LOS PLANES DE DIOS Y LOS NUESTROS

Una vez estaban discutiendo una gallina y un cerdo, acerca de como levantar una campaña en
contra de la pobreza, consideraban que parte debían tener cada uno, en el alivio del hambre y
del sufrimiento.

Cada uno ofrecía ideas y sugerencias que eran rechazadas por el otro. Finalmente, la gallina salió
con una idea que le pareció brillante y decía… “Nosotros podemos proveer a los hambrientos de
la tierra con huevos y jamón…”

El cerdo consideró brevemente la propuesta, y al fin dijo… “Tu bien puedes hacerlo, para ti eso
puede ser una contribución, pero para mí sería una consagración total”

En nuestra dedicación a Dios ¿Qué ofrecemos? Una simple contribución o una consagración
total.

¿Usted contribuye, o se consagra? ¿Quién libro a los hijos de Israel de Egipto: ¿Moisés o Dios?
Dios lo hizo. Dios escogió poner a Moisés en una relación consigo mismo de modo que El, Dios,
pudiera libertar a Israel. ¿Trato Moisés alguna vez de tomar en sus propias manos el asunto de
los hijos de Israel? Si

Comprender lo que Dios está a punto de hacer allí en donde yo me encuentro es más importante
que decirle lo que yo quiero hacer por El.

Recuerde las siete realidades… La sexta nos invita a realizar ajustes en nuestra vida, para luego
obedecer. Nosotros somos sus sirvientes, y debemos ajustar nuestras vidas a lo que él va a hacer.

En muchas ocasiones, no estamos completamente de acuerdo con los planes de Dios. El

problema es que no hemos podido ver el panorama más amplio. Lo que usted necesita saber,
es lo que usted tiene en su agenda para su vida, para su comunidad, para su país, en fin, para el
mundo.

Recuerde hermano y hermana, haga las cosas solamente a la manera de Dios. Comprenda lo
que Dios va a hacer, ahí donde usted se encuentra. Porque eso es lo más importante, que decirle
que es lo que usted debe hacer por él.