2008.1. 06.

Sermón de Domingo en la Iglesia del Evangelio Completo de Yoido, Segundo

Servicio
Seúl, Corea
Orador: Rev. Yonggi Cho, Pastor Principal
Website: www.fgtv.com

Bosquejo del Sermó n

▷ 2008. 1. 06.
El dar y el recibir, el sembrar y el cosechar

2 Cor. 9: 6 ～ 9
<Introducció n>
La razón por la que creó Dios al hombre es porque quiso tener un hijo y una familia
que estuviera a su lado. Pero Dios sufrió profundamente por causa del primer hombre,
porque se rebeló contra él, cayendo en la tentación del diablo. Por lo cual, Dios realizo
un plan para salvar a la humanidad, enviando a Jesús al mundo. Entrego a Jesús para
tener más hijos. Jesús fue el grano de trigo para tener muchos frutos. Desde ese
momento empezó el principio de dar y recibir, sembrar y segar.

1. Dar y recibir, sembrar y segar

1) Dad, y … (Lc. 6:38)
Ⓛse os dará
② Medida buena
③ Apretada
④ Remecida
⑤ rebosando
⑥ darán en vuestro regazo (Gn. 8:22)
2) La semilla sembrada en buena tierra
Ⓛ a treinta ② a sesenta ③ a ciento por uno produce (Mt.13:23)

2. El principio que puede ser aplicado en nuestra vida devocional

1) Sembrando un grano de mostaza se obtiene un gran árbol (Mt. 13:31-32)
Ⓛ El principio del reino de los cielos
② Sembrando la semilla de fe, segará en gran manera (Ga.6:7-8)
2) La Bendición del sembrador (2 Cor. 9:6-9)
Ⓛ Al sembrar escasamente, segará escasamente y al sembrar
generosamente, segará generosamente.
② Bendición del sembrador (2 Cor. 9:8)
③ Dios es el que ayuda al sembrador (2 Cor.9:10-11)

3. Cuando hay dificultades en la vida (Mt. 17:20)

1) Una anécdota (Mt. 17:14-19)
2) Los pequeños y grandes problemas de la vida
 Ⓛ La montaña no tiene vida, pero el grano de mostaza si la tiene
② El grano de mostaza es visible
③ La semilla debe ser sembrada para tener vida. (Jn. 12:24)
3) Siembre la semilla de fe y espere el milagro
ⓛ Muestre su fe (Stg.2:17, Mal. 3:10)
② Siembre con sueño y fe (Fil. 4:19, Heb. 11:6)
③ Ore esperando un milagro (Mt. 7:7-8, 11)

<Conclusió n>
Nosotros gritamos ambiguamente:”YO CREO”. Y nuestro corazón está lleno de
inseguridad en lugar de tener muchas expectativas. La fe segura se puede obtener
aplicando el principio de dar y recibir, sembrar y segar.

Desarrollo del Sermó n

El Dar y el recibir, el sembrar y el cosechar

(2Corintios 9: 6-9)

Pero esto digo: El que siembra escasamente, también segará escasamente; y el que
siembra generosamente, generosamente también segará. Cada uno dé como propuso
en su corazón: no con tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. Y
poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que,
teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra;
como está escrito: Repartió, dio a los pobres; Su justicia permanece para siempre.

<Introducción>
Hoy quisiera compartir el tema el dar y el recibir, el sembrar y el cosechar. La razón por
la que creó Dios al hombre es porque quiso tener hijos y familias que estuvieran a su
lado. Cuando nosotros nos casamos, deseamos tener muchos hijos, tener una gran
familia, Dios creó todas las cosas, pero él quería tener lo hijos para compartir, para vivir,
para gobernar juntos el universo, por lo que creo a Adán y a Eva, lo cual los bendijo y
también les dijo para que se multiplicaran. Pero Dios sufrió profundamente por causa
del primer hombre, porque se rebeló contra él, cayendo en la tentación del diablo. Por
lo cual, Dios realizo un plan para salvar a la humanidad, enviando a Jesús al mundo.
Entrego a Jesús para tener más hijos. Jesús fue el grano de trigo para tener muchos
frutos. Desde ese momento empezó el principio de dar y recibir, sembrar y segar.

<Puntos Principales>

1. Dar y recibir, sembrar y segar

Primero debemos examinar bien lo que es el dar, el recibir, el sembrar y el segar.
1) Dad, y…
Dice en: Lc. 6: 38 Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando
darán en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os volverán a
medir. Este es el principio eterno que estableció Dios sobre el universo. Es necesario
primo dar para poder recibir, cuando aprendemos a dar por si solo vendrán lo que
nosotros hemos dado.
ⓁSe os dará
② Medida buena
③ Apretada
④ Remecida
⑤ Rebosando
⑥ Darán en vuestro regazo
Leyendo este versículo pienso en las nueras contemporáneas, ella hoy en día gritan,
hacen lo que quieren, y los suegros siempre andan rogando a sus nueras para vivir
juntos, anteriormente las nueras sufrían mucho, y trabajaban bastante, debían cuidar a
los padres, a las hermanas de parte de su esposo, siempre sufrían, lloraban, cuando
las nueras llegaban a la casa de sus padres, ellos siempre preparaban arroz, frijoles,
arvejas en medida buena, apretada, remecida, rebosando, para la familia de su esposo,
siempre antes de volver las nuera a la casa de su esposo, la madre le decía a su hija,
debes cuidar bien a la familia de tu esposo, si perseveras llegaran buenos días.
Cuando leí este versículo me vino esta imagen de cómo eran las personas y las
familias de antes. Cuando nosotros damos a Dios las cosas, si o si Dios no devolverá
mas bendiciones. Dios siempre nos dará las cosas en medida buen, apretada,
remecida, rebosando y nos dará en nuestro regazo. Dice en:
Gn. 8: 22 Mientras la tierra permanezca, no cesarán la sementera y la siega, el frío y el
calor, el verano y el invierno, y el día y la noche. Siempre estarán y no cesaran la
sementera y la siga, el frio y el calor, el veranos y el invierno, y el día y la noche, pero si
llegara a desaparecer el frio, el calor, el veranos y el invierno, el día y la noche,
desaparecer entonces la sementera y la siega. Pero no podemos decir voy a segar sin
sembrar, eso no puede pasar, hay que sembrar para segar.
2) La semilla sembrada en tierra buena. Jesucristo también hablo de la parábola del
sembrador. Produce a 30%, a 60% y al 100 por uno
Dicen en: Mt. 13: 23 Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye y
entiende la palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno. Aquí
dice en la Palabra si llegamos a sembrar en buena tierra, podremos cosechar, al 30, al
60 y al 100% lo que hemos sembrado. La fuente de bendición es sembrar, para poder
segar, si no sembramos no tendremos resultados. Tom Butler escritor del libro el
Estante del CEO, en este libro relata la diferencia de triunfo del siglo 20, y unos de los
principales temas de este libro es el diezmar en la vida. John Davison Rockefeller dijo
yo doy el diezmo porque Dios me dio el dinero, dando así algunas razones de porque
es necesario diezmar. En Deuteronomio 8: 18 dice: Sino acuérdate de Jehová tú Dios,
porque él te da el poder para hacer las riquezas, a fin de confirmar su pacto que juró a
tus padres, como en este día. También El gran empresario de seguros Jeim Wolbi
habla de donde se basa de su gran triunfo de 1Samuel 2: 30 Por tanto, Jehová el Dios
de Israel dice: Yo había dicho que tu casa y la casa de tu padre andarían delante de mí
perpetuamente; mas ahora ha dicho Jehová: Nunca yo tal haga, porque yo honraré a
los que me honran, y los que me desprecian serán tenidos en poco. El hombre de
negocios de Haid es el 9 hombre más famoso de los Estados Unidos, este hombre tuvo
una deuda de 10 mil dólares, 9 hijos que criar, pero de todas las dificultades que el
tenia, siempre entrego su diezmo sin excepción, y podemos ver el resultado de cómo
Dios lo bendijo. Esta es la ley de Dios, dar, recibir, sembrar y cosechar, es dad y se os
dará. J. C. Penney era el hombre más adinerado de los Estados Unidos, pero después
de la crisis en la bolsa de valores perdió todos sus bienes, hasta se enfermo y fue
hospitalizado. Este hombre solo tenía sufrimiento, dolor e inseguridad, pero un día en la
capilla del hospital escucho una canción, y luego empezó a escuchar que alguien leía
la Biblia y oraba y en ese momento en Penney empezó a surgir algo nuevo para su
vida. Penney se acordó de la empresa y confeso esto: Yo, cuando estuve escuchando
el himno, la palabra de Dios y la oración para mi fue un gran milagro, fue como el brillo
del sol que apareció en la oscuridad y luego fue que sentí que fue trasladado del
infierno al cielo, eso sentí yo. Y luego en ese momento decidí comenzar de nuevo,
teniendo como lema en su vida y en su trabajo. Así como quieres que te traten los
demás, así también trata a los demás, después Penney entrego como primicia una
cantidad fuerte de ofrenda y luego en Florida llego a ofrendar para la construcción de
100 casas pastorales a honor del pastor Untui. Luego de esto Penney dijo estas
palabras: cómo puedo dar muchas cosas a muchas personas y al solo pensar he
entendido que el corazón agradecido en la vida, es la bendición más grande que se
puede dar, es aprender a dar. Y luego de esto llego a convertirse en el rey del shopping
Jesús nos enseña que cuando aprendemos a dar a Dios, Dios nos dará en medida
buena, apretada, remecida, rebosando y esto será nuestro mayor gozo. Si seguimos
siempre el principio de Dios seremos bendecidos inmensamente.
En estos primeros días del año nuevo, aprendamos a sembrar para poder segar en
abundancia este año nuevo.
2. El principio que puede ser aplicado en nuestra vida devocional
1) Sembrando un grano de mostaza se obtiene un gran árbol. Dice en:
Mt. 13: 31-32 Otra parábola les refirió, diciendo: El reino de los cielos es semejante al
grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo; el cual a la verdad es
la más pequeña de todas las semillas; pero cuando ha crecido, es la mayor de las
hortalizas, y se hace árbol, de tal manera que vienen las aves del cielo y hacen nidos
en sus ramas. Ustedes han visto un grano de mostaza? Esta semilla es demasiado
pequeño, un misionero del Medio oriente me había enviado un grano de mostaza en un
frasco y me acuerdo que en ese entonces, estábamos en la iglesia de Soedemun
terminando el servicio de la mañana y le dije a la congregación que hicieran una fila
para que puedan ver la semilla de mostaza, y de tan pequeño que era la semilla, la
gente no lo podía ver, en ese entonces un anciana que ya no veía bien, entonces dijo
ella: no veo, y fue tan fuerte cuando dijo no veo, que el aire que expulso de la boca,
hizo volar a la semilla de mostaza, aunque por mas busque la semilla que había volado
no lo encontré, entonces una persona que estaba detrás de la anciana se molesta tanto
que le empieza a maldecir, fue en ese mismo instante escuche la voz del Espíritu
Santo que me decía, ahora ya conoces la semilla de mostaza, si tuvieras la fe como el
tamaño de este grano de mostaza, podrás hacer muchas cosas, podrás decir a la
montaña quítate de aquí y échate en el mar, no mires el tamaño de la fe si es grande o
es pequeño, lo importante es saber utilizar la fe.
ⓛ El principio del reino de los cielos.
Debemos conocer el principio del Reino de los cielos. Debemos sembrar, aunque sea
tan pequeño como el grano de mostaza, porque luego crecer y llegara a ser un gran
árbol. Debemos sembrar y aprender a esperar. Qué pasaría si el agricultor, solo se
sentara y orara por la cosecha sin a ver sembrado? No pasara nada, es necesario
saber sembrar primero para tener frutos y para así poder cosechar al 30, al 60, y al
100%.
② Sembrando la semilla de fe, segara en gran manera
Ga. 6: 7-8 El que es enseñado en la palabra, haga partícipe de toda cosa buena al que
lo instruye.
7
No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso
también segará. 8Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción;
mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna. Muchas personas
dicen, nadie me ha visto, por eso sembramos cosas malas, negativas, decimos que no
me pasara nada, pues no es así, lo que sembramos eso segaremos, porque Dios no
puede ser burlado, y a él no se le escapa nada. Todo lo que hacemos, todas nuestra
mala actitud, todo esto Dios lo toma como nuestra semilla y que algún día lo
segaremos. Creemos que no pasara nada, pero en la tierra en donde haya ciado
nuestra semilla, alguna vez brotara la planta y llegara a tener malos frutos. Lo que yo
siembro eso algún día segare. Y lo segaremos con responsabilidad. Dios nos perdona
y nos amas, pero una vez sembrada la semilla, debemos recoger lo segado. Si siembro
cebolla, cebolla voy a segar, así también, son nuestras actitudes, si tratamos mal a
nuestro prójimo, que hacemos cosas que no debemos hacer, algún día, esas actitudes
vendrán contra nosotros, irreversiblemente como un gran árbol cuando llegue será de
mucho dolor, de mucha angustia y de mucho tormento. No podemos engañar a Dios,
esta es la ley que Dios puso en el universo, lo que sembramos, eso segaremos. Si
llegamos a sembrar, el Fruto del Espíritu Santo, cosecharemos, al 30, al 60 y 100 por
ciento. Si yo no llegare a segar lo que he sembrado, entonces mi descendientes
segaran, si o si llegara el tiempo de segar. La persona que siembra cosas buenas,
recibirá grandes bendiciones.
2) La bendición del sembrador dice en: 2Cor. 9: 6-9 Pero esto digo: El que siembra
escasamente, también segará escasamente; y el que siembra generosamente,
generosamente también segará. Cada uno dé como propuso en su corazón: no con
tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al dador alegre. Y poderoso es Dios para
hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las
cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra; como está escrito: Repartió,
dio a los pobres; Su justicia permanece para siempre. Dios desea que todos sus hijos
abundemos en toda buena obra, en toda gracia. El ser humano debe tener siempre la
bendición tripartita, que prospere en los bienes materiales, que prospere en la salud y
que prospere nuestra alma. Esta es una bendición integral y para poder tenerla
debemos aprender a sembrar para segar. Al sembrar escasamente, segara
escasamente y al sembrar generosamente, segara generosamente. Si llego a hacer el
bien a mi prójimo, esta acción de bondad, será recordada para siempre y llegara a ser
recompensado. Si sembramos escasamente no debemos esperar grandes cosas,
porque no hemos sembrado generosamente, muchos dicen yo soy pobre que cosa voy
a sembrar, pero si en su corazón está el deseo de sembrar, Dios lo guiara de una
manera u otra manera para poder sembrar grandemente y luego segar grandemente.
La bendición del sembrador: 2Cor. 9: 8 Y poderoso es Dios para hacer que abunde en
vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo
suficiente, abundéis para toda buena obra
Dios es el que ayuda al sembrador: 2Cor. 9: 10 -11 Y el que da semilla al que siembra,
y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos
de vuestra justicia, para que estéis enriquecidos en todo para toda liberalidad, la cual
produce por medio de nosotros acción de gracias a Dios.
Los puritanos que viajaban en el May Flower, hacia América, sufrieron por hambruna,
por lo cual morían sus hijos amados, aun en esta situación critico no le daban la semilla
que llevaban, porque esta semilla era tan importante, que cuando llegaran al nuevo
continente debía ser sembrada, porque era la semilla de vida por lo que se debía
conservar a toda costa. Nuestra semilla de bendición es también el diezmo. Si
comemos nuestra semilla la cual es nuestro diezmo nuestro futuro será oscuro.
Debemos guardar y conservar bien esta semilla, para que después nuestros
descendientes, también puedan recibir la bendición. Dios no nos dice me quitaste el
diezmo, dice me robaste mi diezmo, el robar es traer las cosas de otra personas, el
diezmo nos ha sido entrego como la semilla para plantar, no debemos robar el diezmo,
porque el diezmo es de Dios. Si un ladrón llega a robar algo, y luego ora a Dios,
diciendo Señor bendíceme, bendíceme, no, Dios nunca le dará la bendición.
Aprendamos primero a sembrar la semilla de fe y esperar el milagro.

3. Cuando hay dificultades en la vida

Mientras vivimos, siempre tendremos muchos problemas, problema en el matrimonio,
en la familia, en el negocio, en la fábrica, en la empresa. Qué hacemos con nuestros
problemas? Siempre diremos Señor, resuelve nuestros problemas, pero Dios no da una
respuesta para solucionar nuestros problemas. Dice en: Mt. 17: 20 Jesús les dijo: Por
vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza,
diréis a este monte _pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible
Una anécdota.
Esto le dijo Jesucristo a sus discípulos que ni fe tenían, un hombre había traído a su
hijo que estaba poseído por los demonios, los discípulos no pudieron liberar a este
muchacho que estaba siendo atormentando por los demonios, pero Jesús después de
bajar del monte, al instante reprendió a los demonios, haciéndolo libre completamente
a este muchacho. Entonces los discípulos preguntaron: maestro que paso, porque
nosotros no pudimos echar a los demonios. Entonces el Señor les responde: si solo
hubiesen tenido la fe como un grano de mostaza, y le dijeran a esta montaña quístate
de aquí y échate al mar, lo hará, porque el que tiene fe todas las cosas son posible.
Aquí el Señor está hablando de una fe viva. La montaña está muerta, como se puede
mover algo muerto, pero la semilla de mostaza por más pequeño que sea está vivo,
porque cuando llegamos a plantar esta semilla, ella crece, frondosamente y llega a
tener frutos, hasta que vienen las aves para hacer sus nidos. Cuando tengamos
enfrente cualquier situación de la vida, debemos hacer actuar nuestra fe, diciendo creo,
creo, que algo va a pasar. Aunque nuestra fe sea pequeña, el Señor quiere ver como
actuamos y como ponemos en práctica nuestra fe.
Mt. 17: 14-19 Cuando llegaron al gentío, vino a él un hombre que se arrodilló delante
de él, diciendo: Señor, ten misericordia de mi hijo, que es lunático, y padece
muchísimo; porque muchas veces cae en el fuego, y muchas en el agua. Y lo he traído
a tus discípulos, pero no le han podido sanar. Respondiendo Jesús, dijo: ¡Oh
generación incrédula y perversa! ¿ Hasta cuándo he de estar con vosotros? ¿ Hasta
cuándo os he de soportar? Traédmelo acá. Y reprendió Jesús al demonio, el cual salió
del muchacho, y éste quedó sano desde aquella hora. Viniendo entonces los discípulos
a Jesús, aparte, dijeron: ¿Por qué nosotros no pudimos echarlo fuera? El grano de
mostaza es visible. La semilla debe ser sembrada para dar vida Jn. 12: 24 De cierto, de
cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si
muere, lleva mucho fruto. Por más pequeña que sea la semilla de mostaza debe ser
sembrado, entonces el monte será quitado. La acción sin fe es muerta, si decimos,
quítate, échate, a la montaña, pero si no tenemos fe, esto no acontecerá. Dios no dijo
solo con palabras que quería rescatar a la humanidad, sino lo hizo con hechos,
enviando a su único Hijo, a Jesucristo para salvarnos. Jesucristo fue la semilla de
salvación que Dios entrego a la humanidad. El Señor fue crucificado, muerto, sepultado
mas al tercer día resucito, para la salvación del mundo.
3) Debemos sembrar la semilla de fe y espere el milagro, el solo orar, no trae los
milagros y los prodigios, hermanos, cuando estemos orando, no digamos, Señor
concédeme un milagro, primero sembremos nuestra semilla de mostaza y luego
pidamos a Dios un milagro. Por la fe debe ser viva para que ocurran los milagros. Si no
hay fe no se puede ver los milagros.
ⓛ Muéstrame tu. Fe. Mucho de nosotros tenemos fe ambigua, Dios quiere ver nuestra
fe en acción, dice en:
Stg. 2: 17 Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma. Debemos
sembrar la fe, viva, esto es el principio de dar, de recibir, de sembrar y de cosechar.
Dice en:
Mal. 3: 10 Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme
ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y
derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde. Dice en la Biblia habla de
los diezmos y dice Dios, probarme ahora, luego, les abriré las ventanas de los cielos
para derramar todas las bendiciones de Dios hasta que sobre abunde. Si nosotros
sembramos la semilla del diezmo, esto significa que nuestra fe está viva, no debemos
sembrar con tristeza, sino con alegría y gozo.
② Siembre con sueño y fe, dice en: Fil. 4: 19 Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falta
conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. 20Al Dios y Padre nuestro sea gloria
por los siglos de los siglos. Amén. Los miembros de la iglesia de Macedonia, enviaron
a Pablo una ofrenda misionera, y cuando recibió Pablo esta ofrenda, dice que lloro,
agradeciendo por la iglesia de Macedonia. Por lo cual Pablo les dijo a la iglesia de
Macedonia estas palabras que fueron de parte de Dios: Mi Dios, pues, suplirá todo lo
que os falta conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús. Dice en: He. 11: 6 Pero
sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios
crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan. Dios es un Dios vivo, por
eso nos dio la semilla de mostaza, para que tengamos una fe viva. Y Dios mismo es
que nos dará el galardón a todos lo que al EL le buscan. Debemos tener fe y salir para
adelante. Debemos orar y esperar en Dios, que los milagros, los sueños acontecerán.
Oremos esperando un milagro de parte de Dios, si nosotros oramos sin esperar un
milagro de parte de Dios entonces no acontecerá, pero debemos orar con fe, y creer
que Dios hará algo grande. Dice en: Mt. 7: 7-8 Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis;
llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al
que llama, se le abrirá. Mt. 7: 11 Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas
dádivas a vuestros hijos, ¿ cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará
buenas cosas a los que le pidan? Yo leí en el diario KungMin un testimonio, Aquí en
Seúl había un empresario, mientras el trabajaba sucedió que quebró. En ese entonces
la única cantidad de dinero que tenía en sus manos era solo de 5 millones de wones.
Con esa última cantidad de dinero que tenia, decidió ayudar en la construcción de una
iglesia en Filipinas para que esa iglesia sea de luz en la isla de Pana. Ese dinero fue de
bendición para las personas de filipinas que daban sus servicios bajo un árbol, y
pusieron el nombre de la iglesia La Iglesia Quiebra, para cada vez que recordaran el
nombre de la iglesia, oraban por la persona que les había ayudado. Pero con este
empresario coreano surgió un milagro, su empresa se levanto y empezó a prosperar
de gran manera, esta es la ley de dar y de recibir, de sembrar y de segar. Los
problemas vienen con la respuesta. Para quitar a la montaña no necesitamos
maquinarias grandes, solo necesitamos la fe del tamaño de una mostaza, esto es tener
fe vivía,
<Conclusión>

Nosotros gritamos ambiguamente: ¨YO CREO”. Y nuestro corazón está lleno de

inseguridad en lugar de tener muchas expectativas. Pero en el corazón decimos no
creo, no creo, porque la acción sin fe es muerta, es como el eco, que se escucha pero
que vuelve vacía. La fe segura se puede obtener aplicando el principio de dar y recibir,
sembrar y segar. Después de haber sembrado yo espero el resultado que es el milagro
de Dios, según lo que yo he sembrado segare. Tengamos cuidado de decir voy a segar
sin a ver sembrado, esto es igual al eco, que se escucha pero que llega vacía.
Practiquemos el dar y el recibir, el sembrar y el segar, en este año que estamos
iniciando. El sociólogo Alemán Max Weber realizo una investigación sobre la relación
del cristianamos y el capitalismo, es escribió un libro llamado el protestantismo, ética y
el patrono capitalista moral. Y dijo estas palabras: el cristianismo vive en una economía
fina. El cristianismo en cualquier nación y en toda nación se convierte en cabeza. La
familia que cree fervientemente en Jesús se convierte en cabeza sobre las familias que
no creen en el Señor. Bebon encontró esta razón en la Biblia. También el reconocido
mundialmente economista británico Alfredo Masial, dijo que los 2 factores que
influyeron en la sobre vivencia y en el desarrollo a lo largo de la historia humanidad,
han sido la religión y la economía. Si la iglesia es sana y tiene el ministerio de salvar a
la gente y cuida a las personas en dificultades, lógicamente la economía del país
crecen, y la nación y el pueblo son prosperado. Nosotros como iglesia debemos salir al
mundo, buscar a los que están sufriendo, ayudar a los necesitados, porque si nosotros
nos ayudamos solo entre cristianos seremos criticados, nosotros somos la luz y la sal
para las personas. La mayoría de los países que viven bien o llamados los países
OECD, como Estados Unidos, Dinamarca, Suiza, Alemania, son todos países del
cristianismo. Si Dios nos levanta, es para que nosotros, podamos ayudar a las
personas que necesitan de nosotros. Para poder ser levantados debemos usar el
principio de dar y de recibir, de sembrar y de segar, y así entonces seremos
prosperados como dice en la Biblia, Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas
las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.