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HABITAR COMO FUNDAMENTO DE LA DISCIPLINA DE LA ARQUITECTURA

Habitar como fundamento de la disciplina


de la Ar
Arqquit ectur
ecturaa
uitectur
Alberto Saldarriaga Roa
Arquitecto, Profesor Titular
Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá.

¿Cuál es el fundamento de la arquitectura como disci- vida y una defensa contra el miedo a la muerte. La «habi-
plina? Una respuesta se encuentra al indagar en el «ha- tación» es un lugar íntimamente relacionado con la an-
bitar» como parte esencial de la vida humana en la Tie- gustia existencial del ser humano, es su alivio.
rra. Para el ser humano habitar sin arquitectura puede
llegar a ser imposible. Para la arquitectura es imposible Para el ser primitivo la conciencia de disponer de un lugar
desprenderse del sentido de habitar. protegido para la permanencia y el reposo se impuso gra-
dualmente sobre el deambular por el territorio a merced
Habitar es ocupar un territorio y vivir en el. Vivir quiere de contingencias y accidentes. El sedentario construyó
decir, exactamente, que se dispone de un lugar espe- su albergue en comunidad y la permanencia en un lugar
cialmente destinado para permanecer, para sentirse le permitió reflexionar sobre su condición y desarrollar
seguro, para preparar los alimentos, para guardar uten- todo aquello que le era posible. La «cultura» humana
silios y cosas, para procrear y criar nuevas generacio- surgió en el momento en que el ser arraigado en un lugar
nes de seres humanos. Habitar es afirmar la presencia expandió sus capacidades y obtuvo su subsistencia me-
de la vida en el territorio. diante el control del territorio y sus recursos. La aparición
de las formas urbanas llevaron la humanidad a otro esta-
Habitar en el mundo significa disponer de espacios y dio en el que el habitar se ofreció ya en un medio «artifi-
edificaciones construidas con el propósito explícito de cial» delimitado, ordenado, previsto para el trabajo, el in-
alojar seres humanos. Habitar y construir son, según tercambio, el culto y también para la guerra.
Martin Heidegger, dos fenómenos íntimamente relacio-
nados con la existencia humana. Como ya se dijo, para Heidegger, habitar es construir y
construir es habitar. La arquitectura, entendida como
Habitar parece ser una condición propia de la vida en el «construcción» es entonces «habitación» en el sentido
planeta, en todas sus formas. La planta se arraiga en el más amplio del término. Si se asumen estas proposicio-
suelo del cual obtiene nutrientes. El animal dispone de un nes como ciertas, habitar es entonces el fundamento de
territorio tan amplio como sus instintos y necesidades la arquitectura. ¿Qué representa este fundamento des-
demandan. Cada especie delimita un espacio vital en el de el punto de vista de la disciplina?
que habita. Algunas especies animales construyen sus
nidos o sus panales, cavan sus madrigueras o forman sus Habitar no es una acción o un evento. Según Heidegger,
montículos como espacios propios y exclusivos. Otras es la esencia del ser, es el «ser en el mundo». Vivir y
especies migran. Ninguna de ellas hace arquitectura. Para habitar son sinónimos en la existencia humana. La ar-
la humanidad habitar significa mucho más que para las quitectura, como simple práctica o como idea, es el
plantas o animales. La supervivencia y la reproducción instrumento del habitar. La práctica sencilla, que permi-
de la especie son instintos básicos compartidos con otras te obtener albergues básicos, puede verse como una
formas de vida. La conciencia de la muerte, del tiempo, primera forma de habitar. La disciplina, que deriva de la
de la vida misma le es propia. Habitar es asegurar super- vocación de habitar, parte de ese «construir» básico y
vivencia, continuidad y es también una afirmación de la se transforma en un construir reflexivo. Los saberes y

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VISTA Hábitat

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RE ALBERTO SALDARRIAGA ROA

prácticas que la componen existen en función de ese “urbanización” desmesurada. Es en ese hábitat donde
origen y se transforman a medida que la humanidad trabaja el arquitecto profesional.
alcanza estadios más y más complejos.
William Morris, en una de sus conferencias, dio una
La transformación de «habitar» en «hábitat» no es un definición de arquitectura que todavía conserva su vali-
puro juego de lenguaje. Aún cuando hábitat es un térmi- dez y aclara suficientemente su relación con el hábitat.
no de reciente aparición en el lenguaje del urbanismo y Dice así: «La arquitectura abarca todo el ambiente físi-
de la arquitectura, y es además prestado de la ecología, co que rodea la vida humana; no podemos sustraernos
ya es de uso común y se refiere a todo aquello que tiene a ella mientras formemos parte de la civilización, por-
que ver con los asentamientos humanos en la superfi- que la arquitectura es el conjunto de modificaciones y
cie terrestre. Hábitat, en su sentido más amplio, es todo alteraciones introducidas en la superficie terrestre, con
el territorio habitado por la humanidad. En un sentido el objeto de satisfacer las necesidades humanas, ex-
más restringido se usa para referirse a territorios pobla- ceptuando sólo el puro desierto.»
dos, a ciudades e incluso a la vivienda misma. El térmi-
no «entorno» es usado como equivalente de hábitat y se Es difícil encontrar otra definición de arquitectura que
refiere a un «ambiente», algo que rodea a algo. se acerque más al concepto contemporáneo de hábitat.
La cualidad visionaria de Morris le llevó a entender, más
Hábitat implica vivir en un lugar, entorno implica un ámbi- allá de su época, el significado profundo de una discipli-
to de circunstancias que hace parte de ese vivir. Habitar na que entonces era considerada más bien un arte de-
es estar «dentro de», entorno es «lo de afuera». El hábitat corativo que una acción determinante en la existencia
puede entenderse entonces como un objeto principal de humana. Hábitat puede hoy entenderse como «todo el
la disciplina de la arquitectura sólo si se entiende que ambiente físico que rodea la vida humana». No pode-
toda la arquitectura existe en función de habitar. ¿Es esto mos «sustraernos de él» por formar parte de la civiliza-
un ejercicio de retórica? ¿Es un argumento sustentado? ción y por ser uno de los medios indispensables para la
En principio, y en el reducido espacio de este escrito, es supervivencia. Las «modificaciones y alteraciones pro-
una hipótesis y como tal está sujeta a refutación. A primera ducidas sobre la superficie terrestre con el fin de satisfa-
vista parece sencillo demostrarla, pero pueden existir ar- cer las necesidades humanas» son todos los
gumentos que demuestren lo contrario. asentamientos rurales y urbanos, premodernos o mo-
dernos, antiguos y nuevos. La excepción hecha por
Si se asume literalmente la tesis de Heidegger que iguala Morris del «puro desierto» ya no es válida, pues el de-
habitar con construir, se puede pensar que es a través sierto ya es parte de la superficie habitable del planeta,
de la construcción como se realiza la existencia huma- en tanto la tecnología puede proporcionar medios para
na en el mundo. Este argumento, de orden filosófico, sobrevivir en su árida inhabitabilidad.
tiende a mostrar la integralidad entre construir y existir
para el ser humano. Exagerando el argumento, se pue- ¿Cuál es el objeto de la arquitectura? Morris lo dice muy
de decir que el ser humano no puede existir sin cons- bien: son «todas las modificaciones y alteraciones» que se
truir. ¿Que pasa entonces con los grupos nómades que requieren para habitar, desde los más sencillos senderos
deambulan por los territorios sin requerir, aparentemen- en la selva hasta las complejas redes viales de las
te, de construcciones permanentes? En esos grupos se megalópolis y desde la «cabaña primitiva» hasta los enor-
encuentran casos como el de las tiendas beduinas del mes conjuntos habitacionales urbanos. A través del tiempo
desierto del Sahara y el de los albergues temporales de la simple «arquitectura» se ha convertido, ella misma, en
los Nukak en la Amazonía colombiana, en los que el un complejo sistema de especialidades y subespecialidades
nomadismo pone de manifiesto un sentido, entre ele- que abarcan desde el ordenamiento espacial de grandes
mental y refinado, del construir. El «albergue» no re- territorios hasta el diseño de espacios mínimos o de «pe-
quiere ser duradero, no requiere ser eterno. Es un gesto queño formato» como hoy se reconocen. Las modificacio-
en el paisaje que lo hace «habitable». Si bien es intere- nes y alteraciones de Morris son hoy grandes
sante analizar estos casos, es igualmente necesario «megaproyectos» o esquemáticos «minimalismos». Todo
pensar que la humanidad ha optado por modos de vida ello está regido por un principio básico, el de habitar, y por
más estables y que el mundo tiende cada vez más a una una mentalidad ordenadora, la del arquitecto.

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pero la arquitectura, en la medida en que “construye”, es


la que dicta la palabra definitiva sobre aquello que se ha
de habitar. Su última palabra puede ser correcta o inco-
rrecta, el error proviene de los raciocinios que llevaron al
proyecto y de las deficiencias en la realización material.
Si la arquitectura se entiende como la disciplina del hábitat,
su obligación debe ser la del bienestar y no la de la degra-
dación de la vida humana. El objeto de la disciplina de la
medicina es, como ya se dijo, la salud humana a través
de reconocimiento y tratamiento de las enfermedades.
De la misma manera, el objeto de la arquitectura debe
ser el hábitat del bienestar, a través de reconocimiento y
tratamiento de los problemas que lo pueden afectar. El
objetivo de la medicina, como disciplina, al menos en
teoría, es el de aumentar el número de personas saluda-
bles, no el de personas enfermas. El objetivo de la disci-
plina de la arquitectura debe ser, al menos en teoría, el de
aumentar el número de personas en buenas condiciones
de habitabilidad, no el del número de habitantes con pro-
blemas de habitación.
Erhard Reeuwich. Vista de Viena (detalle). París, Biblioteca Nacional.
El conjunto de saberes y prácticas que forman hoy la
disciplina de la arquitectura: representar, proyectar, cons-
Habitar es arte, ciencia y técnica a la vez. Es arte en cuan- truir y pensar, tienen como origen más remoto el habitar.
to permite representar estéticamente la existencia huma- La representación, entendida como la construcción
na. Es ciencia, en cuanto, como dimensión de la con- mental del mundo material, se traslada al proyecto como
ciencia, exige el ejercicio del análisis y de la lógica apli- representación del mundo deseado, el cual se ha de
cado a las necesidades de supervivencia y convivencia. Y construir para ser habitado, todo esto orientado por la
es técnica en cuanto es construcción material, espacio idea misma de habitar. Ese origen subyacente en el «ha-
físico. El arte de habitar no es un problema de buenas cer arquitectura» se maneja, de un modo u otro, en cual-
costumbres o de “gente bien”, es la posibilidad de llevar a quier tipo de tarea que tenga que ver con el proyecto y la
representaciones configuradas estéticamente, la presen- construcción -o reconstrucción- del mundo habitable.
cia humana en la Tierra. La ciencia de habitar originada Esto quiere decir, en pocas palabras, que el habitar es al
en las simples intuiciones ambientales de los primeros fin mismo de la enseñanza de la arquitectura, sea ello
humanos es hoy un complejo sistema de análisis y opera- explícito o implícito, sea voluntario o involuntario.
ciones lógicas para el ordenamiento del territorio y de la Ordenar un plan de estudios de la disciplina de la arqui-
ciudad. La técnica de habitar está presente en cualquier tectura tomando como base el hábitat exige, sin embar-
obra realizada, sea ella simple o compleja, tradicional o go, algunas variaciones sustanciales en la secuencia
moderna, convencional o experimental. La construcción de contenidos y en la manera como ellos se presentan
del hábitat ha pasado de ser asunto de pequeños grupos al estudiante. Siguiendo a Heidegger, representar y cons-
o comunidades a ser un enorme movimiento de recur- truir constituyen un binomio básico, esencial. Proyectar
sos, materiales, técnicas, instrumentos y personas. Todo y pensar son labores de personas que han entendido,
el mundo está comprometido, de un modo u otro, en la primero, de que trata la arquitectura. La mirada
construcción del hábitat. Como dijo Morris, no podemos cognoscitiva al mundo habitado y el entendimiento de
prescindir de esa participación. su materialidad asumen singular importancia en los pri-
meros años. Las propuestas de intervención vienen lue-
Si se acepta lo anterior, se llega, quizá demasiado pronto, go de un proceso de maduración, en el que las ideas de
a concebir la arquitectura como la “disciplina del hábitat”. habitar y hábitat deben ser entendidas y vividas para ser
Tal vez no es la única, muchas otras deben intervenir, sustentos reales de proyectos que tengan sentido.

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RE PAULA PEYLOUBET

Hábitat popular
Mat er ialización de un paisa
erialización
Mater je social div
paisaje er
diver so
erso
Cultura de la Pluralidad. 1

Paula Peyloubet
Arquitecta, Magíster en Desarrollo Urbano, Investigadora del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas – CONICET- y del Centro
Experimental de la Vivienda Económica –CEVE-. Docente de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño Universidad Nacional de Córdoba.
Doctorando de la Universidad Nacional de Tucumán. Colaboradores: Arquitecto Germán Augusto Barea, Maestrando de la Carrera de Arquitectura
Paisajista, Facultad de Arquitectura Universidad Católica de Córdoba. Becario Doctoral de CONICET- CEVE. Tomás Arturo O´Neill, Tesista de Grado,
Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño Universidad Nacional de Córdoba, Pasante de CONICET- CEVE.

Resumen Palabras claves


En este artículo se presenta un enfoque alternativo acer- Cultura Popular – Cultura Autónoma – Diversidad Cultu-
ca del valor patrimonial del hábitat popular. Se conside- ral – Sociología – Antropología.
ra su producción como un valor en sí mismo, intangible,
donde se expresa el acervo cultural de los diversos pue- Presentación ideológica del Tema
blos que componen el hábitat popular materializado en Problema
arquitectura de alto contenido simbólico. Se construyen
los argumentos de este enfoque a partir de concepcio- “Hasta los desperdicios del amor triste de
nes sociológicas y antropológicas que dilucidan la se- las ciudades nos llegaron en la hojarasca
miótica de ésta expresión física tan singular y siempre y construyeron pequeñas casas de made-
presente en nuestra ciudad latinoamericana. ra, e hicieron primero un rincón donde
medio catre era el sombrío hogar para una
Abstract noche, y después una ruidosa calle clan-
destina, y después todo un pueblo de tole-
In this article appears an alternative approach to the pa- rancia dentro del pueblo. Macondo, 1909.”
trimonial value of the popular habitat. Its production is (G. García Márquez, 1971: 10)
considered a value in itself, intangible, where the cultu-
ral heap of the diverse towns that compose the popular ¿Qué compartimos nosotros, quienes habitamos el
habitat is expressed materialized in architecture of high mundo del pensamiento y la acción, que explique la
symbolic content. The arguments of this approach are relativa plenitud de nuestra comunicación y la relativa
constructed from sociological and anthropological unanimidad de nuestros juicios profesionales?
conceptions that explain the semiotics of this physical Tal vez compartimos el compromiso por construir una
expression that is so singular and always present in our nueva base teórica que permita un cambio en la per-
Latin American city. cepción del avance de la ciencia que no precisamente

1
Este artículo se basa en dos ponencias que expuso la autora en: la XII Conferencia Internacional sobre la Conservación de Centros
Históricos y Patrimonio Edificado Iberoamericano, organizado por la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño de la Universidad
Nacional de Córdoba en Noviembre de 2004, en la ciudad de Córdoba y en el V Seminario Hipótesis de Paisaje organizado por la
Facultad de Arquitectura de la Universidad Católica de Córdoba. Septiembre de 2005.

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es siempre acumulativa, sino como lo observa Kuhn de nuestra población ciudadana, constituye el reflejo
(1962 [1971: 23]), es posible que en la evolución de la físico más expresivo de dichos sectores.
ciencia misma en los conocimientos nuevos reempla-
cen a la ignorancia. Sin duda, también esta expresión física que manifiesta
claramente una situación económica, social y política,
Paradigmas es albergue de expresiones intangibles profundamente
humanas que constituyen la producción social del
Estamos frente a una novedosa voluntad por agregar hábitat, donde a la vez, se presentan en bocanadas una
nuevos temas y redefinir conceptos antiguos que expli- creatividad y un arte singulares, expresiones del sentir y
quen de otros modos una realidad, hasta el momento entender de estos grupos sociales.
poco interpretada: la cultura popular, sus procesos y pro-
ducción; proteger y conservar. Lejos de ser caótica e improvisada, esta forma de construir
la ciudad posee su propia lógica, su extensión nos demues-
En las ciudades modernas latinoamericanas, la produc- tra la coherencia desde la perspectiva de las necesidades
ción de hábitat en un 65% está en el borde exterior de lo y posibilidades concretas de pobladores que no pertene-
institucional, esto es construir y producir ciudad fuera de cen a los grupos dominantes de nuestras urbes.
las normas convencionales y los preparativos concientes
con que se intenta hacer la ciudad propia programada. Es completamente justo entonces, que se observe la
Pero reconozcamos finalmente que, aún con proble- producción, productos y procesos de los excluidos, con
mas, este sistema “al borde de lo institucional” (Gonzáles respeto y admiración hacia la evidencia de la arquitec-
Lobo 2003), de autoconstructores y autogestores, es la tura alcanzada con imaginación y creatividad, con más
solución y la atención más exitosa al problema de la voluntad que recursos, en medio de una realidad que
vivienda para sectores populares en nuestros países. nada los beneficia.

Esta construcción de ciudad informal, que Por encima de esto podemos descubrir también, y a
mancomunadamente van bordando grandes sectores favor de esta expresión urbana infaltable en cualquiera
Francesco Roselli. Vista de Florencia. Berlín - Dahlem, Staatliche Museen.

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de nuestras ciudades latinoamericanas, sean villas, gracia de las viviendas y paisajes callejeros es inexplicable
favelas, chabolas u otras, a los propios pobladores sin el arte de vivir de la gente...”, por lo tanto si se va a debatir
autoconstructores, que a diferencia de los académicos, sobre la conservación de centros históricos y patrimonio
que sólo ven lo que está ante sus ojos, pueden dilucidar, edificado Iberoamericano se aclara que se entenderá a
viendo ahí mismo, lo que va a ser en su proyecto imagi- estos en el marco de su principal patrimonio: la población.
nario y con sus esperanzas, demostrando en esencia
ser sujetos culturalmente tenaces. Ahora bien, el camino para una comprensión de la ciu-
dad y de su conservación se basa en el reconocimiento
Creo entonces, esto es lo que compartimos nosotros los de la diversidad de ésta como creación cultural y
que habitamos el mundo del pensamiento y la acción el participativa de los grupos heterogéneos que viven en
deseo por discutir, entender y prepararnos para los nue- ella y que expresan sus costumbres, modos de vivir, va-
vos temas y reconceptualizaciones necesarias que com- lores, en síntesis sus propias identidades.
prendan a nuestros pueblos integralmente su pasado,
presente y futuro como iberoamericanos comprometi- Partiendo de este enfoque basado en el reconocimien-
dos que somos. to de la diversidad cultural se debe considerar que parte
del patrimonio material, social, económico y cultural ha
“...cuando el tema se refiere a las ciuda- sido generado por los sectores populares que han
des, la problemática social ocupa un lugar autoconstruido con sus propias lógicas, reforzando sus
preponderante puesto que lo que se ha identidades, un sector del tejido urbano que representa
de preservar, transformar o destruir no sólo sus manifestaciones como sector social.
es fragmento del entorno construido, sino
fragmento del tejido social...” (Marina De allí que deban analizarse estas expresiones no sólo
Waisman 1995) como espacios físicos en evolución gradual y en las trans-
formaciones cualitativas y cuantitativas, sino como un
El tema Problema espacio social complejo con interrelaciones entre sus
pobladores que forjan comunidades urbanas compartien-
Cuando se habla de imagen urbana, considerando la do rasgos de igual identidad cuya construcción colectiva
rica existencia de las edificaciones construidas por el se basa en la conjunción del saber, de las habilidades y
hombre, se suele tener en cuenta casi de manera abso- voluntades que deben conservarse y protegerse.
luta, el patrimonio monumental y el tejido urbano gene-
ral. Se considera que esta es una reducción concep- La urbanización popular y su manifestación integral en-
tual pues sólo está contemplando la imagen urbana en tendida como hábitat popular nos acerca a los concep-
sus aspectos formales, geométricos y espaciales, olvi- tos de derecho a la ciudad y de acceso al suelo urbano
dando a su gente como los autores colectivos de la cons- para todos como expresiones de justicia social y equi-
trucción de esa imagen, el motor del ideario material y dad que coinciden con el debate actual referido a los
de los motivos, de los límites y especulaciones, del sen- estilos de desarrollo con perspectivas sustentables que
tido y del porqué, se está olvidando al auténtico genera- mucho tienen que ver con las distintas culturas.
dor de lo construido espacial e históricamente.
La reflexión urgente a cerca del estilo de desarrollo que
Toda ciudad expresa a una población específica, dimen- proponen los países del tercer mundo, es la contribu-
sión social, en un territorio, dimensión físico espacial y a ción más importante que se pueda hacer al mundo
través del tiempo, dimensión temporal o histórica. En una moderno, en cuanto supone plantear una problemática
ciudad nada puede entenderse sino se consideran estas que ya no sólo concierne a una parte del planeta sino a
tres dimensiones que determinan su existencia. Por lo la totalidad considerando las actuales crisis ambienta-
tanto es un defecto no tenerlas en cuenta al momento de les, sociales y económicas cada vez más frecuentes en
realizar consideraciones sobre patrimonio. nuestros contextos.

Como dice Andrés Aubry en la explicación de la imagen Este estilo de desarrollo en términos sustentables se
urbana de San Cristóbal de las Casas en México, “... la centra en el ser humano, en sus necesidades básicas,

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respetando su cultura, y en la participación definida por extienden sobre los públicos dando lugar a una dinámi-
la autodeterminación entendida como la propia capaci- ca de cambios escenográficos atribuibles a la presen-
dad de tomar decisiones en función de las necesidades cia o ausencia de las personas.
y aspiraciones locales.
El vecindario, subsistema social, conformado por un gru-
Basándose en este marco teórico, que pondera princi- po de familias cuyas viviendas están próximas y se vincu-
palmente el valor del hombre sobre cualquier otro valor lan a través de relaciones de simpatía y solidaridad, pro-
material, estético, funcional o económico, se intentará pios de quienes comparten un territorio allegado, definen
explicar la importancia de otorgar el valor patrimonial a los espacios-lugares: calles, cuadras o manzanas, ca-
los asentamientos populares en sus tres dimensiones: racterizados por las comunicaciones vecinales en las que
social, físico espacial y temporal. trasciende el sentido de amistad que confiere a la imagen
ambiental la dinámica de ciertas prácticas sociales ge-
Enfoque sociológico neradas en los espacios públicos tales como los encuen-
tros y acciones al exterior propiamente dicho que com-
El enfoque sociológico que se utilizará para explicar el plementan el paisaje con la presencia de los vecinos.
valor del hábitat popular se basa en la concepción de
Luhmann2 quien plantea que los sistemas sociales no La comunidad, este subsistema es el sociológicamente
están compuestos sólo por personas sino también por más evolucionado ya que supone vínculos racionales
las comunicaciones generadas a partir de las diferen- para la consecución de objetivos con una previa toma
tes relaciones entre esas personas. de conciencia sobre los problemas que afectan al co-
lectivo social y aglutina un número importante de perso-
A partir de este enfoque se puede explicar la producción nas. Este último subsistema social es la manifestación
y los procesos de los asentamientos populares conside- directa de la imagen ambiental de estos asentamientos
rando las distintas organizaciones sociales que se dan ya que a partir de la comunidad se produce el mejora-
en su interior y el tipo de comunicación que se estable- miento general y colectivo de las condiciones materia-
ce entre su población. les del tejido físico. Estas mejoras sólo se generan a
partir de la evolución de la organización social que in-
Por otro lado se considera que el medio físico construido, corpora otras dimensiones centrales en la vida comuni-
en el caso de estas unidades residenciales es otra cate- taria colaborando sinérgicamente en la progresividad
goría que contribuye a la generación de estas comunica- de su hábitat. Esta voluntad y esfuerzo comienzan a tejer
ciones, de allí que el patrimonio heredado por el hábitat las primeras elucubraciones sobre patrimonio.
popular sea entonces, un hecho sociológico materializa-
do espacialmente y que sus transformaciones se operen El lugar que construye la comunidad, es generalmente el
a partir del sistema social – espacio socializado – gene- asentamiento en su totalidad y se reconoce principalmente
rando la idea de lugar – unidades de experiencia – donde por la participación en la construcción de una identidad
las acciones y las formas se explican unas a otras, lo que común con su escala de valores, significados y aspiracio-
hace imprescindible comprender aquello que se dijo an- nes culturales propias de ese grupo humano.
teriormente... el arte de vivir de la gente... Es desde este enfoque teórico integral de lugares-espa-
cios y sistemas sociales de comunicación, que se puede
En el hábitat popular, con cierta regularidad, se recono- descubrir, reconocer y explicar las distintas imágenes
cen tres subsistemas sociales que definen los lugares y ambientales que predominan en los asentamientos po-
expresan físicamente el posible patrimonio. (Tapia 2000). pulares cuyos rasgos característicos, como se ha expre-
sado, surgen de los sistemas sociales, su grado de orga-
La familia, subsistema social vinculado por lazos de nización y su evolución temporal y es a partir de ellos que
parentesco cuya comunicación se basa en relaciones se puede comenzar a construir el acervo patrimonial.
afectivas y emocionales, define el espacio-lugar: vivien-
da caracterizada a partir de sus límites físicos – lote – y En esta presentación, que no pretende ser nada más
prácticas familiares que se relacionan con los patrones que la revitalización de un debate algo perdido respecto
de su cultura popular en la que los espacios privados se de los asentamientos populares en Latinoamérica y el

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valor como patrimonio construido, se quiere agregar con excluyentes pues dejan fuera todo lo que no ha sido
un interrogante: si la imagen urbana es el reflejo social y considerado con antelación. (Peyloubet 2001).
plástico de su principal patrimonio, la población, ¿Los
asentamientos populares no son acaso la materializa- Para comprender la posición que se adopta desde el
ción de la gente y sus prácticas sociales, por lo tanto punto de vista antropológico en la concepción de patri-
patrimonio de nuestras ciudades? monio se empezará por mencionar dos importantes ejes
de análisis:
Comencemos a mirar con los ojos de la cultura revalo-
rizando principalmente nuestras poblaciones hasta el Uno es la reivindicación del pluralismo cultural, recono-
momento algo excluidas... ciendo que no existen respuestas universales, únicas y
absolutas, y que dichas respuestas no son independien-
Enfoque antropológico tes ni están aisladas de un todo articulado que es la cultu-
ra, en donde los bienes se valoran de diferentes modos.
El enfoque antropológico que se seguirá en este desa-
rrollo se basa principalmente en la conceptualización El otro es la autonomía que valora, utiliza y desarrolla los
cultural del antropólogo mexicano Bonfil Batalla que plan- recursos y capacidades que existen en el conjunto social
tea la urgencia de reformular los proyectos nacionales, conformando alternativas diversas para dar respuestas a
los países que queremos construir y preservar, los mismos problemas. (Bonfil Batalla 1991: 49-57)
involucrando los diversos grupos, clases y sectores que
componen nuestras sociedades latinoamericanas, dan- Acerca del patrimonio cultural, en general, se legisla, se
do a luz la cultura de la pluralidad, un espacio donde se debate en el marco académico y se realizan campañas
admitan y valoren las diferencias. para despertar la conciencia, revalorización, aprecio y
custodia de bienes que hacen a nuestra cultura, pasado
Como se sabe, en las ciencias sociales, la perspectiva y presente.
teórica e ideológica con la que nos aproximamos a la
realidad, delimita, selecciona y jerarquiza de antemano Ahora bien, ¿Qué se entiende por cultura? Una concep-
los datos que iremos a buscar, por esta razón los mar- ción de cultura muy difundida, la presenta como con-
cos conceptuales y enfoques epistemológicos son junto de conocimientos, habilidades y formas de sensi-

Taracea. Vista Urbana. Florencia, colección particular.

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bilidad que les permite a ciertos individuos, apreciar una Lo nuestro hace alusión que nosotros compartimos los
clase particular de bienes. El acceso a estos bienes significados y valores que les atribuimos a un conjunto
exige un tipo de educación particular. de bienes culturales, por tanto la conclusión rápida y
evidente es que no hay patrimonio cultural común a to-
A partir de esta concepción se establece una distinción dos y que para no perderse de algo importante, será
entre personas cultas y personas incultas, pueblos cul- sumamente necesario comenzar a ensanchar estas
tos y pueblos incultos. parcelas de patrimonio cultural incorporando los proce-
sos y producciones, bienes tangibles e intangibles, de
La cultura así se convierte en un patrimonio de unos los grupos sociales en silencio, que nunca están llama-
pocos. dos a participar de estos acuerdos, y que producen en la
actualidad gran parte del medio físico construido de
Frente a esta concepción elitista y reduccionista de la nuestras ciudades.
cultura, existe otra elaborada desde la antropología, a la
que se adhiere, por la cual la cultura Continuando con esta reflexión, que no pretende más que
acercar luz a la verdad, en la perspectiva del patrimonio
“...es un conjunto de símbolos, valores, ac- cultural diverso de las sociedades, se debe recordar que
titudes, habilidades, conocimientos, signi- las relaciones sociales entre los distintos grupos de una
ficados, formas de comunicación, formas sociedad no son simétricas, es decir, existen relaciones
de organización social y bienes materia- asimétricas de dominación/subordinación.
les, que hacen posible la vida de una so-
ciedad, permitiéndole transformarse y re- Esta situación trae como consecuencia una desvalori-
producirse”. zación de la producción cultural de las clases subalter-
(Bonfil Batalla 1991: 128 ). nas y una inhibición de dicha producción, o lo que es
peor una reinterpretación desvinculada de los contex-
Por ello todos los pueblos, las sociedades y los distintos tos significativos a partir de un sistema universal de valo-
grupos humanos tienen cultura, no mejores, no peores, res que considera a estos bienes culturales inferiores,
sino distintas. prueba de ideas y prácticas atrasadas, rezago de gru-
pos sociales en decadencia.
Patrimonio cultural es por tanto el acervo de elementos
de producción social, tangibles e intangibles, que una Frente a esta descalificada posición, la cultura popular va
sociedad considera de su propiedad y los utiliza para dar escondiendo su precioso reflejo singular y se va sustitu-
respuesta a sus necesidades, para alcanzar sus aspira- yendo por la copia exagerada de un modelo único de
ciones, para resolver sus problemas y para expresarse. cultural nacional, transnacional y global.

Según este planteamiento el patrimonio cultural no es- Con ello se han perdido fuentes de inspiración y creati-
taría restringido a los rastros materiales del pasado, sino vidad valiosas para el ser humano, promotoras de ideo-
que abarcaría las costumbres, los conocimientos, los logías sensibles, que cuánto ayudarían a tomar rumbos
significados, las habilidades y las formas de expresión en este tiempo contemporáneo.
actuales que pocas veces son reconocidas y deman-
dan también atención y protección urgentes. Estamos hasta aquí frente a un proceso de transferen-
cia, que en antropología se reconoce como cambio de
Esto es aceptar que existe una diversidad cultural, tan- realidad. Esta expresión nos indica una enajenación
tas culturas como grupos haya en una sociedad, enton- cultural3 o una imposición cultural4 que esteriliza la pro-
ces se puede preguntar: ¿Cuál es la relación de los ducción profunda de bienes culturales de extensas ca-
miembros de un grupo cultural diferenciado con los bie- pas sociales que silencian una vez más.
nes patrimoniales de otros grupos?
La diferencia en la expresión es cambiar la realidad,
La parcela del patrimonio cultural con que nos identi- que supone una transformación conciente y creativa de
ficamos es la que sentimos y consideramos nuestra. producción cultural autónoma5 o apropiada6 , que per-

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VISTA Hábitat

AL
RE PAULA PEYLOUBET

mita a los grupos sociales subordinados poseer sus pro- Se debe afirmar el derecho a la diferencia y abolir
pios elementos culturales junto a las decisiones de usar cualquier forma de desigualdad. El deseo de una
los mismos. (Bonfil Batalla 1991: 16-17) cultura pluralista exige que se eliminen las desigual-
dades y que florezcan las diferencias, valorando y pre-
Legitimando la cultura servando como patrimonio la propia cultura pluralista.
La aceptación de esta situación va a cambiar el valor
La cultura dominante legitima cierto tipo de conocimien- del patrimonio cultural propio que asumimos como
tos y prácticas, reconociéndolos como válidos y desea- pueblos latinoamericanos con la firme conciencia de
bles, únicos como opciones culturales. que su valor está justamente representado por la di-
versidad.
Lo diferente, conocimientos y prácticas no convencio-
nales fuera del orden conciente y programado, se estig- La situación global por la que atraviesan los países lati-
matiza como inferior. noamericanos se expresa en la tendencia de poner en
riesgo y deterioro nuestro patrimonio cultural en sus
Así es como las diferencias culturales se convierten en múltiples manifestaciones.
contradicciones y luchas cuando los sistemas sociales
se vinculan por una relación de conflicto. La pretensión Es de suma importancia plantear los problemas de pa-
de dominio de un grupo cultural sobre otro, las transfor- trimonio cultural en términos más amplios, la erosión
ma entonces en culturas antagónicas y excluyentes. incesante de la cultura propia, no es sólo de obras ma-
teriales edificadas, sino de nuestra capacidad de hacer
Esta situación expresa una relación social de domina- las cosas a nuestra manera, según nuestros propósitos
ción y una estrategia de resistencia a dicha domina- con el vasto y plural repertorio de elementos que confor-
ción. Este conflicto conduce sólo a pérdidas. man el patrimonio cultural de todos nosotros, que nos
hace diferentes, y que nos convoca a un potencial pro-
¿Por qué no modificar los términos y concebir nuestra yecto civilizatorio de la América nuestra. (Bonfil Batalla
identidad como pueblos latinoamericanos que somos, 1987[1994:217-246])
desde la diversidad cultural?
Reconocer la identidad profunda de nuestra población
¿Porqué ilegitimar la producción de vastos grupos socia- y valorar la importancia del pluralismo cultural es el re-
les sólo por no poder comprenderlos ni valorarlos? curso más poderoso con que contamos para hacer fren-
te a los problemas que ya nos agobian.
Para llegar a un diálogo de iguales que legitime un ver-
dadero patrimonio será necesario que las culturas do- Es justamente nuestro patrimonio cultural diverso, la
minantes actualicen su parcela cultural y que las cultu- herencia infalible para cambiar la realidad y no como
ras subalternas aceleren, ganando tiempo al ya perdi- nos invita la cultura global al cambio de realidad.
do, su proceso de producción cultural liberando sus
potencialidades creativas. En este sentido existen deudas por saldar, somos res-
ponsables los académicos de una historia de ceguera,
Luego es posible que se produzcan procesos de apropia- menosprecio y negación a la producción cultural popu-
ción cultural en ambos sentidos, logrando revitalizar los lar de nuestro pueblo.
contenidos del acervo total de nuestros grupos diversos.
No hemos reparado en la importancia de la cultura po-
Es indispensable en este momento acercar dos términos pular, ni en su riqueza, ni en sus potencialidades. La
que colaboren con la comprensión de este problema: la hemos visto como meras expresiones folclóricas, de
diferencia y la desigualdad. La diferencia es el resultado his- color y atracción turística tal vez, la mayoría de las veces
tórico que dio lugar a diversas culturas particulares. La des- como asentamientos inseguros a erradicar.
igualdad también es el resultado histórico, pero proviene de
relaciones asimétricas – dominación/subordinación – que No reconocemos su vigencia actual y no admitimos que
ligan a grupos de una sociedad con diferentes culturas. tenga futuro.

[14]
HÁBITAT POPULAR. MATERIALIZACIÓN DE UN PAISAJE SOCIAL DIVERSO. CULTURA DE LA PLURALIDAD

Debemos abrir espacios de participación que nos ha- tructura de las revoluciones científicas. México. Fondo
gan menos consumidores pasivos y más practicantes de la Cultura Económica S.A.
de nuestra cultura popular.
GONZALES LOBO, Carlos (2003). “La gestión y produc-
La valoración de la diversidad cultural descansa sobre la ción de la vivienda al borde de lo institucional”. Tucumán.
convicción de sociedades que poseen su propia cultura Seminario Iberoamericano de Políticas de Vivienda,
así como las capacidades para transformarla y Facultad de Arquitectura y Urbanismo, Universidad Na-
enriquecerlas para su propio beneficio y luego conservarla. cional de Tucumán.

La persistencia de reivindicar la pluralidad cultural no WAISMAN, Marina (1995). “La identidad y su significa-
sólo se realiza para dar lugar a una democrática diversi- do”. Curso Taller-Nota Editorial. Córdoba. Facultad de
dad de producciones, sino para manifestar la construc- Arquitectura, Urbanismo y Diseño. Universidad Nacio-
ción de un camino posible de andar para todos. nal de Córdoba.

Ciudades pobladas por inmigrantes, asientos de clases TAPIA, Ricardo (2000). “Vivienda progresiva y procesos de
medias inestables, ciudades de un urbanismo brutal que participación”. I Congreso Internacional de Vivienda Pro-
ha destruido normas gentiles de convivencia a cambio de gresiva. México. IMUVI. Instituto Municipal de Vivienda.
nada, ciudades donde habitan restos aristocráticos y bur-
guesías cosmopolitas, ciudades de pobres estructurales PEYLOUBET, Paula (2001). “Hábitat Popular Progresi-
y nuevos pobres, ciudades de ex rurales urbanizados, ciu- vo. Reinterpretación de los factores que intervienen en
dades a las que ha llegado la hojarasca. Ciudades así, su producción.” Tucumán, Tesis doctoral Facultad de
como las nuestras, en las que vivimos nosotros los mis- Arquitectura y Urbanismo, Universidad Nacional de
mos, son ciudades dóciles para reclutar adeptos a la cul- Tucumán.
tura global uniforme, vacía de diversidad, vacía de solu-
ciones a nuestros problemas, vacías de esperanzas. BONFIL BATALLA, Guillermo (1991). Pensar nuestra
cultura. México. Ed. Alianza.
Es ahora, en este lugar y tiempo, donde la resistencia
cultural debe ponerse en marcha y presentar batalla a BONFIL BATALLA, Guillermo (1987). México profundo.
cualquier proyecto cultural sustitutivo o uniforme. Una civilización negada. México D.F. Ed. Grijalbo. 1994
La opción por construir nuestro propio proyecto cultural
es asunto de vital importancia.
Notas
No es sólo la materialización, la edificación, lo que de-
bemos defender, preservar y convertirlo en patrimonio 1
Este artículo se basa en dos ponencias que expuso la autora en: la
XII Conferencia Internacional sobre la Conservación de Centros Históri-
sino la mayor de nuestras riquezas, para no ponerla en
cos y Patrimonio Edificado Iberoamericano, organizado por la Facultad de
juego, es la que debemos acuñar, proteger y cuidar: las Arquitectura, Urbanismo y Diseño de la Universidad Nacional de Córdoba
maneras de hacer, el porqué de lo que queremos hacer en Noviembre de 2004, en la ciudad de Córdoba y en el V Seminario
y quienes lo hacemos... finalmente nuestro mayor patri- Hipótesis de Paisaje organizado por la Facultad de Arquitectura de la
Universidad Católica de Córdoba. Septiembre de 2005.
monio: la población.
2
Niklas Luhmann: sociólogo alemán que utilizó la teoría de los siste-
mas para pensar la sociedad y su comportamiento.

Referencias bibliográficas 3
Cultura enajenada: se da cuando los elementos culturales son pro-
pios y las decisiones sobre ellos es expropiada.

GARCÍA MARQUEZ, Gabriel (1971). La hojarasca. Bue- 4


Cultura impuesta: ni los elementos culturales, ni las decisiones son
nos Aires. Ed. Sudamericana. del grupo social.
5
Cultura autónoma: el grupo social posee el poder de decisión sobre
KHUN, Thomas (1962). The structure of scientific sus propios elementos culturales
revolutions. Chicago: University of Chicago press. Tra- 6
Cultura apropiada: los elementos culturales son ajenos, en el senti-
ducción española por CONTIN, Agustín (1971). La es- do de la producción, pero los usa y decide sobre ellos.

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VISTA Hábitat

AL
RE GLORIA HOYOS BUSTAMANTE

El espacio habit ado desde la singular


habitado idad
singularidad
Gloria Hoyos Bustamante
Arquitecta y tecnóloga en comunicación en radio y televisión. Estudiante de la Maestría en Hábitat, Estudios en vivienda. Segunda Cohorte.
Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá.

Palabras claves: Niñez, accesibilidad, apropiación, se- proposes to analyze the infant’s first environment, the
guridad, vivienda, modos de habitar, singularidad, house, the quality of the design in with respect to his
estandarización, versatilidad, inclusión. demands, to generate a reflection on the ways of
inhabiting: is the house made for the infant or is the
Resumen infant made for the house? Does the architecture
contribute positively to the experience of inhabiting
Este ensayo se ocupa del niño como caso ilustrativo perceived by the infant? Does a consciousness exist in
para el estudio de la estandarización en el diseño ar- that the house is the infant’s main benchmark in the
quitectónico, el grado de versatilidad de la vivienda al cosmos, the place that offers him cover and security?
procurarle un ambiente adecuado para su apropiación, Is the house a place to play, to feed, to grow, to love, to
la accesibilidad a través de un entorno seguro que con- be loved and to rest, with the dimensions and the
tribuya al desarrollo de su autonomía y del sentido de appropriate equipment?
pertenencia a un hábitat original que se traducirá en
su arraigo en el mundo. Con este fin se propone anali- No todo tiempo pasado fue mejor...
zar el primer entorno del niño, la casa, la calidad del
diseño en relación con él y sus demandas, y generar Witold Rybczynski, en su obra “La Casa, Historia de
una reflexión sobre los modos de habitar. ¿Es la casa una idea”, hace una semblanza de la evolución de la
para el niño o el niño para la casa? ¿Contribuye la casa, el diseño y la especificidad de los espacios y los
arquitectura positivamente a la experiencia de habitar muebles y cómo todos estos aspectos están ligados a
que se genera en el niño? ¿Existe una conciencia de la construcción de una noción de intimidad, privacidad
que la casa constituye para el niño el principal punto y confort (RYBCZYNSKI: Cap. 2 y 4). En lo concernien-
de referencia en el cosmos, el lugar que le brinda abri- te a Europa, durante la Edad Media y salvo las clases
go y seguridad? ¿Es la casa, un lugar para jugar, ali- sociales altas, el concepto de “familia” no existía, en
mentarse, crecer, amar, ser amado y descansar, con tanto había lugar sólo para los recién nacidos y los
las dimensiones y los equipamientos adecuados? hijos al cumplir los siete años eran enviados a trabajar
como aprendices o sirvientes (RYBCZYNSKI: 35). “En
Abstract la Edad Media se escribió poco sobre los niños. En
esta época eran tratados como pequeños adultos y
In this essay, the infant is taken as an illustrative case vestidos como tales” (POSADA: 3). Durante el renaci-
for the study of standardization in architectural design, miento aparece el primer libro sobre la salud del niño1
the degree of versatility of the housing in offering him y después de la Revolución Francesa aparece el “Emi-
an adequate atmosphere for its appropriation, the lio” de Rousseau, cuyo interés se centra en los aspec-
accessibility in a secure environment that contributes tos de la educación. Se empieza a observar con
to the development of his autonomy and the sense of detenimiento su séptimo año y los cuidados de la sa-
ownership of the original habitat will influence his taking lud. “Al niño ya no se le miraba como un adulto en
root in the world. Within this objective, this essay miniatura, sino como un ser en crecimiento y desarro-

[16]
EL ESPACIO HABITADO DESDE LA SINGULARIDAD

llo” (POSADA: 3,4). En los siglos XIX y XX se continúa nece. Pero a pesar de esta conciencia y la afirmación
avanzando en el desarrollo de una pedagogía para el de Bachelard cuando dice’ “La infancia es ciertamen-
niño, con apariciones tan importantes como el siste- te más grande que la realidad” (BACHELARD: 46) ¿Cuál
ma de kindergarden, iniciado por Froebel y el psicoa- ha sido el aporte arquitectónico a la consagración de
nálisis de Freud. Sólo hasta 1913 se reporta el “naci- un espacio para vivir la infancia, que no sea un lugar
miento de la idea de una Asociación Internacional para de paso? “Morar, en un sentido existencial, es el pro-
la protección de infancia2 , y actualmente, en el marco pósito de la arquitectura. El hombre mora cuando él
de la declaración de los derechos del niño, hay dife- puede orientarse dentro de y puede identificarse a sí
rentes posiciones según el contexto sociocultural y las mismo con un entorno, o, para abreviar, cuando él ex-
políticas de cada lugar, pero en general, existe un cre- perimenta el entorno como significante. Morar por con-
ciente interés por las condiciones de vida del peque- siguiente implica algo más que “el resguardo”. Implica
ño, los cambios en la educación y la vinculación de los que los espacios dónde sucede la vida sean lugares,
varones a su cuidado. En este momento es aceptada en el verdadero sentido de la palabra” (NORBERG-
la importancia de un acompañamiento cualificado del SCHULZ: 2).
niño, preferiblemente por su familia; el fortalecimiento
del vínculo con la madre hasta el punto de retomar la Habitando desde la singularidad
alimentación de la leche materna, la cual fue vista
como un rasgo primitivo del tercer mundo a partir de la Manuel Gausa en “Housing, nuevas alternativas, nue-
década de los 70 debido al auge de la “leche en polvo” vos sistemas”, escribe sobre “los cambios en los pro-
y las campañas de desprestigio de la lactancia por pios modos de vida que se adivinan (y por tanto en las
parte de las grandes firmas productoras; se afirma que respuestas arquitectónicas a ellos referidas) sensibles
la interacción del niño con su entorno inmediato, su a la actual heterogeneidad de realidades espaciales y
familia y la cultura son definitivos en su desarrollo para a esa mezcla difusa entre lo cotidiano y lo extraordina-
la adecuada inserción en el medio social al que perte- rio, lo previsible y lo sorpresivo que tiende cada vez
Taracea. Espaldar con plaza y pórtico. Parma, Catedral.

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VISTA Hábitat

AL
RE GLORIA HOYOS BUSTAMANTE

más a articular experiencias y comportamientos, dado multifamiliar, se reduce a los denominados ‘parques’4 ,
el papel relevante que cobran las nuevas tecnologías, en un área adyacente a los parqueaderos. Hasta hace
informáticas y telemáticas, y los medios de comunica- menos de dos décadas, era frecuente que los balanci-
ción en la vida laboral y doméstica. [...]” para “Enten- nes, los rodaderos y los columpios de los parques de
der, en definitiva3 , la vivienda como un lugar más próxi- la ciudad estuviesen hechos a otra escala, más acor-
mo a la calidad de vida y la fantasía del ‘ocio’ y el ‘bien- de con las dimensiones de los padres que del niño y
estar’ que a la habitual ‘austeridad’ de un espacio con- en el interior de la vivienda, no difiere mucho la situa-
cebido tan sólo como mera ‘necesidad social’: una ción, siendo más bien una constante. Es necesario
‘nueva vivienda’ planteada, en suma, desde la diversi- reformular el hábitat, ya que como lo expresa Gausa:
dad y la individualidad, más que desde la homogenei- “En este marco, el tema de la vivienda sigue constitu-
dad y la colectividad” (GAUSA: 19). Si se tiene en con- yendo un campo particularmente proclive al conven-
sideración la preocupación de este autor, podría afir- cionalismo, a la repetición [...] de arquetipos acomo-
marse que el interior de cada vivienda también alber- dados en las seguras pautas de un ambiguo
ga diversidad y la individualidad debería ser una deter- ‘neolenguaje’ ecléctico y tozudamente conservador [...]”
minante. (GAUSA: 15)

Con respecto al niño, al discapacitado o al anciano ¿Es la dimensión físico espacial de la casa incluyente
¿Suele considerarse la diversidad de sus exigencias o excluyente con el niño? A través de los tres ejes plan-
espaciales y de equipamiento como determinantes teados, accesibilidad, apropiación y seguridad, se plan-
para el diseño o como indicadores en las transforma- tean unos lineamientos que permitan aflorar al menos
ciones del diseño del espacio habitado desde la sin- una respuesta a este cuestionamiento. Se entiende por
gularidad? En el caso del niño, sólo algunos sectores accesibilidad como la posibilidad del niño de alcanzar
del consumo lo han estudiado como potencialidad en los objetos personales, interruptores y servicios, entre
su mercado. Todo parece indicar que el niño es tenido otros, por sí mismo; es la vía para lograr su indepen-
en cuenta en algunos campos como el diseño indus- dencia y autonomía en su calidad de habitante de la
trial, el textil y el gráfico, pero no en la arquitectura. De casa en las mismas condiciones de equidad que los
tal suerte que hoy en día el niño cuenta con líneas en el adultos. La autonomía es alcanzada no sólo en las di-
diseño de modas: existe una moda infantil (estilos, mensiones físicas que implica la motricidad gruesa y
materiales, texturas, adornos y colores), al igual que la fina adecuada para las acciones cotidianas; también
publicación de textos con estas mismas característi- implica el logro de la autonomía psicológica y emo-
cas, donde no sólo el contenido es infantil sino la edi- cional. Este aspecto en la práctica le permite no ser un
ción en sí misma. Lo mismo ocurre con la confitería, extranjero en su casa, es tener los mismos derechos
cuyo mercado es tan amplio como la producción de de circulación por los diversos espacios que habita.
fármacos de uso pediátrico... La publicidad, las tecno- Es el grado de apropiación del hábitat lo que le permi-
logías telemáticas, todo se transforma para seducir al te construir una imagen del mundo accesible y fami-
niño. Podría decirse que mutó más rápidamente el liar. La casa es la prolongación del vientre materno, es
entorno virtual, siendo éste más reciente en la historia su medio de vida y desarrollo y no solamente un con-
de la humanidad, que la noción de hogar, cuya expre- texto. A menudo el niño pasa a ser un accesorio más
sión física, la casa, es tan antigua como el hombre decorativo, y no un habitante activo y participativo del
mismo. hogar.

¿Quiénes piensan en los modos de habitar del niño y Accesibilidad


sus requerimientos para el diseño de la vivienda? Pa-
rece ser que el sector inmobiliario lo tuvo en cuenta ¿En nuestro contexto arquitectónico y sociocultural,
como premisa para la venta de multifamiliares, con cuenta el niño con la posibilidad de moverse con liber-
sus versiones de ‘zonas verdes para niños’. Algunas tad por todos los lugares de la casa? Los espacios
llegaron al nivel de su máxima abstracción antes de vedados, al igual que en el cuento de Barba Azul, ter-
lograr el desarrollo; es posible encontrarse con que el minan por generar curiosidad que se vuelve tensión,
área de juegos que se promociona para la vivienda tentación y obsesión. El cuarto de San Alejo, donde

[18]
EL ESPACIO HABITADO DESDE LA SINGULARIDAD

todavía lo hay, está lleno de cosas susceptibles de ser el niño tiene derecho a habitar con su familia bajo las
recicladas fuera de casa y podría convertirse en cam- mismas condiciones de equidad; buscar la escala del
bio en un cuarto de juegos, que contribuya a descon- espacio que él necesita, pues si bien se le han de pro-
gestionar el lugar de reposo del niño y brinde la posibi- porcionar los objetos como la vajilla, la mesa, el asien-
lidad de otros escenarios más propicios para la imagi- to, apropiados a su tamaño, es decir, más pequeños,
nación, la ensoñación y la fantasía: “Claro que gracias sus espacios de estancia deben ser igualmente hol-
a la casa, un gran número de nuestros recuerdos tie- gados que los de los adultos. No oprimir su esfera ínti-
nen albergue, y si esa casa se complica un poco, si ma, pues la casa y la familia son su referente para
tiene sótano y buhardilla, rincones y corredores, nues- moverse en el mundo: “La casa y el mundo se corres-
tros recuerdos hallan refugios cada vez más caracteri- ponden. Para el niño de corta edad la casa es aún el
zados. Volvemos a ellos toda la vida en nuestros en- mundo entero, y sólo por estar enraizado en la casa
sueños” (BACHELARD: 37). Sin embargo suele ocurrir puede adentrarse, creciendo, en el mundo”
que cuando el niño nace, la totalidad de los espacios (BOLLNOW: 138).
ha sido ocupada y comienza a abrirse un lugar para la
cuna del niño, como si el lugar de descanso constitu- También es importante la escala del mobiliario en re-
yera su única prioridad. Parece ser que ni el arquitec- lación con su tamaño y las dimensiones del cuarto. No
to, ni muchas veces los propios padres, logran saturar el ambiente y no impedir sus desplazamientos
proyectarse en el tiempo y concebir la idea de un ser libres y seguros en medio de la noche.
animado, es decir, en movimiento, con cambios conti-
nuos en sus posibilidades de desplazamiento y cam- Transmitirle al niño la capacidad de diferenciar los
bios constantes en su tamaño, debido al crecimiento. espacios, esclarecer la pertinencia de cada lugar para
cada actividad, tener en cuenta que dentro de los arti-
Una casa para un niño está en continua transforma- ficios de la modernidad y los indicadores de confort, el
ción como acompañamiento en los cambios que ca- televisor es incompatible con el dormitorio, al menos
racterizan la niñez. Si se considera la vivienda como de manera permanente: para un niño la contamina-
sistema, habrá de tenerse en cuenta que las transfor- ción electromagnética emitida por la pantalla afecta
maciones en sus habitantes han de reflejarse en los su sistema inmunológico y las imágenes almacena-
modos de habitar y en la disposición y adecuación de das en su mente antes de quedarse dormido, interfie-
los espacios. ren en la higiene del sueño.

Apropiación Seguridad
En cuanto a la apropiación, es importante que el niño ¿El diseño arquitectónico le permite al niño circular
cuente con su propio espacio para jugar, para dispo- con libertad por la casa, teniendo en cuenta su seguri-
ner sus objetos, él también está construyendo un mo- dad?
delo del Universo a escala. Dentro de una jerarquía de
valores familiares, es tan importante el computador para “En epidemiología, cuando se pretende estudiar la cau-
el adulto como un instrumento musical o cualquier ju- sa de un suceso se hace el análisis de sus factores de
guete para el niño. El niño ha de contar con un espacio riesgo; por medio de un proceso de razonamiento lógi-
propio para jugar y ser creativo y al igual que los adul- co, y con el apoyo de pruebas estadísticas, se puede
tos, necesita y disfruta los espacios holgados, la luz asignar el riesgo atribuible a cada uno de los factores
natural y la circulación del aire a su alrededor. A menu- en estudio, encontrando así la relación causal en la
do ocurre con el espacio para los niños lo mismo que ocurrencia de un fenómeno, que puede llamarse en-
con las políticas públicas en cuanto al diseño arqui- fermedad o lesión física. Con base en estos estudios
tectónico y urbanístico de la vivienda de interés social. se puede configurar una estructura causal que expli-
¿Por qué una calle de un barrio popular es más an- que un suceso determinado. Para el caso de las lesio-
gosta que la de otros estratos? ¿Qué hace pensar que nes físicas, mal llamadas accidentes, se puede dispo-
una familia de escasos recursos necesita una vivienda ner de una explicación causal claramente sustentada;
más reducida que las demás? Debe considerarse que por tanto, no serían sucesos casuales sino causales

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VISTA Hábitat

AL
RE GLORIA HOYOS BUSTAMANTE

[...] En Colombia, según el Ministerio de Salud [...] los descubrir, explorar, abrir, halar, cavar, porque por
accidentes aparecen como la primera causa de muerte su percepción sabe que lo encantador muchas
en niños de 5 a 14 años [...] El 33% de los acciden- veces no es lo obvio.
tes ocurren en el hogar5 [...]” (POSADA: 444, 445).
Es a partir de la aclaración del término accidente y Otra causa de accidente letal la constituyen las as-
estas estadísticas, que los autores de “El niño sano” fixias por inmersión, sofocación, confinamiento, obs-
desarrollan un capítulo sobre la prevención. “La pre- trucción o intoxicación, que igualmente, están relacio-
vención específica evita muchas lesiones, secue- nadas con depósitos de agua sin cubrir, elegantes fuen-
las y muertes, con la consiguiente disminución de tes de jardín sin protección, piscinas, y algunos artícu-
costos humanos, sociales y económicos” (POSA- los como bolsas plásticas, cojines, etc. Pero el caso
DA: 445). Como la mayor parte de los accidentes de sofocación, remite nuevamente a la necesidad de
ocurren en el hogar se anota cuáles son los más la habitación propia, a su cama, a su cuna
frecuentes y se llama la atención sobre las obras en individual…de nuevo la importancia de la independen-
construcción o las casas semi-terminadas pero ha- cia del niño para dormir. En cuanto al jardín infantil,
bitadas, como una de las modalidades más recu- Céleste cuestiona lo siguiente: “¿cómo se favorecerá
rrentes en las caídas letales en el hogar. También la autonomía del niño en lo referente al dominio de sus
habría que mencionar ciertos diseños arquitectóni- esfínteres si los servicios están situados tan lejos de la
cos que parecen guiados por la estética del vértigo: clase que peligra la seguridad del pequeño si se le
enormes ventanales, de pared a pared, de piso a deja ir solo al baño?” (CÉLESTE: 56).
techo; pasamanos apenas insinuados, barandas de
balcones con elegantes tubos a escasos 60 cm. del Las cosas: compañías virtuales y
piso, baños sofisticados cuya superficie carece de jerarquías electromagnéticas
fricción alguna... y en el medio rural o suburbano,
los pozos y aljibes sin cubrir. Las quemaduras nor- Hay un aspecto que no por mencionarse al final es
malmente tienen lugar en la cocina donde algunos menos importante. El niño vive actualmente una sole-
mobiliarios son muy bajos y junto con las planchas, dad acompañada de ruidos; ruidos provenientes de la
las velas y los fósforos, están al alcance del niño. El calle, pero sobre todo, de los electrodomésticos del
diseño abundante en aristas y acabados duros que hogar y es común que las posesiones de valor se so-
provienen de un sentido de la belleza de la perfec- brepongan a la integridad física del niño y su bienestar.
ción del ángulo recto, los 90 grados, llenan de satis- “Las cosas” por urgentes o costosas que sean, no de-
facción al constructor y al propietario, pero el resul- ben desplazar la importancia de ese pequeño habitan-
tado es filoso y cortante, olvidando que “El construir te que tanto cuenta. La infancia del niño es
como morar se desarrolla en un construir que cui- impostergable, irrepetible y no es acumulable como
da, a saber, el crecimiento; y en un construir que los bienes materiales. Un pedagogo norteamericano
erige edificios” (HEIDEGGER: 2). plantea la siguiente reflexión: el computador no se suele
prestar a la empleada doméstica por temor a que lo
Curiosamente los tomacorrientes se ubican a es- dañe. ¿Porqué, en cambio, sí se le confiere la respon-
casa altura para que no se vean los cables conec- sabilidad de llenar ‘tanto’ espacio del disco duro “vir-
tados a la pared, pero los interruptores son altos, gen” que representa el cerebro de un hijo de los O a
de manera que el niño no accede a ellos con faci- los 6 años?
lidad. Donde habita un niño es primordial que las
posesiones del hogar no lo pongan en peligro o En este punto se esclarece la pertinencia de uno de
limiten su capacidad de movimiento y juego; si bien los cuestionamientos iniciales. ¿Qué representan la
es aconsejable que crezca en compañía de los accesibilidad, la apropiación y la seguridad para el
objetos y las sustancias normales para el funcio- niño como habitante de la casa? Estos elementos, sin
namiento de una casa, hay que considerar la edad olvidar la sustentabilidad del hogar, determinan su bien-
y el desarrollo del niño. No se debe poner en ries- estar y esta primera experiencia de bienestar, la de su
go su integridad física al confiar que lo peligroso infancia, influirá de manera definitiva en su concep-
está fuera de su alcance. Al niño le gusta trepar, ción de habitar, no sólo la casa, sino el mundo.

[20]
EL ESPACIO HABITADO DESDE LA SINGULARIDAD

Tras este recorrido, si retomamos la pregunta: ¿Es la apropiación y la seguridad desde la singularidad de
dimensión físico espacial de la casa incluyente o ex- los habitantes de la casa, se continuarán realizando
cluyente con el niño? podemos concluir que todavía el dentro de la modalidad de ‘adición6 , de rejas, mallas,
diseño y los acabados no tienen en consideración al tubos, rampas, escaleras y escalones donde no fueron
niño. Generalmente los espacios y el mobiliario de una pensados. “La arquitectura no puede limitarse, en efec-
casa están diseñados para la edad adulta. El niño no to, a “extender” el cuerpo, sino que debe ser un suple-
suele tener ventanas seguras, los asientos son altos, mento activo y funcional, un mecanismo autónomo y
los baños peligrosos, los espejos inútiles, pues no los receptivo a un tiempo, “extraño” y a la vez sensible a lo
reflejan, los servicios incómodos, los interruptores particular, capaz de regirse por sí mismo y al mismo
inalcanzables, los grifos y las duchas no les permiten tiempo, sostener y potenciar al anfitrión” (GAUSA: 11).
su anhelada autonomía. Y cuando crecen, cuando son El resultado actual no es el mejor en cuanto a bienes-
adultos y lo abarcan tar y mucho menos
todo, cuando todos como propuesta
los espacios y las estética.
cosas les son per-
mitidos, accesibles Se ha de volver una
y a su medida... y otra vez sobre el
simplemente es tema de la diversi-
también la hora de dad en los modos
marcharse de la de habitar. “Una di-
casa. versidad entendida
como posibilidad
Discusión combinatoria ca-
paz de propiciar la
Si la arquitectura no mezcla eficaz de
considera las dife- múltiples tipos y
rencias de edades y programas a partir
condiciones físicas de la concepción
de los habitantes de de nuevos meca-
la casa, si no se sale nismos y estructu-
de la estanda- ras más
rización, podría in- polivalentes”
tentar emplear las (GAUSA: 23). Asu-
nuevas tecnologías mir la arquitectura,
para generar espa- la construcción de
cios más versátiles la vivienda, dentro
en sus usos: “La del tejido de la ciu-
casa continúa sien- dad y esta a su vez,
do el centro del como subsistema
mundo, pero desta- del territorio, desde
ca con menos niti- la inclusión y el res-
dez y por consi- peto por la hetero-
guiente es más difí- geneidad. La con-
cil de ver. Lo que re- dición de la infan-
gía de manera ‘objetiva’, para la contextura del mundo cia, las dimensiones y desplazamientos que demanda
mítico, hay que transmitirlo a la estructura del espacio la niñez, así como la ancianidad y la discapacidad,
‘subjeti-vamente’ vivenciado y vivido” (BOLLNOW: 137). alteran la media de las estadísticas con las cuales se
Si la versatilidad del diseño original no prevé las adap- diseña la vivienda. Esta diferencia requiere cuidados
taciones necesarias para procurar la accesibilidad, la específicos que superen la competencia de los deco-

R E V I S T A / A L / H Á B I T A T / F E B R E R O 2 0 0 6 / 1 [21]
VISTA Hábitat

AL
RE GLORIA HOYOS BUSTAMANTE

radores de interior y su limitada intervención que se NORBERG-SCHULZ Christian. “Genius Loci. Hacia una
reduce a la definición de los colores aplicados a las fenomenología de la arquitectura”. Nueva York, Rizzoli, 1980.
rejas. El niño tiene derecho a crecer en un entorno que
perciba como seguro, pero que no limite su expresión POSADA, Álvaro, GÓMEZ, Juan Fernando, RAMíREZ,
y desarrollo psicomotriz; este es el concepto que alude Humberto. “El niño sano”. Medellín: Editorial Universi-
a la inclusión en el mundo para el niño, el anciano o el dad de Antioquia, (1997) 1998.
discapaci-tado, sentirse parte de su entorno y su me-
dio social y ser autónomo dentro de éste. RYBCZYNSKI, Witold. “La Casa, Historia de una idea”.
Emecé Editores, Buenos Aires, (1986) 1991.
Si bien la arquitectura proporciona al hombre los es-
pacios en los cuales se desenvuelve su vida pública y SAINT-EXUPÉRY, Antoine. “El principito”. Madrid: Alian-
privada, no puede responder de manera estandarizada za editorial, 1971.
a las demandas de una sociedad por completo
heterogénea. La obra arquitectónica, y en este caso, SERRES, Michel. “Atlas”. Madrid: Ediciones Cátedra,
la vivienda en particular, no pueden constituirse en Colección Teorema, 1994.
obstáculos para la cotidianidad, ha de funcionar más
bien a la manera de un puente que se tiende entre la Referencia Web Instituto Interamericano del niño. “Los
singularidad del habitar y una particular forma de Derechos del Niño en el siglo XX”.
moverse en el mundo, bien sea por tratarse de los http://www.iin.oea.orgNideos/documento_video_yo_quiero.htm Consulta 10/04/05.
extremos de la edad o por discapacidad; es decir, la
arquitectura tiene la misión de albergar al vida, no de
excluirla y la imagen de puente como instrumento Notas
para la inclusión.
1
BAGELLARDI, Paolus de la Universidad de Padua y posteriormente
PHAIRE, Tomás publica en inglés el Libro del niño. 1545, (POSADA,
1998. Pág. 3).
Bibliografía
2
Instituto Interamericano del niño. Los Derechos del Niño en el siglo XX, http:/
BOLLNOW, Otto Friedrich. “Hombre y Espacio”. Barce- /www.iin.oea.orglVideos/documento_video30_quiero.htm. Consulta 10..04/05.
lona: Editorial Labor, 1969. 3
“Tal y como proponían ELlA ZENGHELIS y ELENI GIGANTES”
(GAUSA: 19).
CÉLESTE, Bernadette. “El primer año de escolarización”. 4
Módulo de juegos compactos para niños, que permiten llevar a cabo
Madrid: Narcea, S.A. de Ediciones, 1990. dos o tres actividades en espacios correspondientes a una sola.
5
HEIDEGGER, Martín. “Construir, Morar, Pensar”. El 27% en la calle o la carretera y el 40% restante en el sitio de estudio,
recreo, trabajo u otro.
Darmstadt,1951.
6
“En este marco, la nueva vocación “protésica” de la arquitectura con-
GAUSA, Manuel. “HOUSING nuevas alternativas, temporánea [oo.] no radica tanto en esa constante situación de “adición” a
un cuerpo anterior inherente al propio acto arquitectónico como el hecho de
nuevos sistemas”. Barcelona: Editorial ACTAR que [...] hoy dicha realidad no podría ser, ya, la única fuente de inspira-
1998. ción” (GAUSA: 11).

[22]
LA GESTIÓN DEL HÁBITAT, UN DESAFÍO SOCIAL

La gestión del Hábitat, un desafío social


Mariana Gatani
Arquitecta. Investigadora Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas, CONICET. Miembro del Área de Investigación y Desarrollo
de Tecnologías para viviendas del Centro Experimental de Vivienda Económica.
Docente Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Nacional de Córdoba. Directora de proyectos de investigación y desarrollo referidos al
hábitat y la tecnología.

Resumen Introducción
Este artículo es un ensayo sobre la temática de la ges- Asistimos a un momento de crisis económica, social y
tión tecnológica de viviendas y algunas estrategias para política que, más que crisis, ya es una coyuntura. En
su producción. En la primera parte se describe la crisis este marco creciente y crónico de exclusión que vive un
económica, social y política – de carácter estructural - gran segmento social de varios países de las regiones
que viven muchos de los países de la región. En la se- Sur y Este del mundo, los indicadores sociales demues-
gunda parte se plantean algunos conceptos marco para tran un complejo perfil de carencias que caracteriza a la
entender el contexto económico y social. Más adelante, población de referencia.
se definen las diferentes estrategias de gestión
sociohabitacional en función de la lógica de los agen- El proceso de pauperización social, en contextos de de-
tes intervinientes. Para finalizar, se proponen algunos sarrollo inequitativo1 ha polarizado la situación al extre-
lineamientos alternativos para viabilizar la gestión del mo de la indigencia en amplios sectores de la pobla-
hábitat popular. ción.

Un agudo proceso de recesión con diferencias profun-


Abstract das – entre los países y dentro de los países -, de los
indicadores de PBI per cápita, nivel de desempleo, nivel
This article is an essay concerning technological housing educativo alcanzado, mortandad infantil, nos dibujan un
management and some strategies for the production. At panorama social asimétrico entre los estratos más altos
the beginning, the article describes the economical, so- y los niveles más bajos de la población.2
cial and political shortage -of structural nature -, that live
many regional countries. In the second part, it En Argentina, a consecuencia de la disminución de la
arrangement some concepts to understand the actividad económica y productiva del país, la mitad de la
economical and social context. After that, it defines the población se ve afectada. Así también el incremento de
different strategies of social housing management la indigencia se ha duplicado.3 Las necesidades de aten-
concerning to the logic of the implicate agents. At the ción se concentran en la pobreza, reproduciendo en-
end, it propose some alternative lines in order to viability tonces un círculo vicioso de mayores y más graves ca-
the popular housing management. rencias.

Y si bien existe cierta tendencia a la recuperación eco-


Descriptores temáticos: vivienda y gestión, gestión nómica, social y política del país, será agenda pendien-
sociohabitacional, producción de hábitat popular. te de los próximos años revertir el grado de deterioro

R E V I S T A / A L / H Á B I T A T / F E B R E R O 2 0 0 6 / 1 [23]
VISTA Hábitat

AL
RE MARIANA GATANI

social y cultural acaecido, a la luz de la incipiente ac- focalizado. El sistema económico está produciendo efec-
ción del Estado en áreas tales como educación, salud, tos sociales. Las políticas sociales son un ejercicio de la
generación de empleo y vivienda. voluntad política que tiene por función equilibrar desajus-
tes. El Estado pasa a ser subsidiario del mercado, en aque-
llas áreas que el mercado no cubre.
1. El contexto
Desde hace varias décadas asistimos al crecimiento de
La situación política, social y económica del país nos la economía, sin equidad. Y esta tendencia va en au-
tiene acostumbrados a vaivenes en las últimas déca- mento. Es prioritario desarrollar e implementar políticas
das. Sin embargo, en estos últimos años, los cambios económicas que aseguren programas sociales, econó-
parecen darse en forma vertiginosa y desarrollamos una micos y políticos distributivos.
dinámica de adaptación y resiliencia que socialmente
nos impresiona. La sociedad toda opina de economía, Se afirma que manteniendo este modelo económico,
de política, de aún cuando haya
agendas sociales y crecimiento, no
existe un renovado habrá equidad.
y ávido discurso a
pensar que con La crisis actual
cada proyecto po- nos iguala en un
lítico iniciamos la punto: las circuns-
senda del desarro- tancias sociales,
llo. políticas y econó-
micas nos rozan
Sin embargo, no en mayor o menor
debe ser confundi- medida. Las deci-
do desarrollo con siones cotidianas
crecimiento. ¿Po- plantean diferen-
demos asegurar tes relaciones a la
que el crecimiento crisis: en el ámbito
traerá desarrollo? de la cultura, de la
El desarrollo de la economía, de la
sociedad, de la educación, la pro-
economía, de la ducción o la salud.
cultura…es desa- Entonces, hay que
rrollo equitativa- redistribuir ahora,
mente distribuido. aún sin crecimien-
Es posible que to. Si se distribuye
haya indicadores equitativamente,
sociales que cre- se potenciará el
cen. No obstante, crecimiento.
no siempre sus be- (Coraggio, 2004)
neficios trascien-
den la esfera del Taracea. Sillas corales. Detalle. Venecia
alcance para unos
pocos.
2. Economía y sistema social
El Estado se ha convertido en administrador de la “crisis”
(o coyuntura) y no parece estar capacitado para revertirla, La economía es la disciplina que incide en forma de-
pese a los numerosos programas estatales de carácter terminante y de manera coercitiva sobre los factores

[24]
LA GESTIÓN DEL HÁBITAT, UN DESAFÍO SOCIAL

endógenos del país. Sin embargo, ¿qué es la econo- salud, a educación, porque no disponen de los recursos
mía? Estamos habituados a entender la economía en que lo permitan. Entonces, como resultado de la crisis
manos de expertos, de gurúes y fórmulas mágicas. Den- de expulsión de asalariados 5 , hay indigencia,
tro de esa lógica, existen contradicciones. Las teorías marginación, exclusión social. Y este es un fenómeno
de la crisis enfatizan el rol de la economía. preponderantemente urbano.

Algunas opiniones atribuyen a la economía un sentido ¿Qué alternativas hay? De hecho hay alternativas eco-
más extenso. J L Coraggio (2004) plantea que la econo- nómicas, no sólo para paliar esta crisis, sino para el
mía es el sistema que se da en una sociedad para defi- desarrollo de una economía más equitativa, más social-
nir, para organizar y para distribuir recursos que resuel- mente distribuida. Se trata de redistribuir la riqueza, to-
ven necesidades legítimas y permiten ejercer derechos mar una parte del ingreso excedente y distribuirlo en
legítimos, y lo hacen de manera transgeneracional. salarios dignos, y garantizar capacitación.
Según esta definición, no es coherente plantear diferen-
cias entre economía y economía social. La connota- La búsqueda de economías alternativas es respues-
ción de social, la socioeconomía, parece ser el escena- ta a la marginación social, en pos de mayores y me-
rio de movimiento alternativo para aquellos que quieren jores beneficios. Demostrar esto requiere identificar
diferenciarse del concepto en sentido restringido de potencialidades y posibilidades alternativas, y desa-
economía, entendido como la mera administración de rrollar estrategias que permitan viabilizarlas. Se de-
recursos. mandan propuestas sociales concretas que sean efi-
cientes en la generación de recursos, “reabriendo la
Por su parte, los antropólogos defienden la idea que expectativa generalizada a un desarrollo integrador,
toda economía produce sociedad, y en consecuencia, que impulse a la vez la innovación y la solidaridad”.
la sociedad disfruta los beneficios de la economía. Así (Coraggio, 2000)
entendida la economía está compuesta por actores y
agentes sociales, valores, cultura, e instituciones. A dife-
rencia de la economía, los mercados son reglas de jue- Economía popular y desarrollo local
go, acuerdos sociales. El mercado es una construcción
social. La cuestión urbana de comienzos de siglo está fuerte-
mente vinculada a la capacidad y métodos que el capi-
Entonces, de cómo se organiza la economía podremos talismo desarrolle en referencia a la vida social, cultural
entender la organización social que se da en una socie- y política de nuestras ciudades “globalizadas”. Se dice
dad. La economía debe ser definida por la sociedad en que son “ciudades sin rumbo”, ciudades en crisis, por la
función de sus necesidades prioritarias. Ello implica ne- ineficacia del modelo económico para distribuir los be-
cesariamente un proyecto político que lo sustente. Y es neficios que genera. Por ello, la cuestión urbana es tam-
por eso que la política y la economía difícilmente pue- bién la búsqueda colectiva de una propuesta de senti-
dan ser comprendidas en forma independiente. do. Es necesario resignificar las relaciones sociales ur-
banas en términos de una construcción social colectiva
y armónica.
¿Por qué otra economía?
Los desafíos que enfrenta la política urbana latinoame-
El modelo de organización actual de la economía es el ricana se presentan como la gobernabilidad, la
de mercado libre, autorregulado, la globalización de los competitividad y el desarrollo urbano sustentable.
mercados 4 . Hay consenso sobre las tendencias a la
dualización social y económica que la globalización La gobernabilidad es la garantía de estabilidad para los
conlleva y seguirá manifestando, aún contrarrestando procesos de acumulación del poder político y del poder
sus efectos más “extremos y evidentes”. económico. Competitividad de corto plazo implica de-
sarrollar un sistema urbano eficiente que atraiga el esta-
Como resultado, vemos a un creciente número de “ex- blecimiento de capitales: altas condiciones de infraes-
pulsados” del sistema: no pueden acceder a vivienda, a tructura (comunicaciones, oferta energética), eficiencia

R E V I S T A / A L / H Á B I T A T / F E B R E R O 2 0 0 6 / 1 [25]
VISTA Hábitat

AL
RE MARIANA GATANI

en la administración pública, y desregulación del traba- El grado de determinación se produce según la lógica
jo asalariado. Sustentabilidad es el paradigma de desa- de los agentes intervinientes.
rrollo del siglo XXI. Va más allá de los términos
ecológicos del ambiente, para ser asumido como el uso Con sentido amplio, Víctor Pelli define a la vivienda
eficiente de los recursos naturales y el mínimo impacto como...” un conjunto de soluciones, bienes y servicios,
ambiental de las aglomeraciones urbanas sobre el so- desagregables en el tiempo y en el espacio, y en sus
porte físico. La sustentabilidad social tiene que ver con procesos de producción y uso” (Pelli, 1999). Esta defini-
la mitigación de la pobreza y la indigencia. ción pauta las dimensiones del análisis viviendista a partir
de la concepción transdisciplinar.
La connotación urbana de la economía está fuerte-
mente ligada al sentido de desarrollo local.6 No en el Así el tema de la vivienda es abordado desde los diferentes
sentido clásico de economía interna o economía lo- sectores disciplinares: arquitectos, sociólogos, abogados,
cal, sino entendida como un sistema de relaciones economistas, aportando cada uno desde su perspectiva
sociales de todo tipo, que se dan en el marco de la los múltiples enfoques que intervienen en su tratamiento.
interacción con la economía pública y la economía
empresarial. Pretende trabajar en la interfase promo- Desde esta perspectiva, se trata de concebir la vivienda
viendo nuevas formas estatales y nuevas formas em- como la sinergia de factores de orden social, físico y
presariales. económico que se dan en el tiempo. Sin poner énfasis -
a priori - en alguno de estos aspectos, la vivienda así
Ello significa superar las prácticas filantrópicas de sec- entendida se expresa a partir de la cultura, del orden
tores sociales solventes, y superar también las teorías social establecido, de las oportunidades urbanas, de
que centralizan la idealización de la vida cotidiana de las circunstancias financieras,... y de los procedimien-
las comunidades pobres y la sabiduría de los subordi- tos constructivos vigentes.
nados. Es necesario construir nuevos paradigmas de
abordaje social, económico y político que promuevan Para demostrar la relación entre la gestión del hábitat y
procesos integradores para nuevas interpretaciones y la producción de vivienda, la observación de rasgos so-
alternativas para la acción. bresalientes y característicos de la gestión
sociohabitacional fue centrada en sus efectos: la vivien-
da y su expresión tecnológica. 7
3. La gestión del hábitat
El énfasis está puesto en las interrelaciones existentes
La gestión del hábitat y la producción de viviendas están entre la gestión (procesos de toma de conocimientos y
estrechamente vinculadas. La relación se establece de decisiones) y el correspondiente nivel de materializa-
entre las estrategias sociohabitacionales que se desa- ción alcanzado a través de selecciones y aplicaciones
rrollan y el producto que se obtiene: vivienda. tecnológicas.

La acepción de vivienda parece tener más de un enfo- Las categorías de abordaje son definidas mediante las
que según quien la defina. Según el diccionario, vivien- características predominantes de gestión, desde donde
da es el lugar donde habitan una o varias personas. Sin se realiza la mirada de la lógica dominante. Estas cate-
embargo, los “viviendistas” dan un giro conceptual a la gorías de análisis se clasifican según la posición del
expresión para referirse en términos que van desde órgano de decisión de la gestión sociohabitacional y
hábitat construido a escala comunitaria hasta solución son descritas como la gestión del Estado, la gestión
habitacional incorporando la microescala de interven- empresarial y la gestión social.
ción.

Así, las experiencias de los últimos años abordan las La gestión del Estado
diferentes concepciones sobre el tema de la vivienda
completa o “terminada”, desviando hacia estrategias La gestión institucional del Estado se define por la lógi-
diferentes de soluciones progresivas o “no completas”. ca del financiamiento oficial, esto es, quien aporta los

[26]
LA GESTIÓN DEL HÁBITAT, UN DESAFÍO SOCIAL

recursos necesarios y suficientes para la ejecución del consumo y la iniciativa de la empresa (de escala in-
programa socio habitacional, que puede incluir otros dividual o colectiva) que tiene lógica lucrativa, inyec-
actores participantes del proceso, como por ejemplo, el tando al mercado habitacional unidades para la ven-
sector privado (las empresas). 8 ta.

El proceso de definición de sus principales variables: Las características de este sector están sesgadas por
destinatarios, tecnología de construcción, tiempo de eje- entornos muy dinámicos y flexibles. La lógica de acu-
cución y montos de recursos económicos a aplicar, son mulación guía las actividades de estas constructoras
predeterminados por los organismos técnicos del Esta- que producen viviendas donde se presenta la oportuni-
do y no contemplan participación del destinatario du- dad de inversión rentable.
rante el proceso de toma de decisiones.
Sus resultados son viviendas de buena calidad cons-
Las décadas del sesenta y setenta se caracterizaron por tructiva y buena ubicación en la ciudad - con abundante
abundante producción de viviendas del Estado. Sin oferta de servicios y equipamiento-, predominantemen-

Hartmann Schedel. Liber Chronicorum. Plano de Roma. Biblioteca Nacional.

embargo, en la actualidad, no es significativo el número te destinadas a sectores de medio–alto y alto poder ad-
de viviendas que el Estado inyecta anualmente al par- quisitivo.
que de viviendas. Se trata de viviendas de tamaño medio
entre 60 y 150 m2 aproximadamente, destinadas a los En la gestión empresarial de viviendas, normalmente el
sectores medios y medios bajos. grupo empresarial está encargado de la gestión, finan-
ciación – aunque sea a través de créditos -, ejecución,
El acento de la gestión sociohabitacional estatal se ca- control y comercialización de las viviendas que produ-
racteriza por un proceso de control y administración de ce. Ello implica en ocasiones (dependiendo del tamaño
recursos económicos que contrasta con la ejecución de la empresa constructora) subcontratar algún segmen-
de viviendas en forma directa. to de actividades.

La gestión empresarial privada La gestión social


La gestión del sector empresarial de la construcción Resulta difícil definir la gestión social de viviendas sin
tiene a escala habitacional dos rangos: la gestión por mencionar su relación con algunos de los sectores ante-
demanda familiar individual guiada por una lógica de riores. A fin de definir las características de gestión, se

R E V I S T A / A L / H Á B I T A T / F E B R E R O 2 0 0 6 / 1 [27]
VISTA Hábitat

AL
RE MARIANA GATANI

considerará la gestión sociohabitacional con mediación El financiamiento de la obra es realizada por el ahorro
de ONGs y la autogestión destinada al consumo familiar. familiar – que acompaña la obra- aunque incluye tam-
bién modalidades de financiamiento oficial o créditos
privados.
La gestión de las ONGs
Los componentes y materiales de construcción son ad-
La gestión institucional de organizaciones no guberna- quiridos en el mercado formal, e incluye mano de obra
mentales toma características de las gestiones prece- contratada o autoconstrucción, aunque sea en forma
dentes con modalidades particulares. parcial.

Si bien depende – de manera general - de recursos Las tecnologías de construcción empleadas son de tipo
oficiales, está fuertemente involucrada en el diseño y artesanal, asociadas muchas veces, con falta de cali-
ejecución del programa y tiene activa participación en dad constructiva.
la definición de las características sociales, en la tecno-
logía de construcción, en el uso de los tiempos de eje- Dependiendo del nivel social y económico de la familia,
cución y en la eficiencia en el manejo de recursos limi- las calidades y tamaños de las viviendas autoproducidas
tados, en articulación con los organismos financiadores varían. Así también su ubicación. Grupos sociales más
(Estado) y con los organismos destinatarios (poblado- altos construyen en mejores barrios, y familias pobres
res). construyen en villas de emergencia. Pero la
autoconstrucción es un fenómeno típico de los sectores
La gestión de las ONGs es el espacio de prácticas y populares, quienes consideran la inversión en la vivien-
modalidades de gestión y construcción no convencio- da propia como una de las formas más eficientes del
nales. Desde la participación del usuario en el diseño ahorro familiar.
de la viviendas hasta la innovación con tecnologías cons-
tructivas que no se comercializan en el mercado formal
de producción de viviendas. 4. A modo de conclusiones
Son experiencias que no impactan en el mercado Tradicionalmente la oferta de viviendas, públicas o pri-
sociohabitacional de manera significativa, aunque a vadas no está focalizada hacia los sectores donde hay
menudo estas experiencias constituyen verdaderos carencia sociohabitacional. El desarrollo de estrategias
modelos de gestión. Se trata en general de conjuntos alternativas constituiría un aporte a la solución del défi-
de viviendas pequeñas, o evolutivas, o lotes con servi- cit.
cios, destinados a sectores bajos con alto nivel de sub-
sidio. Desde la gestión social de viviendas resulta una
aproximación pensar la construcción del hábitat aso-
ciada a modalidades financieras, oportunidades del
La autogestión popular mercado de la construcción y sustentabilidad am-
biental.
La gestión particular de viviendas es quizás la que cons-
truye la mayor parte del hábitat que se genera en las Por sobre estos aspectos, los cambios tecnológicos
ciudades latinoamericanas. No obstante, existe poca introducidos en los campos de la informática y de las
información sistematizada al respecto. comunicaciones fundamentalmente, provocan
asimetrías en el desarrollo de los conocimientos y
Su modus operandi consiste en extensos tiempos de del “saber hacer” en los sectores con mayor acceso y
gestión y construcción que son manejados por el usua- nivel de educación. La adecuación de tecnología para
rio – administrador. Según E. Ortiz, el promedio de cons- viviendas (no exclusivamente constructivas), desde
trucción popular de una familia latinoamericana es de esta perspectiva, constituiría el encuentro entre el
14 años, aunque en ocasiones, puede trascender más saber técnico- profesional y las necesidades comu-
de una generación. nitarias.

[28]
LA GESTIÓN DEL HÁBITAT, UN DESAFÍO SOCIAL

Algunos ejemplos son: constituyen entre otros el abanico de alternativas de cons-


trucción más aceptadas.
• Soluciones habitacionales progresivas, no comple-
tas, económicamente accesibles en forma escalo- • Tecnologías ambientalmente sustentables.
nada por medio de pequeños créditos.
Las tecnologías respetuosas del medio ambiente van
Existen antecedentes en diferentes países de aumentando el interés de los constructores que autoges-
Latinoamérica que dan cuenta de esta manera de cons- tionan su vivienda.
truir. Servivienda en Colombia y Viviendas Hogar de Cristo
en Ecuador son ejem- Desde hace varios
plos de ello. En Argenti- años, sistemas de sa-
na, el CEVE ha desarro- neamiento (sangrías,
llado la vivienda “semi- cámaras depuradoras
lla” que debe su nombre de drenaje), sistemas
a la progresividad de la de calefacción con bio
misma. Con tecnología combustible (salaman-
“semilla” se han ejecu- dras, calefones a leña),
tado proyectos socio- orientación adecuada
habitacionales en Cór- de los ambientes de la
doba, Santa Fe y Mon- vivienda para ganar luz,
tevideo. La hipótesis que y protección con aleros
acompaña esta pro- para las orientaciones
puesta tecnológica es la más desfavorables, son
evolución social y eco- algunas de las técnicas
nómica de las familias que economizan y ha-
a partir de la habitación cen más eficiente la
de la vivienda. Los nive- construcción y funcio-
les de terminación ini- namiento de viviendas.9
ciales son básicos y de
carácter abierto. Una vertiente tecnológi-
ca más nueva es la que
Las terminaciones cons- desarrolla materiales y
tructivas “del arte” per- componentes de cons-
miten el aporte de mano trucción a partir de recur-
de obra del usuario o sos renovables o el reci-
contratada a terceros. clado de desechos.
Taracea. Sillas corales. Detalle. Venecia
• Desarrollo del mer- Numerosos proyectos
cado de partes y / componentes. de investigación en Brasil están dedicados al reempla-
zo de la fibra de asbesto en las chapas para techo.
El uso progresivo y generalizado de partes de sistemas
de construcción y/o componentes demuestra la intro- En el CEVE se desarrollan varios proyectos que in-
ducción en el medio constructivo a modo abierto, con corporan desechos plásticos urbanos (PET) e indus-
carácter flexible, en pos de admitir ensambles con com- triales (films plásticos) y también residuos
ponentes de distinto origen y procedimientos variados. agroindustriales (cáscara de maní)10 . Los beneficios
son ambientales porque se le da utilidad a abundan-
La popular comercialización y uso de los bloques de tes volúmenes de desechos; económicos, por el cos-
hormigón así lo demuestra. Viguetas prefabricadas, cha- to competitivo con sus similares de mercado y socia-
pas de acero y más recientemente tableros de madera les, ya que pueden ser desarrolladas por

R E V I S T A / A L / H Á B I T A T / F E B R E R O 2 0 0 6 / 1 [29]
VISTA Hábitat

AL
RE MARIANA GATANI

emprendimientos sin altos costos de inversión en ma- viviendas”. Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño.
quinarias y equipos. Universidad Nacional de Córdoba. Córdoba, 2003.

Asumirse en un contexto económico limitado no de-


biera impedir una evolución tecnológica en térmi- Notas
nos de innovación, calidad y funcionalidad para vi-
1
viendas. En Argentina, el 20 % de la población concentra el 60 % de la renta
nacional
Es posible que debiéramos reinstalar el “oficio” de 2
Según Salvador Treber, analista económico, la relación entre el 10 %
arquitectos, no sólo en términos de diseño, sino tam- más rico y el 10 % más pobre de la Argentina es hoy una relación 1/40.
bién en términos constructivos y de producción; re- Cuando en los años ´60 era 1/8, en los ´70 1/14, en los ´80 1/25 , y en los
´90 1/32
cuperando saberes técnicos e investigando en la
innovación de éstas y haciendo uso de tecnología 3
Diario Clarín. 22.10.04. Buenos Aires
acorde al medio, que no implique sobreesfuerzos 4
El mercado global, como dijimos, es una construcción social, pero es en
que atiendan cuestiones mediáticas. mayor medida una construcción política. La competencia en el mercado
global no es empresa contra empresa, hay mercados por detrás, hay
estados por detrás.
Bibliografía 5
La crisis de expulsión de asalariados es la crisis del estado de bienestar.

CORAGGIO, José Luis. Módulo Economía Popular Ur- 6


Sin embargo, Coraggio define al respecto: No es por el modo de vida,
bana- Maestría en Hábitat y Vivienda. Universidad Na- ni por la densidad de ciertas relaciones entre sus miembros, ni por las
actividades de producción que lo caracterizan, que se define un asenta-
cional de Mar del Plata. 2001. miento como urbano. Este criterio imprime a cada asentamiento urbano
una denotación de “continente” y transfiere el sentido de “urbano” a todo lo
RIFKIN, Jeremy. El fin del trabajo. Nuevas tecnologías que transcurre “adentro” de sus límites, como la actividad económica.
contra puestos de trabajo: el nacimiento de una nueva Según esto, “economía urbana” sería la actividad económica “localizada”
dentro de los límites de los territorios urbanos.
era. Paidós- Buenos Aires, 1997.
En lo que sigue del trabajo denominaremos economía urbana local al
BUSALACHI, Marcelo. Programas de autoempleo: agregado de actividades económicas urbanas del conjunto de ciudades
microemprendimientos para el desarrollo local. http:// perteneciente a un departamento, provincia , o región no jurisdiccional
w w w. c a m b i o c u l t u r a l . c o m . a r / i n v e s t i g a c i o n / 7
Proyecto PROCESOS DE ADOPCION TECNOLOGICA PARA
autoempleo.html. VIVIENDAS. SECyt – UNC Dir: Mariana Gatani
8
En algunos proyectos oficiales con mediación de ONGs es posible la
GASPARINI, Leonardo et al. Características demográfi- inclusión de cooperativas o asociaciones de destinatarios.
cas y pobreza en la Argentina. Departamento de Eco-
9
nomía. Universidad Nacional de La Plata. 2002. Estas técnicas no son novedosas ni constituyen una moda de los
arquitectos populares. Principios milenarios como el Feng Shui, o la tradi-
cional técnica del rancho pampeano son ejemplos de esto.
BOSIO, Cristina. Economía social. Mimeo. Córdoba, 2003.
10
Al respecto se ha desarrollado un proyecto piloto con intervención
TREBER, Salvador. La distribución del ingreso y el déficit de pobladores de bajos recursos de la ciudad de Córdoba, en la
producción componentes de construcción con reciclados plásticos.
de viviendas. La polarización en la pirámide distribucional Los integrantes del proyecto no sólo han usado los componentes en
aleja la posibilidad de acceder a una vivienda digna. Ana- sus viviendas, sino que son entusiastas promotores del sistema de
les de I Jornadas “Procesos de adopción tecnológica para construcción.

[30]
PROYECTO DE INTERVENCIÓN INTEGRAL. OTRA OPORTUNIDAD PARA MORAVIA

Pr
Proo y ect
ectoo de Int er
ervv ención Int
Inter eg
egrral
Integ
Otr
Otraa opor tunidad par
oportunidad Moraavia
paraa Mor
Ana Isabel Rivera Posada
Comunicadora Social, Especialista en Planeación Urbana.

Estratégico
En el 2004 Moravia y sus problemáticas fueron conside-
radas por la administración municipal de Sergio Fajardo
Valderrama como un proyecto estratégico denominado
Intervención Integral de Moravia y su área de influencia,
incluido dentro del Plan de Desarrollo 2004-2007
Medellín compromiso de toda la ciudadanía.

Con carácter de proyecto estratégico, la Alcaldía le nom-


bró gerente al proyecto y además tres coordinadores
para los componentes urbanístico ambiental,
sociocultural y económico-financiero.

El proyecto de Intervención Integral de Moravia y su área de


Pocas personas saben que al barrio Moravia lo componen influencia busca favorecer la transformación física, espa-
los sectores de El Bosque, Moravia, El Morro, El Oasis Tro- cial, ambiental, sociocultural y productiva del sector, contri-
pical y La Herradura y que en la totalidad de su territorio buyendo con la calidad de vida de los habitantes de esta
viven más de 40 mil personas, en más de 8.300 viviendas. zona de la ciudad. Esto se hará mediante siete proyectos
orientados bajo principio de protección a sus moradores,
Lo que muchos sí conocen es que buena parte de lo concertación y participación comunitaria para la toma de
que hoy existe empezó a consolidarse en 1977 cuando decisiones, respeto por las estructuras sociales y urbanísti-
el Municipio de Medellín estableció allí el basurero cas del barrio, con la puesta en marcha de un plan parcial
municipal y con él se presentó un crecimiento acelera- que interprete la realidad del barrio, adaptando las normas
do hasta llegar a 17 mil personas en 1983. Fue enton- de urbanización a la realidad de la zona. El valor total de
ces cuando el Municipio determinó intervenir el sector y toda la iniciativa se calcula en 148.703 millones de pesos.
lo dotó de trazado urbano, de servicios y equipamientos
básicos y fueron canalizadas las quebradas El Molino y Los proyectos
La Bermejala. Pero estas intervenciones no se repitie-
ron hasta 20 años después, tiempo durante el cual el Los siete grandes proyectos son:
sector estuvo abandonado de la gestión estatal y donde
las problemáticas, físicas y sociales, crecieron. 1. Gerencia del proyecto de intervención integral: que bus-
ca gestionar y movilizar el máximo de recursos y proce-
En 1990, el Plan de Ordenamiento Territorial de Medellín sos públicos, privados y de cooperación para la ejecu-
define a Moravia como un área de intervención especial ción de todas las actividades del proyecto, en el marco
susceptible de contar con una Plan Parcial que orienta- de la ley y cumpliendo los lineamientos del Plan de
ra su mejoramiento integral. Desarrollo de Medellín. En total, se ejecutan acciones

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por valor de 2.315 millones de pesos que favorecen las comunicación, eventos y otras ejecuciones en
iniciativas comunitarias, la participación y capacitación concertación con la comunidad.
de las organizaciones comunitarias, salud pública y la
deuda social de los bonos de ayuda mutua. 7. Mejoramiento de la salud sexual y reproductiva: con
inversiones por 201 millones de pesos, pretende
2. Construcción y adquisición de vivienda nueva y usa- promover el avance de la incorporación de hábitos
da de interés social tipo 1: se busca la reubicación adecuados de salud sexual y reproductiva, apos-
de unas 1.900 viviendas -que hoy se encuentran en tándole a la construcción de relaciones familiares,
zonas de alto riesgo- en terrenos adecuados, previ- sociales y sexuales sanas.
niendo pérdidas humanas y materiales. En Moravia
son 4.426 los predios localizados en zonas de alto Una apuesta por la cultura
riesgo físico y ambiental o cercanos a proyectos viales,
retiros de quebradas o de equipamientos públicos. En A Moravia lo distingue un gran movimiento cultural. Por
este sector se invierten 58 mil millones de pesos. eso la administración municipal adelanta acciones para
propiciar nuevos procesos de integración social, con la
3. Fortalecimiento del tejido productivo: con recursos cultura como medio y que contribuyan a la resignificación
por 3.900 millones de pesos, pretende intervenir de del nuevo espacio barrial. El eje de estas actividades
manera participativa y flexible la economía barrial de será el Centro de Desarrollo Cultural, así como el reco-
Moravia, mediante la formación de capital humano, nocimiento y construcción de las memorias culturales,
la creación y fortalecimiento de unidades producti- la ejecución de diferentes proyectos de desarrollo
vas, la integración y generación de colectivos econó- sociocultural y de formación ciudadana para el fortale-
micos y la gestión de espacios de promoción de la cimiento de la identidad cultural. En la actualidad, redes
actividad productiva y comercial del sector. de dinamizadores y un comité interinstitucional confor-
mado por 20 entidades gestionan de forma participativa
4. Generación, recuperación, mejoramiento y conso- la consolidación de la actividad cultural del barrio y que
lidación del espacio público: busca el mejoramien- permita su conexión con las dinámicas de ciudad.
to de los espacios públicos existentes para que la
comunidad se apropie y los identifique como pun- Ejemplo de Buenas Prácticas
tos de encuentro, se creen facilidades en la movili-
dad vehicular y peatonal y se adecuen las instala- La Intervención Integral de Moravia es uno de los proyectos
ciones de salud, educación y cultura. Se invierten estratégicos que se beneficiará de la transferencia de Bue-
51.120 millones de pesos. nas Prácticas para mejorar las condiciones de vida en las
áreas urbanas de la Región Latinoamericana y del Caribe.
5. Legalización integral de predios: con inversiones por Durante el 2005 la ciudad de Medellín participó y fueron
valor de 9.350 millones de pesos, se busca asegu- seleccionados cinco proyectos, dos de los cuales se repli-
rar la tenencia del suelo y de los inmuebles y que se carán en Moravia. Uno de ellos es el Proyecto Pouso para la
reconozca la propiedad y su uso adecuado, de orientación urbanística y social que en los barrios populares
acuerdo con el Plan Parcial y las normas existen- de Río de Janeiro, Brasil, establece de forma participativa
tes. En la actualidad, tan sólo el 10% de las propie- con la comunidad las reglas para la extensión de su infraes-
dades de Moravia cuenta con título legal. tructura. El equipo coordinador del proyecto visitó Moravia y
destacó que se trata de una comunidad con un fuerte senti-
6. Comunicaciones para el desarrollo sociocultural del do de organización y pertenencia por su barrio, con necesi-
barrio Moravia: con estrategias por 318 millones de dades urgentes por resolver, lo que permite encontrar dispo-
pesos, se busca fortalecer los vínculos y redes de sición para trabajar y a producir cosas importantes. De otro
información y conocimiento de los diferentes acto- lado, el equipo del proyecto de Reasentamiento de familias
res del proyecto, centrando las actividades en el de- en riesgo que la Alcaldía Mayor de Bogotá ejecuta en Ciu-
sarrollo de las personas, las organizaciones, la vita- dad Bolívar, también visitó Moravia y señaló que para cual-
lidad del territorio y los impactos socioculturales, a quier proceso la comunidad es clave y que, de acuerdo con
través de la realización de campañas, medios de lo encontrado, se pueden esperar buenos resultados.

[32]
LA REVISIÓN DEL POT, UNA NUEVA MIRADA TERRITORIAL PARA MEDELLÍN

La rree visión del PO


POTT,
una nue
nuevva mir ada tter
mirada er
errr ititor
or ial par
orial paraa Medellín
Ana Isabel Rivera Posada.
Comunicadora Social, Especialista en Planeación Urbana.

Los principios que fueron tenidos en cuenta para esa


revisión son:

• El reconocimiento de la ciudad como acumulado.


La ciudad es un proceso, y por lo tanto es historia
(contexto sociocultural), es actualidad (enfoque de
la evaluación por conflictos y oportunidades según
los impactos de los desarrollos del ordenamiento) y
tiene perspectiva de futuro (frente al modelo de ciu-
dad definido para el año 2009, desde la evaluación
del compromiso de los sectores y actores
(corresponsabilidad) para lograrlo.

• La visión de ciudad desde la conciencia de territo-


rios bajo el reconocimiento de las diferencias en
las escalas y de los impactos que las decisiones y
acciones con carácter de ciudad tienen en lo micro
y lo meso-territorial. Por ello se hace necesaria una
estrategia pedagógica que permita el reconocimien-
to del otro dentro de las negociaciones que se ha-
cen en esa construcción permanente de la ciudad.

La Escuela del Hábitat, Cehap, de la Universidad Nacio- • La sostenibilidad de la participación en la construc-


nal de Colombia sede Medellín, adelanta desde el 2005 ción de la ciudad que queremos (planeación a lar-
la revisión y ajuste participativo del Plan de Ordenamiento go plazo), bajo el criterio de que esa construcción
Territorial –POT- del Municipio de Medellín, que fue apro- de ciudad requiere la simultaneidad en la forma-
bado en 1999 y con una vigencia hasta el año 2009. ción de ciudadanos capaces de establecer nego-
ciaciones para hacer realidad la ciudad que se plan-
Las actividades hacen parte de un contrato con la Alcal- tea en el modelo. Se hace necesaria la compren-
día de Medellín y pretenden, con los aportes de la ciuda- sión de la importancia en este proceso de dar el
danía, retomar un sueño de ciudad que concibe a paso del papel de habitante al de ciudadano.
Medellín integrada con la región; que pone a los ciuda-
danos y ciudadanas en el centro de las decisiones; que Teniendo en cuenta como principios rectores la equidad,
entiende al espacio público como prioritario en la cons- la sostenibilidad del territorio, la visión de región y la
trucción de ciudadanía; que vuelve a mirar hacia el Río competitividad, el análisis participativo del POT busca
Medellín sus quebradas afluentes, las montañas y el generar un espacio de participación, intercambio de ideas,
campo y que hace realidad la idea de privilegiar el bien- y búsqueda de acuerdos, en el cual los distintos sectores
estar colectivo sobre el particular. sociales expresen sus conocimientos, percepciones y

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actitudes frente a los desarrollos del Plan de Ordenamien- rurales y suburbanas con la perspectiva de entender la
to Territorial del Municipio de Medellín, a la vez escuchen ciudad como un espacio compacto e integral.
las posiciones de los demás actores y sujetos del ordena-
miento en la ciudad y a partir de ello se establezcan acuer- Otros sectores
dos y recomendaciones y se dé cuenta de los desacuer-
dos de aquellos aspectos objeto de ajuste. De manera simultánea a los talleres para los escena-
rios micro y meso-territorial se definió una estrategia para
Con la ciudadanía los actores sectoriales, con el fin de generar un espacio
de participación e intercambio de ideas, en el cual pue-
Para la revisión del POT se definieron dos grupos meta, dan expresar sus conocimientos, percepciones y actitu-
en los que se vinculó a toda la ciudadanía en el ejercicio des frente a las diferentes propuestas y desarrollos del
de evaluar cómo estamos frente al camino y la ruta que POT, así como escuchar las posiciones de los demás
nos conducen a la consolidación del modelo de ciudad actores y sujetos del ordenamiento en la ciudad.
pactada en el POT.
Para tal efecto, se desarrolló un ciclo de cinco semina-
Un primer grupo meta tuvo como escalas de análisis lo rios temáticos en los que se abordaron temas articula-
micro (comuna o corregimiento) y lo meso (zonal). Se dos a los componentes del modelo de ciudad pactado
compone por los pobladores y las organizaciones co- para el 2009. Los temas desarrollados fueron: Región
munitarias de base territorial, dado que son los habitan- de Ciudades. Del desarrollo metropolitano al desarrollo
tes de los barrios y veredas quienes desde la perspecti- regional, con Carlos Mario Yori como ponente central;
va y conocimiento del lugar pueden evaluar el impacto Espacio público; Medellín campo y ciudad: una nueva
que tienen en su vida cotidiana los desarrollos relacio- visión de la ruralidad, con Gustavo Wilches-Chaux como
nados con el ordenamiento. ponente; Estrategias de crecimiento urbano y la sana
mezcla de usos e Instrumentos de gestión en un nuevo
El segundo grupo lo conforman representantes de los paradigma del desarrollo urbano.
sectores sociales de carácter privado, académico y po-
lítico, quienes además de ser pobladores tienen intere- La estrategia participativa se articuló de manera definiti-
ses frente al POT en una escala macro, es decir, con va en el Seminario de Ciudad, evento síntesis del proce-
una perspectiva de ciudad y de región. so, en el que tuvieron presencia todos los actores socia-
les que participaron en las etapas anteriores y en el que
En los niveles micro y meso-territorial desde septiembre confluyeron las construcciones hechas en los diferen-
del 2005 se iniciaron los talleres en comunas y tes momentos, para levantar finalmente el documento
corregimientos, para facilitar la reflexión, la deliberación que dará cuenta de los aportes y consideraciones que
y la expresión de los actores locales, sobre los impactos la ciudadanía presentará al Concejo Municipal como
(conflictos y oportunidades) generados por la gestión producto del proceso de revisión y ajuste del POT. El
del POT en sus respectivos territorios, de forma que se seminario de ciudad se realizó el 24 de febrero.
puedan plantear propuestas en términos de su revisión y
ajuste. Para el seminario de ciudad, cada eje temático analizado
en los seminarios anteriores dejó como resultado dos
En lo micro-territorial se han hecho talleres, 2 por comu- documentos: uno de conflictos y potencialidades desde
na y 10 en la zona rural (2 en cada corregimiento). la visión de los diferentes sectores y otro que contiene los
Adicionalmente se han realizado 21 recorridos (1 por cada acuerdos, desacuerdos y recomendaciones sobre el ajus-
comuna y corregimiento), con el propósito de hacer una te, con los compromisos de esos sectores en la construc-
lectura del territorio para confrontar y/o verificar en cam- ción de ciudad y en la negociación del territorio.
po, los análisis efectuados en los talleres.
Con el documento de recomendaciones y apreciacio-
Igualmente, se inició el trabajo en lo meso-territorial (zonal), nes sobre la revisión del POT, la administración munici-
para lo cual se dividió el territorio municipal en tres cua- pal presentará en marzo del 2006 un proyecto de acuer-
drantes: norte, centro y sur, articulando las zonas urbanas, do para la reforma al POT.

[34]
Notas a Cát edr
edraa de Medellín
Cátedr
Presentación conferencia de Alberto Saldarriaga Roa
Medellín, 21 de febrero de 2006

La ciudad entre el bien y el mal. presarios, que por los planes y diseños realizados por
utópicos urbanistas y arquitectos. De allí el predominio
“Hasta el siglo XIX, la naturaleza mantuvo su primacía de configuraciones arquitectónicas anónimas, ajenas a
sobre la progresiva expansión de los asentamientos los valores simbólicos de la “alta” cultura profesional.
humanos. A partir de la Revolución Industrial, la acelera- Todavía, en los años treinta, Rockefeller y sus arquitec-
ción de este proceso logró que aconteciera en este final tos impusieron un lenguaje coherente en el espacio ad-
de milenio un hecho insólito en la historia de la Humani- ministrativo de la centralidad neoyorquina. A partir de la
dad: la población urbana del mundo superó a los habi- Segunda Guerra Mundial, las torres de oficinas repro-
tantes de las áreas rurales. Ello implica la creación del dujeron ad infinitum los esquemas abstractos y anóni-
ambiente “artificial” para más de la mitad de los seis mil mos del International Style, luego sustituídos por la cos-
millones de personas que el mundo alcanzará en el año mética posmoderna. La esperanza de los pioneros del
2000”. Roberto Segre Movimiento Moderno, de integrar las diferentes escalas
del diseño dentro de la ciudad, fracasaron ante el indivi-
Las ciudades “globales”, según Félix Guattari y Sassia dualismo de empresarios y financistas, ansiosos de iden-
Sasken, son los centros direccionales que dirigen los tificarse e inmortalizarse en la construcción de las imá-
destinos de la Humanidad, pero al mismo tiempo llevan genes corporativas del sistema financiero internacional.
en su seno las profundas contradicciones del capitalis- Modelos presentes en el mundo desarrollado y subde-
mo avanzado o neoliberalismo sarrollado, capitalista y socialista, que florecieron en
Nueva York, San Pablo, Buenos Aires, Johannesburg,
La historiadora Françoise Choay afirma que la ciudad Jakarta, Shangai o Tokyo.
ha muerto, sustituída por extendidos territorios donde
fragmentos urbanos se alternan con espacios rurales.
Ellos conforman lo que Claude Lelong denomina “ar- Las ciudades. IDENTIDAD, ESCALA Y
chipiélagos” urbanos. No cabe duda que acabó la ima- PERSONALIDAD
gen integral, unitaria, de la forma de ciudad. El diseño
geométrico regular, surgido en la antigua Grecia con
Hipodamo de Mileto, luego ratificado por los tratadistas Alberto Saldarriaga, en la historiografía colombiana
del Renacimiento, culmina en el proyecto de Le Hablar de Alberto Saldarriaga y su obra es referirnos a
Corbusier de la ciudad de 3 millones de habitantes. Éste momentos fundamentales y fundacionales del estudio,
resulta el último intento de establecer un control estéti- reflexión y búsqueda de la arquitectura y la ciudad co-
co, espacial y formal sobre la totalidad de las funciones lombiana y latinoamericana.
urbanas que imaginaba correspondiese a la existencia
de un orden y armonía sociales. En el siglo XX, las me- Saldarriaga forma parte de la segunda generación de
trópolis fueron configuradas más por las egoístas fuer- arquitectos que hizo una ruptura con la visión conven-
zas económicas, la implacable especulación de la tie- cional y clásica dominante, de un profesional para ha-
rra, la intervención de ingenieros, constructores y em- cer edificios. Un arquitecto que sólo se interesaba en el

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Hábitat
rayar pero sin poca profundidad de conocimiento, ne- parte, las secretarías de Cultura Ciudadana y de Educa-
gación por la teoría o valoración por la historia. ción, la Gerencia del Centro, las facultades de Comuni-
cación y de Arquitectura de la Universidad Pontificia
En un estante de la biblioteca está Habitabilidad, quizá Bolivariana, Comfenalco Antioquia, la Corporación Cul-
el primer texto personal de Alberto Saldarriaga, fechado tural Nuestra Gente, Utopía Urbana, Escuela del Hábitat
en 1976. Después, generalmente asociado con el de Universidad Nacional y la Corporación Región.
Lorenzo Fonseca, su nombre encabeza varios estudios
de tipo exploratorio, por lo demás pioneros en múltiples En el primer semestre del año 2006, se realizarán cinco
campos y varios temas relacionados con la trayectoria sesiones articuladas en el núcleo temático HISTORIA
histórica, los derroteros o los avatares de la arquitectura DE LAS CIUDADES EN EL MUNDO E HISTORIA DE
y de la ciudad colombiana entre los cuales están: As- MEDELLÍN COMO CIUDAD, para lo cual tendremos las
pectos de la arquitectura contemporánea en Colombia siguientes temáticas y conferencistas invitados:
(del cual fue coautor en 1977), Lenguaje y métodos en
la arquitectura (1983), Notas sobre el patrimonio arqui- Marzo 14: Historia de la ciudad latinoamericana (Silvia
tectónico colombiano (1983), Arquitectura colombiana Arango, Universidad Nacional de Colombia, sede Bogo-
(1984), La arquitectura de la vivienda rural en Colombia tá)
(primer volumen en 1980 y segundo en 1984), Vivienda
en madera, San Andrés y Providencia (1985), Arquitectu- Abril 4: La ciudad colombiana (Jacques Aprile, Universi-
ra para todos los días (1988), Un siglo de arquitectura dad del Valle)
colombiana (en la Nueva historia de Colombia [Plane-
ta], 1989), La casa en la arquitectura moderna colom- Mayo 9: Historia de Medellín, de la Villa de la candelaria
biana (capítulo sobre Bogotá. Obra colectiva, 1990), Ar- a la metrópolis (Martha Villa, Corporación Región -
quitectura popular en Colombia (premiado en la Bienal Medellín)
de Arquitectura en 1992), Vivienda guajira (1992), Ma-
nual de manejo del espacio público (1992), Guía de Junio 6: Patrimonio y memoria en Medellín (Luis Fer-
arquitectura de Colombia (con fotografías de Germán nando González Escobar, Universidad Nacional de Co-
Téllez, 1994). lombia, sede Medellín)

Regresó la Cátedra Medellín Quien desee mayor información puede solicitarla en las
instituciones asociadas o en la sede de coordinación
del Proyecto Interinstitucional Conoce Tu Ciudad: Calle
La Cátedra Medellín es resultado de la coordinación 55 No. 41-10 Medellín - Teléfono: 216 68 22 - correo
interinstitucional entre Alcaldía de Medellín y el Proyec- electrónico: conocetuciudad@epm.net.co y
to Interinstitucional Conoce Tu Ciudad, del cual hacen catedramedellin@epm.net.co

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