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RELIGIOSAS OBLATAS
TEMA: La Deforestación
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, alertó sobre el aumento de la frontera agrícola en la Amazonía,
que reduce cada año decenas de miles de hectáreas de selva para zonas de cultivo o dedicarlas a la
ganadería. Correa destacó la labor del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIAP), inexistente al
inicio de este gobierno, y muy importante porque desarrolla semillas más productivas y alimento para el
ganado.En 2008 Ecuador tenía 9,5 millones de hectáreas de bosques, 1,5 millones menos que en 1990. El
gobierno se ha propuesto reforestar un millón de hectáreas en los próximos 10 años. De esos 9,5 millones
de hectáreas, cuatro millones son áreas protegidas y el resto figura en proyectos de conservación, como
Socio Bosque y otros planes. Entre 2000 y 2008 Ecuador perdió 74. 330 hectáreas de bosques por año, lo
cual situa al país ligeramente por encima del promedio mundial (70 mil hectáreas anuales). Los datos se
obtuvieron mediante un estudio que realizó el Ministerio del Ambiente al levantar la línea base de
deforestación en el país, por medio de la utilización de imágenes satelitales para ubicar bosques, cultivos y
cuerpos de agua.
Incremento de la Deforestación
300
1000hasec
X 1000
200
táreas
has
100
0
1980
1982
1984
1986
1988
1990
1992
1994
1996
Años
PORCENTAJE DE BOSQUES TALADOS EN LA SELVA
De acuerdo a datos emitidos por el Ministerio del Ambiente, en el Ecuador los bosques ocupan la mitad de
todo el territorio nacional, es decir, 130.002 km2.
Según los datos del “CLIRSEN”, Centro de Levantamientos Integrados de Recursos Naturales por Sensores
Remotos, en 1991 existían 13'462.654 hectáreas de bosques húmedos, secos y manglares, mientras que
para el 2000, el área con cubierta vegetal se registró en 11'679.822, lo cual da una tasa anual del 1,47 %
deforestando es decir 1´782.832 hectáreas deforestadas, para el 2004 se estima que han desaparecido
aproximadamente unas 792.000 hectáreas más, quedando así un total de 10´887.822 hectáreas de
cobertura forestal en el Ecuador.
Hasta hace 10 años, el 80% de la madera que se utilizaba en el Ecuador provenía de los bosques de la
provincia de Esmeraldas y el 20% de la Región Amazónica, pero esta relación ha cambiado, debido a que en
los últimos años ha sido sobre explotado por parte de las empresas madereras sin correcto y oportuno
control, es así que el tráfico de la madera, en la actualidad " el 60% sale posiblemente de Esmeraldas y el
40% de la Región Amazónica", lo que nos da a entender que el gremio maderero busca otras áreas forestales
para su explotación.
La deforestación de la selva amazónica cayó un 49% entre agosto del 2009 y junio de este año en la
comparación interanual. Eso lo anunció el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales.
Según el sistema de detección de la deforestación en tiempo real del Inpe, entre agosto del 2009 y junio del
2010 la selva amazónica perdió 1 810,81 km², contra 3 538,51 km² en el mismo período del año anterior. En
junio, la destrucción de la selva amazónica sumó 24 374 km². Pese a que los datos de Deter apuntan a una
fuerte caída de la destrucción de la selva para todo el año-calendario 2009/2010, el director del Inpe,
Gilberto Camara, procuró mostrar cautela y recordó que los datos consolidados sobre la deforestación son
obtenidos por el sistema Proyecto de Monitorización de Deforestación en la Amazonia Legal, que tiene una
metodología diferente al Deter. De acuerdo con los datos, el estado de Pará fue el que presentó mayor
deforestación en junio del 2010, con 160,63 km².
De acuerdo a las cifras del Colegio de Ingenieros Forestales de Pichincha indican que únicamente de la
provincia de Esmeraldas salen mensualmente entre 30.000 y 35.000 metros cúbicos de madera, esto
equivale a una columna aproximada de 1.000 trailers llenos con trozas y tablones de madera,
desconociendo el porcentaje legal e ilegal. A nivel nacional y de acuerdo al monitoreo realizado por el
CLIRSEN se estima un promedio de deforestación de 198.000 hectáreas de bosques durante cada año. Si
esta situación se mantiene, de acuerdo a los cálculos, el Ecuador quedaría totalmente deforestado en el año
2050 a pesar de que el 37% de los bosques están declarados como Reservas Naturales Protegidas, que
equivale al 18% del territorio Nacional.
Según un estudio publicado conjuntamente por la FAO y el PNUMA, cada año se pierden en el mundo unos
11,3 millones de hectáreas de bosques tropicales. Las perdidas en 75 países del área tropical de América del
Sur y Central, Asia y África se reparten de la siguiente manera: 23 países de Latinoamérica perdieron 5,6
millones de hectáreas (un área que equivaldría a la superficie total de Costa Rica); y 36 países de África
perdieron 3,67 millones; y 16 países de Asia, dos millones. Como puede apreciarse, la mitad de la
deforestación de bosques tropicales que se lleva a cavo tiene lugar en Latinoamérica.
En la Amazonia Brasileña entre los años 70 y 80 se talaron 42,6 millones de hectáreas. Si no se halla un
remedio, hacia el año 2.025, el Hemisferio Sur no dispondrá de bosques aprovechables.
En los EE.UU. fue talado el 95% de sus bosques originales, y cabría aplicar a Europa un porcentaje mayor. Se
calcula que para el año 2.010, todos los bosques naturales del noroeste de los EE.UU. habrán desaparecido.
Solo quedarán en pie los bosques naturales y otros espacios protegidos. En Canadá se cortan cerca de
300.000 ha. de bosques cada año, y el Gobierno continúa dando licencia de tala prácticamente gratuitas.
A principio del siglo XX, la Argentina tenía más de cien millones de ha. De bosques naturales. A inicio de la
década de los noventa la superficie arbolada apenas llegaba a los 35 millones de ha. Y cada año se pierden
por la tala, para aprovechar la madera, unas 500 mil ha. En ocasiones, maderas valiosas que deberían usarse
en la construcción de muebles se destinan a postes y traviesas.
La mitad de la deforestación de los '80 se produjo en sólo seis países, Brasil, Indonesia, R. D. Del Congo,
México, Bolivia y Venezuela. Los bosques tropicales secos, los manglares, los bosques húmedos de la zona
templada de América del Norte han experimentado también pérdidas muy elevadas. En los últimos 200
años, África ha perdido el 52 % de sus selvas tropicales, Asia el 42 %, y Centroamérica y Sudamérica el 37 %.
Pero no toda la culpa recae sobre los agricultores pobres y los leñadores, de la rápida deforestación, ya que
si se tiene una mayor perspectiva se aprecia un incremento en la demanda y el comercio de productos
forestales; las medidas políticas y las subvenciones que fomentan la reconversión (para recolección
maderera o agricultura y ganadería) favorecen asimismo ese proceso. El comercio internacional de madera,
pasta y papel registra una cifra de 114.000 millones de dólares anuales; el 90% del comercio internacional
de madera procede de los bosques templados y boreales.
Si los países desarrollados usan la madera con algunos fines ya vistos, los países subdesarrollados usan el
80% de la madera como combustible, ya que viene a ser del orden de 1344 millones de metros cúbicos, que
equivalen a 450 millones de toneladas de carbón. Para el Tercer Mundo, la importancia económica de los
recursos forestales, puede estimarse en función de los más de 200 millones de personas que viven en los
bosques y de los otros más de 2000 millones de habitantes rurales que dependen directamente del
abastecimiento de leña como energía doméstica.
En resumen, que es precisamente el bosque el mejor ejemplo de área natural que contribuye decisivamente
al bienestar humano, actuando como amortiguador de las reacciones del entorno; además de la producción
de madera y otros productos, los bosques influyen en el clima local y regional haciéndolo generalmente más
templado.
Industria maderera.
Ganadería.
Agricultura.
Los silvicultores de todo el mundo han talado bosques naturales para abrir
hueco a plantaciones más rentables.