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en: Anuario \IF4, México, UNICACH /Gob. del Estado de Chiapas, Ty . as rar {” La comunidad india en México en los estudios antropolégicos e hist6ricos.' Juan Pedro Viqueira CIESAS-Sureste Introduccién. Hasta fechas recientes, el concepto de comunidad ha,cons tituido el sustento principal de la gran mayoria de los estudios sobre Tor indios en México, Los antropéloges, por lo general, solian limitar sus Investigaciones al marco de una comunidad o en el tmejorde los casos a un conjunto reducido de éstas. Los historiado~ res, aunque abordaban espacios mucho mas amplios, utilizaban muy a menudo a la comunidad como un tipo ideal que les permitia texplicar los fenémenos que analizaban, {neste trabajo nos propanemos mostrar de qué manera este concept funciond coma uno de los principales paradigmas que brientaron el desarrollo de los estudios antropolégicos e histéricos fen México, y constituyé el substrato comén sobre ef que se Tevantaron las principales polémicas teéricas Una piers WaSTaN de ete texto forms pate del trabajo inal para obtener, | on 1968, ef Diplome d'Eudes Approfondies® (DEA) en {Ecole des Hautes | ludes en Sclences Sociales, Pars, Francia bajo la direccion de Jean-Pierre Derihe, a quien agradezco av apoyo y sus scertados consejos. 2 ‘Tannies y el concepto de comunidad. El concepto de comunidad debe mucho a la Ferdinand Tannies, esp trabajo ae cinlmente a su libro Comunidad y ssa i ‘cio. A partir de los estudios de derecho comparativo te Ilnny Maine € influido por algunas de Ins ideas dle Kael Marx, Tonnle clistinguid dos tipos extremos de relnciones socinlest Ins qu s* flaban en Ia comunidad, In *Gemeinschat’y las que se caban unt In zaciedad, la "Guessellschatt’. Las primeras dimanaban dl eons sungo tradicional de Ins voluntacles, mignteas que Ins segundas 10 hacinn de Ia regulacién racional y contractual ce los invereses individuales contrapuestos, La comunidad —eseribié T&nnies (Se basa) en el consenso de las voluntades, duscansa fen fa armonin y se desarrolia y ennoblece mediante lax tradiciones, las costumbres y Ia religion... Hay .. un sistem comin y obligatorio de derecho positive, de normas impositivas, que regulan las relaciones entre Ins voluntades. ‘iene sus raices en la vida familiar y su base en la propiedad de la tiera. En lo esencial determina sus formas el céuligo do teadiciones y costumbres. La religién consagra y glorifica esas formas de la voluntad divina, es decir, interpretadas por {a voluntad de sabios y gobernantes.® Este parrafo contierie as principales lineas de investigacién {que anteopologos © historiadores. de las comunidades ‘inilias mexicanas van a desarrollar durante varias décadas: In homogerieidad econémica y espiritual (consenso de voluntades, armonta); I religin y la tradicién como formas de conteol secinit @l parentesco como-base de la organizacién social; el papel dlrigente de los principales"; y In propiedad dle Ia tieren como principal fuente de cohesin social. Las primerns linens de inves tigacién serén desarrolladas especialmente por los antropéloges mientras que la dltima lo sera mas bien por los historialores.. 2 "FTinntes, Comunidad y asocisiin, pp. 267-202, 2 La comunidad india: ;sypervivencia prehispénica o creacién colonial? La comunided como supervivencia prehispanica. * Robert Redfield fue uno de los primeros antropélogas en Utilzar en forma sistematica los conceptos de comunidad y cocie dad en el estudio de los procesos de aculturacién en México. En su obra Folk Culture of Yucatén se propuso estudiar la transformacién de la cultura folk en urbana, comparando cuatro poblaciones que se hallaban —segin él— en distintas etapas evolutivas de una ‘misma escala lineal. Estas poblaciones eran Mérida (la ciudad), Daitas (la villa), Chan Kon (el pueblo campesino) y Tusik la tru) La regién en que se ubicaban estas cuatro poblaciones, Yucatan, tenia la ventaja —segan él— de que: “The history is already known to have been very simple: a single Indian culture came in contact with Spanish colonial Society four hundred yeats ago and remained largely undisturbed by other infliences of local movements until the introduction of more modern ways through a single part and a single city!? De tal forma que mientras més se alejaba uno de Mérida, el centro que irradiaba los patrones de conducta urbana, mas predo- ‘minantes se volvian las tradiciones arcaicas y primitivas, Ast las ‘comunidades mis alejadas como Tusik se caracterizaban por una gran homogeneidad econémica y espiritual, una division del trabajo elemental, una tecnologta rudimentaria, una cultura alta- mente organizada y poco secularizada, y un escaso desarrollo de {os comportamientos individualizados.*En cambio amedida que se STR RRMA, The FOIE Culture of Yucatin, . 4 + Ibi, pp. 13 y 16-48 24 acereaba uno a Mérida aumentaba la divisign social del trabajo, la brganizacién basada en el parentesco perdia fuerza, la relighasidag Ptfanto [a de origen catslica como la indla— deerecfan, y 48 ‘multiplicaban las posiblidades de eleccién de los individuos.* Este ordenamiento espacial era al mismo tiempo temporal. En tel pasado las poblaciones cercanas a Mérida habfan tenido unn tultura similara la que predominaba en ese momento (1841) an lak pueblos y aldeas alejados, y éstos en su evolucién histérlen Tendrfan que recorrer las etapas ya superadas por les pueblos mas sujetos & [a influencia de Mérida: "Following the line of thought we are made to a the investigation in Yucatan has been, in parvo, of certain aspects ofthe historic process af elvillzallon itselt.? Sin embargo este modelo hacfa caso omiso de divers hechos hist6ricos "que el mismo Redfield conocfa" y que ponfan an tntredicho todos los postulados en los que se basaba Las poblacio- res més alejadas no eran aldeas ancestrales alsladas de Ine influencias occidentales, sino que eran de reciente ereaclén y testaban habitadas por indios que se habian sublevade durante I guerra de castas y que habian buscado refugio en la selva, Muchos tle lor indios provenfan de haciendas préximas a les caniroe urbanos y durante la rebelién habfan mantenido estreches contac {os con los ingleses de Belice que les provefan de arman.! ‘A pesar de sus ingenuidades, de su rechazo a tomar an cuenta los hechos histéricos concretos sustituyéndolen per una secuencia evolutiva abstracta, The Folk Culture of Yueatén, Inept 1 decenas de antropslogos que se lanzaron en busca de mas comunidades "aisladas! en las que se mantuviera viva, en su pureza original, la cultura prehispsinica. a © id, p. 348. Vease al eespacto el excelente bro de N. Reed, La guerra de costes en 5 Las _miradas se ditigieron entonces hacia los indios Incandones a los que se lef declaré sobrevivientes y herederos de in elvilizacién maya a pesar de que sus formas de vida primitivas, y 1u8 conocimientos y tecnologias rudimentarias evidentemente no padian ser aquéllas que habian caracterizado el esplendor de la civlizacién maya. Hoy en dia se sabe que lor actuales lacandones fon Indios yucntecos que huyeron de las regiones controladas por los espavioies y que slo. fines del siglo pasado se instalaron en la felva en la que hoy se les encuentra.* Quien llevé estos planteamientas a cus limites extremos fue Evon Z. Vogt en sus estudios sobre los Altos de Chiapas. Para este antropélogo, los wolziles mantenfan viva no sélo Ia cultura de los iempos prehispnicos, sino incluso aquélla anterior a la expansion de los pueblos del altiplano central (Siglo X 0.C.) “Por diversas exzones, creo que Zinacantn ejemplifca un cierto nimero de hechos fundamentales de la subssten la, del patrn de poblamientey de In organizacin social y eremonial, provenientes de os prinetos periodos de Ta Cultura maya. Panso que ex bastante probable que el Pet, los Cuchumatanesy Ios Altos de Chiapas. quizs constaayan Iaregian mas importante para el entendientode In cultora maya en su forma relatvamenteimperturbada, en dllerentes teenlas de tempor Partiendo de esta premisa, Vogt extrapols los datos tomados He los pueblos tzotziles actuales al perfada clisico de la civiliza- “ién_maya, legando a afirmar que durante este periodo los rabitantes de las ciudades no formaban un grupo social distinto de 08 campesinos, sino que estos mismos acupaban en forma rotativa / Por cortos periodos de tiempo, los cargos de los sacerdotes, Tan Lae Ta pa de Dios y del rey, pp. 22 . ‘Algunos aspectos de patrones de poblamiento y de la raanlzacibo ceremonial de Zinacantin" pp. 80-81 sélo algunos oficios que requerfan de un dominio técnico preciso mntico, artezano— eran desempeindos por especialisine de tiempo completo, quienes sin embargo estaban subardinados 8 ot Campesinos que fungian momenténeamente coma sacardetat pine Cipales.* De esta manera, toda una corriente aniropoléglen au dled .iminimizar las transformaciones acaecidas durante més de euro Siglos diez, en el caso de Vogt, colocando a lot Indlae al mmargen de la historia, haciendo de ellos (ésiles vivlaniag, Su Siuacién actual en st misma carecfa de toda interés. Su sutudlo RS tenia ninguna otra finalidad que lade permite el conoelmlante €0 Ine gloria pasadas de las civilizaciones prehispénieas, Ad, an [ab mmonograffas que ze excribieron bajo ol influja de esas ian, ted ios raegos cultuales que a juicio de los antropélegoe tanfan. un origen reciente eran cuidadosamente omitides, dande ast una imagen totalmente falseada de los grupos indios La comunidad y la propiedad de fa tierra Si bien en sus asevercions sabre la permanencia drugs ‘culturales prehispénicos entre los indios de la época colonial, historiadores fueron mucho mas prudentes y mas rigurosos en Inu pprcbas que aportaron para sustentarla, no escaparon por coral toni a la simplistavisién evolucionista que predominata an aqual fentonces, ni a las influencias esquematizadoras de Ténnies, Di caarlaron la posibilidad de resolver de golpe la cuestién ganaial y bbuscaron abordarla desde diversos Angulos, empezando por un problema que los antropologos habfan omitido: el de las formas de propiedad de Ia tierra de los pusblos indios Un trabajo pionero que se ocupé de esto fue al de George McCutchen MeBride; Los sistemas de propiedad rural en México, publicado originalmente en 1923. En él, el autor crtieé las (asl de Morgan y Bandelier que veian en el calpulll comunidades ip, Igualitarias de tipo tribal baaaclas en el parentesco y que menosprt | ibaa la importancia que tenian en su interior las diferencias sociales, Por el contrario MeCutchen McBride basandose en los ronistas y en los documentos del siglo XVI, mostré que los calpulli tran unidades territoriales en las que la tierra ni estaba distribuida igualitariamente ni se administraba democriticamente, que en la sociedad mexica existia una clase seforial ligada al estado =nobles y funcionarios— que contralaba gran parte de la tierra y que incluso tenfa trabajadores —los llamados mayeques— adscriptos asus posesiones, un poco como la estaban los siervos de la gleba en la Europa feudal." La conquista y colonizacién espafolas proveearon grandes ‘cambios. Las encomiendas, el trabajo forzado en las ciudades, haciendas y minas, las epidemias, los desplazamientos de pebln- ciones destruyeron el antiguo orden prehispénica, provocando un empobrecimiento y una nivelacién de Ia condicién social de loz indios.* Sin embargoun lazo de unién se mantuvo entre los pueblos Indios anteriores a la conquista y lor que resultaron de ella: las formas comunales de la tierra, que fueron respetadas ¢ incluso alentadas por la Corona espafola “Casi todas las comunidades agratias del México actual ddeben su existencia continuada al reconocimiento (tacito 0 expresado) por parte de la Corona espafola después del dertocamiento del gobierno de Moctezuma, Con su inclina- cién usual a adaptar su nueva organizacién politica a las ideas y costumbres de los pueblos natives mas avanzados, el, gobierno reconocié el sistema colective de posesion de la tierra que habia prevalecido entre los Indios agricolas de México, lo modificé ligeramente para adaptarlo mejor a las, instituciones castellanas y le reconocié una situacion legal feCulchen MCU, Los sistemas cle propiedad rural en Mévico" 17% 2 ile, pp. 73-00. 20 rnudliante In promulgacién de una legislacién que se considle- ‘aba apropiada a este caso... El ejido de los tiempos colonin= les es en realidad, el altapetalli algo medificade por las nuevas condiciones y por el contacto con la elvillznelén feurapea Varia décadas mis tarde el historiador José Miranda influenciado por las teorias de Tannies bused mostrar cémo la eniravable relacién que se habia dado en los tiempos pruhispanicos entre la propiedad comunal de los indios y la Exhesién social de sus puebios habia continuado después de ia Eonquisia-espnfola y como, gracias a esa estrecha vinculacién, humeresos puebles Indios Kabian conservado una personalidad propin.* Este nexo entre propiedad comunal y cohesién social se habia mantenido gracias a la separacién entre indios y espavieles ppromovirla por et gobierno espanol, a la poca presencia dle los colonos en algunas regiones, a la autonomia municipal concedida 1 los pueblos indies, a la politica protectora de la Corona y al rechazo de los indios de la religién catdlica y de las normas étiens y jrtelfens indivicualistas de los espanoles.* El punto débil de la argumentacién de Miranda era el suponor que los pueblos Indies de los tiempos prehispanicos se habtan earncterizado por "la unidad fatima y sustancial de hombres y rivrras*y por "el particularismo* que hactan que “cada uno de ellos w-considderabs dn gran parle distinlo y epuesto a los demés'.*Esins aliemaeiones no habrian de resistir a su confrontacién con hechos histéricos puestes en evidencia por Investigaciones posteriores, "ena, *L propiedad communal cl la ira y la cohesion sot ke los pueblos indigenss mexicans ps 5b hi wpe $7289. 2 la comunidad y sus forma de gobierno, Si bien cierto consenso parecia entonces dibujarse en cuanto al origen prehispanico de las formas de propiedad de los pueblos Indios de la Colonia, no sucedié le mismo en cuanto a sus formas dle gobierno. Gonzalo Aguirre Beltrin en su estudio, "El gobiemo indigena en México y el proceso de aculturacién® buses demostrar que dlichas formas de gobierno obedecian patrones prehispanicos vaciados en formas institucionales hispénicas..” Rechazando por etnocéntricas”las descripciones que los cronistas espafioles hicie- ‘an de la organizacién politica prehispanica, retomé las teorias de Morgan y Bandelier, y afirmé que “el llamado Imperio Aztecs no era sino una confederacién de tribus" cuya base eran los calpull, conceptualizados como linajes o clanes geagrificos "El gobierno del calpulli era ejercido par un consejo en cl que recafa la autoridad suprema. Se hallaba integrado por los ancianos del calpulli, es decir, por los hombres de mayor edad y sabiduria, cabezas de grupos de familias conyugales entre sf por herencia directa , patti o matrilineal”. Y afndias "Los parientes mayores y los jefes militares de cada calpulli constitufan el consejo tribal y era este consejo el que clegia por una vida al tlatoani, el que habla, en quien delegaban la ejecucién de sus resoluciones"* Tr Agule Belin, “tl goblemo inigana en Méxien y el proceso de | aculuracén’, p. 293. ia, p. 275, | itp. 275, 30 ‘Aunque —segin Aguirre Beltrin— al final dl perloda prehispanico se estaba dando una mayor estratifiencién social, sin Einbarga esto no llegé a acabar con lag formas democritiens (ut fueron resurgiendo cada vez con mayor fuerza ale largo le los res sighs de dominio espafiol2 ‘Charles Gibson en cambio, en su estudio sobre Los aztecas Iiajo el dominio espanol, hizo énfasis en los elementos ele ruptura ten detrimento de los de continuidad. &! primer paso ce lo que flenominé "hispanizacién polfiica" fue —segia él— el {lesinnntelamiento de todas las unidades politicas prehispinicas Inayares, quedando sélo las relaciones cabecera-sujeto. El segun= flo paso iniciado a rmediados del siglo XVI, fue la limitaci6n del poder de los antiguos caciques y la implantacién en les pueblos Indios del modelo de gobierno municipal espanol! Avulturacin y sincretisme. A pattir de estas dos posiciones la discusién, aresa dle una visién estrechamente difusionista, cayé en un callején sin sali. Cada investigador se esforzé por distinguir los enagos culturales ce origen prehispsnico de aquéllos de origen espaiioly por cuamtificar Jos unos y los ottos para elaborar un "indice de aculturacidin® para los distintos grupos étnicos de Mesoamérica que permitivnt ext blecer una jerarqufa entre ellos pariand del mas puro Lu como hemos visto le fue concedido a les Incandones = hutsta ‘mas contaminados por Ia cultura espaiola, Entro wats dit colocé a los tarascos, sospecliosas dv sor bueno eatille yor haber panicipaco on las Iuehas erlsteras y on ol meviniect sinarquisin3® i om ates aan pail, 1 4. Eos y mili The Vint Fund Semtoae uf Mlle American Laan," Sixes Contuey and he Twente pp, 262-265. 3 El método que se sigTié en esta clasificacién constituia un 'frculo vicioso. Como a menudo no se tenia informacién fidedigna sobre ciertos aspactos de la vida social prehispanica se deducian Gstos de sus supuestas supervivencias en los pueblos indios del siglo XVI o incluso del XX. Este razonamiento, frecuente entre aquellos que segulan las teorias de Morgan y Gandelier, fue levado como ya hemos visto— a extremos caticaturescos par Evon Vogt. Estos estudios —adin frecuentes hoy en dia— acaban por reducir una cultura a sus origenes y ano ver en ella sino una lista inconexa: de rasgos culturales provenientes 9 del pasado o del Viejo Continente, Ast estas investigaciones nos ayudan muy poco fa comprender por qué algin rasgo cultural se ha conservado, desarrollade o alterado; menos aGn eGal es la importancia que tiene en Ia actualidad, La comunidad como creacién colonial La dinica forma de salir de aquel atolladero teérico era reubicar a los pueblos indios en su contexto social, abordarlos como parte de una sociedad que los engloba. Uno de los primeros fen adentrarse por esta via fue Eric Woll, A partir de su ya clasica definicin de campesino —productor agricola que forma parte de tun sistema mayor, que ejerce cierto control sobre la tierra y que vive en una economia orientada principalmente hacia la subsisten- ccia— se iterrog6 sobre las funciones econémicas que desempetia- ban tos indios en tanto que campesines en el seno de la sociedad colonial. Los indios en los tiempos coloniales —en particular los de las tierras altas— construfan y en buena medida mantenfan las ciuda- des y villas espafolas y praveian de la mano de obra necesaria a las empresas econémicas de los colonas, en particular a la mmineria.® Sus comunidades fueron el resultado de un largo proceso FTE Walt "yper oF Latin American Peasaniry",p. 456. 2 die reorganizacin fomentado por la Corona para que estas tarens Gladiewon lovarse a cabo de la manera mae provechoea para ella. {x Congregacisn de lor indioe en comunidades impedin ademss {qu los colonos pudiesen ejercer un dominio de tipo feudal sobre Slice que habriaebiltado el poder rea, permitta constitutes en Sinestamente regido por leyes props, felRaba en mucho i ‘inposicion eesleccion de tibutor en especie, dinero} trabajo." ‘© parir_de un enfoque similar Angel Palerm anal. ta aniculacién de la economia novohiepana con el mercado mundial nravés dela producciny exportation de plata, que ovientaban "hs demés actividades econémieas. Asi por ejemplo, muchas de Int incienda de Baio y del Norte no sd funcionaban principalmen- te come abastecedoras de productos necesnrio Tor centros nines, sino que al estar directamentecontroladas por los captor {es mineros,permitin abatir ls costos de produccion dela plata, Ais ver tel illo econémico de la hacienda... dependia de #0 nieulacién con les comunidades indigenas”> Estas sportaban 9 ins hacienda su conocimiento milenario sobre las plantas, Ia ita al agua, mano de obra barataestacionaria que no tenis que ser trantsnid todo sl. afo sino tan slo durante el empo.en que se fe ‘equera, Lag comunidades ademis pagaban tributos en dinero y speci, y constrfan los caminos que eomunicaban a lor entree miner. Era tal la importancia de estas comunidades que ahi onde no las habla, como en eh Norte de la Nueva Espafa, le Carona buses —no siempre com tito establecerlas* Johanna Broda en su article "Las comunidades indigenas y Ine formas de extraccién del excederte: epoca prehispénica y colonial sntez los principales argumentor que se oponen Ib oncepeién de Ia comunidad como supervivencia prehispanien paniendo en evidencia no solo lo endeble el enfoque Fa pp Seas A Paleem, ‘Sobre Ia formacit del sisema colonial » bid, p. 122. p21 4 es metodolégico de ésta, sing también Ia falsedad de In reconstruc- idm de Ia sociedad prehispanica —ingenua extrapolacién de los tlntos tomades de la realidad colonial— en Ia que se basaba, Johanna Broda empezé preguntindose hasta qué punto: *el cardecter corporado de las comunidades indfgenas basndo en la tenencia comun de la tierta, una organizacién politica "democritica’, una igualdad econémica de sus miembros y sobre todo > La sociedad colonial asigné a los indios un lugar preciso en In estructura econémica y social, usando a la antigua nobleza srehispinica como intermediaria entre las comunidades y lat tespafioles. Si bien las formas de tribute no parecen haber variado ‘demasiado antes de 1550-1560, su uso si cambi6 radicalmente: de senvir para un consumo suntuario pasé a invertirse en el comercio y en empresas productivas de tipo capitalista.® La obligacién de {ributacién no recayé sobre los indios individualmente sina sobre la comunidad en su conjunto, siendo esta obligacién una de las principales fuerzas que la conformaron.3* Todo esto llevé a Johanna Broda a concluir que: La comunidad indigena colonial fue resultado de la politica colonial de la Corona y respondta a intereses econé= tices y politicas concretas. Ls instrumentos de esta politica fueron las congregaciones, la expedicion de leyes para garantizar la separacién de las poblaciones india y expafioln, Ja dotacién de tierras comunales a los nuevos poblados, el Srp oe tid, pp. 72-73; Véase también J. Miranda, La funcién del encomanderd en los oxigenes del régimen colonial. J Brod, *Las comunidades indiganas y las formas do extract il ‘excedente', pp. 75-76, Esta idea manciads por baciantes auiores tke Inspiracién marxista fue también utllizada por M. Weber, Histor econdmiea general, pp. 19-39 para poner en duda f esis de Marx le 1 comunisme primitive es Ia forma inci de toda evoluelén socla * estnblecimiento dh problemas local gebiernos auténomas para resolver los El enfoque de [a comunidad indigena como ereacion de la, politica colonial a pesar de sus aciertos conlleva el peligro de hegar a los indios toda capacidad de respuesta, de coneebir los liversos intereses espanales como congruentes y arménicos entre Hy de dar una imagen de la Corona como un poder sin limites. Los investigadores franceses que, adoptando este enfoque, han realizado sobresalientes estudios histéricos y antropol6gicot de regiones indins de México, al presentar en forma palémica sus frgumentas, no siempre lograron sortear con éxito este peligro. ‘Una contribucién especialmente importante de estos investl- gndotes ha sido el mostrar, con abundante material empitico, que hho existe continuidad entre las comunidades prehispénieas y Ine posteriores a In conquista en tanto unidades socio-espacinies. En tfecto, no s6lo Ins comunidades coleniales fueron el resultado de dlivisiones de unidades mas amplias © de reagrupaciones en un ‘nismo poblado de grupos distintas, sino que durante la Colonia y Ia Epocn independiente, éstas se escindieron en miltiples y nuevas vunidades.®” ‘Apart de esta constatacién varios investigadores dedujeron, algo apresuradamente, que las comunidades eran el resultado casi ‘exclusive de fuerzas externas. Henti Favre, por ejemplo, en su libro Changement el continuité chaz les Mayas du Mexique, se propuce: 7. Brod, Tas comunidades indigenas y las formas de extraccién del excedente’, pp. 76-77, 3H Favre, Changemen! et continulé chez les mayas du Mexlque, pp. 134 1362 B, Dehouve, Preduccién marchande at organisation sacisles dansune ovine indienne du Mexique, pp 439-894, 571-811 y 687-226, 36 “Montrer de quelle maniére la société tzotzil-tzeltzal se remanie selon les pressions extérieurs auxquelles elle ust fexposée; comment elle s/ajuste constamment & la socigié Tadina qui Iinvestit et la domine; comment elle cépend au systéme colonial et aux modifications de ce syslame en fonction de ses propres ressources et de sa propre ddynamique'.> Para él, la comunidad y la indianidad que de ella se deriva son antes que nada iastrumentos que permiten la explotacién de los indi: (La culture indienne) représente un ensemble daulomatismes originaux qui adaptent individu 4 Ia situation colonial. Mais en ladaptant & cette situation, elle ly pitge aussi. Elie Henferme dans un univers artificial de lus en plus déconnecté de la réalité, dans un monde presque pathologique 2 force d'etre la carleature de plus @n-flUE Brossibre du monde réel. Elle le rend ainsi plus dépendlant et flone plus exploitable. Elle laliéne au point de le fire partciper & s2 propre eppression* > La liberacién de los indios, concluys Favre, debe acompafiarse necesariamente de la desaparicién de sus comunida- tles y de su indianidad, Jean Piel en su artfculo "Communauté indigane et fiscalité coloniale sur les Hautes Terres guatémalteques, San Andets Sajcabaja du XVle au XIXe sicle® afirma que: “En tant qu‘institution, la communauté indigéne existe fpar et pour Vat, qui Vexplique au plan historique et qui Fexploite au plan fiseal pour prix de la stabilité qu'il assure 3 5H Favre, Changemen! el continulé chez les mayas du Mesique 11h thd p. 342. ” 1 de production et de reproduction... En tant que tmicrosociété, Ia communauté indigéne existe par et pour PMEtat et le Marché, du moins pendant fa période colonial Jusqu'au milieu du’ XVille sigcle au moins, il n'est en effet ‘aucune forme de participation des communautés rurales de la région d’Utatln —San Andrés Sajcabajé— a la vie interrégionale et au marché qui ne soit controlée, Ccomptabilisée ou contrainte par I'intermédiaire fiscal. Cela a des incidences non seulement administratives, mais, agronomiques, techniques, monétaires. Cela modifie les systemes de culture et d'échange, le calendrier, Vhabitat, mais aussi les solidarités humaines, la structure de la parenté, le fonctionnement du gouvernement indigéne traditionnel Done la communauté indigdne de San Andrés Sajcabaja est conditionée par {'Etat, I'Eglise et le marché colonial mercantiliste non seulement quant & sa place globale dans la societé guatémalleque mais quant & ses mécanismes interne: de fonctionnement structure!” >> Daniéle Dehouve concibié su monumental estudio sobre la regién de Tiapa, Guerrero, “Production marchande et organisation sociale dans une province indienne du Mexique XVle-XXe siécle" como la historia de las transformaciones y adaptaciones de esa rogign a etapas sucesivas del desarrollo del sistema capitalista ‘mundial.® La autora negé no s6lo el que la comunidad colonial hhublese podico tener un contenido anticapitalista, sino incluso el que hubiese podido ser un mecanismo de defensa de les indios contra Ia explotacién y la dominacién espafiolas: i nll ot heal colonate sur les Hautes Terros uatémeltbquns,p. 64. En cambio wn su Ibeo Sejeabajé expone una posieltn mis camslaja y mucho mtu mallzaa 3D, Denouv, Proclreitin marchande vt organisation soclales dans une province indlanne tu axle, ps 77, le, pp. 34048, ' i t i | ela a de same ane [ I | i "Je ne partage pas le point de vue qui consisterait& voir dlans toute institution communautaire, Vexpression de cette autonomies les pressions fiscales €talent trop importantes, [a surveillance royale et ecclésiastique s‘exergait de fagon op soureuse sur les institutions qu avaient rises en place let fonctionnaires royaux et les prétret pour que l'on pulsse ppenser que la communauté constituait, en tant que telle, un acte de résistance indienne" La comunidad, instiucién mulifacética su articulaeién con un sistema econémico mayor, en cambio, ne flejaban de destacar el papel de los indios en la constitucién y el funeianamiento de las comunidades. Erie Wolf, por ejemplo, sufialaba que la comunidad no s6lo era el resultado de una politien dle la Corona espafiola cuyos fines eran disminuir el pocier de los tencomenderos sobre los indios y limitar la libertad de éstos, sina {que respondia también a necesidades de los indios, permitiéndoles paliar en algo la explotacién de que eran objeto, de tal forma que festos legaran a aceptar e incluso a considerar como propia esta nueva forma de vida Angel Palerm a su ver sefalnba que Ia comunidad haba sido dliseRada para cumplir cierios objelivos econémicos distintos de aquéllos a los que de hecho acab6 sirviendo. Asi aunque fue testructurada paca asegurne el contral de la poblacién y la satisine- ign de los tributes y servicios impuestos, permitié mantener una alta wficiencia de las haciencas proveyéndolas de mano de obra 1 barata.t Tae ps SOS - + 8, Wall, Pueblos y culuras de Mesoaméries, pp. 191-192 4A. Paleim, “Sobre la formackén del sistema colonia, p. 122. 9 pb Estos investigadores flo olvidaban que no existe fuerza eco- némica o politica capaz de moldear a su antojo, univocamente, la Fealidad cocial, que ninguna clase dominante carece de conflictos interns, que toda domminacién genera una resistenciasUn ejemplo hos servird para sefalar algunas de las contradicciones internas de Ja dominacién espafiola, tan a menudo pasadas por alto. J. srae! ha mostrade que los violentos enfrentamientar que se dieron en el siglo XVII al interior de las clases dominantes de fa Nueva Espafia se debian en buena medida a sus discrepancins sobre la permanencia de las comunidades indigenas. Mientras que los funcionarias de la Corona y los frailes s2 esforzaban por rantenerlas, los hacendados, los clérigos y los jesuitas luchaban por hacerlas desaparecer.® Por ora parte los mismos autores que vieron en la comunidad colonial tan sélo un instrumento de dominacién y explotacién reconocieron —como fue el caso de Oanitle Dehouve— que a partir del siglo XIX ésta se transforma en: expression dintéréts propres & un groupe local, qui Sopposent parfois dans des conditions désespérées, aux intérats divergents des colonisateurs espagnols", Efectivamente, las numerosisimas luchas violentas de los Indies por defender sus tierras y su autonomia politica y cultural sus comunidades, pues— de las Leyes de Reforma y de las ambiciones de los hacendados impiden par completo sostener para al siglo XIX, la afiemacién de que la comunidad era tan s6lo el Teeanisme més idéneo para explotar y dominar a los indios. 1.1 GT ARIAT a eras gral cl sigho VIM, pp 141-14, 1, Dahouve, Praha marcha 0 organisation sciales dans une province Ines ca Metsu, py 959-860: Véase también J.P Communeulé Inilydne #1 teal culuntale sur ley Havlee suaismaloquns, pp. 4-05, 49 Sin duda, resulta més fructifero concebir a la comunidad india como el resultado hist6rico de fuerzas sociales contrapuestas y Seeptar que ésta puede —sin que esto suponga contrasentide niguno— conjugar elementos prehispénicos hispénicos, ser el fesultado de la politica de la Corona Espanola, funcignar en provecho de los hacendados al mismo tiempo que limitar su Expansién, convenir a las ambiciones —no sélo evangelizadoras— tie los frailes, permiti a los caciques indios salvaguardar parte de su antiguo poder, constituir un arma irremplazable de les indios para preservar sus medios de vida y mantener cierta autonomia politica y cultural, y ser incluso muchas otras cosas ms. €l trabajo fie|histeriador debe ser el de dar cuenta dal complejo entramado fie todas estas fuerzas evitando reducir toda la realidad a uno de sus elementos, por mas importante que sea alguno de elles. La comunidad indigena: ghomogénea y arménica? Como hemos visto, des concepciones se han enfrentado en cuanto a Ia manera de abordar el estudio de las comunidades indias —gsupervivencia prehispénica 0 creacién colonialt—, sin embargo entre ellas existe un punto de gran relevancin sobre el que hay consenso: la hemogeneidad y In armonfa social que supuestamente reinan en el sena de In cemunilad, Los investigadores por lo general han aliemade que en "las repdiblieas de indies" se daba una gran Igualdad que limitaba los conflictes internos. Se llegé incluso a concluir que estos rasgos —igualdael econémien y ausencia de conflictos— eran las cerac- leita esenciles de Ia comunidad, aqua que la defnien come tal [I sistama de enrgos y la hemogeneidad de la comunidad. Los antropélogos por lo general aceptaron que el mecanismo ‘ue permltfa nivelar econdmicamente a los indios y estnblecer Ins vtas legttimas para aleanzar prestigio social y poder, sin provecar conflictes que minaran Ia unidad eomunal, era el sistema jerfrqui= co te cargos civico-religiosos. Este sistema fue observade y co escrito por primera vez par Sol Tax en 1937 al estudiar pueblos {adios de las tierra altas de Guatemala: In. brief summary, there is a hierarchy of seculae officals in each municipio with functions ranging from those Of a combined mayar and justice of the peace to thase of janitors and mescengers there isa parallel hierarchy of sacred, officials in charge of the important santos of the municipio, The officers are theoretically "elected* but actually they take twins, starting with the lower offices and gradually moving igher and higher: in the progression there is an alternation between the secular and sacred hierarchies, through all ofthe offices, the individual becomes a principal an elder in the ‘community exempt from further service to the town'.# Las Investigaciones llevadas a cabo'en los afios 1941-1944 bajo Ia direccién del mismo Sol Tax en los Altos de Chiapas Sregién muy similar a a de las tierras altas de Guatemala— permitieron ahondar en el estudio de esta insttuclén. Ast, Ricardo, Pozns en 2u trabajo sobre Chamula afirmé que la igualdad era uno de los valores fundamentales de los chamulas, permitiéndoles, en condliclones de extrema pobreza, mantenar la cohesién social de ta familin y del pueblo. Dos mecanismos ayudaban a mantener esta igualdad: al interior de In familia, ern el repario equitativo de las tierras dal padre, a In muerte cl ste entre sus hijes; en el pueblo, tra ol alstoma de cargos. Fato any ib em obi a low Inlividiios que lograban sieumilar aqme ties ob deonypear alguna de tos earn Civili religions, Crone satin tnypllraban vl eisembotee ce at Ha bar heave ae Fang tati ete se ll ili, aon lo aay wr asp shorros e incluso muy a menudo a endeudarse. Ricardo Pozns Ifirmaba que no existia en Chamula un escalafén de cargos por el Cual los individues ascendiesen, sino que tan sélo habla unos argos més costosos que otros repartiéndese de acuerdo a las posibilidades econémicas de jos "candidates". Ponta tambign en duda el que fuese Ia bisqueda de prestigio social lo que impulsara a los indios a ocupar tales cargos, ya que st menudo al terminar su periodo quedaban tan arruinadas que se ‘velan marginados de la comunidad. Sélo la extrema presin social por mantener Ia igualdad y la integracién del grupo explicaban que Sus miembros accediasen a ocupar estos cargos.*6 A partir de las investigaciones realizadas en Guatema- Ia y en Chiapas se llegé a la conclusi6n algo apresurada de que teste sistema de cargos habia existido en todos los pueblos indios de ‘Mesoamérica y de que sien algunas comunidades los antropélogos no lo habian hallado, tal y como se le describfa, era porque Fenémenos de aculturacién lo habfan hecho desaparecer. Ast en 1951, la jerarquia civico-religiosa de cargos fue incluida por Robert Redfield y Sol Tax entre las caracteristicas esenciales de Ins ‘ctuales sociedades indias mesoamericanas.** Femando Cémara sintetiz6 la teorfa del sistema de cargos basdndose en sus trabajos de campo en Chiapas y en los studios menograficos del equipe de Sol Tax del que formaba parte. Segin él en las comunidades mesoamericanas centrfpedas —aqué- ling que se basaban en un ordan tradicional, homogeneizador, colectivista,intogradlor y abligatorlo— las organiznclonasreligiosa y polftica ¢staban Integraclas en un solo sistema, en ul que los ‘cargos ostahan Jorarqulzadon, La durneién de estos cargos era de lun ati, ¥ low tularsy clyaaban a sus sueesores tomando en arise WE lvl y Hs Tin, “Lineal Clharetelstles of Presently Indian hi «a euenia sus capactdades ecShémicas y personales. El desempeno Cue vgot impicabe gastos a menddo considerables, El pest is gus ena sobre quienes lo desempefaban aumentaba con Ia Hea esa ferdrqucs del cargo, Loss mportatessupontan un its can osagrado y mayore gatos, Los individuos aseendfan 9 Ti sede usin por la eseala del pretigio ocupando diversos 1 eee sogan sus pesitldades. Oe tal forma que quienes llegaban Fado ako dela jorarqua de cargos, los denominadosprincipn- [ak paradosoeabildos,conattuan una verdaderagerontocraci.” etdando Camara no alo llegd w afar que este sistema habia eisido desde el siglo XI sino inclu lege suger que tenfa un srigen prehispanico.* SP Ene Wolf, quien por lo general discrepaba de los plantea- anientos de estos ntropalogos,acept6 sn embargo la exstencla oneratizada del sistema de cargos n las comunidades india, le Sifbuye orgenes tanto espanoles “Ine cofraias religlosas— ome prehispanicose hizo enass en su inporancia como meca- name nivelador® No obstante ya antes habla precieade que "The existence of such leveling mechanisms does not mean that class divisions within the corporate community do hot existe, 6ut it does mean that the class structure must find expression within the boundaries set by the community?.* Pedro Carrasco se esforzé por rastrear los supuestes orfgenes prehispénicos del sistema de cargos, sin negar que muchos de sus a {lou and political organization’, pp. 146-151. ic, pp. 162-163. ‘Wall, Pueblos y cuturas de Mesosmmérica, pp. 192-194 %E. Wolf, Typat of Lain American Peasaniy p.458. 44 | elementos proventan de la cultura espatiola! Los argumentos que i26 para probar estos orfgenes prehispanicos no resultaron sin embargo demasiado convincentes. Las caracteristicas de los ras- jos culturales prehispénicos que ponia en paralelo con tas del Sistema de cargos eran casi todas comunes a muchas sociedades Irndicionales formas de ascenso social limitadaea cierto: gruros, jernrqulas religiosas, importancia de los ancianos— y la forma en {que s® conjugaban en aquéllas sociedades marcadamente clasis- Ins, diferfa demasiado de cémo, segén los antropélogos, caracteris- teas similares, se combinaban en la actualidad. Frank Cancian, quien estudié el sistema de cargos en Zinacantin puso en duda la funcién niveladora que en teoria ‘lebiera cumplir el sistema de cargos. Mostré que los gastos que iimplicaban los cargos més altos, si bien eran suficientemente igrandes para que s6lo los zinacantecos mis ricos pudiesen aspirar ‘ellos, ne lo eran tanto como para empobrecerlos.* De tal forma {que el sistema de cargos aunque limitaba en algo las diferencias econémicas, servia sobre todo pata legitimarlas, distriouyenda el prestigio que emanaba de los cargos en forma diferenciada, dlorgindole més a los ricos y menos a los pobres: La estratifieacién econémica que existe es justiicada @ incluso alentada por el hecho de que se den mayores racompensas sociales a los ricos'® TF. Cinasco, “The Civil-religious Hierarchy in Mesoamertea Communities", p. 485. Reclentemente el autor ha publicado un estilo Wl que retoma ete problema y en el que aclara y matiza muchas lp sus Alemaciones anteriores: . Camasco, ‘Sobre el origen Nisirico a> la jerarqula_ poico-ceremonial. ® F.Cancian, Economia y prosigio en une comunidad mays, pt 1M © hid pp. 176-177. es Cancian no penta %én duda, sin embargo, la funcién integrador del sistema, tan sélo pensaba que lo que hace la forialeza cle una comunidad no es la absoluta igualdad de sus miembros, sine por el contrario, la existencia de una clara jerar- {hula legltimada y acuptada por todos. ‘Ansan ie esins importantes discrepancias en la descripcién y andlisia del sistema de cargos, Ia teorla que afiemaba su einieicin generallzada destie In Colonia y adn desde antes, se Impuau hasta volverae easi un dogma. Ast por ejemplo Herbert S. klain, al etudllat Ia rebelién tzeltal de 1712 se propuso interpretar- Jaa través a In teoria cel sistema de eargos, a pesar de que sus tlatas cantendcfan esta Leorfa, No s6lo no aparecfa en ellos ningtin Inullelo tie un tlstgma Integrndo de cargos civiles y religiosos, sino qua mosiraban que quienes detentaban el mayor poder en las omuniriades eran los fiscales quienes no eran designados por la comunidad, sine por los pérrocas que los escogian entre la élite de Indies leirades, dandoles el oficio por largos aos. De hecho, como lo senalé muy bien Oani@le Dehouve, hasta hora nadie ha podide aportar prueba alguna de que este sistema haya existido en la Colonia. Por el contrario, todo lo que se sabe de Jos cargos al interior de las eofradias indias nos indica que éstos no tran rotativos y que no eran individuos aislades quienes financia ban las fiestas, ritos y cultor religiosos, zine amplios grupos © incluso el pueblo en su conjunto a través de las cajas de comuni: dads Por otra parte, Robert Wasserstrom mostr6 que el tan estudia- do sistema de entgos de Zinacantén aparecié tan sélo en el siglo XIX'y su creacidn estuvo ligada a las fuertes migraciones tempora- les de los indios que dejaban sus comunidades para ira trabajar a hhaciendas y plantaciones.* FE Klein Rabeiones de las comunidades campesines: La repdbics teeta do 1712", pp 150-152 y 156-170. 4 0, Dchouwe, "Les échelles de cobt et de prestige, réalité ou erreur de méthode, pp 105-106 | Wassersvom, White Fathers and Red Souls, pp. 197-202. | | Danidle Dehouve en sus minuciosas investigaciones ha probado que el clisico sistema de cargos ni existe en Ia actualidad thin sierra de Guerrero, ni habfa existido en el pasado.” Ante estos estudios recientes Ia teorfa de la existencia ieneralizada del sistema de cargos desde la épaca colonial se ha ‘enido abajo, quedando de paso en entredicho la afiemacién de {que Ine diferencias econémicas internas de lot pueblos indios eran 2 bien poco importantes o bien a estar lelimadas peran su Cardeter conflictivo. Ln cohesién de la comunidad. or su parte, los historiadores no pudieron nunca negar In existencla defor confcto Intemos en los pueblos Indios yx que todo To. que taben dal funcionamiento real de su organizacion poltics, lo sben a través de expedionts que tienen 3 orgen en Enitentnmientes entre facciones opuestas de dichos pueblos ‘at en-el ertudlo. plonero de Luis Chavez Orozeo, Las insituetones democrsieas de los indigenas mexicanos ena poce Colona), nparecen indigr aculturados ~~a menudo atsanoe— \chando por el poder poi conta los indios defensores de Ins tradiciones, macehunlesenfentados con principales, indios ene {vesderbisande monopoles cabs, vena: bande Conta los anclaner, y comegidore,alcaldes mayores espaRoles, fncendados y lérgos provecando oatlzando exatluchas, but. and sncar algo provesho de elle * ‘su vez Silvio Zavala Jore Miranda en su trabajo ste clones indigenes en la Colonia, sefalaron que los coregidoresy ree Fchells de cout et de prestige, eéalié ou erreur ie méthode, pp. 101-106; y Prodiceson marchande et organisation soclalee ‘lang une provinee indienne du Mexique, pp. 538-552. "L. Chiver Orozco, Las instiuveiones demoerdicas de los indgene mexicanas en Is época colonial, pp. 5:22. a” beeen eens beeen) Cee ne yet rte po or colder ae medias ue les ete fone stn cenne scare daa sep hora eee y auc nese noayuanban 3 (tras conceptualizaciones de la comunidad. Hemos visto que no se puede hablar de continuiclad de las comunidades desde el prehispanico hasta nuestros dias ya que Gsias, como poseedoras de tierra, dotadas de cierta autonom‘a SETAE Tanah, “nsttuciones indigenas en fa colonia", p. 140. MG Agulre Geliin, Regiones de refsgio, pp. 120-191 + EL Woll, "ypes of Latin American Peasant", p. 460 an oltica, son creaciones colonials que integraon grupos humanoe Iie anteriormente habfan ormado parte de unidalessoclo-epa- Fates dst’ El sistema de cargos que segin algunos autores Slene po funcién mantener a cohesion dela comuniead no parece taber exit en la Colonia, ni Naberse desarllado a prt dl {glo XI fuera de regiones bien precea. Eta hace suponer que Ia Stpuesta homogeneidad de los miembros de la comunidad que ‘ito sistem supuestimente garantaba noes mas que un mito Finalmente la existencia de abundantes prusbas, tanto hstrcas como scales, de conflicorintemos et lot pueblos Indios nor fievan a abandonar i idea simplista de que en Estos se daba vn conseneo derivado de ls tradiciones y dt religion. No obstante a pesar de todo, lr eras que se puedan formula i concept de conrad, er necesro econocer que a tres de él lor investigadoresintentaron dar cunts. den fenémene de gran Importancia: el dela idenidad de los pueblos ndion La comunidad, el pueblo ol ayuntamiento,segin sea ol Caso, et para los Indios actales el pinctpal grupo de adscrpelén Ye identieaci6n, grupo mucho mis importante que el formade forel conjunto de oe fablantes de una misma feng, Lat clencas sociales no estén sin embargo dexproisas teoriat que permian abordar este problema, sin nacesidad de recurtir al mito de la comunidad homogénea, igualitaria y arménl= \Veamos répidamente algunas de ellas Senlimlento de pertenencia comunal y sistemas de ayuda mutua, Emile Durkheim en su obra Les formes élémeniaires de fa vio religieuse hizo énfasis en la Importancia que tiene para los individuos el identifiearse a un grupo social, regirse por sus roglss y compartir sus valores: "Uthamme qui fait son devoir trouve dans lus manifestations de toute sorte par lesquelles sfexpriment la sympathie, lestime, 'affection que ses semblables ont pour ” lui, une impression d-réconfor dont ilne se rend pas compte le plus souvent, mais qui le soutient. Le sentiment que la pocigté ade lui rehausse le sentiment qu‘il a de lui méme. Parce qu'il est en harmanie morale avec ses contemporains, ia plus de confiance, de courage, de hardiesse dans Vaction... Y al analizar las caracteristicas esenciales de los clanes que no son sino una forma muy particular de comunidad— le Toncedié especial importancia al sentimiento de sus miembros de {amar parte de una familia, reconociéndose obligaciones similares. ~ fins que unen a los parientes: "Dovoirs d’assistance, de vendetta, ‘de devil, obligation de ne pas se marier entre eux, etc.® ‘Muchos antropélogos partiendo de estas ideas de Durkheim han afirmado que el sentimiento de pertenencia a una comunidad conileva la aceptacion de unas normas éticas de conducta que Identifican al grupo y lo diferencian de otros. Esto supone no s6lo ‘el reconocimiento de que las normas que rigen al grupo propio son distintas de las que tigen a los otros, sino también que los indlividuos deben eomportarse de acuerdo a normas distintas segin 3 internetdan con miembros de su comunidad o si lo hacen con miembros externos a ella.* Max Weber por su parte definié a la comunidad (Vergemeinchaftung) como aquélla relacién social basada en el entimiento subjetivo (tradicional o afectivo) de los participantes de constituir un todo. £1 interés de esta definicién radica en no pestular de entrada, una igualdad u homogeneidad de los miembros que componen la ‘comunidad. Tampoco presupone una armonfa, un consenso total en fu interior. El mismo Max Weber escribfa linens mas adelante: FE Dancin Tes Tors lémentaizes de Ia vie religieuse,p. 202. © bid, pp. 142-143 + Banh, Mnteluceién’, pp. 1-11 y 24 6 M4 Weber, Economia y sociedad, 1p. 3. | 50 "La comunidad es normalmente por su sentido la contra- posicign radial dela slicha’. Esto no debe, sin embarge, Sreanans set hecho cnpetamere oral de ae de toda suerte con respecto de las personas mas malesbles 9 tronsgentesy tampoce sobre que la "seleceten de los pos ¥ las clferenclas on la probabildades de vidaysuperviven- Ui erendas por ella ccuran lo mis en ota pate cualquiera ce : ee Como es usual en Weber, su defniién es puramente des don, apera ningtn elemento que nos keique cusles ton fs fndmenos que susentan esta “comunidad”. Sin embargo, sera ttn interpretar su pensanfento ef suponer que éta nace‘de un Simple sertimlentocubjetivo de pertnencin, Cayo. oigen sia trediclonal @ afecivo. Por el contralo’ Weber” piensa que. la comunidad de vecindara en ot lugares con medios de Comunics- Cian rudimentaris nace del hecho de que las ayuda, los socores, dben provenir en primer logar de los Vecinos, exablectendose trite ellos una rlocién de ayuda muta, de "rateriaad come la denownina 6k? Los sitemas de ayuda cnutua no implican de manera alguna una igualdad econ6sica este Et personas que patelpan Galles, A veces Incuso don lugar a lntercambios de fovores diferenciados —prodvetes coma protecetnsrpitval o pots, fn Ia "comunidad! que Voor ejemplo— que no s6lo pueden llegar a crear diferencias fseciales, sino incluso a legitimarlas. ‘Avesta Weber afiadia que: 35 © Ibs, p. 294, Ibidom, —— La comunidartule vecinos constituye la base primaria| dlel fayuntamiento institucién que, como veremos més ade: Tante, slo llega a constituirse en su pleno sentido en relacién Con una actividad politica comunitaria que abarque una pluralidad de vecindades!. El sentimiento de pertenencia étnica resulta en cambio, sepin Weber, mucho mas subjetivo, lo que dificulta el precisarlo a través de la observacion de rasgos objetivos. Sin embargo la Creencia en Ia pertenencia a un grupo de parentesco clinico —a menudo mitico— basada en semejanzas de formas de vida y de ostumbres, aunque no es por sf misma una forma de comunidad, fmantigne estrechas relaciones con ella. A veces favorece la formacion de una comunidad politica, otras veces se deriva de ella” Por otra parte, la actividad politica comunal no excluye ni las jerarquias ni tas rivalidadles por el prestigio y el poder, por el Contrario las presupone. Ni siquiera los peligros y las agresiones fexturnas son capaces de reforzar la unidad de Ia comunidad un nivel tal que termine con los conflictos internos, Conclusiones. El concepto de comunidad tal como lo plasmé Tonnies y ‘como lo han usarlo antropdlogos ¢ historiadores debe ser revisado por completo. La comunidad aisinda, portadora de realidades asadlas, igualitarin y arménica no correspohde a la compleja Fituacion de los pueblos inclios cle México. Les mismos estudios que pariiendo de esta conceptualizacién han develado algunas de los Complejicades cle la vida social de los pueblos Indios que contra- diisen sus supuestor teéricos han obligado a intentar nuevos wm % hid, pp 8182119 52 aeercamientor. De hecho cada vex mfs, historindores y ‘atopalogos recurren la region como marco de ands de Ia MYnlidad india pasada y presente de México ™ Pero pesar de [or grandes avancee que estos enfoques han zopiciado sige send necesarioestudar en rndipesy variados Ehaos concretos cules son las froneras que los mismoy indice le “frbuyen a sus dtints grupos de penenencia —-quignes cons yer par lo el norton sons or ver Infistria. Se requier también desebiy analiza ox valores que crientan le Interacciones al interior de le grupos de petenenela Seas Indios y entre miembros de éstos con ol exterior Lae redes de ayuda muta, los sltema de redstibuci6n de los bienesy Ia compejalerarguta de abligacionesy derechor, de ones y contra danes no han reciido a atencion que se merecen tn ls invesigacones recientes, a pesar de que estas prctcns onaituyen sin dda alguna la base misma de la eohesin focal de ioe pueblos indi. Finalmente toda actividad potica colectiva crea diferencias, jerarquiney luchas por el poder el prestigl la riqueza. A pesar te esta realidad tan evdente, I dealizacion de fa vida comune! india ha inhibidoe estudio de loe conflicts imeros de os pueblos ines y de au anieulacion con iat hichas potas de In soctedad mayor que los englaba, El analzar Ia historia de estot conlitos permitrin sin duda ver ae divisiones y enftentamientos acne no Como sintomas de Ia descomporicin de lz comunidaces india sino como una consecuencia Hogica de la vida coleetiva inmersh Por Samp Tas abiae M. Carmagnani, El regres de Jos doses Fass, Maya Society under Colonial Rul 8. Garcia Marino, Lox purhlon ss a sierra R Pastor, Campesinos y reformas;y W. 8. Taylot, Emily hhomicidio y rebelin. 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