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El factor geográfico tiene gran peso en el destino de una nación. En el caso de México, la
geografía lo destina a ser una gran potencia mundial y a ser una potencia en materia de
generación de energía eléctrica a partir de la luz solar.1 Es increíble que un país como
Alemania, con un territorio mucho menor que el nuestro y con mucha menor radiación solar,
sea la potencia en generación de energía fotovoltaica. Nuestra cultura política y el
corporativismo han impedido por años que México aproveche su geografía y sus recursos para
alcanzar su pleno desarrollo y tener su lugar como potencia mundial. Ya no más. México está
llamado a la grandeza. México está llamado a ser un modelo de desarrollo para todo el mundo
y a ser un modelo en la generación de energías limpias.
La región de nuestro país con los mayores niveles de radiación solar se encuentran en el
Noroeste y Norte: Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo
León, Sinaloa y Tamaulipas. La geografía genera oportunidades para el desarrollo de grandes
centros de generación de energía fotovoltaica para uso industrial y comercial, así como la
instalación de sistemas de alumbrado público solar, pero en este caso nos enfocaremos en la
GENERACIÓN DE ENERGÍA FOTOVOLTAICA PARA USO RESIDENCIAL. El número de este
tipo de usuarios (tarifas 1, 1A, 1B, 1C, 1D, 1E, 1F y DAC) en el país es de 37,258,147 al mes
de octubre de 2017.2
Gracias a la reforma energética, ahora los usuarios que produzcan energía eléctrica a partir de
celdas fotovoltaicas podrán conectarse a la red de la Comisión Federal de Electricidad y
venderle los excedentes, lo cual podría llevar a los hogares mexicanos a la autosuficiencia
energética. Sin embargo, esto tiene dos obstáculos: la CFE, que actúa como competidor de la
iniciativa privada, más que como coadyuvante, de hecho, ya presentó demanda de juicio de
amparo contra su obligación de pagar por la utilización de los excedentes de energía que
proveen los particulares; el otro obstáculo es el costo de la tecnología, pues no se produce en
nuestro país, y representa una fuerte inversión inicial por parte del usuario interesado en
utilizarlas.
1
Vid. Woodrow Wilson International Center for Scholars, Solar Energy Potential in Mexico’s Northern
Border States, Washington DC, julio de 2012, localizado en
https://www.wilsoncenter.org/sites/default/files/Border_Solar_Romero_0.pdf
2
Cfr., Gobierno Federal, “Usuarios y consumo de electricidad por municipio, localizado en
http://catalogo.datos.gob.mx/dataset/usuarios-y-consumo-de-electricidad-por-municipio
Dotar de financiamiento a usuarios residenciales de la CFE para instalar sistemas
fotovoltaicos y realizar la interconexión a la red eléctrica. Los créditos a mediano plazo
serán cobrados mediante cargos en los recibos de consumo.
Consejo Mexicano de la Energía: asociación civil que busca proteger los intereses de
las empresas en el mercado energético mexicano; se integra por diversos organismos
patronales y del sector, como son la Academia Mexicana de Derecho Energético,
Asociación Mexicana de Energía, Asociación Mexicana de Empresas de Servicios
Petroleros, Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas LP, Asociación Nacional de
Energía Solar, Asociación Mexicana de Energía Solar Fotovoltaica, Barra Mexicana
Colegio de Abogados, Consejo Coordinador Empresarial, Confederación Patronal de la
República Mexicana, entre otros.
Entre los actores públicos involucrados destacan los siguientes: la Secretaría de Hacienda y
Crédito Público, encargada de buscar financiamiento de parte del Banco Mundial y el Banco
Interamericano de Desarrollo; Secretaría de Energía, que estará a cargo del programa; y la
Comisión Federal de Electricidad, que pasa a ser un coadyuvante de la iniciativa privada, se le
instruirá a desistirse de cualquier acción legal en contra de la reforma energética y encargado
de realizar los cargos a los usuarios, y flexibilizar los trámites de interconexión.
El programa piloto iniciará en los estados del Noroeste y Norte del país, ya mencionados,
durante un periodo de tres años, a efecto de evaluar los siguientes indicadores: 1) Porcentaje
de usuarios que utilizan sistemas de energía solar; 2) Energía eléctrica generada por los
sistemas solares, tanto la consumida como la que se vende a la CFE; 3) Ahorros de energía
generados para los usuarios; 4) Disminución de los subsidios a los consumidores residenciales.
De acuerdo a la evaluación, se calendarizará la extensión del programa al resto del territorio
nacional y su extensión hacia usuarios comerciales y residenciales; 5) El incremento en
expedición de certificados de energía limpias a usuarios de tipo comercial e industrial.
Los certificados de energías limpias serán útiles por las siguientes razones:
Nuestra propuesta tiene pocos riesgos de ser rechazada por los usuarios y los actores
involucrados, sin embargo, se identifican tres amenazas a la misma.
En conclusión, este programa satisface las demandas de los usuarios residenciales, que verían
reducido el costo del consumo de energía eléctrica en el mediano plazo; satisface los
requerimientos de las empresas del sector de la energía solar y los organismos empresariales,
que dispondrán de financiamiento para expandir sus actividades, así como de las empresas
que ven una oportunidad de negocio en la fabricación de componentes que actualmente deben
importarse; se satisfacen las demandas de los grupos ambientalistas, en el sentido de
favorecer las energías limpias para disminuir los daños al medio ambiente; en el futuro, se
satisfará las demanda de la industria y el comercio de disminuir los costos de producción. A
largo plazo, esto será un factor que ayudará a mejorar la competitividad de nuestro país en este
mundo globalizado.