El fin de las castas en la India

Publicado el 27/02/2012 por El Antropólogo Perplejo - Un blog de Jose Mansilla

Fuente: http://www.desmotivaciones.es

Siempre que, en una conversación, surge el tema de la India, invariablemente la gente se

acuerda de las castas.

Casta significa “color” en una traducción directa. Sin embargo casta es algo más. El
Real Diccionario de la Lengua define casta, en la acepción que aquí nos interesa, como
“aquel grupo social de una unidad étnica mayor que se diferencia por su rango, impone
la endogamia y donde la pertenencia es un derecho de nacimiento”. Otras definiciones
son: “forma de estratificación social establecida, en forma tradicional y prescriptiva,
por el hinduismo en la India, la cual clasifica a las personas dentro de la sociedad en
cuatro grandes grupos. En forma general casta se refiere a cualquier forma de
estratificación que pone énfasis en factores heredados o de nacimiento del individuo
para clasificarlo socialmente.”

Claramente, los elementos que más destacan de ambas definiciones son: estratificación,
nacimiento y etnia, y vienen a resumir muy bien lo que significan las castas en el
subcontinente indio, esto es, un sistema social al que se pertenece por nacimiento y que
clasifica a las personas en estratos con funciones establecidas. Para los occidentales,
cualquier forma de “clasificación” por nacimiento es profundamente injusta, por cuanto
supone la determinación de tus condiciones de vida por motivos agnaticios. Y aunque
aquí se nos olvidan los sistemas monárquicos europeos y otras cuestiones que socavan
los principios de igualdad, sí es cierto que rompe con toda una tradición de ciudadanía
impresa en el pensamiento occidental desde la Revolución Francesa.

Volviendo al tema de la conversación, la gente suele tener en mente la injusticia cuando

se acuerda del sistema de castas. Dejando al lado connotaciones ciertamente no tan
negativas de la institución (por ejemplo, cuando se construyeron los primeros hoteles en
la India, todo el mundo pensó que serían un gran fracaso, pues el sistema de solidaridad
intracasta suplía con enorme éxito la necesidad de cobijo fuera del propio hogar),
ciertamente es un elemento regresivo ya que impide el progreso social de las personas y
las valora en función no de lo que son, sino de lo que fueron sus antepasados.

La propia Constitución de la India, en su artículo 15, cita que “ningún ciudadano/a de la

India puede ser discriminado en función de su religión, sexo, casta, raza, lugar de
nacimiento (…)” y otras muchas leyes y disposiciones han pretendido luchar contra
cualquier principio discriminatorio vinculado al sistema de castas. Sin embargo, el éxito
alcanzado siempre ha sido relativo. Pese a los más de 50 años de vigencia de la misma,
a los refuerzos legislativos, las políticas públicas de discriminación positiva e incluso al
hecho de que, actualmente, la Presidenta del Congreso de los Diputados es miembro de
la casta de los intocables, los dálits, las discriminaciones e injusticias se han seguido
produciendo por este motivo.
Ha tenido que ser la influencia de un sistema económico y social ajeno a la realidad y
cultura india, el más puro capitalismo, el agente destructor de los principios del sistema
de castas. Curioso, veamos por qué.

El sistema de castas no es sólo un sistema de base social, sino también productivo. La

llegada del capitalismo a la India ha traído consigo la casi total transformación de la
base económica tradicional del país y este hecho ha venido seguido por la desaparición
del vínculo entre casta y oficio, particularmente en entornos urbanos, de forma que la
industrialización y urbanización de la India han traído consigo una completa
reestructuración de la división social del trabajo. Toma ya! Ni políticas de derechos, ni
décadas de economía socializante, ni discriminación positiva, ni nada. El capitalismo, y
principalmente tras las reformas de corte liberal acontecidas en los años 90, ha acabado
por sí solo con un sistema de contención y estructuración social vigente desde hace
milenios.

¿Hacía donde va la India ahora?, y ¿hacía donde se dirigen sus ciudadanos? No lo sé,
pero quizás, en nuestras próximas conversaciones sobre el país convendrá acordarnos
que el sistema de castas se encuentra en transición, se trata de un proceso dinámico, que
si bien es profundamente injusto, debe ser encauzado para que no dé lugar a nuevas
injusticias.