LA IMPORTANCIA DE SER DOCENTE

La educación es un acto de amor, por tanto, un acto de valor

-Paulo Freire

En el siguiente trabajo reflexivo abordaremos el tema “el perfil del docente”, más específicamente
del papel que debe desempeñar y cuáles deben ser sus características, teniendo en cuenta el
marco teórico: “Frankenstein Educador” de Philippe Meirieu y “La práctica educativa de Paulo
Freire: una visión compartida” de María Gorety Rodríguez Vieira, que a su vez los relacionaremos
con los videos observados en clase: “Los inicios del maestro”, “El Chavo del 8 – Don Ramón
profesor” y “La sociedad de los poetas muertos – Arranquen la introducción”.

Aunque exista una formación académica, la falta de experiencia puede entorpecer la labor de
cualquier docente. El educador debe estar preparado para todo tipo de situaciones no previstas
que surjan en el aula, al igual que notamos en el video “Los inicios del maestro” esto hace alusión
a las distintas circunstancias que el docente debe enfrentar al estar dentro del aula, como lo
menciona Gustavo Mórtola, Integrante del Área de Desarrollo Curricular del INFOD, al referirse al
docente novato: “El novato entra a trabajar y aparecen un montón de problemas que la formación
inicial no le había planteado, entonces tiene que enfrentarse a situaciones que jamás en la
formación inicial pensó que iba a tener que asumir”. O de la misma manera que plantea el
maestro Damián Tornese de la Escuela Normal Superior N°5 al manifestar: “El profesorado puede
prepararte pero hasta determinado punto (…) hay ciertas cosas que se pueden enseñar en la
carrera del profesorado y otras tantas que las vas a tener que aprender sí o sí en el contacto
cotidiano con el aula”. Es decir, el docente debe inmiscuirse en todo lo que se presenta, averiguar
si el alumno necesita algo, improvisar y llevar adelante una clase y sobre todo encontrar una
posible solución a ese problema que se le presenta. Como también se expresa en el video: “Donde
se encuentra un problema se espera que uno encuentre la manera de resolverlo, la cuestión es
que lo puedas resolver y la situación no te supere”- Escuela de música, Juan Pedro Esnaola, Ciudad
de Buenos Aires.

A lo largo de la docencia se presentan muchos interrogantes, ¿qué voy a hacer?, ¿con qué me voy
a encontrar?, ¿podré llevar a cabo mi clase como la había planificado?… así también como otras
sensaciones, de incertidumbre, desaliento por no conseguir lo esperado, inquietud de no estar a la
altura de la tarea, del mismo modo que lo visualizamos en el video en el Instituto de Educación
Inicial, Sara C. de Eccleston, Ciudad de Buenos Aires cuando remarca que “Los que empiezan
tienen miles de preguntas, incertidumbres, un poco de susto…” o en la Escuela de música, Juan
Pedro Esnaola, Ciudad de Buenos Aires cuando manifiesta “Si hacés una actividad que les interese
bastante no tienen por qué hacer lío, pero si se pone fea la mano una experiencia mala todo el
mundo la tiene”, o como también María Alejandra Rossano, Profesora de nivel terciario, Escuela
Normal Superior Nº7 cuando expresa “… recorría las cuadras hasta llegar a la escuela, tenía un
nudito acá y decía ojalá que me vaya bien, ojalá que los chicos aprendan”, o por el contrario,
sentir apasionamiento cuando las cosas empiezan a desbloquearse, entusiasmo cuando se expone
el proyecto, éxtasis cuando el otro, educando, colma nuestros deseos, como María Alejandra
Pasteris, Maestra de 4to grado, Escuela Normal Superior Nº7 hace alusión “Cuando uno ve la cara
de los chicos (…) esa cara que se ilumina porque te dice, Seño ya sé, eso es maravilloso, te
enciende para seguir todos los días”.

Habiendo deliberado acerca de las cualidades y/o características que requiere tener un buen
docente, concluimos en que deben de ser las siguientes:

Ser responsable: esto implica que debe atenerse a las expectativas y estándares que exige a sus
alumnos. La mejor manera de transmitir valores es predicando con el ejemplo. La gran tarea del
educador es hacer que sus educandos piensen de manera acertada por medio del diálogo,
tomando pacientemente el hecho de pensar, entendiendo las cosas, los hechos y la diversidad de
conceptos.

Ser flexible: debe ser un profesional dinámico, que reaccione ante las necesidades de sus alumnos
y del entorno que les rodea. Ser capaz de integrar el contexto actual y la realidad a sus
enseñanzas, de manera que sus estudiantes se sientan implicados y comprendan mejor los
conceptos, creando así mayor motivación por parte del estudiantado. Como en un pasaje del video
“Los inicios del maestro” podemos observar que María Alejandra Rossano, Profesora de Nivel
Terciario, Escuela Normal Superior N°7 opina “Empecé a incorporar este juego de ir y volver entre
lo que yo creo y lo que los chicos necesitaban para poder aprender”.

Ser observador: a pesar de que la clase esté formada por alumnos muy diversos y con diferentes
capacidades, sea capaz de detectar las necesidades de cada uno, sus carencias y adaptar el ritmo
de trabajo, a lo que necesitan sus alumnos para alcanzar el éxito, la alegría. Esta es otra clave para
mejorar la clase, la forma en que el docente logre la comunicación, la interacción entre sus
aprendices, la forma en que ellos se comuniquen con él, esto integra un saber pedagógico por
parte del educador, ya que tiene un grupo colectivo en común, como se puede ver en la Escuela
Cornelio Saavedra, Rosario, provincia de Santa Fe la inclusión del niño con capacidad diferente, en
donde se encuentra con la maestra de grado y la maestra integradora.

Ser mediador y empático: en la mayoría de ocasiones, también debe ejercer de mediador y

centrarse en mostrar a los alumnos, habilidades blandas y comportamientos que les ayuden en
la resolución de conflictos. Tiene que tratar de ponerse en el lugar de sus estudiantes, ver las cosas
desde su perspectiva y ayudarles a desarrollar las habilidades y aptitudes que les ayudará a
madurar y superar con éxito los desafíos. Como la secuencia que se desenvuelve en la Escuela
N°11, Indira Ghandi, D.E 10, Ciudad de Buenos Aires, donde una maestra se acerca a una alumna
que está llorando, angustiada, muestra que en situaciones como estas el docente debe romper
con aquello que está establecido si se le presentan situaciones de este tipo o bien de otra índole,
pero siempre permitiéndose estar cerca del alumno y que este lo pueda ver como una figura
donde además de profesor es también alguien que puede ayudarlo en diversas situaciones que se
plantean y no sólo en las pedagógicas.
Ser cooperativo: la cooperación es clave para trabajar efectivamente con administrativos, otros
docentes y los padres de los alumnos. El aprendizaje colaborativo y el trabajo en equipo debe ser
la base para transmitir conocimientos y generar coloquios e ideas entre los propios docentes y
entre los alumnos, logrando así tanto la producción individual como colectiva del grupo. Hay una
parte del video que lo ejemplifica de manera clara, se desarrolla en la Escuela Normal Superior
N°5. General, Don Martín Miguel de Güemes, Ciudad de Buenos Aires, en donde un profesor
intenta ayudar a sus alumnos a resolver un problema matemático, da una serie de pautas y al
mismo tiempo recibe distintas respuestas tomadas por sus alumnos como una especie de
aprendizaje mutuo.

Ser inspirador: un buen docente debe ser un guía que incentive el conocimiento autodidacta y
creativo de los alumnos. Como profesional especializado en la transmisión de conocimientos,
debe compartir experiencias de aprendizaje que vayan más allá de la explicación de conceptos y la
tradicional clase magistral. Por ejemplo, en el video “La sociedad de los poetas muertos” el
profesor pide a un alumno que creara un poema liberando su mente, usando su imaginación,
cerrando sus ojos y describiendo lo que ve “Solo crea y piensa en algo, dale el énfasis que
necesitas y rompe esquemas”. Una buena enseñanza transgrede.
Si bien el profesor debe ser inspirador con sus alumnos para que tengan independencia de
creación, pero éste debe guiarlos y no soltarles la mano, más allá de esa libertad que les provee no
debe perder el poder de controlarlos. Por ejemplo: cuando uno de sus alumnos Neil Perry decide
quitarse la vida porque sus padres estaban en contra de lo que él quería hacer (actor); el profesor
tanto los incentivó que terminó confundiéndolos.

Ser innovador: también debe encontrarse en plena formación y renovación de conocimientos,

para que pueda integrar en las clases nuevas metodologías, herramientas o recursos. De modo
que se debe actualizar permanentemente. En el video “La sociedad de los poetas muertos” el
profesor de literatura pide que observen el gráfico de coordenadas que la introducción de un libro
utiliza para definir el tema: la poesía, y él lo califica como “basura” y les dice que arranquen esa
página, pues su concepción de poesía no tiene estructura ni normas. El profesor rompe las reglas,
no está de acuerdo con lo establecido, y su vez implementa en el curso una nueva metodología de
enseñanza.

Ser carismático: debe lograr conectar con todos sus alumnos, tener la habilidad de atraer la
atención y de mantenerla, por lo tanto es importante diseñar clases interesantes, frescas,
actuales, promoviendo la curiosidad, trabajando con el rigor metódico para que sus alumnos se
vayan transformando en sujetos reales de su propia construcción y no lograr así un discurso
bancario. Lograr que sus alumnos sean participativos, que produzcan, que sean inquietos, críticos,
reflexivos, entre otras cosas. Al igual que en la Escuela Normal Superior N°7, José María Torres,
Ciudad de Buenos Aires cuando la maestra de lengua pide a sus alumnos que desarrollen de
acuerdo a su interpretación lo que habían trabajado en clases, todos querían participar, estaban
motivados y responden de manera correcta a las actividades propuestas.
Ser firme: debe ejercer autoridad en la clase, tomando decisiones, orientando actividades,
estableciendo tareas, etc. Lo que conlleva a desarrollar nuevas estrategias o métodos para
controlar el orden. Por ejemplo en el video “Los inicios del maestro” en la Escuela Superior N°7,
José María Torres, Ciudad de Buenos Aires percibimos cuando la maestra pone en orden la clase al
llamarle la atención al niño y cambiarlo de lugar.

Ser comprensible: debe ser abierto a indagaciones, la curiosidad y a las preguntas de sus alumnos.
Debe respetar los saberes que traen sus alumnos al aula, desde donde residen, sus experiencias, y
contexto, etc. Como es visible en el video, cuando la profesora Mónica Carozzi, Profesora de Nivel
Superior, Escuela Normal Superior N°7 describe “Lo más importante es escuchar lo que te está
diciendo el alumno o lo que está proponiendo, no por complacer, sino para entender cómo él está
entendiendo lo que vos estás queriendo transmitir”.

Ser autocrítico: debe tener presente la autocrítica reflexiva acerca del desempeño de su tarea con
los alumnos, sobre su práctica diaria, al mismo tiempo que lo toman como tema sumamente
importante para saber qué cosas tomar y qué cosas desechar “Uno va aprendiendo a enseñar y a
trabajar a la medida que está trabajando, mediante el ensayo-error va desechando cosas que no le
sirven y se queda con lo que considera necesario, el ensayo es algo personal” (Gustavo Mórtola),
también se lo puede ver en otros pasajes del video donde se muestran distintas reuniones de
profesores: Reunión docente, Escuela N°11, Indira Gandhi “A los chicos les cuesta mucho hablar.
Yo creo que la expresión oral es fundamental”, o en la Escuela N°604, Juan Carlos Leonetti,
Bernardo de Irigoyen provincia de Misiones, donde los docentes plantean el problema de la
disciplina como un problema en el aula. Esto también genera el enriquecimiento de formación a
través del intercambio de experiencias con otros colegas.
Por último, a modo de conclusión, expondremos el análisis realizado al video “El Chavo del 8 – Don
Ramón profesor” planteando dos diversos procedimientos que tienen de emplear en el mismo
curso, por un lado el profesor Jirafales y por el otro lado Don Ramón.

El profesor Jirafales utiliza una pedagogía conductista, tecnicista. Posee características autócratas,
exigiendo a sus alumnos al máximo, siendo el profesor el que sabe todo en la clase y controla al
grupo. Los alumnos toman el rol pasivo en el aula. El profesor transmite sus conocimientos de
manera muy poco creativa, no es expresivo y reprime a sus alumnos castigándolos, jalando las
orejas y colocándolos en un rincón del salón.
Se puede decir que el método de enseñanza utilizado por el profesor Jirafales es simbólico o
verbalístico, porque utiliza el lenguaje oral o escrito como medio de transmisión de información en
clase, lo cual produce desinterés en los alumnos y falta de motivación.

En cambio… Don Ramón usa una pedagogía constructivista. Modifica la forma de enseñanza que
tienen los alumnos, utiliza un tono grave de voz y explica el tema de “el peligro”, mediante un
método analógico, comparativo, estableciendo ejemplos enfocados en la vida cotidiana, por
ejemplo lo que pasaba si tomaban de un frasco con la imagen de la calavera o si agarraban cables
y se electrocutaban. Retoma conocimientos preexistentes de los alumnos mediante una imagen e
incorpora visualmente nuevos conocimientos representados por el mismo profesor
kinestésicamente. Hace uso del lenguaje corporal y así obtiene una clase más amena y dinámica.
Capta la atención de los alumnos, mantiene el orden y la disciplina. Utiliza como estrategia la
experiencia vivida y no un aprendizaje teórico.

Definitivamente consideramos válida la manera en cómo Don Ramón se desenvuelve aún sin ser
profesor en el aula, utilizando según él la “pesicología” (psicología), y habiendo empleado ciertos
puntos que consideramos necesarias para un docente.

Terminaremos el trabajo con una hermosa cita extraída del video:

Don Ramón: - ¿Usted aguanta esto todos los días del año?
Profesor Jirafales: - Sí, y además los recreos Don Ramón.
Don Ramón: - Entonces ¿por qué sigue en esto?
Profesor Jirafales: - Porque a pesar de todo Don Ramón, tengo fe en los niños y si queremos
construir un mundo mejor, aquí están los cimientos.