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Recomendaciones

de la OIT –
condiciones
ambientales

Ergonomía
Recomendaciones de
condiciones de trabajo
OIT

La OIT es la sigla que denomina a la Organización Internacional del Trabajo.


Surgió después de la primera Guerra Mundial y por el Tratado de Versalles
de 1919, en donde se estableció como oficina internacional del trabajo con
sede en Ginebra, a cargo de la Sociedad de Naciones1.Desde aquella época
se encarga de difundir normas técnicas y crear convenios particulares y
generales con el mundo del trabajo de países, a nivel individual o colectivo.

Según la OIT (2014), la Ergonomía es considerada una ciencia que puede


optimizar las condiciones de trabajo, siempre y cuando se aplique con
eficacia. El mejoramiento está dado por el diseño y rediseño de los modelos,
el tipo de equipo utilizado, los diferentes factores que intervienen en la
organización del trabajo, entre otros. Si se mantienen de manera óptima las
condiciones del trabajador, es posible anticiparse y evitarle enfermedades y
lesiones al mismo.

La aplicación de las mejoras que propone esta disciplina no tiene por qué ser
difícil, ni generar complicaciones. El sindicato, los trabajadores y la dirección
son los encargados de colaborar para evaluar problemas prioritarios y
brindar soluciones.

Algunos de los puntos importantes a considerar, según la OIT (2014), son:

1. Las enfermedades y traumatismos derivados de la mecanización y de


las actividades manuales están presentes en la gran mayoría de los
trabajadores.

1 La Sociedad de Naciones, creado por el Tratado de Versalles, era un organismo


internacional que proponía sentar las bases para la reorganización de las relaciones
sociales después de la Primera Guerra Mundial.

1
2. El estudio de la Ergonomía nos permite optimizar las condiciones de
trabajo inadecuadas e impedir el diseño inadecuado de un puesto de
trabajo.

3. El puesto de trabajo debe adaptarse al trabajador.

4. Por lo general, en ausencia de la aplicación ergonómica, los


trabajadores se terminan adecuando a las condiciones defectuosas.

En la figura n°10 se muestran las enfermedades y lesiones más habituales


generadas por trabajos repetitivos o mal concebidos. Es necesario que los
trabajadores se encuentren informados con respecto a las lesiones y
enfermedades causadas por el incumplimiento de los principios
ergonómicos, de modo que puedan identificar qué síntomas padecen y si
están relacionados al trabajo que desempeñan.

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Figura n° 1: Las enfermedades y lesiones laborales más habituales

Fuente: OIT,2014, pp.5-6.

3
Luego de conocer las consecuencias más frecuentes en relación con los
trabajadores, se puede concluir que:

• Cuando a un trabajador se le exige acostumbrarse a condiciones de


trabajos deficientes, es posible que aparezcan problemas en las
articulaciones, en la zona de la columna vertebral, entre otras partes
del organismo.

• Las posiciones de trabajos forzados, las vibraciones, las tareas


repetitivas, los giros, una fuerza en exceso, el trabajo de levantar o
empujar cargas, etcétera, pueden provocar lesiones y enfermedades
que se desarrollan en un largo período. Lo mismo sucede con las
lesiones y enfermedades provocadas por herramientas y puestos de
trabajos mal diseñados o inadecuados.

• Los trabajadores deben estar informados y actualizados sobre lo


referido a traumatismos y enfermedades, sus síntomas y causantes.

• Los trabajos realizados de forma repetida generan traumatismos y


enfermedades llamadas lesiones causadas por esfuerzos repetitivos,
que pueden ser evitadas si se aplican métodos ergonómicos.

• La inaplicación de la Ergonomía trae consecuencias costosas para el


trabajador, que las sufre, y para el empleador, debido a los gastos
financieros.

• La aplicación de los principios de la Ergonomía en el ámbito laboral


beneficia tanto a los trabajadores como a los empleadores.

Como hemos visto, es fundamental el diseño adecuado de un puesto de


trabajo para evitar enfermedades y lesiones y también para garantizar que
el trabajo sea productivo.

El lugar de trabajo donde se desempeña una tarea puede permanecer


ocupado durante toda la jornada laboral o ser uno de los lugares en que se
realiza el trabajo. Si el puesto de trabajo está bien concebido, el individuo
podrá permanecer en una postura corporal correcta y confortable; en el
caso contrario, se pueden generar diversos problemas, como por ejemplo:

• aparición o agravación de un LER (Lesiones provocadas por


Esfuerzos Repetitivos);

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• lesiones en la espalda;

• molestias y problemas circulatorios en las piernas.

Una norma general de la Ergonomía es prestarle atención a la información


que se tiene acerca del cuerpo del trabajador, como por ejemplo: su altura,
en el caso de escoger y ajustar los lugares de trabajo; más que nada, ajustar
los puestos de trabajo para que el trabajador esté cómodo.

Algunos principios ergonómicos básicos que se utilizan para el diseño de los


puestos de trabajo se muestran a continuación:

Altura de la cabeza

• Los objetos que se tengan que contemplar deben estar a la altura de


los ojos o pocos centímetros más abajo, ya que siempre tendemos a
mirar algo hacia abajo.

• Tiene que haber espacio suficiente para que entren los trabajadores
más altos.

Altura de los hombros

• Los paneles de control tienen que colocarse entre la zona de los


hombros y de la cintura.

• Se recomienda no situar por encima de los hombros objetos o


controles que se utilicen de manera frecuente.

Alcance de los brazos

• Los objetos se deben ubicar en lugares próximos a los brazos del


trabajador, de tal manera que este no deba extender excesivamente sus
extremidades.

• Los materiales y herramientas que se utilizan a menudo deben estar


cerca del cuerpo y frente a él.

• Los objetos deben ser ubicados en lugares donde un trabajador alto


no se vea obligado a encorvarse para poder tomarlo.

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Altura del codo

Para las tareas más generalizadas, se recomienda adecuar el área de


trabajo para que se encuentre al nivel del codo o apenas unos
centímetros por debajo del mismo.

Altura de la mano

Los objetos que deben ser alzados por un trabajador deben colocarse
a una altura que se encuentre entre la mano y los hombros.

Longitud de las piernas

• Se debe acomodar la altura del asiento en relación con la longitud de


las piernas y la altura de la superficie de trabajo.

• Siempre debe haber espacio suficiente para que el trabajador


extienda sus piernas.

• Se recomienda tener disponible un taburete amoldable para los pies


para evitar que las piernas queden colgando.

• Los espacios estipulados para ubicar las piernas deben permitir al


trabajador cambiar de posición.

Tamaño de las manos

• Las herramientas que están en contacto con las manos, como por
ejemplo: los mangos, deben adaptarse a ellas, es decir, para manos
pequeñas se requieren mangos pequeños, y de mayor tamaño para
manos grandes.

• Para manos grandes, se requieren espacios grandes.

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Tamaño del cuerpo

Las personas que tengan mayor tamaño requieren de mayores


espacios; esto se debe considerar a la hora de diseñar o rediseñar puestos
de trabajo.

Puesto de trabajo para trabajadores sentados

Si un trabajo no requiere mucho esfuerzo físico y se puede realizar en un


espacio limitado, el trabajador debe realizarlo sentado. Sin embargo, no es
bueno estar sentado todo el día, en especial para la espalda. Por lo tanto, se
recomienda que el trabajador varíe su posición. No cabe duda que un buen
asiento es fundamental para el trabajo que se realiza sentado. El asiento
tiene que posibilitar al trabajador mover las piernas y demás posiciones con
facilidad.

La posición de trabajo debe ser lo más cómoda posible. En el gráfico que se


presenta a continuación se pueden visualizar flechas que indican las zonas
que se deben mejorar para evitar lesionarse. La posición de la trabajadora
de la derecha puede ser mejorada si se baja la altura de la silla, se la inclina
de forma ligera hacia adelante y se facilita un escabel para darle descanso a
los pies.

Figura n° 2: Posiciones en trabajos que se realizan sentado

Fuente: OIT, 2014, p. 13.

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El asiento de trabajo

En esta instancia también se utilizan los principios ergonómicos para la


elección o diseño de un asiento. Algunas de las consignas a tener en cuenta
son:

• En lo posible, tanto la altura del asiento como la altura e inclinación


del respaldo se deben poder ajustar de manera separada.

• Dejar el suficiente espacio para las piernas del trabajador, de manera


que le permita variar en sus posiciones.

• Los pies del trabajador siempre deben estar apoyados en el suelo o,


en caso contrario, en un banquillo.

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El asiento debe permitir al trabajador reclinarse hacia adelante, hacia
atrás y hacia abajo, en el borde delantero, de manera ligera.

• El trabajador debe asentar la zona inferior de la espalda; por lo tanto,


el asiento debe contar con un respaldo adecuado.

• Es recomendable que los brazos del asiento sean desmontables, ya


que para algunos trabajadores no resultan cómodos. Cabe aclarar que los
brazos del asiento no deben impedir que el trabajador se acerque lo
suficiente a la mesa de trabajo.

• El tapizado del asiento tiene que ser de un tejido permeable, es decir,


respirable, de modo que no permita resbalarse.

• Lo ideal es que el asiento tenga cinco patas para una mejor


estabilidad.

Se puede pensar que algunas de las cuestiones presentadas en esta instancia


son utópicas o demasiado exigentes. Esto ocurre sobre todo para los países
en vía de desarrollo. Pero es importante que los trabajadores entiendan la
importancia de la Ergonomía. Ya hemos visto que por la aplicación de la
misma se evitan muchos problemas de salud y se garantiza la seguridad
laboral. Si la dirección y los trabajadores comprenden las relaciones que hay
entre la productividad y las buenas condiciones laborales, mejorará
notablemente su situación laboral.

En conclusión, permanecer sentado durante toda la jornada laboral no es


aconsejable ni bueno para la salud del trabajador; siempre debe haber
variaciones en las posturas y tareas que se realicen. Por otro lado, es esencial
que el asiento sea adecuado y que las tareas estén diseñadas de manera que
el trabajador no tenga que estirar los brazos ni girar para alcanzar la zona de
trabajo.

Puesto de trabajo para trabajadores de pie

En este caso, se recomienda que el trabajador no se mantenga de pie por


extensos períodos de tiempo, ya que esto puede causar molestias y dolores
en la espalda, alteración en la circulación de la sangre, cansancio de los
músculos, entre otros.
A continuación se presentan algunos aspectos a tener en cuenta si no se
puede evitar el trabajo de pie:

El trabajador que deba permanecer de pie tiene que contar con un


asiento o un banquillo que le permita descansar en determinados
intervalos.

• Las distintas alturas de los trabajadores hacen necesario que las


superficies en las que se trabaje sean flexibles.

• El suelo donde se trabaja no debe ser duro, sino de una superficie


más blanda. Además, debe permanecer con una adecuada higiene, ser
liso y de una superficie que no permita resbalarse. En caso de que el suelo
esté formado por cemento, se puede cubrir con alguna superficie que
amortigüe los golpes.

• El espacio otorgado al trabajador es fundamental: le debe permitir


cambiar de posición de manera fácil. Se recomienda que el área sobre la
cual se ejecuta el trabajo posea una longitud de 20 a 30 centímetros
delante del cuerpo.

Figura n° 3: Posiciones del trabajo que se realiza de pie

Fuente: OIT, 2014, p.16.

Para seleccionar la altura de la superficie de trabajo de manera adecuada, se


recomienda considerar los siguientes factores:

• tipo de trabajo a realizar;

• altura de los codos del trabajador;

• tamaño del objeto con el que realizará la tarea;

• equipo y herramientas que se utilizarán.


Por otro lado, para que el cuerpo adopte una posición adecuada cuando se
trabaja de pie, la Organización Internacional del Trabajo (2014) realiza las
siguientes recomendaciones:

posicionarse frente al producto o la máquina;

• ubicar el cuerpo próximo al producto o la máquina;

• para girar, utilizar los pies, en vez de realizarlo con la espalda o los
hombros.

Es importante aclarar que se debe evitar permanecer de pie cuando se


trabaja durante extensos períodos de tiempo. En caso de que no se evite, es
posible la aparición de problemas de salud en el trabajador. Por ello, siempre
se deben tener en cuenta los factores ergonómicos.

Trabajo físico pesado

Si un trabajador no se encuentra bien, es muy probable que se canse


fácilmente al realizar un trabajo físico pesado. Esto no tiene que
interpretarse como que los trabajadores deben ser reemplazados por
máquinas, sino que es recomendable que los trabajadores utilicen máquinas
para realizar las tareas más duras. Está comprobado que la energía mecánica
reduce los riesgos del trabajador y además proporciona empleo a personas
con menos fuerza física.

Es fundamental que el trabajo manual sea diseñado de forma correcta para


evitar que los trabajadores se agoten y contraigan tensiones musculares
(OIT, 2014).

Las investigaciones recientes concluyen que la sobrecarga de trabajo


produce diferentes manifestaciones de tensión psicológica y física, como por
ejemplo: insatisfacción en el trabajo, sensación de amenaza y de malestar,
tasa elevada de colesterol, aceleración del ritmo cardíaco y aumento del
consumo de tabaco (Barrau, Gregori et al., 1999).

Según la OIT (2014), se aplican las siguientes normas para diseñar puestos
de trabajo pesado:

• El trabajo pesado no tiene que superar la capacidad del trabajador.


• El trabajo físico pesado debe alternarse, mediante intervalos
frecuentes, con un trabajo más ligero a lo largo de la jornada.

Además, es importante tener en cuenta los siguientes factores:

• peso de la carga;

• frecuencia con la que levanta la carga el trabajador;

forma de la carga;

• distancia entre la carga y el trabajador;

• tiempo necesario para realizar la tarea.

Otras recomendaciones para este tipo de trabajo son:

Reducir el peso de la carga

A veces, lo óptimo es volver a empaquetar la carga de tal manera que se


reduzca su tamaño. También se puede reducir la cantidad de objetos que se
trasladan de una sola vez y, asimismo, aumentar el número de personas
cuando haya que cargar objetos excesivamente pesados.

Facilitar la manipulación de la carga

Es importante que el centro de gravedad de la carga se encuentre lo más


cerca posible del individuo que la está alzando. Por ello, se recomienda
cambiar el tamaño y el formato de la carga. Como ocurre con el punto
anterior, también se aconseja utilizar a más de un individuo o un equipo
mecánico para desplazar la carga.

Se puede optar por rodar o arrastrar con herramientas de manipulación; por


ejemplo, con sogas. En caso de que el trabajador tenga que acopiar la carga,
es adecuado que lo realice a la altura de la caldera, en vez de agacharse.
Utilizar técnicas de almacenamiento para conseguir la facilidad de la
manipulación de la carga

En este caso se recomienda utilizar estanterías, repisas o plataformas que se


encuentren a una altura adecuada y distribuir sobre ellas de manera óptima
la carga, por ejemplo cargar en una tarima los artículos pesados más
próximos al borde, en vez de ubicarlos en el centro.

Reducir lo más que se pueda la distancia que debe ser transportada una
carga
Se recomienda redistribuir la zona de producción o almacenamiento.

Disminuir al mínimo el número de levantamientos que haya que realizar

En este caso se puede asignar a más persona para la tarea y acudir a


instrumentos mecánicos.

Disminuir al mínimo el número de giros que el cuerpo debe realizar

Es necesario mantener todas las cargas frente al cuerpo y dejar el espacio


suficiente para que el cuerpo pueda girar por completo. Es preferible girar
moviendo los pies en vez del cuerpo.

Levantar y transportar cargas

Los trabajos de levantar y portar cargas son físicamente muy agotadores,


sumado a que el riesgo de accidentes está siempre presente. Es frecuente
que ocurran lesiones en la espalda y los brazos cuando no se realizan las
tareas de manera adecuada. Para evitar estas cuestiones, es fundamental
estimar el peso de una carga, el efecto del nivel de manipulación y el
ambiente en donde se levanta; por ello, es necesario tener conocimiento de
selección de métodos de trabajo seguro. Mientras más próximo se
encuentre el cuerpo que se debe cargar, resulta mejor, ya que de manera
contraria los músculos de la espalda y ligamientos se tensionan y presionan
los discos intervertebrales (que son cada amortiguamiento que separa las
vértebras de la columna vertebral), como se muestra en la figura n°13(OIT,
2014).
Figura n°4: Posiciones de la espalda y el cuerpo humano

Fuente: OIT, 2014, p.30.

Lo aconsejable es tensar los músculos del estómago y de la espalda, para


que ésta permanezca en la misma posición durante toda la operación.

Figura n° 5: Posiciones de las piernas y espalda

Fuente: OIT, 2014, p.31.

El diseño de los puestos de trabajo

Se remarca nuevamente que es importante diseñar los puestos de trabajo


teniendo en consideración los factores humanos. Entre ellos, se destacan las
características mentales y físicas del trabajador, sus condiciones de salud y
seguridad.
Diseñar un puesto de trabajo implica determinar si será variado o repetitivo,
si las tareas serán previsibles o remotas, si tendrá comodidad o se le exigirá
al trabajador adoptar posiciones forzadas, entre otras.

Un puesto de trabajo diseñado de forma adecuada debe permitir:

• cambiar la posición del cuerpo del trabajador;

• complementar la actividad con distintas tareas que corten con la


monotonía de la misma;

• otorgar al trabajador espacios donde pueda tomar decisiones, para


que pueda elegir sus tareas laborales de acuerdo a sus necesidades
presentes;

• motivar al trabajador;

• brindar capacitaciones al trabajador sobre las operaciones que deba


efectuar;

• posibilitar al trabajador intervalos de descansos;

• establecer períodos de ajuste a las nuevas tareas, con el fin del que
trabajador se adapte de forma gradual a su labor, en especial si
requieren un gran esfuerzo físico.

A modo de resumen, se presentan a continuación los factores ergonómicos


a tener en cuenta a la hora de diseñar o rediseñar un puesto de trabajo (OIT,
2014):

• tipos de tareas;

• cómo hay que efectuarlas;

• cuántas tareas hay que realizar;

• el orden en que se realizarán;

• el tipo de equipo requerido para realizarlas.

Responsabilidades y funciones del delegado de salud y seguridad

Como delegado de salud y seguridad, tú puedes ejercer una importante


función para aplicar la Ergonomía en el lugar de trabajo. Los esfuerzos que
se realicen ayudarán a prevenir diferentes problemas de salud provocados
por las inadecuadas condiciones de trabajo.

Para facilitar el trabajo de identificar las causas de un problema, se


recomienda formularse las siguientes preguntas:

• ¿De qué manera el trabajador se adapta a su labor, herramientas y a


su puesto de trabajo?

• ¿Cuánto es el tiempo y esfuerzo que el trabajador le dedica a una


tarea en particular?

• ¿Cuán repetitiva es la tarea?


El delegado de salud y seguridad puede recurrir a diversas herramientas para
desempeñar sus funciones, como por ejemplo: utilizar las encuestas de salud
para identificar aspectos relevantes, colaborar con el sindicato, la dirección
y los trabajadores para efectuar cambios económicos en el ámbito laboral.

En muchas ocasiones se deberá recurrir al ingenio e imaginación para


mejorar una situación existente, ya que no siempre existirá la posibilidad de
comprar nuevos equipos diseñados conforme a los criterios ergonómicos.

Es esencial hacer participar en los debates a los trabajadores que se verán


afectados por los cambios ergonómicos, ya que conocen su trabajo mejor
que nadie y pueden, por ello, brindar aportes muy útiles (OIT, 2014).

La OIT (2014) presenta una estrategia, que consta de seis puntos, para
aplicar mejoras ergonómicas en el lugar de trabajo:

1. Entrar en relación con los trabajadores:

a. Difundir folletos u hojas con información en el trabajo.


b. Documentar los nombres y las áreas de trabajo de las
personas que experimentan síntomas que posiblemente son
causados por la no aplicación de los principios ergonómicos.
c. Escuchar y prestar atención a lo que otras personas puedan
aportar sobre cuestiones relacionadas a la Ergonomía.

2. Recopilar información para identificar las zonas con problemas.

3. Estudiar y analizar las zonas en las que puede llegar a haber un


problema:
a. Recorrer las zonas con problemas.
b. Analizar las tareas laborales.
c. Pensar en soluciones, como por ejemplo: que el trabajo se
realice por rotación, cambiar posiciones de los objetos de
trabajo, entre otras.

4. Recopilar recomendaciones de:

a. trabajadores perjudicados;
b. trabajadores de mantenimiento y reparación;
c. el departamento sindical de salud y seguridad (en caso de que
exista);
d. otros expertos y especialistas en salud y seguridad.

5. Promover los cambios necesarios:

Contar con el apoyo de los trabajadores y la documentación,


incentiva al ergónomo a conseguir acuerdos, en conjunto con la
dirección, para que se tengan en cuenta la salud y seguridad, se
atienda las quejas u otros acuerdos.

6. Comunicarse con los trabajadores:

La Ergonomía es una ciencia que, si se ejerce de manera eficaz,


puede desarrollar mejoras importantes en las condiciones de
trabajo.

Cabe recordar que los cambios positivos en las diferentes áreas


pueden ayudar a evitar muchas situaciones no deseables, como
lesiones y enfermedades provocadas por la falta de atención a
los principios ergonómicos. La aplicación de estas mejoras no
necesariamente tiene que ser complicada ni difícil. Todos los
integrantes (la dirección, trabajadores y sindicatos) tienen que
colaborar en la evaluación de las zonas con problemas
prioritarios o urgentes y planificar soluciones.
Condiciones ambientales
No es posible hablar de sistema P-M sin tener en cuenta el ambiente.
Cuando se habla de ambiente, se incluyen: el calor, los ruidos, los olores, las
vibraciones, los horarios, los roles, las iniciativas, el clima laboral, entre
otros. Es decir, no solo se trata del ambiente físico, sino psicosocial generado
en el puesto de trabajo, en los puestos de trabajo vecinos e incluso los más
alejados. El todo forma al ambiente.

Los sistemas están en permanente interacción con los elementos que lo


conforman y con los sistemas externos. No existe un sistema P-M
totalmente cerrado, sino que la mayoría de ellos son abiertos o cuasi
abiertos. En un principio, forman parte de otro sistema P-M mayor en el cual
se pueden provocar incompatibilidades o agresiones hacia los subsistemas
que lo configuran.

Los componentes que forman el ambiente repercuten directamente en


nuestro organismo. Por ejemplo, no sólo vemos mejor o peor según el
estado de nuestra vista o según el dispositivo visual que utilicemos, sino en
función del ambiente visual donde nos encontremos (tipo de iluminación,
cortinas, techos, colores, entre otros). Algo similar ocurre con la audición:
vamos a oír mucho mejor en un ambiente sin ruido que en uno ruidoso.
Nuestra agudeza visual se reduce en un lugar muy ruidoso y el ángulo visual
se estrecha. Esto nos demuestra la interrelación que existe entre nuestros
sentidos, que están regidos por el sistema nervioso central.

Un ambiente de trabajo confortable y adecuado trae sus beneficios, que se


expresan en una mejor eficiencia productiva y en un aumento de la
satisfacción de la persona, lo cual es muy importante. Un trabajador que
desarrolla sus actividades en un ambiente confortable tiene pocas
probabilidades de cometer errores de percepción, de decisión ante
situaciones inseguras.

Los ambientes confortables y con un buen diseño serán perjudiciales para


un trabajador si el mismo se encuentra solo en un espacio grande. Lo mismo
ocurrirá en ambientes donde los trabajadores se encuentren hacinados y sin
intimidad.

Para encontrar la densidad apropiada de un ambiente es necesario tener en


cuenta una serie de factores: los requerimientos de las actividades que se
efectúan en los puestos (movimientos, nivel de concentración, grado de
monotonía, entre otros), la logística del local, su tamaño, la ergometría, las
características generales de los puestos de trabajo, sus interrelaciones,
entre otros.
En la mayoría de los casos, se organizan los puestos de trabajo en filas y
columnas, lo cual no es recomendable. Lo ideal es agruparlos de forma
celular. Algunos de los factores a tener en cuenta son: tipo de producción,
geometría del lugar, características climáticas, entre otros. Cabe aclarar que
para organizar la configuración geométrica de las áreas, se debe tener en
cuenta una serie de aspectos que por razones de extensión no se abordan
en esta instancia. Sin embargo, es necesario mencionar que existen métodos
para evaluar y controlar una serie de factores físicos y fisiológicos al
momento de proyectar los puestos de trabajo. En primera instancia, es
necesario comprender el ambiente que nos rodea (Barrau et al., 1999):

• ambiente térmico;

• ambiente acústico y vibraciones;

• ambiente lumínico;

• radiaciones; contaminantes químicos;

• contaminantes biológicos.

Un ambiente térmico es un factor que siempre debe tener en cuenta el


equipo de Ergonomía, ya que un diseño inadecuado del microclima puede
generar efectos no deseados, como por ejemplo: la deshidratación,
disminución de rendimiento físico y mental, aumento de las enfermedades
de las vías respiratorias, incomodidad debida al sudor, entre otros. La
temperatura interna del cuerpo humano puede variar en condiciones
laborales, dependiendo de la actividad realizada. No es conveniente que la
temperatura alcance niveles críticos, ya sea de calor o de frio.
Afortunadamente, el organismo cuenta con un centro termorregulador
eficiente en el hipotálamo para controlar estas variaciones.

Los ruidos y vibraciones se consideran los agentes físicos agresores más


frecuentes en las empresas y en las ciudades, cuyas consecuencias no son
deseables. El ruido puede causar alteraciones de forma temporal o
permanente en la audición en el hombre; puede generar daños en las
actividades económicas por acciones inadecuadas debido a la recepción
defectuosa de instrucciones o informaciones; provoca aumento del estrés,
altera al sistema nervioso, genera estrechamiento de los vasos sanguíneos,
problemas cardiovasculares, reducción de la actividad cerebral y, en general,
disminución de las defensas del organismo frente a diversas enfermedades.
La persona se desarrolla en el mismo ámbito en el que acciona el ruido, ya
sea en los hogares, en las fábricas, instituciones, lugares de descanso, áreas
recreativas, en la calle, entre otras. Con esto se quiere demostrar que la
persona que trabaja en un ambiente ruidoso, cuando finaliza su jornada y
cambia a otro ambiente, puede estar trasladándose a otro espacio ruidoso.
Sin embargo, en los estudios que se realizan en las empresas sobre ruidos se
calcula el nivel sonoro diario considerando solo el ruido al que se expone el
trabajador durante la jornada laboral.

Por otro lado, el ambiente lumínico está presente todo el tiempo: más del
80% de la información que recibe una persona es visual. Es por ello que este
aspecto cobra real importancia. La vista posee dos mecanismos: de
acomodación (permite hacer foco en un punto en particular, de acuerdo a
la distancia, interés o necesidad del operario) y adaptación (permite ajustar
la sensibilidad de la vista al nivel de iluminación presente).El campo visual
comienza a debilitarse cuando se hace necesario observar detalles
pequeños muy próximos y con un nivel de iluminación bajo. En estas
situaciones aumentan los errores y aparece la fatiga visual y mental. Para
tareas de esas características, es necesario aumentar el nivel de iluminación,
el tamaño de los detalles o ambas. Los factores determinantes de las
relaciones entre iluminación y visión son: ángulo visual, agudeza visual,
brillo, contraste, distribución del brillo en el campo visual, el
deslumbramiento, la difusión de la luz, color y tiempo (Barrau et al., 1999).

Para conocer las recomendaciones de visión e iluminación


remitirse a la bibliografía citada.

Existen puestos de trabajo que requieren el uso de instrumentos, equipos o


procesos que emiten diferentes tipos de radiaciones electromagnéticas. Sus
efectos perjudiciales dependen de su frecuencia y energía. Si se separa el
espectro electromagnético en dos partes, las radiaciones se pueden
clasificar en: radiaciones no ionizantes y radiaciones ionizantes (radiactivas).
El espectro electromagnético se puede representar en función del orden
creciente de energías y de frecuencias, y el orden decreciente de longitudes
de onda como se muestra a continuación:

Radio y TV – microondas – radar – infrarrojos – luz – ultravioletas – rayos X,


γ, α, ß.
Desde las primeras ondas hasta los rayos visibles son radiaciones no
ionizantes; a partir de los rayos ultravioleta, la radiaciones son ionizantes
(radiactivas).

Un contaminante es un producto, una energía o un microorganismo que está


presente en el medio y puede afectar la salud humana. Los contaminantes
químicos son aquellas sustancias que se constituyen por materias inertes
presentes en el aire, como grupos de moléculas, aerosoles o nieblas, o como
moléculas individuales (gases y vapores).Los contaminantes biológicos son
organismos vivos: virus, hongos, bacterias, entre otros, que al entrar en
contacto con el cuerpo humano generan enfermedades de tipo infeccioso o
parasitario.

Cuando se diseñen puestos de trabajo, es fundamental el análisis de los


posibles riesgos y sus medidas de mitigación en la etapa del proyecto. Los
efectos de los contaminantes químicos en el cuerpo humano pueden
provocar múltiples inconvenientes, como por ejemplo: irritación de la piel,
mucosas; destrucción del tejido; agentes asfixiantes, cancerígenos,
mutágenos y teratógenos; alteraciones pulmonares que generan depresión
del sistema nervioso central, entre otros (Barrau et al., 1999).

Las medidas preventivas se conforman a partir de tres claves:

• acción sobre el foco de contaminación para evitar su emisión;

• acción sobre el medio de difusión para impedir su propagación;

• acción sobre la persona para evitar los efectos perjudiciales


existentes.

Si sólo se realiza la última actuación, nunca se solucionará el problema. La


misma se constituye como medida preventiva emergente, ya que no logra
impedir la presencia del contaminante en el ambiente.

Es esencial hacer participar en los debates a los trabajadores


que se verán afectados por los cambios ergonómicos, ya que
conocen su trabajo mejor que nadie y pueden, por lo tanto,
brindar aportes muy útiles (OIT, 2014).

La Ergonomía, ¿tendrá la capacidad de prevenir todo


tipo de riesgos?
Referencias
Barrau, B. P., Gregori, T. E. & Mondelo, R. P. (1999).Ergonomía 1, Fundamentos
(3°Ed.). México: Alfaomega, Ediciones UPC.

Farrer, F. (1997).Manual de Ergonomía. Madrid: Mapfre.

Fernández de Pinedo I. (1987).Ergonomía: Condiciones de Trabajo y calidad de


vida. Barcelona: INSHT.

Guélaud, F. (1988).Para un análisis de las Condiciones de Trabajo (LEST). Buenos


Aires: Humanitas.

McCormick, E.J. (1980) Ergonomía. Barcelona: Gustavo Gili.

Organización Internacional del Trabajo (OIT). (2014). La Salud y la Seguridad en el


Trabajo. ERGONOMÍA. Colección Módulos. Recuperado de http://goo.gl/lJ4yIW

Pheasant, S. (1988). Bodyspace. Anthropometry, Ergonomics and Design.Londres:


Taylor & Francis.

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