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CAPÍTULO I

LA EVOLUCIÓN DEL SISTEMA DE EDUCACIÓN SUPERIOR


EN MÉXICO

Introducción

Los planes de desarrollo de la educación superior de los últimos gobiernos han enfatizado
la importancia de los objetivos de cobertura, calidad y equidad.

En el primero de ellos, el Programa Nacional de Educación 2001-2006, se establecen tres


vertientes principales: a) el acceso, la calidad y la cobertura; b) la equidad y c) la
integración, coordinación y gestión del sistema de educación superior (SEP, 2001-2006:
188). Respecto al primer punto señala que en el año 2000 se atendía al 20% de los jóvenes
entre 19 y 23 años, lo cual era una cifra mayor a la de 1990 (12.2%), y reconocía que había
grandes entre las diferentes entidades federativas. El reto más importante consistía
entonces, como en el pasado, en proseguir el crecimiento del sistema de educación superior,
pero agregaba la necesidad de atender los problemas de calidad y la equidad. La
integración, coordinación y gestión del sistema de educación superior debía contribuir, en
el marco del federalismo, a la consecución de esos fines (Rubio, 2006:53).

Por su parte, el Plan Sectorial de Educación 2007-2012 establece como su objetivo número
1 elevar la calidad de la educación y como objetivo número 2 fijar la ampliación de
oportunidades educativas para reducir las desigualdades entre los grupos sociales y el
impulso a la equidad. Para el primer objetivo señala la necesidad de contribuir a extender y
arraigar una cultura de la planeación, de la evaluación y de la mejora continua de la calidad
educativa en las instituciones de educación superior tanto públicas como privadas (meta
1.16). La meta siguiente (1.17) es garantizar que los programas que ofrecen las
instituciones de educación superior particulares reúnan los requisitos de calidad. Para ello,
se propone revisar las reglas y perfeccionar los criterios que regulan el otorgamiento de de
los Reconocimientos de Validez Oficial de Estudios de tipo superior, con el concurso de los
gobiernos tanto federal como estatales y, en su caso, las instituciones de educación
superior. Para el segundo objetivo establece la necesidad de aumentar la cobertura de la
educación superior y de diversificar la oferta educativa, ampliando la matrícula en
programas reconocidos por su buena calidad (meta 2.12) (SEP 2001-2012)

En este capítulo se describen los principales rasgos distintivos de la evolución del sistema
de educación superior en México durante los últimos años desde la perspectiva de los
objetivos que se planteó la autoridad educativa. En la primera parte se abordará la compleja
red de instituciones, planteles y programas que soportan la oferta educativa de nivel
superior en sus tres niveles: Técnico Superior Universitario y Profesional Asociado
(TSU/PA) que son diplomas que requieren dos años de estudios universitarios,
Licenciatura, que implica un promedio de 4 años de estudios y Posgrado que se divide en

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especialidad, maestría y doctorado, que requieren el primero de un año de estudios
adicionales a la licenciatura (con la excepción de las especialidades en medicina que
requieren tiempos de estudio mucho más largos), dos la maestría y un promedio de tres el
doctorado después de la maestría. En ese contexto se describirá la ampliación de la oferta
educativa de los primeros años del siglo XXI, según lo establecido en el Programa
Nacional de Educación 2001-2006 y en el Plan Sectorial de Educación 2007-2012. En la
segunda parte del capítulo se estudiarán los instrumentos, los logros y los desafíos en los
campos de la equidad y la calidad. Para comprender la fisonomía actual del sistema de
educación superior hemos optado por situarlo en una perspectiva histórica que comienza en
1970, cuando se registró un salto cuantitativo y cualitativo en el sistema, sobre todo a partir
de un fuerte crecimiento de la población atendida y del número de egresados.

Como se verá, a lo largo de los años el sistema se ha caracterizado sobre todo por un
incremento ininterrumpido de la matrícula, lo cual ha permitido un aumento significativo
en la cobertura, y por un crecimiento constante del número de profesionistas que egresan de
sus aulas para integrarse al mercado de trabajo. Sin embargo, los avances no son
homogéneos al nivel de las entidades federativas. Cuando se observan los indicadores para
cada entidad aparecen grandes contrastes que reflejan las disparidades sociales regionales.
La continuidad de las desigualdades educativas se convierte en factor de reproducción de
las disparidades sociales y así sucesivamente.

Desde el punto de vista de distribución del trabajo entre las instituciones públicas y
privadas, a lo largo del último medio siglo el sector oficial ha mantenido su predominancia.
Pero año con año ha perdido una parte importante de su peso relativo. En efecto, durante
ese período, las universidades privadas han registrado un mayor dinamismo, lo cual les ha
permitido pasar de una participación relativamente modesta en la matrícula total a
representar la tercera parte de la misma. La diversificación de la educación superior como
efecto de la ampliación de las opciones educativas en el sector privado constituye, sin duda,
uno de los rasgos distintivos del sistema universitario mexicano contemporáneo.

En este trabajo se describirán los avances del sistema de educación superior bajo diferentes
ópticas, empezando por la evolución de la matrícula. También se aportarán los elementos
relacionados con la equidad y la calidad. En relación con la equidad, conviene señalar la
dimensión geográfica de la misma. En la búsqueda del doble objetivo de cobertura y
equidad, las autoridades educativas han incrementado el número de instituciones, planteles
y programas existentes en regiones en donde la oferta educativa de nivel superior era muy
limitada. De ese modo, los jóvenes que no están en condiciones de emigrar hacia las
ciudades en donde se localizaban las instituciones y los programas de educación superior
que podrían interesarles, encuentran ahora en sus localidades o en los centros urbanos más
próximos, un número creciente de oportunidades educativas que les permiten realizar
estudios superiores sin separarse de la casa familiar. Adicionalmente, en algunas regiones
se han creado nuevas instituciones orientadas a la atención de grupos sociales específicos,
particularmente indígenas.

Por otra parte, también buscando una mayor equidad en la distribución de los recursos
destinados a la educación superior, a partir del año 2000 se puso en marcha un ambicioso
programa de becas destinadas a jóvenes universitarios provenientes de familias de bajos

2
recursos. Con esos apoyos se buscó mejorar las condiciones en las cuales se encuentra un
gran segmento de la población universitaria. Se esperaba que con ello se mejoraran los
índices de permanencia y terminación de estudios. Los informes de analistas independientes
sobre los resultados de este programa dan cuenta del cumplimiento de los objetivos
buscados. Las becas del Programa Nacional de Becas para la Educación Superior
(PRONABES) constituyen sin duda un avance importante en el mundo de inequidades
estructurales que ha caracterizado la distribución de las oportunidades de acceso y
permanencia del sistema de educación superior en México. El programa de becas
PRONABES ha cambiado la fisonomía del sistema de educación superior en lo relacionado
con la igualdad de oportunidades y en los indicadores de permanencia y terminación
mencionados.

El otro cambio significativo, de mayor complejidad en su definición e implementación,


concierne a la calidad de los servicios educativos. La introducción de la calidad como
objetivo prioritario de la educación superior proviene, con distintos matices, de la SEP y de
la ANUIES. En 1983, la Subsecretaría de Educación e Investigación Científica de la SEP
(SESIC) planteó la necesidad de que las universidades públicas se autoevaluaran y
armonizaran sus planes de desarrollo a la nueva estrategia de modernización económica
fijada por el gobierno federal recién llegado (Mendoza, 2002). La idea central era que
habría recursos siempre que las universidades se comprometieran a mejorar la calidad de la
educación impartida, lo cual significa que el financiamiento ya no sería otorgado
simplemente por el número de alumnos inscritos (Medina, 2005).

El Programa Integral para el Desarrollo de la Educación Superior del País (PROIDES) se


creó en 1986 para coordinar los esfuerzos entre autoridades federales, estatales e
instituciones de educación superior y para definir los criterios con base en los cuales se
haría la asignación de recursos. En 1989, la SESIC planteó nuevamente una posición crítica
respecto a las universidades públicas. El subsecretario expresó que “muy pocos mexicanos
están satisfechos con el quehacer actual de las instituciones de educación superior. La
mayoría exige mejoramiento de la calidad y ampliación de la cobertura. Los reclamos
vienen desde dentro y desde fuera del sistema educativo y lo único que varía son las formas
de expresarlos”. Para remediar esa situación, propuso, entre otras reformas, las siguientes:
“Instalar la evaluación como práctica constante de las instituciones, los profesores y los
alumnos; evaluar más los resultados que los medios y los insumos, mostrando los
resultados a la sociedad; propiciar la competencia entre instituciones e impulsar la creación
de nuevas instituciones tanto públicas como privadas; regular la admisión de estudiantes a
las instituciones; profesionalizar la gestión de las instituciones poniéndola en manos de
personas moral y académicamente probadas (Kent, 1997 y 2005: 120 y 65).”

La evaluación de la educación superior fue uno de los elementos constitutivos del Programa
para la Modernización Educativa 1989-1994 del Gobierno Federal. Ahí se establece que las
evaluaciones internas y externas de las instituciones serán una prioridad como elementos
para impulsar la mejora de la calidad de los programas educativos. En ese programa se fija
como meta la creación de una instancia que tendrá como función integrar y articular la
política nacional de evaluación de la educación superior.

3
En 1990 se creó, por iniciativa conjunta de la SESIC y la Asociación Nacional de
Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), la Comisión Nacional de
Evaluación (CONAEVAL), destinada a diseñar los programas e instrumentos de evaluación y
a efectuar la revisión del sistema de evaluación del conjunto del sistema universitario
mexicano. En ese momento la prioridad fue la autoevaluación de los establecimientos
educativos de nivel superior. La Anuies defendió la evaluación externa como elemento
indispensable para crear una cultura de la evaluación efectiva entre las universidades.

Para promover la evaluación externa, la Coordinación Nacional para la Planeación de la


Educación Superior (CONPES) creó en 1991 los Comités Interinstitucionales para la
Evaluación de la Educación Superior (CIEES), como organismos de carácter no
gubernamental. Las principales funciones asignadas a los CIEES fueron la evaluación
diagnóstica de programas académicos y funciones institucionales y la acreditación de
programas y unidades académicas.1

Para incidir sobre la problemática anterior, la Asamblea General de la ANUIES acordó en


1997, impulsar la creación, por parte de la CONPES, de un organismo no gubernamental
cuyo propósito fuera regular los procesos de acreditación, y que diera certeza de la
capacidad técnica y operativa de las organizaciones especializadas dedicadas a la
acreditación de programas académicos. Por su parte, la sociedad civil demandaba la
fundación de un organismo que garantizara la operación de procesos confiables, oportunos
y permanentes para el mejoramiento de la calidad de la educación superior. Como
respuesta, después de realizar un amplio proceso de análisis para definir su estructura,
composición y funciones, a finales de 2000 fue instituido formalmente el Consejo para la
Acreditación de la Educación Superior, A. C. (COPAES).

El COPAES es la instancia capacitada y reconocida por el gobierno federal, a través de la


Secretaría de Educación Pública (SEP), para conferir reconocimiento formal a favor de
organizaciones cuyo fin sea acreditar programas académicos de educación superior que
ofrezcan instituciones públicas y particulares, previa valoración de su capacidad
organizativa, técnica y operativa, de sus marcos de evaluación para la acreditación de
programas académicos, de la administración de sus procedimientos y de la imparcialidad
del mismo.

Como resultado de esas evaluaciones, el COPAES otorga la acreditación a aquellos


programas que han demostrado tener las condiciones para brindar un servicio educativo de
calidad. Una parte pequeña pero creciente de dirigentes de las instituciones públicas y
privadas consideró que esta evaluación externa era importante para identificar áreas de
oportunidad de mejoramiento interno y asumió que la acreditación era un instrumento
objetivo para apuntalar la imagen pública de las instituciones que ellos representaban y sus
programas. Como consecuencia, se sumaron a la iniciativa de la autoridad educativa.
Algunas instituciones, públicas y privadas, han logrado acreditar la totalidad de sus

1
Se formaron comités para las siguientes áreas: Difusión y Extensión de la Cultura, Ciencias Exactas y
Naturales, Ingeniería y Tecnología, Ciencias Agropecuarias, Ciencias Sociales y Administrativas, Ciencias de
la Salud, Educación y Humanidades y Administración de los Establecimientos.

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programas. Otro número importante ha logrado acreditar parte de su oferta educativa. Las
demás, que son todavía la mayoría, han optado por permanecer al margen de este proceso.

Por lo que se refiere a las IES públicas, a partir de 2001 la SEP, a través de la Subsecretaría
de Educación Superior, introdujo el Programa Integral de Fortalecimiento Institucional
(PIFI). Con esta iniciativa se buscó integrar en un solo proceso los diversos programas de
mejoramiento académico existentes. A través de estímulos económicos asociados a la
elaboración y defensa de los PIFI las autoridades federales indujeron a los dirigentes de las
universidades públicas a elaborar planes de desarrollo de mediano plazo, en los que debían
especificar las acciones tendientes a mejorar la calidad de los programas, la actualización
de los esquemas para la evaluación del aprendizaje, el desarrollo y consolidación de la
investigación científica y humanística, el fortalecimiento de sus plantas académicas, la
formación de cuerpos colegiados, la movilidad estudiantil, el mejoramiento de la gestión
administrativa de las instituciones, el desarrollo de nuevas relaciones con los diferentes
grupos sociales que forman la comunidad universitaria y su entorno, etc.

Los cambios del sistema de educación superior promovidos desde la SEP o desde la ANUIES
han influido finalmente, en mayor o menor medida según las instituciones, en el número,
composición y características cualitativas de los profesionistas que se forman en las aulas
universitarias. Por ello se consideró necesario que en este estudio sobre el mercado de
trabajo de profesionistas se incluyera un capítulo que describiera los principales rasgos del
sistema de educación superior, el contexto en el que se ha dado su evolución y las posibles
tensiones entre las concepciones de los diversos actores, entre otros factores, que
finalmente influyen en el perfil de los egresados de las universidades que buscan integrarse
al mercado de trabajo. En los párrafos siguientes se busca cumplir con ese propósito.

El crecimiento y la diversificación del sistema de educación superior


Las instituciones, los planteles y los programas que forman el sistema de educación
superior.

a) Los elementos que integran el sistema de educación superior

El sistema de educación superior de México se caracteriza por el crecimiento de la


matrícula y la expansión y diversificación de las instituciones y los programas educativos.

La mayor parte del sistema, es decir de las instituciones, planteles y programas se concentra
en la licenciatura. Aunque en los años recientes los otros niveles, sobre todo el posgrado,
están ganando un mayor peso relativo, la licenciatura sigue ocupando el lugar central del
sistema: en el ciclo 2008-2009 representó el 89.7% de la matrícula. En orden de
importancia le sigue el posgrado, con el 6.8% de la matrícula. Por último, los programas
TSU/PA tienen el menor peso relativo dentro del sistema, con el menor número de
instituciones, planteles y programas involucrados y con solamente el 3.5% de la matrícula.

En números, durante el ciclo 2008-2009 y a nivel licenciatura, el sistema de educación


superior atendió a una matrícula de 2.43 millones de alumnos. En esa tarea intervinieron

5
1,807 instituciones, 2,551 planteles y 15,110 programas educativos2. Todos ellos repartidos
geográficamente a lo largo y ancho del país. Considerando estos datos en relación con la
matrícula, resultan las cifras siguientes: en el nivel licenciatura había 1,345 alumnos por
institución, 953 por plantel y 161 por programa.

Para tener un contexto de estas cifras, es útil mencionar que en el nivel de TSU/PA las
cifras son menores: en el mismo ciclo escolar, la oferta educativa descansaba en 152
instituciones, 203 planteles y 866 programas (Cuadro 1.1.).

Cuadro 1.1
México. Estructura del Sistema de Educación Superior, 2008-2009
Número TSU/PA Licenciatura Posgrado
Total Total Total
Instituciones 152 1,807 698
Planteles 203 2,551 1,075
Programas 866 15,110 6,190
Matricula (miles de alumnos) 91.6 2,429.9 185.6
Alumnos por plantel 451 953 173
Alumnos por programa 106 161 30
Fuente: ANUIES , incluye únicamente los programas escolarizados
Los TSU/PA incluyen las licenciaturas e ingenierías técnicas. En el nivel de licenciatura se consideran las
licenciaturas universitarias, tecnológicas y normales. El posgrado incluye especialización, maestría y
doctorado

Al considerar estas cifras en relación con la matrícula (91.6 miles de alumnos) resulta un
promedio de 602 alumnos por institución, 451 por plantel y 106 por programa. Las cifras
anteriores sugieren que la infraestructura del TSU está subutilizada ya que la universidades
tecnológicas que son las que principalmente ofrecen este nivel fueron diseñadas y
construidas para un número mucho mayor de alumnos. Por último, los posgrados reunían a
698 instituciones, 1,075 planteles y 6,190 programas (Cuadro 1.1). Los cocientes
calculados entre la matrícula y los elementos señalados arrojan las cifras siguientes: 266
alumnos por institución, 173 por plantel y 30 por programa. Estos datos muestran, sobre
todo si se considera la planta académica que tienen las instituciones más importantes, que
son las que ofrecen la mayoría de los posgrados de prestigio, que la infraestructura
destinada al posgrado también está subutilizada desde el punto de vista del número de
alumnos formados a este nivel.

Si se le compara con otros sistemas de educación superior, el de México se distingue por la


cantidad y diversidad de instituciones, planteles y programas y sobre todo por la presencia
y el crecimiento que ha tenido la educación superior privada en casi todos los niveles
educativos. En el ciclo escolar 2008-2008, en el nivel escolar de licenciatura, el sector
privado agrupaba más del 60% de las instituciones, los planteles y los programas de ese

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Estos datos corresponde a los programas escolarizados. Se considera plantel a una unidad académica de una
institución localizada en un municipio (o delegación) distinto o en alguna dirección diferente. En el caso de la UNAM por
su tamaño se consideraron como planteles a cada una de sus facultades. En el caso del IPN se considera como plantel cada
escuela en cada una de sus ubicaciones. En el caso de la UAM se consideran sus diferentes unidades. En el caso de las
Universidades estatales, se considera como plantel las unidades académicas en ubicaciones distintas.

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nivel educativo. Sin embargo con dos tercios de la infraestructura sólo recibe a un tercio de
la matrícula.

Cuadro 1.2
México. Estructura del Sistema de Educación Superior, 2008-2009
(Por cientos)
TSU/PA Licenciatura Posgrado
Número Sector Sector Sector Sector Sector Sector
Público Privado Público Privado Público Privado
Instituciones 79.1 28.9 34.8 65.2 30.4 69.6
Planteles 67.5 32.5 38.3 61.7 37.3 62.7
Programas 67.9 32.1 35.3 64.7 51.1 48.9
Matricula 95.0 5.0 66.9 33.1 51.3 48.7
Fuente: cálculos propios con base en datos de ANUIES

El peso mayoritario de la educación superior descansa en las instituciones públicas. En su


conjunto y para el ciclo 2008-2009, la proporción atendida de la matrícula por las IES
públicas fue la siguiente: el 95% del TSU/PA, el 67% de la licenciatura y el 51% del
posgrado. La organización por instituciones, planteles y programas es distinta a la
correspondiente al sector privado en el sentido en que con un menor número de ellos
atiende a una matrícula mayor. Por ejemplo, en la licenciatura con la tercera parte de las
instituciones y programas el sector público atiende a dos terceras partes de la matrícula.
(Cuadro 1.2)

Además de su tamaño y tipología diversa, el otro elemento a señalar como rasgo importante
del sistema de educación superior es la dinámica de la diversificación de la demanda, en
este caso en beneficio del sector privado.

En efecto, el mayor ritmo de la demanda por los servicios educativos del sector privado ha
hecho que la proporción de alumnos que están inscritos en las instituciones particulares en
relación con la matrícula total crezca de manera ininterrumpida. Entre 2000 y 2009, por
ejemplo, la población atendida por las IES privadas creció el 26 %, mientras que la
correspondiente al sector público aumentó el 19.3%.

La evolución reciente por niveles, del número de instituciones, planteles, programas y tipo
de financiamiento (público y privado) se resume en los siguientes párrafos.

En el nivel de técnico superior universitario o profesional asociado (TSU/PA) se observa


un crecimiento muy importante en la infraestructura de las IES privadas, al aumentar el
número de instituciones involucradas en un 131%, los planteles en casi 250% y la matrícula
en el 83.8%. Sin embargo estos indicadores aún no reflejan en un peso relativo importante
del sector privado en la matrícula. En ese rubro, el predominio queda en el sector público.
(Cuadro 1.3(a)).

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Cuadro 1.3 (a)
México. Crecimiento de la educación superior. TSU/PA. 2000-2001, 2008-2009
(Absolutos y por cientos)
Nivel 00-01 08-09 Variación en el período
de Número Número %
Estudios Públicas Privadas Total Públicas Privadas Total Públicas Privadas Total
Instituciones 78 19 97 108 44 152 38.5 131.6 56.7
Planteles 106 19 125 137 66 203 29.2 247.4 62.4
Programas 445 64 509 588 278 866 32.1 334.4 70.1
M atrícula 48.9 2.5 51.4 87 4.6 91.6 77.9 83.8 78.2
Fuente: SEP, encuesta 911, para ciclo escolar 2000-2001 y ANUIES para el ciclo escolar 2008-2009
En el ciclo escolar 2008-2009 se consideraron únicamente programas escolarizados
Se incluyen los programas de TSU, PA, ingeniería y licenciatura técnica

Entre los ciclos escolares 2000-2001 y 2008-2009, en el nivel licenciatura, globalmente las
instituciones crecieron 29%, los planteles 26%, los programas 53% y la matrícula 21%.
Existe un gran contraste entre las IES privadas y las IES públicas, el cual se acentúa en el
caso de los programas. En nueve años la oferta de programas en instituciones privadas
creció cuatro veces más que en las públicas habiendo aumentado en 4,362 nuevos
programas de licenciatura en IES privados contra 823 en las públicas (Cuadro 1.3 (b)).

En las IES privadas, el crecimiento de los programas y de los planteles es mayor al de las
instituciones, muestra que en buena parte éste se ha dado ampliando la oferta con la
infraestructura existente. Esta situación no se presenta en el sector público. El crecimiento
de la matrícula es también diferente entre los tipos de instituciones. Entre 2000 y 2009 la
tasa de crecimiento de la matrícula de licenciatura en el sector privado, fue del 26 %,
mientras que la correspondiente al sector público fue del 19.3%. De mantenerse esta
tendencia, en unos años, el sector público dejará de tener el papel principal en la formación
de los profesionistas del país, por lo menos en ciertas áreas de conocimiento.

La situación del posgrado que reúne a las especializaciones, las maestrías y los doctorados
es similar con crecimientos muy superiores en las IES privadas que en las públicas de
87.9% y 20.7% respectivamente (Cuadro 1.3 (c)).

La matrícula de los posgrados privados casi alcanza la mitad y las instituciones y los
planteles representan alrededor de dos terceras parte, lo que indica que este sector ha
alcanzado una importancia estratégica en la formación de especialistas, sobre todo en
algunos campos. Al igual que en las licenciaturas el crecimiento del posgrado en las IES
privadas se está dando por expansión de la infraestructura existente.

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Cuadro 1.3.(c)
México. Crecimiento de la educación superior. Posgrado. 2000-2001, 2008-2009
(Absolutos y por cientos)
Nivel 00-01 08-09 Variación en el periodo (%)
de Número Número
Estudios Públicas Privadas Total Públicas Privadas Total Públicas Privadas Total
Instituciones 139 301 440 212 486 698 52.5 61.5 58.6
Planteles 332 372 704 401 674 1075 20.8 81.2 52.7
Programas 2572 1485 4057 3164 3026 6190 23 103.8 52.6
M atrícula 79.5 61 140.5 95.1 90.4 185.6 19.7 48.3 32.1
Fuente: SEP, encuesta 911, para ciclo escolar 2000-2001 y ANUIES para el ciclo escolar 2008-2009
En el ciclo escolar 2008-2009 se consideraron únicamente programas escolarizados
El posgrado incluye especialización, maestría y doctorado

Para tener una panorámica del crecimiento diferenciado en el número de instituciones,


planteles, programas y matrícula en los dos sectores, conviene resumir las relaciones
resultantes entre los diferentes elementos del sistema (Cuadro 1.4). En el sector público se
reduce el número promedio de planteles por institución, lo que significa que el crecimiento
de este sector resulta de creación de nuevas instituciones y no de la expansión de las ya
existentes bajo la forma de planteles adicionales, como está sucediendo en el caso de las
IES privadas. El número de programas por plantel aumenta en los dos tipos de institución,
aunque en las IES privadas a un ritmo mucho mayor, lo que sugiere que el mayor
dinamismo de estas últimas descansa en buena parte en la apertura de nuevos programas.
Al aumentar los programas a un ritmo mayor que el crecimiento de su matrícula resulta un
número cada vez menor de alumnos por programa.

Cuadro 1.4
México. Estructura del crecimiento de la educación superior. 2000-2001, 2008-2009
Tipo de Nivel Planteles por institución Programas por plantel Matrícula por programa1/
IES Educativo 00-01 08-09 00-01 08-09 00-01 08-09
IES TSU/PA 1.36 1.27 4.20 4.29 109.9 148.0
Públicas Licenciatura 1.70 1.55 4.74 5.47 301.6 304.3
Posgrado 2.39 1.89 7.75 7.89 30.9 30.1
IES TSU/PA 1.00 1.50 3.37 4.21 38.7 16.4
Públicas Licenciatura 1.27 1.34 5.03 6.21 118.1 82.4
Posgrado 1.24 1.39 3.99 4.49 41.1 29.9
TSU/PA 1.29 1.34 4.07 4.27 101 105.8
Total Licenciatura 1.44 1.41 4.89 201.6 160.8
Posgrado 1.60 1.54 5.76 5.76 34.6 30.0
1/ M iles de alumnos
Fuente: cálculos propios

La mayor estabilidad relativa de las IES públicas parece descansar en una relación
alumnos/programas que no cambia en el periodo. El ritmo de apertura de nuevos planteles y
programas es relativamente bajo, como ocurre con la matrícula, de modo que la relación
entre alumnos y programas no se modifica.

En cambio, en las IES privadas la relación matricula por programa promedio disminuye
significativamente, lo cual sugiere que un segmento importante de los nuevos programas
tiene todavía una matrícula menor a la que sería su nivel de estabilidad, ya sea porque la

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demanda efectiva ha sido menor a la esperada y algunos de los programas existentes
tenderán a desaparecer o porque esos programas tienen alumnos sólo en los períodos
iniciales, lo cual se ira resolviendo a medida en que avance la cobertura del plan de estudios
hasta llegar a tener alumnos en todos los grados de avance. 3

b) La evolución general de la matrícula.

El conjunto de instituciones y planteles, con sus programas educativos en los niveles


TSU/PA, licenciatura y posgrado y su pertenencia al sector público o al privado, forman un
sistema dedicado a la educación de un número creciente de jóvenes que forman la matrícula
de la educación superior. La fisonomía actual del sistema educativo superior pueda ser vista
como un reflejo de la evolución de esa matrícula y de los factores que la han determinado.
Conviene, por lo tanto, resumir ahora, con el riesgo de ser excesivamente esquemática, una
revisión panorámica de la historia reciente.

La historia contemporánea de la educación superior comienza en la transición de la década


de los años 60 a los 70. En aquel momento el sistema estaba dominado por las IES
públicas. En 1970, por ejemplo, concentraban el 86% de la matrícula. Las universidades,
escuelas, colegios o tecnológicos privados constituían un universo pequeño, con una
matrícula importante para los lugares en donde se localizaban y para el sector social al que
se dirigía su oferta educativa, pero con un peso relativo modesto al nivel nacional. Algunas
instituciones privadas tenían ya una historia larga y un merecido prestigio académico. En
1943 se fundaron el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey y el
Centro Cultural Universitario que diez años más tarde se convertiría en la Universidad
Iberoamericana. El Instituto Tecnológico de México se fundó en 1946 y más tarde se
convirtió en el ITAM, agregando la palabra autónomo. En 1957 se funda el Instituto
Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente, etc.

A largo de los años 70 y hasta 1982, el sistema de educación superior registró un ritmo de
crecimiento sin precedentes, que abarcó tanto al sector público como al privado. El
estímulo a las IES públicas provino de un crecimiento en el financiamiento gubernamental
nunca antes visto. Entre 1970 y 1980 los recursos asignados a la educación superior
crecieron, en términos reales, el 356% (Murayama, 2006).

Desde el punto de vista educativo, el gobierno buscó que las IES públicas pudieran atender
una demanda creciente asociada al aumento del número de egresados del nivel medio
superior. La previsión era que la matrícula de este nivel registraría tasas de crecimiento
anuales sensiblemente mayores a las de las décadas anteriores. Comparando el principio y
el final de la década, el crecimiento acumulado de la matrícula del nivel medio superior
resultó ser del 86%. Dado que esa población se convertiría en la demanda social de las
instituciones de educación superior, que en aquella época eran mayoritariamente públicas,
el gobierno consideró justificada una política que les permitiera contar con los recursos
necesarios para la ampliación de su infraestructura y capital humano.
3
Es necesario señalar que las bases de datos que se utilizan en el estudio muestran un número importante de programas
que no tienen matrícula declarada. Por ejemplo en las licenciaturas en el ciclo 2000-2001 se tienen 322 programas sin
matrícula y 639 programas con una matricula entre 1 y 10 alumnos. Ya para el ciclo escolar 2008-2009 estas cifras
alcanzaron 1,153 y 1,363 programas respectivamente

10
Entre los ciclos escolares 1970-1971 y 1980-1981, la matrícula de las IES públicas pasó de
aproximadamente 233 mil alumnos a 785 mil, lo que implica un aumento del 237%,
equivalente a casi tres veces el aumento de la matrícula del nivel medio superior (Taborga,
2003). 4

Gráfica 1.1
México. Evolución de la matricula de educación superior.
1970-2009.
matrícula (miles de alumnos)

3000
2500
2000
1500
1000
500
0
69-70 79-80 89-90 99-00 08-09
ciclo escolar
TSU/PA Licenciatura Posgrado Total

Fuente: ANUIES, Anuarios estadísticos, sólo se incluyen programas escolarizados, no se incluyen normales

Estos datos sugieren que durante esos años la mayor oferta de lugares disponibles en las
universidades permitió el acceso a individuos que habían concluido sus estudios de nivel
medio superior pero no habían logrado un lugar en alguna institución universitaria. Gracias
al auge de la matrícula, durante esa década se registró también un alto ritmo de crecimiento
del número de egresados.

Los años 70 fueron los mejores años para las IES públicas, gracias a lo cual su matrícula
alcanzó una tasa anual de crecimiento promedio del 12.9%. Sin embargo, la bonanza fue
aun mejor para las IES privadas que crecieron a una tasa anual promedio aun más alta: del
14.7%. Dado el mayor dinamismo del sector privado, su participación dentro del conjunto
del sistema pasó del 14% al 16%.

La crisis de 1982 y sus secuelas cambió el panorama para la economía, las finanzas
públicas y el gasto en educación en general y en educación en particular. En efecto, los
problemas económicos y de finanzas públicas derivados de la crisis de la deuda de 1982 y
los ajustes económicos que duraron los ocho años siguientes cambiaron radicalmente el
4
Taborga, señala que este crecimiento de la matrícula “detonó el crecimiento en todos los órdenes del sistema
académico: más universidades, más institutos tecnológicos, más IES de otro tipo; más facultades e institutos,
más carreras, más académicos de carrera y por horas, más personal administrativo, más edificios en los
campus, más laboratorios y bibliotecas, mayor presupuesto, etc. “Expansión y diversificación de la matrícula
de la educación superior en México. Serie Investigaciones. México, ANUIES, p. 10

11
contexto económico y social del país. La prioridad otorgada al pago de la deuda impuso una
reducción draconiana del gasto público, incluido el gasto social y por lo tanto el
correspondiente a la educación en general y a la educación superior en particular. Se estima
que, en términos reales, entre 1980 y 1989 el presupuesto asignado a la educación superior
registró una reducción del 41 %, en contraste con el apoyo que había recibido en la década
anterior, sobre todo durante el período de auge petrolero (Murayama, 2006:125) 5 Otra
manera de observar la reducción es comparando el monto asignado a la educación superior
en relación con el PIB: la cifra pasó del 0.74 del PIB en 1982 al 0.42% en 1990 (Medina,
2005). 6

Fuente: Ciro Murayama (2009, p. 125-126, Gráfica


cuadro 1 b)1.2
y 4° informe de Gobierno del presidente Felipe
Calderón.
México. Gasto federal en educación superior (1970-2009)
16,000

14,000
millones de pesos de 1994

12,000

10,000

8,000

6,000

4,000

2,000

-
1970 1975 1980 1985 1990 1995 2000 2005 2009 *
quinquenios

Por su parte, no tanto por razones demográficas sino por una severa disminución en las
tasas de crecimiento de la oferta y la demanda, el ritmo de crecimiento de la matrícula del
nivel medio superior se redujo en forma importante: la población inscrita en ese nivel
aumentó solamente el 17% durante los años 80, equivalente a una quinta parte del
crecimiento registrado en los años 70 (Murayama, 2006:127). Esta fuerte caída redujo la
presión sobre las universidades, ya que una parte importante de la demanda social por
estudios de nivel superior proviene precisamente de los egresados del nivel medio superior.
Como resultado de la nueva combinación de circunstancias, la matrícula total del sistema
de educación superior creció a tasas anuales más altas que las registradas por la matrícula
del nivel medio superior, pero mucho menores que las de los años 70.

En efecto, entre los ciclos 1980-1981 y 1990-1991, la matrícula de nivel superior registrada
por las IES públicas pasó de 785 mil alumnos a 1,012 miles de alumnos, lo cual equivale a
un crecimiento del 29 por ciento, 12 puntos porcentuales más alta que la tasa de
crecimiento de la matrícula del nivel medio superior, pero mucho menor al crecimiento

5
El autor comenta, que “la educación superior, que fue destino de amplios recursos para apoyar su expansión
en los setenta, en los ochenta sufrió de manera desproporcionada el ajuste fiscal. Pasó de ser un sector
privilegiado del gasto cuando éste crecía, a uno castigado de manera peculiar a la hora de la estabilización.”

12
registrado en los años 70, que fue del 237%. El menor dinamismo del número de alumnos
admitidos en las IES públicas, entre otros factores, creó nuevas oportunidades de expansión
para el sector privado ya que además de la demanda natural proveniente de sectores que
prefieren que sus hijos estudien en una institución privada, recibieron la constituida por
quienes durante esos años no lograron lugar en las universidades públicas. Así, su matrícula
pasó de aproximadamente 150 mil alumnos a 240 mil, lo que implica un crecimiento del 60
por ciento y un peso relativo de la matrícula que pasó del 16.0% al 19.1%. Este fue el
primer período de gran expansión del sector privado. El siguiente, todavía más importante,
ocurriría en la década de los 90.

Cuadro 1.5
México. Crecimiento de la matricula de educación superior.1969-2009
(Por cientos)
Nivel Crecimiento de la matrícula en el periodo (%)
Educativo 70-79 80-89 90-99 00-09
TSU/PA 102.4
Licenciatura 247.6 52.8 47.0 44.8
Posgrado 328.4 72.4 168.6 57.1
Total 249.9 69.7 58.3 37.7
Fuente: cálculos propios con base en datos ANUIES, sólo se incluyen programas escolarizados, no
incluye normales

La renegociación de la deuda en 1989 significó un respiro para México en términos de


quitas y mejores condiciones financieras. También lo fue en el sentido de que se abrieron
nuevamente las puertas para los flujos de capitales hacia México. Gracias al menor fardo
que significaba el pago de la deuda y a la llegada de fuertes flujos de ahorro del exterior, el
país inició una nueva fase de crecimiento económico. Quedaban atrás 7 años de crisis
financiera, cambios estructurales, ajustes de las finanzas públicas, estancamiento
económico y el retroceso en prácticamente todos los indicadores sociales.

El nuevo ciclo económico fue de corto plazo. Comenzó en 1989 y terminó a finales de
1994, con una nueva devaluación del peso y una nueva crisis financiera. El PIB de 1995
registró una caída del 6.2%, que se tradujo en menores ingresos fiscales, consecuentemente
menos gastos, incluido el correspondiente a la educación superior. Ese año se redujo el 5%
en términos reales respecto al año anterior. En 1996, la economía retomó de nuevo las tasas
positivas de crecimiento. Durante los últimos años de la década se alcanzó un ritmo de
crecimiento económico promedio superior al de los primeros cuatro años, es decir los años
previos a la crisis de 1994. Pese al descalabro de 1995 y a la caída en el financiamiento
para las universidades de ese mismo año, la década en su conjunto registró un aumento
significativo en el monto de recursos destinado a las universidades públicas. En términos
reales, entre 1990 y 1999, el crecimiento del presupuesto asignado fue del 113%. 7

La mayor disponibilidad de recursos propició un aumento de la matrícula del sector de


educación superior público, aunque en una proporción menor al aumento de los recursos
recibidos. En efecto, en el año 2000-2001, la población atendida por las IES públicas llegó

7
Ibid. P. 125 Cuadro 1 B

13
a 1,494 miles de alumnos, lo que en comparación de la matrícula de 10 años antes significó
un incremento del 47.6%.

Es importante recordar que el cambio de régimen registrado por la economía y la política


entre los años 80 y 90 tuvo efectos en todos los ámbitos. El giro de 180 grados en la
estrategia de desarrollo económico que el gobierno puso en marcha desde mediados de la
década de los 80 buscaba esencialmente una mayor integración de la economía mexicana
con la mundial y una reducción significativa del Estado en la vida económica. Se vendió al
sector privado una parte mayoritaria de las empresas públicas y se desmanteló el marco
regulatorio en un gran número de ramas económicas, incluido el sector financiero. En el
discurso oficial, esas medidas eran necesarias para fomentar la productividad y
competitividad de las empresas privadas mexicanas, que poco a poco lograrían una
posición importante en los mercados internacionales. El impulso gubernamental a la
inversión privada, tomó la forma de una política de laissez faire respecto a las
universidades privadas. Ese apoyo y la reducción de las oportunidades existentes en las
universidades públicas, crearon un contexto favorable para una nueva etapa en la expansión
de la demanda de las IES privadas: en los años 90 duplicaron su matrícula. Como dice Ciro
Murayama: “la decisión de retirar protagonismo del sector público para cedérselo al sector
privado en las tareas de la inversión para el desarrollo también tuvo lugar en la educación
superior”8

Durante los años 90 se produjo un nuevo salto en la matrícula de la educación superior en


beneficio del sector privado. Entre los ciclos 1999-2000 y 2000-2001, la matrícula de este
sector creció a una tasa anual promedio del 11.3%, casi tres veces superior a la del sector
formado por las IES públicas, que fue del 4%. Como se señaló anteriormente, la
consecuencia de esta disparidad en la dinámica fue que durante ese período la participación
de las IES privadas en la matrícula total pasó del 19.1% al 32 %.

Desde el punto de vista económico, la primera década del siglo XXI estuvo marcada
nuevamente, es decir como ocurrió en la década anterior, por tasas de crecimiento del
producto bajas y erráticas, con el agravante de que en promedio resultaron más bajas que
las de los años 90. Además, por tercera vez en poco tiempo, al igual de lo ocurrido en 982
y en 1995, en 2009 el país vivió el impacto de una profunda crisis financiera, ahora con
epicentro en Estados Unidos, pero de alcance mundial. Entre los efectos negativos de esta
crisis, el PIB registró una caída del 6.5%, superior, al -6.2% registrado en 1995.

Por lo que se refiere al financiamiento que recibieron las IES públicas, durante los primeros
años de este siglo se registró una reducción en el ritmo de crecimiento del gasto público en
educación superior y un menor ritmo de crecimiento de la población atendida por las IES
públicas. En números, entre el año 2000 y 2009, el gasto público en educación superior
registró un crecimiento de aproximadamente el 33%. La matrícula de las IES públicas
aumentó el 21%. Por su parte, siguiendo la tendencia de las tres décadas anteriores, el
sector privado continuó con tasas de crecimiento más altas que las del sector público, pero
en promedio menores a las alcanzadas en el pasado reciente. Durante la primera década del
siglo XXI, su matrícula creció el 33%, doce puntos porcentuales superior al crecimiento del

8
Ibid, p. 40

14
sector público. Como consecuencia, su peso relativo en la matrícula total pasó del 32% al
33.2%. (Cuadro 1.6)

Cuadro 1.6
Importancia del sector privado en la educación superior
(Por cientos)
Nivel Matrícula de educación superior en instituciones privadas (% )
educativo 1970-1971 1980-1981 1990-1991 2000-2001 2008-2009
TSU/PA 4.8 5
Licenciatura 14.0 16.0 19.0 31.9 33.1
Posgrado N.D. N.D. 19.4 45.4 48.7
Total 14.0 16.0 19.1 32.02 33.2
Fuente: cálculos propios con base en datos de SEP y ANUIES

La conclusión importante de todo lo anterior es que una parte significativa del crecimiento
de la matrícula de nivel superior se explica por la dinámica del sector privado. Su
responsabilidad, que en 1970 abarcaba el 14% de la matrícula, en 2009 llegó a representar
el 33.3%. Este fenómeno es, sin duda, uno de los rasgos distintivos de la educación superior
en el México de finales del siglo XX y principios del XXI. De ahí la necesidad de estudiar
con profundidad su significado. Desde luego, ese objetivo rebasa el alcance de este trabajo.
Sin embargo, conviene hacer algunas observaciones que serán retomadas más adelante,
sobre todo cuando se analicen las cuestiones de equidad y calidad de la educación superior.

c) La importancia creciente del sector privado

El marco legal de la participación de los particulares en la educación es un elemento


fundamental para comprender su importancia creciente. El derecho de los particulares a
brindar servicios educativos en todos los niveles y modalidades está consagrado en el
artículo 3° fracción VI de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos.

En la norma fundamental se establece que el Estado otorgará y retirará los reconocimientos


de validez oficial de estudios que impartan los particulares. En su ley reglamentaria, la Ley
General de Educación establece (artículo 14) que las autoridades federales y locales pueden
expedir el reconocimiento de validez oficial de estudios (RVOE) que soliciten los
particulares. El artículo 55 establece que para obtener el RVOE las instituciones solicitantes
deben contar: 1) con personal que acredite la preparación para impartir educación, 2) con
instalaciones que satisfagan condiciones higiénicas, de seguridad y pedagógicas que la
autoridad otorgante determine, 3) con planes de estudio que la autoridad otorgante
considere pertinentes. El artículo 56 establece que los particulares que impartan estudios
con RVOE lo mencionen en los documentos que expidan y en la publicidad que realices.
Pese a lo establecido en la constitución, la Ley General de Educación prevé el caso de que
los particulares impartan servicios educativos sin tener el RVOE. La única condición,
establecida en el artículo 59 de la ley, es que los particulares que se encuentren en esta
condición lo mencionen en su documentación y publicidad.

15
Por los términos en los que se aprobó la ley y por la manera en que se otorgan el RVOE, la
solicitud de este reconocimiento constituye en los hechos un mero trámite administrativo.
En ese sentido, no hay barreras legales a la entrada en el negocio de la educación superior.
Además, la revocación del RVOE, prevista en la Constitución, es en la práctica letra muerta,
como consecuencia de la ambigüedad existente en los requisitos que deben cumplirse para
obtenerlo y, en su caso, la dificultad para la autoridad de demostrar que alguna institución
no está cumpliendo con la normativa. Así, es posible que operen universidades sin
bibliotecas, sin laboratorios, sin salones adecuados, sin ni áreas comunes para el desarrollo
normal de las actividades docentes y de convivencia entre los alumnos y sin oficinas
adecuadas para los trabajadores administrativos. Basta con que haya espacios higiénicos,
seguros y pedagógicos, que, sin ninguna precisión adicional, son los requisitos establecidos
en la ley.

No existen estadísticas respecto al número de solicitudes de RVOE no otorgadas. En cambio,


se tiene registro de los RVOE autorizados. Entre el año 2000 y el 2008 el número de
programas con RVOE de las IES particulares pasó de 6,957 a 13,074, es decir un incremento
del 88%9, equivalente a un ritmo de crecimiento anual promedio del 7.3%.

Cabe señalar que a diferencia de lo que ocurre en otros países, las IES tanto públicas como
privadas, se llaman indistintamente universidades, institutos, colegios, centros o escuelas,
en virtud de que no existe una reglamentación al respecto. Por otra parte, no hay límite
legal a los nombres que se le pueden dar a los programas, sin importar los efectos que la
proliferación de nombres pueda tener entre los jóvenes que deben decidir qué programa
estudiar ni la posible confusión que la proliferación de los mismos genera en el mercado de
trabajo. En otros países, como en España, hay una lista fija y, para las excepciones, un
procedimiento para autorizar nombres distintos cuando a juicio de la autoridad exista la
argumentación que los justifique.

El hecho importante que conviene destacar es que el sector privado ha aumentado


significativamente su peso relativo dentro de la educación superior, contribuyendo al
cumplimiento de las metas gubernamentales de cobertura. La cuestión siguiente es su
contribución a los objetivos de equidad y calidad, que es un asunto que se estudiará al final
de este capítulo.

Cabe señalar que el crecimiento del sector privado se ha concentrado en los niveles de
licenciatura y posgrado. El nivel de TSU/PA no es de interés para las instituciones privadas.
En el ciclo 2008-2009 se limitó a cubrir únicamente el 5% de la matrícula de ese nivel.
Mientras tanto, en el mismo ciclo escolar, atendió al 33.1% de la matrícula de licenciatura y
el 48.7% del posgrado.

En los primeros años del siglo XXI, es decir entre los ciclos escolares 2000-2001 y 2008-
2009, la matrícula atendida por el sector privado pasó de aproximadamente 702 mil a 900

9
La tasa de crecimiento del número de programas del sector público fue del 21%, lo que sugiere que entre las
IES públicas existe también la tendencia a registrar programas aunque no necesariamente se impartan. La
diferencia es que, en el caso de las IES públicas, la lista crece a una menor velocidad que en el sector privado.

16
mil alumnos, lo que significa una tasa de crecimiento anual promedio del 2.8%, inferior a la
tasa correspondiente a los programas.

El hecho de que, como ya se mencionó, los programas crezcan a un ritmo mucho mayor
que los alumnos significa una reducción creciente en el número de alumnos por programa.
Por ejemplo, entre 2001 y 2009 y al nivel de licenciatura, la relación en las IES privadas
entre el número de alumnos y el de programas pasó de 118 a 82 alumnos por programa
(para las públicas el promedio se mantuvo en poco más de 300 alumnos). En la explosión
de programas privados no parece cubrirse el número mínimo de alumnos para asegurar la
viabilidad de un programa. ¿En que condiciones se está permitiendo la expansión de la
oferta educativa? ¿Se cumplirán los mínimos de calidad para que los egresados puedan
ingresar adecuadamente al mercado de trabajo?

d) La composición y la evolución de las IES públicas

Las IES públicas podrían integrar, por si solas, un sistema de educación superior. Para ello
basta observar la diversidad de tipos de instituciones que agrupan, los niveles que incluye
su oferta educativa, su distinta localización geográfica tanto en zonas urbanas como rurales,
los tamaños de los planteles y la amplia gama de los campos del saber que cultivan. Por
tipos, se dividen en instituciones federales, universidades estatales, Universidad
Pedagógica, normales, institutos tecnológicos, universidades tecnológicas, universidades
politécnicas, universidades indígenas y otras con diferentes denominaciones. Algunas
cubren los tres niveles: TSU/PA, licenciaturas y posgrado. Otras se concentran en uno o dos
de ellos, con mayor frecuencia la licenciatura y el posgrado.

En 2009, el conjunto de las IES públicas ofrecían 9,092 programas educativos,


subdivididos en 588 de TSU/PA, 5,340 licenciaturas y 3,164 posgrados. Para el mismo año,
la matrícula atendida por las IES públicas fue de aproximadamente 1,807 miles de alumnos.

Cuadro 1.7 (a)


México. Crecimiento de la Educación Superior Pública por nivel educativo. TSU/PA
2000-2001, 2008-2009
(Absolutos y por cientos)
Tipo de N° planteles N° programas Matricula (miles)
Institución 00-01 08-09 Var.(%) 00-01 08-09 Var.(%) 00-01 08-09 Var.(%)
Universidades federales 1 5 0.01
Universidades estatales 45 49 8.9 98 129 31.6 5.5 6.6 20.1
Universidad Pedagógica y normales 0 0 0.0
Institutos tecnológicos 6 10 66.7 17 16 -5.9 1.8 0.4 -78.0
Universidades tecnológicas 45 63 40 237 414 74.7 36.4 78.8 116.6
Universidades politécnicas 0.0
Universidades indígenas e 0.0
Otras públicas 10 15 50 93 29 -68.8 5.3 1.3 -75.2
Total públicas 106 137 29.2 445 588 32.1 48.9 87 77.9
Fuente: Cálculos propios con base en información de SEP para ciclo escolar 2000-2001 y de ANUIES para ciclo escolar 2008-2009

Por lo que se refiere al nivel TSU/PA y al ciclo escolar 2008-2009, destacan los siguientes
hechos: las universidades federales no participan en la oferta educativa de este nivel. Los
institutos tecnológicos tienen una matrícula mínima en este tipo de programas. Las
universidades tecnológicas concentran la mayor parte de la matrícula, seguidas de las

17
universidades públicas estatales (Cuadro 1.7.a). Las otras instituciones públicas parecen
haber desistido de impartir este nivel educativo.

En las licenciaturas, la responsabilidad sobre la matrícula se reparte de otro modo: en el


ciclo 2008-2009 la parte mayoritaria se concentró en las universidades estatales, con 787
mil alumnos, divididos en 185 planteles, lo que implica una matrícula promedio por plantel
de aproximadamente 3,627 alumnos. El siguiente segmento es atendido por las
universidades federales (UNAM, UAM e IPN), con una población de 290.3 mil alumnos,
divididos en 51 planteles, es decir un promedio de 5,692 estudiantes por plantel. Los
institutos tecnológicos ocupan la tercera posición, con una población de 370 mil alumnos
en 233 planteles, lo que implica 1,588 estudiantes por plantel. La UPN y las normales
concentran una matrícula de 116 mil alumnos, divididos entre 325 planteles, lo cual implica
un tamaño promedio de 357 alumnos por plantel. Las universidades politécnicas tienen una
matrícula de 24,500 alumnos, divididos en 28 planteles, lo que indica que hay
aproximadamente 875 alumnos por plantel. Las universidades indígenas e interculturales
tienen una matrícula de 3,500 alumnos, que divididos entre 7 planteles resultan 500
alumnos por plantel. Hay otras instituciones públicas más chicas, que en conjunto tienen
115 planteles y 31,600 alumnos, es decir 275 alumnos por plantel.

Cuadro 1.7 (b)


México. Crecimiento de la Educación Superior Pública por nivel educativo. Licenciatura.
2000-2001, 2008-2009
(Absolutos y por cientos)
Tipo de N° planteles N° programas Matricula (miles)
Institución 00-01 08-09 Var.(%) 00-01 08-09 Var.(%) 00-01 08-09 Var.(%)
Universidades federales 49 51 4.1 268 274 2.2 254.5 290.3 14.0
Universidades estatales 185 217 17.3 1856 2323 25.2 627.9 787.3 25.4
Universidad Pedagógica y normales 446 325 -27.1 1230 905 -26.4 204.7 116.5 -43.1
Institutos tecnológicos 191 233 22 952 1329 39.6 253.5 370.1 46.0
Universidades tecnológicas 1 1 0 7 9 28.6 1.1 1.1 -1.0
Universidades politécnicas 28 0 112 0 24.5 0.0
Universidades indígenas e 7 0 20 0 3.5 0.0
Otras públicas 81 115 42 204 368 80.4 20.5 31.6 54.3
Total públicas 953 977 2.5 4517 5340 18.2 1362.1 1624.9 19.3
Fuente: Cálculos propios con base en información de SEP para ciclo escolar 2000-2001 y de ANUIES para ciclo escolar 2008-2009

En el caso de los programas el fenómeno es similar al anteriormente descrito. El


crecimiento de la oferta educativa de las universidades federales es muy chico comparado
sobre todo con el crecimiento de las universidades estatales y de los institutos tecnológicos.
(Cuadro 1.7.b)

A partir de 2000, la matrícula en educación normal ha ido disminuyendo como resultado de


la política regulatoria de los servicios para la formación inicial de profesores implementada
por la Secretaría de Educación Pública, conjuntamente con las autoridades educativas
estatales. Dicha política ha sido parte de las acciones del Programa para la Transformación
y el Fortalecimiento Académicos de las Escuelas Normales, con el fin de no seguir
preparando maestros sin posibilidades de empleo en el sector, por efecto de la

18
estabilización o el descenso progresivo de la población en edad de estudiar la educación
básica.10

Este crecimiento de planteles y programas de los institutos tecnológicos y de las


universidades estatales se ve reflejado en la matrícula que aumentó a nivel licenciatura un
46.0% y 25.4% respectivamente. Este tipo de crecimiento parece responder a una política
de estado en relación a la educación superior en la que las entidades federativas asumen una
mayor responsabilidad en la oferta educativa superior.
En relación con el posgrado, como puede observarse, la diversidad de instituciones,
tamaños, ritmos de crecimiento y orientaciones académicas constituyen los rasgos de un
subsistema de educación superior cada día más complejo en su gestión, regulación y
seguimiento. Las universidades estatales son las más grandes del subsistema y las que han
concentrado la mayor parte del crecimiento tanto en planteles, programas como matrícula
(Cuadro 1.7.c).

Cuadro 1.7.(c)
México. Crecimiento de la Educación Superior Pública por nivel educativo. Posgrado
2000-2001, 2008-2009
Los datos
(Absolutos anteriores
y por cientos) muestran que el crecimiento de la educación superior pública ha
descansadoTipo endelas universidadesN°estatales
planteles y en los institutos tecnológicos. Las
N° programas universidades
Matricula (miles)
Institución 00-01 08-09 Var.(%) 00-01 08-09 Var.(%) 00-01 08-09 Var.(%)
federales ocupan ya sólo el tercer
Universidades federales 53
lugar
57
en 7.5
la matrícula.
460
Sin
438
embargo
-4.8
aunque
24.2
crecen 36.7
33.1
las
universidades estatales,
Universidades estatales subsisten,
95 como
128 se verá
34.7 más
1498 adelante,
1948 problemas
30 35.9 a nivel
43.9 de la
22.4
cobertura a nivel estatal así como hechos de inestabilidad política que afectan la operación
Universidad Pedagógica y normales 81 70 -13.6 157 126 -19.7 8 5.7 -28.2
Institutos tecnológicos 51 64 25.5 144
de varias de ellas, por lo que
Universidades tecnológicas 1
cabría 1
preguntarse
0
si
3
no 202
sería
5
40.3
adecuado
66.7
4.2
0.02
3.4
replantearse
0.03
-19.1
la
94.1
creación
Universidadesde universidades federales fuera
politécnicas 4 de la0zona metropolitana10 de0 la Ciudad de0.1México. 0.0
Universidades indígenas e 0 0 0.0
Otras públicas 50 77 54 309 435 40.8 7.2 8.9 23.1
Total públicas 331 401 21.1 2571 3164 23.1 79.5 95.1 19.7
Fuente: Cálculos propios con base en información de SEP para ciclo escolar 2000-2001 y de ANUIES para ciclo escolar 2008-2009

La desagregación de la matrícula y de los egresados

a) La dinámica de los egresados

El aumento del número de profesionistas que se integran al mercado de trabajo, es decir del
número de egresados de las aulas universitarias es el resultado natural del incremento de la
matrícula de educación superior. Ya se ha mencionado que la dinámica de la matrícula ha
sido cambiante según la coyuntura.

10
Gaceta de la Escuela Normal/abril 2003, http://normalista.ilce.edu.mx/normalista/estadisticas/datos_basicos.pdf

19
Cuadro 1.8
México. Evolución del número de egresados de la
educación superior, 1970-2008
Ciclo Egresados Crecimiento TCAP
1/
Escolar (Miles) del periodo
1969-1970 23
1979-1980 73 219.6 12
1989-1990 128 76.4 6
1999-2000 251 95.3 7
2007-2008 392 56.5 5
1/ Por cientos
Fuente: ANUIES, Anuarios estadísticos, sólo incluye programas
escolarizados, no incluye normales.

Durante los años 70, creció a una tasa anual promedio de 13%, luego, con la crisis de los 80
bajó a 5.5%, en los años 90 se recuperó y creció a una tasa anual promedio de 9.7% para
bajar nuevamente en los primeros ocho años de este siglo, cuando esa cifra fue del 4.9%.
(Cuadro 1.8).

Cuadro 1.9
México. Crecimiento de los egresados de educación
superior, 1970-2008
(Por cientos)
Nivel Crecimiento del número de egresados en el periodo (% )
Educativo 70-79 80-89 90-99 07-08
TSU/PA 117.4
Licenciatura 221.4 70.3 77.1 47.1
Posgrado 184.3 160.0 297.7 78.5
Total 242.9 70.6 152.5 31.3
Fuente: calculos propios.Sólo se incluyen programas escolarizados, no se incluyen
normales

Al comparar las tasas de crecimiento de la matricula y de los egresados se puede apreciar


que sobre todo a partir del año 1990, es mucho mayor la de los egresados (Cuadros 1.5 y
1.9).

Esto parecería indicar que progresivamente han egresado más estudiantes en relación a la
matricula. Efectivamente, entre 1970 y 2008, la relación entre los egresados y la matricula
total ha aumentado 4.3 puntos porcentuales. Por nivel escolar la diferencia en mucho más
marcada en el posgrado en donde pasa de 18.7 a 34.1% (Cuadro 1.10).

20
Cuadro 1.10
México. Relación entre egresados y matrícula, 1970-2008
(Por cientos)
Nivel Número de egresados/Número de alumnos
Educativo 69-70 79-80 89-90 99-00 07-08
TSU/PA 27.3
Licenciatura 10.7 9.9 11.0 13.2 13.8
Posgrado 18.7 12.4 22.5 25.1 34.1
Total 10.9 9.9 11.3 14.5 15.2
Fuente: cálculos propios

Esta situación está estrechamente relacionada a la mayor presencia de IES privadas en la


educación superior. Por múltiples razones la eficiencia terminal en las instituciones
privadas es muy superior a la de las públicas, por lo que al aumentar su participación en la
educación, los indicadores de egresados se ven impactados a la alza. En el posgrado en el
que la matricula privada alcanza casi el 50% la diferencia es muy importante. En el
Capítulo 3 se presentará un análisis detallado de la estructura de los egresados.
b) Crecimiento de la matrícula por área de conocimiento

En el estudio anterior ya habíamos mencionado que “sin existir una acción coordinada o
inducida por parte de las instituciones, un número muy pequeño de carreras concentra dos
terceras partes del sistema educativo, con independencia del tipo de institución y entidad
federativa….(entre las explicaciones) debe estar sin duda la percepción de las
oportunidades laborales que se abren con la adquisición de estos diplomas” (Hernández,
2003). La situación no parece haber cambiado.

La combinación de fases de expansión económica y crisis financieras ha sido determinante


en la evolución de la matrícula y del número de profesionistas que al salir de las
universidades se integran al mercado de trabajo. El desglose de esa evolución por niveles
educativos y áreas de conocimiento nos permite incursionar en las partes del sistema
relacionadas con los niveles de formación y con los campos del saber entre los cuales se
divide la matrícula y su dinámica.

Técnico Superior Universitario y Profesional Asociado

Aunque las autoridades educativas han tratado de impulsar ciertos diplomas y ciertas áreas,
la realidad es que la demanda registra con mucha lentitud los cambios inducidos por los
estímulos gubernamentales. En el caso de los TSU y los PA los avances importantes se han
alcanzado en los últimos años y como consecuencia de los esfuerzos realizados por las IES
públicas. Destacan por su dinámica los programas pertenecientes a las áreas de ingeniería y
las ciencias económico-administrativas y turismo que entre las dos agrupan alrededor de
85% de la matrícula11 (Cuadro 1.11). En un muy lejano tercer lugar están los programas del
área de ciencias de la salud. En las demás áreas, la matrícula sigue siendo marginal.

11
En este estudio, se utilizó la agrupación de carreras utilizada por la Secretaría del Trabajo y Previsión
Social para la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo de forma que se pudieran comparar los datos de

21
Cuadro 1.11
México. Distribución de la matricula de TSU/PA por área de conocimiento
2000-2001, 2004-2005, 2008-2009
(Por cientos)
Area Distribición de la matrícula por área
Grupo de de conocimiento y ciclo escolar
Conocimiento 00-01 04-05 08-09
31 Arquitectura y diseño 1.0 1.2 1.4
32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 2.4 2.1 2.4
33 Ciencias agropecuarias y forestales 1.8 1.3 1.2
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 6.3 4.7 5.4
35 Humanidades, filosofía y psicología 1.5 0.2 0.0
36 Ciencias químicas 1.4 1.8 2.2
37 Ciencias sociales y políticas 0.7 1.6 1.4
38 Disciplinas artísticas 0.5 0.4 0.3
39 Ciencias económico-administrativas y turismo 25.2 33.0 36.2
40 Educación y pedagogía 0.6 0.8 0.7
41 Ingenierías 58.6 52.8 48.9
42 Matemáticas, física y astronomía 0.0 0.0 0.0
Total 100.0 100.0 100.0
Fuente: cálculos propios con base en datos de SEP formatos 91 y ANUIES para 2008-009
Se incluyen los programas de TSU, Profesional asociado, ingeniería técnica y licenciatura técnica
Los datos de 2008-2009 sólo incluyen programas escolarizados

Licenciatura

Como se mencionado en las páginas anteriores, la matrícula del sistema educativo superior
ha crecido significativamente como resultado del esfuerzo de las IES públicas y privadas.
Ese crecimiento es resultado de decisiones independientes de miles de instituciones que
diseñan su oferta educativa en función de la demanda. La conclusión más importante de las
cifras incluidas en los siguientes cuadros es que el sistema ha crecido pero no ha cambiado
en su composición relativa. Salvo excepciones, como las reducciones del peso relativo de
las matrículas asociadas a las carreras vinculadas a la educación básica y casos específicos
como la carrera de contador público que reduce su peso relativo, o psicología que la
aumenta, las demás áreas y carreras mantienen sus posiciones históricas. En otras palabras,
el sistema es cada día más grande, pero mantiene sus proporciones (Cuadro 1.12).

oferta y demanda de profesionistas. La agrupación de carreras se presenta en el anexo estadístico de este


capítulo.

22
Cuadro 1.12
México. Distribución de la matricula de Licenciatura por área de conocimiento
2000-2001, 2004-2005, 2008-2009
(Por cientos)
Area Distribición de la matrícula por área
Grupo de de conocimiento y ciclo escolar
Conocimiento 00-01 04-05 08-09
31 Arquitectura y diseño 4.4 5.0 4.9
32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 1.2 1.3 1.2
33 Ciencias agropecuarias y forestales 2.2 2.1 2.0
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 6.5 7.2 7.1
35 Humanidades, filosofía y psicología 4.9 5.9 6.1
36 Ciencias químicas 3.1 3.5 3.4
37 Ciencias sociales y políticas 15.1 16.9 16.0
38 Disciplinas artísticas 0.4 0.5 0.6
39 Ciencias económico-administrativas y turismo 23.0 25.0 22.8
40 Educación y pedagogía 16.2 7.0 12.1
41 Ingenierías 21.3 24.1 22.4
42 Matemáticas, física y astronomía 0.7 0.7 0.7
999 No identificables incluye troncos comunes generales o de varias carreras 1.0 0.9 0.9
Total 100.0 100.0 100.0
Fuente: cálculos propios con base en datos de SEP formatos 91 y ANUIES para 2008-009
no se incluyen las licenciatura técnicas, las cuales al ser programas cortos de incluyen con los TSU/PA
los datos de 2008-2009 sólo incluyen programas escolarizados

Como ya se mencionó anteriormente, a partir de 2000, la matrícula en educación normal ha


ido disminuyendo como resultado de la política regulatoria de los servicios para la
formación inicial de profesores implementada por la Secretaría de Educación Pública,
conjuntamente con las autoridades educativas estatales.

Cuadro. 1.13
México. Las 10 licenciaturas con mayor matrícula. 2000-2001, 2004-2005, 2008-2009
Lugar en la lista descendente de matrícula
Clave Licenciatura en los ciclos escolares
00-01 04-05 08-09
392 Administración, relaciones industriales, comercio exterior 2 2 1
374 Derecho 3 3 2
400 Formación docente, educación y pedagogía 1 1 3
415 Ing. mecánica, industrial, y mecatrónica 6 5 4
413 Ing. en computación e informática 4 4 5
393 Contaduría y finanzas 5 6 6
355 Psicología 9 7 7
341 Medicina, terapia física y salud pública 8 9 8
414 Ing. Eléctrica, electrónica y electromecánica 7 8 9
394 Turismo y gastronomía 15 12 10
373 Ciencias de la comunicación y publicidad 10 10 12
Porcentaje de la matricula que agrupan 0.767 0.741 0.696
Fuente: Cálculos propios

23
Cuadro 1.14
México . Distribución de la matricula de licenciatura por área conocimiento por tipo de institución, 2000-2001, 2008-2009
(Por cientos)
Proporción de matrícula de cada carrera en IES privadas
Grupo Carrera 00-01 08-09
IES Total Proporción IES Total Proporción
Privadas Matrícula % Privadas Matrícula %
31 Arquitectura y diseño 36.5 88.6 41.14 74.9 145.8 51.33
32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 0.5 23.2 2.04 1.5 39.9 3.64
33 Ciencias agropecuarias, forestales y pesqueras 1.8 43.7 4.08 2.3 55.1 4.26
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 20.0 129.3 15.47 52.3 206.1 25.37
35 Humanidades, filosofía y psicología 33.7 97.4 34.55 69.8 158.6 44.01
36 Ciencias químicas 4.1 62.6 6.57 4.8 88.7 5.42
37 Ciencias sociales y políticas 137.1 302.5 45.34 169.4 46.40
38 Disciplinas artísticas 1.1 7.9 14.16 2.1 15.9 13.33
39 Ciencias económico-administrativas y turismo 187.8 461.1 40.72 243.4 555.2 43.85
40 Educación y pedagogía 108.1 324.7 33.30 78.0 219.3 35.57
41 Ingenierias 100.8 425.6 23.67 99.7 551.8 18.07
42 Matemáticas, física y astronomía 2.0 14.2 14.25 1.9 16.9 11.25
999 No identificables incluye troncos comunes generales o de varias carreras 2.5 19.8 12.78 3.6 11.4 31.80
Total 636.0 2,000.9 31.79 803.8 2,429.9 33.08
Fuente: cálculos propios

24
Al distribuirse la matrícula por área de conocimiento por tipo de institución se observa
claramente como el sector privado ha privilegiado su desarrollo sólo en ciertas áreas. En las
áreas “científicas” la poca matrícula privada que se registra corresponde en realidad a
ciencia aplicada. En las ingenierías la matrícula en IES privadas se ubica cerca del 20%
Sólo en las áreas de ciencias económico administrativas, humanidades, filosofía y
psicología, ciencias sociales y políticas y en arquitectura y diseño y en menor grado en
educación y pedagogía la presencia de las IES privadas es relevante y ha crecido entre 2001
y 2009 (Cuadro 1.14)

Posgrado

Considerando la distribución de la matrícula por áreas, podría decirse que durante la


primera década del siglo XXI tampoco en el nivel de posgrado se han registrado cambios
significativos. Sin embargo, conviene anotar algunas tendencias. Los posgrados en ciencias
agropecuarias y en ingeniería y tecnología están reduciendo su porcentaje relativo, mientras
lo aumentan los programas de las áreas de la salud y de las ciencias sociales impulsadas por
el crecimiento de los posgrados en derecho y psicología.

Cuadro 1.15
México. Distribución de la matrícula de Posgrado por área de conocimiento
2000-2001, 2004-2005, 2008-2009
(Por cientos)
Area Distribición de la matrícula por área
Grupo de de conocimiento y ciclo escolar
Conocimiento 00-01 04-05 08-09
31 Arquitectura y diseño 1.0 1.2 1.3
32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 2.7 2.8 2.5
33 Ciencias agropecuarias y forestales 1.7 1.6 1.5
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 14.2 13.3 16.0
35 Humanidades, filosofía y psicología 6.1 6.6 6.9
36 Ciencias químicas 1.7 1.5 1.6
37 Ciencias sociales y políticas 10.8 13.5 14.9
38 Disciplinas artísticas 0.2 0.3 0.4
39 Ciencias económico-administrativas y turismo 27.5 24.8 24.0
40 Educación y pedagogía 22.0 22.7 20.4
41 Ingenierías 10.7 10.7 8.9
42 Matemáticas, física y astronomía 1.1 1.0 1.1
No identificables incluye troncos comunes generales
999 o de varias carreras 0.2 0.2 0.5
Total 100.0 100.0 100.0
Fuente: cálculos propios con base en datos de SEP formatos 91 y ANUIES para 2008-009
Se incluyen los programas de especialidad, maestría y doctorado
Los datos de 2008-2009 sólo incluyen programas escolarizados

25
Cuadro 1.16
México. Distribución por entidad de la matrícula de educación superior, 2000-2001, 2008-2009
(Por cientos)
Proporción de la matricula total en la entidad (% )
Entidad Federativa TSU/PA Licenciatura Posgrado
00-01 08-09 00-01 08-09 00-01 08-09
Aguascalientes 3.3 3.0 1.0 1.2 0.8 0.8
Baja California 1.2 1.6 2.3 2.9 2.4 3.3
Baja California Sur 0.2 0.0 0.4 0.6 0.3 0.4
Campeche 1.3 1.7 0.8 0.8 0.5 0.5
Chiapas 1.0 1.7 2.6 2.5 2.3 1.7
Chihuahua 1.9 3.9 3.0 3.2 2.9 2.9
Coahuila 5.3 5.5 2.9 2.8 2.9 2.2
Colima 1.2 0.4 0.6 0.7 0.4 0.3
Distrito Federal 6.9 1.1 18.0 15.8 30.2 27.5
Durango 0.0 0.0 1.3 1.3 0.9 1.1
Guanajuato 8.3 6.4 2.9 3.1 4.1 5.3
Guerrero 0.9 2.4 3.0 1.9 1.2 0.8
Hidalgo 7.6 5.5 1.5 2.1 0.9 1.3
Jalisco 6.8 5.5 6.3 6.6 7.0 6.3
México 11.4 11.7 8.2 10.2 6.6 8.0
Michoacán 0.6 0.6 2.9 3.0 1.7 1.7
Morelos 1.1 1.8 1.5 1.5 2.0 1.8
Nayarit 0.0 3.3 1.3 1.0 0.3 0.3
Nuevo León 2.6 2.9 5.6 5.5 7.0 6.2
Oaxaca 0.0 0.0 2.6 2.4 0.5 0.6
Puebla 10.4 9.5 5.1 5.2 7.0 7.2
Querétaro 6.1 4.8 1.2 1.4 3.2 1.7
Quintana Roo 2.6 2.7 0.4 0.7 0.3 0.2
San Luis Potosí 1.8 1.5 1.9 2.1 1.4 1.2
Sinaloa 0.6 0.9 3.7 3.2 1.5 0.8
Sonora 4.3 5.2 2.9 3.0 1.2 3.1
Tabasco 6.4 3.0 1.8 2.3 0.7 1.2
Tamaulipas 1.1 4.3 5.0 3.6 3.8 4.4
Tlaxcala 1.4 1.0 0.9 0.9 0.8 0.3
Veracruz 0.9 2.9 5.9 5.4 2.7 3.6
Yucatán 1.3 4.0 1.6 1.9 1.9 1.7
Zacatecas 1.3 1.4 1.0 1.2 0.5 1.3
Total 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0
Fuentes: Cálculos propios con base en datos de SEP (2000-2001) y ANUIES (2008-2009)

c) El crecimiento de la matrícula a nivel de las entidades de la federación.

Aunque las políticas educativas tienen un carácter general, a lo largo de la primera década
de este siglo existen rasgos específicos en el reparto de las responsabilidades y de los
resultados a nivel de las entidades. Eso se aplica a todos los niveles y áreas, de forma que la
oferta educativa está lejos de ser uniforme entre las regiones del país.

Los estudios que conducen a los diplomas de TSU/PA se concentran en algunas entidades
de la federación: Aguascalientes, Coahuila, Hidalgo, México, Puebla, Querétaro, Sonora y

26
Tabasco. En el DF fueron importantes, pero para 2009 estaban en vías de extinción.
(Cuadro 1.16)

Las licenciaturas mantienen en general el mismo peso relativo a nivel de las entidades, con
algunas excepciones. En entidades como el DF, Guerrero, Nayarit, Sinaloa, Tamaulipas y
Veracruz ha disminuido significativamente el peso relativo de las licenciaturas como
consecuencia del mayor crecimiento de la matrícula de este nivel en otras entidades. Entre
ellas destacan Baja California, Hidalgo México y Tabasco.

Cuadro 1.17
México. Crecimiento de la matricula de educación superior por
Entidad entre 1999-2000 y 2008-2009
(Por cientos)
Variación en la matrícula entre el ciclo escolar entre
Entidad Federativa 2000-2001 y 2008-2009
TSU/PA Licenciatura Posgrado
Aguascalientes 64.0 47.7 35.1
Baja California 136.6 53.5 80.5
Baja California Sur -91.3 96.0 44.3
Campeche 137.0 32.1 44.9
Chiapas 198.3 18.5 -3.1
Chihuahua 257.3 28.7 31.2
Coahuila 83.7 17.7 3.8
Colima -34.8 23.0 -5.7
Distrito Federal -72.4 6.5 20.4
Durango 0.0 20.4 64.0
Guanajuato 37.1 28.3 73.5
Guerrero 377.8 -22.5 -16.5
Hidalgo 29.3 72.1 90.1
Jalisco 43.0 28.2 19.6
México 83.2 50.5 58.3
Michoacán 65.3 27.0 32.3
Morelos 189.3 18.9 20.5
Nayarit 0.0 -13.0 43.1
Nuevo León 100.8 19.6 17.9
Oaxaca 0.0 9.5 61.6
Puebla 61.8 24.8 35.3
Querétaro 39.0 41.0 -27.2
Quintana Roo 82.9 102.8 24.4
San Luis Potosí 41.9 32.2 10.6
Sinaloa 190.1 6.3 -27.9
Sonora 115.5 23.9 247.6
Tabasco -17.0 57.0 126.1
Tamaulipas 573.4 -11.3 50.9
Tlaxcala 27.1 20.1 -45.8
Veracruz 468.5 10.9 74.9
Yucatán 429.1 43.3 16.4
Zacatecas 99.1 51.4 236.7
Total 78.2 21.4 32.1
Fuente: cálculos propios con base en datos SEP y ANUIES
2008-2009 sólo incluye la matrícula escolarizada

27
También los posgrados han diversificado su presencia entre las entidades federativas. El
DF, Chiapas, Guerrero, Jalisco, Nuevo León, Querétaro, Sinaloa y Tlaxcala han perdido
una parte de su participación en el total, en beneficio de Baja California, Guanajuato,
Hidalgo, México, Tamaulipas y Veracruz.

El crecimiento de la matrícula de los tres niveles educativos superiores es muy distinto en


las diferentes entidades del país aunque como ya se dijo, la estructura global de
participación de los Estados cambia muy poco (Cuadro 1.17).

En la licenciatura destacan los estados de, Baja California, Baja California Sur, Hidalgo,
México, Quintana Roo, Tabasco y Zacatecas por tener crecimientos superiores al 50% en
este periodo. Las entidades que han registrado disminución en la población atendida de
nivel licenciatura son Guerrero, Nayarit y Tamaulipas. Este es sin duda un factor
especialmente preocupante por tratarse de los diplomas de mayor demanda, es decir que
constituyen el núcleo fundamental de las universidades.

En los posgrados, las entidades con crecimientos superiores al 100% en su matrícula fueron
Sonora, Tabasco y Zacatecas. Cerca de ellas se encuentran Hidalgo y Baja California. En
esas entidades, las instituciones líderes han hecho un gran esfuerzo para aumentar su oferta
educativa de este nivel. En contraste, otras entidades tuvieron un crecimiento negativo en
su matrícula de posgrado. Se trata de Tlaxcala, Querétaro y Guerrero.

El análisis geográfico de la matrícula de licenciatura por área de conocimiento muestra la


concentración en las cuatro entidades de mayor tamaño. En principio, parecería lógico que
se mantuviese una distribución en la cual el Distrito Federal y los estados de México,
Jalisco y Nuevo León, que son las entidades con mayor matrícula a nivel nacional, se
repartieran los cuatro primeros lugares de cada área. Resulta que hay excepciones
interesantes que conviene mencionar, porque dan cuenta de la existencia de núcleos de
académicos en ciertas áreas, que han desarrollado su actividad de formación e investigación
a un nivel que al final de cuentas les permite destacar en el plano nacional, desplazando a
las entidades que en teoría, por su tamaño, podrían haber mantenido su liderazgo en todas
las áreas del conocimiento. En sentido contrario, sugieren que las entidades grandes no han
actuado con el propósito de mantener su posición relativa en áreas que el país considera
estratégicas.

Las entidades que les han desplazado son las siguientes. Tabasco ocupa el tercer lugar en el
área biológica, desplazando a Jalisco. Coahuila tiene también el tercer lugar en ciencias
agropecuarias, desplazando también a Jalisco. Veracruz ocupa ese lugar en ingeniería y en
educación y pedagogía, desplazando también a Jalisco. Puebla lo tiene en las disciplinas
artísticas (desplazando al Estado de México) y en matemáticas y física desplazando a
Jalisco. En ciencias químicas, el segundo lugar lo ocupa Veracruz y el cuarto lo tiene
Puebla, desplazando a Jalisco y a Nuevo León. Puebla ocupa el 4° lugar en humanidades
desplazando a Nuevo León. (Cuadro 1.18)

28
Cuadro 1.18
México. Entidades con mayor matrícula en las áreas de conocimiento. 2008-2009
(Por cientos)
Entidades con mayor matrícula en las áreas de conocimiento
Grupo Areas de conocimiento 1er 2° 3er. 4° % de la matrícula
Lugar Lugar Lugar Lugar que agrupan
31 Arquitectura y diseño DF México. Jalisco. NL 48.3
32 Biología, biotecnología y ciencias del mar DF México. Tabasco Veracruz 37.9
33 Ciencias agropecuarias y forestales México DF Coahuila Veracruz 33.6
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas DF Jalisco México NL 41.5
35 Humanidades, filosofía y psicología DF México Jalisco Puebla 42.6
36 Ciencias químicas DF Veracruz México Puebla 44.3
37 Ciencias sociales y políticas DF México Jalisco 44.8
38 Disciplinas artísticas DF Jalisco Puebla NL 44.4
39 Ciencias económico-administrativas y turismo DF México Jalisco NL 39.6
40 Educación y pedagogía México DF Ver. Puebla 28.1
41 Ingenierías DF México Ver. NL 36.5
42 Matemáticas, física y astronomía DF México Puebla NL 69.2
Fuente cálculos propios.
DF: Distrito Federal, NL: Nuevo León

Otro aspecto a considerar en relación con la concentración de la matrícula a nivel de las


entidades es el reparto por áreas. En promedio, las cuatro entidades con más matricula en
cada área concentran aproximadamente el 40% de la matrícula, con dos excepciones: una,
educación y pedagogía, cuya matrícula está geográficamente mejor distribuida, de forma
que las cuatro entidades grandes no concentran sino el 28% de la matrícula. La otra
excepción es matemáticas y física, cuyo reparto, al contrario del área anterior, no está bien
distribuido: las cuatro entidades más importantes concentran el 70% de la matrícula. Esta
concentración es indicativa de que hay campos en donde el esfuerzo nacional se concentra
en pocas instituciones y pocas entidades.

Lo anterior lleva necesariamente a hacer un reconocimiento a aquellas instituciones y


entidades que han hecho esfuerzos extraordinarios por alcanzar posiciones de liderazgo en
algunos campos del conocimiento. Pero también a interrogarse sobre lo que está ocurriendo
en algunas entidades, como Jalisco, México y Nuevo León en las cuales pareciera existir
una actitud conformista y de bajo perfil en lo que se refiere al impulso a la educación
superior en general y en algunas áreas en lo particular. Estas observaciones encontrarán
nuevos argumentos en los aparatos siguientes, relacionados con la cobertura.

d) La participación creciente de las mujeres en la educación superior

La equidad de género es un objetivo que implica cambios sociales muy complejos, ya que
involucra la modificación de conductas y roles de las personas y la democratización de los
mecanismos de promoción de las mujeres al interior de las familias y de las organizaciones
sociales, es decir, las empresas, las instituciones educativas, los centros de investigación y
desarrollo tecnológico, los sindicatos, los partidos políticos, las oficinas gubernamentales,
los organismos internacionales, los organismos no gubernamentales, etc.

En el contexto internacional, México es uno de los países más alejados del equilibrio de
género. Según el Reporte de 2008 del Foro Económico Mundial, ocupa el lugar 97 en el

29
ranking de países respecto a la igualdad de género12. El lugar indica que en muchos
aspectos de la vida económica y social subsisten procesos de segregación y discriminación
contra las mujeres. Los problemas más serios se concentran en el ámbito laboral, que es
tema central de este trabajo, ya que ahí se reproducen los mecanismos que originan la
segregación ocupacional y la discriminación salarial contra las mujeres. Su vigencia va en
contra de los principios de equidad e igualdad de oportunidades.

Lo paradójico es que al nivel de la educación superior hay muestras inequívocas de un


equilibro en la matrícula, pese a que al nivel de las entidades subsisten brechas en cuanto a
las oportunidades de estudio de los hombres y las correspondientes a las mujeres. Cuando
se observan las estadísticas a nivel de matrícula nacional, desaparecen, porque se
compensan, las diferencias importantes que se observan en los datos desagregados en el
número de oportunidades educativas para las mujeres por entidad federativa o la
segregación por área de conocimiento.

Uno de los rasgos distintivos más importantes del sistema universitario mexicano es la
participación creciente de las mujeres. Como se puede apreciar en el Cuadro 1.19, las
mujeres han alcanzado el equilibrio al nivel de matrícula total del sistema. Considerando el
peso relativamente marginal que las mujeres tenían en la matrícula universitaria de hace
apenas medio siglo, estos datos expresan un logro social significativo. Lo anterior se
confirma cuando se sabe que desde hace algunos años las mujeres profesionistas son
mayoría en los registros que anualmente se realizan ante la Dirección de Profesiones.

Cuadro. 1.19
México. Participación de las mujeres en la educación superior
2000-2001, 2004-2005,2008-2009
(Por cientos)
Nivel Proporción de mujeres en la matricula total
Educativo 00-01 04-05 08-09
TSU/PA 40.7 43.1 43.5
Licenciatura 50.4 51.3 50.5
Posgrado 43.4 47.8 50.4
Total 49.7 50.8 50.2
Fuente: cálculos propios con base en datos de SEP (2000 y 2004) y ANUIES (2008)

La división de la matrícula a nivel de los diferentes niveles no divide exactamente por


mitad entre los hombres y a las mujeres. En la licenciatura y el posgrado, las mujeres
representan un poco más de la mitad, pero en el TSU/PA tienen un peso relativo de sólo el
43.5%. Al nivel de áreas y carreras subsiste la distinción entre algunas con predominio
femenino y otras con predominio masculino, aunque hay ya muchas carreras que registran
el 50% para cada sexo.

12
Los primeros lugares fueron para Suecia, Finlandia, Noruega, Islandia, Dinamarca, Alemania, España, etc.
y los últimos para Túnez, Marruecos, Turquía, Arabia Saudita. En la región latinoamericana, los países
latinoamericanos mejor ubicados fueron Trinidad y Tobago (19), Argentina (24), Cuba (25), Barbados (26),
Costa Rica (32), Panamá (34), Ecuador (35), etc.

30
En los programas de TSU/PA la distribución indica que las carreras de matemáticas y
física, ingeniería y ciencias agropecuarias son mayoritariamente masculinas. El caso
opuesto es el de la arquitectura y el diseño, las ciencias de la salud, las ciencias
administrativas y la educación (Cuadro 1.20a).

A nivel licenciatura y por áreas, no ha habido mayores cambios en la situación de equidad


de género. Las mujeres son mayoría en las áreas que se consideran tradicionalmente
femeninas: educación y pedagogía, humanidades (por psicología) ciencias de la salud (por
enfermería), y recientemente también en el área biológica. Por otra parte, persisten las áreas
de conocimiento predominantemente masculinas: ingeniería, física y matemáticas y
ciencias agropecuarias y las demás se mantienen en equilibrio (Cuadro 1.20b).

En un análisis por carrera, se puede observar que las mujeres son minoría, entre otras
carreras y áreas, en arquitectura (aunque el porcentaje de mujeres sobre el total va en
aumento), las ingenierías, las ciencias agropecuarias (aunque las mujeres aumentan su peso
relativo), veterinaria (en donde está aumentando su peso relativo), en filosofía y en física.
Son mayoría calificada en las carreras de diseño industrial y de interiores (además en
aumento por la presencia del diseño de interiores), biología, odontología, enfermería,
nutrición, literatura, psicología, QFB, ciencias sociales, comunicación, administración,
contaduría, turismo (en donde la tendencia al equilibrio es muy fuerte), archivonomía y
educación y pedagogía (en donde siguen aumentando su peso relativo). En una situación
de equilibrio o cercana a él, están las carreras de diseño gráfico, ecología, ingeniería
química y tecnología de alimentos, artes, historia (aunque las mujeres están disminuyendo
su peso relativo) y derecho (ver anexo).

Cuadro 1. 20 (a)
México. .Participación de las mujeres en el nivel de TSU/PA por áreas de conocimiento
2000-2001, 2004-2005, 2008-2009
(Por cientos)
Grupo Area de Proporción de mujeres en la matricula total
Conocimeinto 00-01 04-05 08-09
31 Arquitectura y diseño 74.60 63.80 63.90
32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 46.10 57.20 56.00
33 Ciencias agropecuarias, forestales y pesqueras 35.70 36.70 43.40
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 80.50 69.80 64.60
35 Humanidades, filosofía y psicología 63.80 48.20 50.00
36 Ciencias químicas 52.40 58.30 51.50
37 Ciencias sociales y políticas 46.30 54.90 48.50
38 Disciplinas artísticas 64.70 57.90 51.70
39 Ciencias económico-administrativas y turismo 60.60 61.60 62.60
40 Educación y pedagogía 72.80 78.40 71.20
41 Ingenierías 25.70 26.70 25.00
42 Matemáticas, física y astronomía 100.00 100.00 0.00
Total 40.70 43.10 43.50
Fuente: cálculos propios con base en datos de SEP y ANUIES
Los datos de 2008-2009 sólo incluyen programas escolarizados

31
Cuadro 1.20 (b)
México. Participación de las mujeres en el nivel de licenciatura, por áreas de conocmiento
2000-2001, 2004-2005, 2008-2009
(Por cientos)
Grupo Areas de Proporción de mujeres en la matricula total
Conocimiento 00-01 04-05 08-09
31.00 Arquitectura y diseño 41.70 43.90 45.50
32.00 Biología, biotecnología y ciencias del mar 49.10 51.80 53.60
33.00 Ciencias agropecuarias, forestales y pesqueras 27.60 32.40 35.10
34.00 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 60.50 64.10 65.30
35.00 Humanidades, filosofía y psicología 73.10 72.60 72.20
36.00 Ciencias químicas 52.60 54.80 55.10
37.00 Ciencias sociales y políticas 52.80 53.60 54.40
38.00 Disciplinas artísticas 51.60 50.80 50.90
39.00 Ciencias económico-administrativas y turismo 57.00 57.90 57.30
40.00 Educación y pedagogía 66.40 70.20 71.10
41.00 Ingenierías 25.90 26.00 23.30
42.00 Matemáticas, física y astronomía 37.80 37.40 38.20
Total 41.70 43.90 45.50
Fuente: cálculos propios con base en datos de SEP y ANUIES
Los datos de 2008-2009 sólo incluyen programas escolarizados

En el posgrado, subsisten las mismas tendencias que en la licenciatura. En la matrícula de


ciencias de la salud una situación cercana al equilibrio de género, con el 51.5% de
participación femenina. En educación y pedagogía las mujeres son mayoría. En las demás
áreas son minoría, sobre todo en ingeniería, en ciencias agropecuarias y en matemáticas y
física, aunque en los dos primeros casos están aumentando su presencia. Llama, sin
embargo, la atención el que en los posgrados de las áreas de ciencias sociales y políticas y
en ciencias económico-administrativas y turismo, las mujeres sean minoría cuando son
mayoría en la licenciatura.
Cuadro 1.20(c)
México. Participación de las mujeres en el nivel de posgrado, por áreas de conocimiento
2000-2001, 2004-2005, 2008-2009
(Por cientos)
Grupo Areas de Proporción de mujeres en la matricula total
Conocimiento 00-01 04-05 08-09
31.00 Arquitectura y diseño 42.30 43.90 49.80
32.00 Biología, biotecnología y ciencias del mar 46.60 48.00 52.40
33.00 Ciencias agropecuarias y forestales 26.80 32.90 41.30
34.00 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 45.10 49.20 51.50
35.00 Humanidades, filosofía y psicología 66.40 67.50 68.10
36.00 Ciencias químicas 48.70 52.50 50.60
37.00 Ciencias sociales y políticas 42.50 45.40 47.50
38.00 Disciplinas artísticas 55.10 52.70 51.90
39.00 Ciencias económico-administrativas y turismo 39.50 43.10 45.60
40.00 Educación y pedagogía 52.90 59.90 63.80
41.00 Ingenierías 22.70 25.60 26.60
42.00 Matemáticas, física y astronomía 25.40 29.10 28.60
TOTAL 43.40 47.80 50.40
Fuente: cálculos propios con base en datos de SEP y ANUIES
Los datos de 2008-2009 sólo incluyen programas escolarizados
32
A nivel de cada entidad federativa, la presencia de las mujeres en la matricula tiene el
mismo comportamiento que a nivel nacional, sin que se puedan distinguir entidades más
masculinas que otras (ver anexo estadístico de este capítulo). Sin embargo, como se verá
más adelante, cuando se analiza la cobertura por entidades y género, aparecen diferencias
significativas entre hombre y mujeres. En este caso, quedan en evidencia algunas entidades
que ofrecen un menor número de oportunidades de educación superior a las mujeres.

La política de la educación superior centrada en la cobertura y la calidad

Al inaugurar el Foro de Consulta para la Planeación de la Educación Superior, Análisis y


Perspectiva, en mayo 2007, el Subsecretario de Educación Superior señaló que “el
Gobierno del Presidente Felipe Calderón se ha comprometido a elevar la cobertura de la
educación superior en 30 por ciento en el país y a que ningún estado tenga una capacidad
de atención inferior a 20 puntos porcentuales hacia el año 2012”13. Al final de la primera
década del siglo XXI, la meta de cobertura nacional está por cumplirse, sobre todo si se
agregan los programas no escolarizados a los escolarizados, y la meta a nivel de las
entidades está por cumplirse ya que sólo quedan cuatro estados con una cobertura menor a
20% pero ya muy cercana a esta cifra, tal vez con la excepción de Chiapas.

Por otra parte, el presidente Felipe Calderón planteó los objetivos en materia de educación
en los siguientes términos: “Alcanzar una educación de calidad y superar el marasmo de
intereses a fin de que la educación sea la puerta grande para salir de la pobreza.” 14

Por último, el informe “Panorama de la Educación 2010” de la Organización para la


Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), afirma que “invertir en educación es
actualmente más importante que nunca, pues es la única manera real de enfrentar los
cambios sociales, económicos, demográficos y tecnológicos que está viviendo la sociedad y
el mercado laboral.”

En ese sentido, el triple objetivo de cobertura, calidad y equidad se postula como la base
para que la educación superior cumpla, entre otras misiones, con su función histórica de
movilidad social.

La evolución de la cobertura a nivel nacional

El cociente de la matrícula de nivel superior y el grupo de edad de 19 a 23 años arroja el


índice de cobertura. Dado que el ritmo de crecimiento de la matrícula ha sido mayor al
crecimiento de ese grupo de población, se ha incrementado el índice de cobertura. 15

13
http://www.ses.sep.gob.mx/wb/ses/280507_rtgse_elevara_cobertura_30
14
El País, 29/11/2010, Suplemento Periscopio, p. 4 “Asignatura pendiente. La educación de calidad es un
objetivo cercano.”

33
A lo largo de los últimos cuarenta años la evolución es la siguiente. En 1970 se alcanzó un
índice de cobertura del 6.7%. Dos décadas después, es decir en 1990, el índice fue del
15.4%. Al final de esa década se ubicó en 22.7%, para llegar en 2009 al 29.8%, muy cerca
de la meta del 30% que se propuso el gobierno para un año después. (Cuadro 1.21).

Cuadro 1.21
México. Cobertura de educación superior para el grupo de edad 19-23 años
1970-2009
(Absolutos y por cientos)
Ciclo Matricula TSU y licenciatura Población % de
Escolar (miles de alumnos) de 19-23 años Cobertura
(miles de personas)
1970-1971 271.3 4,032.30 6.7
1980-1981 935.8 N.D. 0.0
1990-1991 1,206.10 7,989.40 15.1
2000-2001 2,052.30 9,055.60 22.7
2008-2009 2,521.50 9,086.30 27.8
2008-2009 (e) * 2,707.50 9,086.30 29.8
Fuentes:
N.D. No Disponible
Población:
- para 1970 y 1990: INEGI: Población total por grupo quinquenal de edad según sexo, 1950 a 2005 ,
- para 2000 y 2008: rango de edad 19-23, Censo de Población y Vivienda (2000); Conteo de Población
(2005) y extrapolaciones a 2009. INEGI,
M atricula: ANUIES anuarios estadísticos. Sólo se incluyen programas escolarizados
Notas:
*2008-2009 (e) : para tener un estimado más cercano a la realidad se agregaron a los datos de ANUIES la
matricula de los programas no escolarizados usando la del ciclo 2007-2008 con información formato 911 SEP

- Para el cálculo de cobertura para el grupo de edad 19-23 años se considera sólo la matrícula de TSU y
licenciatura ya que el posgrado al ser posterior a la licenciatura implica una mayor edad de los estudiantes.

La cobertura de la educación superior en las entidades federativas.

a) Evolución de la cobertura a nivel nacional y por entidades de 1990 a 2009

La contribución de las entidades federativas al aumento en el índice nacional de cobertura


ha sido muy desigual. Si se comparan las cifras de cobertura 1990 con las de 2009, sólo con
programas escolarizados, se observa que la cifra pasó del 14% a 28%, es decir un
incremento de 14 puntos porcentuales en veinte años. Esas cifras reflejan los promedios
para cada año. En cada período hay grandes contrastes. Por ejemplo, entre las entidades
más alejadas de la media se encuentra Chiapas, con una cobertura que pasó de 4.2 a 15.4%,

15
Cabe señalar que en este estudio el cálculo de la cobertura se hizo tomando como numerador el total de
estudiantes matriculados en los niveles de TSU/PA y licenciatura. No se incluye la matrícula del posgrado ya
que en este nivel los alumnos tienen edades casi siempre por encima de los 23 años.

34
es decir 11.2 puntos porcentuales de incremento en 20 años, en si mismo importante,
aunque la cobertura alcanzada en 2009 sigue siendo la más baja a nivel nacional, lo que la
ubica como la entidad más rezagada desde el punto de vista de la cobertura. Esta posición
indica claramente que en esa entidad la educación superior no forma parte de las
prioridades de los gobiernos de los últimos años. En la primera década del siglo XXI
Chiapas avanzó sólo un punto porcentual en su índice de cobertura, pese a que el punto de
partida era muy bajo. La entidad que se encuentra en el otro extremo es el Distrito Federal,
con cifras de cobertura, para el mismo período de 28% a 53.4%, respectivamente, lo cual
significa que en el 2009 tuvo una cobertura 3.5 veces mayor a la de Chiapas.

Otra entidad que llama la atención, aunque por distintas razones, es Jalisco. Durante
muchos años esta entidad fue un referente obligado en el mapa nacional de la educación
superior. En los últimos años ha perdido su posición de liderazgo en lo que se refiere a la
cobertura. En 1990 tenía casi 20% y para 2009 sólo aumentó 6 puntos, lo cual lo alejó de
los primeros lugares que antes ocupaba.

Se había mencionado antes (Cuadro 1.17) que entre 2000 y 2009 algunas entidades habían
mostrado un decrecimiento en su matrícula de licenciatura. Ahora es posible observar (en el
Cuadro 1.22) que hay entidades que, además, han disminuido su índice de cobertura. Un
caso emblemático de esta situación es el de Guerrero. En efecto, esta entidad se encuentra,
respecto al índice de cobertura, en una situación especialmente preocupante. En el año 2000
ocupaba la posición 16, con un índice de cobertura del 22.3%, pero en el 2009 pasó a la
posición 29, en virtud de que su índice de cobertura bajó al 19%. Es decir, a lo largo de la
década registró una caída de 5 puntos porcentuales, lo que sugiere que se necesita un
análisis a mucha más profundidad para entender la problemática que se presenta.

Para ilustrar los cambios en los rangos de cobertura en las entidades, en tres años que
finalizan tres décadas, es decir 1990, 2001 y 2009, se ordenaron en orden de importancia en
cuanto al índice de cobertura. Al hacerlo, aparecen fenómenos interesantes (Cuadro 1.22).
Entre las entidades con índice de cobertura más bajos, conviene hacer una observación
especial respecto a lo que ocurre en Quintana Roo. En 1990 ocupó el lugar 31 y en 2009 lo
mantuvo, lo cual lo ubica entre las regiones que requieren de mayores esfuerzos para
acercarse a la media nacional. Sin embargo, en el mismo período, su índice de cobertura
pasó del 3.1% (que en 1990 era el más bajo de todos) al 17.6%, gracias a que en los últimos
nueve años logró un aumento de la matrícula del 103%.

Hay entidades que registran la tendencia contraria. En efecto, un grupo de entidades que en
1990 tenían un alto índice de cobertura y una buena posición en la lista, perdió su posición
relativa. Puebla, por ejemplo, en 1990 ocupó el lugar 2, después del Distrito Federal. Pese a
la creación de un buen número de instituciones privadas, en 2009 cayó al lugar 16, por
haber incrementado su índice de cobertura en solo 3 puntos porcentuales, lo que le
permitió tener el 27.4%, que es una cifra inferior a la media nacional. Jalisco muestra una
trayectoria semejante. En 1990 ocupó la posición 4, pero en 2009 cayó a la posición 20,
perdiendo 16 lugares, por razones idénticas a las de Puebla. Querétaro, San Luis Potosí, y
Veracruz registran situaciones similares al perder 10 lugares en la lista. Baja California
perdió 9 lugares y el Estado de México perdió 8.

35
En 1990, las 18 entidades con mayor rezago, que tenían una cobertura menor del 10% eran
en orden creciente: Quintana Roo, Chiapas, Guanajuato, Hidalgo, Oaxaca, Tabasco, Baja
California Sur, Michoacán, Morelos, Nayarit, Durango, Zacatecas, Campeche, México,
Tlaxcala, Yucatán, Guerrero y Aguascalientes.

Cuadro 1.22
México. Cobertura de la educación superior de la población de 19 a 23 años de edad por Entidad
Federativa, 1989-1990, 2000-2001, 2008-2009

Entidad Cobertura % ) Lugar Lugar Lugar Cambio de posición


Federativa 89-90 00-01 08-09 1990 2001 2009 1990/2009
Aguascalientes 9.8 23.9 31.1 15 10 8 7
Baja California 11.7 20 26.8 10 20 19 9
Baja California Sur 7.3 18.7 30.7 26 24 11 15
Campeche 9 24 29.4 20 9 13 7
Chiapas 4.2 14.2 15.4 31 30 32 -1
Chihuahua 11.6 22.4 30.9 12 13 9 3
Coahuila 16.2 27.2 34.3 7 6 1
Colima 14.8 27.5 30.4 9 7 12 -3
Distrito Federal 28 44.6 53.4 1 1 1 0
Durango 8 20.5 25.1 22 18 22 0
Guanajuato 4.8 14.3 18.6 30 29 30 0
Guerrero 9.4 22.3 19 16 14 29 -13
Hidalgo 5.4 17.2 27.8 29 26 14 15
Jalisco 19.8 21.6 26.4 4 15 20 -16
México 9.1 13.7 20.5 19 31 27 -8
Michoacán 7.4 16.1 22.7 25 28 25 0
Morelos 7.7 22.5 27.6 24 12 15 9
Nayarit 8 32.7 32.6 23 3 7 16
Nuevo León 22.6 29.1 36.3 3 5 4 -1
Oaxaca 6.4 18.1 20.4 28 25 28 0
Puebla 24.9 23 27.4 2 11 16 -14
Querétaro 11.3 20.3 25 13 19 23 -10
Quintana Roo 3.1 10.6 17.6 32 32 31 1
San Luis Potosí 11.7 19.7 25.2 11 22 21 -10
Sinaloa 18.3 30.6 37.5 6 4 3 3
Sonora 18.8 28.7 37.8 5 6 2 3
Tabasco 6.9 21 30.8 27 16 10 17
Tamaulipas 15.9 36.9 34.5 8 2 5 3
Tlaxcala 9.2 19.3 21.6 17 23 26 -9
Veracruz 10.3 19.9 22.8 14 21 24 -10
Yucatán 9.2 20.8 26.9 18 17 18 0
Zacatecas 8.1 16.9 27.2 21 27 17 4
Total Nacional 13.8 22.7 27.7
Fuente: Censo de Población y Vivienda (2000); Conteo de Población (2005) y extrapolaciones a 2009. INEGI, México.
SEP. Informes Estadísticos, Taborga, H., 2003, Expansión y diversificación de la matrícula de la educación superior en
México, ANUIES, México (p.185)

De ellas, las que registraron los mayores avances en las dos décadas siguientes fueron:
Nayarit (+24.6), Tabasco (+23.9), Baja California Sur (+23.4), Hidalgo (+22.4),
Aguascalientes (+21.3), Campeche (+20.4), Morelos (+19.9), Yucatán (+19.1), Zacatecas
(+19.1) y Durango (+17.1). A nivel nacional, la única entidad que tuvo mayores avances

36
que los estados señalados fue el Distrito Federal, con un aumento de 25 puntos
porcentuales.

En 2009, ninguna entidad tenía una cobertura menor a 10% y sólo 2 tenían una cobertura
menor a 20%; Chiapas y Quintana Roo lo cual es un avance muy significativo y una
muestra del esfuerzo que se ha hecho en las entidades para aumentar las oportunidades de
educación superior. En ese mismo ciclo escolar, 13 entidades registraron una cobertura
superior a la media nacional y 10 entidades por debajo de esa media nacional. Desde luego,
sería importante conocer los determinantes del rezago para cada una de ellas.

La observación de los indicadores anteriores confirma al Distrito Federal como el polo de


desarrollo educativo más importante del país. Afortunadamente, hay evidencias de que
otras entidades están acercándose a los indicadores del Distrito Federal, gracias a la
creación de nuevas instituciones y la consolidación de las universidades ya existentes.
Algunas de ellas han alcanzado los más altos niveles académicos, tanto en la docencia
como en la investigación, además de que tienen una presencia creciente en la preservación
y difusión de la cultura. De algún modo eso se refleja en los niveles de cobertura y en la
dinámica de la matrícula.

Si se conjuntaran esas variables y se hicieran tres grupos, las 32 entidades quedarían


separadas en los tres grupos siguientes: el primer grupo, que resultó ser de 14 entidades,
estaría formado por aquellas con una cobertura mayor a la media nacional en el ciclo
escolar 2008-2009. El grupo dos reúne a las 11 entidades que no tuvieron una cobertura
superior a la media pero han registrado una tasa de crecimiento en su matrícula superior a la
media. El tercero, que suma 5 entidades, está formado por las demás entidades, que se
caracterizan por tener una tasa de cobertura y una tasa de crecimiento de la matrícula ambas
inferiores a la media nacional
Cuadro 1.23
Mexico. Grupos de entidades según indicadores de
cobertura y de crecimiento de la matrícula de nivel
Grupo 1 Grupo 2 Grupo 3
Aguascalientes Baja California Chiapas
Baja California Sur Guanajuato Durango
Campeche Jalisco Guerrero
Chihuahua México Morelos
Coahuila Michoacán Oaxaca
Colima Puebla
Distrito Federal Querétaro
Hidalgo Quintana Roo
Nayarit San Luis Potosí
Nuevo León Yucatán
Sinaloa Zacatecas
Sonora
Tabasco
Tamaulipas
Grupo 1: cobertura mayor a la media nacional en 2008-2009
Grupo 2: cobertura menor a media nacional pero tasa de crecimiento entre 2001
y 2009 mayor a media nacional
Grupo 3: cobertura menor a media nacional y tasa de crecimiento entre 2001 y
2009 menor a media nacional
37
Algunas de las entidades que aparecen clasificadas en el grupo 2 están muy cerca de
alcanzar el nivel de cobertura correspondiente a la media nacional. Sin embargo la situación
de tres de las cinco entidades del grupo 3 es preocupante. Los casos de Durango y Morelos
no parecen ser críticos ya que sus indicadores tanto de cobertura como de crecimiento están
en aumento. Aunque la educación superior en Chiapas creció significativamente entre 1990
y 2000 este crecimiento no continuó en la siguiente década lo que coloca a esta entidad en
el último lugar en cuanto a cobertura. La situación de Guerrero es posiblemente la más
crítica ya que sus indicadores en este periodo están retrocediendo por la ya mencionada
disminución en la matricula. En Oaxaca, el crecimiento en la matrícula es demasiado bajo
para que la cobertura cambie significativamente.

La participación de los sectores público y privado en la matrícula de licenciatura por


entidad federativa.

Después de conocer las cifras de cobertura por entidad federativa, queda ahora por saber en
qué proporción el incremento de la cobertura en cada una de ellas se debe al esfuerzo del
sector público y qué parte al sector privado. Esa información está directamente relacionada
con el peso relativo que tiene el sector privado en cada entidad federativa y su cambio de
un período a otro. Dado que la licenciatura agrupa la mayor parte de la matrícula, el cálculo
de la repartición de la matrícula entre los sectores público y privado por entidad federativa
se hizo el análisis a este nivel. Los resultados de este conllevan algunas observaciones
complementarias a las ya mencionadas en párrafos anteriores.

Conviene recordar que de 2001 a 2009 la participación del sector privado en la matrícula
nacional de la licenciatura pasó del 31.9% al 33.1%. Para ubicar el significado real de estos
promedios conviene estudiar el posible contraste existente al interior de cada una de las
entidades. En 2001 había dos entidades en donde el peso relativo del sector privado era
mayor al del sector público. Ese año, en Guanajuato, las IES privadas concentraron el
58.2% de la matrícula y en Puebla la cifra fue del 51.5%. Hay entidades donde están muy
cerca de esas proporciones. En Morelos la fue del 49.5%, en Yucatán, de 47.8% y en
Nuevo León del 45%.

El balance nacional respecto al peso relativo del sector privado por entidad federativa es el
siguiente: en el ciclo 2000-2001 había veinte entidades con una participación de las IES
privadas mayor al 20%, trece con una participación mayor al 30%, siete con un peso
relativo mayor al 40% y dos con un porcentaje mayor al 50%. Estas cifras aumentan en
2009, con 22, 14, 8 y 1, respectivamente, lo que es una manera de ver el posicionamiento
del sector privado en esas entidades. El extraño caso de la entidad que dejó de tener una
participación mayor al 50% fue Tamaulipas. Ahí la participación del sector privado pasa,
entre 2001 y 2009, del 59.9% al 29.3% debido a una disminución del 50.8% en la matrícula
atendida. El hecho de haber perdido la mitad de la matrícula en sólo una década es un
suceso extraordinario que debería ser objeto de un análisis particular, lo cual desde luego
rebasa los límites de este trabajo. Otra entidad con una experiencia análoga fue Guerrero.
Ahí, la participación de las IES privadas en la matrícula total de licenciatura pasó del 21.8
al 19.2% como resultado de un descenso en su matrícula, en el mismo período del 31.5%.
No sería aventurado adelantar como conjetura la creciente inseguridad en esas entidades, lo

38
cual habría provocado una importante emigración de jóvenes que ante el deterioro de la
situación optaron por estudiar en otra parte.

Es más frecuente el caso de entidades donde en el mismo período se registró el fenómeno


opuesto, es decir, un aumento extraordinario en la matrícula y por consiguiente en la
contribución del sector privado en el aumento de cobertura. Por lo que se refiere a la
matrícula, los aumentos más elevados fueron los siguientes (por orden alfabético):
Aguascalientes (145%), Baja California (85%), Baja California Sur (140%), Colima
(151%); Estado de México (78%); Nayarit (147%); Oaxaca (97%), Quintana Roo (302%),
Sonora (170%); Tabasco (120%) y Zacatecas (247%) (ver anexo estadístico de este
capítulo).

En promedio y a nivel nacional, durante el período considerado, la matrícula de licenciatura


del conjunto de IES privadas creció 26% en este nivel, mientras que del sector público
creció el 19.3%, lo cual dio como resultado un crecimiento conjunto del 21.4%. Por su
parte, en ese mismo período, el índice de cobertura pasó de 22.7% al 27.7%. De este
aumento de 5 puntos porcentuales en la cobertura, el 40% se explica por la dinámica del
sector privado. Eso significa que de cada diez lugares nuevos creados en el sistema
universitario mexicano 4 fueron aportados por el sector privado. En ese sentido, el sector
privado es un protagonista importante en los aumentos de la cobertura.

La importancia relativa en la contribución del sector privado a los aumentos en la cobertura


cambia según la participación del sector privado en la matrícula y su ritmo de crecimiento.
Hay muchas situaciones posibles. Un caso excepcional es Nayarit, no tanto por el
incremento en la parte de la cobertura que entre 2001 y 2009 correspondió al sector privado
(+ 5 puntos porcentuales), sino por el hecho de que ese aumento compensó la pérdida de
matrícula del sector público, de modo que en términos netos, la cobertura de la entidad
permaneció constante. Otro caso fue el de Guerrero. Ahí la cobertura bajó 3.3 puntos
porcentuales por una disminución de la matrícula en todo el subsistema universitario. De
ese descenso, 1.2 puntos porcentuales, es decir el 36% de la disminución, se explica por el
decrecimiento de la matrícula del sector privado y el 64% por la disminución de la
matrícula de las IES públicas. Un caso más cercano a lo que ocurrió en Nayarit pero con los
roles invertidos fue Tamaulipas. Durante el mismo período, el índice de cobertura bajó 2.4
puntos porcentuales por una baja en la matrícula total, pero la cifra es resultado de un
efecto combinado: cayó la matrícula de las IES privadas en un 50.8% pero aumentó la
correspondiente al sector público en un 33%. Así, de no haber sido por el aumento de la
matrícula del sector público, la caída de la cobertura habría sido mayor al -2.4.

En 12 entidades el aumento en la cobertura se debió a un aumento en la contribución de las


IES privadas fue superior al 50%: Aguascalientes, Colima, Guanajuato, México, Morelos,
Nuevo León, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Jalisco, Sonora y Yucatán.

Conviene señalar que también hay entidades en donde se registró con el fenómeno
contrario, es decir donde la participación de las IES privadas decreció o participó en el
aumento, pero de manera marginal: Chiapas (-10%); Durango (9%); Hidalgo (11%),
Michoacán (16%); Chihuahua (17%) y Veracruz (18%).

39
Cuadro 1.24
Contribución de las IES privadas en el aumento en la cobertura 2001-2009
(Por cientos)
Aumento en la Aumento en la Contribución de
Entidad cobertura cobertura derivado la IES privadas
Federativa 2009/2001 (puntos del incremento al aumento de
porcentuales) de la IES privadas cobertura
Aguascalientes 7.1 5.0 70.4
Baja California 6.8 2.5 36.8
Baja California Sur 12.0 4.8 40.0
Campeche 5.4 1.3 24.1
Chiapas 1.2 -0.1 -8.3
Chihuahua 8.6 1.5 17.4
Coahuila 7.1 2.6 36.6
Colima 2.9 2.2 75.9
Distrito Federal 8.8 2.0 22.7
Durango 4.5 0.4 8.9
Guanajuato 4.4 2.3 52.3
Guerrero -3.3 -1.2 36.4
Hidalgo 10.7 1.2 11.2
Jalisco 4.9 2.5 51.0
México 6.6 3.6 54.5
Michoacan 6.6 1.0 15.2
Morelos 5.2 2.7 51.9
Nayarit 0.0 5.1 0.0
Nuevo León 7.2 5.0 69.4
Oaxaca 2.4 2.1 87.5
Puebla 4.5 3.3 73.3
Queretaro 4.7 2.0 42.6
Quintana Roo 6.9 5.0 72.5
San Luis Potosí 5.4 1.9 35.2
Sinaloa 6.9 2.9 42.0
Sonora 9.1 4.7 51.6
Tabasco 9.9 2.8 28.3
Tamaulipas -2.4 -9.4 391.7
Tlaxcala 2.3 1.0 43.5
Veracruz 2.9 0.5 17.2
Yucatán 6.1 3.7 60.7
Zacatecas 10.3 2.6 25.2
Total 5.1 2.0 39.2
Fuente: Cálculos propios.

c) Cobertura de educación superior y género.

En el apartado relacionado con la creciente participación de las mujeres en la educación


superior, se señaló que la tendencia al nivel de la matrícula en su conjunto era hacia el
equilibrio de género. Algo semejante ocurre en las áreas y carreras pese a que subsisten las
llamadas carreras masculinas y femeninas. Sin embargo al calcular el índice de cobertura
por entidad federativa se observa que la cobertura de los hombres es mayor que la de las

40
mujeres en la mayoría de las entidades. Es un indicador contundente de la desigualdad de
género al nivel de las oportunidades existentes. En el año 2000 la cobertura promedio de los
hombres fue del 23.8%, mientras que la cifra para las mujeres fue del 21.7%. En el 2009 las
cifras fueron de 29% y 26.6%, respectivamente. La brecha se amplió de 2.1 a 2.4 puntos
porcentuales.

Cuadro 1.25
México. Relación entre la matricula de TSU y licenciatura y la población de 19 a 23 años
por entidad federativa y género
(Por cientos)
Entidad Cobertura de educación superior (% ) Diferencia en cobertura
Federativa 00-01 08-09 entre mujeres y hombres
Hombres Mujeres Hombres Mujeres 00-01 08-09
Aguascalientes 24.3 23.6 31.4 30.7 -0.7 -0.7
Baja California 20.0 20.1 26.5 27.1 0.1 0.6
Baja California Sur 18.5 18.9 28.4 33.1 0.4 4.6
Campeche 26.1 21.9 30.9 28.1 -4.2 -2.7
Chiapas 16.3 12.3 17.2 13.9 -4.0 -3.2
Chihuahua 22.1 22.7 31.7 30.2 0.6 -1.6
Coahuila 28.5 25.9 35.8 32.8 -2.6 -3.0
Colima 28.7 26.4 30.7 30.2 -2.4 -0.5
Distrito Federal 47.4 42.7 54.4 52.4 -4.6 -2.0
Durango 21.5 19.6 26.3 23.9 -1.9 -2.3
Guanajuato 14.8 13.8 19.8 17.7 -1.0 -2.2
Guerrero 22.2 22.4 19.0 18.9 0.2 -0.2
Hidalgo 17.3 17.1 28.9 27.0 -0.2 -2.0
Jalisco 22.5 20.8 27.5 25.5 -1.7 -2.0
México 14.6 12.9 20.9 20.1 -1.6 -0.7
Michoacán 17.3 15.2 24.9 21.0 -2.1 -3.8
Morelos 22.3 22.6 28.6 26.7 0.4 -1.9
Nayarit 31.8 33.4 32.1 33.1 1.7 1.0
Nuevo León 30.5 27.8 37.5 35.1 -2.7 -2.5
Oaxaca 19.7 16.7 22.4 18.8 -3.1 -3.6
Puebla 24.2 22.0 29.8 25.4 -2.3 -4.4
Querétaro 21.1 19.6 26.3 23.9 -1.5 -2.4
Quintana Roo 11.0 10.3 17.7 17.4 -0.6 -0.3
San Luis Potosí 21.5 18.2 27.1 23.5 -3.3 -3.6
Sinaloa 31.4 29.8 37.9 37.1 -1.6 -0.7
Sonora 29.3 28.2 39.1 36.5 -1.0 -2.5
Tabasco 23.1 19.1 33.2 28.8 -4.1 -4.4
Tamaulipas 37.6 36.3 35.5 33.5 -1.3 -2.0
Tlaxcala 18.3 20.2 21.7 21.5 1.9 -0.2
Veracruz 21.0 18.9 24.7 21.1 -2.1 -3.6
Yucatán 22.2 19.4 27.6 26.2 -2.8 -1.4
Zacatecas 18.8 15.4 28.3 26.2 -3.4 -2.1
Total Nacional 23.8 21.7 29.0 26.6 -2.2 -2.5
Fuente cálculos propios, con base en información de SEP y ANUIES

Los contrastes a nivel de cobertura y de género que se habían señalado en otros rubros, se
acentúan cuando se observa la situación en cada una de las entidades. Comparando las

41
diferencias de cobertura entre mujeres y hombres en 2000-2001 y 2008-2009 queda claro
que sólo en tres entidades la cobertura es a favor de las mujeres: Baja California, Baja
California Sur (en las cuales el número de oportunidades de educación superior para las
mujeres crecieron a un ritmo mayor que el correspondiente a los hombres) y Nayarit,
aunque en este caso el número de oportunidades para las mujeres es mayor que el de los
hombres, aunque tiene muestra una tendencia a la baja. (Cuadro 1.25).

En otras entidades se ha presentado un avance hacia la igualdad de género, disminuyendo la


diferencia de cobertura en más de un punto porcentual: se trata de Campeche, Colima,
Distrito Federal, Yucatán y Zacatecas.

Desafortunadamente es mayor el número de entidades en donde se registra un retroceso al


aumentar la brecha que separa la cobertura de las mujeres respecto a la de los hombres. Se
trata de Chihuahua, Michoacán, Morelos, Puebla, Sonora y Tlaxcala.

Las diferencias de género no solo deben observarse al interior de cada entidad sino entre las
entidades. Cuando se observa al interior de una entidad se encuentran situaciones como la
siguiente: En el Distrito Federal, la probabilidad de que un hombre del grupo poblacional
de 19 a 23 años se encontrara estudiando en una universidad era del 54.4% y la cifra para
una mujer era del 52.4%. Para el año 2000 esas cifras eran de 47.4% y 42.7%,
respectivamente. Eso quiere decir que la cobertura entre los varones se incrementó en 7
puntos y entre las mujeres 9.7. De ese modo, se redujo la brecha de género, de 4.7 puntos
a dos. Son los indicadores más altos, reflejo de una tradición histórica que ubica a la ciudad
capital como el centro educativo más importante del país y mayor número de oportunidades
de estudio para las mujeres. Cuando se comparan las entidades, se observan situaciones
como la siguiente: las oportunidades que tienen los jóvenes en el DF son tres veces
superiores a las que tienen en Chiapas. Considerando únicamente a las mujeres de las dos
entidades, las mujeres del DF tienen casi cuatro veces el número de oportunidades que
tienen las chiapanecas.

Desde el punto de vista de las oportunidades a nivel de género, se puede hacer una división
de las entidades federativas en tres grupos (Cuadro 1.26). El grupo 1 reúne a las entidades
que tienen una cobertura de mujeres superior a la media nacional en 2008-2009 y en las
que, entre 2001 y 2009, se redujo la brecha de cobertura entre hombres y mujeres. Sería el
grupo de entidades con mejor trayectoria hacia la igualdad de género. El grupo 2 está
formado por las entidades en las que se ha reducido la brecha que separa la cobertura de los
hombres y de las mujeres aunque la cobertura sea menor a la media Estas entidades estarían
en una situación intermedia en cuanto a la búsqueda de la igualdad de género. El grupo 3
está integrado por todas las demás, es decir por aquellas entidades donde se ha ampliado la
brecha entre la cobertura de los hombres y la de las mujeres. Es muy indicativo de la
realidad nacional que en este grupo aparezcan 19 entidades. Eso sugiere que en la mayoría
de las entidades no se está buscando igualar el número de oportunidades de estudios
superiores para hombres y mujeres.

42
Cuadro 1.26
Grupos de entidades según indicadores de cobertura de mujeres
respecto a la media nacional y según la brecha entre hombres
mujeres, 200-2001, 2008-2009
Grupo 1 Grupo 2 Grupo 3
Aguascalientes Chiapas Chihuahua
Baja California México Coahuila
Baja California Sur Quintana Roo Durango
Campeche Yucatán Guanajuato
Colima Zacatecas Guerrero
Distrito Federal Hidalgo
Nuevo León Jalisco
Sinaloa Michoacán
Morelos
Nayarit
Oaxaca
Puebla
Querétaro
San Luis Potosí
Sonora
Tabasco
Tamaulipas
Tlaxcala
Veracruz
Grupo 1: Cobertura en mujeres mayor a media nacional en 2009 y reducción o mantenimiento de la
brecha entre hombre y mujeres
Grupo 2: Reducción de brecha entre hombres y mujeres aunque cobertura no sea mayor a media
Grupo 3: Aumento de la brecha en la cobertura de hombres y mujeres

Todo lo anterior nos lleva a preguntarnos sobre la educación como un derecho. Este
derecho se deriva del compromiso asumido por el Estado mexicano para que la enseñanza
superior sea accesible a todos, sobre la base de la capacidad de cada uno, por cuantos
medios sean apropiados y en particular por la implantación progresiva de la enseñanza
gratuita.16 Su ejercicio parece estar condicionado por variables ligadas al individuo y otras
al entorno. En el primer caso, están presentes los factores a cada persona (historia escolar,
potencial académico, etc.) y a sus circunstancias (origen familiar, cultural, social, etc.), El
segundo grupo de factores está definido por el entorno en el sentido de número y calidad de
las oportunidades educativas a su alcance y las condiciones requeridas para aprovecharlas.
Incrementar la cobertura con programas de calidad significa en las distintas entidades y al
interior de ellas en las distintas ciudades y regiones aumentar el número de oportunidades a
disposición de los jóvenes que han terminado su escolaridad media superior, que quieren
emprender estudios universitarios y que tienen el potencial académico para hacerlo. La
ampliación de los lugares disponibles en las universidades cercanas a sus lugares de origen

16
Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de las Naciones Unidas, ratificado por
casi todos los países del mundo. El Pacto en su artículo 13 reconoce el derecho de toda persona a la
educación.

43
y la existencia de procesos de selección basados en méritos y en potencial académico son
elementos importantes para acercar al sistema universitario mexicano al principio de
igualdad de oportunidades.

La ampliación del número de oportunidades educativas a lo largo y ancho del país permite
alcanzar una cobertura cada vez mayor y reduce la brecha que separa a México de los
países que han alcanzado altos índices de cobertura, como ocurre con los países
industrializados que forman parte de la OCDE. Igualmente importante es la búsqueda de
una cada vez mejor calidad en la oferta educativa, de forma que el crecimiento de la
matrícula signifique para los estudiantes una formación integral que les ayude a integrarse
en el mercado de trabajo. Por último, se justifica también plenamente la política de equidad,
en el sentido de ofrecer un mínimo de condiciones materiales a quienes tienen el potencial
para emprender estudios superiores, pero que por su origen familiar y cultural no tienen las
condiciones de hacerlos sin un apoyo económico del Estado o de alguna institución
especializada en esta función. Con una política de mayores oportunidades, de una
educación de calidad y con apoyos que reduzcan las desigualdades sociales se puede hacer
realidad el propósito de movilidad social que se asigna al sistema educativo.

El complemento necesario de estas políticas está incluido en las recomendaciones de los


estudiosos de los sistemas de educación superior en diferentes países y circunstancias. Lee
Oswald, por ejemplo, sostiene que los sistemas de educación superior tienen que
transformarse profundamente para cumplir su misión en un mundo cada vez más complejo
(Harvey, 2000: 3-17). Para ello es necesario, entre otros elementos, que mantengan una
relación estrecha con el aparato productivo. Según él, hay muchas presiones para que las
instituciones de educación superior preparen individuos con alto nivel de habilitación y
motivación en tanto ese perfil es condición indispensable para que la economía alcance y
mantenga un alto nivel competitivo en el mundo. Ese perfil debe contener los
conocimientos, habilidades y motivaciones necesarios para que se integren exitosamente en
el mercado de trabajo Por su parte, los egresados tienen que prepararse para cumplir el
papel transformador que la sociedad espera de ellos.

Por su parte, (Brenan y Teichler, 2008) consideran que los sistemas universitarios no
pueden verse como sistemas cerrados. Según ellos, la competencia empresarial también se
aplica, con sus propias formas, a los centros de formación, como ya ocurre en la producción
del conocimiento científico y el desarrollo tecnológico. El horizonte abierto por la
globalización económica es muy amplio y no puede ser ignorado. El reconocimiento de las
nuevas realidades implica cambios en el sistema “nacional” universitario, empezando desde
el concepto mismo de universidad hasta las formas específicas de formación de los
profesionistas. La integración creciente de la economía y los mercados mundiales pueden
ser, de ese modo, un factor de modernización del sistema educativo.

La construcción de la sociedad del conocimiento implica, según los mismos autores, una
situación en la que unos países se distinguen por ser productores del conocimiento y por la
aplicación de los nuevos conocimientos a su economía y otros por ser dependientes de ese
conocimiento. Las universidades pueden jugar un papel importante en la transición de una
economía dependiente a una economía que produzca y aplique los avances de la
investigación científica y la innovación tecnológica.

44
Desde el punto de vista de una eventual reforma institucional, Brenan y Teichler, proponen
a las universidades analizar los distintos modelos de gobierno corporativo que se tienen a la
mano, tanto para mejorar los índices de eficiencia y eficacia, como para estar en
condiciones de coordinar y armonizar los diversos intereses y centros de decisión que
influyen en la definición de los objetivos y en su funcionamiento cotidiano. La experiencia
de lo que ocurre en las empresas en materia de gobernanza corporativa puede ser un
referente útil también para las universidades.

La cobertura de la educación superior en México en el contexto internacional.

En los últimos años el gobierno mexicano ha puesto una mayor atención a los resultados de
los análisis comparativos del sistema educativo mexicano con el de otros países. A nivel
básico se están retomando criterios internacionales para el desarrollo de los instrumentos de
evaluación del sistema. A pesar de los cuestionamientos de ciertos grupos sobre la
pertinencia de estas evaluaciones, los análisis comparativos influyen de manera creciente en
las políticas educativas de México al incluir metas que buscan cerrar las brechas existentes
con otros países.

En el caso de la educación superior uno de los indicadores usados es el índice de cobertura.


Para comparar el índice de cobertura del nivel superior se ha seleccionado una muestra
integrada por países muy cercanos al nuestro por geografía, historia y nivel de desarrollo
económico y otros que no lo son tanto, pero son representativos de lo que ocurre en el
mundo desarrollado sobre todo entre quienes forman la OCDE y de otras regiones. De los
países latinoamericanos se consideraron los casos de Argentina, Colombia, Venezuela y
Brasil. Del segundo grupo se incluyó a Estados Unidos, Canadá, Francia, Reino Unido,
España y Suecia. De la región intermedia entre Europa y Asia se incluyó a Turquía, que
tiene muchas similitudes con México en cuanto a nivel de desarrollo y, como se observa en
el Cuadro 1.27 también en el nivel educativo superior.

Al interior del primer grupo, Argentina tiene el índice de cobertura más alto, seguida de
lejos por Colombia, Venezuela, Brasil y México. En 2005, Argentina se encontraba muy
cerca de Canadá en la cobertura de hombres y mujeres, por arriba de Francia y de España.
En este último caso, también en 2005, la cobertura era de 60% en el caso de los hombres y
de 73% en el caso de las mujeres, equivalentes a más del doble de los indicadores de
México.

Los países con mayores coberturas son Estados Unidos y Suecia. De los países
considerados en la muestra ellos son los que tienen el mayor desarrollo económico y, en lo
que se refiere a la educación superior, el mayor número de oportunidades educativas para
los jóvenes.

45
Cuadro 1.27
Indicadores de cobertura de la educación superior en varios países del mundo
(2000 y 2005) (%)
(Por cientos)
País 2000 2005
Hombres Mujeres Promedio Hombres Mujeres Promedio
Estados Unidos 59.72 78.77 69.25 68.75 96.37 82.56
Suecia 54.93 79.96 67.45 64.43 99.64 82.04
España 54.57 64.29 59.43 60.60 73.02 66.81
Canadá 58.89 68.19 63.54 53.09 72.06 62.58
Reino Unido 53.12 63.25 58.19 49.91 70.97 60.44
Francia 47.62 58.57 53.10 49.47 56.19
Turquía 27.46 18.72 23.09 35.59 26.32 30.96
Brasil 14.00 18.75 16.38 22.23 28.01 25.12
Venezuela 29.15 33.87 31.51 N.D. N.D. N.D.
Argentina 41.79 64.65 53.22 52.09 75.72 63.91
Colombia 22.12 24.07 23.10 27.87 30.14 29.01
México 25.69 22.95 24.32 28.86 26.99 27.93
No Disponible
Fuente: Elaborado con datos del Banco M undial: World Development Indicators (Base de datos en diskete, 2009)

Desde luego, la mención de los avances en estos países no sugiere una relación directa entre
altos niveles de cobertura y un alto nivel de desarrollo económico. Se requiere el concurso
de muchas circunstancias adicionales a la cantidad y calidad de estudiantes universitarios
para que, en su caso, esa relación de causalidad se verifique. Pero una reforma estratégica
de la educación superior en el sentido en el que se ha venido mencionando en este trabajo
puede contribuir al cambio de modelo productivo que se intenta imponer en México desde
mediados de los años ochenta, cuya clave es la competitividad de la economía mexicana en
general y de las empresas y productos hechos en México en particular en los mercados
internacionales. No es casualidad que países como China e India, que son países en
desarrollo como México, hayan incrementado su matrícula en educación superior, sobre
todo en áreas como las ciencias, las ingenierías y la gestión de empresas al interior del país
y en el exterior. Esto último mediante un gran aprovechamiento de las becas existentes (que
ofrecen los gobiernos y las propias universidades) y una serie de apoyos internos que
buscan enviar a sus mejores alumnos a las mejores universidades de todos el mundo. Del
capital humano formado en universidades chinas y extranjeras depende el desarrollo de la
ciencia en China e India y la puesta al día de las fábricas y de las empresas de servicios
orientadas a los mercados nacionales e internacionales.

No es necesario esperar a alcanzar los elevados índices de desarrollo económico que ahora
tienen países como Estados Unidos, Francia, Alemania o Suecia para tener índices de
cobertura superiores al 30% que ya alcanzó México. Ese sería el argumento si se aceptara
que Estados Unidos y Suecia lograron esos indicadores de cobertura sólo como
consecuencia del alto nivel de desarrollo alcanzado por sus economías. Aunque eso es
parcialmente cierto, en el sentido de que el desarrollo económico permite ofrecer mejores
oportunidades educativas para todos, es igualmente cierto que el desarrollo del capital
humano en esos países contribuye al desarrollo de la economía. En ese sentido, la creación
de un número creciente de oportunidades educativas de calidad para una población de

46
jóvenes que crece a tasas significativas es importante para el desarrollo económico,
científico y tecnológico del país.

Sin embargo, es evidente que el sistema educativo no puede ser la locomotora del
desarrollo económico. Hay países que han alcanzado muy altos índices en el desarrollo de
sus sistemas educativos y científicos, sin que hayan logrado desarrollar sus economías. Ese
papel le corresponde a la economía, al modelo de producción y consumo que se diseñe para
ser la locomotora del crecimiento económico y del cual el sistema educativo debe ser un
coadyuvante. Los indicadores de éxito de ese modelo serán, entre otros, el posicionamiento
que se logre en la economía mundial, el volumen de inversiones que atraiga para apuntalar
el crecimiento de las exportaciones y la producción de bienes y servicios para el mercado
interno y el nivel de empleo. El indicador correspondiente al sistema educativo estará
vinculado al grado en el que forme, en cantidad y calidad, a los profesionistas y
especialistas que requiere el desarrollo de ese modelo productivo, además de los
profesionistas y especialistas que se necesitan en todos los demás ámbitos de la vida
política y social. La relación de causalidad también será en el otro sentido, es decir, los
avances que se registren en la economía permitirán generar los recursos para que una cada
vez mayor proporción de jóvenes se formen en las universidades.

La calidad de los programas educativos.

En los últimos años, las autoridades educativas han considerado importante introducir al
sistema de nivel superior el objetivo de calidad. Se asume que es el complemento
indispensable de los objetivos de cobertura y equidad. Una cobertura sin equidad y calidad
no responde sino parcialmente las aspiraciones de la sociedad y las necesidades del
mercado de trabajo. La construcción de una sociedad más justa implica el ideal de una
educación de calidad para todos. La modernización de la economía y de la sociedad
requiere la formación de profesionales y especialistas del más alto nivel en todos los
campos. En ese sentido hay una convergencia entre quienes aspiran a obtener una
educación de calidad y las necesidades del entorno. Las universidades están obligadas a dar
respuesta a esos desafíos.

Los esfuerzos relacionados con el mejoramiento de la calidad empezaron por promover una
nueva cultura de la evaluación. Se inició con una invitación a la autoevaluación como fase
de transición hacia una evaluación externa que condujera a la acreditación. Para esta
segunda etapa se crearon los CIIES y posteriormente el COPAES que a través de sus
organismos otorga la acreditación a los programas de esos dos niveles educativos.

Por lo que se refiere a los posgrados, se integró el Padrón Nacional de Posgrado SEP-
CONACYT.

La información disponible sobre el trabajo acumulado de los organismos dependientes del


COPAES permite hacer el siguiente balance global en relación con el segmento integrado por
las IES privadas. Como se mencionó anteriormente, en el ciclo escolar 2008-2009 y para el
nivel de licenciatura, el sector privado atendió a una población de 803.8 miles de alumnos,
equivalente al 33.1 % de la población total de ese nivel. De ellos, solamente 110.1 miles de
alumnos se encontraba estudiando en programas acreditados por el COPAES.

47
Eso significa que sólo el 14 % de la población atendida por las IES particulares estaba
inscrita en programas reconocidos por el COPAES como de calidad. Este indicador sugiere
que el crecimiento de la participación del sector privado en la educación superior se ha
hecho sin que se haya otorgado a la calidad educativa la importancia que merece. Los
intereses económicos han privado sobre los objetivos educativos. Con la excepción de un
relativamente pequeño número de instituciones privadas, para las cuales la calidad
educativa es prioritaria y como consecuencia han logrado acreditar la totalidad de sus
programas académicos, el sector privado ha optado por permanecer al margen de la cultura
de la evaluación y la acreditación oficiales. De ese modo, la calidad de su oferta educativa
permanece en una situación de opacidad, que no se resuelve con costosas campañas de
publicidad institucional.

Por su parte, el balance global para las IES públicas es la siguiente: durante el mismo ciclo
y para el mismo nivel de licenciatura, la población atendida fue de 1,626.1 miles de
estudiantes. De ese total, la matrícula registrada en programas acreditados fue de 744.6
miles de estudiantes, lo que equivale al 46% de su matrícula total. Estas cifras muestran
que las IES públicas han respondido al llamado de las autoridades educativas por una mejor
calidad de los programas en mayor proporción que las IES privadas. En principio este
comportamiento es consistente con su carácter de instituciones públicas. Como se
mencionó anteriormente, tuvieron que pasar muchos años antes de que un grupo importante
de instituciones públicas se sumara a la cultura de la evaluación y la acreditación
promovida por las autoridades de la SEP y los representantes de la ANUIES. Fue necesario
que, además del convencimiento propio, se crearan programas específicos para apoyar a las
IES públicas en la realización de acciones tendientes a mejorar su infraestructura, su planta
académica y sus sistemas de apoyo a la docencia y el aprendizaje. En ese sentido, llama la
atención que después de diez años de funcionamiento del COPAES, más de la mitad de la
matrícula de las IES públicas esté inscrita en programas que no tienen la acreditación.
Para el ciclo 2008-2009, al sumar la matrícula del sector privado y la correspondiente al
sector público que estaba en programas acreditados, aparece que sólo el 35.4% de la
matrícula total del nivel licenciatura se encontraba estudiando en programas acreditados por
el COPAES; el 14 % de la matrícula total inscrita en IES particulares y el 46% de la
matrícula atendida por las IES públicas.

a) La acreditación a nivel de programas.

En 2009, de un total de 15,111 programas de licenciatura escolarizados, únicamente 1,711,


es decir el 11.3%, habían obtenido su acreditación.

Ninguna de las 12 áreas en las que se agruparon los más de 15 mil programas de
licenciatura alcanza una cifra elevada cuando se hace el cociente del número de programas
acreditados sobre el total. En algunos casos, un bajo porcentaje de programas acreditados
implica una proporción elevada de la matrícula. En varias de las áreas de conocimiento el
porcentaje de matrícula que está en programas acreditados rebasa el 33.3% (Cuadro 1.28).
1) Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas, 2) Ciencias químicas, 3) Ciencias
agropecuarias, forestales y pesqueras, 4) Ciencias económico-administrativas y turismo, 5)
Ingenierías, 6) Arquitectura y Diseño y 7) Biología, biotecnología y ciencias del mar. Con

48
sólo 1% de los programas acreditados destacan las áreas de educación y pedagogía y las
disciplinas artísticas. El caso de las áreas de matemáticas y física y de las disciplinas
artísticas es especial ya que a la fecha en el primer caso no se han constituido los
organismos acreditadores especializados y en el segundo el organismo es aún muy reciente
para que se vea un impacto.

Cuadro 1.28
México. Programas de licenciatura acreditados por COPAES. 2009
(Por cientos)
Proporción de Proporción de
Grupo Areas de programas matrícula en
Conocimiento Acreditados programas
acreditados
31 Arquitectura y diseño 10.80 37.30
32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 21.50 35.50
33 Ciencias agropecuarias y forestales 28.60 40.40
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 23.60 52.70
35 Humanidades, filosofía y psicología 8.80 27.40
36 Ciencias químicas 28.60 48.30
37 Ciencias sociales y políticas 9.30 33.10
38 Disciplinas artísticas 1.30 4.00
39 Ciencias económico-administrativas y turismo 11.50 40.30
40 Educación y pedagogía 1.00 4.10
41 Ingenierías 15.20 39.50
42 Matemáticas, física y astronomía 6.90 12.50
Total 11.30 35.40
Fuente: COPAES, diciembre 2009, ANUIES para ciclo escolar 2008-2009

Los programas de matemáticas y física fueron acreditados por CONAIC y CACEI respectivamente ya que en 2009 aún
no existían organismos acreditadores especializados en esos campos.

Conviene recordar que es muy común que un pequeño número de programas concentre la
mayor parte de la matrícula. Por ejemplo, en el área formada por las carreras económico-
administrativas y turismo, todas ellas de alta demanda, el 11.5 de los programas concentran
el 40.3% de la matrícula. Les siguen las ingenierías, en donde el 15.2% de los programas
concentra casi el 40% de la matrícula. Algo semejante ocurre en el área de ciencias de la
salud. Estas proporciones sugieren que si se avanzara en la acreditación de un número
pequeño de programas pero con matrículas elevadas, se incrementaría significativamente la
proporción de los alumnos que se encuentran en programas de calidad.

La comparación de los programas acreditados a nivel de áreas, distinguiendo las IES


públicas y las privadas, permite medir los avances de cada sector a nivel de área. Para el
conjunto del país, del total de programas acreditados el 30% pertenece al sector privado y
el 70% al sector público. Cuando se considera el reparto de la matrícula inscrita en los
programas acreditados entre ellos se percibe con claridad el contraste entre los dos sectores.

A nivel global, el reparto de la matrícula de los programas acreditados es el siguiente: las


IES privadas atienden el 13%, mientras que las IES públicas agrupan al 87% restante.

49
b) La acreditación de programas según el tipo de institución.

La única área de conocimiento en la que el número de programas acreditados es


prácticamente igual en las IES privadas que en las IES públicas es en las ciencias
económico-administrativas y turismo. Esta es seguida, aunque con grandes desequilibrios,
por las áreas de arquitectura y diseño y de ciencias políticas y sociales.

Las áreas con bajo porcentaje de programas acreditados en IES privadas, corresponden a las
áreas en las que el sector privado no tiene presencia. Es el caso de las disciplinas artísticas y
de las Matemáticas, la Física y la Astronomía. (Cuadro 1.29).

Cuadro 1.29
México. Acreditación de programas en IES privadas, 2009
(Por cientos)
Total de Proporción de programas
Grupo Areas de conocimiento programas acreditados
acreditados IES privadas IES públicas
31 Arquitectura y diseño 100 39.0 61.0
32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 51 3.9 96.1
33 Ciencias agropecuarias y forestales 87 3.4 96.6
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 135 20.0 80.0
35 Humanidades, filosofía y psicología 91 28.6 71.4
36 Ciencias químicas 103 7.8 92.2
37 Ciencias sociales y políticas 180 32.2 67.8
38 Disciplinas artísticas 4 0.0 100.0
39 Ciencias económico-administrativas y turismo 456 50.4 49.6
40 Educación y pedagogía 20 20.0 80.0
41 Ingenierías 477 24.3 75.7
42 Matemáticas, física y astronomía 7 28.6 71.4
Total 1,711 30.1 69.9
Fuente: COPAES, diciembre 2009

La proporción de la matrícula que está en programas acreditados por cada área de


conocimiento entre los sectores público y privado permite continuar el análisis comparativo
entre estos sectores. Las IES públicas, salvo los casos de matemáticas y física y de las
disciplinas artísticas, tienen porcentajes elevados en la parte de la matrícula que está
inscrita en programas acreditados. Varía entre 36.5% para el área biológica y 62.2% en el
área de la salud. En arquitectura y diseño, ciencias sociales y políticas y en ciencias
económico-administrativas y turismo más de la mitad de la matrícula pública está en
programas acreditados.

La situación en las instituciones privadas es muy diferente. El área de conocimiento en


donde se percibe el mayor esfuerzo del sector privado por ganar una posición importante
entre los programas de calidad es en el sector salud, en donde las instituciones privadas han
hecho un gran esfuerzo por legitimar sus programas a través de la formación. Del total de
programas acreditados, tienen sólo el 20%. Eso permite que el 25% de su matrícula esté en
programas acreditados.

50
La que le sigue es la de ciencias económico-administrativas y turismo. Ahí, el número de
programas acreditados que tiene el sector privado es casi el mismo que el del sector
público. Gracias a ello, el 19% de su matrícula total se encuentra en programas acreditados.
Esta cifra llama la atención porque se trata de área emblemática del sector privado, el
fundamento de su imagen y muy probablemente el área que originó la creación de muchas
universidades privadas. Muchos representantes de las universidades privadas sostienen que
su sector forma a los mejores profesionistas en las carreras de administración, contaduría,
finanzas, mercadotecnia, turismo, etc. Los datos sugieren que esa función la comparten con
las IES públicas y que numéricamente están en desventaja.

Le sigue el área que agrupa a las carreras del área de arquitectura y diseño, casi todas ellas
de gran demanda y por lo tanto de importancia estratégica para competir con otras
instituciones. En esta área el sector privado tiene sólo 39% de los programas acreditados,
pero por el tamaño pequeño de sus matrículas, sólo el 15% de los alumnos que tienen en
esa área están inscritos en programas acreditados. En el área de química el bajo porcentaje
de programas acreditados que tiene el sector privado no es relevante dada la participación
marginal de del sector privado en la matrícula total de esta área. Con todo, ese pequeño
porcentaje de programas acreditados (dentro del total), les permite tener al 35.5% de su
matrícula en programas de calidad.
Cuadro 1.30
México. Proporción de la matricula en programas acreditados en las IES
privadas y públicas
(Por cientos)
Proporción de matricula en
Grupo Areas de conocimiento programas acreditados
IES privadas IES públicas
31 Arquitectura y diseño 14.5 61.4
32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 9.0 36.5
33 Ciencias agropecuarias y forestales 12.1 41.6
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 24.8 62.2
35 Humanidades, filosofía y psicología 9.3 41.6
36 Ciencias químicas 35.5 49.0
37 Ciencias sociales y políticas 9.2 53.9
38 Disciplinas artísticas 0.0 4.7
39 Ciencias económico-administrativas y turismo 18.6 57.2
40 Educación y pedagogía 0.5 6.2
41 Ingenierías 16.2 43.4
42 Matemáticas, física y astronomía 11.9 12.5
Total 13.7 45.8
Fuente: COPAES, diciembre 2009

Con estos datos sobre la calidad de los programas, se muestra con mucha claridad la
contradicción que caracteriza al sector privado: un crecimiento espectacular en el número
de alumnos pero un interés marginal por la calidad educativa certificada por organismos
públicos. De hecho es asombrosamente pequeño el número de instituciones privadas que
han tenido interés por acreditar sus programas: sólo 39 de las 1,178 instituciones privadas
registradas (es decir el equivalente al 3.3% del total) tienen programas acreditados en uno o
varios de sus planteles.

51
Los datos anteriores muestran que el cuanto a calidad de programas el liderazgo de las IES
públicas es incuestionable.

c) La calidad en los programas de posgrado

El análisis de la calidad en los programas de posgrado muestra que la situación es análoga a


la que se ha descrito para las licenciaturas. Uno de cada cinco programas en operación, es
decir el 19.6% de los programas, está registrado en el Padrón Nacional de Posgrado de
Calidad (PNCP). Un desglose por tipo de institución muestra que sólo el 3% de los
programas de las IES privadas y el 32% de las públicas están inscritos en ese padrón. Las
áreas en las que hay más programas en el PNCP son las ingenierías y las ciencias biológicas,
exactas y matemáticas, todas ellas con predominancia del sector público.

Dado que es previsible un crecimiento sostenido de la matrícula del sistema universitario


mexicano, surgen muchas preguntas relacionadas, entre otros aspectos, con la división del
trabajo entre instituciones públicas y privadas. No es evidente que se amplíe
significativamente la proporción de alumnos atendidos por las universidades privadas. La
diferencia en los ritmos de crecimiento de los dos sectores se ha reducido en los últimos
años. Puede ser que el sector privado esté cerca de alcanzar su peso relativo estable. Por
otro lado, como lo muestran las estadísticas presentadas a lo largo de este trabajo, existe un
contraste muy grande en el número de alumnos que atienden por institución, por plantel y
por programa. Surge la pregunta si en cada uno de esos niveles habrá un tamaño óptimo
desde el punto de vista de la utilización racional de los recursos, cuya estimación puede no
ser igual para el caso de las IES públicas y las privadas. De la respuesta a esa pregunta
depende el potencial de cada institución y plantel para aumentar la matrícula sin grandes
inversiones adicionales, de modo que con pocos recursos se alcance un mejor
aprovechamiento de su infraestructura física y su capital humano. Este cambio sería
benéfico para el objetivo de cobertura que se ha propuesto el gobierno para los próximos
años.

Las otras preguntas están relacionadas con la equidad y la calidad. Desde luego, es
previsible que continúe la política de construir y poner en marcha nuevos planteles en
ciudades medianas para ofrecer oportunidades en todo el territorio nacional. También se
puede anticipar una ampliación del universo de becarios del PRONABES. Lo que queda es
preguntarse, dados los bajos índices de permanencia y terminación de estudios, es sobre las
medidas que deberán tomar las instituciones públicas para reducir los elevados índices de
deserción y los bajos índices de terminación de estudios. Son medidas válidas para los
alumnos en general, pero especialmente necesarias para aquellos que llegan con
deficiencias específicas en algunas materias y con desventajas culturales en muchos
ámbitos.

En relación con la calidad, es importante reconocer que a 10 años de una política centrada
en la cobertura pero también en la equidad y la calidad, los avances más modestos han sido
los que conciernen a la calidad. Las universidades privadas han querido permanecer al
margen en su gran mayoría. En este caso el desafío de las autoridades educativas es
mayúsculo por no contar con los instrumentos que sólo el legislativo puede darles.

52
En relación con el contingente de instituciones públicas que consideran que pueden
sobrevivir sin atender esta dimensión de la educación superior, el desafío de las autoridades
consiste en encontrar nuevas formas para integrarlas al proceso de mejoramiento de la
calida educativa.

La política de educación superior y la equidad.

A principios de la primera década del siglo XXI se puso en marcha en Programa Nacional
de Becas para la Educación Superior (PRONABES). Su objetivo: ampliar las oportunidades
de acceso y permanencia a las instituciones de educación superior públicas, para que una
mayor proporción de jóvenes en condiciones económicamente adversas tengan acceso a
programas de TSU/PA y de licenciatura y puedan terminar sus estudios. Inició sus
operaciones en el ciclo escolar 2001-2002 bajo un esquema de coordinación entre la SEP,
los gobiernos de los estados y las instituciones públicas, federales y estatales. El programa
busca reducir el peso relativo que tienen los estudiantes provenientes de sectores medios en
la población universitaria en beneficio de estudiantes con potencial académico pero con
pocos recursos económicos. Uno de los requisitos es que la familia del solicitante tenga un
máximo de cuatro salarios mínimos de ingreso familiar. Otro es que para renovar la beca
deben haber cursado y aprobado la totalidad de las materias del plan de estudios
correspondiente al primer año. A partir del tercer año deben haber cursado y aprobado la
totalidad de las materias del plan de estudios y tener un promedio mínimo de ocho. Los
resultados de este programa muestran que los objetivos buscados se han alcanzado en un
porcentaje importante de los casos, sobre todo en relación con quienes terminan la carrera.

La evaluación externa concluye que el programa responde a una necesidad, que se han
llevado a cabo los controles correspondientes para que se aplique según los mecanismos y
las reglas convenidas y que se ha alcanzado los objetivos generales y específicos. Los
impactos de política son todos positivos y coadyuvan a que los becarios acceden y terminen
sus estudios superiores conforme lo deseado. Las altas tasas de renovación así como la
ampliación de su cobertura en sus primeros ciclos de operación son señales indicativas del
éxito de la política y de su demanda. Es un medio eficaz para procurar la equidad
económica en la educación superior y por lo tanto deberá incrementarse. El balance final de
los primeros cuatro años y medio de operación es alentador y positivo.

Con las becas se espera que al menos una parte de la inversión en educación superior
beneficie directamente a sectores que históricamente han estado marginados del nivel
universitario. Un elevado porcentaje de esos jóvenes proviene de familias en donde no ha
habido antes contacto con la educación superior. A principios de 2001 se estimaba que la
mitad de los estudiantes del sistema representaba la primera generación en su familia.
(Rubio p. 164). Esa cifra se elevaba al 90% en el caso de los alumnos de las universidades
tecnológicas, lo que sugiere que el objetivo de equidad está también relacionado con la
localización de las instituciones públicas, en este caso de orientación tecnológica. Según
Rubio, tres de cada 10 estudiantes no hubieran accedido a la educación superior de no
existir una universidad en su localidad (p. 166).

En el ciclo 2008-2009 se habían otorgado más de 300 mil becas. Comparando esta cifra con
la matrícula de TSU/PA y licenciatura, resulta que uno de cada cinco estudiantes del

53
sistema universitario público tiene apoyo del PRONABES. Es una proporción importante,
indicativa del porcentaje de alumnos provenientes de familias de ingresos familiares
inferiores a 4 salarios mínimos. Probablemente no cubra el universo total de la población
universitaria en esa condición. Las nuevas generaciones se verán atraídas por estos apoyos
por lo que la demanda social por educación superior tenderá a aumentar. Eso significa que
se reducirá el número de egresados del nivel medio superior que no continúan hacia
estudios superiores por no tener recursos o por la necesidad de trabajar para contribuir al
ingreso familiar. Tanto por esa reducción como por el aumento de la matrícula de nivel
superior que conlleva y, ya en el sistema de IES públicas, el mejoramiento de los
indicadores de permanencia y terminación de estudios, esta política hacia una mejor
distribución de los recursos asignados a la educación superior se justifica plenamente.

Recapitulación

El sistema universitario mexicano ha vivido en las últimas décadas un acelerado proceso de


crecimiento y diversificación. El ritmo de crecimiento en la matrícula ha sido distinto según
la coyuntura, pero sin interrupciones, lo que unido a un menor crecimiento de la población
en edad universitaria ha permitido un aumento significativo en el índice de cobertura. El
reparto de la matrícula entre instituciones públicas y privadas no ha cesado de modificarse
en beneficio siempre de estas últimas. La cada vez mayor diversidad geográfica de las
nuevas instituciones y planteles ha significado oportunidades educativas donde no había o
en mayor número donde eran insuficientes. La creación de un programa nacional de becas
para estudiantes de familias de bajos recursos ha permitido dar un salto en lo que concierne
a la equidad. En un buen número de entidades se han mejorado significativamente los
índices de cobertura, lo que en el 2009 permitió aumentar el promedio nacional a un nivel
cercano al 30%, que las autoridades se habían fijado como meta para el 2010.

Sin embargo, el sistema universitario mexicano enfrenta una serie de desafíos relacionados
con los tres objetivos importantes, a saber la cobertura, la equidad y la calidad. Esos
problemas podrían clasificarse en tres grandes rubros: 1) El rezago estructural en la
cobertura en un número importante de entidades, cuyo subsistema de educación superior no
ofrece las oportunidades en número suficiente ni en la calidad deseada por las autoridades
para atender la demanda y no se vislumbra un horizonte de progreso en el corto plazo.
Chiapas sería el caso emblemático de esa situación; 2) El problema de la cobertura se
extiende a entidades con potenciales económicos y educativos significativos, con
infraestructura institucional y capital humano suficientes como para dar un salto en el
número de profesionistas a formar en las universidades existentes o en las que podrían
formarse, pero que por razones que se desconocen registran indicadores insatisfactorios si
se les compara con el potencial descrito. En esta situación podrían señalarse los casos de
Jalisco, Puebla, Guanajuato, México y San Luis Potosí; 3) El tercer rubro concierne la
brecha al nivel de la calidad educativa, entre los objetivos de las autoridades y la realidad
de las universidades. El problema de la calidad es mayor en el sector privado en virtud de
que solamente un sector muy pequeño de las IES privadas ha aceptado la invitación de las
autoridades educativas para sumarse a la cultura de la evaluación y la acreditación de

54
programas por organismos oficiales. El hecho de que sólo el 14% de la matrícula de las IES
privadas se encuentre en programas acreditados da cuenta del camino que queda por
recorrer.

El balance es mejor indudablemente en el sector formado por las IES públicas si se atiende
al porcentaje de las IES públicas que han acudido al llamado de las autoridades. Sin
embargo, el hecho de que sólo el 46% de la matrícula de ese sector esté en programas
acreditados sugiere el grado de dificultad al que se ha enfrentado la autoridad educativa
para traducir en realidades sus planes de modernización educativa, que tiene en la calidad
uno de sus ejes fundamentales.

Desde una perspectiva más general, es decir más allá de los límites impuestos por los
interlocutores actuales y las condiciones actuales, la ampliación de la cobertura en el nivel
educativo superior implica tal vez la búsqueda de otras soluciones. Entre ellas, podría
mencionarse la siguiente pregunta: ¿en qué tipo de instituciones deberá descansar el
crecimiento de la oferta educativa de nivel superior de los próximos años? Dadas las
tendencias, puede suponerse que la división del trabajo implica, como hasta ahora, el
concurso de instituciones públicas y privadas. Sin embargo, si lo importante es enfatizar en
la cobertura pero con equidad y calidad será necesario emprender algunas reformas.

Por lo que se refiere a las IES públicas, el problema principal según las autoridades
universitarias es el financiamiento. Para ellas, la ampliación de la matrícula depende de los
recursos que se canalicen a las instituciones educativas. Su propuesta es que se asigne a la
educación superior un porcentaje cada vez más alto del PIB, como ocurre en otros países, y
que a las universidades e instituciones de educación superior públicas se les asignen
presupuestos plurianuales con base en sus necesidades históricas y sus proyecciones de
crecimiento para los próximos años. Sin embargo, dados los indicadores de calidad que se
han comentado en este informe, sería muy difícil justificar ante la sociedad un aumento
generalizado cuando existen diferencias notables en el cumplimiento de los objetivos del
sistema. Una de las reformas consistiría entonces en asociar el financiamiento al
cumplimiento de las prioridades educativas nacionales, sobre todo de calidad, sin intervenir
en el cómo, que quedaría a cargo de las propias instituciones.

Por otro lado, para ciertas entidades, empezando con las de mayores rezagos, convendría tal
vez estudiar la factibilidad de crear nuevas universidades, de preferencia federales, de
vocación regional, de un tamaño semejante al que se previó para la UAM en el momento de
su fundación, con la misma altura de miras en el plano académico y con una estructura de
gobierno que facilite el cumplimiento de su misión, sin las ataduras a la política local y a
las corporaciones sindicales de todos colores.

Por lo que se refiere al crecimiento de la matrícula en las IES privadas, la experiencia


sugiere que para que ahí se ofrezca una educación de calidad es necesario aprobar en el
Congreso una reforma mediante la cual el Estado asuma su responsabilidad en la regulación
de la educación superior. En concreto, eso podía tomar la forma de una reforma a la Ley
General de Educación que eleve las exigencias para el otorgamiento del RVOE, fije los
términos para su eventual revocación y que incluya una reglamentación en relación al uso
del nombre de universidad, sujeta por ejemplo a una evaluación institucional previa por un

55
organismo creado para ese propósito, como existe en otros países. Para las instituciones
particulares que han asumido como propia la cultura de la evaluación y la acreditación
impulsada por las autoridades educativas y que tienen al 100% de su matrícula en
programas de calidad, esa reforma significaría un reconocimiento a su esfuerzo,
permitiéndoles servir de referente a las demás instituciones que forman este importante
sector educativo.

Hay muchos otros desafíos para el sistema universitario mexicano derivados, entre otros
aspectos, de la globalización y la competitividad, la sociedad del conocimiento, la
necesidad de mejorar la efectividad y la eficiencia y de construir una organización que
permita articular los cada vez más diversos intereses y sectores involucrados en la vida
universitaria.

La globalización pone en tela de juicio el carácter “nacional” de los sistemas de educación


superior en el sentido de universos cerrados. La permanente interrelación con los sistemas
de educación de otros países, por ejemplo por la vía del intercambio de estudiantes y
profesores o de la continuación de estudios de los primeros a los posgrados de otros países,
conlleva cambios y responsabilidades para las universidades de un país con tendencias
endogámicas. Por ejemplo, es cada vez más importante que los programas educativos se
homologuen a estándares internacionalmente aceptados con el objeto de facilitar la
movilidad y la comunicación entre los alumnos y los académicos que integran esas
instituciones. Con la homologación viene la competencia, ya que las mejores universidades
tienden a aceptar únicamente a los mejores alumnos provenientes de las mejores
universidades. En ese sentido, la globalización implica para las universidades un horizonte
cada vez más amplio que no puede ser ignorado y que, al contrario es fuente de
consolidación y modernización de las universidades en general y sus programas en
particular. De hecho, la globalización a nivel de la investigación ha existido siempre, con
sus propios matices y obstáculos, en el sentido de comunicación entre especialistas a nivel
de congresos, intercambios, proyectos conjuntos, desarrollo de redes de colaboración,
colaboración para publicaciones conjuntas, etc. En muchas ocasiones esa comunicación se
ha extendido a la colaboración de varias instituciones y varios tutores para la formación de
especialistas en ciertas áreas, vía cotutorías, posdoctorados, estancias de investigación, etc.

Por lo que se refiere a la sociedad del conocimiento, lo pertinente sería hablar en plural, es
decir de distintos grados de integración entre el desarrollo del conocimiento y la sociedad.
Con eso se sugiere la existencia de distintos ritmos y de participaciones desiguales de los
países en la producción del conocimiento y su aplicación a la vida económica, social,
familiar y cultural de los pueblos. Las universidades concebidas en el sentido tradicional, es
decir que como centros de investigación y formación, deben jugar un papel decisivo en la
disminución de las brechas que separan a México de países en donde se han desarrollado en
su nivel más alto las sociedades del conocimiento.

En relación a la eficacia, lo importante es recordar que la sociedad espera que las


universidades produzcan el efecto planeado, es decir que cumplan las funciones para las
que fueron creadas y que presten el servicio para quienes se consideraron originalmente sus
destinatarios. Entre las funciones destacan la investigación, que debe ser pertinente y del
más alto nivel, y la formación, que se dirige a los jóvenes que están en proceso de

56
transformarse en nuevas generaciones de profesionistas y especialistas. La eficiencia evoca
un sentido de consistencia entre fines y medios, de optimización de los recursos disponibles
y de transparencia en su ejercicio.

En sociedades cada vez más complejas, con muchos actores e intereses presentes al interior
y en el entorno de la vida universitaria, se impone también una reflexión profunda sobre los
modelos de gobierno de las universidades, de tal modo que los distintos niveles de decisión
existentes se articulen con una mayor eficiencia y eficacia para el cumplimiento de la
misión de la universidad. En este terreno no sería una mala idea revisar las lecciones que
pueden aprenderse del desarrollo de lo que para la gestión de las empresas se llama
gobierno corporativo.

57
Referencias
___________ (2005) “La dialéctica de la esperanza y la desilusión en políticas de
educación superior en mexico” en: Revista de Educación Superior. Vol. xxxiv (2) Numero
134 abril-junio de 2005, pp. 63-79

____________(1997) “Las políticas de evaluación” en: Rollin Kent (compilador). Los


Temas Críticos de la Educación Superior en América Latina. Vol 2. Los años 90.
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Murayama, Ciro.(2009) La Economía Política de la Educación Superior. Anuies.


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SEP. Plan Sectorial 2007-2012. Varias páginas

SEP. Programa Nacional de Educación. 2001-2006, p. 188

Taborga Huáscar (2003). Expansión y Diversificación de la Matrícula de la Educación


Superior en México. ANUIES. Serie Investigaciones.

58
ANEXO ESTADÍSTICO

59
Cuadro A.1.1
México. Series históricas de matrícula y egresados de educación superior por ciclo escolar.1970-2009
(Miles de alumnos)
Ciclo Matricula Egresados
Escolar TS U/PA Normal Licenciatura Posgrado TS U/PA Normal Licenciatura Posgrado
1969-1970 202,991 5,953 21,648 1,114
1979-1980 705,644 25,503 69,572 3,167
1980-1981 124,508 785,419 32,139 78,644 4,219
1981-1982 131,523 840,368 32,169 85,505 5,918
1982-1983 133,971 879,240 32,970 96,572 5,591
1983-1984 140,093 939,513 35,390 98,788 6,634
1984-1985 119,623 961,468 37,040 103,280 7,047
1985-1986 126,356 988,078 37,955 106,693 6,895
1986-1987 124,434 989,414 38,214 117,378 7,999
1987-1988 132,100 1,033,207 39,505 115,670 9,916
1988-1989 126,676 1,069,565 42,655 115,407 11,159
1989-1990 118,501 1,078,191 43,965 118,457 9,885
1990-1991 108,987 1,091,324 44,946 139,031 11,548
1991-1992 104,799 1,126,805 47,539 147,729 12,097
1992-1993 110,975 1,141,568 50,781 140,256 12,060
1993-1994 120,210 1,183,151 54,910 146,256 13,632
1994-1995 137,253 1,217,431 65,615 173,693 18,291
1995-1996 160,036 1,286,633 75,392 191,024 20,203
1996-1997 188,353 1,310,229 87,696 183,417 20,868
1997-1998 21,995 206,292 1,392,048 107,149 184,258 24,579
1998-1999 34,094 210,544 1,481,999 111,247 200,419 28,943
1999-2000 45,267 215,506 1,585,408 118,099 11,133 43,010 209,795 29,674
2000-2001 51,398 200,931 1,660,973 127,751 14,056 41,155 227,095 35,031
2001-2002 60,037 184,100 1,771,969 132,471 15,989 39,527 249,085 38,006
2002-2003 70,371 166,873 1,865,475 139,669 18,845 34,819 268,155 38,329
2003-2004 77,549 155,548 1,940,208 142,480 21,791 32,735 276,690 47,323
2004-2005 82,850 146,308 2,010,188 150,852 22,929 28,113 288,231 48,834
2005-2006 85,651 142,257 2,070,311 153,907 25,487 32,378 307,188 50,235
2006-2007 84,952 136,339 2,150,146 162,003 24,635 31,865 311,463 54,689
2007-2008 88,705 132,084 2,232,189 174,282 24,198 28,220 308,590 59,471
2008-2009 91,602 131,763 2,296,381 185,516
Fuente:
matricula de normales: http://www.dgpp.sep.gob.mx/Estadi/NACIONAL/index.htm
matricula y egresados TSU 2000-2008; SEP, encuesta 911
otros datos: ANUIES anuarios estadísticos
Sólo se consideran programas escolarizados

60
Cuadro A.1.2
México. Evolución de la matricula de educación superior.1970-2009
(Miles de Alumnos)
Nivel Matrícula del ciclo escolar
educativo 69-70 79-80 89-90 99-00 08-09
TSU/PA 45.3 91.6
Licenciatura 203 705.6 1,078.2 1,585.4 2,296.4
Posgrado 6 25.5 44 118.1 185.5
Total 208.9 731.1 1,122.2 1,748.8 2,573.5
Fuentes: ANUIES, Anuarios estadísticos , solo se incluyen programas
escolarizados, no se incluyen normales

Cuadro A.1.3
Gasto público en educación superior (1970-2009)
(Absolutos y porcientos)
Gasto público en educación
superior a precios de 1994 % de crecimiento en el
Quinquenio (millones de pesos de 1994) quinquenio
1970 1,138
1975 2,821 147.9
1980 7,064 150.4
1985 5,081 -28.1
1990 4,718 -7.1
1995 8,628 82.9
2000 10,972 27.2
2005 14,400 31.2
2009 * 14,380
Fuente: Ciro M urayama (2006) p. 125 cuadro 1. b
* Para 2009 estimación nuestra con base en el 4° informe presidencial

61
Cuadro A.1.4
México. Participación de las instituciones privadas en la matrícula de educación superior, 1971-2009
(Absolutos y por cientos)
Matricula
Nivel 70-71 80-81 90-91 00-01 08-09
Educativo IES Total % IES Total % IES Total % IES Total % IES Total %
Privadas
TSU/PA 2.5 51.4 4.8 4.5 91.6 5.0
Licenciatura 37.9 271.3 14.0 149.9 935.8 16.0 238.6 1,252.0 19.1 638.8 2,000.1 31.9 805.0 2,429.9 33.1
Posgrado 8.9 45.9 19.4 61.0 140.5 45.4 90.4 185.5 48.7
total 37.9 271.3 14.0 149.9 935.8 16.0 247.5 1,297.9 19.1 702.2 2,191.9 32.0 900.0 2,707.0 33.2
Fuente: para 70-71, 80-81, 90-91 SEP:http://www.dgpp.sep.gob.mx/Estadi/NACIONAL/index.htm; para 00-01 SEP formato 911 y para 08-09: ANUIES
incluye sólo programas escolarizados

62
Cuadro A.1.5
Matricula de Licenciatura por carrera, 2000-2008 (miles de alumnos)
(Miles de alumnos)
Clave Areas de estudio/carreras 00-01 01-02 02-03 03-04 04-05 05-06 06-07 07-08 08-09
Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total Hombres Mujeres Total
Grupo 31 Arquitectura y diseño 51.7 37.0 88.6 54.8 40.6 95.5 56.4 43.5 100.0 59.1 45.7 104.9 62.5 49.0 111.5 65.6 52.2 117.8 71.2 56.1 127.3 74.8 61.3 136.1 79.5 66.3 145.8
311 Arquitectura y urbanismo 35.1 16.2 51.2 35.9 17.0 52.8 35.8 17.5 53.3 37.4 18.5 55.9 39.5 19.8 59.3 41.3 21.8 63.1 44.6 23.3 68.0 46.9 26.0 72.9 49.4 27.7 77.1
312 Diseño, diseño industrial, de interiores y textil 3.8 5.1 8.8 4.4 6.1 10.5 4.5 7.2 11.7 4.8 7.6 12.4 5.2 8.5 13.7 5.5 9.4 14.9 6.3 10.8 17.1 6.7 11.7 18.3 7.4 13.6 20.9
313 Diseño gráfico 12.8 15.7 28.6 14.6 17.6 32.2 16.1 18.9 35.0 16.9 19.6 36.5 17.9 20.7 38.6 18.8 21.0 39.8 20.2 22.0 42.3 21.3 23.7 44.9 22.8 25.0 47.8
Grupo 32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 11.8 11.4 23.2 12.0 12.2 24.3 12.6 13.1 25.8 12.8 13.7 26.5 13.7 14.7 28.4 14.6 16.2 30.9 15.3 17.1 32.4 17.1 19.4 36.5 18.5 21.4 39.9
321 Biología y biotecnología 7.8 8.4 16.2 8.0 9.1 17.1 8.3 9.8 18.1 8.6 10.3 18.9 9.3 11.1 20.4 10.0 12.2 22.2 10.2 12.4 22.6 11.2 13.6 24.8 11.9 14.7 26.6
322 Ecología, ingeniería ambiental y ciencias del mar 2.5 2.0 4.5 2.4 1.9 4.3 2.6 2.1 4.7 2.7 2.3 5.0 2.9 2.5 5.5 3.1 2.9 6.0 3.5 3.5 7.0 4.4 4.5 8.8 5.0 5.4 10.4
323 Ciencias del mar e ingeniería pesquera 1.5 1.1 2.6 1.6 1.2 2.8 1.7 1.2 2.9 1.5 1.1 2.7 1.5 1.1 2.6 1.5 1.2 2.7 1.6 1.2 2.8 1.6 1.3 2.9 1.6 1.3 2.9
Grupo 33 Ciencias agropecuarias, forestales y pesqueras 31.7 12.1 43.7 30.3 12.0 42.3 30.2 12.7 43.0 30.3 13.4 43.8 30.7 14.7 45.4 31.8 15.8 47.6 33.0 16.9 49.9 34.4 18.0 52.4 35.7 19.3 55.1
331 Agronomía 17.0 5.7 22.7 15.4 5.0 20.4 15.3 5.4 20.7 15.1 5.7 20.8 15.3 6.0 21.3 15.5 6.3 21.9 16.4 7.0 23.4 17.2 7.3 24.5 18.1 8.0 26.0
332 Veterinaria y zootecnia 14.1 6.2 20.3 14.1 6.8 20.9 14.1 7.0 21.1 14.3 7.4 21.7 14.3 8.2 22.5 15.0 8.8 23.8 15.2 9.2 24.4 15.5 9.8 25.3 15.8 10.3 26.0
333 Forestales 0.6 0.2 0.7 0.8 0.2 1.0 0.9 0.3 1.1 1.0 0.3 1.3 1.1 0.5 1.6 1.3 0.6 1.9 1.4 0.7 2.2 1.8 0.9 2.7 1.9 1.1 3.0
Grupo 34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 51.1 78.2 129.3 51.6 82.3 133.9 54.7 88.4 143.1 56.6 97.6 154.2 57.8 103.3 161.1 59.8 108.0 167.9 64.3 118.1 182.4 67.2 126.6 193.8 71.6 134.5 206.1
341 Medicina, terapia, optometría y salud pública 35.9 37.5 73.5 36.6 39.2 75.8 37.5 41.1 78.7 38.5 45.7 84.1 37.8 45.3 83.2 37.7 45.0 82.8 40.0 48.1 88.2 40.3 48.7 89.0 41.8 50.7 92.5
342 Odontología 11.3 19.9 31.2 11.0 20.3 31.4 12.1 21.8 33.9 12.6 23.1 35.6 13.7 25.0 38.7 14.7 25.8 40.4 15.2 26.8 42.0 15.3 26.2 41.5 16.4 28.6 44.9
343 Enfermería 2.4 15.9 18.2 2.5 17.1 19.5 3.1 19.2 22.3 3.6 21.4 25.0 4.2 24.5 28.7 4.7 26.9 31.6 5.5 30.7 36.2 7.0 36.5 43.5 7.9 36.3 44.3
344 Nutrición 0.9 4.6 5.5 0.9 5.4 6.3 1.4 5.8 7.3 1.3 7.0 8.3 1.4 8.0 9.3 1.8 9.7 11.6 2.5 11.8 14.3 3.4 14.5 17.8 4.2 18.1 22.3
345 Biomédicas 0.6 0.3 0.9 0.5 0.3 0.9 0.6 0.3 0.9 0.7 0.4 1.1 0.8 0.5 1.3 0.9 0.6 1.5 1.0 0.7 1.7 1.2 0.8 2.0 1.3 0.8 2.1
Grupo 35 Humanidades, filosofía y psicología 26.2 71.2 97.4 29.7 78.8 108.5 32.2 85.6 117.8 34.7 93.7 128.4 38.3 101.4 139.7 40.8 107.5 148.3 44.4 114.5 158.9 46.4 119.4 165.8 44.0 114.6 158.6
351 Filosofía y humanidades 3.2 2.4 5.6 3.4 2.3 5.7 3.7 2.2 5.9 3.6 2.3 5.9 3.7 2.4 6.2 3.8 2.2 6.0 4.1 2.5 6.5 4.2 2.4 6.6 3.9 2.3 6.3
352 Historia 2.4 3.0 5.5 2.7 3.1 5.8 3.0 3.3 6.4 3.2 3.5 6.6 3.3 3.5 6.8 3.6 3.7 7.3 3.8 3.7 7.5 3.9 3.8 7.8 3.8 3.6 7.4
353 Antropología, arqueología y etnología 1.5 2.2 3.7 0.8 1.3 2.1 1.7 2.3 4.0 1.7 2.3 4.1 1.8 2.6 4.5 2.1 2.9 5.1 2.4 3.3 5.7 3.0 4.0 7.0 3.0 3.9 6.9
354 Literatura, letras e idiomas 4.7 10.9 15.5 5.5 12.1 17.6 5.9 13.2 19.1 6.3 14.4 20.7 7.5 15.4 22.8 7.6 15.4 22.9 8.9 16.5 25.4 8.6 17.2 25.8 8.8 17.4 26.1
355 Psicología 14.2 52.6 66.8 17.0 59.8 76.8 17.6 64.2 81.8 19.5 70.9 90.4 21.5 77.2 98.6 23.3 82.9 106.2 24.9 88.3 113.2 26.3 91.5 117.8 24.2 87.1 111.3
356 Teología y religión 0.2 0.2 0.4 0.3 0.2 0.5 0.4 0.3 0.7 0.4 0.3 0.7 0.4 0.3 0.8 0.5 0.4 0.8 0.4 0.3 0.7 0.4 0.4 0.8 0.3 0.2 0.5
Grupo 36 Ciencias químicas 29.7 32.9 62.6 30.8 34.8 65.6 31.8 37.4 69.2 33.6 40.0 73.5 34.6 42.0 76.6 36.5 44.4 81.0 37.6 46.4 84.0 39.1 47.2 86.3 39.8 48.9 88.7
361 Química, Ing. Química y tecnología de alimentos 19.4 16.9 36.3 19.5 17.5 37.0 20.3 19.1 39.4 21.6 20.8 42.4 21.8 22.0 43.8 22.1 22.7 44.8 23.4 24.4 47.8 24.0 24.6 48.6 24.2 25.2 49.4
362 QFB, quimica clinica 7.4 12.3 19.7 7.9 12.9 20.7 7.8 13.4 21.2 8.1 14.0 22.1 8.7 14.6 23.2 9.6 15.9 25.5 9.7 15.9 25.5 10.6 16.3 26.9 10.9 17.2 28.1
363 Bioquímica 2.9 3.7 6.6 3.5 4.4 7.9 3.7 4.9 8.6 3.9 5.2 9.1 4.1 5.5 9.5 4.9 5.8 10.7 4.5 6.1 10.6 4.6 6.3 10.8 4.7 6.5 11.2
Grupo 37 Ciencias sociales y políticas 142.9 159.6 302.5 148.8 170.6 319.4 156.6 181.6 338.3 164.6 189.2 353.8 168.5 194.9 363.4 171.8 199.3 371.1 179.0 205.5 384.5 183.1 211.8 394.8 166.6 198.5 365.1
371 Ciencias sociales 5.1 14.9 19.9 7.1 17.5 24.6 7.0 18.0 25.0 7.4 19.1 26.6 6.8 19.2 26.0 7.4 19.6 27.0 7.9 20.9 28.8 8.2 22.2 30.3 8.3 22.3 30.6
372 Ciencias políticas y administración publica 9.6 11.9 21.4 10.8 14.0 24.8 11.3 14.5 25.8 12.0 14.8 26.7 13.7 17.2 30.9 14.5 18.4 33.0 14.7 17.9 32.6 15.3 18.5 33.9 15.6 19.7 35.3
373 Ciencias de la comunicación y publicidad 21.4 34.9 56.3 23.4 37.5 60.9 25.7 41.0 66.7 27.9 42.5 70.3 28.5 43.3 71.7 27.9 43.6 71.5 29.0 44.7 73.7 30.4 45.9 76.3 29.0 44.5 73.6
374 Derecho 106.1 97.5 203.6 106.6 101.0 207.6 111.7 107.5 219.2 116.4 112.1 228.5 118.5 114.4 232.9 120.9 116.8 237.6 126.1 121.0 247.1 127.8 124.2 251.9 112.5 111.1 223.6
375 Geografía 0.7 0.5 1.2 0.8 0.6 1.4 0.9 0.6 1.5 1.0 0.7 1.7 1.0 0.8 1.8 1.1 0.9 2.0 1.4 1.0 2.3 1.3 1.0 2.3 1.2 0.9 2.1
Grupo 38 Disciplinas artísticas 3.8 4.1 7.9 4.6 4.9 9.5 4.9 5.2 10.1 5.4 5.8 11.2 6.3 6.5 12.8 6.7 7.1 13.8 7.0 7.2 14.2 7.4 7.9 15.3 7.8 8.1 15.9
Disciplinas artísticas (artes plásticas, música, teatro, cine) 3.8 4.1 7.9 4.6 4.9 9.5 4.9 5.2 10.1 5.4 5.8 11.2 6.3 6.5 12.8 6.7 7.1 13.8 7.0 7.2 14.2 7.4 7.9 15.3 7.8 8.1 15.9
Grupo 39 Ciencias económico-administrativas y turismo 198.5 262.7 461.1 200.9 270.7 471.6 213.3 286.6 499.9 219.1 297.3 516.4 218.7 300.3 519.0 226.9 309.5 536.4 237.7 323.9 561.6 249.1 335.8 584.8 237.0 318.1 555.2
391 Economía 13.6 10.2 23.9 13.7 10.4 24.1 13.9 10.7 24.6 13.8 10.7 24.5 14.0 10.8 24.8 14.1 11.3 25.4 14.5 11.7 26.2 14.8 11.9 26.7 14.1 11.3 25.4
392 Administración, relaciones industriales, comercio exterior 91.5 115.6 207.1 95.9 123.3 219.2 104.0 134.4 238.4 106.8 140.0 246.8 107.4 142.6 250.1 112.7 146.9 259.6 117.8 153.4 271.2 123.7 158.6 282.3 117.1 151.3 268.5
393 Contaduría y finanzas 71.9 97.8 169.7 65.8 91.5 157.4 67.7 92.5 160.2 67.1 93.4 160.6 64.0 90.5 154.5 63.8 90.5 154.4 64.3 91.0 155.3 64.5 90.7 155.2 56.2 77.4 133.7
394 Turismo 8.8 21.9 30.7 10.5 25.0 35.6 11.5 26.8 38.3 14.3 30.1 44.4 15.1 32.1 47.2 17.1 35.5 52.6 19.9 41.0 61.0 23.8 46.4 70.2 28.2 50.5 78.8
395 Archivonomía y biblioteconomía 0.8 1.2 2.1 0.8 1.4 2.2 0.9 1.4 2.3 0.4 0.6 1.0 0.5 0.6 1.1 0.4 0.6 1.0 0.4 0.7 1.1 0.5 0.7 1.2 0.4 0.6 1.0
396 Mercadotecnia 11.8 15.9 27.7 14.1 19.1 33.1 15.3 20.8 36.2 16.6 22.4 39.0 17.8 23.6 41.4 18.8 24.7 43.4 20.7 26.1 46.8 21.7 27.6 49.3 21.0 26.9 47.9
Grupo 40 Educación y pedagogía 109.2 215.6 324.7 110.1 217.9 328.0 42.6 96.7 139.3 59.8 138.2 198.0 81.7 192.9 274.6 83.1 202.1 285.2 80.6 198.7 279.3 80.2 199.0 279.2 63.5 155.9 219.3
400 Formación docente, educacion y pedagogía 109.2 215.6 324.7 110.1 217.9 328.0 42.6 96.7 139.3 59.8 138.2 198.0 81.7 192.9 274.6 83.1 202.1 285.2 80.6 198.7 279.3 80.2 199.0 279.2 63.5 155.9 219.3
Grupo 41 Ingenierias 315.3 110.4 425.6 342.6 122.1 464.6 355.3 127.4 482.7 369.2 133.7 502.8 376.8 132.4 509.2 391.8 132.2 524.0 404.1 131.2 535.3 417.1 132.9 550.0 423.0 128.8 551.8
411 Ing. civil y de la construcción 30.0 4.1 34.1 30.0 4.6 34.6 29.6 4.7 34.2 29.4 5.0 34.4 31.2 5.6 36.8 32.3 5.9 38.2 34.8 6.5 41.3 36.7 6.9 43.6 40.2 7.4 47.6
412 Ing. extractiva, metalúrgica y energética 2.6 0.7 3.3 2.3 0.8 3.1 2.5 0.8 3.3 2.7 0.9 3.6 3.1 1.1 4.1 3.2 1.1 4.3 3.8 1.2 5.0 4.4 1.6 6.0 4.9 1.7 6.6
413 Ing en computación e informática 110.0 69.7 179.8 132.5 76.7 209.2 128.1 76.5 204.6 135.5 79.5 215.0 134.4 75.3 209.7 137.0 73.6 210.6 137.9 70.6 208.6 138.1 69.7 207.7 133.1 63.9 196.9
414 Ing. Eléctrica, electrónica y electromecanica 81.1 8.0 89.1 63.2 6.8 70.0 75.6 9.3 84.8 75.1 9.6 84.7 76.6 9.4 86.0 78.4 9.4 87.7 78.2 9.2 87.4 78.8 8.7 87.6 77.2 8.6 85.8
415 Ing mecánica, industrial, textil y mecatronica 86.3 26.9 113.1 109.3 32.1 141.4 114.6 34.9 149.5 121.0 37.4 158.4 125.9 39.5 165.4 134.4 40.5 174.9 142.4 41.7 184.2 151.6 43.9 195.5 159.4 44.8 204.2
416 Ing de transportesy logística 2.7 0.3 3.0 2.9 0.3 3.2 2.8 0.4 3.1 2.9 0.4 3.3 2.7 0.3 3.0 3.2 0.4 3.6 3.4 0.5 3.8 3.6 0.5 4.1 4.2 0.8 5.0
417 Ing topográfica, hidrográfica, geológica y geodesta 2.6 0.7 3.3 2.3 0.8 3.1 2.3 0.9 3.1 2.6 0.9 3.5 2.9 1.2 4.1 3.3 1.4 4.7 3.5 1.5 5.0 3.9 1.6 5.5 4.0 1.6 5.7
Grupo 42 Matemáticas, física y astronomía 8.8 5.4 14.2 8.2 4.9 13.1 8.7 5.1 13.8 8.8 5.3 14.1 9.3 5.5 14.8 9.8 6.1 15.9 10.0 6.2 16.2 10.5 6.6 17.1 10.5 6.5 16.9
421 Matemáticas, estadística y actuaría 5.7 4.2 9.8 5.2 3.8 8.9 5.7 4.0 9.8 5.7 4.2 9.9 6.0 4.3 10.3 6.3 4.7 11.0 6.4 4.7 11.1 6.6 5.0 11.6 6.5 5.0 11.5
422 Física y astronomía 3.2 1.2 4.4 3.0 1.1 4.1 3.0 1.1 4.1 3.0 1.1 4.2 3.3 1.3 4.6 3.5 1.4 4.9 3.7 1.5 5.1 3.9 1.5 5.5 3.9 1.5 5.4
999 No identificables incluye troncos comunes generales o de varias
carreras 11.4 8.4 19.8 9.3 9.4 18.7 9.4 9.2 18.6 8.9 8.7 17.6 9.7 9.8 19.5 6.9 7.3 14.2 7.3 7.5 14.8 7.9 7.9 15.8 6.0 5.4 11.4
TOTAL 992.0 1,008.9 2,000.9 1,033.8 1,061.2 2,095.0 1,008.8 992.6 2,001.4 1,062.9 1,082.3 2,145.3 1,108.6 1,167.4 2,276.0 1,146.2 1,207.8 2,354.0 1,191.4 1,249.2 2,440.7 1,234.3 1,293.6 2,527.9 1,203.6 1,226.3 2,429.9
Fuente: '00-08; SEP, encuesta 911 licenciaturas incluye sólo programas escolarizados
fuente ANUIES sólo incluye programas escolarizados
se agregó la información del ITESM Toluca que no estaba incluida en lase de datos dela ANUIES a pesar de estar operando. Se utilizaron los datos 07-08
no se incluyen las licenciatura técnicas, las cuales al ser programas cortos de incluyen con los TSU/PA
para Michoacán son datos 2007-2008
las bases de datos de SEP en los años 02-03 y 03-04 tienen muchas inconsistencias en los datos de las normales por lo que la matricula en el grup 40 y en total es en ralidad mayor

63
Cuadro A.1.6
México. Distribución de la matricula de los programas de licenciatura por área de conocimiento
(Por cientos)
Clave Areas de estudio/carreras Matricula de la carrera en relación al total
00-01 04-05 08-09
Grupo 31 Arquitectura y diseño
311 Arquitectura y urbanismo 2.56 2.60 3.17
312 Diseño, diseño industrial, de interiores y textil 0.44 0.60 0.86
313 Diseño gráfico 1.43 1.69 1.97
Grupo 32 Biología, biotecnología y ciencias del mar
321 Biología y biotecnología 0.81 0.90 1.09
322 Ecología, ingeniería ambiental y ciencias de mar 0.22 0.24 0.43
323 Ciencias del mar e ingeniería pesquera 0.13 0.11 0.12
Grupo 33 Ciencias agropecuarias, forestales y pesqueras
331 Agronomía 1.13 0.94 1.07
332 Veterinaria y zootecnia 1.01 0.99 1.07
333 Forestales 0.04 0.07 0.12
Grupo 34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas
341 Medicina, terapia, optometría y salud pública 3.67 3.65 3.81
342 Odontología 1.56 1.70 1.85
343 Enfermería 0.91 1.26 1.82
344 Nutrición 0.28 0.41 0.92
345 Biomédicas 0.05 0.06 0.09
Grupo 35 Humanidades, filosofía y psicología
351 Filosofía y humanidades 0.00 0.00 0.00
352 Historia 0.00 0.00 0.00
353 Antropología, arqueología y etnología 0.00 0.00 0.00
354 Literatura, letras e idiomas 0.01 0.01 0.01
355 Psicología 0.03 0.04 0.05
356 Teología y religión 0.00 0.00 0.00
Grupo 36 Ciencias químicas
361 Química, Ing. Química y tecnología de alimentos 1.81 1.93 2.03
362 QFB, quimica clinica 0.99 1.02 1.16
363 Bioquímica 0.33 0.42 0.46
Grupo 37 Ciencias sociales y políticas
371 Ciencias sociales 1.00 1.14 1.26
372 Ciencias políticas y administración publica 1.07 1.36 1.45
373 Ciencias de la comunicación y publicidad 2.81 3.15 3.03
374 Derecho 10.18 10.23 9.20
375 Geografía 0.06 0.08 0.09
Grupo 38 Disciplinas artísticas
Disciplinas artísticas (artes plásticas, música, teatro, cine) 0.40 0.56 0.66
Grupo 39 Ciencias económico-administrativas y turismo
391 Economía 1.19 1.09 1.05
392 Administración, relaciones industriales, comercio exterior 10.35 10.99 11.05
393 Contaduría y finanzas 8.48 6.79 5.50
394 Turismo 1.53 2.07 3.24
395 Archivonomía y biblioteconomía 0.10 0.05 0.04
396 Mercadotecnia 1.38 1.82 1.97
Grupo 40 Educación y pedagogía
400 Formación docente, educacion y pedagogía 16.23 12.06 9.03
Grupo 41 Ingenierias
411 Ing. civil y de la construcción 1.71 1.62 1.96
412 Ing. extractiva, metalúrgica y energética 0.17 0.18 0.27
413 Ing en computación e informática 8.98 9.21 8.10
414 Ing. Eléctrica, electrónica y electromecanica 4.45 3.78 3.53
415 Ing mecánica, industrial, textil y mecatronica 5.65 7.27 8.40
416 Ing de transportesy logística 0.15 0.13 0.20
417 Ing topográfica, hidrográfica, geológica y geodesta 0.16 0.18 0.23
Grupo 42 Matemáticas, física y astronomía
421 Matemáticas, estadística y actuaría 0.49 0.45 0.47
422 Física y astronomía 0.22 0.20 0.22
999 No identificables incluye troncos comunes generales o de varias carreras 0.99 0.86 0.47
TOTAL 100.00 100.00 100.00
Fuente: Calculos propios con base en datos estadísticos de SEP, encuesta 911 licenciaturas y ANUIES para el ciclo 2008-2009
los datos de 2008-2009 sólo incluyen programas escolarizados

64
Cuadro A.1.7
México. Participación de las mujeres en los programas de licenciatura
(Por cientos)
clave carrera Proporción de mujeres en la matrícula de cada carrera
00-01 04-05 08-09
Grupo 31 Arquitectura y diseño
311 Arquitectura y urbanismo 31.55 33.44 35.95
312 Diseño, diseño industrial, de interiores y textil 57.36 62.10 64.84
313 Diseño gráfico 55.04 53.67 52.35
Grupo 32 Biología, biotecnología y ciencias del mar
321 Biología y biotecnología 51.81 54.54 55.30
322 Ecología, ingeniería ambiental y ciencias de mar 43.81 46.38 51.80
323 Ciencias del mar e ingeniería pesquera 40.83 41.54 44.70
Grupo 33 Ciencias agropecuarias, forestales y pesqueras
331 Agronomía 25.21 28.24 30.63
332 Veterinaria y zootecnia 30.54 36.53 39.42
333 Forestales 21.21 30.23 36.61
Grupo 34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas
341 Medicina, terapia, optometría y salud pública 51.09 54.48 54.78
342 Odontología 63.77 64.59 63.56
343 Enfermería 86.89 85.45 82.12
344 Nutrición 84.15 85.47 81.17
345 Biomédicas 30.34 40.25 39.27
Grupo 35 Humanidades, filosofía y psicología
351 Filosofía y humanidades 43.36 39.46 37.47
352 Historia 55.51 51.27 48.19
353 Antropología, arqueología y etnología 58.82 58.69 57.09
354 Literatura, letras e idiomas 70.00 67.35 66.51
355 Psicología 78.72 78.23 78.22
356 Teología y religión 45.37 42.63 41.44
Grupo 36 Ciencias químicas
361 Química, Ing. Química y tecnología de alimentos 46.63 50.18 50.95
362 QFB, quimica clinica 62.46 62.65 61.24
363 Bioquímica 56.04 57.13 58.32
Grupo 37 Ciencias sociales y políticas
371 Ciencias sociales 74.54 73.99 72.94
372 Ciencias políticas y administración publica 55.37 55.60 55.82
373 Ciencias de la comunicación y publicidad 61.95 60.33 60.51
374 Derecho 47.90 49.13 49.67
375 Geografía 41.64 42.37 44.68
Grupo 38 Disciplinas artísticas
Disciplinas artísticas (artes plásticas, música, teatro, cine) 51.59 50.83 50.91
Grupo 39 Ciencias económico-administrativas y turismo
391 Economía 42.89 43.65 44.55
392 Administración, relaciones industriales, comercio exterior 55.83 57.03 56.37
393 Contaduría y finanzas 57.64 58.56 57.94
394 Turismo 71.25 68.07 64.16
395 Archivonomía y biblioteconomía 60.34 57.96 60.20
396 Mercadotecnia 57.35 57.09 56.19
Grupo 40 Educación y pedagogía
400 Formación docente, educacion y pedagogía 66.38 70.24 71.06
Grupo 41 Ingenierias
411 Ing. civil y de la construcción 12.09 15.25 15.55
412 Ing. extractiva, metalúrgica y energética 20.17 26.00 25.42
413 Ing en computación e informática 38.79 35.90 32.44
414 Ing. Eléctrica, electrónica y electromecanica 8.97 10.94 10.05
415 Ing mecánica, industrial, textil y mecatronica 23.74 23.88 21.94
416 Ing de transportesy logística 9.31 9.71 15.35
417 Ing topográfica, hidrográfica, geológica y geodesta 21.88 28.93 29.03
Grupo 42 Matemáticas, física y astronomía
421 Matemáticas, estadística y actuaría 42.42 41.82 43.08
422 Física y astronomía 27.52 27.46 27.92
TOTAL 50.42 51.29 50.47
Fuente: Calculos propios con base en datos estadísticos de SEP, encuesta 911 licenciaturas y ANUIES para el ciclo 2008-2009
Notas: no se incluyen las licenciatura técnicas, las cuales al ser programas cortos de incluyen con los TSU/PA
los datos de 2008-2009 sólo incluyen programas escolarizados

65
Cuadro A.1.8
México. Participación de las IES privadas en los programas de licenciatura por área de conocimiento
(Miles de alumnos y por cientos)
Proporción de la matricula de cada carrera en IES Privadas
Clave Areas de conocimeinto/carreras 00-01 04-05 08-09
IES Total % IES Total % IES Total %
Privadas Privadas Privadas
Grupo 31 Arquitectura y diseño 36.5 88.6 41.1 52.5 111.5 47.10 74.9 145.8 51.33
311 Arquitectura y urbanismo 13.6 51.2 26.6 18.7 59.3 31.47 28.0 77.1 36.34
312 Diseño, diseño industrial, de interiores y textil 3.7 8.8 42.1 7.3 13.7 53.09 12.6 20.9 60.10
313 Diseño gráfico 19.1 28.6 67.0 26.6 38.6 69.00 34.3 47.8 71.69
Grupo 32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 0.5 23.2 2.0 0.8 28.4 2.81 1.5 39.9 3.64
321 Biología y biotecnología 0.2 16.2 1.4 0.3 20.4 1.67 0.8 26.6 3.16
322 Ecología, ingeniería ambiental y ciencias de mar 0.2 4.5 5.4 0.4 5.5 8.07 0.6 10.4 5.87
323 Ciencias del mar e ingeniería pesquera - 2.6 0.0 0.0 2.6 0.61 - 2.9 -
Grupo 33 Ciencias agropecuarias, forestales y pesqueras 1.8 43.7 4.1 1.9 45.4 4.21 2.3 55.1 4.26
331 Agronomía 0.5 22.7 2.2 0.5 21.3 2.12 0.7 26.0 2.50
332 Veterinaria y zootecnia 1.3 20.3 6.4 1.5 22.5 6.50 1.7 26.0 6.52
333 Forestales - 0.7 0.0 - 1.6 - - 3.0 -
Grupo 34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 20.0 129.3 15.5 30.9 161.1 19.19 52.3 206.1 25.37
341 Medicina, terapia, optometría y salud pública 12.7 73.5 17.3 17.1 83.2 20.58 23.3 92.5 25.23
342 Odontología 4.9 31.2 15.9 7.8 38.7 20.25 10.8 44.9 23.99
343 Enfermería 1.0 18.2 5.2 2.6 28.7 9.18 5.5 44.3 12.51
344 Nutrición 1.2 5.5 22.2 3.0 9.3 31.84 11.9 22.3 53.34
345 Biomédicas 0.2 0.9 16.7 0.4 1.3 28.85 0.8 2.1 35.45
Grupo 35 Humanidades, filosofía y psicología 33.7 97.4 34.5 56.3 139.7 40.27 69.8 158.6 44.01
351 Filosofía y humanidades 1.7 5.6 30.3 1.8 6.2 28.95 1.6 6.3 24.93
352 Historia 0.5 5.5 8.8 0.4 6.8 5.79 0.4 7.4 5.72
353 Antropología, arqueología y etnología 0.2 3.7 5.2 0.2 4.5 3.69 0.3 6.9 4.89
354 Literatura, letras e idiomas 2.7 15.5 17.3 3.5 22.8 15.28 5.4 26.1 20.65
355 Psicología 28.2 66.8 42.2 49.7 98.6 50.35 61.5 111.3 55.27
356 Teología y religión 0.4 0.4 100.0 0.8 0.8 100.00 0.5 0.5 100.00
Grupo 36 Ciencias químicas 4.1 62.6 6.6 4.5 76.6 5.85 4.8 88.7 5.42
361 Química, Ing. Química y tecnología de alimentos 3.3 36.3 9.0 3.5 43.8 7.91 3.3 49.4 6.72
362 QFB, quimica clinica 0.8 19.7 4.2 0.9 23.2 4.01 1.4 28.1 5.04
363 Bioquímica - 6.6 0.0 0.1 9.5 0.82 0.1 11.2 0.61
Grupo 37 Ciencias sociales y políticas 137.1 302.5 45.3 174.1 363.4 47.91 169.4 365.1 46.40
371 Ciencias sociales 2.0 19.9 10.0 2.2 26.0 8.41 3.6 30.6 11.66
372 Ciencias políticas y administración publica 7.1 21.4 33.2 9.0 30.9 29.27 9.8 35.3 27.67
373 Ciencias de la comunicación y publicidad 35.9 56.3 63.8 44.7 71.7 62.37 44.1 73.6 59.94
374 Derecho 92.1 203.6 45.2 118.1 232.9 50.70 112.0 223.6 50.09
375 Geografía - 1.2 0.0 - 1.8 - - 2.1 -
Grupo 38 Disciplinas artísticas 1.1 7.9 14.2 2.4 12.8 18.61 2.1 15.9 13.33
Disciplinas artísticas (artes plásticas, música, teatro, cine) 1.1 7.9 14.2 2.4 12.8 18.61 2.1 15.9 13.33
Grupo 39 Ciencias económico-administrativas y turismo 187.8 461.1 40.7 225.3 519.0 43.42 243.4 555.2 43.85
391 Economía 3.8 23.9 15.9 3.9 24.8 15.86 3.9 25.4 15.41
392 Administración, relaciones industriales, comercio exterior 87.9 207.1 42.5 105.4 250.1 42.16 107.2 268.5 39.92
393 Contaduría y finanzas 54.4 169.7 32.0 52.2 154.5 33.77 40.7 133.7 30.42
394 Turismo 18.0 30.7 58.7 29.9 47.2 63.48 54.6 78.8 69.30
395 Archivonomía y biblioteconomía - 2.1 0.0 - 1.1 - - 1.0 -
396 Mercadotecnia 23.7 27.7 85.5 33.9 41.4 81.83 37.1 47.9 77.52
Grupo 40 Educación y pedagogía 108.1 324.7 33.3 87.1 274.6 31.73 78.0 219.3 35.57
400 Formación docente, educacion y pedagogía 108.1 324.7 33.3 87.1 274.6 31.73 78.0 219.3 35.57
Grupo 41 Ingenierias 100.8 425.6 23.7 107.8 509.2 21.16 99.7 551.8 18.07
411 Ing. civil y de la construcción 2.8 34.1 8.1 3.3 36.8 8.89 5.4 47.6 11.27
412 Ing. extractiva, metalúrgica y energética - 3.3 0.0 - 4.1 - 0.5 6.6 6.95
413 Ing en computación e informática 56.2 179.8 31.3 57.3 209.7 27.35 41.4 196.9 21.00
414 Ing. Eléctrica, electrónica y electromecanica 12.4 89.1 13.9 7.7 86.0 8.91 6.0 85.8 6.99
415 Ing mecánica, industrial, textil y mecatronica 29.4 113.1 26.0 39.5 165.4 23.86 46.4 204.2 22.71
416 Ing de transportesy logística - 3.0 0.0 - 3.0 - 0.2 5.0 3.99
417 Ing topográfica, hidrográfica, geológica y geodesta - 3.3 0.0 - 4.1 - - 5.7 -
Grupo 42 Matemáticas, física y astronomía 2.0 14.2 14.3 1.8 14.8 12.24 1.9 16.9 11.25
421 Matemáticas, estadística y actuaría 1.5 9.8 15.6 1.4 10.3 14.04 1.6 11.5 13.48
422 Física y astronomía 0.5 4.4 11.3 0.4 4.6 8.18 0.4 5.4 6.53
999 No identificables incluye troncos comunes generales o de varias carreras 2.5 19.8 12.8 2.8 19.5 14.48 3.6 11.4 31.80
TOTAL 636.0 2,000.9 31.8 748.2 2,276.0 32.87 803.8 2,429.9 33.08
Fuente: Calculos propios con base en datos estadísticos de SEP, encuesta 911 licenciaturas y ANUIES para el ciclo 2008-2009
Notas: no se incluyen las licenciatura técnicas, las cuales al ser programas cortos de incluyen con los TSU/PA
los datos de 2008-2009 sólo incluyen programas escolarizados

66
Cuadro A.1.9
Importancia de las educación superior privada en las entidades federaticas. Licenciatura
(Miles de alumnos y por cientos)
Entidad 00-01 08-09 2001-2009
Federativa IES % de matrícula IES % de matrícula Crecimiento matricula IES
Total Privadas Públicas IES privadas Total Privadas Públicas IES privadas Total Privadas Públicas
Aguascalientes 19.4 3.5 15.9 18.0 28.6 8.5 20.0 29.9 47.7 145.5 26.3
Baja California 45.1 9.2 35.9 20.5 69.3 17.1 52.2 24.7 53.5 84.9 45.4
Baja California Sur 7.7 2.0 5.7 25.8 15.0 4.7 10.3 31.5 96.0 139.2 80.8
Campeche 15.2 1.3 13.9 8.5 20.0 2.3 17.8 11.3 32.1 74.7 28.2
Chiapas 51.6 21.0 30.6 40.7 61.1 22.5 38.6 36.8 18.5 7.0 26.4
Chihuahua 61.0 10.6 50.4 17.4 78.5 13.6 64.9 17.3 28.7 28.0 28.8
Coahuila 57.4 15.1 42.3 26.3 67.6 19.2 48.4 28.4 17.7 27.1 14.3
Colima 12.9 0.8 12.1 6.2 15.8 2.0 13.8 12.7 23.0 151.3 14.4
Distrito Federal 360.2 127.6 232.5 35.4 383.6 128.1 255.5 33.4 6.5 0.4 9.9
Durango 26.7 7.1 19.6 26.6 32.1 7.5 24.6 23.4 20.4 6.1 25.5
Guanajuato 58.2 34.8 23.5 59.7 74.7 43.5 31.2 58.2 28.3 25.1 33.0
Guerrero 59.2 12.9 46.3 21.8 45.9 8.8 37.1 19.2 -22.5 -31.5 -19.9
Hidalgo 29.9 13.1 16.8 43.7 51.4 16.0 35.4 31.1 72.1 22.5 110.7
Jalisco 125.2 51.8 73.4 41.4 160.5 69.4 91.0 43.3 28.2 34.0 24.1
México 164.0 58.0 106.0 35.4 248.9 103.4 145.5 41.5 50.5 78.3 37.3
Michoacan 58.1 8.9 49.2 15.3 73.8 11.4 62.4 15.4 27.0 27.8 26.9
Morelos 30.3 14.8 15.5 48.8 36.0 17.8 18.2 49.5 18.9 20.5 17.3
Nayarit 26.9 2.3 24.6 8.4 23.4 5.6 17.8 24.0 -13.0 147.0 -27.7
Nuevo León 111.4 43.2 68.2 38.8 133.3 59.8 73.5 44.9 19.6 38.3 7.8
Oaxaca 52.6 5.9 46.7 11.3 57.6 11.7 45.9 20.4 9.5 97.4 -1.7
Puebla 101.3 47.9 53.4 47.3 126.2 65.3 60.9 51.7 24.8 36.3 14.1
Queretaro 24.7 8.5 16.1 34.6 34.8 12.6 22.2 36.1 41.0 47.1 37.8
Quintana Roo 8.4 1.7 6.7 20.5 17.1 7.0 10.2 40.7 102.8 302.8 51.3
San Luis Potosí 38.5 9.6 28.9 24.8 50.9 13.7 37.2 26.9 32.2 43.2 28.5
Sinaloa 74.0 7.1 66.9 9.6 78.6 12.3 66.4 15.6 6.3 73.1 -0.8
Sonora 57.9 5.1 52.8 8.8 71.7 13.8 58.0 19.2 23.9 170.4 9.8
Tabasco 36.1 4.6 31.5 12.7 56.6 10.1 46.5 17.8 57.0 120.3 47.7
Tamaulipas 99.0 52.3 46.7 52.9 87.8 25.7 62.1 29.3 -11.3 -50.8 33.0
Tlaxcala 17.9 2.5 15.4 14.1 21.5 3.7 17.8 17.1 20.1 45.0 16.0
Veracruz 118.1 40.1 78.0 33.9 131.0 41.8 89.2 31.9 10.9 4.2 14.4
Yucatán 32.5 14.3 18.2 44.0 46.5 22.3 24.3 47.8 43.3 56.0 33.4
Zacatecas 19.8 1.1 18.7 5.8 29.9 4.0 26.0 13.2 51.4 247.5 39.2
TOTAL 2,000.9 638.7 1,362.1 31.9 2,429.9 805.0 1,624.9 33.1 21.4 26.0 19.3
Fuente:
2000-2001:SEP, Encuestas de Educación Superior, formato 911, carreras, normales
2008-2009: ANUIES. Se incluye sólo la modalidad escolarizada
En M ichoacan los datos estadísticos corresponden al ciclo escolar 2007-2008.

67
Cuadro A.1.10
Distribución de la matricula de licenciatura por áreas en cada entidad. 2008-2009
( Por cientos)
Entidad Área de conocimiento (grupo)
Federativa 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 Otros Total
Aguascalientes 7.40 1.10 2.30 9.40 6.60 2.50 10.70 0.80 24.50 12.20 22.20 0.30 0.00 100.00
Baja California 5.50 0.90 0.90 7.80 8.50 1.60 15.90 0.80 25.50 8.80 23.60 0.20 0.00 100.00
Baja California Sur 6.50 2.10 4.20 2.20 6.60 1.30 16.10 0.00 33.40 12.60 15.00 0.00 0.00 100.00
Campeche 2.30 3.00 2.90 9.00 6.20 5.60 11.40 0.20 24.60 12.00 22.80 0.00 0.00 100.00
Chiapas 4.00 2.00 4.30 7.10 6.80 2.60 14.10 0.50 23.10 13.60 19.90 0.40 1.60 100.00
Chihuahua 5.70 0.70 1.90 7.60 5.10 2.40 12.50 1.10 21.20 10.70 29.90 0.40 0.60 100.00
Coahuila 3.60 0.30 5.70 4.30 3.60 3.50 11.20 0.20 24.80 10.90 30.60 0.20 1.20 100.00
Colima 6.80 3.10 2.30 5.80 6.50 3.60 14.60 1.10 27.30 12.10 16.50 0.30 0.00 100.00
Distrito Federal 6.80 1.90 1.30 9.60 8.20 5.10 16.10 0.90 24.40 4.20 19.20 1.80 0.30 100.00
Durango 4.10 2.10 4.40 7.80 3.50 5.90 12.10 0.60 13.30 18.00 27.40 0.40 0.30 100.00
Guanajuato 7.80 1.10 2.20 6.70 6.80 3.10 13.40 0.50 25.00 10.10 23.10 0.30 0.00 100.00
Guerrero 3.90 2.00 2.70 8.50 6.10 2.50 17.40 0.00 23.30 16.60 15.50 1.10 0.50 100.00
Hidalgo 5.80 2.60 2.50 6.80 6.00 2.80 15.90 0.90 23.00 11.30 22.00 0.30 0.20 100.00
Jalisco 8.20 1.10 2.40 12.40 6.90 2.70 15.90 1.00 27.00 5.50 16.70 0.30 0.00 100.00
México 7.80 1.10 2.70 6.10 6.50 2.60 21.10 0.10 22.70 7.10 20.80 1.30 0.20 100.00
Michoacan 4.60 1.70 3.40 14.30 9.40 5.20 13.20 0.60 14.20 11.90 17.90 0.40 3.20 100.00
Morelos 4.10 3.20 0.60 4.10 6.20 3.30 17.10 1.30 23.80 15.30 20.50 0.40 0.10 100.00
Nayarit 4.50 1.10 2.90 10.40 4.90 4.40 13.00 1.10 20.10 23.30 13.80 0.50 0.00 100.00
Nuevo León 8.70 0.80 0.90 10.10 5.70 3.00 17.90 0.70 19.70 7.60 24.20 0.50 0.10 100.00
Oaxaca 5.10 2.30 4.30 8.50 4.20 2.80 14.50 0.00 21.40 15.90 20.80 0.30 0.00 100.00
Puebla 7.80 1.80 2.10 10.10 7.20 3.80 13.00 1.20 19.80 10.00 22.40 0.80 0.00 100.00
Queretaro 7.50 0.90 1.00 7.90 6.20 2.20 16.00 2.30 19.10 8.70 25.90 0.20 2.10 100.00
Quintana Roo 4.30 3.40 2.30 0.50 6.20 0.30 13.60 0.00 44.90 6.60 17.60 0.00 0.20 100.00
San Luis Potosí 5.30 0.40 1.20 9.40 4.80 3.10 13.10 0.50 24.10 8.00 29.50 0.40 0.00 100.00
Sinaloa 5.30 2.10 3.70 9.40 6.00 2.50 21.00 0.40 23.80 3.50 19.30 0.00 2.90 100.00
Sonora 3.30 2.40 1.50 2.40 5.20 3.30 12.30 0.40 28.60 10.30 29.10 0.30 0.80 100.00
Tabasco 3.40 4.50 2.90 7.00 6.70 6.80 10.00 0.00 19.80 7.80 30.60 0.50 0.00 100.00
Tamaulipas 3.70 1.20 1.30 10.80 5.00 3.00 11.20 0.10 21.60 11.10 30.10 0.00 0.90 100.00
Tlaxcala 2.20 1.20 3.00 8.70 6.10 5.20 15.50 0.00 14.10 22.00 21.30 0.50 0.30 100.00
Veracruz 3.60 1.80 2.30 7.00 5.20 6.40 9.30 0.60 18.70 11.50 33.20 0.30 0.00 100.00
Yucatán 5.40 2.00 2.20 7.60 9.40 3.10 13.90 0.70 27.90 8.30 18.50 0.90 0.00 100.00
Zacatecas 4.80 1.60 2.50 15.10 7.00 4.60 12.60 1.50 19.70 6.80 23.00 0.80 0.10 100.00
Total 4.90 1.20 2.00 7.10 6.10 3.40 16.00 0.60 22.80 12.10 22.40 0.70 0.90 100.00
Fuente cálculos propios con datos de ANUIES, sólo incluye progrmas escolarizados

68
Cuadro A.1.11
Distribución de la matricula de licenciatura de cada área por cada entidad. 2008-2009
(Por cientos)
Entidad Área de conocimiento (grupo)
Federativa 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 41 42 Otros Total
Aguascalientes 1.50 0.80 1.20 1.30 1.20 0.80 0.80 1.40 1.30 1.60 1.10 0.50 0.10 1.20
Baja California 2.60 1.60 1.10 2.60 3.70 1.20 3.00 3.40 3.20 2.80 3.00 0.80 0.00 2.90
Baja California Sur 0.70 0.80 1.10 0.20 0.60 0.20 0.70 0.00 0.90 0.90 0.40 0.00 0.00 0.60
Campeche 0.30 1.50 1.10 0.90 0.80 1.30 0.60 0.30 0.90 1.10 0.80 0.00 0.00 0.80
Chiapas 1.70 3.10 4.80 2.10 2.60 1.80 2.40 1.80 2.50 3.80 2.20 1.60 8.60 2.50
Chihuahua 3.10 1.40 2.70 2.90 2.50 2.10 2.70 5.70 3.00 3.80 4.20 1.90 4.30 3.20
Coahuila 1.70 0.50 6.90 1.40 1.50 2.70 2.10 1.00 3.00 3.40 3.70 0.70 7.10 2.80
Colima 0.70 1.30 0.60 0.40 0.60 0.60 0.60 1.10 0.80 0.90 0.50 0.30 0.00 0.70
Distrito Federal 18.00 18.80 8.90 17.90 19.80 22.20 16.90 22.60 16.90 7.40 13.40 41.00 9.80 15.80
Durango 0.90 1.70 2.50 1.20 0.70 2.10 1.10 1.30 0.80 2.60 1.60 0.70 0.90 1.30
Guanajuato 4.00 2.10 2.90 2.40 3.20 2.60 2.70 2.30 3.40 3.40 3.10 1.30 0.20 3.10
Guerrero 1.20 2.30 2.30 1.90 1.80 1.30 2.20 0.00 1.90 3.50 1.30 2.80 2.00 1.90
Hidalgo 2.00 3.40 2.30 1.70 1.90 1.60 2.20 2.90 2.10 2.70 2.00 0.80 0.70 2.10
Jalisco 9.00 4.30 7.10 9.60 6.90 4.90 7.00 10.40 7.80 4.00 4.90 2.90 0.50 6.60
México 13.30 6.80 12.20 7.30 10.20 7.20 14.40 2.00 10.20 8.10 9.40 18.40 4.00 10.20
Michoacan 2.30 3.20 4.50 5.10 4.40 4.40 2.70 2.70 1.90 4.00 2.40 1.90 20.50 3.00
Morelos 1.00 2.90 0.40 0.70 1.40 1.30 1.70 3.00 1.50 2.50 1.30 0.80 0.40 1.50
Nayarit 0.70 0.60 1.20 1.20 0.70 1.20 0.80 1.70 0.80 2.50 0.60 0.70 0.00 1.00
Nuevo León 8.00 2.80 2.20 6.60 4.80 4.50 6.50 6.20 4.70 4.60 5.80 3.60 0.90 5.50
Oaxaca 2.00 3.40 4.50 2.40 1.50 1.80 2.30 0.00 2.20 4.20 2.20 1.10 0.00 2.40
Puebla 6.80 5.70 4.90 6.20 5.70 5.40 4.50 9.30 4.50 5.80 5.10 6.20 0.00 5.20
Queretaro 1.80 0.80 0.60 1.30 1.40 0.90 1.50 5.10 1.20 1.40 1.60 0.40 6.40 1.40
Quintana Roo 0.50 1.50 0.70 0.00 0.70 0.10 0.60 0.00 1.40 0.50 0.50 0.00 0.30 0.70
San Luis Potosí 1.90 0.50 1.10 2.30 1.60 1.80 1.80 1.80 2.20 1.90 2.70 1.20 0.20 2.10
Sinaloa 2.90 4.30 5.20 3.60 3.00 2.20 4.50 1.90 3.40 1.30 2.70 0.20 20.10 3.20
Sonora 1.60 4.50 1.90 0.80 2.40 2.70 2.40 1.80 3.70 3.40 3.80 1.20 5.00 3.00
Tabasco 1.30 6.40 3.00 1.90 2.40 4.30 1.50 0.00 2.00 2.00 3.10 1.70 0.00 2.30
Tamaulipas 2.20 2.70 2.10 4.60 2.70 3.00 2.70 0.50 3.40 4.40 4.80 0.00 7.20 3.60
Tlaxcala 0.30 0.60 1.10 0.90 0.80 1.30 0.90 0.00 0.50 2.20 0.80 0.70 0.60 0.90
Veracruz 3.30 5.90 5.50 4.40 4.30 9.50 3.30 4.80 4.40 6.90 7.90 2.60 0.00 5.40
Yucatán 1.70 2.40 1.90 1.70 2.80 1.60 1.80 2.10 2.30 1.80 1.60 2.50 0.00 1.90
Zacatecas 1.00 1.20 1.40 2.20 1.30 1.50 1.00 2.90 1.10 0.90 1.20 1.40 0.20 1.20
Total 100.00 100.00 100.00 100.00 100.00 100.00 100.00 100.00 100.00 100.00 100.00 100.00 100.00 100.00
Fuente cálculos propios con datos de ANUIES, sólo incluye progrmas escolarizados

69
Cuadro A.1.12
México. Matricula de TSU/PA por área de conocimiento. 00-01, 04-05, 08-09 (miles de alumnos)
(Miles de Alumnos)
Grupo Area de 00-01 04-05 08-09
Conocimiento H M T H M T H M T
31 Arquitectura, diseño industrial, de interiores, textil y gráfico 0.13 0.38 0.50 0.37 0.66 1.03 0.45 0.79 1.24
32 Biología, biotecnología y ciencias del mar 0.67 0.58 1.25 0.74 0.98 1.72 0.96 1.22 2.18
33 Ciencias agropecuarias, forestales y pesqueras 0.59 0.33 0.92 0.71 0.41 1.11 0.62 0.47 1.09
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 0.63 2.59 3.21 1.18 2.72 3.90 1.77 3.22 4.99
35 Humanidades, filosofía y psicología 0.29 0.51 0.79 0.10 0.10 0.20 0.01 0.01 0.02
36 Ciencias químicas 0.35 0.39 0.74 0.62 0.87 1.49 0.98 1.04 2.02
37 Ciencias sociales y políticas 0.18 0.16 0.34 0.60 0.72 1.32 0.66 0.62 1.28
38 Disciplinas artísticas 0.09 0.17 0.26 0.14 0.19 0.34 0.13 0.14 0.27
39 Ciencias económico-administrativas y turismo 5.10 7.85 12.95 10.52 16.86 27.37 12.40 20.76 33.16
40 Educación y pedagogía 0.09 0.23 0.31 0.14 0.51 0.65 0.17 0.43 0.60
41 Ingenierías 22.36 7.75 30.11 32.03 11.68 43.71 33.59 11.17 44.77
42 Matemáticas, física y astronomía 0.00 0.00 0.00 0.00 0.00 0.00 0.00 0.00 0.00
Total 30.49 20.91 51.40 47.15 35.70 82.85 51.73 39.87 91.60
Fuente: SEP formatos 91 y ANUIES para 2008-009
Los datos de 2008-2009 sólo incluyen programas escolarizados
Se incluyen porgrams de TSU, PA y licenciatura e ingeniería técnicas

Cuadro A1.13
México. Matricula de posgrado por área de conocimiento.00-01, 04-05, 08-09
(Miles de alumnos)
Grupo Area de 00-01 04-05 08-09
Conocimiento H M T H M T H M T
31 Arquitectura, diseño industrial, de interiores, textil y gráfico 0.81 0.59 1.40 1.14 0.89 2.02 1.18 1.17 2.35
32 Biología, biotecnología, ecología, y ciencias del mar 2.04 1.78 3.82 2.40 2.22 4.62 2.21 2.44 4.65
33 Ciencias agropecuarias, forestales y pesqueras 1.77 0.65 2.41 1.75 0.86 2.60 1.62 1.14 2.75
34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas 10.98 9.02 20.00 11.23 10.89 22.12 14.38 15.24 29.63
35 Ciencias humanistas 2.89 5.69 8.58 3.57 7.40 10.97 4.09 8.71 12.79
36 Ciencias químicas 1.26 1.20 2.45 1.22 1.34 2.56 1.46 1.50 2.96
37 Ciencias sociales y políticas 8.71 6.44 15.15 12.25 10.18 22.43 14.53 13.15 27.69
38 Disciplinas artísticas 0.14 0.17 0.32 0.21 0.23 0.44 0.35 0.37 0.72
39 Economía administración contaduría y turismo 23.33 15.24 38.57 23.47 17.77 41.24 24.24 20.32 44.55
40 Educación y pedagogía 14.55 16.36 30.90 15.17 22.66 37.83 13.69 24.18 37.87
41 Ingenierías 11.65 3.42 15.07 13.20 4.54 17.74 12.10 4.38 16.48
42 Matemáticas, física y astronomía 1.17 0.40 1.57 1.15 0.47 1.62 1.52 0.61 2.13
999 No identificables incluye troncos comunes generales o de varias carreras 0.15 0.06 0.21 0.19 0.11 0.30 0.62 0.38 1.00
Total 79.43 61.02 140.45 86.94 79.56 166.50 91.98 93.59 185.57
Fuente: SEP formatos 91 y ANUIES para 2008-009
se incluyen los programas de especialización, maestría y doctorado

70
Cuadro A.1.14
México. Presencia de las mujeres en la educación superior en las
en las entidades federativas, 2008-2009
(Por cientos)
Entidad Participación de las mujeres en la matricula total
Federativa TSU licenciatura posgrado
Aguascalientes 47.0 52.4 52.5
Baja California 37.4 50.5 53.0
Baja California Sur 63.6 51.5 56.6
Campeche 42.0 51.1 51.4
Chiapas 47.6 48.5 48.7
Chihuahua 29.8 49.7 49.6
Coahuila 31.0 48.9 46.9
Colima 42.2 50.8 43.2
Distrito Federal 51.7 49.8 47.7
Durango 0.0 50.0 51.5
Guanajuato 47.5 53.1 52.8
Guerrero 44.5 55.3 55.5
Hidalgo 50.9 53.8 56.4
Jalisco 41.7 50.4 47.9
México 50.5 50.9 51.5
Michoacan 36.6 51.6 53.8
Morelos 46.2 51.7 52.5
Nayarit 51.0 53.6 66.8
Nuevo León 32.9 48.3 45.7
Oaxaca 0.0 50.6 53.8
Puebla 43.0 50.9 53.4
Queretaro 47.9 51.3 51.7
Quintana Roo 44.4 50.0 54.6
San Luis Potosí 38.1 50.9 51.2
Sinaloa 60.6 50.2 46.9
Sonora 35.8 49.1 47.2
Tabasco 47.7 49.5 57.7
Tamaulipas 36.0 49.8 57.8
Tlaxcala 43.7 53.8 53.3
Veracruz 45.2 49.6 55.2
Yucatán 42.5 49.8 49.7
Zacatecas 49.6 53.2 51.2
Total 43.5 50.5 50.4
Fuente cálculos propios

71
Cuadro A.1.15
México. Programas de licenciatura acreditados por COPAES. 2009
(Absolutos y por cientos)
Programas Matrícula
Grupo Area de conocimiento % de programas Acreditados Totral % de matricula
(Carreras) Acreditados Total acreditados en programas
Acreditados
Grupo 31 Arquitectura y diseño
311 Arquitectura y urbanismo 64 322 19.9 38,668 77,122 50.1
312 Diseño, diseño industrial, de interiores y textil 16 208 7.7 5,840 20,915 27.9
313 Diseño gráfico 20 400 5.0 9,902 47,786 20.7
Grupo 32 Biología, biotecnología y ciencias del mar
321 Biología y biotecnología 25 98 25.5 9,529 26,604 35.8
322 Ecología, ingeniería ambiental y ciencias de mar 16 91 17.6 3,263 10,437 31.3
323 Ciencias del mar e ingeniería pesquera 8 48 16.7 1,393 2,870 48.5
Grupo 33 Ciencias agropecuarias, forestales y pesqueras
331 Agronomía 57 190 30.0 9,669 26,038 37.1
332 Veterinaria y zootecnia 22 83 26.5 11,744 26,016 45.1
333 Forestales 8 31 25.8 807 3,007 26.8
Grupo 34 Ciencias de la salud, nutrición y biomédicas
341 Medicina, terapia, optometría y salud pública 51 177 28.8 60,101 92,532 65.0
342 Odontología 32 101 31.7 21,473 44,928 47.8
343 Enfermería 42 155 27.1 23,463 44,253 53.0
344 Nutrición 7 121 5.8 2,678 22,308 12.0
345 Biomédicas 3 17 17.6 955 2,121 45.0
Grupo 35 Humanidades, filosofía y psicología
351 Filosofía y humanidades 5 69 7.2 776 6,261 12.4
352 Historia 12 53 22.6 2,319 7,417 31.3
353 Antropología, arqueología y etnología 2 55 3.6 585 6,915 8.5
354 Literatura, letras e idiomas 13 222 5.9 2,959 26,144 11.3
355 Psicología 59 622 9.5 36,765 111,341 33.0
356 Teología y religión 16 0.0 543 0.0
Grupo 36 Ciencias químicas
361 Química, Ing. Química y tecnología de alimentos 65 237 27.4 26,312 49,379 53.3
362 QFB, quimica clinica 18 71 25.4 10,121 28,108 36.0
363 Bioquímica 22 52 42.3 6,386 11,214 56.9
Grupo 37 Ciencias sociales y políticas
371 Ciencias sociales 38 168 22.6 14,303 30,586 46.8
372 Ciencias políticas y administración publica 55 207 26.6 23,559 35,257 66.8
373 Ciencias de la comunicación y publicidad 44 579 7.6 26,876 73,556 36.5
374 Derecho 41 975 4.2 55,751 223,597 24.9
375 Geografía 2 10 20.0 492 2,086 23.6
Grupo 38 Disciplinas artísticas
Disciplinas artísticas (artes plásticas, música, teatro, 4 312 0.0 645 15,928 4.0
Grupo 39 Ciencias económico-administrativas y turismo
391 Economía 29 122 23.8 10,171 25,409 40.0
392 Administración, relaciones industriales, comercio exterior 214 1,768 12.1 108,567 268,463 40.4
393 Contaduría y finanzas 122 997 12.2 73,477 133,660 55.0
394 Turismo 39 550 7.1 15,861 78,762 20.1
395 Archivonomía y biblioteconomía 3 8 37.5 370 980 37.8
396 Mercadotecnia 49 511 9.6 15,209 47,883 31.8
Grupo 40 Educación y pedagogía
400 Formación docente, educacion y pedagogía 20 2,073 1.0 9,098 219,338 4.1
Grupo 41 Ingenierias
411 Ing. civil y de la construcción 39 166 23.5 22,136 47,623 46.5
412 Ing. extractiva, metalúrgica y energética 17 39 43.6 3,904 6,629 58.9
413 Ing en computación e informática 141 1,494 9.4 64,803 196,938 32.9
414 Ing. Eléctrica, electrónica y electromecanica 93 416 22.4 44,007 85,844 51.3
415 Ing mecánica, industrial, textil y mecatronica 172 946 18.2 79,368 204,166 38.9
416 Ing de transportesy logística 2 32 6.3 1,553 4,963 31.3
417 Ing topográfica, hidrográfica, geológica y geodesta 13 40 32.5 2,217 5,657 39.2
Grupo 42 Matemáticas, física y astronomía
421 Matemáticas, estadística y actuaría 1 64 1.6 1,343 11,505 11.7
422 Física y astronomía 6 38 15.8 766 5,434 14.1
Total 1,711 15,111 11.3 860,184 2,429,896 35.4

72

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