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Titular
último
Índice Cleopatra VII
Desde el 51 a. C. hasta el 30 a. C.
Etimología
Historia
Símbolos del faraón Designado Hereditario
Coronas por
Cetros Duración Vitalicio o hasta su abdicación
Trono
Primer Narmer
Otros símbolos del poder
titular
Entorno familiar
Creación 3000 a. C
Faraones célebres
Supresión 30 a. C.
Véase también
Sucedido Emperador de Roma/Prefecto de
Referencias por Egipto
Enlaces externos
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Etimología
Historia
La sucesión de faraones y la historia del propio Egipto vienen indisolublemente
unidas y son tan complementarias entre sí que es imposible desconocer una de ellas
y ser experto en la otra. Tanto es así que incluso en los periodos más críticos, cuando
la anarquía reinaba en muchas zonas del país, siempre había, al menos, un faraón
que afirmaba ser el legítimo gobernante de lacaótica nación en su extensa totalidad.
Desde Menes, 3100 a. C., hasta el año 2600 a. C., la monarquía pasó por momentos
de debilidad y seguía siendo cuestionada por la nobleza local. Así, no es de extrañar
que en la dinastía II los reyes perdieran notablemente el poder y tuvieran que hacer
frente a peligrosas revueltas que pusieron en peligro la estabilidad del país.
Reino Antiguo
Sería solo de 2600 a 2200 a. C. cuando se consolida la institución y los reyes pasan a
El faraón Menkaura. Museo de El
ser monarcas absolutos con derecho divino. Es la época dorada de la monarquía Cairo.
egipcia, conocida por algunos como Imperio Antiguo (aunque en realidad la
denominación de imperio solo le quepa al imperio nuevo o a lo sumo al Imperio
Medio), que acabaría de forma trágica ante la debilidad de los últimos reyes de la dinastía VI, momento en el que una vez más la
nobleza y los gobernadores de los nomos tomaron el poder surgiendo principados independientes. Heródoto comenta: «después de la
muerte de Nitocris, el país se hunde en un estado de inestabilidad, confusión y caos», iniciándose el denominado primer periodo
intermedio de Egipto.
Reino Medio
La situación tardaría más de un siglo y medio en restablecerse, y pese a que nuevamente una dinastía de reyes fuertes asumiría el
control absoluto del país, con la dinastía XII, siguió existiendo el peligro constante de un golpe de Estado. Tanto es así que se sabe
de, al menos, un monarca asesinado, Amenemhat I, por unos ambiciosos nobles. La ligera estabilidad del llamado Reino Medio
estallaría de forma similar a la del Reino Antiguo, por la debilidad de los monarcas y el creciente poder de las clases dirigentes
locales, a las que se añadiría la llegada a Egipto de puebloscananeos, algunos de ellos violentos.
Imperio Nuevo
La siguiente etapa de calma y prosperidad no llegaría hasta el 1500 a. C., con el
Imperio Nuevo, momento en el cual llegaron al poder
los faraones mejor conocidos, que impulsaron la creación de un enorme imperio colonial en la Siria-Palestina (Canaán) y Kush
(Nubia), entrando en contacto con los otros pueblos del Oriente Próximo. Sin embargo, también estos reyes estuvieron acosados por
un peligro que hacía tambalear sus tronos, que en este caso fue el de los sacerdotes de Amón, que habían adquirido mucho poder. El
traslado de la capitalidad al Delta acabaría por convertir al Sumo sacerdote de Amón en rey independiente y daría al traste con la
monarquía egipcia.
Periodo Tardío
Tras esta situación, Egipto no volvería a convertirse en un gran imperio. Desde la toma del poder de los sacerdotes de Amón hasta la
llegada de una dinastía fuerte, la XXVI, pasaron más de cuatrocientos críticos años en los que convivieron dos, tres e incluso más
faraones a un mismo tiempo, y el país fue invadido por libios, nubios y asirios. La dinastía XXVI trató de recuperar el esplendor del
Reino Antiguo, pero la inmediata conquistapersa desbarataría todo.
Tras ello, los invasores aqueménidas, macedonios y lágidas (estos últimos pertenecen a la llamada dinastía Ptolemaica) trataron de
adaptarse a las costumbres del país y aceptaron ser deificados en vida.
Periodo Greco-Romano
El último faraón egipcio reconocido como tal fue la legendaria reina Cleopatra. El último rey nativo, Nectanebo II había gobernado
trescientos años antes, y los faraones ptolemaícos, de origen extranjero, se aislaron en Alejandría y, aunque respetaron las tradiciones
ancestrales del pueblo, no tardaron en convertirlos en semi-esclavos. Por ello, no es de extrañar que cuando Egipto pasó a formar
parte del Imperio romano, los egipcios no dieran importancia al cambio: los verdaderos faraones habían abandonado a su país mucho
tiempo atrás.
Coronas
Sin duda, el elemento del vestuario mejor conocido de los faraones egipcios eran sus
propias coronas, de las que existían numerosos ejemplos. Las más comunes y mejor
conocidas son:
Trono
La ceremonia de la coronación se realizaba en Menfis, primera capital del reino unido, y
comenzaba ascendiendo al heredero al rango de dios entregándole las insignias del
cayado (Heka) y el látigo (Nejej), atributos del poder. Luego, tocado primero con la
corona blanca del Alto Egipto, después con la roja del Bajo Egipto y finalmente con la
doble corona, se sentaba en el trono hecho con papiros (símbolo del norte) y lotos
(símbolo del sur).
La barba postiza, utilizada por los faraones en las grandes ocasiones por su identificación una vez más con
Osiris, considerado el primer gran monarca egipcio, y que era representado con una gran barba similar a la
que llevaban sus sucesores.
El Uraeus y el buitre: La Cobra, animal característico de la diosa Uadyet, patrona del Bajo Egipto. El buitre
era el animal característico de la diosa Nejbet, patrona del Alto Egipto. Así, las Dos Señoras representaban
la unificación de las Dos Tierras en el ser del faraón.
Cola de toro o de león, que remarcaba la potencia creadora del monarca.
Así como infinidad de tipos de collares, pendientes, cinturones, sandalias, vestiduras plisadas de lino y demás tipos de joyas que
harían de la visión del faraón en toda su gloria un golpe de efecto para los modestos habitantes delalle
V del Nilo.
Entorno familiar
Siempre, al lado del faraón, debía convivir su Gran Esposa Real, el equivalente a una reina y la transmisora del linaje real. La
posición de Gran Esposa Real, en egipcio Hemet nise ueret, implicaba no solo una posición política a ocupar dentro de la corte, sino
también una posición religiosa, ya que la Gran Esposa Real oficiaba de ritualista en variadas festividades. Considerando que existían
variados ritos distribuidos a través de la geografía del país de lasDos Tierras, estos involucraban al faraón y su principal esposa. Así,
en los cultos que formaban tríadas como las de: Osiris, Isis y Horus; Amón, Mut y Jonsu; Shu, Tefnut y Atum, etc. cada uno
implicaba la participación del faraón, su principal reina y en los casos donde era posible, de su heredero. En dichos ritos, que se
expresaban mediante múltiples festividades como ser la fiesta de Opet en Karnak, la participación del rey y la reina daban un
significado por emulación de la existencia divina de los dioses representados. Y no solo ello: dado que los egipcios creían que la
legitimidad solo podía poseerla una mujer, las Grandes Esposas Reales eran las garantías y el principal apoyo del faraón durante su
reinado. Por tanto, no es de extrañar que los faraones se casasen con las hijas de su antecesor (en muchos casos estas hijas eran sus
hermanas o sus hermanastras) para poder ascender al trono.
A lo largo de la historia egipcia también hubo grandes reinas, algunas de las cuales
llegarían incluso a asumir el poder absoluto a la muerte de sus maridos. Otras
ocuparon un determinante papel político o religioso, y no se podrían entender
muchas cosas de la historia egipcia sin tener en cuenta el poder que ocuparon estas
damas a la sombra de sus esposos.
Por debajo de las Grandes Esposas Reales, el faraón podía tomar tantas mujeres
como quisiera, e incluso ascenderlas, si así lo quería, al rango de Gran Esposa Real
(aunque esto sería infrecuente). En las primeras dinastías existirían numerosas
esposas secundarias y concubinas, y ya a partir del Imperio Nuevo, los monarcas se
encargarían de poseer enormes harenes en los que todo tipo de mujeres, incluidas
las princesas extranjeras, pasaban a residir. Hay grandes diferencias entre los
harenes faraónicos y los legendarios harenes utilizados por califas y sultanes: en el
Antiguo Egipto los harenes eran una institución más abierta, no una cárcel de oro
guardada por eunucos. Esta situación solo aparecería con la llegada de los persas y Escultura de la reina Hatshepsut, una
de los griegos. de las pocas mujeres que acabarían
gobernando como faraón en solitario.
En cuanto a la descendencia real y la sucesión al trono, las reglas no se mantuvieron
inmutables a través de los miles de años que duró la investidura de faraón. Así,
durante la Dinastía XVIII, al comienzo del Imperio Nuevo, surge con fuerza la posición de Hija del Dios, a quien se emparenta con
el dios Amón, y se la eleva a Dadora de herederos, quedando identificada como la única que puede dotar de un sucesor al faraón
reinante, por encima de las otras reinas de la Casa Jeneret (el harén real). No obstante, la sucesión normalmente se resolvía mediante
un heredero masculino, aun cuando el mismo pudiera no ser hijo de la Gran Esposa Real, sino de una reina de menor rango. Si el
sucesor provenía de una reina de menor rango, procedía a contraer enlace con una hija de la Gran esposa real del rey fallecido. Este
fue el caso de Hatshepsut y Tutmosis II, de quien se sabe era hijo de una reina de menor rango. Esto se repetiría también con
Tutankamón, quien se desposaría con una hija deAjenatón y Nefertiti, que ocupaba la posición deGran Esposa Real.
El futuro de las hijas dependía del rango de su madre: si eran hijas de una reina, podrían heredar su cargo o vivir en soltería; y si eran
hijas de una esposa secundaria o de una concubina, podían casarse con algún noble o residir en el harén.
Faraones célebres
A lo largo de tres mil años de civilización no es extraño encontrar todo tipo de reyes en el trono: grandes conquistadores, vagos e
incapaces, megalómanos y egoístas, déspotas y tiranos, bondadosos y honestos, pacíficos y permisivos, niños y ancianos, avariciosos
y mujeriegos... También gobernaron variasreinas-faraones.
Faraón, película polaca (en polaco, Faraón) de 1966 del director Jerzy Kawalerowicz.
Faraón, novela del escritor polacoBolesław Prus sobre la que se adaptó la película anterior
.
Véase también
Lista de faraones
Titulatura real en el Antiguo Egipto
Referencias
1. Dodson, Aidan y Hilton, Dyan. The Complete Royal Families of Ancient Egypt. Thames & Hudson. 2004. ISBN 0-
500-05128-3.
Enlaces externos
Wikimedia Commons alberga una categoría multimedia sobreFaraón.
Digital Egypt for Universities.(en inglés) Consultado el 2 de octubre de 2013.
Mustafa Waziris, Director de Antigüedades de Luxor dice que "faraón" no significa "rey de Egipto" como dice la
Biblia. En egiptologia.comConsultado el 17 de julio de 2016.
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Se editó esta página por última vez el 21 may 2018 a las 23:57.
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