Professional Documents
Culture Documents
Por lo tanto, se vuelve imprescindible para el éxito en nuestra vida gozar de una buena
autoestima y amor propio. Todos conocemos el valor de la autoestima, pero muy pocos
saben cuidarla, mimarla y mantenerla. La autoestima es un pilar fundamental en nuestro
equilibrio emocional. La vamos desarrollando a lo largo de nuestra vida y no se trata de
algo estático que “se tiene o no se tiene” sino que puede variar según las circunstancias.
Cuando pasamos por experiencias como un abandono, críticas negativas, un fracaso en
algún proyecto personal, o un rechazo, entre otros, es muy habitual que nuestra
autoestima se vea afectada. La autoestima es un afecto de la persona dirigido hacia ella
misma y que puede ser alta o positiva o bien, baja o negativa. Como su nombre lo indica
significa “estima por uno mismo”.
La autoestima no es sólo “quererse a uno mismo” sino que implica todos los sentimientos,
opiniones, sensaciones y actitudes respecto a nosotros mismos que hemos ido
acumulando a lo largo de nuestra vida. La autoestima positiva puede ser un motor que
nos impulse a conseguir nuestras metas, nos aporte seguridad, confianza, identidad,
valor, y competencia personal para afrontar los problemas. Siempre habrá fluctuaciones
en cómo nos percibimos a nosotros mismos, por nuestra propia evolución personal,
vivencia, estados de ánimo, etc. Esto es normal, el problema es cuando las fluctuaciones
son muy pronunciadas o cuando nos volvemos realmente muy negativos respecto a
nosotros mismos.
Autorespeto:
Es importante que revisemos cada tanto la visión que tenemos de nosotros mismos y
demos un repaso a todos estos “autos”
Suele suceder que en nuestro día a día damos más importancia a los mensajes
negativos, a la crítica, a la frustración que a lo positivo. Los elogios y la motivación de
superación y los mensajes de autoconfianza quedan eclipsados ante las frustraciones o
mensajes negativos.. es como si "lo malo" pesara más en nuestra balanza interna.
(Efectivamente así es, "lo malo" pesa más cognitivamente y es más fácil de recordar que
lo bueno)
También puede suceder que malas experiencias del pasado nos hayan afectado, por
ejemplo si hemos vivido algún tipo de abuso o trauma, o puede que hayamos interiorizado
"etiquetas" o valoraciones negativas sobre nosotros mismos y las llevemos arrastrando
desde la infancia.
Por ello puede ser interesante practicar algunos ejercicios para reforzar nuestra
autoestima, aquí os propondré algunos.
Autoestima Muchas veces recordamos las críticas, las cosas que hacemos mal, las
ofensas.. Pero nos olvidamos de recordar nuestros éxitos, elogios, halagos. Para ello
vamos a hacer una recopilación de los mismos, es una forma de darles más peso:
Busca una libreta para trabajar (física o virtual � y realiza tres listas:
En una recopila los elogios que recuerdes que te hayan dicho otras personas a lo largo de
tu vida
En un tercer listado enumera cosas que te hagan sentirte orgulloso de ti mismo (logros,
actitudes ante alguna situación, etc.)
Sería recomendable que dedicaras varios días a ésta tarea: te aconsejo ir rellenándolo
poco a poco durante al menos una semana.
En cuanto a tus fortalezas ¿qué dicen de ti mismo? ¿Qué habilidades y recursos crees
que hay detrás de cada fortaleza? ¿Hay otras fortalezas o valores que te gustaría
fomentar?
En cuanto a las cosas de las que estás orgulloso: ¿Qué dicen de ti mismo? ¿qué valores
y qué habilidades hay detrás de cada una?
Haz un resumen de tus habilidades, recursos y valores y ponlo en algún lugar en el que
puedas verlo asiduamente.
2. El sorteo de autoregalos:
Dedícale tiempo e intenta hacer la lista lo más larga que puedas. No se trata de poner
grandes cosas sino temas cotidianos, por ejemplo: escuchar un disco que te gusta, ir al
gimnasio (o algo que tenga que ver con cuidar tu salud), probar un nuevo peinado, pasear
un rato por un parque, llamar a algún amigo para charlar, preparar un plato que te gusta,
leer un rato.. ¿qué se te ocurre?. Intenta que la lista sea bastante larga. Dedícale un día o
dos sólo a elaborarla.
Cuando tengas tu listado de "premios" crearemos el método para el sorteo: has de poner
cada una de éstas actividades en un papelito que doblarás y pondrás en una cajita o
frasco que te guste. Intenta dedicarle tiempo y hacerlo bonito y creativo (papelitos de
colores, una cajita personalizada..etc)
Cuando lo tengas listo “empieza el sorteo”: Cada día por la mañana debes sacar un
papelito de la caja y darte el “premio” que te haya tocado.. así dia a día hasta acabar
todos los papelitos. Pero ¡no los tires! porque luego puedes volver a empezar el “sorteo de
premios diarios” y añadir otras cosas que se te ocurran �
Otra variante (idea de una consultante) es hacer una lista numerada de "autorregalos" e ir
tirando dados.
3. Afirmaciones positivas:
Cada día frente al espejo debes mirarte a los ojos, y decirte en voz alta una afirmación
positiva.
En ese ejercicio lo más importante es el espejo, mirarte a los ojos, reconocerte: y luego
darte un mensaje positivo o de ánimo.
Puede que al principio te resulte incómodo, artificial o ridículo.. pero has de superar esa
sensación y hacerlo cada día durante al menos 3 semanas, como un reto. ¿te atreves?
Las afirmaciones positivas pueden ser siempre las mismas o diferentes, siempre han de
estar en presente y referirse a ti mismo, y ser realistas. No se trata de mentirte o darte
mensajes irreales, sino de conectar contigo y date mensajes positivos y de ánimo, por
ejemplo: amor propio
- Me respeto y me cuido.
- Puedo hacer lo que me proponga (puedes cambiar el "lo que me proponga" por
objetivos concretos..).
- Confío en mi mismo.
- Me quiero profundamente.
¿cuáles son tus afirmaciones positivas? ¿qué otros mensajes de ánimo se te ocurren?
Recomendación extra:
También es útil que imagines qué cosas serían diferentes si tuvieras un poco más de
autoestima: ¿qué harías o dejarías de hacer? ¿cómo afrontarías tal o cuál problema?
¿Cómo te relacionarías con los demás?.. Imagínate a tu "yo con buena autoestima" y
pregúntate de vez en cuando ¿Qué haría o hubiese hecho mi yo con buena autoestima en
esta situación? ¿cómo lo habría hecho?
La baja autoestima tiene consecuencias negativas en nuestras emociones. En algunas
ocasiones, la baja autoestima actúa interaccionando con otros factores, facilitado el
desarrollo de una patología emocional específica (depresión, fobias…). En este caso,
además de la baja autoestima habrá que tratar el problema psicopatológico específico
que, dependiendo de sus características, podrá requerir tratamiento farmacológico.
Los primeros años de vida son cruciales para la formación de una alta o baja autoestima,
pero también las experiencias que vamos viviendo de adultos pueden modificarla. Entre
las múltiples causas de una baja autoestima podemos señalar las siguientes:
– La exclusión social
Cuando una persona atraviesa momentos difíciles, casi sin darse cuenta va forjándose
unas creencias negativas sobre sí mismo. Ya sea sobre su capacidad intelectual, su
apariencia, o sus capacidades para tener éxito en la vida.
Tan importante son las experiencias vivimos, como la interpretación que hacemos de
ellas.
Entonces, aumentar nuestra autoestima será un factor clave para sentirnos bien con
nosotros mismos.
Consecuencias de una baja autoestima
“No podemos querer a los demás sino aprendemos primero a querernos a nosotros
mismos”
Quererte a ti mismo es mucho más complejo de lo que parece. Saber quererte bien es
aceptarte, respetarte, atender a tus necesidades vitales y amarte por ser quien eres, con
tus virtudes y tus defectos.
Una persona que se quiere y se valora a sí misma proyecta a los demás buenas
vibraciones, y la curiosidad por conocerla. Irradia amor, porque se ha aceptado a sí
misma. E inconscientemente los demás lo perciben.
TECNICA EL ÁRBOL DE LOS LOGROS
El árbol de los logros es una sencilla técnica que te permitirá reflexionar sobre tus logros y
cualidades positivas, analizar la imagen que tienes de ti mismo y centrarte en las partes
positivas.
Con esta técnica podrás evaluar en un momento tu nivel de autoestima ya que ilustra muy
bien tu estado de ánimo. Lo único que necesitas es un bolígrafo y unas hojas.
Lo primero que debes hacer es elaborar una lista de todos tus valores positivos, ya sean
cualidades personales (paciencia, valor…), sociales (simpatía, capacidad de escucha…),
intelectuales (memoria, razonamiento…) o físicos (atractivo, agilidad…). Intenta hacer una
lista lo más larga posible tomándote todo el tiempo que necesites.
Una vez acabada la primera lista, elabora otra con todos los logros que hayas conseguido
en la vida. Da igual si esos logros son grandes o pequeños, lo importante es que tú te
sientas orgulloso de haberlos conseguido. Al igual que antes, reflexiona y apunta todos los
que puedas.
Cuando ya tengas las dos listas, dibuja tu “árbol de los logros”. Haz un dibujo grande, que
ocupe toda la hoja y dibuja las raíces, las ramas y los frutos. Haz raíces y frutos de
diferentes tamaños. En cada una de las raíces debes ir colocando uno de tus valores
positivos (los que apuntaste en la primera lista). Si consideras que ese valor es muy
importante y te ha servido para lograr grandes metas, colócalo en una raíz gruesa. Si por
el contrario no ha tenido mucha influencia, colócalo en una de las pequeñas.
En los frutos iremos colocando de la misma manera nuestros logros (los apuntados en la
segunda lista). Pondremos nuestros logros más importantes en los frutos grandes y los
menos relevantes en los pequeños.
Una vez que lo tengas acabado, contémplalo y reflexiona sobre él. Es posible que te
sorprenda la cantidad de cualidades que tienes y todas las cosas importantes que has
conseguido en la vida. Si quieres, puedes enseñárselo a alguien de confianza para que te
ayude a añadir más raíces y frutos que él haya visto en ti y de los que no seas consciente.