Descartes y la práctica de la meditación personal

En la actualidad a Descartes se juzga y pondera su obra de manera diferente, como filosofo no ha sido objeto de
unánime interpretación.

Para algunos descartes es considerado un metodólogo ya que su preocupación se basa en dar un fundamento
lógico a la nueva ciencia natural. Para otros la intención de Descartes es de orden moral y religioso, apaciguando el
conflicto entre revelación y razón, entre fe y saber. Y finalmente se encuentran los que consideran los que enfatizan
las apreciaciones de los perfiles ontológicos y metafísicos de la obra cartesiana; la finalidad reside en su juicio, en
vivir experiencias ontológicas del yo y del mundo.

Descartes, 1596-1650, crea el sistema de racionalismo, esta doctrina postula como principio por antonomasia la
unidad de la razón, donde las ideas innatas no solo dan la base del conocimiento verdadero sino también de la
sabiduría de la vida.

La época del renacimiento trajo consigo una vasta renovación de la existencia humana, una nueva concepción del
mundo y de la vida, en este periodo los pensadores anhelan un saber del mundo y del hombre. Pero la conquista
de los nuevos métodos llevo a muchos pensadores a forjar recurriendo al principio del racionalismo.

El racionalismo surge con definitivos perfiles. La ciencia natural moderna con un método matemático influyo
mayormente en la nueva doctrina. Descartes pone las bases originando muy importantes sistemas metafísicos. La
primera obra que compuso fueron las Reglas para la dirección del espíritu (1628); en 1634 concluye un estudio
sobre el mundo, Descartes acepta la doctrina heliocéntrica de Copérnico. En 1637 publica su Discurso del Método
siendo un preámbulo a tres ensayos de carácter científico, la Dióptrica, los Meteoros y la Geometría.

Descartes busca los principios racionales que han de normar todo conocimiento, los principios racionales de los
que han de derivarse las nociones sobre el mundo y sobre Dios. Por este motivo se considera a Descartes como el
fundador del racionalismo moderno.

La duda metódica es el instrumento es el instrumento que ha de emplearse en la búsqueda de estos principios,

Descartes duda para llegar a la certidumbre; su duda es una vía para descubrir la verdad: es duda metódica. Su
principio cogito ergo sum, es para él solamente el punto metódico de partida.

El criterio de la verdad; son cuatro las reglas que precisa seguir en la captura de la verdad:

1. Regla de la evidencia

2. Regla del análisis

3. Regla de la síntesis

4. Regla de la prueba

El Discurso del Método

Primera Parte:

Se hace una introducción tomando en cuenta diversas consideraciones respecto a las ciencias desde el punto de
vista de Descartes.

Descartes afirma que todo ser humano está dotado de razón por forma natural. Esta razón es la que ayuda a
distinguir entre lo bueno y lo malo y lo verdadero y lo falso. Pero esta razón no basta por si sola sino que para
emplearla correctamente los seres humanos precisan de un método de uso que Descartes tratará de explicar a lo
largo de esta obra. Esta razón es única del ser humano y le hace superior entre todos los animales.
Para Descartes el uso de un método para guiar la razón es fundamental y da ciertas ventajas tales como el elevar la
inteligencia personal hasta lo máximo posible. En esta parte descartes narra cómo llegó el en persona a descubrir el
método y como el simplemente indica como guion su razón de forma personal sin ánimo de obligar a nadie a seguir
su camino. Descartes tenía desde joven una gran admiración por las matemáticas en las cuales basó su método.
Habla del escepticismo existente en la filosofía y de que se puede dudar de todo. La meta principal de Descartes es
aprender a distinguir entre lo verdadero y lo falso. Para ello deberá atenerse al dictamen de la razón.

La razón es aquello que hace a los hombres superiores a los animales y les permite distinguir entre actos buenos y
actos malos atendiendo a diferentes pautas.

Segunda Parte:

Descartes nos sitúa en la guerra de los treinta años, durante la coronación de Fernando II, se plantea, que las leyes
no se concibieron desde un principio sino que fueron apareciendo según aparecían nuevos delitos, pero que para
él las leyes mejor configuradas son las formuladas por la misma persona, citando como ejemplo a la ciudad de
Esparta. Descartes se decide a renunciar a los viejos cimientos, y a las cosas ya conocidas por otras autoridades, y
diseñar él un nuevo método.

Dice también que son la suerte y las modas los que nos orientan a un tipo determinado de conocimientos. Que
aquellas ciencias relacionadas con la matemática tienen una lógica para explicar las cosas, y que veía relacionada
con la filosofía. Sostiene que sin el análisis, la mente se perdía en divagaciones y casos hipotéticos, que agotaban a
esta, así pues, quiso sintetiza las tres ciencias para dar origen a su nuevo método.

Tercera parte:

En esta parte del discurso se advierte de la necesidad de una moral provisional. La primera de estas reglas era la de
acatar las leyes y costumbres vigentes y seguir las opiniones más moderadas, él decía que tenía que conservar las
leyes de su país y la religión propia ya que era importante y razonable el regirse por como lo hacían los que le
rodeaban.

La segunda regla de esta moral consistía en ser lo más firme y resuelto que se pudiese en las acciones de uno
mismo y aceptar y defender las opiniones dudosas si se hubiese determinado a ello igual que si fuesen seguras.
Propone aceptar a veces las opiniones que nos parezcan probables en caso de que no tengamos ninguna segura.

La tercera regla era la de actuar conforme a la razón antes que a los intereses propios que una sola persona
pudiese tener.

Cuarta Parte:

Descartes nos explica como descubrió, con su método la existencia de Dios y del alma. Después de dudar de todo lo
que hasta ese mismo momento descartes había aprendido observó había hallado verdad que no podía ser puesta
en duda: pensaba, y por lo tanto existía (cogito ergo sum). Al comprobar que no podía fiarse de los sentidos ni de
los argumentos anteriores a él ni de ser capaz de distinguir la vigilia del sueño, decidió buscar algo para averiguar
con total certeza la verdad de las cosas. Y, puesto que ya tenía en su conocimiento una gran verdad de manera clara
en la mente dedujo que todas las verdades debían presentarse de la misma manera, de una forma clara.

Quinta parte:

Después de investigar el cuerpo de los seres humanos y el cuerpo de los animales, logra descubrir que los animales
son semejantes a máquinas ya que carecen de un lenguaje y carecen de razón, y que, al poseer estas cualidades los
seres humanos debemos afirmar que estas cualidades pertenecen a algo que los animales no tienen, que en este
caso es el alma. Esta alma está estrechamente unida al cuerpo, dualismo cartesiano, para Descartes el ser humano
es una “cosa” que piensa compuesta por 2 sustancias diferentes, una de ellas es el alma espiritual cuya esencia es
el pensamiento y un cuerpo que es la extensión. Esto es la diferencia fundamental entre humanos y animales y
entre humanos y máquinas ya que si estos seres poseyesen alma sería superior a los humanos en todo.
Sexta Parte:

Descartes comienza a explicar las razones que tenía para no haber publicado su obra “El Mundo”, la gran razón es la
condena a Galileo por sus teorías impuesta por la Santa Inquisición. Descartes mostraba en “El Mundo” una teoría
similar.

Otra de las razones más importantes es la de la conservación de la salud de los seres humanos, en este punto cabe
destacar la admiración que siente Descartes por la medicina que aún sin estar desarrollada tiene grandes
esperanzas en que será la ciencia más importante para el ser humano. Para él lo más importante es destruir a las
enfermedades y prolongar la esperanza de vida de los hombres. También deseaba publicarla para así poder
colaborar en el progreso de la ciencia que según él debía realizarse de una manera universal.

En esta parte del Discurso Descartes critica a filósofos de su época considerando que una vez llegados hasta su
punto más alto de inteligencia siguen rebuscando y acaban por ser más necios.

Descartes cree que para que la ciencia progrese es fundamental el contar con un apoyo económico para las
investigaciones. Todo esto de lo que habla es una de sus razones para publicar “El Discurso del Método”, aparte del
deseo de incluir en ella ensayos particulares suyos y dar a conocer al público cuáles eran sus propósitos.

Descartes siempre asume la responsabilidad de lo que pueda ocurrir con sus publicaciones y con sus ideas, además
decide escribir en francés porque es un idioma al que puede acceder más gente que al latín, idioma en el cual se
escribían la mayoría de este tipo de textos.

El progreso es el cambio gradual de algo tendiendo a aumentar o a mejorar.

En esta última parte del Discurso se establece una relación entre la filosofía y la ciencia. La filosofía es la madre de
todas las ciencias, desde su aparición todas las demás han progresado de gran manera menos la filosofía. Por ello
Descartes se pone manos a la obra, para evitar que siga habiendo escepticismo y conseguir que la filosofía avance y
progrese. Por ello debe haber progreso en la filosofía para que así pueda seguir su desarrollo junto con la ciencia.

Otra interpretación es que para que haya ciencia es necesario un desarrollo en el ser humano que le permita
dedicarse a ella de forma plena o un incremento en el dinero destinado a la ciencia (en esa época eran financiados
por algún noble interesado)

Para Descartes el desarrollo de la ciencia va implicado a un compromiso con el ser humano, para él la ciencia debe
servir como arma para el ser humano y para que este alcance un dominio total.

Por ejemplo en la frase “el fuego, el aire, la tierra, el agua, podríamos emplearlos de manera semejante en todos
los usos para los que son apropiados, y convertirnos así en dueños y señores de la naturaleza” se muestra como
Descartes estaba a favor de dominar la naturaleza mediante la ciencia para poder gobernar de manera total.

Otro ejemplo es el que se da en la frase “la ley que nos obliga a procurar el bien general de todos los hombres en
cuanto esté en nuestro poder” en la que trata de convencer de que la colaboración es necesaria entre los seres
humanos y en que su obra está dirigida a ese fin.