Hedy Lamarr, el ingenio eclipsado por

la belleza
Hedwig Eva Maria Kiesler nació el 9 de noviembre de 1 91 4
en Viena, aún siendo de origen judío fue educada en el
catolicismo, hija única de un banquero y una pianista.
Desde muy niña se destacó por su inteligencia
sobresaliente, por sus dotes para tocar perfectamente el
piano, sus inquietudes y complejidad.
Inicio sus estudios superiores con ingenieria pero los
abndonó para ser actriz.
Su primera película fue una completa polemica y fue
censurada, debido a que fue la primera mujer en mostrarse
completamente desnuda en pantalla. Pero no todos
visionaron el film de la misma manera, un empresario
armamentario, Fritz Mandl, quedó encantado con su
belleza y poco tiempo despues le pidió a su padre la mano
de Hedwig en matrimonio. Ella fue obligada a casarse con
él en contra de su voluntad. Durante ese tiempo pasó un
completo infierno; era esclava de los lujos de su nueva
vida.
Durante ese matrimonio no tenía permitido salir sin su marido, la llevaba con él a cada cena y reunión que tenia
con los nazis de alto rango, ya que el se encargó de proveer armas para Hitler durante la segunda guerra
mundial. Ella aprovechó cada conversacion y cada cena para recolectar información sobre estrategias y
atmamento. Mientras Fritz estaba en un viaje de neocios ella escapó a Londres para tomar un barco a Estados
Unidos, por consecuencia del destino conoció al director de la Metro-Golwyn-Mayer, su nombre cambió a Hedy
Lamarr, su carrera como artista estaba oficialmente retomada.
Cuando la guerra explotó y todo el mundo estaba sucumbiendo a la hecatombe, ella sabía que podía contribuir
con los aliados, tenia el conocimiento estrategico del ejercito alemán; decidió ofrecer si trabajo como ingeniera
pero la rechazaron pidiendole que centrara su contribución en promocionar bonos de guerra, no se desanimó, al
contrario, ideó una campaña en la que cualquiera que adquiriese 25.000 o más dólares en bonos, recibiría un
beso de la actriz. En una sola noche vendió 7 millones de dólares. Sin embargo, no se detuvo ahí, tambien ideó
una forma de transmitir los mensajes u órdenes de mando fraccionándolos en pequeñas partes, cada una de las
cuales se transmitiría secuencialmente cambiando de frecuencia cada vez, siguiendo un patrón pseudoaleatorio.
De este modo, los tiempos de transmisión en cada frecuencia eran tan cortos y además estaban espaciados de
forma tan irregular, que era prácticamente imposible recomponer el mensaje si no se conocía el código de
cambio de canales. El mensaje o la orden (en caso de control remoto) utilizaba un sistema binario, modulando la
frecuencia portadora con una señal de baja frecuencia fija, de 1 00 o 500 Hz, lo que permitía añadir filtros
sintonizados a estas frecuencias en el receptor para eliminar las señales parásitas mejorando la calidad de la
recepción. El receptor estaba sintonizado a las frecuencias elegidas para la emisión y tenía el mismo código de
cambio, saltando de frecuencia sincrónicamente con el transmisor. Este procedimiento se conoce ahora como
“transmisión en espectro ensanchado por salto de frecuencia”. En la actualidad, muchos sistemas orientados a
voz y datos, tanto civiles como militares emplean sistemas de espectro ensanchado (entre ellos todas las
tecnologías inalámbricas que conocemos, tanto la telefonía de tercera generación como el Wifi o el BlueTooth, se
basan en el cambio aleatorio de canal) .