Amor y Amistad

El amor es paciente, es benigno;

El amor no es celoso ni envidioso;
No es presumido ni orgulloso,
No es egoísta ni grosero;
No hace nada indebido,
No trata de salirse siempre con la suya,
No es irritable ni rencoroso,
No le gustan las injusticias,
Pero se regocija cuando triunfa la verdad.
El amor nunca deja de ser….
Y no hay amor más grande que el que Dios nos ha demostrado a
través de Su Amado Hijo Jesucristo.
1 Corintios 13:4-8
Las personas se preguntan ¿qué es el amor?; algunos lo expresan
en palabras rebuscadas; otros, de acuerdo a como creen haberlo
experimentado… otros más, ni siquiera saben que existe, incluso,
hay quienes lo niegan.
¿Amor en tiempos como éstos, en que la humanidad se destruye, en
que la violencia aumenta cada día más, en que el panorama ya no es
gris, sino negro y todos hablan de dolor, de muerte, de llanto y
destrucción?
Y la amistad ¿dónde queda? Si no existe el amor, la amistad
¡menos!

Pero ¿qué es el amor? La respuesta es muy sencilla: el AMOR es

DIOS, porque DIOS es AMOR, y Él muestra la inmensidad de Su
amor hacia usted y hacia mi, al haber enviado a Su Santo Hijo
JESUCRISTO a morir en nuestro lugar, aún siendo pecadores…. por
Su gran amor eterno y sublime con que nos ha amado, el cual cubre
todas nuestras faltas… este amor excede a todo conocimiento y en
esto podemos conocerlo: en que Él puso Su Vida por nosotros…
POR ESO, nosotros debemos amarnos unos a otros; porque el amor
proviene de Dios. Todo aquel que ama (verdaderamente), es nacido
de Dios y conoce a Dios.
Esto sí es amor verdadero: no es que nosotros hayamos amado a
Dios, sino que Él nos amó tanto, que envió a Su Hijo Único, para que
muriera en sacrificio por nuestros pecados, y así pagara la deuda
que nosotros con nada podemos pagar. Porque la paga del pecado
es muerte, mas el regalo de Dios es vida eterna en Cristo Jesús,
Señor nuestro (Romanos 6:23)
Jesús, el Salvador, dijo: “Nadie tiene mayor amor que este: que uno
ponga su vida por sus amigos, vosotros sois mis amigos, si hacéis
lo que yo os mando” …. y el amigo en todo tiempo ama, y es como
un hermano en tiempo de angustia….
Sí, Jesucristo es nuestro Amigo verdadero y fiel; por eso aceptó
dejar Su Trono glorioso, despojándose de Su majestad, porque
“aunque era Dios, no demandó ni se aferró a los derechos que como
Dios tenía, sino que, despojándose de Su gran poder y gloria, tomó
forma de esclavo al nacer como hombre. Y estando en la condición
de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la
muerte, llegando al extremo de morir como mueren los criminales:
en la Cruz (y esta muerte fue por salvarnos a usted y a mi), por lo
que el Padre lo exaltó hasta lo sumo, y le dio un Nombre que está
por encima de cualquier nombre…. y no hay otro nombre en que
podamos tener salvación”, pues solamente JESÚS es el Camino, la
Verdad y la Vida y nadie llegará al Padre, sino a través de
reconciliarnos con Él, por medio del sacrificio que Jesús hizo en la
Cruz, muriendo en nuestro lugar y pagando con Su Sangre nuestra
deuda.
¿Quieres ser tú, amigo de Jesucristo? Debes saber que la amistad
con las cosas del mundo es enemistad con Él, pero si tú crees a Su
Palabra de vida eterna y le aceptas en el corazón como Único y
Suficiente Salvador, serás llamado amigo de Dios.
PORQUE DIOS NO ES HOMBRE PARA QUE MIENTA, NI HIJO DE
HOMBRE PARA QUE SE ARREPIENTA.