1.

-Lo primero que

me pedían mis padres
después del horario
escolar, es que hiciera los
deberes y luego jugar o
apoyar en las
actividades de la
casa o agrícolas.
 2.-En mi familia más
se interesaban en las
libretas de calificaciones
que en lo que yo
realmente
aprendía o sabía.
 3. Siempre me
repetían que
debía ser un buen
estudiante.
 4. Me
recordaban el
sacrificio que mis
padres hacían para
que yo estudie.
 5. Tuve en mi
casa un lugar
adecuado para
estudiar y realizar
las tareas
escolares.
 6. Mis padres
o representantes
hablaban con
frecuencia con mis
maestras y
maestros.
7. Cuando no
podía con los
deberes, me
ayudaban
en casa.
 8. El horario para
ver televisión, estar
con amigos o salir de casa
era decidido por mis
padres, en función de
cómo estaba en la
escuela.
 9. Cada vez
que se enteraban
de que aprendía algo
nuevo, se alegraban
y me felicitaban.