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Ejercicios de pensamiento matemático

Para llegar al conocimiento del número, primero se debe ubicar al alumno en el espacio a partir de
conceptos como: arriba — abajo, adelante — atrás, izquierda — derecha… Por eso se recomienda trabajar
estos conceptos de manera concreta utilizando diversos materiales, de preferencia los que usan los niños
cotidianamente (lápices, crayones, cuadernos, zapatos, bolitas de papel, caramelo, semillas e incluso ellos
mismos), ya que así entenderán mejor las relaciones espaciales, primero tomándose a sí mismos como
referencia. Es muy importante que manipulen los objetos antes de trabajar con ellos, ya que, al jugar, al
describir y al trabajar colaborativamente descubrirán muchas de sus características, incluidas las
matemáticas, que son las que más nos interesan.
El concepto del número está íntimamente relacionado con las operaciones de clasificación y seriación.
Después de que los niños se han familiarizado con conceptos espaciales y han realizado ejercicios de
clasificación, seriación y correspondencia, iniciaremos la representación gráfica del número.

Motricidad fina (Preparación para la escritura).


La escritura es un arte y como tal requiere de disciplina, dedicación y estudio para poder dominarla.
Los ejercicios están pensados y diseñados para desarrollar la motricidad fina, enseñar al niño a utilizar el
espacio gráfico, la direccionalidad en los trazos y los hábitos que requiere la escritura como orden,
limpieza y secuencia.
Psicomotricidad es la interacción que existe entre el pensamiento y el movimiento. Es decir, los ejercicios
de psicomotricidad nos ayudarán a ser conscientes los movimientos con la finalidad de lograr hacerlos
más efectivos, de tal forma que cuando pasen al inconsciente se realicen de manera correcta y automática.

Hábitos correctos y disciplina.


 El niño deberá estar sentado correctamente.
 La crayola, lápiz o plumín deberán tomarse correctamente.
 La posición del cuaderno debe de ser la siguiente: la parte superior izquierda ligeramente inclinada
hacia abajo, si el niño es diestro y hacia arriba si el niño es zurdo. A este respecto sobra decir que
bajo ninguna circunstancia se deberá forzar al niño zurdo a trabajar con la mano derecha.
 Los trazos que se realicen deberán ser RAPIDOS, CONTINUOS Y FIRMES observando el punto de
salida y el punto de llegada.

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