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Este documento tiene como propósito realizar un análisis jurídico al Discurso Politeama, el
mismo que fue escrito por Manuel Gonzales Prada, en su libro “Páginas Libres y Horas de
Lucha”, por lo que trataremos de esbozar entre la literatura y el derecho, para lo cual se
tomará tres aspectos vigentes para dicho análisis.
Toda persona tiene derecho a la igualdad ante la ley. Nadie debe ser discriminado por
motivo de origen, raza, sexo, idioma, religión, opinión, condición económica o de
cualquiera otra índole.
Que, de acuerdo a lo indicado por Manuel Gonzales Prada, que aunque sea duro y
hasta cruel, el espíritu de servidumbre tiende a inclinarse; el derecho a la igualdad
implica que todas las personas deben ser tratadas en forma igual, pues, en caso
contrario, estaríamos ante una situación de discriminación, por cuanto en nuestra
sociedad se ha creado un estereotipo para la realización de ciertas labores,
consideradas incluso de menos importancia como es el de servicio doméstico, a los
campesinos se les trata peyorativamente.
En la actualidad se vive esta discriminación, por temas de índole de origen, raza, idioma
y condición económica, pues nuestra sociedad está plagada de prejuicios, y se juzga a
las personas por su apariencia, no tomando en consideración los esfuerzos que se
pueden realizar para poder sobresalir en esta sociedad, poniendo barreras que impidan
el surgir a todos los pobladores en las mismas condiciones, mismas que deberían de
ser aseguradas para todo ciudadano por el Estado.
Asimismo en el Artículo 38°.- Todos los peruanos tienen el deber de honrar al Perú y de
proteger los intereses nacionales, así como de respetar, cumplir y defender la
Constitución y el ordenamiento jurídico de la Nación.
Que de los hechos políticos cotidianos, todos como ciudadanos tenemos un gran grado
de responsabilidad, toda vez que cuando elegimos a una autoridad política en uso de
nuestros derechos electorales, desconocemos las obligaciones que ahí se encuentran
implícitas como el de proteger a nuestro estado; por cuanto ciudadanos del mismo
modelo que cita el discurso elaborado por Manuel Gonzales Prada, en el que señala
que los pobladores tienen un espíritu de servidumbre, de vencidos ante toda
circunstancia que no hace más que expresarse en el desinterés de todo ciudadano con
los hechos cotidianos de su estado, y que al final tienen consecuencia sobre su vida a
corto, mediano y largo plazo.
De ello resalta en importancia lo señalado por el autor ¡Que vengan árboles nuevos a
dar flores nuevas i frutas nuevas! ¡Los viejos a la tumba, los jóvenes a la obra!, es de
suma urgencia establecer políticas educativas que engloben realmente los problemas
de la realidad peruana y que a través de la educación puedan contrarrestarse
paulatinamente a través de las nuevas generaciones, hasta hallar la solución plena que
permita llegar al estado de satisfacción en nuestra república, toda vez que a pesar de lo
antiguo del discurso de Gonzales Prada, se mantienen circunstancias similares en los
modelos educativos, que no permiten el despegue hacia el éxito de nuestros
ciudadanos y por ende el éxito del estado peruano.