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Su idea básica: un Estado mínimo y libertad para los mercados
'Debemos trabajar y utilizar nuestros talentos para crear riqueza'
Se inspiró en Hayek y Friedman frente a la economía planificada
y Keynes
Recortó el gasto público, bajó impuestos y quitó poder a los
sindicatos
Merkel y Cameron son herederos de su legado. Rajoy no siguió
sus pasos
Javier González | Madrid
Actualizado martes 09/04/2013 02:39 horas
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Más libertad
El 'Thatcherismo' podría resumirse en una idea básica, el menor Estado
posible para dar la mayor libertad posible para los mercados, más
eficientes al asignar recursos si no se producen monopolios ni oligopolios.
No obstante, el Estado debe regular, que no intervenir, en sectores sistémicos
como la banca. "La desregularización que nos ha llevado a la crisis actual fue
no fue culpa de Thatcher, fue de Bush y otros Gobiernos de los noventa",
advierte Rafael Pampillón, economista de IE Business School.
La 'Dama de Hierro' fue elegida primera ministra en 1979. "Se encontró un
Estado sobredimensionado, con un gasto público desmadrado, la inflación
disparada, unos sindicatos muy potentes y muchísimo paro", afirma el
economista.
"Provocó un cambio radical. Era hija de tenderos, lo llevaba en el ADN", explica
Pampillón. En su opinión, Thatcher, como Reagan, dio con las reformas clave
para reactivar la economía: "recortó el gasto público pero bajó impuestos;
hizo privatizaciones para parar un tren, dio estabilidad a los precios y puso
firmes a los sindicatos".
Margaret Thatcher privatizó, entre otras empresas, British Petroleum, Jaguar,
British Airways y British Gas, y abrió mercados como el de telecomunicaciones,
gas y agua.
"No pudo ver la mejoría del empleo durante su Gobierno, pero sus políticas
fueron la base de ello en los noventa", señala el economista de IE Business
School.
"Tenemos que ser conscientes siempre del enemigo interior, que es mucho
más difícil de combatir y más peligroso para la libertad", afirmó en un discurso
en 1984. Para resistir a las protestas, Thatcher hizo acopio de carbón y
movilizó a la policía.
Otra gran influencia del vienés, quien sufrió en primera persona la hiperinflación
posterior a la Primera Guerra Mundial, fue su advertencia al recibir el premio
Nobel en 1974 de que la "inflación es causada por los Gobiernos".
Hayek fue una influencia "filosófica" para Thatcher, en palabras de su
fundación. Sin embargo, Friedman fue "su economista favorito"y su respuesta
contra el 'keynesianismo', al que culpaba de la crisis de los setenta por
mantener el empleo a costa de una política monetaria expansiva.