Panorama del Antiguo Testamento II

1. Lectura adicional:
La Lectura Eficaz de la Biblia por Gordon D. Fee y Douglas Stuart:

a. Cap. 10: “Los Profetas: La Imposición del pacto en Israel” (Cómo leer los libros
proféticos)
b. Cap. 11: “Los Salmos: Oraciones de Israel y Nuestras” (Como leer Salmos)

c. Cap. 12: “La Sabiduría: Entonces y Ahora” (Como leer los libros de sabiduría)

Impresiones de la lectura adicional

a. Para comenzar el autor detalla los libros que están dentro de esta categoría,
organizados en dos grupos, llamados menores y mayores, su contenido fue
escrito en el Israel Antiguo aproximadamente entre el 760 y 460 a.C. y contienen
una colección de mensajes de Dios. Dentro de la lectura de la Biblia estos libros
son los más difíciles en cuanto a comprensión e interpretación. Los
malentendidos se dan en cuanto a la función y forma. A la palabra profesía se la
define solo tomando la cuestión de la predicción del futuro, de esta forma hacen
un uso selectivo. Una clave para entender a los profetas es volviendo atrás antes
de que sus profecías se hayan cumplido. Si solo se piensa en predicciones,
perdemos el foco principal que era hablar en nombre de Dios a sus propios
contemporáneos. A los lectores modernos se nos hace difícil entender en nuestra
época la Palabra de Dios como fue expresada por los profetas, que a los que
originalmente escucharon las mismas palabras. Para entender lo que Dios nos
quiere decir por medio de estos libros inspirados, necesitamos, claridad en la
comprensión del papel y la función del profeta en Israel. Al leer los profetas
debemos buscar esta sencilla norma: La identificación del pecado de Israel, o del
amor de Dios por él y una predicción de bendición o maldición, según las
circunstancias. El mensaje de los profetas no era suyo propio, sino de Dios y no
hablaban independientemente; no fueron inspirados para hacer mensajes, ni
anunciar doctrinas que no estuvieran ya contenidas en el pacto del pentateuco,
solo era novedosa la estructura y la expresión. La tarea es poner a los profetas
dentro de su propio contexto histórico y escuchar lo que Dios estaba diciendo a
Israel a través de ellos. Otra clave para la comprensión es diferenciando los
diversos oráculos, junto con las diferentes formas que usaron para componerlos.
Los estilos literarios proféticos bien entendidos ayudan a comprender el mensaje
de Dios con más precisión. Por último, los profetas nos recuerdan
constantemente la decisión de Dios de hacer cumplir su pacto. La ortodoxia
consiste en tener las creencias correctas. La ortopraxia consiste en realizar las
acciones correctas.

b. El problema en la interpretación de los salmos surge principalmente de sus

características. La Biblia contiene palabras habladas a Dios o acerca de Dios, y
estas palabras también son palabras de Dios, los salmos son este tipo de
palabras. Comprender su naturaleza, sus diversos tipos, formas y funciones
(Poemas musicales, metafórico, etc.) Hay que leerlos cómo una unidad literaria,
de manera independiente no como parte de un todo. Entenderlos según su
 propósito real y no según el propósito que le asignemos al tomarlo fuera de
contexto. Los salmos tenían la función de establecer la comunicación entre el
adorador y Dios. Los salmos se aplican a todas las épocas, tienen valor universal
y multicultural. Obtenemos tres beneficios: Uno: Son una guía para la adoración.
Dos: Nos muestra que podemos tener una relación sincera con Dios. Tres:
Demuestran la importancia de la reflexión y la meditación, sobre las cosas que
Dios ha hecho por nosotros. Nos invitan a la oración, al pensamiento centrado en
la palabra de Dios (meditación) y a la comunión reflexiva con otros creyentes. Y
por último una advertencia: Los salmos no garantizan una vida agradable.

c. En primer lugar, el autor comienza dando a conocer el mal entendimiento que los
creyentes desarrollan al leer los textos de sabiduría que, al trasladar a su
posterior aplicación, pierden beneficios dados por Dios. Con la intención de
proporcionar ayuda, define la sabiduría cómo la disciplina de aplicar la Verdad a
la vida, a la luz de la experiencia, así se obtiene una correcta comprensión para
finalmente darle una aplicación exacta. De acuerdo con la definición propuesta
por el autor siguiendo la línea de pensamiento, define sabio a una persona que
aplica la Verdad de Dios a la práctica cada día, y cómo resultado de su
experiencia, aprende. También da tres maneras en las cuales podemos
excedernos dándole un mal uso a la literatura sapiencial. Primero: Leer solo en
partes sin considerar el mensaje completo, tomar versos fuera de contextos.
Segundo: Sí entendemos mal las palabras, estilos y modos literarios, cambiará la
definición en el contexto. Tercero: Si no seguimos bien el hilo de un argumento
sobre la sabiduría.