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De la trinitate: Libro X

El libro se divide en 12 capítulos


Capítulo I : Del libro IX se extrae que : Solo se ama lo que se conoce, porque se sabe de
antemano su objetivo o resultado. Sin embargo el alma también desea conocer aquello que
desconoce, por ejemplo una palabra nueva y no solo como el sonido que expresa una
palabra nueva, sino como signo ,es decir que tiene significación .además no llega el
conocimiento pleno .San Agustín advierte que ,al parecer que el alma ama a una cosa
desconocida, pero no es así por tanto hay que distinguir entre el amor por saber lo que se
ignora y el amor por lo desconocido o incognito. Sintetiza esto expresando que el saber es
decir lo sé, como también lo ignoro.
Capitulo II: Éste capítulo inicia con lo más sobresaliente del capítulo anterior : “ nadie ama
lo desconocido”, tampoco como pretérito ,por ejemplo al decir “ya te amaba” ,pues en tal
pasado ya era conocido lo que se amaba. Luego, aclara que en todo lo anterior solo se ha
tratado del anhelo de conocer realidades fuera de sí, pero a continuación tratará sobre la
mente que anhela conocerse a sí misma.
Capitulo III : Empieza realizando las siguientes preguntas : ¿Qué ama la mente?¿Se ama
la mente así misma? ¿Cómo conoce a otras mentes y se ama así misma? Y tales
interrogantes apuntan hacia si la mente realmente ama lo que es el conocer o el querer
comprenderlo todo. Sin embargo San Agustín supera esto, diciendo que cuando la mente
se busca para conocerse ,conoce su búsqueda por lo tanto ,ahí ya se conoce ,en otras
palabras :al buscarse para conocer, sabe que se busca y se ignora.
Capitulo IV: Cuando el alma (en otras traducciones, ponen hombre en lugar de alma, pero
hacen referencia al latín : mens ) conoce algo, conoce la totalidad de ese algo .De ahí que
al auto conocerse se conoce en totalidad .Del capítulo anterior, dado que la mente conoce
que es mente y toda es mente ,entonces se conoce totalmente . Después pregunta cómo
es posible que la mente se haga presente en la mente o en todo caso, si puede la mente
no estar en la mente .A lo que se contesta que la mente al no buscarse ni en totalidad, ni
en parte ,no se busca de ninguna manera. Entonces la mente está en la mente.
Capitulo V. Realiza la pregunta: ¿Para qué se preceptúa conocerse? La cual entiendo
como: ¿Para qué le da orden a la mente de conocerse o que la impulsa a tal acción? San
Agustín responde que esto es para que la mente viva conforme a su naturaleza, siendo
moderada, según su esencia. A lo que recomienda distinguir entre : lo que se ignora y lo
que no se piensa .Luego introduce la temática de las imágenes ,que son aquellas que se
forman a partir de las realidades ,con algo de substancia,que informan por las semejanzas
que tienen con sus cuerpos y son juzgadas por la mente.
Capítulo VI: En esta capitulo hace una importante acotación del capítulo precedido, y es
que la mente está en un error cuando se une a esas imágenes, pues no las juzga sino que
se identifica con ellas. Sin embargo aún puede discernir entre el cuerpo que queda afuera
y la imagen que lleva consigo.
Capitulo VII: Inicia con el cuestionamiento sobre qué es lo que vale más en el cuerpo, las
respuestas de los filósofos son diversas, algunos dicen que el alma toda o la mente; pero
hay otros que dicen que también son valiosos: la sangre, el cerebro y el corazón. A
continuación hace la pregunta: ¿Qué existe tan presente al pensamiento como lo que está
presente en la mente? Para responderla explica la etimología de la palabra “invención”, que
se entiende como venir a lo que se busca .Así es la mente la que busca, pues ella mueve
y dirige el sentido carnal .Además conoce las realidades, sin necesidad de sentidos (que
son corpóreos), encontrándolas ;tanto en la naturaleza divina como en las otras partes del
alma (pues es dentro del alma donde descubre impresas las imágenes de los cuerpos, a
través de los sentidos del cuerpo).
Capitulo VIII: Nos dice, que el origen de la fealdad del error de la mente ,se halla en que no
es capaz de estar en si misma ,sin las imágenes de los objetos sensibles o corpóreos, pues
no puede separar de si las imágenes de lo sensible y verse sola (así se da énfasis en que
la mente esta en un error al mezclarse con las imágenes).Inclusive cuando se esfuerza por
pensarse ,se cree la imagen .pues ella es algo más íntimo e interior que tales imágenes .
Por lo cual debe conocerse así misma , poniéndose atención ,para darse cuenta que nunca
ha dejado de amarse ,pues solo pudo estar confundida .Por ejemplo, esta confundida al
figurarse ser uno lo que es múltiple.
Capitulo IX: En este capítulo se explica que el alma, sabe distinguirse de las otras cosas
que conoce, por ejemplo cuando el alma oye algo como : “conócete a ti mismo “ ,conoce
tanto el “conócete” ,como el “ a ti mismo” pues solo así se conoce a sí misma .Entonces al
dársele tal precepto (de conocerse) lo cumple .
Capitulo X: Nos habla sobre la mente, la cual sabe que existe por tanto vive y entiende ,de
un modo peculiar y noble ,después planteas el siguiente problema , y es el que si todas las
mentes se conocen a sí mismas ,con certidumbre absoluta. Pero al dudar de esto, entonces
se evidencia que vive, pues recuerda su duda, entiende su duda, piensa la duda, etc. En
consecuencia, nos dice San Agustín, “el que entiende, vive y existe”. Existen dos posturas
sobre la mente: unos afirman su substancialidad y otros que la mente radica en un sujeto
(cuerpo) .Entonces, surge la pregunta: ¿En qué sujeto han de colocar la inteligencia ,sino
en el sujeto? .En ambas posturas ,no se tiene en cuenta que la mente se conoce cuando
se busca. Y como la mente se conoce, al conocer su existencia, también conoce su esencia
,por tanto también su naturaleza. Así solo debe tener certeza de su existencia.
Capitulo XI .Este capítulo trata sobre las facultades del alma ,las cuales son : La memoria
(donde radica la ciencia o doctrina) ,la inteligencia (donde radica el ingenio o voluntad
estudiosa ) y la voluntad ( donde radica la acción ) .Estas tres realizan relaciones reciprocas,
que se refiere a como interactúan mediante el recordar ,entender y querer .Además siempre
se les denominara en singular incluso cuando se las refiera en conjunto ,por lo cual resume
que cuanto todas y cada una mutuamente se comprenden ,existe igualdad entre el todo y
la parte y los tres son unidad : una vida, una mente ,una esencia.
Capitulo XII. Finalmente expone que es notoria la presencia de la mente en la memoria, en
la inteligencia y en la voluntad .De aquí se extrapola que la mente siempre se conocía,
amaba y recordada .Y sobre tal recordar, tratará el siguiente libro.

Dennis Alonso Ñañahuari Castrejón Cod:16030064

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