Discurso: Dr.

Álvaro Coutiño García

Honorables autoridades académicas, catedráticos, graduados, familiares y
amigos, señoras y señores, constituye para mí un gran honor, una
responsabilidad y un motivo de profunda alegría encontrarme hoy aquí
pronunciando estas palabras en representación de los graduados de la
promoción 2018 de la Universidad Galileo. Por ello, muchas gracias.
Hoy, 2 de junio de 2018, es un día muy especial, en el cual celebramos con
gran felicidad y orgullo nuestra graduación. Es así para todos nosotros,
nuestras familias, así como también para la Universidad Galileo un día
inolvidable y de gran trascendencia.
Por un lado, es sin duda alguna, un momento de celebración porque hemos
conseguido llegar a la meta, nos hemos graduado.
Asimismo, es cierto que el éxito es nuestro, pero estamos todos de acuerdo
que una parte importante del mismo reside en el apoyo recibido por parte de
nuestros catedráticos, compañeros, y en especial el de nuestras familias, los
cuales han estado a nuestro lado durante todo este proceso, así que, para
ellos, muchas gracias.
Hoy celebramos el fin de un camino, que da inicio a uno mayor, el cual se
refiere al compromiso de hombres y mujeres que transforman el entorno a
través del quehacer profesional, llamados a poner nuestro grano de arena
para que en Guatemala exista una sociedad libre e incluyente con igualdad de
oportunidades para todos.
Por lo tanto, los invito a ser personas de excelencia, que sean creadores y
entusiastas en todos sus nuevos proyectos, que conduzcan sus vidas por el
camino del éxito. Por ello les deseo muchos triunfos en esta nueva etapa de
sus vidas y en todos los proyectos que emprendan.
No puedo dejar pasar esta oportunidad sin agradecer a nuestra universidad
Galileo, a sus autoridades, a todo el personal y en especial a nuestros
catedráticos, los cuales están a la altura de los mejores catedráticos de las
mejores universidades a nivel nacional e internacional, y que han tenido la
dedicación y paciencia de formarnos como profesionales íntegros y capaces,
para todos ellos, muchas gracias.
 Así pues, hoy debemos estar muy orgullosos por lo alcanzado, hemos
llegamos a la meta, pero como mencioné anteriormente, hay mucho más
camino que recorrer, este es sólo una etapa más.
Compañeros graduados, nunca te rindas, nunca, nunca te rindas, levántate
una y otra vez y siempre sigue adelante, siempre, siempre adelante, para atrás
ni para tomar impulso.
Para finalizar, y ahora en nombre de todos los presentes, damos infinitas,
pero infinitas gracias a DIOS por nuestras familias, compañeros y amigos, por
la Universidad Galileo, sus autoridades, personal y catedráticos, por los
graduados, pero sobretodo, por el éxito hoy alcanzado, Señor
Gracias,…Gracias, Gracias Señor.
DIOS los bendiga hoy y siempre y muchas felicidades.
Viva la promoción 2018.
Viva la Universidad Galileo.