DECLARACIÓN ACTUALIZADA:

La arremetida conservadora del Gobierno de Sebastián Piñera se encuentra en

avanzada, a pocos días de asumir el gobierno ha puesto su sello conservador en
diversas materias sentidas paras los chilenos y las chilenas, siendo el último de estos
el recién conquistado derecho al aborto en tres causales.
El pasado viernes 23 de marzo, el Ministro de Salud, Emilio Santelices, dió a conocer
las modificaciones realizadas por el ejecutivo en el protocolo de objeción de
conciencia adscribiendo que “las instituciones privadas que mantengan convenio
vigentes con el estado podrá negarse bajo este protocolo a realizar dicho
procedimiento”, lo cual ha sido ratificado en el Diario Oficial. La nueva normativa
elaborada barre con los protocolos antes promulgados permitiendo a privados
negarse al derecho ganado por miles de mujeres al aborto, poniendo nuevamente el
interés de privados y conservadores por sobre el derecho a decidir sobre nuestros
cuerpos, siendo un ataque directo a la lucha que por años las mujeres hemos llevado
en nuestra historia.
El gobierno de Sebastián Piñera ha sido enfático, su propósito es desarticular los
avances del campo popular, manteniendo el status quo de una moral conservadora
que pone al mercado y el ejercicio del derecho corporativo por sobre el legítimo
derecho de las mujeres a decidir su maternidad, con el incentivo a la privatización de
la salud.
Los cambios realizados en el Protocolo de objeción de conciencia se contradice con
lo declarado por el Gobierno, el cual ha declarado “enfáticamente” el defender a la
niñez vulnerada y a las niñas y mujeres en altos contextos de vulneración, siendo esto
una paradoja al exponernos como mujeres a la revulneración de nuestros derechos
fundamentales.
El avance mínimo de las mujeres en la lucha por decidir sobre sus cuerpos y la
autodeterminación de la maternidad se ve truncada ante este cambio legislativo,
llevando el debate nuevamente a la superioridad moral de otros por sobre nuestras
vidas. La discusión de estos derechos no debería orientarse a la realización de
concesiones hacia las franjas más conservadoras, machistas y católicas del país,
tónica que ha marcado la discusión de la ley de aborto en tres causales. La prioridad
del debate y las propuestas deben estar en el respeto a la voluntad máxima de la
mujer, tomando en cuenta su dignidad, jamás cuestionando su posibilidad de decidir
o juzgando su libertad sexual.
Las mujeres de Chile estamos cansadas de ver nuestros derechos cortados por la
moral de unos pocos, defenderemos nuestra posibilidad de abortar y de decidir sobre
nuestro cuerpo ante la arremetida liberal del gobierno y del estado. Creemos
firmemente que el aborto debe ser tratado como un tema de salud pública, no
centralizado en el orden moral o filosófico, en que el discurso de la familia tradicional
– teniendo como eje la maternidad obligada – impera. Es deber de la sociedad chilena
y como mujeres dueñas de nuestros cuerpos, luchar por llevar esta temática al plano
político, despojándolo de sentimentalismos y moralinas. Nuestra lucha es conseguir
una ley de aborto sin peros ni comas, que garantice seguridad y gratuidad y por
sobretodo las urgentes demandas que permean los derechos sexuales y
reproductivos para todas las mujeres de nuestro país. No obstante, reconocemos el
importante avance que representa la Ley en 3 causales y no permitiremos retrocesos
que tornen inviable su aplicación.

Por nuestro #DerechoADecidir rechazamos terminantemente la maniobra del

protocolo que restringe la Ley de Aborto en 3 Causales, poniendo el derecho a la
objeción de privados por sobre el derecho de las mujeres a su autonomía, vulnerando
el espíritu de la Ley. Como Nueva Democracia no aceptaremos retroceder porque
avanzaremos hacia la garantía de nuestros derechos, por lo tanto nos colocaremos
firmes para combatir los ataques a los derechos de niñas y mujeres en Chile: NO MÁS
OBJECIONES A LA CONCIENCIA DE LAS MUJERES!

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Por nuestro #DerechoADecidir
Nuestro Cuerpo, Nuestra Conciencia, Nuestra Decisión.
Las mujeres decidimos por nuestras vidas.
#NoMásObjeciónDeConciencia