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Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad

Red Latinoamericana de Análisis de Seguridad y Delincuencia Organizada (RELASEDOR)


y FLACSO Sede Ecuador
ISSN 1390-4299 (en línea) - Junio 2016 - No. 18
URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad
Número 18, junio de 2016
Quito - Ecuador
ISSN 1390-4299 (en línea)

URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad,


es una publicación electrónica semestral de FLACSO, sede
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Mtr. Daniel Pontón
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Red Latinoamericana de Análisis de Seguridad y Delincuencia Organizada (RELASEDOR)


y FLACSO Sede Ecuador
ISSN 1390-4299 (en línea) - Junio 2016 - No. 18

Presentation: Las economías ilegales y sus trayectorias . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7-11


Daniel Pontón

Tema central

Cuatro tesis sobre las economías ilícitas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13-27


Luis Umbría Acosta

Drogocriticidad barrial en Chile: coordenadas para el diseño de políticas


de seguridad pública centradas en la vida comunitaria . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28-40
Alejandro Romero Miranda

Impunidad y disuasión criminal del control anticorrupción en Ecuador: el caso de la


Comisión Anticorrupción 1998-2008 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41-60
Cielito Berenice Olivo Espín

El impacto de la cooperación México-Estados Unidos en


el combate al lavado de dinero. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 61-74
Keyla H. Vargas Rojas

Misceláneo

Fuerzas intermedias y lucha contra el tráfico de drogas: el caso de la Gendarmería


en Argentina. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 76-89
Jorge Battaglino
La tecnología de información y comunicación en prevención del delito. . . . . . . . . . . . . . 90-103
Jorge Francisco Aguirre Sala

Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a través de las prácticas


de la vigilancia cotidiana. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 104-123
Luis Berneth Peña

Entrevista

Crimen organizado y economía ilegal


Entrevista a Daniel Sansó-Rubert Pascual. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 125-136
Por Liosday Landaburo Sánchez

Reseñas

Inteligencia Estratégica Latinoamericana. Perspectivas y ejes predominantes para


la toma de decisiones estratégicas ante un mundo en cambio,
compilado por José Gabriel Paz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 138-140
Daniel García Sanz

Geopolítica del narcotráfico en América Latina,


de Norberto Emmerich . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 141-143
Luis Fernando Amaya Martínez

Política editorial. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 145-150


Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad

Red Latinoamericana de Análisis de Seguridad y Delincuencia Organizada (RELASEDOR)


y FLACSO Sede Ecuador
ISSN 1390-4299 (en línea) · Junio 2016 · No. 18

Presentation: Illegal economies and their trajectories . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7-11


Daniel Pontón

Central topic

Four theses about illicit economies. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13-27


Luis Umbría Acosta

Drogocriticidad claypit in Chile: coordinates for the design of policies


of centered public security in the communitarian life. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28-40
Alejandro Romero Miranda

Impunity and criminal deterrence of control against corruption in Ecuador:


The case of the Anticorruption Commission 1998 – 2008. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41-60
Cielito Berenice Olivo Espín

The impact of Mexico-United States cooperation in the fight


against money laundering. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 61-74
Keyla H. Vargas Rojas

Miscellaneous

Intermediate forces and the fight against drug trafficking:


the case of Gendarmerie in Argentina. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 76-89
Jorge Battaglino
Information Communication Technologies in crime prevention. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 90-103
Jorge Francisco Aguirre Sala

Securonormativity. The urban sociability viewed from the everyday


practices of surveillance . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 104-123
Luis Berneth Peña

Interview

Organized crime and illegal economy


Interview to Daniel Sansó-Rubert Pascual . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 125-136
by Liosday Landaburo Sánchez

Books reviews

Inteligencia Estratégica Latinoamericana. Perspectivas y ejes predominantes para


la toma de decisiones estratégicas ante un mundo en cambio,
compilado por José Gabriel Paz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 138-140
Daniel García Sanz

Geopolítica del narcotráfico en América Latina,


de Norberto Emmerich . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 141-143
Luis Fernando Amaya Martínez

Política editorial. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 145-146


DOI: http://dx.doi.org/10.17141/urvio.18.2016.2301

URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad, No. 18, Quito, junio 2016, pp. 7-11
RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador • ISSN 1390-4299 (en línea)
Presentación
Las economías ilegales y sus trayectorias
Presentation
Illegal economies and their trajectories

Daniel Pontón

E
l estudio de las economías ilegales en los últimos tiempos ha cobrado un inte-
rés particular debido a las colosales ganancias que originan al delito organizado
transnacional en la región. Esto ha llevado a que a nivel internacional se desarrolle
una compleja institucionalidad para controlar el manejo de esta economía ilegal,
constituyéndose así en un importante instrumento de lucha para la cruzada in-
ternacional contra el delito organizado. La premisa de este régimen se sustenta en que solo
golpeando o debilitando el motor financiero de este mundo criminal, se puede desmantelar
las estructuras criminales organizadas.
Pero la importancia del estudio de las economías ilegales no solo debe destacarse por su
valor táctico-operativo para el control, sino también por el valor que cobra en el mundo
académico. Esto ha abierto la posibilidad para que criminólogos, juristas, economistas,
sociólogos y antropólogos analicen las características del origen de estas economías, sus
perspectivas de abordaje y sus desafíos metodológicos como campo de saber de las ciencias
sociales. Los ingresos de estas economías pueden venir del desarrollo de la comercializa-
ción de productos y servicios completamente ilegales (tráfico de drogas, armas, personas) o
ilegales con apariencia legal (lavado o blanqueo de dinero). Este tipo de economías forma
parte en general del gran campo de la economía subterránea o sumergida entre la que se
encuentra también la corrupción, evasión fiscal y otros tipos de economías no formalizadas.
Si bien estas tipologías no son lo mismo en cuanto a su actividad de origen, se caracterizan
por ser de naturaleza ilegal, ser clandestinas y estar altamente relacionadas entre sí. Por esta
razón, han recibido el nombre de economía no oficial, informal, paralela, invisible, gris,
oculta, negra, entre otros nombres.
La importancia del estudio de las economías ilegales o sumergidas siempre va a ser un
tema de alto nivel de debate a nivel mundial. Un primer interés se ha concentrado en la
necesidad de medir y cuantificar el peso de esta economía a nivel mundial. La cifra esti-
mada más conocida sostiene que esta economía sumergida representa entre el 15 y el 20%
de la economía mundial. De igual forma, la economía a manos del crimen organizado
representa entre el 5 y 7% (Barrios 2009), mayormente proveniente de actividades como el

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No. 18 - Quito, junio 2016 - pp. 7-11 - © RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
Daniel Pontón C.

narcotráfico, tráfico de personas, armas, entre (2013), estas economías deben ser entendidas
otras (Haken 2011). bajo una compleja intersección entre cultu-
Pese a esto, medir esta economía repre- ra, economía y política. En otras palabras,
senta siempre un desafío metodológico. Gran un mundo conflictivo pero al mismo tiempo
parte de la información disponible es una simbiótico con el sistema de reproducción del
literatura gris dada la naturaleza clandesti- capitalismo actual (Cox 2002). No se trata,
na y oculta de estas actividades sumergidas. por tanto, de decir que el mundo ilegal ter-
A diferencia de la economía legal o formal, minará primando por sobre legal o viceversa,
se genera un campo engorroso que dificulta sino de entender una compleja e histórica in-
la fijación de esta economía como objeto de terrelación de rechazo, convivencia y asimila-
estudio. Esto la deja expuesta a un alto nivel ción entre estos dos mundos. El valor heurís-
especulativo no exenta de intereses políticos y tico de esta afirmación es el que nos conduce a
corporativos en su valoración. Por esta razón, múltiples formas, trayectorias y dinámicas de
guardando semejanzas con el mundo de la psi- comprensión.
cología, la medición de la economía ilegal en- Una de estas trayectorias tiene que ver con
frenta el mismo dilema que el psicoanálisis al la importancia de las economías ilegales en la
inconsciente. Todo el mundo sabe que existe comprensión de la historia. Por lo general, la
y está ahí, pero su objetivación es siempre un historia de las naciones siempre es contada
acto fallido, espinoso, oscuro e imperfecto al desde grandes eventos épicos que dieron paso
mundo consciente. En vista de esto, los estu- a personajes, valores e instituciones sublimes
dios sobre las economías ilegales se han diri- en las identidades nacionales. Pese a esto, la
gido a analizar este fenómeno en función de historia de los países casi siempre están plaga-
sus similitudes y diferencias con los mercados das de ejemplos de “doble moral;” por lo que
legales. Por lo tanto, el interés se ha centrado el estudio de este mundo económico sumergi-
en comprender las leyes de oferta y demanda do forman parte de la historia no dicha de los
de estos bienes y servicios de acceso restringi- países, pero que sin lugar a duda contribuye-
do con naturaleza de equilibro subóptima que ron y siguen contribuyendo al crecimiento y
varían en función factores exógenos (control consolidación de las naciones.
estatal y preferencias de los consumidores), y Otra trayectoria nos conduce también a
donde el comportamiento de los agentes cri- hablar de valores. Edwin Sutherland en 1949
minales económicos están marcados por atri- escribió un libro revolucionario en materia
butos y dinámicas propias del mundo ilegal. criminológica denominado The white collar
Sin embargo, el entendimiento del cam- criminal para entender y explicar la naturaleza
po de estas economías no solo se deriva del de los delitos económicos. En palabras de este
sistema de oferta y demanda de bienes ilíci- autor, por lo general la economía clásica hace
tos a nivel mundial. Al contrario, su origen y una apología de las estrategias de negocios de
magnitud guardan una estrecha relación con los individuos, pero hacen muy poco esfuerzo
un esquema moral de prohibición y crimi- por entenderlos dentro del plano del delito.
nalización y también con los usos políticos y Esto ha llevado a la criminología a un falso es-
oportunidades que los Estados hacen de este pejismo de querer entender ciertos delitos en
sistema. Por esta razón, de acuerdo a Andreas base a determinismos, bilógicos, psiquiátrico y

URVIO 18 • 2016 • pp. 7-11


Presentación

sociales y a no comprender la estrecha relación ilegales. Estos sistemas de control como por
entre cierto delitos de motivación económica ejemplo: el prohibicionismo de drogas, muchas
con el esquema general de la supremacía de va- veces terminan siendo estímulos que aumentan
lores del capitalismo anárquico. Es decir, una las posibilidades de ganancias de estas empresas
recurrente necesidad cuasi natural de supervi- ilegales. En otras palabras, un sistema que se
vencia en un mundo de capitalismo salvaje y repudia pero se reproduce como economía y
sin límites de expansión (Sutherland 1949). como sistema de control.
Por este motivo, es la universalización de Esta trayectoria también nos lleva a hablar
este esquema de valores empresariales lo que de geopolítica; es decir, la capacidad que tiene
hace que se diga que el crecimiento de la eco- el poder capacidad en clasificar a los Estados
nomía informal es consustancial al crecimiento en función competencias para el control. Es-
económico mundial formal y por qué no de- tados colapsados, fallidos, débiles, ente otros
cirlo, su forma no dicha de apalancamiento en han jugado un rol sustancial en la nueva
épocas de crisis. Si a esta cuestión le sumamos geopolítica mundial donde las asimetrías po-
el universo de oportunidades tecnológicas y la líticas y técnicas hacia control juegan un rol
amplia interrelación de los asuntos mundiales, fundamental en la retórica e imaginario del
regionales y domésticos se puede decir que es- poder sobre el mundo peligroso. Esta estética
tas economías sumergidas más allá de crecer en del control, necesita por tanto, una recreación
sus posibilidades reales, crecen también en sus de este mundo peligroso que se constituyen en
capacidades potenciales. El abanico de posibi- verdaderas empresas epistémicas sobre cómo
lidades y espacios para estas economías ilegales abordar y qué considerar peligroso, sin tomar
son potencialmente enormes. en cuenta las complejas interrelaciones de po-
Pero esta universalización de valores tam- der que explican este mundo encubierto.
bién consiste en comprender el valor de estas En este sentido, el poder y su geopolítica
economías sumergidas en el crecimiento y con- son factores que terminan dando sentido a este
solidación de la institucionalización del control compleja relación de conflicto, convivencia y
estatal. Esta lucha por el control de este mundo asimilación de las economías ilegales. Conflic-
informal ha derivado en el surgimiento y con- tivo, en función de criminalización y estigma-
solidación de aparatos burocráticos para el con- tización de ciertas conductas y actividades (por
trol de la proliferación de estas economías en- lo general de sectores sociales más desfavoreci-
tre los que destacan: aparatos de control fiscal, dos y objetivados por ideologías con pretensio-
aduanas, policías, entre otras (Andreas 2013). nes científicas). Convivencia, en función de la
Esto se ha visto agudizado en un contexto de complicidad del poder con estas economías y
globalización donde la interrelación y creci- sus siniestras formas de gobernanza encubier-
miento de la economía mundial genera que ta. Y asimilación, en función de la promoción
los Estados vean en la necesidad de cooperar y de formas, valores y conductas para la repro-
estandarizar este régimen de control. La para- ducción de un sistema económico. Solo así se
doja de esto, es que la actual empresa global de puede entender como un tema como el de los
control contra la informalidad económica pa- Panama Papers se constituye en un problema
rece ser directamente proporcional al tamaño, político de explicación normativo. Para unos se
magnitud y rentabilidad de estas economías trata simplemente de un problema criminoló-

URVIO 18 • 2016 • pp. 7-11


Daniel Pontón C.

gico, y para otros, un tema de oportunidad y Darío Melossi (2006) sostiene que el con-
emprendimiento económico. texto histórico incide sobre la forma como la so-
Otra trayectoria del análisis de las econo- ciedad concibe el delito y la ilegalidad. ¿Cómo
mías ilegales se articula al problema de la cul- explicar esta banalización de mundo ilegal en el
tura. En realidad muchas de las más grandes e mundo social? La contestación a esta pregunta
importantes economías sumergidas relaciona- es todavía un proyecto lejano de responder; no
das con el delito organizado se sostienen por obstante, de un proceso de repudio cultural ge-
el prohibicionismo y criminalización política neralizado, se pasa a un proceso de asimilación
de estas actividades. Sin embargo, esta política social. En otras palabras, una sociedad que se
criminal no es más que un reflejo de grandes repudia pero se representa a sí mismo. He ahí
miedos sociales y sentimiento de indignación lo complejo y paradójico del tema.
y venganza que escapa de la esfera racional y Desde estas distintas trayectorias, este nú-
se ubica en el campo de lo emocional. El cas- mero de la revista URVIO se enfoca en ana-
tigo contra las drogas y otras tipos de activi- lizar el tema de las economías ilegales. Los
dades delictivas no es más que una recreación artículos seleccionados contribuyen a desen-
simbólica para canalizar sentimientos puniti- trañar un tema poco debatido en la academia
vos hacia malvados demonios y mundos que y opinión pública de la región. Sin embargo,
atacan la sociedad. Es por esta razón que el la incidencia del crimen organizado en Amé-
castigo se ha adaptado y constituido en una rica Latina abre la necesidad de desarrollar
institución tan importante en esta sociedad nuevas perspectivas teóricas y metodológicas
del control hacia lo ilegal. La importancia de sobre el abordaje de estas actividades econó-
la proliferación de estas economías ilegales, se micas ilícitas con la finalidad de conocer la
ha nutrido y beneficiado también de la persis- naturaleza, consecuencias y dinámicas de este
tencia de estos medios sociales. fenómeno en América Latina. Para efectos de
Pero este miedo parece haberse converti- este número, se entenderá por economía cri-
do al mismo tiempo en fascinación social. En minal a aquellas actividades del mundo ilegal
efecto, tanto el cine, la televisión, la literatu- que guardan relación con el financiamiento de
ra, la prensa escrita, entre otras instancias han estructuras delictuales organizadas, de alto ré-
sabido explotar hábilmente ese gusto hacia lo dito económico y con vínculos con diferentes
desconocido, reproduciendo historias semific- tipos de violencia y corrupción. Sin embargo,
ticias sobre la existencia de sociedades ocultas la complejidad del tema nos lleva a ubicar
y paralelas y de carismáticos empresarios del esta problemática dentro del gran campo del
mal con conciencia social. Esta misma fiebre mundo informal y clandestino con múltiples
ha alcanzado a la academia de igual forma. formas y trayectorias de abordaje.
Hoy en día existe un conglomerado de soció-
logos, politólogos, historiadores, economistas, Daniel Pontón C.
antropólogos y criminólogos que han dedica- Editor de URVIO,
do carreras enteras al estudio de este fenóme- Revista Latinoamericana
no. Esta fascinación por los demonios no está de Estudios de Seguridad
lejos de lo que en algunos países de la región se
le ha denominado la “narcocultura”.

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URVIO 18 • 2016 • pp. 7-11


Presentación

Bibliografía Haken, Jeremy. 2011. Transnacional Crime in the


Developing World. Washington DC: Global
Andreas, Peter. 2013. Smuggler nation: How il- Financial Integrity. http://www.gfintegrity.
icit trade made America. Oxford: University. org/storage/gfip/documents/reports/trans-
Barrios, Miguel Ángel. 2009. Diccionario la- crime/gfi_transnational_crime_web.pdf.
tinoamericano de seguridad y geopolítica. Melossi, Dario. 2006. “Teoría social y cam-
Argentina: Editorial Biblos. bios en las representaciones del delito”. En
Cox, Robert. 2002. “The Covert World”. En Reconstruyendo las criminologías críticas,
The Political Economy of a Plural World: coordinado por Máximo Sozzo, 115-156.
Critical reflections on power, morals and Buenos Aires: Editorial Ad-Hoc.
civilization, editado por Robert Cox y M. Sutherland, Edwin. 1940. “The white collar
Schechter. Londres: Routledge. criminal”. American Sociological Review 1
(5): 1-12.

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URVIO 18 • 2016 • pp. 7-11


Tema central
DOI: http://dx.doi.org/10.17141/urvio.18.2016.2227

Urvio, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad, No. 18, Quito, junio 2016, pp. 13-27
RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador • ISSN 1390-4299 (en línea)
Cuatro tesis sobre las economías ilícitas
Four theses about illicit economies

Luis Umbría Acosta1


Fecha de recepción: enero del 2016.
Fecha de aceptación: marzo de 2016.

Resumen
Este trabajo reúne cuatro proposiciones ensayadas a partir de un análisis crítico sobre el surgimien-
to, permanencia e impacto de las economías ilícitas en la actualidad. La primera tesis analiza la
relación secuencial entre los conceptos de economía subterránea, economía ilícita y crimen orga-
nizado. La segunda examina las implicaciones económicas, históricas y políticas que simultánea-
mente conlleva este problema, a partir del surgimiento y consolidación del modo de producción
capitalista. La tercera revisa la relación entre las economías ilícitas y la cooptación de poder para
asegurarse el éxito empresarial en sus emprendimientos a partir de la división especializada del
trabajo delictivo; y en la cuarta y última tesis se considera el impacto seguritario internacional de
las economías ilícitas.

Palabras clave: economía sumergida, economía ilícita, crimen organizado, prohibición, poder.

Abstract
This work brings together four propositions assayed from a critical analysis of the rise, permanence
and impact of illegal economies in today’s world. The first thesis analyzes the sequential relation
between the concepts of underground economy, illegal economy and organized crime; the second
examines the economic, historical and political implications which simultaneously carries this
problem, from the rise and consolidation of the capitalist mode of production; the third reviews
the relationship between illicit economies and the co-option of power for ensuring business suc-
cess in your endeavors from the specialized division of criminal work; and the fourth and final
thesis treats about international security impact of illicit economies.

Keywords: underground economy, illegal economy, organized crime, prohibition, power.

1 Abogado venezolano. Cursante de la Maestría en Relaciones Internacionales con mención en Seguridad y Derechos
Humanos, FLACSO Ecuador. Correo: lumbria1964@gmail.com

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URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad


No. 18 - Quito, junio 2016 - pp.13-27 - © RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
Luis Umbría Acosta

Las cuatro propuestas analíticas reunidas en conductas delictivas a partir de las cuales se
este artículo son resultado del contraste de obtiene provecho pecuniario. Finaliza la dis-
referencias históricas específicas frente a al- cusión cuando el jurista cierra el tema apelan-
gunos conceptos y premisas bastante difun- do al tautológico argumento de que delito es
didos acerca de las economías ilícitas como “todo lo que la ley penal defina como tal”. No
problema social y la forma cómo estas son obstante, bajo la orientación iusnaturalista y
gestionadas por los Estados. A través de este recurriendo a la racionalidad, otro responde-
trabajo el lector podrá apreciar observaciones rá que la base de una economía ilícita es la
referidas a la formación de una economía ilí- explotación de actividades con clara esencia
cita y su eventual evolución como estructura antijurídica. Es decir, que produce beneficios
de crimen organizado. También el proceso de por “injusta causa”.
cooptación del poder es analizado para com- En cambio desde la perspectiva crítica de
prender lo que él representa dentro de este un criminólogo si la actividad que propor-
tipo de formaciones económicas. Y luego se ciona los beneficios es delito, entonces será
expone la manera como el proceso productivo necesario analizar previamente la naturaleza
de lo ilegal se va caracterizando según el espa- política del proceso de criminalización de tal
cio de operación donde tienen lugar y según conducta. Argumentan algunos autores que
la división especializada de las tareas que en él tras las economías ilícitas hay opciones de
se ejecutan. ascenso social como respuesta a estructuras
En la última tesis se exponen las implica- de exclusión que oprimen algunos sectores
ciones que tiene para la seguridad internacional de la sociedad (Serrano 2005, 34-35; Dun-
una economía ilícita mutada en crimen organi- can 2014, 17). Es importante tener claro que
zado. La sofisticación que inicialmente pudiera cuando una economía opera clandestinamen-
haber sido subestimada por los gobiernos sepa- te, hay un tropismo que la lleva a tratar de
ra a las tareas operativas y de gestión en muchos igualarse a la economía visible para interac-
espacios de actuación que sobrepasan las fron- tuar con ella.
teras de los Estados y dan origen a problemas La respuesta política más probable será una
que se relacionan con el ejercicio de competen- prohibición, en lugar de una regulación. Pero
cias territoriales apoyándose en mecanismos de en esencia toda economía sumergida o sub-
comunicación globalizada. terránea antes de hacerse ilícita debió ser una
economía emergente y luego de haber queda-
do proscrita el referido tropismo se multiplica
Economías subterráneas, economías casi sin control. Las economías subterráneas
ilícitas y crimen organizado que descansan sobre la lógica del mercado ne-
gro son una respuesta inevitable a mercados
¿Cuál es la distinción entre una economía de bienes o servicios que por cualquier motivo
ilícita y una lícita? Se pueden tener tantas o conjunto de razones no satisfacen sus genui-
respuestas como perspectivas de conocimien- nos objetivos dentro del proceso económico.
to disponibles al escoger a los consultados Esto sucede porque una de las formas de rela-
sobre ese tema. En términos iuspositivistas cionamiento humano más institucionalizado
la respuesta se orienta hacia la definición de es la economía y por esa razón la dialéctica

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URVIO 18 • 2016 • pp. 13-27


Cuatro tesis sobre las economías ilícitas

entre necesidades satisfechas e insatisfechas Observando otro ejemplo, si el valor de


refleja lo sensible de los mercados cuando uso de las piezas metálicas monetarias de un
la población no sabe cómo acceder a bienes país llega a superar su valor de cambio, porque
y servicios en el mercado formal. Siempre la los componentes de su aleación tienen alta
brecha creada por esta confrontación abre la demanda y alto precio en un país distinto al
posibilidad de que sea llenada por un mercado que las ha acuñado, es muy probable que sean
oculto que no está en contacto con los contro- recogidas clandestinamente por grupos orga-
les y exacciones de la economía formal. nizados para tal fin, para fundirlas y vender el
Esto se despeja en la aceptación que las material metálico en un mercado clandestino.
personas hacen con respecto a los compro- Entonces se estará en presencia de un proceso
misos de la economía de mercado, porque les económico anormal que afectaría gravemen-
reduce significativa y eficazmente la incerti- te el circulante operativo de la economía del
dumbre inherente a no saber cómo satisfacer país dueño de la moneda, causando grandes
sus necesidades en un determinado momento ganancias para quienes se ocupan de la reco-
y lugar. Pero cuando este mecanismo falla, el lección, fundición y comercialización. Sobre
respaldo del “indeseable” mercado negro se la ilicitud de todo esto y su comprobación en
ocupa de las grandes dosis de ambigüedad un juicio tendrían que debatir jueces, fiscales,
en la información que se obtiene del sistema abogados y policías, antes de emprender algu-
económico y aparece para actuar como un su- na acción exitosa de persecución penal.
plente en funciones. El anterior ejemplo se refiere a una eco-
En este punto se podría establecer el deba- nomía oculta generada por desequilibrios o
te sobre la legitimidad de esa aparición porque asimetrías en los valores de la especie mone-
su principal rasgo es la alteración de la forma- taria metálica sobre la cual podría eventual-
ción del precio como resultado de la incerti- mente recaer una prohibición y así sus efectos
dumbre creada por los riesgos derivados de la negativos quedarían potenciados como efecto
informalidad. Un ejemplo de esto es lo que de la restricción sobrevenida. También las asi-
sucedería si el precio de los alimentos cultiva- metrías acentuadas en los precios de algunos
dos en una región aumenta considerablemen- bienes de consumo, como los combustibles
te porque las lluvias han dañado gran parte de de automóviles en las zonas fronterizas de los
las cosechas y la oferta disminuye. Entonces Estados que producen petróleo, crean condi-
se tomarán acciones ya preestablecidas para ciones de necesidad, satisfacción y escasez que
satisfacer la demanda aunque sea a un costo presionan excesivamente los precios y crean
un poco mayor para el consumidor, pero todo un mercado subterráneo que no rinde cuentas
se hará con transparencia y formalidad y no a nadie por su operación. El combustible que
habrá lugar para el mercado negro. En cambio se ofrece y se vende a través de estos canales
en las economías sumergidas la instituciona- no ha sido producto de una acción delictiva, si
lidad transaccional no es sólida, prevalece la no de una reventa muy beneficiosa que hacen
incertidumbre y los precios aumentan al tra- los automovilistas entre un país y otro. Por lo
tar de hacer frente a los riesgos derivados de tanto, la persecución queda entredicha al mo-
no saber sobre cómo se finalizarán los arreglos mento de buscar tipicidad delictiva, aunque la
comerciales. antijuridicidad sea obvia.

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Esto exige pensar con más cuidado sobre de la prohibición debe administrar muchos
la gestión que se le aplica desde la función peligros que afectan sus metas corporativas.
pública a las economías ilícitas durante sus Además, es ese riesgo quien crea el típico des-
momentos de formación. Históricamente se equilibrio en los márgenes de ganancia. La
pueden reseñar muchos ejemplos más de ac- incertidumbre de ser capturado, asesinado o
tividades lucrativas que causaron beneficios confiscado, es lo que obliga a los delincuentes
“injustos” pero aun así fueron inocuas para a asumir tareas de protección y resolución de
la sociedad durante mucho tiempo. Los pro- conflictos que en una economía formal son
blemas comienzan cuando se crean presiones exclusivas del Estado.
extrínsecas sobre el mercado de tales bienes o Es obvio que cuando un grupo privado
servicios, por ejemplo, mediante la prohibi- asume una parte o la totalidad de la compe-
ción. Una actividad económica ilícita puede tencia del Estado para administrar la violencia,
terminar convirtiéndose en parte de una ope- se incurre en gran cantidad de delitos que ca-
ración de crimen organizado, pero no bastaría racterizan las prácticas del crimen organizado,
una acción legislativa de criminalización para tales como secuestros de personas, despojos de
la transformación. Tampoco el crimen organi- propiedades, incursiones armadas y extorsio-
zado existe porque los bienes y servicios con nes, entre otras, que se cometen como medios
los cuales se trafica están prohibidos. para ejercer de manera ilegítima la coerción.
El condicionante principal de origen para Un clásico ejemplo de esto fue la aparición de
las manifestaciones de crimen organizado es la las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC)
voluntad de hacer uso privado de la violencia en los años 80, cuyo objetivo inicial fue pri-
para lograr el “enforcement” o imposición de vatizar la defensa de la población rural fren-
las reglas de interacción institucionalizadas te al bandolerismo de los grupos guerrilleros
dentro de una actividad económica. En las comunistas y terminaron actuando peor que
economías lícitas el desacato de los acuerdos las bandas que sirvieron de argumento motivo
entre socios o entre comerciantes, que gene- para su creación.
ran controversias, también tienen formas ins- En muchos casos alguna organización cri-
titucionalizadas de solución. El problema se minal reconoce que el Estado tiene el mono-
manifiesta cuando los mecanismos formales polio legítimo de la violencia y procura transar
no son una opción aceptable y se hace uso con sus representantes, bien para que resuelva
privado de una coerción que solo debería ser la controversia a su favor o bien para que le
administrada por el Estado. conceda el uso específico de la coerción para
Como explica Diego Gambetta (2007, resolver determinados asuntos. En el espacio
12), la ausencia de confianza en los otros abierto para estas transacciones a espaldas de
operadores del mismo mercado es un rasgo las leyes del Estado se desarrolla la relación en-
común presente en la formación del crimen tre la corrupción gubernamental y el crimen
organizado sobre la base de alguna economía organizado. La experiencia mostró como el
ilícita. Esto coincide con el razonamiento que Cartel de Medellín no tuvo el éxito continuo
hace Gustavo Duncan (2014, 39) cuando ar- esperado en las negociaciones con el Estado
guye que el crimen organizado es una empre- colombiano para explotar el tráfico de drogas
sa de reducción de riesgos porque por efecto y aun así pretendió administrar la violencia

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contra otros grupos a sus espaldas, terminan- capacidad operativa y la alta rentabilidad de
do en un sangriento enfrentamiento con él. una economía sumergida se puede explicar
En cambio el Cartel de Cali operó en a través de condiciones muy asimétricas que
acuerdo con altos funcionarios del gobierno existen para el funcionamiento de las reglas
colombiano para explotar la misma economía del mercado en comparación con las de la
ilícita y administrar privadamente la violencia economía visible, ya que dentro de ambas el
sin conflictos directos con el Estado. Aunque principio de escasez y de la reducción de in-
Colombia exhibe abundantes ejemplos rela- certidumbre juegan un rol relevante. El creci-
cionados con economías subterráneas y eco- miento que ha caracterizado a las economías
nomías ilícitas, al igual que con organizacio- ilícitas a través de la historia se puede enten-
nes de crimen organizado, sería bastante útil der más fácilmente al observar el proceso de
estudiar otros casos más remotos que permi- desarrollo transformativo de las estructuras
tan evidenciar que sí existe una secuencia de sociales medievales casi hasta la llegada de la
variable extensión en el tiempo que relaciona revolución industrial. Esa evolución consoli-
evolutivamente a estos tres fenómenos. dó al capitalismo como solución sistémica a
la producción e intercambio de bienes y servi-
cios para la satisfacción de las necesidades hu-
El problema es tan económico manas basándose en la propiedad de los me-
como político dios de producción y en el valor del trabajo.
Los conflictos y rivalidades no se hicieron
Una de las mejores lecciones que la historia ha esperar entre los señores feudales con pro-
ofrecido sobre el paralelismo entre economías piedad sobre la tierra y la nueva clase media
lícitas e ilícitas fue dada por la derogación de habitante de los “burgos”, que era como se
la decimoctava enmienda de la Constitución mencionaba a los sectores periféricos de las
de los Estados Unidos en 1933 y la subse- ciudades fortificadas, porque estos inadverti-
cuente declaración de inconstitucionalidad damente acumularon demasiado poder eco-
de la Ley Volstead. Esta acción legislativa sir- nómico. El mercantilismo fue la respuesta de
vió para poner fin a la condición jurídica que las monarquías europeas que estaban en pro-
desde 1919 proscribió en todo el territorio es- ceso de consolidación de sus dominios como
tadounidense la actividad económica relacio- Estados nacionales para contrarrestar el poder
nada con el comercio y consumo de bebidas de esa clase social que en la época fue apoda-
alcohólicas de contenido superior al 0.5% de da de manera despectiva como “burguesía” o
alcohol. Philip Kurland (1997, 118) explica “burgueses” (artesanos y mercaderes), por no
que los resultados tan adversos a aquel “noble estar sometidos al vasallaje de algún señor feu-
experimento” causaron tanto daño político dal y trabajar independientes en profesiones
que su herencia aún perdura. liberales.
En sentido material la explotación de bie- Las sucesivas guerras exigieron cada vez
nes y servicios proscritos es una estructura más exacciones para sufragar sus gastos y los
económica más, por eso existe y por eso so- burgueses que aun recibían la ojeriza de la
porta las presiones políticas de la prohibición. nobleza, ahora veían la oportunidad de apor-
Como se mencionó en la tesis anterior, la alta tar capitales para el emprendimiento bélico

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y crear dependencia financiera hacia su esta- como un esfuerzo discursivo para legitimar las
mento. Es curioso apreciar que esta alineación políticas públicas de respuesta contra el cri-
entre los burgueses de los siglos XVI y XVII men organizado y para apoyar la clasificación
con la decadente nobleza europea, y la de los de los grados de corrupción gubernamental
señores del crimen organizado actual con la generada por tales alineaciones. La pregunta
clase política de muchos países del mundo sea que aun queda por aclarar es, ¿quién ha coop-
el resultado de la misma dialéctica, partiendo tado a quién? ¿es el crimen organizado quien
de que siempre ha sido peligroso y hasta ilícito capturó al Estado buscando poder político? o
pretender acumular mucho poder económico ¿fue la élite política quien capturó al crimen
mediante negocios privados a espaldas del es- organizado buscando el poder del dinero?
tamento político titular del poder. Abundan El Estado como empresario y acumulador
las evidencias sobre estos contubernios hetero- de rentabilidad, a lo largo de la historia, ha
típicos de convivencia entre las clases políticas mostrado ser mediocre e incapaz, pero sí muy
y los adinerados comerciantes de lo ilícito. eficaz como guerrero y conquistador. Lo re-
Los ricos mercaderes de la Europa pre-ca- levante de esto es que el Estado para lograr
pitalista era reacios a competir comercialmen- sometimientos debe hacer uso de poder y ejer-
te, eran acomodaticios en asuntos de concien- cer el poder también cuesta dinero. Ejercer so-
cia y deseaban suscribirse al reparto del poder beranía política termina siendo más fácil que
político (Galbraith 2003, 49-51; Weber 2011, producir dinero suficiente como para empujar
237), algo muy similar a lo que sucede con a la economía del Estado y para mantener los
los capos del crimen organizado transnacional gastos militares. En esto último, tanto el capi-
de hoy. Del mismo modo que se detestaba talismo de los siglos XVI y XVII como el cri-
la libre competencia también eran proclives men organizado contemporáneo se han desta-
a la cartelización de precios y al monopolio, cado. El modelo simbiótico entre corrupción
lo cual coincide de manera curiosa con rasgos pública y crimen organizado está en el inter-
oligopólicos muy conocidos en las economías cambio de formas de ejercicio del poder. Esto
ilícitas de nuestro tiempo. Es necesario aclarar está condicionado por la utilidad del poder
que estas similitudes de ninguna manera su- que monopoliza el Estado y del que mono-
gieren considerar una posible hipótesis causal poliza el crimen organizado. Los conceptos de
entre el capitalismo y la economía ilícita. John Kenneth Galbraith (2013) acerca cómo
Las alianzas entre los funcionarios guber- se obtiene y se retiene el poder, también dan
namentales de algunos Estados con el crimen cuenta de ideas que permiten crear alguna hi-
organizado transnacional han llamado la pótesis explicativa.
atención de instancias internacionales. Algu- Ni la clase política ni la burguesía capita-
nas son presuntas, otras son evidentes, pero lista pueden mostrar una composición pura o
de cualquier modo es preocupante. También aséptica de mixturas, acerca de como ejercen
algunos gobiernos como el estadounidense, el poder en la sociedad. Tal pretensión sería
promueven reacciones institucionales interna- apenas una ilusión. Galbraith (2013, 96)
cionales contra países calificados como “faci- habla de que el poder siempre está inmerso
litadores” (Farah 2013, 75-95) o “estados cri- en procesos dialécticos o formas de “contra-
minales” (Miklaucic y Naim 2013, 149-169), poder” que tratan de limitarlo o disolverlo y

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esa interacción es quien le da dinamismo a su aunque también asumen las responsabilidades


ejercicio. sociales del Estado ausente. Pero las grandes
Por ser la expresión del sistema político movilizaciones y exportaciones de bienes
establecido, el Estado tiene como misión pro- ilícitos, la relación con los grandes clientes
ducir decisiones vinculantes para los ciudada- distribuidores y las inmensas cantidades de
nos. Uno de los recursos que utiliza para ob- dinero producido, son controladas por los
tener la obediencia de individuos y de grupos propietarios de tales emprendimientos que
es el “poder condigno”. Este está basado en la por lo general están ausentes de las zonas de
coerción como medio de imposición de prefe- producción.
rencias políticas de acuerdo a la disponibilidad En cambio el manejo de los capitales ilícitos
de alternativas más desagradables o penosas y su legitimación dentro del sistema financie-
que siguen como consecuencia del desconoci- ro se manejan a través de redes de corrupción
miento de las que son prioridad para el Estado que funcionan en las ciudades, espacio donde
(Galbraith 2013, 31). cohabitan con el poder económico formal y
En un cambio histórico, la aparición y de- con los representantes del poder del Estado.
sarrollo de corporaciones mercantiles e indus- Allí el primer recurso a utilizar para ejercer el
triales basadas en la propiedad privada trajo poder es el soborno y así se mantiene mientras
consigo la acumulación de capacidades para todo funcione bien. La cara visible del empren-
influir en la sociedad en función de la concen- dimiento ilícito puede intentar confundir sus
tración del capital. La capacidad de proveer modales con los de cualquier otro empresario
bienes y servicios requeridos para satisfacer las de negocios lícitos. Es la característica del po-
necesidades humanas es lo que dio al capitalis- der compensatorio antes explicado, pero esta
mo el “poder compensatorio” basado en retri- vez representado en transacciones donde los
buciones afirmativas, para lograr sometimien- funcionarios hacen uso ilegítimo del poder del
to a cambio de algo valioso o necesario para Estado a espaldas de este, para obtener pingües
el individuo que se somete (Galbraith 2013, beneficios de su contraparte a cambio de apoyo
20). Aunque las economías ilícitas se edifican gubernamental.
inicialmente sobre las compensaciones que Cuando se declara la existencia de una
permiten las altísimas ganancias, la aparición estructura de crimen organizado bien con-
de estructuras de crimen organizado crea una formada, se verá el uso intercalado de poder
elevada y permanente demanda de gestión de condigno y poder compensatorio. Será com-
riesgos inherentes a sus actividades lucrativas plicado hablar de crimen organizado si no hay
que se traduce en el ejercicio alternado entre el un uso alternado de afirmaciones positivas
poder condigno y el compensatorio. y negativas a espaldas del cumplimiento de
Es bien conocido que las economías ilíci- la Ley y del respeto por la institucionalidad
tas por lo general se establecen en zonas geo- del Estado. La prohibición descargada sobre
gráficas periféricas donde el poder del Estado una economía sumergida para convertirla en
no llega. Allí muestran su peor cara, ejercen ilícita es lo que imprudentemente empuja a
su poder por medio de la violencia privada, este problema económico para situarlo en el
afectan a las comunidades humanas, y muchas cuadrante de lo político. El proceso de movi-
veces llegan a inconfesables actos de barbarie, lidad social que germina en la operación de la

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economía ilícita crea grandes problemas cuan- el crimen organizado además de explotar una
do el poder político tradicional se encuentra economía ilícita es una empresa productora de
invadido por elementos que han llegado a po- poder, porque lo necesita para protegerse de
siciones influyentes utilizando rutas alternas los peligros que el negocio conlleva.
para la acumulación de capital. Duncan (2014, 39) lo afirma y lo explica
a través de la contradicción económica entre
la protección ante los riesgos y el trabajo, no
La división del trabajo criminal entre el capital y el trabajo como sucede en los
sistemas corporativos normales. Eso explica
La idea de “economía política del narcotráfi- por qué el riesgo se divide en forma similar
co” (Duncan 2014, 40) da cuenta de un plan- al trabajo y por qué las formas de utilización
teamiento teórico que se ilustra a través de la del poder son disímiles. El poder en las ope-
diferenciación que las economías ilícitas ha- raciones de campo se despliega mediante la
cen con respecto a sus espacios de actuación2. violencia privada y en las operaciones ejecuti-
Existe una especialización de funciones que vas de crimen organizado mediante la corrup-
dedica una parte a las operaciones de campo ción. Es la separación equilibrada del poder
y otra a la gestión económica y estratégica de condigno frente al poder compensatorio. Esta
la organización. Ambas forman parte del mis- separación que contrapone el valor de la pro-
mo sistema y son indisolubles. La primera se tección en lugar del valor del capital, al valor
ocupa de la producción y la movilización de del trabajo, explica las complejidades de las
la mercancía, mientras la segunda se ocupa de economías ilícitas como negocio muy renta-
procurar legitimidad para la entrada del dine- ble. En general sus variadas manifestaciones
ro en el circuito financiero formal y de gestio- operacionales descansan sobre esa misma lógi-
nar los inmensos riesgos del emprendimiento. ca aunque tengan sus particularidades.
Retomando algo de la tesis anterior, la Los riesgos fundamentales del tráfico de lo
percepción de cercanía o de lejanía del Estado ilegal, incorporados a partir de la prohibición,
determina muchas otras cosas en el comporta- provienen básicamente de la actuación de las
miento de los líderes del crimen organizado. instituciones del Estado y de la interferencia
Una de las cosas que condiciona esta conduc- procurada por otros delincuentes operadores
ta es el tipo de despliegues de poder que se del mismo negocio (Duncan 2013, 132). Ello
utiliza para resolver ciertos problemas. El uso genera demanda de funciones de protección
del poder en este caso está determinado por la para cubrir los riesgos operacionales propios
asunción de los riesgos, por eso se afirma que del proceso productivo. Esas actividades giran
alrededor del uso privado de la violencia y de
2 Gustavo Duncan, al igual que otros autores especialistas
en el tema, hacen una notoria referencia en sus trabajos a las
la capacidad de condicionar las decisiones to-
organizaciones de narcotráfico en Colombia y México, y no madas por los funcionarios del Estado. Esta
aclaran expresamente que éstas son una manifestación más de incorporación tiene una importancia muy
crimen organizado. Quizás la utilización de ejemplos basados
en este tipo de operación dificulta una caracterización más ge- elevada para el éxito del emprendimiento y su
neral del crimen organizado, pero la evolución de este último ineficacia puede tener un impacto crítico en
en la actualidad lleva a esparcir la atención de los investigado-
res académicos hacia la operación simultánea de más de una
el negocio. Ello explica la diferencia tan am-
economía ilícita por parte de los grupos delictivos. plia entre el costo de producción y el precio de

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venta en los grandes centros de distribución y dad de hacer ver al crimen organizado como
consumo. muy parecido al Estado. Cuando esto sucede
Gustavo Duncan (2013, 133; 2014, 39) en lugares donde el poder del Estado está au-
insiste en su tesis de que el narcotráfico, y en sente no hay mayor peligro. Pero cuando sí
general todas las expresiones de crimen or- hay alguna presencia política surgen conflictos
ganizado, además de operadores de negocios de alto impacto para la población. Y es peor
ilícitos son empresas productoras de poder y aún cuanto esto sucede en centros poblados.
le dan a este más importancia que a los bie- En contrapartida cuando las afirmaciones po-
nes de capital. Además Duncan cita a Ciro sitivas abundan más de lo estrictamente nece-
Krauthausen en su advertencia acerca de lo sario en las operaciones de campo alejadas de
hábiles que son para “acumular y ejercer el los centros de poder político y económico, se
poder” porque es su más importante medio aumentan el riesgo de deslealtad e incumpli-
de producción. Esta afirmación es reveladora miento de obligaciones porque los individuos
porque corresponde con la realidad observable involucrados en las operaciones de campo y
al momento que un capo pierde sus capacida- en la gestión económica empiezan a barajar
des políticas e inmediatamente sobreviene su opciones, y eso abre el espacio a la indeseable
ruina económica. competencia comercial que tanto se evita en la
Las interferencias internas por parte de operación de economías ilícitas.
obreros de la organización o las externas por El uso de la expresión “división del traba-
parte de personas ajenas que tratan de obsta- jo criminal” introduce a estas disquisiciones
culizar algún detalle operativo, normalmente en un análisis que se aproxima al clásico de
son resueltas por medio de la violencia. Pero no Émile Durkheim “La División del Trabajo
sucede igual cuando se trata de la interacción Social” y a su andamiaje teórico que explica
del poder económico del crimen organizado el paso adaptativo de la sociedad primitiva a
con el poder político de los representantes del la sociedad moderna. El cultivo y comercio
Estado y surge la disyuntiva para el funcionario de sustancias alucinógenas de origen natural
encargado de hacer cumplir la ley. O recibe un como el cannabis, la hoja de coca y la goma de
soborno o recibe un ataque armado que pue- amapola, fue una actividad artesanal arraigada
de acabar con su vida. “Plata o Plomo” según ancestralmente en zonas rurales de Suraméri-
la consigna del capo Pablo Escobar Gaviria. ca, del Asia Menor y del Sureste asiático, hasta
Esa consigna que da nombre a la investigación que el peso de la prohibición acabó alterando
publicada por Gustavo Duncan (2014) expli- totalmente su estructura económica y dando
ca estructuralmente el ejercicio del poder por paso a operaciones diversificadas estratégi-
parte del crimen organizado. Allí se ve como se camente para comerciar con lo ilícito a gran
configura su utilización entre la compensación escala.
y la condignidad. Este equilibrio depende de la En el caso del narcotráfico, la diferencia es
división del trabajo criminal entre la operación observable desde el ambiente rural en el cual se
de campo por una parte y la gestión económica instala la operación de campo de la economía
corporativa por la otra. ilícita conservando sus rasgos arcaicos de rela-
La excesiva inclinación hacia el uso de la cionamiento, hasta el ambiente urbano donde
violencia privada se traduce en la probabili- se instala la gestión corporativa y se exhibe toda

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la sofisticación de la modernidad empresarial. dades económicas también prohibidas, como


Ambos subsistemas son interdependientes por- el contrabando de armas, de piedras preciosas
que están divididos por sus funciones. Se ne- y minerales raros, de combustibles, de especies
cesitan mutuamente para lograr sus objetivos animales exóticas y de trata y tráfico de perso-
ilícitos y aunque dentro de estos dos grandes nas, entre otros (Labrousse 2011, 12). Inclu-
sectores sea posible encontrar también otras ra- so en muchos casos estas rutas de politráficos
mificaciones de tareas más especializadas aun, operan en ambos sentidos entre los centros de
esto no altera el concepto de trabajo divido en- producción y los de consumo de variadas eco-
tre la operación delictiva medular y su gestión nomías ilícitas, sobre todo en espacios terri-
corporativa criminal. toriales fronterizos. En lo sucesivo la gestión
El uso alterno de la violencia privada y de de políticas públicas sobre economías ilícitas
las transacciones corruptas también se aproxi- no debe perder la visión integral del problema
ma al esquema de respuestas ante eventos que por concentrarse en dar soluciones separadas.
alteran la disciplina social y que Durkheim La complejidad de los planes de acción frente
distinguió como “solidaridad mecánica” y “so- a esto depende de analizar la esencia antijurí-
lidaridad orgánica”. En síntesis, el poder ad- dica de cada negocio ilícito para decidir sobre
ministra sus recursos no solo dependiendo de cuál tipo de tratamiento darle.
la naturaleza del problema sino también de- En toda formación económica una rentabili-
pendiendo de dónde y con quién ha aconteci- dad aumentada por el óptimo aprovechamiento
do. No se puede perder de vista que la gestión de los factores de producción generará mejores
transnacional del negocio ilícito a gran escala condiciones distributivas para los beneficios. A
está reservada a sus más altos líderes. La ten- corto plazo será necesario partir del supuesto de
dencia a la diversificación del trabajo criminal que aunque hayan tráficos ilícitos más desarro-
tiene una relevancia geopolítica ya conocida llados, notorios y rentables que otros, la presión
y causada por la interconexión de las grandes penal de la prohibición y la reacción social do-
localizaciones o espacios de actuación atados méstica e internacional que esto genera siempre
a extensiones territoriales y puntos geográfi- van a empujar hacia una optimización integral
cos. Así aparecen entonces las definiciones es- del uso del poder político cooptado por medio
paciales de zonas rurales para la producción de la corrupción, con el objetivo de asumir y
y empaque, zonas portuarias, aeroportuarias gestionar riesgos de algunos otros negocios en
y rutas de tránsito para los arreglos logísticos beneficio de la rentabilidad adquirida mediante
y zonas urbanas para la gestión estratégica el uso de plataformas políticas y operativas ya
del negocio. Esta distribución rebasa fronte- instaladas y comprobadas.
ras dándole al fenómeno delictivo su carácter
transnacional.
En muchos lugares del mundo lo que has- Economías ilícitas y seguridad
ta hace poco eran solo espacios de operación internacional
y rutas para el tráfico de drogas ahora son ru-
tas de “politráficos”, porque las estructuras de La observación acerca de cómo se relaciona el
gestión estratégica y operativa pueden agregar funcionamiento de algunas economías ilíci-
muchísimo valor dando servicio a otras activi- tas y sus hipercrecidas estructuras de crimen

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Cuatro tesis sobre las economías ilícitas

organizado con otros tipos de amenazas, nos comportamiento internacional basados en


permite hacer algunos cuestionamientos que polarización ideológica y en intereses políti-
obligan a revisar las tradicionales premisas cos de menor nivel sustentados por precarios
que conocemos sobre este tema. Esta última argumentos relacionados con la soberanía
tesis se propone revisar cómo y dónde se con- nacional, que al mismo tiempo que sirven
figura esa relación antes de aparecer dentro para ocultar sutilmente los intereses corrup-
de los asuntos seguritarios internacionales. Es tos de los funcionarios que se aprovechan de
preciso ratificar que aunque la distancia entre los espacios de discrecionalidad creados por
una economía sumergida y una ilícita es tan la prohibición transnacional. Esto se resuelve
solo una prohibición legal decretada por un con algunas restricciones económicas que son
Estado, sucede que cuando muchos Estados aprovechadas por los funcionarios castigados
prohíben la misma actividad esta no deja de para radicalizarse ante las coaliciones interna-
convertirse en un problema seguritario solo cionales que los señalan.
porque a ambos lados de una frontera el mis- Por las razones estructurales que han sido
mo hecho sea delito. Las iniciativas de coo- explicadas en las tesis anteriores, los recursos
peración internacional para combatir ciertos tecnológicos de la globalización jamás podrán
delitos muy extendidos cuya organización discriminar entre transacciones comerciales lí-
operativa criminal amerita una división del citas e ilícitas, y sus operadores aprovechan es-
trabajo caracterizada por la transnacionalidad tos recursos para cerrar acuerdos comerciales,
siempre aparecen matizadas por tendencias cruzar océanos y pasar fronteras, al igual que
políticas disímiles que afectan la acción colec- lo hacen las sociedades mercantiles formales.
tiva internacional. Son los Estados quienes tienen la obligación
Hay regímenes internacionales de prohibi- de aplicar los controles para individualizar las
ción que son aceptados por muchos Estados transacciones y los movimientos logísticos ile-
solo porque llevan una connotación moral gales que se cuelan casi por los mismos canales
muy intensa que acompaña al injusto penal, de las operaciones legales.
como por ejemplo, el tráfico de estupefa- Esto ha servido para argumentar que el
cientes, la pornografía infantil y la piratería crimen organizado sí es una amenaza directa
en barcos mercantes en alta mar, entre otros a la seguridad de los Estados. Esto encuentra
(Nadelmann 1990, 532). Pero los regímenes alguna explicación en la relevancia y el impac-
de procedimientos para la captura y judicia- to que tiene la división del trabajo criminal.
lización de quienes operan en estas activida- Louise Shelley (1995, 540) profundiza un
des casi siempre son aceptados con algunas poco más en esto y le atribuye al crimen or-
reservas importantes que impiden las acciones ganizado transnacional la capacidad de causar
conjuntas. serios desarreglos en el ejercicio democrático
No obstante, como lo analizaremos más del poder político y en el desarrollo económico
adelante, esa no es la razón fundamental que legítimo de las naciones. En este caso la autora
determina por qué las economías ilícitas aun pone énfasis en una concepción estado-céntri-
sobreviven a la acción colectiva internacional ca de la seguridad nacional. Pero la autora ci-
de persecución. La abstención de cooperar tada no se detiene allí y traza una “trinidad no
puede tan solo revelar algunos patrones de santa” entre la delincuencia transnacional, la

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corrupción y el terrorismo, que se aprovecha Como observamos, las tesis basadas en


de ambientes políticos de escasa instituciona- la convergencia de las redes ilícitas de terro-
lidad donde prevalece la incertidumbre en el rismo, crimen organizado y corrupción, es-
orden económico, social y jurídico, y juntos tán muy bien patrocinadas por reconocidos
los tres elementos de esa trinidad penetran los académicos pero no logran hacer fehacientes
espacios operativos del Estado (Shelley 2005, comprobaciones empíricas de sus alegaciones.
15). El concepto se ha adelantado inclusi- No obstante, ellas han sido útiles para estimu-
ve para decir que el crimen organizado y sus lar esfuerzos de cooperación internacional y
redes ilícitas obstruyen el ejercicio del poder metas compartidas entre Estados poderosos
político soberano dentro de un esquema de que resultan directamente afectados y Esta-
Estado de Derecho y en casos extremos llegan dos menos influyentes localizados en las zonas
a penetrar tan profundamente las estructuras geográficas en las cuales se originan los tráficos
políticas que logran desnaturalizar el legítimo ilícitos.
rol del Estado (Sullivan 2013, 171). Una de las razones que mantienen activo
Esta asociación es soportada por hipoté- el debate sobre estos compromisos estratégi-
ticos procesos de fragmentación de mafias cos delictivos convergentes que impactan en
denominados por Chris Dishman como “vín- la seguridad internacional es la necesidad de
culos acéfalos” (2005, 237), en los cuales los recursos financieros que se obtiene a partir
pequeños grupos escindidos procuran sobre- de explotación de las economías ilícitas como
vivir en el ambiente delictivo internacional in- base para las economías de guerra. En cambio,
volucrándose en actividades ajenas a sus obje- un análisis más preciso revela que el problema
tivos originales pero mucho más temerarias y para la seguridad internacional a partir de las
lucrativas, como el apoyo a grupos terroristas economías ilícitas se sintetiza en el intercam-
para aprovechar las vinculaciones delictivas ya bio de métodos y medios que ocurren cuando
construidas. Para esto no cuentan con un líder el terrorismo hace transacciones con el crimen
importante que dirija sus actividades y se limi- organizado con el fin de obtener finanzas para
tan a prestar ciertos servicios relacionados con operar. Y del mismo modo el crimen organi-
la actividad criminal pero sin asumir com- zado recibe know-how terrorista para ser em-
promisos estratégicos. Por consiguiente, esta pleado en sus despliegues de violencia directa
vinculación solo es táctica y operativa, y se frente al Estado y frente a sus competidores.
hace para resolver situaciones circunstanciales A partir de algunos argumentos en contra
mientras se reconfiguran las organizaciones de las tesis basadas en alianzas estratégicas en-
delictivas internacionales tras sus verdaderos tre ambas amenazas, Phil Williams (2015, 26)
objetivos, por cierto, casi siempre disímiles descarta que haya una presunta convergencia
con respecto al terrorismo. Esta dinámica se y alega que sus vinculaciones son el resultado
mostró entre las descripciones de la evolución de transacciones hechas en torno a alguna acti-
organizacional de los grupos de tráfico de vidad económica ilícita, como drogas, piedras
drogas en Colombia, en su asociación con los preciosas, combustibles, armas de fuego, etc.
grupos guerrilleros y paramilitares a partir del Y esto conduce en forma directa a este tema
desmantelamiento de los dos primeros gran- hacia dos ámbitos seguritarios internaciona-
des carteles. les: los regímenes globales de prohibición y

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Cuatro tesis sobre las economías ilícitas

persecución penal y la apremiante necesidad rales. Y desde luego, asegurando que el Estado
de cooperación. El cuestionamiento a las ex- llegué a las zonas más desatendidas para cum-
plicaciones que alegan que la supervivencia de plir su función institucionalizadora dentro del
las economías ilícitas a nivel internacional se relacionamiento social.
debe a la débil voluntad política de los Esta-
dos porque algunos funcionarios se benefician
de sus rentas, o porque existen fuertes barreras Una reflexión final
para la persecución penal internacional y la
incautación de bienes provenientes de deli- La abundancia de mitos y prejuicios sobre
tos, queda ratificada al observarse países con las economías ilícitas es el principal enemigo
instituciones políticas muy fuertes que tienen de las estrategias que se diseñan para contro-
problemas de crimen organizado que lucen larlas. Por esa razón la cuatro tesis analíticas
incontrolables. El negocio de lo ilícito está presentadas han mostrado algunas referencias
condicionado por las fuerzas del mercado y históricas que demuestran las equivocaciones
por la acumulación de poder para gestionar cometidas en otros momentos y sus nefastas
los riesgos operacionales, mediante los cuales consecuencias. Pero también dan evidencia
las inversiones delictivas que se hacen bajo remota de la evolución estructural de la eco-
prohibición nacional e internacional se con- nomía y cómo los patrones socio-económicos
vierten en renta. se reproducen de algún modo. Sería muy pro-
Tampoco es una opción seguir pensando vechoso atender a las lecciones de la historia
que con más detenciones e interdicción en las adaptándolas a la modernidad para no seguir
movilizaciones de mercancías bajo prohibición atacando al problema por sus efectos en lugar
se logrará poner bajo control a las economías de hacerlo con sus causas.
ilícitas y derrotar a las mafias que las operan. La forma como se ha abordado a las eco-
En cambio, se logrará darles mayor impulso a nomías criminales en este artículo muestra que
su rentabilidad, mayor espacio para corrom- ellas no aparecen de la nada y también que el
per a los agentes del Estado, y más posibilida- descuido sobre su evolución acarrea efectos gra-
des para la acumulación de poder. El ejemplo ves e incontrolables para los gobiernos y para la
de la ley seca en Estados Unidos es una muy sociedad. Por esa razón se explica cómo se pasa
emblemática experiencia de fracaso aunque de una fase a otra, a veces sin que los Estados
la lección no termina de ser bien aprendida. adviertan en forma correcta sus avances. Ade-
Y así encontramos países en los cuales no se más, el problema de la cooptación de poder y
sabe bajo qué orientación legalizan el consu- su exacta comprensión es esencial para desarti-
mo de cannabis y mantienen la prohibición cular los nexos entre la economía de lo ilícito y
sobre su comercialización y así terminan fa- el funcionamiento estatal, al igual que sucede
voreciendo a las mafias y a los traficantes loca- con las disecciones organizacionales que ocul-
les y de países vecinos. Ya es tiempo de que la tan el verdadero contenido delictivo de estos
cooperación empiece a tener una perspectiva emprendimientos criminales.
estratégica que vaya de lo económico a lo polí- A pesar de los antecedentes citados per-
tico, entendiendo las fuerzas del mercado con tenecen a la historia, las cuatro propuestas
prioridad antes que a las consideraciones mo- anteriores se concatenan a través de una con-

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Luis Umbría Acosta

textualización del problema en las condicio- Eso implica poner la atención en la diná-
nes del mundo actual. El cambio político del mica que origina una economía sumergida y
mundo ocurrido a raíz de la súbita transfor- luego mirar la evolución del problema cuando
mación del orden mundial acontecido al final el poder de los operadores ilegales intenta ab-
del siglo XX y la revolución en la informáti- sorber al poder del Estado para usarlo en su
ca y las comunicaciones, causaron un vuelco beneficio. La principal preocupación de quie-
total en los esquemas de vinculación social nes administran políticas públicas en esta ma-
porque los desarrollos tecnológicos en materia teria tendría que ser la mitigación de las per-
de transporte y la aparición del internet han turbaciones severas a la calidad de vida de la
creado condiciones de cuasi-ubicuidad para población radicada en las regiones geográficas
los seres humanos y en consecuencia una nue- afectadas. El ataque a la base social de las eco-
va manera de efectuar transacciones de todo nomías ilícitas y de las formaciones de crimen
tipo a distancia. Los beneficios fueron aprecia- organizado es la estrategia que los Estados
dos casi de inmediato pero las complejidades pueden asumir para actuar de manera eficaz,
de la globalización económica no tardaron en más que con detenciones y enjuiciamiento de
aparecer. Las corporaciones multinacionales unos cuantos jefes criminales pero sin efecti-
se multiplicaron y la virtualidad de los ne- vidad permanente para controlar el problema.
gocios en línea adquirió un alcance mundial El hecho de que los operadores de los mer-
inimaginable que traspasa inadvertidamente cados negros en las economías que estuvieron
los controles estatales conocidos hasta el mo- bajo control comunista sean hoy algunos de
mento. Incluso se ha llegado a decir que con los más reconocidos líderes de organizaciones
estas demostraciones ya se puede pensar que internacionales muy poderosas que controlan
la globalización es la antítesis del concepto de los mercados de la ilegalidad, da cuenta de im-
soberanía del Estado-Nación. plicaciones estructuralmente basadas en claras
No solo en lo económico llegaron los cam- interpretaciones de las leyes del mercado que
bios. En lo político la caída estrepitosa del dejan atrás a quienes se esfuerzan en controlar
comunismo demostró que nunca fue una so- globalmente el avance del crimen organizado
lución real al problema económico sino una transnacional sólo a través de más represión.
opción arbitraria y directa para perpetuarse en
el ejercicio del poder. Con la desaparición de
la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas Bibliografía
(URSS) quedó abierta la puerta para que mu-
chos vicios escondidos salieran a la luz y trata- Dishman, Chris. 2005: “The Leaderless Nex-
ran de adaptarse a un mundo menos contro- us: When Terror and Crime Converge”.
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La solución más factible a los problemas deri- 252.
vados de la criminalización de las estructuras Duncan, Gustavo. 2013. “La División del
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uno económico y otro político. Pero ese orden Capital, y Geografía del Estado”. En Eco-
es inalterable, primero es necesario trabajar en nomía Criminal y Poder Político, editado
lo económico y luego en lo político. por Jorge Giraldo Ramírez, 113-160. Me-

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Cuatro tesis sobre las economías ilícitas

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URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad. No. 18, Quito, junio 2016, pp. 28-40
RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador • ISSN 1390-4299 (en línea)
DOI: http://dx.doi.org/10.17141/urvio.18.2016.2230

Drogocriticidad barrial en Chile: coordenadas


para el diseño de políticas de seguridad pública
centradas en la vida comunitaria
Drogocriticidad claypit in Chile: coordinates for
the design of policies of centered public security
in the communitarian life

Alejandro Romero Miranda1


Fecha de recepción: enero del 2016.
Fecha de aceptación: marzo de 2016.

Resumen
Cada vez, con mayor fuerza, se acepta una relación lineal entre consumo de drogas y acome-
timiento de actos delictivos. En este sentido, pareciese ser que la sola presencia de drogas en
un sector de la ciudad, de por si nos entrega información referencial de las personas que en el
habitan y de sus estilos de vida. Sin embargo, la presencia de consumo y tráfico de drogas no
tiene las mismas implicancias para todos los habitantes, sino que más bien, su percepción se
construye en base a la relación con los consumidores y vendedores y la incidencia de estos en la
vida comunitaria.

Palabras clave: drogocriticidad, percepción de consumo, delincuencia.

Abstract
Every time with greater force, a linear relation is accepted enters drug consumption and attack
of criminal acts. In this sense, it would seem to be that the single drug presence in a sector, of
in case it gives referential information to us of the people who in live and his styles of life. Nev-
ertheless, the presence of consumption and drug traffic do not have the same consequences for
all the inhabitants, but rather, its perception is constructed on the basis of the relation with the
consumers and salesmen, and the incidence of these in the communitarian life.

Keywords: criticality, perception of consumption, delinquency.

1 Sociólogo, Universidad de Concepción, Chile. Máster en Criminología y Delincuencia Juvenil Universidad Castilla-
La Mancha, España. Docente y Coordinador Programa de Investigación y Análisis Delictual PIAD Universidad La
Republica sede Rancagua, Chile. Actualmente Director Centro Semicerrado SENAME Región de O’Higgins. Correo:
alejandromeromiranda@hotmail.com

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URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad


No. 18 - Quito, junio 2016 - pp.28-40 - © RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
Drogocriticidad barrial en Chile: Coordenadas para el diseño de políticas de seguridad pública centradas en la vida comunitaria

“El barrio es la arena de la predictibilidad” ridad –como salubridad, higiene, marginali-


Kearns y Parkinson dad, etc– que no se relacionan con la violen-
cia. Si el centro de la seguridad ciudadana –en
el caso chileno–, estuvo puesto en la reduc-
A modo de introducción: Seguridad ción de hechos violentos por medio de pro-
ciudadana y seguridad pública: ¿De yectos y programas de participación comu-
qué estamos hablando? nitaria y de prevención, estableciendo como
elemento central de esta política de orden
Una de las primeras interrogantes que sale a público el cambio de conductas antisociales a
flote cuando nos adentramos en las políticas prosociales por parte del sujeto infractor –o
de seguridad es la necesidad de establecer dife- vulnerable– mediante el aumento del control
rencias claras entre los conceptos de seguridad social (Frihling y Gallardo 2012), el nuevo
ciudadana y seguridad pública, necesidad que modelo basado en la seguridad pública impul-
se origina en la indiscriminada utilización de sado por el ex Presidente de Chile Sebastián
ambos conceptos para referirse a fenómenos Piñera (2010-2014), saca del centro al sujeto
similares, cuando no, a uno mismo en parti- delincuente y pone en su lugar a la comunidad
cular. Es esta disyuntiva la que lleva a Maria vulnerable.
del Carmen Hurtado (1999) a destinar es- La inseguridad (la delincuencia, el temor)
fuerzos en pos de definir ambos conceptos. ya no es un problema entre sujetos, entre per-
Tras analizar, debatir y resumir las acepciones sonas –víctima/victimario–, sino uno entre
de diversos autores, Hurtado establece las si- sectores vulnerables y sectores vulnerados, en-
guientes definiciones para cada término. Se- tre barrios de gente de buen vivir y poblacio-
gún la autora, la seguridad ciudadana hace nes marginales. En una idea, hoy por hoy la
referencia a: inseguridad es un problema de grupos sociales
(o si se quiere entre clases sociales). De aquí la
(La) protección de personas y bienes en necesidad de incluir en adelante a las fuerzas
contra de aquellos hechos violentos que
policiales de forma relevante en el juego.
ponen el peligro los derechos fundamen-
tales reconocidos por la constitución. En Con esto, la delincuencia y la drogadicción
concreto, el derecho a la vida, a la libertad dejan de explicarse en razón de características
personal, a la inviolabilidad del domicilio y personales diseminadas en toda la estructura
la propiedad (Hurtado 1999, 14). social como lo plantea Robert Agnew (1992),
que considera la conducta antisocial del sujeto
Mientras que la seguridad pública “supone como producto directo del incumplimiento
una protección de las personas y bienes (pero de metas, la tensión producto de eliminación
además una protección), en razón de todo lo de logros positivos y la exposición a estímulos
que constituya un atentado contra el bienestar negativos o nocivos en su trayectoria de vida
social” (Hurtado 1999, 14). Así –siguiendo a –no necesariamente asociados a la depriva-
esta autora–, la diferencia sustancial entre la ción y pobreza–, o la propia teoría del labe-
seguridad pública y ciudadana es la capacidad ling desarrollada en una de sus vertientes por
que tiene la primera de abordar una cantidad Edwin Lemert (1972) para quien, la conducta
mayor de aspectos relacionados con la insegu- criminal (y el etiquetado) puede ser explicado

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Alejandro Romero Miranda

a partir de una doble desviación, la primaria, La sola presencia de drogas en un sector, de


que hace alusión a factores individuales; y la por si entrega información referencial de las
secundaria, que pone al centro de la conducta personas que en el habitan y de sus estilos
antisocial el refuerzo negativo que hace la so- de vida reforzando la estigmatización. Sin
ciedad al estigmatizar a los sujetos (Romero embargo (y a modo de hipótesis del presente
2013, 2015). trabajo), el consumo y tráfico de drogas no
La conducta delictual es resultado directo tienen las mismas implicancias para todos los
de la socialización en los barrios empobreci- habitantes, sino que más bien, la percepción
dos. El problema causal ya no es el sujeto sino de estos se construye sobre la base de la rela-
su formación, sus valores, su mirada de la vida; ción que ellos mismos establecen con la dro-
a fin de cuentas, el problema es su carga on- ga, los consumidores y traficantes, y las reales
togenética y aquellos que la forjaron. Así, los incidencias de estos últimos en la vida comu-
culpables comienzan en la familia y se proyec- nitaria (hipótesis a profundizar por medio de
tan al barrio como lo plantean Shaw y Mckay la relación desacreditado v/s desacreditable y
(1942)2. Este cambio de enfoque de seguridad topofilia v/s topofobia). Lo anterior genera
no solo supone una adecuación semántica, miradas particulares del fenómeno, que mu-
sino ante todo una que podríamos tachar de chas veces chocan con la visión universal y
epistemológica, ya que no solo se produce una genérica del gobierno y las instituciones que
ampliación en las causas relacionadas con la buscan abordar la problemática (tecnocra-
seguridad, sino que además, estas ponen acen- cia). Es entonces cuando la inseguridad sub-
to en la socialización barrial como elemento jetiva se disocia de la objetiva.
central de la disrupción. Pasamos así de la
conducta antisocial característica de la seguri-
dad ciudadana a la socialización anómala de la Drogocriticidad barrial
seguridad pública como eje articulador.
Siguiendo la línea anterior, la política de Múltiples son las categorizaciones que se han
seguridad pública adoptada en Chile desde hecho de los barrios empobrecidos y depriva-
el Gobierno del presidente Piñera, muestran dos socioculturalmente a nivel nacional e in-
a la delincuencia y al tráfico de drogas como ternacional. En este sentido es posible identifi-
elementos arraigados en determinados sec- car algunos ejemplos con elementos comunes.
tores, la mayor parte de ellos empobrecidos El primero de ellos, es el que podríamos de-
(Lindon 2007), que actúan como verdaderos nominar esquema binario, el cual supone que
viveros del terror y complicidad delictual. en las ciudades es posible identificar dos tipos
de sectores: aquellos que presentan problemas
2 Para estos autores la criminalidad comienza a temprana
edad en los barrios de los sujetos. Concluyen que la diferen-
con las drogas y aquellos que se encuentran
cia entre jóvenes delincuentes y no delincuentes no reside en libres de ella. Esta categorización plantea que
factores individuales sino en las características de los barrios la droga y la delincuencia comparten la mis-
de donde proceden. Los barrios con más delincuencia son
también aquellos menos dotados, con más inmigración y ma cuna etiológica que es propia y endémica
más empobrecidos. La tradición criminal en estos sectores se de barrios empobrecidos y marginales, los que
basa en la relación temprana de los niños con bandas delic-
tuales, que los hacen imitar su comportamiento participan-
actúan como verdaderos centros de aprendiza-
do así en acciones delictuales a temprana edad. jes anómalos y conducta antisocial.

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Drogocriticidad barrial en Chile: Coordenadas para el diseño de políticas de seguridad pública centradas en la vida comunitaria

Encontramos de igual forma caracteri- si misma; el espacio público precarizado, que


zaciones a partir de variables socioculturales, identifica a zonas caracterizadas como vul-
como las propuestas por el Programa Barrio nerables desde el punto de vista económico y
en Paz Residencial (Zamorano et al. 2011), social; el espacio público privatizado, que carac-
donde los sectores o poblaciones son tipifica- teriza a la nueva clase aspiracional que ve en la
dos según los resultados obtenidos tras el cru- adquisición de bienes el bienestar social; el es-
ce de las variables inseguridad y victimización. pacio público resignificado que hace referencia
En la misma línea, Trujillo y Carrasco (2012) a viejos espacios públicos abandonados que
en la sistematización de resultados de la ges- son reutilizados para la cultura y la vagancia;
tión del Municipio de San Joaquín (Santiago, el espacio público apropiado, que identifica los
Chile) en el ámbito de la seguridad ciudada- espacios abiertos tomados por los movimien-
na, utilizan una nomenclatura que podríamos tos sociales para dar cuenta de sus demandas
denominar como clásica o tradicional, que (calle, plazas, etc.), y el espacio público vigila-
apela a la categorización de barrios vulnera- do, que hace referencia a lugares mediatizados
bles, vulnerados y críticos, donde los primeros como inseguros y peligrosos.
–vulnerables– corresponden genéricamente Similar al ejemplo anterior, pero ahora
a conjuntos habitacionales que a lo largo de desde el ámbito internacional, encontramos la
su conformación han acumulado problemas categorización planteada por Pyszczek (2011)
desde lo individual, pasando por lo familiar en relación a la ciudad de Resistencia (Argen-
hasta lo social, que han favorecido la instaura- tina), quien establece cuatro tipos de barrios
ción de la violencia como modelo de relación donde la delincuencia y la venta de droga aso-
social, la delincuencia y desintegración social. man por su profusión y visibilidad. En primer
Los segundos (vulnerados) se caracterizan por lugar aparecen las villas periféricas conflictivas
una alta presencia de actos delictivos, venta de surgidas como tomas de terrenos sin planifica-
drogas y validación de estilos de vida asocia- ción alguna, le siguen los barrios planificados
dos a la infracción de ley, pero que aun no lo- con altos problemas de inseguridad producto
gran dinamitar el tejido social, observándose de la gran población que en ellos habitan y la
trabajo de organizaciones de base aunque sea falta de dotación comunitaria. En tercer lugar
de forma lenta e incipiente. Y los terceros (crí- aparece el casco céntrico, caracterizado por una
ticos), que hacen alusión a sectores donde la alta cantidad de delitos a diversas horas del día
venta de droga así como la delincuencia orga- y cierra esta categorización los barrios que se
nizada han instituido una subcultura delictual integraron a la ciudad de forma improvisada
que se aleja de los valores y normas sociales (que poco a poco comenzaron a acercarse a la
convencionales. metrópolis en la medida que esta se expandía
Bajo la misma lógica, pero desde el urba- hacia sus inmediaciones).
nismo y la significación de los espacios, Marco Otra tipificación que presenta mucha utili-
Valencia (2009) plantea diversas cartografías dad es la propuesta por Felipe Hernando Sanz
de la ciudad de Santiago de Chile susceptibles (s/f ), quien en su estudio sobre urbanismo y
de aplicar a otros países de Latinoamérica. Va- seguridad en Madrid, establece tres categorías
lencia nos habla de espacio público fragmentado relacionadas con elementos criminógenos y su
(condominios), donde la vida se atomiza en recurrencia: áreas criminógenas estables o secto-

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Alejandro Romero Miranda

res donde hace años se manifiesta un impor- factores de riesgo estructurales que se asumen
tante grado de inseguridad ciudadana, áreas operan bajo la misma dinámica que a nivel
criminógenas emergentes o espacios urbanos genérico. El mismo caso se presenta para las
en los que se ha producido un significativo categorizaciones de Pyszczek (2011) y Her-
aumento de la delincuencia que se visualiza nando Sanz (s/f ).
notoriamente, y áreas criminógenas regresivas El único esfuerzo, que parece romper con
o espacios urbanos donde se observa una re- esta tradición estructuralista, es la cartografía
ducción de comportamientos violentos, pero propuesta por Valencia (2009), quien al in-
que siguen registrando altos índices de inse- vertir la polaridad del significado en razón del
guridad. Si hemos de establecer un elemen- propio sentir del sujeto, entrega a este la po-
to común a todas las tipificaciones revisadas, sibilidad de entender, interpretar y configurar
uno que destaca por su primacía, es la visión un barrio o sector según sus propias visiones y
estructuralista –o exógena–, que se denota en experiencias, levantando otros discursos y le-
todos ellos al momento de establecer las ca- gitimaciones pero ahora desde lo endobarrial
tegorías de orden. La génesis misma de cada –desde los propios residentes–, dando pie a lo
categoría al clasificar a los barrios o sectores que denominaremos drogocriticidad barrial.
tiene su origen en visiones o criterios externos Entenderemos drogocriticidad barrial como
a los residentes, muchos de los cuales, no pre- la propia categorización que efectúan los re-
sentan un significado enraizado con la historia sidentes de un sector en razón de sus expe-
y dinámica barrial, alejándose por cuentas, de riencias y trayectorias de vida relacionadas no
la visión cotidiana y las representaciones so- solo con la venta / consumo de droga y actos
ciales del propio mundo comunitario. delictivos, sino también con los sujetos que las
Esta visión estructuralista se evidencia en llevan a cabo. De esta forma, la drogocritici-
el enfoque binario, que a la postre se plan- dad obedece a una categoría que se construye
tea como el más estigmatizante y arcaico, ya a partir de la propia subjetividad de los resi-
que sitúa el problema como causa directa de dentes, misma subjetividad que actúa de base
la pobreza y condiciones de vulnerabilidad. para su autoclasificación.
Si bien la caracterización de Zamorano et al.
(2011) toma en consideración la percepción a) Criticidad cero
de los habitantes para establecer los niveles
de inseguridad y violencia, la génesis de estos Se entenderá por sectores de primer orden o
dos últimos conceptos sigue apelando a crite- criticidad cero, a aquellos barrios donde sus
rios exobarriales (externo a los residentes) que habitantes no vislumbran ni reconocen al con-
tienden a una tipificación universal a fin de sumo ni venta de drogas como un problema
establecer comparaciones a nivel barrial (des- que les afecte. Para los habitantes de estos sec-
de los más a los menos inseguros). Esta misma tores, el fenómeno drogas es un problema de
lógica subyace en la conceptualización utiliza- barrios o localidades delimitados y definidos
da por Trujillo y Carrasco (2012), donde los (o de un número muy reducido de vecinos),
criterios de vulnerable, vulnerado y crítico, que solo les afecta en la medida que peligre su
no surgen necesariamente de la propia visión integridad y patrimonio por medio de actos
de los residentes, sino más bien del cruce de delictivos, que por lo general relacionan de

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Drogocriticidad barrial en Chile: Coordenadas para el diseño de políticas de seguridad pública centradas en la vida comunitaria

forma lineal –consumo de droga = delincuen- casas de estos vecinos, etc). Aquí el acento se
cia–. Reconocen su sector libre del problema, pone entonces en el comportamiento de su-
pero se consideran víctimas indirectas de la di- jetos quienes más que atemorizar e infundir
námica general, dando cuenta de lo que Pysz- miedo, incomodan y preocupan a los vecinos
czek (2011) define como miedo difuso. por su estilo de vida. En estos sectores existe
la percepción por parte de otros residentes,
b) Criticidad divergente que el consumo de droga ya se plantea como
un problema importante, digno de atención,
Corresponden a sectores o barrios, donde los debido a su visualización en la población ju-
habitantes reconocen la existencia de un con- venil. Como elemento central de este tipo de
sumo no problemático de drogas por parte de barrios, encontramos la dispar visión que po-
adultos y jóvenes, de suerte, que su accionar seen sus residentes en torno a las incidencias
no afecta negativamente la convivencia ni el y repercusiones del consumo de drogas en la
diario vivir. En estos sectores, el consumo de vida comunitaria. Es justamente este hecho lo
drogas no se asocia a actos delictivos si no más que marca el conflicto incipiente.
bien, a formas de diversión desenfrenadas por
parte de jóvenes y adolescentes. Aquí, los ve- d) Criticidad relacional
cinos identifican bien a los consumidores a
quienes conocen desde pequeños o hace años. Son sectores donde no existe consumo de dro-
Las relaciones son cordiales y se enmarcan en gas por parte de residentes –o no es generali-
la lógica del respeto por la vida privada y con- zado ni problemático–, pero si por parte de
senso general de la buena utilización de los sujetos desconocidos que utilizan los espacios
espacios públicos. No existe percepción ni co- públicos –plazas, juegos infantiles, multican-
nocimiento de venta de droga, y el consumo chas, entre otras– para la venta y consumo de
de esta se asimila con estilos de vida y diver- alcohol y drogas, generando con esto temor
sión con los que se puede convivir. e inseguridad en los vecinos frente a posibles
actos delictivos. Corresponden a barrios que
c) Criticidad incipiente se encuentran cerca del perímetro céntrico de
la ciudad, o bien, cuyas especificidades como
Corresponde a sectores donde existe consumo sitios mal iluminados, cercanía de otro sector
y venta de drogas por parte de adultos y jóve- de mayor orden, extensión de áreas verdes sin
nes residentes, quienes se transforman en po- utilización comunitaria, sitios eriazos, entre
los de atracción para adolescentes y niños del otros elementos, los hacen atractivos para esta
sector, al igual que para sujetos provenientes población flotante quien adopta estos lugares
de otras localidades. La percepción comuni- como reductos transformándose así en espa-
taria señala a estos vecinos como el foco del cios de terror (Rojas y Henríquez 2010).
problema, quienes si bien no describen com-
portamientos antisociales que atemoricen a e) Criticidad disociativa
la comunidad, su accionar desentona con el
resto de los residentes (ejemplo: muchas fies- Hace referencia a sectores donde existe un
tas, entrada y salida de desconocidos de las consumo problemático de alcohol y drogas

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Alejandro Romero Miranda

por parte de adultos y jóvenes residentes, diarios con los que deben convivir los vecinos
quienes causan temor e inseguridad en la co- y una de las principales actividades econó-
munidad por su modo violento de relacionar- micas. Como características de estos lugares
se, el acometimiento de actos delictivos y la se cuenta la división de zonas o territorios
apropiación de espacios públicos para la venta de venta –pasajes o calles– que son disputa-
y consumo. En terminología de Trujillo y Ca- dos por los traficantes, quienes controlan los
rrasco (2012), un sector de criticidad disocia- circuitos de venta por medio de “soldados”
tiva es un sector vulnerado por la droga y la (grupo pagado de sujetos que les brindan pro-
delincuencia, aunque aun no se encuentra to- tección, que en su mayor parte corresponden
mado por estas. En estos lugares existen focos a jóvenes), quienes poseen en su mayoría an-
reconocidos de microtráfico –venta de droga tecedentes de infracción de ley y portan armas
en pequeñas cantidades– que involucran en de fuego –y de guerra– que infunden temor
ocasiones a familias enteras que surten incluso en el sector. Son frecuentes los tiroteos al in-
a otros barrios. Se observa consumo de drogas terior de estas unidades entre bandas rivales, o
a cualquier hora del día. Existe una alta tasa de entre estas y organismos policiales en el marco
jóvenes desescolarizados, algunos de ellos in- de la realización de procedimientos destinados
fractores de ley, que se identifican fuertemente a desbaratar bandas de traficantes.
con la subcultura carcelaria. Existe presencia A diferencia de los sectores anteriores, en
de actos delictivos en contra de residentes, así estos barrios es posible identificar grandes tra-
como presencia de armas de fuego en manos ficantes que poseen redes de ventas que tras-
de la comunidad. Además, la apropiación de cienden al sector –a diferencia de las unidades
espacios públicos para venta y consumo, di- anteriores que se caracterizan por el microtrá-
ficulta el trabajo de organizaciones de base y fico–. El consumo sobrepasa la ocupación de
desmotiva la vida comunitaria, donde las rela- espacios públicos y se instala a nivel de barrio
ciones se atomizan al interior de la viviendas en todos lados. Se observa una alta taza de po-
–algunas de ellas muy enrejadas como sistema blación flotante de otros sectores que llegan a
de protección dando cuenta de una agorafo- abastecerse. En relación a los habitantes, un
bia comunitaria– y niegan la construcción de porcentaje significativo de estos tiene nexos
planes conjuntos entre los vecinos (Lunecke y directos con traficantes o consumidores, sean
Ruiz 2006). Son frecuentes así mismo, opera- familiares, negocios, venta o favores. Los jóve-
tivos policiales destinados a desmantelar redes nes vislumbran la infracción de ley y la venta
de microtráfico, que en ocasiones son resisti- de drogas, como actividades de las cuales es
dos con armas de fuego por parte de microtra- posible vivir. En muchos casos, el traficante
ficantes. Existe la percepción entre los jóvenes, encarna el modelo de vida a seguir. Existe una
que la venta de droga y la infracción de ley validación de la violencia como método de re-
puede formar parte de un estilo de vida. solución de conflictos, donde la intimidación
y agresión física forman parte de las interac-
f ) Criticidad subcultural ciones cotidianas. Es importante consignar,
que esta criticidad subcultural no hace refe-
Corresponde a sectores donde el consumo y rencia a una desorganización social, sino más
tráfico de drogas forman parte de los eventos bien, a una organización paralela, sui generis,

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Drogocriticidad barrial en Chile: Coordenadas para el diseño de políticas de seguridad pública centradas en la vida comunitaria

sustentada en la instalación de regulaciones planteado por Durston (2000), que supone


culturales propias en estos sectores, regulacio- diferenciar entre una vertiente prosocial o
nes que guían y determinan las interacciones positiva y otra antisocial o negativa, donde
de sus habitantes. Esto es de profunda signi- la primera de estas hará referencia a los lazos
ficación ya que plantea como contrapunto de confianza, reciprocidad y cooperación que
una idea que viene germinando en autores promueven la vida en comunidad, el fortale-
como Portes (1998), Stepick (1992), Lunec- cimiento de las instituciones de base, el apro-
ke y Ruiz (2007), y Trujillo y Arévalo (2012) vechamiento de la infraestructura barrial y la
en razón de cuestionar, si en estos sectores se armoniosa convivencia entre los residentes.
puede hablar de una pérdida de capital social. Mientras que la segunda vertiente dará cuen-
Al respecto es interesante recordar que para ta de la conjugación de los tres elementos a
Durston (2000) el capital social comunitario favor de un determinado grupo residente del
se caracteriza por la presencia de tres elemen- barrio, que favorecerá su articulación y di-
tos interconectados: la confianza, la reciproci- námica en perjuicio del canon general3. Este
dad y la cooperación, mismos tres elementos capital social negativo no opera o subyuga
que a la luz de los sectores de criticidad sub- necesariamente al resto de la comunidad re-
cultural (altamente inseguros y victimizados sidente por medio de métodos antisociales o
para Zamorano et al. (2011), barrios críticos delictivos –como la violencia, temor, muerte,
para Trujillo y Carrasco (2012), espacio pú- etc.–, sino que muchas veces lo hace por me-
blico precarizado para Valencia (2009) y áreas dio de actos prosociales destinados a instaurar
criminógenas estables para Hernando Sanz la triada de Durston –confianza, reciprocidad
(s/f )), no parecen desaparecer sino más bien y cooperación– en los residentes a fin de for-
invertirse. Si se quiere transfigurarse, en ra- talecer y ampliar su rango de acción basado en
zón de los propios valores y normas que guían lo que Blau (1982) define como crédito gene-
la convivencia cotidiana, de modo que esta ralizado: la obtención de beneficios por medio
nueva organización sui géneris pueda susten- de favores. Es en esta línea, por ejemplo, don-
tarse en valores que podríamos definir como de deben circunscribirse la ayuda monetaria
antisociales (temor, violencia, validación de prestada por traficantes a vecinos del sector y
la infracción de ley, etc.), de igual modo se a la comunidad misma.
fundamentan en esos tres elementos, pero El apelativo de subcultura apunta a escla-
ya no sustentados desde la comunidad en su recer que estos sectores se guían por reglas sui
conjunto, sino más bien desde una fracción de génesis impuestas por los más fuertes (poder),
ella que coarta o dirige las relaciones sociales. muchas de las cuales entran en contradicción
Esto es lo que Lunecke y Ruiz (2007) definen o son opuestas a la cultura imperante (país), lo
como “el lado oscuro del capital social” o lo
que Trujillo y Arévalo (2012) plantean como 3 Siguiendo con esta idea, pero ahora realizando el cruce con
“capital social perverso” y que nosotros llama- las categorías de la drogocriticidad barrial, diremos que el
capital social positivo será característico del primer y segun-
remos “capital social negativo o antisocial”. do orden, a su haber: criticidad cero y criticidad divergente,
Para una mayor comprensión de la idea respectivamente. Mientras que el capital social negativo se
evidenciará –y aumentará– en las restantes ordenes según el
anterior es necesario realizar una dicotomía siguiente esquema ascendente: criticidad relacional, critici-
en el concepto de capital social comunitario dad incipiente, criticidad disociativa y criticidad subcultural

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que genera un desapego a las leyes institucio- que que el sujeto no solo sea un agente antiso-
nales y poderes del Estado por parte de quie- cial (problemático, disruptivo), sino también
nes la erigen (Lunecke y Ruiz 2006). Aquí las uno prosocial capaz de actuar como ente so-
leyes del Estado son reemplazadas por códigos cializador positivo. Al situar el problema en
y reglas que se hacen valer a sangre y fuego, las acciones del sujeto y no en su calidad hu-
pero también –como se señaló–, por medio mana se le habilita como agente socializador
de la instauración de créditos generalizados o (tiene cosas positivas que aportar).
favores inespecíficos (Blau 1982) que los trafi- Esta concepción es la que prima en al-
cantes han entablado sobre los residentes pro- gunos barrios con alto consumo y tráfico de
ducto de ayudas económicas y protección4. drogas en relación al traficante, el consumidor
y el delincuente, donde la comunidad hace
la diferenciación entre sus acciones y su ca-
Disquisiciones a modo de lidad como ser humano. Nos referimos aquí
conclusión al vendedor de droga que subvenciona el ani-
versario de la población, al consumidor que
Goffman (1993) plantea que los sujetos estig- nunca ha sido irrespetuoso con los vecinos
matizados, aquellos que portan señales físicas y al joven infractor de ley que delinque solo
–cortes, amputaciones, entre otras– o atribu- en las afueras del sector y que los fines de se-
ciones psicosociales negativas –delincuentes, mana se transforma en la estrella del equipo
pobres, etc.–, deben ser entendidos a la luz de fútbol barrial5, entre otros ejemplos. Será
de dos conceptos que pareciéndose de manera esta disgregación entre acción y persona, la
fonética, apuntan a consideraciones opuestas: que llevará en ocasiones a los vecinos a pre-
lo desacreditable y el desacreditado. sentarse empáticos y colaborativos con estos
Lo desacreditable, según Goffman (1993), sujetos, por medio de acciones que van desde
hace referencia a aspectos que dicen relación la admiración hasta la complicidad. La cate-
con las manifestaciones de los sujetos y no con goría de desacreditado hace referencia directa
su esencia. Se apela a una disociación entre su al individuo, quien se plantea como el centro
comportamiento y las verdaderas concepcio- del conflicto (sujeto delincuente). Aquí ya no
nes de mundo que priman en su interior. Así, existe división entre comportamiento y esen-
lo reprochable, lo detestable, lo estigmatizable cia al momento del enjuiciamiento, es el indi-
no es el individuo en cuestión (el sujeto delin- viduo en su totalidad el problema. Con esto se
cuente), sino sus actos, su manera de relacio- le niega la posibilidad de actuar como agente
narse con el medio (su accionar delictivo). De socializador positivo. Se acepta que el sujeto
aquí que la categoría de desacreditable impli- al personificar el problema no tiene nada que
aportar a la sociedad, que dicho sea de paso, se
4 Siguiendo a Blau (1982), en los sectores de criticidad sub- beneficiaria sin su presencia.
cultural las relaciones sociales se basan ante todo en interac- Todo cuanto realice el desacreditado esta-
ciones económicas y no en interacciones sociales, pues lo que
caracteriza estas relaciones no es una ayuda desinteresada, rá cargado de individualismo, de maldad, de
sino más bien, la instauración de un crédito generalizado
susceptible de ser cobrado. Para el caso del traficante, el fa- 5 Estos ejemplos deben ser asociados en prioridad a la cri-
vor cobrado a los residentes puede ir desde el encubrimiento ticidad cero y divergente, ya que como vimos, en los otros
hasta el asesinato por encargo. sectores priman las interacciones económicas.

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falso ánimo de cooperación, no será nunca un interior de los barrios estigmatizados la topo-
buen hermano y menos un buen amigo, cada filia, ese cariño al lugar de residencia que se
vez que hable será para profetizar el camino contrapone a todas las desventajas, precarie-
hacia la droga y la delincuencia, como padre dades y problemas que en el subsisten y se evi-
de familia solo engendrará la semilla del mal dencian, amor que nace desde las más incom-
que perpetuará por medio de sus hijos y ni prensibles, extremas, extrañas y recónditas
pensar en empatía con los vecinos, porque experiencias, que solo cobran sentido desde la
en este mundo existe solo él y su hedonismo. complicidad generada por el mutuo esfuerzo
Será este choque de visiones planteado en la de salir adelante entre los vecinos o de sen-
diatriba, desacreditado versus desacreditable, tirse igualmente marginados. La topofilia se
lo que actuará de semillero para que la socie- enarbola como un sentimiento reivindicativo,
dad observante (todo aquel externo al barrio) como un sentimiento de esperanza y orgullo
genere nuevas estigmatizaciones (labeling), que deja en claro la existencia de capital so-
que ahora no solo abarcarán a los traficantes, cial positivo al interior del barrio (“no todos
consumidores y delincuentes, sino también a somos iguales”) que se contrapone a la imagen
todos quienes vivan cerca de ellos (a quienes topofóbica que sobre él recae
se sumen cómplices), y por cuentas, al propio De esta manera, la drogocriticidad barrial
barrio donde estos habitan (Pyszczek 2007; y la sociedad observante, poseen diferentes
Campo Tejedor 2003). Desde una lógica y prismas para ver y entender el fenómeno del
perspectiva complementaria, estas estigmati- consumo de droga y la delincuencia, prisma
zaciones basadas en la invectiva desacreditado que tiene su base en la diada: desacreditable/
versus desacreditable, se verá reforzada por la topofilia para la primera y desacreditado/topo-
contrariedad topofilia –amor a un lugar– ver- fobia para los segundos, donde esta última
sus topofobia –terror a un lugar– (Tang 2007). visión adquiere relevancia para el diseño de
Tras la instauración de la imagen del des- políticas de seguridad pública, no solo por la
acreditado sobre el individuo y la generaliza- objetividad atribuida a las denuncias y estadís-
ción del estigma a su lugar de residencia, se ticas de los organismos de control y justicia,
generan dos hechos de importancia: a) no solo sino además, por el voto de confianza, de cre-
se objetiviza el temor y el peligro en determi- dibilidad, de imparcialidad, que los gobiernos
nados barrios de la ciudad y sus habitantes, b) de turno les brindan a estos indicadores como
sino que además, la inseguridad se torna aho- articuladores de realidad (el barrio es, lo que
ra un problema entre sectores de buen vivir y los números dicen). La sociedad observan-
barrios marginales o ghettos del terror. Surge te impone “este sentido común”, este marco
así, la topofobia como una respuesta no solo lógico que permea y determina la política de
defensiva, sino además comprensiva de la pro- seguridad por medio del número, de la cifra,
pia realidad del barrio por parte de la sociedad que ponen a la historia barrial, a los conflic-
observante. De esta forma, la topofobia brin- tos y logros de sus habitantes, a sus miedos
da tranquilidad y seguridad porque delimita y y reivindicaciones, a sus avances y contradic-
circunscribe el peligro. ciones, como mera subjetividad, si se quiere,
Contrario a este sentimiento de terror y como dato accesorio, anecdótico, carente de
objetivación de la inseguridad se evidencia al cientificidad que en nada aporta en el abor-

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daje del fenómeno. Por medio de esta tenue lincuente (Oehmichen 2013; Gledhill 2013)
inflexión, este sentido común de la sociedad en contraposición a la construcción social que
observante se vuelve sentido científico en ma- de ellos hacen quienes conviven diariamente,
nos de la tecnocracia gubernamental, que por representaciones que van desde el manifiesto
medio de sus expertos y especialistas, lo con- temor a la topofilica tolerancia frente a las si-
vierte en modelos explicativos a nivel país, que tuaciones vividas.
actúan como estrategias y planes universales, Así, la invitación es a asegurar que las nue-
genéricos, por tanto inespecíficos y desajusta- vas políticas de seguridad públicas, consideren
dos, destinados por cuentas al fracaso, mismos estas construcciones sociales al momento del
planes que tiempo después (como mecanismo diseño de planes y proyectos destinados a ha-
de corrección) tratan de hacer calzar con una cer frente al tráfico y delincuencia. En otros
realidad barrial ajena y desinteresada6. términos, como señala Manzano (2009), re-
La tarea estriba en preguntarse por la cer- conocer las visiones y capacidades de los po-
canía y representatividad de las políticas de bladores para la solución de los problemas
seguridad pública para las personas (Manzano que les afectan, pero además, aceptar que
2009), y con ello, de forma concomitante, por estos en tanto seres autopoiéticos (Maturana
la estigmatización y abandono que muchos y Varela 2008) forman parte de un entra-
sectores de la ciudad han sufrido por parte de mado comunitario el que reconstruyen y re-
los gobiernos de turno debido a su visión es- significan constantemente, donde el desafío
tructuralista (desacreditado) y topofóbica de para el Estado estriba en generar estrategias
concebir al traficante, al consumidor y al de- para hacer coincidir esta propiedad con las
políticas públicas. En este sentido, que las
6 En Chile, el ícono de esta dinámica se evidencia en la insta- intervenciones ya no como criterio aleatorio
lación de máquinas de ejercicios en todas las plazas y parques sino epistemológico, analicen y trabajen las
del país (desde el 2010 hasta la actualidad). Si bien se asume
la relevancia de la actividad física para el aprovechamiento representaciones sociales, el contenido de las
positivo del tiempo de ocio de los habitantes del barrio, el construcciones barriales y las formas de rela-
problema estriba, en que en muy pocos sectores se encuen- cionarse entre los sujetos a nivel comunitario
tra instalada la cultura del deporte al aire libre, en otros los
artefactos no responden a las necesidades de los habitantes como elementos centrales y elementales, y no
o quedaron mal instalados (muy expuestos a los ojos de como meros datos complementarios de visio-
transeúntes) o bien la comunidad no sabe cómo utilizarlos
(pues no se instruyó a nadie pasa asegurar su correcto uso),
nes estandarizadas venidas de las ciencias so-
o simplemente, otros no se ven interesados ya que deseaban ciales y la tecnocracia gubernamental, muchas
otra dotación para su barrio (iluminarias, reparación escaños de las cuales, portan el sesgo del universalismo
de la plaza, juegos infantiles, etc). El asunto es que hoy por
hoy la mayor parte de esta infraestructura comunitaria se extremo que en palabras de Gabriel Salazar
encuentra en desuso o mal estado a lo largo del país. ¿Qué (1999), crean imágenes hipotéticas que cho-
paso en esta historia?... Siguiendo con la argumentación
del texto la idea es simple. El sentido común tomado ahora
can –y se destruyen–, al momento de entrar
como sentido científico por la tecnocracia gubernamental, en contacto con los sujetos y su realidad. Lo
creyó pertinente y atingente la instalación de la maquina- anterior supone reconocer en el tráfico, en el
ria señalada (la actividad física como factor protector), sin
considerar las especificidades de los barrios, y lo que es peor, consumo de drogas y la delincuencia, aspectos
sin preguntar y evaluar con la comunidad dicha iniciativa. históricos, sociales y políticos que se conjugan
Panorama final, la estrategia no dio los resultados esperados
para el gobierno, y lo más preocupante, fue un sinsentido
de forma diferenciada en los sectores y barrios
para muchos habitantes. de la ciudad, cuyas implicancias serán diversas

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en razón de la construcción social que de ellas Hurtado Martínez, María. 1999. Concepto y
se haga y la relación entablada con quienes causas de la inseguridad ciudadana. Cuenca
la realicen. He aquí el holograma social que España: Editorial Gráfica.
plantea Lindon (2007) que es necesario poner Lemert, Edwin. 1972. Human Deviance, So-
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URVIO 18 • 2016 • pp. 28-40


DOI: http://dx.doi.org/10.17141/urvio.18.2016.2238

Urvio, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad, No. 18, Quito, junio 2016, pp. 41-60
RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador • ISSN 1390-4299 (en línea)
Impunidad y disuasión criminal del control
anticorrupción en Ecuador: el caso de la
Comisión Anticorrupción 1998-2008
Impunity and criminal deterrence of control
against corruption in Ecuador: The case of the
Anticorruption Commission 1998-2008

Cielito Berenice Olivo Espín1


Fecha de recepción: febrero de 2016.
Fecha de aceptación: marzo de 2016.

Resumen
La eficiencia de la política de control de un Estado tiene la doble tarea de generar incentivos adecuados en los agentes
públicos y privados, que los disuadan de cometer actos ilícitos, sin descuidar el ejercicio de un nivel óptimo de control
(Polinsky y Shavell 2007), que minimice el costo social del delito2. La teoría económica del comportamiento criminal pro-
pone su abordaje, a partir de criterios de elección racional, relativos a las preferencias estables de los agentes y sus incentivos
hacia un comportamiento ilícito, sin consideraciones de categoría moral. El modelo teórico de disuasión criminal (Becker
1968) relaciona los posibles incentivos de los agentes, respecto de la capacidad de disuasión de los sistemas de control y la
percepción de eficiencia de su funcionamiento, lo que permite contar con información para un análisis predictivo sobre
el comportamiento estratégico de las personas y establece parámetros para el análisis de las políticas de control, a partir
de una perspectiva económica. El artículo formula un ejercicio de aplicación del modelo teórico de disuasión criminal
(Becker 1968) para la actividad de control de la corrupción, a partir del caso de la Comisión Anticorrupción de Ecuador,
en el período 1998-2008.

Palabras clave: corrupción, disuasión, comportamiento, criminal, políticas, racional, incentivos.

Abstract
The efficiency of the control policy of a State has the dual task, to provide appropriate incentives in the public and private
agents, which deter unlawful acts, without neglecting an optimal level of control (Polinsky and Shavell 2007), that mini-
mizes the social cost of criminal activity. The economic theory of criminal behavior proposes its approach, based on criteria
of rational choice concerning stable agent preferences and incentives to unlawful conduct, disregarding moral aspects. The
theoretical model of criminal deterrence (Becker 1968) lists the possible incentives for agents, regarding the deterrence
capability of these control systems and the perceived efficiency of its operation, thus providing information for predictive
analysis on the strategic behavior of individuals and establishes parameters for the analysis of control policies, from an
economic perspective. This paper proposes an application of the theoretical model of criminal deterrence (Becker 1968)
for corruption control, based on the case of the Anti-Corruption Commission of Ecuador, in the period 1998-2008.

Keywords: corruption, deterrence, behavior, criminal, policies, rational, incentives.

1 Abogada por la Universidad Católica del Ecuador (2003). Máster en Derecho, Economía y Políticas Públicas, por el
Instituto Universitario José Ortega y Gasset de Madrid; Máster en Políticas Públicas por la Facultad Latinoamericana de
Ciencias Sociales, FLACSO Sede Ecuador; y PHD en Economía e Instituciones, por la Facultad de Derecho de la Uni-
versidad Complutense de Madrid. Fue parte del equipo de técnico de la Comisión de Control Cívico de la Corrupción
de Ecuador, en el período 1998-2008. Designada experta gubernamental del Ecuador para el proceso de implementa-
ción de la Convención de Naciones Unidas contra la Corrupción en el año 2013. Correo: cielito_olivo@hotmail.com
2 El costo social del delito equivale a la suma del daño que causa y el costo de perseguirlo.

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URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad


No. 18 - Quito, junio 2016 - pp.41-60 - © RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
Cielito Berenice Olivo Espín

Introducción portamiento individual hacia el socialmente


deseado, mediante el sistema coercitivo y san-
La economía del delito aporta a la política cionatorio. Sin embargo, el riesgo de la pér-
criminal desde el análisis económico del com- dida de la función reguladora de las normas,
portamiento humano, donde se considera la nos conduce a la pregunta del ¿por qué? de
acción humana como una categoría que persi- este comportamiento, dadas las restricciones
gue fines, metas y objetivos (Von Mises 2001), que implican la ilicitud de esta clase de actos.
relativa a logros intermedios y fines últimos. La La teoría económica aporta al análisis de esta
teoría económica busca dilucidar el proceso ra- pregunta de investigación, a partir del estudio
cional de las personas que eligen infringir la ley, de la racionalidad de quienes eligen cometer
como un medio para la obtención de sus fines, actos de corrupción.
a pesar del riesgo de la aplicación de la sanción Becker parte del criterio de que quienes
penal. En las prácticas ilícitas, como es el caso delinquen también actúan en función de sus
de los delitos de corrupción, se produce lo que condiciones socioeconómicas (Eide, Rubin y
Adam Smith denominó la existencia de desave- Shepherd 2006, 11), lo que genera que su
nencias entre el deseo individual y las normas decisión sea la mejor que pueden tomar, a
sociales (Levitt y Dubner 2007), donde se pro- partir de sus deseos y preferencias, pues per-
ducen algunas relaciones: (1) la pérdida de la miten a las personas la maximización de su
función reguladora del comportamiento de las función de utilidad (Stigler y Becker 1990).
normas sociales, lo que se explica conceptual- La ciencia económica reformuló la forma de
mente a partir de la teoría de la anomia; y, (2) la entender la utilidad y procuró depurarla de
presencia de “acuerdos sociales implícitos”, que los estados mentales de los sujetos, convir-
por su naturaleza y conformación no pueden tiéndola más bien en una medida de la pre-
considerarse normas sociales, mas por su nivel ferencia y que a fin de desligarlo aún más de
de ejecución, pueden constituir prácticas tole- toda connotación introspectiva, se denomi-
radas, a pesar de ser sancionadas por el derecho nó preferencia revelada, noción que se origina
y socialmente. en la teoría del consumo y la racionalidad
La pérdida de la función reguladora de las práctica.
normas devela el peso de los incentivos racio- La investigación realiza un ejercicio de
nales y las preferencias reveladas en el com- aplicación de la teoría económica del com-
portamiento de las personas, lo que justifica la portamiento criminal, para la actividad de
importancia del análisis racional del compor- control de la corrupción, a partir del caso
tamiento humano, en la formulación y eva- de la Comisión Anticorrupción de Ecuador
luación de las políticas públicas, como parte en el período de 1998-2008, proceso que se
de un proceso de evaluación de la capacidad estructura en cuatro secciones: en la primera
disuasoria de los instrumentos de control que sección se revisa el planteamiento del modelo
aplica el Estado. La teoría de la regulación se- teórico de disuasión criminal, a partir de los
ñala que las normas jurídicas como institucio- postulados de Gary Becker. En una segunda
nes de la estructura del Estado, contienen es- sección, se ubica el contexto de Ecuador en el
tructuras de incentivos externos a la conducta período de actividad de la Comisión de Con-
individual, encaminadas a conducir el com- trol Cívico de la Corrupción (CCCC) y los

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Impunidad y disuasión criminal del control anticorrupción en Ecuador: el caso de la Comisión Anticorrupción 1998-2008

resultados del juzgamiento y sanción de actos identificar los posibles incentivos racionales
de corrupción investigados por la Entidad en para el comportamiento de los agentes y las
el período de 1998-2008, datos a partir de los restricciones que genera el Estado para disua-
cuales se aplica el modelo de Becker al control dir el cometimiento de actos ilícitos.
anticorrupción. En un tercer acápite, a partir En cuanto a los incentivos, estos pueden
de la revisión de sentencias por el delito de ser económicos4, sociales y morales, entre los
corrupción denominado peculado, se esta- que se pueden mencionar: (1) riqueza, bie-
blecen relaciones posibles entre los resultados nes y recursos materiales o servicios; (2) po-
del juzgamiento y los elementos teóricos de la der o capacidad para influir en otros; y, (3)
economía del delito. En la cuarta sección se reconocimiento, autoestima o autovaloración
formulan las conclusiones del trabajo. (Stigler y Becker 1990, 214). Las restriccio-
nes son aquellas que influyen en el compor-
tamiento humano y que pueden formar parte
El modelo teórico de disuasión de la función de utilidad del individuo (Eide,
criminal: variables y supuestos Rubin y Shepherd 2006), las que pueden ser
institucionales, sociales y económicas5. El mo-
La investigación parte del cuestionamiento delo teórico de disuasión criminal considera
sobre ¿cuál es el grado de racionalidad y di- el análisis de las restricciones que incorporan
suasión de los mecanismos de control de la las sanciones penales, como mecanismos de
corrupción que aplica el Estado, respecto del disuasión, los que implican para el infractor
comportamiento de los agentes?, cuya res- un costo que se expresa en un valor esperado
puesta se relaciona con el planteamiento teó- (CE):
rico del modelo de disuasión criminal (Becker
1968) y con la teoría del Public Enforcement Modelo de disuasión criminal
in Law, sobre el funcionamiento óptimo del CE = p . f
sistema de control (Polinsky y Shavell 2007). Costo esperado del delito (CE) Vs Beneficios (Y)
Los seres humanos considerados como suje-
tos económicos se describen a partir de un El costo esperado del delito se calcula te-
conjunto de creencias, deseos o preferencias3, niendo en cuenta la sanción o multa (f ) y la
quienes a partir de las restricciones externas, percepción subjetiva de las personas sobre la
disponen de un conjunto de estrategias posi- probabilidad de ser sancionados (p) 6. Con-
bles (Di Castro 2002). En este sentido, el aná-
lisis económico de la política criminal busca 4 Los incentivos económicos de los agentes se pueden in-
terpretar a partir de un modelo de asignación de recursos
y búsqueda de rentas, donde se observa que la rapidez en la
obtención y la cantidad de los recursos, puede ser la prefe-
3 Las condiciones para que una preferencia sea racional se rencia del agente.
relacionan con la completitud, transitividad, monoticidad y
continuidad, último elemento que se refiere a la posibilidad 5 En la presente investigación no se analizan las restricciones
de medir la intensidad de las preferencias), desarrollo teórico económicas, pues se considera que las personas que se disua-
que se observa en obras de varios autores, tales como: Luce den de cometer actos de corrupción por restricciones presu-
y Raiffa (Games and Decisions, capítulo 2), Gutiérrez (Ética puestarias, no constituyen un riesgo para el sistema de control.
y decisión racional, capítulo 4), Resnik (Choices, capítulo 4) 6 La probabilidad de sanción tiene una relación elevada con
o Gauthier (La moral por acuerdo, pp. 63 – 71) (tomado de los precedentes sentados para casos análogos y la actitud de
Del Río de Angelis 2007, 15). las partes frente a esta información.

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forme el modelo, esta relación implica un Aplicación del modelo de disuasión


costo esperado para el individuo, donde los al control de la corrupción pública
disuadidos son quienes obtienen un benefi-
cio menor o igual al costo esperado y las per- La corrupción pública como comportamiento
sonas que delinquen son quienes obtienen humano se considera el resultado de una inte-
un beneficio mayor. El modelo plantea una racción donde “un agente investido de autori-
función de utilidad esperada, que orienta al dad toma una decisión respecto de un ciuda-
análisis predictivo sobre las posibles decisio- dano o persona jurídica privada o pública, de
nes de los agentes, para maximizar su bienes- forma que tal decisión genera para el agente
tar individual, que se obtendría conforme la (o para una organización, partido o círculo
siguiente función: al que pertenezca el agente) –a través de una
transferencia de recursos del sector público o
E[U] = pU(Y − f ) + (1 − p)U(Y ) del privado– una ganancia personal. De esta
forma la función pública es convertida ilíci-
U es la función de utilidad individual, p es tamente en una fuente de enriquecimiento
la probabilidad subjetiva de ser descubierto privado”. La corrupción es una “conducta que
y sancionado, Y es el valor de la satisfacción se desvía de los deberes formales de un cargo
que genera el acto de corrupción (con un público a causa de ganancias (pecuniarias o de
equivalente monetario) y f es el equivalente status) de tipo privado (personal, familiar o de
monetario de la pena. Bajo los supuestos de grupo)” (Laporta 1997). El comportamiento
este modelo, el agente cometerá la ofensa si descrito ubica a esta actividad ilícita como una
la expectativa de su utilidad es positiva; y se actividad donde predomina la orientación del
abstendrá de hacerlo si es negativa7. Becker comportamiento ilícito hacia la obtención de
señala que si la elasticidad de la utilidad es- rentas, supuesto del que se parte para la apli-
perada respecto a la probabilidad de castigo, cación del modelo, en cuanto al análisis de
supera la elasticidad de la utilidad esperada incentivos de los agentes.
respecto de la sanción en valores absolutos, los La investigación parte de la hipótesis de
agentes actuarán con una tendencia marcada que una estructura institucional débil, tanto
al riesgo “risk lovers”. Por tanto, la probabili- en cuanto al funcionamiento de la Adminis-
dad y severidad de la sanción son adecuadas tración Pública, como respecto de la efectivi-
para disuadir a personas adversas al riesgo, con dad de las instituciones de control y sanción,
grados menores de disuasión respecto de los promueve incentivos racionales hacia la co-
denominados amantes del riesgo. rrupción, no únicamente para los grupos de
criminalidad organizada, sino para los dife-
rentes actores de la sociedad como consecuen-
7 Esta relación también fue señalada por Stigler (1971) que cia de una deficiente prestación de los servi-
describe la relación como “la respuesta óptima de agentes
cios públicos y el incremento de los niveles de
maximizadores de utilidad, en condiciones de incertidum-
bre ante las alternativas representadas, tanto por el total utilidad que genera recibirlos oportunamente,
de beneficios y costos derivables de las actividades, legales frente a una baja probabilidad de sanción. El
e ilegales, que un sujeto puede emprender, como por el
riesgo de detención y condena en el caso de comisión de análisis de caso se realiza con una serie de da-
delitos”. tos sobre la acción de control anticorrupción

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Impunidad y disuasión criminal del control anticorrupción en Ecuador: el caso de la Comisión Anticorrupción 1998-2008

en Ecuador, a partir de los resultados de la ges- Los factores explicativos señalados por el autor
tión de la CCCC en el período constitucional combinan aspectos institucionales y neoinsti-
de 1998. La Comisión se crea a partir de la tucionales. Sobre los segundos se evidencian
Constitución de 1998, en el macro contexto los siguientes:
de la transición democrática del Ecuador, que
se produce a partir de 1978. - El análisis de factores sociales relativos a
El contexto del Estado ecuatoriano en el la movilización social y el rol de la protes-
período de creación y funcionamiento de la ta popular y los movimientos sociales en
CCCC se ubica en una crisis institucional, la caída de los gobiernos presidenciales,
económica, política y social, relacionada con como factores que han logrado desplazar
grandes escándalos de corrupción pública, a los militares como fuerza capaz de impo-
la caída del sistema financiero ecuatoriano, ner la salida de un Presidente.
movilización y protestas ciudadanas, acom- - Conceptualización de la contingencia: ele-
pañadas de caídas presidenciales sucesivas, si- mento que se relaciona con la existencia de
tuación que perfiló a la Comisión Anticorrup- coyunturas críticas en los casos de estudio,
ción como una entidad de control, autónoma las que se interpretan como “pequeños
y de composición ciudadana, integrada por eventos y decisiones personales sin mayor
representantes de organizaciones de la socie- relevancia teórica parecen, en circunstan-
dad civil. La dinámica democrática está mar- cias críticas, tener un peso decisivo en el
cada por una suma de hechos coyunturales y curso de los acontecimientos” (Pérez-Liñán
conflictividad política y social, que desenca- 2008, 117). Hechos entre los que se men-
dena en tres caídas presidenciales: Bucaram cionan el asesinato de manifestantes en la
en 1997, Mahuad en el 2000 y Gutiérrez en Presidencia de Duhalde, así como la for-
2005; y, un nuevo proceso constituyente, que mación de una coalición callejera contra
da origen a la Constitución de 2008. Esta co- Gutiérrez a partir de la transmisión de la
yuntura ubica al Ecuador en el contexto Lati- Radio La Luna en Ecuador.
noamericano, como parte de la emergencia de - Otros factores, tales como la intervención
democracias estables con gobiernos inestables. de medios de comunicación, condiciones
Conforme el trabajo académico de Pérez-Li- económicas y la presencia de escándalos de
ñán (2008), la variable dependiente del estudio corrupción.
se conforma por las interrupciones presiden-
ciales en Latinoamérica, que se explica a través
de indicadores institucionales, de movilización Juzgamiento y sanción de actos
popular de protesta con una variable de control de corrupción en Ecuador:
económica. Las variables independientes que el caso de la CCCC
se incluyen en el modelo son: la interacción,
entre el tamaño del partido de gobierno en el A partir de la estructura propuesta por el
Congreso y el tamaño de la protesta social, para modelo de Becker, se analizó la información
capturar la dinámica de las coyunturas históri- institucional de la extinta CCCC, conforme
cas en las que condiciones institucionales y so- los posibles nudos críticos que componen la
ciales se potencian o se cancelan mutuamente. variable probabilidad de sanción, en el caso

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del control: las denuncias recibidas e inves- de la Entidad no tenían carácter vinculante
tigadas (detección) y los casos en los que se para el Ministerio Público. Este elemento de
inició el proceso penal y se emitió sentencia diseño institucional generó la duplicación de
(juzgamiento y sanción). En cuanto al pro- los procesos de investigación, dada la facultad
ceso de recepción de denuncias ciudadanas e del fiscal (Art. 215 del Código de Procedi-
investigación de posibles actos de corrupción, miento Penal Ecuatoriano) de investigar los
la Comisión tramitó 5430 denuncias, desde hechos que hayan llegado a su conocimiento,
enero del 2000 a julio de 2008, de las cuales en una fase de indagación previa, lo que restó
luego del proceso técnico de admisión e inves- efectividad a la labor de control del organis-
tigación, se obtuvieron elementos suficientes mo anticorrupción11. De los 83 casos en los
para la determinación de indicios de respon- que se inició un proceso judicial, a través de
sabilidades penales, civiles o administrativas, la correspondiente instrucción fiscal, hasta el
respecto de 462 casos, los que fueron remiti- 2008, un total de 22 llegaron a etapa de juicio
dos a las autoridades competentes de su juzga- y en 10 casos se dictó sentencia (2,7%), de las
miento y sanción8. Los casos investigados por cuales únicamente tres fueron condenatorias
la CCCC llegan a conclusiones sobre indicios ejecutoriadas.
de responsabilidad civil y administrativa, en
un 73.89%9; y en un 26.11% sobre indicios Gráfico 1. Resultados de juzgamiento de
penales, que equivalen a 270 casos que fueron casos por la CCCC. Período 1998-2008
remitidos al Ministerio Público, para el inicio
del proceso de juzgamiento.
De los 270 casos con indicios de responsa-
bilidad penal, remitidos al Ministerio Público,
en 83 se inició un proceso penal (31%) y en
187 recomendaciones no se inició el proce-
so (69%)10, dado que los informes técnicos

8 De los 462 casos, se desprende una suma de 1034 conclu-


siones relativas a indicios de responsabilidad penal, civil o
administrativa, dado que en un caso pueden presentarse los Fuente: CCCC, documento Corrupción e Impunidad 2008.
tres niveles de responsabilidad; o a su vez pueden presen-
tarse dos o más tipos diferentes de responsabilidad penal.
9 Los indicios en materia civil y administrativa fueron remi-
tidos a la Contraloría General del Estado en un 18.8%, a la Por los resultados de la acción de control de
Corporación Aduanera Ecuatoriana en un 8.9%, a diferen- la CCCC, la aplicación del modelo se realiza
tes Ministerios de Estado en un 8.5% y a otras entidades
como el SRI, Petroecuador, la Procuraduría General del
bajo el supuesto de percepción de impunidad,
Estado, la Presidencia de la República, Superintendencias y elección que permite evidenciar la importan-
Gobiernos Seccionales, en un 37.7%.
10 De los 187 casos remitidos al Ministerio Público: 102 11 El diseño institucional del organismo que asumió las atri-
fueron archivados en la fase de indagación previa; 10 se buciones de control anticorrupción, a partir de la Constitu-
encontraban con una solicitud de desestimación en consul- ción de 2008, que es el Consejo de Participación Ciudadana
ta y 75 en trámite de indagación previa, durante un plazo y Control Social (CPCCS), establece que los informes de
mayor al establecido en la norma procesal, esto es 1 año en este nuevo organismo pueden dar origen a un proceso de
los delitos sancionados con prisión y 2 años en los delitos juzgamiento, en el cual, el Consejo es parte procesal para la
sancionados con reclusión. defensa de sus informes.

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Impunidad y disuasión criminal del control anticorrupción en Ecuador: el caso de la Comisión Anticorrupción 1998-2008

cia que juega el factor reputación o nivel de sabilidad y de los mecanismos de sanción;
confianza en el sistema judicial, en la percep- y por tanto, se relaciona con la utilidad es-
ción subjetiva de sanción y por tanto en la di- perada del modelo E[U].
suasión del sistema de control en su conjunto.
Supuestos del juego:
• La relación entre los agentes obedece a la
Modelo de disuasión de la prestación de servicios públicos de acceso
corrupción pública en percepción universal, lo que excluye relaciones con-
de impunidad tractuales. En la prestación de servicios
públicos la obtención del bienestar en
Para la aplicación del modelo se parte de la condiciones normales es recibida por el
delimitación del entorno del juego: jugadores, agente privado J1, por ser el destinatario
estrategias y pagos, los que se suponen referi- del servicio público, el que puede obtener-
dos a una relación de prestación universal de se con o sin corrupción. El incentivo del
servicios públicos12 y el cálculo de las variables agente público J2 se produce con presen-
beneficio (Y), sanciones (f ) y probabilidad de cia de acuerdos en corrupción y su bene-
sanción (p). El entorno del juego quedaría esta- ficio incrementa en un esquema de juego
blecido de la siguiente forma: repetido.
• En caso de ser descubiertos en el cometi-
Jugadores: los particulares que interactúan miento de actos de corrupción, los agentes
con el ámbito público como receptores de asumen el coste de la sanción impuesta por
servicios públicos (J1) y los burócratas o el sistema de control.
autoridades públicas (J2).
• En caso de acuerdo legal el coste de san-
Estrategias: (1) los jugadores podrán obte-
ner el servicio cooperando legalmente o en ción equivale a cero.
corrupción; y, (2) los jugadores podrán ob- • Los jugadores perciben niveles de satisfac-
tener beneficios adicionales (Y), si deciden ción y costos diferenciados.
realizar actos de corrupción. • En caso de no ser descubiertos, los agentes
Pagos: los pagos aplicables al juego se ob- que incurren en corrupción reciben efecti-
tienen de la función de utilidad esperada
vamente la satisfacción Y.
planteada por Becker. Estos valores pro-
vienen de la relación entre el valor de la • Existe una percepción de impunidad por
satisfacción que genera el acto de corrup- parte de los agentes, respecto del funcio-
ción para cada uno de los agentes Y1, Y2, namiento de la Administración de Justicia.
el costo de incurrir en corrupción de cada • Neutralidad en la actitud ante el riesgo.
jugador f1 y f213; y la probabilidad subje- Refleja un nivel de equilibrio e indiferen-
tiva de utilidad pU, que se relaciona con la
cia racional en las elecciones, como con-
aplicación eficiente de las reglas de respon-
secuencia del efecto renta y sustitución,
12 Se excluye del análisis a las relaciones contractuales pú- mientras que en el caso de los “risk lovers”,
blicas, pues al no ser relaciones de acceso universal, como
es el caso de los servicios públicos, la aplicación del modelo el efecto sustitución entre el aumento de la
requiere una formulación diferente. gravedad de la sanción y el cometimiento
13 La variable “f ” representa a la variable denominada san- de actos de corrupción es indeterminado;
ción, denominada en inglés f (fine) conforme el modelo de
Becker.
en tanto, que en el caso de los adversos al

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riesgo, la gravedad de la sanción tiene un pf las dos únicas posibilidades de resultado en


mayor efecto disuasorio. acuerdo de corrupción, tenemos que 1= pU
+ pf, por tanto, la probabilidad subjetiva de
El análisis de los pagos de la función de uti- utilidad pU equivale a “1 – pf ”, conforme la
lidad individual del agente privado J1 y del siguiente ecuación pU = (1 - pf ).
agente publico J2, se calculan a partir de in- El beneficio que genera el acto de co-
formación simplificada que permita verificar rrupción (Y).- se calcula a partir del ingreso
el funcionamiento del modelo14, conforme la monetario, por lo predominante de los in-
siguiente función de utilidad esperada: centivos de este comportamiento ilícito ha-
cia la obtención de rentas. El planteamiento
E[U] = pU(Y − f )* + (1 − p)U(Y ) teórico del modelo considera tanto el ingre-
* La sanción f (fine) se considera constante pues se encuentra determi-
nada previamente por la Ley.
so monetario como el nivel de satisfacción
psicológica que logra el agente con el com-
Para el cálculo de la probabilidad subjetiva de portamiento ilícito con un equivalente mo-
sanción p.– se toman los resultados de la in- netario; a fin de simplificar la aplicación del
vestigación de casos de la CCCC en el período modelo, se prescinde del cálculo del factor
2000-2008, mediante la relación entre el nú- psicológico. Los agentes pueden incurrir en
mero de casos con indicios de responsabilidad corrupción a fin de aumentar su utilidad es-
penal, remitidos al Ministerio Público 270, perada teniendo en cuenta el costo de opor-
con las sentencias condenatorias existentes tunidad que le puede generar el trámite legal
3 (probabilidad de sanción (p) = Sentencias o el cumplimiento de las reglas, por lo que es
condenatorias/Conclusiones de responsabili- una alternativa priorizar la obtención de un
dad penal). Las cifras del caso, se consideran beneficio presente frente a un beneficio fu-
un supuesto de baja probabilidad de sanción. turo (descuento hiperbólico del futuro). En
Se determina que el agente privado y el pú- este sentido, el juego cooperativo en corrup-
blico reciben el máximo nivel de control, por ción estaría definido con total precisión por
tanto p1=p2. la distribución de los pagos (efecto renta) en
El modelo de disuasión de Becker aplica la función de las restricciones que puede gene-
incidencia de la probabilidad de Utilidad pU, rar el sistema de control.
en la expectativa de utilidad esperada E[U]. La Y se calcula en términos de la cuantía
Para su cálculo matemático, el modelo utiliza de corrupción o monto del soborno (CC)
la probabilidad de sanción p; pues de ocurrir (CC=Y), por ser el costo máximo referencial
un acuerdo entre los jugadores se contemplan que está dispuesto a pagar el agente priva-
dos opciones de ocurrencia: (1) que el resul- do (J1) para obtener el servicio ilícitamente,
tado sea una utilidad pU; y (2) que la conse- ya que considera que le deja un margen de
cuencia sea una sanción pf. Al ser la pU y la bienestar o remanente monetario; por tanto,
la cuantía de corrupción es inferior al bien-
14 El objetivo de este trabajo es la verificación del funciona- estar que espera recibir mediante la práctica
miento del modelo, a fin de validar la aplicación de su me- ilícita; y respecto del jugador público (J2), su
todología, para el análisis de políticas públicas, a partir de lo
cual es posible la aplicación de series de datos y mecanismos
satisfacción adicional se refleja en el valor del
de cálculo más refinados. soborno o cuantía de corrupción que recibe.

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Impunidad y disuasión criminal del control anticorrupción en Ecuador: el caso de la Comisión Anticorrupción 1998-2008

En el ejercicio se parte del supuesto de que de corrupción (CC) para el cálculo de la san-
Y1=Y2. El valor de la cuantía de la corrupción ción del agente privado (J1), pues es un valor
para el delito de cohecho se obtiene de los re- que paga injustificadamente; y que para efec-
sultados de Transparencia Internacional, en tos del cálculo en el caso del jugador 2, se le
la Encuesta Nacional de Corrupción y Buen adiciona el duplo de la cuantía de corrupción
Gobierno del Ecuador de 2007. (CC), pues la norma penal establece la obli-
La encuesta concluye que los usuarios gación de restituir el duplo de lo que hubiere
privados asumieron un costo promedio de percibido. La percepción subjetiva de que la
177,70 dólares americanos, por pago de so- sanción sea efectivamente aplicada, afecta el
bornos, por el acceso a servicios públicos. En optimismo de los agentes para incurrir en
cuanto a la equiparación del valor del bene- corrupción, factor que se incorpora al mo-
ficio con el monto del soborno o cuantía de delo a partir de la probabilidad subjetiva de
la corrupción CC=Y, cabe diferenciar el costo impunidad (pfI). Dado que los resultados del
del trámite, de la cuantía de la corrupción. El juzgamiento en el caso suponen la existencia
Costo del Trámite es el relativo a la obtención de impunidad en el sistema, para el ejercicio
del servicio público legalmente y puede tam- se asume que la percepción subjetiva de que
bién ser 0 para quien lo percibe, pues existen se aplique la sanción equivale a la probabili-
servicios públicos gratuitos. Cabe aclarar que dad de sanción que evidencia el sistema de
la prestación del servicio público siempre tie- control, por tanto pfI=p.
ne un costo, el mismo que está externalizado
ya que es asumido por el Estado. Sanción (f ).- Tabla de datos
los niveles de sanción son diferenciados en el
caso del jugador 1 y 2, con mayor cantidad de Jugador 1 Jugador 2
Denominación
agravantes en el caso del comportamiento del Privado Público
agente público, por tanto s2>s1. Probabilidad de
0,01 0,01
Esta relación diferenciada se calculó a sanción (p)*
partir del costo de la sanción, teniendo como Probabilidad de
0,99 0,99
referencia la sanción del delito de cohecho, utilidad pU**
contenida en el artículo 285 del Código Pe- Probabilidad subje-
nal ecuatoriano (ver Anexo I), vigente hasta tiva de sanción, en
el 2014, que establecía la sanción mínima supuesto de impuni- 0,01 0,01
de prisión de 6 meses y multa de 8 dólares dad pfI (se asume a
p=pfI )
americanos15; valor que se suma a la cuantía
Satisfacción por
Y1=177,70 Y2=177,70
15 Para el cálculo de la sanción se multiplica el número de Corrupción (Y)***
meses de prisión (NP) por el valor mensual de la remunera-
ción estimada W más la multa establecida por norma, valor Sanción (f )**** f1= 5087,7 f2= 5265,4
al que se adiciona la cuantía de la corrupción CC, que en el
caso de agente público se duplica.- f1=(NP*W+m) + CC; *Probabilidad de sanción (P) = Sentencias condenatorias (3)/
f2=(NP*W+m) + (CC*2). f= (NP+W. La remuneración Conclusiones de responsabilidad penal (270); P=3/270=0.01
**pU = (1 - p) entonces pU= (1 – 0,01)
mensual se estima en 817 dólares americanos, que equivale ***Y= CC. Cuantía Corrupción CC = 177,70 USD
a un salario promedio de un servidor público 1, este valor se ****f1=(NP*W+m) + CC. Por tanto f1= (6*817+8)
toma a partir de la escala salarial de Ecuador al 2015; y se +177,70=5087,7; y, en el caso de f2=(NP*W+m) + (CC*2).
equipara para J1 y J2. Por tanto f2= (6*817+8) + (177,70*2)= 5265,4.

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Utilidad esperada: E[U] = pU(Y − f*pfI) + (1 − p)U(Y ) utilidad esperada por corrupción E[p] = E[U].
Jugador 1 Jugador 2
Esta utilidad que se deja de percibir evidencia
Agente Privado Agente Público el incentivo que tendrían los agentes para rea-
E[U]J1 =pU(Y − (f1*pfI)) + E[U]J2 =pU(Y − (f2*pfI)) lizar actos de corrupción cuando se percibe la
(1 − p)U(Y1) + (1 − p)U(Y2) existencia de una probabilidad de sanción p
E[U]J1= 0,99*(177,7 E[U]J2 = 0,99*(177,7
- (5087,7*0,01)) + (1 - - (5265,4*0,01)) + (1 - mínima y niveles de sanción inadecuados, por
0,01)*177,7 0,01)*177,7 lo que se concluye que en el caso de estudio,
E[U]J1 = 301,4 E[U]J2 = 299,7
los incentivos no fueron adecuados para la di-
suasión del comportamiento ilícito.
Las ecuaciones aplicadas permiten calcular la Simplificando el análisis del modelo de
utilidad esperada de realizar un acto de co- Becker se obtiene que a mayor probabilidad
rrupción para los dos jugadores, mediante la subjetiva o percibida de sanción, menor es la
relación de pagos que genera la utilidad espe- utilidad esperada. Entonces, el acuerdo de co-
rada por cometer el delito, respecto de la per- rrupción puede arrojar pagos negativos (pérdi-
cepción subjetiva del agente de que se le apli- da), lo que implica que las políticas de control
que la sanción. En el ejemplo se observa que la deben generar incentivos para que la probabi-
utilidad es positiva, lo que implica que existen lidad subjetiva de sanción sea mayor al punto
incentivos racionales para incurrir en corrup- de indiferencia de los agentes, que es aquel en
ción, dado que se articulan varios incentivos el que pueden comportarse racionalmente in-
simultáneamente: una sanción leve, una baja diferentes frente a la posibilidad de corrupción,
probabilidad de sanción del sistema y una baja nivel que puede considerarse como el nivel
percepción subjetiva de los agentes de que la óptimo de de funcionamiento del sistema de
sanción les pueda ser aplicada efectivamente. control. El comportamiento ilícito, a partir de
Dado que el modelo de Becker se basa en acuerdos de corrupción, constituye un juego
el “free will” de optar por cometer o no un cooperativo en el que los participantes pueden
acto ilícito, que se percibe genera una utili- comunicarse y negociar una solución óptima
dad esperada, los jugadores también pueden mutua –información perfecta–, que se traduce
optar por realizar el trámite legalmente y así en la obtención del beneficio con pagos indivi-
dejar de percibir la utilidad esperada adicio- duales superiores para cada uno de los agentes,
nal. Desde esta perspectiva el agente público relación de pagos en la que se observa que la
recibiría únicamente la remuneración W1, ganancia del agente público se incrementa en
mientras que por su parte el agente privado función del volumen de operaciones en las que
recibe el bienestar del servicio, aunque no interviene, por lo que el óptimo para el agente
sea oportunamente. Sin embargo, según cri- público es un esquema de juego repetido, si-
terios económicos, en este supuesto los agen- tuación que se fomenta en un contexto de per-
tes pueden tener una percepción subjetiva de cepción de impunidad. Si partimos de la co-
pérdida, debido a que su función de utilidad rrupción como juego repetido en un contexto
esperada también depende de la probabilidad de impunidad, estamos ante una estructura de
p, por consiguiente tienen un costo de opor- servicios y precios que puede asimilar a las tran-
tunidad que se refleja como una expectativa sacciones de corrupción pública, con aquellas
de pérdida E[p], cuyo valor es equivalente a la que se desarrollan en un mercado.

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Impunidad y disuasión criminal del control anticorrupción en Ecuador: el caso de la Comisión Anticorrupción 1998-2008

Resultados del juzgamiento A partir de las cifras disponibles sobre el juz-


y nivel óptimo del control gamiento del delito de peculado y sus resulta-
dos sobre la investigación procesal por parte
La teoría del “Public enforcement of law” relacio- del Ministerio Público (D), en relación con
na los tipos de sanciones que puede establecer el el inicio de procesos judiciales por parte de
Estado y la incertidumbre del comportamiento los juzgados y Cortes de Justicia, mediante el
de los agentes, con la necesidad de la política cri- inicio de la instrucción fiscal (J) y su poste-
minal de maximizar el bienestar social, a partir rior sentencia (S), se observa una reducción
del ejercicio del nivel óptimo de control. Para la elevada y progresiva del número de casos en
ubicación referencial del estado de juzgamiento las diferentes etapas del proceso, conforme el
de delitos de corrupción en el Ecuador se parte siguiente detalle:
de la Constitución ecuatoriana de 1998, que se-
ñala los siguientes delitos de corrupción públi- Tabla 2. Resultados juzgamiento delito de
peculado
ca: cohecho, concusión y enriquecimiento ilíci-
to. Durante el período 2009-201216, se observa Etapa
2009 2010 2011 2012 Total
que el delito de corrupción con mayor nivel de Procesal
actividad judicial, en cuanto a la investigación, Indaga-
juzgamiento y sanción, es el delito de peculado ción previa 586 492 352 411 1841
(ver Anexo II), con un total de 152 sentencias (D)
condenatorias. Instruc-
ción Fiscal 177 130 78 65 450
(J)
Tabla 1. Delitos de corrupción iniciados
y sentenciados en Ecuador Sentencias
Período 2009-2012 Condena- 26 47 30 49 152
torias (S)
Nº indaga- Nº Sentencias Fuente: Elaboración propia, a partir del Informe del Ecuador. 2013.
Delito ciones previas condenatorias Cuarta Ronda de Análisis del MESICIC.

“NIP” “NSC”
Múltiples factores pueden explicar esta reduc-
Peculado 1841 152 ción progresiva de casos, en las diferentes etapas
Cohecho 343 16 del control. Por este motivo, a fin de profundi-
Concusión 388 12 zar en posibles hipótesis explicativas, se realizó
un análisis cualitativo de sentencias por el de-
Enriquecimiento
200 1 lito de peculado, respecto del recurso extraor-
Ilícito
dinario de derecho, denominado de “casación”
Total 2772 181 17
. De la revisión de sentencias de casación re-
Fuente: Elaboración propia, a partir del Informe del Ecuador. 2013. sueltas por la Corte Nacional de Justicia, en el
Cuarta Ronda de Análisis del MESICIC.
período 1998-2014 se identificaron un total de
148 sentencias relativas a procesos penales por
16 Informe del Ecuador dentro de la Cuarta Ronda de Aná-
lisis sobre la aplicación de la Convención Interamericana
contra la Corrupción, en el marco de la Organización de 17 El recurso extraordinario de casación es un recurso de
Estados Americanos (OEA). derecho, cuyo conocimiento es de competencia nacional.

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el delito de peculado, con miras a la aplicación cuanto al contenido de las normas procesales
de la base teórica de la investigación, se realizó y penales que tipifican y sancionan el delito de
el levantamiento de la siguiente información: peculado; y (2) un problema de eficiencia en
(1) duración del proceso penal, tiempo en me- cuanto al nivel de actividad, resultados y seña-
ses; (2) tipo de agentes enjuiciados: públicos o les disuasorias que genera el sistema judicial.
privados; (3) resultado de la sentencia: condena
o absuelve al imputado18; (4) condena, tiem-
po de la pena privativa de libertad a la que se Inconsistencias en la regulación
condena al procesado en meses; (5) monto del
caso en dólares; (6) condiciones previas para En cuanto a la racionalidad de la norma en el
el inicio del proceso, relativo a la presencia del delito de peculado en el Ecuador, cabe señalar
informe de determinación de responsabilidades que dentro de las restricciones institucionales
penales por parte de la Contraloría General del se encuentran las relativas a las normas y al
Estado. funcionamiento del aparato institucional de
Luego del levantamiento de información control administrativo y judicial del Estado.
se seleccionaron las sentencias relativas a de- La formulación de las normas, la regulación y
litos de peculado cometidos en el período las instituciones jurídicas como instrumentos
1998-2008, por la homogeneidad en cuanto de las sociedades políticamente organizadas,
a las normas sustantivas y adjetivas aplicables, deben ser el resultado de una construcción
período en el que se han ubicado 102 casos colectiva, entendida como una suma de los
con sentencia. De los 148 casos se ubicaron deseos de los individuos en un contexto so-
un total de 102 casos sentenciados en el perio- cial, político e institucional, normas que de-
do 1998 y un total de 46 casos sentenciados ben encontrarse dirigidas al mayor bienestar
el período 2008, de los cuales se eliminaron individual posible, en la lógica de un contex-
ciertos casos que no contenían información to colectivo. No obstante, hay que tener en
completa o que fueron identificados por su cuenta que el derecho constituye en esencia
denominación, pero que en cuanto a su con- un acto emanado del poder político y en tal
tenido no se referían al juzgamiento de delitos virtud, en no pocas ocasiones, representa a los
de peculado, a partir de lo cual el universo intereses de poder de una mayoría política o
de análisis se redujo a un total de 138 casos no sintoniza con la realidad social.
sentenciados en casación. Del resultado de las Las instituciones jurídicas en el ámbito pú-
sentencias se observa que existe una tendencia blico constituyen el marco de racionalidad en
del sistema de control ecuatoriano, a alejarse la toma de las decisiones, con el fin de evitar
del nivel óptimo de control, criterio que tiene desequilibrios económicos en las interacciones
en cuenta dos ámbitos de análisis: (1) la pre- de la Administración y abusos en el manejo de
sencia de inconsistencias en la regulación, en los recursos del Estado, por parte de la burocra-
cia, pero también tienen una función disuaso-
18 En cuanto al número de casos en los que se condena o ria del comportamiento de los agentes públicos
absuelve a los imputados, de un total de 89 casos con datos, y privados hacia la corrupción. Las normas de
se encontraron 73 casos condenados, 12 absueltos y 4 casos
en los que hubo una sentencia mixta, en los que existieron
regulación y sanción como una restricción esta-
imputados condenados y absueltos. blecen ámbitos y condiciones para el compor-

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Impunidad y disuasión criminal del control anticorrupción en Ecuador: el caso de la Comisión Anticorrupción 1998-2008

tamiento en sociedad. De esta manera las ins- abandonado, bien que estaba asignado al Mi-
tituciones jurídicas constituyen mecanismos de nisterio de Obras Públicas. Conforme la sen-
intervención pública, que pueden ser utilizados tencia, en este caso se produjo la readecuación
como incentivos o restricciones en el compor- de la estructura automotriz de una volqueta
tamiento de los diferentes agentes económicos. para fines del servicio de transporte para el
Se considera que la regulación “obliga a que las personal del Ministerio, motivo que generó la
empresas reguladas actúen de manera distinta separación de la parte posterior de la volqueta
a como actuarían si tal regulación no existiera” (balde) y su almacenamiento en los patios de la
(Lasheras 1999). A partir de las sentencias re- institución pública mencionada, bien que lue-
visadas se observa que la descripción del com- go de varios años fue solicitado para su uso por
portamiento tipificado se formula en términos un particular de la zona, a quien le fue entre-
abiertos y que la estructura de formulación del gado por no encontrarse inventariado ni estar
delito no contempla una relación de propor- en condiciones para su uso, sin cumplir para
cionalidad entre el nivel de daño (harm) que ello con el procedimiento legal que establece la
puede causar la actividad y la sanción aplicada administración de bienes públicos. El balde de
en sentencia, situación que se ejemplifica, con volqueta estaba avaluado en 800 dólares ameri-
la comparación de dos casos extremos identifi- canos y el funcionario del Ministerio de Obras
cados en la muestra, en los cuales se aplica una Públicas considerado responsable fue senten-
igual sanción. ciado a 8 años de pena privativa de libertad.
Un primer ejemplo trata sobre el Caso Los casos citados evidencian una clara au-
Banco del Progreso, por fraude al sistema finan- sencia de proporcionalidad, entre el nivel de
ciero nacional en el Ecuador, en contra del daño (harm) que causa la presunta actividad
señor Fernando Aspiazu Seminario, gerente delictiva y la sanción aplicada en sentencia.
y propietario de la Entidad. Este caso se en- Esta brecha puede afectar la valoración subje-
cuentra relacionado con la crisis del sistema tiva de los individuos sobre la racionalidad de
bancario en Ecuador que desembocó en el la norma, situación que crea incentivos para
congelamiento de depósitos decretado por que se evada la aplicación del régimen penal,
el Presidente Mahuad en el año 1999, quien orientados a su evasión por parte de los agen-
recibió donaciones para gastos de campaña tes y a una excesiva apertura frente a los opera-
electoral, provenientes del citado Banco del dores de justicia, respecto de la interpretación
Progreso; hechos que dieron origen al juzga- de la norma y de la aplicación de las sanciones,
miento del ex Presidente Mahuad por la toma con la consecuente afectación al bien jurídico
de medidas de política económica, originadas protegido.
en un régimen en ausencia de control, que
ocasionó un elevado impacto económico y
social. El monto del caso fue de 3´801.645 Disuasión y control óptimo
de dólares americanos y la sanción aplicada al del sistema
administrador del Banco del Progreso fue de 8
años de pena privativa de libertad. La teoría del “Public enforcement of law” seña-
El segundo ejemplo se refiere al Caso por la la que la función de bienestar social implica
entrega a un particular de un balde de volqueta la observación integral de las relaciones que

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produce el comportamiento criminal y su ilícito en el período 2009-2012, cuyo detalle


control, mediante la aplicación de un análisis consta en la Tabla N° 1. Conforme las cifras
costo-beneficio, a partir de las siguientes re- totales, existieron 1841 casos en los que se ini-
laciones: entre los beneficios individuales ob- ció el proceso de investigación (D) y en 152
tenidos por el rompimiento de la ley, versus procesos se dictó sentencia (S), lo que impli-
los costos individuales en los que incurre el ca una reducción equivalente al 93,75%. La
infractor, los daños que esta violación gene- información de carácter cualitativo se obtuvo
ra y los costos de imposición de sanciones en de la revisión de sentencias de casación en el
los que incurre el sistema de control. En esta delito de peculado en el período 1998-2008.
línea, el “Public enforcement of law” aporta En cuanto a los agentes implicados en el juz-
al análisis económico de la política criminal, gamiento existe un número reducido de casos
mediante el reconocimiento de los problemas en los que se juzga conjuntamente a los agentes
de eficiencia en el funcionamiento de los sis- públicos y privados; de 91 casos, únicamente
temas de control administrativo y judicial, lo en 4 se observa su implicación conjunta, en
que puede alejar el nivel de actividad de la el proceso de juzgamiento19. La Constitución
Administración de Pública y de Justicia, de su de 1998 establece por primera vez la impres-
nivel óptimo de funcionamiento. criptibilidad y el juzgamiento en ausencia, en
igualdad de condiciones para agentes públicos
y privados, que participen en los delitos de
(1) Actividad judicial y disuasión cohecho, concusión y enriquecimiento ilícito.
del sistema de control Sin embargo, los resultados del procesamien-
to de sentencias no reflejan cifras relevantes
El efecto disuasorio de los mecanismos insti- sobre la implicación conjunta en juicio, de
tucionales de control y sanción en la conducta agentes públicos y privados. Cabe señalar, que
de los agentes influye en el análisis costo-be- el juzgamiento de agentes privados que se re-
neficio de las personas, respecto de la maximi- gistra en la muestra corresponde básicamente
zación de su función de utilidad. El nivel de a casos relativos a entidades del sistema finan-
control debe mantenerse en el óptimo desea- ciero nacional, por tanto los agentes son em-
do, a fin de tener un grado de incidencia razo- pleados u accionistas bancarios. A partir del
nable en el proceso de toma de decisiones de 13 de mayo de 1999, los funcionarios de los
los agentes públicos y privados. Por lo expues- bancos pueden ser juzgados por los delitos del
to, cuando el nivel de disuasión es inferior, se 257 del Código Penal, reforma que genera la
produce la reducción de los niveles de efecti- presencia de agentes privados en la muestra de
vidad y eficacia de las normas y de los sistemas sentencias analizadas.
de control público, pues se reducen los niveles
de cuidado de los agentes frente a la alternati- 19 De 91 casos en los que se cuenta con información con-
va del cometimiento de actos ilícitos. El nivel fiable, se ubicaron un total de 71 casos en los que se juzga
únicamente a agentes o servidores públicos; y, un total de 16
referencial de la actividad de control se obser- casos en los que se juzga solo a agentes privados, los que se
va a partir de las cifras sobre la detección y refieren a empleados del sector bancario y se relacionan con
casos producidos en la crisis del sistema financiero nacional;
sanción de los delitos de corrupción de pecu- y, solo en 4 casos se observa la implicación del juzgamiento
lado, cohecho, concusión y enriquecimiento tanto de los agentes públicos como de los privados.

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Impunidad y disuasión criminal del control anticorrupción en Ecuador: el caso de la Comisión Anticorrupción 1998-2008

Una hipótesis explicativa es que la norma del proceso de juzgamiento penal no puede
puede haber generado un posible comporta- durar más de 1 año en los delitos sancionados
miento cooperativo entre agentes públicos y con prisión y 2 años en los delitos sanciona-
privados, donde el funcionario público con- dos con reclusión, referente a partir del cual,
centra el riesgo y el costo del juzgamiento y se considera que una duración promedio de
de la sanción, a cambio de pagos superiores 6.66 años22 y un nivel de detección de casos
en la negociación de los acuerdos o a su vez, de un promedio inferior a los 10.000 dólares
con el objetivo de garantizar la repetición del americanos. Esto no disuade el cometimien-
juego, pues ello le permite alcanzar niveles su- to de los grandes casos de corrupción y por
periores de ganancia. De las sentencias revisa- el contrario, genera señales de una baja pro-
das se pudo contar con información sobre el babilidad de que se produzcan los efectos no
monto del caso sentenciado, cuyo promedio es deseados de acudir al comportamiento ilícito,
de 9.676,98 dólares americanos20, por lo que como consecuencia del efecto atribución23,
se considera que las infracciones que se juzgan lo que puede generar incentivos para que los
y sancionan no son las que ocasionan un ma- agentes otorguen una valoración superior a
yor nivel de daño. Esta situación frente a un aquello que pueden lograr en el presente a tra-
tiempo extendido de duración de los procesos vés de incurrir en corrupción.
judiciales, equivalente a 6,66 años, se puede En cuanto a la duración de la pena privati-
considerar una señal sobre un posible costo va de libertad dictada en sentencia, los valores
elevado del proceso de juzgamiento, en rela- se contabilizaron en meses y de un universo
ción con el nivel del daño causado.21 de 75 casos con datos, se identificó que el pro-
En cuanto al tiempo de duración de los pro- medio de las condenas aplicadas es de 4 años
cesos judiciales, conforme la legislación pro- 3 meses de privación de libertad. La norma
cesal vigente entre 1998-2008, la indagación relativa al delito de peculado contenida en el
previa o fase de investigación anterior al inicio artículo 257 del Código Penal, vigente hasta
enero del 2014, establece un rango de aplica-
20 La información sobre este aspecto fue limitada, por la ción de la pena privativa de libertad, de cuatro
naturaleza del recurso de casación, como recurso de pleno a ocho años, cuya interpretación y aplicación
derecho, motivo por el cual, existió información disponible,
únicamente en 27 casos. A partir de la observación de distri-
judicial tiende a la aplicación de la pena me-
bución de valores, se extrajo del cálculo, un caso de fraude nor. La sanción y su aplicación efectiva son
al sistema financiero nacional, por un monto de 3´801.645
dólares americanos; en virtud de lo cual se obtuvo un pro- 22 A efectos de determinar el tiempo de duración de los
medio del monto del caso, de 9.676,98 dólares americanos, procesos, se tuvo como tiempo de inicio, la fecha del posible
a partir de 26 casos. cometimiento del delito y como fecha de finalización la de
21 Cabe señalar que en este periodo se produjo el proceso la sentencia de casación. Sin embargo, dado que este recurso
de dolarización del país, por lo que los valores que constaban fundamenta su análisis en la aplicación del derecho al caso,
en sucres, fueron convertidos a dólares según el último tipo se verificó que un gran número de casos no contaba con la
de cambio vigente antes del cambio de sistema monetario, información relativa al cometimiento de la infracción, por
situación que puede justificar el bajo valor del monto de los lo que únicamente en 28 casos se contó con información.
casos juzgados. Sin embargo, más allá de esta posible explica- 23 La teoría de la elección racional desarrolla el efecto atri-
ción, el valor promedio del costo del caso puede dar señales bución que consiste en la estimación de ocurrencia de even-
sobre un posible costo elevado del juzgamiento de casos, en tos futuros basados en la información disponible, efecto que
relación con el nivel del daño causado, lo que puede rela- puede determinar un bajo nivel de incidencia de las normas
cionarse también con los problemas de racionalidad de la disuasorias en el comportamiento de los agentes, especial-
norma penal de peculado para el período 1998. mente en el supuesto de impunidad del sistema de control.

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dos caras de la misma moneda, por lo que se de Expertos del Mecanismo de Seguimiento
cuestiona el endurecimiento de penas cuando e Implementación de la Convención Intera-
no existe un nivel óptimo de funcionamiento mericana contra la Corrupción (MESICIC) y
del sistema judicial, pues la percepción de im- fue motivo de una recomendación al Estado
punidad neutraliza la capacidad de disuasión ecuatoriano (MESICIC 2013).
de los sistemas de control y genera incentivos Cabe destacar a priori la importancia de
perversos encaminados a comportamientos que el conocimiento del delito pueda contar
estratégicos que reduzcan la probabilidad de con varias fuentes para su conocimiento y juz-
aplicación de sanciones. La percepción de im- gamiento, por lo que es cuestionable la crea-
punidad genera incentivos para acuerdos en ción de normas interpretativas y legales que
corrupción, tanto de oportunidad u ocasio- restringen las posibilidades de investigación
nal; como para las redes consolidadas de co- por parte del Ministerio Público, de posibles
rrupción, con conocimientos técnicos sobre el actos de corrupción, especialmente a través
funcionamiento de la Administración Pública de requisitos previos basados en la acción de
y sus posibilidades de generar condiciones de órganos administrativos de control. Por una
oportunidad y diseños jurídicos que puedan parte, los requisitos de procedibilidad restrin-
neutralizar las probabilidades de detección, gen y neutralizan la competencia esencial de
juzgamiento y sanción. investigación de la Fiscalía General del Estado
y los órganos auxiliares de la Administración
de Justicia. Por otra, restringen las posibilida-
(2) Barreras para el inicio del proceso des de juzgamiento al pronunciamiento de un
de investigación penal órgano general de control administrativo, que
a partir de las nociones básicas de economía
La revisión global de las sentencias, que abarcó podemos afirmar tiene una capacidad institu-
hasta el año 2014, alertó sobre la presencia de cional limitada de respuesta, que se condicio-
una regulación que genera el efecto de limitar na al ejercicio de sus competencias generales
el juzgamiento de actos de corrupción y surge y a la asignación de recursos para su adminis-
con la incorporación del informe de deter- tración; factores que en su conjunto generan
minación de responsabilidades penales de la como efecto la reducción de la probabilidad
Contraloría General del Estado, para el inicio de juzgamiento y sanción, situación que pro-
del proceso judicial por el delito de peculado. duce el efecto del descuento del futuro, ya que
A partir del 2010, por Resolución interpretati- genera que los agentes valoren más el benefi-
va de la Corte Nacional de Justicia, que luego cio presente y minimicen la valoración de la
se incorpora al Código Integral Penal (COIP) amenaza disuasoria de la pena.
vigente desde 2014, se constituye al informe En cuanto a este punto, en los casos ana-
de determinación de responsabilidades de la lizados existió un informe de determinación
Contraloría General del Estado como requi- de responsabilidades penales de la Contraloría
sito de procedibilidad para el inicio de la ac- General del Estado en 66 de 102 casos con
ción penal, el cual constituye una barrera para sentencia, lo que permite señalar que la apli-
el inicio del proceso de investigación penal. cación de dicho requisito de procedibilidad
Este hecho ha sido observado por el Comité puede generar una reducción sustancial en el

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Impunidad y disuasión criminal del control anticorrupción en Ecuador: el caso de la Comisión Anticorrupción 1998-2008

proceso de conocimiento de la noticia criminis rías económicas. Esta propuesta encuentra sus
por parte del Ministerio Público y por tanto orígenes en la propuesta de medir los niveles
en el proceso de juzgamiento y sanción. Exis- de satisfacción (utilidad) de los individuos,
ten varias hipótesis explicativas posibles a la formulada por la doctrina filosófica del uti-
creación de esta barrera al juzgamiento. Una litarismo, razonamiento que se encuentra en
de ellas puede ser la intención de reducir el la base de las teorías económicas aplicadas
nivel de actividad judicial sobre delitos de co- al caso de estudio, a partir de la elección ra-
rrupción, por la judicialización de los conflic- cional, la economía criminal, el análisis del
tos políticos, a partir de denuncias carentes de comportamiento estratégico formulado por la
sustento; pero también cabe la posibilidad de teoría de juegos; y, la teoría del Public Enforce-
que se constituya en una norma emanada del ment of Law. El modelo teórico de disuasión
poder político, con el fin de reducir la proba- criminal de Becker resalta la incidencia de la
bilidad de juzgamiento, mediante el traslado variable probabilidad de sanción p, en la elec-
de la decisión a una instancia administrativa ción de cometer actos de corrupción, la que
de control. se determina por el grado de influencia de la
Las hipótesis planteadas reflejan de forma percepción de los agentes sobre los resultados
ejemplificativa como a partir de un instru- efectivos del funcionamiento del sistema de
mento de política se han modificado los pesos control, en los procesos de detección, juzga-
de influencia de los órganos administrativos y miento y sanción, las que pueden conformar
judiciales de control, situación que puede de- una probabilidad agregada del funcionamien-
velar un comportamiento estratégico frente a to del sistema.
problemas de racionalidad en la formulación El análisis del caso devela los posibles pro-
de los instrumentos de política, o a su vez es- blemas de racionalidad en la implementación
trategias para la evasión del sistema de control. de la política anticorrupción, tales como: el
funcionamiento ineficiente de los sistemas de
control y sanción; la percepción ciudadana
Conclusiones de impunidad en su funcionamiento –factor
reputación–; por normas penales abiertas; por
La investigación no parte de una teoría mo- la falta de proporcionalidad entre el nivel de
ral24. Su objetivo es articular un planteamien- daño que causa el comportamiento y la san-
to metodológico que permita racionalizar el ción aplicable; por normas con sanciones in-
análisis de la política criminal anticorrupción, adecuadas, sea muy bajas o inaplicables, así
a partir de la incorporación de criterios y teo- como también por el endurecimiento de las
normas procesales y penales, sin un nivel óp-
24 Ariel Del Río de Angelis (2007) hace referencia a filósofos
morales que se valen de los elementos de la teoría de juegos
timo de funcionamiento del sistema judicial;
para abordar problemas éticos con un grado de objetividad, así como también, por la creación de barreras
en el que se incluyen a filósofos como Gauthier, y especial- al juzgamiento, en un contexto de judicializa-
mente Harsanyi, respecto de la formulación de una utilidad
social, esto es, maximizar del mejor modo posible las prefe- ción de los conflictos sociales y políticos frente
rencias no de un solo individuo (cada uno de la suya) sino a una Administración de Justicia no consoli-
el bienestar de una sociedad en su conjunto, cuyo punto de
partida se refleja en la obra de Braithwaite, Theory of Games
dada. La aplicación de criterios económicos
as a Tool for the Moral Philosopher (1954). al análisis de la política anticorrupción en el

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Cielito Berenice Olivo Espín

caso de estudio, permite develar la presencia la Corrupción como ámbito de política a


de instrumentos de control que pueden crear partir de la Comisión de Control Antico-
una apariencia de rigor en la formulación de rrupción del Ecuador, 1997 – 2008”. Tesis
política pública, cuando en términos reales Maestría en Políticas Públicas, FLACSO
se generan incentivos perversos en los indivi- Ecuador.
duos, que limitan la capacidad de control y Olivo Espín, Cielito. 2015. Análisis económico
disuasión del sistema, con la consecuente pér- del control anticorrupción a partir del caso
dida del bienestar social. ecuatoriano. Memoria para optar por el
grado de Doctora. Madrid: Facultad de
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Impunidad y disuasión criminal del control anticorrupción en Ecuador: el caso de la Comisión Anticorrupción 1998-2008

Comisión de Control Cívico de la Corrup- retribución, serán reprimidos con prisión de 6


ción. 2008. “Corrupción e impunidad: meses a 3 años y multa de 8 a 16 dólares de
dos caras de la misma moneda”. los Estados Unidos de Norte América, a más
MESICIC. 2013. “Informe del Ecuador sobre de la restitución del duplo de lo que hubieren
el proceso de seguimiento y evaluación de percibido.
la Implementación de la Convención In- Serán reprimidos con prisión de 1 a 5 años
teramericana contra la Corrupción en el y multa de 6 a 31 dólares de los Estados Unidos
país, realizado dentro de la Cuarta Ron- de Norte América, a más de restituir el triple de
da de Análisis de su mecanismo de segui- lo percibido, si han aceptado ofertas o prome-
miento e implementación”. sas, o recibido dones o presentes, bien sea por
Transparencia Internacional. 2007. Encuesta ejecutar en el ejercicio de su empleo u oficio un
Nacional de Corrupción y Buen Gobierno acto manifiestamente injusto; bien para abste-
del Ecuador. http://www.encbg.org. nerse de ejecutar un acto de su obligación”.
“Art. 290.- Los que hubieren compelido por
violencias o amenazas, corrompido por pro-
Normas Jurídicas mesas, ofertas, dones o presentes, a un fun-
cionario público a un jurado, árbitro o com-
Constitución Política de la República del ponedor, o a una persona encargada de un
Ecuador. 1998. (BOE núm 1 de 11 de servicio público, para obtener un acto de su
agosto del 1998). empleo u oficio aunque fuera justo, pero no
Constitución de la República del Ecuador. sujeto a retribución, o la omisión de un acto
2008. (BOE núm 449 de 20 de octubre correspondiente al orden de sus deberes, serán
de 2008). reprimidos con las mismas penas que el fun-
Código de Procedimiento Penal Ecuatoriano. cionario, jurado, árbitro o componedor culpa-
2000. (BOE Suplemento núm 360 de 13 dos de haberse dejado cohechar”.
de enero del 2000). “Art. 291.- No se restituirán al corruptor, en
Código Penal Ecuatoriano. 1971. (BOE Su- ningún caso, las cosas entregadas por él, ni su
plemento núm 147 de 22 de enero de valor; y serán comisadas y puestas a disposi-
1971). ción del Presidente de la República, para que
Código Integral Penal ecuatoriano. 2014. las destine a los establecimientos de asistencia
(BOE núm 180 de 10 de febrero de 2014). pública que juzgue conveniente”.

Anexo I: Código Penal Ecuatoriano. Anexo II: Configuración del delito de peculado.
Delito de cohecho.
Tiene su origen en el derecho romano, con
Art. 285.- Todo funcionario público y toda una concreción precisa respecto de la afecta-
persona encargada de un servicio público que ción de recursos públicos, a partir del Código
aceptaren oferta o promesa, o recibieren dones Toscano y se encuentra tipificado en las prin-
o presentes para ejecutar un acto de su empleo cipales Convenciones Internacionales Antico-
u oficio, aunque sea justo, pero no sujeto a rrupción, ONU y OEA. El delito de peculado

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URVIO 18 • 2016 • pp. 41-60


Cielito Berenice Olivo Espín

consiste en la apropiación que efectúa el su- ha tenido varias reformas en los años 1977,
jeto activo de la infracción, de bienes públi- 1979, 1995, 1999, 2000 y 2014; y, en las que
cos o privados, de efectos que los representen, se han incorporado nuevas conductas a la ti-
piezas, títulos, documentos, bienes muebles pificación penal. Sin embargo para efectos de
o inmuebles, que estuvieren en su poder en la investigación se observa únicamente la va-
virtud o razón de su cargo, que sean del Esta- riación de la figura principal, contenida en el
do, sus instituciones o en las cuales éste tenga artículo 257 del Código Penal vigente hasta el
parte, ejecutada por un funcionario público o 2014, que entra en vigencia del nuevo Código
no, en provecho propio o de un tercero. El de- Integral Penal, por ser el delito con mayores
lito de peculado en la legislación ecuatoriana niveles de juzgamiento.

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URVIO 18 • 2016 • pp. 41-60


DOI: http://dx.doi.org/10.17141/urvio.18.2016.2229

URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad. No. 18, Quito, junio 2016, pp. 61-74
RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador • ISSN 1390-4299 (en línea)
El impacto de la cooperación México-Estados
Unidos en el combate al lavado de dinero
The impact of Mexico-United States cooperation
in the fight against money laundering

Keyla H. Vargas Rojas1


Fecha de recepción: febrero del 2016.
Fecha de aceptación: marzo de 2016.

Resumen
En este artículo se examina la relación entre las Unidades de Inteligencia Financiera de México y los Estados
Unidos para investigar flujos inusuales de dólares en México, así como para detectar una red transnacional de
blanqueadores de dinero entre 2012 y 2014. Se mide el impacto tomando en consideración la evolución de
la cooperación entre las Unidades a través de sus reportes anuales y documentos oficiales, aunado al Informe
Anual del Grupo Egmont de Unidades de Inteligencia Financiera. Se analizan los procesos de intercambio de
información entre ambas instituciones y evalúa su vinculación en la construcción de la inteligencia requerida
para articular órdenes judiciales por lavado de dinero (LD). Se concluye que esta relación ha sido benéfica
para ambos países, ya que existen casos exitosos de detención de criminales por blanqueo de capitales gracias
al trabajo en conjunto de las Unidades.

Palabras clave: lavado de dinero, cooperación internacional, Unidad de Inteligencia Financiera y delin-
cuencia organizada.

Abstract
This article describes the effect of the relationship between Financial Intelligence Units of Mexico and the
United States to investigate unusual dollar inflows in Mexico and to detect a transnational network of
money launderers in 2012, 2013 and 2014. This impact was measured taking into account the evolution
of cooperation between the Units through their annual reports and official documents together with the
annual report of the Egmont Group of Financial Intelligence Units. The process of exchange of informa-
tion between the two institutions is analyzed and its relationship evaluated regarding the construction
of the requires intelligence to articulate arrest warrants and money laundering. It is concluded that the
impact has been beneficial for both countries, as there are successful cases of detention of criminals for
money laundering through the joint work of the Units.

Keywords: money laundering, international cooperation, Financial Intelligence Unit and organized crime.

1 Licenciada en Relaciones Internacionales, egresada de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, adscrita a la Uni-
versidad Nacional Autónoma de México. Actualmente es miembro del equipo de investigación del Colectivo de Análisis
de la Seguridad con Democracia CASEDE A.C. Correo: kharummi@aol.com

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URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad


No. 18 - Quito, junio 2016 - pp.61-74 - © RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
Keyla H. Vargas Rojas

Introducción con el fin de interferir el seguimiento del


flujo de activos por parte de autoridades
La criminalidad transnacional organizada, locales.
entendida dentro de su lógica económica, c) Integración o reconversión. Los delin-
tiene por común denominador la genera- cuentes introducen el dinero a la actividad
ción de utilidades provenientes de actos económica formal para su libre uso por
ilícitos destinadas a mantener a la empresa medio de instrumentos bancarios previa-
criminal en funcionamiento. Sin embargo, el mente creados o la conversión a efectivo.
manejo de dichos recursos requiere de espe- Existen múltiples técnicas utilizadas por
cial atención para evitar que las autoridades las organizaciones criminales para lavar
detecten su procedencia y, por consiguiente, dinero y su elección depende de diferen-
desmantelen a la organización criminal. Los tes factores (vulnerabilidades del sistema
montos deben introducirse cuidadosamente contra el blanqueo de capitales, las nece-
dentro de la economía formal haciendo uso sidades de la organización criminal y los
de métodos legales para guardar y disponer recursos humanos o tecnológicos de los
de dinero en efectivo o electrónico. Este fe- que dispone, entre otros).
nómeno, conocido como lavado de dinero es
el proceso que “procura justificar legalmen- A continuación se mencionan algunos ejem-
te e incorporar al flujo económico capitales plos de las técnicas de lavado de dinero más
de origen ilegal, creando una simulación recurrentes:
transaccional-operativa” que permita ver los
flujos de dinero ilegales como legales (Pérez • Al interior del país
2006, 13). Uso de sistemas bancarios nacionales median-
Este proceso consta de tres etapas, orde- te operaciones de cuentas, casas de cambio,
nadas de tal manera para que se cumpla el títulos de operaciones de crédito, empresas
objetivo último del lavador, hacer uso del ficticias, contratos reales o ficticios, sociedades
dinero sin despertar sospechas de su origen mercantiles.
ilícito: • Fuera del país
Paraísos fiscales, sociedades interpuestas y ofi-
a) Colocación, introducción o prelavado. cinas offshore, contrabando de dinero, socie-
Consiste en ingresar los fondos del delito dades de transferencia de fondos
al sistema financiero para ocultar su verda-
dero origen.
b) Lavado, la estratificación o dispersión. Nocividad del lavado de dinero
En esta etapa los criminales llevan a cabo
transacciones financieras complejas en La nocividad del lavado de dinero compren-
las que participan individuos u organiza- de tres esferas principales: la económica, la
ciones simulando operaciones legítimas. política y la social. En primer lugar, la econó-
Además, una de las metas es facilitar que mica responde a la contaminación de las es-
el dinero se transporte o transfiera a otros tructuras de mercado de los países pues quien
puntos bajo el control de la organización, integra los bienes de origen ilícito a las vías

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URVIO 18 • 2016 • pp. 61-74


El impacto de la cooperación México-Estados Unidos en el combate al lavado de dinero

formales del comercio de bienes y servicios Unidas contra la Droga y el Delito (UNO-
no obedece a una lógica de libre competencia DC) Bo Mathiasen, declaró que el lavado de
que regula a los agentes económicos dentro dinero vinculado con el narcotráfico y otras
de la legalidad (Fabián 2011, 58). Respecto formas del crimen organizado maneja can-
a la segunda esfera, cuando existe un tejido tidades cercanas a los 740.000 millones de
social descompuesto, la impunidad y la co- dólares.
rrupción son dinámicas presentes en la co- Bajo esta lógica, el órgano interguber-
rrelación entre criminales y autoridades. La namental, denominado Grupo de Acción
gravedad deriva en que los últimos pueden Financiera Internacional (GAFI), instó a los
optar por ser laxos en los controles y vigilan- países a crear una Unidad de Inteligencia Fi-
cia. Si son condescendientes, podrán obtener nanciera (UIF), la cual es descrita como un
beneficios a corto plazo, pero para efectos del organismo o dependencia nacional y central
orden verán gradualmente como aumenta la que cumpla las funciones de recibir, analizar
dependencia de la economía a las actividades y canalizar información sobre lavado de di-
que desarrollan sujetos vinculados al ámbito nero y financiamiento al terrorismo. Hasta
criminal. En tercer lugar, la nocividad del la- 2014 se tiene registro de la existencia de 211
vado de dinero es social porque su origen está UIF alrededor del mundo, de las cuales 147
determinado por una serie de situaciones ilí- pertenecen al Grupo Egmont2. Estas unida-
citas, desencadenadas a partir de condiciones des se encuentran divididas por regiones con
tanto de desorden como de descomposición fines de geolocalización, sin embargo, el in-
de las reglas para la convivencia armoniosa tercambio de información no se limita a esta
de las sociedades. división.
Como el dinero es una mercancía que
fluye por todo el mundo a través de sistemas
operativos, que transgreden leyes y cruzan
fronteras nacionales, su proyección es inter-
nacional y no puede ser analizado como un
problema exclusivo de un país determinado
(Nando 2009, 9). Para su erradicación y
combate, en el marco de la Organización de
las Naciones Unidas (Asamblea General de
las Naciones Unidas 2000) se exhortó a los
Estados para que sus “autoridades de admi-
nistración, reglamentación y cumplimiento 2 El Grupo Egmont de Unidades de Inteligencia Financiera
(Grupo Egmont) es una asociación internacional informal
de la ley y demás autoridades encargadas de creada el 9 de junio de 1955 cuyo objetivo es favorecer la
combatir el blanqueo de dinero fueran capa- cooperación mutua entre naciones y la creación de una red
ces de cooperar e intercambiar información a de inteligencia financiera. Esta organización goza de amplio
reconocimiento en el ámbito internacional pues las UIF que
nivel nacional e internacional”. Este razona- la integran están obligadas a ser operativamente indepen-
miento es justificado si se revisan algunas ci- dientes. Esta independencia les permite examinar con efica-
cia los potenciales procedimientos delictivos, independien-
fras globales. Por ejemplo, para 2013, el jefe temente del delito subyacente y la organización que toma
en Colombia de la Oficina de las Naciones la iniciativa de investigación. Ver Egmont Group (2014a).

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Keyla H. Vargas Rojas

Tabla 1. Divisón de UIF del Grupo Egmont por regiones

Región Grupos Regionales No. de UIF

• Caribbean Financial Action Task Force


América 36
• Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica

Asia-Pacífico • Asia Pacific Group on Money Laundering 25

• European Union
Europa Región I 30
• European Economic Area

• Comité de Expertos para la Evaluación de Medidas


Europa Región II Contra el Lavado de Dinero del 22
Consejo de Europa

• Eastern and Southern Africa Anti-Money Launde-


África del Sur y Oriental 7
ring Group
• Eurasian Group on Combating Money Laundering
Región Euroasiática 6
and Financing of Terrorism
Medio Oriente y • Middle East and North Africa Financial Action
11
el Norte de África Task Force

• Intergovernmental Action Group against Money


África Central y Laundering in Central Africa.
10
Occidental • Groupe Intergouvernemental d’Action contre le
Blanchiment de l’Argent en Afrique de l’Ouest

Total 147
Fuente: elaboración propia con datos de Egmont Group (2014a, 7). Nota: Los grupos mencionados en la tabla aglutinan a las UIF de los
países que conforman las diferentes regiones, sin embargo, no existen Unidades de tipo regional.

Tipos de UIF

La incorporación de las UIF en los esquemas cuenta aspectos como las prioridades políti-
de erradiación del lavado de dinero permite cas, presupuestales y tácticas de cada nación,
que los países decidan cuáles serán sus funcio- lo que hace que las agencias especializadas no
nes, responsabilidades o competencias dentro sean iguales en todo el mundo. Existen 4 tipos
de la administración pública y en las estrate- principales de Unidades de acuerdo al Fondo
gias locales de protección del sistema finan- Monetario Internacional (FMI) y el Banco
ciero o combate al crimen organizado. Para Mundial (BM), los cuales se explican a con-
la implementación de una UIF se toman en tinuación:

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El impacto de la cooperación México-Estados Unidos en el combate al lavado de dinero

Tabla 2. Clasificación de las Unidades de Inteligencia Financiera

Tipo de UIF Estructura Características


• Enlace entre el sector financiero y policial
• Actúa como interlocutor de las instituciones
financieras
Integrada como dependencia de un • Puede ser parte de las investigaciones, pero
Administrativo
Ministerio o Secretaría está a disposición de otras instancias judiciales
o policiales.
• Está sujeta a la supervisión directa de las auto-
ridades políticas.
• Aprovecha la infraestructura existente, lo cual
evita la necesidad de crear un organismo total-
mente nuevo.
• Respuesta más rápida de las fuerzas del orden
ante indicios de lavado de dinero y otros de-
litos graves.
• Posibilidad de intercambiar información con
otros organismos policiales nacionales o regio-
nales.
Policial Organismo público no departamental
• Es de carácter más reactivo que preventivo.
• El acceso a los datos de las organizaciones fi-
nancieras (distintos de la notificación de ope-
raciones) por lo general exige que se inicie una
investigación formal.
• Es posible que las instituciones notificadoras
se resistan a divulgar información a un órgano
policial sobre operaciones sospechosas que no
rebasen cierto monto.
• Pueden abrir investigaciones de tipo financie-
ro y ejercitar potestades judiciales.
• Sirven como vínculo entre el sistema financie-
Dentro del poder judicial del Estado
Judicial ro y el poder judicial.
o fiscalía
• La información divulgada pasa directamente
al organismo autorizado para investigar o en-
juiciar.
• Suelen ser resultado de la unión de dos o más
organismos que ya se ocupaban del lavado de
Mixto Cualquiera de las anteriores
dinero, por lo que conjuntan varias caracterís-
ticas de cada modelo.
Fuente: elaboración propia con datos de Grupo del Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional (2004, 12-19).

Contexto bilateral fronteras. En primer lugar, debido a que desde


1994 ambos países junto con Canadá forman
México y Estados Unidos tienen economías es- parte del Tratado de Libre Comercio de Améri-
trechamente ligadas por el flujo constante de ca del Norte (TLCAN) los coloca como socios
personas, mercancías y dinero que atraviesa sus comerciales estratégicos (Notimex 2015). Y en

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Keyla H. Vargas Rojas

segundo lugar, debido a la cantidad de mexica- lación de información entre ambas naciones
nos que trabajan en el país vecino y envían sus concerniente a operaciones y transacciones
remesas a familiares por montos alrededor de que pudiesen derivar en blanqueo de activos.
los 21 mil 597 millones de dólares (Instituto Es importante señalar que en 2003 el Acuerdo
de los Mexicanos en el Exterior 2015). Tanto tuvo que ser modificado ya que no se había
mexicanos como estadounidenses hacen uso clarificado cuáles serían las autoridades com-
de los sistemas financieros de ambas naciones petentes para solicitar y recibir la información
para facilitar el movimiento de dinero de un de cada lado de la frontera, recordando que
país a otro, también para aprovechar los servi- en México la UIF fue creada un año después.
cios bancarios que tanto instituciones privadas
como públicas ofrecen a aquellos empresarios o
comerciantes que se dedican a la exportación e El Financial Crimes Enfocement
importación de bienes y servicios. Network (FinCEN)
Bajo estas condiciones, las UIF se suman
a otros órganos de supervisión de los sistemas Del lado estadounidense se encuentra el Fin-
financieros nacionales y hacen de intermedia- CEN. La unidad fue creada el 25 de abril de
rios entre autoridades de cada país para hacer 1990 durante la administración del expresi-
circular información que atienda las siguientes dente George H. W. Bush. La misión de la
tipologías de lavado: la vinculación del lava- agencia es proporcionar una red interinstitu-
do con estructuras de negocios como grupos cional, con inteligencia y análisis de múltiples
empresariales nacionales o transnacionales, el fuentes en apoyo de la detección, investigación
uso ilícito de empresas legítimas y finalmente, y persecución del LD doméstico e internacio-
el empleo de identidades o documentación nal y otros crímenes financieros por medio de
falsa en la presentación de reportes como en agencias Federales, Estatales, locales y extran-
la identificación de clientes (FIUs in Action jeras de aplicación de la ley (Department of
2015). Estudiar la concatenación entre las the Treasury 1990b). Después de los ataques
UIF es identificar de qué tipo son y cuáles son terroristas de 2001, dentro del Departamen-
sus funciones dentro de las estrategias locales to de Seguridad Nacional se generó la idea
de combate al lavado de dinero a nivel local. de que los servicios de inteligencia financiera
Vale la pena señalar que el primer antece- eran necesarios para hacer frente a los nuevos
dente con el que México y los Estados Unidos riesgos que podían poner en riesgo a los Esta-
establecieron un lazo de coordinación en ma- dos Unidos, como organizaciones criminales
teria de lavado de dinero se remonta a 1994, de carácter transnacional. Fue así que en 2004
bajo el nombre de Acuerdo de Cooperación se creó la Oficina de Terrorismo e Inteligen-
Mutua entre el Gobierno de los Estados Uni- cia Financiera y el FinCEN adquirió el rol de
dos Mexicanos y el Gobierno de los Estados unidad de inteligencia financiera. Debido a su
Unidos de América para el Intercambio de ubicación dentro del Departamento del Teso-
Información Respecto a Transacciones en ro, como Buró oficial adscrito a la Oficina de
Moneda a través de Instituciones Financie- Terrorismo e Inteligencia Financiera, el Fin-
ras para Combatir Actividades Ilícitas. Dicho CEN se considera una UIF de tipo adminis-
acuerdo dispone fundamentalmente la circu- trativa (Department of the Treasury 1990a).

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El impacto de la cooperación México-Estados Unidos en el combate al lavado de dinero

La Unidad de Inteligencia Primer caso de investigación


Financiera de México conjunta: flujos de dólares
en México
Del lado mexicano se encuentra la UIF
perteneciente a la Secretaría de Hacienda y El fortalecimiento de la relación entre las UIF
Crédito Público (SHCP). Fue creada en el inició en 2008, cuando fueron convocadas
año 2004 durante el sexenio de Vicente Fox por diferentes instituciones financieras mexi-
Quesada y como competencias se le asigna canas como la Comisión Nacional Bancaria y
recibir reportes de operaciones financieras, de Valores y la SHCP en vista de la afluencia
analizar las operaciones financieras y eco- inusual de dólares en efectivo hacia México. El
nómicas y otras informaciones relacionadas, Estudio Conjunto de operaciones de dólares
así como diseminar reportes de inteligencia en efectivo entre FinCEN y la UIF se centró
y otros documentos útiles para detectar ope- en explicar cuál era el origen de los dólares en
raciones vinculadas con lavado de dinero o efectivo, además de identificar las zonas en las
financiamiento al terrorismo. Su misión está que se utilizan y las actividades económicas
dirigida a impedir la realización de dichas donde existe mayor afluencia de esta divisa
operaciones, coadyuvar a “castigar a aquellos (Secretaría de Hacienda y Crédito Público
que las realicen así como sustraer la mayor 2012). Se concluyó que el origen del dinero
cantidad de los recursos involucrados a favor se ubicaba en el sector de remesas, turismo y
del Estado” (Secretaría de Hacienda y Crédi- comercio transfronterizo, mismo donde se ge-
to Público 2013). neraban dólares en mayores cantidades.
En concordancia con el Departamento Los resultados de la investigación fueron
del Tesoro, la SHCP también está vincula- utilizados en los diferentes proyectos que em-
da con el eje estratégico de la administración prendió el Gobierno mexicano para articular
mexicana en materia de seguridad. Para ar- la Estrategia Nacional para la Prevención y
ticular el eje “México en Paz” del Plan Na- el Combate al Lavado de Dinero y el Finan-
cional de Desarrollo 2013-2018, se creó un ciamiento al Terrorismo, publicada el 26 de
gabinete especializado en el cual se incluye agosto del 2010. Las medidas que fueron di-
a la SHCP . Además, dentro del Programa señadas a partir de la investigación restringen
para la Seguridad Nacional 2014-2018 (Dia- el ingreso de la moneda en el sistema finan-
rio Oficial de la Federación 2014), se men- ciero cuyo origen lícito no puede ser compro-
ciona que la SHCP junto con la Secretaría de bado. El alcance de las disposiciones fue que
Gobernación, Defensa Nacional, Marina y la en 2011 hubo una disminución del 38% en
Procuraduría General de la República, lleva la captación de dólares en efectivo de Estados
la batuta en la estrategia el Esfuerzo Nacional Unidos a México y un descenso del 35% en
contra el Narcotráfico, lo que mantiene a la los flujos de dólares enviados desde institu-
UIF como una herramienta en el combate a ciones financieras mexicanas. En el siguiente
esta actividad criminal vinculada al lavado de gráfico se observa el descenso progresivo del
dinero. promedio mensual de millones de dólares ex-
portados antes y después de que las Restriccio-
nes de la SHCP fueran implementadas.

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Keyla H. Vargas Rojas

Gráfico 1. Resultados de juzgamiento de casos por la CCCC. Período 1998-2008

2 000

Exportación promedio mensual


Restricciones SHCP para Personas
Exportación promedio mensual
Físicas (Jun 2010)
1 800 1,079 mdd
Exportación promedio mensual
1 600 686 mdd

771 mdd
1 400 Restricciones SHCP para Personas
Morales (Sep 2010)
1 200 Exportación promedio mensual
331 mdd
1 000

800 Exportación promedio


mensual ene-ago
600 378 mdd

400

200

may-11

may-12
mar-08

mar-11

mar-12
ene-07

nov-07
ene-08

nov-08
ene-09

nov-09
ene-10

nov-10
ene-11

nov-11
ene-12
sep-07

sep-08

sep-09

sep-10

sep-11
may-07

may-08

may-09

may-10
jul-07

jul-08

jul-09

jul-10

jul-11

jul-12
mar-07

mar-09

mar-10
Fuente: UIF (2012, 32).

Se observa que entre julio y septiembre del Otra medida adoptada fue la creación de
2010 existe una caída sin precedentes del la figura “comisionista cambiario”4, misma
volumen de dólares exportados de México y que atiende a las realidades comerciales de
Estados Unidos. Cabe destacar que en el mis- las actividades en el norte del país donde el
mo momento son las restricciones a “perso- peso mexicano y el dólar son utilizados indis-
nas físicas”3 las primeras en implementarse. tintamente, por ejemplo hoteles y tiendas de
El segundo descenso precipitado ocurre en- servicios.
tre septiembre y noviembre del mismo año,
con las restricciones a “personas morales”. A
pesar de que los 14 meses siguientes existe La Iniciativa Mérida
un repunte paulatino en la cifra de dólares,
nunca alcanza el tamaño de las exportacio- Merece especial atención la integración de las
nes de moneda antes de las restricciones para UIF en el desarrollo de programas bilaterales
“personas físicas”. de seguridad y de combate al crimen trans-
nacional organizado como fue la Iniciativa
Mérida5, en el cual las agencias se enfocan
3 De acuerdo a la legislación mexicana, para fines fiscales es
necesario definir si una persona lleva a cabo sus actividades 4 Se denomina comisionista cambiario a los comercios que a
económicas como persona física o como persona moral, ya nombre y cuenta de las instituciones puedan efectuar opera-
que las leyes establecen un trato diferente para cada una, y ciones de compra y venta de divisas.
de esto depende la forma y requisitos  para darse de alta en 5 La Iniciativa Mérida es un programa de cooperación es-
el Registro Federal de Contribuyentes (RFC) y las obliga- tablecido el 30 de junio de 2009 entre EEUU, México y
ciones que adquieran.  Una persona física es un individuo Centroamérica. Participan, por el lado de EEUU el Depar-
con capacidad para contraer obligaciones y ejercer derechos, tamento de Estado, el Departamento de Justicia, el Con-
mientras que la persona moral es una agrupación de perso- sejo Nacional de Seguridad, el Pentágono, laCIA, el FBI y
nas que se unen con un fin determinado, por ejemplo, una la DEA; por parte de México, el Congreso de la Unión, la
sociedad mercantil, una asociación civil. Secretaría de la Defensa Nacional, la Armada de México, la

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El impacto de la cooperación México-Estados Unidos en el combate al lavado de dinero

en actualizarse tecnológicamente, por medio recopiló mayor información, salieron a la


de donaciones de software, servicios y aplica- luz datos que reafirmaban sus sospechas de
ciones especializadas así como apoyo en in- enfrentarse a un posible caso de lavado de
fraestructura de hardware y comunicaciones. dinero de alcance transnacional y elevadas
Para efectos de las operaciones de la UIF, la proporciones, ya que desde el año 2010 las
Iniciativa Mérida significó eliminar las difi- entidades realizaron transferencias por un
cultades técnicas que retrasaban y entorpecían monto estimado de $263.1 millones de dó-
la coordinación con su homóloga en Estados lares, equivalentes a poco más de $3,946.5
Unidos. millones de pesos (Egmont Group 2014a).
Una vez la UIF hubo recolectado suficiente
inteligencia para suponer un vínculo con los
Segundo caso de investigación Estados Unidos, contactó al FinCEN para
conjunta: red criminal de lavado presentar el caso.
de dinero A partir de este momento, las UIF se in-
volucran en un proyecto de investigación
A comienzos de 2013, la UIF mexicana re- criminal y llegaron a la conclusión de que las
cibió de diferentes instituciones financieras compañías investigadas conformaban una or-
mexicanas numerosos Reportes de Activi- ganización de lavado de dinero que operaba
dades Sospechosas (SARs, por sus siglas en como una red internacional. De forma con-
inglés) señalando a 43 compañías en México junta, analizaron fuentes tanto privadas como
y en el extranjero cuyo irregular manejo de gubernamentales y lograron obtener datos
clientes y servicios financieros sugería irregu- precisos para poder presentar el caso como un
laridades de procedimiento compatibles con “asunto prioritario” a las dependencias com-
actos, omisiones u operaciones que podrían petentes en la materia tanto en México como
favorecer la comisión del delito de lavado de en Estados Unidos. Entre esta información,
dinero. En respuesta, la UIF dio seguimiento destaca 1) la estimación del monto lavado,
a dichos reportes haciendo uso del Programa que rondaba los 600 millones de dólares y 2)
Computarizado de Análisis de Alto Riesgo las formas en que se había generado el ocul-
(CRACP, por sus siglas en inglés), software tamiento del dinero: uso de recibos falsos y
que da prioridad a los informes con las ca- robo de identidad. Por último, se detectó que
lificaciones de riesgo más altas, que son re- dichas entidades pertenecían a distintos ramos
visadas de manera detallada y oportuna. Los de la industria, como el textil y electrónica, así
resultados arrojados fueron que 5 de las en- como a la rama de los servicios de contabili-
tidades sospechosas tenían niveles de riesgo dad y auditoría.
alarmantes.
En consecuencia, autoridades de ambos
países formaron un grupo de investigación
pocos meses después de la identificación
de los primeros SARs. Conforme la UIF
Secretaría de Seguridad Pública, la Procuraduría General de
la República y el CISEN.

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Keyla H. Vargas Rojas

Gráfico 2. Investigación conjunta FinCEN y la UIF mexicana

Fuente: UIFNota: Programa Computarizado de Análisis de Alto Riesgo (CRACP), Egmont Secure Web (EGW) Plataforma de in-
ternet desarrollada para el intercambio seguro de información entre las UIF, Procuraduría General de la República (PGR), Financial
Crimes Enfocement Network (FinCEN), Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), lavado de dinero (LD).

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El impacto de la cooperación México-Estados Unidos en el combate al lavado de dinero

Vinculación con instituciones la investigación, destacando los puntos clave


de aplicación de justicia para la coordinación entre las UIF, autorida-
des judiciales así como los resultados en un
Los resultados que arrojó la investigación orden cronológico.
permitieron que esta trascendiera a otro ni- En la esfera internacional, fue dentro del
vel, pues el caso desarrollado ya no era de Grupo Egmont donde se reconoció la labor de
naturaleza preventiva, sino reactiva. En otras ambas Unidades como modelo para que otras
palabras, las UIF ya habían completado la UIF cooperen en investigaciones bilaterales.
etapa de estudio y detección de la actividad El premio Best Egmont Case Award 2014, una
criminal llegando incluso a conocer a los ac- iniciativa del Grupo de Trabajo Continuo del
tores que permitían la proyección del delito Grupo Egmont, fue otorgado bajo criterios
en más de un país. Por ello, es que las UIF específicos.
suman en la investigación al Departamento
de Justicia de los Estados Unidos y a su con- a) Demostrar que la función de la UIF era
traparte mexicana, la Procuraduría General relevante para el desarrollo del caso.
de la República, para apoyarlas en la deten- b) Proporcionar evidencia de la colaboración
ción de los criminales. internacional o interno efectivo que con-
Este objetivo se cumplió cuando en octu- tribuyó a un resultado más exitoso.
bre 2013, las autoridades mexicanas lograron c) Ilustrar que la retroalimentación efectiva
recabar la información necesaria para justificar mejora el desarrollo del caso y ha contri-
la detención de 38 individuos involucrados y buido a un resultado positivo.
algunos meses después, en enero del 2014, d) Presentar un alto nivel de complejidad,
detener al líder de la organización así como a que incluye: una variedad de técnicas y
uno de sus colaboradores. Gracias a la misma métodos de lavado de dinero, el tamaño y
investigación, posteriormente se liberaron ór- la fuente de los fondos involucrados, y el
denes de aprehensión contra 4 fugitivos aso- número de agencias y jurisdicciones invo-
ciados a la red, entre los que se concentraba lucradas.
una suma ascendente a los 13.4 millones de
dólares, distribuidos en 39 cuentas de 7 ban- Dicho lo anterior, queda esclarecer cuáles fue-
cos así como 2 propiedades (Egmont Group ron las acciones concretas de las UIF respec-
2014a, 32). El resumen de la investigación to a la prevención, detección y combate a la
arrojó que las entidades proveían de servicios organización criminal, resumidas en la tabla
de lavado de dinero a más de 1500 beneficia- siguiente:
rios de 42 países. Inclusive, el FinCEN pudo
rastrear dentro de los beneficiarios a grupos
vinculados al narcotráfico (Department of
the Treasury 2014), motivo por el que el caso
permanece abierto y bajo investigación en los
Estados Unidos. A modo de esquema, la Ilus-
tración expone el proceso de crecimiento de

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Keyla H. Vargas Rojas

Tabla 3. Acciones desarrolladas por la UIF mexicana y el FinCEN

Agencia responsable Acción


Presentación de un caso de investigación que compete a dos países de forma directa y a 40 de
UIF
forma indirecta.
UIF-FinCEN Intercambio de información a través de la Egmont Secure Web.
UIF-FinCEN Detección de una organización de lavado de dinero transnacional.
UIF-FinCEN Identificación del modus operandi de la organización criminal (red).
UIF-FinCEN Obtención de estimaciones de los montos lavados.
UIF-FinCEN Detección de sectores industriales involucrados en el proceso de lavado.
Inclusión de autoridades judiciales en la investigación (Departamento de Justicia y Procuraduría
UIF-FinCEN
General de la República).
UIF-FinCEN Aportación de pruebas que permitieran la detención y búsqueda de criminales.
FinCEN Vinculación de la red con otros grupos criminales.

Fuente: elaboración propia.

Conclusiones las UIF tiene enorme valor para que otras de-
pendencias dentro de la red interinstitucional
En materia de prevención, tanto la unidad de seguridad de cada nación puedan agilizar
mexicana como la estadounidense participa- sus propias investigaciones.
ron activamente tanto en el fortalecimiento El caso permite observar vínculos crimi-
del marco normativo como en el desarrollo de nales internacionales que inadvertidos hasta
estudios estratégicos para descifrar patrones que el FinCEN y la UIF de forma conjun-
de comportamiento de grupos criminales. A ta dieron seguimiento a las acciones evasi-
partir de la inteligencia generada no solo se vas que las empresas sospechosas. Gracias a
implementaron restricciones en el ingreso y esta labor se abandonó el supuesto de que
egreso de dólares entre México y Estados Uni- las operaciones detectadas eran eventos ais-
dos, también se identificaron los sectores de lados y se determinó que el modus operandi
las economías con mayor riesgo de ser aprove- de los criminales seguía la lógica de una red
chados por los lavadores. transnacional. Cuando el FinCEN se unió a
En cuanto a detección del lavado y com- la investigación de la UIF se agilizó el pro-
bate a grupos criminales, el impacto de la ceso que conllevó a detener las actividades
investigación entre las UIF fue significativo de la red. Es decir, que de manera aislada,
en razón de que coadyuvaron a la construc- la UIF tardó 3 años en detectar la actividad
ción una averiguación suficientemente sólida criminal y el FinCEN ignoraba su existencia.
como para justificar la detención de los res- Sin embargo, de manera conjunta las UIF
ponsables, competencia que recae fuera de las tardaron 9 meses en llevar a cabo la articula-
facultades de las UIF. El hecho de que el caso ción de una investigación sólida que devino
siga siendo investigado en los Estados Unidos en la posterior detención de los criminales.
por su relación con operaciones de grupos A pesar de los avances observados para los
dedicados al narcotráfico también respalda la dos países con la articulación de las UIF en
afirmación de que la inteligencia generada por sus sistemas de prevención y erradicación de

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El impacto de la cooperación México-Estados Unidos en el combate al lavado de dinero

lavado de dinero, aún quedan áreas de coo- de protocolos conjuntos, intercambio de


peración que requieren atenderse. información financiera y judicial. La con-
Los efectos para la relación de cooperación secuencia a nivel local fue elevar el nivel
de las UIF de los casos de estudio expuestos de la UIF mexicana dentro del esquema
en los niveles de confianza dan cuenta de que de seguridad.
existen las condiciones para que las unidades
puedan desarrollar agendas comunes de coo- Tan solo hace falta ver las delcaraciones reali-
peración estratégica y con ello profundizar en zadas en 2015 por el subprocurador general de
el combate bilateral al crimen organizado. De Estados Unidos, Kenneth Blanco, quien señaló
acuerdo al National Antimoney Laundering que la suma de dinero lavado por organizacio-
Risk Assessment, 28 de las 67 organizaciones nes criminales entre su país y México, asciende
dentro de la lista objetivo de la lista de Miem- los 29 mil millones de dólares (Cardoso 2015).
bros Clave  de  Organizaciones  Delictivas6 Formalmente, no existe aún una estrategia clara
(CPOT por sus siglas en inglés) tienen su base en la cual se entrelacen ambas unidades en el
de operación en México. Si a lo anterior se seguimiento de dichas organizaciones. He aquí
suma la información que se tiene sobre los vo- un espacio de oportunidad para ambos gobier-
lúmenes de dinero lavado de las organizacio- nos de fortalecer sus esquemas de seguridad y
nes dedicadas al narcotráfico que operan tanto acotar a las organizaciones criminales que ope-
en Estados unidos como en México, se verá la ran en ambas partes de la frontera.
necesidad de una atención focalizada en esta
coyuntura por parte de ambos gobiernos.
El impacto de los casos recuperados de coo- Bibliografía
peración entre las UIF de México y los Estados
Unidos puede medirse de dos formas diferen- Asamblea General de las Naciones Unidas.
tes, pero que al final, confluyen en el fortaleci- 2000. “Convención de las Naciones Uni-
miento de los esquemas bilaterales de seguridad das contra la Delincuencia Organizada
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presión del lavado de activos desde una óp-
6 La Consolidated Priority Organization Target es una lista tica internacional comparada”, en Memoria
seleccionada por diferentes agencias de los Estados Unidos del Seminario Internacional sobre Corrup-
donde se señalan las organizaciones internacionales de trá-
ción y Lavado de Dinero, Fernando Pérez
fico de drogas y lavado de dinero objetivos más prolíficas
en el mundo. Noriega, Lucero Ramírez León (coord.),

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Keyla H. Vargas Rojas

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Misceláneo
Urvio, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad, No. 18, Quito, junio 2016, pp. 76-89
RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador • ISSN 1390-4299 (en línea)
DOI: http://dx.doi.org/10.17141/urvio.18.2016.2228

Fuerzas intermedias y lucha contra el tráfico de


drogas: el caso de la Gendarmería en Argentina
Intermediate forces and the fight against drug
trafficking: the case of Gendarmerie in Argentina

Jorge Battaglino1
Fecha de recepción: diciembre del 2015.
Fecha de aceptación: marzo de 2016.

Resumen
Este artículo analiza la dinámica de la intervención de una fuerza intermedia como la Gendarmería
Nacional (GN) de la Argentina en la lucha contra el tráfico ilegal de drogas. El argumento principal
es que la elevada percepción de inseguridad y los límites legales a la participación de los militares han
favorecido el creciente empleo de la GN. Asimismo, el trabajo identifica los desafíos y limites que
enfrenta la intervención de esta institución. En particular, se examina su despliegue en las provincias
del norte de la Argentina (Jujuy, Salta, Formosa, Corrientes y Misiones), como así también en el
área metropolitana de la ciudad de Buenos Aires. El artículo se fundamenta en un extenso trabajo
de campo en las provincias del norte del país que incluyó un total de 90 entrevistas a los actores
involucrados.

Palabras clave: Gendarmería Nacional, narcotráfico, fuerzas armadas, fuerzas intermedias, nuevas
amenazas.

Abstract
This article analyzes the dynamics of the intervention of an intermediate force such as the Gendar-
meriaNacional (GN) of Argentina in the fight against illegal drug trafficking. The main argument is
that a high perception of insecurity and the legal limits to the involvement of the military in internal
security have led to the increasing use of the GN. The article also identifies some of the key chal-
lenges as well as the limits faced by the intervention of the GN. In particular, the deployment of
the GN in the northern provinces of Argentina (Jujuy, Salta, Formosa, Corrientes and Misiones), as
well as in the metropolitan area of Buenos Aires will be examined. The article is based on extensive
fieldwork in the northern provinces of Argentina that included 90 interviews with key actors.

Keywords: Gendarmerie, drug trafficking, armed forces, intermediate forces, new threats.

1 PhD en Política Latinoamericana de la Universidad de Essex. Se desempeña como investigador del CONICET y
profesor de la Universidad Torcuato Di Tella. Esta investigación fue llevada a cabo gracias al apoyo de la beca posdoc-
toral “Drugs, Security and Democracy Fellowship” otorgada por el Social Science Research Council en 2014. El artículo
se benefició de los valiosos comentarios de los asistentes al seminario organizado por el programa del SSRC “Drugs,
Security and Democracy” llevado a cabo en la ciudad de Medellín en julio de 2014, así como de las recomendaciones
de los dos evaluadores anónimos. Agradezco el extraordinario trabajo de asistencia de investigación llevado a cabo por
Marcelo Mangini. Correo:jbattaglino@utdt.edu

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URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad


No. 18 - Quito, junio 2016 - pp.76-89 - © RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
Fuerzas intermedias y lucha contra el tráfico de drogas: el caso de la Gendarmería en Argentina

La Gendarmería Nacional (GN) es una fuerza leza transnacional y su grado de violencia y


intermedia que ha experimentado un proceso sofisticación, requieren de fuerzas que combi-
de expansión de sus misiones en los últimos nen características policiales y militares, que
años. Aunque la custodia de las fronteras y de dispongan de equipamiento más pesado (he-
objetivos estratégicos fueron sus misiones ori- licópteros, aviones) y de una organización y
ginales; desde la restauración de la democracia disciplina de cuerpo que las fuerzas policiales
en la Argentina, en 1983, se la ha utilizado no poseen (Lutterbeck 2004). Estas capacida-
crecientemente en el mantenimiento del or- des convierten a las fuerzas intermedias, gra-
den público y en la represión del tráfico ile- cias a su naturaleza hibrida, en las más adecua-
gal de drogas (Salles Kobilanski 2012). Esta das para enfrentar el complejo fenómeno del
expansión de misiones ha contribuido a un crimen organizado contemporáneo.
crecimiento exponencial de la organización En este sentido, las fuerzas intermedias
que pasó de 17500 efectivos en 2002 a 36000 están en condiciones de enfrentar aquellos fe-
en 2014, un incremento de 100% (Gobier- nómenos que rebasan la capacidad preventiva
no de la Argentina 2011). Desde el 2006 se y reactiva de las fuerzas policiales y, al mismo
han llevado a cabo extensos operativos como tiempo, están en condiciones de contribuir a
el Operativo Centinela en el 2006 (refuerzo la defensa nacional. Su estatus intermedio las
nacional de la seguridad ciudadana), Cintu- habilita para enfrentar misiones que deman-
rón Sur en 2011 (despliegue en la zona sur dan un empleo más acentuado de la coerción.
de la Ciudad de Buenos Aires), Escudo Nor- Además, el entrenamiento que reciben como
te del 2011 (despliegue en las provincias del así su despliegue les permite llevar a cabo mi-
norte del país), Acceso CABA 2011 (control siones con un nivel de autonomía mayor al de
de los accesos a la Ciudad de Buenos Aires), una fuerza policial, ello favorece una mayor
Operativo Vigía del 2011 (control de centros capacidad de despliegue en zonas fronterizas o
neurálgicos del transporte público). En estos alejadas de los centros urbanos. Se trata de or-
operativos han participado un promedio de ganizaciones que disponen de una formación,
12000 gendarmes por año. equipamiento y doctrina que las habilita para
Cabe mencionar que el empleo creciente intervenir en aquellos fenómenos de violencia
de fuerzas intermedias es un fenómeno que que exceden las capacidades policiales pero
se ha generalizado en los países europeos y en que tampoco pueden ser clasificados como
Estados Unidos, donde están siendo crecien- conflictos armados.
temente utilizadas para enfrentar a las deno- El principal objetivo de este trabajo es
minadas nuevas amenazas (Lutterbeck 2004). analizar la dinámica de la intervención de
El análisis de las causas de la intervención de una fuerza intermedia como la GN en la lu-
fuerzas intermedias en los casos de EEUU y cha contra el tráfico ilegal de drogas en la Ar-
algunos países europeos puede ofrecer algún gentina desde el año 2002, cuando comien-
indicio respecto a las razones que han propi- za su utilización regular con este propósito.
ciado su participación en el caso de la Argenti- En particular, se examinará el despliegue de
na. Los líderes políticos y la sociedad perciben la GN en las provincias del norte de la Ar-
que el narcotráfico y el crimen organizado en gentina (Jujuy, Salta, Formosa, Corrientes y
general, son fenómenos que por su natura- Misiones), como así también en el área me-

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Jorge Battaglino

tropolitana de la ciudad de Buenos Aires. La tiempo, pone en evidencia sus limitaciones a


relevancia del tema radica en la creciente im- medida que esta se incrementa.
portancia que ha adquirido el fenómeno del La lógica e inercia organizacional de una
narcotráfico en la Argentina y en el hecho de institución cuyo rol principal no ha sido la lu-
que el análisis de la intervención de la GN cha contra el narcotráfico, pero que encuentra
puede contribuir a comprender las ventajas y en esta misión un espacio de fortalecimiento
limitaciones que trae aparejada el despliegue material y simbólico, es un aspecto que com-
de una fuerza de este tipo. Cabe destacar que promete la legitimidad y eficacia de su acción.
la Argentina posee una combinación única Así, la GN se encuentra atrapada entre la ten-
de factores que la transforman en un caso tación del crecimiento institucional continuo
testigo para la investigación de este tema. Se y el desafío de adaptarse a las necesidades de
trata del país de América Latina con mayor una misión no tradicional que le garantiza
consumo per cápita de cocaína (United Na- recursos, equipamiento y expansión para los
tions Office on Drugs and Crime 2015), que próximos años. El tema tiene una enorme
además posee las fuerzas intermedias de ma- trascendencia política para la Argentina ya
yor importancia y donde el marco legal im- que, en paralelo a esta expansión de misio-
pide la participación de las fuerzas armadas nes de la GN, existen sectores de la política
en el mantenimiento de la seguridad interna. que demandan que los militares intervengan
Además, el análisis del rol de una fuerza in- en la lucha contra el narcotráfico, a pesar de
termedia en la lucha contra el tráfico ilegal de que la legislación prohíbe tal posibilidad (La
drogas no ha sido estudiando en la región, a Nación 2015). Es por ello que el análisis de
diferencia de la participación de las policías y la participación de la GN en la lucha contra
fuerzas armadas que ha recibido mucha más este fenómeno puede tomarse como uno de
atención como objetos de estudio. los principales indicadores para anticipar el
Cabe destacar que la intervención de la posible ingreso de los militares: una exitosa y
GN ha sido funcional no solo a su expansión eficaz acción de esta fuerza se convertiría en la
organizacional sino también ha permitido a principal barrera contra el empleo de las fuer-
los sucesivos gobiernos satisfacer, al menos zas armadas.
parcialmente, la demanda pública por seguri- El artículo indaga sobre las causas de la in-
dad sin tener que acudir a los militares (Salles tervención de la GN analizando en particular
Kobilanski 2012). Sin embargo, esta conve- el impacto de dos variables principales: a) el
niencia generalizada puede verse comprome- nivel de percepción de inseguridad y b) el tipo
tida si la intervención continúa sin que la GN de marco normativo del área. El argumento
lleve a cabo los procesos de adaptación orga- principal es que la elevada percepción de inse-
nizacionales necesarios. La convergencia de guridad y los límites legales a la participación
intereses no está exenta de dilemas, desafíos de los militares en misiones de seguridad in-
y peligros. En otras palabras, la demanda por terna han favorecido el creciente empleo de la
seguridad de la sociedad argentina ha sido una GN. Asimismo, el trabajo identifica algunos
de las principales causas de la participación de los desafíos centrales como así también los
creciente de la GN que, en lo esencial, es bien- límites que ha enfrentado la intervención. El
venida por la institución pero que, al mismo trabajo se organiza en una primera sección

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Fuerzas intermedias y lucha contra el tráfico de drogas: el caso de la Gendarmería en Argentina

donde se efectúan algunas apreciaciones res- Con relación a la inaccesibilidad de las es-
pecto al trabajo de campo con fuerzas de segu- tadísticas y como estrategia para suplirlas, se
ridad que puede ser de utilidad para aquellos decidió llevar a cabo una reconstrucción de los
investigadores interesados en analizar fuerzas datos sobre procedimientos antidroga a par-
intermedias. La segunda parte examina las dos tir de la revisión sistemática de los principales
variables causales de la participación, mientras diarios locales de los años 2013 y 2014. La
que en la sección final se analizan los facto- tarea consistió en construir una base de datos
res que limitan o afectan la intervención de a partir de la identificación de noticias de pro-
la GN. cedimientos antidrogas y de la sistematización
de la información que contenían2. En parti-
cular, respecto a cantidad de droga incautada,
Consideraciones metodológicas el número de detenidos, si hubo víctimas y/o
para el estudio de fuerzas violaciones a los derechos humanos, el origen
intermedias del procedimiento, es decir, si fue una opera-
tivo de control o una tarea de inteligencia; en-
La investigación sobre la participación de tre otros ítems que fueron volcados en la base.
la GN en la lucha contra el tráfico ilegal de Aunque esta metodología presenta limitacio-
drogas se basó en un trabajo de campo de al- nes3, fue de gran utilidad para construir una
rededor de cinco meses llevado a cabo en las radiografía de esta problemática. Dada la au-
provincias donde mayor ha sido su despliegue. sencia de estadísticas y publicaciones respecto
Allí se recopilaron fuentes primarias y secun- de la intervención de las fuerzas intermedias
darias y se efectuaron más de 90 entrevistas: en la lucha contra el narcotráfico, los datos re-
27 a gendarmes, 13 a funcionarios de los mi- levados en la base constituyen un aporte para
nisterios de seguridad nacional y provinciales, la caracterización, dimensionamiento y análi-
11 a militares desplegados en la frontera norte sis de este fenómeno.
y 47 a pobladores que habitan en la zona de Cabe aclarar que para mejorar la fiabili-
despliegue. Un total de 22 entrevistas fueron dad de los datos obtenidos, se compararon
efectuadas en el área metropolitana de Buenos las tendencias que surgieron del análisis de la
Aires (AMBA): 36 en la Provincia de Salta, base propia con la información provista por
19 en Jujuy, 4 en Formosa, 7 en Corrientes los entrevistados. De allí surgió que no existen
y 10 en Misiones. La recopilación de fuentes diferencias substanciales entre la información
primarias enfrentó dos problemas principales. recopilada y las estadísticas oficiales no publi-
El primero consistió en la enorme dificultad cadas. La divergencia más importante es en el
para obtener fuentes primarias y secundarias número de operativos, mientras que la base
debido a la ausencia de estadísticas de acceso identificó un total de 178 intervenciones de
público sobre procedimientos antidrogas tan-
to a nivel nacional como provincial. Las entre- 2 Los periódicos relevados fueron El Libertador de Corrien-
vistas que se llevaron cabo tanto a gendarmes tes, Primera Edición y el Territorio de Misiones, Nuevo Diario
como a funcionarios nacionales y provinciales y el Tribuno de Salta y Todo Jujuy de Jujuy.
3 Es importante aclarar que la naturaleza del registro perio-
confirmaron tanto la existencia de estadísticas dístico, diferencias en las fuentes y en los criterios editoriales,
como la imposibilidad de acceder a ellas. impone algunas limitaciones para un análisis comparativo.

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la GN en 2013 y 2014, los entrevistados de la (Kessler 2009; Dammert 2001). Tal percep-
fuerza manifestaron que la cifra es al menos el ción, asimismo, se complementa con la idea
doble, aunque enfatizaron a menudo el carác- de que los delitos han crecido en los últimos
ter secreto de tal información. años y que además son más violentos como
Cabe mencionar que es notoria la ausencia consecuencia de la llegada del narcotráfico al
de libros, artículos o de material oficial tan- país (Kessler 2009). Pero además, la “percep-
to del gobierno nacional, provincial e inclu- ción de inseguridad” también se vincula con
so de la propia GN sobre la participación de la ineficacia y la corrupción policial (Gonzalez
esta fuerza en la lucha contra el narcotráfico. 2005; Dammert y Malone 2002). No es ca-
La única información disponible, muy escasa sual entonces que la enorme y para muchos
por cierto, se puede encontrar en las páginas desproporcionada, demanda social por “segu-
oficiales del Ministerio de Seguridad y de la ridad” haya desencadenado distintas respues-
Gendarmería. En los ministerios provinciales tas de parte del Estado. Una de ellas ha sido el
no existe información o datos sobre el tema. creciente empleo de la GN tanto en su zona
Cabe especular que la falta de datos públicos tradicional de despliegue, las fronteras, como
y de publicaciones es un indicador de las di- así también en los principales centros urba-
ficultades que experimenta la GN para adap- nos, en particular, en el área metropolitana de
tarse a la nueva misión. Ello también pudo la ciudad de Buenos Aires habitada por más de
constatarse en el hecho de que las institucio- trece millones de habitantes en una superficie
nes responsables de la formación de oficiales, de dos mil kilómetros cuadrados.
no han incorporado de manera sistemática en La percepción de inseguridad también se
sus programas de estudio y de investigación la incrementa por el impacto de las crisis experi-
nueva misión. Así, las áreas de docencia e in- mentadas por las policiales provinciales a raíz
vestigación no han producido la masa crítica del incremento de la delincuencia organizada
de recursos humanos necesarios para la pro- (Gonzalez 2005; Sain 2015). Ello ha puesto
ducción de conocimiento en el área del tráfico de manifiesto su falta de entrenamiento y del
de drogas. equipamiento necesarios para enfrentar una
problemática que excede sus competencias y
capacidades pensadas para confrontar los pro-
Causas de la intervención blemas derivados de la delincuencia clásica.
Además, tales fuerzas son muchas veces perci-
La creciente percepción de inseguridad bidas como corruptas y autoritarias por la so-
ciedad, lo que establece una brecha insalvable
La inseguridad pública es el tema que más que dificulta la búsqueda de soluciones a un
preocupa a la sociedad argentina según se problema que requiere de una fuerte interac-
desprende de los estudios de opinión pública. ción entre las fuerzas policiales y la sociedad
Las estadísticas que se han publicado sobre el civil (González 2005).
tema son innumerables. La denominada “per- Asimismo, la intervención es percibida
cepción de inseguridad” o “tasa de victimiza- como algo inevitable en un contexto donde
ción” es muy elevada en todas las encuestas existe una fuerte demanda por la seguridad.
realizadas, no menor al 65% de la muestra Un 92% de los entrevistados durante la in-

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Fuerzas intermedias y lucha contra el tráfico de drogas: el caso de la Gendarmería en Argentina

vestigación como así también la totalidad de en muchos países se contempla también la


las fuentes primarias y secundarias consulta- participación de los militares en misiones de
das sostienen que la intervención de la GN seguridad interna. La Argentina ha estable-
se relaciona con el aumento de la percepción cido, desde 1988, una clara distinción entre
de inseguridad y el hecho de que las policías defensa externa (reservada para las Fuerzas Ar-
ha sido sobrepasadas por este fenómeno o son madas) y seguridad interior (ámbito de acción
demasiado corruptas para enfrentarlo. De las de las fuerzas de seguridad como las policías o
entrevistas realizadas se desprende que esta las fuerzas intermedias). El marco legal de la
percepción difiere en relación a la zona de defensa y seguridad que existía cuando se res-
despliegue de la fuerza. En las zonas urbanas tablece la democracia en 1983, la Ley 16.970
del AMBA predomina la sensación de insegu- de Defensa Nacional sancionada en 1966, fu-
ridad como la principal causa de la presencia sionaba las cuestiones de defensa externa y de
de los gendarmes. En cambio, en las áreas ru- seguridad interna bajo el paraguas de la seguri-
rales, donde la percepción de inseguridad es dad nacional (López 1994). A partir de 1973,
menor, el despliegue no afecta en lo absoluto este marco normativo estableció las bases para
la cotidianeidad de los lugareños ya que están una creciente participación de las Fuerzas Ar-
habituados a la presencia de la GN. madas en la lucha antisubversiva que culmina-
La decisión de asignar a la GN es amplia- ría con el golpe de Estado de 1976.
mente valorada tanto por la sociedad como Raúl Alfonsín, el primer presidente de la
así también por los gobiernos provinciales. nueva democracia argentina, consideraba que
Un 98% de los pobladores entrevistados en la el marco normativo heredado del régimen mi-
frontera norte del país la define como positi- litar había legitimado la intervención de los
va, este porcentaje en las zonas urbanas cae al militares en la política doméstica. Por ello, la
69%. En ambas zonas, rurales y urbanas, se exclusión legal de tal posibilidad era juzgada
prefiere la presencia de la GN a la de la poli- como el mejor recurso para privar a las Fuer-
cía. Estos porcentajes no difieren demasiado zas Armadas de aquellas herramientas legales
de los mencionados por oficiales de la GN y que en el pasado habían permitido proyectar
por funcionarios de los ministerios de seguri- su influencia y poder en períodos de crisis po-
dad provinciales que poseen encuestas que no lítico-social (Alfonsín 2004). De esta manera,
son de acceso público. se intentaban eliminar las condiciones legales
que habían favorecido niveles crecientes de in-
tervencionismo militar que culminaron en los
Un marco normativo desfavorable a la golpes del Estado. La sanción de la Ley de De-
intervención militar fensa Nacional en 1988 (Ley 23.554) repre-
sentó la derogación formal de la Doctrina de
El marco legal de la defensa y seguridad de la Seguridad Nacional. La ley estableció que
un Estado regula el ámbito de empleo de las la defensa del Estado está dirigida a repeler
Fuerzas Armadas. Las leyes de defensa, o de o disuadir agresiones de origen externo (Go-
seguridad, establecen generalmente que la mi- bierno de la Argentina 1988). Así, las Fuerzas
sión principal de aquellas es la defensa contra Armadas perdieron la prerrogativa legal de
amenazas o agresiones externas; sin embargo, participar en misiones de seguridad interna;

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su ámbito de empleo se limitó exclusivamente y de una organización y disciplina de cuerpo


a la defensa exterior frente a amenazas de ori- que las fuerzas policiales no poseen. Sin em-
gen estatal. bargo, su función y formación así como su
Este cambio normativo ha tenido como despliegue las ubica mucho más cerca de una
principal consecuencia que el Estado argen- fuerza policial, en términos tanto de la in-
tino reforzara progresivamente a las policías tensidad de la violencia que pueden utilizar,
y a las fuerzas intermedias como respuesta a que es muy limitada, como así también de las
la delincuencia común y el crimen organiza- funciones que cumplen, que las colocan en
do. Esto nos llama a reflexionar respecto a los contacto e interacción permanente con la po-
tipos de fuerza que un Estado puede desple- blación civil.
gar cuando enfrenta el tráfico ilegal de drogas En América Latina existe una tendencia cre-
(Frederic 2008). En este sentido, los estados ciente al empleo de los militares para combatir
disponen de un abanico de organizaciones ar- el tráfico ilegal de drogas (Ramírez, Stanton y
madas. En la mayor parte de los casos existen Walsh 2005; Fondevila, Quintana-Navarrete
tres tipos principales: las policías, las fuerzas 2015). Cabe mencionar que tal experiencia ha
intermedias y las fuerzas armadas. Uno de los tenido un enorme costo social y que, además,
principales aspectos que las distingue es el ni- no ha sido eficaz para detener el fenómeno.
vel de violencia que puede desplegar que se El caso de México es paradigmático al respec-
encuentra relacionado, a su vez, con el tipo de to (Shirk y Walman 2015). El incremento en
función que deben cumplir y con la naturale- las tasas de crimen y en las violaciones a los
za de los actores que enfrentan. derechos humanos ha sido una consecuen-
Las policías han sido generalmente organi- cia directa de la política de militarización del
zadas con el propósito de administrar la fuerza combate a las drogas llevada a cabo desde el
y mantener el orden en el plano interno. Por 2006 (Human Rights Watch 2015). La in-
ello, el empleo de la fuerza policial se encuen- tervención de las fuerzas armadas ha sido
tra limitado por el hecho de que su principal masiva. Alrededor de 96.000 efectivos fueron
función es proteger a los ciudadanos y repri- desplegados para realizar tareas de seguridad
mir actos delictivos que puedan afectar sus pública, entre ellas detenciones, patrullajes,
vidas y bienes. En el otro extremo se encuen- inspecciones y cateos. El efecto principal de
tran las fuerzas armadas, una institución fun- esta intervención ha sido un incremento ex-
cionalmente especializada en la preservación ponencial de la violencia que ha llevado la tasa
de la soberanía y la integridad territorial que de homicidios de 8 por cada 100.000 habi-
en esencia se organiza y entrena para resguar- tantes en 2007 a 24 en 2013 (Human Rights
dar al Estado de agresiones de origen externo Watch 2015; Madsen 2012).
y estatal. Su principal función es enfrentar a Aunque México puede resultar un caso
fuerzas militares de otros estados y, por ello, extremo, la intervención de los militares en
están organizadas para desplegar la máxima gran parte de los países de la región ha resulta-
intensidad de violencia disponible. Las fuerzas do en toda clase de excesos, arbitrariedades y
intermedias, en cambio, combinan caracterís- violaciones a los derechos humanos (Ramírez,
ticas policiales y militares: disponen de equi- Stanton y Walsh 2005). Los militares carecen
pamiento más pesado (helicópteros, aviones) de la doctrina, capacitación, entrenamiento,

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organización y equipamiento para el desarro- cho de que la GN es la “última barrera” antes


llo de ese tipo de misiones. Además, no está de la intervención de las fuerzas armadas que
comprobado que la misma haya favorecido la es definida como “ineficaz”, “desproporcio-
reducción del tráfico de drogas. Al panorama nada” y “peligrosa”.
desolador que deja la intervención, se suma Esta evaluación a menudo es relacionada
el hecho de que la participación militar en con la experiencia internacional, siendo men-
la seguridad interna favorece su desprofesio- cionados los casos de México, Colombia y de
nalización. Cuando los militares intervienen algunos países de América Central. Asimismo,
en cuestiones domésticas, distorsionan su fin la casi totalidad de los funcionarios señalaron
primario y principal. que además de que la intervención de los mi-
La distorsión aumenta cuando esa in- litares no “resolvería el problema del tráfico de
tervención consiste en el combate contra el drogas”, existen límites institucionales y cultu-
narcotráfico o el crimen organizado debido rales que ponen un serio obstáculo a esa posibi-
a la modificación progresiva de su entrena- lidad. A la menciona Ley de Defensa se sumaría
miento, despliegue, organización, doctrina y entonces, lo que se ha definido como cultura
tipo de armamento. Ello favorece un proce- antimilitarista de la sociedad argentina que
so de desprofesionalización o, en otras pala- rechaza de plano cualquier tipo de rol interno
bras, de pérdida progresiva de sus capacidades para las fuerzas armadas (Battaglino 2013). Por
materiales y habilidades profesionales para el todo ello, la intervención de la GN concita un
conflicto bélico convencional. Enfrentar a la generalizado apoyo político y social.
delincuencia organizada no es lo mismo que
hacerlo con una fuerza armada equipada con
medios clásicos: tanques, aviones o buques. Dilemas y desafíos de la
En suma, una fuerza militar organizada y en- intervención de la Gendarmería
trenada para combatir al crimen organizado Nacional
pierde progresivamente su capacidad para el
conflicto convencional de origen estatal (Ro- La participación de la GN en la lucha contra
jas Aravena 2008). el tráfico ilegal de drogas ha puesto en eviden-
Como se mencionará más adelante, la cia las dificultades que experimenta una fuerza
participación de la Gendarmería tiene un intermedia cuando debe desempeñar nuevos
alto nivel de apoyo entre todos los entrevista- roles, en particular, aquellos no estrictamente
dos. Un 97% de los funcionarios de los mi- relacionados con su misión original. Existen
nisterios de seguridad nacional y provincial seis aspectos que pueden afectar la legitimi-
y un 98% de los pobladores que habitan en dad y viabilidad futura de la intervención de
la zona de despliegue consideran que la pre- la GN: a) la escasa importancia atribuida a la
sencia de la GN es positiva y que contribuye inteligencia criminal; b) las dificultades del
a mejorar la seguridad de la zona. Aunque despliegue de los gendarmes en zonas urbanas,
ambos grupos coinciden en señalar que el c) la falta de coordinación entre los niveles fe-
despliegue de la GN favorece una mejora de deral y provincial, d) la falta de adaptación del
la situación de la seguridad pública, los fun- sistema de formación de los gendarmes y e) la
cionarios públicos suelen mencionar el he- corrupción.

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Uno de los principales desafíos que en- Otro tema que apareció recurrentemente
frenta la intervención de la GN es la falta en las entrevistas a pobladores y gendarmes
de adecuación de sus rutinas y procedimien- fue que la presencia de la GN en las zonas ur-
tos organizacionales al nuevo tipo de misión banas, principalmente en el AMBA, es pro-
asignada. Ello queda en evidencia cuando se blemática al generar resistencias y rechazo de
analiza el origen de los operativos que han sus habitantes. La participación de la GN en
llevado a cabo. Un total de 133 operativos el AMBA (en los llamados operativos Cen-
(75% del total) se iniciaron en el contexto de tinela y Cinturón Sur) ha sido más criticada
procedimientos de rutina (controles vehicula- por los residentes de barrios humildes, sobre
res, acciones de patrullaje). Mientras que 40 todo por situaciones de maltrato a jóvenes.
intervenciones (22%) se iniciaron a partir de De las entrevistas a gendarmes y poblado-
procedimientos de investigación: tareas espe- res de zonas urbanas se desprende que las
cíficas desarrolladas en el contexto de denun- diferencias de sociabilidad y de costumbres
cias de terceros, procedimientos judiciales y de los gendarmes con aquellos que habitan
acciones de inteligencia. Apenas tres (1,6%) zonas urbanas ha sido una de las principales
de las intervenciones tuvo por origen otro tipo causas del maltrato a los jóvenes. De manera
de acción (una actuación policial previa, un reiterada los habitantes de asentamientos y
accidente y un alerta de radar). Es decir, gran barrios humildes señalaban que “los gendar-
parte de los operativos se llevaron a cabo en mes no entienden a los chicos”, “no saben
el marco de procedimientos de rutina. Ello cómo hablarles y no entienden lo que dicen”,
revela la escasa importancia atribuida a la in- muchas veces los “maltratan innecesariamen-
teligencia criminal en la detección y desarticu- te”. Sin embargo, es necesario destacar que
lación del tráfico ilegal de drogas. esta visión de los entrevistados coexiste, para-
Este hecho fue señalado por varios de los dojalmente, con el pedido de mayor presen-
entrevistados que atribuyeron el predominio cia de la institución.
de tales procedimientos a la cultura organiza- Este aspecto se relaciona con las dificulta-
cional de una institución cuya misión prin- des que experimenta una organización cuando
cipal ha sido la custodia de las fronteras. El es desplegada lejos de las zonas de asentamien-
resultado es que a pesar de que el despliegue es to habitual. Todos los gendarmes entrevista-
valorado positivamente por la sociedad su efi- dos enfatizaron el hecho de que la GN no fue
cacia podría mejorarse. Por ejemplo, el fortale- pensada, formada ni organizada para enfren-
cimiento de la inteligencia criminal permitiría tar problemas de seguridad urbana de forma
identificar zonas de consumo y de transito de permanente. Mientras que los gendarmes se
los estupefacientes mejorando, de esta forma, sienten a gusto con su despliegue en las fron-
la eficacia del despliegue de los gendarmes. En teras, porque consideran que esta es su misión
muchas regiones la GN se encuentra en zo- histórica y primaria, su entusiasmo es bastante
nas de consumo lo que no contribuye a que menor cuando se trata de patrullar las calles de
se efectúen incautaciones de importancia, en grandes ciudades. Ello se vincula con el hecho
cambio, su despliegue es escaso en zonas de de que la mayoría de sus integrantes han sido
zonas de tránsito, donde se podrían decomisar reclutados en zonas rurales. En las entrevistas
mayores cantidades de drogas. se escuchó reiteradamente la expresión: “los

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gendarmes son de la chacra” o el gendarme no de la droga a la Argentina) es definida por la


tiene “manejo de la calle”. mayoría de los entrevistados como una “zona
Asimismo, el traslado de los gendarmes ha pacífica” por la virtual ausencia de violencia
provocado toda clase de problemas logísticos como resultado del tráfico ilegal de drogas.
y situaciones de violencia con los pobladores Las explicaciones de este fenómeno varían
que no son habituales en las zonas de frontera. según el actor entrevistado. Los gendarmes
Por ejemplo, el alojamiento que reciben suele enfatizan su eficacia como organización ha-
ser deficiente, como así también sus viáticos. ciendo hincapié en las tácticas empleadas, por
Además, un 83% de los gendarmes manifesta- ejemplo, ser “implacables” o “teñir de verde”
ron padecer tensiones y ansiedades derivadas (saturar de gendarmes) aquella zona donde
del alejamiento de sus familias. Cabe mencio- se produce el menor signo de violencia (una
nar que la GN ha intentado adaptarse al nue- suerte de estrategia de “tolerancia cero”). En
vo despliegue geográfico con la creación de un cambio, los funcionaros de los ministerios de
Destacamento Móvil, el número 6, que tiene seguridad advierten que los narcotraficantes
su base en la zona metropolitana de Buenos tienen poco incentivo para enfrentarse a las
Aires. Esta unidad se encuentra integrada por autoridades públicas porque se trata de zonas
efectivos de la zona lo cual resuelve algunos de de tránsito y no de consumo de la droga. Se-
los problemas mencionados. gún esta lectura, el aumento de la violencia
Aunque el despliegue de la GN en la fron- por parte del narcotráfico atraería una mayor
tera norte ha aumentado en los últimos años, respuesta del Estado y dificultaría “el normal
tal presencia no es percibida por los poblado- desarrollo del negocio” (Natarajan, Zanella y
res locales en términos de militarización. Los Yu 2015).
pobladores de la zona tienen una excelente re- En las entrevistas con funcionarios provin-
lación con los gendarmes a los que consideran ciales del área de seguridad y con gendarmes
“un lugareño más” o “como vecinos nuestros”. se señaló con preocupación la escasa coopera-
A ello contribuye seguramente el hecho de ción que existe entre los ministerios de segu-
que no se han reportado desde 2012 situacio- ridad provinciales y la GN, como así también
nes de uso excesivo de la violencia o de viola- de la GN con las fuerzas policiales y de segu-
ciones a los derechos humanos (DDHH) por ridad de los países vecinos. Cabe mencionar
parte de miembros de la GN. Un indicador que recientemente se ha puesto en marcha
relevante al respecto es la ausencia de muer- el Consejo de Complementación que tiene
tos en los 178 operativos relevados en la base. como principal objetivo coordinar el accionar
Asimismo, se ha registrado tan sólo un caso de de las fuerzas de seguridad federales y provin-
enfrentamiento armado desde el 2012, con un ciales. El escaso tiempo transcurrido desde su
saldo de dos gendarmes y un narcotraficante creación no permite analizar aún la eficacia de
heridos. sus acciones. Otro aspecto que evidencia la
Cabe destacar que este patrón de escaso dificultad de la GN para adaptarse a la nueva
nivel de violencia en el marco de los operati- misión es el hecho de que el sistema de for-
vos antidrogas llevados a cabo por la GN no mación de los gendarmes no contempla ple-
ha sido suficientemente analizado. En general, namente las necesidades derivadas del nuevo
la frontera norte (la principal vía de entrada rol asignado. Las entrevistas a docentes de los

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institutos de formación de la GN permitieron “bombardeaba” la provincia con estupefacien-


establecer que aunque las instituciones de for- tes arrojados desde avionetas.
mación han incorporado, de manera limitada, Este dato llama la atención sobre los ries-
la problemática del narcotráfico a su currícu- gos que comporta para una fuerza intermedia
lo, el entrenamiento jurídico que reciben, en su intervención en la lucha contra el tráfico
cambio, es mínimo e insuficiente para llevar a ilegal de drogas. La autoimagen de la GN no
cabo procedimientos antidrogas. Ello ha pro- siempre contribuye instrumentar mecanismos
piciado fuertes críticas tanto de las distintas de control interno que limiten las consecuen-
policías provinciales como así también de la cias negativas de la intervención. La autoper-
justicia federal, ya que en muchas ocasiones cepción histórica de los gendarmes como una
lo detenidos en operativos antidrogas son rá- fuerza moralmente superior a las policías, es-
pidamente puestos en libertad por errores de casamente afectada por la corrupción y muy
procedimiento. valorada por la sociedad no ha favorecido la
Asimismo, la GN no ha Estado exenta de implementación de mecanismos de control
los efectos negativos que conlleva la participa- internos. Desde la percepción del gendarme
ción de una institución en la lucha contra este “ello no es necesario porque son casos aisla-
tipo de fenómenos. El relevamiento de fuentes dos” y, además, porque “estaríamos dando un
periodísticas permitió documentar la existencia mensaje negativo a la sociedad: nos confundi-
de ocho casos donde personal de esa institu- rían con la policía”.
ción estuvo involucrado en el tráfico de estu-
pefacientes. Dichos casos ocurrieron en Salta
(3), Corrientes (2), Misiones (2) y Jujuy (1), Comentarios finales
cinco casos se registraron durante el año 2014.
Un total de 16 gendarmes fueron detenidos La intervención de la GN en la lucha contra
en el marco de distintas causas judiciales. Uno el tráfico ilegal de droga parece ser inevitable
de los casos, revelado en el año 2011, incluyó en un contexto de creciente percepción de
el allanamiento del Escuadrón 54 con asiento inseguridad, en el que se percibe a las poli-
en Salvador Mazza (Salta) y la detención del cías como insuficientes o corruptas y donde
segundo Jefe de Escuadrón y otros dos subofi- la participación de los militares está prohibida
ciales quienes traficaban parte de la droga que por la ley. El saldo de la intervención podría
era secuestrada en los operativos de control lle- evaluarse de manera positiva al tratarse de un
vados a cabo por la unidad (Clarín 2011). En despliegue que reúne importantes niveles de
otro caso, ocurrido en el mes de mayo del año aceptación tanto en zonas rurales como ur-
2014, tres gendarmes fueron detenidos en un banas, que no ha provocado violaciones de
control de la misma GN apostado en la ruta importancia o sistemáticas a los DDHH, que
31 de la provincia de Formosa, cuando circu- no genera una respuesta violencia de parte del
laban con 150 kilogramos de cocaína (Telam narcotráfico y que es aceptado por los miem-
2014). Los mismos prestaban servicios en For- bros de la institución en términos de una
mosa, Corrientes y Buenos Aires. Días más tar- oportunidad de expansión. Sin embargo, la
de, otros dos gendarmes fueron detenidos en magnitud de la participación, y su probable
Salta, acusados de perteneces a una banda que aumento en el futuro, ha provocado tensiones

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y desafíos relacionados principalmente con el uso del aparato represivo del Estado es una he-
hecho de que la GN es una institución creada rramienta más, y no la central, para enfrentar
para custodiar las fronteras, no para combatir este fenómeno. La reflexión acerca de los tipos
al crimen organizado. El liderazgo del Minis- de fuerza que un Estado puede desplegar, sus
terio de Seguridad de la Nación para incenti- ventajas y desventajas, debería ser uno de los
var los cambios que demanda el nuevo rol y aspectos principales a ser debatidos cuando se
la capacidad de la GN para adaptarse a ellos, trata de enfrentar el tráfico ilegal de drogas.
serán aspectos claves que inclinarán la balanza Todo depende, entonces, de la capacidad
a favor, o en contra, de la legitimidad futura de las sociedades latinoamericanas de organi-
de la intervención. zar y desplegar fuerzas policiales e interme-
El reclamo social para resolver el tema del dias capacitadas, entrenadas y equipadas para
narcotráfico en América Latina continuará y responder al complejo fenómeno del crimen
las policías no parecen ser percibidas como un organizado respetando los DDHH. Es de vi-
actor que por sí solas puedan enfrentar el fe- tal importancia que el empleo de la fuerza se
nómeno (Gootenberg 2012; Loveman 2006). reduzca lo más posible de manera de no ge-
La ausencia generalizada de fuerzas interme- nerar respuestas equivalentes que extiendan
dias en la región parece anticipar que la in- y potencien la dinámica de la violencia. Solo
tervención de los militares persistirá. En otras así podrá una sociedad democrática enfrentar
palabras, en un contexto donde las fuerzas eficazmente un fenómeno que requiere de un
intermedias están ausentes es evidente que la esfuerzo integral y coordinado de todos los es-
demanda pública por mayores niveles de segu- tados latinoamericanos.
ridad solo podrá ser satisfecha por los políticos
mediante la participación de las fuerzas arma-
das. Por ello, es indispensable que los estados Bibliografía
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RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador • ISSN 1390-4299 (en línea)
DOI: http://dx.doi.org/10.17141/urvio.18.2016.1962

La tecnología de información y comunicación


en prevención del delito1
Information Communication Technologies
in crime prevention

Jorge Francisco Aguirre Sala2


Fecha de recepción: octubre del 2015.
Fecha de aceptación: marzo de 2016.

Resumen
Objetivo: mostrar los posibles apoyos de Internet en la prevención del delito. Marco teórico: la teoría
de la prevención comunitaria del delito como síntesis de la prevención situacional y ambiental, y
como efecto de la estadística delictiva que permite proyectar programas de acción. La prevención
comunitaria está necesariamente vinculada con la gobernanza y, dada la interacción exigida por
la gobernanza entre autoridades y ciudadanos, sus alcances son transversales. Marco referencial: la
Estrategia Nacional Digital mexicana que visualiza la prevención con auxilio las redes sociales ciber-
néticas y las plataformas electrónicas. Método y caso: análisis cualitativo del uso de las Tecnologías
de Información y Comunicación (TIC) en prevención delictiva en los casos del área urbana de
Monterrey, México.

Palabras clave: internet, prevención delictiva, gobernanza, transversalidad.

Abstract
Objective: To show the possible support of the Internet on crime prevention in the constructivist
context of governance. Theoretical framework: the theory of communitarian crime prevention
is seen as a synthesis of social, situational and environmental prevention. The effects of crime
statistics, coming from community prevention, suggests that action programs. Consequently the
communitarian prevention is necessarily associated to governance and the interaction required by
governance, between authorities and citizens, is transversal. Framework of reference: the Mexican
National Digital Strategy that visualizes prevention help cyber social networks and electronic
platforms. Method and case: qualitative analysis of ICT uses in crime prevention in the cases the
urban area of Monterrey, Mexico.

Keywords: internet, crime prevention, governance, transversality.

1 Investigación apoyada por la Escuela de Investigaciones en Ciencias de la Seguridad Pública, de la Universidad de


Ciencias de la Seguridad del Estado de Nuevo León y el programa de retención 259423 del CONACYT en el Instituto
de Investigaciones Sociales de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
2 Doctor en Filosofía. Coordinó la Escuela de Investigaciones en Seguridad Pública de la Universidad en Ciencias
de la Seguridad del Estado de Nuevo León. Investigador en el Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad
Autónoma de Nuevo León, Monterrey, México. jorgeaguirresala@hotmail.com

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URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad


No. 18 - Quito, junio 2016 - pp.90-103 - © FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
La tecnología de información y comunicación en prevención del delito

Vencí a los zetas por facebook, y Gorr y Kurland (2012), han mostrado que
Jaime Rodríguez (“El Bronco”). la incorporación de las TIC resulta benéfica
para la detección preventiva del delito.

Marco teórico
Marco referencial
Vincular la teoría de la prevención comuni-
taria del delito con las tecnologías de infor- El 25 de noviembre de 2013 el Gobierno de
mación y comunicación implica, como lo han la República Mexicana dio a conocer la Es-
señalado Fraile y Bonastra (2010), establecer trategia Digital Nacional (en adelante EDN
la conexión entre la seguridad y los mapas on- 2013). Su propósito principal es aprovechar el
line del delito desde nuevas perspectivas de potencial de las Tecnologías de la Información
la participación ciudadana. El enfoque que y Comunicación (TIC). La estrategia contie-
aquí se expone lo hace en particular desde la ne cinco objetivos y el último de ellos es la
gobernanza, entendida como la cooperación seguridad ciudadana.
constructivista entre autoridades públicas y La noción de Seguridad Ciudadana es
las directrices aportadas por los ciudadanos. A concebida por la EDN como: “Utilizar a las
la ciudadanía le interesa el control de la de- TIC para prevenir la violencia social, articu-
lincuencia y la gestión de riesgos, sobre todo lando los esfuerzos de la ciudadanía y de las
en la medida en que percibe la necesidad de autoridades en torno a objetivos comunes
auxiliar al Estado para disminuir los índices para promover la seguridad” (EDN 2013,
delictivos. 15). En esta declaración destacan los aspectos
De ahí nacen las iniciativas de aportar la de la prevención del delito y la gobernanza, es
información y complementar la comunica- decir, la construcción de la seguridad ciudada-
ción que las instituciones de seguridad pública na por los propios ciudadanos. A lo anterior
deben poseer para conservar o tomar el con- se añaden varios objetivos secundarios. En los
trol de un territorio. Gracias a la tecnología primeros tres de los cuatro objetivos secun-
electrónica, estas interacciones cada vez son darios, en materia del marco estructural de la
más seguras, fáciles y rápidas, sobre todo en EDN, se expresa más explícitamente la idea
miras a establecer la cartografía policial que de prevención del delito digitalizada: “Desa-
permite la prevención del delito. Vázquez rrollar instrumentos digitales para la preven-
y Soto (2013) al añadir evaluaciones de los ción social de la violencia; Impulsar la inno-
programas informáticos utilizados en las apli- vación cívica por medio de las TIC” (EDN
caciones criminológicas de los mapas delin- 2013, 18).
cuenciales, han mostrado el éxito de vincular
la prevención comunitaria del delito con la
georreferenciación del mismo y las aportacio- Propósito y objetos de estudio
nes de las nuevas Tecnologías de Información
y Comunicación (TIC). Desde comienzos de Insertado en estos contextos, la presente inves-
la década actual, Paynich y Hill (2010), la In- tigación apunta a mostrar, de manera general,
ternational Association of Crime Analyst (2012) los aportes y posibilidades de la Internet en la

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prevención del delito. De manera particular, policiales y eficaces en la prevención delicti-


se recaban los intentos mexicanos de la con- va. Dentro de la investigación documental
vulsionada ciudad de Monterrey. Por lo tanto, revisada puede hacerse especial mención de
el objetivo general de este ensayo también se las entrevistas a profundidad con personajes
particulariza con la evaluación de los proyec- clave en el tema, publicadas en el número 17
tos significativos de esa ciudad del Estado de de Ciudad Segura, editado por el Programa de
Nuevo León, México. A lo cual se añade una Estudios de la Ciudad (2007); o los estudios
cuestión corolaria: ¿la Fuerza Civil (la policía especializados de Hien (2005) de la funda-
estatal de Nuevo León) debe ampliar su mar- ción chilena Paz Ciudadana; Fraile y Bonastra
gen de acción hacia la prevención comunitaria (2013) y Vázquez y Soto (2013).
con el apoyo de las redes sociales cibernéticas
y las plataformas electrónicas en franca inte-
gración con la gobernanza? Prevención Comunitaria del Delito

La prevención comunitaria de delito puede


Metodología definirse, de acuerdo con Sozzo como: “técni-
cas de intervención que están orientadas a la
Los aportes y posibilidades de internet den- comunidad/vecindario” (2000, 37) y siguien-
tro de la prevención comunitaria del delito se do a Pavarini (1994) puede especificarse con
abordan cualitativamente a través del análisis la siguiente paráfrasis: “la prevención comu-
documental. Igualmente, la evaluación de los nitaria busca reconstruir el control social del
tres casos mexicanos encaminados a la con- territorio por parte de quien lo habita”. La
dición constructivista de gobernanza, ejecu- reconstrucción del control implica la parti-
tados con los instrumentos de las TIC, que cipación de los habitantes de un territorio y
tienen por intención lograr la georreferencia- también de la fuerza pública, por ende, invo-
ción. También se aboca al aspecto cualitativo lucra la gobernanza, en una intención cons-
y prospectivo, tomando en cuenta la organi- tructivista y cooperativa de orden local para
zación, claridad y oportunidad del manejo vincular a estas instancias.
que hacen de su propia estructura y función Los objetivos secundarios específicos para
de datos. la Seguridad Ciudadana (más allá de los obje-
La evaluación no puede considerar las va- tivos secundarios del marco estructural señala-
riaciones en las tasas delictivas en Nuevo León dos arriba) de la EDN evidencian la necesidad
porque debido a los acuerdos legales de reser- de construir la gobernanza. Entre dichos obje-
va, no se cuenta con todos los datos oficia- tivos específicos se encuentran:
les de los índices delictivos para evidenciar la
prevención. Tampoco existen evidencias que Desarrollar herramientas digitales de di-
vinculen las variaciones de las tasas delictivas fusión de información oportuna para la
prevención social de la violencia; proveer
con las acciones de georreferenciación. Sin
información por medios digitales que per-
embargo, en el tenor de los estudios realizados mita a los ciudadanos desarrollar acciones
en Latinoamérica las acciones de georreferen- preventivas para no ser víctimas de vio-
ciación son calificadas como útiles a las tareas lencia, potenciar la innovación cívica y la

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capacidad de la ciudadanía para participar bilidad delictiva, tanto con tácticas de patru-
en los asuntos públicos en materia de segu- llaje como con presencia ciudadana proactiva
ridad; [y en términos generales], incentivar en muchos sentidos positivos (utilizando me-
la co-creación con la ciudadanía, de nuevos
servicios públicos y de soluciones a pro- canismos físicos como bardas, rejas en venta-
blemas públicos, a través de herramientas nas, etc. y/o usando mecanismos electrónicos
digitales (EDN 2013, 25). como alarmas de movimiento, detectores de
armas, cámaras, etc.), entonces la información
En el inventario de elementos constructivistas de dónde, cuándo y cómo aplicar los instru-
de la gobernanza, que apuntan a los programas mentos de disuasión preventiva posee alto va-
de prevención comunitaria, cabe destacar: 1) lor estratégico.
la participación de actores públicos y privados Esa información resulta efectiva cuando
(empresas, organizaciones no gubernamenta- es viral, o al menos cuando posee dirección
les, asociaciones no lucrativas, entidades que bilateral entre la comunidad y las autoridades
agrupan a profesionales, etcétera) para definir policiales. Una entrevista a profundidad al
las políticas públicas y estrategias de acción (por capitán Tello, coordinador de la Policía Co-
ejemplo en la creación y operación de Con- munitaria en Pichincha, Ecuador, reveló que
sejos Ciudadanos de Seguridad); 2) la acción las autoridades policiales son auxiliadas por
en red, es decir, un sistema socio-cibernético el Observatorio Metropolitano de Seguridad
(por ejemplo la constitución de Comisarias Ciudadana, así como por las encuestas de per-
vecinales o barriales, las instancias de media- cepción de inseguridad, áreas de temor y diag-
ción de conflictos, la vinculación entre policía nósticos ciudadanos (Tello 2007, 2). Coope-
comunitaria y los vecindarios vigilantes); y 3) ración que permite un mejor cálculo de las
la actualización y apertura de bases de datos actividades criminales –a través de la cartogra-
electrónicas ante las demandas de la sociedad fía policial– para planificar el patrullaje. De
digital que exigen mayor eficacia, eficiencia y igual manera, la entrevista realizada a Susana
transparencia en las tareas de seguridad. Arciniegas, del Departamento del Sistema de
La acción clave en la prevención comuni- Información Geográfica (SIG) del Instituto
taria del delito es la disuasión. La disuasión Geográfico Militar del Ecuador, revela que
planificada por la información proveniente de “con la tecnología digital existe una mayor ve-
las TIC puede lograrse en simetría con las dos locidad, tanto en la actualización como en la
últimas de las tres condiciones tradicionales respuesta” (Arciniegas 2007, 10). Estas y otras
del delito. La disuasión resta atención al mo- fuentes confirman que la relación entre la
tivo y privilegia la atención sobre los medios y prevención del delito y las nuevas tecnologías
la oportunidad. Si un posible infractor posee para la disuasión criminal son eficaces.
motivos, medios y oportunidades para delin- Más allá de las prevenciones sociales, situa-
quir, entonces solo le resta calcular el riesgo cionales y ambientales que corresponden a la
sobre el probable beneficio de su acción, se- adquisición de conocimiento por la coopera-
gún la teoría de la elección racional. Pero si las ción entre gobierno y ciudadanos, el patrullaje
autoridades en seguridad pública y la ciudada- preventivo es la actividad principal por parte
nía se han anticipado a estar presentes en las de las autoridades de seguridad pública para
zonas y horarios calculados con mayor proba- incrementar la percepción de seguridad. Y la

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forma más exitosa estriba en el modo preven- efectuar las tácticas de prevención, depende
tivo y proactivo y no reactivo, lo cual signifi- de las disposiciones del Estado. De ahí que
ca que ha de conocerse muy bien el territorio las TIC en la prevención del delito tengan un
(área, horarios, tipos de infracciones) sobre el rol constructivista al aportar uno de los vín-
cual se desea recuperar o mantener el control. culos más estratégicos para el desarrollo de
Dicho conocimiento se adquiere de manera programas preventivos. Las TIC evolucionan
cabal por la complementación del saber que rápidamente y su utilidad inicia al establecer
obtienen ciudadanos y autoridades. Saber que la diferencia entre una red social cibernética y
se plasma conjuntamente en las cartografías una plataforma electrónica.
de la prevención con las variables del delito y Son muchas más las diferencias entre pla-
las constantes del territorio. taformas electrónicas y redes sociales ciber-
Las constantes de un territorio son: sus lí- néticas de las que suelen imaginarse. En las
mites, la ubicación de puestos de salud, cole- primeras se encuentran: el correo electrónico,
gios y escuelas, de sedes universitarias, iglesias, los wikis (no solo en el sentido de quién las
hospitales, etc. Lo que lo clasifica en un pre- consulta, sino también de quiénes las cons-
ponderante del tipo: habitacional, industrial, truyen). Las segundas se constituyen por los
comercial, educativo, etc. En términos poli- chats, foros, blogs; el Facebook, el Twitter, las
cíacos, los territorios se dividen en zonas, sec- cuentas de You tube de colaboración abierta y
tores y cuadrantes, estos últimos también son los recientes Instagram y Periscope. Constan-
denominados polígonos. La policía debe co- temente se construyen nuevas redes sociales,
nocer ese cúmulo de información para realizar pero debe hacerse hincapié en la distinción
los itinerarios y estrategias de sus patrullajes. más significativa con las plataformas electró-
Las variables en el territorio son los tipos de nicas: el tipo de construcción de la web. Para
delitos e incidentes que ocurren en diferentes establecer las diferencias en la construcción de
tiempos y ubicaciones. Por lo tanto, la orga- la web y el cabal alcance de las TIC en la pre-
nización de la información debe darse según vención comunitaria del delito, cabe distin-
el lugar, días y horarios y tipos de crímenes. guir las versiones 1.0 a 3.0 de la Web, pues la
Por ejemplo, puede suponerse que será más versión 1.0 presenta muchas similitudes con
común el asalto a transeúntes cercanos a los los medios masivos tradicionales de comuni-
cajeros automáticos los días de paga que en cación debido a su emisora unilateralidad. La
otras fechas. tabla 1 permite visualizar ambos aspectos.
Las variables y constantes se interrelacio- A diferencia de los medios tradiciona-
nan y provocan el diseño de actividades ciu- les (radio y televisión) y la versión Web 1.0,
dadanas y policíacas de manera táctica. Por los usuarios pueden ser a la vez receptores y
ende, esa información debe recabarse y sis- emisores. Eso es vital para vincular autorida-
tematizarse y para ello es imprescindible la des policíacas y ciudadanos participativos del
aplicación de las TIC. Las autoridades poli- control territorial o para estructurar comisa-
ciales, en el sentido de recabar la información, rías ciudadanas. Las aplicaciones de Internet
dependen de la ciudadanía. Y la ciudadanía, de la Web 2.0 y 3.0, se comportan con in-
en el sentido de recibir la información com- dependencia de la cantidad de receptores y
plementada, sistematizada y programada para cada usuario incrementa exponencialmente

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Tabla 1. Evolución de la Web 1.0 a la Web 3.0 y diferencias en su construcción

Web 1.0 Web 2.0 Web 3.0


Personas conectándose a Aplicaciones Web conectándose a aplicacio-
Personas conectándose a personas
la Web nes Web
Conexión exclusiva de Conexión bidireccional entre emisores y
Conciencia de la Web Geo-espacial
emisor a receptor receptores
Doble click Anuncios inteligentes Autonomía respecto del navegador
Sitio de fotos “Ofoto” Sitio de fotos “Flickr” Construcción de la Web Semántica
Genera experiencia y cultura política entre
Servicio “Akamai” Programas para archivos como “BitTorrent”
personas
Sitio web de descarga de Programas par a par para compartir música
Web Tercera dimensión
música, videos, textos (“Napster”), propiedad virtual (“Second Life”)
Enciclopedia Británica en
Proyecto Wikipedia Genera nueva información
línea
Sitios personales Bitácoras electrónicas Aplicaciones y agentes de usuarios
Screen scraping Servicios en red Servicios sobre la Web misma
Visualizaciones de página Costo por click
Directorios Etiquetado (por taxonomía popular, sin Inteligencia artificial para decisiones por
(por taxonomía) jerarquías ni predeterminaciones) interés del usuario
Compartir, procesar y transferir ubicuamente
Publicación Participación
información
Sistemas de manejo y ges-
tión de contenido ligados a Enciclopedias colaborativas Mapas temáticos automáticos
publicidad e ideologías
Gestión de contenidos seleccionados por
Destacar un foro web Redifusión en red
interpretación
Especulación con dominios Optimización en motores de búsqueda SEO Captura y tratamiento inteligente de datos

Fuente: elaboración propia a partir de O’Reilly (2005), Van Der Henst (2005) y Bravo (2007).

su valor. Ello debe usarse como criterio para laboración, organización y protección.
validar la información ciudadana respecto a la El poder de Internet puede resaltarse con
actividad delictiva. la práctica cotidiana de la “sindicación”, que
En contraste a la posible desventaja ante- en términos comunicativos es el apoyo auto-
rior, Internet enriquece a la ciudadanía con la mático entre ciudadanos. Consiste en gene-
inclusión de identidades diferenciadas o mi- rar o seguir hipervínculos (la palabra o frase
norías que, de otro modo, siempre quedarían subrayada de distinto color que en la panta-
en la marginación. Ello es importantísimo lla abre una nueva “ventana”, o la aparición
para las víctimas del delito, pues pueden re- automática de “lo más visitado” en páginas
cibir apoyo casi inmediato y apoyos restau- electrónicas). Con los hipervínculos se pue-
rativos ante las crisis. La utilidad de las redes den encontrar, seguir, suscribir, organizar y
cibernéticas es variada: Twitter es óptimo para enlistar palabras y asuntos del interés de la
movilización, los Blogs son prácticos para la seguridad ciudadana. Además, cuantos más
actualización, Facebook permite la difusión y enlaces apunten hacia una página electrónica,
el crecimiento, la Web federada propicia la co- más exitoso será el anidamiento en distintos

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medios y por diversos caminos. En el ámbi- Las TIC contra el delito


to comercial es común hallarlos ofreciendo en Monterrey
las calificaciones de pasajeros en líneas aéreas,
huéspedes de hoteles y consumidores de di- En el área urbana de Monterrey, Nuevo León,
versos servicios. Los hipervínculos producen México, la delincuencia organizada tuvo una
una sensación de credibilidad y transparencia presencia devastadora durante la década de
en la información. Técnicamente, los nodos 2003 a 2013. Eso propició la movilización de
o intersecciones de la red electrónica, por ser la sociedad civil hacia la prevención delicti-
infinitamente exponenciales en su propia pro- va, tanto en formas no organizadas como en
gramación y reconexión. De ahí la metáfora movimientos institucionalmente organizados.
biológica de la “acción viral”. Los ciudadanos utilizaban sus redes sociales
Las nuevas aplicaciones para Smartphones cibernéticas, sobre todo vía Facebook y Twit-
y Tablets, aunadas a las plataformas y redes ter, para darse aviso entre ellos mismos de in-
ya mencionadas, terminarán por transformar cidentes delictivos o zonas de riesgo.
el hábito de llamar por teléfono a la estación Paralelamente a las formas no organizadas,
central de la policía. Y también con el hábito en el 2011 un grupo de ciudadanos se aliaron
policíaco de re-distribuir el mensaje al polígo- con algunas empresas y formaron el Centro
no afectado y de ahí a la unidad móvil (auto- de Integración Ciudadana (www.cic.mx). Di-
radio-patrulla) de atención; procedimientos cho Centro provee un servicio de enlace entre
que implican un tiempo valiosísimo en la re- ciudadanos autoridades con la estrategia de-
acción, aunque los autos-radio-patrullas estén nominada “Tehuan” (término que en lengua
a la vuelta de la esquina. La interconectividad Nahúatl significa “nosotros”). Tehuan recibe
del sistema, la aplicación cargada en los dis- reportes de parte de los ciudadanos, los regis-
positivos de todos los ciudadanos y los poli- tra, valida y les da seguimiento. Lo publica en
cías en un mismo cuadrante, puede evitar esa su web site y reenvía a los dispositivos móviles
pérdida de tiempo El uso de las plataformas de los ciudadanos registrados en el progra-
también acabará con los hábitos de buscar en ma. Tehuan inició utilizando mensajes sms
fuentes difíciles e inciertas la información de- y correo electrónico. Para 2015 cuenta con
lictiva que el ciudadano y las autoridades poli- Twitter, aplicaciones iOS y Android, llamadas
ciales requieren para las estrategias de preven- telefónicas y la api: developers.cic.mx. Sin em-
ción. La conciencia de la Web Geo-espacial, la bargo, para emitir alertas en tiempo real hacia
transferencia ubicua de información, la gene- los ciudadanos registrados, se redujo a las apli-
ración de nueva información, las aplicaciones caciones de Android e iOS. Los demás medios
y agentes de usuarios, la inteligencia artificial son útiles para validar reportes, pero no para
para decisiones por interés del usuario y sobre la interactividad comunicativa bilateral.
todo los mapas temáticos automáticos, permi- Como la plataforma tecnológica es de co-
ten generar con facilidad tanto la Geo-referen- laboración masiva, el tipo de reportes es muy
ciación del delito como la cartografía policial variado. En consecuencia, la misma platafor-
necesaria para los patrullajes y la intervención ma establece la elección entre varias categori-
ciudadana. zaciones: a) Comunidad; b) Propuestas ciuda-
danas; c) Seguridad –que contiene los rubros

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de incendio, robo, robo de auto y situación Respecto a la geo-referenciación del delito,


de riesgo, en esta última se pueden reportar la información se organiza por categoría, títu-
todo tipo de incidentes o presuntos delitos; d) lo de reporte, ubicación en latitud y longitud,
Servicios públicos; e) Vialidad y Tránsito y f ) descripción, número de reporte, estado de
Emergencias médicas. La ciudadanía reporta reporte, fecha y hora de creación del reporte.

Figura 1. Mapa del delito de la plataforma del Centro de Integración Ciudadana

Fuente: https://data.cic.mx/Seguridad/Vialidad-Seguridad-y-Mapa-del-Delito-en-Vista-de-M/95jt-qbxf

robos a casa habitación, robo de automóviles, Además, dicho reporte puede consultarse con
robo a transeúntes, actividades de pandillas, vista de mapa (puede consultarse en: https://
balaceras, homicidios, hallazgos de cadáveres data.cic.mx/Seguridad/Vialidad-Seguridad-y-
y todo tipo de actividades sospechosas que pu- Mapa-del-Delito-en-Vista-de-M/95jt-qbxf ).
dieran derivar en acciones delictivas. La plata- Por lo tanto, los servicios de la estrategia Te-
forma cuenta con una sección de open data; huan pueden visualizarse bajo dos perspec-
en ella pueden consultarse diversos tipos de tivas en la prevención del delito. Cuando el
reportes, aunque no todos son elaborados por servicio ofrece información en tiempo real a
el Centro de Integración Ciudadana, pues al- los ciudadanos registrados, se convierte en un
gunos proceden de la Procuraduría General de elemento de la prevención situacional, pues
Justicia de la Nación o del Instituto Nacional los ciudadanos quedan advertidos en qué mo-
de Estadística y Geografía. La sección de open mento y lugar ocurre una balacera, una riña
data es constantemente filtrada o modificada entre pandillas o un grupo de personas dro-
y, en general, le falta mostrar las fuentes con gándose, etc. Para las autoridades policíacas
actualidad, claridad estadística y capacidad de es útil como validación para asignar recursos
ubicación. humanos y materiales en la reacción. La otra

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perspectiva corresponde a la cartografía poli- amplia se hallan en el “Tour de Likter (ver-


cial, pues con sus datos se pueden establecer sión español)” (https://www.youtube.com/
los programas de la prevención comunitaria. watch?v=ABvWqqqhC4g).
Otra de las acciones realizadas en Monte- Likter permite generar y consultar noticias
rrey es el proyecto Likter que todavía está en en la red social en tres categorías: en vivo, del
construcción. Likter nació de una iniciativa orden popular y noticias confiables. Los usua-
ciudadana con el deseo de otorgar expedita- rios tienen la capacidad de validar o invalidar
mente información en tiempo real de eventos la veracidad de una noticia y la verificación se
delictivos. El proyecto inicia como un acon- pondera según la cercanía del usuario al lugar
tecer noticioso de información general para de los hechos referidos. La aplicación permite
derivar soterradamente en un instrumento crear una noticia que, de manera automática,
contra el delito. No obstante, para efectos de se ubica en un mapa convencional (cualidad
geo-referenciación del delito Likter debería superior al programa Tehuan, pues este da las
reducir sus múltiples categorías a la de Segu- coordenadas de latitud y longitud y la ciu-
ridad Pública. Es una aplicación completa- dadanía y los cuerpos policíacos no usan esa
mente enfocada a constituir una base de datos nomenclatura en los mapas convencionales),
que indica lugar, momento y descripción de permite hacer una descripción del evento y
acontecimientos. también subir fotos.
La aplicación Likter puede consultar- El archivo de Likter opera por cuadrantes
se en los videos promocionales que se en- extendibles y otorga automáticamente las últi-
cuentran en de You tube. Una descripción mas veinte noticias de dicha área. También se

Figura 2. Muestra de la aplicación Likter

Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=ABvWqqqhC4g

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pueden consultar datos de mayor antigüedad. Aunque hoy no es posible consultar el Fa-
Al proyecto Likter le falta una sistematización cebook del entonces presidente municipal de
organizada de la información y una sub-cla- García para evaluar el alcance de su declara-
sificación dentro de la categoría Seguridad ción., sin duda la tesis se sostiene: dicha red
Pública. Por ello presenta más utilidad para social resultó clave para la geo-referenciación
la reacción de la fuerza pública que para la del delito, su persecución y su posible preven-
prevención. Si Likter se completara de manera ción. La idea, no obstante, no presenta un
orgánica en miras a la cartografía policial, ten- modelo de gobernanza. Alcanzar la cualidad
dría un altísimo potencial para la prevención de gobernanza implicaría elevar la informa-
comunitaria del delito y, en perpetuo tiempo ción ciudadana y la acción policial a progra-
real, permitiría a la ciudadanía tomar el con- mas de prevención comunitaria. Pero este
trol de su territorio. testimonio aporta una enseñanza: la participa-
Respecto a un área colindante con la me- ción ciudadana contra el delito (en este caso,
trópoli de Monterrey, el 25 de agosto de 2015 semi-preventivo, nacido de una denuncia no
el gobernador electo de Estado de Nuevo formal, sino emergente) poseerá la base para
León, Jaime Rodríguez Calderón (conocido realizar acciones preventivas organizadas. La
como “el bronco”) haciendo referencia a di- geo-referenciación ofrece ventajas reactivas y
cha zona durante su gestión como presidente preventivas contra el delito. Por ejemplo, el
municipal del Municipio de García, declaró conocimiento de la geografía física del terri-
en una entrevista periodística: “Yo vencí a torio a controlar aporta una ventaja espacial
Los Zetas utilizando Facebook. En mi ciudad, (cuestas o brechas de difícil tránsito, tanto
preguntándole a la gente quién vende droga, para evitar los escapes de los infractores o la
quién está haciendo daño en la colonia, la vulnerabilidad de los patrullajes; escondi-
gente te dice: entonces tú, como autoridad, tes o sitios para evitar o realizar emboscadas,
tienes el control y resuelves” (Sierra 2015). etc.). La cartografía digital, con posibilidades
La declaración merece observaciones. El tecnológicas de establecer una sumatoria his-
material disponible en Internet por parte de la tórica en el mapa delictivo y los equipos de
entrevistadora y su correspondiente casa edito- geo-posicionamiento, permite validar una alta
rial, que reproduce parcialmente el contenido probabilidad estadística.
de la entrevista, no contiene dicha declaración.
Sin embargo, los testimonios existen en al me-
nos otras cuatro fuentes; una de dichas fuentes Dificultades
si pertenece a la casa editorial de la periodista.
En segundo lugar, cabe recordar: “Los Zetas” Una de las dificultades prácticas que el Estado
son una organización criminal que no operó enfrenta es la falta oportuna de toda la infor-
exclusivamente en el Municipio de García, de mación real, puesto que no todos los ciuda-
manera que, aunque el grupo se haya desplaza- danos acuden a levantar las denuncias contra
do de ese territorio, la declaración debe tomarse el delito del que han sido víctimas. Los avisos
como una victoria inicial. En último lugar, des- o alertas y las denuncias son más útiles a la
taca la preferencia de las TIC sobre cualquier policía que al resto del sistema judicial. Otra
otro medio de comunicación. dificultad es de índole técnica: para sostener

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la geo-referenciación en perpetuo tiempo real estadístico. Sino, como atinadamente ha di-


los servidores u ordenadores deben tener la cho un experto, “se trata de construir teorías
capacidad de permanecer operantes sin in- sobre el funcionamiento de las organizaciones
terrupción, realizar respaldos automáticos y criminales… [y a su vez] identificar las debili-
no contener sistemas operativos con desfasa- dades del Estado” (De León 2012). Se trata de
miento de actualizaciones. De no solventar conocer los pormenores del crimen para rom-
esta dificultad técnica, el patrullaje no resul- per la cadena del delito. Y para lograr dicha
tará suficientemente oportuno en la reacción. ruptura y superar las debilidades del Estado,
Son obvias las dificultades de la brecha di- la gobernanza constructivista apunta a la ac-
gital. En particular, para Tehuan y Likter, sólo ción colaborativa entre Estado y participación
los usuarios que puedan soportar aplicaciones ciudadana.
móviles para iOS y Android tienen la oportu- Puede concluirse que las fortalezas y áreas
nidad de participar reactivamente o preventi- de oportunidad aquí descritas para Nuevo
vamente para romper la cadena delictiva. Un León ilustran la problemática para otras regio-
aspecto más es la falta de garantías, recursos nes. No obstante, existe una cuestión corolaria
humanos y materiales para atender las ad- de interés para el área de Monterrey, Nuevo
vertencias ciudadanas. La situación se agra- León: ¿Fuerza Civil (la policía estatal de Nue-
va en especial para el Centro de Integración vo León) debe ampliar su margen de acción
Ciudadana porque trata con un número muy hacia la prevención con apoyo de las redes so-
amplio de variables. Para el programa Tehuan ciales cibernéticas y las plataformas electróni-
un área de oportunidad se encuentra en actua- cas en directa integración con la gobernanza?
lizar la información y operar las advertencias Cabe responder con un franco sí y explicar
en tiempo real. Tehuan, Likter y la estrategia porque una policía altamente capacitada para
del gobernador Jaime Rodríguez (“el bronco”) hacer uso escalonado ascendente de la fuerza
se enfrentan a la dificultad de validar la in- también debe atender asuntos de proximidad
formación. En este sentido, la colaboración y prevención comunitaria.
ciudadana, en la medida de su amplitud y En primer lugar, bajo el principio lógico
congruencia, es útil para la confirmación y el de “quién puede lo más también puede lo me-
diseño de la cartografía policial. nos” se llegará a la conclusión de que una poli-
cía de orden nacional o estatal también puede
realizar tareas de policía de proximidad si se
Discusión y conclusión capacita para ambas cosas. Y, por tanto, llevar
a cabo tareas de prevención comunitaria con
Si bien es muy valiosa la aportación geo-re- el apoyo de las TIC. Palacios indica que:
ferencial que proporcionan las TIC, debe to-
marse en cuenta que dicho apoyo no se trata Al tener mayor conocimiento de sus cua-
simplemente de poner más puntos rojos o ama- drantes, en cuanto a espacio físico, personas
y criminales recurrentes, el informe policial
rillos en un mapa digital. Tampoco de iden-
homologado que realice [refiriéndose a la
tificar la concentración estadística de puntos policía de proximidad o municipal] será de
o de aumentar el número de servidores de gran utilidad para que las policías de niveles
seguridad pública en función del incremento 2 y 3 [es decir, policías estatales y federales

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o nacionales] operen el ciclo de inteligencia. la capacitación policial no excluya los aspectos


En otros términos, [indica el autor], la poli- proactivos al privilegiar los meramente reac-
cía de proximidad es un engrane que mueve tivos.
a los demás (2013, 80-81).
En Latinoamérica existen varias pruebas
Por tanto, es altamente deseable una recipro- empíricas de cómo una policía de nivel 3 o
cidad colaborativa entre la policía de proximi- nacional también puede trabajar en el nivel 1
dad y las policías estatales como lo es Fuer- o municipal-comunitario. Por ejemplo, la Po-
za Civil y, consecuentemente, Fuerza Civil licía Nacional Colombiana a partir de 2006
habría de cooperar en la modalidad de pre- aplicó el programa de Vigilancia Comunitaria
vención para tomar el control del territorio. “VICOM-2006”, constituyendo el antece-
Control que debe entenderse de tipo comuni- dente del consolidado Plan Nacional de Vigi-
tario. En segundo lugar, Palacios también in- lancia Comunitaria por Cuadrantes establecido
dica que “desde un punto de vista progresivo, desde 2010. En su respectiva dogmática po-
la visión sería que las Policías Niveles 2 y 3, licial, expresada en la Estrategia de la Policía
“incubarán” a la de Proximidad” (2013, 88). Nacional para la Consolidación de la Seguridad
Aunque esto pueda provocar interpretaciones Ciudadana, incluye dos de los elementos que
disímiles, es posible comprender que las poli- consolidan las acciones de gobernanza aquí
cías estatales tienen la capacidad de recibir los descritos: el “Sistema de Participación Ciu-
beneficios de la información, comunicación e dadana” y algunos aspectos de “las TIC para
interacción propios de la escala municipal que la seguridad ciudadana” (Policía Nacional de
resulta el primer peldaño de la gobernanza. Colombia 2010, 115-120 y 139-147). Es des-
Particularmente, para elaborar las cartografías tacable del caso colombiano el hecho de que
policiales. los elementos policíacos signados a cuadrantes
En tercer lugar debe evitarse el equívoco otorgan –como parte del programa institucio-
superficial. Que las policías de mayores rangos nal– los números telefónicos y datos de vin-
(nacionales o estatales) puedan realizar tareas culación de sus aparatos móviles. Ello con el
de policías de menor rango (municipales o de propósito de establecer un contacto inmedia-
proximidad) no significa directamente que to sin necesidad de triangular la emergencia a
cambien de una profesionalización de policías una central.
reactivas a policías preventivas. La cuestión no Otro caso empírico que demuestra la via-
equívoca, ni superficial, el asunto profundo, bilidad de una policía de nivel nacional, in-
es la adaptabilidad hacia la prevención. La clusive con formación militar, trabajando en
tesis derivada desde el principio general sos- la escala comunitaria y preventiva es la Policía
tiene: “la corporación que puede prevenir lo de Carabineros de Chile. En ese país del cono
más, también puede prevenir lo menos”. Y sur americano, se estableció desde 2006 la
la conclusión que se sigue de esta tesis es: se Estrategia Nacional de Seguridad Pública que
puede recuperar y sostener el control de un contempló líneas de operación en prevención
territorio al prevenir la escala de lo mayor (de- social y prevención situacional (Gobierno de
litos de alto impacto) y ampliarla a lo menor Chile 2006, 16-19) y que ha evolucionado ha-
(entiéndase hacia delitos de menor impacto cia diversos planes y programas con los cam-
para evitar un oxímoron). Siempre y cuando bios de administración y definición de políti-

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Jorge Francisco Aguirre Sala

cas públicas actualizadas. En la versión 2014 2014, 28). De donde se sigue el buen trato
(Plan Nacional de Seguridad Pública y Preven- a los habitantes en el tenor de que “tanto el
ción de la Violencia y el Delito, Seguridad para policía como la comunidad deben compren-
Todos) si bien contempla la geo-referenciación der que el policía es parte de la comunidad y
delictual y preventiva realizada en gobernan- que la comunidad forma parte de su policía…
za, todavía no incluye los aportes de las TIC. Comunidad y policía son una misma cosa”
Una prueba empírica más la constituye la (Palacios 2014, 28).
Policía Nacional Civil de El Salvador a través Así mismo, la unión con la ciudadanía con-
de su División de Policía Comunitaria que, templa “ganarse la confianza de la gente por su
entre otras actividades características de la go- buen trato… Incluso, cuando el policía esta-
bernanza en la prevención del delito, cuenta blece un canal de comunicación con base en
con las Patrullas de Intervención Policial Co- la confianza, la ciudadanía le proporciona la
munitarias (PIP-COM) y los Foros de Con- información necesaria para que él haga un me-
sulta Ciudadana, además de los Comités de jor trabajo preventivo” (Palacios 2014, 28-29).
Seguridad Ciudadana. Los dos últimos con Sin duda alguna la ciudadanía de Nuevo León
una significativa función de recolectar la in- preferirá poseer programas de prevención co-
formación “para la planificación de acciones munitaria en los cuales Fuerza Civil se encuen-
policiales, de carácter preventivo y operativo” tre profunda y constantemente involucrada en
(Gobierno de El Salvador, Policía Nacional vez de verse en la necesidad de hacer la típica
Civil 2015). Y paralelamente a dichas instan- “llamada telefónica a la policía” para atender
cias institucionales, la Policía Nacional posee un evento a posteriori. Finalmente, pero no por
cuentas de Facebook y Twitter habilitadas don- ello menos importante, en la actual era digital,
de los ciudadanos pueden seguir la informa- será preferible una interconexión directa entre
ción puntual proporcionada por la Policía Na- ciudadano y agente policíaco a través de la Web
cional y, a su vez, exponer sus necesidades y la federada; tanto para evitar la llamada telefónica
valiosa información para operaciones reactivas de reacción, como para establecer la informa-
o planes preventivos. ción básica de la cartografía policial de donde
En lo concerniente a que Fuerza Civil en se desprenderán los programas para recuperar o
Nuevo León, México, pudiese adaptarse a la- sostener el control del territorio.
bores de prevención comunitaria, cabe desta-
car que su dogmática policial posee suficiente
solidez para permitirle a dicha corporación Bibliografía
de nivel estatal el tránsito desde la reacción
policíaca hasta la prevención. En los valores Arciniegas, Susana. 2007. “Versatilidad, ven-
característicos expresados en la dogmática po- tajas y precauciones en el uso de la geore-
licial de Fuerza Civil destacan la amabilidad, ferenciación”. Ciudad Segura 17: 10.
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nas con capacidades diferentes, etc” (Palacios ciación del crimen en contextos de alta vio-

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La tecnología de información y comunicación en prevención del delito

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Urvio, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad, No. 18, Quito, junio 2016, pp. 104-123
RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador • ISSN 1390-4299 (en línea)
DOI: http://dx.doi.org/10.17141/urvio.18.2016.1792

Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a


través de las prácticas de la vigilancia cotidiana
Securonormativity. The urban sociability viewed
from the everyday practices of surveillance

Luis Berneth Peña1


Fecha de recepción: septiembre del 2015.
Fecha de aceptación: marzo de 2016.

Resumen
En ciudades con diversas fuentes de inseguridad y miedo se han establecido múltiples reglas informales
destinadas a la protección y la vigilancia. Se trata de regulaciones que configuran prácticas espaciales
cotidianas, posturas corporales, expresiones verbales, el uso de los objetos y las relaciones de género en la
ciudad que nos permiten hablar de una sociabilidad urbana marcada por la securonormatividad. Introdu-
cimos el concepto de securonormatividad para referirnos a la forma que adoptan las interacciones sociales
en una ciudad con diversas fuentes de inseguridad urbana y también como una importante contradicción
de la urbanización contemporánea. El objetivo es detallar y analizar las prácticas de seguridad observando
la vigilancia ejercida y recibida por las personas en diferentes escenarios y sus efectos sobre las interacciones
cotidianas. Exploramos la securonormatividad en la ciudad de Bogotá, Colombia, pero sus hallazgos y
herramientas pueden ser útiles para la caracterización de la sociabilidad en el contexto de auge securitario
de otras ciudades, especialmente, en el Sur Global. Las principales herramientas teórico-metodológicas
provienen de la time-geography, Bruno Latour y Judith Butler. Los datos primarios fueron levantados con
una herramienta que hemos llamado “relojes de prácticas espaciales cotidianas”.

Palabras clave: securonormatividad, practicas espaciales, vigilancia, seguridad urbana, América Latina,
Bogotá, performatividad, sociabilidad urbana, Butler, Latour, Time-geography.

Abstract
In cities with diverse sources of insecurity there are informal rules for the protection and surveillance
recognizable in the spatial practices, the corporal postures, the verbal language, the use of objects and
the gender relations. The aggregation of these rules give birth to the securonormativity, an urban socia-
bility marked for the surveillance and fear that can be considered as a contradiction of contemporary
urbanization. The article describes and analyzes the surveillance exercised and received for individuals
in different scenarios of interaction. It explores the securonormativity in Bogota, Colombia, but the
tools and findings are useful to study the others contexts, especially, the Global South cities. The main
theoretical and methodological tools come from time-geography, Bruno Latour and Judith Butler. The
primary data were collected with a tool we called “clocks of everyday spatial practices”.

Keywords: secunormativity, spatial practices, surveillance, urban security, Latin America, Bogotá, perfor-
mativity, urban sociability, Butler, Latour, Time-geography.

1 PhD en Geografía Social. Universidad de la Alta Bretaña Rennes 2. Investigador invitado Georg Simmel Center for
Metropolitan Studies. Universität Humboldt, Berlín. Correo: lberneth@gmail.com

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No. 18 - Quito, junio 2016 - pp.104-123 - © RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a través de las prácticas de la vigilancia cotidiana

Introducción significa una práctica espacial. En tal sentido


este artículo discute las rutinas de vigilancia
La inseguridad tiene profundas consecuen- cotidiana y sus consecuencias sobre la vida en
cias sobre la sociabilidad urbana. No obstan- común en las ciudades pero al mismo tiempo
te, como lo ha señalado Fernando Carrión aporta elementos teórico metodológicos para
(2014), las secuelas del miedo cotidiano ha abordar las prácticas espaciales cotidianas en
sido un tema escasamente tratado teórica general. Nuestro punto de partida es que las
y políticamente en América Latina, a pesar prácticas de seguridad cotidiana se convierten
de ser una experiencia bien conocida por en un problema espacial en la medida que
los habitantes. Algunos autores han mostra- existan actores que despliegan acciones des-
do que donde prima el miedo prosperan los tinadas a manejar la inseguridad a través de
etiquetajes sociales negativos y se promueve acciones de vigilancia. Por eso partimos de la
un sentido de lugar basado en la paranoia y existencia de algo que llamamos una intencio-
la interdicción (Amendola 2000; Bannister y nalidad securitaria, es decir, la existencia de ac-
Fyfe 2001; Bauman 2013; Flusty 1994; Lee ciones deliberadas que tienen como objetivo a
2013; MacLeod y Ward 2002). Pero ¿cómo contrarrestar la inseguridad personal a través
caracterizar las prácticas espaciales, la sociabi- de la vigilancia. La espacialidad de dicha in-
lidad y la materialización de los miedos? En tencionalidad securitaria está compuesta por
este artículo, apuntamos justamente a detallar tres dimensiones inseparables:
y discutir la sociabilidad urbana resultante del
ejercicio permanente de estar vigilante, para a) las prácticas espaciales cotidianas reconoci-
lo cual proponemos el concepto de securonor- bles como apropiaciones espacio-tempora-
matividad. Con dicho concepto designamos les de la ciudad (una geografía temporal de
una sociabilidad urbana en la que la suspicacia la cotidianidad diría Hägerstrand 1985)
y la actitud de defensa son el rasgo distintivo b) la forma de presentarse o de actuar ante los
de las interacciones cotidianas. Analizamos demás en los diferentes escenarios de inte-
las prácticas de seguridad diarias detallando racción (la escenificación o el performance
la vigilancia que ejercen y la vigilancia a la diría Goffman 1999); y
que están sometidas las personas en diferentes c) el uso de expresiones verbales que emplea-
lugares. Exploramos la securonormatividad mos ya sea para constatar eventos –actos
en la ciudad de Bogotá, Colombia, pero los del habla locutivos– o para darle signifi-
hallazgos pueden ser útiles para la caracteriza- cado a estos eventos –actos del habla ilo-
ción de la sociabilidad urbana en el contexto cutorios– o para regular comportamientos
de auge securitario y de profundización de las –actos del habla perlocutivos– (la perfor-
desigualdades sociales de otras ciudades, espe- matividad o el carácter performativo del
cialmente, en el Sur Global. lenguaje del que habla Butler 1993).
El estudio de la vigilancia recibida y la vi-
gilancia ejercida ha sido fructífero no solo para La información primaria sobre las prácticas
comprender la vida cotidiana en las ciudades cotidianas de vigilancia ejercida y vigilancia
inseguras sino que además ha resultado ser recibida se levantó con una herramienta que
una cuestión relevante para entender lo que denominamos “relojes de las practicas espacia-

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Luis Berneth Peña

les cotidianas” la cual diseñamos para captar contenida en los relojes se hizo en Atlas.ti y
la relación entre los miedos-vigilancia con la consistió en codificar cada elemento en los
apropiación del espacio (ver figura 1 y anexo relojes, lo que permitió generar una base de
1). Los relojes de prácticas cotidianas mues- datos de prácticas de securitización a la que se
tran cómo en diferentes escenarios de interac- le pueden aplicar diversos filtros.
ción (la casa, el trabajo, la calle, el transporte Así, la lectura de los relojes quedó consig-
público, bares, restaurantes, bancos, etc.) las nada en cinco temas que describen la estruc-
personas, por un lado, despliegan activamente tura del artículo: a) la vigilancia y el estado
estrategias para velar por su seguridad (vigi- de seguridad; b) patrones patriarcales en las
lancia ejercida) y, por el otro lado, cómo estas prácticas de vigilancia de mujeres y hombres;
también son objeto de controles y observa- c) actitudes corporales y vigilancia; d) las
ción externas (vigilancia recibida). Dicha he- mediaciones de las cosas en las estrategias de
rramienta, inspirada en la geografía del tiem- securitización y; d) la performatividad de la
po, es un reloj compuesto por cuatro anillos vigilancia, la intencionalidad securitarista y las
concéntricos que representan cuatro ámbitos apropiaciones espacio-temporales de la ciu-
interconectados, así: el primer anillo repre- dad. El artículo culmina con una síntesis que
senta las horas del día de 0 a 24; el segundo busca ensamblar los elementos del concepto
los lugares que la persona frecuenta cotidiana- de securonormatividad, el cual proponemos
mente; el tercero reúne la vigilancia ejercida hablar de la sociabilidad urbana mediada por
por la persona respondiente y; el cuarto anillo la intención constante de vigilancia.
se refiere a la vigilancia recibida o la vigilancia
a la cual está sometida la persona.
El ejercicio consistió en pedirle a diversas 1. La vigilancia y el estado
personas que dibujaran cuáles son los lugares de seguridad
que frecuentan y cuánto tiempo permanecen
allí en un día de actividades regulares. De este El ejercicio de múltiples prácticas de securiza-
procedimiento se obtuvieron los escenarios ción personales es una de las “competencias”
recurrentes de interacción de las personas con de la vida cotidiana que adquieren las perso-
la forma de un gráfico circular con porciones nas que viven en Bogotá. Como muestran los
de espacio-tiempo sobre el cual las personas relojes de prácticas espaciales, en casi todos los
empezaban a describir, en primera instancia, escenarios de interacción se ejerce o se reci-
la vigilancia ejercida y, posteriormente, la vi- be vigilancia (ver cuadros 1 y 2)3 destinada a
gilancia recibida2. Se obtuvieron 125 relojes evitar ser víctima de robos, homicidio, abuso
de muy diversa calidad y nivel de detalle. La sexuales y agresiones personales. Como que-
figura 1 es una muestra del tipo de relojes da registrado en nuestros relojes de prácticas
obtenidos. El tratamiento de la información
3 Hicimos este mismo ejercicio con los estudiantes de Uni-
versidad de Leipzig en Alemania y, básicamente, los mapas
2 La compilación del material de este material no hubiera resultantes aparecían casi vacíos. La mayor preocupación con-
sido posible sin la ayuda de los estudiantes del curso de Geo- sistía en la protección de la bicicleta y los incendios en el apar-
grafía, cultura y sociedad de la Universidad Externado de tamento, especialmente cuando se trataba de un apartamento
Colombia, quienes realizaron la mayoría de las entrevistas compartido. Esto refleja el mínimo papel que juega la preo-
para diligenciar los relojes. cupación por ser asaltado o agredido a cualquier hora del día.

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Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a través de las prácticas de la vigilancia cotidiana

Figura 1. Ejemplo de reloj diligenciado de prácticas cotidianas de vigilancia

En el anexo 1 aparecen algunos pocos ejemplos de los relojes de los 125 diligenciados por las personas entrevistadas.

cotidianas, salir a la calle, quedarse en la casa, ins”– que se aprenden y se actualizan en múl-
hacer las compras después del trabajo o el fin tiples interacciones y situaciones. De hecho,
de semana, tener que salir temprano al traba- existen tantos complementos de vigilancia
jo, llegar en la noche después de la jornada de como situaciones de interacción. Los comple-
trabajo, el cuidado de los hijos, salir de vaca- mentos sirven para dictar cuál es el comporta-
ciones, usar el transporte público o ir en bici- miento adecuado en cada situación: qué acti-
cleta, son actividades que implican reflexionar tud corporal adoptar, la velocidad de caminar,
sobre cómo se pueden incorporar estrategias la ropa apropiada para ir a un determinado
de protección en ellas. lugar, cuál es el mejor lugar para sentarse o es-
La multiplicidad de estrategias de vigilan- tar parado en el bus, etc. En términos espacia-
cia constituye, recurriendo a la metáfora de les el uso de estas habilidades o complementos
Latour (2005), un complemento –o “plug- tiene por finalidad evitar sitios, situaciones y

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personas amenazantes como en posibilitar el 2. Patrones patriarcales en las


tránsito fluido y la permanencia efectiva de las prácticas de vigilancia de mujeres
personas entre los escenarios de interacción de y hombres
la vida cotidiana, las cuales se comparten con
desconocidos y conocidos. Las prácticas vigilancia que despliegan las mu-
La direccionalidad de la relación entre jeres expresan y refuerzan los marcos institui-
miedos-vigilancia y apropiación del espacio dos por la sociedad patriarcal en la que se blo-
es doble porque encontramos una diversidad quea y fragiliza la autonomía y la libertad a las
de prácticas de vigilancia insertas en las acti- mujeres. En efecto, apenas se está empezando
vidades cotidianas de las personas y, al mis- a mostrar que la inseguridad y la violencia no
mo tiempo, encontramos prácticas espaciales es solamente un problema de hombres y que
y apropiaciones del espacio urbano que están las mujeres sufren diversas y muy particulares
mediadas por la posibilidad de desplegar o formas de inseguridad y violencias en la ciu-
no prácticas de vigilancia. Como lo advierte dad como los acosos sexuales, las violaciones y
Lofland en sus trabajos sobre el espacio pú- varias formas de violencia simbólica relaciona-
blico (Lofland 1985, 1989a, 1989b), existe das con la aceptación social de las agresiones
una negociación constante que consiste en de las que son objeto, feminicidios, etc. (Cor-
sopesar, por un lado, lo que hay que hacer o poración Sisma Mujer 2013; Observatorio de
se puede hacer en un determinado momen- Ciudades, Violencia y Género 2012).
to y lugar con, por el otro, la posibilidad de Son esos miedos los que se expresan bási-
sentirse seguro. camente en estrategias, detectadas en la vigilan-
La existencia de las múltiples prácticas cia ejercida por las mujeres, destinadas a estar
de securización deriva en lo que Cindi Katz acompañadas a la hora de salir y permanecer
(2008) ha denominado estado de seguridad en lugares públicos. Sostienen algunas mujeres:
compuesto por acciones que, lejos de ser ac- “Para salir toca acompañada y con bendición re-
tos banales individuales destinados a “tener forzada de los papas. Y hay que regresar también
cuidado” o “estar alerta”, indican la encarna- acompañada esperando que el taxi no le haga
ción de los miedos que le dan vida al régimen a uno el paseo millonario” (Reloj P23: M 114)
social y político. En ese mismo sentido, la “Estoy mamada de andar paranoica en la calle”
extensión de la vigilancia nos permite hablar (Reloj P12: M5). “Siempre intento salir con un
de la constitución de una suerte de “super- amigo hombre para poder relajarme un poco y
habitus” o “transhabitus” en la medida que disfrutar” (Reloj P13: M6). “Siempre salgo con
la intencionalidad securitarista se expresa en un grupo de amigos y siempre estoy pendiente
una serie de formas de actuar que supera un de no separarme de ellos” (P65: M 25).
campo específico de la vida social. Así, la ex- No estar en compañía de alguien mientras
tensión y suma de sujetos vigilantes y escena- se está en la calle también implica que las mu-
rios de vigilancia han constituido a la inten- jeres busquen “caminar rápido” (Reloj P22:
cionalidad securitarista en un estado habitual
del ser, perdurable y trasplantable a muchos 4 Debemos citar las expresiones de las personas provenientes
de los relojes de esta forma porque no teníamos los nombres
escenarios de interacción. en todos los casos y decidimos generar una codificación con-
secutiva de los relojes.

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Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a través de las prácticas de la vigilancia cotidiana

H9), “no mirar a nadie” (Reloj P96: M 29), hablan de la vigilancia de los ladrones –“los la-
“intentar no llamar la atención” (Reloj P97: M drones no se miden y siempre están vigilando a
30), “caminar por la vía de los carros y no por quien se descuida” (Reloj P100: M31)–, otras de
la acera cuando hay gente sospechosa” (Reloj los vecinos –“siento que los vecinos me observan
P31: M13), “mirar mal” (Reloj P109: M32), demasiado” (Reloj P65: M 25) y otras de la vigi-
“poner cara de mal genio”(Reloj P31: M13), lancia que ejercen sus familiares sobre sus activi-
“no mostrar el miedo” (Reloj P 1: M1), “estar dades. Los hombres manifiestan que son obser-
avisando dónde estoy” (Reloj P97: M 30). vados pero su molestia con la vigilancia recibida
En los dos casos, el mensaje parece ser el está más relacionada con que la gente los vea
mismo: una mujer sola “se expone” y su pre- como potenciales agresores (las requisas, las pre-
sencia en el espacio público necesita ser avala- guntas, la inspección de los objetos personales,
da por la compañía de un hombre. Como en etc.). Algunas mujeres, por su lado, parecen ma-
otras circunstancias del régimen patriarcal, es nifestar la incomodidad de la vigilancia recibida
necesaria la ayuda y acompañamiento de un como una ofensiva contra la tranquilidad pero,
hombre para las mujeres sean merecedoras de al mismo tiempo, con la búsqueda de “protec-
respeto. Eso se expresa, entre otras cosas, en el ción externa masculina” ayudan a reforzar esque-
acoso sexual en la calle, una cosificación per- mas sexistas en la apropiación de los lugares.
manentemente que hacen muchos hombres Así existe un tensión entre la molestia de
de las mujeres. “Quiero irme a un lugar donde ser vigiladas y la intranquilidad y alivio por
no me anden morboseando y me den miedo” la presencia de vigilancia. En el caso de una
(Reloj P65: M 25), “siento que los hombres mujer que vive sola, la sensación de no estar
me miran morbosamente” (Reloj P62: M vigilada en su casa era lo que más le generaba
23), son las expresiones de algunas mujeres. inseguridad. “En las noches cuando no siento
Como lo confirman los informes de la Corpo- la vigilancia me preocupo porque es un lugar
ración Sisma Mujer, transitar sola en la calle con muchos problemas de seguridad. Es muy
en Bogotá para una mujer se ha convertido solo y hay poca policía y de vez en cuando
en una experiencia de acoso sexual aceptado pasan celadores del barrio que hacen sonar
socialmente. En efecto, el acoso sexual en las sus pitos. Oír los pitos de los vigilantes afuera
calles está marcado por el uso del poder físico me alivia porque sé que alguien está cuidando
y la agresión verbal, la cosificación del cuerpo de mi” (Reloj P100: M31). Esa tensión entre
de las mujeres y la tolerancia absoluta de los “alivio” y sensación de constreñimiento que se
transeúntes que podrían ser claves para con- deriva de la vigilancia recibida, es semejante
trarrestar el fenómeno. “La gente observa tan a esa la que experimentan las mujeres con la
natural este tipo de comportamiento que in- presencia de personas. Estar sola en un sitio
cluso llegan a considerarlo gracioso o cariño- puede producir miedo y estar acompañada
so, cuando realmente se trata de un acto vio- puede producir alivio pero la presencia de las
lento” (Corporación Sisma Mujer 2013, 51) personas tiene su límite y depende, para que la
En ese mismo ámbito de autonomía y liber- presencia de las personas no sea tomada como
tades sitiadas, las mujeres manifiestan sentirse una fuerte de inseguridad o como un acoso,
más vigiladas tanto por los extraños como en de un flujo de estas en el espacio público, de
el entorno más próximo por conocidos. Unas cierta distancia y desatención cortes.

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3. Actitudes corporales: parecer nas llevan llaveros o navajas que dejan ver, que
amenazante y ser irrelevante están al aire” (Reloj P 3: H1). La lógica de esta
acción es que es preferible ser requisado por la
Las prácticas cotidianas de vigilancia mues- policía, generar incomodidad en los espacios
tran dos extremos en la forma en la que las que frecuenta, que convertirse en blanco de
personas se presentan ante los demás. En un una agresión.
lado se encuentran actitudes corporales que Eso quiere decir que ciertas personas ma-
buscan escenificar una presencia desafiante. nejan y conocen el poder de un lenguaje cor-
Esta es una forma destinada a comunicar que poral amenazante y usan el etiquetaje negativo
no se tiene miedo, que se merece respeto y, en como una estrategia de defensa y protección.
algunos casos, que se es temible. En el otro Esa es una actitud inadvertida en la máxima
extremo está la actitud corporal consistente en que hizo famoso a Frank Tannebaum, uno de
invisibilizarse apareciendo como banal tanto los padres de la teoría del etiquetaje, quien
para los agresores imaginarios o reales como señalaba en su clásico libro Crime and Com-
para los potenciales vigilantes. La idea en esta munity, que la manera de romper el espiral de
forma de presentación del cuerpo ante los de- crimen consistía en negarse a interpretar el pa-
más, más común en los relojes de prácticas pel de malo (Tannenbaum 1938). Esa actitud
cotidianas, es ser irrelevante usando formas demuestra o confirma que la división entre
activas desviación del interés de la vigilancia “malos” y “buenos” encubre procesos impor-
ejercida. tantes de la interacción y que la escenificación
En lo que respecta a la estrategia de mos- de si ante los otros puede ser más compleja.
trarse desafiante, es una forma de pretender La segunda forma de presentarse ante los
que se ejerce una suerte de dominio. Un hom- demás, la de la invisibilidad o la banalidad de
bre decía: “cuando estoy llegando al barrio o la presencia, consiste en que la persona bus-
voy a lugares peligrosos me gusta hacer como ca convertirse a sí mismo en un extra de los
si tuviera un arma en la cintura” (Reloj, P 3: escenarios de interacción. La finalidad de esa
H1). Otro, sostenía: “yo tomo la actitud de estrategia es pasar desapercibido y camuflarse
malandro para que no se me acerquen” (Reloj, siendo uno más, siendo una suerte de “ratón
P7: H 2). Una mujer, por su parte, afirmaba gris”. El efecto más importante de la “encarna-
que suele “mirar mal para que no la vean dé- ción de un ratón gris” es la del disciplinamien-
bil” (Reloj P109: M32). Otra decía que “hago to del cuerpo (gestos, forma de vestir, corte de
mala cara para no me molesten” (Reloj P21: M cabello, etc.) a los patrones dominantes por-
10) En el cálculo de una persona que desplie- que no hacerlo activa el interés de quienes vi-
ga esta actitud está la idea de comunicarse cor- gilan (policías, vigilancia privada y, en algunos
poralmente con los potenciales agresores pero lugares, organizaciones delincuenciales). Este
su performance es recibido por el conjunto de tipo de estrategia de securización supone que
personas con las que comparte la calle, los si- hay una vigilancia constante y problemática
tios públicos, el transporte público, etc. lo que que es la que ejerce el delincuente. La gente
podría reforzar el sentimiento de inseguridad manifiesta que “el ladrón siempre está vigilan-
entre estos. A este respecto una persona mani- do” los movimientos y está esperando aprove-
festaba: “me siento vigilado cuando las perso- char el menor descuido. Una mujer sostenía,

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Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a través de las prácticas de la vigilancia cotidiana

“los ladrones vigilan desde afuera del bus si al- más circulación de personas” “tener la maleta
guien está descuidado para subir a robarlo; los al frente” (Reloj P21: M 10), “Tener plata en
ladrones del bus que están atentos para apro- los bolsillos por si me piden”. “No tener ob-
vechar el momento en que alguien se descuide jetos de valor a la vista”. “No dormirme en el
para robarlo” (Reloj P97: M 30). La vigilancia bus” (Reloj P97: M 30). Entre muchas otras.
que ejerce el delincuente es etérea, puede estar Detallar las diferentes actitudes corporales
ocurriendo en cualquier momento inadverti- asociadas a la vigilancia muestra que el cuerpo
damente. “El único del que soy objeto de vi- es el medio fundamental del manejo del espa-
gilancia es el ladrón. El ladrón me está vigila cio-tiempo cotidiano. En el caso de las mu-
y eso lo siento” (Reloj P31: M13), decía una jeres, el manejo del cuerpo muestra que ellas
persona para referirse a ese sentimiento. no experimentan de forma pasiva el espacio,
La estrategia de invisibilización se expresa sino que activamente lo producen, lo definen
en actitudes como: “caminar donde hay mu- y lo apropian. El uso rutinario y consiente de
cha gente” (Reloj P65: M 25); “buscar luga- estrategias pone en evidencia que las mujeres
res concurridos” (Reloj P11: H 4); “no hablar domestican el espacio urbano con valentía y
con nadie en la calle ni aceptar nada de ex- audacia. Éstas poseen varias habilidades de
traños” (Reloj P97: M 30); “caminar rápido y negociación peligro, de lectura de los signos
no detenerse ni prestar atención a nadie” (Re- de riesgo y de la toma de posesión de los esce-
loj P51: M20); “no parar cuando alguien se narios de la ciudad (ver recuadro 1). Las habi-
acerque a pedir información en la calle”; “no lidades espaciales de las mujeres muestran que
prestar atención a saludos, chiflidos o pitos” éstas buscan constantemente construir auto-
(Reloj P17: M8); “no responder preguntas a nomía y, más importante, que dicha búsqueda
personas desconocidas” (Reloj P 3: H1); “no hace que el espacio urbano esté “disponible”
ponerse falda”, (Reloj P62: M 23); “no llevar para otras mujeres. La “confianza espacial” de
cosas lujosas” (Reloj P16: H6), “no usar el las mujeres puede ser interpretada como, lo
celular” (Reloj P56: M22), “no usar aparatos han mostrado las geógrafas feministas en otros
electrónicos y pasar por lugares donde hay contextos, una manifestación de poder que se

Recuadro 1. Voy a salir a matar zombis. Ya vengo

Cada vez que Catalina se despide en su casa o en su lugar de trabajo dice: voy a matar zombis. Interrogándola sobre la
expresión, confiesa que le tiene pavor a salir a la calle y sobretodo porque no le gusta encontrarse con “neritos”, es decir,
con habitantes de la calle. “Yo soy como un imán para ellos. He hecho todo lo posible pero como me ven alta y mona
(rubia) creen que soy extranjera y vienen directo a mí. Si les doy monedas no se van de mi lado y me siguen diciendo cosas.
A veces les hablo, otras los miro rayado (lanzar una mirada despectiva) o simplemente me voy más rápido esperando que
no me vayan a tocar el hombro o el brazo. A mí me da tanta rabia y asco. No me gusta ser rayada (mala persona, agresiva)
con ellos per cuando son tantos todos los días a una le toca ponerse la armadura y caminar como si nada (ignorándolos) o
mandarlos a la mierda con una mirada o cuando me atrevo les digo cosas como: no me jodas que hoy amanecí toreada o
yo ya no me como su cuentico. Así toca en el centro que es donde más me la paso. Lo de los zombis es porque a veces no
parecen personas: están re-sucios, les faltan partes del cuerpo, no tienen mirada, no saben dónde están, no entienden nada.
Caminan como los zombis de las películas, dan miedo y me da escalofrió pensar que se acerquen. Pero al final casi no es
miedo que un ñerito de estos me atraque, si, bueno un poco. Yo también pienso como en las infecciones. Que boleta!! Yo
tengo amigas que cargan gas pimienta para protegerse. Yo cargo en mi morral gel antibacterial. O sea, lo mío es más asco
que miedo. No es que me dé ganas de matar a nadie. Lo de matar zombis es porque quiero evitarlos.
Fuente: (Catalina, peluquera, 2011 entrevista)

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refuerza socialmente cuando las mujeres salen se plantea implícita o explícitamente pregun-
y reclamar el espacio público en vez de per- tas tales como:
manecer encerradas (Koskela 1997; Koskela y
Pain 2000; Wilson y Little 2008). a) ¿Tengo que proteger esta cosa? ¿Cómo la
protejo?;
b) ¿Éste objeto me ayuda en mi protección,
4. Los objetos son fundamentales en mi estrategia de seguridad? ¿Cómo la
en las prácticas de vigilancia incorporo a mi práctica securitaria?
cotidiana c) ¿Este objeto me incomoda, me intimida?
¿Cómo lo evado y si no puedo evadirlo
Nos parece importante señalar que del análisis qué tengo que hacer para manejar la
de los relojes de las prácticas de vigilancia se incomodidad que implica su presencia?
destaca la relevancia de los objetos y las cosas d) ¿Esta cosa es para ser observado y
en las acciones cotidianas5. La importancia de controlado? ¿La acepto, la ignoro o la
los objetos se deriva del hecho ante la presen- desafío?
cia o ausencia de determinadas cosas6 la gente
La forma en la que se resuelven dichas pre-
5 Grandes y pequeñas controversias sociales se tejen por la guntas se expresa en micro-regulaciones de la
presencia o ausencia de determinados objetos. Un dato que
ejemplifica la relevancia de los objetos en las prácticas de
apropiación del espacio porque derivan en ac-
securización es que la primera línea estratégica de la Política ciones o inacciones tales como no contestar el
Nacional de Seguridad y Convivencia de la Alta Consejería teléfono en la calle o en el transporte público,
de la Presidencia para la Seguridad Ciudadana es el hurto de
teléfonos celulares. Este objeto se ha convertido en el objeto no ir por determinado lugar porque no hay
más robado y genera un encadenamiento de actividades de- luces de iluminación, esperar el bus en un lu-
lincuenciales que van desde el ladrón común hasta las redes
internacionales. Las medidas que el Estado toma para com-
gar específico porque ahí hay cámaras de vigi-
batir el hurto a celulares tiene que ver con la persecución lancia, vestirse de una forma particular, dónde
de las mafias como las campañas educativas en cultura de la encontrar a los amigos y qué medio de trans-
legalidad. (Alta Consejería de la Presidencia de la República
para Seguridad y la Convivencia 2014) porte es mejor, a qué hora salir o a qué hora
6 Se trata de objetos que se busca proteger y objetos que llegar si se lleva un computador portátil, etc.
sirven para desplegar estrategias concretas de vigilancia. En Volvemos aquí a Latour porque él ha mos-
los escenarios de interacción la gente hace mención a las cá-
maras de seguridad (probablemente el objeto más nombra-
trado que “cuando se trata de explicar la du-
do); alarmas de los autos, en las casas, los sitios de trabajo; rabilidad de los vínculos sociales se acude a
rejas; pasadores; candados; fetiches de la buena suerte y la nociones abstractas tales como la “sociedad”
prosperidad (la mata de sábila, la cruz de laurel con cereales,
la herradura; la biblia; las imágenes religiosas; especialmente o 1a “norma social” o las “leyes sociales” o las
la virgen del Carmen y altares); botellas de vidrio rotas e
incrustadas en la parte alta de los muros; luces que se encien-
den automáticamente ante la presencia de las personas; las ra; libro anotaciones; CAI y CAI móvil; motos; paraderos;
sillas en el transporte público; las sillas en los restaurantes, vidrio de seguridad; cajones del escritorio; ficha o carné de
bares, salones; la ventana en el bus; Transmilenio; taxi; colec- entrada; clave de acceso; computador; tapabocas; gancho
tivo; bicicleta; automóvil; la puerta de salida de los pasajeros; para el bolso; monedero colgante para guardar el dinero;
los perros entrenados y los perros en general; aparatos elec- billetes de mayor denominación; monedas; documentos de
trónicos; iPod; portátil; proyectores; celulares; automóviles; identificación; billetera; salones cerrados; salones abiertos;
carteras; morrales; casilleros; cortinas; salida de emergencia; lista de los teléfonos de emergencia; conjunto cerrado; he-
llaves; ropa; zapatos, chaqueta, pantalón; falda; sostén; bol- licópteros; navajas; parqueadero; detectores de movimiento;
sillos; joyas; timbres; portería; plata; centro de la calle; ace- gas pimienta, gel desinfectante, etc.

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Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a través de las prácticas de la vigilancia cotidiana

“estructuras” o los “hábitos sociales” o la “cul- hogar” que “refuerzan” los seguros de puertas
tura” o las “reglas”, etc. dejando de lado las co- y ventanas. Todos ellos son actantes en medio
sas, en el sentido literal del término. Sostiene de un entramado de asociaciones destinadas a
que prescindir de los objetos abre el paso a la promover la seguridad.
introducción de explicaciones tautológicas y
la presencia de fuerzas mágicas que sostienen a
la sociedad sin literalmente ninguna cosa (La- 5. Performatividad de la vigilancia,
tour 2005, 70) actos del habla y las apropiaciones
Las cosas, en términos de Latour y la teoría espacio temporales
del Actor Red, son actantes, es decir, partici-
pantes irreflexivos en la acción sin los cuales En el trabajo de campo y en la lectura de los
las acciones sociales quedarían en el aire. La- relojes se hizo evidente que hay una relación
tour sostiene que cualquier cosa (reiteramos, entre las practicas espacio-temporales de secu-
en el sentido más literal del término) que mo- rización y las expresiones verbales que la gente
difica con su incidencia un estado de cosas es emplea para hablar de la seguridad en los es-
relevante para entender la acción. Eso implica cenarios de interacción. En efecto, en la for-
tomar en cuenta los participantes no huma- ma de saludar y despedirse, en las expresiones
nos a la hora de permitir, dar recursos, alen- para referirse a actos de violencia de los que
tar, sugerir, influir, bloquear o hacer posible, se tiene noticia, en las recomendaciones que
la vigilancia ejercida y la vigilancia recibida y les dan a sus hijos, a las alertas que hacen a
en ese sentido son relevantes para entender las quienes los visitan, en las conversaciones antes
acciones de vigilancia cotidianas. de acostarse, en los planes para el dia siguien-
Este planteamiento de Latour se corres- te, etc., las personas suelen pronunciar expre-
ponde con el encontrado en los relojes de prác- siones, comentarios y advertencias referidas a
ticas cotidianas, en los cuales, por ejemplo, la protección y los peligros de la ciudad y su
encontramos que la protección de los objetos barrio. Esas expresiones se pueden entender
(el celular, el portátil, el automóvil, la bicicle- como actos del habla que pueden tener varias
ta, la casa, un terreno, los objetos personales, finalidades como constatar algo, transmitir un
en general) activa prácticas y formas de estar y significado y regular acciones.
relacionarse con los demás. Al mismo tiempo, Lo más importante de estos actos del
el paisaje bogotano está poblado de una am- habla es que al ser repetidos o citados cons-
plia gama de actantes que buscan disuadir la tantemente tiene la capacidad de producir
delincuencia: misceláneas y tiendas de barrio realidades al mismo tiempo que influir en la
enrejadas advirtiendo que hay pocas oportu- forma que toman las acciones de las perso-
nidades para robar allí, perros ladrando en la nas. Desde John Austin (1962) hasta Judith
calles y en las azoteas advirtiendo la presencia Butler (1993; 1997), pasando por Guatari y
de extraños, vidrios de botellas rotas pegadas Deleuze (2002) y Derrida (1977), se ha de-
con cemento sobre los muros; postes de la luz nominado performatividad del lenguaje a la
coronados con parlantes y sirenas para avisar capacidad que tienen la expresiones verbales
cuando algo sucede en el barrio; imágenes re- para producir realidades. Para Judith Butler,
ligiosas que dicen “Virgen María protege este los actos del habla performativos tienen lugar

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en el marco de un régimen de verdad. Ella en- trabajo en la calle ya no siento miedo, pero
tiende que la performatividad no es un acto tampoco doy papaya porque estoy pendien-
que signifique que un sujeto individual cree te de los indigentes, vendedores ambulantes,
el mundo cuando lo nombra sino, más bien, limosneros, etc” (Reloj P19: M9). Este uso
que la reiteración de expresiones verbales re- de la expresión crea una representación se-
fuerza y reproduce discursos sobre la realidad gún la cual hay que contar con la existencia
con capacidad para construir subjetividades. de acechanzas provenientes de varias fuentes.
El poder performativo de los actos del habla, Por eso hay que cuidar los objetos personales
entonces, se deriva de la repetición ritualizada asiduamente, no usar el celular en la calle, lle-
de la norma dentro de un régimen de repre- var la billetera en un lugar seguro, saber cómo
sentaciones, de relaciones de poder, que busca portar la maleta en la calle, no transitar por
reproducir, en el caso de Butler, un régimen determinados lugares a ciertas horas, etc. La
del cuerpo, del sexo y del género que ella cali- explicación que se deriva esta expresión (“lo
fica de heteronormátivo. robaron porque usted dio papaya” sería una
Entre las expresiones encontradas la más respuesta, incluso de los policías, ante una
común y con fuerza performativa es la “dar persona que hace una denuncia de robo) es
papaya” (“dio papaya”, “no hay que dar papa- simplista pero efectiva porque impide tomar
ya”) que significa dar oportunidad para que distancia frente a los fenómenos de inseguri-
algo suceda, especialmente, algo negativo. dad. Justamente lo que hace es hacer que la
Aunque el uso de esta expresión está muy gente piense en los fenómenos (los actores
extendida en el lenguaje cotidiano y se usa que cometen actos delincuenciales) como los
para múltiples circunstancias, uno de sus usos explicadores de la inseguridad y no en los pro-
principales está relacionado con la seguridad cesos y relaciones (económicas, sociales, po-
personal. Cuando alguien “da papaya” quiere líticas, culturales, etc.) que están detrás de la
decir que está desatendiendo las “normas” bá- formación de estos actores.
sicas de comportamiento que le evitarían con- Adicionalmente, esta expresión sirve para
vertirse en víctima de una agresión, un atraco re-victimizar las personas que han sido objeto
o un hurto. Dar papaya es una expresión que de una agresión de cualquier tipo. En efecto,
tiene varias posibilidades de traducción: dejar cuando se dice que la persona fue asaltada o
o permitir que algo pase como consecuencia violada porque dio papaya se está afirmando
de la desatención, por descuido, por exponer- que la víctima es al mismo tiempo la culpable
se innecesariamente, por actuar de manera por su incapacidad para advertir el peligro o
torpe y por ser demasiado confiado. por ponerse en una situación favorable para
Esta expresión tiene un poder de “expli- los agresores. La falda era muy corta, cami-
cación” y justificación sobre la ocurrencia de nó por un lugar muy oscuro, caminaba sola o
algo malo. Dicen las personas, por solo citar solo, no se sentó el lugar indicado en el bus,
algunos ejemplos: “Dio papaya y por eso lo no puso el morral donde debía hacerlo, se le
robaron”. “Dio papaya y la agredieron”. “No olvidó poner pasador en puerta, se le olvidó
doy papaya y por eso no me ha pasado nada” activar la alarma, puso todo el dinero en el
(Reloj P98: H27). “Al principio fui varias ve- mismo bolsillo, etc. Son las formas de incul-
ces víctima de atracos en la calle. Ahora que par a quien ha sido objeto de una agresión.

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Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a través de las prácticas de la vigilancia cotidiana

Así, el poder “explicativo” de la expresión dar sociabilidad urbana mediada por las estrete-
papaya deriva en reforzar la idea según la cual gias de vigilancia.
no es posible apropiarse de maneras alternati- Encontramos que esta actitud de perma-
vas del espacio urbano porque se invoca al pe- nente desconfianza se liga con la aceptación de
ligro. Toda práctica alternativa de apropiación la vigilancia ejercida sobre las personas. Espe-
sería “tentar al destino”, “ponerse en bandeja cialmente, quienes se consideran buenos ciu-
de plata”, “buscar lo que no se le ha perdido”. dadanos aceptan que existan mecanismos de
Por eso existe la expresión “a papaya puesta, control y asocian un lugar no vigilado con un
papaya comida” o “papaya servida, papaya co- lugar inseguro. La lógica de esta actitud favo-
mida” para significar quien baja la guardia se rable a la vigilancia es que ésta cobija a todos
convierte en víctima. y eso es bueno porque incluye a los que sí son
Estas expresiones están hermanadas con peligrosos. La expresión, proveniente del len-
otras expresiones que encontramos referidas guaje común, que mejor sirve para reproducir
a usar la desconfianza como principio acti- y justificar la favorabilidad hacia la vigilancia
tudinal de la apropiación espacio-temporal es la de: “el que nada debe nada teme”. En
y de relacionamiento interpersonal. “La me- los relojes encontramos también y, sobre todo,
jor defensa es desconfiar de la gente”(Reloj múltiples actos del habla que parecen solo
P118: H 31), manifestaba un respondiente constatativos en la medida que describen lo
en los relojes. En la realidad creada por las que hacen las personas cuando están en cada
voces repetidas sobre lo que significa no dar lugar de interacción.
papaya, junto con los eventos de inseguridad La gente dice que prefiere llevar el morral
y la mediatización de los mismos, esa actitud al frente y no atrás o que prefiere sentarse cerca
de desconfianza constante es esencial porque de la puerta de salida en el transporte público,
“hay ladrones que no parecen ladrones” (Re- por ejemplo. También dicen las personas que
loj P103: H30), porque “no hay que bajar la no hablan con extraños y que tampoco pier-
guardia” (Reloj P100: M31) y, esencialemen- den de vista sus objetos. Sin embargo, estos
te, “porque todos son sospechosos” (Reloj P 9: actos del habla muestran, más bien, la solidifi-
M3). Esa actitud no se encuentra solo entre cación de rutinas de vigilancia cotidiana y, son
las personas corrientes sino en quienes tienen justamente, el tipo de efectos que se obtienen
oficios particular de ser desconfiados, es de- de la repetición de expresiones con significado
cir, los vigilantes, celadores, policias, porteros, y con contenido regulatorio. En eso es justa-
etc. En los casos (el de las personas comunes mente en lo que consiste la performatividad
y los varios tipos de vigilantes) la demanda a del lenguaje. Butler dice “la performatividad
las personas con las que interactuan es mostrar debe ser entendida no como un “acto” deli-
“credenciales” de buena persona o por lo me- berado y singular sino más bien como el con-
nos de no ladron. El analisis de esas estrategias junto reiterado de prácticas de citación por
de pasar por alguien confiable en cada uno de medio del cual un discurso produce el efecto
los escenarios de interacción implicaría reco- que nombra” (Butler 1993, 13).
pilar información que en los relojes no tenían
la intención de captar, pero sin duda sería un
material clave para comprender otra cara de la

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Conclusiones. Ensamblando la entender como un régimen de sociabilidad


securonormatividad urbana marcado por la preponderancia de
actos corporales-verbales motivados por una
Este artículo caracteriza las formas que asumen intencionalidad constante de defensa. Dicha
las interacciones cotidianas entre las personas intencionalidad configura subjetividades de-
en una ciudad donde existe una alta sensa- bido a ejercer la vigilancia y la desconfianza
ción de inseguridad. La caracterización de la son la negación de otras destrezas y formas de
sociabilidad urbana en esas condiciones nos actuar como la cooperación y la solidaridad.
permitió construir el concepto de securonor- La securonormatividad muestra que las
matividad. No partimos de un concepto dado prácticas espaciales no son simples desplaza-
y desarraigado espacio-temporalmente para mientos entre escenarios de la vida cotidiana
explicar la sociabilidad urbana en Bogotá, sino sino que las prácticas espaciales están acompa-
que construimos el concepto a partir de los ñadas de actos del habla que ayudan a formar
datos recogidos por la herramienta que diseña- el sentido de la acción. Lo más relevante es
mos (los relojes de prácticas espacio-tempora- que estos actos del habla no son estrictamente
les). En esa medida tampoco partimos de un individuales sino que circulan de diversas for-
autor o de un marco teórico sino que más bien mas entre las personas que viven en Bogotá y
empleamos la teoría como una herramienta en hacen referencia a cosas que la gente ha dicho
vez de usarla como un marco preestablecido repetidamente sobre cómo comportarse en
para formular hipótesis o para extraer conclu- determinados lugares. En ese sentido, son la
siones adelantadas. aceptación y la reproducción de las reglas de
La investigación recoge en ese sentido los juego para estar seguro. La securonormativi-
principios metodológicos tanto de la teoría dad se compone, también, de la escenificación
fundamentada informada (Charmaz 2011; de actitudes corporales (presentarse como te-
2014) como de los enfoques no representacio- mible o, en otro extremo, ponerse en el papel
nales (Thrift 2007). Esa posición de no forzar de figurante trivial) por lo que no hay consti-
un marco teórico para entender los proble- tución de los escenarios de interacción ni ac-
mas no significa negar o descartar la literatura tos vigilancia sin enraizamiento en el cuerpo.
teórica y la investigación existente. Es todo En últimas, la securonormatividad expresa
lo contrario. Significa reconocer el lugar de que las prácticas espaciales están acompañadas
enunciación de las diferentes teorías y usarla de performaces corporales. No obstante, los
críticamente (pragmáticamente) como fuente temores, las agresiones y las estrategias para
de herramientas conceptuales. La literatura hacer frente a los mismos se experimentan di-
considerada teórica es, entonces, un surtidor ferencialmente entre mujeres, hombres, niñas,
de inspiración, de ideas, de asociaciones crea- niños, adultos mayores, etc. por lo que la se-
tivas y reflexiones críticas (Kelle 2005; Kelle curonormatividad es un ámbito muy diverso
2007; Thornberg 2012). En el caso concre- de prácticas y reglas susceptibles de ser anali-
to que nos ocupa, la existencia de múltiples zadas interseccionalmente. Pero, más impor-
regulaciones derivadas de la vigilancia en la tante, la diversidad de la corporificación de la
ciudad nos permite introducir el concepto securonormatividad en las personas, se integra
de “securonormatividad”, la cual podemos al abanico de filiaciones y relaciones posibles

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Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a través de las prácticas de la vigilancia cotidiana

entre las personas (hombres y mujeres, inter- (Simmel 1949, 254). Georg Simmel propuso
generacionales, de clase social, etc.). Por ejem- que los vínculos entre las personas puede adop-
plo, como lo vimos, la securonormatividad tar las siguientes formas de asociación: con
entre las mujeres se expresa como limitación otros (with-one-another) donde prima la coope-
de la autonomía y reproduce los roles patriar- ración mutua; por otros (for-one-another) en la
cales normalizados. que predomina el sentirse responsable de otros
El análisis de las prácticas cotidianas de o de cuidar de otros o el altruismo; en otros
vigilancia muestra que las cosas y los objetos (in-one-another) donde prepondera el respon-
son importantes cuando hablamos de la se- sabilizar a otros o de delegar en otros; contra
curonormatividad. De hecho las prácticas de otros (against-one-another) o donde reina la
securización no se pueden pensar sin objetos, desconfianza y suspicacia frente a los demás;
algo que, incluso los geógrafos tan acostum- y mediante otros (through-one-another) donde
brados a tratar con cosas materiales, a veces prima el egoísmo, la ambición y la competencia
pasan por alto. Tan es así que si hablamos de (Simmel 1949).
las acciones de vigilancia cotidianas sin obje- En los relojes y en las entrevista podemos
tos no sabríamos, por ejemplo, qué es lo que encontrar ejemplos para cada una de estas posi-
la gente busca proteger o simplemente no ha- bles formas de los lazos entre las personas, pero
bría un algo que proteger. Pero si quitamos podemos afirmar que la intencionalidad de vi-
los objetos tampoco sabríamos cómo la gente gilancia constante deriva especialmente en una
despliega acciones de vigilancia: sin seguros en sociabilidad urbana donde reina la desconfian-
la puerta, sin cámaras de vigilancia, sin rejas za y la suspicacia cuando se trata de extraños.
en la puerta, sin alarmas, etc. simplemente no Cuando se trata de las personas de la familia
se pueden describir ni entender las estrategias predominan una forma de sociabilidad basada
de securización cotidianas. Por eso los objetos en la preocupación, la cooperación mutua y el
son participantes (actantes) de la acción social control. Como corolario de esto, el cuidado ha-
no solo como objetos a proteger sino como cia los demás se restringe a un grupo limitados
herramientas de la securización. Los objetos de personas y las relaciones con los demás se
son fetiches y son medios, que le dan vida a la vuelven pesadas y llenas de supuestos, prejui-
securonormatividad. cios y temores. Esta intensificación de las rela-
Los rasgos anteriores (intencionalidad secu- ciones, para usa el término de Lofland (1985),
ritarista, las normas informales sobre de mane- basadas en una intención securitarista hace que
jo del espacio-tiempo cotidiano, de la presen- la tensión entre disfrutar de la presencia de los
tación del cuerpo ante los demás, los actos del demás y los temores frente a éstos bascule hacia
habla asociados a las practicas espaciales de se- el lado de los temores.
curización, la participación de los objetos) des- Por todo lo anterior, entendemos la secu-
embocan en el tema de la sociabilidad urbana, ronormatividad como un conjunto de reglas,
es decir, “la forma que toma el juego de las aso- apropiaciones del espacio, expresiones, postu-
ciaciones entre personas en un lugar concreto”7 ras del cuerpo que implican, sobre todo, un
asalto a la solidaridad y la confianza. En una
7 Sociability is the play-form of association (Simmel 1949, condición de securonormatividad generali-
254). zada como Bogotá, el espacio público, esen-

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Luis Berneth Peña

cia de la ciudad que se crear a partir de los sociales, es pertinente pensar en otras alterna-
encuentros entre extraños, se ve deteriorado tivas complementarias para des-intensificar la
como producto de la practicar sostenida de obsesión de vigilancia y, su corolario, la into-
la suspicacia. La securonormatividad favorece lerancia social.
una suerte de círculo vicioso de invenciones
técnicas y sociales destinadas a vigilar más ha-
ciendo que la vigilancia se sienta como algo Bibliografía
necesario y normal del funcionamiento de
todos los espacios y no como la evidencia de Amendola, Giandomenico. 2000. La ciudad
una ruptura en la sociabilidad. La conexión postmoderna: magia y miedo de la metrópolis
de esta actitud con las posturas políticas de las contemporánea. Barcelona: Celeste Ediciones.
personas ha sido analizada en otro contexto en Bannister, Jon y Nick Fyfe. 2001. Introduc-
el que se encontró que la securonormatividad tion: fear and the city. Urban Studies 38
está asociada a un sentido común securitarista (5-6): 807-813.
caracterizado por el sectarismo político y so- Barberet, Rosemary. 2004. La seguridad urba-
cial (Peña 2015). na: la experiencia europea y las consecuen-
Pero también, estar securonormativizado cias para América Latina. En El desarrollo
“permiten ver” el peligro, detectar fuentes de local en América Latina. Logros y desafíos
riesgo, “saber qué está pasando” y, en conse- para la cooperación europea, 163-176. Ca-
cuencia, dictan (regulan) cuál debe ser el com- racas: Nueva Sociedad.
portamiento. Usando los hallazgos de Joyce Bauman, Zigmut. 2013. Liquid modernity.
Davidson en sus interesantes trabajos sobre la Londres: John Wiley & Sons.
agorafobia (Davidson, 2003a; 2003b) podría- Butler, Judith. 1993. Bodies that Matter: On
mos decir que ser y estar securnormativizado the Discursive Limits of “sex”. Nueva York:
se convierte, paradójicamente, en un recurso Psychology Press.
en el sentido que el sujeto puede construir un ________ 1997. Excitable speech: A politics of
marco de acción y unos límites personales para the performative. Nueva York: Psychology
interactuar con los demás. Por todo lo anterior, Press & Routledge.
entendemos a la securonormatividad como una ________ 2006. Precarious life: The powers of
contradicción sustancial de la urbanización en mourning and violence. Londres: Verso.
el Sur Global y un reto mayor para construc- Buvinic, Mayra. 2008. “Un balance de la vio-
ción de sentidos de lugar positivos. La obsesión lencia en América Latina: los costos y las
de vigilancia es un problema esencialmente re- acciones para la prevención”. Pensamiento
lacionada, por supuesto, con la reducción subs- Iberoamericano: 37-54.
tancial de las agresiones y robos, lo cual es un Buvinic, Mayra, Andrew Morrison y María
proceso que pasa por políticas públicas destina- Orlando. 2005. “Violencia, crimen y de-
das a desactivar la delincuencia. Sin embargo, sarrollo social en América Latina y el Cari-
debido a que la saturación de la vigilancia está be”. Papeles de Población 43: 317-384.
relacionada también con la circulación de dis- Buvinic, Mayra, Andrew Morrison y Michael
cursos maniqueos, la alta mediatización de los Shifter. 2002. La violencia en América La-
eventos delictivos y la existencia de etiquetajes tina y el Caribe: un marco de referencia para

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Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a través de las prácticas de la vigilancia cotidiana

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Securonormatividad. La sociabilidad urbana vista a través de las prácticas de la vigilancia cotidiana

Anexo 1. Algunos ejemplos de los 125 relojes de prácticas espaciales diligenciados

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Luis Berneth Peña

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Entrevista
URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad, No. 18, Quito, junio 2016, pp. 125-136
RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador • ISSN 1390-4299 (en línea)
Crimen organizado y economía ilegal
Entrevista a Daniel Sansó-Rubert Pascual1
Organized crime and illegal economy
Interview to Daniel Sansó-Rubert Pascual

Por Liosday Landaburo Sánchez

¿Cómo se puede combatir el mundo de la economía ilegal que dirige la delincuencia


organizada?

La realidad cotidiana plantea la siguiente paradoja: desde los sectores legales de la economía
se alienta un Estado no intervencionista, en tanto que para supervisar los sectores ilegales,
se promueven políticas diametralmente opuestas, nítidamente intervencionistas. En con-
secuencia, el hecho de que las economías legales e ilegales estén en mayor o menor medida
entretejidas, dificulta sobremanera la adopción de respuestas.
El desarrollo por parte de la delincuencia organizada de una interacción corruptora
con los sectores legítimos de poder le permite además, amasar recursos, capitales, infor-
mación y conocimiento empresarial, hasta alcanzar, siguiendo la clasificación de Lupsha
(desarrollada en su trabajo Transnational Organized Crime Versus the Nation-State), la etapa
simbiótica. Estadio en el que los sectores políticos y económicos se hacen dependientes de
los monopolios y redes delictuales. En esta cúspide evolutiva del poder criminal, es ilusorio
discernir las disimilitudes entre Estado y crimen organizado, entre economía legal e ilícita.
Representa el peor escenario posible, el que más preocupa y el más difícil de atajar, habida
cuenta de la vinculación entre la economía criminal y los poderes públicos. Lo que Roy
Godson identifica como el “nexo político-criminal”.
Por consiguiente, toda medida adoptada para limitar los efectos de la corrupción es el
primer paso para constreñir la capacidad expansiva de la economía criminal. Las Adminis-
traciones Públicas, junto con otras profesiones como la abogacía, los economistas, las aseso-
rías contables y financieras, la banca, las entidades de inversión, entre otras, en connivencia
con las organizaciones criminales, desempeñan una función facilitadora para imbricar la
faceta ilícita de la economía en su vertiente legal. Bien de forma directa, como parte inte-
grante de la estructura criminal, bien simplemente, haciendo dejación intencionada de sus
labores de control y fiscalización.
1 Secretario Académico del Centro de Estudios de Seguridad (CESEG) de la Universidad de Santiago de Compostela.
Investigador Invitado FLACSO (Ecuador). Miembro de la Red Latinoamericana de Análisis de Seguridad y Delincuen-
cia Organizada (RELASEDOR). Miembro del Observatorio de Criminalidad Organizada Transnacional (OCOT),
Universidad de Salamanca.

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URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad


No. 18 - Quito, junio 2016 - pp.125-136 - © RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
Liosday Landaburo Sánchez

De igual forma, la protección del sector que no se ajustan a los mercados competitivos
empresarial resulta igualmente crucial. La pe- existentes en el sector que corresponda.
netración de la delincuencia organizada en el Todas ellas, estrategias conducentes al em-
tejido empresarial, representa una amenaza al pleo fraudulento del sector empresarial que ha
desarrollo industrial de un país. La criminali- supuesto para muchos países, habida cuenta
dad organizada encuentra en este sector pro- de la inseguridad, la fuga de capitales, el des-
ductivo, un nicho de protección de sus activi- censo de la inversión nacional y extranjera,
dades ilícitas empleando empresas para ocultar y el que parte de su sector empresarial, haya
su origen ilegal, incluyendo el blanqueo de decidido reubicarse fuera del país en busca de
activos, pero también, la creación de empre- localizaciones donde la economía ilícita sea
sas o la cooptación de empresas ya existentes, objeto de un mayor control. Por ello, insis-
o incluso la contaminación empresarial sin el tir en la relevancia de la protección del tejido
conocimiento de sus propietarios, a través de industrial y empresarial con toda la contun-
conspiraciones internas con parte de su perso- dencia de la que disponga el Estado. No es, ni
nal para, por ejemplo, contaminar cargamen- más ni menos, que una cuestión de seguridad
tos de productos lícitos con tráficos ilícitos. nacional, para evitar el desmantelamiento de
De igual forma, el componente empresarial uno de los principales motores de desarrollo
puede aportar a las organizaciones crimina- de un país: su industria. Debe preocupar por
les soporte logístico para la distribución de igual, la concepción de muchos operadores
su mercancía, como por ejemplo a través de económicos para los que el crimen organizado
la disposición de empresas de transportes con transnacional, no es más que la continuación
una flota legal de vehículos a su disposición y de los negocios por medios ilícitos.
unas rutas establecidas de transporte, que po- Sea como fuere, lo cierto es que los gru-
drían camuflar sus envíos y distribución bajo pos de criminalidad organizada representan
una apariencia absolutamente legal. En esta una realidad incuestionable. Se han desarro-
misma línea, el recurso al enmascaramien- llado en Asia, América Latina, África, Europa
to legal vía empresarial, permite al crimen y Estados Unidos; ninguna región del mundo
organizado operar desde la apariencia de la y ningún sistema político o régimen econó-
sujeción al derecho, pero empleando metodo- mico, ha impedido su surgimiento o logra-
logías criminales. Esto es, crear una empresa, do un éxito rotundo en su eliminación. Esta
por ejemplo de gestión de residuos altamente imagen refuerza la idea de que la criminalidad
contaminantes y desempeñar sus funciones organizada fructifica explotando las ventanas
con normalidad hasta llegar al paso clave del de oportunidad económicas abiertas, no solo
reciclaje del residuo, momento en el que se en los países más desfavorecidos del planeta,
producen vertidos ilegales altamente contami- prosperando en un estado de caos y conflicto
nantes. O en otros supuestos de empresas de constante, lo que Moisés Naím identifica en
prestación de servicios o venta de materiales, su libro Ilícito (2006), como “agujeros negros
obligar a otras empresas u operadores comer- geopolíticos”, sino que por igual, accede al
ciales, mediante amenaza y comportamientos primer mundo en busca de escenarios y mer-
extorsivos, a adoptar a estas empresas como cados estables en los que implantarse y desa-
proveedores exclusivos a precios desorbitados, rrollar sus actividades lucrativas.

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Crimen organizado y economía ilegal. Entrevista a Daniel Sansó-Rubert Pascual

Cualquier intento de explicar la situa- que se desarrolla la economía criminal hoy es


ción en cualquier zona inestable o estable del el de una cultura funcional a su expansión.
mundo, exige entender el papel de las redes Como acontece en cualquier otro sector
criminales en la región, su organización, sus de negocios, el acceso al capital relacional,
estrategias, los mercados criminales activos, sumado a la confianza, resultan de vital im-
sus vínculos internacionales e intereses econó- portancia para el desarrollo de las actividades
micos. En congruencia, internacionalmente delictivas. Máxime, en un entorno donde
habría que prestar especial atención a estos cualquier alteración, diferencia de términos
espacios geográficos favorables al surgimiento en la prestación del servicio o abastecimiento
de manifestaciones ventajosas para la crimi- del producto o incumplimiento respecto de
nalidad organizada, cuyo seguimiento per- lo pactado, no se dirime precisamente en los
mitiría identificar con antelación las posibles juzgados. Si la clave teórica del éxito estriba en
incursiones oportunistas de redes criminales. generar relaciones interpersonales fiables, sóli-
Cualquier estrategia preventiva, sin lugar a das y estables, entonces la respuesta debe ser la
dudas, resulta la herramienta más eficaz para identificación de las mismas y su neutraliza-
contrarrestar la economía delictiva. Atajarla ción efectiva para evitar el surgimiento y con-
antes de que fructifique, habida cuenta del solidación de alianzas criminales estratégicas.
daños y costes que implica para los Estados, Además, la identificación de oportunidades de
en términos no solo económicos, sino políti- lucro (nichos de negocio fundados en base al
cos, sociales, financieros, mercantiles y a nivel cálculo de costos, riesgos y beneficios), impli-
empresarial, principalmente. En esta línea, la ca estar dispuesto a su explotación y contar
clave reside en el desarrollo de medios y capa- con la infraestructura, las capacidades y la lo-
cidades en inteligencia criminal y económica, gística para ello. En consonancia, la estrategia
que permitan identificar dichas ventanas de de intervención focalizada selectiva, desarro-
oportunidad con antelación para su interdic- llada por Felbab-Brown (Disuasión focalizada,
ción temprana. acción selectiva, tráfico de drogas y delincuencia
Si tenemos en consideración el hecho de organizada: conceptos y prácticas), adquiere un
que la delincuencia organizada y la explo- destacado potencial. Estrategia que exige un
tación de determinados mercados ilícitos profundo conocimiento de los mercados ilí-
(drogas, prostitución, consumo de produc- citos y, sobre todo, de las estructuras crimi-
tos falsificados, contrabando…), representan nales para poder focalizar la acción disruptora
una modalidad de crimen que se inserta en del Estado allí donde más daño pueda hacer,
una matriz en la que la sociedad es al mismo bien en la propia infraestructura de la organi-
tiempo víctima y beneficiaria de los bienes y zación, bien en su aparato logístico o incluso,
servicios de los que la provee, desarrollar me- perturbando las relaciones que se establezcan
didas de tipo social, estimulando la conciencia entre proveedores y compradores participan-
social en aras de lograr un rechazo abierto al tes de la economía criminal, alentando la des-
consumo de bienes y servicios ilícitos, tam- confianza mutua.
bién suma. En consecuencia, implementar Para mejorar nuestra comprensión de la
campañas de concienciación social para con- naturaleza de los vínculos de cooperación en-
trarrestar el hecho, de que el escenario en el tre las organizaciones criminales, es recomen-

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Liosday Landaburo Sánchez

dable recurrir a la literatura de administración de notificación de transacciones sospechosas.


y dirección empresarial. Analizar las formas Las UIF se enfrentan en la actualidad a una
en que las empresas cooperan y compiten y, serie de dificultades especiales. El ámbito de
en particular, la manera en que se articulan y sus responsabilidades se está ampliando a fin
consolidan las alianzas estratégicas. La gama de que comprenda el financiamiento de la de-
de tipologías de cooperación es muy variada. lincuencia organizada, además del lavado de
Pueden adoptar multiplicidad de formas a lo dinero y los correspondientes delitos determi-
largo de un espectro que abarca desde alianzas nantes. La gama de organismos notificadores
estratégicas en un extremo, hasta relaciones también se está expandiendo a fin de abarcar
de proveedor a corto plazo. Los vínculos de las profesiones no financieras, como los casi-
negocio giran en torno a la cadena mundial nos, abogados, inmobiliarias, entre otros.
de productos (lícitos e ilícitos). Cadena que La clave reside en potenciar la vulnerabi-
comprende desde la materia prima hasta el lidad de estas organizaciones a la represión,
producto final (ciclo criminal). Tales enlaces explotando al máximo sus debilidades. En
forman parte integral de la operativa cotidiana esta sintonía, cobra capital importancia el
de las actividades criminales. blanqueo de dinero. Su relevancia consiste
En la línea de las estrategias preventivas, en que además de constituir una importante
resulta igualmente indispensable la articula- modalidad de actividad criminal organiza-
ción de unidades de inteligencia financiera y da en sí misma, es un mecanismo necesario
todo el andamiaje de herramientas e instru- para el éxito de todo crimen organizado. Si
mentos destinados a la detección y erradica- se consiguen atajar adecuadamente los canales
ción del blanqueo de activos. Una unidad de de financiación, neutralizando sus estructuras
inteligencia financiera (UIF) es una agencia de blanqueo de dinero, se le asestará un golpe
central nacional responsable de recibir, anali- letal, no a un aspecto determinado de la red,
zar y difundir a las autoridades competentes, sino a la red criminal en su esencia, en el mis-
las divulgaciones de información financiera: mo núcleo de su capacidad de funcionamien-
relativas a operaciones sospechosas producto to. No en vano, el objeto último de llevar a
del delito y de potencial financiamiento de cabo una determinada actividad delictiva, es
la criminalidad organizada y del terrorismo, el afán de lucro.
o requeridos por la legislación nacional o de Además, resulta importante incidir en
regulación, a fin de contrarrestar el lavado de aspectos no directamente ligados al enfrenta-
dinero y la financiación de la criminalidad or- miento con la criminalidad organizada, pero si
ganizada e igualmente, del terrorismo. indiscutiblemente conexos, que entran en jue-
La lucha contra los delitos de lavado de go a la hora de hacer frente a las diversas mani-
dinero y financiamiento del terrorismo es cru- festaciones de economías ilícitas. El desarrollo
cial para la integridad de los sistemas finan- legislativo de normativa que exija transparen-
cieros, pero para que tenga éxito es necesario cia en la gestión de la administración pública,
que los métodos tradicionales de aplicación de crucial para neutralizar el entramado legal y
la ley cuenten con el respaldo del sistema fi- empresarial que soporta las actividades ilícitas
nanciero mismo, en especial los principios de enmascaradas bajo otras de naturaleza legal; y
diligencia debida (identificación de clientes) y de otra, la implementación de herramientas

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Crimen organizado y economía ilegal. Entrevista a Daniel Sansó-Rubert Pascual

e instrumentos de control y fiscalización em- merados organizados capaces de condicionar


presarial y mercantil (rendición de cuentas), áreas enteras de la vida pública y de controlar
que evite la penetración criminal en el tejido espacios geográficos y vastos sectores de deter-
empresarial, buscando recíprocamente la ob- minados mercados legales e ilegales.
tención de beneficios soslayando la legalidad y
la ética profesional. Medidas todas ellas, tan- ¿Hasta qué punto el monto global de dine-
to desde la óptica más recia de la seguridad, ro que hay en juego dentro de las economías
pasando por el aseguramiento de la sujeción ilegales puede comprometer la economía le-
a la normativa imperante de empresarios y gítima de los países y repercutir directamente
emprendedores de actividades de riesgo, hasta en la gobernanza? (corrupción y compra de
potenciación de códigos de comportamiento votos, por ejemplo).
ético en el ámbito público y privado por igual
que, en su conjunto, representan elementos La delincuencia organizada incide perniciosa-
exigibles de calidad democrática aplicables al mente sobre la cultura política de los países.
saneamiento de las actividades económicas y Esto es, en el conjunto de valores y actitudes
mercantiles, en pos de su desempeño acorde que informan la acción política de los ciuda-
al Estado de Derecho. danos. Afecta sensiblemente al entorno social
El análisis esbozado no pretende ofrecer de las democracias, distorsionando las líneas
una explicación omnicomprensiva acerca de que separan lo legal de lo ilegal, generando
las posibles opciones de respuesta frente a la lealtades alternativas al Estado y provocando
economía ilícita. La intención persigue, sim- cambios en la opinión pública, que afectan
plemente, aportar una reflexión que favorez- de manera negativa al funcionamiento del
ca la apertura de líneas de investigación al sistema. El crimen organizado puede afectar
respecto. Resulta crucial ahondar con mayor de manera substancial distorsionando la línea
profundidad en los conocimientos de que dis- divisoria que separa lo legal de lo ilegal, ge-
ponemos sobre los mercados delictivos y las nerando lealtades alternativas a las del Estado
vinculaciones entre la economía ilícita con la y provocando cambios en la opinión pública,
vertiente legal, que proporcionen un marco que afectan negativamente al funcionamiento
conceptual de análisis para su estudio y com- del sistema democrático.
prensión detallada. Sin olvidar el hecho de La tendencia apunta a que los dirigentes
que las organizaciones criminales establecen de estas organizaciones criminales traducen
vínculos de diversa naturaleza con gobiernos la riqueza acumulada en demandas políticas,
y con organizaciones terroristas e insurgentes, sociales y económicas. Aspiran a convertirse
para la satisfacción de intereses mutuos. Cir- en miembros de la “élite social y política”,
cunstancia, que dificulta aún más el análisis; el destinando parte de su poder económico a
resultado: networks criminales compuestas por la obtención de legitimidad social. Así se ter-
sujetos y entidades pertenecientes a ámbitos mina produciendo una asimilación social de
diversos –la política, el mundo empresarial, los dirigentes criminales, entremezclándose
el sistema financiero, el ámbito de la delin- con las esferas de poder. El crimen organiza-
cuencia organizada– cuyas sinergias e intere- do puede igualmente manipular los afectos
ses compartidos, dan vida a potentes conglo- de poblaciones enteras, generalmente carac-

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Liosday Landaburo Sánchez

terizadas por el retraso económico y las des- pios, para así tener un mejor control sobre
igualdades sociales, posicionándolas frente al toda la estructura de decisiones en las insti-
Gobierno central o frente a las instituciones tuciones de representación política. Con ello
supranacionales. Valiéndose de ardides popu- contribuyen a la deformación y el descrédito
listas, presentan las actuaciones gubernamen- de la democracia, reemplazando la auténtica
tales contra las organizaciones delictivas como representatividad electa por la mercantiliza-
un ataque a tradiciones culturales ancestrales ción instrumental de candidatos y electores.
o intereses sociales legítimos, fomentando el La manifiesta búsqueda del poder ha lle-
rechazo bajo el paraguas de sentimientos na- vado a la concepción de la delincuencia or-
cionalistas o étnicos. ganizada, en palabras de Louise Shelley en la
El acceso al poder en definitiva es una sal- interesante publicación, ya un clásico en la
vaguarda de su estatus. Este se cristaliza en el materia, The Illicit Global Economy and State
carácter inmovilista de la criminalidad orga- Power editada por Richard Friman y Peter An-
nizada, mayoritariamente de corte conserva- dreas, como una “nueva forma de autoritaris-
dor y talante reaccionario ante los cambios, mo político no estatal”, imperante en aquellos
especialmente si estos pueden privarle de su espacios geográficos en los que ha logrado re-
situación privilegiada en los estratos del poder. emplazar al Gobierno legítimo y desplegar un
Esto explica que, a priori, las organizaciones control social alternativo al oficial. A su vez,
criminales transnacionales estén esencialmen- la conexión entre crimen transnacional orga-
te a favor del statu quo, siempre que les benefi- nizado y liberalización económica es un tema
cie, y son notoriamente agnósticas en asuntos políticamente sensible al que con demasiada
de política, excepto cuando se trata de apoyar frecuencia se ignora o palia convenientemen-
a aquellos grupos políticos que les permitan te, o bien se exagera y tergiversa. Cabe preve-
llevar a cabo sus programas. De ahí se deduce nir contra la exageración y la simplificación
la “inestabilidad” de sus lealtades políticas, ya excesiva de esta conexión causal, postulada
que en último término no son más que una desde foros contrarios a la liberalización eco-
instrumentalización pragmática a favor de sus nómica.
propios intereses. Lo que sí es cierto, es el hecho de que la
El sistema electoral tampoco escapa a actividad criminal organizada transnacional
su esfera de influencia. De facto, en no po- genera inestabilidad financiera, a la par que
cas ocasiones recurren a la manipulación del distorsiones e ineficacias en los mercados. Pro-
proceso electivo mediante la postulación de voca disfunciones estructurales en la econo-
candidatos propios, hacia los que canalizan mía, que afectan negativamente a los ciudada-
ingentes recursos económicos e informativos nos y a la estabilidad del sistema democrático.
procedentes de sus negocios ilícitos o, en re- En las décadas precedentes, el extendido des-
giones donde el clientelismo es una caracte- mantelamiento de políticas económicas esta-
rística endémica, pueden poner al servicio del tistas y la aceptación de reformas liberales del
candidato “predilecto” el electorado indispen- mercado han transformado en profundidad la
sable para la victoria. Su poder económico les economía global. Quizá, de acuerdo con An-
permite, llegado el caso, subordinar a partidos dreas, una de las consecuencias más drásticas
políticos preexistentes o crear los suyos pro- del cambio económico operado de la mano

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Crimen organizado y economía ilegal. Entrevista a Daniel Sansó-Rubert Pascual

del capitalismo globalizado resulte el que mu- provoca inestabilidad en las instituciones ban-
chos países en desarrollo y otros plenamente carias y en el mercado del dinero en general,
desarrollados, destaquen por ser especialmen- lo cual puede desembocar en una crisis eco-
te competitivos en diversos sectores criminali- nómica profunda. En definitiva, el crimen or-
zados de la economía global. Las actividades ganizado induce a desequilibrios económicos
económicas de las organizaciones criminales y largos periodos de recesión, perjudicando
transnacionales son en muchos aspectos la gravemente la competitividad internacional.
quintaesencia del espíritu empresarial del sec- Más aún, en países con economías fuertemen-
tor privado. La incómoda realidad arroja que te dependientes del sistema productivo crimi-
en muchas regiones la economía criminali- nal, cualquier esfuerzo para su erradicación y
zada ha resultado una fuente decisiva tanto retorno a un funcionamiento eficiente de los
de ingresos como de empleo, contribuyendo mercados, de la política y de la sociedad en
incluso a amortiguar las conmociones propias general, provocará efectos recesivos en la eco-
de etapas de reestructuración económica. nomía y la consecuente contestación social.
Con esto no se está sugiriendo que la glo- A modo de colofón, ha de hacerse hinca-
balización, en su vertiente económica, sea la pié en que la peligrosidad de este tipo de or-
causa fundamental de la delincuencia organi- ganizaciones delictivas radica especialmente
zada transnacional, pero sí representa una va- en el “reciclaje o blanqueo de las ganancias
riable trascendental para explicar su prolifera- del delito”, en tanto les confiere la capacidad
ción. A la postre, la liberalización económica de perturbar la organización económica de
ha procurado novedosas expectativas para los un Estado. La inyección de las ingentes ga-
que están involucrados en mercados penali- nancias obtenidas ilícitamente en el mercado
zados. Algunas de las mismas iniciativas dise- financiero legal, alteran la libre competencia,
ñadas para estimular y facilitar el intercambio en cuanto han sido logradas sin someterse a
económico legal (liberalización comercial y fi- las reglas legales que constriñen a los demás
nanciera, privatización, desregularización del competidores. La economía de mercado se
transporte) benefician el intercambio econó- basa en el principio de la libre competencia,
mico ilegal. en la confianza en que todos están sometidos
En conjunto, las repercusiones de la inmer- por igual a las normas legales reguladoras del
sión del crimen organizado en el ámbito de la mercado. Este equilibrio quiebra en el mo-
economía son inflación, una distribución in- mento en el que uno de los competidores,
eficiente de rentas, la disolución del libre mer- dispone de un inagotable capital de origen
cado y la regulación económica estatal, pérdi- ilícito. Todo ello en base a que los costes de
das substanciales de productividad, una visión los recursos conseguidos de forma delictiva
utilitarista de la inversión contraproducente son notablemente inferiores respecto de los
con el crecimiento económico prolongado y, derivados para la obtención de fondos lícitos
en ocasiones, sobrevaluación monetaria. En lo (destaca como objetivo de la criminalidad or-
que se refiere al sistema financiero en parti- ganizada su afán de infiltración en la econo-
cular, la volatilidad de los capitales en manos mía legal, para tratar de alcanzar posiciones
de los grupos criminales dificulta las acciones monopolísticas a través de la supresión de
correctas en materia de política económica y competidores).

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Liosday Landaburo Sánchez

Dentro de las economías ilícitas hay opciones lo empujan a romper con la norma. Esto su-
de ascenso social como respuesta a estructu- pone, vinculado a las economías ilícitas, que
ras de exclusión, ¿qué hay de cierto en esto? la consecución del éxito en este ámbito, po-
sibilita al individuo el ascenso social, desde la
Hoy día, uno de los valores culturales interna- obtención de un empleo que no lograría en
cionalmente compartido se corresponde con el circuito laboral legal, que le permita una
“alcanzar el éxito”; meta socialmente traduci- subsistencia digna, hasta el enriquecimiento
da en la adquisición de dinero y bienes mate- personal, por lo que la economía ilícita y la
riales, sumado al reconocimiento y prestigio criminalidad organizada, ofrecen atractivas
social. Obtenerlo, puede conducir a la ruptura opciones de medrar en el escalafón social, en
de la norma. Las personas, escogemos entre el un espectro que abarca tanto los altos niveles
camino legal o ilegal para alcanzar el máximo empresariales, como las situaciones de margi-
bienestar posible, tanto en situaciones de pura nalidad. Todo aquel dispuesto a quebrantar la
elección racional a favor de quebrantar la nor- norma y asumir los riesgos de la inmersión en
ma, como en situaciones de necesidad o de su- la esfera delictiva, tiene la posibilidad de al-
jetos marginalizados socialmente. Lógicamen- canzar el éxito en función de la conjunción de
te, cualquier persona en situación de carestía sus limitaciones y aspiraciones.
tendrá, a priori, una motivación mayor para Son múltiples las teorías criminológicas de
involucrarse en actividades criminales dada fuerte raigambre sociológica, las que han tra-
su exposición social a la exclusión, que otra tado de explicar el por qué la trasgresión de las
en una situación más acomodada. Piénsese en normas y la participación en y del delito, tiene
los campesinos cultivadores de hoja de coca. esa vis atractiva para todos aquellos dispuestos
La prevalencia de sembrar plantíos de cocaí- a lograr el mayor éxito posible a su alcance,
na o de marihuana, descartando otros factores invirtiendo el menor esfuerzo y en tiempo
que puedan entrar en juego como situaciones record. En esta línea explicativa, destaca la
de amenaza o control social férreo (dominio) propuesta de Merton y su Teoría de la Ano-
de organizaciones criminales, que obligan al mia, a través de la cual se identifica el crimen
campesinado a su plantación, obedece, desde organizado como una respuesta normal a las
una visión estrictamente económica, a que presiones que, sobre ciertas personas, ejerce la
este tipo de cultivo reporta mayores benefi- estructura social. La persecución de objetivos
cios, que otros cultivos sustitutivos como el socialmente deseables como el éxito profesio-
café o determinados cereales. nal y la prosperidad económica, favorecen la
Por lo tanto, en la trayectoria vital de un flexibilización, e incluso, la eliminación de los
sujeto, este puede decidir salirse de la coyun- controles sobre los medios empleados para al-
tura social y quebrantar las normas para ob- canzarlos (inhibición de las normas). La ads-
tener éxito, bien debido a una socialización cripción de los individuos a la delincuencia
carente de apego a los medios legales, bien en organizada o su conformidad para constituir
base a su adscripción a una subcultura delic- una organización para delinquir, se explica
tiva que lo alienta o impelido por la falta real al priorizar los fines a conseguir, empleando
de oportunidades (exclusión social). Todas medios socialmente rechazados para su acceso
funcionan como factores determinantes, que por ilegales.

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Crimen organizado y economía ilegal. Entrevista a Daniel Sansó-Rubert Pascual

De igual forma, Sutherland plantea a tra- na de estratos sociales diferenciados por una
vés de la Teoría de los contactos diferenciales, amplia desigualdad, es un factor determinan-
que todos los comportamientos sociales son te para la generación de criminalidad. Evi-
aprendidos, tanto legales como criminales. dencian, que la desigualdad económica, más
Lo que se aprende depende de la intensidad, que la pobreza en sí misma, potencia el de-
frecuencia y duración de la asociación con sarrollo de la delincuencia. Lógicamente, no
otras personas en el curso de un proceso de existe una única teoría explicativa válida de
comunicación. De ahí, que la posibilidad de cómo la inmersión en el mundo de la ilegali-
que un individuo adopte como propio un dad puede facilitar a las personas las oportu-
comportamiento delictivo dependerá de sus nidades de enriquecimiento y ascenso social
contactos y el modo en que éstos se producen que las diversas vías normativizadas, bien no
con personas pertenecientes a organizaciones les ofertan, bien las condiciones estipuladas
criminales. Igualmente, las diversas Teorías son excesivamente gravosas o simplemente,
de la subcultura y la desorganización social de no están dispuestas a asumirlas. La tendencia
Sykes y Matza, interpretan el comportamien- aboga por aglutinar todos los aportes teóri-
to delictivo como aprendido. Es el resultado cos bajo una única Teoría de la criminalidad
de la pertenencia a una subcultura delictiva, organizada, que aún no termina por fructi-
que implica la existencia de valores y pautas ficar. Este planteamiento teórico eminen-
de comportamiento, que se apartan y contra- temente ecléctico, en base a que cualquier
ponen a los valores sociales dominantes. Cir- aproximación a su estudio debe ser necesa-
cunstancia, que lleva aparejado una neutrali- riamente transversal y holístico, atendiendo
zación de las normas, que son reflejo de esos a su naturaleza multicausal y plurifactorial,
valores, por lo que los individuos adecuan y a la diversidad de actividades y mercados
su conducta de acuerdo al grupo criminal al ilícitos existentes con sus respectivas peculia-
cual pertenecen y con el cual se sienten iden- ridades, representa uno de los mayores retos
tificados, desarrollando una actitud social y para la criminología actual y futura.
normativa propia. Íntimamente relacionada
con esta línea argumental, destaca la Teoría ¿Cuán importante es la gestión de fronteras
de la sucesión étnica propuesta por Daniel por parte de cada uno de los Estados-nación
Bell, que sostiene, en líneas generales, que la para neutralizar los movimientos ilícitos?
delincuencia organizada, ha sido un instru-
mento utilizado por los inmigrantes como Cualquiera con un mínimo de conocimiento
medio para mejorar su posición en la escala sobre economía criminal y tráficos ilícitos es
social. consciente de la existencia inmemorial de es-
En este mismo contexto de desigualdad tas prácticas. Existen desde el principio de los
(inequidad social), se ubican las teorías que tiempos; desde el mismo momento en que se
privilegian la idea de la descomposición so- instauraron dos unidades políticas limítrofes
cial como origen de la conducta criminal diferenciadas y cualquier grupo organizado
organizada. Así, en concreto, la Teoría de la de personas transportaron subrepticiamente
carencia relativa, desarrollada por Peter y Ju- mercancías de una a otra sin satisfacer los es-
dith Blau, expone que la coexistencia cerca- tipendios estipulados. Desde entonces hasta la

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Liosday Landaburo Sánchez

actualidad, dentro del ámbito de la seguridad, capacitación especializada para el desempeño


han sido múltiples las transformaciones sufri- de sus funciones, sumado a la inversión en
das a raíz de los procesos de mundialización. medios y capacidades en inteligencia crimi-
En particular, cabe destacar la reconsideración nal e investigación policial, que permitan un
del papel de los Estados, su permeabilidad te- conocimiento profundo del funcionamiento
rritorial a través de sus fronteras y la difumina- de los mercados, los flujos y las economías
ción de las barreras entre los ámbitos de Polí- ilícitas, posibilitando la identificación de sus
tica Exterior e Interior, circunstancias que han vulnerabilidades y potenciando la interven-
posibilitado el aumento del radio de acción ción focalizada sobre las mismas. Objetivos,
de grupos no estatales entre los que destacan que requieren del compromiso institucional
las organizaciones criminales que, cada vez en con la tarea y la tan necesaria y reiterada des-
mayor medida, comienzan a representar un de hace décadas cooperación y colaboración
nocivo papel. interinstitucional e internacional en la lucha
Los procesos de globalización han multi- contra la criminalidad organizada transna-
plicado las conexiones transfronterizas e in- cional, especialmente entre países limítrofes
tensificado la interconexión en los ámbitos o regiones que comparten idéntica fenome-
económico, político y cultural. Inevitable- nología criminal.
mente, las estructuras criminales también se En un mundo interconectado, la delin-
han hecho globales. Al mismo tiempo, han cuencia organizada no solo explota las vul-
demostrado que pueden explotar convenien- nerabilidades en los países más desfavoreci-
temente las debilidades de los Estados, en su dos del planeta, sino que por igual, accede
beneficio. De tal forma que, en gran medida, al primer mundo en busca de escenarios y
a efectos de economías, tráficos ilícitos y segu- mercados en los que implantarse y desarro-
ridad, las fronteras perviven únicamente sobre llar sus actividades lucrativas, lícitas e ilícitas.
el papel. Máxime con la eclosión de la ciber- Los márgenes de maniobra a nivel estatal son
delincuencia, que rompe con todo el esquema cada vez menores, lo que exige adoptar in-
de seguridad fronteriza. eludiblemente medidas de carácter interna-
Esto no quiere decir que se asuma un cional. La magnitud alcanzada por el crimen
abandono de la protección de los pasos fron- organizado transnacional, impide per se a los
terizos reconocidos legalmente y de facto, diferentes gobiernos afrontarlo en solitario
pero sí asumir que las fronteras son porosas y con eficacia. Hoy, la protección por parte de
que no se pueden controlar en su extensión los Estados del contagio criminal de sus eco-
total, siempre y en todo momento, con la nomías y del nutrido y variado conjunto de
misma intensidad, por lo que, a mi juicio, re- las actividades ilegales protagonizadas por la
sulta necesario un cambio de estrategia en la delincuencia organizada, requiere de la pro-
lucha contra los tráficos ilícitos y las econo- yección de nuestras actuaciones, más allá de
mías transfronterizas del contrabando, más nuestras fronteras. Alcanzar elevados están-
allá de la mera contención fronteriza. Estra- dares de seguridad internacional y de segu-
tegia que pivota desde la revalorización del ridad regional, representa la mejor garantía
trabajo de los servicios de aduanas, dotándo- de la preservación de nuestra seguridad na-
los de medios cada vez más técnicos y de una cional.

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Crimen organizado y economía ilegal. Entrevista a Daniel Sansó-Rubert Pascual

¿Qué características debe reunir una actividad en el que insertarse y operar cómodamente,
económica ilícita para comenzar su proceso generando una situación, ahora sí, de elevado
de transformación en crimen organizado? riesgo, en términos macro y microeconómi-
cos, para el Estado. Allí donde existían unos
Actualmente, existe un consenso casi genera- comportamientos económicos asociados a la
lizado sobre las vinculaciones existentes entre subsistencia, ciertamente tolerable en mayor o
una economía caracterizada por abundantes menor medida por la Administración, la cri-
nichos de informalidad económica y la apa- minalidad organizada los transforma en una
rición de manifestaciones de criminalidad economía ilegal elevándolo a niveles de tipo
organizada. Lo que inicialmente se identi- industrial o empresarial, como por ejemplo, la
fica como una economía laxa en cuanto a la explotación laboral de mujeres y niños en las
formalidad de los controles y que, en mayor industria textil, del calzado o de los comple-
o menor medida, consiente determinados mentos/accesorios, mediante la prestación de
niveles de economía informal, básicamente trabajo en condiciones inhumanas, de flagran-
asociada a la subsistencia y cuyo impacto, en te insalubridad y de conculcación de las más
términos de ilicitud (no económicos) refleja básicas normas y derechos laborales, a cam-
una peligrosidad social de bajo perfil, puede bios de salarios paupérrimos. Otro supuesto
derivar en supuestos de economía ilegal de muy común, mediante la explotación laboral
alto impacto, auspiciadas por manifestaciones en el ámbito de las explotaciones agrícolas o
de criminalidad organizada. en el sector de la construcción, donde se recu-
Generalmente, conductas asociadas al con- rre a mano de obra, generalmente inmigran-
trabando que representan incumplimiento de tes, indocumentados, sin contrato, sometidos
legislación administrativa (no penal) por eva- a condiciones de trabajo de extremo desgaste a
sión de impuestos, o fraude fiscal a pequeña es- cambio de una peonada casi testimonial. Y así,
cala (la no emisión de factura para no declarar pluralidad de ejemplos de explotación laboral,
impuestos por pequeñas compras o prestación especialmente grave cuando algún menor se
de servicios, retribuir pequeños trabajos sin el ve involucrado.
correspondiente pago a la seguridad social o sin Para alcanzar este nivel de desarrollo, tan
efectuar los trámites pertinentes de contrata- solo se requiere de la existencia del presu-
ción, muy usual en el ámbito del trabajo do- puesto de partida –la existencia de economías
méstico o en prestaciones laborales esporádicas informales–, sumado a la permisividad social
de carácter informal), quedan inmersos dentro anclada en la costumbre al respecto y la de-
de la cotidianeidad social. Sin lugar a dudas no jadez de la Administración en el ejercicio de
es el comportamiento más deseable en térmi- su labor de fiscalización y control. Terreno
nos del saneamiento de una economía, pero abonado para que la criminalidad organizada
tampoco puede hablarse en estos supuestos de se asiente y eleve las oportunidades brindadas
una economía ilegal, que lo es, o por lo menos por la informalidad económica a expresiones
alegal, de criminalidad organizada. de economía ilícita exponencialmente dañina
La problemática reside en que, al albur en términos socioeconómicos, gubernamenta-
de este ecosistema de economía informal, la les y, a la postre, respecto de la seguridad del
criminalidad organizada encuentra un espacio Estado.

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Liosday Landaburo Sánchez

Por tanto, la peligrosidad intrínseca de la lidades organizadas de economía ilegal, que


asociación criminal reside en su capacidad de explota convenientemente con determinación
construcción de estructuras racionalmente a lograr su consolidación y expansión. De ahí
orientadas a la planificación y comisión del que las economías ilícitas, de tipo informal,
delito, el encubrimiento de sus miembros representan una preocupación en términos de
para evitar la persecución institucional, así seguridad, con independencia de su relevan-
como un elevado potencial de penetración cia en términos de supervisión de la Hacienda
económica y política en la sociedad donde se Pública, en tanto representa una ventana de
asienta. El crimen organizado transforma la oportunidad para el desarrollo de actividades
informalidad económica en diferentes moda- de delincuencia organizada.

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Reseñas
va geoestratégica en la inteligencia estratégi-
ca y perspectivas de cooperación regional en
materia de inteligencia estratégica. El fin de
este volumen, según el compilador José Ga-
briel Paz, es “reflexionar sobre la posibilidad
de conformar en el marco de las estructuras
regionales existentes, una instancia con ca-
pacidad de apoyo en inteligencia estratégica”
(pp. 22-23), de tal manera, que esta sirva para
coadyuvar en la consolidación de los procesos
de integración regional en curso.
Dentro del primer eje temático, cabe des-
tacar el artículo titulado “Perspectivas de fu-
turo en la inteligencia estratégica en Latino-
américa” de Rafael Jiménez Villalonga, en el
que el autor enumera las que, más allá de la
DOI: http://dx.doi.org/10.17141/urvio.18.2016.2225 diversidad de los contextos políticos y expe-
riencias históricas, serían hoy día las caracte-
Inteligencia Estratégica Latinoamericana. rísticas comunes de la inteligencia estratégica
Perspectivas y ejes predominantes para en los países latinoamericanos. Una de estas
la toma de decisiones estratégicas ante características comunes sería la limitación de
un mundo en cambio, compilado por los ámbitos de actuación de la inteligencia es-
José Gabriel Paz1 tratégica, debido fundamentalmente a la au-
Daniel García Sanz2 sencia de grandes motivos de conflicto entre
los países de la región, la procedencia desde
El libro Inteligencia Estratégica Latinoameri- regímenes dictatoriales –lo que obliga a dejar
cana. Perspectivas y ejes predominantes para la atrás el legado de una inteligencia de carác-
toma de decisiones estratégicas ante un mundo ter político-policial enfocada a contrarrestar
en cambio es una publicación institucional del amenazas internas al sostenimiento de esos
Ministerio de Defensa argentino que consis- regímenes– y el aislamiento geográfico con
te en una compilación de veintidós artícu- respecto a ‘puntos calientes’ en otros rincones
los agrupados en torno a tres ejes temáticos: del planeta. De manera interrelacionada, otra
características esenciales de la inteligencia característica común de la inteligencia estra-
en América Latina, vigencia de la perspecti- tégica latinoamericana sería la atención prefe-
rente a las amenazas a la estabilidad interna, lo
1 Paz, José Gabriel. comp. 2015. Inteligencia Estratégica La-
que al condicionar las necesidades informati-
tinoamericana. Perspectivas y ejes predominantes para la toma vas de los tomadores de decisión y repercutir
de decisiones estratégicas ante un mundo en cambio. Ministerio en las demandas de inteligencia a las institu-
de Defensa: Buenos Aires.
ciones especializadas, resulta en una despreo-
2 Sociólogo. Máster en Relaciones Internacionales con men-
ción en Seguridad y Derechos Humanos por FLACSO-Sede cupación por los procesos geopolíticos, eco-
Ecuador. Correo: mdgarciasa@gmail.com nómicos, tecnológicos, sociales y ambientales

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URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad


No. 18 - Quito, junio 2016 - pp. 138-140 - © RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
Reseña I

de alcance global que bien podrían plantear armados activos al interior de sus territorios
amenazas potenciales a las sociedades. que obstruyen el normal funcionamiento de
El autor también señala como característi- las instituciones estatales. Este fenómeno se
ca común a la cualidad incipiente de los mar- presenta como producto de la incapacidad de
cos normativos latinoamericanos en relación ciertos Estados para ejecutar algunas de sus
a los roles y funciones de los servicios de inte- funciones básicas, en particular la de ejercer
ligencia, apreciándose una evolución desigual un control efectivo de su territorio. La pre-
entre los distintos países. Al igual que en otras sencia de Estados disfuncionales –en proceso
partes del mundo, los sectores académico y de convertirse en Estados fallidos– plantearía
empresarial de América Latina se han ido in- una seria amenaza a la seguridad internacional
volucrando progresivamente en el ámbito de debido a que actores no-estatales –tales como
la inteligencia estratégica, lo que es considera- redes terroristas o grupos de la delincuencia
do por el autor como un desarrollo positivo. organizada– utilizan el territorio de estos
En el segundo eje temático, referente a la como un santuario o trampolín para llevar a
vigencia de la perspectiva geoestratégica en la cabo sus actividades.
inteligencia estratégica, destacan los artícu- Sobre la base de los aportes de Martynov
los de Boris Martynov –sobre las afinidades y Derwich sería posible concluir que el pa-
estratégicas entre Rusia y América Latina– y norama estratégico global contemporáneo se
de Karol Derwich –sobre los problemáticos caracteriza por el regreso al primer plano de
conceptos de Estado fallido y Estado disfun- las rivalidades entre las grandes potencias del
cional. Por un lado, Martynov señala que en sistema internacional, expresión de la transi-
la era pos-soviética, la política exterior rusa ha ción desde la unipolaridad pos-Guerra Fría a
ido moviéndose desde el privilegio a las re- una multipolaridad en los ámbitos económi-
laciones con el Occidente desarrollado hacia co y militar. No obstante, este ‘regreso de la
una mayor valoración de los vínculos con paí- geopolítica’ no supondría un mero retorno al
ses del mundo en desarrollo, a medida que las pasado, ya que la permeabilidad de las fronte-
expectativas iniciales de buenas relaciones con ras nacionales –suscitada por la más reciente
Estados Unidos fueron dando paso a serios ola de globalización– ha hecho posible la apa-
desencuentros que daban cuenta de profun- rición de actores no-estatales con la capacidad
das diferencias de perspectiva sobre el ‘ideal’ de realizar sus fines políticos o económicos en
funcionamiento del sistema internacional. un plano transnacional.
Para Martynov, las diferencias de Rusia con El artículo de Carlos Prieto Maldonado
Estados Unidos y sus afinidades con América y Carolina Sancho Hirane, “Cooperación
Latina –especialmente sobre la importancia en Inteligencia Estratégica de la Defensa en
otorgada al derecho internacional en la polí- el CDS de UNASUR: Posibilidades, limita-
tica mundial– responden en su nivel más pro- ciones y desafíos”, plantea algunos elementos
fundo a rasgos de carácter cultural. fundamentales a tener en cuenta al momen-
Por otro lado, según Derwich, las princi- to de reflexionar sobre las perspectivas de la
pales preocupaciones en términos de seguri- cooperación regional en materia de inteligen-
dad de muchos Estados no provienen de ame- cia estratégica, eje temático correspondiente
nazas externas de tipo militar, sino de grupos a la tercera sección del libro. Los autores ven

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Daniel García Sanz

un camino abierto hacia la cooperación en el su utilización en instancias multilaterales; las


campo de la inteligencia estratégica en el ám- escasas oportunidades de formación para los
bito sudamericano, al cumplir la región con profesionales que forman parte de los servicios
tres factores que posibilitan esa cooperación. de inteligencia, lo que disminuye las posibi-
En primer lugar, los países de la región tie- lidades de generar productos de inteligencia
nen percepciones comunes sobre las princi- relevantes para la región en su conjunto y; las
pales amenazas que enfrentan, entre las que inconsistencias de las autoridades políticas de
se cuentan el terrorismo, la corrupción, el los distintos países sobre su voluntad de coo-
narcotráfico, la trata de personas, el tráfico de perar en el ámbito de la inteligencia.
armas y el crimen organizado transnacional. Pero más allá de estos factores, para Prieto
En segundo lugar, los países sudamericanos Maldonado y Sancho Hirane, un hecho que
cuentan con similares capacidades institucio- permite pensar en la posibilidad concreta de
nales en materia de inteligencia, lo que se re- una cooperación regional sudamericana en el
fleja en la presencia de entidades homólogas campo de la inteligencia estratégica es que ya
en este campo. Finalmente, hay en la región están en marcha las instancias que la viabili-
experiencias de intercambio de inteligencia zarían: la Escuela Suramericana de Defensa
en el contexto de mecanismos multilaterales, (ESUDE) y el Centro de Estudios Estraté-
aunque ninguna de estas ha tenido lugar en el gicos de la Defensa (CEED). En definitiva,
marco de la Unión de Naciones Suramerica- el libro Inteligencia Estratégica Latinoameri-
nas (UNASUR). cana. Perspectivas y ejes predominantes para la
No obstante, los autores detectan múlti- toma de decisiones estratégicas ante un mundo
ples e interrelacionados factores que constre- en cambio constituye un aporte significativo
ñirían la cooperación regional en materia de para la reflexión sobre las posibilidades de
inteligencia. Entre estos factores se cuentan cooperación en materia de inteligencia estra-
las diversas comprensiones sobre el significa- tégica en el ámbito sudamericano, dejando
do y alcances sobre lo que es la inteligencia en claro que la misma constituye un impe-
estratégica, lo que limitara el intercambio de rativo en el contexto de un escenario inter-
información entre países; la escasa cultura de nacional cada vez más tenso y complejo. Sin
inteligencia entre la opinión pública y los to- embargo, los desarrollos políticos recientes
madores de decisión, debido a la desconfianza en países como Argentina, Brasil y Venezuela
generada hacia los estamentos de inteligen- –los principales impulsores del proceso inte-
cia por su rol en los regímenes autoritarios gracionista sudamericano– ponen en tela de
de décadas pasadas así como su politización duda la continuidad del impulso hacia con-
por parte algunos gobiernos en el poder; la formación de una identidad propia y autó-
incipiente institucionalización del producto noma de la región en los asuntos mundiales
de inteligencia como insumo en el proceso y, en consecuencia, del interés por contar con
de toma de decisiones por parte de las auto- una visión estratégica común que contribuya
ridades políticas, lo que genera desinterés por a ese fin.

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URVIO 18 • 2016 • pp. 138-140


que desde la geopolítica explica la estrecha
relación entre la geografía de estos países la-
tinoamericanos y su sistemática inserción en
los diferentes mercados del narcotráfico; es
decir, en los mercados de producción, tráfico,
venta y consumo de drogas ilícitas. También
expone la vinculación del narcotráfico con
delitos como el lavado de dinero, el tráfico
de precursores químicos y las redes de crimen
organizado. En sí, el objetivo del libro es pro-
porcionar una visión más comprehensiva y
detallada del desarrollo del narcotráfico como
problemática global.
El libro está estructurado en nueve ca-
pítulos, un prefacio y sus conclusiones, cu-
DOI: http://dx.doi.org/10.17141/urvio.18.2016.2226 yas ideas principales están expuestas con un
lenguaje sencillo. El primer capítulo expone
Geopolítica del narcotráfico en una discusión de las posibles hipótesis expli-
América Latina, de Norberto Emmerich1 cativas sobre el vínculo entre el narcotráfico
Luis Fernando Amaya Martínez2 y el Estado. Además, con conceptos precisos
y referencias empíricas establece los paráme-
Esta obra a través de la confrontación de as- tros para entender el auge del narcotráfico
pectos teóricos y evidencias empíricas, examina en América Latina. En el debate conceptual
sí las estrategias implementadas para combatir que se desarrolla en este primer capítulo, se
el tráfico de drogas en países como Brasil, Co- dan respuestas a diferentes interrogantes, tales
lombia y México han sido las más convenien- como: ¿de qué hablamos cuando hablamos de
tes, y a su vez, evidencia los desafíos y proble- narcotráfico?, ¿se trata del aumento en el trán-
máticas que han surgido en la lucha contra este sito o consumo de drogas?, o ¿sí el Estado y el
fenómeno. Además, analiza las características narcotráfico son coincidentes, equivalentes o
geográficas, históricas y económicas que posi- dispares? Igualmente, se propone comprender
bilitan que el narcotráfico permanezca en estos “el narcotráfico estudiando la formación his-
territorios y advierte sobre las formas como el tórica del Estado nacional” (p. 20), y a la vez,
tráfico de drogas ha penetrado y permeado a las discernir su carácter organizacional, mediante
poblaciones y autoridades de estos países lati- el estudio de su modus operandi.
noamericanos. El segundo capítulo explica que el narco-
Cabe destacar que este libro tiene una im- tráfico no está conformado por un solo mer-
portancia relevante por su perspectiva, dado cado –que por lo general se refiere al tráfico de
1 Emmerich, Norberto. 2015. Geopolítica del narcotráfico en drogas ilícitas, sino que este fenómeno involu-
América Latina. IAPEM: Toluca, Estado de México. cra el encadenamiento productivo y comercial
2 Politólogo. Máster en Relaciones Internacionales con de diversos mercados, tales como el de pro-
mención en Seguridad y Derechos Humanos por FLACSO-
Ecuador. Correo: luis.amaya@unad.edu.co ducción, consumo, tránsito, lavado de dinero

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URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad


No. 18 - Quito, junio 2016 - pp. 141-143- © RELASEDOR y FLACSO Sede Ecuador ISSN 1390-4299 (en línea)
Luis Fernando Amaya Martínez

y tráfico de precursores químicos. Así mismo Buenos Aires (Argentina), pone en evidencia la
describe las características de funcionamiento forma como el narcotráfico se instaura en una
de cada mercado y pone en discusión la capa- comunidad y el conflicto que se produce por
cidad de adaptación del narcotráfico a nuevas el control territorial y el aumento de la crimi-
geografías. El capítulo tres hace un análisis de nalidad. Del capítulo quinto se determina que
la geografía de Brasil, Colombia y México, las características geográficas de los países de
demostrando que el valor estratégico de cada tránsito son determinantes para el narcotráfi-
uno de estos territorios para el narcotráfico co, dado que al compartir frontera con países
está relacionado con sus ventajas geográficas. de producción o consumo, no solo facilita el
De este capítulo se concluye que estos países al transporte de droga entre estos mercados, sino
ser extensos territorialmente, al contar con de- también la obtención de precursores quími-
terminadas características topográficas (valles, cos. El autor presenta mediante una serie de
bosques y cordones montañosos) y con salidas evidencias relacionadas con el Caso Salvador
oceánicas (al Atlántico o el Pacífico), brindan Mazza4 en Argentina, las distintas formas de
a los agentes al servicio del narcotráfico, espa- traspaso de droga a través de las fronteras y la
cio suficiente para la siembra de cultivos ilíci- complicidad entre agentes del narcotráfico y
tos, producción de pasta base y exportación de autoridades políticas y policiales.
la droga al exterior. El capítulo seis estudia las características
El siguiente capítulo expone que en el geográficas de los países de producción. De
mercado de consumo se producen las mayores este capítulo se deduce que estos países al te-
ganancias de todo el proceso del narcotráfico, ner territorios aislados, con baja integración
como producto de “la permanencia y estabi- poblacional, una incipiente presencia estatal,
lidad de sus actores” (p. 85). Esto hace que altos niveles de pobreza, una geografía difícil
ciudadanos estén dispuestos a vincularse en y dificultades en las vías de acceso, brindan
cualquiera de las actividades criminales de la las condiciones necesarias para que la produc-
cadena del narcotráfico. También precisa que ción de drogas ilícitas pueda allí perdurar. A la
es un mercado muy competitivo y peligroso, vez, advierte que los pueblos indígenas son las
ya que con el objetivo de conquistar territo- principales víctimas del asedio de los agentes
rios para monopolizar las ganancias prove- del narcotráfico, dado que sus territorios con-
nientes de la venta de droga, se recurre a la fluyen con zonas vitales para la producción
eliminación de la competencia, lo cual esta- de droga. Por último, explica que los países
blece un escenario de guerra que funciona a la de producción “quedan bajo la órbita de la
sombra del Estado. Describe las dinámicas de política exterior de Estados Unidos” (p.111),
exclusión y segregación social que proveen al quienes buscan eliminar los cultivos ilícitos en
narcotráfico de mano de obra.
Finalmente, mediante referencias de expe- 4 Salvador Mazza, localidad fronteriza situada en el extremo
riencias relacionadas al caso de Villa 313 en norte de Argentina. Se ha transformado en una ruta para el
tráfico de drogas entre Argentina y Bolivia, debido al esca-
so control ejercido por las autoridades argentinas. Esto ha
3 La Villa 31 es un asentamiento ilegal ubicado en el barrio ocasionado el aumento de la criminalidad en esta zona, a
El Retiro de la ciudad de Buenos Aires (Argentina). Su carac- causa de la confrontación entre bandas del narcotráfico, la
terística principal es la inseguridad, instaurada por el crimen complicidad de autoridades político-policíacas y la interna-
organizado, bajo la forma del narcotráfico. cionalización del comercio de drogas.

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Reseña II

los países donde se originan, a través de un Finalmente, el capítulo nueve presenta el


tratamiento predominantemente coercitivo. caso de México, donde se analiza como el ca-
A partir del capítulo siete, el libro anali- rácter transnacional del crimen organizado y
za las acciones estratégicas que se han imple- el narcotráfico ha socavado la soberanía y co-
mentado en Colombia, Brasil y México para hesión social del Estado mexicano. Además,
combatir el narcotráfico. Presenta las proble- cuestiona la implementación de estrategias
máticas que han impedido el éxito de estas antinarcóticos como la Iniciativa Mérida y ex-
políticas. Desde una perspectiva crítica, el pri- plica cómo la cercanía geográfica con Estados
mer país que se analiza es Colombia, conclu- Unidos y contar con una topografía agresiva
yendo que políticas antinarcóticos y contra- han sido los factores geopolíticos que han im-
insurgentes, como el Plan Colombia, el Plan pulsado el narcotráfico en este territorio.
Patriota y la Operación Espada de Honor, El libro Geopolítica del narcotráfico en
no han sido la respuesta indicada para hacer América Latina es un manual que a través de
frente ni a la insurgencia, ni al narcotráfico, formulaciones conceptuales precisas y referen-
dado que mientras “exista un mercado para la cias empíricas contextualizadas, evalúa cuan-
cocaína, la insurgencia y los grupos criminales titativa y cualitativamente la problemática del
tienen los medios y la motivación para conti- narcotráfico para Latinoamérica. Los capítu-
nuar el conflicto” (p. 120). A su vez, analiza los del libro proporcionan al lector una mejor
como el éxito de estas políticas antinarcóticos comprensión de la realidad del narcotráfico,
en su fase inicial, obligaron a las Fuerzas Ar- tanto de las distintas actividades que compo-
madas Revolucionarias de Colombia (FARC) nen la cadena productiva, como de las políti-
a adaptar sus acciones al nuevo escenario de cas antinarcóticos que se han implementado
confrontación planteado por el Estado colom- para combatirlo. De lo planteado en el libro
biano, para asegurar su supervivencia. se puede inferir que el narcotráfico implica
En el capítulo ocho se presenta el caso bra- mucho más que el tráfico de drogas, ya que la
sileño, describiendo la manera cómo se han diversidad de eslabones que lo componen lo
conformado los grupos al servicio del narco- hacen parte integral de una gran totalidad. El
tráfico en ciudades como San Pablo y Río de autor deja ver que es necesaria la formulación
Janeiro. También se expone su modus operan- de políticas antinarcóticos que analicen y eva-
di, los lineamientos que guían sus activida- lúen en conjunto los delitos que conforman
des de financiación y los procedimientos que el narcotráfico, para contar con acciones que
implementan para penetrar y permear en las de forma coordinada, permitan enfrentarlo en
poblaciones y autoridades brasileñas. los diferentes niveles que lo integran.

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Revista URVIO agradece a las siguientes personas por su colaboración
en la realización del presente número:

Ángela Toso Milos

Bruno Rusca

Bruno Tondini

Carla Álvarez Velasco

Gilda Guerrero

José Domingo Schievenini Stefanoni

José Juan Cervantes Niño

Juan Machín

Jenny Pontón

Katalina Barreiro

Luis David Ramírez de Garay

Melissa Salgado

Octavio Islas

Sergio Eissa
Política Editorial
URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad, es una publicación internacional
especializada de FLACSO, sede Ecuador, fundada en el año 2007. La revista busca ser una
herramienta de debate, actualización, investigación y consulta para académicos y decidores de
políticas y opinión pública, tanto en Ecuador, como en América Latina y el mundo en general.
La revista URVIO es de publicación semestral. Cada número presenta un dossier enfoca-
do en un tema específico relacionado con la problemática de la violencia y la seguridad en la
región. Las demás secciones (misceláneos, reseñas, entrevistas) desarrollan diferentes temáticas
en torno a la seguridad.
Las opiniones y comentarios expuestos en los trabajos son de responsabilidad estricta de las
autoras y autores, y no reflejan la línea de pensamiento de FLACSO, sede Ecuador. Los artí-
culos publicados en URVIO son propiedad exclusiva de FLACSO, sede Ecuador. Se autoriza
la reproducción total o parcial de los contenidos siempre que se cite como fuente a URVIO,
Revista Latinoamericana de Estudios de Seguridad.

Normas de publicación de URVIO

Las personas interesadas en escribir para URVIO, Revista Latinoamericana de Estudios de Se-
guridad, deberán subir su artículo a la plataforma de la revista y además, enviar una copia del
documento a la dirección de correo electrónico:
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1. El Comité Editorial de URVIO se reserva el derecho de decidir sobre la publicación de los


trabajos, así como el número y la sección en la que aparecerán.
2. URVIO se reserva el derecho de realizar la corrección de estilo y los cambios editoriales que
considere para mejorar el trabajo.
3. Las investigaciones y artículos de los autores y autoras deberán ser inéditos, escritos preferen-
temente en español y no estar aprobados o publicados en otras revistas.
4. Todos los artículos e investigaciones deben incluir un resumen en español e inglés, no mayor
a 10 líneas (un párrafo donde se especifique los objetivos de trabajo y los contenidos), y un
listado de palabras clave utilizadas. Esta norma no se aplica a la sección Reseñas.
5. Los títulos de los trabajos no podrán ser mayores a 10 palabras, y deberán estar traducidos
al inglés.
6. Todos los trabajos deberán ser presentados en letra 12 Times New Roman, a espacio sencillo.
7. Todos los trabajos deberán ser enviados con una referencia del nombre de su autora o autor,
grado académico, lugar de trabajo o adscripción académica. Además deberán incluir la fecha
de envío y dirección de correo electrónico. Para citas y referencias bibliográficas, se deberá
utilizar el Manual de Chicago Deusto.

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URVIO 18 • 2016 • pp. 145-150


Política Editorial

8. Los artículos presentados para la sección Reseñas deben incluir toda la información biblio-
gráfica del libro que se reseñe.
9. La extensión de los trabajos variará según las secciones:

Secciones Extensión máxima Extensión mínima


Tema Central 8000 palabras 5000 palabras
Misceláneo 8000 palabras 5000 palabras
Reseñas 2000 palabras 1500 palabras

Las referencias bibliográficas estarán acorde al Manual de Estilo Chicago Deusto, formato esta-
blecido en FLACSO Ecuador:

Estructura Básica de una cita en el cuerpo del texto


 
En el sistema autor-año, la referencia en el texto normalmente aparece entre paréntesis y contiene
solo los dos primeros elementos que se hacen constar en la lista de referencias: el autor y el año de
publicación, sin puntuación entre ellos. Además, se puede añadir el número de la página u otro
elemento de localización, después de una coma. En ningún caso utilizar op. cit., ibid., ibídem.

Ejemplo:

(Cox 2010)
(Cox 2010, 91)

Entradas de la lista de referencias con el mismo autor o autores y el mismo año


 
Las obras de un mismo responsable (con independencia que sea autor, editor, compilador o
traductor) y del mismo año se deben diferenciar con la edición de a, b, c, etc. y se ordenan
alfabéticamente por el título. Las citas en el texto consignan el autor y el año con la letra.

Ejemplo:

Chaume Varela, Frederic. 2004a. Cine y traducción. Cátedra: Madrid


__ 2004b. “Modelos de Investigación  en traducción audiovisual”.  Íkala, Revista de lenguaje y
Cultura 9 (15): 351-365.
(Chaume Varela 2004b, 356)
(Chaume Varela 2004a, 45-46)

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145-150
Política Editorial

Orden cronológico para los nombres repetidos en una lista de referencias


 
Cuando se repite el autor (es), traductor(es), editor(es), o compilador(es) en varias entradas seguidas,
el nombre (los nombres) se remplaza por una raya tras la primera aparición. No se escribe tras la raya
el signo de puntuación que sigue habitualmente al elemento omitido (aquí, el punto). Las entradas
se disponen cronológicamente por año de publicación en orden ascendente, no alfabetizadas por
título. Los trabajos sin fechar (marcados como s. f.) o en prensa van después de los trabajos fechados.

Ejemplo:

Segura Munguía, Santiago. 2005. Los jardines en la Antigüedad. Bilbao: Universidad de Deusto.


__ 2007. Diccionario por raíces del latín y de las voces derivadas. Bilbao: Universidad de Deusto.
__ 2010. Nuevo diccionario etimológico latín –español y de las voces derivadas. Bilbao: Universidad
de Deusto.

Libro de un autor o editor único

Ejemplo:

Duch, Lluís. 1998. Mito, interpretación y cultura. Barcelona: Harder


(Duch 1998, 99-100)

Libro de dos o tres autores

En el caso de libros con dos autores, en la lista de referencias solo se invierte el primer nombre:

Ejemplo:

León, Orfelio e Ignacio Montero. 1993. Diseño de investigaciones: Introducción a la lógica de la


investigación en psicología y educación. Madrid: Mc Graw- Hill/ Interamericana de España.
(León y Montero 1993, 25)

 
Libro con tres autores

Ejemplo:

Borrego Nieto, Julio, José J. Gómez Asencio y Emilio Prieto de los Mozos.1986. El subjuntivo.
Valores y usos. Madrid: SGEL.
(Borrego Nieto, Gómez Ascencio y Prieto de los Mozos 1986) 

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Política Editorial

Más de cuatro autores

Si el libro tiene cuatro o más autores, se incluye a todos ellos en la entrada de referencias (bi-
bliografía). El orden y la puntuación son los mismos que en el caso de los libros con dos o tres
autores. En el texto, sin embargo, se da el apellido del autor que aparece en primer lugar, seguido
de et al.

Ejemplo:

(Lago et. al. 2008, 118-19)

Libro publicado electrónicamente

Si el libro está disponible en más de un formato, citen la versión con la que han trabajado. En los
libros consultados en línea hay que añadir el URL.

Libro electrónico obtenido de una biblioteca o librería

Muchos libros editados electrónicamente pueden tener un equivalente impreso. Pero dada la
posibilidad de que existan diferencias, aconsejamos indicar el formato en el que lo han con-
sultado.

Ejemplo:

Austen, Jane. 2008. Pride and Prejudice. Nueva York: Penguin Classics. Edición en PDF. URL.

Capítulo de un libro

Ejemplo:

Gómez Mendoza, Josefina. 2009. “Ecología urbana y paisaje en la ciudad”. En La ciudad del
futuro, editado por Antonio Bonet Correa, 177-217. Madrid: Instituto de España.

Artículos de revista científica

Los elementos que deben constar en la entrada son los siguientes: Nombre complete del autor o
autores, año de publicación, título y subtítulo del artículo, nombre de la publicación periódica,

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Política Editorial

información sobre volumen, número, fecha; indicación de la página cuando es necesario, incluir
el URL o el DOI cuando estén disponibles.
 
Ejemplo:

Bernárdez, Enrique. 2000. ‘‘Estrategias constructivistas de la descripción oral’’. Revista Española


de Lingüística 30 (2): 331-356.

Artículo en periódicos y magacines en la lista de referencias


  
Ejemplo:

Lafuente, Javier.2015. ‘‘Venezuela da la espalda al chavismo’’.  El País, 7 de diciembre.


http://internacional.elpaís.com/internacional/2015712/077america/1449454340_373673.
html.

Artículo sin firma tomado de periódicos o magazine en internet


 
Ejemplo:

Mundo Diner. 2014. ‘‘Japón, una nación que combina la modernidad con tradiciones y costum-
bres ancestrales’’.  29 de diciembre de 2014. http://www.revista-mundodiners.com/?p=4509

Documentos electrónicos en página web

Ejemplo:

Senescyt. 2011. “Becas docentes universitarios”, http://programasbecas.educacionsuperior.gob.


ec/becas-para-docentes-universitarios/.

Ponencia presentada en un seminario, conferencias y otros


   
Ejemplo:

Castro Gómez, Santiago. 2013. ‘‘El Dasein como Design: sobre el concepto de antropotécnica
en Peter Sloterdijk’’. Ponencia presentada en el Coloquio Poder, vida y subjetivación, Universi-
dad Nacional, Bogotá, 14 de abril.

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Política Editorial

Tesis, tesinas
  
Ejemplo:

Black, John. 1999. ‘‘The making of an Indigenous Movement’’. Tesis de maestría, Universidad
de Nuevo México.

Normas jurídicas
 
Las normas jurídicas se citan indicando los siguientes elementos: tipo de norma, nú-
mero y fecha 8 empezando por el año, separado del número por una barra9, segui-
dos, sin espacio intermedios, del día y el mes entre comas, nombre completo de la
norma tal y como figura en la publicación original; lugar y fecha de publicación.
Al citar las más habituales para cada área se puede incluir, ya en la primera mención, sea en el
cuerpo del texto o en la nota, la abreviatura por la que se la mencionará en las siguientes citas.

Ejemplo:

Ley Orgánica 8/ 1980,  de 22 de septiembre, de Financiación de las Comunidades Au-


tónomas (BOE núm.236 de 1 de octubre de 1980), a partir de ahora LOFCA.
Ley 14/2007, de 26 de noviembre, del Patrimonio Histórico de Andalucía (BOJA núm. 248
de 19 de diciembre de 2007).

Entrevistas inéditas y comunicaciones personales


    
Ejemplo:

Nombre real o ficticio (cualquier elemento identificativo relevante al contexto de la entrevista:


ejemplo cargo/ocupación/residencia), día, mes y año. No tiene que estar la entrevista en biblio-
grafía. Con su entrada en el texto es suficiente.

(Manuela Ambas, Barrio Miraflores, Perú, 2 septiembre 2010).


(Manula Ambas, entrevista, 2 septiembre 2010)

Respecto a siglas, la primera vez que aparezcan deberá escribirse su significado completo y su sigla
entre paréntesis, luego solamente la sigla.

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