You are on page 1of 10

Carrera de Filosofía y Pedagogía

Fecha: Domingo 29 de abril del 2018

Tema:

______________________________________________________________________

“BIOÉTICA DE LA FECUNDACIÓN HUMANA”


______________________________________________________________________

Monografía de Bioética

Profesor:

P. Raúl Gonzales

Autor:

Moreno G. Jefferson Alexander


Octavo nivel de Filosofía y Pedagogía
jmorenog2@est.ups.edu.ec

Quito-Ecuador

P á g i n a 1 | 10
ÍNDICE

Tema: Pág.

1 Introducción ...................................................................................................... 3

2 Proceso biológico de la fecundación humana ................................................... 4

3 La reproducción desde la visión cristiana ......................................................... 5

4 Fecundación in vitro .......................................................................................... 6

5 Implicaciones éticas .......................................................................................... 6

6 Posiciones de la religión ante la fecundación artificial ...................................... 7

7 Conclusiones .................................................................................................... 8

8 Bibliografía ........................................................................................................ 9

P á g i n a 2 | 10
1 Introducción

La Bioética, entendida como ciencia encargada de estudiar los aspectos


éticos de la vida, las relaciones del hombre con los demás seres vivos y el entorno,
así como del “estudio sistemático de la conducta humana en el camino de las
ciencias de la vida examinadas a la luz de los valores y principios éticos” (Warren
Reich, 1978, citado en; Siverino, 1995 pág. 62), ha mostrado un gran interés en
las repercusiones, a todos los niveles, de las diferentes investigación biomédica en
tomo al comienzo y desarrollo de la vida humana y a las posibilidades de
intervención sobre esos procesos, como sucede en lo referente a la aplicación de
las técnicas de reproducción asistida (Santamaría, 2000). Entre estos, uno de los
que mayor impacto ha generado es el de la fecundación humana, la intrusión
artificial y los diferentes tipos de intervenciones antinaturales en el proceso, ante lo
cual, han surgido una gran cantidad de interrogantes acerca de la valoración ética
y antropológica de las actividades de los médicos y científicos en el campo de la
fecundación y la reproducción humana en general.

El tema que se abordará en el presente trabajo monográfico está centrado


en comprender la postura o visión de la bioética frente al proceso de fecundación
humana y la intervención artificial o antinatural de la misma, para entender las
repercusiones éticas, religiosas y morales que implica. Para este cometido se
aborda a continuación: el proceso biológico de la fecundación humana, la
fecundación artificial, la visión cristiana sobre la reproducción, así como las
repercusiones éticas y religiosas de la intervención artificial en relación al respeto
de la dignidad humana.

P á g i n a 3 | 10
2 Proceso biológico de la fecundación humana

La fecundación se define como un “proceso dinámico y temporal por el que


cada individuo se constituye a partir de los materiales aportados por los progenitores
con una información genética propia y distinta de la información genética aportada
por los padres” (Observatorio de Bioética, 2014).

La fecundación es un proceso con una dinámica temporal epigenética : la


información genética heredada se retroalimenta con el proceso mismo, por
interacción de los componentes del medio intracelular, a lo largo de las horas que
dura el proceso y el resultado, el cigoto, es más que la mera suma, o fusión, de
los gametos. La fecundación se inicia con el reconocimiento, específico de
especie, y activación mutua de los gametos paterno y materno, maduros y en el
medio adecuado. En la zona en la que el espermatozoide alcanza al óvulo se
produce una liberación de iones calcio que difunden como una onda hacia la zona
opuesta. El gradiente de concentraciones es perpendicular al eje entre los polos
animal y vegetal del óvulo y traza el eje dorso-ventral del cuerpo en estado inicial.
Antes del reconocimiento los gametos se encuentran en un estado de represión
de la actividad genética, y cada uno tiene que ser capaz de desbloquear la
represión del otro. Los cromosomas de los dos gametos se preparan y organizan
de tal forma que el cigoto alcanzará una información genética propia. Los
procesos que tienen lugar están regulados por los niveles de iones calcio
alcanzados en la zona correspondiente. El ADN que forma todos y cada uno de
los cromosomas tiene unas marcas químicas (un patrón de modificación química
por introducción de un grupo metilo en una de las cuatro bases, la citosina, de las
dos hebras que componen el ADN); marcas que son diferentes en el material
genético de la herencia paterna y de la materna. Durante el tiempo de este
proceso, el ADN de ambos progenitores cambia químicamente el patrón propio
—impronta parental— hasta alcanzar el patrón del nuevo individuo. Y sólo tras
estos cambios se inicia la expresión del genoma propio del hijo (Observatorio de
Bioética, 2014).

P á g i n a 4 | 10
3 La reproducción desde la visión cristiana

Para comprender la postura cristiana frente al proceso de reproducción y


fecundación humana, es necesario remitirnos al relato bíblico de la creación, en el
cual se comienza por comprender la distinción entre el hombre y las demás
creaturas, que se manifiesta sobre todo en el hecho de que sólo su creación se
presenta como fruto de una especial decisión por parte de Dios, de una deliberación
que establece un vínculo particular y específico con el Creador (Gutiérrez, 2016),
así se encuentra en la biblia “hagamos al ser humano a nuestra imagen, como
semejanza nuestra” (Gn. 1,26). La vida que Dios ofrece al hombre es un don con el
que Dios comparte algo de sí mismo con la criatura. Además el mismo Dios que
“hizo desde el principio al hombre, varón y mujer” (Gn. 1,26), le ha querido
comunicar cierta participación especial en su propia obra creadora, bien dijo al varón
y a la mujer “Creced y multiplicaos” (Gn. 1, 28). Así, la generación de un nuevo ser
humano es un acontecimiento profundamente humano y altamente religioso, en
cuanto implica a los cónyuges que forman “una sóla carne” (Gn. 2,24) como
colaboradores de Dios Creador.

El criterio ético valorativo para los diferentes actos que tienen que ver con la
procreación humana, estará señalado, entonces, por la originalidad del engendrar
humano al que hemos hecho ya referencia al hablar de la sexualidad y por la
originalidad misma de la persona humana que es engendrada). La transmisión de
la vida humana es confiada por la naturaleza a un acto personal y consciente y,
como tal, sujeto a las santísimas leyes de Dios: leyes inmutables e inviolables que
deben ser reconocidas y observadas. Tal acto personal es la íntima unión de amor
de los esposos, los cuales donándose en totalidad recíprocamente, donan la vida.
Es un único e indivisible acto, conjuntamente unitivo y procreativo, conyugal y de
paternidad. (...) Cada medio e intervención médica, en el ámbito de la procreación,
debe tener una función de asistencia y jamás de sustitución del acto conyugal
(Gutiérrez, 2016).

P á g i n a 5 | 10
4 Fecundación in vitro

El proceso de fecundación in vitro ha tomado gran relevancia a partir de 1978,


año en el cual el profesor Robert Edwards consiguió el nacimiento de la primera
niña, Louise Bown, por fecundación in vitro. A través de esta técnica de
reproducción asistida, se busca conseguir que “un espermatozoide fecunde el óvulo
fuera del cuerpo de la hembra, en un laboratorio; una vez logrado el o los embriones,
el médico o técnico los transfiere directamente al útero para tratar de obtener un
embarazo” (Clínica Eugin, 2018). Después de este resultado un buen número de
países han acogido las diversas técnicas de fecundación artificial dentro de sus
legislaciones, lo que ha contribuido a la idea de la bondad ética de estas técnicas
de reproducción asistida. Sin embargo, hasta el día de hoy no hay un acuerdo
común sobre la eticidad de las técnicas de fecundación artificial.

Frente a todas las controversias, se puede identificar un aspecto que se


puede considerar el punto de partida para la valoración ética de estas técnicas: el
mismo hecho del uso de las técnicas para la fecundación extracorpórea. Para
muchos este aspecto es irrelevante porque sólo se debe atender al fin de la
fecundación: la existencia del hijo. Para otros tiene una gran importancia que el ser
humano llegue a la existencia en un acto conyugal y no como resultado de un
proceso técnico. La pregunta es: ¿Es lícito de suyo engendrar vida humana en un
tubo de ensayo para satisfacer "el deseo de tener un hijo? (Bioeticawiki, 2017).

5 Implicaciones éticas

Entre los cuestionamientos éticos al proceso de fecundación artificial, se


encuentran los cuestionamientos sobre si la ciencia debe o no dar hijos a quien la
naturaleza no se los da; otro cuestionamiento está relacionado con la idea de que
un hijo debe nacer únicamente de un acto de amor llevado a cabo en la intimidad
de la pareja, pero que sin embargo puede ser reprochada, puesto que, también
implica un gran acto de amor el que efectúan los componentes de aquella pareja

P á g i n a 6 | 10
tratada con FIV al soportar los inconvenientes, el stress y la pérdida de intimidad
que la técnica les ocasiona para tener aquel hijo que la intimidad y el acto de amor
clásicos no les han proporcionado (Nolasc, 1994).

6 Posiciones de la religión ante la fecundación artificial

La postura de las instituciones religiosas frente al problema de la fecundación


artificial está centrada en el reconocimiento de la dignidad humana del embrión
desde el momento de la fecundación, por lo que se han exigido el respeto sobre su
patrimonio cromosómico y genético, así lo han expresado Iglesia Evangélica de
Alemania sobre las Cuestiones de Bioética y la Instrucción Donum Vitae o la Carta
Encíclica "Evangelium Vitae". Tales instancias defienden la vida humana desde el
momento de la concepción, al igual que la constitución política de Costa Rica, las
cuales se apegan a las instituciones religiosas del país, ya que tienen gran influencia
política y social. Asimismo, el 31 de noviembre de 1993, en la Plaza de San Pedro
el Papa Juan Pablo II criticó los experimentos científicos que están orientados a
manipular la vida humana, respecto de lo que se mostró profundamente preocupado
sobre las investigaciones ilícitas e inquietantes que violan las normas éticas y
menosprecian la dignidad humana alegando que muchas cosas cambian en el
hombre y su entorno, pero su naturaleza no puede ser alterada. No obstante, por
ello, el Papa exhortó a los científicos a que protejan al embrión humano de los
experimentos genéticos o de lo contrario correrán el riesgo de poner a la humanidad
en peligro, y de ahí que increpara a los gobiernos para que no se descuiden ante
los avances de la información genética (Campos, 2012).

Además, en la Evangelium vitae escrita por Juan Pablo II al final de su


Pontificado, que pretende ser, en el fondo, como un pequeño testamento de su
manera de pensar en los temas de Bioética, se afirma que

está en juego algo tan importante que desde el punto de vista de la


obligación moral bastaría la sola probabilidad de encontrarse ante una

P á g i n a 7 | 10
persona para justificar la más rotunda prohibición de cualquier intervención
destinada a eliminar un embrión humano. Precisamente por esto más allá de
los debates científicos y de las mismas afirmaciones filosóficas en las que el
Magisterio no se ha comprometido expresamente. La Iglesia siempre ha
enseñado y sigue enseñando que al fruto de la generación humana desde el
primer momento de su existencia se ha de garantizar el respeto incondicional
que moralmente se le debe al ser humano en su totalidad y unidad, corporal
y espiritual (Juan Pablo II, 1995).
Desde la tradición, el Magisterio no se compromete con ninguna filosofía, ni
con ningún dato científico, aunque, lógicamente, ya luego con la filosofía se utilizan
categorías filosóficas. La postura del Magisterio de la Iglesia no es, como se suele
presentar, relativa al discernimiento moral, sino que pide un respeto incondicional a
este embrión humano (Torre, 2009).

7 Conclusiones

La reproducción humana no es un hecho meramente biológico. Cuando


consideramos que la vida que se reproduce es la vida de un sujeto humano,
comprendemos que ese acto tiene una densidad especial. Para comprenderlo
adecuadamente, no basta entender el “factum” de la reproducción, es decir, los
aspectos meramente biológicos y genéticos, sino que debemos considerar también
los significados éticos, psicológicos, sociales, culturales y religiosos.

Esta claro que los avances científicos y tecnológicos en el campo de la


medicina, en general, tienden al mejoramiento de las condiciones de vida del ser
humano. Por lo cual, el desarrollo de técnicas de reproducción asistida – FIVET
(fecundación in vitro)- ha posibilitado que muchas parejas estériles alrededor del
mundo consigan tener hijos, pero que siempre se pone en controversia, puesto que,
cuando el objeto de la manipulación técnica es el ser humano, como en la técnica
de Fecundación "In Vitro" y Transferencia de Embriones el análisis debe superar el
plano de lo técnicamente correcto o efectivo. Debe prevalecer el criterio del respeto

P á g i n a 8 | 10
a la dignidad humana, ya que el ser humano nunca puede ser tratado como un
simple medio, pues es el único que vale por sí mismo.

8 Bibliografía

Bioeticawiki. (24 de septiembre de 2017). Ética de la fecundación artificial.


Obtenido de www.bioeticawiki.com:
https://www.bioeticawiki.com/%C3%89tica_de_la_fecundaci%C3%B3n_artif
icial#Ense.C3.B1anza_de_la_iglesia_cat.C3.B3lica

Campos, G. (29 de Febrero de 2012). Implicaciones éticas, legales, religiosas y


socioeconómicas de la fecundación in vitro en la salud reproductiva de
Costa Rica. Obtenido de Universidad de Costa Rica: 3566-5507-1-SM.pdf

Clínica Eugin. (Febrero de 2018). FIV: Fecundación in Vitro. Obtenido de


www.eugin.es: https://www.eugin.es/fecundacion-in-vitro/

Gutiérrez, J. (2016). Las religiones frente a la reproducción. Obtenido de


es.catholic.net: http://es.catholic.net/op/articulos/5192/cat/264/las-religiones-
frente-a-la-reproduccion.html#

Juan Pablo II. (1995). Evangelium vitae. Vaticano.

Nolasc, P. (22 de abril de 1994). Técnica y ética de la fertilización 'in vitro'.


Obtenido de elpais.com/diario:
https://elpais.com/diario/1984/04/22/opinion/451432806_850215.html

Observatorio de Bioética. (01 de julio de 2014). Inicio biológico de la vida humana:


la fecundación. Obtenido de Universidad Católica de Valencia:
http://www.observatoriobioetica.org/2014/07/inicio-biologico-de-la-vida-
humana-la-fecundacion/5053

P á g i n a 9 | 10
Santamaría, L. (2000). Técnicas de reproducción asistida. Aspectos Bio+eticos.
Obtenido de Aspectos bioéticos de las técnicas de reproducción asistida:
http://aebioetica.org/revistas/2000/1/41/37.pdf

Siverino, P. (1995). Una bioética en clave latinoamericana: aportes de la


Declaración Universal sobre Bioética y Derechos Humanos de Unesco.
Obtenido de revistas.pucp.edu.pe:
http://revistas.pucp.edu.pe/index.php/derechopucp/article/viewFile/2986/287
9

Torre, J. (03 de marzo de 2009). El respeto al embrión humano: aspectos éticos.


Obtenido de web.unican.es:
https://web.unican.es/campuscultural/Documents/Aula%20de%20estudios%
20sobre%20religi%C3%B3n/2008-
2009/CursoTeologiaInvestigacionBiomedica2008-2009.pdf

P á g i n a 10 | 10

You might also like