Juan Amos Comenio (1592-1670)

Nació en 1592 en el reino de Bohemia, perteneciente a Alemania que en ese momento era
el centro económico europeo.

Los siglos XVI y XVII fueron de gran desarrollo cultural pero convulsionados en lo político
por las guerras entre católicos y protestantes. Finalizando el medioevo salían a la luz
distintas corrientes de pensamiento con más libertad, más alejadas del teocentrismo,
desplazándose lentamente al antropocentrismo. Esas corrientes no sólo expresaban una
concepción del mundo sino también un interés por el acceso al conocimiento. Era el fin de
la Edad Media y el principio de la Modernidad.

Esas corrientes de pensamiento influyeron en las ideas de Comenio especialmente las de

la Reforma que desafiaban el poder de la Iglesia católica, del Papa y del clero. El movimiento
de la Reforma generó la creación de comunidades con códigos de vida y enseñanza que
fueron muy importantes en la vida de Comenio. Él perteneció en su infancia a una de ellas
y la dirigió en su adultez.

Comenio quedó huérfano de muy pequeño. Su vida fue muy dura. Pérdida de esposa e hijos,
migraciones por persecuciones y exilios debido a sus ideas protestantes.

Se formó en la Academia Calvinista. Uno de los principios de esta academia era: la sabiduría
consiste en el conocimiento de Dios y de uno mismo. Fue sacerdote protestante. La
enseñanza era central para la prédica en esa orden religiosa.

Bacon, científico de la época, también influyó en las ideas de Comenio sobre el

conocimiento de la naturaleza. Consideraba que se debía enlazar naturaleza y espíritu y que
la ciencia tenía tres objetivos: Dios, la naturaleza y el hombre. Bacon era muy detallista en
la cuestión del método de las ciencias.

Otro pedagogo contemporáneo de Comenio y con ideas similares fue Wolfang Ratke.
También era reformista luterano y publicó un libro llamado Didáctica en el año 1619 con un
detalle del método de enseñanza con muchas similitudes con el de Comenio.

La obra escrita de Comenio fue muy prolífica Se notaba que era un gran lector por la
cantidad de citas que constan en sus libros.

El plan de Comenio que surge de la Didáctica Magna era totalizador: incluía cuestiones de
religión, propósitos, política educativa, organización escolar, método de enseñanza,
recomendaciones sobre el desarrollo de niños y jóvenes. Su propósito era educar a todos
sobre todos los temas. Creía en la educación como la salvación del género humano. Su
método tenía un triple fin: desarrollar la erudición, la virtud y la religión. “La educación es
indispensable para que el hombre sea un animal racional, sabio, honesto y piadoso”

Pretendía reformar todas las escuelas de su época. Criticaba los métodos complejos con
los que se enseñaba, la falta de interés que generaban en los niños, los castigos corporales
que usaban para disciplinar, la importancia que se le daba a lo expositivo, entre otras cosas.

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Decía que las escuelas habían sido la “abrumadora mole de Sísifo” en alusión al mito griego
donde Sísifo es castigado y condenado a empujar eternamente una mole de piedra hacia la
cima de una montaña como un trabajo tedioso y condenado al fracaso.

Un capítulo entero de Didáctica lo dedicó a señalar qué libros de autores paganos no debían
ser leídos por los niños. Sugiere que sólo se lean las Sagradas Escrituras porque sólo Dios es
el camino de la sabiduría, sólo la palabra de Dios debe alimentar a los niños. Proponía que
se quemen libros paganos y que se prohíba su lectura bajo pena de anatema.

En la Didáctica Magna usó varias metáforas para que el texto sea comprensible pero a
través de ellas se percibe el fundamento de sus ideas.

Para Comenio el orden de las cosas era algo divino que había que comprender y replicar.
Decía “El orden está en el cielo, en el mundo, en el cuerpo”. Pensaba que si se mantenía
el orden todo funcionaría perfecto. Usó la metáfora del reloj como un elemento lleno de
virtud, “es complejo por la cantidad de piezas y a la vez armónico en su funcionamiento”.
Sostenía que las escuelas equivalen en todo aspecto a un reloj y con su método lograrían la
perfección en su funcionamiento.

Otra metáfora muy interesante que propuso era la de la imprenta. Asemejaba la inscripción
que la imprenta hace en un papel a la inscripción que la enseñanza hace en la mente.
Comparó las artes tipográficas con el método de enseñanza que él sostenía: el papel serían
los alumnos, los caracteres serían los libros didácticos, la tinta sería la voz del docente que
convoca la atención, la prensa sería la disciplina escolar que vigila y reprime. Agregó que
los caracteres deben ser distribuidos en cajas y casilleros, de la misma manera hay que
organizar el conocimiento para que sea aprendido gradualmente. Era tan fuerte este
paralelismo imprenta – enseñanza que denominó didacografía a la didáctica así considerada
como si fuera un proceso de impresión tipográfica.

Comenio explica distintos aspectos de su didáctica que a continuación se detallarán como

claves para entender continuidades y rupturas en el desarrollo del campo de la Didáctica

Sobre la educación y sus propósitos

 La educación debe realizarse en escuelas porque hay un orden natural que debe ser
observado y se necesitan personas dedicadas a tal fin: preceptores, maestros,
profesores. Las escuelas deben ser lugares tranquilos alejados del ruido
 Se debe educar a la juventud reunida y no en forma individual para ejemplo e
impulso entre pares. Todos podrán instruirse sin excluir a ninguno. Un solo maestro
con este método puede instruir a cien alumnos.
 Todos los seres humanos deben ser educados: ricos, pobres, niñas, niños, jóvenes.
 El propósito era enseñar todo a todos (ideal pansófico). Formar en la sabiduría, la
piedad y la prudencia. Formar a los jóvenes para adquirir un conocimiento
verdadero. Los contenidos deben abarcar: artes, ciencias, idiomas, costumbres y
adoración a Dios

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  El método debe ser riguroso para lograr los propósitos educativos de la escuela
considerada por él una “fábrica de humanidad
 La tarea que se propuso es considerada por él mismo como muy difícil pero cree
que con el apoyo de los padres, de los políticos y de Dios se puede llevar adelante.
Además considera que si el método está escrito de forma sencilla en los libros
puede ser llevado a la práctica por personas de buena voluntad.

Sobre el orden en la vida diaria

Consideraba que el cuerpo era el abrigo de la mente. Por eso el cuerpo necesita una dieta
moderada, ejercicios y relación con la naturaleza. El día debía dividirse en tres partes: una
para el sueño, otra para las actividades externas como alimentación, recreación y la otra
parte debía destinarse al trabajo serio.

Sobre la inteligencia de las personas

Distingue seis clases de inteligencia: a) la de los más aptos a los que hay que ayudar para
que no vayan tan aprisa b) la de los agudos y lentos que necesitan estímulo c) la de los
agudos y ávidos de saber pero bruscos que son odiados por los demás pero si se los educa
se verá que tienen un valor d)la de los simpáticos y ávidos de aprender pero lentos y
obtusos, se debe ser tolerante y benigno con ellos, tardan en aprender pero son tenaces,
hay que evitar que se alejen de la escuela e)la de los obtusos, indolentes y prejuiciosos,
pueden ser corregidos pero demandan paciencia y prudencia f) la de los obtusos de índole
torcida y mala, hay que tratar de corregirlos y de extirpar su tozudez, pero se logrará solo
con uno entre millares, si esto sucede es testimonio de la bondad de Dios

Sobre la Disciplina

En la pedagogía cristiana de Comenio ya no estaban las ideas sobre el pecado original de los
niños.

Para él la disciplina era la medida correctiva para ajustar la conducta a las reglas del orden.
La escuela por lo tanto requería vigilancia y atención, ni gritos ni golpes. Proponía una
“severidad benéfica”. Se debía aplicar la disciplina sólo a los que se alejaban del camino
recto pero sin ira ni odio. El alumno debía aceptarla como un remedio recetado por el
médico. La disciplina debía ser rigurosa en relación con las costumbres no con el estudio.
Creía que los castigos no servían para despertar amor por las letras. Para los estudios se
debían usar alabanzas, amonestaciones públicas o exposición al ridículo. Para las faltas
graves como desobediencia y blasfemias la disciplina debía ser severa y causar miedo en los
demás. Otra falta considerada grave era no ayudar a un condiscípulo.

El director de la escuela debía ser modelo de conducta con su ejemplo.

Sobre el método de enseñanza

Los puntos clave de su método eran los siguientes:

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  Enseñar de acuerdo a la edad porque de ella depende la capacidad
 Enseñar a todos los alumnos en una misma clase no individualmente
 Enseñar desde la infancia
 Enseñar en horas de la mañana y de forma gradual, no sobrecargar a los alumnos.
Cuatro horas diarias serán suficientes
 Despertar el deseo de aprender uniendo lo útil para el tiempo presente y lo
agradable
 Enseñar a través de los sentidos y la demostración racional, no imponiendo por la
autoridad
 Enseñar con un solo libro para cada materia
 Enseñar primero las cosas y después las palabras. Enseñar primero los ejemplos y
después las reglas
 No enseñar por separado lo que está unido
 Determinar previamente objetivos que el alumno debe lograr cada año, cada mes y
cada día
 Preparar anticipadamente los instrumentos de trabajo: libros, tablas, modelos, ideas
 El orden de la enseñanza debe ser: primero las artes, después las ciencias y la moral.
 Enseñar de a una cosa por vez
 Enseñar primero el conocimiento de las cosas por los sentidos (usando la mayor
cantidad de sentidos posibles) luego usar la memoria pero no exigirla demasiado,
después la inteligencia y luego el juicio.
 Enseñar primero lo general y luego lo particular, primero lo fácil y luego lo difícil. No
emplear solo el método analítico, dar preferencia a la síntesis
 Enseñar todo por sus propias causas
 Los alumnos deben ejercitarse y repetir con frecuencia
 Fuera de la escuela los alumnos podrán reunirse para discutir lo que han aprendido
eligiendo a uno por votación para dirigir la discusión

Sobre la enseñanza de las ciencias

Todo se debe enseñar por la autopsia, los alumnos deben examinar los objetos por sí
mismos usando todos los sentidos. Deben examinar primero el objeto completo y luego
cada una de las partes del objeto. Así se fija en la memoria. Explicación y repetición serán
el camino a un conocimiento seguro.

Sobre la enseñanza de las artes

Con artes se refiere también a la producción de objetos. Toma el ejemplo de cómo los
artesanos le enseñan a los discípulos. Primero se muestra el modelo terminado, luego se le
da al alumno el material y las herramientas para poner en práctica la tarea dirigido por el
maestro para que no cometa errores. Para Comenio se debe aprender haciendo, imitando
modelos, de lo más sencillo a lo más complejo. La etapa inicial de enseñanza es la más
importante para que el alumno luego pueda trabajar solo y correctamente. También es
importante que el alumno analice inventos y obras de autores insignes.

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Sobre la enseñanza de las lenguas

Primero se debe aprender la lengua propia para usarla en la vida cotidiana, luego la de los
países limítrofes, el latín para leer libros y el griego para leer filosofía. Sostiene que no se
deben enseñar palabras sin relacionarlas con cosas. Se deben usar textos adaptados a la
edad de los niños. No se debe empezar por la gramática. Las lenguas deben ser aprendidas
más por el uso que por las reglas. Establece que los alumnos usarán cuatro tipos de libros
de complejidad creciente: los primeros con palabras y frases y el último con textos de
autores. También se usará un diccionario etimológico

Sobre la enseñanza de las costumbres

Deben ser inculcadas todas las virtudes, especialmente: la prudencia, la fortaleza, la

templanza, la justicia y el bien común. Recomienda que los jóvenes tengan trato frecuente
con personas honradas. El ejemplo es muy importante para lograr buenas costumbres. Se
debe acentuar el trabajo del preceptor quien debe corregir las malas conductas.

Sobre la enseñanza de la piedad

Para Comenio la piedad es la búsqueda de Dios. Considera que hay que enseñar a los niños
a ejecutar la palabra de Dios. El camino es la lectura de las Sagradas Escritura. La piedad se
debe inculcar desde la primera infancia. Coincide con Lutero que el método para enseñar la
piedad tiene tres elementos: la meditación, la oración y el rechazo a la tentación.

Sobre clases de escuelas

Comenio divide el crecimiento del ser humano en cuatro períodos: la infancia, la puericia,
la adolescencia y la juventud. A cada etapa le corresponde una escuela. Elabora un
curriculum para cada nivel detallado con los temas a enseñar y cómo enseñarlos

Para la infancia se destina la escuela maternal a cargo de los padres. Elabora un libro de
sugerencias para los padres y otro de imágenes para los niños para que aprendan el nombre
de las cosas.

La escuela vernácula dura de los 6 a los 12 años, para niñas y niños. Se enseñará en esta
escuela todo de manera general y rudimentaria. Aprenderán a leer y escribir el propio
idioma, escribiendo, cantando, leyendo, pintando, contando, midiendo y aprendiendo de
memoria. La escuela estará dividida en seis clases. Cada clase tendrá su libro. Las lecciones
serán de cuatro horas por día. Recomienda que los niños copien sus libros para mejorar
caligrafía y ortografía

La escuela latina procurará formar la inteligencia y el juicio por medio de las artes y las
ciencias. Allí se estudiará: aritmética, geometría, música, astronomía, gramática, retórica,
dialéctica, física, geografía , cronología, historia, ética, teología. Estas materias que integran
el curriculum de Comenio comienzan a diferenciarse de lo que tradicionalmente se
estudiaba en la época y del orden en que se estudiaba. Este nivel escolar está destinado a
los jóvenes que aspiran lograr algo más que un oficio

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La academia o universidad estarán destinadas a los hombres más inteligentes, con
profesores sabios y eruditos que formarán a los hombres que serán guías de los demás y a
los doctores

Las dos escuelas superiores parecen ser sólo para varones aunque Comenio destaca la
importancia de la educación de la mujer en los dos primeros niveles.

Bibliografía

Camilloni, A (2016) Leer a Comenio. Su tiempo y su didáctica. Paidós, Buenos Aires

Comenio, (1657) Didáctica Magna