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noviembre

nº 4
Año 2008

ANTROPOLOGÍA DE LAS ADICIONES


José Luis Cañas*

El presente artículo presenta una visión antropo- puesto, culturales y religiosas. La persona es un
lógica personalista del fenómeno actual de las concepto que no sólo sobrevive, sino que, afor-
adicciones (todo tipo de adicciones) que hace tunadamente, vuelve a vivir con fuerza y con
posible su superación y fundamenta la re- vigor”.
humanización posterior de las personas adictas.
2. Las causas de los fenómenos adictivos princi-
Mis tesis principales pueden resumirse en los si-
palmente son causas existenciales que están en
guientes postulados:
la persona adicta, pero no son constitutivas de
1. La persona adicta no es el “sujeto” (menos el su ser íntimo. Las adicciones están de muy varia-
“objeto”), ni el “individuo”, ni el “paciente”, ni el das formas instaladas en las personas esclavas
“usuario”, ni el “consumidor”, etc., tal como se la de sí mismas, por ejemplo como enganche a la
trata no ya en el plano coloquial sino en el dis- realidad virtual, como trabajo adictivo o como
curso académico y en los manuales científicos. ortorexia, como sectadependencia y/o sexode-
Ciertamente puede querer decir todo eso, pero pendencia, como adicción al alcohol, al taba-
desde luego es mucho más que eso: la persona co o a psicofármacos, o sobre todo como dro-
adicta ante todo, y antes que adicta, es perso- gadicción, etc., pero no forman parte de la es-
na. En esta afirmación encuentro que el mundo tructura constitutiva de la persona fatal e inexo-
de las adicciones es una des-personalización, y rablemente. Antes bien, son los efectos visibles
que para salir de ese mundo y provocar un cam- del vacío existencial y de la falta de recursos
bio de vida definitivo no basta con utilizar unas personales y de estancamiento del desarrollo
técnicas del modo adecuado, es necesario una personal.
visión integral de la persona esperanzada. Y eso,
3. Si la persona no está condicionada en su ser
en principio, no lo pueden aportar las ciencias
de forma absoluta ni determinada irremisible-
particulares por sí solas, antes bien necesitan de
mente, ello lleva a afirmar la existencia de pro-
un fundamento antropológico previo. El pensa-
cesos evolutivos de maduración o perfección,
dor francés Paul Ricoeur, recientemente falleci-
por un lado, y de regresión o imperfección, por
do (2005), en 1983 escribió: “Si la persona vuelve
otro, en su estructura constitutiva. Sólo partiendo
a ser tenida en cuenta, será porque sigue siendo
de la afirmación de la libertad esencial se pue-
el mejor candidato para mantener batallas jurí-
de entender que la persona elija construirse
dicas, políticas, económicas, sociales, y, por su-

*
José Luis Cañas. Profesor de Filosofía. Universidad Complutense de Madrid
FAMILIA Y SOCIEDAD Antropología de las adicciones

(procesos de madurez), o destruirse (procesos de que posibiliten dejar de ser personas adictas y
regresión). Pero no puede elegir no ser persona: llegar a ser personas rehumanizadas, o simple-
a este nivel de fundamento, por ejemplo elegir mente persona. Si consideramos que el ser adic-
ser animal sólo sería una metáfora literaria. Se es to es una persona des-humanizada, la lógica
persona, se quiera o no serlo. Se sea adicto o no. evolutiva que supone dejar de ser dependiente
nos permite concluir que, si lo consigue, es una
4. Desde la Filosofía, si nos fijamos en los comien-
persona nueva re-humanizada.
zos de la filosofía contemporánea (siglo XIX), po-
demos reparar en dos influyentes pensadores 8. Además, esa persona nueva no sólo se cons-
que plantean dos modelos de persona polar- truye a sí misma sino que también, de algún mo-
mente opuestos o dos tendencias de la vida do, construye la historia. Igual que la persona
contrarias: la persona trascendente de Sören adicta no sólo se destruye a sí misma sino tam-
Kierkegaard por un lado, que nos puede ayudar bién a la sociedad, porque des-estructura la co-
magníficamente a explicar el paradigma de la munidad social en la que está inserto, la rehu-
rehumanización, y por otro lado la persona in- manización se la puede ver también desde una
manente que dibuja la filosofía de Friedrich perspectiva historiológica estructuradora y verte-
Nietzsche que nos sirve para entender perfecta- bradora de la sociedad.
mente el paradigma del fenómeno adictivo.
En definitiva, mediante la educación para la re-
5. Desde la perspectiva de la Psicología alcan- humanización de la persona queremos poner de
zamos las claves del comportamiento de la per- relieve sobre todo que el ser humano es un ser
sona adicta y, sobre todo, las técnicas psicotera- orientado hacia la esperanza. Y que incluso en
péuticas más eficientes en orden a la re- las circunstancias más adversas y en las situacio-
estructuración de su "paisaje del alma", que diría nes límite, a la persona adicta siempre le será
Unamuno. Al pasar revista a las principales es- posible hacer la experiencia de la esperanza y
cuelas psicológicas y a los grandes abordajes o “forzar” a su propio destino.
psicoterapias pronto llegamos a establecer una
división clara entre psicoterapias más excluyen-
tes, como los abordajes de psicología profunda
y los abordajes conductistas-cognitivos, y psico-
terapias más integradoras, como los abordajes
sistémicos y los abordajes humanistas.
6. Por su parte las Ciencias de la Educación nos
ponemos sobre todo ante la perspectiva de la
prevención. Los distintos modelos y programas
de prevención de las adicciones hacen posible
una tarea específica tanto por parte de la Co-
munidad Educativa, como por parte de la fami-
lia como primera y principal sociedad preventi-
va. La perspectiva educativa-preventiva entre
otros perfiles va a mostrar al terapeuta-
educador-voluntario rehumanizador, una figura
coherente con el modelo de persona que revela Familia y profesionales de la educación
una antropología personalista de las adicciones. ante las adicciones
7. Todo ello configura un “supraparadigma” inte-
grador, que podemos ver apuntado ya por dis- Aparte de la familia, es difícil encontrar un ámbi-
to profesional mejor preparado que el aula y el
tintos autores desde Viktor E. Frankl con su bús-
queda del sentido, pasando por Ken Wilber y su profesor para prevenir las adicciones en los ado-
paradigma holográfico, o más recientemente lescentes y jóvenes. El papel de maestros y pro-
fesores ya de por sí es especialmente relevante
Martin E.P. Seligman con su Psicología Positiva,
un supraparadigma que he dado en llamar Filo- como agentes naturales preventivos tanto en el
horizonte general educativo de tutores como en
sofía de la Rehumanización. Sería esta una inves-
el particular del área o disciplina que impartan,
tigación fecunda para establecer sólidas bases
pero sobre todo porque ejercen la importantísi-

Pág. 2 Pontificio Instituto Juan Pablo II


Antropología de las adicciones FAMILIA Y SOCIEDAD

ma labor de la prevención inespecífica -que por -en las mismas circunstancias- rechazan el uso
definición se dirige especialmente a los adoles- de drogas y de conductas adictivas.
centes- por ejemplo cuando actúan de orienta-
Para generar esta mentalidad educativa espe-
dores con las familias que recurren a ellos bus-
ranzadora en la sociedad, para cambiar el este-
cando apoyo en las situaciones delicadas pro-
reotipo social de rechazo al fracaso global co-
ducidas por las adicciones.
mo personas -no sólo escolar-, necesitamos con-
Hoy día la prevención tiene dos ideas claras: siderar que las adicciones son un conjunto de
que trabaja con adolescentes y jóvenes que se actitudes existenciales ante la vida, indepen-
están haciendo, y que las adicciones "nuevas" dientemente de las sustancias o causas que las
evolucionan en ellos con vertiginosa rapidez. To- provocan, que son muchas más de lo que a sim-
das las estadísticas tanto nacionales como inter- ple vista parece, y que se las puede identificar
nacionales sitúan con claridad el patrón de ini- fácilmente con cualquier situación de esclavitud
cio en el consumo de alcohol, tabaco y canna- existencial. Dicho de otro modo: ser adicto es
bis en el entorno de los 12-13 años de edad- más amplio que ser drogadicto, y ello a la hora
media. Además de estas adicciones, junto con de prevenir nos incumbe e implica a toda la so-
los psicofármacos también hablamos de sexode- ciedad y en particular a la familia y a la escuela.
pendencia, sectadependencia, ludopatías, o de
Padres y profesores necesitamos cambiar de
adicciones “sin drogas” como la realidad virtual
mentalidad y situar el problema central de las
(internet, móvil, chat, etc.), realidades que pue-
adicciones en el ámbito existencial del alumno y
den llegar a ser realidades adictivas no por ellas
del hijo, en su humanidad, o sea en el sentido o
en sí sino por su uso compulsivo. Ciertamente las
sinsentido de su vida y no en las sustancias o en
más llamativas son las drogas pero no por ello
sus conductas adictivas. El alumno en general, el
dejan de ser extremadamente destructoras las
alumno "iniciado", y el alumno "enganchado" en
otras, entre otras razones porque suelen ser la
particular, necesita experimentar que en reali-
puerta de entrada que conduce después a las
dad lo que importa no es sólo lo que él espera
drogadicciones.
de la vida, sino lo que la vida espera de él. Es
Sabemos de sobra que la drogadicción es un importante conocer estas conclusiones para ge-
problema que afecta fundamentalmente a los nerar espectativas reales de que merece la pe-
adolescentes que se inician en el tabaco, el na el esfuerzo preventivo familiar y escolar. La
"porro" y el alcohol, conductas que además les mejor ayuda que le puede prestar la Comuni-
fomentan más aún la agresividad y la violencia. dad Educativa (profesores y padres al unísono)
Pero lo que quizá aún no sabemos, lo que la so- es que realmente sea ayudadora, es decir, edu-
ciedad en general aún no termina de saber, es cadora. De tal modo que para hacer preven-
que todos los jóvenes adictos a cualquier adic- ción eficaz tenemos que aplicar prácticas edu-
ción –no el adicto en abstracto, sino el alumno y cativas encamina-das a ayudar a los jóvenes a
el hijo en concreto- son personas a quienes se descubrir el sentido de su vida y su tarea en la
puede primero prevenir y ayudar en la familia y construcción de una sociedad mejor, prácticas
en la escuela, y segundo que para los ya engan- apoyadas en teorías antropológicas rehumani-
chados a las adicciones les es posible, mediante zadoras.
programas rehumanizadores auténticamente
Justamente es la tarea que vengo proponiendo
educativos, salir de esa situación existencial es-
académicamente desde la aparición del ma-
clava que tiene un origen claro en el déficit edu-
nual Antropología de las Adicciones. Psicotera-
cativo.
pia y rehumanización (Dykinson, 2004, 450pp.).
Afortunadamente el joven adicto no es una per- Sostengo aquí que la visión antropológica de la
sona diferente a las demás. No es un "individuo" drogodependencia que predomina en nuestra
especial condenado por las características de sociedad es fruto de un enfoque cultural reduc-
su personalidad o por la marginalidad de su ori- cionista que prioriza el objeto "droga" sobre el
gen familiar o escolar. Estos factores, heredados sujeto "persona". Pero atribuir al objeto droga el
y ambientales, aunque influyen no son fatalmen- origen de todo el mal impide la iniciativa educa-
te determinantes, puesto que de hecho están tiva, y sobre todo impide al adolescente asumir
afectando también a otros muchos jóvenes que su responsabilidad en su propia vida y encarar
los cambios. Es decir, para prevenir de verdad

www.jp2madrid.org Pág. 3
FAMILIA Y SOCIEDAD Antropología de las adicciones

en la escuela, la comunidad escolar necesita nómicas y Locales es hoy día amplísima, habida
desarrollar una visión antropológica que relativi- cuenta de las innumerables iniciativas municipa-
ce las drogas y priorice a las personas desde su les y privadas existentes actualmente sobre el
dignidad humana inalienable. Diríamos que pre- tema. Pero los mejores Programas de Prevención
venir es educar para ser persona. De modo que de implantación nacional inspirados en esta filo-
el futuro de la educación pasa por hacer pre- sofía preventiva y rehumanizadora a mi modo
vención en todos los niveles educativos. Incluso de ver son unos pocos: el Programa “Entre To-
me atrevería a decir que la educación en gene- dos” y el Programa “A Tiempo” de la Asociación
ral hoy debe ser sobre todo y prioritariamente Proyecto Hombre (APH), el Programa “Aprender
equivalente a prevención. a ser autónomo” de la Federación Española de
Religiosos de la Enseñanza (FERE), el Programa
Además, para los adolescentes enganchados y
de la Institución EDEX, los materiales de preven-
los jóvenes adictos, que conviven en las aulas
ción familiar de la Fundación Nacional PROFOR-
con otros compañeros que no lo están, es decisi-
PA y la CONCAPA (Confederación Católica de
vo que la Comunidad Educadora actual sepa
Padres de Alumnos), así como las Campañas
transmitirles que hasta el último aliento existe la
preventivas anuales de la Fundación de Ayuda
esperanza. Se necesita, por tanto, un cambio de
contra la Drogadicción (FAD). Estos programas
mentalidad profundo en la sociedad, primero
de prevención, en suma, configuran hoy un mar-
para ofrecer a los jóvenes alternativas de vida
co general de referencia espléndido de lo que
auténticamente creativa, y después para aca-
podemos llamar el “curriculum” actual para la
barse de creer que es posible abandonar las
práctica profesional educativa en la prevención
adicciones de verdad. En este sentido, no le
de adicciones.
vendría mal a la Comunidad Educativa progra-
mar visitas a algún Centro de Rehumanización Hasta aquí el estado de la cuestión de los mejo-
de Adictos (por ejemplo los de la Asociación res programas de prevención actuales en Espa-
Proyecto Hombre), y entrar en contacto con ña. Ahora la pregunta está en las familias y en
programas educativos rehumanizadores donde los padres, en los profesionales de la educación,
aprender muchas cosas en clave de esperanza. en las autoridades educativas y en la sociedad
en general. La realidad es que desmotiva la au-
Por otra parte, la sociedad en su conjunto tiene
sencia de un compromiso de las instituciones pa-
que superar sus contradicciones internas si quie-
ra apoyar planes de formación del profesorado
re ser de verdad preventiva, ya que el consumo
y de las familias en prevención, así como la falta
de drogas legales como el alcohol, el tabaco y
de reconocimiento por el esfuerzo suplementario
los psicofármacos están relacionados con las
que los profesores hacen para entrenarse, adap-
modas, el consumismo, la publicidad y el éxito
tar y aplicar los programas y evaluarlos. Con fre-
fácil, y por tanto es imposible avanzar en el ám-
cuencia, los responsables de las políticas de pre-
bito de la prevención sin desenmascarar las con-
vención y de las instituciones externas a la Fami-
tradicciones sociales en las que incurrimos los
lia y a la Comunidad Educativa generan accio-
adultos. Ahí está la tarea de la educación y el
nes puntuales de concienciación del profesora-
reto de la rehumanización.
do buscando presentar a la opinión pública el
En el momento presente estamos en condicio- número de asistentes a los cursos y los resultados
nes muy propicias para dar pasos seguros y ade- inmediatos de sus acciones, pero se olvidan de
lante tanto en educación como en psicotera- prestar apoyo a los profesores en las dificultades
pia. Desde hace varios años vengo pro- ordinarias de la conducción de los programas y
poniendo por un lado ampliar la prevención a también se olvidan de la necesidad de garanti-
los niveles educativos infantiles y primarios, y por zar la pervivencia de los mismos. La prevención
otro lado para ayudar a quienes tengan la des- integral requiere una mayor seriedad y una pla-
gracia de caer en la esclavitud de las adiccio- nificación a medio y largo plazo, entre otras co-
nes, propongo sustituir el gastado concepto de sas si se quiere presentar datos fiables a la socie-
rehabilitación por el de rehumanización (Cañas, dad.
1996). Lo cual puede aunarse bajo la fórmula
Nunca es demasiado tarde cuando se trata de
complementaria de "prevenir y rehumanizar".
recuperar el futuro.
La variedad de Programas de prevención des-
arrollados por las distintas Administraciones Auto-

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