You are on page 1of 5

CLASIFICACIÓN DE LAS OBLIGACIONES

Las obligaciones pueden clasificarse desde distintos puntos de vista. Así, si las miramos desde
su contenido, podemos decir que hay obligaciones de “Dar”, de “Hacer”, de “No hacer”. Si las
miramos desde los sujetos que están involucrados podemos observar que hay obligaciones
que vinculan a un sujeto con otro sujeto y otras vinculas a un sujeto con varios sujetos o a
varios sujetos con otros varios sujetos, así tendremos las llamadas “Obligaciones de Sujeto
Múltiple” que, a su vez, según sea el vínculo entre ellas, serán “Mancomunadas”, “Solidarias”
o “Concurrentes”. Y si seguimos avanzando encontraremos otras clasificaciones. Pero nos
detendremos en este momento en las OBLIGACIONES DE DAR, es decir aquellas en las cuales el
Sujeto DEUDOR debe cumplir su prestación haciendo entrega al Sujeto ACREEDOR de “algo”,
ese “algo” puede ser una COSA o DINERO. En particular, trabajaremos sobre aquellas en las
cuales el objeto es el DINERO. A estas Obligaciones las llamamos “OBLIGACIONES DE DAR
DINERO” , “OBLIGACIONES DINERARIAS” u “OBLIGACIONES DE DAR MONEDA”. Íntimamente
vinculadas a ellas se encuentran las llamadas “OBLIGACIONES DE VALOR” a las cuales nos
referiremos brevemente a fin de, por comparación, poder comprender su diferente régimen
legal.

LAS OBLIGACIONES DINERARIAS

En primer término nos referiremos a LA MONEDA. La moneda es definida por Von Tuhr como
cosa mueble que el comercio utiliza como medida de valor para toda clase de bienes,
pudiendo, por lo tanto, emplearse como medio general de cambio.
En segundo término, nos interesa saber cuales son las funciones que la MONEDA cumple. Así,
podemos decir que desde el punto de vista de la Economía se la considera como instrumento
de medida o de cambio mientras que desde el punto de vista jurídico se la considera como
medio legal de pago. Para que la MONEDA cumpla sus funciones, el Estado le impone “CURSO
LEGAL”  Es el acto o potestad del Estado por el cual reconoce, respalda e impone la
circulación de una moneda determinada y constituye el fundamento legal de su valor de
cambio.
Hay distintas “clases” de moneda, la metálica, hecha de metales nobles, normalmente
utilizada como respaldo del circulante en papel, la de papel, representativa del valor del metal
que la respalda y el papel moneda que son los billetes que un Estado emite sin otorgarle
garantía y con curso forzoso y sirven para cancelar deudas dentro del Estado emisor. Estos
valores, en las relaciones civiles cumplen las siguientes funciones:
 Son relevantes en momentos de depreciación monetaria.
 Algunos códigos se inclinan por una clase o por otra de valor y, en algunos casos,
admiten excepciones.
 Para analizar su aplicación, se distingue entre OBLIGACIONES PURAMENTE
PECUNIARIAS y OBLIGACIONES DE VALOR.

LAS OBLIGACIONES “PURAMENTE PECUNIARIAS” O “DE DAR DINERO” O “DINERARIAS O DE


DAR MONEDA”.
 Se debe determinada cantidad de moneda.
 La obligación se cumple pagando la cantidad exacta de la misma especie de moneda
pactada ( peso x peso, dólar x dólar )  “PRINCIPIO NOMINALISTA”.
 Es el sistema adoptado por el Código de Velez.

LAS OBLIGACIONES “DE VALOR”.

 Son también Obligaciones Pecuniarias pero en ellas el dinero no es propiamente el


objeto de la prestación sino un “quid” y el dinero aquello con lo que ese valor se
mide. VALOR CORRIENTE  Si hay depreciación monetaria, deberá reajustarse al
momento del resarcimiento.
 Ejemplos: indemnizaciones/alimentos.

Como podemos observar, la diferencia entre unas y otras resulta sumamente importante
porque unas se reajustas (de valor) y otras no (de dar dinero).

EL RÉGIMEN LEGAL DE LAS OBLIGACIONES DE DAR DINERO EN EL CÓDIGO CIVIL Y COMERCIAL


DE LA NACIÓN.

Las OBLIGACIONES DE DAR DINERO están reguladas en el artículo 765 del CCyC que dice:
“Concepto. La obligación es de dar dinero si el deudor debe cierta cantidad de moneda,
determinada o determinable, al momento de constitución de la obligación. Si por el acto por el
que se ha constituido la obligación, se estipuló dar moneda que no sea de curso legal en la
República, la obligación debe considerarse como de dar cantidades de cosas y el deudor puede
liberarse dando el equivalente en moneda de curso legal.”

Como podemos observar, en el primer párrafo, define qué se entiende por Obligaciones de Dar
Dinero: son aquellas en las cuales el deudor debe entregar cierta cantidad de MONEDA, suma
que podrá estar determinada desde el nacimiento de la Obligación o determinarse
posteriormente, lo importante es que sea determinable, es decir que existan pautas que hagan
posible su determinación al momento de cumplir.

En el segundo párrafo se refiere a aquellas obligaciones que se pacten en MONEDA


EXTRANJERA, es decir, que NO TENGA CURSO LEGAL en nuestro territorio. En este caso, el
legislador optó por considerar que el tratamiento que debe darse a estas es el de las
OBLIGACIONES DE DAR CANTIDADES DE COSAS y que el deudor se libera entregando el
equivalente en moneda de curso legal. En el artículo siguiente, de manera confusa, establece
que “el deudor debe entregar la cantidad correspondiente de la especie designada.”
Vélez Sarsfield seguía, respecto de la moneda extranjera, el mismo principio, la consideraba
“cosa”. La Ley de Convertibilidad vino a cambiar el régimen; motivos económicos del momento
llevaron a establecer la paridad cambiaria con el dólar americano en uno a uno mientras que
se modificó el Código Civil estableciéndose que las Obligaciones pactadas en moneda
extranjera (reconociendo la realidad de la economía cotidiana, fundamentalmente en materia
de compraventa de inmuebles y préstamos hipotecarios) se consideraban como Obligaciones
de dar Dinero. El proyecto de reforma al CCyC mantuvo este criterio que luego fue modificado
por el Poder Ejecutivo y finalmente quedó el art. 765 tal el criterio velezano. Existe una
aparente contradicción entre ambos artículos. Entendemos que el 766 se refiere a la primera
parte del 765 en tanto el deudor puedo comprometerse a entregar cierta cantidad de “pesos
oro” en cuyo caso deberá entregar dicha especie. En este sentido sostiene COMPAGNUCCI DE
CASO: “La primera parte del art. 765 establece que "...la obligación es dineraria cuando el
deudor se obliga a entregar una cierta cantidad de moneda 'determinada o determinable'; y el
siguiente art. 766, concluye en que en ese caso el obligado debe dar la cantidad en la especie
designada" (9) .
Para ser más explícito es posible afirmar que el deudor puede prometer moneda nacional
"pesos" o bien "pesos argentinos oro" (ley 1130), y en esos casos no puede cambiar el tipo de
moneda (10) .
Esta solución lleva implícito el saludable principio nominalista, ya que impone que el dinero
debe darse y recibirse en la cantidad establecida con relación a la unidad ideal, sin
comprobarse el resto de sus cualidades. Entendiéndose que una unidad es siempre igual a sí
misma, por ejemplo: un peso es igual a un peso (11) .” (CÓDIGO CIVIL Y COMERCIAL DE LA
NACIÓN – Comentado – Director RIVERA, JULIO CÉSAR – Ed. La Ley, 2015.).
LOS INTERESES

Particular importancia tiene el régimen de los intereses. Se entiende por intereses aquello que
debe pagarse por el uso del capital ajeno. Estos pueden ser: COMPENSATORIOS, MORATORIOS
y PUNITORIOS. Están regulados en el CCyC en los arts. 767, 768 y 769 del CCyC.

Los COMPENSATORIOS son aquellos que se pactan entre deudor y acreedor a fin que el
primero le “compense” al segundo por el uso que del dinero de éste hace.

Art. 767.— Intereses compensatorios. La obligación puede llevar intereses y son válidos los que
se han convenido entre el deudor y el acreedor, como también la tasa fijada para su
liquidación. Si no fue acordada por las partes, ni por las leyes, ni resulta de los usos, la tasa de
interés compensatorio puede ser fijada por los jueces.

Los MORATORIOS son aquellos que se deben por el sólo hecho de no cumplir a tiempo la
obligación debida, el deudor que está en mora corre con un costo, con una sanción por no
haber cumplido en término. Se trata de una suerte de indemnización por su obrar antijurídico,
no haber cumplido en término lo comprometido. Están regulados en el art. 768 y se establece
la tasa que debe aplicarse.

Art. 768.— Intereses moratorios. A partir de su mora el deudor debe los intereses
correspondientes. La tasa se determina:
a) por lo que acuerden las partes;
b) por lo que dispongan las leyes especiales;
c) en subsidio, por tasas que se fijen según las reglamentaciones del Banco Central.

Los PUNITORIOS, regulados en el art. 769, son intereses por mora pero pactados por las partes
previamente.

Art. 769.— Intereses punitorios. Los intereses punitorios convencionales se rigen por las normas
que regulan la cláusula penal.

El artículo nos remite a la cláusula penal que es aquella cláusula que las partes pactan en un
contrato como indemnización tarifada por el incumplimiento.

LA CAPITALIZACIÓN DE INTERESES- “ANATOCISMO”

Nos preguntamos si es posible la capitalización de intereses, es decir, si es posible que los


intereses que se generen durante un determinado período de tiempo se sumen al capital y así
lo acrecienten y sobre esos intereses se generen nuevos intereses y así sucesivamente
generando una deuda de importantes dimensiones. Este fenómeno se conoce como
ANATOCISMO y se encuentra regulado en el art. 770 del CCyC de la Nación.
En este tema corresponde hacer también un poco de Historia: El art. 623 del Cód. Civil, en su
redacción originaria, prohibía el pacto de acumulación de intereses sobre intereses. La ley
23.923 (de convertibilidad del austral) modificó la norma permitiendo dicho convenio en los
períodos que las partes lo acordaran. Hoy, el art. 770 también los autoriza y en tal sentido dice:

Art. 770.— Anatocismo. No se deben intereses de los intereses, excepto que:


a) una cláusula expresa autorice la acumulación de los intereses al capital con una periodicidad
no inferior a seis meses;
b) la obligación se demande judicialmente; en este caso, la acumulación opera desde la fecha
de la notificación de la demanda;
c) la obligación se liquide judicialmente; en este caso, la capitalización se produce desde que el
juez manda pagar la suma resultante y el deudor es moroso en hacerlo;
d) otras disposiciones legales prevean la acumulación.

Como podemos advertir, la regla es que el ANATOCISMO está prohibido pero existen
numerosas EXCEPCIONES.
Como comentario a tales excepciones merece la pena leer lo que nos dice COMPAGUNUCCI DE
CASO en “CÓDIGO CIVIL Y COMERCIAL DE LA NACIÓN – COMENTADO”– Director RIVERA, JULIO
CÉSAR: “ 2. Excepciones
a. El inc. 1º contempla como primera concesión: "el acuerdo de las partes", resultando
coincidente con el texto del Código Civil. Dicho convenio puede ser realizado al momento del
nacimiento de la obligación, o en un tiempo posterior.
Pero es de aclarar que el art. 770 del nuevo código sujeta la periodicidad a un término no
menor a 6 meses. Esta limitación resulta una pauta razonable para la capitalización de
intereses, ya que evita el que se forme, tal como afirmaba Alfredo Colmo, una verdadera bola
de nieve (3) .
b. El inc. 2º dispone que cuando el cumplimiento de la obligación se realiza judicialmente, la
adición de intereses sobre intereses comienza al momento de notificación de la demanda. De
esa forma se otorga una mayor fuerza y sanción al incumplimiento y mora del deudor.
c. El inc. 3º tiene un similar alcance que lo previsto en el texto original del Codificador, que aun
perdura en su vigencia. Se trata de una liquidación hecha en juicio donde se incluyen
intereses, cuando se aprueba, mandada a pagar y el deudor es moroso en cumplir, se le
calcularán "intereses sobre intereses" (4) .
d. El último inciso prevé supuestos que permiten el anatocismo y están en normas
particulares del Código Civil. Por ejemplo lo dispuesto en el art. 1950, caso del mandatario que
paga con fondos propios una deuda del mandante que incluye intereses, tiene derecho a cobrar
los intereses sobre la totalidad; o lo previsto en el art. 2030 que faculta al fiador que hizo
efectivo el pago, a cobrar intereses sobre la suma total que a su vez incluía ese rubro.”

Ahora bien, conforme el art. 771, los jueces están facultados para morigerar los efectos que
esa capitalización conlleve cuando esa capitalización exceda en forma injustificada y
desproporcionada el costo medio del dinero aludiendo así a las tasas que se aplican para
préstamos de dinero en el mercado local. Dice el Art. 771.— “Facultades judiciales. Los jueces
pueden reducir los intereses cuando la tasa fijada o el resultado que provoque la
capitalización de intereses excede, sin justificación y desproporcionadamente, el costo medio
del dinero para deudores y operaciones similares en el lugar donde se contrajo la obligación.
Los intereses pagados en exceso se imputan al capital y, una vez extinguido éste, pueden ser
repetidos.”

Hasta aquí una breve reseña del tema “OBLIGACIONES DE DAR DINERO” o “DINERARIAS”.
Ahora invitamos al alumno a realizar el siguiente ejercicio:

LECTURA: Se presenta al alumno para su lectura un fallo de la


Corte Suprema de Justicia de la Nación en el cual el Dictamen de la Procuradora tiene
suma importancia. Se trata de un caso de CAPITALIZACIÓN DE INTERESES. Se adjunta el
fallo para su lectura y análisis.
ACTIVIDAD: Una vez que el alumno haya leído el fallo adjunto
se lo invita a participar de la siguiente actividad: El alumno deberá analizar el caso en
estudio y responder el siguiente cuestionario:
1. Quienes son las partes involucradas en el caso?
2. Qué se resolvió en primera instancia con respecto a la liquidación practicada por la
parte actora?
3. Quién apeló a la Cámara de Apelaciones? Por qué?
4. Cómo se resolvió el caso en la segunda instancia?
5. Quién y por qué se apela a la Corte Suprema de Justicia de la Nación? (Recurso
Extraordinario).
6. Qué establece en su Dictamen la Procuradora de la CSJN con relación a la
capitalización de intereses?
7. Qué decidió la CSJN?

You might also like