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La persona humana es, por su propia Por último, la dimensión espiritual es la

naturaleza, una unidad bio (cuerpo), psiche que le permite al hombre trascender su
(alma), espiritual (espíritu). Es por eso que la naturaleza y es por ella capaz de abrirse a Dios.
mirada objetiva y adecuada de la persona es la Es el punto de contacto con Dios y con los
mirada integral, considerándola como unidad; valores trascendentales. La persona posee una
reflexionando sobre la integración de sus tres realidad espiritual que permanece en su
dimensiones fundamentales. Esta visión trial interior a pesar de los cambios físicos o
es presentada ya en el Nuevo Testamento por psicológicos que pueda experimentar, y es lo
San Pablo: «Que Él, el Dios de la paz, os que subsiste después de la muerte.
santifique plenamente, y que todo vuestro ser, Al abordar la inteligencia, afectividad y
el espíritu, el alma, y el cuerpo, se conserve sin voluntad es importante entender que toda
mancha hasta la venida de nuestro Señor acción humana trae detrás una emoción o
Jesucristo» (1 Tes. 5, 23). Entonces, al sentimiento y esto, a su vez, depende de un
entender la unidad integral de cuerpo, alma y criterio, creencia, idea o pensamiento. Salvo
espíritu, que se afectan entre sí, la persona las reacciones reflejas, como el dolor físico,
comprende que tiene tres dimensiones: la todo acto humano contiene los elementos
dimensión corporal, la dimensión psicológica mencionados.
y la dimensión espiritual. La vida humana avanza como un barco,
Comprendiendo esto y al explorar cada algunas veces con viento a favor y otras contra
una de las dimensiones, se puede notar que, viento y marea. Y no faltan olas para remontar
gracias a la corporalidad (dimensión corporal),
y escollos para sortear. El hombre está invitado
la persona puede manifestarse, representarse y
expresarse. De modo que, sin el cuerpo sería a lograr la madurez en sus tres dimensiones y
imposible estar en el mundo y establecer en sus tres facultades. Estamos hablando de
relaciones con él. En lo que se refiere a la una madurez integral como persona humana,
dimensión psicológica, se encuentra la como ser para el encuentro.
vivencia interior de la persona; ideas, criterios,
emociones, sentimientos, pasiones,
motivaciones, deseos, sensibilidad y
percepción, entre otros.

“Una persona madura se distingue por un cierto equilibrio y estabilidad


afectiva. Esto implica que la racionalidad, con sus fuerzas intelectivas y
volitivas, y la afectividad, con su tensión estimulante, están bien integradas y
cooperan armónicamente al servicio de la realización personal”.
El desafío de ser persona
La palabra persona viene del griego (prosopon: respecto d…, relativo a…) y se refería a las
mascaras que usaban los actores para representar los distintos personajes de una obra de teatro.
Crea tu propia máscara, con los colores y rasgos que te caracterizan.
Reunidos en grupo observamos las máscaras de todos los participantes y damos una opinión
de lo que creemos que quiso expresar de sí mismo. Un secretario anota las ideas principales de
lo que cada uno dijo, luego compartimos lo que cada uno quería expresar con esa mascara. ¿Hay
ideas coincidentes? ¿cuáles sí y cuáles no?

UN LLAMADO
Los cristianos «tomaron prestada» la palabra persona del vocabulario filosófico para anunciar
y transmitir su propia experiencia como varones/mujeres que habían encontrado una respuesta
nueva y original a la vieja pregunta acerca de quiénes eran.
Todo ser humano es PERSONA y, a lo largo de toda su vida, está llamado a reconocerse
como tal para desarrollar en plenitud todas las potencialidades presentes en su naturaleza. Para
esto cuenta con dos capacidades fundamentales: la inteligencia y la voluntad libre que
manifiestan su condición fundamental de criaturas que participan de la plena IMAGEN y
SEMEJANZA de DIOS.
Ser criaturas a las que Dios nos regaló su existencia según su imagen y semejanza y nos dio
en Jesús su paternidad, nos hace especiales. Jesús nos propone un camino para buscar la plenitud
de todo aquello que se nos regala: libertad, voluntad, conocimiento, amor. Hasta tal punto se
compromete que nos regala su Espíritu para asistirnos en el desafío cotidiano.
De esta manera podemos decir que, a partir del encuentro con Jesús compañero del camino,
descubrimos que al afirmar nuestra condición de personas nos expresamos semejantes a Cristo
por origen y destino común. Él nos lo prometió en su anuncio del Reino: somos iguales y somos
diferentes, somos personas (Gál.3,28).

Organizados en grupos investiguen el concepto de perso-


na que se maneja en los medios de comunicación. Para ello,
elijan un medio de comunicación social (TV, radio, diarios,
you tube, whatssap u otro) y busquen elementos
(publicidades, programas, imágenes, diálogos, etc.) donde les
parezca que se expresa un «concepto de persona» para ese me-
dio o programa. Transcriban a continuación una síntesis de
lo investigado.
Visiones inadecuadas del hombre en América Latina
1. Visión determinista: Bajo esta visión podemos
descubrir cinco modalidades, todas conducen a una misma
afirmación equivocada: el hombre no es dueño de sí
mismo, sino víctima de fuerzas ocultas.
a. La práctica de la hechicería
Las prácticas supersticiosas abundan en nuestros pue-
blos latinoamericanos. Mucha gente cree en el poder mági-
co y en la influencia maléfica de ciertas personas, acciones u
objetos y hacen depender a Dios de acontecimientos huma-
nos. La creencia en brujos, adivinos, en ciertos ritos, en feti-
ches, amuletos, son aspectos negativos de la religiosidad popular.
b. El interés creciente por los horóscopos o la astrología
Es superstición cuando el hombre cree que su vida está dominada por las fuerzas zodiacales
(He aquí una frase sacada del libro de Botelho d'Abreu "No somos pobres o ricos, buenos o ma-
los, inteligentes o tontos porque queramos: somos una cosa u otra porque los astros así lo deter-
minaron en el momento del nacimiento"
c. La creencia en la reencarnación
Es una creencia propagada por parte de los adeptos de varias formas de espiritismo y de reli-
giones orientales. La creencia en la reencarnación, venga del espiritismo o de las religiones orien-
tales, no es cristiana ni conciliable con el cristianismo.
d. El pasivismo providencialista
Muchos cristianos creen equivocadamente que todo lo que les sucede es determinado e im-
puesto fatalmente por Dios. Nada más contrario al espíritu de la Alianza que pide al hombre ser
colaborador de Dios en el plan de salvación. El hombre debe actuar al lado de Dios providente.
Ni Dios solo (pasivismo), ni el hombre solo (secularismo)
e. El fatalismo social
Se apoya en la idea errónea de que los hombres no son fundamentalmente iguales. Esta falta
de respeto a la persona se manifiesta en expresiones y actitudes de quienes se juzgan superiores a
los demás. De aquí con frecuencia, la situación de desigualdad que viven obreros, campesinos,
empleados domésticos y tantos otros sectores.
3. Visión psicologista.
Según este modo de ver, "la persona humana se reduce, en esta última instancia a su
psiquismo". · Ciertos seguidores de Freud según la cual, la persona es víctima del instinto
fundamentalmente erótico.
· Algunos discípulos de Pavlov, que conciben al hombre como un haz de reflejos
condicionados. El hombre carece de libertad pues responde mecánicamente estímulos.
Así pues, al negar esta visión inadecuada toda responsabilidad conduce al pansexualismo y
justifica el machismo tan extendido en Latinoamérica.
4. Visiones economicistas
Bajo el signo de lo económico, que es la raíz común se presentan tres visiones inadecuadas
del hombre:
a. Visión Consumista
Es la visión que rinde culto al "Tener más", ahogando al hombre en su afán desmedido por
rodearse de cosas, por consumir y gastar. La persona humana es considerada como instrumento
de producción y objeto de consumo. Todo se fabrica y se vende en nombre de los valores del
"tener", del "poder" y del "placer" como si fueran sinónimos de la felicidad. Esto impide el
acceso a los valores espirituales. Es la visión más generalizada".
b. Visión individualista (del Liberalismo Capitalista)
El liberalismo económico de praxis materialista nos presenta una visión individualista del
hombre. La dignidad de la persona consistiría en la eficacia económica y en la libertad
individual. De esta forma el hombre se cierra y se vuelve sordo a las exigencias de la vida social y
se coloca al servicio del imperialismo internacional del dinero, olvidando sus obligaciones en
relación con el bien común. Esta visión no planifica la economía al servicio del hombre, sino el
hombre al servicio de la economía.
c. Visión colectivista (del Colectivismo Marxista)
Opuesto al liberalismo económico y en lucha permanente contra sus injustas
consecuencias, el marxismo clásico sustituye la visión individualista del hombre por una visión
colectivista. La meta de la existencia humana se pone en el desarrollo de las fuerzas naturales de
producción. El hombre es despojado de su libertad auténtica y es dirigido en su
comportamiento por las normas dictadas por aquellos que son los responsables de las
estructuras sociales, políticas y económicas. Esta visión inadecuada afirma defender y proteger
los intereses de la mayoría, pero no hace sino aplastar los derechos del hombre (especialmente
el derecho a la libertad religiosa).
5. Visión estatista
Los Obispos de América Latina, al hablar sobre esta visión y al denunciarla, advierten que
es practicada por no pocos gobiernos latinoamericanos. Esta visión estatista del hombre tiene su
base en la teoría de la "Seguridad Nacional". Todos los individuos son puestos al servicio ilimita-
do de la supuesta guerra total contra los conflictos culturales, sociales, políticos y económicos y,
mediante ellos, contra la amenaza del comunismo. Frente a este peligro permanente, real o posi-
ble, se limitan las libertades individuales y la voluntad del estado se confunde con la voluntad
de la nación. Bajo esta visión el desarrollo económico y potencial bélico, se superponen a las
necesidades de las masas abandonadas.
Hay que tener en cuenta que una seguridad nacional es necesaria a toda organización políti-
ca. Una convivencia fraterna necesita de un sistema de seguridad para imponer el respeto de un
orden social justo que permita a todos cumplir su misión en relación al bien común. Pero cuan-
do el Estado o pocos dentro de una nación utilizan la seguridad nacional y sus métodos inhu-
manos e ilegítimos para bien de pocos en desmedro de la seguridad de la mayoría entonces es-
tamos frente a una visión estatista del hombre y bajo una ideología perniciosa.
6. Visión cientista
La organización técnico científica de ciertos países está
engendrando una visión cientista del hombre. La vocación
del hombre está puesta en la conquista del universo. En esta
visión, sólo se reconoce como verdad, lo que la ciencia puede
demostrar. En nombre de la ciencia todo se justifica, incluso
lo que constituye una afrenta a la dignidad humana. El hom-
bre es lo que la ciencia puede decir de él. Por lo tanto el hom-
bre queda reducido a su definición científica. Las comunida-
des nacionales se someten a las decisiones de un nuevo poder:
la tecnocracia. La tecnocracia consiste en una especie de inge-
niería social que controla los espacios de libertad de indivi-
duos, con el riesgo de reducirlos a meros elementos de cálculo.

1. A partir del texto “Visiones inadecuadas del hombre” realizamos una síntesis en un cuadro
como el siguiente
Dimensión de la perso- Dimensión de la perso- Valoración qué hacemos
na que afirma na que está ausente de él
A veces, cuando intentamos definir quiénes somos, solemos apelar a lo que tenemos, lo que
pensamos, la música que nos gusta, el club de fútbol con el que simpatizamos, etc.
Además, cuando abrimos los ojos y los oídos de manera crítica para ver y escuchar «a la
manera de Jesús» —es decir, más allá de lo aparente— nos damos cuenta de que en nuestra realidad
se recurre a «catalogar» a los seres humanos según su religión, el color de la piel, sus ingresos
económicos, su sexo, estado de salud, oficios, cargos, etc... En estos casos, es fundamental la
afirmación del creyente sobre la plena igualdad de todos los seres humanos creados y sostenidos en
la vida por Dios. De esta manera se afirma la plenitud de derechos y deberes que surgen de su
condición de criatura.
Comprender esta igualdad significa también aceptar las diferencias que existen entre nosotros,
no como amenaza sino como una riqueza, muy parecida a la «biodiversidad» que existe en la
naturaleza creada por nuestro Padre Dios.
1. Leemos la canción Los hermanos, de Atahualpa Yupanqui.
a. ¿Qué versos te llaman la atención? ¿Por qué?
b. ¿Quiénes son mis hermanos?, ¿con qué criterios hago míos a los otros «hermanos»?
c. ¿A quiénes nombrarías de la comunidad en la que participás para ejemplificar la frase: «Yo
tengo tantos hermanos que no los puedo contar»?

Yo tengo tantos hermanos que no los puedo contar.


En el valle y la montaña, en la pampa y en el mar.
Cada cual con sus trabajos, con sus sueños, cada cual.
Con la esperanza adelante, con los recuerdos detrás.
Yo tengo tantos hermanos que no los puedo contar.
Gente de mano caliente, por eso de la amistad.
Con un lloro pa 'llorarlo, con un rezo pa'rezar.
Con un horizonte abierto que siempre está más allá.
Y esa fuerza pa'buscarlo con tesón y voluntad.
Cuando parece más cerca es cuando se aleja más.
Yo tengo tantos hermanos que no los puedo contar.
Y así seguimos andando, curtidos de soledad.
Nos perdemos por el mundo, nos volvemos a encontrar.
Y así nos reconocemos por el lejano mirar,
por la copia que mordemos semilla de inmensidad.
Y así seguimos andando, curtidos de soledad.
Y en nosotros nuestros muertos pa' que nadie quede atrás.
Yo tengo tantos hermanos que no los puedo contar.
¡Y una novia muy hermosa que se llama libertad!
Atahualpa Yupanqui - Pablo del Cerro
2. Leemos Gn. 1,1-2,4a y 2,4b-2,25. En ambos textos se relata la creación del ser
humano. Responde estás preguntas para compartir en grupo:
a. ¿Qué rol asigna Dios a la persona humana en el contexto de todo lo creado?
b. ¿El texto realiza algún tipo de distinción entre los seres humanos?
c. ¿Qué mensaje te gustaría dar a la sociedad sobre lo aprendido?

Existe un objeto que define de un modo único la naturaleza del ser humano. Incluso, es tan
«necesario» para la persona, que existía antes de ser inventado. ¿Te animás a adivinar cuál es?
Pensá...
¿No adivinaste? Bueno, se trata del espejo. Desde siempre existieron «espejos»: charcos de
agua, superficies pulidas, los ojos de otra persona...Todos ellos sirven para reflejar imágenes.
¿Quién no ha pasado aunque sea unos instantes por día mirándose al espejo?, ¿quién no se
ha detenido alguna vez frente a una vidriera para verse? ¿Probaron poner a un nene de un año
frente a un espejo?
Todos buscamos reflejos de lo que somos o queremos ser. A veces nos basta mirar un poco
de televisión, hojear algunas revistas o sondear índices de popularidad para darnos cuenta de
cómo la sociedad de nuestros días exalta ciertos personajes que se nos proponen como
«modelos» para seguir o como imágenes en las que podemos «ver el reflejo de nuestra
identidad». Estos supuestos espejos sociales pueden tener más o menos valores y eso es lo que
intentaremos analizar juntos.
1) Hagan un listado de las personas o grupos que se presentan como modelos en nuestra
cultura y describan cuáles son las cualidades que destacarían en ellos.

«Yo soy el camino, la verdad y la vida»


Los cristianos creemos que Jesús es el reflejo más profundo de nuestra identidad.
Descubrimos en su humanidad la verdad más profunda de lo que estamos llamados a ser como
personas.
A través del relato de sus palabras y gestos narrados por las comunidades cristianas en el
Nuevo Testamento, podemos recrear en el aquí y el ahora de nuestro caminar, un proyecto de
vida plenamente libre y lleno de sentido.
Jesús es verdad: porque revela el misterio más profundo de
nuestra identidad como personas, la de ser hijos de Dios, ¡guales
en derechos yen destino, aunque diferentes unos de otros
Jesús es camino: porque nos muestra los pasos concretos que
tenemos que dar para ser auténticamente libres de todo prejuicio,
dominación, de descubrirnos necesitados de los otros y de Dios en
el cariño, etc.
Jesús es vida: porque nos ama hasta dar la vida por nosotros,
sus amigos, y de este modo venció la peor de las limitaciones: el pecado, negación de la vida en Dios.
¿En qué momentos de su vida descubrís a Jesús como Camino,
Verdad y Vida?

A la luz de tu figura (Ignacio Larrañaga)


Señor Jesús, que tu presencia inunde por
completo mi ser, y tu imagen se marque a
fuego en mis entrañas, para que pueda yo
caminar a la luz de tu figura, y pensar como tú
pensabas, sentir como tú sentías, actuar como
tú actuabas, hablar como tú hablabas, soñar
como tú soñabas, y amar como tú amabas.
Pueda yo, como tú, despreocuparme de mí
mismo para preocuparme de los demás; ser el
aliento y la esperanza para los demás. Pueda yo
ser, como tú, sensible y misericordioso;
paciente, manso y humilde; sincero y veraz.
Tus predilectos, los pobres, sean mis
predilectos; tus objetivos, mis objetivos.
Los que me ven, te vean. Y llegue yo a ser
una transparencia de tu Ser y tu Amor.
Seguramente no necesitamos que nadie nos
describa toda esa inmensa variedad de sensaciones
que se producen dentro de nosotros en los últimos
tiempos, tantas preguntas, certezas, miedos y alegrías
que vivimos en «nuestro interior». Es justamente esta
riqueza la que nos permitirá el desarrollo de nuestra
persona, nos ayudará a conocernos y a emprender la
aventura de crecer en madurez.
Nuestro horizonte de persona es la persona de
Jesucristo. Él es quien nos ayuda a descubrirlo y a
descubrirnos como hombres nuevos.
Al explorar ese mundo interior nos
encontraremos con muchas sorpresas. Allí definimos
todas aquellas cuestiones que son importantes para
nuestra vida, expresamos las luces que aclaran -las decisiones fundamentales que tomamos como un
don del Dios de la vida que nos prometió estar siempre con nosotros.
En este espacio de nuestra interioridad es donde se da el milagro de abrirnos al encuentro con los
otros, de manera particular con Aquel que nos amó primero. Lo descubrimos como continua
novedad, como el Tú más cercano y trascendente; un Tú que dialoga con nuestra vida, al que nada de
lo que nos pase le es indiferente.
Dios está viviendo durante toda nuestra vida. Él viene en su palabra, en su Espíritu que nos da la
fe, en los sacramentos de la Iglesia, en las luchas y alegrías de la vida, en cada uno de nuestros
hermanos, sobre todo en los más pobres y sufridos.
Hay que saber esperar a Dios.
Hay que saber buscar a Dios.
Hay que saber descubrir a Dios.
Y mira que hay muchos que se cansan de esperar, porque la vida se ha puesto muy dura y los
poderosos siempre aplastan a los más débiles.
Y hay muchos que no saben buscar a Dios día a día en el trabajo, en casa, en la calle, en la lucha
por los derechos de todos, en la oración, en la fiesta alegre de los hermanos unidos, e incluso más allá
de la muerte.
Pedro Casaldáliga

LA CIUDAD DE LOS POZOS


En este desafío de construir nuestro futuro, tenemos diversas experiencias. Muchas veces, por
más que desarrollemos distintas áreas de nuestra persona, sentimos que nos falta algo.
1. Leemos el texto, “La ciudad de los pozos”
2. Subrayamos las ideas que más nos llamen la atención
3. ¿Qué les sugiere el cuento?
4. ¿Qué significados puede tener la frase: “Todo ser viviente que se preciara, debería cuidar
mucho más la interior que lo exterior. Lo importante no es lo superficial sino el contenido”?
5. ¿Cuál sería, según el cuento, la interioridad que da más frutos? ¨¿Por qué?
6. ¿Cuál es el riesgo al que hay que atreverse para llegar a esa interioridad?
7. ¿Cuál es el mejor de los frutos que se alcanza cuando se cultiva esa interioridad?
8. Reunidos en grupo buscamos canciones que expresen esta dimensión de interioridad como
constitutiva de la naturaleza humana. Luego debatimos y cantamos

La ciudad de los pozos

Esa ciudad no estaba habitada por personas, como todas las demás ciudades del planeta. Esa
ciudad estaba habitada por pozos. Pozos vivientes, pero pozos al fin. Los pozos se diferenciaban
entre sí, no sólo por el lugar en el que estaban excavados sino también por el brocal (la abertura
que los conecta con el exterior).
Había pozos pudientes y ostentosos con brocales de mármol; pozos humildes de ladrillo y
madera y algunos otros aún más pobres, con simples agujeros pelados que se abrían en la tierra.
La comunicación entre los habitantes de la ciudad era de brocal a brocal y las noticias cundían
rápidamente, de punta a punta del poblado.
Un día llegó a la ciudad una «moda» que seguramente había nacido en un pueblito humano:
todo ser viviente que se preciara, debería cuidar mucho más lo interior que lo exterior. Lo
importante no era lo superficial sino el contenido.
Así fue como los pozos empezaron a llenarse de cosas. Algunos se llenaban de joyas, monedas
de oro y piedras preciosas. Otros, más prácticos, se llenaron de electrodomésticos y aparatos
mecánicos.
Algunos más, optaron por el arte y fueron llenándose de pinturas, pianos de cola y sofistica-
das esculturas posmodernas. Finalmente, los intelectuales se llenaron de libros, de manifiestos
ideológicos y revistas especializadas. Pasó el tiempo y la mayoría de los pozos se llenaron a tal punto
que ya no pudieron incorporar nada más. Los pozos no eran todos iguales, así que, si bien algunos
se conformaron, hubo otros que pensaron que deban hacer algo para seguir metiendo cosas en su
interior...
Alguno de ellos fue el primero: en lugar
de apretar el contenido que estaba incorporan-
do, se le ocurrió aumentar su capacidad ensan-
chándose.
No pasó mucho tiempo antes de que la
idea fuera imitada, todos los pozos gastaban
gran parte de sus energías en ensancharse pa-
ra poder hacer más espacio en su interior, Un
pozo pequeño y alejado del centro de la ciu-
dad, empezó a ver a sus camaradas ensanchán-
dose desmedidamente. Él pensó que si seguían
hinchándose de tal manera, pronto se confun-
dirían los bordes y cada uno perdería su identidad... Quizás a partir de esta idea se le ocurrió que
otra manera de aumentar su capacidad era crecer, pero no a lo ancho sino hacia lo profundo,
hacerse más hondo.
Pronto se dio cuenta de que todo lo que tenía dentro de él le imposibilitaba la tarea de pro-
fundizar. Si quería ser más profundo, debía vaciarse de todo contenido...
Al principio tuvo miedo al vacío, pero luego, cuando vio que no había otra posibilidad, lo
hizo. Vacío de posesiones, el pozo comenzó a volverse profundo, mientras los demás se apodera-
ban de las cosas de las que él se había deshecho...
Un día, sorpresivamente, el pozo que crecía hacia adentro tuvo una sorpresa: adentro, muy
adentro, y muy en el fondo... !!!encontró agua!!!
Nunca otro pozo había encontrado agua...
El pozo superó la sorpresa y empezó a jugar con el agua del fondo, humedeciendo las pare-
des, picando los bordes y por último sacando agua hacia afuera.
La ciudad nunca había sido regada más que por la lluvia, que de hecho era bastante escasa,
así que la tierra alrededor del pozo, revitalizada por el agua, empezó a despertar.
Las semillas de sus entrañas brotaron en pasto, en tréboles, en flores y en tronquitos
endebles que se volvieron árboles después...
La vida explotó en colores alrededor del alejado pozo al que empezaron a llamar "el vergel".
Todos le preguntaban cómo había conseguido el milagro.
Ningún milagro —contestaba el vergel— hay que buscar en el interior, hacia lo profundo...
Muchos quisieron seguir el ejemplo del vergel, pero desandaron la idea cuando se dieron cuenta
de que para ir más profundo debían vaciarse.
Siguieron ensanchándose cada vez más, para llenarse de más y más cosas...
En la otra punta de la ciudad, otro pozo decidió correr también el riesgo al vacío...
Y también empezó a profundizar... Y
también llegó al agua... Y también salpicó
hacia afuera creando un segundo oasis
verde en el pueblo...
¿Que harás cuando se termine el Te busco cada día, Señor
agua? —le preguntaban. Te busco cada día, Señor, y te en-
No sé lo que pasará —contestaba. cuentro donde se siembra la alegría,
Pero, por ahora, cuanto más agua saco, donde se elimina la mentira, donde se
más agua hay. suprime la injusticia. Para encontrarte,
Pasaron unos cuantos meses antes del Señor, ¡hay que estar en vela!
gran descubrimiento. Un día, casi por Vos estás a la puerta
casualidad los dos pozos se dieron cuenta y llamás y esperás, por-
de que el agua que cada uno había que respetás nuestra libertad y por-
encontrado en lo profundo de sí era la que sabés que la puerta del corazón se
misma... Que el río subterráneo que abre siempre desde adentro. Pasá, Se-
pasaba por uno inundaba la profundidad ñor, yo también te espero. Amén.
del otro.
Se dieron cuenta de que se abría para
ellos una nueva vida. No sólo podían
comunicarse de brocal a brocal, superficialmente, como todos los demás, sino que la búsqueda les
había deparado un nuevo y secreto punto de contacto: la comunicación profunda que sólo
consiguen entre sí aquellos que tienen el coraje de vaciarse de contenidos y buscar en lo profundo
de su ser lo que tienen para dar…

En este proceso de descubrir quiénes somos, buscamos maneras de narrar nuestra


identidad: decirnos y decir a los otros algo de nosotros o de los demás. El futuro se nos abre como
un gran interrogante. Muchas veces intentamos responder a preguntas, mas no siempre las
preguntas son las indicadas:
"Una buena pregunta tiene la mitad de su respuesta" (Lao Tse).
Frecuentemente, las preguntas se refieren a lo que vamos a hacer o qué queremos tener, pero
nos olvidamos de aquella pregunta que es básica para levantar el edificio de mi futuro: ¿Quién soy?
Buscar respuestas a este interrogante nos hace ir cada vez más profundo, a buscar esas razones que
son como los cimientos de una casa.
En este planteo sobre quiénes somos, encontramos a Jesús que nos hace una propuesta: nos
llama a ser sus discípulos, hombres y mujeres nuevos. Jesús orienta nuestra mirada para que
veamos más allá de lo superficial, para que busquemos nuevas preguntas, para encontrar un
sentido a nuestro vacío.
1. Leé la oración “Llenar el vacío”, escrita por un chico de tu edad. Comentala con tus
compañeros: ¿Qué quiere expresar este muchacho?, ¿coincide en algo con lo que estás
viviendo?, ¿qué experiencias son significativas para vos en este momento?
2. Ahora te invitamos a que busques en tu interioridad aquellas palabras que expresen lo que o
Llenar el vacío ques, se eleva hacia lo alto en venas, tiene raíces en los bos-
Llenar mi vacío de Dios... las cumbres ques, se eleva hacia lo alto en
¡Si sólo pudiera llenar mi va- Llenar el vacío las cumbres y abraza el
cío de Dios! Llenar mi vacío de Dios... alma de la gente.
Llenar el vacío de tantas muer- ¡Si sólo pudiera llenar mi va- Llenarme de vida, Señor.
tes, de tanto odio, de tantos cío de Dios! Llenar el vacío de Para dar.
silencios. tantas muertes, de tanto odio, Para bendecir.
Llenarlo de Dios. de tantos silencios. Para adorar.
Llenarme de Dios. Llenarlo de Dios. Para adorar tu cuerpo divino
Y de amor. Llenarme de Dios. que fue que es y que será roto
Y pasión. Y de amor. en una Cruz.
Pasión por la Vida, Y pasión. Llenar mi vacío de ti, Señor.
Vida que corre en nuestras Pasión por la Vida, Machús
venas, tiene raíces en los bos- Vida que corre en nuestras
estás viviendo y escribas tu propia oración.
En grupo leemos el texto de Mt. 7, 24-27; ¿qué dice? ¿qué nos dice?
Escribimos en tiras de papel, palabras que expresen cuáles son esas “rocas firmes” desde
las cuales queremos construir nuestro futuro.

La opción fundamental es aquella decisión central que


hacemos en nuestra vida y que luego va a orientar todas las demás
decisiones que tomemos. Es la opción que da sentido de unidad a
nuestra vida.
Actualmente es común que todos nos sintamos presionados
por el ambiente social en que vivimos y que nos lleva a pensar que
estamos eligiendo cuando, en realidad, estamos respondiendo a las pautas que la sociedad de
consumo nos impone. Suponemos que nos vestimos como queremos o que escuchamos la
música que nos gusta, pero la mayor parte de las veces sólo nos sumamos a propuestas
pensadas por otros.
La opción fundamental es aquella que nos hace pensar críticamente todos los actos de
nuestra vida y evita que seamos «personas fragmentadas». Vivir una vida fragmentada es hacer
opciones contradictorias, y hasta opuestas, sin notarlo o sin que esto nos haga reflexionar. Por
ejemplo, una persona puede tener un profundo interés por la ecología y por la conservación
de las especies que están amenazadas de extinción y al mismo tiempo tener actitudes racistas o
de desinterés por otras personas sin advertir la contradicción que esto implica.
Esta opción fundamental es la que genera en nosotros la necesidad de establecer un
proyecto de vida en el que todas nuestras elecciones estén contempladas y orientadas por y
hacia esa elección.
Para nosotros, la opción fundamental es por Dios. Nos disponemos a vivir nuestra vida
en perfecta amistad con El. Para ello, orientamos todas nuestras decisiones desde esta
perspectiva.
Opciones con peso propio
La opción fundamental no sólo orienta las decisiones particulares, sino que además se
encarna en ellas. Por ello, nuestras acciones pueden modificarse, e incluso cambiarse
radicalmente, si no refleja esa opción que orienta nuestra vida.
1. Leemos la canción “Vivir bajo revivir. Siete vicios capitales se treparon al
presión” poder.
Pues estoy de pie y mi sangre está viva y va
Vivir bajo presión a latir.
iEsta sensación terrible de vivir bajo Puso un ancla Dios en mi alma y no me
presión! iEsta mano invisible que te ahoga el podrán hundir. Invisible, hay una cuerda que
corazón! Cómo nos agrede el alma el vivir en me ata al más allá; detrás mío, una pared que
la ciudad, la violencia contenida y la que no se derrumbará. Si en la mirada hay coraje y
empieza a salpicar. Yo te veo caminando junto perfora la realidad, veo que nuestra fortaleza
a ese hombre, esa mujer que soportan cada ya edifica otra ciudad. No me gusta verte en
día la presión que hay que vencer. Veo en tus pósters, oh Jesús, como un galán, cara de
ojos cómo duele esa cotidianeidad: aprontarse recién salido del salón de maquillar; un dios
cada día a una lucha sin piedad. Sé que así «ídolo romántico», minúsculo, irreal, mal
fueron tus días, sé que fue así tu ciudad, pero anzuelo y mal consuelo de una fe sentimental.
me pesa la vida, ayudame a creer que estás. iTe imagino tan marcado por la honda
Cristo hermano, vos sabés lo que es cruzar realidad! pe tu lucha ante lo muerto, una
esta presión y que ser hijo de humano es huella quedará!
afrontar un desamor. Ver la gente Tu belleza silenciosa nace en tu
abandonada conmovió mi corazón, la profundidad:
injusticia y su insolencia prepotente te Amador-Sufriente, irradia tu hermosura
escupió. No aceptaste el escaparte y quedarte otra verdad. Sé que estás junto a los jóvenes
en un Tabor: elegiste encaminarte al lugar de que eligen no transar y resisten y no ceden lo
tu pasión. Y allí hirvió tu compromiso y tu que no hay que negociar. Dejá que hoy te
sangre santa bulló, pues tu aguante poderoso sienta nuestro, dejá que descanse en vos, y tu
es amor liberador. Aliento recupere y me afirme en el amor; mi
O Pulsear con los fariseos, cuánta amarga esperanza eche raíces y mi alma esté en pie, y
discusión; falsedad, hipocresía, como ayer nos haga fuerza al viento en contra, convencido de
pesan hoy. mi fe. Es la decisión amar, amar aun bajo
Para sacarte del medio se opusieron sin presión y tu mano poderosa sostendrá mi
igual, o para robarte la vida, conspiraron sin corazón, iEs la decisión amar, amar aun bajo
cesar. presión! iY tu mano poderosa sostendrá mi
Mezcla de argumentaciones y un duro corazón! Sostendrá mi corazón tu mano
corazón, o su malicia interminable ejerció poderosa.
dura presión. o Su taparse los oídos y chillar Eduardo Meana
para no oír.
L Su «matar al mensajero», resistirse a

2. ¿Qué situaciones hacen que te sientas que vivís bajo presión?


3. ¿Cuáles son las presiones que sentís y que te alejan de Dios?
La opción fundamental que hace cada persona se vive en los juicios y en los hechos
concretos de todos los días. Si bien el optar es un hecho subjetivo, esa opción tiene que estar en
sintonía con el bien y con la verdad que son objetivos.
La verdad no depende de mi comprensión de ella, así como el bien tampoco depende de que
yo lo asuma, ambos existen fuera de mí y garantizan mi libertad y mi dignidad.
Uno de los desafíos de nuestro tiempo es ayudar a las personas a descubrir que el bien y la
verdad no son relativos. Para ello es necesaria la formación de la conciencia moral. Pero ¿qué es la
conciencia?
La conciencia moral es un juicio de la razón por el cual reconocemos dónde está el bien, qué
es lo justo y qué es lo recto. En ella, somos invitados a realizarnos como personas. Ella es la que
nos invita a hacer el bien y a rechazar y evitar el mal. En la aceptación de esta invitación se juega
nuestra responsabilidad y se vive nuestra opción fundamental de manera cotidiana.
Todos podemos formar nuestra conciencia moral y ser capaces de hacer juicios rectos. Un
juicio recto es aquel en el cual actuamos conforme al plan que Dios tiene para nosotros y para toda
la humanidad. En el descubrimiento y en la aceptación del Proyecto de Dios se pone en juego
nuestra felicidad y nuestra realización como personas.
Formar la conciencia moral es una tarea que dura toda la vida. Desde niños somos invitados a
reconocer la voz interior que nos conduce a la verdadera felicidad, aunque a veces esa voz pareciera
que se nos da desde afuera.
o o En la medida en que vamos creciendo, dejamos de actuar y de pensar como otros nos
piden (heteronomía), para ir descubriendo esa ley que el mismo Dios grabó en nuestros corazones
(autonomía).
Actuar de manera autónoma es un signo concreto de nuestra madurez como personas y de
estar viviendo un proyecto de vida orientado según el plan de Dios.
Es importante destacar que no siempre las decisiones que tenemos
que tomar aparecen ante nosotros con claridad; pero siempre estamos
llamados a hacer lo que es justo y lo que es bueno, es decir, lo que Dios
nos invita a vivir. Cuando no podemos discernir con claridad, debemos
buscar el consejo de personas que puedan ayudarnos a comprender qué
es lo que Dios nos pide en ese caso concreto.
La vida sacramental y la pertenencia a una comunidad eclesial
concreta nos permitirán ir creciendo en la formación de nuestra propia
conciencia moral.
Mi conciencia: un espacio para la opción
1) Leé el siguiente relato:
El Titanic está por chocar con el iceberg, queda sólo un bote salvavidas vacío con espacio para
nueve personas. Entre los posibles evacuados se encuentran las siguientes personas:
Una anciana que, después de diez años, viaja para reencontrarse con sus hijos y nietos.
Un médico especialista en gerontología que acaba de descubrir un remedio contra una
enfermedad incurable hasta este momento.
Un arquitecto, especialista en desarrollo urbano, que viaja para reconstruir una ciudad que
sufrió un terremoto.
Un famoso escritor que va a recibir su primer premio internacional.
Una periodista que está en medio de una investigación sobre corrupción política.
Un joven estudiante que viaja por un intercambio cultural.
Una religiosa enfermera que va como misionera a una aldea muy pobre.
Una niña de 9 años con dificultades motrices rumbo a una terapia de rehabilitación.
Un pastor protestante que lleva una donación financiera para una comunidad indígena.
Un líder político rumbo a una cumbre por la paz.
2) Te proponemos que tomes la decisión de elegir a los
nueve integrantes del bote y fundamentes tu elección en
cada caso.

3) ¿Qué dificultades son las más frecuentes al


momento de optar?
4) ¿Qué me ayuda a optar de la mejor manera?

Es suficiente encender la radio o la televisión como para comprender la importancia que tiene
el tema de la libertad para nuestra cultura. Abundan definiciones de esta palabra.
Libertad es una de las palabras más usadas según convenga. Resulta entonces un verdadero
desafío: ser libre significa «poseerse», ser dueño de uno mismo, ser el protagonista de la propia vida
y decidir sobre ella. Esto es una gran responsabilidad, porque la vida es lo más valioso que tenemos
y no podemos malgastarla.
La libertad tiene enemigos: a veces vienen de afuera y son muchos, pero sin dudas los más
fuertes están dentro de nosotros mismos (los caprichos, el actuar «porque sí», las «modas», el miedo
a decidir o a equivocarnos, el miedo a ser auténticos) y a veces se hacen tan fuertes que terminan
por apoderarse de nuestro interior y nos vuelven cada vez más dependientes.
Experimentamos la libertad como regalo de Dios, de un Dios que nos hace libres y está
presente en los momentos en que la ponemos en juego. Jesús, nuestro amigo nos invita a buscar esa
libertad. «La verdad los hará libres», nos dice, y en Él descubrimos la plenitud de lo que significa ser
libres.
La propuesta de libertad que buscamos y a la que aspiramos no es «hacer lo que se nos ocurra»;
nuestra idea de libertad tiene a la verdad y a la justicia como medida de la verdadera libertad. En las
fichas que siguen podrás profundizar acerca de este tema.
Hacia una definición de libertad
La libertad podemos entenderla como «libertad exterior»
y «libertad interior».
La libertad exterior o libertad de hacer es aquella en la
que no existen trabas, impedimentos ni estorbos exteriores.
En ella, _podemos distinguir la libertad física (libertad
de movimientos); la libertad -moral (ser libre para optar por
el bien); la libertad civil, política y religiosa (no existen leyes
positivas dictadas por autoridad que traben mi libre acción, a
diferencia de todo 'tipo de segregación); la libertad social (no
hay determinismos sociales que me impidan optar, a
diferencia de los regímenes totalitarios); y la libertad ascética
(ser libre frente a los instintos y las pasiones, distinto de las
teorías que dicen que estamos determinados por nuestras
pasiones).
La libertad interior es la libertad de querer, de autodeterminarse, de decidir desde dentro.
Nuestra libertad, sea interior y/o exterior, puede hallarse condicionada y tal vez nos limita,
pero nunca estaremos tan determinados que nuestra responsabilidad se encuentre anulada
totalmente, salvo en casos excepcionales como padecer una enfermedad que nos prive del uso de
la razón.
El ser humano fue creado por Dios libre e indeterminado.
Esta afirmación no implica que nos liberemos de los condicionamientos: el mundo material,
nuestra condición corpórea, la propia historia personal, los condicionamientos culturales, etc.
Para comprender nuestra libertad como personas, tenemos que recordar lo siguiente:
+ Podemos tener libertad, pero ser personas libres implica una decisión y un estilo dé vida.
+ La libertad es un don y una tarea. Tenemos que crecer en -libertad. Y esto lo logramos en
la medida que hacemos uso de nuestra capacidad optando continuamente por todo lo que nos
realiza como personas y rechazando todo lo que nos esclaviza.
+ Hay una «libertad de» y una «libertad para». La libertad se apoya en la responsabilidad y
está orientada a nuestra capacidad de comprender el proyecto que Dios tiene para la humanidad
en general y para cada ser humano en particular.
+ Ser libres es estar llamados a ser artífices de nuestra propia historia, a pesar de los
condicionamientos.
La libertad nos impulsa a querer que todos los seres humanos sean libres, porque mi libertad
se complementa con la de los demás. En el rechazo a todas las esclavitudes, vamos creciendo en
la capacidad de elegir. Por eso, mi libertad no termina donde empieza la del otro, sino que mi
libertad esta en comunión con la libertad del otro.
Si una persona no es libre, yo debo comprometerme en el esfuerzo para que lo sea. Si una
persona sufre, toda la humanidad ha de sufrir con ella.
Todo en esta vida
Todo en esta vida es un decidir si me voy contigo o me quedo aquí; romper los muros
de mi propia casa ir mar adentro y pescar, por Ti.
Hoy mi pueblo está clamando pide vida, pide amor; gritan mis hermanos y llega hasta
el cielo su voz. La misión que Tú me has dado quiero hacerla realidad. Luchar por la vida,
luchar por un mundo de paz.
Me has hablado en mil canciones, mas no te quise escuchar; cerré mis oídos porque es
muy difícil hablar. Hace tiempo que pregunto tu respuesta escucho hoy, tu voz habla
adentro y por tu camino ya voy.

Actividad
1. Leemos en grupo “Hacia una definición de la libertad”. A par-
tir de lo leído, elaboramos un mapa conceptual que desarrolle
el tema del texto.
2. Leemos y escuchamos la canción “Todo en esta vida” y a par-
tir de ella elaboramos una definición de libertad.
Escriban una lista que exprese 10 requisitos para vivir en
libertad

El hombre lleva en sí la señal de su «imagen y semejanza» con Dios. Optar por vivir a
fondo o nuestra identidad implica comprender que estamos llamados a poner en juego un
hermoso regalo: la libertad.
1. Lean en el Antiguo Testamento: Ecli. 15, 1 1 -20 y comenten en grupo:
¿Qué responsabilidad trae aparejada la libertad?
¿Qué exigencias implica el descubrirnos como seres libres?
El hombre tiene, pues, la capacidad de ser libre, de optar por el bien, de elegir su
personalización y su crecimiento en el plano de su triple relación:
 trascendente (hacia Dios);
 fraterna (hacia sus hermanos, los hombres);
 cósmica (hacia todas las cosas creadas).
Tenemos por delante todo este universo de relaciones, y podemos allí experimentar
ese regalo de Dios: la libertad. En el Documento de Puebla, nuestros obispos nos
presentan una reflexión sobre la experiencia de la libertad humana. En ella se muestran
opciones que el hombre hace, según lo anime la dinámica del pecado o la dinámica de la
Gracia, así como las consecuencias para cada opción. Veamos una síntesis:
Quien elige el amor Quien elige el egoísmo
(Gracia) (Pecado)
 Vive sus tres dimensiones:  Se cierra ala
 Colabora en el designio del Salvador (187). triple acción: -
Adora ídolos.
 Vive en comunión con Dios y con los hermanos
 Pretende construir un reino en este mundo, sin
(350).
Dios (185).
 Ejercita su capacidad de compartir (243).
 Destruye la convivencia fraterna (185).
 Ama la vida y la respeta (318).
 Profana al hombre (298).
 Reconoce que su persona y la de los demás es un
DON, un VALOR, una TAREA (319)  Abusa del poder (500) y se entrega al vicio (58).
 Somete el mundo con su trabajo y sabiduría (323).  Rompe su relación con la naturaleza (139.327),

Consecuencias Consecuencias
Crece como PERSONA LIBRE, realizándose en: el Se convierte en un ser disminuido y esclavo: ambicio-
amor, la comunión, la participación, la solidaridad, el so
dominio de sí mismo, la alegría, la esperanza, la justicia (328), arrogante (192), condicionado (335.392),
realizada en la paz, la castidad, la entrega desinteresada dominante (476), egoísta (328.529), envidioso
de sí mismo (Cf. 969). Alborea así un HOMBRE NUE- (328), envilecido (328), hedonista (328), infiel
VO en un MUNDO NUEVO (Cf. 191). (192), injusto (328).

La tierra se vuelve un CAMPO DE BATALLA don-


de reinan: la violencia, el odio, la explotación, la
servidumbre (Cf. 184).

2. Busquen en el documento de Puebla las referencias a los números que indican en el cuadro,
comenten en grupo y escriban sus conclusiones.

Libertad para optar


Una de las condiciones esenciales de la persona es la capacidad de ser libres y de responder de
forma autónoma a los desafíos que la vida nos presenta.
La libertad es la capacidad que tenemos de elegir entre lo que es bueno y lo que nos realiza
como personas. Se apoya en la responsabilidad. Yo soy responsable en la medida en que puedo
optar, y, a la vez, sólo si mi elección es la correcta puedo crecer en el ejercicio de la libertad.
Cuando hago una elección que me deshumaniza pierdo libertad (ser libre no es hacer lo que
me plazca, sino hacer lo que me realiza como persona). Por ejemplo: yo puedo elegir pecar, pero en
la medida que lo hago pierdo libertad y a la vez pierdo autonomía porque yo mismo me voy
esclavizando.
Parábola del hombre de las manos atadas
Érase una vez un hombre como todos los demás. Tenía cualidades positivas y negativas. No era
diferente del resto de los hombres.
Una noche, repentinamente golpearon a la puerta de su casa; cuando abrió, se encontró con
algunos amigos que, queriéndolo mucho, habían decidido hacerle un favor: atarle las manos.
Ambas manos le ataron.
Mientras él se resistía, sus amigos lo tranquilizaban diciéndole que lo hacían para cuidarlo y
porque lo querían.
«Atado de manos no podrás hacer nada malo», le dijeron. (Se olvidaron de decirle que
tampoco podría hacer nada bueno.)
Después sus amigos se fueron, pero uno de ellos quedó en la puerta como centinela para
cuidar que nadie le hiciera mal de desatarlo y para atender todo lo que necesitara.
Al principio, el hombre de las manos atadas se desesperó y trató con todas sus fuerzas de
romper las ataduras. Lo intentó con los dientes, con sus pies; buscaba desesperadamente
desprenderse, pero le resultó imposible.
Pasaron las horas, los días... y el hombre se desalentó. Se fue convenciendo de lo inútiles que
eran sus esfuerzos e intentando, lentamente, acomodarse a su nueva situación. No sin dificultad,
consiguió valerse para seguir subsistiendo con las manos atadas.
Le costaba mucho quitarse los zapatos, aunque un día hasta consiguió poner pasta dental en el
cepillo y lavarse los dientes. Y así, poco a poco, este hombre fue olvidando que alguna vez sus
manos habían estado libres.
Mientras todo esto le sucedía, el centinela de turno tenía la misión de comunicarle día tras día
las cosas malas que realizaban en el exterior los hombres con las manos libres. Lo que se olvidaba
era de decirle las cosas buenas que esos mismos hombres hacían
con las manos libres.
Pasaron muchos años. El hombre ya se había acostumbrado a
las ataduras. Cada tanto, el centinela de turno le recordaba lo
agradecido que tenía que estar de que lo hubieran salvado de
hacer algo malo...
Un día, llegaron a la puerta otros hombres que
sorprendieron al centinela de turno, entraron en la casa y
cortaron las ligaduras que ataban las manos del hombre. «Ya sos
libre», le dijeron.
Pero habían llegado demasiado tarde. No sin tristeza, se
dieron cuenta de que las manos del hombre estaban atrofiadas.

Reflexionamos y respondemos
1.¿Qué sintieron al leer la parábola?
2.¿Cuáles son los personajes que aparecen? ¿Qué hacen?
3.¿Qué consecuencias tienen esas acciones?
4.¿Con qué podrían comparar esta parábola? ¿Por qué?
El hombre como persona es un don y una tarea. Se realiza en el ejercicio
pleno de la libertad movida e impulsada por el amor
Carlos José Ñañez,
Arzobispo de Córdoba
Buscar la realización al margen de Dios sólo nos conduce a frustrarnos como personas. Esta
frustración no es un castigo de Dios, sino que somos nosotros mismos los que causamos esto por
no responder al llamado más genuino y auténtico de nuestro propio ser.
Dios no nos abandona, siempre está a nuestro lado dispuesto a acudir en nuestro auxilio y
«no dejarnos caer en tentación»; pero somos nosotros los que, deslumbrados por falsas promesas,
corremos tras espejismos que nos dejan vacíos y profundamente frustrados.
Es común escuchar: «sí te sentís mal, salí a comprar algo y se te va a pasar». Sin embargo,
sabemos que no es en el consumir por el consumir mismo que se encuentra la paz del corazón.
Por el contrario, esto suele generar nuevas y más profundas angustias que nos hacen entrar en un
camino de frustración.
Entonces, aunque las presiones que recibimos sean muchas, no anulan nuestra
responsabilidad para dar una respuesta que nos realice como personas. Esa respuesta es la que nos
impulsa a vivir conforme a los valores y a la ley del Amor. Es lo que Dios nos pide: ser capaces de
asumir en lo cotidiano el proyecto que Él tiene para la humanidad.
Así comprobaremos que la propuesta de Dios, lejos de limitar nuestra vida, colma las
expectativas de nuestro corazón, nos revela la autenticidad de un valor. Por ejemplo, el «no
matarás» nos enseña la profundidad del valor de la vida, el «no cometerás actos impuros» nos
revela la totalidad de la ternura y del amor humano, el «no mentirás» nos muestra la importancia
de vivir en la verdad para alcanzar la felicidad.
Nuestra respuesta positiva frente a la Ley de Dios nos permite amarlo y amar a todos de una
forma más profunda. La realización personal no pasa entonces por vivir caprichosamente, sino
por descubrir la libertad de quien responde al amor gratuito de Dios.
Nuestro deseo no se llena con la posesión de bienes en forma desmedida, ni con la
dominación de las personas a mi antojo, ni con buscar
placeres cada vez más exóticos y extravagantes. Nuestro
deseo nos permite encontrarnos con nuestro Creador y
hacer de este encuentro la sintonía que nos permita vivir
acorde con su voluntad.
Sólo viviendo en el Amor nuestro corazón encuentra la
auténtica felicidad y solamente respondiendo en forma
positiva al llamado de Dios, descubrimos y experimentamos
la auténtica libertad.
Analizamos las canciones de la página siguiente y respondemos:
1. ¿Cómo expresan lo que vivís y soñás para vos y los que te rodean ?
2. Narra una experiencia personal que este en sintonía o en oposición con lo planteado en
estas canciones.
DEBES AMAR CANCION DE MADRUGADA
Debes amar, la arcilla que va en tus
manos, Voy a Vos, recorriendo mi desierto,
debes amar, su arena hasta la con el corazón despierto por tu cruz
locura y si no, y tu amistad. Esa cruz clavó mi alma
no la emprendas que será en vano. con tu cuerpo... pero sé que no
estás muerto: juraste regresar.
Sólo el amor alumbra lo que No es verdad que esa noche hayan
perdura, quedado para siempre silenciados
sólo el amor convierte en milagro el tu mirada y tu abrazo.
barro. “Regresé, Yo soy la Vida entregada
y al alba resucitada, Viviente
Debes amar, el tiempo de los Vencedor".
intentos, No es verdad que lo turbio de mi
debes amar, la hora que nunca vida, mi vergüenza y mis heridas,
brilla sean más fuertes que tu amor.
y si no no pretendas tocar lo cierto. Si en la cruz al ladrón le diste
abrigo, es que tu nombre es
Sólo el amor engendra la maravilla, Amigo... ¡tu regalo, el perdón!
sólo el amor consigue encender lo Sí, Jesús, sos Aquél en quien
muerto. creemos, al que amamos y no
vemos, nuestro hermano, nuestro
Sólo el amor engendra la maravilla, Dios. Llámanos, te escuchamos y
sólo el amor consigue encender lo seguimos, que es verdad que
muerto. estamos vivos: nuestra vida sos Vos.
EI deseo de ser feliz está presente
a diario en nuestra existencia. Ese apetito de felicidad pareciera insaciable, nos reconocemos como
seres que buscamos colmar un espacio que nunca se llena. Nuestra tendencia a buscar felicidad por
momentos no es suficiente, queremos ser felices de una manera permanente y allí aflora cierto
sabor amargo de frustración. Somos felices por momentos.
Algunas veces intentamos llenar esa necesidad de la felicidad con pertenencias (soy feliz en la
medida en que tengo ) otras, con apariencias (soy feliz si los demás se dan cuenta de que...); otras,
con cuestiones intelectuales (soy feliz porque pienso...) y, en muchas ocasiones, reducimos la
felicidad a un sentimiento de placer.
En nuestra búsqueda de la felicidad se juega nuestro futuro; hay una experiencia que nos da
algunas pistas: somos felices en relación con otros, no
podemos imaginamos felices solos, aislados. La
felicidad nos abre a otros y, de manera particular, a
Aquel que es capaz de saciar este deseo tan grande de
felicidad: el Dios de la Vida, nuestro Padre.
En su hijo Jesucristo, Él nos propone un camino de
seguimiento, un camino para buscar, construir y gozar
de ese proyecto de Hombre Nuevo que tiene como
horizonte la felicidad perfecta, ser plenos en su Reino.

A veces no comprendo
por qué camino tanto si no
A veces no comprendo he de hallar la sombra que
mi rodar por el mundo, este el corazón ansía. Quizá un
medir tierra, y el camino y profundo acorde profundo
el mar, esto que siendo sim- como un llanto he de escu-
ple se ha tornado profundo. char un día he de escuchar
Voz que ordena a mi un día.
paso: más allá, más allá... Atahualpa Yupanqui
Leemos el cuento Tres pequeños árboles

Tres pequeños arboles


Érase una vez, en la cumbre de una montaña, tres
pequeños árboles. Juntos pensaban sobre lo que llegar a ser
cuando fueran grandes.
El primer arbolito miró hacia las estrellas y dijo: «Yo
quiero guardar tesoros. Quiero estar repleto de oro y ser
llenado de piedras preciosas. ¡Yo seré el baúl de tesoros más
hermoso del mundo!. El segundo arbolito miró al pequeño
arroyo realizando su camino al océano y dijo: «Yo quiero viajar a través de aguas temibles y
llevar reyes poderosos sobre mi. ¡Yo seré el barco más imponente del mundo!. El tercer arbolito
miró hacia el valle que estaba a los pies de la montana y vio hombres y mujeres trabajando en
un pueblo trabajador: «Yo no quiero irme de la cima de la montaña nunca. Yo quiero crecer
tan alto que cuando la gente del pueblo se pare a mirarme, levanten su mirada al cielo y
piensen en Dios. ¡Yo seré el árbol más alto del mundo!.
Los años pasaron. Llovió, brilló el sol y los pequeños árboles crecieron alto.
Un día, tres leñadores subieron a la cumbre de la montaña. El primer leñador miró al
primer árbol y dijo: «¡Que árbol tan hermoso es éste!», y, con la arremetida de su hacha
brillante, el primer árbol cayó. «¡Ahora me deberían convertir en un baúl hermoso. para
contener tesoros maravillosos!», dijo el primer árbol.
El segundo leñador miro al segundo árbol y dijo: «Este árbol es muy fuerte, es perfecto
para mi». Y, con la arremetida de su hacha brillante, el segundo árbol cayó. «¡Ahora deberé
navegar aguas temibles!», pensó el segundo árbol, «seré un barco imponente para reyes temidos
y poderosos.»
El tercer árbol sintió su corazón sufrir cuando el último leñador lo miró. El árbol se paró
derecho y alto y apuntando ferozmente al cielo. Pero el leñador ni siquiera miró hacia arriba y
dijo: <<Cualquier árbol es bueno para mí». Y, con la arremetida de su hacha brillante, el tercer
árbol cayó.

El primer árbol se emocionó cuando el leñador lo llevó a una carpintería. Pero el carpintero
lo convirtió en una caja de alimento para animales de granja. Aquel árbol hermoso no fue
cubierto con oro, ni llenado de tesoros, sino con polvo de cortadora y con alimento para
animales de granja hambrientos.
El segundo árbol sonrió cuando el leñador lo llevó cerca de un embarcadero, pero ningún
barco imponente fue construido ese día. En lugar de eso, aquel árbol fuerte fue cortado y
convertido a un simple bote de pesca; era demasiado chico y débil para navegar en el océano,
ni siquiera en un río, y fue llevado a un pequeño lago.
El tercer árbol estaba confundido cuando el leñador lo cortó para hacer tablas fuertes y lo
abandonó en un almacén de madera: «Qué estará pasando» — fue lo que se preguntó el árbol—.Yo
todo lo que quería era quedarme en la cumbre de la montaña y apuntar a Dios...»»
Muchísimos días y noches pasaron. A los tres árboles ya casi se les habían olvidado sus sueños.
Pero una noche, una luz de estrella dorada alumbró al primer árbol cuando una joven mujer puso
a su hijo recién nacido en la caja de alimento.
«Yo quisiera haberle podido hacer una cuna al bebé», le dijo su esposo a la mujer. La madre le
apretó la mano a su esposo y sonrió mientras la luz de estrella alumbraba a la madera suave y fuerte
de la cuna.
Y la mujer dijo: «Este pesebre es hermoso.
Y de repente. el primer árbol supo que contenía el tesoro más grande del mundo.
Una tarde, un viajero cansado y sus amigos se subieron al viejo bote de pesca. El Viajero se
quedó dormido mientras el segundo árbol navegaba tranquilamente hacia dentro del lago. De
repente. una impresionante y aterradora tormenta llegó al lago. El pequeño árbol llenó de temor,
sabia que no tenia lo tuerza para llevar todos esos pasajeros a la orilla salvo con ese viento y esa
lluvia El hombre cansado se levantó, se paró y. alzando su mano, dijo: «calma
La tormenta se detuvo tan rápido como comenzó de repente, el segundo árbol supo que él
llevaba navegando al Rey del Cielo y de la Tierra.
Un viernes en la mañana, el tercer árbol se extraño cuando sus tablas fueron tomadas de aquel
almacén de madera olvidado. Se asustó al ser llevado a través de una impresionante multitud de
personas enojadas.
Se llenó de temor cuando unos soldados clavaron las manos de un hombre en su madera. Se
sintió feo, áspero y cruel. Pero un domingo por la mañana, cuando el sol brilló y la tierra tembló
con júbilo. el árbol supo que el amor de Dios había cambiando todo, hizo que el árbol se sintiera
fuerte porque cada que la gente pensara en el tercer árbol, estarían pensando en Dios. Eso era
mucho mejor que ser el árbol más alto del mundo.
¿Qué te llamo la atención del cuento? ¿por qué?
Los árboles, ¿fueron felices finalmente?
Elaboramos el decálogo de la felicidad

No es lo mismo para todos


Si pudiéramos reunir a un grupo de personas venidas de los más diversos rincones del
planeta, y de distintas épocas de la historia, y les preguntáramos: ¿qué es lo que más desean?, es
muy posible que la gran mayoría nos respondiera: «quiero ser feliz». También es probable que no
nos contestaran lo mismo si preguntáramos qué es para ellos la felicidad...
Podríamos hacer un pequeño experimento, un poco más fácil que el anterior: elegir personas
de distintas edades y preguntarles qué es lo que las hace felices.
Seguramente, las respuestas serán muy distintas para cada uno, porque la felicidad es uno de
los «sueños» más profundos y perdurables de la humanidad. Lo que ocurre es que tiene caminos
muy diversos.
INVESTIGAMOS

Busquen una serie de canciones


que hablen de la felicidad.
Elijan dos personajes de Reflexionen sobre lo que propo-
la historia e indaguen cómo nen para alcanzar la tan ansiada felici-
fueron felices, cuáles eran sus dad
sueños, qué hicieron para
lograr que se les cumplieran...

Preparen una encuesta para que la con- testen algunas


personas de la escuela o del barrio. Tengan en cuenta: edad,
sexo, su opinión sobre la felicidad, lo que entiende que se
necesita para ser feliz, los modelos de personas felices y las
limitaciones para alcanzar la felicidad.

Jesús viene a nuestro encuentro Que los oídos de Dios oigan nuestra canción
Gracias, Señor, por la vida que nos das. alegre de peregrinos, nuestra oración de fati-
Gracias. Señor, porque nos querés libres. gados caminantes, nuestra plegaria de jóve-
Gracias, Señor, por el don de la fe. Gracias, nes llenos de vida y de ilusiones. Que la Pala-
Señor. por los compañeros y compañeras de bra de Dios nos hable en cada tramo del ca-
este nuevo grupo. Gracias. Señor, por el mino, que nos levante y nos dé fuerzas, que
amor que nos muestran los que nos rodean. nos dé ánimo y espíritu de hermandad. Que
Gracias, Señor por el amor que nosotras y las manos de María, nuestra Madre. nos pro-
nosotros podemos mostrar a los demás... tejan y nos sostengan en las dificultades del
Que la fuerza de Dios nos mantenga firmes camino.
en nuestro camino. Que los ojos de Dios Por Jesucristo nuestro Señor. Amén.
sonrían a nuestros pasos.
La felicidad, tal como la experimentamos, es un
proceso y se vive por momentos. En la suma de esos
momentos hacemos la experiencia de responder a la
invitación de Jesús amigo a seguirlo en su compromiso por el
Reino, como sus discípulos.
Leé La camisa de la felicidad y compartí oralmente con tus
compañeros.
1) ¿Tiene sentido esta parábola en nuestra época? ¿cuál?
2) ¿Qué te dice el texto sobre tu experiencia de amistad?
3) ¿Cuáles son las características de las «camisas» que a veces andás buscando? Enumerá por lo
menos seis y describí las situaciones que expresen esa búsqueda.

LA CAMISA DE LA FELICIDAD
Un gran marajá indio no era todo el reino con la misión do de una montaña, una cue-
feliz. Sin embargo, tenía todo de encontrar al hombre feliz va en la que vivían unos
lo que un mortal puede y llevarle su camisa. monjes. Habían abandonado
desear: un palacio lujoso, Los enviados partieron hacia el mundo para dedicarse a
riquezas en abundancia, es- los cuatro puntos cardinales las prácticas de la oración y
clavos a su disposición, dis- del reino e interrogaron a la la meditación. No poseían
tracciones renovadas incesan- gente, Por todas partes, la nada y se alimentaban con
temente. misma respuesta: «No, no soy un grano de arroz por día. Al
A pesar de eso, no era feliz. feliz..,». primero a quien se acerca-
Un día, fue en busca de su —No tengo más que un peda- ron, uno de los enviados le
gran visir y le preguntó qué zo de tierra y no puedo ali- hizo la pregunta:
debía hacer para ser feliz. mentar a mi familia. —¿Eres feliz?.
—Nadie es feliz —le respondió —¿Yo? Completamente feliz.
el hombre. —No estoy bien con mi pelle- —Entonces, dame tu camisa
Insatisfecho, el marajá plan- jo; no estoy de acuerdo con- en este momentos
teaba su problema a todos migo mismo. Por unos instantes, el monje
los que encontraba. Hasta —Estoy terriblemente angus- fijó su mirada profunda y
que un sabio aceptó compro- tiado... transparente sobre el rostro
meterse y le dio su receta de Ricos y pobres, varones y mu- de su interlocutor, Después
la felicidad: «Llegará a ser jeres, adultos y niños, nadie dijo, con un gesto que indi-
feliz solamente si se pone la era feliz. caba una evidencia:
camisa de un hombre feliz». Los legados estaban desespe- —Muy gustoso te daría mi
Inmediatamente, el marajá rándose cuando, un día, uno camisa, pero ya hace tiempo
envió a sus empleados por de ellos descubrió, en el fon- que no poseo una.
1. Lee la letra de la canción En busca de un sueño, marca los versos que para vos describan tus
búsquedas de la felicidad. Luego responde: ¿Te parece que buscar un sueño y hallarlo es sinónimo
de felicidad?

En busca de sueño

En busca de un sueño bella locura, en busca de un el amante


sueño que mata y que cura.
En busca de un sueño se En busca de un sueño
En busca de un sueño
acerca este joven, en busca de simula el tunante.
desatan ciclones-. En busca
un sueño van generaciones
de un sueño cuántas En busca de sueño tallaron
En busco de un sueño ilusiones la piedra, en busca de un
hermoso y rebelde. sueño Dios vino a la tierra.
En busca de un sueño
En busca de un sueño partí
En busca de un sueño que transcurren los ríos, en
con mi día, en busca de un
gana y que pierde. En busca busca de sueño se salta al
sueño que no hay todavía.
de un sueño de bella locura, vacío.
en busca de un sueño de Silvio Rodríguez
En busca de sueño abraza

2. Leemos Mt. 13, 44-46 y respondemos

¿Qué nos propone el texto?


¿A qué clase de felicidad aspiran?
Todos buscamos la felicidad. Fuimos creados para ser felices y toda nuestra vida es un camino
que puede acercarnos a ese fin. Lo más difícil es aprender a encontrarla. Si bien hay muchos
caminos que se nos proponen para ser felices, no todos llegan al lugar que anuncian, ni son
posibles para todos, y pueden terminar destruyendo nuestra identidad.
La felicidad más profunda es aquella que nos ayuda a realizarnos plenamente como personas
humanas. Por eso, la búsqueda de la felicidad va profundamente unida al conocimiento de uno
mismo, de nuestras capacidades y defectos, del contexto comunitario e histórico en el que vivimos,
de nuestra habilidad para leer críticamente todas las propuestas que circulan a nuestro alrededor...
Nuestro Dios, que nos creó para la Vida y nos conoce como nadie, quiso mostrarnos el
camino de la felicidad. Pero no «desde el cielo», sino haciéndose uno de nosotros. En Jesús de
Nazaret, Dios nos muestra el Camino que puede llevarnos a la plena felicidad, la ruta de nuestra
imagen más profunda que puede asemejarnos al sueño que Dios tiene para cada uno de nosotros.
Entonces, ¿la Fe tiene alguna respuesta a nuestras ansias de felicidad?

1) Te proponemos que leas atentamente estos dos relatos del Evangelio de San Lucas. En
ambos, Jesús se encuentra con dos personas que buscan ser felices. Ellas se le acercan, aunque con
diferente actitud: Lc. 10, 17-22 Lc. 19, 1-10

¿Cuál de las dos te parece que fue más sincera? ¿Por qué?

2) En los dos pasajes del Evangelio de Lucas, el dinero y las riquezas juegan un papel
importante. ¿Cuál es la relación entre el dinero y la felicidad en ambos casos? ¿En tu caso qué papel
juega el dinero?
Nos realizamos como personas
En nuestra vida vamos haciendo opciones, pero vimos que hay una opción que es
central y que orienta a todas las demás: nuestra opción fundamental. Las opciones de todos
los días se juegan en nuestra conciencia, lugar donde escuchamos la voz de Dios.
La opción fundamental por Dios nos lleva a vivir de alcanzar la felicidad.
En la actualidad, la sociedad nos presenta propuestas que intentan convencernos
seremos felices si asumimos el estilo de vida donde lo único importante es satisfacer deseos
sin pensar en nadie o en nada más. Estas propuestas tienen una motivación central: la
invitación al egoísmo. Mediante la publicidad se van generando en nosotros nuevos deseos o
promesas de falsa felicidad. Así nos encontramos con mensajes que nos proponen consumir
sin límites, dominar sin límites y buscar el placer por el placer mismo.
1. Buscamos una imagen de publicidad gráfica en la que les propongan alcanzar la
felicidad.
2. ¿Cuál es el estilo de vida que muestra? ¿Qué te propone?
3. Leemos lo que nos dice la Iglesia

"Todos los fieles, de cualquier estado o régimen de vida, son llamados a la plenitud de la
vida cristiana y a la perfección de la caridad" (LG 40). Todos son llamados a la santidad: "Sed
perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto" (Mt. 5, 48): Para alcanzar esta perfección,
los creyentes han de emplear sus fuerzas, según la medida del don de Cristo, para entregarse
totalmente a la gloria de Dios y al servicio del prójimo. Lo harán siguiendo las huellas de
Cristo, haciéndose conformes a su imagen, y siendo obedientes en todo a la voluntad del
Padre. De esta manera, la santidad del Pueblo de Dios producirá frutos abundantes, como lo
muestra claramente en la historia de la Iglesia la vida de los santos (LG 40). CATIC n° 2013
La respuesta con que se realiza el hombre: el amor.
El hombre que responde positivamente a Dios, asume como propio el proyecto de la
sabiduría divina, y procura cumplirlo conformando libremente su obrar al llamado de los
valores y a la ley del amor.
En este camino de salvación, la respuesta del hombre se hace digna de Dios y de él
mismo por los bienes que procura y por la sinceridad y profundidad de sus actos. La
voluntad se estabiliza en el bien a través de actitudes que llamamos virtudes, por las que el
obrar moral se integra más en la raíz de la persona, cuyas decisiones se hacen más acertadas y
rápidas, más fáciles y gozosas, más firmes y libres. La virtud perfecciona a la persona misma,
la define en sus rasgos, la hace crecer en unidad e identidad y la orienta a la vida
bienaventurada. Como el contenido de toda ley tiene por fin la gloria de Dios y el bien del
hombre, toda actitud de respuesta es, en definitiva, amor a Dios y amor al hombre. Las
virtudes humanas apuntan hacia la caridad como a su última perfección.
CEA, Dios, el hombre y la conciencia, 44
Las Bienaventuranzas contienen el to de Jesús:
su propuesta para que seamos plenamente «felices».
Contienen el verdadero «mapa» que nos conduce a la
felicidad cristiana. Nos muestran la ruta, el camino
para ser felices.
En primer lugar, las Bienaventuranzas se refieren
a los pasos y las opciones de Jesús. Él mismo fue
pobre, manso, humilde, recto de corazón, tuvo
hambre y sed de justicia y se esforzó por crear la paz
entre los hombres; como consecuencia de esto, fue perseguido. Estas opciones lo hicieron feliz,
como nos lo dice el Evangelio de Juan (Jn. 15, 1 1).
Jesús nos ofrece las Bienaventuranzas como camino para nuestra vida, nos llama a vivir como
Él vivió y nos promete la misma felicidad profunda que alcanzaron aquellos que se animaron a
seguirlo, como lo dijo su propia Madre: «todas las generaciones me llamarán feliz...» (Lc. 1, 48).
Las Bienaventuranzas son un verdadero desafío a nuestra libertad: sólo aquellos que sean
dueños de su vida podrán hacer una opción fundamental por los valores del Reino que este texto
evangélico nos propone y que responde a nuestras aspiraciones más profundas como personas.
En medio de una sociedad marcada por la despersonalización, este llamado de Jesús nos invita
a vivir en plenitud nuestra imagen y semejanza con el Creador de la Vida:
 compartiendo lo que tenemos y lo que somos con los demás;
 siendo solidarios y luchando contra toda forma de miseria;
 viviendo a fondo y con sinceridad comprometidos con la verdad;
 luchando por la igualdad entre todos los seres humanos;
 construyendo la justicia en todos los ámbitos de la realidad.
Vivir el proyecto de las Bienaventuranzas nos acerca a la MIRADA de DIOS sobre el hombre y
la historia. De este modo van transformando nuestro ser, conformándonos como verdaderos
cristianos, profetas y servidores alegres de nuestros hermanos.

Las Bienaventuranzas de Lucas y las de Mateo


Sabemos que los Evangelios son, ante todo, unas catequesis dirigidas a la formación de los
cristianos. Los Evangelios antes de ser escritos, fueron la expresión de una enseñanza oral
transmitida a las comunidades cristianas y tienen, más o menos, una estructura catequética.
Al dirigirse a comunidades Mateo y Lucas acomodan tas bienaventuranzas a problemas
pastorales diversos, a problemáticas espirituales diferentes. De ahí las divergencias observadas.
Sin embargo. ambas versiones se han inspirado en un texto común. De él han brotado las dos
versiones.
¿Cuales son las características esenciales de este gran mensaje? Fundamentalmente tres:
— Se dirigen a los pobres de este mundo. a los marginados de la sociedad, a los que sufren. Los
destinatarios primeros de las bienaventuranzas —pobres, hambrientos y afligidos— no forman mas
que un solo grupo.
— La razón de la dicha es la llegada del Reino. Al decidir establecer su reinado, Dios quiere
manifestar su solicitud preferente haca los que mas sufren, hacia Dios mas desvalidos. Y esto no
por tener los pobres tal o cual disposición interior, sino por et mero hecho de ser los mas
necesitados.
— Las bienaventuranzas de Jesús, ante todo, se refieren a DIOS. Nos manifiestan la voluntad
que DIOS tiene de ejercer su reinado a favor de los pobres y de los oprimidos
Vemos. así, que las bienaventuranzas son (Buena Noticia) de Jesús a los pobres.
A partir de este núcleo común, vamos analizar ambas versiones:
--- Las bienaventuranzas de Lucas van dirigidas a los cristianos que sufren persecución y que
consecuentemente, sufren, pasan hambre y viven pobremente. Todo lo hacen por causa de este
hombre (Lc. 6,22)
Lucas nos habla de estado real de pobreza, de sufrimiento y de persecución soportados a causa
de Jesús, es decir, corno consecuencia de luchar por el advenimiento del Reino entre los pobres
dela tierra.
Las bienaventuranzas de Lucas son las bienaventuranzas de los militantes del Reino, de los
perseguidos por su causa. Intuición subyacente es que el sufrimiento padecido por causa de Cristo,
por causa de los pobres, es tan digno de bienaventuranza como el sufrimiento de la pobreza. Dios
actúa no solo a favor de los pobres, también de los que optan por ellos.
Tras las bienaventuranzas de Lucas, planea la figura de Jesús, pobre y perseguido y él es el
primer bienaventurado por solidaridad con los pobres, por fidelidad su misión.
— Las bienaventuranzas de Mateo no hablan tanto de las consecuencias de militar por el Reino
cuanto de las actitudes interiores con que hay que hacerlo.
Son unas bienaventuranzas que proclaman dichosos a los cristianos (y a todos tos hombres de
buena voluntad), que vivan las actitudes evangélicas, que practiquen la justicia del Reino.
'No son los que dicen: ¡¡Señor, Señor!! los que entrarán en el Reino, sino los que hagan la
voluntad de mi Padre' (Mt 7, 21).
Mateo, con sus bienaventuranzas, va a precisar los verdaderos criterios que permiten la entrada
en el Reino. El Evangelio de Mateo nos obliga a bucear en las actitudes de fondo ante Dios, ante
los pobres y ante los hombres. También tras ellas planea la figura de Jesús, el primero y el mejor en
vivirlas.
Adaptado de Recalde, Ricardo Lázaro, Bienaventuranzas, cuaderno CPC N° 7

Elabora un cuadro
comparativo entre la
bienaventuranza de Lucas y la
de Mateo.
Todo texto bíblico responde al contexto en el que fue escrito. Es evidente que nuestra
situación actual a cambiado mucho en relación con el momento en que las Bienaventuranzas
fueron dichas…
Aquí te presentamos Bienaventuranzas y lamentaciones del siglo XXI:
Felices los que se animan a soñar que aún es posible la verdadera amistad... porque ellos
vivirán una profunda experiencia de amor.
Ay de aquéllos que sólo piensan en manipular a los demás según sus propios intereses...
porque van en camino a la soledad.
Felices los que crean profundamente en el valor de la solidaridad... porque serán capaces de
construir redes sociales de vida y justicia.
Ay de aquéllos que sólo pongan su futuro en manos del éxito económico... porque estarán
construyendo su «bienestar» a costa del hambre de los demás.

En grupos elaboramos algunas bienaventuranzas y lamentaciones al estilo juvenil.

Creo en Ti Padre, ayuda mi píritu Santo que derramas!


poca fe. ¡Qué alegría, Señor recibir el
Oración de la alegría Señor Je- anuncio de tu Reino, sentirme
sús, Qué alegría haberte conoci- libre, llamado al Evangelio de la
do, saber que estás presente en gracia, de la paz y del consuelo!
mi camino, saber que te has Qué alegría Señor, ser hijo de tu
puesto de mi parte, y a pesar de pueblo.
mis locos desatinos no dejas ja- ¡Qué alegría, Señor, saber que tú
más de ser mi amigo! eres mi esperanza, amor que de-
¡Qué alegría, Señor, escuchar tu vuelve la frescura, la roca en que
Palabra que me habla, saber que me apoyo con confianza y el
la siembras en mi alma y germi- abrazo cargado de ternura!
na silenciosa con el agua del Es-
Se reunirán en equipos de cuatro o cinco personas.

a) Cada grupo será un equipo editorial, el cual realizará la primera plana de un periódico, para
ello tienen que nombrar un jefe editorial, dos o tres periodistas y uno o dos diseñadores gráficos,
ya que su labor es hacer un periódico con las noticias más catastróficas que existan, es decir, aque-
llas que hablen de lo peor de la realidad humana.

b) Los requisitos para vender más periódicos son los siguientes: que el nombre del periódico
llame mucho la atención y esté relacionado con la tendencia realista del periódico, que las noticias
sean reales no inventadas, que sean alarmantes, que el diseño gráfico sea atractivo.
Reflexionamos
 Es fácil o no encontrar malas noticias a nuestro alrededor?
 ¿Dónde creen que tiene su origen el mal?
 ¿Por qué existe el mal en la vida?

Al ver la realidad que nos rodea, todas estas noticias que aparecen diariamente en los periódi-
cos, al ver los países en guerra, el incremento de los narcotraficantes, los asesinos múltiples, entre
otros muchos sucesos dramáticamente terribles, al examinar nuestro corazón, podemos palpar que
el hombre está inclinado al mal, que está divido, y nos preguntamos: ¿de dónde viene este mal?
¿Por qué existe si todo fue creado con bondad?
La iglesia enseña, en el Concilio Vaticano II, en la constitución Gaudium et spes, número 13
que:
El hombre, por instigación del demonio, abusó de su libertad, levantándose contra Dios, re-
chazando la ayuda que Él le ofrece, queriendo por propia cuenta lograr
su felicidad.
De esta manera aunque conoce a Dios, no le glorifica como a Dios.
Permitiendo que se obscurezca su estúpido corazón y prefiera servir a la
criatura, no al Creador. Lo que la Revelación divina nos dice coincide
con la experiencia, de ahí que el mal sea una realidad palpable.
De tal forma, cuando el hombre examina su realidad, producto de
su corazón, comprueba su inclinación al mal, como en este caso al ver
las noticias de los diversos periódicos, sintiéndose abrumado por mu-
chos males, ya que al negarse a recibir ayuda de Dios, que es el princi-
pio de todo, rompe el debido orden que existe entre todas las cosas.
Dios, en el inicio de todas las cosas, llamó para vivir en estado de gra-
cia, es decir, lo creó no solamente bueno, sino también en plena amis-
tad con su creador y en armonía consigo mismo y con toda la creación.
Adán y Eva fueron constituidos en un estado de santidad y de justicia
original, que les permitía participar de la vida divina; en el principio de todo, por la irradiación de
esta gracia, todas las dimensiones del hombre estaban fortalecidas, no iba a morir, ni sufrir, no se
iba a enfermar, tenía dominio de sí, ya que estaba íntegro y ordenado en todo su ser, libre de todo
mal, mientras permaneciese en la intimidad divina, confiado en su creador.
Sin embargo, el hombre rechazó la fiesta de amor del Señor, porque no quiso vivir en la forma
de libre sumisión a Dios, dependiendo de su amor, veamos como lo explica el texto de la caída en
Génesis.
Al leer el texto de Génesis 3, 1-7 nos damos cuenta que:
El hombre libremente, aun cuando vivía en amistad con Dios en el Edén, decide rechazar su
amor, que se expresa en la desobediencia a la única prohibición que les había hecho: comer el fru-
to del árbol del bien y el mal. Es muy interesante descubrir que esa prohibición significa depender
de Dios, estar sujetos a él, obedecerle, reconocerle como Señor de nuestras vidas; saberse pequeño,
necesitado de él, como criaturas e hijos, es decir, vivir en una relación de amor.
El hombre, instigado por la serpiente, símbolo del demonio, libremente opta por romper esa
relación de amor, que lo hacía estar en comunión con Dios. El pecado es entonces el rechazo del
hombre al amor de Dios, es desconfiar de la bondad infinita del creador, es desobedecer su pala-
bra, creyendo más en la mía o en la de otros hombres. Por ello, como dice Pablo, “todos pecaron”,
ya que “por la desobediencia de un solo hombre, todos fueron constituidos pecadores.” (Rm 5, 19)
Detrás de la elección desobediente de nuestros primeros padres se halla una voz seductora,
opuesta a Dios que, por envidia, los hace caer en la muerte: el demonio. La serpiente, a través de
un diálogo engañoso con la mujer, la hace dudar de la bondad de Dios, “¿Así que Dios les dijo que
no comieran de ninguno de los árboles del huerto?” (Gén 3, 1) hasta llevarla a desconfiar del amor
de su creador, utilizando seductoramente la mentira para tentar a la mujer, “-¡De ningún modo
morirán! Lo que pasa es que Dios sabe que en el momento en que coman se les abrirán los ojos y
serán como Dios, conocedores del bien y el mal” (Gén 3, 4-5). Este ángel caído, que rechazó libre,
radical e irrevocablemente a Dios y a su Reino, desde el principio y hasta el fin, instiga al hombre
para separarlo de Dios.

LA CAIDA
1) Lee el siguiente texto bíblico sobre el pecado y subraya lo que te parezca más interesante o
que te haga reflexionar, recuerda que este relato es simbólico, es decir, expresa de manera figurada
la verdad profunda de la naturaleza herida del ser humano.
Dios al crear al hombre plantó un huerto para él: el Edén, “El Señor Dios hizo brotar del suelo
toda clase de árboles hermosos de ver, y buenos para comer, así como el árbol de la vida en medio
del huerto, y el árbol del conocimiento del bien y el mal.” (Gén 2, 8-9) Dios le dijo a Adán: “-
Puedes comer de todos los árboles del huerto; pero no comas del árbol del conocimiento del bien y
el mal, porque si comes de él morirás irremediablemente.” (Gén 2, 16-17)

El relato sobre el pecado


“La serpiente era el más astuto de todos los animales del campo que había hecho el Señor
Dios.
Fue y dijo a la mujer:
-¿Así que Dios les dijo que no comieran de ninguno de los árboles del huerto?
La mujer respondió a la serpiente:
-Podemos comer el fruto de los árboles del huerto; sólo nos prohibió Dios, bajo amenaza de
muerte, comer o tocar el fruto del árbol que está en medio del huerto.
La serpiente contestó a la mujer:
-¡De ningún modo morirán! Lo que pasa es que Dios sabe que en el momento en que coman
se les abrirán los ojos y serán como Dios conocedores del bien y el mal.
Entonces la mujer se dio cuenta de que el árbol era bueno para comer, hermoso a la vista y
deseable para adquirir la sabiduría. Así que tomó de su fruto y comió; se lo dio también a su mari-
do, que estaba junto a ella, y él también comió. Entonces se les abrieron los ojos, se dieron cuenta
que estaban desnudos, entrelazaron hojas de higuera y se taparon con ellas.” Gén 3, 1-7

2) Analiza la forma en que la serpiente seduce a la mujer para comer del árbol del bien y el mal,
para ello completa las oraciones con las siguientes palabras que vienen en el recuadro.

a) La serpiente toma la prohibición de Dios, algo que era para el __________ del hombre, co-

Bien Mal Ama Odia Mentira Verdad Serpiente Mujer Enga-


ña Dios Confianza Desconfianza Diálogo Enseñanza Asegura

mo una herramienta para hacer creer a la mujer que Dios no los _____________ realmente.
b) La _____________ de la serpiente tiene aspectos reales, como el hecho de que no podían
comer de un árbol, pero a la vez tiene aspectos inventados, ya que muchas veces la mentira toma
parte de la verdad pero la tergiversa.
c) La _____________ miente ya que Dios sólo les prohibió comer del árbol del bien y el mal y
ella dice que no les permitió comer de todos los árboles.
d) La serpiente seduce a la mujer a través de hacerle creer que Dios los ________________.
e) La serpiente seduce a la mujer asegurándole que si come del árbol del bien y el mal será co-
mo ________________.
f) La serpiente crea __________________ entre Dios y el hombre a través del
_______________ que tiene con la mujer.

3) Ahora identifica qué actitudes tuvo Eva, las cuales permitieron que cayera en la trampa
de la serpiente; para ello subraya las que creas correctas.
a) Permite el diálogo con la serpiente. f) Desconfía de Dios.
b) Desea ser como Dios. g) Es obediente.
c) Es desobediente. h) Es humilde.
d) Confía en Dios. i) Quiere depender de sí misma.
e) Le gusta depender de Dios. j) NO habla con la serpiente.
El pecado de Original o de nuestros primeros padres trae consigo 5 consecuencias:

La perdida de la santidad original, teniendo miedo a Dios, creando una falsa imagen, la de un
Dios inquisidor, “Oyeron después los pasos del Señor Dios que se paseaba por el huerto al fresco
de la tarde, y el hombre y su mujer se escondieron de su vista entre los árboles del huerto. Pero el
Señor Dios llamó al hombre diciendo: -¿Dónde estás? El hombre respondió: -Oí tus pasos en el
huerto, tuve miedo y me escondí, porque estaba desnudo.” (Gén 3, 8-10) ¿Cuántas veces pensamos
que Dios sólo está viendo nuestros defectos? Como si fuera un ser justiciero, que sólo le interesa la
regla, para castigar, esa imagen desfigurada de Dios es consecuencia del primer pecado que produjo
una naturaleza herida, que tiene que ser reparada por la gracia del Espíritu Santo.
Queda destruida la armonía en la que se encontraba el ser humano: el dominio de las faculta-
des espirituales del alma sobre el cuerpo se quiebra, ya que libremente, por desear ser más de lo
que es, es decir, por querer tomar el lugar de Dios, ve las cosas con malicia, pierde la santidad que
le había sido otorgada, “Entonces la mujer se dio cuenta de que el árbol era bueno para comer, her-
moso a la vista y deseable para adquirir sabiduría. Así que tomó de su fruto y comió; se lo dio tam-
bién a su marido, que estaba junto a ella, y él también comió. Entonces se les abrieron los ojos, se
dieron cuenta de que estaban desnudos, entrelazaron hojas de higuera y se taparon con
ellas.” (Gén 3, 6-7)
La unión entre el hombre y la mujer es sometida a tensiones, ya que sus relaciones estarán
marcadas por el deseo y el dominio, “El Señor le preguntó: -¿Quién te hizo saber que estabas desnu-
do? ¿Acaso has comido del árbol del que te prohibí comer? Respondió el hombre: -La mujer que
me diste por compañera me ofreció el fruto del árbol, y co-
mí. Entonces el Señor Dios dijo a la mujer: -¿Qué es lo que
has hecho? Y ella respondió: -La serpiente me engañó y co-
mí” (Gén 3, 11- 13) La relación entre el hombre y la mujer
ya no es plena, él culpa a ella de cometer el pecado, ya no
son uno sólo sino que entran en conflicto, a su vez la mujer
no se hace responsable del acto, culpando a la serpiente;
“Multiplicaré los dolores de tu embarazo, darás a luz a tus
hijos con dolor, desearás a tu marido, y él te domina-
rá.” (Gén 3, 16) La relación de pareja tenderá a ser de do-
minio, de deseo y no basada en el respeto y la concordia,
esta es otra consecuencia clara del pecado original, contra
la cual el ser humano tiene que luchar con la fuerza del Es-
píritu Santo para vivir en armonía.
Guerrero del Señor
1) Lee la siguiente cita y contesta las preguntas, las cuales te ayudarán a reflexionar sobre lo
que es ser un guerrero (a) del Señor.

“A través de toda la historia del hombre se extiende una dura batalla contra los poderes de las
tinieblas que, iniciada ya desde el origen del mundo, durará hasta el último día según dice el Se-
ñor. Inserto en esta lucha, el hombre debe combatir continuamente para adherirse al bien, y no sin
grandes trabajos, con la ayuda de la gracia de Dios, es capaz de lograr la unidad de sí mis-
mo.” (Catecismo de la Iglesia católica No. 409)

a) ¿Crees realmente que el hombre vive esta batalla entre el bien y el mal?
b) ¿Contra quién está luchando el hombre?
c) Según dice el Catecismo ¿cuánto durará esta batalla?
d) Para vencer en esta batalla ¿qué necesita el hombre?
e) ¿Quieres ser un guerrero del Señor y luchar la buena batalla por el Reino de los cielos?

2) Ahora, como buenos guerreros, vamos a estudiar y escribir en los siguientes cuadros:

a) Cuáles son mis batallas más difíciles, es decir, qué pecados son los que con mayor facilidad
cometo, para ello hay que identificarlos con el fin de estar atentos para combatirlos en la vida dia-
ria.
b) Cuáles son los lugares en que la batalla se pone más difícil, es decir, donde estoy más pro-
penso a pecar.
c) Qué personas no me ayudan a vencer en la batalla, es decir, a veces el juntarme con algunas
personas no me ayuda para dejar un pecado en mi vida y es bueno dejar de verla un tiempo para
alcanzar nuestra meta, por ello hay que identificar esto.
d) Qué armas tengo para vencer en contra del mal, por ejemplo, un grupo de amigos con los
cuales lucho por ser mejor persona, mi oración personal todos los días 15 minutos, confesar mis
pecados a un Sacerdote, ir a misa, recordar una jaculatoria que me ayuda a saber que soy hijo de
Dios, una cita bíblica que siempre recuerdo y que me ayuda a hacer la voluntad de Dios, también
acciones concretas que me ayudan a combatir, como ofrecer algún sacrificio o hacer una obra de
caridad.
Mis batallas más difíciles son Los lugares de las batallas más difí-
ciles son:

Las personas que hacen que mi ba- Mis armas contra la batalla son:
talla sea más difícil son:

3) Ahora a manera de compromiso con el Espíritu Santo que siempre nos anima a luchar
contra el pecado de nuestra vida, dibuja tu escudo que te representará como guerrero del Señor, en
cada cuadrante dibuja algo simbólico que te ayude a recordar cada uno de los aspectos anteriores
para luchar el buen combate por el Señor.

Hiéreme, Señor Dame fuerza para no renegar nunca


(Rabindranath Tagore) del pobre, ni doblar mi rodilla al po-
Mi oración, Dios mío, es esta: Hiere, der del insolente. Dame fuerza para
hiere la raíz de la miseria en mi cora- levantar mi pensamiento sobre la pe-
zón. queñez cotidiana. Dame, en fin, fuer-
Dame fuerza para llevar ligero mis za para rendir mi fuerza, enamorado,
alegrías y mis pesares. Dame fuerza a tu voluntad.
para que mi amor dé frutos útiles.
El padre de la mentira.
Los evangelios hablan más de 50 veces del maligno, llamado satanás o
adversario, en hebreo, y demonio, diablo o calumniador, en griego. Este ser
se identifica con las fuerzas del mal, y descubrimos su presión por su oposi-
ción total al amor y a la verdad. Jesús lo defino como “padre de la menti-
ra” (Jn 8,44) y explica que provoca toda clase de esclavitud; nos impide ser
libres en la verdad y trata con engaños de que veamos un bien donde no lo hay, “anda seduciendo
a todo el mundo” (Ap 12,9).
Pero Jesús derrotó a Satanás al instaurar el reino de Dios y vencer el pecado con su muerte y
resurrección. Los cristianos fuimos arrancados de su poder al recibir al Espíritu Santo y, con su
ayuda, podemos también vencerlo. Existen tres niveles de influencia del maligno, que incremen-
tan nuestra vulnerabilidad al poder del mal, y la gracia de Dios nos ayuda a superar:
La tentación de actuar sin Dios o contra Dios. La podemos superar con la oración, la discipli-
na interior y un estilo de vida cristiana, que nos evitan pasar al siguiente nivel.
El pecado venial o leve, que hiere nuestra relación con Dios y nuestros semejantes, y daña
nuestro ser. Lo podemos superar con oración, actos de reconciliación y propósitos de enmienda.
El pecado mortal o grave rompe nuestra relación con Dios, y hiere profundamente nuestro
ser o a otro ser humano. Lo podemos superar con el sacramento de la Reconciliación y un com-
promiso serio de oración para fortalecer nuestra vida espiritual.
Somos débiles y con frecuencia nos vence el poder del mal. Ora con frecuencia como Jesús
nos enseñó: “No nos dejes caer en la tentación; y líbranos del mal” (Mt 6,13).

¡Jesús no se dejó engañar!


Instrucciones: Ve siguiendo los pasos que se te indiquen y contesta lo que se te pida, no te
adelantes y esfuérzate por reflexionar y sacar conclusiones claras que te ayuden en tu propia vida.
1) Dice San Pablo en la Carta a los Romanos que Jesús es el nuevo Adán, esto quiere decir,
entre otras cosas, que Él no cayó en las trampas de la mentira y nos enseñó el camino para que
tampoco nosotros cayéramos. Para analizar esto en las Sagradas Escrituras, vamos a identificar en
cada una de las citas bíblicas cuál fue la mentira que le exponían a Jesús y cómo respondió antes
cada una de ellas.
Situación ¿Cuál es la Actitud de Jesús
mentira?
“Desde entonces comenzó Jesús a manifestar a sus discípulos que
tenía que ir a Jerusalén y que tenía que sufrir mucho por causa de los an-
cianos, los jefes de los sacerdotes y los maestros de la ley; que lo matarían
y al tercer día resucitaría.
Entonces Pedro, tomándolo aparte se puso a reprenderlo:
-Dios no lo quiera Señor; no te ocurrirá eso.
Pero Jesús dirigiéndose a Pedro le dijo:
-¡Colócate detrás de mí Satanás! Eres para mí un obstáculo, porque
no piensas como Dios sino como los hombres.” Mt 16,21-23

“Le enviaron entonces unos fariseos y unos herodianos con el fin de


sorprenderlo en alguna contradicción. Llegaron éstos y le dijeron:
-Maestro, sabemos que eres sincero y que no te dejar influir por
nadie, pues no miras las apariencias de las personas, sino que enseñas con
verdad el camino de Dios. ¿Estamos obligados a pagar impuesto al empe-
rador o no? ¿Lo pagamos o no lo pagamos?
Jesús, viendo su torcida intención, les contestó:
-¿Por qué me ponen a prueba? Tráiganme la moneda del impuesto
para que la vea.
Se la llevaron, y les preguntó:
-¿De quién es esta imagen y esta inscripción?
Le contestaron:
-Del emperador.
Jesús les dijo:
-Pues den al emperador lo que es del emperador y a Dios lo que es
de Dios.
Esta respuesta los dejó asombrados.”
Mc 12,13-17

“ Jesús les respondió:


-Estén atentos para que nadie los engañe. Porque muchos vendrán
en mi nombre diciendo: -Yo soy el Mesías-, y engañarán a mucha gente.
Oirán hablar de guerras y rumores de guerra. Traten de no alarmarse, pues
eso tiene que suceder, pero no es todavía el fin. Se levantará nación contra
nación y reino contra reino, y habrá hambre y terremotos en diversos luga-
res; todo eso será el comienzo de un doloroso alumbramiento.”
Mt 24,4-8

Entonces Simón Pedro, que tenía una espada, la desenvainó e hirió


con ella a un siervo del sumo sacerdote, cortándole la oreja derecha. (Este
siervo se llamaba Malco). Pero Jesús dijo a Pedro: Guarda tu espada. ¿Es
que no debo beber este cáliz de amargura que el Padre me ha preparado?
Los soldados romanos, con su comandante al frente, y la guardia
judía, arrestaron a Jesús y le ataron las manos.
Jn 18, 10-12
2) Desde tiempo memoriales el engaño y la mentira han sido parte de la realidad del hombre.
En la actualidad, el hombre y la mujer de estos tiempos, también tiene que luchar cotidianamente
contra muchas seducciones y atracciones que a primera vista parecen muy buenas, pero no lo son
realmente.
Jesús que es el Camino, la Verdad y la Vida, nos enseñó cómo no dejarse engañar por el
enemigo y el mundo. Para identificar cuáles son las estrategias para lograr esto, analiza el siguiente
texto bíblico.

Del Evangelio de San Mateo 4, 1-11


3) Responde las preguntas según se te vaya indicando, recuerda no te adelantes…

a. ¿Por qué Jesús, que es Dios y hombre verdadero, pudo vencer las tentaciones del enemigo?
¿qué hizo antes de ser tentado para poder resistir?
b. ¿Con qué responde Jesús ante cada tentación hecha por el enemigo?
c. ¿Cuáles son las tres grandes tentaciones que el enemigo hace a Jesús y a todos los hombres?
Para responder esta pregunta, lee cada una de las propuestas hechas por Satanás y relació-
nalas con las atracciones más llamativas del mundo, las cuales vienen en el siguiente recua-
dro. Después coloca el inciso en el paréntesis que corresponda

a) Placer b) Saber c) Poder d) Tener e) Aparen-


tar

( ) Si eres Hijo de Dios, manda que estas piedras se conviertan en panes.


( ) Si eres Hijo de Dios, tírate abajo; porque está escrito: Dará órdenes a sus ángeles para
que te lleven en brazos, de modo que tu pie no tropiece con ninguna piedra.
( ) Todo esto te daré si te postras y me adoras.

4) Ahora analiza cómo trata el enemigo de seducir a Jesús, para ello lee nuevamente el texto
bíblico y subraya las afirmaciones que sean ciertas, las cuales están a continuación.

a. La primera estrategia del enemigo es alejarse de Jesús y esperar que sólo caiga en la tentación.
b. La primera estrategia del enemigo es acercarse a Jesús para entrar en diálogo con él.
c. Otra estrategia del enemigo es mostrar ante los ojos de Jesús la tentación para que primero lo
desee en su corazón.
d. El enemigo nunca utiliza la Palabra de Dios para argumentar sus ideas, ya que él detesta la
verdad.
e. Una estrategia que utiliza Satanás es tomar la Palabra de Dios para argumentar su idea con
ella, aunque esté mal interpretada.
f. Otra estrategia del enemigo es querer que Jesús crea que es muy fácil obtener las cosas, por-
que él aparenta tener mucho poder.
g. Una estrategia del enemigo es mostrar como algo muy bueno lo que ofrece, sin permitir que
la persona pueda discernir sobre esta decisión.
5) Sin embargo, Jesús no es engañado por el enemigo, explica brevemente cómo hace al final
para que Satanás se aleje de Él.
6) Una vez realizado lo anterior, reflexiona cómo te sientes personalmente, ¿crees que estás
equipado espiritualmente para poder enfrentar los engaños del enemigo y del mundo?
7) Autoevalúa tu vida, ¿cuáles crees son tus mayores tentaciones para no hacer la voluntad de
Dios?
8) ¿Cómo podrías combatirlas para vivir de acuerdo a lo que crees? ¿Cómo podrías salir victo-
rioso al igual que lo hizo Jesús, quien no se dejó engañar?

SI FUERAN CIEGOS NO TENDRÍAN PECADO PERO COMO DICEN:


"VEMOS", SU PECADO PERMANECE: Jn 9,41.
“Cada año, con motivo de las fiestas de aniversario de su coronación, el rey liberaba a un pri-
sionero. Cuando cumplió 25 años de monarca, él mismo quiso ir a la prisión acompa-ñado de su.
primer ministro y toda la corte para decidir a cuál prisionero iba a liberar.
Cada uno de los encarcelados, pensando que podría ser el agraciado, preparó su discurso de
defensa para exponerlo ante el rey.
Majestad -dijo el primero-, yo soy inocente. Un ene-migo me acusó falsamente, y por eso estoy
en la cárcel.
A mí -añadió otro- me confundieron con un asesino, pero yo jamás he matado a nadie.
El juez me condenó injustamente _dijo un tercero.
Así, todos y cada uno manifestaban al rey por qué razones merecían precisamente la gracia de
ser liberados.
Había un hombre en un rincón, que no se acercaba, y entonces le preguntó el rey:
Tú, ¿por qué estás aquí?
Porque maté a un hombre, majestad. Soy un asesino.
Y ¿por qué lo mataste?
Porque yo estaba muy violento en esos momentos...
Y ¿por qué te violentaste?
Porque no tengo dominio sobre mi enojo...
Pasó un momento de silencio mientras el rey decidía a quién liberaría. Entonces tomó el cetro
y dijo al asesino que acababa de interrogar:
Tú sales de la cárcel...
Pero, majestad -replicó el primer ministro-, ¿acaso no parecen más justos cualquiera de los
otros?
Precisamente por eso -respondió el rey-, saco a este malvado de la cárcel para que no eche a
perder a todos los demás que parecen tan buenos.
El único pecado que no puede ser perdonado es el que no reconocemos. Es necesario confesar
que somos pecado-res y no tan buenos como muchas veces tratamos de apa-rentar.
Nosotros vencemos el mal cuando nos confesamos y para ello, deben hacer un examen de con-
ciencia. Nosotros vencemos el mal en la vida cotidiana cuando hacemos el bien.

Trabajo grupal
La repetición de frases cortas, también llamadas jaculatorias, son una tradición muy antigua de
la Iglesia, que tiene mucho de su fundamento en la manera como Jesús triunfa sobre las tentacio-
nes. Para ello te proponemos lo siguiente:

¡Vence el mal a fuerza de bien!


Instrucciones: Reúnanse en equipos de tres o cuatro personas y realicen lo siguiente.
1) En equipos reflexionen en la forma en que actualmente las personas son seducidas por me-
dio del placer, el poder y el tener. Para ello, primero hagan una lluvia de ideas de los engaños más
comunes hoy en día, y vayan redactando frases con las que se te presentarían estas tentaciones y
que conlleven el engaño, pero que parecerían verdad (así como las que usó el demonio en el texto
que leímos).
Engañados por el po- Engañados por el pla- Engañados por el tener…
der… cer…

2) Ahora piensen, de forma creativa, en una frase corta que les ayude cotidianamente a com-
batir los engaños o tentaciones de: a) placer, b) poder y c) tener. Después escríbanlas a continua-
ción.

a) Para combatir el placer:


b) Para combatir el poder.
c) Para combatir el tener.
Vivimos en una sociedad que tiene ho- un deseo semejante al de San Pablo: "Deseo
rror a la muerte, hemos creado lugares donde partir y estar con Cristo."
se lleva a las personas a morir: hospitales y La visión cristiana de la muerte se expresa
residencias de ancianos. Hoy se “convive” me- de modo privilegiado en la liturgia de la Igle-
nos con la muerte. Los niños y los jóvenes sia:
vive alejados de esta realidad biológica y hu- "La vida de los que en ti creemos, Señor,
mana. No comparten con los mayores sus últi- no termina, se transforma; y, al deshacerse
mos años, ni reciben de ellos la gran lección nuestra morada terrenal, adquirimos una
de la vida y de la muerte. mansión eterna en el cielo. "
Pero la muerte por mucho que se la ocul- ¿Qué es el "cielo"?
te sigue llamando a la puerta y se hace presen- El cielo es el fin último y la realización de
te. El cristiano sufre como todos los demás la las aspiraciones más profundas del hombre, el
separación de los seres queridos, pero esta estado supremo y definitivo de felicidad. Esto
separación se hace esperanza al creer en la re- se cumple cuando Dios y El hombre se en-
surrección. cuentran. Cuando el hombre "ve a Dios’; cara
¿Qué es la muerte? a cara (ver Mt.5, 8).
La muerte es el final de la vida terrena. "Cielo" es una de las imágenes de la Bi-
Nuestras vidas están medidas por el tiempo, blia para Dios mismo. Dios mismo es el cielo,
en el curso del cual crecemos, cambiamos, Dios mismo es nuestro futuro.
envejecemos y como en todos los seres vivos El misterio de la comunión bienaventura-
de la tierra, al final aparece la muerte como el da con Dios y con todos los que están en Cris-
desenlace normal de la vida. Este aspecto de to sobrepasa toda comprensión y toda repre-
la muerte da urgencia a nuestras vidas: el re- sentación. La Escritura nos habla de ella en
cuerdo de nuestra mortalidad sirve también imágenes: vida eterna, luz, paz, banquete de
para hacernos pensar que no contamos más bodas, vino del reino, casa del Padre, Jerusa-
que con un tiempo limitado para llevar a tér- lén celestial, paraíso. Dice San Pablo:
mino nuestra vida. "Nosotros anunciamos, como dice la Escritu-
La muerte fue transformada por Cristo. ra, lo que nadie vio ni oyó y ni siquiera pudo
Gracias a Cristo, la muerte cristiana tiene pensar, aquello que Dios preparó para los que
un sentido positivo. "Para mí, la vida es Cris- lo aman. ICor.2, 9.
to, y morir una ganancia" "Es cierta esta afir- ¿Qué es el "purgatorio"?
mación: si hemos muerto con él, también vivi- Los que mueren en la gracia y en la amis-
remos con él" La novedad esencial de la muer- tad de Dios pero imperfectamente purifica-
te cristiana está ahí: por el Bautismo, el cris- dos, aunque están seguros de su eterna salva-
tiano está ya sacramentalmente "muerto con ción, pasan después de su muerte una purifi-
Cristo; para vivir una vida nueva. En la muer- cación, a fin de obtener la santidad necesaria
te, Dios llama al hombre hacia sí. Por eso, el para entrar en la alegría del cielo. La Iglesia
cristiano puede experimentar hacia la muerte llama «Purgatorio» a esta purificación final de
los elegidos que es completamente distinta del quiere expresar con la palabra "infierno" es la
destino de los condenados. autoexclusión definitiva de la comunión con
Esta enseñanza se apoya también en la Dios y con los bienaventurados. Es la separa-
práctica de la oración por los difuntos, de la ción eterna de Dios en quien únicamente
que ya habla la Escritura del Antiguo Testa- puede tener el hombre la vida y la felicidad
mento: "Por eso [Judas Macabeo] mandó ha- para la que ha sido creado .
cer el sacrificio de expiación por los muertos, El fracaso eterno del hombre no se lo
para que fueran librados de sus pecados." Des- puede considerar como castigo de Dios. Es
de los primeros tiempos, la Iglesia ha honrado una auto- excomunión, una decisión libre del
la memoria de los difuntos y ha ofrecido su- hombre. La posibilidad del infierno no con-
fragios (oración, limosnas, obras de peniten- tradice al amor de Dios. El infierno es justa-
cia...) en su favor, en particular el sacrificio mente la negación del amor de Dios de parte
eucarístico. del hombre. El amor no se puede imponer a
La Iglesia celebra la Santa Misa por los la fuerza. El amor se vuelve impotente, si no
difuntos especialmente en el día de la es respondido libremente. Lo mejor se vuelve
«Conmemoración de todos los fieles difun- tortura, cuando uno toma conciencia de que
tos» (2 de noviembre). uno lo ha perdido por propia culpa y ligereza.
El purgatorio no es un lugar, sino un pro- El infierno comienza ya ahora, donde uno se
ceso. Es una purificación y comienza cuando encierra en un egoísmo miope, y peor aún,
el hombre se encuentra definitivamente con donde uno convierte la vida a los demás en
Dios, pero no está preparado todavía. Todo un "infierno'! Uno se ve solamente a sí mis-
resto de egoísmo debe ser transformado en mo, y después queda solo consigo mismo para
amor. toda la eternidad.
¿Qué es el infierno?
Jesús habla con frecuencia de la Reunidos en grupos elegimos unos o va-
"gehenna" y del 'fuego que nunca se apaga',' rios objetos que indiquen lo que para ellos es
reservado a los que rehúsan creer y convertir- la muerte y responde la siguiente pregunta:
se, hasta el fin de su vida. Jesús anuncia en
términos graves que "enviará a sus ángeles, y ¿Qué sentimientos suscita en mí la muer-
éstos quitarán de su Reino todos los escánda- te personal y la de un familiar?
los y a los que hicieron el mal, y los arrojarán
en el horno ardiente: allí habrá llanto y rechi-
nar de dientes" Mt. 13,41s., y pronunciará la
condenación sobre los que no supieron ver
las necesidades de sus hermanos: "Aléjense de
mí, malditos; vayan al fuego eterno!” Mt.25,
41.
Lo que la Biblia con la imagen del fuego
quiere expresar es la posibilidad real de un
fracaso definitivo de toda nuestra vida, y con
eso de una soledad y desesperación total. No
es Dios quien condena al hombre. Es el hom-
bre quien se condena a sí mismo. Lo que se
Los médicos, con transplantaciones de órga- ¿Quién resucitará?
nos y terapias sofisticadas pueden prolongar la Todos los hombres que han muerto: “Los
vida, pero no pueden darle la garantía a nadie que hayan hecho el bien resucitaran para la vi-
que no tendrá que morir. Absolutamente todos da, y los que hayan hecho el mal, para la conde-
tenemos que morir. nación”
Tendría poco sentido querer cerrar los ojos ¿Cómo resucitaremos? Cristo resucitó con
ante todos resucitarán con su propio cuerpo, su propio cuerpo: "Miren mis manos y mis pies;
que tiene la muerte. Estar enfermo, envejecer y soy yo mismo." Lc. 24,39; pero Él no volvió a
morir son nuestros verdaderos problemas una vida terrenal. Del mismo modo en Él todos
El Juicio es la consecuencia de las obras, resucitaran con su propio cuerpo, que tienen
omisiones e intenciones durante la vida en este ahora, pero ese cuerpo será “transformado en
mundo. Lo que uno será es el resultado de su cuerpo de gloria” Flp. 3, 21 , en "cuerpo espiri-
modo de vivir. Lo que queremos ser en el futu- tual"1Cor 15,44.
ro, debemos comenzarlo en el presente. Si bien Alguien preguntará: ¿Cómo resucitan los
existe la posibilidad de cambiar hasta el último muertos? ¿Con qué clase de cuerpo? Tu pregun-
momento, sería frívolo vivir toda la vida como si ta no tiene sentido. Lo que siembras no llega a
Dios y sus mandamientos no existiesen, dicien- tener vida, si antes no muere. Y lo que siembras,
do que para arrepentirse habrá tiempo todavía no es la planta tal como va a brotar, sino un sim-
al morir. ¿Quién sabe si habrá tiempo todavía? ple grano. Lo mismo pasa con la resurrección de
¿Quién sabe si tendrá la fuerza necesaria, para los muertos: se siembran cuerpos corruptibles y
dejar atrás su pasado en el acto, y orientar su resucitarán incorruptibles; se siembran cuerpos
vida en la dirección contraria, contra todas las humillados y resucitarán gloriosos; se siembran
costumbres mantenidas durante toda su vida? cuerpos débiles y resucitarán llenos de fuerza; se
Dios quiere salvar a todos. Pero dependerá siembran cuerpos puramente naturales y resuci-
de cada uno mismo, si se va a salvar o no. En el tarán cuerpos espirituales, Lo que es corruptible
fondo, en la eternidad se confirma solamente el debe revestirse de la incorruptibilidad, y lo que
juicio que el hombre mismo realiza por medio es mortal debe revestirse de la inmortalidad.
de su comportamiento diario en este mundo. El ¿Cuándo resucitaremos?
Juicio de Dios no es más que la firma debajo de La bienaventuranza del cielo, bien para con-
las decisiones libres del hombre. El Catecismo denarse inmediatamente para siempre." (CATIC
de la Iglesia Católica habla de un juicio particu- 1022). La fe Sin duda en el "último día" fin del
lar, en que cada hombre recibe su retribución, en esta justicia no nos quiere llenar de angustia,
"bien a través de una purificación, bien para en- mundo'.' En efecto, la resurrección de los muer-
trar definitivamente en la bienaventuranza del tos Pero nos advierte para que tomemos en serio
Cielo, bien para condenarse inmediatamente la está íntimamente asociada a la Parusía
para siempre” CATIC 1022. La fe en esta justi- (Segunda vida, aquí y ahora. Venida) de
cia no nos quiere llenar de angustia, pero nos Cristo.
advierte para que tomemos la vida enserio, aquí
y ahora.
¿Cómo te gustaría que te recuerden?

Aquí descansa
………………………………………………………………………………(Escribe tu nombre)
Una persona que dedicó su vida a
………………………………………………………………………………………..
El sentido de su vida era
……………………………………………………………………………………………
Siempre se caracterizó por
……………………………………………………………………………………………
En su trabajo se destacó por
……………………………………………………………………………………………
Lo que más amaba era
…………………………………………………………………………………………………………
Luchó para
…………………………………………………………………………………………………………
Su principal cualidad fue
…………………………………………………………………………………………………………
Sus últimas palabras fueron
…………………………………………………………………………………………………………
La frase que resume su vida
…………………………………………………………………………………………………………
Al paraíso te lleven los ángeles, a tu llegada te reciban los mártires
y te introduzcan en la ciudad santa de Jerusalén.
El coro de los ángeles te reciba y junto con Lázaro, pobre en esta vida,
tengas descanso eterno.

Actividad: Trabajo en grupo.

GRUPO 1: Juicio Particular


Lean del catecismo los siguientes núme-
ros y respondan:
CEC 1021- 1022
1.¿Cuándo ocurrirá el juicio particular?
2.Nombre ejemplos donde Jesús hable del
Juicio Particular en el Nuevo Testamento
3.¿Qué recibe el hombre después de morir de parte de Cristo?
GRUPO 2: El Cielo
Lean del catecismo los siguientes números y respondan:
CEC 1023; 1024; 1025; 1029
1. ¿Quiénes van al cielo?
2. ¿Qué es vivir en el cielo?
3. ¿Qué hacen las personas en el cielo?

GRUPO 3: El Purgatorio o la purificación final


Lean del catecismo los siguientes números y respondan:
CEC 1030; 1031; 1032
1. ¿Quiénes van al purgatorio?
2. ¿A qué llama Purgatorio la Iglesia?
3. ¿Qué podemos hacer a favor de los difuntos que se están purificando?

GRUPO 4: El Infierno
Lean del catecismo los siguientes números y respondan:
CEC 1035; 1036; 1037
1. ¿Quiénes van al infierno?
2. ¿Cuál es la pena principal del infierno?
3. ¿Para qué sirve a las personas saber que existe la posibilidad del infierno?

GRUPO 5: El Juicio Final


Lean del catecismo los siguientes números y respondan:
CEC 1039; 1040; 1041
1. ¿Cuándo sucederá el juicio final?
2. ¿Qué verdad será revelada el día del juicio final?
3. ¿A qué nos invita el mensaje del juicio final?

GRUPO 6: La esperanza de los cielos nuevos y la tierra nueva


Lean del catecismo los siguientes números y respondan:
CEC 1043; 1045; 1048
1. ¿A qué llama la escritura “cielos nuevos” y “tierra nueva”?
2. En el universo nuevo ¿Dónde vivirá Dios?
3. ¿Cuándo será la consumación final de los tiempos?
cos llaman «aporte», consiste en que el incons-
Muchas personas se dejan fascinar por la ciente —mediante la telergía— desmaterializa
práctica que llaman "juego de la copa": con él cualquier objeto sólido o líquido, hace que
se pretende llamar a espíritus de muertos para atraviese algún obstáculo, por ejemplo una
que revelen secretos, por ejemplo el día del pared, y aparezca de nuevo.
fallecimiento de una persona. El "médium "y Ha sido bastante observado en las llama-
los participantes suelen afirmar que no son das «casas encantadas». Allí, a veces, las pie-
ellos los que mueven la copa. dras atraviesan el techo y las paredes, estando
Existe una fuerte tendencia en muchas las puertas y ventanas completamente cerra-
personas a suponer un origen sobrenatural u das. También se ha comprobado este fenó-
oculto a cualquier cosa que no sepan explicar; meno —y a veces lamentablemente el fraude—
y esto sin previo estudio y sin otro fundamen- en imágenes de Cristo o de la Virgen que llo-
to que la ignorancia. La ciencia que se propu- ran sangre o simplemente lágrimas. En estos
so investigar los fenómenos paranormales se casos, la sangre o las lágrimas de alguna perso-
llama «Parapsicología». "La Parapsicología es na presente, salen invisiblemente de su cuer-
la ciencia que tiene por objeto la comproba- po y van a depositarse sobre la imagen en
ción y análisis de los fenómenos a primera cuestión. La imagen no llora si todas las per-
vista inexplicables, pero que posiblemente son sonas se alejan a más de 50 metros de distan-
resultado de facultades humanas." (Oscar cia. «Automatismos» se llaman las acciones de
Quevedo). hablar escribir, moverse, sin conciencia de Io
Se debe comprobar la existencia y autenti- que se está haciendo. Algunas veces la
cidad de los fenómenos (que no se trate de persona tiene conciencia de lo que sucede,
simples trucos, fraudes o engaños, que lamen- pero con la sensación de no ser ella quien
tablemente abundan). Pero no es menos cier- produce el fenómeno. La dirección del
to que están bien comprobados muchos fenó- proceso está a cargo del inconsciente. Los
menos auténticos (p.e. de clarividencia, tele- automatismos son fenómenos estudiados por
patía, precognición). la psicología y la fisiología, es decir, son
En todos los fenómenos de efectos físicos totalmente naturales. No son fenómenos
(p.e. telekinesis, levitación, aporte), no es la parapsicológicos. Por ejemplo, en el
mente la que actúa sobre la materia. Los fe-
nómenos se deben a un tipo de energía —y la
energía es material, no espiritual— exteriori-
zada por la persona que produce el hecho y
dirigida por su inconsciente. Por eso dichos
fenómenos se dan siempre a una distancia
relativamente corta del hombre que los pro-
duce: no más de 50 metros.
El asombroso fenómeno que los científi-
fenómeno del "juego de la copa: de las "mesas son en realidad fenómenos naturales mal in-
giratorias," o del "péndulo explorador" se dan terpretados.
estos automatismos. No cabe duda de que se Todo proviene del inconsciente de los
trata de movimientos inconscientes de los médiums y depende de su cultura, de sus
músculos de las personas que están con las creencias, de su ambiente. Es comprensible,
manos sobre la mesa, la copa, o que sostienen pues, que los pretendidos mensajes del más
el péndulo. allá sean tan distintos.
Conclusión: El estudio científico del espiritismo llevó
Los fenómenos parapsicológicos son varias décadas. Hoy todos aquellos que están
naturales, humanos. Donde hay hombres, hay al tanto de la cuestión consideran que el caso
tales fenómenos parapsicológicos. Todos los está resuelto: no hay comunicación con los
fenómenos son de todas las épocas, de todos muertos; el espiritismo es un lamentable
los pueblos y de todos los ambientes. Por lo error.
tanto, son humanos. No son sobrenaturales Peligrosas consecuencias.
ni su causa se encuentra enel más allá. Es por Todos solemos tener alguna vez sueños o
eso que ya desde la antigüedad tenemos presentimientos que nos parecen llamativos.
testimonios sobre ellos. Los hechos que se No existe ningún criterio para distinguir las
relatan son fundamentalmente los mismos auténticas captaciones de las fantasías del in-
que hoy conocemos; lo que varía de una consciente. La única manera de estar seguro
cultura a otra, y mucho, es la interpretación es la verificación posterior. Por lo tanto, en la
de los mismos. práctica, lo único sensato es guiarse en la vida
Es comprensible que para interpretar esos por la razón, y no por ocurrencias que pueden
fenómenos sorprendentes se haya recurrido al llevarnos a la ruina.
más allá. Pues, como estos fenómenos se Nadie puede adivinar a voluntad y, si ex-
originan en el inconsciente del hombre, éste cepcionalmente adivina algo, no tienen nin-
no cree ser el responsable de los mismos, guna certeza de haber captado algo cierto. Se
precisamente porque no tiene conciencia de ve lo peligroso que puede ser que una perso-
producirlos. Pero hoy, la ciencia ha probado na oriente su vida sobre la base de los conse-
consciente sobradamente que se inconsciente jos de charlatanes.
trata de fenómenos humanos, del más acá y El espiritismo no es solamente un error.
no del más allá. Todo natural, humano, de Las prácticas que implica son perjudiciales
este mundo. Todo procede de los vivos. para el equilibrio psíquico, ya que estimular
Los muertos nunca revelaron nada. las disociaciones de la personalidad, los auto-
No entraremos aquí en la complicada dis- matismos o cualquier manifestación del in-
cusión de si los muertos, por su propia natu- consciente, puede conducir a la locura.
raleza o por obra de Dios, podrían comunicar- El "juego de la copa" no es ningún juego,
se con nosotros. Tampoco estamos hablando sino una práctica que, como todas las del espi-
de la Resurrección de Jesucristo, ni negamos ritismo, entraña un gran riesgo para la salud y
verdaderos milagros. Simplemente constata- el equilibrio mental. Su peligrosidad se agrava
mos que de hecho los difuntos no se comuni- por el hecho de ser tan popular. Ciertamente
can y que todas las pretendidas pruebas de la el riesgo aumenta si la práctica se hace muy
intervención de difuntos en nuestro mundo, frecuente. En determinadas personas muy
sensibles, una única sesión puede tener conse- sible ser cristiano y espiritista a la vez.
cuencias desastrosas. ¿Cuántos adolescentes Conclusión:
ya se han suicidado antes de la pretendida La Resurrección y la reencarnación son
fecha de su fallecimiento, anunciada en algu- dos respuestas al dilema de la muerte. Pero se
na sesión del "juego de la copa"? Y hay unani- mueven en dos niveles absolutamente diferen-
midad casi absoluta en calificar la persona del tes:
médium como anormal, insana, neurótica, La reencarnación se mueve en el tiempo y
desequilibrada, histérica, etc. Las prácticas en el espacio, pateando indefinidamente el
ocultistas constituyen una grave amenaza para problema de la muerte para adelante.
la salud pública. Muchas veces, en lugar de La Resurrección lleva nuestra vida ante
ayudar a las personas, las enferman mucho Dios. Tenemos una sola vida en este mundo,
peor. decisiva para toda la eternidad. Hay una sola
¿Qué dice la Biblia? oportunidad.
Muchos espiritistas pretenden fundamen- La reencarnación es un gran sedante,
tar en la Biblia algunas de sus creencias e in- mientras la fe en la Resurrección nos impulsa
cluso se llaman a sí mismos cristianos. Todo a tomar en serio esta vida, tratando de mejo-
lo cual conduce a graves confusiones. rarla.
La evocación de muertos, práctica espiri- En síntesis: Entre la fe cristiana y las
tista por excelencia, está expresamente conde- creencias en la reencarnación hay contradic-
nada en varios pasajes de la Biblia (por ejem- ciones insalvables. Por eso un cristiano no
plo en Levítico 19,31; 20,6.), y también en el puede creer en la reencarnación.
Libro del Deuteronomio: Nuestro tema ha sido la comunicación
"Cuando entres en la tierra que el Señor, perceptible con los muertos, y no el tema del-
tu Dios, te dará, no aprendas a practicar las ta vida después de la muerte. Es cierto que no
abominaciones que cometen esas naciones. puede haber comunicación con los muertos
Que no haya entre ustedes nadie que inmole sin sobrevivencia. Pero no es menos cierto
en el fuego a su hijo o a su hija, ni practique que puede haber sobrevivencia sin comunica-
la adivinación, la astrología, la magia o la he- ción. La muerte es sólo un paso a otra vida,
chicería. Tampoco habrá ningún encantador, en la que los cristianos esperamos el encuen-
ni consultor de espectros o de espíritus, ni tro gozoso con nuestro Padre Dios y, también,
que evocador de muertos. Porque todo el que el reencuentro con quienes ya han abandona-
practica estas cosas es abominable todo al do este mundo, en especial, nuestros seres
Señor, tu Dios, y por causa de estas abomina- queridos. Además sabemos que permanece-
ciones, él desposeerá a esos pueblos delante mos unidos a quienes ya se encuentran en la
de ti. Deut.18,9-12 presencia de Dios.
La Biblia sólo se limita a prohibir deter-
minadas prácticas porque son contrarias a la Bibliografía usada: Gustavo Hasperué: La
fe en el Señor. No intenta dar una explicación comunicación con los muertos. ¿Mensajes del
científica de los fenómenos. La sola preten- más allá? (Bonum).
sión de conseguir la comunicación con los
muertos se opone a la voluntad de Dios.
Y la Iglesia aclaró muchas veces: es impo-
Para seguir reflexionando sobre el mismo tema:
Concilio Vaticano ll: Lumen Gentium 49. Cabe destacar que precisamente en este pa-
saje, el propio documento conciliar pone una nota recordando diversos pronunciamientos de la
Iglesia que prohíben cualquier forma de evocación de los espíritus.
Concilio Vaticano ll: Dei Verbum (Sobre la divina revelación), no 1 1 y 12.
Documento de Puebla, no 914,
Documento de Santo Domingo, n° 155.
Catecismo de la Iglesia Católica, no 2116s,

Responde:
1) ¿De dónde vienen los "fenómenos parapsicológicos "?
2) ¿Hay pruebas para la "reencarnación?
3) ¿Los muertos nos dan mensajes desde el más allá?

Oración
Bienaventuranzas (Santo Tomás Moro)
Dichosos los que saben reírse de sí mismos,
porque no terminarán nunca de divertirse.
Dichosos los que saben distinguir una montaña
de una piedra, porque se evitarán muchos
inconvenientes.
Dichosos los que saben escuchar y callar,
llegarán a ser sabios. Dichosos los que están
atentos a las exigencias de los demás, sin
sentirse indispensables, serán fuente de alegría.
Dichosos ustedes cuando sepan mirar
seriamente a las cosas pequeña: y
tranquilamente a las cosas importantes, llegarán
lejos en la vida. Dichosos ustedes cuando sepan
apreciar una sonrisa y olvidar un desaire, su
camino estará lleno de sol.
Dichosos los que piensan antes de actuar y
rezan antes de pensar, evitarán muchas
tonterías.
Dichosos ustedes, sobre todo, cuando sepan
reconocer al Señor en todo lo que viven, habrán
logrado la verdadera luz y sabiduría.
Decir que la fe se contrapone a la cien- pues se pide una respuesta que va más allá
cia no solo es una afirmación poco inteli- del campo de estudio de la ciencia misma
gente e ideológica (desmentida por miles (de las mismas premisas que ella exige para
de científicos de talla mundial entre los considerar como válida dicha afirmación).
cuales se encuentran no pocos premios Un campo donde sí podemos en cambio
nobel), sino que además contradice una afirmar y debatir tales contenidos sería el
actitud fundamental que todo científico, campo de los estudios teológico-filosóficos,
ateo o creyente, presupone en cualquiera donde la experiencia religiosa del hombre
de sus experimentos. Sí, porque la fe - que en la historia se abre al misterio de
entendida en este caso como confianza hu- Dios, puede ser tratada con un lenguaje y
mana ante lo no demostrable o comproba- una serie de premisas más amplias que la
ble – es de hecho una experiencia cotidia- del lenguaje científico.
na de todo científico que indaga. Irónicamente, y aunque no parezca a
Ahora bien, si esto que decimos es ver- primera vista, la ciencia es la manera más
dad para la “fe humana”, ¿qué se puede restringida de conocimiento que tenemos.
decir acerca de la “fe cristiana”, o bien, de Todo el ámbito de la actividad social, fami-
la fe que no es solo confianza ante lo inde- liar, ética, artística, literaria, queda fuera
mostrable, ante lo que excede nuestra ra- de la ciencia, porque excede los paráme-
zón, sino más bien, que se presenta como tros de lo calculable y experimentable, es
confianza ante una serie de verdades reve- decir, superan el marco de acción que las
ladas por Dios mismo como ciertas? ciencias exactas establecen. Y sin embargo
Aquí también podemos afirmar sin todos estos ámbitos son el fundamento de
problema alguno que la ciencia no contra- nuestra cultura, de la dignidad humana, de
dice, ni podría (aun queriéndolo) contrave- las activadas que más nos cualifican como
nir a la revelación. Porque en el fondo, del personas. O en otras palabras como dice
estudio de la materia en su actividad, no Carl von Weizacker, «Si yo veo una puesta
podemos extraer ninguna consecuencia de sol puedo, mediante la espectroscopía
fuera de decir cómo actúa y se comporta. física, explicar la intensidad de las diversas
Lo que significa, simple y llanamente, que longitudes de onda que producen los colo-
el ámbito de la ciencia es limitado, y que res hermosos del atardecer, y dar una ra-
su límite será siempre la actividad de la zón de por qué ocurre así, pero no puedo
materia que puede comprobarse experi- dar una razón científica de por qué me gus-
mentalmente (aun cuando nos falte hoy la ta contemplar ese espectáculo. El que la
tecnología para hacerlo). Por lo tanto, pre- puesta de sol sea hermosa no lo describe
guntarse a nivel científico si Dios existe o ninguna ecuación, no es algo cuantifica-
no, o si dijo o hizo tal o cual cosa, es ya de ble».
partida un problema mal planteado,
En realidad, lo más grande que pueden y pasado- por impedir que éste alcance la felici-
deben hacer las ciencias por el hombre es dad y la realización que tanto anhela. Mu-
encontrar un camino para servir al hombre y chos grandes científicos, como los que éste
favorecerlo a vivir su vida integralmente, de alcance la felicidad y la realización que tanto
tal manera que, a través de una mayor com- anhela. Muchos grandes científicos, como los
prensión de la realidad en su dimensión que presentamos hoy, están ahí presentes
cuantificable, pueda responder y vivir más para darnos un testimonio confiable y para
plenamente las preguntas de fondo que ca- recordarnos que existe y es posible el primer
racterizan su existencia: ¿quién soy?, ¿de dón- camino.
de vengo y a dónde voy?, ¿por qué existe el
mal?, ¿qué hay después de esta vida? Estas Investiga
preguntas tienen su origen común en la ne- 1. ¿Las ciencias naturales hacen innece-
cesidad de sentido que siempre acucia el co- sario al Creador?
razón del hombre y sin el cual no puede vivir 2. ¿Se puede estar convencido de la evo-
plenamente la vida. De hecho “de la respues- lución y creer sin embargo en el Crea-
ta que se dé a tales preguntas depende la dor?
orientación que se dé a la existencia” (Cfr. 3. ¿Es el mundo un producto de la casua-
Fides et Ratio 1). lidad?
Por eso, si las ciencias dejan de ayudar al 4. ¿Cuál fue el problema de Galileo Galilei?
hombre cualitativamente, es decir, dejan de
ayudarlo a responder integralmente a dichas ALGUNOS CIENTÍFICOS GANADO-
preguntas y a vivir coherentemente según RES DEL PREMIO NOBEL
una auténtica respuesta de las mismas, acaba-
rán –como ya lo han hecho tantas veces en el

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