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Análise Psicológica (1996), 2-3 (XIV): 203-213

Rehabilitación post-infarto de miocardio:


Propuesta de un modelo de intervención
psicológica

ANA M. BUENO (*)

1. INTRODUCCI~N Vonken, 1991) y la presencia de síntomas somá-


ticos funcionales (Crisp et al., 1984; Sanne et al.,
Los estudios de seguimiento de sujetos que 1985; García-Sánchez, Wilke & Bayés de Luna,
han padecido un infarto de miocardio ponen de 1988). Además, estos estudios señalan que tales
relieve una elevada frecuencia de trastornos dificultades parecen relacionarse, principalmen-
emocionales y tasas de reincorporación al nivel te, con la reacción psicológica provocada por el
de funcionamiento previo al episodio agudo, hecho mismo de haber padecido un infarto, más
inferiores a las que serían esperables atendiendo, que con el grado de deterioro del sistema cardio-
única y exclusivamente, al estado físico de los vascular de los pacientes (Sanne et al., 1985;
pacientes. Entre los problemas más frecuente- Schleifer, Macari-Hinson, Coyle, Slater, Kahn,
mente observados en el proceso de rehabilitación Gorlin & Zucker, 1989; Diedericks et al., 1991;
post-infarto de miocardio se encuentran: la pre- Terry, 1992; García et al., 1994; Julkunen &
sencia de ansiedad y depresión (Crisp, Queenan Saarinen, 1994).
& D’Souza, 1984; Sanne, Wiklund, Vedin & Por otra parte, de cara a disminuir la probabi-
Wilhelmsson, 1985; García, Valdés, Jodar & lidad de reinfarto, resulta de vital importancia
Riesco, 1994; Jaarsma, Kastermans, Dassen & lograr que los sujetos infartados modifiquen
Philipsen, 1995); las dificultades para la factores de riesgo coronario tales como el consu-
reincorporación laboral (Wiklund, Sanne, Vedin mo de tabaco, el seguimiento de dietas alimenti -
& Wilhelmsson, 1985; Baborski & Turkulin, cias inadecuadas, el sedentarismo, los elevados
1987; Maeland & Havik, 1987); los problemas niveles de estrés y el patrón de conducta Tipo-A.
de funcionamiento sexual (Tardiff, 1989; Rosal, Sin embargo, a pesar del conocimiento por parte
Downing, Littman & Ahern, 1994); la disminu- de los pacientes de la relevancia de estos cam-
ción del nivel de actividades sociales y de ocio bios, a menudo fracasan en su consecución, es-
(Wiklund, Sanne, Vedin & Wilhelmsson, 1984; pecialmente a largo plazo.
Sanne et al., 1985; Diedericks, Bar, Hoppener & Todos estos datos apuntan la necesidad de
proporcionar a los sujetos infartados la adecuada
atención especializada que les permita lograr una
(*) Universidad de la Coruña, Dpto. de Psicología, rehabilitación cardíaca exitosa, es decir, una
Campus de Elviña, s/n, 15071 La Corufía, España. reincorporación saludable a los niveles de fun-

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cionamiento previos al ataque cardíaco y una ración del impacto provocado por el infarto de
reducción, en la mayor medida posible, de los miocardio y, por ende, a una rehabilitación glo-
factores de riesgo de reinfarto. bal exitosa.
En definitiva, para la adecuada recuperación Los denominados programas de Consejo Psi-
de los sujetos infartados, además de la impres- cológico, consisten en la discusión, generalmen-
cindible necesidad de la intervención médica, te en grupo, entre pacienteh y terapeuta sobre
será preciso, en la mayoría de los casos, la ade - problemas (emocionales, familiares, sexuales,
cuada ayuda psicológica que permita el entrena- laborales, etc.) surgidos a raíz del padecimiento
miento del paciente en las habilidades con- del ataque cardíaco, incluyendo además, fre-
ductuales y cognitivas que le faciliten la supe- cuentemente, un componente informativo diri-
ración del impacto emocional provocado por la gido a aportar datos acerca de diversos tópicos
ocurrencia del infarto de miocardio, así como la relacionados con la enfermedad cardiocoronaria,
exitosa modificación de hábitos comportamen- sus factores de riesgo y sus consecuencias; a este
tales de riesgo coronario y estilos de funciona- tratamiento se añade, generalmente, un programa
miento laboral, familiar y social que permitan al de ejercicio fisico. Por su parte, los Programas
paciente la reincorporación a sus actividades Educativos consisten, únicamente, en aportar
habituales en condiciones que garanticen su información sobre aspectos diversos relaciona-
salud y bienestar personal, reduciendo, en la dos con la enfermedad y el proceso de rehabili-
mayor medida posible, el riesgo coronario. tación, difiriendo unos de otros en el tipo de ma -
El objetivo del presente escrito es proponer un terial utilizado para informar al paciente (char-
modelo de intervención que, superando las defi - las, folletos, cintas de video, etc.)
ciencias observadas en la intervención habitual Una revisión de la literatura científica acerca
realizada hasta la fecha en este área, permita dar de la utilidad de este tipo de intervención señala
cuenta de las necesidades anteriormente plantea- que, aunque en ocasiones se han obtenido algu-
das, utilizando los recursos de las técnicas de nos resultados favorables (e.g. Vanelderen-Van-
Modificación de Conducta para la consecución kemenade, Maes & Vandenbroek, 1994; Linden,
de una rehabilitación global exitosa, atendiendo, 1995), éstos no han sido, frecuentemente, supe-
por una parte y en primer lugar, al impacto riores a los obtenidos por sujetos que no han re-
emocional que el infarto de miocardio produce cibido la intervención, especialmente cuando
en el paciente y, por otra, a su reincorporación a los resultados son evaluados a largo plazo (ver
niveles de funcionamiento óptimos y saludables revisión de Bueno & Buceta, 1993). Entre las ra-
y a la modificación de factores de riesgo corona- zones que podrían explicar los deficientes resul-
rio que contribuyan a reducir la probabilidad de tados obtenidos tras la aplicación de este tipo de
posteriores ocurrencias de infarto de miocardio y procedimientos podrían encontrarse algunas de
a mejorar su bienestar y calidad de vida. las que se proponen a continuación
En primer lugar, como ya hemos señalado en
anteriores ocasiones (ver Bueno & Buceta, 1993;
2. INTERVENCI~NPSICOL~GICA Bueno & Buceta, 1996), se trata de una interven-
TRADICIONALDESPUÉS DE UN INFARTO DE ción ((inespecífica)), es decir, no se emplean
MIOCARDIO técnicas terapéuticas concretas que hayan mos-
trado su capacidad para resolver problemas de-
La reiterada constatación de la existencia de terminados presentes en el paciente infartado,
problemas psicológicos en la rehabilitación de síno que, por el contrarío, sin tan siquiera eva-
las personas que han padecido un infarto de luar, en cada caso, cuáles son esos problemas, se
miocardio, ha llevado al desarrollo y puesta en intenta «apoyar» al enfermo, de forma vaga, per-
marcha de programas que tienen por objetivo mitiéndole que exprese sus preocupaciones y
contribuir a solventar dichos problemas. Tradi-, ((animándole))a superarlas, aportándole informa-
cionalmente, esta intervención ha consistido en ción objetiva sobre las repercusiones del infarto
programas educativos y de consejo psicológico de miocardio que, médicamente, serían espera-.
guiados por la idea de que la información y el bles. Es cierto que uno de los problemas que co-
apoyo emocional al paciente ayudarían a la supe-. múnmente presentan las personas que han pade-

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cid0 un infarto de miocardio es la presencia de notablemente diferentes, por lo que la interven-
ideas catastrofistas acerca de las repercusiones ción en grupo según un programa estándar pre-
de la enfermedad en su funcionamiento cotidiano viamente diseñado no parece ser la más adecua-
(laboral, sexual, social...), convirtiéndose a me- da.
nudo, estas ideas negativas, en los más serios Aunque en menor medida que los programas
obstáculos para la rehabilitación tras el ataque anteriormente señalados, también se han reali-
cardíaco. En este sentido, es obvio que la inter- zado algunos intentos de intervención dirigida a
vención tradicional puede servir, al menos en la rehabilitación de pacientes post-infarto de
ocasiones, para corregir las ideas erróneas del miocardio mediante técnicas específicas de Mo-
paciente acerca de su recuperación. Sin embargo, dificación de Conducta. Estos programas han
generalmente, estas ideas catastrofistas, no son incluido técnicas como el entrenamiento en rela-
simplemente errores debidos a falta de informa- jación (e.g. Krampen & Ohm, 1984; Van Dix-
ción, sino una manifestación del impacto nega- hoorn, Duivenvoorden, Pool & Verhage, 1990) o
tivo de la enfermedad sobre el estado emocional diversas estrategias cognitivo-comportamentales
del paciente, para cuya modificación se precisa para el manejo del estrés y la modificación del
de una atención especializada que permita supe- patrón de conducta tipo-A (e.g. Gatchel, Gaffhey
rar los problemas emocionales surgidos como & Smith, 1986; Turner, Linden, Vandenval &
consecuencia del infarto, lo que facilitará, a par- Schamberger, 1995); en ocasiones se han aplica-
tir de este estado psicológico más favorable, la do individualmente,ajustándose el tratamiento a
adecuada reincorporación a las distintas esferas las características de los pacientes y, además,
de funcionamiento cotidiano. con mayor frecuencia han sido aplicados por
Por otra parte, dadas las característicasde esta personal especializado (psicólogos). Los resul-
intervención más tradicional, anteriormente ex- tados obtenidos tras la aplicación de este tipo de
puestas, lo más habitual es que ésta se realice en intervención, demuestran, en general, su utilidad
grupo, que sea aplicada por personal no espe- para aumentar las habilidades de enfrentamiento
cializado y que siga un programa estandarizado, de los pacientes a las situaciones estresantes de
prácticamente igual para todos los pacientes. su vida, para modificar el patrón de conducta
Todas estas circunstancias parecen constituir, tipo-A y para reducir el grado de tensión expe-
igualmente, graves deficiencias en la atención rimentado por los sujetos tras el infarto de mio-
tradicionalmente prestada a los sujetos infarta- cardio (ver revisión de Bueno & Buceta, 1993).
dos, ya que éstos constituyen, en lo que a sus Sin embargo, parece obvio que se trata de una
reacciones post-infarto de miocardio se refiere, intervención muy restringida, atendiendo
un grupo considerablemente heterogeneo que directamente a un escaso número de problemas
requiere de una intervención psicológica capaz presentes en el paciente infartado. En concreto,
de evaluar las necesidades particulares de cada se dirige de manera exclusiva a dotar al paciente
uno de ellos y actuar en consecuencia de manera de habilidades que le permitan afrontar mejor
individualizada. Sirva como ejemplo de lo que situaciones amenazantes o difíciles, y aunque es -
acabamos de exponer, el comportamiento de los tas nuevas habilidades puedan repercutir favo -
pacientes post-infarto de miocardio respecto a la rablemente en el proceso global de recuperación
reincorporación a sus actividades laborales. En post-infarto, suele ser habitual, en muchos casos,
este área, el nivel de actividad inmediatamente que la rehabilitación exitosa precise de una inter-
después de recibir el alta hospitalaria, varía con- vención más amplia, dirigida a reducir las conse-
siderablemente de unos casos a otros, desde pa- cuencias emocionales adversas que se producen
cientes que muestran una total inactividad y tras la experiencia del infarto, a lograr los ajustes
desgana, hasta aquellos otros que acuden a su conductuales necesarios que permitan desarrollar
puesto de trabajo al día siguiente de abandonar el niveles de actividad más adecuados, o a modifi-
hospital; ambas reacciones, una por defecto y car hábitos comportamentales de riesgo corona-
otra por exceso, resultan inadecuadas para la re- rio (tabaco, dieta, ejercicio físico).
cuperación del sujeto, sin embargo, parece claro En definitiva, aunque más adecuada y útil, la
que los ajustes que deberán realizarse a través de aplicación de técnicas específicas de Modifica-
la intervención en uno y otro caso habrán de ser ción de Conducta en este contexto, parece haber

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limitado en exceso su campo de actuación; de rarse a sus actividades habituales y disminuir las
hecho, parece tratarse más de intervenciones probabilidades de reinfarto.
para mejorar algunos problemas que, con fre- En definitiva, la intervención psicológica pue-
cuencia, se encuentran presentes en personas que de contribuir al éxito de la rehabilitación car-
han padecido un infarto de miocardio, que de díaca, en primer lugar, mediante la reducción del
verdaderos programas de tratamiento dirigidos a impacto emocional inicial provocado por el
la rehabilitación global del paciente infartado. infarto, propiciando un estado psicológico en el
paciente que le permita la reincorporación pro-
gresiva y saludable a niveles de funcionamiento
3. PROPUESTA DE UN MODELO DE óptimos y, posteriormente, a través de la modifi-
INTERVENCI~N MULTIDIMENSIONAL POST- cación de conductas de riesgo coronario y el
INFARTO DE MIOCARDIO entrenamiento en habilidades de afrontamiento
de situaciones estresantes, a la reducción al mí-
En un intento de solucionar las deficiencias nimo posible de las probabilidades de reinfarto.
que parecen haber caracterizado a la interven- Estos serán, por lo tanto, los objetivos generales
ción hasta ahora realizada, proponemos un mo- del modelo de intervención que se propone; sin
delo de intervención para la rehabilitación de pa - embargo, como veremos a continuación, para la
cientes después de un infarto de miocardio que consecución de dichos objetivos generales, de-
difiere de las anteriores aportaciones en dos as- berán plantearse, en cada caso, distintos objeti-
pectos fundamentales: en los objetivos que se vos específicos.
persiguen (atendiendo al proceso global de
rehabilitación, más que a parcelas singulares de 3.1.1. Reducción del impacto emocional pro-
éste) y en el tipo de intervención que se utiliza vocado por el infarto
para el logro de los mismos (mediante técnicas
El padecimiento de un infarto de miocardio
específicas de Modificación de Conducta, más
supone un evento vital altamente estresante, pa-
allá del mero apoyo emocional inespecífico).
ra cuyo manejo exitoso se precisa un conside-
rable nivel de habilidades de enfrentamiento
3.1. Objetivos de la intervención psicológica que los pacientes generalmente no poseen. Como
post-infarto de miocardio reacción a esta situación, a nivel cognitivo se
han observado frecuentemente entre los pacien-
Según la Organización Mundial de la Salud tes infartados evaluaciones distorsionadas de la
(OMS), los objetivos considerados como defini- propia situación que van desde la negación de la
torios de la Rehabilitación Cardíaca consisten en propia enfermedad, hasta ideas catastrofistas de
el logro, por parte del paciente, de una vida post- invalidismo. Paralelamente, a nivel conductual,
infarto tan activa y productiva como sea posible, en los primeros momentos del proceso de
reduciendo, también en la mayor medida posible, rehabilitación, es común observar, en unos casos,
el riesgo de padecer nuevos episodios cardíacos conductas de rápida reincorporación a niveles de
(Langosch, 1984). actividad similares a los existentes antes del
Para lograr estos objetivos, a la luz de los da- ataque cardíaco y, en otros, comportamientos de
tos apuntados anteriormente, parece necesario total inactividad y apatía.
que el paciente reciba la ayuda especializada Por lo tanto, respecto al objetivo general de
adecuada para manejar exitosamente la situación reducir el impacto emocional inicial provocado
presente (es decir, el hecho de haber padecido un por el infarto, la intervención psicológica deberá
infarto de miocardio), lo que evitará, por una dirigirse, por una parte, a la evaluación y modifi -
parte, las consecuencias negativas derivadas del cación consecuente de posibles cogniciones irra-
fracaso en el manejo de dicha situación y, por cionales acerca de las consecuencias del ataque
otra, el logro de un estado psicológico favorable cardíaco sufrido, considerándose, tanto los pen-
para realizar, también con la ayuda psicológica samientos catastrofistas, como aquellos otros
especializada apropiada, los ajustes en su com- excesivamente optimistas, igualmente irraciona-
portamiento cotidiano necesarios para reincorpo- les, sobre las repercusiones de la enfermedad en

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el funcionamiento cotidiano y, por otra parte, al ciar las condiciones necesarias para el manteni-
logro de un nivel de actividad saludable, en estos miento de comportamientos adecuados a largo
primeros momentos del proceso de recuperación, plazo, dirigiéndose la intervención tanto a la mo-
teniéndose en cuenta, igual que en el caso ante- dificación de las conductas de riesgo, como al
rior, tanto los excesos, como los déficits de acti- cambio, más general, de las condiciones que ga-
vidad del paciente. ranticen, en la mayor medida posible, la adhe-
rencia permanente a los hábitos saludables.
3.1.2.Disminución del riesgo de nuevos epi- Por lo que se refiere al entrenamiento del pa-
sodios de infarto ciente en habilidades de control del estrés, el tra-
tamiento deberá dirigirse a disminuir la vulnera-
Por lo que se refiere al objetivo de prevenir bilidad de los sujetos a las situaciones particu-
las posteriores ocurrencias de infarto de mio- lares provocadoras de estrés, frecuentes en su en-
cardio, la intervención psicológica deberá dirigir torno habitual, aumentando sus habilidades de
su atención a los hábitos comportamentales que enfrentamiento a estas situaciones, así como a
constituyen factores de riesgo coronario, así reajustar su estilo de funcionamiento (familiar,
como al entrenamiento del paciente en estrate- laboral, etc.), en aquellos casos en los que los
gias de enfrentamiento y control del estrés que problemas del paciente se deban a un estilo de
permitan su reincorporación saludable a las vida caracterizado por las excesivas demandas
diversas áreas de funcionamiento. ambientales. Esta intervención permitirá reducir
Respecto a los comportamientos habituales el riesgo de posteriores ocurrencias de infarto, ya
que constituyen factores de riesgo coronario, la que, en definitiva, se dirige a entrenar a los suje -
intervención puede tener como objetivo, bien la tos para reasumir sus actividades habituales la-
modificación de hábitos perjudiciales que se en- borales, sexuales, sociales, etc., previas al episo-
cuentren presentes en el repertorio del paciente: dio de infarto de miocardio, en condiciones salu-
el consumo de tabaco, los comportamientos ali - dables que, muy probablemente, no eran las
mentarios insanos y el déficit de ejercicio físico existentes antes de éste.
regular y moderado, yío bien, el mantenimiento
a largo plazo de hábitos saludables ya existentes, 3.2. Programas de intervención para la reha-
debiendo considerarse este último objetivo uno bilitación post-infarto de miocardio
de los más importantes al realizar una interven-
ción psicológica con pacientes infartados.
En esta línea, hay que señalar que, en los mo- 3.2.1. Evaluación psicológica inicial del pa-
mentos inmediatamente posteriores al alta hospi- ciente infartado
talaria, es frecuente que los pacientes, posible-
mente motivados por haber padecido el infarto, Los programas de intervención deberán cen-
suelan seguir estrictamente las prescripciones trarse en la evaluación de las cogniciones del su-
que respecto a sus hábitos comportamentales les jeto acerca de las repercusiones, a corto y a largo
señala su cardiólogo. Sin embargo, esta motiva- plazo, del infarto de miocardio en el desarrollo
ción inicial, aunque puede contribuir a la modi- de su vida futura, así como en la evaluación del
ficación exitosa, a corto plazo, de dichos com- nivel y el tipo de actividades realizadas por el
portamientos de riesgo coronario, a menudo re- paciente en este primer momento después del
sulta insuficiente a largo plazo, debido, en mu- episodio de infarto.
chos casos, al hecho de que los comportamientos Por otra parte, la evaluación inicial deberá
perjudiciales a los que nos estamos refiriendo, aportar información acerca de los comporta-
constituyen conductas muy consolidadas que mientos de riesgo (tabaco, dieta y ejercicio físi-
los pacientes han realizado durante años y que, co), tanto en el momento presente como en el
se han asociado a circunstancias ambientales tiempo anterior al padecimiento del ataque car-
concretas presentes habitualmente en su vida díaco, prestando, en este caso, una especial aten-
cotidiana y a consecuencias gratificantes muy ción a las circunstancias que, en el pasado, pu-
apreciadas. dieran haber sido responsables de la aparición
En definitiva, parece muy conveniente propi- yío del mantenimiento de estas conductas.

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Por último, una tercera área a la que se deberá inicial para su consecución, esta información de-
atender en la evaluación inicial se refiere a varia- be ser expuesta y explicada convenientemente al
bles relacionadas con el control del estrés. Den- paciente, asegurándonos, en la mayor medida
tro de este ámbito, los problemas que pueden posible, la consecución de un nivel de motiva-
amenazar la salud cardíaca de los sujetos son, ción y unas expectativas respecto al tratamiento
por una parte, el déficit de habilidades de enfren- que permitan la cantidad y calidad de la implica-
tamiento a situaciones estresantes y, por otra, el ción del sujeto necesaria e imprescindible para el
estilo de vida y las propias características de las éxito de la terapia.
situaciones cotidianas (familiares, laborales, so- En general, la información aportada debe ser
ciales, etc.) a las que el paciente se ve expuesto. suficiente para que el paciente sepa, exactamen-
Por lo tanto, deberá realizarse una adecuada te, qué se pretende lograr, cuál va a ser el método
evaluación de las dos variables mencionadas general de trabajo y qué ventajas suponen para él
(habilidades de enfrentamiento y modos de los logros que se pretenden alcanzar, teniendo en
funcionamiento en las diversas áreas de la vida cuenta, respecto a este último punto, que no se
cotidiana). trata de conseguir la adaptación a una situación
A modo de resumen, a la vista de lo anterior- de invalidez provocada por el infarto de miocar-
mente expuesto, un primer paso de vital impor- dio sufrido, sino, por el contrario, de dotarle de
tancia en la intervención para la rehabilitación estratagias que pueden permitirle alcanzar obje -
después de un infarto de miocardio, será la eva- tivos deseables para cualquier persona, haya su-
luación exhaustiva del paciente respecto a todos frido un infarto o no; así, por ejemplo, estrate-
aquellos aspectos relevantes que permitan gias como un mejor aprovechamiento del tiempo
determinar, en cada caso particular, cuáles son o una mayor capacidad para hacer frente a pro-
los objetivos concretos que se pretende lograr y blemas cotidianos de manera útil y saludable
cuáles son las áreas prioritarias de intervención pueden servir para aumentar su rendimiento, su
para la consecución de los mismos. En esta línea, bienestar o sus relaciones personales, objetivos
la correcta evaluación del paciente debe propor- sin duda deseables para cualquier persona y
cionar la información necesaria para determinar, que, además, redundarán en una mayor seguri-
por una parte, el estado inicial del sujeto res- dad para su salud coronaria.
pecto a problemas actuales relacionados con el
seguimiento de hábitos comportamentales salu- 3.2.3. Aplicación del programa
dables, el funcionamiento familiar, laboral, so-
cial y sexual, y con el estado de ánimo tras el pa- Una vez realizada la evaluación inicial, deli-
decimiento del infarto de miocardio; por otra, mitados los objetivos, diseñado el plan general
identificar áreas de especial vulnerabilidad que de intervención y explicados al paciente los
puedan aumentar la probabilidad de aparición de puntos anteriores, puede comenzarse a aplicar el
problemas en alguno de los ámbitos anterior- tratamiento. Obviamente, las técnicas específicas
mente citados, e identificar, asimismo, posibles a utilizar variarán considerablemente según los
recursos del paciente que puedan ser utilizados problemas que deban resolverse en cada caso; no
para facilitar el logro de los objetivos del progra- obstante, es conveniente señalar, respecto a la
ma (una completa guía para la realización de la aplicación del tratamiento, algunos aspectos ge-
evaluación inicial post-infarto de miocardio pue- nerales de interés.
de encontrarse en Bueno & Buceta, 1996). En primer lugar, el entrenamiento del paciente
en aquellas estrategias que se hayan delimitado
3.2.2.Diseño del plan de tratamiento y expli- como deficitarias, deberá responder a un adecua-
cación inicial al paciente do análisis funcional de su conducta y deberá di-
rigirse al logro de habilidades concretas directa-
A partir de la información obtenida mediante mente relacionadas con su entorno habitual.
la evaluación inicial, podrán delimitarse los Estrechamente ligado con lo anterior, es de
objetivos a conseguir en cada caso y, en función suma importancia que, durante todo el proceso
de éstos, el plan terapéutico inicial para su logro. de tratamiento, se realice una evaluación conti-
Una vez delimitados los objetivos y el plan nua del paciente. Por una parte, la evaluación

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inicial habrá proporcionado datos acerca de los farto de miocardio, realizaremos una breve ex-
problemas del paciente (exceso de hostilidad, posición de las distintas áreas de intervención y
falta de adherencia al ejercicio fisico, pensa- las posibilidades terapéuticas de la Modificación
mientos disfuncionales sobre las consecuencias de Conducta en cada una de ellas, dividiéndolas,
del infarto de miocardio...), sin embargo, para la según el modelo propuesto en: a) técnicas para la
adecuada solución de estos problemas, habrá reducción del impacto emocional inicial post-in-
que continuar evaluando su conducta con el fin farto de miocardio y b) técnicas para la reduc-
de determinar, en su caso concreto, qué mecanis- ción del riesgo coronario.
mos conductuales específicos son responsables
de los comportamientos disfuncionales observa- a) Técnicas terapéuticas para la reducción
dos inicialmente. Por otra parte, la evaluación del impacto emocional inicial post-infarto de
continua hace referencia a la necesidad de obser- miocardio
var progresivamente, a lo largo de la aplicación Como ya hemos indicado, siempre en función
de las estrategias de tratamiento, el efecto que de los resultados de la evaluación inicial, podrá
éstas puedan estar causando, con el fin de corre- diseñarse, específicamente para cada caso, un
gir posibles errores en el planteamiento terapéu- programa de actuación terapéutica destinado a
tico inicial en el caso de no lograrse los resulta- reducir el impacto emocional negativo modifi-
dos esperados, o aprovechar las ganancias que cando las cogniciones disfuncionales detectadas,
puedan irse logrando para el posterior desarrollo así como a realizar los ajustes necesarios en el
de la intervención. nivel y el tipo de actividades desarrolladas por el
Como ya se ha señalado, el éxito del trata- paciente, para conseguir un nivel óptimo de fun-
miento depende, en buena medida, de la motiva- cionamiento en esta primera etapa del proceso de
ción y colaboración activa del paciente. En este rehabilitación. Para ello, los programas terapéu-
sentido, es importante señalar que dicha motiva- ticos podrán incluir la aplicación de estrategias
ción debe ser cuidada durante todo el proceso de cognitivo-comportamentales para la modifica-
tratamiento, por lo que será preciso tener en ción de cogniciones disfuncionales y la planifi-
cuenta el efecto que las indicaciones terapéuticas cación sistemática de actividades a realizar en
ejercen sobre esta variable. este primer momento, lo que permitirá, por una
Por último, es preciso indicar que, dado que, parte, el ajuste del nivel de actividad inicial del
en la mayoría de los casos, se trata de entrenar al paciente y, por otra, contribuir a la modificación
paciente en habilidades diversas y modificar de cogniciones disfuncionales si, como en la 1í-
aquellas conductas que parecen impedir el buen nea propuesta por Beck (1976), las actividades
desarrollo del proceso de recuperación post-in- planificadas se utilizan como experimentos con-
farto de miocardio, los programas de interven- ductuales que aporten datos empíricos en apoyo
ción incluirán un cierto número de estrategias de las cogniciones más racionales acerca de las
comportamentales y cognitivas que constituyen repercusiones del infarto.
un paquete terapéutico complejo. En este sen-
tido, es importante realizar un esfuerzo terapéu- b) Técnicas terapéuticas para la reducción
tico dirigido a conseguir la interacción más ven- del riesgo coronario
tajosa entre los diversos componentes del pro- Respecto a la intervención para la adecuada
grama de tratamiento, aprovechando, siempre modificación de hábitos comportamentales que
que sea posible, las ganacias que se van obte- constituyen factores de riesgo coronario (consu-
niendo en unas áreas de trabajo en beneficio de mo de tabaco, dieta alimenticia inadecuada y
las restantes. déficit de ejercicio físico regular y moderado), la
Sin olvidar la importancia de atender a la ade - información al paciente sobre comportamientos
cuada interacción entre las técnicas que compo- de riesgo, la auto-observación y el auto-registro
nen el paquete de tratamiento, a continuación, y de las conductas que se pretende modificar, la
con el fin de ofrecer una visión general del tipo aplicación de estrategias como el control de
de técnicas terapéuticas más frecuentemente uti - estímulos, la programación del tiempo o la plani-
lizadas en los programas de intervención psico- ficación de objetivos, son algunas de las alterna-
lógica para la rehabilitación de pacientes post-in- tivas terapéuticas que la Modificación de Con-

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ducta ofrece para la solución de los problemas cuencia de consumo de tranquilizantes, en el gra-
que se plantean en este área. do de malestar subjetivo provocado por la reduc-
Por lo que se refiere a la posible necesidad de ción de actividades sociales y sexuales posterior
aumentar las habilidades de los pacientes para el al infarto de miocardio, en el locus de control de
manejo de situaciones estresantes y lograr un es- la salud y en la frecuencia de visitas médicas no
tilo de funcionamiento saludable en las distintas prescritas (Bueno & Buceta, 1996).
áreas de su vida cotidiana, técnicas como la
inoculación del estrés, la reestructuración cogni-
tiva, la programación racional del tiempo, entre 4. CONCLUSIONES
otras, pueden constituir útiles herramientas para
el logro de los objetivos en este área de interven- Los estudios epidemiológicos sobre los facto-
ción. res de riesgo de infarto de miocardio y sobre las
consecuencias psicológicas y sociales del pade-
3.3. Algunos resultados de la aplicación del cimiento de un ataque cardíaco indican, desde
modelo propuesto hace años y sin lugar a dudas, la existencia de
numerosas variables psicológicas implicadas en
Con el fin de aportar alguna evidencia acerca el pronóstico de la rehabilitación cardíaca. Sin
de la eficacia de este modelo de intervención embargo, hasta el momento, los intentos de inter-
multidimensional para la rehabilitación de pa- vención psicológica en este campo parecen ado-
cientes que han sufrido un infarto de miocardio, lecer de múltiples deficiencias que, posible-
hemos realizado un estudio en el que se compa- mente, han limitado la cantidad y calidad de los
raron los resultados obtenidos por diez pacientes logros alcanzados.
que recibieron un programa de las características Por este motivo, intentando superar los défi-
anteriomente expuestas, con los mostrados por cits de los programas habitualmente empleados
otros diez sujetos que también habían padecido en la rehabilitación de pacientes post-infarto de
un infarto de miocardio y a los que no se les miocardio, hemos propuesto un modelo de inter-
aplicó dicha intervención. vención multidimensional que pretende, precisa-
En este estudio, tras un año de seguimiento, mente, optimizar los recursos que ofrecen las
pudo observarse que, en general, los pacientes técnicas de Modificación de Conducta en su
tratados mostraban una excelente situación res- contribución a dicho proceso de rehabilitación.
pecto a la ausencia de conductas de riesgo coro - La idea básica que fundamenta el modelo de
nario, un notable éxito en la reincorporación, en intervención aquí propuesto, es el hecho de que
condiciones saludables, a niveles de funciona- las dificultades existentes para el logro de una
miento aceptables en las áreas familiar, social, rehabilitación exitosa parecen consistir en la
laboral y sexual, y un estado de ánimo que po- falta de habilidades de los pacientes para el ma-
dría calificarse de óptimo. Estos resultados con- nejo de la situación post-infarto, lo que les impi -
trastan abiertamente con los obtenidos por el de efectuar los cambios necesarios en su com-
grupo de pacientes que no recibió tratamiento, portamiento para preservar su comprometida
encontrándose diferencias estadísticamente salud coronaria, provocando reacciones disfun-
significativas entre unos y otros, siempre a favor cionales diversas que impiden el desarrollo favo-
de los que se sometieron a la intervención, en el rable de la recuperación y el logro de un estilo de
nivel de adherencia a las prescripciones dietéti- vida saludable. Parece, por lo tanto, que la inter-
cas, en la adherencia a la práctica de ejercicio fí- vención deberá dirigirse, en primer lugar, a de-
sico regular y moderado, en el grado de vulnera - terminar, individualmente, cuáles son las
bilidad al estrés, en las habilidades de enfrenta- habilidades de las que carece el paciente y, pos-
miento al estrés, en la presencia del patrón de teriormente, en aplicar el correcto entrenamiento
conducta tipo-A, en el grado de hostilidad, en la de las mismas mediante técnicas de Modifica-
recuperación del nivel de actividades sociales y ción de Conducta sistemática e individualmente
sexuales existente antes de la ocurrencia del in- aplicadas.
farto de miocardio, en el grado de ansiedad y de- El modelo de intervención que proponemos,
presión después del ataque cardíaco, en la fre- pretende, en cualquier caso, lograr un ajuste ge-

210
neral de la conducta post-infarto del paciente, Beck, A. T. (1976). Cognitive therapy and the emo-
atendiendo, en primer lugar, prioritariamente, a las tional disorders. New York: International Univer-
sity Press.
reacciones disfuncionales que puedan presentarse Bueno, A. M., & Buceta, J. M. (1993). Intervención psi-
como consecuenciadel impacto emocional produ- cológica en la rehabilitación de pacientes post-in-
cido por la ocurrencia del ataque cardíaco y, pos- farto de miocardio: Una revisión de la literatura. In
teriormente, al logro de un nivel de funciona- M. A. Simón (Ed.), Anuario comportamiento y sa-
miento óptimo en las distintas áreas relevantes de lud (Vol. 11). Valencia: Promolibro.
la vida diaria, reduciendo, así, la probabilidad de Bueno, A. M., & Buceta, J. M. (1994). Intervención psi-
cológica en la rehabilitación de pacientes post-in-
nuevas ocurrencias de infarto de miocardio. farto de miocardio. JANO, 47,5 1-62.
En resumen, en el presente escrito se ha pro - Bueno, A. M., & Buceta, J. M. (1996). Tratamiento psi -
puesto un modelo de intervención específica- cológico después del infarto de miocardio. In J. M.
mente dirigido al proceso de rehabilitación al que Buceta & A. M. Bueno (Eds.), Tratamientopsico-
deben enfrentarse las personas que han padecido lógico de hábitos y enfermedades. Madrid: Pirá-
mide.
un infarto de miocardio y que ha sido elaborado a
Crisp, A. H., Queenan, M., & D’Souza, M. F. (1984).
partir de los datos de la literatura científica Infarto de miocardio y estado emocional. Lancet
acerca de los problemas psicológicos que implica (ed. Esp.), 5 (1), 65-68.
esta situación particular. Esta idea nos parece Diedericks, J. P., Bar, F. W., Hoppener, P., & Vonken,
especialmente importante, ya que no se trata de H. (1991). Predictors of return to former leisure
atender a personas que presentan problemas and social activities in myocardial infarction pa-
tients. Journal of Psychosomatic Research, 35 (6),
psicológicos y que, además, han tenido un 687-696.
infarto, sino, por el contrario, lo que aquí se plan- García, L., Valdés, M., Jodar, I., & Riesco, N. (1994).
tea es una propuesta de intervención terapéutica Psychological factors and vulnerability to psychia-
centrada en la necesidad de ayuda psicológica tric morbidity after myocardial infarction. Psycho-
derivada directamente del hecho de encontrarse therapy and Psychosomatics, 61 (3-4), 187-194.
enfrentado a la experiencia de un infarto y di- García-Sánchez, S., Wilke, M., & Bayés de Luna, A.
(1988). Readaptación psicosocial tras cardiopatía
rigida específicamente al entrenamiento de los isquémica, planteamiento de un programa de
pacientes en las habilidades necesarias para intervención. In M. Valdés, T. De Flores, & S. Gar-
afrontar esta situación con mayores garantías de cía (Eds.), Estrés y cardiopatía coronaria. Barcelo-
éxito, en definitiva, centrada en el proceso de na: Alamex.
rehabilitación post-infarto de miocardio. Gatchel, R. J., Gaffney, F. A., & Smith, J. E. (1986).
Esperamos que los alentadores resultados Comparative efficacy of behavioral stress manage -
ment versus propano101 in reducing psychophysio-
obtenidos mediante la aplicación de este tipo de logical reactivity in post-myocardial infaction pa-
programas sirvan para estimular la investigación tients. Journal of Behavioral Medicine, 9, 503-5 13.
futura en esta línea, lo que redundará en la posibi- Jaarsma, T., Kastermans, M., Dassen, T., & Philipsen, H.
lidad de ofrecer una mejor atención psicológica a (1995). Problems of cardiac patients in early reco-
las personas que deben enfrentarse al complejo very. Journal ofAdvances in Nursing, 21 (1). 21-27.
Julkunen, J., & Saarinen, T. (1994). Psychosocial pre-
proceso de rehabilitación después de haber pade-
dictors of recovery after a myocardial infarction:
cido un infarto de miocardio, cuyo éxito parece Development of a comprehensive assessment me-
depender, en su mayor parte, de las adecuadas ha- thod. Irish Journal of Psychology, 15 (1). 67-83.
bilidades psicológicas que, en muchos casos, el Krampen, G., & Ohm, D. (1984). Effects of relaxation
paciente sólo podrá lograr a través de la interven- training during rehabilitation of myocardial
ción especializada de un psicólogo. infarction patients. Znternational Journal of Reha-
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patients after myocardial infarction (Abstr). Euro- acute myocardial infarction. Zntensive Critical Ca-
pean Heart Journal, 8 (Suppl 11), 162. re in Nursing, 11 (1), 10-19.

211
Maeland, J. G., & Havik, O. E. (1987). Psychological cológica en este área, los programas terapéuticos tra-
predictors for return to work after a myocardial in- dicionalmente empleados parecen presentar múltiples
farction. Journal of Psychosornatic Research, 31 deficiencias que limitan los resultados obtenidos. Con
(4), 471-481. el fin de superar tales deficiencias, en el presente ar-
Rosal, M. C., Downing, J., Littman, A. B., & Ahem, D. tículo se propone un modelo de intervención espe-
K. (1994). Sexual functioning post-myocardial cíficamente diseñado para la atención psicológica a los
infarction: Effects of beta-blockers, psychological pacientes post-infarto de miocardio. El modelo parte
status and safety information. Journal of Psychoso- de la consideración del infarto de miocardio como un
matic Research, 38 (7), 655-667. evento altamente estresante en cuyo manejo el pacien-
Sanne, H., Wiklund, I., Vedin, A., & Wilhelmsson, C. te puede fracasar, manifestándose entonces conse-
(1985). Determinantes de la readaptación psicoló- cuencias conductuales y cognitivas que interfieren
gica, sexual y laboral después del infarto de mio- con su bienestar personal, le impiden reincorporarse a
cardio. Revista Española de Cardiología, 38 (supl. sus actividades habituales y perjudican seriamente su
111), 10-14.
salud. En consecuencia, la intervención psicológica se
Schleifer, S. J., Macari-Hinson, M. M., Coyle, D. A.,
dirige, en primer lugar, a reducir el impacto emocional
Slater, W. R.,Kahn, M., Gorlin, R.,& Zucker, H.
D.(1989). The nature and course of depression fol- provocado por el infarto y, una vez logrado un estado
lowing myocardial infarction. Archives of Internal psicológico adecuado, a entrenar al paciente en las
Medicine, 149, 1785-1789. habilidades necesarias para abordar los cambios en su
Tardif, G. S. (1989). Sexual activity after a myocardial estilo de vida que le permitan una reincorporación exi-
infarction. Archives of Physical Medicine and Re- tosa y saludable a las distintas esferas de funciona-
habilitation, 70,763-766. miento diario.
Terry, D. J. (1992) Stress, coping, and coping resources Palabras clave: Infarto de miocardio; rehabilitación
as correlates of adaptation in myocardial infarction cardíaca; intervención psicológica.
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Turner, L., Linden, W., Vanderwal, R., & Schamberger, RESUMO
W. (1995). Stress management for patients with
heart disease: A pilot study. Heart & Lung, 24 (2), Numerosos estudos epidemiológicos tem assinalado
145-153. a importancia de diversas variáveis psicológicas como
Vanelderen-Vankemenade, T., Maes, S., & Vanden- factores de risco de enfarte de miocárdio, assim como
broek, Y. (1994). Effects of a health education pro-
a presenca frequente de problemas psicológicos na rea-
gramme with telephone follow-up during cardiac
bilitagao depois de um ataque cardíaco. Contudo, ape-
rehabilitation. British Journal of Clinical Psycho-
logy, 33 (3), 367-378. sar da importancia da intervencao psicológica nesta
Vandixhoorn, J., Duivenvoorden, H. J., Pool, J., & Ver- área, os programas terapeuticos tradicionalmente em-
hage, F.(1 990). Psychic effects of physical training pregados parecem apresentar múltiplas deficiencias
and relaxation therapy after myocardial infarction. que limitam os resultados obtidos. Com a finalidade de
Journal of Psychosornatic Research, 34,327-337. superar tais deficiencias, no presente artigo propoe-se
Wiklund, I., Sanne, H., Vedin, A., & Wilhelmsson, C. um modelo de intervencao especificamente desenhado
(1984). Determinants of return to work one year para a prestaqao de cuidados psicológicos aos pacien-
after a first myocardial infarction. Journal of Car- tes post-enfarte de miocárdio. O modelo parte da con-
diopulrnonar Rehabilitation, 5,62-72. sideraqao do enfarte de miocárdio como um aconteci-
Wiklund, I., Sanne, H., Vedin, A., & Wilhelmsson, C. mento altamente stressante em cujo manejo o doente
(1985). Coping with myocardial infarction: A mo- pode fracassar, manifestando-se entao consequtncias
del with clinical applications, a literature review. comportamentais e cognitivas que interferem com o
Internal and Rehabilitation Medicine, 7 (4), 167- seu bem-estar pessoal, lhe impeqam reincorporar-se As
-175. suas actividades habituais e prejudicam seriamente a
sua saúde. Em consequencia, a intervenqao psicológica
dirige-se, em primeiro lugar, a reduzir o impacte emo-
RESUMEN cional provocado pelo enfarte e, uma vez logrado um
estado psicológico adequado, treinar o doente nas ha-
Numerosos estudios epidemiológicos han señalado bilidades necessárias para abordar as mudanqas no seu
la importancia de diversas variables psicológicas como estilo de vida que Ihe permitam uma reintegraqao
factores de riesgo de infarto de miocardio, así como la com exito e saudável nas diferentes esferas de funcio-
frecuente presencia de problemas psicológicos en la namento diário.
rehabilitación después de un ataque cardíaco. Sin em- Palavras chave: Enfarte de miocárdio; reabilitaqiío
bargo, a pesar de la importancia de la intervención psi - cardíaca; intervencao psicológica.

212
ABSTRACT ful life event in whose coping the patient ofien fails
and, when this fact occurs, behavioral and cognitive
Numerous epidemiological studies have pointed consequences appear, interfering with his wellbeing,
out the relevance of many psychological variables as preventing his reincorporation to the habitual activi-
risk factors of myocardial infarction, as well as the ties, and harming seriously his health. Consequently,
in the first moment, the psychological intervention is
existehce of psychological problems asociated with
directed to reduce the emotional impact brought about
cardiac rehabilitation. However, in spite of the impor- by the infarction and, later, once achieved an adequate
tance of the psychological intervention in ihis field, the psychological condition, it is directed to train the
therapeutic programmes traditionally applicated, show patient in the necessary skills for having the changes in
many deficiencies that reduce the outcomes obtained. his life style that would allow him a successful and
In order to overcome such deficiencies, the present healthy rehabilitation to the different fields of his
paper proposes an intervention model specifically de- habitual life.
signed for the psychological care to the post-infarction Key words:Myocardial infarction; cardiac rehabili-
patients. "he model proposes the infarction as a stress- tation; psychological intervention.

213

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