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GEOMORFOLÓGICO
Antofagasta, Chile
2014
AGRADECIMIENTOS
RESUMEN
En el norte de Chile, la deformación neógeno – cuaternaria del Sistema de Fallas de Atacama está expresada por fallas que cortan y
desplazan abanicos aluviales cuaternarios generados en frentes de montaña activos. Estos frentes de montaña están controlados por
estas mismas estructuras. Morfológicamente estas fallas se expresan como notorios escarpes de falla y complejos segmentos de
fracturas extensionales. En los últimos años algunos estudios han abordado el problema de la actividad cuaternaria de estas fallas y
puesto de manifiesto que algunas de estas estructuras muestran actividad holocena y que pueden ser consideradas como fallas
potencialmente sismogénicas.
La presente memoria trata sobre el estudio de un par de fallas expuestas en las inmediaciones de la Cordillera de la Costa del norte de
Chile conocidas como Falla Mititus y Falla Naguayán. Estas fallas muestran características similares a otras estructuras del Sistema de
Fallas de Atacama localizadas en las cercanías de las ciudades de Antofagasta y Mejillones. El objetivo principal de esta memoria es
evaluar el grado de actividad cuaternaria de las fallas Mititus y Naguayán, conocer la edad de la deformación y el potencial sismogénico
de las mismas. Los objetivos específicos son: a) definir la geometría de las estructuras, b) determinar su cinemática, c) acotar la edad de
formación de los escarpes en términos relativos a las superficies que estos afectan y d) evaluar el terremoto máximo asociado a estas
estructuras.
El método de trabajo consideró campañas de terreno, en las cuales se hizo una caracterización morfológica de los escarpes de falla,
como también de las superficies que estas deforman. Para determinar la edad de, al menos, la última actividad de las fallas se levantaron
perfiles topográficos mediante GPS diferencial, como también el uso de información de dataciones de isotopos cosmogénicos realizadas
en estudios previos en el área de estudio.
Los resultados alcanzados muestran que el plano de la Falla Mititus tiene una actitud NS-N12°E/60-80°E, una longitud aproximada de
26,8 km de largo y se compone de una traza simple segmentada y muy recta. Esta traza puede ser separada en dos tramos basados en
las características geomorfológicas. Además la Falla Mititus forma escarpes de falla sobre abanicos aluviales con pendientes inclinadas
principalmente hacia el este, a excepción de su terminación sur donde ocurre una inversión de relieve y de la dirección de inclinación de
su escarpe. En algunos sectores esta falla corta rocas ígneas mesozoicas por algunos kilómetros. Estos escarpes poseen separaciones
verticales que varían desde 0,5 a 3 m. La presencia de un máximo de tres hendiduras dentro de las quebradas que disectan el escarpe
indica que el escarpe de falla es múltiple y sugiere que al menos tres eventos sísmicos lo han modelado.
La Falla Naguayán, de actitud NS-N10°E/72-80°E, se extiende por aproximadamente 55,6 km. Esta estructura posee muchos modos de
ocurrencia, formando trazas simples rectas, arreglos en echelón hacia la izquierda, ramificación de la traza de falla, complejos arreglos
de trazas individuales y pequeñas zonas de transferencia. Esta falla fue dividida en tres tramos dependientes de rasgos morfológicos.El
escarpe de falla consiste principalmente en un escarpe simple bien definido con inclinación hacia el este. Sus separaciones verticales
varían entre 0,8 y 3 m, encontrándose los valores más altos generalmente en sus tramos más septentrionales. Al igual que con la Falla
Mititus, la presencia de hendiduras en las quebradas que disectan el escarpe sugiere que la formación del escarpe ha sido mediante
múltiples paleosismos.
Por medio de indicadores morfológicos se ha establecido que el sentido de movimiento de estas fallas durante sus últimos periodos de
reactivación es normal con descenso del bloque oriental.
El análisis morfológico de los escarpes de falla y sus relaciones de corte con respecto a las superficies deformadas que han sido datadas
mediante isotopos cosmogénicos y radiogénicos indican que la última actividad de estas fallas ocurrió durante tiempos calabrianos
(Pleistoceno temprano). Por otro lado, mediante el uso de las ecuaciones empíricas que vinculan largo de ruptura superficial vs magnitud
de momentum, como también largo de separación vertical vs magnitud de momentum, se ha logrado estimar que los paleosismos que
formaron el escarpe de la Falla Mititus tuvieron una Mw 6.3 y 6.1 para los tramos nortes y sur respectivamente, mientras que para la Falla
Naguayán la magnitud de los paleosismos correspondería a Mw 6.2, 6.8 y 5.9 para sus tres tramos de norte a sur. De acuerdo a lo
observado en otras fallas normales tanto de Chile como de Japón se puede concluir que la actividad reciente de estas fallas estaría
estrechamente vinculada con terremotos de subducción. La presente memoria es una contribución al proyecto FONDEF MAS ANDES
D10I1027: “Desarrollo de plataforma de amenaza sísmica para el norte de Chile y propuesta de actualización de normas de diseño
sismo-resistente: Análisis de los efectos del terremoto del Maule 2010 y caracterización de terremotos tipo en el segmento Taltal-Arica”,
TABLA DE CONTENIDOS
Página
CAPÍTULO I
INTRODUCCIÓN 1
1.2 Objetivos 3
CAPÍTULO II
CAPÍTULO III
LA FALLA MITITUS 30
3.2.1 Generalidades 37
3.6 Estimación de la magnitud del momentum de los paleosismos para la Falla Mititus 56
CAPÍTULO IV
LA FALLA NAGUAYÁN 59
4.2.1 Generalidades 61
4.6.1 Generalidades 72
4.10.1 Generalidades 86
Falla Naguayán
CAPÍTULO V
CAPÍTULO VI
BIBLIOGRAFÍA 123
INDICE DE TABLAS
Página
TABLA DE DATOS 1: 18
TABLA DE DATOS 2: 32
Datum para los catorce planos de falla medidos en las instalaciones de Minera
han tomado debido a que caen fuera de los intervalos definidos para la Falla Mititus.
TABLA DE DATOS 3: 41
Resumen de las edades utilizadas para datar las superficies aluviales afectadas por
las fallas en área de estudio. (*) El error para la datación radiogénica ha sido
calculado con 2, (**) el error para las dataciones cosmogénicas ha sido calculado
con 1.
TABLA DE DATOS 4: 42
TABLA DE DATOS 5: 52
Valores de las separaciones verticales de las superficies dislocadas para cada perfil
de la Zona de Estudio A.
TABLA DE DATOS 6: 56
Valores de las alturas de los escalones (steps) y separación vertical individual para
TABLA DE DATOS 7: 58
en su totalidad.
TABLA DE DATOS 8: 65
TABLA DE DATOS 9: 70
Valores de las separaciones verticales de las superficies dislocadas para cada perfil
de la Zona de Estudio B.
Valores de las separaciones verticales de las superficies dislocadas para cada perfil
de la Zona de Estudio C.
Valores de las separaciones verticales de las superficies dislocadas para cada perfil
de la Zona de Estudio D.
Naguayán.
INDICE DE FIGURAS
Página
FIGURA 1: 6
FIGURA 2: 9
FIGURA 3: 10
FIGURA 4: 16
1977, p. 1269).
FIGURA 5: 17
FIGURA 6: 29
Imagen satelital ETM+ en donde se observan las trazas de las fallas Mititus y
Naguayán.
FIGURA 7: 33
negro el escarpe de falla, como también otros foto-lineamientos que son asociables
medidos en Mina Núcleo. Las rectas azules corresponden a los planos de falla, las
Esquema de diedro para los planos de fallas medidos en Mina Núcleo. En rojo se
observa el eje de extensión (1) y el eje de acortamiento (3) que entregaron como
en Mina Uranía. Las rectas azules corresponden a los planos de falla, las flechas
Esquema de diedro para los planos de fallas medidos en Mina Uranía. En rojo se
observa el eje de extensión (1) y el eje de acortamiento (3) que entregaron como
resultado el análisis.
FIGURA 8: 34
Vista general del tramo sur de la Falla Mititus en donde se observa una inversión
FIGURA 9: 35
Imagen satelital extraída del Software Google Earth, donde se observa el tramo sur
FIGURA 10: 36
FIGURA 11: 36
FIGURA 12: 38
FIGURA 13: 43
FIGURA 14: 43
endurecida.
FIGURA 15: 44
Estudio A.
FIGURA 16: 44
Estudio A.
FIGURA 17: 45
siendo esta última el relleno de los canales más que inciden en las demás
superficies.
FIGURA 18: 45
FIGURA 19: 48
Zona de Estudio A.
FIGURA 20: 49
Zona de Estudio A.
FIGURA 21: 51
principal del escarpe para la Falla Mititus. Los ángulos menores a 20° corresponden
a depósitos de lavado, los que varían entre 20 y 40° al talud de detritos, y las
FIGURA 22: 55
FIGURA 23: 60
FIGURA 24: 60
FIGURA 25: 64
FIGURA 26: 67
Zona de Estudio B.
FIGURA 27: 68
menores a 20° corresponden a depósitos de lavado, los que varían entre 20 y 40° al
FIGURA 28: 69
Sección en perfil W-E del escarpe de falla en la Zona de Estudio B, donde se puede
FIGURA 29: 69
Sección en perfil E-W del escarpe de falla en la Zona de Estudio B, donde se puede
FIGURA 30: 71
Vista frontal de una quebrada (gully) que disecta el escarpe de falla en la Zona de
(knickpoint).
FIGURA 31: 73
Vista hacia el norte del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el extremo norte
FIGURA 32: 73
Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo sur de la
falla en la Zona de Estudio C. Las flechas blancas indican la posición del escarpe.
FIGURA 33: 74
Vista hacia el norte del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en las cercanías de
FIGURA 34: 74
Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo sur de la
falla en la Zona de Estudio C. Las flechas blancas indican la posición del escarpe.
FIGURA 35: 75
Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo sur de la
FIGURA 36: 76
FIGURA 37: 81
Zona de Estudio C.
FIGURA 38: 82
menores a 20° corresponden a depósitos de lavado, los que varían entre 20 y 40° al
FIGURA 39: 85
FIGURA 40: 87
FIGURA 41: 88
Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo norte de la
falla en la Zona de Estudio D. Las flechas blancas indican la posición del escarpe
de falla.
FIGURA 42: 88
Vista frontal del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo norte de la falla
en la Zona de Estudio D.
FIGURA 43: 89
Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo norte de la
falla en la Zona de Estudio D. Las flechas blancas indican la posición del escarpe
de falla.
FIGURA 44: 89
Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo central de
FIGURA 45: 90
Vista hacia el norte del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo sur de la
falla en la Zona de Estudio D. Las flechas blancas indican la posición del escarpe
de falla.
FIGURA 46: 90
Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo sur de la
falla en la Zona de Estudio D. Las flechas blancas indican la posición del escarpe
de falla.
FIGURA 47: 95
Naguayán.
FIGURA 48: 95
FIGURA 49: 96
FIGURA 50: 96
FIGURA 51: 97
FIGURA 52: 97
FIGURA 53: 98
FIGURA 54: 98
FIGURA 55: 99
FIGURA 56: 99
Zona de Estudio D.
Zona de Estudio C.
menores a 20° corresponden a depósitos de lavado, los que varían entre 20 y 40° al
Fractura mayor rellena con sedimentos detríticos color pardo rojizo. La flecha
Imagen satelital ETM+ de los alrededores de la Falla Mititus. Están indicadas con
diagramas de rosa.
CAPÍTULO I: INTRODUCCIÓN
1
2
1.2 Objetivos
3
4
5
Figura 1. Imagen satelital extraída de Google Earth en donde se muestra la ubicación y acceso
al área de estudio.
6
7
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9
10
Que las fallas sismogénicas han estado activas durante el pasado, por lo
menos varias decenas de miles de años, por lo tanto, es aceptable
asumir que eventos comparables a sismos actuales hayan podido
producirse varias veces en el pasado generando efectos similares en la
superficie, y aunque hayan sido parcialmente obliterados o
enmascarados por procesos climáticos o actividad antropogénica,
siempre será posible reconocer algún rasgo geológico ya sea como
resultado de uno o múltiples eventos (Michetti y Hancock, 1996).
11
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glacial, eólico, lacustre, etc.), esta clase genética, a su vez, puede ser
subdividida en un mapeo de unidades de segundo orden, que se basa en
las formas del relieve o procesos que dominan en el ambiente (ej. dentro
de un mapeo de primera clase de tipo aluvial, se puede identificar
abanicos aluviales, terrazas generadas por la corriente, planicies de
inundación, etc.). Una última subdivisión, que llamaremos mapeos
geológico de superficies de tercer orden, está fundamentada en la edad
de estas superficies. Por lo general, mientras más detallada es la
diferenciación de las superficies de los depósitos cuaternarios,
incrementa la utilidad del mapa para la interpretación paleosismológica
(McCalpin, 1996). Dentro de los estudios realizados para esta memoria,
se han confeccionado mapeos geológicos de superficies de tercer orden,
donde las edades asignadas a las superficies han sido asociadas a
dataciones realizadas por Placzek et al. (2010) en otras superficies
similares a las descritas en esta investigación.
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Definición de los parámetros de un escarpe de falla
Partes de un perfil
Cabeza H Borde no erosionado de la superficie original del bloque alzado.
Cresta C Punto de máxima curvatura de la pendiente (convexa hacia arriba) entre la cabeza del escarpe y la parte más
pronunciada de la cara del escarpe.
Cara F Porción del perfil del escarpe entre la cresta y la base.
Base B Punto de máxima curvatura de la pendiente (cóncava hacia arriba) entre la parte más pronunciada de la cara
del escarpe y la pata del escarpe.
Pata T Borde original sin material coluvial de la superficie geomorfológica afectada.
Medidas angulares
Pendiente de campo (Far‐field slope) Gradiente de la superficie geomorfológica dislocada.
Ángulo de máxima pendiente del escarpe Gradiente de la parte más pronunciada del escarpe.
Manteo de la falla Ángulo de manteo del plano de falla que infrayace la cara del escarpe.
Medidas de altura
Altura nivelada L Separación vertical entre la pata y la cabeza del escarpe, usualmente obtenida de una medida simple.
Altura del escarpe H2 La separación vertical entre las intersecciones del plano formado por la parte más pronunciada del escarpe y los
planos de las superficies geomorfológicas afectadas.
Separación vertical (surface offset) SO Separación vertical entre la proyección de las superficies originales dislocadas.
Desplazamiento vertical de la falla (thrown) H1 Distancia vertical entre las intersecciones del plano de falla, y los planos formados por las superficies
geomorfológicas originales desplazadas.
Desplazamiento neto de la falla ns Distancia medida en el plano de falla entre dos puntos que originalmente estaban en contacto antes del
fallamiento.
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Dentro del área de estudio que comprende esta memoria, la cual como
ya se ha dicho corresponde a una cuenca intramontaña en la Cordillera de la
Costa, las condiciones climáticas son bastantes aisladas de las fuentes de
humedad a pesar de su cercanía al Océano Pacifico. La humedad actual
existente en las inmediaciones de la Cordillera de la Costa es derivada
principalmente de los frentes de aire frío que se forman en el océano durante el
invierno, las que generan escasas precipitaciones que afectan más que nada
las zonas más bajas, y una espesa niebla costera denominada camanchaca,
que juega un importante rol en la formación de suelos con costras salinas y por
lo tanto en la preservación de rasgos geológicos y geomorfológicos, y afecta
elevaciones entre los 300 y 1000 m s.n.m. (Rech et al., 2003). Gran parte de la
Cordillera de la Costa se encuentra sobre los 1000 m s.n.m. por lo que no
experimenta condiciones de humedad.
19
20
2.1 Marco geomorfológico
Por otro lado, su límite oriental en la parte norte y central del área de
estudio corresponde serie de cuencas tectónicas controladas por fallas
normales en sus márgenes occidentales, mientras que al sur corresponde a una
estrecha depresión tectónica denominada informalmente como Depresión Salar
del Carmen (Niemeyer et al., 1996).
21
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corrientes de barro. El material que los forma son clastos terrígenos de tamaño
grava, arena gruesa, arenas medias a finas y limos en menor proporción. Estos
materiales de menor granulometría se encuentran conformando la matriz de los
depósitos de alta energía como también originando estratos finos. Al igual que
en la unidad de Gravas Antiguas (Mg), es posible distinguir intercalaciones
menores de ceniza volcánica, algunas de ellas retrabajadas. Estos depósitos
pueden presentarse estratificados, semi-consolidados y, ocasionalmente,
cementados por carbonatos, cloruros o sulfatos.
25
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28
Figura 6. Imagen satelital ETM+ en donde se observan las trazas de las fallas Mititus y
Naguayán.
29
30
Estos datos indican que corresponde a una falla normal con una leve
componente siniestral. Este movimiento transcurrente se ve mejor representado
por los resultados obtenidos en la mina Núcleo, aunque puede intuirse un sesgo
debido a la falta de datos, por lo que es recomendable realizar un nuevo
análisis posterior a una nueva toma de datos. Al proyectar los datos individuales
de los ejes E y A de los planos de falla y generar un contorneado (Figuras7c y
7f) se puede observar que se agrupan en nubes de dispersión homogéneas, lo
que podría sugerir que la falla se encuentra bajo la influencia de un solo campo
de esfuerzo.
31
Tabla de datos 2. Datum para los catorce planos de falla medidos en las instalaciones de
Minera Michilla (interior mina). Se indica con asterisco superior al nombre de la localización
aquellos datos tomados en esta investigación. Aquellos datos escritos en rojo no se han tomado
debido a que caen fuera de los intervalos definidos para la Falla Mititus.
32
33
Figura 8. Vista general del tramo sur de la Falla Mititus en donde se observa una inversión del
relieve, con alzamiento del bloque oriental.
34
Figura 9. Imagen satelital extraída del Software Google Earth, donde se observa el tramo sur
de la Falla Mititus y el cambio de rumbo de la falla. Se indica la inversión del relieve lo que
también provoca un cambio en la orientación del escarpe.
35
Figura 10. Vista frontal del escarpe de falla en el tramo norte de la Falla Mititus.
Figura 11. Escarpe de falla. La Falla Mititus, en su tramo norte, afecta superficies aluviales
adosadas al frente de montaña.
36
3.2.1 Generalidades
Las superficies aluviales que han sido deformadas por la actividad más
reciente de la Falla Mititus, que desde la más antigua a la más joven han sido
nombradas como S1, S2, S3, S4 y S5, entregan información valiosa sobre la
actividad de la estructura. Esto es, básicamente, si la superficie se encuentra
deformada o no, para lo cual fue necesaria una inspección de terreno.
37
38
39
40
Tabla de datos 3. Resumen de las edades utilizadas para datar las superficies
aluviales afectadas por las fallas en área de estudio. (*) El error para la datación radiogénica ha
sido calculado con 2, (**) el error para las dataciones cosmogénicas ha sido calculado con 1.
41
Nombre de la Descripción de la superficie
superficie Morfoestratigrafía Características destacables y Nivel de endurecimiento Material en superficie
origen
S3 Corresponde a la tercera superficie Presenta drenajes paralelos con Nulo. Consiste Principalmente milimétrica
más antigua. Consiste en una orientación NW-SE en el extremo principalmente en (subanguloso) pero con clastos
capa de espesor reducido de sur y NE-SW al norte del área de material no consolidado centimétricos (subangulosos a
material detrítico no consolidado estudio. Las grietas tectónicas con que cubre la superficie angulosos) que llegan a los 15 cm,
que se extiende sobre la superficie orientación NW-SE también la S2. los cuales destacan a pesar de su
S2 y es cortada por la superficie cortan. Corresponde a una baja cantidad. Los castos
S5. Se encuentra inactiva. superficie de origen aluvial.
S4 Corresponde a la segunda Presenta pequeños conos Nulo. Consiste Material milimétrico anguloso y
superficie más joven. Se ubica detríticos. Corresponde a una principalmente en subanguloso de composición
principalmente al pie del escarpe superficie de origen aluvial. material no consolidado. andesítico.
de falla sobreyaciendo de esta
forma a las superficies en el
bloque colgante (S2). Es cortada
por la superficie S5. Se encuentra
activa.
S5 Corresponde a la superficie más Corresponde a una superficie de Nulo. Consiste Granulométricamente se observan
joven del área de estudio. origen aluvial. principalmente en dos grupos de clastos en
Sobreyace y corta a las demás material no consolidado. proporciones similares. Uno de
superficies. Se encuentra activa. tamaño milimétrico (de 2 a 6 mm) y
otro centimétrico (de 1 a 5 cm). Su
color es pardo azulado y varían
desde angulosos a subangulosos.
42
43
44
Figura 17. Se observa la interacción entre las superficies S1, S2 y S5 de la Zona de Estudio A,
siendo esta última el relleno de los canales más que inciden en las demás superficies.
45
46
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48
49
50
Ángulo vs Frecuencia
19
10
8
0 0 0 0 0 0
Figura 21. Muestra los ángulos dominantes a lo largo de los perfiles hechos en la sección
principal del escarpe para la Falla Mititus. Los ángulos menores a 20° corresponden a depósitos
de lavado, los que varían entre 20 y 40° al talud de detritos, y las inclinaciones sobre 40° a la
cara libre.
51
Nombre del Perfil Separación vertical [m]
PA1 3
PA2 3,5
PA3 4,8
PA4 3
PA5 2,7
PA6 1,7
PA7 s/m
PA8 s/m
PA9 3
PA10 7
PA11 s/m
PA12 s/m
PA13 s/m
PA14 3,3
PA15 4,4
PA16 2,6
PA17 2,8
PA18 3
PA19 3
PA20 3
PA21 2
PA22 s/m
Tabla de datos 5. Valores de las separaciones verticales de las superficies dislocadas para
cada perfil de la Zona de Estudio A.
52
53
54
PA24
PA23
PA25 PA26
PA27
PA27
Figura 22. Perfiles realizados a través de las quebradas que disectan la Falla Mititus. Se
observan las hendiduras asociadas a cambios en el nivel de base.
55
Tabla de datos 6. Valores de las alturas de los escalones (steps) y separación vertical
individual para cada evento que ha generado una nueva hendidura (knickpoint).
∗
˄
∗
56
57
Tabla de datos 7. Resumen de los valores de magnitud de momentum obtenidos mediante las
dos ecuaciones SRL vs M y las dos ecuaciones MD vs M para cada segmento y la falla en su
totalidad.
58
59
60
4.2.1 Generalidades
Las superficies aluviales que han sido deformadas por esta falla
corresponden a tres, las que desde la más antigua a la más joven han sido
nombradas como S1, S2 y S3. Estas superficies tienen el potencial de entregar
valiosa información sobre la actividad de la falla mediante una simple
observación en una imagen satelital y una inspección de terreno que indica si
han sido cortadas o no por la falla.
61
una imagen satelital como en terreno. Está compuesta por clastos de tamaño
variable, centimétricos y milimétricos, de composición andesítica de color pardo
rojizo. Esta superficie se encuentra inactiva y se le ha otorgado una edad
obtenida por Placzek et al. (2010) mediante isótopos cosmogénicos que varía
entre los 1,83 ±0,04 Ma y 1,54 ±0,03 Ma (muestras ADSO-3 y ADBA-27A,
respectivamente), por lo tanto esta superficie se comenzó a formar por lo
menos desde el Gelasiano (Pleistoceno temprano).
62
63
64
S2 Corresponde a la segunda Presenta drenajes paralelos con Se encuentra semi- Granulométricamente se observan
superficie más antigua. orientación NW-SE. consolidada pero sin un grupo de clastos de
Poseen una clara morfología presentar un suelo salino. composición andesítica que caen
de abanico aluvial. Se dentro de la fracción centimétrica
extiende desde quebradas (1-9 cm) de color pardo rojizo que
principales provenientes desde varían desde angulosos a
los cerros que limitan hacia el subangulosos.
oeste el área de estudio.
Sobreyace a la superficie S1, y
es cortada y sobreyacida por
las superficie S3. Se encuentra
aparentemente inactiva.
65
66
67
superficie dislocada, en los casos que no es así se observa una cambio gradual
que varía con ángulos entre 14-15°, en este caso la cresta en perfil presenta
una forma convexa hacia arriba y redondeada. Por su parte, en la zona
correspondiente a la base del escarpe de falla se observa una superficie con
ángulos de inclinación variables entre 5-20° correspondiente a los depósitos de
lavado.
Ángulo vs Frecuencia
8
5 5
3
1
0 0 0 0
Figura 27. Muestra los ángulos dominantes a lo largo de los perfiles hechos en la sección
principal del escarpe de la Falla Naguayán en la Zona de Estudio B. Los ángulos menores a 20°
corresponden a depósitos de lavado, los que varían entre 20 y 40° al talud de detritos, y las
inclinaciones sobre 40° a la cara libre.
68
Figura 28. Sección en perfil W-E del escarpe de falla en la Zona de Estudio B, donde se puede
identificar visualmente con facilidad las secciones de la pendiente.
Figura 29. Sección en perfil E-W del escarpe de falla en la Zona de Estudio B, donde se puede
identificar visualmente con facilidad las secciones de la pendiente.
69
Nombre del Perfil Separación vertical [m]
PB1 3,4
PB2 2,9
PB3 2,9
PB4 2,9
PB5 2,6
PB6 3
PB7 3,2
PB8 3,8
PB9 2,2
PB10 1,5
Tabla de datos 9. Valores de las separaciones verticales de las superficies dislocadas para
cada perfil de la Zona de Estudio B.
70
Figura 30. Vista frontal de una quebrada (gully) que disecta el escarpe de falla en la Zona de
Estudio B. La flecha blanca y la línea roja indican la posición de la hendidura (knickpoint).
71
4.6.1 Generalidades
72
Figura 31. Vista hacia el norte del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el extremo norte
de la Zona de Estudio C. Las flechas blancas indican la posición del escarpe.
Figura 32. Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo sur de la
falla en la Zona de Estudio C. Las flechas blancas indican la posición del escarpe.
73
Figura 33. Vista hacia el norte del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en las cercanías de
la Quebrada Entrada, en el extremo sur de la Zona de Estudio C. Las flechas blancas indican la
posición del escarpe.
Figura 34. Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo sur de la
falla en la Zona de Estudio C. Las flechas blancas indican la posición del escarpe.
74
Figura 35. Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo sur de la
falla en la Zona de Estudio C.
75
76
77
78
S1 Corresponde a la superficie aluvial Se observa la presencia de Fuertemente endurecida llegando El material correspondiente a esta
más antigua del área de estudio. grietas tectónicas con a formar costras de yeso superficie composicionalmente es
Es sobreyacida y cortada por las orientación NW-SE en el cristalino, anhidrita y sales en variable. Las superficies ubicadas
demás superficies. Se encuentra extremo sur del área. Presenta algunas localidades. principalmente al oeste del drenaje-
inactiva. la mayor cantidad de drenajes camino principal son de composición
abandonados de todas las andesítica de color pardo rojizo
superficies. ángulos y subangulosos donde la
fracción milimétrica es más abundante
que la centimétrica (hasta 10 cm). Por
otro lado, al este la superficie posee
clastos andesíticos y dioríticos, estos
últimos fuertemente meteorizados y
disgregables de tamaño variable entre
el milímetro y unos pocos
centímetros.
S3 Corresponde a la tercera superficie Presenta depósitos de lodos Nulo. No presenta cobertura El material que forma parte de esta
más antigua. Corta a las superficies blancos tipo “playa lake”. salina. El material no se superficie corresponde a clastos de
S1 y S2, y es sobreyacida por la encuentra cohesionado. composición andesítica de tamaño
superficie S4. Se encuentra activa. variable milimétrico hasta algunos
pocos centímetros color pardo junto a
una fracción tamaño limo-arcilla color
pardo amarillento, que es la más
abundante.
S4 Corresponde a la superficie más Los depósitos eólicos generan Nulo. No presenta cobertura El material correspondiente a las
joven del área de estudio e pequeñas dunas y se acumulan salina. El material no se superficies aluviales corresponde a
incorpora también a los depósitos en la cara expuesta del escarpe encuentra cohesionado clastos de composición andesítica
eólicos actuales. Sobreyace a de la falla. donde se observan dos grupos uno
todas las superficies, milimétrico y otro centimétrico donde
principalmente a S1. Se encuentra sobresale la fracción centimétrica.
activa. Estos clastos son color pardo azulado
y varían de angulosos a
subangulosos. Por otra parte, el
material correspondiente a los
depósitos eólicos corresponde a
arena fina-media de color amarillo.
Esta se encuentra bien redondeada y
bien seleccionada.
Tabla de datos 10. Descripción de las superficies aluviales que se encuentran en la Zona de
Estudio C.
79
80
81
Ángulo vs Frecuencia
8
7
1
0 0 0 0 0
Figura 38. Muestra los ángulos dominantes a lo largo de los perfiles hechos en la sección
principal del escarpe de la Falla Naguayán en la Zona de Estudio C. Los ángulos menores a 20°
corresponden a depósitos de lavado, los que varían entre 20 y 40° al talud de detritos, y las
inclinaciones sobre 40° a la cara libre.
82
Nombre del Perfil Separación vertical [m]
PC1 0,6
PC2 1,7
PC3 s/m
PC4 1,25
PC5 0,7
PC6 0,6
PC7 1,5
PC8 3,8
PC9 5
PC10 1,3
PC11 1
PC12 2,9
Tabla de datos 11. Valores de las separaciones verticales de las superficies dislocadas para
cada perfil de la Zona de Estudio C.
83
más por la base y techo del escarpe (Perfiles PC18, PC19, PC21 y PC22), con
el fin de generar una vista tipo shutter-ridge. Esta vista indica mediante su
geometría convexa por donde pasaban los drenajes antes de la formación del
escarpe.
84
Figura 39. Perfiles topográficos perpendiculares a los drenajes que cortados por la Falla
Naguayán en la Zona de Estudio C.
85
4.10.1 Generalidades
La Zona de Estudio D (Figura 40) está ubicada a 6,7 km al noroeste de
las instalaciones de la Minera Rayrock, y a los pies de la falda sur de Cerro
Fortuna. Las coordenadas que la limitan de norte a sur corresponden a 23°
17'1.65" S y 23° 17'52.01" S respectivamente, abarcando un tramo de
aproximadamente 1,8 km de la Falla Naguayán que incorpora parte de la zona
de transferencia entre las fallas Naguayán y Fortuna. En esta zona, la falla se
expresa mediante una traza simple continua que genera escarpes de falla
discretos pero bien definidos (Figura 41, 42, 43, 44, 45 y 46). Corta tanto
depósitos aluviales como a las unidades rocosas del sector.
86
87
Figura 41. Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo norte de la
falla en la Zona de Estudio D. Las flechas blancas indican la posición del escarpe de falla.
Figura 42. Vista frontal del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo norte de la falla
en la Zona de Estudio D.
88
Figura 43. Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo norte de la
falla en la Zona de Estudio D. Las flechas blancas indican la posición del escarpe de falla.
Figura 44. Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo central de
la falla en la Zona de Estudio D.
89
Figura 45. Vista hacia el norte del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo sur de la
falla en la Zona de Estudio D. Las flechas blancas indican la posición del escarpe de falla.
Figura 46. Vista hacia el sur del escarpe de la Falla Naguayán, ubicado en el tramo sur de la
falla en la Zona de Estudio D. Las flechas blancas indican la posición del escarpe de falla.
90
91
sido asociada a las superficies datadas por Placzek et al. (2010) con edades de
1,01 ±0,05 Ma, 1,01 ±0,03 Ma, 0,93 ±0,08 Ma y 0,90 ±0,04 Ma, por lo que S2
tiene una edad máxima calabriana (Pleistoceno temprano).
92
93
S1 Corresponde a la superficie más Puede presentar drenajes La superficie se encuentra Granulométricamente pueden
antigua. Se encuentra paralelos con relleno de fuertemente endurecida debido diferenciarse en dos extremos:
frecuentemente asociada al material fino, los que se a la presencia de una cobertura uno milimétrico dominante (0.2-
frente de montaña, por lo que encuentran inactivos. Contiene salina de yeso-anhidrita 0.5 mm) y en menor medida
muchas veces se hace difícil la bloques enterrados. tamaño limo-arcilla. Al contrario, uno centimétrico (hasta 30 cm).
distinción de su relación de gran parte de los clastos son Ocasionalmente se observan
contacto. Es cortada y fácilmente disgregables con bloques enterrados. Los
sobreyacida por las superficies martillo y a mano. clastos varían de subangulosos
más jóvenes. Se encuentra a subredondeados y son de
inactiva. color pardo anaranjado-rojizo,
por su parte la fracción salina
es blanca-amarillenta.
S2 Es la segunda superficie más Presenta pequeñas fracturas Menos endurecida que S1. El La granulometría
antigua. En los sectores norte y extensionales en las cercanías material más grueso se dominantemente es
este, dentro de la zona de del escarpe de falla. encuentra prácticamente suelto. centimétrica (hasta de 20 cm).
estudio D, corta a la superficie Corresponde principalmente a
S1, y en el sector centro-sur no clastos de composición
se observa una relación clara andesítica subangulosos a
debido a los escasos remanentes angulosos de color pardo rojizo.
de S1. Es cortada y sobreyacida En el sector centro-sur de la
por la superficie S3 y cortada por zona de estudio forman
la superficie S5. Se encuentra cubiertas más densas y
inactiva. extensas que en el norte.
S3 Es la tercera superficie más Presenta costras de “lodo” Bajo. El material clástico se La granulometría dominante es
antigua. Es el relleno de los endurecidas a través de los encuentra suelto a excepción de orden centimétrico donde es
drenajes que son cortados por el drenajes que esta superficie de la fracción más fina que se posible encontrar clastos
drenaje principal de la cuenca. rellena. encuentra englobada en una superiores a 20 cm. Por su
En el sector norte corta a la matriz de las costras parte la fracción milimétrica
superficie S1, y corta y sobreyace mencionadas anteriormente. promedia en los 0.5 mm.
a la superficie S2. Presenta alta densidad de
Aparentemente está activa. clastos en las cercanías del
frente de montaña.
S5 Es la superficie más joven del Presenta costras de “lodo” Bajo. A excepción de aquel Granulometría heterogénea,
área. Forma parte del relleno de endurecidas a través de los material, principalmente de pero de menor tamaño que la
los drenajes más jóvenes. Corta drenajes que esta superficie granulometría fina que este presente en S4. Los clastos
a toda superficie más antigua que rellena englobado en las costras varían desde angulosos a muy
este en contacto con ella. endurecidas nombras angulosos y son de color pardo
Aparentemente activa. anteriormente. oscuro.
Tabla de datos 12. Descripción de las superficies aluviales que se encuentran en la Zona de
Estudio D.
94
95
96
97
98
Figura 55. Se observa la relación existente entre las superficies S2 y S3 en las quebradas del
margen oriental de la Zona de Estudio D.
Figura 56. Se observa la relación existente entre las superficies S2 y S3 en las quebradas del
margen oriental de la Zona de Estudio D.
99
100
101
102
103
Ángulo vs Frecuencia
6
3
2
1 1
0 0 0 0
Figura 59. Muestra los ángulos dominantes a lo largo de los perfiles hechos en la sección
principal del escarpe de la Falla Naguayán en la Zona de Estudio D. Los ángulos menores a 20°
corresponden a depósitos de lavado, los que varían entre 20 y 40° al talud de detritos, y las
inclinaciones sobre 40° a la cara libre.
104
Nombre del Perfil Separación vertical [m]
PD1 0,72
PD2 0,5
PD3 0,6
PD4 0,6
PD5 1
PD6 0,86
PD7 1,14
PD8 1
PD9 s/m
PD10 0,8
PD11 s/m
PD12 1
PD13 1,2
PD14 0,65
Tabla de datos 13. Valores de las separaciones verticales de las superficies dislocadas para
cada perfil de la Zona de Estudio D.
105
Tabla de datos 14. Resumen de los valores de magnitud de momentum obtenidos mediante las
dos ecuaciones que vinculan SRL vs M para los segmentos y la totalidad de la Falla Naguayán.
106
5.1 Generalidades
107
108
109
110
111
Figura 62. Fractura extensionales de menor tamaño dentro de una zona correspondiente a una
fractura extensional de aproximadamente 2 m de apertura.
Figura 63. Fractura mayor rellena con sedimentos detríticos color pardo rojizo. La flecha blanca
indica la posición de las fracturas pequeñas.
112
Figura 64. Imagen satelital ETM+ de los alrededores de la Falla Mititus. Están indicadas con
diferentes colores los grupos de fracturas extensionales, junto a sus respectivos diagramas de
rosa.
113
114
para el tramo sur la pendiente del escarpe está dominada por ángulos menores
a 20° (depósito de lavado) y una altura de escarpe que puede superar los 3 m.
115
116
Otro punto que debe ser considerado al evaluar los valores para las
magnitudes de los paleosismos propuestos es que los escarpes de falla, al
menos para la Zona de Estudio B, fueron formados por un mínimo de dos
eventos lo que se ha interpretado de la presencia de dos hendiduras
(knickpoints) en las quebradas que disectan el escarpe.
117
Debido a esto, muchos autores han propuesto que los terremotos del
ciclo sísmico de subducción generan un efecto gatillante en las fallas de la
corteza superior mediante un cambio en el stress de Coulomb (CSC) (Simpson,
1986; King et al., 1994). Algunos ejemplos que dan sustento a esta hipótesis
corresponden al el terremoto Mw 8.0 de Antofagasta del 30 de Julio de 1995, el
cual generó un CSC suficiente para la reactivación una parte del Segmento
Paposo de la Falla Salar del Carmen (Delouis et al., 1998). Las réplicas
ocurridas después del terremoto Mw 8.8 del Maule del 27 de Febrero de 2010,
una de las cuales correspondió a un sismo Mw 7.9 ocurrido 90 minutos después
del evento principal con un mecanismo focal normal (Lange et al., 2012). Y por
118
119
6.2 Conclusiones
120
121
122
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