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Intgrantesː

 Clara Magdalena López Celle


 Maria de los Angeles Vazquez Sosa
 Jazmin Aquino Aguinagalde

Profeː Rosa

Gradoː 2do

Añoː 2016
Introducción
El arte es una de las manifestaciones más elevadas de la actividad humana mediante la
cual se expresa una visión personal y desinteresada que interpreta lo real o imaginada
con recursos plásticos, lingüísticos o sonoros.
De allí que sea fundamental en la educación, ya que es generador del desarrollo de la
expresión creativa natural que todo ser trae consigo, y estimula tanto las cualidades
como los valores sociales, morales y la autoestima.
La inserción de estas áreas, como experiencias de vida y por tanto, como aspectos que
logren cambios en valores, afectos y acciones es esencial para un desarrollo social y
personal pleno de los seres humanos.
Historia del Teatro Paraguayo

El teatro paraguayo contemporáneo, escasamente conocido y divulgado -como casi el


total de la literatura de este país-, presenta creaciones singulares como las de Josefina
Pla, Augusto Roa Bastos, Mario Halley Mora, Alcibíades González Delvalle, Roque
Centurión Miranda, Ricardo Lago, Gloria Muñoz y Edda de los Ríos. Generalmente, la
práctica escénica fue un medio de divulgación importante a lo largo de la historia del
país. En épocas como la de la dictadura de Stroessner, era un instrumento de lucha
contra las ideas institucionalizadas por el poder. Producto de ello, la censura tenía sus
ojos muy cerca de las representaciones, como lo prueba el caso de la prohibición en
1975 de la creación titulada San Fernando de Alcibíades González Delvalle, que, por su
talante impugnador de la historia oficial mitificada, fue censurada, y también al inicio
de la transición democrática después del golpe del general Rodríguez, en 1989. De ahí
que a lo largo de la historia, el poder viera al género teatral como un enemigo por su
facilidad para divulgar ideas y hábitos en la población paraguaya, y lo condenara a una
concepción de arte declamatorio por encima de su carácter de catalizador de ideas y
conciencias.

El teatro paraguayo sufrió una renovación importantísima a partir de los años treinta del
siglo XX, con la aparición de Julio Correa. En el ambiente paraguayo de los años
cuarenta, había dos grupos claramente distinguidos. Por un lado estaba al corriente
de José Arturo Alsina, partidario de un teatro universal, que sin huir de lo particular no
cayera en el folclorismo, y cuyo drama de resonancias pirandellianas, al decir de Teresa
Méndez-Faith, El derecho de nacer (1925) es el mejor ejemplo de su creación; por otro,
la del teatro en guaraní, cuyos antecedentes se remontan a 1926, aproximadamente,
con Francisco Martín Barrios, Rigoberto Fontao Meza y Félix F. Fernández, cuya
expansión y el éxito llegaría en la década de los treinta con Julio Correa, considerado
por los críticos como el impulsor del teatro marcadamente popular, que tendía a la
oralidad, a la técnica intuitiva y a los condicionamientos lingüísticos. Este autor impulsó
una suerte de teatro que llegaba mayoritariamente al público por el simple motivo de
que reproducía la situación oral bilingüe del país. Los asistentes a las representaciones
entendían sus obras, por el componente decisivo de la lengua guaraní, y participaba en
ellas en mayor grado que en las puestas en escena de obras de otras vertientes, ya que,
generalmente, el conjunto del teatro paraguayo de esa época se encontraba bastante
anquilosado en un posromanticismo vacuo y en procedimientos con olor a naftalina, a
pesar de los intentos de Alsina. Es importante, además, porque se percibía un fondo
social al que atendía el público con interés.
ARTES ESCÉNICAS:
Constituyen el estudio y la práctica de toda forma de expresión capaz de inscribirse en
el universo del Teatro, la Danza y la Música; así como el espectáculo y la Organización
Espacial. . Es una forma de arte efímera y viva, que requiere de un público para
completar la comunicación.
El edificio teatral o sala de espectáculos: Es un espacio arquitectónico construido
especialmente para realizar en él cualquier tipo de espectáculo en vivo, ya sea teatro
(drama), danza, música o similar. Se refiere a aquellas zonas que van a albergar los dos
elementos esenciales para que el hecho teatral se produzca: los actores y el público.
Cada uno de dichos elementos, necesita de su propio espacio, delimitado y privado, para
desarrollar con la mayor comodidad posible la actividad para la que está destinado.
El artista es quien con sus movimientos, expresión corporal, su gracia, agilidad,
destreza, técnica, habilidades, gestos, timbres de voz, pausas, diálogos, monólogos,
cantos, silencios, miradas, quien expresará el sentimiento, el valor de la obra desde el
punto de vista estético, para que el público reciba, vibre, se emocione, admire o no, su
expresión artística.
El éxito luego de arduas jornadas de trabajo personal y en equipo, concentración,
esfuerzo, sacrificios, ensayos de las artes escénicas, conocimiento técnico, superación
diaria en relación a sí mismo, y una coordinación de los diversos aspectos para disponer
y preparar la representación de la misma.
Se hace necesario un importante número de personas que trabajen en equipo y ciertas
condiciones para alcanzar el mismo objetivo: poner la obra en escena; además de los
artistas, productores, argumentistas, directores, técnicos, asistentes, directores artísticos,
técnicos en iluminación, sonido, decoradores, maquilladores, técnicos de vestuario,
músicos, y por supuesto una empresa productora que publicite las artes escénicas,
exhiba y distribuya la obra, y el dinero necesario para financiar el proyecto.
ORÍGENES DE LAS ARTES ESCÉNICAS
Los orígenes de las artes escénicas se remontan a los ritos shamánicos de la prehistoria,
donde se representaban los mitos a través de la danza y los juegos de roles. El teatro
griego, la cuna de las artes escénicas clásicas, surgió en los Juegos Olímpicos y
Panhelénicos. Se considera a Tespis, ganador de un certamen de las Dionisias de Atenas
en el siglo VI a. C., el fundador del teatro. Con la tragedia griega, el teatro adquirió todo
su poder espiritual, generando la “catarsis” o purificación de los valores.
Las artes escénicas tuvieron en la Edad Media una función estrictamente religiosa
(dramas litúrgicos, autos sacramentales, obras moralizantes), adquiriendo una nueva
dimensión durante el Renacimiento y el Barroco, donde se retoman temas clásicos y se
plantean retratos sociales de la época. Los siglos siguientes trajeron nuevas
manifestaciones escénicas hasta llegar a las vanguardias y las “performances” o
“happenings”, que rompen con las reglas de escenificación convencional.

LOS ARTISTAS Y LAS ARTES ESCÉNICAS:


Cuando todo se conjuga y el éxito acompaña a las artes escénicas, el reconocimiento del
público hacia los artistas y hacia todo el equipo de trabajo, les llega a través de
expresiones de asombro, admiración, y el aplauso que invade como un torrente el
escenario; y allí, en ese espacio tan singular, en ese instante mágico todos se conmueven
y se unen a través del arte escénico.
Es entrega por parte de los artistas y regocijo del público por lo que han recibido de
ellos, por lo que han sentido en su interior, en su más íntima fibra, y que por eso,
seguramente ya no serán los mismos, y guardarán en sus mejores memorias el haber
estado presenciando tal o cual obra que alguna vez estuvo en escena. Y el artista
seguirá, estará pronto para otro desafío, mientras haya luces encendidas, mientras
alguien asista a la función, mientras haya aliento, no abandonará las artes escénicas,
porque se ha convertido en su propia vida.
ELEMENTOS DE LAS ARTES ESCÉNICAS
 El ritmo en las artes musicales y escénicas
 Los sonidos
 El sonido en el tiempo

Elementos de la representación teatral

 Actores
 Público
 Personajes, que no necesariamente son seres humanos; pueden ser títeres,
marionetas.
 Vestuario
 Maquillaje
 Decorados
 Iluminación
 Sonidos
 Efectos especiales

A través de la historia, ha desarrollado su


actividad como

 Entretenimiento popular

 Actividad pública, una actividad comercial

 Arte, para una elite de gustos especiales


Conclusión
Artes Escénicas se conciben como un instrumento fundamental en la formación integral,
a pesar de encontrarse dentro de los contenidos del área de Educación Estética no sólo
se ocupa del estudio de las diferentes manifestaciones de la teatralidad, sino que,
también, permite que las personas desarrollen competencias comunicativas, sociales,
expresivas, creativas o las relacionadas con la resolución de problemas y la autonomía
personal, estimulando su interacción con el medio que lo rodea y garantizando, por
tanto, el logro de fines formativos que le serán útiles para su vida diaria.

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