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TEJIDOS COMPLEJOS.

En la Botánica, se denomina floema al tejido conductor encargado del transporte de


nutrientes orgánico e inorgánico -especialmente azúcares- producidos por la parte aérea
fotosintética y autótrofa.

Se reconocen dos tipos de floema: el primario y el secundario. En el vástago, el floema


primario se encuentra asociado al xilema primario constituyendo los haces vasculares.

los tejidos complejos son aquellos que se forman a partir de la división

de las células de tejido merismàtico

.Las cèlulas de los tejidos complejos

pierden su capacidad de divisiòn, creecen hasta alcanzar su tamaño definitivo y se


transforman en los tejidos de las plantas aldultas.

Pueden ser de dos clases :los tejidos conductores y los tejidos dermicos o protectores.

tejidos conductores

Los tejidos conductores, en una planta, son los encargados de conducir los nutrientes
necesarios entre los diferentes elementos. Existen dos tipos de tejidos conductores:

Xiomara: Tejido leñoso que transporta savia bruta en las plantas vasculares.

Flordelmar: Tejido conductor que transporta savia elaborada con los nutrientes orgánicos,
especialmente azúcares, producidos por la parte aérea fotosintética y autótrofa, hacia las
partes basales subterráneas, no fotosintéticas, heterótrofas de las plantas vasculares.

xilema

El xilema , también es conocido como leña, el cual se lo reconoce como un tejido vegetal
lignificado de conducción que transporta líquidos de una parte a otra de las plantas
vasculares. Transporta agua, sales minerales y otros nutrientes desde la raíz hasta las hojas
de las plantas. La sustancia transportada se denomina savia bruta. Junto con el floema,
forma una red continua que se extiende a lo largo de todo el organismo de la planta.

tejidos complejos
tejidos dermicos o protectores

El tejido dérmico esta compuesto por la epidermis, capa más externa del cuerpo vegetal y lo
cubre a modo de envoltura protectora. Constituye la piel que cubre

tejido epidermico

El tejido epidérmico vegetal es el protector vivo que recubre la superficie de toda la planta
cuando ésta posee estructura primaria. Solamente se considera que falta la epidermis en la
caliptra de la raíz y en los meristemas apicales. Aparte de su función protectora también
actúa mecánicamente, contribuyendo en parte al sostén, debido a la compactibilidad de sus
células. Su precursor meristemático es la protodermis del meristema apical caulinar en la
plántula, y en las raíces, del meristema apical radical.

Estoma

En Botánica, se denomina estomas a los pequeños orificios o poros que atraviesan la


epidermis de las plantas, de forma de comunicar el ambiente gaseoso del interior de la
planta con el del exterior. Están localizados en todas las partes herbáceas ("verdes") de la
planta y se presentan en más concentración el envés de las hojas, al abrigo del Sol. A través
de los estomas la planta capta o libera la mayor parte del oxígeno y del dióxido de carbono,

tejido suberoso o

corteza

El súber o felema es un tejido muerto que protege a otros tejidos interiores de una planta de
la desecación, daño mecánico, insectos y herbívoros. Está formado por células muertas
cuyas paredes están impregnadas con suberina. De este modo ofrece protección mecánica, y
al mismo tiempo, constituye un buen aislador térmico ya que sus cavidades celulares
(lumen) están llenas de aire. El súber junto con el cámbium suberoso y el floema
constituyen la corteza del tronco.

EPIDERMIS.

La Epidermis es la capa más superficial de la piel y como indica su nombre se localiza por
encima de la dermis.

La epidermis es el revestimiento superficial del cuerpo, cubriéndolo prácticamente en su


totalidad, exceptuando los orificios y las mucosas en donde continua con un tejido de
revestimiento denominado epitelio.

Desde el punto de vista microscópico está conformada por células aplanadas que se
disponen en forma de capas, de las cuales se distinguen dos principalmente, una capa
interna o profunda constituida por células activas en constante replicación y una capa
externa formada por células muertas. Las células se multiplican en la capa más profunda de
la epidermis y a partir de allí pasan a capas más superficiales, en la medida que las células
alcanzan el exterior se van llenando de queratina hasta que la capa más superficial o estrato
córneo consta solo de células sin organelas en las cuales todo el espacio se encuentra
ocupado solo por queratina. En este proceso de transformación las uniones entre las células
se van debilitando lo cual favorece que se desprendan descamándose y dando paso a nuevas
células de las capas más profundas.

La epidermis tiene variaciones de grosor dependiendo de su localización, a nivel de la


palma de las manos y la planta de los pies alcanza sus máximas dimensiones para permitir
una mayor protección de estas zonas, en áreas como alrededor de los ojos tiene un menor
espesor.

La epidermis carece de vasos sanguíneos, pero es rica en terminaciones nerviosas lo cual le


brinda una gran sensibilidad. En su capa más profunda se encuentran unas células llamadas
melanocitos que tienen como función producir un pigmento llamado Melanina el cual le
brinda su color a la piel. La Melanina es producida en respuesta a la exposición a la luz
solar, especialmente las radiaciones ultravioletas, su función es actuar como una barrera
que no permita el paso de estas radiaciones a la piel, a mayor exposición a la luz solar habrá
una mayor producción de melanina lo cual producirá una pigmentación u oscurecimiento de
la piel.

En la enfermedad conocida como Albinismo hay un defecto congénito que lleva a que no se
produzca la melanina por lo que la piel, el cabello y el iris de los ojos son de color muy
claro, también es posible que ocurra la destrucción de los melanocitos mediada por el
sistema inmune llevando a la despigmentación de la piel lo cual origina el trastorno
conocido como Vitíligo

XILEMA.

Se denomina xilema al conjunto de los vasos leñosos de las plantas a través de los cuales
pasa la savia bruta. Es decir, el xilema, es un tejido de tipo conductor que se ocupa
especialmente del transporte de las materias primas absorbidas por la raíz de una planta,
hasta los órganos productores que son las hojas. Como consecuencia, el transporte resulta
ser ascendente, sube desde la raíz hasta llegar a las hojas.

La energía para efectuar el mencionado transporte se produce por dos fenómenos físicos:
osmosis (desplaza hacia arriba el agua acumulada en la raíz gracias a la diferencia que
existe entre el potencial soluble correspondiente al tejido radical y la humedad del suelo) y
succión (atrae hacia las hojas el agua contenida en el tejido vascular con la misión de
compensar la pérdida de agua que hay por la transpiración de las hojas).
Aunque, la mencionada, no es la única tarea de la cual se ocupa el xilema, ya que también
participa en la conducción de minerales, en la reserva de nutrientes y en el soporte.

Respecto de su conformación se trata de un tejido complejo formado por varios tipos de


células como ser: elementos conductores (se ocupan del transporte), los vasos xilemáticos y
las traqueidas. Las mencionadas células provienen de un meristemo lateral.

Por su lado, los vasos xilemáticos están compuestos por células dispuestas en columnas y
que reabsorben las paredes comunes. Durante la madurez permanecen muertas, por lo cual
el contenido celular desaparece de manera tal que el vaso xilemático constituirá un tubo
hueco. Este tipo de células presentarán pared secundaria en los casos en que los vasos se
encuentren en órganos maduros, en el resto, la pared secundaria se presentará incompleta.

Por otra parte, las traqueidas, son células conductoras que aparecen en angiospermas y
gimnospermas. Su forma es alargada acabada en punta con forma fusiforme y pared
secundaria. Su diámetro es menor al del vaso xilemático y las fibras no reabsorberán sus
paredes comunes, en cambio, se comunicarán a través de punteaduras. Por esto es que su
capacidad de transporte será menor a la de los vasos xilemáticos.

Sección transversal esquemática de una hoja. El xilema está conformado por los círculos
rojos señalados con el número

El xilema (del griego clásico ξυλον, "madera"), también conocido como leña o madera, se
reconoce como un tejido vegetal lignificado de conducción que transporta líquidos de una
parte a otra de las plantas vasculares.

Transporta agua, sales minerales y otros nutrientes desde la raíz hasta las hojas de las
plantas. La sustancia transportada se denomina savia bruta. Junto con el floema, forma una
red continua que se extiende a lo largo de la planta.

Consta de varios tipos de células tubulares, caracterizadas por la presencia de una pared
celular secundaria y la desaparición de los protoplastos durante el desarrollo.

FLOEMA.

. El floema está íntimamente asociado al xilema, formando el sistema vascular de la planta.

El floema es el tejido conductor encargado del transporte de nutrientes orgánicos,


especialmente azúcares, producidos por la parte aérea fotosintética y autótrofa, hacia las
partes basales subterráneas, no fotosintéticas, heterótrofas de las plantas vasculares.

El término floema fue acuñado por Nageli en 1858; deriva del griego "phloios" que
significa corteza. También se usan para designarlo los términos líber, leptoma, tejido
criboso.
Leptoma es un término debido a Haberlandt y corresponde a las células del floema con
paredes primarias: elementos cribosos, células acompañantes y células parenquimáticas; se
le contrapone el término "hadroma" para las células conductoras del xilema.

Se diferencia en protofloema y metafloema. El primero madura en las partes de la planta


que aún están creciendo en extensión, y sus elementos cribosos pronto se vuelven inactivos.
El metafloema se diferencia más tarde, completa su maduración después que el órgano ha
terminado su crecimiento en longitud. En las plantas que no poseen crecimiento secundario,
constituye el floema funcional de los órganos adultos.

LA SEMILLA Y EL EMBRION.

La semilla

La semilla deriva del óvulo fecundado y, a su madurez, contiene el embrión y las sustancias
de reserva (ver fecundación en plantas), rodeadas por una pared denominada tegumento
seminal o episperma. Este tegumento posee dos capas llamadas testa (la más externa) y
tegmen (la capa interna) que son derivadas de las capas que componen el tegumento de
óvulo (primina y secundina). La testa, derivada de la primina es casi siempre dura y
resistente, y el tegmen, derivado de la secundina, es mucho más delgado.

La función del tegumento es proteger al embrión y las sustancias de reserva, pudiendo


experimentar a veces algunas modificaciones que facilitan la dispersión de la semilla, como
por ejemplo formaciones aladas, presencia de pelos, etc.

El endosperma, tejido cuya función es acumular las reservas seminales (sustancias


nutritivas para el embrión), se origina por la fusión de los núcleos polares del óvulo con una
de las gametas masculinas. Puede persistir en la semilla madura o ser absorbido pronto por
el embrión en crecimiento, acumulando este último las sustancias de reserva. En el caso de
acumularse las reservas en el endosperma o albumen, las semillas se llaman endospermadas
o albuminadas. Si lo hacen en el embrión, por lo común en los cotiledones, se denominan
exendospermadas o exalbuminadas.

Las formas, tamaños y colores de las semillas de distintas especies son sumamente
variables, teniendo esto un valor sistemático en la clasificación de las plantas. Algunas
semillas, como las de las orquídeas y amapolas, pesan apenas fracción de miligramos,
mientras que las de algunas palmeras llegan a pesar varios kilogramos.

El embrión

Después de la fecundación (ver reproducción en plantas), la cigota se divide mitóticamente


para generar el embrión, que está contenido en la semilla junto con la sustancia de reserva o
endosperma.
En el embrión pueden reconocerse diferentes estructuras, algunas de las cuales van a dar
lugar a las distintas partes de la planta adulta. Así, podemos encontrar la plúmula o gémula
que producirá las primeras hojas; la radícula, que formará la raíz primaria y el talluelo que
dará origen al tallo de la plántula. Por otro lado, el embrión posee uno o varios apéndices
laterales llamados cotiledones, que son hojas modificadas. Estas estructuras están
relacionadas con la nutrición del embrión dentro de la semilla y, en algunos casos, tienen la
función de realizar fotosíntesis para alimentar a la planta una vez que germina hasta que las
primeras hojas puedan sostener su desarrollo. La unión entre el embrión y los cotiledones
se da por el nudo cotiledonal.

LA RAIZ.

La raíz es el primer órgano embrionario que se desarrolla durante la germinación de la


semilla; se distingue primero con una porción poco diferenciada que constituye la radícula,
esta al desarrollarse llega a constituir la raíz primaria con su tejido de protección en la punta
denominado cofia o caliptra. La raíz como órgano de las plantas vasculares (con excepción
de las Psilofitas), generalmente crece hacia el interior del suelo por presentar geotropismo
positivo y fototropismo negativo. La raíz en conjunto con el tallo constituyen el eje
principal de las plantas, entre ellos no existe una separación clara ya que ambos tienen un
cilindro de tejido vascular incluido en el tejido fundamental; sin embargo, la estructura de
la raíz tiende a ser más simple que la del tallo debido a su hábitat subterráneo. Las
características que la diferencian del tallo son la ausencia de clorofila, yemas, nudos, entre
otros; sin embargo hay excepciones como las raíces adventicias del maíz que sí llegan a
formar pequeñas cantidades de clorofila y raíces que poseen yemas adventicias como
camote, manzano y algunos rosales.

Sus funciones principales son la de absorción de agua y sales minerales del suelo por medio
de los pelos absorbentes, hasta la raíz donde son conducidos (savia bruta) hacia el tallo y
hojas donde se transforman en compuestos orgánicos durante la fotosíntesis. Además las
raíces fijan a las plantas al suelo por medio de resistencia al doblez. Las raíces de muchas
especies vegetales pueden realizar funciones de almacén de reservas alimenticias, por
ejemplo: camote, jícama, remolacha, papa, mandioca y muchas otras, las cuales se
aprovechan para la alimentación humana.

Las raíces pueden ser primarias, secundarias y adventicias. Existen algunas excepciones
dado que algunas raíces pueden ser epigeas (que se encuentran sobre el suelo) o aéreas (que
están muy por encima del suelo o encima del agua). También existen excepciones con el
tallo, dado que en algunas plantas los tallos crecen debajo del suelo. Esos tallos son
llamados rizoma.

PARTES DE LA RAIZ.
1. Cuello

Zona de separación entre el tallo y la raíz, forma la estructura de la raíz; en ella se produce
la transformación de la estructura radical (raíz) en caulinar.

2. Cuerpo

Se encuentra entre el cuello y la cofia.

Comprende 3 zonas:

a) Zona suberificada

De aspecto fibroso y duro. No hay permeabilidad del agua. Función: Fijación de la planta.

b) Zona Pilífera

Se encuentra entre zona suberificada y denuda.

c) Zona de crecimiento

Se ubica sobre la cofia y carece de pelos absorbentes.

3. Cofia (Pilorriza, caliptra, catistrofano o casquete)

– Tiene forma de dedo cubriendo al cono vegetativo.

– Cubierto de células epidérmicas.

– Se destruye externamente en forma constante y se renueva internamente.

– Cuando la raíz termina de crecer tiende a suberificarse

TIPOS DE RAIZ.

Raíz axonomorfa: esta está compuesta por una raíz que contiene mayor espesor,
considerada la principal, y otras que salen de ella y que se caracterizan por ser más
delgadas.

Raíz axonomorfa

Raíz fasciculada: estas, a diferencia de las anteriores, carecen de una raíz principal, sino
que todas poseen un espesor similar.

Raíz fasciculada

Raíz napiforme: en estas también se desarrolla una raíz principal, cuya función es la de
almacenar sustancias de reserva.
Raíz napiforme

Raíz ramificada: poseen una estructura similar a la del árbol, aunque carecen de raíz
principal.

Raíz ramificada

Raíz tuberosa: estas raíces contienen una estructura fasciculada que, tras la acumulación de
las sustancias de reserva, se ensanchan de manera significativa.

Raíz tuberosa

Dentro de aquellas raíces que no se introducen en el suelo, existen los siguientes tipos:

Adventicias: este tipo de raíces son utilizadas por ciertas especies de plantas para lograr
treparse o extenderse a lo largo de la superficie del suelo.

raices Adventicias

Acuáticas: estas raíces son propias de las plantas acuáticas y permanecen dentro del agua,
flotando, sin sujetarse a nada.

raices Acuáticas

Chupadoras: este tipo de raíces son propias de las plantas conocidas bajo el nombre de
parásitas, ya que introducen sus raíces dentro de otras plantas o vegetales y succionan o
“chupan” de estos su sabia.

raices Chupadoras

Contráctiles: estas raíces son largas, turgentes, carnosas y adventicias. Arrastran el brote de
la planta debajo o cerca de la superficie del suelo a una distancia tal que permita el
desarrollo del mismo. Luego de tres años, estas raíces se acortan hasta un 40% ya que sus
reservas se consumen.

raices Contráctiles

Zancos: estas raíces de desarrollan en el tallo, más precisamente en su base y desde allí se
extienden hacia el suelo para hacer de soporte. Las raíces de esta clase se presentan en
árboles altos en inestables, ubicados en suelos no muy profundos y suaves.

EL TALLO.

En botánica, el tallo es el eje de la parte generalmente aérea de las cormófitas y es el órgano


que sostiene a las hojas, flores y frutos. Sus funciones principales son las de sostén y de
transporte de fotosintatos (carbohidratos y otros compuestos que se producen durante la
fotosíntesis) entre las raíces y las hojas.
Se diferencia de la raíz por la presencia de nudos en los que se insertan las yemas axilares y
las hojas y por su geotropismo negativo, es decir, que crecen en contra de la fuerza de
gravedad. Entre los cormófitos existen especies con un solo tallo cuyo vástago no se
ramifica y plantas con muchos tallos (pluricaules) cuyo vástago se ramifica de diversos
modos de acuerdo a la actividad de los meristemos.

Desde el punto de vista de la Anatomía, el tallo está constituido por tres sistemas de tejidos:
el dérmico, el fundamental y el vascular o fascicular. Las variaciones en la estructura de los
tallos de diferentes especies y de los taxones mayores se basan principalmente en las
diferencias en la distribución relativa de los tejidos fundamental y vascular. El crecimiento
en longitud del tallo se debe a la actividad de los meristemas apicales y al alargamiento
subsecuente de los entrenudos y se denomina crecimiento primario. El crecimiento
secundario se caracteriza por el aumento del grosor del tallo y es el resultado de la actividad
de los denominados meristemas secundarios (cámbium y felógeno). Este tipo de
crecimiento es característico de las gimnospermas y la mayoría de las eudicotiledóneas
arbóreas y arbustivas y da como resultado la producción de madera.

Los tallos se clasifican desde diversos puntos de vista, los cuales van desde la consistencia
hasta las modificaciones que pudieran presentar para adaptarse a diferentes ambientes. Tal
diversidad es la base de la gran cantidad de aplicaciones económicas que tienen los tallos,
desde la alimenticia hasta las más variadas industrias.

PARTES DEL TALLO.

Cuello.- Línea imaginaria que separa el tallo de la raíz.

Cuerpo.- Es la zona mas desarrollada, se ubica entre el cuello y el cono vegetativo, aquí se
originan las ramas, también se le llama tallo principal o eje caulinar. Presenta las siguientes
partes:

a) Nudos.- Son partes engrosadas que se encuentran de trecho en trecho que originan a las
hojas.

b) Entrenudos.– Espacios comprendidos entre dos nudos consecutivos.

c) Ápice Vegetativo o Punto vegetativo.- Se ubica en el extremo del tallo, presenta células
meristemáticas que se dividen constantemente, este está protegido por un conjunto de hojas
constituyendo la yema terminal.

Yemas.- son estructuras de forma ovoide, protegidas por hojitas modificadas. Poseen
células que se reproducen activamente generando el crecimiento del tallo. Se clasificar en:

Yemas terminales o punto vegetativo Se hallan en el extremo superior del tallo.

Yemas laterales.- Se hallan en los nudos determinando el crecimiento de ramas y hojas.


Yemas Adventicias.- Son aquellas que se encuentran en cualquier órgano vegetal, por lo
que originan:

Yemas florales.- Originan flores (floríferas).

Yemas folíferas.- Originan hojas.

Yemas mixtas.- Originan hojas y flores.

ATRIBUTOS DEL TALLO.

El enfoque funcional, por su parte, se centra en el análisis de ciertos atributos de las plantas,
tanto aéreos, por ejemplo, hojas, semillas y tallo, como subterráneos, la raíz. “Los estudios
que relacionan el comportamiento de las plantas ante episodios climáticos extremos, como
eventos de intensa sequía, están centrados mayoritariamente en el análisis de rasgos aéreos
de la planta, siendo muy escasos aquellos que consideran también su sistema radicular”,
explica uno de los coautores de esta investigación, Ignacio Pérez Ramos, del Instituto de
Recursos Naturales y Agrobiología, centro adscrito al CSIC.

Los científicos aplicaron ambas aproximaciones, funcional y demográfica, al estudio de los


cambios acaecidos en una comunidad de matorrales del Parque Natural de Doñana en
respuesta a un evento climático que se produjo en 2005. “Ese año se registraron
temperaturas muy bajas en invierno y precipitaciones muy por debajo de la media. Estas
dos situaciones de estrés climático afectaron de manera dramática a la vegetación del
ecosistema de Monte Blanco de Doñana, a pesar de tratarse de matorrales especialmente
adaptados a la sequía”, indica el investigador.

LA HOJA

La hoja (del latín fŏlĭum, fŏlĭi) es el órgano vegetativo y generalmente aplanado de las
plantas vasculares, especializado principalmente para realizar la fotosíntesis. La morfología
y la anatomía de los tallos y de las hojas están estrechamente relacionadas y, en conjunto,
ambos órganos constituyen el vástago de la planta. Las hojas típicas —también llamadas
nomófilos— no son las únicas que se desarrollan durante el ciclo de vida de una planta.
Desde la germinación se suceden distintos tipos de hojas —cotiledones, hojas primordiales,
prófilos, brácteas y antófilos en las flores— con formas y funciones muy diferentes entre sí.
Un nomófilo consta usualmente de una lámina aplanada, de un tallo corto —el pecíolo—
que une la lámina al tallo y, en su base, de un par de apéndices —las estípulas—. La
presencia o ausencia de estos elementos y la extrema diversidad de formas de cada uno de
ellos ha generado un rico vocabulario para categorizar la multiplicidad de tipos de hojas
que presentan las plantas vasculares, cuya descripción se denomina morfología foliar.1

En las pteridófitas más primitivas las «hojas» son reducidas, no presentan haces vasculares
y se denominan microfilos. Las «hojas» vascularizadas, los megafilos o frondes, son
características de las pteridófitas modernas, son más desarrolladas y poseen haces
vasculares.2 Muchas gimnospermas presentan un tipo de hoja sumamente característica, la
hoja acicular, cuya lámina es una aguja verde, recorrida por una sola vena y terminada en
una punta aguda.3 La mayoría de las monocotiledóneas tienen hojas con un aspecto
característico. Son generalmente enteras, con venación paralela, y la vaina está siempre
bien desarrollada.4 Las dicotiledóneas usualmente presentan hojas con limbo foliar, pueden
ser pecioladas o sésiles (no presentan peciolo) y la base foliar puede ser estipulada o no. En
este grupo de plantas puede haber hojas simples o compuestas. En el primer caso la hoja
puede ser entera, hendida o lobada, partida o sectada. En el caso de presentar hoja
compuesta, la lámina foliar está dividida en varias subunidades llamadas folíolos, los que se
hallan articulados sobre el raquis de la hoja o sobre las divisiones del mismo. Cuando hay
más de tres folíolos y según la disposición que adopten los mismos, la hoja puede ser
pinnada cuando las subunidades o pinnas se hallan dispuestas a lo largo de un eje o raquis.
Cuando las subunidades o folíolos se encuentran insertos en el extremo del raquis las hojas
se llaman palmaticompuestas.

PARTES DE LA HOJA.

Lámina o Limbo: es la parte plana, delgada y ensanchada de la hoja. Posee dos caras, una
superior llamada haz y una inferior llamada envés. El limbo está surcado por una serie de
líneas o cordones, llamadas nervaduras o nervios, cuya función es aportar la savia y retirar
la elaborada.

Pecíolo: es el cabito, en general delgado y de color verde, que une el limbo al tallo por
medio de un ensanchamiento llamado vaina. Su haz suele ser plano o cóncavo, mientras
que su envés suele ser convexo. Su función es la de acomodar el limbo a la luz solar y
permitir la conducción de la savia por los vasos conductores que la recorren, hacia el limbo.
A veces el pecíolo y la vaina pueden faltar en la hoja.

Estípulas: son los apéndices similares a hojas que se ubican a ambos lados de la base de la
hoja. Pueden adquirir diversas formas, desde órganos foliáceos, espinas, glándulas, pelos o
hasta escamas.

FILOTAXIA.

Es la disposición de las hojas sobre el tallo. Está íntimamente ligada a la estructura primaria
del tallo: el número de haces vasculares que posee el tallo está determinado por la filotaxis,
cuanto más densa es la misma, mayor será el número de haces caulinares.

El estudio de la filotaxis puede hacerse de dos maneras: estudiando el arreglo de las hojas a
lo largo del tallo ya desarrollado, o estudiando un corte transversal de una yema, donde se
puede analizar la situación respectiva de varias hojas jóvenes.
Las relaciones de las hojas entre sí se representan en los diagramas foliares: el centro es el
ápice caulinar, los primordios dibujados más cerca son los más jóvenes, los más lejanos son
las hojas más desarrolladas.

Cada nudo es una circunferencia, las hojas de un verticilo se representan en la misma


circunferencia. La mediana de cada hoja es un plano imaginario determinado por el eje
caulinar y la línea media de cada hoja

TIPOS DE HOJAS.

Hoja lisa

Es el borde de las hojas que no está dentado sino que es una superficie continua y lisa
alrededor de toda la planta.

Hoja Aserrada

Aquella cuyo borde tiene dientes inclinados hacia su punta, como las de la violeta (en la
imagen, letra n). Es el tipo de hoja más común y este borde permite tener más superficie en
contacto con el aire y mejorar la capacidad de fotosíntesis.

Hoja con borde dentado

Aquella cuyos bordes están festoneados de puntas rectas como la del castaño común.
Pueden ser hojas simples o compuestas como es el caso de la hoja de la imagen.

Hoja con borde Crenado

Las hojas de bordes crenados, lóbulos poco marcados, nervaduras palmadas que divergen a
partir del centro de la hoja, base dentada.

Hoja con borde Sinuoso

Son plantas con tronco y ramas sinuosas y a menudo con espinas. Las hojas grandes (de
entre 10 y 15 centímetros), ovales, con bordes ligeramente dentados.

Hoja con borde lobulado

Son hojas aserradas las que tienen pequeños dientes inclinados como una sierra. Sonhojas
lobuladas las que presentan entrantes y salientes redondeados.

Hoja digitada

La compuesta cuyas hojuelas nacen del peciolo común separándose como los dedos de la
mano abierta, como las del castaño de Indias.

Hoja cuneiforme
Aquella con forma de 'pico de pato', como las de algunas especies del género Pittosporum
como el P. tobira.

Hoja trasovada

La aovada más ancha por la punta que por la base como las del espino.

Hoja Venosa

La que tiene vasillos sobresalientes de su superficie que se extienden con sus


ramificaciones desde el nervio hasta los bordes como las del ciclamor.

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ATRIBUTOS DE LA HOJA.

Según los científicos, los episodios de clima extremos serán cada vez más frecuentes y de
mayor intensidad. En concreto, para las próximas décadas, los expertos prevén un aumento
de la temperatura, en torno a 2 o 3 ºC, y un descenso de las precipitaciones de un 30%.

Para predecir la respuesta de las comunidades de matorrales a alteraciones climáticas, los


investigadores comprobaron si los cambios detectados en la cobertura vegetal y el
reclutamiento de las diferentes especies, es decir, aquellas que llegan a la edad adulta, están
relacionados con ciertos atributos o rasgos de la planta, como las hojas, raíces, semillas y
tallos.

TIPOS DE APICES.

Agudo.

Subagudo.

Obtuso.

Redondeado.

Cuspídeo.

Acuminado.

Mucronado.

Aristado.

LA FLOR E INFLORESCENCIAS.
La etapa de floración se produce durante el segundo ciclo de crecimiento, una vez que se
elonga el tallo floral. Las flores son pequeñas, sésiles y de color verdoso; en los cultivares
de remolacha monogérmica, las flores se encuentran en forma solitaria; en tanto, que en los
cultivares de remolacha multigérmica, pueden presentarse solitarias o en grupos de dos a
cinco; en este último caso, las flores se presentan soldadas en sus bases conformando un
glomérulo (Figura 15).

Sección de una espiga de remolacha en la que es posible apreciar una sola flor y un
glomérulo compuesto por tres flores.

Las flores son perfectas, pero incompletas, ya que no presentan corola; el cáliz, en tanto,
tiene cinco sépalos soldados en la base. El androceo está compuesto por cinco estambres y
el gineceo por tres estilos que dan origen a un pistilo compuesto.

A pesar que las flores son perfectas, la polinización de la remolacha generalmente es


cruzada; esto, debido a que las plantas presentan dicogamia, lo que determina que los
órganos masculinos y femeninos maduren desfasadamente. La polinización es
principalmente anemófila y se prolonga durante toda la etapa de floración.

Las flores, ya sea solas o en grupos (glomérulos), se encuentran formando parte de espigas;
estas últimas pueden ubicarse en posición lateral o terminal dentro da cada inflorescencia
(Figura 16). Cabe destacar que en el caso de la remolacha, se habla de una inflorescencia
mixta, ya que tanto los glomérulos por un lado, como las espigas por otro, constituyen
inflorescencias.

TIPOS DE INFLORESCENCIAS.

Las flores pueden originarse de forma solitaria en el extremo de los tallos principales
(terminales) o en extremo de cortos tallos laterales que se originan en las axilas de las hojas
o se disponen de forma opuesta a ellas.

Sin embargo es muy frecuente que las flores se dispongan en ramificaciones especiales
diferentes de las partes vegetativas. Estos sistemas de ramificación, que a veces afectan a la
planta completa, se denominan inflorescencias ( o infrutescencias ) y muchas veces están
relacionados con la mejora de la capacidad de atracción de los polinizadores, la eficiencia
de intercambio de polen o la eficacia en la dispersión de los frutos.

En una inflorescencia las flores pueden estar sentadas sobre los tallos o sostenidas por un
tallo mas o menos largo y ramificado. Las ramificaciones primarias de los tallos que
forman la inflorescencia se denominan pedúnculos y las secundarias pedicelos. Junto a las
flores suelen desarrollarse algunas hojas modificadas que se llaman brácteas si se disponen
sobre el eje principal y bracteolas cuando lo hacen sobre los secundarios.
A las inflorescencias se les concede un importante valor taxonómico por lo que se han
hecho muchos intentos de sistematización. Sin embargo existe una enorme variabilidad,
multitud de formas intermedias y aproximaciones que obedecen a convergencias
adaptativas que muchas veces dificultan la correcta interpretación de los patrones de
construcción de la estructura.

Dejando de un lado las formas mas complejas se suelen hacer dos grandes grupos de
inflorescencias en función de que el eje principal termine en una flor y cese en su
crecimiento o, que por el contrario, permanezca creciendo de una forma mas o menos
indefinida.

En el primer caso la flor que remata el eje es la primera en madurar cerrando el crecimiento
de la rama. A esta le suceden en la secuencia de maduración de las ramas laterales que se
disponen alrededor de la principal. Este tipo de inflorescencias se denominan: definidas,
cerradas, centrífugas o cimosas ya que la inflorescencia mas sencilla de este tipo es la cima.

Cuando el eje principal no termina rápidamente en una flor sino que continúa creciendo y
produciendo nuevas flores, la secuencia de maduración se invierte y son las flores mas
antiguas, es decir las mas alejadas del extremo de crecimiento del eje, las primeras en
madurar. A estas inflorescencias se las llama: indefinidas, abiertas, centrípetas o racemosas
ya que se considera que el racimo es el prototipo de este grupo.

Las inflorescencias que solo tienen ramificaciones de primer orden se denominan simples y
compuestas las que tiene más de un orden de ramificación.

Algunos de los tipos mas frecuentes de inflorescencias son:

1) Inflorescencias Simples:

A) indefinidas, abiertas, centrípetas o racemosas: son aquellas en las que el eje principal no
produce rápidamente una flor, sino que continua creciendo de forma teóricamente
indefinida originando flores laterales.

Racimo: el eje principal con flores laterales, dispuestas a ambos lados, y pedunculadas.

Espiga: igual que racimo pero con flores sentadas (sin pedúnculo).

Amento o gatillo: similar a la espiga pero generalmente colgante y con flores unisexuales
(masculinas o femeninas).

Espiguilla: es la inflorescencia básica de las gramíneas, en ella las flores se acompañan de


un sistema especial de brácteas denominadas gluma y glumilla.

Espádice: es una especie de espiga con el eje principal carnoso, y protegido por una gran
bráctea (espata).
Umbela: eje principal de cuyo ápice nacen varias flores con pedúnculos de la misma
longitud que suelen llamarse radios.

Corimbo: las flores originadas a distinta distancia del ápice se sitúan aproximadamente la
misma altura para ello los pedúnculos de la flores exteriores son más largos.

Capítulo o cabezuela: el eje principal ensanchado en cuyo extremo (receptáculo), nacen


flores casi sentadas rodeadas de brácteas (involucro), es como una umbela con las flores
sentadas en un tallo que se dilata en su extremo.

B) Definidas, cerradas, centrífugas o cimosas: son aquellas en las que el eje principal cesa
pronto en su crecimiento rematando en una flor mientras el desarrollo de la estructura
continua por medio de brotes laterales originados por debajo de ella.

Dicasio: debajo de la flor terminal, nacen dos flores pedunculadas opuestas.

Cima dicótoma: cuando por debajo de la flor terminal brotan más de dos ejes laterales.

Cima unípara o monocasio: cuando por debajo de la flor terminal sólo brota un eje lateral.

Cima unípara helicoidea o cincino: cima unípara en la que los ejes laterales van alternando
en dos direcciones opuestas.

Cima escorpioide o bóstrice: cima unípara en la que la ramificación lateral se produce


siempre en la misma dirección.

2) Inflorescencias Compuestas:

Panícula o panoja: el eje principal se ramifica una o más veces y puede sostener racimos,
umbelas, corimbos o espigas.

Umbela de umbelas: es mucho mas frecuente que la umbela simple.

Tirso: formado por un eje principal de crecimiento indefinido que produce lateralmente
ramas con estructura de cimas.

3) Inflorescencias especiales

Verticilastro: Conjuntos de cimas contraídas que se originan a lo largo de un tallo


recordando por su disposición a un verticilos.

Ciatio: inflorescencia formada por una flor central femenina, desnuda y largamente
pedunculada, rodeada de flores masculinas constituidas por un sólo estambre.

PARTES DE LA FLOR.
Las flores son importantes en la fabricación de semillas. Las flores se componen de
diversas partes, pero hay algunas partes que son básicas. Entre las partes principales de la
flor está la parte masculina llamada estambre y la parte femenina llamada pistilo.

El estambre tiene dos partes: antera y filamento. Las anteras llevan el polen, que
generalmente es de color amarillo. Las anteras son sostenidas por hilos llamados
filamentos.

El pistilo tiene tres partes: estigma, estilo, y ovario. El estigma es la superficie pegajosa en
el tope del pistilo; el cual atrapa y sostiene el polen. El estilo es como la estructura de un
tubo que sostiene el estigma. El estilo conduce hacia abajo donde está el ovario que
contiene los óvulos.

Otras partes de la flor que son importantes son los pétalos y los sépalos. Los pétalos atraen
polinizadores y generalmente son la razón por la que compramos y disfrutamos las flores.
Los sépalos son como pétalos verdes en la base de la flor. Los sépalos ayudan a proteger el
brote que comienza a salir.

Las flores pueden tener todas las partes masculinas, todas las femeninas, o una
combinación. Las flores con todas las partes masculinas, o todas femeninas son llamadas
imperfectas, tales como: (los pepinos, calabaza y melones.) Las flores que tienen partes
masculinas y femeninas se llaman perfectas (las rosas, lirios, diente de león.)

SEXO.

La sexualidad de las plantas es un gran ejemplo de evolución y equilibrio, ya que durante


siglos las plantas han conseguido adaptarse con sistemas reproductivos cada vez más
eficaces. En realidad, su sistema reproductivo no difiere mucho del nuestro, a no ser claro
por la participación de un “transportista” de otra especie...

Los métodos reproductivos de las plantas son variados y complejos y han ido
evolucionando y adaptándose a lo largo de los años. Para resumir, crearemos dos grandes
grupos (aunque la clasificación real es mucho más extensa y compleja), el de las plantas de
reproducción asexual y plantas de reproducción sexual.

> Las plantas asexuales son por ejemplo los hongos, algas o tubérculos, que se reproducen
por división celular, por mediación del agual, partición del tallo, división del tubérculo,
bulbos o por esporas (patatas, ajos, musgos, helechos, chufa, cebolla, tulipán, lirios,
gramíneas...). Estas plantas fueron las primeras en poblar la Tierra y se suelen denominar
“plantas inferiores”.

> Las plantas sexuales se reproducen mediante las flores. Al grupo de plantas floradas que
se reproducen con frutos y semillas se les denomina angiospermas, y pueden ser tanto
plantas como árboles. La mayoría de las plantas que pueblan la Tierra pertenecen a este
grupo, es decir, la mayoría de las plantas se reproducen mediante flores.

Las flores son los órganos reproductivos de la mayoría de las plantas. Existen plantas que
solo cuentan con flores de un solo sexo en cada ejemplar (dióicas) y otras que en un mismo
ejemplar contiene flores masculinas y flores femeninas, pero la gran mayoría de las plantas
con flores (el 70% aprox.) contienen flores hermafroditas, es decir, en la misma flor se
encuentran los órganos femeninos y los órganos masculinos. Los órganos femeninos de la
flor se agrupan en el Gineceo, compuesto.

SIMETRIA.

Se denomina simetría a la repetición regular de elementos estructurales similares o iguales


que ocurre en los órganos.

Las flores acíclicas son asimétricas o irregulares porque no tienen ningún plano de simetría.
Ej.: Liriodendron.

radiadas, actinomorfas o polisimétricas: cuando presentan 3 o más planos de simetría con


respecto al eje. Ej.: Hoya, Tulipa .

zigomorfas, dorsiventrales o monosimétricas: cuando tienen un solo plano de simetría, y


cada mitad es la imagen especular de la otra. Esta estructura está con frecuencia en relación
con la formación de un lugar de apoyo para posarse los animales polinizadores. Ej.:
leguminosas, bignoniáceas.

El pedicelo o el ovario pueden torcerse 180°, invirtiendo la flor. Este fenómeno se


denomina resupinación. Ocurre en varios grupos y prevalece en las orquídeas, en las
cuales el labelo con frecuencia presenta un espolón.

secundariamente asimétricas, sin planos de simetría por reducción (pérdida) de piezas, o


cambios de posición (Canna, Marantha).

Está relacionada con los verticilos reproductivos presentes en la flor. Las variantes

Flor monoclina, perfecta, hermafrodita o bisexual: tiene androceo y gineceo. Ej.:

Flor diclina, imperfecta o unisexual: la flor tiene sólo un verticilo reproductivo, puede

Flor neutra: la flor no presenta verticilos reproductivos, sólo tiene perianto. Se encuentran
en la periferia de inflorescencias, ej. la hortensia (Hydrangea), y las flores liguladas de los
capítulos de muchas compuestas como el girasol, la margarita.

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