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UNIVERSIDAD YACAMBÚ

VICERRECTORADO ACADÉMICO
FACULTAD CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS

LA COSA Y SU CLASIFICACIÓN

Autor:
Miguel D. García S.
CI. V-24.417.272
EXP: CJP-153-01601

Cabudare, Febrero de 2018


El Objeto de Derecho:
La Cosa y su Clasificación

El objeto del derecho es todo aquello, ya sea material o inmaterial, que recae bajo
el poder del hombre. Para Barbero (s/f), el objeto del derecho o de la relación jurídica
“es la entidad material o inmaterial sobre la cual recae el interés implicado en la
relación y constituye el punto de incidencia de la tutela jurídica” (P. S/n).
Por su parte, para Castán (s/f), “el objeto del derecho es la entidad sobre la cual
recae el poder o señorío del titular del derecho subjetivo y que le sirve de medios para
sus fines” (P.s/n). Ahora bien, tomando en cuenta lo aquí descrito por los autores, se
puede considerar que como aquello sobre lo que se exterioriza el poder del sujeto
titular de un derecho. Así pues, las entidades que pueden considerarse como objeto de
Derecho la constituyen la propia persona, las demás personas y las cosas del mundo
exterior.
Dicho esto, en los derechos reales la identificación del objeto es la cosa sobre la
que se ejercita el poder, por tanto es la cosa en propiedad, en usufructo, el fundo
gravado. En este mismo sentido, el comportamiento humano o los actos de las
personas, en este caso son los actos o prestaciones los que pueden ser objeto de
derecho, como por ejemplo, el objeto de la obligación es siempre la prestación, el
comportamiento activo o pasivo del deudor. Por otro lado, la propia persona humana
puede ser objeto de derecho en ciertas manifestaciones. Un ejemplo de ello, es aquel
en donde el derecho positivo confiere poderes a unas personas sobre otras, como la
Patria Potestad.
En otro orden de ideas, dentro del ámbito jurídico, se hace el uso del término
Cosa, dando a entender que esto se considera como cualquier ente material o
inmaterial, actual o futuro, que pueda formar parte de las relaciones jurídicas en
calidad de objeto de estas. En un análisis a esta definición, la cosa es considerada
como todo aquel objeto material susceptible de tener un valor. La cosa y el objeto
inmaterial susceptible de tener valor se denomina bien. Se podría definir a los bienes,
como todas las cosas que pertenecen al patrimonio de una persona y las mismas son
susceptibles de valoración económica.
En consecuencia, cosa seria la referencia objetiva del derecho subjetivo y
coincidiría con la noción de objeto de derecho. Pero no solo las realidades del mundo
exterior sino incluso los actos o manifestaciones humanas serian cosas. También,
dentro de esta concepción amplia existe la concepción restringida que limita la noción
de cosas a los objetos materiales del mundo exterior sobre los cuales pueden recaer
derechos reales.
Seguidamente, la cosa se puede caracterizar por ser cosas de las que se pueden
apropiar, por ser entidades que poseen una propiedad distinta a la del hombre y, por
ultimo; que no requieren que sean actuales, los bienes a futuro son jurídicamente
cosas. Así mismo, esta consta de ciertos requisitos, los cuales son: 1. La Utilidad, en
donde serán aquellas entidades que pueden servir para la satisfacción de necesidades;
2. La Apropiación, con la se convierten en bienes, mientras la cosa no sea apropiada o
apropiable no es bien; 3. El Valor, el cual expresa la nota diferencial de los bienes y
las cosas; y 4. La Individualidad, es decir, que tenga existencia separada.
Aunado a lo anterior, a pesar de haber esclarecido las diferencias que existen entre
las cosas y los bienes, la legislación venezolana, según lo establecido en el artículo
525 del Código Civil Venezolano (2009); dispone que “Las cosas que pueden ser
objeto de propiedad pública o privada son bienes muebles e inmuebles.”, es decir, da
a entender que los bienes forman parte de las cosas. Sin embargo, al hacer lectura de
algunos artículos del Código Civil (2009), se puede apreciar que en distintos
enunciados, como las contenidas en el encabezado del artículo 528 el cual dice, “Son
inmuebles por su destinación: las cosas que el propietario del suelo ha puesto en él
para su uso, cultivo y beneficio, tales como…”, o en el artículo 797, “Las cosas que
no son de la propiedad de nadie, pero que pueden llegar a serlo de alguien, se
adquieren por la ocupación; tales son los animales que son objeto de la caza o de la
pesca, el tesoro y las cosas muebles abandonadas.”; Estas frases citadas permiten
pensar que para la legislación venezolana los términos “cosa” y “bien” son
equivalentes.
De acuerdo con Gorrondona, las cosas se pueden clasificar de innumerables
maneras, atendiendo a sus cualidades particulares como el tamaño, forma, color, entre
otros. En ese sentido puede considerarse jurídicamente relevante la siguiente
clasificación:

o Corporales e Incorporales.
o Cosas Fungibles y No Fungibles.
o Cosas Específicas y Genéricas.
o Consumibles y No Consumibles.
o Cosas Divisibles e Indivisibles.
o Presentes y Futuras.
o Singulares y Universales.
o Principales y Accesorias.
o Apropiables y No Apropiables.
o Cosas Susceptibles de Tráfico, No Susceptibles de Tráfico.
o Cosas de Tráfico Prohibido.

Dada esta clasificación, se puede entender entonces, en primer lugar; que las cosas
corporales o materiales son todas aquellas entidades que se pueden percibir a través
de cualquiera de los sentidos o de medios idóneos para tal fin. Por su parte, las cosas
incorporales son los que se perciben a través del intelecto. Castán (s/f), dice que se
percibe con los “ojos de la mente” (P s/n). Entre las principales cosas incorporales
que se pueden mencionar, están: Las obras de Ingenio, Las manifestaciones o
atributos objetivados de la persona que constituyen el objeto de los derechos de la
personalidad tales como la vida, la identidad o el honor, El nombre, la reputación, el
derecho a la vida, la libertad.
En segundo lugar, las cosas fungibles la constituyen todas las que, por no estar
individualmente designadas en una relación jurídica, pueden, por su naturaleza o por
un acuerdo entre las partes, ser sustituidas por otras; caso contario a las cosas
Infungibles, las cuales sí están individualmente designadas en una relación jurídica
impidiendo, por tanto, ser reemplazadas por otras.
Con respecto a la tercera clasificación, existen las cosas genéricas, siendo esas que
están designadas por caracteres que les son comunes a todas las de su género o
especie. Así mismo, están presentes las cosas específicas, estas están designadas por
sus caracteres propios, que les permiten diferenciarlas de las demás de su mismo
género.
Así pues, en cuanto a cosas con posibilidad de uso repetido o consumo, se
encuentran las cosas consumibles y no consumibles, siendo la primera todas las
entidades cuyo primer uso las destruye en forma inmediata o la pone fuera del poder
de disposición del sujeto; y la segunda, en sentido contrario, son aquéllas entidades
cuyo primer uso no las destruye en forma inmediata, ni la pone fuera del poder de
disposición del sujeto.
Atendiendo al fraccionamiento, las cosas pueden ser divisibles, cuando se pueden
fraccionar, conservando cada fracción resultante de la división la misma esencia y
función del todo, de manera que entre el “todo” y la “parte” existe solo una diferencia
cuantitativa, mas no de calidad; e indivisibles, cuando son cosas que al partirse
pierden su esencia y función, de manera que no pueden ser utilizadas para el fin que
estaban destinadas. La indivisibilidad, en ocasiones, es impuesta por la voluntad de
las partes o por mandato legal, ya que una cosa divisible puede convertirse
perfectamente en indivisible.
En cuanto a la existencia en el tiempo, estas pueden ser presentes o futuras.
Cuando son cosas presentes, tienen existencia actual en la naturaleza al momento de
establecerse una relación jurídica; por otro lado, cuando las cosas son futuras, no
existen en la naturaleza al momento de referirse a ellas, pero se prevé que pueden
llegar a existir.
Para continuar, basándose en la interrelación de los elementos son, las cosas
pueden ser singulares y universales. Las cosas singulares constituyen una unidad
natural o artificial en la que sus elementos están unidos o compenetrados entre sí, a
veces identificados y separables; mientras que las cosas universales son Conjunto de
bienes corporales o incorporales que, con base en una unión idealizada, la cosa es
considerada como un todo o una sola cosa, generalmente con un nombre propio.
En este orden de ideas, atendiendo a la importancia de una cosa respecto otra son,
existen las cosas principales, que son entes a los cuales se les une otro para su uso,
perfección o complemento; y accesorias, cuando se le unen a la principal para
complementar y cumplir su función. Por otro lado, también se hace presente la
clasificación según su apropiabilidad, donde son cosas apropiables cuando estas
poseen actualmente un titular; y no apropiables, cuando estas cosas no pertenecen a
nadie.
Por otra parte, existen aquellas cosas que son susceptibles de tráfico, entre ellas
están Cosas de Libre Tráfico (Res in commercium), siendo estas aquéllas cosas que,
por su naturaleza o destino son objeto de negocios jurídicos, sin que pese sobre ellas
ninguna prohibición. De igual forma, están cosas no susceptibles de tráfico, siendo
las Cosas no Susceptibles de Tráfico Jurídico (Res extra commercium), las cuales son
aquellas cosas sustraídas de modo absoluto a la apropiabilidad, por su misma
naturaleza o por su destino, así como también los bienes inembargables e inalienables
por disposición legal.
Para culminar, están las cosas de tráfico prohibido, conformadas por las cosas de
tráfico restringido o del tráfico prohibido: Cosas que, pudiendo considerarse dentro
del comercio, inciden dentro de una prohibición legal que restringe o elimina
definitivamente, tales como las armas o explosivos, narcóticos, sustancias
estupefacientes, órganos humanos, entre otros.
Visto esto, se puede apreciar que la clasificación de las cosas en el ámbito jurídico
civil venezolano, hace referencia más que todo a los bienes, tanto materiales como
inmateriales, que son efectivamente protegidos por el Derecho, es decir, son valores
legalizados como la salud y la vida, entre otros; y que a lo largo de la evolución de la
disciplina se han ido distinguiendo diversos conceptos de lo que representa el bien,
cosa y objeto Jurídico
BIBLIOGRAFÍA

- Código Civil (1982). Gaceta Oficial, 2.990 (Extraordinario). Julio 26, 1982.
- Gorrondona, J. (1999) Cosas, bienes y derechos reales. Derecho Civil II.
Caracas, Venezuela: Universidad Católica Andrés Bello.
- Objeto, Bienes y Cosas. (Publicación en Línea), disponible en:
www.yelidesdiaz.blogspot.com/2011/06/definiciones-de-bien-cosa-y-
objeto.html?m=1

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