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s. TIMOSHENKO 'Y
J. N. GOOnffiR
Profesores de Ingeniería Mecánicu
de la Universidad de Stanford

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AP-/TA-
2.' EDICION EN ESPAii!OL: 1975

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1!k. Traducido por

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ALBERTO FUENTES PEREZ
Licenciado en Ciencias Físicas
Colaborador del Instituto
Eduardo Torroja

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de In Construcción y el Cemento
] eCe de la Sección de Física del
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de la Compañía General de
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Prólogo a la
Unica traducción autorizada al castellano de la obra en lengua inglesa The()ry
af ~lastl"city Copyright, 1934, by the Unitcd Engineering Trustees, lne. Copyright,
1951; by the McGraw-Hill Book Company, lnc. Nueva York.

El notable desarrollo y clasificación de la teoría de la elasticidad y de


sus aplicaciones, ocurrido desde que la primera edición fue escrit;¡, es
reflejado en las numerosas adiciones y enmiendas introducidas en la edición
presente. La estructura de la obra sigue siendo la misma en su mayor parte_
Las cuestiones referentes al método fotoelástico, problemas bidimen-
sionales en coordenadas curvilíneas y tensiones de origen térmico han sido
ampliadas y redactadas de nuevo, constituyendo ahora capítulos indepen-
dientes que presentan muchos métodos y soluciones que no se encontraban
1~¿:; en la edición anterior. Se ha añadido un apéndice en el que se expone el
método de las diferencias finitas y sus aplicaciones, incluyendo el método
I )K~: de relajación. Asimismo, en los otros capítulos, se han introducido nuevas

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preguntas que tratan sobre la teoría de la QrosetaJ), tensiones gravitato-
rias', prinGipio de Saint-Venant, componentes de la rotación, teorema
1':C de reciprocidad, carácter aproximado de las soluciones de los estados
tensionales planos, centro de torsión y centro de flexión, concentración

© Urmo, S. A. de Ediciones
J. de AJurlJguerrJ, 10 - BllbJo-9
Hecho el depósito que mJrt.IIJ ley
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de las tensiones de torsión en las zonas de transición, estudio aproximado
de secciones delgadas .sometidas a torsión y flexión y cilindro de sección
circular sometido en una banda de su superficie a la acción de una presión.
Pensando en los alumnos se han incluido al final de cada capítulo, desde
1968 ! el primero hasta el dedicado a la torsión, algunos problemas.
Impreso en Esp.1ii.l por: Agradecemos vivamente las numerosas sugerencias y consejos de los

I
Fotocomposlción:
Artes Gr,uicJs GrrJe/mo, S. A. le'ctores del libro.
Impresión:
Publidisn S, TIMOSHENKO
Prllltcd 1Il SpJIIl •i J.] N. GOODIER

Depóllto legJI: SE-1018-2009


I.S.B.N.978-84-314-0231-0
! PALO ALTO, CALIFORNIA
~ Febiero, 1951

I
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Prólogo a la primer

Durante los últimos años, la teoría de la elasticidad ha sido aplicada


a la resolución de numerosos problemas de ingeniería. E;xisten muchos
casos, en efecto, en los que, los métodos elementales de la resistencia de
materiales resultan inadecuados para obtener la distribución tensional,
que se produce en las estructur-as, debiendo hacerse uso de los métodos de
la teoría de la elasticidad. Este es el caso, por ejemplo, de las tensiones
locales que se producen en la pl'Oxirnidad de los puntos de aplicación de
las cargas" o de los soportes de las vigas, de la distribución tensional en
cuerpos cuyas. dimensiones son todas del mismo orden de magnitud, de
las tensiones en rodillos y en bolas de cojinetes. De igual forma, la teoría
elemental no permite estudiar el estado tensional existente en aquellas
zonas de vigas o ejes en las que la sección cambia bruscamente. Como se
sabe, los ángulos entrantes originan fuertes concentraciones de tensiones,
las cuales pueden causar fisuras, especialmente si la estructura sufre es-
fuerzos oscilantes. La mayoría de los casos de fractura que se dan en las
piezas de máquinas tienen ese origen.
En los últimos años, se ha avanzado considerablemente en la reso-
lución "de esos problemas, de importancia práctica tan notable. En ciertos
casos, en los que es difícil obtener la solución exacta, se ha hecho uso de
métodos aproximados. En otros, han sido empleados procedimientos ex-
perimentales. Uno de ellos es el método foto elástico, aplicable a problemas
bidimensionales. El equipo para ensayos fotoelástico puede encontrarse
":',' ' hoy en universidades y en muchos laboratorios de investigación indus-
trial. Los resultados de los ensayos foto elásticos ,han sido especialmente
útiles para el estudio de la concentración de tensiones en puntos de zonas
de variación rápida de la sección transversal yen" ángulos entrantes. Sin
........ lugar a dudas, estos resultados han influenciado notablemente el diseño
10 PROLOGO A LA PRIMERA llDlClON PROLOGO A LA PRIMERA EDlCION 11

de las piezas de maquinaria, ayudando a eliminar las zonas débiles en las a la sencilla obtención del mínimo de una función. De esta forma, se
que las fisuras pueden iniciarse. encuentran soluciones aproximadas útiles en muchos casos de Ímportan-
Otro ejemplo de la aplicación fecunda de los métodos experimentales, cia práctica.
es el empleo de la película de jabón para la determinación de las tensiones Con el fin de simplificar, el libro· comienz1;l con los problemas bidi-
de torsión y flexión en piezas prismáticas. El difícil problema de la inte- mensionales, pasando luego, cuando el lector se ha familiarizado con los
gración de una ecuación diferencial sometida a unas ciertas condiciones métodos de resolución de los problemas de la teoría de la elasticidad, a
de contorno se reduce, en este caso, a la medida de las pendientes y de- los tridimensionales. Aquellas partes del libro que siendo importantes, se
flexiones de una película de jabón convenientemente estirada y cargada. pueden omitir en una primera lectura, van impresas en letra pequeña.
Los experimentos demuestran que de esta forma se obtiene, no sólo una El lector puede estudiar tales problemas después de haber acabado con
imagen de la distribución tensional, sino también la necesaria infonnación las partes más esenciales de la obra.
cuantitativa sobre la misma, con una exactitud suficiente para las apli- Las deducciones matemáticas son presentadas en forma elemental
caciones prácticas. no requiriendo, por lo general, mayores conocimientos que los dados en
La analogía eléctrica proporciona, también, un medio para estudiar las escuelas de ingeniería. Si los problemas son más complicados, se dan
las tensiones producidas por la torsión en las zonas de transición de ejes todas las explicaciones necesarias y los cálculos intermedios con el fm de
de diámetro variable. La analogía entre el problema de la torsión de placas que el lector pueda seguir sin dificultad los desarrollos matemáticos.
y el de la elasticidad bidimensional, ha sido aplicado también con éxito Sólo en unos pocos casos son presentados los resultados finales sin detallar
en la resolución de importantes problemas de ingeniería. la deducción de los mismos. En ese caso, se incluye la referencia de los
Al preparar este libro se ha intentado facilitar a los ingenieros, de trabajos en los que tales deducciones pueden ser encontradas.
manera sencilla, el conocimiento fundamental necesario de la teoría Las numerosas notas que contiene este libro dan la referencia de los
de la. elasticidad. Se ha querido también presentar la solución de ciertos trabajos y libros sobre teoría de la elasticidad que pueden ser de impor-
problemas especiales que pueden ser de importancia práctica, así como tancia práctica. Tales referencias pueden ser de interés para los ingenieros
describir los métodos aproximados y experimentales de resolución de los que deseen estudiar algún problema especial con mayor detalle. Ellas
problemas de elasticidad. nos dan también una visión del desarrollo moderno de la teoría de la elas-
Pensando en las aplicaciones prácticas de la teoría de la elasticidad, ticidad, pudiendo ser de interés para aquellos graduados que se especia-
hemos omitido algunos temas de gran interés teórico y aquellas que en lizan en. este campo. .
el momento actual no presentan ninguna aplicación práctica inmediata, En la preparación de este libro se ha utilizado una obra sobre el mismo
para dar lugar al estudio de problemas concretos. Sólo considerando tales tema (Theory 01 Elasticity, vol. 1, San Petersburgo, Rusia, 1914-), cons-
casos con todo detalle y comparando los resultados dados por los métodos tituido por una serie de conferencias dadas· en diversas escuelas de in-
exactos con las soluciones aproximadas dadas en los textos elementales geniería rusas.
de resistencia de materiales, puede el proyectista adquirír un conocimiento El autor ha sido ayudado en su trabajo por el Dr. L. H. Donnell y
profundo de la distribución de tensiones en las estructuras, enseñán- el Dr. J. N. Goodier, quienes revisaron el manuscrito y le sugirieron
dosele las ventajas de los métodos rigurosos del análisis tensiana!. diversas correcciones. El autor agradece asimismo a los profesores G. H.
Al estudiar problemas especiales, se ha aplicado, en la mayoría de Mac CuIlongh, E~ E. Weibel, M. Sadowsky y D. H. Young, la colabora-
los casos, el método de la determinación directa de las tensiones y se ción prestada en la preparación final del libro y en la lectura de algunas
han empleado· las écuaciones de compatibilidad expresadas en función partes del manuscrito. Queda también reconocido al señor L. s. Veenstra
de las componentes de la tensión. Este método es más familiar a los in- por la· realización de los dibujos y a la señora E. D. Webster por su trabajo
genieros, los cuales se interesan, por lo general, por la magnitud de las de mecanografía. . .
tensiones. Una adecuada introducción de funciones de tensión suele sim- S. TIMOSHENKO
plificar este método, haciéndolo más sencillo que aquel en el que las ecua-
ciones de equilibrio son expresadas en función de los corrimientos. UNIVERSIDAD DE MICHIGAN
En numerosos casos, se ha hecho uso del método de la energía elástica. Diciembre, 1933
De esta forma, la integración de ecuaciones diferenciales, queda susti-
tuida por la búsqueda de las condiciones de mínimo de una cierta integra!.
Este problema de cúlculo variacional se reduce, usando el método de Ritz,
PRÓLOGO A LA SEGUNDA EDICIÓN. 7
PRÓLOGO A r.A PRIMERA EDICIÓN 9
NOTACIONES • • • • • • • . • 19

CAPho!.o 1
INTRODUCCION
1. Elasticidad • . . . • . 21
2. Tensiones. . . . . . . . . . • . . • . • . . . . . . 22
3. Notaciones correspondientes a las fuerzas ya las tensiones 23
4. Componentes de la tensión . . . 24
5. Componentes de la deformación . 25
6. Ley de Hooke 27
Problemas. . . . . . 31
) ..,

. '"\' CAPiTULO 2
TENSIONES 'PLANAS y DEFORMACIONES PLANAS
7. Tensiones planas. . . . 32
8. Defonnación plana . . 32
9. Tensiones en un punto. 34
10. Defonnación en un punto 39
11. Medida de las defonnaciones superficiales . 41
12. Construcción del circulo de Mohr a partir de las medidas realizadas
con uria roseta. . • . . . . . . . . 43
13. Ecuaciones diferenciales de equilibrio 43
14. Condiciones de contorno . . . 45
15. Ecuaciones de compatibilidad . 45
16. Función de tensión. 48
Problemas. ',.. . . . . . . . 50
INDICI! INDICI! 15

CAPÍTULO 3 CAPITULO 6

PROBLEMAS BIDIMENSIONALES METODOS' ELASTO-ENERGETICOS


EN COORDENADAS RECTANGULARES 47. Energía potencial elástica . . . . 174
:·E¡áll~qion.es
polinómicas - . . - . . . . . . - . • . . . 52 48. Principio de los trabajos virtuales. 179
Pr'im:lo:io de Saint-Venant. . . . . . . • . • . . . . . 56 49. Teorema de Castigliano. . . . . 191
Determinación de los desplazamientos. • . . • . . . . • . . . 57 50. Principio del mín,imo trabajo. . . . 195
20. Flexión de una pieza en voladizo con carga en su extremidad libre 58 51. Aplicaciones del principio de mínimo trabajo. Placas rectangulares 196
21. Flexión de una viga uniformemente cargada. • . . . . . . . . 63 52. Anchura eficaz de alas de las vigas en T. 201
22. Otros casos de flexión de vigas bajo cargas continuas • . • . . . 68 53. Arrastre por tensión cortante. • 207
23. Solución del problema de la elasticidad plana por medio de una serie Problemns. . . • . . • . . . . . . . 207
de Fourier • • • • . . . . . . . . . . . • . • . . • . . . . . 70
24. Otras aplicaciones de las series de Fourier. Caso en que la carga a con-
CAPÍTULO 7
siderar es el peso. 77
Problemas. . . . . . , ., . . . . . • . . . . . . . . . . 78 PROJlLEMAS BIDIMENSIONALES
EN COORDENADAS CURVILlNEAS
54. Funciones de variable compleja . . . • . . 210
55. Funciones analhicas y ecuación de Laplace. . 212
CAPiTULO 4 Problemas. • . . • • . . . . . . . . • . 214
PROBLEMAS JlIDIMENSIONALES 56. Expresión de la función de tensión mediante funciones armónicas y
EN COORDENADAS POLAlUlS complejas . . . . . • . . . . . . . . . . . . . . • . • • . . 214
57. Desplazamientos correspondientes a una determinada función de
25. Ecuaciones generales en coordenadas polares . . . . 80 tensión . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 217
26. Distribución de tensiones simétricas respecto a un eje 83 58. Tensiones y desplazamientos expresados en función de los potenciales
27. Flexión simple de piezas curvas . . . . . . . . . . 86 complejos. . . . . . • . . . . . . . . . . . . . . . . • • . . 219
28. Componentes de la deformación en coordenadas polares 91 59. Resultante de las tensiones que actúan sobre una curva. Condiciones
29. Distribución simétrica de tensiones: desplazamientos 92 de contorno . . . . . . . . . . . . . . . . . . 221
30. Discos giratorios . . . . .. . • . . . . • . . . . . 95 60. Coordenadas curvilíneas . . . . . . . . . . . . . 223
31. Ménsula curva cargada en su extremo libre . . . . . . 99 61. Componentes de la tensión en coordenadas curvilíneas. 227
·32. Influencia de un orificio circular sobre la distribución de tensiones Problemas. . . . . . • . . . . . . . . . • . . . 229
existente en una placa. . . . . . '. . . . . . . . . . 104 62~ 'Soluciones en coordenadas elipticas. Placa sometida a un esfuerzo de
33. Fuerza concentrada en un punto de un borde rectilíneo. 111 tracción uniforme . . . • . . . . . . . . . . . . . • . . . . . 230
34. Caso general de carga normal al borde recto de una placa . 118 63. Influencia de un orificio elíptico en una placa sometida a tracción simple. 234
35. Cuña con carga en la punta. . . . . . . . . • . 123 64. Contornos hiperbólicos. Entalladuras.' 237
3.6. Carga concentrada sobre una viga . . . . . . . • . • . 125 65. Coordenadas bipolares. . . . . . 239
37. Tensiones en un disco circular . . . . . • . • . . . . 134 66. Soluciones en coordenadas bipolares 241
38... Placa indefinida con carga concentrada en un punto. . • . 139 Otras coordenadas curvilíneas . 245
39. Solución general del problema bidimensional en coordenadas polares 144
40. Aplicaciones de la solución general en coordenadas polares 149
41. Cuña cargada sobre sus caras 151 CAPÍTULO 8
Problemas. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 153
TENSIONES Y DEFORMACIONES EN TRES DIMENSIONES
67. Definición de la tensión en un punto. . . . . 247
68. Tensiones principales. . . . . . . . . . . . 248
CAPiTULO 5 69. Elipsoide de las tensiones y superficie directriz 250
70. Detenninación de las tensiones principales. . . 251
EL METODO FOTOELASTICO 71. Determinación de la tensión tangencial máxima. 252
42. Medida fotoelástica de tensiones. • . . . . . . • . 159 72. Defonnación homogénea . . . . 254
43. Polariscopio circular . . . . . . • . • . . . . . . 164 73. Defonnacíón en un punto . . • 255
#. Ejemplos de determinación fotoelástica de las tensiones . 167 74. Ejes principales de deformación . '; . 258
45. Determinación de las tensiones principales. 170 75. Rotación. . . 260
46. Fotoelasticidad tridimensional. . . . . . . . . . . . 171 Problemas. ",' . • • . • . . . 262
INDICE INDICE 17

CAPÍTULO 9 CAPíTULO 12
FLEXION DE Pl~ZAS PRlSMATICAS
TEOREMAS GENERALES
Ecuaciones diferenciales de equilibrio 263 105. Flexión de una pie:¡a en voladizo 355
Condiciones de compatibilidad. . . . 265 106. Función de tensión. . . . . 357
Determinación de los desplazamientos. 268 107. Sección transversal circular . . 359
Las ecuaciones de equilibrio como funciones de los desplazamientos. 269 108. Sección transversal elíptica . . 360
Solución general para los desplazamientos 270 109. Sección transversal rectangular. 362
Principio de superposición.. 271 110. Resultados complementarios . 368
Unidad de la solución. • . . . . . . . . 272 111. Secciones transversales no simétricas . 370
112. Centro de flexión o centro de corradura 372
Teorema de reciprocidad. . . . . • . . . . •....• 274
Carácter aproximado de las soluciones de los estados tensionales planos. 277 I 1, Ih,:"lu"ción de los problemas de flexión por el método de la película
Problemas. . . . . . . . . . . . • . • . . . . . . . . . • . . 279 de Jabon . . . . . . . . . . 376
114. Desplazamientos . . . . . . 380
115. Otros estudios sobre la flexión 380
CAPÍTULO ·10
PROBLEMAS ELE:MENTALES
DE ELASTICIDAD TRlDI:MENSIONAL CAPíTULO 13
DlSTRIBUCION TENSIONAL SIMETRlCA RESPECTO AL EJE
85. Tensión uniforme . . . . . . • . . . . . . . . . • 281 EN UN SOLIDO DE REVOLUCION
86. Barra prismática extendida por acción de su propio peso. 282
87. Torsión de ejes cilíndricos de sección circular constante. 285 116. Ecuaciones generales. . . . 382
88. Flexión simple de barras prismáticas . . . . . . 287 117. Soluciones polinómicas. . . 386
89. Flexión simple de placas planas . . . . . . . . . . . 291 118. Flexión de una placa circular 388
119. Caso de disco giratorio considerado corno problema tridimensional 391
120. Sólido de extensión indefinida cargado en uno de sus puntos . . 394
11
CAPÍTtr!.O 121. Recipiente esférico sometido a una presión uniforme interior o exterior. 396
TORSION 122. Tensiones locales alrededor de una cavidad esférica . . . .. 399
123. Fuerza sobre el contorno de un cuerpo semiindefmido. . . . . . t . 402
90. Torsión de barras prismáticas . . . . 294 124. Sólido semiindefinido sometido a la acción de una carga distribuida
91. Barras de sección transversal elíptica . 300 sobre una zona de su plano limitante. . . . . . . . 406
92. Otras soluciones elementales. . . . . 302 125. Presión entre dos cuerpos esféricos en contacto. . . . 4'13
93. Analogía con In membrana. . . . . . . 306 126. Caso general de presión entre dos cuerpos en contacto. 419
94. Torsión de barras de sección rectangular estrecha. 310 127. Choque de esferas. . . . . . . . . . . . . . . . 424
95. Torsión de barras de sección rectangular . . . . 312 128. Deformación de un cilindro circular cargado simétricamente. 426
96. Resultados complementarios . . • . . . . . . . . . . . . . . 316 129. Cilindro circular sometido a la acción de una presión sobre una banda
97. Resolución de problemas de torsión por el método elasto-energético. 318 de su superficie . . . . . . . . . . . . . . . . . . 430
98. Torsión de perfiles laminados . . • . . . . . . . . . . . • . 324 130. Torsión de un sector de anillo de se.cción circular.. . . . 433
99. Empleo de películas de jabón para resolver problemas de torsión . 327 131. Flexión simple de un sector de anillo de sección circular. 438
100 .. Analogías hidrodinámicas. . . . • . . .. . 329
101. Torsión de árboles.. huecos. . . . ' . . . . . . . . . . . . . . 332
102. Torsión de tubos' de pared delgada . . . . . . . . . . . . • . . 336 CAPÍTULO 14
103. Torsión de una barra en la que se impide el alabeo de una d.. las sec-
ciones transversales. . . • . • . . . . . . . . 340 TENSIONES DE ORIGEN TERMICO
104. Torsión de árboles circulares de diámetro variable 342 132. Casos sencillos de tensiones de origen témlico. . . . . . • . . . . 441
Problemas. . . . . . . . . . . . . 351 133. Algunos problemas planos de tensiones de origen térmico. . . . . , 446
134. Disco circular delgado. Repartición de temperaturas simétrica respecto
al centro . . . . . • . • . . . . . . . 448
135. Cilindro largo de sección circular. . . . . 450
136. Tensiones de origen térmico en una esfera. 459
137. Ecuaciones generales. 463
138. Tensiones in~ciales. . . • • . . . . . . 467
INDICE

. " Problemas bidimensionales con flujo estacionario de calor 470


.Solución de las ecuaciones general,es • . . • • . . . . . 475

CAPiTULO 15
PROPAGACION DE ONDAS EN :MEDIOS ELASTICOS No
14i'. Movimiento generado por fuerzas • . . . 480
142. Ondas longitudinales en barras prismáticas. 480
143. Choque longitudinal de dos barras. . • . • . . . . . . . • . . . 486
144. Ondas de dilatación y ondas de distorsión en medios elásticos isótropos. 495
145. Ondas planas. . . . . • . . . . . • . . • . . . • . . . . . . 496
146. Propagación de ondas sobre la superfiCie de un cuerpo elástico . . . 499

ApÉNDICE
APLICACIONES DE LAS ECUACIONES
EN DIFERENCIAS FINITAS EN ELASTICIDAD
1. Deducción de las ecuaciones en diferencias finitas. . 503
2. Métodos de aproximación sucesiva . 5.07
3. Métodos de relajación. . . . . • . 510 x,Y,z Coordenadas rectangulares.
4. Redes triangulares y hexagonales. . 515 r, fJ Coordenadas polares.
5. Relajación en ~rupo y en bloque. . . . . . . . 520 ~, r¡ Coordenadas curvilíneas ortogonales; a veces coor-
6. Torsión de barras de sección múltiplemente conexa 521 denadas rectangulares.
7. Punto?pró::,imo~ ~l contorno. . . . • . . . . . 523 R, '1', O Coordenadas esféricas.
8. Ecuaclon blannomca. . . • . . . • . . . . . 525 N NOITIlal exterior a la superficie de un cuerpo.
9. Torsión de árboles circulares de diámetro variable 534 1, m, n Cosenos directores de la normal exterior.
[NDICI! DE AUTOBl!S • •• ••.•••••• 539 A Area de una sección transversal.
INDICI! ALFABÉTICO • • • • • • • • • • • • •••• 543 Momentos de inercia de una sección transversal
respecto a los ejes x e y, respectivamente.
Momento polar de inercia de una sección trims-
versal.
g Aceleración de la gravedad.
/} Densidad.
q Intensidad de una carga distribuida en forma
uniforme.
p Presión ..
X, Y, Z Componentes de una fuerza másica por unidad de
volumen.
X. Y, i Componentes de una fuerza superficial actuando
sobre la superficie de un cuerpo por unidad de
superficie.
M Momento flector.
M, Momento torsor.
U%, u., G, Componentes normales de tensiones, paralelas a
los ejes x. y, y z, respectivamente.
u. Componente normal de tensiones paralelus a n
G" Uo Tensiones normales, radial y tangencial, respec-
tivamente, en coordenaqas polares.
U!, G, Componentes Ilormale* de la tensión en coorde-
nadas curvilíneas. '
tI" tID, tI, Componentes normales en coordenadas cilíndricas.
~ 8=~+~+~=~+~+~
TEORIA DE LA ELASTICIDAD

f Tensión t311gencial.
T~u, Tu. fJl' Componentes de la tensión tangencial en coorde-
nadas rectangulares.
T, o Tensión tangencial en coordenadas polares.
7:"1 Tensión tungencial en coordenadas curvilíneas.
T,O, 'Co .. T" Componentes de la tensión tangencial en coorde-
nadas cilíndricas.
S Tensión total en un plano.
u, '11, w Componentes de los desplazamientos.
E Elongación unitaria.
E" ~"'~. Proyecciones de la elongación unitaria sobre los
ejes :x, Y. y W.
E,. EQ Elongaciones unitarias radial y tangencial en coor-
denadas polares.
e = ~, + "11 + E. Dilatación cúbica.
y Deformación tangencial.
r"'lI' r .." Y., Componentes de la deformación tangencial en coor-
denadas rectangulares.
r, o' )'& .. y,. Componentes de la deformación tangencial en coor-
denadas cilíndricas.
E Módulo de elasticidad.
G Módulo de rigidez. 1. Elasticidad. Todos los materiales estructurales presentan en
" Coeficiente de Poisson. cierto grado la propiedad de elasticidad, es decir, si las fuerzas exteriores
pE que deforman la estructura no rebasan un cierto límite, la deformación
p. G. .l Constantes de Lamé.
(1 + ,.) (1 - 2.) desaparece cuando se suprimen tales fuerzas. En este libro, se supondrá
~ Función de tensión. que los cuerpos que sufren la acción de las fuerzas exteriores son perfec-
'P (z), X(z) Potenciales complejos; funciones de la variable com- tamente elásticos, es decir, recuperan su forma inicial después de suprimir
pleja z = x + iy. las fuerzas.
'i Variable compleja conjugada x - iy.
e Rigidez torsional. La estructura molecular de los cuerpos elásticos no será considerada.
O Angulo específico de torsión. Se supondrá que la materia del cuerpo elástico es homogénea distribuyén-
F = 2GB Expresión usada en problemas de torsión. dose con con~inuidad en su volumen, de forma que cualquier elemento
V Energía de deformación. extraído de él, posee sus mismas propied~des físicas. Para simplificar los
V, Energía de deformación por unidad de volumen.
t Tiempo. razonamientos se supondrá también que el cuerpo es ¡sótropa, es decir,
T Intervalo de tiempo. Temperatura. las propiedades elásticas son las mismas en todas las direcciones.
a Coeficiente de dilatación térmica. . Los materiales estructurales no cumplen, en general, las condiciones
señaladas anterionnente. Un material tan importante ¡;omo el acero, por
ejemplo, consiste en cristales diferentes, distintamente orientados como
puede verse al observarlo al microscopio. El material dista mucho de ser
homogéneo, pero la experiencia muestra que las soluciones de la teoría
elástica, admitiendo las condiciones de homogeneidad e isotropÍa, pueden
ser aplicadas a las estructuras de acero con gran exactitud. La explica-
ción es que los cristales son muy pequeños: generalmente hay millones
en un centímetro cúbico. Mientras que las propiedades elásticas de un
~ristal pueden variar mucho con lu dirección, los cristales están general-
mente orientados al azar y las propiedades elásti¿as de las piezas grandes
corresponden a los promedios de las propiedades 'cristalinas. Siempre que
las dimensiones gepmétricas de un cuerpo sean grandes comparadas con las
dimensiones de ''los cristales, la suposición de homogeneidad puede ser
TEORIA nI': LA ELASTIClDAD INTRODUCCION 23
con gran exactitud y si los cristales están orientados al azur, el ma- En el caso que acabamos de considerar, la tensión era uniforme en
. ser tratado también como isótropo. toda la sección recta. En el caso general de la figura 1, la tensión no se
. a causa de ciertos procesos tecnológicos, tales como el lami- distribuye uniformemente en mm. Para· obtener la magnitud de la tensión
¡.JnOU</ll1ll.Ul1 una cierta orientación de los cristales del metal, las pro- que actúa sobre el pequeño elemento de área bA, que comprende al
Ul"U"'~". elásticas dependen de la dirección y debe considerarse la condición punto O, suponemos que las fuerzas que actúan a través de este área ele-
., anisotropía. Tal condición se da, por ejemplo, en el cobre laminado mental, debidas a la acción del material de la· parte B sobre el material
eri frío. de la parte A, se reducen a una resultante P. Si el área bA disminuye con
continuidad, el valor límite del cociente bPt"A nos da la magnitud de
la tensión, que actúa sobre la sección mm en el punto O. La dirección que
tiene iJP en el límite, es la dirección de la tensión. En general, la tensión
estIÍ inclinada respecto al elemento de superficie iJA sobre el cual actúa
descomponiéndose entonces en sus dos componentes: una tensión normal,
perpendicular al elemento c3A y una temión tangencial o cortante, que actúa
en el plano de !lA .
.tn :Z1l
3. Notaciones correspondientes a las fuerzas y a las tensiones.
Las fuerzas exteriores que pueden actuar sobre un cuerpo, son de dos cla-
ses. Las fuerzas distribuidas sobre la superficie ,del cuerpo, tales como
la presión mutua ejercida entre dos cuerpos o la presión hidrostática, se
FJC.2
llaman fuerzas superficiales. Las fuerzas distribuidas sobre el volumen
Fw. 1
del cuerpo, tales como las fuerzas gravitatorias, las fuerzas magnéticas, o en
el caso de que exista movimiento, las fuerzas de inercia, se llaman fuerzas
2. Tensiones. Supongamos que el cuerpo representado en la fi- masicas. La fuerza por unidad de superficie será descompuesta, en ge-
gura 1, se encuentra en equilibrio. Bajo la acción de las fuerzas exterio- neral, en sus tres componentes paralelas a los ·ejes coordenados y usa-
res p .. "', P?, se producirán fuerzas interiores que actuarán entre las dis- remos para tales componentes la notación X, Y, Z. Descompondremos
tintas partes del cuerpo. Para determinar la magnitud de esas fuerzas en asimismo la fuerza másica por unidad de volumen en sus tres componentes
cualquier punto O, supongamos al cuerpo dividido en dos partes A y B. que designaremos mediante las letras X, .Y, Z.
mediante la sección plana mm que contiene a dicho punto. Si consideramos Usaremos la letra (J para designar la tensión normal y la t" para la ten-
una de esas regiones, por ejemplo, la A, se puede establecer que está en sión tangencial. Para indicar. la dirección del plano sobre el cual actúa
equilibrio bajo la acción de las fuerzas exteriores Pi, .oo, P? Y las fuerzas la tensión, añadiremos subíndices a la letra que expresa la tensión. Si con-
interiores, repartidas en la sección mm., que representan la acción del sideramos un pequeño elemento cúbico en el punto O (fig. 1), con sus
material de la regióIl B sobre el material de la región A. Se supondrá aristas paralelas a los ejes coordenados, la notación para los componentes
que estas fuerzas se distribuyen con continuidad en la sección mm, de la de las tensiones que actúan sobre las caras del cubo es la indicada en la
misma forma que la presión hidrostática o la presión del viento se distri- figura 3, en la que se señalan, asimismo, los sentidos positivos asignados
buyen de forma continua en la superficie sobre la cual actúan. La magni- a aquéIlas. Para las caras perpendiculares al eje y, por ejemplo, las com-
tud de tales fuerzas se define generalmente por su intensidad, o sea, por ponentes normales de las tensiones que actúan sobre ellas son señaladas
la fuerza que actúa sobre el área unidad. Cuando se trata de fuerzas inte- por Uy • El subíndice y indica que la tensión actúa sobre un plano normal
riores, la intensidad se lIuma tensión. al eje y. Se considera positiva a la tensión normal cuando se trata de una
En el caso sencillo de una barra prismática, sometida a tracción bajo tracción y negativa si se trata de una compresión.
la acción de fuerzas distribuid.ls uniformemente sobre sus extremos (fig. 2), La tensión tangencial se descompone en sus dos componentes para-
las fuerzas interiores se distribuyen también uniformemente sobre cual- lelas a los ejes coordenados. En este caso, se usal\ dos subíndices: el pri-
quier sección plana mm. En consecuencia, la intensidad de esta distribu- mero indica la dirección normal 111 plano en cuestión y el segundo, la
ci6n, la tensión, puede obtenerse dividiendo la fuerza P por el área A dirección de la componente de la tensión en sí misma. Si consideramos,
de la sección recta. por ejemplo, las caras perpendiculares al eje y, la componente en la direc-
TEORIA DE LA ELASTICIDAD INTRODUCCION 25
s~fialaqapor T y ", y la de dirección·z por 'y.' Como sentido posi- de las mismas. Resulta, pues, que para elementos muy pequeños, las fuer-
.. .'c9mponentes de la tensión tangencial que aetúa sobre cualquier za·s másicas son infinitésimos de mayor orden que las fuerzas superfi-
toma: el sentido positivo de los ejes coordenados, si una tracción ciales. De igual forma, los momentos: debidos a la distribución no uni-
,. . . a esa misma cara apuntara en el sentido positivo del eje corres- forme de las fuerzas normales son infinitésimos de orden superior que los
'ponqiente. Si la tracción apuntara en sentido contrario al del eje corres- debidos a las fuerzas tangenciales, pudiendo también ser despreciados
pondiente, el sentido positivo de las componentes de la tensión tangencial en el límite. Representando entonces las dimensiones del elemento de la

""=--I---..."J..-;y

FIG. 3 figura 4 por dx, dy, dz y puesto que la fuerza sobre cada cara es el pro-
ducto del área por el valor de la tensión en el punto central de la misma,
sería el opuesto al de los ejes coordenados. Basándonos en esta regla los la ecuación de equilibrio para los momentos respecto al eje. x queda así:
sentidos positivos de todas las componentes de la. tensión, que ac~an '1"'11 d:r; dy dz = 'Cu. d:r; dy di!.
.sobre la cara de la derecha del elemento cúbico de la figura 3, coinciden
con los sentidos de los semiejes positivos. Por el contrarío en la cara ecuaciones se obtienen de forma semejante, llegándose al
izquierda del elemento, los sentidos positivos están invertidos. resultado siguiente:
(1)
4. Com ponentes de la tensión. De acuerdo con lo dicho en el
párrafo anterior, resulta que para cada par de caras paralelas de un ele- Por tanto, para cada dos caras perpendiculares entre sí, las componen-
mento cúbico, como el representado en la figura 3, se necesita un símbolo tes de la tensión de cortadura superficial perpendiculares a la línea de
para representar la componente normal.de la tensión y dos más para las intersección de esas c.-¡ras, son iguales. .
. componentes de la tensión tangencial. Se requieren, por lo tanto, tres .. El sistema de tensiones que actúa sobre los planos coordenados que
símbolos para describir las tensiones normales que actúan sobre las caras pasan por un punto, está en consecuencia definido por las seis canti-
de un cubo elemental,. a saber, (J:t:, 11", 11. Y seis 7:",u, 7:y ", '",., 'z:t:, ryz> "C%y, dades <F" l1y, 11., "C TY = '''''> Tu = " " "/% = ·•• v, las cuales reciben el
para los esfuerzos tangencialegl. nombre de componentes de la tensión en el punto considerado.
De la consiclerªción del equilibrio del elemento, se deduce que el Como se verá más adelante (§ 67), estas seis componentes permite~
número de símbolos para las tensiones tangenciales puede ser reducido determinar el esfuerzo actuante sobre cualquier plano que pase por el
a tres. Si consideramos el momento respecto al eje x de las fuerzas que punto considerado.
actúan sobre el bloque elemen tal, sólo tenemos que tener en cuenta las
tensiones representadas en la figura 4. Las fuerzas másicas, tales como el 5. Componentes de la deformación. Al estudiar la deformación
peso del elemento, pueden ser despreciadas puesto·· que al reducir las de un cuerpo elástico, se supondrá que hay vínculos suficientes que im-
dimensiones del elemento disminuyen con el cubo de las dimensiones piden su movimiento como cuerpo rígido, de forma que no es posible
lineales, mientras que las tensiones superficiales 10 hacen con el cuadrado el desplazanliento de las partículas del cuerpo ~in una deformación del
mismo. l
, En realidad seria más correcto decir esfuerzo tangencial específico ya que la palabra
esfuerzo no implica que se trate de un área unidad.
En este libro sólo se estudiarán deformacioneS pequeñas, tales como se
dan en las estructuras reales. El pequeño desplazamiento de las partículas
TEORlA DE LA ELASTICIDAD INTRODUCCION 27
);1J';l,lJ;~¡J'U .. defo.rmado,
es descompuesto generalmente en sus com- cton angular) o deslizamiento del ángulo comprendido entre los planos
·w
. v, paralelas a los ejes x, Y. z, respectivamente. Se supondrá xz e yz. De igual forma, se obtiene la deformación tangencial de los án-
.. ~mponentes son muy pequeñas y que varían con continuidad gulos formados por los planos xy y xz.y los yx e yz.
:el volumen del cuerpo. Consideremos un pequeño elemento Representaremos mediante la letra E la deformación longitudinal
.. dz de un cuerpo elástico (fig. 5). Si el cuerpo se deforma y u, v, w, y mediante la y, la deformación tangencial. Para indicar la dirección
de las deformaciones, utilizaremos los mismos subíndices que pata las
componentes de las tensiones. De donde resulta que:
ou av aw
e~ =-,
a::c Eu = ay' E. = iJ~
(2)
au OV ou OW av aw
'Y:v = ay + a::r;' 'Y•• = - +-, "fu. = ;rz + ay
az OX

Como veremos más adelante, conocidas las deformaciones longitudiriales


. en tres direcciones perpendiculares y las tres deformaciones tangenciales
correspondientes a esas direcciones, se puede determinar la deformación
correspondiente a una dirección cualquiera y el deslizamiento del ángulo
Flo.6 formado por dos direcciones cualesquiera (§ 73). Las seis componentes
'(;" ... ')1" .. reciben el nombre de componentes de la deformación.
son las componentes del desplazamiento del punto 0, el desplazamiento
en la dirección x de un punto próxi~o A, situado en el eje de las x, será 6. Ley de Hooke. La relación entre las componentes de la tensión
au y de la deformación, ha sido establecida experimentalmente y se conoce
u + az rlz bajo el nombre de ley de Hooke.
Imaginemos un paralelepípedo rectangular infinitésimo, con sus aris-'
debido al incremento (8u/ox)dx de la función u, que corresponde al cambio tas paralelas a los ejes coordenados, sometido a la acción de una tensión
de la coordenada x. El aumento de la longitud del elemento OA debido normal (1", distribuida uniformemente sobre dos caras opuestas. La ex-
. a la deformación, es por lo tanto (ou/ox)dx. En consecuencia, el alarga- periencia demuestra que en el caso de un material isótropo, las tensiones .
miento especíjico en el punto 0, según la dirección x es 'iJu/ax. De igual . normales no producen distorsión angular del elemento~ La magnitud de
forma, puede demostrarse que el alargamiento específico en las direc- 'la deformación longitudinal viene dada por la ecuación:
ciones Y y z viene dado por las derivadas av/ay y aw/oz. El alargamiento
específico será designado, en lo sucesivo, mediante las expresiones defor- 11",
E", = E (a)
maciÓ'n longitudinal o simplemente deformaci6n.
Consideremos ahora la' variación del ángulo formado por los elementos en la que E es el módulo de elasticidad longitudinal. Los materiales usados,
OA y OB (fig. 6). Si u y v son los desplazamientos del punto O en las en ingeniería tienen módulos muy altos en relación con las tensiones
direcciones:x e y, los·del punto A en la dirección y, y del B en la dirección x admisibles y la deformación (a) es muy pequeña. En el caso del acero
vienen dados respectivamente por: de construcción es, generalmente, inferior a 0,001.
v + (ov/'iJx)dx y u + (ou/oy)dy La dilatación del elemento en la dirección x viene acompañada de las
contracciones laterales.
A causa de estos desplazamientos, la nueva dirección O'A' del elemento
OA forma con la dirección inicial un pequeño ángulo, indicado en la fi- Eu =
O"z
-v E' El:;:::: -p
0':
E. eb)
gura, igual a ov/ox. De igual forma, la dirección O'B' forma con OE el , j .
ángulo íJu/íJy. Se sigue de ello que el ángulo AOB, inicialmente recto, en las cuales JI es una constante llamada coeficiente :(ie Poisson. Para muchos
formado por los elementos OA y OB, ha variado en la cantidad av/ax + materiales el coeficiente de Poisson puede igualarse a 0,25. Para el acero
+ Gu/ay. Esta es la deformación tangencial (también es llamada dejorma- de construcción 'es generalmente 0,3.
TEORIA DE LA ELASTICIDAD INTRODUCCION 29
(¡;l) y (h) pueden usarse "también en el caso de com- constantes pueden ser usadas también para definir la relación entre de-
,f,'}"'~""~'~""" del intervalo elástico, el módulo de elasticidad formaciones y tensiones tangenci~les.
~(j.~:ti(!lel~te :de Poisson son iguales en compresión y tracción.
Z
elemento anterior es sometido a la acción de las tensiones nor-
a.;
.. ~; J': '/T,,; distribuidas uniformemente sobre sus caras, las com- h
¡,..., ;1<. 1.1 ,It'formación result:lIltc' pueden obtenerse usando las ecua-
.
.... 'Ca) y (h). La experiencia demuestra tJlIC p.lI.. l "bL\:lIcr estas com- oy~
'ponentes, tenemos que superponer (as deformaciones producidas por cada
0je
una de las tres tensiones. La aplicación de este método de superposición :y O":z:

nos lleva a: (ó)


1
e", = E [o-" - lI(fTv + u.)] (a)
1 Fw. 7
Eu = E [crv - lI(cr", + u.)J (3)

E. :d i [o-. - v(cr" + uv)] Consideremos el caso particular de deformación del paralelepípedo


rectangular, sobre el cual all = - a. y a" = O. Aislando un elemento
'. abcd mediante planos paralelos al eje x que forman 45 D con los ejes y y z
En io sucesivo, usaremos a menudo el método de superposición para cal- . (fig. 7), se puede ver, sumando las fuerzas paralelas y perpendiculares
cular las deformaciones y tensiones totales producidas por varias fuerzas. a be, que la tensión normal sobre las caras de este elemento es nula y
Este método es legítimo siempre que las deformaciones sean pequeñas que la tensión tangencial sobre las mismas es:
y que los pequeños desplazamientos correspondientes no afecten sustan-
cialmente la acción de las fuerzas exteriores. En tales casos, despreciare- Ce)
mos los pequeños cambios de las dimensiones de los cuerpos. deformados : . Tal estado tensional recibe el nombre de esfuerzo cortante simple. El
y los pequeños desplazamientos de los puntos de aplicación de las fuerzas alargamiento del elemento vertical Ob, es igual al acortamiento de los
exteriores, basando nuestros cálculos en las dimensiones y forma iniciales 'elementos' horizontales Oa y Oc, de donde despreciando un infinitésimo
del cuerpo. Los desplazamientos resultantes se obtendrán por' super- 'de segundo orden se deduce que las longitudes ah y be no cambian du-
posición, en forma de funciones lineales de las fuerzas exteriores, como rante la deformación. El ángulo formado por ah y be cambia, sin embargo,
hicimos al deducir la ecuación (3). y la magnitud de la deformación tangencial y puede deducirse del estudio
Hay, sin embargo, casos excepcionales en los que deformaciones .' .del triángulo abe. Después de deformado' se cumple:
pequeñas no pueden ser despreciadas, debiendo ser tenidas en cuenta.
Un ejemplo de ello es el caso en el que actúan sobre una barra delgada Oc
-=
fuerzas axiales y laterales. Las fuerzas axiales, actuando solas, produ- Ob
cen um\ tracción o una compresión simple, pero pueden ejercer una in- Sustituyendo los valores de fv Y €. dados por (3) tenemos:
fluencia esencial sobre la flexión de la barra si actúan acompañadas de
fuerzas laterales. AÍ calcular la deformación de la barra bajo tales condi- 1 (1 +'11)<1".
E. = E (a. - vu,,) = E
ciones, el efecto de la flecha de flexión sobre el momento de las fuerzas
exteriores debe ser considerado, aun cuando dicha flecha sea muy pe-
fU =
(1 + v)O'.
queñal. En este caso la flecha no es función lineal de las fuerzas y no puede E
ser obtenida por simple superposición. ., y advirtiendo que para valores pequeño¡; lit, i'
En las ecuaciones (3), la relación entre alargamientos y tensiones está
'Y
completamente definida mediante las constantes E y Y. Estas rpismns tg ''Ir4 - tg '2 \I
, - 1:2
, Varios ejemplos pueden verse en S. Timoshc"ko, Slrenglh oJ Moleríais, vol. II, pá. =---
gmas 25-49. .
TEORIA DE LA ELASTICIDAD INTRoDuccroN 31

c(lcontramps que y la ecuación (8) nos da


2(1 + 7I)u.. 2(1 + v}r (4) =_
'Y= E = E e
.
3(1 .,... 2v)p
E
De esta forma, la relación entre la deformación tangencial y la tensión
expresión que representa la relación entre la dilatación cúbica e y la
tangencial está definida conociendo E y v. A menudo, se usa la notación:
presión hídrostática p.
La cantidad E/3(1 - 2v) se denomina' módulo de elasticidad de vo-
E (5)
G = 2(1 + JI) lmnen.
Empleando las notaciones (7) y despejando u z , GIl' u., en las ecuaciones
Entonces la ecuación (4) queda (3), obtenemos
vE E
u: = (1 +
p)(1 _ 2v) e 1 + V E" +
vE E'
La constante G definida por (5) recibe el nombre de módulo de elasticidad u" = (1 +
v)(1 _ 21') e 1 V E" + + (9)

tangencial o módulo de rigidez. vE E


Si sobre las caras de un elemento actúan tensiopes tangenciales, como 0". = (1 +
v)(1 _ 21') e 1 y E. + +
en el caso de la figura 3, la deformación del ángulo formado por dos ejes
coordenados cualesquiera, depende únicamente de las componentes de o bien, usando la notación
las tensiones tangenciales paralelas a tales ejes, y su valor es: A = vE (10)
(1 + 11)(1 - 2,,)
(6)
y la ecuación (5) llegamos a
Las deformaciones longitudinales (3) y los deslizamientos (6) son indepen-
dientes unos de otros. En consecuencia, el caso general de deformación
0'. = Xe 2GE= +
O'~ =Xe + 2Gev (11)
producida por tres tensiones normales y tres tangenciales, se resuelve
u. = 116 + 2Ge;
mediante la superposición de las tres deformaciones dad¡¡s por la ecuación
(3) y de los deslizamientos obtenidos mediante las ecuaciones (6).
Las ecuaciones (3) y (6) nos dan las componentes de la deformación Problemas
en función de las componentes de la tensión. A veces, sin embargo, es l. Demostrar que las ecuaciones O) siguen siendo válidas si el elemento de
necesario tener las componentes de la tensión expr.esadas como función la figura 4 está en movimiento y tiene una aceleración angular, como si fuera un
de las componentes de la deformación. Esto se consigue de la manera cuerpo rígido.
siguiente. Sumando las ecuaciones (3) y usando la notación 2. Supongamos un material elástico conteniendo un gran número de pequeñas
partículas imanadas, distribuidas regularmente, de forma que un campo magnético
ejer<la sobre cualquier elemento dx, dy, dz Un momento I,d,,', dy, dz, respecto a
e = + +
E: EU E.
(7) un eje paralelo al eje x. ¿Qué forma tomará la ecuación (l)?
8 = 0',,+ u, + u= 3. Dar algunas razones que justifiquen el que la fónnula (2) sea válida solamente
para pequeñas deformaciones. '
llegamos a la siguiente relación entre la dilatación cúbica e y la suma de 4. Una lámina elásticn se encuentra entre dos placas perfectamente rígidas a,
las tensiones normales las que está pegada. La lámina es comprimida entre las dos placas siendo u, la ten-
'_ aión de compresión. Suponiendo que la adherencia a las plncas impide toda defor-
1- 271
e=-E- 8 (8) mación lateral €., €y encontrar el módulo de Young aparente (o',/€.) en función
de E y l'. Demostrar que si el material de la lámina es ¡¡asi incompresible bajo Jos
efectos de una presión hidrostática el valor del módulo qe Young aparente es muy
En el caso de una presión hidrostática p tenemos superior a E. '
u.. = o'v = u. = -p 5. Deducir la e.;uaeión (8) a partir de las (11), (10) Y (5).
TnNsIONES PLANAS Y DEFORMAClONES PLANAS 33

de forma que cualquier desplazamiento en la dirección axial sea imposible


(el efecto de retirar tales planos será estudiado más adelante). Dado que
no hay desplazamiento axial en los extremos y que por simetría ocurre
otro tanto con la sección central, se puede suponer que lo mismo le sucede
a cualquier otra sección recta, encontrándonos entonces con un estado
de deformaciólt plana.
y
,----,-----.;1:
7if\tt;"XlV",'yMtp'Xt9};(bi)f\CvAlQ"tij};m",..",,,,"

7. Tensiones planas. Si una placa delgada es cargaoa mediante


y y
r'ro.9 PIC. 10
fuerzas aplicadas en su contorno, paralelas al plano de la placa y distribuidas
uniformemente en su espesor (fig. 8), las componentes de la tensión
a., '''''' 'IIZ son nulas sobre ambas caras de la placa y puede suponerse,
en principio, que también lo son en el interior de la misma. El estado ten-
sional queda entonces especificado por <1~, rfy Y ':rll Y es denominado

Flc. 11

...-----1--:11: z Existen muchos problemas importantes que son dc este tipo: muro
de contención sometido a una presión lateral (Hg. 9), túnel o alcantarilla
(fig. 10), tubo cilíndrico sometido a una presión interna, rodillo cilíndrico
comprimido por fuerzas contenidas en el plano diametral como en el caso
de un cojinete de rodillos (fig. 11). .
y y En todos los casos, por supuesto, las condiciones de carga no deben
FW.8
variar con la longitud. Dado que las condiciones son las mismas en todas
estado tensional plar"!.o. Puede asimismo suponerse que estas tres compo- las secciones rectas, bastará con considerar una rebanada contenida entre
nentes son independientes de Z, o sea, no varían a través del espesor de dos secciones separadas una longitud unidad. Las componentes u y v
la placa, siendo en consecuencia función de x e y solamente. del desplazamiento dependen de x e y pero no de z; y puesto que el des-
plazamiento longitudinal w es cero las ecuaciones (2) quedan así:
8. Deformación plana. Una simplificación semejante se da en el _ iJv + iJw _ O
otro caso extremo, en el que la dimensión del cuerpo·en la dirección del 'Y~. - iJz ay-
eje z es muy grande. Si un cuerpo largo cilíndrico o prismático es cargado Bu
mediante fuerzas perpendiculares a la dirección longitudinal que no 'Yo, = iJz + 8w
iJ:¡; = o (a)
varían en esa <{irección, puede suponerse que todas las secciones rectas
8w
están en iguales condiciones. En principio, podemos imaginar que las E.=-=O
iJz
secciones extremas se encuentran confinadas entre planos rígidos fijos,
~ - 'I1!ORlo\ 01: loA r.l~STICIIMO
34 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORMACIONES PLANAS 35
La tensión normal longitudinal a. puede' ser expresada en función de guIar, las fuerzas 'másicas pueden ser despreciadas por ser infinitésimas
x e y mediante la ley de Hooke [ecuaciones (3)]. Puesto que 17= = O ten- de orden superior (pág. 25). De forma semejante, si el elemento es muy
dremos que: pequeño, puede despreciarse la variación de las tensiones sobre las caras
y suponer que se distribuyen uniformemente sobre' ellas. Las fuerzas
(T. - lI(rT: + 0',,) = O que actúan sobre el prisma triangular pueden por lo tanto determinarse,
o 10 que es lo mismo: multiplicando las componentes de la tensión por el área de las caras.
Sea N la dirección de la normal al plano Be y señalemos los cosenos de
(b) los ángulos formados por la normal N y 10'5 ejes x e y por:
Estas tensiones noonales actúan sobre tod~ls las secciones rectas, cos Na; = 1, cos Ny =m
incluyendo las extremas, donde representan las fuerzas requeridas para
mantener el estado de defoonación plana y son ejercidas por los planos Entonces, si A señala el área de la cara Be del elemento, las áreas de
rígidos extremos. las otras caras serán Al y Am.
Las ecuaciones (a) y (b) muestran que 'xz y 'lJ< son nulos y mediante Si indicamos por X e Y las componentes de la tensión que actúan
la ecuación (b) l1z puede Ser expresado en función de x e y: De esta foona, sobre la cara Be, las ecuaciones de equilibrio del elemento prismático
el problema de deformaCión plana, al igual que el estado tensional plano, quedan así:
se reduce a la detenninación de l1", rJy Y >"/1' funciones solamente de x e y. x = W., + m-r.1J (12)
r = + l'T:v
mO'lJ
9. Tensiones en un punto. Conocidas las componentes de la ten-
sión {1'", l1y , >." en cualquier punto de Ulla placa, que se encuentra en De este modo, las componentes de la tensión que actúan sobre cualquier
un estado de tensión o deformación plano, la tensión que actúa sobre plano definido por los cosenos l y m pueden calcularse fácilmente a partir
cualquier plano perpendicular a la placa, que pase por ese punto, puede de las ecuaciones (12) supuesto que las componentes (1"" {1'y, 'I'",y de la tensión
en O sean conocidas.
Sea a el ángulo foonado por la normal N y el eje x, de foona que
1 = cos a y m = sen a. Los componentes normal y tangencial de la tensión
'~==±::==-.;;B_ _X que actúa sobre el plano Be puederi deducirse de las ecuaciones (12),
resultllndo:

rT = X (lOS el + Y sen a; = rT. C082 el + O'usen2 el


+ 2r"" sena cos el
(13)
y r = Y cos el - X sen rx ;" T:rJ(COS
2
a - sen 2 a)
+ (rTlJ - 0'",) sen a COS a
FIO. 12
Podemos deducir de (13) que el ángulo a puede ser elegido de formll
que la tensión tangencial , se anule. Esto ocurre cuando:
calcularse a partir de las ecuaciones de la estática. Sea O el punto en cues-
tión y supongamos 'que conocernos las componentes de la tensión l1 'T"1i(cos2 el - sen 2 a) + (<T~ - l1,,) sen a (lOS el = O
O'y >"'V (fig. 12). Para encontrar la tensión que actúa sobre cualquier pla;~
que contenga al eje z y que esté inclinado respecto a los ejes x e y, tome- de donde:
~ sen a COS el 1 2 (14)
mos un plano Be paralelo a él y próximo a O de foona que el prisma OBe (J'", - O'u = C06 2 el - sen2 a - 2 tg el
formado por este plano y los planos coordenados sea muy pequeño.
Puesto. ~ue las tensiones varían con continuidad en el volumen del cuerpo,
la tenslOn que nctúa sobre el plano Be tiende a la tensión actuante sobre A partir de esta ecuación se pueden encontrar dos direcciones perpen-
el plano paralelo que pasa por O, cuando el elemento se hace cada vez diculares entre sí, para las cuales la tensión ta;ngencial se anula. Estas
más pequeño. direcciones se llaman direcciones principales y' las tensiones normales
Al discutir las condiciones de equilibrio de un pequeño prisma trian- correspondientel! tensiones principales.
36 rEORIA DE LA EI..ASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORMACIONES PLANAS 37

Si las direcciones principales son tomadas como ejes x e y, ,'''u es cero Prolongado el radio eD hasta el punto DI (fig. 13), es decir tomando
y las ecuaciones (13) se simplifican quedando así: el ángulo :r + 2a en lugar de 2a se obtienen las tensiones correspon-
dientes al plano perpendicular a Be (fig. 12). Se ve así que las tensiones
u = u", 005 2 IX + G"vsen2 IX (13')
tangenciales que actúan sobre dos planos perpendiculares entre sí, son
T = t sen 2a(ull - a",) igu~les en valor absoluto, cosa que ya habíamos demostrado. En lo que
. La variación tic las componentes u y r cuando cambia el ángulo "
puede representarse gráficamente mediante un diagrama en el que a y 7
son tomadas como coordenadas!. A cada plano corresponde un punto en
el diagrama cuyas coordenadas son los valores de G" y T correspondientes.
En la figura 13 tenemos un diagrama de ese género, en el cual los puntos
A y B de abscisas rI. y <Ty respectivamente, corresponden a los planos
ª
perpendiculares las direcciones principales. l?uede demostrarse que las
componentes de la tensión correspondientes a un plano cualquiera Be
que forme un ángulo a (fig. 12), están representadas por las coordenadas
de un punto situado en una circunferencia de diámetro AB. Para hallar a-ó
ese punto basta con medir a partir de A, en el sentido de crecimiento de (a) tOI
a_e
los ángulos a de la figura 12, un arco que subtienda un ángulo igual a
(!J)
2a. Si D es el punto obtenido, resultará de la figura; FlG. 13

OF = O..,rt + v.rtF = -
rI" + rTl}
r + u",--2-
- /Tv
COS 201 = u", cos 2 a + ullsen 2 a se refiere a las tensiones normales, vemos en la figura que OF, --1- OF =
DF = en sen 2~ = 1(rT% - /Tu) sen 2~ = 20e, es decir, la suma de las tensiones normales correspondientes
a planos perpendiculares entre sí permanece constante al variar u.
Comparando estas expresiones con las ecuaciones (13') se ve que La tensión tangencial máxima viene dada en el diagrama (fig. 13)
las coordenadas del punto D dan los valores numéricos de las componentes por la máxima ordenada de la circunferencia, o lo que es lo mismo por
de la tensión que actúa en el plano Be, cuya inclinación es Cl. Para obtener su radio. Tenemos entonces
la coincidencia de signo de la componente tangencial, llevaremos los r U:r; - rTy
positivos hacia arriba y consideraremos los esfuerzos tangenciales como =-2- (15)
positivos cuando el sentido de rotación del par que originan es el del mo-
vimiento de .Ias agujas del reloj, como ocurre para las caras be y ad del ele- Dicha tensión actúa sobre el plano bisector del ángulo formado por
mento abed (fig. 13b). Las tensiones tangenciales que obran en las caras las tensiones principales el cual corresponde a a = 71/4.
ab y de del mismo elemento son de sentido contrario y, por lo tanto, El diagrama puede utilizarse también en el caso en que una o las dos
se consideran como negativasB • tensiones principales son negativas (compresión). Basta solamente con
Al girar el plano,Be alrededor de un eje perpendicular al plano xy cambiar el signo de la abscisá para las tensiones ncgatÍ\las. La figura 14a
(fig. 12) en el sentido de l~s agujas del reloj, el ángulo 11 varía de O a n/2 representa el caso en que ambas tensiones principales son negativas y la
y el punto D, en la figura 13, ·se mueve de A a B de forma que la semi- figura 14b el de esfuerzo cortante puro.
circunferencia inferior nos da la variación de la tensión para los valores
de a comprendidos entre esos límites. La semicircunferencia superior De las figuras 13 y 14 se deduce que el estado tensional exisknte en un punto
puede ser considerado como el resultado de la yuxtllposición de otros dos: uno phm()
da las tensiones pam equitensionnl ' de magnitud la ubscisa del centro del círculo, y otro de esfuerzo
n/2 G, a G n cortante cuya magnitud es el radio del círculo. Cuando se superponen varias dis-
tribuciones de tensión los estados equltensionales (d~ tracción o compresión) pueuen
I Este método gráfico es debido a o. Multr, Zivilingenietlr, 1882, pág. 113. Véase también . ser sumados algébricamente. Los esfuerzos cortantes deben añadirse temiendo en
'u Tecllllische Medru",'k, 2." ediCIón, 1914. . cuen ta las direcciones de los planos sobre los cuales actúan. Se demuestra que ,11
, Esta regla Se utIliza solamente en la construcCIón del diagrama de Mohr. Fuera de ahí
es vólida In regla dada en la pág. 23. I N. del T. U.momos estado plano cqultenslOnal !l aquel en el que a, = 'l. Y T," = O.
38 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORMACIONES PLANAS 39
superponer dos sistemas de esfuerzo cortante puro, cuyos planos de máxima ten- Un diagrama cómo el de la figura 13 puede usarse también para deter-
sión tangencial forman un ángulo p, el sistema resultante constituye también un minar las tensiones principales, si se conocen las componentes de la
caso de esfuerzo cortante puro. En la figura 15, por ejemplo, se determina la tensión
que actúa sobre un plano, definido por el ángulo a, y que está originada por dos tensión u." t111 , 7::r1l correspondientes a. dos planos perpendiculares entre
esfuerzos cortantes simples de magnitudes TI y r2 que actúan; uno en los planos :.sí (fig. 12). En tal caso se comienza dibujando los puntos D y DI que
xz e yz (fig. 1Sa) y el otro en los planos que forman con estos. últimos el ángulo {1 '. 'representan las tensiones que actúan sobre los dos planos coordenados

(a) (6)
FIG.14 (fig. 16). De esta forma se obtiene el diámetro DD¡ del círculo. Construido
el círculo, las tensiones principales !TI y (12 vienen dadas por su intersec-
(fig. 15b). En In figuTll ISa las coordenadas del punto D representan las tensiones : . ción con el eje de abscisas. De 'la figura se deduce:
tangencial y norm,,! producid:!s sobre el plano CB por el primer sistema, mientras
las coorde",ldns de DI (fig. 15b) dan las tensiones sobre el mismo plano para el
segundo sistema. Sumando OD y OD, geométricamente obtenemos OG, tensión
resultante sobre ese plano, cuyas componentes tangencial y. normal vienen dadas
0"1 = OC + ~l! = lT. t tT,,+ ~(~y +7=1}2

(16)
0"2 = OC - CD = rF. t tTlJ _ ~(tT., ; uuY + Tz¡¡2

En cuanto a la tensión tangencial máxima viene dada por el radio


del círculo, es decir:

Tm" = ~ CUl - qz) = ~(CTZ ; ([lJr + 'fzv'J. (17)

De esta forma todas las características del estado tensional en un


punto pueden obtenerse conociendo tan sólo las tres comp~nentes t1""

~
2a:
1
., ·2,8

O (T
10. Deformación en un punto. Cuando se conocen las compo-
. nentes €,,,, €,,, ,'.>:/1 de la deformación en un punto, puede determinarse la
deformación longitudinal y tangencial de orientación cualquiera, en ese
;y (ó) mismo punto.
FIG. 15 Al producirse una deformación, el elemento lineal PQ (fig. 17a) que une
los puntos (x, y) y (x +dx, y +
dy) sufre una traslación, una extensión
por las coordenadas de G. Adviértase que la magnitud de OC no depende de a. (o contracción) y un giro convirtiéndose en el elemento P'Q'. Las compo-
Por tanto, la superpoMición de los estados de esfuerzo cortante simple origina un nentes del desplazamiento de P son u y v y las del d,e Q:
círculo de Mohr correspondiente también a un esfuerzo cortunte de radio OG
estundo dada la inclinación de los planos de máxima tensión tangencial por Uf; iJu iJu oV . all
ángulo igual a la mitad del GOD. ~. + iJx dx + ay ay, v+-ax+-dy
ax ay
40 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORM/l.CIONES PLANAS 41

Si el elemento P'Q' (Hg. t 7a) es trasladado de forma que P' coincida , El elemento PT nonnal a PQ forma con el eje x el ángulo O+ ("./2) Y el
eón P, llevándolo a la posición PQ" de la figura 17b, los segmentos QR ", V'o + ~ ¡Jor él sufrido se d~duce de (á) sustituyendo () por O + 11:/2.
y RO" representarán las componentes del desplazamiento de O con rela- que cos [O ,,1- (n/2)] = - sen O y sen [1} + (:n:/2)] = cos e Be-
ción a P. En consecuencia: : gamos a:

RQ " = av dx + dy
ax av ay (a) av 5"n2 (}
"'e+'!!2 = -ax -
(élV
- -
au) sen 8 cos 8 - -8u C082 O
- (e)
ay élx ay
.JJadeformación tangencial Yo para las direcciones PQ, PT es 'fo - V'o+-f
, ,~iferencia cuya expresión es:

'Y9
au + -ayau)
= (-a,¡; (cos2 /J - sen! e) + (av Ou) 2sen. O cos 8
-ay - -ox

Flc.17 ,he = -h"ll (C08 2 8 - sen2 8) + (EU- E,,) sen (} cos 8 (1)

De la comparación con las fórmulas (13) se deduce que las expre-


Las componentes QS y SQ" de este desplazamiento relativo, la pri- !iiones (e) y ifJ pueden obtenerse a partir de ellas sin más que cambiar
mera normal y la segunda pal'alela a PQ" respeetivam'ente, pueden de- , ;;. por Eo , T por Yo/2, 0'", por Ex, O'y por Ey, T:z;y por 1,,,,"/2 ya por O. En canse-
ducirse de las anteriores obteniéndose las expresiones: 'c;:uencia toda conclusión referente a (j y T deducida de (13) admite otra
QS = -QR sen (} + RQ" cos O, SQ" = QR cas e + RQ" sen O (b)
semejante aplicable a fo Y 1'6/2 deducida de Ce) y (f). De ahí que podamos
enunciar los siguientes resultados. Existen dos valores de e, que difieren
en las que el pequeño ángulo QPS ha sido despreciado frente a O. Puesto 90 0 para los que Yo = O. Tales valores vienen dados por:
que el segmento QS puede identificarse con un arco de circunferencia
de centro en P, SQ" nos da el alargamiento de PQ. La deformación lon- _ 'Y"", _ = tg 2/J
E. - Eu
gitudinal de rQ' señalada por fo, es, en consecuencia, SQ"/PQ y su ex-
presión deducida de (b) y (a) queda: Las deformaciones Eo correspondientes son las deformaciones przncz.-
pales~ Se puede dibujar un círculo de Mohr análogo al de la figura 13 Ó 16,
ES = cos IJ (au dx + au dY) + sen (J (av dx av dY) cuyas ordenadas y abscisas representen a Yo/2 y En respectivamente_ Los
, ax ds ay ds ax as + ay ds
", valores máximo y mínimo de fe son las defonnaciones principales El y E2 -
=
8u C08 2 e + (auay + axav) sen 8 cos O+ alen2
a:c av IJ , 'El valor máximo de Yo /2 está representado por el radio del círculo, vi-
riiendo dada la deformaciÓn angular m-áxima 1'Om~" por la expresión:
o lo que es lo mismo: 'Y~ "'.~ = El - E2

E~ = Ez cos~ 8 + 'Y%1/ sen (} cos ti + E.sen! 8 (e)


11. Medida de las deformaciones superficiales. Las defor-
expresión de la defó~mación longitudinal en la dirección O. maciones longitudinales se miden muy a menudo mediante extensómetros
El ángulo q'o girado por PQ es igual a QS/PQ y la ex.presión del mismo a resistencia eléctrica' _ Tales extensómetros consisten en resistencias
deducida de (b) y (a) es: eléctricas embebidas en un soporte aislante que es pegado a la superficie.
Cuando la superficie se deforma la resistencia eléctrica varía y la defor-

oh = - sen O ( ax d:c + 8u
au d8 dY) + cos e(all
ay ds
d:c + ay
éJ:c ds
av ds
dY) mación puede, en consecuencia, ser medida eléctricamente.
El liSO de tales extensómetros es sencillo cuando se conocen las direc-
()
ciones principales. Si se coloca un extensómetro ¡;iguicndo cada dirección

"'e = avax (avay élU)


2
éJ:c
au
- cos O+ - - - sen Ocas 9 -:- -a sen
y
2
9 (d) lUna mformaclón detallada es dada en el Ilalldhook of Experullelllal Stress Analj's/v.
capítulos 5 y 9. '_,
42 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLA\'IAS y DE~'ORMACIONES PLANAS 43

'principal lje obtiene directamente la medida de El y Ea. Las tensiones prin- se ve que los valores de E8 y ! Yo están representados por el punto
cipales 0"1) Il"o pueden entonces deducirse empleando la ley de Hoolce, "de la circunferencia de la figura 18c. Si 8 toma el valor rP, P se convierte
ecuación (3), en la que se hace a", = al, l1u = 0'2 Y 11, = O, condición esta el punto A de la figura 18b fortnanc;lo FA con el eje E el ángulo 2 <p.
última que nace de suponer que no actúa ninguna fuerza sobre la super- abscisa de este punto que es E~ ha sido medida. Si (} toma el valor
ficie a la que se han pegado los extensómetros. Entonces: + a, P se desplaza a B mediante el incremento angular AFB = 2a y
abscisa conocida- es Ea+<f>. Si, finalmente, (} toma el valor p + a + P,
se mueve hasta e aumentando el ángulo en BFe = 2{J Y siendo la abs-
Cuando no se conocen, a priori, las direcciones principales es nece- también medida, Ea,p+.¡.. Partiendo de esto vamos a estudiar ahora
sario realizar tres medidas. El estado de deformación, en efecto, está dibujar el circulE) cuando se conocen esas tres abscisas y los dos án-
completamente determinado si se pueden medir E.., fu Y y:¡;u' Sin embargo, a y p.

del círculo de Mobr a partir de las medidas


con una roseta. Tomemos un eje E horizontal con un
cualquiera O' (fig. 18b) a partir del cual se llevan las deformacio-
medidas €.¡., €a.~ y Ea.p_.p. Por los puntos así determinados tra-
: cemos rectas normales al eje e. Elegido un punto cualquiera D en la normal
Ea "'~' se trazan las rectas DA y De que forman con esa normal los
o·~ __ ~~~ ____ ~ __ a y p y que cortan a las otras en los puntos A y e. La circunfe-
buscada es la que pasa por los puntos B, A, e
y su centro F está
por la intersección de las mediatrices de los segmentos
(e)
Fu:;. 18
y DA. Dado que el ángulo AFB es 2a por ser doble del ADB y que por
mismo el BFe es 2f3, ocurre que los tres puntos A, B Y e representan
deformaciones en la dirección de los, extensómetros. Los puntos A,
puesto que los extensómctros miden deformaciones longitudinales y no
y e, en efecto, guardan dentro del círculo el intervalo angular requerido
tangenciales es necesario realizar la medid¡¡ de la deformación longitudinal
tienen las abscisas correctas. Si trazamos ahora el eje Eo, que se can-
en el punto según tres direcciones. El conjunto de tres extensómetros
ean OF, las distancias de O a las intersecciones de la circunferencia
que realiza esta medida recibe el nombre de «roseta'). Co~ocidas esas tres
este eje nos dan El y E•• El ángulo 2 <p es el formado por el eje con
deformaciones se puede dibujar el círculo de Mohr, mediante la sencilla
medido a partir del eje en el sentido de las agujas del reloj, y su co-
construcción! dada en el § 12 Y determinar las direcciones principales.
:1l'lJLJ,JUlt:I,lLU nos informa sobre cuá~es son las dil'ecciones principales.
Sean los tres extensómetros de la roseta los representados mediante las
líneas continuas de la .figura 18a en la que la línea a trazos corresponde
\ Ecuaciones diferenciales de equilibrio. Consideremos ahora
a la dirección de la deformación principal Elo que forma el ángulo <p con
,: ,,~f.equilibrio de un pequeño bloque rectangular de espesor unidad cuyas
el primer extensómetro.
: '9tras dimensiones son h y k (fig. 19). Las tensiones que actúan sobre las
Si como direcciones x e y de las ecuaciones (e) y (f) del § 10 se hubie-
" 'caras 1, 2, 3, 4- y sus direcciones positivas son indicadas en la figura. Puesto
ran tomado las dire~ciones principales, E" sería E¡, I: y 1:2 Y y"v cero. Las
,,'que las tensiones que actúan en el material varían de un punto a otro el
ecuaciones serían entonces:
valor de (/%, por ejemplo, no es exactamente el mismo en la cara 1 que en
es = El cos~ {} + ~2 sen2 9, '" la cara 3. Los símbolos U z , ay, 7:",y se refieren al punto (x, y), punto central
en las que (J es el ángulo medido a partir de la dirección de €¡. Las mismas <lel rectángulo de la figura 19. Los valores en los puntos centrales de las
ecuaciones pueden escribirse: " son indicados por (0'",)1) (O'Z)3 etc. y dado que las caras son muy
"pequeñas, las fuerzas, correspondientes se obtienen multiplicando estos
ee = 'Hel + E2) + i(El - El) COS 28, valores por el área d~ la cara sobre la cual actúan).
,
I Glenn Murphy, .'J. Applied Mecha/lics (Tralls. A.S.M.E.), vol. 12, pág. A-209, 1945; I Uno considernción más exacta introduciría infinitésimos de orden superior que desapa-
N. J. Hoff, ibíd. ,recen en el proceso.,final en el que se tiende al límite.
44 TEORIA DE LA ELASTICIDAD

Las fuerzas másicas que actúan sobre el bloque, que fueron despre- Estas son las ecuaciones diferenciales de equilibrio, correspondientes
ciadas por ser un infinitésimo de orden superior al considerar el equilibrio ':' á problemas elásticos bidimension!lles.
del prisma triangular de la figura 12, deben ser ahora tenidas en cuenta
puesto que son del mismo orden de magnitud que los términos debidos " 14. Condiciones de contorno. Las ecuacIOnes (18) o (19) deben

¡;t (O"Y}4
ser satisfechas en todos los' puntos de! cuerpo considerado. Ahora bien,
, las componentes de la tensión varían de punto 11 punto de la placa y al
llegar a sus bordes deberán equilibrar las fuerzas exteriores aplicadas en
Iy (roc:y~ :' los' mismos, de modo tal que dichas fuerzas pueden ser consideradas
como una continuación de la distribución interna de los esfuerzos. Las
"":::";:=:4:1.===:....
(.:l:.y)

2 (t:;,;;y).t
(t:;cy)z

(O"y'z
FIC.19 FIC. 20

a la variaCl0n de los componentes de la tensión, términos éstos que son condiciones de equilibrio en e! borde de la placa pueden deducirse de las
considerados ahora. Si X e Y indican los componentes de la fuerza másica ',c'cuaciones (12). Suponiendo al prisma triangular elemental aBC de la
por unidad de volumen la ecuación de equilibrio para las fuerzas que figura 12, dispuesto de manera que la cara BC coincida con un elemento
actúan en la dirección x queda así: 'superficial del contorno de la placa, como se ve en la figura 20, y llamando
(G'",hk - (G'.)"k + (r=vhh - (r",,)¡h + Xhk = O X e Y 11 las componentes de las fuerzas superficiales, por unidad de su-
perficie en ese punto del contorno, dichas ecuaciones serán para este caso:
que dividiendo por hk da
X = ler. + m;o:y (20)
(er.)1 - (cr",h + (r""h - (r:v), +X =O y = .mcru + lrzv
h l~
Si ahora hacemos tender el volumen del bloque a cero, es decir h ....,.. 0, en las cuales 1 y 1n son los cosenos directores de la normal N al contorno.
k -+ O e! límite de [(0'.)1 - (u",)a]/h es OU,jOT Y de forma semejante el ,',' En el caso particular de una placa rectangular, se toman, por lo ge-
de [(1:,..). - (1:",,)4]/k es OrTvloy • Si el mismo proceso es seguido con , lleral, los ejes coordenados paralelos a sus cantos y las condiciones de
fuerzas que actúan en la dirección y, las ecuaciones de equilibrio quedan contorno expresadas en (20) pueden simplificarse. Tomando, por ejem-
así: plo, un borde de la placa paralelo al eje x, tendremos para esta parte del
au., + fJr:v + X = O contorno que la normal N es paralela al eje y, de modo que 1 = Oy m = ± 1
fJ:c ay con Jo que las ecuaciones (20) se reducen a: '
(18)
~~ +aro:y +y =o
ay éJx
En las aplicaciones prácticas la única fuerza másica existente es el peso. Se deberá tomar el signo pOSItIVO cuando la normal N tenga el sen-
En consecuencia, tomando el eje y vertical y hacia abajo y llamando f! a tido del semieje positivo de las y y el signo negativo para el sentido con-
la densidad, las ecuaciones (18) sc convierten en: trario de N. De aquí resulta, que las componentes de las tensiones que se
desarrollan en el contorno de la placa son iguales a las componentes de las

(19)
. .
fuerzas superficiales, ,referidas a la upidad de á~ea periférica.

15. Ecuaciones de compatibilidad. El problema de la teoría de


la elasticidad con:siste, en general, en determinar el estado tensioIlal que
TEORIA DI! LA EI./lSTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORMACIONES PLANAS 47
s~ orIgma en un cuerpo sometido a la acción de determinadas fuerzas. cuerpo es la única fuerza másica, al cual corresponden las ecuaciones
'En el caso de problemas bidimen1lionales, es necesario para ello resolver· equilibrio (19). Diferenciando la primera de éstas respecto a x y la
las ecuaciones diferenciales de equilibrio (18) y la solución debe ser tal, :sel(U:naa respecto a y y luego sumándolas se tiene:
que satisfaga las condiciones de contorno (20). Dichas ecuaciones .dedu-
cidas de las ecuaciones de la estática, aplicables a cuerpos absolutamente 2 a2T"" = _ ;Ja IT", _ a2crll
rígidos, contienen las tres componentes uz , au , 'XII' no bastando para la iJx ay ax2 ay2
detenninación de las mismas. El problema es estáticamente indetermi- sustitución de estos valores en la ecuación (b) se llega a la ecuación
nado y para su solución es necesario considerar la deformación elástica compatibilidad en función de las componentes de la tensión:
del cuerpo.
La expresión matemática de la condición de compatibilidad entre la
distribución de tensiones y la existencia de las funciones continuas u, v,
(::2 + :;2) (U., + (Iv) = O (24)

'W, que definen la deformación se obtiene a partir de las ecuaciones (2). Si se procede análogamente con las ecuaci9nes generales de equilibrio
En los problemas bidimensionales deberán considerarse solamente tres tendrá:
componentes de la deformación, a saber:
av (O~2 + aéJ;a) (0'% + 0'1/) = -(1 + v) (~; + ~~) (25)
ell = éJy' (a)
En el caso de una deformación plana (§ 8) se tiene:
Estas tres componentes de la deformación son expresables en función
0', = v(fT~ + O'JI)
de u y v y, por lo tanto, sus valores no pueden ser arbitrarios sino que han
de estar ligados entre sí. La relación existente -entre ellos se deduce fácil- .Y de acuerdo con la ley de' Hooke [ecuaciones (3)) resultará:
mente de (a). Derivando dos veces respecto a y la primera ecuación de
1
(a), dos veces respecto a x la segunda y respecto a x e y la tercera, ob- = E [(1 - 1'2)0'= - 1'(1 + 1')0'11]
E:
tenemos: (26)
éJ 2e", a 2"(=1I 1
a2Eu = 1Jj [(1 - !l S)lTu - v(l + 1')11':]
aya +
ox 2 = ax ay (21) Eu

2(1 + v)
Esta ecuaClon diferencial se llama condici6n de compatibilidad y debe "1=11 = E 'I'=v
(27)
ser satisfecha por las componentes de la deformación, para asegurar la
existencia de las funciones u y v vinculadas a aquéllas por las ecuacio- en la ecuaClOn (21) y teniendo en cuenta, como antes, las
nes (a). ecuaciones de equilibrio (19) concluimos que la ecuación de compati-
Aplicando la ley de Hooke [ecuaciones (3)J la condición (21) puede .b.ilidad (24), es válida también en el caso de la deformación plana. Para
expresarse en función de los componentes de la tensión. ·.el caso general de fuerzas másicas las ecuaciones (21) y (18) nos permiten
En el caso de un estado tensional plano las ecuaciones (3) se reducen a: bir la ecuación de compatibilidad bajo la forma siguiente:
1
E~ =. E (O'., - VfTu), eu =
1
1Jj (0'11 - VIT~) (22) (a + 02) +-
2
éJx2 aya (0'% IT,¡) =-
1
1- l'
(ax + ay
éJx
ay) (28)

1 2(1 + v) (23) Las ecuaciones de equilibrio (18) o (19) conjuntamente con las con-
'Y:w = lJ'T"" = E 'I''''lI
diciones de contorno (20) y una de las ecuaciones de compatibilidad que
y sustituyendo en (21) se tiene:
. quedan consignadas, constituyen un sistema de ecuaciones que, por lo
permite la determinación completa de la distribución de las ten-
az
ay2 (ITe - VITv)
aa (IT1/ -
+ ax2 !lIT:)
= 2(1 + v) a2T=1I
ax ay (b) . l:1iones en un problema bidimensional'. Más adelante se tratan los C'Il<O!l
:. 1 En problemas tensionales planos existen condiciones de compatibilidad dl"tUlI." ,1, 1.ls
. (21) que no son cumplidas por nuestras suposiciones. S}n embargo, en el § 84 d~?,ostrarcmos
Mediante las ecuaciones de equilibrio podemos dar a esta ecuación una que pese a ello, los métodos pre•.,ntlldos en este capItulo dan lIna aproXlmaclon aceptable
forma diferente. En primer término, consideremos el caso en que el peso .' para placas delgadas:-.
TBORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORMACIONES PLANAS 49
. particulares en los que es necesario agregar otras consideraciones (§ 39). De eS!l Illanera podremos obtener diversas soluciones para las ecuacio-
$s . interesante destacar que cuan~o las fuerzas másicas son constantes, de equilibrio (a),· entre las cuales, aquella que satisfaga también a
en las ecuaciones que determinan la distribución de (as tensiones no apa- ecuación de compatibilidad (b) será la verdadera. Remplazando en la
·recen las constantes elásticas del material, lo que quiere decir que la dis- (b) las expresiones (29) de las componentes del esfuerzo con-
tribución de las tensiones es igual para todos los materiales isátropos, que la función de tensión es la solución de la ecuación:
con tal que las ecuaciones sean suficientes para la completa determinación
éJ4~ éJ4~ 04~
de las tensiones. Esta conclusión es de mucha importancia práctica, pues a? + 2 i.lx2 ay2 + ay~ = O (30)
como veremos más tarde (§ 42), por procedimientos basados en el uso de
luz polarizada se pueden hallar las tensiones que se producen en ma~eriales Resolver un problema de elasticidad en dos dimensiones, en el cual
transparentes como el vidrio y la baquelita y los resultados así obtellidos el peso la única fuerza másica; consiste pues, tan sólo, en buscar una
podrán ser, en muchos casos, inmediatamente aplicados a cualesquiera :.H~I!U'''lV'H de la ecuación (30) -que satisfaga a la condición de contorno (20)
otros materiales, tales como, por ejemplo, el acero. cOlrresp,onCUt:nte al caso particular planteado. En los capÍtu)¡Js siguientes
Señalaremos asimismo, que cuando las fuerzas másicas son constantes,.· ·aplica para resolver una serie de problemas de interés práctico.
la ecuación de compatibilidad (24) es de aplicación tanto a los· casos de
Consideremos ahora el caso más general éle vari"s fuerzas másicas y admitamos
tensión plana como a los· de deformación plana. En consecuencia, la dis., ellas deriven de un potencial. Entonces, las componentes X e Y de las ecuacio-
tribución de las tensiones será igual en ambos casos, siempre que se (18) estarán dadas por las ecuaciones:
trate de contornos idénticos y de un mismo sistema de fuerzas exteriores ' .
x= _aV
i);¡;
16. Función de tensión. Hemos demostrado que para resolver (e)
los problemas bidimensionales, basta con hallar las soluciones de las ecua- y = _av
ay
ciones diferenciales de equilibrio, que satisfagan la ecuación de compati-
bilidad y las condiciones d~ contorno. Si aplicamos esto en primer lugar V es la función potencial. Las ecuaciones (18) se transforman en:
al caso en que la única fuerza másica es el peso del cuerpo, las ecuaciones
que habrá que resolver son [véase las ecuaciones (19) y (24)J ~ (O". - V)
éI:l;
+ !hay•• = O
Bu: + éJr"" = O .!
fJy
(<T. - V) + aTilz•• = O
8x iJy
(a)
ay + éJr""
ax + pg =
au" O son de la misma forma que las ecuaciones (a) )' quedarán sutisfechlls tomnndo:
éJ'q,
<T. - V = iJy.' (al)
2
8 iJ2)
( éJx 2 + ay2 (u", + <Tu) = O (b)
~ es la función de tensión. Remplazando estas últimas en In ecuacIón de com-
a las cuales se deberá añadir las condiciones de contorno (20).
I"""L>II""'U (25), que corresponde a un estado elástico plano, se llega a:
El método corriente para resolver estas ecuaciones se basa en la in- a1tJ¡
(Jz'
il'tJ¡
+ 2 81:' ily' + ay'
8'<1>
= - (1 - v)
(a.v a.v)
a;¡;i + iJy' (32)
troducción de una nueva función llamada función de tensión 2• Fácilmente
se comprueba que r;s ecuaciones (a) quedan satisfechas por una función
. Para el caso de una deformación plana se puede obtener una ecuación análoga,
~ (x, y) relacionada con las componentes de la tensión por medio de
·utilizando un procedimiento similllr. .
l!ls expresiones siguientes: ; Cuando la fuerza másica actuante se reduce al peso, el potencial V es - egy .
. En este caso el miembro derecho de la ecuación (32) se reduce a cero. Si tomamos
(29) 4> = O cornil ~olueión de (32) (J (30) S" deduce, de (J1) o (29), <Iue In distribución
'de ten-limes:
, Esta afirmación puede necesit.r ser modificada cuando la placa o el Cilindro tienen
agujeros pues entonces, para llegar a la solUCIón conecta, debernos considerar los desplazamien- cr. = -pyy, <T~ = -PUy, r•• ;= O (d)
tos además de 1M tensIones. Véase el § 39.
. ! Esta función que a veces es Uamada función de tellSió" de Airy fue introducida en la solu-
·'·es una pO~lble solución. Este estado es el de una ~resión'hidrostátic!l b,dlmensloml¡
ción de los problemas bidimensionales por G. B. Airy, Bril. Assoc. AdvaltcemeJ/t Sci. Rept., 1862. '!gy que se anula paJ:~ l' =, 0, y que supuesto que se apliquen las fuerzas de contorno

.4-l"IiOHIA oc lA Pusnc:::lnAn
5.0 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES PLANAS Y DEFORMACIONES PLANAS 51
corr~spondientes puede darse en una placa o cilindro de forma cualquiera. De la La placa de la figura que se prolonga en un ~diente., se encuentra en un estado
consideración de un elemento de contorno cualquiera, tal como el que representaría tensión plano. Sobre los bordes c;lel diente (las dos líneas rectas) no actúa ninguna
ia figura 12, y aplicando las ecuaciones \(13) se deduce que la fuerza actuante sobre
el contorno consiste en una presián nonnal egy y una tensión· tangencial nula. Si
sobre la placa o el cilindro actúan otras fuerzas tenemos q!le añadir una tensián
normal egy a las nuevas fuerzas. El conjunto de las dos estará en equilibrio y la deter-
minación de sus efectos es un problema de fuerzas de contorno sin intervención.
de las fuerzas másicas 1 •

Problemas
1. Demostrar que las ecuaciones (12) siguen siendo válidas cuando el elemento
de la figt¡ra 12 se mueve con una aceleración cualquiera. .
2. Hallar gráficamente las deformaciones principales y sus direcciones siendo
las medidas dadas por una roseta.
c.¡. .. 2 X 10-', . ~+'i =- 1,35 X 10-3, 'afil+4> 0= 0,95 X 10-' cm/cm. Demuéstrese que no elCÍste tensión alguna en el vértice del diente. (Nota Este
y~ = ~ = 45°. re~¡U!·"'OLO
no es cierto en el caso de que se trate de un diente entrante.)
3. Demostrar que entre los elementos lineales que pasan por .el punto x, y
aquellos en que se da la máxima y minima rotación son los paralelos y perpendicu-
lares a la dirección determinada por () siendo () el ángulo que cumple.

tg 28 = ( -ay
011 - -OU). /
iJa;
(av- +-ayau)
éire

4. Las tensiones existentes en un disco (de espesor unidad) en rotación, pueden


hallarse considerando el disco parado y sometido a un campo de fuerzas mási-
cas igual a la fuerza centrífuga. Demostrnr que tales fuerzas admiten el potencial
V = -1/2 ero'(x' + y') donde e es la densidad y tJJ la velocidad angular de rotación
(alrededor del origen).
5. Las fuerzas gravitatorias que actúan sobre un disco cuyo eje es horizontal
viene!"! dadas por las ecuaciones (el) del § 16. Realizar un diagrama de las fuerzas
de contorno que soportan su peso. Represéntese mediante otro diagrama las fuerzas de
contorno del problema auxiliar, que debe ser resuelto cuando el peso del disco es
soportado completamente por una superficie horizontal sobre la cual se apoya.
6. Las fuerzas gravitatorias que actúan sobre un cilindro cuyo eje es horizontal,
vienen dadas por las ecuaciones (el) del § 16. Los extremos del mismo se encuentran
confinados e~ltre dos planos rígidos fijos que obligan al estado de deformación plana.
Realícese un diagrama. de las fuerzas que actúan sobre su superficie incluyendo
los .extremos. .-.
7. Introduciendo las relaciones tensión-deformación y las ecuaciones (a) del § 15
en las ecuaciones de equilibrio (18), demuéstrese que en ausencia de fuet;zas másicas y
para estados tensionales planos los dcsphlzamientos deben satisfacer la expresión:

a'u + iJ'U + ~~ (/tu + ov) = ·0··


az 2 ay" 1-v8z az 8y.

así como la ecuación compañera.

I Este problema y .1 caso general de un potencial V que anula el miembro derecho de (32)
ha sido tratado por M. Biot, J. Applied MecJumics (1'rans. A.S.M.E.), 1935, póg. A-41.
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGUI,ARES 53
"direcciones perpendiculares entre sí y una tensión tangencial uniforme.
Según se explicó en el § 15, las fuerzas ejercidas sobre el contorno deben
iguales a las tensiones existentes en los puntos del mismo. Tales
son dibujadas en la figura 21, que corresponde a una placa rec-
Problemas bi ITYYIV', cuyos lados son paralelos a los ejes coordenados.

en coordenadas

r---~----------U---,X

y
Flo.21

Consideremos ah'ora Ulla función de tensión consistente en un poli-


17. Soluciones polinómicas. Como se ha visto, la solución de de tercer grado
problemas bidimensionales en los que las fuerzas másicas son nulas o cons-
tantes, se reduce a la integraciÓn de la ecuación diferencial (e)
a ,p + 2 ~
4

ax4 a;¡;2 ay?;


+ aaycf¡4 = O
4
Ca) polinomio satisface también la ecuaClOn (a). Usando las ecuaciones
y poniendo flg = O llegamos a las expresiones
cuenta tenida, de las condiciones de contorno (20) que correspondan al
caso particular en estudio.
Cuando se tratan placas rectangulares largas y estrechas las solucio-
nes en forma polinómica de la ecuación (a) presentan un notable interés.
Utilizando polinomios de diversos grados, en efecto, y ajustando conve-
nientemente los coeficientes, se puede resolver un buen número de pro-
blemas de importancia práctical •
Para empezar, consideremos un polinomio de segundo grado,
placa rectangular, como la que puede verse en la figura 22, se en-
(b) sometida a una flexión simple si todos los coeficientes del polino-
excepto d3 son nulos. En cambio, si sólo a3 es distinto de cero obte-
que, evidentemente, satisfará la ecuación (a). De la ecuación (29), hacien-
un estado de flexión simple creado por esfuerzos normales que
do flg = 0, se deduce
sobre los costados de la placa de ecuación •V = ± c. Si b3o: ¡ e

~. ! 1.~
Las tres componentes de la tensión son pues constantes en cualquier punto x
del cuerpo y la función de tensión (b) representa, 'en consecuencia, una
combinación de tensiones uniformes, de tracción o compresión2 , en dos
, Mesnager, A., Cmnpt. yend., vol. 132, pág. 1475, 1901. Véuse también A. 'l'impe, Z. Math.
Physik, vol. 52, pág. 348, 1905. y
, Que Sea una u otra depende de los signos u. y L,,,
u, b•• direcciones de las tensiones re- y
presentadas eIl la figura 21 corresponden a valores pOSitivos <le a" ha y e,. F.:IG. 22 FIC. 23
54- TEQRIA DE LA ELASTICIDAD PROBLf>"MAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 55
son distintas de cero, además de las' tensiones nonnales tendríamos ten-
conjunto de tensiones tangenciales actuantes sobre el contorno de la
si.ones tangenciales actuando sobre los bordes laterales de la placa. La
produce el par
figura 23, por ejemplo, representa el caso en que todos los coeficientes de
(e) salvo ha son cero. Los sentidos con que se han dibujado las tensiones d4c2l 1 d c2 '
4 2
corresponden a valores positivos de bao A lo largo de los bordes y = ± e
.M = 2 . 20 - '3 "2 . 2c • l = '3 d 4c3l
tenemos una distribución uniforme de tensiones de tracción y c()mpre-
par compensa el producido por las fuerzas nonnales que actúan sobre
sitin, respectivamente, y de tensiones tangenciales proporcionales a X.
cara x = l.
En el borde x = 1 tenemos simplemente una tensión tangencial constante
e ig'ual a -bal y en la cara x = O no existe tensión alguna. Se obtiene --+ - -
una distñbución de tensiones análoga si se toma C3 distinto de cero.
Al tomar como función de tensión polinomios de segundo o tercer
I
¡ +
grado se tiene completa libertad en la elección del valor de los coefi-
I
I
r---"---+-~~
e t..
cientes pues la ecuación (a) es satisfecha cualesquiera que sea su valor.
En el caso de polinoIPios de mayor grado, sin embargo, la ecuaci?n (a~ l
y
sólo es satisfecha si los coeficientes. cumplen, entre ellos, determmadas
FIG.24
relaciom!s. Tomando, por ejemplo, como función de tensión un poli-
nomio de cuarto grado
Supongamos ahora que se toma como función de tensión un poli-
(d) de quinto grado
y llevándolo a la ecuación (a) se encuentra que esta ecuación se cumple . a6
=5'4:t
s + 4·g:ty
b& + 3'2
406 a + do
XY RXY
+ 4'3
/lo xy + f.
n 2 2 3 4
Y
5 (
f)
solamente si
84 = -(2c{ +
a4) en Ca) se obtiene que esta ecuación es satisfecha si
Las compenentes de la tensión en este caso son:
e6 =- (20¡ + Sas)
jr, = -t(b ó + 2ds)
componentes de la tensión correspondiente son, por lo tanto,

= aay2ifJr, = ~
2

3 x + d&x y + 3a6)xy2 - + 2d6)y3


a 1
O' 2 - (205 -3 (b 6
~

a2 ifJ . d
U lI = éJ:r/ = a6x3 + b5x 2y + C5Xy2 + 3's ya
Los coeficientes a4, .... d4 • que figuran en estas expresiones, son arbi-
trarios y eligiendo sus valores convenientemente podemos obtener dis-
~ = - -3 bóx· - cóx2y - d6Xy2
Tz;¡¡ = - ozéJy
1
+ -31 (206 + 3a6)y8
tintas condiciones de carga sobre la placa rectangular. Tomando, por ejem- coeficientes a., ... , d s, son, de nuevo, arbitrarios y eligiéndolos conve-
plo, todos los coeficientes menos d4 iguales a cero resulta se obtienen las soluciones correspondientes a distintas con-
."•.m:'.'L<O
!
de carga de la placa. ¡
O'v = OJ (e) Tomando, por ejemplo, todos los coeficientes excepto d. iguales a cero I
I
I
'. obtiene
Si tomamos d 4 positivo la distribución de fuerzas que actúa sobre la
placa rectangular y que produce las tensiones expresadas por Ce) es la mos-
u= = d&(x,2y - jy~) II
trada en la figura 24. Sobre los bordes longitudinales y = ± c existe una u" = íday 3 (g)
= -d Gxy2
II
1'%11
distribución uniforme de tensiones tangenciales y sobre los extremos
de lii placa l~ distribución de esas tensiones sigue una ley parabólica. I Se considera una placa de espc.qnr unidad.

I
¡
I
I
56 TEORIA DE LA ELt\STICIDt\D PROBLEMAS lllDlMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 57
Las fuerzas normales se distribuyen uniformemente sobre los b01:des sarnente satisfechas. Tal extensión en la aplicación de la solución se basa
longitudinales de la placa (Hg. 25a), mientras que sobre la cara x = l en el llamado pri11cipio de Saint-Venallt. Este principio establece que si
constan de dos partes, una que depende linealmente de y, y otra que es las fuerzas que actúan sobre un pequeño elemento de la superficie de un
función parabólica de tercer grado de la misma coordenada y. Las fuerzas cuerpo elástico son remplazadas por otro sistema de fuerzas actuando
tangenciales son proporcionales a x sobre las caras longitudinales y siguen sobre la misma porción de superficie y estáticamente equivalente al an-
una ley parabólica a lo largo del borde x = l. La distribución de todas terior, la alteración que la nueva distribución de cargas induce en el antiguo
estas tensiones es mostrada en la figura 25b. estado tensional, aunque localmente importante, resulta despreciable a
distancias grandes respecto a las dimensiones de la superficie sobre la

~---+----------+---x
- --- --- - -
i:-L t
+
cual han cambiado las fuerzas. Por ejemplo, en el caso de flexión simple
de una barra (Hg. 22) cuyas dimensiones transversales son pequeñas
comparadas con su longitud, la ma¡lem en que se ílplique el momento
¿ t

----
I t flector exterior int1uye en la distribución tensional que se produce en
la vecindad de los extremos, pero no en aquella correspondiente a sec-
( ~I ciones distantes, para las cuales· coincide prácticamente con la dada por
:r la solución a que se refiere la figura 22.
:r (a) (6) Lo mismo ocurre con los esfuerzos axiales. La distribución de tensiones
FIG.25 depende de la forma en que se aplique la carga, solamente en las zonas
próximas a los extremos. En las secciones alejadas la distribución de ten-
Puesto que la ecuación (a) es lineal, la suma de varias soluciones de siones es prácticamente uniforme. Algunos ejemplos ilustrando la validez
ella es también solución. Podemos, por lo tanto, superponer las solu- de este aserto y mostrando la rapidez con que la distribución se hace uni-
ciones elementales que hemos estudiado y llegar a nuevas soluciones de forme serán presentados más adelante (§ 23).
interés práctico. Más adelante este principio de superposición será usado
varias veces. 19. Determinación de los desplazamientos. Una vez deducidas
las componentes de la tensión a partir de las ecuaciones anteriores, las
18. Principio de Saint-Venant l • En el párrafo anterior se estu- componentes de los desplazamientos se obtienen mediante la ley de Hooke,
diaron distintos casos referentes a placas rectangulares, llegándose a la ,. ecuaciones (3) y (6). Los desplazamientos, u y v, se obtienen entonces
solución exacta de las mismas, mediante sencillas expresiones de la función a partir de las ecuaciones
de tensión $. Estas soluciones satisfacen todas las ecuaciones de la elas- Bu au av
ticidad, pero su exactitud está condicionada a que las fuerzas superfi- Bx = e:::, ay + ax = 'Y=v (a)
ciales se distribuyan de una determinada forma. En el caso de flexión
simple de la figura 22, por ejemplo, el momento flector debe ser producido Más adelante encontraremos numcrosos ejemplos de aplicación de estas
por tracciones y compresiones que, actuando sobre los extremos, sean ecuaciones, cuya integración en cada caso pal1:icular no pr.esenta difi-
proporcionales a la distancia al eje neutro. De otra parte la s~jeción, si ~ultades. Se ve en seguida que las componentes de la deformación no
existe, de la extremidad de la pieza, no deberá influir en la deformación . c!lmbian si añadimos a u y v las funciones lineales
de la superficie plana que la limita. Si tales condiciones no se cumplen,
esto es, si el momento flector se aplica de una manera diferente, o si la
Ul = a + by, VI = e - bx (b)
sustentación impone a la sección terminal otros esfuerzos, la solución en las que a, b y e son constantes. Esto significa que las tensiones y de-
dada en el § 17 deja de ser exacta. formaciones no determinan completamente los desplazamientos y que a
La utilidad práctica de dicha solución, sin embargo, no está limitada los causados por las deformaciones internas pueden añadirse otros, aná-
a, caso tan especial sino que puede aplicarse con suficiente exactitud a logos a los que experimenta un cuerpo rígido. Las constantes a y e de-.
casos de flexión en los que las condiciones en los extremos no son riguro- finen una traslación y la b un pequeño ángulo de giro del cuerpo rígido
. . I Este prl~clp\O flle ",tllbleCldo por Samt-Venant en su famosa memoria sob,.e la torsIón:
alrededor del eje z: .
Mem. raval/I. elrauger., vol 14.1855. Su relaCIón con el pnnClplO de con.ervución de la energla
En el § 15 se demostró que para fuerzas más'icas constantes la distri-
será dIscutida más adelanle (§ 47). bución de tensio.~es es la misma para estados tensionales planos que para
j:

I1
!I
!I
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 59
58 nORIA DE LA ELASTICIDAD

estados de deformación plana. Los desplazamientos, sin embargo, son que la fuerza actuante sobre los bordes y = ± e sea nula es nece-
~Iisi:intos, dado que para el primer caso las componentes de la deforma- que
ción que figuran en las ecuaciones (a) vienen dadas por

E", = E1 (<1" - /I(f'1/), EII = E1 (0"1/ - /lIT,.),

mientras que para el segundo caso de defonnación plana las componentes


de la deformación son
cumpla la condición de que en el extremo cargado la suma
Ez = El1 [O"", - 11(0"" + 0'.)] = E1 {Cl - v2)0".. - 11(1 + 11)0'1/] tangenciales sea igual a P se ha de cumplir quel
= El1 [(f'1/ 1
1I«(f'= + O'.)J = E [(1 - v2)0"1/ - 11(1 + /1)<1,.]
EII

1
-
- fe T",,' dy fe (b2 -
-e
=
-e
~
e
y2)· dy = P
'"(=11 = G.T:;v

3P
Se comprueba fácilmente que estas ecuaciones pueden obtenerse de las b2 = 4c
anteriores, para estado tensional plano, sin más que sustituir E, en estas
últimas, por E/(l - p2) Y p por '1'/(1 - y). Estas sustituciones no alteran Sustituyendo los valores obtenidos de d y b2 en (a) se obtiene
G que es Ej2(1 + v). Al estudiar algunos problemas especiales se indicará
3P
el procedimiento de integración de las ecuaciones (a). - "2 ca xy, (f'" = O

20. Flexión de una pieza en voladizo 1 con carga en su extremi-


dad libre. Sea una pieza en voladizo, de sección rectangular delgada,
7=11 = _ 3P
4c
(1 _!t\
cJ 2
,
"!
que supondremos de anchura unidad, flectada por la acción de una fuerza
aplicada en su extremo libre (fig. 26). Sobre los bordes superior e inferior
.: Y. advirtiendo que 2/3 cf! es el momento de inercia 1 de la sección trans-

¡
.. ·:Versal de la pieza tenemos
l

:0 ~
Pxy
- T' 1]"" = O
'c (b)
p PI 2
.'-t- T=u =- 1 2" (c - y2)

Flc. 26 coincidencia de esta solución con lu deducida de forma elemental en


no actúa ninguna carga, mientras que sobre el extremo correspondiellte los tratados de resistencia de materiales es completa. Debe advertirse,
a x = O se distribuyen fuerzas tangenciales de resultante P. Tales con- .. sin embargo, que ella es exacta tan sólo cuando las fuerzas tangenciales
diciones pueden ser satisfechas mediante una combinación apropiada sobre las extremidades se distribuyen siguiendo la ley parabólica de las
de un estado de esfuerzo cortante simple y de las tensiones dadas por las i:e~siones tangenciales '=" y las fuerzas normules en el empotramiento son
ecuaciones (e) del § 17, representadas en la figura 24. Sumando la tensión proporcionales a: y. Si las fuerzas sobre los extremos se distribuyen de otra
tangencial "1/ = - ba y las tensiones (e) se tiene manera, In distribución de tensiones (h) no es una solución correcta en los
extremos de la pieza, aunque sí lo es, en virtud del principio de Saint-
(f'= = d.:cy, (f'u =O :. Venant, en las secciones transversales alejadas d~ los mismos.
7=11 = -
b2 d~.
-"2 y- (a)
I El s'gno menos, precediendo a la integral, provi"ne de la regla de signos· dada para las
tensiones tangencial~s. L. tensión <..ven el extremo x = O es positiva si se dirige ·huc.. arriba.
I N. del '1: También recibe el nombre de ménsula.
60 'l'EOlIlA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 61

Consideremos ahora los desplazamientos' correspondientes a lus ten- sustituidas en expresiones halladas para u y v conducen a:
IilS
siones (h), Aplicando la ley de Hooke se deduce que: . pz2y' vPy. P y3
Bu If", Pxy élv VU'"vPa;y 'U = - 2EI - 6EI +
61G ey g + +
E", = Bx = E = - El' Eu = oy =- E = El (e) vPxy2 Px. (g)
Bu P )
V = 2EI +
BEl dx h + +
7"", = ay + Bu
Bx =
r.",
7J = - 2IG (c
2
- y2 Cd)
constantes d, e, g, y h pueden ser determinadas ahora mediante la
Las cIJmponeJltcs U y v de los desplazamientos se obtienen integrando (e) y mediante las tres condiciones de vínculo, necesarias para
lHS ecuaciones (e) y (d), Integrando (e) tenemos la expresión; ,,.,,np.,rttr que la viga pueda moverse como un cuerpo rígido en el plano
Supongamos que el punto A, baricentro de la sección transversal
Px2y vPxy2
u = - 2EI + f(y), v = 2EI + h(z) "' .... 'en;I''''' esté fijo. Entonces II y V son nulos para x = 1, y = O Y de las
(g) se deduce
donde 1(1') y /¡(x) son funciones de y y dc x desconocidas. Sustituyendo
estos valores de u y v en la ecuación (el) se llega a: Pl3
g = O, h=---dl
6EI
_ Px 2 + df(y) + vPy2 + df¡(x) = _ ~ ( ~ _ 2)
~urva de deflexión se obtiene sustituyendo y = O en la segunda de las
2El dy 2El dx 2IG e y
En esta ecuación algunos términos dependen solamente de x, otros sola-
(g). De esta manera: i
mente de y, y uno es independiente de ambos. Indicando estos grupos Px 3 Pl3
(h)
I
por F(x), G(y) y K tenemos: (v)v_o = 6EI - 6EI - del - x)
1
G( ) = rlf(y) + vPy2 _ Py2 :iJa determmación de la constante de esta última ecuación exige el empleo
Y dy 2EI 2lG la tercera condición de vínculo, la cual elimina la posibilidad de una
de la viga en el plano xy alrededor del punto fijo A, Esta sujeción
Ir
realizarse de varias fonnas. Consideremos dos casos: 1) Que un
y la ecuación puede escribirse to del eje de la viga esté fijado en el extremo A. Entonces la con- !í
,
de vínculo se escribe:
+ G(y) = K
F(x)
Tal ecuación implica que F(x) es una constante d y G(y) otra e. De no ser (~v)",=¡ =
vX 1/=0
O
.
(Je)
!!

así F(x) y G(y) variarán con x e y y variando la x o la y solamente, la igual-


dad anterior dejaría de cumplirse. En cOl1secuencia
Que se fije un elemento vertical de la sección transversal en el punto A.
misma condición queda entonces
(e)

y ( BU)"'_1
ay 1/=0
= O . (l)
(:
df(y) = _ Py2 + Py2 + i\
dy 2EI 2lG 6 . En el primer caso, la ecuación (h) permite escribir ,1

Pl2 I¡
Las funciones l(Y) y ll(x) son entonces ji
d = - 2EI )1
IIt:
; y la ecuación (e) nos da '1
11
}i
Ji
¡I
,1

li
'1
1I
;I~
,';

62 PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARllS 63
TEORIA DE I.A ELASTICIDAD

Sustituyendo todas las constantes en (g) tenemos ,De la comparación 'de esta ecuación con la (n), se deduce' que debido al
,'giro de la extremidad A del eje de la pieza en voladizo (fig. 27b), su flecha
_ Px2y "PyS Py' (Pl2 PC~) : ~umenta en la cantidad
U - - 2EI - 6El + 61G + 2EI - 21G Y
(m) Pc 2 3P
"Pxy 2 Px 8 Pl2X PP 2IG (l - x) = 4cG (l - x)
V = 2El + 6El - 2El + 3El
que representa, pues, el llamado efecto de las fuerzas cortantes
La ecuación de la curva de deflexión es la flexión de la viga (flecha adicional).

(n)

que da para la flecha del extremo cargado (x = O) el valor Pf/3EI, que coin-
cide con el valor que se deduce en los textos elementales de resistencia
de materiales.
Con .el fin de mostrar 'la distorsión de las secciones transversales pro-
ducida por las tensiones tangenciales consideremos el desplazamiento ¡¿
del extremo empotrado (x = l). Las ecuaciones (m) nos .dan para dicho
plano:

{bJ
ppya Py2 Pc2

- 2EI + 21G - 21G (o) Flc.27

Pc2 3P
-2IG= -4cG práctica las condiciones en el empotramiento difieren de las
rlm,rn.m""en la figura 27. La sección fija no es libre en general para
y la fonna que la seCClOn transversal adquiere como consecuencia de y la distribución de fuerzas en este extremo es diferente de
esa deformación es la indicada en la figura 27a. Debido a la tensión tan- en (b). Esta solución es, sin embargo, satisfactoria para piezas eQ
gencial .",y = - 3P/4c actuante en el punto A, el elemento de sección relativamente largas, en puntos distantes de los extremos.
transversal centrado en A, gira en el plano xy alrededor del punto A el
ángulo 3P/4cG en el sentido de las agujas del reloj. 21. Flexión de una viga uniforInemente cargada. Consídere-
Si en lugar de fijar un elemento horizontal del eje se considera reali- una viga de sección rectangular estrecha y de anchura unidad, apo-
zada la fijación de un elemento vertical de la sección transversal (fig. 27b), e,n sus extremos, sometida a flexión bajo una carga uniformemente
se tendrá, de acuerdo con las ecuaciones (e) y la primera de las (g) de intensidad q, como indica la figura 28. Las condiciones en
: bordes superior e inferior son
p¡a
e = 2EI (7'=v)u-±,c = O, (qu)u=+c = O, (qll)u--c = -q (a)
los extremos x = ± 1
Sustituyendo en (e) se deduce
¡O-o 7':&11 dy = =t=rzl, f"-o q::dy = 0, to u~ydy = O (b)

dos últimas ecuaciones (b) establecen que sobre los extremos de la


y remplazando en la segunda de las ecuaciones (g) llegamos a no actúa ninguna fuerza longitudinal ni dingún par flector. Las
(a) y (b) pueden ser satisfechas combinando ciertas solucio-
(r) polinómicas,.fle las obtenidas en el § 17. Empecemos con la solución
64 TEORIA DE LA ELASTICIDAD I'ROBLEMAS !llIlIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 65

(g) ilustrada por la figura 25. Con el fin de suprimir los esfuerzos de ·'.t>'<UtF.ITlO". Con el fin de que los pares que actúan sobre· éstos se anulen, su-

tracción que actúan sobre el borde y = e y los esfuerzos tangenciales . :perponemos a la solución (á) una flexión simple 0-. =- da' y, !l" = TTV ","' O,
existentes a lo largo de las caras y = ± e superponemos una compre- indica la figura 22, y determinamos da imponiendo la condición de
para x = ± l .
r-q1

:JI
;)C

1 ~fl .2
f e
-o
o-",y dy = fa [- ~~
-d 40
(lZY - ~3 iJ;¡) + daY] y dy = O

(a) (ó) {o}


FJG.28
u = - ~ i. (X2". _ ~3 ya) + 4~ go (~e - ~) y
'" 4 ca ¡¡ 5
2
sión simple !ly = a., de la solución (b), (§ 17) Y las tensiones !ly
y 7:,,, = -bax .(fig. 23). De esta forma se llega a las expresiones:
= baJo
q
= -21 (l2 _ x 2 )y + -21q(2-3 ya - 2)
- c7J
5
(33)

2
(J: = d 6(x y - -¡y3) primer término de esta expresión representa las tensiones que se de-
Uy = td5!J3 + bay a. + (e) de la aplicación de la teoría elemental de la flexión, correspondiendo
"':y = -d 6xy' - ba:!: segundo a una corrección. Esta corrección independiente de x es pe-
comparada con la máxima tensión normal de flexión, siempre
Teniendo en cuenta las condiciones (a) resulta:
la luz de la viga sea considerable en relación con su altura, de manera
-d 5e' - ba = O en vigas de ese tipo, la teoría elemental de la flexión proporciona
¡dle l+ baO + a. = O valor suficientemente exacto pura las tensiones o-z. Es de advertir
'la expresión (33) es una solución exacta sólo si las fuerzas normales
-ldlc a - bac + a. = -g actúan sobre los extremos x = ± 1 se distribuyen según la ley
de donde

/la = -~, ba = 43qe


--J
. ds = - 4&
3 q

es decir, si las fuerzas normales en los extremos son iguales a los valores
Sustituyendo en las ecuaciones (e) y advirtiendo que 2c'j3 es el momento
· de (J,c para x = :1:: 1 deducidos de (33). Estas fuerzas tienen como resul-
de inercia 1 de la sección transversal rectangular de anchura unidad, · tante un par y una fuerza nulos y, por 10 tanto, según se deduce del prin-
se obtiene: 'cipio de Saint-Venimt, podemos despreciar su influencia sobre las ten-
· siones en puntos alejados de los extremos, para distancias, por ejemplo,
·del orden de la altura de la viga. Para tales puntos y cuando las fuerzas X
. s'on nulas, la solución (33) puede considerarse como suficientemente
(d) exacta.
La discrepancia entre la solución exacta dada por (33) y la aproximada
expresada por el primer término de (33), proviene de que en el caílculo
de esta última, se supone que las fibr-as longitudinales de la viga se en-
Puede comprobarse fácilmente que estas componentes de la tensión sa- ·cuentran sometidas a' una tracción simple. La soiución (d), sin embargo,
tisfacen no sólo las condiciones (a), existentes en los bordes longitutli- '. muestra que entre las distintas fibras se ejercen unas tensiones de com-
nales, sino también las. dos primeras condiciones (b), que se dan en los . presión Uy • Esta~ tensiones son las responsables del segundo término
5 -TOOIIIA Da LA FLASTtClDo\D
TEORIA DE LA ELAS'rICIDAD PUOBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 67

de correcclOn de la solución (33). La distribución de esas tensiones de . ~uponiendo nula la flecha del punto central de los extremos (x = ± l)
compresión U v n lo largo de la altura de la viga es mostrada en la figura deduce .
28c. En cuanto a las tensiones tangenciales 'l'''1I' la tercera de hlS ecuaciones
(d) da su distribución en una sección transversal de la viga, la cual coin-
. Ii = ~ ql'
24 El
[1 +12 fl2 (~+ ~)]
5 5 2 (34)
cide con la que se obtiene aplicando la teoría elemental.
factor que precede a los corchetes, es el valor que se obti~ne para la
Cuando la carga que se aplica a la viga es su propio peso en lugar de la fuerza aplicando la teoría elemental, bajo 'el supuesto de que las secciones
distribuida q, la solución debe modificarse haciendo q = Zegc en (33) y en las dos . de la viga permanezcan planas durante la flexión. El segundo
últimas ecuaciones de (d), y añadiendo las tensiones
dentro del corchete, representa la corrección que corresponde
a", = O, a. = poCe - U), T.~ = O (e) . . llamado efecto de la fuerza transversal,
Esta distribución de tensiones puede deducirse aplicando las ecuaciones (29) a: ..... Derivando dos veces con respecto a x la ecuación (f) de la curva de
: deflexión, encontramos para la curvatura la siguiente expresión
1> = lpg(cz' + y'/3)
representando, por tanto, .un. posible estado tensional producido por el peso y las
~uerz.as de contorno. Sobre el borde superior y = - e tenemos (Yu = 2egc y en el ( d2¡;)u-o = ...!l..
d:¡;2 El
[lZ -2 x + c2 (i5 + ~)]
2

2
(35)
lIlfenor y = e, rr. = O. De esta forma cuando las tensiones (e) son añadidas a la
sol,:ción anterior, en la que se 'ha hecho q = 2agc,.la tensión sobre umbos bordes 'lue nos permite establecer que la curvatura no es exactamente propor-
horIzontales es cero, y la carga aplicada a la viga consiste simplemente en su peso.
. .cional al momento flector 1 q(l" - x 2)/2. El ténnino adicional encerrado
Los desplazamientos u y v pueden ser calculados mediante el método por los corchetes tiene el significado de una corrección que debe aplicarse
indicado en el § 20, Suponiendo que el desplazamiento horizontal del bari- a la fónnula elemental corriente. Un estudio más amplio de la curvatura
.~e las vigas lleva a la conclusión~ de que la corrección indicada por el
centro de la sección transversal media (definido por x = O, Y = O) sea
nulo y que el vertical sea igual a la flecha iJ se deduce de (d) y (33). :·término que incluye la expresión (35), puede emplearse en todos aquellos
::c~sos de carga de intensidad variable en fonna continua. En el § 36 se
. el efecto de la fuerza transversal sobre la deformación de una viga
u= 2~I [ (l2Z- i) y + z (i yS - ~ ~2!J) + vz (j 1l - c2y + ~ ca) ] sometida a flexión bajo una carga concentrada.

= - 2~I {~ - C~2 + ~ c y + (LZ _ ~ + ~ _ ~ C


3 2y2
Un cálculo elemental del efecto de la fuerza transversal sobre la curvatura de
IJ V [ X2) ]} la curva de deflexión de las vigas ha sido hecho por Rankine J en Inglaterra y Gra-
. shof· en Alemania. Considerando como deformación transversal máxima en el eje
- 2~1 p;2 - ~; - k + (1 + ~ v)
C2X2 2 2
C X ] +Q .; neutro de una viga rectangular de ancho unitario, bajo la acción de una fuerza trans-
. versal Q, el valo~ 3/2 ( 2~G ), el correspond1n~inc).remento de la curvatura está
A la vista de la expresión de u puede deducirse que la línea neutra de la .. dado por su derIvada respecto a x, o sea, 3/2 \ 2cG • De acuerdo con el cálculo
viga no pasa por su eje ya que ¡) causa de la tensión compresiva
·.~Iemental, se llega a la siguiente expresión para la curvatura corregida:
q I1
El' -2-.-
- z' a i = Elq [12~.+
+ 22cG - e'(l + .)
:1;' ]

el eje directriz está sujeto a una tracción a la que corresponde la deforma- Se observa que el valor de la corrección, así obtenida, es exagerado en comparación
ción ¡¡q/2E, teniéndose por lo tanto . con el de la expresión (35) '.
El término correctivo de la ecuación de la curvatura (35) no puede atribuirse
_7Jqz
()
U u-o - 2E l Esla observación es debida a K. Peorson, Quart. Jour. Math" vol. 24, pág. 63, 1889.
, \'éase el trabajo de T. V. Karman, Abhandl. aerody/lam, Inst. Tech, Hochschule, Aachen
vol. 7, pág. 3, 1927. '
De la expresión de v se deduce la ecuación de la curva de deflexión , Rankine, Appliud Mecha"ics, 14.' edición, pág. 3#, 1895.
., Grashof, Elastizitat wld Festigkeit, 2.' edición, 1878. :
(V)II_O = q [l2X~
o - -2EI - - -5 C2X2 +
-2 - x'
12
1 (1)]
1 +-
2
V C2;¡;2 (f)
, Una mayor aproximación se consigue mediante consideraciones energéticas, Véase
S. Tirnoshenko, StrlnJ/f.th of Materials, 2.' edición, yol. 1, pág. 299,
68 TEORlA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS IIlDlMllNSIONALliS EN COORDENADAS RECTANGULARES 69

tan sólo al esfuerzo cortante, pues deriva del hecho de que las tensiones de com- Estas tensiones, aunque distintas de cero, son muy pequeñas y además
presión ". no están uniformemente distribuidas en I~ alt~~a de la. vig~. El ensanc~a­ u resultante es nula, por lo que a efectos prácticos podemos considerar
miento lateral que estas tensiones producen en la dueCClon x, dlsmmuye de arrtba que el extremo superior de la estructura se encuentra libre de fuerzas
a abajo, de manera que se origina una curvatura inversa (de convexidad, hacia.arriba). ..' exteriores.
Si a esta curvatura se une el efccto de la fucrza transversal, quedara exphcado el
término correctivo de dicha ecuación. . El efecto del peso de la estructunl sobre la distribución de tensiones
tenido en cuenta sin más que añadir a la exptesión de (f~ en las ecuacio-
22. Otros casos de flexión de vigas bajo cargas continuas. (a) el término -q¡x, donde q¡ es el peso específico del material de
Aumentando el grado de los polinomios que representan las soluciones 'la estructura. La solución así obtenida ha intentado aplicarse al cálculo
de los problemas bidimensionales (§ 17), podemos resolver diversos casos 'de las tensiones existentes en las presas de mamposteria de s'ección rec-
de flexión de vigas sometidas a cargas que varían de un punto a o.tro con tangular. Debe advertirse, sin embargo, que tal solución no satisface
continuidad¡. Tomando, por ejemplo, una solución en forma de poli- jas condiciones existentes en la sección de asiento del muro. La solución
y (b) es exacta si las fuerzas actuantes sobre esa sección se reparten como las
·tens:iones U x y T",y dadas por (a). En los casos reales la base de la presa está
trabada a la fundación y las condiciones existentes son distintas a las que
k solución que estudiamos exige. De acuerdo con el principio de Saint-
Venant podríamos deducir que el efecto de dicho vínculo sería desprecia-
a distancias grandes de la base pero dado que las dimensiones trans-
de una presa de mampostería no son despreciables frente a su al-
tura, la influencia que consideramos no puede ser despreciada 2•
FlG. 29 Tomando como función de tensión un polinomio de séptimo grado
nomio de sexto grado y combinándola con las soluciones dadas en el § 17, obtenerse la distribución de tensiones en una viga sometida a una
podemos determinar las tensiones que origina una presión hidrostática de caLgas que obedezca a una ley parabólica.
en una estructura vertical empotrada, como la representada en la figura 29, En el caso general de una distribución de carga dada por una ley de v.ariación
y demos t rll.r que el siguiente sistema de tensiones satisface todas las .wu,,'''u'~ de intensidad q (fig. 30), la distribución de tensiones en cualquier sección
condiciones de equilibrio en las caras longitudinales trans'vc¡'sal alejada de los extremos de la viga (a una distancia mayor que la altura
puede ser calculado en forma aproximada mediante las siguientes ecua-
(1z = q:;r + 4~3 ( -2xy3 + ¡ 2
e x y)
= My + q (lt _.!1t)
(ya
-"'2 + ªx 40
q:u 3Y) (a)
a'.
I 2e' lOe
(1u = 3 - 40 "'v = _!J.2 + 'l (!!JI
4e
Y')
_4c' (36)

7'>11 = 38q~2
(l
(0 2 - y2) - Sªs (e' - y4)
o
+ 4~3 ~ e2(e 2 - y2) T.V = -s. (0 2 - y')

En estas expresiones q es el peso específico del fluido, de manera que la


intensidad de la carga a la profundidad x es qx y la fuerza transversal las que lIti es el momento flector, Q la fuerza trunsversal, calculada en la forma
. y q la intensidad de la carga en la sección transversal considerada. Estas
y el momento flector a la misma profundidad qx f2 y qx f6. Como puede
2 3

advertirse fácilmente, los primeros términos de las expresiones de (J", y • M. Levy, Compt. relld., vol. 126, púg. 1235, 1898.
T.. son los que para estas tensiones dan las fórmulas elementales. ~ El problema de las tenSIones que se producen en lAS presas de mampostería tIene gran
v En la parte superior de la estructura (x = O) la tensión normal es nula práctICO y ha s.do tratado por dIversos autores. Véase K. Pen,"oo. On sorne Dlsrcg'lfdt:d
m the Stablltty of Mnsonry Dams, en Drapers' Co. Rescare/¡ Mems., 1904; K. Pearson
y la tangencial viene dada por; An Experimental Stut.ly of the Stresses In Mnsonry Dams, en Drapers' Co. Re-
¡'ldems., 1907. Véanse tambIén los tf'abajos de L. F. Rlchardson, Trans. RoJ'. Soco (L,.n-
T = _.!L (c4 - y4) +.J....~ C2(02 _ y2) vol. 210, serlC A, pág ..307, 1910; Y S. D. Cal'othels, Proc. ~CJY. Suc., Edmburgo, vol. 33,
>fI 803 4035 1913. l. Muller, PllbliCilt;OIlS du laboratnire de pltata-élai!icité, Zurlch, 1930.F,llunger,
Wachsehr. Ólleni/. Eaudlenst, 1913, Heft, 45. K. Wolf, Sttzber. Akad. WISS. Wlell,
I Véunse los trabajo. dc T.mpe, loe. cit.; W. R. Osgood, J. Researeh Natl. Bur. Standards 123, 1914.
vol. 28, pág. 159, 1942. I F. Seewald, Abltandl, "erady"a",. Irlsl. Teeh. Hnschschule, Aachell, vol. 7, pág. 11, 1927.
70 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PItOBLIlMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 71
ecuaciones concuerdan con las obtenidas anteriormente para una viga sometida a , La función de tensión ·resulta entonces
una curga uniforme (§ 21).
,h sen ax(C¡ ch ay + C. ~h ay + C.y eh ay + C,y sh ay) (d)
las eomponéhtes de la tensión están dadas por
e
t1r .=
. "'y
t
~2 = sen ax [CI(I' ch rLy + C.,,' sh <lJ' -1- CJ /l(2 sh uy
-1- ay ch ay) -1- ('¡u(2 ch "y + ay sh ay)]
= ~:t = -a" sen ax(CI ch ay + C, sh ay + Coy ch ay -1- C,y sh ay) (e)
y
Flo.30 .u = - ox
o' ay
tP = _. acos ax[Cla sh 'jY + Cl(1 eh ay + C.(ch (ly
Si la carga de intensidad q, que actúa de arriba hacia abajo, está distribuida a lo + "y sh ay) + C,(sh "y + ay ch <lY)]
largo del borde inferior (y = +c) de la viga, la expresión de las tensiones se obtiene
a partir de· (36) añlldiendo una tensión de tracción 11. = q. Tenemos entonces:
. ~~n~!derando el caso p~rticular .de .un~ viga simple de sección rectangular sujeta
. la aeclOn ~e fu~rzns. vertICales, ~Jstt1~uJdas en fonna continua a lo largo de sus
super!or e mferIor y cuyas mtensldades sean A sen ax y B sen a.:t', respectiva-
<1' - MlI n (X. _.! 11)
+ "2& La fIgura 31 corresponde al caso particular en el cual a = 411fl e indica
• - 1 10 e

<1'. =2q +!l (SY


40 - 4ci Y') (S6')

.,.•• = ~ (c' _ y')

23. Solución del problema de la elasticidad plana por medio de una


serie de Fourier. Como se ha visto, el problema de la determinación de las
tensiones que se originan en una viga de sección rectangular estrecha, bajo la acción
de una carga distribuida en forma continua a lo largo de la misma, pucde ser re-
suelto bajo.la forma de WI polinomio. Si la carga es discontinua deberá emplearse,
para llegar a la solución, una función de tensión que tenga la forma de una serie FIG. 31
trigonométrica l. La conocida ecuación
él'</> o'</> él'</> los valores positivos de A y de B. La distribución de las tensiones en este
8Z,+2 a;¡;2éJ y 2+8y' =0 (a)
obtenerse mediante las ecuaciones (e). En cuanto a las constantes de
C" ...• C" pueden detenninarse teniendo en cuenta las condiciones
puede ser satisfecha adoptando para la función (; la forma en los bordes superior e inferior de la viga (y = ±c). Estas condiciones son:
m1l'z
(b)
. :para y = +c
</> = sen -¡- I(y)
't"J:!I = 0, <T. = --B sen ax
en la cual11l es un número entero y f(y) una función de y únicamente. Remplazando (f)
este valor en la ecuación (a) y empleando la notación m1lfl = a. se llega a la siguiente
T:: V = O, (fu = -A sen aX
ecuación para la determinación de 1(Y):
sustitución de estos valores en la tercera de las c·cuaciones del grupo (e) se llega a
a'f(y) - 20<'1" (y) + fIY(y) = O (e)
sh (lC -1- C." ch <xc + C.(ch ae -1- /le sh <le) + C,(sh ae -1- ae ch "e) = O
La integral general de esta ecuación diferencial lineal de coeficientes constantes es
C,/l ch ae + C,(ch (le +/le sh /le) _... C,(sh ae + ae ch "e) = O
fey) = C I ch ay + C, sh ay + Ca)' ch ay +'.C,y sh ay
1 La solución del problema de las vigas mediante series trigonométricas fue introducida
por M. C. Ribiere en su tesis .Sur divers cas de la f1exion des prisme. rectangles', Burdeos, -c. a eh (le
1889. Véuse también el trabajo del mismo autor publicado en Campe. rmil., vol. 126, pógs. 402- C,
-104 Y 1190-1192. Posteriormente, L. N. G. Filon, Phil. Trarrs., serie A, vol. 201, pág. 63, chae+acshae
1'103, ha realizado nuevos progresos en la aplicación del método. Diversos casos particulares (g)
C , = -C, ashrL/."
h.m sido estudiados por F. Bleich, Bauingenit:Ur, vol. 4, pág. 255, 1923. sh etC+ uC ch ae
mORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COOltDIlNAlJAS RECTANGULARES 73

Si en \~ segunda ecuación del grupo (e) se tiene en cuenta las eondicumes corres- :. Pam vigas muy largas ae igual u m~c/I, es pequeño, siempre que el número 11/

pondientes a las caras y = ±e, encontramos: . de 01lUIIS no sea grande. 1':n este caso, si se sustituye en (1) resulta:

,,'(e, eh ae + C. sh ae·1 Cae eh ue -r e,e


sh "e) = B sh O/e = <l/e + (llIe)' + (O/C)6 + . . . . ·oh (l/e .. 1 + (llIe)" + ("'0)4 +
6 120' 2 24
a'(C, ch (le C, sh ae C3 e eh ue -1 C,e sh (le) -= A .
Y despreciando los infinltésimos de orden superior" (I1C) , se llega u
Por suma r resta de estas ecuaciones y teniendo en cuenta ecuacioncs (g) se llega a
¡¡lS
fT. = -A sen O/a; (1 - (~~')
C = A + B,
sh ae -<- /le ch ac
sh 2"c + 2"e
I
a' aquí resulta, que pu.ra, valol'Cs pequeños de ae, la distribución de las tensiones
.I1-B ch ae + "csh ue plano mediO es pract,cam~nte la misma que la que corresponde a ambos cantos
C'.=--r' sh 2tlC - 21le (y ,= ±c) de I~ viga y, por tanto, que las prcsiones se transmiten a
(h) viga o placa 8111 modificación apreciable, siempre que ellas no varíen
IX eh ue . . riípi,darnelnte a lo largo de las caras.
A - B
Ca = --,,-.-'
sh 2ac ... 2ae
e, = _ A -+- B, _~--=uc..:s:..:h"--,,ctc=-e,,--__
.. u" . sb 2ILe + 2{le

y finalmente, sustituyendo en las ecuaciones (e) se obtiene para las componentes


de la tensión, las expresiones siguientes
(ae ch <le - 5h (le) ch a,. - a)' sh ay sh ue 'sen ux
a, = CA + E) sh 21lc .¡. 21/e

_ CA _ E) (ae sh ae - ch (le) sh riv - !.Ly ch ay eh ae • sen ux y


sh 2ae - 2"e FIC. 32
(f, = _ (A + E) (ae eh ae + sh ae) eh {Ir uy sh ay sh ae 'sen aX
E',l este caso ~as te~sion~ transversales r '" son muy pequeñas y se suman, en
sh 2ac + 2ae (k) nutades supenor e mferlor de los bordes verticales, a las pequeñas resultantes
+ (A _ B) ("C sh lAC + eh /le) sh ay - ay eh ay ch (le 'sen ux se requieren para equilibrar la cqca.a diferencia entre las presiones que se ejercen
sh 2"o - 2ILc los bordes horizontales (y = ~.l:c). y el plano medio (y = O),
_ (A 1- B) (le ch (1' sh (IV - Ily eh 'Iy sh uC . En el cas? más. gen~ral, la distribución de lna cargos verticales a lo largo de los
. cos "x b.or~es superIOr e mfenor de una viga (fig, 32) se puede representar por las series
sh 2uc t 2ae
SigUIentes 1:
B) ~ sh oe ch "y. "}' sh '"V eh u( . cos al.' Para el borde superior
+(A sh 21lc - 21le .,
La~ tensiones que dan las expresIones (h) satisfacen a las condicIOnes consig-
nadlL~ en la figura :31 en lo que respect~ a las caus ;)' = ±e. En las extremidades
qu = A, + ¿
'"
"/1-=
A"
1
sen ~+
1 ¿
m-l
A' m"z
.. cos-r

de la viga, .\' = O y.,,< = l, las tensiones 11, son nuluR y sólo existe la tensión tangencial Para el borde mfcrlor (m)
"w' Est.'l tensión está representada por dos términos, como se ve en los ecuaciones (h): .,
el primer tém1ino es .proporcional a A + B y representa las tensiones que para las
mitades superior e inferior de la cara externa, son de igual valor, pero de signos q¡ = B, + LB.
m=l
sen ;:t.E
1
+ LB'
m=l
m,r,¡;
'" coa -1-
contrarios, La resultante de estas tensiones en la cara extrema es cero. El segundo
término proporcional a A - E, tiene resultantes en las extremidades de la viga, .: l.,os términos constantes A., Bo representan una carga uniformemente distribuida
que equilibran a las cargas aplicadas a las caras longitudinales 6' = :1- e). .sobre la viga, c?so que se ha visto en ~l § 21. La,s tensioncs originadas por los tér-
Si estas curgas fueran iguales para ambas curas, el coefiCiente A sería igual a B q~e contIenen ~e~ (m.:;rx!lJ sc obtienen med,ante la suma de las soluciones (h),
y las reacciones en los extremos desaparccerlan. Para tratar con más detalle estc tenSIOnes que ongman los términos que contienen cos (nmJl:/l) se determinan
caso particular, supongamos que la longitud de la viga sea grande en comparación . . illte~'cambiando en las ecuaciones (h) sen 1/...... por co~ ~ y viceversa y
con la altura, De acuerdo con la segunda de las· ecuaciones (k), las tensiones norma- cambiando el signo de r.""
les 11" que actltan en el plano medio, :v = 0, de la \'iga, están dadas por
, Pm;, ~studiar las s~r¡es de Fauner véase Osgood, .Ad'L'allcea Culculzu, 1928; o B}'crly,
(lech r.LC 1- sh ae sen llX SCI'ICS atld SplterlCal HartnolUCs, 1902; o ChurchIlI, Faune, Series ami Balll1dary Value
-2A (l)
5h 2ac -+ 2ac Proble/lls, 1941, '.
74 nORIA DE Lt\ ELASTICIDAD
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS RECTANGULARES 75
El caso representado por la figura 33 nos penn'itirá desurrolIar W1 ejemplo ilus- " \l,Iffibién revela que en las caras superior e inferior de la viga las tensiones son con-
trativo de este método general de cálculo de las tensiones quc se producen en las "slder.ables en tanto qUe en su parte"media prácticamente no actúan tensiones ten-
plncas rectangulares, Para este caso en que la carga es simétrica, los ténninos que , genclales.
contienen sen (7n1tx/f) desaparecen de lns expresiones (m) y los coeficientes A. y Ano'
se obtienen como de ordinario m1rft
nP
:L~r-
r' J

a 2qsen-l-
Ao = Bo = A",' = B",' =}
-G g cos dz = 7m.". (n)

Los términos A. y B. representan una compresión uniforme igual a qall de dirección y.


Las tensiones que corresponden a los ténninos trigonométricos se obtienen intercam-
~óll
1.
b
)h;n- ~c
2t
biando en las soluciones (k) sen ax por cos ax y mediante el cumbio del signo de 71", •• FIG, 35

En el problema que se ilu.tm en la figura 34 se ve que por r' . d' ,


,
hnea y =
O no su fnra
"" ntngun d i'
esp azamlento dzonc:sb e Slmetna
vertical ni nctua' 1/ .
. , . 1 I . d ' •
tenslOn tangenclII. Ja mIto supenor de la viga representa ra so re e a DIO
I -
lámina elástica apoyada sobre una base rígida perfectamente'lis~I~S, e caso (k

q
C!. 1,5
~ o P
o ~ 1.0 ~2c-
:;c Q) ,O
"'~ r-['\ I
o ~O,L
f:! o8 D
q <>
;; . ~>r-~.L/
> O O,6 O 10
l .J -z -1 O I 2 3
-*2:f
'/.1. ~ h \"b
:y Valores de x/e
O,4 1
\c·s
FICl. 33

La tensión nonnal a., única que actúa en el plano medio y


FIG,34

O, se puede ob-
o, 2 I 1/ ~=f

'"
=
tener utilizando la segunda de las ecuaciones (k): o ~=co p
m,ra m1l'c h m ..c
-z- c + h mll'c -o,2
qa
-T--;:
4q

2:
m=l
sen -¡-
--m--' sh~+2~
ll
-¡- s -¡-

Esta tensión ha sido calculada por Filon I para el caso de una faja infinitamente
m..:t
.coa-¡-
-0,4
-Op -"- ~
\ \

larga, en la cual el valor de a es muy pequeño o 10 que es lo mismo, para una fuerza
concentruda P = 2qa. La figura 34 resume gráficamente los resultados de estos -0,8 ~~~
cálculos y demuestra que ay disminuye muy rápidamente con x para reducirse a cero ~ ;...:: ¡...-- V ~)
en correspondencia del valor x/e = 1,35 Y ser entonces remplazado por una tracción. -1,0
0 0.5 1,0· 1,5 2,0 2.5 3,0 3,5
El mismo autor ha estudiado el caso que muestra la figuro 35, que es aquel en que 'P
las fuerzas P no tienen la misma recta de acción. En ese caso la distribución de los 20zo"""
esfuerzos tangenciales en la sección transversal 1m es de interés práctico; está repre- .P Y
FIG,36 FIG.37
sentada en la figura 36, la cual nos dice que para valores pequeños de la relación ble
esta distribución se aparta de la ley parabólica deducida de la, teoría elemental;
Veamos otro caso extremo, como el de una pla(;n cuya altura 2e, sea considera-
• L. N,'G. Filon, Tralls. Roy. Soco [.01tdorl, serie A. vol. 201, ¡Jág; 67,1903. El mismo pro- mayor que la longitud 2/ (fig. 37). Este caso nos servirá para demostrar
blemn fue estudiado por A. Timpc, Z. Muth. P!ty,.,k, vol. 55, pág. 149, 1907; G. Mcsmcr, con que la distribución de las tensiones en las secciones transversales se
Vargleieh."rle sp8mlUngsoptisc!te Ulltersuclllmgen .... Dissertatioll, Gotinga, 1929; F. Seewnld, a una ley de repartición uniforme, al aumentar lu distancia al punto de
Abh. aerodYllam. 111$&. Teeh. Hochschule, Aaehe1I, vol. 7, pág. 11, 1927; Y H. Bay, ¡7Igenieur- 'pllca'CICIO de las fuerzas P. Con tal objeto emplenremos l,a segunda de las ecuacio-
Archiv, vol. 3, pÁg. 435, 1932. M. Pigeoud obtuvo una solución aproximada del problema en
Compt. rend., vol. 161, pág. 673, 1915. J. N. Goodier,J. Applied MecFumics ITTans. A.S.M.E.), I El caso de una uas. n;> I.isa ~a sido .estudiado por K. Ma~guerre, lt'g. Archiv, vol. 2,
vol. 54, núm. 1S, pág. 173, 1932. estudió el problema para el caso de placa rectangular de 108,1931, Y el de una lamIna mextens,ble pero flexible embebida en un material elástico
longitud finita. en mecñnica'9c sucio., por M. A. Biot, Physics, vol. 6, pág. 367, 1935. '

,[
.76 TllORIA DE I.A ELASTICIDAD PROBLEMAS BlDIMENSIONAI.F.5 EN COORDh'NADAS RECTANGULARES 77
ncs (k) c(m cos a.x en lugar de sen ~ y las expresiones (n) para 108 coeficientes A,: .de la figura 37 para el caso en qUl:l e = 21, encontrándose que en [n sección
y B",' iguales. Resulta entonces la expresión eXIste una compresión prácticamente uniforme lo que concuerda con la
(lIe eh (JC sh (,e) el1 ay - U)' sh ay sh ue • cos /LX (P)
sh 2"e + 2ae (a)
en la cual qa = P12. Para el caso supuesto, en que 1 resulta pequeño comparado
con e, (lC es grande y puede despreciarse en el denominador frente a sh /te. Tam-
bién podemos escribir
sh /le = eh ele = hu,
P ra secciones transversules distuntes ue In parte ccntml de la plat.11 podemos tambIén
p~mcr sh "y _ eh "y - 112 fU') )' slI!<Iiruycnuu e~to. "liores en la eCLlación (/» se (!JJ ~~IIP
~ z¡
<;:s" .. _..J

~
_
_
lh~.\ II c-y=t

~lli1IlIIlllm~Wlllllllmru[Irr
"
G' = _ ~ _ ~ ~ s"211 ",a, [Cae + 1)&aC"c) - "1/8aCo - o)} cos ~ (e!
1/ l 1r ~ m
",=1
~ c-y=2l
2:'" sen~ m~
N
.
= _ 9!! _ !!1
! 11'
__1_ [n:1r (1: -
271~ •
y) + 1J E!!!:(lI- o)
e¡ coa -l-'. PIC. 38
m=l
38c. Las tensiones existentes en los puntos próxImos' ,,1 de llpliclICiólI de las
Si e - y no fuese muy pequeño, por ejemplo e - JI "> 112, esta serie es de rápida P serán estudiados en el ~ 33.
convergencia y para calcular "", solamente se necesita considerar unos pocos tér-
minos. Si tomamos entonces 24. ,Otras aplicaciones de las series'de :¡;·ourier. Caso en que la carga
conSiderar es el peso. Los problemas considerados en el § 23 se Teferíall a
sen m~a _ mZa 'i<eleUlellltoll» in.dividuales de longitud 1 o 21. Dado, sin embargo, que las senes de
constItuyen funciones periódicas, puede considerarse que las soluciones ;1
"
y ponemos 2aq = P llegaremos u <
<
.\

p
11', .. - 2i - 7
P fL. [m".
T (e - y) + 1] e~"(lI-c) cos -1- m7l'!l)

m~l
1
f-t----t---...¡
Para y = e - J, por ejemplo, se obtiene
I,
O'
u
P
= - - - -
21 /
PC----
. . o"+1 cos -..l ;1; 2.".+1
-1- -._- 2.-z
(J'" eos - / + 3.-+1
- - 3-
6 ..
&x
eos - / +
;1
J

,1
Con [os tres primeros térmmos de la serie basta para lograr una buena aproxi-
maCión, y calculando así, se obtiene la distribución de tensIOnes representada en la
figura 38b, que cuntit:'ú: ¡1~imlSmo las distnbuciones que corresponden a e - JI = 1(2 FHJ. 39
Jfl
2b
:i
J

y e - y = 2l t. La distribuci6n de esfuerzos que corresponde a una distancia de


·1
la extremidad igual al ancho de la faja es prácticamente uniforme, lo que confir- representan estados tensionales periódicos, existentes en largas cultas
maría la conclusión comúnmente establecida por la aplicación del principio de la dirección X. Tal situación se darlÍ, por ejemplo, en las vigas continuas .,'1
Saint-Venant. COIGsiste,nt,oo en II! sucesión de varias vigas «individuales. de iguales luces todas eUns '.~
En el CIISO de \lm1 faja alargada tal como la indicnda en .'11 figura 37 las tensio- cargas iguales en cada tramo. Si, como ocurre en ciertns construcciones ·í
nes 11. se transmitirán sin apenas cambiar a través de la anchura 21, supuesto que lo IlU1UIl/,lun armado, la viga es esellcialml!nte un muro soportado en puntos sepa-
·1.JI
velocidad de variación a 10 largo del borde no sea grande. A causa de esto, sin em- (regularmente) una distancia comparable 11 ~1I altura (fig. 39),10 teoría elementdl
bargo, la solución obtenida requiere alguna corrección especialmentE: en 111 proximi-
dad de los extremos y=- loco Mediante un método diferente' se ha resuelto el
~.Ie las vigas no es adecuada, obteniéndose, sin embargo, r,esultados útiles mediante
d método que estudiamos l. El caso de una carga ql upiformemente distribuida'
'l
J
.;1
t Véase el trabujo de F. IJlclch, 10l. cil. 1 Problemas de este tipo son estudiados en el libro Die Sta/lk int EisellbelOllbau de te. Deyer,
...!

• J. K Goocllcr, Trans. A.3.M.E., .vc>!. 54, pág. 173, 1932. edición, pág. 723,1934; véase tambIén H. Cmemer, lngellier-Archiv, vol. 7, pág. :325, 1936. ::!"
'.78 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMIlNSlON.ALES EN COORDENADAS RECTANGULARJ!S 79
sobte el borde inferior, soportada por reacciones qúe se distribuyen unifomlemente 6. Supongamos que lu ménsula de la figura 26 sea de sección rectangular ancha,
en' segmentos de longitud 2b separados pna distancia 1 puede ser representado por en lugur de estrecha, que P sea la fuerza por unidad de espesor y que la pieza se
la ecuación (m) del § 23. El estado tensional que esas cargas producen sumado con el mantenga en un estado de deformación plano mediante la aplicación de las fuerzas
correspondiente a una presión q, aplicada sobre los bordes inferior y superior es necesarias sobre sus caras verticales. '
el producido cuando la carga· lb es aplicada en el borde superior. , Justifíquese el que las tensiones d"" d~, t'"u. sean las mismas que'las obtenidas
Si la carga a considerar es el propio peso de la viga el problema de fuerzas má- en el § 20. Dedúzcase la expresión de <1% y realícese un diagrama de su distribución
sicas resultante puede convertirse fácilmente en otro de cargas en los bordes. A la a lo largo de las caras de la pieza. Obtener las expresiones de las componentes tl y 'IJ
sencilla distribución tensional , de los desplazamientus cuando en el extremo." 1 st' mantiene fijo un elemento
horizontal del eje. '
(1'", = O, "" = -pg(lf + e), "'.v ... O
7. Demostrar que si Ves una función armónica, lo que quiere decir que satis-
que satisface las ecuaciones (19) y (24) de equilibrio y de compatibilidad corres-
ponde, en efecto, una 'preSión de valor 2egc unifonnemente distribuida sobre el
face la ecuación de Laplace, las funcionesxV,yV, (x' +
y") V satisfacen la ecuación (a)
del § 17, pudiendo ser usadas, por tanto, como funciones de tensión. La e,cuación
borde inferior en la figura 39. La condición de que en ese borde, con excepción , de Laplace es la
de en los soportes (de anchura 2b), <Iv sea cero queda satisfecha sumando la distri-
bución tensional anterior a la representada por la figura 39 con q, = 2 ggc, estando
causada entonces la tensión por q y q¡ simplemente.
8. Demuéstrese que
(Ae"u + Ba-au + Oye"v + Dye-a.) sen ",al
Problemas es una función de tensión.
1. Hallar qué problema tensional plano es resuelto por la función d~ tensión " Deducir la expresión en serie de las tensiones causadas en una placa semi-
indefinida (y > O), pOI' una presión normal aplicada sobre el borde y = O cuyo
J.=3F(:r:¡¡_'JJ¡/') +~yJ .valor viene dado por
't'4c 3e' 2 ~

\' b tn".;¡:
2. Hallar a qué problema corresponde la función L,¡ msen-Z-
m~l
F
tP = - (ji :r:¡¡2(3d - 2y), Demostrar que la tensión <1" en un punto del borde es una compresión igual
,a la presión aplicada en ese punto. Supóngase que las tensiones tienden a anularse
la cual se
aplica a la región de valores positivos de x comprendida entre las rectas al aumentar y.
y = O, y = d Y x = O.
9. Demuéstrese que la~ tensiones (11) ele! § 23 Y las elel problema 8 satisfacen
3. Demostrar que la ecuución (b) del § 16.
ti> = ~. ["'. (ya - 30'11 + 2c» - ~ ya (yo - 20:)]
es una función de tensión y encuéntrese cuál es el problema al que corresponde
cuando es aplicada a la región de valores positivos de x comprendida en tre las rectas
y = ±c y x = O.
4. Tomemos la función
,(1 :ey'
4>=8 4:r:¡¡-Tc-4ci+4e +4c'
:ey> Iy. Iy')
como solución correspondiente al caso de una pieza en voladizo (y = ±c, O < x < 1)
sometida a tensiones tangenciales uniformes en el borde inferior (sobre el borde
superior y el extremo x = 1 no actúa ninguna fuerza). ¿En qué aspectos es imper-
fecta esta solución? Comparar la expresión de las tensiones obt~nidas con la deducida
de las fórmulas elementales de tracción y flexión.
5. Deducir la expresión de las componentes u y v de los desplazamientos que
se dan en la viga de la figura 28, cuando la carga a la cual es sometida es su propio
peso en lugar de la fuerza de intensidad q, aplicada sobre el borde superior. Obtén-
gase también una expresión para el cambio de espesor de la pieza (originalmente
igual a la unidad). :¡:
,,
,
PUOBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 81

(Jo, .T/J) ~ClIl dl·higll.ld", p()r (<1r )" etc., en la figura 40. La fuerza radial
··que actúa sobre 111 cara 1, de ·radio T10 viene dada por O'rlr¡dO, que puede
. escribirse (O"Tr)1 dO, y de forma semejante la que actúa sobre la cara 3,
. radio r3, es - «(JTr)3 dO. La fuerza normal que actúa sobre la carn 2 tiene
componente según el radio OP que vÍe1).e dada por - «(Jo). (r1 - 1'3)
(dO/2), expresión que puede escribirse - «(Jo)2 dr (dO¡2) y por lo mismo
componente correspondiente a la fuerza normal que actúa sobre la cara 4
- (0'0)4 (dO/2). Finalmente, las fuerzas tangenciales que actúan sobre
. ~as caras 2 y 4 nos dan [(Tro)~ - ('rO)IJ dr ..
Sumando todas las fuerzas de dirección radial, las anteriormente in-
dicadas y la fuerza másica R que actúa sobre la unidad de volumen, de la
'que supondremos que actúa en la dirección radial, obtenemos la ecuación
equilibrio:
dO dO
(O"rrh dO - (O"Tr)a dO - (0"8h dr"2 - (0"0)4 ar "2
+ [(Ttoh - (1",8)4] dr + Rr dO dr = O
25. Ecuaciones generales en coordenadas polares. Al estudiar dividiendo por dr dO queda:
la distribución de tensiones en anillos y discos circulares, piezas curvas
de sección rectangular estrecha y directriz circular, etc., es conveniente
hacer uso de las coordenadas polares. La posición de un punto cualquiera
(tT,rh dr (lTrj'h - ~ [(1T0)2 + (o-o)J + (1"Toh ~ (r,o)i + Rr = O
del plano medio de la pieza que estudiamos vendrá dada por la distancia Si de forma análoga hallamos la condición de equilibrio para las
del mismo al origen O (fig. 40) y por el ángulo O formado por r y un fuerzas de dirección tangencial y hacemos tender a cero las dimensio-
determinado eje Ox del plano. nes del elemento 1234, las dos ecuaciones de equilibrio se reducen a:
c-~r-----------X
()o-T
ar
+ !.r aTr~
{JO
+~ r
+R = O
(37)
! alTo + arro + 2r,8 = O
r ao ar r

Estas ecuaciones son las que corresponden a las (18) para el caso de
coordenadas polares y si las fuerzas másicas R son nulas son satisfechas
por las expresiones:
r=OP
FIG.40 <T
r
-.!r ocf>
- éJr
+ 1:r aéJ0<f¡
2
2

Consideremos ahora el equilibrio del pequeño elemento 1234, deli- a2<t> (38)
ITO = iJr 2
mitado por las secciones radiales 04 y 02 y por las superficies cilíndricas
3 y 1 normales todas ellas a la pieza plana que consideramos. Las compo-
nentes normales de la tensión de dirección radial y tangencial son desig- T,B = ~ ~! - ~a!2:o = - ir ~:) O
nadas por 0', y (Jo respectivamente y la componente tangencial por 'rO,
refiriéndose todos estos símbolos a la tensión en el punto central P del en las que rP funció·n de r y e es la función de: tensión. Que ello es así
element~, ·definido por T y O. Debido a la variación· de las tensiones, los puede comprobarse por sustitución directa o bien'deducirse como haremos
valores de:la misma en los puntos centrales de las caras 1, 2, 3 Y 4 no son a continuación . . ..
6 -·TEOIUh Dh LA ELASTlClDAD
82 TEORIA DE LA HLAS"f!ClDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONI\.LES EN COORDENADAS POLARES 83

Para que la función represente una distribución de tensiones posible ecuación y la identidad
ha de satisfacer la condición de compatibilidad, que en coordenadas car-
tesianas queda así:
iJ',p
a:¡;'
8 f r/>
+ 2 iJ:¡;2 (Jy2 + iJy( =
á'<b" (a'
c3X2
(12) (02<b al.p\
+ oy2 ox! + ay!)
(a) la ecuación de compatibilidad Ca) expresada en coordenadas

Para expresar esa condición en coordenadas polares recordemos las si-


guientes relaciones: (39)

8 = arctg JI.. ecuación diferencial entre derivadas parciales nos pennitirá resolver
x de elasticidad plana en coordenadas polares para diversas
de las cuales se obtiene cOJnd:iclc,nces de contorno. En este capítulo se éiesarrollarán algunos ejem-
problemas de este tipo. "
or :¡;
-=-"=0089, ar= JI.. = sen 9
a:c r ay r La primera y segunda de las expresiones (38) se siguen de las ecuaciones (b)
08 _J!..= _~, (JO x cos (J (e). Si elegimos, en efecto, un punto cualquiera y hacemos pasar por el eje x,
oX = r2 r iJy =;:z = _r- "= O Y 11:, C1"u coinciden con ir" 11" de fonna que sustituyendo en (e) el valor cero
O llegamos a:
Utilizando estas últimas expresiones y considerando a rP función (fr ... (1'. "" (a1rf» ... ! arf> +1. a"rf>I
de r y (J encontramos: ay' e_o r ar r" aS
ésta que, naturalmente, seguirá representando 11, aunque cambiemos la
,rie:ntación del eje x. De forma análoga poniendo O = O en (b) tenemos:
2
(fU = (1'. = (a </» = a'",l
i)z' O-o iJr
La derivada segunda con respecto a x se obtiene con sólo repetir la ope- asimismo la expresión de - o' tP I oxOy tendremos la tercera expre-
ración anterior y así resulta:

02rJ>
8x~
= (.!
8r
cos 8_~ sen (J
r 80
i.)
(8,p8r coa f) - !r oq,(JO sen 8) 26. Distribución de tensiones simétricas respecto a un eje. Si
distribución de tensiones es simétrica respecto a un eje perpendicular
= éJ2tf; C 'O _ 2 82q, senOcos (J iJq,~ + 2 8.psen8 2cos IJ
+"
plano xy que pasa por O (fig. 40), las componentes de la tensión no
8r 2 os éJ8 éJr r iJr r 88 r v",.u~,~u de O y son función solamente de r. Se deduce también que por
(J2q, sen' IJ (b) de simetría la tensión 'TO es nula y, en consecuencia, las ecuacio-
+ éJ81 --;:t de equilibrio (37) se reducen a la primera, quedando:

Análogamente se llega a: a(f"+~+E=O (40)


or r
éJ2.p _ iJl.p 2 O +2 82cp sen /1 coa 8 + iJ.p ~ la fuerza másica R es cero podemos usar la función de tensión 4> la
oy2 - or l sen iJ8 iJr r or r dependerá sólo de r, por lo que la ecuación de compatibilidad (39)
_ 2 o'¡' sen (J coa (J + ~ coas 11 (e) así:
00 rl "00= rl

y sumando las ecuaciones (b) y (e) tendremos: -

(d) (41)
84 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMI!NSIONALES EN COORDENA.DAS POLARES 85
Esta es una ecuaClOn diferencial ordinaria,' que puede reducirse a una sustituyendo en la primera de las ecuaciones (44) se obtienen las siguientes
ecuación diferencial de coeficientes, constantes introduciendo una nueva , . para determinar A ,y c:
v~riable t, tal que r = el. De esta ~anera, puede obtenerse fácilmente la
A
solución general de la ecuación (41), que tendrá cuatro constantes de -+2C
aZ = -p,
integración, las que deberán determinarse mediante las condiciones dl'
A
contorno. Por sustitución, puede comprobarse que la solución general L'R: b2 + 2C = -p.
rP = A log r + Br 2 lag r + Cr 2 +D (42)
a partir de la cual pueden hallarse las soluciones de todos los problemas A = a 2b2 (p. - Pi)
de distribución de tensiones simétricas y fuerzas másicas nulas. ba - a Z
Las componentes correspondientes de la tensión se deducen de (38) 2C = p¡a 22 - p.b
2
2

y son: b - a
léJe/> A estos valores en las ecuaciones (44) se obtienen las siguientes
u. = - '!l'= -2
r ur l'
+ B(l + 2lagr) + 2C j{h:r"~,IOT'¡>" para las componentes de la tensión:
¡PtjJ A _ abb2-a2
2 2
(p" - p,) 1 p.a p.b
r + B(3 + 2 lag r) + 2C
2 - 2
uo = !i2
ur = - z
(43) (1r,- ";:z+ bZ-a2
= O
(45)
1'rO _ a Zb2 (po - Pi) 1 p,a 2 - p.b2
Si no existe ningún agujero en el origen de coordenadas las constantes
ae - - ba _ a2 • 7=2 + ba _ a2
A y B se anulan, pues de no ser así las componentes de la tensión dadas (45) se deduce que la suma (Jr -1- (Jo es una constante. En consecuen~ia
por (43) serían infinitas para r = O. Resulta, pues, que una placa sin tensiones (Jr Y (10 producen un alargamiento o un acortamiento uni-
fuerzas másicas que no presente un agujero en el origen ~ólo admite una
distribución de tensiones simétricas, aquella para la cual (Jr = (Jo = cons-
tante; lo que significa que la placa se encuentra en un estado equitensional
de tracción o compresión uniforme en todas las direcciones de su plano.
Si existe un orificio en el origen, las expresiones (43) permiten obtener
soluciones distintas de una tracción o una compresión uniforme. Haciendo,
pOI' ejemplo B igual a cero l , las ecuaciones (43) quedan
A
(Jr = '2
r + 2(1 FIG ...1
(44)
A
(18 = - -2
r
+ 2(1 en la dirección del eje del cilindro y las secciones norm'ales a ese
conservan planas. A causa de ello la deformación producida por las
Esta solución se adapta al caso de la distribución de tensiones que se pro- (45) en un elemento de cilindro contenido entre dos secciones
duce en un cilindró hueco sometido a una presión uniforme interior y "",,,..,,,,,,,,,,, próximas, no interfiere con la deformación de los elementos
exteriormente" (fig. 41). Si a y b son los radios interior y exterior del lo que justifica considerar al elemento en un estado de tensión
cilindro y p, y Po las presiones uniformes interior y exterior las condicio- , tal como hemos hecho en el estudio anterior.
nes de contorno serán: En el caso particular en que Po = O las ecuaciones (45) se transfor-
(a)

I La prueba de' que B debe anularse eXIge la conSIderaCIón de los desplazamientos, Véase
párraro 29. (46)
• La solUCIón de este problema se debe a Lamé, l.erol/s sur la IMuri/! de l' elaslicité, Pa-
rís, 1852,
86 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 87

Es~as ec::uaciones muestran que I1 r es siempre una tensión de compresión onlet:loa a flexión en el plano de curvatura mediante los pares M aplica-
y U9 una tracción. La última de ellas es máxima en la superficie interior en sus extremos (fig. 42). EL momento flector, en este caso, es constante
~el cilindro, donde: lo largo de la pieza y es natural esperar que la distribución de tensiones
la misma en todas las secciones transv~sales de dirección radial y,
(47) consecuencia, que la solución del problema pueda obtenerse aplicando
fórmula (42). Llamando a.y b a los radios de los contornos interior y
La tensión (0"0 )max es siempre mayor en valor absoluto que la preSlOn
y considerando el espesor de la sección rectangular igual a uno, las
interior, a la cual tiende cuando b aumenta de forma que nunca puede
de contorno son
ser inferior a Pi' por mucho material que se añada exteriormente. Diversas
aplicaciones de las ecuaciones (46) y (47) al diseño. de máquinas son (1) Uf = Opara r = a y r =b
estudiadas en los textos elementales de resistencia· de materialesl •
El problema correspondiente a un cilindro con un agujero excéntrico,
(2) Lb CTe dr = 0, Lb aer dr = -M (a)
que será considerado en el § 66, fue resuelto por G. B. Jeffery2. Si el (3) "re = O en el contorno
radio del orificio es a, el del cilindro b y la distancia entre sus centros condición (1) significa que sobre los contornos convexo y cóncavo
es e, la tensión máxima que se origina cuando el cilindro es sometido a una la pie7..3 no actúa ninguna fuerza normal; la ecuación (2) indica que
presión interior Pi> es la tensión tangencial 3 correspondiente al punto tensiones normales que actúan sobre los extremos dan lugar solamente
de la superficie interior en que es mínimo el espesor (si e< i a) y su par M, y la condición (3) que sobre los contornos no actúa ninguna
valor es: tangencial. Utilizando la primera de las ecuaciones (43) conjunta-
2b2(b2 +
a 2 - 2a8 _ 8 2) ] ¡as condiciones (a) se obtiene:
U = Pi [ (a2 +
b2) (b2 _ a 2 _ 2ae _ e2) - 1
A
Si e = O, este valor coincide con el dado por la ecuación (47). (iii+ B(l + 2 lag a)· + 2(1 = O
(b)
A
27. Flexión simple de piezas curvas. Consideremos el caso de ¡j2 + B(l + 2 lag b) + 2(1 = O
una pieza curva de sección rectangular estrecha4 , de directriz circular,
condición (2) del grupo de fórmulas (a) nos conduce a:

¡b ¡b
a
(jo dr =
aor
¡J2</J
- 2 dr = ¡i-:ara
J<fJ¡b = O

sustituyendo 1> por su expresión (42) tenemos:

[~ + B(b + 2b lag b) + 2Gb]


- [~ + B(a + 2a lag a) + 2(1a J = O (e) "

o I
42
:¡O'IG.
.• Comparando esta expresión con (b), es fácil ver· q~e la (e) es satisfecha
'.y las fuerzas aplicadas en los extremos pueden redUCIrse a un par de ~uer­
I
1 VénRe, por ejemplo, S. Timoshenko, Strengllz o/ Materials, vol. 2, pág. 236, 1941.
• Trans. RoJ'. Soco [,ondon, serie A, vol. 221, pág. 265, 1921. Véase wmbién Bril. Assoc. . zas, con tal que las condiciones contenidas e~ (b) queden cu¡nphdas. I
IIdvancement Sd. Repis., 1921. .
• Para ·que el piu flector sea igual a M es necesario que se cumpla la con-
J N. del T. En este Cllpltulo llamamos a veces tenSIón tangenclal a la tensión nomtal d.
,lIrecclón tangencIal u,. Creemos, sin embargo, que el sentido del texto evita toda confusión. dición
I De la discusión general de los problemas bidimensionales (§ 15) se deduce que la solu-
CIón que obtengamos, será válida también para el otro caso extremo en que la dimensión
perpendicular al plano de curvatura sea muy grande, como por ejemplo en un túnel above-
{b
la uardr =
(b i:J2q,
Ja
:.
ar2 rdr =·-M Cd) I
dado (fig. 10), si la· carga, a lo largo del mismo, es constante.

II
I
.1
'1
!
88 TIlORIA DIl LA IlLAS1'IClUAD PROBLIlMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 89

Ahora bien; ,'actúan sobre los extremos es la dada por la segunda de las ecuaciones
:, (48); Si las fuerzas que producen el par M se distribuyen sobre los extre-

l fJ2q, rdr
b -2
fJr
= la</>
-T
ar a
lb 'lb -dr
- at/J
a
- r lb -
= laet>
fJr" 8r
Ilb
cf¡ ,
"
'inos en forma diferente, las tensiones en dichos extremos no serán las
B
"dadas por (48); pero de acuerdo con el principio de Saint-Venant las
y como de la ecuación (b) resulta 'A;fM·pnri ..,,,, senln muy pequeñas y podrán ser despreciadas para distancias
los extremos que sean mayores que, o del orden de, la altura de la
fJet> rlb = O pieza.
IfJr " , Resulta de interés práctico comparar la solución (48) con la que suelen
se deduce de (el) : dar los textos de resistencia de materiales. Si la altura de la pieza b - a,
pequeña frente al radio de la directriz de la misma (b + a)/2, se adopta
la distribución de tensiones que corresponden a piezas
o bien, sustituyendo el valor de r/J dado por la expresión (42) de eje recto. Si la altura de la pieza no es pequeña se supone en la práctica
que sus secciones transversales se conservan planas durante la flexión,
A log~ + B(b 2 ,log b - a 2 log a) + C(b 2
- a 2) = M Ce) donde resulta que 'la distribución de las tensiones normales (fo sigue
a ley hiperbólica' . En todos los casos pueden representarse los valores
Esta ecuación junto con las (h), determina completamente las constantes y mínimo de la tensión (10 por una expresión de la forma
A, B Y C, las cuales vienen dadas 'por las expresiones M
11'8 =m-
0,2 (h)
4M 2 2 b 2M
A = - N a b log ü: B = - N (b
2
- a2 ) tabla siguiente da los valores del factor m calculado por los dos métodos
M ' 2 (f)
mencionados y por la fórmula exacta (48)":
C = N [b 2 - a2 + 2(b S
lag b - a, 10g a)]

donde para simplificar hemos puesto; COEFICIENTE m DE LA IlCUACIÓN eh)

N = (b 2 - (
2
)2 - 4a 2b2 (lag ~y (g)
Ley lineal Ley hiperbólica
de distribución de distribución Solución exacta
Sustituyendo los valores que para las constantes A; B y C dan las fórmulas de tensiones de tensiones
(f) en (43) resulta:
.±. 66,67 +72,98 -61,27 +73,05 -61,35

Ur = -
4M
N 7b (a 2 2
lag ab + b lag rb + a lag ra)
2 2
± 6,000
+ 1,500
+
+
7,725
2,285
4,863
- 1,095
+ 7,755
-1- 2,292
4,917
-- 1,130

!T&= -
4M
N (a
- 7b
2 2
b
lag i.i +b 2
lag ¡;
r+ a log ra+ ba - a )
2 2 (48) A la vista de esta tabla puede deducirse que la solución elemental basada !]
i
i
Tre = O ,.' la hipótesis de la conservación de las secciones planas conduce a resIJI-

Estas fórmulas dan la distribución ,le tensiones que satisface todas las
condicionés de contornd (a) para la flexión simple y representan la so-
muy exactos.
Como veremos más adelante en el caso de flexión simple las secciones
rron.',,"'·.~IA. se conservan planas y la discrepancia entre las soluciones
~I
lución exacta del problema, si la distribución de fu~rzas normales que
",-::,¡ Esta teona aproiumad. fue desarrollada por H. RéMlI, Ann. mil/es, plÍg. 617, 1862, Y
E. WlOkler, Zivili71gelljeur, vol. 4, pág. 232, 1858; véase también su hbro Die Le/m .'on de,
\ Esta solUCión fue dada por H. Golo"m, Tram. II1SI. Tech, San Petersburgo, 1881. 'f-Iusli"itüt "lid Festigkeit, cnpitulo 15, Praga, 1867. El desarrollo ultenor de la teoría fue reah-
m trabajo, pubhcndo en ruso, no fue conocido en otros paises y el mismo problema fue re- :lado por F. Grashof, Elaslizitat U/Id Festigl<eit, pág. 251, 1878, ~ K. Peaman, History 01 ¡he
suelto más tarde por M. C. Rlb¡ere (COn/pi. rend., vol. 108, 1889 Y vol. 132, 1901) Y por L. 'Theory o[ Elasricity, vol: 2, parte 1, pág. 422. 1893. '
Prandtl. Véase A. Foppl, VO/'/f!1tsungen ¡¡bey lec/misehe McchOlzik, vol. S, pág. 72, 1907; y tam- , 'Los resultados han Sido tomndos de l. tesIS doctoral de V, BlIlcvlcz, Umversldad de
bién A. Timpe, Z. Matiz Physik, vol. 52, pág. 348, 1905. M lchlgan, 1931. "_,

'1
90 TEORII\. DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLI\RES 91
elementales y exactas provienen del hecho de que en la primera no se Coxnponentes de la deforxnación en coordenadas polares.
tiene en cuenta la componente ~r de la tensión, suponiéndose que las estudiar los desplazamientos en coordenadas polares designaremos
fibras longitudinales de la pieza están sujetas a tracción o compresión u y v las componentes del mismo en las direcciones radial y tangencial
simples. :;resol~ctívamemt,e. Si u es el desplnzamientci radial de la cara ad del elemento
44), el desplazamiento radial de la cara be será u + (au¡ar)dr.
m
10
o·~~-.~-------- __
B
~l'ls 6
ti 4
\.
,
lP2a
11
~ 2 "- f'. Jle neutro <-V = 1.443)
{l O
~ 2
t'--
"'. -....... FIG.44
¿4 -......
.n 6
1,0 1.1 1.2 1.3 1.4 1.5 1.6 1.7' 1.8 1.9 2,0
. En consecuencia, la deformación unitaria del elemento abed en la direc-
fJ Valores de {¡- radial será:
l.5
~1~1.2 ._-" I II!r
éiu
=-
eq,:
V
.-/. Mdx (1070) éJr (49)
,n 0.9
/)"~a I:§. V i'
{l0,6 'En lo que se refiere a la deformación del elemento abcd en la dirección
~ 0,3I 1'-.. debe observarse que depende no sólo del desplazamiento
¿O ti ~ v, sino también del radial u. Suponiendo, por ejemplo, que
tl1 1,0 ~l l,z 1.3 1,4 1,5 1,6 1,7 1.8 1.9 2.0 .puntos a y d del elemento abcd (fig. 44) sufran solamente un desplaza-
Valores de .L
o radial la nueva longitud del arco ad es (r + u)dO y la deformación
ing:en,cíal resultará, entonces:
F(G.43
(r + u) dO - r d(J u
rdO r
La primera de las ecuaciones (48) nos dice que la tensión es siempre V
diferencia de los ~splazamientos tangenciales de los lados ab y cd
positiva cuando la flexión tiene el sentido que indica la figura 42. La
elemento abcd será (a¡t/ae)de Y. por lo tanto la deformación tangencial
misma conclusión surge inmediatamente teniendo en cuenta el sentido
por el desplazamiento v es av/roO. La deformación tangencial
de las tensiones 110 que actúan en los elementos n - n, indicados en la es pues!:
figura 42. Las resultantes de los correspondientes esfuerzos tangenciales
son de dirección radIal y tienden a separar las fibras longitudinales y a
provocar tensiones de tracción en esa dirección; éstas aumentan al apro-
ximarse a la superficie neutra y alcanzan su máximo en la proximidad
ConSIderando ahora la deformación tangenCial angular o deslizamiento, sea
de la misma .. Este máximo es siempre mucho menor que (~Q)m.". Por
.d' la posición que ocupa el elemento abcd después de.producirse.la de-
ejemplo, para b/a = 1,3, (O'r)l1Iax= 0,060 (O"o)max; ·para. b/a = 2, (O"r):",,=
.;r.c,rn:lac·!ón (fíg. 44). El ángulo que forman ad y a'd' , causado pO"r el despla-
= 0,138 (O'o)ma,,; para b/a = 3. (ur)m.~= 0,193 (l1o)nI'~' La figura 43 en
"zarniento radial u, es igual a éJu/rao y de igual forma ei ángulo comprendido
la cual se representa gráficamente la distribución de 0'0 y O'r para b/a = 2.
a'b ' y ab es avIar: Es de advertir que sólo parte de este ángulo, la
nos hace ver la desviación. que con respecto a la línea neutra y hacia
sombreada en la figura contribuye a la deformación angular, ya que la
el centro de curvatura, experimenta el punto en que aparece la máxima
tensión 0',. I En el § 10 el símpo)o fo fue usado con otro SIgnificado.
92 TBORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 93

otra parte, igual a ~}Ir, representa el desliza·miento angular causado por . donde ¡ler) es función de r solamente. Sustituyendo Ca) y (b) en la
1i1···rdtilitióri del elemento abcd, considerado como un cuerpo rígido, alre- (51) y teniendo· presente que puesto que y,o es nula ha de
dedor ·del eje que pasa por O. Por 10 tanto, la variación total que expe- obtenemos: ... '- f'~ 1;"",1,,'4} M Ir~ er¡/~rt""J

+ af¡(r) + .!. f f(8) a6 -


rimenta· el ángulo dab, o sea, la deformación angular o tangencial, será:
uu élv v (
. ir af(O)
IJO iJT r .
.!.Il(r) = O.
r
(e) (;¡,f1r,6r
U} .t.
"(rO = -
08
+ - - T-
élr
.l )
l¡~ruv~AI.t,t (51)
(1'•
T '
e se deduce: lit"" !'((t r.)
Sustituyendo ahora las expresiones (49), (50) Y (51) de las componentes
jl(r) = Fr, f(6) == H sen O+ K cos O (d)
.qela deformación en las ecuaciones de ¡-Iooke!:
H Y K son constantes a determinar mediante las condiciones
1 que limitan la movilidad de la pieza curva o anillo. Sustitu-
e. =E (0". - ViT8)
las expresiones (ti) en las ecuaciones (a) y -eh) llegamos a las siguientes
ES = .j (0"8 - ViTr) . (I¡"'f'yf~h'¡rS J (52) para· los· desplazamientos!:

1 .
u
1[
=E - (1 +r v)A + 2(1 + v)r
'Yre = GTrs - v)Br logr - B(1

obtenemos suficientes ecuaciones para determinar u y v_ + 20(1 ~ v)rJ + H sen (} + K cos (} (53)

* 29. Distribución simétrica de tensiones: desplazamientos.


Sustituyendo en la primera de las ecuaciones (52) las componentes de la
v
4BrO
= -r + Fr + H cos 8 -
.
K sen 6
tensión dadas por las ecuaciones (43) encontramos que los valores de A, B y e varían para cada caso particular. Con-
por ejemplo, el caso de la flexión simple. Si suponemos rígida-
fijados el baJ:Ícentro de la sección transversal adoptada como origen
éJu
~
= El [(1. +/)A
r + 2(1 - p)B log r + (1 -31') B + 2(1
. - v)C] medida de los ángulos (fig. 42) Y un elemento del radio correspon-
las condiciones de vínculo serán: ((I"'¡"¡'~tI" Jt Ycr+h"(Ci.~)

~
e integrando se llega a: v = 0, -élr = O para 6 = Oy r = ro = a+b
-2-
u =1E [- (1 +r v)A + 2(1 - v)Br log r - B(1 + v)r estos valores a las expresiones (53) obtenemos las siguientes
~mlCJ(Jnt:s para el cálculo de las constantes de integración F, H Y K:
+ 20(1 - v)r] + f(9) (a)
(1 +ro v)A + 2(1 _ v)Bro lag ro - B(l + v)ro
donde feO) es función de O solamente. De la segunda de las ecuaciones
(52) y mediante la fórmula (50) obtenemos: + 20(1 - p)ro] +K = O
élu = 4Br _ f(9) Fro +H = O
iJlJ E F =0
de cuya integración resulta: F = H = O Y para los desplazamientos v obtene-

1} = 4IJ;~ - f f(6) dO + b(r) (b) . 4Br17


v=-r-Kscn8 (54)

1 Suponemos que tenemos un estado plano de tensiones, es deCIr, que (J% es nula (véase I La ."uución (e) quedo satIsfecha só!" cuando la 1 J(O)dO es tomada de (el) sin la preseneJa

I)árrafo 7). ninguna constante aditlva.


94 "l'EORIA DE LA ELASTICIDAD
PRO~LEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 95
,,~S~9, !lignifica. que los desplazamientos de cualqui~r se~ción transversal
c9.ns~s~en en una traslación - K sen e, igual para todos sus puntos, y El mismo' desplazamiento obtenido para el valor O =' 2:r en la eeua-
..ción (54) será:
a:derriás un giro de su plano igual a 4BO/E, efectuado alrededor del centro
. ~e curvatura O (fig. 42). "5{(CI"~ +MI¡IVl¡,s41
Como vemos 'Ias secciones transversales se conservan planas en el caso <n
. de l¡¡ flexión simple, tal· como se supone corrientemehte en la teoría ~Ie- r'
. mental de la flexión de piezas curvas. . dos expresiones anteriores, (e) y lf), nos permiten obtener ¡
Al discutir la distribución simétrica de tensiones en un anillo completo aE r
(§ 26) hicimos cero la constante B de la solución general (43), con lo que B = &r (g) ;f
j.:
llegamos. a una solución del problema de. Lamé. Ahora, a lu vista de las í
c:x:presiones .($3), vemos que implicaba la anulación de B. B contribuye . constante B que figura en el término ~ultiforme de la fórmula (54)
ái 'desplaZamieIlto v mediante el término 4Bre/E. Este término no es ahora un valor definido, que dependerá de los mediós que se 'hayan
(~ ~. u~iforme puesto que admite más de un valor para un misrl!o punto al .~mpleado para I?rovocar en el anillo las tensiones iniciales. Sustituyendo
';(;'6 aúmentar () en 2n. Tal expresión multiforme es físicamente absurda (g) 'en las ecuacIones lf) del § 27, obtendremos la expresión que corres-
r para un anillo completo, por lo que debemos tomar B = O en la solución al momento flector, que es necesario introducir para volver a unir
extremos del anillo de la figura 45, a saber:
ti tll general (43),
;)"\'11> El anillo, completo o. corona circular es un ejemplo tic UII l uerpo
'1 múltiplemente corlexo, es decir, un cuerpo que puede ser cortado trlln8-
versalmente sin que quede dividido en dos. Al determinar las tensiones ~n eh)
tales cuerpos se llega generalmente a la conclusión de que ¡as condiciones
de contorno referentes a las tensiones en el mismo, no bastan para deter- ~'JDI~Cllenao el momento flector, las tensiones iniciales en el anillo se pueden
minar 'por completo la distribución tensional, siendo necesario hacer uso. caliCUlar· utilizando la ecuación (48), que corresponde a la 'flexión simple.
de las ecuaciones adicionales que exigen que el valor de los desplazamien-
tos sea único (véase § 39). Discos giratorios. La distribución de tensiones en discos cir-
El significado físico de las soluciones multiformes puede'ser explicado anim~dos de un movimiento de rotación es de gran importancia
considerando las tensiones iniciales posibles en un cuerpo' pluralmente ·nrar.lt'r.,o'. Si el espesor del disco es pequeño frente a su radio la variación
tensiones en el espesor del mismo podrá ser despreciada2 ' y el proble":
entonces, puede ser resuelto fácilmente·. Si el espesor del disco es
t.:U.IlS1Larm, puede entonces aplicarse la ecuación (40) sin más que considerar

fuerza másica la fuerza de inercia 4


R = pw'lr Ca)
e es la densidad del material del disco y w la velocidad angular
su rotación.
FIO. 45
La ecuación (40) puede escribirse en la forma:
conexo .. Si mediante dos cortes que sigan secciones radiales adyacentes
retirarnos un sector del anillo (fig. 45) Y unimos luego los bordes por (b)
soldadura u otro medio, se obtiene un anillo con tensiones iniciales, lo.
que quiere decir que sin la presencia de fuerzas exteriores existen' esfuer- J Una discusión completo del problema, así como la bibliografía que sobre éL ~"iste ~s

zos en el anillo. Si a es el ángulo en el centro, muy pequeño, que forman • P?r A. St~dola, D,amp!-und Gas·1'urbmen, ó•• edición, págs. 312 y 889, 1924. '
Para ~m d.sco uOlfonne qu~, tenga la fonua de Wl elipsoide de revolución achatodo,
las secciones radiales de corte; para reunir los extremos planos del anillo. .~pesor••!!ual a un o~t~vo del dlO~etro, C. Chr•• ha demostrado: que l. diferencia entre l.
será necesario realizar un desplazamiento tangencial: maxuna y la mlO11lla en el eje de rotoción es tan sólo el 5 % de la tensión máxima
o Roy. Soco London, vol. 58, pág. 39, 1895). .
v = OIr (6) En el § 119 se desarrolla mlÍs detalladame.nte el problema.
4 El peso del disco 'es despreciado.

!;:','
'j"
TEOHIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS llIDIMIlNSlONALES EN COORDENADAS POLARES 97
96
Esta ecuación quedará satisfecha si deducimos·los componentes de la ten- de las fórmulas (g) se deducirán las siguientes componentes de la tensión:
sión de una función F, función de tensión, del siguiente modo:

(e)
u, = 3 t "p~~(b2 ~ 7 2)
(55)

Para el caso en que exista simetría, las componentes de la deformación


de acuerdo con las ecuaciones (49) Y (50) son valor m¡íximo de las tensiones, que se da en el centro del disco, es:
du 1t
E, = dr' ES =-; (56)
Elimin:¡¡ndo u entre estas ecuaciones se llega a: Cuando el disco tiene Un agujero circular de radio a en el centro, las
deo :OTlst:anltes de integración de las ecuaciones (g) se deducen de las condicio-
Ee-Er+r-=O (d)
dr existentes en los bordes interior y exterior. Si sobre tales contornob
actúa fuerza alguna tenemos
Sustituyendo las componentes de la deformación por sus expresiones en
función de las componentes de la tensión (52) y usando las ecuaciones (e), (u,)..-. = O, {U,)r-b =O (h)
se demuestra que la función de tensión F deberá satisfacer la siguiente resulta
ecuación
+
r~d2F' r dF _ F (3 + +
lI)pw~r3 = O (e)
dr2 dr
estos valores en (g) tenemos
euya solución general, como puede comprobarse por sustitución, es:

(f)
(57)
y mediante las ecuaciones (e) se llega a

u, = C
+ 11
+ C1121 - 3-S-pw2r 2

(g) tensión radial máxima se obtiene para r -= vfCib donde:


1 + 3v
UD = e - el -r1 - ---
S2 pw r 2 Z
(Ur) = 3 v +
= -S- . pw 2(b
. - a)2 (58)
Las constantes de integración e y el se d~terminan mediante las condicio- según la tangente corresponde nI borde interior del
nes de contorno.

+ 3l-P)
Si se trata de un disco macizo (lleno) debemos poner el = 0, pues
3+v (
de no ser así las tensiones (g) se harían infinito en el centro. En lo que se (uo) .... .= -4-.- púJ2 b2 + va 2 (59)
refiere a la consta:llte e se determina temcnuo en cuenta las condiciones
en la periferia del disco r = b. Si en ésta no existe ninguna fuerza, ten- como puede verse es mayor que (0",)1\1"
dremos: Cuando. el radio a del orificio disminuye tendiendo a cero la tensión
. de dirección tangencial tiende a un valor doble del que corres-
a un disco lleno (56), lo que significa que las tensiones máximas
duplican al practicar un pequeño orificio circular. en el centro de un
de donde: giratorio (véase~el § 32). : .
3+)) 2b 2 Suponiendo que las tensiones no varían a través del espesor del disco
e= -S-PW método que acabamos de desarrolIar puede extenderse a discos de
--TOlRI¡\, 1)8 lA LI.A'i'I'ICIlMU
98 TEORIA DE LA ELAS'l'lCIDAD PHOllLliMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 99
1
espesor variable. Si h es el espesor del discó, variable con 1', la ecuación ico, estudiado por muchos autores suele ser calculado dividiendo
,

de equilibrio de un elemento como el representado en la figura 40 es: disco en partes que se consideran como de espes()r constante 2 •

(k) .31. Ménsula curva cargada en su . extremo libre 3 • Comenza-


con el caso sencillo de la figura 46. Una pieza de sección rectangular
y directriz circular está empotrada en su extremo inferior, siendo
ecuación que queda satisfecha poniendo en el extremo superior a la acción de una fuerza radial P. El
dF' flector que actúa sobre cualquier sección transversal rrm es
Mo = dr + hpw"r z a sen ~ y de acuerdo con la teorín elemental de la flexión
piezas curvas la tensión normal <10 es proporcional al momento Elector.
donde F es nuevamente una función de tensión.
Sustituyendo estas expresiones de las componentes de la tensión
en la ecuación de compatibilídad (d), llegllmos a la· siguiente ecuación
para la función de tensión F:

r2 R
dr 2 + r ndr - F + (3 +/I)pcu hr 2 3
- hr~(B
dr l' dr - uF ) = O (l)

De esta forma el problema de l.'llcontl'.li· la distribución de tensiones en


un disco de espesor variable queda reducido a la solución de la ecuación (l).
En el caso pl11'li('ul¡¡r. en que el espesor varía según la ley:
Fw. -16
h = Ut·· Cm)
l!p>ollllellldo que esto se cumple, suposición que se verá justificada por
en la que e es una constante y n un númem cualquiera, la ecuaClOn (/) deducimos de la segunda de las ecuaciones (38) que la
puedtl ser fácilmente integrada!. La solución gentlraL tiene la forma: tensi6n <p que satisface la· ecuación

F mrn+3 + Ara + BrP 02 1 () 1 ( 2) (024) 1 oq, 1 ()2q,)


=
( iJr z + r ¡¡;. + T2 iJ8 2 éJr 2 +r éJr + T2 iJrj2 = O (a)
en la que
ser proporcional a sen (J. Tomando
.p = f(r) sen () (b)
sustituyendo en la ecuación (a) encontramos que J(T) debe satisfacer
a y fJ son las raíces de la ecuación de segundo grado ecuación diferencial:
x 2 -nx+vn-l=O d2
( dr 2
d
+1 (d 2f di 1)
T dr - Ti dr 2 :¡: dr - Ti = O +1
(e) f)
y A y B dos constantes de integración que se determinan a partir de lus
, V"a6e A. Flscher, Z. oesterr. l/lg. Areh. V.reí/ls., vol. 74, pág. 46, 1922. H. M. Marlm,
condiciones de contorno. :/lR""ee,;",!. vol. lIS, pág. l. 1923; B. HodklllSOIl, Hngilzeeri"g, vol. 116, plÍg. 27·1, .1923; K. E.
Los casos reales de discos giratorios de diversas formas pueden ser J. Applzed lvlechmrics (1'rclII ••4.S.M.H.), vol. 11, pág. A-l, 1944.
resuelt<>s, con suficiente aproximación, dividiéndolos"en partes y tratando método file desnrrollndu por M. Donllth en su libro Die Bererhlllll/g rot.erende,
de ajustar a cada una de ellas una curva del tipo (m)2. El caso del disco u"d RÍ1zge, Berlín, 1912. l' ,,"-descrito en mglés por H. Hearle en R/lgl/leerillg, vol. 106.
, 1918. Postenormen.te ha s.do desarrollado por R. GramOlel, Di/lglers Po(~'tech. J.,
8, p'¡g. 217, 1923. M. Grilhler. en V.D.l., vol. 41, pág. 86Q Y vol. 4-1, pág. 1157, 1900,
I Este caso fue estttd",do por Stoc!"la, lIJe." cit. Véase también H. Holzer, Z. ges. TlIrbi- el caso en el que el mater...1 110 sIgue la ley de Hooke. Véase taml'lIén H. Schlechtwcg,
'WIIUeSetl, 1951. 'ltIgezu. Mal". Mech., vol. 11, pág. "17, 1931, e Illgellleur-ArclIJv, vol. 2, púg. 212. 1931.
1 H. Golcivm, loc. ·.f.i!.
, Véase M. Grilbler, V.D.l., vol. 50, pag, 535, 1906.
100 TEORIA DI! LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 101

.E~t.a ecuaClOll puede convertirse en una eéuación diferencial lineal, de


'coeficientes constantes (véase § 26), cuya solución gentlral es: " b
N = a2 - b2 + (a2 +b
2) lag -
a
j(r) = Ar3 + B -1l' + Cr + Dr lag l'
"~";h"".nrl~ los valores (g) de las constantes de integración en las eCU8-
en. la q)le A, B, e y D son constantes de integración que vienen deterr\1i- (60), obtenemos las expresiones de las componentes de· la tensión.
i1ada~ parlas condiciones de contorno. Sustituyendo la solución (d) en el extremo superior, O = O, encontramos
la expresión (b) de la. función de tensión y usando las fórmulas generales
(38) encontramos la siguiente expresión para las componentes de la tensión:
eh)
+ '1'2-1 a-~
2
(f r = -1r -ot/l cf>
= ( 2Ar - 2B
3"" + -D) sen O
01' élO l' T
. el extremo inferior O = :n:/2
(f8 = éJ2rJ> = (!>Al'
iJr 2 ' .
+ 2~
l'
+ .P-) sen 8 T
(60)

'1' 8
r
= -.!!..
or (1 él</>'\ = - (2Ar - 2~ + Q)'
r iJU) r r
cos 8 (k)

Puesto que no actúa ninguna fuerza sobre los bordes interior y exterior
expresiories (60) constituyen una solución exacta del problema, sólo
de la pieza se ha de cumplir que: las fuerzas en los extremos de la pieza curva se distribuyen en la
IFr := Tre = O para r = a y r = b

o, de las ecuaciones (60)


2B D
2Aa- -+-
a a =
3 O
(e)
2B D
2Ab - 17 + b := O

Con' arreglo a la última condición, la suma dc las fuerzas tangenciales


que se distribuyen sobre el extremo superior de la ménsula debe ser
, igual a P. Considerando el ancho de la sección transversal igual a uoo,
o bien a P como carga por unidad de espesor de la pieza, obtendremos ___ ("-a) .1
para O = O 1--= ¡íj·H ~------__ . FIG. 47 ~•. .' r~:A ~::~ J'<r¡','I~it- tri,
J"(b TrO. dr = -lb .!!.. (~ 00
"fJr r
ot/» 'dr = I~r 0"'1"
DO b
Il~k h kliJ( d~iJt tl QfiJ6','l
-----..:..._-----
/1dJ;J ;':"1.5''1 /
-[:;/ e-"O
' ' -8'
v.f... tI¡

= IAr 2
+ ~ + e + D lag TI: = p dada por las ecuaciones (h) y (k). Para otra distribución de las mismas
tensional en las zonas próximas a los extremos será distinto al
o bien por la solución (60), pero a distancias mayores la solución será
(f) según el principio de Saint-Venant. Los cálculos demuestran que
simplificada, basada en el supuesto de la conservación de las
De las ecuaciones (e) y (j) resulta' plaoas durante la flexión, da aquí tampién resultados satis-

P D (g) figura 47 muestra la distribución de las tensiones tangenciales


A = 2N' 'u lo largo de la, sección transversal O = O (para los casos b = 3a, 2a,
102 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMIIS BIDIMENSION¡\I.ES EN COORDENADAS POl.ARES 103

.y 1,3a). En esta gráfica las abscisas representan las distancias al borde H, K Y L son constantes arbitrarias a determinar a partir de las
interior (r·= a), medidas según un radio; y las ol'denadas los coeficientes ;}lI'~!"'¡UII";:O.
de vínculo. De (m) .. y. (n) deducimos las componentes de los
que es necesario aplicar a la tensión tangencial media P/(b .,- a) para mientes que resultan:
obtener la tensión cortante correspondiente al punto considerado, El valor
1,5 de ese factor nos da la tensión tangencial máxima, calculada de acuerdo
con una distribución parabólica para vigas rectilíneas de sección rectangu-
- .2D ire [ D(l
E ocos () + sen . - v) log r + A(l - 311)r 2
lar, Según evidencia la figura, la distribución de las tensiones tangenciales
se apro¡¡ima a la ley parabólica cuando la altura de la sección transversal
+ B(l r+ v)] + K sen O + L coa ()
2
(q)
es pequeña. PUede aceptarse; por lo tanto, que para las proporciones
, ~ 2D Osen 8 _ cos e (A(5 + v)r2 + B(l + v)
usuales de arcos y. bóvedas la distribución parabólica de las tensiones E E r2
tangenciales, al igual que para las piezas rectillneas de sección rectangular,
es suficientemente exacta. -D(l - v) lag r ] + Del E+ 11) coa () + K cos () - IJ sen IJ + Hr
Consicieremos. ahora los desplazamientos producidos por la fuerza
P (Hg. 46). Usando las ecuaciones (49) y (52) Y sustituyendo en ellas las radial del borde libre de la pieza se obtiene poniendo O = O
;.t'iif>tlt>x,ión
expr.esiones (60) de las componentes de la tensión tenemos: expresión de u, lo que nos da:
(16)0_0 = L (r)
81¿ sen O[
8r = -E- 2Ar(1 - 3v) -
2B
(1 ra + v) + rD (1 - v)
]
~onstante L se obtiene de l~l condición existente en el empotramiento
av 46). Para IJ = n/2 tenemos, v = O, avIar = 0, y en consecuencia
éJ() = rES - u (l)
segunda de las ecuaciones (q) resulta:
ou av v
'Yr8 = r. a() + ar - r H=O, L =D'lI' (s)
E
Integrando la primera de estas ecuaciones obtenemos . (g) deducimos, pOl' lo tanto, que la deflexión del extremo superior

u . = lE
seno[ Ar2 (1 - 3v) + TiB (1 + 11) + D(l - v) lag r ] + feO) (m)
(61)
donde/Ce) es función de (} solamente. Sustituyendo (m) en la segunda de
las ecuaciones (l) junto con la expresión de Eo e integrando, tenemos:
adelante se dan algunas nplicaciories de esta fórmula. Cuando b tiende
cos e [ Ar2(5 + v) + Ti
B (1 + v) de a y la altura de la piezaLh = b - a, se hace pequeña frente a
1J =- E - D 1og r(l - v) bacer uso de,¿ la expresión ,.. .n ..!:J. :11+· 6-1", 46 -;{- J.
a " ti

f
._-~/·l"'", IJ

+ D(l - v) ] - f(e) d() + F(r) (n). b~ ~(+ -h) h 1 h2 1 h3


lag - = lag l
a a = -a - -2 -a2 + -3 -a3 -
en la que F(r} es función de r solamente. Sustituyendo ahora (m) y (n)
despreciando los términos de grado superior
en la t:JiI.rcera de las ecuaciones (1) llegamos a la ecuación

f ·+ f(8) dO !'(O) + rF'(r) - F(r) = - .4Dcoso


.. E 311'aap
(16)8_0 = - - -
Eh
3
...~
vv;,
11/
,,¡-
_;?V'·~*
Esta ecuación es satisfecha si ponemos ~._- ..
coincide con la fórmula elemental que se da para el caso que tratamos l •
2D
F(r) = Hr, ¡(O) = - E Ocos 8 + K sen O+ L cos () (p) .. I Véase S, TlmOshe'1ko, Stre/lg lit of Materials. vol, 2. arto 13, 1941.
104 TEORlJ\. DE LA ELI\ST1C1DAD PI10BLEMAS IlIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 105
Dando a la, función de tensión la forma Consideremos la porción de placa contenida en un círculo, concén-
4> = f(r) cos 8 ,', :,~rico con el orificio; de radio b" grande en comparación con a. Las tensiones
~ los puntos de radio b son las mismas que, existirían en la placa si no
y procediendo de forma análoga, obtenemos la solución para el caso ,en ,hubiera _agujero y vienen dadas por io' tanto, por *jpJq(C,o~: 'Vt~ JI/S ¿(4/tc,lIIltC
que sobre el extremo superior de'la pieza (fig. 46) actúen, un' par y una
fuerza vertical. Restando de esta solución las tensiones producidas por el
"~~i1'y=0 ~"fe
(uf).-o = 8 cos 2 8 = iS(l +
cos 28) ( l-t.lq(,,~ (.hlle
) (,o¡.)lh1/I1r
par (véase § 27), nos quedarán las tensiones debidas a la fuerz~ ,yeJ;tical ' I:l 'jt;S (rTo)r=b = - t8 sen 2 8 ' a p,lm1J 1.
", 6h1· • . ". •.• Y(d,f/¡j"/~l'er
'~plicada al extremo libre de la 'pieza. Si la fuerza que actúa sobre ese ex- , Es~as fuerzas, al actuar en la ,pe~lfer~~ del amllo, de radlOs l~ter¡o.r y ex- (vx¡6)'
tremo es oblicua su efecto se hallará sumando los efectos correspondientes :"tenor a y b, provocan una dlstrlbuclOn de tensIOnes en su mterlor que z¡ , ;;
a la fuerza horizontal y vertical en que aquélla se descompone. '"podemos considerar compuesta. de dos partes. La primera es debida a la
~ S d e 1as fu erzas norma1es y las tensIOnes
.
+7¡'H1,¡I"r
tI>
En el estudio anterior supusimos siempre que se cumplían las ecuacio- :'<!!~n:Lp()nl~n1te constante '2" por e!las )e (JI¡.
ncs(e) y. que los bordes' circulares de la pieza cstaban libres de cualquier pueden calcularse' mediante las ecuaciones (45) (§ 26). La (,l J..)
carga. Si se toman para las expresiones (e) valores distintos de cero obte- parte corresponde a las fuerzas normales 1 S cos 20 y las fuerzas "Ir 1 ero-
~c .:., nemos el caso en que fuerZas normales 'y tangenciales proporcionales a sen ,:tangenciales - 4 S sen 20, las cuales producen una tensión que puede
O y cos () actúan sobre los contornos circulares. Combinando tales solu- ,deducirse de una función de tensión del tipo:
ciones con las obtenidas anteriormente pan¡ el caso de flexión simple y
de flexión por una fuerza aplicada en el extremo, nos podemos aproximar <P = f(r) cos 20 (b)
a las condiciones de carga que se dan en una bóveda cubierta de arena esta expresión en la ecuación de compatibilidad

* o tierra'.

32. Influencia de un orificio circular sobre la distribución de


tensiones existentes en una placa. La figura 48 representa una
pla(;a sometida a una tracción uniforme de valor S en la dirección x.
82 1 8
( or2 + ar r 1 ( 2 ) (éJ24>
+ :¡:2 a0 2
1 acf>
r 1 a2<p)
ar2 + Tr + ¡:2 atJ2 =

la siguiente ecuación diferencial ordinaria que determina


O

La solución general de la misma es

J(T) = Ar 2 + Br4 + G2r1 + D


,por lo tanto, la función de tensión es;

(e)
'Y
F'G. 48
las correspondientes componentes de la tensión, de acuerdo con (38),

Si en el centro de la placa se hace un pequeño orificio circular la distribu-


ción de tensiones en su proximidad habrá cambiado, pero de acuerdo
con el principio de Saint-Venant podemos pensar que la alteración del
estado tensional es despreciable a distancias grandes frente al radio del (d)
agujero.
, Vnnos ejemplos 00 este Ilpo h,m sIdo estudIados por Golovm, loco dl.,y Rlb,~re loe. cit.
y Cumpl. ,""d.• vol. 132, pág. 315, 1901.
106 TEORlA DE I.A ELASTICIDAD PROBLEMAS lllDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARF.5 107
...Las constantes de integración se determinarán ahora a partir de la con- de fonna que..existe en ellos· una tensión de compresión en la dirección
·dición (a), referel1te al conto·rno exterior, así como también a partir de la .tangenciaL
que establece que sobre· el borde del orificio no actúa fuerza alguna. Para la sección transversal de la· placa que pasa por el centro del agu-
Esas condiciones 110S dan ·Ios resultados siguientes: jero circular y es normal al eje de las x; O = 71/2, Y entonces las· ecuacio-

2A + 60
b'
+ 4D
b 2
_ _ 1S
- 2 -
___" "*' 6J'J.,r=h:: t-Yv:{, b nes (62) nos dan:
2
a4)
= -S2 ( 2 + -ar2 +8-
2A
BO
+ -¡ +a 4D
-2 = O
eJ(prrtiiO~
,. \
=i 5 (T"
(15 Ja- 7"rO = 0, .
U8
r4
a (íJ.¡ ext,r/¡'
El efecto del orificio es evidentemente de carácter muy localizado tendiendo
2A + BRb 6C _ ':D = _ ~ S
2 _ (tri la .tensión (Jo rápidamente a S cuando r aumenta. La distribución de esta
b4 b2 2 A~~I~ .
2A + GRa2 _ 6C _ 2D =
a' a2
° 1.5 Si! ·1~,rJ1/
fVIo ~rvf~
tensión es mostrada en la figura mediante el área rayada. El carácter loca-
lizado de las tensiones que se originan alrededor del orificio· justifica la
aplicación de la solución (e), deducida para una laja indefinida, a una
Resolviendo estm; eculldone;; y poniendo a/h ~ 0, c~ llt-dr, suponiendo placa de anchura finita. Si la anchura de la placa es superior a cuatro·vece·s
una placa () laja indefinida obtenemos:· .. el diámetro del agujero, el error cometido al usar la solución (62) para.
calcular (tro) .. "" no excede del 6 %1.
8
A = --,
4
B =0,

Sustituyendo estos valores· de las constantes en las ecuaciones (d) y su-


mando las tensiones producidas por la tensión uniforme t S que actúa
sobre el contorno exterior, las cuales son calculadas mediante (45) en-
contramos1:

~r = ~ (1 - ~) + ~ (1 +3r~4 _ ~~2) cos 28


Uo = ~ (1 + ~) - ~ (1 + 3r~~) cos 28 (62)
'Y

q
r
= _ ~2 (1 _3a + 2ar2
74
4 2
) sen 28 Fm.49

Una vez obtenida la solución (d) para tracción o compreSlOn en una


Si r es muy grande (fr y T,Q tienden a los valores dados en las ecuaciones dirección, pueden resolverse fácilmente por superposición los casos de
(a). En el borde del orificio r ==- a tenemos: . tracción o compresión en dos direcciones perpendiculares. Considerando,
por ejemplo, el caso de dos te~siones de tracción iguales a ··S y actuando
u, = r,8 = 0, tr~ = 8 - 28 cos 28
en. dos direcciones perpendiculares encontramos que el contorno del
Puede verse que los valores máximos de (fo se dan para (j = ",,/2 y orificio se encuentra sometido a la tensión de tracción 00 = 28 (véase
O = 3¡¡;/2, es decir, en· los extremos 111 y n del diámetro normal a la di- § 30). Si en la dirección x actúa una tensión de tracción S y en lu direc-
rección de la tensión (fig. 48). En esos puntos (ay)",,,. = 3S. Esta es ción y una tensión de compresión, también igual a S (fig. 49) tenemos una
la tensión máxima de tracción y su valor es tres veces el de la tensión uni- solicitación de esfuerzo cortante. Las tensiones ·según la dirección de la
fonne 8 aplicada en los extremos de la placa. tangente, deducidas de (62) son entonces:
En los puntos p y.q, cn los que O = n y O = ()
(ju = S - 28 cos 28 - [8 - 28 cos (20 - 'Il")]
u~ =- S Para O = ¡r/2 o () =,3 -¡¡/2, es decir, en los puntos 17 y m, tenemos que
I Esta solUCIón, obtenIda por el profe.,or G. Klrsch (véase V.D.!., vol. 42, 1898), ha sido'
= 4S. Para O =
trl¡ °
ó () = 71, puntos ni Y m,,;
00 = -48. En conse-:-

confIrmada muchas veces medmnte medid"" de deformaciones y ensayos fotocJ¡\sticos (véase Véase S. Tlmoshcnko, Bull. Po/ytech. IIISI., l(iev, 1907. Se debe tomar S 19u~l a la fuer,m
I
el capítulo 5 y los libros citados en el § 42). diVIdIda por el área.. total de lo chapa.
108 TEORI~ DE LA EL/lSTIClDAD PRoBr.ElVlAs BIDIMF.NSIONAUS EN COORDllNAllJ\S POLJ\IIES 109

, cuenciu, para una placa grande cargada a esfuérzo cortante las tensiones ',zonas no alterad~ls por la presencia de! orificio, siempre que rnn sea pe-
máximas en la dirección de las tangentes, existentes en el borde del ori- queño frente ,a np.
ficio, son cuatro veces mayores que la aplicada. G. B. Jeffery ha estudiado también el caso en que una pre~ión normal
La considerable concentración de tensiones existente en el contorno ,Wliforme p, actúa sobre el con torno del agujero. Este problema" de interés
de un agujero es de gran importancia práctica. El caso de las aberturas , . es el de las tensiones que se producen en la vecindad de un agujero
practicadas en los puentes de los barcos puede citarse como ejemplo, remache al introducir bajo presión el roblón, en estado plástico, por
pues su presencia da origen a altas concentraciones de las tensiones de I¡¡, ¡lcción del calor., Si el agujero está lejos 'del borde rectilíneo, la tensión
tracción o compresión que experimenta el puente cuando el casco trabaja su contorno, con arreglo a las ecuaciones, (46) (§ 27), resulta:
a flexión; las olas, al chocar repetidamente, originan ciclos de tensiones (1"6 = p"
que pueden determinar, en los lugares fuertemente solicitados, fisuras
de fatiga l • ' próximo al borde rectilíneo, las tensiones tangenciales
ser constantes en su contorno, dándose el valor máximo de la
s
(63)

'i$11
-+-
.1c 1
2.- en los puntos k y l.
Comparemos este valor, con la tensión de tracción existente en el punto
p la cual viene dada por la fórmula:
, 4p,r 2
FW.50 0'8 = da _ r2 (64)

d = rV3 las' dos expresiones dan el mismo valor. Si d es mayor


A menudo es necesario reducir la coltcentración de tensiones en los r..j3"la máxima tensión se produce en el contorno' circular y si es
agujeros, tales como los existentes, por ejemplo, en el fuselaje y las alas en el ,punto m.
de los aviones. Esto puede hacerse añadiendo un reborde2 o un anillo
de refuerzo2 • El problema analítico correspondiente ha sido resuelto me-
diante una extensión del método que acabamos de aplicar, al estudio de
la influencia de un orificio y los resultados han sido comparados con las
medidas realizadas con bandas extensométricas3 •
El caso en el que existe un orificio circular próximo al borde recto
de una placa semiindefinida sometida a una tensión paralela al contorno FrG.51
(fig. 50), fue estudiado por G. B. Jeffery~. R. D. Mindlin s, ha tratado
ulteriormente el problema aportando ciertas correcciones y r~alizando El caso de una placa o laja de anchura finita con un orificio circular
un estudio fotoelástico, del mismo. La tensión existente en n, punto éste 'en su eje de simetría ha sido estudiado por R. C. J. Howland'. Este'autor
el más próximo al borde recto, es igual a muchas veces su valor en las encontró, por ejemplo, que para 2,' = ! d (Jo = 4,3,5' en el ,punto n y
(Jo = 0,75S en el m.
I Véase el trabajo de T. L. Wllson. Th. S, S, J.evia/hall, D.mage. Repatrs and Strength
Anulysls, presentllndo 01 Congl'cso ele 111 (.Amerle"n SOClety of Nnvnl Archltects and Marine
, El método desarrollado en 10 que antecede, pa,ra el análisis de las
Engmeer.' ~ll novl~mbre úe 1930. , ',.tensiones que se producen en torno de un pequeño orificio circular, puede
• V óase S. Tlm05henl,0. J. Frollklti, [nrl .• vol. 197. pág. 505, 190'¡; véase tambIén la ser aplicado al caso de una placa sujeta 11 flexión simpleS.
obra del mIsmo lIutor, S!rel/g/h uf 11-1,,'er;11Is, segundll ediCIón, vol. 2, Pllg. 317.
J S. Lcvy, A. E. McPherson r F. C. SlIltlh, J. Appl,.t/ Mechanr"" (Trcllls. A.S.M.E.!.
vol. 15, p~g. 160, 1948. En este trabajO pueúen encontrarse las referenCIas de los trabajOS , R. C. J. Howland, Traris. Ruy. Soco (LUlldoll), a~rt. A, vol. '229, póg. 49.
lIntcnores sobre el tcmn. J Z. TUZI, Phil. /l![ag .• febrero, 1930, pág.. 21O; véase tambIén Se" Papm JI/st. Phy•. Chem.
, Trans. Roy. SOL. (].Ol1doll). sene A, \'01. 221. pág. 265, 1921. Rescareh (Tokyo). vol. 9, pág. 65, 1928. El prohlcma corrcspondu!nte con un onflclO elíptico
• Proc. Soco E\pl. Stress A1ldlySlS, vol, S, pág. 56. 1948. fue resuelto postenormerte pOI' K, Wolf, Z. lecho Phy..", 1922, púg. 160. El caso tic una placa
110 TEORlA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BlDEMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 111

Asimismo han sido estudiados:.también los casos de una fila de ,ori- ·~lásticas distintas a la 'del materhIl de la placa (estado plano de tensiones)
ficios circulares en una placa' indefinida l • 2 • 3 , semiindefinidn 3 o de anchura ,.0 cuerpo (estado plano de deformación), nos encOntramos.con el.problema
finita 3.·1 y de una laja con un anillo dé orificios"· (en todos los casos la soli- qe una inclusión rígida o elástica, el cual. ha sido tratado para inclu-
citación aplicada ha sido una tracciÓn). El caso de una placa cuadruda siones circulares l y elípticas a• Los resultados obtenidos.para una inclusión
en la que existe un orificio' y a la ·que se aplican tracciones iguales en las circular han sido confirmados por los ensayos fotoelásticos~.
dos direcciones o, o que es sometida a esfuerzo cortante 7, ha sido estudiado Las tensiones que dan 'las ecuaciones (62) para el problema represen-
mediante. un método deducido .por Hengst. : tado en la figura 48, son las mismas para un estado tensional plano que
Asimismo, se han resuelto los 'casos, en los que las fuerzas son aplicadas · .para un estado de deformación plano. En este último caso, sin embargo,
en ei contorno del orificio, existente en una placa indefinidaS o de anchura qcbe actuar una' tensión axial:
finita 0, o en los contornos de una fila de agujeros, paralela y próxima al
borde de una laja semiindefinida lO (fila de agujeros de remache). •• = V(O'r + lf'o)
Si una placa indefinida, con un orificio ·elíptico, es sometida a una trac- · sobre los extremos de la pieza, paralelos al plano xy, con el fin de anular
ción S paralela a uno de los ejes principales de la elipse, la tensión c"xistentc . La supresión de tales esfuerzos, extremos libres, produce otras ten-
en los extremos del otro eje princ.:ipal (perpendicular a la dirección de · siones de carácter no bidimensional. Si el diámetro del 'orificio es pe-
la tracción) 'viene dada por: . · ,qúeño com parado con el espesor de la pieza la aÍteración estará confinada

• =S0+2~ 0~ ,a las zonas próximas a los extremos de la misma. Si, por el contrario, el
diámetro y el espesor son del mismo orden de magnitud, el problema
debe ser considerado como tridimensional. Estudios de este ti p0 1 han
en donde 2a es el eje' de la elipse perpendicular a la tensión y 2b el otro demostrado que 0'0 sigue siendo la mayor componente de la tensión y
eje. Este y otros problemas concernientes a orificios elípticos, hiper- :que su valor es muy parecido al dado por 111 teoría bidimensional.
bólicos y a dos agujeros circulares son estudiados en el capítulo 7, en el
cual se dan las referencias correspondientes.
Un agujero muy angosto perpendicular a la dirección ele la tracción
"*33. Fuerza 'concentrada en un punto de un borde rectilíneo.
Consideremos ahora el caso de una fuerza vertical concentrada P, que
produce una gran concentración de tensión ll, lo que explica que las fisuras actúa sobre el borde recto y horizontal AB de una placa semi indefinida
perpendiculares a las fuerzas aplicadas tiendan a extenderse. Tal extensión (fig. 52a). La distribución de la earga a través del espesor de la placa es
puede ser detenida taladl'ando los extremos. de la fisura lo que elimina la uniforme, tal como se muestra en la figura 52b, y el espesor es uno, de forma
pronunciada curvatura, responsable de la elevada concentración de . que P es la carga por unidad de espesor.
tensiones. . La distribución de tensiones que se origina recibe el nombre de dis-
Cuando un agujero está ocupado por un material rígido o de constantes tribución radial simpleS. Cualquier elemento e distante r del punto de
. aplicación de la carga se encuentra sometido a una tensión de compresión
de anchura finIta COn un onficlo circular fue estudiado por R. C. J. Howlnnd y A. C. Stevenson. en la dirección radial, de valor
Trans. Roy. s~C'. (tondO/I), serIe A, vol. 232, pág. 155, J933. Una prueba de la conv"rsonL'la
de lu sene solución es duda por R. C. Knlgbt, Qllarf. j. J1!/ath. O-,/ord series, vol. 5, pág. 255. 2P cos 11
1934.
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• W. G. BIc1c1cy, Tralls. Ro)'. So('. (!.ondoll), SCrIe A, vol. 227, púg. 383, 192t!. , Ln "".Iu, IIl11 de este problema fu. obtenIda encarándolo como un caso de soliCItaCIón
" R. C. [(nl~ht, Phil. M"g .• serIe 7, \'01. 19, p,íg. 517, 1935. tridtmensmnal. por Flamant, ComPI. rlmd., vol. 114, póg. 1465. 11192, Paris. La extensIón ¡¡,.
111 C. B. Llng Y M. C. Hsu, Tech. Rept., núm. 16, Bur. Aerollaur. Researelr, Cbengtu, lo solUCión al cnso de una fuerza mclmada se dobe a Bousslllosq,:jCo7llpt. r."d., vol. 114, p,í.
Ch,"", febrel'o, 1945. . glUU 1510. 1892. Vé.lsc también el trabajo de J. H. Mlchell, Proc. Londo" Mat/¡. Soc., vol. 32.
" El caso de una ranura angosta fue tratado pOI' M. Sadowsky, Z. ""gew. Mal'" Mech., pág. 35, 1900. La lllVesugaclon expenmentlll de la diStribUCIón de tensUlIles que sugirió la
\'01. 10, plÍg. 77, 1930. . teoría precedente fue re""zoda por Caru. WIIson, Phil. IV/ag., vol. 32, pág. .f81, 1891.
112 'rEORIA DE LA ELASTICIDAD I'ROllLllMAS DlDIMIlNSIONALES llN COORDIlNJlDAS POLARES 113

En cuanto a la tensión de dirección' tangcnciál <10 y a 111 tensión tangencial como ~c \'c, nos dan la solución (66). Sustituyendo la función (11)
cortante propiamente dicha '1"0, son en este caso nulas. ecuación (39), podcmos ver fácilmente que esta eCllllción es s¡ltis-
Se ve fácilmente que estos valores de las componentes de la tensión por lo que (a) representa la verdadera función de tensión y las ecua-
satisfacen las ecuaciones de equilibrio' (37) (§ 25); también quedan satis- es (66') dan la distribución de tentliones correcta.
fechas las condiciones de contorno porque dO y T,O son nulas a lo largo del Si consideramos una circunferencia de cualquier diámetro d centrada
borde rectilíneo de la placa, que está libre de fuerzas exteriores. En el pUl1to el eje x y tangente al eje y en O (fig. S2a) ocurre que para cualquier
de aplicación de la carga (r = O), U r alcanza un valor infinito. La resul- e de la misma d cos O = r. En consecuencia, como se deduce de
tante de las fuerzas que actúan sobre una superficie cilíndrica de radio r ecuaciones (66), resulta

p 2P
U r ;::::. - 7rd
'Y A
que nos dice, que ]a tensión vale lo mismo e~ todos los puntos de la
:¡n:UIue:relnC:la salvo en el O, punto de aplicación de ]a carga.
En un punto cualquiera, M, de un plano horizontal mn distante a
borde de la placa, las componentes normal y tangencial de la tensión
calculan partiendo del valor de la compresión simple radial. Tendremos
(fig. 52a)

~~---------4----------~ IT. = {f'r cos 2 8 = - -


2P cos3 8
-- = - -
2P
cos 4 O
x 1f' r 'ITa '
(a) (ó)
{f'v = 0',sen 2 O = - 2P sen 2 IJ 00S2 () (67)
FlG, 52 'lTa
O () 2Psen 8 00S2 8 2P
7'"" = 0', sen ('os = - -;- r - -sen
?ra
{J cos 3 O
debe equilibrar a la fuerza P (fig. 52b) Y se obtiene por integración de las
componentes verticales elementales, O',r dO cos O, que obran sobre cada la figura 53 se representa gráficamente la distribución de las tensiones
elemento, rdO de la superficie. Proct'cJicmlo de eRta mnncra encontramos y '1",11 a 10 largo del plano horizontal m11.
En el punto de aplicación de la carga, teóricamente, .13 tensión es in-
2
!o~
o
0'", cos O• r dO = - - 4Plai
1f' o
00S2 8 dO = - P tamente grande, ya que se trata de una fuerza de valor finito que actúa

Para probar que la expresión (66) es la solución exacta del problema,


¡p 13 ~
.A JUl qn
debemos hacer intervenir también la ecuación de compatibilidad (39).
Dicha solución se dedllce de la función de tensión
/0 °1 O2 S8

P
.. ,
:;. e.V ~.......
"-
'" = - - rO sen {] (a)
'/!' .,/V I"~
./ '7 '~ K
--
como puede verificarse, utilizando las ecuaciones (38) %l!
1Ta

~/ ;;- ¡fi -- ,.
2P cos O .;..-
"- ~ D W; lI1rrmrr
- -71' - -
r
'
(66' ) -- -
:;c
", Fw. 53
114 TEOlllA DE I.A ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 115
en un área infinitamente pequeña. En la práctica se produce un fenómeno . La funCllln de tensión (a) puede emplearse, igualmente, en el caso en que sobre
de flujo plástico eje cierta magnitud ep el entorno del punto de aplicación, : el borde ~"ctilíneo de una placa semiindefinida actúa un p:lr tll' fllcr:¡:as (fig, 560).
de manera que la carga viene a repartirse en un área de extensión finita. . fi e ve, fácIlmente que para el caso en que la tracción P se apliclI en el punto O"
Si imaginamos que la porción de material que experimenta la deform!!,ción .que dista a del origen, la función de tensión se obtiene de la ecuación (a) conside-
momentáneamente a ,p. como función de x e y en vez de serlo de r y 8, escri-
plástica es separada de la placa mediante una pequeña perforación éilín- . y + a en lugar de y, y sustituyendo P por -P. La combinación de esta
drica (fig. 52b), las ecuaciones de la elasticidad podrán aplicarse a la por- de tensión con la función original ,¡, nos da la función que corresponde
ción restante de la placa. caso de dos fuerzas iguales y de signos contrarios, aplicadas en O y 0 1 , bajo la forma
-</>(x,1J + a) + .p(z,y)
a tiende a cero, la función tiende al valor
<PI = - a él",
oy (b)
:::;tlstl.tu'~eIlldo (a) en la ecuaciÓn (b) y teniendo en cuenta (§ 25) que

= {l4> sen 8 + o<p coa 8


{I.p
aya.. 88 r
Fm. 54 FIO, 55

Pa M
Una solución análoga puede ser obtenida si la carga aplicada en el borde 4>1 = -;- (8 +sen 8 cos /J) = -;; (8 + sen 8 coa 8) (69)
rectilíneo de la placa semíindefinida es una fuerza horizontal P (fig. 54). la cual ]JI! es el momento del par aplicado.
Las componentes de la tensión vienen dad~s de nuevo por las ecuaciones
(66') siendo sólo necesario medir el ángulo e a partir de la dirección de la p
fuerza tal como se muestra en la figura. Calculando la resultante de las M
y'-,--------~~--_4~
fuerzas que actúiln sobre una superficie cilíndrica tal como la mostrada y.--,r---~,.,..:..--!-~~~
en la figura 54 mediante la línea a trazos tendremos:

- - 2P!a"o cos
11"
2 e de = -p

Esta resultante equilibra la fuerza exterior P y puesto que las componentes


de la tensión 'rO Y (fo se anulan sobre el borde, la solución (66') satisface
las condiciones de contorno. (a)
Cuando se trata de fuerzas cilíndricas oi:>licuas, el problema se resuelve
por superposición, aplicando las soluciones que corresponden a las fuer- FIO. 56
zas vertical y horizontal. Descomponiendo la fuerza P en sus compo-
nentes vertical P cos a y horizontal P sen a (fig. 55) obtendremos la
tensión radial en cualquier punto e, a partir de las ecuaciones (66'). Si se trata de ?OS pares de fuerzas 'de igual magnitud y dirigidos en sentidos
.. que actuan en los puntos O y O" muy próximos (fig, 56b), la función
téns~~n q., puede obtenerse por un rllzonamiento análogo, mediante derivación de
(J'r =- ~ [p cos ex cos e+ P sen a cos (~ + o)] funCIon <P,. Tendremos de esa manera, si e1 valor común del momento es M,
2P ..,
= - -cos (a + O) (68)
q,~ = <PI -
.
(4), + iJa</>lY a) = - ao.p, ay
= - ~
7fT
cosO O
(70)
1rT
los sentidos de rotación de los pares se intercambian bastará modificar el signo
Las ecuaciones (66') pueden ser usadas, por lo tanto, cualquiera que sea la función (70). . ' :
la dirección de la fuerza, supuesto que el ángulo O sea medido a partir de Una serie de funciones de tensión obtenidas por diferebciación sucesiva ha sido
para la determinación ?~ la concentración de tensiones, cread~ por la
esa dirección. de una ent~lladura semicircular en una placa semiindefinida sometida a
116 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMIlNSIONALES IlN COORDENADAS POLARES 117

una tracción paralela al borde de la misma'. La' tensión máxima es ligemmente ii:i¡;,oJ1,gam()s que, como condición de vínculo de ]a placa de la figura 52,
mayor que el triplo de la tensión existente en las zonas alejadas de la entalladura. que los puntos situados en. el eje x no admiten desplazamiento
El caso de una placa de anchura finita con unll entalladura semicircular en cada
borde ha sido también estudiado'. El factor de concentración de tensión (relación
esto es, que para IJ = O, v = 0, 'con lo cual la segunda de las
de la tensión mlÍxima a la media, existentes en la sección más pequeña) es menor de :ua:cí(>n~:s (g) nos da A = O y e = O; mediante esto~ valores de las cons-
tres, tendiendo a la unidad cuando las cnt"lladur,," ,'1II11(:ntan. de integración, el desplazamiento vertical de los puntos del eje x
entonces,
Una vez conocida la distribución de tensiones podemos obtener los 2P
deslizamientos en la forma usual, aplicando las ecuaciones (49) a (51). (u)a_o = - '/TE lag r + B (h)
Para el caso de una fuerza normal al contorno (fig. 52) tenemos
determinar la constante B, vamos a supone¡' que un punto del eje x
au 2P cos 8 diste d del origen, no pueda moverse verticalmente. En la ecuación
E, = ar = - 7rE -r- se tendrá r = d, luego:
u av 2Pcos8
Eo = r + r ae = ']) 7rE -r- (e)
B =
2P
-Elogd
éJu éJv V
'/T'
"Ira = r ao + ar - ;. = O todas las constantes de integración, pueden
termtna:rse los desplazamientos de cualquier punto de la,placa semiin-
Integrando la primera de estas ecuaciones obtenemos mediante las ecuaciones (g).
por ejemplo, los deslizamientos de los puntos del
2P
u = - '/TE cos 810g T + f(e) (d) de la placa. Las componentes horizontales de los mismos se ob-
poniendo e = ± ;n;j2 en la primera de las ecuaciones (g). Tenemos
donde f( O) es función de () solamente. Sustituyendo en la segunda de
las ecuaciones (e) e integ~ando resulta (1 - /I)P (1 - JI)P
V
2~ Ren 8 -1- 'lT'E
= :;rE 2P lag r sen O- f ¡(e) de + F(r) (e)
(tt)a=i = - 2E I (U)9 __ ~ = - 2E

nos dice que todos los puntos del borde rectilíneo experimentan
(71)

en la que F(r) es función de r solamente. Sustituyendo (d) y (e) en la desplazamientos, dirigidos hacia el origen, lo cual puede ser con-
tercera de las ecuaciones (e) se llega a físicamente factible, ya que, como se recordlmí, hemos supuesto
suprimido' la parte de material limitada por una superficie ciHn-
(1 - p)P
feO) = - --E--
• 'IT'
8 sen O + A sen 8 + B cos O, F(r) = Cr (f) de radio pequeño, en tomo al punto de aplicación de P (fig. 52b),
cual no son llplicables las ecuaciones de la elasticidad. En realidad,
donde A, B y e son constantes de integración que se determinan a partir porción de material experimenta una deformación plástica que permite
de las condiciones de vínculo. Las expresiones de los desplazamientos, desplazamientos (71) a 10 largo del canto recto. En cuanto a los des-
ueducidlls de (d) y (e), son: mientas verticales que corresponden al borde, se calculan aplicando
'scgundla de las ecuaciones (g). El desplazamiento hacia abajo a una dis-
(1 - p)P r del origen se obtiene recordando que r es positivo si el movimiento
u
2P
= - 1f'E
-- cos 6 log r -
'Ir'
E 8 sen e + A sen 6 -1- B cos () en el sentido del crecimiento de los ángulos e y que la defor-
2vP 2P . (1 - JI)P es simétricll respecto al eje de las x. De esta manera obtendremos
v = 1f'E sen 8 + '/rE lag r sen (J - 'lT'E 8 cos (J. (O)
(V) .. = - (v) .. = 2P lag ~ _ (1 -1- p)P (72)
+ r;l.-;'SJl)P sen (J + A cos (J - B sen (J + e" a=-'2. 6='2 '/TE r 7rE ~

ecuación aplicada nI origen dll un desplazamiento infinitamente grande.


, F. G. MaunselJ, Phi!. Mag., vol. 21, plÍg. 765, 1936.
'c. B. Llng, J. Applied Mecha1lics (Tram. A.S.M.E.), vol. 14, pág. A·275, 1947; H. Po- obviar esta dificultad podemos suponer que la porción. de material
ntsky, H D. Snlvely, y C. R. Wy!Je, ¡bid., vol. 6, pág. A-63, 1939. rodea el punto"de aplicación de la carga es retirada, cortando segiJn
TEORIA DE LA IlLASTICIDAD
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 119
11&
una superficie cilíndrica ¡:le pequeño radio.' Para otros puntos del borde ·HvmSH.llno"para la fuerza P, de manera que su origen sea el punto de apli-
la ecuación (72) da desplazamientos finitos. respectivo 01> Oa ... De ·10 dicho se desprende que la tensión l1",
ducida, por ejemplo, por la fuerZa P 1 en el plinto D del plano mn se
34. Caso general de carga normal al borde recto de una placa. multiplicando PI por la ordenada HtKi' De igual forma la ~ensión
Si suponemos que las curvas ti", y 1'' '11 de la figura 53 (§ ~3) .represen~an los producida por Pa en D es H 2 K 2 xP2 y así sucesivamente para las otras
valores de las tensiones originadas por una fuerza Unltana, por ejemplo La tensión total normal producida en D por las fuerzas P, PI,
1 kg, dichas curvas serán las líneas de influencÜJ de las tensione~ l1", y.1'xu ,
10 que quier~ decir que la tensión a" ori!ilinada po.r l~ fuerza de mtensIdad
P en un punto H del plano mn, se obtiene multlphcando por P la orde-
consecuencia, la curva (1'" d~ la figura 53 es la línea de influencia de
nada HK. .
tensión normal l1., en el punto D y la curva 1:"11 será la línea de influencia
fA" la tensión tangencial en el punto D sobre el plano 11ln.
:Y Teniendo estas curvas, se pueden obtener fácWnente las componentes
la tensión en D para cualquier carga vertical aplicada al borde AB.
Si en lugar de tratarse de fuerzas concentradas nos encontramos con
fuerza, de intensidad q, distribuida sobre el segmento ss del borde
53), la tensión normal 11", en D se obtiene multiplicando por q el área
la parte de diagrama correspondiente, rayada en este caso en la figura,
que llamaremos superficie de influencia.
. El problema de una carga distribuida uniformente puede resolverse
otra manera mediante una función de tensión de la forma
Ca)
Las componentes de la tensión correspon-

(b)

la placa semiindefinida esto se traduce en la distribución de cargas


en la figura 57a. Sobre el borde de la misma actúa una fuerza
cíal cortante, uniformemente distribuida, de intensidad ·-A y
normal, también uniformemente distribuida, de intensidad An cuyo
cambia bruscamente en el origen O. Para asignar a las fuerzas su
Fw. 57 correcto, nos guiaremos por los signos de las componentes de la
que actúan en un elemento C.
Si sobre el borde horizontal, AB, de la placa semiinfinita que co~­ Trasladando el origen a 0 1 y cambiando el signo de la función de ten-
sideramos actúan varias fuerzas verticales P, PI, P2, ... las tensiones ori- ,¡, se tendrá la distribución de cargas de la:: figura 57b. Mediante
ginadas en el plano mn se obtienen sumando los valores que corres¡:>onden de los dos casos de distribución de 'cargas (fig. 57a y 57b)
a cada una de ellas, las cuales resultan de trasladar las curvas de ti", y 1''''v el de 'qua carga uniforme sobre un segmento del borde de la
::.:: ...
...

"filaRlA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POl.ARES 121


.pla.ca, tal como se muestra en la figura 57c. Para que la intensidad de esa 11 este e'ifucrzo cortante, 'y el radio CD representa la tensión tangencial, - A, en
c~~ga sea q hacemos el plano 1/111 perpendicular a r. Para ,c1.lalquier plano 1n,Il" que farOla con mn un
1 ángulo P (fig. 58a) las componentes de lu tensión L.,.¡tÍn duu.,> !,Ol" 1,,5 coordenadas
2A71" = q, A =-q (1 y , del punto a de In circunferencia de Mohi-, siendo aCD igual a 2/1.
2?J'
Para ootener las componentes de la tensión.originaua por el esfuerzo cortante
La tensIOn en cualquier punto de la placa viene entonces dada por la simple de dirección r, se puede emplear la misma circunferencia (§ 9). Considerando
función de tensión' de nuevo el plano 11/,11, y observando que In normal al mismo forma un ángulo" - {J
con la dirección Y, (fig. -58a), resultará que las componentes de la tensión están
(e) dadas por las coordenadas de! punto II de la circunf~renci ... ·Pum tener en cuenta
el signo del esfuerzo cortante correspondiente" In dirección '" deben cllmbimse los
SIgnOS de las componentes de la tensión y dI: eSIl munenl se obtiene el punto H,
A la vista de las ecuaciones (b), se dedul.<· lI1ie el primer término de la función (e) de hl circunferencia. La tensión total que actúa sobre el plano m,ll, viene dada
representa, para cualquier plinto M de la placa (fig. SHtI). lIn estado equitensional por el vector CK, de componentes, la tensión nonnal - (11 + 11,) Y la tensión tan-
gencial"1 - ,. El vector CK no varía, cualquiera que sea el valor del ángulo fi ya
que la magnitud de sus componcntes CH, y ca, así como el ángulo que forman,
lT - 2" son independientes de {l. Vemos, pues, -que combinando dos solic.itaciones
de esfuerzo cortante ootenemos otro esfuerzo 'cortante simple (véase § 9).
Los ángulos fI para los que TI ._- T = O, corresponden a una de las direcciones
de las tensiones principales en .M. A la vista de la figura deducimos que T y TI son
iguales en valor absoluto cuando 2fJ = 2(" - (J), es decir, fi = 1..1/2. La dirección
de la tensión principal bisectn pues el ángulo formado por r y 1', Y las magnitudes de
las tensiones principales son:
±211 = ±2A sen 2{i = ±2A sen tl _ (e)

Combinando estos volares con la cquitcnsión (el) obten'emos que las tensiones prin-
cipales en el punto M son:
-2A(1l + sen ,,), -2A(" sen ,,) (f)

Dada una circunferencia que plise por O y O, el ángulo" se mantiene constante


para cualquier punto de la misma, ocurriendo lo mismo, por tanto, con lns tensiones
principales (J) en esos puntos. En el borde, y pllru los puntos comprendidos entre
O- y O, (fig. 58,,) el ángulo " es iguul a "7 de dnndl' 1". d()~ tensiones principales (J)
son iguales a 2:rA - .- q. En el resto dd borde" = O \ las dos tensiones prin-
FIG. 58 cipales se anulan. .

(de tracción) de valor 2AO junto con un esfuerzo cortante simple igual a A. De igual
forma el segundo término de la función de tensión representa un estado equitensio-
nal (de compresión) de valor - 2AO, y un esfuerzo cortante igual a A.
Los estados equitensionales de tracción y comprcsión pueden sumarse directa-
mente resultando otro estado equitcnsional de valor
p = 2.1.1.0 - 2.1.1.0, = 2.1.1.(0 - 9,) = -2Aa (d)

siendo u el ángulo formado por los nldlOs , y r,.


Compondremos los dos esfuerzos cortante~ SImples, de direcciones r y 1'" hacien-
do uso dcl círculo de Mohr (fig. 58b), cuyo radio será iguall1 In tensión tangencial A.
Tomando los diámetros DD, y FI'~ paralelo y pcrpcndiculnr ,f',
respectivamente, En consecuencia, si una distribución arbitral"ia ele carga (fig. 59) es descompuesta
como ejes de T y u 'obtendremos la representación del esfuerzo cortante simple que en un gran número de curgns de. intensidudes varinbles uctuundo sobre pequeños
corresponde u la dirección r. Los radios CF y CF, representan llls tensiones princi- elementos del borde, la tensión horizontal 11% existente en. un elemento (tal como
pales A y ·_·A (que forman ángulos 11'/4 con r en el punto M) que !=orresponden el indicaelo en la fig. 59) está motivada solamente por la carga actuante sobre ese
elemento, siendo '
, Estu soluci6n se 'debe a J. H. Michell, Proc. úmdo71 .M"I" ,t;"", nI. 34, pág. 134, 1902. (f, =nlJ-= ._q (g)
122 TEORIA·DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 123
.. Otros casos de cargas distribuidas sobre el borde recto de una placa semiinÍmita 35. Cuña con carga en la punta. La sencilla distribución radial
han sido estudiados por S. D. Carothers' y M. SadowskyJ. En el § 41 se estudia de tensiones discutida en el § 33 puede ser usada también en el estudio
op-a manera de resolver este problema. .'
de las tensiones que crea. en una cuña, la aplicación de una carga en el
vértice de la misma. Consideremos el caso simétrico,. mostrado en la
La flecha del borde recto de la placa puede ser hallada mediante las figura 62, en el que suponemos que la cuña tiene un espesor unidad.
ecuaciones (72) obtenidas para el caso de una fuerza concentrada. Si q
es la intensidad de la distribución vertical de carga (fig. 59) la deflexión p
de 0, producida por el elemento de carga q dr, distante r de O y rayado
en la figura, será de acuerdo con la ecuación (72)
2q 1 d d (1 + p)q d
'll"E ogr r - 'll"E r
y la deflexión total de O

VQ
2
= 'll"Ei'
+:>: d
~ .. qlog-dr -
:>: r
1+
-E
'11"
viZ+"; qdr
'"
(h)

Si la distribución de carga es uniforme, q es constante y entonces

Vo
2q [
= 1rE (l + $) lag L +d z - z10g Z
dJ + --:;;;r-
1- qZ p (i) Fra. 62 Flo. 63

Las condiciones existentes en las caras () = ± a, quedan satisfechas


tomando como componentes de la tensión los valores dados por las ex-
presiones
kP eos 8
0', = r 1 <1'6 = 0, (a)

en las que. la: constante k se detenninará de manera que quede satisfecha


:y la condición de equilibrio para el punto O. Haciendo igual a -P la resul-
Flc. 60 FIG. 61 tante de las presiones que actúan sobre la superficie cilíndrica (indicada
a trazos en la figura), obtenemos .
De igual forma, para un punto situado dentro de la zona cargada (fig. 60)
~etendrá -2)0re< kP cos
r
2
8
rd8=-l.-Pa+ sen2a=-P
Z
(1' )
Vo
2q [
= 1rE (1 - x) log l _ a;
d + :c log Zd] + --:;;;r-
1- p
ql (j)
de donde
La ecuación (h) puede emplearse también para determinar la intensi- k = 1
dad q de la distribudón de carga que produce una determinada defle- a +i sen 2a
xión del borde recto. Admitiendo, por ejemplo, que el desplazamiento
de los puntos del borde es constante en la longitud cargada (fig. 61), Las ecuaciones (a) quedan entonces así';
se puede demostrar que la distribución de la presión a lo largo de la misma P cos 8
viene dada por la ecuación3 <1' r = - -r('a--;+-'ll'"-se-n"""'2"a') (73)
p
q=--===
2
71' va - ZZ
Tomando a = :n/2 llegl!fl1os a la solución (66) ya estudiada, que corres-
ponde a una placa semiindefinida.
I Proe. ROj. Sac. (Landoll), serie A, vol. 97, pág. 110, 1920.
• Z. ang/!W. Malh. Meeh., vol. 8, pág. 107, 1928. I Esta solucion fue dada por MichelJ, loco cit. Véase también A. Mesnager, Ann. pO/ltS
• Sadowsky, /oc. cil. el chanssées, 1901. .
.1.24 . TEORlA DH LA ELASTICIDAD PROllLllMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 125

'.:. Como"<ptiede· 'verse, la distr~bución de las tensiones normales sobre figuras 62 Y 63, podemos tratar el caso en que la fuerza P tenga una direc-
una. s~~ciórt. t"rartsversal mn no es upiforme y la relación de su valor en ción cualquiera en el plano .:ry, descomponiendo la fuerza en sus dos
·los.puntos m. o n al valor máximo, que se da en el centro de esa sección, componentes ..y aplicando el principio de. superposiciónl • Debe advertirse
.resulta igual a cos' a. . que las soluciones (73) y (74) son exactas, únicamente en el caso en que
Si la fuerza es perpendicular al eje de la cuña (fig. 63) puede usarse en el extremo fijo, la cuña es sostenida por las fuerzas radiales cuyo valor
de n~evo la solución (a) si el ángulo () es medido a partir de la dirección es el dado por esas ecuaciones.' De no ser así tales soluciones son válidas
de la fuerza. El factor k se obtiene a partir de la ecuación de equilibrio solamente en puntos distantes del apoyo.
~ El problema de una cuña sometida a un par M, contenido en su plano
(2'~a
J... (J"r coa O· 7' dO = -p y aplicado en el vértice de la misma se resuelve mediante la función de
2 -a tensión2 .
de la cual se deduce = ][ ...sen 20 - 20 cos 21X (d)
<P 2(5en 21X - 21X cos 2a)
k = __ 1 __
. o: - t ¡¡en 20: donde el ángulo (} es el· señalado en la figura 62 y el par aplicado, k/,
tiene un sentido con.trario al de lns agujas del reloj. Las tensiones resul-
estando dada, por lo tanto, la tensión en direcéión radial por
tantes son:
P cos O M 4
crr = - 1'(0: - tsen2a) (74)
rJ"r = ~--o::----;::----;:;:, . - sen 28 G'9 = O
2(sen 21X - 20: COS 20:) . 1'2 • ,
(e)
Las tensiones existentes en una sección transversal mn cualquiera vienen JI! 2 .
'1"rO = 2( 2 2 . 2--)' . 2 (e os 20 - cos 20:)
expresadas por sen ex ~ ex cos o: l'
PllX sen4 (}
- y3(a - i sen 20:) 36. Carga concentrada sobre una viga. El problema de la dis-
(b) tribución de tensiones en una viga sometida a la acción de una carga con-
p.,·"sen 1 O
r"", = - y3ra=- í señ ~a) centrada es de gran interés práctico. En el § 22 se demostró que la dis-
tribución tensional que una carga uniformemente distribuida origina
pudiendo ponerse cuando a es pequeño:

20: - sen 2a = (2a)3


()
e
c.x
Representando entonces, por 1 el momento de inercia de la sección trans- ~------~~----~~
versal mn, podemos escribir las ecuaciones (h) en la forma:
. Pyz
Uu = --y- ¡.'1Cl.6+
~ .. ' (e)
1'''11 = en lus vigas de sección rectangular estrecha, puede calcularse con exac-
titud satisfactoria utilizando la teoría elemental de la flexión. En la pro-
Para valores pequeños de a el factor ( t~, '!_)' ,< sen 4 O puede tomarse ximidad del punto de aplicación de una fuerza concentrada ocurre sin
embargo, una perturbación local de la distribución de tensiones, que hace
muy aproximadamentc igual a uno y entonces la expresión de Uy coincide 1 Varios ejemplos relatIvos a la d,strIbuc,ón de tensIones en las cuños han SIdo anah.ados
con la que da la teoría elemental de la flexión. La máxima tensión tangen- por Aklro MlUrn en Spannti"gskrrmell j" rcchteckigen l/lid keilfb,¡nrgeJl Trag('/II, Berlín, 1')28
cial se da en los pu~tos 111 y n y su valor es doble del deducido por la El caso en el que las fuer..as no "e aplican e[, la punla de la cuña h~ SIUO estudIado por j. H. A
B[·.,htz, Ph,YSLCS, vol. +. pág. 56, 1933 Y por W. M. Shepherd, Proc; Roy. Soco (Lol/doll). ser!< .\.
teoría elemental para el baricentro de la sección rectangular de unll viga. '01. 148, prig. 28+, 1935. .
Obtenidas las soluciones para los problemas representados en las .2 C. E. Ingll., Tran.s. 111sl. Nav. Areh. (LUllIlutl), 1922, vol. 64.
TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 127
. rié~~a;io,un,estudio m!iÍs detenido. Tal estudio Ha sido realizado por pri- de la viga, es igual a la diferencia entre el momento de la reacción P/2 y
'~~~" ;e~ ·por. earus Wilson' , quien ensayó por métodos fotoelásticos el momento de todas las fuerzas' de tracción, de dirección radial, corres-
(yéase. § 42) .una viga rectangular de vidrio, libremente apoyada en sus pondientes a una de las mitades de la' viga. Este momento se calcula fácii-
dos extremos y,cargada en el centro (fig. 64). Mediante 105 ensayos reali- mente, pues esta distribución radial es estáticamente equivalente a 'la
zados encontró que en el punto A de aplicación de la carga, la distribución de las presiones que actúan sobre el cuadrante ah que rodea al punto A
dé ,tensiones se aproxima.a la producida en una placa semiindefinida por (fíg. 65c) o bien, teniendo en cuenta la ecuación (66), al conjunto de una
fuerza horizontal Pln y una fuerza vertical PI2 aplicadas en A (fjg. 65d).
Por lo tanto el momento flector, es decir, el momento respecto a 0, es
p P
- l - -e
2 '11'

y las tensiones de flexión correspondientes!


a A e

~ A A estas tensiones debe añadirse el estado equitensional de valor PI2nc


producido por la fuerza Pln. Las tensiones normales que actúan sobre la
sección AD, obtenidas de esta forma elemental son, en consecuencia:

11'", = 3P (i _!!.)
2c 3 2 7r
y ~
+ 2m:
fórmula que' coincide con la propuesta por Stokes.
Se obtiene una mayor aproximación si hacemos uso de las ecuaciones
(36') y observamos que sobre el borde inferior de la viga (fig. 65b) existe
FIG.65
una distribucion continua de carga. En el punto D la intensidad de esta
carga es Plne como se deduce de las ecuaciones (66). Sustituyendo este
valor en (36') y teniendo en cuenta el encontrado anterionnente para
una fuerza concentrada. A lo largo de la sección AD la tensión normal
a"" obtenemos en segunda aproximación
11", no sigue una ley lineal y en el punto D la tensión de tracción es inferior
11 la que resultaría de aplicar la teoría elemental de la flexión. Estos resul-
tados han sido explicados por G. G. Stokes' recurriendo a ciertas supo-
siciones empíricas. Según dicho autor, el sistema representado en la figura (a)
64 puede obtenerse por superposición de los dos sistemas mostrados en la
figura 65. Las tensiones radiales de compresión que actúan sobre las
secciones mn, np y pq de
la laja semiindefinida (fig. 65a) son compensadas
por tracciones radiales, de igual valor, que actúan en los costados de la viga Para obtener las tensiones totales a lo largo de las sección AD, debe agre-
rectangular apoyada en.n y p (fig. 65b). Para realizar el caso tratado por garse a estas últimas expresiones las tensiones
Stokes, se deben superponer las tensiones existentes en esa viga, a las que 2P
"orresponden a la placa semiínfinita. . (f", = 0,
rt" = - ?r(c + y) (b)
Aplicando la fórmula elemental de la flexión al cálculo de las ten-
siones se tendrá: el momento flector en la sección transversal media AD como para el caso de una placa semiindefinida.
La comparación de . las expresiones anteriores con una solución más
Loe. cit.
1 .i
• Wilson. loe. cit.; v •• se también O. G. Stokes, Mathematical and Physical Papers, vol. S, I Consideramos a P, como hicimos antes, como la fuerza por unidad de espesor de la
pág. 238, placa.' ".
\128 TIlORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BllJlMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 129

.,exacta (véase la. tabla de la pág. 131) muestra que las ecuaciones (a) y (b), el caso de una viga de longitud indefinida vendrá representada por una integral
'dan las tensiones con una gran aproximación, salvo en el punto D, donde de Fourier. De esta forma Kánnán llega a la función de tensión
i~ corrección que aportan al valor dado por la teoría elemental es: ti> = Ma r" (ac eh + sh ac) eh. ay ~ eh exC ah ay· ay
ocC coa aX da
". Jo sh. 2a.c + 2ac
3P
2;é
P lP
+ z.;;:;; +:5;;:C = -
P
0,254.;
_ Ma r" Cae sh ",e + eh ae) sh ay - eh ae eh a.y. ay coa <l/X da (e)
.. Jo ah Zac - Zac
Esta función da la distribución de tensiones en una viga en el caso en que el diagrama
mientras que la teoría exacta da tan sólo -0,133 (PIe). del momento flector sea un rectángulo muy estrecho, tal como el ,mostrado en la
El primer intento para obtener una solución del problema más exacta, figUra 66. Para el caso más general de cargas verticales que obran sobre el borde
es debido a J. Boussinesql. que hizo uso de la solución de Flamant para pla- superior de la viga 1, el momento flector correspondiente puede dividirse en rectán-'
cas semiindefinidas (véase el § 33), mediante correcciones s\lcesi\ a:;. gulos elementales, como el de la figura 66, y la función de tensión corre;pondientc
Comienza por anular las tensiones sobre el contorno np (fig. 65a), super- se obtiene integrando la expresión (e) a lo largo de la viga.
poniendo un sistema de tensiones iguales y de signo contmrio; luego
considera que la viga es una placa semiindefinida que se extiende por en-
cima de la línea lIP y e;r:nplea de nuevo la solución de Flamant. Como esta
corrección introduce tensiones suplementarias sobre el borde superior
de la viga es necesaria la utilización de una nueva solución de Flamant
para compensarlas. Este proceso se aplica sucesivamente, pero dado
que converge muy lentamente, no conduce a resultados satisfactorios.
L. N. G. Filon2 ha dado una solución al problema por medio de series y
trigonométricas. Los resultados que obtuvo pam diversos casos de fuerzas
FlG. 66
concentradas (véase el § 23) cuadran bastante bien con los obtenidos en las
investigaciones más recientes. Seewald ha aplicado este método al caso de una viga sometida a una fuerza
H. Lamb3 realizó ulteriormente progresos en la búsqueda de la solu- concentrada P (fig. 64), Y ha demostrado que la tensión 11" puede ser descompuesta
ción correcta. Considerando una viga de longitud indefinida, sobre la en dos partes: una calculable mediante la fórmula elemental de las vigas y otra
que actúan hacia abajo y hacia arriba, alternadamente, fuerzas iguales que represerita el efecto local en el entorno del punto de aplicación de la carga;
equidistantes, Lamb pudo simplificar la solución del problema bidi- esta última, llamada 1Iz', puede ser representada en la forma fJ(Plc), donde fJ es un
factor numérico cuyo valor depende de la posición del punto para el cual se calcula
mensional y obtuvo para diversos casos la curva de deflexión.· Demostró, la tensión local. Los valores de este factor vienen dados en la figura 67. Las otras
asimismo, la gran exactitud de la teoría elemental de la flexión de Ber- dos componentes de la tensión lIy y 'zy pueden ser representadas también en la for-
.noulli-Euler cuando la altura de la viga es pequeña fl'ente a su longitud, ma fJ(P/c). Los valores correspondientes de P'son dados en las figuras 68 y 69. A la
y también que la corrección de esfuerzo cortante 'dada por Rankine y vista de estas figuras sc deduce que las tensiones locales disminuyen muy rápida-
Grash<if (véase el § 21) es algo exagerada y debe ser reducida a los 3/4: mente cuando aumenta la distancia al punto de aplicación de la carga y que a una
distancia igual a la altura de la viga, su valor es prácticamente despreciable. En la
de su valol'4. página 131 se inserta una tabla de valores de las tensiones locales en cinco puntos
de la sección transversal AD, que contiene a la vertical de la carga (fig. 6+), valores
l1n estudio máq detllllnclo de la dIstribución tcn8ional y dc 111 curvutura en el que se pueden comparar con los de las tensiones locales', calculadas para los inismos
entorno del punto de IIp!tc>lción de In carga <:OllLcntl'uda, hu sido rcahzudo por puntos mediante las ecuaciones (a) y (17). Como puede verse, la exacl'Ítud que con
T. V. K'¡rmán' v F. Sccwuld'. El primero con&ld"ru tina viga infinitamente Iargu estas ecuaciones puedc obtenerse para las tensiones, es satisfactoria.
y hllce uso de la ~olución correspondiente al caso de una placa semllndcfinidn, sobr~ Conocidas las tensiones pueden calcularse fácilmente la curvatura y la deflexión
la cual actúan dos pares iguales y opuestos en puntos próximos del borde (fig. 56b). de la viga. Estos cálculos muestran que tanto la curvatura como la deflexión vienen
Las tensiones así introducidas en el borde mferior de la viga pueden ser eliminada'
usando una s()lucióQ, cuya fonna es la de una serie trigor!mi1étrica (§ 23), que en , El case:. de una carga nplicada a la mitad de la altura de la vigo, fue estudiado por R. C. J.
Howland, Proc. Roy. Soco (Landan), vol. 124, pág. 89, 1929 (véase las págs. 115 y .igs.)· y el
I eOll/pI.' relld., vol. 11 +, púg. 1510, J 892. de dos fuerzas actuando en el interIor de la viga por K. Girkmann, lngenieur-Archiv, vol. 13,
, L. N. G. Flloll, Tram. Ray. Silr (LOlldoll), serie A, vol. 201, pÁg. óJ, 1903. pág. 273, 1943. El caso de vigas en 1 sobre las que actúan fuerzo~ longitudinales concentradas,
I H. Lrunb, Att. IV cOI/gr. l/Iterl/. /l/a/elllol., vol. 3, plÍg. 12. Roma, 1909. ha sido considerado por Girkmann en Oes/err. Ingenieur-Archiv., vol. 1, pág. 420, 1~46.
, Fllon llegó" la misma conclUSIón en su trabajo Iloc. cil.). J Nos referimos con esa expresión a las tensiones que deben ser añadidas a las obtenidas

'Ablza"dl. aerodYllam. Jnst. Terl. Hochschule, A.lchen, \'01. 7, 1927. mediante la fónnula -,elemental.
9 -THORIA DE LA eu.srICIDhD
PROBLEMAS BlDlMENSIONA,LES EN COOHDENADAS POLARES 131
TEORIA DE LA, ELASTICIDAD
130 T"BLA DE, LOS FACTORES {I PAn" EL CENTRO DE LA VIGA

'y -e -c/2 ,1 o c/2 c


y.-o
Solución exacta
'1\
V ,~ ~ -0,133
V
~~ ~<:i <:S~
~ ;::
I~~
O
vV ~
1--V ,~~ ~ ~ I--!
<:i
-¡. x
O '
~
e Solución aproximada

3.0 2,5 2.0 1,5 1,0 0,5 0,5 1,0 1,5 2,0 2.5 3,0 -0,254
O
(a)
j
y=-~
2 fJ
fJ
3.0 2,5 2,0 1,5 1,0 0,5 - 05 1,0 1.5 2,0 25 3,0
O
1\ V
1\ ~'" ~I/
'?~ ~~
tl
~
~
~
B
~
• <o <:s <:S t:S
1\V'r ••
<S
-lo ~ 'f.

(a)
~~~ta~ ~<:i ~¡¡: ~
l!l<:S
Pf<:3~<:i
;. ... .~ <:S <:SI y. () fJ
V 1'0.'1' • • x
e 1,0 05 05 10 15 2.0 25 3.0
3,0 2,5 20 1,5
10 O 1
~ ~ ~k:t; ~ ;;:;
3.0 2.5 2.0 I.S 1,0 O,? 0,5 1,0 1,5 2.0 2,5 3.0
(e)
t'--
r-l'\ <S
~~~I~
~
~ <:i ~
~ ¡..;. <:S<:S
I I ...
<S
.
<:S (:)
-¡.

(b)
,O

['o,~""S!;~
I
..... "-
~
".

~' ~~~
I>i~

,~
'<i
...
<S -¡.
3,0 2,5 2,0 1,5 1,0 0,5 0,5 1,0 1,5 2.0 2.5 3,0
(á)
y=+c (e)

-- ¡'-r-.. .0 vI- x
e
FIG. ó~

~ ~~~ :;;
:g~", ~ ;1t
dadas por expresiones que pueden ser descompuestas en dos partes: una. la <Inda
9~ -¡. -¡..,.
~
os ~
.,.
<:S ~... por la teoría elemental y otra que representa el efecto local de la carga concentrll-
~
da P. Esta ~urvatura adicional de 1>1 línea central de la:' viga puede representur~l'
3.0 2.5 2,0 1.5 1,0 0,5 0,5 1,0 1.5 2,0 2,5 3,0
por la fórmula "
(e)
F.o. 67
1 P (el)
",
r="'Eo'
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES
133

. en la que (1 es un factor· numérico que varía a lo largo de la viga. Algunos valores


de ese factor son dados en la figuro 70. Como puede verse para secciones transver-
sales cuya distancia a la central sea mayor que la mitad de la altura de la viga, la
curvatura adicional es despreciable.
P
h" a
~
:t .P
F"U,ílJiif

Y"-f
[\..
- ¡-

1 1I~ :;.¡
~
t;:s~~~_
;t,\~~~~
"\!;.<:s~q
.......
~ ¡i
~~ ~
1
I;:¡
~~ :¡¡~ ~
~
~
I\l
.... / :-:t'!;'1 I I +2B.
e
~~ ~'" <:S
3.0 2,0 1,5 1.0 0,5 -¡. ., <:S <:S
~-¡. ~ 'i-
O 0,5 1,0 1,5 2,0 3.0
3.0 2,5 2,0 1,5 1,0 0,5 (I,S 1,0 I,S 2,0 2,5 3,0

FIG.70
(a)
- ~.
En virtud del efectp localizado sobre la curvatura, a que nos hemos referido,
1\ se puede considerar que las dos ramas de la curva ·de deflexión AB y AC (fig. 71)
11
forman un ángulo igual a
jJ
~ (~ - l~E - !i:)
1
'Y '"
'" V
~I La flecha correspondiente al punto medio es:
§1
y~O

!/ ~ ~~ l<l la..,
(f)

3,0 2,0 1,5 1,0 0,5


~
<j
~
<:SI;:¡
~
c::s
I;:¡
1,0 1,5 2,0 3.0
T
O 0,5

/
1I (11) .BC;FJjJ2~ A t
lL 1- FIG.71

,8H- De esta flecha debe restarse o., pequeño término correctivo cuyo objeto es hacer des-

:y",+f iS vP' apareCer el cambio brusco de pendiente en el punto A. Su valor calculado por

.. ~II Seewald es:


p
~
~~ ~ ~
V~0,5
o. = 0.21 E
~
3,0 2,0 1,5 1,0 0,5 <::sC::S ~
"'''' c::s <:S x
1,0 1.5 2,0 3,0 e Designando ahora por c" la flecha que daría la teoría elemental, el valor total de la
110 misma será: -
(75)
1/ te)
V
- que tomando v = 0,3 queda
F.o. 69 Pl' [ 1
'.~ = 4sEí + 2,85 (2C)'
T - 0.84 (2C)']
T
· . '. '. 'TEoiUA DE LA ELASTICIDAD PRODLIlMhS DIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 135
'ni!?'~l'e~ent:ál"de Rnnkine-Grashof (§ 21) da en esto CIlSO Si sobre la periferia del disco no actúan fuerzas exteriores la tensión

8'~ 4::[ [1 + S.90 (~rJ (o)


en cualquier punto se obtiene, pues, agregando a las des distribuciones
radiales simples de tensiones, antes menci~)Oadas, una tracción en el plano
del disco, de magnitud 2P/ nd.
" ': : "'q\.le parece ser un valor demasiado grande para la corrección debida al esfuerzo
·cortarite. Ninguna de las fórmulas anteriores toma en cuenta la deformación local Consideremos ahora la tensión existente en la sección diametral hori-
que se produce en los apoyos. zontal del disco que pasa por N. Por simetría se deduce que no actuará nin-
guna tensión tangencial sebrela misma; en cuanto a la tensión normal que
37. Tensiones en' un disco circular. Comencemos considerando resulta de las dos compresiones' radiales iguales valdrá:
el caso sencillo de un disco sometido a la acción de dos fuerzas iguales y
opuestas P que actúan en los extremos de un diámetro AB del mismo 2Pcos 8
-2 ' - - - . cosz (J
71" r -
p
en la que r es la distancia AN y Oel ángulo formado por AN y el diámetro
vertical. Superponiendo a este valor la tracción uniforme 2P/nd, tenemos,
para la tensión normal total existente en el plano horizontal que pasa por
N, el valor .
d
~~~r--1-------4D~~x

que usando. la igualdad

d
cos O = -;r.;;:=;==;==;¡
Vd2 +4X2
y
qued!lllsí:
FIG.72

(fig. 72). Suponiendo que cada una de las fuerzas produce una distri- (b)
bución radial simple de tensiones [ecuación (66)], podremos calcular
qué fuerzas habrá que aplicar a la periferia del disco para mantener dicha
distribución. En cualquier punto M del contorno tendremos compresio-
La máxima tensión de cempresión en el diámetro eD se da en el centro
del disco donde
nes en la dirección de r y Yl de valor igual !I 2P cos (J 'y 2P COS (JI res-
1/" l' 71" Tl 6P
1 O"y = - 1rd
pectivamente • Dado que r y YI son perpendiculares entre sí y que siendo
d el diámetro del disco,'
mientras que en los extremos del diámetro O"y se anula.
cos 8 COS 81 1 Consideremos ahora el caso de dos fuerzas iguales y opuestas, ac-
-r- = ----rx- = d (a) tuando en los extremos de una cuerda, AB (fig. 73) en la dirección de la
misma. Suponiendo de nuevo dos distribuciones radiales de tensiones,
se deduce, que las dos tensiones principales en M son dos compresiones
que parten de A y B, la tensión en un plano tangente a la circunferencia
igual~ de valor 2P/ nd. En consecuencia, esta misma tensión de compre-
en el punto NI, se obtiene por superposición de dos compresiones radiales,
sión actúa sobre cualquier plano, perpendicular al plano. del disco, que
pase por M y una fuerza normal de compresión, de valer 2P/:rcd, deberá 2P 'cos 8 y 2P COS 81 , de direcciones r y r1 respectivamente. La
ser aplicada sobre la periferia del disco con objete de mantener el par de 7t r 11: rl
distribuciones radiales simples de tensiones que se ha supuesto existen, normal MN a la tangente en M es el diámetro deLdisco¡ de manera que
MAN y MBN son triángulos rectángulos y los ángulos que forma la
, Se supone que P es la fuerza por unidad de espesor del disco. nqrmal N/O 'con .'( y rl son 'n/2 - 81 y n/2 - (J, respectivamente, Las
136 TEORIA DH LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 137

, tensiones nonnal y tangencial que corresponden a un elemento del con- en equilibrio, aplicadas 'a su periferia '. Consideremos una de estas fuerzas aplicada
torno eI\ el punto M, serán, por lo tanto: en .A según la dirección de la cuerda AB (fig. 74). Suponiendo de nuevo que la
distribuci6n de tensiones es radial tendremos en el punto M una compresión simple

O' = _ 2P cos Ocos2


'Ir T
(! _
2
Ih) _ 2P coa 01 cos2
'Ir' TI
(!. _o)
2
radial de valor (2P¡ 310) cos etlT1 dirigida según AM. Tomando el punto O como
origen de las coordenadas polares y midiendo O en la forma que se indica en la figura,
las componentes normal y tangencial de la tensión que actúa sobre el elemento
tangencial que comprende el punto M, pueden ser calculadas fácilmente si se observa
_ 2P (cos Osen2 01 + cos 0 sen fJ) 1
2
(o)
que el ángulo que forma la normal MO a dicho clemento con ,la dirección T1 de
'Ir T 'TI la co~pcesión vale n/2 - O.. Tendremos, pues:

= _ 2P cos 8'sen; 8.
'.,. = - -2P (cos
- -Osen 01 cos 01 sen e cos e)
COS fT.
el - -- 11' T' •
'Ir T TI (6)
"'.8 = - 2P cos 8, sen 8. cos 8,
'l!' T1

Estas ecuaciones pueden ser simplificadas si observamos que en los trián-


En el triángulo AMN, T, = d sen O,,· luego las ecuaciones (e) pueden escribirse:
gulos MAN y MBN se verifica:
r = d sen Ih, '1"1 = d sen O <Ir P sen (O, + 8,)
= - "lrd - .!... sen (O. - 8,)
"Ira
P p (n
Sustituyendo en las ecuaciones (e) tenemos: - ;d coa (8, + fJJ) - ;;el cos (O, - 8,)
2P
O' = - 'lI"d sen (O + (1), T = O (d)

De la figura 73 se deduce que e'[ valor de sen (O 8,) pennanece constante +


en toda la periferia, por lo ql,le para que las distribuciones radiales de tensio-
nes supuestas se den en el disco, es necesario aplicar sobre el contorno del
mismo una fuerza de compresión uniforme de valor 2P/nd' ¡;en (O + O,).

FIG. 74

Esta tensión que actúa sobre el elemento, tangente a la periferia en el punto M,


puede obtenerse por superposición de las tres tensiones siguientes:
1) Una tensión normal que se distribuye unifonnemente a 10 largo del contorno
p
- ;;¡ sen (8, + 8,) (g)

2) Una tensión tangencial que se distribuye unifoffilemente sobre el contorno


Flc.73
(h.)
En el caso en que tal fuerza de compresión no exista la tensión en el disco,
será la que resulta de añadir a las dos distribuciones radiales simples arriba I Los problemas examinados en este pármfo fueron resueltos por H. Hertz, Z. Math.
indicadas una tracción unifonne de intensidad 2P/nd· sen (O + O,). Physick, vol. 28, 1883, o Gesamllle/te Werke, vol. 1, pág. 283; Y pqr J. H. Michell, Proc.un/do"
Math. Soc., voL 32, pág. 44, 1900 y vol. 34, pág. 134, 1901. El; problema correspondiente a
In figura 72 en el que el disco ha sido remplazado por un rectángulo ha sido estudiado por
Podemos abordar ahora el problema más general, de la distribución de tensiones J. N. Goodier, TTam. A.S.M.E., vol. 54, pág. 173, 1932, incluyéndose el efecto de que la
que se obtiene en un disco sujeto a la acción de un sistema cualquiera de fuerzas carga sea aplicada sob~e pequeños segmentos del contorno.
.138 . -rEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 139
-3) Una tensión cuyas componentes normal y tangencial son actllc un pur sobre el disco (fig. 75), compensado por otro Pllr aplIcado en el centro.
P . Admitiendo dos distribuciones rndilllcs iguales en los puntos A y E, vemos que
- - sen (0, - 01) y' (k) en este caso la fue ....!... (l) y la suma de"las teTlsiones (h) es cero, por lo que para' man-
lId tener lás distribuciones radiales de tensiones sólo es necesario aplicar las fuerzas
Observando que el ángulo fonnado por la fuerza P y la tangente en M es O, - O tangenciales (m). La intensidad de tajes fuerzas será:
puede deducirse que la tensión (k) vale 'P/",d y actúa en sentido opuesto al de dich~
fuerzaP. 2P 2M,
Suponiendo ahor~ que son v~ria~ fu~;zas la.s que actúan sobrc el disco y que
- ...d COB (0 1 + O.) = - ".d' (1')
cada una de ellas produce una dlstrtbuclOn radial simple dc tensiones las fuerzas
que deberán ser aplicadas sobre el contorno .del disco para mantener ~al distribu- donde Me es el momento del par de fuerzas aplicado. Para que la periferia del disco
ción serán: . quede libre de esfuerzos tangenciales y pueda efectuarse la traslación, al centro
1) Una fuerza normal, distribuida uniformemente sobre el contorno, de valor del disco, del par de fuerzas equilihrante de las fuerzas P, que constituyen el pal'
que actúa sobre la circunferencia de la pieza, es necesario añadir a las distribuciones
-l;5 sen (o. + O,) (l)
radiales simples, las tensiones que se indican en la figura 75b, las cuales correspon-
den al caso de tensiones originadas por unn tensión cortari te círcuferencial, fácil-
2) Fuer~as tangenciales de intensidad mente calculable; tal resulta de observar que las tensiones tangenciales deben origi-
nar un par MI en cada uno de los Círculos 'concéntricos, así que siendo T el radio,.
,\,p
- L,¡:;;J COS (01 + O,) Cm)
se ttmdrá: .

(p)
3) Una fuerza, cuya intensidad y dirección se obtienen sumando vectorialmente
los expresiones (k), suma que debe extcnderse a todas las fuerzas que obran sobre
la periferia. Estas tensiones podrlan ser deducidas también mediante las ecuaciones (38) par-
tiendo de la función de tensión

(g)
de la que se deduce

<Tr = 0"9 = 0,

FIG.75 38. Placa indefinida con carga concentrada en un punto. Si


una fuerza P actúa en el plano medio de una placa indefinida (fig. 76a),
De la figura 74 resulta que el momento total de todas las fuerzas exteriores con la distribución de tensiones resultante puede obtenerse fácilmente por
relación al punto 0, es superposici6n de sistemas que ya hemos estudiado. No puede resolverse
el problema, sin embargo, superponiendo simplemente las soluciones
que corresponden a las placas semiinfinii:as que se muestran en las figuras
. y como .este mumento debe ser cero por tratarse de un sistema en equilibrio, se de-
duce que las fuerzas t;m¡¡encinles (m) deben s~ nulas. La suma de las tensiones (k)
76b y 76c. En efecto, si bien los desplazamientos verticales sQn iguales en
es una fuerza proporcIonal JI la suma geométrIca de las fuerzas extcriores y también ambos casos, los que se producen horizontalmente convergen hacia O
será nula para un sistema en equilibrio. Se desprende, pues, que para mantener en el caso de la figura 76c y divergen en el de la 76b. La magnitud de estos
las distribucione.~.?e te~sión radiale~ simples sólo será necesario aplicar periférics- desplazamientos, en ambos casos, deducidos de la ecuación (71), es:
mente la comprcslOn umfonne (1). SI sobre el contorno no existe compresión unifor-
me se obtendrá la tensión en un punto del disco, superponiendo a las distribuciones 1- 11
radiales simp les la tracción uniforme: 4li· P (a)
'\; P .
~;d sen(8, + o.) La diferencia entre los desplazamientos horizontales puede ser eliminada
combinando los casos 76b y 76c con los 76d y 76e en los que nctúru¡ fuer-
Usundo este método general se pueden resolver fácilmente otros casos de dis-
tl'Íbución de tensiones en los discos '. Podernos escoger, por ejemplo, el caso en que zas tangenciales sobre e'l borde rectilíneo. Los despl~zamientos c~:rrespon­
dientes a estos casos, pueden obtenerse a partir de lok resultados obtenidos
I Varios casos de interés han .,do estudiodos por ]. H. Michell, loe. cit. en, 'el problema, de. la flexión de una pieza curva, que se muestra en la
TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLI\RES 141
. : "fi~~f~:;~~'6¡;':~ad~nd(rtender el radio interior y. el exterior de. esta pieza Teniendo en cuenta los distintos ejes polares tomados en las figuras
' ... ~','~~í$:"(lrtfJnito respectivamente, obt~nemos el caso de una placa semi- 46 y 76 Y usando las ecuaciones'''(60), las tensiones en la barra curva,
midiendo f) como se indica en la figura 76, valdrán

D cos 8 1 - 'V P cos 8


íTr ;::::::: --r-- = -:¡:;---r-
D cos 8 1- 71 P cos (J
rJ"o = --r- = ~--T-

Daenf] 1- IJPsen 6
Tr8 = --r- = ~ --r-

. ~,
Si se. combinan estos valores con los que da la fórmula (66) para las ten-
-siones que origina la carga P12, se obtiene la siguiente distribución de
tensiones para la placa de extensiÓn ilimitada

Q O
P
2
(óJ
~
-~)
Cfr

CTO =

T'rq=-----
1 - 71

l-7IPcos6
-:;¡;- --r-
1-vPsen6
P cos 6
= -:¡;;:---r- - --;.;:-
P ('OS ()
-~--r-
(3 -/- v)P cos ()

(76)

411" r

Si suponemos ahora que en el punto O de la placa aislamos un pequeño


cilindro de radio r y proyectamos sobre los ejes x e y las fuerzas que
FIO. 76' actúan sobre el contorno de dicho cilindro, tendremos:

indefinida. La ecuación (61) nos da el valor del deslizamiento que tiene x = 2 lo'" (Cf r coa (J - 'frO sen/l)r d/l =P
lugar a lo largo del borde rectilíneo de esta placa, en la dirección de la
fuerza cortante que actúa sobre el mismo: y = 2 lo"" (rJ"r sen /1 + 'fro COS 8)r dO = O

D1I"
(b) expresiones éstas, que igualan las fuerzas que actúan sobre el contorno
E del elemento cilíndrico a la carga P aplicada en O. Usando ahora las
siendo D una constante de integración que debe ser ajustada co~ objeto ecuaciones (13) podremos deducir de (76) la expresión de las compo-.
de que el desplazamient~l.-fesultante de (a) y (b) se anule. En consecuencia: nentes de la tensión en coordenadas cartesianas

D1I" 1- p P coa (J
E = -lA' P, (e) rJ"", = 4'11"-r- [-(3 + IJ) + 2(1 + v)sen 2
(J]

P cos IJ
y realizado .este ajuste, se obtiene como resultado de la superposición de 11" = 411"-r- [1 - v - Zn + IJ)5en O] 2
(77)
los CllSOS 76b, 76c, 76d y 76e, el de una placa indefinida cargada en un . P sen O
punto (fig. 76a). Las tensiones correspondientes se obtienen ahora, fácil- r"" = - 41I:-r- [1 - v + 2(1 + IJ) cos 2
6]
mente, sumando las tensiones que se presentan en una placa semiinde-
finida sobre. cuyo borde actúa una fuerza normal P/2 y las existentes en Las fórmulas (77) resuelven el caso de una fuerza concentrada y per-
una barra curva, en cuyas expresiones figura la constante de integración D. mit~n obtener, Por. superposición, las soluciones correspondientes a
142 TllORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POI.ARES 143

otros tipos de carga. Consideremos, por ejemplo; el caso mostrado en la Como puede verse las componentes de la tensión disminuyen muy rapl-
. figura 77, en el que dos fuerzas iguales y opuestas son aplicadas a una damente cuando r aumenta y para valores de r grandes, frente a d, su
placa indefmída en los puntos O y Oh cuya distancia d, es muy pequeña. valor se hace prácticamente despreciable, resultado este previsible, con
~rreglo al principio de Saint-Venant, por tratarse de dos fuerzas iguales
y opuestas actuando en puntos muy próximos.
Superponiendo dos distribuciones tensionales de las dadas por las
ecuaciones (78), podemos resolver el problema mostrado en la figura 78. En
este caso las componentes de la tensión 1 son:
dP
(F" = -2(1 - 11) 4'11"1'2 (1 - 2sen 2 O)
dP
(fu = 2(1 - v) 4'/1"1'2 (1 - 2 sen 2 O)
X
FIG.77 dP
T%lI = -2(1 - JI) 41rr 2 sen 20

La tensión en c~alquier punto M se calcula sumando las producidas por La misma distribución tensional expresada en coordenadas polares queda
las fuer.zas que actúan en O y 0 1 , Considerando, por ejemplo, en M un así:
elemento plano perpendicular al eje x y designando por 11", la tensión dP dP
(F, = -2(1 - v) 4'/1"1'2' (fa = 2(1 - v) 4~' TrB = O (79)
normal producida en el elemento por la fuerza de O, la tensión normal 1I'r
IUtal 11/ producida por las dos fuerzas representadas en la La solución (46), correspondiente al caso de un cilindro de pared gruesa
sometido a la acción de una presión interior, coincide con las expresiones
rr
'"
I = 11 -
z
+ OU"')
- d
(er"o:r; = - d -ou",
o:r; = -
d (orr:
-or cos O - -orr",
00 r
seno)
-- (79) cuando el diámetro exterior del cilindro se hace infinitamente' grande.
De igual manera podemos resolver el caso mostrado en la figura 79a.
Vemos pues, que para el caso de la figura 77 las componentes de la tensión Las componentes de la tensión' son
se obtienen por diferenciación de las ecuaciones (77). Procediendo así M
(fr = (fq = 0, T,I = - 2;T2 (SU)
tendremos
Estas tensiones ·son las producidas por un par M aplicado en el Ol:igen
er. = 4dP2 [- (3
'/Tr
+ v) cos 2 8 + (1 - 11) sena O + 8(1 + v) sen 2
Ocos 2 8] (fig.79b).
dP- Si en lugar de una placa indefinida se trata de una tira infinitamente larga 80-
111 = 4m. 2 [(1 - 11) cos 2 8 + (1 .+ 3/1) sen2 O (78) m~tidn n la acción de una fuerza P longitudinal (fig. 80), podemos comenzar tomando
la solución (77) como si la placa fuera indefinida en todas las direcciones. Las ten-
- 8(i + /1) sena Ocos 2
O]
T"" = ¿~2 [ - (O + 2/1) +
.....
8(1 + v) sen 2
Ol sen O C08 O p, O
[Jx
I
:r
Fw. 80

siones que entonces aparecen a lo largo de los bordes de la tira, pueden ser .anuladas
añadiendo un sistema correctivo igual y contruri(), que produce unas tensiones que
pueden ser detenninadas usando el método general descrito en el § 23. Los cálculos
realizados por R. C. J. Howland' muestran que las tensioI?es local~s producidas
, A. E. H. Luve, 'l'heory oJ Elastidcy. pog. 214. Cambridge.
:x J Loe. cit. Véase también el trabajo de E. Melan, Z. arrgr:zu. Math. lvIech., vol. S, pág. 314,
Flc.78 Fw. 79 192~ .
...... :

TEOIUA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BllllMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 145

la·:·fuerza. ..concentrada· P,. disminuyen rápidamente al aumentar la distancia al Los tres primeros términos del segundo miembro representan la solución corres-
. . de aplicación de la carga, de fonna que a distancias superiores a·1a anchura pondiente a una distribución de tensiones, simétrica respecto al origen de coorde-
. la tira la distribución de tensiones en una sección transversal de la misma es prác- nadas (véase el § 26). El cuarto término da la distribución correspondiente al caso
. ticamente imifOlme. En la tabla siguiente damos algunos valores de U z y Uv calcula- mostrado en la figura 57. El quinto la correspondiente al caso de la figura 7Sb.
dos suponiendo que la barra es sujetada en el extremo x = +00 y que el coeficiente El primer término de la segunda línea es la distribución .radial simple para una
de Poisson vale 1/4. carga de dirección () = O. Los restantes términos de la segunda línea representan
la solución para una porción de un anillo circular fleetado por una fuerza radial

=-=
e
n
--
3
n
--
9 18
11
-n
- 30
°
(fig. 46). La combinación de todos los términos de la segunda linea da la solución
para el caso de una fuerza que actúa sobre una placa indefinida (§ 38). Soluciones
análogas se obtienen también a partir de la tercera línea de la expresión (81), sin
<1,,2e otra difcren~ia que el ca~bio en 11/2 de la dirección de la fuerza. Los restantes tér-
y=o -P-= -0,118 -0,992 ...... . .... 00 minos de la expresión (81) representan las soluciones para fuerzas normales y tan-
<1",2e genciales proporcionales a sen nO y cos nO, que obran en los bordes exterior e inte-
y=c -p-= +0,159 +0,511 0,532 0,521 0,500 rior de un anillo circulor. Un ejemplo de este tipo referente tI la distribución de ten-
uv 2e _ siones alrededor de un pequeño orificio circular ha sido estudiado en el § 32.
y=o -P-- 0,110 ·0,364 .. - .. ..... .. ...... En el caso de un sector de anillo circular, las constantes de integración de (81)
pueden ser calculadas fádlmente a partir de las condiciones de contorno. Si se trata
de un anillo completo la determinación de tales constantes exige a veces un estudio
-x = -" 11
-9n -n -'"2 adicional de los desplazamientos. Consideraremos el caso general de un anillo com-
pleto y supondremos que las fuerzas normales y tangenciales en los contornos T = a
e 30 18 3
- y T = b vienen dadas por las siguientes series trigonométricas

y=o <1,,2e .. ...


1 I
.. al
-P-= ...... 1,992 1,118 1,002
<1,2c ear)r... '"' Aa + A. cos nO + Bn sen n8
y=e --¡;- = 0,468 0,489 0,841 0,973
0,479 n=l
.. n=1

+1 +I
u1l 2c
y=o -P-= ..... ...... 0,364- -0,110 -0,049 (Or)r'" = A.' A,,' cos n8 Bn' sen nO
. ,,-1
.. 11.=1
(a)
Las tensiones que en una placa semiindefinida orlgma una fuerza aplicada a (1"<6)r __ = O. + 1 o. cos nO +I D.senn8
una cierta distancia del borde han sido estudiadas por E. Melan '.
..
11.= 1
.
n=l

39. Solución general del problema bidimensional en coordenadas


polares. Una vez estudiados diversos ejemplos del problema bidimensional, (Tri/)r'" = (Jo' + 2:
n=1
(Jo' COS 118 + ID,.'
n-1
sen na
estamos preparados para obtener la solución general del mismo. La expresión ge-
neral de la función de tensión ,p, que satisface la ecuación de compatibilidad (39) es!
en las cuales, las constantes A., A., B n , ••• se calculan de la manera usual a partir
4> = a. log r + bor2 + CoT' log r + doT'!) + a.'O . de la distribución de carga en los bordes (§ 23). Calculando las componentes de la
tensión a partir de la expresión (81), mediante las ecuaciones (38), y comparando
+ 1fT8 sen e + (b,T' + a,'r-' + b¡'T log r) coa 8 los valores de estas componentes para T = a y T = b con los valores dados por las
ecuaciones (a), obtenemos un número de ecuaciones suficiente para determinar
- ~ re C06 ~. + (d,T' + c¡'r-¡ + d,'T log r) sen e las constantes de integración C!I1 todos los casos en que n ;;" 2. Para n = O, es decir,
para todos los términos- de la primera línea de la expresión (81) y para n = 1, es
+ l,,-2'" (anT" + b"T·+' + an'r-" + bn'r~+2) cos nO decir, para los términos de la segunda y tercera línea es llec~s3rio un examl'n más
detenido.
.. Si se toma como función de tensión la que constituyen los ténninos de la pri-

+l
mera línea de la expresión (81), la constante 00' quedará detelminada por la magnitud
(cnr·:t d"r n+, + c.'r.... + d..'r""'¡") sen nO· (81) de las fuerzas tangenciales uniformemente distribuidas en la periferia e§ 37). La re-
n=2 partición de tensiones que nos da el término que contiene el coeficiente ~ es multi-
forme (§ 34) y, en el caso. de un anillo completo, deberm¡s suponer ~ = O. Para
Z. Q/lgew. Malh. Mech., vol. 12, pág. 343, 1932.
I la determinación de las restantes constantes 00, bo y Ca disp¡onemos tan ·sólo de ·dos
Esta solución fue dada por]. H. Michell, Proc. Lonáon Mat/¡. Soc., yol. 31, póg. 100
J
ecuuciones:
1899. \léase también A. Timpe, Z. Moth. P/¡ysik., yol. 52, pág. 384, 1905, quien dio una .olu~
ción análoga aplicable al caso de un anillo eHptico, Math. Z., vol. 17, plÍg. 189,1923. -... (cr')F~ = Ao y (IT,),.." = Aa'

IO-TEORI.\ os L,\ EL.-\IJ,.¡CJUALI


TEORIA DE LA EI.AS'f1ClDAD
PROBLEMAS BIP1MI1NSIONALES EN COORDENADAS POLARES 147
,,:' ¡;~ro pod;emos obtener la tercera co 'd" . a"2 por - PI" en las ecuaciones (g) y b¡' por D en las (q), hallarnos para los despla-
ser una función unifonne d, O N' nSl el and,o los desplazamientos, 1,,1\ clIoles deben zamientos 11 y 'V, respectivamente, los siguientes términos multiformes:
' " e . uestro antenor estudIO n h d
con d IClon queda cumplida SI' pon O( os a emostrado que estu
las otras dos, constantes 00 y huemasd LO = d véase el § 26) Y entonces se detemlinun a, l - " 2b , '
arriba consignadas,' , e aeuer o con las dos condiciones de contorno 2'-r 8senO +T 8'senO
, Consideremos ahora más detaIladam
Para la determinación de las ()ch
1 - .
ente os terminas para los cuales n = 1
!:! 1
2
- " Ocos 8
E
+ 2bt'
E
ecos 9
o constantes a b d 'f' .
segunda y tercera de la expresio'n (81) 1 1 I 1, ... , I que Jguran en las líneas
t " utJ'1'Izando esta parte de la fu , "ca cu
ensJOn, rfi aremos
E h 'las com ponentes fI', y T,IJ de la En el caso de un anillo completo estos ténninos deben anularse y entonces:
d
~ ig~alando los coeficientes correspo:~~:nt~ C ando mano de los condiciones (a) ~1 - v + 2b,' = O
interior y exterior, llegamos a las ocho e , e se? n~ y cos nO para los bordes 2 E E
cuaCJones SiguIentes:
o bien
(al + h,')a-' + 2b,a - 2a,'a- 3 '" Al
(a, + b,')b-' + 2ó,b - 2a,'b-' = Al (f)
(e, + d,')a-' + 2d,a - 2e¡'a-' '" E, (h)
(e, + d,')b-1 + 2d,b - 2c,'b-' = BI' Procediendo en fonna análoga con la tercera línea de la expresión (81) obtencmos
2d,a - 2CI'a-3 + d,'a-' = -(JI c,(l - .)
el,' = - '--4-- (g)
2d lb - 2c,'b- 3 + dl'b-' '" -(JI'
'. ,_2b,a - 2al'a- 3 + /J,'a-I' =]), le) Las ecuaciones (j) y (g) junto con la.<; (b) y (e) nos bastarán, entonces, para deter-
2b,b - 2a,'b- 3 + b¡'b- I = D,' minar todas las constantes de la función de tensión, representada por la seguñda
y tercera líneas de la expresión (81).
Comparando las ecuaciones (h) ()
y e, se ve que san compatibles solamente si se verifica: Llegarnos a la conclusión de que en el caso de un anilJo completo las condicio-
nes de contorno (a) son insuficientes para determinar la repartición de tensiones
a,a-' = A, - ]), y resulta entonces necesario cunsiderar los desplazamientos, 'Estos deberán respon-
a,b-' = A>' - D,' der en el caso de una corona circular completa a la condición de ser de valor único
c,a- I '" BI al + (el) y para satisfacerla se deberá tener:
clb-1 = B,' + e,'
de las que se desprende 00 = O, b,' = - ~1!...=..!:2,

dI' = - -
C¡(J - v)
-4- (82)

Se desprende de tales resultados, que las constantes bl ' Y dI' son funciones del
atA, - D,) == b(A,' - DI')' (B
, a ,+ e, ) == b(B,' + (JI') (e) coeficiente 'de Poisson, lo qUI: quiere decir quc en un anillo completo la distribución
~as ecuaCiones (e) quedlln siem re " . de las tensiones depende de los propiedades elásticas del material. Unicamente en
el anillo están cn equilibrio P dsatlsfechas s, las fuerzns que actúan sobw el caso en que a, Y e, desaparezcan, e~ decir, conforme a las ecuaciones (82), que
' como se emuestra 'b' d '
d 1
suma e as proyecciones de tod l ' ' escn ¡en o por ejemplo que la b,' = d, ' = 0, dicha distribución resultará independiente de las características elás-'
P r Oce d'¡end o así cncan tramos: as as ,uerzas sobre 1a d' '- d
'IreCClon Ix'es nula;
e eje ticas, Según resulta de las ecuaciones (ti) este caso particular ocurrirá si:
(2" [ y B, = -e,
Jr) [b(..,),•• - a(..,),•• ] cos e - [b(T,O)'_~ - a(r,o)t•• ] sen O) de = o Tal condición se cumplirá !:uando se anule la reHultllnte de las fuerzas aplicadas
y si sustituimos los valores de (J d ', a cada uno de los contornos del anillo, Tomemos, por ejemplo, la componente :le
de las ecuaciones (e), AriáJoga~~n:~9 ~~~ a la expr~s\On (a), llegaremos a la primefu de la resultante de las fuerzas aplicados ai borde r = a, De (a) se deduce que esta
si proyectarnos las fuerzas sobre el', d
en remos a segunda de las ecuaciones (e) componente es:
C' d eje y.
uan o a, Y e, son determinados a partir de l '
de ecuaciones (b) y (e) se hacen idénticos e a~ ecuacIOnes <t!l,
los dos sistemas
nes para ?etenninar las seis constantes ~ s~co~t~andonos con sol~ cuatro ecuacio-
s y si desaparece se desprende que A, = DI, De igual forma, proyectando las fuerzas
que necesItamos se obtienen consl'de de lan e>d , Las dos ecuacIOnes adicionales
,
la segun d a 1mea '
de la expresión (81)
ran o os esplazarnl'ent'" L ,.
, os, os termmos de en la dirección y, obtenemos B, = -G" cuando la componente de dirección y es
combinación de distribución radial simr~pres~rtan l~ funCIón de tensión para una nulll, Se concluye, pues, que si la resultante de las fuerzas aplicados u coda contorno
tada (fig. 46). Sumando I entonces 1 p e y , e tensIOnes en una pieza curva f1ec- es nulu, la distribución de tensiones en un anillo completo 'no dl.'P"ndc- de 1,,8 pro-
de estos dos casos, a sabe;, las ecuadio~::c;r~~ln§~3gelera(le)sddel los desplaz~mientos piedades elásticas del material y ello sin necesidad de que"cl moml'''I'' ell' dichns
l ' Y as q e § 31, Y sustituyendo fuerzas sea nulo. ' ,
Debe advertltse que debe ~u~tituirse O por 8 + (12) , 1 ' Las conclusiones obtenidas par!! un anillo circular siguen sienuo v i a, p,¡ra
de un !!jo vertical (fig, 52) en Jugor de a partir de u ," h ~,e anguJo es medido a partir
n eje orlzontal (fig, 46), el caso más general del'prublema bidimensional de un cuerpo múltiplen e1\ (, ceolle,o,
PROBLEMAS BIDIMENSIONAI.P.s EN COORDENADAS POLARES 149
.. '<mORIA DE LA ELASTICIDAD

. generales' realizadas por J. H. Michell ' , se sigue que paru 40. Aplicaciones de la solución general en coordenadas polares. Como
. conexos (fig. 81), se obtienen ecuaciones análogas a las (82), primera aplicación de 111 solución del problema bidimensional en coordenadas po-
unicidad de los valores de los desplazamientos para cada uno de lares consideremos-·tI11 anillo circular comprimido por dos fuerzas iguales y opuestas
independientes, tales como las marcadas en la figura por A y B. La dis- diri~idas según un diámetro J (fig. 83a). Comencemos considerando la solüción .co-
. tensiona! en tales cuerpos depende generalmente de las constantes elásticas rrespondiente a un disco macizo. La realización t:tl él de un orificio circular de radIO a
del inaterial, salvo que la resultante de las fuerzas que actúan sobre cada uno de los crea fuerzas normales y tangenciales distribuidas en la circunferencia del orificio,
contornos se anule'. Cuantitativamente, sin embargo, el efecto del valor del módulo que pueden ser anuladas superponiendo un sistema de fuerz~ iguales'y opuesto.
sobre la tensión máxima es generalmente muy pequeño, pudiendo ser despreciado Este sistema de fuerzas puede ser expresado mediante lo~ pnmeros termu;t0s de
en la práctica l. Esta conclusi6n es de interés práctico, pues, como veremos más una serie de Fourier y las tensiones en el anillo se determman entonces aplicando
adelante, existen ciertos materiales transparentes, tilles como el vidrio o la baquelita, la solución general que estudiamos en el § 39. Estas tensiones, junto con los cal.culadas
en los que pueden determinarse las tensiones mediante métodos ópticos que utilizan para un disco macizo, constituyen las tensiones totales existente.s en elamllo. La
luz pnlarizada (§ 42). En consecuencia, debido a la conclusión anteriormente ob- relación u" : 2pl:n:b correspondiente a diversos puntos de las secciones transversales
tenida, los resultados que se obtienen al experimentar con esos materiales transpa- mn y mln" calculada de esta manera para el caso en que b = 2a es tabulada a con-
rentes, pueden ser aplicadas de manera inmediata a cualquier otro material, tal como tinuación ' .
el acero, a igualdad de condiciones geométricas y estáticas.

b O,9b 0,8h 0_,7_b_LO,6b 0,5b


r= .-1..._

TeorÍa exacta

-8,942
10,147

Distribución hiperbólica de tensiones

(a) (h) --8,653


FIG. 81 FIG. 82 11,18

Corno se ha dicho anteriormente (§ 29), el significado físico de las soluciones Distribuci6n lineal de tensiones
múltiples queda explicado por la consideración de las tensiones inicia1es en un cuerpo
múltiplemente conexo. Supongamos, por ejemplo, que la ecuación (f) no se satis- -7,04
tnn 8,67
faga: el correspondiente desplazamiento, indicado en la figura 82a puede produ-
cirse mediante un 'corte en el anillo y la apIlcación de las fuerzas P. Si las extremi- __ nZlnl
~~~~~ ____- L____L -__ ~ ___ ~ _ _ _ __
dades del anillo se reúnen luego por soldadura u otro medio, se habrá obtenido
un anillo c()n tensiones iniciales, CUY'd magnitud depende del desplazamiento ini-
cial di. Análogo efecto se obtiene cortando el anillo a lo largo de un radio vertical En la misma tabla se dan los valores de la tensión, calculada con arreglo a las dos
y provocando una traslación inicial de uno de los extremos con respecto al otro, . teonas elementales, basadas en las siguientes hipéltesis: .1) las secciones. rect~s. se
mantienen planas, en cuyo caso las tensiones normales .slguen una ley hlpcrbohcfl¡
en dirección vertical (fig. 82b). Las tensiones iniciales que se producen en los casos
ilustrados por las figura~ 820 y 82b corresponden ¡¡ los términos multif(lnnes de 2) las tensiones se distribuyen de acuerdo con una ley.bne.a.l. La tabla muestra q~e
la solución general cuando las ecuacione~ (j) y (o) no quedan satisfechas. pllra lu sección recta 11In, distante de los puntos de a~J¡caclon de la carga P, la dIS-
. La solución completa de estos problemas puede ser obtenida aplicando los resul- tribución hiperbólica de tensiones da resultad()s casI ex~c;tos; el error correspon-
tados del § 31. Los despla'zamicntos dados por las ecuaciones (q) del § 31 puede diente a la tensión máxima es sólo del 3 %. Para la secclon recta 11I¡ 1I1 los errores
verse que presentan el tipo de discontinuidad requerido cuando se aplican a un anillo de la solución aproximada son mucho mayores. Es intere~~nte advertir que la resul-
(véase el problema 4). tante de las tensione.~ normales que actúan sobre la secclon 11l¡n¡ es Pln, resultado
éste que era de esperar si recordamos la acción de cuña de la carg~ c?nce.~trada
Loe. cit•
J . ilustrada en la figura 65d. En las figums 83b y 83c .se muestra. la dlstnbuclOn de
• nebe recordarse que se ha considerado nu las a las fuerzas másicas. las tensione.q normales en las secciones 111'1 Y 11/,1JJ calculadas por los tres métodos
• Un estudio de este tema ha sido realizada por L. N. G. Filon, BrÚ. ·Assoc. Ad~a"cemell/ antedichos. El método que se ha aplicado en lo que antecede al caso de dos fuerzas
Scj. Rept., 1921. Véase E. G. Coker y L. N. O. Filon, Photoelas/idty, 6.07 y 6.16.
, Un estudio de tales tensiones ha sido r~ulizado por A. Timpe, Z. Math. Phys"k, vol. 52, ,
I Véase S. T¡moshenko, B,;U. Po/y/echo Inst. Ki.... • 1910, Y PhiFMag., vol. 44, pág. W14,
pág. 348, J905. V. Vult~rra desarrolla una teoría general, A,m. ér.ole "orm., París, serie 3, vol. 24.
1922. Véase tambIén K. W¡eghardt, Sit:::bcr. Akad. Wiss., Vienu, vol. 124, Dpto. 11, póg. 1119,
págs. 401-517,1907. Véase tambIén A. E. H. Lave, Malh.mat"cal Theary of Elasticily, 4." edi-
c¡ón, pág. 221, 1927; J. N. Oaadier. Proc. FiJth [mem. emlgr. Applied Mech(","cs, 1938, pá- 1915 •
gina 129. • Se consIdera una pl~c~ de espesor UnIdad.
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 151
150 'l'EORIA DE LA ELASTICIDAD

iguales y opuestas, puede emplearse paro el caso general de un anillo circular sobre ciones I1l11 Y 1/I,nl para "la = 4 Y bJa = 2 ' . Debe advertírseque como en este coso
las fuerll3s que actúan sobre cada un9 de los contornos tiene resultan te nula, la dis-
sobre el que actúan fuerzas concentradas '. .
tribución de tensiones depende de las constantes elásticas del material, En los cálculos
Dé anteriores se ha tomado el coeficiente de Poisson igual a 0,3.

\
'\ 1-_ _+-l-----_,..----,'I-a04s2 .
,~
r-----~r_--~~r_--r-~~----~n
1\,
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~, 10~ \
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~~ ~FZ 10-
~f0 ~ ~f0 ~ 10 ,\
Ó O,9ó "'" ~(\ !P:DJó. ¡:;]i6ó O b b 0.9b 0,86 10 .h I%Q ¡;~~P;
~0 ~ ~ ~~F.% f%::

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-f/,44
(a) I'''l~ ~ 1\\ ~ +o.tJó8 +.J,8S
~~ .'í~
8=0' ~,~
(}=90' ~
I~ ~
, 1]
II,
(ó). (e) ..0,/69

FIG. 83 41. Cuña cargada sobre sus caras. La solución general (81) puede apli-
carse también en el caso en que una distribución polinómica de carga actúa sobre
Como segundo ejemplo consideremos el extremo las caras de una cuña'. Calculando a partir de (81) las componente.~ de la tensión
de una cbiela de ojO.2 (fig. 84). La distribución de en la forma usual y tomando solamente los términos r" con n ~ O obtenemos las
presiones en el borde del orificio depende de la holgura siguientes expresiones para las componentes de la· tensión:
existente entre el pasador y el agujero. Se supoue que 0'9 = 2b. + 2d.8 + 211. cos 28 + 2(', sen 28
sobre los contornos interior Y exterior sólo actúan pre- +6r(b, cos O + el, sen 9 + o. ros 30 + e, scn 30)
siones nonnales cuyo valor es' .+12r'(b, cos 28 + el, scn 20 + a, cos 48 + e. sen 40)
· ............. .
(n + 2) (n + l)r"[b" coa nU + el .. sen nO + a.+! t'OS (1' + :::)0
(0',),., -;- a para - ,..2 ~
= -'-·2Pcos8 8 ~
11'
2 + c,,+, sen(n + 2)8]
· .................. - ... . (83)

(O")'.b = - z:; eo: 8 para ~ :,; IJ ~ :;r 7,0


+
= -do -t 2(1, sen 20 - 2c. cos 2/1
T(2ú, sen O - 2,1, cos /1 + (ia3 sen38 - oc, cos 30)
FIG. 84
..... + r>(6b! sen 28 - Od, coa 20 -1- 12a,sen40 -.l2c. cos 49)

es decir, las presioncs están repartidas en la mitad inferior del borde interno y la \
+ Tuln(n + l)b .. sen /18 - 11(11 -1- l)d" ~os nO + (n + l)(n + 2)
mitad superior del borde externo. Una vez desarrollada esta distribución en series
(1 +' ~en(/1 + Z)O - tI. + l)(n + 2)c,,+, ('os tI< + :::)61
trigonométricas pueden calcularse las tensiones hacieodo uso de la solución gene-
ral (81). La figura 85 representa los valores de Cfn : PJ2a, correspondientcs· a las sec- , En lo que se refIere ,,1 chlUUIO experimental de las tensIones en bielas de ojó medIante
el nlétodo fotoelástico, véase E. G. Coker y L. N. G. Filon, Photoelasticity, 6.18 y K. Take-
mu.ra e Y. Hosoknwa, Rept., .12,1926, Aeronnut. Resenrch (nst. Tol,yo fmp. Umv. L., dIstri-
I L. N. G. Filon, The Stresses In a circular ring, Salected Engincerillg Papers, nlun. 12,
bución de tensIOnes en biela. de ojo ele acero fue estudiada por l.' Mathar, ForschUl'!fsarbetlerl,
Londres, 1924, publicado por l. Cllnstitution of Civil Engmeers».
, H. R~issner, Jahrb. wiss. GrselIsch. [.ufrjahrt, pág. 126, 1928: H. Reissner y F. Strauch, núm. 306, 1928.
• Véase S. Timoshcnko, Te.TIa de /t¡ Elasticidad, edICIón rusa, póg. 119, San Petershur-
11lgemeur-Archiv., vol. 4, pág. 481, 1933. go, 1914. ....
I P es la fuerza por unidad de espesor de la placa.
152 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PUOBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLArulS 153

Cada llnR de las potencias de r está ligada, como se ve, con cuatro parámetros arbi- .Llevando estos valores a las ecuaciones (83) obtenemos I
trarios de manera que si las tensiones aplicadas en las superficies límites (} = a,
(J = l/vienen dadas en forma de polinomios de "t, quedan determinadas las tensio-
g(
rro=¡; -k+2" tg f3-0-·2
1 .. 1 1)
t~ ~cos20+2sen28
nes de la cuña comprendida entre dichos límite.~.
Si las condiciones de contorno son, por ejemplo ': -r,B = H~ -~ tg f3 ~en 26 - ~ cos 26) (e)

(rto)o-« = No + N,r + N,T' + .. lT, = ~ (-k + ~ tg f3 - 8 - ~ sen20 + ~ tg f3 t·,," 28)


(rto)e-P = No' + N,'T + Nb· 2 + .. (a)
(T,8)0-a = So + S,T + S,f' + .. . De manera análoga se pueden obtener las componentes de la tensión para cual-
(r,o)o..fl = So' + S,'T + S/r' + .. . quier otro ténnino de la distribución polinómica de carga (a).
El método que acabamos de desarrollar para el cálculo de las tensiones· en una
la igualación de los coeficientes de las distintas potencias de T nos da curva e.~ aplicable n una placa semiindefinida sin más que igualar el ángulo ¡J a n.
Las tensiones, por ejemplo, para el ca90 de la figura 87 ge obtienen poniendo f3 = 7T
+ do", + a. cos 2", + e, sen 2,,)
2(bo = No (b) en las ecuaciones (e). Obtenemos entonces: .
6(b, cos '" + d,scn" + a, cos 3", + es sen 3",) = N,

y, en general:
rrB = - ..!l ( ... - 8 + !.sen28)

(71 + 2) (n + l)[b" ros n", + d~ senn", + an;.O cos (n + 2)", 1',.6 = -.:}; (1 _·cos 20) (d)
+ C"+' sen(n + 2),,] = N"

=
con otros tres grupos de ecuaciones para efa en O fJ y T, o en O = a y O = /3. Estas
ecuaciones son suficientes para determinar las constantes que entran en la solu-
ción (83).

. q Problemas

l
1. Probar la validez de la ecuación (d) del § 2S haciendo uso de la función
.p =:1)1 - y' = (z' +y')(z' - yO) = r' ~os 28

2. Estudiar el significado de la función de tensión co


en la que e es una cons-
tante. Apüquese a un anillo a < r < b y a una placa indefinida.
Un anillo, fijado en r = a, es sometido a fuerzas tangenciales en T = b cuya
resultante es un par M. Obtener la expresión del desplazamiento circunferencial v
Fw.87
FIO. 86 en r = b, a partir de las ecuaciones (49), (50) Y (51).
J. Demostrar que si en el problema de la figura 45 el radio interior a es pequeño
Consideremos, por ejemplo, el caso present~do en la figura 86. Un~ presión comparado con el exterior b, el valor de efa viene dado por
normal uniforme q actúa sobre la cara O = 0, mIentras la cara O = fI esta libre de
fuerzas. Usando solamente las primeras líneas de las expresiones (83) de 110 y T,q
las ecuaciones que pem:.iten determinar las constantes bo, do, a, y c, son:
a.E
4,..
(1 _2log 2.)
a
siendo, por tanto, negativo y grande en valor absoluto, cuando a es positivo (el
2b. + 2a, = -q
corte ha sido cerrado).
2b o + 2do~ + 2a. cos 2~ -1- 2c, sen 2{3 == O ¿Cuál es el valor máximo del corte (definido por a), que se puede volver a cerrar
-do - 2<:, = O sin sobrepasar el límite elástico, siendo bla = 10, E = 20,7 X 10" newton/cm' y el
-do + 2a,sen 2{3 - 2c, cos 2f3 == O límite elástico 27,5 x 10' newton/cm2 ? .
de las cuales (escribiendo k ~ tg ti - P) se deduce 4. Utilizando los resultados del § 31, escribir las fórmulas que dan las tcnsio-

G. == .!1..
41c' a. == - UU
4k'
d
o
q
= - 2,ié'
2bu - '( + !L!LP.
21.: I A esta solUCión llegó por otro método M. Levy, Compl. Te"d., vol. 126, pág. 1235, 1898.
Véase también P. Fillunger,· Z. MatÍl. P/¡ysik, vol. 60, 1912. Vé~se tamb,én.1a aplicaCión de
funciones de tensión de este t,po a ciertas Vigas por E. Relssnilr, J. A.Tona/l!. Sd., vol. 7,
pág. 353, 1940. Los casos correspondientes a cuños sometIdas a otros tipos de carga SOn e~tu­
.1 Los ténnlnos Nn', NOf Su Y Su' no son lndt:ptmdientes. Sólo tres de ellos lo son, pues
diados por C. J. Trancer, Quart.]. Meeh •. cmd Appl. Math., vol. 1, pág. 125, 1948, .
representnn la tensión en la punta de la cuña r = O.
154 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDlMENSIONAI.JlS EN coormENADAS POLAllllS 155

nes, resultantes del cierre del corte paruldo h de:: la figuru 88a y Jel deslizun1icntu J 12. Determinar cuál es el valor de e en la función de tensión.
de la figura 88b en [unción de (j. ' </> = C[r'{a - 9) + ,.' sen 8 ~os O-r' coso 8 tg "']
5. Determinar por suptrposición de los resultados obtenidos con las ecuacio- que satisface las condiciones de contorno existentes en los bordes superior e mfedor
nes (62), las tensiones existentes en una placa indefinida en la que existe un orificio, .de la placa triangular de la figura 91. Evaluar las componentes a.,·, r~v de la tensión en
cuando los puntos del infinito de la misma se encuentran en un estado equitensional la sección vertical 71ln. Trazar las curvas para el caso de a = 20° Y también, n fin
de valor S. Los resultados obtenidos deberán coincidir con los que dan las ecuacio- de comparar, In correspondiente a )(1 teoría elemental de la flexión de vigas.
nes (45) cuando bJa -->- 00, p, = O Y Po = _·S.

(a)"
FIG. 88
(h)
I~ FLG. 91

6. Obtener las expresiones de los despluzamientos correspondientes a las ten-


siones (62) y comprobar que son uniformes.
13. Encontrar qué valor ha de tomar la constante e en la función de tensión
7. Expresar en coordenadas cartesianas la función de tensión (a) del § 33 Y </> = Cr'{cos 20 - cos 2",)
deducir los valores de u., ay, 'rv, que equivalen a la distribución definida por las .para que se satisfagan las condiciones
ecuaciones (66'). Demostrar que esos valores tienden a cero cunndo la distancia
al punto de aplicación de la fuerza aumenta en una dirección cualquiera. 110"" O, '(rO = S en 8 = a
rTS = O, 'rr8 = -s en O = -o:

correspondientes a la aplicación de fuerzas tangenciales uniformes (de dirección la


. que se aleja del vértice) sobre cada uno de los bordes de una cuña. Comprobar que
sobre el vértice de la cuña no actúa ninguna fuerza concentral ni ningún par.
14. Obtener una función de tensión del tipo

~
. S
a,f" cos 3 O + bi l,3 cos

Zcr] 1~~: que satisfaga las condiciones

p~a._.
ao = O, 1'r8 ~ sr en 9 =: «
-x-- 110= 0, 'Tr8 = -sr en 8 = -(1'
.B
FIC. &9 FIC. 90 en las que s es una constante. Representar la distribución de tensiones para valores
positivos de s.
8. Demostrnr que para el caso particular en que a = 1</2, la función de tell- 15. Obtener una función de tensión del tipo
sión (d) del § 35 satisface l!\ ecuación (69) y estudiar si la distribución (e) de tensiones,
del mismo párrafo, tiende a la dada pOlO la teoría elemental de la flexión cuando a
a,r' cos 49 + b,r4 cos 28
es pequeño. que satisfaga las condiciones
9. Demostrar, calculando las fuerzas resultantes, que la distribución tensio- 110 =' 0, 1'r8 = ST~ en e= a
nal (e) del § 35 corresponde a la aplicación de un par M en el vértice de la cuña. 110 = 0, 1'rO = -sr 2 en 9 = -a.

10. Una fuerza P por unidad de espesor, es aplicada por el qmto de un cuchillo que s es una constante. Representar la distribución de tensiones.
sobre el fondo de una entalladura de 900, tal como se indica en la figura 89. Calcular 16. Demostrar que la distribución de tensiones
las tensiones y la fuerza horizontlll transmitida a través del arco AB.
11. Obtener la expresión de las tensiones a T existentes en la sección mn que se
er. = -;;:
'P (
arctg;;
y Xli)
+ XO+tÍ" r_v
P 1/'
- ;;: I'-'+-¡ji
representa en la figura 90. La teoría· de las cuñas expuesta en el capítulo presente
y la de las ménsulas presentada en el capítulo 3 dan distribuciones de tensión dis-
I1v = -;;:l' ( arctg;;'1 - ",-2-+-'-y-2 XII)
tintas para la unión rs. Comentar este hecho.
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS POLARES 157

20. Demostrar que la función de tensión .


,[véase la ecuación (a) del § 34]

:.:..: :71" ( (Z2 + y') arctg ~- Zy) '" = _ ..L


271"a
[(13 z' -1- x y .)· nrctg !l + ~ y' log (z' + y") -
Z .
~ Z'11J•.
. .. . del problema de la placa scmiindefinida representada resuelve el problema de la placa semiindefinida de la figura 94, en el·que la com-
.. ~os ejes indicados~ La carga: se extiende indefinidamente hacia presión (que crece linealmente) se extiende indefjnidamente hacia la izquierda.
21" Demostrar que si en el problema anterior remplazamos la compresión p
por una fuerza tangencial $ la función de tensión· se convierte en

x 4> = ..!..-
2~a
[XY' log (z' + y') + (z'1/ - y') arctg 1!. -
z
3.rv'J
22. Dcmostrllr que las reparticiones de carga repl'esentadas en la figura 95.
pueden obtenerse por superposición de reparticiones del tipo indicado en la figura 94.
FIG. 92 FIG. 93

Estudiar el valor.de 1".y: a) cuando nos aproximamos a Ó a 10 largo del eje Ox;
. b) cuando nos aproxImamos a O a lo largo del eje Oy (la discordancia es causada
por In discontinuidad de la carga en O).
17. Demostrar que la función de tensión FIG.95

'" = ;. [~ y2 log (z. + y') + xy arctg ~- v.] 23. Demostrar que la repartición parabólica representada en la figura 96 viene
dudu por la función de tensión:
resuelve el problema de la placa semiindefiniúa representada en la figura 93 en la
que la fuerza tangencial u~if~,,?e se extiende indefinidamente hacia la izq~ierda. r.' - [a'"4 + 1 , ,( .r' y' ) ]
Demos.trar que ". Se hace mfmlto cuando nos aproximamos a O en una dirección -;;:p { - 3a;
XY'
log ;.~; 2 (x +!I) 1 - 6a' + 2(1' a

+ Y')}
cu~lqulera. (Esto es debido a la discontinuidad de la carga en O. Se obtiene un valor
fimto ~ua.~do la carga decrece de forma continua, valor que depende de la curva + 3a.r:¡3 + zay ( 1
2 1
- 3a'
z'
(i2
de vanaclon de la carga en la proximidad de O.) .
. 18. Por s.uperposición, utilizando los resultados del problema número 16, escri-
bIr las expresIones de "., "VI -ro. para el caso en que actúa una presión constante p
sobre el segmento -a.-:;:' x < a, del borde rectilíneo de una placa semi indefinida.
Demostrar que la tenslOn tangencial es .

ro. = _ ~ 4axy'
71" [(x - a)' + y'J[(x + a)' + y']
y examinar cómo varía esta tensión al acercarnos al punto x = O, Y = O a lo largo:· PICI. 96
a) del borde; b) de la recta x = a.
para el caso dI:: una compresión y por
z" (r' 4Z Y'}
8 { y'
;; 6a' (3(1' - 3x' + y') log T;1
7,'
+ 32 ay{3 + 3~' - 3y' - 3a!)" + 3a
para el de fuerzas tangenciales siendo
rl' = (x - a)' -1- y', r,' = (.r + al' + y'
2aq
:Y " = 01 - O, = arctg z' +
y' _ a"
FIG. 94
24. Demostrar que en el problema de la figura 72 ·~xiste una tensión de tra-
ción '" = 2P/:.d a lo largo del diámetro vertical, salvo en 'los puntos A y B. Explicar
19. Representar, usando los resultados del problema número 17, la variación el equilibrio de la porción semicircular ADB, considerando pequeños semicírct.!los
de U z ~ lo largo del borde y = O, en el caso en que una fuerza tangencial uniforme ~ alrededor de los puntos A Y B, de igual manera que en las figuras 65c y 65d.
es aphcada sobre el segmento -a < x < a de ese borde.
158 TEOIUA DIl LA IlLASTICIDAD

25. Comprobar que la función de tensión


P
.¡, = - ; {cos1
O - 4' (1 -
if¡r v)r lag T ~os IJ _. 12
rO sellO

+~Iogr
4
-~
32
(3 - ..)~~sol
T (

satisface las condiciones de contorno, para el caso en que una fuerza P es aplicada
El método jo
en el interior de un orificio existente en una placa indefinida, en la que las tensiones
son nulas en el infmito. Demostrar que la tensión normal de dirección tangencial
en todos los puntos del orificio, salvo en el A (fig. 97), viene dada por
p
~d12 + (3 - J,) COS OJ
.Demostrar quc los desplazamientos son uniformes.

42. Medida fotoelástica de tensiones. En las placas estUdiadas


en los capítulos anteriores el contorno- tenía siempre una forma 'geomé-
'trica sencilla, 10 que permitió obtener la solución analítica del problema.
'Si el contorno tiene una forma más compleja llegar a tal solución resulta,
sin embargo, muy difícil por lo que es necesario recurrir a métodos numé-
ricos (que se estudian en el apéndice) o a métodos experimentales, tales
'como la medida de las deformaciones superficiales mediante extensómetros
O el método !otoelástt·co. El fundamento de esta técnica experimental se
,encuentra en el descubrimiento de David Brewster, de que cuando
una pieza de vidrio cargada es observada mediante luz polart"zada trans-
mitida a su través, aparece un dibujo brillantemente coloreado causado
Fro.97 por las tensiones que hay en la pieza. Brewster sugirió que este fenómeno
podría ser utilizado para medir las tensiones que se presentan en estruc-
. 26. Deducir del problema precedente, integrando, la tensión existente en la turas tales como puentes de albañilería, estudiando mediante luz pola-
periferia del orificio, cuando en su interior actúa una presión p. Contrastar los re- ,rizada el comportamiento de modelos de vidrio, sometidos a diversas
sultados con las ecuaciones (46).
~,~Jndiciones de carga. MaxwelP. comparó los esquemas fotoelásticos
27. E?colltrar la forma general de f(r) en la función de tensión Oj(r) y escribir con las soluciones analíticas y mucho m¡'Ís tarde la sugerencia de Brewster,
la. expresIOnes de las componentes a" (J"., T. o. ¿Puede aplicarse una función tal
a un llnillo cerrado? 'largo tiempo olvidada, fue adoptada por Wilson 3 quien aplicó dicho
,método al estudio de las tensiones originadas en una viga por una carga
~oncentrada y por Mesnager 4 en su estudio de los puentes de arco. Mlís
, tarde E. G. Coker" desarrolló e hizo gran uso del método, utilizando nitro-
I D. Brewster, Trans. Roy. Soco (LondO/,), 1816, pág. 156.
• J. Clerk Maxwell, Sej. Papers, vol. 1, pág. 30.
3 C. Wilson, Phi/o Mag., vol. 32, pág. 481, 1891-
• A. Mesnager, AmI. ponts el cha.mées, 4.° trimestro, pág. 129, 1901; Y 9." serie, vol. 16,
pág. 135, 1 9 1 3 . . "
, Las numerosas publicaciones del profesor Coker se encuentran reunidas en sus trab>\Íos:
Gm. Elec. Rev., vol. 23, pág. 870, 1920 Y J. [i'rU1lkli71 blS/., vol. 199, pág. 289, 1925. Véase
iambién el libro de E. G. Coker y L. N. Filon, PIzoto·elastjcily, Cambridge UnJversity Press,
1931. .', '
160 TEORIA DE LA ELASTICIl>AD EL METODO FOTOELASTICO 161

celulosa como material' para los modelos. Posteriormente se ha hecho uso Sea abcd (fig. 99a)·un pequeño elemento de la cara izquierda qel IDQ-
también de la baquclita y más recientemente de la fosterita 1 • delo M, en el cual las direcciones de las tensiones principales a", y ay se
En 10 que sigue (donde vam'os a hablar solamente del equipo toto- toman vertical y horizontal por con veriiencia. Un rayo, normal al plano de
elástico más sencillo"), consideraremos la luz ordinarja como un conjunto papel, y polarizado en el plano DA (fig. 99) llega desde P: La vibración
de oscilaciones que se producen en todas las direcciones normales a la es armónica y puede representarse por la elongación s de dirección DA
s = a cas pt (a)

L P

.M
: A 8
I: ~~ : ~ : ~~ : I
L PQp M ~A S
en la que p es 2.n veces la frecuencia, que depende del color de la luz,
y t el tiempo.
(a)
La oscilación (a) contenida en el plano DA puede descomponerse
(b)
fo'lO. 98
en sus componentes según Dx y Oy que serán:

recta que define geométricamente el rayo luminoso. Por reflexión del x = a cos a cos pt, y = a sen a cos pt (b)
mismo sobre una placa de vidrio, una de cuyas caras está pintada de negro, El efecto. de las tensiones principales 0"" y O"y, que actúan en el punto O
o por transmisión a través de un polarizador (un prisma de Nicol o una de la placa, es alterar las velocidades con que las componentes (b) se pro-
lámina de Polaroid) se obtiene un haz de luz polarizada, en mayor o mellar pagan a través de la misma. Llamando v" y V y a las velocidades de propa-
. grado, en el cual predomina la vibración transversal correspondiente a gación de la luz en los planos Dx y Oy, respectivamente y h al- espesor de
una dirección determinada. El plano que contiene esta dirección y la del la placa, los tiempos necesarios para que las componentes de la vibración
rayo se llama plano de pqlarización. Este tipo de luz, que en lo que sigue la atraviesen serán:-
elegiremos además monocromática, es la que se utiliza en la investigación h
fotoelástica de las tensiones. ta =-
Vv
Ce)

Por 10 tanto las oscilaciones (b) después de haber atravesado la placa


vendrán expresadas por las ecuaciones:
Xl == a cos a cos p(t - ti), Yl = asen a cos p(t - t2 ) (d)
lo que indica que al abandonar la placn existe una diferencia de fase entre
las dos componentes que viene dada por ,1 = p(t• ._. tI). Experimental-
mente se ha encontrado que para un determinado material, a una tem-
peratura dada, y con luz de una cierta longitud de onda la diferencia de
(a)
fase es proporcional a la diferencia entre las tensiones principales y al
(e) espesor de la placa. Tal proporcionalidad es expresada por la siguiente
FIO. 99 ecuación:

La figura 98a representa el diagrama de un polariscopio plano. El haz (e)


de luz originado en L pasa a través del polarizador P, a continuación a
través del modelo transparente M, que modifica la luz de acuerdo con el en la que A es la longitud de onda (en el vacío) y e la constante fotoelást~'ca,
estado tensional en que se encuentra, después a través del analizador A que se determina experimentalmente y que depende de la longitud de
(otro polarizador) llegando finalmente a la pantalla S .&Qhre la c\,lal se onda de la luz así como del material y de la temperatura a la que éste se
forman las franjas de interferencia (figs. 100 !I 104). encuentra.
El analizador A transmite solamente las vibraciones o las componentes
'M. M. Leven, Proc. Soco Expl. Stre..· AI/ulysis, vol. 6, nllm. 1, pág. 19, 1948. de las mismas que se encuentran en su plano de· polarlzación. Si. este
1 Un tratamiento más complete> puede encontrarse en los libros: Handbonk 01 Egpen.
plano es normal al del polarizador y quitamos el modelo, el analizador A
m""tal Stress Aualysis, ¡ 950; M. M. Frocht, Pllotoelasticity, 2 vals., 1941 y 1948; y en el libro
CItado en la nota 5. I Se dice entonces que polarizador y analizador están 'cruzado...
162 TIlOR1A DE LA BI.AST1CIDAD EL METODO FOTOELASTICO 163

no dejará pasar ninguna luz a la pantalla. Consideremos ahora lo que pasa 11.1Z blanca, como bandas coloreadas. De la ecuación (e) se deduce que el
cuando el modelo está presente. Las. componentes (d) 11 su llegada al ana- vf!lor de cs. - cs. es doble para ¡,ma isocromática de segundo orden que
lizador vendrán expresadas por las ecuaciones para una de primero, triple para una de tercer orden, etc. En consecuem:ia,
para evaluar la diferencia entre las tensiones principales, es necesario
Xa = a cos a COS .p, ya = a sen acos (if¡ - a) (f) , conocer tanto el orden de la isocromática como la diferencia correspondiente
ya que la diferencia de fase ¿J se conserva en el camino de M a A. Aquí a la iso cromática de primer orden llamada valor de franja.
7J1 es igual a pt más una constante. El valor de franja para un cierto material puede determinarse ensa-
Las componentes de las vibraciones (f) que son transmitidas por el a tracción una lámina rectangular del mismo. Puesto que el ~stado
analizador (cuyo plano de polarizllción es representado por mn en la que se obtiene es uniforme toda la pieza se presentará igual-
fig. 99a) serán la proyec~ión de las mismas sobre la dirección Om, cuyo te iluminada. Para una carga nula, la imagen que se obtiene en la
valor es: será oscura, iluminándose al aumentar la carga hasta que vuelve
. oscurecerse cuando la diferencia de tensiones (igual aquí a la tracción
X2 sen a = ia sen 2a cos "', -Y2 COS a = -~a sen2a cos (t/! - .1)
."tJ"~,,u.al se aproxima al valor de franja. Un aumento ulterior de la carga
y la vibración resultante. según mn será

~ a sen2a [e os '" - cos CI{I - a)] = -asen 2a sen~ sen('t' -~)


El factor sen ('11 - d/2) de la misma representa una función armónica del
tiempo cuya amplitud es:
.1
asen 2a sen 2 (g)

Se sigue de esta expresión, que la luz llegará a la pantalla a menos que sen
2a = O ó sen d/2 = O. Centrándonos en el primer caso, el hecho de
que sen 2a = O indica que las direcciones de las tensiones principales son
paralelas (perpendiculares) a las direcciones de polarización de P y A.
Los rayos que pasen por tales puntos de M se extinguirán y los puntos FIG. 100
correspondientes de la pantalla S aparecerán en negro. Estos puntos se
encuentran generalmente en una o más curvas indicadas por líneas oscuras a iluminar la imagen hasta que para una tensión igual al doble del
en S. Tales curvas se llaman (cisodinas». Trazando en numerosos puntos de franja vuelve a oscurecerse, repitiéndose sucesivamente este pro-
de ellas pequeños segmentos paralelos a los ejes de P y A tendremos regis- de iluminación y oscurecimiento si seguimos aumentando la carga.
tradas las direcciones de las tensiones principales en esos. puntos. Dando . Estos mismos ciclos se darán en un punto cualquiera de un campo
distintas orientaciones a P y A (que se mantienen cruzados) obtendremos . no uniforme al aumentar la carga, supuesto que la diferencia
nuevas ¡soclinas y los segmentos indicadores de las direcciones principales tensiones en el punto llegue a ser un múltiplo del valor de franja. A
cubrirán el campo teí:i.sional (igual que hacen las limaduras de hierro en ciclos de un punto individual corresponde, visto el campo tensional
el campo de un imán), siendo entonces posible trazar curvas tangentes en . ·su totalidad, el movimiento gradual de las franjas (incluyendo laentraoa
cada punto a los ejes principales de las tensiones. Tales curvas reciben .. nuevas) al aumentar la carga. En consecuencia, el orden de las
. el nombre de (cisostáticasll. 'V'.LVll""""", puede determinarse observando su movimiento y contán-
El otro caso en que se produce oscuridad en un punto es cuando en
él sen 11/2 = O. Entonces ti = 2nn siendo 11 = O, 1, 2, ... Cuando J = O placa estrecha, por ejemplo, sometida a flexión simple dará el
las tensiones principales son iguales y los puntos donde eso ocurre se de isocromáticas que se reproduce en la figura lOO, indicando
llaman puntos isótropos. Cuando n = 1 tenemos una franja de primer franjas paralelas que en todas las secciones verticales, alejadas de los
orden, para n = 2 una franja de segundo orden, etc., recibiendo todas . de aplicación de las cargas, la distribución de·tensiones es la misma.
estas líneas el nombre de isocromáticas por presentarse, cuando se utiliza la )magen de la pantalla mientras' aumentamos. gradual-
EL MIlTODO FOTOELASTICO 165

que aparecen nuevas isocromatlcas en los y para las componentes c..Iebidas a y~'
de la pieza que se mueven hacia el eje neutro, de . a .
se van espesando cada vcz más. En el eje neutro se presenta, Xa = - ~sen {3sen.p, Ya = V2 cos {J sen (if; - A) (J)
la isocromática de orden cero (n = O). y2
Sumando las componentes de las ecuaciones (¡) y 0) tenemos para la luz
43. Polariscopio circular. Hemos visto que, para un determinado
que sale del modelo
ángulo, el polariscopio plano muestra junto con las isocromátícas las
¡sodinas correspondientes a ese ángulo. En la figura 100, por lo tanto,
debieran aparecer en negro todos aquellos puntos en los que las direc- Xa =
a
.y2 .//
cos '1', Ya = ../2 sen (1/1' - A) (k)

ciones de las tensiones principales coinciden con las orientaciones de


polarizador y analizador. La figura 100 fue obtenida en reaiídad con Un donde 'PI = 'P +
f3. .
Antes de examinar la influencia de Q,1 y A conviene representar las
polariscopio circular, el cual es una modificación del polariscopio plano ecuaciones (k) como superposición de dos movimientos circulares. Lla-
diseñada con el fin de eliminar las ¡sodinas!. Su esquema es el mostrado mando 'JI" a 'l -(LJ/2) Y b a a/V2 las ecuaciones (h) toman la forma
en~ la figura 98b, y corresponde al dé la figura 98a, sin más que añadir
las dos láminas cuarto de onda Qp y QA' Una lámina cuarto de onda es una
placa cristalina, con dos ejes de polarización, que afecta a la luz de igual $3 = b cos (if;1I +~) = b (COi:l~COS if;" - sen~ senifil/) (l)

~) = b (COS ~ sen"'" - sen~ cos '¡'fI)


forma que un modelo en estado tensional uniforme, introduciendo una
diferencia de fase Ll, dada por if), pero cuyo espesor es tal qu.e IJ = :;r/2. ys = b sen ("''' - (m)
Usando las ecuaciones (J) con ese valor de Ll y eligiendo pal'a a, ángulo
formado por el plano de polarización de P y uno de los ejes de Qp, el que representa, en la figura 99b (en la que ~l rayo norma~ al papel entra
valor de 45°, obtenemos las siguientes expresiones para las componentes en él), la superposición de un movimiento clrcular de radIO b co~ (.-1/2) y
de la luz que sale de Qp. sentido el de las agujas del reloj y otro de radio b sen (Ll/2) y sentido con-
trario al de las agujas del reloj.
,
a:2 =
a .1,
y'2 ces '1', 11~' = . 52 cos (if; - ~) = :2 sen if; (h)
Podemos ahora demostrar que si el eje de polarización de A forma
450 con los de QA uno de estos movimientos circulares es transmitido
hasta la pantalla S, mientras que el otro es interceptado consiguiéndose
. Aquí X.I corresponde al eje «rápido~ de la lámina cuarto de onda. La elon- así el resultado que buscamos de eliminación de las isodinas. Las compo-
gación expresada por estas ecuaciones (en las que 'P es de la forma pt + nentes Xa e Ya de las ecuaciones (l) y (m) tienen las direcciones c..Ie las ten-
+ constante para un punto cualquiera del rayo luminoso) corresponde . siones principales del modelo. Un cambio de los ejes del movimiento cir-
a un 'movimiento circular, por lo que una luz tal se dice que está circular- cular no hace más que alterar el ,íngulo de fase ?JI" en una constante. En
mente polarizada. consecuencia el movimiento circular puede ser expresado empleando los
Llamando P al ángulo formado por x/ y la dirección de r1,. en el mo- ejes de QA mediante las componentes
delo (fig. 99b), LJ a la diferencia de fase producida por el elemento so-
$4=CCOS"', Y4=csenv- (n)
metido a tensión y habida cuenta de que las componentes (h) corres-
ponden a los ejes de polarización de Q P, tendremos las expresiones si- en las que 1JI tiene de nuevo la forma pt + cte. Identificando x con el eje
guientes para las .componentes de la luz, producidas por xa /, que salen «rápido') de Q A tendremos que a la salida de esta lámina cuarto de onda
del modelo.
a X; = ecos 1/1, Ys = csen (" - ;) = -c cos '" (o)
a
Xa = ---= cos (3 cos 1/1, ya = V2 sen fJ cos (1/1 - Ll) (i)
y2
donde 'P ha cambiado de. nue~o en una constante. Si; coloc~mos ahoru e~
, Si se gira el polarizador y el analizador, manteniéndolos cruzados, las isocromáticas analizador de forma que su eje forme con OX 4 Y O,Y4 un angula de 4S
se mantendrán estacionarias mientrns que las i.oclinas se moverún. Si tal rotación se realiztl (fig. 99c) la resultante de las componentes (o) a lo largo de él será· .
rápidamente, las ¡sodinas dejarán de Verse. Este mismo efecto es el conseguido por el polaris-
copio circular por métodos puramente ópticos. ecos 45° cos 1/1 - e ces 45° CQS '"
166 TEORlA DU LA ELASTICIDAD El. METODO FOTOIlLASTICO . 167

lo cual es cero, con lo que el movimiento circular de i:lentido, el de las oscuro. Si giramos el analizador _900 respecto a'O" lo tendremos, por el
agujas del reloj, es interceptado. . contrario, instalado para la observación en campo' iluminado,' en la que
Considerando de la misma manera 111 parte de las ecuaCIOnes (1) y 'aparecen como franjas iluminadas las que antes se presentaban.en negro.
(m) correspondientes al movimiento de sentido contrario al de las agujas Este mismo efecto se consigue en el polariscopio plano colocando parale-
del reloj, es decir, lamente, en lugar de normalmente, los ejes de polarizador'Y analizador.
(n')
xi = -csen f, y/ = -e cos '" . 44. Ejetnplos de determinación fotoelástica de las tensiones.-
tendremos que la elongación transmitida por el eje del analizauor es: . La aplicación del método fotoelástico ha permitido obte~er resultados de
suma importancia en el estudio de las concentraciones de tensiones que
-e cos 45° sen f - ecos 43° sen '"
siendo su amplitud
_r .t:. t:.
V2c o v2bsenZ o asen
Z
(p)

si recordamos que' b es u/V'X y que a es la amplitud a la salida del pola-


rizador. Comparando este resultado con el (g) del polariscopio plano ob-
servamos que el factor sen 2a está ausente, con lo que sobre la pantalla
aparecerán las isocromáticas pero no las isodinas. En este estudio no se
ha tenido en cuenta la absorción de luz por el aparato.
Si I es cero también lo es la amplitud (P), lo que quiere decir que
si no hay modelo o si éste no está cargado, la pantalla aparecerá en negro.
Tenemos entonces instalado el instrumento para la observación en campo

Frc. 102

PIC. 103

· 'aparecen en el contorno de los orificios y ángulos entrantes. En tales caso::;


'. la tensión má.'dma se produce en el borde, y como una de las tensiones
· principales se anula en el contorno libre, aquélla puede obtenerse direct,i-
FIG. 101 · mefite por el método óptico.
168 '!'HORIA DE LA ELASTICIDAD EL MBTODO FOTOELAS'l'ICO 169

La figura 101 muestra la distribución de isocromáticlIs para una b¡lrra


curva), flectada por los pares M, cuyo diámetro exterior es tres veces el
interior. El orden de las isocromáticas marcado en el extremo derecho
de la pieza, presenta un máximo de valor 9 en la parte superior e inferior
de la barra y el regular espaciado de las mismas, en esta zona, corresponde 3
,
~

"\ Factores de concentracoón de esfu~rzos


Tensión
p o-D/d:J
~ c-D/d"l.5
0\
~
¡"'- -1 t ~
'ir- r-
-
FIG. 104 0.1 0.'2 0.3 D.4 0.5 0.6
Relación R/d

a ia distribución lineal de las tensiones flectoras. El orden de las ¡socro- Fll.. 105
máticas, marcado en el extremo superior, muestnl la distribución tensio-
nal en la parte curva de la barra (el modelo completo se continúa por
encima de este extremo superior, que es su eje de simetría), indicando la
existencia de una tensión de compresión en el borde interior igual a 13,5
en valor relativo y de una tracción en el borde exterior igual a 6,7. Estos
valores concuerdan muy bien, proporcionalmente, con los resultados teóri-
cos «(exactos') dados en ll! última línea de la tabla del § 27.
Las figuras 102 y 103 se refieren al caso de una viga flectada bajo la
acción de una carga concentrada' que se aplica en su punto medio2 • La
mayor densidad de franjas oscuras indica tensiones elevadas en la pro-
ximidad del punto de" HplicacÍón de la carga. El número de franjas que
atraviesan las secciones transversales decrece desde el centro hacia los
extremos de la pieza, a consecuencia de la correspondiente disminución
del momento flector,
La figura 104 representa la distribución de tensiones en una plac!l
de dos unchunls diferentes, sometida a una tracción axÍli:1 e indica que la
máxima tensión aparece en la terminación de la transición entre las partes
de distinta sección, La relación de la tensión máxima a la tensión mediá en 1·'IG, 106

1 E. E. Weibel, Tralls. A.S,M,E., vol. 56, pág. 637. 1934.


'M, M. Frocht, T,'a1IS. AS,M.E.• vol. 53, 1931. .....
170 TEORIA DE LA ELASTICIDAD EL METODO FOTOELASTICO 171
la sección más estrecha de la placa, es llamada 'factor de concentración de En consecuencia, en todo punto donde deseemos determinar !lIS tensiones
tensiO?les. Su valo!" depende de la relación del radio R, de la curva de tran- podremos evaluar U x + (1v realizando !a medida de IJh, para cuya ejecu-
sición al ancho, d, de la placa en su parte más angosta. La figura 105 con- ción se han desarrollado diversos tipos de extensómetros 1. Asimismo,
tiene diversos valores del factor de concentración obtenidos experimen- podemos realizar tal medida fotografiando las franjas de interferencia que
talmentel y muestra que la tensión máxima aumenta rápidamente al dis-
minuir la relación Rld, de forma que cuando Rld = 0,1, la tensión máxima
· se obtienen al aplicar el modelo sobre un ellpejo plano. Tales franjas son
· causadas por la lámina de aire de espesor variable, que sigue las variacio-
supera al doble de la tensión media. La figura 106 representa la misma · nes de espesor del modelo, contenida entre modelo y espejo.
placa sometida a la acción de un par de fuerzas aplicado en su extremo y · De otra parte, la suma de las tensiones principales cumple una ecua-
en el plano medio de la placn, y en la figura 107 se consignan los valores del · ción diferencial [ecuación (b) del § 16J que es también satisfecha por la
factor de concentración para este caso. . dd1exión de una membrana, una película ·de jabón por ejemplo, unifor-
. ·memente estirada, de forma que si hacemos corresponder los valores de
45. Determinación de las tensiones principales. El polaris- contorno, la deflexión representa 11", + ay según una ~ierta escala'. En
copio corrienté, que hemos estudiado, determina solamente la dirección · muchos casos los valores en el contorno de (1x +
a~ pueden ser determi-
de las tensiones principales y su diferencia. Cuando se desean conocer las ~ados mediante los diagramas fotoelásticos. Estos métodos permiten de-
·terminar a .. - av solamente,. pero en un borde libre una de las tensiones
Factores de concentraCIón de tensiones
Curvatura pura
ay, por ejemplo, se anula por lo que (1% - (11) y (1", +
ay valen lo mismó.
·Asimismo, si en un punto del contorno es aplicada una cargu normal cono-
o-Dld=J cida, esta carga constituye una de las tensiones principales por lo que la
\ o-pld=/,S ;lllCUJiUi:< fotoelástica de la diferencia de las mismas basta para determinar su

La misma ecuación diferencial es satisfecha por la distribución de


\0
~ C[CÍl) eléctrico en el flujo de cor1'Íente a través de una placa, lo que
ser el fundamento de un método eléctrico de determinación de las
r",~olnn"",-. Asimismo las tensiones principales pueden ser también .. de ter-
~ mediante métodos puramente foto elásticos haciendo uso de ins-
.......... ,....... .Q,

-- más .elaborados que los descritos en los §§ 42 Y 43. Como alter-


a estos procedimientos experimentales se han desarrollado métodos
. uméricos que son estudiados en el apéndice.

I 46. Fotoelasticidad tridimensional. Los modelos usados en los


O 0.1 0.2 0,3 0,4 0.5 0.6
Re/ación Bid fotoelásticos ordinarios son cargados a la temperatura ambiente
FIC. 107 elásticos·, de forma que los esquemas ópticos desaparecen al retirar
carga. De otra parte, puesto que la luz ha de atravesar tocio el espesor
tensiones principales, en el interior del modelo o en zonas del contllmo ·modelo, la interpretación de los esquemas fotoelástieos es posible
sobre las que actúa una carga desconocida, es preciso acudir bien al cálculo, cuando el modelo se encuentra en un estado tensional plano
bien a la realizaCión dé··otras medidas. Para la ejecución de uno u otro se tensiones, entonces, son casi cónstantes !l través del espesor). Si éste
han propuesto y utilizado muchos métodos, de algunos de los cuales se 'es el caso, como en una distribución de tensiones tridimensionales, el
va a hacer una breve descripción 2 • óptico es la integral del estado tensional a lo largo del camino re-
La suma de las tensiones principales puede determinarse midiendo ..rido por el rayo".
los cambios de espesor de la placa3 como se deduce de la __relación: ·Estas dificultades han sido resueltas mediante un método busudo en
,jh = ~ (a. + I1v) (a)
, Véas' M. M. Frocht, Plwtoclas/icity, vol. 2.
'J. P. Den Hartog, Z. I/rlgew. Mallr. Jyfech., vol. 11, plÍg. 156. 1931.
, Véase el trabajo cltndo de We.bcl. 'Vé."" R. D. Mmdhn, J. Appl,ed Plrys., vol. 10. pág. 282. 1931. . .
A Pam mayor InformaCIón \ é.m~t: 1.lb reCel cnCM~ dI:" Id nota.
, Véase el trabajo de D_ C_ Drucker en el Tlal/dbook 01 Expertll/elllal Slress 11.1ll1Iysi,·, dond~
, Este método fue sugerIdo por I\Ilcsnager, /Ile. nI. un estudIO completo. sobre la fotoelastlcldnd tridImenSIonaL
172 TEQRIA DE LA ELASTIGIIJAD
EL METODO FOTOELA5TICO 173
las observaciones de Brewster y Clerk Maxwell 1 de que los materiales .
gelatinosos, tales como el colapes (isinglass), secados bajo carga, conservan
Tuerca ·con borde
los esquemas foto elásticos al ser desc~rgados. Asimismo se ha encontrado CÓniCO
que resinas tales como la baquelita y la fosterita, cargadas estando calientes,
poseen la misma propiedad al ser descargadas. La explicaciónz se encuen-
tra en que la estructura de estos materiales consta de un esqueleto elástico

FIO. 108

fuerte (una malla molecular) rellenada por una masa de moléculas poco
ligadas que se fluidiza al calentar. Cuando el modelo caliente es cargado,
Tuerca convencional
el esqueleto elástico es el que sostiene la carga. Al enfriar el modelo la masa
asemilíquida') se. «congela. haciendo que el esqueleto conserve la defor- FIG. 109
mación al descargar el modelo. El efecto óptico se conserva, en conse-
cuencia, y no es alterado al cortar la pieza en trozos. Un modelo tridi- ó 3 %. La figura 109 representa las franjas obtenidas sobre un modelo
mensional puede ser··éortado en rebllnadas, cada una de las cuales puede baquelita) de una unión por pasador y tuercal . La tuerca inferior es del
ser estudiada con el polariscopio. El estado tensional en tales rebanadas no convencional. La superior de borde cónico muestra una menor con-
es plano, pero se sabe que las componentes de la tensión 7:",., 'yz y (J. no de tensiones que la convencional.
afectan al rayo de dirección z, normal a la lámina. La figura 108 muestra
la repartición de franjas obtenida en la rebanada central.de un eje redondo 1M. Hetényi, J. Applied Mechu1Iics (Tram. A.S.M.E.J, vol. lO, pág. A·93, 1943. Resul.
(de fosterita) en el que existe una muesca hiperbólica 3• La tensión máxima correspondientes a otros tipOS de tuercas pueden encontrarse en este trabajo.
deducida de este diagrama fotoelástico, difiere del valor teórico en un
I J. Clerk MUKwdl, Sci. Paper., vol. 1, pág. 30.
'M. Hetényi,:J. Applied Phys., vol. 10, pág. 295, 1939.
lLeven, loco cit.
.....
METODOS ELASTO-ENERGETICOS 175

'sima fracción del trabájo realizado por las fuerzas de compresión!; fracción
ésta tan pequeña, que a efectos prácticos puede ser despreciada. En conse-
cuencia, podemos aceptar que el trabajo, realizado no se emplea en la
generación de calor, siendo todo él almacenado en el elemento 'en forma
, de la llamada energía de deformación o energ{a potencial elástica. Se supone
Métodos elasto que el elemento sigue siendo elástico y que no es generada energía cinética.
Las mismas consideraciones se aplican cuando sobre el elemento ac-
túan las seis componentes de la tensión a"" (Jy, (J.. T",y, T",., T/I% (Hg. 3).
La conservación de la energía requiere que el trabajo realizado no dependa
, del orden en que se apliquen las fuerzas, sino sólo de su magnitud final.
De no ser así, al cargar siguiendo un cierto orden y descargar siguiendo
otro orden, al que corresponde un trabajo mayor, obtendríamos una energía
.' Ilbre neta después de hacer recorrer al elemento un ciclo completo.
El cálculo del trabajo realizado, es más sencillo si las fuerzas b ten-
siones aumentan todas simultáneamente con igual velocidad. Entonces,
la rehición entre cada fuerza y el' desplazamiento correspondiente sigue
siendo lineal como en la figura 11 Ob, de forma que el trabajo realizado por'
47. Energía potencial elástica. Cuando una barra uniforme es
todas esas fuerzas será:
sometida a una tracción, las fuerzas que actúan sobre sus extremos reali-
zan una cierta cantidad de trabajo al estirarla. Si sobre el elemento de dV = Vod:cdydz (b)
la figura 110, actúa solamente la tensión normal (J", la fuerza y extensión

¿¿ttl.1:3 d.
O : e.áz
Vo = ·HO"%E% + rrufu + a,E. + T"","("", + 'l'V'''(II' + T,,=y~,)
la energía de deformación correspondiente a la unidad de volumen.
, .' En la discusión precedente se consideró que las tensiones eran las mismas en
las caras opuestas del elemento y que no existinn fuer:r.3s másicas. Estudiemos ahora
(e)

(al (b) el trabajo hecho sobre el elemento, cuando las tensiones varian a través del cuerpo
y las fuerzas másicas no son nulas. Considerando la fuerza ".,.dud, que actúa sobre
FlG. 110 , la cara 1 del elemento de la fígunl 110a, el trabajo que realiza al despla:.:arse el des-
plazamiento u será Hrr,u),d.,d, donde el subíndice 1 indica que las funciones rrr y 11
correspondientes serán !T",dydz y f",dx. La relación existente entre estas :, deben ser evaluadlls en el punto 1. De igual forma, la fuerza rr ,dvd, quc actúa sobre
dos cantidades es la representada por una recta tal como la OA de la , la cara 2 realiza el trabajo - Je". u)!d.,d , siendo el trabajo total para las dos caras
figura 110b, y el trabajo hecho durante la deformación viene dado por el
i[(..:uh - ("su).] dy dz
área l(adydz) (E"dx) del triángulo OAB. Llamando dV a este trabajo límite es:
tendremos: 1 f)
2 a;; (.."u) dx dy dz (d)
Ca)
siendo evidente que este mismo trabajo es realizado sobre todos los ele- , Calculando ahora el trabajo realizado por las tensiones tangenciales '~y y t",. sobre
,las caras 1 y 2 Y sumándolo a (d), tendremos la siguiente expresión para el trabajo
mentos de la barra suponiendo que el volumen de todos ellos sea el mismo. , hecho sobre esas dos caras por las tres compooentes de lo tensión:
Sentado esto, surge la pregunta siguiente: ¿en qué tipo de energía se
convierte este trabajo? 1 él
2 a; (..:u + T:,tI + T:,W) d:r; dy d~
En el caso de un gas, la compresión adiabática del mismo eleva su
temperatura. Si es una barra de acero 10 que comprimimos adiabática- I De no ser así habrla una diferencia sustancial entre los mÓdulos elásticos ad.abáticos
mente, la temperatura se eleva también aunque en pequ'eña cantidad. El e isotermos cuando en la realidad tal diferencia es muy pequeña. Véase G. F. C. Seade, Ex·
calor correspondiente, sin embargo, representa solamente una pequeñí- ,p.,imental Elasticity, capítulo 1.
176 TEORIA DE I.A ELASTICIDAD METODOS ELASTO-ENERGETICOS 177
do~de V ~ 'lII son las componentes del desplazamiento en la direcciones y y. z. El lru- a la componente correspondiente de la tensión. Tomando por lo tanto la
biIJo realizado sobre los otros dos pares ,de caras puede hallarse de igual manera, derivada respecto a €" y. usando .la ecuación (11) se obtiene
encontrándose pura el trabajo total hecho por las tensiones sobre las caras la siguiente
expresión:
avo
oe",
= ),8 + 2Ge", = u'" (g)
1 [ iJ fJ
:2 a;; (u"u + T ••U + 'T••w) + ay (.,.vv + T ••W + ..... u) En el caso de un estado tensional plano U z = .rz = .y. = O Y de (84)
+ fz (.,.,1U + T••'. + "u.u) ] dx dy dz (6)
resulta;

El trabajo realizado por las fuerzas másicas será:


V o -- 2E
1 (rr" 2+ O'v2) - Ev rr"uu 1 r;rJ-•
+ 2G (86)

í(Xu + Yu + Zw) d,; dy dz (J) La energía potencial elástica total V de un cuerpo deformado, se ob-
y el tmbajo total será la suma de (e) y (f) q~e diferenciando (e) queda así: tiene integrando la energía de deformación por unidad de volumen Va:

....!..[IT,~+U., (lv +G. jlw +T,y(o~'j_aU)+T'Z(aw +élv) v = JfJV o dx dy dz (87)


2 a.'!C ay ,¡¡z ih ay ay GZ
Representa el trabajo total realizado durante el proceso de carga contra
(21L
élz
+ ow)
+ . .,:
ox
+ u (..fuI...
ih
-r ~ + ~ + x)
ay oz
las fuerzas interiores. Si imaginamos que el cuerpo consta de un gran
n(¡mero de partículas unidas entre sí por resortes, V representaría el
+ v (.lEu.. + l.!a. +~. + y) + w (.&... + 1!.u. + + z)] d.>: dy dz "Tu: trabajo realizado para estirar y contraer tales resortes. Usando las 'ecuacio-
~ h~ h ~ ~
nes (84) u (85) podemos expresarlo en función de las componentes de la
Observando que las cantidades que multiplican a las componentes de la tensión tensión o de la deformación, como vel'emos en las aplicaciones que se des-
son Ex> ••• , 1''''"' ... [ecuaciones (2)] y dado quc los paréntesis que afectan a u, v y w ;1rro11an a' continuación.
son nulos, como veremos en las ecuaciones (127) del § 76, resulta que el valor totaí
del trabajo realizado sobre el elemento viene dado por (á) y (e). Estas fórmulas La C'dntidad de energía potencial elástica almacenada por unidad de volumen,
siguen, pues, siendo válidas lJun cuando el estado tensional no sea uniforme y no ,es usada a veces como base para determinar la tensión límite a la cual se produce
se consideren nulas las fuerzas másicas. la rotura '. Con el objeto de armonizar tal criterio con el hecho de que los materiales
isótropos son capaces de soportar grandes presiones hidrostáticas sin ceder, se ha
Mediante la ley de Hooke, ecuaciones (3) y (6), podemos expresur propuesto considerar dividida en dos partes la energía de deformación: una, la corres-
pondiente al cambio de volumen, y la otra, que sería debida a la deformación, y que
Va, que viene dado por la ecuación (e), en función de las tensiones sola- es la única que se toma en cuenta para determinar la resistencia".
mente. Entonces Como ]0 expresa la ecuación (8), la modificación de volumen es proporcional
a la suma de las tres componentes nOffilales de la tensión, de manera que si esta
11
- E (rr,¡t'u + rrv rr• + rr.rr,,) suma es cero, la deformación es tal que el volumen no cambia. Cada una de dichas
~omponentes puede ser, a su vez, dividida en dos sumandos

+ 2~ (T"1/ + T~=2 + T".2) (84) fl'tIS == a/ + P, .., "" IT,I + P


en las cuales
Alternativamente, podemos usar las ecuaciones (11) y expresar Va en
p = -i(... + ... + ..,) = te (h)
función de las defonnaciones. Resulta: es decir, que
<1'.' + u.' +.,.z' = O

de manera que, según se ha expresado, la solicitación <1,,', G,/, G.' producirá única-
siendo mente una distorsión y la variación de volumen dependerá solamente • de la tracción
E1I
e = E" + fu + e., h = (1 + 11) (1 - 21')
1 En el libro de S. Timoshenko, Strengtlr 01 Materia/s, vol. 2, se estudian las diversa.

teorías de la resistencia.
o M. T. Huber, Caasopfsmu teehnizne, Lwóv, 1904. Véase también R. V. Mises, Gliuingell
De la expreslon (85), se deduce fácilmente que Va es siempre positivo. Nadlriehte/l, ,Math.-p/¡ys. Klasse, 1913, pág. 582, Y F. Sebleicper, Z. allgew. Math. Meeh .•
Como puede mostrarse fácilmente usando la ecuación (85), la deri- vol. 5, pág. 199, 1925. .
3 LRS componentes" tangenl.;ales d.e la tensión T:r;UlI t'vr., "tzt: producen defonnacioncs tan-
vada de Va respecto a cualquier componente de la deformación, es igual' gel,c,.l". p"ro no alt~ran el volumen.
12 -TtOnlA DI! LJ\ hW5TICIUt.O
ME'l'ODOS ELASTO-ENERGETICOS 179
178 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
Una distribución tal reaüza un trabajo durante su aplicación puesto que s~
unifonne p. De la ecuación (8), resulta que la parte de la energía total que corres- produce una··(¡eformación de la regiqn cargada. Fijemos en posición y orientación
ponde al cambio de volumen es: un elemento de superficie de esta región; sLp indica el orden de magnitud (por ejem-
ep _ 3(1 - 2_). 1 - 2_ plo, el valor ·medio) de In· fuerza por unidad de área y a es una dimensión lineal
2" - 2E p- = ~ (<T: +00. +<T,)2 (i) representativa (por ejemplo, el diámetro) de la zona cargada, las componentes de
la deformación son del orden de (PIE) y los desplazamientos de la parte cargada
Restundo esta expresión de la (84) y usando la identidad del orden de palE. El trabajo realizado es, entonces, del orden de pa' . palE = p'a"IE.
Puesto que de otra parte, componentes de la tensión de orden p implican una energía
<T:If" + "1fT, + <T,a". = -ílea. - 0",)' + (<T. - a,)' + (lfo - a.)'] + (a.' + <T,' + u,') potencial cuyo valor por unidad de volumen es del orden de p"/E, se deduce que
el traaajo realizado se extiende solamente a un volumen del orden de aS, lo que
podemos expresar In parte de energía total debida a la distorsión bajo la forma; concuerda con el enunciado del principio de Saint-Venanr.
En lo dicho se ha supuesto que el cuerpo era de fonoa rlgida quc obedecía a la ley
y 1 +_
D -
1 - 2"
-¡jE- (a". + 0"", + u,)' = BE [(... - .. ,)' + (a. - u.), de Hooke. Esta última restricción puede ser salvada haciendo que E represente
a In penwente de la curva tensión-defomlación del material. Si, por el contrario,
1
+ (". - ".)'J + 2G (T:,' + T." + Tv") (88) el cuerpo no es de forma rígida, como ocurre, por ejemplo, con una viga muy delgada
o con una fina membrana cilíndrica, la aplicación de una distribución equilibrada
de fuerzas puede dejarse sentir a distancias superiores a varias veces el espesor
En el caso, de una tracci~n simple de dirección x, tan sólo a. es distinta de cero
y la energla de defonnaclón que corresponde a la distorsión resulta entonces de o el diámetro.
. La discusión anterior puede ser repetida sin cambios para el caso de una carga
acuerdo conla fórmula (88) 1
3
1" .
(1.". En el caso de una solicitación de esfu:rzo de resultante no nula, siempre que exista un elemento de superficie fijo dentro de
o próxímo a In parte cargada. Por tanto, si un material deformable está pegado a
:',

cortante aplicada, por ejemplo, a los planos xz e yz, T . . es la única tensión diferente uno rígido, la presión aplicada a una pequeña parte del prímero, próxima al empalme,
de cero y la energía correspondiente a la distorsión es 2~ . i'"•. Admitiendo
producirá solamente tensiones. locales l. 1',

como cierto que para cualquier sistema de tensiones la rotura ocurre cuando la 48. Principio de los trabajos virtuales. El princlplO de los tra-
energía de defonnación correspondiente a la distorsión alcanza un cierto límite bajos virtuales se emplea, con ventaja, en la solución de diversos problemas
(car~:teristico d _cada material), la relación entre el valor crítico para el caso de una
7
tenslon de tracClon sola y para el de una tensión tangencial también sola se obtiene de elasticidad. Para e! caso de una partícula, dicho principio establece
,.
,.
median te la ecuaci ón que si un punto material, sometido a un conjunto de fuerzas, se encuentra
en equilibrio, el trabajo total de esas fuerzas es nulo en toda traslación vir-
¡:
1-
tual. Se considera como traslación virtual de una partícula que puede mo- l:.
¡.,
de donde result'l verse libremente en cualquier dirección, todo desplazamiento infinitesimal
. 1 de la misma. Si bu, tÍv, c5w son las componentes de una traslación virtual ¡.
T •• = -va'" = 0,55700: en las direcciones x, y, z, respectivamente, y LX, EY, LZ, las sumas de ¡
¡

las proyecciones de las fuerzas en las mismas direcciones, e! principio ;
Para e! c~so d?l acero los experimentos muestran' que la relación entre los limites
de los trabajos virtuales permite escribir las siguientes ecuaciones: ¡.
de flUidez re~lstrados para tracción y esfuerzo cortante, concuerda muy bien con
la dada por (j). /lu'1:X·= 0, oV 2:Y = 0, /lw'1:Z =O 1:
1;
.?~ la consideración de la energía potencial elástica, Ke deduce que el principio
de Salll t-~ en~n.t es una ~on~ecu~ncia de la conservación de la energía u, De acuerdo ecuaciones que quedan satisfechas para cualquier traslación ·virtual si se !.
con tal pnnClplO, dos ·dlstrrbuClOnes de carga diferentes con igual resultante que ¡,
actú~n sobre una pequeña· parte de un sólido elástico, producen el mismo e~tado verifica: ¡1
tenslOn?l, ~alv~ en los punto~ próximos a los de aplicación de la carga. Si una de :EX = 0, '1:Y = 0, 1;Z = O ,,.j,
estas dlstnbucJOnes es cambIada de signo y combinada con la otra las tensiones
resulta.n.tes serán, pues, nulna salvo en los puntos citados. Las cargas combinadas Llegamos, así, a las conocidas ecuaciones de! equilibrio del punto-masa. l·
se equllibr:m ~ el p.,rincipio en cuestión es, de hecho, equivalente a la afinnación de Al aplicar el principio de los trabajos virtuales, las fuerzas que actúan f¡:
que una ·dlstnb~clon ~e .fuerzas de resultante nula, que actúe sobre una pequeña (;;
se consideran como constantc;s durante una traslación virtual y si alguna
parte de un sóhdo elastJco, produce solamente tensiones locales. j"
de las fuerzas, que obran en un punto dado, fuese una reacción elástica, !.
¡..
• 1 Vé .se IOBs tr,"bajos de W. Lodc, Z. Physik, vol. 36, pág. 913, 1926, Y Forschu1Igsarbeite1l
por ejemplo, la reacción de una barra en el caso de la articulación de una
numo 3o3, erhn, 1928. '
2 J. N. Goodier, Phi/o Mag., serie 7, vol. 24, plÍg. 235, 1937 J Applied P/¡"s vol 13
pág. 167, 1942. ' . ~.,.. 1 Gootlier, J. Applie4 Phys., loe. cit.
METODOS ELASTO-BNERGETICOS 181
180 TEORIA DE LA ELASTICIDAD

viga de celosía, admitiremos que los desplazámientos virtuales son tan Como h¡¡ quedado establecido, la variación de la energía potencial
pequeños, como para que la variación de su intensidad o' dirección pueda de deformación es la medida del trabajo efectuado para vencer las ac-
ser despreciada. ciones mutuas que se ejercen entre' las partículas. Para obtener este tra-
Un cuerpo elástico, en reposo bajo la acción. de fuerza.s de superficie bajo se debe cambiar el signo de aquélla, así que la expresiQn del trabajo
y másicas, constituye un conjunto de partículas, cada una de las cuales efectuado durante la traslación virtual por las fuerzas que estamos con-
está sometida a un sistema de fuerzas en equilibrio. En toda traslación siderando será:
virtual, el trabajo total de las fuerzas, que actúan sobre una partícula, -JI OVo dx dy (b)
es nulo, y por lo tanto, también lo será el trabajo de la totalidad de las
fuerzas del sistema. En el caso de un cuerpo elástico, se entenderá por Al efectual' el cálculo del trabajo de las fuerzas exteriores durante una
traslación virtual, todo pequeño desplazamiento compatible con la con- traslación virtual, debe tomarse en cuenta las fuerzas aplicadas en el con-
dición de continuidad de la materia que lo constituye y con los vínculos tornó de la placa, así como las fuerzas másicas. Designemos por g e ji'
que pudiesen ser establecidos para los puntos de su superficie. Si, por ejem- a las componentes de las fuerzas que obran en el contorno de la pieza,
plo, se establece como condición la inmovilidad de una parte de la super- referidas a la unidad de área; para el trabajo de estas fuerzas, durante el
ficie del cuerpo, dígase la extremidad empotrada de una viga, o bien un desplazamiento virtual, cuyas 'componentes son óu y óv, puede, sin más,
desplazamiento muy pequeño, la traslación virtual para esa parte debe ser . escribirse la expresión:
igual a cero. Iex OU + Y ov) ds (e)
Vamos a examinar, como ejemplo d~ aplicación, el caso de una placa
sometida a un estado plano de .tensión. Denotaremos con u y v a las com- en la cual, la integración se extiende a todo el contorno, s, de la placa.
ponentes de los desplazamientos efectivos debidos a las cargas y con ¿¡u y De una manera análoga, se tendrá como trabajo de las fuerzas má-
t~V a las componentes de una traslación virtual que se efectúa a partir de sicas
la posición de equilibrio de la pieza bajo carga, las cuales son cantidades Jf(X OU + Y ov) dx dy (d)
infinitamente pequeñas arbitrarias que satisfacen a las condiciones de en donde X e Y son las componentes de la fuerza ponderal específica, y,
continuidad propias de una deformación elástica, es decir, funciones con- como en el caso anterior, la integración se extiende a toda el área de la
tinuas de x e y. placa.
Cualquiera que sea el sistema de traslaciones que se lleve a efecto, el La cotidición que expresa la nulidad del trabajo total, desarrollado
trabajo realizado para vencer las acciones mutuas entre las partículas durante la traslación virtual, resulta de las expresiones (b), Ce) y (d) y
es igual a la energía de deformación almacenada por el cuerpo, esto es, es la siguiente:
la energía potencial elástica que corresponde a aquellas traslaciones.
Por lo tanto, si en lugar de u y v tomamos óu y óv, el trabajo realizado J(X OU + Y liY) ds + .ff(X OU + Y 011) dxdy - JI llVodxdy = O (89)
para vencer los vínculos internos será igual a la energía de deformaci6n
consiguiente a u +
OU, v +.
¿¡v, menos la energía de la deformación que Como se ha dicho al aplicar el principio de los trablljos virtuales, las fuerzas
corresponde a u y a v. La influencia de los desplazamientos virtuales dadas y los componentes de las tensiones reales que corresponden a la posición
ou, Ov en las componentes de la deformación, se expresa por: . de equilibrio, se consideran como constantes durante la traslación virtual, así que
el signo Ii puede colocarse fuera de las integrales en la ecuación (89). Procediendo
os oU;' él Bv de tal forma y cambiando todos los signos, se tendrá la nueva expresión:
z
= él
ax oey =--,
ay Il[fJVo dz dy - ff(Xu + Yo) r1:& dy - f(Xv. + Yv) ds] = O (89')
y la respectiva modificación de la energía potencial de deformación por en la cual, el primer término entre corchetes es la energía potencial de defonnación.
unidad de volumen se desprende de la ecuación (85) La suma de 105 ténninos segundo y tercero representa la energía potencial que
.corresponde a IIlS fuerzas que actúan sobre el cuerpo, si para el estado en que no
avo avo avo .. existe tensión alguna (u = v = O) dicha energía potencial se toma igual a cero.
¡¡ V o = -,,-
ve:
oez + -,,-
"fU
OEU + -;-- 6-y"", = G"z DE. + G"u oe. + T~ O'Y~
a'Yru
(a)
Finahnente la expresión completa, dentro de corchetes, representa la energía po~
tenGÍal total del sistema.· .
La variación de energía potencial de deformación correspondiente a todo Por tanto, si se comparan diversos valores úe los desplul':arnientos u y '/J, puede
el cue,po se obtendrá mediante j'J¿¡Vodxdy, en la cual la integración se establecerse que las traslaciones que realmente tienen lugar en un sistema elástico,
debe extender al área total de la placa de espesor unidad. sujeto a la acción de fuerzas exteriores dadas, son aquellas que anulan la variación
182 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METODOS ELASTO-ENERGETICOS 183

de la energía potencial total del sistema, pan! cualquier despluzarniento virtual que y el incremento correlativo de la energía potencial de deformación será,
ocurra a partir de la posición de equilibrio, esto es, que la energía potencial total según queda dicho:
del sistema en la posición de equilibrio es un máximo o un mínimo. Para ver si se
trata de un máximo o de un mínimo, es necesario tener en cuenta los infinitésimos
de orden superior que habí:m sido despreciados en el desarrollo ailterior l. Si de
-s
2
l!(i-l/)2
-
o d."C
dx (e)
esa manera puede demostrarse que para toda' traslación virtual la variación de la
energía potencial total del sistema es positiva, se tratará de un caso de mínimo Si añadimos a la expresión (e) la energía debida a la tensión inicial, se,
y si ella fuera siempre negativa, se estaría en el caso de un máximo. Toda traslnció~ ", obtendrá la energía potencial totaL En este caso el principio de los tra-
virtual del sistema que lo aparte del equilibrio estable exige un trabajo positivo bajos virtuales conduce a la ecuación siguiente, que corresponde a la (89):
de mnIleru que, en este caso, la energía potenCIal tOtlll del sistema en equilibri~
es un mÍ1limo.
En el caso de un estado elástico tridimension.ll. SI! puede llegar fácil-
l S!al (dy)2
!ao CJ.oydx--2 o 0-'"dx dx=O (f)
mente a una ecuación análoga a la (89). '
El principio de los trábajos virtuales es particularmente útil para la subintegral que figura en el segundo término se tendrá:
determinar la deformación que en un cuerpo elástico origina un sistema
de fuerzas determinado.' Unos cuantos ejemplos, cuya solución es ya
muy conocida, ilustran la aplicación del método de q~e se trata.
y la integración por partes, nos da, teniendo.en cuenta que' en las extre-
,midades del hilo óy = O:

lo' (~;) dd~ (!~; ayl: - la ~:~


l
2 dx = 2 ay dX) =
Sustituyendo en la ecuación (f), se obtendrá:
Flo. 111

Consideremos, en primer lugar, la deflexión de un hilo elástico y per-


S
Jorz dd~
x-
oy dx + (' q ay d:l; = o
Jo
fectamente flexible (fig. 111) estirado por la acción de las fuerzas S entre
dos puntos fijos, A y B, Y sujeto a una carga vertical distribuida, de in-
tensidad q. Suponemos que la tensión inicial del hilo es suficientemente
grande como para que el incremento de esfuerzo tractor, debido a la
extensión adicional durante la flexión, pueda despreciarse. Por lo tanto,
ecuación únicamente quedará satisfecha para cualquier traslación
el aumento que experimenta la energía potencial de deformación a causa
dy, si se verifica
de la flexión, se obtiene multiplicando la intensidad inicial de la fuerza S
de tracción por el alargamiento que experimenta el hilo. Considerando (g)
las coordenadas confonne indica la figw'a 111, se tiene:

[1+ (d)2]1 -d:C=2d~


(d )2 "llega, así, a la conocida ecuación diferencial 'de un hilo cargado vertical-
1
ds-dx=dx d; d:c
El principio de los trabajos virtuales puede aplicarse no solamente para
!!sl:al:,le':er la ecuación diferencial de la línea de deflexión como en el ejemplo
El alargamiento del hilo eSbl dado por
sino también para el cálculo directo de las flechas l • Tomemos
r¡ 1
Jo (ds - dx) = 2
J¡ (dd;)2 dx ejemplo, una barra prismática libremente apoyada en sus extremos
cargada con una fuerza P (fig ..112). En el caso m~s general, la expresión

t Véase S. T,moshen]co, B/lll. 11ls!. Pabl., Klew, 1909, y también su hbro StTC7!gilt oJ
J L3!l dc~prccl.mlU~ ..11 ~uponcr que en to<1(j Ilcsplm'Almlcnto vlrtunl permanedan conS- 2." edlclón"vo!. 2, pág. 44, 1941.
tan tel) los fuerzns) las tensIOnes.
184 TEORIA DE LA ELASTICIDAD 185
METODOS ELASTO-ENERGE'l'lCOS

de la curva de deflexión de una barra en ¡as condiciones indicadas puede : Sustituyendo en la serie (h) el valor hallado, llegamos a la ecuación de la
representarse en forma de serie trigonométrica, como sigue " curva de de flexión
7rX
y = alsenT -z- + a3 sen-1- + . . .
+ azsen' 211":1: 3'lTX
eh)
(o)
expresión, que llevada a la conocida fórmula que da la energía potencial
de deformación de una barra prismática flectada l , nos conduce a
..
Elr
V = 2" Jo
(d'y)2 Eh' ~
,dx = 413 L¡ n'a,,2
dX2 (k)
: Esta serie converge rápidamente, así que para obtener una aproximación
: ~atisfactoria basta calcular unos pocos términos. Si, por ejemplo, la carga
,,-1 actúa en la mitad de la lu:z (e = 1/2), la flecha que ella originll será:

fk-:-::I~,-,_-__ + 341 + 541 + ...)


2Pl3 (
(Y)"=i = El?r 4 1
--¡r;:--j x
, COIl el primer término de la serie, se tiene para la flecha:
Pl"
FlC. 112 (Y):z:=í = 48.7EI
, BI valor exacto para el coeficiente del denominador es 48, 10 que nos dice
Para obtener un despla:zamiento virtual respecto a la línea elástica real, , que -el error cometido al considerar solamente el primer término. de la
demos a un coeficiente a", de la serie (h), un incremento infinitesimal serie resultá del 1,5 % aproximadamente.
(jan. Entonces

(1)
, En el estudio, precedente, consideramos despla:za-
en una sola dirección que representamos por
serie (h). Un método semejante puede aplicarse a
Ó 0p-a
;JO

, La correspondiente variación de la energía potencial de deformación, más complicados, Consideremos una placa rec-
resultará entonces, con arreglo a la ecuación (k): "tangular de bordes fijos (fig. 113), sobre la que actúan
av /jan -_ w-
EJ.¡r' 4
fuerzas másicas paralelas a su propio plano. La expre-
8a. n a... oan (m) sión general de los despla:zamientos u y v puede tomar FIC. 113
. Ja forma de las series
y el trabajo de la fuer:za exterior P durante el desplazamiento virtual (l)
será,
n7l"c' ~ ~
/..¡ A,." sen a sen b
m1rX n'trY
P oansen -1- (11.) u = Lt
(p)
~ ~
l.¡ L.¡ Bnm sen a sen b
m1rX Tl1ry
De acuerdo con las expresiones (m) y (11), la ecuRción del' trabajo virtual v =
resulta entonces:
EJ1I"~ 4 11.7l"G en las que cada término se anula en el borde, quedando así satisfechas
""2l3 11. an lia n - P oan sen -1- = O
las condiciones de contorno. Pam calcular los coeficientes A ,..n y B mn
y de ahí: procedemos como en el ejemplo de la viga y tomamos los desplazamientos
2Pl3sen~ virtuales en la forma:
1 m7fX n7fy
a" = -'E""Irll'~4;-n-'4- oU = oAmnsen-asenT

, Véase: S. Timoshenko, Strellght of Materials, 2.~ edición, vol. 1, pág. 297, 1940. "~.
6v = liB mn sen a
m1rZ n'trY
sen b
186 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METO DOS ELASTO~ENERGETICOS 187

quedando entonces la ecuación (89) de los de'splazamient()s virtuales así: , emos que para cualquier tipo de fuerzas másicas se pueden calcular

DAm.. ff X sen m;x sen n;: d:c dy = DA .... aL" f f V dx dy O


<fácilmente los coeficientes de las· expresiones (p) obteniéndose la solución
del problema.
Puede usarse también, el método de los desplazamientos virtuales
oBm.. ff y sen m;x sen n;: d:c dy = oBm.. aL . f f V dx dy O (q) . la obtención de soluciones aproximadas de problemas bidimensio~
nales, en los que se conoéen los desplazamientos en el contorno. Suponga-
mos que los desplazamientos u y 'IJ pueden ser expresados con suficiente
Para el cálculo de la energía potencial elástica en el caso tensional plano, 'exactitud mediante las series
hacemos liSO de la fónnula
+ ¿am<Pm(X,y)
v= fJ JJ [2(1 ~ p2) (e. 2 + ei + 2pf.e,,)
u = t/>kc,y)
.. (8)
VDdxdy =
11 ~ t{I.(x,y) + 1; bmt{l,.(z,y)
+ 4(1 ~ JI) 'Y",,2 Jdx dy
,n
(r)
que satisfacen las condiciones de contorno antedichas. Para ello podemos'
,elegir, por ejemplo, funciones t{10 y 11'0 que en los bordes den el valor
Sustituyendo en ella l
requerido de los desplazamientos y funciones <P y 'P (el resto de ellas)
que se anulen en el contorno. Para el cálculo de los coeficientes a" ... , 0n"
éiu \' \' m1l" n7fil
= éix = 44 a Am .. cos eL sen b
m7l":C
E. · b, ¡ ... , b"" usamos el principio de los trabajos vi.rtuales (89). Tomando
los desplazamientos virtuales en la fonna
ov \' \' n7r m7rX n7fil
¿r
E" = ay = 4 4 b BOl .. sen ex cos -b- au,. = aa .. c!>",(x,y), (t)

ou av n'1l" m'1l"x' n-rry podemos escribir tantas ecuaciones de equilibrio, semejantes a las ecua-
"/",,,=-+-=
éiy ax - bA m.. sen--cos~

r Lm;
a b : ciones (q) del ejemplo anterior, como coeficientes existen en la serie (s).

+ BOl .. cos m;:c sen n~ · Estas ecuaciones serán lineales respecto a al, ... , a,," b" '" , bm Y resueltas
'.nos darán lbs valores de los coeficientes dé las series (s), series que repre~
, sen tan la solución aproximada del problema' .
y realizando las integraciones, resulta: · Al usar el principio de los trabajos virtuales (89), se supone que la
'energía de deformación por unidad de volumen V o viene expresada en
función de las componentes de la deformación [ecuación (1')], las cuales
· se obtienen a partir de las expresiones (s). El cálculo de la variación de
la energía potencial elástica puede simplificarse si observamos que

Sustituyendo esta expreslOn de la energía de deformación en las ecua~


'oV = f J(q~ De. + (jll oell + T"", li'Y"",) dx dy .

ciones (q) obtenemos: = J1[iT'" a~ 01¿ + rF aay ov + lI T"" (aOy oU + ::c IlV)] dx dy
Eab7l"2 (m2
Amn -4- a~( 1 _ VI) +
n2 )
2b2(l + JI) =
f.aJ.b m7rX n7ry
o o X sen a senT d..x dy Integrando por partes y observando que ou y ilv se anulan en el contorno
Eab¡r2 (m2 71
2
J."ojo(b y sen mn mry
resulta
J1.
[(arFZ: éh%u) au + (au y ay + a7"")
)
B""-4- 2a2(1 + v) + b2(1 _ IiV = -
ax + ay ax ou]
v2) = -asen-b- dx dy d:rdy
,
. 1 Derivar una serie de Fourier térmmo 3 ténnlno no es Slenlpr~ correcto. Las cóm..liclones . I Este método de resolución de problemas de elasticidad fue propuesto por W. Rnz,
sufiCIentes para que 10 sea, que son cumplidas por el problema presente, pueden verse en qUien lo aplicó con éXIto en el estuulo de la fleXión de placas rectangulares. Véase J. reine 11
Modem Analysis, de E. T. Whlttnkcr y G. N. Watson, png. 1&9. a1/Cew. Math., vol. US, págs. 1-61. Véase tambIén Cesa",,,,elte Werke, pág. 192, París, 1911.
188 TEORIA DI! LA ELASTICIDAD MBTODOS BLASTO-l!NERGETICOS 189
Tomando para los desplazamientos virtuales las expresiones (t) obte- ..
T,!u = 2(1
E
+ JI)
(au
ay
av)
+ ax
.
= 2(1
E
+ JI)
('L..¡
V 'V. n?r m?rx mry
Lt Amo. b sena: cos -b-
nemos las ecuaciones necesarias para calcular los coeficientes al'" a m ,
bl •••. hm de la forma siguiente:
+ 2: L B.on -
m7r. 7n1rX n1r'1J
cos --sen -b-- + ey·a- cos ?rX)
'1/'
-

J.! (00': + ayor",,)


a a a

oa m
JI X <!>m(x,y) 11.1: iv = - oa", iJ:¡; <Pm(X,y) dx dy ,,,r',nllvpn' dalas en las ecuaciones (90) y suponiendo

lib., ff Yo/m(X,y) dxdy = -ob", f ! (~~ + a;;)t.,(x,y)dXdY OV = .~B", sen a


m?rx n1rY.
senT

o bien

f f (~~ + a;; + x) ",,:,(x,y) dxdy =O


f f (~; ~ + y) 0;; t".(x,y) dxdy = O
(90)1

Como ejemplo de aplicación de estas ecuaciones, consideremos de nuevo,


el caso de una placa rectangular (fig. 113) de la que suponemos que tres
de sus bordes están fijos y que los despiazamientos del otro (y = b) vienen
dados por las ecuaciones

u = O, v = ebsen~
. a
maslcas son cero, todos los coeficientes A 77In se anulan
Las condiciones de contorno quedarán satisfechas tomando: coeficientes Bmn son distintos .de cero solamente cuando

~~ A m'lrx n1rY
u = L..¡ L..¡ nm sen a sen -b-

v= 'lrX
ey sen-a
+. . ¿¿ B m" sen m'lTX
--sen-
a
n'lTy
b
(u)

Las componentes correspondientes de la tensión serán:

0'", = --E- -
1 - Jl2 ax
(au +.' ayav) = 1---E - (L¿ A..,,-cos--sen--
1'-
m1T
a
m'lrx
a
n1rJ/
ClJllte.rrnlln:un.uo B 1m a partir de esta ecuación y sustituyéndolo en las fórmu-
(u) obtenemos los desplazamientos producidos por los que supusimos

. ¿¿
+ JI
1'2

B mn n7l"
- .•
Ú
b
m1rX
sen - nmJ
a- cos. -b- + ve sen 'lrX)
-a
daban en el con torno.
En su teoría de la rotura de los materiales frágiles A. A. Griffith aplicó
conceptos generales relativos a la energía total de un sistema1 • Como

O'~ = 1 _
E
1'2
(av
ay + v au)
ax = 1-
('L..¡Lt
V \' B""l)sen.7cosT
E
1'2
n1fy n7l" m7rZ
sabe, los materiales tienen una resistencia muy inferior a la que cabría
de la magnitud de las fuerzas moleculares. Para un detenllinado

+ eseno: + v 'LtLt
V \' AmI> m?r n7rY) por ejemplo, Griffith encontró teóricamente que la resistencia a la
1/'X
a cos m1fX
--a se11 -b-
1 A. A. Griffith, 1'Tallr. Roy. Soco (Londo,,), _ene A, vol. 221, p~g. 163,1921. Véase también
trabajo del mismo autor en Proc. Intern. Congr. Appl. Mech.,· Delft, 1924. La bibliografia
, Los ecuacIones de este tipO de los de.plazanllentos virtuales son llamados tl veces ecua· este tema puede encontrarse en Ha71dhuch der physikalische1l und technischen il-lecltanik,
Clones de Galerkm. Sin embargo, ambos tipOS de ecuaCIones, las (q) y las (90), fuel'On ya 4, parte 2, 1931, ~.rticulo de Adolf Smekal.
,nd,cados por Rltz en el trabajo citado anterIormente. V¿ase Oesam.lell. Werke, pág. 228,
190 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METODOS ELASTO-ENERGETICOS 191
tracción que cabría esperar sena del orden de' 1,125 X lOó kg/cm", mien- :~rrollo espontáneo se dará cuando las dos cantidades de energía se igualen,
tras que los ensayos realizados con barras de ese material dieron solamente ,' empleando (v) queda:
0,018 X 10 5 kg/cm 2 • Corno el autor citado demostró, la discrepancia
entre teoría y experimentos puede ser explicada si suponernos que en dV dE = 'lC'l8,r2 dl' = 2 dl T
materiales tales como el vidrio, existen fisuras y defectos microscópicos dI 2E
que producen elevadas concentraciones de tensioiles y provocan consi-
guientemente el desarrollo de la grieta. Griffith, con el fin de facilitar _ /4ET (w)
S " - '\j 'll'l
los ~álculos, supuso que esas microfisuras tenían la fauna de una elipse
muy estrecha cuyo eje mayor era normal a la tracción.
resultados de los ensayos realizados con probetas en las que, por
" medio de una punta de diamante, se realizaban fisuras de longitud 'cono-
"Cida, concuerdan muy bien con los valores obtenidos aplicando la fórmula
También se ha demostrado experimentalmente que si se adoptan
tendentes a -evitar fisuras microscópicas, pueden obtenerse
resisterlci:as mucho mayores que las corrientes.
Algunas varíllas de vidrio ensayadas por Griffith dieron resistencias
tracción del orden de 0,63 X 10" kg/cm2 , 10 que supera a la mitad de
FIG.114 'i~ cifra teórica antes citada.

Consideremos una placa ahcd fija en sus lados ah y cd y sometida a 49. Teorema de Castigliano. En el párrafo anterior se ha compa-
una tensión de tracción uniformemente distribuida de valor S y apli- la configuración de un cuerpo elástico en estado de equilibrio bajo
cada en esos mismos bordes (fig. 114). Si hacemos un orificio elíptico ,U't:Lt:l";¡U"'<.la" fuerzas másicas y condiciones de contorno, con las confor-
microscópico AB, de longitud 1, y se mantienen ab y cd fijos, la energía : maciones contiguas a aquéllas, que el mismo adquiere al ser apartado de la
inicial de deformación debida a la tensión S se reducirá. Esta reducción l , pOSICIón de equilibrio mediante las traslaciones virtuales c~u, du. Quedó allí
2
que podemos calcular haciendo uso de la solución para un orificio elíptico , ~1'''L>l'''C1UIU ,que las verdáderas traslaciones que corresponden a la p'osición
es para una placa de espesor unidad igual a de equilibrio estable son aquellas que hacen mínima la energía potencial
2 ,total del sistema.
'11'/ 28 ( )
, Consideremos ahora, en lugar de los desplazamientos, las tensiones
V = 4E v
',que corresponden a In posición de equilibrio, y tomemos también como
fórmula que llOS indica además que al extenderse la fisura (l se hace ,,~jemplo, el caso de un estado elástico plano. Como sabemos, las ecuacio-
mayor) aumenta la reducción de la energía elástica' almacenada en la 'nes diferenciales de equilibrio (18), junto con las condiciones de borde
placa. Al mismo tiempo, sin embargo, la extensión ~~ la grieta s~l?one ,'(20), no bastan para determinar las compo!,:\cntes de la tensión, u"', CJ., ."y.
un aumento de energía superficial, ya que las superflclcs dc los sohdos, También hemos visto que adoptando diversas expresiones para la función
al igual que la de los üquidos, poseen una tensión superfici¡ll. Griffit~ "de tensión, ,¡" que figur,a en las ecuaciones (29), podemos encontrar una
encontró, por ejemplo, que para la clase de vidrio ~ue usó en sus. ~xpen­ variedad de distribuciones de esfuerzos que satisfagan a las ecuaciones
mentos, la energía superficial, T, referida a la umdad de superfICIe, era ,de equilibrio y a las condiciones de borde. Se plantea entonces la cues-
del orden de 2,2 X 10- 4 kg/cm2 • tión: ¿cómo distinguir entre todas las distribuciones de tensiones estática-
Si pensamos ahora, que la extensión de la fisura requiere un consumo mente posibles,-la verdadera?'
de energía superficial inferior a la reducción correspond}ente de la energía , Sean u"', Uy, ''''V' las verdaderas componentes de la tensión corres-
de deformación, el desarrollo de la grieta no exige ningún aumento de pondientes a la posición de equilibrio y da", aal/' ch",y, incrementos infini-
la energía total y se producirá espontáneamente. La condición pura ese des- ',tamente pequeños de l~s mismas, de manera que las nuevas componentes
de la tensión, es decir, 11", + oa-,:, ay + CJay , ''''11 + C$-e",,, satisfagan las
t N. del 1'. Consideramos la reducción de energía correspondiente a un aumento unidad ,mismas ecuaciones de equilibrio (18). Restando entonces las ecuaciones
de la Idngltud de la fisura.
• Véase el § 63.
de uno de los siste~as de las del otro, haIlaremos que la variación 'de las
192 mORlA UIl LA ELt\STICIDAD METonos ELASTO-JlNIlRGETICOS 193
componentes del esfuerzo habrán de satisfacer a las siguientes ecuaciones
de equilibrio: lu (~lTzl representa la diferencia de los valores que
. la función u (jq." en dos puntos opuestos del contorno tales como
a OCT. + ()
OT"" = o
y B en la figura 115_ Tenemos entonces:
ax. ay (a)
a OCTy + ()
o.,."", = o dylu .10-,,1 = dy(u oUx).i - dy(u OIT,,)a = ds(u 61T", COS Nx)J.
ay éJx +ds(u OU", cos N:C)B (f)
A esta vanaclon de las componentes de la fatiga corresponderá cierta r---------------------.x
variación en las fuerzas de superficie. Sean (jl( y (j y las variaciones infi-
.nitamente pequeñas de dichas fuerzas; las condiciones de contorno (20)
nos darán entonces:
aCT" l + o.,."" m = liX (b)
oO'u Tn + OT.Ul = óY
Para establecer en cuanto varía la energía potencial del cuerpo, a causa
de las antedichas modificaCiones de las componentes de la tensión, expre-
FIG.115
semos la energía de deformación por unidad de volumen en función de
las componentes de la tensión (86), y la variación de la energía a que nos cos Nx = 1 es el coseno del ángulo que forma la normal exterior
referimos será, entonces,. con el eje de las x, y ds, un elemento de contorno. De la ecuación (f)
integrando, y teniendo en cuenta la observación anterior:
(e)

en la cual lo que la ecuación (e) se transforma en:

fj E, 00-" dx dy = JuDo-, l ds - J j u iJ éJ~" dx dy (g)

i La primera de las integrales se extiende a lo largo del contorno de la plac,¡


\j la 'segunda, al área de la misma.
. Análogas transformaciones del segundo y tercer término de la expre-
y, por lo tanto: " ¡6n (d) nos penniten escribir:

oVo = E" OU. + ey 6uu + "IrJ OT:, <I J Ey oO'yax ay = J J~~


dx oUydy = f dxlv ouyl
y la variación total que afecta a la energía de deformación a causa de las
modificaciones de las componentes del esfuerzo es, entonces:
BV = JI oVo dx dy = JI(E.OU"
.-JJ éJ~v v·o ax dy = f v 6crll m as - II v éJ :;" dz dy

Calculemos esta variación de la energía haciendo intervenir para ello las


(d)
·····11
:.' J 'jau + j f"
1'zu OT"y dx dy = dy éJx 6T•• dx dx dU OTzu dy
ay
(h)
condiciones de contorno (h). El primer término de la expresión (ti) da,
al integrar por partes: -"'- = J 6T""I- I Jdvlv + j qxlu l v a::"" dxdy 6Txu

Jf~~~~=/~j:~~=J~u~ - JJua:~'lIdxdy= f var.uld.~+ f UOT.:rv mds

-f f u ~a;" dxdy (e) II ~


11 -a
- a6r
v---?!dxdy
b
-
"
éJoT""d xdy
u-
Y
'I1!ORlo\ ve L.-\ ELASTICIDAD
194 nORIA DE LA ELASTICIDAD METO DOS ELASTO-IlNIlIWET1COS 195

Por sustitución de (g) y (h) en la ecuación (d) obtenemos la expresIón: Deberá tenerse en cuenta que las reacciones de los apoyos, qj.le pueden

IlV = ! [u(oO'~ + +
Z 07"" 1n) V(OO'II m + 07;ry l)] ds
. ser determinadas con arreglo a las ecuacio~es de equilibrio de un cuerpo
están expresadas en función de las cargas dadas PI> P• .. , y nq
en 111 expresión de la energía potencial elástica. Si existen víncu-
-f f [16 (8a;= + 8 :;",,) + v ea~" + a;;",,)] dzdy superfluos, las respectivas reacciones deberán ser consideradas como
estáticamente independientes, c~njuntamente con las fuerzas
en la cual la primera integración se efectúa a lo largo del contorno y la , Pz , etc.
segunda se extiende a toda el área de la placa. Utilizando las ecuaciones Partiendo de una expresión de la energía potencial de deformación
(a) y (h), obtendremos, finalmente, la siguiente expresión para el in cre- función de las fuerzas exteriores, se tendrá como incremento de la
. mento de la energía potencial cÍebido a la variación de las componentes isma, consiguiente al que experimenta cada una de las fuerzas:
de la tensión: av av
IlV = éJPl 5P1 + aPz IiP +2
óV = f(u óX + v IiY) ds (91)
la (92) nos da
El segundo miembro de esta ecuación representa el trabajo producido
por la variación de las fuerzas exteriores a lo largo de los recorridos efec- aV _ dI) [¡PI
( aP + (av
aP
- d2) [¡P 2 • =0 (i)
I 2
tivos. Las verdaderas tensiones son las que satisfacen esta ecuación. Una
ecuación análoga puede obtenerse para el caso tridimensional añadiendo bien, como se ha dicho antes, las fuerzas, P It P 2 ... son estática-
un tercer término wóZ al paréntesis de la ecuación (91) y extendiendo la independientes, de manera que sus modificaciones, OPIJ oP2 ...
integración a la superficie contorno en lugar de a la curva de contorno. !ion completamente arbitrarias; así, pues, podemos igualar a cero todas
Si en lugar de una distribución continua de fuerzas superficiales, ¡:ncnos una y entonces la ecuación (z) exigirá que se verifique;
tuvieramos cargas concentradas, la integral de la ecuación (91) debería ser 8V aV
remplazada por una sumatoria. Si Pl' P 9 ... son cargas concentradas inde- aP = dI, éJPz = d2 • • • (93)
l
pendientes y dh d2 ... , los desplazamientos reales de los puntos de aplica-
ción de dichas cargas, en la dirección de sus rectl1S de l1cción, la ecuación 'Queda así comprobado que si la energía potencial de deformación de un
mencionada se transforma en · sIstema elástico, V, está expresada en función de fuenms exteriores está-
· ticamente independientes, PI, P 2 , P3 ... el desplazamiento real del punto
(92) · de aplicación de una fuerza en su propia dirección es igual a la derivada
En lo que antecede hemos estudiado el caso de las variaciones más gene- pitrcial de dicha función con respecto a la misma fuerza. Tal es el célebre
rales de las componentes de la tensión que satisfagan a las ecuaciones de tédrema de Castigliano.
equilibrio Ca). Examinemos ahora un caso especial: aquel en que los
. 50. Principio del mlrumo trabajo. En el § 49 hemos llegado' a
incrementos de las componentes de la tensión sean de tal naturaleza,
la ecuación (91), partiendo de cualesquiera variaciones de las componentes
... que ellos pueden ser realmente producidos en un cuerpo elástico. por
de la tensión, susceptibles de satisfacer las ecuaciones de equilibrio. Ad-
medio. de adecuadas variaciones de las fuerzas exteriores. Supondremos
mitamos ahora váriaciones tales que las fuerzas superficiales no se modifi-
que las componentes"de la tensión se expresan en función de las cargas
quen; entonces, habrá que remplazar las ecuaciones de contorno, (b), de
exteriores P¡, P2 oo. Y consideraremos aquellas modificaciones de las com-
dicho párrafo, por estas otras:
ponentes de la tensión consecuentes de las que experimentan dichas fuer-
zas, a saber, liP1 , óP2 '" Limitándonos a los casos en que las componentes óO'~l + orxvm = O
del esfuerzo son funciones lineales de las fuerzas e¡¡;teriores PI, P2 Y .oo OO'II11~ + /irzul = O
sustituyendo estas funciones en la ecuación (84), obte~émos la expresión
Y la ecuación (91) se transforma en:
de la energía de deformación como una función homogénea cuadrática
de dichas fuerzas l . av = O (94)

fu""""
I Excluimos los casos como el de la f1""ión de barras delgadas por la acción d" un coso como ése, las tensiones originados por la solicita~ión axil dependen de la flexión la-
laterales que obren SImultáneamente con una tracción o compresión axiles. por ejemplo. En teral y no son funciolles lineales de las fuerzas exteriores.
196 nORIA DE LA BLASTIC1DAD
METODOS BLASTO-ENERGETICOS 197
Lo que se traduce expresando, que cuando las componentes de In tensión
originada en' un cuerpo cargado en su contorno varian sin que se alteren Para x = ± a,
las ecuaciones de 'equilibrio ni las condiciones de borde, las verdaderas
componentes de la tensión son aquellas que hacen nula la variación de la T"II = O,
energía potencial elástica. Se puede demostrar que tales valores correctos
de las componentes de la tensión hacen mínima la energía potencial elás- Paray=±b,
tica, por lo que la ecuación (94) es la expresión del llamado principio T=u = 0, cry = O (a)
del m{t/t·mo trabajo.
Dicha ecuación es también válida si a lb largo de una part~ del con- energía de defonnación correspondiente a una placa cuyo espesor se
torno, rígidamente enlazada por medio de sustentaciones fijas, las fuerzas igual a uno es, con arreglo a la ecuación (86)
exteriores superficiales varían a consecuencia de modificaciones en las
.componentes de la tensión. En efecto, bajo tales hipótesis, esa porción
del contorno no admite desplazamientos, lo que se traduce en la anulación
V = 2~ fJ[U",2 + cr,? - 2vcr"crv + 2(1 + 2
V)T=u ] dx dy (b)

del segundo miembro de la ecuación (91), de manera que se obtiene, destacarse que en el caso de un recinto simplemente conexo como ;,
"

que aquí se considera, la distribuciÓn de tensiones no depende de las ¡¡


nuevamente, la ecuación (94).
El principio de mínimo trabajo se usa muy a menudo para resolver 1i
en forma elemental sistemas estáticamente indetenninadosl • Si X, Y, Z, ... i.i
tj
son fuerzas o pares de fuerzas que obran sobre clementos o vínculos super- !:fr,
fluos de un sistema elástico, se pueden calcular las incógnitas hiperes- n
táticas partiendo de la condición de que la energía potencial del sistema
expresada en función de X, Y, Z, ... sea mínima, es decir, mediante las
.'
1;
!i
¡!
ecuacIOnes j!
aV
ax = O, .
. BV
"§Y'- = O,
av
az = O, (95)
y
Fw. 116
l'
1:
.l'
En los párrafos siguientes aplicaremos el principio de mínimo trabajo i'
éaracterísticas elásticas o constantes del material (véase pág. 48), de ma-
a la resolución de diversos problemas de elasticidad bidimensional.
que haciendo igual a cero el coeficiente de Poisson, v, los cálculos
51. Aplicaciones del principio de mÍnÍlno trabajo. Placas
simplificarán notablemente. Introduciendo, pues, la función de tensión !:
¡.
y sustituyendo en (b) los valores
rectangulares. Vamos a tratar, por ejemplo, el caso de una placa ¡'
¡.
rectangular. Se ha visto en el § 23 que mediante la aplicación de las series a2if> v=O

i
trigonométricas es posible satisfacer las condiciones relativas a dos lados T,," = - axay' ¡
de una p.1aca rectangular. Las soluciones así obtenidas pueden ser de interés i:
práctico si se aplican a Ulla placa de poca altura en relación con su longitud; j:
pero si ambas dimensiones son del mismo orden de magnitud, deberán !:
(e)
ser consideradas las .condiciones en los cuatro· costados. Para resolver
problemas de esta clase se puede algunas veces aplicar ventajosamente
,
i

el principio de mínima energía. La expresión exacta de la función de tensión será aquella que satisfaga las
Supongamos que sobre las extremidades de la placa rectangular se condiciones (a) y haga que la energía de deformación (e) sea mínima.
ejerce una tracción de manera que las fuerzas allí aplicadas obedezcan Si para la determinación del mínimo de (c) aplicamos el cálculo de
a una repartición parabólica (fig. 116)B. En este caso, las condiciones •variaciones, llegaremos a la ecuación (30) para la función de tensión '¡';
de límite son: ·pero aquí emplearemos. otro procedimiento, que nos permitirá obtener
I vii."", por ejemplo, Strtmgth al Materials del autor, 2.' ed., vol. 1, 1940 o Timoshenko
· solución, aproximada. Como función de tensión, adoptaremos una
y Young, Theory of Slruclures.
• Véase el trabajo del autor, Phi/o Mag., vol. 47, pág.' 1095, 1924.
(d)
198 'maRIA Dll LA llLAS1'JClDAD METonos ELAS'l'O-BNllIlGETICOS 199
que satisfaga a las condiciones de contorno (a) y 'en la cual al, az, aa, ... son . Para utla placa cuadrada (a = b), resultará:
constantes que habrá que determinar posteriormente. Llevando esta serie
a la expresión (e) obtendremos V como una función de segundo grado
en a" U2, as '" El valor de las constantes podrá calcularse entonces con
arreglo a las siguientes condiciones de mínimo, que scrán ecuaciones y las componentes de la tensión valdrán:
lineales en a"
02' as

oV = O (e)
y2,\
,,-.=8 ( l-(i2j-O,1702S 1- (3:.z)2\ (1-az~/)S
ocxa '
Por lo general, una adecuada elección de [as funciones ,pi> permi- "'2'" "-u = 3.1:2)
-0,17028 ( 1 - .-- ( 1 - --
y2)Z
2 2 a a
tirá obtener una solución satisfactoriamente aproximada, empleando tan 2) (
sólo unos pocos términos de la serie (tI). En lluestro caso, las condiciones "z¡¡
. = -0,68058-
xy ( 1 - -x y2)
1 --
de límite (a) quedan satisfechas haciendo:
2 2
a a 2 a
la figura 1"17, la curva II representa la distribución de {1", en la secci6n
transversal x = 01 •
. Calculemo~ ahora con tres términos de la serie (f) para lograr una .1
ya que, operando, obtenemos: aproximación mayor. Las ecuaciones (e) que sirven para el cálculo de las
constantes a"/l2, /la serán entonces:
1)2"'0
"=11= - ox
- -
ay =0 ,
02 04 06 08 10 d. I
1/ x/S
Las restantes funciones 1>1, "'a, ... deben ser elegidas de manenl que 111
0,2"
las correspondientes tensiones desaparezcan en el contorno. Nos asegu-
raremos de eIJo afectando a todas esas ·funciones, del factor (x 2 - 0 2 ) . 0,4b
,
I
1/

• (ya _. b2)2 cuyas derivada'! segundas con respecto a x y a y se anulan para


y
los lados = ±b y x = ±a, respectivamente; mientrns que 02/0X ay des- O,6b
A
aparece en correspondencia de los cUl!tro bordes de la placa. Se podní / ' '1/
tomar, pues, como expresión de la función de tensión la siguiente: O.8b
/' I
/1
r/> = ~ Sy2 (1 - ~~) + (x 2 - a 2)2(y2 - b2)2(CXI + Cl!zX2
b L..-'V
1 . ][]l

+ a3y2 + ...) (1) FIG. 117

La serie con.tiene solamente las potencias pares de x e y porque la dis-


tribución de tensiones ~s simétrica con respecto a ambos 'ejes coordenados.
Si nos limitamos al primer término, al, de la serie (j), tendremos

<J¡ = "21 Sy' ( 1 - 61 ¡j2


y2)
+ 0<1(X2 - a2)2(y2 _ b2)2
De la primera de las ecua~iDnes (e) llegamos, entonces, a:

a, (64 + 256 ~ + 64 ~) 8
7 49 a 7 a
2 4 = a 4b2
1 La curva 1 repr""ehta la distflbución parabólica de tensIOnes en Jos extremos de la placa,
200 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METODOS llLASTO-ENERGIlTICOS 201

y se representa por la curva b (fig. 118b). Evidentemente, el sistema de


tensiones será impar respecto al. eje x y par con .respecto al eje y. Se satis-
facen estas condiciones dando a la función de tensión la fonna
r/J = -!h A y 5 + (x 2 - a 2)2(y2 - b2)2
Estas ecuaciones nos dan para una placa cuadrada, o sea, para a = b: «(XIY + CY.2YX 2 + a3y3 + Ci4X!!y3 + ' , .). eh)

) ,FEf
S
al = 0,04040 a'
a
La repartición de la componente (J", del esfuerzo en la sección trans-
versal x = O está dada por la ley I---a -. a--l :Y
y
- 3112)
- (a) (h)
. a2 FlG. 118

+ 0,0235 (1 - 1Z~ + 15 ~;) Como antes, el primer tém1ino satisface, para r/>, las condiciones de límite.
Si aplicamos la ecuación (h) con cuatro coeficientes al, '.' , ah en las ecua-
y viene representada gráficamente en la figura 117 por la curva 1III. ciones (e), encontramos para una placa cuadrada (a = b):
La repartición de esfuerzos en la sección transversal x = O se va
haciendo más uniforme a medida que aumenta la longitud de la placa. q.
u2
= - cjJ {I
= 2Aa3 - 1)3 - (1 - ~~) 2[0,08392(5,.,3 - 3,.,)
uy2 . 2
Para a = 2b, por ejemplo, se deduce de las ecuaciones (g) los siguientes
valores: +
0,004108(21713 - 201)~ 3,.,)] +
S S S - ~2(l - ~2)2[O,07308(51/3 - 3,.,) + 0,04179(211)5 - 201/3 + 31/)1} (k)
"'1 = 0,07983 a4b1 ' a1 = 0,1250 a6b~' "'3 = 0,01826 a 6b2
'ex:presión .en la cual ~ = x/a y 7J = y/b. La distribución de tensiones en
.Para la mencionada sección transversal, se consigna a continuación algunos la sección transversal media, para la cual x = 0, está representada por la
valores de a",: curva a de la figura 118b, y como se ve, es sensiblemente lineal.
1l=0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0
b
a: = 0,6908 0,6848 0,6698 0,6538 0,6498 0,6758 52. Anchura eficaz de alas de las vigas en T. Vamos a desarrollar otro
ejemplo .de aplicación del principio de mínima energí", ,l problemas de elasticidad
En la figura 117 se indica con línea de trazos esta repartición de es- bidimensional, relativos a piezas de sección rectangular: el de las vigas de alas muy
anchas (vigas en T) (fjg. 119), muy usadas en estructUl'llS de hormigón 'annado
fuerzos que, como vemos, se aparta muy poco de la tensión media, t s. y en cascos de buques. Confonne a la teoría elemental, en la flexión de una viga
Para tratar otras reparticiones simétricas de esfuer7.os en los bordes los esfuerzos nonnnles en los diversas capas de fibras varlan proporcionalmente a
x = ± a sólo tendr~mos que adoptar otra función rpo en la expresión (j) sus distancias a la línea neutra, esto es, las tensiones conservan su valor en todo el
y únicamente se deberá modificar los segundos miembros de las ecua- ancho del ala. Si éste es muy grande, las partes distantes del alma o nervio parti-
cipan en menor grado en su resistencia 31 momento flector y la viga es menos resis-
ciones (g). tente que lo que la teoría elemental indica. Para el, cálculo de las tensiones en vigas
Como ejemplo de distribución asimétrica con relación al eje x, consi- de ese tipo, se suele remplazar la anchura real de ala por otra menor, de manera
deremos el caso de una pieza flectada (fig. 118)2, en la cual la repartición que al aplicar la teoría elemental de la flexión a la nueva sección resultante, se ob-
de esfuerzos en las secciones extremas siguen la ley"(i:Tx)x = ~'J: a = A y 3 tenga el valor correcto de la móxima tensión. El ancho del ala así reducido, llamado
ancho eficaz, se detennina teóricamente como se indica a contínuación '.
1 El profesor C. E. Inglis obtuvo result.dos análogos, Pruc. Roy. Soco (Lundo,,), serie A,
vol. 103, 1923 y también G. Pickett, J. Applied Meo'hanics (TTfl1/S. A.S.M.E.), vol. 11, pág. 176, , Este tema ha sido desarrollado por Th. v. Kánnán; véase Festschrift AugttSt Flippls,
1944. pág. J 14, 1923, Y también G. ScbnRdcl, Werft umI Reederei, vol. 9, pág. 92, 1928; E. Reíssner,
• F'.StQS cálculos han sido tomados dc la tesis doctoral de 1. N. Goodier, Universidad Der· Stahlbatl, 1934, pág. 206; E. Chwalla, Der Stahlhau, 1936; L. Descbkine, PubIs. 1mem.
de Michigan, 1931. Véase también TTfl1IS. Am. Soco Mee/l. Eng., vol. 54, pág. 173, 1931. Assoc. Bridge ami SlrucluTál Ellg;neerillg, vol. 5, pág. 65, 1938.
202 'rEORIA DE LA ELAS'l'ICIDAD METonos ELASTO-ENIlRGETICOS 203

Para simplificar en lo posible:> el problema, suponaremos que se trata de una verda?,era distribuci?n de tensi?ncs es aquella que hace mínima la energía de
viga continua sobre un número infinito de, apoyos equidistantes y que todos los derormaclOn correspondIente al conjunto del ala y del alma y esa condición permite
tramos están sujetos a cargas distribuidas simétricamente con resp'eeto a la vertical , determinar los coeficientes An y lin. Remplazando
de su punto medio. Se adopta como origen de coordenadas uno de los apoyos del
tramo representado en la figura 119, y el eje de la viga como eje x. Por razones
de simetría, solamente será necesario considerar la mitad dc la losa de uno de los
tramos; por <:jemplo, la que corresponde al semieje positivo de las y. El ancho del siguiente expresión de la energí!1 de deformación
¡-;l.-¡ ¡-..:t-¡
V 1 == 2· 2~ !o . 10 21
[IT.' + <f.' - 2V<f.a'u + 2(1 + v)r•• ') rk dy

"y empleando (d) corno exprcslon de la función de tensión, se obtiene la energia


de deformación del ala 1:
V = 2" f,.¡\' ~~
I l'
(BE... + :!'!2G.nBn + An:\
2G) (e)
.. =1

y Para hallar el valor de la energía de deformación que corresponde únicamente al


II I

J
aIma, llamemos A nI área de la sección transversal, I a su mome,ito de inercia con
I
I .. respecto al eje horizontal que pasa por el baricentro e, y e a la distancia de éste al
I I plano medio del ala (fig. 119). Teniendo en cuenta la simetría que en este caso
I I fóJ existe, el momento flector total transmitido a una sección transversal cualquiera
I I ¡:lar el conjunto del alma y el ala, puede ser representado por la serie
I I
I I
- I '1
,,= il1,+M1cos-y+M.cosT+
'll'X 2,..:>; '" (f)

F,o.119 , ,~ la cual hay una indeterminación estática representada por M., cantidad que de-
pende de la magnitud del momento flector en los apoyos; los otros coeficientes Mí,
ala o . ~osa se supone infinitamente grande y su espesor, h, muy pequeño en com- M., ... , deben ser calculados con arreglo n las condiciones de carga. El momento
para~lon con la altura del nervio. La flexión del ala como placa delgada puede des-
, flec:0l' M se puede descon;poner en un momento M', que absorberá el ala, y otro M",
p~eclBrse, y se admite asimismo que durante la flexión de la viga, las fuerzas se trans-
debido a la~ fuer,IBs longitudinales N aplicadas al alma y al ala (fig. 119c) y que
rruten a la losa en su plano medio, de manera que la determinación de la distribución
vale Ne. Las tensiones normales que se presentan en toda sección transversal de
de esfuerzos en esta última es un problema de eluf<ticidatl bidimensional. La corres-
la viga completa forman como se sabe, un par de fuerzas !vI, de manera que
pondiente función de tensión, que ha de satisfacer la ecuación diferencial
a'</>
a:¡:'
éJI</>
+ 2 a:¡:' ay' + ay'
al</>
= o (a) N + 2h lo . IT: dy = O
(g)
puede adoptar la forma de
caso~
111 siguiente serie, 11 causa de la simetría supucSta en estt! lrl' - 2718 lo" <1: dy = M

l'
n- ..

'" = ¿;
11.=1
1.(y) eos n;z (b) - 21le
11
r1:dy = lv1" es la parte del momento flector que absorbe el ala.
La energía de deformación del alma es
en la cual Ju(y) simboliza funciones de y únicamente. Remplazando en la ecuación (a)
obtenemos para f"iy), la siguiente expresión:
V. =
r
Jo
21 N' d:>;
ME + Jo
r 21 1>[,' dx
2EI
(h)

1.(y) = A.e -~
1 +Bn,(1 +1~"1J)
/ ~ -~ 1 +D. (11.",)
¡ +ene ~ 1 +---f e~
¡ ... (e)
De la primem de las ecuacione..'1 (g) resulta:
La condiCIón de que las tensIones deslIparczcml cuando y 'to';'~"un valor 'infinito
quedará satisfecha haciendo en = D" = n, con lo que In exprcsión de la función
de tensión resulta N = -2/1
!co .. ". dy = -2h 1'" a'ay;,
o
</> 8
- , dy = 2h 1- </>1°
ay ..

.p = I
n-I
[Ana - n¡y + En (1 + ~?) a - nt] eos IL1T¡ x (d) 1 En el trabajo de Th. v. Kármáp, loe. cit. se encuentra el' cálculo de los integrales quc
mtervienen en la expresión de la energía de deformación.
204 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METODOS ELASTO-ENERGETICOS 205

.Por otra parte, la expresión (á) de la función de tensión nos da La condición


.,
(gj)
iJy V-oo
-= O
'
(8"') \' n,.. A "coa -1-
ay v-o ... ~ l
n,..z
n=-l .
conduce a
Por hlnto,
., 2Y" + (1 + p)X" = O
N h \,11.1<" n,..:¡;
= 2 ~ T Aft coa -¡-
y" = :- 1 +
2
v X.
n~1
Remplazando en la ecuaClon (l) este valor, así como Mo = 0, obtenemos para la
M' = M + 2118 Jo( .. v. dy = M + Na = M ~ !!:! A" cos ~
+ 2118 L.,l energía de deformación, la siguiente expresión;
B-1
1
.". 3 + 2. -
..
pt \ ' • l \' X
"
o bien, empleando la nohlción V == 2hE' --4-~ L.¡ 11. • X .. ' + 2AE L., n'
11=1 n=l
.
podremos escribir
+ 2~I ¿ (M~ +
n-1
eX.)' (m)

., La condición para que X. haga mínimo el valor de V, esto es;


N = ¿ X. cos n7 z ~=o
"-1 aX.
" ., (Te)
M' ... M +e ¿ X" coa 11.;$ = Mo + ¿ (M" + eX.) coa n;z
nos conduce a
X. = lIl" __-..-_ _-.-,;-:--=_--= (n)
n-l n-l
- e 1 + -.L + n-.:I • 3 + 2. - vi

Remplazando en eh) y teniendo en cuenta que Ae' hie' 4


Consideremos el cuso particular en que el diagrHmH de momentos es una línea
21 11...2 (21 n,..:¡; m'lf$

!o
O
cos'-dz=l
1 ' Jo COS -z- COS -¡- d.1; = O (cuando m", n) senoigal, por ejemplo, M = M, cos (:rxll). En In eClUlci6n (n) Re tendría entonces
X, _ 1I[, ____. -__~~~~--~
llegamos a la expresión
-:c 1 + J....
Ae
+ E... . 3 + 2. -
he'l l

4
1 ~ • Mo'l ~ ¡
V. = 2AE L., X,. + TI + 2EI L.¡ (M. + eX~)S De la ecuación (k) deducimos la expresión del momento debido a la fuerza N en
el ala, esto es, - eN:
n-l n-l
".$ M
Sumando esta última con VI> es decir, la energía de deformación del ala [fórmula (e)] Mil = - eN = -eX, C05 7 = 1 .,.I 3 + 2v v' (p)
e introduciendo en esta última las notaciones . . 1 +:Aei + íiB2i 4
1• .,.
2"7 A. = X .. , La fórmula (á) nos permite ahora establecer la distribución de esfuerzos tJ. a lo
ancho del ala, igualando a cero todos los coeficientes A" y B., con excepción de A,
encontramos para la energía total de deformución, la siguiente expresión: y Bl. haciendo (de acuerdo con las notaciones que hemos adoptado):

" " Al =~~, B, = _1 ;-' A, = _ (1 ::1 1X


,
V = 2;E 2:
n-l
n[Y,,1 + (1 + v)X.Y" + (1 + ,,)X,,'j + 21E 2:
n-l
X,,,
Las curvas de la figura 119a representan esta distribución: la tensión (T, dismi-
~" "- nuye a medida que aumenta la distancia al nervio.
+ Mo'¡
El + m
! \' M
~ e ,,+ eX,,) ~ (1)
Determinemos ahora el ancho de ala, 2 Á, de una viga en T (fig. 119a), de manera
que el momento Mil que se ha calculado [ecuación (p)] resulte de una repartición
... -1
uniforme de tensiones en la sección transversal del ala ·.que se señala con rayado
d ,. cantidades M.., X "y Y " d e b en d etermmarsc
Las . con arreglo a la condición vertical en la figura, y que será el ancho eficaz del ala. :. ..
e '7
w
;mo. pa~:~/:l/~ergíu de deformación (1). Puede verse que 2110 aparece tan sólo Si ]l¡1' y M" significan, como antes, las partes del momento flector que absorben
en e t rmmo • I I y, de acuerdo con la mencionada condición, resulta 2M. = O. el nervio y la placa,"lécspectivamente, y denotamos con (J, la tensión en el baricentro e
206 TEORIA DE LA ELASTICIDAD METODOS ELASTO-ENERGETICOS 207
del nervio y con ti, la tensión en el plano medio de!' ala, In teoría elemental de la - es decir, que resulta algo menor que en el caso de un diagrama cosenoidal de mo-
flexión nos da fIientos flectores, corno el que antes__ se .supuso. -
M'e
tf. =tf.+¡ (q) -_ 53. Arrastre por tensión cortante. Un problema de naturaleza análoga al
: -que aCabamos de estudiar en el § 52 se presenta en ciertos elementos de la construc-
y las ecuaciones de la estática, Ción aeronáutica. Consideremos una viga cajón (fig. 121) fonnllda por las láminas
· - delgadas ABCn y EFGH soldadas o remachadas a las dos vigas en U, ABFE Y
2),M, + ..,A = O
, DCGH. Si el conjunto se encuentra empotrado en su extremo izquierdo y es cargado
Z.h.-.8 = Mil (r)
· , como una ménsula mediante las dos fuerzas P, aplicadas en los extremos de las vigus
Las expresiones para esas dos partes del momento flector serán, de acuerdo con
las ecuaciones (q) y (r):

M ,=;;
I ((f. - (f,) = eI( 1 + T2),,11) ...
Mil = 2),hecr,
La relación de M" al momento flector es:
M" 2.he... 1
M'+M'I =-_·_j--Y (8)
FIG. 121
1 + Ae'-+ 2Me'
Para que esta relación sea igual a la razón M"jM, deducida de la solución exacta (P), · en U, la teoría elemental de la flexión predice la existencia de una traccióJ1, uniforme
debemos hacer: en cualquier sección, paralela a BC, de la lámina ABCD. En realidad, sin embargo,
la tensión de tracción existente en la lámina proviene de la tensión tangencial apli-
I -...1 3 + 2" - ,,' cada a sus bordes por las vigas en U (corno indica la fig. 121) Y la distribución de
21Jre' = he'l 4 la tracción a través de su anchura no es unifOlme (corno puede verse en la misma
de la cual resulta la siguiente expresión para la anchura eficaz 2). figura) siendo mayor en los bordes que en el centro. Este no cumplimiento de la
unifonnidad prevista por la teoría elemental lo llamamos <arrastre por tensión cor-
1l),= ___4_1_ - tante') (shear lag) ya que proviene de la deformación de las láminas por tensión
11"(3 +2. - "') _ cortante. Este problema ha sido estudiado mediante el método de la energía de defor-
Tomando para el coeficiente de Poisson el valor l' = 0,3, por ejemplo, tendremos -_- mación, entre otros, partiendo de ciertas hipótesis simplificadoras l.
2,1 = 0,181 (2l)
es decir, que para el diagrama de momentos flectores que hemos supuesto el anch<, Problemas
eficaz del ala representa aproximadamente Wl 18 % de la lu¿.
1. Encontrar una expresión, en fWlción de u" a" ",y, de la energía de defOlma-
ción V por unidad de espesor, de un cilindro o un prisma en estado plano de defor-
mación (e. = O).
2. Escribir la integral que da la energía de deformación V, en coordenadas
polares, en función de las componentes polares de la tensión, para el caso tensional
plano [véase la ecuación (h) del § 51 J.
La distribución de tensiones dada por las ecuaciones (80), resuelve el problema,
representado en la figura 122, en la cual, mediante_tensiones tangenciales uniformes,
FlO. 120
un par M eS aplicado sobre la superficie interior del ~millo y otro igual y opuesto
sobre la exterior. Calcular la energía de deformación en el anillo y deducir, igua-
lándola al trabajo realizado durante el proceso de carga, la rotación de la circun-
_ En el caso de una viga continua -cargada con fuerzas iguales. y concentrada en ferencia exterior cuando se mantiene fijo el borde interior del anillo (véase el pro-
la mitad de cada trruDl), el diagrama de momentos flectores será el que representa blema 2 del cap. 4).
la figura 120. Si se expresa este diagrama de momentos por .. medio de una serie
de Fourier y ~e aplica el método general que se ha desarrollado, encontraremos
1 E. Reissner, Quart. Applied Mal"., vol. 4, pág. 268, 1946; J. Hadji-Argyris, (Br;1
como ancho efIcaz en los apoyos:
Aeronn/lt. Researa. Contllil, Reports and lY/emoranda, núm. 2038, 1944; J. Hadji-Argyris \
4l H. L. Cox, ibfd, núm. 1969, 1944. En estos tmbnjo~ se encontrarán [as referencias de los estu·
2), = 0,85 • '/1'(3 + 2v _ v') dios que precedieron -.a los aquí citados.
208 'rIlORIA DE LA IlLAS1'WIDAD ME'l'ODDS ELAS'l'O~ENE¡¡GIITICOS 209

3, Culcular la energía de deformación por unidad de longitud en un cilindro .,cc.mlpal,¡O:UI(!aU (§ 1 S). En este segundo caso los cambios d_e la .!ensión son los que
a < r <b sometido a una presión interior p, [véase la ecuación .<46)] y deducir :.reamnCllIe se dan al VlJriur las fuerzas de contorno en liX, IJ Y". -¿Es correcto el
el desplazamiento radial d~ la superficie interior. :llo.un.cia.do precedente? .
Obtener el mismo resultado utilizando la ecuación (50) (tomando v = O) Y las que lo sea demostrar que el desplazamiento radial del problema 3
relaciones tensión-deformación para estados tensionales planos,
4. Interpretar-la ecuación - 1 aV
(u) ..... =_.-
2,,-a api_
¡¡Vo dzdll = HJ(Xu + Yv) Ikdy +i-J(.gu + P"v)dB
y justificar los factores ~ del segundo miembro.

FJG, 122

5. Demostrar, a partir de las ecuaciones (84), que si tenemos los estados ten-
sional y de deformación plana (e, = O) para los que O"x, Clv' ,~" toman los mismos
valores, la energía de deformación (por unidad de espesor) es mayor para el estado
tensionsl plano.

6. La figura 123, (a) representa una banda sometida a una compreSlOn que
pune en tensión toda la pieza. En (b) la banda deformable está pegada en su parte
inferior y superior a dos placas rígidas. ¿Se producirán tensiones en toda la pieza
o solamente en los extremos? En (e) el borde superior es libre como en (a), pero
el inferior está fijo como en (b), ,La tensión que se crea será o no local?

7. Partiendo del priQcipio de que la energía potencial de un sistema en equi-


librio es un mínimo respecto a la energía correspondiente a los estados vecinos,
demostrar sin cálculos que la energía de deformación de la placa de la figura 114,
bien _ disminuye, bien permanece constante, al efectuar un fino corte AB.

8. Remphlzando las fuerzas X e Y en el contorno, por las componentes radial


y tangencial R y T y empleando para los desplazamientos l~s componentes polares u
y 'V del capítulo 4, poner el teorema de Castigliuno, expresado por la ecuación (91),
en forma utilizable en coordenadas polares,

9. La ecuación (91) es válida cuando óV, 'óX, óY son el resultado de cual-


quier pequeño cambio, de las componentes de la tensión, que satisface las condi-
ciones dc equilibrio (a) del § 39, tanto si ese cambio viola o no las condiciones dc
PROBLEMAS BlDlMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILlNEAS 211

e'O .. 1 + i8 -1- 1.
21
(iO)2 + 1. (is)a + 1. (i8)' +
'31. 41

Problemas 1.2 :::2 -1, i 3 = -i, i.f. = 1, etc.,

+i(O -~S' + ...

de la ecuación (a) se deduce


z = :¡; + ill = ro'O (b)
. Empleando las definiciones analíticas en lugar de las geométricas podemos formar
54. Funciones de variable compleja. Hemos visto que las coor- funciones algebmicas, trigonométricas, exponencial, logarítmica., etc., de la va-
z como si se tratase de una variable real. De esta forma, pOr ejemplo, pueden
denadas cartesianas y polares eran adecuadas para la resolución de los sen z, cos z y e:, mediante su desarrollo en serie. Una función cualquiera,
problemas hasta aquí tratados. Para otros contornos, sin embargo --elipses, , . las que estudiamos, podrá descomponerse en sus partes real e imaginaria, es
hipérbolas, circunferencias no concéntricas y otras curvas-, es preferible decir, ser expresada en la forma a(x, y) -1- ifJ(x, y) donde a(x, y), la parte real, y
generalmente emplear otras coordenadas, para cuyo 'estudio así como para .. fJ(x, y), la parte imaginaria 1, son funciones reales ordinarias de x e y (no contienen 1).
la construcción de las funciones de tensión conviene utilizar variable Si la función de z, fez) es, por ejemplo, llz, tenemos:
compleja. 1 :¡; - iy :¡; . • (-y)
f(z) = z + iy = (z -1- iy)(:& - iy) = z' -1- yi + ~ :&' -1- y'
De forma semejante, teniendo en cuenta que ch jy .... ~ (e'" + e"'), sh iy =
.= he." - eH"), y e'''' = cos y 1- i sen y resulta:
~z=ili~+M=ilix~~-I-~x~~
= sh x cos ji i eh x sen y +
~z=~~+M=~x~~+ilix~~
= ~ x cos y i sh x sen y +
Como ejemplo ilustrativo del método general para convertir un denominador com-
plejo en uno renl consideremos la función ctgh z. Tendremos:

FlG. 124
clgh z = ~_ = eh (x +..!!L. sh (x - iy)
sh z sh (x + iy) sh (x - iy)
Dos númSlros reales x e y forman el número complejo' x + ¡yen el que i re- = (ch x cos y + i sh ;c sen y) (sil x cos y - i ch~
presenta la v
-1. Dado que i no pertenece al conjunto de los números reales debe (sh x cos y + i ch x sen y) (sh x cos y - j eh x sen y)
defmirse qué se entiende"por igualdad, adición, sustracción, multiplicación y divi-
sión.. de. estos números '. Por definición x + iy = x' + iy' cuando x = x' e y = y', denominador es la cantidad real (sh x' cos y)2 ··f (eh X' sen y)l y operando el
e ¡"2 es. igual a -1. Para el resto de las operaciones se dan las mismas definiciones .numerador y simplificando obtenemos:
que ·si· ~e tratase de números reales. Así, por ejemplo, ct h z = sh 2x - i sen 2y (e)
g ch2x-cos2y
(x + iy)a = x! + 2xiy + (iy)' = x' - y' + i2xy puest~ q1!e jI! = -lo
Pasando a coordenadas polares, como se indica en la figura 124, tenemos Otro procedimiento posible es el indicado en la ecuación (P) del § 62.
La derivada de f(z) respecto a z es por definición:
z = :¡; + iy = "(008 8 + isen O) (a)
df(z) = liro f(z -1- Aa) - I(a) (d)
1 Estas definiciones representan operuciones sobre el par de nr¡meros reales usándose i sim- da Az-'O Az
plemente por conveniencia. Véase, por ejemplo. E. T. Whittnl<er y G. N. Watson, Modem 1 Se observará que. es real, pese a su nombre.
A71alysis, 3." edición, págs. 6-8.
212 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILINEAS 213

donde lis = ¡Ix -1- iay y Jz -+ O significa, por supuesto, que •.Ix -+ O y dy -+ O. ~ec:or(1ar1ldo
que a y {J son reales, que :"2 = -1 y que la igunldad de números com-
Pensando en x e y como coordenadas cartesianas de un punto del plano, ilx y ~1y implica la de sus partes real..e imaginaria, resultan las ecuaciones
representarían un desplazamiento a un punto vecino y podría esperarse, a primera a",= -<JfJ,
- a«. a{3
vista, que el valor de (ti) dependiera de la dirección de ese desplazamiento. No obs- a;¡; ay ay = -a; (e)
tante, el límite de (ti) es expresable directamente en función de z y Ilz como si se
tratase de números reales, y los resultados correspondientes tales como cuales reciben el nombre de ecuaciones de Cauchy-Riemann. Derivando la pri-
respecto a 'X, In segunda respecto a y y sumando, obtenemos:
d d
dZ (z') = 2z, . ¡z;sen z = eos z (f)
deben ser independientes de In elección de Jz y de Llx y Lly. Podemos decir, por tanto,
que todas las funciones de z, formadas de la manera corriente, tendrán derivadas que ecuación de este tipo, se llama ecuación de Laplaee y las soluciones de la misma
sólo dependerán de z, obteniéndose un único valor para todas las direcciones (de dz) el nombre de funciones armónicas. Eliminando u de forma semejante de las
en el punto z. Tales funciones se llaman analíticas. =1l8tci()flc:s (e), tendremos asimismo:
La cantidad x - iy puede ser considerada como función de z, en el sentido, éJ'P éJ1fJ
de que dada z lo están x e y y en consecuencia x - iy. Sin embargo, x - iy no puede
obtenerse a partir de z en la forma en que obtenemos, por ejemplo, z", e", etc.
éJ:c' + ay" = o (g)

Su derivada respecto a z, que es el límite de (¡Jx _. i.1y)/(¡Jx iAy) cuandó ,1x ,+ pues, que si dos funciones a y {J, de :Jo: e y, 'son las partes real e imaginaria
LJy -+ O, depende de la dirección del desplazamiento Llx, Lly. Si tomamos este des- función analítica f(z), ambas satisfacen l~ ecuación de Laplace, ecuación
plazamiento en la dirección x, de forma que LJy = O, obtenemos 1 como valor del se encuentra en muchos problemas de la Física incluidos los de la Elasti-
límite. Si tomamos el desplazamiento en la dirección y, ,Ix = O y el límite es -lo [véase, por ejemplo, la ecuación (b) del § 16J.
En consecuencia, x "- iy no es una función analítica de x + iy. En la construcción Las funciones a y {3 se dice que son funciones armónicas conJugadas y e~ evidente
de las funciones de tensión usaremos funciones analíticas junto con la expresión dada cualquier función armónica a, las ecuaciones (e) determinan, salvo una
x - ¡y. Cualquier función en la que intervenga i recibc el nombre de .función la fundón P conjugada con la a.
compleja». ejemplos de deducción de funciones armónicas a partir de funciones
Una función analítica fez) tendrá una integral indefinida, que se define como la de z consideremos las funciones e,n., "." y log z en las que n es un número
función cuya derivada respecto a z sea f(z), y que reprc)lentaremos por f(z)dz.
Si, por ejemplo, fez) = 1/21 tendremos: '
f Para la primera de ellas tenemos:

J~dz=logl$+C 'donde vemos quc 8-"· cos 1IX y e-M sen n.", son funciones annónicas. Cambiundo 11
-11 encontramos que en. cos 1lX y e"· sen nx son también armónicas, de donde
donde la constante nditiva e es ahora un número complejo A + iB, que contiene sigue que también lo son:
dos constantes reales arbitrarias A y B. sh ny sen n."" ch ny sen 1lX, sh ny cos 11."', eh ny cos n:" (h)
que se obtienen sumando y restando las funciones precedentes y añadiendo
55. Funciones anaüticas y ecuación de Laplace. Una función analítica 1/2. Partiendo de z" tenemos:
fez) puede ser considerada como una función de x e y y sus derivadas parciales serán:
ulla ZA = (r8· 8)" = r"e"'Y = rO cos 'nO + ir" sen nO

a d 01$ 82
(a)
las siguientes funciones armónicas:
8,/(2) = IEf(z) iJa: = 1'(2) iJz =o f'(z)
r" cos 718
J
y-A cos nO, r-" sen nO (z)
puesto que ozlox = 1, y la otra:

..!!.. fez) = f'(z) iJz = ij'(z) (b)


log z = log re" = log r + iD
ay iJy
puesto que ozloy = i.
log () (j)
Poniendo fez) en la forma a(~', y) +'iP(x, y), o para abreviar a + ¡¡J, tendre-
T,

mos también: puede comprobarse fácilmente las funciones (i) y (;) salÍsfacenla ecuación
y (e)
Lapluce en coordenadas polares (véase la ecuación (ti) del § 2SJ, la cual es:

y comparando las ecuaciones (e) con las (a) y (b) obtenemos


8"/1
a¡:;
+ r1 a;.
ao? + 1 a'y, O
;:; 00' = (k)

.(él«éJ:c + .a!3)
~ <l:c
1
= ~
éJy
+ i ap
ay
(d)
214 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS DlDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVll.INIlAS 215

Problemas' -Esto mismo es cierto también para y'l', para la función 1jJ, y como puede
, comprobarse fácilmente, derivando, para (:;;;. + y2)'P, que es r"tp.
1. Determínense las funciones reales de x e y que son las partes real e imagi- , , Tomando, por ejemplo, las dos' funciones armónicas
11aría de las funciones complejas z·, z", tgh z:
[x' - y, 2"-)1; x, ~ 3xy', 3x·y - y";
sh ny sen nx, ch ny sen nx
sh 2x(ch 2x + cos 2y)-', sen 2y(ch 2x + cos 2y) ']
· de (h) (§ 55) Y multiplicándolas por y, llegamos, por superposición, a la
2. Dt:temlínense las funciones reales de T y O que son l¡¡s partes real e imagi-
naria de las funciones complejas z-', JI: log z. · función de tensión (d) del § 23. Asimismo, to¡nando las funciones (t) y (j)
del § 55 Y multiplicándolas por x, y o 1'2 podemos obtener todos los tér-
[r'~ cos 20, r • sen O; 7' log T COS O - rO sen 0, r log r sen e + re cos 1)] minos de la función de tensión en coordenadas polares dada por la ecua-
3. Si ( es una variable compleja y z = e eh 4, obténgase ción (81) en el § 39.
No obstante, la pregunta de si cualquier fl!nción de tensión puede ser
d
dzsh nI; · expresada de esta forma sigue planteada y a ella vamos a responder en
Escribiendo ?; = 1;.+ j7J determínense las partes real e imaginaria de esta derivada ,s~guida al conseguir expresar la función general de tensión mediante
cuando e y n son reales. dos funciones analíticas arbitrarias.
e
4. Si z = x + iy, = ~ + ir¡ y z = ia etgh ~ : (a es real) demuéstrese que Escribiendo el operador laplaciano
x= a sen '1/ , _ a sh ~
eh t; _.. cos 7J Y-ehl;-cos7/ a2 82
8x 2 + ay2
~ediante el símbolo V' podemos formular la ecuación (a) del § 17 así:
56. Expresión de la funéión de tensión mediante funciones : V'(V·~) = O Ó V' ~ = O. Llamando P a V' ~, que representa a (1", + (1q,
armónicas y complejas. Dada una función cualquiera df? x e y, 'JI, . , 'vemos que P es una función armónica, teniendo por lo tanto, una función
derivando obtenemos armónica conjugada Q. En consecuencia P + iQ es una función analítica
'de z que podemos escribir
(a) fez) = P + iQ (e)

y si 1JI es armónica, el paréntesis del miembro derecho se anulará. En este y su mtegral respecto a Z, que expres~lmos por 41j1(Z) será también una
caso 01pJox es también una función armónica puesto que: : funcióñ'analítica. Llamando, entonces, p y q a las partes real e imaginaria
de 'P(z) tenemos:
y,(z) = p + iq = Hf(z) dz Cd)
que 1p'(z) = 1/4 fez). Asimismo
Una nueva aplicación de la laplaciana (a) nos da

aa) ( iJ2 + 82 )
éJp +i aq = ~ "'(z) = V/ (z) az =!:..4 fez) = !:.4. (P + iQ)
' a2 8$ ax eX 8x
( a:¡;2 + ay2 8X2 ay2 (x"') =O (b)
. e igualando las partes reales del primer miembro y del último, obtenemos
que es lo mismo que
(e)

y puesto que p y q son funciones conjugadas, satisfacen las ecuaciones (e)


del § 55, de forma que
de donde comparando con la ecuación (a) del § 17, deducimos que la fun-
ción X,/" si 'P es armónica, puede ser usada como función de tensión. eq =!:..P (f)
ay 4
216 'I'EORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILlNEAS 217

Recordando que P = \72 rfi y partiendo de las eéuaciones (e) y (j), podernos Re significa <<parte real de», z representa X - iy, Y tp(z) Y x(z) son
ver que r/> - xp - yq es una función armónica ya que furlcilonl~s analíticas elegidas convenientemente. Recíprocamente toda
(97), sean cuales fueren ;Pez) y .x(z), es una función de tensión
\72(c/> - xp - yq) = '\72<f> - 2 :~ - 2 :~ = O (g) satisface a la ecuación (a) del § 17. Esto será aplicado más adelante
. 'la solución de varios problemas de interés práctico .
Tenemos, por lo tanto, que para cualquier función de tensión rp . Escribiendo la <<función compleja de tensión~ contenida entre corchetes
(97) de la forma
..p' - xp - yq = PI
donde PI es una función armónica y en consecuencia !z .p(z) + ;x(z)
z
.' observando que zz = r y que tp(z)fz es también función de z encon-
lo que demuestra que cualquier función de tensión puede ser expresada que cualquier función de tensión puede expresarse en la forma
mediante dos funciones armónicas conjugadas p y q y una función armó- r2p, + Pi
nica PI convenientemente elegidas.
La utilidad de ·la ecuación (96) será comprobada más adelante, pero P4 Y P s funciones armónicas.
como vamos a ver ahora el uso de las dos funciones P y q no es necesario.
En lugar de la ecuación I.g) podemos escribir: Desplazamientos correspondientes a una determinada
de tensión. En el § 39 vimos que la determinación de las
'\72(", _ 2xp) = '\72<f> - 4 iJp
éJx
=O ~n~;]U1:U:'t; en una región múltiplemente conexa requiere la evaluación de
desplazamientos, con el fin de asegurarnos de que no' son discontinuos,
lo que demuestra que t/> - 2xp es una función armónica, que llamamos 10 que es lo mismo, de que las tensiones no son causadas parcialmente
p., con lo que cualquier función de tensión es expresable en la forma dislocaciones. Con tal fin, así como para aquellos casos en que los
interesan por sí mismos, se necesita un método que
cp = 2xp + P2 eh) obtener las funciones de los uesplazamientos u y v a partir de la
donde p y p. son dos funciones armónicas convenientemente elegidas, de tensión.
De forma semejante, considerando '" - 2yq, puede demostrarse que Las relaciones tensión-deformación para problemas planos, ecuacio-
cualquier función de tensión es también expresable en la forma (22) y (23), pueden escribirse de la siguiente forma:

.p = -2yq + pa E ax
au
= 0'. - 110'1/,
av
E íJy = Cf" - ]10'" Ca)
donde q y Ps son dos funciones armónicas convenientes.
Volviendo a la fórmula (96), introduzcamos la función ql que es la
G ( ax
av BU) =r""
-+- (b)
armónica conjugada de PI y escribamos ay

x(z) = Pi ilJ.l + la función de tensión a la primera de. las ecuaciones anteriores


'.;r"·"'''H1n
.'
Entonces es fácil comprobar que la parte real de :. recordando queP = '\7' 1>, tenemos:

(x - iy)(p + iq) + PI + iql E Bu = iJ2", _


Bx ay2
11 B2,p =
éJx 2
(p _iJ~4» éix 2
_ 11 ~:!
u",'
se identifica con el miembro derecho de la ecuación (96). En consecuencia,
(J2tJ>
cualquier función de tensión es expresable en la formal. - (1 + 11) ax2 + P (e)
,p = Re (ioj-(z) + ;x(z)] (97)
forma semejante .
éiv éJ2.p
1 E, Goursat, BulJ, Soco jl1ath, FT(l1lce, vol. 26, pág. 206, j 898. N,1. Muschelisvili, Math,
Ann., vol. 107, págs. 282-312, 1932. .
E -éiy = - (1 + JI) ay2.
- +p Cd)
218 TEORJA DE LA ELASTlCJDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALF"S EN COORDENADAS CURVILlNIlAS 219

Dividiendo por 1 + l' Y sustituyendoP por '4op/o.-.: en (e) y por 4oq¡oy Más adelante veremos la utilidad de estas ecuaciones en algunas apli-
en (el) [ecuacion~s (f) y (g) del § 56] obtenemos en las que el método· de determinación de· desplazamientos
en los capítulos 3 y 4 no es eficaz. .
2G au a21{> + 4 ap 2G éJv = _ é)2cp + _4_ éJq (e)
ax = - ax2 1 + 'J) ax' ay ay2 1 + éJy 'J)
58. Tensiones y desplazantientos expresados. en función de
que integrando nos da potenciales complejos. Hasta aquí, las componentes de la tensión
los desplazamientos han sido obtenidos a partir de la función de ten-
81{> 4 aep 4
2Gu = --+-p+f(Y)
éJx .1+)1 , 2Gv = - ay + 1 + JI q + fl(X) (f) , pero dado que la ecuución (97) expresa <p en función de 1p(Z) y X(z)
posible también obtener las tensiones y desplazamientos a partir de
donde f(y) y fl (x) son funciones arbitrarias. dos ~potenciales complejos')'
Sustituyendo estas expresiones en el primer miembro de la ecuación (b) Cualquier función compleja fez) puede ponerse en la forma 11 ip, +
obtenemos a y {3 son reales. A tal función se la puede hacer corresponder la
al, que es el valor que toma fez) cuando en ella sustituimos i por
_ éJxaéJy + 1~_
2
", (a p + éJq)
+ v ay ax
+ ~ df +! dh =
2 dy 2 dx
T
""
(g) i. La notación que utilizamos para designar a la conjugada es la ~iguiente:
l(z) = a - ifl (a)
donde el primer término de la izquierda es 'rv Y el paréntesis se anula
por ser p y q funciones armónicas conjugadas, que satisfacen las ecuacio-
por ejemplo, fez) = e l t. . tendremos
nes de Canchy-Rieman (§ 56). En consecuencia
(b)
comparar con
de donde fez) = 8 1"3
df = A, dfl = -A el fin de ilustrar el significado de la barra que existe sobre la f en la
dy dx (a) .
. Evidentemente
siendo A una constante. Se sigue de ello, que los términos f(y) y f¡(x)
de la ecuación (J) representan la traslación de un cuerpo rígido, por lo fez) + fez) = 2a = 2 Ref(z)
que suprimiéndolos, las ecuaciones (f) resultan'
lo que si añadimos a la función contenida en los corchetes de la ecua-
éJ<J¡ 4 4 al{> (97) su conjugada, la suma será el doble de la parte real de esa función.
2Gu= - - + - - p 2Gv:= - - + - - q (h)
ax 1 JI ' + ay 1 + p ecuación (97) puede, por lo tanto, ser remplazada por .la
entendiéndose que se pueden añadir los desplazamientos correspon- 2<J¡ = z¡fl(z) + x(z) + zf(z) + x(z) (98)
dientes a la traslación de un cuerpo rígido.
la que derivando resulta
Estas ecuaciones !los permiten obtener u y v cuando .¡, es conocida.
Para ello determinamos primero P = V" </1, hallamos luego su función
conjugada Q mediante las ecuaciones de Canchy-Rieman, 2 ~: = z¡fl'(z) +'¡'(z) + X'(z) + z;¡"(z) + ~(z) +x'(z)
ap
-=-,
aQ éJP
- = - -aQ, 2 ~= = i(z¡fl'(z) - "'(z) + X'(z) - zif/(z) + ;pez) - x'(z)]
ax ay ay ax
formamos la función fez) = P + iQ Y obtenemos p y q integrando fez) dos ecuaciones pueden combinarse en una, multiplicando la segunda
como en la ecuación (d) del § 56. Los términos de las ecuaciones (h) son i y sumándolas.
entonces conocidos.
. 1 El significado que aquí tiene esta palabra es distmto del que toma en la expresión: «fun-
lA. E. H. Love, Malhemalical T/¡eory of Elasticily, 4." edición, §§ 144 Y H6, 1926. ción armóntca conjugada •.
220 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLI>MI\!:i BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILlNEAS 221
Entonces:
Como una sencilla iÍustración de este método consideremos la distribución ten-
polinómica estudiada en el § 17. Evidentemente la ecuación (98) nos dará
:: + i ~t = I/I(Z) + zíf!(Z) + X'(z) (e) función de tensión, que es un polinomio de quinto grado, si tomamos
",(a) = (a, + ib,)a', x(a) = (e, + id.)a'
Combinando de igual forma las ecuaciones (h) del § 57 se obtiene
e, y d, son coeficientes reales arbitrarios. Entonces

2G(u. + iv) = _ (o</> + i o</» + _4_ (p + iq) ",'(z) = 4(a.+ ib.)z', x'(a) = 5(c, + id,)z' .
élz ay 1+1' "," (a) = 12(a,+ i/',)a·. x" (a) = 20(c, + id.)z'
que usando la ecuación (e) y 111 (ti) del § 56 queda . de las ecuaciones (100) y (102) obtenemos
;,,, + = 4Re4(a, + ib,)z'
+ iv) = ~ ¡ : ,pez) -
IT.

2G(u z,f/(z) - x'(z) (99) = 16 Re (a.+ ib,)[Z3 - 3zy' +


i(3"''1I - Y')J
= 10a,(",' - 3",y') - 16b,(3z2y - y3)
ecuación, que conocid9s los potenciales complejos ¡pez) y X(z), nos per- (f. - IT_ + 2':-..:u = +
2[12(a, ib,)ü' +
20(ao +
id.)zal
mite detenninar u y v para los estados tensionales planos. Para los estados
. = 24(a, + ib o)('" - iy)(:z: + i!l)' 20(e, + +
id.)(x iy)3 +
. = [24a",,(x' + y2) - 24b,y(:z:' + y» +
20c,(",- - 3xy')
de deformación plana, de acuerdo con el § 19, debemos sustituir v/(l - 11) +
- 20cl,(3x2y - y')] i[24a,y(:z:' y') + +
241>,z(",- y') +
por 11 en las ecuaciones (99). + 20a, (3z'y - y') 20cl.(z' - 3zy')] +
Las componentes de la tensión 11%, ay, T3;y, pueden obtenerse directa-
:Orl~e~l)OIldí,efl(lo las expresiones entre corchetes a qll -- a. y 2'1'•• respectivamente.
mente derivando dos veces la ecuación (98), pero en vista de su aplicación desplazamientos correspondientes se obtienen fácilmente mediante la ecua-
en coordenadas curvilíneas es preferible proceder de otra manera. Deri- (99), resultando
vando respecto a x la ecuación (e) se tiene:
2 2
2G(u + iv) = ~ +: Ca. + ib.)a· - 4(a, - ib.)zz' - 5(e. - id,),¡¡!
a .p
él;¡;2
+i a </> = 'V(z)
0:1) ay
+ zl/¡I/(z) + 'f/(z) + X"(z) (d)
Resultante de las tensiones que actúan sobre una curva.
y derivando respecto a y y multiplicando por i obtenemos: de contorno. La figura 125 muestra el arco AB de una
'"'U:UU.A"J<U......'"

2 trazada sobre la placa. La fuerza ejercida por el material situado


i a cp _ iJ2cp = _ ",'(z)
éJx mJ ay2
+ z;¡'''(z) - ~'(z) + x"(z) (e) . la izquierda del arco AB sobre el material situado a 111 derecha, en el
Sumando y restando ahora las ecuaciones (d) y (e) se obtienen las siguientes
expresiones, más sencillas!
(1'~ + rTl/ = 21/1'(z) + 2'11(2) = 4 Re ",'(z) (100)
rTu - rT= - 2i-r=v = 2[z~"(z) + i"(Z)] (101)

una de las cuales, la (101) puede tomar, cambiando i por -i, esta otra
forma (1.1)
rFu - rT;c +
2i-r"", = 2[ztJ¡"(z) x"(z)] (102) + FlG. 125

Dados pues los potenciales complejos Vez) y X(z) podemos determinar ds, puede representarse por las componentes Xds e Vds, cuyo valor,
las componentes de la tensión mediante las ecuaciones (100) y (102). se deduce de las ecuaciones (12) del §.9, viene dado por las expre-
Separando las partes real e imaginaria de (102) Ó (101) obtenemos separa-
damente G", - Gv Y 2-r",u y los desplazamientos correspondientes mediante x= (1'. cos a + T:cu sen a (a)
la ecuación (99). ji' = rTlI sen Oi + T:cu COS Oi

1 Estos resultados y la ecuación (99) fueron obtenidos por G. Kolosoff en su tesis doc- las que a es el ángulo formado por la normal N y el eje x. Al el,emento
toral. Véase su trabajo en Z. Math. Physik, vol. 62, 1914. arco ds corresponden los elementos dx y dy, que' se indican en la fi-
222 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVII.lNEAS 223
gura 12Sb, Y dado que al ir de A a B x disminuye y dx será negativo. ,plan y paralela acfJjos a AB. Estas derivadas son conocidas si se da ~ y
Entonces ,plan a lo largo de AB1 •
dz . Sea ahora un arco que se cierra sobre .sí mismo, de forma que A coin-
COS a = dy sen a = - ds (b) con B, pero en el que este punto sigue siendo considerado como
ds
al cual se llega· después de recorrer el arco, partiendo: de A_ Las
y l1evando estos resultados, junto con los ·~cj~ac:lOrles (el) y (e) nos dan entonces la fuerza y el momento resultante de
tensiones que actúan sobre la porción de placa contenida en el circuito
AB. Si tales resultantes no son cero, a rP ja."C y o.p j oy, no toman
valores. iniciales (A) después de recorrer el circuito (B), siendo, por
a las ecuaciones (a), obtenemos tanto, fll11ciones discontinuas como, por ejemplo, la coordenada polar
. ·Este caso se dará solamente cuando cargas iguales y opuestas a Fx Y
y M, son aplicadas en puntos interiores de la porción de placa limitada
la curva AB.
Expresando las dos ecuaciones (á) en función de los potenciales com-
,p·lejos 'P(z) y xCz) de la ecuación (98) tendremos

Las componentes de la fuerza .resultante que actúa sobre el arco AB son, F + iF = [8r/> _ i ac/>]B = _ i [ar/> + i 8r/>]B
por lo tanto " II
ay az A. az ay A

F: = j A.BX_ds = jB. -
d (ac/»
.A ds ay
-
[acf>]B
ds = -
ay A.
usando las ecuaciones (e) del § 58, resulta

Fu = jBA. Y ds = -lB
i.. (arf» ds = _ [acf>]B
A ds az o:c JI.
(d)
F" + iF lI

(e) nos quedan así:


= -i[.y(z) + zi¡t'(z) + X'(z)E[ (103)

representando el corchete, la diferencia eJ?-tre los valores que la cantidad M = Re [-zz,p'(!) + x(z) - ZX'(z)]~ (104)
que encierra, toma en los puntos B y A.
La fuerza que actúa sobre AB tiene un momento respecto a O (de Las ecuaciones (103) y (104) aplicadas a un circuito cerrado que rodee al
sentido el del giro de las agujas del reloj) cuyo valor es: . origen, muestran que si las funciones tp(z) y x(z) son del tipo z" (donde
. n es un entero positivo o negativo) F"" F~ y M serán nulos, ya que las
: funciones entonces contenidas en los corchetes vuelven a tomar su valor
. inicial cuando el circuito es completado. Estas funciones, por lo tanto,
no pueden representar las tensiones producidas por cargas aplicadas en el
que integrando por partes quedal
. origen. La función log :Ir = log T + i8 por el contrario, no vuelve a tomar
JJ [8c/> éJ</J]B · el mismo valor al recorrer un circuito que rodee al origen, puesto que O
M= [ <> ]
.A
- :c-+y-
a:c éJy A
(e) aumenta en 2:n. En consecuencia, si 'P(z) = e log z o x(z) = Dz log z
(donde e y D son constantes complejas) la ecuación (103) dará un valor
Si AB representa ulla porción del contorno sobre la que no actúa nin- no nulo pam F" + iFy • Asimismo la función X(z) = D log z dará un
guna carga X e Y serán nulos y según las ecuaciones (e) o rP jax y a rPlay valor no nulo de M si D es imaginario y nulo si D es real.
se mantendrán constantes a 10 largo de AB. Si sobre AB actúa una deter-
minada distribución de carga las ecuaciones (e) fijarán los valores de a</> lax · 60. Coordenadas curvilineas. Puede considerarse que las coor-
y a(¡IBy a lo largo del contorno, lo que equivale á dar las derivadas normal · denadas polares r y O (fig. 124), especifican la posi.;:ión de un punto me-
, diante la intersección de una circunferencia (de radio r) y de una recta
, Las ecuaciones (d) y (e) sirven para establecer una analogía entre los problemas tensio- .
nales planos y el movimiento bidimensional lento de fluidos viscosos. Véase ]. N. Goodier, I Estas ecuaciones fundamentan la analogía con la deflexión transversal de lai placas
PIUI. Mag., serie 7, vol. 17, págs. 554 y 800, 1934. elásticas. Véase R. D. Mindlin, Quar/. i1.pplied Mat"_, vol. 4, pág. 279, 1946.
224 '!'I!ORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILINEAS 225

radial (de dirección (), El paso de las coordena'das cartesianas a las polares , . ~ se obtienen distintas elipses, todas con los mismos focos que forman,
se realiza median te las ecuaciones '. por tanto, 'una familia de elipses homoJocales (fig, 126). En una cualquiera
de estas elipses 1; es constante y r¡' varía, de igual forma que sobre una
vz 2
+ y2 = r, arctg 1!..
:c
= (J (a) circunferencia, en coordenadas polares, r es constante y O varía: De hecho,
'en el caso presente "1 es el ángulo de excentricidad1 de los puntos de la
La primera, cuando el paramento r toma diversos valores, representa la · elipse.
familia de circunferencias y la segunda, al variar el valor de (j, la familia
de rectas radiales, .
Las ecuaciones (a) son un caso particular de las
F&¡;,y) =~, (b)
Dando un.os valores determinados a ~ y 'Y] (uno a cada parámetro) estas ecua-
ciones representarán dos curvas, las cuales se cortarán si hemos elegido
convenientemente las funciones F1(x, Y)'y Fz(x,y), Para nuevos valores
de ~ y '11 obtendremos nuevas curvas y nuevos puntos de intersección de
forma que cada punto del plano xy podrá ser caracterizado por un cierto
valor de ~ y '1 [los valores que hagan que las dos curvas dadas por (b) pasen
por él] y ~ y 7J pueden ser consideradas como las qcoordenadasl) del punto, FIG. 126
Puesto que dados los valores de ~ y 7J el punto que definen es el de inter-
sección de dos curvas, estas coordenadas son llamadas coordenadas cu.r- Si haciendo uso de la ecuación ch' .!; - sh' l: = 1, eliminamos ahora .::
vilíneaf. de las ecuaciones (ti) tendremos
En el capítulo 4 vimos la utilidad de las coordenadas polares en el __ 2_ _ __
:1:_ y_2_ = 1
tratamiento de problemas de contornos circulares concéntricos. En tales (e)
e2 cos 2 '1/ c2 sen2 '1/
contornos las tensiones y los desplazamientos son función solamente de
() puesto que en ellos r es constante. Si los contornos consisten en otras ecuaclon que para un valor constante de r¡ representa una hipérbola,
curvas, elipses por ejemplo, es conveniente usar las coordenadas curvi- · cuyos focos son los mismos de las elipses. La ecuación (e) representa,
líneas en las que una de las coordenadas se mantenga constante en cada por lo tanto, una familia de hipérbolas homofocales, sobre cualquiera de
contorno. las cuales 71 es constante y ~ varía. Estas coordenadas reciben el nombre de
Despejando x e y de las ecuaciones (b) obtendremos las expresiones · ;elfp ticas.
. Las dos ecuaciones (d) son equivalentes ax + ¡y = c cosh(; + i'T}) o
(e)
z = cchr (j)
las cuales son, por lo general, más útiles que las (b). Consideremos, por
ejemplo, las dos ecuaciones '. donde = e e + i'Y]. Estamos evidentemente frente a un caso particular
de la relación
x =,c ch 1; cos "1, y = e sh l; sen r¡ (d)
z =jW (g)
en las que e es una constante. Eliminando 71 se obtiene:
lo que además de definir z como función de ~ pemIÍte despejar ~ y ex.~
x9 y2 presarla como función de z. i: y 1] son entonces las partes real e imaginaria
e2 ch 2 ; + c' sh2 l; = 1 '. y por lo tanto satisfacen las ecuaciones (e), de Cauchy-Rieman, y las (j)
y. si .: es constante ésta es la ecuación de una elipse de semiejes c ch " y y (g), de Laplace, del § 55.
c sh $, cuyos focos se encuentran en x = ±e. Para distintos valores de
I Si a y O son las coordenadas polares de un punto de la ci.rcunferencia que circunscribe
. una elipse de semiejes a y h, la perpendicular por ese pumo ni eje x COrt1l n In elipse en el
punto x = a cos O, y = b sen Oí 8 "" llamado el ángulo de excentricidad de ese punto de la
l. La teoría general de las coordenadas curvilíneas fue desarrollada por Lamé en su libro
Leceo"s sur les cao~den7létl$ curvilignes, París, 1859. ~- , .
15 -'(U)RtA OH LA VUSTlC1PAD
226 TEORIA DE LA EI.ASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMIlNSIONALIlS EN COORDBNADAS CURVILINEAS 227

Todas las ecuaciones que vamos a usar en este capítulo serán deduci- y el eje x (fig. 127): Si de forma semejante varía solamente 1/, los incre-
das de ecuaciones del tipo (g) y en consecuencia tendrán algunas pro- . mentos dx y dy, dados por las ecuaciones (h), corresponden a un ·elemento
piedades especiales. si eJ, punto x, y tiene las coordenadas curvilíneas de arco ds.¡ perteneciente a una curVa ~ :== cte., y en lugar de las ecuacio-
.;, r¡, las del punto vecino x + dx, Y + dy serán l; + dli, '1 + d1/ Y dado .. nes (t) tendremos:
que existen dos relaciones del tipo (e) podremos escribir OX
dx = -dl)
aTl '
dy = ay dr¡
:~ de + :~ d", = :~ de + :: d1/
élr¡
d:¡; = dy (h)
Procediendo como hemos hecho más arriba obtenemos que
Si solamente varía.; los incrementos dx, dy corresponden a un elemento
de arco ds que pertenece a una curva 1/ = cte., y entonces: -o:¡; =
ar¡'
-Jsena a1l=Jco8a
or¡
OX dy = oy di; y también que ds,¡ = Jd'l. Asimismo ocurre que
dx = Oc d~, éJl;
(i)
dyld:c = - ctg a
de donde
resultado que comparado con la ecuación (n) nos dice que las curvas
(j) r; = cte. y 7} = cte. se cortan ortogonalmente (fig. 127).
~-,~------------~~·x

Dado que z = j( C), tendremos que f+tlI


éJz _ OX • éJy _ d ar
Im
I

éJ~ - a~ + z éJi; - arl(O a~ = (k)

donde y

'1 incremento
FlG. 127.
Puesto que además toda cantidad compleja puede escribirse en la forma
Jeas a + iJ sen CL = Je'u (J y CL reales), podremos poner Considerando, por ejemplo, las coordenadas elípticas definidas por
j'(r) = Je"" (l) ecuación (j) tendremos:

deduciéndose entonces de la ecuación (k) ¡'(C) = e sh C = e sh .; cos 7J + ic eh .; sen 1/ = Jeta


a:¡; Comparando las partes real e imaginaria de la última igualdad se obtiene
a~ =.J C08 a, ay =J sena (m)
ai; J cos I.! = e sh ~ cos 1/. J sen I.! = e ch ~ sen r¡
y de la (¡) .y, por tanto,
d8( "'" J di; J2 = c2 (sh' .; cosa r¡ + ch 2
~ sen' 7J) =~c'(ch 2'; - cos 21/) (o)
Partiendo de las ecuaciones (~) y (m) podemos calcular la pendiente tg.u=ctgh .; tg 1/ (P)
de ds., la cual es
61. Componentes de la tensión en coordenadas curvilíneas.
dy = éJy/loe = tg el (n) Las ecuaciones (99), (100) Y (102) dan las componentes cartesianas de los
dx OX a~ desplazamientos y las· tensiones en función de los potenciales complejos
de donde deducimos que eL, dado por la ecuación (l), es el ángulo formado 1p(z) y ·X(z). Si usamos coordenadas curvilíneas podremos expresar los
por la tangente a la curva 1/ = cte., en la dirección de las .; crecientes, potenciales complejos en función de l;, haciendo uso para ello de· ia ecua-
228 TEORIA DE LA ELÁSTIClDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALl!S EN COORDENADAS CURVIL1NEAS 229
ción, del tipo de la (g) del § 60, que defme las coordenadas curvilíneas. u~, de sentido el de las )} crecientes. Si u y v son las componentes carte-
Hecho esto, el expresar u"', U'I> T;¡;U en función de ~ y 'Yl no presentará as de los desplazamientos tendremos:
ninguna dificultad.
En general, sin embargo, es conveniente especificar la tensión mediante
Uf = U cos a + v' sen (l, u~ = v cos a - u sen a
las siguientes componentes: por lo tanto
UI¡ + iu" = e-la (u + iv) (108)
u., componente normal a la curva':: = cte.
U'I' componente normal a la curva 7/ = cte. Haciendo uso de la ecuación (99), con z = f(I;), y de la (107) podemos
'<'1, componente tangencial a ambas curvas '~presar u. y u~ 'en función de ~ y T/, una vez que hayamos elegido los
potencililes complejos 1JI(z) y X(z).

las cuales son representadas en la figura 128. Comparando esta figura y


la 127 con la 12 vemos que u. y 'I;~ corresponden a a y T en la figura 12.
Podemos por lo tanto usar las ecuacionell (13), resultando:
fIó = J(O'" +
0',,) + t(O'", - ay) cos 2u +
'%y sen 2'L
T;~ =- 1(u" - l1y) sen 2(L + T",y cos 2a

De forma semejante sustituyendo a por n/2 + a se obtiene la ecuación:


(J'1 = !(u", + uy) - !(u" - ay) cos 2a - ':tri sen 2a
que junto con las anteriores nos permite obtener las siguientes1 : Dirección de
I¡-aumentando
~
FIG. 128
Dirección de
.-aumel1t,mda
(1, + u~ = a", + UJI (105)
u~ -~ u, + 2i-'C~ = e21a
(uy - a", + 2h",v) (106)
Combinando las ecuaciones (99), (100) Y (l02) con las (105), (106) Y
El factor e21a , que se presenta cuando usamos coordenadas curvilíneas, (108) obtenemos las siguientes expresiones de las componentes de las
viene definido por z = f( C) y puede obtenerse a partir de la ecuación (l) : tensiones y los desplazamientos (en la última de ellas se ha sustituido
del § 60. Esta ecuación junto con su conjugada, que se obtiene cambiando i 'por -t):
i por --i, nos da lJ'e + 11'~ = 2['¡"(z)+ if'(z)J = 4RetP'(z) (109)
f'm J'(f) = Je-w. ,,~ - "e + 2i"e~ = 2e2úo [z¡b"(z) + X"(z)] (110)
de donde
= Je"",

e21" = j'(r)
2G(Uf - iu,¡) = é~ n+: i[t(z) - ztP'(z) - x'(Z)] (111)

(107) 'las cuales serán usadas más adelante en la solución de diversos problemas
J'(f)
en los que existen contornos curvilíneos.
En coordenadas elípticas, por ejemplo, /'(0 = e sh ey
é'a,=~ (q)
sh e Problemas
Determinado así el valor de e"a, las ecuaciones (lOSfy (106) expresan l. Demostrar que en coordenadas polares, dadas por:J = el, la ecuación (107)
a., a~ y T"I en función de a"" Uu y T",u. se convierte en e'" = ¡jl'" y IX = 7' = O.
Los desplazamientos en coordenadas curvilíneas son especificados 2. Obtener la solución en coordenadas polares de los siguientes problemas
mediante las componentes 111 de sentido el de las e crecientes (fig. 127), mediante los potenciales complejos quc se indican, y calcular las componentes d~
las tensiones y los desplazamientos. Las letras mayúsculas indican constantes que
1 Las ecuaciones (105), (106) Y (lOS) fueron obtenidas por Kolosoff, loe. cit. pueden ser complejl!-s: ,
PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILlNEAS 231
230 TEORIA DE LA ELASTICIDAD

a) Anillo (a < r < b) sobre cuyos contornos actúan dos pares iguales y opues- semiejes a y b, sobre cuyo contorno no actúa ninguna fuerza exterior'.
tos M causados por esfuerzos tangenciales (fig. 122). !pez) = O, 1(Z) = A log:J. condiciones significan que:.
b) Anillo sometido a una presión interna P, y otra externa p" (véase el § 26).
lp(z) = Az, ;((z) = B lag z. :. u'" = Uy = S en el infinito (1; -+ ce ) (ti)
e) Flexión simple de una barra curva y «dislocación rotacional,) de un anillo .. o-e = r,>, = O sobre el contorno elíptico del orificio, donde 1; toma el
(véanse los §§ 27 y 29). ",(z) = Az log z + Bz, x(z) = C log z. valor 1;0 (e)
ti) El problema resuelto en el § 31. v,(z) = Az'+B logz, X(z)=Cz logz+Dlz.
e) Placa con orificio circular sometida a tensión (§ 32). ",(z) = Az + Blz, . De las ecuaciones (100) y (102) se deduce que la condición (ti) es satis-
X(z) = Clagz + Dz' + Flz'. fu~a~ -
f) Distribución radial de tensiones del § 33. ",(z) = A log z, x(z) = Bz lag z.
g) Placa indefinida cargada por una fuerza concentrada en un punto (§ 38). 2 Re !p/(Z) = S, z·,,/'(z) + X"(o3') = O a infinito (f)
?pez) = A log z, x(z) = Bz log z.
Puesto que las tensiones y los desplazamientos han de ser, por razones
de continuidad, funciones periódicas de 7}, con período 2n, tomamos
62. Soluciones en coordenadas elípticas. Placa sometida a un expresiones de 1jI(z) y X(z) que den una función de tensión de la misma
esfuerzo de tracción uniforIne. Las coordenadas elípticas !; y 1/ .periodicidad. Tales.expresiones son:
que hemos representado en h¡ figura 126 y considerudo yu en el § 60
están, definidas por las ecuaciones: sh n~ = sh nI: cos m¡ + ich nI: sen n'Y}
z = e ch ,", (a)
ch ne; = ch nI; cos mJ + ish ni: sen n1}
de las cuales se deduce: en las que 11 es un entero. La función X(z) = BeSe;, en la que B es una
constante, es también adecuada para este problema.
x = e ch .; cos 1}, y=csh';sen'lj Tomando 1p(z) = Ac sh e
(A = cte.) y despejando de la primera de
¡as ecuaciones (b) Jeldz, recíproca de dzlde, obtenemos
y
dz sh t
1p'(o3') = Ae ch 1; • dI;
dz
=A~
sh 1;
=A ctgh ~ (g)
d," = e sh e, = sh ~
(b)
e
A una distancia infinita del origen, 1; es infinita y ctgh vale uno, de fonna
Supuesta dada una elipse, de semiejes a y b, correspondiente al valor . que la primera de las condiciones (f) exige que 2A = S. De (g) se deduce
.; = ~ o tendremos: además que
e ch ';0 = a, csh';o=b (e) (h)
de donde se deduce, que dado un miembro de la familia de elipses toda
la familia tanto de 'elipses como de hipérboI8.s (véase el § 60) está definida ..
Si ~ es pequeño, la elipse es muy estrecha convirtiéndose para 1; = O en el
segmento de longitud 2e que une los focos. Si, por el contrario, damos a - "(z )
z'"
T
- e;-
= -- A -sh3
eh
~
(z)
l; valores positivos cada vez mayores, la elipse aumenta tendiendo a una
circunferencia de radio infinito en el límite 1; = co. Cuando un punto da x(z) = Be2 C (B = cte.) tenemos
una vueltá completa a una elipse cualquiera, el valor correspondiente
de 'Y} toma todos los valores que van de O u 2x, recordando en este aspecto ít
I()=~
Z sh e , x
"(Z)=-B~
sh" e
(;)
esta variable al ángulo O de las coordenadas polares. Debido a esto, la con-
tinuidad de las componentes de las tensiones y los desplazamientos, I Las primeras soludones de la plac.~ con orificiD eJrptico fu~ron .dadas por K?losoff,
exige que sean funciones periódicas de 1}, con período 2n, de forma que loe. dt., y C. E. Inglis, Tra1!s. Inst. Naval Are!.. LOlld~es, 1913; E71gmeerZ1lg, vol. 9~, pago 415,
1913 Véase también T. Poschl, Mal/¡. Z., vol. 11, pago 95, 19~1. El método aqUl empleado
su valor sea igual para 7} = O Y 1} = 2n.' es el de Kolosoff. El trÚsmo método fue aplicado a varios problemas bidimensional~s por
Consideremos ahora el caso de una placa indefinida sometida a una A. C. Stcvcnson, Proc. Ray. Soco (Londoll), .eñe A, vol. 184, págs. 129 y 218, 1945: Más ade-
tracción uniforme S, sólo alterada por la presencia de un agujero elíptico lante. en este mismo..,~apítu]o, se darán otras referencias ..
232 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALBS EN COORDENADAS CURVILlNEAS 233

ecuaciones de las que junto con la (i), se deduce que tanto X"(z) como tnv ..nrin en (109) el valor de 'V"(z) dado por la ecuación (g) en la que
ZIj/'(z) se anulan en el infinito, siendo por lo tanto satisfecha la segunda pone A = 8/2 tenemos:
de las condiciones (f).
La condición (e) se cumple eligiendo convenientemente la constante B. /Tf + O"~ = 4 Re y,'(z) = 28 Re ctgh.f
Restando la ecuación (110) de la (109) obtenemos que
81+{~ + e-e-" (el+" + e-e-iq) . (er-i. - 8-l+i,,) (
!T~ - irh = fez) + ¡¡'(z) - e2ia [í.p"(Z) + x"(z)J (k) . ctgh r= el+il _ e-r-'q = (eE+>' - e-r- i ,) (er-i. - 8 r+iq) P)
2la
que sustituyendo los valores que acabamos de obtener y el de e , dado en obtiene operando los paréntesis
la segunda de las ecuaciones (b), queda:
ctgh C = sh 21; - i sen 2'1'}
(1. - iT<~ ::, A (~+ ch f) -1- ~ (A ch ~ -1- B~) ch 2~ - cos 2r¡
sh t; sh t; sh ( \: sh3 t sh" t;
consecuencia:
sh zé\h '( {A [sh (; sh ce + () + ch (J + B ch n (l) 28sh H
ch2~ - cds 2/1
En el. contorno del agujero elíptico 1; = ~o, ~ + :: = 2~., Y , = 2". - t;
reducIéndose (l) a ' . y en el contorno del orificio
1
sh" t; sh ~ (A ch 2~" -1- E) ch (; + 28 sh 2~u
ch 21;" - cos 2'1'}
de donde se deduce que la condición (e) es satisfecha si
Los valores máximos que se dan en los extremos del eje mayor, donde
.r¡ = O Y n Y cos 2r¡ = 1, son
B = -A eh U" = - ~8 ch H" (m)
_~2=S7S~h~2~~~,,_
Obtenemos pues (11") m •• = ch 21;. - 1
1p(Z) = !Sc sh t;, (71)
·como se deduce fácilmente de las ecuaciones (e)
Los potenciales complejos obtenidos (n) son tales que las condiciones 2ab
de contorno son satisfechas, pero no podemos asegurar que representen sh 2~o = ~2'
e
la s~lución de nuestro problema, hasta que no sepamos que los despla-
zamientos de ellos obtenidos no presen tan discontinuidades. Las com- . quedando entonces (aq)m., asi:
ponentes cartesianas de los desplazamientos, obtenidas mediante la
ecuación (99) vienen dadas por la ecuación

3 ..::. v h " lo que indica que el valor máximo de la tensión será mayor cUanto más
2G( u + tv. ) = - 1 - - Ac s t, - Ac ch <: ctgh ~-;: ~
Be
(o)
+v ~~ estrecha sea la elipse.
El valor mínimo de (aq)~= •• se da en los extremos del eje menor donde
donde A = 8/2, B tiene el valor dado por la ecuación (711) y las funciones cos 21J = - 1. Allí:
hiperbólicas que en ella aparecen tienen partes reales· e imaginarias pe- () --,2-"8-:::-s,-h_2:-,~,,;-,,_ = 28.!.
riódicas en r¡. De esta forma dando la vuelta completa a una elipse en la (J'I nun = eh 2~" +.1 a
que l; = cte., u y v volverán a tomar los valores iniciales. Los potenciales
complejos (n) representan, pues, la solución del problema. Cuando a = b, la elipse se convierte en un círcl.\lo y «(j )",,,x y (CT )m¡n
La componente (j'1 de la tensión en el contorno del orificio puede calcu- se hacen iguales a 28, 10 que concuerda con los v¡ilores obtenidos para el
larse a partir de la ecuadon (109) dado que en esos puntos (j. es cero. caso en que el orificio es circular (véase el § 32).
234 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN eooRDEI'!ADAS CURVILlNEAS 235

Los desplazamientos que por supuesto son continuos y vienen dados ~edIUC.lenaO!¡e de las ecuaciones (100) y (102) que:
por funciones uniformes y continuas, se obtienen a partir de la ecuación
(n) y de la (111) ó (99).
4 Re t/I'(z) = S, 2[z,yI/(z) + xl/(z)] = -S6-2~ en el infinit() (a)
. El caso en que en el interior del orificio existe una presión uniforme que en el contorno del orificio, ~;", ~o, tenemos que a~ = '.'1 = O.
S· y las tensiones en el infinito son nulas se resuelve fácilmente combi- Todas estas condiciones de contorno son satisfechas tomando funcio-
nando la solución anterior con el estado tensional uniforme a. = a'l = _. 8 pez), x(z) del tipo!
deducible del potencial complejo 'P(z) = - 8z/2.
41f'(z) = Ae eh , + Be sh ,
63. Influencia de un orificio elíptico en una placa sometida 4X(z) = Cea, + Dc ch n + El? sh 2C
2

a tracción simple. Consideremos ahora el caso de una placa inde-


finida, que tiene un orificio elíptico, sometida a una tracción simple 8 A, B, e, D y E son constantes a determinar. Dado que z = e ch .::,
cuya dirección forma el ángulo f1 con el eje x, el cual se elige coincidente término Ae ch 1; se reduce a Az y su contribución a la función de ten-
con el eje mayor de la elipse (fig. 129). Mediante el método de los poten- [ecuación (97)] será la expresión Re Azz = Re Ara. De esta ex-
se deduce que A ha de ser real pues de no ser así el valor de la misma
cero. Si insertamos las expresiones anteriores de 'I}J(z) y x(z) en la
(104), aplicada a una curva cerrada AB que rodee al orificio,

j lptelliemlos que todos los términos excepto el que contiene a C se anulan


. ser funciones hiperbólicas, periódicas en 1}, con período 2n. El término
contiene a C es Re[Cc2(~ + i1])]!f Y puesto que debe anularse dedu-
. que C debe ser también real.
... Las constantes B, D Y E son complejas y pueden escribirse
(b)
F.o. 129
las expresiones anteriores de 1p(z) y X(z) en las condiciones
obtenemos
ciaIes complejos, no es más difícil obtener la solución de este problema A + B. = 8, (e)
g~neral que la de los casos particulares, en los que el eje mayor de la
.KeSUlno.o ahora la ecuación (110) de la (109) con el fin de obtener a~ - iT ",
eh~se es p~ra1elo o normal a 8 2 permitiéndonos determinar, de otra parte,
la mfluencla de un agujero elíptico sobre todo estado tensional plano
-:
uniforme, que venga especificado por el valor de las tensiones principales - iT~,,) = cosh ::[(2A + B ctgh ::) sh
en el infinito y por la orientación de las mismas respecto a los ejes de la
elipse.
+ (8 + B COSh2~) ch :: + (C + 2E) cosh:= ctgh ::
- 4D sh :: .- 4E ch .:]
Sean Ox' y Oy' los ejes cartesianos que se obtienen al hacer coincidir
Ox con la dirección S;·girándolo el ángulo {J. Las ecuaciones (105) y (106)
quedan entonces así: el contorno del orificio ~ = ~D Y 1; = 2 ~u - ,. Llevando este valor
. sh "' y ch ( en la expresión anterior y desarrolIando las funciones
(2t=o - ~) y ch (2~n - 1;), vemos que la expresión contenida en el
rn,r,.,lhpj·.. se reduce a
Dado que en el infinito ax, = S, y ay, = ''''',,' = O, tendremos que:
sh 2« - 2iBz ch 2« _.. 4bj ch .::
0'= + (T,I = S, (1" - <1,. + 2i'J.,y = -Se- /l 2i en el infinito
-(2A ch 21l - 2iB. sh 2u + 4D) sh ::.
I El caso de presión 110 uniforme ha sido considerado por 1. N. Sncddon y H. A. Elliott,
-1- (C -1- 2E -1- B eh 2«) ctgh l:. cosh ::
Q"art. Applied Math., vol. 4, pág. 262, 1946.
• VéRnse la.. referencias ciladas en la nola. I Stevenson, loe.· .. ~t.
236 TEORlA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDlMBNSIONALES BN COORDENADAS CURVILlNEAS 237

desarrollo que se anula, ocurriéndole lo mismo' por 1.. tan to u Cf~ - iT,.,/ en La influencia de un orificio elíptico en un estado de esfuerzo cortante
el agujero, si los coeficientes de ch e,
sh /;, ctgh :: y cosh :: son cero. Te- aplicado paralelamente a los ejes x e y se estudia fácilmente super-
nemos entonces tres relaciones, que junto con las ecuaciones (e) deben jotlierldo los casos de tracción S con iJ = 71./4 Y tracción - S con {J = 3:rc/4.
ser satisfechas por las constantes A, B, e, D y E. Puesto que A y e son
reales existen en realidad nueve ecuaciones que han de ser cumplidas
e2e'sen 27]
por A y e y por las partes reales e imaginarias de B, D Y E: B I , B<¡, DI, D 2 , (a.)H. = -28 eh 2~• - cos 2 11
El Y Ea. El sistema formado por esas ecuaciones, es compatible, y sus
soluciones son los extremos de los ejes mayor y menor y que toma su
A = 8e'~ cos 2p D = - tSe 2<. ch 2(~" + ifJ)
B = 8(1 -'- e 2._ -2'p) E = t Se2 $.sh 2(~" + ifl) ±S (a + b)2
e= -S(ch 2 ~o - cos 2P) ah
los puntos determinados por: tg 7] - tgh~" = bla. Si la elipse es muy
En consecuencia, los potenciales complejos vienen dados por estos valores son muy grandes y. los puntos donde se presentan
41Jl(z) = Sc[e"<· cos 2f3 ch e+ (1 -; e2~. 21P) sh e]
muy próximos a los extremos del eje mayor.
Asimismo se han obtenido las soluciones para los casos de orificio
4X(Z) = -Se'l[(ch 2~" - ch 2{J)C -t !é~· - ch 2(C - .;, - iP)] en ulIa placa sometida en su plano a flexión simple!- 2 y a una
parabólica de esfuerzos tangenciales tal como la que se da
de los cuales se obtienen desplazamientos aplicando la ecuación (111).
Como puede verse fácilmente vienen dados por una función uniforme. una viga rectangular, agujero elíptico sometido en los extremos a
Dado que Cf. es cero en el orificio podremos obtener a~ en esos mismos concentradas iguales y opuestas3 e inclusiones elípticas rígidas o
puntos aplicando la ecuación (l09). Entonces: en una placa sometida a tracción", habiéndose considerado formas
generales de la función de tensión <p en coordenadas elípticas'. Los
(O' ) = S sh 2~. + cos 2fl - e2f• cos 2({1 - '1) complejos que corresponden a las mismas se construyen a
v f-ft oh 2~. - cos 211 de las funciones que acabamos de usar o citar, junto con las análogas
empleadas en los problemas del § 61 cuando se incluyen pares, fuerzas
Cuando la tracción oS es perpendicular al eje mayor de la elipse «(1 = 71/2) ;U~l";,,r1L:n1<Ut<; y dislocaciones.

(Cf)
u ;.-;.
= 8e2" [aheh2Ml + e-2e.) -
2~o - C06 2'1
1] Contornos hiperbólicos. Entalladuras. Como vimos en los
60 y 62, en coordenadas elípticas las curvas r¡ = cte. son hipérbolas y
intervalos de variación de 7] y l; son de O a 271 y de O a 00, respectiva-
y el valor máximo, que se presenta en los extremos del eje mayor (cos
27] = 1) es: '. Sea 710 el valor constante de r¡ a lo largo del arco de hipérbola BA de
'figura 130. Dado que x e y son positivos en ese arco, el valor 7]0 estará
iinlorend:ido entre O y n/2 ..En los arcos Be, ED y EF, 7] valdrá 2n - 11."
- 7]0 y 71 + 7]0 respectivamente.
valor que aumenta sin límite al estrecharse el orificio. Cuando a = b ob- Consideremos la placa ABCFED, contenid'a entre los contornos híper-
tenemos el mismo resultado que encontramos en el § 32 para un agujero
circular. El valor mínimo de la tensión en el contorno del orificio se da en , K. Wolf, Z. techo Physik, 1922, pág. 160.
los extremos del eje menor y su valor, _·S, coincide con el obtenido para • H. Neuber, blgenieur-Archiv, vol. S, plÍg. 242, 1934. En el libro -de Neuber Kerbspan-
Berlín, 1937, se d. esta solución y otras varia. refer~ntes a elipses e hipérbolas.
el agujero circular. Symonds, J. Applied Mechanics (Tralls. A.S.M.E.), vol. 13, pág. A-183, 1946.
Si la tracción S es paralela al eje mayor ({J = O), el máximo valor de rJ? E. Green, ibld., vol. 14, plÍg. A-246, 1947, da una soluciqn en ..forma finita.
en el. borde del agujero, que se presenta en los extremos del eje menor, , N. J. Musc~ehSvili, Zeit. angew. Match. Meeh., vol. 13. pág, 264, 1933; L. H. DonneH,
von Ká~mán A'l1Iiversary Volllnte, pág. 293, Pasadena, 1941. .. '.
es S(l + 2b/a), valor que tiende a S al estrecharse el orificio. En los G. Coker y L. N. G. Filon, Photaelastieity, págs. 123-535, Cambridge University
extremos del eje mayor la tensión es -S cualquiera que sea la relaciÓn b/a. 1931; A. Timpe,'Math. Z., vol. 17, pág. 189, 1923. . .'
238 TEORrA DI! LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES I!N COORDENADAS CURVII.INIlAS 239

bólicos, que está sometida a una tracción de dirección Oy'. La tensión en será una constante si la cantidad contenida en el paréntesis se anula,
el infinito debe anularse para que sea ftnita en la sección EOB. Potenciales lo cual,
complejos que satisfacen esta condición, la de contorno (que están libres
de fuerzas) y las condiciones de simetría respecto Ox y Oy son las B = -A eos 2 '10 (e)
Para obtener la resultante de la fuerza transmitida podemos aplicar
.p(z) = -Mi s, x(z) = -tAi r - Bci 8h r (a)
•ecuación (103) del § 59 a la sección EOB de la figura 130, la cual coin-
con la parte inferior de la elipse que se obtiene para ~ = O, que está
entre las hipérbolas 1'/ = 1'/. Y 1'/ = n-TI.. En este elipse
t t t t e
= - i1'/ Y de las ecuaciones (103), (e) y (el) resulta

F., - iFu = i[A7] - (A +


B) ctg '1]~;-~'
= i(A("lI" - 21/0 +
2 ctgl1o) +
2B ctg 11.]

que dimos a A y B valores reales F" es cero y usando la ecuación (e)

Fu = -A(1I" - 2'1j. + sen 21Jo)


, donde pod~mos determinar A cuando conocemos la fuerza total Fu.

( ! componentes de las tensiones y los desplazamientos se deducen fácil-


aplicando las ecuaciones (109), (110) Y (111). La primera da
FIG. 130. ti eh ~sen7]
a~ + a. = e eh 2~ - cos 211
en las que A y B son constantes reales y z = e ch C. Tenemos entonces
valor de O'i¡ en el contorno hiperbólico· se obtiene haciendo 1/ = 1/0
iA 'esta expresión. Su valor máximo -2Afe sen 1'/0 se da en los puntos
1/;' (z) = -...",..-:--.--:-
2cshs'
a ~ = O Y ha sido expresado por Neuber l en función
radió de curvatura de la hipérbola en su «cuello.). Este mismo autor
De la ecuación (103) del § 59 se deduce que sobre el contorno hiperbólico " resuelto también, por otro método, los casos en que la placa es sometida
'Y} = 1/0 no actuará ninguna fuerza, si la función , flexión y a esfuerzos tangenciales.'
1/;(z) + zf'('l) + X'(z) (e)
65. Coordenadas bipolares. Los problemas relativos a contornos
es constante en él, o lo que es equivalente si lo es su conjugada, que como m;uJlU~'"no concéntricos, incluyendo el caso de un agujero circular en
se deduce de (a) y (b) es placa semiindefinida, requieren generalmente el uso de las eoorde-
bipolares ~, 1'/, que vienen definidas por:
l··iz· ch f
A 'f/-21~- ( 21 A + B) i ctgh e (el)
z ia ctghir
= (a)

En la hipérbola 1/ = 110 tenemos que/; = e- 2i'Y}0 Y la expresión anterior e i;) Y despejando eF se


se convierte en
A7]o - -lA sen 27]0 - (.jA cos 2'1jo +'iA + B){'ctgh r (b)

, Este problema (también el caso en que las cargas son tangenciales) ha sido resuelto
• Loc. cit. Para 13 comparación de los resultados dados por, Neuber con los obtenidu'
por A. A. Griffith, Tech. Rept. Aeronaut. Researeh C=TII. Gran Bretaña, 1927-1928, vol. Il,
los ensayos fotoelásticos y úe fatiga úe placas con entalladuras y árboles con ranuras véase
pág. 66&; y H. Ncubcr, Z, angew, Math. Mech., vol. 13, .pág. 439, 1933; o Kerbspamlu1Igslehre,
E. Petersol1 y A. M. Wahl, J. Applied Mec/¡all;cs, vol. J, pág. 15, 1936. S. Timoshenko.
pÁg. 35, Berlín, 1938. ,, 01 Materials, 2:0 . ed., vol. 2, pág. 340 y M. M. Frocht, .P/¡oto-elasticity, vol. 2.
240 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILINEAS 241
La cantidad z + ia está representada en el plano .xy por el segmento que .todos los puntos del plano es el de - 17. a 17.. Las tensiones y desplaza-
une el punto -ia con el z, ya que este segmento tiene por coordenadas serán entonces continuas en los puntos de ese segmento, si vienen
las partes real e imaginaria de esa cantidad, la cual podrá ser representada ,,.,..· .. ",..n1'''rI'n'' por funciones periódicas en r¡ de período 2n.
entonces por 1"1 e'·' donde rt es la longitud del segmento y 61 el ángulo . Separando las partes real e imaginaria en la ecuación (a) se obtiene'
que forma con el eje x (fig. 131). De forma semejante z - ia es el segmento
que une los puntos ia y z y puede ser representado por rze'o, (fíg. 131). x = a sen 7J a sh ~
(ti)
La ecuación (b) se convierte entonces en che-cosr¡' y=;= ch e-COS?)

~ + il1 = lag (!:! eif,e-¡f,) = log!:!.


,.~ r2
+ i(lh - /J s) ecuación (a) tenemos:

(e)
de forma que
.t = lag!:!,
f:t
(e)
(f)
Como puede verse en la figura 131 el ángulo formado por las rectas que
unen los (¡polos» -ia e ia con z es igual a Eh - es cuando el punto z está· 66. Soluciones en coordenadas bipolares. Consideremos ahora
·problema de un disco circular, en el ~que existe un orificio excéntrico,
a una presión Po exteriormente y a una presión p¡ en el interior
agujer0 2• Las componentes de la tensión obtenidas, serán válidas tam-
para el caso de un tubo cuyas secciones exterior e interior sean
excéntricas.
con tomo exterior e interior las circunferencias de la familia
correspondientes a ~ = ~o Y ~ = el
respectivamente (dos cir-
· ." tales han sido representadas con trazo grueso en la fig. 131).
· la expresión de y en las ecuaciones (ti) del § 6S se sigue que los nl-
. de estos círculos son a cosh E" y a cosh El y que sus centros distan
e. y a ctgh $1 del origÉm, de forma que conocidos los radios y In
. entre los centros se pueden determinar a, ~o y ~,.
recorrer en sentido contrario al de las agujas del reloj cualquier
$ = cte., empezando por 'el punto que esté en el eje y
y la figura 131, la coordenada r¡ varía con continuidad desde -;re a :n;. En
1<'10. 131 ~L1'><"'U<;¡""'" las funciones que den las tensiones y los desphlzamientos
tomar los mismos valores para r¡ = :n; y r¡ = -:- :n;, cosa que se con-
a la derecha del eje y e igual a -(el - 6a) cuando está a la izquierda. Se
si son funCIones periódicas en 1/, con período 2:n;. Son por lo tunto
sigue de ello que las cu~vas ?) = cte. son arcos de circunferencia que pasan
Topiados, los potenciales complejos 1JI(z), X(z) del tipo
por los polos. Varios de ellos están representados en la figura 131. A la
vista de las ecuaciones (e) está claro que las curvas ~ = cte. son los lugares eh 71t;, sn 7/t; (a)
cuyos puntos son tales que r¡{ra = cte. Estos lugares son circunferencias
que rodean al polo ia si rt/ra > 1, es decir, si ~ es positiyo y al polo -ia los que TI es entero, ya que cumplen los requisitos citados. Otro tanto
si 1; es negativo, Varias circunferencias de éstas aparecen en la figura 131. con sus derivadas respecto a z, por cumplir dt;/dz [ecuación (e),
Forman una familia de circunferencias coaxiales teniendo a los dos polos 65] esa propiedad.
por puntos límites. 1 Véase la deducción de fa ecuación (e) en el § 54.
La coordenada r¡ pasa del valor n al -:n; al cruzar el segmento de eje y .' 1 La solución original, expresada mediante unu función de tensión real, fue obtenida por
que une los polos y el intervalo de valores que toma en la representación .: B. Jeffery, Transo R0y.. Soco (Londo1l), serie A, vol. 221, pág. 265, 192"1.
242 TllomA DE LA EI.ASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COOIlDEN.jDAS CURVILINEAS 243
Si aplicamos las ecuaciones (103) y (104), en las que hemos intro- del témlino en cos 'l} al igual que ocurre con la función (b). Esto
ducido las funciones (a), a c1.1alquier circunferencia ; =;= cte. del disco, sucederá con los potenciales complejos (d) si tomamos C' = ae,
obtenemos que a causa de la periodicidad de las funciones, la fuerza y teniéndose con estas restriccione's funciones más sencillas que son,
par correspondientes son cero, resultado éste, que por razones de equi- adecuadas para nuestro problema.
librio, ha de ser cumplido también por la solución completa. por lo tanto .
Para la obtención de la misma haremos uso de la función x(z) = aDr;,
en la que D es una constante. Empleando de nuevo las ecuaciones (103) y
"!pez) = iR eh e, x(z) = aB sh C (e)
(104), vemos que la constante D ha de ser real, pues de no ser así el mo-
mediante las ecuaciones (109), (110) Y las (a) y (j) del § 65,
mento que da la ecuación (104) no sería nulo. Aplicando la ecuación (99)
componentes de la tensión
se comprueba que los deslizamientos que se obtienen, tanto de esta función
como de las (a), usadas indistintamente en lugar de "!pez) o X(z), no pre- ·a('T.' '1>,) = 2B(2 sh ~ cos ~] - sh 2 $ cos 27) (j)
sentan discontinuidades. I 2ir.,,) = - 2B[sh H - 2 sh 2~ ch ~ cos '/ .
El estado equitensional uniforme, de tracción o compresión, que + sh 2:: cos 2'] - i(2 ch 2E ch E sen r¡
formará parte de la solución, se obtiene a partir del potencial complejo - eh U ~cn 2,/)) (g)
'P(z) = Az con A real. La función de tensión real correspondiente es,
como se deduce de la ecuación (97), forma semejante las funCIOnes

r/J = Re(zAz) = Azz = A(x 2 + yO) "!pez) = ie sh 1;, x(z) = ae eh e (h)


que expresada, mediante las ecuaciones (d) del § 65 en coordenadas bipo-
lares, resulta
Aa3 ch ~ + cos r¡ (b) a('T. + a,,) = -2C(1 - 2 ch ~ cos r¡ + ch 2 ~ cos 21]) (i)
ch ~ - cos r¡ a~ + 2i-r;q) ~ 2e[ -ch 2~ + 2 eh 2~ ch ~ cos 1]
- ch U cos 2'] + i(2 sh 2 ~ eh ~ sen r¡
Considerando funciones del tipo (a), con n = 1, se deduce que puesto -- sh 2~ sen 217)] (j)
que la distribución tensional del problema presente es simétrica respecto
Las componentes de la tensión producidas por
al eje y, esas funciones deberán ser elegidas de forma tal, que la función
de tensión correspondiente posea también esa simetría. En consecuencia, x(z) = aDC (k)
podemos tomar

II'(Z) = iB eh!;, x(Z) = B ' sh e (e)


,r. + 6" = O
+ 2iTe,,) = D[sh 2$ - 2 sh ~ cos 1]
con B y E' reales, y - i(2 ch ~ sen '1 - sen 27/)J (l)

'P(z) = iC sh ~, x(z) = C' eh e (d)


correspondientes al estado equitensional uniforme
con e y e' reales
Aplicando la ecuación (97), se obtiene la función de tensión real co- tp(z) = Az (m)
rrespondiente a (e), la cual será: por

aB sh ~ ch 4 cos 7J -
sh ~ sen 2 7J O"~ + a" = 4A, a" - al; + 2iT." = O
che-cosr¡
+ E' sh; ch ~ cos r¡ - sh ~ cos 2 r¡
ch~-cos'] a. = (J" = 2A, t'¡" =0. (11)

Toma~do B ' = aE, los términos en sen" 7/ y coso 7/ de los numeradores -La solución de nuestro problema puede obtenerse superponiendo
dejan de depender de 'l} y el numerador completo depende de r¡ solamente estados tensionales representados por los potenciales complejos (e),
244 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS BIDIMENSIONALES EN COORDENADAS CURVILINEAS 245

(h), (h) Y Cm). Reuniendo los términos que representan T~'I en las ecuaciones semiindefinida .con orificio circular sometida a una tracción paraleln
(g), (j), y (l) se obtiene que para que T.'I se anule en los contornos ~ = 1;. recto de la misma l oa ·su propio pesoa y placa indefinida con dos
y l!. = ~l se han de cumplir las ecuaciones; o con uno solo formado por la i:ptersección de dos círculos 4•
Asimismo, con y sin coordenadas bipolares 5, se han resuelto los si-:-
D - 2B ch 2.:.'" 2esh 2~" = O (o)
problemas: disco circular sometido a una fuerza concentrada
D - 2B ch 2:, 2e sh 2.:.'1 = O .. un punto cualquiera 6, disco circular sometido a su propio peso estando
IS¡:IerI0100 de un punto?, disco circular en rotación· alrededor de un eje
que una vez resueltas nos dan :céntI:ic()' y efecto de un orificio circular en la .distribución de tensiones
2B = D ch (1:.1 + 1:.,,) 2e = -D ah (~I + ':,,) (P) placa semÍindefinida sometida n una fuerza concentrada en su
ch (l:.1 - ·U' ch (l:.¡ - '1:... )
La tensión normal (1., que se obtiene restando de la ecuación (f) la parte
real de la (g) (y haciendo lo mismo con los otros pares de ecuaciones) ha . Otras coordenadas curvilíneas. La ecuación
de ser igual a -Po en el contorno ~ = ~D Y a -PI en el borde 1; = 1;1'
De estas condiciones y ~ustituyendo los valores de B y e, dados por las
ecuaciones (P), se deducen las dos ecuaciones

2A
D
+ -8h Z
l!."tgh(l;¡ - ';,) -Poi x = (e< +
abe-~) cos 71 + acsa- s• cos 371
a y = (e< - abe·") sen tI - ac:~e-3< sen 371
2A - D sh2 ¿:¡tgh(l!., .1',,) = -PI
a a, b Y e son constantes, nos da curvas 1; = cte. a las que se puede
que resueltas nos dan tomar diversas formas ovaladas, incluyendo cuadrados de ángulos
!-,uuut::,,,uu,,. El efecto de un agujero tal, en una placa sometida a tracción
'P" sh ~¡ + PI sh 1:."
2 a
A l sido estudiado (empleando una función de tensión real) por M. Greens-
= - "2 sh 2 1;1 + sh2 Co, Mediante una generalización de estas coordenadas A, E. Greenll ha
D _ _ (Poi - PI) ctgh (1;1 - 1:.,,) la: solución para el caso de un agujero triangular de esquinas
- a sh2 1;1 + sh 2 .;" ;U~"l\H;<lU<" y haciendo uso de otra transformación <:le coordenadas, para
. de un agujero perfectamente rectangular.
Estas ecuaciones junto con las (P), completan la determinación de los
potenciales complejos. Cuando Po = O la tensión periférica en el orificio Las coordenadas curvilíneas dadas por la expresión
viene dada por z = 1; + iale'!; + ia.e'2' + ... + ia"e'"¡
. (rr,,). <. = -PI + 2p,(sh2 I;¡ + sha ¿:,,)-I(ch ¿:I la que al, a2, ... , a", son constantes reales han sido aplicadas por C. We-
- cos ,¡)[sh ~1 ctgh (~, - EtI ) + cos 1f] . al caso de· una placa semiiIldefinida. de borde ('dentado». Tal es el
1 • Véase el§ 32.
expresión, cuyo valor máximo ha sido dado ya en el § 26 • 'R. D. Míndlin, Proc. A.S.M.E., pág. 619, 1939.
G. B. Jeffery2 ha ·dado una forma general de la función de tensión en 'T. Poschl, Z. G/lgew.l'vIath. Mech., vol. 1, pág. 174, 1921 Y vol. 2, pág. 187,1922. Véase
coordenadas bipolares. Los potenciales complejos correspondientes se C. Weber, ihEd., vol. 2, pág. 267, 1922; E. Weínel, ¡bid., voL 17, pág. 276, 1937; Chih
Líng, J. Applied Phys., vol. 19, pág. 77, 1948.
obtienen fácilmente y comprenden las Ílmciones consideradas aquí, junto • Chih Bing Ling, ibid., pág. 405, 1948.
con las análogas bipolares de las funciones presentadas en los problemas .• R. Sen, Bull. Ca/culta Math. Soc., vol. 36, págs. 58 y 83, 1944.
del § 61, cuando se presentan fuerzas concentradas· y. dislocaciones. El "R. D. Mindlin, J. Applied Mecharl;cs (Trans. A.S.M.E.!, vol. 4, pág. A-l1S, 1937.
'R. D. Mindhn, J. Applied Physics., vol. 9, pág. 714, 1938.
método ha sido aplicado a los siguientes problemas: placa semiindefinida .• R. D. Mindlin, Phil. Mag., serie 7, vol. 26, pág. 713, 1938.
sometida en un punto cualquiera a la acción de una fuerza concentradaS, ., A. BnrjRn.ky, Qua,'. -1pplied Matlr., vol. 2, pág. 16, 1944.,
.. ,,, QuaTt. Applied ¡\tlath., wl. 2, pág. 60, 1944. Ve."" tambIén V. Morkovin, ibld., pág. 350,
I Un estudio completo del valor máximo ha sido realizado por' Coker y Filon, loe. cit.
'Loe. cit. u Proc. Roy. Soco ([,olldolZ), sed" A, voL 184, pág. 231, 1945.
• E. Melan, Z. a"gew. Malh. Mech., ·vol. 5, pág. 314, 1925. .' "C. Weber, Z. Ulllf.ew. Malh. Mech., vol. 22, pág. 29, 1942.
246 TEORIA DE LA ELASTICIDAD

caso de entalladuras semicirculares regulanIiente espaciadHs. Cllando la


distancia entre los centros. de las entalladuras es doble del diámetro de
las mismas, la cortcentración de tensión, para el caso en que se aplica una
tracción, viene dada por un factor igual a 2,13. Para el caso de una sola
entalladura el factor es 3,07 (véase el § 33).
N. Muschelisvili '· 2 ha desarrollado un método para determinar los
potenciales complejos a partir de las condiciones de contorno, sin que sea deformaciones en tres
necesario suponer su forma a priori.

1 Math, Ann., vol. 107, págs. 282-312, 1932. Véase también Z. u1Ig//W. Math. Meeh .•
vol. 13, plÍg. 264, 1933. Una exposición de! método ha sido realizada por lo S. Sokolnikoff.
l.eelures cm tile Theory o[ Elastici/y, BTO'W University, 1941.
• El método e.q utilizado por Morl<ovin (véase la nota 10 de la pág. 245). La mayoría
de! trabajo de N. l. Musch"hohvdi y sus colaboradores esm en ruso. Su libro Singuu,r Integral
Equaliolls (2.' edición), que contiene las soluciones de diversos problemas de elasticidad b,-
dimensional, ha sido traducida por los Aeronautical Research Luboratories, Dept. of Sapply
oIld Developernent, Commonwealth of Australia (Traducción núm. 12, 1949). Otra traduc-
ción edItada por 1. R. M. Radok fue publicado por P. Noordhoff, N. V. Groningen, HO,lan- 67. Definición de la tensión en un punto. El estudio realizado
da, 1953. Muscheli§hvili da su método en Somo Bosi, Proble7lls of the Ma/he7llatical T/¡eor\'
nf Elastici/y, 3." edición, Moscú, 1949, traducida por ]. R. M. Rauok y publicado por P. Noord- los capítulos anteriores se ha limitado a los problemas bidimensionales.
hoff, Groningen, Holanda, 1953. Los resultados del tIpO cItado en las notas 10 y 11 de In ;qllsiderelrIlC)S ahora el caso general de la distribución de tensiones en tres
página 245 han sido ya obtenidos por los autores rusos que se citan en este último lIhro. IlrrleI1ISI()n¡~s. Como hemos visto (§ 4) las tensiones que actúan sobre las
caras de un elemento cúbico vienen definidas por las seis componentes
la tensión, las tres componentes normales U:c, a", (J. y las tres tangenciales

FIO. 132

Tu = 'u, 'yo = 7:.". Si en un punto cualquiera, se conocen


= r y ,<,
componentes, podremos calcular mediante las ecuaciones de la está-
la tensión que actúa sobre un plano de orientación arbitraria que pase
ese punto. Sea O un punto del cuerpo cargado y supongamos que se
las tensiones que actúan sobre los planos de coordenadas xy,
yz (fig. 132). Para determinar la tensión que actúa en otro plano cuaI-
que pase por O, tracemos a distancia muy 'pequeña de ese punto,
BCD paralelo al dado, el cual formará con los planos coordenados
tetraedro elemental, BCDO. Como según se ha supuesto las tensiones
248 TEOIUA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES Y DEFORMACIONES EN TlUlS DIMENSIONES 249

varían de manera continua en todo el volumen del cuerpo, la que actúa remplazando los valores de X, Y y Z, de las ecuaciones (112)
sobre el plano BCD, al acercarse éste al origen cuando el elemento se hace Un = UJ,2 + uvm~ + u.n2 + 2TI/.mn + 2r••ln + 2r=u1m. (113)
infinitésimo, tenderá a un límite, que es la tensión correspondiente al plano
paralelo al mismo por el punto O. demos representar geométricamente la
variación de la tensión u" cuan-
Al establecer las condiciones de equilibrio del tetraedro elemental se cambia la dirección de la normal N, 'es decir, la orientación del plano
podrá despreciar las fuerzas másicas, según se explicó en el § 4. Asimismo considera, por medio de un radio vector de dirección N, cuya
podremos dejar de lado la variación de la tensión en las caras del elemento n¡;len:510,au r sea inversamente proporcional. a la raíz cuadrada del valor
pOlO ser de orden infinitesimal, y suponer una distribución uníforrne d~ del esfuerzo, esto es:
tensiones, de for.ma que las fuerzas que actúan sobre el tetraedro se deter- k
minarán multiplicando las áreas de sus caras por las respectivas compo- ,'=--
V¡;,;¡ (b)
nentes de la tensión. Si con A denotamos el área de la cara BCD las áreas
de las otras caras se obtienen proyectando A sobre los tres planos Coor- es una constante. Las coordenadas de la punta del vector serán
denados. x = Ir, y = m.r, ~ = nr (e)
Si N es la normal al plano BCD y escribimos:
l:{e:mI=.Ia¡~anlao en la ecuación (113) el valor
cos (Nx) = t, cos (Ny) = m, cos (Nz) = n (a)
k 2
las áreas de las otras tres caras del tetraedro serán CT n = +-
- r2 (d)

Al, Am, An ,UC'UU'L,;IU.U de la igualdad (h), así como los cosenos directores l, m, n, que
Sean X, Y, Z las componentes de la tensión que actúan en la cara "e"u,''''''' de las expresiones (e), tendremos'
BCD, paralelamente a los ejes coordenados respectivos. La componente
según la dirección x de la fuerza que obra sobre dicha cara será AX y
las componentes de las fuerzas que actúan en las otras tres caras del
tetraedro, en la misma dirección serán --Ala"" -·AmT",y, ·-Am,,% de se hace girar al plano BCD alrededor del punto 0, la extremidad del
manera que tendremos la siguiente ecuación de equilibrio del tetraedro: vect<?r r se mantendrá constantemente sobre la superficie de segundo
representada por la ecuación (114), la cual está perfectamente defi-
AX - Alo-z - .Amr"" - Anr".. =O por el estado de tensión en el punto O. Si cambiamos la orientación
De manera análoga, es decir, proyectando las fuerzas sobre los' ejes y los ejes ~el sistema de coordenadas rectangulares, dicha superficie
y z se obtienen las otras dos ecuaciones de equilibrio y dividiendo luego variará y tan sólo sufrirán modificaciones, las componentes del esfuerzo
(fv, <1z , 7:",y, 7: ... 7: yz , quedando alterados en consecuencia los coeficien-
ambos miembros de cada ecuación por el factor A, podremos escribir
de la ecuación (114).
X = u.l r""m+ +
r:un
Es sabido que dada una superficie de segundo orden como la que
+ +
y = r""l al/m r.un (112)
.nt·.. ~,,,n1r. la ecuación (114), siempre puede efectuarse una transformación
Z = r""l +
TI/.m +
a.n coordenadas que haga desvanecer los términos en que figuran los
Estas son las ecuaciones buscadas, ya que ellas nos permiten deter- de variables, esto es, que podremos hallar una terna ortogonal
minar las componentes del esfuerzo que actúa en un plano cualquiera referencia que origine la desaparición de las tensiones tangenciales,
que pase por el punto O, de orientación definida por sus cosenos direc- que significa que las tensiones resultantes son perpendiculares a los
tores 1, m, 11 siempre que sean conocidas las seis componentes del esfuerzo sobre los cuales actúan. A tales tensiones se las denomina tensiones
11"" Uy , 11., T"v, Tu .. T"" en dicho punto. tmmcibtzles. relativas al punto de que se trata. A sus direcciones, ejes prin-
1 En las ecuaciunes (el) y (114) se emplea el signo más cuando <1" es una tracción y el menos
68. Tensiones principales. Consideremos ahora la componente es una compresIón. Cuando las tres tensiones prinCIpales tienen el mismo sIgno, bas-
normal del esfuerzo, a" que actúa en el plano BCD (fig. 132). Empleando , con tornar un sIgno para los ecuaciones citadas, siendo enlol-'ces la superficie un el1psOlde.
las notaciones consignadas en (a) para los cosenos directores, tendremos las tres teImones prmcipales no tienen el mismo sIgno habrá' que conSIderar los dos signos
(d) y (114). Las superficies que resultan son un hiperboloide de dos hojas y un hiperboloide
u" = Xl + Ym + Zn . una hoja, ambos cq,n el mismo cono aSIntótico.
250 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES Y DEFORMACIONES EN TRES DIMENSIONES 251

cipales y planos principales a los planos sobre los cuales actúan. Se ve en Cada radio vector del elipsoide de las tensiones representa a cierta escala la ten-
seguida que la tensión alrededor de un punto queda completamente de- · sión que corresponde a uno de los planos que pasa por el centro del elipsoide. Para
· determinar este plano emplearemos, además, del elipsoide (116) la llamada superficie
fínida cuando se conocen las direcciones de los ejes principales y las mag- 4irectriz que está definida por In ecuación .
nitudes de las tres tensiones principales.
(117)

69. Elipsoide de las tensiones y superficie directriz. Si se Demostraremos que la tensión representada por un radio vector del elipsoide
de las tensiones, actúa en el plano paralelo al plano tangente a la superficie directriz
adoptan como ejes coordenados, x, y, z los ejes principales, el cálculo de por el punto ~n que la corta. En efecto, In ecuación. del plano tungente a la superficie
las tensiones que corresponden a un plano cualquiera resulta muy simple. directriz en un punto Xn, Yo, :a'n, es . .
Las tensiones tangenciales '"V, 'u, 'U%! son nulos en este caso y las ecua-
(a)
ciones de equilibrio del tetraedro (112) se transforman en
X = rr.l, Y = u"m, Z = u.n (115) ecuación que también puede escribirse así:
Zx+;ny+nz=h (b)
Remplazando los valores. de t, m, n, deducidos de estas ecuaciones en
la conocida relación ¡;.+m" + n2 = 1, tendremos en la cual h ·es la distancia del origen al plano tangente y 1, m, 1I los cosenos directores
.. de dicha perpendicular. Comparando (a) y (h) encontramos
2
X +Y2+ Z 2=1 (116) zon.
0'%2 ul ul' a• .,;:I- (e)
n
Esto significa que si la tensión que corresponde a cada uno de los Llevando esos valores a las fórmulas (lIS) resulta
infinitos planos que pasan por O se representa por un vector con origen X = z,h, Y = y';", Z = zoh
en dicho punto y cuyas proyecciones sobre los ejes sean X, Y, Z, el lugar lo que nos dice que las componentes del esfuerzo en el plano definido por los cose-
geométrico de las extremidades de dichos vectores será la superficie del nos directores 1, In, n son proporcionales a las c[Jordenadas Xo, Yo, 13'0, y, por tanto,
elipsoide cuya ecuación es (116). Esta superficie, representativa de las el vector representativo de la tensión pasa por el punto ~, Yo, .2'0, como se quería
tensiones, se denomina elipsoide de las tensiones. Sus semiejes son las demostrar 1 •
tensiones principales en el punto considerado. Resulta de aquí que la
. tensión máxima en un punto cualquiera es el semieje mayor del mismo 70. Determinación de las tensiones principales. Utilizando
elipsoide, esto es, el mayor de los tres esfuerzos principales correspon- la propiedad de que gozan las tensiones principales, de ser perpendiculares
dientes. . ·á·los planos sobre los cuales actúan, podremos determinar las direcciones
Si dos de las tensiones principales son iguales en valor absoluto el y magnitudes de las tensiones principales si conocemos las componentes
elipsoide de las tensiones es de revolución y si además ellas tienen el mismo· ·(le los esfuerzos que corresponden a tres planos coordenados. Sean 1,
signo, las tensiones resultantes en todos los planos que pasan por el eje .. m, 11, los cosenos directores de uno de los planos principales y S la mag-
de simetría del elipsoide serán iguales y perpendiculares a los planos en ni~ud de la tensión principal correspondiente al mismo. Sus componentes
que actúan. En este caso las tensiones que correspondan a cualquier serán, entonces:
par de planos perpendiculares que se corten en ese eje pueden conside- X =Sl, Y=Sm, Z = Sn
rarse como tensiones ·pÍ"incipales. Cuando las tres tensiones principales
son iguales y del mismo signo el elipsoide de las tensiones resulta ser una ..Remplazando en las ecuaciones (112) encontramos:
esfera y cualquier tema de direcciones perpendiculares entre sí puede ser (S - uz)l - 'T.."m - 'Tz,n = O
considerada como de ejes principales. Si una de las tensiones principales -'1"""Z + (S - uII)m -, '1"u.n = O (a)
es nula el elipsoide de las tensiones se reduce a una elipse y los vectores
representativos de las tensiones en todos los planos que pasan por el punto
-7". .1 - ?'l/.m +(S - rr.)n = O

son coplanares. El estado elástico correspondiente se denomina estado , (JU<J Mohr describe otro método para representar las tensiooes en un punto por medio
·'1, .. r<l'I,,, en su Technische Mechanik, 2." edición, pág. 192, 1914. Puede ",erse también A.
plano de tensión y ha sido ya estudiado en los capítulos precedentes. Cuando . :. F¡¡PII \ 1.. Félppl, Dra>lg wul Z•• ang, vol. 1, pág. 9. Y H. M. ·Westergaard. Z. angew. Math.
dos tensiones principales son nulas se tendrá el caso de una tracción o .. 'J1,," ,,,l. 4, pág. 520, 1924. Al estudiar los problemas bidirnensiones (§ 9) hemos dado
una compresión simples. ... ,.lgulll' .phcaciones.~e los diagramas circulares de Mohr.
252 TBORIA DE' LA ELASTICIDAD TllNSIONES y DE~'ORMAClONES EN TRES DIMENSIONES 253

Para que estas tres ecuaciones lineales y homógéneas en l, m, n tengan pasaremos a determinar l y m de manera que,. resulte máximo. Rem-
soluciones difel'entes de cero es necesario que su determinante sea nulo. :'"plnzando en la expresión (b), 112 por 1 - (la - m2 ), deducido de la anterior
Si calculamos' dicho determinante y lo igualamos a cero, obtendremos , ~cuación, calculando las derivadas ue l~ tensión tangencial T respecto a
la siguiente ecuación de tercer grado en S llamada ecuación característica , ,y a m e igualándolas a cero, llegaremos a las ecuaciones que nos permi-
'. tirán determinar los cosenos directores de los planos en los cuales • es
83 - (u", + CTu + <r.)82 + (rF.CTu + rFyCT, + u~u. - T y•2 - T u 2 - T",l)S , máximo o mínimo; ellas son
, - (l1"o<TyG"8 + 2T!J.T",.:~v - tT.Tu• u'!r•• 2
CT.T",l) = 0(118)
-
2
-

Las tres raíces de esta ecuación nos dan los valores de las tensiones prin-
+
1[(0": - u.) 12 (G"v - 0".)m 2 - HIT; - u.)] = O
(e)
m[(<r", - 0".)12+ (rrv - u.)m 2 - i«1'~ - G".)1 = O
cipales cuya sustitución eIl las ecuaciones (a), cuenta tenida de la relación
f + 2
m .~ n2 = 1, nos permite determinar tres grupos de cosenos di- obtiene una solución de estas ecuaciones haciendo l = m = 0, pero
rectores para los tres planos princip!l1es. , también podemos obtener soluciones diferentes de cero. En, efecto, ha-
.' Ciendo, por ejemplo, 1 = 0, la segunda de las ecuaciones (e) nos da entonces
Es de advertir que la ecuación (118) que permite determinar los valores de las
tensiones principales debe ser independiente de la dirección de los ejes coordena-
" = ± vr¡:. y con m = 0, de la primera de dichas ecuaciones, resulta
dos x, y, z, de manera que los coeticientes encerrados en paréntesis en la misma = ±vrr;. En general no existen soluciones de las ecuaciones (e) con
serán invariuntes. En consecuencia, los coeficientes de la ecuación (118) 'i y m distintas las dos de cero, puesto que en este caso las expresiones con-
tenidas en los paréntesis no pueden anularse.
(a) 11'~ + +'11",11'. ',:', ' Repitiendo los cálculos anteriores, eliminando 7n y 1 de (b), obtenemos
(b) d';r.rF"+ O'ur:1'; + O";r.U,. - T:;:i - T IIB' - r:;;.' ,Ías direcciones de los planos en los que r es máxima o mínima, direcciones
(e) O"::ff'ur1'% + 2T;t:¡/TflsT~:. - rr.T1J~2 - CTflTx~2 - o's.,:,,2 , cosenos directores damos en la tabla siguiente:

permanecerán .constantes cualquiera que sea el sistema de referencia. COSENOS DIRECTORES DE LOS PLANOS DE Trnax Y Tnun
~sto nos dice que la suma a", + Uy + u, de las tres componentes normales de la
tenslOn .en un punto, correspondiente a tres direcciones perpendiculares es cons.
tante e Igual n la suma de las tensiones principales en el mismo punto. '
1= O O ±1 O ±v'1 ±-v'T
71. Deteuninación de la tensión tangencial máxima. Supon- m= O :l::1 O ±-!I O ±~
, gamos que x, y, z son 105 ejes principales o 10 que es 10 mismo (1z, ull , (1. las
tensiones principales y l, m, n los cosenos directores de un plano dado. n= ±1 O O ±.J1 ±vT O
El cuadrado de la tensión resultante, correspondiente al mismo será,
con arreglo a las ecuaciones (115)
Las tres primeras columnas nos dan las direcciones de los planos de
82 = X 2 + yz + Z.2 = u: 2l2 + ITy2m2 + tT.2.n 2 coordenadas, los cuales coinciden, conforme al supuesto original con los
El cuadrado de la componente normal de la tensión en el mismo , planos principales; como para éstos la tensión tangencial es cero, es un
plano es, según la ecuación (113) rrl.Ínimo la expresión (b). Las columnas restantes dan los plunos que,
'conteniendo á los ejes principales, bisectan a los ángulos formados por
(a) ,los otros dos ejes principales. Remplazando en la expresión (b) los cosenos
, 'directores que corresponden a estos tres planos, llegamos a los siguientes
El cuadrad.o de la tensión tangencial en el mismo plano deberá ser
entonces ",:valores de las tensiones tangenciales correspondientes a los mismos:

(b) T = ±}(ITg - rF.), (119)


Eliminaremos ahora en esta ecuación uno de los cosenos directores,
, :r,.o que nos demuestra que la máxima tensión tangencial actúa en el plano
verbigracia m, empleando para ello la relación
, bis~ctor del ángulo que forman las tensiones principales máxima y mínima
IZ+m2+n2 = 1 , que su valor es, igual a la semi diferencia de las mismas.
TENSIONES Y DEFORMA.CIONES EN TRES DIMENSIONES 255
254 TEOR1A. DE LA ELASTICIDAD

, Si los ~jcs x y z de la figura 132 tienen las direéciones de las tensiones prin- en (b) los valores de x, y, z,dados por las ecuaciones (a). De este
cipales y SI OB = OC = on, de forma tal que In normal N 11 la cara oblicua del puede fácilmente demostrarse que los planos paralelos conservan
tetraedro tenga los cosenos directores I = m = 11 = l/...!3la tensión normal a esta paralelismo después de la deformación y que las rectas paralelas lo
cara, dada por las ecuaciones (a) o (113) es igual a: siendo una vez. deformado el cuerpo a que pertenecen.
a'n = ic"z + au + rr.) (d) Una superficie esférica de la barra, cuya ecuación es:
siendo llamada «tensión media», La tensión tangencial sobre esa misma cara dada (e)
~W~ ,
..' = t(.,..2 - rr~" + 0',") -l(a'~ + O'u + cr.» de aquélla, se transforma a consecuencia de la
pudiendo escribirse en un elipsoide cuya ecuación se obtiene remplazando en (e) las
."r,r...~i."n .." x, y, z deducidas de 11:\5 ecuaciones (a), hecho lo cual tenemos

X/~ y'2. 15'2 _ 1


o también
r2(1 + + r2(1
E)2 _ JlEF + r2(1 _ VE~2 - (d)
r = t[(O': - O'a)" + (rru - 0'.)' + (a'. - rr.)'!
Rec:ibe el nombre d,e «tensión tangencial octoédricao pOI' ser la C'dra sobre la cual es, que la esfera de radio r se ha transformado en un elipsoide cuyos
actúa, l~ correspond1ente a un octaedro regular con vértices en los ejes, Esa tcnsión senlÍei,es son r(l + E), r(l - vE), r(1 - vE).
es conSiderada con frecuencia en In teoría de la plasticidad, ,La extensión axial y el acortamiento transversal considerados en lo
antecede no son más que un caso particular de una defonnación de
72., Deformación homogénea. Nos ocuparemos tan sólo de de- tipo más general. en el que las componentes u, v, w, ·del desplazamiento
fo~acl0nes pequeñas .que son las que prevé el ingeniero se han de pro- funciones lineales de las coordenadas, deformación que -como puede
~uclr en las construCCiones. Los desplazamientos elementales de las par- por un razonamiento análogo al anterior- tiene las mismas pro-
tlculas de un cuerpo deformado serán resueltos por lo general en sus plf~aa,ae:s que hemos hallado para el caso de la tracción simple, esto es,
componentes u, v, w, paralelas a los ejes coordenados x, y, z respectiva- las rectas y planos se conservan como tales después de la deformación,
mente y se supondrá que dichas componentes son cantidades infinite- los planos y rectas paralelos también conservan su paralelismo y que
simales que v~rían en forma continua en el ámbito del cuerpo. esfera se transforma, a raíz de la deformación, en un elipsoide. Según
Sea, por ejemplo, el caso de una barra prismática fija por su extremi- ,demostrará más adelante, en toda deformación homogénea. como se
...dad superior (fig. 133) Y sujeta a extensión axial. Si E es el alargamiento ,. a las de este género, todos los puntos del cuerpo deformado
es~ecífico de la pieza en la dirección x y vE el correspondiente acorta- . ·experimentan igual deformación en una dirección dada cualquiera y dos
. -mIento transversal, las componentes del desplazamiento de un punto de ".el.enlel1tC)S geométricamente semejantes igualmente orientados se conser-
coordenadas x. y, z serán evidentemente, geométricamente semejantes después de la deformación.
u = EX, v = -VEY, W = -VEZ En casos más generales, la deformación varía de punto a punto -del
deformado. Por ejemplo, cuando una viga es f1ectada, las dilata-
z Llamemos x', y', z' a las coordenadas del mismo punto . y acortamientos de las fibras longitudinales varían con su distancia
una vez producida la extensión. Sus valores serán . la capa de fibras neutras. La tensión tangencial en los elementos de un
· eje circular, sometido a torsión, es proporcional a las distancias que los
X' = 3;' +U = x(1 + E), 'U' = Y + V = y(l - VE), · separan del eje de la pieza, En tales casos de deformación, no h~mogénea,
+ W = 15(1 - VE)
15' = 15 (a) · es necesaIÍo efectuar el estudio analítico de la defonnación en el entorno
· de un punto.
y si consideramos en la barra, antes de ser deformada
una superficie plana tal como la que representa la ecua~ ., 73. Deformáción en un punto. Para estudiar la defonnación en
eión . ·la vecindad de un punto O de un cuerpo deformado (fig. 134), conside-
(b) remos un pequeño ele!Tlento lineal 00l> de largo r, cuyos cosenos direc-
'. t,qres llamamos t, m, n. Sus proyecciones sobre los ejes de coordenadas,
los puntos de aquélla pertenecerán después <.le la defor-
Fu. 133 mación a un nuevo plano, cuya ecuación se obtiene sustitu- '"o:c = rl, oy = rm, (a)
256 TENSIONES Y DEFORMACIONES EN TRES DIMENSIONES 257
TEORIA DE LA ELASTICIDAD

· dadas en (e) así que si llamamos € al alargamiento específico del elemento


representan las coordenadas del punto 0 1 con relación a los ejes x, y, z,
: de que se tnlta, se tendrá:
que pasan por el origen O. Si u, v, w, son las componentes del trayecto del
punto O durante la deformación del cuerpo, las que corresponden al
(r
oU
+ er)2 == (lix + iJx ox + ay oy + oZ oZ
OU . )2
oU

z Bu au iJV)2
+ ( oY+élxOX+¡Jyoy+ozOZ
iJw oW OW)2
01 + ( oz+ ax OZ + ayOY + oz Ilz

o bien, dividiendo por r y teniendo en cuenta las ecuaciones (a)

Flo.134

desplazamiento del punto vecino 0 1 estarán dadas por las sigUÍl'lflcll


ecuaciones:
au au au
UI + ax lix + ay ay + élz /jz
=u
av av Bv · Recordando ahora que tanto € como las derivadas parciales óuj6x, •.• /5wl <iz,
Vl = V + ex lix + ay By + iJz liz (b)
son cantidades muy pequeñas cuyos cuadrados y productos pueden ser
. aw aw aw · despreciados y simplificando en razón de ser, f + m" + n" = 1, se
Wl = W + ~ 'ox + - oy + - 6z
élx ay élz deduce:

Se supone que las cantidades "x, !5y, 6z, son infinitnmente pequeñas f= l2 au + m2 av + n2 ow + lm (iJU + é!x
av) + in (iJU + aw)
y, por lo tanto, los términos de grado superior al primero, así como sus az ay oZ ay OZ ax
productos, serán infinitésimos de orden superior y como tales pueden
despreciarse en (b). Lns coordenadas del punto O, después de la defor-
+ mn (aviJz + aw)
iJy
(120)

mación, serán:
éJu ou OU · Relación que nos dice que podrá calcularse el alargamiento de un elemento r
0:1: + UI - U = 6x + ""x ax + - ay + - 8z
oy OZ ·'slempre
, ' GU ,.. ((JU
que se conozcan las expreslones-;-, -;- -1 - , etc. L a ecua- ov)
av av av '. . <.x ely (Ix
+ VI .'- U =
lr¡¡ ay + -a ox + -a liy + - OZ
x y az
(c) 'ción (120) puede expresarse en forma allis simple si empleamos las si-

OZ + W¡ - w =
ew aw oW
oZ + - lix + - oy + - liz
guientes notaciones:
é!x é!y OZ
dU aw
iJx = E~, Tz'= E.
Estas coordenadas, como se ve, son funciones lineales de las prImI- (e)
tivas, óx, ay, (jz, y conforme a la definición dada en el § 72,'ln deformación ¡Ju Bv av Bw
de un elemento muy pequeño de un cuerpo en el punto O puede entonces ay + ax = "(;v, é!z + ay = "(".
considerarse como homogénea.
Pasemos a considerar el alargamiento experimentado por el elemento así:
r .. El cuadrado de su longitud después de la deformación será igual a la (121)
suma de los cuadrados de las nuevas coordenadas del punto O, que están
17 -TEOtU/t, na lA P.I.A..'n'Je-IOAn
TENSIONES Y DEFORMAClONES EN TRES DIMENSIONES 259
258 TEORIA DE LA ELASTICIDAD

El significado físico de las cantidades (" ... , Yv~ ... ha sido explicado en el . un punto determinado. Trl1-cemos para ello en la dirección de cada ele-
§ 5 Y según se indica en el mismo Ex, f y , E.. son los alargamientos espe- mento lineal, tal como r (fig. 134), un radio vector cuyo valor sea:
cíficos en las direcciones x, y, z, en tanto que Yxv, Y,m l'uz son las dis- Ca)
torsiones correspondientes a esas mismas direcciones. Como en dicho
párrafo se anuncia, queda aquí demostrado que el alargamiento de un
elemento cualquiera que pase por el punto O podrá ser calculado, apli- Razonando, entonces, como se ha indicado en el § 68, concluimos
cando la ecuación (121), en función de las seis componentes de la defor- . que el lugar geométrico de las extremidades de los radios vectores corres-
mación. · pondientes es la superficie de ecuación.
En el caso particular de una deformación homogénea las componentes
u, v, w, del desplazamiento, son funciones lineales de las coordenadas ± k2 = e,,:¡;2 + Euy') + e.z 2 + "Iu.Yz + "I".xz + "I:r:uXY (123)
de manera que, según las ecuaciones (e) las componentes de la deformació~
Esta superficie queda completamente determinada por el estado de
son constantes en todos los puntos del cuerpo, esto es, que, en dicho
caso, todos los elementos del cuerpo se deforman igualmente. ·deformación en el punto considerado y es independiente de la orientación
de los ejes coordenados rectangulares. ~s siempre posible dar a estos
Al estudiar la defonnación en el entorno de un punto O es muchas veces nece- ejes ortogonales, direcciones tales, que los términos de la ecuación (123)
sario saber cuánto varía el ángulo que forman dos elementos lineales que pasan por que contengan productos de variables desaparezcan, lo que entraña la
ese punto. Sean 1 112" n, los cosenos directores del elemento r (fig. 134) después .. nulidad de las variaciones angulares en tales direcciones. Estas han re-
de la deformación," y 1,',71/,', n¡', los de otro elemento r' caracterizado por valores. cibido el nombre de ejes principales de deformación; los planos corres-
l', m', n' antes de la deformaci6n. Aplicando las ecuaciones (e) y (a) y considerando fi
corno cantidad infmitésima, tendremos como expresiones de los primeros pondientes, pla1UJS principales de deformación y las deformaciones respec-
tivas, deformaciones principales. De todo ello resulta evidente que los ejes
1, = Ií;¡;
r(!
+ 111 - U=
+ E)
1 (1 _•+ élU)
lJ:¡;:
+ m lJu; + n ~
ay az
· principales de deformación siguen siendo perpendiculares después de
.. ocurrida la deformación, de manera que un paralelepípedo rectangular
+ 11, - ) v =1-
líy iJv +m ( 1 - . +au) av . de caras paralelas a los planos principales se conservarán como tal después
m., = +. r
(1
a:¡;: ay- +n-
a21 (J)
de la deformación. En general sufre una pequeña rotacióll.
líe + w, - w iJw aw ( aw)
nl = r (1 +.) - ... 1- az + m -ay + n 1 - • +-as
Si los ejes x, y y z coinciden con los ejes principales de deformación,
ia ecuación (123) se transforma en: .
y o~ras tanta~ ~cuacionesanálogas pnm los cosenos directores del elemento' r'. La ·co- ± k2 = f',X2 + E"yZ + E.Z2
noclda ecuaCIOll que da el coseno del .ángulo formado por dos direcciones, aplicada
a las de los dos elementos después de la deformación, nos da: En este caso, la dilatación de un élemento cualquiera cuyos cosenos
.directores sean t, m, n, valdrá, con arreglo a las ecuaciones (121):
COS (1'r') .= 1,1,' + m,m,l + n,n, l
(124)
Las ecuaciones (f) !lOS darán, considerando como cantidades muy pequeñas los alar-
gnmien tos E y fi' en dichas direcciones, . y según la ecuaclon (122) la deformación tangencial o distorsión corres-
pondiente a dos direcciones r Y r', perpendiculares entre sí, estará dada
. cos (rr') = (W + 111m' +..?1.n') (1 - _ - .') + 2(.,ll' + _.mm.' + .,nn')
por la fórmula:
+ 7",(1nn' + m.'n) + 7z,(nl' + n'l) + -r•• (ll1t + l' m) (122) (125)
Si las direcciones r y r' fueran perpendiculares entre sI, resultar!a:
Resulta de lo que antecede que la deformación en un punto está com-
U' + mm' + nn.' = O . pletamente determinada si se conocen las direcciones de los ejes prin-
. cipales de deformación y las magnitudes de los alargamientos principales.
y entonces la ecuación (122) da el valor d~ la distorsión que sufre el ángulo formado
La determinación de unos y otros se efectúa de una manera análoga a la
por esas direcciones.
· que se explicó en el § 70. Puede también demostrarse que cuando el sistema
74. Ejes· principales de deformación. La ecuación (121) nos · d~ ejes coordenados experimenta un giro, la suma f" + €JI + f. permanece
constante. Como ·~e sabe, el significado físico de esta suma es simple:. se
permite ·interpretar geométricamente la variación de la deformación en
260 TEORIA DE LA l!L~STlCIDAD TENSIONES Y DEFORMACIONES EN ,!,RES DIMENSIONES 261

trata de la dilatación cúbica causada por la deformación que se produce emos escribir las 'ecuaciones (a) en la forma
E. oX + iy"" ay.+ h .. OZ - lA_ By + iJ)1I 021
alrededor de un punto. U¡ - u =
VI - V = h%fl IJ:¡; + Ev By + hu. oz - w" óZ + "'. ax (b)
75. Rotación. En general cuando un cuerpo se deforma, un ele- Wl - W = -tr•• óx + -tY1I. ay + 'Es oz -' WlI &¡; + ay(0)",
mento cualquieru de superficie cambia de forma y sufre una traslación
y una rotación. A causa de la deformación transversal las aristas no sufren descompone los desplazamientos relativos ~n dos partes: una que
la misma rotación y es necesario entonces definir, qué se entiende por depende de las componentes de la deformación y otra que depende
rotación del elemento. Un elemento rectangular cualquiera puede llegar nIC:aIlCleIlte de las cantidades W ZI W y , al ••
a tomar la forma, posición y orientación finales mediante la aplicación Podemos ahora demostrar que CO:Z:I COy. co. son, de hecho, las componen-
al mismo, en su estado inicial (no deformado) de las tres operaciones de la rotación 3 más arriba citada. Consideremos la superficie defi-
siguientes. por la ecuación (123). El cuadrado de un radio cualquiera es inversa-
proporcional a la deformación unitaria del elemento lineal de la
1. Se aplican las deformaciones E" Ey , E'., )'xy, y ... , )'yz al elemento, dirección y la forma de la ecuación es:
el cual· está orientado de' forma tal que his direcciones de las deformacio-
nes principales no giran. F(z,y,z) = constante (e)
2. Se traslada el elemento hasta que su centro ocupe la posición final.
3. Se gira el elemento hasta que tome su orientación final.
consideramos un punto vecino ex + dx, y + dy, z + dz) situado en
superficie, se cumpliní la relación:
La rotación de la operación 3 es evidentemente la rotación de las aF da;
- + -aF aF
dy + - dz = O (d)
direcciones de la deformación principal, siendo, por lo tanto, indepen- OX iJy iJz
diente de [a dirección de [os ejes x, y, z. Debe poder ser evaluada si se
conocen los desplazamientos U , V, w. Por otra parte es evidentemente .' El desplazamiento dx, dy, dz, se efectúa en una dirección cuyos cosenos
independiente de las componentes de la deformación. dlrectores son proporcionales a dx, dy, dz, y las tres cantidades oF¡ox,
Puesto q\le la traslación del elemento no tiene ningún interés para oF¡oz, definen igualmente otra dirección de cosenos directores
nosotros, podemos considerar, como en el § 73 Y en la figura 134, el des- a ellas mismas. El primer miembro de la ecuación (á)
plazamiento relativo de un punto 0 1 respecto al centro O del elemento. entonces proporciomü al coseno del ángulo formado por esas dos direc-
Este desplazamiento viene dado por las ecuaciones (b) del § 73. las cuales, por ser ese coseno cero, serán perpendiculares entre sí.
que dx, dy, dz, repre~enta un elemento cualquiera del plano
Ul-u=-ax+-oy+-o¡:
vU vU vu a la superficie, la dirección representada por oF¡ox, BF¡oy, aF¡oz,
Bx ay vz la de la normal a la misma.
Bv oV oV
VI - V = -
ax OX +-éJy ay + -éJz oz (a) En el caso estudiado F(x, y, z) es el segundo miembro de la ecuación
(123). En consecuencia:
Wl -
iJw
W = 8z 8x + oW vW
ay ay + az 021 aF'
! l = 2e,;t:
uZ .
+ 'Y""Y + 'Y:z=Z
Sustituyendo la expresión (e) del § 73, de las componentes de la defor- iJF
mación, e introduciendo igualmente la notación! ay = 'Y",yX + 2~yy + 'Yv,Z (e)

iJF
! (OV .: . éitt ) = '" (126)
éJz = 'Y""X + 'Yv'y + 2E.Z
2 ax ay •
Habiendo trazado )a superficie definida por la ecuaClon (123) con e[
1 Examinando In figura 6, se ve fácilmente que o1·/~.-.: y - lila)', que entran en la expresión punto O como centro (fig. 134) podremos identificár lix, liy, {¡z [ecuacio-
., (11, son las 'rotaciones, en el sentido de lns agUjas del reloJ, sufrIdas por los elementos li-
"nes (b)] con :.;, y, z [ecuaciones (e)].
neales O'A', O'B'. a partir de sus posiciones miclules OA, 08; (lJ:t es) por Jo tanto, la media
de estas rotaciones y W,& y WIJ tienen el mismo significado en sus planos respectivos. Consideremos"l!hora el caso particular en que IJJ", COy Y COz son nulos. Los
262 TEORIA DE LA ELASTICIDAD

segundos miembros de las ecuaciones (e) y (h)'son entonces idénticos salvo


en un factor 2. Resulta de ello que el desplazamiento definido por las
ecuaciones (b) es normal a la superficie definida por la ecuación (123).
Esto significa que si consideramos al punto 01 (fig. 134) como perte-
neciente a la superficie, su desplazamiento es nonnal a la misma. En con-
secuencia, si DO, es uno de los ejes principales de deformación, o lo que Teoremas
es lo mismo uno de los ejes principales de la superficie, el desplazamiento
de 01 se efectúa en la dirección de 00" deduciéndose que 001 no gira.
El desplazamiento correspondiente será entonces del tipo 1, anterionnente
citado.
Para completar el desplazamiento debernos volver a introducir en las
ecuaciones (b) los térmhtos en w"" CUy, ro., los cuales corresponden a una
pequeña rotación de conjunto cuyas componentes según los ejes x, y, Z, son
w", Wy, w. respectivamente. Resulta entonces que estas cantidades cuya
expresión viene dada por las ecuaciones (126) expresan la rotación del
tipo 3 es decir, la rotación, en el punto 0, de los ejes de deformación.
Tales cantidades reciben el nombre de componentes de la rotación.
Ecuaciones diferenciales de equilibrio. En el § 67 hemos
Problema el estudio de· la tensión en un punto de un cuerpo elástico.
... ,,,,.<vuauv

1. ¿Cuál es la ecuación, del tipo f(x, y, z) = O, de la superficie, de centro O, proponemos efectuar, ahora, el análisis de la variacióm de la tensión
que se convierte en una esfera x" + y" + z" = r al sufrir la deformación homo- 'cambiar la posición del punto. Para ello debemos establecer las con di-
génea del § 72? ¿De qué tipo de superficie se trata? de equilibrio de un elemento, de forma de paralelepípedo rectan-

FIG. 135

cuyas dimensiones son: 6x, óy, (lz, como el que se presenta en la


135, en la cual se indican las componentes de la tensión que actúan
. cada cara, así como sus sentidos positivos. Tomaremos aquí en consi-
las variaciones que experimentan dichas componentes, como con-
de los incrementos infinitamente pequeños, {¡x, t5y, t5z, de los
adas y al calcular las fuerzas actuantes en el elemento, consideramos
las caras son infinitamente pequeñas, de man.era <lue la fuerza que
irn~splon.de a cada cara se obtiene multiplicando por su área la tensión
baricentro r~spectivo. Llamando 1, 2, 3,4,5, 6, a los centros de las
(fig. 135) designamos (a",)l al valor de a", en 1 (a",h al valor de a, en 2,
264 'rEORIA DE LA ELASTICIDAD TEOREMAS GENERALES 265
etcétera. El símbolo d., representa el valor de esta componente de la tensión las ecuaciones (127), de manera que la solución satisfaga a las
eri el punto x, y, z. ,GUJlU•• <,;lVnes de limite o condiciones de borde (128). Es evidente que estas
La fuerza másica relativa al elemento considerado, que fue despreciada, que contienen seis componentes de tensión, U:z;, ... , T"'II' no
como infinitésimo de orden superior, al establel=er las condiciones de equi- para determinar estas cantidades;, el problema es estáticamente
librio del tetraedro (fig. 132), deberá ahora intervenir en las ecuaciones, y para resolverlo se deberá proceder como en el caso del
por ser del mismo orden de magnitud que los términos que corresponden plano de tensión, haciendo intervenir a las deformaciones elásticas
11 111 variación de las componentes de la tensión. Si designamos entonces
por X, Y, Z; las componentes de la fuerza 'másica específica, obtendremos
una de las ecuaciones de equilibrio, proyectando las fuerzas sobre la 77. Condiciones de compatibilidad. Para establecer las ecuacio-
dirección x: que 'buscamos, deberá tenerse en cuenta que las seis componentes de
[(u,,)¡ - (O'"hI oy oz + [(r",,)a - (r",,)~J oa; oz , 'deformación en cada punto, quedan completamente determinadas por
[(1'",.)5 - (r,..)6J lJx oy +X OX liy lJz = O tres funciones u, v, w, que representan las componentes de su desplaza-
, así que las componentes de la deformación no ,pueden expresarse
De manera análoga se obtienen las ot"ras dos ecuaciones de equilibrio en función de x, y, z, sino que habrán de satisfacer a
y después de efectuar las simplificaciones, llegamos a las siguientes ecua- relaciones que se deducen de las ecuaciones (2) (véllse, § 5):
ciones, que deben quedar satisfechas en todos los puntos del cuerpo a2 Ez a ¡¿
3
ae 2
(Jau 8 2"'(%11 él3.¡¿ aV3

considerado: ay2 = aX ay2' a:r i = ax2 ay' az ay = élx ay2 + ax2 ay


iJt1'.
i):¡;
+ a1'""
ay
+ a-r""
iJz
+X = O donde resulta que:

~'!J! + a-r"" + a1'y. + y = O (127) (a)


i)y ax GZ
ai1, + a1'". + a1' + z = o y•
permutación cíclica de las letras x, y, z, nos permitirá obtener otras
az ax ay
relaciones análogas.
Estas ecuaciones (127) deben ser satisfechas en todo el volumen del Calculahdo ahora las derivadas:
cuerpo. aa
¿jze: u
Las tensiones varían de uno a otro punto del cuerpo y en su periferia --=---,
ayaz iJx ay oz
deberán equilibrar a las fuerzas exteriores que actúan sobre la superficie
ay.. = {J2U +~,
del mismo. Las expresiones matemáticas de las condiciones de equilibrio, ay ayaz {J:¡; ay
relativas a la superficie, pueden obtenerse partiendo de las ecuaciones
(112). Consideremos para ello que el tetraedro OBeD (fig. 132) está
dispuesto de manera que la cara BCD coincida con la superficie del cuerpo
y llamemos X, Y, Z a las componentes de las fuerzas superficiales refe- (b)
ridas a la unidad deooárea, en dicho punto. Las ecuaciones mencionadas
son entonces:
permutación de las letras x, y, z, obtendremos otras dos relaciones
x = cr"l + r",,1f/. + -r",n logas a (b). Procediendo como se ha indicado, se llega a seis ecuaciones
y = t1'Jlrn + + 1'""l
TlIzn (128) entre las componentes de la deformación, las cuales deberán
!Z = cr.1¿ + r",l + r.,1ft satisfechas en virtud de las ecuaciones (2). Ellas reciben el nombre
en las que l, m, n, son los 'cosenos directores de la normal exterior a la condiciones de compatibilidad y son las siguientesl :
superficie del cuerpo en el punto considerado. 1 La demostración de que estas seis ecuaciones bastan p,\i'a aseguror la existencia del

Si el problema consiste en determinar el estado de tensión que se . corre-spondtcntc a un conjunto dado de funCiones E" .oo, ~' ti "', puede en..
:,:contn".e en A. E. H. Lave, Malhematjcal Theory of Elas(jciIY, 1-.A ediCIón, pág. 49, e l. S. 50-
origina en un cuerpo sometido a la acción de fuerzas dadas, es necesario Mathematical Theory 01 Elasticity, pág. 24, 1946.
266 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
TEOREMAS GENERALES 267

e + a2Eu
2
E", ~ a
2
'Y:v 1 . Si se lleva esta última a la ecuación (d) y para simplificar la escritura se
ayl a;¡;2 ax ay el símbolo:
e2 E¡¡ a2E, a2'Y.o
ez2 + ay2 = ay ai
e e. +
2
alt;" = 82'Y.3,
eXZ az2 ax oZ
Las condiciones expresadas por las ecuaciones (129) pueden trans- '.'" (1
"".
+
v) ( vle - V20"" -
e)
-02 2
0:v
- JI ('vla - -8 2
ex!
e)
formarse en relaciones entre las componentes de la tensión, utilizando la
ley de Hooke [ecuaciones (3)]. Tomemos, por ejemplo, una de ellas: = (1 + v) ( -eX
ax -
8Y az)
-ay - -az (e)
a e"
2
a E.2
82'Yu.
(e)
8z 2 + ey2 = ay az otras dos condiciones de compatibilidad del tipo (e), permiten escribir
ecuaciones análogas a la anterior.
De l.as ecuaciones (3) y (4) resulta, teniendo en cuentll la igualdad (7),
Sumando ordenadamente las tres ecuaciones del tipo (e) así obtenidas,
mediante una transformación sencilla:
1
e" = E [(1 + v)O"v - ve] (1- JI)V2€) = -(1 + JI) (ax + aY + az)
éJx ay 02
f. = E1 [(1 + v)O". - ve]
.J:\.'"IJl.p"''''<Ul''U en la ecuación (e) el valor de 2 e, que resulta de esta última
2(1 + v)r••
'"tll< = E
V20"", + _1_ aZ8 = _ _ v_ (ax + ay + az) _ 2 ax (1)
1 + v ax2 1- v ax ay al, az
Remplazando en (e) estas expresiones, obtenemos:
2
2ll + aZu a2e) = 2(1 + v) ay
obtener tres ecuaciones de esta clase, correspondientes a las
(1 + v) (<J
. azU
2 éJ y2
o) _ JI (a02a2 + ay2 8
az
2
TI/0 (d) nr"TTl .. r.", tres ecuaciones del grupo (129). Análogamente, las tres condicio-
de ese grupo pueden transformarse en ecuaciones del tipo
El segundo miembro de esta ecuación puede transformarse empleando .
las ecuaciones de equilibrio (127). En efecto, de las dos últimas resulta:
Vr2 + __1 _ a~e = _ (az + ay) (g)
u' 1 + p ay az ay az
~ = _ 80". _ 87"" _ Z
ay az ax
Oru. _ aO"u _ IJTorv _ Y Con las fuerzas másicas constantes o nulas (f) y (g) nos dan:
a; = ay ax a28
(1 + v)V2r". + ayaz = o
Sumando las derivadas de la primera ecuación' con respecto a z y de la a8 2
(1 + v)V r•• + 8X az = o (130)
2
segund~ con respecto a y, se tiene:
20". 20"u Z
2 a2711' = _ 8 _ 8 _ ~ (8T•• + OT%I/) . . . az _ ay (1 + 1I)V r.u + aa 8. = o
2
ay az az2 ay2 ax aZ ay al, ay x ay

o bien, si se tiene en cuenta la primera de las ecuaciones (127): Se ve pues, que además de las ecuaciones de· equilibrio (127) y las
;,cc)Delkiofles de borde (128), las componentes de la 'tensión en UI). cuerpo
2 a2T1I'. = a20"" _ 0 20"11 _ ~2rT. + g _ aY _ az :'ls,Eltrono habrán de satisfacer a las seis condiciones de compatibilidad (f)
ay 8z ax2 ay2 az 2 élx ay éJz ';(g) o a las seis ebndiciones (130)_ Este sistem~ de ecuaciones basta, por
268 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TEOREMAS GENBRALES 269
10 general, para determinar sin ambigüedad alguna las componentes de constantes de las ecuaciones (h) pueden ser calculadas fácilmente,
la tensión (véase § 82). manera que satisfagan las condiciones de vínculo., Más adelante se
Las ecuaciones que expresan las condiciones de compatibilidad con- :exuonen diversos ejemplos de cálculos de esa naturaleza.
tienen, según se ha visto, tan sólo derivadas segundas de las componentes
de la tensión. Por lo tanto, si las fuerzas exteriores permitieran satisfacer Las ecuaciones de equilibrio' como funciónes de los des-
las ecuaciones de equilibrio (127) conjuntamente con las condiciones Un método que permite resolver los problemas de
de límite (128), mediante unas componentes de la tensión que fuesen ,.,,,,.,,-"",,.,, es el que conduce a formular tres ecuaciones de equilibrio cuyas
constantes o funciones lineales de las coordenadas, las ecuaciones de com- ......'6 .... "" son las tres funciones li, v, w. Para ello se elimina de las ecuacio-
patibilidad quedarían idénticamente satisfechas y este sistema de tensiones y (128) las componentes de la ten~ión recurriendo a la ley de
representaría la solución correcta del problema. En el capítulo 10 desarro- y' !l las ecuaciones (2), que nos penniten expresar las componentes
llamos varios ejemplos de problemas de esta clase. la deformación en función de los desplazamientos. Sustituyendo (11)
(127) tenernos:
78. Detenninaci~n de los desplazamientos. La ley de Hooke
él u.
[ecuaciones (3) y (4)] nos. permitirá determinar las componentes de l~ u", = X.e + 2{}-
&:c
(a)
deformación una' vez calculadas las componentes de la tensión, mediante
las ecuaciones anteriores. Para determinar los desplazamientos u, v, w,
se utilizan entonces las ecuaciones (2). Derivando éstas con respecto a
x, y, z, se pueden obtener 18 ecuaciones entre las 18 derivadas de u, v, w,
y calcular así dichas derivadas. Para u, por ejemplo, tendremos: T. u = G'Y'"1J = G (&1t
y ay)
ay + ai
(b)
a2.u. ae", T ••
aw au)
= G",•• = G ( O:C + élz
a:i;2 = a:c'-
(a)
éFu ae",
. a:c ay = ay'

Si en las ecuaciones anteriores intercambiarnos cíclicamente las letras


J.', y, Y z hallaremos las derivadas segundas de las componentes de los
desplazamientos v y w y por medio de integraciones dobles obtendremos otras dos ecuaciones pueden transformarse de la misma manera, así
11, v, w a las cuales, como constantes arbitrarias de integración, añadiremos
utilizando el símbolo laplaciano, las ecuaciones de equilibrio '(27),
'funciones lineales de x, y y z que, evidentemente, no afectarán a las'
ecuaciones (a) y sus correlativas. Tampoco modificarán a las componentes
de la deformación [ecuaciones (2)] siempre que sean de la forma:
(X. + G) aae:c + G V u + X 2
= O

u' = a + by - cz ex. + G) ;; + G V v + y 2
= O (131)
~. v'=d-bx+ez (b)
w'=f+c;J;-ffJj (X. + G) ~; + G V 2w + Z = O
Esto significa que la~ tensiones y las deformaciones no determinan por
.'cuando no existen fuerzas nUlsicas, se tendrá:
completo los desplazamientos y que a las ecuaciones que los expresan,
deducidas de (127), (128) Y (130), podrá añadirse .el desplazamiento
(X
oe + G V4¿ =
+ G) ax O
que corresponde a un movimiento n In manera de cuerpo rígido. Las cons-
tantes a, d, J, en las ecuaciones (h), representan un movimiento de tras-
(A + G) oe + G V2y = O (132)
lación del cuerpo y las constantes b, e, e, son las tres rotaciones del cuerpo ay
rígido alrededor de los ejes coordenados. Cuando existen vínculos bas-
tantes para impedir el ~ovimiento del cuerpo como si fuera rígido, las (A + G) :: + G vaw = O
270 TEORrA DE LA ELASTICIDAD TEOREMAS GENERALES 271
Derivando la primera de estas ecuaciones con respecto a x. la segunda puede demostrar que esta solución es general y que una de las cuatro
con respecto a Y. y la tercera con respecto a z. y sumando miembro a ~UI.'<;llJH<'"
puede ser suprimida. sin perder generalidad.
miembro las igualdades que' se obtienen. se llega a: tipo de solución ha sido adapta~o a las coordenadas curvilíneas
NeuberI, quien 10 ha aplicado a la solución de 'problemas relativos
(A + 2G) V e =
2 O
de revolución, generados por hipérbolas (cilindro con entalla-
de donde resulta evidentemente que la dilatación cúbica, e. satisface a la hiperbólica) o elipses (cavidad con forma de elipsoide de revolución).
. ecuación diferencial transmiten tracción, flexión. torsión o esfuerzos tangenciales normales
'su eje. junto con flexión.
(133)
81. Principio de superpOS1Clon. La solución del problema rela-
a un cuerpo elástico dado, limitado por una superficie conocida y
La misma conclusión es aplicable al.caso en que las fuerzas másicas sean
a unas determinadas fuerzas másicas, exige la determinación
constantes para todo punto del cuerpo.
componentes de la tensión. o de los desplazamientos. que satis-
Remplazando los valores que dan las ecuaciones (a) y (b) en las con-
las ecuaciones diferenciales y las condiciones de contorno. Si de-
diciones de borde (128), hallamos:
trabajar COIl las componentes de la tensión se deberán cumplir:
ecuaciones de equilibrio (127); b) las condiciones de compatibilidad
X = Ael + G (éI'U
élz
+ ay
au m + OU
OZ
n) + G (élU 1+ oV m +
élx o:r;
él-w n) (134)
élx e) las condiciones de contorno (128). Sean Ur., ... , T:r:u, ••• , las com-
de la tensión así determinadas, las cuales han sido producidas
las fuerzas superficiHles X, Y, Z. y las fuerzas másicas X, Y, z.
Definidas as! completamente las tres funciones u. v, w, mediante
. Si llamamos CJ",,' ••• T"y', ... a las componentes de la tensión producidas
las ecuaciones (131) y las condiciones de borde (134), podremos obtener
las componentes de la defonnación aplicando las ecuaciones (2), y luego
.el mismo cuerpo por las fuerzas superficiales X', Y', Z' y las fuerzas
X', Y'. Z', las componentes CJ"" + CJ",,'• ... '%y + ¡",g', ... ,represen-
las componentes de la tensión, valiéndonos de las fórmulas (9) y (6). En
las tensiones causadas por las fuerzas superficiales X -1- X', ... , y
el capítulo 15 se hace aplicación de estas ecuaciones.
fuerzas másicas X + X' ... Esto es así por ser lineales todas las ecua-
dife(enciales y las condiciones de contorno. Añadiendo, de esta
e 80. Solución general para los desplazamientos. Se comprueba la primera de las ecuaciones (127) a la ecuación correspondiente:
fácilmente que las ecuaciones diferenciales de equilibrio (132), expresa-
das en función de fas desplazamientos, son satisfechas .por: ou,.' + ~T,;,/ + 01",,/ + X' = O
o:r; ay oZ

a~ (cr" + u,.') + o~ (1".v + T"u') + :z (1"= + 1":.') + X + X' = o


'análogamente de la 'primera de las ecuaciones (128) y de su homóloga,
'deduce:
X + X? = (q" + cr/)l + (1""" + 1'",,')m + (1'". + 1',,/)n
donde 4a = 1/(1 - v) y las cuatro funciones <Po, rPI' rP2, rP3 son armónicas, condiciones de compatibilidad pueden combinarse también de la
es decir:
forma. El conjunto completo de ecuaciones. muestra que u" -1- CJ",,',
'%U + Trl/' .... satisfacen todas las ecuaciones y condiciones, que de-

las tensiones producidas por las fuerzas X + X', ... , X + X' • ...
1 Esta solución h. sido dada independiente por P. F. P.pkoyitch, Compt. relld., yol. 195.
resultado constituye el principio de superposición.
plÍgs. 513 Y 754. 1932, Y por H. Neuber, Z. tmgew. Ma/h. Mech., yol. 14, pág. 203, 1934. Otr.s
solucionES generales ban sido dadas por B. Gaierkin, Compt. rend., yol. 190, pág. 1047, 1930.
Y por Bouss;ncsq y Kelv;n (véase Todhunter y Pearson, I1istory 01 Elastici/y. vol. 2, parte 2.", • H. Neuber, Kerbspannmlgsle/¡re. Esta obra contiene tambi6n la solución de problemas
pág. 268). Véase también R. D. Mindlin, Bull. Am. Math. Soc., 1936, pág. 373. bídim"nsiom.les. Véase ... el capítulo 7 del presente libro.
272 TEORIA DE I,A EL~ICIDAD TEOREMAS GENERALES 273
Al deducir las ecuaciones de equilibrio (127) y las condiciones de con-
torno (128), no hicimos ninguna distinción entre la posición y forma
del elemento antes y después de aplicar la carga, De ello resulta, que ~
!l ( '
-
O..t
0''''_" )_ + a-("--ay
T"" 1 - •
T"'I" )
. + ----8"Z----
él ( '
T •• - 1/)
Ta:, _ o
nuestras ecuaciones y las conclusiones de ellas deducidas, son válidas
solamente si los pequeños desplazamientos producidos en la deforma-
ción no afectan sustancialmente la acción de las fuerzas exteriores. Existen
casos, sin embargo, en los que es preciso tener en cuenta esa modificación.
En este caso la justificación del principio de superposición, que acabamos
de dar, fulla.
Esto ocurre, por ejemplo, en el caso de una viga sometida simultánea-
mente a tina carga lateral y a otra carga, aplicada según su dirección
· \in las que todas las fuerzas exteriores se anulan. Las condiciones de com-
longitudinal; otros mllchos ejemplos se presentan en el estudio de estruc-
turas con paredes delgadas. · patibilidad (129) serán también satisfechas por las componentes corres-
:pondientes de la deformación Er' - E",t', .. ;, ¡IXy' - YXy", ...
. Esta distribución tensional corresponde, en consecuencia,a fuerzas
82. Unidad de la solución. Estudiemos ahora, si las ecuaciones
· inásicas y de superficie nulas_ El trabajo realizado por tales fuerzas durante
precedentes pueden tener más de una solución, dadas unas determinadas
· el proceso de carga es cero, siéndolo también, por Jo tanto, J.rJVD dx dy dz.
fuerzas más'icas y de superficie. Supongamos que Ir",', ... , t %V', ... ya,,:', "., · Ahora bien, dado que, como se deduce de la ecuación (85), VD es positivo
:..=.,," .'"
representen dos soluciones correspondientes a las mismas cargas '. para cualquier estado de deformación, la integral se anulará, solamente,
X, ... , X ... Aplicando, entonces,. las ecuaciones (127) y (128) a la primera · 'si VD es nulo en todos los puntos del cuerpo, 10 cual implica que lo sean
solución tendremos:
.·cada una de las componentes E/ - Ex", "., y%y' - y;¡.y" ... En consecuen-
.cia, los dos estados de deformación Ex' ... , J'",,, , ,,_ y Ex" ._. y",,," . __ son idén-
: 'tiCos, lo que demuestra que para unas cargas determinadas la solución de
las ecuaciones es únÍca l.
Acabamos de probar la unicidad de la solución, basándonos en la
x = u,,'l + "".I m + "".'71 hipótesis de que las tensiones existentes en \ln cuerpo, desaparecen cuando
. el mismo es liberado de la acción de las fuerzas exteriores. Hay cicrtos
': . casos, sin embargo, en los que pueden existir tensiones iniciales en un
'cuerpo sin que ninguna fuerza exterior sea aplicada. Un ejemplo de este
"tipo ha sido encontrado al estudiar el anillo circular (véase el § 39). Si
. junto con las condiciones de compatibilidad.
se practica un corte siguiendo dos secciones transversales adyacentes
De igual forma considerando la segunda solución, tl'rlCmos:
de un anillo y se unen de nuevo los bordes obtenidos, soldándolos o me-
él" al! a" + X diante otro proceso cualquiera, se obtiene un anillo en el cual existen
al' + T:ay + ...2='
-~ o
y
= tensiones iniciales". Varios ejemplos de este tipo han sido estudiados al
iJz
. . . . . . . - . . . ~
.considerar los problemas bidimensionales.
............. Asimismo pueden presentarse tensiones iniciales en un cuerpo sim-
x= rr,,/Il + T./'m + T:/'n plemente conexo como resultado de las deformaciones no elásticas, s\lfri-
I Este teorema se debe a G. Klrchboff. Véase su VorlesILlIgm iiber Math. Phys., )!.1echa,,¡k_
• El anIllo representa el ejemplo más sencillo de cuerpo múltlplcmcnte conexo. Para I()~
cucrpos de este tipo, IRS ecunClones generales de la elasticidud, expresadas en funCIón 00 I"q
componentes de In tenSión, no !:Ion suflcitmtcs pal'U determinar las tenslones y SI se desea llnu
junto, también, con las condiciones de compatibilidad. solución completa, un estudio adiCIonal de los desplazamientos es necesario. Las primel·.I~
investigaCIones de este tipo fueron renlizadas por J. H. Mich~lI, Proc. Londa". Math. Soc.,
Restando las expresiones precedentes se encuentra la distribución ':01. 31, pág. 103, 1899. Véase también L. N. G. Fdon, Bn"I. As,oc. Advallcemellt. Sci. Rept .•
de tensiones, definida por las diferencias a:c' - (J ~ ", ••• , T "'v ' - 7".v ", las 1921, pág. 305, y V. Volterra, Su> l' equilibre des corps e/as tiques tII11ltiplemellt conIl8x¡l.s, AWI. ecnle
cuales satisfacen las ecuaciones: I/orm., París, sone 3( vol. 2+, pÁgs. 401-5.17, 1907. Otros datos sobre las tenSIones Inlctnles
se encuentran en la memo na de P. NémenYI, Z. angew. !VIat/¡. Meell., vol. 11, pág. 59, 1931.

J8-Tf"OHI'\ 1lF. loA r.l..ASTIClDAD


274 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TEOREMAS GENERALES 275

das durante el proceso de fabricación. En ciertas piezas metálicas grandes, Llevando esta expresión a (h), se deduce que el segundo y tercer término
por ejemplo, pueden existir tensiones iniciales considerables, producidas de (a) se convierten en:

J- JI J.(0G'.' + ay +
por un enfriamiento no uniforme; de igual forma el laminado de barras
metálicas puede originar notables tensiones, a consecuencia de la defor- X lUZ as + X lUZ da; dy == f'
(J:&
OTZV' X J) ..:/ dy
UZ uX

+ JJ(~U;G't' + ~~ZTZ1J')dXdY
mación plástica producida por el trabajo en frío. Las ecuaciones de la
elasticidad no bastan entonces para determinar las tensiones iniciales, (e)
siendo necesario añadir información sobre el proceso de fabricación al
cual ha. estado sometido el cuerpo. De forma semejante el segundo y cuarto término nos dan:
Es de advertir que en todos aquellos casos en los que se puede usar
el principio de superposición las deformaciones y tensiones producidas
por la acción de las fuerzas exteriores, no son afectadas por las tensÍpnes
f }\V2 ds + JJ Y 1V2 dx dy = JJ(O;;' + 8;;' + Yl) v: dx dy
iniciales, pudiendo ser calculadas de la misma forma que si tales tensiones
iniciales no existieran. Las tensiones totales se obtienen, entonces, aña-
+ f f (~~ <Tu' + :~ T%V) dx dy (d)
diendo a las iniciales las prod.ucidas por las- fuerzas exteriores. En los casos
en los que el principio de superposición no es aplicable, las tensiones . Observando ahora que, como consecuencia de las ecuaciones de equilibrio
provocadas por las fuerzas exteriores no pueden ser determinadas si no se .. (i8), los primeros términos de los segundos miembros de las ecu!lciones
conocen las tensiones iniciales. No podemos, por ejemplo, calcular las ten- .(c) y (ti) se anulan, se obtiene, sustituyendo en la ecuación (a):
siones de flexión producidas por cargas laterales en una barra delgada
que está sometida a una tracción o una compresión, sin conocer previa-
mente la magnitud de esas tensiones iniciales.
'1' = fJ (Et"rr'/ + El/"a,/ + '''f"u''r%u') dx dy
83. Teorema de reciprocidad. Limitándonos al caso de los pro- == E lJf¡"'% 11 G'~'+ "'u'""'" - vrt~ rr. - Ya~lI~u'
11' _ v

blemas bidimensionales, consideremos una placa sometida a dos sistemas + 2(1 + p)r",,"-r=v') dx dy
de cargas distintos. Sean Xl, Yt, Xl e YI las componentes de las fuerzas
másicas y de contorno del primer sistema y X a, Ya, X'a e Ya las del SC7 El mismo. resultad? se obtiene calcu~ando el trabajo realizado por las
gundo. Los desplazamientos y las componentes de la deformación y de la fuerzas correspo?,dlent~s ni segundo slstema de cargas, sobre los despla-
tensión, correspondientes a los dos sistemas de carga, serán designados zamientos del prlIDer sistema. Podemos pues concluir que si se comparan
Ul, 1h J Ex', E'y)', "'%yl, l1 z ') (]1/', T~V' Y U2, V2, €3:"7 ~u", r~'IJ'" (1:/', d ,;", tXY",
respectivamente. Consideremos ahora el trabajo que producirían las fuer-
zas del primer sistema al actuar sobre los desplazamientos del segundo.
Su valor es:
T = JX l u 2 ds + IY l v2d-s + JJX1U2dxdy + JJY¡v 2 dxdy (a)
extendiéndose la primera integral a toda la curva que limita la placa y Q-ll--h-'lt_ _ ->H (b)
la segunda al área de la. misma. Sustituyendo x..
por su expresión, dada -l-
por la ecuación (20) del § 14, podemos escribir el primer . término del FlG. 136
segundo miembro de (a), de la forma siguiente:
JXIU2 ds = Jla,,'u2 ds fmr",/u2 ds+ (b) dos estados tensionales diferentes, el trabajo realizado por las fuerzas del
Procediendo ahora en la forma Índicada en la página.193 se obtiene: primer estado al actuar sobre los desplazamientos del segundo es igual
: . al trabajo de las fuerzas del segundo sobre los desplazamientos del pri-
1 Iduz ds = ff 1¿2 O;;' dx dy +f1~~2 G',,' ax ay
mero. Este enunciado constituye el teorema de reciprocidad, el cual puede
ser extendido fácilmente a cuerpos en movimiento o en vibración, con-

f 1n-r./U2 ds == JJ 1'2 O;;' dx dy + f f ¡¡0~2Tzv' dz dy


siderando además de las fuerzas exteriores las fuerzas de inercia. El teore-
de reciprocid.;ad encuentra un importante campo de aplicación en la
276 "rEORIA DE LA ELASTICIDAD TEORIlMAS GIlNERALES 277

teoría de estructuras, en la construcción de las 'líneas de influencia. Tiene :disminuirá en la cantidad (1 - 21,)pljE. El teorema de reciprocidad,
asimismo útiles aplicaciones en teoría de elasticidad. icado a los dos sistemas de tensionesl de la figura 137 nos dará:
Consideremos ahora el ejemplo sencillo de una barra prismática com-
p. (1 - 2v)pl = Ap
primida por dos fuerzas! P,' iguales·y opuestas (fig. 136a). El problema
E
de encontrar las tensiones producidas por estas fuerzas es complicado,
pero nosotros vamos a suponer que estamos interesados en conocer, no la' disminución de volumen será entonces:
las tensiones sino el alargamiento total o de la barra. Se puede resolver
A _ Pl(l - 2v)
este problema rápidamente haciendo uso del teorema. Con tal fin, consi- L.l- E
deremos la adición, a las tensiones correspondientes al caso de la figura
136a, de la tracción axial de la figura 136b. Para este último caso obtene-
84. Carácter aproximado de las soluciones de los estados tensionales
mos una contracción lateral igual a ~l = vQh/AE, donde A es el área de ···planos. Hemos señalado en la págma 48 que el conjunto de ecuaciones que bastan
la sección transversal de la barra. El teorema de reciprocidad nos permite . determlllur los problemas planos de tensión, bujo lDS hipótesis hechas (a, = Tu =
escribir: = 0, "r, "u, T",u, independientes de z), no cumplían todas las condiciones de
cOlupatibil.id:¡d. Estas hipótesis implicaban que €" E,,, E" )'TlI sean independientes
Qh z y que yn, }'u=; sean nulas. La primera de las condiciones de compatibilidad (129)
P . v AH = Qó fue incluida en la teoría de los estados planos de tensión como ecuación (21). Sc veri-
. fica fácilmente, que lns otras cinco son satisfechas solamente si E, es función lineal
de donde el alargamiento producido por las dos fuerzas P, de la figura 136a, de x e y, lo que más bien es excepción que regla para las soluciones obtenidas en los
será: capítulos 3 a 7. Evidentemente, tales soluciones no pueden ser exactas, pero como
veremos a continuación, sin embargo, constituyen excelentes aproximaciones para
ó = JlP~ el caso de placas delgadas.
Busquemos las soluciones exactas de las ecuaciones tridimensionales, en las que ":
AE
{1;: = 'l'~= = t'1Il: = O
resultando ser independiente de la forma de la seccIDn transversal.
y. las fuerzas másicas son cero. Tales soluciones deben satisfacer las ecuaciones de
Como segundo ejemplo, calculemos la disminución de volumen .J de
. equilibrio (127) y las condiciones de compatibilidad (130).
un cuerpo elástico, producida por las dos fuerzas P, iguales y opuestas, . Dado que 0'" T." T.", son nulos la tercera, cuarta y quinta de las ecuaciones (130)
de la figura 1370. Como segundo estado tensional, consideremos al mismo (leyendo por. columnas) nos dan:
cuerpo sometido a la acción de una presión p uniformemente repartida.
fz (~:) = 0, 3...
ay éJz
(.JO) = O '
.3...
iJ;;
(ae)
iJz
= o
que quiere decir que oOloz es constante. Designando ka su valor, tendremos,

0:
. al integrar respecto a z
o= kz + o. Ca)
'donue 00 es una función arbitraria de x e y.
La tercera de las ecuaciones (127) es verificnda, entonces, idénticamente y las
'. pos primeras toman la forma bidimensional.
(bJ a.. , -1- aT~v = O
FIG. 137
ax éJy ,
que son satisfechas, como antes, por:
En este último CllSO tendremos en todo punto del cuerpo una compresión (b)
uniforme (según todas las direcciones) de vlllor (1 .~ .2¡,)p/E [véase la
ecuación (8) del § 6] y la distancia l entre los puntos de aplicación A y B siendo ~,ahora, función de x, y y z.

1 P"ra otrAS aplicaCIones del mIsmo tIpO véas~ A. E. H. Love, Mathemal,eal Theory of
I Podemos suponer que las fuerzas se reparten sobre unft pequeña superficie con el fin
de evitar Singularidades. La consideración en problemM bidimensionales de fuerzas (ideales) HlastlClty, +,' ~ÚICIÓll, pág•. 174-176, 1927.
concentradas, conduce generalmente a obtener desplazamientos de valor infinito, lo que , A. elebsch, I!.'lasllLlllll. § 39. Véase también A. E. H. Love, Malhemulical TheorJ' of
mdica que los desplazamientos reales dependen de la distribución de la carga. Elastieity, 4.' ediclón~ pág. 145, 1927.
278 TEORIA DE LA EL:ASTICIDAD TEOREMAS GENERAL)lS 279
Volviendo a las ecuaciones (130) y recordando que Q = (J~ + (Jv + <1.. obser- Si calculamos (1~, (Jy, T:u a partir de (1) mediante las relaciones (b), los términos:
vamos que sumando las tres ecullciones de la izquierda tenemos:
A+~x+Cy
V'9 == O (e)
no intervienen pudiendo, por tanto, ser anulados 10 que equivale a tomar para a,
y, por tanto, usando (a): , b, e, el valor cero en (h).
Limitándonos a los problemas en los que la distribución de tensión es simé-
(d)
z
'trica respecto al plano medio, = 0, el término "',z
debe también ser cero, siéndolo,
donde: por 10 mismo, el factor k de (a). La ecuación (,) se reduce entonces a:
'02 o'
V,, == é)zl + ay'
Resulta entonces, siendo <1. nulo y viniendo dados G% y Gu por las dos primeras
ecuaciones (b), que podemos escribir 171 '''' = e, que sustituyendo (a), queda: No obstante '" y fJo vienen relacionados por (e), donde ahora podemos hacer k = O.
Sustituyendo entonces 0) en (e) y usando (d), tenemos:
(e)
VI'OPO = 0 0 (kj
donde eo es 'una función de x e y que satisface la ecuación (d). Teniendo en cuenta y, por tanto, según (d):
las expresiones (a) y la primera de las (b), la primera de las ecuaciones (130) se con-
vierte en: (1)
Las restantes ecuaciones de (130) son satisfechas, habida cuenta de la ecuación (a)
(1 a'", + ~'= O
+ .)V2 ay' (f) y de que <1., ',m T~., son nulos.
az'
Podernos ahora obtener una distribución de tensiones eligiendo una función ~II
Pero: " de x ey que satisfaga la ecuación (l), obteniendo fJo a partir de (k) y '" a partir de úl
v. ay'
é)'cP = ~
iJy'
V"", = ~
ay'
(,?'" + Oz' a' (9
a'",) == ay' u
+ az'
0'<1» Las tensiones, entonces, 'se obtienen mediante las fórmulas (b). Cada una de ellas
consta de dos partes, la primera que se deduce de .po en la ecuación (J), la segunda
donde, en la última igualdad, se ha usado la ecuación (e). Se puede, entonces, habida del término - ~ 1+,. eo"'. A la vista de la ecuación (l) se deduce, que la primera
cuenta de (d), sustituir o'e.lax' en (f) por - o"eo/ay', resultando:
parte es exactamente igual a la componente plana de la tensión determinada en los
(1 + ..).E:..
ay'
(a. -1- az'
0'<1» _ 13'90 == O
ély'
capítulos 3 a 7. La segunda parte, proporcional a z', puede reducirse a un valor
tan pequeño como se quiera, eligiendo una placa suficientemente delgada. De ahí
o ,lo, que es lo mismo: la conclusión de que las soluciones de los capítulos 3 a 7, que no satisfacen todas las
condiciones de compatibilidad sean, sin embargo, buenas aproximaciones para
placas delgadas.
-a' (a'</>
- v 9 0 ) ==0
--- (g)
ély' az' -1, 1 + .. Las soluciones (ICXactas~, representadas por funciones de tensión del tipo (;"),
Podernos usar esta ccuación en lugar de la primera de las (130). De forma amUoga exigen que las tensiones en los bordes y en cualquier otro punto, sigan una variación
la segtmda' y tercera pueden remplazarse por: parabólica a lo largo del espesor. Cualquier alteración, sin embargo, de esta distri-
bución, que no cambie la fuerza por unidad de contorno, altera la tensión, según el
élz' élz'
V)
a" (a o</> + 1 + .. o, = 0,
él'
éJ$ ély
(a'tI> v
a;¡ + i + ve.
)
= o " principio de Saint-Venant (§ 18), solamente en la vecindad inmediata del borde.
Las soluciones del tipo considerado hasta aquí, representan siemprt: la tensión real
y las componentes er., T",,, Tu, serán efectivamente nulas salvo en la proximidad del
Estas ecuaciones y la Vi) muestran que las derivadas segundas respecto a x e y de borde.
la función (de x, y y z), cgntenidas en el paréntesis, se aQullln. Esta función es, por
tanto, lineal 'en x' e y, púdiendo escribirse:
éJ'tI> + ___v _ o.
i)z2 1 + p
= CL + f¡:¡; + GY (h.) Problemas
donde a, b y e son funciones arbitrarias de z. Integrando esta ecuación dos veces l. Demostrar que:
respecto a z, obtenemos:
'. = lc{:l!' + y'), EU == k{y' + ""), 'Yov = k'zyz
tP = -
1
2 "
1 + v e •e' + A + Ex + Oy + ""z + "'. E~ = 'Yu == 1'116 -= O
, donde k y k' son cantidades pequeñas constantes, no es un estado posible de defor-
donde A, B, C) son fundones de z obtenidas por integración repetida de a, b, c. mación.
y"'" {Jo funcioneS de x e y, arbitrarias por el momento. 2. Un sólido e~, calentado de forma no uniforme a la temp~ratur,~, T función
280 1'E01UA DE LA ELASTICIDAD

de x, y y z. Si suponemos que todo elemento del cuerpo puede dilatarse libremente


las componentes de la defonnación serán:
E:: = fu == e~ = ClT,
uonde u es el coeficiente de dilatación.
Demostrar que esto sólo puede ocurrir cuando T es función lineal de x, y y z.
(Las tensiones y deformaciones consecuentes que se producen cuando T no es lineal
Problemas
son estudiadns en el capítulo 14.) de elasticidad
3. Un disco o cilindro de la f~rma mostrada en la figura 137a es comprimido
por dos fuerzas P, aplicadas en C y D Y dirigidas según CD, que provocan una
extensión de AB. A continuación se le comprime mediante dos fuerzas P según AB
(fig. 137a) que producen la extensión de eD. Demostrar que estas extensiones
son iguales.
4. En la solución gcneral del § 80 ¿cómo hay que elegir las funciones t/>o, t/>..
<P', ,p3
para obtener 1.\ sn!unón general para el caso de defonnnción plana (w = O)?

85. Tensión uniforme. Al estudiar las ecuaciones de equilibrio


.(127) y las condiciones de borde (128), quedó establecido que la verdadern
solución del problema deberá satisfacer, no solamente a aquéllas, sino
también a las condiciones de compatibilidad (§ 77). Si las fuerzas másicas

Flc. 138

. son const¡intes o inexistentes, las condiciones de compatibilidad sólo


..contienen dcrivadas segundas de las componentes de la tensión. Por lo
tanto, si unas componentes de la tensión que sean constantes o bien fun-
ciones lineales de las coordenadas pueden cumplir las ecuaciones (127) y
(128), las condiciones de compatibilidad quedarán idénticamente satis-
.. fechas .y dichas tensiones constituyen, entonces, la solución exacta del
problema.
En el caso de unH barra prismática sometida a una extensión de direc-
ción axil (fig. 138) (caso que constituye un ejemplo muy sencillo), si
.. se desprecian las fuerzas másicas, I:IS ecuaciones de equilibrio quedan
satisfechas tomando:
0'.. = constante, Ca)
Sobre la superficie lateral de la barra no actúa fuena exterior alguna
y las condiciones de borde (128) están ~videntcmente satisfechas desde
que, con excepción de rJ., todas las componentes de la tensión son nulas.
Para las caras limitantes de la barra en ambas exttemidades, las condicio-
nes de límite están reducidas a:
CT z = X (b)
282 PROBLEMAS ELEMENTALES DE ELASTICIDAD TRIDIMENSIONAL 283
TEORIA DE LA ELASTICrDAD

lo que nos dice, que si las tensiones de tracción están uniformemente La solución (b), concordante con la que dan generalmente los textos
¡·epartidas en las bases de una 'barra prismática, en cada sección recta elementales de resistencia de m!1teriales, satisface también a las ecuaciones
. de compatibilidad (130) y por lo tanto, es la solución correcta del problema
habrá una distribución uniforme de tensiones normales. En este caso las
relaciones (a) satisfacen a las ecuaciones (127) y (128) Y constituyen la . para una repartición uniforme de fuerzas en la base superior del prisma.
solución correcta del problema, puesto que las condiciones de compatibi- Pasemos ahora a considerar los desplazamientos (ve¡:- §. 78). Para la
lidad (130) quedan satisfechas idénticamente. . aplicación de [a ley de Hooke empleamos las ecuaciones. (3) y (6), con
La .solución (a) deja de ser correcta cuando los esfuer~os de extensión lo cual llegamos a:
no se reparten uniformemente sobre las extremidades, porque entonces aw u, pgz
no se satisface en éstas a las condiciones de límite. La solución verdadera E~ = ez =]j = E Ce)
resulta, entonces, más complicada, a causa de que la distribución de ten-
au éJiI poz
siones en una sección transversal deja de ser uniforme. Al tratar algunos E% = E¡¡ = eX = ay = -v E (d)
problemas de elasticidad bidimensional (píÍgs. 75 y 197) hemos encon-
.
~=~=~=_+_=_+_=_+_=o
uU uV u'u uw av uw W
trado ejemplos de ese género de repartición de tensiones.
Sea ahora, como segundo ejemplo, ercaso de una compresión hidros-
ay ax az ux az ay
tática, uniforme. Con fuerzas másicas inexistentes, las ecuaciones de
equilibrio (127) quedan satisfechas, tomando: Los recorridos u, 7), w pueden obtenerse, entoncell, integrando las ecua-
ciones anteriores. Por integración de (e) se obtiene:
CTz = "11 = CT, = -p, Tzv = '1"",. = '1"". =O (e)
pgz2
El elipsoide de tensiones es, en este caso, una esfera, 10 que quiere decÍl' w = 2E + Wo
que tres direcciones perpendiculares cualesquiera pueden ser conside-
radas como direcciones principales, y el esfuerzo en un plano elegido en la cual w. es una función de x y de y, que se determinará más adelante.
arbitrariamente es una tensión normal de compresión igual a p. Las con- . Remplazando este último valO!· en las ecuaciones (e), encontramos:
diciones periféricas (128) quedarán satisfechas, evidentemente si la oresión
p está uniformemente distribuida en la superficie del cuerp~. .
z de las cuales resul ta:
86. Barra prismática extendida por acción de
su propio peso. Si '!g es el peso específ.ico del mate-
rial de la barra (fig. 13·9), las fuerzas másicas serán: u = -za:;
aWn
+ UD, v = - zéJwo
- +vo
ay
(g)

En ésta UD y VD son funciones de x y de y solamente. Remplazando en (d)


x = y= 0, Z = -pg (a)
las expresiones (g) tenemos:
Las ecuaciones diferenciales de equilibrio (127) quedan
satisfechas poniendo en ellas: (h)
I--L_..j-:LJ'

FIG. 139 rF. = paz, Si recordamos que UD y VD son independientes de z, concluiremos que las
ecuaciones (h) quedarán satisfechas, solamente si se verifica:
o lo que es lo mismo, suponiendo que cada sección transversal está sujeta a
una tracción uniforme originada por el peso de la parte de la barra situada auo = avo =O (k)
por debajo de aquélla. 8x ay ,
Fácilmente se comprueba, que para las superficies laterales, sobre Por sustitución de las expresiones (g), que nos dan u y V, en la primera de
las cuales no actúa fuerza alguna, las condiciones periféricas (128) están las ecuaciones (e), tendremos:
satisfechas. Para la extremidad inferior de la barra, de longitud l, las con-
diciones de límite se traducen en tensiones nulas y en una tensión exten- -2z U2wo + auo + uvo = O
sora, uniformemente distribuida, U;¡; = (¿gl, sobre la extremidad superior. ". ax ay ay. éJx
284 TllORIA DE LA ELASTICIDAD PROBI.EMAS ELEMENTALES DE ELASTICIDAD TI{WIMI,NSIONA1. 285

y puesto que 110 y VD no dependen de z, será necesario que: 11" \ 11 dcfmltlvlI, loi'l dc¡;plH)::lIlII,·,IlO, ,,,11:

82w o = O u = l'pg:cz
axay , -~

Las ecuaciones (k) y (l) nos permiten establecer las expresiones gene- v=
rales de las funciones uo, VD, wo. Es fácil demostrar que todas estas ecua-
ciones se cumplen para los valores: w = pgEZ2
2
+ 2~
vP (x' + y2)
E
g - Pgl.:
2E

'Uo = oy + 01 aquí resultu, que los puntos que están sobre el eje de las z efectúan
VA = -8x + "Y1 únicamente desplazamientos verticales, dados por:

Wo = ;~ (x a + y2) + ax + {3y + 'Y w = - pg (l2 - Z2)


2E
consecuencia de la contracción lateral, otros puntos de la barra, experi-
en los cuales, a, (J, )', 0, ,\¡", )'1 son consúmtes arbitrarias. Ahora bl<:Il, con
además del desplazamien to vertical, otro horizontal, de manera
arreglo a las expresiones (j) y (g), se tendrá para los desplazamientos las
las rectas que antes de la deformación eran paralelas al eje de las z,
'fórmulas siguientes:
un ángulo con esa dirección despué¡; de deformarse la barra,
vp(J:CZ ta adquirirá la forma que se indica en la figura 139 con líneas pun-
u= - ~ - IXZ+ ay + 01 Sus secciones rectas pasarán a ser paraboloides. Los puntos por
vpgyz de la sección transversal z = e, estarán situados, después de
V = - E- - f3z - ilx + "Y1 (m) ~eformación de la barra, sobre la superficie de ecuación:
pgz2 vpg 2
W = 2E + 2E (:c
2
+ y2) + IXX + f3y + 'Y +
z = e w = e pgc +
Ppg (x" +
y2) _ pgl' +
2E 2E 2E
Las seis constantes arbitrarias deberán ser determinadas teniendo en superficie es perpendicular a todas las fibras longitudinales de la
cuenta las condiciones de sust~ntación de la pieza, las cuales deben evitar las que a causa de la deformación, adquieren una inclinación res-
el movimiento de la barra como cuerpo rígido. Con objeto de impedir al eje z, y las distorsiones Y:z.y y Yrt serán, entonces, nulas.
toda traslación de la misma, fijemos el baricentro A de su cara superior
de manera que 11 = V = W = O para x = y = O y z = /. Para eliminar 87. Torsión de ejes cilíndricos de sección circular constante.
la posibilidad de rotación de la barra alrededor de ejes paralelos a las direc- arreglo a la teoría elemental de la torsión de piezas cilíndricas ele sec-
ciones x e y, que pasen por A, fijemos en dicho punto un elemento del circular, la tensión tangencial, -r, en un punto cualquiera de la sección
eje z, con lo cual se verificará en él: aujoz = ovjoz = O. En cuanto a la "(fig. 140), es perpendicular al radio r y' proporcional a su
posibilidad de rotación alrededor del eje de las z, desaparece fijando alre- Ri.T~.,ri~ al eje y al ángulo específico de torsión, o:

dedor del punto A UIl área elemental, en un plano paralelo al xz, con lo T = Ger (a)
cual, en dicho punto";·"se tendrá ov¡ox = O. Aplicando las ecuaciones (m),
las seis condiciones mencionadas, relativas al punto A, se convierten en: L·ü" la cual, G, es el módulo de rigidez. Las componentes de la tensión
"tangencial según los ejes x e y son:
-IXI + 01 = 0, -f31 + "Y1 = O, pgl2 + -v -
2E." ,-
° Ty, = GfJr . :: = GOx
r
a = 0, fJ = O, o= O (b)
T~, = -GfJr·
" 'r!!. = -GOy
de donde resulta:
acuerdo con la teoría elemental, se supone también que:
01 = 0, "Yl = O,
lFz = (1" = (J, = T"" =O
286 TEORIA DE LI). ELASTICIDAD
PROBLEMAS ELEMENTALES DE ELASTICIDAD TRlDIMENSIONAL 287
IJodemos demostrar que bajo ciertas condiciones, esta solución ele-
MI, Y son prácticllmente independientes de la re·partición de
mental es exacta. Para ello, tendremos presente que todas las componentes
que reine en las extremidades.
de la tensión son, si no nulas, funciones lineales de las coordenadas, de

'&PLdai
A .x
t~l_l~a
-:-
JI
~~h-l

~
.x
x
O :le (a) (6)
.r ..

--Z
A
y
-7:.
x,z;
¡O'la. 141

En este caso, los desplazamientos pueden ser determinados de la


FIO. 140 manera que en el problema tratado en el párrafo anterior. Admi-
en el punto A las mismas condiciones de vínculo supuestas en
~modo que las ecuaciones de compatibilidad (130) se cumplen y tan sólo problema, llegamos a:
. es necesario considerar las condiciones de equilibrio (127) y las condi- =
ciones. de límite (128). Remplazando las expresiones (b) en las (127),
u -Oyz, v = ()xz, w = O
encontramos que estas últimas quedan satisfechas siempre que no existan significa que las hipótesis de la conservación de las sec-
fuerzas másicas. La superficie lateral del árbol considerado no está some- transversales planas y de los radios rectilíneos, que se formula
~ tido a carga alguna, de manera que recordando que para la superficie en el desarrollo de la teoría de la torsión, son correctas.
.cilíndrica cos (Nz) = n = 0, las condiciones de límite (128) se reducen a:
Flexión simple de barras prismáticas. Consideremos una
O = ~=, C08 (Nx,) + Tu' 008 (Ny) (e) prismática flectada bajo la acción de dos pares de fuerzas iguales
Para el caso de un cilindro circular se verifica, asimismo, que: opuestos M, que actúan en uno de sus planos principales (fig. 141).
O!rlanl<10 éomo origen de coordenadas el baricentro de la sección recta
cos (Nx) =~, cos (Ny) = l''!!. (d) plano xz el plano principal de flexión, la teoría elemental corres-
j'
nos da para las componentes de la tensión los valores:
La sustitución de estas expresiones y de las designadas con la letra (b) Ex,
en la ecuación (e), patentiza que esta última queda satisfecha. Es también u. = 7[1 r1u = <T% = T:c¡¡ = T~. = T". = O (a)
evidente que parasecciones transversales no circulares, casos en los cuales
no son aplicables las relaciones (d), las componentes de la tensión dadas es aquí el radio de curvatura de la barra deformada a consecuencia
en (h) no satisfacen la condición de límite (e) y, por lo tanto, no es adecuada la flexión. Llevando los valores que dan las expresiones (a) a las ecua-
la sohición (a). Estos problemas de torsión, más complicados, se tratarán de equilibrio (127), se concluye que estas ecuaciones quedan satis-
en el capítulo 11. siempre que no existan fuerzas másicas. Las condiciones de límite
Por 10 que hace a las condiciones de límite en correspondencia con para la superficie lateral de la barra, que está exenta de fuerzas
las bases, es visible que las fuerzas cortantes superficiales, deben repar-: ·pv"".·¡~"p~ también quedan satisfechas. Para las caras limitantes de la
tirse en ellas de manera exactamente igual que lo están las tensiones en sus extremidades, las condiciones de contorno (128), exigen que
'",. y 'y. en cualquiera de las secciones rectas inter.m«::dias· de la pieza. fuerzas de superficie estén distribuidas en ellas de la misma manera
La distribución de tensiones que dan las ecuaciones (b) representa la solu- lo están las tensiones u•. Es esta condición necesaria para que las ten-
ción exacta del problema sólo para este caso, pero su aplicación práctica (a) representen la solución exacta del problema. El momento flectoI
puede extenderse a otros, puesto que según el principio de Saint-Venant, está dado por la ecuación:
a suficiente distancia de las extremidades de una barra larga sujeta a tor-
sión, las tensiones dependen únicamente de la magnitud del momento M =
".
Jr1,x,dA = J E:r;2dA = E1u
R R
288 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS ELEMENTALES DE ELASTICIDAD TRIDIMENSIONAL 289
en la cual, Iv es el momt:nto de inercia de la sección transversal de l~ viga integración, resulta de las ecuaciones mencionadas:
respecto al eje neutro paralelo al eje y. De esta ecuación resulta: V:¡;2 . vxy
1 M Uo = - 2R + h(y), Vo = - R -+ fa(x) (g)
Ii = Ely
Relnp,la2:ando ahora (e) y (g) en la primera ecuación incluida en la serie (d),
que es la conocida fórmula de la teoría elemental de la flexión.
Consideremos ahora los desplazamientos en el caso de la flexión
simple. La ley de Hooke y las ecuaciones (2), llevadas a la solución (a), 2z B2WO _ éJfl(Y) _ a!2(x) + vy = O
ax ay ay ax R
nos dan:
éJw x (b) que tan sólo el primer término de e,sta ecuación depende
E:=a;=R z, concluimos que se deberá tener:
Bu x Bv :¡;
(e) é)2wo
= B:¡; -VIi' Ev=ay=-V R --=0
€", = ax ay ,

(d) ecuaciones, élsí cumo las designadas con (f) (·,il.\en que se cumpla:
wo=mx+ny+p
Tomando en consideración las condiciones de sustentaclOn de la barra, ¡;y2
las ecuaciones diferenciales anteriores permitirán determina.' los desplaza- f¡(y) = 2R + ay + 'Y
mientos como en el § 86. De la ecuación (b) ·resulta inmediatamente
XZ
f2(X) = -a;¡; + f3
W = R + Wo
las que m, 11, p, CA, j"J, 1', son constantes arbitrarias. De esta manera, las
en la eual Wo es función de x y de y solamente. De la segunda y tercera iones que corresponden a los desplazamientos serán'
ecuación, que resultan de la serie (d), tenemos entonces:
Z2 vx2 ¡;y 2
Bu z awo 11 = - 2R - mz - 2R +2R + cq¡ + 'Y
Bz = - Ii -ai'
v = -nz - /lxy - ax + fJ
de las cuales: R
awo Bwo XZ
u =-
Z2
2R - Z -aX" + 'UD, v = - zay
- +vo (e) ~o = R +m:¡;+ny+p

Las constantes arbitrarias se determinan mediante las condiciones


Aquí u o y '!Jo denotan funciones incógnitas de x e y, las que más adelante
·sustentación de la pieza, Suponiendo fijos: el baricentro A de la cara
serán determinadas:- Remplazando en las ecuaciones (e) estas últimas
de la barril; por la izquierda: un elemento del eje de las z y un
expresiones, tendremos: "!,!.UCllLU del plano xz, tendremos para x = y = z = O:
-z a~
ax2
+ auo
ax
=
-
PX
a' 'U = 11 = W = O, a'U = av =. av =O
az az ax
Estas ecuaciones deberán quedar satisfechas para cualquier valor de z, condiciones quedan satisfechas si todas las constantes arbitrarias
y por lo tanto: iguales a cero, y entonces:
1 ..
(1) 'U = - 2'¡¡: [z~ +
V(Z2 - y2)J, v =
-T'
Jlxy (h)
290 TllORlA DE LA ELASTICIDAD PltOBl.EMAS ELEMENTALIlS DI! ELASTICIDAD TRIDIMENSIONAL 291
Para obtener la curva de deflexión, remplazamos en las ecuaciones (h) los . <!onde resulta para el ángulo a (fig. 142a):
valores x = y = O. Se tiene entonces:
Mz2 1
Z2 tg2 IX = P
u =- 2R =- 2EI/ v= w = O
ecuaciones han sido utilizadas para determinar el coeficiente de
que es la expresión de la curva de deflexión que da la teoría elemental p". Si se pule la cara superior de' la viga y se coloca sobre ella
de la flexión.
Consideremos ahora una sección transversal cualquiera, z = e, que
dista e de la extremidad izquierda de la barra.
Después de la deformación, los puntos de esa sección transversal se
encontrarán en el plano

es decir, que tal como lo admite la teoría elemental, en la flexión simple


las secciones transversales permanecen planas. Con el objeto de estudiar
ahora la deformación de la sección transversal en S1\ propio plano, consi-
deremos las caras y = ± ó, después de la flexión. Los costados de la
viga toman la inclinación que se indica con líneas de trazos en la figura
141b, con arreglo a la ecuación:

y = ±b + v = ±b (1 - ~) FICl. l42b

lámina de vidrio, después de la flexión existirá holgura entre la lámina


Los otros dos lados de la sección transversal, x = ± a, se habrán . vidrio y la superficie curva de la barra," cuya amplitud, variable, puede
curvado por efecto de la flexión y después de ésta estarán constituidos po"r procedimientos ópticos. Un haz luminoso monocromático,
" por curvas parabólicas, de ecuaciones: como el de una llama amarilla de sodio, dirigido normalmente sobre
placa de vidrio, se reflejará en parte sobre ésta y en parte sobre las
perficies de la viga y, en aquellos puntos en los que el espesor de la capa
aire determine una diferencia de caminos ópticos de esos rayos, equi-
Si la deformación es pequeña, esas curvas pueden ser sustituidas, con a un múltiplo impar de una semílongitud de onda luminosa, se
una interferencia de los dos rayos reflejados. De esa manera
suficiente exactitud, por arcos de circunferencia de radio R/v. Cuando a
obtenerse una imagen tal como la que muestra la figura 142b que
causa de la flexión, la curvatura de esos costados muestra, en la dirección
longitudinal, su concavidad hacia arriba, transversalmente presentan su apreciar las líneas hiperbólicas de nivel de las superficies com-
concavidad hacia abajo. Podremos obtener la ecuación de las líneas de
nivel que corresponden a esta superficie, de curvaturas opuestas, cuyo
aspecto será el que indica la figura ¡42a, haciendo en la primera de las 89. Flexión simple de placas planas. Los resultados" obtenidos
ecuaciones eh), x y u constantes. De esa manera, se tiene como ecuación el párrafo anterior son de aplicación al caso de la flexión de placas de
de esas curvas uniforme. Si sobre los bordes de la placa paralelos al eje de las y
Z2 _ "y2 = constante g. 143) están repartidas las tensiones (1", = EzIR, la cara de ésta se
en una lluperficie de curvaturas opuestas: en planos para-
que son, por lo tanto, hipérbolas, de asíntotas , A. Comu, C071lpl. rend., vol. 69, pág. 333, 1869. Véase también R. Strnubel, Wied.
Aun., vol. 68, pág. 369, 1899.
Z3 _ .. y2 = O "" • Se supone qu~ 1"" defonnaclOnl!S son pequeñas frente al 'espesor de la placa.
292 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROBLEMAS ELEMENTALES DE ELASTICIDAD TRIDIMENSIONAL 293
lelos a xz es llR y en dirección perpendicular, .- vlR. Si }¡ es el espesor entonces:
de In placa, ¡"1I1l el momento flector por unidad de longitud sobre los bordes
paralelos al eje de las y, y (135)

x
(136)

y
constante D se denomina rz"gzaez de fleJ.,"ión de la placa. En el caso
z z en que la placa adquiere la forma de superficie cilíndrica de
··ap,n"ra1tril,p~ paralelas al eje y tendremos a2 wléJy2 = O y de acuerdo con
FrG. 143 Pre.14+
ecuaciones (136): . '
el momento de inercia por unidad de longitud, la relación entre MI y R
será, con arreglo a lo explicado en el párrafo precedente, MI = -D 82w2
ilx
(137)
(a) Ma = -vD éJ2w
il;¡;2

Si llegaron a actuar momentos flectores en dos direcciones ortogo- el caso particular en que M 1 = M2 = M, tenemos
nales (fig. 144) las curvaturas de las superficies deformadas pueden obte-
nerse por vía de superposició.n. Sean 1/Rl y IIR2 las curvaturas de las
superficies elásticas en los planos paralelos a los ejes de coordenadas
zx y zy y M~ Y M 2 los momentos f1ectores por unidad de longitud de los placa adquiere, entonces, forma esférica y la relación entre la curva-
bordes paralelos a los ejes y y x, respectivamente. Aplicando la ecun~ión y el momento flector es, según las ecuaciones (e)
(a) y el principio de superposición, resulta
M = Eh 3 .l = D(l + v) (138)
12(1 - v) R R
1 12 )
Rl = Eh3 (MI - pM2
tendremos oportunidad de emplear estos resultudos.
1 12 ) (b) Las fórmulas (136) son L1sadas en la teoría de placas, cuando los mo-
Ra = Ehs (M 2 - pM l
flectores no son uniformes y vienen acompañados de presiones
'lIT,,·r·tl"I~II·" y fuerzas tangenciales. En esas circunstancias esas fórmulas,
Los momentos se consideran de signo positivo si al deformar la placa, son una aproximación válida pa-ra placas delgadas, se deducen de hlS
ésta muestra su convexidad hucia abajo. Despejando M J y M 2 en las .cc:uaClcme:s generales del capítulo 9. La teoría elemental de la flexión de
ecuaciones (b) resulta bartas puede relacionarse con las ecuaciones generales de manera seme-
(~ + ~)
3 1 .
M _ Eh V
1 - '12(1 - ]12) R¡ R 2
(e) J. N. Goodicr, Trans. Roy. Soco Can., 3.a ediCión, sección IIJ, vol. 32,
M 2 = 12(1 _
Eh 3
]12)
( 1 . 1)
R, + R¡ V
I pág. 65, 1938.

Para pequeñas deformaciones se puede admitir, aproximadamente:


1 éJ2w éJ2w
R¡ = - a;F' - éJ y 2
TORSION 295
la dirección normal al radio OA. Descomponiendo esta tensión en Sll::!
componentes Tu Y 'ti .. es evidente que una tensión complementaria,
a '11' actuará sobre el elemento de.superficie lateral de la barra .que
<:Il:C:;U<HU'" al punto A (véase § 4). Esto está en contradicción con la hipótesis

que la torsión es causada únicamente por los pares que actúan sobre
extremos de la barra, estando libres las caras laterales de la acción
toda fuerza exterior. Una sencilla experiencia realizada con una barra
(fig. 146) muestra que las secciones transversales de la barra
permanecen planas al sufrir la torsión y que la distorsión de los e1e-
entos rectangulares de la superficie es máxima en el centro de los lados
decir, en los puntos más próximos al eje de la barra. '

90. Torsión de barras prismáticas. Hemos visto ya (§ 87) que


la solución exacta del problema de la torsión de una pieza cilíndrica de
sección circular, se obtiene admitiendo que las secciones transversales
de la barra permanecen planas y giran sin deformarse durante la torsión.
Esta teoría, desarrollada por Coulomb!, fue aplicada más tarde por Navier
al caso de una barra prismática de sección no circular. Adoptando la
hipótesis mencionada, Navier llegó a la conclusión errónea de que para
FIG. 146 FIG. 147

La solución exacta del problema de la torsión de barras prismáticas


pares aplicados en los extremos, fue dada por Saint-V enant' , quien
el método llamado semiinverso. Comenzó haciendo ciertas supo-
siciones respecto a la deformación de la barra sometida a torsión, supo-
FlG. 145 siciones que demostró cumplían las ecuaciones de equilibrio (127) y las
un determinado momento el ángulo de torsión es inversamente proporcio- de contorno (128). Se sigue, entonces, de la unicidad de la
nal al momento polar de inercia respecto al baricentro de la sección trans- 'solución de las ecuaciones de la elasticidad .(§ 82), que las suposiciones
versal y de que los ~alores máximos de la tensión tangencial se dan en los hechas son correctas y que la solución obtenida es la verdadera solución
puntos más alejados del centro de la sección ". Es fácil ver que esta hipótesis problema de torsión.
está en contradicción con las condiciones de contorno. Tomemos, por ejem- . Consideremos una burra prismática que trabaja a torsión bajo la acción
plo, una barra de sección rectangular (fig. 145). De la teoria de Navier se 'de los pares aplicados en los extremos (fig. 147). Basándose en la solución
sigue que en todo punto A del contorno, la tensión tangencial debe actuar .obtenida para el árbol cilíndrico (pág. 285), Saint-Venant supone que la
. rmación de la barra prismática sometida a torsión, consiste en: a) una
1 Histoi~e de l'académie, 1784, págs. 229-269. Parí., 1787. rotación de las secciones transversales, como en el caso del árbol cilíndrico
• Navier, RlÍsu7n¿ des "fOllS sur "applicalion de la mécanique, 3.~ edición, P,rls, 1864.
editada por Saitlt-Venant. . I Mém. sava/fts étrallger.• , vol. 14, 1855. Véase tamb,én la nota de Saint-Venant relat<v ..
o Est," condiciones se dan en una lámina elástica delgada (couespondiente a una rebanada . la obr. de Navier, loe. cit., e l. 'l'odhunter y K. Pcarson, History 01 ¡he Theory oif ElasliciN
de la barra, comprendida entre dos secciones transversales) ligada a dos placas rígidas. Véase . vol. 2. . . • •
J. N. Goodier, J. Applied Phys., vol. 13, pág. 167, 1942.
·296 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 297

y b) un alaoeo de las secciones transversales; igual para todas ellus. Tomando y cuyas normales son perpendiculares al eje z, tenemOs X = Y = Z = O
el origen de coordenadas en una de las secciones extremas (fig. 147), Y cos (Nz) = n = O. Las dos primeras ecuaciones (128) son idéntica-
encontramos que los desplazamientos correspondient~s a la rotución de mente satisfechas y la tercera da:
las' secciones transversales son:
(e)
u = -(Jzy, ti = Ozx (a)
lo que significa que la tensión tangencial resultante que actúa en el con-
donde (}z es el ángulo de rotación de la sección transversal distante z del torno, tiene por dirección la de la tangente al mismo (fig. 148). Anterior-
origen. mente demostramos (pág. 294) que esta condición debe ·ser satisfecha si
El alabeo de las secciones transversales estará defrnido por una función: sobre la superficie lateral de la barra no actúa ninguna fue~za.
. w·= 8tP(x,y) (b)
Partiendo de los desplazamientos (a) y (b) supuestos, calculamos las
componentes de la deformación mediante las ecuaciones (2), obteniéndose:
¡-----4--x
E~ ~ = E. = 'Y::v = O
ElI

"I=- = aw + au = () (a!fJ _ y)
ax az ax
(e)
aw av (a ift )
"111' = - + - = (J - + x
. ay éJz ay .

Las componentes de la tensión correspondientes, dadas por las ecua-


ciones (3) y (6) son:
rT. = (F1I = rT, = TI<1I = O F¡o. 148

T .. = Ge (!~ - y) Considerando un elemento de arco abe del contorno y suponiendo

Ty> = Go (:t + x) (d) que $ aumenta yendo de e hacia a, tenemos:

l = c~s (Nx) = ~~, in = cos (Ny)


Puede verse que las hipótesis (a) y (b), relativas a los desplazamientos,
implican la ausencia de tensiones normales que actúen entre las fibras y la ecuación (e) se convierte entonces en:
longitudinules de la pieza o en la dirección longitudinal de las mismas.
Asimismo no hay distorsión de las secciones transversales pOI' ser €" E" Y
y",. nulos. Tenemos en todo punto un estado de esfuerzo cortante simple
(
a.f _
az
y) dy _ (ut/! +
ds ay
z) az = O
ds
(140)

definido por las componentes T;¡,: y 7:"z. La función 1jJ(x, y), que define el
De esta fOlma todo problema de torsión se reduce a la detenninación de
alabeo de la sección recta, debe ser detenninllda ahora, de forma que sa-
una función 1p que satisfaga la ecuación (139) y las condiciones de con-
tisfaga las ecuaciones de equilibrio (127). Llevando a estas ecuaciones la
torno (140).
expresión (d) y despreciando las fuerzas másicas vemos que la' función
Otra manera de operar que ofrece la ventaja de simplificar la expresión
.'1' debe satisfacer la ecuación:
de la condición de contorno es la siguiente. Habida cuenta de la anula-
í)2!fJ + a'l,J¡ = O (139)
ción de IJ'z, (FII' (1., T:z: v [ecuación (d)), las ecuaciones de equilibrio (127)
ux 2 ay2 se reducen a:
Consideremos ahora las condiciones de contorno (128). En las super- éJ-rz • = O,
ficies laterales de la barra, sobre las que no actúa ninguna fuerza exterior .. az
298 TEORrA DE LA BLASTICIDAD TORSION 299
Las dos ecuaciones primeras son cumplidas ya t¡ue T Z% Y Ty , son, según las ocurre con el extremo inferior de la barra de la figura 147. En los extremos
ecuaciones (d), independientes de z; La tercera significa que podemos las fuerzas tangenciales se distribuyen de igual manera que las tensiones
expresar T;I:% y t'y% de la forma: tangenciales en las secciones rectas. Es fácil probar que la resultante de
esas fuerzas es un par. Sustituyendo en ias ecuaciones (g) los valores (141)
(141) y observando que <{J es cero en el contorno se obtiene:

donde ~ es una función de x e y llamada función de tensiótr.


De las ecuaciones (141) y (d) se deduce:

-0¡P = G8 (01/1)
- - y, - -ocf; = GIJ (o",
- + x) (j)
ay ox OX ay
Si eliminamos tp derivando la primera .expresión respecto a y y la segunda
respecto a x y restándolas, encontramos que la función de tensión debe
satisfacer la ecuación diferencial; Vemos, pues, que la resultante de las fuerzas distribuidas sobre los ex-
tremos de la barra son cero y que estas fuerzas representan un par cuya
(142) magnitud es:

en la que:
F = -2GIJ (143)
MI = fj (Yx - Xy) dxdy = - f f ~:zdzdy
La condición de contorno (e), introduciendo las ecuaciones (141),
-f J~: y da; dy (h)
se convierte e{l:
Integrando por partes y teniendo en cuenta que '" = O en el contorno,
o¡P dy + orJ¡ dx = d¡p = O (144) encontramos:
dy ds oz ds ds
(145)
Lo que nos dice que la función de tensión r/> debe ser constante a lo largo
.del contorno de la sección transversal. Si se trata de directrices que sean contribuyendo cada una de las integrales del último miembro de las ecua-
recintos simplemente conexos (barras macizas) esta constante puede ser ciones (h) a la mitad del valor del par. Vemos así que una mitad del par
elegida arbitrariamente, asignándosela el valor cero en el estudio que sigue. es debida a la componente t'",: Y la otra a 'y.'
La determinación, entonces, de la distribución de tensiones en la sección Queda así demostrado que la distribución de tensiones que se obtiene
transversal de una barra sometida a torsión, consiste en determinar la .. suponiendo que los desplazamientos vienen dados por (a) y (b) Y deter-
función r/> que satisfaga la ecuación (142) y se anule en el contorno. Más minando las componentes t':u Y T U% mediante las ecuaciones (141), (142).y
adelante, daremos algunos ejemplos de aplicación de esta teoría general (144), satisfacen las ecuaciones de ~quilibrio (127), anula las fuerzas apli-
a diversos casos particulares de secciones transversales. cadas sobre la superficie lateral de la barra y da en 105 extremos el par ex-
Consideremos ahora las condiciones existentes en los extremos de pr~sado .por (145). Las condiciones de compatibilidad (130) ~o necesitan
una barra sometida· a torsión. Las normales a esas secciones extremas son ser consideradas dado que las tensiones han sido deducidas de los despla-
paralelas al eje z. En consecuencia l = m = O, n = ± 1 y las ecuaciones zamientos (a) y (b). Las ecuaciones de la elasticidad quedan, pues, satis-
(128) se convierten en: fechas y la solución del problema de la torsión, así obtenida, es la exacta.
(g) Como se ha hecho notar esa solución exige que las fuerzas en los ex-
tremos de la barra, se distribuyan de una cierta ni:mera. No obstante, las
en las que el signo positivo debern tornarse para el extremo de la barra aplicaciones prácticas de la solución no se lúnitan a casos de ese tipo, ya
cuya normal exterior tenga el sentido del semieje positivo de las z, como que, según el principio de Saint-Venant, a suficiente distancia cl,e los
1 Esta función ha sido introducida por L. Prandtl. Véase Physik. Z., vol. 4, t"9(iJ. extremos de un'l. barra larga sometida a torsión, las tensiones dependen
300 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 301

solamente de la magnitud del momento de torsión Mt y son prácticamente ecuaCión (ti) se convierte en:
independientes de la distribución de fuerzas que exista en sus bases.

91. Barras de sección transversal elíptica. Supongamos que el


contorno de la sección transversal (fig. 149) venga dado por la ecuación:
:¡;2y2
ji2+lj2-1=O (a) F= 2M,Caz b2) + (e)
7ra 3 b;f-
'La ecuación (e) da entonces:

cp = --
M,
7rab a 2
(x
-
2
y~ )
+--1
b2
(f)

Las componentes de la tenRión se obtienen sustituyendo en las ecuaciones


. 1) la función de tensión (b), que operando nos da:

2M,y 2M,:r; (146)


1'~, =- 7rab 3 ' 1'u. = 7ra 3b

FIC. 149 La relación entre las componentes de la tensión es proporcional a y/x y


10 tanto constante !\ lo largo de cualquier radio tal como OA (fig. "149).
significa que la tensión tangencial resultante a lo largo de un radio
La ecuación (142) y la condición de contorno (144) son satisfechas si · cualquiera OA, tiene una dirección constante que será evidentemente
la función de tensión es de la forma: · la de la tangente al contorno en el punto A. A 10 largo del eje vertical DB
componente '1/: de la tensión tangencial es nula y la tensión resultante
(b) .es igual a '" •. A lo largo del eje horizontal OD la tensión tangencial resul-
· ·tante es igual a T y •• Es evidente que la tensión máxima se produce en el
en la que m es una constante. Llevando el valor (b) a la ecuación (142) contorno y puede demostrarse fácilmente que este máximo se da en los
se obtiene: . del eje menor de la elipse. Sustituyendo y = b en la primera
·de las ecuaciones (146) obtendremos el valor absoluto de dicho má.ximo:.

de donde: (147)
(e)
· Para a = b esta expresión coincide con la conocid¡l fórmula correspon-
· diente a la sección circular:
La ecuación (145) permitirá ahora determinar la constante F. Sustituyendo
Sustituyendo (e) en (143) resulta la siguiente expresión para el ángulo
el valor (e) en esta ecu·ación tendremos:
de torsión:

M, = á~~~2 (~f I 2
x dxdy +~ fJ 2
y dxdy - ff dXdY) Cd) (148)

Puesto que:
.·Damos el nombre de ngidez torsional al factor por el cual debe dividirse
· ~I momento torsor para obtener el ángulo específico de torsión. Si los
JI 2
y dxdy
7rab3
= 1" = T' , ~enotamos por e, su. valor, de (148), para el cas~ de sección elíptica es:

ff dxdy = 7rab (149)


302 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 303

donde: partes real e imaginaria de esta expresión son soluciones de la ecuación (b)
la pág. 214). Tomando, por ejemplo, 1/ = 2, se obtienen las soluciones x' - y'
Con 1/ = 3 se tienen x' - 3xy2 y 3x'y - y'. Con 71 = 4 llegamos a soluciones
A = lI'ab, IU,"'''JU'''' homogéneas de cuarto grado y así sucesivamente. Combinando tales solu-
podremos obtener otras varias de forma polinómica.
son el área y el momento polar de inercia de la sección transversal. . Tomando, por ejemplo: .
Conocidas las componentes de la tensión (146) podemos determinar
fácilmente los desplazamientos. Las componentes u y 1) vienen dadas por <P = F
422
- - (z' + y') - .-
- (:l;' + y') + 4>, = F[1
~
1 (x' - 3:vy') + b ] (el

obtendrá una solución de la ecuación (142) que será un polin"omio de tercer grado
dos constantes a determinar a y b. Este polinomio será solución del problema
·mlrSll~lU" si satisface a las condiciones de contorno (144), o lo que es lo mismo si
... contorno de la sección transversal de la barra tiene por ecuación:

!2 (:l;' + y') - 1.
~
(x' - axy') +h = O (f)
diversos valores a la constante (h) de esta ecuación, obtendremos otras tantas
para la sección transversal.
b = - (2/27)«' se obtiene como solución el triángulo equilátero. La
Momento torsor en este caso tendrá la forma:
Fu... 150 (:1; - V3v--ia)(:I) + V3U - ¡a)(x +1-a) = O

las ecuaciones (a) del § 90. El desplazamiento w se deduce de las ecuaciones


(d) y (b) del § 90. Sustituyendo los valores dados por (146) y (148) e inte-
grando obtenemos:

(150)

Esto prueba que las curvas de nivel de las secciones alabeadas son hipér-
bolas cuyas asíntotas son los ejes principales de la elipse (fig. 150).
y
92. Otras soluciones elementales. En el curso de un estudio del problema
de la torsión, Saint-Venant analizó varias soluciones polinómicas de la ecuación (142). FlG. 151
Para resolver el problema representamos la función de tensión de la forma:
que es el producto de las ecuaciones de los lados del triángulo mostrado en la figu-
<P = <PI + F4" (x' + y') (a) · ra 151. Observando que F = -2GO y sustituyendo:

La ecuación (142) nos da entonces: <p'" -Gil [ 21 (x' + y') -


1 (:l;'
2a ji
- 3zy') - 2¡a'
] (g)

(J2"'1 8'</>1 ea las ecuaciones (141) obtenemos las componentes de la tensión T., y 'gr. Por razo-
iJ:I;' + ¡¡y' =0 (h)
· nes de simetría a 10 largo del eje x, "n = O y entonces deducimos de (g):
y a 10 largo del contorno, según (144):
(h)
F
<PI +¡ (:!l' + y') = COllstant (e)
· La máxima tensión se produce en los puntos medios de los lados del triángulo donde,
El problema de la torsión se reduce entonces 11 la obtención de las soluciones de la · con arreglo a (h), tiene el valor:
ecuación (h), que satisfagan a la condición de contorno (e). Con el fin de llegar G8a
a soluciones de forma polinómica, tomemos la función de variable compleja: Tm= = 2 (/c)

(x \- <y)" En lus vértices del...~iángulo, la tensión tangencial es cero (véase la fig. 151).
304 1'EOIUA DI.! LA ELllb"l'WlOAD TORSION 305

Sustituyendo (;¡) en la ecuación (145) se obnen'e: dedujo Saint-Venllnt que la rigidez torsional puede calcularse
ap.rOl,mla(lalne.n~e mediante la ecuación (143), es decir, sustituyendo el eje
M. = UOa<_ = ~ 6GI" el) por uno de sección elíptica con iguul área y momento polllr de inercia.
15.ya 5
En todos los casos estudiados por Saint-Venant, la tensión máxima
Si como solución ele In ecullción (142) se toma un polinomio de cuarto grado
.';"'Tr""noncliÓ a los puntos del contorno' más próximos al baricentro de
que contenga solamente potencias pares de ., e }', obtendremos la siguiente función
de tensión: recta, Posteriormente las investigaciones más detalladas de

2 2
al]
4> = -Ge [ 1- (x' + y') - - (a;4 - 6a;2y2 + y~) + - (a - 1)
2
mostraron que existen casos en los .que los puntos con tensiones
si bien pertenecen al contorno, no son los más próximos al
de la sección transversal.
La condición de contomo (144) queda satisfecha SI el contorno de la sección trans-
I'ersol tiene por ecuación: Tomando n = 1 y 11 = - 1 en la expresión (d) y usando las coordenadas polares
tenemos las siguientes soluciones de lu ecuación (b):
;¡;' + y' - (t(z! - 6:1:'1/' + y') + a - 1= O

\Ta1'iando a, Saint-Venant obtuvo una familia de secciones transversales como las .p, = r coa.p, 4>1 = !'eoa,¡,
T
que muestra la figura 152 a.. Combinando solucIOnes polinómicas de cuarto y octavo
grado Saint-Venant llegó a la sección recta que representa la figura 152 b. de tensión (a) podrá tomar entonces la forma:
F Frz
Basándose en sus investigaciones, Saint-Venant formuló ciertas con- q, = '4 (x" + yO) - T r 008..p + Fb'C\
"2 T COS '" -
F
'4 bS (m)
clusiones generales de interés práctico. Demostró quc para contornos
simplemente conexos y para una determinada área de la sección, la rigidel. . la que a y b son constantes. La condición de contorno (144) se cumplirá si en el
torsional aumenta cuando el momento polar de inercia de aquélla dismi- contorno de la sección recta tenemos rP -" O ó, sei¡(¡n (m):

:rO - b 2 - 2a(r' - b2)~ ,. = O (n)

(T' _ b') (1 _ 2a ~os ",) = O (o)

'~~uaclón del' contorno de la sección recta I'epr~­


;,'~'ntada en la figura 153 '. Tomando:
r' - b' = O
una circunferencia de radio b \
origen, y haciendo: y
!OU... 153

(6) /J \ ' . ·resulta una circunferencia de radio a tangente del eje y en el origen. La tensión
:Y tungenciol máximo se da en el punto A y es:
fo1G.152
"-m.. = Ge(2rz - b) (p)

!luye. En consecuencia, dada una cierta cantidad de material, la máxima Cuando b es muy pequeña comparada con {l, es decir, cuando se tiene una ranura
rigidez a la torsión se obtiene en un eje de sección circular. Conclusiones . longitudinal semicircular de radio muy pequeño, la tensión en el fondo de la ranura
. es tÚ doble de la tensión máxima corresponeliente al eje de sección circular de radio el
semejantes resultan de considerar la máxima tensión tangencial. Para un
entalladura.
par de torsión y un área de sección transversal dados, el menor valor de
la tensión máxima corresponde a la figura de mínimo momento polar
. t L. N, G. Filon, Tra1ls. Roy. Soco Latido", serie A, vol. 193, 1900. Véase también el
de inercia. trabajo de G. Polyo, Z. G/lgew. Malh. Mech" vol. 10, pág. 353, 1930.
Comparando diversas secciones rectas de contornos simplemente 2 ESle problema fpe estudiado por C. Weber, Forschu1Igsarbc¡ttm, núm. 249, 1921.

20 --rfiQRI,\ DIt 1 A 1l.A'iTlt.IDAO


306 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TonSloN 307

93. Analogía con la membrana. La· analogia con la membrana, la ecuación (142) y la condición de contorno (144) (véase el § 90)
introducida por L. Prandt1' ha resultado de gran utilidad para la solución la función de tensión ~,se deduce que estos dos problemas son idén-
de problemas de torsión. Imaginemos una membrana homogénea (fig. 154) Podemos entonces deducir de las flechas de la membrana los valores
cuyos bordes se mantienen fijos sobre un contorno igual al de la sección ~ sin más que sustituir la cantidad '-(g/S) de la ecuación (151) por
transversal de la barra sujeta a torsión, que es sometida a una tracción cantidad F = -- 2GIJ de la ecuación (142).
Mediante la representación de la superficie deformada de la membrana

1i~,7'X
curvas de nivel (fig. 155) se pueden obtener varias conclusiones im-
¡'ortantf~s relativas a la distribución de tensiones en la torsión. Conside-
un punto cualquiera B de la membrana. La flecha a 10 largo de la
rva de nivel que pasa por este punto es constante y se tendrá:
z
az = O
as
ecuación correspondiente para la función de tensión será:
él<fJ = (at/JdY + a</>d:c\ = T dy _ 'J'. dz ='0
as ay ds o:c ds} :rz ds' ~. ds
que expresa que la proyección de la tensión tangencial resultante
·.'t:I:U'It.:l'UU
el punto B, sobre la normal N a la curva de nivel es cero, deduciéndose
la tensión tangencial en el punto B tiene la dirección de la tangente

~Irl~~
FlO. 154

uniforme sobre sus bordes y a una presión uniforme sobre sus caras. Sea
q la presión por unidad de superficie de la membrana y S la tracción unifor-
me'por unidad de longitud del contorno. Los esfuerzos de tracción que
I z; 1
actúan sobre los lados ad y be del elemento infinitesimal abcd (fig. 154) I I
tiene, cuando las flechas de la membrana son pequeñas, una resultante
dirigida hacia arriba cuyo valor es ·-S(8"zJ&x') dx dy. De igual forma,
las . tracciones que actúan sobre los otros lados del elemento tienen por
resultante -S(82 zJíJx") dx dy y la ecuación de equilibrio del elemento
será:
y
FIG. 155
de donde: a la curva de nivel que pasa por ese punto. Si en la sección transversal
(151) . : de una barra sujeta a torsión se trazan curvas tales que la tensión tan gen-
· cíal resultante en cualquiera de sus puntos tenga la dirección de la tangente
· respectiva, dichas curvas serán las llamadas líneas de tensión tangencial .
. En el contorno la flecha de la membrana es cero. Comparando la ecua- ·.·Por lo tanto, las curvas de nivel de la membrana son las curvas de tensión
ción (151) y las condiciones de contorno para las flechas z de la membrana,
· tangencial de la sección transversal de la barra sometida a torsión.
I Physik Z., vol. 4, 1903. Véase también Anthe6, Di7lglers poly/och. J., pág. 342, 1906.
La magnitud de la· tensión resultante, en B (fig. 155) se obtiene pro-
Otros desarrollos de la ana logIa, as! como ciertas aplicaciones de la misma, pueden verse en yectando sobre la tangente las componentes ,;,. y' 'y., Se tiene entonces:
los trabajos de A. A. Griffith y O. 1. Taylor, Tech. Rept. Ad". COIum. Aerollautics, vol. 3,
páginas 910 y 938, 1917-1918. 'O" T = T". cos (Nx) - T", COS (}[y)
308 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 309

Sustituyendo:
aq. dx Jr ds =.2GIJA (152)
r .. = ay' coa (Nx) = dn' cos (Ny) = dy
dn
ediante esta expreSlOn puede obtenerse el valor medio de la tensión
se obtiene: tangencial a 10 largo de una curva de nivel.
T = _ (aq. d:c + acf¡ ay) = aq. Tomando q = 0, es decir, considerando una membrana sobre la que
actúe carga lateral alguna, se llega a la ecuación:
8:c dn ay an - dn
La magnitud de la tensión tangencial" en B viene dada por la pendiente a'lz ..L a2z = O (153)
máxima de la membrana en ese punto. Basta simplemente con sustituir éb;3 ' ay2
q/S por 2GB en la expresión de la pendiente. De este hecho, se deduce que
las máximas tensiones tangenciales actúan en los puntos en los que las la ecuación de la [unción r/JI [ecuación (h) del § 92].
curvas de nivel están muy próximas unas a otras. las ordenadas del contorno de la membrana, de forma tal que
La ecuación (145) nos permite. establecer que el doble del volumen verifique la ecuación:
limitado por la membrana· deformada y
el plano xy (fig. 155) representa
z + F4' (Xi + y2) = constante (154)
el par de torsión supuesto que qfS es sustituido por 2GO.
Se puede observar que la forma de la membrana y, en consecuencia, la distrI- cumplirá también la condición de contorno (e) del § 92. De esta forma,
bución de tensiones es la misma cualquiera que sea el punto de la sección transversal, podeme)s obtener la función 1>1 a partir de la superficie de deformación
tomado como origen en el problema de torSlón. Este punto, por supuesto, representa ·una membrana no cargada, supuesto que las ordenadas de la superficie
el eje de rotación de las secciones rectas. Es sorprendente a primera vista que las
secciones rectas puedan girar respecto a Un eje diferente (paralelo) siendo el mismo ·la misma tengan unos determinados valores en el contorno. Más adelante
el par al que se encuentran sometidas. Esta diferencia, sin embargo, se resuelve que tanto las membranas cargadas, como las no cargadas, pueden
mediante una I·otación de conjunto (rotución de sólido rígido) de la pieza. Consi- utilizadas para determinar experimentalmente la distribución tensional
deremos, por ejemplo, un cilindro circulllr sometido a torsión, cuyas secciones rectas piezas sometidas a torsión.
han sufrido rotaciones respecto al eje central. Una generatriz lateral toma una posición
oblicua respecto a su dirección original, a la cual puede ser llevada de nuevo me-
diante una rotación de conjunto del cilindro alrededor de un diámetro. Las posi-
or
G
ciones finales de las secciones transversales corresponderán, entonces, a tina rota-
ción de torsión nlredcdor de esta generatriz, tomada como eje. Las secciones rectas
se mantienen planas pero se encuentmn ahora inclinadas respecto a su plano inicial,
r---c~
a causa de la rotación de conjunto del cilind ro. Cualquier sección estará alnheadfl y
Gon unu elección dada de los ejes, la inclinación de un elemento de superficie de ",Il S
la sección terminal estará definida [(kv/ax y ow/oy estando dados por las ecuacio- Ó x
nes (ti) )" (b) del § 90]. Ese elemtlnt() puede ser devueltu a su orientación uriginal
mediante uno rotación de conjunto alrededor de un eje perteneciente a la sección
terminal. Una rotación tal sustituye el eje de las rotaciones de torsión por un eje
paralelo. Es posible, entonces, definir un eje o un centro de las rotaciones de torsión,
llamado Cel/tTo de torsión si se precisll In orientación final de un elemento de superficie
ele la sección terminal, por ejemplo, si tal elemento se mantiene fijo.
l ;y
(a)
z
(óJ

Consideremos ahora la condición de equilibrio de la porción mn de Flc. ¡56


la membrana limitada por una curva de nivel (fig. 155). La pendiente de
la membrana a lo largo de esta curv¡¡ es en cualquier punto proporcional La analogía de la membrana no es útil solamente cuando el material
a la tensión tangencial T e igual a r 'g/S ·1/2GO. L1arrmndo, entonces, A la barra sometida a torsión, se mantiene dentro del límite elástico,
a la proyección horizontal de la porción mn de memb¡·ana, la ecuación también cuando ese límite es sobrepasado en ciertos puntos de la
respectiva de eCJuilibrio sení: y el material comienza a ceder haciéndose plástico1 • Suponiendo

f S (r 2S 2G8
_1) ds = qA I Este hecho fue mdlcado por Prandtl, véase A. Nádal, Z. angew. Mal". Mech., vol. 3,
442. Véaselamb,4~ E. Trcfftz, ibfd., vol. S, pág. 64-, 1925.
310 TEORJA DE LA ELASTICIDAD TORSION 311
que la tensión tangencial se mantenga constante durante la deformación
plástica, la distribución tensional en la zona de la sección transversal
elásticamente deformada sigue estando representada por la membrana, (155)
pero en la zona de deformaciones plástic11s, 111 tensión vendrá dada por
una superficie de pendiente máxima y constante correspondiente a la (156)
tensión límite. Imaginemos que esa superficie esté colocada sobre la sección
de la barra a la.manera de un tejado y que también esté aplicada la mem- . En la curva de deflexión parabólica (fjg. 15ób):
brana tersa y cargada como se explicó anteriormente. Al aumentar la
presión, ciertas partes de la membrana comienzan a ponerse en contacto
con el techo rígido. Esto corresponde a la iniciación de la deformación
plástica de la ba.rra sometida a torsión. Si se sigue aumentando la presión,
. y la pendiente de la membrana en cualquier puntó es:
ciertas zonas entran en contacto con el techo. Estas zonas son las regiones
de deformación plástica de la barra. A Nádai ha realizado interesantes
experimentos que ilustran .esta teoría l.

94. Torsión de barras de seCClon rectangular estrecha. La tensión correspondiente en la barra sometida a torsión es:
analogía con la membrana, proporciona una solución muy séncilla del
pro blema de la torsión de una barra de sección rectangular estrecha. Des- Tu' = 2GOx
preciando' el efecto de los lados cortos del rectángulo y suponiendo que distribución de tensiones obedece, pues, a una ley lineal, como se ve
la membrana, Iigemmente deformada, toma una forma cilíndrica (fig. 156), la fjgura 156a. Calculando la magnitud del par correspondiente a esta
podremos obtener la flecha de la membrana mediante la fórmula elemental de tensiones se obtiene:
de la parábola, que corresponde a la curva de equilibrio de un hilo unifor-
mem~nte cargad0 2 (fig. 156b);
qc 2
!i=-
88
(a)
solamente la mitad del total dado por la ecuacJOn
La otra mitad corresponde a la componente r~ .. la cual fue des-
La pendiente máxima que se presenta en el punto medio de los lados largos
a! suponer que la superficie de la membrana defonnada era
del rectángulo es, de acuerdo con las conocidas propiedades de la parábola:
,<;lI.l11<.Jn",a. Aun cuando la magnitud de estas tensiones sólo es apreciable

4/) qc la proximidad de los lados cortos y aunque los valores máximos que
e = 28 (a)
son inferiores al de ',.oc< calculado anteriormente, actúan a
distancias del eje de la burra y su momento representa la segunda
El volumen limitado por la membrana deformada y el plano xy, calculado del par de torsión M/~.
como cilindro parabólico, será: Es Interesante destacar que el valor m~íximo de la tensión T max , dado
2 qbc 3 la primera de las ecuaciones (d), es doble del que se origina en un eje
V =-clib =- (e) de diámetro igual a e sometido al mismo giro (J. Esto puede ser
3 128
¡cado considerando el alabeo de las secciones transversales. Los lados
Empleando ahora la analogía de la membrana y sustituyendo qfS por 2GO las seccionés rectas tales como 1111; (fig. 157) permanecen normales a
en (b) y (e), se oJ;¡tiene: aristas de la barra, como es mostrado en' la figura, en los puntos n y m.
(d) distorsión total de un elemento tal como el abcd se compone de dos
T,a,% = cGO,
la parte YI debida a la rotación de la sección transversal alrededor
eje de la barra, la cual es igual a la producida en un cilindro circular
, Véase TrmlS. A.S.kl.E. Applicd Mechonics DlVlslon, 1930. Véa.e tumbi"n A. Núual, . diámetro e y la parte Y. debida al alabeo de la sección transversal.
1'heory of Flmv ol/d Fracture ni Salid., 1950, capítulos 35 y 36.
'V"ase S. Tnnpshenko y D. Young, Engi"eer;ng Mechanic!, pág. 35. • Esta cu~stJón fu. a~larada por Lord Kelvm y 'I'Ult, Natural Philasaphy, vol. 2, pág. 26·,
312 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 313
En el caso de una sección rectangular estretha)l2 ;'1 Y la distorsión condición de' simetría con respecto al eje y y las condiciones de
resultante es doble de la que se da en un eje circular de diámetro c. en los lados x = ± a del rectángulo, quedan satisfechas si se
Las ecuaciones (155) y (156), obtenidas para el caso de una sección ,:'",v'nr,p"a z bajo la forma de una serié,
rectangular estrecha, pueden ser usadas también cuando se trate de harras
de pared delgada, de secciones tales como las mostradas en la figura 158, ..
~
nm-x
z = bn cos 2a Y" (b)
,,~1.3, , ...

t- -"(
la que b1 , b ... son coeficientes constantes e Y¡,
I 1 "
Y, ... son funciones de JI solamente. Sustituyendo (b)
--l f--)í 1
I I la ecuación (a) y observando qlle el segundo miem-
b de esta ecuación puede ser dcsarrollado en serie ':
¡ aí
Cll
rr' ['d
¿:
~

4 n-l y
I q (1)--¡¡- n1l"X (e)
I "8 n1l" - cos 2iL Fra. 159
I
1 I ~=lJ3,5, •••
1 I
)..-/-- ,u~:ga[ll():S a la siguiente ecuación para la determinación dc Y,.:
2 2 4 ,.-1
(a} (hJ (a) (6J Y If - ~ y = _ 2 __ (-1)2- (d)
n 4a2 n S n1l"b"
Flo. 157 FIG. 158

bastando para ello hacer b igual a la longitud de la sección transversal


desarrollad!!. Tal extensión se sigue del hecho de que si el espesor e de
un tubo cilíndrico cortado a lo largo de una generatriz (fig. 158a) es peque-
ño frente al diámetro del mismo, la pendiente máxima de la membrana sim~tría de la superficie deformada de la membrana respecto al
y el vplumen por ella limitado serán aproximadamente los mismos que x, exige que la constante de irltegradón A sea cero, La constante B
para una sección rectangular estrecha de espesor e y longitud la de la. determinada a partir de la condición de que la flecha de la membruna
circunferencia media del tubo. Una conclusión análoga se obtiene para ca nula para y = ± b, es decir, (Yn)u-ü = O lo que da:
el caso de la sección e
representada en la figura 158b. Es de advertir, sin
embargo, que en este último caso existe una concentración de tensiones (f)
considerable en los ángulos entrantes, cuyo valor depende del radio r de
la transición, no pudiendo aplicarse a tales puntos la: ecuación (156). Un 'la expresión general, según (b), de la superficie deformada de la membrana
estudio mas detallado de este tema' será realizado en el § 98 .
.--
95. Torsión de barras de sección rectangular. Si~viéndonos de z=
nuevo de la análogía con la deformación de una membrana, el problema
se reduce a la determinación de las flechas de una membrana rectangular,
como la representada en la figura 159. Estas flechas .deben satisfacer la uyenuo g/S por 200 obtenemos la función de tensión:
ecuación (151)"
"
'\'. 13 (-1):=";-~ [1 - _ch (n7rYj2a) ] n1T"X
(a) Lt n eh (n1T"bj2a) cos 2a (g)
n::::ll,3,5, •. •

y ser cero en el contorno, 1 B. O. Pe.rce, A Short Table of Integra/s, pág. 95, 1910.
;314 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 315
Las componentes de la tensión se obtienen ahora a partir de las ecua-
TABLA .oH CONSTAN'l'1lS DE LA. TORSiÓN DE UNA BARRA RECTANOULAH
~iones (141) derivando. Por ejemplo;
k k, k. b{a , k k, k.
éJq, _16GBa ~ ..!:.( _l)n;l [1-~~.01rY!.~LJ sen ~ (h)
TV> = - 8x ----;;:2 L.¡ n2 ' eh (n1rb/2a) 2a 0,675 0,1406 0,208 3 0,985 0,263 0,267
n=J.315~... . 0,759 0,166 0,219 4 0,997 0,281 0,282
0,848 0,196 0,231 5 0,999 0,291 0,291
'Suponiendo que b> a la tensión tangencial máxima, correspondiente 0,930 0,229 0,246 10 1,000 0,312 0,312
a I~ mayor pendiente de la membrana, se da en los puntos medios de los 0,968 0,249 0,258 ca 1,000 0,333 0,333
lados largos x '= ± a del rectángulo. Sustituyendo x = a, y = O en (h)
obtenemos: ' Calculemos ahora el momento torsor Mt en función del ángulo espe-
[1 _
~

de torsión O. Usando para ello la ecuación (145) obtenemos:'


16G8a ~ _,1 1 ,]

y observando que: '


= ~
n= 1,3, •.••
na eh (n1rb/2a)
Me = 2 fe>
-a
fb
-b
<p dx dy = 64G:a,2fa
'/l" -a-b
lb { ~.. n\ (-1) n~1
.... ' n=1,3 .....
.
,[1 _ eh (mry/2a) ] eos n7rx} dx d
eh (n'1f'b/2a) 2a y
= 32Ge(2a)3(2b)
71"
\:'
L.¡
1

tenemos: . n=1,3,5, _...

~
~
4
1 64GO(2a) !:..tanh n1fb
= 2GOa _ 16GOa \:' (157) "21'5 11,6 2a
'1f'2 L.¡ 1t -l,3, , .. ,
n=1.3,5 .....

La serie del segundo miembro converge con gran rapidez para b> a, no
siendo difícil calcular 'm...
con suficiente exactitud para cualquier valor
particular de bla. En el cuso de un rectítngulo muy estrecho, por ejemplo,
bJa resulta muy grande, por' lo cual podemos despreciar la sumatoria de ..
(157). Tenernos entonces:
M I = -I GO.(2 a,) 3 (2b) ( 1 - -192 -a ~ n:rb) (160)
- 1 tgh __ o

'l"Jn.\x = 2G8a 8 'lI'6 b n' 2(1


n=I.3, ....
lo que coincide con la primera de las ecuaciones (ti) del § 94.
Si la sección es cuadrada a = b Y de la ecuación (157): 'serie que figura en el segundo miembro converge rápidamente y Mt
ser calculado fácilmente para cualquier valor de la relación alb.
T"",. { ~8[1
= 2GOa 1 - eh (7r/2) + 1
9 eh (31T'/2) + ... J} el caso de un rectángulo estrecho podemos tomar:

n1T'b = 1
8 (
= 2Gea [ 1 -;Z 2,509
1
+ 9 X 155,67 + )]
= 1,351GOa (158)
2a,

En general se tiene:
MI = ~Ge(2a)3(2b) (1 - 0,630i) (161)

T ..... = lc2GIJa (159) Para la sección cuadradu, II = b, Y (160) da


donde k es un factor numérico cuyo valor depende de hla. Diversos valores MI = 0,1406Ge(2a)4 (162)
de este factor son dados a continuación:
, B. O. Pelre". A shbrl lable oi ¡ntegTals, pág. 90, 1910.
316 "rEOUIA Uli LA ¡¡LM;TICIUAU TORSION 317
En general, el mumt:nto puede ser representado por la ecuación: funCión UC t~nslón I'csultu, Imr tunto:
(163)
_~)+Hla2",t
en la que k1 es un factor numérico cuyo valor depende de la relación bJa. cos i:t '1t'J

Diversos valores de este factor son dados en la tabla anteriormente escrita.


Sustituyendo ~l valor de IJ dado por la ecuación (163) en la ecuación
(159) obtenemos la tensión tangencial máxima en función del momento
de torsión:
T max (164)
2:
,,-1,8,5••.

tuyendo en la ecuación (145) obtenemos M, = 2Jf1>rd 'I'dr = kGa"(J, donde k


factor que depende del ángulo (l del sector. Diversos valores de k, calculados
dOl1dek. es un factor numérico cuyo valor viene indicado en la tabla de Snint-Vcnant, son dados a continuación:
In p~gina 315.
1< n n 2;¡ 31< Su
¡¡ 2:rr
4 3 2 3 2 3
96. Resultados cOl11plementarios. El problema torsional correspondiente
a barras cuya sección transversal ticne otras formas puede ser resuelto usando series, 0,0181 0,0349 0,0825 0,148 0,296 0,5721 0,6721 0,878"
como ya se ha hecho en el párrafo anterior. 0,452 0,622 0,719
En el caso de un sector circul,w' (fig. 160) los contornos vienen dados por 0,490 0,652 0,849
'P ~ ± ,,12, r = 0, r = a. Tomamos una función de tensión de la siguiente forma:
I Est~ tlJto.\o han Sldu (..,rrcRldu'l por 1\..[ Aw.eu Vcn¡,e eJ Pllhu, G S/t!gu, /l/JPfllmt'lr.e lnt'll'whlll~ Uf .AlulT'f'11101,rnl
rf> = <1>1 + ¡F (:¡;: + '1/') = <P' -
(JOr'
T pDg 261, })rmcl:ntun Unl\'ef'lll! Pre.\o" 1951
- Este ddto ha Sido (,orn.'gu.lo pul" DIIIIUk, loc IJf

La función 1>, debe satisfacer la ecuación de Laplace (véase el § 92). Tomando máximas tensiones tangenciales a lo largo de los contornos circular y radial,
como solución de esta ecuación la serie: dados por las fórmulas k 1 CaO y k.CaO, respectivamente. Diversos valores
.. n .. k. y k. se encuentran en la tabla precedente. _
<1>. Gs [T'
="2 CIJa 2'" +.
--coa;- a / .'\'. , .A; ¡
(r)-;;- cos n1r1/t]
-;;-
'La solución para un sector de corona circular puede obtenerse de In misma
1
n-l.3 t 5, ..
el caso de un triángulo rectángulo isósceles " el ángulo específico de torsión
llegamos a la función de tensión: por
MI
<1> = Go
2" [ -r' ( 1 - cos
~ 2.") + a' ~
/.., A• (r)~ 11"'''']
a cos-;;- (J = 38,3
Ga4
n=1,3,5•. •.
que 1I es la longitud de los lados iguales del triángulo. La tensión tangencial
Para conseguir que también se anule en el contorno se produce cn el punto medio de la hipotenusa y es igual a
circular l' = a debemes poner M,
,,"/..IlaXo == 18,02 a 3
~
~
A n1r1/t
cos ~
1 cos 2'"
CC;S;;
n =* - Introduciendo coordenadas curvilíneas ha sido estudiada la torsión de piezas
n=I,3.5, .•• otras secciones transversales~ Tomando coordenadas elípticas (véase el § 60)
de donde se obtiene en la forma usual: usando las funciones conjugadas l: y f} determinadas por la ecuación:
n+1 :¡; -1- iy = e eh (~+ í'l)
16",' """2' --.--~__-,.--c",,..
FIG. 160
A,,=-;¡<-l) n(n+~)(n_2:) btcmE:mlDS secciones transversales limitadas por elipses e hipérbolas homofocales 3.

1 SUUlI-V.nant, luc. cit. Véase también A. E. H. Lave, Theory 01 E/asticity, 4." edICIón,
1 Este problema fue estudiado por Saint-Vennnt, Compl. rend., vol. 87, págs. 849 y 893,
319, 1927.
1878. Véase también A. G. Gre~nh¡Jl, MeSS81lger 01 Math., vol. 9, pág. 35, 1879. Otro método . 'B. G. Galcrkrn, BI/I/. acad. des se;. de Russ., pág. 111, 1919;·G. Kolosoff, Compt. rend.,
en el que se utJliza la func,ón de Bessel fue dado por A. Dlnnik. BI/I/. DolZ Po/y/echo 1mt., 178, pág. 2057, 1924.
Novotcherkassk, vol. l, pág. 30<). Véase también A. Foppl Y L. Foppl, Drat¡g Ilnd Z<vallg, 'A. G. Greenhl11, Qrta,.t. J. /VIoth., vol. 16. 1879. Véase también L. N. G. Fllon, Trans.
pág. 96, 1928. . .soc. (LO/,doll), se<le A, vol. t 93, 1900. .
318 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
TORSION 319
Usando la ecuación'
. Empleando un razonamiento análogo al usado para establecer la ecuación
(91) se obtiene:
obtenemos secciones transversales limitadas por parábolas ortogonales.
Asimismo han sido obtenidas las soluciones correspondientes a otras muchas
secciones", macizas y huecas, incluyendo polígonos, ángulos, cardioides, lemnis-·
catas·, y círculos con uno o varios agujeros excéntricos '. En todos los casos en los
que la sección puede ser aplicada sobre el circulo unidad mediante una representa-
ción conforme es siempre posible obtener una solución expresada por una integral
compleja ~ ,

97. Resoluci6n de problemas de torsión por el método elasto- . La verdadera expresión de la función de tensión rP es, por lo tanto, aquella
energético 6 • Hemos visto que la solución de los problemas torsionales .que anula la variación de la integral
;;e reduce, en cada caso particular, a la determinación de la función de
tensión que satisface la ecuación diferencial (142) y la condición de con- (165)
torno (144). Cuándo se trata de obtener una solllción aproximada del pro-
blema, resulta útil detenninar la función de tensión a partir de la condi- a la misma conclusión empleando la analogía de la membrana y el
ción de mínimo de una cierta integraJ1, en lugar de trabajar con la ecuación los trabajos virtuales (§ 48). Si S es la tracción uniforme aplicada a la
rnt:fI.UIana. el aumento de su energía potencial elástica, producido durante su defor-
diferencial. Dicha condición puede obtenerse mediante la expresión de
, se obtiene multiplicando S por el aumento de superficie que experimentll
la energía potencial elástica de la barra sometida a torsión. La energía de membrana. De esta forma obtenemos
deformación de la barra por unidad de longitud, según (88), es
~S JJ[(~)" + (~rJ dzdy

z es la f1ec-.ha de la membrana. Si consideramos ahora un desplazamiento


de la membrana a partir de su posición de equilibrio, el cambio de su energía
Dando un pequeño incremento (j <p a la función de tensión cjJ, incremento . deformación, producido por este desplazamiento, debe ser igual al trabajo reali-
que se anule en el contornoS, la energía de deformación varía en . zado por la ~arga uniforme q en la traslación virtual. Podemos entonces escribir:

1 SI¡
"2 JI L\.~~
r(i'z)2 + (a~)'J
f..~. . JI q ozdx dy
dxdy =

y la variación del momento de torsión, según la ecuación (145), es determinación de la superficie de deformación de la membrana se reduce a In
ción de la expresión de la función z, que haga mínima la integral
2II órpdxdy

, E. W. Anderson yO. L. Holl,lowa Slale Col/.J. Sd., vol. 3, pág. 231,1929.


JJ {+ [(g)' + (~.)'J-1z} ~dy
'Véase la recopilación de T. J. Higgins, Am. J. Phys., vol. lO, pág. 248, 1942.
, Las referenci ...~ de los trabajos que dan las soluciones exactas de esto. casos, demasiado SustItuyendo 200 por q/S llegamos a la int"gral (165) anteriormente obtenIda.
abundantes ·para ser incluidu. aquí, pueden encontrarse consultando Applied Jl¡Iec}/a1¡j" Re-
vi~s, Scimci. Abstracts A, Ma¡hematical Reviews y Zentralblatt far Mechanik. La mayoría
de las referencias dadas en la pág. 370 ",cluyen o se refieren al problema de torsión. En la resolución aproximada de los problemas de torsión remplaza-
• Véase G. B. Ling, Qua'l. Applied Math., vol. 5, pág. 168, 1947. como hemos visto, el cálculo varicional por una simple determina-
'Resultado obtenido por N. 1. Muschelisvili. Véase 1. S. Sokolnikoft, Mathel1latical ~ión del mínimo de una función. Tomemos como función de tensión la
Theory oi Elastici¡y, capítulo 4, 1946. .
• Un resumen Con referenciu. dt: e. te y otros métodos aproximado. es dado por T. J.
Higgins, J. Applied Phys., vol. 14, pág. 469, 1943. (a)
7 Este método fue propuesto por W. Ritz, quien lo usó en la resolución de problemas
de flexión y de vibración de placas rectangulares. Véase J. reine QlIge"lO. Malh., vol. 135, 1908,
y. Arln. Physik, serie 4, vol. 28, pág. 737, 1909. que <Po, <pJ, "'2, ...
son funciones que satisfacen la condición de
'Haciendo '\4> O en el contorno las variaciones de 4> no introducirán ninguna nuev" :co·nt'Drrlo, es decir, se anulan en la periferia. Al ~legir estas funciones,
fuerza sobre la superficie lateral de l. barro. ."""""lU"'" guiarnos 'por la analogía con la membrana, dándoles la forma
320 TEORlA DE LA ELASTICIDAD

adecuada a la representación de la función "': Las cantidades 00, al, aZ, ... El momento de torsión, que se obtiene sustituyendo <P- en (145), resulta
son factores numéricos, a determinar a partir de la condición de mínimo
de la integral (165). Sustituyendo la serie (a) en esta integral e integrando, M¡ = -~i(iH + ~ . t . -g;v,)GOa' = 0,1404G8(~a)4
obtenemos una función de segundo grado en an, al, az, _._ cuya condición valor tlue es tan sólo 0,15 % menor que el correcto.
de mínimo es Se comete un error mucho mayor en la determinación de la tensión
'OU 'OU .. _ O DU = O ._. (h)
máxima. Sustituyendo (e) en las expresiones (141) de las componentes
OCIo = O, Dal - , Das . ' de la tensión, nos encontramos con un error del orden del 4 %, debiendo
tornar más términos de la serie (e) para conseguir una mayor exactitud.
Obtenemos así un sistema lineal de ecuaciones, II partir del cual pueden Puede demostrarse mediante la analogía con la membrana que proce-
determinarse los coeficientes an. a" a2, ... Aumentando el número de tér- -diendo de la forma explicada anteriormente, se obtiene generalmente
minos de lu serie (a) aumenta la exactitud de la solución aproximada y - para el momento de torsión, valores menores que el exacto. Una mem-
utilizando una serie infinita llegaríamos a la solución exacta del problema brana perfectamente flexible, uniformemente estirada en su contorno y
torsional ' . --uniformemente cargada es un sistema con un número infinito de grados
Tomarnos como ejemplo, ei caso de una sección transversal rectan- - de libertad. El limitarnos en el cálculo a unos pocos términos de la serie
gular 2 (fjg. 159). El contorno viene dado por las ecuaciones x = ± a,. - (e), equivale a introducir en el sistema ciertos vínculos que lo reducen a
-y = ± b y la función (x 2 - a2 ) (y2 - b2 ) se anula en la periferia. La otro con un número pequeño de grados de libertad. Tales vínculos sola-
serie (a) puede ponerse en la forma mente pueden reducir la flexibilidad del sistema y disminuir el volumen
(e) --limitado por la membrana deformada. El momento de torsión, que se
deduce de ese volumen, será pues, de ordinario, menor que el verdadero.
en la cual m y n, por razones de simetría, deben ser pares. _ Otro método para la determinación aproximada de la función '" ha
Suponiendo que tenemos una sección transversal cuadrada y limitando _sido sugerido por E. Trefftzl • Con este método, el valor aproximado del
el desarrollo de la serie (e) al primer término, tomemos momento es superior al verdadero. Usando entonces los métodos de Ritz
(d) y Trefftz juntos, pueden establecerse los límites de error de la solución
--aproximada.
Sustituyendo esta expresión en (165), se deduce de la condición de mínimo La aplicación del método de Ritz no entraña el empleo exclusivo de
que -los polinorn:ios (e), pudienclo usarse toda función ,pu, ¡f,,, /h, ... para la
5GB
ao = 8 a2 serie (a), cuya forma sea adecuada para la representación de la función de
tensión ¡p. Tornando, por ejemplo, funciones trigonométricas y atendiendo
La magnitud del momento, según (145), será a las condiciones de simetría (fig. 159), obtenemos
.
Mt = 2ff cf> dx dy = '¡G8a l
valor que difiere de la solución exacta (162) en un 1 ~ %.
= O,1388(2a)4GII
q, =
)'
~-If.t
2: ~

.... m-I,a.5, •..


m,rx 1'mY
am~ cos 2a cos 2b
(f)

Para obtener una mayor aproximación, tomemos los tres primeros


términos de la seri~ (e). Usando, entonces, la condición de simetría, --Sustituyendo en (165) y efectuando la integración, resulta
obtenernos
cp = (x! - a2) (y! - a 2)[ao al(x 2 y2)]
que sustituida en (165) y usando las ecuaciones (h) nos da
+ (e)+ u= 1r ;b
2
1:
m=1.3,6, .••
5 259 Ge .
ao = 8 . 277 . a2'
I Las condlcioIle. de convergeIlcla de este método fueron estudiadas por Ritz, loe. cit.
-2GB L
nl-1,3,."" •
16ab
amn ·mn'lT
- ( 2- 1 )
m+n_1
2

\",;"s" tambIén E. Trefftz, Halldblllh der P/rysik, vol. 6, pág. 130, 1928.
l Véase S. Tlmoshenko, Bull. lrlSl. Ways 01 Cornrnll7licalioll, San Petersburgo, 1913 y
l E. Trefftz, Proc. Seco1ld. j,ttem. Callgy. Applied. Mech., Zünch, 1926, pág. 131. Véase
PToe. Londo.. Mal}" Soc., "ene 2, voL 20, pág. 389, 1921. también N. M. Basti;·- Phil. Mag., vol. 10, pág. 886, 1930.

21-"""T'EORIA DI: 1.... ItWTtCIOAn


322 TORSION
TEORIA DE LA IlLASTICIOAD

Las ecuaciones (b) se convierten en .la función de tensión (k) satisface la condición de contorno (144). Llevando
(k) a la ecuación (145) del momento de torsión obtenemos
1r2ab (m2 nZ
) 16ab ~-1
4 Za +b -
2 2G8 • m.n1l'2 (-1) 2 =O
y de aquí
a".,.
MI = 2J~" J~b <p d;¡; dy =~ GO(2a)3(;b) (1 - 0,632~)
. io que coincide bastante satisfactoriamente con la ecuación (161), obtenida
¡lOtes mediante el empleo de una serie.
En todos aquellos casos en los que la s.ección transversal tenga por
. contorno un polígono convexo, puede usarse como función de tensión,
donde a = h/a. Sustituyendo en (j), obtenemos la solución exacta del . . ~on excelentes resultados, una expresión polinómica análoga a la (e). Si
problema bajo la forma de una serie trigonométrica. El momento torsor
será entonces alZ + bly + el = 0, . a2X + b,y + e2 = 0, . . •
'son las ecuaciones de los lados del polígono, podemos tomar la función
M, = 2 f" jb .pdxdy· de tensión de la forma
-" -b
<p = (alz + b1!1 + cl)(a2x + b2y + o,) . . . Ca"z + b"y + e,,) ~~amnx·y'"
.·opteniéndose, por regla general, una exactitud satisfactoria con sólo con-
siderar unos pocos términos del principio de la serie.
. El método elastoenergético es útil también cuando el contorno de la
Obs¡:rvando que
sección transversal (fig. 161) está dado por dos curvasl
t h mal!' ma1r
g2-T
-t(mall'(2) 3 y

vemos que la expreSlOn anterior coincide con la (160). Considerando,


FIG.161
. ahora, el caso de un rectángulo alargado, con una dimensión h muy grande
frente a la otra a (fig, 159), podemos tomar como primera aproximación
Las condiciones de contorno serán cumplidas si tomamos para la
(h) . función de tensión una expresión aproximada
que coincide con la solución estudiada en el § 94. Con el fin de conseguir <P = A(y - a,y)(y + al"")
una mayor aproximación, a la par del cumplimiento de las condiciones Sustituyéndola en la integral (165) obtenemos, según la ecuación dl/dA=O
de contorno en los lados cortos del rectángulq, podemos tomar
(k)

y elegir la cantidad Pde forma tal que la integral (165) tome el valor mínimo.
Resulta así

A causa del término exponencial encontrado entre corchetes en la ex-


presión (k), la distribución de tensiones que se obtiene, coincide práctica- . . 1 Tales problemas fueron estudiados por L. S, Lcibcnsort. Véase su libro Variational

mente con la' solución (h), en todos aquellos puntos suficientemente dis- : Methods lar Solving Problems ollhe Thcary ni Elasticity, Moscú, 1943. Véase también W. J .
. Duncan; Phi/o Mog."serie 7, vol. 25, pág. 634, 1938.
tantes de los lados cortos del rectángulo. En la proximidad de estos lados,
324 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 325

El momento deducido de la ecuación (145) es Se tiene entonces


IJ _ 3Me
MI = -A b(a + al)3 (11/t3dt - (b 1cl3 + 2b 3
)G
(a)
3 Jo 2C 2

- En el caso particular en el que m = t, p = q = 1, a = a" tenemos Para calcular la tensión en los puntos del contorno, situados a consi-
y "'-= ± a 7p(xJb) = ± -Vxib '[l-(x/b)], obteniéndose derable distancia de los vértices de la sección transversal, podemos usar
una vez más la ecuación correspondiente a ~n rectángulo alargado y tomar
GO' GOba s
A = 11 a2' MI = 0,0736 --11 a2 T = ceG
1 13 b2 + 1 13 ¡j2 + Según la ecuación (a) tendremos, entonces, pa,a las alas del perfil
A. Weigand1 ha dado una solución aproximaclJl, que ha comparado con
(b)
los resultados obtenidos en ensayos experimentales, para secciones limi-
tadas por una circunferencia y una cuerda. Los métodos numéricos son
estudiados en el apéndice. Las mismas ecuaciones aproximadas pueden ser usadas para una viga
de sección 1 (fig. 162c).
98. Torsión de perilles laminados. Las fórmulas obtenidas para En los ángulos entrantes se produce una considerable concentración
barras de sección rectangular estrecha (§ 94), pueden ser utilizadas en el de tensiones cuya magnitud depende del radio de las curvas de transición.
estudio de la torsión de secciones como las.que presentan los aceros lami-
nados, tales como perfiles en U, L e l. Si In sección transversal es de espesor I
I
I
I
I
I
1
r J
re ------- ....Vi'
1.
L "
(a) (6) re)
FlG. 163
FIG. 162
Un valor aprmdmado de las tensiones existentes en tales puntos, puede
·-.constante, como en la figura 1620, el ángulo de torsión se obtiene con su- obtenerse mediante la analogía con la membrana. Consideremos una sec-
ficiente exactitud a partir de la ecuación (155), haciendo en ella b igual a la ción transversal angular, de espesor constante e (fig. 163) y sea a el radio
longitud desarrollada de la fibra media2 de la sección, es decir, b = 2a - c. en lu transición que corresponde al ángulo entrante. Suponiendo que la
En el caso de una sección en U (fig. 162b), se obtiene con cierta uproxima. superficie de la membrana en la bisetriz 001 , es aproximadamente una
ción el ángulo de torsión considerando para las alas un espesor medio superficie de revolución de eje perpendicular al plano de la fjgul'a en O
C2, descomponiendo la sección transversal en tres rectángulos y sustitu- y empleando coordenadas polares, la ecuación (151) de la superficie de-
yendo en la ecuación (155) he! por blC~ + 2b2C~, lo que significa que la formada de la membrana se transforma en (véase el § 25).
rigicl~:;¡:. torsional de la pieza es igual a la suma de las rigideces de los tres
d z +!~
2
rectángulos 3 . = _!l. (c)
dr 2 r dr S
1 LU!lha"/-joTsch, vol. 20,1944, traducido al inglés como N.A.C,A ... Tech. Me",., 1182,1948.
, Un. fórmula más elabol·ada. que tiene en cuenta el aumento de rigidez resultante de l. Recordando que la pendiente de la membrana dzldr nos da la tenslon
ulIión de loo rectángulos, fue desarrollndn por G. W. Trayer y H. W. Mnrch, Na/Ir. Advisory tangencial sin más que sustituir q/S por 2GO, de la expresión (e) deduci-
Cmnltl, Aerol/al/f. Rept., 334, 1930.
J La comparacióo de 1" rigidez o la torsión obtenido pOI' este método con la dada por
remos la siguiente ecuación para la tensión tangencial
los ensayos experimentales, para distintos perftlcs y diversas dimensiones ha sido realizad"
por A, F<ipp1. Silzber. Bayer. Akad. Wiss .• pág. 295, Munich, 1921. Véase tamb,én Bauiuge-
lIieur, serie S, vol. 3, pág. 42, 1922.
- +1
dr
dr
-7"
l'
= -2GO ~d)
326 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
TORSION 327

La ecuación correspondiente para los puntos de las alas del ángulo, si- de a/c, obtenida por este método¡ junto con la curva que representa a la
tuados a considerable distancia de los mismos, donde la membrana tiene ecuación (g). Vemos que esta, fórmula sencilla da resultados aceptables
una superficie aproximadamente cilíndrica, será para valores de a/c inferiores a O,3~

dr 99. Empleo de películas de jabón para resolver problemas


dn = -2GB (e)
de torsión. Hemos visto que la analogía con la membrana, es de gran
utilidad por hacer visible la distribución de tensiones en la sección trans-
en la cual n es la nonnal al contorno. Llamando '1 a la tensión en el borde,
versal de una barra sometida a torsión. Membranas constituidas por
la ecuación (e) previamente obtenida para el caso de un rectángulo alar-
películas de jabón han sido empleadas con éxito para la medida' directa
gado, nos da '1 = GOc, que empleando la e'cuación (d) nos lleva a

dr 1 _ 2Tl
(dI)
di'-+¡:r= e
de donde, integrando
A 7¡7
r=---
r e
(f)

siendo A una constante de integración. Para la determinación de la misma,


supongamos que la tensión tangencial se anula en el punto 0 1 , distante
c/2 del contorno (fig. 163). Según (fJ
se tendrá
3, 5
A _ rifa + (c/2)] _ O
3,0 a + (c/2) c -

2.5 y
Z"tm1.x
Z1
2,0
\ \

1.5
\~ -:A. V"" Sustituyendo en (fJ y tomando r = a
~
f.c.(g) r--
obtenemos

0.5 1,0"., 1.5 2.0


a/c (g)
FIO. 164
Para a = i e, como en la figura 163, Flo. 165
tenemos 'mo. =.1 Srl. Si el radio de
la transición es muy pequeño la tensión máxima resulta muy grande.
Tomando por ejemplo a = O,le, se llega a .,n." = 3,S.-¡. [n.biúo a J. M. Hulh. J. Applied Mechunics (Tram. A.3M.E.), vol. 17. pág. 388,1950.
La elevación de la curva real, hacia la derecha se da en el caso 'limite en el que el radiQ de la
Resultados más exactos y completos pueden ser obtenidos mediante transición aumenta considerablemente en relación al espesor del ala. 1. Lysc Y,B.,G. Jóhnston
cálculos 'numé,icos, basados en el método de las diferencias finitas (véase han dado en Prac. A.S.C.E•• 1935, pág. 469, las r.. fereneia. de los intentos anteriores de reso-
el apéndice). La figura 164 (línea A) muestra la curva 'm.x/,¡ función lución del problema", incluyéndose las medidas con pelicuhis de jabón., " '
328 TORSJON 329
TSORIA DE LA Er.ASTlClDAU

de las tensiones l , a. Tales películas son formadas sobre agujeros de forma bisetriz del ángulo comprendido entre los rayos incidentes y reflejado.
conveniente reálizados en placas planas. Con el fin de hacer posible la Un instrumento especial, destinado a realizar esa medida, ha sido desano-
determinación directa de las tensiones, se ha encontrado .que es necesario · !lado por Griffith y Taylor. La figura 16~ representa un ejemplo de curvas
que la misma placa tenga 1m orificio circular, representativo de una sección de nivel obtenidas para una viga en 1 (larguero de madera de un ala de
circular la cual es utilizada con fines comparativos. Sometiendo a ambas · avión). El hecho de que las curvas estén muy próximas unas a otras en los
peliculas a la misma presión, tendremos valores iguales del cociente q/S3.
10 que corresponde a los mismos valores de GO para las dos barras some-
tidas a torsión. Determinando, en consecuencia, la pendiente de las dos
películas, podremos comparar las tensiones producidas en la barra de
sección dada con las existentes en el eje circular, supuesto que el ángulo
de torsión e y la constante G tengan igual valor en los dos casos. La rela-
ción correspondiente entre los momentos de torsión, se determina por la
de los volúmenes encerrados entre cada película y el plano de la placa.
Las curvas de nivel de las superficies de las películas se obtienen
mediante el aparato representado en la figura 165'1. La placa de aluminio
donde han sido practicados los agujeros, está sujeta entre las dos mitades
de una caja de fundición de hierro A. La parte inferior de la caja, que FIC. 166 .
tiene la forma de una bandeja, es soportada por unos tornillos. El trazado
de las curvas de nivel se efectúa mediante el tornillo B, el cual atraviesa ángulos entrantes y en la parte central de la cara superior, prueba que en
una placa de vidrio de tamaño suficiente para cubrir la caja, cualquiera estos puntos las tensiones son muy elevadas. Los extremos de las alas,
que sea la posición del tornillo. El extremo inferior del tornillo lleva una por el contrario, están sometidos a tensiones mucho menores. La tensión
punta de acero duro cuya distancia a la placa de vidrio es regulada por el máxima en la parte central del alma del perfil es prácticamente constante
tornillo. Se aproxima la punta del tornillo a la peücula desplazando la · e igual a la que se produce en un rectángulo estrecho para el mismo ángulo
placa de vidrio hasta que la distorsión de la imagen muestre que se ha · de torsión. La aplicación del método de la película de jabón a llecciones
establecido el contacto entre uno y otro. El trazado de las curvas, se hace · tales como· elipses y rectángulos, para las que las soluciones exactas son
sobre una hoja de papel que está adherida a una plancha E, la cual puede "conocidas muestra que la tensión máxima y el momento, pueden ser deter-
girar alrededor de un eje horizontal hasta que la punta ele acero registra- ~inados por ese método con una aproximación del 1 ó 2 %. En los puntos
dora D produzca en ella una picadura. Después de haber puesto en con- · de gran concentración de tensiones, como es el caso en las transiciones
tacto la punta e con la película en un número de puntos suficientes, se de radio muy pequeño, no es fácil conseguir una aproximación del orden
unen los puntos señalados sobre el papel, obteniéndose así una curva de · indicadol.
nivel. Ajustando el tornillo B en una nueva posición, podemos repetir
esta operación tantas veces como curvas de nivel necesitemos. Una vez . 100. Analogías hidrodinámicas. El problema de la torsión. pre-
registradas todas las curvas, se obtiene por sumacÍón el volumen y el · senta algunas analogías con el problema hidrodinámico del movimiento
momento de torsión correspondientes. Las pendientes y las tensiones de un fluido en un tubo. Lord Kelvin2 señaló que la función 4>1 (ecuación
correspondientes se obtienen midiendo la distancia entre curvas de nivel (a), § 90] que a veces es empleada en la resolución de los problemas de
vecinas. Esta pendiente puede ser determinada por métodos ópticos con · torsión, es idéntica a la función de corriente de cierto movimiento irrotacio-
mucha mayor precisión proyectando un haz de luz sobre la película y nal de un {,fluido ideal" en un conducto cuya sección transversal es igual
midiendo el ángulo del rayo retlejado. La normal a la película será la ~ la de la barra sometida a torsión.
J. BOllssinesq3 hu señalado otra analogía. Ha demostrado que la eCUR-
I VÓ""SC los tl'llbnj", de Toylor y Gnffnh, 10(. <11. Y el ele Truyor y Moreh, lne. CIt.
/ T. J. l-z,ggln. hu rOllllzlldo un e.luu", de COla y otra. ullalogíos en .l:.:,p.,lfI'I'II/lI/ Slran t v. ~.C los' trabajos úe C. B. El.zona y J. M. Rademakel', D. ¡/lgB"i."r, núm. 52, 1931;
A"alj'SIS, vul. 2, plÍg. 17, 1945. P.' A. C~shmalt. Trc'·,. A.,S.M.E., 1932; H. QlIest, l"geJl;."r-ATc/,,~,., vol. 4, pág. 510, 1933
J Se supone que la tcmlÍln slIperflclUl (:s la mIsma en Ins dos pcliculas. Los ensuyos renlI- Y J. H. iVluth, lne. Ctt. • .
zados mustrllron que C$to es aproxunadamcntc CIerto. , Kelvm l' Tall, .Va/lllal P¡/llosophy, 2:' parte. pago 242.
, Véase el troboJo de Taylor y GnffJth, loe. cit. J J. Bt>usslsncsq, J. math. pare el appl, serIe 2, ,.,,1. 16, 187.1 ..
330 TEOml> DE LA ELASTICIDAD TORSION 331

clon diferencial y la condición de contorno, 'que determinan la función es la misma que la correspondiet).te (144) al problema de
de tensión ~ [véanse las ecuaciones (142) y (144) del § 90] son idénticas Se sigue de ello que la distribución de velocidades del problema
a las que detenninan las velocidades del movimiento laminar de un fluido ¡idrol:lirlá:rnil:o es matemáticamente idéntica a la distribución de tensiones
viscoso en lln tubo, cuya sección transversal sea la de la barra sujeta a la barra sometida a torsión, pudiendo deducirse de ello aigunas condu-
torsión l , de importancia práctica.

o',-----/-;;>;

:Y
F'1Cl. 167

Greenhill señaló que la funhlón de' tensión rp es mat~má#camente


G FIG. 168

Consideremos como .primer ejemplo, el caso de un eje circular, que


ta un orificio también circular (fig. 168) sometido a torsión' . El
idéntica a la función de corriente, correspohdje¡nte al movimiento de un efecto de este agujero en la distribución tensional, será semejante al que
fluido ideal que circula con torbeílino constante-2 a través de un tubo de .' la introducción de un cilindro macizo, de igual diámetro que el
s1c~ión transver,ll'ÍI,l igual a la de la barra 3 • Sean u y v las componentes de , dentro de la corriente líquida del modelo hidrodinámico. Ese
Id -(¡-elocidad d~l fluido en el punto A (fig. 167). En virtud de la condición alterará notablemente la velocidad del fluido en su vecindad in-
d~ incompresibilidad del líquido ideal, tendremos Las velocidades en los puntos frontal y posterior del cilindro
anulan, mientras que en los puntos 111 y n se duplican. Un taladro de
au + éJv = O (a) naturaleza duplica, por lo tanto, las tensiones tangenciales en la parte
az ay
eje en la que se encuentra situada. Una pequeña ranura semicircular
La condición de torbellino constante es '·".••' '11'' 'LI>1 en la superficie del eje según la dirección longitudinal (fig. 168),
au au (b)
el mismo efecto. La tensión tangencial en el fondo de la entalla-
aa; - ay= (punto m) es aproximadamente el doble de la que se produce en los
puntos de la superficie del eje alejados en la ranura.
Tomando . La misma analogía hidrodinámica explica la influencia en la distri-
u = arf> éJ</> tensional de un pequeño orificio de sección elíptica o de una ranura
ay' v = - a:¡; (e)
sección semielíptica. Si uno de los ejes principales, a, del orificio
tiene dirección radial y es b el otro eje principal, las tensiones en
queda satisfecha la écuación (a) y la (b) se convierte en del orificio, en los extremos del eje a, aumentan en la relación
éJ2<f> a 2<1> + alb): 1. Vemos, pues, que la tensión máxim,a producida depende
-a
x2 +
. "!l2
vy = constante (d) la relación alb. Cuando el eje mayor de la elipse tiene dirección radial,
efecto del orificio sobre la tensión es mayor que cuando dicho eje tiene
expresión que coincide con la (142) correspondiente a la función de tensión dirección de la tangente a la circunferencia. ES.to explica el notable
para el caso de la torsión. UU.H"UU.""to producido por las fisuras radiales en la resistencia de un
La velocidad del líquido en la periferia tiene por dirección la de la Efectos análogos sobre 'la distribución tensional son producidos por
tangente a ese contorno, de fonna que la condición de !Jorde del problema entalladura semielíptica practicada en la superficie de un eje, para-
.'C;."'1J''''':HC a las generatrices del mismo.
I Esta analogr.. fue utilizada por M. Doschoud, Compl. rClld., vol. 179, pág. 451, 1924.
Véase también Bull. lech. Sui"" Rom. (Lausanne), noviembre, 1925.
De la analogía hidrodinámica se deduce, asimismo,. que en los ángulo~
, El torbellino o rotor tiene igual e"presión que la rotación w. estudiada en la pág. 260, de la seccióri transversal de una barra so.metida a torsión, la~
siempre que u y " sean las componentes de la velocidad del fluido.
3 A. G. Greenhill, uHydromechanics., articulo de la Enciplopaedia Britann;ca, 11.' edI-
ción, 1910. I Véase ]. Larmo~\ Phi/o Mag., voL 33, pág. 76, 1892.
332 . TEORIA DE LA ELASTICIDAD TOESION 333

tensiones tangenciales se anulan mientras que en los ángulos entrantes .se verá disminuido en la cantidad que, cn el caso del árbol macizo, proviene
toman valores teóricamente infinitos, lo que implica que el más pequeño la parte de sección transversal correspondiente al hueco. La ecuación
momento de torsión produzca en tales puntos, bien una fisura, bien una (148) muestra que esa cantidad guarda .con el momento total la relación
deformación plástica. En el caso de una entalladura para chaveta de forma de k 4 : 1. Para el árbol hueco, por lo tanto, la ecuación (148) será rempla-
rectangular, se producirá, pues, en los ángulos entrantes, una notable ele- por
vación de las tensiones, la cual podrá ser atenuada redondeándolos ade-
cuadamente!.

101. Torsión de árboles huecos. En el estudio hasta aquí reali- .y la función de tensión (a) se convierte en
zado, nos hemos limitado a árboles cuyas secciones transversales son
recintos simplemente conexos. Consideremos ahora ejes huecos cuyas rp
M,
= - 'll'ab(l - le')
(X(i22+ /ir
y2 - 1)
secciones rectas tengan dos o más contornos. El problema más sencillo
de este tipo es el de un árbol hueco, cuyo contorno interior coincide con fórmula que da la tensión máxima será
una de las curvas de tensión f.angent;t'al (véase el § 93) del árbol macizo de
2M¡ 1
contorno exterior igual al del eje hueco. '1'",.~ = 7r'ab2 1 _ k'
Tomemos, por ejemplo, unH sección transversal elíptica (fig. 149).
Lu función de tensión para el árbol macizo es En la analogíu con la membrana la porción central, correspondiente
hueco del árbol (fig. 169), puede sel' sustituida por una placa horizontal
(:D. Observamos que la presión, uniformemente distribuida sobre la.
(a)

La curva
(b)

es una elipse semejante al contorno exterior de la seCClOn transversal. A


lo largo de esta elipse la función de tensión (a) se mantiene constante y
en consecuellcia para valores de k, inferiores a la unidad, esta elipse es i<:---+-l-Jo"'--t--~

una línea de tensión tangencial del árbol macizo. La tensión t1mgencial en


todos los puntos de la misma, tiene por dirección la de la tangente a la
curva. Imaginemos ahora, una superficie cilíndrica genenlcla ·por esta
y
línea de tensión que tenga su eje paralelo al del. árbol. De la conclusión
Flo. 169
anterior, refermtc a la dirección de las tensiones tangenciales, se deduce
que no actuará ninguna tensión sobre estll supcrficie cilíndrica. Se puede
·pc,rclLon CFD de la membrana, es estáticamente equivalente a una presión
pues imaginar suprimido el material limitado por esta s\lperficie, sin
de igual magnitud repartida sobre la placa CD y que las fuerzas de trae-
que cllo altere la dist~ibución de tensioncs en la partc cxterior de la pieza.
S, que actúan sobre la membrana· a lo largo del borde de ]a placa,
La función de tensión (a) será también, en consecuencia, la correspondientl"
nI CHSU del árbol hueco. . en equilibrio con la carga uniforme que obra sobre esta última.
/"'orlrt>rrln", por lo tanto, emplear en este caso el pl'Ocedimiento de la pc-
Para un determinado ángulo de torsión O, las tensiones en el árbol
hueco serlÍn las mismas que en el árbol madzo. El momento, sin embargo, lleula de jabón, puesto que la sustitución de la porción CFD de la mem-
bi'ana por la placa cn no altera la configuración ni el estado de equilibrio
I Lu 'I'VCStlguc,ón de las tenSIOnes en una entalla pnra chaveta ha .,uoreahzuda por el de la porción restante de la membrana.
método tle la películu de jabón (véase el trnbaJo de A. A. Gr,ff,th y G. 1. Taylol', T/I<h. Rept. Consideremos ahora el caso, más general, en el que el 'coritorno del
Cm",,,. fluollal/l, vol. 3, pág. 938, 1917-19IM) ~ tamb,én por el método fotoehíst,co (véase el orificio no coincide con una de las curvas de tensión del árbol macizo.
tr"bujo de A. G. Solak,an y G. ll. Karehtz, Tra/ls. Am. Soco Meeh. b'/lg., Apphed Mechnnlc,
0'\""011, 1931 ). be acuerdo con la. teoría general de la torsión (véase el § 90) sabemos que
334 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 335

la función de tensión debe ser constante a' lo largo de cada contorno; 169, debe tomarse de manera tal que la carga vertical que actüa
estas constantes, sin embargo, no pueden ser elegidas arbitrariamente. la placa, sea igual y de sentido opuesto a la componente vertical
Al .estudiar los problemas bidimensionales, referentes a contornos múlti- resultante de llls fuerzas 'de tracción que sobre la misma ejerce la
plemente conexos, vimos que era preciso recurrir a las expresiones de los Si los contornos de los agujeros coinciden con las líneas de
desplazamientos y que las constantes de integración debían ser elegidas del correspondiente eje macizo, la condición precedente basta
de manera tal que esas expresiones resulten de valor único. En el estudio asegurar el equilibrio de las placas. En el caso general esta condición
de la torsión de árboles huecos es necesario proceder de una manera no es suficiente y para que la placa esté en equilibrio en una posición
análoga, debiendo elegirse, como valores constantes de la función de tensión es necesario emplear mecanismos especiales de guía, lo que
a lo largo de los contornos, aquellos que hagan que la expresión de los el que el método de la película de jabón sea más complicado para
desplazamientos no tome más que un valor. De esta manem obtendremos árboles huecos.
un número de ecuaciones suficiente para determinar estas constantes.
De las ecuaciones (b) y (d) del § 90 tenemos Con el fin de vencer esta dificultad podemos adoptar la siguiente solución'.
en la placa una abertura (fig. 165) que corresponda al contorno exterior

~u = GG: - ey} Ce)


Los contornos interiores, correspondientes a los orificios, van montados
que pueden deslizarse verticalmente de fonna que su altura pueda ser
fácilmente. Fijando arbitrariamente estas alturas y e.stirando la película
contornos, obtenemos una superfi«ie que satisface la ecuación (142) y las
Cdculemos ahora la integral m".'cll.....:~ de borde (144), pero que, en general, no cumplirá las ecuaciones (e),
¡'rds (d) re~)reSerltalrld,o, por tanto, la distribución tensional existente en el árbol hueco.
epl,tl~:naIO la operación, tantas veces como contornos existen ajustando las alturas
a lo largo de cada contorno. Descomponiendo la tensión total en sus com- contornos interiores de cada caso y efectuando las correspondientes medidas
la película, se obtendrán suficientes datos para detenninar los valores correc-
ponentes y usando las expresiones (e) resulta
las alturas de los contornos interiores, pudiendo lograrse finalmente, la ten-
en la película de jabón. Esto puede ser demostrado de la siguiente
JTds J(T>: ~~ + Ty.~:)dS
=
. i es el número de contornos y 1>" .p2, .... 4>. son las superficies de las
obtenidas con los i ajustes diferentes de las alturas de los contornos, la

JG: + :;
= G da: f dY) - eG (y da; - a; dy)
. l~ que m" m., ... , In, son factores numéricos será igualmente una solución de In
(f)

(142). supuesto que


Dado que w es una función uniforme y que la integración se extiende
sobre una curva cerrada, la primera integral deberá anularse. En conse- m, + '1'" + . . . + m, = 1
cuencia bs,en'ando ahora que la tensión tangencial es igual a la pendiente de la membrana
Ir as = 8Gf(:c dy - Y d:c) ·ou:.,",u".",do (j) en la ecuación (e), obtenemos i ecuaciones de la fonna

La integral del segundo miembro equivale al doble del área de la parte f :: ds = 2G8A¡
hueca. Entonces las cuales los i factores m" mo, ... , m, pueden ser determinados en función de O.
JT as = 2GM (e) verdadera función de tensión, se obtiene, entonces, a partir de (j)". Este método
aplicado por Griffith y Taylor a la detenninación de las tensio~es en un árbol
Los valores constantes de la función de tensión a lo largo de los agujeros, de sección circular con entalladura para una chaveta. Pudieron demostrar
alejando la entalladura tlel centro del árbol, la tensión tangencial disminuye
deberán pues ser determinados, de manera tal que para cada uno de ellos resistencia de la piezn aumenta.
quede satisfecha la ecuación (e). Esta ecuación es igualmente válida para
toda curva cerrada, trazada sobre la sección transversal, como puede
, A. A. Griffith y G. J. Tnylor, 7'ecll. Rept. Natl. Advisory Comm. Aeronaut., vol. 3, pá-
comprobarse volviendo a examinar la demostración. ' 938, 1917-1918. . ..
Ya hemos estudiado anteriormente el significado físico de la ecuación Griffirh y Taylor dedujeron, de sus experimentos, que para estudiar las tensiónes en
(e) [véase la ecuación (152)]. Dicha ecuación indica que al aplicar la ana- huecos resulta más convenieote usar películas con presión cero (véuse la pág. 310)
con presión CD7Istante. El desarrollo del cálculo de los coeficientes 1/1" ",2.... puede verse
logía con la membrana, el nivel de cada placa, la eD por ejemplo de la . 'su trabajo antes Citado.
336 TEORIA DE LA EI.ASTICIDAD TORSlON 337
En el caso de un árbol con uno o varios agujeros, el momento de torsión . nivel de los dos contornos y (¡ al espesor variable de la pared, la tensión
es igual al doble del volumen encerrado por la'membran,a y la placa rígida. ,'~ualquier punto, dada según sabe~os por la pendiente de la membrana,
Para ver que esto es así, calculemos el momento producido por las tensiones
tangenciales que actúan sobre un anillo elemental, comprendido entre dos h
líneas de tensión, tal, por ejemplo, como el representado en la figura 169 r =- (a)
ti
(la cual es supuesto, ahora, que representa un árbol hueco). Llamemos (j
a la anchura variable del anillo y consideremos un elemento tal como el 'valor es inversamente proporcional al espesor de la pared, siendo por
rayado en la figura, la fuerza tangencial que actúa sobre este elemento es '. 'tanto mayor cuanto más delgado sea el tubo. Con el fin de relacionar la
igual a ,(5 ds y su momento respecto a O n(lds. El momento que actúa

r~~
sobre el anillo elemental vendrá dado por
dMI = JTrB ds (e)
donde la integración se extiende a toda la longitud del anillo. Llamando A
al área limitada por el 'anillo y observando que 7;' es la pendiente y '!'t:l, en
L~(aJ
I
A,'\ I c--..¡

I le z FlG. 171

~o
, j
y
con el momento M, apliquemos de nuevo la analogía con la mem-
calculemos el momento en función del volumen ACDB. Tenemos:
M, = 2Ah = 2Aór (b)
JI A representa la media de las áreas encerradas por los contomos
f'1G. 170
y exterior de la sección transversal del tubo. La expresión (b)
consecuencia, la diferencia )¡ de nivel entre las dos líneas de contorno da una fórmula sencilla para el cálculo de la tensión tangencial:
adyacentes obtendremos de (e) M,
r = 2Ao (166)
dM, = 2hA (ti)
lo que nos dice que el momento correspondiente al anillo elemental es especÍfico de torsión O se aplica la ecuación
igual al doble del volumen rayado en la figura. El momento total, que se
obtiene sumando todos estos volúmenes, será por lo mismo el doble del M,/dS
volumen limitado por AB, la membrana AC y DE y la placa CD. La con- l' ds = -2A -o = 2GM (e)
clusión es idéntica para los casos en los que existen varios agujeros. '

102. Torsión de tubos de pared delgada. Se puede obtener fácil- (167)


mente una solución aproximada del problema de la torsión de tubos de
pared delgada, empleando el método de la analogía con fa membrana.
Sean AB y CD (fig. 170) los niveles de los contornOl¡ exterior e interior ''',~I espesor del tubo es constante 5 lo es también y (167) nos da
y AC y DE los perfiles de la membrana extendida entre dichos contornos. MIS
Por tratarse de una pared delgada podemos despreciar In variación de 8 = 4A2Go (168)
pendiente de la membrana y admitir que AC y ED son líneas rectas,
lo que equivale a suponer que las tensiones tangenciales se distribuyen uni-
, 1 Las ecuacIOnes (166) y (167) fueron obtellldus por R. Hredt, V.D.!., vol. 40, pág. 815,
formemente a través del espesor de la pared. Llamando h a la diferencia
llr LA U.MTICIPAU
338 T¡¡ORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 339
donde s es la longitud de la curva media de ·la sección anular del tubo. y la ecuación (j) tomOa la forma:
Si el tubo tiene ángulos °entrantes como es el caso de la figura 171,
pueden producirse en ellos considerables concentraciones de tensión. T = ToO 1 - (8/44.)(2a Ii) + +~ (h)
La tensión máxima es superior a la dada por la ecuación (166) y su valor r log, (1 lija) + 2A
depende del radio a de la curva de transición (fjg. 171b). Para calcular Para tubos de pared delgada las relaciones s(2a + o)jA y srjA serán
su valor haremos uso de la analogía con la membrana, tal como hicimos pequeñas y (h) nos queda:
en el § 98 al estudiar los ángulos entrantes de losoperfiles de hierro laminado.
Como ecuación de la membrana en el ángulo entrante podremos tomar la "T = 1'0 • ~/log. (1 +~) (~)
d2z 1 dz q Haciendo r = a obtenemos la tensión en el ángulo entrante, la cual
dr 2 -1- r dr = - S es representada en función de aj6 en la figura 172. La otra curval (A en
la figura) ha sido obtenida mediante ('1 método de las diferencias finitas,
Sustituyendo
o qJS por 2GB y teniendo en cuenta que '1" = - dzjdr (fig. 170),
sin haber sido empleada la hipó-
obtenemos: tesis de que la membrana tenga la
3,5 rr-.,---.,---.-....,
dT 1
forma de una superficie de revolu-
-dr +-T
o

,. = 2GB (d)
ción en los ángulos. Ella confirma
3,01-\--+---1---+---1 la exactitud de la ecuación (í) para
Suponiendo que el espesor del tubo {) sea constante y llamando '1"0 a la las curvas de transición de radio a
tensión, calculada con la ecuación (166), existente en los puntos alejados pequeño, tal, por ejemplo, que
del ángulo, tendremos según la ecuación (e) 2.51---'\\--1---1---1---1 ajo sea inferior a 1/4. Para valores
r:/71R"
z:;;-
2G8 = TOS
A 2,0t-~d--+--I---I

y sustituyendo 'en (d)


1,5 ¡---¡-'::"2'-..l::---I---I
(e)

. La solución general de esta ecuación es: 1,0 ~--;~-±-...,l;=":J


O 0.5 20
7 = Q + "ToST (f)
T 2A Fre. 172 Fra. 173

Admitiendo ahora que los ángulos salientes de la sección transversal o de a mayores los resultados dados por la ecuación (i) son demasiado altos.
se redondean siguiendo una curva de transición de radio a, como se indica o Consideremos ahora el caso de una pieza tubular cuya sección trans-
e
en la figura, la constante de integración podrá ser determinada mediante versal tengll más de dos contornos. Tomando, por ejemplo, el caso mos-
la ecuación: trado en la figura 173 y suponiendo que el espesor de la pared sea muy
pequeño, las tensiones tangenciales que actúan sobre cada porción de
(g) pared, deducidas de la analogía de la membrana, serán:

deducida de la analogía hidrodinámica (§ 100); esto equivale a decir que h1


TI = 01
si un fluidoo ideal circula por un conducto, cuya sección es igual a la del
ha
tubo, la cantidad de líquido que atraviesa cada sección deberá ser cons- 1'2 = a; (k)
tante. Llevando el valor de 7:, dado por (j) a la ecuación (g), resulta
h1 - h2 1"101 - 72 02
"Ta = --03- = 8
1 - (s/4A)(2a + a) 3
(J
= 1"08 log, (1 o/a) + 1 Huth, loe. cit.
340 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 341
donde h¡ Y hz son los niveles de los contornos interiores CD y EFI. Una particularidad análoga, se produce cuando e¡:¡ una barra sometida n torsión,
El momento torsor determinado a partir del volumen ACDEf'B es: se impide por algún medio el alabeo ele, una sección transversal. Problemas de este
tipo se presentan :1 veces en ingeniería l •. Un ejemplo sencillo es el mostrado en la
Mt = 2(A¡h 1 + A 2h2) = 2A¡Ol'l"l + 2A.,h'l"2 (l) figura 174. Por razones de simetría puede admitirse que la secciÓn medi.a permanece
donde A, Y A~ representan las áreas encerradas por las líneas marcadlls .plana durante la torsión y, en consecuencia, que la distribución terisional existente
en los puntos próximos a e~'ta sección transversal, es distinta de la obtenida anterior-
a trazos en la figura. . mente para barras rectangulares (§ 95). Para estudiar estas tensiones consideremos
Otras ecuaciones para resolver el problema se obtienen aplicando . primero el caso de un rectángulo' estrecho cuya dimensión a supondremos grande
la ecuación (152) a las curvas cerradas señaladas a trazos en la figura. SII- frente a la b. Si las secciones transversales son libres de alabcarse, las tensiones,
poniendo que los espesores t5I. ~2, 03, sean constantes y llamando S" S2, S.I según el § 94, serán:
a la longitud de las curvas mencionadas, resulta, de la figura 173. 1". . = -2G81/, (a)

'1"181 + Ta83 = 2GeA 1


(m) y los desplazamientos correspondientes, con arreglo a las ecuaciones (a), (b) y (d)
'1"28. - T383 = 2GeA z del § 90.
Utilizando las ecuaciones (l), (112) Y la última de las (k) obtenemos las ten· u == -Byz, v == Bu, w == ':"Oxy (b)
.siones TI> '2, T3, expresadas. en función del momento:
Para impedir el alabeo de las secciones
111,[038 ••1. 1 + 0283(A 1 + A 2)] (n) transver8ales, caracterizado por el despla-
TI = 2Ullh8.A IZ + O.Oa8IA.2 +
0102'~a(A.l + A2)2] zllmiento tO, será necesario aplicar ten-
'. siones tangenciales u, sobre estas seccio-
11I,(oa8 I A. + 0183(A 1 + A.)] (o) nes. Una solución aproximada, se obtiene
T2 = 2[li 1 oa8 2A 1 2+ +
o2oas ¡A 22 Ol 028 a(A 1 + A2)2] suponiendo quc <1, es proporcional a 70 y
l1f,(OI82i11 - 028,11.) (p) disminuye al aumentar la distancia z 2P
'1"3 = 2[li 1 oas.A12 + 62 0as 1A 2' +
OlD28 a(A 1 + A2)2] a la sección media. Tales hipótesis quedan
satisfechas haciendo .
En el caso de una sección simétrica, SI = S., DI = (¡2, Al = A. Y T3 = o. (e)
2P
En este caso el momento es absorbido por la pared exterior del tubo en dondc m es un coeficiente a determinar.
tlmto que el nervio interior queda exento de toda tensión2 • .A causa del factor e ..e la tensión fl, dis-
El ángulo específico de torsión correspondiente a cualquier sección, minuye al crecer z, haciéndose desprecia-
tal por ejemplo corno la mostrada en la figura 173, se obtiene sustituyendo ble a una cierta distancia, la cual depende
los valores de las tensiones en una de las ecuaciones Cm). De esta manera () del valor de m.
Las restantes componentes de la ten- z
podrá ser obtenido en función del momento torsor M,. sión deben ser elegidas ahora de fonna tal F¡G. 174
;que las ecuaciones de equilibrio (127) y las
103. Torsión de una barra en la que se impide el alabeo de una de las condiciónes de contorno sean satisfechas.
secciones transversales. En el estudio hasta aquí realizado de los problem!l~ Es fácil ver que tales requisitos son cumplidos haciendo:
de torsión, se ha supuesto siempre, que el momento torsor es aplicado mediant.:
tensiones tangenciales distribuidas sobre los extremos de la barra de una manera (T= =- O
:= II'JI
definida, la correspondiente a la solución de In ecuación (142) que satisfaga' In con- -r••= -tEm'ee-m'(a~ - ",,) (b: - y')
dici6n de contorno (lH). Si In distribución de tensiones en esos extremos es otra, -r.. = iEm'8C"'(a' - :l)2)y - ZGOy
(d)
el estado tensional resultante presenta irregularidades locales y las soluciones dadas 'T•• = tEm'8e-....(b· - y.)",
por (142) y (144) son aplicables con exactitud satisfactoria solamente en las rcgionc,
alejadas de esos extremos l.
Para valores grandes de z esta distribución tensiona! se aproxima a la (a), corres-
, Se supone que Ins phlClIS son gUladlls de torm.l tal que permanecen horizontales (\"éa,,' pondiente a la torsión simple. La componente '%!I se anula en los bordes x = ±a
~~~~~ - e'y = ±h; y las Tu Y Tu, para x = ±a, y = ±b, respectivamente. Las condiciones
¿ Las pequeñas tenslones corresp0l1dlentcs a J3 varlaclón de la pendIente de la menl R de contorno son, pues, satisfechas y la superficie lateral está libre de fuerzas.
brAnn a través del espesor del alma, son despreclIldas en esta derIvaCIón. Para detenninar el coeficiente 111' consideremos la energía elástica de la bnrm
\ Lus irreguluridadcs locnles en los extremos de un Cilindro cITeular han Sido estudladd.
por F. Purser, Proc. Roy. Irish. Arad., Dublín, vol. 26, sel'je A, pág. 54, 1906. Véase 'amlnén I L. torsión de vlgos en 1 ha Sido estudiado por S. Tlmoshenko, Z. Matil. Phys.k,vol. 58.
K. Wolf, Sitzber . .Ilkad. Wiss. W!C1/., vol. 125, pág. 1149, 1916, Y A. Timpe, Ma/h. AnllaleJl, ·pág. 361, 1910. V.ase t3lnblén C. Weber, Z. ,mgew. Mat/¡. Mech., vol. 6. pág. 85, 1926.
vol. 71, pág. 480, 1912. • Véase S. Tunosh.enko, Proc. London. Math. Soc., serle 2, '01. 20 .. pág; 3B9, 1921.
342 TEORIA DE LA l!LASTlCIDAD TORSION 343
y busquemos qué valor de m la hace mínima. Empleando la ecuación (84) (§ 47), (fig. 175). Podemos tomar como eje z el eje de la pieza y usar
tenemos:
coordenadas polares r y 6 para definir la posición de un elemento del
y == J¡ f¡ f", fb [1"#." + 1"#l + 1"... + 2(1 ~ ,,) . u," ] d3J dll da de la sección. Las notaciones entcJnces empleadas, para las com-
de la tensión serán (1.. C1B, (1. . Tr>, 7: r 9, 7:8z. Las componentes de
Sustituyendo en esta: expresión los valores dados por (d) y ·teniendo en cuenta que
para una barra larga podernos poner
l 1
!ao e-""dz= -m
llegamos a:

y == } Eq2C1 'D' { -3m + (l +,,) [fs a b'm' + ~ (a" + b')m' + (1 ~ ..l" ~]} (e)
2

La condición de minimo nos da la siguiente ecuación para determinar m:


(l + v)[!a'blm' + lea' + b2)m']=3
la cual, para el caso de uD. rectángulo estrecho, se reduce aproximadamente a:
== (j)
mS
(1 +5 ,,)al
Sustituyendo este valor de m en (e) y (d), obtenemos la distribución tensional corres-
pondiente al caso en que la sección media de la barra permanece plana.
Para calcular el ángulo de torsión '1', igualamos la energía potencial (e) al trabajo
realizado por el momento M,.
z

de donde se deduce:
.; 3M. [z-~
-l6Gab' 6 a
] (g)

. Comparando este resultado con la ecuaClOn (155), se deduce que impidiendo el


. alabeo de la sección se awnenta la rigidez a la torsión de la barra. El efecto de la
irregularidad local de la distribución de tensiones sobre el valor de 'P, equivale
al influjo de disminuir en:
~
a 6
la longitud 1 de la pieza. Tomando y = 0,30, esa reducción es 0,425 o. Vemos, pues, Fle. 175
que el efecto de impedir el alabeo de la sección media sobre el ángulo de torsión,
es pequeño si la dimensión a es pequeña comparada con l. desplazamientos de dirección radial y tangencial serán designados
La torsión de una barra de sección elíptica puede ser estudiada de forma aná- y v y la componente de dirección z, w. Empleando las fórmulas obtenidas
loga '. Mayor importancia tiene el efecto de fijar una sección en el caso de la torsión
de una barra de sección l. El ángulo de torsión, en este caso, puede obtenerse por un
iormente para los problemas bidimensionales (§ 28), encontramos
método aproximado considerando la flexión de las alas, producida por la torsión'. expresiones para las componentes de la deformación:

104. Torsión de árboles circulares de diámetro variable. Con- aU. u Bu


e,.=-¡
ar Eu = -,.+ r--,
ao
sideremos ahora, el caso de un árbol de la forma de ·u·;; sólido de revolu- (169)
ción sometido a torsión por la acción de pares de fuerzas, aplicadas a sus éJu
= --
éJv
+ -éJr - -,rv Bu aw
'YrU
r ao 'Yr. = éJz + ar'
I A. Füppl, Sitz{¡er. Bay .... AI,ad. Wiss., Math •• Phys. Klasse, Munich, 1920, página ~61.
, Véase S. Timoshenko,.z.Math. Physih. vol. 58, página 361, 19JO; o Slreugth 01 Materlals, las ecuaciones de equilibrio de .un elemento (fig. 175), de
vol. Z, pág. 287, 1941.•...
manera que.Jo hicimos para el caso bidimensional (§ 25) y supo-
344 TEORlA DI! LA ELASTICIDAD TORSlON 345
niendo que las fuerzas másicas son nulas, obtenemos las ecuaciones dife-
renciales de equilibrio siguientes!: TrS = (}-yrO = G (ov
01
_!!.)r = Gr~or (~\r)
(e)
ou. +! orro
or· r 00
+ or.. + ~ =
OZ r
O Te. = (}-ye. = G ov =
aZ
G~ ~ (!:)
OZ r
.!r acp
=
or 2

or.. +! OTO. + ou. -1- r.. = O (170) De estas ecuaciones, se deduce que:
or ao OZ 1
1
() (1 acp) + a (1T3
8r 1:3 or oS
él cfJ)
OZ =:= o (f)
o lo que es lo mismo:
Para aplicar estas ecuaciones al problema de la torsión, utilizamos el
método semiinverso (véase la pág. 295) y suponemos que u y w son ·nulos (g)
(esto significa que durante la torsión las partículas se mueven según la
dirección tangencial). Esta hipótesis, difiere de la correspondiente al caso Consideremos ahora, las condiciones de contorno correspondientes
de la torsión de un eje circular de sección constante, en qúe en el caso actual a la función q,. Puesto que sobre la superficie lateral de la barra no actúa
los desplazamientos tangenciales no son proporcionales a la distancia al ninguna fuerza, podemos concluir que en todo punto A de la periferia de
eje (esto implica el que los radios de una sección se curven durante la tina sección que pase por el eje (Hg. 175), la tensión tangencial total debe
torsión). Como veremos en las páginas siguientes la solución basada en tener la dirección de la tangente al contorno, siendo cero su proyección
esa hipótesis satisface todas las ecuaciones de la elasticidad representando, ·sobre la normal al mismo N. En consecuencia:
por lo tanto, la verdadera solución del problema.
ds dr
Sustituyendo u = ro = O en (169) y teniendo en cuenta que por razones TTO ds - ro. ds = O
de simetría el desplazamiento v no depende de O, se obtiene:
.... siendo ds un elemento del contorno. Sustituyendo en esta expresión los
av v valores (d) resulta:
~r = Ee = E. = 'Y.. = 0, "(re = - --, (a)
or l'

Resulta pues, que sólo las componentes 'rO Y "Co. son distintas de cero. (h)
Las dos primeras ecuaciones (170) son satisfechas idénticamente y la
tercera da: de donde se deduce que dada una sección axial del árbol, la función </> se
(1)) mantiene constante a lo largo de su contorno.
La ecuación (g) junto con la condición de contorno (h) determinan
Esta ecuación puede cscnbirse de la forma: completamente la función de tensión ,¡" la cual permite obtener las ten-
siones que satisfacen a las ecuaciones de equilibrio, las ecuaciones de com-
(e) patibilidad y la condición de borde sobre la superficie lateral del ejel •
La magnitud del par, se obtiene considerando una sección transversal
y calculando el momento producido por las tensiones tangenciales TO:. Re-
expresión que es satisfecha por una función q" de r y de z tal que:
sulta entonces:
(d) M, = Jor" 21rT 2re, dr = 21i' Jor" orf>
or (l" = 21f'11"
q, o (k)

Para satisfacer las condiciones de compatibilidad, es preciso tener en


1 Esta 50lución general se debe a J. M. Mtchell, Pror. Loudo" Math. Soc., vol. 31, pág. 141,
cuenta el hecho de que ','0 y ro son funciones del desplazamiento v. Las 1899. Vénsc también A. F1i,Ppl, Sitzber. Bayer. Akad. Wisr., M:unlch, vol. J5, págs. 249 y 504,
ecuaciones (a) y (á) nos dan: 1905 Y el libro Kerblpam1U7Igslehre. tle H. N"mber, donde se encuentran los solUCIOnes corres-
pondientes al htperbololde de revolucJón y a la caVIdad de forma de elipsoide de revoiuclón.
T. Pbschl, Z. angew. Malh. Meeh., vol. 2, pág. 137, 1922 Y T. J. HIggms, Experimmuzl Slrees
t Estas ecuacIOnes fueron obtenidas por Lamé y Chapeyron; véase ere/le's J., vol. 7, 1831 Allalysis, vol. 3, nú~: 1, pág. 94, 1945 dan una reseña de la bibliogralia sobre el tema.
346 TIlORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 347

donde a es el radio exterior de la sección. Vemos que el momento puede a lo largo del contorno de la sección axial serÍl dVllds y, de igual manera
ser determinado fácilmente si se cono.ce el valor de la función en el centro que para el caso de un árbol cilín4rico de sección circular (§ 87), tendremos:
y en el contorno de la sección transversal.
En el estudio de los desplazamientos producidos por la torsión del (n)
árbol, emplearemos la' notación 1p = v/r para designar el ángulo de rota-
ción del anillo elemental de radio r perteneciente a una sección transversal donde:
cualquiera. Un anillo tal puede ser considerado como la sección de uno dr dz
de los numerosos tubos de pared delgada, en que puede ser descompuesto 'T = 'TrO ds + 'TU'da
el eje. El ángulo de torsión de esos tubos será pues Vi. Dado que los radios
de la sección transversal se curvan, ese ángulo, ?p, variará con r y los ángulos . es la tensión tangencial resultante en la periferia. El valor de esa tensión
de torsión de los tubos elementales no son iguales para una misma sección tangencial puede ser obtenido fácilmente si determinamos experimental-
-transversal de la pieza. Las ecuaciones (e) toman ahora la forma: mente d,!11 di- •
Consideremos el caso particular de un árbol troncocónico' (fig. 176).
En este caso la relación:
z

de donde
es constante e igual a cos (1 en el contorno de la sección axial, y cualquier
. función de esa relación cumplirá la condición (h) de contorno. Con el fin
de satisfacer también la ecuación (g), tornamos:
o bien:

(l)
.'" = e {z
(r2 + Z2)~ -
1[. Z
3 (7'2 + ZO)!
J3} (o)

donde e es una constante. Derivando resulta:


Una de las soluciones de esta ecuación nos da el ángulo de torsión
,en función de r y z. Si en esa solución hacemos 1 arp en
'JI = constante (m)
To. = 1=2 ar = - (1'2 z2)i + (P)

obtenernos una superficie, lugar geométrico de los puntos de igual ángulo En cuanto a la constante e se obtiene de la ecuación (k). Sustituyendo (o)
de torsión. En la figura 175, AAI representa la curva de intersección de en esta ecuación tenemos:
esa superficie con la sección axial del árbol. Por razones de simetría, se
c=
deduce que la superficie dada por la ecuación (m) es de
o r revolución, siendo AA, el meridiano de la misma que pasa
211'(% - COS IX +t cosa a)
por A. Durante la torsión, estas superficies giran alrededor El ángulo de torslon se deduce de las ecuaciones (e), las cuales dan la
del eje Ji: sin sufrir ninguna deformación, exactamente como expresión de '/', que satisface la ecuación (l) y la condición de contorno.
les ocurre a las secciones transversales de los ejes cilíndricos
de sección circular. La deformación total en un punto cual- (q)
quiera del meridiano AA¡, será, pues, una deformación tan-
gencial en el plano normal al mismo y la t.ensión tangenciltl Como puede verse las superficies de igual ángulo de torsión son esferas
correspondiente, en la sección axial de la pieza, será per-
con centro en el origen O.
pendicular a dicho meridiano. En la periferia esta tensión es
tangente al borde de la pieza, siendo, por tanto, los meridia- 1 Experimentos de este tipo fueron realizados por R. Sonntag, Z. angew. Math. Mech., vo-
z. nos, normales nI contorno de In sección axial. Si pasamos de lumen 9, pág. 1, 1929.
}lIt.. 17(, una superficie 'JI = cte~, a otra adyacente, la variación de v' 'Véase fo'oppl, "¡~c. cit.
348 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 349

Los casos de ejes en forma de elipsoides, h'iperboloides o paraboloides Supongamos que la placa tenga el mismo contorno que la seCClOl1
de revolución pueden ser tratados de manera análoga ' . axial del eje (fig. 178), quc los ejes x e y coincidan' con los z y r y que el
Los problemas que se presentan en la práctica son, por lo general, espesor de la placa sea proporcional al cubo de r (h = (¡ya). La ecuación
más complicados' pues el diámetro del eje suele cambiar bruscamente (r) se convierte entonces en: .
como se muestra en la figura 177a. El estudio de estos problemas ha sido
iniciado por A. Foppl. C. Runge propuso un método numérico de reso-
2
8 ", + ~ coj¡ + a2¡f¡ = O
8z 2 r 8r ar 2
lución de los miSnlOS 3, con el que pudo comprobarse que en puntos tales
como 7Tl o 11 se produce una notable concentración de tensiones y tIue en que coincide con la ecuación (l). Se deduce enton¡;;es, que las líneas equi-
los ejes con dos diámetros diferentes, d y D (fig. 177a), el valor de la ten- potenciales de la placa vienen determinad~lS por la misma ecuación que
sión máxima depende de las relaciones entre el radio a de la curva de tran- las líneas de igual ángulo de torsión en el caso de un árbol de diámetro
sición y el diámetro d y de la dlD. . variable.

FIC. 178
la} (6)
FIG. 177 Suponiendo que entre los extremos de la placa correspondientes a los
del eje, se establece una cierta diferencia de potencial, de modo que la
En el caso de una entalladura dc radio muy pequeño, a (fig. 177b), corriente circule a lo largo del eje z, las lineas equipotenciales serán nor-
la tensión máxima en el fondo de la muesca es doble de la que se produce males a los bordes laterales de la placa dlindose, por lo tanto, las mismas
en 111 superficie cid eje cilíndrico carente de muescas. condiciones de contorno que en el caso de las líneas de ángulo de torsión
Para el estudio de la concentración de tensiones en las zonas de tran- constante. Si las ecuaciones diferenciales y las cond.iciones de contorno
sición entre distintas secciones y en entalladuras, tiene gran utilidad la son las l!lismas, las dos haces de líneas serán idénticas por lo que estudiando
analogía eléctrica 3 • La ecuación general del flujo de corriente eléctrica en la distribución de potencial, obtendremos información útil para el cono-
una placa homogénea de espesor variable es: cimiento ele la repartición de tensiones en el árbol sometido a torsión.
~
8x
(h a",) + ~ (h aya",)
ax ay
= o (r)
La tensión máxima se da en la superficie del árbol y su valor se de-
duce de (n). De esta ecuación, aplicando la analogía eléctrica, resulta que
la tensión es proporcional a la variación de la caída de potencial a lo largo
en la que h es el espesor variable de la placa yrp la función potencial. del borde de la placa.
Sobre un modelo de acero de 24 pulgadas de largo, 6 de ancho en su'
I Véun"e los trabujos 'de E. MelaD, 1'ech. Bliitter, Praga, 1920; A. N. Dinnik, Bull. Don

Po/ytech. ],'S/. NO"lJo/cherkask, 1912; W. Aradt, Die Torno" <'on We1l1l1111li/ achse1l$Ylllmet,isehIl11 '. extremidad mayor y 1 de espesor máximo (fig. 178) han sido realizadas
Bohmgen ""d Hohlriiurnen, DissertatlOD, Gottingen, 1926; A. Timpe, ¡VIal/¡. Al/na/en, 19!1, ~edidas. La caída de potencial a lo largo del borde mnpq del modelo,
púg. 480; Higgms, loc. cit., de la blbhograna sobre el tema.
1 Ver F. A. W.lIcrs, Z. Matlr. PI'ysik, vol. 55, pág. 225, 1907. Otro método aproKlOlsdo
ha sido determinada mediante un galvanómetro muy sensible cuyos tcr-
fue desarrollado por L: ¡"!lppl, Sitzber. Bayer. Al<ad. Wiss., Mumcl~, vol. 51, pág. 61, 1921, ITlinales estaban conectados a dos agujas muy agudas, fijadas a un bloque
) por R. Sonnr-.tg, Z. ulIgew. Mal". Mee"., vol. 9, pág. 1, 1929. .. y distantes 2 mm entre sí. Al tocar la placa con las agujas, la caída de
1 Ver el trabajo de L. S. JAcobscn, Trans. A.S.M.R., vnl. 47, pág. 619, 1925, Y la revI-
sIón bibliográfIca ue T. J. l:/.¡g¡¡ms, loe. dt. La. dlscrepllnclUs entre los resultados dados pOl"
tensión existente entre los puntos de las mismas era indicada por el galva-
eslc y otros métouos son estud.ados en este último trabajo. A. We.gand, LlIftfa"rt-Forsch., nómetro. Moviendo lás agujas a lo largo del borde de transición se pudo
vol. 20, pág. 217, t 9+3 (tradUCido en N.A.C.A. Tech. 1I-lem., 1179, setiembre, 1947), r.,..1I7.8 localizar y medir el gradiente máximo de voltaje. La relación de 'éste
otr"S comparllClOncs y da los resultados el" el"rtas medidas con uandas extensométricas que
extienden la f.gura 179 has!.1 2ald = 0,05. máximo al gradi«.nte correspondiente a un punto .alejado, como el 1lZ. por
350 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 351

ejemplo (fig. 178a) permite evaluar el coeficiente de concentración de


tensión k 1 de la ecuación: Problemas
1. Demostrar, a partir de las condiciones de equilibrio de la barra completa,
que cuando todas las componentes de la tensión, excepto T z., "v. se anulan, las fuer-
zas aplicadas sólo pueden consistir en pares de torsión [ver las ecuaciones (h) del § 90].
Los resultados. de los ensayos citados para un caso particular están re- Z. Demostrar que '" = ACr' - Q') es la solución del problema del árb9l cilfn-
presentados en la figura 178c, en la que la eaída de potencial medida en macizo o hueco. Determinar A en función de GO. Mediante las ecuaciones (141)
calcular la tensión tangencial máxima y la rigidez a la torsión en fu~ción de M,
árbol macizo y verificar que estos resultados concuerdan con los dados en
3,2 libro~ de resistencia de materiales.
Demostrar que aplicando la misma torsión, la sección eliptica sufre una
tangencial mayor que la correspondiente a la sección circular inscrita (de
2,8 al eje menor b de la elipse). ¿Cuál de las dos secciones da el momento
para igual tensión máxima?

2,4 \
~, D=2.()O

2,0 \~ ,~
/ W=.lSO.
le
\
~ " "j"I.JI
\ i'-- ~ ~ f~=1.2()

1,2
"- ........... ........ -- Cl: ~

,~GI.O¡- -- -
0.8 FrG. 180 FIG. 181

4. Calcular, usando la ecuación (g) del § 92 y la (145), la rigidez 8 la torsión del


.triángulo equilátero y comprobar la concordancia con la ecuación (1) del § 92.
5. Obtener la expresión de 'v' a Jo largo de la linea media Ax de la figura 153,
la función de tensión (m) del § 92 expresada en coordenadas rectangulares.
0,08 0,12 0,16 0,20 0,24 que el valor máximo a lo largo de esa línea es el dado por la ecuación (P).
2a
-¡¡ 6. Evaluar la rigidez torsional de la sección representada en la figura 153.
FlG. 179
. ·¿Difiere apreciablemente de la correspondiente a la sección circular completa cuando
·Ia muesca es pequeña?
.....
cada punto viene indicada por la longitud de la normal al borde, trazada 7. la función de tensión <p correspondiente a la membrana
en ese punto. El coeficiente de concentración correspondiente es 1,54.
Los valores de este coeficiente obtenidos para otras proporciones de ár-
boles son mostrados en la figura 179, en la cual las abscisas representan
2a/d y las ordenadas el factor k para cada una de los valores de la relación );:lenlOfitr¡lr que para una sección delgada tal como la mostrada en la figura 180,
Dld (véase la fig. 177). Mediante estas curvas puede determinarse por puede obtener una solución aproximada suponiendo que para cualquier valor
interpolación, con suficiente exactitud, el coeficiente de concentración
:de y, la membrana tiene la fonna parabólica correspondiente a la anchura de la
. pieza para ese valor dey: Probar que para una sección triangular de altura b se tiem'
correspondiente a cualquier caso particular. ·aproximadamente.
• Las pequeñas vnriaciones del radio T [ecuación (n)] pueden ser despreciadas en este caso.
352 TIlORIA DE LA ELASTICIDAD TORSION 353

8. Usando el método indicado en el problema anterior, obtener unll expreSlOn -_ EMlablecer las fórmulus que dan: a) la tensión tangencial en los puntos de las
llProximada para la rigidez torsionul ele la sección delgada simétrica limitada por ,1, " laterales alejadas de las aristas; b) la torsión unitaria Oen función del momento.
las dos parábolus de In figura 181, para la cual la anchura e, a la distancia y del centro, 14. Obtener las expresiones que dan-la tensión tangencial en un tubo de espesor
viene dada por: le Ó y sección la mostrada en la figúm 183.
En el estudio de secciones cerradas de pared delgada se ha supuesto que la
e = c. (1 -~) tangencial es constante a través del espesor de la pared, lo que corresponde
membrana de pendiente constante a través de este espesor. Demostrar que
9. Demostrar que el método indicado en el problema 7 da para una sección no puede ser rigurosamente exacto para una porción recta de pared (fig. 171 a,
elíptica alargada la función de tensión aproximada: a
ejemplo) y que en general el término correctivo añadir a esta tensión tangencial
tensión correspondiente al tubo Mbiertol) por cortes longitudinales (véase el
4> = -G8b~ (~ + ~ - 1) orolbJenlfi' 12).
16. La teorla expuesta en el § 104 comprende como caso particular el de un
siendo la elipse la de la figura 149 con b/a pequeño. Demostrar que la solución de sección circular uniforme. ¿Cuáles son las funciones p y 'P correspondientes?
- exacta indicnda en el § 94 tiende a la dada aquí cuando b/a es pequeño. 1J~~m'OS11-ar que estas funciones dan la relación correcta entre el momento y la torsión
Deducir las fórmulas aproximadas

M,- = ,.-ab3(}8, Tmáx - = 2GOb = 2M.


..-ab'
para la secclon elíptica delgada y compararla CCln las fórmulas correspondientes donde
relativas a la sección rectangular estrecha de longitua 2a y anchura 2b.
10. Aplicar el método indicndo al final del § 97, para obtener un valor aproxi- ~atisface la ecuación (g) del § 104 más que si A = -1/3 [véase la ecuación (o)].
mado de la rigidez a la torsión de la sección considerada en el prohlema 8.

Den ·EJ ~ 19 Pw. 182 FIG. 183


o
t
r

11. La función de tensión ~, correspondiente a una seCClOll que contiene un


agujero, se anula en el contorno exterior y toma el valor rPl/ constante, en el con-
torno del orificio. Adoptando el método de cálculo que permite llegar a la ecuación 145 FIO. 184 FIG. 185 FIG. 186
(pá¡¡. 299), demostrar que el momento total viene dado por el doble del volumen
limitado por la superficie ~ aumentado en el doble del volumen cerrado por un
techo plano de altura ¡fi" que cubre el agujero (véase la pág. 336). En un punto cualquiera de una sección axial de un eje de diámetrQ variable,
12. Un tubo ccrr~do de pared delgada de espesor 6 tiene un pedmetro l. Prac- arbitmnamellte dos elementos ds y dn (perpendiculares entre sl) tales
ticando un corte longitudinal en él se obtiene un tubo abierto. Demostrar que si indican en la figura 184. La tensión tangencial es expresada por sus compo-
la tensión tangencial máxima es la misma en uno y otro 'caso se cumple y T n según esas direcciones. Demostrar que:

l& 1 aep a.¡,


¡"'L"ó,lr,n
== Ti 8n' 'T. = Gr an
AI,c~rrl\do
'T,
= 6A r
y que la .·elación entre IUR rigideces tOl'sionales es ["b"/12A", ·siendo A el área dd deducir la condición de contorno satisfecha por 'P.
(lagujero>,. Evaluar estas relaciones para el caso de un tubo de radio 25,4 mm y de Demost~ar, sin cálculos, que la función dada por la ecuación (q) del § 104 verifica
espesor de pared 2,54 mm. condición para el ClISp de un contorno en forma de tronco de cono, cualesquiera
sea el ángulo del mismo.
13. Un tubo de pared delgada, de espesor constante 15, tiene la sección mos-
trada en la figura 182. Demostrar que cuando es sometido a torsión no actúa tensión 19. - Comprobar que la ecuación (q) del § 104 da correctamente la función que
alguna sobre el nervio central. a la ~.._de la ecuación (o).
354 'rEoarA DE LA ELASTICIDAD

20. Si modificamos la teoTÍn del § 104, eliminando la condIcIón de contorno


,p = cte., la tensión será producida por los momentos aplicados en los extremos
de una parte y por ciertos aanillos de tensión tangencial~ de otra. Considerando un
eje de sección cir~ular uniforme, estudiar el problema resuelto por '" = Czr.,
donde C es una constante, para O < z < l.
,21. Demostrar que la rotación relativa de los extremos del eje troncocónieo Flexión de piezas
de la figura 185, producida por el momento .IV!, viene dada por.

2"(f - COS: + ir cosO al . ~ (;1 - ~)


Si a y b aumentan (b -." (l = l) y a disminuye, el resultado anterior deherá tender
al valor de la rotación relativa de los extremos de un eje de sección uniforme de
longitud 1y radio aa producida por el mamen to MI' Demuéstrese que es así en efecto.
22. Usando las funciones dadas por las ecuaciones (o) y (q) del § 104, expresar
en función' de M, la rotación relativa de los extremos del árbol troncocónico hueco de
la figura 186. Los extremos son superficies esféricas de centro IJ y radio a y b.

lOS. Flexión de una pieza en voladizo. Hemos visto al estudiar


la flexión simple (§ 88) que si \lml pieza prismática es sometida en uno
de sus planos principales, a la acción de dos pares iguales y opuestos apli-
cados en sus extremos, la flexión de la misma se produce en ese mismo
plano y de las seis componentes de la tensión sólo la tensión normal,
paralela al eje de la pieza, es distinta de cero siendo proporcional la a
distancia al eje neutro. La solución exacta coincide, pues, en este caso,
con la que da la teoría elemental de la flexión, Vimos también al tratar l'I
caso de ulia pieza en voladizo de sección rectangular estrecha, flectad¡t .

°1"'.----t'-----l.- N~
(a)
Flo. 187
tn-M ~

(6)

bajo la aCClon de una fuerza aplicada en su extremo (§ 20), que además


de las tensiones nonnales, proporcionales en cada sección transversal al
momento flector, se producen tensiones tangenciales que son propor-
cionales a la fuerza cortante.
Consideremos ahora, el caso más general de la flexión de una ménsula
(de sección transversal constante, de forma cualquiera) por la acción de
una fuerza P aplicada 'en el extremo, paralelamente a uno de los ejes prin-
cipales de la sección transversaJ1 (fig, 187). Tomemos como centro de
1 Este problema fue resuelto por Saint-Venant, J. mathémat. (J.iou'/Jille), serie 2, vol. 1, 1856.
35ó TE.ORIA DE LA EL~STICIDAD FLEXION DE PIEZAS PRISMATICAS 357·

coordenadas, el baricentro de la sección fija, de forma que el eje z coincida 1a última en la que· aparece -r:",u, resultan idénticamente satisfechas. El
con la fibra c!mtral de la pieza y los ejes x e y con los ejes principales de sistema (130) se reduce entonces a las dos ecu~eioncs:
dicha sección. Para resolver el problema, aplicamos el método semiinverso . P
Saint-Ve~ant y establecemos, en principio, ciertas hipótesis referentes (e) .
a l!'ls tensiones.
'\721'.. == - 1(1 + v)
Suponemos que las tensiones normales que actúan sobre una sección . La resolución del problema de la flexión· de una· ménsula prismática, de
transversal, situada a la distancia z de la sección fija se distribuyen si- sección transversal, se reduce por lo tanto a la obtención· de las
guiendo la misma ley que en el caso de la flexión simple: ·PYnrC'Rllor,eR de 're y 'y. en función de x e y que satisfagan las ecuaciones
equilibrio (e), la condición de contorno (d) y las ecuaciones de compati-
P(l - z):c
tr, = - 1 (a) (e).

. Suponemos aSlmlsmo, clue existen tensiones tangenciales que actúan 106. Función de tensión. Al estudiar los problemas de flexión,
sobre las mismas secciones transversales, las cuales se resuelven en sus '''"rp,"Yl''',., de nuevo la función de tensión q,(x, y). Es fácil ver que las ecua-
componentes '",. Y 'ue Y que las tres componentes restantes de la tensión dones diferenciales de equilibrio (h) y (e) del párrafo anterior quedan CUID-
(]"', ~"> 1:",", son cero, Demostraremos ahora que usando estas hipótesis . ~lidas tomando:
llegamos a una solución que satisface todas las ecuaciones de la elasticidad
y que, por lo tanto, constituye la solución exacta del problema.
Partiendo de estas hipótesis y despreciando las fuerzas másicas, . las
T""
oef¡
= -
éJy
Px 2
- _.
2I
+ f(y)
'
(171)

ecuaciones diferenciales de equilibrio (127) quedan así; es la función de tensión de x e y y J(y) es función de y solamente,
será determinada más tarde con arreglo a las condiciones de contorno.
(b) Sustituyendo (171) en las ecuaciones de compatibilidad (e) del párrafo
obtenemos:
(c)

La ecuación (b) nos dice que las tensiones tangenciales nu dependen de z,


sien do iguales para todas las secciones transversales de la barra.
Aplicando ahora las condiciones de contorno (128) a la superficie
lateral. de la pieza, que esaí libre de fuerzas exteriores, encontramos que las ecuaciones se deduce que:
dos primeras ecuaciones son satisfechas idénticamente y que la tercera
nos da:
(a)

De la figura 187b, resulta; e es una constante de integración cuyo significado físico es muy
.. d dx .·.sencillo. Consideremos la rotación de un elemento superficial de una
l = cos (Nx) = d~1 m = cos (Ny) = - ds . sección transversal de las piezas en voladizo. Esta rotación viene expresada
la ecuación (véase el § 75).
donde ds es un elemento del borde de la sección transversal. La condición
éJv au
de contorno será entonces: 2",s =---
ex ay
(d) . y. su variación según la· dirección z podrá escribirse de la siguiente fonna:
Pasando a las e<;uaciones de compatibilidad (130), vemos que las tres ~(&_~)=~(~+b)_~(~+b)~~_~
primeras de ellas, que. contienen componentes normales de la tensión, y éJz éJx éJy·, ax éJz éJy éJy az ax·· ax ay
358 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLEXION DE PIEZAS PRlBMATICAS 359
Aplicando la ley de Hooke y usando las expresiones (171) de las com- torno rp = O. Este problema es análogo al de la defor:tnación de una mem-
ponentes de la tensión, obtenemos: brana uniformemente estirada cuyo borde tiene un contorno igual al de la
~ (2w) = 1: (aTV' _ aTO:) = _
2</> + a2rf¡ + df)
1.G (aéJ:¡;2 sección transversal de la barra sometida a flexión y que está sujeta a una
as ' G éJ:¡; ay 8y:' dy carga continua dada por el segundo miembro de la ecuación.(l72). En lo
que sigue daremos algunas aplicaciones de esta analogía de la membrana.
Sustituyendo en la ecuación (a) se tiene:
a' v Py 107. Sección transversal circular. Seu:
-G 8s (2w,) = 1 + 71 T + e (b)
X2 + y2 = r2 (a)
Si el eje x es un eje de simetría de la sección transversal, la flexión provocada la ecuación del contorno de la sección transversal. El segundo miembro de
por una fuerza P, dirigida según este eje, produce una repartición simé- la condición de ·límite o contorno (173) se anula si tomamos:
trica de rotaciones w. de la sección transversal (correspondiente a una
curvat~a ~ntielástica) de valor medio nulo para el conjunto de la sección. P 2
f(y) = 21 (r - y2) (b)
El valor medio de OllJ.!oz ¡¡erá también cero lo que exige que e sea nula
en la ecuación eh). Si la sección transversal no es simétrica podemos de- Llevando este valor a (172) la función de tensión rp vendrá determinada
. finit la flexión sin torsión por la condición de que el valor medio de ow.! oz por la ecuación
sea nulo lo que exige naturalmente que también lo sea c. La ecuación (b)
muestra entonces'que oro.foz se anula en los elementos que contienen al (e)
bariccntro de las secciones transversales. Esto equivale a decir que los
elementos situados a lo largo del eje sufren una rotación relativa (unos y la condición r{> = O en el contorno. De esta manera la función está dada
respecto a otros) nula, por lo que si uno de tales elementos es mantenido por las deformaciones de una membrana de contorno circular, de radio r,
fijo la rotación de los otros respecto al eje será cero. Haciendo cero a e la unifonnemente tensada y sometida a una carga transversal de intensidad
ecuación (a) toma la forma:· proporcional a:
a2<:> 8 2.p _ v P11 dj 1 + 2pPy
éJ:¡;2 + iJ y 2 - 1 + 71 7 - dy
(172) -n:vT
Sustituyendo (172) en la condición de contorno (d) del párrafo an- La ecuación (e) y la condición de contorno quedan satisfechas tomando:
terior, obtenemos: (d)
a.p dy a,¡, d:c a,¡, [P:¡;2 ] dy donde m es un factor constante. Esta función se anula en el contorno (a)
ay ds + éJ:!: ds = éJs = 21 - f(y) ds (173)
· y cumplirá la ecuación (e) si hacemos:
ecuaClon que nos permite calcular los valores de la función r{> a lo largo (1 + 2v)P
c;:IeJ contorno de la sección transversal, una vez escogida la función f(y). m = 8(1 + 71)1
La ecuación (172) junto con la condición de contorno (173) de.termina
la función de tensión··r{>. La ecuación (ti) toma entonces la forma:
En los problemas que serán estudiados a continuación tomaremos
= (1 + 271)P ( 2 +
la funciónJ(y) de manera tal que el segundo miembI:o de la ecuación (173)
.Jo
'1' 8(1 + 1')1 x y
2 _
l'
2)
Y (e)
se anulé, con lo que la función rf> será constante a lo largo del contorno.
Haciendo iguul u cero esa constante, el problema de la. flexión se reduce · y las componentes de la tensión que se obtienen aplicando las ecuaciones
a la resolución de la ecuación diferencial (172) con la condición de con- · (171) serán:
_ .(3 +
2p)P ( 2 _ 2 _ 1 .....: 2p 2\
1 ] . N. Goodier, J. Aeronoue. Sd .• vol. 11, pág. 273, 1944. Una definición diferente fue
propuesta por E. Trefftz. Z. ongew. Math. Mech., vol. 15, pág. 220, 1935.
1'"" -8(1 +
1')1 r :t 3 + 21' Y)
(174)
• Véase S. Timoshenko, Bull. Inst. Engineers 01 Ways 01 Communications, San Peters- (1 +
2v)Pxy
burgo, 1931. Véase twnbién Proc. l.<Jndon. Mach. Soc., serie 2, vol. 20, pág. 398, 1922. 7~. = - 4(1 1')1 +
360 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLEXION DE I'IEZAS PRISMAT[CAS 361
La tensión tangencial vertical T",. es una función par de x e y, la compo- Sustituyendo esta expresión en (172) resulta,
nente horizontal T". una función impar de las mismas variables. La dis-
tribución tensional (174) -dará, por tanto, una resultante cuya línea de éJ2<J>
éJ~2
éJ2.p
+ ay2 =
Py
7
(a¡;z + 1 +
2 ,,)
JI
(e)
D,cción coincide con el diámetro vertical de la sección transversal.
En el diámetro horizontai de la sección recta x = O y según (17~) ecuaClOn, que junto con la condición ,p = O en el perímetro, determina
tendremos _ la función de tensión ,p. La condición de contorno y la-ecua.ción (e) que-
(3 + 2v)P ( •
+
"T.. = 8(1 v)! 1" -
1 - 2v
3+
2)
2v y , "Tu. = O (f)
dan satisfechas tomando:

(d)
La máxima tensión tangencial se presenta en el centro (y = O) donde:
--Cuando a = b esta solución coincide con la dada anteriormente para la
(3 2v)PrZ + sección circular.
(1"u)mÁX= 8(1 ,,)1 + (g)
.. Sustituyendo (h) Y (d) en las ecuaciones (171) obtendremos las com-
- La tensión tangencial en lbs extremos del diámetro horizontal (y = ±r) - ponentes de la tensión:
vale: _ 2(1 + p)a 2+ b2 P [ . 2 (1 - -2p)a2 2]
_ (1 + 2v)Pr~ Tu - (1 + p)(3a2 + b2) • 21 a- - x - 2(1 + p)a2 + b2 Y
(1"••).._=. - 4(1 v)I + (h) (1 + JI)a + Jlb Pxy
2 Z (175)
TM' = - (1 + y)(3a + b T
2 2)

Como se ve la magnitud de la tensión tangencial depende del valor del


coefi~iente de Poisson. Haciendo v = 0,3, (g) Y (h) resultan horizontal de la sección elíptica (x = O) Y resulta:

2(1 +
v)a2 + b2 P [ • (1 - 2v)a2 ]
(le) T:. = (1 + p)(3a2 + b2) 21 a- - 2(1 + v)a Z + b2 y2
siendo A el área de la sección transversal de la pieza. La teoría elemental TlI' =O
de la flexión de vigas basada en la suposición de que la tensión tangencial La tensión máxima, que-se presenta en el centro (y = O), viene dada por
T .. se distribuye uniformemente a lo largo del diámetro horizontal de la la ecuación: -
sección recta, nos da:
4P
( )
T", • .... x
= pa
21
2
[1 _ a 2
+ b + JI)]
+Sa2"bz/(l 2
T •• = 3A
Si b es pequeño comparado con a podemos despreciar los términos con-
siendo un 4 % el ermr de esta solución elemental. teniendo b2 /a 2 , en cuyo caso resulta:

108. Sección transversal eliptica. El método que acabamos de Paz 4P


(T:.) ....x = 3J = 3A
emplear en el párrafo anterior puede ser usado también en el caso de sec-
ción transversal elíptica. Sea: coincide con la solución dada por la teoría elemental de la flexión.
~3 y2 b es muy grande en relación con a tendremos:
(i2+¡;z-l=O (a)
2 P
(T ..) ...." = 1 + vA
la ecuación del perímetro de la sección. El segundo miembro de la ecua-
ción (173) se anulará si hacemos: La tensión en los extreI?os del diámetro horizontal (y = ±b) será en este
j(y) = - fr(~y2 - a2) (b)
4J1 P
T: t =l+vA
362 'I'1l0RIA DE LA ELASTICIDAD FLEXION DE PIBZAS PIUSMATICAS 363
La distribución d~ tensiones a 10 largo del diámetro horizontal dista mucho, Según las ecuaciones (171) las tensiones tangenciales pueden descom-
en este caso, de ser uniforme y depende del coeficiente de Poisson v. . ponerse en los dos sistemas siguientes:
Haciendo .'JI = 0,30 obtenemos .
(1) I_P(2 2)'
T"" - 21 a - X,.
(e)
/1 éJq,
La tensión máxima así calculada es aproximadamente un 14 % mayor de
(2) r",. = a¡l
la obtenida aplicando la fórmula elemental.
El primer sistema representa la distribución parabólica de tensiones dada
la teoría elemental. El segundo, que depende de la función .p, repre-
109. Sección transversal rectangular. La ecuación del contorno
las correcciones a aplicar a la solución elemental. La magnitud de
. del rectángulo de la figura 188 es:
correcciones viene dada por las pendientes de la membrana. Por ra-
. (a) de simetría atjJJox = o a lo largo del eje y y las correcciones a la
elemental serán tensiones tangenciales verticales dadas por la pen-
. Sustituyendo f(y) en la e'cuación (173) p~r la constante Pa 2/2I, la expre- atjJ/oy. Conforme a la figura 188, .:u" es positiva en los puntos m
sión Px2 /21 - Pti/21 se anula a lo largo de los lados x = ±a del rec- p y negativa en n. La tensión '"., en consecuencia, no es uniforme a lo
del eje horizontal de simetría (uniformidad' ésta a la que llega la
elemental) presentando máximos en los extremos m y p y un mÍni-
en el centro n.
De las condiciones de carga de la membrana resulta que <p es función
de x e impar de y. Este requisito, así como la condición de contorno,
cumplidos si damos a la función de tensión <p la forma de serie
. Fourier
m- 10 n_oo

. q, =
'V L¡
Lt 'V .
A 2,,*1,1> C08
(2m + 1)1I'Z sen bntrU
2a (d)
FIG. 188 m-O n-1

en (b) Y aplicando el método usual para calcular los coefi-


tángulo. La derivada dy/ds se anula, por otra parte, a lo largo de los lados las series de Fourier, llegamos a las ecuaciones:
verticales y = ±b. De todo ello resulta que el segundo miembro de la
ecuación (173) se hace cero en el contorno, pudiendo ser en él, por tanto,
'" = O. La ecuación diferencial (172) se. convierte en: .
éJZ<J> éJ2<J> V Py
(b)
éJx 2 +éj y 2 =l+vT
ecuaClon que junto con la condición de contorno determina completa-
mente la función de tensión. Nuestro problema queda reducido a deter-
minar las deformaciones que produce en una membrana rectangular uni-
formemente estirada una carga continua cuya in·tensida.d es proporcional a: en (d) obtenemos:

-l+JJT
v Py
v
m=" n= 1) + 1
P 8b3 '"' '"' - m n- cos
(2m
2a
"'e
l)'lTX ntrU
senT
+
2
La curva mnp de la figura 188 representa la intersección de la membrana - 1 + V 1 -:;;x L¡ L¡ (2m + l)n [(2m + 1)2 b2
4a .
+ na]
con el plano yz. , m=O 71=1 .
364 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLEXION DE PIEZAS PRISMATICAS 365
Con esta función de tensión las componentes de la tensión tangencial tendrá entonces
pueden ser determinadas mediante las ecuaciones (e). n- ..
Deduzcamos ahora qué correcciones hay que añadir a 1m; tensiones, _ _v_ 3P . ~,[ ! ~ "'\" (-l)n]
que pal"3 el eje Ji, da la teoría elemental. Considerando para ello la defor- (1'",")_0, u-o = 1 + JI 2A a 2 3 + Ls¡ n2 'ch
11'2 n1l'a
mación de la membrana (fig. 188), podemos ver que las correcciones alcan- ,,-1 b
(176)
zan los valores máximos a 10 largo de este eje y que, por tanto, la máxima 11= ~

tensión aparece en el punto medio de los lados y = ±b. Calculando la


derivada vrP!oy y haciendo x = O tenemos:
( ")
T... =-0, v-lr =. 1 + ]1
'P
3P b
2A ii2
2
[2'3 - :¡;:24L.,¡
'" 1!!::!:.-b ]
11,2 ch a
"
(1''')
:ro
O
-,
= - -V- -P8b
1
-
+
".- .. "a..

JI 1 11'~
2
2: 2:
(_1)"'+0-1 cos n1Ty

m=O n=l
(2m + 1) [ b 2+]
(2m + 1)2
b
-2
4a
11,2
en donde A = 4ab, es el área de la ,sección transversal. Estas series con-
vergen rápidamente y no es difícil calcular las correcciones Tu" para cual-
quier valor de la relación albo Estas correcciones deben ser añadidas al
nel

De aquí deducimos las siguientes fórmulas, aplicables en el centro de la


a
sección transversal (y = O) y en el punto medio de los lados verticales Punto b= 2
2 4
del rectángulo. .
;, ]1
m=-
P 8b2~ "'\" (-l)"'+n-l
/IQ n~;o

x = 0, y = ° Exacto 0,983 0,940 0,856 0,805


('1'.,. >_o.v-O = -1 + 'Py-:;rL.¡
L¡(2m 1) [(2m 1)2 + + 4~2 +n2] Aproximado 0,981 0,936 0,856 0,826

m=O 11.=1 x = 0, y = b Exacto 1,033 1,126 1,396 1,988


Aproximado 1,040 1,143 1,426 1,934
m=oon= __
2
V P 8b ' " "'\" (-1 )"-l
- 1 + y-;s .L¡ L¡ (2m + 1) [(2m + 1)2 ~2 +
11 11,2]
valor 3P/2A dado por la fórmula elemental. En la primera línea de la
tabla adjunta se dan los factores por lo que hay que multiplicar el valor
m=O ,,=1 4
~proximado,3P/2A de la tensión tangencial para obtener los valores exactos l •
La suma de estas series se simplifica grandemente usando las cono-
cidas fórmulas:

k'='~
El",'
e es la dIstancia de la fuerza P al apoyo IzqUIerdo (flg. 112). Haciendo ahora e = OY Pe = M,
~ (-1)0 • la sIguiente curva de deflexlón producida por el par M aphcado en el extremo
,,- . sen~
L.¡ n
¿
2

n-l 2Ml' Z

m-"
'" (-l)m,
(kll')*
'lJ"s 1 - sech-Z la flecha en el centro será:
y = El ...'
,.-1
n(n' + k')

L.¡ (2m + 1)(2m + 1)2 + lc 2] = 32 i(k1l'j2) 2 2Ml' mf" , (-1)"' (a)


m=O
6 -"Iffh' ~
meO
(2m + 1)[(2171. + 1)' + k'I
" Esta fórmula puede deducirse de la siguiente manera: Usando la serie trigonométrica (/,) 'La misma flecha obtemda por integracIón de In ecuación dIferencial de In curva de defle,,,ón es:
(pá~. t 84) para el caso 'de un tirante cargudo por una fue!?. transvers~1
P y una tracción .xial S,
I)bten~mos que Ml" ( k1r) (b)
6 = 2EI1l"k" 1 - seoh '2
n- DOsen~ sen ~
2Pl' '\' Z z fórmula anterior se sigue d~ la cumparaclón de (a) y (b).
,y = Eh·' L.¡ ,,'(n' + "') 1 Los datos de la tabla dIfIeren .llgo de los datos por Saint-Venallt. La comprobación
n~l los resultados de Sa,int-Venant demostró l. existenCIa de un error en sus cálculos.
366 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
FLBXlON DE PIEZIIS PRISMATICAS 367
En estos cálculos se ha tomado el valor 1/4 para el coeficiente Poisson v. tángulo tomaremos como función de tensión la siguiente expresión en
Como se ve la teoria elemental da valores muy exactos para estas tensiones lugar de la (g):
cuando a/b ~ 2. Para una sección cuadrada el error que se introduce al
considerar la tensión máxima dada por la fórmula elemental, es de un 10 %. "Py ,
ti> = - - - {:z;2 - ( 2)[l -
1 + v21 (h)
e-(b--¡¡)mJ
Usando la analogía con la membrana pueden deducirse fórmulas aproxi- ,
madas para el cálculo de estas tensiones tangenciales, fórmulas éstas de , 'en la que m debe ser determinada con arreglo'a la condición de mínima
gran ui:ilidad. Si a es grande comparado con b (fig. 188) podremos suponer • energía (véase el § 97). De esta manera obtenemos:
que a suficientc distancia de los lados cortos del rectángulo la superficie
de la membrana es prácticamente cilíndrica. La ecuación (b) entonces 1
se convierte en 'In = 2av'iO
este valor de m y empleando la ecuación (h) podemos calcular con
suficiente exactitud la tensión tangencial máxima, la cual se presenta en
y de ello resulta: el centro de los lados menores del rectángulo.
Si ambos lados del rectángulo son del mismo orden de magnitud,
<P = - "- -
P (ya - b2y) podemos obtener una solución aproximada de forma polinómica para la
(e)
1 + ,,61 distribución tensional, dando a la función de tensión la forma:
Sustituyendo en (e) tenemos para las tensiones a lo largo del eje y. (le)
2

ru P [a
= 21 2+ 1 +" " (2y - b )]
3" (1) Calculando los coeficientes m y tl mediante la condición de mínima
, "nergía obtenemos'
Se observará que para un rectángulo estrecho la corrección de la fórmula
elemental dada por el segundo término del corchete es siempre pequeña. m=
Si b es grande frente a a la deformación de la membrana en los puntos
alejados de los lados cortos del rectángulo, puede ser considerada función
lineal de y, de donde según la ecuación (b) tenemos: n=

(g) tangenciales calculadas con la fórmula (h) son:


Pa2
Sustituyendo en Ce), las componentes de la tensión tangencial son: (r=) ...o. v-o = z:r + ma b 2 2

Pa 2 (l)
v P (r",.)_o.lI-lJ = 2T - 2a 2b2(m + 1!b2)
ru. = - 1 + v T x¡¡
Los valores aproximados de la tensión tangencial dados en la segunda línea
En el baricentro de la sección recta (x = y = O), la tabla de la página 365 han sido calculados usando estas fórmulas.
puede verse las fórmulas aproximadas (l) dan una exactitud satis-
1 Pa2 para este orden de valores de la relación alb.
r"" =1 + vU' r •• = O
la anchura del rectángulo es grande comparada con su altura la
que co'mparada con la solución elemental da una tensión reducida en 'tensión máxima es muy superior al valor 3P/2A, dado por la teoría ele-
l/O + v). Por otra parte si bla es mayor de lS la tensión máxima deja de
Para satisfacer la condición de contorno en los lados cortos del rec- 1 Véase Timoshcnlco, loe. cit.
368 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLElCION DE PIEZAS PRISMA"l'ICAS 369
ser la componente 'ZD en los puntos medios de los lados verticales (x = O, El problema pu!:!ue también resolverse fácilmente si el contorno de la sección
y=±b), siéndolo la componente horizontal '11: en los puntos x=a, y=±¡¡, transversal viene dado por la ecuación:
pertenecientes a los bordes superior e inferior y próximos a los vértices.
Los valores de estas tensiones son dados en la tabla I siguiente: Los valores a >z >-a (b)
de r¡ aparecen en la forma (b - r¡)/2a en la última columna, siendo b - 11
la distancia entre el vértice y el punto donde se da la tensión máxima. Para" = 1/4 ese contorno tiene la forma mostrada en la fIgura 190.
Haciendo:

-ab (T..)=_•••-6 (r ••)._•. v-' b-~


3Pj2A 3Pj2A 2a
el primer miembro de la condición de contorno (173) se
O 1,000 0,000 0,000
.Ulula, lo que significa que rp debe ser constant!:! a lo largo
2 1,39(4) 0,31 (6) 0,31(4)
del perímetro. La ecuación (172) toma entonces la forma:
4 1,988 0,968 0,522
6 2,582 1,695 0,649 1
8 3;176 2,452 0,739 él'", él'", v Py Pa' ( 11);-1
10 3,770 3,226 0,810
élz' + oV' = 1 + v T ± 2b1 v ± ¡;
15 5,255 5,202 0,939
20 6,740 7,209 1,030 Esta ecuación y la condición de contorno qucdan satisfechas
25 8,225 9,233 1,102 tomando:
50 15,650 19,466 1,322
4> = 2(i
Pa'"
+ v)I [(x, ) (y)'!+l]
y (ji - 1 ± b ± ¡¡ "
Flo.19O
110. Resultados complementarios. Consideremos el caso de una sección
que llevada a las ecuaciones (171) nos da:
trunsversallimitada por las dos rectas vcrtica[cs y = ±a (fig. 189) Y las dos hipérbolas!
p"
(1 + v)zt - "1/' = a' (a) T.. = 2(1 P
+ v)l (a • - ')
Z , 1"11· =
- (1 + v)I zy Ce)

Es fácil demostrar que esta ecuación anula el segundo Podemos llegar al mlsmo resultaoo de distinta forma. Al estudiar las tensiones que
miembro de la (173) si tomamos se producen en una viga rectangular, cuya anchura es grande comparada con su
t al.tura, empleamos como solución aproximada para la función de tensión [ecuación (g),
fey) =
P ( ¡:¡:-;;
21 .. y' + 1 a+ .. )
§ 109] la expresión:
.. Py
;e
Sustituyendo en (172) resultO!" '" = 1-~
+" -21 (z' - a')
a.", él'",
FIU. 189 iiii + élV' = o de la cual pueden deducirse las fórmulas (e) de las componentes de la tensión. Po-
demos obtener ahora la ecuación del contorno partiendo de la condición de que la
ecuaclon que junto con la condición de contorno (173) qlleda satisfecha haciendo dirección de la tensión tangencial coincida con la de la tangente a la periferia. Te-
<P "f' O. Las componentes de la tensión tangencial deducidas, según (171), serán nemos entonces:
entonces:

r... = Ji (- z, + 1 ~ .. y. + 1 ~ .)
T1I1 = O Sustituyendo (e) e integrando obtenemos la siguiente ecuación para el contorno:

La tensión tangencial es, pues, vertical en todo punto de la seeclon transversal y = b{a 2 - z'}'
y su valor máximo que se da en el punto medio de los lados ·verticales es:
El método de la energía (§ 109) pennite obtener en muchos (,tros cusos ~olu­
Pa' ciones aproximadas. Consideremos, por ejemplo, la sección recta mostrada en lol
Tmb =-
. 21 figura 191. Los lados verticales del contorno vienen dados por la ecuación y = ± b
y los otros dos son arcos de la circunferencia.
I E. Reissller y G. B. Thomas, J. Motil. P/¡ys., vol. 25, pág. 241, 1946.
, Este problema fue estudiado por F. Grashof, Elasti"itilt u1Id Festigkeit, pág. 246, 1878. z'+y2-r'=O (¡j)

- It11111\ ll¡¡; I.AHv.sflcIO,U>


.170 'rEORIA DE LA ELASTICID<\D FLEXION DE PIEZAS PRISM<\TICAS 371

El segundo miembro de la ecuación (173) se .muht para: y la (172), que determina la función de tensión 91 resulta:

a'", a'", v 1'11 P •


a;;: + ay' = 1 + vT ~ 1 (2a + y) tg '" (a)

Una expresión aproximada para la función de tensión será entonces:


El método energético permite obtener una solución aproximada. En el caso particu-
'" = (y' - b')(:¡;' + yS - T')(Ay + By3 + ...) lar en que:
en In cual los coeficientes A, B, ... , han de ser calculados con arreglo a la condición (b)
de mínima ene.rgía.

se llega a la solución exacta de [a ecuación (a), tomarido para la función de tensión


la expresión:

'" = fu. [z· - ~ (2a + y).] (11 - a)

Las componentes de la tensión obtenidas aplicando [as ecuaciones (171) son:

Bt/> P:¡;' P
2T + 6t (2a + y)' =
2 vap + a(2a + 1/)1
JtIJ
Flc. 191
=
Flo. 192
T •• = ay -
o'¡' 2.y'3P
27a' [-z'
(e)
T •• = - a;; - 27a' z(a - y)
Las soluciones correspondientes a secciones transversales de otras muchas formas
han sido obtenidas empleando coordenadas curvilíneas y funciones de variable com- A .10 [argo del eje y'(x = O) la tensión tangencial resultante es vertical y viene dada
pleja. Entre les casos estudiados se encuentran los de secciones limitadas por dos por la función lineal.
círculos, concéntrico' o no', un círculo con ranuras radia[es J , una cardiode ' , un
Iimacon', un Jimacon elíptico", dos elipses homofocales' y una elipse y una hipér-
bola homofocales·, triángulos y pollgonos" incluyendo un rectángulo con ranuras'"
y un sector de un anillo circular".
E[ valor máximo de la misma, que se presenta en el punto
111. Secciones transversales no simétricas. Empecemos considerando medio del lado vertical de la sección, es:
e[ coso de un triángulo isósceles (fig. 192). La ecuación de su contorno es:
(y - a)[x + (2a + y) tg aJ[..: - (2a + y) tg a] = O.
(d) FIG.193,
El segundo miembro de la ecuacIón (173) se .llIula SI tomarnos:
p Calculando el momento producido por las tensiones tangenciales (e) respecto al
f(1/) -= 21 (2a + y)! tg' Ct eje z vemos, que en este caso, la fuerza tangencial resultante pasa por el baricentro e
de [a sección recta.
Consideremos ahora el caso ,más ~ener.ll de una sección transversal con un eje
, Véase A. E. H. Love, Mathema/ical 'l'heary 01 Elasticity, 4.' edición, pág. 335, Y l. S horizontal de simetría (fig. 193), cuyas porciones superior e inferior tengan el con-
Sokolnikoff, /lt!alhematica/ T/¡eory 01 E/asti,ity, pág. 253.
• B. R. Seth, Proc. ¡ndianAcad. Sci., vol. 4, seco A, pág. 531, 1936 Y vol. S, pág. 23,1937. torno dado por:
• W. M. Shepherd, Proc. Rqy. Soco London, serie A, vol. 138, pág. 607, 1932; L. A.
Wigglesworth, Proc.(LondonJMatll., Soc., serie 2, vol. 47, pág. 20, 1940, Y Proc. Roy. Saco
pum z >0
para :¡; <O
(Lrmdoll), serie A, vol. 170, pág. 365, 1939.
• W. M. Sbepherd, Proc. Ruy. Soc., (London), serie A, vol. 154, pág. 500, 1936. La función:
'D. L. Hall y D. H. Rock, Z. a>tgew. Mal/¡. Mech., vol. 19, pág, 1,41,1939.
• A. C. Stevenson, Proc. Londan Mat/¡. Soc., serie 2, vol. 45, pág. 126, 1939. [:¡; + >¡b(y)J[:¡; - >¡b{1I)] = z· - ¡'¡'(y)]',
, A. E. H. Lave, Mathe7natica/ Theory 01 E/as/idty, 4." edición, pág. 336.
• B. G. Galerkim, Bull. Inst. ETlgineers 01 Ways 01 Communicati01l. San Petersburgo, se anula entonces, y en las expresiones (171) de las componentes de la tellsión po-
vol. 96, 1927. Véase también S. Gho.h, Bull. Calcutta Matil. Soc., vol. 27, pág. 7, 1935 • demos poner:
., B. R. Seth, Phi/o Mag., vol. 22, pág. 582, 1936 Y vol. 23, pág. 745, 1937.
'" D. F. Gunder, P/¡ysics, vol. 6, pág. 38, 1935. P
11 M. Seegar y K. Pearson, Proc. Roy. Soco (Londoll), serie A, vol. 96, pág. 211, 1920.
fey) = 2i [>¡b(1I)]'
372 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLJlXION DE PIEZAS I'RISMATICAS 373

La función de tensión, en consecuencia, tendrá que satisfacer la ecuaCIón diferencial: Cuando la fuerza P es paralela al eje y, en lugar de al eje x, podemos
establecer, de manera análoga, la posición de la línea de acción de P para
la cual no se dé ninguna rotación de los elementos de las secciones trans-
versales que contienen a los baricentros. 'La intersección- de estas dos líneas
y ser constunte en el contorno .. Nuestro problema se reduce a la obtención de las de acción de las fuerzas de flexión, determina un punto que es de interés
deformaciones de una membrana, uniformemente estirada y sometida a una cargll considerar. Si en ese punto se aplica una fuerza perpendicular al eje de
cuya intensidad viene dada por el segundo miembro de In ecuación anterior. Por lo la viga podremos descomponerla según sus componentes paralelas a los
general, como ya hemos visto para el· caso de la sección rectangular estrecha, este ejes x e y y basándonos en el estudio anterior llegamos a la conclusión
l1ltirno problemn puede ser resuelto con suficiente exactitud aplicando el método
de la energía. de que los elementos situados en el centro de gravedad de las secciones
El caso representado en la figura 194 puede ser tratado no sufrirán ninguna rotación. Este punto ·recibe el nombre de centro de
de forma similar. Supongamos, por ejemplo, que la sección flexión o centro de cortadura.
transversal sea un segmento parabólico y que la ecuación de
y--¡f---,,--I la parábola sen:
a;" = A(y +11)
Tomando:
p
.?C
I(y) = 21 . A(y + a)
FIG. 194

el primer factor, del segunúo miembro de la ecuación (173) se anulará en la porción


parabólica del contorno. A lo largo de la porción recta se anula el factor dy/e/s.
Obtenemos, pues, una. vez más, que la función de tensión es constante a lo "Irgo
del contorno y que el problema puede ser tratado por el método de la energía. FIG. 195

112. Centro de flexión o centro de cortadura. Al estudiar el


PI oblema de la flexión de una pieza en voladIZO, hemos tomado como eje z Si la sección transversal de la viga tiene dos ejes de simetría, se ve
la línea que pasa por los baricentros de las secciones de la barra y como fácilmente que el centro de flexión coincidirá con el baricentro de dichn
ejes x e y los ejes principales de la sección fija de la pieza. Hemos supuesto sección. S·i solamente existe un eje de simetría se deduce que por razones
asimismo que la fuerza P es paralela al eje x y que la distancia de su línea de simetría, el centro de tlexión estará en dicho eje. Tomándolo como
de acción al baricentro es tal que no se produce torsión. Esta distancia, d4" !je y podremos calcular mediante la ecuación (b), la posición del centro
importancia para los cálculos prácticos, se obtiene fácilmente si se conocer. .:fe flexión.
las tensiones representadas por las ecuaciones (171). Evaluemos, en efecto Consideremos, por ejemplo, la sección semicircular l representada en
el momento respecto al baricentro producido por las tensiones tangencía· la figura 195. Las tensiones tangenciales pueden obtenerse empleando la
les '%% y Tu'. Este momento será evidentemente: solución conespondiente al caso de vigas de sección circular (véase la ecua-
ción 174, pág. 359), en el que las tensiones a·ctúan sobre la sección diametral
M, = If (r,..y - TI/IX) dx dy (a) vertical xz con cero. Podemos, pues, imaginar a la vigu circular dividida
por el plano xz en dos mitades que representan dos vigas semicirculares
Observando que las tensiones repartidas sobre la sección terminal de la flectadas por la fuerza Pj2. Las tensiones vienen dadas por la ecuación (174).
barra son estáticamente equivalentes a la fuerza P se deduce que la dis- Sustituyendo en (a), integrando y dividiendo M. por Pj2 obtenemos para
tancia d de la fuerza P al barícentro, es: la distancia de flexión al punto O el valor:

d~ 2M. 8 3 + 4v
=P (b) 6 = P = 1& 1 + JI r
siendo 1'vl, positivo sí la distancia d es tomada en el sentido positivo del
I Véase S. Timoshenko, Bull. 1ml. ElIgú"ers oi Ways 01 Coimnunicatiol", San Petersburg",
eje y. En el estudio precedente hemos supuesto que la fuerza aplicada em 1913. Parece ser que es en este artículo donde se ha estudiado por primero vez 'el dcsplazIl-
paralela al eje x. mienlo dto la fuer~a ,~_e fleXIón del baricentro de la seccIón recla.
374 nORIA DE LA ELASTICIDAD FLElCION DE PIEZAS PRISMATICAS 375

el cual define la posición de la fuerza para la que el elemento de sección Integrando por partes y observando que r/J se anula en el contorno
recta que contiene al punto O, centro del círculo, no gira. Simultáneamente \ = ± 1p(y), obtenernos:
el elemento que contiene albaricentro de la sección semicircular girará la
- cantidad [véase la ecuación (b), pág. 358]
I I (~: 11 + :: a;) d~
dy = - ~ II
;p ilx ily
Col
= JlP(l-z)
lJI 42'-
• ,;rr ° J[X2 - ,p2(y)] d:J; = #a(y) - 2,p3(y) = _"*"'3(y)
JJ[X2 - ,p2(y)]yd:J;dy = _tfytf;3(y) dy
donde 0,424r es la distancia del origen' O al haricentro del semicírculo. I = fJx 2 dxdy = tN3(y) dy
Para eliminar esta rotación es preciso aplicar un par, en la forma que se
SustituyendO' en (e) y dividiendo por P resulta'
indica en la figura 195. El valor de ese par se obtiene haciendo uso de la
tabla de la página 317, la cual da para una sección semicircular el siguiente
ángulo de torsión d -- ~
P --l-~
P II cPd:J;dy + [y"'3(y) dyl
f¡J;3(y) dy

8 = 0,296Gr4 Conociendo 1p(y) y determinando rp mediante la analogía de la mem-


brana, podremos calcular I siempre, con suficiente exactitud, la posición del
La condición de rotación nula de los elementos situados en los baricentros centro de flexión para estas secciones transversales.
de las secciones rectas se traduce entonces por: La cuestión del centro de flexión es de particular importancia en los
casos de secciones abiertas de pared delgada. Su posición puede ser deter-
M1(l - z) = JlP(l - z) • O 424 minada fácilmente, con suficiente aproximación, suponiendo que· las ten-
0,296&' El ,r siones tangenciales se distribuyen uniformemente a través del espesor de
y la pared y que son paralelas a la superficie media de la pared 2•
La posición del centro de flexión depende únicamente de la forma geométrica
M, = JlP' 0,296r 4 • 0,424r
2(1 + p)l de la sección. La situación del centro de torsión, por el contrario (véase la pág. 308)
depende de la forma en que es sujetada la barra. Eligiendo convenientemente la
forma de slljeción podemos hacer coincidir el eje de centros de torsión con el de
Se obtendrá este par desplazando la fuerza de flexión P/2 hacia el eje de centros de flexión. Puede demostrarse que esto ocurre cuando la sujeción de In
las z la distancia: pieza es tal que la integral JI w 2 dxdy extendida a la sección recta es un mínimo 3
siendo w el desplazamiento de alabeo de torsión (indeterminado en una función lineal
b = 2M, = 8v . 0.296 . 0,424r de x e y mientras no se aplique esta condición). En la práctica, la ftiación perturbará
P 2(1 JI)"/I" + la repartición de tensiones ~n la vecindad del extremo fijo, cosa ésta que ocurre,
por ejemplo, cuando se impiden por completo los desplazamientos de la sección
Esta cantidad restada del valor e, previamente obtenido, nos da la distan- extrema. En este caso, si consideramos a la fuerza de flexión como localizada en el
centro de flexión y produciendo una rotación nula, el teorema de reciprocidad (véase
cia del centro de flexión al centro O del círculo. Suponiendo que JI = 0,3,
la pág. 274) muestra que la aplicación de un par producirá un desplazamiento nulo
se tiene: de ese centro. Esto indica que el centro de torsión coincide con el centro de flexión l .
e ..,.. {j = 0,548r - 0,037r = 0,511r Este argumento no tiene mús que un canÍctt:r aproximado puesto que 1.. existencia
del centro de torsión depende de la ausencia de deformación de las secciones rectas en
su plano, condición ésta que no es cumplida en la zona perturbada próxima al ex-
En secciones tales corno la de la figura 193, las componentes de la tremo fijo.
tensión' tangencial son:
.arjJ I Ejemplos de cálculos de este tipo pueden verse en la obra de L. S. Lelbellson, VQria-
tioMi M cthods for Solmilg Problem., oi lhe Theory 01 Elas/l"cíty, Moscú, 1943.
- ax • Pueden encontrarse referencias en S. Timoshenko SITf!J/g¡f¡ of Materials, 2.~ edicIón,
Resulta entonces: vol. 2, pág. SS.
, R Kappus, Z. angew. Matiz. Mech., vol. 19, pág. 347, 1939: A. Weinstem, Quart. Applied
¡Vlalh., vol. 5, pág. 79, 1947.
ilf. = ff(o<fo.
éJy Y
+ arjJ ) P f [:¡;2
éJx;¡; dx dy - 21
f '- ,f¡2(y)Jy dx dy
'Véase R. V. Southwell, bltroáuctio1l lo tlle Tf¡eury uf Elasticity, pág. 29; W. J. Duncan,
D. L. Ellis y C. Scruton, Phil. Mag., vol. 16, pág. 201, 1933.
(e)
376 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FLEXrON DE PIEZAs PRISMATICAS 377
113. Resolución de los problemas de flexión por el método truir el contorno de' la película de j~bón. En una lámina de celuloide se
de la peücula de jabón. La solución exacta de los problemas de practica un agujero de forma tal que después de deformada aquélla, 'la
torsión no se conoce más que para unos pocos casos en los que la sección proyección del borde del orificio sobre. un plano horizontal, tiene igual
recta es de forma sencilla. Es por ello muy importante, de cara, a las apli-
caciones prácticas, disponer de métodos de resolución para cualquier tipo
de sección recta. Unos de ellos son los métodos numéricos basados en las
ecuaciones en diferencias finitas, que son explicados en el apéndice, y otro
el método experimental de la película de jabón 1 ,. análogo al empleado para
la resolución de los problemas de torsión (véase la pág. 327). Para deducir
las fórmulas correspondientes a este método emplearemos las ecuaciones
(171), (172) Y (173) (véase el § 106). Tomando:
V P1¡2
f(y)- = -------!-
2(1 + v) 1
la ecuación de la función de tensión (172), es:
02.p éJ2cp.
{):¡;2 + éJ y2 = O (a)
Fro. 196a
que es la misma que la correspondiente a una membrana uniformemente
estirada y sin carga (véase la pág. 308). La condición de contorno (173)
se transforma en:
oc/> _. [P:r;2 11 py2] dy
¡¡; - 2I - 2(1 + 11) T ds (b)

Integrando a lo largo del contorno s, se obtiene la expreSlon:.

ti> =
P!
T
:¡;2dy
-2- - 2(1
11 Py3
+
ji) 3T + constante (el

que permite obtener el valor de rp para todo punto del contorno. La inte-
gral J(x 2{2)dy, cuando es tomada a lo largo del contorno, se anula ya que
representll el momento de la sección transversal respecto al eje y, el cual
pasa por el baricentro de la misma. La función rp calculada mediante la
expresión (e) está representada a lo largo del contorno por una curva
cerrada.
Supongamos ahorá que la película de jabón es estirada de tal forma
que su borde coincide con dicha curva. La superficie de la película satis-
face entonces la ecuación (a) y la condición de contorno (e) y sus ordenadas
FIC,. 19M
representarán la función ,p, en todo punto de la sección transversal, a la
escala empleada para representar r/J a lo largo del contorno (ecuación (e)].
Lu fotografía 196a ilustra uno de Jos métodos empleados para cons- que el contorno de la sección recta de la viga. La lámina viene fijada
unas clavijas verticales y su posición se ajusta con tuercas y arandelas
J Este método fue señulauo por primera vez por V.ning Meine.", D. 171genieur. pág. 108, que las ordenadas de los puntos del borde del agujero representan,
Holanda, 1911. Independientemente fue desarrollado por A. A. Griffith y G. 1. Taylor, Tech. ~. cierta esc,lla, los valores de cfi dados por la expresión (e). La fotografía
Rept. Nacl. Advisory Comll!. AerOl/nut., vol. 3, pág. 950, 1917-1918, de donde se han tomado
los resultados que aquí damos. 196b ilustra otro.~método para materializar el contornó que hace uso de
378 TEORlA DI! 1.A IlLASTICIDAD FLEXlON DE PIEZAS l'RISMATICAS 379

delgadas láminas de latón recocido l. Las pequeñas correcciones de las tante de todas las tensiones tangenciales distribuidas en la se~ción trans-
ordenadas en los distintos puntos del orificio se obtienen deformándolo versal. Esta resultante deberá ser igual a la fuerza P que actúa sobre el
ligeramente. extremo de la ménsula.
La analogía entre las ecuaciones de la película de jabón y del problema
de la flexión se mantiene rigurosamente, solamente si las deformaciones de ;IC .x x
la membrana son infinitamente pequeñas. Al realizar el ensayo es conve-
niente que el orden de magnitud de las ordenadas de la película no sea
superior a un décimo de la máxima dimensión horizontal. En caso nece-
la
sario el intervalo de variación de función a lo largo del contorno puede
reducirse introduciendo una nueva función ,pI> en lugar de r/J, ligada a
¡
ella por la relación:
r/J = <PI + ax + by (d) 1

donde a y b son constantes.arbitrarias. Puede observarse que la función <PI


satisface también la ecuaciÓn de la membrana (a). Los valores a lo largo
II

del contorno de ifil> deducidos de (e) y (el) son:


I 'C~=n*
¡fi 1 = -PJ2
·.1
~ dy -
2 2(1
'V
+ 'V) 3
p3
...!Y....
.] - ax - by + constante y -l- y
FIG. 197
La reducción del intervalo de variación de ,pI> a lo largo del contorno,
se obtiene por lo general ajustando de forma adecuada las constantes a y b.
Determinada la función <p 1 mediante el método de la película de jabón, Los experimentos realizados muestran que el método de la película de
obtenemos la función r/J a partir de la ecuación (d). Una vez conocida la jabón permite determinar las tensiones con suficiente exactitud. Las figu-
función de tensión <P las componentes de la tensión se obtienen aplicando ras 197 muestran los resultados obtenidos para una sección en 1 1, observán-
las ecuaciones (171) que ahora toman la forma: dose en las. mismas que las hipótesis de la teoría elemental, según las cuales
el alma de una viga en 1 absorbe la mayor parte de la fuerza tangencial,
y las tensiones tangenciales son constantes a través del ancho del alma,
(e) son completamente confirmadas. La máxima tensión tangencial en el plano
neutro, concuerda muy bien con la calculada aplicando la teoría elemental.
La componente 7:". es prácticamente nula en el alma, alcanzando el valor
máximo en el ángulo entrante. Ese valor depende dcl radio de la curva
Las componentes de la tensión pueden scr calculadas ahora fácilmente
de transición de dicho ángulo. Para las proporciones tomadas en este
en cada uno de los pUntos de la sección transversal siempre que se conozcan
ejemplo, llega a ser tan s6lo la mitad del valor máximo de 7:". en el plano
los valores de las derivadas o"'fax y oififoy en ese punto. Estas derivadas
vienen dadas por las pendientes de la película de jabón según las direc- neutro. En las figuras han sido trazadas las curvas de igual tensión tan-
·ciones x e y. Para determinar tales pendientes procedemos, como en el gencial y se indica el valor de la relación entre estas componentes y la
caso de los problemas de torsión, trazando en primer lugar las curvas de tensión tangencial media PjA. La concentración de tensiones en el ángulo
nivel de la superficic de la película. Una vez trazadas esas curvas, las pen- entrante ha sido estudiada para el caso de una viga en T. El radío de la
dientes se obtienen dibujando rectas paralelas a los ejes coordenados y curva de transición fue aumentando gradualmente y las curvas de nivel
construyendo llls curvas que representan las secciones correspondientes fueron tr¡¡zadas en cada caso. De esta forma se observó que la tensión
de la pellcula de jabón. Las pendientes así obtenidas son introducidas en máxima en el ángulo se hace igual a la tensión máxima del alma cuando
las expresiones (e) de las componentes de la tensión tangencial. La exac- el radio de la curva de transición es aproximadamente 1/16 dei espesor
titud de este procedimiento, puede ser comprobada calculando la resul- del alma.

1 Véase el trabajo de P. A. Cushman, TTam', A.S.M.E., 1932. 1 Por la simetria del problema basta con conSIderar una cuarta parte de ·In sección.
380 TEORIA DE LA ELASTICIDAD FI.IllUON DE I'IIl'.lAS I'RJSMATICAS 381

114. Desplazamientos. Una vez conocidas las componentes de mismo princ'ipio, podernos extender la aplicación de las ecuaciones ante-
la, tensión, los desplazamientos u, v, w, pueden ser calculados de igual riores a otros casos de carga' y a otras condiciones de apoyo de vigas.
forma que en el caso de la flexión simple (véase el § 88). Consideremos Podemos admitir con suficiente ex'actitud que las tensiones en cualqui'er
la curva de deflexión de la pieza en voladizo. Las curvaturas de esta línea sección transversal de la viga, distante de los puntos de aplicación de las
en los planos xz e yz están dadas con suficiente exactitud por los valores de cargas, depende solamente de la magnitud del momento flector y de la
las derivadas B3ufoz· y o·vfoz· para x = y = O. Estas cantidades pueden fuerza cortante en esa sección y que pueden ser calculadas superponiendo
ser calculadas mediante las ecuaciones: las soluciones antes obtenidas para la viga en voladizo.
Si las fuerzas exteriores tienen direcciones distintas de las de los ejes
principales de la sección recta de la viga; aquéllas podrán ser siempre des-
(a) compuestas según las direcciones principales, siendo posible estudiarla
flexión separadamente, en cada uno de los dos planos principales. Las ten-
siones y desplazamientos totales se obtendrán entonces; usando el prin-
cipio de superposición. '
Como puede verse, la fibra axial de la ménsula se deforma en el plano xz, Cerca de los puntos de aplicación de las fuerzas exteriores, se dan
que 'es el phmo en el q'ue' actúan las fuerzas, y la curvatura en cualquier irregularidades en la distribución tensional que ya han sido estudiadas para
punto es proporcional al momento flector en ese punto tal como se supone el caso de una sección rectangular estrecha (véase el § 36). Un estudio
en la teoría elemental de la flexión. Integrando la primera de las ecuaci()- análogo para secciones transversales de otras formas, muestra que estas
nes (a) resulta: irrt:gularidades tienen carácter ¡ocaP,
P[Z2 P Z3 El problema de la flexión producida por cargas repartidas ha sido tam-
U = 2EI - fiNl + cz + d (b) bién resuelto para ciertos casos 2 • Se ha demostrado que en tales casos
el eje de la pieza sufre, por lo g~neral, un alargamiento o un acortamiento
donde e y d son constantes de integración que deben ser determinadas corno en el caso de piezas de sección rectangular estrecha (véase el § 21)
con arreglo a las condiciones del extremo fijo de la pieza. Si la extremidad ya estudiado. La curvatura de la fibra axial en estos casos deja de ser
de la fibra axial está empotrada, u y dufdz serán nulas para z = O Y las proporcional al momento flector, pero las correcciones a aplicar s()n lo
constantes e y d de la ecuación (b) serán entonces cero. ~uficientemente pequeñas como para poder ser despreciadas en los casos
Las secciones transversales de la viga no permanecen planas sino que prácticos. En el caso, por ejemplo, de una viga circular flectada por su
se alabean como consecuencia de la acción de las tensiones tangenciales. propio peso 3, la curvatura del extremo fijo viene dada por la ecuación:
El ángulo formado por la curva de de±1exión y un elemento de la superficie
de la sección alabeada es:

en la que a es el radio de la sección transversal y lla longitud de la pieza.


El segundo término del corchete representa la corrección de la curvatura
y puede calcularse, si se conocen las tensiones tangenciales en el baricentro. que nace de la repetición de la carga. Su valor, pequeño, es del orden
de a 2[f. Esta misma conclusión se aplica también a vigas, con otras for-
115. Otros estudios sobre la flexión. En los párrafos precedentes mas de sección, flectadas por su propio peso 4.
hemos estudiado el problema de la flexión de una pieza en voladizo, carga-
da en su extremo libre por una fuerza transversal. Las soluciones obtenidas
son las exactas, si las fuerzas exteriores se distribuyen sobre las secciones 1 Véase L. Pochhammer, Untersuchungetl über das Gleichgewicht des e/asticlzeti Stl/bes,
Kiol, 1879. Véase también el trabajo de ]. Dougall, Trans. Roy. Soc, (Edinbttrgh), vol. 49.
rectas extremas de la misma manera que las tensiones [I"" '", .. 'YZ> obteni. pág, 895, 1914.
das en la solución. De no cumplirse esa exigencia, la distribución tensional 'J. H. Michell, Qllart, J. Math., vol. 32, 1901; véase tambIén K. Pearson, ibld., vol. 24,
presentará irregularidades locales en las proximidades de los extremos de 1889 Y K. Pearson y L, N"G. Filan, ibld., vol. 31, 1900. '
I Este problema es estudIado por A. E. H, Love, Malh"",atical Theory 01 Elasticity, 4."
la viga, pero según el principio de Saint-Venant a suficiente distan,cia ediCIón, pág. 362, 1927.
de los extremos, a distancias superiores a las dimensiones de la sección 1 El caso de una ménsula de sección transversal elíptica ha sido estudiado por J. M. Klit-

transversal, nuestras soluciones son suficientemente exactas. Usando el chierf, Bull. Po/ytec", 'b.st., San Petersbur¡;lo, pág. 441, 1915.
D1STRffiUCION TENSIONAL SIMETRICA 38:;

Distribución tensional
(179)
resp
en un sólido de r

que la función de tensión <p, satisfaga a la ecuación:

(180)

símbolo I 2 indica la operación

(a)
116. Ecuaciones generales. Muchos problemas de importanci~
práctica se refieren a cuerpos de revolución, que son deformados simétri- corresponde al operador de Laplace
camente respecto al eje. Los ejemplos más sencillos son los del cilindró
circular sometido a U11a presión interior y exterior uniformes y el del
a 2 a 2 ¡J2
disco circular giratorio (véase los §§ 26 y 30). Para resolver problemas
u:r.· 2 + aif + 0;;2
de este tipo suele ser conveniente utilizar coordenadas cilíndricas [véanse coordenadas cartesianas [véase la ecuación (d), pág. 82). Es de advertir
las ecuaciones (170), pág. 344]. Siendo la deformación simétrica respecto la f~nción rft no depende de.~, de forma que el tercer término de (a)
al eje z, se deduce que las componentes de la tensión serán independientes tara nulo cuando la operaclOn es aplicada a ,p.
de) ángulo 0, anulándose, pues, todas las derivadas respecto a esta variable. Pasemos ahora las ec~aci0x:es de compatibilidad (130) (véase la pá-
Las componentes de la tensión tangencial 'rrO Y 're. se anulan igualmente 2.67) a coordenadas cIlíndricas. Llamando e al ángulo formado por r
.1 causa de la simetría del problema. Las ecuaciones (170) se reducen
. el eje x tendremos [ecuación (13)J:
entonces a:
JJO"r+~:!... +~ =0 (f", = (f, cos~ (J + O"osenz (} (b)
ar uZ T
(177) 0"" = (frsen2 (} + cos (J
0"0
2

é)'T r, + aO", +'T" = O


. no intervienen (fz ni '1: r ••
éJr iJz r
Por lo tanto:
Las componentes de la deformación, para el caso de deformación
trica respecto al eje, serán, según (169):
o
v·O'''' =
(a'ara + r1 ai.iJ +;3I aB'a + az'éJ2) 2
«(f, ('os' 6 + ero se~2 (J)
iÚi, aW (178)
E,
O·u
= Dr' fO
1!
= r' 'Y,. = ~
Oz
+-
Br

Una vez más, resulta ventajoso introducir una función de tensión <p. Como 2 .
puede verificarse por sustitución, las ecuaciones (177) quedan satisfechas . - j:2 COS 28(0', - 0'0) (e)
si tomarnos como componentes de la tensión las:
384 TEORIA DE LA ELASTICIDAD DlSTlllBUCION TENSIONAL SIMETRICA 385

Usando el símbolo e para la suma de las tres componentes normales de y considerando la cuarta ecuación del grupo citado se llega al mismo resul-
la tensión y aplicando la ecuación (h) de In página 82, resulta, que para tado. En lo que se refiere a la última ecuación· de (130),· puede ser expre-
una distribución simétrica de tensión: sada en coordenadas cilíndricas, sustituyendo:

¿¡26 ,pe . ae sen2 (J T:tj/ = l(<fr - (Tu) sen20


-=--o os-O+--- (el)
é.lx2 é1r 2 a,. r esta forma, obtenemos:
Sustituyendo (e) y (d) en la primera de las ecuaciones (130), obtenemos:
(J + JI)V2 [-21 (O'r - (Tu) sen20] + ~en20 (0éJr _1:l' 2.)
2
O=O
a 6] cos or
2 2

-a + -r1 -al'(J + ilz-(


2 2 2
) 2 (r1'r - 0'0) 1 -;.-.
+ 1 +- 2
[(
_ ¡Jr 2 2
r1r - -;;
¡-' JI vr-
f}
ecuación, que resulta inmediatamente, si se resta una de las ecuaciones (e)
de la otra. Las ecuaciones de compatibilidad (130) para el caso de una
+ [(-orZ + -r1-or 2 1 -"lae] sen-" a = o
2
02 ¿¡
+ -ilz( z) <rq + 2 (<rr
T
.- IIq) + 1-+-
JI r vI'. deformación simétrica respecto a un eje, expresadas en coordenadas cilín-
dricas, serán, pues:
ecuación que es válida para cualquier valor de (j, por lo que:

(C') (g)
a2 1 a 82 ) 2 1 1 ae _
( 81'2 + T ar + éJz2
I

lIs +;:a ClTr - <re) T 1 + JI:¡: éJr - ()

Se llega al mismo resultado considerando la segunda de las ecuaciones (130),


de manera que las ecuaciones (e) sustituirán a las dos primeras de (130) para Puede demostrarse que todas estas ecuaciones son satisfechas por las
el caso de una deformación simétrica. La tercera ecuación (130) conserva (179), cuando la función de tensión satisface la ecuación (180).
la misma forma en coordenadas cilíndricas.
Consideremos ahora las tres ecuaciones restantes del sistema (130), que
contienen las componentes de la tensión tangencial. En el caso de defor-
mación simétrica, sólo 7: TZ es distinta de cero y las componentes 7::.. y T y .,
que actúan sobre un plano perpendicular al eje !J, se obtienen descom-
poniendo 'rz según sus dos componentes paralelas a los ejes x e y:

T .. = T r:: COS O, T~z = T .. sen O


''''o. 198
Tenemos, además: ..
Vemos pues, que el estudio de los problemas referentes a distribuciones
a2e ¿pe tensionales simétricas respecto al eje, se reduce en cada caso particular
ax ilz = ()r oZ cos O
·a la obtención de la solución de la ecuación· (180), que satisfaga las con-
diciones de contorno del problema'.
V2r.., = V2(r.. COS e) = (V2r" - T;;) COl! O
, E.t~ método. mediante el cuol se expresan todas las ~omponentes de la tensión ~n función
única función de tensión que satisruce la ecuación (180), c., explicado con detalle po,· A. E. H.
Sustituyendo en la quinta ecuación del grupo (130), resulta: Matlll",ratical Theory of Elast;city. 4." edición. pág. 274, 1927. Otro método para tratar
:" .<_."__ ._._ •••• _. mediante unn funci6n de tensión. ha sido dado por ]. H. Michell. PTOC. Lalldo"

31, 144. 1900. La relación que existe entre Ja f'.lOción de tensión de los
oroblelnas bidlirncnsion.les y la estudiada en este capítulo ha sido considernda por C. Weber.
(f) angew. Math. Mech:, .. vol. 5, 1925. .
386 nORIA DE LA El.ASTlCIDAD
DISTRIBUCION 'l'ENSIqNAl. SIMETRICI\ 387
En algunos casos resulta útil expresar la ecuación (180) en coordena- Sustituyendo en (h) resulta:
das polares R y 1fI (fig. 198), en lugar de las coordenadas cilíndricas T y z.
, él 2 'l'. éJ'l'n
Esta transformación puede realizarse fácilmente empleando las fórmulas (1 - x-) - 8x2 - 2a' -a'
,¡;,
, + n(n + 1)'I',. = o (183)
dd § 25, las cuales nos dan:
ecuación que resolveremos por medio de una sede l . Suponiendo que:
él' o' {Jz 1 él 1 {J2
ar 2 + éJz' = aR2 + R aR + RO a,f¡2 ..¡r. = a1X'"' + a.xm, + a3X'" + (e)
.!.r ~ = _,_1 _._ (.3.- sen'" + cos y, .!.) = ..!..3.- + ~g tJ¡ .!. y sustituyendo en (183), tendremos:
or R sen y, oR R a", R aR R~ ay,
n(n + l)(a¡x"" + azz + a~x'" + ...) = 7n¡(ml + l)a¡x
m
, m,

Sustituyendo en la ecuación (180), se obtiene: , -mI(m¡ - l)a¡x""-z + mz(mz + 1)a2x'" - mz(mz - 1)azz",,-2
+ . " (d)
éJ2
( aRo
2 (J 1 a
+ R oR + R2 ctg '" o'" + R2 a",'
1 a.) (a'aRo
e/> + R2 aR
acf> ',Para que esta ecuación sea satisfecha por cualquier valor de x deben darse
.. las siguientes relaciones entre los exponentes mlt m 3 , mJ, '
1 - a</> lO'</»
+ R2 ctg.p atJ¡ + R2 éJy,' = o (181) m2 = mI - 2, ma = mz - 2,

En los párrafos siguientes, haremos uso de esta ecuación con el fin de relaciones, de las que se sigue, que la serie (e) viene ordenada-según 'las
estudiar diversos problemas particulares con simetría axial. ,potencias decrecientes de z. El valor de mI será ahora determinado igualan-
Podemos resolver estos problemas de otra forma considerando explí- i;!o los coeficientes de x ml en (d). Tenemos entonces:
citamente los desplazamientos. Las ecuaciones (178) permiten expresar las n(n + 1) - ml(ml + 1) = (n - ml)(m¡ + n + 1), = O
componentes de la tensión en función de los desplazamientos 'U y w. Susti-
'que nos da para m" las dos soluciones:
tuyendo estas funciones en (177), obtenemos dos ecuaciones en derivadas
parciales de segundo orden que contienen a u y w. El problema se reduce, mI = -en + 1) (e)
entonces, a la resolución de esas dos ecuaciones. ellas, se tendrá:
mz=n-2, ma = n - 4,
117. Soluciones polinólllicas. Consideremos las soluciones de la
ecuación (181), que al mismo tiempo lo son de la ecuación: coeficientes Gz, a3, ... , que figuran en (d), se obtienen igualando a
los coeficientes de cada un~ de las potencias de x. Tomando, por
, los términos que contienen .x m1 -2 + 2, encontramos para el
del coeficiente () la ecuación:

Una solución particular de esta última ecuación puede tomar la forma:


, n(n + llar == (m¡ - 2r + 2) (mI - 2r + 3)ar
- (mI - 2r + 4)(mI - 2r + 3)ar_l
(a) sustituyendo m, por n nos da:

en la que IJIn es furiCión del ángulo 'P solamente. Sustituyendo (a) en la a = _ (n - 2r + 4)(n - 2r 8) +
ecuación (182), obtenemos la siguiente ecuación diferencial ordinaria: r 2(r +
1)(2n _ 2r 3) a,.....l
serie (e) tomará, ahora, la forma:
-1- - él ~sen f a'l'o)
----- + n(n + l)w" ,= " O (b)
sen f ay, af "~~. _ [.. n(n - 1) .-2
,:"" - al x - 2(2n _ 1) x
ecuación que puede simplificarse introduciendo una nueva
x = cos 'IjI. Entonces: " . + n(n - l)(n - 2)(n - 3) X,,-4 - • •• ] (J)
2 . 4(2n - 1)(2n - 3) ,
~,= -éJw" senf , " Conocida como ecuaeió" d. Legendrc. Un estudio derJllado de la misma puede verse
a", élx 1
'A. R. Forsyth, A Treati,e on Differelltial Equatians, púg. 155, 1903.
388 TEORIA DE LA. ELASTICIDAD DlSTRIBUCION TENSIONAL SIP,1ETRICA 389

expresión que constituye una solución de la ecuación (183). Sustituyendo Sustituyendo en las ecuaciones (179), resulta:
esta solución en (a) y recordando que:
u, = 6a a + (10" - 2)b a, . uq = Ga a +
(1011 - 2)b 3
(186)
:t = COS "', Ex = Z, R = v'r2 + Z2 IT. = -12aa + (14 - IOII)b a, . T,z; = O

se tendrá para 11 igual a O. 1, 2, 3, ... , las siguientes soluciones polinómicas expresiones que muestran que las componentes de la tensión son constantes
particulares de la ecuación (182): . en la placa. Ajustando convenientemente las constantes a3 y "3, obtendre-
mos las tensiones en una placa, cuando se nos da alguno de los valores
4>o=Ao constantes de a. y u,.
4>1 = A¡z Tomemos ahora los polinomios de cuarto grado de (184) y (185), los
4>~ = A 2(Z2 - }(rll + Z2)) . cuales nos dan la función de tensión:
4>. = A.(Z3 - fz(r 2 +.Z2)] (184)
4>. = A4[Z~ -_ ~z2(r2 + Z2) + -¡¡\-(r 2 + Z2)2) <b = a,(8z' - 241'2z 2 3r 4) +
b4 (2z 4 + rZz z - r 4) +
(b)
4>6 = Aó(Z5 _1j-z 3(r 2 + Z2) + -.Az(r2 + Z2)2] . ·Sustituycndo en (179), obtendremos:
••• , , • o", •• •••• I .......... .

Estos polinomios en los que ~, Al, ... , son constantes arbitrarias, son
también ¡;oluciones de la ecuación (181). De estas soluciones podemos
.0',
.0'.
= 96a(z + 4b.(14" -
= -192a.z +
4b.(16 - 1411)z
= 96a~r - 2b 4 (16 - 1411)r
l)z
(187)! 1t ¡1
lo~ II i1' r

obtener otras nuevas, de la ecuación (181), que no lo son de la (182). a---l


;¡:
Si R" '1'" es una solución de la ecuación (182), puede demostrarse que
R" + Z '1',. lo es de la (181). Efectuando la operación indicada entre parén- FIG. 199

tesis en (181), se tendrá:


z
a2
( aE2 + Ji2 aRa + E21 ctg .1. a",() + E21 oa,p2)
'1'
Rn+2iJ.t
"
q. = r,." = O, ur = 28(1 + JI)b.¡.Z (e)
= 2(2n + 3)RniJ.t" (g) z es la di~tancia contada desde el plano medio de la plac·a, la solución (e)
:¡'Í>,nr"~f",t" un estado de flexión simple de la misma, causado por la acción
Si, como indica la ecuación (181), repetimos la misma operación, obten-
pares uniformemente distribuidos en su contllrno.
d¡'emos cero ya que (g) es solución de (182). En consecuencia, Rn + 2tp",
. Para obtener la solución correspondiente al caso de la placa uniforme-
es una solución de la ecuación (181), Puede verse, también, que multi-
cargada, tomemos como función de tensión un polinomio de sexto
plicando las soluciones (184) por R Z = r Z + z', obtenemos hlS siguientes
Procediendo en la forma indicada en el párrafo precedente, obte-
soluciones nuevas:
4>2 = B 2(r ll + ;:::2)
4>3 = BzZ(r~ + 22) '" = ta6(16z~ - 120z4r 2 + 90z r· 2
- 5r 6 )
"'4 = B 4(2z Z - r Z)(1 Z + Z2) (185) + b~(8z6 - 16z4r 2 - 212 21'" + 3r O)

4>ó = B s(2z 3 - 3r2;:::) (1'2 + ZZ) sustituyendo en (179) nos da:

<1', = a6(320z 3 - 720r"z) + ba[64(2 +


llv)z8 + (504 - 48 - 22v)r 2zJ
118. Flexión de una placa circular. Entre los diversos proble- <1'. = aG( -640z 3 + 960r z)2 +
baH -960 +
32 . 22(2 - p»)Z3
ma::; de in terés práctico que pueden ser resueltos mediante las soluciones +
[384 - 48 . 22(2 - 1I))rZz}
anteriormente expresadas, se encuentran algunos casos de placas circula- T r= = as(960rz 2 - 240r 3)
res, flectadas por cargas simétricamente aplicadas (fig. 199). Tomando, . + b~[(-672 +
48 - 22,,)z 2r +
(432 - 12 -2211)r;)
por ejemplo, los polinomios de tercer grado de (184) y (185), obtenemos
la función de tensión . estas tensiones deberemos añadir las:
(a) IT, = -19Za.z, rr. = 96a~r
390 TEORIA DE LA ELASTICIDAD D1STRIBucrON TENSIONAL SlMETRICA 391

obtenidas haciendo b4 = O en (187), as! como una tracción uniforme de La teoría elemental de la flexión de placas, basada en la suposiclOn
dirección Z, 11. = b, que puede obtenerse de las fórmulas (186). Llegamos de que los elementos lineales de la placa perpendiculares al plano medio
de 'esta forma a unas expresiones de las componentes de la tensión, que (z = O), se conservan rectos y normáles a.1a superficie deformada de dicha
contienen cuatro constantes aG, ba, a., b, que pueden ser evaluadas, de placa', da el siguiente valor para la tensión radial en el centro:
forma tal, que queden satisfechas las condiciones de contorno en las caras
superior e inferior de la placa (fig. 199). Estas condiciones son:
u. =
3(3 + v) -es
32
a2z
q (g)
11" =0 para Z =o
11. = -q para z = -o Comparando este resultado con (j), vemos que los términos adicionules
(d) le la solución exacta, son pequeños si el espeso, de la placa, 2e es pequeño
1",. = O para z=o
1",. = O para Z =-0 comparado con el radio a.
Es de advertir que la superposición de una flexión simple eliminará
donde q representa la intensidad de la carga unifonne y 2c es el espesor los momentos flectores aplicados en el contorno de la placa, pero no las
de la placa. Sustituyendo las expresiones de las componentes de la ten- , tensiones radiales en ese mismo contorno cuyo valor es:
sión en estas ecuaciones, determinamos las cuatro constantes a o, bG, a4, ·b·.
Usando los valores obtenidos, llegamos a las siguientes expresiones para +v
2 Z3 32
(11.) ...... = q ( - - -3 - - - - -
+ vz) (h)
las componentes ele la tensión, que satisfacen las condiciones (d): 8 c 8 5 e

La resultante de estas tensiones por unidad de longitud de la periferia


. y su momento son, sin embargo, cero. Basándonos, pues, en el principio
" de Saint-Venant, podremos decir que la supresión de estas tensiones no
(e) altera la distribución tensional en los puntos distantes del borde.
Tomando polinomios de orden superior al sexto para la función de
tensión, podemos estudiar la flexión de placas circulares provocada por
cargas distribuidas de manera no uniforme. Si en lugar de la solución (j)
de la página 387, tomásemos la otra solución de la ecuación (182), podría-
- Se verá que las tensiones a. y 1." ro, se distribuyen de forma exactamente
mos .obtener también las soluciones correspondientes a una placa circular
igual que en el caso de una viga rectangular estrecha uniformemente
.con un agujero en el centro 2. Todas estas soluciones son satisfactorias,
cargada (§ 21). Las tensiones radiales a" vienen representadas por una
función impar de z y originan en el contorno de la placa momentos unifor- 'solamente si las flechas que alcanza la placa son pequeñas comparadas
: con su espesor. Para muyores deformaciones, deberá tenerse en cuenta
memente distribuidos. Para obtener la solución en el caso de una placa
simplemente apoyada (fig. 199). superponemos la tensión de flexión sim- . la extensión que sufre el plano medío de la placa a .
ple (e) y determinamos la constante b4 , de forma tal que en el contorno
119. Caso del disco giratorio considerado como problema tridimen-
(r = a): . sional. En nuestro estudio anterior, (§ 30), hemos supuesto que las tensiones
no variaban a través del espesor del disco. Consideremos ahora, el mismo problemn,
suponiendo solamente que la distribución tensional es simétrica respecto al eje de
rotación. Las ecuaciones diferenciales de equilibrio se obtienen añadiendo, en las
La expresión final de a" resulta: ecuaciones (177), la fuerza centrífuga.

(T = [2 + v~ _ 3(3 + v) r z _
2
~2 + JI =+ 3(3 + p) a2z] (188) I Esta hipótesis es análoga a la de conservación de las secciones transversales pliIl1., de
r g 8 el 32 c3 8 5 o 32 c3 la teoría de la flexión de. vigas. La teoría exacta de la flexiÓn de placos fue desanolloda por
J. M. Michcll, Proc. London Malh. Soc., vol. 31,1900 Y A. E. H. Lave, Mathematical Theo,y
que para el centro de la placa nos da el valor: .0J Elusticily, 4.' edición, pág. 465, 1927.
J A. Korobov, Bull. Polytech. IlIst. Kiew, 'J913, ha estudl2dci algunas solUCiones del caso

v~ _ 2 v~
de placa circular cargada uniformemente. Soluciones semej1lI)tes han. sido obtenidos inde-
(IT) = [2 + 'ª- + + 3(3 32+ v) a'.i.e3z ] (1) pendientemente por A. Tlmpe, Z. a1lgew. Mallz. Meeh., vol. 4, 1924.
••_0. q 8 e3 8 5 e , Véase Kelvlfl y Tait, Natural P/¡ilosophy, vol. 2, pág. 171, 1903.
392 'l'EORIA DE LA ELASTICIDAD DlSTRIBUCION ,'l'ENSIONAL SlMETRICA 393

Entonces En el caso de un disco circular, de ~spesor constante, añadimos a la solución (190)


iJlT.
iJr
+ UTiJz.. + ~ r
+ P.,2r = O la distribución de tensiones, correspondientes a una función de tensión que tenga
(189) la forma de un polinomio de quinto grado [véanse las ecuaciones (184) y (185)].
iJT.. + alT. + !!! = O
ar élz r <1> == a,(8z' - 40r'z' +157',,) + b',(2z' - r'z' - 3r1z) (d)

dónde e es la densidllu y IJJ !a velocidad angular del disco. De las ecuaciones (179) deducimos
Las ecuaciones de compatibilidad, deben ser cambiadas también. En lugar del
sistema (130), tendremos tres ecuaciones del tipo (j) (véase la !níg. 267) y tres del rT. "" -a,(lSOr' - 240.') + b.[(36 - 54,,)r a + (1 + 18..)6"J
tipo (g). Sustituyendll en estas ecuaciones las componentes de la fuerzn másica tT. = -a.( -240r' + 4802') +
b.[(96 - 1081').2 + (-102 + 54.)r']
(e)
tl8 = as( -60r' + 240,,') + M(6 + lOS.)z' + (12 - 54 ..)r']
y = p""y, z=O (a) T~. = 480a,r. - b,(96 - 10S,,)r.
obtenemos, que las últimas tres ecuaciones que contienen las componentes tangen- .\,i.I<.!Jendo estas tensiones a las (190) y determinando las constantes a, y b" bajo
ciales de la tensión, son las mismas que las del sistema (130) y que las tres primeras la condición de que las tensiones resultnntes T .. y u% desaparezcan, encontramos:
se convierten en [véase las ecuaciones (e), § 116]
• [v(1 + v) ,+ -8-
a +" r.]
V'rT. _ ~ (IT. _ 1T8) + _1_ a'e = 2p",z tT, = -po> 2(1 _ .)"
r' 1 +" iJr' - r=-;. (f)
_ ,[(1+3p) ,+v(l+v).]
2 1 1 ae 2p",' rT~ - -POI --8-- r 2(1 _ ..) a
V'rTO + ;:0("" - 1T0) + 1 + ¡Ir é)r = - r=-; (b)

V'a. + _1_ a'e = _ 2vpOl' Para eliminar la compreSlOn radial resultante que actúa .a lo largo del contorno,
1+.8z' 1-. es decir, para que

Comenzamos con una sc¡,lución particular de las ecuaciones (189), que satisface las
condiciones de compatibilidad y le superponemos soluciones de la forma polinómi-
(f ardz)
C
-e r.-a
= O

ca (184) y (185), cuyos coeficientes determinarnos de manera que. queden satisfechas


las condiciones de contorno del problema. Como solución particular, tomamos las añadimos a (f) una tracción radial, uniforme, de magnitud
expresiones
POI' (3 + v)a ,+ p'" •2(1
,,(1 + v2 ~
rT, = Brt + D•• , 118 = Gr' D.', +
1',., =0 (e) S - v) 3

que como se ye sati~facen a la segunda de las ecuaciones de equilibrio, cumpliendo Las tensiones finales, por tanto, serán
asimismo las condiciones de compatibilidad que contienen las componentes de la
tensión tangencial [véanse las ecuaciones (j) y (g), § 116J. Falta ahora detenninar crr = p",' [ 3-+-v (a' - r') + 6(1 + v) (c' -3z') ]
-.(1---
p

las constantes A, B, e, D, de forma tal que satisfagan las restantes cuatro ecuacio- 8 - v)
,(191)
nes, es decir, la primera de las (189) y las (b). Sustituyendo (e) en estos ecuaciones, 3 v
ITq = pOlO [ - - a' -
+ 1 + 3,. .. (1 + ,,)
- - /" + - - - (e' - 3z')
]
obtenemos S 8 6(1 - v)
rr~ =O
A = pw'{l + 3~) G = 0, D-
pOl'(l + 2,,)(1 + .)
6" ' 6 .. (1 - .) Si se compaTa esta última con In solución (SS), vemos que en la solución actual
existen términos adicionales que contienen al factor' (e" - 3z'). Las tensiones co-
La soh¡ción particular resulta entonces: rrespondientes son pequeñas para el caso de un disco delgado y su resultante es
cero en su espesor. Si la superficie cilfndrica limitantc de la rodaja estuviese libre
_ _ p"" , _ pOl'(l + 2.)(1 + ,,) • de fuerzllS exteriores, lo solución (191) representa el estado de tensión en las partes
IT, - 3 r 6v(l ..) z del disco distantes de su borde.
pOl'(l + 3.) , La distribución tensional en un disco giratorio que tenga la fonna de un elip-
cr. == 6" r (190) soide de revolución achatado, ha sido estudiada por C. Chree 2 •
. pw'(1+2u)(l+.).
1T8 = - 6.(1 _ .) Z
, F.stos ténninos son d<· igual narurale"" que los en z' encontrados en el § 84. Las ecu.lClO-
Tu = O neo (191) representan un estado tensional plano, puesto que a, Y'''''' se anulan. La fuerza m,i-
sica (la fuerza centrífuga aqui), no incluida en el § 84, no altera las conclusiones generales,
Esta solUCión, puede ser utilizada al estudiar las tensiones existen tes en cualquier siempre que sea Independiente de z. ' .
cuerpo que gira alrededor de su eje de revolución. • C. Chrcc, Proc, ~oy. Soco (L01ldon), vol. 58; pág. 39, 1895.' '
394 TEORIA DE LA ELASTICIDAD D1STR1BUCION TENSIONAL SIMETRICA 395

120. Sólido, de extensión indefinida 'cargado en uno de sus necesidad de considerar tensiones infinitas, suponemos que el origen es
puntos. Al estudiar este problem¡lj usumos de nuevo la ecuación (182) el centro de una pequeija cavidad esférica (fig. 200) y consideramos, que
de la página 386. Tomando m¡ = -en +
1) [véase la ecuación (e), pá- la superficie de esa cavidad está sometida a fuerzas calculadas con arreglo
gina 387J, obtenemos la segunda integral de la ecuación (183) bajo forma a las ecuaciones (194-). Puede demostrar~e, que la resultante de estas fuerzas
de la serie

'1! = n [X-(II+1) + (n + l)(n + 2) ~-(II+3)


" ... 2(2710 + 3) h

(710 + 1)(10 t~0__+ 3)(710 + 4) -(n+6) + .]


+ 2 . 4 . (2710 + 3) (2710 + 5) x
Haciendo n igual a --1, -- 2, -·3, ... , resulta de esta última, las siguientes'
soluciones particulares de la ecuación (182)

q,l = AI(T! + Z2)-t


"'2 = A Z(1'2 + Z2)-¡
t (192) z
"'3 = A3[z2(r 2 + Z2)-¡ - tcr 2 + z2)-i] Fra. 200

que también son soluciones de la ecuación (18"1). Multiplicando las expre- representa una fuerza aplicada en el origen con la dirección del eje de
siones (192) por 7 2 + Z2 (véase la pág. 388), obtenemos otra serie de solu- las z. De la condición de equilibrio de un elemento anular adyacente a la
ciones de la ecuación (181), a saber, cavidad (fig. 200), se deduce que la componente de las fuerzas superfi-
ciales según la dirección z es
<Pl = Bl(r 2 + z2)1
<P2 = fl zz(r 2 + z2)-1 (193) z = -(7,., sen'" + 0'. cos if¡)

:u sando las ecuaciones (194-) Y las fórmulas


Cada una de las soluciones (192) y (193) Y cualquier combinación lineal
de ellas, puede ser tomada como función de tensión, obteniéndose la solu-
sent/t = 1'(1.2 + z2)-i,
ción de diversos problemas, mediante una elección conveniente de las obtenemos que
constantes A¡, A 2 , ... , BIJ B a, ...
Para el caso de Una fuerza concentrada, tomamos la primera de las Z= B[(1 - 2v)(r2 + Z2)-1 + 3z 2(r2 + Z2)-2]
soluciones (193) y suponemos que la función de tensión es . La resultante de estas fuerzas, aplicadas sobre la superficie de la cavidad, es
. '"
2 Ia'i. Z vr +2 Z2 • d~ ·21I1' = 8B'7r(1 - JI)
donde B es una cOJist:mte a determinllr. Sustituyendo en (179), deduci-
mos las correspondientes componentes de la tensión . siendo nula la resultante de las fuerzas superficiales según la dirección
. radial, como se deduce por razones de simetría. Si P es el valor de la fuerza
CF. = B[(l - + +
2v)z(r 2 Z2}:..¡ - 31' 2z(I·2 z2)-I] . aplicada, tendremos
CFo = B(1 - +
2v)z(r2 z2)-3 (194)
CF. = -B[(1 - 2v)z(r 2 +
z2)-1 +
3:>.3(1'2 +
z2)-1] P = 8B'7r(J - /1)
rrz = -E[(l - 2v)r(r 2 +
Z2)-¡ + +
3rz 2(r 2 z~)-I] Sustituyendo

Todas estas tensiones tienden a infinito cuando nos acercamos al origen B = P (195)
de coordenadas, donde la fuerza concentrada está aplicada. Para evitar la 87r(1 - /1)
396 'rEORIA DE LA ELASTICIDAD DlSTIUBUCION TENSIONAL SIMETRICA 397

en las ecuaciones (194), obtcnerrios las tensiones producida~ por una fuer- - U + (offaz)d]. Superponiendo las tensiones producidas por las dos fuer-
za P aplicada en el odgen según la dirección z l. Esta solución es la análoga zas y representando mediante el símbolo A el producto Bd, resulta
tridimensional del problema bidimensional estudiado en el § 38," a
Sustituyendo z = O en las ecuaciones (194), deducimos que no existen CTr = -A iJz [(1 - 21')z(r 2 + 2"2)-1 .,... 3r2z(r2 + z2)-I]
tensiones normales que actúen sobre el plano coordenado z = O. Las ten- Q
siones tangenciales en el mismo plano son (1"8 = -A az [(1 - 2J1)z(r 2 + Z2)1]
iJ " (196)
B(l - 2v) P(l - 2)1)
1'rz= - - -r-
2 - = - 81T"(l
- ---v)r
-3 (a) 11". = A QZ [(1 - 2v)z(r 2 + z2)-if + 3z 3(r 2 + Z2)-!J
éJ
Estas tensiones son inversamente proporcionales al cuadrado de la dis- 7",.. = A QZ [(1 - 21')r(r2 + z2)-a + 3rz 2(r 2 + z2)-9]
!Dcia T desde el punto en cuestión al de aplicación de la carga,
Consideremos (fig. 201) las componentes de la tensión CfR y T[1'I', que
121. Recipiente esférico sOJlletido a una presión uniforIne actúan en un punto M de una superficie de área elemental normal al
interior o exterior. Partiendo de la solución del párrafo precedente y radio 01'VI, cuya longitud designaremos por R. De la condición de equi-
por superposición, podemos obtener nuevas soluciones de interés práctico, librio de un pequeño elemento triangular, tal como el indicado en la figura,
Comencemos con el caso de dos fuerzas iguales y opuestas, que actúan obtenemos1
sobre un cuerpo elástico de extensión indefinida en puntos separados entre 2
sí la distancia pequeña d (fig. 201). Las tensiones producidas por la fuer- O"R = O"rsen2 '" +
CT, cos '" +
21',.. sen'" cos '"
2 2 (a)
za P, aplicada en el origen O, vienen determinadas por las ecuaciones (194) 1'n.¡, = (O", - 0"=) sen'" cos '" - r,,(sen '" - cos "')

Usando (196) y tomando

obtenemos
2(1 + v)A [ 2(2 - JI) ]
- -¡¿a .-.. - sen2 '" + 1 + V CO:;2",
(b)
2(l + v)A
- [l" sen'" co:; '"

La distribución de estas tensiones es simétrica respecto al eje z y respecto


z; al plano coordenado perpendicular a z.
Imaginemos ahora, que además del sistema de dos fuerzas P que actúan
f'lG. 201
en la dirección del eje z, tenemos, en el origen, un sistema idéntico a lo
largo del eje r y otro según el eje perpendicular al plano rz. En virtud
y (195) del párrafo precedente. Asimismo, haciendo uso de las mismas de la sim"etría señalada, obtendremos una distribución de tensiones simé-
ecuaciones, podemos calcular las tensiones producidas por la fuerza P, trica respecto al origen, que para el caso de una esfera con centro en ese
que actúa en 0\. Recordando que la segunda fuerza es de dirección opuesta punto, dará una distribución de tensiones que consiste simplemente en
a la primera y considerando a la distancia d como infinitamente pequeña, una tensión normal uniforme que actúa sobre la superficie de esa esfem.
lóstérminos 1(r, z) de las expresiones (194), deberán ser remplazados por La magnitud de esta tensión puede ser calculada mediante la prime~a de
las ecuaciones (b). Considerando la tensión que actúa en los puntos del
I La solución ~e este problema fue dada por Lord Kelvin, Cambridge and Dubli7, Math. J.,
1848. Véase tambIén Mathematical und Physical Papers, vol. 1, pág. 37. De esla solución se • Las componentes de In tensión t1u que actúan sobre los lados del elemento en las seccio-
deduce que los desplazamientos correspondientes a las tensiones (194) son unifonnes. lo nes n1eridianas del cuerpo, dan como resultante un infjnitésimo de orden. mayor, que puede
que prueba que (194) es la solución correcta del problema (véase § 82). ser despreciado al dequcir las ecuaciones de equilibrio.
398 TEORIA DE LA ELASTICIDAD D1STRIBUCION TENSIONAI. SIMETRICA 399

círculo contenido en el plano rz, la primera de l!ls ecuaciones (b) nos da Tendremos entonces
:a parte de tensión originada por la fuerza doble a lo largo del eje z. Inter- e = (Pi - po)a 8b3
cambiando sen 1p y cos lfl, obtenemos la tensión normal que produce la a3 - bS
doble fuerza que actúa a lo largo del eje r. La tensión normal, producida D = Pob 3 - p,a B
por la doble fuerza perpendicular al plano TZ, se obtiene haciendo 1J! = n/2 3 (197)
a - b3
en la misma ecuación. Combinando la acción de las tres fuerzas dobles _ PobS (R3 - a3 ) Pia3(b3 - E3)
perpéndiculares, se obtiene la siguiente tensión normal que actúa sobre aH - R3(a3 _ b3) - + R3(a3 _ b3)
la superficie de la esfera,
Las presiones Po y P, producen también en la esfera tensiones normales (f
G'j¡ = (e) de dirección tangencial, cuya magnitud determinamos a partir de la con-
dición de equilibrio de un elemento de esfera, limitado por dos superficies
La combinadón de las tres dobles fuerzas perpendiculares, determina lo esféricas concéntricas de radios R y R + dR Y por un cono circular de
que se llama centro de compresión y la ecuación Ce) nos dice, que la compre- ángulo sólido muy pequeño d'l' (fig. 202). La ecuación de equilibrio es
sión correspondiente segÍln. 111 dirección radial depende solamente de la
distancia al centro de compresión y que es inversamente proporcional al
cubo de esta distancia.
de donde

(e)

Usando la expresióri (197) de cr", resulta

p.a 3 (2R3 + b8 )
(198)
2R3(a 3 - ba)

Si Po .= O; se tendrá

Ba. 202 Como puede verse en estL' caso, la tensión de dirección tangencial máxima
se da en la superficie interior, donde
Esta solución, puede ser empleada para el cálculo de las tensiones en un
recipiente esférico sometido a la acción de una presión uniforme interior
o exterior. Sean a y b los radios interior y exterior de la esfera (fig. 202)
Y p, Y Po las 'presiones uniformes interior y exterior. Añadiendo a la ten-
Todos estos resultados son debidos a Lamé 1•
sión (e) un estado equitensional de tracción o compresión, podemos tomar
la expresión general de la tensión normal radial en la forma, 122. Tensiones locales alrededor de una cavidad esférica. COIlside-
(J
lemos ahora, como segundo ejemplo, la distribución tcnsionaJ existente en torno
G'j¡ = E8 +D (d) a una pequeña cavidad esférica que se encuentra en una barra sometida a una trac-
ción uniforme de valor S (fig. 203) '. En el caso de una bana maciza sometida a
donde e y D SOll constantes cuyo valor se calcula con arreglo a las condi-
, Lamé, Lefons sur fa théorie ... de I'elasticité, Parls, 1852.
ciones en la. superficie interior.y exterior del recipiente, las cuales son , La solución de este problema ba sido dada por R. V. Soutbwell, Phm. Mag., 1926;
véase también J. N. Goodicr, Trans. A.S.M.E., vol. 5S, pág. 39, 1933. La cnvidad elipsoidal
e
bi + D = -p.
es consid~rada por E. Sternberg y M. Sadowsky, J. Applied Mecha71ic$ (Trans. A.S.M.E.J.
vol. 16, pág. 149, 1.?49.
400 TEOIUA DI! LA ELASTICIDAD DISTRIBUCION TBNSIONAL SlME1'RICA 401

tracclóll, las c()mponentes normal y tangencial de la tensión que actúa sobre una Usando ahora las ecuaciones (a) del plÍrrafo anterior, las componentes de la tensión
superficie esférica son que actúan sobre una superficie esférica de radio tl son
~a . ~a
tr" = Seos· 'P, Tn, = -8 sen 'P cos ~' 0"1I
m
-= 7 (-1 + 3 cos" '¡), . T1I"'''' - aa sen'" cos .¡, (e)
Para obtener la solución correspondiente al caso de una pequeña cavidad esférica,
de radio a, debemos superponer a la tracción simple un sistema tensional cuyas t ·.,mbinando los sistemas tensionales (b), (e) y (e), resulta
componen tes sobre la superficie esférica sean iguales y opuestas a las dadas por las
ecuaciones (a) y que en el infinito se anulen. _ UR =
2(1 +
a'
II)A
- 2(5 -
A
11) (i3 cos' .¡,
B
+ 12(;'
(i3 - ~. + 360
(i6 COSO '"
2(1 + ,,)A 240 (f)
"l"l/'¡- = - a' sen'¡' cos '" + (jT sen'¡' cos '"

Añadiendo estas tensiones a las (a), la superficie esférica de la cavidad quedará


libre de fuerzas si se cumplen las condiciones

(o)

de las que se deduce

A 5S B 8(1 - 5v) (h)


ii' "" 2(7 - 5.)' ii' = 7 - 5. '
FIG. 203
La tensión total que actúa en cualquier punto se obtiene ahora superponiendo a la
Tomando del párrafo anterior las tensiolles (h), producidas ~)Qr una doble fuerza tracción simple 8 las tensiones dadas por las ecuaciones (d), las (196), debidas a
de dirección z y las tensiones (e), causadas por un centro de compresión, las ten- la doble fuerza y las que originan el centro de presión que vienen expresadas por las
siolles correspondientes que nctúan sobre la superficie esférica de radio a podrán ecuaciones (e) y (e) del párrafo precedente.
escribirse como sigue: Consideremos, por ejemplo, las tensiones que actúan sobre el plano z = o.
De las condiciones de simetría, se deduce que sobre este plano no actúan tensiones
tangenciales y a partir de las ecuaciones (d), haciendo 1p = 31/2 Y R = r, resulta
, 2(1 + ,,)A ( 5 - p) 2(1 + v)A (1))
O"]l=- a 3 -l+l+"cos·",.,tr.-/=- a sen'¡'cos'¡' 3
,90 9Sa'
'm" = a!!.,
3 rE'¡-" = O (e) ... '" ro '" 2(7 - 5.)r 5 (k)

donde A y B son constantes a determinar. Puede verse, que las tensiones (a) que
Para z = 0, las ecuaciones (196) dan
origina la tracción no pueden ser anuladas combinando las (h) y (e), siendo necesario " A(l - 2.) 5(1 - 211)8 a'
un sistema adicional de tensiones. 0". = r' = 2(7 - 5.) ro (l)
Tomando de las soluciones (192) lIna función de tensión
De la ecuación (e) del párl"afo anterior, t~nemos

", () B S(l - 5.) a'


las correspondientes componentes de la tensión, según (179) serlÍn CI. = 0", '_0 "" ~ 2r' "7' - 2(7 _ 5v)ro (m)

La tensión total sobre el plano z = O, es


O"r = ~~ (1 - 5 eos' '" - 5sen''¡' + 35sen 2 '¡' ~os:.¡,)
5
11",
30
= }(" (3 - 30 cosO '" + 35 cos~'¡') 0". = er. '+ er. JI + er.", -1- 8 - S [1 + 2(7
4 -_ 5. a' + 2(7 -9 511) r>
5j;)ro a ] (n)

30 . (d)
0"0 = ll' (1 - 5 coso .¡,) En r = a telldremos
150 () = 27 - 15" 8 (o)
T,. =W (-3 sen'" cos .¡, + 7 sen.p cosO .¡) er, m'" 2(7 _ 5v)

26 -TOOIIM, 'Dr loA Eu.srJ~IOAD


402 TEORIA DE LA ELASTICIDAD DISTRIBUCION TENSIONAL SIME'l'RICA 403
que haciendo v = 0,3 nos da Para eliminar estas fuerzas y obtener la solución del problema representado
en la figura 204, utilizamos la distribución tensional que corresponde al
ceqtro de compresión (véase pág: 399). En coordenadas polares, esta dis-
La tensión máxima resulta ser, por tanto, el doble de la tracción uniforme S aplicada tribución de tensiones es la .
a la barra. Este aumento de la tensión está muy localizado y. cuando r aumenta,
la tensión (n) se aproxima rápidamente al valor S. Tomando, por ejemplo, r = 2a, A
v = 0,3, resulta u, = 1,054S. O'l< = R3'
De igual forma. para los puntos del plano z = O, resulta
donde A es una constante. En coordenadas cilíndricas (fig. 204), las expre-
("")'_0 _ 30 _ A(l - 2.) _ .!!.. .' siones de las componentes de la tensión son las siguientes:
• r· r' 2r'
Sustituyendo los valores dados por la ecuación (h) y haciendo r = a. obtenemos O"r = O'/lsen!.p + O'¡ cos2 .p = A(r2 - jz2)(r 2 + Z2)-¡
la tensión de tracción que actúa a lo largo del ecuador de la cavidad (", = nJ2).
la cual es
0", = 0'1/ cos 2 t/t + O'tsen2.p = A(Z2 - +
fr 2)(r 2 z2)-1 (199)
15" - 3
T" = t(u/< - 1Ft) sen 2t/t = il:ATZ(r 2 + Z2)-¡
(O' o) a_O, r_4 = 2(7 5v) 8 1 A· 1
0'8 = 0'1 = - 2' R3 = - 2'A(r 2 + z2)-1
En el polo de la cavidad ('1' = O Ó 'JI = n), tenemos
Supongamos ahora que los centros de presión se encuentran distribuidos
CT = (1 = 2(1 - 2v)A _ gq _ Ji. = _ 3 + 15v '8 unifonnemente a lo largo del eje 13, desde z = O hasta z = - CO. Usando
r I a' a6 !k' 2(7 - 5.) . entonces el principio de superposición, las componentes de la tensión
lo que indica que la tracción longitudinal. S, produce una compresión en ese punto. . producidas en un sólido de extensión indefinida, serán, según las ecua-
Si se combina una tracción S según una dirección, con una compresión S en la :ciones (199),
dirección perpendicular, podemos obtener la distribución tensional existente alre-
dedor de una cavidad esférica para el caso en el que la solicitación aplicada es la
de esfuerzo cortante '. Podemos demostrar de esta forma, que la máxima tensión
tangencial vale
rTr = Al" (r 2 - j.Z2) (r 2 + Z2)-t dz
(p) . = i [~ - ~ + z2)-1 - z(r2 + Z2)-1 J
(r 2

Los resultados a los que hemos llegado. pueden tener interés práctico al estudiar
la influencia que sobre la tensión límite de fatiga de probetas sometidas a la acción
0'. = Al" (Z2. - ~ r 2) (r i + z2)-1 dz = ~ z(r 2 + Z2); (200)

Jr"
de tensiones cíclicas, tienen las pequeñas cavidades 2.
3
T.. = 2' A z rz(r2 + z2)-1 dz = A
'2 r(r 2 + z2)-i
123. Fuerza sobre el contorno de un cuerpo sexniindefinido.
Imaginemos que el plano z = O, constituye el contorno de un sólido semi-
indefinido y que una fuerza P actúa sobre este plano 11 lo largo del eje z 0'9 = - -21 A f."• (r i + z2)-iI dz = - - A[l
- -
2 r 2
.:.i (r2
r
+ z2)-1 ]
(fig. 204) 3. Como se ha visto en el § 120, la distribución de tensiones
dada por las ecuaciones (194) y (195). puede ser producida en un cuerpo el plano z = O. encontramos que la tensión normal en el
semiindefinido por)a acción de una fuerza concentrada en el origen y de es nula y que la tensión tangencial vale
fuerzas tangenciales sobre el contorno plarlO z = O, de valor
(Tr.)z-o = i~ (b)
B(l - 211)
7:'t: = - 1"2 (a) ahora que combinando las soluciones (194) y (200) podemos, ajus-
convenientemente las constantes A y B, obtener una distribución
1 Este problema fue estudiado por J. Larmor. Phi/o Mag•• serie S, vol. 33. 1892. V6ase tensiones tal que el plano z = O quede libre de tensiones y que una
también A. E. H. Lave. Math~matica/ Theory 01 E/asticity. 4." edición. pág. 252. 1927. concentrada P actúe en el origen. Las expresiones (a) y (b) indican
2 Tales cavidades se presentan, por ejemplo. en una soldadura. mostrando los ensayos d.
fatiga. que las fisuras se inician por lo general, en esas cavidades. las fuerzas tangenciales sobre el contorno plano, son eliminadas ¡¡i.·
, La solución de este problema se debe a J. Boussinesq. véase Application des potelltie/s...•
París, 1885. La solución pura el caso en que la fuerza actúa en un punta interior del cuerpo
semündefinido. fue obtenida por R. D. Mindlin. P}¡YSiC5, vol. 7, pág. 195, 1936.
-B(l - 21') +:i2 = O
DISTIUBUCION TENSIONAI.. SIMETRICA 405
404 'rEORIA DE LA ELAS'l'lCIDAD

de donde Sustituyendo finalmente (e), obtenemos las siguientes expresiones para


A = 2B(1 .:... 21') componentes de la tensión producida por una fuerza P, que actúa
normalmente sobre el plano l1mitante del sólido semi indefinido
Sustituyendo en las expresiones (200) y sumando esta última con las (194),
obtenemos
O'r = ;:. {(1 - 2,,) [~ - ~ (1'2 + Z2)-lJ - 31'2z(1' 2 + Z2)-a}
Ur = B {(1 - 211) [~ - ~ (1'2 + Z2)-1J - 31·2z(r 2 + Z2)-1 J
a'. = -3Bz 3(r2 + z2)-a u; = - 3?P z3(r 2
~11"
+ Z2)-1
(e)
ue = B(l - 21') [ - ~ + ~ (1'2 + z2)-1 + Z(1· 2 + Z2)-¡] {1 + -z (201)

T rc = -3Brz 2 (r 2 + Z2)-1 O'e = -P (1 - 2p)


211"
- -
1'2 1'2
(1'2 + Z2)-¡ + z(l'~ + z2)-a }
Esta distribución tensional satisface las condiciones de contorno puesto
que <1, = T" = O para' z·= O. Queda aún por determinar, el valor de la

p 'Esta solución es la análoga tridimensional de la correspondiente a la placa


semiindefinida (véase el § 33).
. . Si consideramos el área elemental mn perpendicular al eje z (fig. 204),
la relación entre las componentes normal y tangencial correspondientes
a ese elemento, según las ecuaciones (201), será

(d)

que nos dice que la tensión resultante pasa por el origen O.


magnitud de esa resultante es
~ __ / 2 + 2 _ 3P Z2 _ 3P cos 2 I/t

FIG. 204
" - v u= 7'., - 211" (1'2 + Z2)2 - 211" (1'2 +
Z2) (202)

emos, pues, que la tensión es inversamente proporcional al cuadrado de


constante B que haga que las fuerzas distribuidas en la superficie de un distancia del punto en cuestión ul de aplicación de la carga P. Imagi-
hemisferio, cuyo centro sea el origen, sean estáticamente equivalentes a 1<1 una superficie esférica de diámetro d, tangente al plano z = O
fuerza P que actúa a lo largo del eje z. Considerando el equilibrio de un el origen O. Par~ todo punto de esta superficie
elemento tal como el mostrado en la figura 200, la componente en la direc-
ción z de las fuerz"as que actúan sobre la superficie del hemisferio es (e)
+
Z = - (r" sen zfr Uz cos I/t) = 3Bz2(r2 Z2)-2 + .. donde sustituyendo en (202), lIegumos a la conclusión de que para
Para determinar B obtenemos la ecuación punto de la esfera, la tensión total que actúa sobre los planos horizon-
es constante e igual a 3P/2nrf'. .
P = 211" foi Z1'(¡·2 + z2)a d.p = G1I"B loi cos 2 ",' s~'n'¡' a", = 27rB Consideremos ahora los desplazamientos que la carga P provoca en
. sólido semi indefinido. Según las ecuaciunes (1.78) para las componen- .
de la tensión .
de donde
P
B=- .....
U = Eo1' = E'1' [uo - p(lTr + u.)]
211" :::
406 TEORIA DE LA ELASTICIDAD DISTRIBUCION TENSIONAL SIMETRICA 407

Sustituyendo los valores de las componentes 'de la tensión, dadas por las por superposición, los desplazamientos y tensiones· provocados por una
ecuaciones (201), resultará carga distribuida. Consideremos el ejemplo sencillo de una carga distribui-
da sobre un círculo de radio a (fig: 205) y estudiemos el desplazamiento
(1 - 2v){1 +
v)P según la dirección de la carga de UJI punto M de la superficie del cuerpo,
u = 2rrEr·

[
Z(r2 + Z2)-. - 1 + 1_._1_
- 2v
r2z(r~ + Z2)-i] (203)

Las ecuaciones (178) permiten determinar los desplazamientos verticales w

(Jw
OZ
= z = -El' [uz -
é v(ur + uo)}
(Jw uu 2(1 + V)'-rz Bu FIG. 205
ar = 'Yrz - az = E - az
distante r del centro del círculo. Considerando el pequeño elemento de
Sustituyendo en las expresiones de lns componentes de la tensión y del ~uperficie cargada que se muestra rayado en la figura, limitado por dos
desplazamiento u los valores encontrados, obtenemos . que forman el ángulo d1ji y dos arcos de circunferencia de radios s
y s + ds, todos ellos con centro en M, la carga que actúa sobre este ele-
·~ento es qs d1J!ds y el desplazamiento correspondiente en M, según (205), es

(I - v2)q • .s d.jJ tU = (1 - 1'2)q d,y ds


1rE .s 1rE
de donde, integrando, se tiene total se obtiene entonces por integración doble

Para el plano límite (z = O) los desplazamientos son


UIJ;t:~¡no\:nuo respecto a s y teniendo en cuenta que la cuerda mn tiene una
+ v)P P(l - v 2)
()
1! ._0 -__ (1 - 2v)(1
2'1fEr' (w)._o = E
7f r
(205) igual a 2";a 2 - r 2 sen" VI, resulta
10 que nos dice que el producto wr es constante en el contorno. Por tanto,
los radios que parten del origen y se encuentran en e.l, contor~o .plano del w = 4(1 -
1rE
2
v )q ('h
Jo
va' _r sen. '" d",
2 Ca)
cuerpo se transforman, a consecuencia de la .deformaclOn, en. hiperbolas de
asíntotas Or y Oz. En el origen los desplazamientos y las tensIOnes alcanzan 'P1 es el valor máximo de !P, es decir, el ángulo comprendido-entre ~
un valor infinito. P;ra salvar las dificultades de aplicación, de las ecua- tangente a la circunferencia. Ei cálculo dé la integral (a), se simplifica
ciones halladas, podemos imaginar que el material próximo al origen es ltroctuc:'leuldo la variable' angular 8 en lugar de la variable !p. A la vista
separado en un pequeño hemisferio, y q~e la fuerza conc~tr~da P es sus- la figura, se deduce que
tituida por las fuerzas estáticamente eqUIvalentes que se dlstnbuyen sobre
a sen O = r sen '1'
esa superficie. .

124. Sólido semiindefinido sometido a la acción de una carga


distribuida sobre una zona de su plano limitante. Una vez obte- dy, ~ a cos 8 dO = a cos e de
nida la solución correspondiente al casO de una fuerza concentrada que r cos '" ~ a2 2 e
r 1 - -seri
actúa sobre el contorno' de un sólido ser:niindefinido, podemos obtener,
2
r
408 TEORIA DE LA. ELASTICIDAD DISTRIBUCION 1'IlNSIONAL SIMBTRICA 409

~ustituyendo en la ecuación (a) y recordando que a varía de O a 7f/2, que teniendo en' cuenta la igualdad a sen n= r sen Y', nos da
cuando tp 10 hace de O u tpx. obtenemos

4(1 - v 2)q ri a2 C08


2
8 do _ 4(1 - VZ)qr (208)
W = 7rE . Jo l' Vl - (a 2 jr2 )sen 2 8 - 7rE
La flecha puede, pues, calcularse para cualquier valor de la relación r/a,
[Io ~1- ~ sen OdO - (1 - ~) Joi v'l- (~~r2) sen2 oJ
i 2
(206)
usando tablas de integrales elípticas. La flecha máxima se presenta, por
supuesto, en el centro del círculo y su valor obtenido haciendo r = O
L¡lS integrales de esta ecuaClOll reciben el nombre de integrales elípticas, (208),· es
y el valor de las mismas para cualquier valor de a/r, puede ser encontrado (W) ..... = 2(1 - p2)qa (209)
en tablas l • E
m -----. . . . . Comparando este resultado con el correspondiente al contorno del círculo,
"\ \ vemos que la flecha de los puntos de ese contorno es 2/71 veces la flecha
máxima l . Es interesnnte advertir que para una intensidad dada de la
\ carga q, la flecha máxima no es constante sino que aumenta en propor-
I
ción con el radio del círculo cargado. .
Podemos igualmentt', aplicando el principio de superposición, calcular
las tensiones. Consideremos, por ejemplo, las tensiones en un punto del
e z (fig. 206b). La tensión ,ti. producida en tal punto por una carga dis-
. sobre una corona circular de radio r y anchura dJ', se obtiene
(a) en la segunda de las ecuaciones (201) 2:><r drq, en lugar de P.
rIG. 206 tensión u. producida por la carga uniforme distribuida sobre la super-
del círculo de radio a, será entonces
Para obtener la flecha en el contorno del círculo cargado, ponemos
r = a en la ecuación (206), obteniendo loa. 3qr drz3(r 2 + z2)-8 = qzal(r' + ;<:2)-1[:
4(1 - p2)qa
(W)r~a = --;¡r- (207)
= q[ -1 + «(L2~Z2)¡J (b)
Si el punto M se encuentrtt den tro de la superficie cargada, (fig. 206 a),
podemos considerar de nuevo la flecha provocada por el elemento rayado t,ensión es igual a -q en la superficie del cuerpo y disminuye gradunl-
sobre el que actúa la carga qs ds d,/,. La flecha total será, entonces, cuando aumenta la distancia z. Pura calcular las tensiones (fr Y (fa
el mismo punto, consideremos los dos elementos 1 y 2 de la superficie
(fig. 206ó), a los que corresponde una carga qr d 1> dr. Ll1S ten-
producidas por estas dos cargas elementales en un punto del eje z
con ~rreglo a la primera y tercera de las ecuaciones (201),
La longitud de la cuerda 1ml es 2a cos O y 1Jl varía desde O a 71/2, de
I La solucI6n de este problema fue obtenIda por HOII"smesg, lor.. cit. Véns" tambIén H.
forma que ~ Proc. Londan Mat/¡. Soc., vol. 34, pág. 276, 1902; I<. Terazawu, J. Coll. Sei. UIII1.'.
w =- 4(1 - E v')q
2
a cos 8 a.; 10 vol. 37, 1916; F. Schlelcher, Bauillgellieur, vol. 7, 1926, Y Bouingenieur, vol. 14, pág. 242,
estlldlo completo de este problema, así como el <:l'so en que In C"!'gll es d,smb.l1da
'/1" o un rectángulo, se encuentra en el trabajo du A. E. H. Love, 1'ycms. Roy. Soco (Lalldoll) ,
A, vol. 228, 1929. Las prop,edades especIales de In deformaCIón y la tensIón en el C:lM'
I Véase por ejernpl;" E. Jahnkc y F. Emde, F'llnktiollC//lafeln, Berlín, 1909; o PClrce, SIl/Jlt
son señaladas por S. Wny, J. Applied .Mecha",cs (Tralls. A.8.M~R.J, vol. 7, pág. A-H7,
ToMe of l/ltegrals, 1910.
TEORIA DE LA ELASTICIDAD DISTRIBUCION TEN~jzONAL SIMBTRICA 411
410

du/ = gra;dr {(1 - 2V)l~ - ~ (r 2 + e2)-~] - 3r z(r + Z2)-t}


2 2
c!al máXima en un punto cualquiera del eje z (fig, 206b) es, según las ccuu-
clones (h) y (f), .

dai = qr dI{> dr (l -:- 21') [_ .!..2 + !.. (r 2


2
+ z2)-1 + z(r2 + Z2)-¡]
(e)
~ (0'0
2
- (1.) = !!. [ 1 - 211 + (1 + v) · z .
2 2 v'a2 + z~
- ~(
2 val
z V]
+ za)
(g)
11" r r
Esta expresión toma el valor máximo cuando
Las tensiones normales producidas en los mismos planos por las cargas z 1 /:-=--:--.....
elementales que corresponden a los puntos 3 y 4, son va 2 + Z2 = 3' y2(1 + JI)

de donde
z=a 2(1 + JI) (h)
7 - 2v
Sustituyendo en (g), se tiene

Sumando (e) y (d), obtenemos las tensiones producidas por las cuatro Tm., = 2'q [1 -
- 22v
- 2
+9 (1 + JI) V2(1 + JI) ] (k)
cargas elementales indicadas en la figura, las cuales son
Suponiendo que 11 = 0,3, obtenemos, de las ecuaciones (h) y (k),
z = O,638a, Tmáx = O,33q

(e) lo que nos muestra que la tensión tangencial máxima, en los puntos del
eje z, se produce a ulla cierta profundidad, igual aproximadamente a los
dos tercios del radio del círculo cargado, y que la magnitud de este máxi-
mo es aproximadamente un tercio de la presión uniforme q aplicada.
Para ontener las tensiones que la carga total uniformemente distribuid!!
Para el caso de una presión uniforme, distribuida sobl'e un cuadrado
sobre la superficie del círculo de radio a produce, debemos. integrar la
expresión (e), respecto a ¡p, entre los límites y n/2 y respecto a rentre ° de lado 2a; la flecha máxima se da en el centro, siendo su valor
O y a. Tenemos entonces w"",x = ~ log
11" n
(V2 + 1) !la(1 E- 112) - 2 24 qa(l - v~)
-, E (210)

(f, = Uo = Cf.
2 Jo
fa (-2(1 + v)z(r 2 + Z2)-¡ +. 3e 3(r 2 + z2)-1]r dr La flecha en los vértices del cuadrado, es solamente la mitad de la corres-
en pondiente al centro y el valor medio de la misma es
= ~ [-(1 -+ 2v) + 2(1 + v)~ - ( Va.-
~V] qa(l - )12)
2 va 2 + Z2 + é) W mcu = 1,90 E (211)

Para el punto 0, centro del círculo cargado, las ecuaciones (h) y (f), nos d~m . Cálculos análogos han sido realizados para el caso en que la presión uni-
. forme se distribuya sobre rectángulos, para diversos valores de la relación,
= uq =
q(l + 2,,) fi = a/b, entre los lados, Todos los resultados pueden ser expresados en
rr. = -9., Uf
2 la formal
P(! _ )12)
Wmed = m _ lA (212)
Haciendo )1 = 0,3, obtenemos Uf = 110 = -0,8q. La .tensión tangencial EyA
m¡íxima en el punto 0, en planos a 45 grados con el eje z, es igual a 0,19.,
Admitiendo que la deformación plástica del material se produce cuando donde m es un factor numérico que depende de a? A es el valor del área
la tensión tangencial alcanza un cierto valor, se puede demostrar que el y P la carga total.
punto 0, arriba consid~rado, no es, entre los puntos del eje z, el más
propenso a que tal tipo de deformación se produzca, La tensión tangen- 1 Vénse SchlcIChcr,.. loco cit.
412 TEOUIA DE LA ELASTICIDAD DlSTRIBUCION TENSioNAL SIMETRICA 413

_ _o TABLA DIl vALorms DEL COEFICIENTE m DE LA IlCI At'IÓN (212,) de presiones (213) en los puntos distantes de la circunferencia que limit¡¡
In zona cargada.
a El recorrido del punzón eshl dado por la ecuación
Rectángulo con diversos valores u =b
Cuadra-
Círculo -
do P(l _'1'2)
1,5 2 3 S 10 100 W = 2aE (214)

m= 0,96 0,95 0,94 0,92 0,88 0,82 0,71 0,37 que nos indica que para un determinado valor de la presión media sobre
'. el plano límite, la deformación aumenta en proporción inversa al radio
del punzón.
Varios valores del factor m son' dados en la tabla adjunta. Puede observarse La flecha correspondiente al caso de una distribución uniforme de
que para un cierto valor de la carga P y del ,área A, las flech~s .aumentan que damos con fines comparativos, es [ecuación (208)J
cuando la relación entre el perímetro y el area de la superficie cargada
disminuye. La ecuación (212), se úsa a veces en el estudio de las. deforr:na-
ciones que se producen en las fundaciones l de las estructuras. SI se qUIere
que sean iguales las flechas en las distintas partes de .Ia estruc~:a, la pre-
sión media sobre la fundución debe guardar una CIerta relaclOn con la
forma y área de la superficie cargada. misma difiere poco del recorrido (214) correspondiente a
punzón perfectamente rígido.
En el estudio precedente hemos supuesto que la carga era un dato,
obteniendo los desplazamientos por ella producidos. Consideremos ahora
el caso en que son conocidos los desplazamientos y donde es nece~ar~o 125. Presión entre dos cuerpos esféricos en contacto. Los
. 'resultados del párrafo precedente pueden ser usados al estudiar la dis-
encontrar la correspondiente distribución de presiones sobre el plano hml-
tanteo Tomemos, por ejemplo, el caso de un punzón cilíndrico perfecta- ·tribución de presión entre dos cuerpos en contacto l • Supongamos que
mente rígido, de base circular, el cual es aplicado contra e~ plano limitante 'en el punto de contacto la superficie de estos cuerpos sea esférica, con
de un sólido semiindefinido. En un caso tal, el desplllzalmento w es cons- radios Rl y Ra (fig. 207). Si tales cuerpos no ejercen ninguna presión el
tante en toda la base del punzón. La distribución de presiones, por el tino contra .el otro, el contacto se reduce al punto O. Las distancias del
contrario, no lo es, viniendo dado su valor por la ecuación 2 plano tangente en O a puntos tales como el M y el N, situados en la sec-
meridiana de las esferas, a pequeña distancia 2 r de los ejes ZI Y z.,
P ser expresadas con suficiente exactitud mediante las fórmulas
(213)
q = 211"a -Va2= r 2
en la que P es la carga total aplicada por el punzón, a el r~dio del misr:ro (a)
y T la distancia del centro del círculo al punto que se conSidera. Esta ?IS-
tribución de presiones no es, como se ve, uniforme, siendo el valor mímmo la distancia mutua entre estos plintos es
de la misma, que se da en el centro (r = O)
.'-
(b)

el caso particular del contacto entre una esfera y un plano (fig. 208 a),
valor, que es igual a la mitad de la presión media sobre el área circ~l~r
= 00 y la ecuación (b) de la distancia MN nos da
de contacto. En el contorno de la superficie de contacto (7 = a) hl presJOn
es infinita. En los casos reales, se producirá una deformación plástica del
mHterial a lo largo de esa periferia. Este tipo de deformación ~s, ~in e~­ (e)
bargo, de carácter l(Jcal, no afectando sustancialmente a la dlstnbuCiOn
1 Este problema fuc resuelto por H. Hertz, J. Mal/¡. {Cr.Il.'~ J.J, vol. 92, 1881. Vé•• c
, Véase Schlclcher, lo';' CIt. H. Hertz, GeSQln11lolle Wcrke, vol. 1, pág. 155, Lelpzlg, 1895 ..
, Esta solUCión fue dada por Bonssmes,!, lnc. al. • r es pequeña co~parada eOIl R, y R,.
414 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
DISTIUnUCION TENSÍONAL SIMBTRICA 415
En el caso de contacto entre una bola y una superficie esférica (figu- deraciones geométricas, encontr!1lll0S que para todo punto de la sllperficie
ra 208b), Rl es negativo en la ecuación (b), resultando de contacto,
r 2(R¡ - R 2) (e)
- Z2 - 2:1 = 2RIR-~- (e')
Consideremos ahora las deformacione·s locales. Según la condición de
Si los cuerpos son comprimidos uno contra otro en la dirección de la simetría, puede deducirse que la intensidad, q, de la presión ejercida entre
normal en O, por una fuerza P, se producirá una deformación local en los dos cuerpos en. contacto y la deformación correspondiente, son simé-
la vecindad del punto de contacto, que extenderá ese contacto sobre una tricas respecto al centro O de la superficie de contacto. Suponiendo que
pequeña superficie de contorno circular llamada superficie de contacto. la figura 206a represente la superficie de contacto y que M sea un punto

1-'1(;.20&

perteneciente a la superficie de la esfera inferior, el desplazamiento Wl


de este punto. ~~ún lo obtenido anteriormente, será
FlG. 207

Suponiendo que los radios de curvatura Rl y R. sean muy grandes com-


Wl = (1 ::E;1 2
) ff q d8 d'¡' (1)

parados con el radio del contorno de la superficie de contacto, podremo!-. donde la integración se extiende sobre toda el área de contacto y 1I¡, E"
aplicar, al estudiar la deformación local, los resultados anteriormente obte- son las constantes elásticas de la bola inferior. Una fÓrII).ula análoga se
nidos para cuerpos semiindefinidos. Sea Wl el desplazamiento, provocado obtiene también para la bola superior. Tenemos entonces
por la deformación local según la dirección Z¡, de un punto tal como el IvI
perteneciente a la superficie de la bola inferior (fig. 207) Y w. el mismo (g)
desplazamiento, según la dirección z., para un punto tal como el N de
la bola superior. Suponiendo que el plano tangente en O permanece in- 2
móvil durante la compresión local, dos puntos cualesquiera situados en 1- P1
k¡ = --E-'
71' ¡
(216)
los ejes z! y Ze, a distancias! grandes de O, se aproximarán entre sí unll
cierta cantidad a como consecuencia de la compresión y la distancia entre : De las ecuaciones Ce) y (g) resulta
dos puntos tales como M y N (fig. 207) disminuirá en a - (w¡ + W2)'
Si además, suponemos que estos puntos M y N caen dentro de la super- (lC1 + k2)JJq ds df = a - {3r z (11.)
ficie de contacto, tendremos
: pues, encontrar una expresión para q que satisfaga la ecuación (h).
a - (Wl + W2) = Z1 .¡.. Zz = {Jr~ (d) : Demostraremos que esta exigencia queda satisfecha si suponemos que la
distribución de presiones q, en la superficie de contacto, obedece a una
donde p es una constante cuyo valor depende de los radios R¡ y R g Y Jey que viene representada por las ordenadas de lID hemisferio de radio a,
viene dada por las ecuaciones (h), (e) o (e'). Basándonos, pues, en consi- cOllst:nndo sobre la superficie de contacto. Si qu es Ia.presión en el centro O
dicha superficie, tendremos que
1 Distancias tales que las deformaciones provocadas por la compresión en estos puntos
pueda ser despreciada. qo = ka
416 TRORlA DE LA ELASTICIDAD DlSTRIBUCION TENSIONAL SIMETRICA 417

donde k = qola, es un factor constante que indica la escala con que hemos encontramos, para el caso de contacto de dos esferas (fig. 207),
representado la distribución de presión. A lo largo de tina cuerda mn, In
presión q varía como se indica en la figura 206 mediante la semicircun- a=
ferencia a trazos. Realizando la integración a lo largo de esta cuerda, (219)
obtenemos a=

Suponiendo que las dos esferas tienen las mismas propiedadcs elásticas
donde A es el área del semicírculo señalado por la linea a trazos que es y haciendo 11 = 0,3, resulta

igual a ; (a 2 - r 2 sen 2 1p). Sustituyendo en (h), llegamos a a =. 1109 s~ RIR2


, ER1+R2
(220)
a = 123 spoR¡ +R2
, E2 RIR2

y de ahí La presión máxima correspondiente es

(221)

Esta ecuaClon debe ser cumplida para cualquier valor de r, y por tanto,
En el caso de una bola oprimida contra una superficie plana, suponiendo
la distribución de presiones que habíamos supuesto es la correcta si se
que las propiedades elásticas de los materiales de ambos sólidos sean las
dan las siguientes relaciones entre el desplazamiento a y el radio a de la
mismas, encontramos, sustituyendo R¡ = OC> en (220) y (221)
superficie de contacto.
3(1"2 8fPE2
a = 1,109 '\31PR
J E 2, a = 1,23 '\J~' qo = 0,388 '\JR;2' (222)
(217)
Las ecuaciones correspondientes al caso de una bola apretada contra un
asiento esférico (fig. 208 b) se obtienen, dando a Rl signo negativo.
Conocida la magnitud de la superficie de contacto y las presiones que
. El valor de la presión máxima, qo, se obtiene igualando la suma de las pre-
actúan en ella, podemos calcular las tensiones mediante el método des-
siones que actúan sobre el área de contacto a la fuerza de compresión P.
arrollado en el § 124 1 . Los resultados de estos cálculos para puntos de
Considerando una distribución hemisférica de presión, obtenemos
los ejes Oz¡ y OZ2 son mostrados en la figura 209. La presión máxima, qo,
que se da en el centro de la superficie de contacto es tomada como unidad
~'~ll'a3 = P
de tensión. El radio a de la superficie de contacto, es tomado como unidad
a 3
en la medida de las distancias a lo largo del eje z. La tensión máxima es la
de donde :. tensión de compresión eJ. que se da en el centro de la superficie de con-
3P (218) tacto, pero las otras dos tensiones principales u. y (fo en el mismo punto
qo = 2ll'a 2 . l 1 + 2v .
son ¡gua es a 2 u•. Resulta entonces, que la tensión tangencial
lo que nos dice que la presión máxima es 1,5 veces la: presión medü¡ sobre máxima, determinantc de la deformación plástica de materiales tales c'omo
la superficie de contacto. Sustituyendo en las ecuaciones (217) y tomando,
según la ecuación (b), : 1Tales ~Iculos fuero'; realizados por A. N. Dinnik, Bull. Polyte~". b,st., Kiew, 1909 .
. V~asc tamblcn M. T. Hubcr, A"n. Physik, ve!. 14,1904, pág. 153; S. Fuchs, Physik. Z., vol. 14,
.pag. 1282, 1913; M. C. Huber y S. Fuchs, Physik. Z., vol. 1S, pág. 298,1914; W. B. Mo ton
y L. J. Close, Phil.li!lag., \"01 +3. pág. 320, 1922.

27 ·-TF.ORIA DE LA FLASTIC1DAO
418 TEORIA DE LA ELASTICIDAD D1STRIBUCION TENSIONAI. SIMETRICA 419
el acero, es, en este punto, relativamente pequeña. El punto en que se 126. Caso general de presión entre dos cuerpos en contacto '.
presenta la máxima tensión tangencial se encuentra en el eje z, a una El caso general de la compresión entre dos cuerpos elásticos en contacto,
profundidad aproximadamente igual a la mitad del radio de la superficie puede ser tratado de igual manera que el caso de cuerpos esféricos que
de contacto. Dicho punto debe ser considerado como el más débil en el acabamos de estudiar. Consideremos el ·plano tangente en el punto de
. caso de que tratemos con materiales tales como el acero. La tensión tan- contacto 0, como plano xy (fig. 207). Las superficies de los cuerpos en la
. gencial máxima en ese punto (para v = 0,3) es, aproximadamente, 0,31qo. vecindad del punto de contacto, despreciando infinitésimos de orden su-
perior, pueden ser representadas por las ecuaciones 2
Zl = Alx2 + A 2zy + A3y2 (a)
Z2 = BIX 2 + B 2xy + Bay2
La distancia entre dos puntos tales como M y N es, entonces,
Z1 + Z2 = (Al + Bl)X2 + (A z + B 2)xy + (Aa + Ba)y2 (b)
Tomando como direcciones x e y, aquellas que anulan el término que
contienen el producto xy, cosa siempre posible, resulta
(e)
donde A' Y B son constantes cuyo valor depende de la magnitud de las
curvaturas principales de las superficies en contacto y del ángulo formado
z por los planos de curvatura principal de las dos superficies. Si R¡ y Rl'
F'G. 209 indican los radios principales de curvatura en el punto de contacto de
uno de los cuerpos y R. Y R.' los del otro 3, Y si 'P es el ángulo comprendido
En el caso de materiales frágiles tales, por ejemplo, como el vidrio, entre los planos normales a los que pertenecen las CurvllS de curvatura l/R,
la posibilidad de fractura del material viene determinada por la máxima y l/R., las constantes A y B vendrán determinadas por las ecuaciones
tensión de tracción. Esta tensión se presenta en la circunferencia límite
de la superficie de contacto. Actúa según la dirección radial y tiene el valor

(1 - 21')
U"r = 3 '10

La otra tensión principal que actúa según la dirección circunferencial.


es igual, en valor absoluto, a la tensión radial citada, pero de signo opuesto .
. Tenemos, pues, que el contorno de la superficie de contacto, donde la Se puede demostrar que en la ecuación (e) A y B tienen el mismo signo,
presión normal sobre la superficie se anula, se encuentra sometido a un deduciéndose, por tanto, que todos los puntos separados por igual dis-
esfuerzo constante de valor qo(l - 211)/3. Haciendo 11 = 0,3 este valor es tancia Zl + Z2, se encuentran en una elipse. Ocurre, pues, que al com-
O,133qo. Esta tensión es muy inferior a la máxima tensión tangencial calcu- primir entre sí dos cuerpos según la dirección normal al plano tangente
lada antcriormente, pero es superior a la tensión tangencial que Bctún en
d centro de la superficie de contacto, donde la presión normal es máxima , Esm teorla fue desarrolladu por Hertz, loe. cit. La fuerza tangencial 'i el par de torsión
Con el fin de verificar la validez de los resultados teóricos de Her!;.-. en el contacto son considerados por R. D. Mindlin, J. Applied Mechallics (Trans. A.S.M.E.),
vol. 16, pág. 259, 1949. .
para materiales que siguen la ley de Hooke y para tensiones inferiorc~ J Se supone que el punto O no es punto singular de l•• superficilO$ de los cuerpos, siend"
al límite elástico, han sido realizados muchos ensayos'. redondeada la superficie adyacente al punto de contacto, pudiendo ser considerada como eJ,
segundo g r a d o . · .. .
J La curvatura de un cuerpo es considerada positiva si el centro de curvatura corres ..
1 En el trabajo de G. Berndt, Z. lech. Physik, vol. 3, pág. 14, 1922, pueden encontrarst·
. los referencias relativas ·0 este nsunto. Véase también Handbuch del' physikalz'schen und teclz- pondiente ...., encuentra en el interior del sólido. En la figura 207 las cur.vaturas de los cuerpos
Il;sc/um Mechallik, vol. 3, pág. 120. son positivas. En la figura 208b, la del asiento esférico es negativa.
420 TEORIA DE L~ ELASTICIllAV DISTRIHUCION 1'ENS¡ONAL SIMETRICA 421

en O, la superficie de contacto que se forma tendrá un contornu elíptico.


Dando a ti, W¡, wz, el mismo significado que en el párrafo precedente,
se tendrá, para los puntos de la superficie de contacto, (224)

'W¡ + 'W2 + 2:1 + :112 = a


o bien, (e)
donde A + B está determinada por las ecuaciones (el) y los coeficientes m
y n son números que dependen de la relación (B - A)/(A + B). Usanpo
la notación
lo cual es resultado de simples consideraciones geométricas. Consideremos
ahora la deformación local en la superficie de contacto. Suponiendo que B-A
dicha supertlcie es muy pequeña y aplicando la ecuación (205), obtenida
cos 0= A +B (h)
para cuerpos semiindefinidos, la suma de los desplazamientos 'lO! y 'lO2
ios valores de m y n, para distintos valores de IJ, son los dados en la tabla
de lo~ puntos de las superficies de contacto será
siguiente':

W¡ + w~ 1 - VI
= ( -E--
71"1
2
+ 1- E
- -
7r2
2a
71 ) JI qdA
-
r
- (f) 0= 30° 350 40' 45° 50 0 55° 60' 65 0 70° 75° 80° 85 0 900

m= 2.731 2,397 2,136 1,926 1,754 1,611 1,486 1.378 1.284 1,202 1.128 1;061 1.000
donde qdA. es la presión que actúa sobre un elemento infinitamente pe- 11 = 0,493 0,530 0,567 0.604 0,641 0.678 0,717 0,759 0.802 0,846 0.893 0,944 1.000
"queño de la superficie de contacto, y r la distancia de este elemento al
punto que consideramos. La integración debe extenderse a toda la super-
ficie de contacto. Empleando las notaciones (216) y haciendo uso de (e) Considerando, por ejemplo, el contacto de una rueda de llanta cilíndrica
y (f), obtenemos de radio R¡ = 400 mm con un raíl cuyo hongo tiene un radio R. = 306 mm
encontramos, sustituyendo R¡' = R 2 ' = 00 y ~ = nl2 en las ecuaciones (d)
(kl +k 2) JJ :A q = a - Ax2 - By2 (g)
A +B = 0,0733 B - A = 0,0099 cos e = 0,135
:--.Tuestro problema, ahora, es obtener la distribución de presiones q (jUL· ,Usando I~ tabla anterior e interpolando. obtenemos
satisfaga la ecuación (g). H. Hertz demostró que este requisito queda satis-
fecho, suponiendo que la intensidad de las presiones q en la superficie de
'In = 1,098, n = 0,918
contacto. es la representada por las ordenadas de un semielipsoide cons- Sustituyendo las ecuaciones (224) y haciendo E = 2100000 kg/cm 2 y
truido sobre la superficie de contacto. La presión máxima se presenta. ji = 0,25', resulta
como es natural, en el centro de la superficie de contacto. Llamándola qo
y señalando con las letras a y b los s~,miejes del contorno elíptico de la a = 0.00946 ..yp, b = 0,00792 ...:/P
superficie de contacto, la magnitud de la presión máxima se obtiene a
partir de la ecuación Para una carga P = 409 kg

P = JI q dA = j7rabqo a = 0,240 cm b = 0,201 cm área de contacto :mb = 0,152 cm'

de donde se deduce , y'la presión máxima en el centro es


3 P 3 P ,
qo=-- (223) ([o = 2" 7rab = 4036 kg/cm
2
27rab
Vemos, pues, que la presión máxima es 1.5 veces la presión media sobre
la superficie de contacto. Para calcular esta presión debemos conocer el 1 Esta tobla ha sido tornada del trabajo de H. L. Whittemore y S. N. Petrenl<o. U. S. Bur.

Standards, Tec". Paper, 201, 1921.


valor de los semiejes a y b. Realizando un análisis análogo al efectuado , Si·v aumenta de 0,25 a 0,30, los semiejes (224) disminuyen aproximadamente en ún 1 % y
para cuerpos esféricos, resulta la presión máxima 91., aumenta aproximadamente en un' 2 %.
422 TEORIA DE LA ELASTICIDAD DISTRIBUCION TENSIONAL SlMETRICA 423

Una vez conocida la distribución' de presíones, podemos calcular la más estrechas y en el límite afb = ro se produce el caso de contacto de
tensión en cualquier punto 1. Se comprueba, de esta forma, que el punto dos cilindros de ejes paralelos 1 •. La superficie de contacto es ahora un
con máxima tensión tangencial está en el eje z, a una cierta profundidad Zl, rectángulo estrecho. La distribución de .presión q a través de la anchura
pequeña, que depende de la magnitud de los semiejes a y b. Por ejemplo: de la superficie de contacto (fig. 210), está representada por una semielipse.
Zl = 0,47a, cuando bfa = 1; Y ZI = 0,240 cuando ·bfa = 0,34. Los valores
correspondientes de la máxima tensión tangencial (para 'V = 0,3) son
T,n •• = O,31qo Y Tm.x = O,32qo, respectivamente.
Considerando los puntos de la superficie elíptica de contacto y tomando
los ejes x e y en la dirección de los semiejes a y b, respectivamente, las
tensiones principales en el centro de la superficie de contacto son

(1"" = -2vqo - (1 - 2v)qo a +b b


. a
(1"1/ = -2vqo - (1 - 2v)qo-- (le)
a+b

En los extremos de los ejes de la elipse, resulta a", = .-(]y Y T",y = O.


La tensión de tracción según la dirección radial, es igual a la tensión de
cOnlpresión según la dirección circunferencial, En estos puntos, pues,
z
tenemos una solicitación de esfuerzo cortante. El valor de la misma para
FIG. 210
los extremos del eje mayor (x = +a, y = O) es

T = (1 - 2v)qo ~ (~ arctgh e - 1) (l) Si el eje x es perpendicular al plano de la figura, b es la mitad de la anchura


de la superficie de contacto y P', carga por unidad de longitud de super-
y para los extremos del eje menor (x = 0, y = ±b) .ficie de coiltacto, estará dada, conforme a la distribución de tensión semi-
elíptica, por
T = (1- 2v)qo !z (1 - ~ arctg ~) (m) p' = p.bqo
donde p = b/a y e = (l/a)../ a - b • Cuando b tiende a a, el contomo
2 2 de donde
de la superficie de contacto tiende a tomar la forma de una circunferencia qo = -
2P'
(225)
'y las tensiones dadas por (k), (1) Y (m) se aproximan a las obtenidas en el
'lrb
.párrafo precedente pura el caso de compresión entre dos esferas.
El estudio de la deformación local nos da para la cantidad b la expresión
Un estudio más detallado de las tensiones en todos los puntos de la
superficie de contacto, muestra 2 qué para e < 0,89 la máxima tensión
b=
4P' (k l + kz)R¡R 2
(226)
tangencial viene dada por la ecuación (l). Para e > 0,89 la tensión tangen- Rl +R 2
cial máxima se presenta en el centro de la elipse y se calcula mediante
donde Rl Y R s, son los radios de los cilindros y k 1 Y ka constantes definidas
las ecuaciones (k).
por las ecuaciones (216). Si ambos cilindros son del mismo material)
Aumentando la relación alb, obtenemos elipses d~ contacto cada vez
l' = 0,3, resulta

, Tales estudios han sido renlizndos por el profesor N. M. Belajef, véase Bull. Insto Eng;·
lIears o[ Ways 01 Cal1/l1/u1Iicatio7tS, SIIfl Petersburgo, 1917, y Memo,r, on Theory 01 Structures. b = 1,52 (227)
San Petersburgo, 1924; véase también H. R. Thomas y V. A. Hoersch, Univ. Illinois Eng
&'Pt. Sta., Bull., 212, 1930, Y G. Lundherg y F. K. G. Odqvist, Proc. Ingeniors Vctenskap,
.4kad., núm. 116, Esmeotmo, 1932... I Una deducción directa de este caso con la consideración d" la fuerza tangencial de con·
j Véase Belaj"r, loc. cit. tacto es dada por H. R9ritsky, J. Applied Mechanics (Tralls. A.S.M.E.), vol. 17, pág. 191,1950.
424 TEORIA DE LA ELASTICIDAD DISTRlDUCION TENSIONAL SIMETRICA 425

Si los radios son iguales, R¡ = R 2 = R que, empleando las ecunciones (a), queda
.. '" _ptnl +m.
1,08~PIR
(b)
b= . m,1n2
E (228)
Las investigaciones realizadas muestran que la 'duración del choque, es decir., el
Para el caso de contacto de un cilindro con una superficie plana . tiempo durante el cual la~ esferas permanecen eh contacto es muy grande comparado

b = 1,52~P~R (229)

Llevando el valor de b que da la ecuación (226) a la (225), obtenemos

qn'=
P'(R, .R z) + (230)
7r
2
+
(k 1 kz)R1R z FIG. 211

Si el material de ambos cilindros es el mismo y v = 0,3 el período de la vibración de más baja frecuencia de las esferas '. Las vibra-
pueden ser, por tanto, despreciadas, pudiendo suponerse que la ecuación (219)
I"'''''.'~''.'U'' para condiciones estáticas, sigue siendo válida durante el choque. Em-
qo = 0,418 las notaciones
(231)
/16
A

+
R¡R.
n =Vilrs (!e, k,)2(R, Rs)' + n,=---
m,+m,
7nlm •
(e)
.En el caso del contacto de un cilindro con un plano
oo,reIllerrIOS, a partir de (219),
{PiE (d)
qo = 0,418 'VT (232)

(e)
Una vez conocida (jo y b, pueden calcularse las tensiones en cualquier
punto. Estos cálculos muestran' que el punto con máxima tensión tan- M\lltiipllicando ambos miembros de cstu ecuución por a, re..<;ulta
gencial se encuentra en el eje z a una cierta profundidad. La variación
de las componentes de la tensión con la profundidad, para 11 = 0,3, es la
mostrada en la figura 210. La tensión tangencial máxima se da a la pro- integrando, nos da
fundidad Z¡ = O,78b Y su valor es O,304qo. U)
127. Choque de esferas. Los resultados de los dos últimos párrafos, pueden v es la velocidad de aproximación de las dos esferas en el momento inicial
ser utilizados en el estudio del choque de cuerpos elásticos. Consideremos, como Si hacemos a = O en esta ecuación, obtenemos la aproximación de las
ejemplo, el choque de dos esferas (fig. 211). Tan pronto como las esferas entran en el instante de máxima compresión "1, la cual es
en contacto en el punto O', la fuerza de compresión P comienza a actuar cambiando
las velocidades de I~s esferas. Si V, Y V. son los valores de estas velocidades, las ace-
leraciones que definen fa variación de las mismas, vienen dadas por las ecuaciones Ct¡l=f (-
u.)-
5 -
411nl
(g)

d!J, dlJ~
m, dt - -P, In, di' - -P (a) este valor, podremos calcular, a partir de las ecuaciones (219), la máxima fuerza
P que actúa entre las dos esferas durante el choque y el radio corres-
o"VI.l1jJ1C.'''·JI
en las que m, y m. señalan las masas de las esferas. Sea a la distancia que las dos diente a de la superficie de contRctO.
esferas se aproximan como resultado de la compresión en O. La velocidad de esta La duración del impacto se calcula escribiendo la ecuación (j) de la forma siguiente
aproximación será
a- v, + u.
'Véase Bel.jef, loe. cit.
• Suponemos que los movimientos tienen lugar a lo largo de la recta que une Jos centros
de las es feras. , Lord Raylcigh, P"#il. Mug., serie 6, vol. 11, pág. 283, 1906.
426 TEOR!A DE I.A ELASTICIDAD DISTRIBUCION TENSIONAL SIMETRlCA 427
o bien escribiendo ala, = X Y empleando la ecuación (g) Como integral de esta ecuación tomamos la serie
dt=~, tk f(r) = It. + a,T' + a,T' + (1.,.0 + (d)
ti VI - (:Z:)i
que sustituida en la ecuación (e), nos da la siguiente relación entre los coeficientes
de donde se deduce que la duración del choque es de la misma:
t = 2.. , {l dx = Z 94 ~ (2n}·a,. - k'a"_l = O
(233)
u Jo VI - (x}i ' tJ
Despejando, obtenemos
En el caso particular de dos esferas iguales, realizadas con el mismo material, y de /;;'
radio R, se tendd. COn arreglo a lo ecunción (,q). al = 2ia.,
aL= (S-V;1TPl iV'tJ'YR Sustituyendo estos valores en la serie (d), resulta
(234)
k'r' k'r' k'r'
t
= 2,94 (5 V21TP
4
1 - ")I..!L
E (u) 1
I(r) = Ito ( 1 + 22 + 2'74i +~ + (8)

. dondé (] señala 1>1 densidad de las esferas. La segunda integral de la ecuación (e), puede ser expresada también en forma de
Como vemos, la duración del choque es proporcional al radio de los esferas una serie y se puede demostrar que toma el valor infinito cuando 'r = 0, por lo que
e inversamente proporcional a (v)'¡'. Este resultado ha sido verificado por varios no deberá ser considerada al estudiar la defonnación de un cilindro macizo. La serie
contenida en el paréntesis de la ecuación (e) es la función de Bessel de orden cero
investigadores'. En el caso de barras largas con extremidades esféricas, el período
y de argumento imaginario, ikr '. En lo que sigue, esta función será designada con
de la vibración fundamental puede ser del mismo orden que la duración del choque,
la notación Jo(ikr), escribiendo la función de tensión (b) de la forma
por lo que el estudio de la compresión local en el punto de contacto, debe tener
en cuenta tales vibraciones'. 4>, = ao.l .(ikr) sen kz (1)
La ecuaclOn (180), tiene también soluciones diferentes de las de la ecuaclOn (a).
128. Defonnación de un cilindro circular cargado simétricamente.
Una de ellas puede deducirse de la función J.(ikr). Derivundo, obtenemos
Con el fin de estudiar el caso del cilindro circular sometido a la acción de {uel'zas
aplicadas sobre la superficie lateral del mismo y distribuidas simétricamente con dJ .(ikr) ikr ( k'r" k"r" k"r' )
respecto a su cje, introducimos una función de tensión t/J en coordenadas cilíndricas a(iJ.;r) = - '2 1 + N + 2 ·4' . 6 + 2 . 4' . 6 2 .8+ ••• (g)
y aplicamos la ecuación (180)3. Esta ecuación es satisfecha si tomamos como fun-
ción de tensión cp una solución <.le la ecuación derivada de signo negativo, que recibe el nombre de función de Bcsse! de primer
orden y que se denota por J, (ikr). Consideremos ahora la función
a'", +! a4> + a'", = O (a) a J.(ilcT)
aTO r éir a.' fl(r) = r dr = -ilcTJ1Cíkr)
/c'r' ( 1 + N
= 2" k'r' k'r'
+ 2.4". 6 + ...
) Ch} "
solución que puede tener la forma
Por diferenciación se demuestra que
1> = f(T) sen fez (b)
en la que} es función de r solamente. Sustituyendo (b) en (a), obtenemos la siguiente (dr'
~ + r~.:!.
dr
- k')fl(T) = 2klJ.(ilcr)
ecuación diferencial ordinaria para la detem~inación de I(r)
Recordando que Jo(ikr) es una solución de la ecuación (e), se deduce que I,(r) lo
es de la ecuación
(e)
d' +!.:!.
( ar' rdr
_ kl) (a'!,
ar i
+ !,af,
rdr
_ k''f)
"
= o
I M. Hamburger, Wied. AlIn., vol. 28, pág. 653, 1886; A. Dinnik, J. Russ. Phys. Chem.
Soc., vol. 38, pág. 242, 1906, y vol. 41, pág. 57, 1909. Otras referencias úe la bibliograffa que 'Así, pues, la solución de la ecuación (180) podrá adoptar la forma
tratan sobre el tema son dadas en Handhuch der physika/ischen IInd lechnischen Mecha"ik,
vol. 3. pág. 448, 1927. "'. = a, sen kz(iJ.;r)J,Cikr) (i)
• Véase página 495. El impacto longitudinal de varillas con extremos esféricos h. sido
estudiado por J. E. Sears, Proc. Cambridge Phi/o Sor., vol. 14, pág. 257, 1908, Y TTans. Cam· Combinando las soluciones (f) e (t) obtenemos la función de tensión
bridge Phi/o Soc., vol. 21, pág. 49, 1912. El impacto lateral de la.. barr~ en el que se considera
la compresión local fue estudiado por S. Timoshenko, Z. Math. Physik, vol. 62, pág. 198, 1914. 4> == sen kz[aoJ .(ihr) + a,(ikr}.J,(ikr)] (i)
J El problema de la defonnación de un cilindro circular sujeto a la acción de fuerzas
aplicadas sobre su sup"rfieie, fue tratado por primera vez por L. Poehharnmer, Crelle's J., I Aceren de l. ecuación diferencial (c) y de las funciones de Bessel, pueden consultars~

vol. 81, 1876. Varios problemas de deformación simétrica de cilindros fueron estudiados por l." obras siguientes: A. R. Fo ....yth, A Treatise on Differential Equations y A. Grny y G. B.
C. Chrce, Tram. Cambridge Phi/o Soc., vol. 14, pág. 250, 1889. Véase también el trabajo de ~1"thews, A Trealise on Bessel FunctÍlms. Tablas numéricas sobre las funciol'es de Bessel
L. N. G. Filon, 'f'Ta~s. Roy. Soco (Landa,,), serie A, vol. 198, 1902, que contiene las soluciones pueden encontrarse en E. Jahnkc y F. Emde, Funktionentafe/tt mit Fom"/tt und Kurv"L. Berlín,
de varios problemas de interés práctico, referentes a la tI.fonnación simétrica de W1 cilindro. 1909. "
TEORIA DE LA ELASTICIDAD DISTRIBUCION TENSIONAL SIMIIT.R1CA 429
428
que llevada a las ecuaciones (179), nos da las siguientes expresiones para las com- llegaremos, por un procedimien~o amílogo al anterior, a In siguiente función de tensión
ponentes de la tensión rjJ = cos Rz[b.,,)o(ikr) .1- b,(ikr) J, (i/<r)) (o)
lJ'r = coa kz[aoF'l(r) +
a¡F.(r)) (le)
..,. = senkz[a,F,(r) +
a¡F,(r)l en lugar de la expresión (;). Eligiendo convenientemente las constantes k,. b." b¡,
obtenemos la solución para el caso en que las presiones normales que actúan so-
donde F¡(r), ._., .F.,(r) son ciertas funciones de r que contienen a ,l~(ikT) y J¡(ikr). bre el cilindro, están representadns por una serie senoidal y las fuerzas iangenciales
Usando las tablas de las funciones de :Bessel, podremos calcular facllmcnte los va- por una serie cosenoidal. Combinando las soluciones (;) y (o), tendremos, por tanto,
lores de F¡(r), ... , F,(r), cualquiera que sea T. •
cualquier distribución de fuerzas normales y tangenciales simétricas respecto al eje.
Si llamamos a all'f1dio exterior del cilindro, las fuerzas apbcadas sobre su super-
ficie estarán dadas, según las ecuaciones (k), por los siguientes valores de las compo-
nentes de la tensión:
=
lJ'r cos kz[aoF'l(a) +
I.I,F.(a)] (1)
'f'r. = sen ke[aoF'.(a) +
a,F,(a)]
,---f...YJ"-.I
Eligiendo convenientemente las constantes k, .{!¡J, a" p~~remos estudiar diversos
casos de carga simétrica. Llamando 1 a la longitud del cllmdro y tomando
lc=~
l

aoF¡(a) + G¡F,(a) = -A"


aoF,(a) + G,F.(a) ... O Z

FIO. 213
obtenemos los valores de las constantes ~ y a, para el caso en que una presión
normal, A" cos (n"z!/), actúa sobre la superficie lateral del cilindro. El caso en que
11 = 1 está representado en la figura 212. ?e igual.r0nn~, podemos obtener la s~lu­ Al mismo tiempo, existirán ciertas fuerzas distribuidas sobre los extremos del cilin-
ción para el caso en que fuerzas tangencIales de mtensldad Bn sen (tmz!l), actuan dro. Añadiendo una tracción o una compresión, podremos conseguir siempre que
.sobre la superficie del cilindro. la resultante de tales fuerzas sea cero, con lo que su efecto a alguna distancia de los
extremos se hace desp¡'eciable en virtud del principio de Saint-Venant. Varios
ejemplos de carga simétrica de cilindros son estudiados por L. N. G. Filon en el
trabajo anteriormente citado '. Nosotros damos aquí los resultados finales, por él
obtenidos para el caso mostrado en la figura 213. Se trata de un cilindro cuya lon-
gitud es igual a na, que es sometido a una acción extensora mediante fuerzas cor-
tantes, que se distribuyen uniformemente sobre la porción de superficie del cilindro
que se muestra rayada en la figura. La distribución de la tensión normal IYz sobre
las secciones transversales del cilindro, es de interés práctico y la tabla adjunta da
la relación entre estas tensiones y la tensión media de tracción obtenida dividiendo la
fuerza total de tracción por el área de la sección recta del cilindro. Como puede verse,
las tensiones locales de tracción, en la proximidad de las porciones cargadas de la
;¡;
superficie, disminuyen rápidamente al aumentar su distancia a las mismas, teJldi~lld"
Flc.212 al valor medio.

Haciendo 11 = 1, 2;'3, ... , Y usando el principio de superposición, obt~~emos


las soluciones correspondientes a los problemas en los que sobr~ la sup~rf1cle del z r=O r = 0,21.1 r = O,4a r = O,6a r=*a
cilindro actúan presiones noonales que pueden ser expresadas por la serIe
3mI+ () O 0,689 0,719 0,810 0,962 1,117
Al
7fZ
coa T + A. 008 2T..z + A. coa T m 0,051 0,673 0,700 0,786 0,937 1,163
0,101 0,631 0,652 0,720 0,859 1,344
y fuerzas t3ng~nciales expresables por la serie 0,151 0,582 0,594 0,637 0,737 2,022
",e 2..z 3.re + (11) 0,201 0,539 0,545 0,565 0,617 1,368
B,senT+ B,senT + B.senT
Si, en lugar de la expresión (b), empleamos la función de tensión '" I Doc. cit. Véase también G. Pickett, J. Applied JIIled'<lI'/(\ ('Jiam. a.S.M.E.), vol. 11,
'" = J(T) coa Tez pág. 176, 1944. '.
430 TEORIA DE LA ELASTICIDAD DlSTRIBIlCION TBNSIONAI. SIMETRICA 431
Otra aplicación de la solución general, expresada bajo forma de funcione~ de donde el signo prima indica diferenciación respecto a·kr. Esta tensión debe anularse
Bessel, e~ duda por A. Nádai al estudiar la flexión de placas circulares sometIdas en. la superficie r = a. Poniendo r = a en la expresión contenida entre corchetes
a una fuerza concentrada en el centro' (fig. 214). e Igualando ese corchete a 0, obtenemos una ecuación en (! que nos da

129. Cilindro circular sometido a la acción de una presión sobre una p = 2(1 _ ,,) + ka ~(ka) (d)
banda de su superficie. Cuando un anillo corto se encoge estando abrazando I,(ka)
un eje, las fórmulas sencillas, válidas cuando anillo y cje tienen iguales longitudes, condiciones de contorno son
dejan de ser exactas. Se obtiene una aproximación mucho mayor considerando el
problema indicado en la figura 215a de un cilindro largo, sometido en la banda
ABCD de su superficie, a la acción de una presión normal p. "r = ~ parR r = a, > O
Z
(e)
p/2 "r = - ~ para r = a, Z <O
obtenido a partir de (d), mediante las ecuaciones (179), es

"r = - lo" [(1 - 2 .. - p)I.(Jer) + <kr + ir) I,(Jer) ] k'f(k) sen ke dio <D

.Haciendo ahora uso del hecho de que

(al (ó)
p/2
(Il)
O>Zl!.IUd
0= Z HlBd ;
2 _j
Flc. 214 Flo.215
0< 2 lilBd.?i
JL

La solución que buscamos puede obtenerse, evidentemente, superponiendo los


y multiplicando por p/n obtenemos
efectos de las dos distribuciones de presión mostradas en la figura 215b. El pro-

¡
blema básico, por tanto, es el correspondiente a la acción de una presjón p/2 so~re
la mitad inferior de la superficie cilíndrica y de otra -pf2 sobre la mItad superior. ~paraz>o
En la solución que damos a continuación, se considera que la longitud del cilindro F. r.. senkz
.. Jo
__le
dk =
-
O para z
'P
=O (h)
es infinita.
Si comenzamos con la función de tensión dada en la ecuación (o) del § 12B,- - 2 para z < O
llamando ¡o(kr) a J.(ikr), i¡,(!lr) a J, (ikr) y haciendo bo = eb., resulta
'" = (pI.(ler) - JerI,(lcr)]b, cos kz (a) los valores de la derecha corresponden a los valores de lI r en el c:untorno,
por (e). Las condiciones de contorno (e) quedan, por tanto, cumplidas si
expresión que satisface a la ecuación (¡BO) cualquiera que sea el valor de k. Si con- el segundo miembro de la ecuación (f), con r = a, idéntico con el primer
siderarnos que k toma un cierto intervalo de valores, podemos hacer que b, dependa n.;~n".hT·" de 10 ecuación (h). Esto exige que
de k y del incremento dk, escribiendo
b1 = f(le) dlc - [(1 - 2" - p)I. (ka) + (ka + fa) 1,(ka)] k'f(k) ~ ~. ~ (i)
Llevando esta expresión a (a) y sumando todas las funciones de tensión así obtenidas,
llegaremos a una función de tensión más general que toma la forma que permite determinar j(k). Las componentes de la tensión se ohtienen,
a partir de la función de tensión (b), aplicando las fórmulas (179), y re-
q, - lo" (P1 a(ler) - lerI,(ler)Jf(k) coa lee di, (b) ser integrales de la misma naturaleza que la de la ecuación (f). Valores, obte-
por integración numérica, pueden encontrarse en el trabajo de Rankin citado
Corno veremos a continuación, es posible seleccionar la función ¡(k) de forma tal página 430. Las curvas de la figura 216 muestran la variación de las tensiones
. que la función de tensión nos dé la solución del problema. la dirección 8.-.,:ial para diversas distancias radiales, así como los desplazamien-
Según las ecuaciones (179) las tensiones tangenciales serán superficiales.
Tales curvas han sido tomadas del trabajo de Barton (véase la pág. 430) habiendo
obtenidas mediante un método que hace uso de las s~ries de Fouricr: A partir
T,
r
= r" [p1clo'(kr) -
Jo.
Ie'r[,'(kr) - kIleler)
_ 2k(1 _ v)Io'(lcrl]k'f(k) coa k. dk (e) estas curvas, se pueden obtener por superposición los resultadas correspon-

I A. Nádai, E/astische Plauen, pág. 315, 1925. , V"ase, por ejemplo, l. S. Sokolnikoff, AdvQlIced Ca{cu[us; primeru edición, pág. 362
TEORIA DI! LA ELASTICIDAD OIsmIBUCION TENSIONAL SIMETRICA 433

dientes al problema de la figura 215 en la manera explicuda ~nteriorme?,te, Las .curvas 130. Torsión de un sector de anillo de sección circular, Este problema,
de Ins tensiones y desplazamientos corre~pondíentes a bandas de pr~lOn de dl'.:ersus es de interés práctico por estar relacionado con el cálculo de tensiones en los resortes
anchuras son dadas en los trabajos citados. Cuando la anchura es Igual al radIo del helicoid:¡les de espiras cerradas. Consideremos un sector de anillo sometido, en la
cilindro 'la tensión normal de dirección tangencial (JO en la superficie, y en el centro forma que indica la figura 217, a la acción de dos fuerzas P iguales y opuestas.
de la b~da de presión, toma un valor superior en un 10 % al de la presió~ aplicada
siendo, naturalmente, una compresión. La tensión axial ~; en la superfiC1~J en los
puntos situados justamente encima de la banda de preslOn, es una ~racclOn cuyo
valor supera en un 45 % al de la presión aplicada. La tensión tangencIal T" alcanza
el valor máximo, igual al 31,8 % de la presión aplic.ada, en los bo~~es AB y en
de la banda de presión (fig. 215) y justamente debajO de la superfICIe,
ro

-O.5If~~ , 'ji
-M r711J.:\t,ILl--4---' z.
~ -0,3 r.11l1fp:.¡r~+-l--i,
-O.2~IUH-!-+--i Fw. 217
Za -~ -o _-ª-O.I f..-4-+---J.--!. z
a a 3a 2a ··Estas fuerzas or.lglnan el mismo par M, = PR en todas las secciones rectas del
,1--l-+-I-¡,-AlO,J '2 T
, 1/1 0•2
. anillo. Si las dimensiones de las secciones transvers¡¡les son pequeñas comparadas
, I ///1 0,3 con el radio R, las fórmulas deducidas para la torsión de piezas prismáticas pueden
'/1 0:1- ser utilizadas, con suficiente exactitud, para el cálculo de las tensiones. En el CllSO

.,, 0.11
/7/1 0,2
I§¡, D,l
Ar;:¿) 0,4
a 1.-J-,~~,¿.jO.S

0.5

roja
-~~~ -------------- -_=0/1
----=0.8
-0,2 ---=0.6
-,---=0.4
Oj-z
p-O,I --:JJ~---=------ =0.2
2a
Or-~~~~~~~~~z z
FIG.218 FlC. 219

resorte helic()idnl grueso, las dimensiones de la sección transversal ya no son


y la diferencia de longitud entre las fibras circulares interiores v exteriores
ser considerada. De esta forma, puede demostrarse que en los puntds interiores
como el t', la tensión tangencial es considerablemente mayor que la dada por
de la torsión de barras rectas l • Una solución más rigurosa del problema
aplicando las ecuaciones genemles de la teoría de la elasticidad,
en coordenadas cilíndricas' [ecuaciones (170), pág. 344 J. Admitiendo
en este caso de torsión las únicas componentes de la tensión no nulas son Tuz
Cuando la presión es aplicada sobre toda la superficie lateral del cilindro, cual- (fjg. 218), deducimos, de las ecuaciones (170),
quiera que sea la longitud del mismo, tenemos simplemente tensiones de compre-
sión a, y (Ja iguales a la presión, siendo ~. y 11" iguale? a cero. . ~ + 8r6. + 2Tr 6 ... O (a)
De manera análoga han sido obtemdas las solUCiones correspondIentes n una 8r 8z r
banda de presión actua~do en un agujero de un sólido indefinido'. ya una b.an~n 1 Una teoría elemental d~ In torsión del sector de anillo fue d ••• rrollada por V. Roever
de presión actuando en la proximidad de uno de los extremos de un cllmdro maclzo-. vol. 57, 1913. Véase también M. Pilgrum. Artill. Monatshejte, 1913. La determin"ció~
,eXloerllnen'n' de la tensIón máxima, realizada medtante la medida de In deformación en la super-
, C. J. Traneer, Quart. ·Applied Mal"., vol. 4, pág. 298, 1946; O. L. Dowie, ¡bid., vol. 5, de! reSalte, ha s,do realizada por A. M. Wahl, Trans. A.S:M.E., 1928;
, Esta solución es debida a O. Gohner, 11Igelliaur-Arr.hiv.• vol. l. pág. 619, 1930; vol. 2,
pág. 100, 1947. . 1 Y 381. 1931; v~!. 9, pág. 355. 1938.
, c. J. Tranter y j. W. Craggs, Phil. Mag., vol. 38, pág. 214, 1947.
434 'rEORIA DB LA ELASTICIDAD D1STRIBUCION TENSIONAL SIML"l'RICA 435

Consideremos ahora las ecuaciones de compatibilidad (13U). Según. la figura 219 y determinemos '¡'n, lb,; "'~ .... , de forma tal que satisfagan las ecuaciones
resulta
TlJ~ = '1'8z; COB 8
1'.v - 1',e(C09 2 O -sen" 8) == 1',6 COS 20

Sustituyendo en la cuarta y quinta de las ecuaciones (130) y recordando que

(00) = {f, + {fo + {f, ~ O


obtenemos
A medida que el número de términos de la serie (g) aumenta, la suma de las ecua-
(11) ciones (h) se va aproximando más y más a la ecuación (e) y la serie (g) tiende a h\
solución exacta que corresponde a la función ~. Consideremos nhorn las condicio-
nes de contorno. La tensión tangencial en la periferia (fig. 218). debe ser tangente
a la misma. por lo que
Las cuatro ecuaciones restantes [véanse ecuaciones (g), pág. 385], son satisfechas 'T,6 coa (N!;) - 'TOz cos (Nr) = O
como consecuencia de haber supuesto que (Jr = {fU = {f. = l' • = O. El problema
se reduce, por tanto, a la resolución de las ecuaciones (~) y (b), res~lución.para cuya que empleando las ecuaciones (e). queda
obtención empleamos la función de tensión "'. La ecuaclón (a) se satIsface SI tomamos
GR' (81) ~
r a uj'da
+ 84> c!S)
1); d8
=O
GR'8~
Te. = - -;:s 8r (e)
lo' que demuestra que '" debe ser constante en el contorno, condición que queda
satisfecha empleando soluciones de las ecuaciones (h) que anulen a ,po, .p" q" • ....
donde G es el módulo de rigidez y R el radio del anillo. Sustituyendo (e) en las ecua- en el contorno.
ciones (b), resulta Obtenidas .¡.", ,p" .... llegaremos a las componentes de la tensión por aproxi-
maciones sucesivas mediante las ecuaciones (e). Introduciendo las nuevas variables
.1: y ~, estas ecuaciones pueden ser expresadas de la siguiente forma

de donde se deduce que la expresión contenida en el paréntesis debe ser una constante.
Llamando a esta constante - 2e. la ecuación para determinar la función de tensión'" es ahora el desarrollo

(d)

Introduciendo ahora las coordenadas l;y t;, en lugardc lasr y z (fig. 218), definidas por la serie (g), obtenemos como primera aproximación
~ = R - r, j'=% ('T,e)o = G 8
ai" (7'8.). = G él4>.
iJl;
(¡)
encontramos que la ecuación (d), toma la forma
aproximación. deducida de (i), es
02</> ¡¡i</> 3 iJrj> +2 _ O
ae + élr' + R (1- R~) a~ e - (e)
(TrO)1 2~) a¡
= G [( 1 +R iJ4>']
B</>u +a¡
(le)
Considerando ~/R como una pequeña cantidad y empleando el desarrollo (7'8.), = G [( 2t) ar
1 +R
iJ</>']
u4>o + iJf
1 ~~.
--~=l+R+'W' . la tercera
U)
1- R
(1'rO)' =
.( .
a[ 1 + 2~
R + 3~") 8</>0 ( 2~) 8"',
R' 8f + 1 + R 8f + Ti
0</>,]
podremos resolver la ecuación (e) por aproximaciones sucesivas. Supongamos que (1)
2f 3~') 8</>0 ( 2() a"'t a~,]
4> = <po + </>1 + <p. + . . . (o) (ro.), = g [ ( 1 + 7l + R' "'if + 1 + R "'if + 8f
436 TEORIA DE LA ELASTICIDAD OIS'l'lUDUCION TENSIONAI. SIMETRICA 437

Apliquemos ahora este método general al caso particular dI! un anillo de sección expresiones que sustituidas en (o) nos dan el momento de torsión correspondiente:
cir~ular de radio a. La ecuación de! contorno (fig. 218) es
r+~-~=O ~
(M,). -2- 1:- 16 a.)
= c<J.rra' ( S
R' (r)

y la solución de la primera de las ecuaciones (h) que satisface la ecuación de con- Detelminamlo a partir de esta igualdad la constante e y sustituyéndola en las expre-
torno, será siones (q), podemos obtener las componentes de la tensión expresadas en función
e del par de torsión (M,) •. A lo largo del diámetro horizontal de la sección trans-
"'. = - 2" (~. + ¡-' -o a') versal del aníllo (fjg. 218) i:; = 0, T •• = 0, y según la segunda de las ecuaciones (q)
resulta
La primera aproximación para las componentes de la tensión, deducida de las ecua- 11 ( 7 ~. 13 1:'
1'0.2= -ro- 1: +SR +I6:R' + 8R + 4R2
()
Sa" a'~)
ciones ú), nos da
(n) Para el punto interior i, 1; = a, tendremos

distribución que coincide con la correspondiente a un eje de sección circular. El valor


del momento que a tal distribución corresponde, es
(o) Para el punto exterior 0, ~ = -a, y entonces

que stistituyendo las ecuaciones (n), resulta (


'1'0)
• •
.rr (
= "",a 1 - 4"5 Ra + 16
17
R2
al)
cGrra'
(M.). = -2-' Conforme a la ecuación (r), los valores de estas tensiones resultan
Para obtener la segunda aproximación, utilizamos la segunda de las ecuacio- 5a 17 a'
nes (h). Sustituyendo la expresión de Po, ante.riormente obtenida, encontramos -2l1f, 1 + 4R + uJi2
,Pq,..! + ~!~ _ Sc~ = O ,..a' 3 ez"
ap al" R 1 -1- j]Ri

ecuación cuya solución, que satisface la condición de que p, se anule en el contorno, es (TO.). 2M. (
= ,..a' 1-
5 a
4R + SR'
7 a2 )

</>. ". ~ ~ U' + t' - a')


El cálculo de ulteriores aproximaciones, muestra que la
Sustituyendo esta expresión en la ecuación (k), obtenemos la segunda aproximación expresión fmal de la máxima tensión tangencial es la si-
para las componentes de la tensión: guiente':

(1'0.); = _ ~ .1 -
1 1 a
(aIR) +:tE + j]
1 Ca)'
R (235)
..a' 1 _ i!. -.Jg.jR)' FIG. 220
(p)
. 16 1 - (aIR)'

Remplazando q,n y ,pI en la tercera de las ecuaciones (h), se tiene La figura 220 representa la distribución de las tensiones tangenciules a lo largo del
diámetro horizontal para el caso en que a/R = l/S. Asimismo, y con fm comparativo,
¡¡'.p. + él''''' +!!~ (;2 + Si' - 3a') = O se ha dibujado la primera aproximación obtenida por aplicación de la fórmula corres~
üE" a¡-' SR' pondiente a un árbol de sección circular', línea de puntos.
La solución de esta ecuación que cumple la condición de contorno es E! método descrito, ha sido aplicado también ul problema de la torsión de sec-
tores de anillos de sección transversal ~cJíptica y rectangular', Para una sección
.. = _ _ c_ (~.
.,.., H·1R"
+ 5.\' _ 15a')(~' + !"' - ( 2) cuadrada de lados iguales a 2a, la tercera aproximación da como tensión en el punto
interior el siguiente valor:
Empleando las ecuaciones (l) obtenemos la tercera aproximación para las compO-
. nentes de la tensión
( O,6PR(
) = - (
TO., i 3 1 + 1.Z0 R a+O.liO:wa.) (236)

, Esta fórmula le fue comunicada a S. Tirnoshenko por O. Gohner en una carta.


(g) • Las soluc,ones elementales anteriormente Citadas (véase pág. 433), úan para (TU.) va-
lores que concuerdan bastante bien con 1",. resultados calcul!rdos mediante la ecuacIón (235).
, O. G6hner, loco ~il. ..
438 DISTRIBUCION TENSIONAL SIMETRICA 439

131. Flexión simple de un sector de anillo de sección cir~ular. El


método de las aproximaciones sucesivas, empleado en la pregunta anterior, .puede 4M
ser aplicado también al estudio de la flexión simple de un sector de Ull amllo de (: =: 1fa4.E
sccción circular'. Al aplicar dos pares iguales y opuestos M en los extremos de un
sector de anillo circular en la forma que indica la figura 221 (tales Rares. a:ru.an Para obtener la segunda aproximación, podemos despreciar los términos en ~/R
en el plano de la 'curva central del anillo), se produce una def~lmaclOn sunetrlca ya que 1; es pequeña comparada con R. Las ecuacione.~ (d) y (e) to,man, entonces;
respecto al eje JI y las tensiones tangenciales T rO y "o.. en las secclo~,es trallsversa~es la forma
meridianas, 80n nulas. Las cuatro componentes restantes de la tenslon, deben sa~l~­
facer las ecuaciones de equilibrio que corresponden al caso de una deformaclOn
simétrica (véase § 116) (d')
a". él.,.,. ~ O + + _
or oZ r (a)
8-r.. + 8... +.!!! O so
8r Ol> r
v también las respectivas ecuaciones de compatibili-
~Iad [véanse ecuaciones (g), § 116) (e')

(b)
Z el símbolo J sign.ifica a'/0~2 + a'/ol:;'.
FIG.221 Introduciendo ahora una función de tensión "'" satisfaremos las ecuaciones (d')

= cE(~+~._.•)+cEa'.p,
(
O'~) '2R > aRar'
Si se toma como ejemplo el caso de un anillo de sección circular constante, y se
emplean las nuevas coordenadas ~ y ~ (fig. 218), definidas por cE 1)'1/>,
(ITr), = -¡¡ 8~' (g)
~ = E - r, i=a (e)
cE a'I/>,
las ecuaciones (a) y (h) se convierten en (T¡r)l = - R ¡¡~ af

8,,~ éJT¡r O'¡ - <Te (g) en las ecuaciones (e') hnllnmos que la función de tensión ,p debení
éJf+Tr-R-~ =0 la ecuación
(d)
iJTer aO'r 1'/r . 1 + 2p
8f+ar-R-~=O 6. A.p, =- 1+v (h)

a'''¡ 8'''1 1 aO'¡ 2 1 a'a condiciones de contorno para <p, se deducen de las ecuaciones (12). Puesto
W + al' - R - ('if - (E - '¡:)' (O'~ - O'e) + 1 + p a~' = O el primer término de la expresión de (a ), es cero en el contorno circular, y
a'0'8 a'0'9 1 a"8 2 1 1 aa _
alis + a¡-' - E. -I¡a¡ + (E _ ~)' (tr¡ - <Te) - 1 +-; E _ ~a; - O dt d~
(e) ¡ = 1iB' lit = --
..' a'O'r atO'r 1 éJcrr 1 a'e_ ds
W + aro - E - I¡ a[ + 1 + "at' - O
a'r¡r a"-r¡r 1 ~ 1 1 a'e .!!.. (a.p,) ~ (a",,) = O
av + ~ - R - 1; o~ - (E - I¡» T¡r 1 o; at = O + +" ds elt
= O
' as a~

Como primera aproximación, vamos a toma: la, ~isma distrib~ción tensional pues, que op,/oC y oePtlíJl¡ son constantes n lo largo de la pedfería y
se presenta en la fl~ión simple de barras pnsmatlcas. Se tendra, entonces, admitir que ,p I Y d,pl/dn son cero en el contorno. La ecuación (h), junto
(0',). = (O'r)o = (T¡r). = O (1) estas condiciones de borde, determina completamente la función de tensión ,pI'
interesante destacar que la ecuación (11) y las condicíom;,q de contorno arriba
(0'8)0 = -cEe en'~lo.naljas son idénticas a las ecuaciones referentes al caso de la flexión de una
1 Ollhner, loe. cit.' empotmda en su, borde sometida a una carga uniforme. Si se trata de una placa
440 TEORIA DE LA ELASTICIDAD

circular, la superficie de deflexión, ya conocida, nos permite obtener la siguiente


expresión para la función de tensión

4>1 = - ..l...±.~ (~. -1- r' - 0.')' (k)


64(1 + v)
Sustituyendo en (g), encontramos que las componentes de la tensión son
Tensiones de orig
cE
(0'1)1 = - - - 1(7
16R(l v) + .
+ 6.)(~2 - a ) 2
+ (5 + 2,,)¡-21
cE(l
(O't) 1 = - 16R(1 ++
2,,)
v) E
(3 •+ r2 - a 2) (1)
cEI +2" .
(Tfr) 1 = SR 1 + v ~r
Remplazando estas expresiones en (e') obtenemos

Integrando estas ecuaciones y ajustando las constantes de integración de forma tal 132. Casos sencillos de tensiones de origen ténnico. Una de
que la distribución de tensiones nonnales que actúa sobre las secciones transver- las causas que originan tensiones iniciales en un cuerpo, es el calentamiento
sales del anillo sea estáticamente equivalente al momento flector M, obtenemo~ no uniforme del mismo. Como sabemos, al elevar la temperatura, los ele-
mentos que componen un cuerpo, se dilatan. Tal dilatación no puede,
(CT) = _ 4M rl~ + (8 + 10" + 4.")~t - (6v + 4v2 )t2 - (2 + ,,)0."] (m) por lo general, desarrollarse libremente en un cuerpo continuo,. por lo que
el. ",(14 8(1 + ..)R el calor provoca en el mismo tensiones internas. En muchos proyectos de
maquinaria, tales como turbiI}as de vapor o motores Diesel, las tensiones
Tomando e= oy ~ = a, la tensión en el punto interior i (fig. 218); vendrá expre-
de origen térmico revisten gran importancia debiendo ser estudiadas con
sada por
todo detalle.
4M{1
1I'a'
+ 6 -1-8(l9"++4.
v)
2
~}
R
Para v = 0,3 la ecuación anterior nos da
T
(11)
O i
El cálculo de las aproximaciones ulteriores conduce a la siguiente expresión parn J
la tensión en el punto interior 1 (e = a) -L
q = _ 4M [1 + O'87 ~ + O.64:a/R)2] (p) I--l -l~
9 l!'a3 R l - (a/E)
y {a}
La teoría elemental de In flexión de piezas curvas, busada en la hipótesis de que Fw 222
las secciones transversales se conservan planas, nos da, para.. este caso". despre-
ciando las tcnsion.es Los problemas más sencillos de tensiones de origen térmico pueden
a reducirse fácilmente a problemas, ya estudiados, de fuerzas de contorno.
0', = -4.11f
- [ 1 +0,75-+0,50-+'"
a' ]
• l!'a' R R" Consideremos, para empezar, el caso de una placa rectangular delgada,
de espesor uniforme, cuyos puntos se encuentran sometidos a una tem-
I Esta fórmula le fue comunicada a S. Tirnoshcnko por O. Gohner en uno corto.
, Véase S. Tirnoshenko. Slrenglh uf Materials. 2." euiclón, vol. 2, pág. 73. peratura T que es función par de y (Hg. 222) y que no depende de x y z.
'rEORIA DE LA ELASTICIDAD TBNSIONIlS DB ORIGBN TBRMICO 443

La dilatación térmica longitudinal a1', quedará suprimida si en todo punto de nuevo con las de compresión (a) que anulan la deformación €~. En los
de la placa aplicamos tensiones longitudinales de compresión, de valor: casos no simétricos, estas tensiqnes dan lugar, no solamente a una fuerza
,,'/ = -a 'E Ca) resultante - i: c
/JET dy, sino también a un· momento - ¡:c o.ET y dy,
Dado que la placa puede extenderse libremente en dirección lateral, la por lo que para satisfacer las condiciones de equilibrio, debemos añadir
aplicación de las tensiones (a) no producirá tensiones laterales, de donde a las tensiones de compresión (a) una tracción uniforme, que se deter-
se deduce· que para mantener las tensiones (a) bastará con aplicar fuerzas mina en la forma indicada anteriormente.y tensiones flectoras 1],,:" = ay/c,
compresivas de valor (a) en los extremos de la placa. Tales fuerzas supri- que vienen determinadas por la condición de que el momento de las fuerzas
mirán completamente la dilatación longitudinal de la placa provocada por distribuidas sobre una sección transversal debe ser nulo. Tendremos
la elevación de la temperatura 1'. Para obtener las tensiones térmicas exis- entonces:

f +c f+·
tentes en la placa, cuando sobre ella no actúa ninguna fuerza exterior, 2d
tenemos que superponer a las tensiones (a) las producidas en la misma ~y. - aETydy = O
-(1 e -o
por la acción sobre sus extremos de fuerzas de tracción de intensidad aTE.
La resultante de estas fuerzas es: de donde:

f-~O aTE dy ~ = -2
e
33
e
f+' aETy dy,
_e
CT/' = ~
3
20
J+.
-a
aETy dy

y el efecto que producen a suficiente distancia de los extremos, será aproxi- La tensión total será, pues:
madamente una distribución unifonne de tensiones, de valor:
1
-2 f+· CT= = -aET + 21o f +0 aET dy
_,
+ 23~e f+o
-e
aETy dy (d)
o _, aTEdy
En el estudio realizado, hemos supuesto que la placa era delgada en
Así, pues, las tensiones térmicas existentes en la placa (de extremos libres) la dirección z. Imaginemos ahora, que la dimensión según esa dirección
en puntos alejados de los extremos, serán: sea grande. Tenemos entonces unu placa L"UyO plano medio coincide con

= -21e f+a
el xz y cuyo espesor es 2c. Supongamos, asimismo, que la temperatura T
u= _. aTEdy - aTE (b) sea como antes función de y solamente.
La dilatación libre de un elemento de la placa según las direcciones
Suponiendo, por ejemplo, que la distribución de la temperatura es para- x y' z, quedará suprimida completamente si aplicamos las tensiones t1x,
1]% que se obtienen aplicando las ecuaciones (3) del § 6 en las que se hace
bólica y que viene dada por la ecuación:
(" = €. = -0.1', (fu = O. Estas ecuaciones nos dan entonces:
T = 170 (1 -~) CT", = 11'.
cxET
== - 1 _ v (e)
obtenemos, según (b):
Podemos mantener a los elementos en esta condición aplicando en las
u", = -32 aToE y2)
- aToE ( 1 - - 2
c (c)
aristas (x = cte., z = cte.), la distribución de fuerzas de compresión dada
por (e). La tensión térmica en la placa libre de .fuerzas exteriores se obtiene
;.:

añadiendo a las tensiones (e) las que resultan de la aplicación de distribu-


Esta distribución tensional es la mostrada en la figura 222b. En los ciones de fuerzas iguales y opuestas en las aristas. Si T es una función
púntos próximos a los extremos, la repartición de tensiones producida par de y, tal que su valor medio a través del espesor de la placa es cero,
por las fuerzas de tracción, no es uniforme, pero puede ser calculada me- la fuerza resultante por unidad de longitud de arista es nula y según el
e diante el método explicado en la página 196. Añadiendo a estas tensiones principio de Saint-Venant (§ 18), resulta que las tensiones que produce
las dadas por (a), tendremos las tensiones térmicas correspondientes a los serán cero en todos los puntos excepto en aquellQs próximos a la arista.
puntos próx.imos a los extremos de la placa. Si el valor medio de T no es cero, será necesario añadir a las tensiones
Si la temperatura' T· no es simétrica respecto al eje x, comenzamos de compresión (e2. tracciones unifoIDles, correspondientes ,a la fuerza resul-
444 1'EORlA DE I.A ELASTICIDAD TENSIONES DE: ORIGEN TERMICO 445

tante, según las direcciones x y z. Si además la· temperatura no es simétrica Si las superficies y = ±c son mantenidas a dos temperaturas diferen-
respecto al plano xz, tendremos que agregar las tensiones de flexión. '. tes Tt, T 2 , se origina un flujo calorífico que después de cierto tiempo será
De esta forma llegamos !I la siguiente ecuación final: .estacionario. La temperatura, entonces, estará dada por la función lineal:

~ (TI + '1.'2) + ~ (1" + T2) ~


_ aTE
1- v
+
2c(1
1
)f
11
+C aTE dy
-c
3 j+c aTEy dy
T =

Sustituyendo en la ecuación (j), vemos que si la placa puede dilatarse


(i)

+ 2-c~3(";;'1"-Y--"JI) -c
(f)
libremente las tensiones térmicas serán cero I • Si se impide toda dilatación
'. o rotación de los bordes, la tensión producida por el calentamiento viene
la cual es análoga a ta (d), obtenida más arriba. Mediante la ecuación (f) dadu por las ecuaciones (e). Si, por ejemplo, T2 = - TI> se tendrá, con-
podemos calcular fácilmente las tensiones de origen térmico, creadas por . forme a (i)
una determinada distribución de temperatura T, supuesto que esta dis- (j)
tribución sea conocida.
y la ecuación (e) da:
Consideremos, por eje~pl~, el caso de una placa, inicialmente a la temperatura
uniforme To, que es enfriada al mantener sus caras y = ±c a una temperatura 0'. = <1". = - ~7'1'!!.e
1- v
(k)
constante T¡.' La teoría de Ftlurier da la siguiente distribuciiín de temperatura para
cualquier instante t:
máxima es:
T = 7' l + ...-4 (T o - T ,) ( e-P"cos -7ry
2c
- -1 0"""1'.' coa -811"11
3 2¡;
+ .. -) (g)
aET¡
(o-=;)mtl"l: = (O"::)ma.x = -1-- (l)
-JI
en la que p" p, = 3'p¡, ..., Pn = n'Pl, representan ciertas constantes. Sustiruyendo
en if), se tielle: En esta fórmula no figura el espesor de la placa, pero en el caso de una
17'

;" <T

= 4aE(To - T,)
... (1 - v)
[e-",' (~ - coa !ll) +!3 o-P" (a2... + 3>ry)
7r 2c 20
008
placa más gruesa, lo pl"obable es que exista una mayor diferencia de tem-
peraturas. Esto es lo que explica el que una placa gruesa de un material
+ .!.5 (1. _ 511' 2c
Y) +
e-P.' . . .]
5~
COS (h) frágil, esté más expuesta a romperse bajo la" acción de tensiones térmicas
que una placa delgada.
Al cabo de .Ilgún tiempo, el primer término adquiere una importancia predominante Consideremos, para acabar, una esfera de radio grande y supongamos
y entonces podremos admitir: q'ue un pequeño elemento esférico de la misma, de radio a, situado en el
4",E(1'. - T , ) (2 7r 1l) centro, sufl"e una elevación de temperatura T. Puesto que este' elemento.
<1". = <1", = (1 ) • e- P " - - cos -2e
71" -]' ?r no puede dilatarse libremente, en su superficie se producirá una presión p.
Para y = :l::c tenemos tensiones de tracción: Las tensiones radial y tangencial que esa presión produce en un punto
cualquiera de la esfera, distante r > a del centro, pueden obtenerse apli-
<1"= <1" = 4GYE(~!..=_1'¡) e-PI' ~ . cando lns ecuaciones (197) y (198) (véase la pág. 399). Suponiendo que
'.' ~(l - p) . 1\"
el radio exterior de la esfera sea muy grande, comparado con a, resulta:
En el plano medio y =., O, obtenemos tensiones de compresión:

<1". = <1", = - 4aE~To - T,)


".1 - J»
e-PI' (1 _~) 1("
Cm)

Los puntos ell los que las tensiones son nulas vienen dados por la ecuación: Ala distancia r = a, se tiene:
<1"r = - p, <1", = j-p

, En general, cuanu" T es función hneal de x, y, lO, la deformaclón COrl'espondiente a l •.


de la que se deduce: libre dilatación de cada elemento, es decir a: . .
y = ±O,560c Ex = EII = E, = aTt
I Este problema fue resuelto por Lord Rayleigh, Phil. Mag., sene 6, vol. 1, pág. 169, 1901. satisface las ecu,cID!)."" de compat¡b,ltdad (129), por 10 que no eXIstirán tenslOnes ténnlcns.
446 TEORIA DE LA ELASTICIDIID TENSIONES DE ORIGEN TER.MICO 447

r el aumento de ese radio, producido por la' preSlon p, será: las cualel'l son up!Jt:aum. cn los Cl\.tremos A y B c;le cada banda. Conseguimos
entonces, que las distintas banuas se presenten como si la placa no hubieru
Ar = (ae,) ..... = i [<T, - v(<Tr + 0",)] ...... = : ; (1 + 11) sido calentada. Para obtener las ten'siones térmicas, debemos añadir a (a)
la tensión producida por la aplicación de fuerzas iguales y opuestas, es decir,
aumento que deberá ser igual al producido por hl elevación de la tempera- de una tracción de valor aET, a lo largo' de los bordes y = ±c de la faja.
tura y la presión p en el elemento esférico. ,,-=- l:L
Tenemos entonces: +1 e 8
11.
pa pa IL
ctTa - E (1 - 2v) = 2E (1 + 11) -
/

-
de .. donde: +1
2 aTE LL
p=---
31 -:
(n)
11 ./
+/
Sustituyendo en (m), obtenemos las relaciones siguientes para las tensio- /
..f=r
nes en el exterior del elemento calentado.
+ ./'
- e
2 aTEaS 1 aTEa' /'
- 8 (1 - JI)r S' <T¡ = 3 (1
- l1)r3 (o)
~

Edge C.l.
--------c--------~
133. Algunos prDblemas planDs de tensiones de origen térmico. FIG. 224
Supongamos que una faja de una pla<;a delgada (fig. 223), es calentada
de forma no uniforme, de manera tal que la temperatura T sea función de Si el calentamiento se limita a una zona de la faja corta en comparación
.x solamente, manteniéndose constante a lo largo de cualquier sección recta. con su anchura, 2c, tal como la CDFE de la figura 223, el efecto de las
tracciones 'aET se hará notar solamente en la proximidad de en, en el
borde superior y de EF en el borde inferior. Podemos, pues, considerar,
'. que estas dos zonas representan un problema del tipo estudiado en el § 34 .
. He~os mostrado en la página 121 que una tensión normal aplicada sobre
un borde recto produce wla tensión igual, normal, sobre ese borde, que
es paralela al mismo. Las tracciones aET producirán, por tanto, una ten-
sión de tracción aET en la dirección x. Las dos tensiones normales se
anulan cuando se penetra en el interior de la placa perpendicularmente
a la arista. Si estas tensiones son superpuestas a la compresión (a) de direc-
FIn. 223 ción y, podemos trazar curvas J que dan rJ:r; y rJy a lo largo de una línea tal
.' como la AB, tl"azada en la parte más caliente de la pieza, cuyo aspecto
es el mostrado en la figura 223b. Cerca de los bordes, la tensión prevale-
Si la placa es cortada en bandas tales como la AB (fig. 223), esas bandas ciente es rJ"" cuyo valor es aET y cuyo signo es el de una 'tracdón cuando l'
sufrirán dilataciones verticales diferentes. Es por ello, y a causa del enlace . es positivo. Las tensiones máximas toman el valor aET,n~,.
mutuo entre esas bandas en el conjunto de la pieza, que se producirán Si la temperatura T es función periódica de x, la aplicación de las trac-
tensiones. ciones aET representll: un problema del tipo considerado en el § 23. Cuando:
Considerando las bandas como si fueran libres, podremos suprimir su
dilatación vertical sometiéndolas a las tensiones de compresión: T = Tosenax (b)

0'11 = -aET Ca) 1 J. N. Goodier, Physics, vol. 7, pág. 156, 1936.


448 TIlORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGEN "ERMICO 449

las ecuaciones (k) del § 23, poniendo A =. B = - cdD.~ y tellÍendo en de (h) Y (e), resulta:
cuenta (f), nos dan:
E
Cf", = -2aETo (ac ch aC - sh ae) ch Ily - ay sh Ily sh ac
ct. = r-":"--;;2 fe. + vea - (1 + v)aTl ,
. sh 21lc + 2ae . sen ax E
o.ET. (ac ch Üe + sh elc) eh ay - ay sh (lY sh ae
0"8 = ·1 _ v2 [ea + VEr - (1 + v)aT] (d)
1171 2 o sh 2ac + 2ac . sen ux
que la ecuación (a) toma la forma:
= 2elET Ilech elC sh ay - ay ch ay sh u.c . c~s ax
t;rll n
. sh 2ae + 21lc el
r dr (E r + VEO) + (1 - V)(Er - fO) = (1 + v)o:1' rJ,T
dr (e)
Las tensiones térmicas en la placa I vienen, pues, dadas por aquellas
. cuya expresión acabamos de dar, junto con la tensión de compresión desplazamiento radial tenemos, según el § 28:
ay = -aET de la ecuación (o). La figura 224 muestra la variación de 0", du U
a lo largo de las líneas de temperatura máxima para distintos valores de la Er = dr' Ee = -
r
. (1)
longitud de onda 2l = 271/1/. Vemos que la tensión máxima aumenta cuando
la longitud de onda disminuye, tendiendo hacía el valor aETa. Obtenida la Sustituyendo en (e) obtenemos:
solución para el caso de una distribución sinusoidal de la temperatura,
pueden tratarse otros casos en los que la temperatura es función periódica
de x. Puede igualmente concluirse, que la tensión máx.im¡¡ en una placa de
.longitud finita difiere sólo ligeramente del valor aE1'o, obtenido para una que puede ser escrita en la forma:
placa infinita.

1:34. Disco circular delgado. Repartición de teInperatura siIné- ~ [.!.


d(rU)] = (1
dr r dr
+ v)a dT
dr
(g)
trica respecto al centro. Si la temperatura T no varia a lo largo del
espesor del disco, podemos suponer que ocurre lo mismo con las tensiones integración de esta ecuación da:
y despla;¡;amientos producidos por el calentamiento. Las tensiones (1r y 0"8
satisfacen la ecuación de equilibrio: u = (1 +.. v)a -1r !.r• Tr elr + Olr + -2
a
r
(h)
dnr + (fr -...!!..! = O (a) el límite inferior de integración, a, puede ser elegido arbitraria-
dr r
Para un disco con un agujero, puede ser el radio interior. Para
deducida de la ecuaClOn (40), página 83, haciendo R = O. La tensión disco macizo podemos tomar 0=0.
tangencial 'rU será nula por razones de simetría. Las componentes de la t~nsión se obtienen, ahora, llevando la solu-
Las rel;;ciones (52) entre tensión y deformación, deberán ser modifi- (h) a las ecuaciones if) y sustituyendo los resultados en (d). Se tiene
cadas ya que la deformación es debida por una parte a la dilatación térmica
y por otra a la tensión. Si Er representa la deformación radial real, f. - cr.T
será la parte correspondiente a la tensión. Tendremos entonces: a, = -aE.1:, (r Tr dr
r' la + 1 -E 11 2 [Ole1 + /1) - O2 (1 - 11) ~J
r
(i)

(b) . .
·.aq =
1!.T
aE· T2 a
E )12 [ Ol(l
Trdr - ",ET + 1- + JI) + 02(l - JI) T2
1] w.
y de forma semejante:.
las constantes C l y Cz vienen determinadas por las condiciones
(/;)
macizo tomamos a = O Y observando que:
I Este problema fue estudiado por J. P. Den Garrog, .1. Frallklin 111S1., vol. 222, pág. 149
1936, ni Investigar Ins tensiones de origen térmICO producidas durante el proceso de la···soldu·
dura.
1
Hm-
,....0 l'
irO
Trdr =O
450 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGEN TIlRMICO 451

2
+ ¡¡)aT = 1 ~ v (0" - 1=-; 0'0)
vernos, según la ecuación (h), que C 2 debe anularse para que u sea nu);¡
en el centro. En el borde r = b, debernos tener O'r = 0, de donde según E, - (1
la ecuación (i): (b)
EO - (1 + )I)aT = 1 ~ (0'0 - )12 1 .: )1 0',)
Vemos fácilmente que estas ecuaciones pueden deducirse a partir de
Las tensiones vendrán, pues, dadas por las relaciones: las correspondientes a la tensión plana; ecuaciones (h) y (e) del párrafo
, precedente, sustituyendo e'n ellas E por EICl - J.2), J' por JI/(l - J') y rl por
(~ Io ~ !o' Tr dr)
b
CT, = aE Tr dr - (237) (1+ v)a.
Las ecuaciones (a) y (f) del párrafo precedente siguen siendo válidas.
El cálculo dé u, 0', y 0'"0, se realiza exactamente de la misma forma. Pode-
+ ~ Io + ~ Io
b r
ITa = aE (-T Trd¡' Trdr) (23~) mos escribir, por tanto, los resultados, realizando las sustituciones citadas
en las ecuaciones (h), (t) y (;). Obtenernos de esta manera
que dan valores finitos en el centro, puesto que:
1 + 11 oa o_ 11,' Trdr+C11'+-C 2

1
Jim""'i
"...0 r
!o'
o
Trdr = -21 To
u= __

cr
1-11
ixE l!.r,Trd¡'+--
= ___
l'

E (C¡ C2)
a r
(e)

0- ~-- (d)
1 1'2 1 1-
1ir Tr dr - -aET- + ---
r -)1 a +)1 211 ¡.2
donde To es la temperatura en el centro.
OlE E (G\ C2)
135. Cilindro largo de sección circularo En el estudio de este
as = - -'-
1 - 11 1'2 a + ---- + .....
1- r-
JI 1 JI 1 - 2/1
(e)

problema, se supone que la distribución de la temperatura es simétrica


respecto al eje e independiente de la coordenada axial zJ. Comenzaremos (a):
estudiando el caso en el que el desplazamiento axial w es idénticamente
nulo y modificaremos a 'continuación la solución para incluir el caso de (f)
cKtremos libres,
Dada la simetría axial del J}roblema y la uniformidad del mismo según mantener w = 0, eS preciso que una fuerza normal, definida por la
esta dirección, las tres tensiones y las tres deformaciones tangenciales serán eCllaC;¡OIO lf), sea aplicada en los extremos del cilindro. Añadiendo una ten-
nulas, por 10 que sólo tendremos que considera¡' las tres componentes aro axial 0'". = Ca, podemos elegir Ca de forma tal que la fuerza resultante
ero, (Jz. Las relaciones tensión-deformación son: los extremos sea nula. La distribución de fuerzas de resultante nula
,que actúa sobre cada extremo, produciní únicamente tensiones locales,
1 'como se deduce del principio de Saint-Venant.
E, - aT = Eh - V(0'8 + er.)J , Las ecuaciones (d) y (e) seguirán dándonos las tensiones (J'r Y (Jo. El
1 ,Qt:sp'¡a,lanme:nt,o ll, sin embargo, es afectado por la tensión axial C s, siendo
EO - aT = E [iTe - v(O'", + cr.)J (239)
nñadir al segundo miembro de (e) el término -'vCar/E. El des-
pl;azamiento axial será el correspondiente a la tensión uniforme Cs.
Ez - aT = E1 [O', - v(O'r + O'"o)J Cilindro macizo. En este caso anulamos la cantidad a límite inferior
e las integrales de las ecuaciones (e), (d) y (e). El desplazamiento u debe
Teniendo en cuenta que w = O, €. = 0, la tercera de estas ecuaciones nos da rse para r = O 10 que exige que C2 = O.
La constante C¡ se obtiene a partir de la condición de que sobre la ¡,
(a) r = b no actúe ninguna fuerza, o lo que es lo mismo, que j:

Sustituyendo este valor en la~ dos primeras ecullcioIles (239), resultl1: b = O. Haciendo cntonces C 2 = °
y a = O en la ecuación (d), resulta: :;

L
~_.....,.:C.,.:l_-_~ = _~_..!:.2 (b ~1' d1' (g)
I La primera solUCIón d ••• le problema fue obtenidn por j. M. C. Duhamel, l\1emoires ...
par rlivers sava/r/$, vol.' S, pág, 440. París, 1838.
(1 + 11)(1 - 211) 1~ JJ b Jo
"

i
452 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE OlUGEN TERMICO 453

La resultante ele la tensión axial (j) es: en la que k es lu conductibilidad térmica, e el calor específico del material y I! la
densidfid. Sustituyendo la serie (1) en la ecuación (241) y tenienuo en cuentu el hecho
[1' 21!"exE (b" 2vEG 1 b2 de que':
Jo CT, 2'111"dr = -1 _ v Jo 'lrdr + (1 + 1')(1 - 2v) 11"
(r Jo
Jo (r) br (PnS")
{J"ii I'dr a;.JL
=
2
y la de la tensión axial uniforme Cs es Ca' nb El valor de Ca que anula •

la fuerza axial total viene dado, entonces, por la relación.


2 27iexE {b 2vEC1 2 (k)
Ca - 7ib = ~ Jo Tr dr - (1 + v) (1 _ 27,5 -rrb (h)
sustituyendo la serie (:) la ecuación (242), resulta:
Las expresiones finales de u, aro O' Q, O'z, deducidas de las ecuaciones (e),
= 2",ET, ~ e"""
.. {...!.
e11

+ ..!.. ~ J,fp,,(r/bll_ Joftl.(r/bl]}


(d), (e), (1), (g) y (h), son: 0"8
(l)
1 - v 1.. tln" IiO'· JI ({in)
T tlnJ ,({in)
,,-1
- J~¡u 'l'rdr +.!r Jo{r Trdr]
t! = 1 + vv·. ex [(1 r..
_ 2v) -b (240)
1- ~ ' la serie (2) en la ecuación (243l, tenemos:

(1'. = _c: E
_ (.!.. (b 'l'T d'l'
1 - v b2 Jo
- !.
)'2
f' Tr dr)
~. = 2aEZ..~ '\'
1 - v 1..
~

n=1
8-"" {..!
lin'
_JAfp"Cr/b)]}
JI(Pn)
(J ..
(m)

tIq = aE
1 -
(.!.. ¡o 'l'ror +.;r Jo(" 7'rd,. -
v b Jo 2
r) (242)
Las fórmulas (k), (1) Y (m) representan la solución completa del problema. En los
·trabajos de A. Dinnik y C. H. Lees, antes mencionados, se desarrollan filgunos
nunl.él'icos..!.

IT. -
-
_ aE
---
1- V
(2vlab
-
b o 2
']';¡
ru-T - 'j') (243)

Tomemos, por ejemplo, un cilindro largo euya temperatura inicial sea constante
e igual a T,. Si a partir del instante t = O la superficie lateral del cilindro se mantiene 70
a temperatura cero', la distribución de la temperatura que corresponde a otro g
E: 60
instante t, viene dada por la serie' "
ü 50
2' = '1'. L
~

,,=l
AlOJo (Ii .. n n·' (i)
L.
R.4D
1- 3D
20
en la que Jo(!1"r/b) es la función Dessel de orden cero (véase 111 pág. 427) Y fJ es el
símbolo de las raíces de la ecuación Ju(fi) = O. Los coefícicntes de la serie (1) son: ID
2
A .. = 7;-;:J¡ ({Jn)
y las constan tes P.. vienen dadas por la ecuación: FIG. 225
_ le Ii,,' (j)
Pn--cp'/,' La figura 225 representa a la distribución de temperatura en un cilindro
, Se supone qlJe la superfiCIe del cilindro toma bruscamente la temperatura cero. Si la acero, que se supone a temperatura inicial uniforme e igual a cero
temperatura de la superficie es T" debemos sust,tuir To por T. - T, en las ecuaciones oh-
tenid~s. . , \léase E. Jahnke y F. Emde, FUllktlo/lenta]eb" plÍg. 165, Dedin, 1909.
, Véase Byerly, Fou·,ier Series alld Sp".rical Ilamlonics, pág. 229. El cálculo de las tensio- • La distribucióll de temperutum en los sólidos durante el proceso de calentamiento o
. nes téTlT\icRS para este cnso, puede encontrarse en A. Dmmk, Applicarions o] Bessel's Ftlnction ha sido estudiada por Williamsoll y Adamo, Pl&ys. Reu., serie 2, vol. 14; pág. 99,
to EluSlicity Prohlems, 2." parte, pág. 95. Ekaterinoslav, 1915. Véase tumblén C. H. Lees, Ingberg, Griffin, Robinson y W.lson han estudiado experimentalmente el efecto del fuego
Froc. Roy. Sor:. (Lomioll), vol. 101, pág. 411, 1922. del agua 8obr., Ins columnas. Véase U. S. Bur. Standllrds, Tic/¡. Papt!T, 184, í921.
3 F..stos datos han sido tomados de A. Stodola, Da1Tlpfl-/llld Gmtllrbinell, ú.n edición, pó-
961, 1924.
454 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGIlN TERMICO 455

y cuya superficie se mantiene a la temperatura TI a partir de un instante


Ur = --
aB -:¡1(r2 _a2 !.b Tr clr - !.T)
-.' - -
1 - JI r" b2 - a'
Tr dr (244)

+ a21b l'rdr + 1Trdr -


t = O. Las diferentes curvas representan la distribución de temperatura a "

= -aE- -r1 (,,2


a l<l largo del radio para distintos valores de tJb2 (t es medido en segundos y b r

en centímetros). De 'las ecuaciones (t) y (J) se deduce que la distribución (1'8


1- JI
---
b 2
a 2
-
2
a a
7' r2) (245)
de temperatura es la misma en distintos cilindros, si la duración del calen-
tamiento es proporcional al cuadrado del diámetro. La figura permite 0'- =, -aE- ( -----
2
2
2
J.b Tr dr - ,T) (246)
- 1 -" b - a a
calcular la temperatura media del cilindro completo y también la de una
porción, interior del mismo de radio r. Obtenidas e~tas temperat1.lraS, Consideremos, pOI' ejemplo, la existencia de un flujo estaciollario de
obtenemos las tensiones térmicas mediante las ecuaCIOnes (241), (242) calor. Si la temperatura de la superficie interior del cilindro es T, y la de
Y (243). Si tomamos para t un valor muy pequeño, las temperaturas medias la superficie exterior es cero, la temperatura T a una distancia cualquiera
antes mencionadas tienden a cero y en la superficie se tendrá: T del centro viene dada por la expresión:

c¿ET I T· b
(Jr = 0, U'O = lT.z: = - 1 _ ]1 T = log(b/a) log T (n)

Este valor, que es el máximo que puede. adquirir la ten~~ón que se .origina 'Llevando este valor a las 'ecuaciones (244), (245) Y (246) obtenemos la8
por calentamiento 'en un cilindro, eqUlvale a la tenslOn. ~ecesana para 'siguientes expresiones para las tensiones de origen térmico J.
suprimir por completo la dilatación térmica en la superfIcie. D~ra~te el
calentamiento, esta tensión es una compresión y ~urante el er:fna~le.n:o,
Ufill ttaCcióIl_ Con el fm de reducir la tensión máXIma, es corriente IniCiar
(1'
r
=
2(1 -
aBT,
JI) log(bja)
[ - lo -b -
gr
a
(b 2 - a2 )
2
( 1 - -b ) lo -
r2 ga
2
bJ
el calentamiento de árboles y rotores a una temperatura algo inferior a la
final, TI> y aumentar el tiempo de calentamiento en proporción al cuadrado (1'9 = 2(1 _ aBT¡ [ b a
JI) log(bja) 1 -lag;: - (b2 _
2
(2)
(
1
b)
+12
2
bJ
loga (247)
del diámetro de la pieza.
Cilindro con un agujero central'. Si llamamos a al radio del agujero rT z
aBT i [
= 2(1 _ JI) log(b(a) ] - 2log;: - (b2 _ a2) lag ji
b 2a
2
bJ
y b al radio exterior del cilindro, las co~stantes CI '! C 2 , que figuran en
las ecuaciones (e), (d) y (e), son determmadas mediante la condición de T, es positivo, la tensión radial es de compresión en todos los puntos,
nulidad de rT, para esoS dos radios. Entonces: en las superficies interior y exterior del cilindro. Las compo-
de la tensión 0'0 y rTz toman sus valores máximos en esas mismas
.~_c~=o
2 Haciendo r = a, resulta:
1 - 2v a

- 1_
c¿E
JI'
1
b2
lb
a T7 dr
E
+1+ JI
(CI
i _ 21' -
0 2) _
b2 - O (0'8)..- = (0',),_ =
O/ET¡ (
b 1 - b2 _ a 210g ti
2b
2
b) (248)
2(1 - v) log-
a,
de donde se deduce:

__z
,·-EC
1 +"
=_____
aE a !.b Tr dT
1- JI
2
b -
2

a 2
a
T = b se tiene:

(1 + ,,)(1
EC I
- 2,,)
= ~
1- V
1_
__
bZ - a2
J.b Tr dr
a
(249)

Sustituyendo estos valores en (d), (e) y (f¡ y añadiendo a l~ última l~ ten- : figura 226 muestra la repartición de las tensiones de origen térmico
sión all:iul Cs, necesaria para anular la fuerza resultante aXial, se obtIenen través del espesor d~ la pared cilíndrica para el:,caso particular en que
las fórmulas
, L. Barker, E71gint!eriug, vol. 124, pág. 443, 1927, ha dado ciertos gráfICOS que facllnan
cálculo de las tensIones medlonte las ecuacJOncs (247).
1 Véase R. Lareoz, Z. Vey dentscJi. Ing., vol. 51, pág. 743, 1907.
TllOElrA DE LA ELASTICIDAD
TENSIONES DE ORIGEN TllRMICO 457
456
aJb = 0,3. Si T, es positiva, las tensiones son de compresión en la super. y siempre que los bordes estén sujetos, de tal manera, que la flexión de
ficie interior y de tracción en la superficie exterior. En el caso de matenales la placa, producida por el calentamiento no uniforme, sea impedida [véase
tales como piedra, ladrillo u hormigón, que son débiles a la tracción, es la ecuación (k) del § 132]. .
de temer la aparición de fisuras en la superficie exterior del cilindro.

z z
Cuando el espesor de la pared del cilindro es peq~eño: ~omparad? con (a) (óJ
su radio exterior, las ecuaciones (248) Y (249) pueden Simplificarse pomendo F¡c. 227

b m S m3
b
+m,
- = 1 lag - = m - - + - - ...
a a 2:3 Si al flujo estacionario de calor se superpone una fluctuación de tem-
de alta frecuencia, las tensiones que esta última provoca pueden
y considerando que m es una cantidad pequeña. Resulta entonces:
calculadas de una manera análoga a la explicada para el caso de placas

(0'0)'_ = (0'.)._" -
_ _ aRTi
2(1 - v)
(1 -1- ~)3 (248')
(véase el § 132)1.
el estudio precedente, se supuso que el cilindro es muy largo y el
de las tensiones que hemos realizado es aplicable a las regiones ,
= 2(~E2'¡v) (1 - i)
(249') de los extremos. Cerca de los mismos, las irregularidades locales
(O'o),...¡, = (Uz)r../>
~Ulll!l'll~:an el problema de )a distribución de las tensiones de origen ténni·
Si la temperatura en la superficie exterior del cilindro es distinta de cero, : problema éste que vamos a considerar ahora para el caso de un cilindro I
los resultados anteriores podrán ser aplicados sin más que sustituir en todas . paredes delgadas. La solución (250) exige que las fuerzas nonnales, ·1
las ecuaciones la temperatura T, por la diferencia T, - T o entre las telIl.- . en la figura 227a, estén distribuidas sobre los extremos del
·1
peraturas exterior e interior. Para hallar las tensiones en un cilindro con extremos libres de~
En el caso de una pared muy delgada podemos despreciar el / superponer a las tensiones (250) las producidas por fuerzas jg~ales
m/3 en comparación con la unidad, en las ecuaciones (248') Y (249 ). . opuestas a las mostradas en la figura 227a, fuerzas que en el caso de
Resulta entonces: . pared delgada de espesor h, pueden ser reducidas a momentos flec·
como se muestra en la figura 227b, uniformemente distribuidos a
oET, . largo del borde de) cilindro y cuyo valor por unidad de longitud es:
(ero),_a = (0',) ....... = - 2( 1-- v) (2;JO)
aBT, aET i h2
.lI1 '"' 2(1 _ v) (f (o)
(ero),../> = (IT,)r_b = i(1=-v)
lo que nos dice que la distribución de las tension~s de origen
a través del espesor de la pared, es igual a la que. se produce ~n el , El cálculo ue J"S tensiones UU ongen térmico en Ins purcues de los cllmdros llene gran
en el diseño de máquim.s Diesel. G. Eichelberg (Farschungsarbeilet/, núm. 263,
de uml placa de espesor 2c = b - a, cuando la temperatura vIene una solUCión gráfica del problema para el caso en el que el espesor de la pared
por la ecuación (fig. 222): celllll,e".,,,ru v"ri.n u lo largo del c¡]mdro. Se puede encontror información sobre ·Ia dls-
de temperatura en los motores Diesel en los SIgUIentes trabajos: H. Jo" G. Letsol\,
T = ~_#._­ Mech. Eng., pág_ 19, Londres, 1925; A_ Niígel, Engineert'llg, vol. 127, págs'. 59,179,279,
(b - a) Y 626, 1929. ' ..

'!
·1
458 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENsrONES DE ORIGEN TERMrcO 459

Para calcular las tensiones producidas por estos momentos, imaginemos La tensión máxima de tracción en el extremo libre de un cilindro es, pues,
una faja longitudinal de anchura unidad separada de la envolvente cilíndri- un 25 % mayor que la obtenida mediante las ecuaciones (250), para los
ca. Una faja tal puede ser tratada como si estuviese apoyada sobre una puntos alejados de los extremos. Lá ecuación (P) permite constatar que
fundación elástica. La curva de deflexión ele esta faja viene dada por la el aumento de la tensión en la cercanía de los extremos libres del cilindro
ecuación 1 es de carácter local, puesto que depende de la flecha u, y disminuye rápida-
· mente cuando la distancia z al extremo aumenta.
i'.1e-~·
t¿ = 2{32D (COR fJz -sen (3z) (p) Este método aproximado para el cálculo de las tensiones de origen
térmico, basado en la curva de deflexión de una barra sobre fundación
donde: elástica, puede aplicarse también en el caso de una temperatura variable
· a lo largo del eje del cilindro1• .
fJ= (q)
136. Tensiones de origen térmico en una esfera. Estudiaremos
y e es el radio medio del tubo cilíndrico. Esta curva de de flexión permite aquÍ el caso sencillo de una distribución de temperatura simétrica respecto
calcular llls tensiones de .flexión crz correspondientes y las tensiones tan- · al centro, función, pues, solamente, del radio· r 2 •
genciales (fe p~ra todo valor de z. La flecha máxima se encuentra eviden- Por razone..<¡ .de simetría no habrá más que tres componentes de la
temente en el. extremo z = 0, donde: tensión no nulas: la componente radial (Fr Y dos componentes tangencia-
les er" como en el § 121, ll1s cuales deberán satisfacer la condición de equi-
·libdo de un elemento en la dirección radial (fig. 202, ecuación Ce), pág. 399J.
d!T
-dr
r
+ T-2 (I1 r - !T,) = O (a)
La componente de la deformación, que corresponde a este valor, según
la dirección tangencial, es: Las relaciones tensión-deformación serán:

(r) E, - CI.'1' = ~ (11, - 2Vl1t) (b)

E, - 0:'1' = ~ [erl - v(err + <TI)] (e)


La componente de la tensión de dirección tangencial en la superficie exte-
rior de la pared, se determina, empleando la ley de Hooke, por la ecuación: y siendo u el desplazamiento radial, tendremos

o:E'1'·~ vo:E1'¡ =-,


({71. ~t

er8 = EEO + Vl1 g


= 2";3 (1 _ v) - 2(1 - JI)
Er
ti/"
El =-

(d)

Sumando esta tensión a la tensión correspondiente calculada mediante la


ecuación (250), obtenemos la tensión tangencial máxima para un cilindro E
de pared delgada -{ extremos libres, la cual es:
rTr = (1 + v)(l _ 2,,) [(1 - v)er + 2VEI - (1 + v)o:T] (e)
E
!T¡ = (1 + v)(l _ 2v) [El + VEr - (1 + p)o:T1 (f)
(251)

, 1 S. T,moshenko y 1. M. Lessells, Applied E/astidty, pág. 147, 1925 y C. H. Kent TrallS.

Tomando para " el valor 0,3, resulta: ·.A.S.M.E., Apphed Mechanics DlyiS10n, yol. 53, p.íg. 167,1931. . '
· , Este problema fue resuelto por Duhamel, loe. cit. F. Ne,!man, Ablu.mdl. ARad. Wis,.,
, 1841; véase también su Vv,lcnsllIIgen iiber die TIzeoyie der Elastizitiít der festell Kbper,
.. 1885; ]. Hopkinson, Messenger of ¡'vIath., vol. 8, pág. 168, 1879. El cnso de tempe-
raturas no simétricAs ha sido estudiado por C. W. Dorchardt, Nlvllatsber. Akud. Wiss., Berlín,
, Véase S. Tlm~shenko, Strellgth vf N[aterlO[s, 2." edICIón, vol. 2, pág. 166. 1873, pág. 9.
460 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGEN TERMICO 461

Llevando estas expresiones a la ecuación .(a) y sustituyendo Er Y E, por donde lal:l componentes de la tensión serán:

r.
sus valores, dados por (d), resulta la siguiente ecuación diferencial para u:
~ + 3. a~¿ _ ?~ = 1 + JI. a?2' (g)
d~ ~ l-JI b (252)
la cual puede escribirse: aE
(T, = 1 _
(2¡;s ro
Jo Tr dr
2
+ ra1Jo(r Tr 2
dr - T
)
+ l'

ar [!.
1 JI d'l'
!:.. !!:... (rZ'II)] =1-- -JI' adl'
r 2 dr
-

y cuya solución es: temperatura media de la esfera en el interior de la superficie esférica


1 JI
U. = - - .
l-JI
+ 1
a • -:-
r2
ir.

Tr- dr + GIr + 2"
O
r
2
(h)
radio'r es:
4lT fa' Tr
-1._
2
dr
= -3
31" TrZdr
donde el y C 2 son constantes de integración que habrá que determinar
lr"11¡3 r o
con arreglo a las condiciones de contorno, y a cualquier límite inferior , pues, que el valor de la tensión tr, en un punto cualquiera, definido
de integración conveniente, tal como el l'adio interior si se trata de una el radio r, es proporcional a la diferencia entre las temperaturas me-
esfera hueca. ias de la esfera completa y de la esfera de radio T. La tensión t~ngeneial,
Esta solución puede ser llevada a las ecuaciones(d) y utilizar los resul- un punto cualquiera, se obtiene multiplicando el coeficiente:
tados en las (e) y (1). Resulta entonces:
rr = _ ~.!.
, 1 - JI r 3
i"4
Tr 2 dr + 1 EC!
- 2J1
- 2EC .!.
1 + r
2

JI
3
(i)
2cxE
3(1 - v)

rr =
I
~ .!.
1 _ JI r3
J.' Tr
4
2 dr + EC! + EO • . !. -' ~
1 - 2111+ r 1 - JI
3
11
(J) media de la esfera completa + (1{2 de la temperatura media
la esfera dc radio r) .... 3/2TJ.
El cálculo de las tensiones en. cada caso particular, puede realizarse
Consideremos ahora algunos casos particulares:
dificultad si se conoce la distribución de la temperatura l. G. Grünberg 2
Esfera maciza. En este caso, podemos dar el valor cero al límite infe-
desarrollado un ejemplo interesante de la aplicación de cálculos de este
rior, a, de las integrales. Asimismo, es preciso que u = O para r = 0, lo
en relación con el estudio de la resistencia de materiales i8ótropos
que llevado a la ecuación (h) implica que C2 = O, puesto que:
'dos a una solicitación triaxial de tracciones iguales. Si una esfera
cuya temperatura inicial es To es introducida en un líquido que se
lím ~ (' ']',2 dr = O
..-0 r- Jo IrIlPnrru a una temperatura mayor TI, la porción exterior de la esfera

dilata, ejerciendo sobre el centro de la misma una tracción uniforme


Las componentes de la tensión, dadas por (¡) y (;), serán pues finitas en
todas las direcciones, cuyo valor máximo, acontece d~spués de trans-
el centro, ya que: . el tiempo:
Iím!'3 {' 1'r2 dr = To
r-+O r Jo 3 t = 0,0574: b~~p (k)
donde T. es la temperatura en el centro. La constante el viene determinada'
esta fórmula b es el radio de la esfera, k la conductibilidad térmica,
por la condición de que la superficie exterior, r = b, esté libre de fuerzas,
el calor específico del material y (J la densidad.
o 10 que es lo mismo que a, = O. Haciendo entonces a r = 0, a = 0,
Ca = 0, r = b, en la ecuación (i) resulta: , VarIOs ejem,r!?" de tilles ~álclllos son dados en el trabajo. de E. Honegger, Feslclrrift
A. Stoáola, Zunch, J92\1. En la obm Citada de Adorno y WI1hnmson se d.. una tabla pan,
. Ea¡ = 2aE
1 - 21' 1 -: v
.1.
b3
r
Jo
Tr2dr
2
de la distrIbUCIón de temperatura en una esfera durante su calentamIento o enfna-

G. Grlinberg, Z,. Physik, vol. 35, pág. 548, 1925.


~62 TEORIA DE LJl. ELASTICll?AD TENSIONES DE ORIGEN TIlUMICO 463

La mllgnituu de esta tracción máxima.es': Como vemos, la tensión a r es nula para r ",.~ a y r ,"'- b. Se hace máxima o
mínima cuando! .
()(E (l)
0', = 0'1 = 0,771 2(1 _ ji) (T1 - T o) 2 _ :3a2 b2 .
r -a Z +ab+b2
Lll tensión máxima de compresión, que se produce en la superficie de la es-
f~ra en el momento de aplicar la temperatura TI es ·igual a aE( TI - To)/l -1')' Para T, > O, la tensión al aumenta a medida que r crece. Para r = a,
Este valor es el mismo que antes obtuvimos para un cilindro (véase la tenemos:
pág. 454). Aplicando las ecuaciones (h) y (l) al caso del acero y tomando
2 a, =
aET. b(b - a)(a 2b) + (n)
b = 10 cm y T 1 - To = 100 oC obtenemos <Ir = a, = 1270 kg/cm y 2(1. - JI) bS - a 8
t = 33,4 s.
Esfera hueca. Llamando a y b a los radios interior y exterior de la Si r = b, resulta:'
esfera, determú1amos las constantes el y e z de las expresiones (z) y (j)
empleando la condición de que 0', sea cero en las superficies interior)
a, = aEr, a(b - a)(2a + b) (o)
2(1 - v) b3 - aS ,
exterior. La expresión (¡) ~a:
En el caso de una esfera hueca de pared delgada, podemos poner:
~_ 2E0 2 • .!:..=O
1 - 2v 1 + ji a3 b = a(l + m)
_ 2()(E.!. (b Tr 2dr +~ _~ ..!.3 = O donde m es una cantidad pequeña. Sustituyendo en (n) y (o) y despreciando'
1 - v b3 Ja 1 - 211 1 + ji b las potencias superiores de m, obtenemos:
Despejando el y e2y llevando los valores encontrados a (z) y (j) obtenemos:
para r = a, a, = - 2(1 _ v)
()(ETi (
1
2)+ 3' m
(253) para r = b,'
aET,
a, = 2(1 _ ji)
( 2)
1 - 3' m

Si despreciamos la cantidad 213m, obtenemos para las tensiones tangen-


Vemos, pues, que las componentes de la tenslOn podrán ser calculadas ciales los mismos valores que antes fueron deducidos para un cilindro de
pared delgada [véase las ecuaciones (250)J y para una placa delgada em-
cuando se conozca la distribución de temperatura.
Consideremos, a título de ejemplo, el caso de un flujo estacionario de potrada en su contorno.
calor. Llamaremos T, a la temperatura de la superficie esférica interior
y supondremos nula la temperatura en la superficie exterior. La tempera- 137. Ecuaciones generales. Las ecuaciones diferenciales (132)
que expresan las condiciones de equilibrio en función de los desplaza-
tura a distancia r del centro es entonces:
mientos, pueuen ser generalizadas para incluir los casos de tensiones y
T=2.(~-1)
b- a r
Cm) deformaciones de origen ténnico. Las relaciones tensión-deformación pan,
" los problemas tridimensionales son:
Sustituyendo este valor en las expresiones (253), resulta: 1
E" - aT = E [0'. - v(0'1I + 0'.)]
Ev - aT = ; [0'. - v(l1'" -1- O'.)} (a)

E. - a.T = 1 [o', - veO': + 0'11)]


Ty ,
I Hemos supuesto en este cálculo que la superficie de la esfem toma inmediatamente In
'Y¡¡. = a' (b)
temperatura T, del fluido.
464 TEORlA DE LA ELASTICIDAD
TENSIONES DE ORIGEN TERMICO 465

Las ecuaciones (b) no son afectadas por la 'temperatura, puesto que la y las tensiones normales:
dilatación térmica libre no produce ninguna distorsión angular en un cuerpo ~ET
isótropo. 1 - 2v (e)
Sumando las ecuaciones (a) y usando la notación definida en (7),
resulta: aplicadas sobre la superficie.
1
e = ]jj (1 - 2v)9 3aT + Si podemos determinar la solución de las ecuaciones (254) que satis~
faga las condiciones de contorno (255), esta solución nos dará los despla-
Despejando las tensiones de las ecuaciones (a) y empleando este resultado, zamientos u, v, w, a partir de los cuales, y mediante las ecuaciones (h) y (e),
obtenemos: podremos determinar las tensiones tangenciales y normales. Estas últimas
CtET ecuaciones, las (e), nos muestran que las componentes normales de la
u" = Xe + 2Ge" - r-::2v Ce) tensión constan de dos partes: a) una parte deducida en la forma habitual de
las componentes de la deformación; b) una presión «hidrostática') de valor:

Llevando estas expresiones, así como las'ecuaciones (6), a las ecuaciones de ~ET
(f)
equilibrio (127) y suponiendo que las fucrzas másicas son nulas, resulta:

(A. + G) axDe + G V2u _ ~ aT = O


1 - 211 Bx (254)
proporcional en todo punto a la variaclOn de temperatura en cse mismo
punto. La tensión total producida por un calentamiento no uniforme se
obtiene, pues, superponiendo la presión hidrostática (j) a las tensiones
Estas ecuaciones remplazan a las (131) en el cálculo de las tensiones tér- producidas por las fuerzas másicas (d) y las fuerzas de superficie (e).
micas. En cuanto a las ecuaciones de contorno (128), sustituyendo los A la misma conclusión podemos llegar por otro camino, Imaginemos,
valores Ce) y (b) Y suponiendo que las fuerzas de superficie son nulas, en efecto, que el cuerpo sometido a calentámiento no uniforme es sub-
nos quedan: dividido en elementos infinitamente pequeños, y supongamos que las
deformaciones térmicas €,. = €v = €z = IJ.T, de estos elementos, son con-
aET l = "el + G(au 1+ au m + Bu n) trarrestadas por la aplicación a cada elemento de Wla presión uniforme p
1 - 2v ax ay 82 cuyo valor, conforme a la ecuación (8), viene dado por (j), De esta forma,
+ G (au 1 + av m+ aw n) (255) la deformación térmica es eliminada y los elementos toman su posición
ax a:c a:c mutua para formar un cuerpo continuo, que conserva su forma inicial.
......................... La distribución de la presión (f) puede realizarse aplicando al cuerpo
inicial, formado por los elementos, ciertas fuerzas másicas y cicrtas
Comparando l¡lS ecuaciones (254) y (255) con las (131) y 134) "\emos que
presiones superficiales, que deberán satisfacer a las condiciones de equi-
los términos: librio (127) y a las de contorno (/28). Sustituyendo en estas ecuacionc¡;
CtE BT e/E aT aE a'1' los valores:
-l-'2v 8x' - r=z¡; ay' - 1 - 2., Tz aET
u", = (f'~ = u.. = -p = - 1 _ 2/ r"" = r~, = r". = O (g)
sustituyendo a las componentes' X, Y, Z de las fuel'zas másicas y los:
encontramos que: para mantener la forma inicial del cuerpo formado por
aET aET OI.ET los elementos, en su forma inicial, las fuerzas másicas necesarias son:
1 - 2p m, ---n
1 - 2p 1, 1 - 2p
a las componentes X, Y, t,
de las fuerzas de superfiéie: Los desplazamien-
aE é)'l'
X=----, y=~aT, C/.E a1'
z=--- (h)
1 - 21' 8x 1 - 2v ay 1 - 21' 02
tos u, v, w, producidos por el cambio de temperaturu T son, pues, los
mismos que provocarílln las fuerzas másicas: y además, deberá aplicarse hl presión (j) sobre su superficie:
aE a1.' aE aT z = ~E aT Supongamos, ahora, que los elementos están vinculados entre sí )'
X=----, y= - - ---, (d)
1 - 2v ax 1 - 2v ay - 1 - 2v a~ suprimamos las fuerzas (h) y la presión superficial (f). Las tensiones térmi-
3tJ -l'tOmA DE LA I!L~TTCID"O
+66 TEORIA DIl 1./\ EL/\STICIDAD TENSIONES DE ORIGEN TElIMICO 467

C¡¡S se obtendrán entonces evidentemente, superponiendo a las presio- y de la tracción normal:


l1e~ If) las tensiones producidlls en el cuerpo elástico por las fuerzas másicas: ClE7'
(j)
r=2v
x= _ O/E aT y = _ O/E aT¡ Z = _ aE aT
1 - 2v en;' 1 - 2v ay 1 - 2v az la cual actúa sobre la superficie lateral solamente. Este problema, que corresponde
" un estado de deformación planl\ (E. _. O), es del tipo considerado en el § 16 con
y por la tnlcClón, normal a la superficie, de valor: la sola excepción de qUe es precIso pasar la ecuacIón (32) del caso de tensión plana al :1
de deformacióll plana sustituyendo l' por ,-/(1 - p). De esta forma, las ecuaciones (3i)
aET y (32) sernn remplazadas. por: '1
1 - 2v il
aET a'", . (k)
<1'. - 1 _ 2. = ay" :[
Estas .últimas tensiones satisfacen a las ecuaciones de equilibrio
y '1

acr. + 01'"" + a1'., ~ ~ aT = o ·i"


.,.,
ax ay az 1 - 2v ax (1) .,"
,1
acr. + ~1'"" + iJrv' _ ~ éJT = o (250) La función de tensión correcta es, pues, aquella que satisface la ecuación el) y pro-
'1
ay éJz az 1 -2)1 ay duce la tensión normal definida por (¡) sobre el contorno. En lo que se refiere a las
;!
.,"
aer, + 87•• + ~ru. _ __.aE aT = O tensiones, se calculan mediante ias relaciones (k) a las que deberemos superponer . :¡
.,.!
az az éJy 1 - 2)1 éJz las tensiones (g). :¡
La tensión axial a, se compondrá del término dado por (g) junto con el '(11~ -l- 0'.) :¡
!
deducido de eh). La fuerza axial y el momento f1ector resultantes en los extremos,
y Il las condiciones de contorno: . podrán ser suprimidos superponiendo UIla tracción simple y un par de flexión simple.
El caso de temión plana se presentará en una placa delgada en lu que lu tempera-
aET tura no varía a través del espesor. Tomando como plano xy el plano medio de la
cr.l + r••m + 1'""n = 1 _ 211 placa, podremos suponer que 0'. = t z • = "" = O. Podernos, igualmente, considerar
que todo elemento es libre de dilatarse en la dirección z. Bastará, pues, para unir a
aET
erjJm + 11- + 1'.. 1. = 1 _ 2v m
1'•• (257) los elementos, con suprimir la dilatación en las direcciones x e y. F.sto exige qu;::
aE!J.'
aET = = - r=-;' =O (m)
er,11- + r.,l + r••m = ~ n
IT= lrlJ Tz:U

Sustituyendo estos valores en las ecuaciones dc equilibrio (18) encontramos que


las fuerzas másicas necesarias son iguales a:
junto con las condiciones de compatibilidad estudiadas en el § 77. La so-
lución de estas ecuaciones, Ilñadidas a la presión (j), nos da la expresión x=·_~aT, . y=~aT (n)
1 - vax 1- p ay
de las tensiones de origen térmico en un cuerpo sometido a un cambio de
y que es preciso aplicar una compresión normal de valor uET/(1 - v) sobre el con-
temperatura. torno de la placa.
Suprimiendo estas fuerzas, deducimos que la tensión térmica se compone de (m)
T~ndrem()s un estado de deformación plana en un cuerpo alargado, cillndrico y de las ttmsiones producidas por las fuerzas másicas:
() prismático, cuando la temperatura variable en la sección recta no varíe a lo largo
de las paralelas al eje del cilindro o del prisma (el eje z). T es entonces, indepen- X = _ ~ aT, y =_ aE aT (o)
1 - p az 1 - p ay
diente de z.
Comenzando de nuevo COIl la aplicación de las tensiones (g) que anulan la defor- y por lo tracción normal (lET/el - .) aplicada sobre el contorno. La dete¡'rninación
mación, tendremos que añadir las fuerzas másicas (h) en las que ahora Z = O, y.la de esta tensión plana constituye un problema del tipo considerado en el § 16. Basta
presión (f) actuará sobre toda la superficie, extremos incluidos. solamente con poner en las ecuaciones (31) y (32) la función:
Supongamos, ahora, que estando los elementos unidos unos a otros, suprirni-
mOR las fuerzas másicas y la presión ql1e actúa sobre la superficie lateral curvnda, V = aET
presión ésta que conserva nula la defOllnución axial e,. La distribución tensional 1- v
resultante, se obtiene resolviendo el problema C]ue corresponde a la aplicación de como función potencial correspondiente a las fuerzas (o).
llls fuerzas másicas: CUllndo el contorno está fijo, el problema se reduce a la obtención de las tensio-
nes producidas por las fuerzas músicas (o). Eu la págm~\ 185 fue explicado un mé-
(i) todo de resolucióf\ de este problema para el caso de una plata rectangufar.
468 TEORJA. DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE OIUGEN TERMICO 469

138. Tensiones iniciales. El método que hemos empl~ado para calcular las y por las fuerzas de superficie:
tensiones de origen térmico, puede ser aplicado al problema más general de las ten-
sitmes iniciales. Imaginemos un cuerpo subdividido en pequeños elementos y su- x= (~e' + 2G.¡i)l + G,,/=.'m + (].y• .'7/.
pongamos que cada uno de estos elementos, sufre una cierta defom1ación plástica, (f)
producida por una transformación metalográfica, definida por las componentes de
la deformación
De esta manera, el problema de la determinación de las tensiones iniciales queda
I
"Y:tJ:, (a)
reducido al sistema corriente de ecuaciones de la teoría de la elasticidad, en la cual
las fuerzas másicas y superficiales ficticias están completamente determinadas si se
Supondremos que estas componentes de la deformación son pequeñas y ql,le vienen conoce la deformación permanente (a).
representadas por funciones continuas de las coordenadas. Si las componentes de En el Caso particular en el que E.. ' ~ €; = E:
= aT y y./ = Jln' ~ " • .' = O.
qoe se truta satisfacen, también, las condiciones de compatibilidad (129), los ele- las ecuaciones anteriores coincidcn con las obtenidas para el cálculo de las tensiones
mentos en los que hemos subdividido el cuerpo se adaptan mutuamente después de origen térmico.
de la deformación permanente (a) y no habrá en él tensiones iniciales. DI e a
Consideremos, ahora, el caso más general cn el que las componentes (a) no
satisfacen las condiciones de compatibilidad, de forma que los elementos en los que
el cuerpo está subdividido no ,se acomodarán' entre sí después de la deformación
pelmanente, lo que exige la aplicación de fuerzas sobre la superficie de cada uno
de estos elementos, con el fin de satisfacer las ecuaciones de compatibilidad. Supo-
niendo que el material sigue siendo perfecl:'.unente elástico después de la deforma-
ción pennanente y aplicando la ley de Hooke, deducimos, de las ecuaciones (11) y (6),
que la deformación permanente (a) puede ser eliminada aplicando n cado elemento
las fuerzas superficiales:
lT/ = -(Ae l + 20".'), (b) Fu, 228
en las que:
Consideremos ahora el problema inverso en el que las tensiones iniciales son
B'=e;/+e/+E:r:' conocidas y queremos determinar la deformación permanente (a) que ha producido
esus tensiones. En el caso de materiales transparentes, tales como el vidrio, las ten-
Las fuerzas de superficie (b) pueden ser pro\'oeadas aplicando al cuerpo, forma- siones iniciales pueden ser estudiadas mediante el método fotoelástico (cap. 5).
do por 108 pequeñotl elementos, ciertas fuerzas másicas y superficiales, las cU'lles En otros casos, esas tensiones pueden ser determinadas cortando el cuerpo en pe-
deberán satisfacer a las ecuaciones de equilibrio (127) y a las condiciones de con- queños elementos y midiendo las deformaciones que en ellos se dan como conse-
torno (128). Sustituyendo las componentes de la tensión (h) en estas ecuaciones. cuencia de liberarlos de las fuerzas de superficie representativas de las tensiones
obtenemos para las fuerzas másicas la expresión:' que existen en el cuerpo antes de ser cortado. pel estudio precedente se deduce que
la deformación inicial produce tensiones iniciales solamente cuando las componen-
tes (a) de la deformación no satisfacen las ecuaciones de compatibilidad; de no ser
así esas deformaciones pueden existir sin que produzcan tensiones iniciales. De esto
(e) se sigue que el conocimiento de las tensiones iniciales no basta para determinar
las componentes de la deformación Ca). Obtenida una solución para esas compo-
nentes, podemos sumarlas cualquier sistema de deformación permanente que satIs-
y para las fuerzas superficiales la:
faga las ecuaciones de compatibilidad sin alterar hlS tensIones Iniciales l •
X .,= - (Ae l + 2G./)l - G"/:/m - G,,/:/n
(d) Las tensiones iniciales, que provocan d fenómeno de la Jable refracción en' el'
vidrio, dificultan nc>tublemente lo fabricación de instrumentos ópticos. Para dismi-
, Mediante la aplicación de las fuerzas másicas (e) y de las fuerzas superfichlles (d) nuir estas tensiones se recurre ordinariamente al recocido del vidno. El límite elás-
hemos suprimido la deformación inicial permanente (a), de manera que los elementos tico del .vidrio a temperaturas elevadas es muy bajo, por lo que el material fluye
bajo la acción de las tensiones iniciales. Después de un tiempo sufiCIente, el flujo
del cuerpo se llj\lstnrán entre s¡ para formar un cuerpo continuo. Supongamos,
plástico de la matena a la temperlltura elevada se traduce en una considerablc ltbc-
ahora, que los elementos citados se unen entre s( y que suprimimos las fu.erzas (e)
ración de las tensiones iniciales. El recocido produce un efecto análó'go cuando es
y (d). Las tensiones iniciales se obtendrán entonces, evidentemente, superponiendo
aplicado a diversas aleaciones metálicas y productos fOljados.
a las tensiones (6) las producidas en el cuerpo elástico por las fuerzas másicas:
Cortando un cuerpo grande en p,iezus mús pequeñas, se liberan las tensiones

x= -1x (MI + 2G ••/ ) - ~ (G"/ ••/) - ~ (G'Y./)


(e)
miciales a lo largo de las superficies de corte y la energía total de deformaCión causada

I H. Relssller ha estudiado el hecho de que el conjunto (a) no esté detenntnado comple-


tamente por las tensIones Jnlcwles. Véase Z. allge1JJ. Math. Medl., vnl. 11, plÍg. 1, 1931.
470 '¡'liaRlA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGEN TIlRMICO 471

por las tensiones iniciales disminuye. No ocurre siempre lo mIsmo, sin embargo, de la deformación son independientes de z, todas esas condiciones son
con el valor de la tensión inicial máxima. Consideremos, por ejemplo, un anillo verificadas a pri()ri excepto la primera. Esta se reduce a:
circular (fig. 228) al que suponemos sometido a tensiones iniciales distribuidas
simétricamente respecto al ccntro y cuya componcnte ao' varía a lo largo de la scc-
ción recta mil de acuerdo con una ley lineal (ah en la figura). Cortando el anillo
a2E= + 82Eu2 = O
ay2 8:c
radialmente, en la [anna en la que se indica en la figura, rnt!diante líneas a trazos,
se libenm las tensiones 0'0' a lo largo de esos cortes. Esto equivale a aplicar en los . ecuación, que teniendo en cuenta las (e) y (a) será igualmente satisfecha.
e.'Ctremos de cada porción de anillo dos pares iguales y opuestos que dan lUf$ar a Vemos, pues, que en el caso de un flujo estacionario de calor las ecuaciu-
una flexión simple, la cual origina una distribución de la tensión 110 a lo largo de 71!11
casi hiperbólica (véuse el § 27), la cual es representadu por la curva cde. Los tensiones nes de equilibrio y las condiciones de contorno, según las cuales la super-
rcsidunles a lo largo de //In después de efectuar el corte vienen dadas por "11 + <11,' ficie lateral no está sometida a ninguna fuerza, son satisfechas simultánea-
yes mostrada en la figura por el área rayada. Si el radio interior del anillo es pequeño, mente si tomamos:
existe lUla elevudu concentración de tensiclIles en el contorno interior y la m,íxima
tensión inicial después del corte, representada en la figura 228 por be puede ser <1" = o'v = 'f'.:¡¡ = O, 0', = -aET (d)
mayor que la máxima tensión inicial anterior al corte del anillo. Este razonamiento
u otro análogo explica por qué el vidrio se fisura después de cortado'. En el caso de un cilindro macizo las ecuaciones anteriores constituyen
un conjunto completo, de donde podemos deducir que en un estado esta-
139. Problemas bidi:mensionales con flujo estacionario de cionario bidimensional de conducción térmica todas las tensiones térmicas
calor. En el caso de un flujo estacionario de calor paralelo al plano" son nulas excepto la tensión axial /1., la cual viene ciada por la ecuación (el)
xy (fluju ~l través de uno placa delg¡ldu l) de un cilindro largo, por ejemplo). y es necesaria para mantener las condiciones de deformación plana, Ez .,; O.
en el que la temperatura no varíe con z, esta magnitud, r, cumplirá la
ecuación:

(a)
Consideremos un cilindro, que no ha de ser necesariamente circular,
en un estado plano de deformación, con (. = 1'". = 1'v= = O. Las rela-
ciones tensión-deformación, en coordenadas cartesianas, serlÍn análogas a
las ecuaciones (11) y (11) del § :I 35, en el caso dI:: deformación plana. Las (al (bl
ecuaciones correspondientes a (b) serán: FIG 229 ,

E" - (1 + v}aT = 1 E¡.!: (rr - 1 .::. v <Tu)


(b)
En el caso de un cilindro alargado de extremos libres, obtenemos una solu-
ción aproximada, válida para todos los puntos excepto para aquellos próxi-

+ v)a'l' = 1 ~ p2 (<TU -
mos a los extremos, superponiendo una tracción, o una compresión simple,
Eu - (1 1 '::'-;0'.) y una flexión simple tales que la fuerza y el momento resultantes en los
extremos, producidas por 11., se anulen,
Preguntémonos ahora si es posible que 11" {1y Y 1'", puedan ser llulos. En el caso de un cilindro hueco, sin embargo, no podemos decir que
Haciendo <T., = <Iv = O en (b), tendremos: las ecuaciones (d) resuelvan el problema de la deformación plana, siendo
necesario estudiar los desplazamientos correspondientes. Es posible, en
E", = (1 + v)aT, E¡, = (1 + v)aT (e)
efecto, que éstas presenten discontinuidades análogas a las estudiadas en las
y naturalmente )'rv = O. páginas 93 y 148.
Una deformación tal es posible solamente si satisface las ecuaciones Supongamos, por ejemplo, que el cilindro sea un tubo en ·el que se
" de compatibilidad (129). Dado quc E..."" O Y que las otras componentes ha hecho un corte longitudinal en la forma que se indica en la figuia 229b.
Si el interior del mismo se encuentra a \lila temperatura mús elevada que
1 Vanos cjelnplos del c.:ák:ulo ut! I~s tl!OSlOnt.'S Inlcialet:¡ en los trozos cortados t!n tllI.l pi 11... el exterior, el tubo tenderá a abrirse y la ranura' aumentará. Existirá unu"
Circular han s,do estudiados por M. V. Laue, Z. lech. P¡'ysik, vol. 11, pago 285,1930. D'\l'"''
métodos de cálculo de Ins tenSIones rehldunlcs son csul<hados en el embaj" de N. Da" """"1,,,,, discontinuidad de desplazamiento entre los dos labios de la abertura, "por
Z. Metal/kili/de, vol. 24, pág. 25, 1932. . lo que los desplazamientos deberán venir" representados p.or una función"
4-72 TEORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONF.5 DE OIUGEN TIlRMICO 473

discontinua de O. La sección recta forma un recinto simplemente conexo Los desplazamientos serán uniformes si esta integral se anula pan! toda curva cerrada
y las ecuaciones (ti) dan correctamente las tensiones para el caso de defor- (tal, por ejemplo, como la circun ferencia represen tadl¡ u trazos en la fig. 229a)
que pueda ser trazada sobre el. material ,de la sección r~ctu. Este resultado será
mación plana. Si, por el'contrario, el tubo no presenta ninguna ranura utilizado más adelante para resolver un problema de tensiones térmicas en un cilin-
(fig. 229a) las discontinuidades de los desplazamientos son imposibles, dro circular hueco.
lo que implica que la distribución supuesta para la temperatura producirá, Al igual que los desplazamientos, la rotación (o. debe ser continua. Tenemos:
de hecho, componentes (¡:e, (T", .~v, que representan las tensiones produ-
cidas al unir las caras separadas de la ranura (véase el § 39 Y la fig. 82).
(..,.). _ (""), = (2 (a.,< da;
)¡ iJ:IJ
+ él."
ay
dY)
La componente G. quedará igualmente modificada por esta operación. que empleando las ecuaciones (1) nos queda:
Para estudiar esta cuestión con más detalle, escribamos de nuevo las ecuacio-
nes (e) de la forma: (,.,). - (W')I = f (- ~~ dz + :; dY)
au Bu = .. Dado que €' es proporcional a T, esta integral es proporcional al calor que fluye,
8i = ti, éJy (6)
por unidad de tiempo y de distancia axial, a través de la IÚlea que une los puntos 1
donde E' = (1 + ¡·)aT. Dado que l' tU = 0, tendremos: y 2. Si la curva que consideremos es cerrada (ro,), - (ÚJ,)t serlÍ cero, debiendo
serlo también, por tanto, el flujo total de calor a través de esa curva. Si en un tubo
iiV
aa;
+ élu
ay
=O (f) existe flujo tle calor desde el in terior hacia el exterior o viceversa, esta ecuación
no es cumplida y las ecuaciones (d) no representarán correctamente el estado tcnsional.
y Si el tubo presenta una ranura tal como la indicada en la figu¡-" 2290, el despla-
au _ bu = 2"" zamiento y la rotación pueden ser diferentes en el punto 2 y en el 1. Tal ocurre, ,
a:ll ay (g) por ejemplo, si el cnlentamiento ensancha la ranura. En eHe caso el estado tensional
dado por las ecuaciones (d) es correcto. Para obtener la distribución tensional corres-
tlonde w. es una 'componente de rotación (véase la pág. 259). Las ecuaciones (j) pondiente al caso del tubo sin ranura, tendremos que añadir las tensiones resultantes ,1
y (g) nos dan: del cierre de la misma a las dadas por (d). La determinación de esas tensiones de
éJv discontinuidad es un problem,1 análogo a los ilustrados por las figuras 45 y 82 I •
a:IJ =..,. (h)
Consideremos, por ejemplo, el caso de un cilindro circular hueco de radio ex- "
terior b con un orificio concéntrico de radio a. Si la temperatura de la superficie
que juntamente con (e) nos permiten escribir:
interior es T, y la de la superficie exterior es cero, la temperatura Ta una distancia r
(i) cualquiera del eje vendrá dada por la ecuación (n) del § 135. Esta expresión puede
escribirse de 'la forma:
relaciones éstas, que no son otras que las ecuaciones de Callchy-Riemann, estu- T = - A log b + A log r (m)
d'iadas en el § 55. Estas relaciones muestran que f' -r iw z es una función analítica
en la que:
de la var.inble compleja :l,' +
¡'y. LIlImundo a esta función Z, tunemos:
T,
z= ,/ +{CoJ, (j) A = - lag (b/a)
(n)

Si U" ¡'I, ti" ¡'" son los valores de u y v en dos puntos 1 y 2 de la sección trans-
y donde el término constante -A log b puede ser suprimido, ya que una vanaCton
versal del cilind m, las diferencias UJ .... u" ~', . t'" pueden expresarse de In forma:
uniforme de temperatura no provoca tensiones de origen térmico. Tendremos en-
(2'
= JI (éJu 81l)
¡¡; d:IJ + ay v. - v, = (VU d~ + -au)
2 - dy tonces, poniendo log z = log f iO, que: +
U, - 'lI, dy ,
fx
1 az ay Z = .' + iw, = (1 + v)",T + 'í""
donde las integrales son 'tomadas a lo largo de una curva cualquIera, contenida = (1 + v)"A log r + iw, = (1 + v)aA log z
en el cuerpo, que une los dos puntos. Multiplicando la segunda pOl' i y sumándola
a la primen, resulta:
Llamando B a (1 + v)aA y usando la ecuación (1), tendremos:

11. - lt,
. -
+ t(v, VI) ==]x
(2 [élU élll dy -1-'• (élV
8:C d:IJ + ay 8:IJ dx
élV)]
+ ay ay (k) u. -'Ul + i(u. - VI) = B ~210g z d. = B [.(IOg z - 1) J~ (o)

relación cuya Intugrl\l se comprueba fácilmente, a partir de las ecuaciones (e) y (h),
que es igual 4ue la 1. (€' -1- i",.) (dx + idy) ó 1." Zdz. La ecuación (k) toma en-
1 I La relaCión entre las tensIOnes de origen térmiCO y las de discontinUidad para ei casu

de flujo estaclonatlo de calor han Sido estableCidas por N. MuschehovIlt, Bul/. E/ec. Tech. [mt.,
SlIn Petersburgo, \'01. 13, pág. 23, 1916, e mdependlentemente por M, A. Blot. Phil. Mag.,
tonces In forma: sene 7, vol. 19, pág. 540, 1935, E. E. Welbel ha cHtudllldo foioellÍsucamente las tensIones
(1) témucas en un cllmdro Circular hueco y en un prisma con un onflclo Circular, P,·oc. F,tfh.
Intern. COllg. Applied,,¡WechaT/ics, CambrIdge, Mass., 1938, pág. 213.
4-74 TEORIA DB LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGEN TERMICQ 475

relación que se aplica a toda eurva que une los puntos 1 y 2 a través del material deduce del correspondiente a cos O sin más que cambiar la dirección inicial O .." O.
que compone el cuerpo, y quc expresa el desplazamiento relativo de un punto res- Consideramos pues solamente:
pecto a otro cuando la temperatura es la dada por (m) y la tensión la correspon- T. = Al COS 0, . T•.= Al cos O
diente a las ecuaciones (d).
Al considerar la curva circular de radio r que partiendo del punto 1, rodea el La. distribución de temperatura, correspondiente a estos valores de conto~no, coinci-
orificio y termina en el 2 tendremos (puesto que 01 = O, O. = 2,,): de con In parte real de la funciÓn:
[z(log z - 1)]; = l'e"" (lag l' + i· 2..) - re'" (log r + i . O) = i ·2,,-r
(u)
que llevado a (o), nos da:
U, -111 = O, v, - VI = B . 2".r (p)
en la que las constantes el )' C. se determinan mediante las condiciones (t). Sus
valores son:
Al no ser cero el desplazamiento rclativo, es necesario considerar que el Cilindro
presenta una ranura que permite que el punto 2 se separe del 1 el desplazamiento
o-
1-
~(Al_
ba _ 0;2 a b Al') I
o _ Alb - A,a
2 - b' - a'
(u)
vertical 2J1rB (fig. 229b). El movimiento del ·Iabio llupcrior de la ranura respecto
al labio inferior es equivalente a una rotación de valor 2nB. en el sentido de las agujas El" término CI/z de (u) corresponde al valor:
del reloj, alrededor del centro del cilindro (B, sin embargo, es negativo si T. es
positivo). La ranura, pues, se abre, siendo vista desde el centro bajo un áng\llo ) 01
(1+"",z-
de valor - 2",B. El problema de cerrar esa ranura ha sido resuelto en la página 95
para el casa tensional plano. Pasando la solución allí obtenida al caso de deformm:")n · de la función Z. Llevando este valor a (1) y teniendo en cuenta (s), resulta que la
·plana, mediante las sustituciones indicadas en la página 57, obtenemos unas cnm- ··discontinuidad del desplazamiento es:
ponentes de la tensión que añadida.. a In tensión axial ". = -aET. de las ecuacio-
nes (d), nos da un estado tcnsional idéntico al que definen las ecuaciones (247). u. - 111 +i(v. - VI) =·í· 2.. (1 + ,,),,0,
Cuando la temperatura varía a lo largo de los contornos circulares exterior e de donde:
interior podemos usar paro su representación las series de Fourier: u~ - Ul = 0, 11. - VI = 2rr (1 + "),,,0,
'1', = Aa + 11 1 cos B + A, cos 26 -1- ••• + B, senO + B, sen29 + ..
7', = Aa' + A,' cos O + A,' cos 20 + ... + B L' senO + B.' sen29 + .. .(q) · 10 que significa que el borde superior de la ranura de la figura 229 Re desplaza la
cantidad 2",(1 + .)aC, en el espacio ocupado por el borde inferior y el matenal
Las tensiones térmicas provocadas por cada uno de esos términos pueden ser estu- · subyacente. Esto es, evidentemente, Imposible, SIendo impedido por la acción de
diadas separadamente, siendo las producidas por los términos constantes .40, Ao', las fuerzas de contucto entre I()s dos labios, Jos cuales generan un despl!lznmiento
las definidas en el estudio anterior, donde ahora T, = .40 - A.,'. Las funciones Z opuesto. L!ls tensiones que acompañan a ese desplazamiento termman en la form'l
que corresponden n los términos cos O, sen Oi cos 20, sen 20, etc., contendrán tér- mdicada en el § 39, tratándose en este caso naturalmente de def01mación plana.
minos proporcionales a: Las componentes de la tensión que deberán ser añadidas a las dadlls pOI' las ecua-
3, Z-l; ZSl, Z-2; etc. (r) dones (á), son:

Consideremos ahora la integral z"dz tomada


completa de radio r. Operando, resulta:
I I1 lo largo de una circunfercnclll "r = K COS O· r (1 - ~) (!C,2 - 1)
1,2

= K COS IJ • T
a 2b2 + b' -
+ --- 0;'
3
)
J
"6 -
( r-4
J Sh da "" rn.,nsro,si dO = ir n+1 fa 2 ... e'<n+l) 8 dO
T,9 = K sen /J • r
,,2

(1 - r2~) (~,.2 - 1)
(2,.. .
= ';r + n 1 Jo [cos (n + 1)0 + ~ sen (n + l)U] dO
donde:
que e~ cYldcntemente 'nula, c..'(cepto para n + 1 = O, caso en el que: -aE (Ala: - Al') a'b'
= 2(1 _ v)· T ¡;:¡:...
J~ = 21r'i (8)
J(

La tensión axial, si la dilatuclón es Impedida en esa dirección, viene dudo por las
0;4

Vemos, pues, que el único término de (r) que no anula a la integral del segundo ecuaciones (d) en IllS qlJe T está detcrmmadn por (11) } (~.). Si los e:,.tremos no están
. miembro de (l) es el término en Z-I. Se sigue de ello que. los términos en cos 211, sometidos a ninguna sujeción, es preciso tener en cuenta la tensión axial cread u
sen 20 y los armónicos superiores de la serie (q), no producen ningún desplazamiento : por la supresIón de la fuerza y momento que sobr~ ellos tlctunbun.
rel!1tivo entre los dos labios de la ranura, correspondiendo, por tanto, a un flujo
de calor global desde el interior hacia el exterior nulo, que produce solamente las 140. Solución de las ecuaciones generales. Toda solución particular de
tens iones expresadas por las ecuaciones (d). las ecuaciones (254) qLle podamos obteh"r, rcduc~ el problema de las tt"IlSlOnes· de
Los término~ de (q) que origimm.lns potencias Z··I en Z son cos O y sen O, cuyo origen télmico a un problema ordinario de fuerzas de superficie. Obtenidas las·soll!-
efeeio Vamos a estudiar. considerando solamente el de cos () ya que el de sen O se . ClOnes en !l, ?J. W, ]os.yalores de la~ componentes de la tensión se obtienen por mediO
476 Tl!ORIA DE LA ELASTICIDAD TENSIONES DE ORIGEN TERMJCO 477

de las ecuaciones (a) y (6) del § 139 Y las (2). Las fuerzas de Huperficle requeridas, máxima que pll~"t" pl'escntarse tiene el valor llETj(l l'), Y es nOl'IDnl a la superficie
junto con la temperatura no uniforme para mantener esas tensiones, se encuentran del elipsoide en los puntos de may~)r curvatUrll de la elipse generatriz. Este valor
aplicando las ecuaciones (128). La supresión de esas fuerzas, que hace que las ten- se presenta solamente en los dos Casos extremos de elipsoide muy alargado o mu}
siones existentes sean dehidas únicamente a la temperatura no uniforme, constituye aplannuo. En los casos intermedios la tensión máxima toma un valor más bajo.
un problema corriente de cargas de superficie. Para una esfera ese valor es los dos tercios del citado anteriormente.
Una manera de obtener soluciones particulares de las ecuaciones (254) con- Cuando T es independiente de z y w = O la deformación es plana y '1', U,.y v
siste en tomar: no dependen de z. La ecuación (d) toma entonces la forma:

u = aoJ!,
i)a;
ti = iN,
iJy
(a) a'",
ax'
+ a'ofr = 1 + • aT
ay' 1 - v
(f)

donde 1/' es una función de x, y, ::r, y también del tiempo I si la temperatura vnrín Una solución particular de la misma es:
con el tiempo.
Haciendo uso de las ecuaciones (5) y (10) podemos escribir las (254) de la si- '" ;". i; .i ~ :.'" JJ!Ct,'1) lag r' de dr¡ (g)
guiente forma: a'!' donde:
2.~ -1- (1 - 2v)'I'" = 2(1 v)"'-a +
a~ x
(b)
T' = [ex - ~)" + (y - ,,)2]}

En unfl placa delgada en la que T no varíe a través del espesor, el estado tensional
será plano con u. = Tu = T y, = O Y '//, V, G%, uv, ' •• funciones sólo dc x e JI. Las
Dudo que e = Ot//ox .¡. ov/ay l· ow/oz, de las ecuaciones (a), resulta e = ;¡2.~, relaciones tensión-dcfonnación serún entonces [vénnse las ecuaciones (ti) del § 1341
que llevado a (h) nos da:
Ir. = 1--E- [au
- v -av - (1
+ + ..)",T ]
él aT p' .ax i)y
(1 - v) a~ V'ofr = (1 -1- ..)a 8x
(c~
rT.
E [av axo,. -
= 1 _ v' ay -1- V (1 + v)aT ] (h)

=
E (av au)
2(1 + ..) az + ay
donde o/a)' y %z sustituyen a a¡8x en la segunda y tercera ecuaCión, respectiva- 7 ••

mente. Estas ecuaciones son evidentemente satisfechas si tomamos como función' 11' que sustituid.l' '" '.1' "UHClones de eqUlhbrio (18) (con fuer.l:as másicas nulns)
una solución de la ecuación: nos dan:
+ ay) 1 - " (O'U iJ"1l) = 2", 8T
V,"" = 1 + v",T
1 - v
(d)
axiJ (8U
8x 8ii + 1 + ':, iJx' + ay' a:D
Las soluciones de las ecuaciones de este tipo son estudiadas en la teoría del (i)
potencial'. Una de ellas es el potencial gravitatorio correspondiente a la distribu-
ción de materia de densidad -(1 -1- y)"T/4:r(l - ~). Su expresión es': Estas ecuaciones son satisfechas por:

'" = -
(1 +_v)",
4".Cl v) JJJ ( 1
T ~,1/,r) ?,d~ d'1 d r (e) ti =0'"
oy
(1)

en la que TU, '1, ,) es la temperatura en un punto cualquiera ¿, j}, ~ contenido en un supuesto que tp sea. solución úe:
elemento de volumen d~ d1] de y r' es In distancia de este punto al punto :0:, y, z.
i)'ofr
La ecuación Ce), da la solución completa del problema de las tensiones de origen
térmico, en un sólido infinito que se encuentra a temperatura nula en todos sus
O:D' + i)'ofr
ay' = (1 + .)aT (1;)

'puntos salvo en una regi5n calentada (o enfriada'). Los casos en los que esa región Comparando esta relación con la (f), vemos que una solución particular de lu misma
tiene la forma de un eEpsoide de revolución o de un cilindro circular semi indefinido, es el potencial logarítmico (g), con el factor (1 - ") del denominador suprimido.
uniformemente calentado, han sido estudiados'. En el caso del elipsoide la tensión Esta es, pues, la solución eompleta para el caso úe un e"lentamiento loc,1l en unu
placa indefinida en la que tensión y deformación tienden a cero en el infinito.
, E. Alamansl ha empleado funCIones de este tIpO en .1 problema de la esfera. Véase: Consideremos, como primer ejemplo, una placa sometida a la temperatura cero
1) Allt rea}p ocead. ,eL TorillO, vol. 32, pág. 963, 1896-1897; 2) Me",.. real. acead. sei. Tonno,
scrw 2, vol. 47. 1897. . en todos sus puntos excepto en la región rectangular ABCD de lados 2a, 211 (fig. 230)
'Véase pOI' ejemplo 71/tory o/ ¡he PolmllO/, de W. D. MacMllla.n, NuevlI York,'1930. en la que la temperatura es uniforme e igual a T'. El potencial logarítmico corres-
J E.qta funCión potenCIal fue cmplt'ada por C. W. Borchardt en el problema de la esfera. pondiente será:
Véase Monalsber. kÓlligl. PrerlSS. Akad. Wiss., Pl\g. 9, Berlín, 1873.
, j. N. Goodler, Phil. M<lg., vol. 23, pág. 1017, 1937. El sóhdo semundefmldo ha SIdo
estudIado por R. D. Mmdhn y D. H. Chcng,j. Applred. Phj'J., vol. 21. págs. 926,931, J950 .
'" = J; (1 -1- v)",T fb tJ lag [(z - t)" + (y. - 71)"] d~ d1/ (l)

. "'. O. Myklestad, J. dpplred Mechan;cs (Tram. A.S.M.E.), pág. A-131, 1942. I Goodier. loe. cit.
TEORIA DE LA ELASTICIJ)AD TENSIONES DI! OIUGEN TERMICO 479
478
Una vez obtenidos los desplazamientos por la ,aplicación de las ecuaciones (;), El método que estamos estudiando resulta especialmente sencílIo cuando lu
, 'podemos hallar las componentes de la tensión por medio de las re!aciones (h). Lus temperatura varía con el tiempo y satisface la ecuación diferencial de la ~onduc­
valores encontrados para 0', y ,.v
en puntos tales como P, exterIor al rectángulo ción del calor'
élT '
caliente, pueden ponerse en la forma: Tt = Kv'T (n)

(m) en la que k es la conductibilidad térmica dividida por el calor específico y por la'
densidad. Derivando la ecuación (ti) respecto a t y sustituyendo éJTléJt por el valor
donde los ángulos '1", '1', Y las distanCIas rlo Y2, ro, Y" son los mdicad~s en la figura 230. dado por (n), vemos que la' función '1' deb ... verificar la ecuación:
Los ángulos son los subtendidos en P por los dos lados del r~ctangulo AD Y BP, v· aat", = ~""(V'T
paralelns al eje x. La expresión de u" se obtiene a partir de la primera de las ecuaclO- 1- v
nes (m) sin más que sustituir V" y 1¡~ por los ángulos subtendidos en P por los otros
Podemos poner, por tanto:
dos lados del rectángulo AB y De.

ecuación, cuy" integral para el caso en el que la temperatura tiende a cero al trans-
currir el tiempo, es:
oJo = _l+"CtK r~Tdt (o)
1 - v J!
como pueue verificarse sustituyendo en la ecuación (ti) y haciendo uso de la ecua-
ción (n).
Consideremos, por ejemplo, un cilindro circular largo (deformación plana) que
es calentado o enfriado según un régimen estacionario de conducción térmica. La
tempemtura no es simétrica respecto al eje pero es independiente de la coordenada
axial z. Podemos representar entonces la temperatura por una serie de la forma:

FItl 230 T •• = e-"'I .Tn(.~r)e'n8 (P)


donde podemos separar las partes real o imaginaria de c"'o para obtener cos nO
El valor de ~J en un punto situado inmediatamente debajo de AD y a la izquierda
o sen nO. Según la ecuación Ca), la función t¡J que corresponde a una temperatura
de A es: que tenga esta expresión se escribe:
ECtT .¿; (71' - o.rctg~) (g)

valor, éste, que alcanza su máximo !EaT en el caso de un rectángulo inf~~itame~te La serie formada por tales términos, que corresponden a los de la serie que da T
largu según la dirección y. Las dos componentes normales de :~ tenslOn ~an"n representará una solución particular de las ecuaciones generales (h). Los despla7.a~
bruscamente cuando se contornea la esquina del rectángulo. La tenslon tangencml TTY
mientas serán calculados median te las ecuaciones (a) o sus equivalentes polares:
tiende a infinito cuando nos acercamos al vértice. Estas características, 'tan peculiares,
resultan de la existencia de vértices perfectos en el rectángulo clllentado. 1 a",
Si la zona calentada es elíptica' en vez de rectangular y la ecuación de la elipse es: 11 = a""
r 130
iJr
v=

z· y' en las que u y v son los componentes mdial y tangencial respectivamente. La com-
¡¡.+ b2 = 1 ponente axial w, por tratarse de deformación plana, será nula. '
Las componentes de la deformación se deducen de los resultados del § 28.
el vlllor de la tensión d~ en un punto exterior a la elipse, situado muy cerca del ex-
En cuanto a las componentes de la tensión se obtienen a partir de las fórmulas (a)
tremo del eje mayor, es: y (b) de la deformación pInna del § 135, junto con la última de las ecuaciones (52)
EaT para la tcnsi'ón tangencial rol'.
1 + (b/a) Una vez obtenida nuestra solución encontrarem()s que, en general, tenemos
valor que tiende a Ea l' para una elipse muy alargada. Si la z,!na cal~ntada es circular, fuerzas de contomo (~" ',Q) no nullls sobre la superficie 'lateral del cilindro. La su-
este valor es ~EuT. La tensión cr r en la vecíndl1d inmediata del "Je menor es: presión de tales fuerzas constituirá un problema corriente de deformación plana,
que se resuelve utilizando la función general de tensión en, coordenadas polares
Ea.T dada en el § 39'.
1 + (alb)
r Véase por ejemplo, T/¡eory 01 lieat COl1ductlO7I, de Ingersoll y Zobel.
Il"l<lienc!" a cero pal11 una elipse mu) "largada. 'Este problema, para el caso de un cilmdro hueco (estando dada la temperatura por (P)]
I Goodlcr, loco cit. ha SIdo estudí.do por j. N. Goodler en el trabajO cuado. ,
PROPAGACION DE ONDAS EN MIlDlOS IlLASTICOS 481
elemento de .la bar~a' contenido entre dos secciones rectas adyacentes mn
y mInI. La dIferenCIa entre las fuerzas que actúan sobre las dos secciones
transversales es .

Propaga au él tt)
2
a,!¿ a2
AE ( -a.
x
+-ax.
dx 2 - AE- = AE-..!:dx
élx ax2
en medz
y la ecuación diferencial del movimiento de dicho elemento es
éJ'u a2~¿
Apd:C-
at 2 = AE-
ax2 al:.
o lo que es lo mismo

(25R) FIG. 231

.n
141. Movimiento generado por fuerzas. En los capítulos pre- ~-----­
~""" .............
cedentes hemos supuesto que el cuerpo elástico se encontraba en reposo m~C4f---,Ir-----~p~----~--X
bajo la acción de las fuerzas exteriores, tratándose, pues, de problemas (a)
de estática. Existen casos, sin embargo, en los que debemos considerar el
movimiento provocado en un cuerpo elástico, por cargas aplicadas brusca-
'/-=:----:-t---=:t'/----t,~e:-:::.:-:..:l~::.::-~ct¡------t.r..:::,-:::-::':t~::::-:::"""""":;C
mente o por fuerzas variables. La acción de una fuerza bruscamente apli-
cada no es transmitida simultáneamente a todas las partes del cuerpo.
En el instante inicial las zonas alejadas del mismo no son alteradas y las
deformaciones provocadas por la fuerza se propagan a través del sólido (6)
en fonoa de ondas elásticas. Si las dimensiones del cuerpo son grandes, Flc. 232
el tiempo que las ondas emplean en atravesarlo, es lo suficientemente
grande como para ser considerado, a efectos prácticos. Tales problemas expresión en la que !! es la densidad del material de la barra y
se presentan, por ejemplo, al estudiar el efecto de las percusiones o el de
las ondas producidas por los terremotos. El estudio de la propagación
de las ondas en los medios elásticos es .el tema del presente capítulo ' .
c=~ (259)

Comencemos por el problema sencillo de la propagación de ondas longi- Puede demostrarse por sustitución que cualquier función j(x -1- et) es
tudinales en una barra prismática larga. una solución de la ecuación (258). Asimismo, toda función JI (x - et) es
también una solución viniendo la solución general de la ecuación (258)
142. Ondas lo~gitudinales en barras prismáticas. Tomando representada por la expresión.
como eje x el de la barra (fig. 231) Y suponiendo que las secciones trans-
versales de la misma se mantienen planas durante la defOImación, la exten-
u = j(x -1- et) -1- j,(X - et) (260)
- sión unitaria en cualquier sección recta mn, debida al dcsplazluoiento lon-
gitudinal u, es igual a au¡ax y la fuerza de tracción 'correspondiente será mercia correspondientes al mOVimiento de las partículas según la direCCión lateral son de.-
AE(éJu¡éix), donde A es el área de la sección recta 2 • Consideremos un preciada. e~ nuestro deducción. I~sta ~oluclón aprOXimada es suficientemente exac~n SIempre
que la longitud de Olida de la. VibraCIOnes no sea pequeña comparada con In. dimensiones
transversales de la barra. En el caso en el que la longitud de onda es pequeña .el movilnlen'to
I Los problemas de lu~ vibraCIones estacionanas de los cUt!rpos elásticos son estudiado" de. 1M partículas ~cgún la dirección perpendIcular al eje de la banda debe .:er conSIderado.
\'n S. Tlmosht!l\ko, Vibra/ion Prob/e-ms
I'n Engilleering, Nueva York, 1928. Vease Lord Raylelgh, Theory uf Sound, cap. 7; L. PochhalÍuner, J, Mat/¡, Cre/t.·" J .. ; vol .. Sl,
11 Suponemos que' tenemos una traccjón simple que actúa en la dIreCCión ;..' y que la e>..~ 1 ~76; C. Chree, Quart. J. M.ath .• vol. 21. 1886 Y vol. 24, 1890; J.. Preseott, Phil.. Mag., vol. 33,
tensIón tu tx vjenc acomPllñada por una contracción lateral de valor l·(ru'i"l:). Las fuerzas de: pago 703, 1942; R. M. Davles, 7'rans. Roy. Soco (Lo!,doll), seri~ A, vol. 240, pág. 375, 1948.

31-TEOJUA. DC ..... ELASTICIOAD

;:
482 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS ELASTICOS 483
Esta solución tiene un significado físico muy 'sencillo que puede .ser expli- mienza a propagarse a lo largo de la barra con una cierta velocidad e,
cado de la siguiente manera. Consideremos el segundo término del segundo de forma tal, que después de un cierto intervalo de tiempo t, una porción de
miembro de la ecuación (260). En un determinado instante t este término la barra de longitud et, estará coinprimida mientras que la porción res-
es función de x solamente, pudiendo ser representado por una cierta curva, tante se encontrará libre de toda solicitación.
tal como la mnp (fig. 232a), cuya forma depende de la funciónJI' Después
de un cierto intervalo de tiempo .It, el argumento de la función JI será
x - e(t + LIt). La función!l no variará, si al mismo tiempo que la variable t
se incrementa en ¿ft aumenta la abscisa en una cantidad ¿Ix igual a el.1t.
Esto significa que la curva mnp, construida para el instante t puede ser
utilizada también en el t + ¡Jt, con tal de desplazarse según la dirección x
FIG, 233
la cantidad L!x = eLlt, tal como se muestra mediante la Iínea'a trazos de la
figura. A partir de' esta consideración, puede verse que el segundo tér-
mino de la solución (260), representa una onda que se propaga a lo largo La velocidad de propagación de la onda e no deberá ser confundida
del eje x con ~na velocidad constante e. De igual forma, puede demostrarse con la velocidad v transmitida a las partículas de la zona afectada por la
que el primer término de la solución (260) representa una onda que se compresión. Esta velocidad, v, puede calcularse teniendo en cuenta que
propaga en sentido opuesto. La solución general (260) representa, pues, dicha zona (rayada en la figura) experimenta como consecuencia de la
dos ondas que se propagan a lo largo del eje x en sentidos opuestos con la compresión u un acortamiento de valor (O'fE)et. De aquí resulta, que la
velocidad constante e dada por la ecuación (259). Esta velocidad depende velocidad del movimiento vibratorio en el extremo izquierdo de la barra,
únicamente del módulo E y de la densidad del material de la barra. En el igual a la que adquieren las partículas de la zona comprimida, es
caso del acero, por ejemplo, podemos adoptar el valor e = 5135 mIs.
Las funciones f y J, deberán ser determinadas, en cada caso particular, (b)
a partir de las condiciones iniciales en el instante t = O. Para ese instante
tendremos, según la ecuación (260) La velocidad e de propagación de la onda, puede obtenerse aplicando
(u) 1_0 = f(x) + ¡l(X) la ecuación de momentos. En el instante inicial la porción rayada de la
barra s~ encontraba en reposo. En el instante t tiene una velocidad v y
e~)I-o = e[f'(x) - 1/(x)J
(a)
un momento Actev. Igualando este momento al impulso de la fuerza de
compresión se tiene
Supongamos, por ejemplo, que la 'velocidad inicial a 10 largo de la barra
sea nula y que exista un desplazamiento inicial dado por la ecuación Aut = Aclpv (e)

(u)¡_O = F(x) Sustituyendo (b), encontrarnos para (e) el valor dado por la ecuación (259)'
y para la velocidad de las partículas
Las condiciones (a) quedan satisfechas, tomando
v=-~
u
(261)
f(x) = f¡(:c) = -j-F(x) -VEP
El desplazamiento inicial se dividirá en este caso, por tanto, en dos partes Como puede verse, mientras que e es independiente de la fuerza de com-
iguales que se propagan como ondas, en sentidos opuestos (fig. 232b). presión, la velocidad v de las partículas es proporcional a la tensión.
La velocidad de propagación de las ondas en las barras prismáticas, Si en lugar de una compresión, aplicamos bruscamente una tracción
puede obtenerse a partir de consideraciones elementales. Supongamos que ,en el extremo de la barra, se producirá la propagación del esfuerzo corres-
una tensión de compresión uniformemente distribuida; es aplicada brusca- , pondiente a lo largo de la misma con una velocidad c. Una vez más la velo~
mente sobre el extremo izquierdo de una barra prismática (fig. 233). En el 'cidad de las partículas viene dada por la ecuación (261). El sentido de
instante inicial, se producirá una compresión uniforme que afecta a una esta velocidad será el opuesto al sentido positivo d.e las x. Así, pues, en
capa infinitamente delgada situada en ese extremo de la barra. Esta com-
, 1 Esta deducción elemental de la fónnula que da la velocidad de propagación de la ond;,
'presión será transmitida a la capa adyacente continuándose este proceso es debida a Babine!; véase Clebsch, 1'héarie de l'élastir-ité des corps'.mlides, 'tradU'cida por Saint.
al tran~F~rrir el tiempo. En consecuencia, una onda de compresión co- , Venaul, pág. 480d, 1883. '
. .'.
TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROPAGACION DI! ONDAS·EN MEDIOS ELASTICOS 485
484
una onda de compresión la velocidad v de la·s partículas tiene el mismo La ecuación (258), que gobierna la propagación de la onda, es lineal,
sentido que la velocidad de propagación de la onda, mientras que en una de forma que si tenemos dos soluciones de la misma su suma lo será" tam-
onda de tracción el sentido es el opuesto. bién. Se sigue de ello, que al estudiar la propagación de las ondas a lo
De las ecuaciones (259) Y (261) se deduce largo de una barra podemos utilizar el método de superposición. Si dos
ondas se propagan en sentidos opuestos (fig. 234), al encontrarse producen
t1=El!... (262) una tensión y una velocidad resultante que serán obtenidas por super-
()
posición. Si ambas ondas son, por ejemplo, compresivas, la compresión
fórmula que expresa que la tensión producida por la onda es igual ~ pro- resultante se obtiene por simple adición como lo indica la figura 234b,
ducto del módulo elástico E del material por la relación de las velocldades. y la velocidad resultante de las partículas por sustracción. Después de
Si un cuerpo absolutamente rígido, que se desplaza con una velocidad v, haberse cruzado, las ondas recobran sus formas iniciales tal como· se indica
golpea según la dirección longitudinal una barra prismática, la te~sión de en la figura 2 3 4 c . · .
compresión que se produce en l¡¡. superficie de contacto en el Instante
inicial estará dada por la ecuación (262)1. Si la velocidad del cuerpo v .Dl
supera un determinado límite, límite que depende de las propiedades me- I
cánicas del material de la barra, se producirá una deformación permanente I (a)
en la pieza aunque la masa de! cuerpo que choca con ella sea.~uy pequeña 2. I-t-l I 111111 I 11} u x
Consideremos ahora, la energía de la onda que se extIende a la zona
.n
~
~
rayada de la figura 233. Esta energía consta de dos partes: la correspon-
diente a la deformación cuyo valor es i 1I11111111CT x
(6)
I
CT{lIlllllll
1
y la energía cinética que es igual a
Actpv2
~=
Act".2
2E
~--------~I~ ~) FlO. 235

Como puede verse, la energía total de la onda, igual al trabaj~ realizado


por la fuerza de compresión Acr que actúa a lo lar~o del .ca~mo (crfE)ct Supongamos que una onda de compresión se traslada a lo largo de
se descompone, a partes iguales, en energía potenCial y cmétlca. una barra en el sentido positivo de las x y que una onda de tracción de la
.misma longitud de onda y de igual intensidad 10 hace en el sentido opuesto
e (fig. 235). Cuando ambas ondas se encuentran, la tracción y la compresión
~
o.dl " 111111 1111ilTIi 1111}u~ (a) se anulan entre sí y la porción de barra en la que ambas se superponen se
encuentra sometida a una tensión nula. Al mismo tiempo la veloCidad de
las partículas en esa porción de la barra alcanza el valor 2v. Después de
1 oz
01 mrffiJjLJ...L.L..LU..W...LLLl111I..L!.Ll1111}l---
....2.l1 x
(/J) haberse cruzado las ondas recuperan su forma inicial tal como se muestra
en la figura 235b. En la sección transversal media mn, la tensión será
siempre nula, pudiendo ser considerada dicha sección como e;tremo libre

~tI~II~III~II~III~I______~III~~III~II~1X
de la barra (fig. 235c). Si se comparan las figuras 235a y 2·35b puede
(e)
deducirse que en e! caso de un extremo libre, UIja onda de compresión
FIG. 234 se refleja como una onda de tracción semejante, y viceversa.
Al encontrarse dos ondas idénticas que se trasladan en Sentidos con-
, 8sta conclusión· es debida a Thomas Young; véase su Course oi Lecwres on Natural trarios (fig. 236a), el valor de la tensión se doblaiá y. el de la velocidad
Philusophy ••. , vol. 1, págs. 135 y 144, 1807. .. se anulará en aquella porción de la barra en la· que se superPonen· las dos
.' Se supone que el contacto se produce simultáneamente en todos los puntos de la secclOll
extrema de la barra. . ondas. La sección ·media mn presentará siempre una velocidad nula. Dicha
TEORIA DE LA El.ASTIClDAD PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS EUSTICas 487
486
sección permanece, pues, inmóvil durante el paso de las ondas, pudiendo Consideremos ahora el caso más general en que las barras 1 y 2 (figu-
ser considerada como extremo fijo de la barra (fig. 236c). De la compara- ra 237b) se desplazan 1 con velocidades v, y V2(VI > 'L'2)' En el instante
ción de las figuras' 236a y 236b podemos deducir, pues, que una onda del choque, se producirán dos ondas de pompresión idénticas que se des-
cualesquiera no sufre ninguna alteración al reflejarse en un extremo fijo. plazan a lo largo de ambas barras. Las veloddades correspondientes de las

uill"lllll
:m
I
-...E-
IIIIIIIII}O"~ (a)
I -- v m

~.
.....!L

12J .::1:1 (a)


I-t-l-a=I=a-l-l-l \--l'
e n e ~ .-!2....
IIffill 11 t IImITll x
(6)
L~2J
I
I--l--l
FJG. 237
? I .x (ó)

L-_ _ _ _ _ _~
~ (e)

'1<'10. 236 partículas, respecto a las partes no sometidas a tensión de ambas barras,
son iguales y están dirigidas en cada barra siguiendo el sentido que s~
Hemos considerado hasta aquí las ondas producidas por fuerzas cons- aleja de la superficie de contacto. La magnitud de las mismas debe ser
tantes. La tensión" y la velocidad de las partículas v resultan entonces igual a (Vl - v2)/2, con el fm de que las velocidades absolutas de las par-
constantes a lo largo de la onda. En el caso de una fuerza variable, la ten- tículas de ambas barras sean las mismas en la superficie de contacto.
sión rT y la velocidad v varían a lo largo de la onda. Las conclusiones obte- Después de un intervalo de tiempo igual a lle las ondas de compresión
nidas en el estudio precedente, referentes a la propagación, superposición y alcanzan los extremos libres de las barras, las cuales se encuentran enton-
reflexión de las ondas, pueden ser aplicadas también en este caso más ces en un estado de compresión uniforme. En ese instante, asimismo, las
general. velocidades absolutas de todas sus partículas serán

143. Choque longitudinal de dos barras. Si dos barras iguales, VI _ VI - V2 = 112 + VI - v~ = VI + 1'2
222
del mismo material chocan longitudinalmente entre sí estando animadas
de la misma velocidad v (fig. 237), el plano de contacto mn no se moverá Las ondas de compresión se reflejarán, entonces, en los extremos libres
durante el choque 1 y dos ondas de compresión idénticas empezarán a. como ondas de tracción y en el instante t = 2ile, en el que estas ondas
trasladars'e a lo largo de ambas barras con una misma velocidad e. Las velo- llegan a la superficie de contacto de las dos barras, las velocidades de las
cidades de las partículas, superpuestas a las velocidades iniciales de las barras 1 y 2 son
barras, determinan un estado de reposo en las zonas de oscilación y en el
instante en que las ondas alcanzan los extremos libres de las barras (t = llc) ,
VI + V2
--2- - --2- =
VI - 112
112,
111 + 112 + VI - 112 = VI
2 2
las dos barras se encontrarán inmóviles y uniformemente comprimidas. Las
ondas de compresión se reflejarán entonces en los extremos libres como on- Vemos, pues, que las barras intercambian, a consecuencia .del choque,
das de tracción que se desplazan hacia la sección de contacto mn. En estas las velocidades.
ondas las velocidades de las partículas, iguales a v, tendrán el sentido que Si las barras que acabamos de considerar tienen longitudes diferentes,
se aleja de mn, de manera que cuando las ondas alcancen el plano de con- / 1 y l2 (fig. 238a), las condiciones provocadas por el choque en los instantes

tacto, las barras se separarán con una velocidad igüal- a su velocidad ini- iniciales serán las mismas que en el. caso precedente. Transcurrido un
cial v. La duración del choque en este caso es igual, evidentemente, a 2:Jlf intervalo de tiempo igual a 21, le, momento en el que la onda reflejada en hi
y la tensión de compresión, según la ecuación (261), es igual a v--/Er¿. barra corta 1 alcanza la superficie de contacto 1nn, liiI. vibración que a través
de esta superficie se propaga a lo largo de la otra barra produce la situílción
I Se supone que el contacto tiene lugar simultáneamente en toda la superficie de los ex-

tremos de las barras•. I Las vc10cldadcs son consideradas positivas si su sentido es el del eje x.
488 'l'JlORIA DE LA ELASTICIDAD PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS ELA&TICOS 489
que se representa en la figura 238b. La onda de tracción de la barra de unidad de la sección transversal de la barra, y Va la velocidad inicial de
longitud 11 , anula la compresión mutua de las barras, pero éstas permane- este cuerpo. Considerando el cuerpo como absolutamente rígido, In velo-
cerán en contacto hasta que la onda de compresión correspondiente a la cidad de las partículas del extremo' de la barra en el instante del impacto
barra larga (rayada en la figura) haya alcanzado, después de reflejarse (t = O) es Va y la tensión de compresión 'inicial, dada por la ecuación (261),
la superficie de contacto, cosa que ocurre en el instante t = 2l2/C. será

~m 0'0 = VD .yJJjp (a)


I ,1 2 f(ct)
Debido a la resistencia de la barra, la velocidad del cuerpo móvil y en
b--~ .I"'! t2 ----+l·1 consecuencia la presión sobre la barra, disminuirán gradualmente, de ma-
02 j {óJ .... oJ} 02.
nera que habrá una onda de compresión con una tensión de compresión
F 11111111" (111111 (ó) decreciente que se propaga a 10 largo de la pieza (fig. 239b). La variación
de la compresión con el tiempo, puede obtenerse fácilmente a partir de la
ecuación de movimiento del cuerpo. Llamando G a la tensión de compresión
FIG. 238
variable en el extremo de la barra y v a la velocidad variable del cuerpo,
obtenemos
En el caso de dos barras de longitudes iguales, las dos presentan des-
pués del rebote la misma velocidad en todos los puntos, moviéndose como
(b)
cuerpos rígidos. La energía· total es la que corresponde al movimiento de
traslación. En el caso de barras de diferente longitud, la barra larga, des-
pués del rebote, posee una energía adicional correspondiente a la onda que sustituyendo la expresión de v, dada por (261), nos queda
que se propaga en su seno, la cual deberá ser considerada al calcular la
energía total de la barra l • M dO"
---+0'=0
11-.- - Z - - - - ! o I "
v'EPdt
de donde
¡"'----;!!E..If:=:::::= =====fl (a)
O' = O'oe
_l~
(e)

f-~~J!I!I1Yo x (6) Esta ecuaClon, puede ser usada siempre que t < 21/c. Cuando t = 2l/c,'
la onda compresiva, con un valor 0'0 para la presión frontal, vuelve a la

'¡fu 11 It#WI 11 11 ~~
11 re)
extremidad de la barra que está en contacto con el cuerpo móvil. La velo-
cidad de éste no puede cambiar bruscamente y, en consecuencia, la onda
se reflejará .como si el extremo estuviera fijo, de forma que la tensión de
compresión en la superficie de contacto aumenta bruscamente alcanzando
FlG. 239
el valor 20'0, tal como se indica en la figura 239c. Un aumento tal, brusco,
de la presión, se produce dUrante el choque en el extremo, en instantes de
Consideremos, ahora, el problema más complejo de una barra fija en
tiempos separados por el intervalo T = 21/c, debiendo obtener una expre-
uno de sus extremos golpeada por una masa móvil en el otro extremo 2
sión de G para cada uno de dichos intervalos. Para el primero, en eIque
(fig. 239). Sean M la masa d~l cuerpo en movimien~o, referida al área
O < t < T, usamos la ecuación (e). Para el segundo, en el que T < t <: 2t,
1 El problema de la pérdida de la energra cinética correspondiente al movimiento de tras- tenemos las condiciones representadas en la figura 239c y la tensión de
lución, ~n el ca~o del choque longitudinal de barras, ha sido estudiado por Cauchy, Poisson y.
finalmente, por Saint-Venan!; véas~ Compt. rend., pág. 1108, 1866 y J. mathémat (Lt"ouville), Theorie de ['elas/icité des corps solides, de Clebsch, traducida p(lr Saint-VeiJant (véase 111 nota
págs. 257 y 376, 1867.' de la pág, 86). El problema fue asimismo estudiadu por L. H.:Donndl qui.en, einpleando las
2 Este problema ha sido' estudiado por varios autores. La solución final ha sido dada por leyes de la propagación d. las ondas, simplificó la solución y la ext~!ldjó al. caso de uno barra
J. Boussinesq, Compl. rel/d., pág. 154, 1883. La historia del problema puede encontrarse en cónica. Véase Trans. A.S.M.E., Applied Mcchanics Division,. 1930... ,
490 TRORIA DE LA ELASTICIDAD PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS ELAllTICOS 491
compresión (j es producida por dos ondas que' se alejan del extremo .que de donde
ha sufrido el choque y por otra que se·.acerca a dicha extremidad. Si desig-
namo~ por SI (t), S2(t), Ss (t) , :.. , la tensión total de compresión, producida (g)
en el extremo golpeado por todas las ondas que se alejan del mismo después
de los intervalos de tiempo T, 2T, 3 T, ... , las ondas que vuelven de la
extremidad que sufre el choque, son simplemente las emitidas durante
donde e es una constante de integración. Esta ecuación, será usada. a
continuación para reducir las expresiones de los valores consecutivos
el intervalo precedente, retardadas un tiempo T a causa de su viaje de
SI, S2, •••• Durante el primer intervalo O < t < T, la tensión de compresión
ida y vuelta a través de la barra. La compresión producida por estas ondas está dada por la ecuación (e) y podemos escribir
en el extremo golpeado, se obtendrá, en consecuencia, sustituyendo t
por t - T en la expresión de la compresión producida por las ondas emi-
tidas durallte el intervalo precedente. La expresión general para la ten- (h)
sión de compresión total durante cualquier intervalo nT < t < (n + l)T,
será, por tanto, Sustituyendo-la expresión correspondiente a Sn_1 en la ecuación (g), se tiene

u = s,,(t) + 5n_l(t - T) (a,)


SI(t) = croe
-2"(1.- 1)
'1' -
40: _2 ..,
T e T
(f UUP a
2
dt + e)
La velocidad de las partículas en el extremo sometido al choque, será la
diferencia entre la velocidad provocada por la presión Sn(t) de las ondas -2"(-1'1 -1) (1 40:1) e 40: -;al
que se alejan del extremo y la correspondiente a la presión s" l(t - T) "'" croe - T - Te (k)
de las olldas que se aproximan al mismo extremo. Tendremos ·entonces,
según la ecuación (261),
La constante de integración e, se obtiene a partir de la condición de que
en el instante t = T la tensión de compresión en la extremidad de la harTa
(e)
que recibe el choque aumenta bruscamente en una cantidad 2ao (fig. 23ge).
Usando entonces la ecuación (d), resulta
La relación entre s,,(t) y Sn l(t - T), se obtendrá, empleando la ec~ación
de movimiento (b) del cuerpo que choca. Llamando (l a la relación entre'
las masas de la barra y del cuerpo percutor, tenemos [Uo/l _2a'J
l' 1=2' + 20'0 =
[-2"(1._
(joe T
1) + uoe -2"(1.-1
l'
) (1 - 4
;
t\J
lp
, a = Ji' (f)

y aplicando esta última expresión, así como las ecuaciones (d) y (e), la
de donde nos queda
ecuación (h) toma ia forma
crT
~ [5,,(1) - S"_l(t - T)] + ':; [s.(O + 8_-1(& - 2'») = O
e=- _0_ (1
40:
+ 40:e2"')
2a~
Multiplicando por eT , Sustituyendo en la ecuación (k), se tendrá

e
~' ds. (t)
-¡¡;-
+ T20: e2;' Sn'(') -_ e~ dll.-lUdt - T) 81 = 80 + croe -2.. (1._
'1'
1) [ 1 + 40: (t)]
1 - Ji (1)
20: ~ 40: ·2.d
+ T e'1' 8"_1(1 - T) - Te l' 8._1(t - '1') Procediendo de' igual forma y sustituyendo
ción (g), obtenemos
SI en lugar de $"_1 en la ecua-
. .
() bien
d 2al' . d 2at 40: 2al
- [e T Sn(t)] = -d [e T 5n-l(1 - T)] - -T e '1' Sn-l(t - T)
dt . t

:',
,;
-1-92 TEOR!A DE LA ELASTICIDAD PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS ELI\STICOS 493

Repitiendo el proceso, llegamos a Para valores muy pequeños de a el tiempo de contacto puede ser calculado

Tt)
a partir de la fórmula elemental,
= 8~ + O"oe
-l!a(.!.-a) [ 1 + 2 . 6a.(3 -
='~
83 T
t fl
+ 2 . 3 . 40:' (3 - t)2 + 2 ~.~
T 2 3 s( t)3]
8a 3 - T (n)
e ,,~ (p)

la cual se obtiene, despreciando totalmente la masa de la barra y supo-


y así sucesivamente. En la figura 240 se representan gráficamente las fun- niendo que la duración del impacto es igual a la mitad del período de ·la
ciones So, SI, S2, .", para 0"0 = 1 y para cuatro valQres diferentes de las oscilación armónica simple del cuerpo unido a la barra.
relaciones!, a = 1/6, 1/4, 1/2, 1: Utilizando estas curvas, puede calcularse
fácilmente la tensión de compresión a mediante la ecuación (d). En la
11'
figura 241 está representada gráficamente esta tensión para 0"0 = 1 Y
a = 1/4, 1/2,1. Como puede verse, varía por saltos a intervalos T, 2T, .. , . 1 a:=4
1
2~
o P
FlG. 241

Las funciones SI, S2, Sn, ••• , calculadas anteriormente, pueden ser usada:;
también para determinar las tensiones en cualquiera otra sección trlms-
versal de la barra. La tensión total es siempre la suma de dos valores de s
[ecuación (d)]: uno de ellos en la onda resultante que se traslada hacia el
extremo fijo y el otro en la que se propaga en sentido opuesto. Cuando

FIG. 24{)

El valor máximo de esta tensión depende de la relación a. Para a = 1/2


Y (l = 1, la tensión toma su valor máximo para t = T. Cuando a = 1/4,
la tensión máxima se produce para t = 2T. El instante en el que a se
anula, indica el final del choque. Es de advertir que la duración del mismo
aumenta cuando a disminuye. Los cálculos de Saint-Venant dan los si-
guientes valores para esa duración

a=
1 1
-1 1 °O~--~5~--~IO~--~I5~---W~----2~S~~
6 4- 2 FIO. 242
..
2t
T= 7,419 5,900 4,708 3,068
la porclon de onda que corresponde al valor máximo ·de. s (el pico más
.. --- alto de una de las curvas de la fig. 240) llega al extremo fijo y es allí refle-
I Estas curvas fueron calculad"" por Sujnt-Venan~ y Plamant. Véase Compt. rerul., pá-
jada, las dos ondas mencionadas anteriormente al~ilJ~~an su\'algr n;áximo:
. ginas 127, 214,2&1 Y 353, 1883.. la tensión de compresión total en este punto, en este instante/es ·la :ináxíma
494 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROPAGACION DE' ONDAS EN MEDIOS ELASTICOS
495
que puede producirse durante el choque. De esto se sigue, que la tensión 144. Ondas de· dilatación y de distorsión e~ medios elásticos
máxima durante el choque se produce en el extremo fijo, siendo su valor isótropos. Al estudiar la propagación de ondas en medios elásticos,
el doble del máxi[llo de s. De la figura 240 puede deducirse rápidamente es ventajoso utilizar las ecuaciones diferenciales expresadas en función de
que para (2=1/6, 1/4, 1/2, 1, las tensiones de compresión máxima son los desplazamientos [ecuaciones (131), pág. 269]. Para obtener las ecua-
2 X 1,7520"0, 2 X 1,606 ao, 2 X 1,368 0"0, 2 X 1,135 0"0, respectivamente. ciones de los pequeños movimientos a partir de estas ecuaciones de equili-
En la figura 242 son dados los valores de amll~/C1o para diversos valores brio, basta simplemente con añadir las fuerzas de inercia. Admitiendo
de la relación a = el/Ml. En la misma figura y con fines comparativos, que las fuerzas másicas son nulas, las ecuaciones de movimiento son
es mostrada también la parábola de ecuación

11'=(1'0 {M =~ (q)
. -VPi -vIa
que puede ser obtenida fácilmente, de forma elemental, despreciando la
(263)
masa de la barra e igualando la energía de deformación de la misma a
la energía cinética del cuerpo que choca con ella. La línea a trazos muestra
la parábola' que viene definida por la ecuación

(r)
donde e es la dilatación cúbica y el símbolo V2 representa la operación
Como puede verse, esta curva, para valores de 1/11 grandes da una aproxi- z ¡¡2 ¡¡2 az
m.ación bastante buena. v = ¡¡x 2 + ¡¡yZ + azz
La teoría del impacto desarrollada anteriormente, se basa en la hipó-
tesis de que el contacto tiene lugar simultáneamente en toda la superficie Supongamos, en primer lugar, que la deformación producida por las ondas
de la extremidad de la barra. Esta condición, raramente se realiza en la es tal que la dilatación cúbica es cero, de forma que la deformación con-
práctica y los experimentos no muestran una concordancia satisfactoria sista solamente en una rotación y en una distorsión. Las ecuaciones (263)
con la teoría:!. Se obtiene una concordancia con la teoría mucho mayor, se transforman en
si se usan resortes helicoidales en lugar de barras 4. En este caso, la velo-
cidad de propagación de las ondas longitudinales es pequeña y el tiempo T
invertido por la onda para hacer el recorrido de ida y vuelta de la pieza,
es grande comparado con el necesario para conseguir un contacto completo (264)
de los extremos.
También se puede ensayar, bajo condiciones precisas, utilizando en
los experimentos barras terminadas por esferas, teniendo en cuenta las Estas son las ecuaciones de las llamadas ondas de dislorsi ón.
deformaciones locales, que pueden calcularse mediante la fórmula de Considere,mos ahora el caso en que la deformación provocada por las
Hertz 5 (véase pág. 4-13). ondas no esta acompañada de rotación. La rotación de un elemento res-
pecto al eje z es (véase § 75)

W
z
= ~ (av _ a¡~) (a)
I Véallse los trabajos de Saint-Vcnsnt y Flamunt, loco cit. 2 ax ay
• Esta curva fue propuc.qta por Boussinesq; véase COlllpt. rettd., pÁg. 154, 1883.
, Véase W. Voigt, AmI. "hysik, voL 19, pág. 44, 1883, Y vol. 46, pág. 657, 1915. Para una
revisión de la bibliografía sobre el temo véase el articulo ue T. PUsehl, .Handbuch der Physik., Expresiones análogas dan la rotación respecto a los ejes x ej.l. La condición
vol. 6, pág. 525, Bcrlin, 1928.
, Tales experimentos fueron realizados por C. Ram.suer, Ann. Phy,ik, vol. 30, pág. 416,
de que la deformación sea irrotacional, podrá ser expresada, 'por' tanto,
190<). en la forma .
• Tal estudio fue realizauo por J. E. Seal's, TraJ/s. Cambridge Pllil. 80c., vol. 21, plig. 49, 0: :

1908. Véase tambiénJ. E. P. Wagstaff, Proc. Roy. Soco (Londoll), serie A, vol. 105, púg. 544,
1924; Y W. A. Prowse, Phil. Mag., vol. 22, pág. 209, 1936.
aw_av=o . au:_ aw = o· (b)
ay az .' . az, . a;¡;. '.
·1,
·1
!
¡
!
496 TEORIA DE LA RLAST1CIDAD PROPAGACION DE ONDAS EN MEDrOS ELASTlCOS 497

Estas ecuaciones son satisfechas, si los desplazamientos u, v, w, se deducen clon de propagación de la onda, tendremos que v = 'lO = O Y que u es
de una única función '" como sigue: función de x solamente. Las ecuaciones (265) nos dan, entonces

u = orf>, oq,
v=-, w = oq, (e)
8 2u 2 a2u
o;¡; iJt2 = Gí 8X2 (a)
iJy éJz
Entonces, Esta es la misma ecuación que he~os encontrado al estudiar la propaga-
Clon de ondas longitudinales en barras prismáticas [véase ecuación (258),
ae = .!!.. \T2q, = V'lu pág. 481], excepto en que la cantidad
lJx íJ:c

que sustituidas en las ecuaciones (263), nos dan


iJ'lu
c=i
(A + 2G) V u 2
- P
w=O es remplazada por la cantidad

(265) el = ~A ~ 2G
Estas son las ecuaciones de las ondas irrotacionales u ondas de dilatación. Sustituyendo A Y G por sus expresiones en función de E y del coeficiente
Un caso más general de propagación de ondas en un medio elástico, de Poisson (véanse págs. 30 y 31), esta última cantidad puede ser repre-
se obtiene superponiendo ondas de distorsión y ondas de dilatación. Para sentada en la forma
ambas clases de ondas, las ecuaciones de movimiento tienen la forma común
(269)
(266)
Puede verse fácilmente que el es mayor que e. Este resultado se debe al
en la que
hecho de que el desplazamiento lateral, en este caso, se considera supri-
(267)
mido rpientras que en el caso de una barra, se supone que la deformación
longitudinal es acompañada por una contracción o expansión lateral.
La relación elle depende de la magnitud del coeficiente de Poisson. Para
para el caso de ondas de dilatación, y
')J = 0,25, c¡}c = 1,095; para v = 0,30, elle = 1,16. Todas las conclusio-
JI] nes anteriormente obtenidas, referentes a la propagación y superposición
a= C2 = "\ji (268)
de ondas longitudinales, pueden ser aplicadas también en este caso.
Consideremos ahora las ondas transversales. Tomando como eje de las x
]mr. el de ondas de distorsión. Vamos a demostrar ahora que CI Y e, la dirección de propagación de la onda y como eje y la dirección del des-
::;on las velocidades de propagación de las ondas de dilatación y de dis- plazamiento transversal, encontramos que los desplazamientos u y w son
torsión. cero y que el desplazamiento v es función de x y t. Las ecuaciones (264)
nos dan, entonces
145. Ondas planas. Si en Un punto cualquiera de un medio elástico
se produce una perturbación, las ondas que se originan se propagan en (b)
todas las direcciones. A gran distancia del centro de perturbaciÓn, sin em~
bargo, tales ondas pueden ser consideradas como planas, pudiendo super- Encontramos de nuevo una ecuación de la misma forma que la anterior,
ponerse que todas las partículas se mueven puulelamente a la dirección
pudiendo pues concluir, que las ondas transversales se propagan a 10 largo
de propagación de 'la onda (ondas longitudinales o perpendicularmente a del eje x con la velocidad
esa dirección (ondas tnmsversales). En el primer caso, tenemos ondas de
dilataci6n y en el segundo ondas de distorsiólI. ~2 = (Q
"\j-p ,
Considerando las ondas longitudinales y tomando el eje x como direc-
32 -tliOltlA Llli LA l:USnC;/UAD
PROPAGACION DE ONDAS EN MEDIOS ELASTICOS 499
498 TEORIA DE LA ELASTICIDAD
la fibra experimenta' desplazamientos y distorsiones, cuyos valores con-
o bien, según (269) secutivos están indicados en la. figura mediante los elementos rayados:
( 1 - 2J1 1, 2, 3, 4, 5, .... En el instante t = O, el elemento A toma la posición
C¡ = Cl '\]2(1 _ JI) (270) indicada por 1. En este momento su distorsión y su velocidad son cero.
Después adquiere una velocidad positiva y después de un intervalo de
Para 'V = 0,25, la ecuación anterior nos da tiempo igual a ti/c. su distorsión está representada por 2. En este instante
el desplazamiento del elemento es cero y su velocidad es máxima. Después
de un intervalo de tiempo igual tl/c", las condiciones están indicadas por 3,
y así sucesivamente. .
Cualquier función Suponiendo que el área de la sección transversal de la fibra sea igual
(e) a la unidad, la energía cinética del elemento A es

~-----------t------------~~_
p d:r;
2
(av)2
¡¡¡ =
p dx 47r'cz2
2 ' -Z-2- v." cos· T (x -
271"
C2t)

y su energía de deformación
2
1 .1
2" Gy=u~ to:¡; = 2G d:c --l-2
471"iv 0
-
211"
cos· T (:¡; - C2t)

Recordando que C2" = Gle, podemos deducir que las energías cinética y
Flo.243 potencial del elemento, en cualquier instante, son iguales. Esta es la misma
conclusión que obtuvimos anteriormente al estudiar las ondas longitudi-
es solución de la ecuación (h) y representa una onda que se propaga en nales en barras prismáticas (véase pág.484) ..
la dirección x con velocidad C2. Tomemos, por ejemplo, la solución (e) En el caso de. un terremoto, se producen los dos tipos de ondas, de
de la forma dilatación y de distorsión, las cuales se propagan a través de la tierra con
velocidades Cl Y Cg. Esas ondas pueden ser registradas por un sismógrafo,
271" (d) de forma que el intervalo de tiempo transcurrido entre la llegada de los
11 = Vo sen T (x - C2t)
dos tipos de ondas, es un dato que da una orientación respecto a la dis-
La onda tiene en este caso una forma sinusoidal. La longitud de onda tancia que separa a la estación registradora del centro de pertUrbación I •
es l y la amplitud V¡,. La velocidad del movimiento transversal será
146. Propagación de ondas sobre la superficie de un cuerpo
811 27rC2 271" ( ) (e) elástico. En la pregunta anterior, hemos estudiado la propagación
al = - -¡- 110 cos T x - C2t
de las ondas a cierta distancia de la superficie limitante de un medio
la cual es cero cuando el desplazamiento (el) es máximo, y tiene su valor elástico. Pude ocurrir, no obstante, que en la superficie de un cuerpo elás-
máximo cuando el desplazamiento es nulo. La deformación tangencial tico tengamos ondas de un tipo diferente, las cuales se propagan sobre
producida por la onda es la superficie penetrando muy poco en el interior del cuerpo. Son semejantes
a las ondas producidas en la superficie tranquila del agua al ser arrojada
'Y%U = ax8v = T 2?rVo 271"
cosT (x - czt
) (1) una piedra. Lord Rayleigh, que fue el primer-o en estudiar tales ondas" ,
señaló: «No es impr()bable que las ondas superficiiiles aquí estudiadas,
Como puede verse, la distorsión má;'(ima (j) y el máXimo del valor abso-
I Las ondas provocadas en la tierra por las máquinas de movimiento ál~ernativo son' estu~
luto de la v~locídad (e), se producen, en un punto determinado, simultá- di~d8S c,:, los siguientes trabujos: L. Mi!1trop, Dissertat;on, G~ttingcn, '1911; A.. Hcinrich,
neamente. DisserlaltOn, Br•• Jau, 1930; G. Bornitz, Über die AusbreilUll1l vd" Bodenschwingungim, Berlln
Podemos ~epresentar esta forma de propagación de ondas de la ma- 1932. Véase también E. Reissner y H. F. Sagaci, J. AppliuJ Phys., vol. 15, pág. 652, 1'944;
H. F. Sogoci, ibid., pág. 655. . .
nera siguiente: sea mn (fig. 243) una fibra de un medio elástico. Cuando • Véase Proc. LOllljml Math. Soc., vol. 17, 1887... '. .
una onda sinusoidal (d) se propaga a lo largo del eje x, el elemento A de
500 TEORIA DE LA ELASTICIDAD PROPAOACION !J1l ONDAS EN MEDIOS ELASTlCOS 501
jueguen un papel importante en los terremotos y en los fenómenos de o empleando la notación
colisión de cuerpos elásticos. Divergiendo en dos dimensiones solamente;
deben adquirir, a distancias grandes del origen, una importancia conti- (e)
nuamente en aumento». El estudio de las gráficas de las ondas sísmicas,
llegamos a
confirma la hipótesis de Rayleigh.
A distancias grandes del origen en que la onda ha sido creada, la de- (f)
formación producida por las ondas que estudiamos puede ser considerada
Combinando las soluciones (a) y (b) Y tomando u = Ul + u., V = Vl + V2,
como bidimensional. Admitamos que el cuerpo está limitado por el plano
determinamos las constantes A, b, p, r, s, de forma que sean satisfechas
y = O, Y tomemos como sentido positivo elel eje y el que va hacia el inte-
las condiciones de con tomo. La periferia <;Iel cuerpo está libre de fuerzas
rior del cuerpo y como sentido positivo del eje x el de propagación de la
exteriores, de manera que para .Y = O, X = O e Y = O. Sustituyendo las
onda. Las expresiones de los desplazamientos, se obtienen combinando on-
ecuaciones (134) y tomando l = n = O Y 711 = -1, obtenemos
das de dilatación [ecuaciones (265)], y ondas de distorsión [ecuacio-
nes (264)]. Suponiendo en ambos casos que 'lO = O, -la solución de las ou+av_
ecuaciones (265), que representa las ondas de dilatación, puede escribirse ay élx - o
'U1 = se-rv sen(pt - sx), Vl = -re-t'1J cos (pt - 8X) (a) AB+2G
oV =0 (g)
ay
donde p, T, Y .s son C011stantes. El factor exponencial de estas expresiones
indica que, para valores reales positivos de T, la amplitud de la onda dis- La primera de estas ecuaciones indica que las tensiones son tangenciales
minuye rápidamente al aumentar la profundidad y. El argumento pt - .sx y la segunda, que las tensiones normales en la superficie del cuerpo, son
de las funciones trigonométricas, muestra que las ondas se propagan en nulas. Sustituyendo las expresiones anteriores para u y v en estas ecua-
la dirección x con la velocidad ciones, resulta
e3 = l!. (2711 2rs + A (b + 8 2)
2
= O
(~ - 2) (r
8
2
-
2
8 ) + 2(r + Ab8) = O
2 (h)
Sustituyendo las expresiones (a) en las ecuaciones (265), encontramos que
estas ecuaciones SOIl satisfechas si donde, según (b) y (e)
{c2 A
--2 =-
h} G
o usando la notación
Eliminando la constante A de las ecuaciones (h) y usando (c) y (j),
(b) obtenemos
si tenemos (le)
(o) .
o bien, según (e) y (j) !
Tomaremos las soluciones de las ecuaciones (264), que repl·esentan las
ondas de distorsión; en la forma
2
fe - 2
( -~ )4 = 16 (1 - -h2) (1 - ~ .
2
-fe~ )
112 = A be-bV sen (pt - sx), V2 = - Ase-bu cos (pt - oSx) (d) Empleando las ecuaciones (b), (e) y (271), todas las cantidades de esta
donde A es una constante y b un número positivo; Puede demostrarse ecuac:ión pueden ser expresadas en función de las velocidades el de las
que la dilatación cúbica que corresponde a los desplazamientos (ti) es ondas de dilatación, c. de las ondas de distorsión y C3 de las ondas super-
cero y que las ecuaciones (264) son satisfechas si ficiales, obteniéndose.

b2 = S2 - G.
pp2
(
2
03 -
02
2
2)4 = 16 (1 _( (1 - ca:)' 32
)
C1 2 C2-
(l)
502 'rEORIA DE LA ELASTICIDAD

Empleando la notación

y recordando que Aplicaciones de las


C2 2 1 - 2)1
C¡2 = 2(1 - 11)
en diferencias finitas en e/a
la ·ecuación (l) se convierte en

«1 _ 801.4 + 8 (3 - 11 -=-2:) 01. 2


- 16 [1 - 2~1-!:)] = O (m)

Tomando por ejemplo, 11 = 0,25, obtenemos

o
(0: 2 - 4) (3«4 - 12a2 + 8) = O 1. Deducción de las ecuaciones en diferencias finitas. Como
hemos visto, el estudio de los problemas de elasticidad requiere la solu-
Las tres raíces de esta ecuación son ción de ciertas ecuaciones en derivadas parciales, sometidas a unas deter-
2 minadas condiciones de contorno, las cuales sólo en los casos de contornos
.
ct 2 = 4, ct 2 = 2 + --, muy sencillos son resolubles de manera rigurosa.
v'3 A menudo es imposible obtener la solución exacta siendo necesario
Las cantidades r y b2, dadas por las ecuaciones (e) y (j), son números hacer uso de métodos aproximados, uno de los cuales, el método numérico
positivos y como se observará, solamente la última de las tres raíces satis- basado en la sustitución de las ecuaciones en derivadas parciales por las
face esas condiciones. En consecuencia correspondientes en diferencias finitas, va a ser tratado aquí '.

Ca = aC2 = O,91D4 .J? Si una. función continua y(x) viene dada por el conjunto de valores
Yo, Yl, Y2, ••. , correspondientes a x = 0, x = 6, x = 20, ... , podemos ob-
tener, restando, las dijerendas primeras (¿l¡y)%-O = Yl -' Yo, (LltY)%_~ =
Tomando como caso extremo 'ji = t, la ecuación (m) se transforma en = Y2 - y¡, (LI¡Y)Z-2h = Ya - Y2' •.• , las cuales, divididas por el inter-
valo 6 nos dan los valores aproximados de la derivada primera de y(x)
en los puntos correspondientes:
llegándose entonces a
dY)
( dx "" YI - Yo, (1)
_o o
. Ca = 0,9553 @.
'\j"p
1 Parece ser que C. Runge fue el primero en aplicar las ecuacIOnes en difer~nclas tinitas
En ambos casos, lá· velocidad de las ondas superficiales es ligeramente ~II elasticidad, al emplear este método para la resolución de problemas de torsión (Z. Math.
Phys., vol. 56, pág. 225, 1908). Rungo reuuce el problema a la solución de un sistema de ecua-
inferior a la de las ondas de distorsión propagadas a través del cuerpo. ciones algebraicas lineales. L. F. Richardson, Tram. Roy. Soco (London), s~rie A, vol. 210,
Conocida a, se puede calcular fácilmente la relación entre las amplitudes pág. 307, 1910, aplicó un proceso iterativo a In resolución de esas ecuaciones algebraicas ob-
de los desplazamientos horizontales y verticales que ocurren en la super- teniendo así los valores aproximados de las tensiones, qu~ producen en las presas las fUCI7.RS
gravitatorios y la presión del agua. Otro proceso iterativo, así como la prueba de su convergen-
ficie. Para 'ji = .1/4- esta relación cs 0,681. Podemos asimismo obtener la cia, hu sido dado por H. Liebmnnn, Sitzber. Bayer, A~ad. W'·S$., 1918, pág. 385. La conver-
velocidad de propagación de las ondas superficiales, partiendo de la con- gencia de este proceso de iteración en el caso de ecuuciones armónicas y biarmónicas ha sido
sideración de las vibraciones de un cuerpo limitado por dos planos pa- estudiada por F. Wolf, Z. allgew. Math. Mech., vol. 6, pág. 118, 1926, y R. Courant, Z. angew.
Malh. Mech., vol. 6, pág. 322. El método de la~ diferencias finitas fue aplicado con éxito en
ralelos' . el estudio de las placas por H. Mareus, A,mierter Beton, 1919, pág. 107; H. Heneky, Z. angp.w.
Ma/h. Mech., vol. 1, pág. 81, 1921, y vol. 2, pág. 58, 1922. Modernamente R. V. Sout!lwell
I Véase H. Lanib, Proc. Roy. Soco (Londoll), serie A, vol. 93, pág. 114, 1917. Véuse también
y su escuela han hecho amplio uso del método. Véase R. V. ·Southwcll, Relaxa/ion Methods.
S. Timoshenko, Phi/o Mag•• vol. 43, . pág. 125, 1922. vols. r, II y lIr. . . ..
504 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 505

Partiendo de las diferencias primeras, las diferencias segundas se calculan en la que tf es la función de tensión, que debe ser constante a lo largo del
de la siguiente manera contorno de la sección transversal, O el ángulo de torsión por unidad de
longitud de la barra y G el módulo· de rigidez: Empleando ahora las fór-
(6 aY)=-5 = (AIY)=-1 - (61y)._o = Y2 - 2Y1 Yo + mulas (3) podemos transformar la ecuación anterior en la ecuación en
y a partir de ellas, se obtienen los valores aproximados de las derivadas diferencias finitas
segundas 1
~ (</>I + <Pz + cf>3 + 94 - 490) = -2GO (5)
d2 1!) ,.,. (62Y).~8 = Ya - 2111 + Yo (2)
( dXl :_1 a2 62 De esta forma todo problema torsional se reduce a la obtención de un
conjunto de valores numéricos de la función de tensión tf que se man-
Si tenemos una función continua de dos variables w(x, y), podemos tengan constantes en el contorno de la sección transversal y que en los
utiliza. para el cálculo aproximado de sus derivadas parciales, ecuaciones nudos interiores de la cuadrícula satisfagan la ecuación (5).
semejantes a las (1) y (2)_ Supongamos, por ejemplo, que el contorno de Vamos a considerar ahora el caso sencillo de una barra de sección
nuestro problema es rectangular (fig. 1) Y que se conocen los valores nu- cuadrada a X a (fil{. 2), en la que usamos una red cuadrada cuya celda
tiene la dimensión b ~ 1/4a. Por razones de simetría se ve que en el estudio
de este caso, basta con considerar la parte de la sección que se muestra
y
a
rayada en la figura. Determinados, en efecto, los valores o. p, " de la

r
ró.J "
función rp en los puntos que se señalan en la figura, conoceremos tf en todo
nudo de la red. En cuanto al valor de rp en el contorno, podemos suponer
~ l= que es cero. El problema, pues, se reduce al cálculo de o, fJ y y, para lo
~RP que escribimos tres ecuaciones del tipo. de la (5), que teniendo en cuenta
2 a v
r las condi<:iol1cb de simetría, nos quedan
l1 lt

L
O
2fJ - 4a = -2G80 2
1> 2a: + "( - 4(3 = -2GW
4f3 - 4"( = -2G805'
Fw. 1 FIO. 2
y que rc~udt"s nos dan
a = 1,375GOo2, f3 = 1,750GO{j2,
méricos de la función zv en los nudos de la cuadrícula, cuya celda elemental
tiene la dimensión o. Podemos entonces determinar los valores aproxima- La función de tensión viene, pues, determinada por el valor cero en el con-
dos de las derivadas parciales de w en O mediante las siguientes expresiones: torno y por los valores que acabamos de obtener en los nudos ·interiores.
Para calcular las derivadas parciales de la función de tensión, imagi-
OW Wl - 'tOo OW Wz - Wo nemos una superficie continua que tenga por ordenadas en los nudos de
-~-, ay ,.,. ---0-
o.c /l (3) la red los valores numéricos calculados. La pendiente en un punto cual-
él 2w WI - 2wo + W3 a2w W2 - 2wo + w( quiera de esta superficie, nos dará el valor correspondiente (aproximado)
élx2 ,.,. 02 ' ay2 "" /l2 de la tensión de torsión, dándose el valor máximo de la misma en el punto
De forma similar, obtenemos las expresiones aproximadas de las derivadas medio de los lados del cuadrado. Para hacernos una idea de la exactitud
parciales de orden superior. Obtenidas esas expresiones, podemos trans- que se consigue al aplicar una red de tan pocos nudos, calculemos la ten-
formar fácilmente las ecuaciones en diferencias finitas. Consideremos, para sión de_ torsión en el punto O de la figura 2. Para obtenerla, busquemos
empezar, el caso de la torsión de barras prismáticas._ El problema, c?mo una curva continua cuyas ordenadas en los nudos del eje x sean los valo-
sabemos 1, se red'lt e a la integración de la ecuación en derivadas parCiales res P, ", IJ. Estos valores, divididos por 1/40802, aparecen en la segunda
línea de la tabla adjunta, dándose en las restantes líneas de la misma las
(4) sucesivas diferencias finitas 1 •
1 Consideramos aquí las ,hferencias (que son usadas en la fórmula de Newton) cornil ,lo

, Véase l. ecuación (142), § 90. fmidas todos ellns en un extremo del conjunto de cAnudades: . ... ..
TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUAC10NES EN DIFERENCIAS FINITAS 507
506
entonces obtenerse aplicando la fÓTmllhl de tensión 1>, introducido por el uso de diferencias finitas, en lugar de
L a curva que b uscamos p uede ecuaciones diferenciales, es proporcional al cuadrado de la dimensión de la
dl" interpolación de N ewton: '.
celda elemental de la red, supuesto que ésta sea pequeña. Si designamos
x= O o 20 30 4J
r~

'"'"
.p= O 7 9 7 O
a: Ip r
A, = 7 2 -2 -7 0:1 la.t
Ll. = -5 -4- -5 o "\,?í
1.13 = 1 -1

A - -2

~ ~ ) ~
ep= epo + x-t + x(;¡; - o) 1- 2' 03 + x(x - o)(x - 2<1 1· 2', 363 FICl.3

~4 por Ll el error de la tensión máxima para o = 1/4a el error para (j = 1/6a


+ :t(x - o)(x - 20) (x - 30) 1 . 2 . 3 . 484
podrá suponerse a ..1 {!)2. Usando los valores de la tensión máxima, ca1cll-
I:ldos anteriormente. se obtiene J a partir de la ecuación
Derivando rP y sustituyendo Lit. Lh • ..•• por los valores de la tabla, que
Do - Do(t)2 = O,0l5G8a
multiplicamos por GI)52f4, obtenemos para x = O, de donde
0<1»
( éJx
= ~GtM := O,646·Ga8 Á = O,027GOa
",-o 48
siendo entonces el valor más aproximado de la tensión
Comparando este resultado con el valor exacto dad~ en el § 95, ve~o~
que el error en este caso es del 4.3 %. Para consegUIr mayord~xact1~~ O,646GOa + 0,027G6a = O,573G8a
debemos usar una red más fina. Tomando, por ejemp.lo, com~ ImenSlOn que difiere del valor exacto, O,67SGOa en menos de 1/3 %.
de la celda () = af6 (fig. 3), tenemos que resolver seIS ecuaclOnes de las
que se obtiene 2. Métodos de aproximación sucesiva. A la vista del sencillo
ex = 0,952 X 2G60 a, {3 = 1,404 X 2G8/j2, "1_= 1.539 X 2G()02 ejemplo, estudiado más arriba, se deduce que el método de las diferencias
2 ""1-= 2,598 X 2G8ó 2 finitas es más exacto cuanto más fina sea la red que utilizamos. Al mismo
al = 2,125 X 2GB 02, fh = 2,348 X 2G8ó "
tiempo, sin embargo, el número de ecuaciones a resolver aumenta y el
Usando ahora siete ordenadas 11 10 largo del eje x y ca~~u~ando la pen~ tiempo necesario para hallar su solución puede ser tan grande, que el
diente en el punto O; obtenemos el valor máximo de la tensICn , que result método deje de ser práctico 1 • La obtención de esa solución se facilita,
no obstante, notablemente haciendo uso del método de aproximaciones
( Oc/»
ox ._0 = O,GGlOBa sucesivas, método que vamos a ilustrar considerando la ecuación 2

El error del mismo es de un 2 %. Obtenidos los r7s~lt~~os para 0 = ~/;a


02<t> ¡Pe(>
y (J = 1/6a, puede conseguirse' una mayor aproxlmac~on extrapo1un ?, .
éJ:t2 + éJ y2 = O (6)

Se puede demostrar~. en efecto, que el error de la derIvada de la func10n I En el trabajo de G. Runge, citado anteriornwnt.., se liega a Un. sistema de 42 ecuaciones,
.. . rf demente que pudo ser resucito sin gran dificultad gracias a la sencillez de Ji!s ecuaciones.
1 El cálculo de' ~ns d.rivadWas dGe lBl,:aklcllrv~:e ~~r:~:~~~: ~:r:;:~ ~¡":b:";elaxal¡oll , Como vimos en el § 92, la solución de los problemas tarsionales: Se reduce a la obtención
usando los tablas realtzadas por . . le ey. as de una función '/> que lome unos determinados valores en, el i:?piO:fl.1.9. y que satisfaga es.
Methods ¡PI Theoretical Phys,'s, de R. '(o Sothwell. ecuación .
• Véase L. F. Richard,on, loco "l.
508 'rEORIA Dll I.A ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINI1'AS 509
Como se deduce de (5) la ecuación en diferencias finitas corrl!spondientes es Realizando cálculos semejantes pura todos los nudos interiores, obtenemos
las primeras aproximaciones dadas por los segundos números de las colum-
(7)
nas de la figura, pudiendo obtenerse a partir de ellas las segundas aproxi-
ecuación que muestra que el valor de la función '" en cualquier nudo O maciones: '
de la red cuadrada, es igual a la media aritmética de los valores de la fun-
ción en los cuatro nudos adyacentes. Este hecho va a permitirnos abordar rj>,," =! (800 + 1000 + 988 + 806) = 899
,p,," = ! (899 + 1200 + 899 + 850)
............... = 962
f(J()() 1200 ¡tXJO
llJO()
!l2S
IQO(1
9,18
{Q(1(J
92$ .,, ,, ¡"

800
a
899

!I(}(J
9$Z

Ó 'O(}
e
899

'(JO
r!O() , /
/
/
, //
/"

8(J6 IISII

"'" ,,
d06
75Q 800 75Q
/
/ // 1'\,
6'00 600
a1 IÓI ' C¡ / /
"v
,
(I()() 80(} 110()
"
400
/SSI
622
7.18
7/1
6S1
622 /
/
, //

ctz Óz Cz
400
/
'/
,, //
,,
'//

/
6'00 800 éOO
/
" v/ "
FIG.4
FIG. 5

el cálculo de los valores de '" por aproximaciones sucesivas. Consideremos


de nuevo el caso sencillo en el que el contorno es un cuadrado (fig. 4) Las segundas aproximaciones han sido escritas también en la figura 4,
Y supongamos que los valores de rfi en ese contorno son los indicados en la cual puede verse cómo las aproximaciones sucesivas tienden gradual-
en la figura. A causa de la simetr{a de estos valores respecto al eje vertical mente a los valores exactos obtenidos anteriormente. En el caso presente
central, se deduce que tP será simétrica respecto a ese mismo eje. En con- r después de repetir 10 veces los cálculos, los resultados obtenidos difieren
secuencia, bastará con calcular los vulores de 1> en los seis nudos a, b, de los exactos en menos de una unidad, lo cual es una aproximación
a¡, b¡, a., b., Esto puede realizarse fácilmente pla'nteando seis ecuaciones (7) K~~~ -
las cuales, son sencillas en este caso, y nos dan rpa = 854, P. = 914, Generalmente el número de veces que es necesario repetir los cálculos
tPa.1 = 700, rPOI = 750, "'aZ = 597, <Pb2 = 686 1• En lugar de proceder depende mucho de la selección inicial de los valores de la función .p.
así, sin embargo, vamos a hacerlo de la siguiente forma: suponemos Cuanto mejor sea ésta, menor será el número de las correcciones subsi-
que la función rP toma unos ciertos valores (tales, por ejemplo, como los que guientes.
encabezan las columnas numéricas escritas en la fig. 4) Y después aplica- Al comenzar los cálculos conviene utilizar una red «abierta» que tenga
mos a cada nudo la eq.lación (7), con el fin de obtener una mayor apl'oxi- pocos nudos interiores. Los· valores de ,p, en esos puntos, pueden obte-
mución. Consider:ando el purito a tenemos, como primera aproximación, ~erse. por solución direc~ de las ecuaciones (7) o mediante el proceso
el valor Iterativo que acabamos de describir. A continuación, se pasa a una red
más fina tal como la ilustrada en la figura 5, en la que la red «abierta>} es
if¡.,' = ! (800 + '1000 + 1000 + 900) = 925
representada por las líneas gruesas. Obtenidos los valores de '" en los nudos
representados por pe,queños círculos y aplicando las ecuaciones (7), se
y para el punto b (empleando el valor obtenido de ,pa' y haciendo por sime- calculan los valores para los puntos marcados con cruces. Usando ahora I!ls
tría ~; =, <fin ')
ecuaciones (7) yesos dos conjuntos de valores, sc' obtienen los corres-
rp~' = 1- (925 + 1200 + 925 + 900) = 988 pondientes a los puntos señalados por pequeños círculos negros. De esta
forma, estarán determinados todos los valores en los' nudos de la red fina
, En el c-.ilculo 'realizado despreciamos los decimale., pudiendo comenzarsc los procesos de iteración .en, esa red. '
510 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLlCAClONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS f'INITAS 511
En lugar de calcular los valores de rp, es posible aSImIsmo obtener a la tracción uniforme de los hilos, vemos que la fuerza vertical (hacia
las correcciones a los valores rpo tomados inicialmente para la función ,¡, 1 .' , arriba) ejercida sobre el nudo O por los hilos O - 1 Y O - 3 (fig. 6)
Ocurre entonces que es igual a
(10)
y dado que la función 1 satisface la ecuación (6), otro tanto ocurrirá con
la suma rpo +
'1', obteniéndose pudiendo escribirse una expresión semejante para los otros dos hilos O - 2
8 21/1
8X2
{)21/;
+ "áYi. =
_ (8
t3x2
2
</10
+
0 2 </>°)
8y2 (8)
y O - 4. Remplazando la carga continua que actúa sobre la membrana

En el contorno se conocen los valores de rp anulándose en él, por tanto,


las correcciones 1f'. El problema, entonces, es encontrar la función 1p que
satisfag¡i la ecuación (8) y se anule en el contorno. Sustituyendo la ecua-
ción (8) por la correspondiente ecuación en diferencias finitas, se obtiene
para cualquier punto O de una red cuadrada (fig. 1).
+ +
.pl + 1/;2 ';8 V4 ..,. 41/;o = - (</>1° cf>20 +
</>3 0 cf>40 - 4"'0°) (8') + + FIG.6

El segundo miembro de esta ecuación puede ser' evaluado, para todo nudo por las fuerzas concentradas ql;Z, aplicadas en los nudos, podemos escribir
interior, partiendo de los valores supuestos ¡f; ° para la función rp. De esta ahora la e~uación de equilibrio de un nudo O de la siguiente forma:
forma, el problema de calcular las correcciones 1f' se reduce a la solución
de un sistema de ecuaciones semejantes al (5), que puede ser atacado por
q8 2 + S(Wl + Wz + Wa + W4 - 4wo) = O (11)
el método iterativo estudiado. Esta es la ecuación en diferencias finitas que corresponde a la ecuaClOn
diferencial (9), debiendo obtenerse para resolver el problema un conjunto
3. Método de relajación. Un método útil para tratar ecuaciones tal de valores, que satisfaga la ecuación (11) en todos los nudos.
en diferencias, tales como las (8'), ha sido desarrollado por R. V. Southwell Comenzamos para ello con un conjunto cualesquiera de valores Wo°,
quien lo ha nombrado método de relajación. Southwell comienza conside- W10, wao, W3~, W40, ••• , de la flecha. Sustituyéndolos en las ecuaciones (11)
rando la analogía de la membrana de Prandtl 2 , la cual se basa ,en el hecho encontraremos, generalmente, que las condiciones de equilibrio no son
de que la ecuación diferencial (4), de los problemas de torsión, es de satisfechas, de forma que para mantener las flechas supuestas en la red,
igual forma que la necesitamos introducir soportes en sus nudos.
Las cantidades tales como:
(9)
Ro = qo2 + S(w10 + W20 + wao + W40 - 4woO) (12)
ecuaClOn ésta que rige la deformación de una membrana sometida a una que representan los esfuerzos a los que son sometidos los soportes, son
tracción uniforme en su borde y cargada lateralmente. En esta ecuación w llamados fuerzas residuales o residuos. Imaginemos ahora que los soportes
es la flecha de la membrana respecto al plano horizontal, que es su posi- son del tipo tornillo, de forma que todo nudo pueda ser desplazado a
ción inicial, q el valor de la carga repartida y S la tracción constante por voluntad. Desplazando entonces convenientemente los soportes podremos
unidad de longitud de contorno de la membrana. El problema es encon- conseguir finalmente que las fuerzas residuales (12) se anulen. Tales des-
trar la flecha w función de x e y, que satisfaga la ecuación (9) en todo plazamientos representarán, por tanto, las correcciones a añadir a las fle-
punto de la membrana y se anule en el contorno. cbas Wo°, W10, W20, ••• , supuestas inicialmente, para obtener los verdaderos
Deduzcamos ahora la ecuación en diferencias finitªs correspondiente. valores de w.
Con ese fin sustituyamos la membrana por la cuadrícula de hilos unifor- El procedimiento utilizado por Southwell para realizar el desplaza-
memente estirados de la figura 1. Considerando el punto O y llamando Sá miento de los soportes, es análogo al empleado por Calisev 1 al manejar
, Este método ~implifica los cálculus, puestu que en él se trata cun números relativamentl' , K. A. ealisev, Telmicki List, 1922 y 1923, Zagreb. Traducci6n alemana en Pubs. 111terl/
pequeños.. . ~ss(¡c. Bridge and Slmctural Engilleering, vol. 4, pág. 199, 1936. Un méloúo semejante h.,
• Véase el § 93. s,do desarrollado por l'Iardy Cross.
512 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN D1FF.RENCIAS FINITAS 513

estructuras articuladas altamente indeterminadas desde el punto de vIsta dente exactitud. Los valores correspondientes de -ro se obtendrán entonces
estático. Se comienzu desplazando uno de los soportes, el 0, por ejem- mediante la ecuación (14).
plo (fig. 6), dejando a los otros inmóviles. Ecuaciones tales como la (11) Con el fin de ilustrar el método, consideremos el problema, ya estu-
muestran que un desplazamiento hacia abajo 'U\¡ , provoca la aparición de diado en el § 1 del apéndice, de la torsión ·de tina barra de sección cuadrada.
una fuerza vertical -4SUlJ' sobre el nudo O, indicando el signo menos La ecuación diferencial correspondiente a este caso es la (4) I~ cual es
que la fuerza es hacia arriba. Ajustando el desplazamiento de forma tal que expresada en forma adimensional poniendo

Ro - 4Swo1 = O, es decir, wl = !:s (13) .p = 2GOo2", (17)


1000
podemos anular el residuo (12), consiguiendo que ninguna fuerza sea
La ecuación en diferencias finitas (5) toma entonces la fOlma:
transmitida al soporte O. Al mismo tiempo, sin embargo, esfuerzos de
\'alor SWo' son transferidos a los soportes adyacentes, lo que modifica 1000 + (,p, + -/12 + "'3 + "'4 - 4",o) = O (18)
sus fuerzas residuales. Procediendo de igual manera con el resto de los
o
soportes y repitiendo varias veces la operación, se llega a reducir las fuerzas
residuales a pequeñas cantidades que pueden ser despreciadas. Los des-
plazamientos totales. de los soportes, finalmente ejecutados, representan
·las correcciones que es preciso realizar para obtener las verdaderas flechas
-I'l -
-2
-J
-6 -
700

:¡:i

de la cuadrícula tensada. :~
Con el fin de simplificar los cálculos que se presentan en la aplicación -1 -);
-2 -~
del método, que acaba de ser descrito, comenzaremos por poner la ecua- :~ :~'?5..
-/2 -
ción (11) en forma adimensional sustituyendo 900 -t

o2 :~ :j:
q
w=-.p (14) -J
-;1 -
-~-~
-~
S
:~:l$ :¡:~
o
10 que permite escribir: -/2 -
900 -1

1 + (.pI + "'2 + 0/13 + ,pl - 4",o) = O (15)


donde las cantidades 1po, 1JI1> ... , son números sin dimensiones.
El problema se reduce, de esta forma, a la determinación del conjunto
de valores de 'P que verifican las ecuaciones (15) en todos los nudos inte-
riores de la red. En el contorno 1p es nula. Para obtener la solución mediante
~-----------a------------~.l /:: 1
FIC. 7
el método descrito, partamos de un conjunto cualesquiera de valores inicia- ,
les 'Po 0 , 1f1'o, 1f1ao, .... Estos valores no satisfarán las ecuaciones de equili- El denominador 1000 ha sido introducido en la ecuación (17) con objeto ¡. 1
;:
brio (15) teniendo entonces los residuos de que los números sean lo suficientemente grandes como para poder des- !,
preciar media unidad de la última cifra significativa. De este forma tra-
(16)
bajaremos solamente con números enteros. Con el fin de hacer nuestro·
que en este caso son números sin dimensiones. ejemplo lo más sencillo posible comenzaremos considerando la red abierta
Nuestro problema, ahora, consiste en añadir a los valores iniciales de la figura 2. Bastará entonces con determinar los valores de 11' .en tres
'1'00, 'P'o, 1}Jso, .oo, correcciones tales que anulen todos los residuos. Sumando puntos interiores, para los que ya conocemos la respuesta exacta (pág. 504).
la corrección V1J n '1/,,,', uñadimos la cantidad -41J.\l' al residuo ro y la .'Po' En la figura 7 la cuadrícula ha sido representada en una escala lo suficiente-
a los residuos de los nudos adyacentes. Poniendo 1fb' = To/4 anularemos mente grande como para permitir la inscripción de todos los resultados
el residuo ele O y cambiaremos en una cierta cantidad los residuos de los de los cálculos intermedios. El cálculo comienza con los valores de "P,
nudos adyacentes. Operando de la misma forma con todos los nudos y supuestos inicialmente, los cuales han sido inscritos a la izquierda de cada
repitiendo el proceso varias veces, reduciremos finalmente las fuerzas re- nudo. Los valores 700, 900 y 1100 han sido elegidos intencionadamente
siduales a valores despreciables, lo que nos dará los valores de 1p con sufi- algo distintos de.., los exactos, calculados precedentemente. Sustituyendo
33 .......,..,.oRIA DC LA C1AS1",cu,)¡\J)
514 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLÍCACIONES DE LAS ECUACIONES EN D1FIlRENCIAS FINITAS 515

estos valores junto con el valor cero del contorno en el primer miembro los cuales se aproximan mucho a los resultados exactos obtenidos anterior-
dc la ecuación (18), calculamos las fuerzas residuales para todos los nudos. mente (véase el § 1 del apéndice).
Estas fuerzas están inscritas a la derecha y arriba de cada nudo. El valor Vemos que el método de Southwell da una representación física del
máximo de las mismas, 200, se da en el centro de la red, punto éste a proceso iterativo de resolución de las ecu~ciones (15), lo que puede ayudar
partir del cual comenzamos a aplicar el método de relajación. Corrigiendo a elegir correctamente el orden en que deben ser abordados los nudos de
el valor inicial 1100 mediante la adición del número SO, el cual está escrito la red.
encima del 1100, eliminamos completamente la fuerza residual en el centro. Para obtener una mayor aproximación debemos pasar a una red más
Es por eso que tachamos el número 200 poniendo el cero en su lugar. fina. Usando el método ilustrado en la figura S, obtenemos los valores
Hecho esto tendremos que cambiar los residuos de los nudos adyacentes.
Añadimos para ello el número SO a cada uno de estos residuos y escribi-
iniciales de 1p para una red cuadrada de dimensión {; = fa. Aplicando
mos los nuevos valores, - SO, de las fuerzas residuales encima de los valo- a estos valores el proceso norma). de relajación, podremos encontrar los
res iniciales en la forma que se indica en la figura. Con esto finalizan las valores de 1p para una red más fina y determinar asi, con mayor precisión,
operaciones relativas al punto central de la red. Tenemos ahora cuatro
nudos, simétricamente situad,os, con residuos iguales a - SO Y es conve-
el valor de la tensión máxima. Con los valores obtenidos para {; = ~ a
niente corregirlos simultáneamente. Apliquemos para ello a todos estos y O =. t a puede conseguirse, extrapoland~ en la forma explicada en el
puntos una misma corrección de valor -12 1 • Estas correcciones que están
§ 1 del apéndice, una mayor aproximación.
escritas encima de los valores iniciales 900 alteran en ·_·12 X 4 = -43
los residuos previos de valor - SO obteniéndose como se expresa en la
4. Redes triangulares y exagonales. La .red que hemos utilizado
figura fuerzas residu~les iguales a ~2. Al mismo tiempo, fuerzas de valor
en el estudio precedente ha sido una cuadiícula. En ciertos casos, sin em-
-12 se sumarán a los residuos de los nudos adyacentes. De esta forma,
bargo, es preferible usar redes triangulares o exagonales (figs. 8a y 8b).
como es fácil ver, el valor -12 X 4 = -48 debe ser añadido al residuo
Considerando la red triangular de la figura 8a vemos que la carga repar-
del centro y el -12 X 2 = -24 al de los nudos más próximos a los vér-
tida en el interior del exágono, representado por la línea a trazos, estará
tices de la figura. Con esto acabamos la primera etapa de nuestro cálculo.
aplicada en el nudo O. Si 5 es la dimensión de la malla, el lado del exágono
En la segunda volvemos a empezar con el punto centra! corrigiendo con
valdrá b/-v'3 y su área V3 (;2/2, de forma que la carga aplicada a cada
el valor -12, lo que anula el residuo de ese punto y añade -12 al de los
nudo será V3 o2q/2. Esta carga será equilibrada por las fuerzas ejercidas
puntos adyacentes. Aplicando ahora una corrección igual a··· 6 a los puntos
por los hilos 0- 1, 0-2, ... , 0- 6. Para que la red de hilos esté en
vecinos a los vértices, eliminamos sus residuos y alteramos en el valor - 26
correspondencia con la membrana uniformemente tensada, la tracción que
los de los cuatro nudos simétricos. El gráfico muestra tres etapas más del
cálculo lo que supone una mayor reducción de los residuos. Los valores
de ./fI se obtendrán añadiendo a los valores iniciales todas las correccione~
mtroducidas sucesivamente. Resulta, por tanto,
700 - 6 - 3 - 1 = 688,5, 900 - ]2 - ü - 3 - 2 - 1 = 876,
+
1100 50 - 12 - 6 - 3 - 2 = 1127
La ecuación (17) 110S da entonces los valores siguientes para 1>:

GSR,;'
50IJ ('OiP
T 1 377GOo' = O,0861GOa2
=,

~b~ 08ó~ = 1,752G80' = 0,109SGOa 2 .

15~~)7 (iO,l J = 2,254GlJó' = O,1409GOa 2


(a) (6)
1 Tomamus - 12 como corrección en lugor de ~o ~ _ J2,5 por ser preferible lra-
bajar con números enteros. FIG.8
516 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE .LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 517
existe en cada hilo debe ser igual a la transmitida por cada lado del exágono Empleando el método de relajación, lo natural es elegir para el caso
en la membrana. Su valor será entonces SIJ/v'3. Procediendo ahora como en presente una red triangular. Comenzando con una red abierta toxp.amos
la pregunta anterior obtenemos la siguiente ecuación de equilibrio para el como dimensión ~ de la malla un tercio dcllado a del triángulo. En conse-
~~~ . cuencia tendremos un único nudo interior O y los valores de la función ~
_W.=.1_+'---W-=2_+-'----;:_+-'--W...::6C--_O
_W-'0. 80_ + V3 qó 2 = O
V3 2
o lo que es lo mismo:

+ -2a CJ._
J
ó
W¡ + w~ + . . . + Wd - Liw"
J,'{
= o (19)

Introduciendo ahora la función adimensional tp definida por:

(20)
~----~-a--~----~ ~-------a--------~
FIC.9 FIO.IO
la ecuación en diferencias finitas quedará expresada de la siguiente forma:
fl + "'~ + . . . + fr. - (¡fu +1= O (21) de tensión en todos los nudos adyacentes. 1, 2, .... 6. serán cero, por estar
esos puntos en el contorno. La ecuación en diferencias finitas para el
Una ecuación tal puede ser descrita para cada UIlO de los nudos interiores
punto O se obtiene entonces, a partir de la ecuación (19) sustituyendo Wo
y su solución puede obtenerse bien por el método de iteración, bien por
el de relajación. por rPo y q/S por 2GIJ lo que da:
En el caso de una red exagonal (fjg. 8h). la carga repartida sobre el GIJa 2
triángulo equilátero representado por la línea a trazos estará aplicada en 6<1>0 = 3GOó· = 3
el nudo O. Llamando ó a la longitud del lado de la malla exagonal, vemos
de donde .se deduce:
que el lado del triángulo equilátero es ~v'3 y su área 3v'3 o~/4. La carga
. correspondiente, 30 qiS2/4, será equilibrada por las tensiones de los tres
(23)
hilos 0-1. 0-2. 0-3. 'Para que la red de hilos corresponda a la membraml·
tensada igualamos la tensión de los hilos a S,I...(3. La ecuación de equili-
. brio será entpnces: Pasemos ahorll a una red más fina. Para obtener valores iniciales con-
sideremos el punto a. centro del triángulo 1-2-0. Supongamos que este
Wl + W2 + Wa - 3w o • So..j3 + 3 va qoZ = O punto está unido a los nudos O. 1 y 2. mediante los tres hilos a-O. a-t, a-2
6 4 de iongitud ó/V3. Considerando el punto a como lIn nudo de una red
o exagonal (fig. 8b). sustituyendo <5 por b/...;f, q/S por 2GO en la ecuación (22)
. 3 q y tomando w, = w. = O, W3 = <Po. Ub = </Ja. se obtiene:
Wl + W2: W3 - 3wo + 4" S li 2 = O (22)
<P. =
1(
3 <Po + GOfj~)
-2- =
GOa 2
27 (24)
Para obtener las ecuaciones en diferencias finitas correspondientes a los
problemas de torsión. tenemos que sustituir q/S por 2GIJ en las ecuacio- Estos mismos valores pueden ser tomados para la función de tensión en
nes (19) y (22). . .... los puntos h, c. d. e y f de la figura 9. En lo que se refiere a los puntos
Consideremos. a título de ejemplo. la torsión de una barra cuya sec- k. 1, m. usaremos una vez más la ecuación (22). que para este caso en el
ción es un triángulo equilátero 1 (fig. 9). La solución exacta de este pro- que W¡ = W2 = Wa = O nos da:
blema ha sido obtenida en el § 92.
GOa 2
rpk = <P •• = <PI = - (23)
I Este ejemplo es estudiado con d~talle en d libro de Southwell, loe. dt. .. 54
518 TEORIA QE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 519

De esta forma tenemos los valores de 9> en ·todos los puntos señalados En el caso de la torsión, la ecuación (19) será sustituida por la
mediante pequeños círculos en la figura 10. En esta figura vemos, asi-
+ 3Go 81a
2
mismo, que de cada uno de los nudos a, e y e parten seis hilos como se ePI + ep2 + ... + tPe - 6<1>0 = O
exige que ocurra en una red triangular (fig. 8a). En los nudos restantes,
sin embargo, el número de hilos es inferior a seis. Con el fin de satisfacer que introduciendo la notación:
las condicione~_ de red triangular en todos los puntos interiores,. operamos
en la forma que indican las líneas a trazos de la parte superior de la figu- o (27)
ra 10. De esta forma, la sección recta se encontrará dividida en triángulos
queda en forma puramente numérica:
o
.pI + .p2 + . . . +.p6 - G.po + 18 = O (28)
] ,os valores iniciales de V', calculados mediante la ecuación (27), están
inscritos a la izquierda de los nudos en la figura 1lb. Sustituyendo estos
,alores en el primer miembro de (28) encontramos los residuos corres-
pondientes:
(29)
Los residuos así calculados, están escritos a la derecha de cada nudo en
la figura l1b. Para la eliminación de los mismos comenzamos por el
punto a. Dando a este punto un desplazamiento "1p,/ = -2 añadimos
(a) fó) (e) -1-/ .¡.f .¡.¡ ·ff .¡.I

FIG. 11

equiláteros' de lado ó = a/9. Por razones de simetría vemos, que para


resolver nuestro problema, basta con considerar una sexta parte de la
. sección recta, por ejemplo, la mostrada en la figura lla. Los valores
de <p en los nudos 0, a, b y k están ya determinados. Los correspondientes
a los puntos 1, 2 Y 3 serán calculados ahora usando la ecuación (22) y el
valor de ,p en los tres puntos . adyacentes. Para el punto 1, por ejemplo,
tendremos:
4>0 + .jlb + ep" - 34>1 + i . (gy
200 = O Fu). 12

de donde sustituyendo rPa, rPb> t/>u por sus valores anteriormente calcula- [véase la ecuación (29)] + 12 al residuo en a y - 2 a los de todos los puntos
dos, se obtiene: adyacentes. De esta forma el residuo en a ha sido eliminado, mientras
(26) que el correspondiente al punto b toma el valor -2. Los residuos en el
contorno carecen de importancia puesto que en los puntos del mismo
De igual mallera podemos calcular ,p2 y rPa. En la figura l1a I han sido tenemos soportes fijos. Considerando ahora 'el punto e e introduciendo
inscritos todos, los valores a la izquierda del nudo correspondiente. Tales en él un desplazamiento +2 anulamos su residuo y añadimos +2 a '1m,
cantidades serán utilizadas ahora como valores iniciales par~ el proceso residuos de los puntos b, d Y e. El resto de los mi~mos será anulado: im~
de relajación. '
" El núm.ro 486 ha SIdo mtroduc.do en esta fónnu]a con el fm de trabajar solamente
, En la figum ha s.do omItido el factor COa'. con números enteros. .' , ~ ..
520 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 521
poniendo un desplazamiento -2 al punto f. 'Sumando a los valores ini- tul que anule la resultante, obtenemos un conjunto de fuerzas residuales
ciales de 'P todas las corrccciones registradas, obtenemos los valores correc- que se anulan mutuamente, siendo así más fácil su eliminación mediimte
tos de 'P, y empleando la ecuación (27) los de <p. Tales valores que dividi- el procedimiento normal de relajación punto por punto. En las aplica-
dos por GOa2 aparecen en la figura 11c coinciden con los obtenidos en ciones prácticas es ventajoso alternar el' proceso de relajación en bloque
la solución rigurosa (g) del § 92. con el de relajación punto por punto. Supongamos, por ejemplo, que la
zona rayada de la figura 13 representa una porción de una red triangular.
5. Relajación en grupo y en bloque. En el proceso seguido hasta
aquí, para al1u1ar los residuos, se trabaja con un solo nudo, considerándose
fijos al resto. A veces, sin embargo, es preferible desplazar un grupo de

,\ •
nudos simultáneamente. Supongamos, por ejemplo, que la figura 12 re-
presenta una porción de cuadricula y que damos un desplazamiento uni-
tario a todos los puntos de la zona rayada mientras el resto de los nudos .2 -4.ll "'
permanecen fijos. Podemos imaginar que todos los nudos de la zona rayada FIG. 13.
están unidos a una placa rígida de masa nula, la cual es desplazada una
longitud unidad según su propia normal. De las consideraciones sobre el' El número n de hilos que une esta porción al resto de la red es 16 y la
equilibrio (fig. 6) se deduce que los desplazamientos descritos modifica- resultante de los residuos escritos en la figura es 8,8. El desplazamiento
rán los residuos de los nudos, extremos de los hilos que unen la placa en bloque apropiado sería, en consecuencia, 8,8/16 = 0,55. Después de
rayada con el resto de la cuadrícula. Si O y 1 representan los nudos extre- aplícar ese desplazamiento la resultante de las fuerzas residuales que actúan
... mos de un hilo, la contribución a sus propios residuos de los desplaza- sobre la zona rayada de la red se anula y la liquidación de los residuos
. mientos Wo y Wl son: se conseguirá más fácilmente mediante el procedimiento de relajación
punto por punto.
R o = -S8~ y En lugar de dar a la placa ficticia un desplazamiento, perpendicular
Il a su plano y constante para todos sus nudos, se la puede girar alrededor
Si mantenemos fijo ahora el punto 1 y al O le damos un desplazamiento Wo, de un eje situado en su plano. Los desplazamientos correspondientes de
las fuerzas residuales se incrementarán en: los nudos y la modificación resultante de los residuos puede calcularse
fácilmente: De esta forma podemos anular, no solamente la resultante de
ARo = -BAwo, las fuerzas residuales sino también el momento resultante respecto a cual-
quier eje elegido en el plano de la placa.
Introduciendo, conforme a nuestra notación anterior, las cantidades adi-
. mensionales: Podemos igualmente prescindir de la noción de placa ficticia y asignar
desplazamientos arbitrarios a cualquier grupo de nudos. Si tenemos alguna
.R qll2
gó 2 = T, w=-.p S
idea sobre la forma de la superficie de deformación de la red, podremos'

elegir desplazamientos de grupo que aceleren el proceso de anulación.
obtenemos: :1
-A.po, 6. Torsión de barras de sección Itlwtiplemente conexa. Como '1
,1
ya hemos demostrado I , cuando las barras son de sección múltiplemente co- "1
¡¡
Vemos entonces que dando un incremento unidad a 'lb se produce un nexa la función de tensión ,¡, aparte de satisfacer la ecuación (4) debe
cambio de los residuos igual a: JI
verificar a lo largo de cada contorno interior la relación:
Al'O? -1,
Estos cambios' son representados en la figura. Los residuos de los otros
-J orfo ds = 2GM
on' (30)
!
,j
j
¡
nudos de la red no varían. Si n es el número de hilos que unen la placa
móvil al resto de la red el desplazamiento unidad de aquélla, tiene por en la que A es la superficie del agujero.
efecto añadir la cantidad -n a la resultante de las fuerzas residuales ac-
tuantes sobre la porción rayada de la red. Eligiendo un desplazamiento , Véase el § 101,.


!
.¡';
.522 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 523

En la analogía de la membrana la ecuación correspondiente es: es la representada en la figura 14. Tomando la cuadrícula abierta repre-
sentada en la figura y teniendo en cuenta las condiciones de simetría,
-S j -ds
fJW
éJn
= qA (31) observamos que basta con determinar los valores de la función de tensión
en a, b, e, d ye. Las relaciones necesarias se obtendrán utilizando la ecua-
que significa que la carga, uniformemente repartida sobre la .superficie ción (32) y las cuatro ecuaciones (11), correspondientes a los nudos a,
del agujero 1, es equilibrada por las tracciones existentes en la membrana. b, e y d. Sustituyendo q/S por 2G8 y observa11do que n = 20 y A =. 16,)2
Aplicando ahora las ecuaciones en diferencias finitas y considerando como estas ecuaciones toman la siguiente forma:
red unu cuudrículu, pondremos Sli como tensión de los hilos y llamaremos
«lo a la flecha del contorno. y Wl a la del nudo i, adyacente al agujero. 200 -:- 8b - 8e - 4rl = 10 . 2GfJó2
Tendremos antonces, en lugar de la ecuación (31), la expresión: 2b - 4a = _:2(/O(¡2
a - tb + +
r e= -2mJ52
So L (Wi: wo) + qA = O
b - 4c + (1
2~ - 4d
+
u =
e= +
-2G05 2
-2G00 2

S(¡ w.-nwo) +qA =0 (32)


Estas ecuaciones pueden resolverse fácilmente, obteniéndose:

e = 1170. 2G062
488
en la que n es el número de hilos que unen la superficie del orificio al así como los valores a, b, e y d.
re¡;to de la red. La ecuación (11) no es más que un caso particular de la Estos valores, obtenidos con una red abierta, no nos dan las tensio-
ecuación (32) en la que n = 4. nes con suficiente exactitud, siendo necesario pasar a una red más fina. El
resultado de tales· cálculos puede encontrarse en la obra de South\velI 1.

7. Puntos próximos al contorno. En los ejemplos precedentes


existían nudos de [a red que se encontrabl1n en el contorno, pudiéndose
aplicar el mismo procedimiento de relajación a todos los puntos. A me-
menudo, sin embargo, ocurre que ciertos puntos se encuentran muy próxi-
mos al contorno, estando ligados al mismo por hilos muy cortos. A causa

V
de las diferencias de longitud de [os hilos es preciso introducir ciertas
modificaciones en las ecuaciones (11) y (19). Vamos a estudiar ahora tales
modificaciones centrándonos en el ejemplo representado en la figura 15.
ve
F e el e
Una pieza plana en la que existen dos entalladuras semicirculares es some-
tida a esfuerzos de tracción, repartidos uniformemente en sus extremos.
/ b Supongamos que mediante el método fotoeléctrico, expuesto en el ca-
pítulo 5, se haya determinado 'en 'todos los puntos' la diferencia de las
F,o. H tensiones principales. Nuestro problema ahora es determinar la suma de
las tensiones principales, la cual como ya hemos indicado (§ 2 del apéndice)
Podemos escribir tantas ecuaciones (32) como agujeros existan en la debe satisfacer la ecuación diferencial (6). En los puntos del contorno se
sección transversal. Estas ecuaciones junto con las (11), escritas para cllda conoce una de las tensiones principales, por lo quc usando 16S resultados
nudo de la cuedrícula, bastan para determinar las flechas de todos los de los ensayos fotoelásticos, podremos determinar la otra tensíón prin-
nudos de la red y del contorno de los agujeros. cipal y la suma de las mismas. Nuestro problema, por tanto, es, resolver
Examinemos, por ejemplo, el caso de un tubo cuadrado cuya sección la ecuación diferencial (6) conociendo los valores' d~ 1> ·en. el contorno.
I R. V. Southwelt, Rela.wtion Methods tIl Thcorctical Phys;cs, póg .. 60: Oxrórd"Unlverslt)
, gl orIfICIO es representndo por una placa absolutamente ríguJa de pl!S() nulo, que se
puede de.phlz"r sellún In perpendIcular al plano inIcIal de la membrana tensada. Prcss, Nueva York, 1946. .
524 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFllRIlNcrAs FINITAS 525
Aplicando el método de las diferencias finitas auna red de malla cuadrad.l. Aplicando esta forma operatoria en todos los puntos pr.óximos al contorno
observamos que a causa de la simetría de la pieza basta con conside"nlr y el proceso normal de relajación en el resto de los Iludas, se llega a '1m;
una cuarta parte de la misma. Esta porción junto con los valores de ," valores de ~ expresados en la figuni 16 1,

FIG. 15

en el contorno son mostrados en la figura 16. Considerando el punto A


de esta figura, vemos que tres de los hilos que en él confluyen tienen la FIG. 17
longitud <!Standard» b, mientras el cuarto tiene una longitud menor 7111)
En el caso más general en el que se emplea la ecuación (9) y existen
4/00 4Joo 4500 S40fJ 6700 8SfJO IOSOO !/4{)O
4/00 cargas exteriores aplicada!! a los nudos, llamamos mo, no, ro y so a lus
longitudes de los hilos que confluyen en un punto «irregular» O de la
4/00
4/1M '121M 41<Jt S/(l() 54(}{) 01/(}0 moo IIJOO
A
cuadrícula y supondremos que la carga transmitida a este nudo cs
q8 3
-4- (m + n +r + s). La ecuación de equilibrio será entonces:
4/00
4000 J900 3900 4200 SIOO 7600 !!4;;;;- /J600

q!' (m + 1~ + r + 8)
, IJ(l()

+ .s [~...! +~ (~
J800 JSOO ;]500 2600 2~
4/00 '2200
700 m n
+ W3r + W48 - Wo + ! + ! + l.)J" =
mn r s
O (33)

4100
j
JflO(} 32(J(J 2/00 1000 Para m = 11 = r = s = 1, esta ecuación coincide con. la (11), deducidll
para un punto regular. Mediante la ecuación (33) se puede, en cada caso,
F·lG. 16
establecer el procedimiento conveniente semejante al mostrado en la figu-
Cm "'" 0,4 en este caso). Esta circunstancia deberá ser tenida en cuenta ra 17 para ponderar los residuos. Podemos establecer igualmente una ecua-
al establecer la ecuación de equilibrio del punto A, la cual será: ción análoga para el caso de una red triangular.
Con las modificaciones que acabamos de estudiar, el procedimiento
So (<p n - <p¡ + <Po - <P2 -+- </>0 - </>a + .'to_ - <P!) = O de relajación se aplica a los casos en los que existen puntos irregula¡'es
o o o mo cerca del contorno.
o:

+ tP2", + epa + -m14>4 ( + _.1) <Pa 8. Ecuación biarmónica. Hemos visto (§ 16) que en el caso de
</>1 - 3 = O problemas de elasticidad, bidimensionales, con fuerzas conocidas actuando
?n sobre el contorno y fuerzas másicas nulas, las tensiones vienen definida$
por una función de tensión rp que satisface la ecuación biarmónica:
Aplicando al punto A el procedimiento normal de relajación y dando
a ,po un incremento igual a la unidad, introduciremos, el) los residuos los
(34)
cambios que se muestran en la figura 17a. Este tipo de repartición debe
ser empleado para la anulación de los residuos en A. Si consideramos el
punto B, vemos que a él llegan dos hilos más cortos de 10 normal. Llamando I Este ejemplo ha Sido tratada por n. Weller y G. H. Shortley. véase J. Applied Mee/iame..

a sus longitudes mo y nb, vemos que la eliminación de los residuos en el 1939, pug. A·71. nado que los volares de '" en el contorno"" ,obtienen de ellsayas 'fot9c1ás-
tlCOS y son conocidos cun una preclsión pcqu(!ña. los v.dores en los puntos interioreS son düdo~.
punto B debe ser realizada según la forma ilustrada en la figura 17b. con sólo dos O tres cifras significativas. . ," '


,;26 TIlORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DlFIlRENCIAS FINITAS 527

las condiciones de contorno (20) del § 14, que en este caso son: De f()rma semejante tenemos:
IJ2q, . a2</1 - a4q, 1 .'
l ayZ - m ax ay = X ay' "" ~ (6cfJo - 4</>2 - 4,p~ + </17 + "'11)
(35) éJ4</1 1
m IJzq, _ 1 IJzcf> = y ax2 ay2 "" I4 [4,pQ - 2(</>1 + 4>2 + epa + "',) + cfJa + tPs + q,lO -/- </1121
ax2 éJx éJy .
Sustituyendo estas expresiones en (35), obtenemos la ecuación en dife-
Conociendo las fuerzas que actúan a lo largo de la periferia podemos rencias finitas buscada:
calcular cP en el contorno integrando l las ecuaciones (35). El problema
se reduce entonces a encontrar la función p que cumpla en todo punto 20,po - 8(epl + tjJ2 + </>a + <1>,) + 2(rP6 + rP8 + cfJIO + 1/>12)
interior al contorno la ecuación (34) y que tome (la función'" y sus deri- + .po + </17 + cf>9 + cf¡1l = O (36)
Esta ecuación debe ser satisfecha en todo nudo de la red interior al con-
7 torno de la placa. Para obtener los valores de la función de tensión en
el borde'" integramos las ecuaciones (35). Observando (fig. 20, § 15) que:
8 2 6 t .
l=cosa=..J!.
d
m = sen a = -dxfds
o ds
y
J
9 3 O 11 S las ecuaciones (35) tomarán la forma

110 4 112 dy ~2~ + dx éJ'</> =!!:.. (c1</» = X


ds fJy- ds a;¡; ay rls éJy

'J1. dx éJ2rf> dy éJztjJ d (éJ cfJ) -


- ds fJx 2 - ds IJx ay = - ds a:¡; = y
FlG. 18

vadas) en él ciertos valores prescritos. Usando el método de las diferen- de donde por integración se obtiene:
cias finitas tomemos una red cuadrada (fig. 18) Y transformemos la ex-
presión (34) en la ecuación correspondiente en diferencias finitas. Cono-
ciendo las dCTiyadas segundas:
- -a4> =
ax
J- Yds
(38)
-arf>
ay = f-Xds
Para determinar '" utilizamos la ecuación
éJrf> = IJrf>dx + IJ.pdy
as ax ds ay ds
que integrando por partes nos da:

se deduce que: a,¡,


rf>=x- arf>
aX -/-y".--
ay
J x--+y--
(a',¡,
as ax as ay
éJ'cf¡ ) ds (39)

Sustituyendo en esta ecuación los valores de las derivadas, dados por las
expresiones (37) y (38), se puede calcular el valor. en el contorno de. ~.
Es preciso advertir que el cálculo de las derivadas primeras (38), introducirá
dos constantes de integración A y B y que en la realizació¡] de la integral
que fjgura en la ecuación (39) aparecerá una tercc.ra constante C. La expre-
I Consld(!ramos aquí .solamente regiones simplemente conexas.
528 TllORIO\ DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE ~..As ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 529
slon final de rP contendrá, por tanto, una función lineal Ax "1,, By -1- C. que integrando nos' da:
Puesto que las componentes de la tensión vienen dados por las derivadas
segundas de 4>, esa función lineal no modifica su distribución, pudiéndose aeP = A =c
elegir arbitrariamente en consecuencia las constantes A, B Y C. ax ' '" = Ax + B, a<J¡
ay
e
donde A, B Y son constantes a lo largo del eje x, que como ya hemos
dicho pueden ser elegidas arbitrariamente. Nosotros supondremos qUl:
A = B = e = O. La función ~ se anula entonces, en aquella porción del

J 2
:v1
a8a
F10. 19
¡ I ¡¡
III ¡ ¡ ¡ ¡ ¡ 1 J J !P
O.7ZB f/,QB +J,IB '.fJ.5B
Partiendo de los valores de ,p y de ~us derivadas primeras en él con-
torno, podremos calcular aproximadamente los valores de ~ en los nudos 1/J3 -ME -O,72B 3 2 1
adyacentes al contorno, tales como los puntos A, e y E de la figura 19.
Teniendo, por ejemplo, los valores de rPB y de (oc/> laxB en B se obtiene:
t/16 -4.8B -a72E 6 oS 4-

<pe = <Pn + (~~)D8, ePA = ePB - (~:)B8 , -MB o.72B 9 8 7


tPg
Fórmulas análogas pueden ser escritas para el punto E. Ulteriormente,
cuando la forma de la superficie que representa la función de tensión ~ 1/JJ2-4.8B -()l2B 12 1/ 10
sea conocida de manera aproximada, se podrá realizar una evaluación más
exacta de estas cantidades. tA -4.8B -o,72B IS /4- /:1
Conociendo los valores aproximados de ~ en los nudos ¡ldyacentes al 1$

contorno y escribiendo para los restantes nudos interiores las ecuaciones


-O,72B O O ()
del tipo (36) correspondientes, tendremos un sistema de ecuaciones lineales
que basta para calcular los valores de r/> e,n los nudos. Las diferencias -tf-..
segundas podrán ser usadas pam el cálculo aproximado de las tensiones.
El sistema de ecuaciones (36) puede ser resuelto, bien directamente, IS /~ 11
bien de forma aproximada, mediante los procesos ya estudiados. Los di. ¡.~,~~
versos métodos para obtener la solución serán ilustrados a continuación ~~-----------a----------~
mediante el ejemplo sencillo de una placa cuadracl-a, cargada en la forma FIG.20
que se indica en la figura 20 1 .
Tomando los ejes de coordenadas que se muestran en la figura 2, lado inferior sobre la cual no actúa ninguna carga, lo que asegura la siml·.
calculamos a partir del origen los valorés de tP en el contorno. De x = O tría de tP respecto al eje y. Desde x = O,4a hasta x = O,Sa, actúa una car~a
a x = O,4a, las fuerzas aplicadas sobre el borde son nulas, de donde: unifoW!e de intensidad 4p y las ecuaciones (38) dan:
a2q,
-
a2eP
ox'2 =ax-ay
=0
-! 4p dx = -4px + al
I Este es uno ue los muchos casos estudiados por P. M. Varvak, Callee/ion 01 PapeTs 011
aeP = o
Slructllral Mecha"ic!, Kiev Structural Instituto, vol. 3, pág. 143, 1936. K. Beyer ha dado iJy ,
Igualmente una solUCIón numérica de Un problema semejante en su libro Die Statik im Eisen" Integrando se obtiene:
hetonbau, 2." euición, vol. 2, pág. 733, Berlín, 1934.
• Se obtiene este sistema haciendo girar los ejes de la figura 20, § 14.

34 -Tt:OHIA DE LA. In.ASTICIOo\O


530 TEORIA DI> LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 531

Las constantes de integración vendrán detenninadas por las con,di- Para x = O,4a estos'valores deben coincidir' con los (e). Se tiene entonces
ciones de que en el punto x = O,4a, común a las dos partes de la arista infe- (\ = C2 = O y la función de tensión tomará la forma:
rior, los valores de <f¡ y o<f¡/íJx sean únicos. Tendremos, en consecuencia, qUl'
<p=_px
2
2
+a
de donde se deduce Para x = 0,4a su valor debe ser igual al dado por (d), de donde C = O,lpa2 ~

el = 1,6pa,
(8)
La función de tensión ,p desde x = O,4a a x = O,Sa, estará representada
por la parábola La función de tensión viene representada por una parábola que tiene al
'" = _2p;¡;2 + l,6pax - O,32pa 2 -(a) eje y como eje de simetría. Con esto se tern;lina el cálculo de los valores
en el contorno de ~ y de sus derivadas primeras, ya que los valores corres-
que para el vértice de la placa nos da: pondientes a la parte derecha del borde se obtendrán por simetría.
Poniendo
(b)

Sobre el lado vertical de la placa no actúa ninguna fuerza, por lo que de


las ecuaciones (38), se deduce que para cualquier punto de este borde, podemos expresar todos los valores calculados para el contorno, en la
los valores de o4>/ox y o'¡'/éJy deben ser los mismos que para el vértice forma mostrada en la figura 20.
Calculemos ahora, extrapolando, los valores de q, en los nudos situa-
. inferior, es decir,
dos al exterior del contorno. Volviendo a empezar con el borde inferior
-a¡p = -O,4pa,
a;¡; a.¡, =
ay
° (e) de la placa y observando que la o<f¡/oy se anula a lo largo de este lado,
podemos tomar para los puntos exteriores los mismos valores ~13' <PH' <PI.,.
.Resulta de esto que ,¡, permanece constante a lo largo del lado vertical. que para los puntos interiores adyacentes a[ conto·mo l • De igual manera
Este valor constante, ya calculado para el vértice inferior, será - O,02pa2• procedemos con el borde superior de la placa. A lo largo del borde vertical
la derivada es: - .
A 10 largo de la parte no cargada del borde superior las derivadas pri-
meras de .,p deben pennanecer constantes. Tomarán, por tanto, el valor
dado por (e), idéntico al correspondiente al vértice superior. La función (!:)._o,s. -O,4pa
de tensión será entonces:
)" podemos obtener, de forma aproximada, los valores correspondientes
<p = -O,4pax +e a [os puntos exteriores, restando la cantidad:
Puesto que en el vértice s'uperior izquierdo el valor de rjJ es -0,02pa",
se deduce que C = O,18pa" y la función de tensión es:
°
4pa = 4,8B
O,4pa· 28 = -'-3-
2

¡p = - O,4paz + O,18pa2 (d) de los valores asignados a Jos nudos interiores, adyacentes al contorno,
en la figura 20.
Considerando ahora la porción cargada del borde superior y observando Podemos ahora iniciar el cálculo de los valores de ~ en los nudos
que en ella ds = -dx e Y = - p, X = O, se obtiene de las ecuaciones (38) mteriores de la red. Abordando la resolución directa de las ecuaciones en
diferencias finitas, debemos escribir, habida cuenta de la 'simetría del pro-
'0</1 = -px + el blema, las ecuaciones (36) para los 15 puntos indicados en la figura 20.
éJx
0<[1 = e, , Este procedimiento de extrapolación utilizado 'en el artículo de Varvak es diferente 'del
éJy mdicado en la página 528.
532 TEORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONF,S EN DI~'EIIENCIAS FINITAS 533
La resolución de estas ecuaciones da para +'los valores que figuran en variación de ,po en Una unidad. Cuando este método es aplicado a la placa
la tabla siguiente: cuadrada estudiada anteriormente, debe observarse que los valores de rP
- - -- a lo largo del contorno están sometidos. a las restricciones, que se siguen
1 2 J 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 de las condiciones de borde, lo que implica que las fuerzas residuales en

"'ID 3,3562,8851,4822,9062,512 I,J11 2,3062,0241,0971,531 1,381 0,800 0,634 0,608 0,396


_._~_._.
:Y
! 2 ~ I t
Calculemos la componente normal de la tension (f" a lo largo del eje y.
Los valores de esta tensión vienen dados por la derivada segunda ae ¡fJ Iaya.
Utilizando las diferencias finitas obtenemos para el punto superior (y = a)

()
(f:r: v~ ~
(3,356 - 2·3,600
82
+ 3,356)B O,488pa
2
= -O 488
3662 ,P

Para el punto inferior (y =0) t (6) t t (e) !


FIG. 22
()
_ (0,634 - O
r1:r: ~_o - 82
+ O,634)B _ -,
1268
P
los puntos del contorno no deben ser eliminadas. A continuación podemos
Si consideramos la placa como una viga apoyada sobre dos soportes y pasar a una red más fina utilizando como valores iniciales de rP los ob-
suponemos que los valores de a" en la sección media (x = O), siguen una tenidos para la red abierta.
distribución lineal, tendremos que (a",) max = 0,60p. Vemos, pues, que para En casos de distribución asimétrica de carga tales, por ejemplo, como
una placa de esa forma la fórmula usual de las vigas da un resultado el mostrado en la figura 22a, la carga aplicada puede descomponerse según
incorrecto. indican las figuras 22b y 22c, en una componente simétrica y otra anti-
simétrica. En estos dos últimos casos podremos limitarnos a considerar
media placa, puesto que en el caso simétrico ~ (x, y) = </> (-x, y) y en
el antisimétrico tP (x, y) = - +(
-x, y).

+---I---:;c

FIG. 21
FIG.23
Para resolver ·Ias ecuaciones en diferencias finitas mediante el proceso
de iteración, tomemos ciertos valores iniciales arbitrarías rP ¡, rPz, ... , tP 15' El trabajo puede reducirse aún más, considerando igualmente el eje
Sustituyendo estos vulores en las ecuaciones (36) obtenemos las fuerzas horizontal de simetría de la placa rectangular. La. carga representada en
residuales correspondientes a todos los nudos interiores, los cuales pueden la figura 20 puede descomponerse en la forma que indica lu figura 23,
ser eliminados siguiendo el proceso de relajación. El tipo correcto de re- en una componente simétrica y otra ·antisimétrica; En cada uno de estos
. partición obtenido a partir de las ecuaciones (36) es representado en la casos bastará con calcular los valores numéricos de la función de tensión
figura 21, en la que se dan los cambios de los residuos causados por la en una cuarta parte de la plaq..
534 TIlORIA DE LA ELASTICIDAD APLICACIONES DE LAS ECUACIONIlS EN DIFERENCIAS FINl'fAS 535

9. Torsión de árboles circulares de' diámetro variable. 1'.1 Consideremos, a titulo de ejemplo, el caso representado en la figura 25.
,estudio de este problema exige, como hemos visto en el § 104, encontnlr En la región en la que varía 'rápidamente el diámetro, tendremos una dis-
una funció~ de tensión que satisfaga la ecuación diferencial tribución tensional complicada, pero a suficiente distancia de la transición
una solución sencilla de Coulomb; nos dará una precisión suficiente y la
¡Pcp 3 iJq, iJ2cp (40)
or2 -;:ar + 8z' = O
distribución de tensiones será independiente de z. La ecuación (40) para
tales puntos toma la forma
en todo punto de la sección 'axial del árbol (fig. 24) Y que sea constantl' d2 cf> 3 de/> '
a lo largo del contorno de esa sección. dr 2 - r dr = O (42)

siendo la solución general de la misma


Ar4 B
e/> = + (43)
y las tensiones correspondientes (véase 'el § 104).

1 dcp
r 'Toe = - -
1'2 dr
= 4.Ar' 'l'rS =O
Comparando este resultado con la solución de Coulomb, tenemos:

donde MI es el par aplicado e 1p el momento polar de inercia del árbol.


z z Suprimiendo de la solución general (43) la constante B, que no ejerce
:FrG. 25
ninguna influencia sobre la repartición de tensiones, encontramos que a
Fre. 24
suficiente distancia de la transición, la función de tensión viene dada por
las expresiones '
La solución rigurosa del problema es obtenible solamente en unos
pocos casos sencillos, siendo necesario en la mayoría de los casos prácti- M" ],-[. (44)
.l."
'l'w
= 2-
.. w.
n
' • 1", .1.
'l'b -
-
211'b4 • 1'4
cos, hacer uso de métodos aproximados.
Nosotros emplearemos el método de las diferencias finitas con una
Estas expresiones se anulan en el eje del árbol y toman sobre el borde
red cuadrada. Considerando un nudo O (fig. 24) podremos operar sobre
el valor común M /27t. Dado que </> es constante a lo largo del contorno, '
las derivadas segundas que figuran en la ec¡,¡ación. (40), en la forma en que
ese mismo valor será el correspondiente a la curva de transición. De esta
lo hemos hecho anteriormente. Como derivada primera podemos tomar:
forma, en la resolución de las ecuaciones (41), la elección del valor cons-
a<l» "" ~ (<PI - <Po + <1>0 - <1>3) = "'1 - <P3 tante en el contorno equivale a asignar al par un valor determinado.
( or r-ro" 2, o o 28 En la resolución de las ecuaciones (41) podemos aplicar de nuevo la
analogía de la membrana. Comenzamos con Jos puntos en los que se veri-
La ecuación en diferencias finitas correspondiente 'a la ecuación (40) será:
fica la ecuación (42). La ecuación en diferencias finitas correspondientes es:
38
</>.1 + <P2 + <pa + <P4 ro (<PI - q,3) = O
- 4<po , - -2 (41)
(45)
Nuestro problema, entonces, se ~educe a encontrar el conjunto de valores
de rP que tomen el valor constante supuesto en el contorno y que satis- Esta ecuaClon tiene la misma forma que la qu~ define las deformaciones
fagan'las ecuaciones (41) en todo Iludo interior de la red. Podemos tratar de una membrana de forma cilíndrica, cuya tensión'varía en razón inversa
este ,problema, bien resolviendo directamente las ecuaciones (41), bien con y3. Para demostrar esto consideremos tres' puntPs consecutivos de 1;1
mediante uno cualquiera de los métodos de iteración. red (fig. 26). Las ,flechas correspondientes son designadas por ~U.t, U1J, W,.
536 TIlORlA DE LA ELASTICIDAD .APLICACIONES DE LAS ECUACIONES EN DIFERENCIAS FINITAS 537
La tensión en el centro, de los hilos 3-0 y O~l será: lo qlle nos indica que la repartición de las variaciones, para la operación
\ de relajación, es la mostrada en la figura 27 y que cambia de un punto

(r:_ ~y ro3 -_ So( + 1
3~)
2To +/

l+-!!!'
2ro

La ecuación de equilibrio del punto O será, entonces


FIG, 27

So
ros
(1 _~)~
2ro a
+ So (1 + ~)W3 - Wo O
ro3 2To o
= a otro ~on la distancia radial To, R. V. Southwell y D. N, de G. Allen
han efectuado cálculos de este tipol,

Wl - 2wo + '!lIa - -
2To
(Wl -
,
Wa) =o I l'T/J<, Roy, SI)( (LrmdmIJ. s<'ru: Á. \(JI. l83, p¡ig> l2$·l,1+ \ <',N' t,lnlhlL'l1 el libro> <l.
'inuthwell Rela.tallan M,IIJads /11 T}¡,nrel¡col Ph}'rI($. púg 152
que coincide con la ecuación (45),
En el caso general, observando que la tensión de la membrana no de-
pende de z, obtenemos la ecuación

Wl + W¡ + Ws ,+ W4 - 4wo - -2
ro (Wl - Wa) =O (46)

la cual concuerda con la (41). Vemos, pues, que podemos calcular la fun-
ción de tensión como si se tratara de la deformación de una membrana
sometida a una tensión no uniforme, cuya deflexión en el contorno es el
valor constante M'¡2 yen puntos distantes de la transición el dado por (44).

,1
,1

F1G,26

Tomamos entonces ciertos valores iniciales arbitrarios para w, los susti-


tuimos en el primer miembro de las ecuaciones (46) y calculamos los resi-
duos, El problema, ahora, consiste en eliminar esos resitiuos por el pro-
cedimiento de relajación. La figura 26 muestra que dando al punto O un
desplazamiento unidad, añadimos a los residuos de 1 y 3 las cantidades ';
I

1-
-S
- 3( 1 - -
ro
35)
2To
y
Indice de

ADAMS, L. H., 453. CHREn, e., 95, 393, 426,481.


AIRY, O. B., 48. CnWAl.LA, R, 201.
A.1..LllN, D. N. de O., 537. eLAPEYRON, B. P. E., 344.
ALMANSI, E.. 476. CLEBSCH, A., 277, 483, 489.
ANDERSON, E. W., 318. CI.OSH, L. J.,
417.
ANTUES, 306. COKllR, E. G., 148, 151, 159, 237.24+.
ARNDT, W., 348. eORNU, M. A., 291.
COULOMD, e.
A., 294.
BA\lINET, 483. eOURANT, R., 503.
BARJANSKY, A., 245. eRAEMER, U., 77. .
DARKER, L. ·H., 455. eRAGCS, J.W., 432.
HARTON, M. V., 431. eROSS, H., SIL
BASU, N. M., 321. CUSHM~N, P. A., 329, 378.
BAY, H., 74.
BELAJEr, N. M., 422. CHENG, D. B., 476.
BERNDT, O., 418. CHURCHILL, R. V., 73.
BEScHKINF., L., 201.
BEYER, K., 77, 528. DAWIDENKOW, N., 470.
BICKLLV, W. G., 110, 506. DAYIES, R. M., 481.
BIIl7.ENO, C. B., 329. DEN HARTOO, J. P., 171,448.
BILLEVICZ, V., 89. DINNIK, A., 316,348,417,426,452.
BIOT, M. A., 75, 473. DONA'I'f!, M., 99.
BlssHoPP, K. E., 99. DONNFLL, L. H., 111, 237, 489.
BLtilCH, F., 70, 76. DOUOALL, J., 381.
BORCHARDT, e. W., 459, 476. DRUCKER, D. e., 171.
BORNI'IZ, G., 499. DUHAMEL, J. M. e.,
450,459.
BOl'SSINESQ, J.,
111, 128, 270, 329, 402, 409, DUNCAN, W.J., 323,375.
488,494.
BRAHTZ, J. U. A., 125. E¡ClIEI.Ullno, G., 457.
BIlED,., R., 337. EI.Llo·rT, 11. A., 234.
BREWS1ER, D., 159, 172. EL'LIS, D. L., 375 ..
DVERl.T, 73, 452.
Fn.LUNGJ!R, P., 69, 153.
FIl.ON, L. N:· O" 70, 74, 128, 148, 15.0, 151,
Ct\LlSEV,l{.A., 511.
eAROTHllns, S. D., 69, 122.
159, 237, 244, 273, 305, 317, 426, 429.
eASTIGLIANO, A., 191. ('ISCHUR, A:, 99.
e,WrHY. A. L., 488. FLAMANT, 111. 492.
540 INDICE DI! AUTORES lNOlCE OI! Al'TORES 541
FOj'j'L, A., 88,'251, 316, 324,342, 345. KÁnMÁN, 'l'. VOll, 67, 129,201, 203. NÁDÁI, A., 310,430. SEARS, J. E., 426, 494.
FoppL, L., 251.316, 347. . KaLvIN, Lord, 270, 329, 396. :>!ÁGEL, A., 457. SEEGAII, M., 370.
FORSYnI, A. R., 387,427. KSLVIN y TAIT, 311, 329, 391. ~AvmR, 294. SEIlWALD, F., 69, 74, 128.
FROCHT. M. M., 160,168, 171,239. K¡¡NT, C. H., 459. '1EMÉNYI, P., 273. SEN, B., 245.
FuCHS, S., 417. KIRCHHOFI', G., 273. 'lEUDER, H., 237-39, 270, 345. SETH, B. R., 370.
KIRSCH, G., 106. :>!EUMANN, F. E., 459. SEZAWA, K.,111.
GALERItlN', lJ., 188, 270, 317, 370. KLITCUIEFF, J. M., 381.' :>!ISIIIMURA, G., 111. SHEPHERD. W. M., 125, 370.
GIRKMANN, K., 129. KNlGrIT, R. C., 11 O. SHORTLEY, G. H., 525.
GilHNER, O., 433, 437, 440. KOLOSOFF, G., 220, 228, 231, 317. ODQVIST, K. G., 422. SMEKAI., A., 189.
Gm.ovIN, H., 88, 99, 104. «OROBOV, A., 391. OSOOOD, W. F., 73. SMITH, F. C., 108 . .
GOODIER, J. N., 74, 76, 111, .137,148, 178. OSGOOO, W. R., 68. SNJ!DDON, 1. N., 234.
179, 200, 222, 293, 294, 358, 399, 447, SNIVF.LY, H. D., 116.
LAMB, H., 128,409, 502.
476,477. PAPKOVI'rCH, P. F., 270. SOKO~NIKOFF, 1. S., 246, 265, 318, 370.
LAMÉ, G., 84, 224, 344, 399.
OounsAT,'E., 216. ('Mcnouo, M., 330. SOLAKIAN, A. G., 332.
LARMOR, J., 331, 402.
GRAMMBL, R., 99. PEARSON, K., 67, 69, 89, 370, 381. SONNTAC, R., 347, 348.
LA1JP., M. V., 470.
GIWlHOF, F., 67, 89, 134, 368. SOUTflWuLL, R. V., 375, 399, 503, 506, 510,
GRAY, A., 4?7.
LEES, e.
R, 452. PETERSON, R. E., 239.
SIl, 523, 537.
LEIBENSON, L. S., 323, 375. PETRENKO, S. N., 421.
GREEN, A. E., 111, 237, 245. STBRNBERC, E., 111, 399.
LEl¡SELLS, J. M., 459. PlCKETr, O., 200,429.
GREENHILL, A. G., 316, 317, 330. STJ!VENSON, A. C., 110,231,235,370.
LETSON, H. F. G., 457. PIGEAUD, M., 74.
OREIlNSPAN, M., 245. PILGRAM, M., 433. STOUOLA, A., 95, 98, 453.
LEVEN, M. M., 160, 172.
CRIFFIN, B. K., 453. POCHHAMMElt, L., 381,426,481. STOKES, G. C., 126.
Lp.\'Y, M., 69, 153.
CIUFFITH, A. A., 190,306, 328,332,335, 376. POISSON, S. D., 488 . STRAUBEL, R., 291.
.. Lnvv, S., 108.
CRÚBIlR, M., 98. S"RAUCH, F., 150.
L/lRMAN, H., 503. POLLARD, e., 69.
GRUNIlERG, G., 461. POLYA, C., 30S. SYMONDS, P. S., 237.
LING, C. D., 110, 116,245,318.
GUNDER, D. F., 370. PORITSKY, B., 116,423.
LOOR, W., 178.
LORENZ, R., 454. POSCHL, T., 231, 245, 345,494. TAI<EMIJllA, K.,151.
HADjr-ARG\'RIS, J.,
207. LOVE, A. E. H., 143, 148, 265, 277, 317, PRANOTL, L., 88, 298, 306, 309. TAYLOR, G. l., 306, 328, 332, 335, 376.
HAMBURGER, M., 426. 370, 381, 385, 391,402,409. PnESCOTr, J., 481. TERAZAWA, K., 409.
HEARt.E, H., 99. LUNDBERG, G., 422. PROWSE, W. A., 494. THIDODEAU, W. E., 111.
HSINRICH, A., 499. LYSE, L, 327. PURsEn, F., 340. THOMAS, G. B., 368.
HENCKY, B., 503. TROMAS, H. R., 422.
HENOST, H., 110. QUES'f, H., 329. TIMOSIIF.NI<U, S., 28, 67, 86, 103, 107, 108,
HERTZ, B., 137,413,419,420,494. MACMILLAN, W. D., 476. 149,151,177,183,184,196,239,310,320,
HBTÉNYI, M., 172,173. ;VICPflERSON, A. E., 108. 341,342,358,373,375,426,458,459,502.
MARcH, H. W., 324, 328. RADEMAKER, J. M., 329.
HIGOINS, T. J.,318, 328, 345. HAMSJ\UI'.'R, C., 494.
TIMPE, A., 52, 68, 74, 88, 144, 148,237, 340,
HODKINSON, B., 99. MARcus, H., 503. 348, 391.
MARGUERRE, K., 75. HANKIN, A. W., 431.
HOERSCH, V. A, 422. TODHuNTER y PEARSON, 89, 270, 295.
MARTIN, H. M., 99. HANItINE, W. J. M., 67, 134.
Horr, N. J., 42. TRAN1'ER, C. J., 153, 432.
MA'IHAR, J., 151. RAYUlICH, Lord, 425, 444,481, 499.
[JOLL,D. L., 318, 370. TRAYF.lt, C. W., 324,328.
MATHEWS, C. B., 427. REISSNER, E., 153, 201,207,368,499.
Hor.zI!R, H., 98. TREFFrz, E., 309, 320, ;321, 358.
MAUNSELL, F. G., 116. REISSNER, B., 150, 469.
HONECOER, E., 461. TuZI, Z., 109.
MAXWELL, J. C., 159. RÉSAL, H., 89.
HOPKINSON, J., 459.
ME/NESZ, V., 376. HlDlJillf., C., 88, 104.
HOSOKAWA, Y., 151.
MELhN, E., 143, 144,244,348. RICHARDSON, L. F., 69, 503. VAIIV.nC, P. M., 528.
HOWLAND, R. e. 109, 129, 143.
J.,
MESMER, G., 74. RITZ, W., 187, 188, 318,320. VOIGRT, W., 494.
Hsu, M. C., 110. VOLTERRA, V., 148, 273.
MESNAGER, A., 52, 123, 159,170. ROlllNSON, W. C., 453.
HUBER, M. T., 177,417.
MrCIIELL, J, H., 111, 120, 123, 137, 139, I{OCK, D. H., 370.
HUTII, J. H., 327, 339.
144,148,273, 345,381,385,391. I{OEVER, V., 433. WAGSTAFF, J. E. P., 494.
MINDLIN, R. D., 108, 171, 223, 245, 270, HUNGE, e.,
503. WAHL, A. M., 239, 433.
(NOBERG, S. H., 453.
INGERSOLL, L. R., 479.
402,419, 476. WANG, e.
K., 110.
MINTRoP, L., 499. SADOWSK\', M. 110,111,122,399. WANG, P. S., 110.
1NOLIS, C. E., 125, 200, 231. MISIiS, R. van, 177. SAGOCI, H. F., 499. WATSON, O. N.;186, 210.
MIURA, A., 125. SAINT-VENANT, 56, 57, 178, 295,
302, 304, WAY, S., 409.
J,\CDUSEN, L. S., 348. MOHR, O., 36, 120,"251. 305,316,317,355,365,488,489,492,494. WEBER, C., 245, 305, 341, 385.
]EFFERY, C. B., 86, 109,241,244. MORKOVIN, V., 246. SCHl.HCHTWEO, H., 99. WEIBEL, E. E., 168, 170, 473.
lING, K. S., 110.' MORTON, W. B., 417. SCHLEICHER, F., 177,409. WmoANo, A., 324, 348.
lOIlNSTON, B. G., 327. MUU.HR, 1., 69. SCHNAOEL, G., 201. WEINEL, E.,. 245.
v1uRPHY, G., 42. SCHULZ, K. J", 110. WEINSTEIN, ·'A., 375.
KAPPUS, R., 375. \IUSCHELI§VILI, N., 216, 237; 246, 318, 473. SCRUTON, e., 375. WW,LER, R.,· 525.
I<ARELITZ, G. B., 332. :v!YKr.r,sTAD, N. O., 476. SEARLE, G. F. C., 175. WESTERCAARD, H. M., 251.
542 lNDlCE DIl AUTORES

WlIl'l-¡'AKUH, E. T., 186, 210. \VOLF, F., 503.


WHITTEMORE, H. L., 421. \~OLF, K, 69, 109, 237, 340.
WIEGHARDT, K., 149. WooD,L. A., 111.
WIGGLrlSWORT\I, L. A., 370. C. R., 116.
\VVLIIl,
'., WIl.I.ERS, F. A., 348.
WILLlAMSON, E. D., 453 •
. WILSUN, C., 111,126, 159. YOUNG, D. R, 310.
-. WILSON, R. E., 453. YOUNG, Th., 484. Indz'ce a
"WILSON, T. L., 108.
" ,'-;. -WrNKI.L:R, E., 89.
ZOBEL, O. J., 479.

Acción de una carga conce1ltrada sobre: Burra:


un disco, 134. ...re sección fC!ctunguIllr.
un sólido de extensión indefinida, 394,402. en la flexión, 362.
una cuña, 123. en la torsión, 310, 312, 342.
una placa: elíptico:
indefinida, 139. bajo flexión, 360.
semiindetinida, 111. bajo torsión, 299.
una tira, 143. Biela de ojo, tensi6n en, 150.
una viga, 125. Bolas, presión de, 413.
Alabeo de las' secciones transversales de pris.
mil!' bajo torsión, 296, 302. Calentamiento no uniforme, tensiones debidos
Alargamiento especifico, 26. al (v. Tensiones de origen térmico).
Analizador, 160. Calor, tensiones debidas a la distribución del,
Analogías hidrodinámicas, 222, 329. 444,452, 454, 462, 470, 479.
Anchura eficaz de las vigas en T, 201. Carácter localizado de la distribución de ten-
Angulas: siones en el orificio, 107, 399.
entrante.q: Cargas:
concentración de tensiones en vigas en 1, simétrica y asimétricR, 533.
379. uniformemente distribuida sobre una viga,
en árboles, 325, 332. 63, 68, 73, 381. .
en placas, 170. Castigliano, teorema de, 191.
en tubos, 338. Cauchy-Riemann, ecuaciones de, 213.
específicos de torsión, 285, 295,301,311, Cavidad:
317,324,332,337. elipsoide, 271.
AniUo circular comprimido por dos fuerzas esférica, 399.
iguales y opuestas, 149. Celda elemental, 504.
solución general, 145. Centro:
tensiones iniciales, en el, 148. de compresión, 398.
Anisotropía, 22. de cortadura, 373.
Arboles: de flexión, 373.
de diámetro variable, 342. de torsión, 308,375.
huecos, torsión de, 332. Cilíndricas, coo.rdenadas, 343, 382, 385,' 386.
torsión de (v. Torsión). Cilindro: :.
troncocónicti, 347. banda de presión sobre un, 430.
Arm6nicas, funciones, 213, 214. circular:
Arrastre por tensión cortonte, 207. con orificio excéntrico, 86, 24 L
544 lNDI<T ~LFABgTICO
lNDICIi A[.FABIlTICO 545
deformación simétrica, 426. bidimensionales, 80.
flexión, 358. tridimensionales, 386. determinación de los: cillndricos:
d~formación simétrica, 426. (- orriente eléctrica, analogía con ejes de d,,- en la flexión de piezas prismáticas, 380. de diámetro variable, 342, 534.
hueco, sometido a presión, 84. tinto diámetro y con la torsión, 348. en la torsión de barras prismáticas, 295, torsión de, 285.
tensiones de origen térmico, 450, 470. Cortadura, centro de, 373, 375. 296. directriz:
479. Cortante simple, esfueIZo, 29. en placas semiúldefinidas, 115. de una pieza prismática, 355.
Circular, anillo (v. Anillo drcuiar). Cuerpo: en problemas: e"tensión, .66, 381.
Cocficien te: cilíndrico de cualquier seeción tl.msversal: bidimensionales, 58, 60, 66, 92, 103. principal:
de dilataCión térmica, 441. en la flexión, 287, 355. tridimensionales, 268. de deformación; 258, 259.
de Poisson, 28. en la tensión, 282, 283. en sólido semiindefinido, 405. de tensión, . 35, 249, 250.
determinación, 291. en la torsión, 294. radial,91. Elasticidad, 22.
Compatibilid~d, condiciones de (v. Ca",'"",- esférico bajo presi6n, 413. uniforme, 94, 146. Elipsoide de las ten.ionos, 250.
nes de compatibilidad). múltiplemente conexos, 147, 148,273, 521. Diagrama de Mohr, 36. Elípticas, coordenadas, 225.
Componentes: semiindefinido, contorno de Ull: Diámetro variable, árboles de, 342. problemas bidimensionales en, 230.
de. la deformación, 25, 27. carga distribuid'; sobre el, 406. Dilataci6n: Energía:
de la tensión, 24. fuerza sobre el, 402. cúbica, 30. de deformación, 175.
en coordenadas curvilíneas, 227. Cuña con carga: ondas de, 495. de las ondas elásticas, 484, 499.
Comprosión: en la punta, 123, 125. ténnica, 441. potencial, 181.
entre cuerpos sólidos, 419. sobre sus caros, 151. coeficiente de, 441. elástica, 174.
entre esferas, 413,422. Curvatura: \ Direcciones principales, 35. del cambio de volumen y distorsión,
por carga: adicional de la viga, 131. Disco: . 178.
en cuñas, 123. de las vigas, 67, 379,381. circular: mínimo, 182.
en discos, 134. adicional, 131. giratorio, 95, 391. superficial, 190.
en placas rectangulares, 73, 75. efecto de la fuerza transversal sobre la, dilatación ténnica en, 448. Enfriamiento no uniforme, tensiones debi-
Concentración dc tensiones: 67. de espesor variable, 97, 98. das a:
en ángulos entrantes sujetos a torsión (vénq,. relación con el momento de flexión, 38(), giratorio, 95,391. en ojos, 454.
también Angulo; entrantes), 325, 338. 381. tensiones ténnÍcas en, 448. en placas, 444.
en envidad esférica, 399. LLlrvilíneás, coordenadas, 223, 224. Distorsión: Entalladuras:
en orificio: de las secciones' transversales: hiperbólicas, 237, 271.
circular, 106-08. de la barra sometida a pre.,ión (alaheo), semicirculares, liS, 246, 305, 311, 523.
Choque:
ellptieo, 110. 296,302. Equilibrio, ecuaciones generales de, 263.
de esferas, 424.
en zonas de transición de ejes de dl\ e,"" de la viga, 62, 381. en coordenadas:
duración, 425, 493. energía de deformación de la, 177.
diámetro, 348. longitudinal de barras, 486. cilíndricas, 344, 382.
llSO de lo analogía hidrodinámica en la de. ondas de, 495. polares, 80.
COll extremos redondos, 494. Distribución tension.l simétrica axialmente,
torminación de la, 329. tensiones producidas por el, 484. en el caso de calentamiento no uniforme,
Condiciones: 382. 462,465.
de compatibilidad: en dos dimensiones, 83. en términos de desplazamientos, 269.
DcforrnHción: en tres dimensiones, 382. Esférica, cavidad, en una barra maciza, 399.
en coordinadas cilíndricas, 383.
en problemas: en un punto, 39, 255. en un cilindro, 426. Esfuerzo cortante simple, 29.
bidimensionales, 46. círculo de Mohr, 41, 42. Estructuras, fundaciones de las (v. t. Vigas),
compatibilidad, 46, 265, 384. 412.
tridimensionales, 265. Ecuaciones:
componentes, 26, 258. Extensómetros a resistencia eléctrica) 41.
de contorno:
ejes principales de, 259. de Cauchy-Riemann, 213.
como funciones de los desplazamientos, en coordenadas polares, 91. de Laplace, 212, 213.
270.
planos principales de, 259. diferenciales de equilibrio: Fisuras:
en la flexión, 356.
relacionos idénticas entre los componen- en dos dimensiones, 43, 81. de fatiga, 108.
ell la torsión, 296.
tes (v. De!or71laciólI, compatibilidad). en términos de desplazamientos, 269. en la torsión, 331.
en problemas bidimensionales, 45, 265 superficial, medida, 41. en tres dimensiones, 265, 343. reducción de la energía debida a, 190.
Constantes: humogénea, 254. en diforencias finitas, 503. Fle"ión:
elásticas (v. t. Ley de Hoohe), 27, 28. irrotacional, 495. condiciones de contorno, 528, 531. adicional debido a las fuerzas cortantes,
fotoclásticas, 161. plana, 32, 46. puntos pró"imos nI contorno, 523, 528. 63, 131.
Contacto, superficie de, 414. ecuaciones de compatibilidad para la, generales de equilibrio; centro de (v. t. Cenlro), 373.
Coordenadas: 45,46. en coordenadas cilíndricas, 344, 382. condiciones de contorno, 356.
bipolares, 239. plástica: en el caso de cambios de temperatura, de cilindros, 359. . .
cilíndricas, 382, 386. en eje.. sometidos a torsión, 310. 464,465. de ménsula curva cargada en su extremo
curvilíneas ortogonales, 223, 224. tension". iniciales debidas a lo, 468. Efecto: libre,99. .. .
componentes de la tensión en, 227. principal, 41, 259. de las fuerzas cortantes en la fle"ión, 63, de piezas prismáticas, 355 ..
elípticas, 225. radial, 91. 67,128. detenninnción de los desplazamientos en
polares, 80, 386. Desplazamiento: de un orificio circular sobre la distribución las, 380.
en problemas: de un cuerpo rígido, 268. de tensiones, 104. de pl~cas circulares, 388.
Ejes: de vigas: .

1S ~RIA DI!: LA RI.AATICIOAD


INDICE ALFABETICO 547
INDICE ALFABETlCO

de Rayleigh, 499. Polarizador, 160.


d. diversas formas de sección: Ley de Hoolie, 27. de superficie, 499. Polinómicas, soluciones para problemas:
circular, 359. Líneas: longitudinales, 496, 497. bidimensionales, 52.
elíptica, 360. 'de influencia, 118. en barras prismáticas, 481. de concentración de tensiones simétricas,
otras formas, 368,370, 371. de tensión tangencial en la torsión, 307. plac.as, 496. . 3S6.
rectangular, 362. isaclinas, 162. propagación (v. Propagaci6t1 de ondas). de torsión, 302.
de secci6n rectangi.llar estrecha: isocromáticas, 162. superposición, 485. Potenciales complejos, 219.
por carga: Longirudinales, ondas, 480, 497. transversales, 497. Presas. tensiones en, 69.
concentrada, 125. Luz polarizada, medici6n de tensiones por velocidad (v. Velociáaá). Presión:
continua, 68. medio de, 159. Orificio: distribuida sobre superficie de· contacto,
en su extremidad libre, 58. circular, efecto sobre las tensiones: 415,416,420.
uniforme, 68, 70. Materia homogénea, 21. en discos giratorios, 97. entre dos cuerpos en contacta, 413,419 ..
por su propio peso, 66, 77, 381. Material isótropo, 21. en entalladuras, 331. hidrostáticas, 30.
resolución del problema por el método Membrana, analogía de la: en placas, 104. en cilindro hueco, 84.
de la película de jabón, 376. aplicación en fOloelasticidad, 171. concentración de tensiones en, t 06, 107, en recipiente esférico, 396.
método semiinverso, 356. con barras sujetaS a torsión, 306.. 110. . tensiones producidas por, 282.
prisma triangular, 370. de diversas fonnas de sección trnnsversal: de diversas formas en placas, 245. producida por un punzón rlgido, 412.
sección circular en la, 438. perfiles laminados, 324. de ejes sometidos a torsión, 331, 332. Principio:
simple: rectangular estrecha, 310. elíptico, 110, 230, 234. de Saint-Venant, 56, 178.
de barras prismáticas, 287. rnedición de las tensiones por, 328. en árboles hueéoB, 332. de superposición, 2,71.
de piezas curvas, 86, 438. solución de las tensiones, en tubos de exen placas, 110, 230, 234. del mínimo trabajo, 195.
de placas, 291. paréd delgada sujetos a torsión, 336. excéntrico, 86, 241, 245. del trabajo virtual, 179.
FÓlmula de interpalación de Newton, 506. con viga flexionada, 359. . Prisma: .
Fotoelasricidad: determinación de las tensiones, 375. de Nicol, uso en fotoclastícidad, 160.
método de medición de tensiones por, 159. uso, en el cálculo del par, 308. Par, 299. flexión, 355.
tridimensional, 171. Ménsula curva, flexión de la: cálculo por apücación de la anslog!a de la.
torsión, 294.
Fuerzas: cargada en su extrerno libre, 99. membrana, 308.
Película (v. M étocJq de la película del jabón). trimgular:
iguales y opuestas actuando: simple, 86, 438. en la flexión, 370.
sobre cuerpos de extensión indefinida, Método: Perfiles laminados, tunión de, 324. en la torsión, 303, 317, 516.
396. de la película de jabón, para resolver pro- Peso: vibraciones longitudinales en, 480.
sabre placas, 142. blemas: extensión de barras por su propio, 282.
flexión de la viga por su propio, 66, 77, 381 Problema:
rnásicas, 23. de fleldón, 376.
superficiales, 23. de torsión, 327. Pieza en voladizo: de Hertz, 413, 418.
Funciones: de relajación, 510. de diversas fOlmas de sección transversal: de Lamé, 84,.399.
anallticas, 212. elosto-energético, 174. circular, 359. Propagación de ondas:
arm6nicas, 213, 214. aplicación, 186, 196,318. elíptica, 360. en barras, 480.
de corriente, 329. semiinverso: otras formas, 368. en sólidos, 494.
de tensión, 48,81, 112, lIS, 144,214, 298, en la flexión, 356. rectangular, 362. sobre la superficie de un cuerpo, 499, 500.
357,382, 525. en la torsión, 295. delgada, 58.
Fundaciones: de úrboles de diámetro variable, 344. deflexión, 62, 380. Radial, defolmación, 91.
de las eat';'cturas, 412. Mínimo trabajo: distorsión de la sección transversal de la, Rayleigh, ondas de, 499.
distribución d,e las preaiones, 412. aplicación del, 196. 62,380. Recipiente esférico:
principio, 195. tensiones, 58, 355. sometido a presión interior o exterior, 396.
Giratoria, disco (v. Disco). Módulo: . Placas: tensiones térmicas en, 461.
de elasticidad de volumen, 31. circulares cargadas simétricamente, 388. Recocido, disminución de las tensiones por
Hertz, problema de, 412, 418. de rigidez, 30. de cuarto de onda, 164. el, 469.
Hilo, deflexión de un, 182. de Young, 31. flexionadas, 291, 388. Red:
Hiperbólicas, entalladuras, 237,.271. en la tensión, 27. semiindefinida, 111. cuadricular, 504.
Homogénea, deformación, 254. enlns cortaduras, 30. Planas, ondas, 496. hexagonal, 515.
Hooke, ley de, 27. Mohr, diagnuna de, 36. Plano: triangular, 515.
Momento f1ector, su relación con la curva· medio de la placa, 390. R"lación tensión-deformaciór¡ (v. Ley de
Inclusiones, 111. turn,380. principal, 250, 259. Hooke) •.
Invadantes de tensión, 252. de l. tensión, 36, 250. Relaciones idénticas entre los componentes
Irrotacional; deformación, 495. Newton, fÓlmula de interpolación de, 506. Poisson, coeficiente de, 28. de deformación (v. CoTididonei de compa-
Isoclinas, líneas, 162. determinación, 291. ¡,·bilidaá). . '...
:\icol, prisrna de, su uso en íotoelasticidad,
IsocromátiCall, ¡¡neas, 162. 160. Polariscopio: Relajación en grupo y en bloq\.le, 520:
Isostáticas, 162. . circular, 164. Residuales, ten~.iones, 470. . ..
plano, 160. Residuos, 511. '.
Lamo!, problemas de, 84, 399. Ondas: Polarizada, uso en medida de tensiones de l., Resistencia eléctrica) extcns6metros nI 41-
Lámina elástica sobre Una base rlgida lisa, 75. de dilat.ción, 495, 496. Rl~~llrtes hélicoid¡~l~s; t~nsiones- en los, 433.
luz, 159.
Laplace, ecuación de, 212, 213. de distorsión, 495, 496.
548 INDlCIl AI.FABIlTICO INDICE .~LFABETJCO 549

. Rjgide2': en discos, 448 . energfa potencial como· base de la, 177 'Transición, concentración de tensiones ~n las
de flexión de las placas, 293. en esferas, 445, 459. Terremoto, ondas del, 499. zonas de:
módulo de, 30. en flujo estacionario de calor, 455, 470. Torbellino constante, 330. en enteUaduras de diámetro variable, 348.
torsional, 301. en placas, 442, 477. Torsión: e.n la flexión de placas, 168, 170.
Roseta, extensómetro, 42. en un sólido infinito, 476. árbol troncocónico en, 347. en In torsión de piezas prismáticas, 325, 337.
Rotación. componentes de, 260. debida a cambios de temperatura, 442. barras de sección transversal elíptica en, Transversales, ondas, 496, 497.
Rotura: . distribución axial simétrica, 382. 300. Traslación virtual, 179.
hipótesis relativas a lns condiciones de, 177. elipsoide de la, 250. centro de, 308, 375.- Tubos:
tensión en la, 177. en dirección radial, 80, 81. condiciones de contorno en, 297. de pared delgada, torsión de, 336.
distribución, 111. • cuerpo cilíndrico de sección tranversal en, sometidos a presión intema y externa, 84.
Saint-Venant: en la rotura, 177. 294. torsión de, 336.
principio de. 56, 178. eo término.q de coordenadas ortogonales de árbol.s:
problema de. 295, 356. curvilíneas, 224. de diámetro variable, 342, 534. Unidad de la solución, 272.
Scctnr' en un punto, 34, 247. huecos, 332.
tIIeular, problema tomional correspon- determinación, 170, 251. de barras prismáticas, 294, 504. Volar de franja, 163.
dIente a un, 316. en una biela de ojo, 1SO. curvas de transición en, 325,336. Variable compleja, funciones de, 210.
dt: .1111110: inicial, 94, 148, 274, 468. de diversas formas de sección tmnsversal \"elocidad: .
en la flexión, 438. ecuaciones generales para la determina- de circular, 285. de las onda~ superficiales, 502.
en la torsión, 433. ción, 468. elíptica, 300. de ondas:
Sene de Fourrier: en anillos, 94, 148. método semi inverso en, 295. de· dilatación, 496.
aplicación en los problemas de flexión, 363. en placas de cristal, 469. otras formas, 303, 316, 317, 323. de dispersión, 496.
curva de deflexlun representuda por, 184 local: perfil laminado, 324. de propagación de ondas en barras pris-
en problemas: en cavidad esférica, 399. rectangular, 310, 312. mática., 482.
bidimensionales, 70, 77. 145. en orificio circular, 107. desplazamientos en, 296. Vibraciones longitudinales de borras prismá-
de torsión. 313, 321. función de tensión, 298. ticas,480.
en zonas de transición:
Semicirculares, entalladuras, 116, 246,523. método aproximado en su investigación, Vigas:
en la flexión y la tensión, 168, 170.
Sismógrafo, 499. 318. carga concentrada sobre una, 125.
en la torsión, 274. .
Solución: de tubos de pared delgada, 336. curvatura (v. t. Curvatura de vigas), 67,
medida fotoelástica de las, 159.
general; de un sector de anillo de sección circular, 131, 133, 380.
norma 1 y tangencial, 23.
de problemas bidimensionales: 433. adicional, 131, 133 ..
plana, 32, 250. 277.
en coordenadas polares, 144. ejes ciUndricos en, 285. deflexión, 62, 66, 380.
ecuaciones de equilibrio para la, 43.
para una cuña, 151. líneas de tensión tangencial en, 307. distorsión de sus secciones transversales,
función de tensión, 48.
para los desplazamientos, 270. tensiones locales en las curvas de transi-· 62,380.
tensiones en un punto, 34.
unidad de la, 2.72. ción en, 273, 338. en T, anchura eficaz de las, 201.
principal, 35, 248.
Superficie: Torsiollal, rigidez, 30l. flexión (v. Flexián, de vigas).
determinación, 170,251.
de contacto, 4 t 4. Trab.yo virtual: tensiones tangenciales, 59, 68, 129, 360,
radial,80.
de curvaturas opuestas, 290. distribución de, tt 1. ap)¡cnción en los problemas de torsión. 361, 365, 368, 369, 371.
directriz, 250. residual, 470. 319.
neutra, 66. tangencial, 23. principio, 179. Y"ung, módulo de, 31.
Superposición, principio de, 271. componentes, 24.
distribución en vigas:
Temperatura, tensiones provocadas por: de diversas formas de sección:
la distribución no unifonne de la, 441. circular, 359.
l. fluctuación: e¡¡ptica, 361.
en cilindros, 457. rectangular, 362.
en placas, 442. vigas en 1, 379.
Tensión: de sección transversal rectangular, 74.
compnnentes de, 25, 80. efecto .n la flexión de vigas, 63, 133.
de barras prib'ffiáticns: líneas de, 307.
por fuerzas C<Jncentradas, 74.
por la fuerza de gravedad, 282.
máxima, 37, 252.
Tensional simétrica en el eje, distribución: ,¡
por tensiones distribuidas, 197. en cilindros circulares, 426.
unifomle, 281. en dos dimensiones; 83.
de cortadura, 25. en tres dimensiones, 382.
de origen télTIlico, 441. Teorema:
ecuaciones generales para, 463. de Castigliano, 191.
solución, 475. de reciprocidad, 274.
en bandns largas, 442, 44ó. Teoría de la energía en los materiales frági-
en cilindros, 450, 470. les, 189.

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