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Lenguø, Llenguø, Llíngua, Lingua, Langue

Encuentro s filoló gico s (ib ero)romdnico s


ESTT,JDIOS EN HOMXNAIE A LA PROFESORA BEATRICE SCHMID

yvE"rrE BURKI, MANLTET,IcIMELIY RosA sÁNcH¡z


(coononuoones)

Beatrice Schmià
Mänchen
Inhalt

Sostenuto dall'Accademia svizera


u b

Germà Colón: Prólogo


1

di scienze umane e sociali UNI


-
www.sagw.ch BASET u*vEtr[^t
!!lx
Yvette Bürki, Manuela Cimeli & Rosa Sánchez: Presentación
3

5
Carlos Alvar: Las peripecias del hijo del zar

DÉRom
Maria Reina Bastardas i Rufat & Eva Buchi: Aportacions del
catalala
t9
a I' etimologia

33
Ångel Berenguer Amador: Acerca del genrndio enjudeoespa'ñol

4l
HarmdenBoer:LasCoPlasdeManriqueentrelosjudlosportugu'esesdeFerra¡a
60
Marie-Chrßtine Bornes Varol : Anrcgraphie
judéo-espagnole

Tbbias Brandenberger: <¡semostercos, s¿t"os rudos'>


Lectura imagológica de
74
dos zatntelas chicas

DavidM.Brrnis:.Recordings,ofJudezmoLinguisticVariationinthe
92
Early Twentieth-Century Judezmo Press

El Avenir
yvette Bürki: La publicidad en los periódicos salonicenses La Épocay
xx lt5
en los albores del siglo

nella marchionimia r37


Enzo caffarelli: Toponimi e anfoponimi italiani e svizzen
BibliografÌsche Information Der Deutschen Bibliothek y I' zpelliu J o gl ar n' astu¡ianu 147
An a luf C ano G ow ól ez : Los xu glare s
Die Deutsche Bibliothek verzeicbnet diese Publikation in der
Deutschen Nationalbibliografi e; detaillierte bibliografi sche Daten de Barcelona (1482)
sind im I¡temet über htþ://dnb.ddb.de abrufba¡.
Emili Casanoya.' Contrast lingüístic entre les Edicions
i valència (14g1) <le (¡¿ imitació de Jesuchrist e del menyspreu del món>,
t5'l
de Miquel Peres

Mireia Casaña i Mercè: Catalans a Suissa: una primera


panoràmica t7l
t82
Germà Colón: Temprana recepción alemana del Quijote
lpeniopel - Verlag Anja Urbanek
www.peniope.de de la Restauración:
Paloma Díaz-Mas: El judeoespañol en la prensa española
@ 20l2Yerlag Alrja Urbanek, München 190
informaciones en el diario El Globo
Satz: fidus Publikations-Service, Nördlingen
Druck und Bindr¡ng: Bookstation, Aazing
Printed in Germany
rsBN 978-3-936609-5ó-1
V
INu.qrt I¡g,qrr

Rolf Eberenz: Cuando lacomídaylabebida no se llamaban así: exploración de Sandra Schlumpf Notas sobre las oraciones pseudocondicionales en
un área semiántica del castellano medieval 203 judeoespañol moderno 408

X. LI. Garcia Arias: El Diccionariu Etimolóxicu de la Llingua Asfurianay el so Andreu sentí i Pons: L'expressió de I'obligació en català arcaic i els verbs
interés comparativu 215 deure, haver i tenir
420

Aitor García Moreno: Juguetonarios: diccionarios humorísticos de El juguetón 23t Carsten Sinner: Variación diasistemática, representación del contacto lingtiístico
y oralidad fingida en Zos Baldrich de Use Lahoz (2009) 436
José Enrique Gargallo Gil: Se I Genenis al mett sü I capè||..
Refranes meteorológicos y territorio en la Suiza romance 4so
249 Federico hcario: Soprannomi in carte friulane tardomedievali

Marco Kunz: Lingüística heterodoxa. De lingtiistas locos y sus investigaciones Monikn winet: LosfaQã'il del viernes en un manuscrito aljamiado-morisco 46t
fantásticas 261
Aude wirth-Jaillard: Les documents comptables coÍlme source pour l'étude de
Laura Minertini: Cantiga de Purim a la morisca 469
273 I' anthroponymie (rv"-xrm" siècle)

Rena Molho: Le patimoine culturel des juifs de Grèce, confronté à la Melanie Würth: Mental maps como herramienta metodológica en la
<grécisatioo>: De Selaniklis juifs en victimes de la Shoah 288 Sociolingüística urba¡a. un acercamiento interdisciplinario a partir del habla
de la Ciudad de Buenos Aires
480
Brauli Montoyalåaf.'Mossèn Miravete de Maseres: Un oriolà de mitjan
segle xvrn (re)catalanitzat 297 Tabula gratulatoria
492

Sandra Montserrat i Buendia: La perífrasi estar* gentndi en català antic:


un estudi de corpus 309

José Manuel Pedrosa: El anillo de bodas: canciones y metáforas eróticas


en la tradición oral sefardí 324

Ralph Penny: Variation in Judeo-Spaaish: The Question of ComFeting Norms 338

Maria Ana Ramo^r.' Língua literriria e interferências linguísticas 348

Elena Rieder-Zelenko: El léxico relacionado con la flora y la fauna en


La Buena Esperanza 362

Elena Romero.' De ruidos callejeros: Las ciud¿des de Salónica y Esmirna según


las êscucharon tres poetas sefardíes 374

Rosa Sánchez.' Consideraciones para la forja de un registro metateatral


judeoespañol 390

VI VII
Lingüística heterodoxa. De lingüistas locos y
sus investigaciones fantásticas

Marco Kunz, Université de Lausanne

Resumen

Lo fa¡tástico se ¡elaciona est¡echamente con las posibilidades que ofrece la lengua para hablar de
cosas y circunstaDcias que carecen de referentes empíricos y/o no pueden teuerlos según las leyes de
la lógica o las ideas dominantes acerca de real. En mi artículo comento algunos textos narrativos
1o
de los escrito¡es espaioles José Antonio Mülán y José María Merino y del mexicano Rafael Bemal
cuyos protagonistas son lingüistas que observan o crean relaciones sorprendentes ente el lenguaje
y el mundo.

Para los que nos dedicamos a los estudios litera¡ios no deja de ser inquietante lo que le
pasó al bueno de donAlonso Quijano: <del poco dormir y del mucho leer, se le secó el
celebro de manera que vino a perder el juicio> (cewantes 1998: 39). Resulta incómodo
tener que aceptar el hecho de que no sólo severos moralistas, vestidos de negras sotanas
o armados del despiadado sentido común del utilitarismo, se empeñaban en condenar el
influjo nocivo de las ficciones, sino que los reparos del mismísimo cervantes, venerado
como fi¡ndador de la novelística moderna y precursor de la posmodemidad, desprestigia-
ron tanto la lectu¡a de historias ínventadas que, nolens volens,\anarratla posquijotesca
tuvo que construirse sobre el precario fi¡ndamento de la locura de un héroe alienado por
una sobredosis de literatu¡a. ¡Curinto más seria y racionalista es nuesta disciplina herma-
na, la linguística! Aliada a la investigación literaria en la frlologí4 logra a veces refrenar
la malsana tendencia de los literatos a los devaneos descabellados, especulaciones ma-
niáticas y elucubraciones fantasiosas, e impide que nuestros obsesivos atentados conha
la salud mental les causen daños incu¡ables a los estudiantes.
Ahora bien, la historia del pensarniento occidental muesta que dedicarse a la re-
flexión sobre las lenguas humanas no es garantía de inmunidad al desvarío. No pocos
precursores algunos contemporáneos- de la lingtüstica modema pertenecen a la
-y
<<immensa e saporosissima categoria dei cosidetti <folli del linguaggio>> (Eco 1993: 9):
inventores de lenguas perfectas, buscadores del idioma de Adrín, etimólogos demasiado
ingeniosos, ortógrafos visionarios y una caterva variopinta de eruditos lunáticos, cuyas
obras constituyen una alucinante biblioteca de la heterodoxia lingüística.
Sin embargo, escasos son los tocados por el furor de la lengua cuya extravagancia
alcanzó latenacidady la coherencia del francés Jean-Pierre Brisset (1837-1919), quien
dedicó gran parte de su vida a demostrar que la especie huma¡a descendía de las ranas y
que a estos anfibios se debía también la lengua primitiva, antepasada de todos los idiomas
actuales. La teoría de Brisset se funda en r¡na curiosa fonética baûacia y un razonamiento
que, ar¡nque a todas luces delirante, seduce por la originalidad y el atrevimiento de sus
l

261
Mlnco KuNz LrNcùÍsïcA, IETERoDoxA. Dr rr¡¡cùrsres Locos y sus rNvEsrrcAcrow¡s r¡.NrÁsrces

etimologías, como ilusfa su explicación de la palabra espagnol, que es' que yo sepa' la de hormiga, y tat¿ndo de un Monte, usar una û1 ta¡ ruin como si tata¡a de un mosquito? Esto
única que no sólo elucida el origen del sig¡ifica¡te, sino que además lo relaciona con el no se puede tolerar, y ha sido una inadvertencia fatal y crasísima de todos cuantos han escrito
carácter nacional de los españoles y con su afición a la corrida de toros: hasta aquí. (Isla 1995: 268).

Pagne hauler: Hauler formé de haut I'ai est r¡n verbe ayaat valu lever. Ce pagne haule égale: con la relativización o incluso la negación de la a¡bitariedad del signo, Ias fantasías
cette queue 1ève. La vois-tu ce pagne hauler, se pagnoler: eile se promène en levaat la queue. lingüísticas se aproximan a lo fantiástico (en el sentido ¡mFlio del término) o, por lo me-
Comme la vache lève rarement la queue et que c'est un spectacle corrique et ridicule, c'était nos, despojan la lengua de su ca¡ácter convencional y la hacea así más aptaparagenerar
et c'est encore un terme de comparaison ûéquent. Comme r¡ne vache elle se pagnole égale: narraciones fant¡ísticas. Pues en lo fantístico el azar no existe, todo está relacionado por
coÍrme utre vache elle lève la queue. C'est bien 1à le langage de la campagne. Celui qui parle una necesidad secreta, todo tiene una motivación, cualquier detalle es sienificativo, y
mal, rarement, et d'une manière ridicule , parle comme une vache elle se pagnole, conme une para expresar esto, le viene de perlas la posibilidad ----o, mejor dicho, la ilusión- de
vache espagnole . L'Espagnol se pagnole, c'estdumoins sa réputation. I1 est toujours à se battre servirse de un sistema de signos iguatnente motivados. según Todorov, en el universo
avec les vaches, car i1 ue peut leur pardonner de lever la queue plus haut que lui. @risset 2005: pandeterminado de la literatura fantrístic4 1o mental (la lengua) y 1o material (el mundo
37-38). referencial) no se separan cla¡amente y, por ende, ningún signo es puramente convencio-
nal, sino que cualquier casualidad aparente tiene su causalidad ocult4 y esta causalidad
Si en la realidad existiçron genios incomprendidos como Brisset, no sorPrende que los faltistica, irracional, <<explica>> lo inexplicable. La consecuencia de este pandeterminis-
tingtiistas ficticios, en su condición de personajes que puebla¡ novelas y cuetrtos, se mo es la pansignificación:
contagien del medio etr que se mueven y den rienda suelta a su ingeniosida{ sin hablar
de los autores mismos que inventan lenguas exóticas (v. gr. las jergas fantasiosas que puisque des relations existent à tous les niveaux, ente tous les éléments du monde, ce mond.e
habla Panurge en Pantagruel de Rabelais o el glíglico en Rayuela de Julio Cortrízar). Un devient hautement signifiant. [...] tout est chargé de sens. plus même: au-delà du sens pre-
gran número de esas fantasías lingtiísticas tiene que ver ora con la búsqued¿ del origen mier, évident, on peut toujor¡¡s découwi¡ un sens plus profond (une surinterprétation). (Todorov
de la lengua en la natu¡aleza misma (de ahí la pasión de Brisset por el croar de las ranas) 1970:118).
y, por consiguiente, también con la exploración de idiomas presuntamente naturales (o
se4 de los enimales, las plantas, los elementos, el viento, etc.), ora con los vínculos entre En virtud de este pandeterminismo, los nexos que las personas establecen con los objetos
el significaate y su referente (v. gr. la cosificación de los signos lingüísticos que imagi- dejan de ser pura¡nente mentales y modifican la esencia misma de las cosas: lm pensa-
nó Swift en Los tiajes de Gulliver al describir un pueblo de isleños que no conunican miento provoca un acontecimiento, las fuerzas psíquicas influyen en el mundo material,
mediante palabras, sino mostrándose los objetos sipificados que cada hablante lleva una palabra puede hacerse realidad concreta; en sum4 los límites ente lo fisico y lo
siempre consigo en un gran saco). Ambas tendencias convergen en el cuestionamiento mental, entre la materia y el espíritu, entre la cosa y la palabra dejan de ser absolutos y se
del principio de la a¡bitrariedad del signo, ya que, por un lado, la lengua primitiva, previa hacen relativos y permeables. Pa¡a las relaciones ia16¡þ¡6anas, esto significa que, en el
a la conl¡sión babélica, se suele suponer de origen divino y por eso perfecta, con si8rrifi- caso extemo, la comrmicación ya no necesita la enunciación de sipos perceptibles (v.
cantes que emana¡ directay natural¡nente de los conceptos, mientras que, por oto lado, gr. palabras pronunciadas o escritas, gestos visibles), sino que funciona por penetración
se intenta motivar el nexo entre significante y significado recu¡riendo a ca¡acterísticas de mental del otro: <<Puisque le sujet n'est plus separé de I'objet, la communication se fait
los referentes. Una variante grafemática de este anticonvencionalismo lingiistico fue in- directement, et le monde entier se touve pris d¡ns un réseau de communication généra-
geniada en el siglo xvru por eljesuita José Francisco de la Isla quién trasladó el problema lisée> (Todorov 1970: 123). Mientras que la magia verbal intenta actua¡ directamente so-
a la escritura e hizo argtiir a un ortografista que el ta.maño de las letas debería reflejar el bre el mundo, la lingüística fanuística busca sea rma congruencia enûe el sistema de sig-
de las cosas desiguadas: nos de la lengua y el mundo sobre el que se habla mediante estos signos, sea un método
<científico> para descodificar el lenguaje con que el mundo se comunica con nosotros.
Las palabras son imágenes de los conceptos, y las letras se inventaron para ser rçresentación como, además, una simila¡ falta de distinción ente el yo y lo exterior que caracteriza
de las palabras; con que, por fin y poshe, ellas también vienen a ser rqlresentación de los lo fa¡tástico se observa en las psiques tanto del nìñe s¡ la fase prelingüística como de
conceptos. Pues ahorq aquellas letas que representaren mejor lo que se concibe, ésas senln las ciertos drogados y enfermos psicóticos, resulta obvia la cercanía de lo fantástico respecto
mráspropias y adecuadas; y así, cuando yo concibo una cosa pequeña,la debo escribi¡ con leta a estados prerracionales y anomalías del pensamiento, de la percepción y del uso de la
pequeña, y cuando grande, con leta graade. Verbigracia: ¿qué cosa más impertinente que, ha- lengua: por consiguiente, los lingüistas que aparecen en na¡raciones fantásticas merecen
bia¡do de una Pierna de Vaca, escribiria con unaP tan pequeña cono si se habla¡a de una pierna todos, en menor o mayor grado, el epíteto de locos.

262 263
M¡.nco Kuttz Lwcùsrrc¡. rrETERoDoxA. Dp rn¡cúrsres Locos y sus INvEsrIGAcroNEs FANTÁsrrcAS

+ castro quiere que su hijo sea el primer hablante nativo de una lengua diseñada por é1
<<Estás loco. Estás completâmente loco> (Millån 1990: 112), dice Eulalia a su marido, según principios presuntamente científicos. sin embargo, lo poco que nos dice de las
Agustín Casto, profesor de lingüística en la universid¿d a Distancia y protagonista-na- ca¡acterísticas del anga basta para hacemos duda¡ del racionalismo de los criterios apli-
rrador del cuento <<la patria líquidar> (Mill,í" 1990: 107- 113) de José Antonio Milfuin, un cados en su creación; m¡ís aún, la anomalía del comFortamiento social del lingtiista es un
autor español que, como su personaje, es lingüista de formación. La locura del profesor síntoma inequívoco de una psicopatología que excede en un grado alarmante los límites
Castro no consiste en crear, con la ayuda de un ordenador que genera el léxico' una nueva de lo tolerable en una Facultad de Letras. El léxico y 7a gramflliça del anga no se derivan
lengua, el anga, sino en empeñarse en convertir a su hijo Ata-kio en el primer habla¡te de lenguas existentes, sino que pretenden ser absolutamente originales: vana pretensión,
nativo monolingüe. Mìentas que los inventores de idiomas artificiales como el esperanto pues el mero hecho de disponer de un sistema fonológico, de una morfología y una sin-
o el volapük aspiraban a Ploporcionar a la huma¡idad un instumento de comunicación taxis hace imposible que no se detecten semejanz¿s con idiomas <<naturales>>. Así, p. ej.,
internacional, Casto, al contrario, procura aislar a su hijo, desde el día de su nacimiento, las categorías semánticas en que se agnrpan los sustantivos recuerdan los clasificadores
de sus congéneres, para evitar que un influjo lingüístico diferente del anga interfiera en del chino y otros idiomas asiáticos:
la adquisición de su lengua paterna. Paterna, porque Ata-kio no tend¡á Tengta materna
propiamente dicha: al darse cuenta de que su mujer, una ex estudiante suya, no aPoya sg En anga no hay géneros gramaticales; las cosas que bullen, ya seaa matorrales, ríos, escaraba-
proyecto, Castro secuestra a su hijo y lo lleva a un lugar apartado. Pero Eulalia encuentra jos, un televiso¡ o el hombre, tieneu la forma peculiarpåo; las cosas estríticas: casas, horizontes,
su escondite y logra llevarse al niño. El cuento se Presenta como rm monólogo del narra- libros u ostas, tier.en ot:a,ma. sin embargo los miembros del cuerpo o los venenos son siempre
dor, grabado con el magnetófono de un coche de alquiler, mientras castro persigue a 1a ma,ylas leû-as sonpåo. (Millín 1990: 111).
madre desesperada y consigue arrebatarle de nuevo aAta-kio.
Exceptuando la educación lingüústica que le impone su padre, la lengua pierde para En ânga, ûos dice el profesor casto, <el tiempo no es espacio: no puedes <<sartarte>> una
Ata-kio toda fl¡nción social. Su monolingüismo en anga se pagará con la falta casi total fecha, ni poner un día <<tope>>, ni siquiera decir que se (acercÐ) tu cumpleaios.
¿Cómo
de contactos humanos, por lo menos en los primeros años de su vida: Castro es conscien- es el tiempo ea anga? Es una especie de rocío que rezuma de las cosas>> (Milftán 1990:
te de que necesita más cobayas, pero por el momento dispone de un solo niño, de modo 108-109). si la mera distinción, en el nivel estructural, ente tiempo y espacio todavía
que, hasta que consiga crear una Pequeña comunidad de anga-hablaates, él será el único podría malentenderse como pnreba de la racionalidad del anga, la explicación (crna es-
interlocutor de su hijo. La ventaja del anga es, según su inventor, que el niño aprendeni a pecie de rocío que Íez')mz de las cosas>> revela que la lengua ingeniada por el lingüista
ver, sentir y comprender la realidad de una manera genuinamente nueva, libre del laste heterodoxo resulta poco compatible con la tadición occidental del logos. Lo que no sig-
milenario de concepciones e¡róneas que subyacen a los ìdiomas <dristóricos> y que con- nifica el fracaso del proyecto, sino todo lo contario, pues liberarse de aquella hadición es
dicionan de manera nociva el pensamiento del individuo desde que empieza a entender 1o que se propone casto con su nueva lergua: romper con toda concepción heredada del
y emitir las primeras palabras. No así Ata-kio, pues la nueva lengua conducirá, nece- orden del mundo, implícita enla gra-'átrca de cualquier lengua histórica por eso
sariamente, a ura manera original de ver el mundo: ((No moverá el cuerpo bajo rimos que en anga (no hay forma de expresar la causalidaö (Miltán 1990: l l l)?-, -¿es
reconciliar
bestiales, rþ tezaríL a deidades absurdas, no recibi¡á enseñanzas deformantes. Tendrá el la lengua con la naturaleza (<El sistema de onomatopeyas del anga es muy rico, pero no
mejor de los regalos: uûa herramienta que le abrirá el mrmdo>> (Millán 1990: 110). Sin hay ninguna para el sonido del moto¡: ¿debería haberla?>: Millán 1990: 110) y con el
dud4 Castro simpatÞa con la hipótesis de Sapir y Whorf según la cual la estmchrra de cosmos, tal como lo concibe el inventor del aaga bien mirado, el anga es radical-
cada lengua determina el modo y las posibilidades de pensar de sus hablantes. Al final del
-pues,
mente egocéntrico-- sin por eso renunciar a la arbitrariedad de los signos:
cuento, Casto se imagina el futu¡o, y su hijo dice sus primeras palabras:
El sol se oculta t-as las montañas, pero aún queda mucha hn. tJnifnö, se dice; literalmente: <el
cua¡do mi hijo crezca [...], cuando abra los ojos y articule su pensâmiento al margen de mr- giro nos aleja (del sol)>. !l anga tiene muy claro la roÞción de la Tierra. <ò.{oche> se dice atata
lenios de cultura anterior, ¿qué veni? Yo estalé a sìl lado, y espero que me 1o cuente. ¿Verdad, zombru: (ciento sesenta y nueve soles>, porque la palabra <estello> es igual que <sob>, y el
hljo? ¿Okanasode? cuadrado de tece significa <in¡r¡merables>>. Realmente, los hablantes de anga son conscientes
de cómo son las cosas. O, por mejor deci, elhablatte.. yo. (Millin 1990: 109).
¡Ohu, sode-re!
-
[. . .] ¿Has oído? La primera conversación en anga acaba de
tener luga¡. (Millán 1990: I 12). <<La patia líquida> no es un cuento fa¡tástico en sentido esticto, pues no ocurre en él
nada que transgrede las leyes naturales o lógicas ni chocan, en el mundo en que viven
1os personajes, dos sistemas de reglas incompatibles, sino que únicamente se cuenta un

264 26s
I Lr¡¡cûÍsrrc¡ rrrsnoDoxA. DE LNGûrsrAs Locos y sus TNVESTIGACIoNES
M¡.nco Kutz FÄNTÁSïCAS

extraño caso de conducta asocial por parte de un lingäista loco. El anga, sin embargo, hacen los hombres por medio de la palabra, o mejor aún. Con esta idea en la cabeza, empecé a

sería una lengua perfectarnente apropiada para expresar una cosmovisión fantástica con- estudiar los zumbidos y noté que no todos eran iguales, que los había largos, más agudos, mrás
forme con los comentarios de Todorov acerca del parentesco entre lo fantilstico y las graves, r¡nos iÃtermitentes y otros continuos, y no era sólo 1a dife¡encia del tono de cada mosco,

anomalías clel lenguaje, pues el principio fundamental de su gramática es la abolición de sino que cada ¡¡imal emitía sonidos en distintos tonos. (Bemal 2005: 24-25).
las fronteras y las resticciones combinatorias, como muest'a la explicación del nombre
del hijo de Castro: Aplicando métodos semejantes a los usados por los etnólogos y lingüistas norteâmerica-
nos (v.gr. Fraaz Boas, Leona¡d Bloomfield, Edwa¡d Sapir, etc.) que estudiaron las len-
Ata-kio es la unión de la paiabra <sob> y la paJabra <<huevo>>. Cuando en anga se juntaa dos guas amerindias aprincipios del siglo lo<, primero intenta distinguir los rasgos distintivos
palabras, mezclan su sentido íntimamente. El nombre de mi hijo indica algo nufitivo y caliente, pertinentes y clasificar las unidades mínimas (digamos: los fonemas y/o morfemas):
luminoso y lleno de vida, esférico y pequeño; inmenso, blanco y ffigil. En anga no hay límites
estictos ente las cosas, porque no hay combinación vedada: Ios hablantes perciben el mr:ndo Para anotar los zumbidos desa¡rollé rm sistema donde incluía las intermitencias, lo agudo o 1o

como fluido, y ellos estrín en ese fluido, y son ese fluido, como medusas. lnga significa <me- grave del sonido, 1o prolongado de los intervalos y la nota musical en la que se emitían. pronto

dusa>. (Millan 1990: 112). vi, en 1o quese refiere a las notas, que los moscos usa¡ semitonos de la escala, así que en cada
tono hay doce sonidos más o menos agudos. Al principio rre fue dificil el percibirlos, pero poco

Si en el mrmdo yi.r/o, es dectr, hablado en anga no hay límites estrictos entre las cosas, la a poco fui acostumbrando a mi oído a ellos, para lo que valió mucho la educación musical que
condición corpórea de los objetos pierde su función definitoria de la extensión de éstos; recibí siendo pequeño. @ernal 2005: 3 l).
si no hay combinaciones prohibidas, ninguna ley restringe la libre fusión de los entes
más diferentes; y si el mundo es percibido como fluido y los hablantes se creen partes Parece que este curioso idioma entomológico mezcla características de las lenguas tona-
integrantes de este fluido universal en que todo se mezcla, entonces queda abolida la se- les, la música dodecafónic4 el silbo gomero y el alfabeto morse. En una segunda etapa"
paración entre la materia y el espíritu. Por consiguiente, el anga es una lengua fartrística. nuestro investigador se esfuerua por reconocer sintagmas y describir las reglas combina-
torias (es decir: la morfología y la sintæds):
Su nombre era muerte (1947) de Rafael Bemal tiene la fama de haber sido la primera
novela mexicana de ciencia ficción. Ahora bien, la ficción propiamente científica se ]i- Después de varios meses de estudios me di cuetrta de que cada frase va emitida en uno de los

mita a las investigaciones del protagonista-narrador para comprender y hablar la lengua cuaho tonos que tiene la voz hurna.na y de que toda frase se emite en ese mismo tono, ar¡trqìl.e
mosquil, que, pese a la semejanz¿ fonétic4 nada tiene que ver con el idioma indígena co- la siguiente o la a¡terio¡ estén en oto. Por ejemplo: rm mosco zumbaba un momento, digamos
lombiano descrito por Fray Bemardo de Lugo en *t Gramática en la lengua general del ocho o diez intermitencias; en voz de bajo, para luego tomar el tono del soprano o del barítono,
nuevo reyno, llamada mosca (1619), sino que es el sistema de comruricación empleado o,Íalvez, cosa poco frecuente, el de ia voz del niño. @emal 2005: 3l-32).
por los moscos en la selva chiapaneca, adonde, movido por el desengaio y la misantro-
pí4 se retiró el narrador para vivir lejos de Ia odiada civilización, como una esPecie de De la repetición de determinadas secuencias de zumbidos en situaciones aniilogas dedu-
ermitaño laico, al que los indios lacandones veneran ll¿rmá¡dolo Tecolote Sabio y Kukul- ce el significado de los mensajes, rlando por fin el paso decisivo a la exploración de la
cán, nombre maya de Quetzalcóatl conocemos, en cambio, su nombre de pila ni su semifutica:
-no
apellido- y será un pionero de <<una nueva cienci4 el idioma de los animales, a la cual
le pondría un nombre griego que en ese momento no Pude imaginar cuál debería ser, algo Observé que había un cierto sonido, un mi en voz de bajo repetido dos veces, con una breve
así como zoofonologíÐ) @ernal 2005:49). intermitencia. Este sonido se repetía frecuentemente en las noches y pude darme cuenta de que
A1 principio está su obsesión por los moscos. como estos insectos chupasa¡gres no al producirlo uû mosco, acudían otros, de Io que deduje que se trataba de un llamado. Luego
dejan de m¿ìrtifizarlo, empieza a interesafse Por ellos y observaf su comFortamiento. observé que este rnismo sonido, pero emitido en voz de ba¡ítono, producía los efectos contra¡ios
Pronto cree descubù que los moscos se comlrnican entre ellos y, en parte pa.ra distraer- y que los moscos que estaban cerca de quien Io emitía se ausentaban. Era emitido generalmente
se, en parte bajo el influjo del alcohol y la fiebre, se propone descodificar su constante cuando mataba yo a alguno de ellos y los espantaba. Con esos datos ya me aùeví a founula¡ la
zumbar: teoría de que en idioma mosquil el tono del zumbido cambia el sentido del verbo y de que si <rvu,
intermitenci4 MD) en voz baja significa <Venid>, en voz de ba¡ítono significará <d.{o vengas>>.
Un día se me ocurrió que ese zumbar fuera el sistema de comunicación que teniæ ente ellos, @emal 2005: 32).
ya que estaba yo plenamente convencido de que podían comunica¡se ta¡ fácilmente como 1o

266 267
rl

Menco Kt¡wz LT¡¡CÛÍSTICI HETERODOXA. DP UNCÜISTES LOCOS Y SUS INVESTIGACIONES FANTÁSTICAS

En ocho meses de trabajo intenso, el lingüista selvático redacta un diccionario de la sión amenazante, en este caso concreto la repentina ininteligibilidad semántica de partes
lengua mosquil, y en otro cuaderno describe la gr¡m[¡is¿ de este idioma admirable en el de los enunciados del conferenciante:
que <<nr:aca hay excepciones a las reglas, lo cual hace el idioma más civilizado de que he
oído hablao> @ernal 2005: 43). Queda por resolver el ultimo problema: aprender a ha- [. ..] algunas de las palabras del discurso, escuchadas por é1 con toda claridad, perdian de pronto
blarlo. Siguiendo sus instrucciones, un indio le fabrica r:na flauta que emite sonidos muy su sentido y llegaban a los límites de su entendimiento tan extaiamente descompuestas, que
semejantes a los zumbidos mosquiles. Tras unos primeros intentos exitosos de establecer sólo por el sentido de los vocablos que las acompañaban era capaz de comprenderlas.
un contacto con los moscos, el Tecolote Sabio perfecciona sus habilidades musicales hasta conlapalabra ganadería que, fras oír repetidamente,
Ta1 sucedió se fue tansfomta¡do en sus
conseguif conversar con ios insectos. Lo que éstos le dicen no tiene nada que ver con la oidos et gán - ád - erí - á, hasta llegar a converti¡se en una confusa serie de fonemas en que
lingüística, pero sí quizas con la locura del narrador quien descubre el plan de los moscos sólo resaltaba¡ las vocales <<a
- e - f) entre utr inescnrtable revoltijo de sonidos guturales, nasa-
de esclavizar o extennina¡ a toda la especie humana y cree que sólo él lo puede impedir.
les, alveolares, que enmascaraban defi¡itivamente el significado último de la palabra. (Merino
Sus huellas se pierden en la selva lacandona . . . El coronel que, en el epílogo, encuentra los
1990:32).
apuntes del ermitaño entomólogo sea, el texto que constituye la novela de Bemal- los
-o
califica despectivamente de <<memorias de un mariguano> (Bemal 2005: 196). Seríapedir En los meses restantes del semestre, el deterioro de su capacidad de comprensión empeo-
demasiado que u¡ mill¡il'6¡sstre aprecio p*or la abnegación de la investigación lingüística.
ra con rma :apidez alarmante y empieza a afectar $r manera de hablar, de modo que se
ve obligado a recurir a la escritura para comunicar con sus estudiantes, <çues hasta las
El lingüista literario más reincidente en desva¡íos seudocientificos es, sin duda, el pro- mismas palabras que él hablaba se tomaban un cúmulo de sonidos absurdos al resona¡ en
fesor Eduardo Soutor, protagonista de varios cuentos del escritor leonés José María Me- su interior cuando las decío> (Merino 1990: 34).
rino, para quien representa una especie de doble ominoso: <el profesor Souto es una Alarrnado por la c¡eciente desintegración psíquica del paciente, su médico le prescri-
sombr4 es ése que no quiero ser pero que va conmigo> (Merino, en Ga¡cía-Teresa2}O2; be dos meses de desca¡so en algún lugar tranquilo. Sin embargo, las vacaciones no cura¡
s. p.). La locura específica de Souto se menifiesta en una serie de extrañas obsesiones e
ai lingilista de su peculiar fomla de afasia, al contrario, sus largos paseos por el bosque
investigaciones que conducen reiteradas veces a la desaparición misteriosa del profesor lo hacen desvariar aún más, pues descubre aaalogías enüe los ruidos de lataÞtralezay la
y cuyo denominador común es la disolución, característica de la cosmovisión fantrística,
fonética de las lenguas humanas:
de la frontera entre el lenguaje y el mundo, entre la mente y la nat'xalez4 entre el yo y su
exterior. Lo que varía en los cuentos protagonizados por Souto es el tipo de relación que el mumullo interminable de las agruß, en los limpios arroyos que descendían por el monte,
[...]
el lingtiista exûavagante cree haber descubierto entre el lenguaje y la realidad material.
tenía los mismos elementos sonoros que las palabras humanas.
En <Las paiabras del mundo> (Merino 1990:29-44), el escritor leonés plantea de
una manera original la imposibilidad de separar al sujeto de su condicionamiento lin- En aquellos días, cuando su percepción de los sonidos hablados era incapaz de da¡les el corres-
güístico sin aniquilarlo. El cuento narra la progtesiva disolución de la entidad psíquico- pondiente significado, ¡esultaba que algunos nridos de la naturalez4 igualmente ininteligibies,
corporal llamada Eduardo Souto en la medida etr que va perdiendo sucesivamente sus resonaban de idéntica manera y se iban sucediendo con la misma alternancia fonica que los
facultades de comprender mensajes orales, de hablar y de escribir. Los primeros síntomas vocablos de r¡n discuno. (Merino 1990: 35).
de su trastomo mental se producen un día en que intem:mpe <la elaboración de rm trabajo
sobre fonología --{el que era parte sustantiva un prolijo inventario de va¡iantes de fone- Al ritno con que va perdiendo la lengua y con ella, la cohesión de su visión del mundo,
mas> (Merino 1990: 31)- para oír una conferencia de un colega economista sobre las Souto se convence de que los ruidos naturales no constituyenun código lingiústico, como
postimerías de la agricultura tradicional en la que el lingüista presta particular atención peDsaba al principio, sino que sólo la lengua garantiza la cohesión de ia reaLidad fenomé-
a <deter¡ninados aspectos de la pronunciación de los fonemas be, de y ge, que permitían nica, y que esta lengua es un constucto precario, mantenido intacto y funcional gracias
analizarlos desde perspectivas diferentes de las utilizadas en los estudios habituales> a <<tm perrrvnente y violento esfue¡zo de la memoria>, por lo que <[u]n desmayo de esa
(Merino 1990:32). Como pasa a menudo en lo fantástico, la ruptura del orden habitual secreta voluntad y el súbito olvido ha¡á que todo el gigantesco castillo de las palabras,
empieza con una ligera anomalía de la percepción que con el tiempo adquiere una ¡limen- artiñcioso, ficticio, pierda su imposible coherencia y se desmorone> (Merino 1990: 36).
Más aún, aferrándose con un solipsismo desesperado a los últimos restos que le quedan
I María Ángeles Encinar (2001) estudia a este personaje en un artículo inte¡esante que, sin de Ia facultad del lenguaje, llega a la conclusión de que el mundo es una mera proyección
embargo, no analiza la probiemática lingüística y su relación con lo fantástico. Dolors Poch de la lengua que sólo la fijación mediante la escritura puede conserva¡ y proteger de la
olivé (2001) sí se interesa por el tema del lenguaje, pero con un enfoque diferente del mío. disolución:

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't

M¡.rco Kut¡z LrNctïÍsrlcA HETERoDoXA. DE LINGûIsrAs Locos y sus INVEsrIcAcIol.¡¡s re¡¡rÂsnces

[...] también las palabras escritas eran, sin dud4 producto de una voluntad poderosa e inco¡s- tas y otos objetos útiles, sino que es <<lo inorgrínico [que] nos ha venido utilizando, de
ciente, que reflejaba en el interior de cad¿ uno el propósito colectivo de que aquellos signos manera cadavez más compleja, para organizarse> (I\4erino 1990: 150), y que terminará
gníficos tuviesen un significado que tascetrdía inmensamente su forma; un sip.ificado que, al por adueñarse del mundo. Tras el fracaso de la mente en su vano intento de domina¡ lo
convertirlas en una denominación reconocible y aceptada, era no sólo la verdadera señal de la material en <<Las palabras del mundo>>, en <<Del Libro de Naufragios> se invierte la rela-
existencia de las cosas del mundo, sino el propio emblema mágico que 1as hacía existir. (Merino ción y lo inorgánioe usa, de manera parasitaria, a los hombres para realizar su ambición
1990: 3Q. de hegemonía" y souto, acosado por las cosas, tiene que huir para no termina¡ cosìficado.
En <Signo y mensaje> (Merino 1994: 113-L27), Souto vuelve a afirma¡ su convic-
La lengua crea el mundo y la escrifirra prolonga su existencia: <<En las palabras escrit¿ts ción de que el mundo material se org¡niz¿ como lm lenguaje universal de lo inorgiínico:
está el único indicio de las cosas>>, (Las cosas sólo se sostienen en letas> (Merino 1990:
36), <Só1o lo escrito eKiste>, <<No olvidar las letas o todo desaparecerb (Merino 1990: Un día me harté de inventaria¡ fonem¿N y me puse a analizar los sonidos natr¡rales. Escuché las
37), son algunas de 1as últimas máximas que el profesor Souto apunta en un cuadernillo, voces de los animales y los ruidos del agua. Todo tiene sus córrigos. Reflexioné también sob¡e
antes de que la regresión de su evolución lingüística, tas pasar en sentido inverso por las 1as formas de las rocas, las figuras y muescas que en ellas va dibujando la erosión. Todo son
etapas de la adquisición infantil de la lengua rudimentarias para la superviven- signos, todo mensajes. El quid está en sabe¡ encontra¡ su significado. (Merino 1994: I 14- I 15).
-frases
cia diari4 letras del alfabeto y (agrupaciones de sílabas que recordaban los modelos de
a¡tiguos textos pedagógicos> (Merino 1990: 4l), palabras sueltas relativas a referentes En los grafitis y otras pintadas de la ciudad vislumbra un mensaje, un sentido profirndo,
de su entomo inmediato--, termine con unos garabatos inescrutables, <<hasta semejar el en unas formas básicas repetidas en el meto reconoce un mandal4 es decir, <crna ven-
dibujo de una tela de a¡aña. El resto de las hojas esti en blanco> (Merino 1990: 42).La tara abierta al punto en que sejuntan lo disperso y lo unitario, lo confüso y lo claro, lo
disipación lingüística de Souto culmina en su desaparición fisica: sólo querlen de é1 sus imaginario y lo reab> (Merino 1994: 122). Lo que Souto describe en términos lingtiísticos
zapatos y su ropa vacíos, pero ordenados ((como si vistiesen a una personÐ), o se4 como y semióticos es, por un lado, la pansip.ifrcación y, por oto, la tansgresión o abolición
si el lingüista perturbado hubiera ido <esfum¡índose en el aire del mismo modo que se de la frontera entre los contrarios, rasgos definitorios de lo fantiístico. Tampoco falta Ia
había extinguido y esûrmado su ultima memoria de las palabras> (Merino 1990: 44). vacilación ente la aceptación de 1o inexplicable y la explicación racional que Todorov
Como en 1o fantástico 1o material y lo mental no están claramente seParados, sino que considera como conditio sine qua non delo fantástico, pues en el desenlace del cuento
la mente fufluye en la materia, la extinción de la lengua de Souto va acompaiada de la Souto, que por fia ha comprendido que los mensajes misteriosos del metro se dirigían a
volatilización de su cue¡po. é1 y Io invitaban a pasar a otra dimensión, desaparece ante los ojos del narrador atónito,
Mientas que en <Las palabras del mundo>, la locura lingüística consiste en una va- dejando como única huella de su transubsta¡ciación un enigmático signo incrustado en
riante de esa ilusoria omripotencia del pensamiento (<cAllmacht der Geda¡keo>: Freud el muro; ahora bien, unos días después el narrador ve a un hombre que pinta sip.os muy
1947 :253) que, según Sigmund Freud, comparten la cosmovisión animista, el narcisismo semejantes en las paredes y le pregunta qué significan: <Estamos señalardo el sitio para
infantil y el relato fantastico, en otros dos cuentos de Merino el profesor Souto revela ser la acometida de los bomberos, dijo. Se va a poner una en todas las estaciones>> (Merino
un poseso de la idea, igualmente típica de 1o fantástico, de Ia pansignificación del mundo. 1994:127).
En <Del Libro de Nauûagios> (Merino 1990: l4l-154), su campo de investigación es
primero el lenguaje del mar y de las fuentes, cuyos ruidos, regisüados con una grabadora, Los tres lingüistas de los textos ."-.r;:r-;scan, cada uno a su maûera, una lengua
propone aîalizar con la ayuda de rma computadora, y después pasa a pasionarse por la suPerior a los idiomas existentes, pero todos sus intentos de crea¡la o de descubrkla en la
superficie de las rocas, que ve cubiertas de fisuras, muescas e incisiones que toma por naturaleza están condenados a fracasar, tanto por el ca¡ácter asocial de su ambición, in-
inscripciones <que pudiera.n parecer haber sido originadas por la mano humana, [pero compatible con la función comunicativa del lenguaje tres cortan las relaciones con
que] se adaptan demasiado bien a la conformación de cada roca para no tener un origen la sociedad, dejan de habla¡ con interlocutores humanos -los(o 1o hacen muy raramente y de
naturab> (Merino 1990: 146). O se4 los sonidos del agua son un discurso, los peñascales una manera difïcilrnente comprensible) y se retiran a lugares apartados para poder estar
un texto de la natu¡aleza que se expresa mediante <<un lenguaje secreto, destinado a no solos- como tarnbién porque confunden, de un modo solipsista, la presunta lengua na-
se sabe qué secretos comunicantes)), y cuyos signos quizás constituya¡ un código que tural con sus propias fantasías y proyecciones, al igual que don Quijote, que veía gigaotes
çodía tener relación con las estructuras elementales de la materio> (Merino 1990: 146). donde había molinos porque los gigantes correspondían m¿Ís a lo que deseaba ver. Pero,
Sin embargo, antes de que Souto logre descifrar ese ADN de lo inanimado, los artefactos claro está, la locu¡a de estos personajes no se debe a su pasión por la lingäística, silo a
se conspiran contra él y lo persiguen para impedir que revele su descubrimiento terrible: su condición literaria, pues la literatura contagia todo con la insensatez de sus desvaríos.
que no es el hombre quien se apropia la materia inorgilnica y la convierte en herramien-

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M¡nco Kurqz

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