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s. TIMOSHENKO 'Y
J. N. GOOnffiR
Profesores de Ingeniería Mecánicu
de la Universidad de Stanford
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2.' EDICION EN ESPAii!OL: 1975
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ALBERTO FUENTES PEREZ
Licenciado en Ciencias Físicas
Colaborador del Instituto
Eduardo Torroja
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de In Construcción y el Cemento
] eCe de la Sección de Física del
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de la Compañía General de
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Prólogo a la
Unica traducción autorizada al castellano de la obra en lengua inglesa The()ry
af ~lastl"city Copyright, 1934, by the Unitcd Engineering Trustees, lne. Copyright,
1951; by the McGraw-Hill Book Company, lnc. Nueva York.
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preguntas que tratan sobre la teoría de la QrosetaJ), tensiones gravitato-
rias', prinGipio de Saint-Venant, componentes de la rotación, teorema
1':C de reciprocidad, carácter aproximado de las soluciones de los estados
tensionales planos, centro de torsión y centro de flexión, concentración
© Urmo, S. A. de Ediciones
J. de AJurlJguerrJ, 10 - BllbJo-9
Hecho el depósito que mJrt.IIJ ley
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de las tensiones de torsión en las zonas de transición, estudio aproximado
de secciones delgadas .sometidas a torsión y flexión y cilindro de sección
circular sometido en una banda de su superficie a la acción de una presión.
Pensando en los alumnos se han incluido al final de cada capítulo, desde
1968 ! el primero hasta el dedicado a la torsión, algunos problemas.
Impreso en Esp.1ii.l por: Agradecemos vivamente las numerosas sugerencias y consejos de los
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Fotocomposlción:
Artes Gr,uicJs GrrJe/mo, S. A. le'ctores del libro.
Impresión:
Publidisn S, TIMOSHENKO
Prllltcd 1Il SpJIIl •i J.] N. GOODIER
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Prólogo a la primer
de las piezas de maquinaria, ayudando a eliminar las zonas débiles en las a la sencilla obtención del mínimo de una función. De esta forma, se
que las fisuras pueden iniciarse. encuentran soluciones aproximadas útiles en muchos casos de Ímportan-
Otro ejemplo de la aplicación fecunda de los métodos experimentales, cia práctica.
es el empleo de la película de jabón para la determinación de las tensiones Con el fin de simplificar, el libro· comienz1;l con los problemas bidi-
de torsión y flexión en piezas prismáticas. El difícil problema de la inte- mensionales, pasando luego, cuando el lector se ha familiarizado con los
gración de una ecuación diferencial sometida a unas ciertas condiciones métodos de resolución de los problemas de la teoría de la elasticidad, a
de contorno se reduce, en este caso, a la medida de las pendientes y de- los tridimensionales. Aquellas partes del libro que siendo importantes, se
flexiones de una película de jabón convenientemente estirada y cargada. pueden omitir en una primera lectura, van impresas en letra pequeña.
Los experimentos demuestran que de esta forma se obtiene, no sólo una El lector puede estudiar tales problemas después de haber acabado con
imagen de la distribución tensional, sino también la necesaria infonnación las partes más esenciales de la obra.
cuantitativa sobre la misma, con una exactitud suficiente para las apli- Las deducciones matemáticas son presentadas en forma elemental
caciones prácticas. no requiriendo, por lo general, mayores conocimientos que los dados en
La analogía eléctrica proporciona, también, un medio para estudiar las escuelas de ingeniería. Si los problemas son más complicados, se dan
las tensiones producidas por la torsión en las zonas de transición de ejes todas las explicaciones necesarias y los cálculos intermedios con el fm de
de diámetro variable. La analogía entre el problema de la torsión de placas que el lector pueda seguir sin dificultad los desarrollos matemáticos.
y el de la elasticidad bidimensional, ha sido aplicado también con éxito Sólo en unos pocos casos son presentados los resultados finales sin detallar
en la resolución de importantes problemas de ingeniería. la deducción de los mismos. En ese caso, se incluye la referencia de los
Al preparar este libro se ha intentado facilitar a los ingenieros, de trabajos en los que tales deducciones pueden ser encontradas.
manera sencilla, el conocimiento fundamental necesario de la teoría Las numerosas notas que contiene este libro dan la referencia de los
de la. elasticidad. Se ha querido también presentar la solución de ciertos trabajos y libros sobre teoría de la elasticidad que pueden ser de impor-
problemas especiales que pueden ser de importancia práctica, así como tancia práctica. Tales referencias pueden ser de interés para los ingenieros
describir los métodos aproximados y experimentales de resolución de los que deseen estudiar algún problema especial con mayor detalle. Ellas
problemas de elasticidad. nos dan también una visión del desarrollo moderno de la teoría de la elas-
Pensando en las aplicaciones prácticas de la teoría de la elasticidad, ticidad, pudiendo ser de interés para aquellos graduados que se especia-
hemos omitido algunos temas de gran interés teórico y aquellas que en lizan en. este campo. .
el momento actual no presentan ninguna aplicación práctica inmediata, En la preparación de este libro se ha utilizado una obra sobre el mismo
para dar lugar al estudio de problemas concretos. Sólo considerando tales tema (Theory 01 Elasticity, vol. 1, San Petersburgo, Rusia, 1914-), cons-
casos con todo detalle y comparando los resultados dados por los métodos tituido por una serie de conferencias dadas· en diversas escuelas de in-
exactos con las soluciones aproximadas dadas en los textos elementales geniería rusas.
de resistencia de materiales, puede el proyectista adquirír un conocimiento El autor ha sido ayudado en su trabajo por el Dr. L. H. Donnell y
profundo de la distribución de tensiones en las estructuras, enseñán- el Dr. J. N. Goodier, quienes revisaron el manuscrito y le sugirieron
dosele las ventajas de los métodos rigurosos del análisis tensiana!. diversas correcciones. El autor agradece asimismo a los profesores G. H.
Al estudiar problemas especiales, se ha aplicado, en la mayoría de Mac CuIlongh, E~ E. Weibel, M. Sadowsky y D. H. Young, la colabora-
los casos, el método de la determinación directa de las tensiones y se ción prestada en la preparación final del libro y en la lectura de algunas
han empleado· las écuaciones de compatibilidad expresadas en función partes del manuscrito. Queda también reconocido al señor L. s. Veenstra
de las componentes de la tensión. Este método es más familiar a los in- por la· realización de los dibujos y a la señora E. D. Webster por su trabajo
genieros, los cuales se interesan, por lo general, por la magnitud de las de mecanografía. . .
tensiones. Una adecuada introducción de funciones de tensión suele sim- S. TIMOSHENKO
plificar este método, haciéndolo más sencillo que aquel en el que las ecua-
ciones de equilibrio son expresadas en función de los corrimientos. UNIVERSIDAD DE MICHIGAN
En numerosos casos, se ha hecho uso del método de la energía elástica. Diciembre, 1933
De esta forma, la integración de ecuaciones diferenciales, queda susti-
tuida por la búsqueda de las condiciones de mínimo de una cierta integra!.
Este problema de cúlculo variacional se reduce, usando el método de Ritz,
PRÓLOGO A LA SEGUNDA EDICIÓN. 7
PRÓLOGO A r.A PRIMERA EDICIÓN 9
NOTACIONES • • • • • • • . • 19
CAPho!.o 1
INTRODUCCION
1. Elasticidad • . . . • . 21
2. Tensiones. . . . . . . . . . • . . • . • . . . . . . 22
3. Notaciones correspondientes a las fuerzas ya las tensiones 23
4. Componentes de la tensión . . . 24
5. Componentes de la deformación . 25
6. Ley de Hooke 27
Problemas. . . . . . 31
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. '"\' CAPiTULO 2
TENSIONES 'PLANAS y DEFORMACIONES PLANAS
7. Tensiones planas. . . . 32
8. Defonnación plana . . 32
9. Tensiones en un punto. 34
10. Defonnación en un punto 39
11. Medida de las defonnaciones superficiales . 41
12. Construcción del circulo de Mohr a partir de las medidas realizadas
con uria roseta. . • . . . . . . . . 43
13. Ecuaciones diferenciales de equilibrio 43
14. Condiciones de contorno . . . 45
15. Ecuaciones de compatibilidad . 45
16. Función de tensión. 48
Problemas. ',.. . . . . . . . 50
INDICI! INDICI! 15
CAPÍTULO 3 CAPITULO 6
CAPÍTULO 9 CAPíTULO 12
FLEXION DE Pl~ZAS PRlSMATICAS
TEOREMAS GENERALES
Ecuaciones diferenciales de equilibrio 263 105. Flexión de una pie:¡a en voladizo 355
Condiciones de compatibilidad. . . . 265 106. Función de tensión. . . . . 357
Determinación de los desplazamientos. 268 107. Sección transversal circular . . 359
Las ecuaciones de equilibrio como funciones de los desplazamientos. 269 108. Sección transversal elíptica . . 360
Solución general para los desplazamientos 270 109. Sección transversal rectangular. 362
Principio de superposición.. 271 110. Resultados complementarios . 368
Unidad de la solución. • . . . . . . . . 272 111. Secciones transversales no simétricas . 370
112. Centro de flexión o centro de corradura 372
Teorema de reciprocidad. . . . . • . . . . •....• 274
Carácter aproximado de las soluciones de los estados tensionales planos. 277 I 1, Ih,:"lu"ción de los problemas de flexión por el método de la película
Problemas. . . . . . . . . . . . • . • . . . . . . . . . • . . 279 de Jabon . . . . . . . . . . 376
114. Desplazamientos . . . . . . 380
115. Otros estudios sobre la flexión 380
CAPÍTULO ·10
PROBLEMAS ELE:MENTALES
DE ELASTICIDAD TRlDI:MENSIONAL CAPíTULO 13
DlSTRIBUCION TENSIONAL SIMETRlCA RESPECTO AL EJE
85. Tensión uniforme . . . . . . • . . . . . . . . . • 281 EN UN SOLIDO DE REVOLUCION
86. Barra prismática extendida por acción de su propio peso. 282
87. Torsión de ejes cilíndricos de sección circular constante. 285 116. Ecuaciones generales. . . . 382
88. Flexión simple de barras prismáticas . . . . . . 287 117. Soluciones polinómicas. . . 386
89. Flexión simple de placas planas . . . . . . . . . . . 291 118. Flexión de una placa circular 388
119. Caso de disco giratorio considerado corno problema tridimensional 391
120. Sólido de extensión indefinida cargado en uno de sus puntos . . 394
11
CAPÍTtr!.O 121. Recipiente esférico sometido a una presión uniforme interior o exterior. 396
TORSION 122. Tensiones locales alrededor de una cavidad esférica . . . .. 399
123. Fuerza sobre el contorno de un cuerpo semiindefmido. . . . . . t . 402
90. Torsión de barras prismáticas . . . . 294 124. Sólido semiindefinido sometido a la acción de una carga distribuida
91. Barras de sección transversal elíptica . 300 sobre una zona de su plano limitante. . . . . . . . 406
92. Otras soluciones elementales. . . . . 302 125. Presión entre dos cuerpos esféricos en contacto. . . . 4'13
93. Analogía con In membrana. . . . . . . 306 126. Caso general de presión entre dos cuerpos en contacto. 419
94. Torsión de barras de sección rectangular estrecha. 310 127. Choque de esferas. . . . . . . . . . . . . . . . 424
95. Torsión de barras de sección rectangular . . . . 312 128. Deformación de un cilindro circular cargado simétricamente. 426
96. Resultados complementarios . . • . . . . . . . . . . . . . . 316 129. Cilindro circular sometido a la acción de una presión sobre una banda
97. Resolución de problemas de torsión por el método elasto-energético. 318 de su superficie . . . . . . . . . . . . . . . . . . 430
98. Torsión de perfiles laminados . . • . . . . . . . . . . . • . 324 130. Torsión de un sector de anillo de se.cción circular.. . . . 433
99. Empleo de películas de jabón para resolver problemas de torsión . 327 131. Flexión simple de un sector de anillo de sección circular. 438
100 .. Analogías hidrodinámicas. . . . • . . .. . 329
101. Torsión de árboles.. huecos. . . . ' . . . . . . . . . . . . . . 332
102. Torsión de tubos' de pared delgada . . . . . . . . . . . . • . . 336 CAPÍTULO 14
103. Torsión de una barra en la que se impide el alabeo de una d.. las sec-
ciones transversales. . . • . • . . . . . . . . 340 TENSIONES DE ORIGEN TERMICO
104. Torsión de árboles circulares de diámetro variable 342 132. Casos sencillos de tensiones de origen témlico. . . . . . • . . . . 441
Problemas. . . . . . . . . . . . . 351 133. Algunos problemas planos de tensiones de origen térmico. . . . . , 446
134. Disco circular delgado. Repartición de temperaturas simétrica respecto
al centro . . . . . • . • . . . . . . . 448
135. Cilindro largo de sección circular. . . . . 450
136. Tensiones de origen térmico en una esfera. 459
137. Ecuaciones generales. 463
138. Tensiones in~ciales. . . • • . . . . . . 467
INDICE
CAPiTULO 15
PROPAGACION DE ONDAS EN :MEDIOS ELASTICOS No
14i'. Movimiento generado por fuerzas • . . . 480
142. Ondas longitudinales en barras prismáticas. 480
143. Choque longitudinal de dos barras. . • . • . . . . . . . • . . . 486
144. Ondas de dilatación y ondas de distorsión en medios elásticos isótropos. 495
145. Ondas planas. . . . . • . . . . . • . . • . . . • . . . . . . 496
146. Propagación de ondas sobre la superfiCie de un cuerpo elástico . . . 499
ApÉNDICE
APLICACIONES DE LAS ECUACIONES
EN DIFERENCIAS FINITAS EN ELASTICIDAD
1. Deducción de las ecuaciones en diferencias finitas. . 503
2. Métodos de aproximación sucesiva . 5.07
3. Métodos de relajación. . . . . • . 510 x,Y,z Coordenadas rectangulares.
4. Redes triangulares y hexagonales. . 515 r, fJ Coordenadas polares.
5. Relajación en ~rupo y en bloque. . . . . . . . 520 ~, r¡ Coordenadas curvilíneas ortogonales; a veces coor-
6. Torsión de barras de sección múltiplemente conexa 521 denadas rectangulares.
7. Punto?pró::,imo~ ~l contorno. . . . • . . . . . 523 R, '1', O Coordenadas esféricas.
8. Ecuaclon blannomca. . . • . . . • . . . . . 525 N NOITIlal exterior a la superficie de un cuerpo.
9. Torsión de árboles circulares de diámetro variable 534 1, m, n Cosenos directores de la normal exterior.
[NDICI! DE AUTOBl!S • •• ••.•••••• 539 A Area de una sección transversal.
INDICI! ALFABÉTICO • • • • • • • • • • • • •••• 543 Momentos de inercia de una sección transversal
respecto a los ejes x e y, respectivamente.
Momento polar de inercia de una sección trims-
versal.
g Aceleración de la gravedad.
/} Densidad.
q Intensidad de una carga distribuida en forma
uniforme.
p Presión ..
X, Y, Z Componentes de una fuerza másica por unidad de
volumen.
X. Y, i Componentes de una fuerza superficial actuando
sobre la superficie de un cuerpo por unidad de
superficie.
M Momento flector.
M, Momento torsor.
U%, u., G, Componentes normales de tensiones, paralelas a
los ejes x. y, y z, respectivamente.
u. Componente normal de tensiones paralelus a n
G" Uo Tensiones normales, radial y tangencial, respec-
tivamente, en coordenaqas polares.
U!, G, Componentes Ilormale* de la tensión en coorde-
nadas curvilíneas. '
tI" tID, tI, Componentes normales en coordenadas cilíndricas.
~ 8=~+~+~=~+~+~
TEORIA DE LA ELASTICIDAD
f Tensión t311gencial.
T~u, Tu. fJl' Componentes de la tensión tangencial en coorde-
nadas rectangulares.
T, o Tensión tangencial en coordenadas polares.
7:"1 Tensión tungencial en coordenadas curvilíneas.
T,O, 'Co .. T" Componentes de la tensión tangencial en coorde-
nadas cilíndricas.
S Tensión total en un plano.
u, '11, w Componentes de los desplazamientos.
E Elongación unitaria.
E" ~"'~. Proyecciones de la elongación unitaria sobre los
ejes :x, Y. y W.
E,. EQ Elongaciones unitarias radial y tangencial en coor-
denadas polares.
e = ~, + "11 + E. Dilatación cúbica.
y Deformación tangencial.
r"'lI' r .." Y., Componentes de la deformación tangencial en coor-
denadas rectangulares.
r, o' )'& .. y,. Componentes de la deformación tangencial en coor-
denadas cilíndricas.
E Módulo de elasticidad.
G Módulo de rigidez. 1. Elasticidad. Todos los materiales estructurales presentan en
" Coeficiente de Poisson. cierto grado la propiedad de elasticidad, es decir, si las fuerzas exteriores
pE que deforman la estructura no rebasan un cierto límite, la deformación
p. G. .l Constantes de Lamé.
(1 + ,.) (1 - 2.) desaparece cuando se suprimen tales fuerzas. En este libro, se supondrá
~ Función de tensión. que los cuerpos que sufren la acción de las fuerzas exteriores son perfec-
'P (z), X(z) Potenciales complejos; funciones de la variable com- tamente elásticos, es decir, recuperan su forma inicial después de suprimir
pleja z = x + iy. las fuerzas.
'i Variable compleja conjugada x - iy.
e Rigidez torsional. La estructura molecular de los cuerpos elásticos no será considerada.
O Angulo específico de torsión. Se supondrá que la materia del cuerpo elástico es homogénea distribuyén-
F = 2GB Expresión usada en problemas de torsión. dose con con~inuidad en su volumen, de forma que cualquier elemento
V Energía de deformación. extraído de él, posee sus mismas propied~des físicas. Para simplificar los
V, Energía de deformación por unidad de volumen.
t Tiempo. razonamientos se supondrá también que el cuerpo es ¡sótropa, es decir,
T Intervalo de tiempo. Temperatura. las propiedades elásticas son las mismas en todas las direcciones.
a Coeficiente de dilatación térmica. . Los materiales estructurales no cumplen, en general, las condiciones
señaladas anterionnente. Un material tan importante ¡;omo el acero, por
ejemplo, consiste en cristales diferentes, distintamente orientados como
puede verse al observarlo al microscopio. El material dista mucho de ser
homogéneo, pero la experiencia muestra que las soluciones de la teoría
elástica, admitiendo las condiciones de homogeneidad e isotropÍa, pueden
ser aplicadas a las estructuras de acero con gran exactitud. La explica-
ción es que los cristales son muy pequeños: generalmente hay millones
en un centímetro cúbico. Mientras que las propiedades elásticas de un
~ristal pueden variar mucho con lu dirección, los cristales están general-
mente orientados al azar y las propiedades elásti¿as de las piezas grandes
corresponden a los promedios de las propiedades 'cristalinas. Siempre que
las dimensiones gepmétricas de un cuerpo sean grandes comparadas con las
dimensiones de ''los cristales, la suposición de homogeneidad puede ser
TEORIA nI': LA ELASTIClDAD INTRODUCCION 23
con gran exactitud y si los cristales están orientados al azur, el ma- En el caso que acabamos de considerar, la tensión era uniforme en
. ser tratado también como isótropo. toda la sección recta. En el caso general de la figura 1, la tensión no se
. a causa de ciertos procesos tecnológicos, tales como el lami- distribuye uniformemente en mm. Para· obtener la magnitud de la tensión
¡.JnOU</ll1ll.Ul1 una cierta orientación de los cristales del metal, las pro- que actúa sobre el pequeño elemento de área bA, que comprende al
Ul"U"'~". elásticas dependen de la dirección y debe considerarse la condición punto O, suponemos que las fuerzas que actúan a través de este área ele-
., anisotropía. Tal condición se da, por ejemplo, en el cobre laminado mental, debidas a la acción del material de la· parte B sobre el material
eri frío. de la parte A, se reducen a una resultante P. Si el área bA disminuye con
continuidad, el valor límite del cociente bPt"A nos da la magnitud de
la tensión, que actúa sobre la sección mm en el punto O. La dirección que
tiene iJP en el límite, es la dirección de la tensión. En general, la tensión
estIÍ inclinada respecto al elemento de superficie iJA sobre el cual actúa
descomponiéndose entonces en sus dos componentes: una tensión normal,
perpendicular al elemento c3A y una temión tangencial o cortante, que actúa
en el plano de !lA .
.tn :Z1l
3. Notaciones correspondientes a las fuerzas y a las tensiones.
Las fuerzas exteriores que pueden actuar sobre un cuerpo, son de dos cla-
ses. Las fuerzas distribuidas sobre la superficie ,del cuerpo, tales como
la presión mutua ejercida entre dos cuerpos o la presión hidrostática, se
FJC.2
llaman fuerzas superficiales. Las fuerzas distribuidas sobre el volumen
Fw. 1
del cuerpo, tales como las fuerzas gravitatorias, las fuerzas magnéticas, o en
el caso de que exista movimiento, las fuerzas de inercia, se llaman fuerzas
2. Tensiones. Supongamos que el cuerpo representado en la fi- masicas. La fuerza por unidad de superficie será descompuesta, en ge-
gura 1, se encuentra en equilibrio. Bajo la acción de las fuerzas exterio- neral, en sus tres componentes paralelas a los ·ejes coordenados y usa-
res p .. "', P?, se producirán fuerzas interiores que actuarán entre las dis- remos para tales componentes la notación X, Y, Z. Descompondremos
tintas partes del cuerpo. Para determinar la magnitud de esas fuerzas en asimismo la fuerza másica por unidad de volumen en sus tres componentes
cualquier punto O, supongamos al cuerpo dividido en dos partes A y B. que designaremos mediante las letras X, .Y, Z.
mediante la sección plana mm que contiene a dicho punto. Si consideramos Usaremos la letra (J para designar la tensión normal y la t" para la ten-
una de esas regiones, por ejemplo, la A, se puede establecer que está en sión tangencial. Para indicar. la dirección del plano sobre el cual actúa
equilibrio bajo la acción de las fuerzas exteriores Pi, .oo, P? Y las fuerzas la tensión, añadiremos subíndices a la letra que expresa la tensión. Si con-
interiores, repartidas en la sección mm., que representan la acción del sideramos un pequeño elemento cúbico en el punto O (fig. 1), con sus
material de la regióIl B sobre el material de la región A. Se supondrá aristas paralelas a los ejes coordenados, la notación para los componentes
que estas fuerzas se distribuyen con continuidad en la sección mm, de la de las tensiones que actúan sobre las caras del cubo es la indicada en la
misma forma que la presión hidrostática o la presión del viento se distri- figura 3, en la que se señalan, asimismo, los sentidos positivos asignados
buyen de forma continua en la superficie sobre la cual actúan. La magni- a aquéIlas. Para las caras perpendiculares al eje y, por ejemplo, las com-
tud de tales fuerzas se define generalmente por su intensidad, o sea, por ponentes normales de las tensiones que actúan sobre ellas son señaladas
la fuerza que actúa sobre el área unidad. Cuando se trata de fuerzas inte- por Uy • El subíndice y indica que la tensión actúa sobre un plano normal
riores, la intensidad se lIuma tensión. al eje y. Se considera positiva a la tensión normal cuando se trata de una
En el caso sencillo de una barra prismática, sometida a tracción bajo tracción y negativa si se trata de una compresión.
la acción de fuerzas distribuid.ls uniformemente sobre sus extremos (fig. 2), La tensión tangencial se descompone en sus dos componentes para-
las fuerzas interiores se distribuyen también uniformemente sobre cual- lelas a los ejes coordenados. En este caso, se usal\ dos subíndices: el pri-
quier sección plana mm. En consecuencia, la intensidad de esta distribu- mero indica la dirección normal 111 plano en cuestión y el segundo, la
ci6n, la tensión, puede obtenerse dividiendo la fuerza P por el área A dirección de la componente de la tensión en sí misma. Si consideramos,
de la sección recta. por ejemplo, las caras perpendiculares al eje y, la componente en la direc-
TEORIA DE LA ELASTICIDAD INTRODUCCION 25
s~fialaqapor T y ", y la de dirección·z por 'y.' Como sentido posi- de las mismas. Resulta, pues, que para elementos muy pequeños, las fuer-
.. .'c9mponentes de la tensión tangencial que aetúa sobre cualquier za·s másicas son infinitésimos de mayor orden que las fuerzas superfi-
toma: el sentido positivo de los ejes coordenados, si una tracción ciales. De igual forma, los momentos: debidos a la distribución no uni-
,. . . a esa misma cara apuntara en el sentido positivo del eje corres- forme de las fuerzas normales son infinitésimos de orden superior que los
'ponqiente. Si la tracción apuntara en sentido contrario al del eje corres- debidos a las fuerzas tangenciales, pudiendo también ser despreciados
pondiente, el sentido positivo de las componentes de la tensión tangencial en el límite. Representando entonces las dimensiones del elemento de la
""=--I---..."J..-;y
FIG. 3 figura 4 por dx, dy, dz y puesto que la fuerza sobre cada cara es el pro-
ducto del área por el valor de la tensión en el punto central de la misma,
sería el opuesto al de los ejes coordenados. Basándonos en esta regla los la ecuación de equilibrio para los momentos respecto al eje. x queda así:
sentidos positivos de todas las componentes de la. tensión, que ac~an '1"'11 d:r; dy dz = 'Cu. d:r; dy di!.
.sobre la cara de la derecha del elemento cúbico de la figura 3, coinciden
con los sentidos de los semiejes positivos. Por el contrarío en la cara ecuaciones se obtienen de forma semejante, llegándose al
izquierda del elemento, los sentidos positivos están invertidos. resultado siguiente:
(1)
4. Com ponentes de la tensión. De acuerdo con lo dicho en el
párrafo anterior, resulta que para cada par de caras paralelas de un ele- Por tanto, para cada dos caras perpendiculares entre sí, las componen-
mento cúbico, como el representado en la figura 3, se necesita un símbolo tes de la tensión de cortadura superficial perpendiculares a la línea de
para representar la componente normal.de la tensión y dos más para las intersección de esas c.-¡ras, son iguales. .
. componentes de la tensión tangencial. Se requieren, por lo tanto, tres .. El sistema de tensiones que actúa sobre los planos coordenados que
símbolos para describir las tensiones normales que actúan sobre las caras pasan por un punto, está en consecuencia definido por las seis canti-
de un cubo elemental,. a saber, (J:t:, 11", 11. Y seis 7:",u, 7:y ", '",., 'z:t:, ryz> "C%y, dades <F" l1y, 11., "C TY = '''''> Tu = " " "/% = ·•• v, las cuales reciben el
para los esfuerzos tangencialegl. nombre de componentes de la tensión en el punto considerado.
De la consiclerªción del equilibrio del elemento, se deduce que el Como se verá más adelante (§ 67), estas seis componentes permite~
número de símbolos para las tensiones tangenciales puede ser reducido determinar el esfuerzo actuante sobre cualquier plano que pase por el
a tres. Si consideramos el momento respecto al eje x de las fuerzas que punto considerado.
actúan sobre el bloque elemen tal, sólo tenemos que tener en cuenta las
tensiones representadas en la figura 4. Las fuerzas másicas, tales como el 5. Componentes de la deformación. Al estudiar la deformación
peso del elemento, pueden ser despreciadas puesto·· que al reducir las de un cuerpo elástico, se supondrá que hay vínculos suficientes que im-
dimensiones del elemento disminuyen con el cubo de las dimensiones piden su movimiento como cuerpo rígido, de forma que no es posible
lineales, mientras que las tensiones superficiales 10 hacen con el cuadrado el desplazanliento de las partículas del cuerpo ~in una deformación del
mismo. l
, En realidad seria más correcto decir esfuerzo tangencial específico ya que la palabra
esfuerzo no implica que se trate de un área unidad.
En este libro sólo se estudiarán deformacioneS pequeñas, tales como se
dan en las estructuras reales. El pequeño desplazamiento de las partículas
TEORlA DE LA ELASTICIDAD INTRODUCCION 27
);1J';l,lJ;~¡J'U .. defo.rmado,
es descompuesto generalmente en sus com- cton angular) o deslizamiento del ángulo comprendido entre los planos
·w
. v, paralelas a los ejes x, Y. z, respectivamente. Se supondrá xz e yz. De igual forma, se obtiene la deformación tangencial de los án-
.. ~mponentes son muy pequeñas y que varían con continuidad gulos formados por los planos xy y xz.y los yx e yz.
:el volumen del cuerpo. Consideremos un pequeño elemento Representaremos mediante la letra E la deformación longitudinal
.. dz de un cuerpo elástico (fig. 5). Si el cuerpo se deforma y u, v, w, y mediante la y, la deformación tangencial. Para indicar la dirección
de las deformaciones, utilizaremos los mismos subíndices que pata las
componentes de las tensiones. De donde resulta que:
ou av aw
e~ =-,
a::c Eu = ay' E. = iJ~
(2)
au OV ou OW av aw
'Y:v = ay + a::r;' 'Y•• = - +-, "fu. = ;rz + ay
az OX
Flc. 11
...-----1--:11: z Existen muchos problemas importantes que son dc este tipo: muro
de contención sometido a una presión lateral (Hg. 9), túnel o alcantarilla
(fig. 10), tubo cilíndrico sometido a una presión interna, rodillo cilíndrico
comprimido por fuerzas contenidas en el plano diametral como en el caso
de un cojinete de rodillos (fig. 11). .
y y En todos los casos, por supuesto, las condiciones de carga no deben
FW.8
variar con la longitud. Dado que las condiciones son las mismas en todas
estado tensional plar"!.o. Puede asimismo suponerse que estas tres compo- las secciones rectas, bastará con considerar una rebanada contenida entre
nentes son independientes de Z, o sea, no varían a través del espesor de dos secciones separadas una longitud unidad. Las componentes u y v
la placa, siendo en consecuencia función de x e y solamente. del desplazamiento dependen de x e y pero no de z; y puesto que el des-
plazamiento longitudinal w es cero las ecuaciones (2) quedan así:
8. Deformación plana. Una simplificación semejante se da en el _ iJv + iJw _ O
otro caso extremo, en el que la dimensión del cuerpo·en la dirección del 'Y~. - iJz ay-
eje z es muy grande. Si un cuerpo largo cilíndrico o prismático es cargado Bu
mediante fuerzas perpendiculares a la dirección longitudinal que no 'Yo, = iJz + 8w
iJ:¡; = o (a)
varían en esa <{irección, puede suponerse que todas las secciones rectas
8w
están en iguales condiciones. En principio, podemos imaginar que las E.=-=O
iJz
secciones extremas se encuentran confinadas entre planos rígidos fijos,
~ - 'I1!ORlo\ 01: loA r.l~STICIIMO
34 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORMACIONES PLANAS 35
La tensión normal longitudinal a. puede' ser expresada en función de guIar, las fuerzas 'másicas pueden ser despreciadas por ser infinitésimas
x e y mediante la ley de Hooke [ecuaciones (3)]. Puesto que 17= = O ten- de orden superior (pág. 25). De forma semejante, si el elemento es muy
dremos que: pequeño, puede despreciarse la variación de las tensiones sobre las caras
y suponer que se distribuyen uniformemente sobre' ellas. Las fuerzas
(T. - lI(rT: + 0',,) = O que actúan sobre el prisma triangular pueden por lo tanto determinarse,
o 10 que es lo mismo: multiplicando las componentes de la tensión por el área de las caras.
Sea N la dirección de la normal al plano Be y señalemos los cosenos de
(b) los ángulos formados por la normal N y 10'5 ejes x e y por:
Estas tensiones noonales actúan sobre tod~ls las secciones rectas, cos Na; = 1, cos Ny =m
incluyendo las extremas, donde representan las fuerzas requeridas para
mantener el estado de defoonación plana y son ejercidas por los planos Entonces, si A señala el área de la cara Be del elemento, las áreas de
rígidos extremos. las otras caras serán Al y Am.
Las ecuaciones (a) y (b) muestran que 'xz y 'lJ< son nulos y mediante Si indicamos por X e Y las componentes de la tensión que actúan
la ecuación (b) l1z puede Ser expresado en función de x e y: De esta foona, sobre la cara Be, las ecuaciones de equilibrio del elemento prismático
el problema de deformaCión plana, al igual que el estado tensional plano, quedan así:
se reduce a la detenninación de l1", rJy Y >"/1' funciones solamente de x e y. x = W., + m-r.1J (12)
r = + l'T:v
mO'lJ
9. Tensiones en un punto. Conocidas las componentes de la ten-
sión {1'", l1y , >." en cualquier punto de Ulla placa, que se encuentra en De este modo, las componentes de la tensión que actúan sobre cualquier
un estado de tensión o deformación plano, la tensión que actúa sobre plano definido por los cosenos l y m pueden calcularse fácilmente a partir
cualquier plano perpendicular a la placa, que pase por ese punto, puede de las ecuaciones (12) supuesto que las componentes (1"" {1'y, 'I'",y de la tensión
en O sean conocidas.
Sea a el ángulo foonado por la normal N y el eje x, de foona que
1 = cos a y m = sen a. Los componentes normal y tangencial de la tensión
'~==±::==-.;;B_ _X que actúa sobre el plano Be puederi deducirse de las ecuaciones (12),
resultllndo:
Si las direcciones principales son tomadas como ejes x e y, ,'''u es cero Prolongado el radio eD hasta el punto DI (fig. 13), es decir tomando
y las ecuaciones (13) se simplifican quedando así: el ángulo :r + 2a en lugar de 2a se obtienen las tensiones correspon-
dientes al plano perpendicular a Be (fig. 12). Se ve así que las tensiones
u = u", 005 2 IX + G"vsen2 IX (13')
tangenciales que actúan sobre dos planos perpendiculares entre sí, son
T = t sen 2a(ull - a",) igu~les en valor absoluto, cosa que ya habíamos demostrado. En lo que
. La variación tic las componentes u y r cuando cambia el ángulo "
puede representarse gráficamente mediante un diagrama en el que a y 7
son tomadas como coordenadas!. A cada plano corresponde un punto en
el diagrama cuyas coordenadas son los valores de G" y T correspondientes.
En la figura 13 tenemos un diagrama de ese género, en el cual los puntos
A y B de abscisas rI. y <Ty respectivamente, corresponden a los planos
ª
perpendiculares las direcciones principales. l?uede demostrarse que las
componentes de la tensión correspondientes a un plano cualquiera Be
que forme un ángulo a (fig. 12), están representadas por las coordenadas
de un punto situado en una circunferencia de diámetro AB. Para hallar a-ó
ese punto basta con medir a partir de A, en el sentido de crecimiento de (a) tOI
a_e
los ángulos a de la figura 12, un arco que subtienda un ángulo igual a
(!J)
2a. Si D es el punto obtenido, resultará de la figura; FlG. 13
OF = O..,rt + v.rtF = -
rI" + rTl}
r + u",--2-
- /Tv
COS 201 = u", cos 2 a + ullsen 2 a se refiere a las tensiones normales, vemos en la figura que OF, --1- OF =
DF = en sen 2~ = 1(rT% - /Tu) sen 2~ = 20e, es decir, la suma de las tensiones normales correspondientes
a planos perpendiculares entre sí permanece constante al variar u.
Comparando estas expresiones con las ecuaciones (13') se ve que La tensión tangencial máxima viene dada en el diagrama (fig. 13)
las coordenadas del punto D dan los valores numéricos de las componentes por la máxima ordenada de la circunferencia, o lo que es lo mismo por
de la tensión que actúa en el plano Be, cuya inclinación es Cl. Para obtener su radio. Tenemos entonces
la coincidencia de signo de la componente tangencial, llevaremos los r U:r; - rTy
positivos hacia arriba y consideraremos los esfuerzos tangenciales como =-2- (15)
positivos cuando el sentido de rotación del par que originan es el del mo-
vimiento de .Ias agujas del reloj, como ocurre para las caras be y ad del ele- Dicha tensión actúa sobre el plano bisector del ángulo formado por
mento abed (fig. 13b). Las tensiones tangenciales que obran en las caras las tensiones principales el cual corresponde a a = 71/4.
ab y de del mismo elemento son de sentido contrario y, por lo tanto, El diagrama puede utilizarse también en el caso en que una o las dos
se consideran como negativasB • tensiones principales son negativas (compresión). Basta solamente con
Al girar el plano,Be alrededor de un eje perpendicular al plano xy cambiar el signo de la abscisá para las tensiones ncgatÍ\las. La figura 14a
(fig. 12) en el sentido de l~s agujas del reloj, el ángulo 11 varía de O a n/2 representa el caso en que ambas tensiones principales son negativas y la
y el punto D, en la figura 13, ·se mueve de A a B de forma que la semi- figura 14b el de esfuerzo cortante puro.
circunferencia inferior nos da la variación de la tensión para los valores
de a comprendidos entre esos límites. La semicircunferencia superior De las figuras 13 y 14 se deduce que el estado tensional exisknte en un punto
puede ser considerado como el resultado de la yuxtllposición de otros dos: uno phm()
da las tensiones pam equitensionnl ' de magnitud la ubscisa del centro del círculo, y otro de esfuerzo
n/2 G, a G n cortante cuya magnitud es el radio del círculo. Cuando se superponen varias dis-
tribuciones de tensión los estados equltensionales (d~ tracción o compresión) pueuen
I Este método gráfico es debido a o. Multr, Zivilingenietlr, 1882, pág. 113. Véase también . ser sumados algébricamente. Los esfuerzos cortantes deben añadirse temiendo en
'u Tecllllische Medru",'k, 2." ediCIón, 1914. . cuen ta las direcciones de los planos sobre los cuales actúan. Se demuestra que ,11
, Esta regla Se utIliza solamente en la construcCIón del diagrama de Mohr. Fuera de ahí
es vólida In regla dada en la pág. 23. I N. del T. U.momos estado plano cqultenslOnal !l aquel en el que a, = 'l. Y T," = O.
38 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORMACIONES PLANAS 39
superponer dos sistemas de esfuerzo cortante puro, cuyos planos de máxima ten- Un diagrama cómo el de la figura 13 puede usarse también para deter-
sión tangencial forman un ángulo p, el sistema resultante constituye también un minar las tensiones principales, si se conocen las componentes de la
caso de esfuerzo cortante puro. En la figura 15, por ejemplo, se determina la tensión
que actúa sobre un plano, definido por el ángulo a, y que está originada por dos tensión u." t111 , 7::r1l correspondientes a. dos planos perpendiculares entre
esfuerzos cortantes simples de magnitudes TI y r2 que actúan; uno en los planos :.sí (fig. 12). En tal caso se comienza dibujando los puntos D y DI que
xz e yz (fig. 1Sa) y el otro en los planos que forman con estos. últimos el ángulo {1 '. 'representan las tensiones que actúan sobre los dos planos coordenados
(a) (6)
FIG.14 (fig. 16). De esta forma se obtiene el diámetro DD¡ del círculo. Construido
el círculo, las tensiones principales !TI y (12 vienen dadas por su intersec-
(fig. 15b). En In figuTll ISa las coordenadas del punto D representan las tensiones : . ción con el eje de abscisas. De 'la figura se deduce:
tangencial y norm,,! producid:!s sobre el plano CB por el primer sistema, mientras
las coorde",ldns de DI (fig. 15b) dan las tensiones sobre el mismo plano para el
segundo sistema. Sumando OD y OD, geométricamente obtenemos OG, tensión
resultante sobre ese plano, cuyas componentes tangencial y. normal vienen dadas
0"1 = OC + ~l! = lT. t tT,,+ ~(~y +7=1}2
(16)
0"2 = OC - CD = rF. t tTlJ _ ~(tT., ; uuY + Tz¡¡2
~
2a:
1
., ·2,8
O (T
10. Deformación en un punto. Cuando se conocen las compo-
. nentes €,,,, €,,, ,'.>:/1 de la deformación en un punto, puede determinarse la
deformación longitudinal y tangencial de orientación cualquiera, en ese
;y (ó) mismo punto.
FIG. 15 Al producirse una deformación, el elemento lineal PQ (fig. 17a) que une
los puntos (x, y) y (x +dx, y +
dy) sufre una traslación, una extensión
por las coordenadas de G. Adviértase que la magnitud de OC no depende de a. (o contracción) y un giro convirtiéndose en el elemento P'Q'. Las compo-
Por tanto, la superpoMición de los estados de esfuerzo cortante simple origina un nentes del desplazamiento de P son u y v y las del d,e Q:
círculo de Mohr correspondiente también a un esfuerzo cortunte de radio OG
estundo dada la inclinación de los planos de máxima tensión tangencial por Uf; iJu iJu oV . all
ángulo igual a la mitad del GOD. ~. + iJx dx + ay ay, v+-ax+-dy
ax ay
40 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORM/l.CIONES PLANAS 41
Si el elemento P'Q' (Hg. t 7a) es trasladado de forma que P' coincida , El elemento PT nonnal a PQ forma con el eje x el ángulo O+ ("./2) Y el
eón P, llevándolo a la posición PQ" de la figura 17b, los segmentos QR ", V'o + ~ ¡Jor él sufrido se d~duce de (á) sustituyendo () por O + 11:/2.
y RO" representarán las componentes del desplazamiento de O con rela- que cos [O ,,1- (n/2)] = - sen O y sen [1} + (:n:/2)] = cos e Be-
ción a P. En consecuencia: : gamos a:
RQ " = av dx + dy
ax av ay (a) av 5"n2 (}
"'e+'!!2 = -ax -
(élV
- -
au) sen 8 cos 8 - -8u C082 O
- (e)
ay élx ay
.JJadeformación tangencial Yo para las direcciones PQ, PT es 'fo - V'o+-f
, ,~iferencia cuya expresión es:
'Y9
au + -ayau)
= (-a,¡; (cos2 /J - sen! e) + (av Ou) 2sen. O cos 8
-ay - -ox
Flc.17 ,he = -h"ll (C08 2 8 - sen2 8) + (EU- E,,) sen (} cos 8 (1)
oh = - sen O ( ax d:c + 8u
au d8 dY) + cos e(all
ay ds
d:c + ay
éJ:c ds
av ds
dY) mación puede, en consecuencia, ser medida eléctricamente.
El liSO de tales extensómetros es sencillo cuando se conocen las direc-
()
ciones principales. Si se coloca un extensómetro ¡;iguicndo cada dirección
'principal lje obtiene directamente la medida de El y Ea. Las tensiones prin- se ve que los valores de E8 y ! Yo están representados por el punto
cipales 0"1) Il"o pueden entonces deducirse empleando la ley de Hoolce, "de la circunferencia de la figura 18c. Si 8 toma el valor rP, P se convierte
ecuación (3), en la que se hace a", = al, l1u = 0'2 Y 11, = O, condición esta el punto A de la figura 18b fortnanc;lo FA con el eje E el ángulo 2 <p.
última que nace de suponer que no actúa ninguna fuerza sobre la super- abscisa de este punto que es E~ ha sido medida. Si (} toma el valor
ficie a la que se han pegado los extensómetros. Entonces: + a, P se desplaza a B mediante el incremento angular AFB = 2a y
abscisa conocida- es Ea+<f>. Si, finalmente, (} toma el valor p + a + P,
se mueve hasta e aumentando el ángulo en BFe = 2{J Y siendo la abs-
Cuando no se conocen, a priori, las direcciones principales es nece- también medida, Ea,p+.¡.. Partiendo de esto vamos a estudiar ahora
sario realizar tres medidas. El estado de deformación, en efecto, está dibujar el circulE) cuando se conocen esas tres abscisas y los dos án-
completamente determinado si se pueden medir E.., fu Y y:¡;u' Sin embargo, a y p.
Las fuerzas másicas que actúan sobre el bloque, que fueron despre- Estas son las ecuaciones diferenciales de equilibrio, correspondientes
ciadas por ser un infinitésimo de orden superior al considerar el equilibrio ':' á problemas elásticos bidimension!lles.
del prisma triangular de la figura 12, deben ser ahora tenidas en cuenta
puesto que son del mismo orden de magnitud que los términos debidos " 14. Condiciones de contorno. Las ecuacIOnes (18) o (19) deben
¡;t (O"Y}4
ser satisfechas en todos los' puntos de! cuerpo considerado. Ahora bien,
, las componentes de la tensión varían de punto 11 punto de la placa y al
llegar a sus bordes deberán equilibrar las fuerzas exteriores aplicadas en
Iy (roc:y~ :' los' mismos, de modo tal que dichas fuerzas pueden ser consideradas
como una continuación de la distribución interna de los esfuerzos. Las
"":::";:=:4:1.===:....
(.:l:.y)
2 (t:;,;;y).t
(t:;cy)z
(O"y'z
FIC.19 FIC. 20
a la variaCl0n de los componentes de la tensión, términos éstos que son condiciones de equilibrio en e! borde de la placa pueden deducirse de las
considerados ahora. Si X e Y indican los componentes de la fuerza másica ',c'cuaciones (12). Suponiendo al prisma triangular elemental aBC de la
por unidad de volumen la ecuación de equilibrio para las fuerzas que figura 12, dispuesto de manera que la cara BC coincida con un elemento
actúan en la dirección x queda así: 'superficial del contorno de la placa, como se ve en la figura 20, y llamando
(G'",hk - (G'.)"k + (r=vhh - (r",,)¡h + Xhk = O X e Y 11 las componentes de las fuerzas superficiales, por unidad de su-
perficie en ese punto del contorno, dichas ecuaciones serán para este caso:
que dividiendo por hk da
X = ler. + m;o:y (20)
(er.)1 - (cr",h + (r""h - (r:v), +X =O y = .mcru + lrzv
h l~
Si ahora hacemos tender el volumen del bloque a cero, es decir h ....,.. 0, en las cuales 1 y 1n son los cosenos directores de la normal N al contorno.
k -+ O e! límite de [(0'.)1 - (u",)a]/h es OU,jOT Y de forma semejante el ,',' En el caso particular de una placa rectangular, se toman, por lo ge-
de [(1:,..). - (1:",,)4]/k es OrTvloy • Si el mismo proceso es seguido con , lleral, los ejes coordenados paralelos a sus cantos y las condiciones de
fuerzas que actúan en la dirección y, las ecuaciones de equilibrio quedan contorno expresadas en (20) pueden simplificarse. Tomando, por ejem-
así: plo, un borde de la placa paralelo al eje x, tendremos para esta parte del
au., + fJr:v + X = O contorno que la normal N es paralela al eje y, de modo que 1 = Oy m = ± 1
fJ:c ay con Jo que las ecuaciones (20) se reducen a: '
(18)
~~ +aro:y +y =o
ay éJx
En las aplicaciones prácticas la única fuerza másica existente es el peso. Se deberá tomar el signo pOSItIVO cuando la normal N tenga el sen-
En consecuencia, tomando el eje y vertical y hacia abajo y llamando f! a tido del semieje positivo de las y y el signo negativo para el sentido con-
la densidad, las ecuaciones (18) sc convierten en: trario de N. De aquí resulta, que las componentes de las tensiones que se
desarrollan en el contorno de la placa son iguales a las componentes de las
(19)
. .
fuerzas superficiales, ,referidas a la upidad de á~ea periférica.
'W, que definen la deformación se obtiene a partir de las ecuaciones (2). Si se procede análogamente con las ecuaci9nes generales de equilibrio
En los problemas bidimensionales deberán considerarse solamente tres tendrá:
componentes de la deformación, a saber:
av (O~2 + aéJ;a) (0'% + 0'1/) = -(1 + v) (~; + ~~) (25)
ell = éJy' (a)
En el caso de una deformación plana (§ 8) se tiene:
Estas tres componentes de la deformación son expresables en función
0', = v(fT~ + O'JI)
de u y v y, por lo tanto, sus valores no pueden ser arbitrarios sino que han
de estar ligados entre sí. La relación existente -entre ellos se deduce fácil- .Y de acuerdo con la ley de' Hooke [ecuaciones (3)) resultará:
mente de (a). Derivando dos veces respecto a y la primera ecuación de
1
(a), dos veces respecto a x la segunda y respecto a x e y la tercera, ob- = E [(1 - 1'2)0'= - 1'(1 + 1')0'11]
E:
tenemos: (26)
éJ 2e", a 2"(=1I 1
a2Eu = 1Jj [(1 - !l S)lTu - v(l + 1')11':]
aya +
ox 2 = ax ay (21) Eu
2(1 + v)
Esta ecuaClon diferencial se llama condici6n de compatibilidad y debe "1=11 = E 'I'=v
(27)
ser satisfecha por las componentes de la deformación, para asegurar la
existencia de las funciones u y v vinculadas a aquéllas por las ecuacio- en la ecuaClOn (21) y teniendo en cuenta, como antes, las
nes (a). ecuaciones de equilibrio (19) concluimos que la ecuación de compati-
Aplicando la ley de Hooke [ecuaciones (3)J la condición (21) puede .b.ilidad (24), es válida también en el caso de la deformación plana. Para
expresarse en función de los componentes de la tensión. ·.el caso general de fuerzas másicas las ecuaciones (21) y (18) nos permiten
En el caso de un estado tensional plano las ecuaciones (3) se reducen a: bir la ecuación de compatibilidad bajo la forma siguiente:
1
E~ =. E (O'., - VfTu), eu =
1
1Jj (0'11 - VIT~) (22) (a + 02) +-
2
éJx2 aya (0'% IT,¡) =-
1
1- l'
(ax + ay
éJx
ay) (28)
1 2(1 + v) (23) Las ecuaciones de equilibrio (18) o (19) conjuntamente con las con-
'Y:w = lJ'T"" = E 'I''''lI
diciones de contorno (20) y una de las ecuaciones de compatibilidad que
y sustituyendo en (21) se tiene:
. quedan consignadas, constituyen un sistema de ecuaciones que, por lo
permite la determinación completa de la distribución de las ten-
az
ay2 (ITe - VITv)
aa (IT1/ -
+ ax2 !lIT:)
= 2(1 + v) a2T=1I
ax ay (b) . l:1iones en un problema bidimensional'. Más adelante se tratan los C'Il<O!l
:. 1 En problemas tensionales planos existen condiciones de compatibilidad dl"tUlI." ,1, 1.ls
. (21) que no son cumplidas por nuestras suposiciones. S}n embargo, en el § 84 d~?,ostrarcmos
Mediante las ecuaciones de equilibrio podemos dar a esta ecuación una que pese a ello, los métodos pre•.,ntlldos en este capItulo dan lIna aproXlmaclon aceptable
forma diferente. En primer término, consideremos el caso en que el peso .' para placas delgadas:-.
TBORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORMACIONES PLANAS 49
. particulares en los que es necesario agregar otras consideraciones (§ 39). De eS!l Illanera podremos obtener diversas soluciones para las ecuacio-
$s . interesante destacar que cuan~o las fuerzas másicas son constantes, de equilibrio (a),· entre las cuales, aquella que satisfaga también a
en las ecuaciones que determinan la distribución de (as tensiones no apa- ecuación de compatibilidad (b) será la verdadera. Remplazando en la
·recen las constantes elásticas del material, lo que quiere decir que la dis- (b) las expresiones (29) de las componentes del esfuerzo con-
tribución de las tensiones es igual para todos los materiales isátropos, que la función de tensión es la solución de la ecuación:
con tal que las ecuaciones sean suficientes para la completa determinación
éJ4~ éJ4~ 04~
de las tensiones. Esta conclusión es de mucha importancia práctica, pues a? + 2 i.lx2 ay2 + ay~ = O (30)
como veremos más tarde (§ 42), por procedimientos basados en el uso de
luz polarizada se pueden hallar las tensiones que se producen en ma~eriales Resolver un problema de elasticidad en dos dimensiones, en el cual
transparentes como el vidrio y la baquelita y los resultados así obtellidos el peso la única fuerza másica; consiste pues, tan sólo, en buscar una
podrán ser, en muchos casos, inmediatamente aplicados a cualesquiera :.H~I!U'''lV'H de la ecuación (30) -que satisfaga a la condición de contorno (20)
otros materiales, tales como, por ejemplo, el acero. cOlrresp,onCUt:nte al caso particular planteado. En los capÍtu)¡Js siguientes
Señalaremos asimismo, que cuando las fuerzas másicas son constantes,.· ·aplica para resolver una serie de problemas de interés práctico.
la ecuación de compatibilidad (24) es de aplicación tanto a los· casos de
Consideremos ahora el caso más general éle vari"s fuerzas másicas y admitamos
tensión plana como a los· de deformación plana. En consecuencia, la dis., ellas deriven de un potencial. Entonces, las componentes X e Y de las ecuacio-
tribución de las tensiones será igual en ambos casos, siempre que se (18) estarán dadas por las ecuaciones:
trate de contornos idénticos y de un mismo sistema de fuerzas exteriores ' .
x= _aV
i);¡;
16. Función de tensión. Hemos demostrado que para resolver (e)
los problemas bidimensionales, basta con hallar las soluciones de las ecua- y = _av
ay
ciones diferenciales de equilibrio, que satisfagan la ecuación de compati-
bilidad y las condiciones d~ contorno. Si aplicamos esto en primer lugar V es la función potencial. Las ecuaciones (18) se transforman en:
al caso en que la única fuerza másica es el peso del cuerpo, las ecuaciones
que habrá que resolver son [véase las ecuaciones (19) y (24)J ~ (O". - V)
éI:l;
+ !hay•• = O
Bu: + éJr"" = O .!
fJy
(<T. - V) + aTilz•• = O
8x iJy
(a)
ay + éJr""
ax + pg =
au" O son de la misma forma que las ecuaciones (a) )' quedarán sutisfechlls tomnndo:
éJ'q,
<T. - V = iJy.' (al)
2
8 iJ2)
( éJx 2 + ay2 (u", + <Tu) = O (b)
~ es la función de tensión. Remplazando estas últimas en In ecuacIón de com-
a las cuales se deberá añadir las condiciones de contorno (20).
I"""L>II""'U (25), que corresponde a un estado elástico plano, se llega a:
El método corriente para resolver estas ecuaciones se basa en la in- a1tJ¡
(Jz'
il'tJ¡
+ 2 81:' ily' + ay'
8'<1>
= - (1 - v)
(a.v a.v)
a;¡;i + iJy' (32)
troducción de una nueva función llamada función de tensión 2• Fácilmente
se comprueba que r;s ecuaciones (a) quedan satisfechas por una función
. Para el caso de una deformación plana se puede obtener una ecuación análoga,
~ (x, y) relacionada con las componentes de la tensión por medio de
·utilizando un procedimiento similllr. .
l!ls expresiones siguientes: ; Cuando la fuerza másica actuante se reduce al peso, el potencial V es - egy .
. En este caso el miembro derecho de la ecuación (32) se reduce a cero. Si tomamos
(29) 4> = O cornil ~olueión de (32) (J (30) S" deduce, de (J1) o (29), <Iue In distribución
'de ten-limes:
, Esta afirmación puede necesit.r ser modificada cuando la placa o el Cilindro tienen
agujeros pues entonces, para llegar a la solUCIón conecta, debernos considerar los desplazamien- cr. = -pyy, <T~ = -PUy, r•• ;= O (d)
tos además de 1M tensIones. Véase el § 39.
. ! Esta función que a veces es Uamada función de tellSió" de Airy fue introducida en la solu-
·'·es una pO~lble solución. Este estado es el de una ~resión'hidrostátic!l b,dlmensloml¡
ción de los problemas bidimensionales por G. B. Airy, Bril. Assoc. AdvaltcemeJ/t Sci. Rept., 1862. '!gy que se anula paJ:~ l' =, 0, y que supuesto que se apliquen las fuerzas de contorno
.4-l"IiOHIA oc lA Pusnc:::lnAn
5.0 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORMACIONES PLANAS 51
corr~spondientes puede darse en una placa o cilindro de forma cualquiera. De la La placa de la figura que se prolonga en un ~diente., se encuentra en un estado
consideración de un elemento de contorno cualquiera, tal como el que representaría tensión plano. Sobre los bordes c;lel diente (las dos líneas rectas) no actúa ninguna
ia figura 12, y aplicando las ecuaciones \(13) se deduce que la fuerza actuante sobre
el contorno consiste en una presián nonnal egy y una tensión· tangencial nula. Si
sobre la placa o el cilindro actúan otras fuerzas tenemos q!le añadir una tensián
normal egy a las nuevas fuerzas. El conjunto de las dos estará en equilibrio y la deter-
minación de sus efectos es un problema de fuerzas de contorno sin intervención.
de las fuerzas másicas 1 •
Problemas
1. Demostrar que las ecuaciones (12) siguen siendo válidas cuando el elemento
de la figt¡ra 12 se mueve con una aceleración cualquiera. .
2. Hallar gráficamente las deformaciones principales y sus direcciones siendo
las medidas dadas por una roseta.
c.¡. .. 2 X 10-', . ~+'i =- 1,35 X 10-3, 'afil+4> 0= 0,95 X 10-' cm/cm. Demuéstrese que no elCÍste tensión alguna en el vértice del diente. (Nota Este
y~ = ~ = 45°. re~¡U!·"'OLO
no es cierto en el caso de que se trate de un diente entrante.)
3. Demostrar que entre los elementos lineales que pasan por .el punto x, y
aquellos en que se da la máxima y minima rotación son los paralelos y perpendicu-
lares a la dirección determinada por () siendo () el ángulo que cumple.
tg 28 = ( -ay
011 - -OU). /
iJa;
(av- +-ayau)
éire
I Este problema y .1 caso general de un potencial V que anula el miembro derecho de (32)
ha sido tratado por M. Biot, J. Applied MecJumics (1'rans. A.S.M.E.), 1935, póg. A-41.
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGUI,ARES 53
"direcciones perpendiculares entre sí y una tensión tangencial uniforme.
Según se explicó en el § 15, las fuerzas ejercidas sobre el contorno deben
iguales a las tensiones existentes en los puntos del mismo. Tales
son dibujadas en la figura 21, que corresponde a una placa rec-
Problemas bi ITYYIV', cuyos lados son paralelos a los ejes coordenados.
en coordenadas
r---~----------U---,X
y
Flo.21
~. ! 1.~
Las tres componentes de la tensión son pues constantes en cualquier punto x
del cuerpo y la función de tensión (b) representa, 'en consecuencia, una
combinación de tensiones uniformes, de tracción o compresión2 , en dos
, Mesnager, A., Cmnpt. yend., vol. 132, pág. 1475, 1901. Véuse también A. 'l'impe, Z. Math.
Physik, vol. 52, pág. 348, 1905. y
, Que Sea una u otra depende de los signos u. y L,,,
u, b•• direcciones de las tensiones re- y
presentadas eIl la figura 21 corresponden a valores pOSitivos <le a" ha y e,. F.:IG. 22 FIC. 23
54- TEQRIA DE LA ELASTICIDAD PROBLf>"MAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 55
son distintas de cero, además de las' tensiones nonnales tendríamos ten-
conjunto de tensiones tangenciales actuantes sobre el contorno de la
si.ones tangenciales actuando sobre los bordes laterales de la placa. La
produce el par
figura 23, por ejemplo, representa el caso en que todos los coeficientes de
(e) salvo ha son cero. Los sentidos con que se han dibujado las tensiones d4c2l 1 d c2 '
4 2
corresponden a valores positivos de bao A lo largo de los bordes y = ± e
.M = 2 . 20 - '3 "2 . 2c • l = '3 d 4c3l
tenemos una distribución uniforme de tensiones de tracción y c()mpre-
par compensa el producido por las fuerzas nonnales que actúan sobre
sitin, respectivamente, y de tensiones tangenciales proporcionales a X.
cara x = l.
En el borde x = 1 tenemos simplemente una tensión tangencial constante
e ig'ual a -bal y en la cara x = O no existe tensión alguna. Se obtiene --+ - -
una distñbución de tensiones análoga si se toma C3 distinto de cero.
Al tomar como función de tensión polinomios de segundo o tercer
I
¡ +
grado se tiene completa libertad en la elección del valor de los coefi-
I
I
r---"---+-~~
e t..
cientes pues la ecuación (a) es satisfecha cualesquiera que sea su valor.
En el caso de polinoIPios de mayor grado, sin embargo, la ecuaci?n (a~ l
y
sólo es satisfecha si los coeficientes. cumplen, entre ellos, determmadas
FIG.24
relaciom!s. Tomando, por ejemplo, como función de tensión un poli-
nomio de cuarto grado
Supongamos ahora que se toma como función de tensión un poli-
(d) de quinto grado
y llevándolo a la ecuación (a) se encuentra que esta ecuación se cumple . a6
=5'4:t
s + 4·g:ty
b& + 3'2
406 a + do
XY RXY
+ 4'3
/lo xy + f.
n 2 2 3 4
Y
5 (
f)
solamente si
84 = -(2c{ +
a4) en Ca) se obtiene que esta ecuación es satisfecha si
Las compenentes de la tensión en este caso son:
e6 =- (20¡ + Sas)
jr, = -t(b ó + 2ds)
componentes de la tensión correspondiente son, por lo tanto,
= aay2ifJr, = ~
2
a2 ifJ . d
U lI = éJ:r/ = a6x3 + b5x 2y + C5Xy2 + 3's ya
Los coeficientes a4, .... d4 • que figuran en estas expresiones, son arbi-
trarios y eligiendo sus valores convenientemente podemos obtener dis-
~ = - -3 bóx· - cóx2y - d6Xy2
Tz;¡¡ = - ozéJy
1
+ -31 (206 + 3a6)y8
tintas condiciones de carga sobre la placa rectangular. Tomando, por ejem- coeficientes a., ... , d s, son, de nuevo, arbitrarios y eligiéndolos conve-
plo, todos los coeficientes menos d4 iguales a cero resulta se obtienen las soluciones correspondientes a distintas con-
."•.m:'.'L<O
!
de carga de la placa. ¡
O'v = OJ (e) Tomando, por ejemplo, todos los coeficientes excepto d. iguales a cero I
I
I
'. obtiene
Si tomamos d 4 positivo la distribución de fuerzas que actúa sobre la
placa rectangular y que produce las tensiones expresadas por Ce) es la mos-
u= = d&(x,2y - jy~) II
trada en la figura 24. Sobre los bordes longitudinales y = ± c existe una u" = íday 3 (g)
= -d Gxy2
II
1'%11
distribución uniforme de tensiones tangenciales y sobre los extremos
de lii placa l~ distribución de esas tensiones sigue una ley parabólica. I Se considera una placa de espc.qnr unidad.
I
¡
I
I
56 TEORIA DE LA ELt\STICIDt\D PROBLEMAS lllDlMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 57
Las fuerzas normales se distribuyen uniformemente sobre los b01:des sarnente satisfechas. Tal extensión en la aplicación de la solución se basa
longitudinales de la placa (Hg. 25a), mientras que sobre la cara x = l en el llamado pri11cipio de Saint-Venallt. Este principio establece que si
constan de dos partes, una que depende linealmente de y, y otra que es las fuerzas que actúan sobre un pequeño elemento de la superficie de un
función parabólica de tercer grado de la misma coordenada y. Las fuerzas cuerpo elástico son remplazadas por otro sistema de fuerzas actuando
tangenciales son proporcionales a x sobre las caras longitudinales y siguen sobre la misma porción de superficie y estáticamente equivalente al an-
una ley parabólica a lo largo del borde x = l. La distribución de todas terior, la alteración que la nueva distribución de cargas induce en el antiguo
estas tensiones es mostrada en la figura 25b. estado tensional, aunque localmente importante, resulta despreciable a
distancias grandes respecto a las dimensiones de la superficie sobre la
~---+----------+---x
- --- --- - -
i:-L t
+
cual han cambiado las fuerzas. Por ejemplo, en el caso de flexión simple
de una barra (Hg. 22) cuyas dimensiones transversales son pequeñas
comparadas con su longitud, la ma¡lem en que se ílplique el momento
¿ t
----
I t flector exterior int1uye en la distribución tensional que se produce en
la vecindad de los extremos, pero no en aquella correspondiente a sec-
( ~I ciones distantes, para las cuales· coincide prácticamente con la dada por
:r la solución a que se refiere la figura 22.
:r (a) (6) Lo mismo ocurre con los esfuerzos axiales. La distribución de tensiones
FIG.25 depende de la forma en que se aplique la carga, solamente en las zonas
próximas a los extremos. En las secciones alejadas la distribución de ten-
Puesto que la ecuación (a) es lineal, la suma de varias soluciones de siones es prácticamente uniforme. Algunos ejemplos ilustrando la validez
ella es también solución. Podemos, por lo tanto, superponer las solu- de este aserto y mostrando la rapidez con que la distribución se hace uni-
ciones elementales que hemos estudiado y llegar a nuevas soluciones de forme serán presentados más adelante (§ 23).
interés práctico. Más adelante este principio de superposición será usado
varias veces. 19. Determinación de los desplazamientos. Una vez deducidas
las componentes de la tensión a partir de las ecuaciones anteriores, las
18. Principio de Saint-Venant l • En el párrafo anterior se estu- componentes de los desplazamientos se obtienen mediante la ley de Hooke,
diaron distintos casos referentes a placas rectangulares, llegándose a la ,. ecuaciones (3) y (6). Los desplazamientos, u y v, se obtienen entonces
solución exacta de las mismas, mediante sencillas expresiones de la función a partir de las ecuaciones
de tensión $. Estas soluciones satisfacen todas las ecuaciones de la elas- Bu au av
ticidad, pero su exactitud está condicionada a que las fuerzas superfi- Bx = e:::, ay + ax = 'Y=v (a)
ciales se distribuyan de una determinada forma. En el caso de flexión
simple de la figura 22, por ejemplo, el momento flector debe ser producido Más adelante encontraremos numcrosos ejemplos de aplicación de estas
por tracciones y compresiones que, actuando sobre los extremos, sean ecuaciones, cuya integración en cada caso pal1:icular no pr.esenta difi-
proporcionales a la distancia al eje neutro. De otra parte la s~jeción, si ~ultades. Se ve en seguida que las componentes de la deformación no
existe, de la extremidad de la pieza, no deberá influir en la deformación . c!lmbian si añadimos a u y v las funciones lineales
de la superficie plana que la limita. Si tales condiciones no se cumplen,
esto es, si el momento flector se aplica de una manera diferente, o si la
Ul = a + by, VI = e - bx (b)
sustentación impone a la sección terminal otros esfuerzos, la solución en las que a, b y e son constantes. Esto significa que las tensiones y de-
dada en el § 17 deja de ser exacta. formaciones no determinan completamente los desplazamientos y que a
La utilidad práctica de dicha solución, sin embargo, no está limitada los causados por las deformaciones internas pueden añadirse otros, aná-
a, caso tan especial sino que puede aplicarse con suficiente exactitud a logos a los que experimenta un cuerpo rígido. Las constantes a y e de-.
casos de flexión en los que las condiciones en los extremos no son riguro- finen una traslación y la b un pequeño ángulo de giro del cuerpo rígido
. . I Este prl~clp\O flle ",tllbleCldo por Samt-Venant en su famosa memoria sob,.e la torsIón:
alrededor del eje z: .
Mem. raval/I. elrauger., vol 14.1855. Su relaCIón con el pnnClplO de con.ervución de la energla
En el § 15 se demostró que para fuerzas más'icas constantes la distri-
será dIscutida más adelanle (§ 47). bución de tensio.~es es la misma para estados tensionales planos que para
j:
I1
!I
!I
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 59
58 nORIA DE LA ELASTICIDAD
estados de deformación plana. Los desplazamientos, sin embargo, son que la fuerza actuante sobre los bordes y = ± e sea nula es nece-
~Iisi:intos, dado que para el primer caso las componentes de la deforma- que
ción que figuran en las ecuaciones (a) vienen dadas por
1
-
- fe T",,' dy fe (b2 -
-e
=
-e
~
e
y2)· dy = P
'"(=11 = G.T:;v
3P
Se comprueba fácilmente que estas ecuaciones pueden obtenerse de las b2 = 4c
anteriores, para estado tensional plano, sin más que sustituir E, en estas
últimas, por E/(l - p2) Y p por '1'/(1 - y). Estas sustituciones no alteran Sustituyendo los valores obtenidos de d y b2 en (a) se obtiene
G que es Ej2(1 + v). Al estudiar algunos problemas especiales se indicará
3P
el procedimiento de integración de las ecuaciones (a). - "2 ca xy, (f'" = O
¡
.. ·:Versal de la pieza tenemos
l
:0 ~
Pxy
- T' 1]"" = O
'c (b)
p PI 2
.'-t- T=u =- 1 2" (c - y2)
Consideremos ahora los desplazamientos' correspondientes a lus ten- sustituidas en expresiones halladas para u y v conducen a:
IilS
siones (h), Aplicando la ley de Hooke se deduce que: . pz2y' vPy. P y3
Bu If", Pxy élv VU'"vPa;y 'U = - 2EI - 6EI +
61G ey g + +
E", = Bx = E = - El' Eu = oy =- E = El (e) vPxy2 Px. (g)
Bu P )
V = 2EI +
BEl dx h + +
7"", = ay + Bu
Bx =
r.",
7J = - 2IG (c
2
- y2 Cd)
constantes d, e, g, y h pueden ser determinadas ahora mediante la
Las cIJmponeJltcs U y v de los desplazamientos se obtienen integrando (e) y mediante las tres condiciones de vínculo, necesarias para
lHS ecuaciones (e) y (d), Integrando (e) tenemos la expresión; ,,.,,np.,rttr que la viga pueda moverse como un cuerpo rígido en el plano
Supongamos que el punto A, baricentro de la sección transversal
Px2y vPxy2
u = - 2EI + f(y), v = 2EI + h(z) "' .... 'en;I''''' esté fijo. Entonces II y V son nulos para x = 1, y = O Y de las
(g) se deduce
donde 1(1') y /¡(x) son funciones de y y dc x desconocidas. Sustituyendo
estos valores de u y v en la ecuación (el) se llega a: Pl3
g = O, h=---dl
6EI
_ Px 2 + df(y) + vPy2 + df¡(x) = _ ~ ( ~ _ 2)
~urva de deflexión se obtiene sustituyendo y = O en la segunda de las
2El dy 2El dx 2IG e y
En esta ecuación algunos términos dependen solamente de x, otros sola-
(g). De esta manera: i
mente de y, y uno es independiente de ambos. Indicando estos grupos Px 3 Pl3
(h)
I
por F(x), G(y) y K tenemos: (v)v_o = 6EI - 6EI - del - x)
1
G( ) = rlf(y) + vPy2 _ Py2 :iJa determmación de la constante de esta última ecuación exige el empleo
Y dy 2EI 2lG la tercera condición de vínculo, la cual elimina la posibilidad de una
de la viga en el plano xy alrededor del punto fijo A, Esta sujeción
Ir
realizarse de varias fonnas. Consideremos dos casos: 1) Que un
y la ecuación puede escribirse to del eje de la viga esté fijado en el extremo A. Entonces la con- !í
,
de vínculo se escribe:
+ G(y) = K
F(x)
Tal ecuación implica que F(x) es una constante d y G(y) otra e. De no ser (~v)",=¡ =
vX 1/=0
O
.
(Je)
!!
y ( BU)"'_1
ay 1/=0
= O . (l)
(:
df(y) = _ Py2 + Py2 + i\
dy 2EI 2lG 6 . En el primer caso, la ecuación (h) permite escribir ,1
Pl2 I¡
Las funciones l(Y) y ll(x) son entonces ji
d = - 2EI )1
IIt:
; y la ecuación (e) nos da '1
11
}i
Ji
¡I
,1
li
'1
1I
;I~
,';
.¡
62 PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARllS 63
TEORIA DE I.A ELASTICIDAD
Sustituyendo todas las constantes en (g) tenemos ,De la comparación 'de esta ecuación con la (n), se deduce' que debido al
,'giro de la extremidad A del eje de la pieza en voladizo (fig. 27b), su flecha
_ Px2y "PyS Py' (Pl2 PC~) : ~umenta en la cantidad
U - - 2EI - 6El + 61G + 2EI - 21G Y
(m) Pc 2 3P
"Pxy 2 Px 8 Pl2X PP 2IG (l - x) = 4cG (l - x)
V = 2El + 6El - 2El + 3El
que representa, pues, el llamado efecto de las fuerzas cortantes
La ecuación de la curva de deflexión es la flexión de la viga (flecha adicional).
(n)
que da para la flecha del extremo cargado (x = O) el valor Pf/3EI, que coin-
cide con el valor que se deduce en los textos elementales de resistencia
de materiales.
Con .el fin de mostrar 'la distorsión de las secciones transversales pro-
ducida por las tensiones tangenciales consideremos el desplazamiento ¡¿
del extremo empotrado (x = l). Las ecuaciones (m) nos .dan para dicho
plano:
{bJ
ppya Py2 Pc2
Pc2 3P
-2IG= -4cG práctica las condiciones en el empotramiento difieren de las
rlm,rn.m""en la figura 27. La sección fija no es libre en general para
y la fonna que la seCClOn transversal adquiere como consecuencia de y la distribución de fuerzas en este extremo es diferente de
esa deformación es la indicada en la figura 27a. Debido a la tensión tan- en (b). Esta solución es, sin embargo, satisfactoria para piezas eQ
gencial .",y = - 3P/4c actuante en el punto A, el elemento de sección relativamente largas, en puntos distantes de los extremos.
transversal centrado en A, gira en el plano xy alrededor del punto A el
ángulo 3P/4cG en el sentido de las agujas del reloj. 21. Flexión de una viga uniforInemente cargada. Consídere-
Si en lugar de fijar un elemento horizontal del eje se considera reali- una viga de sección rectangular estrecha y de anchura unidad, apo-
zada la fijación de un elemento vertical de la sección transversal (fig. 27b), e,n sus extremos, sometida a flexión bajo una carga uniformemente
se tendrá, de acuerdo con las ecuaciones (e) y la primera de las (g) de intensidad q, como indica la figura 28. Las condiciones en
: bordes superior e inferior son
p¡a
e = 2EI (7'=v)u-±,c = O, (qu)u=+c = O, (qll)u--c = -q (a)
los extremos x = ± 1
Sustituyendo en (e) se deduce
¡O-o 7':&11 dy = =t=rzl, f"-o q::dy = 0, to u~ydy = O (b)
(g) ilustrada por la figura 25. Con el fin de suprimir los esfuerzos de ·'.t>'<UtF.ITlO". Con el fin de que los pares que actúan sobre· éstos se anulen, su-
tracción que actúan sobre el borde y = e y los esfuerzos tangenciales . :perponemos a la solución (á) una flexión simple 0-. =- da' y, !l" = TTV ","' O,
existentes a lo largo de las caras y = ± e superponemos una compre- indica la figura 22, y determinamos da imponiendo la condición de
para x = ± l .
r-q1
:JI
;)C
1 ~fl .2
f e
-o
o-",y dy = fa [- ~~
-d 40
(lZY - ~3 iJ;¡) + daY] y dy = O
2
(J: = d 6(x y - -¡y3) primer término de esta expresión representa las tensiones que se de-
Uy = td5!J3 + bay a. + (e) de la aplicación de la teoría elemental de la flexión, correspondiendo
"':y = -d 6xy' - ba:!: segundo a una corrección. Esta corrección independiente de x es pe-
comparada con la máxima tensión normal de flexión, siempre
Teniendo en cuenta las condiciones (a) resulta:
la luz de la viga sea considerable en relación con su altura, de manera
-d 5e' - ba = O en vigas de ese tipo, la teoría elemental de la flexión proporciona
¡dle l+ baO + a. = O valor suficientemente exacto pura las tensiones o-z. Es de advertir
'la expresión (33) es una solución exacta sólo si las fuerzas normales
-ldlc a - bac + a. = -g actúan sobre los extremos x = ± 1 se distribuyen según la ley
de donde
es decir, si las fuerzas normales en los extremos son iguales a los valores
Sustituyendo en las ecuaciones (e) y advirtiendo que 2c'j3 es el momento
· de (J,c para x = :1:: 1 deducidos de (33). Estas fuerzas tienen como resul-
de inercia 1 de la sección transversal rectangular de anchura unidad, · tante un par y una fuerza nulos y, por 10 tanto, según se deduce del prin-
se obtiene: 'cipio de Saint-Venimt, podemos despreciar su influencia sobre las ten-
· siones en puntos alejados de los extremos, para distancias, por ejemplo,
·del orden de la altura de la viga. Para tales puntos y cuando las fuerzas X
. s'on nulas, la solución (33) puede considerarse como suficientemente
(d) exacta.
La discrepancia entre la solución exacta dada por (33) y la aproximada
expresada por el primer término de (33), proviene de que en el caílculo
de esta última, se supone que las fibr-as longitudinales de la viga se en-
Puede comprobarse fácilmente que estas componentes de la tensión sa- ·cuentran sometidas a' una tracción simple. La soiución (d), sin embargo,
tisfacen no sólo las condiciones (a), existentes en los bordes longitutli- '. muestra que entre las distintas fibras se ejercen unas tensiones de com-
nales, sino también las. dos primeras condiciones (b), que se dan en los . presión Uy • Esta~ tensiones son las responsables del segundo término
5 -TOOIIIA Da LA FLASTtClDo\D
TEORIA DE LA ELAS'rICIDAD PUOBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 67
de correcclOn de la solución (33). La distribución de esas tensiones de . ~uponiendo nula la flecha del punto central de los extremos (x = ± l)
compresión U v n lo largo de la altura de la viga es mostrada en la figura deduce .
28c. En cuanto a las tensiones tangenciales 'l'''1I' la tercera de hlS ecuaciones
(d) da su distribución en una sección transversal de la viga, la cual coin-
. Ii = ~ ql'
24 El
[1 +12 fl2 (~+ ~)]
5 5 2 (34)
cide con la que se obtiene aplicando la teoría elemental.
factor que precede a los corchetes, es el valor que se obti~ne para la
Cuando la carga que se aplica a la viga es su propio peso en lugar de la fuerza aplicando la teoría elemental, bajo 'el supuesto de que las secciones
distribuida q, la solución debe modificarse haciendo q = Zegc en (33) y en las dos . de la viga permanezcan planas durante la flexión. El segundo
últimas ecuaciones de (d), y añadiendo las tensiones
dentro del corchete, representa la corrección que corresponde
a", = O, a. = poCe - U), T.~ = O (e) . . llamado efecto de la fuerza transversal,
Esta distribución de tensiones puede deducirse aplicando las ecuaciones (29) a: ..... Derivando dos veces con respecto a x la ecuación (f) de la curva de
: deflexión, encontramos para la curvatura la siguiente expresión
1> = lpg(cz' + y'/3)
representando, por tanto, .un. posible estado tensional producido por el peso y las
~uerz.as de contorno. Sobre el borde superior y = - e tenemos (Yu = 2egc y en el ( d2¡;)u-o = ...!l..
d:¡;2 El
[lZ -2 x + c2 (i5 + ~)]
2
2
(35)
lIlfenor y = e, rr. = O. De esta forma cuando las tensiones (e) son añadidas a la
sol,:ción anterior, en la que se 'ha hecho q = 2agc,.la tensión sobre umbos bordes 'lue nos permite establecer que la curvatura no es exactamente propor-
horIzontales es cero, y la carga aplicada a la viga consiste simplemente en su peso.
. .cional al momento flector 1 q(l" - x 2)/2. El ténnino adicional encerrado
Los desplazamientos u y v pueden ser calculados mediante el método por los corchetes tiene el significado de una corrección que debe aplicarse
indicado en el § 20, Suponiendo que el desplazamiento horizontal del bari- a la fónnula elemental corriente. Un estudio más amplio de la curvatura
.~e las vigas lleva a la conclusión~ de que la corrección indicada por el
centro de la sección transversal media (definido por x = O, Y = O) sea
nulo y que el vertical sea igual a la flecha iJ se deduce de (d) y (33). :·término que incluye la expresión (35), puede emplearse en todos aquellos
::c~sos de carga de intensidad variable en fonna continua. En el § 36 se
. el efecto de la fuerza transversal sobre la deformación de una viga
u= 2~I [ (l2Z- i) y + z (i yS - ~ ~2!J) + vz (j 1l - c2y + ~ ca) ] sometida a flexión bajo una carga concentrada.
el eje directriz está sujeto a una tracción a la que corresponde la deforma- Se observa que el valor de la corrección, así obtenida, es exagerado en comparación
ción ¡¡q/2E, teniéndose por lo tanto . con el de la expresión (35) '.
El término correctivo de la ecuación de la curvatura (35) no puede atribuirse
_7Jqz
()
U u-o - 2E l Esla observación es debida a K. Peorson, Quart. Jour. Math" vol. 24, pág. 63, 1889.
, \'éase el trabajo de T. V. Karman, Abhandl. aerody/lam, Inst. Tech, Hochschule, Aachen
vol. 7, pág. 3, 1927. '
De la expresión de v se deduce la ecuación de la curva de deflexión , Rankine, Appliud Mecha"ics, 14.' edición, pág. 3#, 1895.
., Grashof, Elastizitat wld Festigkeit, 2.' edición, 1878. :
(V)II_O = q [l2X~
o - -2EI - - -5 C2X2 +
-2 - x'
12
1 (1)]
1 +-
2
V C2;¡;2 (f)
, Una mayor aproximación se consigue mediante consideraciones energéticas, Véase
S. Tirnoshenko, StrlnJ/f.th of Materials, 2.' edición, yol. 1, pág. 299,
68 TEORlA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS IIlDlMllNSIONALliS EN COORDENADAS RECTANGULARES 69
tan sólo al esfuerzo cortante, pues deriva del hecho de que las tensiones de com- Estas tensiones, aunque distintas de cero, son muy pequeñas y además
presión ". no están uniformemente distribuidas en I~ alt~~a de la. vig~. El ensanc~a u resultante es nula, por lo que a efectos prácticos podemos considerar
miento lateral que estas tensiones producen en la dueCClon x, dlsmmuye de arrtba que el extremo superior de la estructura se encuentra libre de fuerzas
a abajo, de manera que se origina una curvatura inversa (de convexidad, hacia.arriba). ..' exteriores.
Si a esta curvatura se une el efccto de la fucrza transversal, quedara exphcado el
término correctivo de dicha ecuación. . El efecto del peso de la estructunl sobre la distribución de tensiones
tenido en cuenta sin más que añadir a la exptesión de (f~ en las ecuacio-
22. Otros casos de flexión de vigas bajo cargas continuas. (a) el término -q¡x, donde q¡ es el peso específico del material de
Aumentando el grado de los polinomios que representan las soluciones 'la estructura. La solución así obtenida ha intentado aplicarse al cálculo
de los problemas bidimensionales (§ 17), podemos resolver diversos casos 'de las tensiones existentes en las presas de mamposteria de s'ección rec-
de flexión de vigas sometidas a cargas que varían de un punto a o.tro con tangular. Debe advertirse, sin embargo, que tal solución no satisface
continuidad¡. Tomando, por ejemplo, una solución en forma de poli- jas condiciones existentes en la sección de asiento del muro. La solución
y (b) es exacta si las fuerzas actuantes sobre esa sección se reparten como las
·tens:iones U x y T",y dadas por (a). En los casos reales la base de la presa está
trabada a la fundación y las condiciones existentes son distintas a las que
k solución que estudiamos exige. De acuerdo con el principio de Saint-
Venant podríamos deducir que el efecto de dicho vínculo sería desprecia-
a distancias grandes de la base pero dado que las dimensiones trans-
de una presa de mampostería no son despreciables frente a su al-
tura, la influencia que consideramos no puede ser despreciada 2•
FlG. 29 Tomando como función de tensión un polinomio de séptimo grado
nomio de sexto grado y combinándola con las soluciones dadas en el § 17, obtenerse la distribución de tensiones en una viga sometida a una
podemos determinar las tensiones que origina una presión hidrostática de caLgas que obedezca a una ley parabólica.
en una estructura vertical empotrada, como la representada en la figura 29, En el caso general de una distribución de carga dada por una ley de v.ariación
y demos t rll.r que el siguiente sistema de tensiones satisface todas las .wu,,'''u'~ de intensidad q (fig. 30), la distribución de tensiones en cualquier sección
condiciones de equilibrio en las caras longitudinales trans'vc¡'sal alejada de los extremos de la viga (a una distancia mayor que la altura
puede ser calculado en forma aproximada mediante las siguientes ecua-
(1z = q:;r + 4~3 ( -2xy3 + ¡ 2
e x y)
= My + q (lt _.!1t)
(ya
-"'2 + ªx 40
q:u 3Y) (a)
a'.
I 2e' lOe
(1u = 3 - 40 "'v = _!J.2 + 'l (!!JI
4e
Y')
_4c' (36)
7'>11 = 38q~2
(l
(0 2 - y2) - Sªs (e' - y4)
o
+ 4~3 ~ e2(e 2 - y2) T.V = -s. (0 2 - y')
advertirse fácilmente, los primeros términos de las expresiones de (J", y • M. Levy, Compt. relld., vol. 126, púg. 1235, 1898.
T.. son los que para estas tensiones dan las fórmulas elementales. ~ El problema de las tenSIones que se producen en lAS presas de mampostería tIene gran
v En la parte superior de la estructura (x = O) la tensión normal es nula práctICO y ha s.do tratado por dIversos autores. Véase K. Pen,"oo. On sorne Dlsrcg'lfdt:d
m the Stablltty of Mnsonry Dams, en Drapers' Co. Rescare/¡ Mems., 1904; K. Pearson
y la tangencial viene dada por; An Experimental Stut.ly of the Stresses In Mnsonry Dams, en Drapers' Co. Re-
¡'ldems., 1907. Véanse tambIén los tf'abajos de L. F. Rlchardson, Trans. RoJ'. Soco (L,.n-
T = _.!L (c4 - y4) +.J....~ C2(02 _ y2) vol. 210, serlC A, pág ..307, 1910; Y S. D. Cal'othels, Proc. ~CJY. Suc., Edmburgo, vol. 33,
>fI 803 4035 1913. l. Muller, PllbliCilt;OIlS du laboratnire de pltata-élai!icité, Zurlch, 1930.F,llunger,
Wachsehr. Ólleni/. Eaudlenst, 1913, Heft, 45. K. Wolf, Sttzber. Akad. WISS. Wlell,
I Véunse los trabajo. dc T.mpe, loe. cit.; W. R. Osgood, J. Researeh Natl. Bur. Standards 123, 1914.
vol. 28, pág. 159, 1942. I F. Seewald, Abltandl, "erady"a",. Irlsl. Teeh. Hnschschule, Aachell, vol. 7, pág. 11, 1927.
70 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PItOBLIlMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 71
ecuaciones concuerdan con las obtenidas anteriormente para una viga sometida a , La función de tensión ·resulta entonces
una curga uniforme (§ 21).
,h sen ax(C¡ ch ay + C. ~h ay + C.y eh ay + C,y sh ay) (d)
las eomponéhtes de la tensión están dadas por
e
t1r .=
. "'y
t
~2 = sen ax [CI(I' ch rLy + C.,,' sh <lJ' -1- CJ /l(2 sh uy
-1- ay ch ay) -1- ('¡u(2 ch "y + ay sh ay)]
= ~:t = -a" sen ax(CI ch ay + C, sh ay + Coy ch ay -1- C,y sh ay) (e)
y
Flo.30 .u = - ox
o' ay
tP = _. acos ax[Cla sh 'jY + Cl(1 eh ay + C.(ch (ly
Si la carga de intensidad q, que actúa de arriba hacia abajo, está distribuida a lo + "y sh ay) + C,(sh "y + ay ch <lY)]
largo del borde inferior (y = +c) de la viga, la expresión de las tensiones se obtiene
a partir de· (36) añlldiendo una tensión de tracción 11. = q. Tenemos entonces:
. ~~n~!derando el caso p~rticular .de .un~ viga simple de sección rectangular sujeta
. la aeclOn ~e fu~rzns. vertICales, ~Jstt1~uJdas en fonna continua a lo largo de sus
super!or e mferIor y cuyas mtensldades sean A sen ax y B sen a.:t', respectiva-
<1' - MlI n (X. _.! 11)
+ "2& La fIgura 31 corresponde al caso particular en el cual a = 411fl e indica
• - 1 10 e
Si en \~ segunda ecuación del grupo (e) se tiene en cuenta las eondicumes corres- :. Pam vigas muy largas ae igual u m~c/I, es pequeño, siempre que el número 11/
pondientes a las caras y = ±e, encontramos: . de 01lUIIS no sea grande. 1':n este caso, si se sustituye en (1) resulta:
de la viga, .\' = O y.,,< = l, las tensiones 11, son nuluR y sólo existe la tensión tangencial Para el borde mfcrlor (m)
"w' Est.'l tensión está representada por dos términos, como se ve en los ecuaciones (h): .,
el primer tém1ino es .proporcional a A + B y representa las tensiones que para las
mitades superior e inferior de la cara externa, son de igual valor, pero de signos q¡ = B, + LB.
m=l
sen ;:t.E
1
+ LB'
m=l
m,r,¡;
'" coa -1-
contrarios, La resultante de estas tensiones en la cara extrema es cero. El segundo
término proporcional a A - E, tiene resultantes en las extremidades de la viga, .: l.,os términos constantes A., Bo representan una carga uniformemente distribuida
que equilibran a las cargas aplicadas a las caras longitudinales 6' = :1- e). .sobre la viga, c?so que se ha visto en ~l § 21. La,s tensioncs originadas por los tér-
Si estas curgas fueran iguales para ambas curas, el coefiCiente A sería igual a B q~e contIenen ~e~ (m.:;rx!lJ sc obtienen med,ante la suma de las soluciones (h),
y las reacciones en los extremos desaparccerlan. Para tratar con más detalle estc tenSIOnes que ongman los términos que contienen cos (nmJl:/l) se determinan
caso particular, supongamos que la longitud de la viga sea grande en comparación . . illte~'cambiando en las ecuaciones (h) sen 1/...... por co~ ~ y viceversa y
con la altura, De acuerdo con la segunda de las· ecuaciones (k), las tensiones norma- cambiando el signo de r.""
les 11" que actltan en el plano medio, :v = 0, de la \'iga, están dadas por
, Pm;, ~studiar las s~r¡es de Fauner véase Osgood, .Ad'L'allcea Culculzu, 1928; o B}'crly,
(lech r.LC 1- sh ae sen llX SCI'ICS atld SplterlCal HartnolUCs, 1902; o ChurchIlI, Faune, Series ami Balll1dary Value
-2A (l)
5h 2ac -+ 2ac Proble/lls, 1941, '.
74 nORIA DE Lt\ ELASTICIDAD
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 75
El caso representado por la figura 33 nos penn'itirá desurrolIar W1 ejemplo ilus- " \l,Iffibién revela que en las caras superior e inferior de la viga las tensiones son con-
trativo de este método general de cálculo de las tensiones quc se producen en las "slder.ables en tanto qUe en su parte"media prácticamente no actúan tensiones ten-
plncas rectangulares, Para este caso en que la carga es simétrica, los ténninos que , genclales.
contienen sen (7n1tx/f) desaparecen de lns expresiones (m) y los coeficientes A. y Ano'
se obtienen como de ordinario m1rft
nP
:L~r-
r' J
t·
a 2qsen-l-
Ao = Bo = A",' = B",' =}
-G g cos dz = 7m.". (n)
q
C!. 1,5
~ o P
o ~ 1.0 ~2c-
:;c Q) ,O
"'~ r-['\ I
o ~O,L
f:! o8 D
q <>
;; . ~>r-~.L/
> O O,6 O 10
l .J -z -1 O I 2 3
-*2:f
'/.1. ~ h \"b
:y Valores de x/e
O,4 1
\c·s
FICl. 33
O, se puede ob-
o, 2 I 1/ ~=f
'"
=
tener utilizando la segunda de las ecuaciones (k): o ~=co p
m,ra m1l'c h m ..c
-z- c + h mll'c -o,2
qa
-T--;:
4q
2:
m=l
sen -¡-
--m--' sh~+2~
ll
-¡- s -¡-
Esta tensión ha sido calculada por Filon I para el caso de una faja infinitamente
m..:t
.coa-¡-
-0,4
-Op -"- ~
\ \
larga, en la cual el valor de a es muy pequeño o 10 que es lo mismo, para una fuerza
concentruda P = 2qa. La figura 34 resume gráficamente los resultados de estos -0,8 ~~~
cálculos y demuestra que ay disminuye muy rápidamente con x para reducirse a cero ~ ;...:: ¡...-- V ~)
en correspondencia del valor x/e = 1,35 Y ser entonces remplazado por una tracción. -1,0
0 0.5 1,0· 1,5 2,0 2.5 3,0 3,5
El mismo autor ha estudiado el caso que muestra la figuro 35, que es aquel en que 'P
las fuerzas P no tienen la misma recta de acción. En ese caso la distribución de los 20zo"""
esfuerzos tangenciales en la sección transversal 1m es de interés práctico; está repre- .P Y
FIG,36 FIG.37
sentada en la figura 36, la cual nos dice que para valores pequeños de la relación ble
esta distribución se aparta de la ley parabólica deducida de la, teoría elemental;
Veamos otro caso extremo, como el de una pla(;n cuya altura 2e, sea considera-
• L. N,'G. Filon, Tralls. Roy. Soco [.01tdorl, serie A. vol. 201, ¡Jág; 67,1903. El mismo pro- mayor que la longitud 2/ (fig. 37). Este caso nos servirá para demostrar
blemn fue estudiado por A. Timpc, Z. Muth. P!ty,.,k, vol. 55, pág. 149, 1907; G. Mcsmcr, con que la distribución de las tensiones en las secciones transversales se
Vargleieh."rle sp8mlUngsoptisc!te Ulltersuclllmgen .... Dissertatioll, Gotinga, 1929; F. Seewnld, a una ley de repartición uniforme, al aumentar lu distancia al punto de
Abh. aerodYllam. 111$&. Teeh. Hochschule, Aaehe1I, vol. 7, pág. 11, 1927; Y H. Bay, ¡7Igenieur- 'pllca'CICIO de las fuerzas P. Con tal objeto emplenremos l,a segunda de las ecuacio-
Archiv, vol. 3, pÁg. 435, 1932. M. Pigeoud obtuvo una solución aproximada del problema en
Compt. rend., vol. 161, pág. 673, 1915. J. N. Goodier,J. Applied MecFumics ITTans. A.S.M.E.), I El caso de una uas. n;> I.isa ~a sido .estudiado por K. Ma~guerre, lt'g. Archiv, vol. 2,
vol. 54, núm. 1S, pág. 173, 1932. estudió el problema para el caso de placa rectangular de 108,1931, Y el de una lamIna mextens,ble pero flexible embebida en un material elástico
longitud finita. en mecñnica'9c sucio., por M. A. Biot, Physics, vol. 6, pág. 367, 1935. '
,[
.76 TllORIA DE I.A ELASTICIDAD PROBLEMAS BlDIMENSIONAI.F.5 EN COORDh'NADAS RECTANGULARES 77
ncs (k) c(m cos a.x en lugar de sen ~ y las expresiones (n) para 108 coeficientes A,: .de la figura 37 para el caso en qUl:l e = 21, encontrándose que en [n sección
y B",' iguales. Resulta entonces la expresión eXIste una compresión prácticamente uniforme lo que concuerda con la
(lIe eh (JC sh (,e) el1 ay - U)' sh ay sh ue • cos /LX (P)
sh 2"e + 2ae (a)
en la cual qa = P12. Para el caso supuesto, en que 1 resulta pequeño comparado
con e, (lC es grande y puede despreciarse en el denominador frente a sh /te. Tam-
bién podemos escribir
sh /le = eh ele = hu,
P ra secciones transversules distuntes ue In parte ccntml de la plat.11 podemos tambIén
p~mcr sh "y _ eh "y - 112 fU') )' slI!<Iiruycnuu e~to. "liores en la eCLlación (/» se (!JJ ~~IIP
~ z¡
<;:s" .. _..J
~
_
_
lh~.\ II c-y=t
~lli1IlIIlllm~Wlllllllmru[Irr
"
G' = _ ~ _ ~ ~ s"211 ",a, [Cae + 1)&aC"c) - "1/8aCo - o)} cos ~ (e!
1/ l 1r ~ m
",=1
~ c-y=2l
2:'" sen~ m~
N
.
= _ 9!! _ !!1
! 11'
__1_ [n:1r (1: -
271~ •
y) + 1J E!!!:(lI- o)
e¡ coa -l-'. PIC. 38
m=l
38c. Las tensiones existentes en los puntos próxImos' ,,1 de llpliclICiólI de las
Si e - y no fuese muy pequeño, por ejemplo e - JI "> 112, esta serie es de rápida P serán estudiados en el ~ 33.
convergencia y para calcular "", solamente se necesita considerar unos pocos tér-
minos. Si tomamos entonces 24. ,Otras aplicaciones de las series'de :¡;·ourier. Caso en que la carga
conSiderar es el peso. Los problemas considerados en el § 23 se Teferíall a
sen m~a _ mZa 'i<eleUlellltoll» in.dividuales de longitud 1 o 21. Dado, sin embargo, que las senes de
constItuyen funciones periódicas, puede considerarse que las soluciones ;1
"
y ponemos 2aq = P llegaremos u <
<
.\
p
11', .. - 2i - 7
P fL. [m".
T (e - y) + 1] e~"(lI-c) cos -1- m7l'!l)
m~l
1
f-t----t---...¡
Para y = e - J, por ejemplo, se obtiene
I,
O'
u
P
= - - - -
21 /
PC----
. . o"+1 cos -..l ;1; 2.".+1
-1- -._- 2.-z
(J'" eos - / + 3.-+1
- - 3-
6 ..
&x
eos - / +
;1
J
,1
Con [os tres primeros térmmos de la serie basta para lograr una buena aproxi-
maCión, y calculando así, se obtiene la distribución de tensIOnes representada en la
figura 38b, que cuntit:'ú: ¡1~imlSmo las distnbuciones que corresponden a e - JI = 1(2 FHJ. 39
Jfl
2b
:i
J
• J. K Goocllcr, Trans. A.3.M.E., .vc>!. 54, pág. 173, 1932. edición, pág. 723,1934; véase tambIén H. Cmemer, lngellier-Archiv, vol. 7, pág. :325, 1936. ::!"
'.78 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMIlNSlON.ALES EN COORDENADAS RECTANGULARJ!S 79
sobte el borde inferior, soportada por reacciones qúe se distribuyen unifomlemente 6. Supongamos que lu ménsula de la figura 26 sea de sección rectangular ancha,
en' segmentos de longitud 2b separados pna distancia 1 puede ser representado por en lugur de estrecha, que P sea la fuerza por unidad de espesor y que la pieza se
la ecuación (m) del § 23. El estado tensional que esas cargas producen sumado con el mantenga en un estado de deformación plano mediante la aplicación de las fuerzas
correspondiente a una presión q, aplicada sobre los bordes inferior y superior es necesarias sobre sus caras verticales. '
el producido cuando la carga· lb es aplicada en el borde superior. , Justifíquese el que las tensiones d"" d~, t'"u. sean las mismas que'las obtenidas
Si la carga a considerar es el propio peso de la viga el problema de fuerzas má- en el § 20. Dedúzcase la expresión de <1% y realícese un diagrama de su distribución
sicas resultante puede convertirse fácilmente en otro de cargas en los bordes. A la a lo largo de las caras de la pieza. Obtener las expresiones de las componentes tl y 'IJ
sencilla distribución tensional , de los desplazamientus cuando en el extremo." 1 st' mantiene fijo un elemento
horizontal del eje. '
(1'", = O, "" = -pg(lf + e), "'.v ... O
7. Demostrar que si Ves una función armónica, lo que quiere decir que satis-
que satisface las ecuaciones (19) y (24) de equilibrio y de compatibilidad corres-
ponde, en efecto, una 'preSión de valor 2egc unifonnemente distribuida sobre el
face la ecuación de Laplace, las funcionesxV,yV, (x' +
y") V satisfacen la ecuación (a)
del § 17, pudiendo ser usadas, por tanto, como funciones de tensión. La e,cuación
borde inferior en la figura 39. La condición de que en ese borde, con excepción , de Laplace es la
de en los soportes (de anchura 2b), <Iv sea cero queda satisfecha sumando la distri-
bución tensional anterior a la representada por la figura 39 con q, = 2 ggc, estando
causada entonces la tensión por q y q¡ simplemente.
8. Demuéstrese que
(Ae"u + Ba-au + Oye"v + Dye-a.) sen ",al
Problemas es una función de tensión.
1. Hallar qué problema tensional plano es resuelto por la función d~ tensión " Deducir la expresión en serie de las tensiones causadas en una placa semi-
indefinida (y > O), pOI' una presión normal aplicada sobre el borde y = O cuyo
J.=3F(:r:¡¡_'JJ¡/') +~yJ .valor viene dado por
't'4c 3e' 2 ~
\' b tn".;¡:
2. Hallar a qué problema corresponde la función L,¡ msen-Z-
m~l
F
tP = - (ji :r:¡¡2(3d - 2y), Demostrar que la tensión <1" en un punto del borde es una compresión igual
,a la presión aplicada en ese punto. Supóngase que las tensiones tienden a anularse
la cual se
aplica a la región de valores positivos de x comprendida entre las rectas al aumentar y.
y = O, y = d Y x = O.
9. Demuéstrese que la~ tensiones (11) ele! § 23 Y las elel problema 8 satisfacen
3. Demostrar que la ecuución (b) del § 16.
ti> = ~. ["'. (ya - 30'11 + 2c» - ~ ya (yo - 20:)]
es una función de tensión y encuéntrese cuál es el problema al que corresponde
cuando es aplicada a la región de valores positivos de x comprendida en tre las rectas
y = ±c y x = O.
4. Tomemos la función
,(1 :ey'
4>=8 4:r:¡¡-Tc-4ci+4e +4c'
:ey> Iy. Iy')
como solución correspondiente al caso de una pieza en voladizo (y = ±c, O < x < 1)
sometida a tensiones tangenciales uniformes en el borde inferior (sobre el borde
superior y el extremo x = 1 no actúa ninguna fuerza). ¿En qué aspectos es imper-
fecta esta solución? Comparar la expresión de las tensiones obt~nidas con la deducida
de las fórmulas elementales de tracción y flexión.
5. Deducir la expresión de las componentes u y v de los desplazamientos que
se dan en la viga de la figura 28, cuando la carga a la cual es sometida es su propio
peso en lugar de la fuerza de intensidad q, aplicada sobre el borde superior. Obtén-
gase también una expresión para el cambio de espesor de la pieza (originalmente
igual a la unidad). :¡:
,,
,
PUOBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 81
(Jo, .T/J) ~ClIl dl·higll.ld", p()r (<1r )" etc., en la figura 40. La fuerza radial
··que actúa sobre 111 cara 1, de ·radio T10 viene dada por O'rlr¡dO, que puede
. escribirse (O"Tr)1 dO, y de forma semejante la que actúa sobre la cara 3,
. radio r3, es - «(JTr)3 dO. La fuerza normal que actúa sobre la carn 2 tiene
componente según el radio OP que vÍe1).e dada por - «(Jo). (r1 - 1'3)
(dO/2), expresión que puede escribirse - «(Jo)2 dr (dO¡2) y por lo mismo
componente correspondiente a la fuerza normal que actúa sobre la cara 4
- (0'0)4 (dO/2). Finalmente, las fuerzas tangenciales que actúan sobre
. ~as caras 2 y 4 nos dan [(Tro)~ - ('rO)IJ dr ..
Sumando todas las fuerzas de dirección radial, las anteriormente in-
dicadas y la fuerza másica R que actúa sobre la unidad de volumen, de la
'que supondremos que actúa en la dirección radial, obtenemos la ecuación
equilibrio:
dO dO
(O"rrh dO - (O"Tr)a dO - (0"8h dr"2 - (0"0)4 ar "2
+ [(Ttoh - (1",8)4] dr + Rr dO dr = O
25. Ecuaciones generales en coordenadas polares. Al estudiar dividiendo por dr dO queda:
la distribución de tensiones en anillos y discos circulares, piezas curvas
de sección rectangular estrecha y directriz circular, etc., es conveniente
hacer uso de las coordenadas polares. La posición de un punto cualquiera
(tT,rh dr (lTrj'h - ~ [(1T0)2 + (o-o)J + (1"Toh ~ (r,o)i + Rr = O
del plano medio de la pieza que estudiamos vendrá dada por la distancia Si de forma análoga hallamos la condición de equilibrio para las
del mismo al origen O (fig. 40) y por el ángulo O formado por r y un fuerzas de dirección tangencial y hacemos tender a cero las dimensio-
determinado eje Ox del plano. nes del elemento 1234, las dos ecuaciones de equilibrio se reducen a:
c-~r-----------X
()o-T
ar
+ !.r aTr~
{JO
+~ r
+R = O
(37)
! alTo + arro + 2r,8 = O
r ao ar r
Estas ecuaciones son las que corresponden a las (18) para el caso de
coordenadas polares y si las fuerzas másicas R son nulas son satisfechas
por las expresiones:
r=OP
FIG.40 <T
r
-.!r ocf>
- éJr
+ 1:r aéJ0<f¡
2
2
Consideremos ahora el equilibrio del pequeño elemento 1234, deli- a2<t> (38)
ITO = iJr 2
mitado por las secciones radiales 04 y 02 y por las superficies cilíndricas
3 y 1 normales todas ellas a la pieza plana que consideramos. Las compo-
nentes normales de la tensión de dirección radial y tangencial son desig- T,B = ~ ~! - ~a!2:o = - ir ~:) O
nadas por 0', y (Jo respectivamente y la componente tangencial por 'rO,
refiriéndose todos estos símbolos a la tensión en el punto central P del en las que rP funció·n de r y e es la función de: tensión. Que ello es así
element~, ·definido por T y O. Debido a la variación· de las tensiones, los puede comprobarse por sustitución directa o bien'deducirse como haremos
valores de:la misma en los puntos centrales de las caras 1, 2, 3 Y 4 no son a continuación . . ..
6 -·TEOIUh Dh LA ELASTlClDAD
82 TEORIA DE LA HLAS"f!ClDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONI\.LES EN COORDENADAS POLARES 83
Para que la función represente una distribución de tensiones posible ecuación y la identidad
ha de satisfacer la condición de compatibilidad, que en coordenadas car-
tesianas queda así:
iJ',p
a:¡;'
8 f r/>
+ 2 iJ:¡;2 (Jy2 + iJy( =
á'<b" (a'
c3X2
(12) (02<b al.p\
+ oy2 ox! + ay!)
(a) la ecuación de compatibilidad Ca) expresada en coordenadas
8 = arctg JI.. ecuación diferencial entre derivadas parciales nos pennitirá resolver
x de elasticidad plana en coordenadas polares para diversas
de las cuales se obtiene cOJnd:iclc,nces de contorno. En este capítulo se éiesarrollarán algunos ejem-
problemas de este tipo. "
or :¡;
-=-"=0089, ar= JI.. = sen 9
a:c r ay r La primera y segunda de las expresiones (38) se siguen de las ecuaciones (b)
08 _J!..= _~, (JO x cos (J (e). Si elegimos, en efecto, un punto cualquiera y hacemos pasar por el eje x,
oX = r2 r iJy =;:z = _r- "= O Y 11:, C1"u coinciden con ir" 11" de fonna que sustituyendo en (e) el valor cero
O llegamos a:
Utilizando estas últimas expresiones y considerando a rP función (fr ... (1'. "" (a1rf» ... ! arf> +1. a"rf>I
de r y (J encontramos: ay' e_o r ar r" aS
ésta que, naturalmente, seguirá representando 11, aunque cambiemos la
,rie:ntación del eje x. De forma análoga poniendo O = O en (b) tenemos:
2
(fU = (1'. = (a </» = a'",l
i)z' O-o iJr
La derivada segunda con respecto a x se obtiene con sólo repetir la ope- asimismo la expresión de - o' tP I oxOy tendremos la tercera expre-
ración anterior y así resulta:
02rJ>
8x~
= (.!
8r
cos 8_~ sen (J
r 80
i.)
(8,p8r coa f) - !r oq,(JO sen 8) 26. Distribución de tensiones simétricas respecto a un eje. Si
distribución de tensiones es simétrica respecto a un eje perpendicular
= éJ2tf; C 'O _ 2 82q, senOcos (J iJq,~ + 2 8.psen8 2cos IJ
+"
plano xy que pasa por O (fig. 40), las componentes de la tensión no
8r 2 os éJ8 éJr r iJr r 88 r v",.u~,~u de O y son función solamente de r. Se deduce también que por
(J2q, sen' IJ (b) de simetría la tensión 'TO es nula y, en consecuencia, las ecuacio-
+ éJ81 --;:t de equilibrio (37) se reducen a la primera, quedando:
(d) (41)
84 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMI!NSIONALES EN COORDENA.DAS POLARES 85
Esta es una ecuaClOn diferencial ordinaria,' que puede reducirse a una sustituyendo en la primera de las ecuaciones (44) se obtienen las siguientes
ecuación diferencial de coeficientes, constantes introduciendo una nueva , . para determinar A ,y c:
v~riable t, tal que r = el. De esta ~anera, puede obtenerse fácilmente la
A
solución general de la ecuación (41), que tendrá cuatro constantes de -+2C
aZ = -p,
integración, las que deberán determinarse mediante las condiciones dl'
A
contorno. Por sustitución, puede comprobarse que la solución general L'R: b2 + 2C = -p.
rP = A log r + Br 2 lag r + Cr 2 +D (42)
a partir de la cual pueden hallarse las soluciones de todos los problemas A = a 2b2 (p. - Pi)
de distribución de tensiones simétricas y fuerzas másicas nulas. ba - a Z
Las componentes correspondientes de la tensión se deducen de (38) 2C = p¡a 22 - p.b
2
2
y son: b - a
léJe/> A estos valores en las ecuaciones (44) se obtienen las siguientes
u. = - '!l'= -2
r ur l'
+ B(l + 2lagr) + 2C j{h:r"~,IOT'¡>" para las componentes de la tensión:
¡PtjJ A _ abb2-a2
2 2
(p" - p,) 1 p.a p.b
r + B(3 + 2 lag r) + 2C
2 - 2
uo = !i2
ur = - z
(43) (1r,- ";:z+ bZ-a2
= O
(45)
1'rO _ a Zb2 (po - Pi) 1 p,a 2 - p.b2
Si no existe ningún agujero en el origen de coordenadas las constantes
ae - - ba _ a2 • 7=2 + ba _ a2
A y B se anulan, pues de no ser así las componentes de la tensión dadas (45) se deduce que la suma (Jr -1- (Jo es una constante. En consecuen~ia
por (43) serían infinitas para r = O. Resulta, pues, que una placa sin tensiones (Jr Y (10 producen un alargamiento o un acortamiento uni-
fuerzas másicas que no presente un agujero en el origen ~ólo admite una
distribución de tensiones simétricas, aquella para la cual (Jr = (Jo = cons-
tante; lo que significa que la placa se encuentra en un estado equitensional
de tracción o compresión uniforme en todas las direcciones de su plano.
Si existe un orificio en el origen, las expresiones (43) permiten obtener
soluciones distintas de una tracción o una compresión uniforme. Haciendo,
pOI' ejemplo B igual a cero l , las ecuaciones (43) quedan
A
(Jr = '2
r + 2(1 FIG ...1
(44)
A
(18 = - -2
r
+ 2(1 en la dirección del eje del cilindro y las secciones norm'ales a ese
conservan planas. A causa de ello la deformación producida por las
Esta solución se adapta al caso de la distribución de tensiones que se pro- (45) en un elemento de cilindro contenido entre dos secciones
duce en un cilindró hueco sometido a una presión uniforme interior y "",,,..,,,,,,,,,,, próximas, no interfiere con la deformación de los elementos
exteriormente" (fig. 41). Si a y b son los radios interior y exterior del lo que justifica considerar al elemento en un estado de tensión
cilindro y p, y Po las presiones uniformes interior y exterior las condicio- , tal como hemos hecho en el estudio anterior.
nes de contorno serán: En el caso particular en que Po = O las ecuaciones (45) se transfor-
(a)
I La prueba de' que B debe anularse eXIge la conSIderaCIón de los desplazamientos, Véase
párraro 29. (46)
• La solUCIón de este problema se debe a Lamé, l.erol/s sur la IMuri/! de l' elaslicité, Pa-
rís, 1852,
86 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 87
Es~as ec::uaciones muestran que I1 r es siempre una tensión de compresión onlet:loa a flexión en el plano de curvatura mediante los pares M aplica-
y U9 una tracción. La última de ellas es máxima en la superficie interior en sus extremos (fig. 42). EL momento flector, en este caso, es constante
~el cilindro, donde: lo largo de la pieza y es natural esperar que la distribución de tensiones
la misma en todas las secciones transv~sales de dirección radial y,
(47) consecuencia, que la solución del problema pueda obtenerse aplicando
fórmula (42). Llamando a.y b a los radios de los contornos interior y
La tensión (0"0 )max es siempre mayor en valor absoluto que la preSlOn
y considerando el espesor de la sección rectangular igual a uno, las
interior, a la cual tiende cuando b aumenta de forma que nunca puede
de contorno son
ser inferior a Pi' por mucho material que se añada exteriormente. Diversas
aplicaciones de las ecuaciones (46) y (47) al diseño. de máquinas son (1) Uf = Opara r = a y r =b
estudiadas en los textos elementales de resistencia· de materialesl •
El problema correspondiente a un cilindro con un agujero excéntrico,
(2) Lb CTe dr = 0, Lb aer dr = -M (a)
que será considerado en el § 66, fue resuelto por G. B. Jeffery2. Si el (3) "re = O en el contorno
radio del orificio es a, el del cilindro b y la distancia entre sus centros condición (1) significa que sobre los contornos convexo y cóncavo
es e, la tensión máxima que se origina cuando el cilindro es sometido a una la pie7..3 no actúa ninguna fuerza normal; la ecuación (2) indica que
presión interior Pi> es la tensión tangencial 3 correspondiente al punto tensiones normales que actúan sobre los extremos dan lugar solamente
de la superficie interior en que es mínimo el espesor (si e< i a) y su par M, y la condición (3) que sobre los contornos no actúa ninguna
valor es: tangencial. Utilizando la primera de las ecuaciones (43) conjunta-
2b2(b2 +
a 2 - 2a8 _ 8 2) ] ¡as condiciones (a) se obtiene:
U = Pi [ (a2 +
b2) (b2 _ a 2 _ 2ae _ e2) - 1
A
Si e = O, este valor coincide con el dado por la ecuación (47). (iii+ B(l + 2 lag a)· + 2(1 = O
(b)
A
27. Flexión simple de piezas curvas. Consideremos el caso de ¡j2 + B(l + 2 lag b) + 2(1 = O
una pieza curva de sección rectangular estrecha4 , de directriz circular,
condición (2) del grupo de fórmulas (a) nos conduce a:
¡b ¡b
a
(jo dr =
aor
¡J2</J
- 2 dr = ¡i-:ara
J<fJ¡b = O
o I
42
:¡O'IG.
.• Comparando esta expresión con (b), es fácil ver· q~e la (e) es satisfecha
'.y las fuerzas aplicadas en los extremos pueden redUCIrse a un par de ~uer
I
1 VénRe, por ejemplo, S. Timoshenko, Strengllz o/ Materials, vol. 2, pág. 236, 1941.
• Trans. RoJ'. Soco [,ondon, serie A, vol. 221, pág. 265, 1921. Véase wmbién Bril. Assoc. . zas, con tal que las condiciones contenidas e~ (b) queden cu¡nphdas. I
IIdvancement Sd. Repis., 1921. .
• Para ·que el piu flector sea igual a M es necesario que se cumpla la con-
J N. del T. En este Cllpltulo llamamos a veces tenSIón tangenclal a la tensión nomtal d.
,lIrecclón tangencIal u,. Creemos, sin embargo, que el sentido del texto evita toda confusión. dición
I De la discusión general de los problemas bidimensionales (§ 15) se deduce que la solu-
CIón que obtengamos, será válida también para el otro caso extremo en que la dimensión
perpendicular al plano de curvatura sea muy grande, como por ejemplo en un túnel above-
{b
la uardr =
(b i:J2q,
Ja
:.
ar2 rdr =·-M Cd) I
dado (fig. 10), si la· carga, a lo largo del mismo, es constante.
II
I
.1
'1
!
88 TIlORIA DIl LA IlLAS1'IClUAD PROBLIlMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 89
Ahora bien; ,'actúan sobre los extremos es la dada por la segunda de las ecuaciones
:, (48); Si las fuerzas que producen el par M se distribuyen sobre los extre-
l fJ2q, rdr
b -2
fJr
= la</>
-T
ar a
lb 'lb -dr
- at/J
a
- r lb -
= laet>
fJr" 8r
Ilb
cf¡ ,
"
'inos en forma diferente, las tensiones en dichos extremos no serán las
B
"dadas por (48); pero de acuerdo con el principio de Saint-Venant las
y como de la ecuación (b) resulta 'A;fM·pnri ..,,,, senln muy pequeñas y podrán ser despreciadas para distancias
los extremos que sean mayores que, o del orden de, la altura de la
fJet> rlb = O pieza.
IfJr " , Resulta de interés práctico comparar la solución (48) con la que suelen
se deduce de (el) : dar los textos de resistencia de materiales. Si la altura de la pieza b - a,
pequeña frente al radio de la directriz de la misma (b + a)/2, se adopta
la distribución de tensiones que corresponden a piezas
o bien, sustituyendo el valor de r/J dado por la expresión (42) de eje recto. Si la altura de la pieza no es pequeña se supone en la práctica
que sus secciones transversales se conservan planas durante la flexión,
A log~ + B(b 2 ,log b - a 2 log a) + C(b 2
- a 2) = M Ce) donde resulta que 'la distribución de las tensiones normales (fo sigue
a ley hiperbólica' . En todos los casos pueden representarse los valores
Esta ecuación junto con las (h), determina completamente las constantes y mínimo de la tensión (10 por una expresión de la forma
A, B Y C, las cuales vienen dadas 'por las expresiones M
11'8 =m-
0,2 (h)
4M 2 2 b 2M
A = - N a b log ü: B = - N (b
2
- a2 ) tabla siguiente da los valores del factor m calculado por los dos métodos
M ' 2 (f)
mencionados y por la fórmula exacta (48)":
C = N [b 2 - a2 + 2(b S
lag b - a, 10g a)]
N = (b 2 - (
2
)2 - 4a 2b2 (lag ~y (g)
Ley lineal Ley hiperbólica
de distribución de distribución Solución exacta
Sustituyendo los valores que para las constantes A; B y C dan las fórmulas de tensiones de tensiones
(f) en (43) resulta:
.±. 66,67 +72,98 -61,27 +73,05 -61,35
Ur = -
4M
N 7b (a 2 2
lag ab + b lag rb + a lag ra)
2 2
± 6,000
+ 1,500
+
+
7,725
2,285
4,863
- 1,095
+ 7,755
-1- 2,292
4,917
-- 1,130
!T&= -
4M
N (a
- 7b
2 2
b
lag i.i +b 2
lag ¡;
r+ a log ra+ ba - a )
2 2 (48) A la vista de esta tabla puede deducirse que la solución elemental basada !]
i
i
Tre = O ,.' la hipótesis de la conservación de las secciones planas conduce a resIJI-
Estas fórmulas dan la distribución ,le tensiones que satisface todas las
condicionés de contornd (a) para la flexión simple y representan la so-
muy exactos.
Como veremos más adelante en el caso de flexión simple las secciones
rron.',,"'·.~IA. se conservan planas y la discrepancia entre las soluciones
~I
lución exacta del problema, si la distribución de fu~rzas normales que
",-::,¡ Esta teona aproiumad. fue desarrollada por H. RéMlI, Ann. mil/es, plÍg. 617, 1862, Y
E. WlOkler, Zivili71gelljeur, vol. 4, pág. 232, 1858; véase también su hbro Die Le/m .'on de,
\ Esta solUCión fue dada por H. Golo"m, Tram. II1SI. Tech, San Petersburgo, 1881. 'f-Iusli"itüt "lid Festigkeit, cnpitulo 15, Praga, 1867. El desarrollo ultenor de la teoría fue reah-
m trabajo, pubhcndo en ruso, no fue conocido en otros paises y el mismo problema fue re- :lado por F. Grashof, Elaslizitat U/Id Festigl<eit, pág. 251, 1878, ~ K. Peaman, History 01 ¡he
suelto más tarde por M. C. Rlb¡ere (COn/pi. rend., vol. 108, 1889 Y vol. 132, 1901) Y por L. 'Theory o[ Elasricity, vol: 2, parte 1, pág. 422. 1893. '
Prandtl. Véase A. Foppl, VO/'/f!1tsungen ¡¡bey lec/misehe McchOlzik, vol. S, pág. 72, 1907; y tam- , 'Los resultados han Sido tomndos de l. tesIS doctoral de V, BlIlcvlcz, Umversldad de
bién A. Timpe, Z. Matiz Physik, vol. 52, pág. 348, 1905. M lchlgan, 1931. "_,
'1
90 TEORII\. DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLI\RES 91
elementales y exactas provienen del hecho de que en la primera no se Coxnponentes de la deforxnación en coordenadas polares.
tiene en cuenta la componente ~r de la tensión, suponiéndose que las estudiar los desplazamientos en coordenadas polares designaremos
fibras longitudinales de la pieza están sujetas a tracción o compresión u y v las componentes del mismo en las direcciones radial y tangencial
simples. :;resol~ctívamemt,e. Si u es el desplnzamientci radial de la cara ad del elemento
44), el desplazamiento radial de la cara be será u + (au¡ar)dr.
m
10
o·~~-.~-------- __
B
~l'ls 6
ti 4
\.
,
lP2a
11
~ 2 "- f'. Jle neutro <-V = 1.443)
{l O
~ 2
t'--
"'. -....... FIG.44
¿4 -......
.n 6
1,0 1.1 1.2 1.3 1.4 1.5 1.6 1.7' 1.8 1.9 2,0
. En consecuencia, la deformación unitaria del elemento abed en la direc-
fJ Valores de {¡- radial será:
l.5
~1~1.2 ._-" I II!r
éiu
=-
eq,:
V
.-/. Mdx (1070) éJr (49)
,n 0.9
/)"~a I:§. V i'
{l0,6 'En lo que se refiere a la deformación del elemento abcd en la dirección
~ 0,3I 1'-.. debe observarse que depende no sólo del desplazamiento
¿O ti ~ v, sino también del radial u. Suponiendo, por ejemplo, que
tl1 1,0 ~l l,z 1.3 1,4 1,5 1,6 1,7 1.8 1.9 2.0 .puntos a y d del elemento abcd (fig. 44) sufran solamente un desplaza-
Valores de .L
o radial la nueva longitud del arco ad es (r + u)dO y la deformación
ing:en,cíal resultará, entonces:
F(G.43
(r + u) dO - r d(J u
rdO r
La primera de las ecuaciones (48) nos dice que la tensión es siempre V
diferencia de los ~splazamientos tangenciales de los lados ab y cd
positiva cuando la flexión tiene el sentido que indica la figura 42. La
elemento abcd será (a¡t/ae)de Y. por lo tanto la deformación tangencial
misma conclusión surge inmediatamente teniendo en cuenta el sentido
por el desplazamiento v es av/roO. La deformación tangencial
de las tensiones 110 que actúan en los elementos n - n, indicados en la es pues!:
figura 42. Las resultantes de los correspondientes esfuerzos tangenciales
son de dirección radIal y tienden a separar las fibras longitudinales y a
provocar tensiones de tracción en esa dirección; éstas aumentan al apro-
ximarse a la superficie neutra y alcanzan su máximo en la proximidad
ConSIderando ahora la deformación tangenCial angular o deslizamiento, sea
de la misma .. Este máximo es siempre mucho menor que (~Q)m.". Por
.d' la posición que ocupa el elemento abcd después de.producirse.la de-
ejemplo, para b/a = 1,3, (O'r)l1Iax= 0,060 (O"o)max; ·para. b/a = 2, (O"r):",,=
.;r.c,rn:lac·!ón (fíg. 44). El ángulo que forman ad y a'd' , causado pO"r el despla-
= 0,138 (O'o)ma,,; para b/a = 3. (ur)m.~= 0,193 (l1o)nI'~' La figura 43 en
"zarniento radial u, es igual a éJu/rao y de igual forma ei ángulo comprendido
la cual se representa gráficamente la distribución de 0'0 y O'r para b/a = 2.
a'b ' y ab es avIar: Es de advertir que sólo parte de este ángulo, la
nos hace ver la desviación. que con respecto a la línea neutra y hacia
sombreada en la figura contribuye a la deformación angular, ya que la
el centro de curvatura, experimenta el punto en que aparece la máxima
tensión 0',. I En el § 10 el símpo)o fo fue usado con otro SIgnificado.
92 TBORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 93
otra parte, igual a ~}Ir, representa el desliza·miento angular causado por . donde ¡ler) es función de r solamente. Sustituyendo Ca) y (b) en la
1i1···rdtilitióri del elemento abcd, considerado como un cuerpo rígido, alre- (51) y teniendo· presente que puesto que y,o es nula ha de
dedor ·del eje que pasa por O. Por 10 tanto, la variación total que expe- obtenemos: ... '- f'~ 1;"",1,,'4} M Ir~ er¡/~rt""J
1 .
u
1[
=E - (1 +r v)A + 2(1 + v)r
'Yre = GTrs - v)Br logr - B(1
obtenemos suficientes ecuaciones para determinar u y v_ + 20(1 ~ v)rJ + H sen (} + K cos (} (53)
~
e integrando se llega a: v = 0, -élr = O para 6 = Oy r = ro = a+b
-2-
u =1E [- (1 +r v)A + 2(1 - v)Br log r - B(1 + v)r estos valores a las expresiones (53) obtenemos las siguientes
~mlCJ(Jnt:s para el cálculo de las constantes de integración F, H Y K:
+ 20(1 - v)r] + f(9) (a)
(1 +ro v)A + 2(1 _ v)Bro lag ro - B(l + v)ro
donde feO) es función de O solamente. De la segunda de las ecuaciones
(52) y mediante la fórmula (50) obtenemos: + 20(1 - p)ro] +K = O
élu = 4Br _ f(9) Fro +H = O
iJlJ E F =0
de cuya integración resulta: F = H = O Y para los desplazamientos v obtene-
1 Suponemos que tenemos un estado plano de tensiones, es deCIr, que (J% es nula (véase I La ."uución (e) quedo satIsfecha só!" cuando la 1 J(O)dO es tomada de (el) sin la preseneJa
zos en el anillo. Si a es el ángulo en el centro, muy pequeño, que forman • P?r A. St~dola, D,amp!-und Gas·1'urbmen, ó•• edición, págs. 312 y 889, 1924. '
Para ~m d.sco uOlfonne qu~, tenga la fonua de Wl elipsoide de revolución achatodo,
las secciones radiales de corte; para reunir los extremos planos del anillo. .~pesor••!!ual a un o~t~vo del dlO~etro, C. Chr•• ha demostrado: que l. diferencia entre l.
será necesario realizar un desplazamiento tangencial: maxuna y la mlO11lla en el eje de rotoción es tan sólo el 5 % de la tensión máxima
o Roy. Soco London, vol. 58, pág. 39, 1895). .
v = OIr (6) En el § 119 se desarrolla mlÍs detalladame.nte el problema.
4 El peso del disco 'es despreciado.
!;:','
'j"
TEOHIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS llIDIMIlNSlONALES EN COORDENADAS POLARES 97
96
Esta ecuación quedará satisfecha si deducimos·los componentes de la ten- de las fórmulas (g) se deducirán las siguientes componentes de la tensión:
sión de una función F, función de tensión, del siguiente modo:
(e)
u, = 3 t "p~~(b2 ~ 7 2)
(55)
(f)
(57)
y mediante las ecuaciones (e) se llega a
u, = C
+ 11
+ C1121 - 3-S-pw2r 2
+ 3l-P)
Si se trata de un disco macizo (lleno) debemos poner el = 0, pues
3+v (
de no ser así las tensiones (g) se harían infinito en el centro. En lo que se (uo) .... .= -4-.- púJ2 b2 + va 2 (59)
refiere a la consta:llte e se determina temcnuo en cuenta las condiciones
en la periferia del disco r = b. Si en ésta no existe ninguna fuerza, ten- como puede verse es mayor que (0",)1\1"
dremos: Cuando. el radio a del orificio disminuye tendiendo a cero la tensión
. de dirección tangencial tiende a un valor doble del que corres-
a un disco lleno (56), lo que significa que las tensiones máximas
duplican al practicar un pequeño orificio circular. en el centro de un
de donde: giratorio (véase~el § 32). : .
3+)) 2b 2 Suponiendo que las tensiones no varían a través del espesor del disco
e= -S-PW método que acabamos de desarrolIar puede extenderse a discos de
--TOlRI¡\, 1)8 lA LI.A'i'I'ICIlMU
98 TEORIA DE LA ELAS'l'lCIDAD PHOllLliMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 99
1
espesor variable. Si h es el espesor del discó, variable con 1', la ecuación ico, estudiado por muchos autores suele ser calculado dividiendo
,
de equilibrio de un elemento como el representado en la figura 40 es: disco en partes que se consideran como de espes()r constante 2 •
r2 R
dr 2 + r ndr - F + (3 +/I)pcu hr 2 3
- hr~(B
dr l' dr - uF ) = O (l)
'1' 8
r
= -.!!..
or (1 él</>'\ = - (2Ar - 2~ + Q)'
r iJU) r r
cos 8 (k)
Puesto que no actúa ninguna fuerza sobre los bordes interior y exterior
expresiories (60) constituyen una solución exacta del problema, sólo
de la pieza se ha de cumplir que: las fuerzas en los extremos de la pieza curva se distribuyen en la
IFr := Tre = O para r = a y r = b
= IAr 2
+ ~ + e + D lag TI: = p dada por las ecuaciones (h) y (k). Para otra distribución de las mismas
tensional en las zonas próximas a los extremos será distinto al
o bien por la solución (60), pero a distancias mayores la solución será
(f) según el principio de Saint-Venant. Los cálculos demuestran que
simplificada, basada en el supuesto de la conservación de las
De las ecuaciones (e) y (j) resulta' plaoas durante la flexión, da aquí tampién resultados satis-
.y 1,3a). En esta gráfica las abscisas representan las distancias al borde H, K Y L son constantes arbitrarias a determinar a partir de las
interior (r·= a), medidas según un radio; y las ol'denadas los coeficientes ;}lI'~!"'¡UII";:O.
de vínculo. De (m) .. y. (n) deducimos las componentes de los
que es necesario aplicar a la tensión tangencial media P/(b .,- a) para mientes que resultan:
obtener la tensión cortante correspondiente al punto considerado, El valor
1,5 de ese factor nos da la tensión tangencial máxima, calculada de acuerdo
con una distribución parabólica para vigas rectilíneas de sección rectangu-
- .2D ire [ D(l
E ocos () + sen . - v) log r + A(l - 311)r 2
lar, Según evidencia la figura, la distribución de las tensiones tangenciales
se apro¡¡ima a la ley parabólica cuando la altura de la sección transversal
+ B(l r+ v)] + K sen O + L coa ()
2
(q)
es pequeña. PUede aceptarse; por lo tanto, que para las proporciones
, ~ 2D Osen 8 _ cos e (A(5 + v)r2 + B(l + v)
usuales de arcos y. bóvedas la distribución parabólica de las tensiones E E r2
tangenciales, al igual que para las piezas rectillneas de sección rectangular,
es suficientemente exacta. -D(l - v) lag r ] + Del E+ 11) coa () + K cos () - IJ sen IJ + Hr
Consicieremos. ahora los desplazamientos producidos por la fuerza
P (Hg. 46). Usando las ecuaciones (49) y (52) Y sustituyendo en ellas las radial del borde libre de la pieza se obtiene poniendo O = O
;.t'iif>tlt>x,ión
expr.esiones (60) de las componentes de la tensión tenemos: expresión de u, lo que nos da:
(16)0_0 = L (r)
81¿ sen O[
8r = -E- 2Ar(1 - 3v) -
2B
(1 ra + v) + rD (1 - v)
]
~onstante L se obtiene de l~l condición existente en el empotramiento
av 46). Para IJ = n/2 tenemos, v = O, avIar = 0, y en consecuencia
éJ() = rES - u (l)
segunda de las ecuaciones (q) resulta:
ou av v
'Yr8 = r. a() + ar - r H=O, L =D'lI' (s)
E
Integrando la primera de estas ecuaciones obtenemos . (g) deducimos, pOl' lo tanto, que la deflexión del extremo superior
u . = lE
seno[ Ar2 (1 - 3v) + TiB (1 + 11) + D(l - v) lag r ] + feO) (m)
(61)
donde/Ce) es función de (} solamente. Sustituyendo (m) en la segunda de
las ecuaciones (l) junto con la expresión de Eo e integrando, tenemos:
adelante se dan algunas nplicaciories de esta fórmula. Cuando b tiende
cos e [ Ar2(5 + v) + Ti
B (1 + v) de a y la altura de la piezaLh = b - a, se hace pequeña frente a
1J =- E - D 1og r(l - v) bacer uso de,¿ la expresión ,.. .n ..!:J. :11+· 6-1", 46 -;{- J.
a " ti
f
._-~/·l"'", IJ
* o tierra'.
(e)
'Y
F'G. 48
las correspondientes componentes de la tensión, de acuerdo con (38),
2A + 60
b'
+ 4D
b 2
_ _ 1S
- 2 -
___" "*' 6J'J.,r=h:: t-Yv:{, b nes (62) nos dan:
2
a4)
= -S2 ( 2 + -ar2 +8-
2A
BO
+ -¡ +a 4D
-2 = O
eJ(prrtiiO~
,. \
=i 5 (T"
(15 Ja- 7"rO = 0, .
U8
r4
a (íJ.¡ ext,r/¡'
El efecto del orificio es evidentemente de carácter muy localizado tendiendo
2A + BRb 6C _ ':D = _ ~ S
2 _ (tri la .tensión (Jo rápidamente a S cuando r aumenta. La distribución de esta
b4 b2 2 A~~I~ .
2A + GRa2 _ 6C _ 2D =
a' a2
° 1.5 Si! ·1~,rJ1/
fVIo ~rvf~
tensión es mostrada en la figura mediante el área rayada. El carácter loca-
lizado de las tensiones que se originan alrededor del orificio· justifica la
aplicación de la solución (e), deducida para una laja indefinida, a una
Resolviendo estm; eculldone;; y poniendo a/h ~ 0, c~ llt-dr, suponiendo placa de anchura finita. Si la anchura de la placa es superior a cuatro·vece·s
una placa () laja indefinida obtenemos:· .. el diámetro del agujero, el error cometido al usar la solución (62) para.
calcular (tro) .. "" no excede del 6 %1.
8
A = --,
4
B =0,
q
r
= _ ~2 (1 _3a + 2ar2
74
4 2
) sen 28 Fm.49
confIrmada muchas veces medmnte medid"" de deformaciones y ensayos fotocJ¡\sticos (véase Véase S. Tlmoshcnko, Bull. Po/ytech. IIISI., l(iev, 1907. Se debe tomar S 19u~l a la fuer,m
I
el capítulo 5 y los libros citados en el § 42). diVIdIda por el área.. total de lo chapa.
108 TEORI~ DE LA EL/lSTIClDAD PRoBr.ElVlAs BIDIMF.NSIONAUS EN COORDllNAllJ\S POLJ\IIES 109
, cuenciu, para una placa grande cargada a esfuérzo cortante las tensiones ',zonas no alterad~ls por la presencia de! orificio, siempre que rnn sea pe-
máximas en la dirección de las tangentes, existentes en el borde del ori- queño frente ,a np.
ficio, son cuatro veces mayores que la aplicada. G. B. Jeffery ha estudiado también el caso en que una pre~ión normal
La considerable concentración de tensiones existente en el contorno ,Wliforme p, actúa sobre el con torno del agujero. Este problema" de interés
de un agujero es de gran importancia práctica. El caso de las aberturas , . es el de las tensiones que se producen en la vecindad de un agujero
practicadas en los puentes de los barcos puede citarse como ejemplo, remache al introducir bajo presión el roblón, en estado plástico, por
pues su presencia da origen a altas concentraciones de las tensiones de I¡¡, ¡lcción del calor., Si el agujero está lejos 'del borde rectilíneo, la tensión
tracción o compresión que experimenta el puente cuando el casco trabaja su contorno, con arreglo a las ecuaciones, (46) (§ 27), resulta:
a flexión; las olas, al chocar repetidamente, originan ciclos de tensiones (1"6 = p"
que pueden determinar, en los lugares fuertemente solicitados, fisuras
de fatiga l • ' próximo al borde rectilíneo, las tensiones tangenciales
ser constantes en su contorno, dándose el valor máximo de la
s
(63)
'i$11
-+-
.1c 1
2.- en los puntos k y l.
Comparemos este valor, con la tensión de tracción existente en el punto
p la cual viene dada por la fórmula:
, 4p,r 2
FW.50 0'8 = da _ r2 (64)
Asimismo han sido estudiados:.también los casos de una fila de ,ori- ·~lásticas distintas a la 'del materhIl de la placa (estado plano de tensiones)
ficios circulares en una placa' indefinida l • 2 • 3 , semiindefinidn 3 o de anchura ,.0 cuerpo (estado plano de deformación), nos encOntramos.con el.problema
finita 3.·1 y de una laja con un anillo dé orificios"· (en todos los casos la soli- qe una inclusión rígida o elástica, el cual. ha sido tratado para inclu-
citación aplicada ha sido una tracciÓn). El caso de una placa cuadruda siones circulares l y elípticas a• Los resultados obtenidos.para una inclusión
en la que existe un orificio' y a la ·que se aplican tracciones iguales en las circular han sido confirmados por los ensayos fotoelásticos~.
dos direcciones o, o que es sometida a esfuerzo cortante 7, ha sido estudiado Las tensiones que dan 'las ecuaciones (62) para el problema represen-
mediante. un método deducido .por Hengst. : tado en la figura 48, son las mismas para un estado tensional plano que
Asimismo, se han resuelto los 'casos, en los que las fuerzas son aplicadas · .para un estado de deformación plano. En este último caso, sin embargo,
en ei contorno del orificio, existente en una placa indefinidaS o de anchura qcbe actuar una' tensión axial:
finita 0, o en los contornos de una fila de agujeros, paralela y próxima al
borde de una laja semiindefinida lO (fila de agujeros de remache). •• = V(O'r + lf'o)
Si una placa indefinida, con un orificio ·elíptico, es sometida a una trac- · sobre los extremos de la pieza, paralelos al plano xy, con el fin de anular
ción S paralela a uno de los ejes principales de la elipse, la tensión c"xistentc . La supresión de tales esfuerzos, extremos libres, produce otras ten-
en los extremos del otro eje princ.:ipal (perpendicular a la dirección de · siones de carácter no bidimensional. Si el diámetro del 'orificio es pe-
la tracción) 'viene dada por: . · ,qúeño com parado con el espesor de la pieza la aÍteración estará confinada
• =S0+2~ 0~ ,a las zonas próximas a los extremos de la misma. Si, por el contrario, el
diámetro y el espesor son del mismo orden de magnitud, el problema
debe ser considerado como tridimensional. Estudios de este ti p0 1 han
en donde 2a es el eje' de la elipse perpendicular a la tensión y 2b el otro demostrado que 0'0 sigue siendo la mayor componente de la tensión y
eje. Este y otros problemas concernientes a orificios elípticos, hiper- :que su valor es muy parecido al dado por 111 teoría bidimensional.
bólicos y a dos agujeros circulares son estudiados en el capítulo 7, en el
cual se dan las referencias correspondientes.
Un agujero muy angosto perpendicular a la dirección ele la tracción
"*33. Fuerza 'concentrada en un punto de un borde rectilíneo.
Consideremos ahora el caso de una fuerza vertical concentrada P, que
produce una gran concentración de tensión ll, lo que explica que las fisuras actúa sobre el borde recto y horizontal AB de una placa semi indefinida
perpendiculares a las fuerzas aplicadas tiendan a extenderse. Tal extensión (fig. 52a). La distribución de la earga a través del espesor de la placa es
puede ser detenida taladl'ando los extremos. de la fisura lo que elimina la uniforme, tal como se muestra en la figura 52b, y el espesor es uno, de forma
pronunciada curvatura, responsable de la elevada concentración de . que P es la carga por unidad de espesor.
tensiones. . La distribución de tensiones que se origina recibe el nombre de dis-
Cuando un agujero está ocupado por un material rígido o de constantes tribución radial simpleS. Cualquier elemento e distante r del punto de
. aplicación de la carga se encuentra sometido a una tensión de compresión
de anchura finIta COn un onficlo circular fue estudiado por R. C. J. Howlnnd y A. C. Stevenson. en la dirección radial, de valor
Trans. Roy. s~C'. (tondO/I), serIe A, vol. 232, pág. 155, J933. Una prueba de la conv"rsonL'la
de lu sene solución es duda por R. C. Knlgbt, Qllarf. j. J1!/ath. O-,/ord series, vol. 5, pág. 255. 2P cos 11
1934.
I M. Sadowsky, Z. a/lgew. Mat/¡. Mech., vol. B, plÍg. 107, 1928.
---- r
?l'
(66)
: R. C. J. Howlund, Proc. Roy. Soco (London), serie A, vol. 148. pág. +71. 1935,
, K J. Schulz, Proc. NedPT/. Akad: van We/etJschappen, vol. 45, pógs. 233, 1+1. 457.
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'C. 1<. Wang, J. Applzed Mceltames (Trans. A.S.M.E.), vol. 13, pág. A·77, 19~6. M. S"dowsky, j. Applted JvIecJ¡an;es. (TrllllS. A.S.M.E.J. vol. 16, pág. 27, 1949.
• W. G. BIc1c1cy, Tralls. Ro)'. So('. (!.ondoll), SCrIe A, vol. 227, púg. 383, 192t!. , Ln "".Iu, IIl11 de este problema fu. obtenIda encarándolo como un caso de soliCItaCIón
" R. C. [(nl~ht, Phil. M"g .• serIe 7, \'01. 19, p,íg. 517, 1935. tridtmensmnal. por Flamant, ComPI. rlmd., vol. 114, póg. 1465. 11192, Paris. La extensIón ¡¡,.
111 C. B. Llng Y M. C. Hsu, Tech. Rept., núm. 16, Bur. Aerollaur. Researelr, Cbengtu, lo solUCión al cnso de una fuerza mclmada se dobe a Bousslllosq,:jCo7llpt. r."d., vol. 114, p,í.
Ch,"", febrel'o, 1945. . glUU 1510. 1892. Vé.lsc también el trabajo de J. H. Mlchell, Proc. Londo" Mat/¡. Soc., vol. 32.
" El caso de una ranura angosta fue tratado pOI' M. Sadowsky, Z. ""gew. Mal'" Mech., pág. 35, 1900. La lllVesugaclon expenmentlll de la diStribUCIón de tensUlIles que sugirió la
\'01. 10, plÍg. 77, 1930. . teoría precedente fue re""zoda por Caru. WIIson, Phil. IV/ag., vol. 32, pág. .f81, 1891.
112 'rEORIA DE LA ELASTICIDAD I'ROllLllMAS DlDIMIlNSIONALES llN COORDIlNJlDAS POLARES 113
En cuanto a la tensión de dirección' tangcnciál <10 y a 111 tensión tangencial como ~c \'c, nos dan la solución (66). Sustituyendo la función (11)
cortante propiamente dicha '1"0, son en este caso nulas. ecuación (39), podcmos ver fácilmente que esta eCllllción es s¡ltis-
Se ve fácilmente que estos valores de las componentes de la tensión por lo que (a) representa la verdadera función de tensión y las ecua-
satisfacen las ecuaciones de equilibrio' (37) (§ 25); también quedan satis- es (66') dan la distribución de tentliones correcta.
fechas las condiciones de contorno porque dO y T,O son nulas a lo largo del Si consideramos una circunferencia de cualquier diámetro d centrada
borde rectilíneo de la placa, que está libre de fuerzas exteriores. En el pUl1to el eje x y tangente al eje y en O (fig. S2a) ocurre que para cualquier
de aplicación de la carga (r = O), U r alcanza un valor infinito. La resul- e de la misma d cos O = r. En consecuencia, como se deduce de
tante de las fuerzas que actúan sobre una superficie cilíndrica de radio r ecuaciones (66), resulta
p 2P
U r ;::::. - 7rd
'Y A
que nos dice, que ]a tensión vale lo mismo e~ todos los puntos de la
:¡n:UIue:relnC:la salvo en el O, punto de aplicación de ]a carga.
En un punto cualquiera, M, de un plano horizontal mn distante a
borde de la placa, las componentes normal y tangencial de la tensión
calculan partiendo del valor de la compresión simple radial. Tendremos
(fig. 52a)
P
.. ,
:;. e.V ~.......
"-
'" = - - rO sen {] (a)
'/!' .,/V I"~
./ '7 '~ K
--
como puede verificarse, utilizando las ecuaciones (38) %l!
1Ta
~/ ;;- ¡fi -- ,.
2P cos O .;..-
"- ~ D W; lI1rrmrr
- -71' - -
r
'
(66' ) -- -
:;c
", Fw. 53
114 TEOlllA DE I.A ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 115
en un área infinitamente pequeña. En la práctica se produce un fenómeno . La funCllln de tensión (a) puede emplearse, igualmente, en el caso en que sobre
de flujo plástico eje cierta magnitud ep el entorno del punto de aplicación, : el borde ~"ctilíneo de una placa semiindefinida actúa un p:lr tll' fllcr:¡:as (fig, 560).
de manera que la carga viene a repartirse en un área de extensión finita. . fi e ve, fácIlmente que para el caso en que la tracción P se apliclI en el punto O"
Si imaginamos que la porción de material que experimenta la deform!!,ción .que dista a del origen, la función de tensión se obtiene de la ecuación (a) conside-
momentáneamente a ,p. como función de x e y en vez de serlo de r y 8, escri-
plástica es separada de la placa mediante una pequeña perforación éilín- . y + a en lugar de y, y sustituyendo P por -P. La combinación de esta
drica (fig. 52b), las ecuaciones de la elasticidad podrán aplicarse a la por- de tensión con la función original ,¡, nos da la función que corresponde
ción restante de la placa. caso de dos fuerzas iguales y de signos contrarios, aplicadas en O y 0 1 , bajo la forma
-</>(x,1J + a) + .p(z,y)
a tiende a cero, la función tiende al valor
<PI = - a él",
oy (b)
:::;tlstl.tu'~eIlldo (a) en la ecuaciÓn (b) y teniendo en cuenta (§ 25) que
Pa M
Una solución análoga puede ser obtenida si la carga aplicada en el borde 4>1 = -;- (8 +sen 8 cos /J) = -;; (8 + sen 8 coa 8) (69)
rectilíneo de la placa semíindefinida es una fuerza horizontal P (fig. 54). la cual ]JI! es el momento del par aplicado.
Las componentes de la tensión vienen dad~s de nuevo por las ecuaciones
(66') siendo sólo necesario medir el ángulo e a partir de la dirección de la p
fuerza tal como se muestra en la figura. Calculando la resultante de las M
y'-,--------~~--_4~
fuerzas que actúiln sobre una superficie cilíndrica tal como la mostrada y.--,r---~,.,..:..--!-~~~
en la figura 54 mediante la línea a trazos tendremos:
- - 2P!a"o cos
11"
2 e de = -p
una tracción paralela al borde de la misma'. La' tensión máxima es ligemmente ii:i¡;,oJ1,gam()s que, como condición de vínculo de ]a placa de la figura 52,
mayor que el triplo de la tensión existente en las zonas alejadas de la entalladura. que los puntos situados en. el eje x no admiten desplazamiento
El caso de una placa de anchura finita con unll entalladura semicircular en cada
borde ha sido también estudiado'. El factor de concentración de tensión (relación
esto es, que para IJ = O, v = 0, 'con lo cual la segunda de las
de la tensión mlÍxima a la media, existentes en la sección más pequeña) es menor de :ua:cí(>n~:s (g) nos da A = O y e = O; mediante esto~ valores de las cons-
tres, tendiendo a la unidad cuando las cnt"lladur,," ,'1II11(:ntan. de integración, el desplazamiento vertical de los puntos del eje x
entonces,
Una vez conocida la distribución de tensiones podemos obtener los 2P
deslizamientos en la forma usual, aplicando las ecuaciones (49) a (51). (u)a_o = - '/TE lag r + B (h)
Para el caso de una fuerza normal al contorno (fig. 52) tenemos
determinar la constante B, vamos a supone¡' que un punto del eje x
au 2P cos 8 diste d del origen, no pueda moverse verticalmente. En la ecuación
E, = ar = - 7rE -r- se tendrá r = d, luego:
u av 2Pcos8
Eo = r + r ae = ']) 7rE -r- (e)
B =
2P
-Elogd
éJu éJv V
'/T'
"Ira = r ao + ar - ;. = O todas las constantes de integración, pueden
termtna:rse los desplazamientos de cualquier punto de la,placa semiin-
Integrando la primera de estas ecuaciones obtenemos mediante las ecuaciones (g).
por ejemplo, los deslizamientos de los puntos del
2P
u = - '/TE cos 810g T + f(e) (d) de la placa. Las componentes horizontales de los mismos se ob-
poniendo e = ± ;n;j2 en la primera de las ecuaciones (g). Tenemos
donde f( O) es función de () solamente. Sustituyendo en la segunda de
las ecuaciones (e) e integ~ando resulta (1 - /I)P (1 - JI)P
V
2~ Ren 8 -1- 'lT'E
= :;rE 2P lag r sen O- f ¡(e) de + F(r) (e)
(tt)a=i = - 2E I (U)9 __ ~ = - 2E
nos dice que todos los puntos del borde rectilíneo experimentan
(71)
en la que F(r) es función de r solamente. Sustituyendo (d) y (e) en la desplazamientos, dirigidos hacia el origen, lo cual puede ser con-
tercera de las ecuaciones (e) se llega a físicamente factible, ya que, como se recordlmí, hemos supuesto
suprimido' la parte de material limitada por una superficie ciHn-
(1 - p)P
feO) = - --E--
• 'IT'
8 sen O + A sen 8 + B cos O, F(r) = Cr (f) de radio pequeño, en tomo al punto de aplicación de P (fig. 52b),
cual no son llplicables las ecuaciones de la elasticidad. En realidad,
donde A, B y e son constantes de integración que se determinan a partir porción de material experimenta una deformación plástica que permite
de las condiciones de vínculo. Las expresiones de los desplazamientos, desplazamientos (71) a 10 largo del canto recto. En cuanto a los des-
ueducidlls de (d) y (e), son: mientas verticales que corresponden al borde, se calculan aplicando
'scgundla de las ecuaciones (g). El desplazamiento hacia abajo a una dis-
(1 - p)P r del origen se obtiene recordando que r es positivo si el movimiento
u
2P
= - 1f'E
-- cos 6 log r -
'Ir'
E 8 sen e + A sen 6 -1- B cos () en el sentido del crecimiento de los ángulos e y que la defor-
2vP 2P . (1 - JI)P es simétricll respecto al eje de las x. De esta manera obtendremos
v = 1f'E sen 8 + '/rE lag r sen (J - 'lT'E 8 cos (J. (O)
(V) .. = - (v) .. = 2P lag ~ _ (1 -1- p)P (72)
+ r;l.-;'SJl)P sen (J + A cos (J - B sen (J + e" a=-'2. 6='2 '/TE r 7rE ~
(b)
Combinando estos volares con la cquitcnsión (el) obten'emos que las tensiones prin-
cipales en el punto M son:
-2A(1l + sen ,,), -2A(" sen ,,) (f)
(de tracción) de valor 2AO junto con un esfuerzo cortante simple igual a A. De igual
forma el segundo término de la función de tensión representa un estado equitensio-
nal (de compresión) de valor - 2AO, y un esfuerzo cortante igual a A.
Los estados equitensionales de tracción y comprcsión pueden sumarse directa-
mente resultando otro estado equitcnsional de valor
p = 2.1.1.0 - 2.1.1.0, = 2.1.1.(0 - 9,) = -2Aa (d)
VQ
2
= 'll"Ei'
+:>: d
~ .. qlog-dr -
:>: r
1+
-E
'11"
viZ+"; qdr
'"
(h)
Vo
2q [
= 1rE (l + $) lag L +d z - z10g Z
dJ + --:;;;r-
1- qZ p (i) Fra. 62 Flo. 63
'.:. Como"<ptiede· 'verse, la distr~bución de las tensiones normales sobre figuras 62 Y 63, podemos tratar el caso en que la fuerza P tenga una direc-
una. s~~ciórt. t"rartsversal mn no es upiforme y la relación de su valor en ción cualquiera en el plano .:ry, descomponiendo la fuerza en sus dos
·los.puntos m. o n al valor máximo, que se da en el centro de esa sección, componentes ..y aplicando el principio de. superposiciónl • Debe advertirse
.resulta igual a cos' a. . que las soluciones (73) y (74) son exactas, únicamente en el caso en que
Si la fuerza es perpendicular al eje de la cuña (fig. 63) puede usarse en el extremo fijo, la cuña es sostenida por las fuerzas radiales cuyo valor
de n~evo la solución (a) si el ángulo () es medido a partir de la dirección es el dado por esas ecuaciones.' De no ser así tales soluciones son válidas
de la fuerza. El factor k se obtiene a partir de la ecuación de equilibrio solamente en puntos distantes del apoyo.
~ El problema de una cuña sometida a un par M, contenido en su plano
(2'~a
J... (J"r coa O· 7' dO = -p y aplicado en el vértice de la misma se resuelve mediante la función de
2 -a tensión2 .
de la cual se deduce = ][ ...sen 20 - 20 cos 21X (d)
<P 2(5en 21X - 21X cos 2a)
k = __ 1 __
. o: - t ¡¡en 20: donde el ángulo (} es el· señalado en la figura 62 y el par aplicado, k/,
tiene un sentido con.trario al de lns agujas del reloj. Las tensiones resul-
estando dada, por lo tanto, la tensión en direcéión radial por
tantes son:
P cos O M 4
crr = - 1'(0: - tsen2a) (74)
rJ"r = ~--o::----;::----;:;:, . - sen 28 G'9 = O
2(sen 21X - 20: COS 20:) . 1'2 • ,
(e)
Las tensiones existentes en una sección transversal mn cualquiera vienen JI! 2 .
'1"rO = 2( 2 2 . 2--)' . 2 (e os 20 - cos 20:)
expresadas por sen ex ~ ex cos o: l'
PllX sen4 (}
- y3(a - i sen 20:) 36. Carga concentrada sobre una viga. El problema de la dis-
(b) tribución de tensiones en una viga sometida a la acción de una carga con-
p.,·"sen 1 O
r"", = - y3ra=- í señ ~a) centrada es de gran interés práctico. En el § 22 se demostró que la dis-
tribución tensional que una carga uniformemente distribuida origina
pudiendo ponerse cuando a es pequeño:
11'", = 3P (i _!!.)
2c 3 2 7r
y ~
+ 2m:
fórmula que' coincide con la propuesta por Stokes.
Se obtiene una mayor aproximación si hacemos uso de las ecuaciones
(36') y observamos que sobre el borde inferior de la viga (fig. 65b) existe
FIG.65
una distribucion continua de carga. En el punto D la intensidad de esta
carga es Plne como se deduce de las ecuaciones (66). Sustituyendo este
valor en (36') y teniendo en cuenta el encontrado anterionnente para
una fuerza concentrada. A lo largo de la sección AD la tensión normal
a"" obtenemos en segunda aproximación
11", no sigue una ley lineal y en el punto D la tensión de tracción es inferior
11 la que resultaría de aplicar la teoría elemental de la flexión. Estos resul-
tados han sido explicados por G. G. Stokes' recurriendo a ciertas supo-
siciones empíricas. Según dicho autor, el sistema representado en la figura (a)
64 puede obtenerse por superposición de los dos sistemas mostrados en la
figura 65. Las tensiones radiales de compresión que actúan sobre las
secciones mn, np y pq de
la laja semiindefinida (fig. 65a) son compensadas
por tracciones radiales, de igual valor, que actúan en los costados de la viga Para obtener las tensiones totales a lo largo de las sección AD, debe agre-
rectangular apoyada en.n y p (fig. 65b). Para realizar el caso tratado por garse a estas últimas expresiones las tensiones
Stokes, se deben superponer las tensiones existentes en esa viga, a las que 2P
"orresponden a la placa semiínfinita. . (f", = 0,
rt" = - ?r(c + y) (b)
Aplicando la fórmula elemental de la flexión al cálculo de las ten-
siones se tendrá: el momento flector en la sección transversal media AD como para el caso de una placa semiindefinida.
La comparación de . las expresiones anteriores con una solución más
Loe. cit.
1 .i
• Wilson. loe. cit.; v •• se también O. G. Stokes, Mathematical and Physical Papers, vol. S, I Consideramos a P, como hicimos antes, como la fuerza por unidad de espesor de la
pág. 238, placa.' ".
\128 TIlORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BllJlMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 129
.,exacta (véase la. tabla de la pág. 131) muestra que las ecuaciones (a) y (b), el caso de una viga de longitud indefinida vendrá representada por una integral
'dan las tensiones con una gran aproximación, salvo en el punto D, donde de Fourier. De esta forma Kánnán llega a la función de tensión
i~ corrección que aportan al valor dado por la teoría elemental es: ti> = Ma r" (ac eh + sh ac) eh. ay ~ eh exC ah ay· ay
ocC coa aX da
". Jo sh. 2a.c + 2ac
3P
2;é
P lP
+ z.;;:;; +:5;;:C = -
P
0,254.;
_ Ma r" Cae sh ",e + eh ae) sh ay - eh ae eh a.y. ay coa <l/X da (e)
.. Jo ah Zac - Zac
Esta función da la distribución de tensiones en una viga en el caso en que el diagrama
mientras que la teoría exacta da tan sólo -0,133 (PIe). del momento flector sea un rectángulo muy estrecho, tal como el ,mostrado en la
El primer intento para obtener una solución del problema más exacta, figUra 66. Para el caso más general de cargas verticales que obran sobre el borde
es debido a J. Boussinesql. que hizo uso de la solución de Flamant para pla- superior de la viga 1, el momento flector correspondiente puede dividirse en rectán-'
cas semiindefinidas (véase el § 33), mediante correcciones s\lcesi\ a:;. gulos elementales, como el de la figura 66, y la función de tensión corre;pondientc
Comienza por anular las tensiones sobre el contorno np (fig. 65a), super- se obtiene integrando la expresión (e) a lo largo de la viga.
poniendo un sistema de tensiones iguales y de signo contmrio; luego
considera que la viga es una placa semiindefinida que se extiende por en-
cima de la línea lIP y e;r:nplea de nuevo la solución de Flamant. Como esta
corrección introduce tensiones suplementarias sobre el borde superior
de la viga es necesaria la utilización de una nueva solución de Flamant
para compensarlas. Este proceso se aplica sucesivamente, pero dado
que converge muy lentamente, no conduce a resultados satisfactorios.
L. N. G. Filon2 ha dado una solución al problema por medio de series y
trigonométricas. Los resultados que obtuvo pam diversos casos de fuerzas
FlG. 66
concentradas (véase el § 23) cuadran bastante bien con los obtenidos en las
investigaciones más recientes. Seewald ha aplicado este método al caso de una viga sometida a una fuerza
H. Lamb3 realizó ulteriormente progresos en la búsqueda de la solu- concentrada P (fig. 64), Y ha demostrado que la tensión 11" puede ser descompuesta
ción correcta. Considerando una viga de longitud indefinida, sobre la en dos partes: una calculable mediante la fórmula elemental de las vigas y otra
que actúan hacia abajo y hacia arriba, alternadamente, fuerzas iguales que represerita el efecto local en el entorno del punto de aplicación de la carga;
equidistantes, Lamb pudo simplificar la solución del problema bidi- esta última, llamada 1Iz', puede ser representada en la forma fJ(Plc), donde fJ es un
factor numérico cuyo valor depende de la posición del punto para el cual se calcula
mensional y obtuvo para diversos casos la curva de deflexión.· Demostró, la tensión local. Los valores de este factor vienen dados en la figura 67. Las otras
asimismo, la gran exactitud de la teoría elemental de la flexión de Ber- dos componentes de la tensión lIy y 'zy pueden ser representadas también en la for-
.noulli-Euler cuando la altura de la viga es pequeña fl'ente a su longitud, ma fJ(P/c). Los valores correspondientes de P'son dados en las figuras 68 y 69. A la
y también que la corrección de esfuerzo cortante 'dada por Rankine y vista de estas figuras sc deduce que las tensiones locales disminuyen muy rápida-
Grash<if (véase el § 21) es algo exagerada y debe ser reducida a los 3/4: mente cuando aumenta la distancia al punto de aplicación de la carga y que a una
distancia igual a la altura de la viga, su valor es prácticamente despreciable. En la
de su valol'4. página 131 se inserta una tabla de valores de las tensiones locales en cinco puntos
de la sección transversal AD, que contiene a la vertical de la carga (fig. 6+), valores
l1n estudio máq detllllnclo de la dIstribución tcn8ional y dc 111 curvutura en el que se pueden comparar con los de las tensiones locales', calculadas para los inismos
entorno del punto de IIp!tc>lción de In carga <:OllLcntl'uda, hu sido rcahzudo por puntos mediante las ecuaciones (a) y (17). Como puede verse, la exacl'Ítud que con
T. V. K'¡rmán' v F. Sccwuld'. El primero con&ld"ru tina viga infinitamente Iargu estas ecuaciones puedc obtenerse para las tensiones, es satisfactoria.
y hllce uso de la ~olución correspondiente al caso de una placa semllndcfinidn, sobr~ Conocidas las tensiones pueden calcularse fácilmente la curvatura y la deflexión
la cual actúan dos pares iguales y opuestos en puntos próximos del borde (fig. 56b). de la viga. Estos cálculos muestran que tanto la curvatura como la deflexión vienen
Las tensiones así introducidas en el borde mferior de la viga pueden ser eliminada'
usando una s()lucióQ, cuya fonna es la de una serie trigor!mi1étrica (§ 23), que en , El case:. de una carga nplicada a la mitad de la altura de la vigo, fue estudiado por R. C. J.
Howland, Proc. Roy. Soco (Landan), vol. 124, pág. 89, 1929 (véase las págs. 115 y .igs.)· y el
I eOll/pI.' relld., vol. 11 +, púg. 1510, J 892. de dos fuerzas actuando en el interIor de la viga por K. Girkmann, lngenieur-Archiv, vol. 13,
, L. N. G. Flloll, Tram. Ray. Silr (LOlldoll), serie A, vol. 201, pÁg. óJ, 1903. pág. 273, 1943. El caso de vigas en 1 sobre las que actúan fuerzo~ longitudinales concentradas,
I H. Lrunb, Att. IV cOI/gr. l/Iterl/. /l/a/elllol., vol. 3, plÍg. 12. Roma, 1909. ha sido considerado por Girkmann en Oes/err. Ingenieur-Archiv., vol. 1, pág. 420, 1~46.
, Fllon llegó" la misma conclUSIón en su trabajo Iloc. cil.). J Nos referimos con esa expresión a las tensiones que deben ser añadidas a las obtenidas
'Ablza"dl. aerodYllam. Jnst. Terl. Hochschule, A.lchen, \'01. 7, 1927. mediante la fónnula -,elemental.
9 -THORIA DE LA eu.srICIDhD
PROBLEMAS BlDlMENSIONA,LES EN COOHDENADAS POLARES 131
TEORIA DE LA, ELASTICIDAD
130 T"BLA DE, LOS FACTORES {I PAn" EL CENTRO DE LA VIGA
3.0 2,5 2.0 1,5 1,0 0,5 0,5 1,0 1,5 2,0 2.5 3,0 -0,254
O
(a)
j
y=-~
2 fJ
fJ
3.0 2,5 2,0 1,5 1,0 0,5 - 05 1,0 1.5 2,0 25 3,0
O
1\ V
1\ ~'" ~I/
'?~ ~~
tl
~
~
~
B
~
• <o <:s <:S t:S
1\V'r ••
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-lo ~ 'f.
(a)
~~~ta~ ~<:i ~¡¡: ~
l!l<:S
Pf<:3~<:i
;. ... .~ <:S <:SI y. () fJ
V 1'0.'1' • • x
e 1,0 05 05 10 15 2.0 25 3.0
3,0 2,5 20 1,5
10 O 1
~ ~ ~k:t; ~ ;;:;
3.0 2.5 2.0 I.S 1,0 O,? 0,5 1,0 1,5 2.0 2,5 3.0
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~ ¡..;. <:S<:S
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3,0 2,5 2,0 1,5 1,0 0,5 0,5 1,0 1,5 2.0 2.5 3,0
(á)
y=+c (e)
-- ¡'-r-.. .0 vI- x
e
FIG. ó~
~ ~~~ :;;
:g~", ~ ;1t
dadas por expresiones que pueden ser descompuestas en dos partes: una. la <Inda
9~ -¡. -¡..,.
~
os ~
.,.
<:S ~... por la teoría elemental y otra que representa el efecto local de la carga concentrll-
~
da P. Esta ~urvatura adicional de 1>1 línea central de la:' viga puede representur~l'
3.0 2.5 2,0 1.5 1,0 0,5 0,5 1,0 1.5 2,0 2,5 3,0
por la fórmula "
(e)
F.o. 67
1 P (el)
",
r="'Eo'
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES
133
Y"-f
[\..
- ¡-
1 1I~ :;.¡
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t;:s~~~_
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"\!;.<:s~q
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e
~~ ~'" <:S
3.0 2,0 1,5 1.0 0,5 -¡. ., <:S <:S
~-¡. ~ 'i-
O 0,5 1,0 1,5 2,0 3.0
3.0 2,5 2,0 1,5 1,0 0,5 (I,S 1,0 I,S 2,0 2,5 3,0
FIG.70
(a)
- ~.
En virtud del efectp localizado sobre la curvatura, a que nos hemos referido,
1\ se puede considerar que las dos ramas de la curva ·de deflexión AB y AC (fig. 71)
11
forman un ángulo igual a
jJ
~ (~ - l~E - !i:)
1
'Y '"
'" V
~I La flecha correspondiente al punto medio es:
§1
y~O
!/ ~ ~~ l<l la..,
(f)
/
1I (11) .BC;FJjJ2~ A t
lL 1- FIG.71
,8H- De esta flecha debe restarse o., pequeño término correctivo cuyo objeto es hacer des-
:y",+f iS vP' apareCer el cambio brusco de pendiente en el punto A. Su valor calculado por
d
cos O = -;r.;;:=;==;==;¡
Vd2 +4X2
y
qued!lllsí:
FIG.72
(fig. 72). Suponiendo que cada una de las fuerzas produce una distri- (b)
bución radial simple de tensiones [ecuación (66)], podremos calcular
qué fuerzas habrá que aplicar a la periferia del disco para mantener dicha
distribución. En cualquier punto M del contorno tendremos compresio-
La máxima tensión de cempresión en el diámetro eD se da en el centro
del disco donde
nes en la dirección de r y Yl de valor igual !I 2P cos (J 'y 2P COS (JI res-
1/" l' 71" Tl 6P
1 O"y = - 1rd
pectivamente • Dado que r y YI son perpendiculares entre sí y que siendo
d el diámetro del disco,'
mientras que en los extremos del diámetro O"y se anula.
cos 8 COS 81 1 Consideremos ahora el caso de dos fuerzas iguales y opuestas, ac-
-r- = ----rx- = d (a) tuando en los extremos de una cuerda, AB (fig. 73) en la dirección de la
misma. Suponiendo de nuevo dos distribuciones radiales de tensiones,
se deduce, que las dos tensiones principales en M son dos compresiones
que parten de A y B, la tensión en un plano tangente a la circunferencia
igual~ de valor 2P/ nd. En consecuencia, esta misma tensión de compre-
en el punto NI, se obtiene por superposición de dos compresiones radiales,
sión actúa sobre cualquier plano, perpendicular al plano. del disco, que
pase por M y una fuerza normal de compresión, de valer 2P/:rcd, deberá 2P 'cos 8 y 2P COS 81 , de direcciones r y r1 respectivamente. La
ser aplicada sobre la periferia del disco con objete de mantener el par de 7t r 11: rl
distribuciones radiales simples de tensiones que se ha supuesto existen, normal MN a la tangente en M es el diámetro deLdisco¡ de manera que
MAN y MBN son triángulos rectángulos y los ángulos que forma la
, Se supone que P es la fuerza por unidad de espesor del disco. nqrmal N/O 'con .'( y rl son 'n/2 - 81 y n/2 - (J, respectivamente, Las
136 TEORIA DH LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 137
, tensiones nonnal y tangencial que corresponden a un elemento del con- en equilibrio, aplicadas 'a su periferia '. Consideremos una de estas fuerzas aplicada
torno eI\ el punto M, serán, por lo tanto: en .A según la dirección de la cuerda AB (fig. 74). Suponiendo de nuevo que la
distribuci6n de tensiones es radial tendremos en el punto M una compresión simple
= _ 2P cos 8'sen; 8.
'.,. = - -2P (cos
- -Osen 01 cos 01 sen e cos e)
COS fT.
el - -- 11' T' •
'Ir T TI (6)
"'.8 = - 2P cos 8, sen 8. cos 8,
'l!' T1
FIG. 74
(p)
3) Una fuerza, cuya intensidad y dirección se obtienen sumando vectorialmente
los expresiones (k), suma que debe extcnderse a todas las fuerzas que obran sobre
la periferia. Estas tensiones podrlan ser deducidas también mediante las ecuaciones (38) par-
tiendo de la función de tensión
(g)
de la que se deduce
<Tr = 0"9 = 0,
Daenf] 1- IJPsen 6
Tr8 = --r- = ~ --r-
. ~,
Si se. combinan estos valores con los que da la fórmula (66) para las ten-
-siones que origina la carga P12, se obtiene la siguiente distribución de
tensiones para la placa de extensiÓn ilimitada
Q O
P
2
(óJ
~
-~)
Cfr
CTO =
T'rq=-----
1 - 71
l-7IPcos6
-:;¡;- --r-
1-vPsen6
P cos 6
= -:¡;;:---r- - --;.;:-
P ('OS ()
-~--r-
(3 -/- v)P cos ()
(76)
411" r
indefinida. La ecuación (61) nos da el valor del deslizamiento que tiene x = 2 lo'" (Cf r coa (J - 'frO sen/l)r d/l =P
lugar a lo largo del borde rectilíneo de esta placa, en la dirección de la
fuerza cortante que actúa sobre el mismo: y = 2 lo"" (rJ"r sen /1 + 'fro COS 8)r dO = O
D1I"
(b) expresiones éstas, que igualan las fuerzas que actúan sobre el contorno
E del elemento cilíndrico a la carga P aplicada en O. Usando ahora las
siendo D una constante de integración que debe ser ajustada co~ objeto ecuaciones (13) podremos deducir de (76) la expresión de las compo-.
de que el desplazamient~l.-fesultante de (a) y (b) se anule. En consecuencia: nentes de la tensión en coordenadas cartesianas
D1I" 1- p P coa (J
E = -lA' P, (e) rJ"", = 4'11"-r- [-(3 + IJ) + 2(1 + v)sen 2
(J]
P cos IJ
y realizado .este ajuste, se obtiene como resultado de la superposición de 11" = 411"-r- [1 - v - Zn + IJ)5en O] 2
(77)
los CllSOS 76b, 76c, 76d y 76e, el de una placa indefinida cargada en un . P sen O
punto (fig. 76a). Las tensiones correspondientes se obtienen ahora, fácil- r"" = - 41I:-r- [1 - v + 2(1 + IJ) cos 2
6]
mente, sumando las tensiones que se presentan en una placa semiinde-
finida sobre. cuyo borde actúa una fuerza normal P/2 y las existentes en Las fórmulas (77) resuelven el caso de una fuerza concentrada y per-
una barra curva, en cuyas expresiones figura la constante de integración D. mit~n obtener, Por. superposición, las soluciones correspondientes a
142 TllORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POI.ARES 143
otros tipos de carga. Consideremos, por ejemplo; el caso mostrado en la Como puede verse las componentes de la tensión disminuyen muy rapl-
. figura 77, en el que dos fuerzas iguales y opuestas son aplicadas a una damente cuando r aumenta y para valores de r grandes, frente a d, su
placa indefmída en los puntos O y Oh cuya distancia d, es muy pequeña. valor se hace prácticamente despreciable, resultado este previsible, con
~rreglo al principio de Saint-Venant, por tratarse de dos fuerzas iguales
y opuestas actuando en puntos muy próximos.
Superponiendo dos distribuciones tensionales de las dadas por las
ecuaciones (78), podemos resolver el problema mostrado en la figura 78. En
este caso las componentes de la tensión 1 son:
dP
(F" = -2(1 - 11) 4'11"1'2 (1 - 2sen 2 O)
dP
(fu = 2(1 - v) 4'/1"1'2 (1 - 2 sen 2 O)
X
FIG.77 dP
T%lI = -2(1 - JI) 41rr 2 sen 20
La tensión en c~alquier punto M se calcula sumando las producidas por La misma distribución tensional expresada en coordenadas polares queda
las fuer.zas que actúan en O y 0 1 , Considerando, por ejemplo, en M un así:
elemento plano perpendicular al eje x y designando por 11", la tensión dP dP
(F, = -2(1 - v) 4'/1"1'2' (fa = 2(1 - v) 4~' TrB = O (79)
normal producida en el elemento por la fuerza de O, la tensión normal 1I'r
IUtal 11/ producida por las dos fuerzas representadas en la La solución (46), correspondiente al caso de un cilindro de pared gruesa
sometido a la acción de una presión interior, coincide con las expresiones
rr
'"
I = 11 -
z
+ OU"')
- d
(er"o:r; = - d -ou",
o:r; = -
d (orr:
-or cos O - -orr",
00 r
seno)
-- (79) cuando el diámetro exterior del cilindro se hace infinitamente' grande.
De igual manera podemos resolver el caso mostrado en la figura 79a.
Vemos pues, que para el caso de la figura 77 las componentes de la tensión Las componentes de la tensión' son
se obtienen por diferenciación de las ecuaciones (77). Procediendo así M
(fr = (fq = 0, T,I = - 2;T2 (SU)
tendremos
Estas tensiones ·son las producidas por un par M aplicado en el Ol:igen
er. = 4dP2 [- (3
'/Tr
+ v) cos 2 8 + (1 - 11) sena O + 8(1 + v) sen 2
Ocos 2 8] (fig.79b).
dP- Si en lugar de una placa indefinida se trata de una tira infinitamente larga 80-
111 = 4m. 2 [(1 - 11) cos 2 8 + (1 .+ 3/1) sen2 O (78) m~tidn n la acción de una fuerza P longitudinal (fig. 80), podemos comenzar tomando
la solución (77) como si la placa fuera indefinida en todas las direcciones. Las ten-
- 8(i + /1) sena Ocos 2
O]
T"" = ¿~2 [ - (O + 2/1) +
.....
8(1 + v) sen 2
Ol sen O C08 O p, O
[Jx
I
:r
Fw. 80
siones que entonces aparecen a lo largo de los bordes de la tira, pueden ser .anuladas
añadiendo un sistema correctivo igual y contruri(), que produce unas tensiones que
pueden ser detenninadas usando el método general descrito en el § 23. Los cálculos
realizados por R. C. J. Howland' muestran que las tensioI?es local~s producidas
, A. E. H. Luve, 'l'heory oJ Elastidcy. pog. 214. Cambridge.
:x J Loe. cit. Véase también el trabajo de E. Melan, Z. arrgr:zu. Math. lvIech., vol. S, pág. 314,
Flc.78 Fw. 79 192~ .
...... :
la·:·fuerza. ..concentrada· P,. disminuyen rápidamente al aumentar la distancia al Los tres primeros términos del segundo miembro representan la solución corres-
. . de aplicación de la carga, de fonna que a distancias superiores a·1a anchura pondiente a una distribución de tensiones, simétrica respecto al origen de coorde-
. la tira la distribución de tensiones en una sección transversal de la misma es prác- nadas (véase el § 26). El cuarto término da la distribución correspondiente al caso
. ticamente imifOlme. En la tabla siguiente damos algunos valores de U z y Uv calcula- mostrado en la figura 57. El quinto la correspondiente al caso de la figura 7Sb.
dos suponiendo que la barra es sujetada en el extremo x = +00 y que el coeficiente El primer término de la segunda línea es la distribución .radial simple para una
de Poisson vale 1/4. carga de dirección () = O. Los restantes términos de la segunda línea representan
la solución para una porción de un anillo circular fleetado por una fuerza radial
=-=
e
n
--
3
n
--
9 18
11
-n
- 30
°
(fig. 46). La combinación de todos los términos de la segunda linea da la solución
para el caso de una fuerza que actúa sobre una placa indefinida (§ 38). Soluciones
análogas se obtienen también a partir de la tercera línea de la expresión (81), sin
<1,,2e otra difcren~ia que el ca~bio en 11/2 de la dirección de la fuerza. Los restantes tér-
y=o -P-= -0,118 -0,992 ...... . .... 00 minos de la expresión (81) representan las soluciones para fuerzas normales y tan-
<1",2e genciales proporcionales a sen nO y cos nO, que obran en los bordes exterior e inte-
y=c -p-= +0,159 +0,511 0,532 0,521 0,500 rior de un anillo circulor. Un ejemplo de este tipo referente tI la distribución de ten-
uv 2e _ siones alrededor de un pequeño orificio circular ha sido estudiado en el § 32.
y=o -P-- 0,110 ·0,364 .. - .. ..... .. ...... En el caso de un sector de anillo circular, las constantes de integración de (81)
pueden ser calculadas fádlmente a partir de las condiciones de contorno. Si se trata
de un anillo completo la determinación de tales constantes exige a veces un estudio
-x = -" 11
-9n -n -'"2 adicional de los desplazamientos. Consideraremos el caso general de un anillo com-
pleto y supondremos que las fuerzas normales y tangenciales en los contornos T = a
e 30 18 3
- y T = b vienen dadas por las siguientes series trigonométricas
+1 +I
u1l 2c
y=o -P-= ..... ...... 0,364- -0,110 -0,049 (Or)r'" = A.' A,,' cos n8 Bn' sen nO
. ,,-1
.. 11.=1
(a)
Las tensiones que en una placa semiindefinida orlgma una fuerza aplicada a (1"<6)r __ = O. + 1 o. cos nO +I D.senn8
una cierta distancia del borde han sido estudiadas por E. Melan '.
..
11.= 1
.
n=l
+l
mera línea de la expresión (81), la constante 00' quedará detelminada por la magnitud
(cnr·:t d"r n+, + c.'r.... + d..'r""'¡") sen nO· (81) de las fuerzas tangenciales uniformemente distribuidas en la periferia e§ 37). La re-
n=2 partición de tensiones que nos da el término que contiene el coeficiente ~ es multi-
forme (§ 34) y, en el caso. de un anillo completo, deberm¡s suponer ~ = O. Para
Z. Q/lgew. Malh. Mech., vol. 12, pág. 343, 1932.
I la determinación de las restantes constantes 00, bo y Ca disp¡onemos tan ·sólo de ·dos
Esta solución fue dada por]. H. Michell, Proc. Lonáon Mat/¡. Soc., yol. 31, póg. 100
J
ecuuciones:
1899. \léase también A. Timpe, Z. Moth. P/¡ysik., yol. 52, pág. 384, 1905, quien dio una .olu~
ción análoga aplicable al caso de un anillo eHptico, Math. Z., vol. 17, plÍg. 189,1923. -... (cr')F~ = Ao y (IT,),.." = Aa'
Se desprende de tales resultados, que las constantes bl ' Y dI' son funciones del
atA, - D,) == b(A,' - DI')' (B
, a ,+ e, ) == b(B,' + (JI') (e) coeficiente 'de Poisson, lo qUI: quiere decir quc en un anillo completo la distribución
~as ecuaCiones (e) quedlln siem re " . de las tensiones depende de los propiedades elásticas del material. Unicamente en
el anillo están cn equilibrio P dsatlsfechas s, las fuerzns que actúan sobw el caso en que a, Y e, desaparezcan, e~ decir, conforme a las ecuaciones (82), que
' como se emuestra 'b' d '
d 1
suma e as proyecciones de tod l ' ' escn ¡en o por ejemplo que la b,' = d, ' = 0, dicha distribución resultará independiente de las características elás-'
P r Oce d'¡end o así cncan tramos: as as ,uerzas sobre 1a d' '- d
'IreCClon Ix'es nula;
e eje ticas, Según resulta de las ecuaciones (ti) este caso particular ocurrirá si:
(2" [ y B, = -e,
Jr) [b(..,),•• - a(..,),•• ] cos e - [b(T,O)'_~ - a(r,o)t•• ] sen O) de = o Tal condición se cumplirá !:uando se anule la reHultllnte de las fuerzas aplicadas
y si sustituimos los valores de (J d ', a cada uno de los contornos del anillo, Tomemos, por ejemplo, la componente :le
de las ecuaciones (e), AriáJoga~~n:~9 ~~~ a la expr~s\On (a), llegaremos a la primefu de la resultante de las fuerzas aplicados ai borde r = a, De (a) se deduce que esta
si proyectarnos las fuerzas sobre el', d
en remos a segunda de las ecuaciones (e) componente es:
C' d eje y.
uan o a, Y e, son determinados a partir de l '
de ecuaciones (b) y (e) se hacen idénticos e a~ ecuacIOnes <t!l,
los dos sistemas
nes para ?etenninar las seis constantes ~ s~co~t~andonos con sol~ cuatro ecuacio-
s y si desaparece se desprende que A, = DI, De igual forma, proyectando las fuerzas
que necesItamos se obtienen consl'de de lan e>d , Las dos ecuacIOnes adicionales
,
la segun d a 1mea '
de la expresión (81)
ran o os esplazarnl'ent'" L ,.
, os, os termmos de en la dirección y, obtenemos B, = -G" cuando la componente de dirección y es
combinación de distribución radial simr~pres~rtan l~ funCIón de tensión para una nulll, Se concluye, pues, que si la resultante de las fuerzas aplicados u coda contorno
tada (fig. 46). Sumando I entonces 1 p e y , e tensIOnes en una pieza curva f1ec- es nulu, la distribución de tensiones en un anillo completo 'no dl.'P"ndc- de 1,,8 pro-
de estos dos casos, a sabe;, las ecuadio~::c;r~~ln§~3gelera(le)sddel los desplaz~mientos piedades elásticas del material y ello sin necesidad de que"cl moml'''I'' ell' dichns
l ' Y as q e § 31, Y sustituyendo fuerzas sea nulo. ' ,
Debe advertltse que debe ~u~tituirse O por 8 + (12) , 1 ' Las conclusiones obtenidas par!! un anillo circular siguen sienuo v i a, p,¡ra
de un !!jo vertical (fig, 52) en Jugor de a partir de u ," h ~,e anguJo es medido a partir
n eje orlzontal (fig, 46), el caso más general del'prublema bidimensional de un cuerpo múltiplen e1\ (, ceolle,o,
PROBLEMAS BIDIMENSIONAI.P.s EN COORDENADAS POLARES 149
.. '<mORIA DE LA ELASTICIDAD
. generales' realizadas por J. H. Michell ' , se sigue que paru 40. Aplicaciones de la solución general en coordenadas polares. Como
. conexos (fig. 81), se obtienen ecuaciones análogas a las (82), primera aplicación de 111 solución del problema bidimensional en coordenadas po-
unicidad de los valores de los desplazamientos para cada uno de lares consideremos-·tI11 anillo circular comprimido por dos fuerzas iguales y opuestas
independientes, tales como las marcadas en la figura por A y B. La dis- diri~idas según un diámetro J (fig. 83a). Comencemos considerando la solüción .co-
. tensiona! en tales cuerpos depende generalmente de las constantes elásticas rrespondiente a un disco macizo. La realización t:tl él de un orificio circular de radIO a
del inaterial, salvo que la resultante de las fuerzas que actúan sobre cada uno de los crea fuerzas normales y tangenciales distribuidas en la circunferencia del orificio,
contornos se anule'. Cuantitativamente, sin embargo, el efecto del valor del módulo que pueden ser anuladas superponiendo un sistema de fuerz~ iguales'y opuesto.
sobre la tensión máxima es generalmente muy pequeño, pudiendo ser despreciado Este sistema de fuerzas puede ser expresado mediante lo~ pnmeros termu;t0s de
en la práctica l. Esta conclusi6n es de interés práctico, pues, como veremos más una serie de Fourier y las tensiones en el anillo se determman entonces aplicando
adelante, existen ciertos materiales transparentes, tilles como el vidrio o la baquelita, la solución general que estudiamos en el § 39. Estas tensiones, junto con los cal.culadas
en los que pueden determinarse las tensiones mediante métodos ópticos que utilizan para un disco macizo, constituyen las tensiones totales existente.s en elamllo. La
luz pnlarizada (§ 42). En consecuencia, debido a la conclusión anteriormente ob- relación u" : 2pl:n:b correspondiente a diversos puntos de las secciones transversales
tenida, los resultados que se obtienen al experimentar con esos materiales transpa- mn y mln" calculada de esta manera para el caso en que b = 2a es tabulada a con-
rentes, pueden ser aplicadas de manera inmediata a cualquier otro material, tal como tinuación ' .
el acero, a igualdad de condiciones geométricas y estáticas.
TeorÍa exacta
-8,942
10,147
Corno se ha dicho anteriormente (§ 29), el significado físico de las soluciones Distribuci6n lineal de tensiones
múltiples queda explicado por la consideración de las tensiones inicia1es en un cuerpo
múltiplemente conexo. Supongamos, por ejemplo, que la ecuación (f) no se satis- -7,04
tnn 8,67
faga: el correspondiente desplazamiento, indicado en la figura 82a puede produ-
cirse mediante un 'corte en el anillo y la apIlcación de las fuerzas P. Si las extremi- __ nZlnl
~~~~~ ____- L____L -__ ~ ___ ~ _ _ _ __
dades del anillo se reúnen luego por soldadura u otro medio, se habrá obtenido
un anillo c()n tensiones iniciales, CUY'd magnitud depende del desplazamiento ini-
cial di. Análogo efecto se obtiene cortando el anillo a lo largo de un radio vertical En la misma tabla se dan los valores de la tensión, calculada con arreglo a las dos
y provocando una traslación inicial de uno de los extremos con respecto al otro, . teonas elementales, basadas en las siguientes hipéltesis: .1) las secciones. rect~s. se
mantienen planas, en cuyo caso las tensiones normales .slguen una ley hlpcrbohcfl¡
en dirección vertical (fig. 82b). Las tensiones iniciales que se producen en los casos
ilustrados por las figura~ 820 y 82b corresponden ¡¡ los términos multif(lnnes de 2) las tensiones se distribuyen de acuerdo con una ley.bne.a.l. La tabla muestra q~e
la solución general cuando las ecuacione~ (j) y (o) no quedan satisfechas. pllra lu sección recta 11In, distante de los puntos de a~J¡caclon de la carga P, la dIS-
. La solución completa de estos problemas puede ser obtenida aplicando los resul- tribución hiperbólica de tensiones da resultad()s casI ex~c;tos; el error correspon-
tados del § 31. Los despla'zamicntos dados por las ecuaciones (q) del § 31 puede diente a la tensión máxima es sólo del 3 %. Para la secclon recta 11I¡ 1I1 los errores
verse que presentan el tipo de discontinuidad requerido cuando se aplican a un anillo de la solución aproximada son mucho mayores. Es intere~~nte advertir que la resul-
(véase el problema 4). tante de las tensione.~ normales que actúan sobre la secclon 11l¡n¡ es Pln, resultado
éste que era de esperar si recordamos la acción de cuña de la carg~ c?nce.~trada
Loe. cit•
J . ilustrada en la figura 65d. En las figums 83b y 83c .se muestra. la dlstnbuclOn de
• nebe recordarse que se ha considerado nu las a las fuerzas másicas. las tensione.q normales en las secciones 111'1 Y 11/,1JJ calculadas por los tres métodos
• Un estudio de este tema ha sido realizada por L. N. G. Filon, BrÚ. ·Assoc. Ad~a"cemell/ antedichos. El método que se ha aplicado en lo que antecede al caso de dos fuerzas
Scj. Rept., 1921. Véase E. G. Coker y L. N. O. Filon, Photoelas/idty, 6.07 y 6.16.
, Un estudio de tales tensiones ha sido r~ulizado por A. Timpe, Z. Math. Phys"k, vol. 52, ,
I Véase S. T¡moshenko, B,;U. Po/y/echo Inst. Ki.... • 1910, Y PhiFMag., vol. 44, pág. W14,
pág. 348, J905. V. Vult~rra desarrolla una teoría general, A,m. ér.ole "orm., París, serie 3, vol. 24.
1922. Véase tambIén K. W¡eghardt, Sit:::bcr. Akad. Wiss., Vienu, vol. 124, Dpto. 11, póg. 1119,
págs. 401-517,1907. Véase tambIén A. E. H. Lave, Malh.mat"cal Theary of Elasticily, 4." edi-
c¡ón, pág. 221, 1927; J. N. Oaadier. Proc. FiJth [mem. emlgr. Applied Mech(","cs, 1938, pá- 1915 •
gina 129. • Se consIdera una pl~c~ de espesor UnIdad.
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 151
150 'l'EORIA DE LA ELASTICIDAD
iguales y opuestas, puede emplearse paro el caso general de un anillo circular sobre ciones I1l11 Y 1/I,nl para "la = 4 Y bJa = 2 ' . Debe advertírseque como en este coso
las fuerll3s que actúan sobre cada un9 de los contornos tiene resultan te nula, la dis-
sobre el que actúan fuerzas concentradas '. .
tribución de tensiones depende de las constantes elásticas del material, En los cálculos
Dé anteriores se ha tomado el coeficiente de Poisson igual a 0,3.
\
'\ 1-_ _+-l-----_,..----,'I-a04s2 .
,~
r-----~r_--~~r_--r-~~----~n
1\,
p i»,
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~, 10~ \
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~f0 ~ ~f0 ~ 10 ,\
Ó O,9ó "'" ~(\ !P:DJó. ¡:;]i6ó O b b 0.9b 0,86 10 .h I%Q ¡;~~P;
~0 ~ ~ ~~F.% f%::
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~~ ~
0.
-f/,44
(a) I'''l~ ~ 1\\ ~ +o.tJó8 +.J,8S
~~ .'í~
8=0' ~,~
(}=90' ~
I~ ~
, 1]
II,
(ó). (e) ..0,/69
FIG. 83 41. Cuña cargada sobre sus caras. La solución general (81) puede apli-
carse también en el caso en que una distribución polinómica de carga actúa sobre
Como segundo ejemplo consideremos el extremo las caras de una cuña'. Calculando a partir de (81) las componente.~ de la tensión
de una cbiela de ojO.2 (fig. 84). La distribución de en la forma usual y tomando solamente los términos r" con n ~ O obtenemos las
presiones en el borde del orificio depende de la holgura siguientes expresiones para las componentes de la· tensión:
existente entre el pasador y el agujero. Se supoue que 0'9 = 2b. + 2d.8 + 211. cos 28 + 2(', sen 28
sobre los contornos interior Y exterior sólo actúan pre- +6r(b, cos O + el, sen 9 + o. ros 30 + e, scn 30)
siones nonnales cuyo valor es' .+12r'(b, cos 28 + el, scn 20 + a, cos 48 + e. sen 40)
· ............. .
(n + 2) (n + l)r"[b" coa nU + el .. sen nO + a.+! t'OS (1' + :::)0
(0',),., -;- a para - ,..2 ~
= -'-·2Pcos8 8 ~
11'
2 + c,,+, sen(n + 2)8]
· .................. - ... . (83)
es decir, las presioncs están repartidas en la mitad inferior del borde interno y la \
+ Tuln(n + l)b .. sen /18 - 11(11 -1- l)d" ~os nO + (n + l)(n + 2)
mitad superior del borde externo. Una vez desarrollada esta distribución en series
(1 +' ~en(/1 + Z)O - tI. + l)(n + 2)c,,+, ('os tI< + :::)61
trigonométricas pueden calcularse las tensiones hacieodo uso de la solución gene-
ral (81). La figura 85 representa los valores de Cfn : PJ2a, correspondientcs· a las sec- , En lo que se refIere ,,1 chlUUIO experimental de las tensIones en bielas de ojó medIante
el nlétodo fotoelástico, véase E. G. Coker y L. N. G. Filon, Photoelasticity, 6.18 y K. Take-
mu.ra e Y. Hosoknwa, Rept., .12,1926, Aeronnut. Resenrch (nst. Tol,yo fmp. Umv. L., dIstri-
I L. N. G. Filon, The Stresses In a circular ring, Salected Engincerillg Papers, nlun. 12,
bución de tensIOnes en biela. de ojo ele acero fue estudiada por l.' Mathar, ForschUl'!fsarbetlerl,
Londres, 1924, publicado por l. Cllnstitution of Civil Engmeers».
, H. R~issner, Jahrb. wiss. GrselIsch. [.ufrjahrt, pág. 126, 1928: H. Reissner y F. Strauch, núm. 306, 1928.
• Véase S. Timoshcnko, Te.TIa de /t¡ Elasticidad, edICIón rusa, póg. 119, San Petershur-
11lgemeur-Archiv., vol. 4, pág. 481, 1933. go, 1914. ....
I P es la fuerza por unidad de espesor de la placa.
152 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PUOBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLArulS 153
Cada llnR de las potencias de r está ligada, como se ve, con cuatro parámetros arbi- .Llevando estos valores a las ecuaciones (83) obtenemos I
trarios de manera que si las tensiones aplicadas en las superficies límites (} = a,
(J = l/vienen dadas en forma de polinomios de "t, quedan determinadas las tensio-
g(
rro=¡; -k+2" tg f3-0-·2
1 .. 1 1)
t~ ~cos20+2sen28
nes de la cuña comprendida entre dichos límite.~.
Si las condiciones de contorno son, por ejemplo ': -r,B = H~ -~ tg f3 ~en 26 - ~ cos 26) (e)
y, en general:
rrB = - ..!l ( ... - 8 + !.sen28)
2·
(71 + 2) (n + l)[b" ros n", + d~ senn", + an;.O cos (n + 2)", 1',.6 = -.:}; (1 _·cos 20) (d)
+ C"+' sen(n + 2),,] = N"
=
con otros tres grupos de ecuaciones para efa en O fJ y T, o en O = a y O = /3. Estas
ecuaciones son suficientes para determinar las constantes que entran en la solu-
ción (83).
. q Problemas
l
1. Probar la validez de la ecuación (d) del § 2S haciendo uso de la función
.p =:1)1 - y' = (z' +y')(z' - yO) = r' ~os 28
G. == .!1..
41c' a. == - UU
4k'
d
o
q
= - 2,ié'
2bu - '( + !L!LP.
21.: I A esta solUCión llegó por otro método M. Levy, Compl. Te"d., vol. 126, pág. 1235, 1898.
Véase también P. Fillunger,· Z. MatÍl. P/¡ysik, vol. 60, 1912. Vé~se tamb,én.1a aplicaCión de
funciones de tensión de este t,po a ciertas Vigas por E. Relssnilr, J. A.Tona/l!. Sd., vol. 7,
pág. 353, 1940. Los casos correspondientes a cuños sometIdas a otros tipos de carga SOn e~tu
.1 Los ténnlnos Nn', NOf Su Y Su' no son lndt:ptmdientes. Sólo tres de ellos lo son, pues
diados por C. J. Trancer, Quart.]. Meeh •. cmd Appl. Math., vol. 1, pág. 125, 1948, .
representnn la tensión en la punta de la cuña r = O.
154 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDlMENSIONAI.JlS EN coormENADAS POLAllllS 155
nes, resultantes del cierre del corte paruldo h de:: la figuru 88a y Jel deslizun1icntu J 12. Determinar cuál es el valor de e en la función de tensión.
de la figura 88b en [unción de (j. ' </> = C[r'{a - 9) + ,.' sen 8 ~os O-r' coso 8 tg "']
5. Determinar por suptrposición de los resultados obtenidos con las ecuacio- que satisface las condiciones de contorno existentes en los bordes superior e mfedor
nes (62), las tensiones existentes en una placa indefinida en la que existe un orificio, .de la placa triangular de la figura 91. Evaluar las componentes a.,·, r~v de la tensión en
cuando los puntos del infinito de la misma se encuentran en un estado equitensional la sección vertical 71ln. Trazar las curvas para el caso de a = 20° Y también, n fin
de valor S. Los resultados obtenidos deberán coincidir con los que dan las ecuacio- de comparar, In correspondiente a )(1 teoría elemental de la flexión de vigas.
nes (45) cuando bJa -->- 00, p, = O Y Po = _·S.
(a)"
FIG. 88
(h)
I~ FLG. 91
~
. S
a,f" cos 3 O + bi l,3 cos
p~a._.
ao = O, 1'r8 ~ sr en 9 =: «
-x-- 110= 0, 'Tr8 = -sr en 8 = -(1'
.B
FIC. &9 FIC. 90 en las que s es una constante. Representar la distribución de tensiones para valores
positivos de s.
8. Demostrnr que para el caso particular en que a = 1</2, la función de tell- 15. Obtener una función de tensión del tipo
sión (d) del § 35 satisface l!\ ecuación (69) y estudiar si la distribución (e) de tensiones,
del mismo párrafo, tiende a la dada pOlO la teoría elemental de la flexión cuando a
a,r' cos 49 + b,r4 cos 28
es pequeño. que satisfaga las condiciones
9. Demostrar, calculando las fuerzas resultantes, que la distribución tensio- 110 =' 0, 1'r8 = ST~ en e= a
nal (e) del § 35 corresponde a la aplicación de un par M en el vértice de la cuña. 110 = 0, 1'rO = -sr 2 en 9 = -a.
10. Una fuerza P por unidad de espesor, es aplicada por el qmto de un cuchillo que s es una constante. Representar la distribución de tensiones.
sobre el fondo de una entalladura de 900, tal como se indica en la figura 89. Calcular 16. Demostrar que la distribución de tensiones
las tensiones y la fuerza horizontlll transmitida a través del arco AB.
11. Obtener la expresión de las tensiones a T existentes en la sección mn que se
er. = -;;:
'P (
arctg;;
y Xli)
+ XO+tÍ" r_v
P 1/'
- ;;: I'-'+-¡ji
representa en la figura 90. La teoría· de las cuñas expuesta en el capítulo presente
y la de las ménsulas presentada en el capítulo 3 dan distribuciones de tensión dis-
I1v = -;;:l' ( arctg;;'1 - ",-2-+-'-y-2 XII)
tintas para la unión rs. Comentar este hecho.
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 157
x 4> = ..!..-
2~a
[XY' log (z' + y') + (z'1/ - y') arctg 1!. -
z
3.rv'J
22. Dcmostrllr que las reparticiones de carga repl'esentadas en la figura 95.
pueden obtenerse por superposición de reparticiones del tipo indicado en la figura 94.
FIG. 92 FIG. 93
Estudiar el valor.de 1".y: a) cuando nos aproximamos a Ó a 10 largo del eje Ox;
. b) cuando nos aproxImamos a O a lo largo del eje Oy (la discordancia es causada
por In discontinuidad de la carga en O).
17. Demostrar que la función de tensión FIG.95
'" = ;. [~ y2 log (z. + y') + xy arctg ~- v.] 23. Demostrar que la repartición parabólica representada en la figura 96 viene
dudu por la función de tensión:
resuelve el problema de la placa semiindefiniúa representada en la figura 93 en la
que la fuerza tangencial u~if~,,?e se extiende indefinidamente hacia la izq~ierda. r.' - [a'"4 + 1 , ,( .r' y' ) ]
Demos.trar que ". Se hace mfmlto cuando nos aproximamos a O en una dirección -;;:p { - 3a;
XY'
log ;.~; 2 (x +!I) 1 - 6a' + 2(1' a
+ Y')}
cu~lqulera. (Esto es debido a la discontinuidad de la carga en O. Se obtiene un valor
fimto ~ua.~do la carga decrece de forma continua, valor que depende de la curva + 3a.r:¡3 + zay ( 1
2 1
- 3a'
z'
(i2
de vanaclon de la carga en la proximidad de O.) .
. 18. Por s.uperposición, utilizando los resultados del problema número 16, escri-
bIr las expresIones de "., "VI -ro. para el caso en que actúa una presión constante p
sobre el segmento -a.-:;:' x < a, del borde rectilíneo de una placa semi indefinida.
Demostrar que la tenslOn tangencial es .
ro. = _ ~ 4axy'
71" [(x - a)' + y'J[(x + a)' + y']
y examinar cómo varía esta tensión al acercarnos al punto x = O, Y = O a lo largo:· PICI. 96
a) del borde; b) de la recta x = a.
para el caso dI:: una compresión y por
z" (r' 4Z Y'}
8 { y'
;; 6a' (3(1' - 3x' + y') log T;1
7,'
+ 32 ay{3 + 3~' - 3y' - 3a!)" + 3a
para el de fuerzas tangenciales siendo
rl' = (x - a)' -1- y', r,' = (.r + al' + y'
2aq
:Y " = 01 - O, = arctg z' +
y' _ a"
FIG. 94
24. Demostrar que en el problema de la figura 72 ·~xiste una tensión de tra-
ción '" = 2P/:.d a lo largo del diámetro vertical, salvo en 'los puntos A y B. Explicar
19. Representar, usando los resultados del problema número 17, la variación el equilibrio de la porción semicircular ADB, considerando pequeños semicírct.!los
de U z ~ lo largo del borde y = O, en el caso en que una fuerza tangencial uniforme ~ alrededor de los puntos A Y B, de igual manera que en las figuras 65c y 65d.
es aphcada sobre el segmento -a < x < a de ese borde.
158 TEOIUA DIl LA IlLASTICIDAD
+~Iogr
4
-~
32
(3 - ..)~~sol
T (
satisface las condiciones de contorno, para el caso en que una fuerza P es aplicada
El método jo
en el interior de un orificio existente en una placa indefinida, en la que las tensiones
son nulas en el infmito. Demostrar que la tensión normal de dirección tangencial
en todos los puntos del orificio, salvo en el A (fig. 97), viene dada por
p
~d12 + (3 - J,) COS OJ
.Demostrar quc los desplazamientos son uniformes.
celulosa como material' para los modelos. Posteriormente se ha hecho uso Sea abcd (fig. 99a)·un pequeño elemento de la cara izquierda qel IDQ-
también de la baquclita y más recientemente de la fosterita 1 • delo M, en el cual las direcciones de las tensiones principales a", y ay se
En 10 que sigue (donde vam'os a hablar solamente del equipo toto- toman vertical y horizontal por con veriiencia. Un rayo, normal al plano de
elástico más sencillo"), consideraremos la luz ordinarja como un conjunto papel, y polarizado en el plano DA (fig. 99) llega desde P: La vibración
de oscilaciones que se producen en todas las direcciones normales a la es armónica y puede representarse por la elongación s de dirección DA
s = a cas pt (a)
L P
•
.M
: A 8
I: ~~ : ~ : ~~ : I
L PQp M ~A S
en la que p es 2.n veces la frecuencia, que depende del color de la luz,
y t el tiempo.
(a)
La oscilación (a) contenida en el plano DA puede descomponerse
(b)
fo'lO. 98
en sus componentes según Dx y Oy que serán:
recta que define geométricamente el rayo luminoso. Por reflexión del x = a cos a cos pt, y = a sen a cos pt (b)
mismo sobre una placa de vidrio, una de cuyas caras está pintada de negro, El efecto. de las tensiones principales 0"" y O"y, que actúan en el punto O
o por transmisión a través de un polarizador (un prisma de Nicol o una de la placa, es alterar las velocidades con que las componentes (b) se pro-
lámina de Polaroid) se obtiene un haz de luz polarizada, en mayor o mellar pagan a través de la misma. Llamando v" y V y a las velocidades de propa-
. grado, en el cual predomina la vibración transversal correspondiente a gación de la luz en los planos Dx y Oy, respectivamente y h al- espesor de
una dirección determinada. El plano que contiene esta dirección y la del la placa, los tiempos necesarios para que las componentes de la vibración
rayo se llama plano de pqlarización. Este tipo de luz, que en lo que sigue la atraviesen serán:-
elegiremos además monocromática, es la que se utiliza en la investigación h
fotoelástica de las tensiones. ta =-
Vv
Ce)
no dejará pasar ninguna luz a la pantalla. Consideremos ahora lo que pasa 11.1Z blanca, como bandas coloreadas. De la ecuación (e) se deduce que el
cuando el modelo está presente. Las. componentes (d) 11 su llegada al ana- vf!lor de cs. - cs. es doble para ¡,ma isocromática de segundo orden que
lizador vendrán expresadas por las ecuaciones para una de primero, triple para una de tercer orden, etc. En consecuem:ia,
para evaluar la diferencia entre las tensiones principales, es necesario
Xa = a cos a COS .p, ya = a sen acos (if¡ - a) (f) , conocer tanto el orden de la isocromática como la diferencia correspondiente
ya que la diferencia de fase ¿J se conserva en el camino de M a A. Aquí a la iso cromática de primer orden llamada valor de franja.
7J1 es igual a pt más una constante. El valor de franja para un cierto material puede determinarse ensa-
Las componentes de las vibraciones (f) que son transmitidas por el a tracción una lámina rectangular del mismo. Puesto que el ~stado
analizador (cuyo plano de polarizllción es representado por mn en la que se obtiene es uniforme toda la pieza se presentará igual-
fig. 99a) serán la proyec~ión de las mismas sobre la dirección Om, cuyo te iluminada. Para una carga nula, la imagen que se obtiene en la
valor es: será oscura, iluminándose al aumentar la carga hasta que vuelve
. oscurecerse cuando la diferencia de tensiones (igual aquí a la tracción
X2 sen a = ia sen 2a cos "', -Y2 COS a = -~a sen2a cos (t/! - .1)
."tJ"~,,u.al se aproxima al valor de franja. Un aumento ulterior de la carga
y la vibración resultante. según mn será
Se sigue de esta expresión, que la luz llegará a la pantalla a menos que sen
2a = O ó sen d/2 = O. Centrándonos en el primer caso, el hecho de
que sen 2a = O indica que las direcciones de las tensiones principales son
paralelas (perpendiculares) a las direcciones de polarización de P y A.
Los rayos que pasen por tales puntos de M se extinguirán y los puntos FIG. 100
correspondientes de la pantalla S aparecerán en negro. Estos puntos se
encuentran generalmente en una o más curvas indicadas por líneas oscuras a iluminar la imagen hasta que para una tensión igual al doble del
en S. Tales curvas se llaman (cisodinas». Trazando en numerosos puntos de franja vuelve a oscurecerse, repitiéndose sucesivamente este pro-
de ellas pequeños segmentos paralelos a los ejes de P y A tendremos regis- de iluminación y oscurecimiento si seguimos aumentando la carga.
tradas las direcciones de las tensiones principales en esos. puntos. Dando . Estos mismos ciclos se darán en un punto cualquiera de un campo
distintas orientaciones a P y A (que se mantienen cruzados) obtendremos . no uniforme al aumentar la carga, supuesto que la diferencia
nuevas ¡soclinas y los segmentos indicadores de las direcciones principales tensiones en el punto llegue a ser un múltiplo del valor de franja. A
cubrirán el campo teí:i.sional (igual que hacen las limaduras de hierro en ciclos de un punto individual corresponde, visto el campo tensional
el campo de un imán), siendo entonces posible trazar curvas tangentes en . ·su totalidad, el movimiento gradual de las franjas (incluyendo laentraoa
cada punto a los ejes principales de las tensiones. Tales curvas reciben .. nuevas) al aumentar la carga. En consecuencia, el orden de las
. el nombre de (cisostáticasll. 'V'.LVll""""", puede determinarse observando su movimiento y contán-
El otro caso en que se produce oscuridad en un punto es cuando en
él sen 11/2 = O. Entonces ti = 2nn siendo 11 = O, 1, 2, ... Cuando J = O placa estrecha, por ejemplo, sometida a flexión simple dará el
las tensiones principales son iguales y los puntos donde eso ocurre se de isocromáticas que se reproduce en la figura lOO, indicando
llaman puntos isótropos. Cuando n = 1 tenemos una franja de primer franjas paralelas que en todas las secciones verticales, alejadas de los
orden, para n = 2 una franja de segundo orden, etc., recibiendo todas . de aplicación de las cargas, la distribución de·tensiones es la misma.
estas líneas el nombre de isocromáticas por presentarse, cuando se utiliza la )magen de la pantalla mientras' aumentamos. gradual-
EL MIlTODO FOTOELASTICO 165
que aparecen nuevas isocromatlcas en los y para las componentes c..Iebidas a y~'
de la pieza que se mueven hacia el eje neutro, de . a .
se van espesando cada vcz más. En el eje neutro se presenta, Xa = - ~sen {3sen.p, Ya = V2 cos {J sen (if; - A) (J)
la isocromática de orden cero (n = O). y2
Sumando las componentes de las ecuaciones (¡) y 0) tenemos para la luz
43. Polariscopio circular. Hemos visto que, para un determinado
que sale del modelo
ángulo, el polariscopio plano muestra junto con las isocromátícas las
¡sodinas correspondientes a ese ángulo. En la figura 100, por lo tanto,
debieran aparecer en negro todos aquellos puntos en los que las direc- Xa =
a
.y2 .//
cos '1', Ya = ../2 sen (1/1' - A) (k)
lo cual es cero, con lo que el movimiento circular de i:lentido, el de las oscuro. Si giramos el analizador _900 respecto a'O" lo tendremos, por el
agujas del reloj, es interceptado. . contrario, instalado para la observación en campo' iluminado,' en la que
Considerando de la misma manera 111 parte de las ecuaCIOnes (1) y 'aparecen como franjas iluminadas las que antes se presentaban.en negro.
(m) correspondientes al movimiento de sentido contrario al de las agujas Este mismo efecto se consigue en el polariscopio plano colocando parale-
del reloj, es decir, lamente, en lugar de normalmente, los ejes de polarizador'Y analizador.
(n')
xi = -csen f, y/ = -e cos '" . 44. Ejetnplos de determinación fotoelástica de las tensiones.-
tendremos que la elongación transmitida por el eje del analizauor es: . La aplicación del método fotoelástico ha permitido obte~er resultados de
suma importancia en el estudio de las concentraciones de tensiones que
-e cos 45° sen f - ecos 43° sen '"
siendo su amplitud
_r .t:. t:.
V2c o v2bsenZ o asen
Z
(p)
Frc. 102
PIC. 103
a ia distribución lineal de las tensiones flectoras. El orden de las ¡socro- Fll.. 105
máticas, marcado en el extremo superior, muestnl la distribución tensio-
nal en la parte curva de la barra (el modelo completo se continúa por
encima de este extremo superior, que es su eje de simetría), indicando la
existencia de una tensión de compresión en el borde interior igual a 13,5
en valor relativo y de una tracción en el borde exterior igual a 6,7. Estos
valores concuerdan muy bien, proporcionalmente, con los resultados teóri-
cos «(exactos') dados en ll! última línea de la tabla del § 27.
Las figuras 102 y 103 se refieren al caso de una viga flectada bajo la
acción de una carga concentrada' que se aplica en su punto medio2 • La
mayor densidad de franjas oscuras indica tensiones elevadas en la pro-
ximidad del punto de" HplicacÍón de la carga. El número de franjas que
atraviesan las secciones transversales decrece desde el centro hacia los
extremos de la pieza, a consecuencia de la correspondiente disminución
del momento flector,
La figura 104 representa la distribución de tensiones en una plac!l
de dos unchunls diferentes, sometida a una tracción axÍli:1 e indica que la
máxima tensión aparece en la terminación de la transición entre las partes
de distinta sección, La relación de la tensión máxima a la tensión mediá en 1·'IG, 106
FIO. 108
fuerte (una malla molecular) rellenada por una masa de moléculas poco
ligadas que se fluidiza al calentar. Cuando el modelo caliente es cargado,
Tuerca convencional
el esqueleto elástico es el que sostiene la carga. Al enfriar el modelo la masa
asemilíquida') se. «congela. haciendo que el esqueleto conserve la defor- FIG. 109
mación al descargar el modelo. El efecto óptico se conserva, en conse-
cuencia, y no es alterado al cortar la pieza en trozos. Un modelo tridi- ó 3 %. La figura 109 representa las franjas obtenidas sobre un modelo
mensional puede ser··éortado en rebllnadas, cada una de las cuales puede baquelita) de una unión por pasador y tuercal . La tuerca inferior es del
ser estudiada con el polariscopio. El estado tensional en tales rebanadas no convencional. La superior de borde cónico muestra una menor con-
es plano, pero se sabe que las componentes de la tensión 7:",., 'yz y (J. no de tensiones que la convencional.
afectan al rayo de dirección z, normal a la lámina. La figura 108 muestra
la repartición de franjas obtenida en la rebanada central.de un eje redondo 1M. Hetényi, J. Applied Mechu1Iics (Tram. A.S.M.E.J, vol. lO, pág. A·93, 1943. Resul.
(de fosterita) en el que existe una muesca hiperbólica 3• La tensión máxima correspondientes a otros tipOS de tuercas pueden encontrarse en este trabajo.
deducida de este diagrama fotoelástico, difiere del valor teórico en un
I J. Clerk MUKwdl, Sci. Paper., vol. 1, pág. 30.
'M. Hetényi,:J. Applied Phys., vol. 10, pág. 295, 1939.
lLeven, loco cit.
.....
METODOS ELASTO-ENERGETICOS 175
'sima fracción del trabájo realizado por las fuerzas de compresión!; fracción
ésta tan pequeña, que a efectos prácticos puede ser despreciada. En conse-
cuencia, podemos aceptar que el trabajo, realizado no se emplea en la
generación de calor, siendo todo él almacenado en el elemento 'en forma
, de la llamada energía de deformación o energ{a potencial elástica. Se supone
Métodos elasto que el elemento sigue siendo elástico y que no es generada energía cinética.
Las mismas consideraciones se aplican cuando sobre el elemento ac-
túan las seis componentes de la tensión a"" (Jy, (J.. T",y, T",., T/I% (Hg. 3).
La conservación de la energía requiere que el trabajo realizado no dependa
, del orden en que se apliquen las fuerzas, sino sólo de su magnitud final.
De no ser así, al cargar siguiendo un cierto orden y descargar siguiendo
otro orden, al que corresponde un trabajo mayor, obtendríamos una energía
.' Ilbre neta después de hacer recorrer al elemento un ciclo completo.
El cálculo del trabajo realizado, es más sencillo si las fuerzas b ten-
siones aumentan todas simultáneamente con igual velocidad. Entonces,
la rehición entre cada fuerza y el' desplazamiento correspondiente sigue
siendo lineal como en la figura 11 Ob, de forma que el trabajo realizado por'
47. Energía potencial elástica. Cuando una barra uniforme es
todas esas fuerzas será:
sometida a una tracción, las fuerzas que actúan sobre sus extremos reali-
zan una cierta cantidad de trabajo al estirarla. Si sobre el elemento de dV = Vod:cdydz (b)
la figura 110, actúa solamente la tensión normal (J", la fuerza y extensión
¿¿ttl.1:3 d.
O : e.áz
Vo = ·HO"%E% + rrufu + a,E. + T"","("", + 'l'V'''(II' + T,,=y~,)
la energía de deformación correspondiente a la unidad de volumen.
, .' En la discusión precedente se consideró que las tensiones eran las mismas en
las caras opuestas del elemento y que no existinn fuer:r.3s másicas. Estudiemos ahora
(e)
(al (b) el trabajo hecho sobre el elemento, cuando las tensiones varian a través del cuerpo
y las fuerzas másicas no son nulas. Considerando la fuerza ".,.dud, que actúa sobre
FlG. 110 , la cara 1 del elemento de la fígunl 110a, el trabajo que realiza al despla:.:arse el des-
plazamiento u será Hrr,u),d.,d, donde el subíndice 1 indica que las funciones rrr y 11
correspondientes serán !T",dydz y f",dx. La relación existente entre estas :, deben ser evaluadlls en el punto 1. De igual forma, la fuerza rr ,dvd, quc actúa sobre
dos cantidades es la representada por una recta tal como la OA de la , la cara 2 realiza el trabajo - Je". u)!d.,d , siendo el trabajo total para las dos caras
figura 110b, y el trabajo hecho durante la deformación viene dado por el
i[(..:uh - ("su).] dy dz
área l(adydz) (E"dx) del triángulo OAB. Llamando dV a este trabajo límite es:
tendremos: 1 f)
2 a;; (.."u) dx dy dz (d)
Ca)
siendo evidente que este mismo trabajo es realizado sobre todos los ele- , Calculando ahora el trabajo realizado por las tensiones tangenciales '~y y t",. sobre
,las caras 1 y 2 Y sumándolo a (d), tendremos la siguiente expresión para el trabajo
mentos de la barra suponiendo que el volumen de todos ellos sea el mismo. , hecho sobre esas dos caras por las tres compooentes de lo tensión:
Sentado esto, surge la pregunta siguiente: ¿en qué tipo de energía se
convierte este trabajo? 1 él
2 a; (..:u + T:,tI + T:,W) d:r; dy d~
En el caso de un gas, la compresión adiabática del mismo eleva su
temperatura. Si es una barra de acero 10 que comprimimos adiabática- I De no ser así habrla una diferencia sustancial entre los mÓdulos elásticos ad.abáticos
mente, la temperatura se eleva también aunque en pequ'eña cantidad. El e isotermos cuando en la realidad tal diferencia es muy pequeña. Véase G. F. C. Seade, Ex·
calor correspondiente, sin embargo, representa solamente una pequeñí- ,p.,imental Elasticity, capítulo 1.
176 TEORIA DE I.A ELASTICIDAD METODOS ELASTO-ENERGETICOS 177
do~de V ~ 'lII son las componentes del desplazamiento en la direcciones y y. z. El lru- a la componente correspondiente de la tensión. Tomando por lo tanto la
biIJo realizado sobre los otros dos pares ,de caras puede hallarse de igual manera, derivada respecto a €" y. usando .la ecuación (11) se obtiene
encontrándose pura el trabajo total hecho por las tensiones sobre las caras la siguiente
expresión:
avo
oe",
= ),8 + 2Ge", = u'" (g)
1 [ iJ fJ
:2 a;; (u"u + T ••U + 'T••w) + ay (.,.vv + T ••W + ..... u) En el caso de un estado tensional plano U z = .rz = .y. = O Y de (84)
+ fz (.,.,1U + T••'. + "u.u) ] dx dy dz (6)
resulta;
í(Xu + Yu + Zw) d,; dy dz (J) La energía potencial elástica total V de un cuerpo deformado, se ob-
y el tmbajo total será la suma de (e) y (f) q~e diferenciando (e) queda así: tiene integrando la energía de deformación por unidad de volumen Va:
de manera que, según se ha expresado, la solicitación <1,,', G,/, G.' producirá única-
siendo mente una distorsión y la variación de volumen dependerá solamente • de la tracción
E1I
e = E" + fu + e., h = (1 + 11) (1 - 21')
1 En el libro de S. Timoshenko, Strengtlr 01 Materia/s, vol. 2, se estudian las diversa.
teorías de la resistencia.
o M. T. Huber, Caasopfsmu teehnizne, Lwóv, 1904. Véase también R. V. Mises, Gliuingell
De la expreslon (85), se deduce fácilmente que Va es siempre positivo. Nadlriehte/l, ,Math.-p/¡ys. Klasse, 1913, pág. 582, Y F. Sebleicper, Z. allgew. Math. Meeh .•
Como puede mostrarse fácilmente usando la ecuación (85), la deri- vol. 5, pág. 199, 1925. .
3 LRS componentes" tangenl.;ales d.e la tensión T:r;UlI t'vr., "tzt: producen defonnacioncs tan-
vada de Va respecto a cualquier componente de la deformación, es igual' gel,c,.l". p"ro no alt~ran el volumen.
12 -TtOnlA DI! LJ\ hW5TICIUt.O
ME'l'ODOS ELASTO-ENERGETICOS 179
178 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
Una distribución tal reaüza un trabajo durante su aplicación puesto que s~
unifonne p. De la ecuación (8), resulta que la parte de la energía total que corres- produce una··(¡eformación de la regiqn cargada. Fijemos en posición y orientación
ponde al cambio de volumen es: un elemento de superficie de esta región; sLp indica el orden de magnitud (por ejem-
ep _ 3(1 - 2_). 1 - 2_ plo, el valor ·medio) de In· fuerza por unidad de área y a es una dimensión lineal
2" - 2E p- = ~ (<T: +00. +<T,)2 (i) representativa (por ejemplo, el diámetro) de la zona cargada, las componentes de
la deformación son del orden de (PIE) y los desplazamientos de la parte cargada
Restundo esta expresión de la (84) y usando la identidad del orden de palE. El trabajo realizado es, entonces, del orden de pa' . palE = p'a"IE.
Puesto que de otra parte, componentes de la tensión de orden p implican una energía
<T:If" + "1fT, + <T,a". = -ílea. - 0",)' + (<T. - a,)' + (lfo - a.)'] + (a.' + <T,' + u,') potencial cuyo valor por unidad de volumen es del orden de p"/E, se deduce que
el traaajo realizado se extiende solamente a un volumen del orden de aS, lo que
podemos expresar In parte de energía total debida a la distorsión bajo la forma; concuerda con el enunciado del principio de Saint-Venanr.
En lo dicho se ha supuesto que el cuerpo era de fonoa rlgida quc obedecía a la ley
y 1 +_
D -
1 - 2"
-¡jE- (a". + 0"", + u,)' = BE [(... - .. ,)' + (a. - u.), de Hooke. Esta última restricción puede ser salvada haciendo que E represente
a In penwente de la curva tensión-defomlación del material. Si, por el contrario,
1
+ (". - ".)'J + 2G (T:,' + T." + Tv") (88) el cuerpo no es de forma rígida, como ocurre, por ejemplo, con una viga muy delgada
o con una fina membrana cilíndrica, la aplicación de una distribución equilibrada
de fuerzas puede dejarse sentir a distancias superiores a varias veces el espesor
En el caso, de una tracci~n simple de dirección x, tan sólo a. es distinta de cero
y la energla de defonnaclón que corresponde a la distorsión resulta entonces de o el diámetro.
. La discusión anterior puede ser repetida sin cambios para el caso de una carga
acuerdo conla fórmula (88) 1
3
1" .
(1.". En el caso de una solicitación de esfu:rzo de resultante no nula, siempre que exista un elemento de superficie fijo dentro de
o próxímo a In parte cargada. Por tanto, si un material deformable está pegado a
:',
cortante aplicada, por ejemplo, a los planos xz e yz, T . . es la única tensión diferente uno rígido, la presión aplicada a una pequeña parte del prímero, próxima al empalme,
de cero y la energía correspondiente a la distorsión es 2~ . i'"•. Admitiendo
producirá solamente tensiones. locales l. 1',
como cierto que para cualquier sistema de tensiones la rotura ocurre cuando la 48. Principio de los trabajos virtuales. El princlplO de los tra-
energía de defonnación correspondiente a la distorsión alcanza un cierto límite bajos virtuales se emplea, con ventaja, en la solución de diversos problemas
(car~:teristico d _cada material), la relación entre el valor crítico para el caso de una
7
tenslon de tracClon sola y para el de una tensión tangencial también sola se obtiene de elasticidad. Para e! caso de una partícula, dicho principio establece
,.
,.
median te la ecuaci ón que si un punto material, sometido a un conjunto de fuerzas, se encuentra
en equilibrio, el trabajo total de esas fuerzas es nulo en toda traslación vir-
¡:
1-
tual. Se considera como traslación virtual de una partícula que puede mo- l:.
¡.,
de donde result'l verse libremente en cualquier dirección, todo desplazamiento infinitesimal
. 1 de la misma. Si bu, tÍv, c5w son las componentes de una traslación virtual ¡.
T •• = -va'" = 0,55700: en las direcciones x, y, z, respectivamente, y LX, EY, LZ, las sumas de ¡
¡
l·
las proyecciones de las fuerzas en las mismas direcciones, e! principio ;
Para e! c~so d?l acero los experimentos muestran' que la relación entre los limites
de los trabajos virtuales permite escribir las siguientes ecuaciones: ¡.
de flUidez re~lstrados para tracción y esfuerzo cortante, concuerda muy bien con
la dada por (j). /lu'1:X·= 0, oV 2:Y = 0, /lw'1:Z =O 1:
1;
.?~ la consideración de la energía potencial elástica, Ke deduce que el principio
de Salll t-~ en~n.t es una ~on~ecu~ncia de la conservación de la energía u, De acuerdo ecuaciones que quedan satisfechas para cualquier traslación ·virtual si se !.
con tal pnnClplO, dos ·dlstrrbuClOnes de carga diferentes con igual resultante que ¡,
actú~n sobre una pequeña· parte de un sólido elástico, producen el mismo e~tado verifica: ¡1
tenslOn?l, ~alv~ en los punto~ próximos a los de aplicación de la carga. Si una de :EX = 0, '1:Y = 0, 1;Z = O ,,.j,
estas dlstnbucJOnes es cambIada de signo y combinada con la otra las tensiones
resulta.n.tes serán, pues, nulna salvo en los puntos citados. Las cargas combinadas Llegamos, así, a las conocidas ecuaciones de! equilibrio del punto-masa. l·
se equllibr:m ~ el p.,rincipio en cuestión es, de hecho, equivalente a la afinnación de Al aplicar el principio de los trabajos virtuales, las fuerzas que actúan f¡:
que una ·dlstnb~clon ~e .fuerzas de resultante nula, que actúe sobre una pequeña (;;
se consideran como constantc;s durante una traslación virtual y si alguna
parte de un sóhdo elastJco, produce solamente tensiones locales. j"
de las fuerzas, que obran en un punto dado, fuese una reacción elástica, !.
¡..
• 1 Vé .se IOBs tr,"bajos de W. Lodc, Z. Physik, vol. 36, pág. 913, 1926, Y Forschu1Igsarbeite1l
por ejemplo, la reacción de una barra en el caso de la articulación de una
numo 3o3, erhn, 1928. '
2 J. N. Goodier, Phi/o Mag., serie 7, vol. 24, plÍg. 235, 1937 J Applied P/¡"s vol 13
pág. 167, 1942. ' . ~.,.. 1 Gootlier, J. Applie4 Phys., loe. cit.
METODOS ELASTO-BNERGETICOS 181
180 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
viga de celosía, admitiremos que los desplazámientos virtuales son tan Como h¡¡ quedado establecido, la variación de la energía potencial
pequeños, como para que la variación de su intensidad o' dirección pueda de deformación es la medida del trabajo efectuado para vencer las ac-
ser despreciada. ciones mutuas que se ejercen entre' las partículas. Para obtener este tra-
Un cuerpo elástico, en reposo bajo la acción. de fuerza.s de superficie bajo se debe cambiar el signo de aquélla, así que la expresiQn del trabajo
y másicas, constituye un conjunto de partículas, cada una de las cuales efectuado durante la traslación virtual por las fuerzas que estamos con-
está sometida a un sistema de fuerzas en equilibrio. En toda traslación siderando será:
virtual, el trabajo total de las fuerzas, que actúan sobre una partícula, -JI OVo dx dy (b)
es nulo, y por lo tanto, también lo será el trabajo de la totalidad de las
fuerzas del sistema. En el caso de un cuerpo elástico, se entenderá por Al efectual' el cálculo del trabajo de las fuerzas exteriores durante una
traslación virtual, todo pequeño desplazamiento compatible con la con- traslación virtual, debe tomarse en cuenta las fuerzas aplicadas en el con-
dición de continuidad de la materia que lo constituye y con los vínculos tornó de la placa, así como las fuerzas másicas. Designemos por g e ji'
que pudiesen ser establecidos para los puntos de su superficie. Si, por ejem- a las componentes de las fuerzas que obran en el contorno de la pieza,
plo, se establece como condición la inmovilidad de una parte de la super- referidas a la unidad de área; para el trabajo de estas fuerzas, durante el
ficie del cuerpo, dígase la extremidad empotrada de una viga, o bien un desplazamiento virtual, cuyas 'componentes son óu y óv, puede, sin más,
desplazamiento muy pequeño, la traslación virtual para esa parte debe ser . escribirse la expresión:
igual a cero. Iex OU + Y ov) ds (e)
Vamos a examinar, como ejemplo d~ aplicación, el caso de una placa
sometida a un estado plano de .tensión. Denotaremos con u y v a las com- en la cual, la integración se extiende a todo el contorno, s, de la placa.
ponentes de los desplazamientos efectivos debidos a las cargas y con ¿¡u y De una manera análoga, se tendrá como trabajo de las fuerzas má-
t~V a las componentes de una traslación virtual que se efectúa a partir de sicas
la posición de equilibrio de la pieza bajo carga, las cuales son cantidades Jf(X OU + Y ov) dx dy (d)
infinitamente pequeñas arbitrarias que satisfacen a las condiciones de en donde X e Y son las componentes de la fuerza ponderal específica, y,
continuidad propias de una deformación elástica, es decir, funciones con- como en el caso anterior, la integración se extiende a toda el área de la
tinuas de x e y. placa.
Cualquiera que sea el sistema de traslaciones que se lleve a efecto, el La cotidición que expresa la nulidad del trabajo total, desarrollado
trabajo realizado para vencer las acciones mutuas entre las partículas durante la traslación virtual, resulta de las expresiones (b), Ce) y (d) y
es igual a la energía de deformación almacenada por el cuerpo, esto es, es la siguiente:
la energía potencial elástica que corresponde a aquellas traslaciones.
Por lo tanto, si en lugar de u y v tomamos óu y óv, el trabajo realizado J(X OU + Y liY) ds + .ff(X OU + Y 011) dxdy - JI llVodxdy = O (89)
para vencer los vínculos internos será igual a la energía de deformaci6n
consiguiente a u +
OU, v +.
¿¡v, menos la energía de la deformación que Como se ha dicho al aplicar el principio de los trablljos virtuales, las fuerzas
corresponde a u y a v. La influencia de los desplazamientos virtuales dadas y los componentes de las tensiones reales que corresponden a la posición
ou, Ov en las componentes de la deformación, se expresa por: . de equilibrio, se consideran como constantes durante la traslación virtual, así que
el signo Ii puede colocarse fuera de las integrales en la ecuación (89). Procediendo
os oU;' él Bv de tal forma y cambiando todos los signos, se tendrá la nueva expresión:
z
= él
ax oey =--,
ay Il[fJVo dz dy - ff(Xu + Yo) r1:& dy - f(Xv. + Yv) ds] = O (89')
y la respectiva modificación de la energía potencial de deformación por en la cual, el primer término entre corchetes es la energía potencial de defonnación.
unidad de volumen se desprende de la ecuación (85) La suma de 105 ténninos segundo y tercero representa la energía potencial que
.corresponde a IIlS fuerzas que actúan sobre el cuerpo, si para el estado en que no
avo avo avo .. existe tensión alguna (u = v = O) dicha energía potencial se toma igual a cero.
¡¡ V o = -,,-
ve:
oez + -,,-
"fU
OEU + -;-- 6-y"", = G"z DE. + G"u oe. + T~ O'Y~
a'Yru
(a)
Finahnente la expresión completa, dentro de corchetes, representa la energía po~
tenGÍal total del sistema.· .
La variación de energía potencial de deformación correspondiente a todo Por tanto, si se comparan diversos valores úe los desplul':arnientos u y '/J, puede
el cue,po se obtendrá mediante j'J¿¡Vodxdy, en la cual la integración se establecerse que las traslaciones que realmente tienen lugar en un sistema elástico,
debe extender al área total de la placa de espesor unidad. sujeto a la acción de fuerzas exteriores dadas, son aquellas que anulan la variación
182 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METODOS ELASTO-ENERGETICOS 183
de la energía potencial total del sistema, pan! cualquier despluzarniento virtual que y el incremento correlativo de la energía potencial de deformación será,
ocurra a partir de la posición de equilibrio, esto es, que la energía potencial total según queda dicho:
del sistema en la posición de equilibrio es un máximo o un mínimo. Para ver si se
trata de un máximo o de un mínimo, es necesario tener en cuenta los infinitésimos
de orden superior que habí:m sido despreciados en el desarrollo ailterior l. Si de
-s
2
l!(i-l/)2
-
o d."C
dx (e)
esa manera puede demostrarse que para toda' traslación virtual la variación de la
energía potencial total del sistema es positiva, se tratará de un caso de mínimo Si añadimos a la expresión (e) la energía debida a la tensión inicial, se,
y si ella fuera siempre negativa, se estaría en el caso de un máximo. Toda traslnció~ ", obtendrá la energía potencial totaL En este caso el principio de los tra-
virtual del sistema que lo aparte del equilibrio estable exige un trabajo positivo bajos virtuales conduce a la ecuación siguiente, que corresponde a la (89):
de mnIleru que, en este caso, la energía potenCIal tOtlll del sistema en equilibri~
es un mÍ1limo.
En el caso de un estado elástico tridimension.ll. SI! puede llegar fácil-
l S!al (dy)2
!ao CJ.oydx--2 o 0-'"dx dx=O (f)
mente a una ecuación análoga a la (89). '
El principio de los trábajos virtuales es particularmente útil para la subintegral que figura en el segundo término se tendrá:
determinar la deformación que en un cuerpo elástico origina un sistema
de fuerzas determinado.' Unos cuantos ejemplos, cuya solución es ya
muy conocida, ilustran la aplicación del método de q~e se trata.
y la integración por partes, nos da, teniendo.en cuenta que' en las extre-
,midades del hilo óy = O:
t Véase S. T,moshen]co, B/lll. 11ls!. Pabl., Klew, 1909, y también su hbro StTC7!gilt oJ
J L3!l dc~prccl.mlU~ ..11 ~uponcr que en to<1(j Ilcsplm'Almlcnto vlrtunl permanedan conS- 2." edlclón"vo!. 2, pág. 44, 1941.
tan tel) los fuerzns) las tensIOnes.
184 TEORIA DE LA ELASTICIDAD 185
METODOS ELASTO-ENERGE'l'lCOS
de la curva de deflexión de una barra en ¡as condiciones indicadas puede : Sustituyendo en la serie (h) el valor hallado, llegamos a la ecuación de la
representarse en forma de serie trigonométrica, como sigue " curva de de flexión
7rX
y = alsenT -z- + a3 sen-1- + . . .
+ azsen' 211":1: 3'lTX
eh)
(o)
expresión, que llevada a la conocida fórmula que da la energía potencial
de deformación de una barra prismática flectada l , nos conduce a
..
Elr
V = 2" Jo
(d'y)2 Eh' ~
,dx = 413 L¡ n'a,,2
dX2 (k)
: Esta serie converge rápidamente, así que para obtener una aproximación
: ~atisfactoria basta calcular unos pocos términos. Si, por ejemplo, la carga
,,-1 actúa en la mitad de la lu:z (e = 1/2), la flecha que ella originll será:
(1)
, En el estudio, precedente, consideramos despla:za-
en una sola dirección que representamos por
serie (h). Un método semejante puede aplicarse a
Ó 0p-a
;JO
, La correspondiente variación de la energía potencial de deformación, más complicados, Consideremos una placa rec-
resultará entonces, con arreglo a la ecuación (k): "tangular de bordes fijos (fig. 113), sobre la que actúan
av /jan -_ w-
EJ.¡r' 4
fuerzas másicas paralelas a su propio plano. La expre-
8a. n a... oan (m) sión general de los despla:zamientos u y v puede tomar FIC. 113
. Ja forma de las series
y el trabajo de la fuer:za exterior P durante el desplazamiento virtual (l)
será,
n7l"c' ~ ~
/..¡ A,." sen a sen b
m1rX n'trY
P oansen -1- (11.) u = Lt
(p)
~ ~
l.¡ L.¡ Bnm sen a sen b
m1rX Tl1ry
De acuerdo con las expresiones (m) y (11), la ecuRción del' trabajo virtual v =
resulta entonces:
EJ1I"~ 4 11.7l"G en las que cada término se anula en el borde, quedando así satisfechas
""2l3 11. an lia n - P oan sen -1- = O
las condiciones de contorno. Pam calcular los coeficientes A ,..n y B mn
y de ahí: procedemos como en el ejemplo de la viga y tomamos los desplazamientos
2Pl3sen~ virtuales en la forma:
1 m7fX n7fy
a" = -'E""Irll'~4;-n-'4- oU = oAmnsen-asenT
, Véase: S. Timoshenko, Strellght of Materials, 2.~ edición, vol. 1, pág. 297, 1940. "~.
6v = liB mn sen a
m1rZ n'trY
sen b
186 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METO DOS ELASTO~ENERGETICOS 187
quedando entonces la ecuación (89) de los de'splazamient()s virtuales así: , emos que para cualquier tipo de fuerzas másicas se pueden calcular
ou av n'1l" m'1l"x' n-rry podemos escribir tantas ecuaciones de equilibrio, semejantes a las ecua-
"/",,,=-+-=
éiy ax - bA m.. sen--cos~
r Lm;
a b : ciones (q) del ejemplo anterior, como coeficientes existen en la serie (s).
+ BOl .. cos m;:c sen n~ · Estas ecuaciones serán lineales respecto a al, ... , a,," b" '" , bm Y resueltas
'.nos darán lbs valores de los coeficientes dé las series (s), series que repre~
, sen tan la solución aproximada del problema' .
y realizando las integraciones, resulta: · Al usar el principio de los trabajos virtuales (89), se supone que la
'energía de deformación por unidad de volumen V o viene expresada en
función de las componentes de la deformación [ecuación (1')], las cuales
· se obtienen a partir de las expresiones (s). El cálculo de la variación de
la energía potencial elástica puede simplificarse si observamos que
ciones (q) obtenemos: = J1[iT'" a~ 01¿ + rF aay ov + lI T"" (aOy oU + ::c IlV)] dx dy
Eab7l"2 (m2
Amn -4- a~( 1 _ VI) +
n2 )
2b2(l + JI) =
f.aJ.b m7rX n7ry
o o X sen a senT d..x dy Integrando por partes y observando que ou y ilv se anulan en el contorno
Eab¡r2 (m2 71
2
J."ojo(b y sen mn mry
resulta
J1.
[(arFZ: éh%u) au + (au y ay + a7"")
)
B""-4- 2a2(1 + v) + b2(1 _ IiV = -
ax + ay ax ou]
v2) = -asen-b- dx dy d:rdy
,
. 1 Derivar una serie de Fourier térmmo 3 ténnlno no es Slenlpr~ correcto. Las cóm..liclones . I Este método de resolución de problemas de elasticidad fue propuesto por W. Rnz,
sufiCIentes para que 10 sea, que son cumplidas por el problema presente, pueden verse en qUien lo aplicó con éXIto en el estuulo de la fleXión de placas rectangulares. Véase J. reine 11
Modem Analysis, de E. T. Whlttnkcr y G. N. Watson, png. 1&9. a1/Cew. Math., vol. US, págs. 1-61. Véase tambIén Cesa",,,,elte Werke, pág. 192, París, 1911.
188 TEORIA DI! LA ELASTICIDAD MBTODOS BLASTO-l!NERGETICOS 189
Tomando para los desplazamientos virtuales las expresiones (t) obte- ..
T,!u = 2(1
E
+ JI)
(au
ay
av)
+ ax
.
= 2(1
E
+ JI)
('L..¡
V 'V. n?r m?rx mry
Lt Amo. b sena: cos -b-
nemos las ecuaciones necesarias para calcular los coeficientes al'" a m ,
bl •••. hm de la forma siguiente:
+ 2: L B.on -
m7r. 7n1rX n1r'1J
cos --sen -b-- + ey·a- cos ?rX)
'1/'
-
oa m
JI X <!>m(x,y) 11.1: iv = - oa", iJ:¡; <Pm(X,y) dx dy ,,,r',nllvpn' dalas en las ecuaciones (90) y suponiendo
o bien
u = O, v = ebsen~
. a
maslcas son cero, todos los coeficientes A 77In se anulan
Las condiciones de contorno quedarán satisfechas tomando: coeficientes Bmn son distintos .de cero solamente cuando
~~ A m'lrx n1rY
u = L..¡ L..¡ nm sen a sen -b-
v= 'lrX
ey sen-a
+. . ¿¿ B m" sen m'lTX
--sen-
a
n'lTy
b
(u)
0'", = --E- -
1 - Jl2 ax
(au +.' ayav) = 1---E - (L¿ A..,,-cos--sen--
1'-
m1T
a
m'lrx
a
n1rJ/
ClJllte.rrnlln:un.uo B 1m a partir de esta ecuación y sustituyéndolo en las fórmu-
(u) obtenemos los desplazamientos producidos por los que supusimos
. ¿¿
+ JI
1'2
B mn n7l"
- .•
Ú
b
m1rX
sen - nmJ
a- cos. -b- + ve sen 'lrX)
-a
daban en el con torno.
En su teoría de la rotura de los materiales frágiles A. A. Griffith aplicó
conceptos generales relativos a la energía total de un sistema1 • Como
O'~ = 1 _
E
1'2
(av
ay + v au)
ax = 1-
('L..¡Lt
V \' B""l)sen.7cosT
E
1'2
n1fy n7l" m7rZ
sabe, los materiales tienen una resistencia muy inferior a la que cabría
de la magnitud de las fuerzas moleculares. Para un detenllinado
+ eseno: + v 'LtLt
V \' AmI> m?r n7rY) por ejemplo, Griffith encontró teóricamente que la resistencia a la
1/'X
a cos m1fX
--a se11 -b-
1 A. A. Griffith, 1'Tallr. Roy. Soco (Londo,,), _ene A, vol. 221, p~g. 163,1921. Véase también
trabajo del mismo autor en Proc. Intern. Congr. Appl. Mech.,· Delft, 1924. La bibliografia
, Los ecuacIones de este tipO de los de.plazanllentos virtuales son llamados tl veces ecua· este tema puede encontrarse en Ha71dhuch der physikalische1l und technischen il-lecltanik,
Clones de Galerkm. Sin embargo, ambos tipOS de ecuaCIones, las (q) y las (90), fuel'On ya 4, parte 2, 1931, ~.rticulo de Adolf Smekal.
,nd,cados por Rltz en el trabajo citado anterIormente. V¿ase Oesam.lell. Werke, pág. 228,
190 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METODOS ELASTO-ENERGETICOS 191
tracción que cabría esperar sena del orden de' 1,125 X lOó kg/cm", mien- :~rrollo espontáneo se dará cuando las dos cantidades de energía se igualen,
tras que los ensayos realizados con barras de ese material dieron solamente ,' empleando (v) queda:
0,018 X 10 5 kg/cm 2 • Corno el autor citado demostró, la discrepancia
entre teoría y experimentos puede ser explicada si suponernos que en dV dE = 'lC'l8,r2 dl' = 2 dl T
materiales tales como el vidrio, existen fisuras y defectos microscópicos dI 2E
que producen elevadas concentraciones de tensioiles y provocan consi-
guientemente el desarrollo de la grieta. Griffith, con el fin de facilitar _ /4ET (w)
S " - '\j 'll'l
los ~álculos, supuso que esas microfisuras tenían la fauna de una elipse
muy estrecha cuyo eje mayor era normal a la tracción.
resultados de los ensayos realizados con probetas en las que, por
" medio de una punta de diamante, se realizaban fisuras de longitud 'cono-
"Cida, concuerdan muy bien con los valores obtenidos aplicando la fórmula
También se ha demostrado experimentalmente que si se adoptan
tendentes a -evitar fisuras microscópicas, pueden obtenerse
resisterlci:as mucho mayores que las corrientes.
Algunas varíllas de vidrio ensayadas por Griffith dieron resistencias
tracción del orden de 0,63 X 10" kg/cm2 , 10 que supera a la mitad de
FIG.114 'i~ cifra teórica antes citada.
Consideremos una placa ahcd fija en sus lados ah y cd y sometida a 49. Teorema de Castigliano. En el párrafo anterior se ha compa-
una tensión de tracción uniformemente distribuida de valor S y apli- la configuración de un cuerpo elástico en estado de equilibrio bajo
cada en esos mismos bordes (fig. 114). Si hacemos un orificio elíptico ,U't:Lt:l";¡U"'<.la" fuerzas másicas y condiciones de contorno, con las confor-
microscópico AB, de longitud 1, y se mantienen ab y cd fijos, la energía : maciones contiguas a aquéllas, que el mismo adquiere al ser apartado de la
inicial de deformación debida a la tensión S se reducirá. Esta reducción l , pOSICIón de equilibrio mediante las traslaciones virtuales c~u, du. Quedó allí
2
que podemos calcular haciendo uso de la solución para un orificio elíptico , ~1'''L>l'''C1UIU ,que las verdáderas traslaciones que corresponden a la p'osición
es para una placa de espesor unidad igual a de equilibrio estable son aquellas que hacen mínima la energía potencial
2 ,total del sistema.
'11'/ 28 ( )
, Consideremos ahora, en lugar de los desplazamientos, las tensiones
V = 4E v
',que corresponden a In posición de equilibrio, y tomemos también como
fórmula que llOS indica además que al extenderse la fisura (l se hace ,,~jemplo, el caso de un estado elástico plano. Como sabemos, las ecuacio-
mayor) aumenta la reducción de la energía elástica' almacenada en la 'nes diferenciales de equilibrio (18), junto con las condiciones de borde
placa. Al mismo tiempo, sin embargo, la extensión ~~ la grieta s~l?one ,'(20), no bastan para determinar las compo!,:\cntes de la tensión, u"', CJ., ."y.
un aumento de energía superficial, ya que las superflclcs dc los sohdos, También hemos visto que adoptando diversas expresiones para la función
al igual que la de los üquidos, poseen una tensión superfici¡ll. Griffit~ "de tensión, ,¡" que figur,a en las ecuaciones (29), podemos encontrar una
encontró, por ejemplo, que para la clase de vidrio ~ue usó en sus. ~xpen variedad de distribuciones de esfuerzos que satisfagan a las ecuaciones
mentos, la energía superficial, T, referida a la umdad de superfICIe, era ,de equilibrio y a las condiciones de borde. Se plantea entonces la cues-
del orden de 2,2 X 10- 4 kg/cm2 • tión: ¿cómo distinguir entre todas las distribuciones de tensiones estática-
Si pensamos ahora, que la extensión de la fisura requiere un consumo mente posibles,-la verdadera?'
de energía superficial inferior a la reducción correspond}ente de la energía , Sean u"', Uy, ''''V' las verdaderas componentes de la tensión corres-
de deformación, el desarrollo de la grieta no exige ningún aumento de pondientes a la posición de equilibrio y da", aal/' ch",y, incrementos infini-
la energía total y se producirá espontáneamente. La condición pura ese des- ',tamente pequeños de l~s mismas, de manera que las nuevas componentes
de la tensión, es decir, 11", + oa-,:, ay + CJay , ''''11 + C$-e",,, satisfagan las
t N. del 1'. Consideramos la reducción de energía correspondiente a un aumento unidad ,mismas ecuaciones de equilibrio (18). Restando entonces las ecuaciones
de la Idngltud de la fisura.
• Véase el § 63.
de uno de los siste~as de las del otro, haIlaremos que la variación 'de las
192 mORlA UIl LA ELt\STICIDAD METonos ELASTO-JlNIlRGETICOS 193
componentes del esfuerzo habrán de satisfacer a las siguientes ecuaciones
de equilibrio: lu (~lTzl representa la diferencia de los valores que
. la función u (jq." en dos puntos opuestos del contorno tales como
a OCT. + ()
OT"" = o
y B en la figura 115_ Tenemos entonces:
ax. ay (a)
a OCTy + ()
o.,."", = o dylu .10-,,1 = dy(u oUx).i - dy(u OIT,,)a = ds(u 61T", COS Nx)J.
ay éJx +ds(u OU", cos N:C)B (f)
A esta vanaclon de las componentes de la fatiga corresponderá cierta r---------------------.x
variación en las fuerzas de superficie. Sean (jl( y (j y las variaciones infi-
.nitamente pequeñas de dichas fuerzas; las condiciones de contorno (20)
nos darán entonces:
aCT" l + o.,."" m = liX (b)
oO'u Tn + OT.Ul = óY
Para establecer en cuanto varía la energía potencial del cuerpo, a causa
de las antedichas modificaCiones de las componentes de la tensión, expre-
FIG.115
semos la energía de deformación por unidad de volumen en función de
las componentes de la tensión (86), y la variación de la energía a que nos cos Nx = 1 es el coseno del ángulo que forma la normal exterior
referimos será, entonces,. con el eje de las x, y ds, un elemento de contorno. De la ecuación (f)
integrando, y teniendo en cuenta la observación anterior:
(e)
Por sustitución de (g) y (h) en la ecuación (d) obtenemos la expresIón: Deberá tenerse en cuenta que las reacciones de los apoyos, qj.le pueden
IlV = ! [u(oO'~ + +
Z 07"" 1n) V(OO'II m + 07;ry l)] ds
. ser determinadas con arreglo a las ecuacio~es de equilibrio de un cuerpo
están expresadas en función de las cargas dadas PI> P• .. , y nq
en 111 expresión de la energía potencial elástica. Si existen víncu-
-f f [16 (8a;= + 8 :;",,) + v ea~" + a;;",,)] dzdy superfluos, las respectivas reacciones deberán ser consideradas como
estáticamente independientes, c~njuntamente con las fuerzas
en la cual la primera integración se efectúa a lo largo del contorno y la , Pz , etc.
segunda se extiende a toda el área de la placa. Utilizando las ecuaciones Partiendo de una expresión de la energía potencial de deformación
(a) y (h), obtendremos, finalmente, la siguiente expresión para el in cre- función de las fuerzas exteriores, se tendrá como incremento de la
. mento de la energía potencial cÍebido a la variación de las componentes isma, consiguiente al que experimenta cada una de las fuerzas:
de la tensión: av av
IlV = éJPl 5P1 + aPz IiP +2
óV = f(u óX + v IiY) ds (91)
la (92) nos da
El segundo miembro de esta ecuación representa el trabajo producido
por la variación de las fuerzas exteriores a lo largo de los recorridos efec- aV _ dI) [¡PI
( aP + (av
aP
- d2) [¡P 2 • =0 (i)
I 2
tivos. Las verdaderas tensiones son las que satisfacen esta ecuación. Una
ecuación análoga puede obtenerse para el caso tridimensional añadiendo bien, como se ha dicho antes, las fuerzas, P It P 2 ... son estática-
un tercer término wóZ al paréntesis de la ecuación (91) y extendiendo la independientes, de manera que sus modificaciones, OPIJ oP2 ...
integración a la superficie contorno en lugar de a la curva de contorno. !ion completamente arbitrarias; así, pues, podemos igualar a cero todas
Si en lugar de una distribución continua de fuerzas superficiales, ¡:ncnos una y entonces la ecuación (z) exigirá que se verifique;
tuvieramos cargas concentradas, la integral de la ecuación (91) debería ser 8V aV
remplazada por una sumatoria. Si Pl' P 9 ... son cargas concentradas inde- aP = dI, éJPz = d2 • • • (93)
l
pendientes y dh d2 ... , los desplazamientos reales de los puntos de aplica-
ción de dichas cargas, en la dirección de sus rectl1S de l1cción, la ecuación 'Queda así comprobado que si la energía potencial de deformación de un
mencionada se transforma en · sIstema elástico, V, está expresada en función de fuenms exteriores está-
· ticamente independientes, PI, P 2 , P3 ... el desplazamiento real del punto
(92) · de aplicación de una fuerza en su propia dirección es igual a la derivada
En lo que antecede hemos estudiado el caso de las variaciones más gene- pitrcial de dicha función con respecto a la misma fuerza. Tal es el célebre
rales de las componentes de la tensión que satisfagan a las ecuaciones de tédrema de Castigliano.
equilibrio Ca). Examinemos ahora un caso especial: aquel en que los
. 50. Principio del mlrumo trabajo. En el § 49 hemos llegado' a
incrementos de las componentes de la tensión sean de tal naturaleza,
la ecuación (91), partiendo de cualesquiera variaciones de las componentes
... que ellos pueden ser realmente producidos en un cuerpo elástico. por
de la tensión, susceptibles de satisfacer las ecuaciones de equilibrio. Ad-
medio. de adecuadas variaciones de las fuerzas exteriores. Supondremos
mitamos ahora váriaciones tales que las fuerzas superficiales no se modifi-
que las componentes"de la tensión se expresan en función de las cargas
quen; entonces, habrá que remplazar las ecuaciones de contorno, (b), de
exteriores P¡, P2 oo. Y consideraremos aquellas modificaciones de las com-
dicho párrafo, por estas otras:
ponentes de la tensión consecuentes de las que experimentan dichas fuer-
zas, a saber, liP1 , óP2 '" Limitándonos a los casos en que las componentes óO'~l + orxvm = O
del esfuerzo son funciones lineales de las fuerzas e¡¡;teriores PI, P2 Y .oo OO'II11~ + /irzul = O
sustituyendo estas funciones en la ecuación (84), obte~émos la expresión
Y la ecuación (91) se transforma en:
de la energía de deformación como una función homogénea cuadrática
de dichas fuerzas l . av = O (94)
fu""""
I Excluimos los casos como el de la f1""ión de barras delgadas por la acción d" un coso como ése, las tensiones originados por la solicita~ión axil dependen de la flexión la-
laterales que obren SImultáneamente con una tracción o compresión axiles. por ejemplo. En teral y no son funciolles lineales de las fuerzas exteriores.
196 nORIA DE LA BLASTIC1DAD
METODOS BLASTO-ENERGETICOS 197
Lo que se traduce expresando, que cuando las componentes de In tensión
originada en' un cuerpo cargado en su contorno varian sin que se alteren Para x = ± a,
las ecuaciones de 'equilibrio ni las condiciones de borde, las verdaderas
componentes de la tensión son aquellas que hacen nula la variación de la T"II = O,
energía potencial elástica. Se puede demostrar que tales valores correctos
de las componentes de la tensión hacen mínima la energía potencial elás- Paray=±b,
tica, por lo que la ecuación (94) es la expresión del llamado principio T=u = 0, cry = O (a)
del m{t/t·mo trabajo.
Dicha ecuación es también válida si a lb largo de una part~ del con- energía de defonnación correspondiente a una placa cuyo espesor se
torno, rígidamente enlazada por medio de sustentaciones fijas, las fuerzas igual a uno es, con arreglo a la ecuación (86)
exteriores superficiales varían a consecuencia de modificaciones en las
.componentes de la tensión. En efecto, bajo tales hipótesis, esa porción
del contorno no admite desplazamientos, lo que se traduce en la anulación
V = 2~ fJ[U",2 + cr,? - 2vcr"crv + 2(1 + 2
V)T=u ] dx dy (b)
del segundo miembro de la ecuación (91), de manera que se obtiene, destacarse que en el caso de un recinto simplemente conexo como ;,
"
el principio de mínima energía. La expresión exacta de la función de tensión será aquella que satisfaga las
Supongamos que sobre las extremidades de la placa rectangular se condiciones (a) y haga que la energía de deformación (e) sea mínima.
ejerce una tracción de manera que las fuerzas allí aplicadas obedezcan Si para la determinación del mínimo de (c) aplicamos el cálculo de
a una repartición parabólica (fig. 116)B. En este caso, las condiciones •variaciones, llegaremos a la ecuación (30) para la función de tensión '¡';
de límite son: ·pero aquí emplearemos. otro procedimiento, que nos permitirá obtener
I vii."", por ejemplo, Strtmgth al Materials del autor, 2.' ed., vol. 1, 1940 o Timoshenko
· solución, aproximada. Como función de tensión, adoptaremos una
y Young, Theory of Slruclures.
• Véase el trabajo del autor, Phi/o Mag., vol. 47, pág.' 1095, 1924.
(d)
198 'maRIA Dll LA llLAS1'JClDAD METonos ELAS'l'O-BNllIlGETICOS 199
que satisfaga a las condiciones de contorno (a) y 'en la cual al, az, aa, ... son . Para utla placa cuadrada (a = b), resultará:
constantes que habrá que determinar posteriormente. Llevando esta serie
a la expresión (e) obtendremos V como una función de segundo grado
en a" U2, as '" El valor de las constantes podrá calcularse entonces con
arreglo a las siguientes condiciones de mínimo, que scrán ecuaciones y las componentes de la tensión valdrán:
lineales en a"
02' as
oV = O (e)
y2,\
,,-.=8 ( l-(i2j-O,1702S 1- (3:.z)2\ (1-az~/)S
ocxa '
Por lo general, una adecuada elección de [as funciones ,pi> permi- "'2'" "-u = 3.1:2)
-0,17028 ( 1 - .-- ( 1 - --
y2)Z
2 2 a a
tirá obtener una solución satisfactoriamente aproximada, empleando tan 2) (
sólo unos pocos términos de la serie (tI). En lluestro caso, las condiciones "z¡¡
. = -0,68058-
xy ( 1 - -x y2)
1 --
de límite (a) quedan satisfechas haciendo:
2 2
a a 2 a
la figura 1"17, la curva II representa la distribución de {1", en la secci6n
transversal x = 01 •
. Calculemo~ ahora con tres términos de la serie (f) para lograr una .1
ya que, operando, obtenemos: aproximación mayor. Las ecuaciones (e) que sirven para el cálculo de las
constantes a"/l2, /la serán entonces:
1)2"'0
"=11= - ox
- -
ay =0 ,
02 04 06 08 10 d. I
1/ x/S
Las restantes funciones 1>1, "'a, ... deben ser elegidas de manenl que 111
0,2"
las correspondientes tensiones desaparezcan en el contorno. Nos asegu-
raremos de eIJo afectando a todas esas ·funciones, del factor (x 2 - 0 2 ) . 0,4b
,
I
1/
a, (64 + 256 ~ + 64 ~) 8
7 49 a 7 a
2 4 = a 4b2
1 La curva 1 repr""ehta la distflbución parabólica de tensIOnes en Jos extremos de la placa,
200 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METODOS llLASTO-ENERGIlTICOS 201
) ,FEf
S
al = 0,04040 a'
a
La repartición de la componente (J", del esfuerzo en la sección trans-
versal x = O está dada por la ley I---a -. a--l :Y
y
- 3112)
- (a) (h)
. a2 FlG. 118
+ 0,0235 (1 - 1Z~ + 15 ~;) Como antes, el primer tém1ino satisface, para r/>, las condiciones de límite.
Si aplicamos la ecuación (h) con cuatro coeficientes al, '.' , ah en las ecua-
y viene representada gráficamente en la figura 117 por la curva 1III. ciones (e), encontramos para una placa cuadrada (a = b):
La repartición de esfuerzos en la sección transversal x = O se va
haciendo más uniforme a medida que aumenta la longitud de la placa. q.
u2
= - cjJ {I
= 2Aa3 - 1)3 - (1 - ~~) 2[0,08392(5,.,3 - 3,.,)
uy2 . 2
Para a = 2b, por ejemplo, se deduce de las ecuaciones (g) los siguientes
valores: +
0,004108(21713 - 201)~ 3,.,)] +
S S S - ~2(l - ~2)2[O,07308(51/3 - 3,.,) + 0,04179(211)5 - 201/3 + 31/)1} (k)
"'1 = 0,07983 a4b1 ' a1 = 0,1250 a6b~' "'3 = 0,01826 a 6b2
'ex:presión .en la cual ~ = x/a y 7J = y/b. La distribución de tensiones en
.Para la mencionada sección transversal, se consigna a continuación algunos la sección transversal media, para la cual x = 0, está representada por la
valores de a",: curva a de la figura 118b, y como se ve, es sensiblemente lineal.
1l=0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0
b
a: = 0,6908 0,6848 0,6698 0,6538 0,6498 0,6758 52. Anchura eficaz de alas de las vigas en T. Vamos a desarrollar otro
ejemplo .de aplicación del principio de mínima energí", ,l problemas de elasticidad
En la figura 117 se indica con línea de trazos esta repartición de es- bidimensional, relativos a piezas de sección rectangular: el de las vigas de alas muy
anchas (vigas en T) (fjg. 119), muy usadas en estructUl'llS de hormigón 'annado
fuerzos que, como vemos, se aparta muy poco de la tensión media, t s. y en cascos de buques. Confonne a la teoría elemental, en la flexión de una viga
Para tratar otras reparticiones simétricas de esfuer7.os en los bordes los esfuerzos nonnnles en los diversas capas de fibras varlan proporcionalmente a
x = ± a sólo tendr~mos que adoptar otra función rpo en la expresión (j) sus distancias a la línea neutra, esto es, las tensiones conservan su valor en todo el
y únicamente se deberá modificar los segundos miembros de las ecua- ancho del ala. Si éste es muy grande, las partes distantes del alma o nervio parti-
cipan en menor grado en su resistencia 31 momento flector y la viga es menos resis-
ciones (g). tente que lo que la teoría elemental indica. Para el, cálculo de las tensiones en vigas
Como ejemplo de distribución asimétrica con relación al eje x, consi- de ese tipo, se suele remplazar la anchura real de ala por otra menor, de manera
deremos el caso de una pieza flectada (fig. 118)2, en la cual la repartición que al aplicar la teoría elemental de la flexión a la nueva sección resultante, se ob-
de esfuerzos en las secciones extremas siguen la ley"(i:Tx)x = ~'J: a = A y 3 tenga el valor correcto de la móxima tensión. El ancho del ala así reducido, llamado
ancho eficaz, se detennina teóricamente como se indica a contínuación '.
1 El profesor C. E. Inglis obtuvo result.dos análogos, Pruc. Roy. Soco (Lundo,,), serie A,
vol. 103, 1923 y también G. Pickett, J. Applied Meo'hanics (TTfl1/S. A.S.M.E.), vol. 11, pág. 176, , Este tema ha sido desarrollado por Th. v. Kánnán; véase Festschrift AugttSt Flippls,
1944. pág. J 14, 1923, Y también G. ScbnRdcl, Werft umI Reederei, vol. 9, pág. 92, 1928; E. Reíssner,
• F'.StQS cálculos han sido tomados dc la tesis doctoral de 1. N. Goodier, Universidad Der· Stahlbatl, 1934, pág. 206; E. Chwalla, Der Stahlhau, 1936; L. Descbkine, PubIs. 1mem.
de Michigan, 1931. Véase también TTfl1IS. Am. Soco Mee/l. Eng., vol. 54, pág. 173, 1931. Assoc. Bridge ami SlrucluTál Ellg;neerillg, vol. 5, pág. 65, 1938.
202 'rEORIA DE LA ELAS'l'ICIDAD METonos ELASTO-ENIlRGETICOS 203
Para simplificar en lo posible:> el problema, suponaremos que se trata de una verda?,era distribuci?n de tensi?ncs es aquella que hace mínima la energía de
viga continua sobre un número infinito de, apoyos equidistantes y que todos los derormaclOn correspondIente al conjunto del ala y del alma y esa condición permite
tramos están sujetos a cargas distribuidas simétricamente con resp'eeto a la vertical , determinar los coeficientes An y lin. Remplazando
de su punto medio. Se adopta como origen de coordenadas uno de los apoyos del
tramo representado en la figura 119, y el eje de la viga como eje x. Por razones
de simetría, solamente será necesario considerar la mitad dc la losa de uno de los
tramos; por <:jemplo, la que corresponde al semieje positivo de las y. El ancho del siguiente expresión de la energí!1 de deformación
¡-;l.-¡ ¡-..:t-¡
V 1 == 2· 2~ !o . 10 21
[IT.' + <f.' - 2V<f.a'u + 2(1 + v)r•• ') rk dy
J
aIma, llamemos A nI área de la sección transversal, I a su mome,ito de inercia con
I
I .. respecto al eje horizontal que pasa por el baricentro e, y e a la distancia de éste al
I I plano medio del ala (fig. 119). Teniendo en cuenta la simetría que en este caso
I I fóJ existe, el momento flector total transmitido a una sección transversal cualquiera
I I ¡:lar el conjunto del alma y el ala, puede ser representado por la serie
I I
I I
- I '1
,,= il1,+M1cos-y+M.cosT+
'll'X 2,..:>; '" (f)
F,o.119 , ,~ la cual hay una indeterminación estática representada por M., cantidad que de-
pende de la magnitud del momento flector en los apoyos; los otros coeficientes Mí,
ala o . ~osa se supone infinitamente grande y su espesor, h, muy pequeño en com- M., ... , deben ser calculados con arreglo n las condiciones de carga. El momento
para~lon con la altura del nervio. La flexión del ala como placa delgada puede des-
, flec:0l' M se puede descon;poner en un momento M', que absorberá el ala, y otro M",
p~eclBrse, y se admite asimismo que durante la flexión de la viga, las fuerzas se trans-
debido a la~ fuer,IBs longitudinales N aplicadas al alma y al ala (fig. 119c) y que
rruten a la losa en su plano medio, de manera que la determinación de la distribución
vale Ne. Las tensiones normales que se presentan en toda sección transversal de
de esfuerzos en esta última es un problema de eluf<ticidatl bidimensional. La corres-
la viga completa forman como se sabe, un par de fuerzas !vI, de manera que
pondiente función de tensión, que ha de satisfacer la ecuación diferencial
a'</>
a:¡:'
éJI</>
+ 2 a:¡:' ay' + ay'
al</>
= o (a) N + 2h lo . IT: dy = O
(g)
puede adoptar la forma de
caso~
111 siguiente serie, 11 causa de la simetría supucSta en estt! lrl' - 2718 lo" <1: dy = M
l'
n- ..
'" = ¿;
11.=1
1.(y) eos n;z (b) - 21le
11
r1:dy = lv1" es la parte del momento flector que absorbe el ala.
La energía de deformación del alma es
en la cual Ju(y) simboliza funciones de y únicamente. Remplazando en la ecuación (a)
obtenemos para f"iy), la siguiente expresión:
V. =
r
Jo
21 N' d:>;
ME + Jo
r 21 1>[,' dx
2EI
(h)
1.(y) = A.e -~
1 +Bn,(1 +1~"1J)
/ ~ -~ 1 +D. (11.",)
¡ +ene ~ 1 +---f e~
¡ ... (e)
De la primem de las ecuacione..'1 (g) resulta:
La condiCIón de que las tensIones deslIparczcml cuando y 'to';'~"un valor 'infinito
quedará satisfecha haciendo en = D" = n, con lo que In exprcsión de la función
de tensión resulta N = -2/1
!co .. ". dy = -2h 1'" a'ay;,
o
</> 8
- , dy = 2h 1- </>1°
ay ..
.p = I
n-I
[Ana - n¡y + En (1 + ~?) a - nt] eos IL1T¡ x (d) 1 En el trabajo de Th. v. Kármáp, loe. cit. se encuentra el' cálculo de los integrales quc
mtervienen en la expresión de la energía de deformación.
204 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METODOS ELASTO-ENERGETICOS 205
!o
O
cos'-dz=l
1 ' Jo COS -z- COS -¡- d.1; = O (cuando m", n) senoigal, por ejemplo, M = M, cos (:rxll). En In eClUlci6n (n) Re tendría entonces
X, _ 1I[, ____. -__~~~~--~
llegamos a la expresión
-:c 1 + J....
Ae
+ E... . 3 + 2. -
he'l l
v·
4
1 ~ • Mo'l ~ ¡
V. = 2AE L., X,. + TI + 2EI L.¡ (M. + eX~)S De la ecuación (k) deducimos la expresión del momento debido a la fuerza N en
el ala, esto es, - eN:
n-l n-l
".$ M
Sumando esta última con VI> es decir, la energía de deformación del ala [fórmula (e)] Mil = - eN = -eX, C05 7 = 1 .,.I 3 + 2v v' (p)
e introduciendo en esta última las notaciones . . 1 +:Aei + íiB2i 4
1• .,.
2"7 A. = X .. , La fórmula (á) nos permite ahora establecer la distribución de esfuerzos tJ. a lo
ancho del ala, igualando a cero todos los coeficientes A" y B., con excepción de A,
encontramos para la energía total de deformución, la siguiente expresión: y Bl. haciendo (de acuerdo con las notaciones que hemos adoptado):
M ,=;;
I ((f. - (f,) = eI( 1 + T2),,11) ...
Mil = 2),hecr,
La relación de M" al momento flector es:
M" 2.he... 1
M'+M'I =-_·_j--Y (8)
FIG. 121
1 + Ae'-+ 2Me'
Para que esta relación sea igual a la razón M"jM, deducida de la solución exacta (P), · en U, la teoría elemental de la flexión predice la existencia de una traccióJ1, uniforme
debemos hacer: en cualquier sección, paralela a BC, de la lámina ABCD. En realidad, sin embargo,
la tensión de tracción existente en la lámina proviene de la tensión tangencial apli-
I -...1 3 + 2" - ,,' cada a sus bordes por las vigas en U (corno indica la fig. 121) Y la distribución de
21Jre' = he'l 4 la tracción a través de su anchura no es unifOlme (corno puede verse en la misma
de la cual resulta la siguiente expresión para la anchura eficaz 2). figura) siendo mayor en los bordes que en el centro. Este no cumplimiento de la
unifonnidad prevista por la teoría elemental lo llamamos <arrastre por tensión cor-
1l),= ___4_1_ - tante') (shear lag) ya que proviene de la deformación de las láminas por tensión
11"(3 +2. - "') _ cortante. Este problema ha sido estudiado mediante el método de la energía de defor-
Tomando para el coeficiente de Poisson el valor l' = 0,3, por ejemplo, tendremos -_- mación, entre otros, partiendo de ciertas hipótesis simplificadoras l.
2,1 = 0,181 (2l)
es decir, que para el diagrama de momentos flectores que hemos supuesto el anch<, Problemas
eficaz del ala representa aproximadamente Wl 18 % de la lu¿.
1. Encontrar una expresión, en fWlción de u" a" ",y, de la energía de defOlma-
ción V por unidad de espesor, de un cilindro o un prisma en estado plano de defor-
mación (e. = O).
2. Escribir la integral que da la energía de deformación V, en coordenadas
polares, en función de las componentes polares de la tensión, para el caso tensional
plano [véase la ecuación (h) del § 51 J.
La distribución de tensiones dada por las ecuaciones (80), resuelve el problema,
representado en la figura 122, en la cual, mediante_tensiones tangenciales uniformes,
FlO. 120
un par M eS aplicado sobre la superficie interior del ~millo y otro igual y opuesto
sobre la exterior. Calcular la energía de deformación en el anillo y deducir, igua-
lándola al trabajo realizado durante el proceso de carga, la rotación de la circun-
_ En el caso de una viga continua -cargada con fuerzas iguales. y concentrada en ferencia exterior cuando se mantiene fijo el borde interior del anillo (véase el pro-
la mitad de cada trruDl), el diagrama de momentos flectores será el que representa blema 2 del cap. 4).
la figura 120. Si se expresa este diagrama de momentos por .. medio de una serie
de Fourier y ~e aplica el método general que se ha desarrollado, encontraremos
1 E. Reissner, Quart. Applied Mal"., vol. 4, pág. 268, 1946; J. Hadji-Argyris, (Br;1
como ancho efIcaz en los apoyos:
Aeronn/lt. Researa. Contllil, Reports and lY/emoranda, núm. 2038, 1944; J. Hadji-Argyris \
4l H. L. Cox, ibfd, núm. 1969, 1944. En estos tmbnjo~ se encontrarán [as referencias de los estu·
2), = 0,85 • '/1'(3 + 2v _ v') dios que precedieron -.a los aquí citados.
208 'rIlORIA DE LA IlLAS1'WIDAD ME'l'ODDS ELAS'l'O~ENE¡¡GIITICOS 209
3, Culcular la energía de deformación por unidad de longitud en un cilindro .,cc.mlpal,¡O:UI(!aU (§ 1 S). En este segundo caso los cambios d_e la .!ensión son los que
a < r <b sometido a una presión interior p, [véase la ecuación .<46)] y deducir :.reamnCllIe se dan al VlJriur las fuerzas de contorno en liX, IJ Y". -¿Es correcto el
el desplazamiento radial d~ la superficie interior. :llo.un.cia.do precedente? .
Obtener el mismo resultado utilizando la ecuación (50) (tomando v = O) Y las que lo sea demostrar que el desplazamiento radial del problema 3
relaciones tensión-deformación para estados tensionales planos,
4. Interpretar-la ecuación - 1 aV
(u) ..... =_.-
2,,-a api_
¡¡Vo dzdll = HJ(Xu + Yv) Ikdy +i-J(.gu + P"v)dB
y justificar los factores ~ del segundo miembro.
FJG, 122
5. Demostrar, a partir de las ecuaciones (84), que si tenemos los estados ten-
sional y de deformación plana (e, = O) para los que O"x, Clv' ,~" toman los mismos
valores, la energía de deformación (por unidad de espesor) es mayor para el estado
tensionsl plano.
6. La figura 123, (a) representa una banda sometida a una compreSlOn que
pune en tensión toda la pieza. En (b) la banda deformable está pegada en su parte
inferior y superior a dos placas rígidas. ¿Se producirán tensiones en toda la pieza
o solamente en los extremos? En (e) el borde superior es libre como en (a), pero
el inferior está fijo como en (b), ,La tensión que se crea será o no local?
e'O .. 1 + i8 -1- 1.
21
(iO)2 + 1. (is)a + 1. (i8)' +
'31. 41
FlG. 124
clgh z = ~_ = eh (x +..!!L. sh (x - iy)
sh z sh (x + iy) sh (x - iy)
Dos númSlros reales x e y forman el número complejo' x + ¡yen el que i re- = (ch x cos y + i sh ;c sen y) (sil x cos y - i ch~
presenta la v
-1. Dado que i no pertenece al conjunto de los números reales debe (sh x cos y + i ch x sen y) (sh x cos y - j eh x sen y)
defmirse qué se entiende"por igualdad, adición, sustracción, multiplicación y divi-
sión.. de. estos números '. Por definición x + iy = x' + iy' cuando x = x' e y = y', denominador es la cantidad real (sh x' cos y)2 ··f (eh X' sen y)l y operando el
e ¡"2 es. igual a -1. Para el resto de las operaciones se dan las mismas definiciones .numerador y simplificando obtenemos:
que ·si· ~e tratase de números reales. Así, por ejemplo, ct h z = sh 2x - i sen 2y (e)
g ch2x-cos2y
(x + iy)a = x! + 2xiy + (iy)' = x' - y' + i2xy puest~ q1!e jI! = -lo
Pasando a coordenadas polares, como se indica en la figura 124, tenemos Otro procedimiento posible es el indicado en la ecuación (P) del § 62.
La derivada de f(z) respecto a z es por definición:
z = :¡; + iy = "(008 8 + isen O) (a)
df(z) = liro f(z -1- Aa) - I(a) (d)
1 Estas definiciones representan operuciones sobre el par de nr¡meros reales usándose i sim- da Az-'O Az
plemente por conveniencia. Véase, por ejemplo. E. T. Whittnl<er y G. N. Watson, Modem 1 Se observará que. es real, pese a su nombre.
A71alysis, 3." edición, págs. 6-8.
212 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILINEAS 213
donde lis = ¡Ix -1- iay y Jz -+ O significa, por supuesto, que •.Ix -+ O y dy -+ O. ~ec:or(1ar1ldo
que a y {J son reales, que :"2 = -1 y que la igunldad de números com-
Pensando en x e y como coordenadas cartesianas de un punto del plano, ilx y ~1y implica la de sus partes real..e imaginaria, resultan las ecuaciones
representarían un desplazamiento a un punto vecino y podría esperarse, a primera a",= -<JfJ,
- a«. a{3
vista, que el valor de (ti) dependiera de la dirección de ese desplazamiento. No obs- a;¡; ay ay = -a; (e)
tante, el límite de (ti) es expresable directamente en función de z y Ilz como si se
tratase de números reales, y los resultados correspondientes tales como cuales reciben el nombre de ecuaciones de Cauchy-Riemann. Derivando la pri-
respecto a 'X, In segunda respecto a y y sumando, obtenemos:
d d
dZ (z') = 2z, . ¡z;sen z = eos z (f)
deben ser independientes de In elección de Jz y de Llx y Lly. Podemos decir, por tanto,
que todas las funciones de z, formadas de la manera corriente, tendrán derivadas que ecuación de este tipo, se llama ecuación de Laplaee y las soluciones de la misma
sólo dependerán de z, obteniéndose un único valor para todas las direcciones (de dz) el nombre de funciones armónicas. Eliminando u de forma semejante de las
en el punto z. Tales funciones se llaman analíticas. =1l8tci()flc:s (e), tendremos asimismo:
La cantidad x - iy puede ser considerada como función de z, en el sentido, éJ'P éJ1fJ
de que dada z lo están x e y y en consecuencia x - iy. Sin embargo, x - iy no puede
obtenerse a partir de z en la forma en que obtenemos, por ejemplo, z", e", etc.
éJ:c' + ay" = o (g)
Su derivada respecto a z, que es el límite de (¡Jx _. i.1y)/(¡Jx iAy) cuandó ,1x ,+ pues, que si dos funciones a y {J, de :Jo: e y, 'son las partes real e imaginaria
LJy -+ O, depende de la dirección del desplazamiento Llx, Lly. Si tomamos este des- función analítica f(z), ambas satisfacen l~ ecuación de Laplace, ecuación
plazamiento en la dirección x, de forma que LJy = O, obtenemos 1 como valor del se encuentra en muchos problemas de la Física incluidos los de la Elasti-
límite. Si tomamos el desplazamiento en la dirección y, ,Ix = O y el límite es -lo [véase, por ejemplo, la ecuación (b) del § 16J.
En consecuencia, x "- iy no es una función analítica de x + iy. En la construcción Las funciones a y {3 se dice que son funciones armónicas conJugadas y e~ evidente
de las funciones de tensión usaremos funciones analíticas junto con la expresión dada cualquier función armónica a, las ecuaciones (e) determinan, salvo una
x - ¡y. Cualquier función en la que intervenga i recibc el nombre de .función la fundón P conjugada con la a.
compleja». ejemplos de deducción de funciones armónicas a partir de funciones
Una función analítica fez) tendrá una integral indefinida, que se define como la de z consideremos las funciones e,n., "." y log z en las que n es un número
función cuya derivada respecto a z sea f(z), y que reprc)lentaremos por f(z)dz.
Si, por ejemplo, fez) = 1/21 tendremos: '
f Para la primera de ellas tenemos:
J~dz=logl$+C 'donde vemos quc 8-"· cos 1IX y e-M sen n.", son funciones annónicas. Cambiundo 11
-11 encontramos que en. cos 1lX y e"· sen nx son también armónicas, de donde
donde la constante nditiva e es ahora un número complejo A + iB, que contiene sigue que también lo son:
dos constantes reales arbitrarias A y B. sh ny sen n."" ch ny sen 1lX, sh ny cos 11."', eh ny cos n:" (h)
que se obtienen sumando y restando las funciones precedentes y añadiendo
55. Funciones anaüticas y ecuación de Laplace. Una función analítica 1/2. Partiendo de z" tenemos:
fez) puede ser considerada como una función de x e y y sus derivadas parciales serán:
ulla ZA = (r8· 8)" = r"e"'Y = rO cos 'nO + ir" sen nO
a d 01$ 82
(a)
las siguientes funciones armónicas:
8,/(2) = IEf(z) iJa: = 1'(2) iJz =o f'(z)
r" cos 718
J
y-A cos nO, r-" sen nO (z)
puesto que ozlox = 1, y la otra:
mos también: puede comprobarse fácilmente las funciones (i) y (;) salÍsfacenla ecuación
y (e)
Lapluce en coordenadas polares (véase la ecuación (ti) del § 2SJ, la cual es:
.(él«éJ:c + .a!3)
~ <l:c
1
= ~
éJy
+ i ap
ay
(d)
214 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS DlDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVll.INIlAS 215
Problemas' -Esto mismo es cierto también para y'l', para la función 1jJ, y como puede
, comprobarse fácilmente, derivando, para (:;;;. + y2)'P, que es r"tp.
1. Determínense las funciones reales de x e y que son las partes real e imagi- , , Tomando, por ejemplo, las dos' funciones armónicas
11aría de las funciones complejas z·, z", tgh z:
[x' - y, 2"-)1; x, ~ 3xy', 3x·y - y";
sh ny sen nx, ch ny sen nx
sh 2x(ch 2x + cos 2y)-', sen 2y(ch 2x + cos 2y) ']
· de (h) (§ 55) Y multiplicándolas por y, llegamos, por superposición, a la
2. Dt:temlínense las funciones reales de T y O que son l¡¡s partes real e imagi-
naria de las funciones complejas z-', JI: log z. · función de tensión (d) del § 23. Asimismo, to¡nando las funciones (t) y (j)
del § 55 Y multiplicándolas por x, y o 1'2 podemos obtener todos los tér-
[r'~ cos 20, r • sen O; 7' log T COS O - rO sen 0, r log r sen e + re cos 1)] minos de la función de tensión en coordenadas polares dada por la ecua-
3. Si ( es una variable compleja y z = e eh 4, obténgase ción (81) en el § 39.
No obstante, la pregunta de si cualquier fl!nción de tensión puede ser
d
dzsh nI; · expresada de esta forma sigue planteada y a ella vamos a responder en
Escribiendo ?; = 1;.+ j7J determínense las partes real e imaginaria de esta derivada ,s~guida al conseguir expresar la función general de tensión mediante
cuando e y n son reales. dos funciones analíticas arbitrarias.
e
4. Si z = x + iy, = ~ + ir¡ y z = ia etgh ~ : (a es real) demuéstrese que Escribiendo el operador laplaciano
x= a sen '1/ , _ a sh ~
eh t; _.. cos 7J Y-ehl;-cos7/ a2 82
8x 2 + ay2
~ediante el símbolo V' podemos formular la ecuación (a) del § 17 así:
56. Expresión de la funéión de tensión mediante funciones : V'(V·~) = O Ó V' ~ = O. Llamando P a V' ~, que representa a (1", + (1q,
armónicas y complejas. Dada una función cualquiera df? x e y, 'JI, . , 'vemos que P es una función armónica, teniendo por lo tanto, una función
derivando obtenemos armónica conjugada Q. En consecuencia P + iQ es una función analítica
'de z que podemos escribir
(a) fez) = P + iQ (e)
y si 1JI es armónica, el paréntesis del miembro derecho se anulará. En este y su mtegral respecto a Z, que expres~lmos por 41j1(Z) será también una
caso 01pJox es también una función armónica puesto que: : funcióñ'analítica. Llamando, entonces, p y q a las partes real e imaginaria
de 'P(z) tenemos:
y,(z) = p + iq = Hf(z) dz Cd)
que 1p'(z) = 1/4 fez). Asimismo
Una nueva aplicación de la laplaciana (a) nos da
aa) ( iJ2 + 82 )
éJp +i aq = ~ "'(z) = V/ (z) az =!:..4 fez) = !:.4. (P + iQ)
' a2 8$ ax eX 8x
( a:¡;2 + ay2 8X2 ay2 (x"') =O (b)
. e igualando las partes reales del primer miembro y del último, obtenemos
que es lo mismo que
(e)
Recordando que P = \72 rfi y partiendo de las eéuaciones (e) y (j), podernos Re significa <<parte real de», z representa X - iy, Y tp(z) Y x(z) son
ver que r/> - xp - yq es una función armónica ya que furlcilonl~s analíticas elegidas convenientemente. Recíprocamente toda
(97), sean cuales fueren ;Pez) y .x(z), es una función de tensión
\72(c/> - xp - yq) = '\72<f> - 2 :~ - 2 :~ = O (g) satisface a la ecuación (a) del § 17. Esto será aplicado más adelante
. 'la solución de varios problemas de interés práctico .
Tenemos, por lo tanto, que para cualquier función de tensión rp . Escribiendo la <<función compleja de tensión~ contenida entre corchetes
(97) de la forma
..p' - xp - yq = PI
donde PI es una función armónica y en consecuencia !z .p(z) + ;x(z)
z
.' observando que zz = r y que tp(z)fz es también función de z encon-
lo que demuestra que cualquier función de tensión puede ser expresada que cualquier función de tensión puede expresarse en la forma
mediante dos funciones armónicas conjugadas p y q y una función armó- r2p, + Pi
nica PI convenientemente elegidas.
La utilidad de ·la ecuación (96) será comprobada más adelante, pero P4 Y P s funciones armónicas.
como vamos a ver ahora el uso de las dos funciones P y q no es necesario.
En lugar de la ecuación I.g) podemos escribir: Desplazamientos correspondientes a una determinada
de tensión. En el § 39 vimos que la determinación de las
'\72(", _ 2xp) = '\72<f> - 4 iJp
éJx
=O ~n~;]U1:U:'t; en una región múltiplemente conexa requiere la evaluación de
desplazamientos, con el fin de asegurarnos de que no' son discontinuos,
lo que demuestra que t/> - 2xp es una función armónica, que llamamos 10 que es lo mismo, de que las tensiones no son causadas parcialmente
p., con lo que cualquier función de tensión es expresable en la forma dislocaciones. Con tal fin, así como para aquellos casos en que los
interesan por sí mismos, se necesita un método que
cp = 2xp + P2 eh) obtener las funciones de los uesplazamientos u y v a partir de la
donde p y p. son dos funciones armónicas convenientemente elegidas, de tensión.
De forma semejante, considerando '" - 2yq, puede demostrarse que Las relaciones tensión-deformación para problemas planos, ecuacio-
cualquier función de tensión es también expresable en la forma (22) y (23), pueden escribirse de la siguiente forma:
.p = -2yq + pa E ax
au
= 0'. - 110'1/,
av
E íJy = Cf" - ]10'" Ca)
donde q y Ps son dos funciones armónicas convenientes.
Volviendo a la fórmula (96), introduzcamos la función ql que es la
G ( ax
av BU) =r""
-+- (b)
armónica conjugada de PI y escribamos ay
Dividiendo por 1 + l' Y sustituyendoP por '4op/o.-.: en (e) y por 4oq¡oy Más adelante veremos la utilidad de estas ecuaciones en algunas apli-
en (el) [ecuacion~s (f) y (g) del § 56] obtenemos en las que el método· de determinación de· desplazamientos
en los capítulos 3 y 4 no es eficaz. .
2G au a21{> + 4 ap 2G éJv = _ é)2cp + _4_ éJq (e)
ax = - ax2 1 + 'J) ax' ay ay2 1 + éJy 'J)
58. Tensiones y desplazantientos expresados. en función de
que integrando nos da potenciales complejos. Hasta aquí, las componentes de la tensión
los desplazamientos han sido obtenidos a partir de la función de ten-
81{> 4 aep 4
2Gu = --+-p+f(Y)
éJx .1+)1 , 2Gv = - ay + 1 + JI q + fl(X) (f) , pero dado que la ecuución (97) expresa <p en función de 1p(Z) y X(z)
posible también obtener las tensiones y desplazamientos a partir de
donde f(y) y fl (x) son funciones arbitrarias. dos ~potenciales complejos')'
Sustituyendo estas expresiones en el primer miembro de la ecuación (b) Cualquier función compleja fez) puede ponerse en la forma 11 ip, +
obtenemos a y {3 son reales. A tal función se la puede hacer corresponder la
al, que es el valor que toma fez) cuando en ella sustituimos i por
_ éJxaéJy + 1~_
2
", (a p + éJq)
+ v ay ax
+ ~ df +! dh =
2 dy 2 dx
T
""
(g) i. La notación que utilizamos para designar a la conjugada es la ~iguiente:
l(z) = a - ifl (a)
donde el primer término de la izquierda es 'rv Y el paréntesis se anula
por ser p y q funciones armónicas conjugadas, que satisfacen las ecuacio-
por ejemplo, fez) = e l t. . tendremos
nes de Canchy-Rieman (§ 56). En consecuencia
(b)
comparar con
de donde fez) = 8 1"3
df = A, dfl = -A el fin de ilustrar el significado de la barra que existe sobre la f en la
dy dx (a) .
. Evidentemente
siendo A una constante. Se sigue de ello, que los términos f(y) y f¡(x)
de la ecuación (J) representan la traslación de un cuerpo rígido, por lo fez) + fez) = 2a = 2 Ref(z)
que suprimiéndolos, las ecuaciones (f) resultan'
lo que si añadimos a la función contenida en los corchetes de la ecua-
éJ<J¡ 4 4 al{> (97) su conjugada, la suma será el doble de la parte real de esa función.
2Gu= - - + - - p 2Gv:= - - + - - q (h)
ax 1 JI ' + ay 1 + p ecuación (97) puede, por lo tanto, ser remplazada por .la
entendiéndose que se pueden añadir los desplazamientos correspon- 2<J¡ = z¡fl(z) + x(z) + zf(z) + x(z) (98)
dientes a la traslación de un cuerpo rígido.
la que derivando resulta
Estas ecuaciones !los permiten obtener u y v cuando .¡, es conocida.
Para ello determinamos primero P = V" </1, hallamos luego su función
conjugada Q mediante las ecuaciones de Canchy-Rieman, 2 ~: = z¡fl'(z) +'¡'(z) + X'(z) + z;¡"(z) + ~(z) +x'(z)
ap
-=-,
aQ éJP
- = - -aQ, 2 ~= = i(z¡fl'(z) - "'(z) + X'(z) - zif/(z) + ;pez) - x'(z)]
ax ay ay ax
formamos la función fez) = P + iQ Y obtenemos p y q integrando fez) dos ecuaciones pueden combinarse en una, multiplicando la segunda
como en la ecuación (d) del § 56. Los términos de las ecuaciones (h) son i y sumándolas.
entonces conocidos.
. 1 El significado que aquí tiene esta palabra es distmto del que toma en la expresión: «fun-
lA. E. H. Love, Malhemalical T/¡eory of Elasticily, 4." edición, §§ 144 Y H6, 1926. ción armóntca conjugada •.
220 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLI>MI\!:i BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILlNEAS 221
Entonces:
Como una sencilla iÍustración de este método consideremos la distribución ten-
polinómica estudiada en el § 17. Evidentemente la ecuación (98) nos dará
:: + i ~t = I/I(Z) + zíf!(Z) + X'(z) (e) función de tensión, que es un polinomio de quinto grado, si tomamos
",(a) = (a, + ib,)a', x(a) = (e, + id.)a'
Combinando de igual forma las ecuaciones (h) del § 57 se obtiene
e, y d, son coeficientes reales arbitrarios. Entonces
2G(u. + iv) = _ (o</> + i o</» + _4_ (p + iq) ",'(z) = 4(a.+ ib.)z', x'(a) = 5(c, + id,)z' .
élz ay 1+1' "," (a) = 12(a,+ i/',)a·. x" (a) = 20(c, + id.)z'
que usando la ecuación (e) y 111 (ti) del § 56 queda . de las ecuaciones (100) y (102) obtenemos
;,,, + = 4Re4(a, + ib,)z'
+ iv) = ~ ¡ : ,pez) -
IT.
una de las cuales, la (101) puede tomar, cambiando i por -i, esta otra
forma (1.1)
rFu - rT;c +
2i-r"", = 2[ztJ¡"(z) x"(z)] (102) + FlG. 125
Dados pues los potenciales complejos Vez) y X(z) podemos determinar ds, puede representarse por las componentes Xds e Vds, cuyo valor,
las componentes de la tensión mediante las ecuaciones (100) y (102). se deduce de las ecuaciones (12) del §.9, viene dado por las expre-
Separando las partes real e imaginaria de (102) Ó (101) obtenemos separa-
damente G", - Gv Y 2-r",u y los desplazamientos correspondientes mediante x= (1'. cos a + T:cu sen a (a)
la ecuación (99). ji' = rTlI sen Oi + T:cu COS Oi
1 Estos resultados y la ecuación (99) fueron obtenidos por G. Kolosoff en su tesis doc- las que a es el ángulo formado por la normal N y el eje x. Al el,emento
toral. Véase su trabajo en Z. Math. Physik, vol. 62, 1914. arco ds corresponden los elementos dx y dy, que' se indican en la fi-
222 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVII.lNEAS 223
gura 12Sb, Y dado que al ir de A a B x disminuye y dx será negativo. ,plan y paralela acfJjos a AB. Estas derivadas son conocidas si se da ~ y
Entonces ,plan a lo largo de AB1 •
dz . Sea ahora un arco que se cierra sobre .sí mismo, de forma que A coin-
COS a = dy sen a = - ds (b) con B, pero en el que este punto sigue siendo considerado como
ds
al cual se llega· después de recorrer el arco, partiendo: de A_ Las
y l1evando estos resultados, junto con los ·~cj~ac:lOrles (el) y (e) nos dan entonces la fuerza y el momento resultante de
tensiones que actúan sobre la porción de placa contenida en el circuito
AB. Si tales resultantes no son cero, a rP ja."C y o.p j oy, no toman
valores. iniciales (A) después de recorrer el circuito (B), siendo, por
a las ecuaciones (a), obtenemos tanto, fll11ciones discontinuas como, por ejemplo, la coordenada polar
. ·Este caso se dará solamente cuando cargas iguales y opuestas a Fx Y
y M, son aplicadas en puntos interiores de la porción de placa limitada
la curva AB.
Expresando las dos ecuaciones (á) en función de los potenciales com-
,p·lejos 'P(z) y xCz) de la ecuación (98) tendremos
Las componentes de la fuerza .resultante que actúa sobre el arco AB son, F + iF = [8r/> _ i ac/>]B = _ i [ar/> + i 8r/>]B
por lo tanto " II
ay az A. az ay A
F: = j A.BX_ds = jB. -
d (ac/»
.A ds ay
-
[acf>]B
ds = -
ay A.
usando las ecuaciones (e) del § 58, resulta
Fu = jBA. Y ds = -lB
i.. (arf» ds = _ [acf>]B
A ds az o:c JI.
(d)
F" + iF lI
representando el corchete, la diferencia eJ?-tre los valores que la cantidad M = Re [-zz,p'(!) + x(z) - ZX'(z)]~ (104)
que encierra, toma en los puntos B y A.
La fuerza que actúa sobre AB tiene un momento respecto a O (de Las ecuaciones (103) y (104) aplicadas a un circuito cerrado que rodee al
sentido el del giro de las agujas del reloj) cuyo valor es: . origen, muestran que si las funciones tp(z) y x(z) son del tipo z" (donde
. n es un entero positivo o negativo) F"" F~ y M serán nulos, ya que las
: funciones entonces contenidas en los corchetes vuelven a tomar su valor
. inicial cuando el circuito es completado. Estas funciones, por lo tanto,
no pueden representar las tensiones producidas por cargas aplicadas en el
que integrando por partes quedal
. origen. La función log :Ir = log T + i8 por el contrario, no vuelve a tomar
JJ [8c/> éJ</J]B · el mismo valor al recorrer un circuito que rodee al origen, puesto que O
M= [ <> ]
.A
- :c-+y-
a:c éJy A
(e) aumenta en 2:n. En consecuencia, si 'P(z) = e log z o x(z) = Dz log z
(donde e y D son constantes complejas) la ecuación (103) dará un valor
Si AB representa ulla porción del contorno sobre la que no actúa nin- no nulo pam F" + iFy • Asimismo la función X(z) = D log z dará un
guna carga X e Y serán nulos y según las ecuaciones (e) o rP jax y a rPlay valor no nulo de M si D es imaginario y nulo si D es real.
se mantendrán constantes a 10 largo de AB. Si sobre AB actúa una deter-
minada distribución de carga las ecuaciones (e) fijarán los valores de a</> lax · 60. Coordenadas curvilineas. Puede considerarse que las coor-
y a(¡IBy a lo largo del contorno, lo que equivale á dar las derivadas normal · denadas polares r y O (fig. 124), especifican la posi.;:ión de un punto me-
, diante la intersección de una circunferencia (de radio r) y de una recta
, Las ecuaciones (d) y (e) sirven para establecer una analogía entre los problemas tensio- .
nales planos y el movimiento bidimensional lento de fluidos viscosos. Véase ]. N. Goodier, I Estas ecuaciones fundamentan la analogía con la deflexión transversal de lai placas
PIUI. Mag., serie 7, vol. 17, págs. 554 y 800, 1934. elásticas. Véase R. D. Mindlin, Quar/. i1.pplied Mat"_, vol. 4, pág. 279, 1946.
224 '!'I!ORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILINEAS 225
radial (de dirección (), El paso de las coordena'das cartesianas a las polares , . ~ se obtienen distintas elipses, todas con los mismos focos que forman,
se realiza median te las ecuaciones '. por tanto, 'una familia de elipses homoJocales (fig, 126). En una cualquiera
de estas elipses 1; es constante y r¡' varía, de igual forma que sobre una
vz 2
+ y2 = r, arctg 1!..
:c
= (J (a) circunferencia, en coordenadas polares, r es constante y O varía: De hecho,
'en el caso presente "1 es el ángulo de excentricidad1 de los puntos de la
La primera, cuando el paramento r toma diversos valores, representa la · elipse.
familia de circunferencias y la segunda, al variar el valor de (j, la familia
de rectas radiales, .
Las ecuaciones (a) son un caso particular de las
F&¡;,y) =~, (b)
Dando un.os valores determinados a ~ y 'Y] (uno a cada parámetro) estas ecua-
ciones representarán dos curvas, las cuales se cortarán si hemos elegido
convenientemente las funciones F1(x, Y)'y Fz(x,y), Para nuevos valores
de ~ y '11 obtendremos nuevas curvas y nuevos puntos de intersección de
forma que cada punto del plano xy podrá ser caracterizado por un cierto
valor de ~ y '1 [los valores que hagan que las dos curvas dadas por (b) pasen
por él] y ~ y 7J pueden ser consideradas como las qcoordenadasl) del punto, FIG. 126
Puesto que dados los valores de ~ y 7J el punto que definen es el de inter-
sección de dos curvas, estas coordenadas son llamadas coordenadas cu.r- Si haciendo uso de la ecuación ch' .!; - sh' l: = 1, eliminamos ahora .::
vilíneaf. de las ecuaciones (ti) tendremos
En el capítulo 4 vimos la utilidad de las coordenadas polares en el __ 2_ _ __
:1:_ y_2_ = 1
tratamiento de problemas de contornos circulares concéntricos. En tales (e)
e2 cos 2 '1/ c2 sen2 '1/
contornos las tensiones y los desplazamientos son función solamente de
() puesto que en ellos r es constante. Si los contornos consisten en otras ecuaclon que para un valor constante de r¡ representa una hipérbola,
curvas, elipses por ejemplo, es conveniente usar las coordenadas curvi- · cuyos focos son los mismos de las elipses. La ecuación (e) representa,
líneas en las que una de las coordenadas se mantenga constante en cada por lo tanto, una familia de hipérbolas homofocales, sobre cualquiera de
contorno. las cuales 71 es constante y ~ varía. Estas coordenadas reciben el nombre de
Despejando x e y de las ecuaciones (b) obtendremos las expresiones · ;elfp ticas.
. Las dos ecuaciones (d) son equivalentes ax + ¡y = c cosh(; + i'T}) o
(e)
z = cchr (j)
las cuales son, por lo general, más útiles que las (b). Consideremos, por
ejemplo, las dos ecuaciones '. donde = e e + i'Y]. Estamos evidentemente frente a un caso particular
de la relación
x =,c ch 1; cos "1, y = e sh l; sen r¡ (d)
z =jW (g)
en las que e es una constante. Eliminando 71 se obtiene:
lo que además de definir z como función de ~ pemIÍte despejar ~ y ex.~
x9 y2 presarla como función de z. i: y 1] son entonces las partes real e imaginaria
e2 ch 2 ; + c' sh2 l; = 1 '. y por lo tanto satisfacen las ecuaciones (e), de Cauchy-Rieman, y las (j)
y. si .: es constante ésta es la ecuación de una elipse de semiejes c ch " y y (g), de Laplace, del § 55.
c sh $, cuyos focos se encuentran en x = ±e. Para distintos valores de
I Si a y O son las coordenadas polares de un punto de la ci.rcunferencia que circunscribe
. una elipse de semiejes a y h, la perpendicular por ese pumo ni eje x COrt1l n In elipse en el
punto x = a cos O, y = b sen Oí 8 "" llamado el ángulo de excentricidad de ese punto de la
l. La teoría general de las coordenadas curvilíneas fue desarrollada por Lamé en su libro
Leceo"s sur les cao~den7létl$ curvilignes, París, 1859. ~- , .
15 -'(U)RtA OH LA VUSTlC1PAD
226 TEORIA DE LA EI.ASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMIlNSIONALIlS EN COORDBNADAS CURVILINEAS 227
Todas las ecuaciones que vamos a usar en este capítulo serán deduci- y el eje x (fig. 127): Si de forma semejante varía solamente 1/, los incre-
das de ecuaciones del tipo (g) y en consecuencia tendrán algunas pro- . mentos dx y dy, dados por las ecuaciones (h), corresponden a un ·elemento
piedades especiales. si eJ, punto x, y tiene las coordenadas curvilíneas de arco ds.¡ perteneciente a una curVa ~ :== cte., y en lugar de las ecuacio-
.;, r¡, las del punto vecino x + dx, Y + dy serán l; + dli, '1 + d1/ Y dado .. nes (t) tendremos:
que existen dos relaciones del tipo (e) podremos escribir OX
dx = -dl)
aTl '
dy = ay dr¡
:~ de + :~ d", = :~ de + :: d1/
élr¡
d:¡; = dy (h)
Procediendo como hemos hecho más arriba obtenemos que
Si solamente varía.; los incrementos dx, dy corresponden a un elemento
de arco ds que pertenece a una curva 1/ = cte., y entonces: -o:¡; =
ar¡'
-Jsena a1l=Jco8a
or¡
OX dy = oy di; y también que ds,¡ = Jd'l. Asimismo ocurre que
dx = Oc d~, éJl;
(i)
dyld:c = - ctg a
de donde
resultado que comparado con la ecuación (n) nos dice que las curvas
(j) r; = cte. y 7} = cte. se cortan ortogonalmente (fig. 127).
~-,~------------~~·x
donde y
'1 incremento
FlG. 127.
Puesto que además toda cantidad compleja puede escribirse en la forma
Jeas a + iJ sen CL = Je'u (J y CL reales), podremos poner Considerando, por ejemplo, las coordenadas elípticas definidas por
j'(r) = Je"" (l) ecuación (j) tendremos:
e21" = j'(r)
2G(Uf - iu,¡) = é~ n+: i[t(z) - ztP'(z) - x'(Z)] (111)
(107) 'las cuales serán usadas más adelante en la solución de diversos problemas
J'(f)
en los que existen contornos curvilíneos.
En coordenadas elípticas, por ejemplo, /'(0 = e sh ey
é'a,=~ (q)
sh e Problemas
Determinado así el valor de e"a, las ecuaciones (lOSfy (106) expresan l. Demostrar que en coordenadas polares, dadas por:J = el, la ecuación (107)
a., a~ y T"I en función de a"" Uu y T",u. se convierte en e'" = ¡jl'" y IX = 7' = O.
Los desplazamientos en coordenadas curvilíneas son especificados 2. Obtener la solución en coordenadas polares de los siguientes problemas
mediante las componentes 111 de sentido el de las e crecientes (fig. 127), mediante los potenciales complejos quc se indican, y calcular las componentes d~
las tensiones y los desplazamientos. Las letras mayúsculas indican constantes que
1 Las ecuaciones (105), (106) Y (lOS) fueron obtenidas por Kolosoff, loe. cit. pueden ser complejl!-s: ,
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILlNEAS 231
230 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
a) Anillo (a < r < b) sobre cuyos contornos actúan dos pares iguales y opues- semiejes a y b, sobre cuyo contorno no actúa ninguna fuerza exterior'.
tos M causados por esfuerzos tangenciales (fig. 122). !pez) = O, 1(Z) = A log:J. condiciones significan que:.
b) Anillo sometido a una presión interna P, y otra externa p" (véase el § 26).
lp(z) = Az, ;((z) = B lag z. :. u'" = Uy = S en el infinito (1; -+ ce ) (ti)
e) Flexión simple de una barra curva y «dislocación rotacional,) de un anillo .. o-e = r,>, = O sobre el contorno elíptico del orificio, donde 1; toma el
(véanse los §§ 27 y 29). ",(z) = Az log z + Bz, x(z) = C log z. valor 1;0 (e)
ti) El problema resuelto en el § 31. v,(z) = Az'+B logz, X(z)=Cz logz+Dlz.
e) Placa con orificio circular sometida a tensión (§ 32). ",(z) = Az + Blz, . De las ecuaciones (100) y (102) se deduce que la condición (ti) es satis-
X(z) = Clagz + Dz' + Flz'. fu~a~ -
f) Distribución radial de tensiones del § 33. ",(z) = A log z, x(z) = Bz lag z.
g) Placa indefinida cargada por una fuerza concentrada en un punto (§ 38). 2 Re !p/(Z) = S, z·,,/'(z) + X"(o3') = O a infinito (f)
?pez) = A log z, x(z) = Bz log z.
Puesto que las tensiones y los desplazamientos han de ser, por razones
de continuidad, funciones periódicas de 7}, con período 2n, tomamos
62. Soluciones en coordenadas elípticas. Placa sometida a un expresiones de 1jI(z) y X(z) que den una función de tensión de la misma
esfuerzo de tracción uniforIne. Las coordenadas elípticas !; y 1/ .periodicidad. Tales.expresiones son:
que hemos representado en h¡ figura 126 y considerudo yu en el § 60
están, definidas por las ecuaciones: sh n~ = sh nI: cos m¡ + ich nI: sen n'Y}
z = e ch ,", (a)
ch ne; = ch nI; cos mJ + ish ni: sen n1}
de las cuales se deduce: en las que 11 es un entero. La función X(z) = BeSe;, en la que B es una
constante, es también adecuada para este problema.
x = e ch .; cos 1}, y=csh';sen'lj Tomando 1p(z) = Ac sh e
(A = cte.) y despejando de la primera de
¡as ecuaciones (b) Jeldz, recíproca de dzlde, obtenemos
y
dz sh t
1p'(o3') = Ae ch 1; • dI;
dz
=A~
sh 1;
=A ctgh ~ (g)
d," = e sh e, = sh ~
(b)
e
A una distancia infinita del origen, 1; es infinita y ctgh vale uno, de fonna
Supuesta dada una elipse, de semiejes a y b, correspondiente al valor . que la primera de las condiciones (f) exige que 2A = S. De (g) se deduce
.; = ~ o tendremos: además que
e ch ';0 = a, csh';o=b (e) (h)
de donde se deduce, que dado un miembro de la familia de elipses toda
la familia tanto de 'elipses como de hipérboI8.s (véase el § 60) está definida ..
Si ~ es pequeño, la elipse es muy estrecha convirtiéndose para 1; = O en el
segmento de longitud 2e que une los focos. Si, por el contrario, damos a - "(z )
z'"
T
- e;-
= -- A -sh3
eh
~
(z)
l; valores positivos cada vez mayores, la elipse aumenta tendiendo a una
circunferencia de radio infinito en el límite 1; = co. Cuando un punto da x(z) = Be2 C (B = cte.) tenemos
una vueltá completa a una elipse cualquiera, el valor correspondiente
de 'Y} toma todos los valores que van de O u 2x, recordando en este aspecto ít
I()=~
Z sh e , x
"(Z)=-B~
sh" e
(;)
esta variable al ángulo O de las coordenadas polares. Debido a esto, la con-
tinuidad de las componentes de las tensiones y los desplazamientos, I Las primeras soludones de la plac.~ con orificiD eJrptico fu~ron .dadas por K?losoff,
exige que sean funciones periódicas de 1}, con período 2n, de forma que loe. dt., y C. E. Inglis, Tra1!s. Inst. Naval Are!.. LOlld~es, 1913; E71gmeerZ1lg, vol. 9~, pago 415,
1913 Véase también T. Poschl, Mal/¡. Z., vol. 11, pago 95, 19~1. El método aqUl empleado
su valor sea igual para 7} = O Y 1} = 2n.' es el de Kolosoff. El trÚsmo método fue aplicado a varios problemas bidimensional~s por
Consideremos ahora el caso de una placa indefinida sometida a una A. C. Stcvcnson, Proc. Ray. Soco (Londoll), .eñe A, vol. 184, págs. 129 y 218, 1945: Más ade-
tracción uniforme S, sólo alterada por la presencia de un agujero elíptico lante. en este mismo..,~apítu]o, se darán otras referencias ..
232 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALBS EN COORDENADAS CURVILlNEAS 233
ecuaciones de las que junto con la (i), se deduce que tanto X"(z) como tnv ..nrin en (109) el valor de 'V"(z) dado por la ecuación (g) en la que
ZIj/'(z) se anulan en el infinito, siendo por lo tanto satisfecha la segunda pone A = 8/2 tenemos:
de las condiciones (f).
La condición (e) se cumple eligiendo convenientemente la constante B. /Tf + O"~ = 4 Re y,'(z) = 28 Re ctgh.f
Restando la ecuación (110) de la (109) obtenemos que
81+{~ + e-e-" (el+" + e-e-iq) . (er-i. - 8-l+i,,) (
!T~ - irh = fez) + ¡¡'(z) - e2ia [í.p"(Z) + x"(z)J (k) . ctgh r= el+il _ e-r-'q = (eE+>' - e-r- i ,) (er-i. - 8 r+iq) P)
2la
que sustituyendo los valores que acabamos de obtener y el de e , dado en obtiene operando los paréntesis
la segunda de las ecuaciones (b), queda:
ctgh C = sh 21; - i sen 2'1'}
(1. - iT<~ ::, A (~+ ch f) -1- ~ (A ch ~ -1- B~) ch 2~ - cos 2r¡
sh t; sh t; sh ( \: sh3 t sh" t;
consecuencia:
sh zé\h '( {A [sh (; sh ce + () + ch (J + B ch n (l) 28sh H
ch2~ - cds 2/1
En el. contorno del agujero elíptico 1; = ~o, ~ + :: = 2~., Y , = 2". - t;
reducIéndose (l) a ' . y en el contorno del orificio
1
sh" t; sh ~ (A ch 2~" -1- E) ch (; + 28 sh 2~u
ch 21;" - cos 2'1'}
de donde se deduce que la condición (e) es satisfecha si
Los valores máximos que se dan en los extremos del eje mayor, donde
.r¡ = O Y n Y cos 2r¡ = 1, son
B = -A eh U" = - ~8 ch H" (m)
_~2=S7S~h~2~~~,,_
Obtenemos pues (11") m •• = ch 21;. - 1
1p(Z) = !Sc sh t;, (71)
·como se deduce fácilmente de las ecuaciones (e)
Los potenciales complejos obtenidos (n) son tales que las condiciones 2ab
de contorno son satisfechas, pero no podemos asegurar que representen sh 2~o = ~2'
e
la s~lución de nuestro problema, hasta que no sepamos que los despla-
zamientos de ellos obtenidos no presen tan discontinuidades. Las com- . quedando entonces (aq)m., asi:
ponentes cartesianas de los desplazamientos, obtenidas mediante la
ecuación (99) vienen dadas por la ecuación
3 ..::. v h " lo que indica que el valor máximo de la tensión será mayor cUanto más
2G( u + tv. ) = - 1 - - Ac s t, - Ac ch <: ctgh ~-;: ~
Be
(o)
+v ~~ estrecha sea la elipse.
El valor mínimo de (aq)~= •• se da en los extremos del eje menor donde
donde A = 8/2, B tiene el valor dado por la ecuación (711) y las funciones cos 21J = - 1. Allí:
hiperbólicas que en ella aparecen tienen partes reales· e imaginarias pe- () --,2-"8-:::-s,-h_2:-,~,,;-,,_ = 28.!.
riódicas en r¡. De esta forma dando la vuelta completa a una elipse en la (J'I nun = eh 2~" +.1 a
que l; = cte., u y v volverán a tomar los valores iniciales. Los potenciales
complejos (n) representan, pues, la solución del problema. Cuando a = b, la elipse se convierte en un círcl.\lo y «(j )",,,x y (CT )m¡n
La componente (j'1 de la tensión en el contorno del orificio puede calcu- se hacen iguales a 28, 10 que concuerda con los v¡ilores obtenidos para el
larse a partir de la ecuadon (109) dado que en esos puntos (j. es cero. caso en que el orificio es circular (véase el § 32).
234 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN eooRDEI'!ADAS CURVILlNEAS 235
Los desplazamientos que por supuesto son continuos y vienen dados ~edIUC.lenaO!¡e de las ecuaciones (100) y (102) que:
por funciones uniformes y continuas, se obtienen a partir de la ecuación
(n) y de la (111) ó (99).
4 Re t/I'(z) = S, 2[z,yI/(z) + xl/(z)] = -S6-2~ en el infinit() (a)
. El caso en que en el interior del orificio existe una presión uniforme que en el contorno del orificio, ~;", ~o, tenemos que a~ = '.'1 = O.
S· y las tensiones en el infinito son nulas se resuelve fácilmente combi- Todas estas condiciones de contorno son satisfechas tomando funcio-
nando la solución anterior con el estado tensional uniforme a. = a'l = _. 8 pez), x(z) del tipo!
deducible del potencial complejo 'P(z) = - 8z/2.
41f'(z) = Ae eh , + Be sh ,
63. Influencia de un orificio elíptico en una placa sometida 4X(z) = Cea, + Dc ch n + El? sh 2C
2
desarrollo que se anula, ocurriéndole lo mismo' por 1.. tan to u Cf~ - iT,.,/ en La influencia de un orificio elíptico en un estado de esfuerzo cortante
el agujero, si los coeficientes de ch e,
sh /;, ctgh :: y cosh :: son cero. Te- aplicado paralelamente a los ejes x e y se estudia fácilmente super-
nemos entonces tres relaciones, que junto con las ecuaciones (e) deben jotlierldo los casos de tracción S con iJ = 71./4 Y tracción - S con {J = 3:rc/4.
ser satisfechas por las constantes A, B, e, D y E. Puesto que A y e son
reales existen en realidad nueve ecuaciones que han de ser cumplidas
e2e'sen 27]
por A y e y por las partes reales e imaginarias de B, D Y E: B I , B<¡, DI, D 2 , (a.)H. = -28 eh 2~• - cos 2 11
El Y Ea. El sistema formado por esas ecuaciones, es compatible, y sus
soluciones son los extremos de los ejes mayor y menor y que toma su
A = 8e'~ cos 2p D = - tSe 2<. ch 2(~" + ifJ)
B = 8(1 -'- e 2._ -2'p) E = t Se2 $.sh 2(~" + ifl) ±S (a + b)2
e= -S(ch 2 ~o - cos 2P) ah
los puntos determinados por: tg 7] - tgh~" = bla. Si la elipse es muy
En consecuencia, los potenciales complejos vienen dados por estos valores son muy grandes y. los puntos donde se presentan
41Jl(z) = Sc[e"<· cos 2f3 ch e+ (1 -; e2~. 21P) sh e]
muy próximos a los extremos del eje mayor.
Asimismo se han obtenido las soluciones para los casos de orificio
4X(Z) = -Se'l[(ch 2~" - ch 2{J)C -t !é~· - ch 2(C - .;, - iP)] en ulIa placa sometida en su plano a flexión simple!- 2 y a una
parabólica de esfuerzos tangenciales tal como la que se da
de los cuales se obtienen desplazamientos aplicando la ecuación (111).
Como puede verse fácilmente vienen dados por una función uniforme. una viga rectangular, agujero elíptico sometido en los extremos a
Dado que Cf. es cero en el orificio podremos obtener a~ en esos mismos concentradas iguales y opuestas3 e inclusiones elípticas rígidas o
puntos aplicando la ecuación (l09). Entonces: en una placa sometida a tracción", habiéndose considerado formas
generales de la función de tensión <p en coordenadas elípticas'. Los
(O' ) = S sh 2~. + cos 2fl - e2f• cos 2({1 - '1) complejos que corresponden a las mismas se construyen a
v f-ft oh 2~. - cos 211 de las funciones que acabamos de usar o citar, junto con las análogas
empleadas en los problemas del § 61 cuando se incluyen pares, fuerzas
Cuando la tracción oS es perpendicular al eje mayor de la elipse «(1 = 71/2) ;U~l";,,r1L:n1<Ut<; y dislocaciones.
(Cf)
u ;.-;.
= 8e2" [aheh2Ml + e-2e.) -
2~o - C06 2'1
1] Contornos hiperbólicos. Entalladuras. Como vimos en los
60 y 62, en coordenadas elípticas las curvas r¡ = cte. son hipérbolas y
intervalos de variación de 7] y l; son de O a 271 y de O a 00, respectiva-
y el valor máximo, que se presenta en los extremos del eje mayor (cos
27] = 1) es: '. Sea 710 el valor constante de r¡ a lo largo del arco de hipérbola BA de
'figura 130. Dado que x e y son positivos en ese arco, el valor 7]0 estará
iinlorend:ido entre O y n/2 ..En los arcos Be, ED y EF, 7] valdrá 2n - 11."
- 7]0 y 71 + 7]0 respectivamente.
valor que aumenta sin límite al estrecharse el orificio. Cuando a = b ob- Consideremos la placa ABCFED, contenid'a entre los contornos híper-
tenemos el mismo resultado que encontramos en el § 32 para un agujero
circular. El valor mínimo de la tensión en el contorno del orificio se da en , K. Wolf, Z. techo Physik, 1922, pág. 160.
los extremos del eje menor y su valor, _·S, coincide con el obtenido para • H. Neuber, blgenieur-Archiv, vol. S, plÍg. 242, 1934. En el libro -de Neuber Kerbspan-
Berlín, 1937, se d. esta solución y otras varia. refer~ntes a elipses e hipérbolas.
el agujero circular. Symonds, J. Applied Mechanics (Tralls. A.S.M.E.), vol. 13, pág. A-183, 1946.
Si la tracción S es paralela al eje mayor ({J = O), el máximo valor de rJ? E. Green, ibld., vol. 14, plÍg. A-246, 1947, da una soluciqn en ..forma finita.
en el. borde del agujero, que se presenta en los extremos del eje menor, , N. J. Musc~ehSvili, Zeit. angew. Match. Meeh., vol. 13. pág, 264, 1933; L. H. DonneH,
von Ká~mán A'l1Iiversary Volllnte, pág. 293, Pasadena, 1941. .. '.
es S(l + 2b/a), valor que tiende a S al estrecharse el orificio. En los G. Coker y L. N. G. Filon, Photaelastieity, págs. 123-535, Cambridge University
extremos del eje mayor la tensión es -S cualquiera que sea la relaciÓn b/a. 1931; A. Timpe,'Math. Z., vol. 17, pág. 189, 1923. . .'
238 TEORrA DI! LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES I!N COORDENADAS CURVII.INIlAS 239
bólicos, que está sometida a una tracción de dirección Oy'. La tensión en será una constante si la cantidad contenida en el paréntesis se anula,
el infinito debe anularse para que sea ftnita en la sección EOB. Potenciales lo cual,
complejos que satisfacen esta condición, la de contorno (que están libres
de fuerzas) y las condiciones de simetría respecto Ox y Oy son las B = -A eos 2 '10 (e)
Para obtener la resultante de la fuerza transmitida podemos aplicar
.p(z) = -Mi s, x(z) = -tAi r - Bci 8h r (a)
•ecuación (103) del § 59 a la sección EOB de la figura 130, la cual coin-
con la parte inferior de la elipse que se obtiene para ~ = O, que está
entre las hipérbolas 1'/ = 1'/. Y 1'/ = n-TI.. En este elipse
t t t t e
= - i1'/ Y de las ecuaciones (103), (e) y (el) resulta
, Este problema (también el caso en que las cargas son tangenciales) ha sido resuelto
• Loc. cit. Para 13 comparación de los resultados dados por, Neuber con los obtenidu'
por A. A. Griffith, Tech. Rept. Aeronaut. Researeh C=TII. Gran Bretaña, 1927-1928, vol. Il,
los ensayos fotoelásticos y úe fatiga úe placas con entalladuras y árboles con ranuras véase
pág. 66&; y H. Ncubcr, Z, angew, Math. Mech., vol. 13, .pág. 439, 1933; o Kerbspamlu1Igslehre,
E. Petersol1 y A. M. Wahl, J. Applied Mec/¡all;cs, vol. J, pág. 15, 1936. S. Timoshenko.
pÁg. 35, Berlín, 1938. ,, 01 Materials, 2:0 . ed., vol. 2, pág. 340 y M. M. Frocht, .P/¡oto-elasticity, vol. 2.
240 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILINEAS 241
La cantidad z + ia está representada en el plano .xy por el segmento que .todos los puntos del plano es el de - 17. a 17.. Las tensiones y desplaza-
une el punto -ia con el z, ya que este segmento tiene por coordenadas serán entonces continuas en los puntos de ese segmento, si vienen
las partes real e imaginaria de esa cantidad, la cual podrá ser representada ,,.,..· .. ",..n1'''rI'n'' por funciones periódicas en r¡ de período 2n.
entonces por 1"1 e'·' donde rt es la longitud del segmento y 61 el ángulo . Separando las partes real e imaginaria en la ecuación (a) se obtiene'
que forma con el eje x (fig. 131). De forma semejante z - ia es el segmento
que une los puntos ia y z y puede ser representado por rze'o, (fíg. 131). x = a sen 7J a sh ~
(ti)
La ecuación (b) se convierte entonces en che-cosr¡' y=;= ch e-COS?)
(e)
de forma que
.t = lag!:!,
f:t
(e)
(f)
Como puede verse en la figura 131 el ángulo formado por las rectas que
unen los (¡polos» -ia e ia con z es igual a Eh - es cuando el punto z está· 66. Soluciones en coordenadas bipolares. Consideremos ahora
·problema de un disco circular, en el ~que existe un orificio excéntrico,
a una presión Po exteriormente y a una presión p¡ en el interior
agujer0 2• Las componentes de la tensión obtenidas, serán válidas tam-
para el caso de un tubo cuyas secciones exterior e interior sean
excéntricas.
con tomo exterior e interior las circunferencias de la familia
correspondientes a ~ = ~o Y ~ = el
respectivamente (dos cir-
· ." tales han sido representadas con trazo grueso en la fig. 131).
· la expresión de y en las ecuaciones (ti) del § 6S se sigue que los nl-
. de estos círculos son a cosh E" y a cosh El y que sus centros distan
e. y a ctgh $1 del origÉm, de forma que conocidos los radios y In
. entre los centros se pueden determinar a, ~o y ~,.
recorrer en sentido contrario al de las agujas del reloj cualquier
$ = cte., empezando por 'el punto que esté en el eje y
y la figura 131, la coordenada r¡ varía con continuidad desde -;re a :n;. En
1<'10. 131 ~L1'><"'U<;¡""'" las funciones que den las tensiones y los desphlzamientos
tomar los mismos valores para r¡ = :n; y r¡ = -:- :n;, cosa que se con-
a la derecha del eje y e igual a -(el - 6a) cuando está a la izquierda. Se
si son funCIones periódicas en 1/, con período 2:n;. Son por lo tunto
sigue de ello que las cu~vas ?) = cte. son arcos de circunferencia que pasan
Topiados, los potenciales complejos 1JI(z), X(z) del tipo
por los polos. Varios de ellos están representados en la figura 131. A la
vista de las ecuaciones (e) está claro que las curvas ~ = cte. son los lugares eh 71t;, sn 7/t; (a)
cuyos puntos son tales que r¡{ra = cte. Estos lugares son circunferencias
que rodean al polo ia si rt/ra > 1, es decir, si ~ es positiyo y al polo -ia los que TI es entero, ya que cumplen los requisitos citados. Otro tanto
si 1; es negativo, Varias circunferencias de éstas aparecen en la figura 131. con sus derivadas respecto a z, por cumplir dt;/dz [ecuación (e),
Forman una familia de circunferencias coaxiales teniendo a los dos polos 65] esa propiedad.
por puntos límites. 1 Véase la deducción de fa ecuación (e) en el § 54.
La coordenada r¡ pasa del valor n al -:n; al cruzar el segmento de eje y .' 1 La solución original, expresada mediante unu función de tensión real, fue obtenida por
que une los polos y el intervalo de valores que toma en la representación .: B. Jeffery, Transo R0y.. Soco (Londo1l), serie A, vol. 221, pág. 265, 192"1.
242 TllomA DE LA EI.ASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COOIlDEN.jDAS CURVILINEAS 243
Si aplicamos las ecuaciones (103) y (104), en las que hemos intro- del témlino en cos 'l} al igual que ocurre con la función (b). Esto
ducido las funciones (a), a c1.1alquier circunferencia ; =;= cte. del disco, sucederá con los potenciales complejos (d) si tomamos C' = ae,
obtenemos que a causa de la periodicidad de las funciones, la fuerza y teniéndose con estas restriccione's funciones más sencillas que son,
par correspondientes son cero, resultado éste, que por razones de equi- adecuadas para nuestro problema.
librio, ha de ser cumplido también por la solución completa. por lo tanto .
Para la obtención de la misma haremos uso de la función x(z) = aDr;,
en la que D es una constante. Empleando de nuevo las ecuaciones (103) y
"!pez) = iR eh e, x(z) = aB sh C (e)
(104), vemos que la constante D ha de ser real, pues de no ser así el mo-
mediante las ecuaciones (109), (110) Y las (a) y (j) del § 65,
mento que da la ecuación (104) no sería nulo. Aplicando la ecuación (99)
componentes de la tensión
se comprueba que los deslizamientos que se obtienen, tanto de esta función
como de las (a), usadas indistintamente en lugar de "!pez) o X(z), no pre- ·a('T.' '1>,) = 2B(2 sh ~ cos ~] - sh 2 $ cos 27) (j)
sentan discontinuidades. I 2ir.,,) = - 2B[sh H - 2 sh 2~ ch ~ cos '/ .
El estado equitensional uniforme, de tracción o compresión, que + sh 2:: cos 2'] - i(2 ch 2E ch E sen r¡
formará parte de la solución, se obtiene a partir del potencial complejo - eh U ~cn 2,/)) (g)
'P(z) = Az con A real. La función de tensión real correspondiente es,
como se deduce de la ecuación (97), forma semejante las funCIOnes
aB sh ~ ch 4 cos 7J -
sh ~ sen 2 7J O"~ + a" = 4A, a" - al; + 2iT." = O
che-cosr¡
+ E' sh; ch ~ cos r¡ - sh ~ cos 2 r¡
ch~-cos'] a. = (J" = 2A, t'¡" =0. (11)
Toma~do B ' = aE, los términos en sen" 7/ y coso 7/ de los numeradores -La solución de nuestro problema puede obtenerse superponiendo
dejan de depender de 'l} y el numerador completo depende de r¡ solamente estados tensionales representados por los potenciales complejos (e),
244 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILINEAS 245
(h), (h) Y Cm). Reuniendo los términos que representan T~'I en las ecuaciones semiindefinida .con orificio circular sometida a una tracción paraleln
(g), (j), y (l) se obtiene que para que T.'I se anule en los contornos ~ = 1;. recto de la misma l oa ·su propio pesoa y placa indefinida con dos
y l!. = ~l se han de cumplir las ecuaciones; o con uno solo formado por la i:ptersección de dos círculos 4•
Asimismo, con y sin coordenadas bipolares 5, se han resuelto los si-:-
D - 2B ch 2.:.'" 2esh 2~" = O (o)
problemas: disco circular sometido a una fuerza concentrada
D - 2B ch 2:, 2e sh 2.:.'1 = O .. un punto cualquiera 6, disco circular sometido a su propio peso estando
IS¡:IerI0100 de un punto?, disco circular en rotación· alrededor de un eje
que una vez resueltas nos dan :céntI:ic()' y efecto de un orificio circular en la .distribución de tensiones
2B = D ch (1:.1 + 1:.,,) 2e = -D ah (~I + ':,,) (P) placa semÍindefinida sometida n una fuerza concentrada en su
ch (l:.1 - ·U' ch (l:.¡ - '1:... )
La tensión normal (1., que se obtiene restando de la ecuación (f) la parte
real de la (g) (y haciendo lo mismo con los otros pares de ecuaciones) ha . Otras coordenadas curvilíneas. La ecuación
de ser igual a -Po en el contorno ~ = ~D Y a -PI en el borde 1; = 1;1'
De estas condiciones y ~ustituyendo los valores de B y e, dados por las
ecuaciones (P), se deducen las dos ecuaciones
2A
D
+ -8h Z
l!."tgh(l;¡ - ';,) -Poi x = (e< +
abe-~) cos 71 + acsa- s• cos 371
a y = (e< - abe·") sen tI - ac:~e-3< sen 371
2A - D sh2 ¿:¡tgh(l!., .1',,) = -PI
a a, b Y e son constantes, nos da curvas 1; = cte. a las que se puede
que resueltas nos dan tomar diversas formas ovaladas, incluyendo cuadrados de ángulos
!-,uuut::,,,uu,,. El efecto de un agujero tal, en una placa sometida a tracción
'P" sh ~¡ + PI sh 1:."
2 a
A l sido estudiado (empleando una función de tensión real) por M. Greens-
= - "2 sh 2 1;1 + sh2 Co, Mediante una generalización de estas coordenadas A, E. Greenll ha
D _ _ (Poi - PI) ctgh (1;1 - 1:.,,) la: solución para el caso de un agujero triangular de esquinas
- a sh2 1;1 + sh 2 .;" ;U~"l\H;<lU<" y haciendo uso de otra transformación <:le coordenadas, para
. de un agujero perfectamente rectangular.
Estas ecuaciones junto con las (P), completan la determinación de los
potenciales complejos. Cuando Po = O la tensión periférica en el orificio Las coordenadas curvilíneas dadas por la expresión
viene dada por z = 1; + iale'!; + ia.e'2' + ... + ia"e'"¡
. (rr,,). <. = -PI + 2p,(sh2 I;¡ + sha ¿:,,)-I(ch ¿:I la que al, a2, ... , a", son constantes reales han sido aplicadas por C. We-
- cos ,¡)[sh ~1 ctgh (~, - EtI ) + cos 1f] . al caso de· una placa semiiIldefinida. de borde ('dentado». Tal es el
1 • Véase el§ 32.
expresión, cuyo valor máximo ha sido dado ya en el § 26 • 'R. D. Míndlin, Proc. A.S.M.E., pág. 619, 1939.
G. B. Jeffery2 ha ·dado una forma general de la función de tensión en 'T. Poschl, Z. G/lgew.l'vIath. Mech., vol. 1, pág. 174, 1921 Y vol. 2, pág. 187,1922. Véase
coordenadas bipolares. Los potenciales complejos correspondientes se C. Weber, ihEd., vol. 2, pág. 267, 1922; E. Weínel, ¡bid., voL 17, pág. 276, 1937; Chih
Líng, J. Applied Phys., vol. 19, pág. 77, 1948.
obtienen fácilmente y comprenden las Ílmciones consideradas aquí, junto • Chih Bing Ling, ibid., pág. 405, 1948.
con las análogas bipolares de las funciones presentadas en los problemas .• R. Sen, Bull. Ca/culta Math. Soc., vol. 36, págs. 58 y 83, 1944.
del § 61, cuando se presentan fuerzas concentradas· y. dislocaciones. El "R. D. Mindlin, J. Applied Mecharl;cs (Trans. A.S.M.E.!, vol. 4, pág. A-l1S, 1937.
'R. D. Mindhn, J. Applied Physics., vol. 9, pág. 714, 1938.
método ha sido aplicado a los siguientes problemas: placa semiindefinida .• R. D. Mindlin, Phil. Mag., serie 7, vol. 26, pág. 713, 1938.
sometida en un punto cualquiera a la acción de una fuerza concentradaS, ., A. BnrjRn.ky, Qua,'. -1pplied Matlr., vol. 2, pág. 16, 1944.,
.. ,,, QuaTt. Applied ¡\tlath., wl. 2, pág. 60, 1944. Ve."" tambIén V. Morkovin, ibld., pág. 350,
I Un estudio completo del valor máximo ha sido realizado por' Coker y Filon, loe. cit.
'Loe. cit. u Proc. Roy. Soco ([,olldolZ), sed" A, voL 184, pág. 231, 1945.
• E. Melan, Z. a"gew. Malh. Mech., ·vol. 5, pág. 314, 1925. .' "C. Weber, Z. Ulllf.ew. Malh. Mech., vol. 22, pág. 29, 1942.
246 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
1 Math, Ann., vol. 107, págs. 282-312, 1932. Véase también Z. u1Ig//W. Math. Meeh .•
vol. 13, plÍg. 264, 1933. Una exposición de! método ha sido realizada por lo S. Sokolnikoff.
l.eelures cm tile Theory o[ Elastici/y, BTO'W University, 1941.
• El método e.q utilizado por Morl<ovin (véase la nota 10 de la pág. 245). La mayoría
de! trabajo de N. l. Musch"hohvdi y sus colaboradores esm en ruso. Su libro Singuu,r Integral
Equaliolls (2.' edición), que contiene las soluciones de diversos problemas de elasticidad b,-
dimensional, ha sido traducida por los Aeronautical Research Luboratories, Dept. of Sapply
oIld Developernent, Commonwealth of Australia (Traducción núm. 12, 1949). Otra traduc-
ción edItada por 1. R. M. Radok fue publicado por P. Noordhoff, N. V. Groningen, HO,lan- 67. Definición de la tensión en un punto. El estudio realizado
da, 1953. Muscheli§hvili da su método en Somo Bosi, Proble7lls of the Ma/he7llatical T/¡eor\'
nf Elastici/y, 3." edición, Moscú, 1949, traducida por ]. R. M. Rauok y publicado por P. Noord- los capítulos anteriores se ha limitado a los problemas bidimensionales.
hoff, Groningen, Holanda, 1953. Los resultados del tIpO cItado en las notas 10 y 11 de In ;qllsiderelrIlC)S ahora el caso general de la distribución de tensiones en tres
página 245 han sido ya obtenidos por los autores rusos que se citan en este último lIhro. IlrrleI1ISI()n¡~s. Como hemos visto (§ 4) las tensiones que actúan sobre las
caras de un elemento cúbico vienen definidas por las seis componentes
la tensión, las tres componentes normales U:c, a", (J. y las tres tangenciales
FIO. 132
varían de manera continua en todo el volumen del cuerpo, la que actúa remplazando los valores de X, Y y Z, de las ecuaciones (112)
sobre el plano BCD, al acercarse éste al origen cuando el elemento se hace Un = UJ,2 + uvm~ + u.n2 + 2TI/.mn + 2r••ln + 2r=u1m. (113)
infinitésimo, tenderá a un límite, que es la tensión correspondiente al plano
paralelo al mismo por el punto O. demos representar geométricamente la
variación de la tensión u" cuan-
Al establecer las condiciones de equilibrio del tetraedro elemental se cambia la dirección de la normal N, 'es decir, la orientación del plano
podrá despreciar las fuerzas másicas, según se explicó en el § 4. Asimismo considera, por medio de un radio vector de dirección N, cuya
podremos dejar de lado la variación de la tensión en las caras del elemento n¡;len:510,au r sea inversamente proporcional. a la raíz cuadrada del valor
pOlO ser de orden infinitesimal, y suponer una distribución uníforrne d~ del esfuerzo, esto es:
tensiones, de for.ma que las fuerzas que actúan sobre el tetraedro se deter- k
minarán multiplicando las áreas de sus caras por las respectivas compo- ,'=--
V¡;,;¡ (b)
nentes de la tensión. Si con A denotamos el área de la cara BCD las áreas
de las otras caras se obtienen proyectando A sobre los tres planos Coor- es una constante. Las coordenadas de la punta del vector serán
denados. x = Ir, y = m.r, ~ = nr (e)
Si N es la normal al plano BCD y escribimos:
l:{e:mI=.Ia¡~anlao en la ecuación (113) el valor
cos (Nx) = t, cos (Ny) = m, cos (Nz) = n (a)
k 2
las áreas de las otras tres caras del tetraedro serán CT n = +-
- r2 (d)
Al, Am, An ,UC'UU'L,;IU.U de la igualdad (h), así como los cosenos directores l, m, n, que
Sean X, Y, Z las componentes de la tensión que actúan en la cara "e"u,''''''' de las expresiones (e), tendremos'
BCD, paralelamente a los ejes coordenados respectivos. La componente
según la dirección x de la fuerza que obra sobre dicha cara será AX y
las componentes de las fuerzas que actúan en las otras tres caras del
tetraedro, en la misma dirección serán --Ala"" -·AmT",y, ·-Am,,% de se hace girar al plano BCD alrededor del punto 0, la extremidad del
manera que tendremos la siguiente ecuación de equilibrio del tetraedro: vect<?r r se mantendrá constantemente sobre la superficie de segundo
representada por la ecuación (114), la cual está perfectamente defi-
AX - Alo-z - .Amr"" - Anr".. =O por el estado de tensión en el punto O. Si cambiamos la orientación
De manera análoga, es decir, proyectando las fuerzas sobre los' ejes y los ejes ~el sistema de coordenadas rectangulares, dicha superficie
y z se obtienen las otras dos ecuaciones de equilibrio y dividiendo luego variará y tan sólo sufrirán modificaciones, las componentes del esfuerzo
(fv, <1z , 7:",y, 7: ... 7: yz , quedando alterados en consecuencia los coeficien-
ambos miembros de cada ecuación por el factor A, podremos escribir
de la ecuación (114).
X = u.l r""m+ +
r:un
Es sabido que dada una superficie de segundo orden como la que
+ +
y = r""l al/m r.un (112)
.nt·.. ~,,,n1r. la ecuación (114), siempre puede efectuarse una transformación
Z = r""l +
TI/.m +
a.n coordenadas que haga desvanecer los términos en que figuran los
Estas son las ecuaciones buscadas, ya que ellas nos permiten deter- de variables, esto es, que podremos hallar una terna ortogonal
minar las componentes del esfuerzo que actúa en un plano cualquiera referencia que origine la desaparición de las tensiones tangenciales,
que pase por el punto O, de orientación definida por sus cosenos direc- que significa que las tensiones resultantes son perpendiculares a los
tores 1, m, 11 siempre que sean conocidas las seis componentes del esfuerzo sobre los cuales actúan. A tales tensiones se las denomina tensiones
11"" Uy , 11., T"v, Tu .. T"" en dicho punto. tmmcibtzles. relativas al punto de que se trata. A sus direcciones, ejes prin-
1 En las ecuaciunes (el) y (114) se emplea el signo más cuando <1" es una tracción y el menos
68. Tensiones principales. Consideremos ahora la componente es una compresIón. Cuando las tres tensiones prinCIpales tienen el mismo sIgno, bas-
normal del esfuerzo, a" que actúa en el plano BCD (fig. 132). Empleando , con tornar un sIgno para los ecuaciones citadas, siendo enlol-'ces la superficie un el1psOlde.
las notaciones consignadas en (a) para los cosenos directores, tendremos las tres teImones prmcipales no tienen el mismo sIgno habrá' que conSIderar los dos signos
(d) y (114). Las superficies que resultan son un hiperboloide de dos hojas y un hiperboloide
u" = Xl + Ym + Zn . una hoja, ambos cq,n el mismo cono aSIntótico.
250 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES Y DEFORMACIONES EN TRES DIMENSIONES 251
cipales y planos principales a los planos sobre los cuales actúan. Se ve en Cada radio vector del elipsoide de las tensiones representa a cierta escala la ten-
seguida que la tensión alrededor de un punto queda completamente de- · sión que corresponde a uno de los planos que pasa por el centro del elipsoide. Para
· determinar este plano emplearemos, además, del elipsoide (116) la llamada superficie
fínida cuando se conocen las direcciones de los ejes principales y las mag- 4irectriz que está definida por In ecuación .
nitudes de las tres tensiones principales.
(117)
69. Elipsoide de las tensiones y superficie directriz. Si se Demostraremos que la tensión representada por un radio vector del elipsoide
de las tensiones, actúa en el plano paralelo al plano tangente a la superficie directriz
adoptan como ejes coordenados, x, y, z los ejes principales, el cálculo de por el punto ~n que la corta. En efecto, In ecuación. del plano tungente a la superficie
las tensiones que corresponden a un plano cualquiera resulta muy simple. directriz en un punto Xn, Yo, :a'n, es . .
Las tensiones tangenciales '"V, 'u, 'U%! son nulos en este caso y las ecua-
(a)
ciones de equilibrio del tetraedro (112) se transforman en
X = rr.l, Y = u"m, Z = u.n (115) ecuación que también puede escribirse así:
Zx+;ny+nz=h (b)
Remplazando los valores. de t, m, n, deducidos de estas ecuaciones en
la conocida relación ¡;.+m" + n2 = 1, tendremos en la cual h ·es la distancia del origen al plano tangente y 1, m, 1I los cosenos directores
.. de dicha perpendicular. Comparando (a) y (h) encontramos
2
X +Y2+ Z 2=1 (116) zon.
0'%2 ul ul' a• .,;:I- (e)
n
Esto significa que si la tensión que corresponde a cada uno de los Llevando esos valores a las fórmulas (lIS) resulta
infinitos planos que pasan por O se representa por un vector con origen X = z,h, Y = y';", Z = zoh
en dicho punto y cuyas proyecciones sobre los ejes sean X, Y, Z, el lugar lo que nos dice que las componentes del esfuerzo en el plano definido por los cose-
geométrico de las extremidades de dichos vectores será la superficie del nos directores 1, In, n son proporcionales a las c[Jordenadas Xo, Yo, 13'0, y, por tanto,
elipsoide cuya ecuación es (116). Esta superficie, representativa de las el vector representativo de la tensión pasa por el punto ~, Yo, .2'0, como se quería
tensiones, se denomina elipsoide de las tensiones. Sus semiejes son las demostrar 1 •
tensiones principales en el punto considerado. Resulta de aquí que la
. tensión máxima en un punto cualquiera es el semieje mayor del mismo 70. Determinación de las tensiones principales. Utilizando
elipsoide, esto es, el mayor de los tres esfuerzos principales correspon- la propiedad de que gozan las tensiones principales, de ser perpendiculares
dientes. . ·á·los planos sobre los cuales actúan, podremos determinar las direcciones
Si dos de las tensiones principales son iguales en valor absoluto el y magnitudes de las tensiones principales si conocemos las componentes
elipsoide de las tensiones es de revolución y si además ellas tienen el mismo· ·(le los esfuerzos que corresponden a tres planos coordenados. Sean 1,
signo, las tensiones resultantes en todos los planos que pasan por el eje .. m, 11, los cosenos directores de uno de los planos principales y S la mag-
de simetría del elipsoide serán iguales y perpendiculares a los planos en ni~ud de la tensión principal correspondiente al mismo. Sus componentes
que actúan. En este caso las tensiones que correspondan a cualquier serán, entonces:
par de planos perpendiculares que se corten en ese eje pueden conside- X =Sl, Y=Sm, Z = Sn
rarse como tensiones ·pÍ"incipales. Cuando las tres tensiones principales
son iguales y del mismo signo el elipsoide de las tensiones resulta ser una ..Remplazando en las ecuaciones (112) encontramos:
esfera y cualquier tema de direcciones perpendiculares entre sí puede ser (S - uz)l - 'T.."m - 'Tz,n = O
considerada como de ejes principales. Si una de las tensiones principales -'1"""Z + (S - uII)m -, '1"u.n = O (a)
es nula el elipsoide de las tensiones se reduce a una elipse y los vectores
representativos de las tensiones en todos los planos que pasan por el punto
-7". .1 - ?'l/.m +(S - rr.)n = O
son coplanares. El estado elástico correspondiente se denomina estado , (JU<J Mohr describe otro método para representar las tensiooes en un punto por medio
·'1, .. r<l'I,,, en su Technische Mechanik, 2." edición, pág. 192, 1914. Puede ",erse también A.
plano de tensión y ha sido ya estudiado en los capítulos precedentes. Cuando . :. F¡¡PII \ 1.. Félppl, Dra>lg wul Z•• ang, vol. 1, pág. 9. Y H. M. ·Westergaard. Z. angew. Math.
dos tensiones principales son nulas se tendrá el caso de una tracción o .. 'J1,," ,,,l. 4, pág. 520, 1924. Al estudiar los problemas bidirnensiones (§ 9) hemos dado
una compresión simples. ... ,.lgulll' .phcaciones.~e los diagramas circulares de Mohr.
252 TBORIA DE' LA ELASTICIDAD TllNSIONES y DE~'ORMAClONES EN TRES DIMENSIONES 253
Para que estas tres ecuaciones lineales y homógéneas en l, m, n tengan pasaremos a determinar l y m de manera que,. resulte máximo. Rem-
soluciones difel'entes de cero es necesario que su determinante sea nulo. :'"plnzando en la expresión (b), 112 por 1 - (la - m2 ), deducido de la anterior
Si calculamos' dicho determinante y lo igualamos a cero, obtendremos , ~cuación, calculando las derivadas ue l~ tensión tangencial T respecto a
la siguiente ecuación de tercer grado en S llamada ecuación característica , ,y a m e igualándolas a cero, llegaremos a las ecuaciones que nos permi-
'. tirán determinar los cosenos directores de los planos en los cuales • es
83 - (u", + CTu + <r.)82 + (rF.CTu + rFyCT, + u~u. - T y•2 - T u 2 - T",l)S , máximo o mínimo; ellas son
, - (l1"o<TyG"8 + 2T!J.T",.:~v - tT.Tu• u'!r•• 2
CT.T",l) = 0(118)
-
2
-
Las tres raíces de esta ecuación nos dan los valores de las tensiones prin-
+
1[(0": - u.) 12 (G"v - 0".)m 2 - HIT; - u.)] = O
(e)
m[(<r", - 0".)12+ (rrv - u.)m 2 - i«1'~ - G".)1 = O
cipales cuya sustitución eIl las ecuaciones (a), cuenta tenida de la relación
f + 2
m .~ n2 = 1, nos permite determinar tres grupos de cosenos di- obtiene una solución de estas ecuaciones haciendo l = m = 0, pero
rectores para los tres planos princip!l1es. , también podemos obtener soluciones diferentes de cero. En, efecto, ha-
.' Ciendo, por ejemplo, 1 = 0, la segunda de las ecuaciones (e) nos da entonces
Es de advertir que la ecuación (118) que permite determinar los valores de las
tensiones principales debe ser independiente de la dirección de los ejes coordena-
" = ± vr¡:. y con m = 0, de la primera de dichas ecuaciones, resulta
dos x, y, z, de manera que los coeticientes encerrados en paréntesis en la misma = ±vrr;. En general no existen soluciones de las ecuaciones (e) con
serán invariuntes. En consecuencia, los coeficientes de la ecuación (118) 'i y m distintas las dos de cero, puesto que en este caso las expresiones con-
tenidas en los paréntesis no pueden anularse.
(a) 11'~ + +'11",11'. ',:', ' Repitiendo los cálculos anteriores, eliminando 7n y 1 de (b), obtenemos
(b) d';r.rF"+ O'ur:1'; + O";r.U,. - T:;:i - T IIB' - r:;;.' ,Ías direcciones de los planos en los que r es máxima o mínima, direcciones
(e) O"::ff'ur1'% + 2T;t:¡/TflsT~:. - rr.T1J~2 - CTflTx~2 - o's.,:,,2 , cosenos directores damos en la tabla siguiente:
permanecerán .constantes cualquiera que sea el sistema de referencia. COSENOS DIRECTORES DE LOS PLANOS DE Trnax Y Tnun
~sto nos dice que la suma a", + Uy + u, de las tres componentes normales de la
tenslOn .en un punto, correspondiente a tres direcciones perpendiculares es cons.
tante e Igual n la suma de las tensiones principales en el mismo punto. '
1= O O ±1 O ±v'1 ±-v'T
71. Deteuninación de la tensión tangencial máxima. Supon- m= O :l::1 O ±-!I O ±~
, gamos que x, y, z son 105 ejes principales o 10 que es 10 mismo (1z, ull , (1. las
tensiones principales y l, m, n los cosenos directores de un plano dado. n= ±1 O O ±.J1 ±vT O
El cuadrado de la tensión resultante, correspondiente al mismo será,
con arreglo a las ecuaciones (115)
Las tres primeras columnas nos dan las direcciones de los planos de
82 = X 2 + yz + Z.2 = u: 2l2 + ITy2m2 + tT.2.n 2 coordenadas, los cuales coinciden, conforme al supuesto original con los
El cuadrado de la componente normal de la tensión en el mismo , planos principales; como para éstos la tensión tangencial es cero, es un
plano es, según la ecuación (113) rrl.Ínimo la expresión (b). Las columnas restantes dan los plunos que,
'conteniendo á los ejes principales, bisectan a los ángulos formados por
(a) ,los otros dos ejes principales. Remplazando en la expresión (b) los cosenos
, 'directores que corresponden a estos tres planos, llegamos a los siguientes
El cuadrad.o de la tensión tangencial en el mismo plano deberá ser
entonces ",:valores de las tensiones tangenciales correspondientes a los mismos:
, Si los ~jcs x y z de la figura 132 tienen las direéciones de las tensiones prin- en (b) los valores de x, y, z,dados por las ecuaciones (a). De este
cipales y SI OB = OC = on, de forma tal que In normal N 11 la cara oblicua del puede fácilmente demostrarse que los planos paralelos conservan
tetraedro tenga los cosenos directores I = m = 11 = l/...!3la tensión normal a esta paralelismo después de la deformación y que las rectas paralelas lo
cara, dada por las ecuaciones (a) o (113) es igual a: siendo una vez. deformado el cuerpo a que pertenecen.
a'n = ic"z + au + rr.) (d) Una superficie esférica de la barra, cuya ecuación es:
siendo llamada «tensión media», La tensión tangencial sobre esa misma cara dada (e)
~W~ ,
..' = t(.,..2 - rr~" + 0',") -l(a'~ + O'u + cr.» de aquélla, se transforma a consecuencia de la
pudiendo escribirse en un elipsoide cuya ecuación se obtiene remplazando en (e) las
."r,r...~i."n .." x, y, z deducidas de 11:\5 ecuaciones (a), hecho lo cual tenemos
z Bu au iJV)2
+ ( oY+élxOX+¡Jyoy+ozOZ
iJw oW OW)2
01 + ( oz+ ax OZ + ayOY + oz Ilz
Flo.134
Se supone que las cantidades "x, !5y, 6z, son infinitnmente pequeñas f= l2 au + m2 av + n2 ow + lm (iJU + é!x
av) + in (iJU + aw)
y, por lo tanto, los términos de grado superior al primero, así como sus az ay oZ ay OZ ax
productos, serán infinitésimos de orden superior y como tales pueden
despreciarse en (b). Lns coordenadas del punto O, después de la defor-
+ mn (aviJz + aw)
iJy
(120)
mación, serán:
éJu ou OU · Relación que nos dice que podrá calcularse el alargamiento de un elemento r
0:1: + UI - U = 6x + ""x ax + - ay + - 8z
oy OZ ·'slempre
, ' GU ,.. ((JU
que se conozcan las expreslones-;-, -;- -1 - , etc. L a ecua- ov)
av av av '. . <.x ely (Ix
+ VI .'- U =
lr¡¡ ay + -a ox + -a liy + - OZ
x y az
(c) 'ción (120) puede expresarse en forma allis simple si empleamos las si-
OZ + W¡ - w =
ew aw oW
oZ + - lix + - oy + - liz
guientes notaciones:
é!x é!y OZ
dU aw
iJx = E~, Tz'= E.
Estas coordenadas, como se ve, son funciones lineales de las prImI- (e)
tivas, óx, ay, (jz, y conforme a la definición dada en el § 72,'ln deformación ¡Ju Bv av Bw
de un elemento muy pequeño de un cuerpo en el punto O puede entonces ay + ax = "(;v, é!z + ay = "(".
considerarse como homogénea.
Pasemos a considerar el alargamiento experimentado por el elemento así:
r .. El cuadrado de su longitud después de la deformación será igual a la (121)
suma de los cuadrados de las nuevas coordenadas del punto O, que están
17 -TEOtU/t, na lA P.I.A..'n'Je-IOAn
TENSIONES Y DEFORMAClONES EN TRES DIMENSIONES 259
258 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
El significado físico de las cantidades (" ... , Yv~ ... ha sido explicado en el . un punto determinado. Trl1-cemos para ello en la dirección de cada ele-
§ 5 Y según se indica en el mismo Ex, f y , E.. son los alargamientos espe- mento lineal, tal como r (fig. 134), un radio vector cuyo valor sea:
cíficos en las direcciones x, y, z, en tanto que Yxv, Y,m l'uz son las dis- Ca)
torsiones correspondientes a esas mismas direcciones. Como en dicho
párrafo se anuncia, queda aquí demostrado que el alargamiento de un
elemento cualquiera que pase por el punto O podrá ser calculado, apli- Razonando, entonces, como se ha indicado en el § 68, concluimos
cando la ecuación (121), en función de las seis componentes de la defor- . que el lugar geométrico de las extremidades de los radios vectores corres-
mación. · pondientes es la superficie de ecuación.
En el caso particular de una deformación homogénea las componentes
u, v, w, del desplazamiento, son funciones lineales de las coordenadas ± k2 = e,,:¡;2 + Euy') + e.z 2 + "Iu.Yz + "I".xz + "I:r:uXY (123)
de manera que, según las ecuaciones (e) las componentes de la deformació~
Esta superficie queda completamente determinada por el estado de
son constantes en todos los puntos del cuerpo, esto es, que, en dicho
caso, todos los elementos del cuerpo se deforman igualmente. ·deformación en el punto considerado y es independiente de la orientación
de los ejes coordenados rectangulares. ~s siempre posible dar a estos
Al estudiar la defonnación en el entorno de un punto O es muchas veces nece- ejes ortogonales, direcciones tales, que los términos de la ecuación (123)
sario saber cuánto varía el ángulo que forman dos elementos lineales que pasan por que contengan productos de variables desaparezcan, lo que entraña la
ese punto. Sean 1 112" n, los cosenos directores del elemento r (fig. 134) después .. nulidad de las variaciones angulares en tales direcciones. Estas han re-
de la deformación," y 1,',71/,', n¡', los de otro elemento r' caracterizado por valores. cibido el nombre de ejes principales de deformación; los planos corres-
l', m', n' antes de la deformaci6n. Aplicando las ecuaciones (e) y (a) y considerando fi
corno cantidad infmitésima, tendremos como expresiones de los primeros pondientes, pla1UJS principales de deformación y las deformaciones respec-
tivas, deformaciones principales. De todo ello resulta evidente que los ejes
1, = Ií;¡;
r(!
+ 111 - U=
+ E)
1 (1 _•+ élU)
lJ:¡;:
+ m lJu; + n ~
ay az
· principales de deformación siguen siendo perpendiculares después de
.. ocurrida la deformación, de manera que un paralelepípedo rectangular
+ 11, - ) v =1-
líy iJv +m ( 1 - . +au) av . de caras paralelas a los planos principales se conservarán como tal después
m., = +. r
(1
a:¡;: ay- +n-
a21 (J)
de la deformación. En general sufre una pequeña rotacióll.
líe + w, - w iJw aw ( aw)
nl = r (1 +.) - ... 1- az + m -ay + n 1 - • +-as
Si los ejes x, y y z coinciden con los ejes principales de deformación,
ia ecuación (123) se transforma en: .
y o~ras tanta~ ~cuacionesanálogas pnm los cosenos directores del elemento' r'. La ·co- ± k2 = f',X2 + E"yZ + E.Z2
noclda ecuaCIOll que da el coseno del .ángulo formado por dos direcciones, aplicada
a las de los dos elementos después de la deformación, nos da: En este caso, la dilatación de un élemento cualquiera cuyos cosenos
.directores sean t, m, n, valdrá, con arreglo a las ecuaciones (121):
COS (1'r') .= 1,1,' + m,m,l + n,n, l
(124)
Las ecuaciones (f) !lOS darán, considerando como cantidades muy pequeñas los alar-
gnmien tos E y fi' en dichas direcciones, . y según la ecuaclon (122) la deformación tangencial o distorsión corres-
pondiente a dos direcciones r Y r', perpendiculares entre sí, estará dada
. cos (rr') = (W + 111m' +..?1.n') (1 - _ - .') + 2(.,ll' + _.mm.' + .,nn')
por la fórmula:
+ 7",(1nn' + m.'n) + 7z,(nl' + n'l) + -r•• (ll1t + l' m) (122) (125)
Si las direcciones r y r' fueran perpendiculares entre sI, resultar!a:
Resulta de lo que antecede que la deformación en un punto está com-
U' + mm' + nn.' = O . pletamente determinada si se conocen las direcciones de los ejes prin-
. cipales de deformación y las magnitudes de los alargamientos principales.
y entonces la ecuación (122) da el valor d~ la distorsión que sufre el ángulo formado
La determinación de unos y otros se efectúa de una manera análoga a la
por esas direcciones.
· que se explicó en el § 70. Puede también demostrarse que cuando el sistema
74. Ejes· principales de deformación. La ecuación (121) nos · d~ ejes coordenados experimenta un giro, la suma f" + €JI + f. permanece
constante. Como ·~e sabe, el significado físico de esta suma es simple:. se
permite ·interpretar geométricamente la variación de la deformación en
260 TEORIA DE LA l!L~STlCIDAD TENSIONES Y DEFORMACIONES EN ,!,RES DIMENSIONES 261
trata de la dilatación cúbica causada por la deformación que se produce emos escribir las 'ecuaciones (a) en la forma
E. oX + iy"" ay.+ h .. OZ - lA_ By + iJ)1I 021
alrededor de un punto. U¡ - u =
VI - V = h%fl IJ:¡; + Ev By + hu. oz - w" óZ + "'. ax (b)
75. Rotación. En general cuando un cuerpo se deforma, un ele- Wl - W = -tr•• óx + -tY1I. ay + 'Es oz -' WlI &¡; + ay(0)",
mento cualquieru de superficie cambia de forma y sufre una traslación
y una rotación. A causa de la deformación transversal las aristas no sufren descompone los desplazamientos relativos ~n dos partes: una que
la misma rotación y es necesario entonces definir, qué se entiende por depende de las componentes de la deformación y otra que depende
rotación del elemento. Un elemento rectangular cualquiera puede llegar nIC:aIlCleIlte de las cantidades W ZI W y , al ••
a tomar la forma, posición y orientación finales mediante la aplicación Podemos ahora demostrar que CO:Z:I COy. co. son, de hecho, las componen-
al mismo, en su estado inicial (no deformado) de las tres operaciones de la rotación 3 más arriba citada. Consideremos la superficie defi-
siguientes. por la ecuación (123). El cuadrado de un radio cualquiera es inversa-
proporcional a la deformación unitaria del elemento lineal de la
1. Se aplican las deformaciones E" Ey , E'., )'xy, y ... , )'yz al elemento, dirección y la forma de la ecuación es:
el cual· está orientado de' forma tal que his direcciones de las deformacio-
nes principales no giran. F(z,y,z) = constante (e)
2. Se traslada el elemento hasta que su centro ocupe la posición final.
3. Se gira el elemento hasta que tome su orientación final.
consideramos un punto vecino ex + dx, y + dy, z + dz) situado en
superficie, se cumpliní la relación:
La rotación de la operación 3 es evidentemente la rotación de las aF da;
- + -aF aF
dy + - dz = O (d)
direcciones de la deformación principal, siendo, por lo tanto, indepen- OX iJy iJz
diente de [a dirección de [os ejes x, y, z. Debe poder ser evaluada si se
conocen los desplazamientos U , V, w. Por otra parte es evidentemente .' El desplazamiento dx, dy, dz, se efectúa en una dirección cuyos cosenos
independiente de las componentes de la deformación. dlrectores son proporcionales a dx, dy, dz, y las tres cantidades oF¡ox,
Puesto q\le la traslación del elemento no tiene ningún interés para oF¡oz, definen igualmente otra dirección de cosenos directores
nosotros, podemos considerar, como en el § 73 Y en la figura 134, el des- a ellas mismas. El primer miembro de la ecuación (á)
plazamiento relativo de un punto 0 1 respecto al centro O del elemento. entonces proporciomü al coseno del ángulo formado por esas dos direc-
Este desplazamiento viene dado por las ecuaciones (b) del § 73. las cuales, por ser ese coseno cero, serán perpendiculares entre sí.
que dx, dy, dz, repre~enta un elemento cualquiera del plano
Ul-u=-ax+-oy+-o¡:
vU vU vu a la superficie, la dirección representada por oF¡ox, BF¡oy, aF¡oz,
Bx ay vz la de la normal a la misma.
Bv oV oV
VI - V = -
ax OX +-éJy ay + -éJz oz (a) En el caso estudiado F(x, y, z) es el segundo miembro de la ecuación
(123). En consecuencia:
Wl -
iJw
W = 8z 8x + oW vW
ay ay + az 021 aF'
! l = 2e,;t:
uZ .
+ 'Y""Y + 'Y:z=Z
Sustituyendo la expresión (e) del § 73, de las componentes de la defor- iJF
mación, e introduciendo igualmente la notación! ay = 'Y",yX + 2~yy + 'Yv,Z (e)
iJF
! (OV .: . éitt ) = '" (126)
éJz = 'Y""X + 'Yv'y + 2E.Z
2 ax ay •
Habiendo trazado )a superficie definida por la ecuaClon (123) con e[
1 Examinando In figura 6, se ve fácilmente que o1·/~.-.: y - lila)', que entran en la expresión punto O como centro (fig. 134) podremos identificár lix, liy, {¡z [ecuacio-
., (11, son las 'rotaciones, en el sentido de lns agUjas del reloJ, sufrIdas por los elementos li-
"nes (b)] con :.;, y, z [ecuaciones (e)].
neales O'A', O'B'. a partir de sus posiciones miclules OA, 08; (lJ:t es) por Jo tanto, la media
de estas rotaciones y W,& y WIJ tienen el mismo significado en sus planos respectivos. Consideremos"l!hora el caso particular en que IJJ", COy Y COz son nulos. Los
262 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
1. ¿Cuál es la ecuación, del tipo f(x, y, z) = O, de la superficie, de centro O, proponemos efectuar, ahora, el análisis de la variacióm de la tensión
que se convierte en una esfera x" + y" + z" = r al sufrir la deformación homo- 'cambiar la posición del punto. Para ello debemos establecer las con di-
génea del § 72? ¿De qué tipo de superficie se trata? de equilibrio de un elemento, de forma de paralelepípedo rectan-
FIG. 135
Si el problema consiste en determinar el estado de tensión que se . corre-spondtcntc a un conjunto dado de funCiones E" .oo, ~' ti "', puede en..
:,:contn".e en A. E. H. Lave, Malhematjcal Theory of Elas(jciIY, 1-.A ediCIón, pág. 49, e l. S. 50-
origina en un cuerpo sometido a la acción de fuerzas dadas, es necesario Mathematical Theory 01 Elasticity, pág. 24, 1946.
266 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
TEOREMAS GENERALES 267
e + a2Eu
2
E", ~ a
2
'Y:v 1 . Si se lleva esta última a la ecuación (d) y para simplificar la escritura se
ayl a;¡;2 ax ay el símbolo:
e2 E¡¡ a2E, a2'Y.o
ez2 + ay2 = ay ai
e e. +
2
alt;" = 82'Y.3,
eXZ az2 ax oZ
Las condiciones expresadas por las ecuaciones (129) pueden trans- '.'" (1
"".
+
v) ( vle - V20"" -
e)
-02 2
0:v
- JI ('vla - -8 2
ex!
e)
formarse en relaciones entre las componentes de la tensión, utilizando la
ley de Hooke [ecuaciones (3)]. Tomemos, por ejemplo, una de ellas: = (1 + v) ( -eX
ax -
8Y az)
-ay - -az (e)
a e"
2
a E.2
82'Yu.
(e)
8z 2 + ey2 = ay az otras dos condiciones de compatibilidad del tipo (e), permiten escribir
ecuaciones análogas a la anterior.
De l.as ecuaciones (3) y (4) resulta, teniendo en cuentll la igualdad (7),
Sumando ordenadamente las tres ecuaciones del tipo (e) así obtenidas,
mediante una transformación sencilla:
1
e" = E [(1 + v)O"v - ve] (1- JI)V2€) = -(1 + JI) (ax + aY + az)
éJx ay 02
f. = E1 [(1 + v)O". - ve]
.J:\.'"IJl.p"''''<Ul''U en la ecuación (e) el valor de 2 e, que resulta de esta última
2(1 + v)r••
'"tll< = E
V20"", + _1_ aZ8 = _ _ v_ (ax + ay + az) _ 2 ax (1)
1 + v ax2 1- v ax ay al, az
Remplazando en (e) estas expresiones, obtenemos:
2
2ll + aZu a2e) = 2(1 + v) ay
obtener tres ecuaciones de esta clase, correspondientes a las
(1 + v) (<J
. azU
2 éJ y2
o) _ JI (a02a2 + ay2 8
az
2
TI/0 (d) nr"TTl .. r.", tres ecuaciones del grupo (129). Análogamente, las tres condicio-
de ese grupo pueden transformarse en ecuaciones del tipo
El segundo miembro de esta ecuación puede transformarse empleando .
las ecuaciones de equilibrio (127). En efecto, de las dos últimas resulta:
Vr2 + __1 _ a~e = _ (az + ay) (g)
u' 1 + p ay az ay az
~ = _ 80". _ 87"" _ Z
ay az ax
Oru. _ aO"u _ IJTorv _ Y Con las fuerzas másicas constantes o nulas (f) y (g) nos dan:
a; = ay ax a28
(1 + v)V2r". + ayaz = o
Sumando las derivadas de la primera ecuación' con respecto a z y de la a8 2
(1 + v)V r•• + 8X az = o (130)
2
segund~ con respecto a y, se tiene:
20". 20"u Z
2 a2711' = _ 8 _ 8 _ ~ (8T•• + OT%I/) . . . az _ ay (1 + 1I)V r.u + aa 8. = o
2
ay az az2 ay2 ax aZ ay al, ay x ay
o bien, si se tiene en cuenta la primera de las ecuaciones (127): Se ve pues, que además de las ecuaciones de· equilibrio (127) y las
;,cc)Delkiofles de borde (128), las componentes de la 'tensión en UI). cuerpo
2 a2T1I'. = a20"" _ 0 20"11 _ ~2rT. + g _ aY _ az :'ls,Eltrono habrán de satisfacer a las seis condiciones de compatibilidad (f)
ay 8z ax2 ay2 az 2 élx ay éJz ';(g) o a las seis ebndiciones (130)_ Este sistem~ de ecuaciones basta, por
268 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TEOREMAS GENBRALES 269
10 general, para determinar sin ambigüedad alguna las componentes de constantes de las ecuaciones (h) pueden ser calculadas fácilmente,
la tensión (véase § 82). manera que satisfagan las condiciones de vínculo., Más adelante se
Las ecuaciones que expresan las condiciones de compatibilidad con- :exuonen diversos ejemplos de cálculos de esa naturaleza.
tienen, según se ha visto, tan sólo derivadas segundas de las componentes
de la tensión. Por lo tanto, si las fuerzas exteriores permitieran satisfacer Las ecuaciones de equilibrio' como funciónes de los des-
las ecuaciones de equilibrio (127) conjuntamente con las condiciones Un método que permite resolver los problemas de
de límite (128), mediante unas componentes de la tensión que fuesen ,.,,,,.,,-"",,.,, es el que conduce a formular tres ecuaciones de equilibrio cuyas
constantes o funciones lineales de las coordenadas, las ecuaciones de com- ......'6 .... "" son las tres funciones li, v, w. Para ello se elimina de las ecuacio-
patibilidad quedarían idénticamente satisfechas y este sistema de tensiones y (128) las componentes de la ten~ión recurriendo a la ley de
representaría la solución correcta del problema. En el capítulo 10 desarro- y' !l las ecuaciones (2), que nos penniten expresar las componentes
llamos varios ejemplos de problemas de esta clase. la deformación en función de los desplazamientos. Sustituyendo (11)
(127) tenernos:
78. Detenninaci~n de los desplazamientos. La ley de Hooke
él u.
[ecuaciones (3) y (4)] nos. permitirá determinar las componentes de l~ u", = X.e + 2{}-
&:c
(a)
deformación una' vez calculadas las componentes de la tensión, mediante
las ecuaciones anteriores. Para determinar los desplazamientos u, v, w,
se utilizan entonces las ecuaciones (2). Derivando éstas con respecto a
x, y, z, se pueden obtener 18 ecuaciones entre las 18 derivadas de u, v, w,
y calcular así dichas derivadas. Para u, por ejemplo, tendremos: T. u = G'Y'"1J = G (&1t
y ay)
ay + ai
(b)
a2.u. ae", T ••
aw au)
= G",•• = G ( O:C + élz
a:i;2 = a:c'-
(a)
éFu ae",
. a:c ay = ay'
u' = a + by - cz ex. + G) ;; + G V v + y 2
= O (131)
~. v'=d-bx+ez (b)
w'=f+c;J;-ffJj (X. + G) ~; + G V 2w + Z = O
Esto significa que la~ tensiones y las deformaciones no determinan por
.'cuando no existen fuerzas nUlsicas, se tendrá:
completo los desplazamientos y que a las ecuaciones que los expresan,
deducidas de (127), (128) Y (130), podrá añadirse .el desplazamiento
(X
oe + G V4¿ =
+ G) ax O
que corresponde a un movimiento n In manera de cuerpo rígido. Las cons-
tantes a, d, J, en las ecuaciones (h), representan un movimiento de tras-
(A + G) oe + G V2y = O (132)
lación del cuerpo y las constantes b, e, e, son las tres rotaciones del cuerpo ay
rígido alrededor de los ejes coordenados. Cuando existen vínculos bas-
tantes para impedir el ~ovimiento del cuerpo como si fuera rígido, las (A + G) :: + G vaw = O
270 TEORrA DE LA ELASTICIDAD TEOREMAS GENERALES 271
Derivando la primera de estas ecuaciones con respecto a x. la segunda puede demostrar que esta solución es general y que una de las cuatro
con respecto a Y. y la tercera con respecto a z. y sumando miembro a ~UI.'<;llJH<'"
puede ser suprimida. sin perder generalidad.
miembro las igualdades que' se obtienen. se llega a: tipo de solución ha sido adapta~o a las coordenadas curvilíneas
NeuberI, quien 10 ha aplicado a la solución de 'problemas relativos
(A + 2G) V e =
2 O
de revolución, generados por hipérbolas (cilindro con entalla-
de donde resulta evidentemente que la dilatación cúbica, e. satisface a la hiperbólica) o elipses (cavidad con forma de elipsoide de revolución).
. ecuación diferencial transmiten tracción, flexión. torsión o esfuerzos tangenciales normales
'su eje. junto con flexión.
(133)
81. Principio de superpOS1Clon. La solución del problema rela-
a un cuerpo elástico dado, limitado por una superficie conocida y
La misma conclusión es aplicable al.caso en que las fuerzas másicas sean
a unas determinadas fuerzas másicas, exige la determinación
constantes para todo punto del cuerpo.
componentes de la tensión. o de los desplazamientos. que satis-
Remplazando los valores que dan las ecuaciones (a) y (b) en las con-
las ecuaciones diferenciales y las condiciones de contorno. Si de-
diciones de borde (128), hallamos:
trabajar COIl las componentes de la tensión se deberán cumplir:
ecuaciones de equilibrio (127); b) las condiciones de compatibilidad
X = Ael + G (éI'U
élz
+ ay
au m + OU
OZ
n) + G (élU 1+ oV m +
élx o:r;
él-w n) (134)
élx e) las condiciones de contorno (128). Sean Ur., ... , T:r:u, ••• , las com-
de la tensión así determinadas, las cuales han sido producidas
las fuerzas superficiHles X, Y, Z. y las fuerzas másicas X, Y, z.
Definidas as! completamente las tres funciones u. v, w, mediante
. Si llamamos CJ",,' ••• T"y', ... a las componentes de la tensión producidas
las ecuaciones (131) y las condiciones de borde (134), podremos obtener
las componentes de la defonnación aplicando las ecuaciones (2), y luego
.el mismo cuerpo por las fuerzas superficiales X', Y', Z' y las fuerzas
X', Y'. Z', las componentes CJ"" + CJ",,'• ... '%y + ¡",g', ... ,represen-
las componentes de la tensión, valiéndonos de las fórmulas (9) y (6). En
las tensiones causadas por las fuerzas superficiales X -1- X', ... , y
el capítulo 15 se hace aplicación de estas ecuaciones.
fuerzas másicas X + X' ... Esto es así por ser lineales todas las ecua-
dife(enciales y las condiciones de contorno. Añadiendo, de esta
e 80. Solución general para los desplazamientos. Se comprueba la primera de las ecuaciones (127) a la ecuación correspondiente:
fácilmente que las ecuaciones diferenciales de equilibrio (132), expresa-
das en función de fas desplazamientos, son satisfechas .por: ou,.' + ~T,;,/ + 01",,/ + X' = O
o:r; ay oZ
las tensiones producidas por las fuerzas X + X', ... , X + X' • ...
1 Esta solución h. sido dada independiente por P. F. P.pkoyitch, Compt. relld., yol. 195.
resultado constituye el principio de superposición.
plÍgs. 513 Y 754. 1932, Y por H. Neuber, Z. tmgew. Ma/h. Mech., yol. 14, pág. 203, 1934. Otr.s
solucionES generales ban sido dadas por B. Gaierkin, Compt. rend., yol. 190, pág. 1047, 1930.
Y por Bouss;ncsq y Kelv;n (véase Todhunter y Pearson, I1istory 01 Elastici/y. vol. 2, parte 2.", • H. Neuber, Kerbspannmlgsle/¡re. Esta obra contiene tambi6n la solución de problemas
pág. 268). Véase también R. D. Mindlin, Bull. Am. Math. Soc., 1936, pág. 373. bídim"nsiom.les. Véase ... el capítulo 7 del presente libro.
272 TEORIA DE I,A EL~ICIDAD TEOREMAS GENERALES 273
Al deducir las ecuaciones de equilibrio (127) y las condiciones de con-
torno (128), no hicimos ninguna distinción entre la posición y forma
del elemento antes y después de aplicar la carga, De ello resulta, que ~
!l ( '
-
O..t
0''''_" )_ + a-("--ay
T"" 1 - •
T"'I" )
. + ----8"Z----
él ( '
T •• - 1/)
Ta:, _ o
nuestras ecuaciones y las conclusiones de ellas deducidas, son válidas
solamente si los pequeños desplazamientos producidos en la deforma-
ción no afectan sustancialmente la acción de las fuerzas exteriores. Existen
casos, sin embargo, en los que es preciso tener en cuenta esa modificación.
En este caso la justificación del principio de superposición, que acabamos
de dar, fulla.
Esto ocurre, por ejemplo, en el caso de una viga sometida simultánea-
mente a tina carga lateral y a otra carga, aplicada según su dirección
· \in las que todas las fuerzas exteriores se anulan. Las condiciones de com-
longitudinal; otros mllchos ejemplos se presentan en el estudio de estruc-
turas con paredes delgadas. · patibilidad (129) serán también satisfechas por las componentes corres-
:pondientes de la deformación Er' - E",t', .. ;, ¡IXy' - YXy", ...
. Esta distribución tensional corresponde, en consecuencia,a fuerzas
82. Unidad de la solución. Estudiemos ahora, si las ecuaciones
· inásicas y de superficie nulas_ El trabajo realizado por tales fuerzas durante
precedentes pueden tener más de una solución, dadas unas determinadas
· el proceso de carga es cero, siéndolo también, por Jo tanto, J.rJVD dx dy dz.
fuerzas más'icas y de superficie. Supongamos que Ir",', ... , t %V', ... ya,,:', "., · Ahora bien, dado que, como se deduce de la ecuación (85), VD es positivo
:..=.,," .'"
representen dos soluciones correspondientes a las mismas cargas '. para cualquier estado de deformación, la integral se anulará, solamente,
X, ... , X ... Aplicando, entonces,. las ecuaciones (127) y (128) a la primera · 'si VD es nulo en todos los puntos del cuerpo, 10 cual implica que lo sean
solución tendremos:
.·cada una de las componentes E/ - Ex", "., y%y' - y;¡.y" ... En consecuen-
.cia, los dos estados de deformación Ex' ... , J'",,, , ,,_ y Ex" ._. y",,," . __ son idén-
: 'tiCos, lo que demuestra que para unas cargas determinadas la solución de
las ecuaciones es únÍca l.
Acabamos de probar la unicidad de la solución, basándonos en la
x = u,,'l + "".I m + "".'71 hipótesis de que las tensiones existentes en \ln cuerpo, desaparecen cuando
. el mismo es liberado de la acción de las fuerzas exteriores. Hay cicrtos
': . casos, sin embargo, en los que pueden existir tensiones iniciales en un
'cuerpo sin que ninguna fuerza exterior sea aplicada. Un ejemplo de este
"tipo ha sido encontrado al estudiar el anillo circular (véase el § 39). Si
. junto con las condiciones de compatibilidad.
se practica un corte siguiendo dos secciones transversales adyacentes
De igual forma considerando la segunda solución, tl'rlCmos:
de un anillo y se unen de nuevo los bordes obtenidos, soldándolos o me-
él" al! a" + X diante otro proceso cualquiera, se obtiene un anillo en el cual existen
al' + T:ay + ...2='
-~ o
y
= tensiones iniciales". Varios ejemplos de este tipo han sido estudiados al
iJz
. . . . . . . - . . . ~
.considerar los problemas bidimensionales.
............. Asimismo pueden presentarse tensiones iniciales en un cuerpo sim-
x= rr,,/Il + T./'m + T:/'n plemente conexo como resultado de las deformaciones no elásticas, s\lfri-
I Este teorema se debe a G. Klrchboff. Véase su VorlesILlIgm iiber Math. Phys., )!.1echa,,¡k_
• El anIllo representa el ejemplo más sencillo de cuerpo múltlplcmcnte conexo. Para I()~
cucrpos de este tipo, IRS ecunClones generales de la elasticidud, expresadas en funCIón 00 I"q
componentes de In tenSión, no !:Ion suflcitmtcs pal'U determinar las tenslones y SI se desea llnu
junto, también, con las condiciones de compatibilidad. solución completa, un estudio adiCIonal de los desplazamientos es necesario. Las primel·.I~
investigaCIones de este tipo fueron renlizadas por J. H. Mich~lI, Proc. Londa". Math. Soc.,
Restando las expresiones precedentes se encuentra la distribución ':01. 31, pág. 103, 1899. Véase también L. N. G. Fdon, Bn"I. As,oc. Advallcemellt. Sci. Rept .•
de tensiones, definida por las diferencias a:c' - (J ~ ", ••• , T "'v ' - 7".v ", las 1921, pág. 305, y V. Volterra, Su> l' equilibre des corps e/as tiques tII11ltiplemellt conIl8x¡l.s, AWI. ecnle
cuales satisfacen las ecuaciones: I/orm., París, sone 3( vol. 2+, pÁgs. 401-5.17, 1907. Otros datos sobre las tenSIones Inlctnles
se encuentran en la memo na de P. NémenYI, Z. angew. !VIat/¡. Meell., vol. 11, pág. 59, 1931.
das durante el proceso de fabricación. En ciertas piezas metálicas grandes, Llevando esta expresión a (h), se deduce que el segundo y tercer término
por ejemplo, pueden existir tensiones iniciales considerables, producidas de (a) se convierten en:
J- JI J.(0G'.' + ay +
por un enfriamiento no uniforme; de igual forma el laminado de barras
metálicas puede originar notables tensiones, a consecuencia de la defor- X lUZ as + X lUZ da; dy == f'
(J:&
OTZV' X J) ..:/ dy
UZ uX
+ JJ(~U;G't' + ~~ZTZ1J')dXdY
mación plástica producida por el trabajo en frío. Las ecuaciones de la
elasticidad no bastan entonces para determinar las tensiones iniciales, (e)
siendo necesario añadir información sobre el proceso de fabricación al
cual ha. estado sometido el cuerpo. De forma semejante el segundo y cuarto término nos dan:
Es de advertir que en todos aquellos casos en los que se puede usar
el principio de superposición las deformaciones y tensiones producidas
por la acción de las fuerzas exteriores, no son afectadas por las tensÍpnes
f }\V2 ds + JJ Y 1V2 dx dy = JJ(O;;' + 8;;' + Yl) v: dx dy
iniciales, pudiendo ser calculadas de la misma forma que si tales tensiones
iniciales no existieran. Las tensiones totales se obtienen, entonces, aña-
+ f f (~~ <Tu' + :~ T%V) dx dy (d)
diendo a las iniciales las prod.ucidas por las- fuerzas exteriores. En los casos
en los que el principio de superposición no es aplicable, las tensiones . Observando ahora que, como consecuencia de las ecuaciones de equilibrio
provocadas por las fuerzas exteriores no pueden ser determinadas si no se .. (i8), los primeros términos de los segundos miembros de las ecu!lciones
conocen las tensiones iniciales. No podemos, por ejemplo, calcular las ten- .(c) y (ti) se anulan, se obtiene, sustituyendo en la ecuación (a):
siones de flexión producidas por cargas laterales en una barra delgada
que está sometida a una tracción o una compresión, sin conocer previa-
mente la magnitud de esas tensiones iniciales.
'1' = fJ (Et"rr'/ + El/"a,/ + '''f"u''r%u') dx dy
83. Teorema de reciprocidad. Limitándonos al caso de los pro- == E lJf¡"'% 11 G'~'+ "'u'""'" - vrt~ rr. - Ya~lI~u'
11' _ v
blemas bidimensionales, consideremos una placa sometida a dos sistemas + 2(1 + p)r",,"-r=v') dx dy
de cargas distintos. Sean Xl, Yt, Xl e YI las componentes de las fuerzas
másicas y de contorno del primer sistema y X a, Ya, X'a e Ya las del SC7 El mismo. resultad? se obtiene calcu~ando el trabajo realizado por las
gundo. Los desplazamientos y las componentes de la deformación y de la fuerzas correspo?,dlent~s ni segundo slstema de cargas, sobre los despla-
tensión, correspondientes a los dos sistemas de carga, serán designados zamientos del prlIDer sistema. Podemos pues concluir que si se comparan
Ul, 1h J Ex', E'y)', "'%yl, l1 z ') (]1/', T~V' Y U2, V2, €3:"7 ~u", r~'IJ'" (1:/', d ,;", tXY",
respectivamente. Consideremos ahora el trabajo que producirían las fuer-
zas del primer sistema al actuar sobre los desplazamientos del segundo.
Su valor es:
T = JX l u 2 ds + IY l v2d-s + JJX1U2dxdy + JJY¡v 2 dxdy (a)
extendiéndose la primera integral a toda la curva que limita la placa y Q-ll--h-'lt_ _ ->H (b)
la segunda al área de la. misma. Sustituyendo x..
por su expresión, dada -l-
por la ecuación (20) del § 14, podemos escribir el primer . término del FlG. 136
segundo miembro de (a), de la forma siguiente:
JXIU2 ds = Jla,,'u2 ds fmr",/u2 ds+ (b) dos estados tensionales diferentes, el trabajo realizado por las fuerzas del
Procediendo ahora en la forma Índicada en la página.193 se obtiene: primer estado al actuar sobre los desplazamientos del segundo es igual
: . al trabajo de las fuerzas del segundo sobre los desplazamientos del pri-
1 Iduz ds = ff 1¿2 O;;' dx dy +f1~~2 G',,' ax ay
mero. Este enunciado constituye el teorema de reciprocidad, el cual puede
ser extendido fácilmente a cuerpos en movimiento o en vibración, con-
teoría de estructuras, en la construcción de las 'líneas de influencia. Tiene :disminuirá en la cantidad (1 - 21,)pljE. El teorema de reciprocidad,
asimismo útiles aplicaciones en teoría de elasticidad. icado a los dos sistemas de tensionesl de la figura 137 nos dará:
Consideremos ahora el ejemplo sencillo de una barra prismática com-
p. (1 - 2v)pl = Ap
primida por dos fuerzas! P,' iguales·y opuestas (fig. 136a). El problema
E
de encontrar las tensiones producidas por estas fuerzas es complicado,
pero nosotros vamos a suponer que estamos interesados en conocer, no la' disminución de volumen será entonces:
las tensiones sino el alargamiento total o de la barra. Se puede resolver
A _ Pl(l - 2v)
este problema rápidamente haciendo uso del teorema. Con tal fin, consi- L.l- E
deremos la adición, a las tensiones correspondientes al caso de la figura
136a, de la tracción axial de la figura 136b. Para este último caso obtene-
84. Carácter aproximado de las soluciones de los estados tensionales
mos una contracción lateral igual a ~l = vQh/AE, donde A es el área de ···planos. Hemos señalado en la págma 48 que el conjunto de ecuaciones que bastan
la sección transversal de la barra. El teorema de reciprocidad nos permite . determlllur los problemas planos de tensión, bujo lDS hipótesis hechas (a, = Tu =
escribir: = 0, "r, "u, T",u, independientes de z), no cumplían todas las condiciones de
cOlupatibil.id:¡d. Estas hipótesis implicaban que €" E,,, E" )'TlI sean independientes
Qh z y que yn, }'u=; sean nulas. La primera de las condiciones de compatibilidad (129)
P . v AH = Qó fue incluida en la teoría de los estados planos de tensión como ecuación (21). Sc veri-
. fica fácilmente, que lns otras cinco son satisfechas solamente si E, es función lineal
de donde el alargamiento producido por las dos fuerzas P, de la figura 136a, de x e y, lo que más bien es excepción que regla para las soluciones obtenidas en los
será: capítulos 3 a 7. Evidentemente, tales soluciones no pueden ser exactas, pero como
veremos a continuación, sin embargo, constituyen excelentes aproximaciones para
ó = JlP~ el caso de placas delgadas.
Busquemos las soluciones exactas de las ecuaciones tridimensionales, en las que ":
AE
{1;: = 'l'~= = t'1Il: = O
resultando ser independiente de la forma de la seccIDn transversal.
y. las fuerzas másicas son cero. Tales soluciones deben satisfacer las ecuaciones de
Como segundo ejemplo, calculemos la disminución de volumen .J de
. equilibrio (127) y las condiciones de compatibilidad (130).
un cuerpo elástico, producida por las dos fuerzas P, iguales y opuestas, . Dado que 0'" T." T.", son nulos la tercera, cuarta y quinta de las ecuaciones (130)
de la figura 1370. Como segundo estado tensional, consideremos al mismo (leyendo por. columnas) nos dan:
cuerpo sometido a la acción de una presión p uniformemente repartida.
fz (~:) = 0, 3...
ay éJz
(.JO) = O '
.3...
iJ;;
(ae)
iJz
= o
que quiere decir que oOloz es constante. Designando ka su valor, tendremos,
0:
. al integrar respecto a z
o= kz + o. Ca)
'donue 00 es una función arbitraria de x e y.
La tercera de las ecuaciones (127) es verificnda, entonces, idénticamente y las
'. pos primeras toman la forma bidimensional.
(bJ a.. , -1- aT~v = O
FIG. 137
ax éJy ,
que son satisfechas, como antes, por:
En este último CllSO tendremos en todo punto del cuerpo una compresión (b)
uniforme (según todas las direcciones) de vlllor (1 .~ .2¡,)p/E [véase la
ecuación (8) del § 6] y la distancia l entre los puntos de aplicación A y B siendo ~,ahora, función de x, y y z.
1 P"ra otrAS aplicaCIones del mIsmo tIpO véas~ A. E. H. Love, Mathemal,eal Theory of
I Podemos suponer que las fuerzas se reparten sobre unft pequeña superficie con el fin
de evitar Singularidades. La consideración en problemM bidimensionales de fuerzas (ideales) HlastlClty, +,' ~ÚICIÓll, pág•. 174-176, 1927.
concentradas, conduce generalmente a obtener desplazamientos de valor infinito, lo que , A. elebsch, I!.'lasllLlllll. § 39. Véase también A. E. H. Love, Malhemulical TheorJ' of
mdica que los desplazamientos reales dependen de la distribución de la carga. Elastieity, 4.' ediclón~ pág. 145, 1927.
278 TEORIA DE LA EL:ASTICIDAD TEOREMAS GENERAL)lS 279
Volviendo a las ecuaciones (130) y recordando que Q = (J~ + (Jv + <1.. obser- Si calculamos (1~, (Jy, T:u a partir de (1) mediante las relaciones (b), los términos:
vamos que sumando las tres ecullciones de la izquierda tenemos:
A+~x+Cy
V'9 == O (e)
no intervienen pudiendo, por tanto, ser anulados 10 que equivale a tomar para a,
y, por tanto, usando (a): , b, e, el valor cero en (h).
Limitándonos a los problemas en los que la distribución de tensión es simé-
(d)
z
'trica respecto al plano medio, = 0, el término "',z
debe también ser cero, siéndolo,
donde: por 10 mismo, el factor k de (a). La ecuación (,) se reduce entonces a:
'02 o'
V,, == é)zl + ay'
Resulta entonces, siendo <1. nulo y viniendo dados G% y Gu por las dos primeras
ecuaciones (b), que podemos escribir 171 '''' = e, que sustituyendo (a), queda: No obstante '" y fJo vienen relacionados por (e), donde ahora podemos hacer k = O.
Sustituyendo entonces 0) en (e) y usando (d), tenemos:
(e)
VI'OPO = 0 0 (kj
donde eo es 'una función de x e y que satisface la ecuación (d). Teniendo en cuenta y, por tanto, según (d):
las expresiones (a) y la primera de las (b), la primera de las ecuaciones (130) se con-
vierte en: (1)
Las restantes ecuaciones de (130) son satisfechas, habida cuenta de la ecuación (a)
(1 a'", + ~'= O
+ .)V2 ay' (f) y de que <1., ',m T~., son nulos.
az'
Podernos ahora obtener una distribución de tensiones eligiendo una función ~II
Pero: " de x ey que satisfaga la ecuación (l), obteniendo fJo a partir de (k) y '" a partir de úl
v. ay'
é)'cP = ~
iJy'
V"", = ~
ay'
(,?'" + Oz' a' (9
a'",) == ay' u
+ az'
0'<1» Las tensiones, entonces, 'se obtienen mediante las fórmulas (b). Cada una de ellas
consta de dos partes, la primera que se deduce de .po en la ecuación (J), la segunda
donde, en la última igualdad, se ha usado la ecuación (e). Se puede, entonces, habida del término - ~ 1+,. eo"'. A la vista de la ecuación (l) se deduce, que la primera
cuenta de (d), sustituir o'e.lax' en (f) por - o"eo/ay', resultando:
parte es exactamente igual a la componente plana de la tensión determinada en los
(1 + ..).E:..
ay'
(a. -1- az'
0'<1» _ 13'90 == O
ély'
capítulos 3 a 7. La segunda parte, proporcional a z', puede reducirse a un valor
tan pequeño como se quiera, eligiendo una placa suficientemente delgada. De ahí
o ,lo, que es lo mismo: la conclusión de que las soluciones de los capítulos 3 a 7, que no satisfacen todas las
condiciones de compatibilidad sean, sin embargo, buenas aproximaciones para
placas delgadas.
-a' (a'</>
- v 9 0 ) ==0
--- (g)
ély' az' -1, 1 + .. Las soluciones (ICXactas~, representadas por funciones de tensión del tipo (;"),
Podernos usar esta ccuación en lugar de la primera de las (130). De forma amUoga exigen que las tensiones en los bordes y en cualquier otro punto, sigan una variación
la segtmda' y tercera pueden remplazarse por: parabólica a lo largo del espesor. Cualquier alteración, sin embargo, de esta distri-
bución, que no cambie la fuerza por unidad de contorno, altera la tensión, según el
élz' élz'
V)
a" (a o</> + 1 + .. o, = 0,
él'
éJ$ ély
(a'tI> v
a;¡ + i + ve.
)
= o " principio de Saint-Venant (§ 18), solamente en la vecindad inmediata del borde.
Las soluciones del tipo considerado hasta aquí, representan siemprt: la tensión real
y las componentes er., T",,, Tu, serán efectivamente nulas salvo en la proximidad del
Estas ecuaciones y la Vi) muestran que las derivadas segundas respecto a x e y de borde.
la función (de x, y y z), cgntenidas en el paréntesis, se aQullln. Esta función es, por
tanto, lineal 'en x' e y, púdiendo escribirse:
éJ'tI> + ___v _ o.
i)z2 1 + p
= CL + f¡:¡; + GY (h.) Problemas
donde a, b y e son funciones arbitrarias de z. Integrando esta ecuación dos veces l. Demostrar que:
respecto a z, obtenemos:
'. = lc{:l!' + y'), EU == k{y' + ""), 'Yov = k'zyz
tP = -
1
2 "
1 + v e •e' + A + Ex + Oy + ""z + "'. E~ = 'Yu == 1'116 -= O
, donde k y k' son cantidades pequeñas constantes, no es un estado posible de defor-
donde A, B, C) son fundones de z obtenidas por integración repetida de a, b, c. mación.
y"'" {Jo funcioneS de x e y, arbitrarias por el momento. 2. Un sólido e~, calentado de forma no uniforme a la temp~ratur,~, T función
280 1'E01UA DE LA ELASTICIDAD
Flc. 138
lo que nos dice, que si las tensiones de tracción están uniformemente La solución (b), concordante con la que dan generalmente los textos
¡·epartidas en las bases de una 'barra prismática, en cada sección recta elementales de resistencia de m!1teriales, satisface también a las ecuaciones
. de compatibilidad (130) y por lo tanto, es la solución correcta del problema
habrá una distribución uniforme de tensiones normales. En este caso las
relaciones (a) satisfacen a las ecuaciones (127) y (128) Y constituyen la . para una repartición uniforme de fuerzas en la base superior del prisma.
solución correcta del problema, puesto que las condiciones de compatibi- Pasemos ahora a considerar los desplazamientos (ve¡:- §. 78). Para la
lidad (130) quedan satisfechas idénticamente. . aplicación de [a ley de Hooke empleamos las ecuaciones. (3) y (6), con
La .solución (a) deja de ser correcta cuando los esfuer~os de extensión lo cual llegamos a:
no se reparten uniformemente sobre las extremidades, porque entonces aw u, pgz
no se satisface en éstas a las condiciones de límite. La solución verdadera E~ = ez =]j = E Ce)
resulta, entonces, más complicada, a causa de que la distribución de ten-
au éJiI poz
siones en una sección transversal deja de ser uniforme. Al tratar algunos E% = E¡¡ = eX = ay = -v E (d)
problemas de elasticidad bidimensional (píÍgs. 75 y 197) hemos encon-
.
~=~=~=_+_=_+_=_+_=o
uU uV u'u uw av uw W
trado ejemplos de ese género de repartición de tensiones.
Sea ahora, como segundo ejemplo, ercaso de una compresión hidros-
ay ax az ux az ay
tática, uniforme. Con fuerzas másicas inexistentes, las ecuaciones de
equilibrio (127) quedan satisfechas, tomando: Los recorridos u, 7), w pueden obtenerse, entoncell, integrando las ecua-
ciones anteriores. Por integración de (e) se obtiene:
CTz = "11 = CT, = -p, Tzv = '1"",. = '1"". =O (e)
pgz2
El elipsoide de tensiones es, en este caso, una esfera, 10 que quiere decÍl' w = 2E + Wo
que tres direcciones perpendiculares cualesquiera pueden ser conside-
radas como direcciones principales, y el esfuerzo en un plano elegido en la cual w. es una función de x y de y, que se determinará más adelante.
arbitrariamente es una tensión normal de compresión igual a p. Las con- . Remplazando este último valO!· en las ecuaciones (e), encontramos:
diciones periféricas (128) quedarán satisfechas, evidentemente si la oresión
p está uniformemente distribuida en la superficie del cuerp~. .
z de las cuales resul ta:
86. Barra prismática extendida por acción de
su propio peso. Si '!g es el peso específ.ico del mate-
rial de la barra (fig. 13·9), las fuerzas másicas serán: u = -za:;
aWn
+ UD, v = - zéJwo
- +vo
ay
(g)
FIG. 139 rF. = paz, Si recordamos que UD y VD son independientes de z, concluiremos que las
ecuaciones (h) quedarán satisfechas, solamente si se verifica:
o lo que es lo mismo, suponiendo que cada sección transversal está sujeta a
una tracción uniforme originada por el peso de la parte de la barra situada auo = avo =O (k)
por debajo de aquélla. 8x ay ,
Fácilmente se comprueba, que para las superficies laterales, sobre Por sustitución de las expresiones (g), que nos dan u y V, en la primera de
las cuales no actúa fuerza alguna, las condiciones periféricas (128) están las ecuaciones (e), tendremos:
satisfechas. Para la extremidad inferior de la barra, de longitud l, las con-
diciones de límite se traducen en tensiones nulas y en una tensión exten- -2z U2wo + auo + uvo = O
sora, uniformemente distribuida, U;¡; = (¿gl, sobre la extremidad superior. ". ax ay ay. éJx
284 TllORIA DE LA ELASTICIDAD PROBI.EMAS ELEMENTALES DE ELASTICIDAD TI{WIMI,NSIONA1. 285
y puesto que 110 y VD no dependen de z, será necesario que: 11" \ 11 dcfmltlvlI, loi'l dc¡;plH)::lIlII,·,IlO, ,,,11:
82w o = O u = l'pg:cz
axay , -~
Las ecuaciones (k) y (l) nos permiten establecer las expresiones gene- v=
rales de las funciones uo, VD, wo. Es fácil demostrar que todas estas ecua-
ciones se cumplen para los valores: w = pgEZ2
2
+ 2~
vP (x' + y2)
E
g - Pgl.:
2E
'Uo = oy + 01 aquí resultu, que los puntos que están sobre el eje de las z efectúan
VA = -8x + "Y1 únicamente desplazamientos verticales, dados por:
dedor del punto A UIl área elemental, en un plano paralelo al xz, con lo T = Ger (a)
cual, en dicho punto";·"se tendrá ov¡ox = O. Aplicando las ecuaciones (m),
las seis condiciones mencionadas, relativas al punto A, se convierten en: L·ü" la cual, G, es el módulo de rigidez. Las componentes de la tensión
"tangencial según los ejes x e y son:
-IXI + 01 = 0, -f31 + "Y1 = O, pgl2 + -v -
2E." ,-
° Ty, = GfJr . :: = GOx
r
a = 0, fJ = O, o= O (b)
T~, = -GfJr·
" 'r!!. = -GOy
de donde resulta:
acuerdo con la teoría elemental, se supone también que:
01 = 0, "Yl = O,
lFz = (1" = (J, = T"" =O
286 TEORIA DE LI). ELASTICIDAD
PROBLEMAS ELEMENTALES DE ELASTICIDAD TRlDIMENSIONAL 287
IJodemos demostrar que bajo ciertas condiciones, esta solución ele-
MI, Y son prácticllmente independientes de la re·partición de
mental es exacta. Para ello, tendremos presente que todas las componentes
que reine en las extremidades.
de la tensión son, si no nulas, funciones lineales de las coordenadas, de
'&PLdai
A .x
t~l_l~a
-:-
JI
~~h-l
~
.x
x
O :le (a) (6)
.r ..
--Z
A
y
-7:.
x,z;
¡O'la. 141
(d) ecuaciones, élsí cumo las designadas con (f) (·,il.\en que se cumpla:
wo=mx+ny+p
Tomando en consideración las condiciones de sustentaclOn de la barra, ¡;y2
las ecuaciones diferenciales anteriores permitirán determina.' los desplaza- f¡(y) = 2R + ay + 'Y
mientos como en el § 86. De la ecuación (b) ·resulta inmediatamente
XZ
f2(X) = -a;¡; + f3
W = R + Wo
las que m, 11, p, CA, j"J, 1', son constantes arbitrarias. De esta manera, las
en la eual Wo es función de x y de y solamente. De la segunda y tercera iones que corresponden a los desplazamientos serán'
ecuación, que resultan de la serie (d), tenemos entonces:
Z2 vx2 ¡;y 2
Bu z awo 11 = - 2R - mz - 2R +2R + cq¡ + 'Y
Bz = - Ii -ai'
v = -nz - /lxy - ax + fJ
de las cuales: R
awo Bwo XZ
u =-
Z2
2R - Z -aX" + 'UD, v = - zay
- +vo (e) ~o = R +m:¡;+ny+p
y = ±b + v = ±b (1 - ~) FICl. l42b
x
(136)
y
constante D se denomina rz"gzaez de fleJ.,"ión de la placa. En el caso
z z en que la placa adquiere la forma de superficie cilíndrica de
··ap,n"ra1tril,p~ paralelas al eje y tendremos a2 wléJy2 = O y de acuerdo con
FrG. 143 Pre.14+
ecuaciones (136): . '
el momento de inercia por unidad de longitud, la relación entre MI y R
será, con arreglo a lo explicado en el párrafo precedente, MI = -D 82w2
ilx
(137)
(a) Ma = -vD éJ2w
il;¡;2
Si llegaron a actuar momentos flectores en dos direcciones ortogo- el caso particular en que M 1 = M2 = M, tenemos
nales (fig. 144) las curvaturas de las superficies deformadas pueden obte-
nerse por vía de superposició.n. Sean 1/Rl y IIR2 las curvaturas de las
superficies elásticas en los planos paralelos a los ejes de coordenadas
zx y zy y M~ Y M 2 los momentos f1ectores por unidad de longitud de los placa adquiere, entonces, forma esférica y la relación entre la curva-
bordes paralelos a los ejes y y x, respectivamente. Aplicando la ecun~ión y el momento flector es, según las ecuaciones (e)
(a) y el principio de superposición, resulta
M = Eh 3 .l = D(l + v) (138)
12(1 - v) R R
1 12 )
Rl = Eh3 (MI - pM2
tendremos oportunidad de emplear estos resultudos.
1 12 ) (b) Las fórmulas (136) son L1sadas en la teoría de placas, cuando los mo-
Ra = Ehs (M 2 - pM l
flectores no son uniformes y vienen acompañados de presiones
'lIT,,·r·tl"I~II·" y fuerzas tangenciales. En esas circunstancias esas fórmulas,
Los momentos se consideran de signo positivo si al deformar la placa, son una aproximación válida pa-ra placas delgadas, se deducen de hlS
ésta muestra su convexidad hucia abajo. Despejando M J y M 2 en las .cc:uaClcme:s generales del capítulo 9. La teoría elemental de la flexión de
ecuaciones (b) resulta bartas puede relacionarse con las ecuaciones generales de manera seme-
(~ + ~)
3 1 .
M _ Eh V
1 - '12(1 - ]12) R¡ R 2
(e) J. N. Goodicr, Trans. Roy. Soco Can., 3.a ediCión, sección IIJ, vol. 32,
M 2 = 12(1 _
Eh 3
]12)
( 1 . 1)
R, + R¡ V
I pág. 65, 1938.
que la torsión es causada únicamente por los pares que actúan sobre
extremos de la barra, estando libres las caras laterales de la acción
toda fuerza exterior. Una sencilla experiencia realizada con una barra
(fig. 146) muestra que las secciones transversales de la barra
permanecen planas al sufrir la torsión y que la distorsión de los e1e-
entos rectangulares de la superficie es máxima en el centro de los lados
decir, en los puntos más próximos al eje de la barra. '
y b) un alaoeo de las secciones transversales; igual para todas ellus. Tomando y cuyas normales son perpendiculares al eje z, tenemOs X = Y = Z = O
el origen de coordenadas en una de las secciones extremas (fig. 147), Y cos (Nz) = n = O. Las dos primeras ecuaciones (128) son idéntica-
encontramos que los desplazamientos correspondient~s a la rotución de mente satisfechas y la tercera da:
las' secciones transversales son:
(e)
u = -(Jzy, ti = Ozx (a)
lo que significa que la tensión tangencial resultante que actúa en el con-
donde (}z es el ángulo de rotación de la sección transversal distante z del torno, tiene por dirección la de la tangente al mismo (fig. 148). Anterior-
origen. mente demostramos (pág. 294) que esta condición debe ·ser satisfecha si
El alabeo de las secciones transversales estará defrnido por una función: sobre la superficie lateral de la barra no actúa ninguna fue~za.
. w·= 8tP(x,y) (b)
Partiendo de los desplazamientos (a) y (b) supuestos, calculamos las
componentes de la deformación mediante las ecuaciones (2), obteniéndose:
¡-----4--x
E~ ~ = E. = 'Y::v = O
ElI
"I=- = aw + au = () (a!fJ _ y)
ax az ax
(e)
aw av (a ift )
"111' = - + - = (J - + x
. ay éJz ay .
definido por las componentes T;¡,: y 7:"z. La función 1jJ(x, y), que define el
De esta fOlma todo problema de torsión se reduce a la detenninación de
alabeo de la sección recta, debe ser detenninllda ahora, de forma que sa-
una función 1p que satisfaga la ecuación (139) y las condiciones de con-
tisfaga las ecuaciones de equilibrio (127). Llevando a estas ecuaciones la
torno (140).
expresión (d) y despreciando las fuerzas másicas vemos que la' función
Otra manera de operar que ofrece la ventaja de simplificar la expresión
.'1' debe satisfacer la ecuación:
de la condición de contorno es la siguiente. Habida cuenta de la anula-
í)2!fJ + a'l,J¡ = O (139)
ción de IJ'z, (FII' (1., T:z: v [ecuación (d)), las ecuaciones de equilibrio (127)
ux 2 ay2 se reducen a:
Consideremos ahora las condiciones de contorno (128). En las super- éJ-rz • = O,
ficies laterales de la barra, sobre las que no actúa ninguna fuerza exterior .. az
298 TEORrA DE LA BLASTICIDAD TORSION 299
Las dos ecuaciones primeras son cumplidas ya t¡ue T Z% Y Ty , son, según las ocurre con el extremo inferior de la barra de la figura 147. En los extremos
ecuaciones (d), independientes de z; La tercera significa que podemos las fuerzas tangenciales se distribuyen de igual manera que las tensiones
expresar T;I:% y t'y% de la forma: tangenciales en las secciones rectas. Es fácil probar que la resultante de
esas fuerzas es un par. Sustituyendo en ias ecuaciones (g) los valores (141)
(141) y observando que <{J es cero en el contorno se obtiene:
-0¡P = G8 (01/1)
- - y, - -ocf; = GIJ (o",
- + x) (j)
ay ox OX ay
Si eliminamos tp derivando la primera .expresión respecto a y y la segunda
respecto a x y restándolas, encontramos que la función de tensión debe
satisfacer la ecuación diferencial; Vemos, pues, que la resultante de las fuerzas distribuidas sobre los ex-
tremos de la barra son cero y que estas fuerzas representan un par cuya
(142) magnitud es:
en la que:
F = -2GIJ (143)
MI = fj (Yx - Xy) dxdy = - f f ~:zdzdy
La condición de contorno (e), introduciendo las ecuaciones (141),
-f J~: y da; dy (h)
se convierte e{l:
Integrando por partes y teniendo en cuenta que '" = O en el contorno,
o¡P dy + orJ¡ dx = d¡p = O (144) encontramos:
dy ds oz ds ds
(145)
Lo que nos dice que la función de tensión r/> debe ser constante a lo largo
.del contorno de la sección transversal. Si se trata de directrices que sean contribuyendo cada una de las integrales del último miembro de las ecua-
recintos simplemente conexos (barras macizas) esta constante puede ser ciones (h) a la mitad del valor del par. Vemos así que una mitad del par
elegida arbitrariamente, asignándosela el valor cero en el estudio que sigue. es debida a la componente t'",: Y la otra a 'y.'
La determinación, entonces, de la distribución de tensiones en la sección Queda así demostrado que la distribución de tensiones que se obtiene
transversal de una barra sometida a torsión, consiste en determinar la .. suponiendo que los desplazamientos vienen dados por (a) y (b) Y deter-
función r/> que satisfaga la ecuación (142) y se anule en el contorno. Más minando las componentes t':u Y T U% mediante las ecuaciones (141), (142).y
adelante, daremos algunos ejemplos de aplicación de esta teoría general (144), satisfacen las ecuaciones de ~quilibrio (127), anula las fuerzas apli-
a diversos casos particulares de secciones transversales. cadas sobre la superficie lateral de la barra y da en 105 extremos el par ex-
Consideremos ahora las condiciones existentes en los extremos de pr~sado .por (145). Las condiciones de compatibilidad (130) ~o necesitan
una barra sometida· a torsión. Las normales a esas secciones extremas son ser consideradas dado que las tensiones han sido deducidas de los despla-
paralelas al eje z. En consecuencia l = m = O, n = ± 1 y las ecuaciones zamientos (a) y (b). Las ecuaciones de la elasticidad quedan, pues, satis-
(128) se convierten en: fechas y la solución del problema de la torsión, así obtenida, es la exacta.
(g) Como se ha hecho notar esa solución exige que las fuerzas en los ex-
tremos de la barra, se distribuyan de una cierta ni:mera. No obstante, las
en las que el signo positivo debern tornarse para el extremo de la barra aplicaciones prácticas de la solución no se lúnitan a casos de ese tipo, ya
cuya normal exterior tenga el sentido del semieje positivo de las z, como que, según el principio de Saint-Venant, a suficiente distancia cl,e los
1 Esta función ha sido introducida por L. Prandtl. Véase Physik. Z., vol. 4, t"9(iJ. extremos de un'l. barra larga sometida a torsión, las tensiones dependen
300 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 301
solamente de la magnitud del momento de torsión Mt y son prácticamente ecuaCión (ti) se convierte en:
independientes de la distribución de fuerzas que exista en sus bases.
cp = --
M,
7rab a 2
(x
-
2
y~ )
+--1
b2
(f)
de donde: (147)
(e)
· Para a = b esta expresión coincide con la conocid¡l fórmula correspon-
· diente a la sección circular:
La ecuación (145) permitirá ahora determinar la constante F. Sustituyendo
Sustituyendo (e) en (143) resulta la siguiente expresión para el ángulo
el valor (e) en esta ecu·ación tendremos:
de torsión:
M, = á~~~2 (~f I 2
x dxdy +~ fJ 2
y dxdy - ff dXdY) Cd) (148)
Puesto que:
.·Damos el nombre de ngidez torsional al factor por el cual debe dividirse
· ~I momento torsor para obtener el ángulo específico de torsión. Si los
JI 2
y dxdy
7rab3
= 1" = T' , ~enotamos por e, su. valor, de (148), para el cas~ de sección elíptica es:
donde: partes real e imaginaria de esta expresión son soluciones de la ecuación (b)
la pág. 214). Tomando, por ejemplo, 1/ = 2, se obtienen las soluciones x' - y'
Con 1/ = 3 se tienen x' - 3xy2 y 3x'y - y'. Con 71 = 4 llegamos a soluciones
A = lI'ab, IU,"'''JU'''' homogéneas de cuarto grado y así sucesivamente. Combinando tales solu-
podremos obtener otras varias de forma polinómica.
son el área y el momento polar de inercia de la sección transversal. . Tomando, por ejemplo: .
Conocidas las componentes de la tensión (146) podemos determinar
fácilmente los desplazamientos. Las componentes u y 1) vienen dadas por <P = F
422
- - (z' + y') - .-
- (:l;' + y') + 4>, = F[1
~
1 (x' - 3:vy') + b ] (el
obtendrá una solución de la ecuación (142) que será un polin"omio de tercer grado
dos constantes a determinar a y b. Este polinomio será solución del problema
·mlrSll~lU" si satisface a las condiciones de contorno (144), o lo que es lo mismo si
... contorno de la sección transversal de la barra tiene por ecuación:
!2 (:l;' + y') - 1.
~
(x' - axy') +h = O (f)
diversos valores a la constante (h) de esta ecuación, obtendremos otras tantas
para la sección transversal.
b = - (2/27)«' se obtiene como solución el triángulo equilátero. La
Momento torsor en este caso tendrá la forma:
Fu... 150 (:1; - V3v--ia)(:I) + V3U - ¡a)(x +1-a) = O
(150)
Esto prueba que las curvas de nivel de las secciones alabeadas son hipér-
bolas cuyas asíntotas son los ejes principales de la elipse (fig. 150).
y
92. Otras soluciones elementales. En el curso de un estudio del problema
de la torsión, Saint-Venant analizó varias soluciones polinómicas de la ecuación (142). FlG. 151
Para resolver el problema representamos la función de tensión de la forma:
que es el producto de las ecuaciones de los lados del triángulo mostrado en la figu-
<P = <PI + F4" (x' + y') (a) · ra 151. Observando que F = -2GO y sustituyendo:
(J2"'1 8'</>1 ea las ecuaciones (141) obtenemos las componentes de la tensión T., y 'gr. Por razo-
iJ:I;' + ¡¡y' =0 (h)
· nes de simetría a 10 largo del eje x, "n = O y entonces deducimos de (g):
y a 10 largo del contorno, según (144):
(h)
F
<PI +¡ (:!l' + y') = COllstant (e)
· La máxima tensión se produce en los puntos medios de los lados del triángulo donde,
El problema de la torsión se reduce entonces 11 la obtención de las soluciones de la · con arreglo a (h), tiene el valor:
ecuación (h), que satisfagan a la condición de contorno (e). Con el fin de llegar G8a
a soluciones de forma polinómica, tomemos la función de variable compleja: Tm= = 2 (/c)
(x \- <y)" En lus vértices del...~iángulo, la tensión tangencial es cero (véase la fig. 151).
304 1'EOIUA DI.! LA ELllb"l'WlOAD TORSION 305
Sustituyendo (;¡) en la ecuación (145) se obnen'e: dedujo Saint-Venllnt que la rigidez torsional puede calcularse
ap.rOl,mla(lalne.n~e mediante la ecuación (143), es decir, sustituyendo el eje
M. = UOa<_ = ~ 6GI" el) por uno de sección elíptica con iguul área y momento polllr de inercia.
15.ya 5
En todos los casos estudiados por Saint-Venant, la tensión máxima
Si como solución ele In ecullción (142) se toma un polinomio de cuarto grado
.';"'Tr""noncliÓ a los puntos del contorno' más próximos al baricentro de
que contenga solamente potencias pares de ., e }', obtendremos la siguiente función
de tensión: recta, Posteriormente las investigaciones más detalladas de
2 2
al]
4> = -Ge [ 1- (x' + y') - - (a;4 - 6a;2y2 + y~) + - (a - 1)
2
mostraron que existen casos en los .que los puntos con tensiones
si bien pertenecen al contorno, no son los más próximos al
de la sección transversal.
La condición de contomo (144) queda satisfecha SI el contorno de la sección trans-
I'ersol tiene por ecuación: Tomando n = 1 y 11 = - 1 en la expresión (d) y usando las coordenadas polares
tenemos las siguientes soluciones de lu ecuación (b):
;¡;' + y' - (t(z! - 6:1:'1/' + y') + a - 1= O
\Ta1'iando a, Saint-Venant obtuvo una familia de secciones transversales como las .p, = r coa.p, 4>1 = !'eoa,¡,
T
que muestra la figura 152 a.. Combinando solucIOnes polinómicas de cuarto y octavo
grado Saint-Venant llegó a la sección recta que representa la figura 152 b. de tensión (a) podrá tomar entonces la forma:
F Frz
Basándose en sus investigaciones, Saint-Venant formuló ciertas con- q, = '4 (x" + yO) - T r 008..p + Fb'C\
"2 T COS '" -
F
'4 bS (m)
clusiones generales de interés práctico. Demostró quc para contornos
simplemente conexos y para una determinada área de la sección, la rigidel. . la que a y b son constantes. La condición de contorno (144) se cumplirá si en el
torsional aumenta cuando el momento polar de inercia de aquélla dismi- contorno de la sección recta tenemos rP -" O ó, sei¡(¡n (m):
(6) /J \ ' . ·resulta una circunferencia de radio a tangente del eje y en el origen. La tensión
:Y tungenciol máximo se da en el punto A y es:
fo1G.152
"-m.. = Ge(2rz - b) (p)
!luye. En consecuencia, dada una cierta cantidad de material, la máxima Cuando b es muy pequeña comparada con {l, es decir, cuando se tiene una ranura
rigidez a la torsión se obtiene en un eje de sección circular. Conclusiones . longitudinal semicircular de radio muy pequeño, la tensión en el fondo de la ranura
. es tÚ doble de la tensión máxima corresponeliente al eje de sección circular de radio el
semejantes resultan de considerar la máxima tensión tangencial. Para un
entalladura.
par de torsión y un área de sección transversal dados, el menor valor de
la tensión máxima corresponde a la figura de mínimo momento polar
. t L. N, G. Filon, Tra1ls. Roy. Soco Latido", serie A, vol. 193, 1900. Véase también el
de inercia. trabajo de G. Polyo, Z. G/lgew. Malh. Mech" vol. 10, pág. 353, 1930.
Comparando diversas secciones rectas de contornos simplemente 2 ESle problema fpe estudiado por C. Weber, Forschu1Igsarbc¡ttm, núm. 249, 1921.
93. Analogía con la membrana. La· analogia con la membrana, la ecuación (142) y la condición de contorno (144) (véase el § 90)
introducida por L. Prandt1' ha resultado de gran utilidad para la solución la función de tensión ~,se deduce que estos dos problemas son idén-
de problemas de torsión. Imaginemos una membrana homogénea (fig. 154) Podemos entonces deducir de las flechas de la membrana los valores
cuyos bordes se mantienen fijos sobre un contorno igual al de la sección ~ sin más que sustituir la cantidad '-(g/S) de la ecuación (151) por
transversal de la barra sujeta a torsión, que es sometida a una tracción cantidad F = -- 2GIJ de la ecuación (142).
Mediante la representación de la superficie deformada de la membrana
1i~,7'X
curvas de nivel (fig. 155) se pueden obtener varias conclusiones im-
¡'ortantf~s relativas a la distribución de tensiones en la torsión. Conside-
un punto cualquiera B de la membrana. La flecha a 10 largo de la
rva de nivel que pasa por este punto es constante y se tendrá:
z
az = O
as
ecuación correspondiente para la función de tensión será:
él<fJ = (at/JdY + a</>d:c\ = T dy _ 'J'. dz ='0
as ay ds o:c ds} :rz ds' ~. ds
que expresa que la proyección de la tensión tangencial resultante
·.'t:I:U'It.:l'UU
el punto B, sobre la normal N a la curva de nivel es cero, deduciéndose
la tensión tangencial en el punto B tiene la dirección de la tangente
~Irl~~
FlO. 154
uniforme sobre sus bordes y a una presión uniforme sobre sus caras. Sea
q la presión por unidad de superficie de la membrana y S la tracción unifor-
me'por unidad de longitud del contorno. Los esfuerzos de tracción que
I z; 1
actúan sobre los lados ad y be del elemento infinitesimal abcd (fig. 154) I I
tiene, cuando las flechas de la membrana son pequeñas, una resultante
dirigida hacia arriba cuyo valor es ·-S(8"zJ&x') dx dy. De igual forma,
las . tracciones que actúan sobre los otros lados del elemento tienen por
resultante -S(82 zJíJx") dx dy y la ecuación de equilibrio del elemento
será:
y
FIG. 155
de donde: a la curva de nivel que pasa por ese punto. Si en la sección transversal
(151) . : de una barra sujeta a torsión se trazan curvas tales que la tensión tan gen-
· cíal resultante en cualquiera de sus puntos tenga la dirección de la tangente
· respectiva, dichas curvas serán las llamadas líneas de tensión tangencial .
. En el contorno la flecha de la membrana es cero. Comparando la ecua- ·.·Por lo tanto, las curvas de nivel de la membrana son las curvas de tensión
ción (151) y las condiciones de contorno para las flechas z de la membrana,
· tangencial de la sección transversal de la barra sometida a torsión.
I Physik Z., vol. 4, 1903. Véase también Anthe6, Di7lglers poly/och. J., pág. 342, 1906.
La magnitud de la· tensión resultante, en B (fig. 155) se obtiene pro-
Otros desarrollos de la ana logIa, as! como ciertas aplicaciones de la misma, pueden verse en yectando sobre la tangente las componentes ,;,. y' 'y., Se tiene entonces:
los trabajos de A. A. Griffith y O. 1. Taylor, Tech. Rept. Ad". COIum. Aerollautics, vol. 3,
páginas 910 y 938, 1917-1918. 'O" T = T". cos (Nx) - T", COS (}[y)
308 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 309
Sustituyendo:
aq. dx Jr ds =.2GIJA (152)
r .. = ay' coa (Nx) = dn' cos (Ny) = dy
dn
ediante esta expreSlOn puede obtenerse el valor medio de la tensión
se obtiene: tangencial a 10 largo de una curva de nivel.
T = _ (aq. d:c + acf¡ ay) = aq. Tomando q = 0, es decir, considerando una membrana sobre la que
actúe carga lateral alguna, se llega a la ecuación:
8:c dn ay an - dn
La magnitud de la tensión tangencial" en B viene dada por la pendiente a'lz ..L a2z = O (153)
máxima de la membrana en ese punto. Basta simplemente con sustituir éb;3 ' ay2
q/S por 2GB en la expresión de la pendiente. De este hecho, se deduce que
las máximas tensiones tangenciales actúan en los puntos en los que las la ecuación de la [unción r/JI [ecuación (h) del § 92].
curvas de nivel están muy próximas unas a otras. las ordenadas del contorno de la membrana, de forma tal que
La ecuación (145) nos permite. establecer que el doble del volumen verifique la ecuación:
limitado por la membrana· deformada y
el plano xy (fig. 155) representa
z + F4' (Xi + y2) = constante (154)
el par de torsión supuesto que qfS es sustituido por 2GO.
Se puede observar que la forma de la membrana y, en consecuencia, la distrI- cumplirá también la condición de contorno (e) del § 92. De esta forma,
bución de tensiones es la misma cualquiera que sea el punto de la sección transversal, podeme)s obtener la función 1>1 a partir de la superficie de deformación
tomado como origen en el problema de torSlón. Este punto, por supuesto, representa ·una membrana no cargada, supuesto que las ordenadas de la superficie
el eje de rotación de las secciones rectas. Es sorprendente a primera vista que las
secciones rectas puedan girar respecto a Un eje diferente (paralelo) siendo el mismo ·la misma tengan unos determinados valores en el contorno. Más adelante
el par al que se encuentran sometidas. Esta diferencia, sin embargo, se resuelve que tanto las membranas cargadas, como las no cargadas, pueden
mediante una I·otación de conjunto (rotución de sólido rígido) de la pieza. Consi- utilizadas para determinar experimentalmente la distribución tensional
deremos, por ejemplo, un cilindro circulllr sometido a torsión, cuyas secciones rectas piezas sometidas a torsión.
han sufrido rotaciones respecto al eje central. Una generatriz lateral toma una posición
oblicua respecto a su dirección original, a la cual puede ser llevada de nuevo me-
diante una rotación de conjunto del cilindro alrededor de un diámetro. Las posi-
or
G
ciones finales de las secciones transversales corresponderán, entonces, a tina rota-
ción de torsión nlredcdor de esta generatriz, tomada como eje. Las secciones rectas
se mantienen planas pero se encuentmn ahora inclinadas respecto a su plano inicial,
r---c~
a causa de la rotación de conjunto del cilind ro. Cualquier sección estará alnheadfl y
Gon unu elección dada de los ejes, la inclinación de un elemento de superficie de ",Il S
la sección terminal estará definida [(kv/ax y ow/oy estando dados por las ecuacio- Ó x
nes (ti) )" (b) del § 90]. Ese elemtlnt() puede ser devueltu a su orientación uriginal
mediante uno rotación de conjunto alrededor de un eje perteneciente a la sección
terminal. Una rotación tal sustituye el eje de las rotaciones de torsión por un eje
paralelo. Es posible, entonces, definir un eje o un centro de las rotaciones de torsión,
llamado Cel/tTo de torsión si se precisll In orientación final de un elemento de superficie
ele la sección terminal, por ejemplo, si tal elemento se mantiene fijo.
l ;y
(a)
z
(óJ
f S (r 2S 2G8
_1) ds = qA I Este hecho fue mdlcado por Prandtl, véase A. Nádal, Z. angew. Mal". Mech., vol. 3,
442. Véaselamb,4~ E. Trcfftz, ibfd., vol. S, pág. 64-, 1925.
310 TEORJA DE LA ELASTICIDAD TORSION 311
que la tensión tangencial se mantenga constante durante la deformación
plástica, la distribución tensional en la zona de la sección transversal
elásticamente deformada sigue estando representada por la membrana, (155)
pero en la zona de deformaciones plástic11s, 111 tensión vendrá dada por
una superficie de pendiente máxima y constante correspondiente a la (156)
tensión límite. Imaginemos que esa superficie esté colocada sobre la sección
de la barra a la.manera de un tejado y que también esté aplicada la mem- . En la curva de deflexión parabólica (fjg. 15ób):
brana tersa y cargada como se explicó anteriormente. Al aumentar la
presión, ciertas partes de la membrana comienzan a ponerse en contacto
con el techo rígido. Esto corresponde a la iniciación de la deformación
plástica de la ba.rra sometida a torsión. Si se sigue aumentando la presión,
. y la pendiente de la membrana en cualquier puntó es:
ciertas zonas entran en contacto con el techo. Estas zonas son las regiones
de deformación plástica de la barra. A Nádai ha realizado interesantes
experimentos que ilustran .esta teoría l.
94. Torsión de barras de seCClon rectangular estrecha. La tensión correspondiente en la barra sometida a torsión es:
analogía con la membrana, proporciona una solución muy séncilla del
pro blema de la torsión de una barra de sección rectangular estrecha. Des- Tu' = 2GOx
preciando' el efecto de los lados cortos del rectángulo y suponiendo que distribución de tensiones obedece, pues, a una ley lineal, como se ve
la membrana, Iigemmente deformada, toma una forma cilíndrica (fig. 156), la fjgura 156a. Calculando la magnitud del par correspondiente a esta
podremos obtener la flecha de la membrana mediante la fórmula elemental de tensiones se obtiene:
de la parábola, que corresponde a la curva de equilibrio de un hilo unifor-
mem~nte cargad0 2 (fig. 156b);
qc 2
!i=-
88
(a)
solamente la mitad del total dado por la ecuacJOn
La otra mitad corresponde a la componente r~ .. la cual fue des-
La pendiente máxima que se presenta en el punto medio de los lados largos
a! suponer que la superficie de la membrana defonnada era
del rectángulo es, de acuerdo con las conocidas propiedades de la parábola:
,<;lI.l11<.Jn",a. Aun cuando la magnitud de estas tensiones sólo es apreciable
4/) qc la proximidad de los lados cortos y aunque los valores máximos que
e = 28 (a)
son inferiores al de ',.oc< calculado anteriormente, actúan a
distancias del eje de la burra y su momento representa la segunda
El volumen limitado por la membrana deformada y el plano xy, calculado del par de torsión M/~.
como cilindro parabólico, será: Es Interesante destacar que el valor m~íximo de la tensión T max , dado
2 qbc 3 la primera de las ecuaciones (d), es doble del que se origina en un eje
V =-clib =- (e) de diámetro igual a e sometido al mismo giro (J. Esto puede ser
3 128
¡cado considerando el alabeo de las secciones transversales. Los lados
Empleando ahora la analogía de la membrana y sustituyendo qfS por 2GO las seccionés rectas tales como 1111; (fig. 157) permanecen normales a
en (b) y (e), se oJ;¡tiene: aristas de la barra, como es mostrado en' la figura, en los puntos n y m.
(d) distorsión total de un elemento tal como el abcd se compone de dos
T,a,% = cGO,
la parte YI debida a la rotación de la sección transversal alrededor
eje de la barra, la cual es igual a la producida en un cilindro circular
, Véase TrmlS. A.S.kl.E. Applicd Mechonics DlVlslon, 1930. Véa.e tumbi"n A. Núual, . diámetro e y la parte Y. debida al alabeo de la sección transversal.
1'heory of Flmv ol/d Fracture ni Salid., 1950, capítulos 35 y 36.
'V"ase S. Tnnpshenko y D. Young, Engi"eer;ng Mechanic!, pág. 35. • Esta cu~stJón fu. a~larada por Lord Kelvm y 'I'Ult, Natural Philasaphy, vol. 2, pág. 26·,
312 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 313
En el caso de una sección rectangular estretha)l2 ;'1 Y la distorsión condición de' simetría con respecto al eje y y las condiciones de
resultante es doble de la que se da en un eje circular de diámetro c. en los lados x = ± a del rectángulo, quedan satisfechas si se
Las ecuaciones (155) y (156), obtenidas para el caso de una sección ,:'",v'nr,p"a z bajo la forma de una serié,
rectangular estrecha, pueden ser usadas también cuando se trate de harras
de pared delgada, de secciones tales como las mostradas en la figura 158, ..
~
nm-x
z = bn cos 2a Y" (b)
,,~1.3, , ...
t- -"(
la que b1 , b ... son coeficientes constantes e Y¡,
I 1 "
Y, ... son funciones de JI solamente. Sustituyendo (b)
--l f--)í 1
I I la ecuación (a) y observando qlle el segundo miem-
b de esta ecuación puede ser dcsarrollado en serie ':
¡ aí
Cll
rr' ['d
¿:
~
4 n-l y
I q (1)--¡¡- n1l"X (e)
I "8 n1l" - cos 2iL Fra. 159
I
1 I ~=lJ3,5, •••
1 I
)..-/-- ,u~:ga[ll():S a la siguiente ecuación para la determinación dc Y,.:
2 2 4 ,.-1
(a} (hJ (a) (6J Y If - ~ y = _ 2 __ (-1)2- (d)
n 4a2 n S n1l"b"
Flo. 157 FIG. 158
y ser cero en el contorno, 1 B. O. Pe.rce, A Short Table of Integra/s, pág. 95, 1910.
;314 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 315
Las componentes de la tensión se obtienen ahora a partir de las ecua-
TABLA .oH CONSTAN'l'1lS DE LA. TORSiÓN DE UNA BARRA RECTANOULAH
~iones (141) derivando. Por ejemplo;
k k, k. b{a , k k, k.
éJq, _16GBa ~ ..!:.( _l)n;l [1-~~.01rY!.~LJ sen ~ (h)
TV> = - 8x ----;;:2 L.¡ n2 ' eh (n1rb/2a) 2a 0,675 0,1406 0,208 3 0,985 0,263 0,267
n=J.315~... . 0,759 0,166 0,219 4 0,997 0,281 0,282
0,848 0,196 0,231 5 0,999 0,291 0,291
'Suponiendo que b> a la tensión tangencial máxima, correspondiente 0,930 0,229 0,246 10 1,000 0,312 0,312
a I~ mayor pendiente de la membrana, se da en los puntos medios de los 0,968 0,249 0,258 ca 1,000 0,333 0,333
lados largos x '= ± a del rectángulo. Sustituyendo x = a, y = O en (h)
obtenemos: ' Calculemos ahora el momento torsor Mt en función del ángulo espe-
[1 _
~
~
~
4
1 64GO(2a) !:..tanh n1fb
= 2GOa _ 16GOa \:' (157) "21'5 11,6 2a
'1f'2 L.¡ 1t -l,3, , .. ,
n=1.3,5 .....
La serie del segundo miembro converge con gran rapidez para b> a, no
siendo difícil calcular 'm...
con suficiente exactitud para cualquier valor
particular de bla. En el cuso de un rectítngulo muy estrecho, por ejemplo,
bJa resulta muy grande, por' lo cual podemos despreciar la sumatoria de ..
(157). Tenernos entonces:
M I = -I GO.(2 a,) 3 (2b) ( 1 - -192 -a ~ n:rb) (160)
- 1 tgh __ o
n1T'b = 1
8 (
= 2Gea [ 1 -;Z 2,509
1
+ 9 X 155,67 + )]
= 1,351GOa (158)
2a,
En general se tiene:
MI = ~Ge(2a)3(2b) (1 - 0,630i) (161)
La función 1>, debe satisfacer la ecuación de Laplace (véase el § 92). Tomando máximas tensiones tangenciales a lo largo de los contornos circular y radial,
como solución de esta ecuación la serie: dados por las fórmulas k 1 CaO y k.CaO, respectivamente. Diversos valores
.. n .. k. y k. se encuentran en la tabla precedente. _
<1>. Gs [T'
="2 CIJa 2'" +.
--coa;- a / .'\'. , .A; ¡
(r)-;;- cos n1r1/t]
-;;-
'La solución para un sector de corona circular puede obtenerse de In misma
1
n-l.3 t 5, ..
el caso de un triángulo rectángulo isósceles " el ángulo específico de torsión
llegamos a la función de tensión: por
MI
<1> = Go
2" [ -r' ( 1 - cos
~ 2.") + a' ~
/.., A• (r)~ 11"'''']
a cos-;;- (J = 38,3
Ga4
n=1,3,5•. •.
que 1I es la longitud de los lados iguales del triángulo. La tensión tangencial
Para conseguir que también se anule en el contorno se produce cn el punto medio de la hipotenusa y es igual a
circular l' = a debemes poner M,
,,"/..IlaXo == 18,02 a 3
~
~
A n1r1/t
cos ~
1 cos 2'"
CC;S;;
n =* - Introduciendo coordenadas curvilíneas ha sido estudiada la torsión de piezas
n=I,3.5, .•• otras secciones transversales~ Tomando coordenadas elípticas (véase el § 60)
de donde se obtiene en la forma usual: usando las funciones conjugadas l: y f} determinadas por la ecuación:
n+1 :¡; -1- iy = e eh (~+ í'l)
16",' """2' --.--~__-,.--c",,..
FIG. 160
A,,=-;¡<-l) n(n+~)(n_2:) btcmE:mlDS secciones transversales limitadas por elipses e hipérbolas homofocales 3.
1 SUUlI-V.nant, luc. cit. Véase también A. E. H. Lave, Theory 01 E/asticity, 4." edICIón,
1 Este problema fue estudiado por Saint-Vennnt, Compl. rend., vol. 87, págs. 849 y 893,
319, 1927.
1878. Véase también A. G. Gre~nh¡Jl, MeSS81lger 01 Math., vol. 9, pág. 35, 1879. Otro método . 'B. G. Galcrkrn, BI/I/. acad. des se;. de Russ., pág. 111, 1919;·G. Kolosoff, Compt. rend.,
en el que se utJliza la func,ón de Bessel fue dado por A. Dlnnik. BI/I/. DolZ Po/y/echo 1mt., 178, pág. 2057, 1924.
Novotcherkassk, vol. l, pág. 30<). Véase también A. Foppl Y L. Foppl, Drat¡g Ilnd Z<vallg, 'A. G. Greenhl11, Qrta,.t. J. /VIoth., vol. 16. 1879. Véase también L. N. G. Fllon, Trans.
pág. 96, 1928. . .soc. (LO/,doll), se<le A, vol. t 93, 1900. .
318 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
TORSION 319
Usando la ecuación'
. Empleando un razonamiento análogo al usado para establecer la ecuación
(91) se obtiene:
obtenemos secciones transversales limitadas por parábolas ortogonales.
Asimismo han sido obtenidas las soluciones correspondientes a otras muchas
secciones", macizas y huecas, incluyendo polígonos, ángulos, cardioides, lemnis-·
catas·, y círculos con uno o varios agujeros excéntricos '. En todos los casos en los
que la sección puede ser aplicada sobre el circulo unidad mediante una representa-
ción conforme es siempre posible obtener una solución expresada por una integral
compleja ~ ,
97. Resoluci6n de problemas de torsión por el método elasto- . La verdadera expresión de la función de tensión rP es, por lo tanto, aquella
energético 6 • Hemos visto que la solución de los problemas torsionales .que anula la variación de la integral
;;e reduce, en cada caso particular, a la determinación de la función de
tensión que satisface la ecuación diferencial (142) y la condición de con- (165)
torno (144). Cuándo se trata de obtener una solllción aproximada del pro-
blema, resulta útil detenninar la función de tensión a partir de la condi- a la misma conclusión empleando la analogía de la membrana y el
ción de mínimo de una cierta integraJ1, en lugar de trabajar con la ecuación los trabajos virtuales (§ 48). Si S es la tracción uniforme aplicada a la
rnt:fI.UIana. el aumento de su energía potencial elástica, producido durante su defor-
diferencial. Dicha condición puede obtenerse mediante la expresión de
, se obtiene multiplicando S por el aumento de superficie que experimentll
la energía potencial elástica de la barra sometida a torsión. La energía de membrana. De esta forma obtenemos
deformación de la barra por unidad de longitud, según (88), es
~S JJ[(~)" + (~rJ dzdy
1 SI¡
"2 JI L\.~~
r(i'z)2 + (a~)'J
f..~. . JI q ozdx dy
dxdy =
y la variación del momento de torsión, según la ecuación (145), es determinación de la superficie de deformación de la membrana se reduce a In
ción de la expresión de la función z, que haga mínima la integral
2II órpdxdy
adecuada a la representación de la función "': Las cantidades 00, al, aZ, ... El momento de torsión, que se obtiene sustituyendo <P- en (145), resulta
son factores numéricos, a determinar a partir de la condición de mínimo
de la integral (165). Sustituyendo la serie (a) en esta integral e integrando, M¡ = -~i(iH + ~ . t . -g;v,)GOa' = 0,1404G8(~a)4
obtenemos una función de segundo grado en an, al, az, _._ cuya condición valor tlue es tan sólo 0,15 % menor que el correcto.
de mínimo es Se comete un error mucho mayor en la determinación de la tensión
'OU 'OU .. _ O DU = O ._. (h)
máxima. Sustituyendo (e) en las expresiones (141) de las componentes
OCIo = O, Dal - , Das . ' de la tensión, nos encontramos con un error del orden del 4 %, debiendo
tornar más términos de la serie (e) para conseguir una mayor exactitud.
Obtenemos así un sistema lineal de ecuaciones, II partir del cual pueden Puede demostrarse mediante la analogía con la membrana que proce-
determinarse los coeficientes an. a" a2, ... Aumentando el número de tér- -diendo de la forma explicada anteriormente, se obtiene generalmente
minos de lu serie (a) aumenta la exactitud de la solución aproximada y - para el momento de torsión, valores menores que el exacto. Una mem-
utilizando una serie infinita llegaríamos a la solución exacta del problema brana perfectamente flexible, uniformemente estirada en su contorno y
torsional ' . --uniformemente cargada es un sistema con un número infinito de grados
Tomarnos como ejemplo, ei caso de una sección transversal rectan- - de libertad. El limitarnos en el cálculo a unos pocos términos de la serie
gular 2 (fjg. 159). El contorno viene dado por las ecuaciones x = ± a,. - (e), equivale a introducir en el sistema ciertos vínculos que lo reducen a
-y = ± b y la función (x 2 - a2 ) (y2 - b2 ) se anula en la periferia. La otro con un número pequeño de grados de libertad. Tales vínculos sola-
serie (a) puede ponerse en la forma mente pueden reducir la flexibilidad del sistema y disminuir el volumen
(e) --limitado por la membrana deformada. El momento de torsión, que se
deduce de ese volumen, será pues, de ordinario, menor que el verdadero.
en la cual m y n, por razones de simetría, deben ser pares. _ Otro método para la determinación aproximada de la función '" ha
Suponiendo que tenemos una sección transversal cuadrada y limitando _sido sugerido por E. Trefftzl • Con este método, el valor aproximado del
el desarrollo de la serie (e) al primer término, tomemos momento es superior al verdadero. Usando entonces los métodos de Ritz
(d) y Trefftz juntos, pueden establecerse los límites de error de la solución
--aproximada.
Sustituyendo esta expresión en (165), se deduce de la condición de mínimo La aplicación del método de Ritz no entraña el empleo exclusivo de
que -los polinorn:ios (e), pudienclo usarse toda función ,pu, ¡f,,, /h, ... para la
5GB
ao = 8 a2 serie (a), cuya forma sea adecuada para la representación de la función de
tensión ¡p. Tornando, por ejemplo, funciones trigonométricas y atendiendo
La magnitud del momento, según (145), será a las condiciones de simetría (fig. 159), obtenemos
.
Mt = 2ff cf> dx dy = '¡G8a l
valor que difiere de la solución exacta (162) en un 1 ~ %.
= O,1388(2a)4GII
q, =
)'
~-If.t
2: ~
\",;"s" tambIén E. Trefftz, Halldblllh der P/rysik, vol. 6, pág. 130, 1928.
l Véase S. Tlmoshenko, Bull. lrlSl. Ways 01 Cornrnll7licalioll, San Petersburgo, 1913 y
l E. Trefftz, Proc. Seco1ld. j,ttem. Callgy. Applied. Mech., Zünch, 1926, pág. 131. Véase
PToe. Londo.. Mal}" Soc., "ene 2, voL 20, pág. 389, 1921. también N. M. Basti;·- Phil. Mag., vol. 10, pág. 886, 1930.
Las ecuaciones (b) se convierten en .la función de tensión (k) satisface la condición de contorno (144). Llevando
(k) a la ecuación (145) del momento de torsión obtenemos
1r2ab (m2 nZ
) 16ab ~-1
4 Za +b -
2 2G8 • m.n1l'2 (-1) 2 =O
y de aquí
a".,.
MI = 2J~" J~b <p d;¡; dy =~ GO(2a)3(;b) (1 - 0,632~)
. io que coincide bastante satisfactoriamente con la ecuación (161), obtenida
¡lOtes mediante el empleo de una serie.
En todos aquellos casos en los que la s.ección transversal tenga por
. contorno un polígono convexo, puede usarse como función de tensión,
donde a = h/a. Sustituyendo en (j), obtenemos la solución exacta del . . ~on excelentes resultados, una expresión polinómica análoga a la (e). Si
problema bajo la forma de una serie trigonométrica. El momento torsor
será entonces alZ + bly + el = 0, . a2X + b,y + e2 = 0, . . •
'son las ecuaciones de los lados del polígono, podemos tomar la función
M, = 2 f" jb .pdxdy· de tensión de la forma
-" -b
<p = (alz + b1!1 + cl)(a2x + b2y + o,) . . . Ca"z + b"y + e,,) ~~amnx·y'"
.·opteniéndose, por regla general, una exactitud satisfactoria con sólo con-
siderar unos pocos términos del principio de la serie.
. El método elastoenergético es útil también cuando el contorno de la
Obs¡:rvando que
sección transversal (fig. 161) está dado por dos curvasl
t h mal!' ma1r
g2-T
-t(mall'(2) 3 y
y elegir la cantidad Pde forma tal que la integral (165) tome el valor mínimo.
Resulta así
mente con la' solución (h), en todos aquellos puntos suficientemente dis- : Methods lar Solving Problems ollhe Thcary ni Elasticity, Moscú, 1943. Véase también W. J .
. Duncan; Phi/o Mog."serie 7, vol. 25, pág. 634, 1938.
tantes de los lados cortos del rectángulo. En la proximidad de estos lados,
324 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 325
- En el caso particular en el que m = t, p = q = 1, a = a" tenemos Para calcular la tensión en los puntos del contorno, situados a consi-
y "'-= ± a 7p(xJb) = ± -Vxib '[l-(x/b)], obteniéndose derable distancia de los vértices de la sección transversal, podemos usar
una vez más la ecuación correspondiente a ~n rectángulo alargado y tomar
GO' GOba s
A = 11 a2' MI = 0,0736 --11 a2 T = ceG
1 13 b2 + 1 13 ¡j2 + Según la ecuación (a) tendremos, entonces, pa,a las alas del perfil
A. Weigand1 ha dado una solución aproximaclJl, que ha comparado con
(b)
los resultados obtenidos en ensayos experimentales, para secciones limi-
tadas por una circunferencia y una cuerda. Los métodos numéricos son
estudiados en el apéndice. Las mismas ecuaciones aproximadas pueden ser usadas para una viga
de sección 1 (fig. 162c).
98. Torsión de perilles laminados. Las fórmulas obtenidas para En los ángulos entrantes se produce una considerable concentración
barras de sección rectangular estrecha (§ 94), pueden ser utilizadas en el de tensiones cuya magnitud depende del radio de las curvas de transición.
estudio de la torsión de secciones como las.que presentan los aceros lami-
nados, tales como perfiles en U, L e l. Si In sección transversal es de espesor I
I
I
I
I
I
1
r J
re ------- ....Vi'
1.
L "
(a) (6) re)
FlG. 163
FIG. 162
Un valor aprmdmado de las tensiones existentes en tales puntos, puede
·-.constante, como en la figura 1620, el ángulo de torsión se obtiene con su- obtenerse mediante la analogía con la membrana. Consideremos una sec-
ficiente exactitud a partir de la ecuación (155), haciendo en ella b igual a la ción transversal angular, de espesor constante e (fig. 163) y sea a el radio
longitud desarrollada de la fibra media2 de la sección, es decir, b = 2a - c. en lu transición que corresponde al ángulo entrante. Suponiendo que la
En el caso de una sección en U (fig. 162b), se obtiene con cierta uproxima. superficie de la membrana en la bisetriz 001 , es aproximadamente una
ción el ángulo de torsión considerando para las alas un espesor medio superficie de revolución de eje perpendicular al plano de la fjgul'a en O
C2, descomponiendo la sección transversal en tres rectángulos y sustitu- y empleando coordenadas polares, la ecuación (151) de la superficie de-
yendo en la ecuación (155) he! por blC~ + 2b2C~, lo que significa que la formada de la membrana se transforma en (véase el § 25).
rigicl~:;¡:. torsional de la pieza es igual a la suma de las rigideces de los tres
d z +!~
2
rectángulos 3 . = _!l. (c)
dr 2 r dr S
1 LU!lha"/-joTsch, vol. 20,1944, traducido al inglés como N.A.C,A ... Tech. Me",., 1182,1948.
, Un. fórmula más elabol·ada. que tiene en cuenta el aumento de rigidez resultante de l. Recordando que la pendiente de la membrana dzldr nos da la tenslon
ulIión de loo rectángulos, fue desarrollndn por G. W. Trayer y H. W. Mnrch, Na/Ir. Advisory tangencial sin más que sustituir q/S por 2GO, de la expresión (e) deduci-
Cmnltl, Aerol/al/f. Rept., 334, 1930.
J La comparacióo de 1" rigidez o la torsión obtenido pOI' este método con la dada por
remos la siguiente ecuación para la tensión tangencial
los ensayos experimentales, para distintos perftlcs y diversas dimensiones ha sido realizad"
por A, F<ipp1. Silzber. Bayer. Akad. Wiss .• pág. 295, Munich, 1921. Véase tamb,én Bauiuge-
lIieur, serie S, vol. 3, pág. 42, 1922.
- +1
dr
dr
-7"
l'
= -2GO ~d)
326 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
TORSION 327
La ecuación correspondiente para los puntos de las alas del ángulo, si- de a/c, obtenida por este método¡ junto con la curva que representa a la
tuados a considerable distancia de los mismos, donde la membrana tiene ecuación (g). Vemos que esta, fórmula sencilla da resultados aceptables
una superficie aproximadamente cilíndrica, será para valores de a/c inferiores a O,3~
dr 1 _ 2Tl
(dI)
di'-+¡:r= e
de donde, integrando
A 7¡7
r=---
r e
(f)
2.5 y
Z"tm1.x
Z1
2,0
\ \
1.5
\~ -:A. V"" Sustituyendo en (fJ y tomando r = a
~
f.c.(g) r--
obtenemos
de las tensiones l , a. Tales películas son formadas sobre agujeros de forma bisetriz del ángulo comprendido entre los rayos incidentes y reflejado.
conveniente reálizados en placas planas. Con el fin de hacer posible la Un instrumento especial, destinado a realizar esa medida, ha sido desano-
determinación directa de las tensiones, se ha encontrado .que es necesario · !lado por Griffith y Taylor. La figura 16~ representa un ejemplo de curvas
que la misma placa tenga 1m orificio circular, representativo de una sección de nivel obtenidas para una viga en 1 (larguero de madera de un ala de
circular la cual es utilizada con fines comparativos. Sometiendo a ambas · avión). El hecho de que las curvas estén muy próximas unas a otras en los
peliculas a la misma presión, tendremos valores iguales del cociente q/S3.
10 que corresponde a los mismos valores de GO para las dos barras some-
tidas a torsión. Determinando, en consecuencia, la pendiente de las dos
películas, podremos comparar las tensiones producidas en la barra de
sección dada con las existentes en el eje circular, supuesto que el ángulo
de torsión e y la constante G tengan igual valor en los dos casos. La rela-
ción correspondiente entre los momentos de torsión, se determina por la
de los volúmenes encerrados entre cada película y el plano de la placa.
Las curvas de nivel de las superficies de las películas se obtienen
mediante el aparato representado en la figura 165'1. La placa de aluminio
donde han sido practicados los agujeros, está sujeta entre las dos mitades
de una caja de fundición de hierro A. La parte inferior de la caja, que FIC. 166 .
tiene la forma de una bandeja, es soportada por unos tornillos. El trazado
de las curvas de nivel se efectúa mediante el tornillo B, el cual atraviesa ángulos entrantes y en la parte central de la cara superior, prueba que en
una placa de vidrio de tamaño suficiente para cubrir la caja, cualquiera estos puntos las tensiones son muy elevadas. Los extremos de las alas,
que sea la posición del tornillo. El extremo inferior del tornillo lleva una por el contrario, están sometidos a tensiones mucho menores. La tensión
punta de acero duro cuya distancia a la placa de vidrio es regulada por el máxima en la parte central del alma del perfil es prácticamente constante
tornillo. Se aproxima la punta del tornillo a la peücula desplazando la · e igual a la que se produce en un rectángulo estrecho para el mismo ángulo
placa de vidrio hasta que la distorsión de la imagen muestre que se ha · de torsión. La aplicación del método de la película de jabón a llecciones
establecido el contacto entre uno y otro. El trazado de las curvas, se hace · tales como· elipses y rectángulos, para las que las soluciones exactas son
sobre una hoja de papel que está adherida a una plancha E, la cual puede "conocidas muestra que la tensión máxima y el momento, pueden ser deter-
girar alrededor de un eje horizontal hasta que la punta ele acero registra- ~inados por ese método con una aproximación del 1 ó 2 %. En los puntos
dora D produzca en ella una picadura. Después de haber puesto en con- · de gran concentración de tensiones, como es el caso en las transiciones
tacto la punta e con la película en un número de puntos suficientes, se de radio muy pequeño, no es fácil conseguir una aproximación del orden
unen los puntos señalados sobre el papel, obteniéndose así una curva de · indicadol.
nivel. Ajustando el tornillo B en una nueva posición, podemos repetir
esta operación tantas veces como curvas de nivel necesitemos. Una vez . 100. Analogías hidrodinámicas. El problema de la torsión. pre-
registradas todas las curvas, se obtiene por sumacÍón el volumen y el · senta algunas analogías con el problema hidrodinámico del movimiento
momento de torsión correspondientes. Las pendientes y las tensiones de un fluido en un tubo. Lord Kelvin2 señaló que la función 4>1 (ecuación
correspondientes se obtienen midiendo la distancia entre curvas de nivel (a), § 90] que a veces es empleada en la resolución de los problemas de
vecinas. Esta pendiente puede ser determinada por métodos ópticos con · torsión, es idéntica a la función de corriente de cierto movimiento irrotacio-
mucha mayor precisión proyectando un haz de luz sobre la película y nal de un {,fluido ideal" en un conducto cuya sección transversal es igual
midiendo el ángulo del rayo retlejado. La normal a la película será la ~ la de la barra sometida a torsión.
J. BOllssinesq3 hu señalado otra analogía. Ha demostrado que la eCUR-
I VÓ""SC los tl'llbnj", de Toylor y Gnffnh, 10(. <11. Y el ele Truyor y Moreh, lne. CIt.
/ T. J. l-z,ggln. hu rOllllzlldo un e.luu", de COla y otra. ullalogíos en .l:.:,p.,lfI'I'II/lI/ Slran t v. ~.C los' trabajos úe C. B. El.zona y J. M. Rademakel', D. ¡/lgB"i."r, núm. 52, 1931;
A"alj'SIS, vul. 2, plÍg. 17, 1945. P.' A. C~shmalt. Trc'·,. A.,S.M.E., 1932; H. QlIest, l"geJl;."r-ATc/,,~,., vol. 4, pág. 510, 1933
J Se supone que la tcmlÍln slIperflclUl (:s la mIsma en Ins dos pcliculas. Los ensuyos renlI- Y J. H. iVluth, lne. Ctt. • .
zados mustrllron que C$to es aproxunadamcntc CIerto. , Kelvm l' Tall, .Va/lllal P¡/llosophy, 2:' parte. pago 242.
, Véase el troboJo de Taylor y GnffJth, loe. cit. J J. Bt>usslsncsq, J. math. pare el appl, serIe 2, ,.,,1. 16, 187.1 ..
330 TEOml> DE LA ELASTICIDAD TORSION 331
clon diferencial y la condición de contorno, 'que determinan la función es la misma que la correspondiet).te (144) al problema de
de tensión ~ [véanse las ecuaciones (142) y (144) del § 90] son idénticas Se sigue de ello que la distribución de velocidades del problema
a las que detenninan las velocidades del movimiento laminar de un fluido ¡idrol:lirlá:rnil:o es matemáticamente idéntica a la distribución de tensiones
viscoso en lln tubo, cuya sección transversal sea la de la barra sujeta a la barra sometida a torsión, pudiendo deducirse de ello aigunas condu-
torsión l , de importancia práctica.
o',-----/-;;>;
:Y
F'1Cl. 167
tensiones tangenciales se anulan mientras que en los ángulos entrantes .se verá disminuido en la cantidad que, cn el caso del árbol macizo, proviene
toman valores teóricamente infinitos, lo que implica que el más pequeño la parte de sección transversal correspondiente al hueco. La ecuación
momento de torsión produzca en tales puntos, bien una fisura, bien una (148) muestra que esa cantidad guarda .con el momento total la relación
deformación plástica. En el caso de una entalladura para chaveta de forma de k 4 : 1. Para el árbol hueco, por lo tanto, la ecuación (148) será rempla-
rectangular, se producirá, pues, en los ángulos entrantes, una notable ele- por
vación de las tensiones, la cual podrá ser atenuada redondeándolos ade-
cuadamente!.
101. Torsión de árboles huecos. En el estudio hasta aquí reali- .y la función de tensión (a) se convierte en
zado, nos hemos limitado a árboles cuyas secciones transversales son
recintos simplemente conexos. Consideremos ahora ejes huecos cuyas rp
M,
= - 'll'ab(l - le')
(X(i22+ /ir
y2 - 1)
secciones rectas tengan dos o más contornos. El problema más sencillo
de este tipo es el de un árbol hueco, cuyo contorno interior coincide con fórmula que da la tensión máxima será
una de las curvas de tensión f.angent;t'al (véase el § 93) del árbol macizo de
2M¡ 1
contorno exterior igual al del eje hueco. '1'",.~ = 7r'ab2 1 _ k'
Tomemos, por ejemplo, unH sección transversal elíptica (fig. 149).
Lu función de tensión para el árbol macizo es En la analogíu con la membrana la porción central, correspondiente
hueco del árbol (fig. 169), puede sel' sustituida por una placa horizontal
(:D. Observamos que la presión, uniformemente distribuida sobre la.
(a)
La curva
(b)
la función de tensión debe ser constante a' lo largo de cada contorno; 169, debe tomarse de manera tal que la carga vertical que actüa
estas constantes, sin embargo, no pueden ser elegidas arbitrariamente. la placa, sea igual y de sentido opuesto a la componente vertical
Al .estudiar los problemas bidimensionales, referentes a contornos múlti- resultante de llls fuerzas 'de tracción que sobre la misma ejerce la
plemente conexos, vimos que era preciso recurrir a las expresiones de los Si los contornos de los agujeros coinciden con las líneas de
desplazamientos y que las constantes de integración debían ser elegidas del correspondiente eje macizo, la condición precedente basta
de manera tal que esas expresiones resulten de valor único. En el estudio asegurar el equilibrio de las placas. En el caso general esta condición
de la torsión de árboles huecos es necesario proceder de una manera no es suficiente y para que la placa esté en equilibrio en una posición
análoga, debiendo elegirse, como valores constantes de la función de tensión es necesario emplear mecanismos especiales de guía, lo que
a lo largo de los contornos, aquellos que hagan que la expresión de los el que el método de la película de jabón sea más complicado para
desplazamientos no tome más que un valor. De esta manem obtendremos árboles huecos.
un número de ecuaciones suficiente para determinar estas constantes.
De las ecuaciones (b) y (d) del § 90 tenemos Con el fin de vencer esta dificultad podemos adoptar la siguiente solución'.
en la placa una abertura (fig. 165) que corresponda al contorno exterior
JG: + :;
= G da: f dY) - eG (y da; - a; dy)
. l~ que m" m., ... , In, son factores numéricos será igualmente una solución de In
(f)
La integral del segundo miembro equivale al doble del área de la parte f :: ds = 2G8A¡
hueca. Entonces las cuales los i factores m" mo, ... , m, pueden ser determinados en función de O.
JT as = 2GM (e) verdadera función de tensión, se obtiene, entonces, a partir de (j)". Este método
aplicado por Griffith y Taylor a la detenninación de las tensio~es en un árbol
Los valores constantes de la función de tensión a lo largo de los agujeros, de sección circular con entalladura para una chaveta. Pudieron demostrar
alejando la entalladura tlel centro del árbol, la tensión tangencial disminuye
deberán pues ser determinados, de manera tal que para cada uno de ellos resistencia de la piezn aumenta.
quede satisfecha la ecuación (e). Esta ecuación es igualmente válida para
toda curva cerrada, trazada sobre la sección transversal, como puede
, A. A. Griffith y G. J. Tnylor, 7'ecll. Rept. Natl. Advisory Comm. Aeronaut., vol. 3, pá-
comprobarse volviendo a examinar la demostración. ' 938, 1917-1918. . ..
Ya hemos estudiado anteriormente el significado físico de la ecuación Griffirh y Taylor dedujeron, de sus experimentos, que para estudiar las tensiónes en
(e) [véase la ecuación (152)]. Dicha ecuación indica que al aplicar la ana- huecos resulta más convenieote usar películas con presión cero (véuse la pág. 310)
con presión CD7Istante. El desarrollo del cálculo de los coeficientes 1/1" ",2.... puede verse
logía con la membrana, el nivel de cada placa, la eD por ejemplo de la . 'su trabajo antes Citado.
336 TEORIA DE LA EI.ASTICIDAD TORSlON 337
En el caso de un árbol con uno o varios agujeros, el momento de torsión . nivel de los dos contornos y (¡ al espesor variable de la pared, la tensión
es igual al doble del volumen encerrado por la'membran,a y la placa rígida. ,'~ualquier punto, dada según sabe~os por la pendiente de la membrana,
Para ver que esto es así, calculemos el momento producido por las tensiones
tangenciales que actúan sobre un anillo elemental, comprendido entre dos h
líneas de tensión, tal, por ejemplo, como el representado en la figura 169 r =- (a)
ti
(la cual es supuesto, ahora, que representa un árbol hueco). Llamemos (j
a la anchura variable del anillo y consideremos un elemento tal como el 'valor es inversamente proporcional al espesor de la pared, siendo por
rayado en la figura, la fuerza tangencial que actúa sobre este elemento es '. 'tanto mayor cuanto más delgado sea el tubo. Con el fin de relacionar la
igual a ,(5 ds y su momento respecto a O n(lds. El momento que actúa
r~~
sobre el anillo elemental vendrá dado por
dMI = JTrB ds (e)
donde la integración se extiende a toda la longitud del anillo. Llamando A
al área limitada por el 'anillo y observando que 7;' es la pendiente y '!'t:l, en
L~(aJ
I
A,'\ I c--..¡
I le z FlG. 171
~o
, j
y
con el momento M, apliquemos de nuevo la analogía con la mem-
calculemos el momento en función del volumen ACDB. Tenemos:
M, = 2Ah = 2Aór (b)
JI A representa la media de las áreas encerradas por los contomos
f'1G. 170
y exterior de la sección transversal del tubo. La expresión (b)
consecuencia, la diferencia )¡ de nivel entre las dos líneas de contorno da una fórmula sencilla para el cálculo de la tensión tangencial:
adyacentes obtendremos de (e) M,
r = 2Ao (166)
dM, = 2hA (ti)
lo que nos dice que el momento correspondiente al anillo elemental es especÍfico de torsión O se aplica la ecuación
igual al doble del volumen rayado en la figura. El momento total, que se
obtiene sumando todos estos volúmenes, será por lo mismo el doble del M,/dS
volumen limitado por AB, la membrana AC y DE y la placa CD. La con- l' ds = -2A -o = 2GM (e)
clusión es idéntica para los casos en los que existen varios agujeros. '
,. = 2GB (d)
ción en los ángulos. Ella confirma
3,01-\--+---1---+---1 la exactitud de la ecuación (í) para
Suponiendo que el espesor del tubo {) sea constante y llamando '1"0 a la las curvas de transición de radio a
tensión, calculada con la ecuación (166), existente en los puntos alejados pequeño, tal, por ejemplo, que
del ángulo, tendremos según la ecuación (e) 2.51---'\\--1---1---1---1 ajo sea inferior a 1/4. Para valores
r:/71R"
z:;;-
2G8 = TOS
A 2,0t-~d--+--I---I
Admitiendo ahora que los ángulos salientes de la sección transversal o de a mayores los resultados dados por la ecuación (i) son demasiado altos.
se redondean siguiendo una curva de transición de radio a, como se indica o Consideremos ahora el caso de una pieza tubular cuya sección trans-
e
en la figura, la constante de integración podrá ser determinada mediante versal tengll más de dos contornos. Tomando, por ejemplo, el caso mos-
la ecuación: trado en la figura 173 y suponiendo que el espesor de la pared sea muy
pequeño, las tensiones tangenciales que actúan sobre cada porción de
(g) pared, deducidas de la analogía de la membrana, serán:
y == } Eq2C1 'D' { -3m + (l +,,) [fs a b'm' + ~ (a" + b')m' + (1 ~ ..l" ~]} (e)
2
de donde se deduce:
.; 3M. [z-~
-l6Gab' 6 a
] (g)
or.. +! OTO. + ou. -1- r.. = O (170) De estas ecuaciones, se deduce que:
or ao OZ 1
1
() (1 acp) + a (1T3
8r 1:3 or oS
él cfJ)
OZ =:= o (f)
o lo que es lo mismo:
Para aplicar estas ecuaciones al problema de la torsión, utilizamos el
método semiinverso (véase la pág. 295) y suponemos que u y w son ·nulos (g)
(esto significa que durante la torsión las partículas se mueven según la
dirección tangencial). Esta hipótesis, difiere de la correspondiente al caso Consideremos ahora, las condiciones de contorno correspondientes
de la torsión de un eje circular de sección constante, en qúe en el caso actual a la función q,. Puesto que sobre la superficie lateral de la barra no actúa
los desplazamientos tangenciales no son proporcionales a la distancia al ninguna fuerza, podemos concluir que en todo punto A de la periferia de
eje (esto implica el que los radios de una sección se curven durante la tina sección que pase por el eje (Hg. 175), la tensión tangencial total debe
torsión). Como veremos en las páginas siguientes la solución basada en tener la dirección de la tangente al contorno, siendo cero su proyección
esa hipótesis satisface todas las ecuaciones de la elasticidad representando, ·sobre la normal al mismo N. En consecuencia:
por lo tanto, la verdadera solución del problema.
ds dr
Sustituyendo u = ro = O en (169) y teniendo en cuenta que por razones TTO ds - ro. ds = O
de simetría el desplazamiento v no depende de O, se obtiene:
.... siendo ds un elemento del contorno. Sustituyendo en esta expresión los
av v valores (d) resulta:
~r = Ee = E. = 'Y.. = 0, "(re = - --, (a)
or l'
Resulta pues, que sólo las componentes 'rO Y "Co. son distintas de cero. (h)
Las dos primeras ecuaciones (170) son satisfechas idénticamente y la
tercera da: de donde se deduce que dada una sección axial del árbol, la función </> se
(1)) mantiene constante a lo largo de su contorno.
La ecuación (g) junto con la condición de contorno (h) determinan
Esta ecuación puede cscnbirse de la forma: completamente la función de tensión ,¡" la cual permite obtener las ten-
siones que satisfacen a las ecuaciones de equilibrio, las ecuaciones de com-
(e) patibilidad y la condición de borde sobre la superficie lateral del ejel •
La magnitud del par, se obtiene considerando una sección transversal
y calculando el momento producido por las tensiones tangenciales TO:. Re-
expresión que es satisfecha por una función q" de r y de z tal que:
sulta entonces:
(d) M, = Jor" 21rT 2re, dr = 21i' Jor" orf>
or (l" = 21f'11"
q, o (k)
donde a es el radio exterior de la sección. Vemos que el momento puede a lo largo del contorno de la sección axial serÍl dVllds y, de igual manera
ser determinado fácilmente si se cono.ce el valor de la función en el centro que para el caso de un árbol cilín4rico de sección circular (§ 87), tendremos:
y en el contorno de la sección transversal.
En el estudio de los desplazamientos producidos por la torsión del (n)
árbol, emplearemos la' notación 1p = v/r para designar el ángulo de rota-
ción del anillo elemental de radio r perteneciente a una sección transversal donde:
cualquiera. Un anillo tal puede ser considerado como la sección de uno dr dz
de los numerosos tubos de pared delgada, en que puede ser descompuesto 'T = 'TrO ds + 'TU'da
el eje. El ángulo de torsión de esos tubos será pues Vi. Dado que los radios
de la sección transversal se curvan, ese ángulo, ?p, variará con r y los ángulos . es la tensión tangencial resultante en la periferia. El valor de esa tensión
de torsión de los tubos elementales no son iguales para una misma sección tangencial puede ser obtenido fácilmente si determinamos experimental-
-transversal de la pieza. Las ecuaciones (e) toman ahora la forma: mente d,!11 di- •
Consideremos el caso particular de un árbol troncocónico' (fig. 176).
En este caso la relación:
z
de donde
es constante e igual a cos (1 en el contorno de la sección axial, y cualquier
. función de esa relación cumplirá la condición (h) de contorno. Con el fin
de satisfacer también la ecuación (g), tornamos:
o bien:
(l)
.'" = e {z
(r2 + Z2)~ -
1[. Z
3 (7'2 + ZO)!
J3} (o)
obtenernos una superficie, lugar geométrico de los puntos de igual ángulo En cuanto a la constante e se obtiene de la ecuación (k). Sustituyendo (o)
de torsión. En la figura 175, AAI representa la curva de intersección de en esta ecuación tenemos:
esa superficie con la sección axial del árbol. Por razones de simetría, se
c=
deduce que la superficie dada por la ecuación (m) es de
o r revolución, siendo AA, el meridiano de la misma que pasa
211'(% - COS IX +t cosa a)
por A. Durante la torsión, estas superficies giran alrededor El ángulo de torslon se deduce de las ecuaciones (e), las cuales dan la
del eje Ji: sin sufrir ninguna deformación, exactamente como expresión de '/', que satisface la ecuación (l) y la condición de contorno.
les ocurre a las secciones transversales de los ejes cilíndricos
de sección circular. La deformación total en un punto cual- (q)
quiera del meridiano AA¡, será, pues, una deformación tan-
gencial en el plano normal al mismo y la t.ensión tangenciltl Como puede verse las superficies de igual ángulo de torsión son esferas
correspondiente, en la sección axial de la pieza, será per-
con centro en el origen O.
pendicular a dicho meridiano. En la periferia esta tensión es
tangente al borde de la pieza, siendo, por tanto, los meridia- 1 Experimentos de este tipo fueron realizados por R. Sonntag, Z. angew. Math. Mech., vo-
z. nos, normales nI contorno de In sección axial. Si pasamos de lumen 9, pág. 1, 1929.
}lIt.. 17(, una superficie 'JI = cte~, a otra adyacente, la variación de v' 'Véase fo'oppl, "¡~c. cit.
348 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 349
Los casos de ejes en forma de elipsoides, h'iperboloides o paraboloides Supongamos que la placa tenga el mismo contorno que la seCClOl1
de revolución pueden ser tratados de manera análoga ' . axial del eje (fig. 178), quc los ejes x e y coincidan' con los z y r y que el
Los problemas que se presentan en la práctica son, por lo general, espesor de la placa sea proporcional al cubo de r (h = (¡ya). La ecuación
más complicados' pues el diámetro del eje suele cambiar bruscamente (r) se convierte entonces en: .
como se muestra en la figura 177a. El estudio de estos problemas ha sido
iniciado por A. Foppl. C. Runge propuso un método numérico de reso-
2
8 ", + ~ coj¡ + a2¡f¡ = O
8z 2 r 8r ar 2
lución de los miSnlOS 3, con el que pudo comprobarse que en puntos tales
como 7Tl o 11 se produce una notable concentración de tensiones y tIue en que coincide con la ecuación (l). Se deduce enton¡;;es, que las líneas equi-
los ejes con dos diámetros diferentes, d y D (fig. 177a), el valor de la ten- potenciales de la placa vienen determinad~lS por la misma ecuación que
sión máxima depende de las relaciones entre el radio a de la curva de tran- las líneas de igual ángulo de torsión en el caso de un árbol de diámetro
sición y el diámetro d y de la dlD. . variable.
FIC. 178
la} (6)
FIG. 177 Suponiendo que entre los extremos de la placa correspondientes a los
del eje, se establece una cierta diferencia de potencial, de modo que la
En el caso de una entalladura dc radio muy pequeño, a (fig. 177b), corriente circule a lo largo del eje z, las lineas equipotenciales serán nor-
la tensión máxima en el fondo de la muesca es doble de la que se produce males a los bordes laterales de la placa dlindose, por lo tanto, las mismas
en 111 superficie cid eje cilíndrico carente de muescas. condiciones de contorno que en el caso de las líneas de ángulo de torsión
Para el estudio de la concentración de tensiones en las zonas de tran- constante. Si las ecuaciones diferenciales y las cond.iciones de contorno
sición entre distintas secciones y en entalladuras, tiene gran utilidad la son las l!lismas, las dos haces de líneas serán idénticas por lo que estudiando
analogía eléctrica 3 • La ecuación general del flujo de corriente eléctrica en la distribución de potencial, obtendremos información útil para el cono-
una placa homogénea de espesor variable es: cimiento ele la repartición de tensiones en el árbol sometido a torsión.
~
8x
(h a",) + ~ (h aya",)
ax ay
= o (r)
La tensión máxima se da en la superficie del árbol y su valor se de-
duce de (n). De esta ecuación, aplicando la analogía eléctrica, resulta que
la tensión es proporcional a la variación de la caída de potencial a lo largo
en la que h es el espesor variable de la placa yrp la función potencial. del borde de la placa.
Sobre un modelo de acero de 24 pulgadas de largo, 6 de ancho en su'
I Véun"e los trabujos 'de E. MelaD, 1'ech. Bliitter, Praga, 1920; A. N. Dinnik, Bull. Don
Po/ytech. ],'S/. NO"lJo/cherkask, 1912; W. Aradt, Die Torno" <'on We1l1l1111li/ achse1l$Ylllmet,isehIl11 '. extremidad mayor y 1 de espesor máximo (fig. 178) han sido realizadas
Bohmgen ""d Hohlriiurnen, DissertatlOD, Gottingen, 1926; A. Timpe, ¡VIal/¡. Al/na/en, 19!1, ~edidas. La caída de potencial a lo largo del borde mnpq del modelo,
púg. 480; Higgms, loc. cit., de la blbhograna sobre el tema.
1 Ver F. A. W.lIcrs, Z. Matlr. PI'ysik, vol. 55, pág. 225, 1907. Otro método aproKlOlsdo
ha sido determinada mediante un galvanómetro muy sensible cuyos tcr-
fue desarrollado por L: ¡"!lppl, Sitzber. Bayer. Al<ad. Wiss., Mumcl~, vol. 51, pág. 61, 1921, ITlinales estaban conectados a dos agujas muy agudas, fijadas a un bloque
) por R. Sonnr-.tg, Z. ulIgew. Mal". Mee"., vol. 9, pág. 1, 1929. .. y distantes 2 mm entre sí. Al tocar la placa con las agujas, la caída de
1 Ver el trabajo de L. S. JAcobscn, Trans. A.S.M.R., vnl. 47, pág. 619, 1925, Y la revI-
sIón bibliográfIca ue T. J. l:/.¡g¡¡ms, loe. dt. La. dlscrepllnclUs entre los resultados dados pOl"
tensión existente entre los puntos de las mismas era indicada por el galva-
eslc y otros métouos son estud.ados en este último trabajo. A. We.gand, LlIftfa"rt-Forsch., nómetro. Moviendo lás agujas a lo largo del borde de transición se pudo
vol. 20, pág. 217, t 9+3 (tradUCido en N.A.C.A. Tech. 1I-lem., 1179, setiembre, 1947), r.,..1I7.8 localizar y medir el gradiente máximo de voltaje. La relación de 'éste
otr"S comparllClOncs y da los resultados el" el"rtas medidas con uandas extensométricas que
extienden la f.gura 179 has!.1 2ald = 0,05. máximo al gradi«.nte correspondiente a un punto .alejado, como el 1lZ. por
350 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 351
2,4 \
~, D=2.()O
2,0 \~ ,~
/ W=.lSO.
le
\
~ " "j"I.JI
\ i'-- ~ ~ f~=1.2()
1,2
"- ........... ........ -- Cl: ~
,~GI.O¡- -- -
0.8 FrG. 180 FIG. 181
8. Usando el método indicado en el problema anterior, obtener unll expreSlOn -_ EMlablecer las fórmulus que dan: a) la tensión tangencial en los puntos de las
llProximada para la rigidez torsionul ele la sección delgada simétrica limitada por ,1, " laterales alejadas de las aristas; b) la torsión unitaria Oen función del momento.
las dos parábolus de In figura 181, para la cual la anchura e, a la distancia y del centro, 14. Obtener las expresiones que dan-la tensión tangencial en un tubo de espesor
viene dada por: le Ó y sección la mostrada en la figúm 183.
En el estudio de secciones cerradas de pared delgada se ha supuesto que la
e = c. (1 -~) tangencial es constante a través del espesor de la pared, lo que corresponde
membrana de pendiente constante a través de este espesor. Demostrar que
9. Demostrar que el método indicado en el problema 7 da para una sección no puede ser rigurosamente exacto para una porción recta de pared (fig. 171 a,
elíptica alargada la función de tensión aproximada: a
ejemplo) y que en general el término correctivo añadir a esta tensión tangencial
tensión correspondiente al tubo Mbiertol) por cortes longitudinales (véase el
4> = -G8b~ (~ + ~ - 1) orolbJenlfi' 12).
16. La teorla expuesta en el § 104 comprende como caso particular el de un
siendo la elipse la de la figura 149 con b/a pequeño. Demostrar que la solución de sección circular uniforme. ¿Cuáles son las funciones p y 'P correspondientes?
- exacta indicnda en el § 94 tiende a la dada aquí cuando b/a es pequeño. 1J~~m'OS11-ar que estas funciones dan la relación correcta entre el momento y la torsión
Deducir las fórmulas aproximadas
°1"'.----t'-----l.- N~
(a)
Flo. 187
tn-M ~
(6)
coordenadas, el baricentro de la sección fija, de forma que el eje z coincida 1a última en la que· aparece -r:",u, resultan idénticamente satisfechas. El
con la fibra c!mtral de la pieza y los ejes x e y con los ejes principales de sistema (130) se reduce entonces a las dos ecu~eioncs:
dicha sección. Para resolver el problema, aplicamos el método semiinverso . P
Saint-Ve~ant y establecemos, en principio, ciertas hipótesis referentes (e) .
a l!'ls tensiones.
'\721'.. == - 1(1 + v)
Suponemos que las tensiones normales que actúan sobre una sección . La resolución del problema de la flexión· de una· ménsula prismática, de
transversal, situada a la distancia z de la sección fija se distribuyen si- sección transversal, se reduce por lo tanto a la obtención· de las
guiendo la misma ley que en el caso de la flexión simple: ·PYnrC'Rllor,eR de 're y 'y. en función de x e y que satisfagan las ecuaciones
equilibrio (e), la condición de contorno (d) y las ecuaciones de compati-
P(l - z):c
tr, = - 1 (a) (e).
. Suponemos aSlmlsmo, clue existen tensiones tangenciales que actúan 106. Función de tensión. Al estudiar los problemas de flexión,
sobre las mismas secciones transversales, las cuales se resuelven en sus '''"rp,"Yl''',., de nuevo la función de tensión q,(x, y). Es fácil ver que las ecua-
componentes '",. Y 'ue Y que las tres componentes restantes de la tensión dones diferenciales de equilibrio (h) y (e) del párrafo anterior quedan CUID-
(]"', ~"> 1:",", son cero, Demostraremos ahora que usando estas hipótesis . ~lidas tomando:
llegamos a una solución que satisface todas las ecuaciones de la elasticidad
y que, por lo tanto, constituye la solución exacta del problema.
Partiendo de estas hipótesis y despreciando las fuerzas másicas, . las
T""
oef¡
= -
éJy
Px 2
- _.
2I
+ f(y)
'
(171)
ecuaciones diferenciales de equilibrio (127) quedan así; es la función de tensión de x e y y J(y) es función de y solamente,
será determinada más tarde con arreglo a las condiciones de contorno.
(b) Sustituyendo (171) en las ecuaciones de compatibilidad (e) del párrafo
obtenemos:
(c)
De la figura 187b, resulta; e es una constante de integración cuyo significado físico es muy
.. d dx .·.sencillo. Consideremos la rotación de un elemento superficial de una
l = cos (Nx) = d~1 m = cos (Ny) = - ds . sección transversal de las piezas en voladizo. Esta rotación viene expresada
la ecuación (véase el § 75).
donde ds es un elemento del borde de la sección transversal. La condición
éJv au
de contorno será entonces: 2",s =---
ex ay
(d) . y. su variación según la· dirección z podrá escribirse de la siguiente fonna:
Pasando a las e<;uaciones de compatibilidad (130), vemos que las tres ~(&_~)=~(~+b)_~(~+b)~~_~
primeras de ellas, que. contienen componentes normales de la tensión, y éJz éJx éJy·, ax éJz éJy éJy az ax·· ax ay
358 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLEXION DE PIEZAS PRlBMATICAS 359
Aplicando la ley de Hooke y usando las expresiones (171) de las com- torno rp = O. Este problema es análogo al de la defor:tnación de una mem-
ponentes de la tensión, obtenemos: brana uniformemente estirada cuyo borde tiene un contorno igual al de la
~ (2w) = 1: (aTV' _ aTO:) = _
2</> + a2rf¡ + df)
1.G (aéJ:¡;2 sección transversal de la barra sometida a flexión y que está sujeta a una
as ' G éJ:¡; ay 8y:' dy carga continua dada por el segundo miembro de la ecuación.(l72). En lo
que sigue daremos algunas aplicaciones de esta analogía de la membrana.
Sustituyendo en la ecuación (a) se tiene:
a' v Py 107. Sección transversal circular. Seu:
-G 8s (2w,) = 1 + 71 T + e (b)
X2 + y2 = r2 (a)
Si el eje x es un eje de simetría de la sección transversal, la flexión provocada la ecuación del contorno de la sección transversal. El segundo miembro de
por una fuerza P, dirigida según este eje, produce una repartición simé- la condición de ·límite o contorno (173) se anula si tomamos:
trica de rotaciones w. de la sección transversal (correspondiente a una
curvat~a ~ntielástica) de valor medio nulo para el conjunto de la sección. P 2
f(y) = 21 (r - y2) (b)
El valor medio de OllJ.!oz ¡¡erá también cero lo que exige que e sea nula
en la ecuación eh). Si la sección transversal no es simétrica podemos de- Llevando este valor a (172) la función de tensión rp vendrá determinada
. finit la flexión sin torsión por la condición de que el valor medio de ow.! oz por la ecuación
sea nulo lo que exige naturalmente que también lo sea c. La ecuación (b)
muestra entonces'que oro.foz se anula en los elementos que contienen al (e)
bariccntro de las secciones transversales. Esto equivale a decir que los
elementos situados a lo largo del eje sufren una rotación relativa (unos y la condición r{> = O en el contorno. De esta manera la función está dada
respecto a otros) nula, por lo que si uno de tales elementos es mantenido por las deformaciones de una membrana de contorno circular, de radio r,
fijo la rotación de los otros respecto al eje será cero. Haciendo cero a e la unifonnemente tensada y sometida a una carga transversal de intensidad
ecuación (a) toma la forma:· proporcional a:
a2<:> 8 2.p _ v P11 dj 1 + 2pPy
éJ:¡;2 + iJ y 2 - 1 + 71 7 - dy
(172) -n:vT
Sustituyendo (172) en la condición de contorno (d) del párrafo an- La ecuación (e) y la condición de contorno quedan satisfechas tomando:
terior, obtenemos: (d)
a.p dy a,¡, d:c a,¡, [P:¡;2 ] dy donde m es un factor constante. Esta función se anula en el contorno (a)
ay ds + éJ:!: ds = éJs = 21 - f(y) ds (173)
· y cumplirá la ecuación (e) si hacemos:
ecuaClon que nos permite calcular los valores de la función r{> a lo largo (1 + 2v)P
c;:IeJ contorno de la sección transversal, una vez escogida la función f(y). m = 8(1 + 71)1
La ecuación (172) junto con la condición de contorno (173) de.termina
la función de tensión··r{>. La ecuación (ti) toma entonces la forma:
En los problemas que serán estudiados a continuación tomaremos
= (1 + 271)P ( 2 +
la funciónJ(y) de manera tal que el segundo miembI:o de la ecuación (173)
.Jo
'1' 8(1 + 1')1 x y
2 _
l'
2)
Y (e)
se anulé, con lo que la función rf> será constante a lo largo del contorno.
Haciendo iguul u cero esa constante, el problema de la. flexión se reduce · y las componentes de la tensión que se obtienen aplicando las ecuaciones
a la resolución de la ecuación diferencial (172) con la condición de con- · (171) serán:
_ .(3 +
2p)P ( 2 _ 2 _ 1 .....: 2p 2\
1 ] . N. Goodier, J. Aeronoue. Sd .• vol. 11, pág. 273, 1944. Una definición diferente fue
propuesta por E. Trefftz. Z. ongew. Math. Mech., vol. 15, pág. 220, 1935.
1'"" -8(1 +
1')1 r :t 3 + 21' Y)
(174)
• Véase S. Timoshenko, Bull. Inst. Engineers 01 Ways 01 Communications, San Peters- (1 +
2v)Pxy
burgo, 1931. Véase twnbién Proc. l.<Jndon. Mach. Soc., serie 2, vol. 20, pág. 398, 1922. 7~. = - 4(1 1')1 +
360 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLEXION DE I'IEZAS PRISMAT[CAS 361
La tensión tangencial vertical T",. es una función par de x e y, la compo- Sustituyendo esta expresión en (172) resulta,
nente horizontal T". una función impar de las mismas variables. La dis-
tribución tensional (174) -dará, por tanto, una resultante cuya línea de éJ2<J>
éJ~2
éJ2.p
+ ay2 =
Py
7
(a¡;z + 1 +
2 ,,)
JI
(e)
D,cción coincide con el diámetro vertical de la sección transversal.
En el diámetro horizontai de la sección recta x = O y según (17~) ecuaClOn, que junto con la condición ,p = O en el perímetro, determina
tendremos _ la función de tensión ,p. La condición de contorno y la-ecua.ción (e) que-
(3 + 2v)P ( •
+
"T.. = 8(1 v)! 1" -
1 - 2v
3+
2)
2v y , "Tu. = O (f)
dan satisfechas tomando:
(d)
La máxima tensión tangencial se presenta en el centro (y = O) donde:
--Cuando a = b esta solución coincide con la dada anteriormente para la
(3 2v)PrZ + sección circular.
(1"u)mÁX= 8(1 ,,)1 + (g)
.. Sustituyendo (h) Y (d) en las ecuaciones (171) obtendremos las com-
- La tensión tangencial en lbs extremos del diámetro horizontal (y = ±r) - ponentes de la tensión:
vale: _ 2(1 + p)a 2+ b2 P [ . 2 (1 - -2p)a2 2]
_ (1 + 2v)Pr~ Tu - (1 + p)(3a2 + b2) • 21 a- - x - 2(1 + p)a2 + b2 Y
(1"••).._=. - 4(1 v)I + (h) (1 + JI)a + Jlb Pxy
2 Z (175)
TM' = - (1 + y)(3a + b T
2 2)
2(1 +
v)a2 + b2 P [ • (1 - 2v)a2 ]
(le) T:. = (1 + p)(3a2 + b2) 21 a- - 2(1 + v)a Z + b2 y2
siendo A el área de la sección transversal de la pieza. La teoría elemental TlI' =O
de la flexión de vigas basada en la suposición de que la tensión tangencial La tensión máxima, que-se presenta en el centro (y = O), viene dada por
T .. se distribuye uniformemente a lo largo del diámetro horizontal de la la ecuación: -
sección recta, nos da:
4P
( )
T", • .... x
= pa
21
2
[1 _ a 2
+ b + JI)]
+Sa2"bz/(l 2
T •• = 3A
Si b es pequeño comparado con a podemos despreciar los términos con-
siendo un 4 % el ermr de esta solución elemental. teniendo b2 /a 2 , en cuyo caso resulta:
. q, =
'V L¡
Lt 'V .
A 2,,*1,1> C08
(2m + 1)1I'Z sen bntrU
2a (d)
FIG. 188 m-O n-1
-l+JJT
v Py
v
m=" n= 1) + 1
P 8b3 '"' '"' - m n- cos
(2m
2a
"'e
l)'lTX ntrU
senT
+
2
La curva mnp de la figura 188 representa la intersección de la membrana - 1 + V 1 -:;;x L¡ L¡ (2m + l)n [(2m + 1)2 b2
4a .
+ na]
con el plano yz. , m=O 71=1 .
364 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLEXION DE PIEZAS PRISMATICAS 365
Con esta función de tensión las componentes de la tensión tangencial tendrá entonces
pueden ser determinadas mediante las ecuaciones (e). n- ..
Deduzcamos ahora qué correcciones hay que añadir a 1m; tensiones, _ _v_ 3P . ~,[ ! ~ "'\" (-l)n]
que pal"3 el eje Ji, da la teoría elemental. Considerando para ello la defor- (1'",")_0, u-o = 1 + JI 2A a 2 3 + Ls¡ n2 'ch
11'2 n1l'a
mación de la membrana (fig. 188), podemos ver que las correcciones alcan- ,,-1 b
(176)
zan los valores máximos a 10 largo de este eje y que, por tanto, la máxima 11= ~
JI 1 11'~
2
2: 2:
(_1)"'+0-1 cos n1Ty
m=O n=l
(2m + 1) [ b 2+]
(2m + 1)2
b
-2
4a
11,2
en donde A = 4ab, es el área de la ,sección transversal. Estas series con-
vergen rápidamente y no es difícil calcular las correcciones Tu" para cual-
quier valor de la relación albo Estas correcciones deben ser añadidas al
nel
k'='~
El",'
e es la dIstancia de la fuerza P al apoyo IzqUIerdo (flg. 112). Haciendo ahora e = OY Pe = M,
~ (-1)0 • la sIguiente curva de deflexlón producida por el par M aphcado en el extremo
,,- . sen~
L.¡ n
¿
2
n-l 2Ml' Z
m-"
'" (-l)m,
(kll')*
'lJ"s 1 - sech-Z la flecha en el centro será:
y = El ...'
,.-1
n(n' + k')
ru P [a
= 21 2+ 1 +" " (2y - b )]
3" (1) Calculando los coeficientes m y tl mediante la condición de mínima
, "nergía obtenemos'
Se observará que para un rectángulo estrecho la corrección de la fórmula
elemental dada por el segundo término del corchete es siempre pequeña. m=
Si b es grande frente a a la deformación de la membrana en los puntos
alejados de los lados cortos del rectángulo, puede ser considerada función
lineal de y, de donde según la ecuación (b) tenemos: n=
Pa 2 (l)
v P (r",.)_o.lI-lJ = 2T - 2a 2b2(m + 1!b2)
ru. = - 1 + v T x¡¡
Los valores aproximados de la tensión tangencial dados en la segunda línea
En el baricentro de la sección recta (x = y = O), la tabla de la página 365 han sido calculados usando estas fórmulas.
puede verse las fórmulas aproximadas (l) dan una exactitud satis-
1 Pa2 para este orden de valores de la relación alb.
r"" =1 + vU' r •• = O
la anchura del rectángulo es grande comparada con su altura la
que co'mparada con la solución elemental da una tensión reducida en 'tensión máxima es muy superior al valor 3P/2A, dado por la teoría ele-
l/O + v). Por otra parte si bla es mayor de lS la tensión máxima deja de
Para satisfacer la condición de contorno en los lados cortos del rec- 1 Véase Timoshcnlco, loe. cit.
368 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLElCION DE PIEZAS PRISMA"l'ICAS 369
ser la componente 'ZD en los puntos medios de los lados verticales (x = O, El problema pu!:!ue también resolverse fácilmente si el contorno de la sección
y=±b), siéndolo la componente horizontal '11: en los puntos x=a, y=±¡¡, transversal viene dado por la ecuación:
pertenecientes a los bordes superior e inferior y próximos a los vértices.
Los valores de estas tensiones son dados en la tabla I siguiente: Los valores a >z >-a (b)
de r¡ aparecen en la forma (b - r¡)/2a en la última columna, siendo b - 11
la distancia entre el vértice y el punto donde se da la tensión máxima. Para" = 1/4 ese contorno tiene la forma mostrada en la fIgura 190.
Haciendo:
Es fácil demostrar que esta ecuación anula el segundo Podemos llegar al mlsmo resultaoo de distinta forma. Al estudiar las tensiones que
miembro de la (173) si tomamos se producen en una viga rectangular, cuya anchura es grande comparada con su
t al.tura, empleamos como solución aproximada para la función de tensión [ecuación (g),
fey) =
P ( ¡:¡:-;;
21 .. y' + 1 a+ .. )
§ 109] la expresión:
.. Py
;e
Sustituyendo en (172) resultO!" '" = 1-~
+" -21 (z' - a')
a.", él'",
FIU. 189 iiii + élV' = o de la cual pueden deducirse las fórmulas (e) de las componentes de la tensión. Po-
demos obtener ahora la ecuación del contorno partiendo de la condición de que la
ecuaclon que junto con la condición de contorno (173) qlleda satisfecha haciendo dirección de la tensión tangencial coincida con la de la tangente a la periferia. Te-
<P "f' O. Las componentes de la tensión tangencial deducidas, según (171), serán nemos entonces:
entonces:
r... = Ji (- z, + 1 ~ .. y. + 1 ~ .)
T1I1 = O Sustituyendo (e) e integrando obtenemos la siguiente ecuación para el contorno:
La tensión tangencial es, pues, vertical en todo punto de la seeclon transversal y = b{a 2 - z'}'
y su valor máximo que se da en el punto medio de los lados ·verticales es:
El método de la energía (§ 109) pennite obtener en muchos (,tros cusos ~olu
Pa' ciones aproximadas. Consideremos, por ejemplo, la sección recta mostrada en lol
Tmb =-
. 21 figura 191. Los lados verticales del contorno vienen dados por la ecuación y = ± b
y los otros dos son arcos de la circunferencia.
I E. Reissller y G. B. Thomas, J. Motil. P/¡ys., vol. 25, pág. 241, 1946.
, Este problema fue estudiado por F. Grashof, Elasti"itilt u1Id Festigkeit, pág. 246, 1878. z'+y2-r'=O (¡j)
El segundo miembro de la ecuación (173) se .muht para: y la (172), que determina la función de tensión 91 resulta:
Bt/> P:¡;' P
2T + 6t (2a + y)' =
2 vap + a(2a + 1/)1
JtIJ
Flc. 191
=
Flo. 192
T •• = ay -
o'¡' 2.y'3P
27a' [-z'
(e)
T •• = - a;; - 27a' z(a - y)
Las soluciones correspondientes a secciones transversales de otras muchas formas
han sido obtenidas empleando coordenadas curvilíneas y funciones de variable com- A .10 [argo del eje y'(x = O) la tensión tangencial resultante es vertical y viene dada
pleja. Entre les casos estudiados se encuentran los de secciones limitadas por dos por la función lineal.
círculos, concéntrico' o no', un círculo con ranuras radia[es J , una cardiode ' , un
Iimacon', un Jimacon elíptico", dos elipses homofocales' y una elipse y una hipér-
bola homofocales·, triángulos y pollgonos" incluyendo un rectángulo con ranuras'"
y un sector de un anillo circular".
E[ valor máximo de la misma, que se presenta en el punto
111. Secciones transversales no simétricas. Empecemos considerando medio del lado vertical de la sección, es:
e[ coso de un triángulo isósceles (fig. 192). La ecuación de su contorno es:
(y - a)[x + (2a + y) tg aJ[..: - (2a + y) tg a] = O.
(d) FIG.193,
El segundo miembro de la ecuacIón (173) se .llIula SI tomarnos:
p Calculando el momento producido por las tensiones tangenciales (e) respecto al
f(1/) -= 21 (2a + y)! tg' Ct eje z vemos, que en este caso, la fuerza tangencial resultante pasa por el baricentro e
de [a sección recta.
Consideremos ahora el caso ,más ~ener.ll de una sección transversal con un eje
, Véase A. E. H. Love, Mathema/ical 'l'heary 01 Elasticity, 4.' edición, pág. 335, Y l. S horizontal de simetría (fig. 193), cuyas porciones superior e inferior tengan el con-
Sokolnikoff, /lt!alhematica/ T/¡eory 01 E/asti,ity, pág. 253.
• B. R. Seth, Proc. ¡ndianAcad. Sci., vol. 4, seco A, pág. 531, 1936 Y vol. S, pág. 23,1937. torno dado por:
• W. M. Shepherd, Proc. Rqy. Soco London, serie A, vol. 138, pág. 607, 1932; L. A.
Wigglesworth, Proc.(LondonJMatll., Soc., serie 2, vol. 47, pág. 20, 1940, Y Proc. Roy. Saco
pum z >0
para :¡; <O
(Lrmdoll), serie A, vol. 170, pág. 365, 1939.
• W. M. Sbepherd, Proc. Ruy. Soc., (London), serie A, vol. 154, pág. 500, 1936. La función:
'D. L. Hall y D. H. Rock, Z. a>tgew. Mal/¡. Mech., vol. 19, pág, 1,41,1939.
• A. C. Stevenson, Proc. Londan Mat/¡. Soc., serie 2, vol. 45, pág. 126, 1939. [:¡; + >¡b(y)J[:¡; - >¡b{1I)] = z· - ¡'¡'(y)]',
, A. E. H. Lave, Mathe7natica/ Theory 01 E/as/idty, 4." edición, pág. 336.
• B. G. Galerkim, Bull. Inst. ETlgineers 01 Ways 01 Communicati01l. San Petersburgo, se anula entonces, y en las expresiones (171) de las componentes de la tellsión po-
vol. 96, 1927. Véase también S. Gho.h, Bull. Calcutta Matil. Soc., vol. 27, pág. 7, 1935 • demos poner:
., B. R. Seth, Phi/o Mag., vol. 22, pág. 582, 1936 Y vol. 23, pág. 745, 1937.
'" D. F. Gunder, P/¡ysics, vol. 6, pág. 38, 1935. P
11 M. Seegar y K. Pearson, Proc. Roy. Soco (Londoll), serie A, vol. 96, pág. 211, 1920.
fey) = 2i [>¡b(1I)]'
372 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLJlXION DE PIEZAS I'RISMATICAS 373
La función de tensión, en consecuencia, tendrá que satisfacer la ecuaCIón diferencial: Cuando la fuerza P es paralela al eje y, en lugar de al eje x, podemos
establecer, de manera análoga, la posición de la línea de acción de P para
la cual no se dé ninguna rotación de los elementos de las secciones trans-
versales que contienen a los baricentros. 'La intersección- de estas dos líneas
y ser constunte en el contorno .. Nuestro problema se reduce a la obtención de las de acción de las fuerzas de flexión, determina un punto que es de interés
deformaciones de una membrana, uniformemente estirada y sometida a una cargll considerar. Si en ese punto se aplica una fuerza perpendicular al eje de
cuya intensidad viene dada por el segundo miembro de In ecuación anterior. Por lo la viga podremos descomponerla según sus componentes paralelas a los
general, como ya hemos visto para el· caso de la sección rectangular estrecha, este ejes x e y y basándonos en el estudio anterior llegamos a la conclusión
l1ltirno problemn puede ser resuelto con suficiente exactitud aplicando el método
de la energía. de que los elementos situados en el centro de gravedad de las secciones
El caso representado en la figura 194 puede ser tratado no sufrirán ninguna rotación. Este punto ·recibe el nombre de centro de
de forma similar. Supongamos, por ejemplo, que la sección flexión o centro de cortadura.
transversal sea un segmento parabólico y que la ecuación de
y--¡f---,,--I la parábola sen:
a;" = A(y +11)
Tomando:
p
.?C
I(y) = 21 . A(y + a)
FIG. 194
d~ 2M. 8 3 + 4v
=P (b) 6 = P = 1& 1 + JI r
siendo 1'vl, positivo sí la distancia d es tomada en el sentido positivo del
I Véase S. Timoshenko, Bull. 1ml. ElIgú"ers oi Ways 01 Coimnunicatiol", San Petersburg",
eje y. En el estudio precedente hemos supuesto que la fuerza aplicada em 1913. Parece ser que es en este artículo donde se ha estudiado por primero vez 'el dcsplazIl-
paralela al eje x. mienlo dto la fuer~a ,~_e fleXIón del baricentro de la seccIón recla.
374 nORIA DE LA ELASTICIDAD FLElCION DE PIEZAS PRISMATICAS 375
el cual define la posición de la fuerza para la que el elemento de sección Integrando por partes y observando que r/J se anula en el contorno
recta que contiene al punto O, centro del círculo, no gira. Simultáneamente \ = ± 1p(y), obtenernos:
el elemento que contiene albaricentro de la sección semicircular girará la
- cantidad [véase la ecuación (b), pág. 358]
I I (~: 11 + :: a;) d~
dy = - ~ II
;p ilx ily
Col
= JlP(l-z)
lJI 42'-
• ,;rr ° J[X2 - ,p2(y)] d:J; = #a(y) - 2,p3(y) = _"*"'3(y)
JJ[X2 - ,p2(y)]yd:J;dy = _tfytf;3(y) dy
donde 0,424r es la distancia del origen' O al haricentro del semicírculo. I = fJx 2 dxdy = tN3(y) dy
Para eliminar esta rotación es preciso aplicar un par, en la forma que se
SustituyendO' en (e) y dividiendo por P resulta'
indica en la figura 195. El valor de ese par se obtiene haciendo uso de la
tabla de la página 317, la cual da para una sección semicircular el siguiente
ángulo de torsión d -- ~
P --l-~
P II cPd:J;dy + [y"'3(y) dyl
f¡J;3(y) dy
ti> =
P!
T
:¡;2dy
-2- - 2(1
11 Py3
+
ji) 3T + constante (el
que permite obtener el valor de rp para todo punto del contorno. La inte-
gral J(x 2{2)dy, cuando es tomada a lo largo del contorno, se anula ya que
representll el momento de la sección transversal respecto al eje y, el cual
pasa por el baricentro de la misma. La función rp calculada mediante la
expresión (e) está representada a lo largo del contorno por una curva
cerrada.
Supongamos ahorá que la película de jabón es estirada de tal forma
que su borde coincide con dicha curva. La superficie de la película satis-
face entonces la ecuación (a) y la condición de contorno (e) y sus ordenadas
FIC,. 19M
representarán la función ,p, en todo punto de la sección transversal, a la
escala empleada para representar r/J a lo largo del contorno (ecuación (e)].
Lu fotografía 196a ilustra uno de Jos métodos empleados para cons- que el contorno de la sección recta de la viga. La lámina viene fijada
unas clavijas verticales y su posición se ajusta con tuercas y arandelas
J Este método fue señulauo por primera vez por V.ning Meine.", D. 171genieur. pág. 108, que las ordenadas de los puntos del borde del agujero representan,
Holanda, 1911. Independientemente fue desarrollado por A. A. Griffith y G. 1. Taylor, Tech. ~. cierta esc,lla, los valores de cfi dados por la expresión (e). La fotografía
Rept. Nacl. Advisory Comll!. AerOl/nut., vol. 3, pág. 950, 1917-1918, de donde se han tomado
los resultados que aquí damos. 196b ilustra otro.~método para materializar el contornó que hace uso de
378 TEORlA DI! 1.A IlLASTICIDAD FLEXlON DE PIEZAS l'RISMATICAS 379
delgadas láminas de latón recocido l. Las pequeñas correcciones de las tante de todas las tensiones tangenciales distribuidas en la se~ción trans-
ordenadas en los distintos puntos del orificio se obtienen deformándolo versal. Esta resultante deberá ser igual a la fuerza P que actúa sobre el
ligeramente. extremo de la ménsula.
La analogía entre las ecuaciones de la película de jabón y del problema
de la flexión se mantiene rigurosamente, solamente si las deformaciones de ;IC .x x
la membrana son infinitamente pequeñas. Al realizar el ensayo es conve-
niente que el orden de magnitud de las ordenadas de la película no sea
superior a un décimo de la máxima dimensión horizontal. En caso nece-
la
sario el intervalo de variación de función a lo largo del contorno puede
reducirse introduciendo una nueva función ,pI> en lugar de r/J, ligada a
¡
ella por la relación:
r/J = <PI + ax + by (d) 1
1 Véase el trabajo de P. A. Cushman, TTam', A.S.M.E., 1932. 1 Por la simetria del problema basta con conSIderar una cuarta parte de ·In sección.
380 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FI.IllUON DE I'IIl'.lAS I'RJSMATICAS 381
114. Desplazamientos. Una vez conocidas las componentes de mismo princ'ipio, podernos extender la aplicación de las ecuaciones ante-
la, tensión, los desplazamientos u, v, w, pueden ser calculados de igual riores a otros casos de carga' y a otras condiciones de apoyo de vigas.
forma que en el caso de la flexión simple (véase el § 88). Consideremos Podemos admitir con suficiente ex'actitud que las tensiones en cualqui'er
la curva de deflexión de la pieza en voladizo. Las curvaturas de esta línea sección transversal de la viga, distante de los puntos de aplicación de las
en los planos xz e yz están dadas con suficiente exactitud por los valores de cargas, depende solamente de la magnitud del momento flector y de la
las derivadas B3ufoz· y o·vfoz· para x = y = O. Estas cantidades pueden fuerza cortante en esa sección y que pueden ser calculadas superponiendo
ser calculadas mediante las ecuaciones: las soluciones antes obtenidas para la viga en voladizo.
Si las fuerzas exteriores tienen direcciones distintas de las de los ejes
principales de la sección recta de la viga; aquéllas podrán ser siempre des-
(a) compuestas según las direcciones principales, siendo posible estudiarla
flexión separadamente, en cada uno de los dos planos principales. Las ten-
siones y desplazamientos totales se obtendrán entonces; usando el prin-
cipio de superposición. '
Como puede verse, la fibra axial de la ménsula se deforma en el plano xz, Cerca de los puntos de aplicación de las fuerzas exteriores, se dan
que 'es el phmo en el q'ue' actúan las fuerzas, y la curvatura en cualquier irregularidades en la distribución tensional que ya han sido estudiadas para
punto es proporcional al momento flector en ese punto tal como se supone el caso de una sección rectangular estrecha (véase el § 36). Un estudio
en la teoría elemental de la flexión. Integrando la primera de las ecuaci()- análogo para secciones transversales de otras formas, muestra que estas
nes (a) resulta: irrt:gularidades tienen carácter ¡ocaP,
P[Z2 P Z3 El problema de la flexión producida por cargas repartidas ha sido tam-
U = 2EI - fiNl + cz + d (b) bién resuelto para ciertos casos 2 • Se ha demostrado que en tales casos
el eje de la pieza sufre, por lo g~neral, un alargamiento o un acortamiento
donde e y d son constantes de integración que deben ser determinadas corno en el caso de piezas de sección rectangular estrecha (véase el § 21)
con arreglo a las condiciones del extremo fijo de la pieza. Si la extremidad ya estudiado. La curvatura de la fibra axial en estos casos deja de ser
de la fibra axial está empotrada, u y dufdz serán nulas para z = O Y las proporcional al momento flector, pero las correcciones a aplicar s()n lo
constantes e y d de la ecuación (b) serán entonces cero. ~uficientemente pequeñas como para poder ser despreciadas en los casos
Las secciones transversales de la viga no permanecen planas sino que prácticos. En el caso, por ejemplo, de una viga circular flectada por su
se alabean como consecuencia de la acción de las tensiones tangenciales. propio peso 3, la curvatura del extremo fijo viene dada por la ecuación:
El ángulo formado por la curva de de±1exión y un elemento de la superficie
de la sección alabeada es:
transversal, nuestras soluciones son suficientemente exactas. Usando el chierf, Bull. Po/ytec", 'b.st., San Petersbur¡;lo, pág. 441, 1915.
D1STRffiUCION TENSIONAL SIMETRICA 38:;
Distribución tensional
(179)
resp
en un sólido de r
(180)
(a)
116. Ecuaciones generales. Muchos problemas de importanci~
práctica se refieren a cuerpos de revolución, que son deformados simétri- corresponde al operador de Laplace
camente respecto al eje. Los ejemplos más sencillos son los del cilindró
circular sometido a U11a presión interior y exterior uniformes y el del
a 2 a 2 ¡J2
disco circular giratorio (véase los §§ 26 y 30). Para resolver problemas
u:r.· 2 + aif + 0;;2
de este tipo suele ser conveniente utilizar coordenadas cilíndricas [véanse coordenadas cartesianas [véase la ecuación (d), pág. 82). Es de advertir
las ecuaciones (170), pág. 344]. Siendo la deformación simétrica respecto la f~nción rft no depende de.~, de forma que el tercer término de (a)
al eje z, se deduce que las componentes de la tensión serán independientes tara nulo cuando la operaclOn es aplicada a ,p.
de) ángulo 0, anulándose, pues, todas las derivadas respecto a esta variable. Pasemos ahora las ec~aci0x:es de compatibilidad (130) (véase la pá-
Las componentes de la tensión tangencial 'rrO Y 're. se anulan igualmente 2.67) a coordenadas cIlíndricas. Llamando e al ángulo formado por r
.1 causa de la simetría del problema. Las ecuaciones (170) se reducen
. el eje x tendremos [ecuación (13)J:
entonces a:
JJO"r+~:!... +~ =0 (f", = (f, cos~ (J + O"osenz (} (b)
ar uZ T
(177) 0"" = (frsen2 (} + cos (J
0"0
2
Una vez más, resulta ventajoso introducir una función de tensión <p. Como 2 .
puede verificarse por sustitución, las ecuaciones (177) quedan satisfechas . - j:2 COS 28(0', - 0'0) (e)
si tomarnos como componentes de la tensión las:
384 TEORIA DE LA ELASTICIDAD DlSTlllBUCION TENSIONAL SIMETRICA 385
Usando el símbolo e para la suma de las tres componentes normales de y considerando la cuarta ecuación del grupo citado se llega al mismo resul-
la tensión y aplicando la ecuación (h) de In página 82, resulta, que para tado. En lo que se refiere a la última ecuación· de (130),· puede ser expre-
una distribución simétrica de tensión: sada en coordenadas cilíndricas, sustituyendo:
(C') (g)
a2 1 a 82 ) 2 1 1 ae _
( 81'2 + T ar + éJz2
I
31, 144. 1900. La relación que existe entre Ja f'.lOción de tensión de los
oroblelnas bidlirncnsion.les y la estudiada en este capítulo ha sido considernda por C. Weber.
(f) angew. Math. Mech:, .. vol. 5, 1925. .
386 nORIA DE LA El.ASTlCIDAD
DISTRIBUCION 'l'ENSIqNAl. SIMETRICI\ 387
En algunos casos resulta útil expresar la ecuación (180) en coordena- Sustituyendo en (h) resulta:
das polares R y 1fI (fig. 198), en lugar de las coordenadas cilíndricas T y z.
, él 2 'l'. éJ'l'n
Esta transformación puede realizarse fácilmente empleando las fórmulas (1 - x-) - 8x2 - 2a' -a'
,¡;,
, + n(n + 1)'I',. = o (183)
dd § 25, las cuales nos dan:
ecuación que resolveremos por medio de una sede l . Suponiendo que:
él' o' {Jz 1 él 1 {J2
ar 2 + éJz' = aR2 + R aR + RO a,f¡2 ..¡r. = a1X'"' + a.xm, + a3X'" + (e)
.!.r ~ = _,_1 _._ (.3.- sen'" + cos y, .!.) = ..!..3.- + ~g tJ¡ .!. y sustituyendo en (183), tendremos:
or R sen y, oR R a", R aR R~ ay,
n(n + l)(a¡x"" + azz + a~x'" + ...) = 7n¡(ml + l)a¡x
m
, m,
Sustituyendo en la ecuación (180), se obtiene: , -mI(m¡ - l)a¡x""-z + mz(mz + 1)a2x'" - mz(mz - 1)azz",,-2
+ . " (d)
éJ2
( aRo
2 (J 1 a
+ R oR + R2 ctg '" o'" + R2 a",'
1 a.) (a'aRo
e/> + R2 aR
acf> ',Para que esta ecuación sea satisfecha por cualquier valor de x deben darse
.. las siguientes relaciones entre los exponentes mlt m 3 , mJ, '
1 - a</> lO'</»
+ R2 ctg.p atJ¡ + R2 éJy,' = o (181) m2 = mI - 2, ma = mz - 2,
En los párrafos siguientes, haremos uso de esta ecuación con el fin de relaciones, de las que se sigue, que la serie (e) viene ordenada-según 'las
estudiar diversos problemas particulares con simetría axial. ,potencias decrecientes de z. El valor de mI será ahora determinado igualan-
Podemos resolver estos problemas de otra forma considerando explí- i;!o los coeficientes de x ml en (d). Tenemos entonces:
citamente los desplazamientos. Las ecuaciones (178) permiten expresar las n(n + 1) - ml(ml + 1) = (n - ml)(m¡ + n + 1), = O
componentes de la tensión en función de los desplazamientos 'U y w. Susti-
'que nos da para m" las dos soluciones:
tuyendo estas funciones en (177), obtenemos dos ecuaciones en derivadas
parciales de segundo orden que contienen a u y w. El problema se reduce, mI = -en + 1) (e)
entonces, a la resolución de esas dos ecuaciones. ellas, se tendrá:
mz=n-2, ma = n - 4,
117. Soluciones polinólllicas. Consideremos las soluciones de la
ecuación (181), que al mismo tiempo lo son de la ecuación: coeficientes Gz, a3, ... , que figuran en (d), se obtienen igualando a
los coeficientes de cada un~ de las potencias de x. Tomando, por
, los términos que contienen .x m1 -2 + 2, encontramos para el
del coeficiente () la ecuación:
en la que IJIn es furiCión del ángulo 'P solamente. Sustituyendo (a) en la a = _ (n - 2r + 4)(n - 2r 8) +
ecuación (182), obtenemos la siguiente ecuación diferencial ordinaria: r 2(r +
1)(2n _ 2r 3) a,.....l
serie (e) tomará, ahora, la forma:
-1- - él ~sen f a'l'o)
----- + n(n + l)w" ,= " O (b)
sen f ay, af "~~. _ [.. n(n - 1) .-2
,:"" - al x - 2(2n _ 1) x
ecuación que puede simplificarse introduciendo una nueva
x = cos 'IjI. Entonces: " . + n(n - l)(n - 2)(n - 3) X,,-4 - • •• ] (J)
2 . 4(2n - 1)(2n - 3) ,
~,= -éJw" senf , " Conocida como ecuaeió" d. Legendrc. Un estudio derJllado de la misma puede verse
a", élx 1
'A. R. Forsyth, A Treati,e on Differelltial Equatians, púg. 155, 1903.
388 TEORIA DE LA. ELASTICIDAD DlSTRIBUCION TENSIONAL SIP,1ETRICA 389
expresión que constituye una solución de la ecuación (183). Sustituyendo Sustituyendo en las ecuaciones (179), resulta:
esta solución en (a) y recordando que:
u, = 6a a + (10" - 2)b a, . uq = Ga a +
(1011 - 2)b 3
(186)
:t = COS "', Ex = Z, R = v'r2 + Z2 IT. = -12aa + (14 - IOII)b a, . T,z; = O
se tendrá para 11 igual a O. 1, 2, 3, ... , las siguientes soluciones polinómicas expresiones que muestran que las componentes de la tensión son constantes
particulares de la ecuación (182): . en la placa. Ajustando convenientemente las constantes a3 y "3, obtendre-
mos las tensiones en una placa, cuando se nos da alguno de los valores
4>o=Ao constantes de a. y u,.
4>1 = A¡z Tomemos ahora los polinomios de cuarto grado de (184) y (185), los
4>~ = A 2(Z2 - }(rll + Z2)) . cuales nos dan la función de tensión:
4>. = A.(Z3 - fz(r 2 +.Z2)] (184)
4>. = A4[Z~ -_ ~z2(r2 + Z2) + -¡¡\-(r 2 + Z2)2) <b = a,(8z' - 241'2z 2 3r 4) +
b4 (2z 4 + rZz z - r 4) +
(b)
4>6 = Aó(Z5 _1j-z 3(r 2 + Z2) + -.Az(r2 + Z2)2] . ·Sustituycndo en (179), obtendremos:
••• , , • o", •• •••• I .......... .
Estos polinomios en los que ~, Al, ... , son constantes arbitrarias, son
también ¡;oluciones de la ecuación (181). De estas soluciones podemos
.0',
.0'.
= 96a(z + 4b.(14" -
= -192a.z +
4b.(16 - 1411)z
= 96a~r - 2b 4 (16 - 1411)r
l)z
(187)! 1t ¡1
lo~ II i1' r
obtenidas haciendo b4 = O en (187), as! como una tracción uniforme de La teoría elemental de la flexión de placas, basada en la suposiclOn
dirección Z, 11. = b, que puede obtenerse de las fórmulas (186). Llegamos de que los elementos lineales de la placa perpendiculares al plano medio
de 'esta forma a unas expresiones de las componentes de la tensión, que (z = O), se conservan rectos y normáles a.1a superficie deformada de dicha
contienen cuatro constantes aG, ba, a., b, que pueden ser evaluadas, de placa', da el siguiente valor para la tensión radial en el centro:
forma tal, que queden satisfechas las condiciones de contorno en las caras
superior e inferior de la placa (fig. 199). Estas condiciones son:
u. =
3(3 + v) -es
32
a2z
q (g)
11" =0 para Z =o
11. = -q para z = -o Comparando este resultado con (j), vemos que los términos adicionules
(d) le la solución exacta, son pequeños si el espeso, de la placa, 2e es pequeño
1",. = O para z=o
1",. = O para Z =-0 comparado con el radio a.
Es de advertir que la superposición de una flexión simple eliminará
donde q representa la intensidad de la carga unifonne y 2c es el espesor los momentos flectores aplicados en el contorno de la placa, pero no las
de la placa. Sustituyendo las expresiones de las componentes de la ten- , tensiones radiales en ese mismo contorno cuyo valor es:
sión en estas ecuaciones, determinamos las cuatro constantes a o, bG, a4, ·b·.
Usando los valores obtenidos, llegamos a las siguientes expresiones para +v
2 Z3 32
(11.) ...... = q ( - - -3 - - - - -
+ vz) (h)
las componentes ele la tensión, que satisfacen las condiciones (d): 8 c 8 5 e
(T = [2 + v~ _ 3(3 + v) r z _
2
~2 + JI =+ 3(3 + p) a2z] (188) I Esta hipótesis es análoga a la de conservación de las secciones transversales pliIl1., de
r g 8 el 32 c3 8 5 o 32 c3 la teoría de la flexión de. vigas. La teoría exacta de la flexiÓn de placos fue desanolloda por
J. M. Michcll, Proc. London Malh. Soc., vol. 31,1900 Y A. E. H. Lave, Mathematical Theo,y
que para el centro de la placa nos da el valor: .0J Elusticily, 4.' edición, pág. 465, 1927.
J A. Korobov, Bull. Polytech. IlIst. Kiew, 'J913, ha estudl2dci algunas solUCiones del caso
v~ _ 2 v~
de placa circular cargada uniformemente. Soluciones semej1lI)tes han. sido obtenidos inde-
(IT) = [2 + 'ª- + + 3(3 32+ v) a'.i.e3z ] (1) pendientemente por A. Tlmpe, Z. a1lgew. Mallz. Meeh., vol. 4, 1924.
••_0. q 8 e3 8 5 e , Véase Kelvlfl y Tait, Natural P/¡ilosophy, vol. 2, pág. 171, 1903.
392 'l'EORIA DE LA ELASTICIDAD DlSTRIBUCION ,'l'ENSIONAL SlMETRICA 393
dónde e es la densidllu y IJJ !a velocidad angular del disco. De las ecuaciones (179) deducimos
Las ecuaciones de compatibilidad, deben ser cambiadas también. En lugar del
sistema (130), tendremos tres ecuaciones del tipo (j) (véase la !níg. 267) y tres del rT. "" -a,(lSOr' - 240.') + b.[(36 - 54,,)r a + (1 + 18..)6"J
tipo (g). Sustituyendll en estas ecuaciones las componentes de la fuerzn másica tT. = -a.( -240r' + 4802') +
b.[(96 - 1081').2 + (-102 + 54.)r']
(e)
tl8 = as( -60r' + 240,,') + M(6 + lOS.)z' + (12 - 54 ..)r']
y = p""y, z=O (a) T~. = 480a,r. - b,(96 - 10S,,)r.
obtenemos, que las últimas tres ecuaciones que contienen las componentes tangen- .\,i.I<.!Jendo estas tensiones a las (190) y determinando las constantes a, y b" bajo
ciales de la tensión, son las mismas que las del sistema (130) y que las tres primeras la condición de que las tensiones resultnntes T .. y u% desaparezcan, encontramos:
se convierten en [véase las ecuaciones (e), § 116]
• [v(1 + v) ,+ -8-
a +" r.]
V'rT. _ ~ (IT. _ 1T8) + _1_ a'e = 2p",z tT, = -po> 2(1 _ .)"
r' 1 +" iJr' - r=-;. (f)
_ ,[(1+3p) ,+v(l+v).]
2 1 1 ae 2p",' rT~ - -POI --8-- r 2(1 _ ..) a
V'rTO + ;:0("" - 1T0) + 1 + ¡Ir é)r = - r=-; (b)
V'a. + _1_ a'e = _ 2vpOl' Para eliminar la compreSlOn radial resultante que actúa .a lo largo del contorno,
1+.8z' 1-. es decir, para que
Comenzamos con una sc¡,lución particular de las ecuaciones (189), que satisface las
condiciones de compatibilidad y le superponemos soluciones de la forma polinómi-
(f ardz)
C
-e r.-a
= O
que como se ye sati~facen a la segunda de las ecuaciones de equilibrio, cumpliendo Las tensiones finales, por tanto, serán
asimismo las condiciones de compatibilidad que contienen las componentes de la
tensión tangencial [véanse las ecuaciones (j) y (g), § 116J. Falta ahora detenninar crr = p",' [ 3-+-v (a' - r') + 6(1 + v) (c' -3z') ]
-.(1---
p
las constantes A, B, e, D, de forma tal que satisfagan las restantes cuatro ecuacio- 8 - v)
,(191)
nes, es decir, la primera de las (189) y las (b). Sustituyendo (e) en estos ecuaciones, 3 v
ITq = pOlO [ - - a' -
+ 1 + 3,. .. (1 + ,,)
- - /" + - - - (e' - 3z')
]
obtenemos S 8 6(1 - v)
rr~ =O
A = pw'{l + 3~) G = 0, D-
pOl'(l + 2,,)(1 + .)
6" ' 6 .. (1 - .) Si se compaTa esta última con In solución (SS), vemos que en la solución actual
existen términos adicionales que contienen al factor' (e" - 3z'). Las tensiones co-
La soh¡ción particular resulta entonces: rrespondientes son pequeñas para el caso de un disco delgado y su resultante es
cero en su espesor. Si la superficie cilfndrica limitantc de la rodaja estuviese libre
_ _ p"" , _ pOl'(l + 2.)(1 + ,,) • de fuerzllS exteriores, lo solución (191) representa el estado de tensión en las partes
IT, - 3 r 6v(l ..) z del disco distantes de su borde.
pOl'(l + 3.) , La distribución tensional en un disco giratorio que tenga la fonna de un elip-
cr. == 6" r (190) soide de revolución achatado, ha sido estudiada por C. Chree 2 •
. pw'(1+2u)(l+.).
1T8 = - 6.(1 _ .) Z
, F.stos ténninos son d<· igual narurale"" que los en z' encontrados en el § 84. Las ecu.lClO-
Tu = O neo (191) representan un estado tensional plano, puesto que a, Y'''''' se anulan. La fuerza m,i-
sica (la fuerza centrífuga aqui), no incluida en el § 84, no altera las conclusiones generales,
Esta solUCión, puede ser utilizada al estudiar las tensiones existen tes en cualquier siempre que sea Independiente de z. ' .
cuerpo que gira alrededor de su eje de revolución. • C. Chrcc, Proc, ~oy. Soco (L01ldon), vol. 58; pág. 39, 1895.' '
394 TEORIA DE LA ELASTICIDAD D1STR1BUCION TENSIONAL SIMETRICA 395
120. Sólido, de extensión indefinida 'cargado en uno de sus necesidad de considerar tensiones infinitas, suponemos que el origen es
puntos. Al estudiar este problem¡lj usumos de nuevo la ecuación (182) el centro de una pequeija cavidad esférica (fig. 200) y consideramos, que
de la página 386. Tomando m¡ = -en +
1) [véase la ecuación (e), pá- la superficie de esa cavidad está sometida a fuerzas calculadas con arreglo
gina 387J, obtenemos la segunda integral de la ecuación (183) bajo forma a las ecuaciones (194-). Puede demostrar~e, que la resultante de estas fuerzas
de la serie
que también son soluciones de la ecuación (18"1). Multiplicando las expre- representa una fuerza aplicada en el origen con la dirección del eje de
siones (192) por 7 2 + Z2 (véase la pág. 388), obtenemos otra serie de solu- las z. De la condición de equilibrio de un elemento anular adyacente a la
ciones de la ecuación (181), a saber, cavidad (fig. 200), se deduce que la componente de las fuerzas superfi-
ciales según la dirección z es
<Pl = Bl(r 2 + z2)1
<P2 = fl zz(r 2 + z2)-1 (193) z = -(7,., sen'" + 0'. cos if¡)
Todas estas tensiones tienden a infinito cuando nos acercamos al origen B = P (195)
de coordenadas, donde la fuerza concentrada está aplicada. Para evitar la 87r(1 - /1)
396 'rEORIA DE LA ELASTICIDAD DlSTIUBUCION TENSIONAL SIMETRICA 397
en las ecuaciones (194), obtcnerrios las tensiones producida~ por una fuer- - U + (offaz)d]. Superponiendo las tensiones producidas por las dos fuer-
za P aplicada en el odgen según la dirección z l. Esta solución es la análoga zas y representando mediante el símbolo A el producto Bd, resulta
tridimensional del problema bidimensional estudiado en el § 38," a
Sustituyendo z = O en las ecuaciones (194), deducimos que no existen CTr = -A iJz [(1 - 21')z(r 2 + 2"2)-1 .,... 3r2z(r2 + z2)-I]
tensiones normales que actúen sobre el plano coordenado z = O. Las ten- Q
siones tangenciales en el mismo plano son (1"8 = -A az [(1 - 2J1)z(r 2 + Z2)1]
iJ " (196)
B(l - 2v) P(l - 2)1)
1'rz= - - -r-
2 - = - 81T"(l
- ---v)r
-3 (a) 11". = A QZ [(1 - 2v)z(r 2 + z2)-if + 3z 3(r 2 + Z2)-!J
éJ
Estas tensiones son inversamente proporcionales al cuadrado de la dis- 7",.. = A QZ [(1 - 21')r(r2 + z2)-a + 3rz 2(r 2 + z2)-9]
!Dcia T desde el punto en cuestión al de aplicación de la carga,
Consideremos (fig. 201) las componentes de la tensión CfR y T[1'I', que
121. Recipiente esférico sOJlletido a una presión uniforIne actúan en un punto M de una superficie de área elemental normal al
interior o exterior. Partiendo de la solución del párrafo precedente y radio 01'VI, cuya longitud designaremos por R. De la condición de equi-
por superposición, podemos obtener nuevas soluciones de interés práctico, librio de un pequeño elemento triangular, tal como el indicado en la figura,
Comencemos con el caso de dos fuerzas iguales y opuestas, que actúan obtenemos1
sobre un cuerpo elástico de extensión indefinida en puntos separados entre 2
sí la distancia pequeña d (fig. 201). Las tensiones producidas por la fuer- O"R = O"rsen2 '" +
CT, cos '" +
21',.. sen'" cos '"
2 2 (a)
za P, aplicada en el origen O, vienen determinadas por las ecuaciones (194) 1'n.¡, = (O", - 0"=) sen'" cos '" - r,,(sen '" - cos "')
obtenemos
2(1 + v)A [ 2(2 - JI) ]
- -¡¿a .-.. - sen2 '" + 1 + V CO:;2",
(b)
2(l + v)A
- [l" sen'" co:; '"
círculo contenido en el plano rz, la primera de l!ls ecuaciones (b) nos da Tendremos entonces
:a parte de tensión originada por la fuerza doble a lo largo del eje z. Inter- e = (Pi - po)a 8b3
cambiando sen 1p y cos lfl, obtenemos la tensión normal que produce la a3 - bS
doble fuerza que actúa a lo largo del eje r. La tensión normal, producida D = Pob 3 - p,a B
por la doble fuerza perpendicular al plano TZ, se obtiene haciendo 1J! = n/2 3 (197)
a - b3
en la misma ecuación. Combinando la acción de las tres fuerzas dobles _ PobS (R3 - a3 ) Pia3(b3 - E3)
perpéndiculares, se obtiene la siguiente tensión normal que actúa sobre aH - R3(a3 _ b3) - + R3(a3 _ b3)
la superficie de la esfera,
Las presiones Po y P, producen también en la esfera tensiones normales (f
G'j¡ = (e) de dirección tangencial, cuya magnitud determinamos a partir de la con-
dición de equilibrio de un elemento de esfera, limitado por dos superficies
La combinadón de las tres dobles fuerzas perpendiculares, determina lo esféricas concéntricas de radios R y R + dR Y por un cono circular de
que se llama centro de compresión y la ecuación Ce) nos dice, que la compre- ángulo sólido muy pequeño d'l' (fig. 202). La ecuación de equilibrio es
sión correspondiente segÍln. 111 dirección radial depende solamente de la
distancia al centro de compresión y que es inversamente proporcional al
cubo de esta distancia.
de donde
(e)
p.a 3 (2R3 + b8 )
(198)
2R3(a 3 - ba)
Si Po .= O; se tendrá
Ba. 202 Como puede verse en estL' caso, la tensión de dirección tangencial máxima
se da en la superficie interior, donde
Esta solución, puede ser empleada para el cálculo de las tensiones en un
recipiente esférico sometido a la acción de una presión uniforme interior
o exterior. Sean a y b los radios interior y exterior de la esfera (fig. 202)
Y p, Y Po las 'presiones uniformes interior y exterior. Añadiendo a la ten-
Todos estos resultados son debidos a Lamé 1•
sión (e) un estado equitensional de tracción o compresión, podemos tomar
la expresión general de la tensión normal radial en la forma, 122. Tensiones locales alrededor de una cavidad esférica. COIlside-
(J
lemos ahora, como segundo ejemplo, la distribución tcnsionaJ existente en torno
G'j¡ = E8 +D (d) a una pequeña cavidad esférica que se encuentra en una barra sometida a una trac-
ción uniforme de valor S (fig. 203) '. En el caso de una bana maciza sometida a
donde e y D SOll constantes cuyo valor se calcula con arreglo a las condi-
, Lamé, Lefons sur fa théorie ... de I'elasticité, Parls, 1852.
ciones en la. superficie interior.y exterior del recipiente, las cuales son , La solución de este problema ba sido dada por R. V. Soutbwell, Phm. Mag., 1926;
véase también J. N. Goodicr, Trans. A.S.M.E., vol. 5S, pág. 39, 1933. La cnvidad elipsoidal
e
bi + D = -p.
es consid~rada por E. Sternberg y M. Sadowsky, J. Applied Mecha71ic$ (Trans. A.S.M.E.J.
vol. 16, pág. 149, 1.?49.
400 TEOIUA DI! LA ELASTICIDAD DISTRIBUCION TBNSIONAL SlME1'RICA 401
tracclóll, las c()mponentes normal y tangencial de la tensión que actúa sobre una Usando ahora las ecuaciones (a) del plÍrrafo anterior, las componentes de la tensión
superficie esférica son que actúan sobre una superficie esférica de radio tl son
~a . ~a
tr" = Seos· 'P, Tn, = -8 sen 'P cos ~' 0"1I
m
-= 7 (-1 + 3 cos" '¡), . T1I"'''' - aa sen'" cos .¡, (e)
Para obtener la solución correspondiente al caso de una pequeña cavidad esférica,
de radio a, debemos superponer a la tracción simple un sistema tensional cuyas t ·.,mbinando los sistemas tensionales (b), (e) y (e), resulta
componen tes sobre la superficie esférica sean iguales y opuestas a las dadas por las
ecuaciones (a) y que en el infinito se anulen. _ UR =
2(1 +
a'
II)A
- 2(5 -
A
11) (i3 cos' .¡,
B
+ 12(;'
(i3 - ~. + 360
(i6 COSO '"
2(1 + ,,)A 240 (f)
"l"l/'¡- = - a' sen'¡' cos '" + (jT sen'¡' cos '"
(o)
donde A y B son constantes a determinar. Puede verse, que las tensiones (a) que
Para z = 0, las ecuaciones (196) dan
origina la tracción no pueden ser anuladas combinando las (h) y (e), siendo necesario " A(l - 2.) 5(1 - 211)8 a'
un sistema adicional de tensiones. 0". = r' = 2(7 - 5.) ro (l)
Tomando de las soluciones (192) lIna función de tensión
De la ecuación (e) del párl"afo anterior, t~nemos
30 . (d)
0"0 = ll' (1 - 5 coso .¡,) En r = a telldremos
150 () = 27 - 15" 8 (o)
T,. =W (-3 sen'" cos .¡, + 7 sen.p cosO .¡) er, m'" 2(7 _ 5v)
Los resultados a los que hemos llegado. pueden tener interés práctico al estudiar
la influencia que sobre la tensión límite de fatiga de probetas sometidas a la acción
0'. = Al" (Z2. - ~ r 2) (r i + z2)-1 dz = ~ z(r 2 + Z2); (200)
Jr"
de tensiones cíclicas, tienen las pequeñas cavidades 2.
3
T.. = 2' A z rz(r2 + z2)-1 dz = A
'2 r(r 2 + z2)-i
123. Fuerza sobre el contorno de un cuerpo sexniindefinido.
Imaginemos que el plano z = O, constituye el contorno de un sólido semi-
indefinido y que una fuerza P actúa sobre este plano 11 lo largo del eje z 0'9 = - -21 A f."• (r i + z2)-iI dz = - - A[l
- -
2 r 2
.:.i (r2
r
+ z2)-1 ]
(fig. 204) 3. Como se ha visto en el § 120, la distribución de tensiones
dada por las ecuaciones (194) y (195). puede ser producida en un cuerpo el plano z = O. encontramos que la tensión normal en el
semiindefinido por)a acción de una fuerza concentrada en el origen y de es nula y que la tensión tangencial vale
fuerzas tangenciales sobre el contorno plarlO z = O, de valor
(Tr.)z-o = i~ (b)
B(l - 211)
7:'t: = - 1"2 (a) ahora que combinando las soluciones (194) y (200) podemos, ajus-
convenientemente las constantes A y B, obtener una distribución
1 Este problema fue estudiado por J. Larmor. Phi/o Mag•• serie S, vol. 33. 1892. V6ase tensiones tal que el plano z = O quede libre de tensiones y que una
también A. E. H. Lave. Math~matica/ Theory 01 E/asticity. 4." edición. pág. 252. 1927. concentrada P actúe en el origen. Las expresiones (a) y (b) indican
2 Tales cavidades se presentan, por ejemplo. en una soldadura. mostrando los ensayos d.
fatiga. que las fisuras se inician por lo general, en esas cavidades. las fuerzas tangenciales sobre el contorno plano, son eliminadas ¡¡i.·
, La solución de este problema se debe a J. Boussinesq. véase Application des potelltie/s...•
París, 1885. La solución pura el caso en que la fuerza actúa en un punta interior del cuerpo
semündefinido. fue obtenida por R. D. Mindlin. P}¡YSiC5, vol. 7, pág. 195, 1936.
-B(l - 21') +:i2 = O
DISTIUBUCION TENSIONAI.. SIMETRICA 405
404 'rEORIA DE LA ELAS'l'lCIDAD
(d)
FIG. 204
" - v u= 7'., - 211" (1'2 + Z2)2 - 211" (1'2 +
Z2) (202)
Sustituyendo los valores de las componentes 'de la tensión, dadas por las por superposición, los desplazamientos y tensiones· provocados por una
ecuaciones (201), resultará carga distribuida. Consideremos el ejemplo sencillo de una carga distribui-
da sobre un círculo de radio a (fig: 205) y estudiemos el desplazamiento
(1 - 2v){1 +
v)P según la dirección de la carga de UJI punto M de la superficie del cuerpo,
u = 2rrEr·
[
Z(r2 + Z2)-. - 1 + 1_._1_
- 2v
r2z(r~ + Z2)-i] (203)
(Jw
OZ
= z = -El' [uz -
é v(ur + uo)}
(Jw uu 2(1 + V)'-rz Bu FIG. 205
ar = 'Yrz - az = E - az
distante r del centro del círculo. Considerando el pequeño elemento de
Sustituyendo en las expresiones de lns componentes de la tensión y del ~uperficie cargada que se muestra rayado en la figura, limitado por dos
desplazamiento u los valores encontrados, obtenemos . que forman el ángulo d1ji y dos arcos de circunferencia de radios s
y s + ds, todos ellos con centro en M, la carga que actúa sobre este ele-
·~ento es qs d1J!ds y el desplazamiento correspondiente en M, según (205), es
~ustituyendo en la ecuación (a) y recordando que a varía de O a 7f/2, que teniendo en' cuenta la igualdad a sen n= r sen Y', nos da
cuando tp 10 hace de O u tpx. obtenemos
de donde
z=a 2(1 + JI) (h)
7 - 2v
Sustituyendo en (g), se tiene
Sumando (e) y (d), obtenemos las tensiones producidas por las cuatro Tm., = 2'q [1 -
- 22v
- 2
+9 (1 + JI) V2(1 + JI) ] (k)
cargas elementales indicadas en la figura, las cuales son
Suponiendo que 11 = 0,3, obtenemos, de las ecuaciones (h) y (k),
z = O,638a, Tmáx = O,33q
(e) lo que nos muestra que la tensión tangencial máxima, en los puntos del
eje z, se produce a ulla cierta profundidad, igual aproximadamente a los
dos tercios del radio del círculo cargado, y que la magnitud de este máxi-
mo es aproximadamente un tercio de la presión uniforme q aplicada.
Para ontener las tensiones que la carga total uniformemente distribuid!!
Para el caso de una presión uniforme, distribuida sobl'e un cuadrado
sobre la superficie del círculo de radio a produce, debemos. integrar la
expresión (e), respecto a ¡p, entre los límites y n/2 y respecto a rentre ° de lado 2a; la flecha máxima se da en el centro, siendo su valor
O y a. Tenemos entonces w"",x = ~ log
11" n
(V2 + 1) !la(1 E- 112) - 2 24 qa(l - v~)
-, E (210)
(f, = Uo = Cf.
2 Jo
fa (-2(1 + v)z(r 2 + Z2)-¡ +. 3e 3(r 2 + z2)-1]r dr La flecha en los vértices del cuadrado, es solamente la mitad de la corres-
en pondiente al centro y el valor medio de la misma es
= ~ [-(1 -+ 2v) + 2(1 + v)~ - ( Va.-
~V] qa(l - )12)
2 va 2 + Z2 + é) W mcu = 1,90 E (211)
Para el punto 0, centro del círculo cargado, las ecuaciones (h) y (f), nos d~m . Cálculos análogos han sido realizados para el caso en que la presión uni-
. forme se distribuya sobre rectángulos, para diversos valores de la relación,
= uq =
q(l + 2,,) fi = a/b, entre los lados, Todos los resultados pueden ser expresados en
rr. = -9., Uf
2 la formal
P(! _ )12)
Wmed = m _ lA (212)
Haciendo )1 = 0,3, obtenemos Uf = 110 = -0,8q. La .tensión tangencial EyA
m¡íxima en el punto 0, en planos a 45 grados con el eje z, es igual a 0,19.,
Admitiendo que la deformación plástica del material se produce cuando donde m es un factor numérico que depende de a? A es el valor del área
la tensión tangencial alcanza un cierto valor, se puede demostrar que el y P la carga total.
punto 0, arriba consid~rado, no es, entre los puntos del eje z, el más
propenso a que tal tipo de deformación se produzca, La tensión tangen- 1 Vénse SchlcIChcr,.. loco cit.
412 TEOUIA DE LA ELASTICIDAD DlSTRIBUCION TENSioNAL SIMETRICA 413
_ _o TABLA DIl vALorms DEL COEFICIENTE m DE LA IlCI At'IÓN (212,) de presiones (213) en los puntos distantes de la circunferencia que limit¡¡
In zona cargada.
a El recorrido del punzón eshl dado por la ecuación
Rectángulo con diversos valores u =b
Cuadra-
Círculo -
do P(l _'1'2)
1,5 2 3 S 10 100 W = 2aE (214)
m= 0,96 0,95 0,94 0,92 0,88 0,82 0,71 0,37 que nos indica que para un determinado valor de la presión media sobre
'. el plano límite, la deformación aumenta en proporción inversa al radio
del punzón.
Varios valores del factor m son' dados en la tabla adjunta. Puede observarse La flecha correspondiente al caso de una distribución uniforme de
que para un cierto valor de la carga P y del ,área A, las flech~s .aumentan que damos con fines comparativos, es [ecuación (208)J
cuando la relación entre el perímetro y el area de la superficie cargada
disminuye. La ecuación (212), se úsa a veces en el estudio de las. deforr:na-
ciones que se producen en las fundaciones l de las estructuras. SI se qUIere
que sean iguales las flechas en las distintas partes de .Ia estruc~:a, la pre-
sión media sobre la fundución debe guardar una CIerta relaclOn con la
forma y área de la superficie cargada. misma difiere poco del recorrido (214) correspondiente a
punzón perfectamente rígido.
En el estudio precedente hemos supuesto que la carga era un dato,
obteniendo los desplazamientos por ella producidos. Consideremos ahora
el caso en que son conocidos los desplazamientos y donde es nece~ar~o 125. Presión entre dos cuerpos esféricos en contacto. Los
. 'resultados del párrafo precedente pueden ser usados al estudiar la dis-
encontrar la correspondiente distribución de presiones sobre el plano hml-
tanteo Tomemos, por ejemplo, el caso de un punzón cilíndrico perfecta- ·tribución de presión entre dos cuerpos en contacto l • Supongamos que
mente rígido, de base circular, el cual es aplicado contra e~ plano limitante 'en el punto de contacto la superficie de estos cuerpos sea esférica, con
de un sólido semiindefinido. En un caso tal, el desplllzalmento w es cons- radios Rl y Ra (fig. 207). Si tales cuerpos no ejercen ninguna presión el
tante en toda la base del punzón. La distribución de presiones, por el tino contra .el otro, el contacto se reduce al punto O. Las distancias del
contrario, no lo es, viniendo dado su valor por la ecuación 2 plano tangente en O a puntos tales como el M y el N, situados en la sec-
meridiana de las esferas, a pequeña distancia 2 r de los ejes ZI Y z.,
P ser expresadas con suficiente exactitud mediante las fórmulas
(213)
q = 211"a -Va2= r 2
en la que P es la carga total aplicada por el punzón, a el r~dio del misr:ro (a)
y T la distancia del centro del círculo al punto que se conSidera. Esta ?IS-
tribución de presiones no es, como se ve, uniforme, siendo el valor mímmo la distancia mutua entre estos plintos es
de la misma, que se da en el centro (r = O)
.'-
(b)
el caso particular del contacto entre una esfera y un plano (fig. 208 a),
valor, que es igual a la mitad de la presión media sobre el área circ~l~r
= 00 y la ecuación (b) de la distancia MN nos da
de contacto. En el contorno de la superficie de contacto (7 = a) hl presJOn
es infinita. En los casos reales, se producirá una deformación plástica del
mHterial a lo largo de esa periferia. Este tipo de deformación ~s, ~in e~ (e)
bargo, de carácter l(Jcal, no afectando sustancialmente a la dlstnbuCiOn
1 Este problema fuc resuelto por H. Hertz, J. Mal/¡. {Cr.Il.'~ J.J, vol. 92, 1881. Vé•• c
, Véase Schlclcher, lo';' CIt. H. Hertz, GeSQln11lolle Wcrke, vol. 1, pág. 155, Lelpzlg, 1895 ..
, Esta solUCión fue dada por Bonssmes,!, lnc. al. • r es pequeña co~parada eOIl R, y R,.
414 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
DISTIUnUCION TENSÍONAL SIMBTRICA 415
En el caso de contacto entre una bola y una superficie esférica (figu- deraciones geométricas, encontr!1lll0S que para todo punto de la sllperficie
ra 208b), Rl es negativo en la ecuación (b), resultando de contacto,
r 2(R¡ - R 2) (e)
- Z2 - 2:1 = 2RIR-~- (e')
Consideremos ahora las deformacione·s locales. Según la condición de
Si los cuerpos son comprimidos uno contra otro en la dirección de la simetría, puede deducirse que la intensidad, q, de la presión ejercida entre
normal en O, por una fuerza P, se producirá una deformación local en los dos cuerpos en. contacto y la deformación correspondiente, son simé-
la vecindad del punto de contacto, que extenderá ese contacto sobre una tricas respecto al centro O de la superficie de contacto. Suponiendo que
pequeña superficie de contorno circular llamada superficie de contacto. la figura 206a represente la superficie de contacto y que M sea un punto
1-'1(;.20&
parados con el radio del contorno de la superficie de contacto, podremo!-. donde la integración se extiende sobre toda el área de contacto y 1I¡, E"
aplicar, al estudiar la deformación local, los resultados anteriormente obte- son las constantes elásticas de la bola inferior. Una fÓrII).ula análoga se
nidos para cuerpos semiindefinidos. Sea Wl el desplazamiento, provocado obtiene también para la bola superior. Tenemos entonces
por la deformación local según la dirección Z¡, de un punto tal como el IvI
perteneciente a la superficie de la bola inferior (fig. 207) Y w. el mismo (g)
desplazamiento, según la dirección z., para un punto tal como el N de
la bola superior. Suponiendo que el plano tangente en O permanece in- 2
móvil durante la compresión local, dos puntos cualesquiera situados en 1- P1
k¡ = --E-'
71' ¡
(216)
los ejes z! y Ze, a distancias! grandes de O, se aproximarán entre sí unll
cierta cantidad a como consecuencia de la compresión y la distancia entre : De las ecuaciones Ce) y (g) resulta
dos puntos tales como M y N (fig. 207) disminuirá en a - (w¡ + W2)'
Si además, suponemos que estos puntos M y N caen dentro de la super- (lC1 + k2)JJq ds df = a - {3r z (11.)
ficie de contacto, tendremos
: pues, encontrar una expresión para q que satisfaga la ecuación (h).
a - (Wl + W2) = Z1 .¡.. Zz = {Jr~ (d) : Demostraremos que esta exigencia queda satisfecha si suponemos que la
distribución de presiones q, en la superficie de contacto, obedece a una
donde p es una constante cuyo valor depende de los radios R¡ y R g Y Jey que viene representada por las ordenadas de lID hemisferio de radio a,
viene dada por las ecuaciones (h), (e) o (e'). Basándonos, pues, en consi- cOllst:nndo sobre la superficie de contacto. Si qu es Ia.presión en el centro O
dicha superficie, tendremos que
1 Distancias tales que las deformaciones provocadas por la compresión en estos puntos
pueda ser despreciada. qo = ka
416 TRORlA DE LA ELASTICIDAD DlSTRIBUCION TENSIONAL SIMETRICA 417
donde k = qola, es un factor constante que indica la escala con que hemos encontramos, para el caso de contacto de dos esferas (fig. 207),
representado la distribución de presión. A lo largo de tina cuerda mn, In
presión q varía como se indica en la figura 206 mediante la semicircun- a=
ferencia a trazos. Realizando la integración a lo largo de esta cuerda, (219)
obtenemos a=
Suponiendo que las dos esferas tienen las mismas propiedadcs elásticas
donde A es el área del semicírculo señalado por la linea a trazos que es y haciendo 11 = 0,3, resulta
(221)
Esta ecuaClon debe ser cumplida para cualquier valor de r, y por tanto,
En el caso de una bola oprimida contra una superficie plana, suponiendo
la distribución de presiones que habíamos supuesto es la correcta si se
que las propiedades elásticas de los materiales de ambos sólidos sean las
dan las siguientes relaciones entre el desplazamiento a y el radio a de la
mismas, encontramos, sustituyendo R¡ = OC> en (220) y (221)
superficie de contacto.
3(1"2 8fPE2
a = 1,109 '\31PR
J E 2, a = 1,23 '\J~' qo = 0,388 '\JR;2' (222)
(217)
Las ecuaciones correspondientes al caso de una bola apretada contra un
asiento esférico (fig. 208 b) se obtienen, dando a Rl signo negativo.
Conocida la magnitud de la superficie de contacto y las presiones que
. El valor de la presión máxima, qo, se obtiene igualando la suma de las pre-
actúan en ella, podemos calcular las tensiones mediante el método des-
siones que actúan sobre el área de contacto a la fuerza de compresión P.
arrollado en el § 124 1 . Los resultados de estos cálculos para puntos de
Considerando una distribución hemisférica de presión, obtenemos
los ejes Oz¡ y OZ2 son mostrados en la figura 209. La presión máxima, qo,
que se da en el centro de la superficie de contacto es tomada como unidad
~'~ll'a3 = P
de tensión. El radio a de la superficie de contacto, es tomado como unidad
a 3
en la medida de las distancias a lo largo del eje z. La tensión máxima es la
de donde :. tensión de compresión eJ. que se da en el centro de la superficie de con-
3P (218) tacto, pero las otras dos tensiones principales u. y (fo en el mismo punto
qo = 2ll'a 2 . l 1 + 2v .
son ¡gua es a 2 u•. Resulta entonces, que la tensión tangencial
lo que nos dice que la presión máxima es 1,5 veces la: presión medü¡ sobre máxima, determinantc de la deformación plástica de materiales tales c'omo
la superficie de contacto. Sustituyendo en las ecuaciones (217) y tomando,
según la ecuación (b), : 1Tales ~Iculos fuero'; realizados por A. N. Dinnik, Bull. Polyte~". b,st., Kiew, 1909 .
. V~asc tamblcn M. T. Hubcr, A"n. Physik, ve!. 14,1904, pág. 153; S. Fuchs, Physik. Z., vol. 14,
.pag. 1282, 1913; M. C. Huber y S. Fuchs, Physik. Z., vol. 1S, pág. 298,1914; W. B. Mo ton
y L. J. Close, Phil.li!lag., \"01 +3. pág. 320, 1922.
27 ·-TF.ORIA DE LA FLASTIC1DAO
418 TEORIA DE LA ELASTICIDAD D1STRIBUCION TENSIONAI. SIMETRICA 419
el acero, es, en este punto, relativamente pequeña. El punto en que se 126. Caso general de presión entre dos cuerpos en contacto '.
presenta la máxima tensión tangencial se encuentra en el eje z, a una El caso general de la compresión entre dos cuerpos elásticos en contacto,
profundidad aproximadamente igual a la mitad del radio de la superficie puede ser tratado de igual manera que el caso de cuerpos esféricos que
de contacto. Dicho punto debe ser considerado como el más débil en el acabamos de estudiar. Consideremos el ·plano tangente en el punto de
. caso de que tratemos con materiales tales como el acero. La tensión tan- contacto 0, como plano xy (fig. 207). Las superficies de los cuerpos en la
. gencial máxima en ese punto (para v = 0,3) es, aproximadamente, 0,31qo. vecindad del punto de contacto, despreciando infinitésimos de orden su-
perior, pueden ser representadas por las ecuaciones 2
Zl = Alx2 + A 2zy + A3y2 (a)
Z2 = BIX 2 + B 2xy + Bay2
La distancia entre dos puntos tales como M y N es, entonces,
Z1 + Z2 = (Al + Bl)X2 + (A z + B 2)xy + (Aa + Ba)y2 (b)
Tomando como direcciones x e y, aquellas que anulan el término que
contienen el producto xy, cosa siempre posible, resulta
(e)
donde A' Y B son constantes cuyo valor depende de la magnitud de las
curvaturas principales de las superficies en contacto y del ángulo formado
z por los planos de curvatura principal de las dos superficies. Si R¡ y Rl'
F'G. 209 indican los radios principales de curvatura en el punto de contacto de
uno de los cuerpos y R. Y R.' los del otro 3, Y si 'P es el ángulo comprendido
En el caso de materiales frágiles tales, por ejemplo, como el vidrio, entre los planos normales a los que pertenecen las CurvllS de curvatura l/R,
la posibilidad de fractura del material viene determinada por la máxima y l/R., las constantes A y B vendrán determinadas por las ecuaciones
tensión de tracción. Esta tensión se presenta en la circunferencia límite
de la superficie de contacto. Actúa según la dirección radial y tiene el valor
(1 - 21')
U"r = 3 '10
W¡ + w~ 1 - VI
= ( -E--
71"1
2
+ 1- E
- -
7r2
2a
71 ) JI qdA
-
r
- (f) 0= 30° 350 40' 45° 50 0 55° 60' 65 0 70° 75° 80° 85 0 900
m= 2.731 2,397 2,136 1,926 1,754 1,611 1,486 1.378 1.284 1,202 1.128 1;061 1.000
donde qdA. es la presión que actúa sobre un elemento infinitamente pe- 11 = 0,493 0,530 0,567 0.604 0,641 0.678 0,717 0,759 0.802 0,846 0.893 0,944 1.000
"queño de la superficie de contacto, y r la distancia de este elemento al
punto que consideramos. La integración debe extenderse a toda la super-
ficie de contacto. Empleando las notaciones (216) y haciendo uso de (e) Considerando, por ejemplo, el contacto de una rueda de llanta cilíndrica
y (f), obtenemos de radio R¡ = 400 mm con un raíl cuyo hongo tiene un radio R. = 306 mm
encontramos, sustituyendo R¡' = R 2 ' = 00 y ~ = nl2 en las ecuaciones (d)
(kl +k 2) JJ :A q = a - Ax2 - By2 (g)
A +B = 0,0733 B - A = 0,0099 cos e = 0,135
:--.Tuestro problema, ahora, es obtener la distribución de presiones q (jUL· ,Usando I~ tabla anterior e interpolando. obtenemos
satisfaga la ecuación (g). H. Hertz demostró que este requisito queda satis-
fecho, suponiendo que la intensidad de las presiones q en la superficie de
'In = 1,098, n = 0,918
contacto. es la representada por las ordenadas de un semielipsoide cons- Sustituyendo las ecuaciones (224) y haciendo E = 2100000 kg/cm 2 y
truido sobre la superficie de contacto. La presión máxima se presenta. ji = 0,25', resulta
como es natural, en el centro de la superficie de contacto. Llamándola qo
y señalando con las letras a y b los s~,miejes del contorno elíptico de la a = 0.00946 ..yp, b = 0,00792 ...:/P
superficie de contacto, la magnitud de la presión máxima se obtiene a
partir de la ecuación Para una carga P = 409 kg
Una vez conocida la distribución' de presíones, podemos calcular la más estrechas y en el límite afb = ro se produce el caso de contacto de
tensión en cualquier punto 1. Se comprueba, de esta forma, que el punto dos cilindros de ejes paralelos 1 •. La superficie de contacto es ahora un
con máxima tensión tangencial está en el eje z, a una cierta profundidad Zl, rectángulo estrecho. La distribución de .presión q a través de la anchura
pequeña, que depende de la magnitud de los semiejes a y b. Por ejemplo: de la superficie de contacto (fig. 210), está representada por una semielipse.
Zl = 0,47a, cuando bfa = 1; Y ZI = 0,240 cuando ·bfa = 0,34. Los valores
correspondientes de la máxima tensión tangencial (para 'V = 0,3) son
T,n •• = O,31qo Y Tm.x = O,32qo, respectivamente.
Considerando los puntos de la superficie elíptica de contacto y tomando
los ejes x e y en la dirección de los semiejes a y b, respectivamente, las
tensiones principales en el centro de la superficie de contacto son
, Tales estudios han sido renlizndos por el profesor N. M. Belajef, véase Bull. Insto Eng;·
lIears o[ Ways 01 Cal1/l1/u1Iicatio7tS, SIIfl Petersburgo, 1917, y Memo,r, on Theory 01 Structures. b = 1,52 (227)
San Petersburgo, 1924; véase también H. R. Thomas y V. A. Hoersch, Univ. Illinois Eng
&'Pt. Sta., Bull., 212, 1930, Y G. Lundherg y F. K. G. Odqvist, Proc. Ingeniors Vctenskap,
.4kad., núm. 116, Esmeotmo, 1932... I Una deducción directa de este caso con la consideración d" la fuerza tangencial de con·
j Véase Belaj"r, loc. cit. tacto es dada por H. R9ritsky, J. Applied Mechanics (Tralls. A.S.M.E.), vol. 17, pág. 191,1950.
424 TEORIA DE LA ELASTICIDAD DISTRlDUCION TENSIONAL SIMETRICA 425
Si los radios son iguales, R¡ = R 2 = R que, empleando las ecunciones (a), queda
.. '" _ptnl +m.
1,08~PIR
(b)
b= . m,1n2
E (228)
Las investigaciones realizadas muestran que la 'duración del choque, es decir., el
Para el caso de contacto de un cilindro con una superficie plana . tiempo durante el cual la~ esferas permanecen eh contacto es muy grande comparado
b = 1,52~P~R (229)
qn'=
P'(R, .R z) + (230)
7r
2
+
(k 1 kz)R1R z FIG. 211
Si el material de ambos cilindros es el mismo y v = 0,3 el período de la vibración de más baja frecuencia de las esferas '. Las vibra-
pueden ser, por tanto, despreciadas, pudiendo suponerse que la ecuación (219)
I"'''''.'~''.'U'' para condiciones estáticas, sigue siendo válida durante el choque. Em-
qo = 0,418 las notaciones
(231)
/16
A
+
R¡R.
n =Vilrs (!e, k,)2(R, Rs)' + n,=---
m,+m,
7nlm •
(e)
.En el caso del contacto de un cilindro con un plano
oo,reIllerrIOS, a partir de (219),
{PiE (d)
qo = 0,418 'VT (232)
(e)
Una vez conocida (jo y b, pueden calcularse las tensiones en cualquier
punto. Estos cálculos muestran' que el punto con máxima tensión tan- M\lltiipllicando ambos miembros de cstu ecuución por a, re..<;ulta
gencial se encuentra en el eje z a una cierta profundidad. La variación
de las componentes de la tensión con la profundidad, para 11 = 0,3, es la
mostrada en la figura 210. La tensión tangencial máxima se da a la pro- integrando, nos da
fundidad Z¡ = O,78b Y su valor es O,304qo. U)
127. Choque de esferas. Los resultados de los dos últimos párrafos, pueden v es la velocidad de aproximación de las dos esferas en el momento inicial
ser utilizados en el estudio del choque de cuerpos elásticos. Consideremos, como Si hacemos a = O en esta ecuación, obtenemos la aproximación de las
ejemplo, el choque de dos esferas (fig. 211). Tan pronto como las esferas entran en el instante de máxima compresión "1, la cual es
en contacto en el punto O', la fuerza de compresión P comienza a actuar cambiando
las velocidades de I~s esferas. Si V, Y V. son los valores de estas velocidades, las ace-
leraciones que definen fa variación de las mismas, vienen dadas por las ecuaciones Ct¡l=f (-
u.)-
5 -
411nl
(g)
d!J, dlJ~
m, dt - -P, In, di' - -P (a) este valor, podremos calcular, a partir de las ecuaciones (219), la máxima fuerza
P que actúa entre las dos esferas durante el choque y el radio corres-
o"VI.l1jJ1C.'''·JI
en las que m, y m. señalan las masas de las esferas. Sea a la distancia que las dos diente a de la superficie de contRctO.
esferas se aproximan como resultado de la compresión en O. La velocidad de esta La duración del impacto se calcula escribiendo la ecuación (j) de la forma siguiente
aproximación será
a- v, + u.
'Véase Bel.jef, loe. cit.
• Suponemos que los movimientos tienen lugar a lo largo de la recta que une Jos centros
de las es feras. , Lord Raylcigh, P"#il. Mug., serie 6, vol. 11, pág. 283, 1906.
426 TEOR!A DE I.A ELASTICIDAD DISTRIBUCION TENSIONAL SIMETRlCA 427
o bien escribiendo ala, = X Y empleando la ecuación (g) Como integral de esta ecuación tomamos la serie
dt=~, tk f(r) = It. + a,T' + a,T' + (1.,.0 + (d)
ti VI - (:Z:)i
que sustituida en la ecuación (e), nos da la siguiente relación entre los coeficientes
de donde se deduce que la duración del choque es de la misma:
t = 2.. , {l dx = Z 94 ~ (2n}·a,. - k'a"_l = O
(233)
u Jo VI - (x}i ' tJ
Despejando, obtenemos
En el caso particular de dos esferas iguales, realizadas con el mismo material, y de /;;'
radio R, se tendd. COn arreglo a lo ecunción (,q). al = 2ia.,
aL= (S-V;1TPl iV'tJ'YR Sustituyendo estos valores en la serie (d), resulta
(234)
k'r' k'r' k'r'
t
= 2,94 (5 V21TP
4
1 - ")I..!L
E (u) 1
I(r) = Ito ( 1 + 22 + 2'74i +~ + (8)
. dondé (] señala 1>1 densidad de las esferas. La segunda integral de la ecuación (e), puede ser expresada también en forma de
Como vemos, la duración del choque es proporcional al radio de los esferas una serie y se puede demostrar que toma el valor infinito cuando 'r = 0, por lo que
e inversamente proporcional a (v)'¡'. Este resultado ha sido verificado por varios no deberá ser considerada al estudiar la defonnación de un cilindro macizo. La serie
contenida en el paréntesis de la ecuación (e) es la función de Bessel de orden cero
investigadores'. En el caso de barras largas con extremidades esféricas, el período
y de argumento imaginario, ikr '. En lo que sigue, esta función será designada con
de la vibración fundamental puede ser del mismo orden que la duración del choque,
la notación Jo(ikr), escribiendo la función de tensión (b) de la forma
por lo que el estudio de la compresión local en el punto de contacto, debe tener
en cuenta tales vibraciones'. 4>, = ao.l .(ikr) sen kz (1)
La ecuaclOn (180), tiene también soluciones diferentes de las de la ecuaclOn (a).
128. Defonnación de un cilindro circular cargado simétricamente.
Una de ellas puede deducirse de la función J.(ikr). Derivundo, obtenemos
Con el fin de estudiar el caso del cilindro circular sometido a la acción de {uel'zas
aplicadas sobre la superficie lateral del mismo y distribuidas simétricamente con dJ .(ikr) ikr ( k'r" k"r" k"r' )
respecto a su cje, introducimos una función de tensión t/J en coordenadas cilíndricas a(iJ.;r) = - '2 1 + N + 2 ·4' . 6 + 2 . 4' . 6 2 .8+ ••• (g)
y aplicamos la ecuación (180)3. Esta ecuación es satisfecha si tomamos como fun-
ción de tensión cp una solución <.le la ecuación derivada de signo negativo, que recibe el nombre de función de Bcsse! de primer
orden y que se denota por J, (ikr). Consideremos ahora la función
a'", +! a4> + a'", = O (a) a J.(ilcT)
aTO r éir a.' fl(r) = r dr = -ilcTJ1Cíkr)
/c'r' ( 1 + N
= 2" k'r' k'r'
+ 2.4". 6 + ...
) Ch} "
solución que puede tener la forma
Por diferenciación se demuestra que
1> = f(T) sen fez (b)
en la que} es función de r solamente. Sustituyendo (b) en (a), obtenemos la siguiente (dr'
~ + r~.:!.
dr
- k')fl(T) = 2klJ.(ilcr)
ecuación diferencial ordinaria para la detem~inación de I(r)
Recordando que Jo(ikr) es una solución de la ecuación (e), se deduce que I,(r) lo
es de la ecuación
(e)
d' +!.:!.
( ar' rdr
_ kl) (a'!,
ar i
+ !,af,
rdr
_ k''f)
"
= o
I M. Hamburger, Wied. AlIn., vol. 28, pág. 653, 1886; A. Dinnik, J. Russ. Phys. Chem.
Soc., vol. 38, pág. 242, 1906, y vol. 41, pág. 57, 1909. Otras referencias úe la bibliograffa que 'Así, pues, la solución de la ecuación (180) podrá adoptar la forma
tratan sobre el tema son dadas en Handhuch der physika/ischen IInd lechnischen Mecha"ik,
vol. 3. pág. 448, 1927. "'. = a, sen kz(iJ.;r)J,Cikr) (i)
• Véase página 495. El impacto longitudinal de varillas con extremos esféricos h. sido
estudiado por J. E. Sears, Proc. Cambridge Phi/o Sor., vol. 14, pág. 257, 1908, Y TTans. Cam· Combinando las soluciones (f) e (t) obtenemos la función de tensión
bridge Phi/o Soc., vol. 21, pág. 49, 1912. El impacto lateral de la.. barr~ en el que se considera
la compresión local fue estudiado por S. Timoshenko, Z. Math. Physik, vol. 62, pág. 198, 1914. 4> == sen kz[aoJ .(ihr) + a,(ikr}.J,(ikr)] (i)
J El problema de la defonnación de un cilindro circular sujeto a la acción de fuerzas
aplicadas sobre su sup"rfieie, fue tratado por primera vez por L. Poehharnmer, Crelle's J., I Aceren de l. ecuación diferencial (c) y de las funciones de Bessel, pueden consultars~
vol. 81, 1876. Varios problemas de deformación simétrica de cilindros fueron estudiados por l." obras siguientes: A. R. Fo ....yth, A Treatise on Differential Equations y A. Grny y G. B.
C. Chrce, Tram. Cambridge Phi/o Soc., vol. 14, pág. 250, 1889. Véase también el trabajo de ~1"thews, A Trealise on Bessel FunctÍlms. Tablas numéricas sobre las funciol'es de Bessel
L. N. G. Filon, 'f'Ta~s. Roy. Soco (Landa,,), serie A, vol. 198, 1902, que contiene las soluciones pueden encontrarse en E. Jahnkc y F. Emde, Funktionentafe/tt mit Fom"/tt und Kurv"L. Berlín,
de varios problemas de interés práctico, referentes a la tI.fonnación simétrica de W1 cilindro. 1909. "
TEORIA DE LA ELASTICIDAD DISTRIBUCION TENSIONAL SIMIIT.R1CA 429
428
que llevada a las ecuaciones (179), nos da las siguientes expresiones para las com- llegaremos, por un procedimien~o amílogo al anterior, a In siguiente función de tensión
ponentes de la tensión rjJ = cos Rz[b.,,)o(ikr) .1- b,(ikr) J, (i/<r)) (o)
lJ'r = coa kz[aoF'l(r) +
a¡F.(r)) (le)
..,. = senkz[a,F,(r) +
a¡F,(r)l en lugar de la expresión (;). Eligiendo convenientemente las constantes k,. b." b¡,
obtenemos la solución para el caso en que las presiones normales que actúan so-
donde F¡(r), ._., .F.,(r) son ciertas funciones de r que contienen a ,l~(ikT) y J¡(ikr). bre el cilindro, están representadns por una serie senoidal y las fuerzas iangenciales
Usando las tablas de las funciones de :Bessel, podremos calcular facllmcnte los va- por una serie cosenoidal. Combinando las soluciones (;) y (o), tendremos, por tanto,
lores de F¡(r), ... , F,(r), cualquiera que sea T. •
cualquier distribución de fuerzas normales y tangenciales simétricas respecto al eje.
Si llamamos a all'f1dio exterior del cilindro, las fuerzas apbcadas sobre su super-
ficie estarán dadas, según las ecuaciones (k), por los siguientes valores de las compo-
nentes de la tensión:
=
lJ'r cos kz[aoF'l(a) +
I.I,F.(a)] (1)
'f'r. = sen ke[aoF'.(a) +
a,F,(a)]
,---f...YJ"-.I
Eligiendo convenientemente las constantes k, .{!¡J, a" p~~remos estudiar diversos
casos de carga simétrica. Llamando 1 a la longitud del cllmdro y tomando
lc=~
l
FIO. 213
obtenemos los valores de las constantes ~ y a, para el caso en que una presión
normal, A" cos (n"z!/), actúa sobre la superficie lateral del cilindro. El caso en que
11 = 1 está representado en la figura 212. ?e igual.r0nn~, podemos obtener la s~lu Al mismo tiempo, existirán ciertas fuerzas distribuidas sobre los extremos del cilin-
ción para el caso en que fuerzas tangencIales de mtensldad Bn sen (tmz!l), actuan dro. Añadiendo una tracción o una compresión, podremos conseguir siempre que
.sobre la superficie del cilindro. la resultante de tales fuerzas sea cero, con lo que su efecto a alguna distancia de los
extremos se hace desp¡'eciable en virtud del principio de Saint-Venant. Varios
ejemplos de carga simétrica de cilindros son estudiados por L. N. G. Filon en el
trabajo anteriormente citado '. Nosotros damos aquí los resultados finales, por él
obtenidos para el caso mostrado en la figura 213. Se trata de un cilindro cuya lon-
gitud es igual a na, que es sometido a una acción extensora mediante fuerzas cor-
tantes, que se distribuyen uniformemente sobre la porción de superficie del cilindro
que se muestra rayada en la figura. La distribución de la tensión normal IYz sobre
las secciones transversales del cilindro, es de interés práctico y la tabla adjunta da
la relación entre estas tensiones y la tensión media de tracción obtenida dividiendo la
fuerza total de tracción por el área de la sección recta del cilindro. Como puede verse,
las tensiones locales de tracción, en la proximidad de las porciones cargadas de la
;¡;
superficie, disminuyen rápidamente al aumentar su distancia a las mismas, teJldi~lld"
Flc.212 al valor medio.
129. Cilindro circular sometido a la acción de una presión sobre una p = 2(1 _ ,,) + ka ~(ka) (d)
banda de su superficie. Cuando un anillo corto se encoge estando abrazando I,(ka)
un eje, las fórmulas sencillas, válidas cuando anillo y cje tienen iguales longitudes, condiciones de contorno son
dejan de ser exactas. Se obtiene una aproximación mucho mayor considerando el
problema indicado en la figura 215a de un cilindro largo, sometido en la banda
ABCD de su superficie, a la acción de una presión normal p. "r = ~ parR r = a, > O
Z
(e)
p/2 "r = - ~ para r = a, Z <O
obtenido a partir de (d), mediante las ecuaciones (179), es
"r = - lo" [(1 - 2 .. - p)I.(Jer) + <kr + ir) I,(Jer) ] k'f(k) sen ke dio <D
(al (ó)
p/2
(Il)
O>Zl!.IUd
0= Z HlBd ;
2 _j
Flc. 214 Flo.215
0< 2 lilBd.?i
JL
¡
blema básico, por tanto, es el correspondiente a la acción de una presjón p/2 so~re
la mitad inferior de la superficie cilíndrica y de otra -pf2 sobre la mItad superior. ~paraz>o
En la solución que damos a continuación, se considera que la longitud del cilindro F. r.. senkz
.. Jo
__le
dk =
-
O para z
'P
=O (h)
es infinita.
Si comenzamos con la función de tensión dada en la ecuación (o) del § 12B,- - 2 para z < O
llamando ¡o(kr) a J.(ikr), i¡,(!lr) a J, (ikr) y haciendo bo = eb., resulta
'" = (pI.(ler) - JerI,(lcr)]b, cos kz (a) los valores de la derecha corresponden a los valores de lI r en el c:untorno,
por (e). Las condiciones de contorno (e) quedan, por tanto, cumplidas si
expresión que satisface a la ecuación (¡BO) cualquiera que sea el valor de k. Si con- el segundo miembro de la ecuación (f), con r = a, idéntico con el primer
siderarnos que k toma un cierto intervalo de valores, podemos hacer que b, dependa n.;~n".hT·" de 10 ecuación (h). Esto exige que
de k y del incremento dk, escribiendo
b1 = f(le) dlc - [(1 - 2" - p)I. (ka) + (ka + fa) 1,(ka)] k'f(k) ~ ~. ~ (i)
Llevando esta expresión a (a) y sumando todas las funciones de tensión así obtenidas,
llegaremos a una función de tensión más general que toma la forma que permite determinar j(k). Las componentes de la tensión se ohtienen,
a partir de la función de tensión (b), aplicando las fórmulas (179), y re-
q, - lo" (P1 a(ler) - lerI,(ler)Jf(k) coa lee di, (b) ser integrales de la misma naturaleza que la de la ecuación (f). Valores, obte-
por integración numérica, pueden encontrarse en el trabajo de Rankin citado
Corno veremos a continuación, es posible seleccionar la función ¡(k) de forma tal página 430. Las curvas de la figura 216 muestran la variación de las tensiones
. que la función de tensión nos dé la solución del problema. la dirección 8.-.,:ial para diversas distancias radiales, así como los desplazamien-
Según las ecuaciones (179) las tensiones tangenciales serán superficiales.
Tales curvas han sido tomadas del trabajo de Barton (véase la pág. 430) habiendo
obtenidas mediante un método que hace uso de las s~ries de Fouricr: A partir
T,
r
= r" [p1clo'(kr) -
Jo.
Ie'r[,'(kr) - kIleler)
_ 2k(1 _ v)Io'(lcrl]k'f(k) coa k. dk (e) estas curvas, se pueden obtener por superposición los resultadas correspon-
I A. Nádai, E/astische Plauen, pág. 315, 1925. , V"ase, por ejemplo, l. S. Sokolnikoff, AdvQlIced Ca{cu[us; primeru edición, pág. 362
TEORIA DI! LA ELASTICIDAD OIsmIBUCION TENSIONAL SIMETRICA 433
dientes al problema de la figura 215 en la manera explicuda ~nteriorme?,te, Las .curvas 130. Torsión de un sector de anillo de sección circular, Este problema,
de Ins tensiones y desplazamientos corre~pondíentes a bandas de pr~lOn de dl'.:ersus es de interés práctico por estar relacionado con el cálculo de tensiones en los resortes
anchuras son dadas en los trabajos citados. Cuando la anchura es Igual al radIo del helicoid:¡les de espiras cerradas. Consideremos un sector de anillo sometido, en la
cilindro 'la tensión normal de dirección tangencial (JO en la superficie, y en el centro forma que indica la figura 217, a la acción de dos fuerzas P iguales y opuestas.
de la b~da de presión, toma un valor superior en un 10 % al de la presió~ aplicada
siendo, naturalmente, una compresión. La tensión axial ~; en la superfiC1~J en los
puntos situados justamente encima de la banda de preslOn, es una ~racclOn cuyo
valor supera en un 45 % al de la presión aplicada. La tensión tangencIal T" alcanza
el valor máximo, igual al 31,8 % de la presión aplic.ada, en los bo~~es AB y en
de la banda de presión (fig. 215) y justamente debajO de la superfICIe,
ro
-O.5If~~ , 'ji
-M r711J.:\t,ILl--4---' z.
~ -0,3 r.11l1fp:.¡r~+-l--i,
-O.2~IUH-!-+--i Fw. 217
Za -~ -o _-ª-O.I f..-4-+---J.--!. z
a a 3a 2a ··Estas fuerzas or.lglnan el mismo par M, = PR en todas las secciones rectas del
,1--l-+-I-¡,-AlO,J '2 T
, 1/1 0•2
. anillo. Si las dimensiones de las secciones transvers¡¡les son pequeñas comparadas
, I ///1 0,3 con el radio R, las fórmulas deducidas para la torsión de piezas prismáticas pueden
'/1 0:1- ser utilizadas, con suficiente exactitud, para el cálculo de las tensiones. En el CllSO
.,, 0.11
/7/1 0,2
I§¡, D,l
Ar;:¿) 0,4
a 1.-J-,~~,¿.jO.S
0.5
roja
-~~~ -------------- -_=0/1
----=0.8
-0,2 ---=0.6
-,---=0.4
Oj-z
p-O,I --:JJ~---=------ =0.2
2a
Or-~~~~~~~~~z z
FIG.218 FlC. 219
Consideremos ahora las ecuaciones de compatibilidad (13U). Según. la figura 219 y determinemos '¡'n, lb,; "'~ .... , de forma tal que satisfagan las ecuaciones
resulta
TlJ~ = '1'8z; COB 8
1'.v - 1',e(C09 2 O -sen" 8) == 1',6 COS 20
de donde se deduce que la expresión contenida en el paréntesis debe ser una constante.
Llamando a esta constante - 2e. la ecuación para determinar la función de tensión'" es ahora el desarrollo
(d)
Introduciendo ahora las coordenadas l;y t;, en lugardc lasr y z (fig. 218), definidas por la serie (g), obtenemos como primera aproximación
~ = R - r, j'=% ('T,e)o = G 8
ai" (7'8.). = G él4>.
iJl;
(¡)
encontramos que la ecuación (d), toma la forma
aproximación. deducida de (i), es
02</> ¡¡i</> 3 iJrj> +2 _ O
ae + élr' + R (1- R~) a~ e - (e)
(TrO)1 2~) a¡
= G [( 1 +R iJ4>']
B</>u +a¡
(le)
Considerando ~/R como una pequeña cantidad y empleando el desarrollo (7'8.), = G [( 2t) ar
1 +R
iJ</>']
u4>o + iJf
1 ~~.
--~=l+R+'W' . la tercera
U)
1- R
(1'rO)' =
.( .
a[ 1 + 2~
R + 3~") 8</>0 ( 2~) 8"',
R' 8f + 1 + R 8f + Ti
0</>,]
podremos resolver la ecuación (e) por aproximaciones sucesivas. Supongamos que (1)
2f 3~') 8</>0 ( 2() a"'t a~,]
4> = <po + </>1 + <p. + . . . (o) (ro.), = g [ ( 1 + 7l + R' "'if + 1 + R "'if + 8f
436 TEORIA DE LA ELASTICIDAD OIS'l'lUDUCION TENSIONAI. SIMETRICA 437
Apliquemos ahora este método general al caso particular dI! un anillo de sección expresiones que sustituidas en (o) nos dan el momento de torsión correspondiente:
cir~ular de radio a. La ecuación de! contorno (fig. 218) es
r+~-~=O ~
(M,). -2- 1:- 16 a.)
= c<J.rra' ( S
R' (r)
y la solución de la primera de las ecuaciones (h) que satisface la ecuación de con- Detelminamlo a partir de esta igualdad la constante e y sustituyéndola en las expre-
torno, será siones (q), podemos obtener las componentes de la tensión expresadas en función
e del par de torsión (M,) •. A lo largo del diámetro horizontal de la sección trans-
"'. = - 2" (~. + ¡-' -o a') versal del aníllo (fjg. 218) i:; = 0, T •• = 0, y según la segunda de las ecuaciones (q)
resulta
La primera aproximación para las componentes de la tensión, deducida de las ecua- 11 ( 7 ~. 13 1:'
1'0.2= -ro- 1: +SR +I6:R' + 8R + 4R2
()
Sa" a'~)
ciones ú), nos da
(n) Para el punto interior i, 1; = a, tendremos
ecuación cuya solución, que satisface la condición de que p, se anule en el contorno, es (TO.). 2M. (
= ,..a' 1-
5 a
4R + SR'
7 a2 )
(1'0.); = _ ~ .1 -
1 1 a
(aIR) +:tE + j]
1 Ca)'
R (235)
..a' 1 _ i!. -.Jg.jR)' FIG. 220
(p)
. 16 1 - (aIR)'
Remplazando q,n y ,pI en la tercera de las ecuaciones (h), se tiene La figura 220 representa la distribución de las tensiones tangenciules a lo largo del
diámetro horizontal para el caso en que a/R = l/S. Asimismo, y con fm comparativo,
¡¡'.p. + él''''' +!!~ (;2 + Si' - 3a') = O se ha dibujado la primera aproximación obtenida por aplicación de la fórmula corres~
üE" a¡-' SR' pondiente a un árbol de sección circular', línea de puntos.
La solución de esta ecuación que cumple la condición de contorno es E! método descrito, ha sido aplicado también ul problema de la torsión de sec-
tores de anillos de sección transversal ~cJíptica y rectangular', Para una sección
.. = _ _ c_ (~.
.,.., H·1R"
+ 5.\' _ 15a')(~' + !"' - ( 2) cuadrada de lados iguales a 2a, la tercera aproximación da como tensión en el punto
interior el siguiente valor:
Empleando las ecuaciones (l) obtenemos la tercera aproximación para las compO-
. nentes de la tensión
( O,6PR(
) = - (
TO., i 3 1 + 1.Z0 R a+O.liO:wa.) (236)
(b)
Z el símbolo J sign.ifica a'/0~2 + a'/ol:;'.
FIG.221 Introduciendo ahora una función de tensión "'" satisfaremos las ecuaciones (d')
= cE(~+~._.•)+cEa'.p,
(
O'~) '2R > aRar'
Si se toma como ejemplo el caso de un anillo de sección circular constante, y se
emplean las nuevas coordenadas ~ y ~ (fig. 218), definidas por cE 1)'1/>,
(ITr), = -¡¡ 8~' (g)
~ = E - r, i=a (e)
cE a'I/>,
las ecuaciones (a) y (h) se convierten en (T¡r)l = - R ¡¡~ af
8,,~ éJT¡r O'¡ - <Te (g) en las ecuaciones (e') hnllnmos que la función de tensión ,p debení
éJf+Tr-R-~ =0 la ecuación
(d)
iJTer aO'r 1'/r . 1 + 2p
8f+ar-R-~=O 6. A.p, =- 1+v (h)
a'''¡ 8'''1 1 aO'¡ 2 1 a'a condiciones de contorno para <p, se deducen de las ecuaciones (12). Puesto
W + al' - R - ('if - (E - '¡:)' (O'~ - O'e) + 1 + p a~' = O el primer término de la expresión de (a ), es cero en el contorno circular, y
a'0'8 a'0'9 1 a"8 2 1 1 aa _
alis + a¡-' - E. -I¡a¡ + (E _ ~)' (tr¡ - <Te) - 1 +-; E _ ~a; - O dt d~
(e) ¡ = 1iB' lit = --
..' a'O'r atO'r 1 éJcrr 1 a'e_ ds
W + aro - E - I¡ a[ + 1 + "at' - O
a'r¡r a"-r¡r 1 ~ 1 1 a'e .!!.. (a.p,) ~ (a",,) = O
av + ~ - R - 1; o~ - (E - I¡» T¡r 1 o; at = O + +" ds elt
= O
' as a~
Como primera aproximación, vamos a toma: la, ~isma distrib~ción tensional pues, que op,/oC y oePtlíJl¡ son constantes n lo largo de la pedfería y
se presenta en la fl~ión simple de barras pnsmatlcas. Se tendra, entonces, admitir que ,p I Y d,pl/dn son cero en el contorno. La ecuación (h), junto
(0',). = (O'r)o = (T¡r). = O (1) estas condiciones de borde, determina completamente la función de tensión ,pI'
interesante destacar que la ecuación (11) y las condicíom;,q de contorno arriba
(0'8)0 = -cEe en'~lo.naljas son idénticas a las ecuaciones referentes al caso de la flexión de una
1 Ollhner, loe. cit.' empotmda en su, borde sometida a una carga uniforme. Si se trata de una placa
440 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
Integrando estas ecuaciones y ajustando las constantes de integración de forma tal 132. Casos sencillos de tensiones de origen ténnico. Una de
que la distribución de tensiones nonnales que actúa sobre las secciones transver- las causas que originan tensiones iniciales en un cuerpo, es el calentamiento
sales del anillo sea estáticamente equivalente al momento flector M, obtenemo~ no uniforme del mismo. Como sabemos, al elevar la temperatura, los ele-
mentos que componen un cuerpo, se dilatan. Tal dilatación no puede,
(CT) = _ 4M rl~ + (8 + 10" + 4.")~t - (6v + 4v2 )t2 - (2 + ,,)0."] (m) por lo general, desarrollarse libremente en un cuerpo continuo,. por lo que
el. ",(14 8(1 + ..)R el calor provoca en el mismo tensiones internas. En muchos proyectos de
maquinaria, tales como turbiI}as de vapor o motores Diesel, las tensiones
Tomando e= oy ~ = a, la tensión en el punto interior i (fig. 218); vendrá expre-
de origen térmico revisten gran importancia debiendo ser estudiadas con
sada por
todo detalle.
4M{1
1I'a'
+ 6 -1-8(l9"++4.
v)
2
~}
R
Para v = 0,3 la ecuación anterior nos da
T
(11)
O i
El cálculo de las aproximaciones ulteriores conduce a la siguiente expresión parn J
la tensión en el punto interior 1 (e = a) -L
q = _ 4M [1 + O'87 ~ + O.64:a/R)2] (p) I--l -l~
9 l!'a3 R l - (a/E)
y {a}
La teoría elemental de In flexión de piezas curvas, busada en la hipótesis de que Fw 222
las secciones transversales se conservan planas, nos da, para.. este caso". despre-
ciando las tcnsion.es Los problemas más sencillos de tensiones de origen térmico pueden
a reducirse fácilmente a problemas, ya estudiados, de fuerzas de contorno.
0', = -4.11f
- [ 1 +0,75-+0,50-+'"
a' ]
• l!'a' R R" Consideremos, para empezar, el caso de una placa rectangular delgada,
de espesor uniforme, cuyos puntos se encuentran sometidos a una tem-
I Esta fórmula le fue comunicada a S. Tirnoshcnko por O. Gohner en uno corto.
, Véase S. Tirnoshenko. Slrenglh uf Materials. 2." euiclón, vol. 2, pág. 73. peratura T que es función par de y (Hg. 222) y que no depende de x y z.
'rEORIA DE LA ELASTICIDAD TBNSIONIlS DB ORIGBN TBRMICO 443
La dilatación térmica longitudinal a1', quedará suprimida si en todo punto de nuevo con las de compresión (a) que anulan la deformación €~. En los
de la placa aplicamos tensiones longitudinales de compresión, de valor: casos no simétricos, estas tensiqnes dan lugar, no solamente a una fuerza
,,'/ = -a 'E Ca) resultante - i: c
/JET dy, sino también a un· momento - ¡:c o.ET y dy,
Dado que la placa puede extenderse libremente en dirección lateral, la por lo que para satisfacer las condiciones de equilibrio, debemos añadir
aplicación de las tensiones (a) no producirá tensiones laterales, de donde a las tensiones de compresión (a) una tracción uniforme, que se deter-
se deduce· que para mantener las tensiones (a) bastará con aplicar fuerzas mina en la forma indicada anteriormente.y tensiones flectoras 1],,:" = ay/c,
compresivas de valor (a) en los extremos de la placa. Tales fuerzas supri- que vienen determinadas por la condición de que el momento de las fuerzas
mirán completamente la dilatación longitudinal de la placa provocada por distribuidas sobre una sección transversal debe ser nulo. Tendremos
la elevación de la temperatura 1'. Para obtener las tensiones térmicas exis- entonces:
f +c f+·
tentes en la placa, cuando sobre ella no actúa ninguna fuerza exterior, 2d
tenemos que superponer a las tensiones (a) las producidas en la misma ~y. - aETydy = O
-(1 e -o
por la acción sobre sus extremos de fuerzas de tracción de intensidad aTE.
La resultante de estas fuerzas es: de donde:
f-~O aTE dy ~ = -2
e
33
e
f+' aETy dy,
_e
CT/' = ~
3
20
J+.
-a
aETy dy
y el efecto que producen a suficiente distancia de los extremos, será aproxi- La tensión total será, pues:
madamente una distribución unifonne de tensiones, de valor:
1
-2 f+· CT= = -aET + 21o f +0 aET dy
_,
+ 23~e f+o
-e
aETy dy (d)
o _, aTEdy
En el estudio realizado, hemos supuesto que la placa era delgada en
Así, pues, las tensiones térmicas existentes en la placa (de extremos libres) la dirección z. Imaginemos ahora, que la dimensión según esa dirección
en puntos alejados de los extremos, serán: sea grande. Tenemos entonces unu placa L"UyO plano medio coincide con
= -21e f+a
el xz y cuyo espesor es 2c. Supongamos, asimismo, que la temperatura T
u= _. aTEdy - aTE (b) sea como antes función de y solamente.
La dilatación libre de un elemento de la placa según las direcciones
Suponiendo, por ejemplo, que la distribución de la temperatura es para- x y' z, quedará suprimida completamente si aplicamos las tensiones t1x,
1]% que se obtienen aplicando las ecuaciones (3) del § 6 en las que se hace
bólica y que viene dada por la ecuación:
(" = €. = -0.1', (fu = O. Estas ecuaciones nos dan entonces:
T = 170 (1 -~) CT", = 11'.
cxET
== - 1 _ v (e)
obtenemos, según (b):
Podemos mantener a los elementos en esta condición aplicando en las
u", = -32 aToE y2)
- aToE ( 1 - - 2
c (c)
aristas (x = cte., z = cte.), la distribución de fuerzas de compresión dada
por (e). La tensión térmica en la placa libre de .fuerzas exteriores se obtiene
;.:
tante, según las direcciones x y z. Si además la· temperatura no es simétrica Si las superficies y = ±c son mantenidas a dos temperaturas diferen-
respecto al plano xz, tendremos que agregar las tensiones de flexión. '. tes Tt, T 2 , se origina un flujo calorífico que después de cierto tiempo será
De esta forma llegamos !I la siguiente ecuación final: .estacionario. La temperatura, entonces, estará dada por la función lineal:
+ 2-c~3(";;'1"-Y--"JI) -c
(f)
libremente las tensiones térmicas serán cero I • Si se impide toda dilatación
'. o rotación de los bordes, la tensión producida por el calentamiento viene
la cual es análoga a ta (d), obtenida más arriba. Mediante la ecuación (f) dadu por las ecuaciones (e). Si, por ejemplo, T2 = - TI> se tendrá, con-
podemos calcular fácilmente las tensiones de origen térmico, creadas por . forme a (i)
una determinada distribución de temperatura T, supuesto que esta dis- (j)
tribución sea conocida.
y la ecuación (e) da:
Consideremos, por eje~pl~, el caso de una placa, inicialmente a la temperatura
uniforme To, que es enfriada al mantener sus caras y = ±c a una temperatura 0'. = <1". = - ~7'1'!!.e
1- v
(k)
constante T¡.' La teoría de Ftlurier da la siguiente distribuciiín de temperatura para
cualquier instante t:
máxima es:
T = 7' l + ...-4 (T o - T ,) ( e-P"cos -7ry
2c
- -1 0"""1'.' coa -811"11
3 2¡;
+ .. -) (g)
aET¡
(o-=;)mtl"l: = (O"::)ma.x = -1-- (l)
-JI
en la que p" p, = 3'p¡, ..., Pn = n'Pl, representan ciertas constantes. Sustiruyendo
en if), se tielle: En esta fórmula no figura el espesor de la placa, pero en el caso de una
17'
•
;" <T
•
= 4aE(To - T,)
... (1 - v)
[e-",' (~ - coa !ll) +!3 o-P" (a2... + 3>ry)
7r 2c 20
008
placa más gruesa, lo pl"obable es que exista una mayor diferencia de tem-
peraturas. Esto es lo que explica el que una placa gruesa de un material
+ .!.5 (1. _ 511' 2c
Y) +
e-P.' . . .]
5~
COS (h) frágil, esté más expuesta a romperse bajo la" acción de tensiones térmicas
que una placa delgada.
Al cabo de .Ilgún tiempo, el primer término adquiere una importancia predominante Consideremos, para acabar, una esfera de radio grande y supongamos
y entonces podremos admitir: q'ue un pequeño elemento esférico de la misma, de radio a, situado en el
4",E(1'. - T , ) (2 7r 1l) centro, sufl"e una elevación de temperatura T. Puesto que este' elemento.
<1". = <1", = (1 ) • e- P " - - cos -2e
71" -]' ?r no puede dilatarse libremente, en su superficie se producirá una presión p.
Para y = :l::c tenemos tensiones de tracción: Las tensiones radial y tangencial que esa presión produce en un punto
cualquiera de la esfera, distante r > a del centro, pueden obtenerse apli-
<1"= <1" = 4GYE(~!..=_1'¡) e-PI' ~ . cando lns ecuaciones (197) y (198) (véase la pág. 399). Suponiendo que
'.' ~(l - p) . 1\"
el radio exterior de la esfera sea muy grande, comparado con a, resulta:
En el plano medio y =., O, obtenemos tensiones de compresión:
Los puntos ell los que las tensiones son nulas vienen dados por la ecuación: Ala distancia r = a, se tiene:
<1"r = - p, <1", = j-p
r el aumento de ese radio, producido por la' preSlon p, será: las cualel'l son up!Jt:aum. cn los Cl\.tremos A y B c;le cada banda. Conseguimos
entonces, que las distintas banuas se presenten como si la placa no hubieru
Ar = (ae,) ..... = i [<T, - v(<Tr + 0",)] ...... = : ; (1 + 11) sido calentada. Para obtener las ten'siones térmicas, debemos añadir a (a)
la tensión producida por la aplicación de fuerzas iguales y opuestas, es decir,
aumento que deberá ser igual al producido por hl elevación de la tempera- de una tracción de valor aET, a lo largo' de los bordes y = ±c de la faja.
tura y la presión p en el elemento esférico. ,,-=- l:L
Tenemos entonces: +1 e 8
11.
pa pa IL
ctTa - E (1 - 2v) = 2E (1 + 11) -
/
-
de .. donde: +1
2 aTE LL
p=---
31 -:
(n)
11 ./
+/
Sustituyendo en (m), obtenemos las relaciones siguientes para las tensio- /
..f=r
nes en el exterior del elemento calentado.
+ ./'
- e
2 aTEaS 1 aTEa' /'
- 8 (1 - JI)r S' <T¡ = 3 (1
- l1)r3 (o)
~
Edge C.l.
--------c--------~
133. Algunos prDblemas planDs de tensiones de origen térmico. FIG. 224
Supongamos que una faja de una pla<;a delgada (fig. 223), es calentada
de forma no uniforme, de manera tal que la temperatura T sea función de Si el calentamiento se limita a una zona de la faja corta en comparación
.x solamente, manteniéndose constante a lo largo de cualquier sección recta. con su anchura, 2c, tal como la CDFE de la figura 223, el efecto de las
tracciones 'aET se hará notar solamente en la proximidad de en, en el
borde superior y de EF en el borde inferior. Podemos, pues, considerar,
'. que estas dos zonas representan un problema del tipo estudiado en el § 34 .
. He~os mostrado en la página 121 que una tensión normal aplicada sobre
un borde recto produce wla tensión igual, normal, sobre ese borde, que
es paralela al mismo. Las tracciones aET producirán, por tanto, una ten-
sión de tracción aET en la dirección x. Las dos tensiones normales se
anulan cuando se penetra en el interior de la placa perpendicularmente
a la arista. Si estas tensiones son superpuestas a la compresión (a) de direc-
FIn. 223 ción y, podemos trazar curvas J que dan rJ:r; y rJy a lo largo de una línea tal
.' como la AB, tl"azada en la parte más caliente de la pieza, cuyo aspecto
es el mostrado en la figura 223b. Cerca de los bordes, la tensión prevale-
Si la placa es cortada en bandas tales como la AB (fig. 223), esas bandas ciente es rJ"" cuyo valor es aET y cuyo signo es el de una 'tracdón cuando l'
sufrirán dilataciones verticales diferentes. Es por ello, y a causa del enlace . es positivo. Las tensiones máximas toman el valor aET,n~,.
mutuo entre esas bandas en el conjunto de la pieza, que se producirán Si la temperatura T es función periódica de x, la aplicación de las trac-
tensiones. ciones aET representll: un problema del tipo considerado en el § 23. Cuando:
Considerando las bandas como si fueran libres, podremos suprimir su
dilatación vertical sometiéndolas a las tensiones de compresión: T = Tosenax (b)
las ecuaciones (k) del § 23, poniendo A =. B = - cdD.~ y tellÍendo en de (h) Y (e), resulta:
cuenta (f), nos dan:
E
Cf", = -2aETo (ac ch aC - sh ae) ch Ily - ay sh Ily sh ac
ct. = r-":"--;;2 fe. + vea - (1 + v)aTl ,
. sh 21lc + 2ae . sen ax E
o.ET. (ac ch Üe + sh elc) eh ay - ay sh (lY sh ae
0"8 = ·1 _ v2 [ea + VEr - (1 + v)aT] (d)
1171 2 o sh 2ac + 2ac . sen ux
que la ecuación (a) toma la forma:
= 2elET Ilech elC sh ay - ay ch ay sh u.c . c~s ax
t;rll n
. sh 2ae + 21lc el
r dr (E r + VEO) + (1 - V)(Er - fO) = (1 + v)o:1' rJ,T
dr (e)
Las tensiones térmicas en la placa I vienen, pues, dadas por aquellas
. cuya expresión acabamos de dar, junto con la tensión de compresión desplazamiento radial tenemos, según el § 28:
ay = -aET de la ecuación (o). La figura 224 muestra la variación de 0", du U
a lo largo de las líneas de temperatura máxima para distintos valores de la Er = dr' Ee = -
r
. (1)
longitud de onda 2l = 271/1/. Vemos que la tensión máxima aumenta cuando
la longitud de onda disminuye, tendiendo hacía el valor aETa. Obtenida la Sustituyendo en (e) obtenemos:
solución para el caso de una distribución sinusoidal de la temperatura,
pueden tratarse otros casos en los que la temperatura es función periódica
de x. Puede igualmente concluirse, que la tensión máx.im¡¡ en una placa de
.longitud finita difiere sólo ligeramente del valor aE1'o, obtenido para una que puede ser escrita en la forma:
placa infinita.
(b) . .
·.aq =
1!.T
aE· T2 a
E )12 [ Ol(l
Trdr - ",ET + 1- + JI) + 02(l - JI) T2
1] w.
y de forma semejante:.
las constantes C l y Cz vienen determinadas por las condiciones
(/;)
macizo tomamos a = O Y observando que:
I Este problema fue estudiado por J. P. Den Garrog, .1. Frallklin 111S1., vol. 222, pág. 149
1936, ni Investigar Ins tensiones de origen térmICO producidas durante el proceso de la···soldu·
dura.
1
Hm-
,....0 l'
irO
Trdr =O
450 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGEN TIlRMICO 451
2
+ ¡¡)aT = 1 ~ v (0" - 1=-; 0'0)
vernos, según la ecuación (h), que C 2 debe anularse para que u sea nu);¡
en el centro. En el borde r = b, debernos tener O'r = 0, de donde según E, - (1
la ecuación (i): (b)
EO - (1 + )I)aT = 1 ~ (0'0 - )12 1 .: )1 0',)
Vemos fácilmente que estas ecuaciones pueden deducirse a partir de
Las tensiones vendrán, pues, dadas por las relaciones: las correspondientes a la tensión plana; ecuaciones (h) y (e) del párrafo
, precedente, sustituyendo e'n ellas E por EICl - J.2), J' por JI/(l - J') y rl por
(~ Io ~ !o' Tr dr)
b
CT, = aE Tr dr - (237) (1+ v)a.
Las ecuaciones (a) y (f) del párrafo precedente siguen siendo válidas.
El cálculo dé u, 0', y 0'"0, se realiza exactamente de la misma forma. Pode-
+ ~ Io + ~ Io
b r
ITa = aE (-T Trd¡' Trdr) (23~) mos escribir, por tanto, los resultados, realizando las sustituciones citadas
en las ecuaciones (h), (t) y (;). Obtenernos de esta manera
que dan valores finitos en el centro, puesto que:
1 + 11 oa o_ 11,' Trdr+C11'+-C 2
1
Jim""'i
"...0 r
!o'
o
Trdr = -21 To
u= __
cr
1-11
ixE l!.r,Trd¡'+--
= ___
l'
E (C¡ C2)
a r
(e)
0- ~-- (d)
1 1'2 1 1-
1ir Tr dr - -aET- + ---
r -)1 a +)1 211 ¡.2
donde To es la temperatura en el centro.
OlE E (G\ C2)
135. Cilindro largo de sección circularo En el estudio de este
as = - -'-
1 - 11 1'2 a + ---- + .....
1- r-
JI 1 JI 1 - 2/1
(e)
Sustituyendo este valor en la~ dos primeras ecullcioIles (239), resultl1: b = O. Haciendo cntonces C 2 = °
y a = O en la ecuación (d), resulta: :;
L
~_.....,.:C.,.:l_-_~ = _~_..!:.2 (b ~1' d1' (g)
I La primera solUCIón d ••• le problema fue obtenidn por j. M. C. Duhamel, l\1emoires ...
par rlivers sava/r/$, vol.' S, pág, 440. París, 1838.
(1 + 11)(1 - 211) 1~ JJ b Jo
"
i
452 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE OlUGEN TERMICO 453
La resultante ele la tensión axial (j) es: en la que k es lu conductibilidad térmica, e el calor específico del material y I! la
densidfid. Sustituyendo la serie (1) en la ecuación (241) y tenienuo en cuentu el hecho
[1' 21!"exE (b" 2vEG 1 b2 de que':
Jo CT, 2'111"dr = -1 _ v Jo 'lrdr + (1 + 1')(1 - 2v) 11"
(r Jo
Jo (r) br (PnS")
{J"ii I'dr a;.JL
=
2
y la de la tensión axial uniforme Cs es Ca' nb El valor de Ca que anula •
(1'. = _c: E
_ (.!.. (b 'l'T d'l'
1 - v b2 Jo
- !.
)'2
f' Tr dr)
~. = 2aEZ..~ '\'
1 - v 1..
~
n=1
8-"" {..!
lin'
_JAfp"Cr/b)]}
JI(Pn)
(J ..
(m)
tIq = aE
1 -
(.!.. ¡o 'l'ror +.;r Jo(" 7'rd,. -
v b Jo 2
r) (242)
Las fórmulas (k), (1) Y (m) representan la solución completa del problema. En los
·trabajos de A. Dinnik y C. H. Lees, antes mencionados, se desarrollan filgunos
nunl.él'icos..!.
IT. -
-
_ aE
---
1- V
(2vlab
-
b o 2
']';¡
ru-T - 'j') (243)
Tomemos, por ejemplo, un cilindro largo euya temperatura inicial sea constante
e igual a T,. Si a partir del instante t = O la superficie lateral del cilindro se mantiene 70
a temperatura cero', la distribución de la temperatura que corresponde a otro g
E: 60
instante t, viene dada por la serie' "
ü 50
2' = '1'. L
~
,,=l
AlOJo (Ii .. n n·' (i)
L.
R.4D
1- 3D
20
en la que Jo(!1"r/b) es la función Dessel de orden cero (véase 111 pág. 427) Y fJ es el
símbolo de las raíces de la ecuación Ju(fi) = O. Los coefícicntes de la serie (1) son: ID
2
A .. = 7;-;:J¡ ({Jn)
y las constan tes P.. vienen dadas por la ecuación: FIG. 225
_ le Ii,,' (j)
Pn--cp'/,' La figura 225 representa a la distribución de temperatura en un cilindro
, Se supone qlJe la superfiCIe del cilindro toma bruscamente la temperatura cero. Si la acero, que se supone a temperatura inicial uniforme e igual a cero
temperatura de la superficie es T" debemos sust,tuir To por T. - T, en las ecuaciones oh-
tenid~s. . , \léase E. Jahnke y F. Emde, FUllktlo/lenta]eb" plÍg. 165, Dedin, 1909.
, Véase Byerly, Fou·,ier Series alld Sp".rical Ilamlonics, pág. 229. El cálculo de las tensio- • La distribucióll de temperutum en los sólidos durante el proceso de calentamiento o
. nes téTlT\icRS para este cnso, puede encontrarse en A. Dmmk, Applicarions o] Bessel's Ftlnction ha sido estudiada por Williamsoll y Adamo, Pl&ys. Reu., serie 2, vol. 14; pág. 99,
to EluSlicity Prohlems, 2." parte, pág. 95. Ekaterinoslav, 1915. Véase tumblén C. H. Lees, Ingberg, Griffin, Robinson y W.lson han estudiado experimentalmente el efecto del fuego
Froc. Roy. Sor:. (Lomioll), vol. 101, pág. 411, 1922. del agua 8obr., Ins columnas. Véase U. S. Bur. Standllrds, Tic/¡. Papt!T, 184, í921.
3 F..stos datos han sido tomados de A. Stodola, Da1Tlpfl-/llld Gmtllrbinell, ú.n edición, pó-
961, 1924.
454 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGIlN TERMICO 455
c¿ET I T· b
(Jr = 0, U'O = lT.z: = - 1 _ ]1 T = log(b/a) log T (n)
Este valor, que es el máximo que puede. adquirir la ten~~ón que se .origina 'Llevando este valor a las 'ecuaciones (244), (245) Y (246) obtenemos la8
por calentamiento 'en un cilindro, eqUlvale a la tenslOn. ~ecesana para 'siguientes expresiones para las tensiones de origen térmico J.
suprimir por completo la dilatación térmica en la superfIcie. D~ra~te el
calentamiento, esta tensión es una compresión y ~urante el er:fna~le.n:o,
Ufill ttaCcióIl_ Con el fm de reducir la tensión máXIma, es corriente IniCiar
(1'
r
=
2(1 -
aBT,
JI) log(bja)
[ - lo -b -
gr
a
(b 2 - a2 )
2
( 1 - -b ) lo -
r2 ga
2
bJ
el calentamiento de árboles y rotores a una temperatura algo inferior a la
final, TI> y aumentar el tiempo de calentamiento en proporción al cuadrado (1'9 = 2(1 _ aBT¡ [ b a
JI) log(bja) 1 -lag;: - (b2 _
2
(2)
(
1
b)
+12
2
bJ
loga (247)
del diámetro de la pieza.
Cilindro con un agujero central'. Si llamamos a al radio del agujero rT z
aBT i [
= 2(1 _ JI) log(b(a) ] - 2log;: - (b2 _ a2) lag ji
b 2a
2
bJ
y b al radio exterior del cilindro, las co~stantes CI '! C 2 , que figuran en
las ecuaciones (e), (d) y (e), son determmadas mediante la condición de T, es positivo, la tensión radial es de compresión en todos los puntos,
nulidad de rT, para esoS dos radios. Entonces: en las superficies interior y exterior del cilindro. Las compo-
de la tensión 0'0 y rTz toman sus valores máximos en esas mismas
.~_c~=o
2 Haciendo r = a, resulta:
1 - 2v a
- 1_
c¿E
JI'
1
b2
lb
a T7 dr
E
+1+ JI
(CI
i _ 21' -
0 2) _
b2 - O (0'8)..- = (0',),_ =
O/ET¡ (
b 1 - b2 _ a 210g ti
2b
2
b) (248)
2(1 - v) log-
a,
de donde se deduce:
__z
,·-EC
1 +"
=_____
aE a !.b Tr dT
1- JI
2
b -
2
a 2
a
T = b se tiene:
(1 + ,,)(1
EC I
- 2,,)
= ~
1- V
1_
__
bZ - a2
J.b Tr dr
a
(249)
Sustituyendo estos valores en (d), (e) y (f¡ y añadiendo a l~ última l~ ten- : figura 226 muestra la repartición de las tensiones de origen térmico
sión all:iul Cs, necesaria para anular la fuerza resultante aXial, se obtIenen través del espesor d~ la pared cilíndrica para el:,caso particular en que
las fórmulas
, L. Barker, E71gint!eriug, vol. 124, pág. 443, 1927, ha dado ciertos gráfICOS que facllnan
cálculo de las tensIones medlonte las ecuacJOncs (247).
1 Véase R. Lareoz, Z. Vey dentscJi. Ing., vol. 51, pág. 743, 1907.
TllOElrA DE LA ELASTICIDAD
TENSIONES DE ORIGEN TllRMICO 457
456
aJb = 0,3. Si T, es positiva, las tensiones son de compresión en la super. y siempre que los bordes estén sujetos, de tal manera, que la flexión de
ficie interior y de tracción en la superficie exterior. En el caso de matenales la placa, producida por el calentamiento no uniforme, sea impedida [véase
tales como piedra, ladrillo u hormigón, que son débiles a la tracción, es la ecuación (k) del § 132]. .
de temer la aparición de fisuras en la superficie exterior del cilindro.
z z
Cuando el espesor de la pared del cilindro es peq~eño: ~omparad? con (a) (óJ
su radio exterior, las ecuaciones (248) Y (249) pueden Simplificarse pomendo F¡c. 227
b m S m3
b
+m,
- = 1 lag - = m - - + - - ...
a a 2:3 Si al flujo estacionario de calor se superpone una fluctuación de tem-
de alta frecuencia, las tensiones que esta última provoca pueden
y considerando que m es una cantidad pequeña. Resulta entonces:
calculadas de una manera análoga a la explicada para el caso de placas
(0'0)'_ = (0'.)._" -
_ _ aRTi
2(1 - v)
(1 -1- ~)3 (248')
(véase el § 132)1.
el estudio precedente, se supuso que el cilindro es muy largo y el
de las tensiones que hemos realizado es aplicable a las regiones ,
= 2(~E2'¡v) (1 - i)
(249') de los extremos. Cerca de los mismos, las irregularidades locales
(O'o),...¡, = (Uz)r../>
~Ulll!l'll~:an el problema de )a distribución de las tensiones de origen ténni·
Si la temperatura en la superficie exterior del cilindro es distinta de cero, : problema éste que vamos a considerar ahora para el caso de un cilindro I
los resultados anteriores podrán ser aplicados sin más que sustituir en todas . paredes delgadas. La solución (250) exige que las fuerzas nonnales, ·1
las ecuaciones la temperatura T, por la diferencia T, - T o entre las telIl.- . en la figura 227a, estén distribuidas sobre los extremos del
·1
peraturas exterior e interior. Para hallar las tensiones en un cilindro con extremos libres de~
En el caso de una pared muy delgada podemos despreciar el / superponer a las tensiones (250) las producidas por fuerzas jg~ales
m/3 en comparación con la unidad, en las ecuaciones (248') Y (249 ). . opuestas a las mostradas en la figura 227a, fuerzas que en el caso de
Resulta entonces: . pared delgada de espesor h, pueden ser reducidas a momentos flec·
como se muestra en la figura 227b, uniformemente distribuidos a
oET, . largo del borde de) cilindro y cuyo valor por unidad de longitud es:
(ero),_a = (0',) ....... = - 2( 1-- v) (2;JO)
aBT, aET i h2
.lI1 '"' 2(1 _ v) (f (o)
(ero),../> = (IT,)r_b = i(1=-v)
lo que nos dice que la distribución de las tension~s de origen
a través del espesor de la pared, es igual a la que. se produce ~n el , El cálculo ue J"S tensiones UU ongen térmico en Ins purcues de los cllmdros llene gran
en el diseño de máquim.s Diesel. G. Eichelberg (Farschungsarbeilet/, núm. 263,
de uml placa de espesor 2c = b - a, cuando la temperatura vIene una solUCión gráfica del problema para el caso en el que el espesor de la pared
por la ecuación (fig. 222): celllll,e".,,,ru v"ri.n u lo largo del c¡]mdro. Se puede encontror información sobre ·Ia dls-
de temperatura en los motores Diesel en los SIgUIentes trabajos: H. Jo" G. Letsol\,
T = ~_#._ Mech. Eng., pág_ 19, Londres, 1925; A_ Niígel, Engineert'llg, vol. 127, págs'. 59,179,279,
(b - a) Y 626, 1929. ' ..
'!
·1
458 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENsrONES DE ORIGEN TERMrcO 459
Para calcular las tensiones producidas por estos momentos, imaginemos La tensión máxima de tracción en el extremo libre de un cilindro es, pues,
una faja longitudinal de anchura unidad separada de la envolvente cilíndri- un 25 % mayor que la obtenida mediante las ecuaciones (250), para los
ca. Una faja tal puede ser tratada como si estuviese apoyada sobre una puntos alejados de los extremos. Lá ecuación (P) permite constatar que
fundación elástica. La curva de deflexión ele esta faja viene dada por la el aumento de la tensión en la cercanía de los extremos libres del cilindro
ecuación 1 es de carácter local, puesto que depende de la flecha u, y disminuye rápida-
· mente cuando la distancia z al extremo aumenta.
i'.1e-~·
t¿ = 2{32D (COR fJz -sen (3z) (p) Este método aproximado para el cálculo de las tensiones de origen
térmico, basado en la curva de deflexión de una barra sobre fundación
donde: elástica, puede aplicarse también en el caso de una temperatura variable
· a lo largo del eje del cilindro1• .
fJ= (q)
136. Tensiones de origen térmico en una esfera. Estudiaremos
y e es el radio medio del tubo cilíndrico. Esta curva de de flexión permite aquÍ el caso sencillo de una distribución de temperatura simétrica respecto
calcular llls tensiones de .flexión crz correspondientes y las tensiones tan- · al centro, función, pues, solamente, del radio· r 2 •
genciales (fe p~ra todo valor de z. La flecha máxima se encuentra eviden- Por razone..<¡ .de simetría no habrá más que tres componentes de la
temente en el. extremo z = 0, donde: tensión no nulas: la componente radial (Fr Y dos componentes tangencia-
les er" como en el § 121, ll1s cuales deberán satisfacer la condición de equi-
·libdo de un elemento en la dirección radial (fig. 202, ecuación Ce), pág. 399J.
d!T
-dr
r
+ T-2 (I1 r - !T,) = O (a)
La componente de la deformación, que corresponde a este valor, según
la dirección tangencial, es: Las relaciones tensión-deformación serán:
Tomando para " el valor 0,3, resulta: ·.A.S.M.E., Apphed Mechanics DlyiS10n, yol. 53, p.íg. 167,1931. . '
· , Este problema fue resuelto por Duhamel, loe. cit. F. Ne,!man, Ablu.mdl. ARad. Wis,.,
, 1841; véase también su Vv,lcnsllIIgen iiber die TIzeoyie der Elastizitiít der festell Kbper,
.. 1885; ]. Hopkinson, Messenger of ¡'vIath., vol. 8, pág. 168, 1879. El cnso de tempe-
raturas no simétricAs ha sido estudiado por C. W. Dorchardt, Nlvllatsber. Akud. Wiss., Berlín,
, Véase S. Tlm~shenko, Strellgth vf N[aterlO[s, 2." edICIón, vol. 2, pág. 166. 1873, pág. 9.
460 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGEN TERMICO 461
Llevando estas expresiones a la ecuación .(a) y sustituyendo Er Y E, por donde lal:l componentes de la tensión serán:
r.
sus valores, dados por (d), resulta la siguiente ecuación diferencial para u:
~ + 3. a~¿ _ ?~ = 1 + JI. a?2' (g)
d~ ~ l-JI b (252)
la cual puede escribirse: aE
(T, = 1 _
(2¡;s ro
Jo Tr dr
2
+ ra1Jo(r Tr 2
dr - T
)
+ l'
ar [!.
1 JI d'l'
!:.. !!:... (rZ'II)] =1-- -JI' adl'
r 2 dr
-
JI
3
(i)
2cxE
3(1 - v)
rr =
I
~ .!.
1 _ JI r3
J.' Tr
4
2 dr + EC! + EO • . !. -' ~
1 - 2111+ r 1 - JI
3
11
(J) media de la esfera completa + (1{2 de la temperatura media
la esfera dc radio r) .... 3/2TJ.
El cálculo de las tensiones en. cada caso particular, puede realizarse
Consideremos ahora algunos casos particulares:
dificultad si se conoce la distribución de la temperatura l. G. Grünberg 2
Esfera maciza. En este caso, podemos dar el valor cero al límite infe-
desarrollado un ejemplo interesante de la aplicación de cálculos de este
rior, a, de las integrales. Asimismo, es preciso que u = O para r = 0, lo
en relación con el estudio de la resistencia de materiales i8ótropos
que llevado a la ecuación (h) implica que C2 = O, puesto que:
'dos a una solicitación triaxial de tracciones iguales. Si una esfera
cuya temperatura inicial es To es introducida en un líquido que se
lím ~ (' ']',2 dr = O
..-0 r- Jo IrIlPnrru a una temperatura mayor TI, la porción exterior de la esfera
La mllgnituu de esta tracción máxima.es': Como vemos, la tensión a r es nula para r ",.~ a y r ,"'- b. Se hace máxima o
mínima cuando! .
()(E (l)
0', = 0'1 = 0,771 2(1 _ ji) (T1 - T o) 2 _ :3a2 b2 .
r -a Z +ab+b2
Lll tensión máxima de compresión, que se produce en la superficie de la es-
f~ra en el momento de aplicar la temperatura TI es ·igual a aE( TI - To)/l -1')' Para T, > O, la tensión al aumenta a medida que r crece. Para r = a,
Este valor es el mismo que antes obtuvimos para un cilindro (véase la tenemos:
pág. 454). Aplicando las ecuaciones (h) y (l) al caso del acero y tomando
2 a, =
aET. b(b - a)(a 2b) + (n)
b = 10 cm y T 1 - To = 100 oC obtenemos <Ir = a, = 1270 kg/cm y 2(1. - JI) bS - a 8
t = 33,4 s.
Esfera hueca. Llamando a y b a los radios interior y exterior de la Si r = b, resulta:'
esfera, determú1amos las constantes el y e z de las expresiones (z) y (j)
empleando la condición de que 0', sea cero en las superficies interior)
a, = aEr, a(b - a)(2a + b) (o)
2(1 - v) b3 - aS ,
exterior. La expresión (¡) ~a:
En el caso de una esfera hueca de pared delgada, podemos poner:
~_ 2E0 2 • .!:..=O
1 - 2v 1 + ji a3 b = a(l + m)
_ 2()(E.!. (b Tr 2dr +~ _~ ..!.3 = O donde m es una cantidad pequeña. Sustituyendo en (n) y (o) y despreciando'
1 - v b3 Ja 1 - 211 1 + ji b las potencias superiores de m, obtenemos:
Despejando el y e2y llevando los valores encontrados a (z) y (j) obtenemos:
para r = a, a, = - 2(1 _ v)
()(ETi (
1
2)+ 3' m
(253) para r = b,'
aET,
a, = 2(1 _ ji)
( 2)
1 - 3' m
Las ecuaciones (b) no son afectadas por la 'temperatura, puesto que la y las tensiones normales:
dilatación térmica libre no produce ninguna distorsión angular en un cuerpo ~ET
isótropo. 1 - 2v (e)
Sumando las ecuaciones (a) y usando la notación definida en (7),
resulta: aplicadas sobre la superficie.
1
e = ]jj (1 - 2v)9 3aT + Si podemos determinar la solución de las ecuaciones (254) que satis~
faga las condiciones de contorno (255), esta solución nos dará los despla-
Despejando las tensiones de las ecuaciones (a) y empleando este resultado, zamientos u, v, w, a partir de los cuales, y mediante las ecuaciones (h) y (e),
obtenemos: podremos determinar las tensiones tangenciales y normales. Estas últimas
CtET ecuaciones, las (e), nos muestran que las componentes normales de la
u" = Xe + 2Ge" - r-::2v Ce) tensión constan de dos partes: a) una parte deducida en la forma habitual de
las componentes de la deformación; b) una presión «hidrostática') de valor:
Llevando estas expresiones, así como las'ecuaciones (6), a las ecuaciones de ~ET
(f)
equilibrio (127) y suponiendo que las fucrzas másicas son nulas, resulta:
138. Tensiones iniciales. El método que hemos empl~ado para calcular las y por las fuerzas de superficie:
tensiones de origen térmico, puede ser aplicado al problema más general de las ten-
sitmes iniciales. Imaginemos un cuerpo subdividido en pequeños elementos y su- x= (~e' + 2G.¡i)l + G,,/=.'m + (].y• .'7/.
pongamos que cada uno de estos elementos, sufre una cierta defom1ación plástica, (f)
producida por una transformación metalográfica, definida por las componentes de
la deformación
De esta manera, el problema de la determinación de las tensiones iniciales queda
I
"Y:tJ:, (a)
reducido al sistema corriente de ecuaciones de la teoría de la elasticidad, en la cual
las fuerzas másicas y superficiales ficticias están completamente determinadas si se
Supondremos que estas componentes de la deformación son pequeñas y ql,le vienen conoce la deformación permanente (a).
representadas por funciones continuas de las coordenadas. Si las componentes de En el Caso particular en el que E.. ' ~ €; = E:
= aT y y./ = Jln' ~ " • .' = O.
qoe se truta satisfacen, también, las condiciones de compatibilidad (129), los ele- las ecuaciones anteriores coincidcn con las obtenidas para el cálculo de las tensiones
mentos en los que hemos subdividido el cuerpo se adaptan mutuamente después de origen térmico.
de la deformación permanente (a) y no habrá en él tensiones iniciales. DI e a
Consideremos, ahora, el caso más general cn el que las componentes (a) no
satisfacen las condiciones de compatibilidad, de forma que los elementos en los que
el cuerpo está subdividido no ,se acomodarán' entre sí después de la deformación
pelmanente, lo que exige la aplicación de fuerzas sobre la superficie de cada uno
de estos elementos, con el fin de satisfacer las ecuaciones de compatibilidad. Supo-
niendo que el material sigue siendo perfecl:'.unente elástico después de la deforma-
ción pennanente y aplicando la ley de Hooke, deducimos, de las ecuaciones (11) y (6),
que la deformación permanente (a) puede ser eliminada aplicando n cado elemento
las fuerzas superficiales:
lT/ = -(Ae l + 20".'), (b) Fu, 228
en las que:
Consideremos ahora el problema inverso en el que las tensiones iniciales son
B'=e;/+e/+E:r:' conocidas y queremos determinar la deformación permanente (a) que ha producido
esus tensiones. En el caso de materiales transparentes, tales como el vidrio, las ten-
Las fuerzas de superficie (b) pueden ser pro\'oeadas aplicando al cuerpo, forma- siones iniciales pueden ser estudiadas mediante el método fotoelástico (cap. 5).
do por 108 pequeñotl elementos, ciertas fuerzas másicas y superficiales, las cU'lles En otros casos, esas tensiones pueden ser determinadas cortando el cuerpo en pe-
deberán satisfacer a las ecuaciones de equilibrio (127) y a las condiciones de con- queños elementos y midiendo las deformaciones que en ellos se dan como conse-
torno (128). Sustituyendo las componentes de la tensión (h) en estas ecuaciones. cuencia de liberarlos de las fuerzas de superficie representativas de las tensiones
obtenemos para las fuerzas másicas la expresión:' que existen en el cuerpo antes de ser cortado. pel estudio precedente se deduce que
la deformación inicial produce tensiones iniciales solamente cuando las componen-
tes (a) de la deformación no satisfacen las ecuaciones de compatibilidad; de no ser
así esas deformaciones pueden existir sin que produzcan tensiones iniciales. De esto
(e) se sigue que el conocimiento de las tensiones iniciales no basta para determinar
las componentes de la deformación Ca). Obtenida una solución para esas compo-
nentes, podemos sumarlas cualquier sistema de deformación permanente que satIs-
y para las fuerzas superficiales la:
faga las ecuaciones de compatibilidad sin alterar hlS tensIones Iniciales l •
X .,= - (Ae l + 2G./)l - G"/:/m - G,,/:/n
(d) Las tensiones iniciales, que provocan d fenómeno de la Jable refracción en' el'
vidrio, dificultan nc>tublemente lo fabricación de instrumentos ópticos. Para dismi-
, Mediante la aplicación de las fuerzas másicas (e) y de las fuerzas superfichlles (d) nuir estas tensiones se recurre ordinariamente al recocido del vidno. El límite elás-
hemos suprimido la deformación inicial permanente (a), de manera que los elementos tico del .vidrio a temperaturas elevadas es muy bajo, por lo que el material fluye
bajo la acción de las tensiones iniciales. Después de un tiempo sufiCIente, el flujo
del cuerpo se llj\lstnrán entre s¡ para formar un cuerpo continuo. Supongamos,
plástico de la matena a la temperlltura elevada se traduce en una considerablc ltbc-
ahora, que los elementos citados se unen entre s( y que suprimimos las fu.erzas (e)
ración de las tensiones iniciales. El recocido produce un efecto análó'go cuando es
y (d). Las tensiones iniciales se obtendrán entonces, evidentemente, superponiendo
aplicado a diversas aleaciones metálicas y productos fOljados.
a las tensiones (6) las producidas en el cuerpo elástico por las fuerzas másicas:
Cortando un cuerpo grande en p,iezus mús pequeñas, se liberan las tensiones
por las tensiones iniciales disminuye. No ocurre siempre lo mIsmo, sin embargo, de la deformación son independientes de z, todas esas condiciones son
con el valor de la tensión inicial máxima. Consideremos, por ejemplo, un anillo verificadas a pri()ri excepto la primera. Esta se reduce a:
circular (fig. 228) al que suponemos sometido a tensiones iniciales distribuidas
simétricamente respecto al ccntro y cuya componcnte ao' varía a lo largo de la scc-
ción recta mil de acuerdo con una ley lineal (ah en la figura). Cortando el anillo
a2E= + 82Eu2 = O
ay2 8:c
radialmente, en la [anna en la que se indica en la figura, rnt!diante líneas a trazos,
se libenm las tensiones 0'0' a lo largo de esos cortes. Esto equivale a aplicar en los . ecuación, que teniendo en cuenta las (e) y (a) será igualmente satisfecha.
e.'Ctremos de cada porción de anillo dos pares iguales y opuestos que dan lUf$ar a Vemos, pues, que en el caso de un flujo estacionario de calor las ecuaciu-
una flexión simple, la cual origina una distribución de la tensión 110 a lo largo de 71!11
casi hiperbólica (véuse el § 27), la cual es representadu por la curva cde. Los tensiones nes de equilibrio y las condiciones de contorno, según las cuales la super-
rcsidunles a lo largo de //In después de efectuar el corte vienen dadas por "11 + <11,' ficie lateral no está sometida a ninguna fuerza, son satisfechas simultánea-
yes mostrada en la figura por el área rayada. Si el radio interior del anillo es pequeño, mente si tomamos:
existe lUla elevudu concentración de tensiclIles en el contorno interior y la m,íxima
tensión inicial después del corte, representada en la figura 228 por be puede ser <1" = o'v = 'f'.:¡¡ = O, 0', = -aET (d)
mayor que la máxima tensión inicial anterior al corte del anillo. Este razonamiento
u otro análogo explica por qué el vidrio se fisura después de cortado'. En el caso de un cilindro macizo las ecuaciones anteriores constituyen
un conjunto completo, de donde podemos deducir que en un estado esta-
139. Problemas bidi:mensionales con flujo estacionario de cionario bidimensional de conducción térmica todas las tensiones térmicas
calor. En el caso de un flujo estacionario de calor paralelo al plano" son nulas excepto la tensión axial /1., la cual viene ciada por la ecuación (el)
xy (fluju ~l través de uno placa delg¡ldu l) de un cilindro largo, por ejemplo). y es necesaria para mantener las condiciones de deformación plana, Ez .,; O.
en el que la temperatura no varíe con z, esta magnitud, r, cumplirá la
ecuación:
(a)
Consideremos un cilindro, que no ha de ser necesariamente circular,
en un estado plano de deformación, con (. = 1'". = 1'v= = O. Las rela-
ciones tensión-deformación, en coordenadas cartesianas, serlÍn análogas a
las ecuaciones (11) y (11) del § :I 35, en el caso dI:: deformación plana. Las (al (bl
ecuaciones correspondientes a (b) serán: FIG 229 ,
+ v)a'l' = 1 ~ p2 (<TU -
mos a los extremos, superponiendo una tracción, o una compresión simple,
Eu - (1 1 '::'-;0'.) y una flexión simple tales que la fuerza y el momento resultantes en los
extremos, producidas por 11., se anulen,
Preguntémonos ahora si es posible que 11" {1y Y 1'", puedan ser llulos. En el caso de un cilindro hueco, sin embargo, no podemos decir que
Haciendo <T., = <Iv = O en (b), tendremos: las ecuaciones (d) resuelvan el problema de la deformación plana, siendo
necesario estudiar los desplazamientos correspondientes. Es posible, en
E", = (1 + v)aT, E¡, = (1 + v)aT (e)
efecto, que éstas presenten discontinuidades análogas a las estudiadas en las
y naturalmente )'rv = O. páginas 93 y 148.
Una deformación tal es posible solamente si satisface las ecuaciones Supongamos, por ejemplo, que el cilindro sea un tubo en ·el que se
" de compatibilidad (129). Dado quc E..."" O Y que las otras componentes ha hecho un corte longitudinal en la forma que se indica en la figuia 229b.
Si el interior del mismo se encuentra a \lila temperatura mús elevada que
1 Vanos cjelnplos del c.:ák:ulo ut! I~s tl!OSlOnt.'S Inlcialet:¡ en los trozos cortados t!n tllI.l pi 11... el exterior, el tubo tenderá a abrirse y la ranura' aumentará. Existirá unu"
Circular han s,do estudiados por M. V. Laue, Z. lech. P¡'ysik, vol. 11, pago 285,1930. D'\l'"''
métodos de cálculo de Ins tenSIones rehldunlcs son csul<hados en el embaj" de N. Da" """"1,,,,, discontinuidad de desplazamiento entre los dos labios de la abertura, "por
Z. Metal/kili/de, vol. 24, pág. 25, 1932. . lo que los desplazamientos deberán venir" representados p.or una función"
4-72 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONF.5 DE OIUGEN TIlRMICO 473
discontinua de O. La sección recta forma un recinto simplemente conexo Los desplazamientos serán uniformes si esta integral se anula pan! toda curva cerrada
y las ecuaciones (ti) dan correctamente las tensiones para el caso de defor- (tal, por ejemplo, como la circun ferencia represen tadl¡ u trazos en la fig. 229a)
que pueda ser trazada sobre el. material ,de la sección r~ctu. Este resultado será
mación plana. Si, por el'contrario, el tubo no presenta ninguna ranura utilizado más adelante para resolver un problema de tensiones térmicas en un cilin-
(fig. 229a) las discontinuidades de los desplazamientos son imposibles, dro circular hueco.
lo que implica que la distribución supuesta para la temperatura producirá, Al igual que los desplazamientos, la rotación (o. debe ser continua. Tenemos:
de hecho, componentes (¡:e, (T", .~v, que representan las tensiones produ-
cidas al unir las caras separadas de la ranura (véase el § 39 Y la fig. 82).
(..,.). _ (""), = (2 (a.,< da;
)¡ iJ:IJ
+ él."
ay
dY)
La componente G. quedará igualmente modificada por esta operación. que empleando las ecuaciones (1) nos queda:
Para estudiar esta cuestión con más detalle, escribamos de nuevo las ecuacio-
nes (e) de la forma: (,.,). - (W')I = f (- ~~ dz + :; dY)
au Bu = .. Dado que €' es proporcional a T, esta integral es proporcional al calor que fluye,
8i = ti, éJy (6)
por unidad de tiempo y de distancia axial, a través de la IÚlea que une los puntos 1
donde E' = (1 + ¡·)aT. Dado que l' tU = 0, tendremos: y 2. Si la curva que consideremos es cerrada (ro,), - (ÚJ,)t serlÍ cero, debiendo
serlo también, por tanto, el flujo total de calor a través de esa curva. Si en un tubo
iiV
aa;
+ élu
ay
=O (f) existe flujo tle calor desde el in terior hacia el exterior o viceversa, esta ecuación
no es cumplida y las ecuaciones (d) no representarán correctamente el estado tcnsional.
y Si el tubo presenta una ranura tal como la indicada en la figu¡-" 2290, el despla-
au _ bu = 2"" zamiento y la rotación pueden ser diferentes en el punto 2 y en el 1. Tal ocurre, ,
a:ll ay (g) por ejemplo, si el cnlentamiento ensancha la ranura. En eHe caso el estado tensional
dado por las ecuaciones (d) es correcto. Para obtener la distribución tensional corres-
tlonde w. es una 'componente de rotación (véase la pág. 259). Las ecuaciones (j) pondiente al caso del tubo sin ranura, tendremos que añadir las tensiones resultantes ,1
y (g) nos dan: del cierre de la misma a las dadas por (d). La determinación de esas tensiones de
éJv discontinuidad es un problem,1 análogo a los ilustrados por las figuras 45 y 82 I •
a:IJ =..,. (h)
Consideremos, por ejemplo, el caso de un cilindro circular hueco de radio ex- "
terior b con un orificio concéntrico de radio a. Si la temperatura de la superficie
que juntamente con (e) nos permiten escribir:
interior es T, y la de la superficie exterior es cero, la temperatura Ta una distancia r
(i) cualquiera del eje vendrá dada por la ecuación (n) del § 135. Esta expresión puede
escribirse de 'la forma:
relaciones éstas, que no son otras que las ecuaciones de Callchy-Riemann, estu- T = - A log b + A log r (m)
d'iadas en el § 55. Estas relaciones muestran que f' -r iw z es una función analítica
en la que:
de la var.inble compleja :l,' +
¡'y. LIlImundo a esta función Z, tunemos:
T,
z= ,/ +{CoJ, (j) A = - lag (b/a)
(n)
Si U" ¡'I, ti" ¡'" son los valores de u y v en dos puntos 1 y 2 de la sección trans-
y donde el término constante -A log b puede ser suprimido, ya que una vanaCton
versal del cilind m, las diferencias UJ .... u" ~', . t'" pueden expresarse de In forma:
uniforme de temperatura no provoca tensiones de origen térmico. Tendremos en-
(2'
= JI (éJu 81l)
¡¡; d:IJ + ay v. - v, = (VU d~ + -au)
2 - dy tonces, poniendo log z = log f iO, que: +
U, - 'lI, dy ,
fx
1 az ay Z = .' + iw, = (1 + v)",T + 'í""
donde las integrales son 'tomadas a lo largo de una curva cualquIera, contenida = (1 + v)"A log r + iw, = (1 + v)aA log z
en el cuerpo, que une los dos puntos. Multiplicando la segunda pOl' i y sumándola
a la primen, resulta:
Llamando B a (1 + v)aA y usando la ecuación (1), tendremos:
11. - lt,
. -
+ t(v, VI) ==]x
(2 [élU élll dy -1-'• (élV
8:C d:IJ + ay 8:IJ dx
élV)]
+ ay ay (k) u. -'Ul + i(u. - VI) = B ~210g z d. = B [.(IOg z - 1) J~ (o)
relación cuya Intugrl\l se comprueba fácilmente, a partir de las ecuaciones (e) y (h),
que es igual 4ue la 1. (€' -1- i",.) (dx + idy) ó 1." Zdz. La ecuación (k) toma en-
1 I La relaCión entre las tensIOnes de origen térmiCO y las de discontinUidad para ei casu
de flujo estaclonatlo de calor han Sido estableCidas por N. MuschehovIlt, Bul/. E/ec. Tech. [mt.,
SlIn Petersburgo, \'01. 13, pág. 23, 1916, e mdependlentemente por M, A. Blot. Phil. Mag.,
tonces In forma: sene 7, vol. 19, pág. 540, 1935, E. E. Welbel ha cHtudllldo foioellÍsucamente las tensIones
(1) témucas en un cllmdro Circular hueco y en un prisma con un onflclo Circular, P,·oc. F,tfh.
Intern. COllg. Applied,,¡WechaT/ics, CambrIdge, Mass., 1938, pág. 213.
4-74 TEORIA DB LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGEN TERMICQ 475
relación que se aplica a toda eurva que une los puntos 1 y 2 a través del material deduce del correspondiente a cos O sin más que cambiar la dirección inicial O .." O.
que compone el cuerpo, y quc expresa el desplazamiento relativo de un punto res- Consideramos pues solamente:
pecto a otro cuando la temperatura es la dada por (m) y la tensión la correspon- T. = Al COS 0, . T•.= Al cos O
diente a las ecuaciones (d).
Al considerar la curva circular de radio r que partiendo del punto 1, rodea el La. distribución de temperatura, correspondiente a estos valores de conto~no, coinci-
orificio y termina en el 2 tendremos (puesto que 01 = O, O. = 2,,): de con In parte real de la funciÓn:
[z(log z - 1)]; = l'e"" (lag l' + i· 2..) - re'" (log r + i . O) = i ·2,,-r
(u)
que llevado a (o), nos da:
U, -111 = O, v, - VI = B . 2".r (p)
en la que las constantes el )' C. se determinan mediante las condiciones (t). Sus
valores son:
Al no ser cero el desplazamiento rclativo, es necesario considerar que el Cilindro
presenta una ranura que permite que el punto 2 se separe del 1 el desplazamiento
o-
1-
~(Al_
ba _ 0;2 a b Al') I
o _ Alb - A,a
2 - b' - a'
(u)
vertical 2J1rB (fig. 229b). El movimiento del ·Iabio llupcrior de la ranura respecto
al labio inferior es equivalente a una rotación de valor 2nB. en el sentido de las agujas El" término CI/z de (u) corresponde al valor:
del reloj, alrededor del centro del cilindro (B, sin embargo, es negativo si T. es
positivo). La ranura, pues, se abre, siendo vista desde el centro bajo un áng\llo ) 01
(1+"",z-
de valor - 2",B. El problema de cerrar esa ranura ha sido resuelto en la página 95
para el casa tensional plano. Pasando la solución allí obtenida al caso de deformm:")n · de la función Z. Llevando este valor a (1) y teniendo en cuenta (s), resulta que la
·plana, mediante las sustituciones indicadas en la página 57, obtenemos unas cnm- ··discontinuidad del desplazamiento es:
ponentes de la tensión que añadida.. a In tensión axial ". = -aET. de las ecuacio-
nes (d), nos da un estado tcnsional idéntico al que definen las ecuaciones (247). u. - 111 +i(v. - VI) =·í· 2.. (1 + ,,),,0,
Cuando la temperatura varía a lo largo de los contornos circulares exterior e de donde:
interior podemos usar paro su representación las series de Fourier: u~ - Ul = 0, 11. - VI = 2rr (1 + "),,,0,
'1', = Aa + 11 1 cos B + A, cos 26 -1- ••• + B, senO + B, sen29 + ..
7', = Aa' + A,' cos O + A,' cos 20 + ... + B L' senO + B.' sen29 + .. .(q) · 10 que significa que el borde superior de la ranura de la figura 229 Re desplaza la
cantidad 2",(1 + .)aC, en el espacio ocupado por el borde inferior y el matenal
Las tensiones térmicas provocadas por cada uno de esos términos pueden ser estu- · subyacente. Esto es, evidentemente, Imposible, SIendo impedido por la acción de
diadas separadamente, siendo las producidas por los términos constantes .40, Ao', las fuerzas de contucto entre I()s dos labios, Jos cuales generan un despl!lznmiento
las definidas en el estudio anterior, donde ahora T, = .40 - A.,'. Las funciones Z opuesto. L!ls tensiones que acompañan a ese desplazamiento termman en la form'l
que corresponden n los términos cos O, sen Oi cos 20, sen 20, etc., contendrán tér- mdicada en el § 39, tratándose en este caso naturalmente de def01mación plana.
minos proporcionales a: Las componentes de la tensión que deberán ser añadidas a las dadlls pOI' las ecua-
3, Z-l; ZSl, Z-2; etc. (r) dones (á), son:
= K COS IJ • T
a 2b2 + b' -
+ --- 0;'
3
)
J
"6 -
( r-4
J Sh da "" rn.,nsro,si dO = ir n+1 fa 2 ... e'<n+l) 8 dO
T,9 = K sen /J • r
,,2
(1 - r2~) (~,.2 - 1)
(2,.. .
= ';r + n 1 Jo [cos (n + 1)0 + ~ sen (n + l)U] dO
donde:
que e~ cYldcntemente 'nula, c..'(cepto para n + 1 = O, caso en el que: -aE (Ala: - Al') a'b'
= 2(1 _ v)· T ¡;:¡:...
J~ = 21r'i (8)
J(
La tensión axial, si la dilatuclón es Impedida en esa dirección, viene dudo por las
0;4
Vemos, pues, que el único término de (r) que no anula a la integral del segundo ecuaciones (d) en IllS qlJe T está detcrmmadn por (11) } (~.). Si los e:,.tremos no están
. miembro de (l) es el término en Z-I. Se sigue de ello que. los términos en cos 211, sometidos a ninguna sujeción, es preciso tener en cuenta la tensión axial cread u
sen 20 y los armónicos superiores de la serie (q), no producen ningún desplazamiento : por la supresIón de la fuerza y momento que sobr~ ellos tlctunbun.
rel!1tivo entre los dos labios de la ranura, correspondiendo, por tanto, a un flujo
de calor global desde el interior hacia el exterior nulo, que produce solamente las 140. Solución de las ecuaciones generales. Toda solución particular de
tens iones expresadas por las ecuaciones (d). las ecuaciones (254) qLle podamos obteh"r, rcduc~ el problema de las tt"IlSlOnes· de
Los término~ de (q) que origimm.lns potencias Z··I en Z son cos O y sen O, cuyo origen télmico a un problema ordinario de fuerzas de superficie. Obtenidas las·soll!-
efeeio Vamos a estudiar. considerando solamente el de cos () ya que el de sen O se . ClOnes en !l, ?J. W, ]os.yalores de la~ componentes de la tensión se obtienen por mediO
476 Tl!ORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGEN TERMJCO 477
de las ecuaciones (a) y (6) del § 139 Y las (2). Las fuerzas de Huperficle requeridas, máxima que pll~"t" pl'escntarse tiene el valor llETj(l l'), Y es nOl'IDnl a la superficie
junto con la temperatura no uniforme para mantener esas tensiones, se encuentran del elipsoide en los puntos de may~)r curvatUrll de la elipse generatriz. Este valor
aplicando las ecuaciones (128). La supresión de esas fuerzas, que hace que las ten- se presenta solamente en los dos Casos extremos de elipsoide muy alargado o mu}
siones existentes sean dehidas únicamente a la temperatura no uniforme, constituye aplannuo. En los casos intermedios la tensión máxima toma un valor más bajo.
un problema corriente de cargas de superficie. Para una esfera ese valor es los dos tercios del citado anteriormente.
Una manera de obtener soluciones particulares de las ecuaciones (254) con- Cuando T es independiente de z y w = O la deformación es plana y '1', U,.y v
siste en tomar: no dependen de z. La ecuación (d) toma entonces la forma:
u = aoJ!,
i)a;
ti = iN,
iJy
(a) a'",
ax'
+ a'ofr = 1 + • aT
ay' 1 - v
(f)
donde 1/' es una función de x, y, ::r, y también del tiempo I si la temperatura vnrín Una solución particular de la misma es:
con el tiempo.
Haciendo uso de las ecuaciones (5) y (10) podemos escribir las (254) de la si- '" ;". i; .i ~ :.'" JJ!Ct,'1) lag r' de dr¡ (g)
guiente forma: a'!' donde:
2.~ -1- (1 - 2v)'I'" = 2(1 v)"'-a +
a~ x
(b)
T' = [ex - ~)" + (y - ,,)2]}
En unfl placa delgada en la que T no varíe a través del espesor, el estado tensional
será plano con u. = Tu = T y, = O Y '//, V, G%, uv, ' •• funciones sólo dc x e JI. Las
Dudo que e = Ot//ox .¡. ov/ay l· ow/oz, de las ecuaciones (a), resulta e = ;¡2.~, relaciones tensión-dcfonnación serún entonces [vénnse las ecuaciones (ti) del § 1341
que llevado a (h) nos da:
Ir. = 1--E- [au
- v -av - (1
+ + ..)",T ]
él aT p' .ax i)y
(1 - v) a~ V'ofr = (1 -1- ..)a 8x
(c~
rT.
E [av axo,. -
= 1 _ v' ay -1- V (1 + v)aT ] (h)
=
E (av au)
2(1 + ..) az + ay
donde o/a)' y %z sustituyen a a¡8x en la segunda y tercera ecuaCión, respectiva- 7 ••
mente. Estas ecuaciones son evidentemente satisfechas si tomamos como función' 11' que sustituid.l' '" '.1' "UHClones de eqUlhbrio (18) (con fuer.l:as másicas nulns)
una solución de la ecuación: nos dan:
+ ay) 1 - " (O'U iJ"1l) = 2", 8T
V,"" = 1 + v",T
1 - v
(d)
axiJ (8U
8x 8ii + 1 + ':, iJx' + ay' a:D
Las soluciones de las ecuaciones de este tipo son estudiadas en la teoría del (i)
potencial'. Una de ellas es el potencial gravitatorio correspondiente a la distribu-
ción de materia de densidad -(1 -1- y)"T/4:r(l - ~). Su expresión es': Estas ecuaciones son satisfechas por:
'" = -
(1 +_v)",
4".Cl v) JJJ ( 1
T ~,1/,r) ?,d~ d'1 d r (e) ti =0'"
oy
(1)
en la que TU, '1, ,) es la temperatura en un punto cualquiera ¿, j}, ~ contenido en un supuesto que tp sea. solución úe:
elemento de volumen d~ d1] de y r' es In distancia de este punto al punto :0:, y, z.
i)'ofr
La ecuación Ce), da la solución completa del problema de las tensiones de origen
térmico, en un sólido infinito que se encuentra a temperatura nula en todos sus
O:D' + i)'ofr
ay' = (1 + .)aT (1;)
'puntos salvo en una regi5n calentada (o enfriada'). Los casos en los que esa región Comparando esta relación con la (f), vemos que una solución particular de lu misma
tiene la forma de un eEpsoide de revolución o de un cilindro circular semi indefinido, es el potencial logarítmico (g), con el factor (1 - ") del denominador suprimido.
uniformemente calentado, han sido estudiados'. En el caso del elipsoide la tensión Esta es, pues, la solución eompleta para el caso úe un e"lentamiento loc,1l en unu
placa indefinida en la que tensión y deformación tienden a cero en el infinito.
, E. Alamansl ha empleado funCIones de este tIpO en .1 problema de la esfera. Véase: Consideremos, como primer ejemplo, una placa sometida a la temperatura cero
1) Allt rea}p ocead. ,eL TorillO, vol. 32, pág. 963, 1896-1897; 2) Me",.. real. acead. sei. Tonno,
scrw 2, vol. 47. 1897. . en todos sus puntos excepto en la región rectangular ABCD de lados 2a, 211 (fig. 230)
'Véase pOI' ejemplo 71/tory o/ ¡he PolmllO/, de W. D. MacMllla.n, NuevlI York,'1930. en la que la temperatura es uniforme e igual a T'. El potencial logarítmico corres-
J E.qta funCión potenCIal fue cmplt'ada por C. W. Borchardt en el problema de la esfera. pondiente será:
Véase Monalsber. kÓlligl. PrerlSS. Akad. Wiss., Pl\g. 9, Berlín, 1873.
, j. N. Goodler, Phil. M<lg., vol. 23, pág. 1017, 1937. El sóhdo semundefmldo ha SIdo
estudIado por R. D. Mmdhn y D. H. Chcng,j. Applred. Phj'J., vol. 21. págs. 926,931, J950 .
'" = J; (1 -1- v)",T fb tJ lag [(z - t)" + (y. - 71)"] d~ d1/ (l)
. "'. O. Myklestad, J. dpplred Mechan;cs (Tram. A.S.M.E.), pág. A-131, 1942. I Goodier. loe. cit.
TEORIA DE LA ELASTICIJ)AD TENSIONES DI! OIUGEN TERMICO 479
478
Una vez obtenidos los desplazamientos por la ,aplicación de las ecuaciones (;), El método que estamos estudiando resulta especialmente sencílIo cuando lu
, 'podemos hallar las componentes de la tensión por medio de las re!aciones (h). Lus temperatura varía con el tiempo y satisface la ecuación diferencial de la ~onduc
valores encontrados para 0', y ,.v
en puntos tales como P, exterIor al rectángulo ción del calor'
élT '
caliente, pueden ponerse en la forma: Tt = Kv'T (n)
(m) en la que k es la conductibilidad térmica dividida por el calor específico y por la'
densidad. Derivando la ecuación (ti) respecto a t y sustituyendo éJTléJt por el valor
donde los ángulos '1", '1', Y las distanCIas rlo Y2, ro, Y" son los mdicad~s en la figura 230. dado por (n), vemos que la' función '1' deb ... verificar la ecuación:
Los ángulos son los subtendidos en P por los dos lados del r~ctangulo AD Y BP, v· aat", = ~""(V'T
paralelns al eje x. La expresión de u" se obtiene a partir de la primera de las ecuaclO- 1- v
nes (m) sin más que sustituir V" y 1¡~ por los ángulos subtendidos en P por los otros
Podemos poner, por tanto:
dos lados del rectángulo AB y De.
ecuación, cuy" integral para el caso en el que la temperatura tiende a cero al trans-
currir el tiempo, es:
oJo = _l+"CtK r~Tdt (o)
1 - v J!
como pueue verificarse sustituyendo en la ecuación (ti) y haciendo uso de la ecua-
ción (n).
Consideremos, por ejemplo, un cilindro circular largo (deformación plana) que
es calentado o enfriado según un régimen estacionario de conducción térmica. La
tempemtura no es simétrica respecto al eje pero es independiente de la coordenada
axial z. Podemos representar entonces la temperatura por una serie de la forma:
valor, éste, que alcanza su máximo !EaT en el caso de un rectángulo inf~~itame~te La serie formada por tales términos, que corresponden a los de la serie que da T
largu según la dirección y. Las dos componentes normales de :~ tenslOn ~an"n representará una solución particular de las ecuaciones generales (h). Los despla7.a~
bruscamente cuando se contornea la esquina del rectángulo. La tenslon tangencml TTY
mientas serán calculados median te las ecuaciones (a) o sus equivalentes polares:
tiende a infinito cuando nos acercamos al vértice. Estas características, 'tan peculiares,
resultan de la existencia de vértices perfectos en el rectángulo clllentado. 1 a",
Si la zona calentada es elíptica' en vez de rectangular y la ecuación de la elipse es: 11 = a""
r 130
iJr
v=
z· y' en las que u y v son los componentes mdial y tangencial respectivamente. La com-
¡¡.+ b2 = 1 ponente axial w, por tratarse de deformación plana, será nula. '
Las componentes de la deformación se deducen de los resultados del § 28.
el vlllor de la tensión d~ en un punto exterior a la elipse, situado muy cerca del ex-
En cuanto a las componentes de la tensión se obtienen a partir de las fórmulas (a)
tremo del eje mayor, es: y (b) de la deformación pInna del § 135, junto con la última de las ecuaciones (52)
EaT para la tcnsi'ón tangencial rol'.
1 + (b/a) Una vez obtenida nuestra solución encontrarem()s que, en general, tenemos
valor que tiende a Ea l' para una elipse muy alargada. Si la z,!na cal~ntada es circular, fuerzas de contomo (~" ',Q) no nullls sobre la superficie 'lateral del cilindro. La su-
este valor es ~EuT. La tensión cr r en la vecíndl1d inmediata del "Je menor es: presión de tales fuerzas constituirá un problema corriente de deformación plana,
que se resuelve utilizando la función general de tensión en, coordenadas polares
Ea.T dada en el § 39'.
1 + (alb)
r Véase por ejemplo, T/¡eory 01 lieat COl1ductlO7I, de Ingersoll y Zobel.
Il"l<lienc!" a cero pal11 una elipse mu) "largada. 'Este problema, para el caso de un cilmdro hueco (estando dada la temperatura por (P)]
I Goodlcr, loco cit. ha SIdo estudí.do por j. N. Goodler en el trabajO cuado. ,
PROPAGACION DE ONDAS EN MIlDlOS IlLASTICOS 481
elemento de .la bar~a' contenido entre dos secciones rectas adyacentes mn
y mInI. La dIferenCIa entre las fuerzas que actúan sobre las dos secciones
transversales es .
Propaga au él tt)
2
a,!¿ a2
AE ( -a.
x
+-ax.
dx 2 - AE- = AE-..!:dx
élx ax2
en medz
y la ecuación diferencial del movimiento de dicho elemento es
éJ'u a2~¿
Apd:C-
at 2 = AE-
ax2 al:.
o lo que es lo mismo
.n
141. Movimiento generado por fuerzas. En los capítulos pre- ~-----
~""" .............
cedentes hemos supuesto que el cuerpo elástico se encontraba en reposo m~C4f---,Ir-----~p~----~--X
bajo la acción de las fuerzas exteriores, tratándose, pues, de problemas (a)
de estática. Existen casos, sin embargo, en los que debemos considerar el
movimiento provocado en un cuerpo elástico, por cargas aplicadas brusca-
'/-=:----:-t---=:t'/----t,~e:-:::.:-:..:l~::.::-~ct¡------t.r..:::,-:::-::':t~::::-:::"""""":;C
mente o por fuerzas variables. La acción de una fuerza bruscamente apli-
cada no es transmitida simultáneamente a todas las partes del cuerpo.
En el instante inicial las zonas alejadas del mismo no son alteradas y las
deformaciones provocadas por la fuerza se propagan a través del sólido (6)
en fonoa de ondas elásticas. Si las dimensiones del cuerpo son grandes, Flc. 232
el tiempo que las ondas emplean en atravesarlo, es lo suficientemente
grande como para ser considerado, a efectos prácticos. Tales problemas expresión en la que !! es la densidad del material de la barra y
se presentan, por ejemplo, al estudiar el efecto de las percusiones o el de
las ondas producidas por los terremotos. El estudio de la propagación
de las ondas en los medios elásticos es .el tema del presente capítulo ' .
c=~ (259)
Comencemos por el problema sencillo de la propagación de ondas longi- Puede demostrarse por sustitución que cualquier función j(x -1- et) es
tudinales en una barra prismática larga. una solución de la ecuación (258). Asimismo, toda función JI (x - et) es
también una solución viniendo la solución general de la ecuación (258)
142. Ondas lo~gitudinales en barras prismáticas. Tomando representada por la expresión.
como eje x el de la barra (fig. 231) Y suponiendo que las secciones trans-
versales de la misma se mantienen planas durante la defOImación, la exten-
u = j(x -1- et) -1- j,(X - et) (260)
- sión unitaria en cualquier sección recta mn, debida al dcsplazluoiento lon-
gitudinal u, es igual a au¡ax y la fuerza de tracción 'correspondiente será mercia correspondientes al mOVimiento de las partículas según la direCCión lateral son de.-
AE(éJu¡éix), donde A es el área de la sección recta 2 • Consideremos un preciada. e~ nuestro deducción. I~sta ~oluclón aprOXimada es suficientemente exac~n SIempre
que la longitud de Olida de la. VibraCIOnes no sea pequeña comparada con In. dimensiones
transversales de la barra. En el caso en el que la longitud de onda es pequeña .el movilnlen'to
I Los problemas de lu~ vibraCIones estacionanas de los cUt!rpos elásticos son estudiado" de. 1M partículas ~cgún la dirección perpendIcular al eje de la banda debe .:er conSIderado.
\'n S. Tlmosht!l\ko, Vibra/ion Prob/e-ms
I'n Engilleering, Nueva York, 1928. Vease Lord Raylelgh, Theory uf Sound, cap. 7; L. PochhalÍuner, J, Mat/¡, Cre/t.·" J .. ; vol .. Sl,
11 Suponemos que' tenemos una traccjón simple que actúa en la dIreCCión ;..' y que la e>..~ 1 ~76; C. Chree, Quart. J. M.ath .• vol. 21. 1886 Y vol. 24, 1890; J.. Preseott, Phil.. Mag., vol. 33,
tensIón tu tx vjenc acomPllñada por una contracción lateral de valor l·(ru'i"l:). Las fuerzas de: pago 703, 1942; R. M. Davles, 7'rans. Roy. Soco (Lo!,doll), seri~ A, vol. 240, pág. 375, 1948.
;:
482 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS ELASTICOS 483
Esta solución tiene un significado físico muy 'sencillo que puede .ser expli- mienza a propagarse a lo largo de la barra con una cierta velocidad e,
cado de la siguiente manera. Consideremos el segundo término del segundo de forma tal, que después de un cierto intervalo de tiempo t, una porción de
miembro de la ecuación (260). En un determinado instante t este término la barra de longitud et, estará coinprimida mientras que la porción res-
es función de x solamente, pudiendo ser representado por una cierta curva, tante se encontrará libre de toda solicitación.
tal como la mnp (fig. 232a), cuya forma depende de la funciónJI' Después
de un cierto intervalo de tiempo .It, el argumento de la función JI será
x - e(t + LIt). La función!l no variará, si al mismo tiempo que la variable t
se incrementa en ¿ft aumenta la abscisa en una cantidad ¿Ix igual a el.1t.
Esto significa que la curva mnp, construida para el instante t puede ser
utilizada también en el t + ¡Jt, con tal de desplazarse según la dirección x
FIG, 233
la cantidad L!x = eLlt, tal como se muestra mediante la Iínea'a trazos de la
figura. A partir de' esta consideración, puede verse que el segundo tér-
mino de la solución (260), representa una onda que se propaga a lo largo La velocidad de propagación de la onda e no deberá ser confundida
del eje x con ~na velocidad constante e. De igual forma, puede demostrarse con la velocidad v transmitida a las partículas de la zona afectada por la
que el primer término de la solución (260) representa una onda que se compresión. Esta velocidad, v, puede calcularse teniendo en cuenta que
propaga en sentido opuesto. La solución general (260) representa, pues, dicha zona (rayada en la figura) experimenta como consecuencia de la
dos ondas que se propagan a lo largo del eje x en sentidos opuestos con la compresión u un acortamiento de valor (O'fE)et. De aquí resulta, que la
velocidad constante e dada por la ecuación (259). Esta velocidad depende velocidad del movimiento vibratorio en el extremo izquierdo de la barra,
únicamente del módulo E y de la densidad del material de la barra. En el igual a la que adquieren las partículas de la zona comprimida, es
caso del acero, por ejemplo, podemos adoptar el valor e = 5135 mIs.
Las funciones f y J, deberán ser determinadas, en cada caso particular, (b)
a partir de las condiciones iniciales en el instante t = O. Para ese instante
tendremos, según la ecuación (260) La velocidad e de propagación de la onda, puede obtenerse aplicando
(u) 1_0 = f(x) + ¡l(X) la ecuación de momentos. En el instante inicial la porción rayada de la
barra s~ encontraba en reposo. En el instante t tiene una velocidad v y
e~)I-o = e[f'(x) - 1/(x)J
(a)
un momento Actev. Igualando este momento al impulso de la fuerza de
compresión se tiene
Supongamos, por ejemplo, que la 'velocidad inicial a 10 largo de la barra
sea nula y que exista un desplazamiento inicial dado por la ecuación Aut = Aclpv (e)
(u)¡_O = F(x) Sustituyendo (b), encontrarnos para (e) el valor dado por la ecuación (259)'
y para la velocidad de las partículas
Las condiciones (a) quedan satisfechas, tomando
v=-~
u
(261)
f(x) = f¡(:c) = -j-F(x) -VEP
El desplazamiento inicial se dividirá en este caso, por tanto, en dos partes Como puede verse, mientras que e es independiente de la fuerza de com-
iguales que se propagan como ondas, en sentidos opuestos (fig. 232b). presión, la velocidad v de las partículas es proporcional a la tensión.
La velocidad de propagación de las ondas en las barras prismáticas, Si en lugar de una compresión, aplicamos bruscamente una tracción
puede obtenerse a partir de consideraciones elementales. Supongamos que ,en el extremo de la barra, se producirá la propagación del esfuerzo corres-
una tensión de compresión uniformemente distribuida; es aplicada brusca- , pondiente a lo largo de la misma con una velocidad c. Una vez más la velo~
mente sobre el extremo izquierdo de una barra prismática (fig. 233). En el 'cidad de las partículas viene dada por la ecuación (261). El sentido de
instante inicial, se producirá una compresión uniforme que afecta a una esta velocidad será el opuesto al sentido positivo d.e las x. Así, pues, en
capa infinitamente delgada situada en ese extremo de la barra. Esta com-
, 1 Esta deducción elemental de la fónnula que da la velocidad de propagación de la ond;,
'presión será transmitida a la capa adyacente continuándose este proceso es debida a Babine!; véase Clebsch, 1'héarie de l'élastir-ité des corps'.mlides, 'tradU'cida por Saint.
al tran~F~rrir el tiempo. En consecuencia, una onda de compresión co- , Venaul, pág. 480d, 1883. '
. .'.
TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROPAGACION DI! ONDAS·EN MEDIOS ELASTICOS 485
484
una onda de compresión la velocidad v de la·s partículas tiene el mismo La ecuación (258), que gobierna la propagación de la onda, es lineal,
sentido que la velocidad de propagación de la onda, mientras que en una de forma que si tenemos dos soluciones de la misma su suma lo será" tam-
onda de tracción el sentido es el opuesto. bién. Se sigue de ello, que al estudiar la propagación de las ondas a lo
De las ecuaciones (259) Y (261) se deduce largo de una barra podemos utilizar el método de superposición. Si dos
ondas se propagan en sentidos opuestos (fig. 234), al encontrarse producen
t1=El!... (262) una tensión y una velocidad resultante que serán obtenidas por super-
()
posición. Si ambas ondas son, por ejemplo, compresivas, la compresión
fórmula que expresa que la tensión producida por la onda es igual ~ pro- resultante se obtiene por simple adición como lo indica la figura 234b,
ducto del módulo elástico E del material por la relación de las velocldades. y la velocidad resultante de las partículas por sustracción. Después de
Si un cuerpo absolutamente rígido, que se desplaza con una velocidad v, haberse cruzado, las ondas recobran sus formas iniciales tal como· se indica
golpea según la dirección longitudinal una barra prismática, la te~sión de en la figura 2 3 4 c . · .
compresión que se produce en l¡¡. superficie de contacto en el Instante
inicial estará dada por la ecuación (262)1. Si la velocidad del cuerpo v .Dl
supera un determinado límite, límite que depende de las propiedades me- I
cánicas del material de la barra, se producirá una deformación permanente I (a)
en la pieza aunque la masa de! cuerpo que choca con ella sea.~uy pequeña 2. I-t-l I 111111 I 11} u x
Consideremos ahora, la energía de la onda que se extIende a la zona
.n
~
~
rayada de la figura 233. Esta energía consta de dos partes: la correspon-
diente a la deformación cuyo valor es i 1I11111111CT x
(6)
I
CT{lIlllllll
1
y la energía cinética que es igual a
Actpv2
~=
Act".2
2E
~--------~I~ ~) FlO. 235
~tI~II~III~II~III~I______~III~~III~II~1X
de la barra (fig. 235c). Si se comparan las figuras 235a y 2·35b puede
(e)
deducirse que en e! caso de un extremo libre, UIja onda de compresión
FIG. 234 se refleja como una onda de tracción semejante, y viceversa.
Al encontrarse dos ondas idénticas que se trasladan en Sentidos con-
, 8sta conclusión· es debida a Thomas Young; véase su Course oi Lecwres on Natural trarios (fig. 236a), el valor de la tensión se doblaiá y. el de la velocidad
Philusophy ••. , vol. 1, págs. 135 y 144, 1807. .. se anulará en aquella porción de la barra en la· que se superPonen· las dos
.' Se supone que el contacto se produce simultáneamente en todos los puntos de la secclOll
extrema de la barra. . ondas. La sección ·media mn presentará siempre una velocidad nula. Dicha
TEORIA DE LA El.ASTIClDAD PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS EUSTICas 487
486
sección permanece, pues, inmóvil durante el paso de las ondas, pudiendo Consideremos ahora el caso más general en que las barras 1 y 2 (figu-
ser considerada como extremo fijo de la barra (fig. 236c). De la compara- ra 237b) se desplazan 1 con velocidades v, y V2(VI > 'L'2)' En el instante
ción de las figuras' 236a y 236b podemos deducir, pues, que una onda del choque, se producirán dos ondas de pompresión idénticas que se des-
cualesquiera no sufre ninguna alteración al reflejarse en un extremo fijo. plazan a lo largo de ambas barras. Las veloddades correspondientes de las
uill"lllll
:m
I
-...E-
IIIIIIIII}O"~ (a)
I -- v m
~.
.....!L
L-_ _ _ _ _ _~
~ (e)
'1<'10. 236 partículas, respecto a las partes no sometidas a tensión de ambas barras,
son iguales y están dirigidas en cada barra siguiendo el sentido que s~
Hemos considerado hasta aquí las ondas producidas por fuerzas cons- aleja de la superficie de contacto. La magnitud de las mismas debe ser
tantes. La tensión" y la velocidad de las partículas v resultan entonces igual a (Vl - v2)/2, con el fm de que las velocidades absolutas de las par-
constantes a lo largo de la onda. En el caso de una fuerza variable, la ten- tículas de ambas barras sean las mismas en la superficie de contacto.
sión rT y la velocidad v varían a lo largo de la onda. Las conclusiones obte- Después de un intervalo de tiempo igual a lle las ondas de compresión
nidas en el estudio precedente, referentes a la propagación, superposición y alcanzan los extremos libres de las barras, las cuales se encuentran enton-
reflexión de las ondas, pueden ser aplicadas también en este caso más ces en un estado de compresión uniforme. En ese instante, asimismo, las
general. velocidades absolutas de todas sus partículas serán
143. Choque longitudinal de dos barras. Si dos barras iguales, VI _ VI - V2 = 112 + VI - v~ = VI + 1'2
222
del mismo material chocan longitudinalmente entre sí estando animadas
de la misma velocidad v (fig. 237), el plano de contacto mn no se moverá Las ondas de compresión se reflejarán, entonces, en los extremos libres
durante el choque 1 y dos ondas de compresión idénticas empezarán a. como ondas de tracción y en el instante t = 2ile, en el que estas ondas
trasladars'e a lo largo de ambas barras con una misma velocidad e. Las velo- llegan a la superficie de contacto de las dos barras, las velocidades de las
cidades de las partículas, superpuestas a las velocidades iniciales de las barras 1 y 2 son
barras, determinan un estado de reposo en las zonas de oscilación y en el
instante en que las ondas alcanzan los extremos libres de las barras (t = llc) ,
VI + V2
--2- - --2- =
VI - 112
112,
111 + 112 + VI - 112 = VI
2 2
las dos barras se encontrarán inmóviles y uniformemente comprimidas. Las
ondas de compresión se reflejarán entonces en los extremos libres como on- Vemos, pues, que las barras intercambian, a consecuencia .del choque,
das de tracción que se desplazan hacia la sección de contacto mn. En estas las velocidades.
ondas las velocidades de las partículas, iguales a v, tendrán el sentido que Si las barras que acabamos de considerar tienen longitudes diferentes,
se aleja de mn, de manera que cuando las ondas alcancen el plano de con- / 1 y l2 (fig. 238a), las condiciones provocadas por el choque en los instantes
tacto, las barras se separarán con una velocidad igüal- a su velocidad ini- iniciales serán las mismas que en el. caso precedente. Transcurrido un
cial v. La duración del choque en este caso es igual, evidentemente, a 2:Jlf intervalo de tiempo igual a 21, le, momento en el que la onda reflejada en hi
y la tensión de compresión, según la ecuación (261), es igual a v--/Er¿. barra corta 1 alcanza la superficie de contacto 1nn, liiI. vibración que a través
de esta superficie se propaga a lo largo de la otra barra produce la situílción
I Se supone que el contacto tiene lugar simultáneamente en toda la superficie de los ex-
tremos de las barras•. I Las vc10cldadcs son consideradas positivas si su sentido es el del eje x.
488 'l'JlORIA DE LA ELASTICIDAD PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS ELA&TICOS 489
que se representa en la figura 238b. La onda de tracción de la barra de unidad de la sección transversal de la barra, y Va la velocidad inicial de
longitud 11 , anula la compresión mutua de las barras, pero éstas permane- este cuerpo. Considerando el cuerpo como absolutamente rígido, In velo-
cerán en contacto hasta que la onda de compresión correspondiente a la cidad de las partículas del extremo' de la barra en el instante del impacto
barra larga (rayada en la figura) haya alcanzado, después de reflejarse (t = O) es Va y la tensión de compresión 'inicial, dada por la ecuación (261),
la superficie de contacto, cosa que ocurre en el instante t = 2l2/C. será
f-~~J!I!I1Yo x (6) Esta ecuaClon, puede ser usada siempre que t < 21/c. Cuando t = 2l/c,'
la onda compresiva, con un valor 0'0 para la presión frontal, vuelve a la
'¡fu 11 It#WI 11 11 ~~
11 re)
extremidad de la barra que está en contacto con el cuerpo móvil. La velo-
cidad de éste no puede cambiar bruscamente y, en consecuencia, la onda
se reflejará .como si el extremo estuviera fijo, de forma que la tensión de
compresión en la superficie de contacto aumenta bruscamente alcanzando
FlG. 239
el valor 20'0, tal como se indica en la figura 239c. Un aumento tal, brusco,
de la presión, se produce dUrante el choque en el extremo, en instantes de
Consideremos, ahora, el problema más complejo de una barra fija en
tiempos separados por el intervalo T = 21/c, debiendo obtener una expre-
uno de sus extremos golpeada por una masa móvil en el otro extremo 2
sión de G para cada uno de dichos intervalos. Para el primero, en eIque
(fig. 239). Sean M la masa d~l cuerpo en movimien~o, referida al área
O < t < T, usamos la ecuación (e). Para el segundo, en el que T < t <: 2t,
1 El problema de la pérdida de la energra cinética correspondiente al movimiento de tras- tenemos las condiciones representadas en la figura 239c y la tensión de
lución, ~n el ca~o del choque longitudinal de barras, ha sido estudiado por Cauchy, Poisson y.
finalmente, por Saint-Venan!; véas~ Compt. rend., pág. 1108, 1866 y J. mathémat (Lt"ouville), Theorie de ['elas/icité des corps solides, de Clebsch, traducida p(lr Saint-VeiJant (véase 111 nota
págs. 257 y 376, 1867.' de la pág, 86). El problema fue asimismo estudiadu por L. H.:Donndl qui.en, einpleando las
2 Este problema ha sido' estudiado por varios autores. La solución final ha sido dada por leyes de la propagación d. las ondas, simplificó la solución y la ext~!ldjó al. caso de uno barra
J. Boussinesq, Compl. rel/d., pág. 154, 1883. La historia del problema puede encontrarse en cónica. Véase Trans. A.S.M.E., Applied Mcchanics Division,. 1930... ,
490 TRORIA DE LA ELASTICIDAD PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS ELAllTICOS 491
compresión (j es producida por dos ondas que' se alejan del extremo .que de donde
ha sufrido el choque y por otra que se·.acerca a dicha extremidad. Si desig-
namo~ por SI (t), S2(t), Ss (t) , :.. , la tensión total de compresión, producida (g)
en el extremo golpeado por todas las ondas que se alejan del mismo después
de los intervalos de tiempo T, 2T, 3 T, ... , las ondas que vuelven de la
extremidad que sufre el choque, son simplemente las emitidas durante
donde e es una constante de integración. Esta ecuación, será usada. a
continuación para reducir las expresiones de los valores consecutivos
el intervalo precedente, retardadas un tiempo T a causa de su viaje de
SI, S2, •••• Durante el primer intervalo O < t < T, la tensión de compresión
ida y vuelta a través de la barra. La compresión producida por estas ondas está dada por la ecuación (e) y podemos escribir
en el extremo golpeado, se obtendrá, en consecuencia, sustituyendo t
por t - T en la expresión de la compresión producida por las ondas emi-
tidas durallte el intervalo precedente. La expresión general para la ten- (h)
sión de compresión total durante cualquier intervalo nT < t < (n + l)T,
será, por tanto, Sustituyendo-la expresión correspondiente a Sn_1 en la ecuación (g), se tiene
y aplicando esta última expresión, así como las ecuaciones (d) y (e), la
de donde nos queda
ecuación (h) toma ia forma
crT
~ [5,,(1) - S"_l(t - T)] + ':; [s.(O + 8_-1(& - 2'») = O
e=- _0_ (1
40:
+ 40:e2"')
2a~
Multiplicando por eT , Sustituyendo en la ecuación (k), se tendrá
e
~' ds. (t)
-¡¡;-
+ T20: e2;' Sn'(') -_ e~ dll.-lUdt - T) 81 = 80 + croe -2.. (1._
'1'
1) [ 1 + 40: (t)]
1 - Ji (1)
20: ~ 40: ·2.d
+ T e'1' 8"_1(1 - T) - Te l' 8._1(t - '1') Procediendo de' igual forma y sustituyendo
ción (g), obtenemos
SI en lugar de $"_1 en la ecua-
. .
() bien
d 2al' . d 2at 40: 2al
- [e T Sn(t)] = -d [e T 5n-l(1 - T)] - -T e '1' Sn-l(t - T)
dt . t
:',
,;
-1-92 TEOR!A DE LA ELASTICIDAD PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS ELI\STICOS 493
Repitiendo el proceso, llegamos a Para valores muy pequeños de a el tiempo de contacto puede ser calculado
Tt)
a partir de la fórmula elemental,
= 8~ + O"oe
-l!a(.!.-a) [ 1 + 2 . 6a.(3 -
='~
83 T
t fl
+ 2 . 3 . 40:' (3 - t)2 + 2 ~.~
T 2 3 s( t)3]
8a 3 - T (n)
e ,,~ (p)
Las funciones SI, S2, Sn, ••• , calculadas anteriormente, pueden ser usada:;
también para determinar las tensiones en cualquiera otra sección trlms-
versal de la barra. La tensión total es siempre la suma de dos valores de s
[ecuación (d)]: uno de ellos en la onda resultante que se traslada hacia el
extremo fijo y el otro en la que se propaga en sentido opuesto. Cuando
FIG. 24{)
a=
1 1
-1 1 °O~--~5~--~IO~--~I5~---W~----2~S~~
6 4- 2 FIO. 242
..
2t
T= 7,419 5,900 4,708 3,068
la porclon de onda que corresponde al valor máximo ·de. s (el pico más
.. --- alto de una de las curvas de la fig. 240) llega al extremo fijo y es allí refle-
I Estas curvas fueron calculad"" por Sujnt-Venan~ y Plamant. Véase Compt. rerul., pá-
jada, las dos ondas mencionadas anteriormente al~ilJ~~an su\'algr n;áximo:
. ginas 127, 214,2&1 Y 353, 1883.. la tensión de compresión total en este punto, en este instante/es ·la :ináxíma
494 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROPAGACION DE' ONDAS EN MEDIOS ELASTICOS
495
que puede producirse durante el choque. De esto se sigue, que la tensión 144. Ondas de· dilatación y de distorsión e~ medios elásticos
máxima durante el choque se produce en el extremo fijo, siendo su valor isótropos. Al estudiar la propagación de ondas en medios elásticos,
el doble del máxi[llo de s. De la figura 240 puede deducirse rápidamente es ventajoso utilizar las ecuaciones diferenciales expresadas en función de
que para (2=1/6, 1/4, 1/2, 1, las tensiones de compresión máxima son los desplazamientos [ecuaciones (131), pág. 269]. Para obtener las ecua-
2 X 1,7520"0, 2 X 1,606 ao, 2 X 1,368 0"0, 2 X 1,135 0"0, respectivamente. ciones de los pequeños movimientos a partir de estas ecuaciones de equili-
En la figura 242 son dados los valores de amll~/C1o para diversos valores brio, basta simplemente con añadir las fuerzas de inercia. Admitiendo
de la relación a = el/Ml. En la misma figura y con fines comparativos, que las fuerzas másicas son nulas, las ecuaciones de movimiento son
es mostrada también la parábola de ecuación
11'=(1'0 {M =~ (q)
. -VPi -vIa
que puede ser obtenida fácilmente, de forma elemental, despreciando la
(263)
masa de la barra e igualando la energía de deformación de la misma a
la energía cinética del cuerpo que choca con ella. La línea a trazos muestra
la parábola' que viene definida por la ecuación
(r)
donde e es la dilatación cúbica y el símbolo V2 representa la operación
Como puede verse, esta curva, para valores de 1/11 grandes da una aproxi- z ¡¡2 ¡¡2 az
m.ación bastante buena. v = ¡¡x 2 + ¡¡yZ + azz
La teoría del impacto desarrollada anteriormente, se basa en la hipó-
tesis de que el contacto tiene lugar simultáneamente en toda la superficie Supongamos, en primer lugar, que la deformación producida por las ondas
de la extremidad de la barra. Esta condición, raramente se realiza en la es tal que la dilatación cúbica es cero, de forma que la deformación con-
práctica y los experimentos no muestran una concordancia satisfactoria sista solamente en una rotación y en una distorsión. Las ecuaciones (263)
con la teoría:!. Se obtiene una concordancia con la teoría mucho mayor, se transforman en
si se usan resortes helicoidales en lugar de barras 4. En este caso, la velo-
cidad de propagación de las ondas longitudinales es pequeña y el tiempo T
invertido por la onda para hacer el recorrido de ida y vuelta de la pieza,
es grande comparado con el necesario para conseguir un contacto completo (264)
de los extremos.
También se puede ensayar, bajo condiciones precisas, utilizando en
los experimentos barras terminadas por esferas, teniendo en cuenta las Estas son las ecuaciones de las llamadas ondas de dislorsi ón.
deformaciones locales, que pueden calcularse mediante la fórmula de Considere,mos ahora el caso en que la deformación provocada por las
Hertz 5 (véase pág. 4-13). ondas no esta acompañada de rotación. La rotación de un elemento res-
pecto al eje z es (véase § 75)
W
z
= ~ (av _ a¡~) (a)
I Véallse los trabajos de Saint-Vcnsnt y Flamunt, loco cit. 2 ax ay
• Esta curva fue propuc.qta por Boussinesq; véase COlllpt. rettd., pÁg. 154, 1883.
, Véase W. Voigt, AmI. "hysik, voL 19, pág. 44, 1883, Y vol. 46, pág. 657, 1915. Para una
revisión de la bibliografía sobre el temo véase el articulo ue T. PUsehl, .Handbuch der Physik., Expresiones análogas dan la rotación respecto a los ejes x ej.l. La condición
vol. 6, pág. 525, Bcrlin, 1928.
, Tales experimentos fueron realizados por C. Ram.suer, Ann. Phy,ik, vol. 30, pág. 416,
de que la deformación sea irrotacional, podrá ser expresada, 'por' tanto,
190<). en la forma .
• Tal estudio fue realizauo por J. E. Seal's, TraJ/s. Cambridge Pllil. 80c., vol. 21, plig. 49, 0: :
1908. Véase tambiénJ. E. P. Wagstaff, Proc. Roy. Soco (Londoll), serie A, vol. 105, púg. 544,
1924; Y W. A. Prowse, Phil. Mag., vol. 22, pág. 209, 1936.
aw_av=o . au:_ aw = o· (b)
ay az .' . az, . a;¡;. '.
·1,
·1
!
¡
!
496 TEORIA DE LA RLAST1CIDAD PROPAGACION DE ONDAS EN MEDrOS ELASTlCOS 497
Estas ecuaciones son satisfechas, si los desplazamientos u, v, w, se deducen clon de propagación de la onda, tendremos que v = 'lO = O Y que u es
de una única función '" como sigue: función de x solamente. Las ecuaciones (265) nos dan, entonces
u = orf>, oq,
v=-, w = oq, (e)
8 2u 2 a2u
o;¡; iJt2 = Gí 8X2 (a)
iJy éJz
Entonces, Esta es la misma ecuación que he~os encontrado al estudiar la propaga-
Clon de ondas longitudinales en barras prismáticas [véase ecuación (258),
ae = .!!.. \T2q, = V'lu pág. 481], excepto en que la cantidad
lJx íJ:c
(265) el = ~A ~ 2G
Estas son las ecuaciones de las ondas irrotacionales u ondas de dilatación. Sustituyendo A Y G por sus expresiones en función de E y del coeficiente
Un caso más general de propagación de ondas en un medio elástico, de Poisson (véanse págs. 30 y 31), esta última cantidad puede ser repre-
se obtiene superponiendo ondas de distorsión y ondas de dilatación. Para sentada en la forma
ambas clases de ondas, las ecuaciones de movimiento tienen la forma común
(269)
(266)
Puede verse fácilmente que el es mayor que e. Este resultado se debe al
en la que
hecho de que el desplazamiento lateral, en este caso, se considera supri-
(267)
mido rpientras que en el caso de una barra, se supone que la deformación
longitudinal es acompañada por una contracción o expansión lateral.
La relación elle depende de la magnitud del coeficiente de Poisson. Para
para el caso de ondas de dilatación, y
')J = 0,25, c¡}c = 1,095; para v = 0,30, elle = 1,16. Todas las conclusio-
JI] nes anteriormente obtenidas, referentes a la propagación y superposición
a= C2 = "\ji (268)
de ondas longitudinales, pueden ser aplicadas también en este caso.
Consideremos ahora las ondas transversales. Tomando como eje de las x
]mr. el de ondas de distorsión. Vamos a demostrar ahora que CI Y e, la dirección de propagación de la onda y como eje y la dirección del des-
::;on las velocidades de propagación de las ondas de dilatación y de dis- plazamiento transversal, encontramos que los desplazamientos u y w son
torsión. cero y que el desplazamiento v es función de x y t. Las ecuaciones (264)
nos dan, entonces
145. Ondas planas. Si en Un punto cualquiera de un medio elástico
se produce una perturbación, las ondas que se originan se propagan en (b)
todas las direcciones. A gran distancia del centro de perturbaciÓn, sin em~
bargo, tales ondas pueden ser consideradas como planas, pudiendo super- Encontramos de nuevo una ecuación de la misma forma que la anterior,
ponerse que todas las partículas se mueven puulelamente a la dirección
pudiendo pues concluir, que las ondas transversales se propagan a 10 largo
de propagación de 'la onda (ondas longitudinales o perpendicularmente a del eje x con la velocidad
esa dirección (ondas tnmsversales). En el primer caso, tenemos ondas de
dilataci6n y en el segundo ondas de distorsiólI. ~2 = (Q
"\j-p ,
Considerando las ondas longitudinales y tomando el eje x como direc-
32 -tliOltlA Llli LA l:USnC;/UAD
PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS ELASTICOS 499
498 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
la fibra experimenta' desplazamientos y distorsiones, cuyos valores con-
o bien, según (269) secutivos están indicados en la. figura mediante los elementos rayados:
( 1 - 2J1 1, 2, 3, 4, 5, .... En el instante t = O, el elemento A toma la posición
C¡ = Cl '\]2(1 _ JI) (270) indicada por 1. En este momento su distorsión y su velocidad son cero.
Después adquiere una velocidad positiva y después de un intervalo de
Para 'V = 0,25, la ecuación anterior nos da tiempo igual a ti/c. su distorsión está representada por 2. En este instante
el desplazamiento del elemento es cero y su velocidad es máxima. Después
de un intervalo de tiempo igual tl/c", las condiciones están indicadas por 3,
y así sucesivamente. .
Cualquier función Suponiendo que el área de la sección transversal de la fibra sea igual
(e) a la unidad, la energía cinética del elemento A es
~-----------t------------~~_
p d:r;
2
(av)2
¡¡¡ =
p dx 47r'cz2
2 ' -Z-2- v." cos· T (x -
271"
C2t)
y su energía de deformación
2
1 .1
2" Gy=u~ to:¡; = 2G d:c --l-2
471"iv 0
-
211"
cos· T (:¡; - C2t)
Recordando que C2" = Gle, podemos deducir que las energías cinética y
Flo.243 potencial del elemento, en cualquier instante, son iguales. Esta es la misma
conclusión que obtuvimos anteriormente al estudiar las ondas longitudi-
es solución de la ecuación (h) y representa una onda que se propaga en nales en barras prismáticas (véase pág.484) ..
la dirección x con velocidad C2. Tomemos, por ejemplo, la solución (e) En el caso de. un terremoto, se producen los dos tipos de ondas, de
de la forma dilatación y de distorsión, las cuales se propagan a través de la tierra con
velocidades Cl Y Cg. Esas ondas pueden ser registradas por un sismógrafo,
271" (d) de forma que el intervalo de tiempo transcurrido entre la llegada de los
11 = Vo sen T (x - C2t)
dos tipos de ondas, es un dato que da una orientación respecto a la dis-
La onda tiene en este caso una forma sinusoidal. La longitud de onda tancia que separa a la estación registradora del centro de pertUrbación I •
es l y la amplitud V¡,. La velocidad del movimiento transversal será
146. Propagación de ondas sobre la superficie de un cuerpo
811 27rC2 271" ( ) (e) elástico. En la pregunta anterior, hemos estudiado la propagación
al = - -¡- 110 cos T x - C2t
de las ondas a cierta distancia de la superficie limitante de un medio
la cual es cero cuando el desplazamiento (el) es máximo, y tiene su valor elástico. Pude ocurrir, no obstante, que en la superficie de un cuerpo elás-
máximo cuando el desplazamiento es nulo. La deformación tangencial tico tengamos ondas de un tipo diferente, las cuales se propagan sobre
producida por la onda es la superficie penetrando muy poco en el interior del cuerpo. Son semejantes
a las ondas producidas en la superficie tranquila del agua al ser arrojada
'Y%U = ax8v = T 2?rVo 271"
cosT (x - czt
) (1) una piedra. Lord Rayleigh, que fue el primer-o en estudiar tales ondas" ,
señaló: «No es impr()bable que las ondas superficiiiles aquí estudiadas,
Como puede verse, la distorsión má;'(ima (j) y el máXimo del valor abso-
I Las ondas provocadas en la tierra por las máquinas de movimiento ál~ernativo son' estu~
luto de la v~locídad (e), se producen, en un punto determinado, simultá- di~d8S c,:, los siguientes trabujos: L. Mi!1trop, Dissertat;on, G~ttingcn, '1911; A.. Hcinrich,
neamente. DisserlaltOn, Br•• Jau, 1930; G. Bornitz, Über die AusbreilUll1l vd" Bodenschwingungim, Berlln
Podemos ~epresentar esta forma de propagación de ondas de la ma- 1932. Véase también E. Reissner y H. F. Sagaci, J. AppliuJ Phys., vol. 15, pág. 652, 1'944;
H. F. Sogoci, ibid., pág. 655. . .
nera siguiente: sea mn (fig. 243) una fibra de un medio elástico. Cuando • Véase Proc. LOllljml Math. Soc., vol. 17, 1887... '. .
una onda sinusoidal (d) se propaga a lo largo del eje x, el elemento A de
500 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROPAOACION !J1l ONDAS EN MEDIOS ELASTlCOS 501
jueguen un papel importante en los terremotos y en los fenómenos de o empleando la notación
colisión de cuerpos elásticos. Divergiendo en dos dimensiones solamente;
deben adquirir, a distancias grandes del origen, una importancia conti- (e)
nuamente en aumento». El estudio de las gráficas de las ondas sísmicas,
llegamos a
confirma la hipótesis de Rayleigh.
A distancias grandes del origen en que la onda ha sido creada, la de- (f)
formación producida por las ondas que estudiamos puede ser considerada
Combinando las soluciones (a) y (b) Y tomando u = Ul + u., V = Vl + V2,
como bidimensional. Admitamos que el cuerpo está limitado por el plano
determinamos las constantes A, b, p, r, s, de forma que sean satisfechas
y = O, Y tomemos como sentido positivo elel eje y el que va hacia el inte-
las condiciones de con tomo. La periferia <;Iel cuerpo está libre de fuerzas
rior del cuerpo y como sentido positivo del eje x el de propagación de la
exteriores, de manera que para .Y = O, X = O e Y = O. Sustituyendo las
onda. Las expresiones de los desplazamientos, se obtienen combinando on-
ecuaciones (134) y tomando l = n = O Y 711 = -1, obtenemos
das de dilatación [ecuaciones (265)], y ondas de distorsión [ecuacio-
nes (264)]. Suponiendo en ambos casos que 'lO = O, -la solución de las ou+av_
ecuaciones (265), que representa las ondas de dilatación, puede escribirse ay élx - o
'U1 = se-rv sen(pt - sx), Vl = -re-t'1J cos (pt - 8X) (a) AB+2G
oV =0 (g)
ay
donde p, T, Y .s son C011stantes. El factor exponencial de estas expresiones
indica que, para valores reales positivos de T, la amplitud de la onda dis- La primera de estas ecuaciones indica que las tensiones son tangenciales
minuye rápidamente al aumentar la profundidad y. El argumento pt - .sx y la segunda, que las tensiones normales en la superficie del cuerpo, son
de las funciones trigonométricas, muestra que las ondas se propagan en nulas. Sustituyendo las expresiones anteriores para u y v en estas ecua-
la dirección x con la velocidad ciones, resulta
e3 = l!. (2711 2rs + A (b + 8 2)
2
= O
(~ - 2) (r
8
2
-
2
8 ) + 2(r + Ab8) = O
2 (h)
Sustituyendo las expresiones (a) en las ecuaciones (265), encontramos que
estas ecuaciones SOIl satisfechas si donde, según (b) y (e)
{c2 A
--2 =-
h} G
o usando la notación
Eliminando la constante A de las ecuaciones (h) y usando (c) y (j),
(b) obtenemos
si tenemos (le)
(o) .
o bien, según (e) y (j) !
Tomaremos las soluciones de las ecuaciones (264), que repl·esentan las
ondas de distorsión; en la forma
2
fe - 2
( -~ )4 = 16 (1 - -h2) (1 - ~ .
2
-fe~ )
112 = A be-bV sen (pt - sx), V2 = - Ase-bu cos (pt - oSx) (d) Empleando las ecuaciones (b), (e) y (271), todas las cantidades de esta
donde A es una constante y b un número positivo; Puede demostrarse ecuac:ión pueden ser expresadas en función de las velocidades el de las
que la dilatación cúbica que corresponde a los desplazamientos (ti) es ondas de dilatación, c. de las ondas de distorsión y C3 de las ondas super-
cero y que las ecuaciones (264) son satisfechas si ficiales, obteniéndose.
b2 = S2 - G.
pp2
(
2
03 -
02
2
2)4 = 16 (1 _( (1 - ca:)' 32
)
C1 2 C2-
(l)
502 'rEORIA DE LA ELASTICIDAD
Empleando la notación
o
(0: 2 - 4) (3«4 - 12a2 + 8) = O 1. Deducción de las ecuaciones en diferencias finitas. Como
hemos visto, el estudio de los problemas de elasticidad requiere la solu-
Las tres raíces de esta ecuación son ción de ciertas ecuaciones en derivadas parciales, sometidas a unas deter-
2 minadas condiciones de contorno, las cuales sólo en los casos de contornos
.
ct 2 = 4, ct 2 = 2 + --, muy sencillos son resolubles de manera rigurosa.
v'3 A menudo es imposible obtener la solución exacta siendo necesario
Las cantidades r y b2, dadas por las ecuaciones (e) y (j), son números hacer uso de métodos aproximados, uno de los cuales, el método numérico
positivos y como se observará, solamente la última de las tres raíces satis- basado en la sustitución de las ecuaciones en derivadas parciales por las
face esas condiciones. En consecuencia correspondientes en diferencias finitas, va a ser tratado aquí '.
Ca = aC2 = O,91D4 .J? Si una. función continua y(x) viene dada por el conjunto de valores
Yo, Yl, Y2, ••. , correspondientes a x = 0, x = 6, x = 20, ... , podemos ob-
tener, restando, las dijerendas primeras (¿l¡y)%-O = Yl -' Yo, (LltY)%_~ =
Tomando como caso extremo 'ji = t, la ecuación (m) se transforma en = Y2 - y¡, (LI¡Y)Z-2h = Ya - Y2' •.• , las cuales, divididas por el inter-
valo 6 nos dan los valores aproximados de la derivada primera de y(x)
en los puntos correspondientes:
llegándose entonces a
dY)
( dx "" YI - Yo, (1)
_o o
. Ca = 0,9553 @.
'\j"p
1 Parece ser que C. Runge fue el primero en aplicar las ecuacIOnes en difer~nclas tinitas
En ambos casos, lá· velocidad de las ondas superficiales es ligeramente ~II elasticidad, al emplear este método para la resolución de problemas de torsión (Z. Math.
Phys., vol. 56, pág. 225, 1908). Rungo reuuce el problema a la solución de un sistema de ecua-
inferior a la de las ondas de distorsión propagadas a través del cuerpo. ciones algebraicas lineales. L. F. Richardson, Tram. Roy. Soco (London), s~rie A, vol. 210,
Conocida a, se puede calcular fácilmente la relación entre las amplitudes pág. 307, 1910, aplicó un proceso iterativo a In resolución de esas ecuaciones algebraicas ob-
de los desplazamientos horizontales y verticales que ocurren en la super- teniendo así los valores aproximados de las tensiones, qu~ producen en las presas las fUCI7.RS
gravitatorios y la presión del agua. Otro proceso iterativo, así como la prueba de su convergen-
ficie. Para 'ji = .1/4- esta relación cs 0,681. Podemos asimismo obtener la cia, hu sido dado por H. Liebmnnn, Sitzber. Bayer, A~ad. W'·S$., 1918, pág. 385. La conver-
velocidad de propagación de las ondas superficiales, partiendo de la con- gencia de este proceso de iteración en el caso de ecuuciones armónicas y biarmónicas ha sido
sideración de las vibraciones de un cuerpo limitado por dos planos pa- estudiada por F. Wolf, Z. allgew. Math. Mech., vol. 6, pág. 118, 1926, y R. Courant, Z. angew.
Malh. Mech., vol. 6, pág. 322. El método de la~ diferencias finitas fue aplicado con éxito en
ralelos' . el estudio de las placas por H. Mareus, A,mierter Beton, 1919, pág. 107; H. Heneky, Z. angp.w.
Ma/h. Mech., vol. 1, pág. 81, 1921, y vol. 2, pág. 58, 1922. Modernamente R. V. Sout!lwell
I Véase H. Lanib, Proc. Roy. Soco (Londoll), serie A, vol. 93, pág. 114, 1917. Véuse también
y su escuela han hecho amplio uso del método. Véase R. V. ·Southwcll, Relaxa/ion Methods.
S. Timoshenko, Phi/o Mag•• vol. 43, . pág. 125, 1922. vols. r, II y lIr. . . ..
504 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 505
Partiendo de las diferencias primeras, las diferencias segundas se calculan en la que tf es la función de tensión, que debe ser constante a lo largo del
de la siguiente manera contorno de la sección transversal, O el ángulo de torsión por unidad de
longitud de la barra y G el módulo· de rigidez: Empleando ahora las fór-
(6 aY)=-5 = (AIY)=-1 - (61y)._o = Y2 - 2Y1 Yo + mulas (3) podemos transformar la ecuación anterior en la ecuación en
y a partir de ellas, se obtienen los valores aproximados de las derivadas diferencias finitas
segundas 1
~ (</>I + <Pz + cf>3 + 94 - 490) = -2GO (5)
d2 1!) ,.,. (62Y).~8 = Ya - 2111 + Yo (2)
( dXl :_1 a2 62 De esta forma todo problema torsional se reduce a la obtención de un
conjunto de valores numéricos de la función de tensión tf que se man-
Si tenemos una función continua de dos variables w(x, y), podemos tengan constantes en el contorno de la sección transversal y que en los
utiliza. para el cálculo aproximado de sus derivadas parciales, ecuaciones nudos interiores de la cuadrícula satisfagan la ecuación (5).
semejantes a las (1) y (2)_ Supongamos, por ejemplo, que el contorno de Vamos a considerar ahora el caso sencillo de una barra de sección
nuestro problema es rectangular (fig. 1) Y que se conocen los valores nu- cuadrada a X a (fil{. 2), en la que usamos una red cuadrada cuya celda
tiene la dimensión b ~ 1/4a. Por razones de simetría se ve que en el estudio
de este caso, basta con considerar la parte de la sección que se muestra
y
a
rayada en la figura. Determinados, en efecto, los valores o. p, " de la
r
ró.J "
función rp en los puntos que se señalan en la figura, conoceremos tf en todo
nudo de la red. En cuanto al valor de rp en el contorno, podemos suponer
~ l= que es cero. El problema, pues, se reduce al cálculo de o, fJ y y, para lo
~RP que escribimos tres ecuaciones del tipo. de la (5), que teniendo en cuenta
2 a v
r las condi<:iol1cb de simetría, nos quedan
l1 lt
L
O
2fJ - 4a = -2G80 2
1> 2a: + "( - 4(3 = -2GW
4f3 - 4"( = -2G805'
Fw. 1 FIO. 2
y que rc~udt"s nos dan
a = 1,375GOo2, f3 = 1,750GO{j2,
méricos de la función zv en los nudos de la cuadrícula, cuya celda elemental
tiene la dimensión o. Podemos entonces determinar los valores aproxima- La función de tensión viene, pues, determinada por el valor cero en el con-
dos de las derivadas parciales de w en O mediante las siguientes expresiones: torno y por los valores que acabamos de obtener en los nudos ·interiores.
Para calcular las derivadas parciales de la función de tensión, imagi-
OW Wl - 'tOo OW Wz - Wo nemos una superficie continua que tenga por ordenadas en los nudos de
-~-, ay ,.,. ---0-
o.c /l (3) la red los valores numéricos calculados. La pendiente en un punto cual-
él 2w WI - 2wo + W3 a2w W2 - 2wo + w( quiera de esta superficie, nos dará el valor correspondiente (aproximado)
élx2 ,.,. 02 ' ay2 "" /l2 de la tensión de torsión, dándose el valor máximo de la misma en el punto
De forma similar, obtenemos las expresiones aproximadas de las derivadas medio de los lados del cuadrado. Para hacernos una idea de la exactitud
parciales de orden superior. Obtenidas esas expresiones, podemos trans- que se consigue al aplicar una red de tan pocos nudos, calculemos la ten-
formar fácilmente las ecuaciones en diferencias finitas. Consideremos, para sión de_ torsión en el punto O de la figura 2. Para obtenerla, busquemos
empezar, el caso de la torsión de barras prismáticas._ El problema, c?mo una curva continua cuyas ordenadas en los nudos del eje x sean los valo-
sabemos 1, se red'lt e a la integración de la ecuación en derivadas parCiales res P, ", IJ. Estos valores, divididos por 1/40802, aparecen en la segunda
línea de la tabla adjunta, dándose en las restantes líneas de la misma las
(4) sucesivas diferencias finitas 1 •
1 Consideramos aquí las ,hferencias (que son usadas en la fórmula de Newton) cornil ,lo
, Véase l. ecuación (142), § 90. fmidas todos ellns en un extremo del conjunto de cAnudades: . ... ..
TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUAC10NES EN DIFERENCIAS FINITAS 507
506
entonces obtenerse aplicando la fÓTmllhl de tensión 1>, introducido por el uso de diferencias finitas, en lugar de
L a curva que b uscamos p uede ecuaciones diferenciales, es proporcional al cuadrado de la dimensión de la
dl" interpolación de N ewton: '.
celda elemental de la red, supuesto que ésta sea pequeña. Si designamos
x= O o 20 30 4J
r~
'"'"
.p= O 7 9 7 O
a: Ip r
A, = 7 2 -2 -7 0:1 la.t
Ll. = -5 -4- -5 o "\,?í
1.13 = 1 -1
A - -2
~ ~ ) ~
ep= epo + x-t + x(;¡; - o) 1- 2' 03 + x(x - o)(x - 2<1 1· 2', 363 FICl.3
Se puede demostrar~. en efecto, que el error de la derIvada de la func10n I En el trabajo de G. Runge, citado anteriornwnt.., se liega a Un. sistema de 42 ecuaciones,
.. . rf demente que pudo ser resucito sin gran dificultad gracias a la sencillez de Ji!s ecuaciones.
1 El cálculo de' ~ns d.rivadWas dGe lBl,:aklcllrv~:e ~~r:~:~~~: ~:r:;:~ ~¡":b:";elaxal¡oll , Como vimos en el § 92, la solución de los problemas tarsionales: Se reduce a la obtención
usando los tablas realtzadas por . . le ey. as de una función '/> que lome unos determinados valores en, el i:?piO:fl.1.9. y que satisfaga es.
Methods ¡PI Theoretical Phys,'s, de R. '(o Sothwell. ecuación .
• Véase L. F. Richard,on, loco "l.
508 'rEORIA Dll I.A ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINI1'AS 509
Como se deduce de (5) la ecuación en diferencias finitas corrl!spondientes es Realizando cálculos semejantes pura todos los nudos interiores, obtenemos
las primeras aproximaciones dadas por los segundos números de las colum-
(7)
nas de la figura, pudiendo obtenerse a partir de ellas las segundas aproxi-
ecuación que muestra que el valor de la función '" en cualquier nudo O maciones: '
de la red cuadrada, es igual a la media aritmética de los valores de la fun-
ción en los cuatro nudos adyacentes. Este hecho va a permitirnos abordar rj>,," =! (800 + 1000 + 988 + 806) = 899
,p,," = ! (899 + 1200 + 899 + 850)
............... = 962
f(J()() 1200 ¡tXJO
llJO()
!l2S
IQO(1
9,18
{Q(1(J
92$ .,, ,, ¡"
800
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!I(}(J
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899
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75Q 800 75Q
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6'00 600
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ctz Óz Cz
400
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'/
,, //
,,
'//
/
6'00 800 éOO
/
" v/ "
FIG.4
FIG. 5
El segundo miembro de esta ecuación puede ser' evaluado, para todo nudo por las fuerzas concentradas ql;Z, aplicadas en los nudos, podemos escribir
interior, partiendo de los valores supuestos ¡f; ° para la función rp. De esta ahora la e~uación de equilibrio de un nudo O de la siguiente forma:
forma, el problema de calcular las correcciones 1f' se reduce a la solución
de un sistema de ecuaciones semejantes al (5), que puede ser atacado por
q8 2 + S(Wl + Wz + Wa + W4 - 4wo) = O (11)
el método iterativo estudiado. Esta es la ecuación en diferencias finitas que corresponde a la ecuaClOn
diferencial (9), debiendo obtenerse para resolver el problema un conjunto
3. Método de relajación. Un método útil para tratar ecuaciones tal de valores, que satisfaga la ecuación (11) en todos los nudos.
en diferencias, tales como las (8'), ha sido desarrollado por R. V. Southwell Comenzamos para ello con un conjunto cualesquiera de valores Wo°,
quien lo ha nombrado método de relajación. Southwell comienza conside- W10, wao, W3~, W40, ••• , de la flecha. Sustituyéndolos en las ecuaciones (11)
rando la analogía de la membrana de Prandtl 2 , la cual se basa ,en el hecho encontraremos, generalmente, que las condiciones de equilibrio no son
de que la ecuación diferencial (4), de los problemas de torsión, es de satisfechas, de forma que para mantener las flechas supuestas en la red,
igual forma que la necesitamos introducir soportes en sus nudos.
Las cantidades tales como:
(9)
Ro = qo2 + S(w10 + W20 + wao + W40 - 4woO) (12)
ecuaClOn ésta que rige la deformación de una membrana sometida a una que representan los esfuerzos a los que son sometidos los soportes, son
tracción uniforme en su borde y cargada lateralmente. En esta ecuación w llamados fuerzas residuales o residuos. Imaginemos ahora que los soportes
es la flecha de la membrana respecto al plano horizontal, que es su posi- son del tipo tornillo, de forma que todo nudo pueda ser desplazado a
ción inicial, q el valor de la carga repartida y S la tracción constante por voluntad. Desplazando entonces convenientemente los soportes podremos
unidad de longitud de contorno de la membrana. El problema es encon- conseguir finalmente que las fuerzas residuales (12) se anulen. Tales des-
trar la flecha w función de x e y, que satisfaga la ecuación (9) en todo plazamientos representarán, por tanto, las correcciones a añadir a las fle-
punto de la membrana y se anule en el contorno. cbas Wo°, W10, W20, ••• , supuestas inicialmente, para obtener los verdaderos
Deduzcamos ahora la ecuación en diferencias finitªs correspondiente. valores de w.
Con ese fin sustituyamos la membrana por la cuadrícula de hilos unifor- El procedimiento utilizado por Southwell para realizar el desplaza-
memente estirados de la figura 1. Considerando el punto O y llamando Sá miento de los soportes, es análogo al empleado por Calisev 1 al manejar
, Este método ~implifica los cálculus, puestu que en él se trata cun números relativamentl' , K. A. ealisev, Telmicki List, 1922 y 1923, Zagreb. Traducci6n alemana en Pubs. 111terl/
pequeños.. . ~ss(¡c. Bridge and Slmctural Engilleering, vol. 4, pág. 199, 1936. Un méloúo semejante h.,
• Véase el § 93. s,do desarrollado por l'Iardy Cross.
512 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN D1FF.RENCIAS FINITAS 513
estructuras articuladas altamente indeterminadas desde el punto de vIsta dente exactitud. Los valores correspondientes de -ro se obtendrán entonces
estático. Se comienzu desplazando uno de los soportes, el 0, por ejem- mediante la ecuación (14).
plo (fig. 6), dejando a los otros inmóviles. Ecuaciones tales como la (11) Con el fin de ilustrar el método, consideremos el problema, ya estu-
muestran que un desplazamiento hacia abajo 'U\¡ , provoca la aparición de diado en el § 1 del apéndice, de la torsión ·de tina barra de sección cuadrada.
una fuerza vertical -4SUlJ' sobre el nudo O, indicando el signo menos La ecuación diferencial correspondiente a este caso es la (4) I~ cual es
que la fuerza es hacia arriba. Ajustando el desplazamiento de forma tal que expresada en forma adimensional poniendo
de la cuadrícula tensada. :~
Con el fin de simplificar los cálculos que se presentan en la aplicación -1 -);
-2 -~
del método, que acaba de ser descrito, comenzaremos por poner la ecua- :~ :~'?5..
-/2 -
ción (11) en forma adimensional sustituyendo 900 -t
o2 :~ :j:
q
w=-.p (14) -J
-;1 -
-~-~
-~
S
:~:l$ :¡:~
o
10 que permite escribir: -/2 -
900 -1
estos valores junto con el valor cero del contorno en el primer miembro los cuales se aproximan mucho a los resultados exactos obtenidos anterior-
dc la ecuación (18), calculamos las fuerzas residuales para todos los nudos. mente (véase el § 1 del apéndice).
Estas fuerzas están inscritas a la derecha y arriba de cada nudo. El valor Vemos que el método de Southwell da una representación física del
máximo de las mismas, 200, se da en el centro de la red, punto éste a proceso iterativo de resolución de las ecu~ciones (15), lo que puede ayudar
partir del cual comenzamos a aplicar el método de relajación. Corrigiendo a elegir correctamente el orden en que deben ser abordados los nudos de
el valor inicial 1100 mediante la adición del número SO, el cual está escrito la red.
encima del 1100, eliminamos completamente la fuerza residual en el centro. Para obtener una mayor aproximación debemos pasar a una red más
Es por eso que tachamos el número 200 poniendo el cero en su lugar. fina. Usando el método ilustrado en la figura S, obtenemos los valores
Hecho esto tendremos que cambiar los residuos de los nudos adyacentes.
Añadimos para ello el número SO a cada uno de estos residuos y escribi-
iniciales de 1p para una red cuadrada de dimensión {; = fa. Aplicando
mos los nuevos valores, - SO, de las fuerzas residuales encima de los valo- a estos valores el proceso norma). de relajación, podremos encontrar los
res iniciales en la forma que se indica en la figura. Con esto finalizan las valores de 1p para una red más fina y determinar asi, con mayor precisión,
operaciones relativas al punto central de la red. Tenemos ahora cuatro
nudos, simétricamente situad,os, con residuos iguales a - SO Y es conve-
el valor de la tensión máxima. Con los valores obtenidos para {; = ~ a
niente corregirlos simultáneamente. Apliquemos para ello a todos estos y O =. t a puede conseguirse, extrapoland~ en la forma explicada en el
puntos una misma corrección de valor -12 1 • Estas correcciones que están
§ 1 del apéndice, una mayor aproximación.
escritas encima de los valores iniciales 900 alteran en ·_·12 X 4 = -43
los residuos previos de valor - SO obteniéndose como se expresa en la
4. Redes triangulares y exagonales. La .red que hemos utilizado
figura fuerzas residu~les iguales a ~2. Al mismo tiempo, fuerzas de valor
en el estudio precedente ha sido una cuadiícula. En ciertos casos, sin em-
-12 se sumarán a los residuos de los nudos adyacentes. De esta forma,
bargo, es preferible usar redes triangulares o exagonales (figs. 8a y 8b).
como es fácil ver, el valor -12 X 4 = -48 debe ser añadido al residuo
Considerando la red triangular de la figura 8a vemos que la carga repar-
del centro y el -12 X 2 = -24 al de los nudos más próximos a los vér-
tida en el interior del exágono, representado por la línea a trazos, estará
tices de la figura. Con esto acabamos la primera etapa de nuestro cálculo.
aplicada en el nudo O. Si 5 es la dimensión de la malla, el lado del exágono
En la segunda volvemos a empezar con el punto centra! corrigiendo con
valdrá b/-v'3 y su área V3 (;2/2, de forma que la carga aplicada a cada
el valor -12, lo que anula el residuo de ese punto y añade -12 al de los
nudo será V3 o2q/2. Esta carga será equilibrada por las fuerzas ejercidas
puntos adyacentes. Aplicando ahora una corrección igual a··· 6 a los puntos
por los hilos 0- 1, 0-2, ... , 0- 6. Para que la red de hilos esté en
vecinos a los vértices, eliminamos sus residuos y alteramos en el valor - 26
correspondencia con la membrana uniformemente tensada, la tracción que
los de los cuatro nudos simétricos. El gráfico muestra tres etapas más del
cálculo lo que supone una mayor reducción de los residuos. Los valores
de ./fI se obtendrán añadiendo a los valores iniciales todas las correccione~
mtroducidas sucesivamente. Resulta, por tanto,
700 - 6 - 3 - 1 = 688,5, 900 - ]2 - ü - 3 - 2 - 1 = 876,
+
1100 50 - 12 - 6 - 3 - 2 = 1127
La ecuación (17) 110S da entonces los valores siguientes para 1>:
GSR,;'
50IJ ('OiP
T 1 377GOo' = O,0861GOa2
=,
+ -2a CJ._
J
ó
W¡ + w~ + . . . + Wd - Liw"
J,'{
= o (19)
(20)
~----~-a--~----~ ~-------a--------~
FIC.9 FIO.IO
la ecuación en diferencias finitas quedará expresada de la siguiente forma:
fl + "'~ + . . . + fr. - (¡fu +1= O (21) de tensión en todos los nudos adyacentes. 1, 2, .... 6. serán cero, por estar
esos puntos en el contorno. La ecuación en diferencias finitas para el
Una ecuación tal puede ser descrita para cada UIlO de los nudos interiores
punto O se obtiene entonces, a partir de la ecuación (19) sustituyendo Wo
y su solución puede obtenerse bien por el método de iteración, bien por
el de relajación. por rPo y q/S por 2GIJ lo que da:
En el caso de una red exagonal (fjg. 8h). la carga repartida sobre el GIJa 2
triángulo equilátero representado por la línea a trazos estará aplicada en 6<1>0 = 3GOó· = 3
el nudo O. Llamando ó a la longitud del lado de la malla exagonal, vemos
de donde .se deduce:
que el lado del triángulo equilátero es ~v'3 y su área 3v'3 o~/4. La carga
. correspondiente, 30 qiS2/4, será equilibrada por las tensiones de los tres
(23)
hilos 0-1. 0-2. 0-3. 'Para que la red de hilos corresponda a la membraml·
tensada igualamos la tensión de los hilos a S,I...(3. La ecuación de equili-
. brio será entpnces: Pasemos ahorll a una red más fina. Para obtener valores iniciales con-
sideremos el punto a. centro del triángulo 1-2-0. Supongamos que este
Wl + W2 + Wa - 3w o • So..j3 + 3 va qoZ = O punto está unido a los nudos O. 1 y 2. mediante los tres hilos a-O. a-t, a-2
6 4 de iongitud ó/V3. Considerando el punto a como lIn nudo de una red
o exagonal (fig. 8b). sustituyendo <5 por b/...;f, q/S por 2GO en la ecuación (22)
. 3 q y tomando w, = w. = O, W3 = <Po. Ub = </Ja. se obtiene:
Wl + W2: W3 - 3wo + 4" S li 2 = O (22)
<P. =
1(
3 <Po + GOfj~)
-2- =
GOa 2
27 (24)
Para obtener las ecuaciones en diferencias finitas correspondientes a los
problemas de torsión. tenemos que sustituir q/S por 2GIJ en las ecuacio- Estos mismos valores pueden ser tomados para la función de tensión en
nes (19) y (22). . .... los puntos h, c. d. e y f de la figura 9. En lo que se refiere a los puntos
Consideremos. a título de ejemplo. la torsión de una barra cuya sec- k. 1, m. usaremos una vez más la ecuación (22). que para este caso en el
ción es un triángulo equilátero 1 (fig. 9). La solución exacta de este pro- que W¡ = W2 = Wa = O nos da:
blema ha sido obtenida en el § 92.
GOa 2
rpk = <P •• = <PI = - (23)
I Este ejemplo es estudiado con d~talle en d libro de Southwell, loe. dt. .. 54
518 TEORIA QE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 519
De esta forma tenemos los valores de 9> en ·todos los puntos señalados En el caso de la torsión, la ecuación (19) será sustituida por la
mediante pequeños círculos en la figura 10. En esta figura vemos, asi-
+ 3Go 81a
2
mismo, que de cada uno de los nudos a, e y e parten seis hilos como se ePI + ep2 + ... + tPe - 6<1>0 = O
exige que ocurra en una red triangular (fig. 8a). En los nudos restantes,
sin embargo, el número de hilos es inferior a seis. Con el fin de satisfacer que introduciendo la notación:
las condicione~_ de red triangular en todos los puntos interiores,. operamos
en la forma que indican las líneas a trazos de la parte superior de la figu- o (27)
ra 10. De esta forma, la sección recta se encontrará dividida en triángulos
queda en forma puramente numérica:
o
.pI + .p2 + . . . +.p6 - G.po + 18 = O (28)
] ,os valores iniciales de V', calculados mediante la ecuación (27), están
inscritos a la izquierda de los nudos en la figura 1lb. Sustituyendo estos
,alores en el primer miembro de (28) encontramos los residuos corres-
pondientes:
(29)
Los residuos así calculados, están escritos a la derecha de cada nudo en
la figura l1b. Para la eliminación de los mismos comenzamos por el
punto a. Dando a este punto un desplazamiento "1p,/ = -2 añadimos
(a) fó) (e) -1-/ .¡.f .¡.¡ ·ff .¡.I
FIG. 11
de donde sustituyendo rPa, rPb> t/>u por sus valores anteriormente calcula- [véase la ecuación (29)] + 12 al residuo en a y - 2 a los de todos los puntos
dos, se obtiene: adyacentes. De esta forma el residuo en a ha sido eliminado, mientras
(26) que el correspondiente al punto b toma el valor -2. Los residuos en el
contorno carecen de importancia puesto que en los puntos del mismo
De igual mallera podemos calcular ,p2 y rPa. En la figura l1a I han sido tenemos soportes fijos. Considerando ahora 'el punto e e introduciendo
inscritos todos, los valores a la izquierda del nudo correspondiente. Tales en él un desplazamiento +2 anulamos su residuo y añadimos +2 a '1m,
cantidades serán utilizadas ahora como valores iniciales par~ el proceso residuos de los puntos b, d Y e. El resto de los mi~mos será anulado: im~
de relajación. '
" El núm.ro 486 ha SIdo mtroduc.do en esta fónnu]a con el fm de trabajar solamente
, En la figum ha s.do omItido el factor COa'. con números enteros. .' , ~ ..
520 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 521
poniendo un desplazamiento -2 al punto f. 'Sumando a los valores ini- tul que anule la resultante, obtenemos un conjunto de fuerzas residuales
ciales de 'P todas las corrccciones registradas, obtenemos los valores correc- que se anulan mutuamente, siendo así más fácil su eliminación mediimte
tos de 'P, y empleando la ecuación (27) los de <p. Tales valores que dividi- el procedimiento normal de relajación punto por punto. En las aplica-
dos por GOa2 aparecen en la figura 11c coinciden con los obtenidos en ciones prácticas es ventajoso alternar el' proceso de relajación en bloque
la solución rigurosa (g) del § 92. con el de relajación punto por punto. Supongamos, por ejemplo, que la
zona rayada de la figura 13 representa una porción de una red triangular.
5. Relajación en grupo y en bloque. En el proceso seguido hasta
aquí, para al1u1ar los residuos, se trabaja con un solo nudo, considerándose
fijos al resto. A veces, sin embargo, es preferible desplazar un grupo de
,\ •
nudos simultáneamente. Supongamos, por ejemplo, que la figura 12 re-
presenta una porción de cuadricula y que damos un desplazamiento uni-
tario a todos los puntos de la zona rayada mientras el resto de los nudos .2 -4.ll "'
permanecen fijos. Podemos imaginar que todos los nudos de la zona rayada FIG. 13.
están unidos a una placa rígida de masa nula, la cual es desplazada una
longitud unidad según su propia normal. De las consideraciones sobre el' El número n de hilos que une esta porción al resto de la red es 16 y la
equilibrio (fig. 6) se deduce que los desplazamientos descritos modifica- resultante de los residuos escritos en la figura es 8,8. El desplazamiento
rán los residuos de los nudos, extremos de los hilos que unen la placa en bloque apropiado sería, en consecuencia, 8,8/16 = 0,55. Después de
rayada con el resto de la cuadrícula. Si O y 1 representan los nudos extre- aplícar ese desplazamiento la resultante de las fuerzas residuales que actúan
... mos de un hilo, la contribución a sus propios residuos de los desplaza- sobre la zona rayada de la red se anula y la liquidación de los residuos
. mientos Wo y Wl son: se conseguirá más fácilmente mediante el procedimiento de relajación
punto por punto.
R o = -S8~ y En lugar de dar a la placa ficticia un desplazamiento, perpendicular
Il a su plano y constante para todos sus nudos, se la puede girar alrededor
Si mantenemos fijo ahora el punto 1 y al O le damos un desplazamiento Wo, de un eje situado en su plano. Los desplazamientos correspondientes de
las fuerzas residuales se incrementarán en: los nudos y la modificación resultante de los residuos puede calcularse
fácilmente: De esta forma podemos anular, no solamente la resultante de
ARo = -BAwo, las fuerzas residuales sino también el momento resultante respecto a cual-
quier eje elegido en el plano de la placa.
Introduciendo, conforme a nuestra notación anterior, las cantidades adi-
. mensionales: Podemos igualmente prescindir de la noción de placa ficticia y asignar
desplazamientos arbitrarios a cualquier grupo de nudos. Si tenemos alguna
.R qll2
gó 2 = T, w=-.p S
idea sobre la forma de la superficie de deformación de la red, podremos'
:¡
elegir desplazamientos de grupo que aceleren el proceso de anulación.
obtenemos: :1
-A.po, 6. Torsión de barras de sección Itlwtiplemente conexa. Como '1
,1
ya hemos demostrado I , cuando las barras son de sección múltiplemente co- "1
¡¡
Vemos entonces que dando un incremento unidad a 'lb se produce un nexa la función de tensión ,¡, aparte de satisfacer la ecuación (4) debe
cambio de los residuos igual a: JI
verificar a lo largo de cada contorno interior la relación:
Al'O? -1,
Estos cambios' son representados en la figura. Los residuos de los otros
-J orfo ds = 2GM
on' (30)
!
,j
j
¡
nudos de la red no varían. Si n es el número de hilos que unen la placa
móvil al resto de la red el desplazamiento unidad de aquélla, tiene por en la que A es la superficie del agujero.
efecto añadir la cantidad -n a la resultante de las fuerzas residuales ac-
tuantes sobre la porción rayada de la red. Eligiendo un desplazamiento , Véase el § 101,.
I¡
!
.¡';
.522 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 523
En la analogía de la membrana la ecuación correspondiente es: es la representada en la figura 14. Tomando la cuadrícula abierta repre-
sentada en la figura y teniendo en cuenta las condiciones de simetría,
-S j -ds
fJW
éJn
= qA (31) observamos que basta con determinar los valores de la función de tensión
en a, b, e, d ye. Las relaciones necesarias se obtendrán utilizando la ecua-
que significa que la carga, uniformemente repartida sobre la .superficie ción (32) y las cuatro ecuaciones (11), correspondientes a los nudos a,
del agujero 1, es equilibrada por las tracciones existentes en la membrana. b, e y d. Sustituyendo q/S por 2G8 y observa11do que n = 20 y A =. 16,)2
Aplicando ahora las ecuaciones en diferencias finitas y considerando como estas ecuaciones toman la siguiente forma:
red unu cuudrículu, pondremos Sli como tensión de los hilos y llamaremos
«lo a la flecha del contorno. y Wl a la del nudo i, adyacente al agujero. 200 -:- 8b - 8e - 4rl = 10 . 2GfJó2
Tendremos antonces, en lugar de la ecuación (31), la expresión: 2b - 4a = _:2(/O(¡2
a - tb + +
r e= -2mJ52
So L (Wi: wo) + qA = O
b - 4c + (1
2~ - 4d
+
u =
e= +
-2G05 2
-2G00 2
e = 1170. 2G062
488
en la que n es el número de hilos que unen la superficie del orificio al así como los valores a, b, e y d.
re¡;to de la red. La ecuación (11) no es más que un caso particular de la Estos valores, obtenidos con una red abierta, no nos dan las tensio-
ecuación (32) en la que n = 4. nes con suficiente exactitud, siendo necesario pasar a una red más fina. El
resultado de tales· cálculos puede encontrarse en la obra de South\velI 1.
V
de las diferencias de longitud de [os hilos es preciso introducir ciertas
modificaciones en las ecuaciones (11) y (19). Vamos a estudiar ahora tales
modificaciones centrándonos en el ejemplo representado en la figura 15.
ve
F e el e
Una pieza plana en la que existen dos entalladuras semicirculares es some-
tida a esfuerzos de tracción, repartidos uniformemente en sus extremos.
/ b Supongamos que mediante el método fotoeléctrico, expuesto en el ca-
pítulo 5, se haya determinado 'en 'todos los puntos' la diferencia de las
F,o. H tensiones principales. Nuestro problema ahora es determinar la suma de
las tensiones principales, la cual como ya hemos indicado (§ 2 del apéndice)
Podemos escribir tantas ecuaciones (32) como agujeros existan en la debe satisfacer la ecuación diferencial (6). En los puntos del contorno se
sección transversal. Estas ecuaciones junto con las (11), escritas para cllda conoce una de las tensiones principales, por lo quc usando 16S resultados
nudo de la cuedrícula, bastan para determinar las flechas de todos los de los ensayos fotoelásticos, podremos determinar la otra tensíón prin-
nudos de la red y del contorno de los agujeros. cipal y la suma de las mismas. Nuestro problema, por tanto, es, resolver
Examinemos, por ejemplo, el caso de un tubo cuadrado cuya sección la ecuación diferencial (6) conociendo los valores' d~ 1> ·en. el contorno.
I R. V. Southwelt, Rela.wtion Methods tIl Thcorctical Phys;cs, póg .. 60: Oxrórd"Unlverslt)
, gl orIfICIO es representndo por una placa absolutamente ríguJa de pl!S() nulo, que se
puede de.phlz"r sellún In perpendIcular al plano inIcIal de la membrana tensada. Prcss, Nueva York, 1946. .
524 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFllRIlNcrAs FINITAS 525
Aplicando el método de las diferencias finitas auna red de malla cuadrad.l. Aplicando esta forma operatoria en todos los puntos pr.óximos al contorno
observamos que a causa de la simetría de la pieza basta con conside"nlr y el proceso normal de relajación en el resto de los Iludas, se llega a '1m;
una cuarta parte de la misma. Esta porción junto con los valores de ," valores de ~ expresados en la figuni 16 1,
FIG. 15
q!' (m + 1~ + r + 8)
, IJ(l()
+ .s [~...! +~ (~
J800 JSOO ;]500 2600 2~
4/00 '2200
700 m n
+ W3r + W48 - Wo + ! + ! + l.)J" =
mn r s
O (33)
4100
j
JflO(} 32(J(J 2/00 1000 Para m = 11 = r = s = 1, esta ecuación coincide con. la (11), deducidll
para un punto regular. Mediante la ecuación (33) se puede, en cada caso,
F·lG. 16
establecer el procedimiento conveniente semejante al mostrado en la figu-
Cm "'" 0,4 en este caso). Esta circunstancia deberá ser tenida en cuenta ra 17 para ponderar los residuos. Podemos establecer igualmente una ecua-
al establecer la ecuación de equilibrio del punto A, la cual será: ción análoga para el caso de una red triangular.
Con las modificaciones que acabamos de estudiar, el procedimiento
So (<p n - <p¡ + <Po - <P2 -+- </>0 - </>a + .'to_ - <P!) = O de relajación se aplica a los casos en los que existen puntos irregula¡'es
o o o mo cerca del contorno.
o:
+ tP2", + epa + -m14>4 ( + _.1) <Pa 8. Ecuación biarmónica. Hemos visto (§ 16) que en el caso de
</>1 - 3 = O problemas de elasticidad, bidimensionales, con fuerzas conocidas actuando
?n sobre el contorno y fuerzas másicas nulas, las tensiones vienen definida$
por una función de tensión rp que satisface la ecuación biarmónica:
Aplicando al punto A el procedimiento normal de relajación y dando
a ,po un incremento igual a la unidad, introduciremos, el) los residuos los
(34)
cambios que se muestran en la figura 17a. Este tipo de repartición debe
ser empleado para la anulación de los residuos en A. Si consideramos el
punto B, vemos que a él llegan dos hilos más cortos de 10 normal. Llamando I Este ejemplo ha Sido tratada por n. Weller y G. H. Shortley. véase J. Applied Mee/iame..
a sus longitudes mo y nb, vemos que la eliminación de los residuos en el 1939, pug. A·71. nado que los volares de '" en el contorno"" ,obtienen de ellsayas 'fot9c1ás-
tlCOS y son conocidos cun una preclsión pcqu(!ña. los v.dores en los puntos interioreS son düdo~.
punto B debe ser realizada según la forma ilustrada en la figura 17b. con sólo dos O tres cifras significativas. . ," '
,¡
,;26 TIlORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DlFIlRENCIAS FINITAS 527
las condiciones de contorno (20) del § 14, que en este caso son: De f()rma semejante tenemos:
IJ2q, . a2</1 - a4q, 1 .'
l ayZ - m ax ay = X ay' "" ~ (6cfJo - 4</>2 - 4,p~ + </17 + "'11)
(35) éJ4</1 1
m IJzq, _ 1 IJzcf> = y ax2 ay2 "" I4 [4,pQ - 2(</>1 + 4>2 + epa + "',) + cfJa + tPs + q,lO -/- </1121
ax2 éJx éJy .
Sustituyendo estas expresiones en (35), obtenemos la ecuación en dife-
Conociendo las fuerzas que actúan a lo largo de la periferia podemos rencias finitas buscada:
calcular cP en el contorno integrando l las ecuaciones (35). El problema
se reduce entonces a encontrar la función p que cumpla en todo punto 20,po - 8(epl + tjJ2 + </>a + <1>,) + 2(rP6 + rP8 + cfJIO + 1/>12)
interior al contorno la ecuación (34) y que tome (la función'" y sus deri- + .po + </17 + cf>9 + cf¡1l = O (36)
Esta ecuación debe ser satisfecha en todo nudo de la red interior al con-
7 torno de la placa. Para obtener los valores de la función de tensión en
el borde'" integramos las ecuaciones (35). Observando (fig. 20, § 15) que:
8 2 6 t .
l=cosa=..J!.
d
m = sen a = -dxfds
o ds
y
J
9 3 O 11 S las ecuaciones (35) tomarán la forma
vadas) en él ciertos valores prescritos. Usando el método de las diferen- de donde por integración se obtiene:
cias finitas tomemos una red cuadrada (fig. 18) Y transformemos la ex-
presión (34) en la ecuación correspondiente en diferencias finitas. Cono-
ciendo las dCTiyadas segundas:
- -a4> =
ax
J- Yds
(38)
-arf>
ay = f-Xds
Para determinar '" utilizamos la ecuación
éJrf> = IJrf>dx + IJ.pdy
as ax ds ay ds
que integrando por partes nos da:
Sustituyendo en esta ecuación los valores de las derivadas, dados por las
expresiones (37) y (38), se puede calcular el valor. en el contorno de. ~.
Es preciso advertir que el cálculo de las derivadas primeras (38), introducirá
dos constantes de integración A y B y que en la realizació¡] de la integral
que fjgura en la ecuación (39) aparecerá una tercc.ra constante C. La expre-
I Consld(!ramos aquí .solamente regiones simplemente conexas.
528 TllORIO\ DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE ~..As ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 529
slon final de rP contendrá, por tanto, una función lineal Ax "1,, By -1- C. que integrando nos' da:
Puesto que las componentes de la tensión vienen dados por las derivadas
segundas de 4>, esa función lineal no modifica su distribución, pudiéndose aeP = A =c
elegir arbitrariamente en consecuencia las constantes A, B Y C. ax ' '" = Ax + B, a<J¡
ay
e
donde A, B Y son constantes a lo largo del eje x, que como ya hemos
dicho pueden ser elegidas arbitrariamente. Nosotros supondremos qUl:
A = B = e = O. La función ~ se anula entonces, en aquella porción del
J 2
:v1
a8a
F10. 19
¡ I ¡¡
III ¡ ¡ ¡ ¡ ¡ 1 J J !P
O.7ZB f/,QB +J,IB '.fJ.5B
Partiendo de los valores de ,p y de ~us derivadas primeras en él con-
torno, podremos calcular aproximadamente los valores de ~ en los nudos 1/J3 -ME -O,72B 3 2 1
adyacentes al contorno, tales como los puntos A, e y E de la figura 19.
Teniendo, por ejemplo, los valores de rPB y de (oc/> laxB en B se obtiene:
t/16 -4.8B -a72E 6 oS 4-
Las constantes de integración vendrán detenninadas por las con,di- Para x = O,4a estos'valores deben coincidir' con los (e). Se tiene entonces
ciones de que en el punto x = O,4a, común a las dos partes de la arista infe- (\ = C2 = O y la función de tensión tomará la forma:
rior, los valores de <f¡ y o<f¡/íJx sean únicos. Tendremos, en consecuencia, qUl'
<p=_px
2
2
+a
de donde se deduce Para x = 0,4a su valor debe ser igual al dado por (d), de donde C = O,lpa2 ~
el = 1,6pa,
(8)
La función de tensión ,p desde x = O,4a a x = O,Sa, estará representada
por la parábola La función de tensión viene representada por una parábola que tiene al
'" = _2p;¡;2 + l,6pax - O,32pa 2 -(a) eje y como eje de simetría. Con esto se tern;lina el cálculo de los valores
en el contorno de ~ y de sus derivadas primeras, ya que los valores corres-
que para el vértice de la placa nos da: pondientes a la parte derecha del borde se obtendrán por simetría.
Poniendo
(b)
¡p = - O,4paz + O,18pa2 (d) de los valores asignados a Jos nudos interiores, adyacentes al contorno,
en la figura 20.
Considerando ahora la porción cargada del borde superior y observando Podemos ahora iniciar el cálculo de los valores de ~ en los nudos
que en ella ds = -dx e Y = - p, X = O, se obtiene de las ecuaciones (38) mteriores de la red. Abordando la resolución directa de las ecuaciones en
diferencias finitas, debemos escribir, habida cuenta de la 'simetría del pro-
'0</1 = -px + el blema, las ecuaciones (36) para los 15 puntos indicados en la figura 20.
éJx
0<[1 = e, , Este procedimiento de extrapolación utilizado 'en el artículo de Varvak es diferente 'del
éJy mdicado en la página 528.
532 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONF,S EN DI~'EIIENCIAS FINITAS 533
La resolución de estas ecuaciones da para +'los valores que figuran en variación de ,po en Una unidad. Cuando este método es aplicado a la placa
la tabla siguiente: cuadrada estudiada anteriormente, debe observarse que los valores de rP
- - -- a lo largo del contorno están sometidos. a las restricciones, que se siguen
1 2 J 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 de las condiciones de borde, lo que implica que las fuerzas residuales en
()
(f:r: v~ ~
(3,356 - 2·3,600
82
+ 3,356)B O,488pa
2
= -O 488
3662 ,P
+---I---:;c
FIG. 21
FIG.23
Para resolver ·Ias ecuaciones en diferencias finitas mediante el proceso
de iteración, tomemos ciertos valores iniciales arbitrarías rP ¡, rPz, ... , tP 15' El trabajo puede reducirse aún más, considerando igualmente el eje
Sustituyendo estos vulores en las ecuaciones (36) obtenemos las fuerzas horizontal de simetría de la placa rectangular. La. carga representada en
residuales correspondientes a todos los nudos interiores, los cuales pueden la figura 20 puede descomponerse en la forma que indica lu figura 23,
ser eliminados siguiendo el proceso de relajación. El tipo correcto de re- en una componente simétrica y otra ·antisimétrica; En cada uno de estos
. partición obtenido a partir de las ecuaciones (36) es representado en la casos bastará con calcular los valores numéricos de la función de tensión
figura 21, en la que se dan los cambios de los residuos causados por la en una cuarta parte de la plaq..
534 TIlORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONIlS EN DIFERENCIAS FINl'fAS 535
9. Torsión de árboles circulares de' diámetro variable. 1'.1 Consideremos, a titulo de ejemplo, el caso representado en la figura 25.
,estudio de este problema exige, como hemos visto en el § 104, encontnlr En la región en la que varía 'rápidamente el diámetro, tendremos una dis-
una funció~ de tensión que satisfaga la ecuación diferencial tribución tensional complicada, pero a suficiente distancia de la transición
una solución sencilla de Coulomb; nos dará una precisión suficiente y la
¡Pcp 3 iJq, iJ2cp (40)
or2 -;:ar + 8z' = O
distribución de tensiones será independiente de z. La ecuación (40) para
tales puntos toma la forma
en todo punto de la sección 'axial del árbol (fig. 24) Y que sea constantl' d2 cf> 3 de/> '
a lo largo del contorno de esa sección. dr 2 - r dr = O (42)
1 dcp
r 'Toe = - -
1'2 dr
= 4.Ar' 'l'rS =O
Comparando este resultado con la solución de Coulomb, tenemos:
l+-!!!'
2ro
So
ros
(1 _~)~
2ro a
+ So (1 + ~)W3 - Wo O
ro3 2To o
= a otro ~on la distancia radial To, R. V. Southwell y D. N, de G. Allen
han efectuado cálculos de este tipol,
3ó
Wl - 2wo + '!lIa - -
2To
(Wl -
,
Wa) =o I l'T/J<, Roy, SI)( (LrmdmIJ. s<'ru: Á. \(JI. l83, p¡ig> l2$·l,1+ \ <',N' t,lnlhlL'l1 el libro> <l.
'inuthwell Rela.tallan M,IIJads /11 T}¡,nrel¡col Ph}'rI($. púg 152
que coincide con la ecuación (45),
En el caso general, observando que la tensión de la membrana no de-
pende de z, obtenemos la ecuación
3ó
Wl + W¡ + Ws ,+ W4 - 4wo - -2
ro (Wl - Wa) =O (46)
la cual concuerda con la (41). Vemos, pues, que podemos calcular la fun-
ción de tensión como si se tratara de la deformación de una membrana
sometida a una tensión no uniforme, cuya deflexión en el contorno es el
valor constante M'¡2 yen puntos distantes de la transición el dado por (44).
,1
,1
F1G,26
1-
-S
- 3( 1 - -
ro
35)
2To
y
Indice de
. Rjgide2': en discos, 448 . energfa potencial como· base de la, 177 'Transición, concentración de tensiones ~n las
de flexión de las placas, 293. en esferas, 445, 459. Terremoto, ondas del, 499. zonas de:
módulo de, 30. en flujo estacionario de calor, 455, 470. Torbellino constante, 330. en enteUaduras de diámetro variable, 348.
torsional, 301. en placas, 442, 477. Torsión: e.n la flexión de placas, 168, 170.
Roseta, extensómetro, 42. en un sólido infinito, 476. árbol troncocónico en, 347. en In torsión de piezas prismáticas, 325, 337.
Rotación. componentes de, 260. debida a cambios de temperatura, 442. barras de sección transversal elíptica en, Transversales, ondas, 496, 497.
Rotura: . distribución axial simétrica, 382. 300. Traslación virtual, 179.
hipótesis relativas a lns condiciones de, 177. elipsoide de la, 250. centro de, 308, 375.- Tubos:
tensión en la, 177. en dirección radial, 80, 81. condiciones de contorno en, 297. de pared delgada, torsión de, 336.
distribución, 111. • cuerpo cilíndrico de sección tranversal en, sometidos a presión intema y externa, 84.
Saint-Venant: en la rotura, 177. 294. torsión de, 336.
principio de. 56, 178. eo término.q de coordenadas ortogonales de árbol.s:
problema de. 295, 356. curvilíneas, 224. de diámetro variable, 342, 534. Unidad de la solución, 272.
Scctnr' en un punto, 34, 247. huecos, 332.
tIIeular, problema tomional correspon- determinación, 170, 251. de barras prismáticas, 294, 504. Volar de franja, 163.
dIente a un, 316. en una biela de ojo, 1SO. curvas de transición en, 325,336. Variable compleja, funciones de, 210.
dt: .1111110: inicial, 94, 148, 274, 468. de diversas formas de sección tmnsversal \"elocidad: .
en la flexión, 438. ecuaciones generales para la determina- de circular, 285. de las onda~ superficiales, 502.
en la torsión, 433. ción, 468. elíptica, 300. de ondas:
Sene de Fourrier: en anillos, 94, 148. método semi inverso en, 295. de· dilatación, 496.
aplicación en los problemas de flexión, 363. en placas de cristal, 469. otras formas, 303, 316, 317, 323. de dispersión, 496.
curva de deflexlun representuda por, 184 local: perfil laminado, 324. de propagación de ondas en barras pris-
en problemas: en cavidad esférica, 399. rectangular, 310, 312. mática., 482.
bidimensionales, 70, 77. 145. en orificio circular, 107. desplazamientos en, 296. Vibraciones longitudinales de borras prismá-
de torsión. 313, 321. función de tensión, 298. ticas,480.
en zonas de transición:
Semicirculares, entalladuras, 116, 246,523. método aproximado en su investigación, Vigas:
en la flexión y la tensión, 168, 170.
Sismógrafo, 499. 318. carga concentrada sobre una, 125.
en la torsión, 274. .
Solución: de tubos de pared delgada, 336. curvatura (v. t. Curvatura de vigas), 67,
medida fotoelástica de las, 159.
general; de un sector de anillo de sección circular, 131, 133, 380.
norma 1 y tangencial, 23.
de problemas bidimensionales: 433. adicional, 131, 133 ..
plana, 32, 250. 277.
en coordenadas polares, 144. ejes ciUndricos en, 285. deflexión, 62, 66, 380.
ecuaciones de equilibrio para la, 43.
para una cuña, 151. líneas de tensión tangencial en, 307. distorsión de sus secciones transversales,
función de tensión, 48.
para los desplazamientos, 270. tensiones locales en las curvas de transi-· 62,380.
tensiones en un punto, 34.
unidad de la, 2.72. ción en, 273, 338. en T, anchura eficaz de las, 201.
principal, 35, 248.
Superficie: Torsiollal, rigidez, 30l. flexión (v. Flexián, de vigas).
determinación, 170,251.
de contacto, 4 t 4. Trab.yo virtual: tensiones tangenciales, 59, 68, 129, 360,
radial,80.
de curvaturas opuestas, 290. distribución de, tt 1. ap)¡cnción en los problemas de torsión. 361, 365, 368, 369, 371.
directriz, 250. residual, 470. 319.
neutra, 66. tangencial, 23. principio, 179. Y"ung, módulo de, 31.
Superposición, principio de, 271. componentes, 24.
distribución en vigas:
Temperatura, tensiones provocadas por: de diversas formas de sección:
la distribución no unifonne de la, 441. circular, 359.
l. fluctuación: e¡¡ptica, 361.
en cilindros, 457. rectangular, 362.
en placas, 442. vigas en 1, 379.
Tensión: de sección transversal rectangular, 74.
compnnentes de, 25, 80. efecto .n la flexión de vigas, 63, 133.
de barras prib'ffiáticns: líneas de, 307.
por fuerzas C<Jncentradas, 74.
por la fuerza de gravedad, 282.
máxima, 37, 252.
Tensional simétrica en el eje, distribución: ,¡
por tensiones distribuidas, 197. en cilindros circulares, 426.
unifomle, 281. en dos dimensiones; 83.
de cortadura, 25. en tres dimensiones, 382.
de origen télTIlico, 441. Teorema:
ecuaciones generales para, 463. de Castigliano, 191.
solución, 475. de reciprocidad, 274.
en bandns largas, 442, 44ó. Teoría de la energía en los materiales frági-
en cilindros, 450, 470. les, 189.