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Su Naturaleza y Realización
por H. Spencer Lewis, F.R.C.
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
Tenemos muchas definiciones para la palabra o término Amor, y en todas las
filosofías al amor se le da un significado tan amplio y abstracto que, tras todo
nuestro análisis de este, no podemos comprenderlo completamente.
El Budismo considera al Amor como una de las Viharas o Condiciones
Sublimes, siendo las otras, el dolor, la felicidad y la ecuanimidad.
En la doctrina Cristiana hallamos al amor interpretado como una de las
nociones centrales sobre la cual depende la buena conducta, siendo la fe la
otra noción. Del amor depende el “cumplimiento de la ley”, y el único valor
moral del deber Cristiano- esto es, amar a Dios, en primer lugar, y en segundo
lugar, amar a la humanidad.
Analicemos esta afirmación. Encontramos, primero que todo, que el Amor es una
realización consciente. El Amor ha sido crudamente, aunque correctamente
denominado, una emoción. Es una emoción porque es sentido, realizado; es una
emoción en el sentido fisiológico porque estimula ciertos centros nerviosos y
produce ciertas condiciones, tanto fisiológicas como condiciones psicológicas.
Ahí está la clave, la idealidad. En esta palabra vemos lo que significa la doctrina del
Cartesianismo cuando dice que amor es un anhelo por el bien, para la satisfacción
absoluta.
Cada uno de nosotros tiene ciertos ideales que pueden permanecer adormecidos
en nuestra consciencia o en la consciencia sub-normal. Estos ideales o normas,
modelos absolutamente perfectos, pueden ser de nuestra propia hechura,
construidos a través del estudio, análisis, experiencia e inspiración divina, durante
semanas, meses, años o encarnaciones. Consciente o inconscientemente podemos
añadir, remodelar, perfeccionar y hacer más maravillosos aquellos ideales que
creemos que son infinitos, supremos.
De la misma manera la mujer ama al hombre, y los padres a sus hijos, y los hijos
aman a sus padres. También en la misma manera - súbitamente o gradualmente
haciéndose consciente de una realización de nuestros ideales en una cosa, o de una
cosa- amamos ciertos tipos de música, arte, literatura, alimentos, comodidades, etc.
"En el principio fue la Palabra, y la Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios".
Así fueron el hombre y toda la creación concebidos en y del Amor, y Dios expresó
en todas las cosas creadas su Amor.
Así, filosóficamente, uno puede decir que el Amor es el gran incentivo, el gran
poder, la más grande energía inspiradora en el mundo; y como el amor tiene que
tener ideales para sus elementos de expresión, el Amor es esencialmente bueno. En
esta manera uno puede filosofar: Amor es Bueno, lo Bueno es Dios, Dios es Amor, el
Amor es Dios; o, Dios es Amor; Dios es la Fuente de todo Bien, por lo tanto el Amor
es la fuente de toda bondad, el mayor poder en todo el mundo.
Encontramos esto bien expresado en el cuarto capítulo del Libro Primero de Juan:
(Versículos Séptimo y Octavo): "Amados, amémonos unos a otros porque el amor
es de Dios; y todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. El que no ama
no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. Si nos amamos mutuamente Dios
mora en nosotros, y su amor se perfecciona en nosotros. Amamos a Dios porque El
nos amó primero. Si un hombre dijera, amo a Dios y odia a su hermano, él es un
mentiroso; pues si no ama a su hermano a quien ha visto, (conscientemente
realizado) ¿cómo puede él amar a Dios, a quien no ha visto? Y este mandamiento
tenemos de Él, Que el que ama a Dios ama también a su hermano".
Nota: aquellos que deseen números atrasadis para completar sus archivos deben
tener en mente que el precio de los números de Enero, Feb rero, Marzo, Abril,
Mayo, Junio y Julio es de 50 centavos cada uno. Este precio se incrementará a
medida que las copias se vuelvan más escasas.
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
ENTRE todos los griegos o primeras escuelas de filósofos, así llamados, cuyas
vidas, enseñanzas y logros son profundamente interesantes, hay uno que es
especialmente interesante para los Rosaecrucianos. Es Empédocles, el
científico, médico, filósofo y Maestro de una muy floreciente Logia
Rosaecruciana.
Empédocles vivió la vida de un verdadero místico Rosacruz; esto es, él aplicó
las enseñanzas de la Orden y realizó tales aparentes milagros y
manifestaciones maravillosas de las enseñanzas Rosaecrucianas como uno
esperaría de un Maestro Místico.
Si creyéramos todas las historias fragmentarias de su vida como son
presentadas por algunos historiadores y enciclopedias, consideraríamos a
Empédocles, ya sea como un precursor del hombre Jesús o aún más como el
más grande enigma de la historia. En verdad, alguna consideración debe darse
al hecho de que la mayoría de las historias publicadas de su vida y obra fueron
escritas por admiradores, estudiantes o aquellos que fueron maravillosamente
beneficiados por sus “milagros” personalmente demostrados. Debemos tener
por la honesta exageración, la alabanza sincera atenuada con la parcialidad y
el deseo de hacer el nombre de Empédocles por siempre famoso.
Pero las historias publicadas y los documentos sobre la vida y obra de
Empédocles son muy fragmentarios, muy incompletos y muy dogmáticos para
que ser de algún valor real al Rosaecruciano que desea la verdad sobre este el
más inspirador Maestro.
Aquellos que se han aventurado a componer los pocos fragmentos sobre su
vida y filosofía parecen temer expresarse ellos mismos libremente; ellos
prefieren meramente registrar su grandeza como tradicional y dejar al lector
juzgar por sí mismo. Es como si la verdad fuera asombrosa; y bien podría serla
para algunos.
William Wallace, el famoso filósofo Escocés, y profesor de Filosofía Moral en la
Universidad Merton, quien fue uno de los más destacados expositores y críticos
de la filosofía y doctrinas de Hegel, escribió hace varios años sobre
Empédocles como sigue: “Él fue a la vez un estadista, profeta, físico, médico y
reformador que más impresionó la imaginación popular. Para sus
contemporáneos, como para él mismo, él parecía más que un simple hombre”.
Al dirigirnos a los registros Rosaecrucianos, sin embargo, uno puede componer
una muy completa- aunque breve- historia de este hombre maravilloso.
El espacio en esta revista es limitado, y no es apropiado publicar un esbozo
extendido de la vida y las enseñanzas de Empédocles en un artículo de una
revista pública. Por lo tanto, voy a trazar los datos más interesantes y dejar
para un momento en el futuro el trabajo más completo en forma de libro.
Empédocles nació en Agrigento en Sicilia a principios de mayo (de acuerdo con
nuestro calendario actual) en el año 492 a. C. y no en el año 490 como dice la
mayoría de las autoridades. La diferencia de dos años es debido a un cambio
en el calendario de los años que se produjo en la quinta centuria A. C., y que
no es apropiadamente considerado por aquellos que escriben historias
populares.
La fecha exacta de nacimiento no está establecida, tal como lo indicamos. Pero
su nacimiento está registrado por su horóscopo y esto demuestra que,
permitido por los cambios del calendario, más ciertos cambios astronómicos, él
nació como se dijo antes, a principios de Mayo. Pero tenemos otra guía y esta
es una celebración en su honor realizada por las antiguas Logias Europeas el
día 6 de Mayo de cada año. Podemos decir con seguridad entonces, que a
través de las configuraciones de algún viejo científico o astrólogo en la Orden,
su nacimiento fue el 6 de mayo de 492 A.C.
La antigua ciudad de Agrigento es ahora la más moderna ciudad de Girgenti.
Está situada en la costa sur de Sicilia, a 58 millas de Palermo.
La ciudad de Agrigento fue fundada por colonos de Gela alrededor del 586 a
584 A.C. Adquirió la primer posición entre las ciudades establecidas por los
Griegos en Sicilia.
El sitio es uno de remarcable belleza y gran fuerza natural. Al norte se extiende
sobe una elevada cresta y en el este había una gran roca usada una vez como
un Templo Altar, hoy día conocida como la Roca de Atenea. Sobre la meseta
alta rodeando el altar había un templo de Zeus (*). De hecho la ciudad original
estaba amurallada y dentro de sus murallas había muchos Templos dedicados
a la adoración oculta- y estos templos en ruinas permanecen hasta este día a
pesar del hecho que una ciudad muy grande ha crecido sobre el sitio. En un
artículo futuro describiré estos templos y su propósito en detalle.
Ha existido una discusión considerable por muchos años respecto a este
Templo y su llamado Toro de Bronce. Algunos de los más grandes
escritores y científicos del mundo han argüido sobre el punto en
cuestión, el cual, después de todo, ellos no han sido capaces de definir.
Es porque el mítico tirano Falaris no ha tenido nada que ver con este
Templo. Los Rosaecrucianos en el 4º grado o superior entenderán
porqué el Altar y el Templo fueron construidos sobre una roca alta en el
Este, y para qué fue usado en Altar.
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
Sobre las llanuras de Francia oriental se encuentra la provincia de Lorena, y allí
el río Mosa escurre un lento y vagabundo curso entre verdes pasturas. Anidado
entre sus orillas, en tiempos antiguos, había pequeñas villas donde vivían los
pastores cuyos rebaños vagaban por los campos. Entre estas villas había una
denominada Domremy, desde entonces famosa sobre todas las otras villas del
mundo. Un pequeño caserío de chozas de paja a lo largo de calles estrechas,
acordonaban la simple iglesia. Entre estas casas estaba aquella de un Jaques
d’Arc, un granjero propietario de numerosos rebaños, y a este granjero y a su
esposa Isabel, nació el 6 de enero, en el año 1412, una hija, que fue bautizada
Juana, a quien sus compañeros de juego llamaban Juanita y a quien los
Ingleses, en años posteriores llamaron Juana de Arco.
En estos primeros años de la 15 centuria Francia todavía estaba bajo la nube
de la Guerra de los Cien Años. Los Ingleses habían conquistado las provincias
del norte y la batalla de Agincourt había diezmado los rangos de los nobles,
miles de los cuales fueron asesinados por las flechas inglesas en esa terrible
batalla. La 14 centuria había sido una de horrores a través del país. La guerra
rugía, la pestilencia se esparcía, la gente soportaba impuestos al punto de la
hambruna. En París los alborotos y el desorden eran la regla; los muertos
yacían en las calles sin ser enterrados, mientras que en el invierno los lobos
invadían la ciudad. La moral estaba en su punto más bajo; mentir, robar, matar,
era común entre los señores y los príncipes. Crueldades, traiciones, y
venganzas ocupaban las mentes de los políticos y los líderes. Tras la batalla de
Agincourt el temor a los Ingleses llenó el corazón de cada soldado Francés, y el
Duque de Burgundia y todos sus seguidores se habían unido a los ingleses en
el norte.
Al sur del río Loria, el Delfín Carlos VII, todavía mantenía su poder. Los nobles
de las provincias del sur, unidos bajo él, lucharon por su país, pero el coraje, la
esperanza, el entusiasmo habían declinado bajo reversas. Carlos, débil,
amable, vacilante, fue la herramienta de una favorita real tras otra, y su corte
fue una escena de frivolidad y mal. Tales eran las condiciones prevalecientes
cuando allí ocurrió el milagro, y de las marchas de Lorena salió la Liberadora
de Francia.
En el momento en que Juana de Arco nació las estrellas mostraban que una
gran alma estaba reencarnando. En el este se levantaba Escorpio, ese signo
del Zodíaco que con tanta frecuencia juega una parte en el genio, dando poder
creativo. Brillando directamente hacia abajo desde el Medio cielo estaba la
Luna en el ígneo signo de Leo, otorgando gran energía vital, calor de corazón y
ambición. El sol en Capricornio, el signo del sacerdote y del político, estaba
cerca del planeta Venus. De modo que la determinación, el tacto y un fuerte
sentimiento religioso, es añadido profundamente y una constancia de afecto.
Juana, de niña, era saludable, feliz, llena de vida y vigor; obediente a sus
padres y devota de la iglesia. Sus días pasaban atendiendo sus rebaños. Cerca
de la villa había un gran roble viejo donde los niños se reunían para jugar y
charlar de las hadas que vivían allí, hadas que eran buenas y mantenían
alejados a los lobos. Juana amaba a los animales, las ardillas se sentaban en
sus hombros, los corderos la seguían, mientras que los pájaros comían de sus
manos. Así fue hasta que ella cumplió los trece años de edad cuando vino un
cambio; aparecieron las visiones y las voces le hablaron.
Una vez corriendo a través del jardín de su padre, una gran nube apareció
frente a ella y escuchó una voz diciendo que “ella debía cambiar su vida y hace
obras maravillosas, pues el Rey de los Cielos la había elegido para ayudar al
Rey de Francia”. Luego le apareció el arcángel San Miguel, a quien vio
claramente a la luz del sol, y quien le dijo que Santa Catalina y Santa Margarita
vendrían de las nubes y le hablarían. Ellas vinieron y ella las vio, las escuchó,
las tocó y las obedeció. Ellas venían con frecuencia y ella lloraba cuando ellas
se iban, pues ellas eran “bellas y coronadas con hermosas coronas”. Ella no
habló a nadie de estas visiones, sino que permaneció silenciosa, seria y muy
devota. Por cuatro años ella resistió las órdenes de sus Santos; las órdenes
que le decían que fuese a ver al Delfín y hacerlo coronar Rey. Ellas le dijeron
que ella era ignorante, una pobre muchacha que no podía montar ni ser una
líder, pero en la primavera de 1428 ellos no le permitieron más demoras. Se le
ordenó ir a ver a un Roberto de Baudricourt, comandante de un fuerte cercano;
él le daría una escolta y ella cabalgaría hasta lo del Delfín.
Juana tenía en esta época cerca de dieciséis años, una muchacha alta. Fuerte,
saludable, hermosa de rostro y de figura. Su cabello era negro y sus
maravillosos ojos grandes parecían ver lejos en las profundidades de las cosas.
Su sonrisa poseía una dulzura que pocos podían resistir y sus maneras
gentiles, lágrimas listas y rápidas simpatías delataban su alma, Mercurio, el
planeta de la mente, está ubicado en su horóscopo en el signo de Sagitario, en
feliz relación con la Luna, e influenciado grandemente por el planeta Neptuno.
Todo esto añadiría a sus tendencias religiosas y místicas. Sin embargo, no
debemos pensar de ella como meramente una soñadora visionaria. La carta
muestra gran fuerza de carácter, aguda inteligencia, habilidad práctica, coraje y
poder de voluntad. Esta es una combinación inusual de ternura y de fuerza. En
la época en que sus visiones comenzaron, el Sol había entrado en estrecho
contacto con el gran Urano, fuerte en sui propio signo de Acuario. Esto
desarrolló su genio y le dio un deseo de obrar por la humanidad.
Así que en los días de la primavera ella fue a la ciudad de Vaucouleurs donde
al siguiente año se le dio una escolta de dos caballeros, sus dos hermanos y
algunos soldados, y partió para Chinon para ver al Delfín. En esta época ella
adoptó la ropa de un hombre. Hubo retraso antes que el Rey la recibiera, y
cuando lo hizo, ellos trataron de engañarla colocando otro hombre sobre el
trono, mientras Carlos permanecía parado entre la multitud. Pero sus Voces l
guiaron y ella se adelantó con gran simplicidad, y, arrodillándose, dijo al Delfín
“Yo vengo de Dios para ayudarlo a usted y a su reino”. Ella le dijo que
perduraría solo “por un año y un poco más” pues ella siempre supo que su fin
se aproximaba, pero siempre lo desatendía. Ella le pidió apurarse para que ella
pueda liberar Orleans y conducirlo a ser coronado en Rheims. Finalmente ella
fue enviada a Tours, donde su blanca armadura fue hecha y donde sus Voces
le ordenaban buscar cierta espada, enterrada detrás del altar de una iglesia a
cierta distancia de la ciudad. La espada fue hallada como ella dijo, cubierta de
herrumbre, y ella la usó en una vaina de cuero; la usó pero nunca la blandió
para matar un ser humano. En batalla ella llevaba su bandera de seda blanca
con sus lirios y las palabras “Jesús, María”.
Ella ahora había sido hecha General en Jefe de los ejércitos de Francia, y su
lugarteniente era un cierto Duque de Alencon. Este príncipe era su gran
admirador y amigo, y él le dio un gran caballo negro sobre el cual cabalgar en
las batallas. Por su previsión de los eventos ella salvó una vez su vida. Ella
tenía un doméstico propio, un confesor, un caballerizo real y un paje. Su
palabra era ley para todos ellos, mientras que la gente se enloquecía de
entusiasmo ante su llegada. Recordemos que todo esto ocurrió entre fines de
Abril y el Febrero anterior, cuando una doncella campesina, de diecisiete años
de edad, incapaz de leer o escribir, no sabiendo nada del mundo o del arte de
la guerra, comenzó con su escolta desde la ciudad de Vaucouleurs. ¿Quién fue
esta doncella en una previa encarnación? ¿Qué semblanza tenía para
mostrarse ante el mundo?
Su primer acto oficial fue dictar una carta a los Ingleses, ordenándoles dejar
sus fuertes y partir de Francia. Sus cartas están preservadas en los archivos
Franceses; ellas son dignas, como de un estadista y enérgicas. Los Ingleses en
este momento estaban asediando Orleans; esa ciudad sobre el Loria, era la
puerta de entrada al sur y su captura significaba el desastre para Francia.
Juana entró por una puerta libre por la noche, y fue bienvenida como una
Libertadora. Mientras tanto ella había fortalecido su ejército y limpiado del
desorden; cada hombre siguiendo su estandarte debía estar confesado.
Cuando ella caminaba entre sus soldados llenaba sus corazones con
entusiasmo, con coraje, con amor; ellos la llamaban el Paje de Cristo. Mientras
los generales dudaron al principio de su habilidad, ellos pronto se dieron cuenta
de su error; ellos creyeron en su inspiración, y su propia fe en sus Voces fue
como la fe que podía mover montañas.
La toma de un fuerte llamado Tourelles fue el último evento en el levantamiento
del sitio. Dijo la Doncella: “Al amanecer del día de mañana, manténganse cerca
de mí pues yo tengo mucho que hacer, y la sangre fluirá de mi cuerpo sobre mi
pecho”. Este fue un gran asalto. Los Franceses escalaron las murallas con tal
valor y coraje que, dice un antiguo escritor “uno podría pensar que ellos se
consideraban inmortales”. La bandera de la Doncella estuvo siempre primera
en el ataque, pero cerca del mediodía ella fue herida por una flecha que
atravesó su armadura y pasó claramente a través de su hombro. Ella misma se
la quitó, mientras lloraba de dolor, y de nuevo condujo sus tropas hacia una
completa victoria. La batalla de Orleans, una de las batallas decisivas de la
historia, fue ganada. La ciudad y el ejército estaban enloquecidos de felicidad, y
le dieron a Juana su nuevo título, la Doncella de Orleans. Esa ciudad ha sido
siempre fiel a su memoria; hasta este día el 8 de Mayo es celebrado con
ceremonias civiles y militares.
El próximo objetivo de su misión era que el Delfín fuese coronado en Rheims,
donde todos los Reyes de Francia habían sido coronados en la gran catedral.
Esta ciudad se encuentra en el norte y estaba entonces en el corazón del país
enemigo. El tímido y vacilante Carlos lo postergó largo tiempo, aunque la
Doncella le imploraba apurarse a medida que el año finalizaba. Ella conquistó
otros fuertes Ingleses al norte, y finalmente Carlos aceptó ir con el ejército a
Rheims, donde, en Julio, vino la coronación. En la gran iglesia, ante el altar, la
Doncella se paró cerca del Rey, con su estandarte en su mano; cuando él fue
coronado, ella se arrodilló, sollozando con gozo, y dijo, “Gentil Rey, ahora está
cumplida la voluntad de Dios”. Ella había completado en menos de tres meses
los dictados de sus Voces.
¡Qué alma fue esta! ¡Qué gentileza, qué simplicidad, qué gran coraje y
tenacidad de propósito! Imaginen esa delgada figura, cubierta con su armadura
blanca, inclinándose sobre el cuello de su caballo, como volando hacia
adelante mientras ella conduce la hueste que carga, su bandera con sus lilas
en su mano y siempre su grito “¡Adelante! ¡Adelante!”. Imagínenla, cuando ella
estaba sentada sollozando en el campo de batalla de Pathay, con la cabeza de
un inglés moribundo en su regazo, mientras como a un sacerdote, él hace su
última confesión.
Fue ahora que ella pidió permiso para retornar a su villa, pero Carlos no se lo
permitió; se la necesitaba con el ejército. Ella y su familia habían sido
ennoblecidos y dado el nombre de Lys, pero para Juana esto era de poco
interés. Su único pedido había sido que se perdonaran los impuestos a la villa
de Domremy. Esto fue hecho y la ley permaneció en vigor hasta la Revolución.
Los generales del ejército deseaban ahora avanzar sobre París, pero Carlos
era un gran cobarde, demasiado bajo la influencia de ciertos cortesanos que
intrigaban con el enemigo para permitírselo hasta que fue muy tarde. El ataque
fracasó, los Franceses se replegaron al Loria, y Juana colgó su armadura en la
Catedral de San Denis. “Y así”, dice el antiguo escritor, “fueron quebradas la
voluntad de la Doncella y el ejército del Rey”. A partir de ahora las sombras se
reunieron rápidamente. El precioso año de Juana estaba terminando, y sus
Voces le avisaban que ella sería capturada antes de los días del verano. Ellas
le decían que no tema, que Dios la ayudaría, pero ella oraba por la muerte, no
por la cautividad.
Fue un breve tiempo después, en una incursión contra las fuerzas Burgundias
que la Doncella fue capturada. Ella rehusó rendirse cuando estuvo rodeada, y
esperó así hallar la muerte, pero ella era un premio muy valioso para ser
lastimado. Ella fue vendida a los Ingleses, por sus aliados de Burgundia; los
Ingleses que habían dicho siempre, para conocimiento de Juana, que la
quemarían viva si la capturaban. ¿Ofreció el Rey, el agradecido Rey, un
rescate por ella? No. ¿Mostró interés en su destino, u ofreció ayudarla de
alguna manera? No. Verdaderamente, la gratitud de los reyes merece su
reputación.
Ahora los Ingleses no podían asesinar a una gran líder, amada por las masas
de Franceses, sin causar mucha perturbación, así que ellos solicitaron la
asistencia de la Iglesia. Hubo un hombre, Pierre Cauchon- un nombre por
siempre negro en la historia- un Obispo de Beauvais, y como Juana había sido
capturada en su diócesis, le fue dado a él conducir el juicio; ese juicio por
herejía y brujería. Los Ingleses la llevaron a Rouen, la colocaron en un
calabozo, le pusieron cadenas y la presentaron a la Iglesia con el conocimiento
que si ellos fallaban en condenarla, ella sería devuelta a ellos. A Pierre
Cauchon se le prometió el Arzobispado de Rouen si tenía éxito en destruirla. Él
pidió colaboración de la Universidad de París y esta le envió cincuenta
hombres de la iglesia que estaban en simpatía con los ingleses. La Inquisición
también asistió. Así en Febrero de 1431 comenzó la farsa, que marca con
infamia a la Iglesia. Todos los registros de esta están preservados en Francia y
forman una historia entera de la Doncella.
El Gran Juicio, como fue llamado, fue conducido en el castillo en Rouen. Los
muchos sabios y humanos “ministros de Dios”, presididos por el gordo
Cauchon, llamaron a Juana frente a ellos. Ella vino- en su vestido de paje de
color negro- pálida y débil por sus meses de cautividad, sus tobillos y muñecas
encadenados. Ella vino sin un simple amigo para hablar en su favor, o
defenderla, pero su mente, clara y activa, estaba siempre alerta; su genio no
falló. Ellos le preguntaron acerca de las hadas de Domremy; acerca de sus
Santos, a quienes ella declaraba haber visto, oído, tocado y adorado; acerca de
la razón por usar ropa de hombre; acerca de la espada oculta en Fierbois. Ellos
trataron de todas las maneras de hacerle confesar, pero esto nunca sucedió.
Ella pidió que sacerdotes del partido de Francia estuviesen entre sus jueces, y
esto le fue negado. Ella quiso apelar ante el Papa, pero esto también le fue
negado. Ella era simplemente una víctima entre sus enemigos.
Luego ella cayó enferma y ellos se preocuparon ante la idea que muriese de
muerte natural. Ellos la visitaron en su celda donde yacía con fiebre, a cargo de
rudos soldados Ingleses, y trataron de hacerle declarar que sus Santos eran
demonios y que ella misma era una cosa maligna, pero siempre su coraje se
elevó y ella nunca titubeó, aunque veía las llamas delante de ella. Este triste
juicio se desarrolló a través de los meses con muchas complicaciones, hasta
que los Ingleses se impacientaron, y ella fue entonces condenada como
herética y bruja, y sentenciada a ser quemada.
En el mercado de Rouen ellos levantaron un cadalso con una estaca, apilaron
leñas a su alrededor, y allí, el 30 de mayo, en el año 1431, cuando ella tenía
diecinueve años de edad, esta maravillosa muchacha subió bravamente a su
muerte. Cuando la encadenaron, ella llamó a Santa Catarina y dijo que todo lo
que había hecho fue por mandato de Dios. Cuando las llamas la envolvieron
ella gritó claramente “Jesús”, su cabeza cayó hacia adelante y su alma partió.
Durante sus últimos días sus Voces le habían prometido la victoria a Juana,
una gran victoria, y esto le hizo creer que ella iba a ser rescatada por los
Franceses, pero esa victoria era una cosa mucho más grande que la lucha de
los hombres pudiesen alcanzar. Su alma había completado la misión para la
cual había venido; algún débito de una vida pasada había sido reparado y ella
podía partir del plano material una vez más.
En su horóscopo la casa de la muerte está ocupada por el planeta Neptuno,
que podría indicar su muerto como siendo inusual, y la luna en esta época en
mala relación con Urano, testimoniaba algo similar. Pero el sol, el ego, el ser
real, estaba en feliz relación con el gran benefactor, Júpiter, y para esta alma la
muerte vino como una feliz liberación.
Fue casi veinte años después que los gentiles Ingleses habían arrojado las
cenizas de la Doncella en el Sena, que Francia despertó y demandó conocer la
verdad. Esto resultó en lo que se conoció como el Juicio de rehabilitación que
duró algunos años. Los Franceses estaban nuevamente en el poder, los
Ingleses habían sido expulsados del país, y Carlos el Rey, se había vuelto un
hombre bajo en entrenamiento de Richemont. Todas las profecías de Juana se
habían realizado y el pueblo insistía en que ella fuese honrada. Este segundo
juicio de nuevo revivió la vida entera, llamando como testigos a todos los que la
habían conocido o habían estado concernidos en su condena, y terminó por la
Iglesia y el pueblo reinstalándola como “el Paje de Cristo”, “la Doncella de
Orleans”, “la Liberadora de Francia”.
En 1908 la Iglesia de Roma, que la había quemado, hizo el honor de hacerla
una Santa, pues deseaban incrementar su influencia menguante sobre el
pueblo de Francia. Esto debe haber hecho que Pierre Cauchon se diese vuelta
en su tumba.
EL “MAESTRO MUNDIAL” BUGABOO
por El Gran Secretario General
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
Mucho está siendo dicho y escrito en estos días acerca de diferentes “Maestros
Mundiales” que están viniendo aquí del Este y del Sur a reformar o revisar el
pensamiento de Occidente, que uno podría encontrar alivio en la afirmación
Rosaecruciana: “¡Nosotros no tenemos ningún Maestro por venir!”.
Varias organizaciones ocultas, esotéricas o fanáticas en América, de tiempo en
tiempo han proclamado que en un país muy distante un prodigio de niño o un
súper hombre está esperando el tiempo cuando ellos sean llamados aquí por
sus respectivas organizaciones para ir entre la gente y predicar.
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
Es un placer, verdaderamente, presentar a nuestros miembros a nuestro leal
compañero de trabajo, George R. Chambers, quien tan exitosamente
estableció la Logia Estatal para la Jurisdicción de Iowa, en Harlan.
El Hermano Chambers es un entusiasta buscador de la verdad y la Luz y pide
que la Luz, dondequiera arda, sea permitida para iluminar las mentes de
aquellos que buscan su iluminación. En sus propias palabras: “Soy lo
suficientemente amplio para realizar que algunos rayos de la verdad que
iluminaron la cuna de la antigua civilización pueden llegar hasta el presente y
ayudarnos en nuestra prejuiciada visión moderna”.
Temprano en el último año el Hermano Chambers comenzó su campaña para
una Logia en Harlan con la determinación de hacer saber a Iowa aquellas
verdades que ayudarían a los hombres y mujeres a vivir ese ideal de vida que
llamamos Rosaecruciano, y que él llamaría similar a Cristo. Él ha reunido a su
alrededor un equipo de oficiales capaces y tras grandes pruebas, muchos
sacrificios, y una gran cantidad de duro trabajo, ellos finalmente tuvieron su
gran institución de la Logia en Harlan en la noche del jueves 26 de Octubre.
El Hermano Chambers nació el 30 de marzo de 1865, cerca de las 8 A.M., en
Maidstone, Condado de Kent, Inglaterra. Hijo de padres Congregacionales él
estudió para el ministerio y se convirtió en Sacerdote de la Iglesia Católica
(conocida como la Iglesia Episcopal Protestante) y es hoy el Rector de la
Parroquia San Pablo en Harlan. Pero el Hermano Chambers también ha
ofrecido sus servicios en muchas maneras para ayudar a sus hermanos y ha
servido en muchas capacidades altruistas. Él es Vice Grande y Conferenciante
Estatal para el I.O.O.F. en Iowa, Capellán de una Logia Masónica, Director
Extranjero del Arco Real Masónico, Prelado de los Caballeros Templarios y
miembro de la Sociedad Nacional de Investigación Masónica, y ha sido un
Maestro de la A.O.U.W. En adición él ha sido honrado con los grados de Ph.B.,
Honorario M.A., y D.C.
Como ciudadano naturalizado de los Estados Unidos encontramos que el
Hermano Chambers ha entrado en el espíritu de progreso Americano con esa
sinceridad que hace a la vez que lo amemos y admiremos sus esfuerzos en
nombre de la humanidad. Y ahora – como él dice – él puede usar sus mejores
esfuerzos en brindar la gran luz de los misterios y de la sabiduría de los
Maestros a la otra mitad del mundo, las mujeres, a quienes les ha sido negada
la admisión en tantas organizaciones avanzadas de investigación y estudio.
Es un placer leer la filosofía del Hermano Chambers como está expresada en
párrafos ocasionales de sus cartas, y con todo hallar que él permanece leal a
los credos de su Iglesia en estos días cuando el modernismo hace que muchas
mentes titubeen. “Nunca puedo cesar de enseñar”, dice, “que Dios estuvo en
Cristo reconciliando el mundo con Él mismo”. Ni puedo rechazar los Credos
como símbolos autorizados de la Fe Cristiana.”
Y así, presentamos a nuestros miembros en todas partes a esta buena y
sincera amante alma de la primer clerecía Episcopal ordenada como Gran
Maestro en la Jurisdicción Americana. Mientras tenemos tantos clérigos de
varias denominaciones interesados en, y trabajando para nuestra Orden,
estamos particularmente orgullosos del corazón abierto del Hermano
Chambers para ofrecer voluntarioso servicio.
A él y a la Logia Estatal de Harlan como un cuerpo, y a los miembros
individualmente le enviamos nuestros mejores pensamientos y saludos.
AUTO-CONOCIMIENTO
Por Hatchuep, Antigua R.C.
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
Ese auto conocimiento no puede ser obtenido sin el juicio del ser, y quien se
juzga a sí mismo debe tener algo que juzgar- algún estándar ya sea actual o
ideal. En nuestro último artículo sobre este tema mostramos cómo la
consciencia se ha desarrollado, cómo la concepción y el entendimiento tienen
su progreso evolucionario en todos los seres y razas. Se entenderá que como
el conocimiento es una concepción de la mente y está sujeto a nuestra razón,
es del mismo modo modificable según nuestra realización y progreso. Todos
podemos esforzarnos hacia una perfección ideal y pensar que lo que
comprendemos como perfección es absoluta y eterna, pero si miramos más de
cerca pronto realizamos que nuestra concepción de la percepción crece con
nuestro propio progreso y así nuestro ideal está sujeto a cambio.
La perfección ideal es el sublimado de nuestras experiencias y comparaciones,
es el principio actuante y vivificante de toda moralidad, que cada uno de
nosotros debe sostener en un cierto grado y que impulsa nuestras acciones y
juicios. Toda fe en la dignidad y superior desarrollo del hombre, cada esfuerzo
y actividad, descorazonamiento, dependencia o inactividad son resultados de
una concepción superior o inferior del ideal. Este es entonces el verdadero
fundamento de la moralidad, y de acuerdo a nuestra concepción del ideal
nuestra moralidad será alta o baja. Ahora, si el juicio de nuestro propio ser y el
valor de otros depende del ideal que cada hombre tiene, y si estas
concepciones son diferentes será claro que el ideal de perfección debe variar.
También será claro que los hombres constantemente se contradicen ellos
mismos y a otros en sus juicios tanto como el estándar del ideal no sea el
mismo.
La pregunta ahora ante nosotros es: ¿Puede la humanidad coincidir en los
principios fundamentales de la perfección? Todas las religiones tienen tal ideal
en el supremo Dios que ellas adoran, pero todavía todas las naciones no
pueden coincidir en un Dios, el más alto ideal de perfección, porque la
concepción individual de esta perfección difiere. Nosotros no queremos entrar
en una discusión teológica, o la concepción de Dios, sino solamente puntualizar
que todas las religiones coinciden en un poder cósmico, inteligente, ya sea
personal o impersonal, y que este poder se expresa a sí mismo como un
principio creativo y preservador. Por la fuerza única todo es creado o traído a
existencia, y por el otro es forzado a madurar y propagarse. Hasta allí
encontramos unidad. Tomemos esta concepción y construyamos una
perfección ideal. Digamos que el principio creativo contiene en sí mismo tres
atributos: sabiduría, orden y propósito. Sin sabiduría no habría pensamiento
original, que el orden lo trae a formación y que el propósito fija en una idea
formada. Digamos que el principio preservador también contiene tres atributos
y que ellos son amor, paciencia y caridad. La idea formada sería nada si esta
no estuviera ligada junta por el amor que desea sostenerla, por la paciencia
que la guía, y finalmente por la caridad que preserva y salva de la destrucción
aún las ideas indignas. Si el estudiante tomara estas cualidades en su más alto
desarrollo él tendría una imagen ideal, que vale la pena imitar y por la cual él
puede reconocer sus necesidades comparándose él mismo y a sus
congéneres.
La mente aspira independientemente por el ideal. Es el sitio de nacimiento de
nuestros pensamientos y así de nuestras acciones y encontramos
principalmente dos clases de humanidad, aquella que actúa a partir de una fría
reflexión y razonamiento material, y aquella que actúa desde un estándar
mental o ideal. La comprensión y la razón producen leyes en la mente, pero
nuestro ideal en la mente tiene una tendencia a alejarnos de lo tangible y lo real
hacia lo especulativo, y busca su ideal más allá de lo real. Las acciones
impulsivas son aquellas actuadas por el ideal estándar en el hombre que no
sabe lo que quiere hasta la incitación de la pasión, o del dolor, o de la
aspiración ideal, o la religión lo conduce a una acción sin precedente.
Hemos tratado aquí de mostrar que todos los sentimientos religiosos, ideas y
acciones tienen su asiento en la mente, porque ellas solamente pueden ser
consideradas como causadas por el dominio de un alto ideal. Creyendo en este
ideal, el hombre se vuelve coronado con una sensación moral, y si no hay una
fe pura y la capacidad de percepción, él no completa su demanda; como un
ideal superior es pronto cambiado de un Dios a un ídolo y la superstición reina
suprema. Vemos entonces intolerancia, fanatismo, estoicismo, fatalismo,
oposición al conocimiento, con todos sus acompañamientos de disputas, odios,
terrores de guerra y de persecución; donde debería haber tolerancia, paz
fraternidad y amor fraternal.
Donde el poder del pensamiento es más fuerte que la capacidad de
percepción, la mente no será capaz de desplegarse, y donde la capacidad de
percepción es más fuerte y el poder del pensamiento es su sirviente, la mente
desplegará un real crecimiento. Donde el poder de percepción es muy pequeño
soportado por el poder del pensamiento, la vida mental degenerará. En la
primer clase están los hombres como duros animales, que se cuidan solamente
del placer, nada por el sentimiento; en la segunda clase están los pensadores,
fieles al deber; y en la tercera clase están los fanáticos y de mentes débiles,
que se expresan en las sensaciones solamente.
La mente se une con el sol de su ideal elegido y puede ser alcanzada por
debajo y ahogada por la bola de fuego del odio implacable. Esta influencia con
frecuencia quita al hombre de la zona de indiferencia y crea en él la voz de la
consciencia, tan pronto como él ha pasado al guardián del umbral y le muestra
su ideal, susurrando, primero suavemente, luego más y más fuerte: “¡Mírate a ti
mismo, por lo que eres, no por lo que no eres!”
Cuando ha despertado en cada hombre una mentalidad real que se esfuerza
por un ideal eterno, alto y verdadero, en el cual la inteligencia y la razón son
igualmente activos; entonces un alto grado de realización puede ser alcanzado,
igual a los sueños de la edad dorada, que aparece a la humanidad aspirante
como una felicidad largamente esperada.
¿POR QUÉ LA PUBLICIDAD?
Una Respuesta a la Pregunta por la Propaganda Rosaecruciana
Por Royle Thurston (seudónimo de H.S.Lewis)
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
Donde
D.C.E., Desarrollo Constructivo Espiritual puede ser expresado como “La
afirmación de los propios derechos de uno y privilegios y el descarte de los
propios deberes y responsabilidades de uno. Esto involucra la gradual pero
inevitable asunción de más grandes y superiores responsabilidades bajo y de
conformidad con el proceso y propósito evolucionario de la naturaleza. Esto
resulta en la preparación de la Inteligencia Individual para vivir en planos
superiores de evolución. Esto es llamado “constructivo” porque construye
carácter e incrementa las capacidades y poderes del ser esencial o Alma”. (La
Gran Obra)
I- El Ego o Espíritu, la Inteligencia Individual
C. El Espíritu Constructivo en la Naturaleza. “Ese principio en la naturaleza que
impele a cada entidad a buscar correspondencia vibratoria con otra entidad
similar de polaridad opuesta. (La Gran Obra)
D. El Principio Destructivo en la Naturaleza
M. Moralidad. “La Relación Armónica establecida que el hombre como una
inteligencia individual lleva al Principio Constructivo en la Naturaleza”. (La Gran
Obra)
E. Errores de omisión y comisión (o+c)
S. Servicio. El poder de servir al fin de la evolución acelerada tanto del Servidor
como del Servido. Evoluciona más quien sirve mejor.
L. Amor Altruista
W. Sabiduría
W. Voluntad
Nuestra Fórmula de Espiritualidad Constructiva iguala primero al Individuo
menos los errores de omisión y comisión que hace en su vida diaria. Es simple
y evidente que si una persona no hace errores de omisión y de comisión él
sería perfecto o un Maestro. Todos nosotros quisiéramos ser perfectos aunque
pocos lo somos, y una razón es que no sabemos cómo y qué son las razones
que nos hacen cometer errores de omisión y de comisión.
Hay una gran ley de dualidad que se extiende a través de la Naturaleza. El
positivo de la luz tiene su correspondiente negativo en la oscuridad. El calor en
el frío, la fertilidad su esterilidad. Luz, calor y fertilidad son constructivos;
oscuridad, frío y esterilidad son destructivos. Lo constructivo busca siempre
edificar algo integrado y evolucionar, lo destructivo derribar, desintegrar y
destruir.
Esta analogía también se aplica al Hombre como a sus cualidades de carácter
constructiva y destructiva. Lo opuesto de la memoria es el olvido y estamos en
algún lado entre el olvido y la memoria perfecta. Lo opuesto del sentimiento de
la fe es la duda y en algún lado estamos entre la duda y la perfecta fe. Lo
opuesto del sentimiento de coraje es el temor. Y estamos en algún lugar entre
los dos. Lo opuesto a la cualidad volitiva de la acción es la inactividad y
estamos en algún lugar entre la actividad y la inactividad. Nuestros poderes
como Inteligencia Espiritual desarrollada están en directa proporción al poder
de nuestras cualidades espirituales o constructivas. Esto está a su vez en
proporción al grado de desarrollo de los principios constructivos sobre los
destructivos en nuestros caracteres. ( C – D )
Por el cultivo de los principios constructivos en nuestros caracteres, estamos
capacitados a establecer la relación armónica con el Hombre como una
Inteligencia Individual llevando al principio constructivo en la Naturaleza, y así
somos capaces de servir a nuestro Hermano Hombre hasta el final de modo
que podamos ayudarle a lo largo del sendero de la Luz y de la Vida, y al
ayudarlo aceleramos nuestra propia evolución. ( S + M)
Así crecemos en espiritualidad constructiva y al crecer así más y más
ejemplificamos en nuestras vidas los tres grandes atributos universales de
AMOR, SABIDURÍA y VOLUNTAD (L.W.W.)
Como el Sistema Solar es el Cuerpo del Logos, los planetas, el Sol y la Luna,
son centros definidos u órganos dentro de ese cuerpo y cada uno manifiesta
varios atributos de Amor, Sabiduría y Voluntad.
Venus, Neptuno y el sol gobiernan los atributos del AMOR; Mercurio, Urano y
Saturno gobiernan los atributos de la Sabiduría; Marte, Saturno y Júpiter
gobiernan los atributos de la VOLUNTAD. El mapa de la Natividad hecho a la
fecha de nacimiento muestra cómo estos planetas están ubicados en nuestras
Natividades al nacimiento, y justo qué proporción de estos atributos de Amor,
Sabiduría y Voluntad, Moralidad y Servicio, tenemos inherentemente en
nuestros caracteres como individuos.
La Astrología Esotérica nos proporciona la CLAVE a las faltas y fallas, que
tenemos que transmutar, superar, y elevar en nuestro Carácter Estelar de
modo que podamos desarrollarlo en la máxima expresión viviendo una vida de
conformidad con las leyes de Moralidad y Servicio, esa maravillosa trinidad de
Amor, Sabiduría y Voluntad, que son la expresión en el Universo de la
Espiritualidad Constructiva del Logos. Debajo tenemos en forma tabulada la
relación detallada entre los varios elementos de la Fórmula.
(Continuará en el próximo mes)
LA ORDEN JUVENIL ROSAE CRUCIS
Su Constitución y Propósitos (Segunda entrega)
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)
Se ha dicho con frecuencia que un árbol crece hacia donde se dobla la rama.
Del mismo modo hemos llegado a realizar que las razas futuras sobre esta
tierra dependen para el éxito y poder de la educación de los niños del presente.
Es con estos dos hechos en mente que la Orden Rosae Crucis ha visto para
esto que los niños reciban alguna oportunidad de beneficiarse por el
conocimiento que esta posee.
Nosotros no creemos, ni podemos concebir, que los niños han nacido en
pecado y deben ser redimidos. Ni creemos que los niños nacen en la
ignorancia de una positiva naturaleza. Ellos pueden nacer sin educación, pero
ellos han nacido sin educación para lo que es equivocado tanto como son
ineducados para lo que es correcto. Y- dándoles una buena oportunidad sin
obstáculos para aprender naturalmente, ellos aprenderán la verdad más
rápidamente que la mentira. En efecto la mentira es diariamente enseñada a
los niños, mientras quela verdad se deja que haga su camino en su consciencia
por medio de la experiencia mas bien que por el precepto.
El Rosacrucismo sostiene, que si se le permitiera a un niño vivir sobre una isla
donde nada excepto la naturaleza enseñara las lecciones y Dios (imparcial de
las interpretaciones personales, egoístas y atadas a un credo de los
intérpretes) inspirara el pensamiento y entendimiento del niño, ese niño
aprendería esas lecciones, esas verdades y esos principios fundamentales que
la Orden Rosae Crucis debe necesitar luchar para establecer en la consciencia
del adulto.
El niño que aprende por observación, sin ser influenciado por falsas doctrinas,
observa los fenómenos de la naturaleza en sus muchas fases y de allí aprende
la primer gran lección, aquella de la absoluta ley de regularidad, armonía y
amor. La continua, regular, matemáticamente exacta salida y puesta del sol; la
regularidad de las fases de la luna; la consistencia del crecimiento de la vida de
una planta a partir de la semilla en la tierra tras su propio tipo; el cambio
periódico de las estaciones- todas estas cosas simples, miradas por encima por
el adulto en sus ocupaciones de negocios y juzgado por lo que la biblia o los
filósofos dicen de ellos, son considerados como lecciones supremas para el
niño que no tiene otra escuela que la de la naturaleza.
Luego gradualmente despierta en la mente del infante que debe haber una
mente o intelecto divino, infinito, superior, maravilloso y supremo que guía o
gobierna estas cosas, o que, al menos, estableció estas cosas en algún
momento y las hizo leyes permanentes.
Cuan frecuentemente uno puede ver un niño de la edad de la observación
sentado bajo el domo de la naturaleza observando cuestionadoramente el cielo
y repitiendo mentalmente el viejo, viejo pensamiento: debe haber algún poder,
algún gobierno, alguna gran fuerza e intelecto en los reinos arriba guiando los
asuntos aquí abajo. Ese pensamiento que llega a cada mente de un niño que
no ha sido influenciado es el resultado natural de su propio pensamiento, su
propia intuición, y su propio entendimiento. Y- todas las grandes verdades,
todas las verdades fundamentales vendrán a los niños de la misma manera si
ellos no fueron previamente entrenados a pensar diferentemente.
Esta es la razón por la cual la Orden Juvenil Rosae Crucis fue establecida. Sus
propósitos son colocar delante del niño las leyes naturales de Dios y el
Universo, revelar las obras de la naturaleza en sus formas más simples poner a
un lado las supersticiones y las falsas doctrinas y pavimentar el camino para la
realización de la VERDAD en todas las cosas. Naturalmente todo esto es
acompañado a través del amor, la armonía, la justicia, la caridad, la
misericordia y la ley y el orden.
Los Jóvenes Rosacruces son, primero que todo, niños honestos, no porque la
honestidad sea la mejor política, sino porque la honestidad solo es posible si
uno desea volverse perfecto a través del entendimiento y el auto desarrollo.
Ellos son veraces, no porque se le exija por algún dictado de la Biblia, sino
porque la verdad sola los hará superiores a través del conocimiento. Los
jóvenes son buenos y amorosos porque toda la naturaleza y Dios son buenos y
amorosos, y para vivir en armonía con Dios y la naturaleza uno debe
asemejarse a Dios y la naturaleza.
Además se les enseña a los Jóvenes, se los entrena (sin ser forzados) a ser
corteses, felices, cultos, considerados, tolerantes y simpáticos porque tales
hábitos y atributos inconscientes entonan la mente y el cuerpo con la bondad
infinita de la naturaleza.
Y- finalmente- a los Jóvenes se les enseña los poderosos resultados que ellos
pueden lograr a través del poder, el infinito poder, residente dentro de ellos.
Ellos son por siempre liberados de las cadenas de la esclavitud a las falsas
costumbres, hábitos y creencias que los mantienen víctimas de la enfermedad,
la mala salud, el sufrimiento de todo tipo, la pobreza y la superstición.
EL PRIMER OFICIAL NACIONAL
De conformidad con la Constitución de la Orden Juvenil la Suprema Gran Logia
de la Orden Senior en Nueva York, designará al Soberano Maestro de la Orden
Juvenil, quien será el oficial nacional más alto de la Orden Juvenil. El
nombramiento será hecho durante el mes de Noviembre y será anunciado en
un próximo número. Mientras tanto cada Logia en América está invitada a
enviar al Supremo Secretario General en Nueva York el nombre de un
muchacho que vaya a convertirse en el Maestro de la Logia Juvenil local. Tal
nombramiento debe ser de un muchacho de no menos de 12 años de edad y
no más de 14. Se pide a todos los miembros que envíen a sus propios
secretarios de logia los nombres de aquellos muchachos y muchachas a quien
ellos recomienden para membresía en la Orden Juvenil.
El Profesor Garret P. Serviss, eminente científico y escritor, escribió
recientemente en el New York Evening Journal como sigue:
“Un alumno sale de la escuela sin saber mas de la naturaleza que lo que sus
sentidos sin entrenar le enseñan. Se le enseña a escribir y leer, los cuales son
admirables e indispensables invenciones humanas, pero no se le enseña a
comprender muchos de los más simples fenómenos naturales, por los cuales él
va a estar rodeado y perplejo a través de toda su vida.
“La sombra de la antigua idea clásica todavía cuelga sobre nuestro sistema
educacional. En vez de Griego y Latín tenemos “literatura moderna”. En
sustitución de Homero y Virgilio tenemos los actualizados hilanderos de
palabras y cuentos.
“La joven mente es enseñada a admirar alguna historia inteligente como de un
“gran genio” y su “artesanía” y crudas aventuras en “interpretar la vida y
carácter” son puestos como modelos de logro intelectual. El alumno se siente
avergonzado si no conoce acerca de los métodos y realizaciones de estos
“maestros”, pero nadie levanta el dedo del escarnio hacia él si no puede decir
porqué la luna cambia su figura a medida que viaja a través del cielo. ¡En
verdad yo tengo razón en sospechar que algunos de los profesores mismos
tendrían dificultad en explicar esto!
“El mundo es contenido por tal sistema de educación como este. La literatura
debería ser el postre en la mesa; pero se lo hace el plato principal. Yo hallo que
mi pequeña hija sabe todo acerca de Carlyle, Kipling, y otros, pero si ella sabe
algo acerca del sol y de la luna su conocimiento no proviene de sus profesores
de la escuela.
“Ella lee “Sobre la Conciliación” de Burke, y “Kim” y “Ensayo sobre
quemaduras”, como prescriben los estudios, pero alguien fuera de la escuela
tiene que enseñarle a leer la naturaleza, un más grande orador, predicador y
romancero que todos los tejedores de palabras juntos. Deberíamos tener en
cuenta la edad tan lejana en el pasado cuando “aprendizaje” era considerado
como idéntico a la habilidad de escribir leer versos en Latín, a la Dra. Johnson,
pero el espíritu de esa edad está todavía con nuestros educadores”.
ESTUDIO PARA EL HOGAR
(Artículo publicado en la revista “The American Rosae Crucis” Vol. 01, Nro. 10,
Octubre de 1916-Traducido por Alejandro Daniel Silvani Costa, F.R.C.)