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Teoría Jurídica II

Daniel Bonilla
Angélica María Guzmán Olmos

¿Conocimiento del otro o dominación sobre el otro?

Una reflexión acerca de cómo el derecho comparado legitima la dominación de los


pueblos colonizados

"Cuando una opinión es general, suele ser exacta."


Jane Austen
Introducción

Por diferente que pueda parecer una sociedad de las otras, el lenguaje es una
característica común en todas, éste permite la interacción y la comunicación de los sujetos
que hay dentro de ellas. Pero, además, es el reflejo de lo que se designa como cultura dentro
de cada sociedad. El lenguaje se puede entender como uno de los signos culturales más
importantes para entender la cultura1. Primero porque hace parte esencial de la cultura,
segundo porque expresa las actitudes y/o hábitos de nuestros antepasados a través de la
tradición y tercero, porque es el medio por el cual un sujeto asimila la cultura de su
comunidad (Serrano. 1980. Pág. 16).
Ahora bien, uno se podría preguntar por qué definir el lenguaje y analizar la cultura
resulta relevante para los estudios críticos o para el derecho comparado. Este texto no
pretende hacer una amplia disertación sobre el concepto del lenguaje, pero si busca explicar
cómo la interpretación del lenguaje hace imposible conocer objetivamente al “otro”—
extranjero—. Esto deriva en que el derecho comparado con su idea sobre el conocimiento
del otro solo legitime un discurso de colonización y dominación. En esencia, se pretende
explicar cómo un determinado lenguaje asigna definiciones prestablecidas a la cultura del
otro (Said.2008. Pág.80), e impide conocer realmente la esencia de un pueblo extranjero.
Esto conlleva a la imposición de ideas (de derecho) occidentales, que castran la
autodeterminación de los Estados con costumbres ajenas a ellos.
Para ello, primero se analizará cómo funciona el lenguaje dentro de la cultura, y cómo
una determinado Estado de acuerdo con sus particularidades llena de significado y contenido
a los objetos propios de otra sociedad; entendiendo así lo que lo diferente es equivalente a lo
negativo. Segundo, se verá cómo el miedo al “otro” es lo que determina los arquetipos
negativos que se asignan a una determinada sociedad. Y tercero, se hará referencia al arte
como un lenguaje efectivo para preconizar los estereotipos de una sociedad.

1
“La cultura es el medio de comunicación del hombre y no existe ningún aspecto de la vida humana que no sea
tratado por la cultura. Enmarca la personalidad de los miembros de una comunidad. Está muy relacionado con
la manera como los individuos se expresan emocionalmente, la manera cómo piensan, como se mueven, como
plantean y resuelven los problemas, como proyectan sus ciudades, como organizan sus transportes, y como,
también, se estructuran y funcionan los sistemas económicos y políticos” (Serrano. 1980. Pág. 19).
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1. El lenguaje, las categorizaciones y los arquetipos


Es posible advertir que el lenguaje también es un medio para conocer la cultura del
otro. Aun así, el texto de Said lleva a repensar ¿cómo es posible conocer al otro?, si de
antemano se tiene una caracterización de ese “otro”. Resulta entonces prácticamente
imposible conocer un objeto sin dominarlo, sin tener autoridad sobre él y sin quitarle su
autonomía (Said. 2008. Pág. 59). En ese entendido, parece imposible que realmente se
conozca al “otro” cuando ya se tiene un arquetipo de él, cuando por medio del lenguaje ya se
ha catalogado, clasificado y estereotipado.
Lo anterior conlleva a que, al ser contrario a las ideas “normales”, racionales y
correctas de los occidentales, se quiera cambiar lo que según estas ideas preconcebidas se
entiende como correcto. Esto, sin embargo, resulta del todo contradictorio, por un lado,
pareciera que se quisiera conocer de manera imparcial al “otro”. Pero, por otro lado, en el
ejemplo que Said se presenta, con los orientales2 que, lo que ha hecho la sociedad occidental
es usar ese conocimiento, para manipular el comportamiento de ellos, e imponerles la
“racionalidad” de sus pensamientos y conocimientos.
De lo anterior, surge un nuevo interrogante, ¿Cómo se descifra el lenguaje?, y más
importante ¿cómo se construye ese lenguaje? Resulta imposible responder a estas preguntas
de una única forma. Lo cierto, es que el lenguaje es formalmente, una reproducción de
palabras, las cuales están dotadas de un significado, el cual es conferido por los seres
humanos. Esas palabras provienen de un estimulo nervioso, y probablemente varían según
el contexto de una y otra sociedad, y de una a otra persona.
“Del estímulo nervioso resulta posible inferir algo además de una causa fuera de
nosotros, es ya el resultado de un uso falso e injustificado del principio de razón. ¡Cómo
podríamos decir legítimamente, si la verdad estuviese solamente determinada por la
genesis del lenguaje, y si el punto de vista de la certeza fuese también lo único decisivo
respecto de las designaciones, cómo, no obstante, podríamos decir legítimamente: la
piedra es dura, como si además captásemos lo duro de otra manera y no únicamente como
una designación subjetiva! (Nietzsche.2011.Pág, 5).
Entonces, si se entiende que el significado que se le da a un objeto, concepto, actitud,
comportamiento u habito. El significado que se le asigna al lenguaje depende de factores
ajenos al individuo, y el ejercicio de razón resulta totalmente subjetivo y arbitrario3.Así, se

2
De acuerdo con lo que Said expresa de Cromer, el conocimiento podía usarse para gobernar de manera que
al, “[…] comprender sus limitaciones y en procurar encontrar, en la satisfacción de la raza sometida, un vínculo
de unión más valioso y, si se puede, más fuerte con los dirigentes y los dirigidos.” (Said. 2008. Pág. 64). De
manera que la administración del oriente por parte de occidente se pueda hacer de manera más fácil.
3
“Tomemos por ejemplo el sustantivo español «perro»; el significado que le asignamos es una convención
arbitraria, ya que no existe relación fónica ni gráfica que enlace la idea de perro con esa palabra. Se trata de un
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debe entender que el conocimiento de una cultura sobre otra es subjetivo y proviene de una
razón sesgada. De acuerdo con Said, la mente tiende a procesar el lenguaje por medio de
distinciones4, o siguiendo a Aristóteles, la mente realiza categorías para asignarle diversos
significados a los objetos que se encuentran dentro del universo. En este sentido, la mente
asigna a lo que conoce como lo bueno, y a lo extranjero o desconocido como lo malo y lo
que se debe arreglar, ese es el caso del orientalismo. “Occidente, durante los siglos XIX y
XX, asumió que Oriente—y todo lo que en el había--, si bien no era manifiestamente inferior
a Occidente, si necesitaba ser estudiado y rectificado por él” (Said. 2008. Pág. 69). Ello
teniendo en cuenta que era una región completamente diferente, alejada y sus principios y
creencias eran desde todo punto de vista contrarias a su estudiada racionalidad.
Según Pierce, toda la realidad puede ser comprendida a partir de tres categorías que
permiten unificar aquello que es complejo y múltiple, así, esta, 1) el objeto, referido a
cualidades del sentir, la idea de aquello tal y como es; 2) el interpretante, que se refiere a la
cualidad de un sentimiento, entendiéndolo como el significado general que se asigna; 3) el
representamen, que se encuentra en una intrinseca conexión con el segundo, ya que se le
asigna un determinado valor a lo que ya significaba(Zecchetto.2013). Por ejemplo, 1) una
manzana es un alimento, 2) le atribuimos el nombre de manzana y la categoría de fruta, y 3)
la convertimos en el logo de Apple al añadirle una distinción propia.
Del ejemplo anterior se entiende, que el sujeto en la segunda categoría es quien
nombra al objeto, y en la tercera quien la dota de significado. Asimismo, sucede con el
entendimiento de oriente por occidente, o de un imperio a un territorio por colonizar. Pues a
falta de significado, o de entendimiento de su verdadero significado, quien tiene mayor
dominio le asigna en la segunda y tercera categoría un significado particular, desligándolo
del significado original.
Lo anterior, aunque parece un simple ejercicio lingüístico, resulta una forma de
entender el pensamiento, y la manera en que al parecer se realiza el estudio de derecho
comparado. Resulta claro, tal como lo entiende Saussure, que la arbitrariedad de la
asignación de sentido a un objeto, lugar, costumbre, cultura o Estado por la lengua no puede
ser más que un sistema de valores puros (Zecchetto.2013). Así, los trasplantes jurídicos
parecen arbitrarios teniendo en cuenta que son un ejercicio de interpretación del lenguaje y
de resignificación del este. Cuando occidente o el hegemon imponen sus modelos de
gobierno a las tierras “incivilizadas” por colonizar, parecería la imposición del lenguaje

enlace no natural, sino arbitrario, dice Saussure. Podemos cambiar de significante y usar otros códigos
lingüísticos (en inglés «dog», en alemán «hund», en italiano «cane», en francés «chien»), y nos encontraremos
siempre con el mismo principio de enlace arbitrario, carente de toda relación natural entre la idea de «perro» y
su expresión idiomática.” (Zecchetto.2013)
4
“Es posible que a muchos objetos, lugares y épocas se les asignen papeles y se les den significados que
adquieren una validez objetiva solo después de que se hayan realizado las asignaciones.” (Said. 2008. Pág. 86)
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propio de sistemas occidentales a los orientales, sin tener en cuenta el leguaje propio de estos
últimos.
2. Neutralizando al enemigo: el miedo al “otro”
Es imposible obviar el hecho de que cualquier Imperio del siglo pasado, vivió en
constante alarma y en guerra con sus Estados vecinos, y no es irrisorio pensar, tampoco, que
cualquier ataque a su gobierno o a su estabilidad debiera ser combatido. Ahora bien, la
mayoría de los imperios estaban cimentados en unos fuertes principios morales y religiosos.
El cristianismo, ha sido y será un símbolo que distingue al oriente del occidente, por
consiguiente, todo lo que fuera contrario a las ideas morales representaba una amenaza
latente para occidente. Cabe además señalar, que quienes iniciaron el estudio del oriente
fueron en su mayoría, eruditos cristianos5, que veían con escandalo las prácticas “inmorales”
de los orientales. Por lo cual resulta fácil comprender la connotación negativa de la que los
occidentales dotaron todas las prácticas y la cultura de oriente.

“Se tiende a dejar de juzgar las cosas porque sean completamente extrañas o
completamente conocidas; surge una nueva categoría intermedia, una categoría que
permite ver realidades nuevas, realidades que se ven por primera vez, como versiones de
una realidad previamente conocida. En esencia, una categoría de este tipo no es una
manera de recibir nueva información, sino un método para controlar lo que parece ser
una amenaza para la perspectiva tradicional del mundo.” (Said. 2008. Pág. 92).
Así, parece que lo extraño y desconocido resulta ser una amenaza latente, no soló para
lo conocido, la razón, la ciencia y los valorados principios morales de la sociedad occidental,
sino que además resultan ser un peligro para la soberanía del imperio. Y lo más lógico ante
esto, resulta ser la colonización por medio de la dominación y el sometimiento a estas tribus
irracionales, supersticiosas y poco cultas. Parece ser que lo mejor, tal como sucedió con la
colonización en América, es la evangelización, racionalización e iluminación de estos
pueblos barbaros.
3. Comunicación no verbal: la inmutabilidad del arte y de los arquetipos
sociales

El lenguaje no es sólo palabras o sonidos, en el lenguaje confluyen distintos elementos


que comunican6. Una imagen habla de una realidad inmutable, muchas veces una imagen

5
“Los autores cristianos que fueron testigos de las conquistas islámicas tenían escaso interés en aprender la
elevada cultura y la magnificencia de los musulmanes […]” (Said. 2008. Pág. 93)
6
“La comunicación: es el proceso central y constitutivo de toda cultura en la medida en que la comunicación
rige el comportamiento humano/La percepción del mundo que tenemos nos viene programada por nuestra
lengua, y no resultaría excesivamente aventurado aplicar este principio a la totalidad de la cultura. Es decir,
personas de diferentes culturas no solo hablan diferente, sino que, en cierto modo, habitan diferentes mundos
sensoriales. Esta consideración nos lleva del estudio de la comunicación verbal al de la comunicación no
verbal.” (Serrano. 1980. Pág. 25)
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puede expresar más de lo que las palabras, con su limitado sentido simbólico, pueden llegar
a comunicar. Así, en las pinturas antiguas se encuentran ideas que contrastan con lo que se
entiende como realidad7. Cuando se presenta una imagen, la gente la mira desde una
perspectiva condicionada, por una serie de hipótesis aprendidas acerca del arte y la cultura.
Estas hipótesis o suposiciones se refieren a: la belleza, la forma la verdad, la posición social
el genio, el gusto, la civilización, etcétera y muchas de ellas no se ajustan a la realidad de una
sociedad tal cual es (el mundo tal cual es, es algo más que un puro hecho objetivo; incluye
cierta conciencia.). Entonces, las imágenes tienden a mistificar el mundo, y dan un amplio
campo para la interpretación. En el caso de oriente, o de lo desconocido también sucede así,
se trata de un lugar mistificado, de algo desconocido al cual se le asigna un sentido
determinado (Berger.1972. Pág.7).
Es el caso, por ejemplo, del
romanticismo, corriente artística que se
irradio tanto en la literatura, como en el
arte. Las pinturas vistas con los ojos de
pintores franceses, ingleses, españoles,
dejaban a la imaginación del receptor, la
interpretación de ese mundo, pero en el
fondo venían predeterminadas por la
visión del mundo de ellos
(Mackenzie.1995). Este mundo seducía
como aterraba, era tan desconocido, que
tanto en las novelas del siglo XIX, como
en sus pinturas se podía ver un lugar que Ilustración 1. Scheherezade y Shahriar (1880) de Ferdinand
daba lugar a bastas aventuras, un país Keller.
exótico lleno de misterios, y de erotismo,
contrario a toda la moral de los ambientes occidentales, en especial durante la época
victoriana. Donde la sexualidad no solo fuer un tabú, sino totalmente opuesto a las
enseñanzas cristianas.
Asimismo, la literatura que narraba las grandes guerras, y la estructura interna de un
continente hostil y altamente sexualizado. El cual se veía a través de los ojos de autores de
literatura como fabulas, viajes e historia que generaba pánico y al mismo tiempo atracción.
Pero sí para los individuos generaran fascinación, tal como ya se ha mencionado, también

7
Cabe reflexionar, “¿Qué es entonces la verdad? Un ejército móvil de metáforas, metonimias,
antropomorfismos, en resumidas cuentas, una suma de relaciones humanas que han sido realzadas,
extrapoladas, adornadas poética y retóricamente y que, después de un prolongado uso, a un pueblo le parecen
fijas, canónicas, obligatorias: las verdades son ilusiones de las que se ha olvidado que lo son, metáforas que se
han vuelto gastadas y sin fuerza sensible, monedas que han perdido su troquelado y no son ahora consideradas
como monedas, sino como metal.” (Nietzsche.2011.Pág, 6).
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comprendía una amenaza para la estabilidad de unos imperios. Estabilidad basada en
costumbres fuertemente cristianizadas.
“Asia habla a través de la imaginación de Europa y gracias a ella, una Europa
que según se la describe, ha vencido a ese “otro” mundo hostil de más allá de los
mares que es Asia. [Así], se le atribuyen a Asia sentimientos de vacío, de perdida y
de desastre; son el precio que ha de pagar por haber desafiado a Europa” (Said. 2008.
Pág. 91).
Esta reproducción del arte, que derivo en distintas corrientes artísticas, y que fue una
manera de expansión del lenguaje y la cultura dentro del imperio, derivo inevitablemente en
una satanización del oriente, de aquellas culturas bárbaras que contrariaban la moral cristiana.
Es así, que el arte como medio de comunicación termino convirtiéndose en medio de
legitimación para la dominación colonial. Sucedió también así con pueblos como los de
América del Sur.
4. Conclusión
Said describe el orientalismo como un modo de relacionarse con Oriente, basado en
el lugar especial que este ocupa en la experiencia de Europa occidental (Said. 2008. Pág.19).
En este texto no nos hemos referido solo a Europa occidental, tampoco, se hizo un estudio
critico y pormenorizado de como se han dado los trasplantes jurídicos de los diferentes
imperios a los territorios que en la historia universal han sido colonizados. Sólo se pretendió
hacer una seria disertación acerca de como funciona el derecho comparado, y la fuerte
tendencia que el mismo tiende a justificar con la colonización y dominación del “otro”
incivilizado.
“El éxito del derecho comparado hay que atribuirlo a la necesidad que han
experimentado los juristas, tras una etapa de signo nacionalista, de restituir la ciencia jurídica
a su anterior universalismo […]” (David. 2010). Este universalismo, no existió, es
simplemente una apariencia de lo que los imperios en su momento y debido a su gran poder
de domino intentaron universalizar, y en cierto modo lograron castrando mucho de la
autodeterminación de los pueblos extranjeros. Ciertamente, Balfour, uno de los
colonizadores de Oriente, dijo. “la ocupación extranjera se convierte, pues, en el fundamento
principal de la civilización egipcia contemporánea; Egipto necesita—de hecho, exige—la
ocupación británica” (Said. 2008. Pág., 61). Asimismo, señala que, “[si a los colonizados]
les preguntaran y fueran capaces de contestar, confirmarían de manera superflua lo que ya es
evidente: que son una raza sometida, dominada por una raza que los conoce y que sabe mejor
que ellos lo que les conviene.” (Said. 2008. Pág., 62).
En suma, resultan ser, en apariencia, los trasplantes del derecho comparado un
sistema tautológico, que reproduce sistemas políticos de gobierno occidentales. Los cuales
están basados y justificados, desde sus inicios de la colonización, en interpretaciones
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excluyentes del lenguaje y representaciones artísticas inmutables que preconizaron un
arquetipo negativo sobre los pueblos colonizados. Deriva esto en que los valores lingüísticos
desbordan la simple significación asignada de antemano a los términos, porque ellos “emanan
del sistema occidental” (Zecchetto.2013). Finalmente vale la pena preguntarse si ¿Es posible
entender la cultura a partir de los estudios críticos, aún cuando los seres humanos solo
podemos entender algo cuando le atribuimos un significado y lo encasillamos dentro de una
categoría?

Bibliografía

Edward Said, Orientalismo, Random House, 2008, Tercera parte, secciones 1 y 2.

Friedrich Nietzsche, Sobre verdad y mentira en sentido extramoral, Tr. Joan B. Linares.
Madrid: Gredos, 1ª edición, 2011. pp. 187-201. p. 191.

John Berger, Modos de ver, Editorial GG, 1972, capítulos 5 y 6.

John, Mackenzie, Orientalism: History, Theory and the Arts, Manchester University Press,
1995, capítulo 3.

Sebastiá Serrano. Signos, lengua y cultura, 1981.

Pinturas Orientalistas, ver recuadro con presentación de diapositivas en,


http://algargosarte.blogspot.com.co/2014/10/orientalismo-en-el-siglo-xix-la.html John,
Mackenzie, Orientalism: History, Theory and the Arts, Manchester University Press, 1995,
capítulo 3.

René David. Los Grandes Sistemas Jurídicos Contemporáneos. Décimo Primera


Edición.2010. Paris. UNAM.

Victorino Zecchetto, Seis semiólogos en busca del lector: Ferdinand de Saussure - Charles
Sanders Peirce - Roland Barthes - Algirdas Julián Greimas - Humberto Eco - Eliseo
Verón.,2005. La Crujía.

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