Las características del mentefacto conceptual están determinadas por su rigor para

la organización jerárquica de las ideas en proposiciones; es por esta razón que el

mentefacto conceptual se proyecta en tres dimensiones de complejidad, que se
representan verticalmente: la supraordinación, arriba; la isoordinación/exclusión,
en el medio, y la subordinación, abajo.
La primera característica del mentefacto conceptual es su centralidad; es decir,
que parte de un concepto central para construir a partir de él la totalidad del
razonamiento proposicional. Otros organizadores gráficos también llevan el concepto
en una posición central (mapa mental y conceptual); sin embargo, en el caso del
mentefacto esta posición determina que el concepto pertenece al segundo orden de
ideas, en el mismo valor categórico de lo isoordinado y de lo excluido, asunto que
contrasta con los mapas porque la posición central es, siempre, de primer orden.
La siguiente característica es la jerarquización. Independientemente de que se
puedan representar en él las más diversas ideas y de que se puedan usar recursos
gráficos o audiovisuales, su estructura jerárquica es rígida y los elementos que
deben de entrar en él están caracterizados por el diseño predefinido por una
estructura de pensamiento deductiva. Cuando observas el mentefacto de nuestro
ejemplo, podrás ver cómo las características de Homero solamente aparecen en el
segmento inferior del cuadro y, además, allí no aparecen características de ninguno
de los otros personajes de la serie, ni de otros personajes parecidos de otras
series televisivas.
Desde esta perspectiva, el mentefacto conceptual no es un organizador gráfico de
índole final; es decir, no te servirá solamente para presentar los resultados de
una reflexión, de una lectura o de una exploración investigativa; al contrario, el
mentefacto conceptual es una herramienta de carácter procesal porque te permitirá
hallar elementos de conocimiento importantes para comprender el tema, mientras lo
elaboras.
De acá se desprende otra de las características importantes del mentefacto
conceptual: es una herramienta de aprendizaje, debido a que debes aplicar una serie
de herramientas de pensamiento tales como las generalizaciones, las integraciones,
las exclusiones o las comparaciones, todas ellas apuntando a la creación de las
proposiciones incluidas en la estructura. En el caso del ejemplo de Homero Simpson
puedes presumir que se excluyeron personajes de otras series cómicas y, adentro del
mentefacto, se excluyeron personajes que no son parecidos a Homero; igualmente, se
integraron aspectos descriptivos del personajes en las categorías subordinadas, o
se generalizaron comportamientos del personaje en una única característica.