El tecnopor es una marca comercial introducida en el Perú para designar a planchas
de aislamiento térmico y acústico hechas de poliestireno expandido. En la actualidad, el consumidor extiende este nombre a todo lo fabricado con poliestireno expandido. Respectó del poliestireno expandido, éste es un material plástico espumado, derivado del poliestireno, que es utilizado en el sector del envase y la construcción. En términos químicos, el poliestireno es un polímero fabricado enlazando monómeros de estireno. En la actualidad, la Organización Mundial de la Salud (OMS), dentro de su listado de grupos de riesgo que pueden clasificar como elementos cancerígenos, clasifica al poliestireno dentro del grupo 3, denominado “Not classifiable as to its carcinogenicity to humans”, que traducido al español significa “No clasificable en cuanto a carcinogenicidad en seres humanos”. Es importante precisar que la OMS se basa en los estudios de la International Agency for Research on Cancer (IARC) para la clasificación de cancerígenos. Es falso que el poliestireno expandido, al entrar en contacto con alimentos calientes, genere cáncer o daño a la salud, ya que no existe documentación científica que así lo compruebe. Por el contrario, no sólo no libera sustancias tóxicas al calentarse, sino que la FDA lo tiene aprobado para ser usado en la fabricación de tapas para vasos que almacenan bebidas calientes: caso Starbucks y múltiples restaurantes en el mundo que los usan.
1. Mitos y Verdades del Tecnopor
Mito: El Tecnopor no se puede reciclar. Verdad: El tecnopor sí puede ser reciclado. Puede ser transformado y utilizado de nuevo en el aislamiento de edificios, madera plástica, marcos de fotos y muchos otros productos. Países como Canadá, México, Japón, Estados Unidos y otros tienen programas de recuperación de envases de tecnopor para su reciclaje. Mito: En Perú no se recicla el tecnopor. Verdad: La industria local del tecnopor ya ha puesto en marcha planes piloto de reciclaje de tecnopor. Es verdad que existe un reto respecto al manejo del tecnopor después de haber sido utilizado, por esto se está estructurando un plan de reciclaje ajustado a la realidad del Perú el cual está planificado a iniciar en la segunda mitad del 2016. En otros países se ha demostrado que el tecnopor se puede reciclar de manera que sea económicamente rentable, el reto en el Perú está en cambiar la mentalidad de la gente hacia una cultura de reciclaje integral. Mito: Los envases de tecnopor se hacen con estireno, un producto químico peligroso. Verdad: Los envases de tecnopor son hechos de poliestireno, el cual no debe ser confundido con el estireno. El Programa Nacional de Toxicología de Estados Unidos ha declarado inequívocamente que “el estireno no se debe confundir con el poliestireno (Tecnopor). Aunque el estireno, un líquido, se utiliza para hacer el poliestireno, que es un plástico sólido, no creemos que las personas están en riesgo por el uso de productos de poliestireno” El estireno se produce de forma natural en alimentos como la carne, el café y el queso. Mito: El uso de productos alternativos es medioambientalmente superior. Verdad: Los productos de tecnopor consumen menos energía en su fabricación que alternativas equivalentes de papel, además tienen menores emisiones atmosféricas. Cuando se compara con muchas de las alternativas existentes en el mercado, el impacto del ciclo de vida de los productos de tecnopor que son debidamente dispuestos o reciclados, son positivos y deberían ser reconocidos. Verdad: Si se reemplazará el plástico utilizado en los bienes de consumo y empaques por alternativas (papel, aluminio, vidrio, etc.) que cumplan la misma función, el costo del impacto al medio ambiente sería casi 4 veces mayor.
2. Tecnopor y comidas calientes
Aun cuando un envase de tecnopor (poliestireno expandido) entra en contacto con un alimento caliente no es riesgoso para la salud Se ha mal informado indicando que almacenar un pollo a la brasa caliente, en un envase de tecnopor (poliestireno expandido), es nefasto para la salud; que tomar un café también lo es; y que inclusive tomar la leche de tigre sobrante de un ceviche, desde uno de estos recipientes también genera daños en los seres humanos. Toda esa información no tiene sustento científico, es falsa. Cuando el poliestireno expandido, o comúnmente llamado tecnopor, se calienta, no libera sustancias tóxicas, tan es así que el poliestireno se utiliza ampliamente para la fabricación de tapas para bebidas calientes. Un ejemplo claro es los casi 3 mil millones de tapas con las que cada año Starbucks –y el resto de restaurantes que expenden bebidas calientes en el mundo-, entregan sus cafés u otras bebidas calientes a temperaturas de entre 70ºC y 80ºC, las cuales son hechas en base a poliestireno. Un plato de comida caliente no suele alcanzar esas temperaturas (temperatura promedio es de 60ºC). Ahora bien, dependiendo del calor aplicado el tecnopor puede llegar a deformarse e incluso inflamarse, por lo que se recomienda no exponerlo a temperaturas muy altas; de allí proviene la recomendación de no ingresar un recipiente de tecnopor (poliestireno expandido) a un microondas, ya que podría terminar quemado, no hay otra razón que no sea esa. Hoy en día, usar vasos de tecnopor (poliestireno expandido) en USA está aprobado por la FDA desde los años 60´s: si hubiera alguna conclusión de que éstos son dañinos al exponerse al calor, entonces ya habrían sido prohibidos por ese motivo.