cerrado de procesos biológicos y abióticos en que se basa el suministro de este elemento a los seres vivos. Es uno de los importantes ciclos biogeoquímico de que depende el equilibrio dinámico de composición de la biosfera. Los seres vivos cuentan con una gran proporción de nitrógeno en su composición química. El nitrógeno oxidado que reciben como nitrato (NO3–) es transformado a grupos aminoácidos (asimilación). Para volver a contar con nitrato hace falta que los descomponedores lo extraigan de la biomasa dejándolo en la forma reducida de ion amonio (NH4+), proceso que se llama amonificación; y que luego el amonio sea oxidado a nitrato, proceso llamado nitrificación. CICLO DEL FÓSFORO El ciclo del fósforo es un ciclo biogeoquímico que describe el movimiento de este elemento químico en un ecosistema. Los seres vivos toman el fósforo en forma de fosfatos a partir de las rocas fosfatadas, que mediante meteorización se descomponen y liberan los fosfatos. Estos pasan a los vegetales por el suelo y, seguidamente, pasan a los animales. Cuando éstos excretan, los descomponedores actúan volviendo a producir fosfatos. Una parte de estos fosfatos son arrastrados por las aguas al mar, en el cual lo toman las algas, peces y aves marinas, las cuales producen guano, el cual se usa como abono en la agricultura ya que libera grandes cantidades de fosfatos. CICLO DEL AZUFRE El azufre forma parte de aminas y de otras moléculas clave como la coenzima A, donde se halla en forma reducida (principalmente como grupo sulfhidrilo) y el NADPH. Las plantas y otros productores primarios lo obtienen en su forma líquida, principalmente como ion sulfato (SO42-) que, tras ser reducido se incorpora a sus proteínas en forma sólida. Los organismos que ingieren estas plantas lo incorporan a su vez a sus proteínas, y de esta forma pasa a los organismos del nivel trófico superior. Al morir, el azufre reducido de las proteínas entra en el ciclo del azufre y es oxidado por bacterias a forma que las plantas puedan asimilar (sulfato) y los animales puedan digerir. CICLO DEL CARBONO El ciclo del carbono es el ciclo biogeoquímico por el cual el carbono se intercambia entre la biosfera, pedosfera, geosfera, hidrosfera y la atmósfera de la Tierra. Junto con el ciclo del nitrógeno y el ciclo del agua, el ciclo del carbono comprende una secuencia de eventos que es clave para hacer a la Tierra capaz de sostener vida; describe el movimiento de carbono al ser reciclado y reusado por la biosfera, incluido los sumideros de carbono. El balance global del carbono es el equilibrio de los intercambios (ingresos y pérdidas) de carbono entre las reservas de carbono o entre un bucle concreto (p. ej., atmósfera ⇔ biosfera) del ciclo del carbono. Un examen del balance de carbono de una reserva o depósito puede proporcionar información aproximadamente si este está funcionando como una fuente o sumidero de dióxido de carbono. DOSIS DEL HERBICIDA La dosificación de los herbicidas se presenta en unidades de peso o volumen por unidades de superficie, por ejemplo kgs. o litros de herbicida por hectárea. Debemos asegurarnos de que la dosis que apliquemos sea la que se recomienda en el marbete del producto, ya que si subdosificamos no encontraremos respuesta y si sobredosificamos no sólo dañaremos a la maleza sino que también a las plantas que queremos preservar. Es muy importante asegurarnos que la/s pastilla/s del pico pulverizador sea/n para aplicar herbicidas y que esté/n limpia/s, sin ningún tipo de obstrucción y que el equipo funcione correctamente. Una vez hecho esto debemos calibrar el equipo, para lo cual seguiremos los siguientes pasos: 1 - Agregar, por ejemplo, 5 litros de agua en el tanque del pulverizador. 2 - Cerrarlo y presurizarlo. 3 - Marcar una superficie de por ejemplo 100 m2. en el parque y comenzar a pulverizar con agua sola, cubriendo con una velocidad constante de avance, el área mencionada y bombeando el pulverizador en forma continua a los efectos de mantener sin variaciones el caudal de salida. La distancia del pico al suelo debe ser siempre la misma, ya que de lo contrario variará el ancho de mojado: cuando más bajo esté el pico, menor será la franja de mojado y cuanto más alto lo ubiquemos mayor será el ancho de trabajo. 4 - Una vez cubierta la superficie, abrir el pulverizador lentamente hasta eliminar la presión interior y volcar el agua remanente en algún envase graduado a los efectos de medir cual fue el consumo de líquido (diferencia entre lo agregado inicialmente y lo que quedó en el pulverizador). Lo ideal es repetir este esquema tres veces, a los efectos de obtener un promedio del consumo o gasto del equipo pulverizador, valor que ya fijaremos para los trabajos que hagamos en adelante. Obviamente el valor nos va a servir siempre y cuando no se modifiquen las condiciones de trabajo: velocidad de avance, estado de la pastilla y del pulverizador y distancia del pico al suelo. Este cálculo nos va a dar entonces un valor de gasto o consumo: por ejemplo, 3 litros cada 100 m2., lo que equivale a 300 litros cada 10.000 m2. o sea 300 lt./ha. A los efectos de realizar un buen mojado de la superficie a tratar, se deben aplicar entre 300 y 60 litros de agua cada 10.000 m2 (ha), con el agregado del herbicida a la dosis recomendada por el fabricante. Si, por ejemplo, hubieramos consumido 1,5 litros para mojar los 100m2., estaríamos en presencia de un bajo volumen de agua.
Libro de Trabajo DE LA TERAPIA DE ACEPTACIÓN Y COMPROMISO (ACT). UNA GUÍA COMPLETA PARA CAMBIAR EL MINDFULNESS Y RECUPERARSE DE LA ANSIEDAD, LA DEPRESIÓN, LOS ATAQUES DE PÁNICO Y LA IRA