You are on page 1of 10

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO

Serie 18
Gaceta Judicial 12 de 03-sep.-2012
Estado: Vigente

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO


Se casa el fallo del tribunal ad quem, al no encontrarse una debida motivación en el mismo. Dicta
sentencia de mérito la sala de Casación, misma que desestima la demanda por cuanto, no se
encuentra sustentados en derecho, ninguno de los asertos que sostiene el actor y que son los
elementos de la reivindicación.
Gaceta Judicial. Año CXIII. Serie XVIII, No. 12. Página 4292.
(Quito, 03 de Septiembre del 2012)

Juicio no. 1061-2009

Resolución no. 304-2012

Juicio ordinario reivindicatorio de dominio propuesto por Ricardo Enrique Montufar Segovia contra
Martha Elizabeth Ruiz Zambrano.

PRIMERA INSTANCIA

JUZGADO TERCERO DE LO CIVIL DE LOS RIOS. Quevedo, febrero 8 del 2008; a las 15h30.

VISTOS: A fojas siete comparece Ricardo Enrique Montufar Segovia, diciendo: que es propietario de
un inmueble compuesto de solar y construcción, situado en el sector Malecón de la parroquia y
cantón Quevedo, expresamente en la calle Ricaurte, intersección noventa de esta ciudad de
Quevedo, y comprendido dentro de los siguientes linderos y dimensiones: norte, casa de Zoila
Villegas, hoy de sus herederos; por el sur, casa de Leticia González, hoy Susi Saltos; este, calle
Ricaurte; y, por el oeste, casa de Julián Arévalo, hoy de sus herederos; que el terreno tiene un área
de más o menos 184 metros cuadrados, conforme lo justifica con escritura pública que acompaña.
Que la señora Martha Elizabeth Ruiz Zambrano, desde el mes de agosto del 2006, en forma
indebida y en contra de su voluntad, se ha apropiado del predio antes descrito y que es de su
propiedad e incluso expulsándolo del hogar y propiedad, por lo que, fundamentado en los artículos
933, 934, 937, 939, 948, 951 y 954 del Código Civil, la demanda en trámite en juicio ordinario a
Marta Elizabeth Ruiz Zambrano, para que en sentencia sea condenada a restituirle el bien inmueble
de su propiedad mediante esta acción reivindicatoria, con más los daños y perjuicios causados por la
ocupación indebida del inmueble como es el usufructo, costas y honorarios de su defensor. A fojas
siete se acepta la demanda a trámite ordenándose citarse a la demandada y que se inscriba la
demanda en el Registro de la Propiedad, diligencia que se aprecia haberse cumplido a fojas siete
vuelta como también el acto de citación a la demandada quien compareció de fojas diez a la once
impugnando la demanda por cuanto manifiesta la demandada que el actor es su ex conviviente, con
quien formó un hogar de hecho desde los primeros días del mes de mayo de 1984 hasta el 21 de
agosto del 2006, habiendo procreado a Ricardo Enrique de 20 años de edad y Juan Fernando
Montufar Ruiz de 14 años de edad, como lo justifica con las partidas de nacimiento que corren a
fojas ocho y nueve. Que asimismo adquirieron el inmueble que se pretende la reivindicación, es decir
que pertenece a la sociedad de hecho formada con el accionante. Que el actor fue expulsado del
solar y casa materia de este juicio por orden de la señora Comisaría Primera de la Mujer y la Familia,
porque se constituía en un riesgo para la seguridad física y psíquica de ella, proponiendo las
siguientes excepciones: negativa simple de los fundamentos de hecho y de derecho, alega
impugnación y rechazo de los fundamentos de hecho y derecho por ser ilegal, contradictorio e
inconstitucional, nulidad de todo lo actuado por que la demanda no reúne los requisitos de ley, que el
actor propone una demanda sin derecho alguno, falta de causa y objeto lícito de la demanda,
improcedencia de la acción, falta de legitimación del actor para proponer la falsa demanda e

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO - Página 1


LEXIS FINDER - www.lexis.com.ec
improcedencia de la demanda por cuanto en ningún momento lo ha expulsado del hogar y propiedad
al accionante. A fojas doce vuelta se calificaron de claras las excepciones y por ende se les admitió a
trámite y se convocó a las partes a junta de conciliación, diligencia que la encontramos a fojas trece
a la que comparecieron el señor abogado Fausto Jami Guanolisa por los derechos del actor y la
demandada con su patrocinador en la que no hubo avenimiento entre las partes. A fojas quince el
actor Ricardo Montufar Segovia ratificó las gestiones realizadas en la junta de conciliación por el
abogado Fausto Jami Guanolisa. A fojas quince vuelta se ordenó recibirse la causa a prueba por el
término de ley correspondiente, concluido el mismo encontrándose la causa en estado de resolverse
y para hacerlo se considera: PRIMERO: Se ha dado el trámite concerniente a este tipo de demanda
sin que se haya omitido solemnidad sustancial alguna que pueda influir en la decisión por lo que se
declara su validez. SEGUNDO: El derecho del actor para proponer esta acción lo justifica con los
fundamentos de su demanda y documentos acompañado a la misma, esto es con el documento que
corre de fojas cuatro a las cinco justifica la titularidad del derecho sobre el inmueble que se está
demandando en este juicio. TERCERO: Corresponde al actor justificar los fundamentos de su
demanda y al demandado los de la contestación, así nos dice el artículo 113 del Código de
Procedimiento Civil. Al efecto, el actor solicita a fojas veinte y siete que se reproduzca todo lo que le
beneficie en especial su demanda y documentos acompañados a ella, y la exposición hecha en la
junta de conciliación; a fojas veinte y cinco vuelta se aclaró el intríngulis, es decir que se aclaró el
hecho de que en la junta de conciliación se ordenó prueba y en la providencia del 6 de febrero del
2007, a las 16h55, se ordenó también abrirse la prueba. El actor en el escrito de fojas veinte y siete
solicita que se reproduzca todo lo solicitado en el acápite primero y que se incorpore la partida de
matrimonio, como las partidas de nacimiento a la que se hacen referencia en el escrito de fecha 6 de
febrero del 2007 a las 14h25 como la copia de la sentencia de divorcio y que se oficie al Juzgado
Cuarto de lo Civil y que se lleve a efecto una inspección judicial. De fojas ciento cuarenta y ocho a la
ciento cincuenta los testimonios de Carlos Humberto Hurtado Villegas, Carlos Angel Naranjo
Peñalosa, Pedro Jacinto Estrada Bermeo, Mauro Odilíon Ortega Ayala y Pedro Antonio Alvarado
Briones. A fojas ciento cincuenta y uno el actor impugna la prueba presentada por la parte
demandada en especial la testimonial y que se obtengan las copias auténticas del juicio de
prescripción 347-98, y que se oficie al Registrador de la Propiedad de este Cantón y que se
incorpore una escritura que acompaña que corre de fojas ciento cincuenta y dos a la ciento cincuenta
y cuatro, la misma que se encuentra mal ubicada en la foliación. A fojas ciento cincuenta y siete el
actor solicita que se reproduzca la documentación que corre a fojas dieciséis a la veinte y dos. A
fojas ciento sesenta y dos el acta de inspección judicial realizada en el inmueble materia de este
juicio de la que se desprende que la demandada se encuentra en posesión de dicho solar y casa y
que incluso mantiene una tienda de abarrotes. De fojas ciento sesenta y ocho a la doscientos ocho
las copias certificadas del expediente no. 211-95 de divorcio; y, de fojas doscientos nueve a la
doscientos sesenta y uno el expediente de alimentos no. 256-94 seguido en el Tribunal de Menores
de Quevedo. De fojas doscientos setenta y seis a la trescientos dos copias certificadas del
expediente de prescripción extraordinaria adquisitiva de dominio que siguió Ricardo Enrique
Montúfar Segovia. Por su parte la demandada dentro de la prueba presenta a fojas veinte y nueve a
la ciento cuarenta y tres copias certificadas del expediente seguido en la Comisaría Primera de la
Mujer y la Familia en contra de Ricardo Enrique Montúfar Segovia por agresiones psicológicas a la
demandada en este juicio Martha Elizabeth Ruiz Zambrano; a fojas ciento cuarenta y cuatro solicita
que se reproduzca los fundamentos de hecho y de derecho expuesto en la contestación de su
demanda y rechaza e impugna la prueba de la contra parte y que se repregunte a los testigos del
actor. A fojas doscientos sesenta y nueve el acta de confesión judicial del demandante. CUARTO: La
acción de dominio, que según el artículo 933 del Código Civil "es la que tiene el dueño de una cosa
singular, de que no está en posesión para que el poseedor de ella sea condenado a restituírsela".
Como también de acuerdo con el artículo 936 del ibídem, una cuota determinada por indiviso de una
cosa singular. De las disposiciones invocadas se desprende que para que opere la reivindicación es
necesario: 1. Que se trate de una cosa singular (sic) cuota determinada de una cosa singular; 2. Que
el actor o demandado sean titular del derecho de dominio de la cosa cuya reivindicación pretende; 3.
Que exista plena identidad entre la cosa pretendida por actor (sic) y la poseída por el demandado; y,
4. Que el demandado tenga posesión material. QUINTO: De las pruebas aportadas se aprecia en la
especie se hayan cumplidos todos y cada uno de los elementos básicos precedentes. En efecto: a)
pueden ser objetos de (sic) reivindicatoria las cosas singulares raíces y deudas, es decir las (sic) que

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO - Página 2


LEXIS FINDER - www.lexis.com.ec
pueden determinarse físicamente. En la presente c (sic) inmueble objeto de la reivindicación es una
cosa física perfectamente determinada. b) el dominio que se llama también propiedad (sic) artículo
599 del Código Civil "es el derecho real en una cosa, c (sic) para gozar y disponer de ella conforme a
las disposiciones de (sic) respetando el derecho ajeno, sea individual y social". De acue (sic) las
reglas legales mencionadas, el derecho real de dominio o pr (sic) nace de un modo, pero para que
exista el modo se requiere (sic) traslaticio de dominio. Esto es que para que se perfeccione el (sic)
de dominio son indispensables un título y un modo. Son concurrencia de estos dos elementos
esenciales los que confi (sic) derecho de dominio o propiedad. SEXTO: El actor ha demostrado que
es el titular de dominio pleno del inmueble cuya reivin (sic) pretende con el título que obra de fojas
cuatro a las cinco, mien (sic) la demandada alega que el bien que se pretende la reivin (sic)
pertenece a la sociedad de hecho que tuvo formada con el actor Ricardo Enrique Montúfar Segovia
con quien dice haber procreado dos hijos que responden a los nombres de Ricardo Enrique y Juan
Fernando Montúfar Ruíz, excepción que se la descarta por cuanto no pudo existir sociedad de hecho
cuando el demandante a pro (sic) que se encontraba casado legalmente con Jacoba Nelly Alcívar
(sic) desde el día de 20 noviembre de 1978 hasta el día 14 de abril (sic) en que el señor Juez Cuarto
de lo Civil dictó sentencia de div (sic) demanda de divorcio a la que se hace referencia fue
presentada (sic) de mayo de 1995, y, la demanda de prescripción en donde (sic) título de dominio del
bien inmueble materia de este (sic) fue presentada en tiempo en que se encontraba casado con Ja
(sic) Alcívar Romero, es decir que el 24 agosto 1998 (sic) manifestó que estaba en posesión de ese
inmueble por más de (sic). Si bien es verdad que se reconoce la unión estable y mono (sic) de un
hombre y una mujer, libres de vínculo matrimonial con otra persona, que formen un hogar de hecho,
por el lapso y bajo las condiciones y circunstancias que señale la ley, generará los mismos derechos
y obligaciones que tienen las familias constituidas mediante matrimonio, inclusive en lo relativo a la
presunción legal de paternidad, y a la sociedad conyugal, y si nos dice el artículo 38 de la
Constitución Política del Estado, en concordancia con el artículo 222 del Código Civil; es decir, que
de la disposición constitucional y legal a las que se ha hecho referencia, jamás pudo existir sociedad
de hecho cuando ha existido sociedad de derecho; las excepciones dos, tres, cinco y siete, así
mismo se las desecha por cuanto el actor ha probado categóricamente sus fundamentos de hecho y
de derecho propuesto en su demanda; la excepción cuarta de nulidad de todo lo actuado igualmente
no se la considera por cuanto la demanda reúne todos los requisitos de ley contemplados en el
artículo 67 del Código de Procedimiento Civil, y no existe omisión de solemnidad sustancial alguna
que pueda o vaya influir en la decisión; con relación a la excepción sexta de falta de causa y objeto
lícito de la demanda, de igual forma se la desecha porque la causa y objeto está plenamente
determinada en la demanda; las excepciones ocho y nueve de igual forma se las desecha por las
razones expuestas en líneas anteriores. Por lo mismo y sin entrar en más consideraciones el suscrito
Juez Tercero de lo Civil de Los Ríos, ADMINISTRANDO JUSTICIA EN NOMBRE DE LA
REPUBLICA Y POR AUTORIDAD DE LA LEY, declara con lugar la demanda, consecuentemente
que la demandada Martha Elizabeth Ruiz Zambrano, entregue el inmueble que indebidamente está
posesionado, al demandante Ricardo Enrique Montúfar Segovia, en el término de treinta días, que
comenzarán a correr a partir de la ejecutoria de esta sentencia, bajo prevenciones de ley. Se cancela
la inscripción de la demanda dictada en el auto inicial y que se encuentra inscrita bajo el no. 63 en el
registro de demanda y anotadas al No. 4734 del Libro Repertorio en la fecha noviembre 27 del 2006,
para cuyo efecto y ejecutoriada esta sentencia el actuario del Despacho deberá de notificar al señor
Registrador de la Propiedad de este Cantón para que tome nota de lo ordenado. Sin costas y sin
honorarios. Léase y notifíquese.

f) Ab. Enrique Briones Sotomayor. Juez

SEGUNDA INSTANCIA

CORTE PROVINCIAL DE JUSTICIA. SALA CIVIL, MERCANTIL, LABORAL Y MATERIAS


RESIDUALES DE LOS RIOS. Babahoyo, 27 de agosto del 2009. Las 10h50.

VISTOS: De la sentencia que expidió el Juez Tercero de lo Civil, en Quevedo, interpuso recurso de
apelación la accionada Martha Elizabeth Ruiz Zambrano, por serle desfavorable, recurso al cual se
adhirió el accionante Ricardo Enrique Montúfar Segovia, dentro del juicio, ordinario (cuaderno del

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO - Página 3


LEXIS FINDER - www.lexis.com.ec
primer nivel no. 407-2006) que propuso este. Elevados los autos corresponde esta Sala decidir sobre
los recursos, dado que es competente por la materia y por la certificación actuarial que obra en este
cuaderno procesal, en razón de lo previsto en el numeral 1 del artículo 280 del Código Orgánico de
la Función Judicial concordante con el artículo 58 del Código de Procedimiento Civil. Para tal efecto
se emiten los siguientes considerandos: PRIMERO: Revisados los autos se aprecia que el Juez a
quo cuidó del debido proceso por lo que los justiciables ejercieron con amplitud su legítima defensa,
como así igualmente cuidó esta Sala en este nivel, sin que, por otra parte, aparezca omisión de
solemnidad sustancial alguna ni que se haya viciado el trámite del pleito, por lo que se declara la
validez de lo actuado. SEGUNDO: Pretensión. A. En su libelo inicial de fojas 6 y vuelta, Ricardo
Enrique Montúfar Segovia de estado civil divorciado, dijo que era propietario del inmueble compuesto
de solar y construcción sito (sic) en el sector el Malecón de la parroquia y cantón Quevedo,
expresamente en la calle Ricaurte, intersección novena de la ciudad de Quevedo, comprendido
dentro de los linderos y dimensiones que puntualizo, un área de más o menos 184 m2, como lo
justifico con el testimonio notarial respectivo, que acompaño y que obra de fojas 4 a 5. Dijo además
que desde el mes de agosto del 2006, Martha Elizabeth Ruiz Zambrano en forma indebida y contra
su voluntad, se apropió del predio de su propiedad mencionado, inclusive expulsándolos de su hogar
y propiedad por lo que reclamo la restitución de ese bien inmueble, mediante esta acción
reivindicatoria, con más los daños y perjuicios causados por la ocupación indebida del inmueble
como es el usufructo costas y honorarios de su defensor. B. Al comparecer a juicio la accionada dijo
ser soltera, mayor de edad, de ocupación ejecutiva de hogar y comerciante e impugno los
fundamentos de hecho y de derecho de la reclamación, pues el actor fue su conviviente con quien se
unió y formó un hogar de hecho desde los primeros días del mes de mayo de 1984 hasta el 21 de
agosto del 2006; y que fruto de esa relación procrearon dos hijos: Ricardo Enrique, de 20 años de
edad, y Juan Fernando Montúfar Ruiz de 14 años de edad, y asimismo se adquirió el inmueble a que
se refiere el actor y por ello el inmueble pertenece al régimen de la sociedad de hecho que
constituyeron y sujeto a la liquidación de esa sociedad al amparo de las disposiciones sustantivas
civiles que invocó; y que al actor cambia artificialmente el estado de las cosas y engaña a la
administración de justicia de acuerdo con el artículo 296 del Código Penal. Además, dijo la
demandada, que el 21 de agosto del 2006 a las 11h45, mediante providencia, inicial, la Comisaría
Primera de la Mujer y Familia de Quevedo, ordenó la salida del actor Ricardo Enrique Montúfar
Segovia de la vivienda (que es la que demanda el actor), que venía compartiendo con ella, por
implicar un riesgo para la seguridad física y psíquica de la familia, etc., diligencia que fue ejecutada
por la Policía, por lo que dicha medida de amparo la tomó la Comisaría de acuerdo con el artículo 13
no. 2 de la Ley contra la Violencia de la Mujer y la Familia, y por tanto no lo expulsó del hogar y
propiedad como sostiene en su demanda, y por ese motivo se quedó ella en el interior del bien raíz
materia de la acción en compañía de sus hijos comunes. Consecuentemente, dedujo las nueve
excepciones que constan insertas en su escrito de fojas 10 a 11; C. Entonces, en esos términos se
trabó la litis, razón por la cual las partes contendientes quedaron sometidas, para efectos ejercer sus
medios de pruebas, a lo prescrito en las partes pertinentes de las normas procesales civiles de que
trata la Sección 7.a del Título Primero del Libro Segundo que trata del Enjuiciamiento Civil; D.
Convocados los litigantes a junta de conciliación no pudo llegarse a un avenimiento y por ello,
recibida la causa prueba se pidieron, ordenaron y practicaron los actos y diligencias que requirieron
los litigantes, y concluido dicho término se emitió el fallo materia de la impugnación. En este nivel,
igualmente, dentro de la sustanciación debida y al haberse pedido pruebas también estas se
evacuaron, conforme a los requerimientos de las partes procesales. TERCERO: Análisis y
valoración. 1. Evidentemente, Ricardo Enrique Montúfar Segovia en su pretensión accionó la
reivindicación del bien inmueble de su propiedad, que la dirigió en contra de su actual poseedora, la
demandada, para que en sentencia se le restituya dicho bien, de conformidad con el instrumento
protocolizado notarialmente, que corre de fojas 4 a 5, aparece que con fecha 23 de marzo de 1999
se inscribió en el Registro de la Propiedad de Que-vedo, bajo el número 511 en el Registro de
Propiedades y anotada el número 966 del Libro Repertorio, la protocolización de la sentencia
mediante la cual el Juez Tercero de lo Civil en Quevedo otorgó la prescripción extraordinaria
adquisitiva de dominio a favor de quien es el actor, respecto del bien inmueble materia de la litis,
sentencia que se expidió el 19 de febrero de ese mismo año, 2. A fojas 16 aparece el instrumento
público que acredita que, en Quevedo, el 21 de abril de 1998, se inscribió la sentencia que expidió el
Juez Cuarto de lo Civil en Quevedo, que declaró disuelto por sentencia de divorcio el matrimonio o

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO - Página 4


LEXIS FINDER - www.lexis.com.ec
contrato matrimonial que celebró quien es el actor en este juicio con Jacoba Nelly Alcívar Romero,
por lo que el referido bien inmueble no ingresó al haber de esa sociedad conyugal que existió por
ese matrimonio pero que si hubo en el descendientes comunes, como está justificado con los
instrumentos públicos de fojas 17 a 19; 3. De fojas 29 a 143 aparece incorporado a los autos una
abundante documentación que se actuó dentro del expediente que se siguió en la Comisaría Primera
de la Mujer y la Familia del Cantón Quevedo en contra de Ricardo Enrique Montufar Segovia (actor
en este juicio) por agresión psicológica a Martha Elizabeth Ruiz Zambrano (demandada en este
litigio) expediente bajo el número D-l 171-6 que se inició precisamente a base de la denuncia que
presentó el 21 de agosto del 2006 Martha Elizabeth Ruiz Zambrano con ce. no. 17116806-0, quien
dijo, entre otros particulares tener de 31 años de edad, soltera, domiciliada en la calle Ricaurte y
Novena y Décima de la ciudad de Quevedo; y que el día sábado 19 de agosto del 2006, a las 09h00
encontrándose en la limpieza en la parte de su pequeño negocio de vivieres ubicado en la dirección
antes indicada (bien raíz que reclama el actor) cuando su ex conviviente Ricardo Enrique Montúfar
Segovia (actor en este juicio) en compañía de una persona pretendía coger luz de su medidor a lo
que se opuso la denunciante, razón por la cual su exconviviente soezmente le dijo "hija de puta esta
es mi casa y puedo hacer lo que me dé la gana siempre te boto como perra y no te largas, chucha de
tu madre" y que los hombres que la acompañaban lo incitaban hacer lo que éste quería. Pero la
denunciante dijo que este litigio lleva hace seis años atrás por lo que la convivencia es insostenible
por su mal forma de vivir toda vez que se exconviviente la agredía verbal y físicamente, teniendo que
recurrir en otras ocasiones a esa misma Comisaría a denunciar hechos similares como la que consta
en la denuncia no. 1998.01. de la que él jamás acató la Ley de Amparo que le brindaron a su favor y
sin embargo la acosaba e incluso propició un incendio años atrás con la finalidad de destruir la
mercadería que existía en la pequeña tienda; y que hasta se olvidó de sus hijos habidos con él y la
denunciante dejó constancia de otros particulares que recibió con su conviviente, todo con el afán de
que ella salga de la casa cuando esta también es suya y es patrimonio de sus hijos, estos que
también sufrieron las agresiones de su padre y por ello pidió nuevamente el amparo de la Comisaría,
es la que, en providencia que dictó en esa misma fecha, 21 de agosto del 2006, extendió boleta de
auxilio a la denunciante Martha Elizabeth Ruiz Zambrano, como prohibió a Ricardo Enrique Montufar
Segovia se acerque al lugar de trabajo estudio y domicilio de Martha Elizabeth Ruiz Zambrano
prohibiéndole o restringiéndole también el acceso a ella, sea por sí mismo o a través de terceras
personas, inclusive prohibiéndole el retiro de enseres de uso familiar y por último, ordenando la
salida de él de la vivienda que ha venido compartiendo con la denunciante Ruiz Zambrano por
implicar un riesgo para la seguridad física psíquica y la libertad sexual de la familia, siendo esta
última la que se cumplió con la salida de Montufar Segovia según el parte de la Policía que se elevó
al Jefe del Servicio Rural Los Ríos no. 8 Quevedo (fojas 39); y en general, dentro de ese expediente
se practicaron todos y cada uno de los medios probatorios que solicitaron los ex convivientes: 4. Se
encuentra debidamente probado los hijos comunes procreados entre actor y demandada, inclusive al
rendir el actor la confesión judicial que le requirió la demandada y en la misma diligencia también
reconoció que fue obligado a salir del interior del domicilio (inmueble que reclama) a través de la
Comisaría Primera de la Mujer y la Familia por constituir un riesgo para la seguridad de quien es la
accionada; 5. A pesar de no reconocer el actor que el bien inmueble que reclamó fue también dentro
de la convivencia del actor con la accionada, esa convivencia realmente arranca desde el año 1984,
aunque a esa fecha estuvo todavía casado, insistió en que el inmueble que reclama lo adquirió
desde el año 1972 porque su señora madre le hizo entrega de la obra y que después lo legalizó en el
año de 1999, y se inscribió el 23 de marzo, alegación que esta Sala evidentemente no acepta dado
de lo que obra en los recaudos procesales y teniéndose en cuenta que el mayor de los hijos
procreados entre los dos tiene más de veinte años de edad y que por otra parte, no se puede negar
la realidad de que, como ocurre con frecuencia en el país, bien puede un hombre estar casado con
otra persona pero que realmente en forma esporádica temporal o circunstancial vive con otra mujer
en la que ha procreado descendencia, realidad que no se puede desconocer, por lo que cabe que
todo administrador u operador de justicia repare y remedie el problema social que deviene de casos
como el presente en que los afectados son realmente en primer lugar los hijos y que, en el caso,
estos viven conjuntamente con su progenitora, demostrando cariño para ella y bastante
distanciamiento con el padre, como pudo observar esta Sala al practicar la inspección judicial, en los
términos que constan del acta de fojas 148 a 153, diligencia en la que fue escuchado u oído el hijo
mayor llamado R E M R con ce. no. xx quien dijo tener a esa fecha 22 años de edad, estudiante,

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO - Página 5


LEXIS FINDER - www.lexis.com.ec
soltero, quien proporcionó a la Sala información sobre la convivencia de sus padres y los problemas
existentes desde entonces cuando él tenía aproximadamente 5 años de edad, destacándose que la
forma como vivía junto con sus padres, que había problemas pero que con el esfuerzo de su mamá
iban comprando poco a poco cosas para el hogar y su padre siempre llagaba a la casa borracho y le
pegaba a su madre, y que inclusive una vez su padre la botó a su madre, pero luego volvieron a
reconciliarse y que inclusive pusieron un negocio en ese mismo domicilio, y que quien más invirtió en
ese negocio fue su madre y que recuerda que su padre vivía arriba dentro del espacio físico en que
vivían y que los hijos con mamá vivían abajo y que a veces el papá bajaba a escondidas y cogía el
dinero recaudado materia del negocio; que a su mamá siempre la ha considerado como una persona
tranquila pero que su papá siempre fue problemático y que inclusive puedo decir que se trata de una
"mala persona". En esa misma diligencia se receptó las declaraciones de los testigos, así como se
escuchó en forma previa versiones de vecinos colindantes al inmueble materia de la litis así como se
realizó la verificación física interior y exterior del inmueble lo que se cumplió en asocio con el perito
interviniente; y de todo ello aparece ampliamente relatado en el acta respectiva, que sirve de
elementos de convicción, suficientes para tomar la decisión que se impone; 6. Por otra parte en lo
que concierne al reconocimiento del solar y de la construcción existente a él, (sic) tanto en lo exterior
como en el interior más detalles constan reseñados en el informe pericial de fojas 161 a 162 al que
se le adjuntó un croquis y seis fotografías que se adjuntó de fojas 157 a 160; 7. La prueba testifical
pedida y practicada a favor de la parte demandada no ha logrado desvirtuar la practicada de la
contraparte y las observaciones y elementos de juicios que recabó la Sala sobre la realidad social y
humana del cuadro familiar existente. Por el análisis, reflexiones y valoración traducidos y que se
exponen en los considerandos precedentes esta Sala Civil de la Corte Provincial de Justicia de Los
Ríos, ADMINISTRANDO JUSTICIA EN NOMBRE DE LA REPUBLICA Y POR AUTORIDAD DE LA
LEY, revoca la sentencia venida en grado y, consecuentemente, declara sin lugar la acción
pretendida por el demandante. Dado que se observa adicional-mente una conducta procesal
reiterada del demandado en tergiversar o trastocar la realidad de los hechos, se dispone que
sufrague las costas procesales que se han causado, en las dos instancias de este litigio incluyendo
el honorario profesional de la abogada defensora de la demandada, que se lo regula de conformidad
a lo que prescribe la Ley de Federación Nacional de Abogados del Ecuador, debiéndose retener y
consignar el porcentaje legal que pertenece al Colegio de Abogados de Los Ríos. Publíquese y
notifíquese.

f) Dra. Dalia Rodríguez Arbaiza. Ab. Marco Arguello Bermeo. Ab. Miguel Cardona Moran. Jueces
Provinciales.

RECURSO DE CASACION

Jueza Ponente: Doctora Paulina Aguirre Suárez.

CORTE NACIONAL DE JUSTICIA. SALA DE LO CIVIL Y MERCANTIL. Quito a, 03 de septiembre


del 2012, a las 09h40.

VISTOS: (1061-2009) En virtud de que la Jueza y Jueces abajo firmantes, hemos sido debidamente
designados por el Consejo de la Judicatura de Transición, mediante Resolución no. 004-2012 de 25
de enero del 2012; y, el Pleno de la Corte Nacional de Justicia, mediante Resolución de 30 de enero
del 2012, nos designó para integrar esta Sala Especializada; y conforme el acta de sorteo que consta
en el expediente, somos competentes para reconocer la presente causa. Antecedentes: En el juicio
ordinario que por reivindicación sigue Ricardo Enrique Montúfar Segovia contra Martha Elizabeth
Ruiz Zambrano; el actor interpone recurso de casación respecto de la sentencia dictada por la Sala
de lo Civil, Mercantil, Laboral y Materiales Residuales de la Corte Provincial de Justicia de Los Ríos,
el 27 de agosto del 2009, a las 10h50, que revoca el fallo del juez de primer nivel, y en su lugar
desecha la demanda. El recurso se encuentra en estado de resolver, para el efecto, la Sala hace las
siguientes consideraciones: PRIMERO: Competencia: Este Tribunal de la Sala es competente para
conocer del recurso de casación en virtud de lo dispuesto en el artículo 184 numeral 1 de la
Constitución de la República del Ecuador, el artículo 190.1 del Código Orgánico de la Función
Judicial y el artículo 1 de la Ley de Casación; por cuanto el recurso de casación ha sido calificado y

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO - Página 6


LEXIS FINDER - www.lexis.com.ec
por ende, admitido a trámite por la Sala de lo Civil, Mercantil y Familia de la Corte Nacional de
Justicia, mediante auto de 6 de abril del 2010; las 11h20, por cumplir con los requisitos de
procedencia, oportunidad, legitimación y formalidades acorde a lo dispuesto en el artículo 6 de la Ley
de Casación; y, por corresponder a este Tribunal la resolución del recurso de casación, en virtud del
sorteo realizado acorde a lo previsto en el Art. 183, inciso quinto del Código Orgánico de la Función
Judicial, conforme obra de la razón precedente. SEGUNDO: Fundamentos del recurso de casación:
2.1. El casacionista fundamenta su recurso en la causal primera del artículo 3 de la Ley de Casación
por falta de aplicación del artículo 66 numeral 26, en concordancia con el artículo 321 de la
Constitución de la República; los artículos 76 letra 1) y 82 de la misma Constitución; de los artículos
25 y 138 del Código Orgánico de la Función Judicial; y de los artículos 222, 599, 715, 933, 937 y 939
del Código Civil. 2.2. Al sustentar esta causal argumenta lo siguiente: Que sea desconocido su
derecho de libertad a la propiedad consagrado en el artículo 66 numeral 26 de la Constitución, pues
dice que en todo el proceso ha demostrado que se encuentra incurso en lo previsto por el artículo
599 del Código Civil y que no goza de la posesión del inmueble, pues es la demandada quien
mantiene tal posesión, negándose su derecho de propiedad conforme los artículos 933, 937 y 939
del Código Civil. Que existe falta de la motivación prescrita en el artículo 76 numeral 7 letra 1) de la
Constitución, pues los Jueces del Tribunal ad quem han llegado a una reflexión arbitraria conjetural
sin fundamento legal alguno, siendo la motivación una exigencia constitucional de obligatorio
cumplimiento y no que ha sido observado al no invocar normas legales o principios jurídicos
inexistentes en la sentencia. Que esta inobservancia de normas constitucionales y legales ha
generado que se viole la seguridad jurídica prevista en el artículo 82 de la Constitución. Además
aduce que lo dispuesto en el artículo 222 del Código Civil en nada se contrapone a lo establecido en
el artículo 68 de la Constitución, pero tácitamente la jueza y jueces del Tribunal ad quem crean una
sociedad de bienes mediante análisis subjetivos y contrarios a disposiciones expresas de la ley para
rechazar su demanda. Finalmente, indica que de la lectura de la sentencia se observa que no se ha
cumplido con lo previsto en el artículo 138 del Código Orgánico de la Función Judicial, al no ser
utilizada la fórmula contemplada en ese artículo. TERCERO: Motivación: Conforme el mandato
contenido en el artículo 76, numeral 7 letra 1) de la Constitución de la República, las resoluciones de
los poderes públicos deberán ser motivadas. No habrá motivación si en la resolución no se enuncian
las normas o principios jurídicos en que se funda o no se explica la pertinencia de su aplicación a los
antecedentes de hecho establecidos en el proceso. La falta de motivación y por lo mismo de
aplicación de la norma constitucional en referencia ocasiona la nulidad de la resolución. Cumpliendo
con la obligación constitucional de motivación antes señalada, este Tribunal de la Sala fundamenta
su resolución en el análisis que se expresa a continuación: 3.1. La causal primera del artículo 3 de la
Ley de Casación procede por: "Aplicación indebida, falta de aplicación o errónea interpretación de
normas de derecho, incluyendo los precedentes jurisprudenciales obligatorios, en la sentencia o
auto, que hayan sido determinantes de su parte dispositiva.". El vicio que la causal primera imputa al
fallo es el de violación directa de la norma sustantiva, incluyendo los precedentes jurisprudenciales
obligatorios, porque no se ha dado la correcta subsunción del hecho en la norma; es decir no se ha
producido el enlace lógico de la situación particular que se juzga con la previsión hipotética,
abstracta y genérica realizada de antemano por el legislador; yerro que se puede producir por tres
diferentes tipos de infracción, que son: por la aplicación indebida, falta de aplicación o errónea
interpretación de las normas de derecho; siempre que estos vicios sean determinantes de la parte
dispositiva de la sentencia o auto, lo que el recurrente debe fundamentar debidamente. La aplicación
indebida ocurre cuando la norma ha sido entendida rectamente en su alcance y significado; más se
la ha utilizado para un caso que no es el que ella contempla. La falta de aplicación se manifiesta si el
juzgador yerra ignorando la norma en el fallo, la cual efectivamente sí es aplicable al caso que se
está juzgando. La errónea interpretación tiene lugar cuando, siendo la norma cuya transgresión se
señala la pertinente para el caso, el juzgador le ha dado un sentido y alcance que no tiene, que es
contrario al espíritu de la Ley. 3.2. Al haber acusado la violación de normas constitucionales, dado el
carácter supremo que tienen tales disposiciones, según lo previsto en los artículos 324 y 325 de la
Constitución, debe analizarse en primer término la violación de tales preceptos. Como queda
señalado, el recurrente dice que la sentencia violenta su derecho a la propiedad consagrado en el
artículo 66, numeral 26 del actual Constitución. La acción reivindicatoria contemplada en el artículo
933 del Código Civil constituye precisamente un medio de defensa del derecho a la propiedad
privada, ya que brinda la oportunidad al titular del derecho de dominio de un bien inmueble a

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO - Página 7


LEXIS FINDER - www.lexis.com.ec
recuperar la posesión del mismo, cuanto éste se halle ocupado en posesión por otra persona; no
obstante, la procedencia de la acción reivindicatoria requiere que el demandante justifique una serie
de requisitos contemplados en la Ley, de tal manera que si el juzgador desecha la demanda por
razones legalmente justificadas, tal pronunciamiento judicial no puede ser interpretado como
violatoria al derecho a la propiedad privada consagrado constitucional-mente. El recurrente acusa
también la violación, por falta de aplicación, del artículo 76, numeral 7, letra 1) de la Constitución,
expresando que la sentencia del Tribunal ad quem no se hallaba motivada en normas legales o
principios jurídicos. Al respecto este Tribunal estima que efectivamente el fallo de la Sala de lo Civil,
Mercantil, Laboral y Material Residuales de la Corte Provincial de Justicia de Los Ríos, contiene
análisis de las pruebas evacuadas en el proceso, en especial lo relativo a las denuncias formuladas
por la demandada en este juicio, Martha Elizabeth Ruiz Zambrano, ante la Comisaría Primera de la
Mujer y la Familia del cantón Quevedo, así como al "estado de convivencia" y las situaciones
familiares entre el actor y la demandada, para llegar a la conclusión de que acepta el recurso de
apelación presentado por la demandada y revocar el fallo del Juez de primer nivel, desechando la
demanda, pero sin fundamentar su resolución en alguna norma jurídica o en un principio jurídico del
derecho que justifique tal decisión. El autor Fernando de la Rúa, en su obra "Teoría General del
Proceso", (Editorial de Palma, Buenos Aires, 1991, p. 146), acerca de la motivación señala el
siguiente criterio: "La motivación de la sentencia constituye un elemento intelectual, de contenido
crítico, valorativo ilógico, que consiste en el conjunto de razonamientos de hecho y de derecho en
que el juez apoya su decisión. Su exigencia es una garantía de justicia a la cual se le ha reconocido
jerarquía constitucional, como derivación del principio de la inviolabilidad de la defensa en juicio. Por
la motivación, además, se asegura la publicidad de la conducta de los jueces y el control popular
sobre el desempeño de sus funciones, esencial en un régimen republicano. Por ella también podrán
los interesados conocer las razones que justifican el fallo y decidir su aceptación o impugnación. El
tribunal que deba conocer en el eventual recurso reconocerá de la motivación los principales
elementos para ejercer su control... La motivación de la sentencia es la fuente principal de control
sobre el modo de ejercer los jueces su poder jurisdiccional. Su finalidad es suministrar garantía y
excluir lo arbitrario. La sentencia, enseña Florian, no ha de ser un acto de fe, sino un acto de
convicción razonada. Por ello, la libertad de convencimiento no puede degenerar en un arbitrio
ilimitado, y en la estimación de la prueba no puede imperar la anarquía, toda vez que la ley no
autoriza jamás juicios caprichosos. Por eso, agrega Vélez Mariconde, un juez técnico no puede
proceder como un jurado popular para limitarse a dar mero testimonio de su conciencia. La certeza
moral debe derivar de los hechos examinados, y no sólo de elementos psicológicos internos del juez,
como bien afirma Manzini. Precisamente por eso se impone la obligación de motivar la sentencia.".
Es tal la trascendencia de la motivación como requisito de las resoluciones que dicten las
autoridades públicas, entre ellas las juezas y jueces que ejercen jurisdicción, que su omisión acarrea
la nulidad de la sentencia, según lo establece el propio texto del artículo 76, numeral 7, letra 1) de la
Constitución cuando dispone: "Las resoluciones de los poderes públicos deberán ser motivadas. No
habrá motivación si en la resolución no se enuncian las normas o principios jurídicos en que se funda
y no se explica la pertinencia de su aplicación a los antecedentes de hecho. Los actos
administrativos, resoluciones o fallos que no se encuentren debidamente motivados se considerarán
nulos. Las servidoras o servidores responsables serán sancionados.". En tal virtud, este Tribunal
estima que procede casar la sentencia objeto del recurso, y dictar una sentencia de mérito, conforme
la norma constitucional antes citada y a lo establecido en el inciso segundo del artículo 426 de la
Constitución, que establece la obligación de las juezas y jueces de aplicar directamente las normas
constitucionales. CUARTO: 4.1. Como ya se expresó en el considerando Primero de esta sentencia,
este Tribunal es competente para conocer y resolver la presente causa. 4.2. No se han omitido ni
violentado solemnidades substanciales en la tramitación del presente proceso, y por tanto se lo
declara como válido. 4.3. A fojas seis del expediente de primer nivel, comparece Ricardo Enrique
Montúfar Segovia manifestando que es propietario de un inmueble compuesto de solar y
construcción situado en el sector El Malecón de la parroquia cantón Quevedo, en la calle Ricaurte e
intersección novena de esa ciudad, cuyos linderos, cabida y dimensiones deja señalados en el libelo
inicial de la demanda, conforme obra de la escritura pública celebrada ante Notario Cuarto del cantón
Quevedo del 23 de febrero de 1999, inscrita en el Registro de la Propiedad el 23 marzo del mismo
año, cuya copia certificada acompaña. Que en el mes de agosto del 2006, la señora Martha
Elizabeth Ruiz Zambra-no, en forma indebida y contra su voluntad, se ha apropiado del predio de su

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO - Página 8


LEXIS FINDER - www.lexis.com.ec
propiedad antes descrito, inclusive expulsándolo de su hogar y propiedad. Con tales antecedentes,
fundamentado en los artículos 933, 934, 937, 939, 948, 951 y 954 del Código Civil, demanda a la
prenombrada señora para que en sentencia sea condenada a la restitución del bien inmueble de su
propiedad, así como a los daños y perjuicios causados por la ocupación indebida. Citada la
demandada, comparece a juicio, dando contestación la demanda propone las siguientes
excepciones: 1. Negativa pura y simple de los fundamentos de hecho y de derecho de la demanda.
2. Que impugna y rechaza los fundamentos de hecho y derecho de la demanda. 3. Nulidad de todo
lo actuado por falta de requisitos de la demanda. 4. Improcedencia de la acción. 4.4. De acuerdo a lo
dispuesto en el artículo 113 del Código de Procedimiento Civil, es obligación del actor probar
afirmativamente los hechos propuestos en la demanda, y además, es obligación del demandado,
probar su negativa si contiene afirmación explícita o implícita sobre el hecho, derecho o calidad de la
cosa que se litiga. En la presente causa, se han solicitado y actuado las pruebas documentales,
testimoniales, de inspecciones judiciales y peritaje que obran de primera y segunda instancias, que
serán consideradas a continuación. 4.5. De conformidad con lo previsto en los artículos 933, 934,
937, 939 del Código Civil, son elementos y requisitos para que proceda la acción de reivindicación:
1) Se pueden reivindicar las cosas corporales, raíces o muebles; 2) La acción reivindicatoria
corresponde al que tiene la propiedad plena o nuda, absoluta o fiduciaria de la cosa; 3) La acción de
dominio debe dirigirse contra el actual poseedor; 4) El objeto de la reivindicación debe ser una cosa
singular; 5) Debe realizarse la determinación física del bien y constatarse la plena identidad del bien
que reivindica el actor y que posee el demandado. En lo que se refiere al requisito de la posesión, el
artículo 715 del Código Civil establece que "Posesión es la tenencia de una cosa determinada con
ánimo de señor o dueño"; y, ello conlleva determinar que la posesión es un hecho que requiere tres
elementos: a) La existencia de una cosa determinada; b) la tenencia, elemento material que pone a
la persona en contacto con la cosa; c) el ánimo de señor y dueño, que es el elemento tipificante de la
posesión, en cuanto es el ingrediente que convierte a la tenencia en posesión. Si el tenedor de la
cosa reconoce como propietario de la misma a otra persona, no es poseedor. En el presente caso
tenemos que se pretende reivindicar un bien raíz cuya propiedad corresponde al actor según se
desprende de la escritura pública de protocolización de la sentencia dictada por el Juez Tercero de lo
Civil de Los Ríos el 18 de febrero de 1999, las 15h30, que confiere la prescripción extraordinaria
adquisitiva de dominio a favor de Ricardo Enrique Montúfar Segovia, inscrita en el Registro de la
Propiedad del cantón Quevedo el 23 de marzo de 1999. Respecto del requisito de singularización del
bien inmueble objeto de la demanda, se encuentra que el mismo está debidamente identificado en
cuanto a su ubicación, cabida, linderos y dimensiones, conforme se desprende del acta de fojas 162
del expediente de primer nivel de la inspección judicial al inmueble, así como del Acta que consta de
fojas 148 a 151 del expediente de segundo nivel; y, del informe pericial de fojas 157 a 162 de esa
instancia. Respecto del requisito de posesión de la persona contra quien se dirige la demanda, la
accionada Martha Elizabeth Ruiz Zambrano, alega haber convivido en unión libre desde el año 1984,
con Ricardo Enrique Montúfar Segovia, el hoy actor, con quien ha procreado dos hijos, habitando el
inmueble objeto de la demanda de reivindicación como su hogar familiar; por tanto alega no ser
solamente poseedora del bien, sino su copropietaria, toda vez que el bien raíz forma parte de la
sociedad de bienes constituida en la unión de hecho; afirmación que es refutada por el actor, quien
manifiesta haber tenido el estado civil de casado con Jacoba Nelly Alcívar Romero, cuyo divorcio le
fue concedido por sentencia del Juez Cuarto de lo Civil de los Ríos de fecha 14 de abril de 1988.
Además, sobre este tema, gran parte de la prueba testimonial presentada por las partes, se
encamina demostrar la existencia de esa unión de hecho y de que el bien inmueble fue adquirido
durante la misma, y por otra parte, a desestimar esta aseveración. Al respecto este Tribunal
considera que la existencia o no de una unión de hecho entre Martha Elizabeth Ruiz Zambrano y
Ricardo Enrique Montúfar Segovia, así como de que el bien motivo de la acción reivindicatoria formó
o no parte de la sociedad de bienes originada en esa supuesta unión de hecho, no es materia de
esta causa, no puede ser discutido, analizado, probado y resuelto en este proceso cuyo objeto es
distinto, pues en esta causa se trata de resolver acerca de la acción reivindicatoria, que es el asunto
materia de la litis, según lo previsto en los artículos 274 y 276 del Código de Procedimiento Civil. En
la presente causa, de fojas 75 a 105 del cuaderno de segundo nivel consta copias certificadas de la
acción de disolución y liquidación de unión de hecho propuesta por Martha Elizabeth Ruiz Zambrano
contra Ricardo Enrique Montúfar Segovia, que se tramita ante el Juez Cuarto de lo Civil de Los Ríos,
sin que aparezca que en ese proceso se haya dictado sentencia. 4.6. Sobre la acción reivindicatoria,

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO - Página 9


LEXIS FINDER - www.lexis.com.ec
tenemos que el actor, al formular la demanda dice que: "...La señora MARTHA ELIZABETH RUIZ
ZAMBRANO, desde el mes de agosto del 2006, en forma indebida, y contra mi voluntad, se ha
apropiado del predio de mi propiedad arriba descrito, inclusive expulsándome de mi hogar y
propiedad..." (sic). Tal afirmación ha sido refutada por la demandada, expresando que el actor fue su
exconviviente con quien se unió y formó un hogar de hecho, habitando en el inmueble que es motivo
de este juicio reivindica-torio; y que la salida del actor de la vivienda se debe a una orden de la
Comisaría Primera de la Mujer y la Familia del cantón Quevedo, ordenada mediante providencia de
21 de agosto del 2006. Efectivamente, los fundamentos de hecho de la demanda no son reales, pues
según se desprende de la copia certificada del expediente D.1 171-06 de la citada Comisaría
Primera, que obra de fojas 29 a 143 del cuaderno de primer nivel, la salida del actor, Ricardo Enrique
Montúfar Segovia, del inmueble casa de habitación ubicada en la calle Ricaurte y Malecón de la
ciudad de Quevedo, se debió a la orden emitida por la Comisaría Primera de la Mujer y la Familia de
21 de agosto del 2006, ratificada el 13 de octubre del mismo año, autoridad que dictó esa medida de
protección con fundamento en las facultades que le confiere el artículo 13 de la Ley Contra la
Violencia a la Mujer y la Familia; por tanto, la acción del actor en esta causa, a través de esta
demanda, pretende alterar las medidas de amparo y protección que una autoridad competente
otorgó a la víctima de violencia intrafamiliar. Por las consideraciones que anteceden, este Tribunal
que integra la Sala de lo Civil y Mercantil de la Corte Nacional de Justicia, ADMINISTRANDO
JUSTICIA, EN NOMBRE DEL PUEBLO SOBERANO DEL ECUADOR, Y POR AUTORIDAD DE LA
CONSTITUCION Y LAS LEYES DE LA REPUBLICA, CASA la sentencia dictada por la Sala de lo
Civil, Mercantil, Laboral y Materiales Residuales de la Corte Provincial de Justicia de Los Ríos, el 27
de agosto del 2009, a las 10h50 y en su lugar, por las consideraciones expuestas en este fallo, se
desecha la demanda. Sin costas ni honorarios que fijar. Notifíquese y cúmplase.

f) Dra. Paulina Aguirre Suárez. Jueza Ponente. Dr. Wilson Andino Reinoso. Dr. Eduardo Bermúdez
Coronel. Jueces Nacionales..

JUICIO ORDINARIO REIVINDICATORIO DE DOMINIO - Página 10


LEXIS FINDER - www.lexis.com.ec

You might also like