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Automatización y Sustentabilidad

Sustentabilidad es un término que se ha vuelto muy común en el mundo en los últimos


años, siendo usado en cualquier esfera, sea en la economía, política, cultura o en
ambientes corporativos. En la búsqueda de un futuro con mayor calidad de vida ha
generado demandas, como el uso de la automatización para disminuir el uso de recursos
naturales empleados en los procesos.

Estas ideas y estudios incoherentes empezaron a ganar presencia y fuerza política en


fines de los años 60, tras la creación del Club de Roma. El grupo, formado por
personalidades importantes de distintos sectores y países, inició el patrocinio de estudios
e investigaciones avanzados relacionados con el crecimiento económico rentable y
sustentable.
Primeras consideraciones
Los inicios de su trato fue la publicación, en 1972, del informe encomendado a los
investigadores del MIT llamado “Los límites del crecimiento”, y que trataba de puntos
cruciales al desarrollo de la humanidad tales como energía, polución, saneamiento,
tecnología y crecimiento poblacional. A través del modelamiento matemático, estos
estudios revelaron que, hasta 2100, el planeta tierra no soportaría el aumento
desordenado de la población mundial debido a los impactos en esos puntos.
Ya con el impacto de esa publicación, se organizó en la Organización de las Naciones
Unidas, en el mismo año, la primera conferencia internacional para tratar del
relacionamiento humano con el medio ambiente. Se recuerda que la comunidad científica
ya detectara problemas futuros debido a la polución atmosférica causada por las
industrias en todo el mundo.
Desde este entendimiento recíproco entre naciones desarrolladas y subdesarrolladas
relativamente a las actividades industriales, las acciones siguientes se apoyaron en
organismos tales como la UNESCO, creadora, en el 1975, del Programa Internacional de
Educación Ambiental (PIEA) enfocado en la capacitación de educadores para seguir
principios de Educación Ambiental continuada, adaptada a las diferencias regionales y
vuelta a los intereses de las naciones. Esa constituyó la primera acción práctica tras las
resoluciones de la Conferencia de Estocolmo.
En 1980, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza publicó el informe:
“La Estrategia Global para la Conservación”, surgiendo por primera vez el concepto de
“desarrollo sustentable”.
Hasta entonces todo parecía encaminarse bien, pero fue en 1987, con el informe de
Brundtland ("Our Common Future), que se denunció la incompatibilidad entre los modelos
de desarrollo sustentable y los medios de producción y consumo vigentes. Por lo tanto,
una serie de medidas finalmente se formalizó el concepto de desarrollo sustentable,
definido como “el desarrollo que satisfaz las necesidades presentes sin comprometer la
capacidad de las generaciones futuras de proveer sus propias necesidades”.
Medidas a considerar:

 Limitación del crecimiento poblacional;


 Garantía de recursos básicos (agua, alimento, energía) a largo plazo;
 Preservación de la biodiversidad y los ecosistemas;
 Reducción del consumo de energía y el desarrollo de tecnologías que usan la
energía renovable;
 Aumento de la producción industrial en los países no industrializados basado en
tecnologías adaptadas a la ecología;
 Control de la urbanización desordenada e integración entre el campo y las
ciudades más pequeñas;
 Satisfacción de las necesidades básicas (salud, educación, habitación);
 Adopción de la estrategia del desarrollo sustentable por las organizaciones de
desarrollo (organismos y entidades internacionales de financiación);
 Protección de los ecosistemas supranacionales tales como la Antártida, los
océanos, etc. por la comunidad internacional;
 Proscripción de las guerras;
 Implementación de programas de desarrollo sustentable por las Naciones Unidas
(ONU).
 Uso de nuevos materiales de construcción;

 Reestructuración de sectores residenciales y industriales;


 Uso y consumo de fuentes alternativas de energía, tales como la energía solar,
eólica y geotérmica;
 Reciclaje de materiales reutilizables;
 Consumo racional de agua y alimentos;
 Reducción del uso de productos químicos perjudiciales a la salud en la producción
de alimentos.

Con metas más claras y coherentes, las conferencias pasaron a tener más impacto y
amplitud en sus pautas, siguiéndose en 1992 la Conferencia de la ONY sobre Ambiente y
Desarrollo, donde nació la Agenda 21 y se aprobaron la Convención sobre Alteraciones
Climáticas, la Convención sobre Diversidad Biológica (Declaración de Río de Janeiro –
ECO-92), además de la Declaración de Principios sobre Florestas.
Con el “cerco” cerrándose sobre las naciones, vino en seguida (1997) el Protocolo de
Kioto, exigiendo compromisos más rígidos para la reducción de la emisión de gases y el
‘efecto invernadero’, lo que tuvo gran impacto en naciones tales como los Estados Unidos
y China.
Como compensación y para volver los esfuerzos de las empresas más transparentes y
valiosos, en 1999 se creó el índice Dow Jones Sustainability World Index, el primer
indicador de desempeño financiero de las empresas líderes en sustentabilidad global. Sus
derivaciones incluyen actualmente compañías de las bolsas de valores de los Estados
Unidos y Europa. Siguiéndose la misma metodología, en 2005 se creó el Índice de
Sustentabilidad Empresarial (ISE), la primera iniciativa de la América Latina (Bovespa,
Brasil), constituyendo una manera eficiente del sector económico fomentar acciones de
sustentabilidad en las empresas brasileñas.
Y, más recientemente, en 2009, en la Conferencia de Copenhagen, ocurrió un refuerzo al
Protocolo de Kioto, que expira en 2012.
El término “sustentabilidad” adquirió un significado más amplio, propagándose
rápidamente, ahora incorporado al vocabulario políticamente correcto empresarial, de los
medios de comunicación masiva, de las organizaciones de la sociedad civil, a punto de
volverse una unanimidad casi global. Mientras tanto, la solución de las causas de la
“insostenibilidad” parece avanzar en ritmo mucho más lento, mismo con las previsiones
más catastróficas sobre el futuro. Esa lentitud aparente ocurre a pesar del incentivo a los
debates sobre propuestas de soluciones posiblemente contradictorias entre los varios
participantes.

Por otra parte, dentro de la perspectiva social, enfrentamos nuestros propios desafíos.
Según investigaciones recientes hechas en Brasil, desde la cosecha hasta la participación
de la comunidad, 20% de todo alimento producido en el país es desperdiciado (IBGE).
Eso sería suficiente para proveer toda la población necesitada brasileña. Además, se
producen diariamente 125 mil toneladas de desechos orgánicos y basura reciclable. Sin
mencionarse el desperdicio de 50% de agua tratada en todo el país. De la misma manera,
se derrocha 9,5% de toda la producción anual de energía.
Estos números son impresionantes. La Asociación Brasileña de Mantenimiento indica que
los costos con mantenimiento en el País alcanzan la figura de 4,2% del PIB, además de
4% de la facturación bruta de las compañías gastados en mantenimiento
Tratase de datos suficientes para que en este escenario complicado, lleno de desafíos, la
ingeniería de automatización pueda proveer el apoyo necesario a todas las demandas de
la sociedad, siempre en búsqueda del punto óptimo de equilibrio de esa ecuación cuyas
tres variables principales son los requisitos ecológico, social y económico.
La figura siguiente muestra los desvíos de resultados ocurridos cuando se olvida una de
las variables principales de esa ecuación. Los resultados obtenidos se vuelven muy
diferentes de lo que se entiende como sustentabilidad:
Automatización y Sustentabilidad
Solamente el equilibrio de las tres variables podrá producir una solución autosustentable.
La automatización de procesos es uno de los instrumentos para viabilizar una realidad
sustentable.
El apoyo tecnológico de organizaciones mundiales para la estandarización de recursos de
equipos es un buen ejemplo. Actualmente equipos y soluciones completas de
automatización salen de fábrica con el timbre verde de la sustentabilidad, no solo porque
consumen menos, pero también porque se han concebido con un perfil de aplicación
estandarizado que posibilita que la propia planta pueda apagarse en sus sectores
ociosos. Un ejemplo de ese concepto es el ProfiEnergy, el más nuevo perfil de aplicación
de la Profibus International.
El ProfiEnergy objetiva no solo procedimientos básicos, tales como las sintonías finas de
los circuitos de control; pero también otros aspectos para la mejoría de procesos, los
sistemas de supervisión de activos, los sistemas de control de ejecución (MES) y de
Inteligencia de Negocios (Business Intelligence – BI), cuyas finalidades se esbozan
claramente: aumentar la capacidad productiva sin investir en expansiones o nuevas
fábricas, elevando la disponibilidad operativa a su punto máximo y evitando paradas
imprevistas, desperdicios con la variabilidad del producto final y fallos en el control de
producción, debido a la falta de informaciones en tiempo real para tomas de decisión.
Con las redes industriales y los equipos inteligentes, el fundamento de la automatización
industrial incorporó datos hasta entonces solo imaginados como ficción. Las
informaciones No Controladas están cada vez más disponibles y listas para satisfacer los
sistemas especializados.

Beneficios
Con la digitalización de los procesos la necesidad de impresión de todos los documentos,
certificados, informes, avisos y otros papeles comunes en el ambiente de trabajo se ha
vuelto superflua y ha tenido una caída muy grande. A través de e-mails, certificación
digital y otras herramientas, los colaboradores muchas veces no usan papel en el día a
día.

Más una consecuencia de la disminución del uso de papel es la reducción de espacios


ociosos dentro de la empresa, más precisamente aquellos destinados solo a ser depósito
de documentos. Además, el uso de archivo muerto, armarios, archivo de acero, cajones y
otros muebles para guardar documentos se torna menor, ya que la mayoría estará
digitalizada. Una sugerencia es transformar esos espacios en locales de relajamiento y
diversión para los colaboradores.

Todas las características citadas anteriormente culminan con la mejora del ambiente
interno de la empresa y con la mejora de la salud de los colaboradores, que trabajan con
mayor confianza y motivación.
Conclusión

La Sustentabilidad va mucho más allá de las actividades publicitarias y de comunicación.


Es un concepto fácil de entender, pero trae consigo un contenido histórico de conflictos de
intereses y la búsqueda del entendimiento entre las partes. En esa busca, mucho se
aprendió y hay mucho para aprenderse. La velocidad para la adopción de soluciones
sustentables está muy debajo de lo deseable, pues se necesita voluntad política para
forzar cambios, voluntad empresarial para crear mejorías significativas en los medios de
producción y cobranzas enérgicas de toda la sociedad. Esta, a su vez, debe adoptar una
conciencia de lo sustentable, evitando el consumo desenfrenado.

Sin embargo, no se puede menoscabar los avances alcanzados hasta ahora, pues es un
concepto muy difícil de mantenerse con la ausencia de herramientas y políticas
adecuadas. En este contexto, la automatización tiene importante papel. A través de
nuevas investigaciones y la adopción de métodos y herramientas de producción más
inteligentes, ese cuadro tiende a mejorar mucho, con pocas inversiones.

Finalmente, somos todos responsables para reinventar nuestro futuro de manera


autosostenible con enfoque en el bienestar de nuestro planeta.
Introducción

Con la modernidad y la automatización han llegado un sin fin de beneficios para el ser
humano pero también han llegado las consecuencias, muchas de las cuales plantean
retos muy serios para el planeta; el controlar el calentamiento global, derivado de la
emisión de diversos gases, particularmente los llamados de efecto invernadero, es uno de
dichos retos. Se auna a esta problemática, los grandes flujos migratorios, la escasez de
agua y las pandemias, esto conlleva una serie de cambios conductuales y sociales, de tal
forma que se consiga equilibrio ecológico, social y económico.

Es por ello la importancia de este trabajo ya que se plantean los beneficios y las
desventajas que trae consigo la automatización por lo cual debemos plantearnos muchas
preguntas sobre nuestro futuro y como podremos hacer que no nos afecte demasiado la
automatización y aportar soluciones.

Cabe resaltar que todos debemos ser parte de este movimiento que no debe de ser una
moda sino una cultura de vida para ésta y las siguientes generaciones.

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