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Compañeros, los saludo.

Para la realización de la consigna, realicé entrevistas a 4 compañeros de distintos niveles y


modalidades educativas: en el marco de la educación formal (nivel medio y superior) y no
formal (CAJ).

Es interesante observar que en cada una de las respuestas se advierten tensiones al momento
de conceptualizar la sexualidad, la ES y sus contenidos. En ninguna de ellas he advertido la
presencia del enfoque tradicional-moralista, aunque sí es notoria una fuerte tendencia hacia la
visión biomédica, centrada en la genitalidad y la prevención: “supone trabajar
fundamentalmente en cuestiones preventivas”, “[la ES debe dar] recomendaciones para evitar
enfermedades o embarazos no deseados”, “[brinda información] sobre métodos
anticonceptivos”.

Ahora bien, esta perspectiva que pone foco en los “efectos” de la sexualidad, se integra en una
concepción más amplia de la sexualidad, donde es posible reconocer otros aspectos, en pos de
una definición más integral.

Algunas respuestas reconocen, en consonancia con la mirada de la sexología, la importancia de


considerar el “placer” en el entendimiento de la sexualidad: “Tiene que ver con (…) lo
placentero y también con lo que genera displacer”, “Cada uno en un encuentro sexual debe
poder sentir placer”.

Asimismo, hay una mención recurrente a lo emocional en las declaraciones, como elemento
que se pone en juego en la relación de un sujeto con otro y con su propio cuerpo. Sin embargo,
es necesario aclarar que la mención de la dimensión afectiva se concreta sólo en afirmaciones
muy generales del tipo: “[la ES] debería aportar al cuidado de la salud emocional”, “En el
comportamiento sexual intervienen las emociones”.

En 3 entrevistas emerge la problemática del género, como aspecto a considerar en la


sexualidad. De esta forma, se adjudica a la ES la función de tratar “las problemáticas que giran
en relación al género”, desnaturalizando las categorías genéricas tradicionales (varón y mujer).

Sorprendentemente, ninguna respuesta conceptualiza la sexualidad como derecho, en relación


al enfoque jurídico.

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