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Introducción
Voy a poner en perspectiva, algunas posturas de los practicantes del “Evangelio de la
prosperidad”, para formular una postura Bíblica y como les presentaría el evangelio de Dios.
Los practicantes de esta teología, en detrimento de una gran cantidad de pasajes Bíblicos que
contradicen sus doctrinas, continúan falsificando a pesar de la abrumadora y transparente verdad
de la Biblia.
Ellos postulan que la expiación de Cristo elimina todos los estragos del pecado, como la
enfermedad, la pobreza y el sufrimiento. Eliminan de este modo instantáneamente la naturaleza
pecaminosa que posee el ser humano y no se requiere de la santificación y de la obra progresiva
de Dios sobre el creyente.
Idea principal:
Argumento:
Los teólogos de la prosperidad utilizan una fe sugestiva, que raya en una fe psicología y no en
una fe Bíblica. Ellos dan algunos pasos para lograr que Dios nos prospera utilizando una fe falsa:
Paso 1: Debemos visualizar lo que queremos
Paso 2: Formularlo en la mente, o embarazarme de lo que quiero.
Paso 3: Reclamarlo y confesarlo.
Entonces la fe es una fuerza espiritual autogenerada que conduce a la prosperidad. Pero esta fe
está basada en una fe real? Definitivamente que no. ¿Por qué? Porque se basa en la capacidad
humana, para alcanzar sus objetivos desechando Mateo 6: -33.
Porque los gentiles buscan todas estas cosas, pero vuestro Padre que está en los cielos
sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas. 33 Más bien, buscad primeramente el reino de
Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
Quitan a Dios su soberanía, quedando reducido El a nuestros caprichos. Dios para la gloria del
hombre y no el hombre para la gloria de Dios.
Dios queda reducido a un simple mandadero del ser humano.
Conclusión:
La teología de la prosperidad está haciendo que las personas que sostienen sus creencias pequen
contra Dios, por las siguientes razones. El individuo usa a Dios para propios fines pecaminosos,
el hombre es deificado y Cristo no es nuestro Señor y Dios, sino que es, nuestro hermano mayor.
La Fe está basada en las palabras y confesiones positivas y no en la autoridad y soberanía de Dios.
Si la teología de la prosperidad fuera Bíblica, entonces todos los héroes de la fe del capítulo 11
de Hebreos tendríamos que borrarlos de la Biblia porque muchos de ellos no tuvieron ni buena
salud ni prosperidad financiera.
En conclusión la Biblia rechaza los postulados de la falsa teología de la prosperidad y las enmarca
como pecado delante de Dios.
Hebreos 13:5 Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora;
porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré;
Mateo 6:24. Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al
otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas
Lucas 12:15
Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la
abundancia de los bienes que posee.
Mateo 6:19
No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones
minan y hurtan;