Espíndola Durán Esteban Sección 006

Psicología Médica 09/04/2018

“Los trece dispositivos psicológicos”. Virginia Satir. Ideas principales

1. Quitar los obstáculos del camino.

Hay varias cosas que interfieren y que tienen que ver con nuestro interior,
entonces hay que quitarlas para poder marchar en la dirección adecuada y
practicarlo más.

2. Para descubrir las antiguas reglas.

En la infancia aprendimos una serie de reglas que usamos en la actualidad, a

menos que hayamos tenido una experiencia diferente que nos haya hecho
cambiarlas. Necesitamos guías, no reglas.

La mayoría de las personas intenta vivir con reglas imposibles e inhumanas y si no

las cumple se siente culpable o se enoja.

Cada persona puede descubrir sus reglas si se da cuenta a todas las veces que
dice hay que, no hay que, habría que y tengo que. Si la persona vive con ellas,
tendrá muchos fracasos y sentimientos de culpa.

Debemos de transformar las reglas en guías útiles mediante la adición de un

contexto humano para tomar decisiones adecuadas.

3. Vivir la expectativa catastrófica.

A menudo nos ocupamos tanto en imaginar cosas terribles que no percibimos la

realidad circundante, nuestro diálogo interno se torna todo un caos, pero ante
esto, debemos calmarnos y saber que no todas las cosas son malas, que hay algo
de bueno en ello.

4. Mi pasado.

La experiencia del pasado es una fuerza poderosa, que nos permite hacer ciertos
cambios. La repetición de determinada conducta sólo indica que no hemos
aprendido algo nuevo, si esto es así, es porque lo que aprendimos nos funcionó
bastante pero hay casos en los que no funciona bien, entonces debemos de
cambiar. Tenemos la capacidad de aprender algo nuevo, siempre y cuando
tengamos la capacidad de creer lograrlo.

5. Llegar a familiarizarse con las palabras que nos hieren

Hay ciertas palabras que nos “lastiman” por el simple hecho de tocar un tema que
nos causa dolor, humillación o vergüenza. Algunas personas sufren en cuanto a
su integridad física y autoestima (por palabras hirientes) y es frecuente que la
posibilidad de contacto se posponga o destruya. No todos conocemos las palabras
que puedan herir a los demás, pero, estableciendo un buen contacto podemos
conocerlas y evitarlas para no lastimar a los demás.

6. Hacer suposiciones.

La mayoría de las personas hace suposiciones, ya sea por alguna duda o

desconfianza. Cuando se ponen en claro las suposiciones, es frecuente que
puedan aclararse los malos entendidos y los consecuentes resentimientos.
Muchas posibilidades de relación han fracasado por una suposición, ya que todos
suponemos cosas distintas. A veces parece que la gente siente que la
considerarán ignorante si dice que no entiende. En ese caso, lo único que la gente
puede hacer es inventar algo. Cada vez que nos topemos con una persona
podemos estar seguros de que encontraremos semejanzas y diferencias con
nosotros, por razones de la naturaleza humana. En presencia de la semejanza y la
diferencia, la clave es la apreciación, y el medio para lograr que ambas cosas
armonicen en la vida real es la comunicación congruente.

7. Comprobar mi percepción.

Es muy fácil que nos malinterpreten, el hecho de que nuestros gestos o

expresiones no vayan acorde con lo que estamos diciendo o sintiendo, es una
característica por la cual las personas nos malinterpreten. Cuando esto suceda,
tenemos que aclarar con la otra persona que es lo que entendió, vio y escuchó
para aclarar nuestra idea.

8. Uno posee todas las herramientas que necesita.

Todos poseemos las herramientas necesarias para establecer un buen contacto

humano, aunque puede ser que no hayamos encontrado todas. Herramientas
como la respiración, el cuerpo, expresiones faciales, voz, los sentidos, los gestos,
las palabras, los sentimientos, la experiencia, la locomoción, el tiempo y el espacio
nos ayudan a tener un contacto completo, pero para eso tenemos que usar todas
armoniosamente (congruencia). Debemos de saber cómo funcionan, como
utilizarlas , cuando utilizarlas, tener paciencia mientras se aprende y practicar para
adquirir habilidad en su uso.

9. Usar los sentidos.

Los sentidos constituyen el principal medio para captar la información que

proviene de fuentes externas a nosotros.
Vista. Tomamos en cuenta las imágenes mentales que creamos, las cuales, a
menudo, responden a experiencias.

Tacto. El cuerpo, el sistema nervioso, las satisfacciones con los demás y la

creatividad podrían incrementarse si tan sólo tocáramos más. Las manos no son
solo para el trabajo, el castigo y el sexo, constituyen un medio humano muy
confiable para establecer contacto.

Oído. Tiene que ver con el hecho de escuchar, el saber escuchar todo lo que una
persona pueda decir nos ayuda a tener una buena conversación y a no
malinterpretar.

Respiración. Es el sustento vital que oxigena el cuerpo. El acto mismo de

considerarla atentamente hace que todo el cuerpo y la mente sean más
receptivos.

10. Tomar en cuenta las palabras.

Las palabras son herramienta importante para el contacto. Es importante saberlas

usar en provecho de nuestra comunicación. Las palabras que usamos tienen
consecuencia en nuestra salud, influyen en relaciones afectivas entre las personas
y la forma en que la gente puede funcionar entre sí. Debemos de saber que las
palabras tienen poder. Cuando hablamos con otra persona hay diez formas de
expresión que habría de tomar en cuenta, usar con precaución y benevolencia.
Estas son: Hablar en primera persona, atribuir todo al interlocutor, recurrir al
impersonal (singular o plural), usar el término “eso” (sin especificar), uso del
“pero”, del “sí”, del “no”, del “siempre” y del “nunca”, o de una forma del potencial
del verbo deber.

11. Para mucha gente, hablar es sólo un hábito.

Si no prestamos atención a lo que decimos, podríamos decir todo tipo de cosas

que realmente no queremos decir y comunicar mensajes que no tenemos
intención de comunicar. Cuando se vuelve un hábito, dejamos de prestarle
atención.

El establecer contacto con nosotros equivale a descubrir de qué manera podemos

darnos cuenta de lo que estamos haciendo, diciendo, como nos movemos y que
estamos pensando y sintiendo.

12. La mayoría de nosotros habla en taquigrafía.

Nuestra taquigrafía frecuentemente va acompañada de mensajes corporales que

expresan lo contrario, esto hace que las demás personas no nos entiendan.
Podemos mejorar nuestra comunicación con las demás personas con un poco de
tiempo, esperanza y esfuerzo, ya que una persona tiene más influencia (porque
puede oír, ver, sentir, pensar, decir, hacer, moverse y aprender) de la que se
imagina para que las cosas cambien, en el momento en que decide
responsabilizarse de sus decisiones.

13. Canales.

Se refiere al medio por el cual el receptor percibe el mensaje, por ejemplo:

Ojos-verse

Oídos-escucharse

Boca-hablar

Piel-tocar

Nariz-oler

Podemos considerar estos canales como conductos por los cuales se mueven las
cosas entre las personas. Pueden presentarse imágenes turbias, por ejemplo,
cuando una persona está hablando con otra persona pero está pensando en otra
cosa. Esto da origen a un mal contacto, ya que la persona se siente mal
escuchada, mal vista, mal entendida y mal tocada. El simple hecho de que una
persona aparentemente esté viendo y escuchando a otra no es garantía de que
realmente lo esté haciendo.