El término “Diseño” implica la selección y organización de elementos realizados por un artista.

Estos elementos a su vez están en relación entre ellos mismos y con el todo. De esta manera
podemos afirmar que un sonido solo no cobra significado alguno hasta que es combinado con
otros sea de manera sucesiva (línea melódica) o simultánea (acorde). Así también un acorde no
posee carácter alguno hasta que se relaciona con otros. Así tanto “temas” como “motivos” cobran
significado a través de la relación “formada” con otros elementos de la obra. En conclusión, el
Diseño Formal Musical es la manera en la que cual los elementos musicales son organizados.

Cuando hablamos de “Forma Musical” se toma en cuenta dos aspectos: (a) la Forma, que viene a
ser la estructura total (la fachada, el resultado, lo que se ve desde afuera) y (b) el Diseño, que es la
estructura interna, la relación interna de elementos tales como Motivos, Temas, Progresiones
Armónicas y Patrones Rítmicos. Podría decirse que la Forma es consecuencia o resultado del
Diseño.

Al procurar estudiar el Diseño Musical, tenemos en cuenta los siguientes objetivos:

Identificar qué y cuáles elementos constituyen el Diseño de una obra.
Cómo estos elementos están organizados.
Qué tipos de Diseños existen y que resultan cuando ciertas relaciones existen entre estos
elementos.
Lograr la adquisición de un dominio completo en lo que se refiere a Diseño Musical nos permitirá a
una mayor comprensión auditiva de las obras que escuchamos.

Cada artista dispone las partes de una composición en un determinado Diseño. La ubicación de las
partes en un orden particular o en un patrón obedece a ciertos Principios de Diseño. Por ejemplo
un pintor o escultor organiza materiales Espaciales (que ocupan un lugar en la dimensión
denominada “Espacio”) con el fin de lograr efectos visuales. Así mismo un músico o poeta organiza
materiales Temporales (que ocupan un lugar en la dimensión denominada “Tiempo”) con el fin de
lograr efectos auditivos. Así, quien quiera que estuviese interesado en apreciar sea por visión o
por audición una obra de arte, debería ser capaz de entender el Diseño de la obra. Conforme
vayamos a distinguir cada vez más de manera precisa la relación de las partes con el todo,
aprenderemos a ver o escuchar con criterio.

Par un pintor, la disposición de líneas, objetos y contornos sobre el lienzo en el cual es gestada la
obra total es llamada COMPOSICIÓN. Dicho sea de paso, una de las primeras cosas que un artista
plástico principiante comienza a aprender es la adquisición de conciencia y sensación del alcance y
extensión de un lienzo cuando empieza a colocar líneas y contornos en él.

De manera análoga, el compositor (y arreglista) musical debe tener