La inquisición española

La inquisición española fue creada para evitar la herejía “se fundó en 1478 con
la aprobación del Papa Sixto IV (Kamen, 1965, pag.15) se encargo de varios
delitos que solo se relacionaban con la Iglesia, además que en la inquisición
solo se tenía poder sobre los cristianos bautizados, no buscaban la verdad,
solo se basaban en las acusaciones que hacia el pueblo en contra del acusado.

En España se llevaban a cabo los juicios para castigar a las víctimas de la

inquisición, estos juicios eran realizados en un tribunal y dependiendo de la
acusación eran juzgados ya fuera en público o en privado (con los reyes o
inquisidores) estos mismos presos quedaban marcados de por vida, si es que
se les llegaba a dar la libertad, porque siempre iban hacer tratados como
sospechosos, sin embargo el pueblo al igual que los condenados no sabían de
que se les acusaba. Las sentencias eran dadas horas antes de que fueran
pronunciadas en el auto de fe, general mente este acto comenzaba a las 5
horas del día. “La tortura es el medio seguro para absolver a los potentes
perversos y para condenar a los débiles inocentes” (Beccaria, 1764, pag.115)

La Iglesia tuvo el papel principal ya que por ella se inició toda esta tortura, uno
de los principales acusadores eran los integrantes de ella. El Papa Leon XIII
decía : “la sentencia de muerte es un medio necesario y eficaz para que la
Iglesia obtenga su fin, cuando los rebeldes actúan en contra de ella” también
añadió “si no existe otro remedio para salvar a su gente se puede y debe dar
muerte a estos perversos hombres” (Baroja, 1968, pag.198) Los que se
encontraban dentro de estas leyes de la iglesia eran los que practicaban la anti
herejía.