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Secuencias textuales o tipos de texto

El presente cuadro muestra un esquema sencillo de cómo podríamos clasificar los textos o
discursos más usuales con los cuales nos podemos encontrar y que son materia de la labor
pedagógica en aula para los primeros años de escolaridad. Aún cuando el tema de las
tipologías textuales y géneros discursivos es un tema de amplio debate y que no ha sido
resuelto por los teóricos de los estudios del texto y lingüístas, hemos escogido el modo en
que Adam aborda el tema por ser más simple y directo. Según Adam (1991) la función
predominante en el texto es clave para determinar su clasificación. Su trabajo establece
cinco tipos: narrativo, descriptivo, argumentativo, explicativo y dialógico. Del mismo
modo, establece que no existe una clasificación, sino que más bien se trata de formas
prototípicas que se mezclan entre sí y que lo fundamental es la estructura típica que
adoptan las secuencias al interior del texto. De acuerdo a esto habría 5 secuencias
textuales en que es posible organizar los discursos. Del mismo modo, serían entonces
cinco las funciones que es posible identificar en ellos. La Función estaría definida por
aquel rol que el texto cumple para los receptores y estaría cercano a lo que entendemos
por intención comunicativa. Los géneros literarios que se presentan en la última columna
responden a la división y subdivisión clásica, compuesta principalmente por los géneros
Narrativo, Dramático, Poético y Ensayístico. De estos cuatro se desprenden todos los
demás subgéneros con los que convivimos como las cartas, los chistes, los informes
educativos, las noticias, mails, entre otros. La existencia de cada uno de estos es tan
móviles como la historia, pues son parte de cada sociedad y cambian con ella.

Función Tipo de texto Géneros o subgéneros

Informar. Presentar datos o hechos Informativo Diarios murales, memo (nota), afiches,
con el fin de que otro los conozca. noticias, afiche para una fiesta, etc.
Describir. Presenta una acción, Descriptivo Correo sentimental (busca parejas),
persona o cosa proporcionando sus folleto de electrodomésticos (este
características y propiedades. aparato contiene…), afiche científico,
etc

Explicar. Presenta datos o hechos y Explicativo Justificativo por atraso, clase

establece entre ellos relaciones de expositiva, etc.
causa y consecuencia.

Contar/narrar. Presenta acciones Narrativo Cuento, anécdota, novela, chiste, etc.

que se suceden cronológicamente
y que pueden ser reales o ficticias.

Presentar datos/exponer. Expositivo Artículo científico, enciclopedia, etc.

Presenta datos o hechos como
“cosas que suceden en el mundo”,
que mantienen una relación de
causa-consecuencia, pero en las
que quien escribe no tiene
demasiada influencia.

Convencer, persuadir. Presenta Argumentativo Ensayo académico, carta al director,

argumentos expresados como discurso político (centro de alumnos),
hechos, datos o apreciaciones que debate, etc.
fundamentan un juicio inicial o
tesis.

Dar instrucciones. Breves Instruccional Manuales, instrucciones (para armar

descripciones o explicaciones un juego, por ejemplo), instrucciones
seguidas de directrices para un experimento, receta, etc.
secuenciadas paso a paso que
tienen como objetivo que otro siga
ese mandato.
 Desglose de Tipos de secuencias textuales/Tipos de texto

La secuencia narrativa se caracteriza por presentar una sucesión de acciones o

eventos finalizados. La secuencia narrativa predomina en el género discursivo cuento,
pero también en géneros que no pertenecen a la ficción, como por ejemplo la crónica
periodística o los manuales de historia.

La secuencia descriptiva se caracteriza por presentar los rasgos salientes de un

objeto, persona, paisaje o acción. Este tipo de secuencia predomina, por ejemplo, en el
género guía turística, en el que también suelen aparecer insertas secuencias narrativas
para, entre otras posibilidades, contar sucesos relacionados con el lugar que se describe.

La secuencia expositivo-explicativa se vincula con el análisis y la síntesis de

conceptos. En este sentido, los textos en los que predomina este tipo de secuencia
responden siempre a una pregunta que puede estar formulada explícita o implícitamente.
Se busca ampliar o transmitir el saber enciclopédico: hacer saber, hacer comprender o
aclarar un conocimiento que se toma como punto de partida. En este tipo de secuencia se
busca generar una ilusión de objetividad, pues la explicación se presenta como una verdad
no abierta al debate. En ella no se pretende discutir, sino hacer comprender al
interlocutor algo que desconoce o que no entiende. Los géneros discursivos en los que
predomina la secuencia expositivo-explicativa son, por ejemplo, la clase teórica, tratados,
manuales, etc.

La secuencia argumentativa se estructura a partir de la postura que se adopta con

respecto a un problema controvertido. Para convencer al interlocutor de que la postura
propia es la más adecuada, se despliega una serie de argumentos o razones que funcionan
como los pilares que la sostienen. Los géneros discursivos en los que predomina esta
secuencia son, entre otros, la nota de opinión y el ensayo.
 La secuencia dialogal se caracteriza por la alternancia de voces; su estructura es la
de un diálogo y los géneros discursivos en los que predomina son, entre otros, los guiones
de cine o televisión, las obras de teatro, la conversación cotidiana y la entrevista.

En la secuencia instruccional se presentan consejos y/u órdenes. Es habitual

encontrar en ella el modo imperativo, ya que se apela a la segunda persona para que lleve
a cabo las acciones que se consideran convenientes para lograr un determinado objetivo.
Este tipo de secuencia predomina en los manuales de uso, las recetas de cocina y los
reglamentos.

Es importante señalar que hablamos de predominio de una secuencia determinada

ya que a la secuencia dominante suelen subordinarse otras. Tal es el caso, por ejemplo, de
la secuencia descriptiva que se inserta en una obra de teatro (cuya secuencia dominante
es dialogal) con el fin de disponer personajes y objetos en escena.

Tanto los géneros discursivos como las secuencias textuales son esquemas
mentales que como usuarios de una lengua hemos ido ensayando e incorporando desde la
infancia y que utilizamos a la hora de producir y comprender textos. Por esta razón,
desconocer tanto los géneros discursivos propios de una actividad humana como las
secuencias lingüísticas constituyen un obstáculo para la comprensión y la producción de
textos.
Se debe tener en cuenta, que todos los tipos antes presentados pueden ser parte
del discurso oral o escrito, sin embargo, dadas las características propias de estas dos
modalidades, tendrán también distintas características según el contexto y la audiencia
en que sea creado y presentado (actualización del discurso)
Literario y no literario

Los textos no literarios se fundamentan en el mensaje entregado y no en la

intención de crear belleza en el lenguaje, por lo que podría decirse que hablan de la
realidad tal cual es.

Así, el testimonio, la nota periodística, la carta, y todo lo que hoy las editoriales
engloban bajo el rubro de "no ficción" (excepto el ensayo, que es literario) son ejemplos
de géneros que, aunque dentro de ellos a veces se produzcan textos de "valor literario",
no son literarios en principio, ya que su principal función es la de transmitir una
información. En ocasiones la información es transmitida con arte y por eso ingresa a la
literatura.

Los textos literarios en cambio centran su construcción en la ficción, aún cuando el

tema e incluso los hechos narrados que le sirvan de base, sean tomados de la realidad.
¨Por otro lado, muchas veces su estructuración o forma buscan la belleza o formas
artísticas.

Como la naturaleza misma de los objetos literarios es heterogénea, nos podemos

encontrar con cartas que han sido puestas en un formato artístico formando parte de un
objeto literario aún cuando sean cartas reales. Lo mismo, puede ocurrir con los
testimonios, tal como ha ocurrido con el libro “Me llamo Rigoberta Menchú”, el cuál nace
como un relato testimonial, que ha sido ampliamente analizado por su valor sociocultural
y artístico, pero que sin embargo nace de una larga entrevista a la su protagonista, que sin
embargo no es la autora del texto.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que el texto no literario posee un contexto
inmediato, estructura y lenguaje más simple y directo. En cambio, el texto literario hace
uso de un repertorio más amplio de recursos expresivos, y su contexto es mucho más
universal y atemporal.