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Prólogo
1
Extranjero. —¿Y qué ventaja se puede sacar de un hombre que no ve la luz? / Edipo. —Cuanto
deba decirle, se lo diré todo con la mayor claridad.
2
Richard Rojcewicz usa beyng como forma arcaica de “ser” para sustituir das Seyn.
1
Cada una de las palabras básicas dice lo mismo, el evento. Su secuencia es
determinada fuera de la esencia de la resolución, para quienes la firmeza del decir
es quizá consignada a veces.
Las palabras básicas son rastros que, en un ciclo insondable alrededor del evento,
lleva al dominio que está más allá de toda cercanía y es por lo tanto desconocido a
la representación inmediata.
Cada palabra contesta al reclamo del virar: que la verdad del ser [Seyn]
esencialmente ocurre en el ser [Seyn] de la verdad.
La circunferencia del viraje indica el giro fuera [Verwindung]3 de la inicialidad 4.
El pensamiento de la historia del ser [Seyn] fundamenta el a-bismo [Ab-grund]
al mantenerse firme en la veracidad del principio y así transformar la palabra.
*
3
Reposición
4
El evento como palabra, comienzo anfang (beginning, inception). Apertura dentro de un inicio, la
inicialidad, la angenglige. No indica un momento temporal en el cual algo inicia o comienza, sino
una apertura dentro de lo inicial.
El primer comienzo es el origen de la filosofía en la Grecia antigua como la manera en que Grecia es
tomada en nuestro pensamiento y continua dándole tono.
2
*
1. El primer comienzo
A. El primer comienzo
ΑΛΗΘΕΙΑ
5
N. del A: en algún tiempo.
3
Semestre de invierno 1931-32: De la esencia de la verdad. sobre la parábola de la
caverna y el Teeteto de Platón {GA34}
Semestre de verano 1932: El comienzo de la filosofía occidental (Anaximandro y
Parmedides) {GA35}
Semestre de invierno 1934-35: Los himnos de Hölderlin “Germania” y “El
rin” {GA39}
Semestre de verano 1935: Introducción a la Metafísica {GA40}
Semestre de verano 1936: Schelling: De la esencia de la libertad humana (1809)
{GA42}
Semestre de invierno 1937-38: Preguntas fundamentales de la filosofía.
“Problemas” escogidos de “Lógica” {GA45}
1. El primer comienzo
Άλήθεια [Alétheia] ocurre esencialmente como el comienzo.
La verdad es la verdad del ser.
Verdad es “la diosa”, Θεά [Thea].
Su casa es bien redondeada, no cerrada, nunca (temblando) disimulando corazón
pero, en cambio, revelando iluminación de todo. Άλήθεια [Alétheia]es en el primer
comienzo lo oculto —la verdad: la oculta preservación del claro-abierto, el obsequio
del surgir, el permitir de la presencia. Verdad es la esencia del ser.
*
4
“Ser” ya “es” en el desprendimiento[Entwindung] (y de hecho ocurre esencialmente
en el desprendimiento [Entwindung] indiscernible). El giro fuera [Verwindung] del
ser.
Desde luego será difícil al principio renunciar al ser [Seyn] fuera del giro libre
[Verwindung] y al mismo tiempo tener experiencia de verdad como algo que “es
mas completo” que cualquier interpretación cognitiva de lo que su esencia permite.
2. Άλήθεια—ἰδέα [Alétheia—idéa]
Lo desoculto: ¿cuándo y dónde existe y sucede? ¿Podemos hacer tal pregunta si
conocemos que Άλήθεια [Alétheia] es el ser mismo? Pero ἔστιν γὰρ εἶναι [estin gar
einai]6 . Ciertamente; esto implica, sin embargo, que el ser mismo ocurre
esencialmente de una forma originaria a lo largo del espacio-tiempo, aunque el ser
no puede ser fijado indicando una posición en tal lugar.
Todavía no la pregunta se hace siempre inevitable: ¿cómo sería tomada y
preservada ἀλήθεια [alétheia]? Seguramente es inevitable, pero este tomar
(originando el esenciarse del ser humano como νοῦς7 [nous]) no es el primer lugar
del fundamento de Άλήθεια [Alétheia], que esencialmente ocurre sólo en su propia
inicialidad, esto es, sólo inicialmente. Por lo tanto la experiencia de lo inicial es
decisiva, y también son, más aún, la renunciación de una explicación y la
localización en un lugar. Todo esto simplemente levanta preguntas, porque
pensamos en términos de lo ente y somos poco capaces de hacerlo coincidir con el
ser, lo cual nosotros, siguiendo la designación, al mismo tiempo tomamos y
buscamos como un “objeto”.
¿Pero es la ἰδέα [idéa], visibilidad, no entonces lo mismo que ἀλήθεια [alétheia]?
Si y no. Esta en ella aún la esencia de lo emergente pero al mismo tiempo la
inclusión del vislumbrar, por el que la ἰδέα [idéa] misma se convierte en el cual un
dirigir es dirigido. Esto, sin embargo, no introduce al momento nada del “sujeto” y
lo subjetivo. Lo que es esencial aquí es sólo que el desocultamiento llega bajo el
yugo de la ἰδέα [idéa], esto es, el acto de vislumbrar, donde el vislumbrar sin
embargo no postula y crea la ἰδέα [idéa] sino, en cambio, la percibe.
Aún esto en verdad parece haber sido dicho ya, en el dictum de Parmedides, el
cual se refiere a νοεῖν [noein] 8en su pertenecer al ser. ¿No es εἶναι [einai]9 aquí ya
6
Parmedides. Esti gar einai, “es para ser”, “es capaz de ser”.
7
Inteligencia, espíritu, mente, pensamiento, memoria.
8
Percibir, observar, pensar.
9
Das Sein, esse, lo idéntico a la multiplicidad de los entes.
5
νοούμενον [noúmenon]10, por lo tanto ἰδέα [idéa]? Precisamente no; precisamente
ese paso se encuentra lejos. En cambio νοεῖν [noein] y εἶναι [einai] son llamados en
su pertenecer a ἀλήθεια [alétheia]. Y esto es esencialmente diferente del
acoplamiento de ἀλήθεια [alétheia] y νοεῖν [noein] bajo el yugo de la ἰδέα [idéa].
Pero la ἰδέα [idéa] como ἀγαθόν [agathon] 11 mueve dentro del dominio de hacer
posible y por lo tanto de explicar—condicionar—producir—αἴτιον [aition] 12; αἴτιον
[aition] es ἀρχή [arché]13. Aún no es ἀρχή [arché] inicialmente αἴτιον [aition].
Con este paso hacia el ἀγαθόν [agathon], ser se convierte en un ente, en el más
alto sentido ente del tipo que causa el ser —no en el ser que es inicialmente.
Estos no son lo mismo: el ente en el más alto sentido (el más alto ente) y aquel
que, como puro ser, nunca es un ente y aún precisamente por esa razón permanece
el esencuarse pura e inicialmente y únicamente “es” —más inicialmente que ese
ἔστιν [estin]14 del εἶναι [einai] en Parmedides.
Pero entonces, y antes todo lo demás, debemos considerar: Άλήθεια [Alétheia] es
lo desoculto de lo oculto y ocurre intrínsecamente en el a-bismo y en lo enigmático.
Y que no es una simple barrera puesta en la forma del entendimiento humano; por
lo contrario, el carácter del a-bismo es el esenciarse mismo —el comienzo.
Ciertamente la cuestión de la relación de Άλήθεια [Alétheia] y del comienzo aún
permanece —indeterminada en el primer comienzo, y en el otro comienzo: Da-sein
[ser-ahí].
3. Errancia [Extravío]
es la extrema esencia distorsionada de la verdad.
4. Άλήθεια (Platón)
En el Pseudo-platónico ὅροι [opoi] 15 (definiciones):
413c6f.
10
“Lo pensado” o “lo que se pretende decir”. Postula un objeto o evento que es conocido sin el uso de
los sentidos.
11
Aristóteles. Es el genuino ser-carácter de los seres humanos. Bien.
12
Causa, acusación, culpa
13
Fuente, principio, origen.
14
Es, viene, suma.
15
Frontera, punto de referencia.
6
Άλήθεια ἕξις ἐν καταφάσει καὶ ἀποφάσει ἐπιστήμη ἀληθῶν16.
Desocultamiento —comportamiento en afirmar y negar.
“Conocimiento” de lo que es no oculto.
413c4f.
Πίστις ὑπóληψις ὀρθὴ τοῡ οὕτως ἔχειν ὡς αὐτῷ φαίνεται βεβαιóτης ἤθους.
Creer, la anticipación correcta de que algo realmente es como éste se muestra a
alguien. Estabilidad de actitud.
16
Verdad tiene en Ciencias de afirmación y de decisión; Cierto
17
Dentro, en él, en ello.
18
Esencia.
19
Hölderlins Hymne “Der Ister”. Freiburg lecture course, summer semester 1942. {GA53, p. 130ff.}
7
7. ἀ-λήθεια [a-letheia]
En ἀλήθεια [alétheia] la esencia del helenismo es preservada. ¿Cómo debería esta
preservación no acontecer en la esencia de la verdad que tal gente fue permitida a
tener experiencia? ἀλήθεια [alétheia] —lo no oculto— dice que lo que es cierto no
es la verdad; la verdad como verdad también, y precisamente, incluye lo oculto o,
en cambio, el ocultamiento de lo oculto, un ocultamiento que permite sólo cierta
medida de lo desoculto para emerger en la verdad.
Aquí está escondida una determinación del pensamiento inicial, es decir, que éste
es desde el comienzo preparado para reconocer lo irreconciliable y lo auto-
excluyente, en el cual este pensar supone la unidad de eso como el fundamento,
aún sin ser capaz de tener experiencia de esto en un cuestionar. (¡la esencia del ἔν
[en]!)
En esta esencia dual de ἀλήθεια [alétheia] estarán al abrigo el ὄν [on] y μὴ ὄν
[me on] y su relación; aquí está el fundamento para ἔν [en]—πάντα [pánta]20
(Heráclito B 50), la ἁρμονία ἀφανής [armonia afanis] (B 54), τὸ ἀντίξουν
συμφέρον [to antixoyn symféron] (B 8), y el σημαίνειν [semaínein] (B 93). Todos
estos son ahora pensados mayormente en un sentido moderno, en términos de
consciencia, esto es, dialécticamente, y son por tanto también mal interpretados.
20
Siempre
8
modo de representación de lo igualmente vago y confuso de la experiencia vivida
del flujo de la vida.
La ilimitada errancia [extravío] de esta forma de representación es inadecuado a
la experiencia inicial del ser [Seyn].
21
Mirar con afectividad, amar.
22
Ocultarse.
23
Aquello que no tiene ocaso, the not setting ever.
24
El evento.
9
El resultado es entonces otra vez la necesidad de pensar φύσις [physis] sobre el
fundamento esencial de Άλήθεια [Alétheia] en el sentido de una ya determinada
ἀλήθεια [alétheia], esto es, de δόξα [doxa] en el sentido esencial de aparecer, surgir.
ϕύσις [Physis] entonces se convierte en el origen esencial de la ἰδέα [idéa]; al
mismo tiempo, sin embargo, desde el decir de la esencia del ser ha sido dimitido en
favor de la ἰδέα [idéa], φύσις [physis] se vuelve en la determinación de un aún
dominio cercano, uno que es más constante y todavía está cambiando: “naturaleza”.
10
Al mismo tiempo: prioridad de los entes mismos en el cambio a αἰτία25 [aitia].
De tal modo: ἀλήθεια [alétheia] queda atrás en el olvido.
13. Desocultamiento
es arrebatado de un ocultamiento y lo oculto mediante la lucha. ¿Debe haber una
lucha? (cf. Heráclito: πόλεμος [polemos]). De acuerdo al tipo y a la originalidad en
la cual el ocultamiento y su pertenecer al ser [Seyn] son cuestionados, y entonces
en el cual el ser [Seyn] mismo es cuestionado, y de acuerdo a la inicialidad de la
disposición y depósito en el ser [Seyn], fuera del cual el cuestionar surge primero,
el des-ocultamiento y la esencia del “des” puede también ser pensada.
El “des” es de hecho el signo del tipo de la apropiación inicial del clarear del ser
[Seyn] y de la consecuente interpretación y formulación conceptual.
La mera introducción al término “desocultamiento” no logra nada; intenta pensar
del modo “a la manera griega” no lo suficiente para ganar lo que es esencial.
25
Causa.
11
venir en el ser —esto es, ahora, en “poder”— el abandono de los entes al ser en la
forma de comienzo como maquinación. El “ἀγαθόν” [agathon], lo “bueno”, “es” su
esencia: lo “malo”.
12
(Una terrible mal interpretación del Ser y tiempo [Sein und Zeit] tiene lugar
cuando es sujeto a la usual comparación historiográfica, por ejemplo, al conectarlo
con la “Octava Elegía” de Rilke26. Esa elegía testifica en la forma más fuerte a la
pura modernidad de este poeta, sólo como “El Angel” indica su posición básica
sobre la metafísica. El ser humano es para Rilke “interioridad”, el sujeto confinado,
el espacio interior en el cual todo está supuesto a ser transformado.
Más aún, su interpretación imposible de la animalidad. Que es puro
confinamiento en la falta de un entendimiento del ser es tomada por Rilke como lo
esencial; lo que está afuera de la franqueza y lo cerrado él lo toma como una vista
dentro de lo abierto. Imposibilidades y pensamiento psicoanalítico.)
26
fragmento: Con todos los ojos ve la criatura /lo abierto. Sólo están nuestros ojos /como invertidos,
por entero puestos /como trampas a su alrededor, /y en torno a su libre salida. /Lo que afuera es, lo
sabemos tan sólo /por un rostro de animal; pues ya al niño /reciente lo volvemos y forzamos /a que
vea hacia atrás conformación, /no lo abierto, que es tan profundo /en cara de animal. Libre de
muerte. /A ella la vemos sólo nosotros: /el animal libre tiene su ocaso /siempre tras sí, y ante sí a
Dios, /y cuando va, va hacia la eternidad, /del mismo modo en que van las fuentes. /Nosotros jamás
tenemos, ni un día, /el puro espacio adelante, hacia el cual /las flores se abren sin fin.
27
N. del T. {Publicada en GA73}
13
17. ΑΛΗΘΕΙΑ
Lo que el ser es φύσις [physis] es decidido por los griegos mediante el hecho de que
la inocutariedad pertenece al ser.
El acto de ser es emerger en lo desoculto, y el emergente es el originar el
esenciarse de lo no oculto.
Por tal razón visibilidad
por tal razón ἰδέα [idéa]
por tal razón οὐσία [ousía] presencia
por tal razón ἐντελέχεια [entelékheia]
14
20. El momento de la consolidación
Cuando la ἰδέα [idea] consolida ἀλήθεια [alétheia]. Lo “contra lo que” para eso.
Quizá ἀλήθεια [alétheia] ya atraída hacia ἰδέα [idea] —hacia el γιγνωσκόμενον
[gignoskomenon].
Cf. δόξα! —mostrarse así mismo como eso
cf. νοεῖν — }en Parmedides
¿y Heráclito?
Desde Anaximandro nada; el comienzo obscuro. Intimación pura del carácter del a-
bismo de la inicialidad.
28
Ente conocido
15
propiamente es —caso en punto— causa: θεῖον [Theion], Deus, creador, el
absoluto, el incondicional; a priori —condición de posibilidad; “efectuar”—
participación en ello —esforzarse.
3. “Luz” —brillo—visibilidad—desocultamiento, en la luz, brillo, ojos —no
apertura-lo desoculto.
4. El trazo inicial, es decir, Parmenides.
29
Lo conocido.
30
Falsedad.
31
La physis se oculta, se encripta.
32
N. del T. Vom Wesen und Begriff de φύσις. Aristóteles, Physik B 1. {En Wegmarken, GA9}
33
N. del T. Hölderlins Hymnen “Germanien” und “Der Rhein”. Freiburg semestre de invierno 1934-35.
{GA39}
34
N. del T. Einführung in die Metaphysik. Freiburg lección, semestre de verano 1935. {GA40}
35
De las cosas y hacia ellas mismas.
16
26. Cómo ἀλήθεια
como inoultariedad de lo que es presente es determinado por la interpretación del ser
como οὐσία [ousía], esto es, previamente como φύσις [physis].
ἀλήθεια [alétheia] fundada sobre presenciar.
φύσις [physis] ya en relación al εἶδος [eidos]36 y sentida sólo en esa manera (νοῦς
—νοεῑν). ἀλήθεια [alétheia] ya establecida —de lo contrario el claro “de” el evento
apropiador. Así en general el primer comienzo y por esta razón aún eterno regreso a
lo mismo.
como título del comienzo el cual permite surgir. Lo inicial como reintegración
desdoblada y a través del esenciarse (no como identidad de lo significado; ni como
la mismidad del objeto, ni como un pertenecer juntos, sino como lo inicial, como lo
que precede todo y aún no es el “apriori”).
Desocultamiento —lo más prestamente presente en los entes como cosas sobre-y-
en-contra-de— esencialmente ocurriendo como aquello de donde el ser humano
también viene situarse.
Lo que es decisivo acerca del comienzo, sin embargo, no reside en el hecho de
que la esencia del ser humano es reclamada en el sentido de liberación. La esencia
de la libertad se deriva de la esencia de la verdad. Esta esencia de “libertad”, como
entendida inicialmente y en términos de la historia del ser [Seyn], primero regresa
detrás de todas las preguntas metafísicas, aun aquellas de Schelling. Al mismo
tiempo, ofrece la posibilidad de experimentar inicialmente el pertenecer al ser
[Seyn] y de sujetar lo esencial y través de la penetración del ser humano por lo
desoculto —ya fundado como percepción en el hacer libre— del asir lo que se
extiende él mismo en lo no oculto en su propia manera. Desde aquí, es una y otra
vez tapado y transformado a través de ὀρθότης [orthotis], repraesentare,
representación.
36
Forma o aspecto.
37
En la sentencia de Anaximandro: “esto”
17
28. ταύτόν [tauton]
38
Apelación a Anaximandro: procedencia y retorno.
39
Alma.
40
Lo que es, ente.
41
Tener un principio racional. Aristóteles.
18
de la “esencia” en el sentido de la indicación de inconsecuentes, características
generales.
*
Que la experiencia de la historia del ser [Seyn] debe ser infrecuente, casi imposible,
y casi sin efecto (abandono por el ser); que por lo tanto cada experiencia histórica
de la verdad del ser presenta ella misma bajo la forma de una “vista historiográfica”
la cual ha sido preocupada desde hace tiempo com lo que es obsoleto; que en la
“filosofía” general aparece como sucesión de opiniones de personas individuales.
42
N. del T. Besinnung. {GA66, p. 135-36}
19
Emergencia como el regresar a sí mismo del descoyuntamiento del ocultar. Fuera de
lo desoculto, lo desoculto. Y esto como un suceder —y ciertamente el comienzo
mismo. ¡El más puro “el hecho que”! del comienzo.
Ser y verdad
φύσις ἀλήθεια [physis alétheia]
El infundar de ἀλήθεια [alétheia]— ἀλήθεια [alétheia] es arrebatada de φύσις
[physis], transferida a λόγος [logos], y es no reconocida y olvidada como
fundamento y como dominio del claro.
El fundar de ἀλήθεια [alétheia] como φύσις [physis], requiere la preservación de
la esencia de la φύσις [physis] misma más allá del primer comienzo.
20
De dónde pervertir —distorsionar.
la verdad
de
No-distorsionar, tanto como ciertamente relacionado precisamente en la forma
griega a dar vuelta-hacia y ϕαίνεσθαι [phainesthai]43.
¿Qué resulta aquí, en tal empuje, con respecto a ϕύσις-ἀλήθεια [physis-alétheia]?
(¡Presencia!, emergencia) Emergente auto-ocultar, admisión del pervertir,
intervención del representar (¡νοεῖν! [¡noein!], ¡λέγειν! [¡legein!]).
Heráclito, frg. 16: τὸ μὴ δῦνόν ποτε πῶς ἄν τις λάθοι44;
↑
φύσις
(constantemente emergiendo) (estar en ocultamiento)
Esencialmente la relación interior de εἴναι—ἕν [einai—en] y λέγειν [legein].
λόγος [logos] recolección como recolectar originario como permanecer con uno
mismo —ocultamiento como desocultameinto. ἕν [en] en la manera de presencia y de
claro. Cf. pensar. (Cf. remarca pertenecer a “¿Qué es la metafísica?”).
Ἀλήθεια [Alétheia] —Si ahí no permanece una retrospectiva historiográfica (cf.
38/39. ms. 110f.45). El retroceso al comienzo es el salto hacia adelante por parte de
lo que viene en la medida en que se acerca.
Pero ¿de dónde comenzamos el comienzo?
43
Parecer a uno, creer, opinar, aparecer.
44
Τὸ μὴ δῦνόν ποτε πῶς ἄν τις λάθοι; How can one escape that which never sets?
45
N. del T. Zur Auslegung von Nietzsches II. Unzeitgemäβer Betrachtung. Freiburg seminar, semestre de
invierno 1938-39. [GA46, p. 99ff.}
21
Pero, ¿cómo podemos “nosotros” preguntar tan decisivamente sobre la base del
ser [Seyn]?
¿O es esta inversión solamente afectada con la maldición de todas las inversiones
no para liberar en lo originario sino, en cambio, para nunca atrapar en lo que
simplemente sobreviene?
Pero, ¿cómo preguntar de otra manera, desde que de hecho nosotros somos
siempre quienes preguntan —nosotros?
Por lo tanto aquí de hecho radica la decisión —o ser en general ya no más afuera
de la relación con el ser humano y como la relación? Pero, ¿cómo es eso?
Cómo el preguntar surge de un descubrimiento y “meramente” lo desdobla.
22
dominar inicialmente, … a sí misma su fundamento en relación a νοεῖν [noein]—
λέγειν [legein] 46 (→ἰδεῖν [idein]).
La esencia relacionada-al-evento del ser humano permanece oculta. ¿Por qué? Como
primera predominancia de los entes como tales el impulso de la “existencia”. Los
humanos mismos a la vez se establecen en el τέχνη τῶν ὄντων [techne ton onton].
Pero porque están consignados a ser, deben de hecho satisfacer ser. Siguen el
desprendimiento [Entwindung] en el avance y se encuentran “ellos mismos”
salvados en el ἀγαθόν [agathón] y en la ἰδέα [idea].
46
Hablar. El ejercicio del logos, la consigna del pensamiento en ella palabra.
23
Heráclito: ¿qué fragmento se dice que es el primero, todo-eliminar? Frg. 16: τὸ
μὴ δῦνον [to mi dunon]. (ϕύσις [Physis]—ἀλήθεια [alétheia]—λανθάνειν
[lanthanein]).
Experimentar el comienzo —decir el evento. La esencia del “pensar” fuera del ser
[Seyn] como evento. Con qué derecho esta relación de ser y pensar dirigen el
camino? Fue de l caer hacia los entes —el ser humano; ser y pensar. Cf. más
inicialmente νοεῖν—εῖναι [noein—einai].
47
Inesperado para, desbloqueado para.
48
Mente, intelecto.
24
(Verdad — ser — humanidad)
↑
falta de sentido de situación — sin la verdad, sin la esencia de la verdad
abandono por el ser
el ser humano
ἀλήθεια es ella misma ya desenredo fuera del fundamento del ser y la verdad, un
fundamento aún oculto.
25
Esta relación con la metafísica, sin embargo, bajo el aspecto de la historia del ser,
una historia que por sí misma es a ser experimentada fuera de la inicialidad del
comienzo. Y esto lo que la palabra responderá.
B. Δόξα [Doxa]49
49
Opinión, conocimiento aparente de la realidad.
26
sólo lejos de uno mismo y una emergencia, sino también llamando de vuelta dentro
de algo oscuro, oculto, inaccesible.
Brillar—el resplandor del auto-ocultamiento.
Los entes mismos en su apariencia como ellos mismos. τὀ ἐόν [to eon] entes en su
eseidad en otra cosa que ellos mismos, un “otro” que es tan sólo en relación con los
entes en sí mismos.
τἀ δοκοῦντα [ta dokounta] así no mera semblanza sino, de acuerdo con el
plural, también entes (que en otro fundamento y sobre la base de la certeza de la
representación son los objetos mismos —en Kant, “apariencias”); es a ese ser, εἶναι
[einai], para Parmenides ni objetividad ni condicionalidad sino, en cambio ἀλήθεια
[alétheia]—infundada.
Dado que en el primer comienzo, ser [Seyn] y verdad son infundados en el a-bismo,
dado que el ser [Seyn] no ocurre inicialmente en el modo de transición, y dado que
lo que es primero en el comienzo es emergencia, el ser mismo se entrega a sí mismo
a la apariencia, δοκεῖν [dokein], los entes (τἀ δοκοῦντα [ta dokounta]) son
percibidos en consecuencia, y así una δόξα [doxa] entonces se encuentra contra las
otras y todas sus multiplicidades contra la una, ἕν [en], de pura apariencia misma.
δόξα [doxa] como ocasionar el adelanto a la ἰδέα [idea].
A ἀλήθεια pertenece la mirada hacia afuera en la apariencia, la cual es a la vez una
apariencia que parece ser tal a mí y entonces sólo parece ser tal. (cf. s. s. 35)51
50
Apariencia, forma, semblante.
51
Einführung in die Metaphysik. {GA40, p. 105ff.}
27
49. ἀλήθεια— δόξα
δοκίμως [dokimos] 52— en la manera de un parecer que es intrínsecamente un auto-
mostrarse (ἀλήθεια—φύσις [alétheia—physis]) y por tanto (tomado por sí mismo
sobre la base de la cosa respectiva que se muestra a sí misma) una semblanza.
Todos los entes, tomados por ellos mismos, tienen esta característica. Para:
1. como entes, ellos están presentes
2. pero, como presentes, ellos miran como si fueran simplemente ellos mismos y
casi el ser mismo.
Todo lo que emerge entra necesariamente en la esencia de la δόξα [doxa].
¿Por qué y cómo?
δόξα [doxa] no es simplemente falsedad sino, en cambio, es la verdad cotidiana,
la necesariamente más próxima verdad.
50. Parmenides
δύο γνώμαι [duo gnomai]53— en cada caso dos y varios aspectos, estos en cada
caso aspectos si en ταὐτο [tauto]54- Άλήθεια [Alétheia]. Ellos en cada caso
constituyen sólo entes, unos contra otros y por tanto nunca más los otros —
alteración.
Cuando decimos, “No ser sin parecer”, ¿qué significa “ser”? Emergencia,
desocultamiento, auto-mostrarse. Sólo esto, como parecer (brillar), otorga la
posibilidad de semblanza Cf. s. s. 3555. Ser—parecer.
ἄκριτα [akrita]—indeciso, no ser capaz de distinguir entes y no-entes, porque no
dentro de la diferencia entre ser y entes, ἀλήθεια y δόξα [doxa]. δόξα [doxa]—más
inicialmente como lo que viene adelante en el más próximo claro.
κρίσις [krisis]—el cálculo que distingue. Distinguir —no formalmente; en cambio,
de acuerdo con la verdad. Aquí Άλήθεια misma como esencia del ἐόν [eon] qua
εἶναι [einai]. δόξα [doxa] como esencia del ἐόν [eon] qua δοκοῦντα [dokounta] 56.
52
Probar, someter a prueba, dar por bueno, creer, pensar, opinar, suponer, resolver, decidir, ser
resuelto o determinado.
53
Dos aspectos o dos comprensiones. En cada caso dos, dualidad.
54
Esto, lo mismo.
55
Einführung in die Metaphysik. {GA40, p. 105ff.}
56
Aparecer.
28
Άλήθεια—θεά [thea] 57
δόξα [doxa] βροτῶν [broton]58 — esto es, entes, como aparecen, cuando
percibidos desde ellos mismos por un mortal sin θυμός [thumos]59 por Άλήθεια (no
apropiado y por tanto ciego a la eseidad y a lo que la eseidad es; si y cómo la
eseidad es lo mismo como νοεῖν [noein] sobre el fundamento de Άλήθεια).
δίζησις [dizesis]—buscar, indagar a fondo lo que emerge (Άλήθεια). κρίσις
[krisis] y las maneras. El que va a lo largo del camino —como permanencia— en
cada caso con σήματα [semata], con lo que se muestra a sí mismo (y al mismo
tiempo se oculta a sí mismo).
¿En qué medida (infundada) Άλήθεια requiere una relación con νοεῖν [noein]
εἶναι [einai], con λέγειν [légein]60 , κρίνειν [krinein]61? Como la relación entre
Άλήθεια [Alétheia] y ὁδός [odos] 62 —camino a Άλήθεια, modos en ella, “su” manera.
La esencia del la forma. (En conexión con la interpretación de Parmenides de 193263,
el trabajo de Otfrid Becker, pero insuficiente porque Άλήθεια [Alétheia] y εἶναι
[einai] no realmente experimentados)
Άλήθεια [Alétheia] y errancia [extravío] cf. verdad—curso de 193064.
ἀλήθεια — ser
la diferencia
δόξα — entes
La luna —no ella misma luminosa— puede emerger, pero prestada la luz. De la
misma forma δόξα [doxa]: auto-mostrándose sólo bajo la precedencia de ἀλήθεια.
57
Diosa.
58
Mortales.
59
Thymos, pasión.
60
Develación que congrega y une.
61
Separar, juzgar, distinguir.
62
Camino, senda, dirección, modo de vida, manera.
63
Der Anfang der abendländischen Philosophie (Anaximander und Parmenides). Freiburg lecture
course, summer semester 1932. {GA35}
64
Vom Wesen der Wahrheit. {In GA80; reworked version in Wegmarken, GA9}
29
Por lo tanto también δόξα [doxa] como la esencia de δοκοῦντα [dokounta] —
presencia en lo que es más cercano sobre la base de los entes.
¿Cómo entonces νόος [nous]? Aquí la diferencia entre νοεῖν [noein] pura, que es
lo mismo que εἶναι [einai], y el humano νόος [nous]. Este último vacilante y
maleable.
δόξα [doxa] no es discutida en cuanto a su contenido; en cambio, su esencia, la
cual pertenece a Άλήθεια [Alétheia], es determinada como un modo necesario de
presencia.
65
Apariencia, semejanza, similar.
66
Mortal, humana.
67
[Οὕτω τοι κατὰ δόξαν ἔφυ τάδε / καί νυν ἔασι καὶ μετέπειτ΄ ἀπὸ τοῦδε πελευτήσουσι
τραφέντα· / τοῖς δ΄ ὄνομ΄ ἄνθρωποι κατέθεντ΄ ἐπίσημον ἑκάστῳ.] “Así, pues, emergieron, según
el parecer, estas cosas y ahora son, / y, a partir de aquí, habiendo madurado, acabarán. / A ellos los
hombres nombre impusieron acuñado para cada cual”.
30
53. γίνεσθαι —ὄλλυσθαι (Parmenides 8, 12; 8, 27)
Salir a la luz y desaparecer —no determinaciones posibles y fundamentos esenciales
de presencia liberada por ellos mismos; por lo contrario, a la inversa: ellos son
retenidos a través del cruce en la esencia de la presencia, salir a la luz y desaparecer
son crecer; menguar entonces es venir a presencia de la δόξα [doxa].
γένεσις —ὄλεθρος como determinaciones autónomas son expulsadas lejos en lo
que viene a presencia.
El despedazarse —la dispersión de la reunión, de la unicidad de la presencia.
C. Anaximandro
Cf. s. s. 41, pp. 20-3268.
Cf. “der Spruch des Parmenides”, June 194069.
68
Grundbegriffe. Freiburg lecture course, summer semester 1941. {GA51, p. 94ff}
69
Lecture to the Freiburger Kränzschen, June 1940. {In GA80}
70
Límite, conclusión.
71
Olvido.
31
Inicialmente el α-; cf. ἀ-λήθεια [a-létheia]. En “in” (sin…, en contra, ¡pero no
necesariamente negativo!) tiene el carácter básico de ἀρχή [arché]: punto de
partida, maestría, liberar. Sólo que es abierto para, y de tal modo ya prevalece,
puede liberar.
ἀλήθεια [alétheia] no es apertura pura y nada más, sino es α-, relacionada a
λήθη [lethe]. Esto último ocurre esencialmente, pero su esenciarse es nombrado
sólo mediatamente en el primer comienzo.
55. La transición
γένεσις [genesis] y ϕθορά [phthora] 72 y ἀλήθεια [alétheia] son características de lo
que es presente, porque esto, como algo presente, es consignado a la esencia (entes
pertenecen al ser, y que lo que emerge en los entes deriva del ser).
Lo que es presente viene a presencia en un salir a la luz y un desaparecer. Aún
ϕθορά [phthora] es γίνεσθαι [ginesthai]: salir a la luz, un tipo de ϕύσις [Physis],
emergencia—desaparición—bajar. La quintaesencia de γένεσις [genesis] como ϕύσις
[Physis], es transición, la unidad del salir a la luz y desaparecer, y este último
esencialmente ocurre en lo mismo, en ἀλήθεια [alétheia], porque ἀλήθεια [alétheia]
es conjuntamente y esencialmente ocultamiento—retiro en el ocular. Esta transición
es el presenciar que, sin embargo, ahora permanece precisamente escondido en
favor de la presencia de lo que es presente, eso que es vencido en los límites y como
tal es luego perseguido y disipado en el cambio.
La transición no será involucrada en el atrincheramiento de lo que viene a
presencia. La transición preserva el ἄπειρον [apeiron]. La presencia es
transicionalmente el pico reunir-reunido de ϕύσις [Physis], esto es, del
desocultamiento. La presencia debe ser experimentada aletheiológicamente y no
metafísicamente en términos del constante y lo objetivamente presente. Luego se
hace claro que “ser” impregna no el factor de duración de la presencia objetiva sino,
en cambio, la única reunidad de lo desoculto emergente-pereciente. (Cf. la
interpretación de lo que significa permanecer)
72
Destrucción.
32
de los límites, los que simultánea y simplemente permiten a la cosa
restringida ser vista y también la delimitan contra otras, y
—ocultarla en sus pertenencia a ellos. Restricción una suerte de
ocultamiento, especialmente si visto en términos de la pura
presencia de lo que viene a presencia, más bien en términos del
respectivo “este” en su individuación.
τὁ ἄπειρον [to apeiron]—lo que des-confina, mantiene fuera de los límites y
restricción, porque él mismo inconsciente de estos como que
emergencia pura él mismo es.
Des-confinamiento — lo desoculto—
el no-enérgico — el de dónde del emerger
el adónde volver y
desaparecer
(de presencia) (de ser)
estos mismos en el plural ἐξ—εἰς ταῦτα
el esenciarse de la presencia
ἀλήθεια
τὁ χρεών la necesidad imperiosa, la pura y simplemente necesaria, ésta dicha
en relación a de dónde y adónde de la presencia y ausencia.
73
Grundbegriffe. {GA51, p. 116}
33
Άλήθεια [Alétheia] es sin un comienzo en mayor medida que φύσις [physis].
74
«De donde las cosas tienen su origen, hacia allí deben sucumbir también, según la necesidad; pues
tienen que expiar y ser juzgadas por su injusticia, de acuerdo con el orden del tiempo»
75
Leyendo Verwehrung para Verwahrung. —trad.
76
Parmenides. Freiburg lecture course, winter semester 1942-43. {GA54, p. 94ff.}
34
stans, es la verdad (postulada en ella misma) de los entes, que
comienza con aquello hacia lo que la inicialidad concebida como
constancia es en contienda.
Constancia —es que no viene al ser (presencia) del exterior, sin embargo;
pertenece a la esencia del ser como lo que es contrario al ser y
como su esencia distorsionada; la permanencia se esfuerza a lo
largo de todo lo que viene a la presencia; ¿por qué?
¿Y de dónde toda la esencia distorsionada de la esencia? ¿De dónde
y cómo la esencia?
ἄπειρον [apeiron]—en qué forma la repudiación de los límites es
preponderante y de allí la transición es victoriosa.
La transición del salir a la luz en lo que sale a la luz del desaparecer
como la extremidad de la presencia.
Cómo en la transición tal como toda continuación es sin esencia.
πέρας [peras]—límite en el sentido del final de la transición (y eso
significa el final del salir a la luz y del desaparecer).
El final es el último fin, la finalidad de la continuación.
“ἄπειρον” [“apeiron”]—lo que es esencial al ἄπειρον [apeiron] no radica en la
inmaterialidad y así no en la distinción entre lo material y lo
inmaterial. Lo que ciertamente sería una distinción dentro de los
entes y en particular una distinción que adhiere a lo material y
procede de él. Lo que es decisivo es que el ser es diferenciado de los
entes. Y esta diferenciación es ya una consecuencia del pensar en el
ser.
Esta inicialidad radica en el ἄπειρον [apeiron]. Pero luego, y
ciertamente inmediatamente, el límite (πέρας—τέλος [peras—telos]
se convierte en la determinación característica de la eseidad. Los
dos no son “contradictorios”; más precisamente: el deseo de
descubrir una contradicción aquí, algo que, de acuerdo con esta
interpretación del ἄπειρον [apeiron], es sugerida al considerar la
esencia del εἶδος [eidos] (μορϕή [morphe]), significaría el deseo de
restringir la historia oculta del ser en las reglas para pensar sobre
objetos formales.
Pero no sería menos erróneo interpretar el ἄπειρον [apeiron] y
ταῦτα [tauta] en el sentido del un platonismo pre-platónico y
comprenderlos como lo que queda, sobre y en contra de γένεσις
[genesis] y ϕθορά [phthora]. En vista de la extrañeza de todo
comienzo, no es de asombrarse que la mayor tergiversación se
35
entromete precisamente al comienzo, y lo material (o, lo que no es
mejor, lo inmaterial) es planteado como “principio”.
En qué medida se puede presumir que todas las interpretaciones de la sentencia que
sugieren algo que venga después son ya erróneas, puesto que tal interpretación no
reconoce la extrañeza del comienzo.
*
Que aquí al menos el rastro de un atropomorfizar del ser, si ello fuera posible del
todo. Atropomorfizar puede quizás acontecerle a los entes (Dios, mundo), pero aún
ahí es de preguntarse siempre cómo es experimentado “el anthropos”.
La percepción77 fundamental [Grund-erfahrnis]
77
De faring, tomando en cuenta erfahren con las posibles acepciones: experimentar, sentir, descubrir,
aprender.
78
Peligro.
79
Diosa y personificación de la injusticia.
36
¿Cómo la insinuación del lo inicial, el ocultamiento?
*
Cómo las palabras de Anaximandro dicen ϕύσις [physis] en su más oculta esencia
sin nombrarla.
La sentencia de Anaximandro
D. Pensar occidental
Reflexión
Da-seyn [Ser-ahí]
80
Separación, horizonte.
37
De otra parte con el pensar pensante (agradecido). La timidez de distinguir, la
timidez de experimentar lo misterioso. Apenas una representación en el sentido de
un traer ante sí mismo.
En la era moderna, mediante el pensar calculador nos hemos acostumbrado
desde tiempo atrás a ver en pensar, y demandar del pensar, asidero [Zugriff],
asimiento [Griff], y concepto [Begriff], esto es, entendemos el “concepto” sobre la
base de un asir: conceptus81 — ya no más ὁρισμός [orismós]82.
Entendemos el pensar riguroso sólo como representación conceptual. Pero su
rigor descansa en la originariedad del decir sin imágenes en la palabra obediente
que es inherente en la esencia de la verdad.
La invasión de lo misterioso en lo repentino.
81
Embrión.
82
Definición, designación.
38
antigüedad griega la norma y la ley eran dados para la esencia y el curso histórico
del subsecuente pensar pensante.
Con todo ¿de qué clase es esto llamado “pensar” en un sentido enfático? ¿En qué
se distingue el pensar pensante del ordinario pensar? ¿Qué es pensar en general?
Debemos ser claros acerca de todo si vamos a experimentar “el comienzo del pensar
occidental” con cualquier entendimiento.
Pero si ahora intentamos pensar de nuevo el inicio de la filosofía occidental,
entonces los recelos surgen inmediatamente, siempre que no entremos en el
proyecto con los ojos cerrados. Regresando al inicio de la filosofía occidental,
suponiendo que ello sea posible, podría sin duda dar alguna utilidad en la medida
que como conocimiento del inicio puede mostrar de dónde y cómo cada uno de los
filósofos ha desarrollado. Podríamos como resultado de ello calcular, al menos
aproximadamente, las presuposiciones, influencias, y condiciones de desarrollo de
la posterior y especialmente de la más reciente filosofía.
¿Y cuál sería el punto de todo ello? Recopilar información acerca de los grandes
filósofos —lo que significa simplemente reflexionar sobre una manera formal de
pensar en lugar de meditar a fondo por uno mismo de, y en nombre de, el tiempo
presente.
Pero escoger y adherirse a una filosofía especialmente llamativa de instancias
anteriores: Platón, Leibniz, Kant, Hegel, Nietzsche, como una mezcla de todos o
algunos —y, aún así, sólo un pensar acerca de pensar— y no en sí mismo un pensar;
simplemente escaparse en la historiografía —en cambio de meditar a fondo de, y en
nombre de, el tiempo presente.
Esto lo hace todo claro, de tal manera que con una determinación apresurada
abandonemos la historiografía y al menos exijamos, en caso de que no podamos
realizarlo nosotros mismos, que el pensar surja de, y en nombre de, el tiempo
presente y reemplace discusiones historiográficas de las cosas anticuadas.
39
parece un intento de martillar el martillo. Ese no es el fin, al menos no con respecto
al mismo martillo: no será martillado consigo mismo.
Si un martillo fuera martillado, y realmente es martillado, eso podría ser sólo con
la ayuda de un segundo martillo. Si, por ejemplo, el mango se ha aflojado, lo
volvemos a martillar para que el martillo esté en las condiciones apropiadas de
trabajo. Martillar el martillo, pensar acerca del pensar —no una y otra vez, sino
precisamente sólo en la ocasión, para mantener la herramienta en buen estado.
Martillar como martilleo de cosas. Así también pensamiento de objetos. Pensar
acerca del pensar para mantener en buen estado. Si pensar ya no es “capaz” de
pensar, entonces ponerlo de vuelta en buena condición. (Por lo contrario, peculiar;
si sólo “acerca” —dígase tal pensar tanto girado como trastornado (“reflexivo”),
egocéntrico, atrapar de manera antinatural.) Pero en nuestro caso, no acerca del
pensar sino, en cambio, distinguir varios modos y clarificar la esencia del tipo
preeminente de pensar. Distinguir un tipo de pensar de otro. ¿Estos a la mano,
puestos ya antes? ¿Como martillos, tenazas? Así que de hecho aquí también
(psicología del pensar) en el pensar ordinario y filosófico. Aquí tenemos hecha ya
una distinción. Sin embargo —quién nos dice que pensar es algo pensante— ¿Kant,
por ejemplo? Ciertamente; pero ¿qué es filosófico, y qué ordinario? Lo filosófico es
inusual, no ofrece ayuda, (tener ya distinguido. ¡Distinguir!: ¡pensar! No sólo no
dispuesto antes, sino también no herramienta, ¿pero en cambio? Facultad y
actividad (actos de pensamiento), comportamiento —“ser”.) Pensar acerca de
pensar —no reflexivo, viraje-hacia el interior, sino meditar a fondo —fantasía.
Pensar—poetizar: la palabra— el mismo y aún precisamente no. Filosofía-Dasein
(pensar).
40
Pensar inicial (cf. conclusión de 42-3)83.
65. Filosofía—pensar—ser
¿Bajo qué condiciones es “filosofía” un “ser” [ein “Sein”] en el sentido del pertenecer
esencial del humano histórico (“Da-sein” [“ser-ahí”]) a la verdad del ser?
¿Cómo este “ser” como pensar no requiere un “resultado” (que “sale a la luz” sólo
más tarde)? (1. porque los “resultados” no del todo esenciales; 2. porque “ser”
anterior a toda productividad). ¿Cómo no es sin embargo un mero circular
“existencial” alrededor del ser humano? (“Filosofía existencial” atiende a los entes y
no hace suyo el ser. Ni puede hacerlo, precisamente porque “existencia” no es más
existentia, deja sólo al ser mismo en la esencia de su verdad). ¿Cómo es la historia
aquí, la esencia de la historia, una cuestión del evento?
83
Parmenides. Freiburg lecture course, winter semester 1942-43. {GA54, p. 240ff.}
41
Platonismo es historiografía —de acuerdo con la esencia metafísica de la
historiografía— es inevitable; las varias formas de platonismo banal; el infortunio
de la consideración apropiada de la falta.
E. De camino
al primer comienzo
La preparación
para el pensar del ser [Seyn] en su historicidad
42
La experiencia del a-bismo.
———
La disposición de la reclamación dispone el
ser humano a la insistencia [instancia] de la
insistencia [instancia] del resguardo del claro del ser [Seyn].
*
70. La transición
El destino del ser se transfiere a los pensadores. Su decir, en la resolución del
tránsito, debe hablar más frecuentemente en el modo de negativa. Aún su lenguaje
que deniega no permanece por ningún medio en el nivel de lo negativo y lo
reactivo. (Renuncia de la despedida). Su negativa es determinada por las riquezas
del ser, esto es, por la diferencia como la inicialidad en retirada.
Aún más, esto noedor no es de ninguna manera la negatividad de la dialéctica
absoluta.
43
No es un “no” que no puede ser superado, pero la imposibilidad de superación es
un signo del tránsito inicial.
La transición, que los pensadores “siguen”, ella misma sigue como el curso de la
superación que surge del giro fuera [Verwindung] del ser [Seyn]. Atender a la
transición es la resolución de la diferencia en la despedida; es a-bismo del
comienzo.
*
La transición
(Transición y superación
giro fuera [Verwindung])
sigue la superación de la metafísica. El superar, en el campo de la historia del ser
[Seyn], es esencialmente un giro fuera.
La superación gira la metafísica en la corona del viraje.
Este girar primero trae a la metafísica en el honor de su esencia oculta. Este giro
fuera [Verwindung] es reverencia por la dignidad del ser [Seyn] y es todo lo que el
pensador sigue y acata.
Aquí la “superación” no posee en lo más mínimo el sentido peyorativo de obligar
a aceptar, derrotar, el sentido de eliminación o reducción. No es el triunfo de la
mejor apreciación y la mayor inteligencia sino, en cambio, es un evento del ser
[Seyn] mismo.
✕
Toda historia, y el destino del ser [Seyn] también, deben permanecer detrás aquí.
Pensar está al pie de la cordillera global.
Desde este círculo de acción Άλήθεια [Alétheia] una vez colapsó repentinamente,
y en Άλήθεια [Alétheia] está oculto: destino, que es el destino del ser [Seyn].
Ahí las reglas en la cordillera global nada de pasar tiempo y por tanto también
nada de eternidad (de tiempo sin tiempo).
84
{Extracto de paquete VII (anotaciones) de pp. 164-70}
44
La cordillera es el local en cuya forma externa la esencia del tiempo acontece
fuera de la cercanía mundana. El acercarse de la cercanía, desapropiación en la
diferencia, acontece como la iluminación y la sonoridad del evento en el velar de la
luz, en el acallar del sonido. La iluminación revela; la sonoridad reúne. Iluminación
y sonoridad iluminan, y resuenan, mediante la cuaternidad en la cordillera global;
ellos son la resonancia.
Al colapsar, Άλήθεια [Alétheia] se lleva el destellar de la luz: el emerger que
ocurre esencialmente en Άλήθεια [Alétheia] y en el claro (traído adelante de esta
forma) de lo inoculto: ϕύσις [Physis]. Al colapsar fuera de la cordillera, Άλήθεια
[Alétheia] se lleva el aliento de la sonoridad, la reunión resguardante de lo inoculto:
λόγος [logos].
Al colapsar, Άλήθεια [Alétheia] es aquello que se lleva y, al traerse, trae hacia acá
en el desocultamiento y hacia allá en lo que está presente, que sin embargo es lo que
primero importa.
ϕύσις [Physis] y Λόγος [Logos] ocurren esencialmente veladamente en la
iluminación y la sonoridad del la cordillera global, y es como esto que la diferencia
se apropia y el evento se desapropia.
Al causar el colapso, Άλήθεια [Alétheia] es reunida en el enviar [Schicken] y es el
destino [Ge-schick], la asignación, Μοῖρα [Moira], en la cual Άλήθεια [Alétheia] es
retenida y reunida, despejada y protegida. ϕύσις [Physis], Λόγος [Logos], Μοῖρα
[Moira] colapsan como Άλήθεια [Alétheia] fuera de Άλήθεια [Alétheia] en el Ἕν
[En], que él mismo ocurre esencialmente de una forma oculta, de acuerdo a los
modos de Άλήθεια [Alétheia], y en tal una esencia toma posesión.
Esto hasta que el Ἕν [En], permaneciendo olvidado en su procedencia esencial
fuera de Άλήθεια [Alétheia] pero al mismo tiempo pura y simplemente viniendo a
presencia como iluminación surgida y destino reunido, es él mimos aprehendido
(Δόξα [Doxa]) como algo presente y es reunido sobre la base de la aprehensión y la
percepción (νοεῖν [noein]), esto es, numerado, y así es hecho sujeto a la σύνθεσις
[synthesis] que emplea διαίρεσις [diairesis]. Así el causar (el esenciarse de Άλήθεια
[Alétheia]) llega al dominio del colocar encima a y de colocar ante uno mismo en
νοεῖν [noein]. Este esenciarse de unificación, como el más vivo es confiado a ζωή
[zoé] y ψυχή [psyché]; la última, como νοῦς [nous], se convierte en el lugar nativo
de Λόγος [Logos].
La esencia entera de Άλήθεια [Alétheia] está distorsionada. La ἰδέα [idéa] usurpa
la posición de la iluminación. La mirada hacia afuera de la iluminación estampa lo
45
que viene a presencia, demanda la μορφή [morphé], y provee alojamiento al ὕλη
[hule]85. El aparato de la metafísica está completo.
Incipit comoedia. Άλήθεια [Alétheia] es olvidada. Pero todo vive en este olvido
olvidado. En el prólogo de la maquinación del marco de referencia (creatio), las
simples máscaras son convertidas en las personas. La personalidad es creada. Lo que
está vivo puede ser representado sólo como persona. Grito ciego para el personal Tú
cuenta como lo último en consideración. Las rutas del pensar han sido abandonadas
tiempo atrás —reconocidamente en ello una forma que es vuelo salvaje en la cara del
pensar (esto es, en la cara del resistir de la pertenencia a la esencia que ocurre
esencialmente, a la procedencia de Άλήθεια [Alétheia]) parece ser la victoria del
pensar y por tal razón en el más bajo punto del descenso no teme presentar el
pensar como un creer.
Por largo tiempo el pensar no ha sido ya pensar.
Pensar cuenta como creencia filosófica.
Se supone que hay gente que cree en algo parecido.
¿Quién nos librará de esta liberación?
Al mismo tiempo, es sorprendente que el ser humano, quien está preocupado con la
creencia filosófica, también descubra la energía atómica, para esto es de hecho el
✕
mismo ser humano quien, fuera del mismo olvido del ser [Seyn], nutre las raíces del
✕
poder del ser [Seyn].
Άλήθεια [Alétheia] se derrumba fuera de la cordillera global constantemente
oculta y en el colapso se convierte en el traer-adelante-acá que al mismo tiempo
trae el “acá” como claro (“ahí”) y el “adelante” como presencia.
En este traer es comprendido el estar que pertenece a la presencia, esto es, la
tardanza —como la peregrinación de la presencia en el desocultamiento.
Tardanza [Verbringen86], pensada de acuerdo al traer-adelante-acá, nombra el
prolongado presenciar —fuera del cual ocurre esencialmente la presencia constante
que es determinate del “ser” en la metafísica. La determinación incluye la
postulación del ser de los entes (Ποίησις [Poiesis]). Esta postulación es, de seguro,
inexperienciable desde que es distorsionada por la metafísica y a través de la
metafísica. Sin embargo, como tal es irreconocible, viene a la luz en cuanto el ser es
efectuado y, en un sentido amplio, condicionado: efectuado por la primer causa
(ipsum esse como actus purus), condicionado por las condiciones de necesidad y
85
Bosque, madera.
86
Gastar, pasar, perecer.
46
universalidad (esse como realidad objetiva), y, finalmente, condicionado como
haberse convertido dialéctico —en el acoplamiento de ambos modos de
fundamentar.
La doctrina de los trascendentales, la cual relaciona a ὄν [on] y ἕν [en], ἕτερον
[eteron], ἀγαθόν [agathon], ἀληθές [alethes], καλόν [kalon], y que es clarificada en
términos de creatio, apunta a esta condicionalidad, esto es, al carácter de efectuado
y al alojamiento del ser.
Para ser ponderado: ¿cómo hay el traer-adelante-acá en el colapso de Άλήθεια
[Alétheia] fuera del carácter de olvidado de la cordillera global? ¿Cómo el
distorsionar permanece en consecuencia —como olvidar— la procedencia esencial
del marco de referencia?
Todo esto es sin embargo a ser considerado aparte del destino y fuera de la
cercanía de la cordillera.
Aquí reside la dimensión esencial de la procedencia de la causalidad (para αἰτίαι
[aitiai]87 y la ἀρχαί [archai]88 y de su articulación.
La iluminación puede iluminar repentinamente picos distantes de la cordillera.
Así es innecesario escalar esos picos y hacer brillar una luz sobre ellos fuera de su
oscura cercanía; esto es efectuado por la descripción historiográfica de lo que es
dictado como historia de la filosofía.
Lo que sigue siendo esencial es si un pensamiento es suficiente de un árbol para
hacer descender sobre sí mismo un relámpago que confiere tal iluminación.
Entender a un pensador significa estar cara a cara con su pensamiento sobre un
“pico más separado”, significa ser un pico uno mismo, significa resistir el silencio y
la luz de la cordillera. ¿Entenderemos alguna vez este entendimiento? ¿O es
definitivamente perdido?
87
Responsabilidad. Causa, razón, motivo.
88
Comienzo, origen. Principios de conocimiento.
47
F. El primer comienzo
Cf. Sobre el comienzo 89
89
über den Anfang. {GA 70}
48
“Pensar”, en el primer comienzo, como aprehensión reunida de lo que emerge.
49
75. La esencia del ser en el primer comienzo
se revela, esto es, al mismo tiempo, esencialmente ocurre inicialmente, en emerger,
avanzando. Sólo si los rasgos básicos de la inicialidad vienen a ser recordados
constantemente, sobre todo en su unidad inicial, puede ser conjeturado el primer
comienzo.
Ser es el comienzo.
El comienzo es lo desoculto hacia el desocultamiento (ΑΛΗΘΕΙΑ [ALÉTHEIA]). Lo
desoculto es el emerger que regresa a sí mismo, porque lo desoculto posee el
ocultamiento fuera del cual emerge.
Emergencia es φύσις [physis].
Emergencia es presencia (οὐσία [ousia]. A la presencia pertenecen:
la cercanía —παρά [para]
la vista —visibilidad ιδέα [idéa]
la descarga —contra μὴ ὄν [me on]
la magia —καλόν [kalon].
La presencia consiste en persistencia y es entonces permanencia (ἀεί [aei]).
La presencia es entonces el esenciarse en el trabajo y como trabajo, de donde es
reunida la presentariedad del descanso y la moción: ἐνέργεια [enérgeia]; ἐντελέχεια
[entelecheia]. Co-posición: ἐνέχεια τὸ τέλος [enecheia to telos].
Cada determinación que emerge del ser puede de alguna manera respaldar el
comienzo, y todas ellas pueden ser especialmente atribuidas al comienzo. Y aún
ellas no lo agotan, porque el mismo, como el primer comienzo, debe encargarse del
progreso.
No obstante, el comienzo permanece embebido en el ocultamiento, pero en uno
en el que él mismo permanece oculto y así está careciendo completamente en
presencia y por ello debe ser reemplazado por “verdad” como ὁμοίωσις [omoiosis] y
como desfiguramiento del ser humano cognoscente.
Ser ιδέα [idéa] — ἐνέργεια [enérgeia] es simplemente entes. Y los entes proveen
de medidas para el ser, por lo cual la previa manifestación de los entes ha caído en
el reino de lo impensado y lo no cuestionado.
50
76. El recuerdo en el primer comienzo
se encuentra atrapado en la semblanza de que aquí algo de manera historiográfica
muy remoto y difícilmente accesible podría ser obtenido inmediatamente, a través
de un salto sobre toda la historia previa.
Lo que ha de ser recordado, como la opinión va, es adicionalmente un pasado
que está presente a la mano e incomprensible sólo en sus remanentes.
Pero lo que ha de ser recordado es nada del pasado; en cambio, es el esenciarse
de lo que está viniendo —el ser mismo en su verdad.
No necesitamos escapar de nosotros mismos, sino que también debemos no
defendernos a “nosotros” mismos como los que simplemente deambulan alrededor
arbitrariamente y están bien informados. Por lo contrario, necesitamos tomar
conciencia de la relación esencial cambiante del ser auto-proyectante a la esencia
del ser humano. Y requerido por lo que es “sólo” resolución en lo que está
excesivamente cercano.
51
φύσις [physis]: emergencia; el golpeteo emergente de raíces y así el dar de una
postura a lo que se encuentra constante (como tardanza, pero no
permanente) en destacarse en el emergente dominio abierto.
Emergencia por tanto: presencia y constancia. Constancia — ¿en
qué medida la esencia distorsionada de la presencia?
φύσις [physis]: dice entonces al mismo tiempo φύσει ὄν [physei on] —entes de tal
naturaleza.
Pero más inicialmente en φύσις [physis] es ya ocultamiento; άλήθεια [alétheia]
esencialmente ocurre como la transformación y el venir a la luz del ocultamiento.
Ocultamiento fundado en ocultariedad.
Pero aún más inicial en ocultariedad es refugiar, el cual no es una subsecuente
recuperación sino en cambio, la originariamente propia preservación. Refugiar es el
encubrir (protección) que preserva la emergencia: la más propia esencia del
comienzo, su indestructible acto de comienzo, esto es, su regreso a sí mismo. Esta
inicialidad, experimentada —desde la perspectiva de los entes— como ausencia, es
la preservación de la opulencia del comienzo en su pura auto-donación.
El desocultamiento es entonces un modo de lo desoculto del ocultamiento, en
cuanto al ocultamiento, y fuera de él, ocultariedad (λήθη [lethe]) aparece como su
más próxima esencia y es determinada como φύσις [physis].
Más inicial, sin embargo, es lo desoculto, si él al mismo tiempo permite refugiar
para ocurrir esencialmente en el comienzo y si él mismo es el evento apropiador.
¿Pero cómo se supone que uno piense la plenitud esencial de lo que después
llamamos el evento de apropiación?
La esencia más inicial de φύσις [physis], el otro comienzo, que al mismo tiempo
lleva devuelta en sí misma la metafísica, esto es la historia de la “verdad” surgida de
los entes.
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pero así la prioridad de los entes mismos como lo que en el propio sentido está
presente previo a la presencia.
No hay “dialéctica” aquí en lo absoluto, ni del ser ni del pensar acerca del ser.
Lo que esencialmente ocurre aquí es el comienzo del primer comienzo y nada
además de este acto de comenzar.
El recuerdo en esto es ya apropiación.
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Símbolos, signos, señales.
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Anaximandro aún dice el primer comienzo. El ser es el repudio 91 del límite, la
provisión de lo desoculto.
(Pero nunca es una “doctrina” entendida aquí en el sentido de una opinión; en
cambio, el comienzo mismo, el ser, la verdad, que es rememorada al fortalecer el
comienzo mismo mediante un pensar adelante en el evento).
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Leyendo Verwehrung por Verwarun. Traducción
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